Cada semana encontrá información de tu Programa de Salud en http://saluda.udea.edu.co

Temas de salud, de familia, de promoción y de prevención te pueden ayudar a llevar una vida mejor. No dudés en encontrarte con nosotros a cualquier hora del día y desde donde estés.

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El descanso te Saluda

Llegan las vacaciones de fin de año y, con ellas, la alegría de la Navidad, la fiesta que congrega a la familia. Grandes y chicos, abuelos y nietos, padres e hijos, planean desde ya cómo será ese momento tan especial y tan esperado. Por eso, SALUDA los invita a que organicen unas vacaciones excepcionales.

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SALUDAPeriódico del

Programa de Salud de la Universidad de Antioquia

Edición: 04 Fecha de circulación: Noviembre de 2006

Rector

Alberto Uribe CorreaVicerrector Administrativo

Álvaro Pérez RoldánJefa del Departamento

de Seguridad Social Marta Taborda Hernández

Coordinador del Programa de Salud

John Jairo Orozco Giraldo

Comité EditorialMarta Taborda HernándezJohn Jairo Orozco Giraldo

Jhonson Alfonso CastañedaEdilson Bustamante Ospina

ProducciónFacultad de Comunicaciones

Universidad de Antioquia Decano

Edison Darío Neira PalacioCoordinación General

Edilson Bustamante Ospina y Sandra Milena Jiménez Vargas.

Edición Juan Carlos Luján Sáenz

Redacción Nectalí Cano Oliveros y Felipe Sosa Vargas

Diseño Isabel Cristina Toro QuinteroCoordinación Portal Web Juan Camilo Arboleda Alzate

ImpresiónLa Patria

Ciudad Universitaria Bloque 22 Oficina 340

Teléfono 210 62 70Fax: 210 62 80

Las opiniones de los autores no comprometen a la

Universidad de Antioquia.

Tus opiniones son esperadas en el correo electrónico:

saluda@comunicaciones.udea.edu.co

Circulamos con 6.000 ejemplares Distribución gratuita

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Estamos certificados con el ISO 9001:2000 en Gestión de la Seguridad Social, que incluye Pensiones, Riesgos Ocupacionales y Programa de Salud. Esto nos enorgullece y nos invita a continuar en la mejora de nuestra calidad.

A continuación entregamos apar-tes de un texto escrito por el jubilado José Elías Atehortúa, afiliado al Pro-grama de Salud, quien lo quiso com-partir con los lectores de SALUDA.

“Mi salud es un atuendo universitario como una fuente cristalina.Es mi vocabulario en su garrular, en mi pensamiento.Es por ello que le llevo en el alma como una mamá.Mi vestimenta, mi salud, mi lecho tibio.Acá no se maltrata al hombre, no tiene ese delito.Somos familia”.

¿Nos querés dar tu opinión sobre el periódico o sobre el portal Web? Tus sugerencias o comentarios los podés enviar al correo electrónico: saluda@comunicaciones.udea.edu.co o hacerlos llegar al Bloque 22 oficina 340.

Opiná

Asoman las vacaciones, asoma la alegría de fin de año, asoma la alegría de la Navidad. Llega la época en que la familia planea cómo compartirá los últi-mos días de 2006, tiempo propicio para que desde los abuelos hasta los más

pequeños compartan cada mo-mento, revitalicen sus relaciones y entiendan que aunque siempre haya diferencias y distintas mane-ras de ver la vida, el proyecto de familia es sinónimo de unidad, de fortaleza y de mutuo apoyo.

Unas buenas vacaciones no sólo se viven en Europa o en el Caribe, en la misma casa, en el parque infantil de la esquina, en la acera del frente, en la piscina de la unidad residencial o en la alcoba en la que cada pareja com-parte su intimidad, hay espacio para que un buen descanso, una buena conversación, un abrazo o un juego sirva para que la fami-lia, así sea por un par de días, se

Llega la alegría de las vacaciones

detenga y evalúe todo aquello, po-sitivo y negativo, que los ha hecho o no crecer.

Y si de planes se trata, los hay de todas las clases, desde los que se ar-man en el barrio, en la parroquia o en la acción comunal hasta los que arman el papá o la mamá después de cenar. Si hay niños, pues lo me-jor es compartir mucho tiempo con ellos e inscribirlos en unas vacaciones recreativas que les permita conocer a otros de su edad y desarrollar acti-tudes y aptitudes propias de su per-sonalidad.

Para los abuelos, como para los niños, el mejor de los planes es conversar bastante con ellos, preguntarles por sus expectativas de vida, pedir que les recuerden las Navidades que vivieron y, en caso tal de que vivan alejados de

nosotros, invitarlos a pasar una temporada juntos. El éxito de las vacaciones parte de que nos en-contremos, de que volvamos a recuperar espacios perdidos y de que nos comprometamos a que el próximo año vamos a tener más tiempo para el hermano, la her-mana, el papá, la mamá, los tíos, los hijos…

Que las vacaciones que se ave-cinan sean las mejores de la vida, que este lapso entre un año que pasa y otro que llega sirva para for-talecer nuestra salud mental y sir-va para fortificar nuestra existencia ante tantos embates de la acosada vida de hoy. Por eso, para el Pro-grama de Salud de la Universidad de Antioquia el que sus afiliados puedan disfrutar de un espacio tan necesario es un paso más para que la familia encuentre en la diversión más momentos para concretar su proyecto de vida.

Queda que planeemos unas buenas vacaciones, sin excesos y con la idea de vivirla en familia.

Reportá los accidentes de trabajo

A la influenza le seguimos dando la pelea en el Programa de Salud de la Universidad de Antioquia. Por eso, durante noviembre continuaremos vacunando a nuestra población pro-pensa a sufrir un virus que muta cada año de distintas maneras. Ahora, para lograr una cobertura más am-plia, el Programa de Salud ha decidi-do vacunar a los adultos mayores de 45 años y continuar con los menores de 23 meses.

Los afiliados podrán acceder a este servicio gratuito en Pediatría So-cial del Hospital Infantil, en la Ciudad Universitaria (sólo para pensionados) y en la IPS Universitaria.

