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Escuela Normal Superior de Hermosillo

Licenciatura en Educación Secundaria

Con Especialidad en Ingles

Educación Secundaria Cuestiones Básicas I

Profr. Francisco Sotomayor Andrade

Análisis de postulados del libro de Michel Saint Onge

Yo explico pero ellos …. ¿aprenden?

Presentan:

López Ortiz Cinthya Sarahí

Sánchez Chavarria Edna Michelle

Mayo del 2012, Hermosillo, Son.

Primer Postulado:

¿Interesan a los alumnos las materias escolares?

Razón por la que persiste la idea de que las asignaturas por sí mismas son

atractivas para los adolescentes.

Resulta de gran importancia plantearse lo que genera el interés por parte de los

alumnos a la materia, muchos maestros afirman que la asignatura capta el interés

de los estudiantes por sus mismos contenidos y con esto se pierde el verdadero

sentido del proceso enseñanza-aprendizaje.

Al momento de que el profesor confía en que la asignatura que imparte es

interesante por sí misma, deja de lado la enseñanza centrando su total atención

en lo que se enseña y al mismo tiempo deja al alumno, sus intereses y el

conocimiento de lado.

Forma positiva de relación entre la persona y la asignatura.

Las relaciones interpersonales desarrolladas en el aula son de gran importancia

en el proceso enseñanza-aprendizaje pues de esto depende la atracción o

disgusto del alumno hacia una materia en específico. Es importante conocer el

contexto en el que se desarrolla el alumno para que se logre un aprendizaje

significativo, la situación económica, relaciones que maneja en los ambientes

familiares tanto como escolares, todos estos factores dependerán de la manera

que procese los conocimientos dados, todo esto eleva al maestro y no solo lo

pone en el papel de ‘’emisor’’ haciéndolo un apóstol de la educación.

Como futuros docentes es importante no olvidar que nuestra labor va mas allá de

transmitir un conocimiento y depositarlo en el alumno, los conocimientos previos

juegan un gran papel y al considerarlos ayuda a aprender más acerca de la

persona a la que se está ensenando, haciendo que este tenga un mayor

aprovechamiento.

Consideraciones para que los alumnos encuentren sentido a los contenidos

y se interesen por aprender.

Existen 4 condiciones principales para que se realice de manera exitosa el

proceso enseñanza-aprendizaje según el autor, mismos que desarrollaremos a

continuación:

Interés: No basta con captar su atención, es importante mantenerla y lograr

situaciones estimulantes en el aula sin alejar a los alumnos demasiado para

que el conocimiento no se pierda.

Para ello es necesario:

Ofrecer estímulos nuevos .

Plantear interrogantes.

Variar el ritmo o intensidad de la comunicación.

Hacer que el alumno participe en la discusión.

Responder a las intervenciones de los alumnos.

Cantidad de contenido: El ritmo y la cantidad de contenido están

estrechamente relacionados pues con un balance de ambos los contenidos

curriculares causaran un mejor efecto en el alumno. Un contenido amplio

con ritmo lento puede ocasionar el aburrimiento de los alumno pero un

contenido abundante y con un ritmo moderado a rápido es la formula

correcta para el aprendizaje.

Orientar las actividades: El profesor ejerce el papel de guía en la

enseñanza por esto las actividades y contenido que utilizara en clase deben

estar bien estructurados y contar con condiciones especificas:

- Definir un proyecto con un objetivo específico.

- Definir un método que los alumnos sean capaces de desarrollar.

- Obtener los resultados esperados.

Estilo de enseñanza: Cada forma de trabajar de los profesores es diferente

así como cada alumno tiene necesidades y capacidades diferentes, es

necesario conocer a las personas que te diriges y tratar de adaptarte a sus

necesidades y habilidades cognitivas.

Para conseguirlo se debe:

- Especificar los aprendizajes que se esperan alcanzar.

- Conocer las características de los alumnos.

- Descubrir el ambiente propicio.

- Crear actividades para aprender.

- Cambiar las condiciones de aprendizaje.

Actitudes de los estudiantes ante el aprendizaje.

1.- Organización del contenido:

El profesor debe planificar el contenido de su curso, de forma que los estudiantes

le encuentren sentido. Para ello es necesario:

- Enlazarlo con aprendido anteriormente.- Es importante que las nuevas

adquisiciones cognoscitivas, se relacionen con los componentes de la

estructura cognitiva ya formada del alumno, para que pueda extraer de ella

la significación (Ausubel, 1963).

