ARTE - FACTO

Reflexiones entorno al espacio efímero

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La revista Arte-facto es tan solo un método que utilizamos para plasmar las reflexiones que tenemos en el momento, inquietudes que nos interesa compartir, posiciones alternativas frente a la arquitectura, el arte y el espacio mismo.

Creemos que la arquitectura es una disciplina experimental, es una producción inacabada, es una construcción de ideas precarias. Pensamos que las ideas se deben mostrar de una forma inmediata, con lo justo y lo necesario.

Julio César Cabrera Cano.Julián Oquendo Valenzuela.

Imaginario: Julián Oquendo y Julio Cabrera

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AZAR Y NECESIDAD “Todo cuanTo exisTe es fruTo del azar y la necesidad”...demócrito.

En la conformación de un asentamiento urbano influyen todo tipo de factores sociales, físicos y metafísicos. La planificación pretende controlar estos factores y ejecutar estrategias, que permitan el funcionamiento óptimo y ordenado del sistema de ciudad.

La planificación no arroja resultados perfectos en ningún caso, todos los sistemas son vulnerables al error. Esos “errores” son los que crean acontecimientos de gran complejidad, pero más que eso productos particulares, son efectos del azar y la necesidad, son fenómenos que se resisten a los sistemas codificados.

El mejor ejemplo de esta situación es la ciudad de Medellín, una ciudad planificada bajo los lineamientos del movimiento moderno, pero debido a las masivas migraciones del campo a la ciudad producto del conflicto armado nacional. Se convierte en una ciudad con sectores invadidos, correspondientes al territorio circundante a la ciudad planificada, que con el paso del tiempo pasa a ser minoría. Es en esos sectores invadidos donde afloran las relaciones del azar.

Todo se origina por la necesidad de una CASA, un refugio que se construye con materiales de diferentes procedencias, diferentes tamaños, diferentes poseedores en el tiempo, unos considerados basura y otros considerados poco asépticos, pero a la hora de la verdad no importa... La necesidad rige las exigencias, limpia los caprichos. El resultado

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es sintético: una CASA. Bella o espantosa, no importa… esas categorías son valoraciones banales. Lo que interesa es la vida que se tiene que refugiar en su interior. Así el fenómeno de alojar la vida se repite, casa por casa, barrio por barrio, ladera por ladera. Hasta crear grandes masas heterogéneas de casas de plástico, ladrillo barato, madera sin procesar y láminas de zinc. Esta masa heterogénea se traduce en miles de familias, que buscan suplir la extrema necesidad, tomando como fuente a la ciudad, sus beneficios, siempre usufructuando a espaldas de lo planificado. Todo esto con el fin último de albergar la vida bajo un refugio construido por el mismo azar.

Aerografía de Santo Domingo Savio.

Esquema Parcelación Predial-Santo Domingo Savio.

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MATERIALIDAD (MATERIAL + MATERIALIZAR)

Un proyecto arquitectónico siempre inicia con una intensión, una preocupación, un capricho, una necesidad a suplir. Al intentar descifrar y producir las ideas, es donde la construcción aparece como proceso impredecible. El hecho físico es la única manera de poner a prueba una idea en el mundo real. Es por esto que desde que existe la figura de arquitecto, estos se han preguntado por el asunto de la materialidad; Desde los primeros libros catalogados sobre arquitectura, escritos por por Vitruvio, hasta las últimas décadas, visible en la obra de arquitectos como Louis Kahn o Peter Zumthor. Se puede evidenciar en el ejercicio proyectual, que el espacio lo identifica y caracteriza el elemento físico, que a partir de la aparición de este se abre paso a las experiencias sensibles entre el cuerpo y espacio.

De una manera muy sintética y dispuesta a seguir evolucionando a través de la experiencia y la reflexión grupal, hemos encontrado una aproximación que nos interesa evidenciar en los próximos ejercicios arquitectónicos, funcionando como un laboratorio experimental. La materialidad, es un concepto compuesto, se arma complementariamente por dos palabras provenientes de su misma raíz. Es el concepto donde se encuentran dos hechos: materia y materializar. La materia, es aquella sustancia con la que están hechas las cosas; del latín Mater, que significa Madre. La materia como suceso físico, se hace, se compone, se dispone, se organiza. Permitiendo así que un

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espacio como elemento intangible, sea materia, sea consolidado, sea construido. Pero es crucial preguntar ¿Qué sería del tronco de madera sin ser dispuesto como silla, o la roca sin ser apilada como muro? No sería más que un objeto susceptible a ser admirado, más que habitado. Es aquí donde interviene el segundo compositor de la materialidad... materializar. Así la materia es dispuesta con una intención o inclusive por una función, cerrando un proceso: idea existente, intención existente, lugar dispuesto, materia dispuesta, espacio para habitar. Posiblemente este protocolo permita comprobar que tan importante es el material en una construcción, su selección, su tectónica, su atmosfera. O que tan delicado sea su uso... O tal vez no.