Para mayor información, los in-

También para los mayores de 45teresados se pueden comunicar al teléfono 213-3262 con la auxiliar Blear Holguín Puerta. Para las jor-nadas es necesaria la identificación con el carné del Programa de Salud de la U. de A. Les sugerimos llamar antes de asistir.

Horarios de noviembrePediatría Social (Hospital Infantil)Los días 14, 16, 17, 20, 21, 23, 24, 27 y 28 de 8:00 a.m. a 1:30 p.m. y el día 30 de 8:00 a.m. a 12:00 m.Ciudad Universitaria (Jubilados)El 21, de 8:00 a.m. a 12:30 p.m.IPS UniversitariaLos días 14, 16, 17, 23, 24, 28 y 30 de 8:00 a.m. a 12:00 m.

“Somos familia”

Llega la época en que la familia planea cómo compartirá los últimos

días de 2006.

Reportar todo tipo de evento que se relacione con la actividad laboral y que ponga en riesgo la integridad física y la salud de los empleados es un asunto prioritario que debe informarse al jefe inmediato para que éste pueda documen-tarlo, intervenir dicha circunstancia y tomar medidas de tipo legal. El que vos lo hagás, en

caso de haberlo vivido, va a permi-tir que otros compañeros no sufran tu misma situación y así el entorno laboral será más seguro y se podrá iniciar una mejora del asunto.

También, para que se haga un reconocimiento por parte de

la Administradora de Riesgos, se debe hacer el reporte dentro de las 48 horas siguientes (dos días hábiles). Si por alguna circuns-tancia no podés cumplir este tér-mino, se debe aclarar mediante un comunicado que justifique el por qué del retardo. Dependien-do de la causa del accidente, será la atención del mismo, por lo cual es importante que el afecta-do adelante el proceso completo hasta que el médico lo dé de alta si requirió incapacidad, o hasta la fase de rehabilitación si ésta se necesitó para adaptarse de nuevo al mundo laboral.

Te invitamos a seguir estos pa-sos para que por un lado evitemos los accidentes laborales y por otro podamos iniciar correctivos.

Tratarlos con amor Acogerse al reglamento

“La familia es el eje del cuidado de un anciano con discapacidad”, afirma Carlos Eduardo Jaramillo González, médico de Visita Domiciliaria de la IPS Universitaria, quien considera que estos pacien-tes se vuelven un problema para la familia no porque afectivamente lo sean, sino por falta de herramientas para su adecuado manejo.

Dicen que abuelos y bebés com-parten los adjetivos de dependientes y caprichosos. Por eso, así como un bebé enfermo genera impotencia porque no puede decir qué le duele, “la familia se siente impotente para manejar un anciano con discapaci-dad mental, física o del mismo con-texto familiar y eso genera proble-mas médicos y la aparición de otras patologías”, agrega el profesional.

El médico asegura que, para el exitoso cuidado de un anciano con discapacidad, se deben sumar el acompañamiento del Programa de Salud o cualquier EPS, con una visi-ta médica periódica para evaluar el paciente y su contexto; una familia unida que apoye esta labor y una co-municación fluida y honesta entre el paciente, el médico y la familia.

Un público especialSi tener un familiar enfermo

exige el compromiso y acompaña-miento de todos en casa, si que es cierto cuando es el abuelo, pues “el paciente anciano tiene toda la evolución, toda la vida encima con

Convivir con un anciano con discapacidad, un reto familiar

En equipo con el alma

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esa enfermedad y no es sólo una, sino que tiene otras enfermedades que se asocian al problema indicado”, como explica el doctor Jaramillo.

Así, mientras un joven con una pierna fractura-da se puede mover apo-yando las manos, cuando un anciano se fractura la cadera no tiene la misma movilidad y además hay que estar pendiente del sistema respiratorio, pues la inactividad le puede generar una neumonía o una infección urinaria, entre otras, por la reten-ción de líquidos.

Adicionalmente, el doctor Carlos subraya la importancia de estar pendientes de la quie-tud en cama, pues expo-ne al paciente a heridas por presión, y, aunque acepta que es incómodo levantarse a las dos de la mañana para mover a un anciano (por lo menos cada hora y media), dice que accio-nes de cariño como éstas son las que permiten evitar más problemas a futuro. “Además, si el paciente no está en cama, es bueno sacar-lo a caminar para que tome el sol, siempre apoyado en un adulto”.

Por último, el doctor Jaramillo co-menta que “los ancianos necesitan ca-riño y compañía, caricias y palmaditas

en el hombro, pues nosotros genera-mos una inyección de afecto para que sienta que estamos pendientes de él, pero el éxito de un programa de visita domiciliaria no lo hace el médico sino el equipo que forma con la familia y con el paciente”.

Dales una mano“Descubrí que ellos son

limitados, pero yo también lo soy al no conocerlos…”, resumió un asistente al Par-que Multisensorial después de vivir la experiencia, por unos minutos, de no poder ver, hablar ni caminar.

Y allí se demostró que el lí-mite entre unos y otros es casi imperceptible, por más que unos la superen con levantarse de la silla de ruedas al terminar el recorrido, mientras que a otros la vida les puso la prueba de no poder estar de pie.

Pero, ¿qué es esto del Parque Multisensorial? Es más que una ca-rrera de obstáculos para amarrarse un zapato, identificar un olor o ca-minar sin ver.

El Parque Multisensorial, que visitó la Universidad del 11 al 13 de octubre, sirvió para sentir por unos minutos las discapacidades y así entender que existe la dife-rencia y que nadie está exento de sufrirlas algún día. Así quizás, como el asistente lo escribió en el papel, la primera discapacidad que tenemos que superar es la de conocer y entender la diferencia.

Truquitos pa´la salud

“A los ancianos con discapacidad hay que tratarlos con amor, hacerlos sentir que son miembros importantes de la familia y que siempre estén

rodeados de los hijos y nietos, pues a ellos todo se les hace un mundo y hay que ayudarles”.

Olga Ochoa, afiliada

“Un deber del afiliado es hacer los aporte cumpli-damente, respetar y acogerse al reglamento, y en términos de derechos todos los que confiere la ley a través del Programa de Salud de la Universidad”.