- Enlazarlo con la experiencia del alumno.- El sentido que puede tener el

contenido, dependerá también de la relación que se establezca entre él

mismo y su experiencia.

Síntomas de la desintegración en los aprendizajes:

Dificultad para aplicar un conocimiento en el contexto de la solución

de un problema nuevo.

Estancamiento del pensamiento en los datos descriptivos.

Persistencia de referencias inadecuadas, valoradas como buenas.

Lentitud del pensamiento.

Desinterés por el estudio.

Incapacidad de sintetizar.

No existe relación de saberes de una asignatura a otra.

Establecer vínculos entre los conocimientos previos y los aprendizajes que están

por adquirir es uno de los mayores retos en el aula, con esto se permite la

integración de las diferentes dimensiones y traer al presente saberes pasados

haciendo que el aprendizaje más fácil al alumno.

2.- Asociación de sentimientos para el aprendizaje:

No todo se guarda en la memoria, sólo aquello que interesa. Hay hechos que

impresionan y otros que resultan indiferentes, por tanto, existe información

subjetiva asociada a las informaciones que recibimos. Para ello es importante que

el profesor manifieste:

- Compromiso personal: El profesor da testimonio de la importancia de la

materia con su entrega personal. Los comentarios que hacen a las tareas

desempeña un papel importante en la relación pedagógica.

- La posibilidad de éxito.- El alumno tiene que percibir la posibilidad de

conseguir el aprendizaje de una asignatura que se interese; si la carga

emotiva es negativa, el alumno puede dudar en entregarse al estudio.

El papel del profesor como motivador en gran parte del tiempo es la más

importante pues al alumno hay que hacerles ver la relación de la materia y los

beneficios de esta en sus vidas, llevando un carga emotiva así como académica

que es necesario balancear manteniendo su interés y procurando que progrese en

su aprendizaje.

Conclusiones primer postulado

Para que una asignatura llegue a interesar a los alumnos e influir en su dedicación

al estudio, dependen de la calidad de la enseñanza de los profesores. En

definitiva, la enseñanza despierta mucho más interés que las mismas materias.

Por lo demás, un mismo curso interesará con un determinado profesor y con otro

será irrelevante. El dominio por el profesor de las técnicas de enseñanza se

muestra tan decisivo como el del contenido de la asignatura.

Por otra parte las relaciones fomentadas maestro-alumno y el contexto individual

de los educandos influyen significativamente en el aula, hay que tomarlos en

cuenta así como los conocimientos previos y no solo ver al alumno como una urna

en la que depositaremos los conocimientos, sino verlos como seres humanos con

habilidades cognitivas de las que podemos sacar provecho.

Segundo Postulado:

El trabajo de los alumnos se limita a guardar información

Rasgos acerca del registro de la información por parte de los alumnos.

Cuando el método de exposición de un profesor descansa en gran parte en la

exposición magistral, se puede presumir que la labor de los alumnos, se limita a

registrar la información, la cual deberán comprender y analizar. En realidad la

tarea de los alumnos como mínimo, es sacar la información “esencial” de las

explicaciones y asimilarlas de manera que les permita salir con éxito de las

pruebas que han de superar, lo que implica analizar la misma, formarse su propio

pensamiento y elaborar modelos de acción.

Lo antes mencionado nos lleva a plantear los siguientes cuestionamientos:

¿Son capaces los alumnos de registrar el contenido de un período escolar?

¿Están en condiciones de retener después las informaciones dispares de

diferentes materias, sin relación aparente entre sí?

¿Podrían después ordenar toda esta información?

Síntomas de las dificultades:

Lamentan tener que aprender a partir de numerosas y prolijas

explicaciones.

A veces las consideran aburridas, pero con frecuencia las encuentran

interesantes, aunque difíciles de seguir.

Contienen abundante información para ellos, pero les falta el tiempo

necesario para comprenderla y, sobre todo, para deducir su verdadera

significación.

