plegadillo economia verde 1

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La Economía Verde no es la solución porque pone en venta la naturaleza, es apalancada por el capital financiero que cada vez tiene más sed de dinero. Para impulsar la economía verde los gobiernos dictan leyes y pactan Tratados de Libre Comercio (TLC) que favorecen la mercantilización y la privatización de los bienes comunes, favoreciendo los intereses de las empresas multinacionales y los grandes grupos económicos. De verde pintan ahora la economía, convirtiendo la vida en solo mercancía La Economía Verde no es la solución ¡Justicia social y ambiental ya! La economía verde no es ni verde, ni sostenible Cultivos transgénicos, geoingeniería, nanotecnología, biología sintética e ingeniería genética son algunos de los nuevos “engendros verdes”. Con todos estos artilugios tecnológicos nos han vendido la supuesta solución de los actuales problemas sociales, económicos y ambientales. Toda esta tecnología se concentra en manos de las empresas multinacionales, quienes pretenden mercantilizar los bienes comunes, privatizar la vida y esclavizar a la mayoría de la población mundial, a través del consumismo, la explotación laboral y la expoliación del planeta. La Economía Verde no es la solución ¡Justicia social y ambiental ya! El negocio de la economía verde es el agronegocio La Economía Verde actualmente promueve en todo el mundo el agronegocio incentivando los cultivos transgénicos y agrocombustibles, estimulando las patentes sobre las semillas y demás recursos genéticos. Además, genera especulación con las tierras, los bosques, el agua y los alimentos. Obliga a las comunidades campesinas a depender de semillas patentadas, y a que compitan en un mercado globalizado en condiciones inequitativas. El modelo que se viene: un campo sin gente. La Economía Verde no es la solución ¡Justicia social y ambiental ya! La multinacionales del agronegocio sobreexplotan el planeta usando la “etiqueta verde”. La economía verde favorece el acaparamiento de tierras y agua a nivel mundial, principalmente para la producción de agrocombustibles, alimentos transgénicos, ganadería extensiva y monocultivos de exportación. Actualmente se impone el cultivo de apenas 150 especies alimentarias, pero la mayor parte de la humanidad vive de solo 12 plantas y el grueso de la producción se concentra en solo 4 cultivos: trigo, arroz, maíz y papa. No al acaparamiento de tierras y aguas ¡defendamos nuestra soberanía alimentaria! La Economía Verde no es la solución ¡Justicia social y ambiental ya! Los bosques con una REDD quieren atrapar ¡nosotros y nosotras no los vamos a dejar! La ONU (Organización de las Naciones Unidas), el Banco Mundial, algunos gobiernos y multinacionales como DuPont, BASF, Monsanto, Syngenta, Bayer y las petroleras BP, Shell y Chevron-Texaco están promoviendo el programa REDD+ (Reducción de Emisiones de Carbono causadas por la Deforestación y la Degradación de los Bosques), que pone precio al carbono absorbido por bosques y suelos. De este modo pintan de verde su imagen pero siguen contaminando y enriqueciéndose con este nuevo negocio. La Economía Verde no es la solución ¡Justicia social y ambiental ya! Agua, tierras, bosques, semillas, alimentos, biodiversidad, territorios y culturas, son bienes comunes para toda la humanidad. La vida no se patenta, no se privatiza, no se mercantiliza, no se vende. Por tal motivo, los pueblos del mundo le dicen No a la Economía Verde y se unen en defensa de la vida, los bienes comunes y la justicia social y ambiental. ¡Los bienes comunes no se venden, se protegen y se defienden! Para la economía verde, la megaminería es clave. En Colombia, se han concesionado 6 millones de Hectáreas para explotación minera y cerca de 67 millones de hectáreas están solicitadas para exploración. Esto corresponde al 58% del territorio