Fredy Alonso Vélez MonsalveVicedecano - Facultad de Comunicaciones

¿Se imagina llegar a una cita y que el médico le diga que no lo atiende porque dejó el estetosco-pio? Pues bien, así como el profe-sional de la salud debe preparar-se para brindarle atención, usted debe cumplir ciertos requisitos para acceder a ésta. Por eso, en la condición de afiliados al Programa de Salud y de usuarios de la IPS Universitaria, tenemos una Decla-ración de derechos y deberes, una carta de navegación que permitirá que juntos alcancemos el puerto de un mejor servicio.

Pero tranquilo, no se trata de complicadas normas. Sus deberes como usuario incluyen, entre otros, el de procurar su salud y la de su comunidad; estar afiliado al Siste-ma General de Seguridad Social en Salud; cumplir con sus pagos obligatorios; informarse sobre los servicios de salud, la ubicación de las IPS, los horarios y los procesos para obtener la atención; solicitar y usar racionalmente los servicios; seguir las indicaciones médicas; asistir cumplidamente a las citas; participar de los programas de prevención y promoción y aplicar acciones de autocuidado para re-ducir los factores de riesgo.

Así mismo, usted cuenta, entre otros, con el derecho a recibir la información clara y precisa; a ob-tener sus citas oportunamente; a ser escuchado y responder a sus inquietudes; a recibir indicaciones sobre autocuidado y tratamientos a seguir; a escoger libremente el profesional que lo va a atender, dentro de las opciones de la IPS; a ser remitido a un centro de mayor complejidad, cuando así lo requie-ra; a ser atendido en urgencias por fuera de Antioquia; a que se le preste durante todo el proceso de la enfermedad la mejor asistencia médica disponible, respetando los deseos del paciente en el caso de enfermedad reversible; a ser aten-dido en instalaciones seguras y confortables; y, claro, a ser tratado con amabilidad y cortesía.

Así que ya sabe, como reza el lema del Programa: “Ocuparnos de su salud y la de su familia, nuestro mayor compromiso”, por eso los deberes y derechos deben cumplirse.

Todos ponemos

El afecto es la base de un buen cuidado para los adultos mayores que sufren alguna discapacidad. Claro que sólo el afecto no basta, también se ne-cesita conocer qué herramientas requieren estas personas para una buena vida.

Hacerle caso al médico

Queré tu cuerpo

Como una sensación de que “algo falta” define Carlos Mario González, filósofo e historiador de la Universidad Nacional, la calidad del ser humano. Y agrega: “huma-nidad es deseo de que algo o alguien nos detenga”. Sin embargo, en nuestro afán de ser estudiantes, trabajado-res o sujetos activos y productivos se nos olvida que so-mos humanos, decimos que no hay tiempo y olvidamos sacar minutos sencillos para vivir, para abrazar o para re-galar una caricia, algo que reclamábamos cuando niños y que parece que olvidamos cuando llegamos a adultos.

Y de eso se trata: de que nos dejemos abrazar, y me-jor aún, también abrasar, primero con los brazos, para rodear, ceñir, hacernos sentir ante quien nos ama, y bueno, también con brasas, con ese calor corporal que podemos transmitir al otro, porque igual, con ese gesto tan humano, quien se pierde en nuestros brazos siente que se le entrega todo.

Abrazar es comunicar sin palabras, es pedirle al otro que se deje tocar, es brindar un estímulo. Y ese estímulo lo transmitimos con las manos, con la palmadita.

Un toque rescatanteLa necesidad de sentir al otro tiene tantos años como la

misma humanidad. El hijo se aferra a la madre para bus-car protección, la amada se aferra a su amante para co-municarle que espera que ese amor dure por siempre. Un ejemplo de lo que significan estas manifestaciones fue el famoso “abrazo del rescate”. Fue la historia de dos bebés en su primera semana de vida. Cuentan que cada peque-ño estaba en su incubadora respectiva y que uno de los dos no iba a sobrevivir. Una enfermera del hospital luchó contra las reglas y puso a los bebés en una sola incubado-ra. Cuando estuvieron juntos, el más sano de los dos lanzó un brazo sobre el otro. El ritmo cardíaco del bebé más pequeño se estabilizó y su temperatura se volvió normal.

¿Qué más premio al éxito obtenido que un abrazo de felicitación? ¿Qué mejor manera de empezar el día, llegar al trabajo o volver que con un abrazo? Somos inconformes por ser humanos, vamos en busca de algo que en ocasiones no sabemos qué es y todos los días nos llenamos de nuevos retos. Pero hace falta dejar espacio al sentir, al tocar, al apretar.

Podemos sentir, tocar y palpar

Dame un abrazo

“Hay que seguir las recomendaciones del médico y si dice que para agacharse se debe flexionar las rodillas, pues hacerlo así en cada momento, pues el abuso del

organismo acrecientas las dolencias y los dolores”.Ana Cecilia Bedoya, beneficiaria

Como una sensación de que “algo falta” define Carlos Mario González, filósofo e historiador de la Universidad Nacional, la calidad del ser humano. Y agrega: “huma-nidad es deseo de que algo o alguien nos detenga”. Sin embargo, en nuestro afán de ser estudiantes, trabajado-res o sujetos activos y productivos se nos olvida que so-mos humanos, decimos que no hay tiempo y olvidamos sacar minutos sencillos para vivir, para abrazar o para re-galar una caricia, algo que reclamábamos cuando niños y que parece que olvidamos cuando llegamos a adultos.

Y de eso se trata: de que nos dejemos abrazar, y me-jor aún, también abrasar, primero con los brazos, para rodear, ceñir, hacernos sentir ante quien nos ama, y bueno, también con brasas, con ese calor corporal que podemos transmitir al otro, porque igual, con ese gesto tan humano, quien se pierde en nuestros brazos siente que se le entrega todo.

Abrazar es comunicar sin palabras, es pedirle al otro que se deje tocar, es brindar un estímulo. Y ese estímulo lo transmitimos con las manos, con la palmadita.