Ante estas dificultades, algunos alumnos reaccionan forzando al profesor a

respetar las condiciones mínimas necesarias que faciliten su aprendizaje, como

por ejemplo:

Control del ritmo de la exposición. Los alumnos no pueden retener el flujo

continuo de información, por lo que retrasan la operación tomando apuntes, lo que

entra en competencia con otra actividad: escuchar lo que se está diciendo, por lo

que procuran influir en el ritmo de la exposición a través de:

Proponen al profesor que repita la información.

Realizan planteamientos o preguntas.

Incitan al humor.

Clarificación del objetivo del aprendizaje. Los alumnos necesitan orientación

sobre el tratamiento que han de dar a las informaciones. De acuerdo con Royer

(1977), comunicar a los alumnos lo que deberían aprender durante la explicación

(antes de comenzarla), permite obtener más provecho de la misma.

Explicaciones del tratamiento de la información. No se retiene en la memoria

las percepciones tal como son, ni se cuenta con toda la información tal como llega,

por lo que el manejo de la información no está condicionado tanto por el

“contenido”, sino por el “sentido” que tiene para nuestros actos e intenciones. Se

retiene sólo lo que interesa, lo cual tiene relación con la idea que se forma el

estudiante respecto a lo que ha de hacer con la misma.

Ser estudiante no es tarea fácil, durante las clases pueden surgir varias

problemáticas que obstruyan su camino hacia el aprendizaje, por lo tanto el

profesor en cierta forma debe de adaptarse a las necesidades que tengan sus

alumnos durante el transcurso de clases para poder lograr los aprendizajes

esperados.

Es muy importante que el maestro lleve un ritmo adecuado ya que no es tan fácil

que sus alumnos asimilen la información que él está transmitiendo mediante su

exposición, e incluso el acto de tomar notas para los estudiantes no puede resultar

algo sencillo ya que muchas veces “se les pasa” lo que el maestro dijo ya que no

todos tienen la habilidad de escribir y escuchar a la vez, como mencione con

anterioridad, el maestro debe saber manejar un ritmo adecuado para que sus

alumnos comprendan, pero sin causar retrasos de tiempo en la cuestión de la

planeación de sus temas. Además resulta muy interesante que el docente le dé a

conocer al alumno (previo a su exposición del tema) que es lo que tiene que

aprender ya que de esta forma el alumno centrará más su atención a lo que debe

aprender e incluso estará más atento en la clase ya que sabrá que información es

la que tiene que captar, anotar, retener, aprender, etc.

Relación entre la elaboración de los modelos mentales y el aprendizaje.

Para ser más eficaz, nuestro cerebro elabora a partir de los elementos recibidos,

modelos abstractos de la realidad, los cuales sirven para elegir comportamientos

y organizar la conducta. Estos modelos son los que ayudan a elegir nuestros comporta-

mientos y establecer nuestra conducta. Por lo tanto la situación no es la que determina

nuestra conducta, simplemente es el modelo y la idea que nos hacemos y/o tenemos de ella.

Esto nos permite comprender por qué, en las mismas situación y/o circunstancia, una

persona reacciona rápida y eficazmente, y otra persona se muestra completamente lenta

e ineficaz. . Durante una exposición el alumno no busca tanto memorizar, si no

sacar de ella modelos de pensamiento útiles para su actividad.

La función de la enseñanza principalmente es impulsar la formación de modelos

apropiados, coherentes y completos. Los errores que cometen los alumnos surgen

de las fallas de los modelos mentales que ellos utilizan. Se tiene que identificar las lagunas en

el modelo de referencia y trabajar en su modificación, para poder remediar esta situación.

Operaciones mentales que intervienen en la construcción de modelos.

El tratamiento de la información puede comprender operaciones como:

Codificación de las informaciones memorizadas (conjunto de

conocimientos coherentes según un código lingüístico).

La organización de las informaciones.

El refinamiento de las redes de selección (mejora para localizar

información relevante).

La complejidad creciente de los sistemas para producir información

(perfeccionamiento de las estrategias de investigación).

El reajusto del sistema de control.

La creación de nuevas estructuras (creación de modelos que permita

el tratamiento de nuevas informaciones).

El perfeccionamiento del sistema lingüístico (mejora del léxico,

sintaxis y semántica).

La diversidad de las formas de organización de la información

(enriquecimiento de la manera en que se presenta).