colombiano. En Antioquia la cifra asciende a 700.000 hectáreas. La actividad extractiva altera los suelos y afecta flora y fauna. En el Bajo Cauca Antioqueño, la minería ha degradado 45 mil hectáreas y generado gran impacto ambiental en los ríos Cauca y Nechí. La locomotora de la megaminería, deja desiertos y mata la vida La Economía Verde no es la solución ¡Justicia social y ambiental ya! Las multinacionales privatizan la vida ¡el agua no es una mercancía! Las multinacionales francesas Suez y Vivendi, dominan el agua en América Latina. Juntas, poseen dos tercios del mercado mundial de agua privatizada. En Colombia: Suez, Vivendi, Aguas de Barcelona y Canal de Isabel II, tienen presencia en Bogotá, Barranquilla, Cartagena, Santa Marta, entre otras ciudades del país, camufladas con nombres locales para que no se determine su presencia. La privatización ha traído como consecuencia un encarecimiento del agua para los usuarios ahora convertidos en “clientes”. La Economía Verde no es la solución ¡Justicia social y ambiental ya! ¡Sí a la vida! no más represas, no más megaminería En Colombia los megaproyectos mineros y energéticos, han puesto en riesgo la superviviencia de las comunidades locales. Las represas, las hidroeléctricas y la gran minería, han generado desplazamientos forzados de miles de personas, sin restitución o indemnización de sus derechos y las condiciones para una vida digna, así como perjuicios y daños ambientales. En Colombia, la central hidroeléctrica La Miel, provocó la desaparición de 22 quebradas y el desplazamiento involuntario de las familias campesinas que habitaban cerca de 350 hectáreas. La Economía Verde no es la solución ¡Justicia social y ambiental ya! Los acueductos comunitarios son gestión comunitaria y pública del agua, ¡defendámoslos! El mercado del agua impulsado por empresas multinacionales, así como la venta de agua embotellada, son claros signos de privatización de este bien común. Por el contrario, las comunidades organizadas, bajo la forma de acueductos comunitarios, veredales o barriales, constituyen modelos de gestión comunitaria del agua, basados en la vecindad, la solidaridad, el respeto por el medio ambiente, los usos y costumbres de cada una de las comunidades, garantizando condiciones de vida dignas. Impulsémoslos! La Economía Verde no es la solución ¡Justicia social y ambiental ya! LA ECONOMÍA VERDE NO ES LA SOLUCIÓN ¡JUSTICIA SOCIAL Y AMBIENTAL YA! La Economía Verde no es la solución ¡Justicia social y ambiental ya! La Economía Verde no es la solución ¡Justicia social y ambiental ya! La Economía Verde no es la solución ¡Justicia social y ambiental ya! Los TLC y las leyes de semillas atacan la economía campesina y privatizan la vida Otra economía es posible otros mundos son posibles Los Tratados de Libre Comercio (TLC) impuestos por algunos gobiernos, son la vía legal para instalar las exigencias de las empresas multinacionales, convertidas en leyes y normas, vendiendo así la soberanía alimentaria y la biodiversidad. La ley 1518 de 2012, que impone la propiedad intelectual sobre las semillas a través del convenio UPOV 91, fue aprobada afanosamente por el congreso colombiano, como una de las exigencias de los Estados Unidos para aprobar el TLC. Esto favorece el saqueo y control total de las semillas por parte de las multinacionales. Miles de experiencias exitosas que impulsan la producción campesina agroecológica, el comercio justo, los mercados y sistemas de abastecimiento locales, los acueductos comunitarios, la conservación de bosques que involucra a las comunidades locales, los sistemas de trueque e intercambio, el consumo responsable, la banca ética, la equidad entre géneros y generaciones, la soberanía alimentaria, el agua y la alimentación como derechos humanos fundamentales, demuestran que OTRA ECONOMÍA SÍ ES POSIBLE, MÁS JUSTA, ECOLÓGICA Y SOLIDARIA