Un toque rescatanteLa necesidad de sentir al otro tiene tantos años como la

misma humanidad. El hijo se aferra a la madre para bus-car protección, la amada se aferra a su amante para co-municarle que espera que ese amor dure por siempre. Un ejemplo de lo que significan estas manifestaciones fue el famoso “abrazo del rescate”. Fue la historia de dos bebés en su primera semana de vida. Cuentan que cada peque-ño estaba en su incubadora respectiva y que uno de los dos no iba a sobrevivir. Una enfermera del hospital luchó contra las reglas y puso a los bebés en una sola incubado-ra. Cuando estuvieron juntos, el más sano de los dos lanzó un brazo sobre el otro. El ritmo cardíaco del bebé más pequeño se estabilizó y su temperatura se volvió normal.

¿Qué más premio al éxito obtenido que un abrazo de felicitación? ¿Qué mejor manera de empezar el día, llegar al trabajo o volver que con un abrazo? Somos inconformes por ser humanos, vamos en busca de algo que en ocasiones no sabemos qué es y todos los días nos llenamos de nuevos retos. Pero hace falta dejar espacio al sentir, al tocar, al apretar.

Podemos sentir, tocar y palpar

Dame un abrazoAl sentarse, caminar, cargar algo y hasta dormir...

¡Salud por su postura!

Autocuidado

El afecto es fundamental

“Pienso que el afecto es fundamental en la vida de cada ser humano. Yo personalmente soy muy

afectuosa y me encanta expresarlo a las personas que yo quiero. Eso nos aumenta el autoestima

porque nos sentimos queridos”.Edilma Orozco Soto, jubilada

¿Un hombre prefiere soportar una risa aje-na o un dolor lumbar? Hay algunos que por no agacharse “como las mujeres”, hacen es-fuerzos indebidos para levantar algún peso.

El médico Ricardo León Gutiérrez, del Programa de Riesgos Ocupacionales y es-pecialista en salud ocupacional y ergono-mía, explica que “muchas de las manifesta-ciones de salud se asocian con la postura, el manejo del cuerpo en el movimiento y en el descanso. Y no sólo la actividad que implica esfuerzo o carga afecta el cuerpo, pues cuando nos sentamos hay un esfuer-zo muscular para acomodar todas las es-tructuras a esa función”.

Históricamente, el hombre, bípedo por esencia, se movilizaba y trabajaba de pie, pero la evolución lo llevó a otras posturas, lo sentó. “Por eso se dice que con el desarrollo se van a atrofiar ciertos sistemas y ciertos elementos del cuerpo porque ya no se van a utilizar”, agrega el doctor Gutiérrez y subra-ya la importancia de las posturas adoptadas para dormir, caminar, hacer el aseo, trans-portarse y trabajar, cuando nos acoplamos para usar máquinas y herramientas.

Dentro del quehacer diario hay múltiples actividades que, de realizarse en la postura incorrecta, pueden generar molestias en la espalda, el cuello o cualquier parte donde hay relación de músculo y estructura ósea. Por eso, SALUDA invitó al doctor Gutiérrez para que nos diera algunas recomendacio-nes para la postura correcta en las tareas básicas del día a día:

Al agacharse para levantar algo: Lograr que la columna conserve la verticalidad y las curvaturas naturales, teniendo en cuenta que en la parte alta hay más movimiento y flexi-bilidad, mientras que en la parte baja es más rígida y, contradictoriamente, son las partes que obligamos a hacer movimientos, cuando deberían permanecer rectas, para soportar la mayor parte de la carga. Así, la invitación es a flexionar las extremidades inferiores, poner un pie adelante y otro atrás para ganar esta-bilidad, teniendo en cuenta que los patrones normales dicen que la capacidad de alzada del hombre (desde el piso) es de 25 kilos y de la mujer 12,5 kilos.

Al caminar: Con la columna recta, el mentón erguido y el abdomen adentro.

Al sentarnos a trabajar: Lo ideal es que la silla sostenga bien las caderas y el espaldar, principalmente la región lumbar (la parte baja de la espalda) y que al sen-tarnos las rodillas queden en ángulo recto con la cadera o superen ligeramente el ni-vel de éstas.

Al dormir: De nuevo lo ideal sería con-servar las curvaturas naturales de la colum-na (cuello, tórax y región lumbar).

Por eso, si duermo de lado, lo ideal es que la almohada no supere el nivel del hom-bro. Aquí encontramos la que se considera una de las mejores posturas, que es con las rodillas recogidas: la posición fetal.

Así mismo, si duermo boca arriba lo ideal sería poner una almohada bajo las rodillas, para levantarlas ligeramente, y si lo hago boca abajo, lo ideal, para que las líneas no se aplanen, es ubicar una almo-hada bajo el abdomen.

Por último, el médico Ricardo Gutié-rrez aclara que si bien estas posturas no las mantenemos conscientes, habría que volverlas conscientes, para incorporarlas a nuestra cotidianidad, de manera que terminen siendo actos mecánicos, que nos ayuden a evitar esas molestias que afectan nuestra salud y nos hacen soñar con un masaje.

Ante todo la tradiciónDialogar en familia

Vivir bueno es fácil, esa es la consigna de la fami-lia Quintero Restrepo y

lo cumplen a cabalidad. Así lo hace saber la mamá del hogar, doña Clara: “Si a mí me gritan pues yo me quedo callada y luego hablamos; uno tiene que apagar y no prender”.

En esta casa, ubicada en el barrio Las Margaritas de Enviga-do, todos viven muy bien. Don Rubén, el papá; doña Clara, la mamá; y tres hijos (Belén, Nico-lás y Mauricio) de nueve que son en total. Y aunque no viven allí, no faltan los nietos y familiares que gustan de visitarlos.

“Si alguien me insulta y yo me levanto a pelear o a gritar hay un problema; es mejor callarse, es como pelear con un borracho, nada me gano. Si está aburrido, si no le gusta lo que yo hago que explique”, agrega doña Clara.

Ella y sus familiares partici-paron hace un año en el pro-grama ‘Proyecto en Familia’ que organizó el Programa de Salud de la Universidad de Antioquia y dice al respecto Belén que “el Proyecto nos sirvió mucho en nuestro hogar”.

Belén se desempeña como secretaria de la Vicedecanatura de la Facultad de Ciencias So-ciales y Humanas de la Univer-sidad de Antioquia, además de profesora de cátedra también en el Alma Máter.