Diseño: .. Julián Oquendo Valenzuela........... Julio César Cabrera CanoClasificación:.. Arquitectura EfímeraAño: .......................... 2013

ATMÓSFERAS DE LA

NECESIDAD

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FORMULACIÓN PROYECTO:

ATMÓSFERAS DE LA NECESIDAD

Medellín es una ciudad latinoamericana, compuesta por un paisaje

comercial producto de la planificación estatal y un paisaje marginado

creado por viviendas transitorias que invadieron las periferias del

territorio. Estos asentamientos se podrían catalogarse como arquitectura

informal, construida bajo parámetros del azar y la necesidad. Artificios

humanos conformados por materiales precarios, que se valen de cualquier

recurso a la mano y cualquier espacio propicio para sobrevivir.

Entendemos el funcionamiento de este fenómeno urbano como si se tratara

del Parasitismo. Siendo este una relación inmediata y estrecha entre

dos organismos, clasificados como huésped y parásito, donde el segundo

vive a costa del primero. El huésped es indispensable para el parásito,

ya que es el sistema al que se adapta y obtiene provecho.

Fotografía: Juan Carlos Aristizabal

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El parasito cuenta con una habilidad de acomodarse, replicarse,

recogerse o extenderse. En ese mismo orden de ideas, comprendemos el

carácter de la arquitectura informal, como CASAS que se transforman,

se acomodan a través de la recursividad o varían según la necesidad

y su posible huésped (la ciudad). Es en la recursividad, en esa

susceptibilidad al cambio, donde aparece el valor agregado de estas

construcciones: el valor interior, un ambiente cargado de precariedad,

construido por métodos rústicos, soluciones constructivas arquetípicas

y elementales para la supervivencia. Arquitecturas Constantemente

estigmatizadas por la sociedad.

A partir de esta reflexión, planteamos destacar las virtudes sensibles

y habitacionales de este tipo de edificaciones, que no solo contrastan

el paisaje, sino también dan cuenta de una situación humana.

Gracias a la comprensión del fenómeno urbano, sensibles a las atmósferas

de necesidad; visibles en las periferias de nuestra ciudad. Tomando

como principios la tectónica, el caos y la precariedad estética,

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llegamos a proyectar un pabellón

“atmósferas de la necesidad”. Que

a modo de intervención efímera, se

posa sobre el museo de Antioquia

(Museo central de Medellín), con

la finalidad de producir evidencias

de la arquitectura marginal en

el espacio público de la ciudad

comercial. Todo esto con la

intención que los ciudadanos

experimenten la sensación espacial,

tectónica y atmosférica de una

arquitectura estigmatizada, pero

con unos valores potenciales.

El método de inserción espacial del proyecto, es el parasitismo. El

pabellón depende del Museo de Antioquia para poder funcionar, pero a

su vez el pabellón presta un servicio de extensión como sala alterna

de exhibición de arte.

Finalmente el pabellón es un pretexto donde quisimos valorar y

potencializar aquellas virtudes de las viviendas de invasión,

enfocándolo hacia el arte y la arquitectura efímera. Abriéndole campo

a las experiencias sensibles de los espacios invalidados.

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FACHADA FRONTAL

SECCIÓN LONGITUDINAL

PLANTA GENERAL

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AGRADECIMIENTOS Dovi Vargas. Ricardo Vasquez. Horacio Valencia. Camilo Echeverri. Sebastian Mejia. Edgar Mazo. Alejandro Tobon. Juan Galeano. Lina Arroyave. Ovidio Cardona. Juan Carlos Aristizabal

Edición: Lina Arroyave. Julián Oquendo. Imagenes: Julio Cabrera. Julián Oquendo. Juan Carlos Aristizabal.Textos: Julio Cabrera. Julián Oquendo

CRÉDITOS

http://revista-arte-facto.blogspot.com/