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La Economía Verde no es la solución porque pone en venta la naturaleza, es apalancada por el capital financiero que cada vez tiene más sed de dinero. Para impulsar la economía verde los gobiernos dictan leyes y pactan Tratados de Libre Comercio (TLC) que favorecen la mercant i l ización y la privatización de los bienes comunes, favoreciendo los intereses de las empresas multinacionales y los grandes grupos económicos.

De verde pintan ahora la economía,convirtiendo la vida en solo mercancía

La Economía Verde no es la solución ¡Justicia social y ambiental ya!

La economía verde no es ni verde, ni sostenible

Cultivos transgénicos, geoingeniería, nanotecnología, biología sintética e ingeniería genética son algunos de los nuevos “engendros verdes”. Con todos estos artilugios tecnológicos nos han vendido la supuesta solución de los actuales problemas sociales, económicos y ambientales. Toda esta tecnología se concentra en manos de las empresas multinacionales, quienes pretenden mercantilizar los bienes comunes, privatizar la vida y esclavizar a la mayoría de la población mundial, a través del consumismo, la explotación laboral y la expoliación del planeta.

La Economía Verde no es la solución ¡Justicia social y ambiental ya!

El negocio de la economía verdees el agronegocio

La Economía Verde actualmente promueve en todo el mundo el agronegocio incentivando los cultivos transgénicos y agrocombustibles, estimulando las patentes sobre las semillas y demás recursos genéticos. Además, genera especulación con las tierras, los bosques, el agua y los alimentos. Obliga a las comunidades campesinas a depender de semillas patentadas, y a que compitan en un mercado globalizado en condiciones inequitativas. El modelo que se viene: un campo sin gente.

La Economía Verde no es la solución ¡Justicia social y ambiental ya!

L a m u l t i n a c i o n a l e s d e l a g r o n e g o c i o sobreexplotan el planeta usando la “etiqueta verde”. La economía verde favorece el acaparamiento de tierras y agua a nivel mundial, pr incipalmente para la producción de agrocombustibles, alimentos transgénicos, ganadería extensiva y monocultivos de exportación. Actualmente se impone el cultivo de apenas 150 especies alimentarias, pero la mayor parte de la humanidad vive de solo 12 plantas y el grueso de la producción se concentra en solo 4 cultivos: trigo, arroz, maíz y papa.

No al acaparamiento de tierras y aguas¡defendamos nuestra soberanía alimentaria!

La Economía Verde no es la solución ¡Justicia social y ambiental ya!

Los bosques con una REDD quieren atrapar¡nosotros y nosotras no los vamos a dejar!

La ONU (Organización de las Naciones Unidas), el B a n c o M u n d i a l , a l g u n o s g o b i e r n o s y multinacionales como DuPont, BASF, Monsanto, Syngenta, Bayer y las petroleras BP, Shell y Chevron-Texaco están promoviendo el programa REDD+ (Reducción de Emisiones de Carbono causadas por la Deforestación y la Degradación de los Bosques), que pone precio al carbono absorbido por bosques y suelos. De este modo pintan de verde su imagen pero siguen contaminando y enriqueciéndose con este nuevo negocio.

La Economía Verde no es la solución ¡Justicia social y ambiental ya!

Agua, tierras, bosques, semillas, alimentos, biodiversidad, territorios y culturas, son bienes comunes para toda la humanidad. La vida no se patenta, no se privatiza, no se mercantiliza, no se vende. Por tal motivo, los pueblos del mundo le dicen No a la Economía Verde y se unen en defensa de la vida, los bienes comunes y la justicia social y ambiental.

¡Los bienes comunes no se venden,se protegen y se defienden!

Para la economía verde, la megaminería es clave. En Colombia, se han concesionado 6 millones de Hectáreas para explotación minera y cerca de 67 millones de hectáreas están solicitadas para exploración. Esto corresponde al 58% del territorio colombiano. En Antioquia la cifra asciende a 700.000 hectáreas. La actividad extractiva altera los suelos y afecta flora y fauna. En el Bajo Cauca Antioqueño, la minería ha degradado 45 mil hectáreas y generado gran impacto ambiental en los ríos Cauca y Nechí.