Una soluciónDoña Clara y don Rubén

han convivido por años sin problemas grandes. Esculcan sus recuerdos y comentan que el único inconveniente que ha trascendido, y fue el problema

Vivir sin problemas

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La familia Quintero Restrepo,

como toda familia, tiene sus

dificultades en la convivencia, pero siempre se las han arreglado para

salir adelante y superarlas.

que el ‘Proyecto de Familia’ ayu-dó en su solución, tuvo que ver con un nieto.

Julián David Estrada Quintero es hijo de Gloria, una de las hijas de doña Clara y don Rubén. Tie-ne una hermana, Ana Carolina, y los dos son asiduos visitantes de la casa de los abuelos; antes vivían allí pero ya residen en otra vivienda.

“Pero Julián es una persona muy explosiva y no respetaba al abuelo -cuenta doña Clara-. Y salía gritan-do cosas y el abuelo le contestaba, y eso más me disgustaba a mí”.

Eso sucedió hace unos tres años. “A mí me disgustaba la música que él escuchaba”, dice don Rubén. “Y nos sirvió mucho lo que hicimos en el Programa de Salud de la Universidad”.

En las reuniones participaron juntos, escucharon los conse-jos de las terapeutas de familia. “Julián ya venía como más dócil, como más sumiso, aunque él es una persona muy entrona”, co-menta doña Clara.

“Él cambió demasiado debi-do a eso, ya fue capaz de convi-vir más con nosotros y el abuelo también cambió”, expresa doña Clara. “Tuvieron ese problemita con la música, al muchacho le gustaba la música con bulla y al abuelo no le gustaba, por eso se iba por allá arriba a dormir, y al muchacho ya le gusta la música como los porros, la cumbia…”.

Don Rubén, cuando recuer-da todo esto, comenta que en el Programa de Salud, con el “Proyecto en Familia”, le ayu-daron mucho para acercarse a su nieto. “He reforzado ideas que defiendo en mi casa, como que el licor sólo trae problemas, por eso aquí no bebemos”.

Ríen, se ríen de todo y viven bueno. Por eso saben resolver sus problemas y quieren que todas las familias hagan lo mis-mo. “Aquí irán a pelear cuando yo me muera, pero mientras esté viva nunca lo vamos a ha-cer”, dice orgullosa doña Clara entre risas.

CuidalosVacaciones en familiaLas vacaciones son el momento propicio

para estar en familia. Si bien en lo que va del año se han tenido espacios para com-partir, las vacaciones deben ser el instante del reencuentro. Para el que sale de viaje o para el que se queda en casa la invitación es una sola: comparta, pase la mayoría del tiempo con su padre, su madre, su her-mano, su esposo, su esposa, sus hijos, en fin, dedíquele el tiempo a los que poco les dedicó. Ya a la hora de embarcarse en un destino, piense en lo siguiente.

Si va a viajar, sea por tierra o por aire, este es el instante de hacer la reservación. No lo deje para más tarde, mejor aún, entre más rápido lo haga, más tranquilo estará. Póngase de acuerdo con su gru-po familiar sobre el destino, a no ser que tenga una finca o un lugar tradicional en el que pase la Navidad y el fin de año. Y claro, a la hora de buscar una agencia, cerciórese de que ésta no sea pirata. Pla-nee el viaje y tenga en cuenta una serie de medidas antes de salir de casa:

• Lleve los medicamentos que no re-quieren prescripción médica y que se puedan necesitar.

• Lleve, a donde vaya, el carné del Programa de Salud y mire en el Ma-nual del Usuario en qué otros sitios del país puede ser atendido con el carné. • Lleve los primeros auxilios médicos.

• Tenga en cuenta los bloqueadores de sol, sombreros y lentes para el sol.

• Consulte con el médico antes de salir si se está tomando algún medicamento.

• Se recomienda llevar los medica-mentos a la mano y no con el equipaje.

• Al viajar a otro país, se debe ave-riguar sobre la disponibilidad y calidad del servicio médico allí.

• Si no se lleva a los niños, debe dejar una autorización escrita para cualquier tratamiento a quien esté al cuidado de ellos.

• Si los planes son viajar largas dis-tancias, se puede minimizar el desajuste horario si se programa la llegada cer-ca de su hora acostumbrada de ir a la cama, de acuerdo con la hora del lugar al que se viaja.

• Se deben llevar los registros de in-munización, junto con cualquier otro re-gistro médico importante, sobre todo si se viaja a otro país.

• Al viajar a otro país hay que asegu-rarse de que todos los que viajan estén vacunados contra cualquier enfermedad infecciosa que puede estar presente en el lugar. Algunos países exigen certifica-dos de vacunación contra enfermedades como el cólera y la fiebre amarilla.

“Las familias deben solucionar sus problemas dialogando, buscando momentos como los fines de semana para reunirse a hablar cuando estén

todos en la casa”.Dora Escobar, beneficiaria

“Las vacaciones las pasamos en familia. Lo me-jor es que en este momento mi esposa y yo so-mos el centro de una familia grande, de manera

que las hijas confluyen a nuestro alrededor”.Gustavo Cadavid Cardona

Jubilado

Consejos familiares

Cuenta Belén Quintero que en el ‘Proyecto en Familia’ apren-dieron más sobre la convivencia familiar.“Como Julián, mi sobrino, vivía aquí, todos teníamos autoridad sobre él. La trabajadora de familia nos dijo que ‘uno u otro, pero no todos, le pueden decir qué debe hacer, pues él no le puede hacer caso a todos’”.Así que se pusieron en acuerdo hasta en la asignación de roles, a Julián su figura de autoridad sólo la representó la madre, Gloria.

Belén (derecha) y su madre, doña Clara. La palabra ‘problema’ parece no existir en el léxico de la familia Quintero Restrepo.

Buen provecho

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Controlar el peso

La diabetes se ha conver-tido en una enfermedad que, debido a los hábitos alimen-ticios y de vida de los últimos años, se ha tornado cada vez más común.

“A mí me empezaron a dar mareos y no sé por qué me imaginé que era lo que llaman azúcar en la sangre, y el médi-co me dijo: ‘sí, tiene diabetes’”, cuenta Mariana Díaz Quiceno, de 45 años de edad.

“En mi familia nadie había tenido eso, entonces yo creía que nunca me iba a dar, que sólo le daba a los hijos de dia-béticos, y vea que no”.