Conclusiones segundo postulado

Las características del funcionamiento del cerebro no permite a los alumnos

registrar un flujo continuo de informaciones, por lo que deben tratar de darles

sentido para construir su estructura de conocimientos “proposicional” o de

procedimientos. Para tratar esta situación lo que se hace es que con los

elementos sacados de conocimientos previos y sus experiencias, debemos

orientar su tratamiento y verificar la estructura de conocimientos resultante. Es

importante indicar lo que debería buscar en el conjunto de informaciones que le

van a ser transmitidas. Después, ayudarles alternando los momentos de

exposición con la toma de apuntes, con el fin de evitarles el hacer dos operaciones

simultáneas ya que esto puede retrasar al alumno en la adquisición de los

conocimientos de la clase. También resulta conveniente realizar preguntas durante

la exposición, motivarlos, animarlos, darles ideas de cómo pueden organizar su

información de diferentes formas.

Por otra parte los alumnos siempre tendrán la necesidad de que se les guie la

construcción de su sistema de conocimientos. Como docentes al momento de que

un alumno solicite ayuda, hagámosles saber que somos unos profesionales y que

podemos ser de gran utilidad en el proceso de construcción de sus conocimientos.

Tercer Postulado:

Basta con escuchar para aprender y hablar para ensenar

Para mejorar la pedagogía, se propone hacer lo contrario de lo que suele hacer la

mayoría de los profesores. Entonces la propuesta sería: basta con hablar para

aprender y escuchar para enseñar. En este sentido, el autor plantea como lema de

la nueva propuesta los siguientes aspectos:

1. Los alumnos necesitan desarrollar sus habilidades y no memorizar

las informaciones.

2. Los alumnos aprenden más debatiendo que escuchando una

exposición.

3. Los alumnos reservados están menos interesados en aprender que

los que no lo son.

Si es necesario hablar para enseñar y escuchar para aprender, comentar en

equipo sus implicaciones. Los puntos que maneja el autor serían:

1. Situar la exposición dentro de un modo de enseñar más completo.

2. Mejorar la calidad de las exposiciones.

Frases de autores/lecturas.

‘’El fin de la escuela no es ensenar, sino educar al niño’’

(Carrillo, 1964)

La manera de enseñar de la mayoría de los profesores en la actualidad

recae en la memorización o modelo tradicionalista impidiendo que los

alumnos desarrollen completamente sus habilidades cognitivas como la

creatividad, solución de problemas, pensamiento crítico y reflexivo, etc.; El

maestro debe de propiciar en el alumno el gusto por el aprendizaje a través

de el ejemplo, fomentando la interacción entre ambos para crear un

ambiente propicio para este.

“Aprendo como me lo enseñaron, enseño como lo aprendí”

(Pressley y Cols, 1990)

Esta frase expresa que, la estrategia por la cual nosotros adquirimos

nuestros conocimientos, es la misma que utilizaremos si queremos enseñar

a otras personas dichos conocimientos. A pesar de esto, esta frase no nos

parece del todo a acertada ya que todos aprendemos de diferentes formas

e incluso tenemos diferentes niveles cognitivos, por lo tanto si una

estrategia me funciona a mi no es nada seguro que les funcionara de la

misma manera a los demás. Por lo tanto no es muy recomendable utilizar

las mismas estrategias que te sirvieron a ti con otras personas ya que

puede ser que te funcionen o no.

Frase creada

El verdadero aprendizaje es aquel que se genera por sí mismo.

(Sánchez y López, 2012)

El aprendizaje que uno mismo construye es el más puro ya que se crea en

base a tus propias ideas, conocimientos previos y experiencias. No existe

mejor constructor de aprendizaje que tú mismo, el maestro en la actualidad

aparece solo para guiarte en dicha construcción y ser un apoyo en el camino

hacia el aprendizaje.

Conclusiones del tercer postulado

Los resultados del aprendizaje dependen mucho de la calidad de

una serie de actividades que realiza el profesor, que de la mera

exposición.

Evidentemente el hablar para el profesor y el escuchar para el

alumno, no expresan adecuadamente la riqueza y la complejidad de

la relación pedagógica. El alumno aprende escuchando pero también

leyendo, realizando ejercicios, en resumen aprende cuando

reorganiza por sí mismo la información que recibe.

El profesor enseña cuando transmite información, pero también

cuando facilita al alumno el captar modelos para tratarla y ejercitar

sus capacidades haciendo él mismo las operaciones que se le piden.