La locomotora de la megaminería,deja desiertos y mata la vida

La Economía Verde no es la solución ¡Justicia social y ambiental ya!

Las multinacionales privatizan la vida ¡el agua no es una mercancía!

Las multinacionales francesas Suez y Vivendi, dominan el agua en América Latina. Juntas, poseen dos tercios del mercado mundial de agua privatizada. En Colombia: Suez, Vivendi, Aguas de Barcelona y Canal de Isabel II, tienen presencia en Bogotá, Barranquilla, Cartagena, Santa Marta, entre otras ciudades del país, camufladas con nombres locales para que no se determine su presencia. La privatización ha traído como consecuencia un encarecimiento del agua para los usuarios ahora convertidos en “clientes”.

La Economía Verde no es la solución ¡Justicia social y ambiental ya!

¡Sí a la vida!no más represas, no más megaminería

En Colombia los megaproyectos mineros y energéticos, han puesto en riesgo la superviviencia de las comunidades locales. Las represas, las hidroeléctricas y la gran minería, han generado desplazamientos forzados de miles de personas, sin restitución o indemnización de sus derechos y las condiciones para una vida digna, así como perjuicios y daños ambientales. En Colombia, la central hidroeléctrica La Miel, provocó la desaparición de 22 quebradas y el desplazamiento involuntario de las familias campesinas que habitaban cerca de 350 hectáreas.

La Economía Verde no es la solución ¡Justicia social y ambiental ya!

Los acueductos comunitarios son gestión comunitaria y pública del agua, ¡defendámoslos!

El mercado del agua impulsado por empresas multinacionales, así como la venta de agua embotellada, son claros signos de privatización de este bien común. Por el contrario, las comunidades organizadas, bajo la forma de acueductos comunitarios, veredales o barriales, constituyen modelos de gestión comunitaria del agua, basados en la vecindad, la solidaridad, el respeto por el medio ambiente, los usos y costumbres de cada una de las comunidades, garantizando condiciones de vida dignas. Impulsémoslos!

La Economía Verde no es la solución ¡Justicia social y ambiental ya!

LA ECONOMÍA VERDE NO ES LA SOLUCIÓN¡JUSTICIA SOCIAL Y AMBIENTAL YA!

La Economía Verde no es la solución ¡Justicia social y ambiental ya!

La Economía Verde no es la solución ¡Justicia social y ambiental ya!

La Economía Verde no es la solución ¡Justicia social y ambiental ya!

Los TLC y las leyes de semillas atacan la economía campesina y privatizan la vida

Otra economía es posibleotros mundos son posibles

Los Tratados de Libre Comercio (TLC) impuestos por algunos gobiernos, son la vía legal para instalar las exigencias de las empresas multinacionales, convertidas en leyes y normas, vendiendo así la soberanía alimentaria y la biodiversidad. La ley 1518 de 2012, que impone la propiedad intelectual sobre las semillas a través del convenio UPOV 91, fue aprobada afanosamente por el congreso colombiano, como una de las exigencias de los Estados Unidos para aprobar el TLC. Esto favorece el saqueo y control total de las semillas por parte de las multinacionales.

Miles de experiencias exitosas que impulsan la producción campesina agroecológica, el comercio justo, los mercados y sistemas de abastecimiento locales, los acueductos comunitarios, la conservación de bosques que involucra a las comunidades locales, los sistemas de trueque e intercambio, el consumo responsable, la banca ética, la equidad entre géneros y generaciones, la soberanía alimentaria, el agua y la alimentación como derechos humanos fundamentales, demuestran que OTRA ECONOMÍA SÍ ES POSIBLE, MÁS JUSTA, ECOLÓGICA Y SOLIDARIA