La diabetes no es nada dulce

Es una de las enfermedades que más afecta el mundo actual. Sus causas son múltiples.

El doctor Nicolás Velásquez Ruiz, médico de la IPS Universi-taria y director de los Programas de Hipertensión, Diabetes y Dis-lipidemias, explica que la dia-betes, “lo que se conoce como ‘azúcar en la sangre’, son tras-tornos metabólicos en los que está elevada el azúcar, es decir la glucosa”.

Agrega el mismo médico que esto es debido a una incapacidad por parte del organismo de utilizar esta glucosa, lo que conlleva, sino hay un adecuado control médico y nutricional, a daños en la retina, en los riñones, en el corazón y en el sistema nervioso, entre otros”.

Clases de diabetesEsta enfermedad se clasifi-

ca en tres grupos: diabetes 1, propia de pacientes jóvenes. La diabetes 2 o diabetes del adul-to: en Colombia se calcula que la padece el 7 por ciento de la población mayor de 30 años y es de carácter familiar; y la dia-betes gestacional, que es pro-pia del 2 al 5 por ciento de las mujeres embarazadas.

Esta enfermedad es de esas que cuando se manifiesta en el organismo puede llevar ya varios meses e incluso años de manera latente, lo que evita que se em-piece un tratamiento temprano.

“Hay unos síntomas clásicos producidos por la diabetes -ma-nifiesta-: la poliuria, que es estar orinando permanentemente; la polidipsia, que es ganas de tomar agua a toda hora; y la pérdida de peso”. También es muy común la falta de ánimo para desarro-llar las actividades cotidianas y el sueño permanente. En los niños los síntomas son la deshidrata-ción y el dolor abdominal.

Prevención y cuidadoLa señora Mariana Díaz men-

ciona que los cuidados que tiene consigo misma, con el fin de con-vivir lo mejor posible con esa en-fermedad, es una buena alimen-tación y ejercicio frecuente.

Claro que, como con toda enfermedad, lo mejor es preve-nirla. El médico Velásquez mani-fiesta que “el pilar fundamental en la prevención y manejo de las complicaciones de la diabetes se centra en la dieta y el ejercicio”.

Cuando se padece de ella, aparte de la dieta y del ejercicio se debe recurrir a medicamen-tos llamados hipoglicemiantes, y en otros casos a la insulina.

Para evitarla lo requerido es el ejercicio frecuente y una alimen-tación baja en azúcares y en ha-rinas, y como siempre, un buen médico y un buen nutricionista como frecuentes consejeros.

“Yo pienso que un paso muy importante para combatir la diabetes es controlar el peso y la

alimentación, sobre todo las grasas, las harinas y los dulces”.

Amanda EstradaBeneficiaria

¡Que por la boca no entre todo!

Gracias a la asesoría de la Nutricio-nista Catalina Arango, en las dos prime-ras ediciones de SALUDA respondimos cómo mercar saludablemente y cómo conservar mejor los alimentos. Por eso, hoy traemos algunas recomendaciones sencillas para cocinar saludablemente, que no es más que minimizar los ries-gos de salud de la cocina tradicional, evitando los excesos de grasas, coles-terol y sal.

Algunas recomendaciones son:- Coma gran variedad de alimentos,

pero no en gran cantidad.- Utilice aceites bajos en grasa: de

oliva, canola o girasol son excelentes alternativas.

- Cree salsas con yogurt o crema sin grasa para mejorar el sabor de los ali-mentos.

- Quítele la piel al pollo y la grasa a las carnes: recibirá la misma nutrición, disfrutará del mismo sabor y le hará un bien al corazón.

- Sazone pollos, carnes y pescados con hierbas y especias como el oréga-no, el laurel o el polvo de ajo, en lugar de ponerles mantequilla y grasa.

- Conjugue verbos como hornear, hervir, asar y sofreír, en lugar de freír los alimentos.

- Cocine las verduras sólo hasta que estén tiernas y crujientes, mejorando así su aprovechamiento nutricional.

- Enriquezca el relleno con verduras, frutas o nueces cortadas, ellas añaden sabor, textura y valor nutritivo a los ali-mentos.

- Limite la grasa agregada. Cubra las verduras cocinadas y otros platos con productos de margarina de poca grasa en lugar de las salsas ricas en grasa.

Por último, no olvide que comer saludable es vital para tener energía durante todo el día, conseguir las vita-minas y minerales necesarios, mante-ner fuerza para las actividades físicas y mantener un peso ideal.

El ejercicio, una dieta balanceada y acompañamiento médico son esenciales para prevenir o mantener controlada la diabetes.

Más verduras, menos grasa

“Nos debemos cuidar consumiendo productos que no le hagan daño al organismo, caso las frutas y verduras y tratando de no utilizar grasas saturadas sino aceite

de canola. Tampoco utilizo la piel del pollo, comemos mucho pescado y no compramos embutidos”.

Elvia Correa, jubilada

Recomendaciones

Para prevenir o mantener controlada la diabetes, es recomendable:- Una dieta controlada por nutricionista.- Evitar el consumo exagerado de dulces y azúcares.- Ingerir agua (hasta seis o siete vasos diarios).- Practicarse chequeos también contra la hipertensión o la dislipidemia.- Evitar la ‘comida chatarra’, pues su alto consumo ha elevado también el número de diabéticos.

Sa

na

men

teNo es necesario Le aterra el cigarrillo

“Estoy ajustando un año sin fumar”

Mark Twain, el escritor y perio-dista estadounidense autor de Las aventuras de Tom Sawyer, decía que “Dejar de fumar es fácil. Yo ya lo dejé unas cien veces”. Y aunque suene a broma, Twain deja en el aire la sensación de que lo compli-cado no es dejar el cigarrillo sino sostenerse antes de regresar a él.

Entonces, a veces es bueno acor-darse de las soluciones ilógicas y pensar cómo aplicarlas a un viejo anhelo: dejar de fumar. ¿Recuerda alguna vez que haya empezado a aplazar algo un día y otro día?