Sexto Postulado:

¿Tienen los alumnos verdadera necesidad de los profesores?

‘’La investigación sobre la enseñanza, a la luz de las nuevas concepciones del aprendizaje,

muestra que los profesores que realmente ayudan a aprender no son simples transmisores

de su saber: ellos dirigen el desarrollo de las capacidades intelectuales de sus alumnos.’’

(Saint-Onge, 2000).

Hoy en día, el profesor es considerado un guía o facilitador del conocimiento

solamente, dejando abierta la posible idea de si el alumno tiene o no la necesidad

de este. En la antigua práctica docente el alumno se sentaba en el aula y el

profesor reproducía todo su conocimiento frente al alumno llenándolo como agua a

una fuente, siendo este solo capaz de retener la información sin necesidad de

comprenderla a fondo o cuestionar los conocimientos del profesor, pues el se

pensaba que él conocía la verdad absoluta.

El aprendizaje se ve como el uso de conocimientos nuevos (hechos o métodos) y de

estrategias específicas para comprender de diferente forma las ideas y los problemas.

(Saint-Onge, 2000).

El profesor tiene la tarea de alentar al alumno y ayudarlo durante todo su proceso de

formación, preparándose para resolver sus dudas de forma efectiva y acompañarlo a

superarse académicamente siempre considerando las habilidades cognitivas de cada

alumno, así como su nivel de escolaridad y edad actual para la obtención de un aprendizaje

permanente. Las capacidades cognoscitivas que el alumno posee pueden ser bien

desarrolladas sin necesidad de un profesor sin embargo, el no cuenta con la madurez

suficiente para presentar características de autosuficiencia en cuanto al nivel escolar se

refiere, esto significa que no alcanzaría los mismos niveles de aprovechamiento sin ayuda

de el docente.

Por otra parte los alumnos que aprenden eficazmente buscan principalmente conseguir dos

propósitos: primeramente entender el sentido de las tareas que se les imponen y en

segundo término controlar su propio proceso de aprendizaje. Para que los alumnos se

entreguen de verdad a aprender, deben estar convencidos, por sí mismos, de la "utilidad" del

saber propuesto.

Esto quiere decir que para que los alumnos realmente pongan de su parte en el proceso

de enseñanza-aprendizaje es fundamental que ellos sepan para que, cuando y como

podrán utilizar esos conceptos y/o contenidos que se les quiere enseñar. Lo antes

mencionado es muy importante ya que todos en algún momento de nuestras vidas como

estudiantes hemos usado la siguiente expresión: “¿Y eso para que me va a servir?”,

entonces aclarándole al alumno desde un principio para que nos servirán dichos

contenidos evitaremos cuestionamientos como estos además que así se crea el interés

en el alumno.

Conclusión sexto postulado

La enseñanza podría ser la exposición estructurada de nuestros propios conocimientos si

los alumnos dispusieran ya de todas las capacidades necesarias para aprender. Ahora

bien, si los alumnos son capaces de conducir su propio modo de comprender con la ayuda

de las capacidades intelectuales que ya poseen, inicialmente no son capaces de dirigir el

proceso para adquirir nuevas capacidades que les permitan comprender de forma

diferente. Ésta es una de las funciones de la enseñanza: ayudar a desarrollar esas nuevas

capacidades. Los alumnos realmente tienen necesidad de los profesores debido a que los

alumnos nunca contarán con la información necesaria respecto a todos los contenidos para

construir sus conocimientos de forma autónoma en todo momento.

Bibliografía

Carrillo, Carlos A. (1964). “De la enseñanza”, en Artículos pedagógicos,

México, SEP/Instituto Federal de Capacitación del

Magisterio (Biblioteca pedagógica de perfeccionamiento profesional, 34),

1964, pp. 375-378.

Monereo, Carles (Coord.)(1998), “Enseñanza y aprendizaje, dos caras de la

misma moneda”, en Estrategias de enseñanza y aprendizaje. Formación del

profesorado y aplicación en el aula, México, Cooperación España/SEP

(Biblioteca normalista), página 51.

Saint-Onge, M. (2000). “Yo explico pero ellos… ¿aprenden?” Primera

Edición en la Biblioteca para la Actualización del Maestro de la SEP, 2000.