Pues bien, si le hacemos caso a Twain con aquello que demuestra lo fácil que es dejar el cigarrillo, quizás se nos abra una posibilidad. Ima-

El tabaquismo y una solución al revésginemos que empieza un lunes. Pri-mero, piense en algo que le produzca placer para invertir en ello el tiempo y el dinero del cigarrillo. ¿Comer man-go? ¿Chupar paleta? ¿Ir a cine?

En este punto y momento, sólo queda prometerse a sí mismo que sólo es un cambio temporal, que ya volverá el cigarrillo. Y será sólo al otro día, pero justo ese día algo se atraviesa en el camino, ¿qué tal un cono en el parque con su hijo? El paquete de cigarrillos esperará en la tienda, pues tan sólo pasará otro día antes de volver a su humeante.

Y llega ese tercer día, pero cómo uno fuma en la casa, por fin hay la posibilidad de encontrarse todos

para ver un programa, esta vez el ci-garrillo tendrá que esperar un par de horas más. Pero, película en familia sin crispetas y gaseosa no es pelícu-la, así que la plata de los cigarrillos se convierte en el refreso que ahora comparten juntos. ¡Qué se va a ha-cer, cigarro, mañana hablamos!

Si la calle nos llama...Y el cuarto día está acá. Ya no

hay que dar más vueltas: “hoy vuel-vo al cigarro”. Y ya, cuando imagi-naba de nuevo la cajetilla, una mú-sica desde la calle le recuerda que hay donas de todos los sabores. “¡Seguro, pero seguro cigarrillo que mañana sí!”

Y ya es viernes. “Ya es justo que vuelva el cigarrillo”, pero cómo los viernes son tan románticos, la plata de la cajetilla se invertirá en un pa-quete de margaritas, pues además es bueno comprar flores. Bueno, la plata se irá en pétalos en lugar de humo, pero ya vendrá el sábado, espere y verá.

¿Fin de semana en familia? Y qué tal hacer una vaca para com-prar una pizza. Pues sí, tocó po-ner lo de los cigarrillos, pero ya el domingo nos desquitamos. ¿Y el séptimo día? No, se lo vamos a dar de descanso al cigarro. Esperemos el lunes, aunque quizás el camino atraviese un mango o un helado.

“Nunca he llegado a fumar, nunca fumaré y nunca permitiré que alguien de mi familia fume

porque me ha tocado ver familiares cercanos mo-rir por ese vicio. Eso me aterra”.Cecilia Ramírez, afiliada

“Yo creo que el cigarrillo es muy dañino por-que mis padres murieron de cáncer por fumar. Cuando trabajé en la Universidad llegué a fu-mar pero a la larga vi que eso no me generaba

necesidad y lo dejé”.Orlando Mejía, jubilado

El doctor Alberto Uribe, rector de la U. de A., dejó el cigarrillo y siente una mejoría en su calidad de vida.

Fumar es muy rico, pero no fumar es

extraordinario, dice el Rector, quien hace un año entró al club de

los exfumadores y hoy anima a los suyos a

seguirlo.El ejemplo empieza por casa. Y

eso lo demuestra el médico Alber-to Uribe Correa, rector de la Uni-versidad de Antioquia, quien hace un año le dijo no al cigarrillo y se ha sostenido en una decisión que ha mejorado su calidad de vida.

El cuento del humo es cosa del pasado. “Yo cogí el hábito de fu-mar ya adulto, en edad madura, cuando estudiaba un posgrado en la Facultad de Medicina, y lo hice más por los amigos, porque el grupo de amigos que tenía fuma-ba, y por curiosidad. De eso hace unos 17, 20 años”, recuerda.

Ante esta situación hubo que tomar correctivos, aunque la fuerza de voluntad no ayudara mucho. “En unas siete ocasiones intenté dejar el uso de cigarrillo, y hubo épocas en las que lo dejé por seis, siete meses, pero hoy día he dejado de fumar y ojalá perdure en esa decisión”.

Razones por montonesY claro, tenía razones para de-

jarlo. “Le digo a mis amigos y a mi familia que en este momento lo tengo suprimido. No es fácil, pero tengo un convencimiento cada vez mayor: fumar es muy rico, pero no fumar es extraordinario”.

Hoy el Rector ve los resultados de dejar de inhalar humo por su boca. “Las molestias físicas han desapa-recido en un alto porcentaje y eso lo estimula a uno para persistir en el no fumar”, dice quien sabe que la actividad física moderada puede complementar el dejar de fumar. “En mi estado físico me he sentido bien, he sido buen caminador, ten-go buena capacidad para caminar, no he hecho ejercicio a alta inten-

sidad, no me he puesto a prueba en ello, pero todo se va limitando debido al cigarrillo”.

¿Pero a todas estas, qué hay de-trás de dejar el cigarrillo, será que sí somos capaces? Mejor que lo diga el Rector: “Los primeros días son terribles, los deseos, las ansias de fumar y la desesperación son gran-des, yo pienso que existen métodos que ayudan a soportar esa ansie-dad, esa angustia, hay estrategias como los parches de nicotina o los chicles de nicotina, algunos ansio-líticos o antidepresores que se es-tán usando en el mercado; solos o combinados son de gran ayuda y recomendables”.

Consejo para seguirY viene de parte del galeno una

inquietud: “Yo no sé por qué los sistemas de salud, las EPS, no pa-trocinan estas campañas. La verdad es que son costosas e infortunada-mente no están al alcance de la po-blación en general, pero recorde-mos los años perdidos, los costos de un paciente con enfermedades producto del cigarrillo y del taba-quismo, como son los costos perso-nales de incapacidad, hospitalario, los múltiples cánceres que se deri-van del fumar, y creo que haciendo una relación costo – beneficio, bien valdría la pena que fueran apoya-dos o se empezara a pensar en el ambiente de las EPS”.

Pero el doctor Alberto Uribe tie-ne un gran reto: “En el ambiente familiar, mi señora es fumadora de muchísimos años, y la hija mayor igualmente, los dos menores no son fumadores; ellos inicialmente lo rechazaban y se han ido acos-tumbrando a la vida así, y ahora que no fumo soy un estímulo tan-to para los fumadores como para los no fumadores en la familia”.

Por eso, ante un reto como es-tos lo mejor es pensar en la salud. El Rector considera que fumar es delicioso pero igual trae sus con-secuencias negativas, las mismas que es mejor hacer a un lado. ¿Será que vos te vas a atrever y vas a intentar dejar de fumar?

Ahí tenés los tenis

El deporte es salud Me siento como de 25

John Cardona dedica su vida a la Universidad de Antioquia, a su

familia y a la actividad física. Todas las semanas es común verlo, de

madrugada, trotando por las calles de su barrio.

A las 5:40 de la mañana se deja ver por al-gunas calles del sur de la ciudad. El sol ape-nas asoma y ya el doctor John Cardona se ha puesto los tenis para salir a trotar durante una hora antes de iniciar sus labores.

John Cardona Arteaga es pensionado de la Universidad de Antioquia, aunque sigue li-gado a ésta, toda vez que hace parte de la Escuela de Gobierno y de Políticas Públicas de Antioquia. Es egresado del Liceo del Alma Máter y contador de la Facultad de Ciencias Económicas, además fue profesor, jefe de De-partamento y decano de la misma Facultad.

“Toda la vida he estado ligado a la Uni-versidad, como 42 ó 43 años”, cuenta este hombre que, hasta hace poco, fue presiden-te del equipo rojo de Antioquia, el Deportivo Independiente Medellín, y en la actualidad es presidente de la Asociación de Contado-res de la Universidad de Antioquia. A todo ello dedica su vida: academia, empresa y ac-tividad física.

Siempre deportistaCuenta el doctor Cardona que “a mí me

enseñaron en el Liceo de la Universidad de Antioquia que uno de los fundamentos de la formación integral es el deporte, y es además importante para uno mantenerse en forma desde el punto de vista espiritual y físico”.

Gracias a ello mantiene un estado físico envidiable y no refleja los 58 años que su cédula certifica tener. “Allá en el Liceo y en el trayecto por la Universidad siempre he es-tado junto al deporte, viéndolo y practicán-dolo. Primero fue el fútbol, luego haciendo jogging y caminando fuertemente. Siempre saco tiempo en la mañana o en la noche y practico al menos tres veces en la semana”.

Un día normal del doctor John Cardona empieza muy temprano, cuando aún ni ha aclarado el día. Sale a trotar, regresa a casa y se dirige luego a alguna de sus acostumbra-das reuniones. Entre la Universidad y otras labores se le pasa el día, y es común que en las noches también deba asistir a reuniones.

Del Medellín fue parte esencial; en los úl-timos diez años fue integrante del Comité

Por el deporte tiene la mente despejada

Los trotes de don John

Ejecutivo y desde mediados de este 2006 fue el presidente. “He vivido las verdes y las ma-duras”, comenta, mientras recuerda cuando el DIM fue último del torneo, en 1997, pero tam-bién cómo ha sido campeón dos veces: 2002 y 2004. “Tenemos la gratificación de obtener logros muy importantes en este siglo”.

En familiaLa familia de John Cardona también se de-

dica al deporte, no como él que sale a trotar pero sí en gimnasio, como lo hacen sus tres hijas. “Algunos familiares se interesan por el adagio de ‘en mente sana, cuerpo sano’”.

Y para acabar de ajustar, la vida de bo-hemia es poquísima en su existencia. “Tomo muy poco licor, salvo alguna actividad social muy ocasional. Pero cuando uno toma licor de noche no es recomendable que se levante a hacer deporte al otro día, porque como que no va lo uno con lo otro, además la vida se lleva mejor sin licor, de eso estoy seguro”.

Así vive y combina deporte con trabajo este personaje que casi diario se pone los tenis. “Yo salgo a trabajar nuevo, animado, cuando practico deporte. Yo que trabajo con grupos llego con la mente despejada, como nuevo a las actividades diarias”, recuerda el expresidente del Independiente Medellín.

Camiseta de la Universidad de Antioquia pero roja, como la del DIM, para unir sus amores. En las mañanas es común ver trotar a John Cardona por vías de El Poblado.

El 26 de octubre, los afiliados y beneficiarios eli-gieron sus representantes ante los organismos de Seguridad Social, con los siguientes resultados:

Junta Administradora del Programa de SaludRepresentantes de los afiliados y vinculados: Salva-

dor Ramírez, principal, y Jorge Aristizábal, suplente.Representantes de pensionados y jubilados: Wilson

Quintero, principal, y Pedro Restrepo, suplente.Comité Técnico CientíficoCésar Ospina, principal, y William Botero, suplente.Junta Administradora del Encargo Fiduciario

Representantes de servidores públicos y vinculados: Guillermo Pereira, Principal, y Gloria Granda, suplente.

Representantes de pensionados y jubilados: Car-los Cañas, principal, y Pedro Restrepo, suplente.

La Junta Administradora del Programa de Salud vela por los recursos de la Seguridad Social en salud, le propone al Rector las normas que debe expedir el Consejo Superior Universitario, aprueba los progra-mas de promoción y prevención, diferentes de los obligatorios, y define los recursos para éstos.

El Comité Técnico Científico define condiciones, procedimientos, formatos y registros para la solici-tud y aprobación de medicamentos esenciales, de procedimientos y actividades que no se encuen-tren en el plan de beneficios adoptado para el sistema Universitario de Salud. También evalúa y recomienda al médico tratante la conducta que se debe seguir para cada uno de los pacientes de los que se solicite su concepto acerca de medicamen-tos, actividades o procedimientos que se encuen-tren por fuera del plan de beneficios, y autorizar-los cuando lo considere necesario.

Finalmente, la Junta Administradora del Encargo Fiduciario aprueba el balance del encargo fiduciario, los informes de gestión que presenta la Fiduciaria y las rendiciones de cuenta que presente la Fiducia-ria. La invitación es para que los afiliados se enteren de la gestión que hace cada una de las Juntas.

Democracia y seguridad social, de la mano

A velar por los usuarios

Bitácora

“El deporte es salud, por eso invito a las personas a que lo practiquen ya que a la larga beneficia mucho porque a uno la salud se le va deteriorando por falta de activar los músculos”.

Ruth Villegas, beneficiaria

“El deporte es indispensable para la salud. Yo por ejemplo camino todos los días desde el Centro

hasta La Floresta y eso a mí, que tengo 65 años, me hace sentir a plenitud, como

un muchacho de 25”.Rodolfo Rojas, Jubilado