revista nina

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El auge del “café gourmet” · Deporte: Sobre dos ruedas · Música: Vincent Vega · Entrevista al fotógrafo Mario Mora · Menos humo, por favor · Moda: City Style · Sociedad: Casa nueva, estrés nuevo · Lugares: Mamma Roux · Gastronomía: Hecho en casa 01 · Diciembre, 2010 · UY $110 · ARG $12 · CH $4200 El auge del “café gourmet”

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Revista creada como proyecto de clase.

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Page 1: Revista Nina

El auge del “café gourmet” · Deporte: Sobre dos ruedas · Música:

Vincent Vega · Entrevista al fotógrafo Mario Mora · Menos humo,

por favor · Moda: City Style · Sociedad: Casa nueva, estrés nuevo ·

Lugares: Mamma Roux · Gastronomía: Hecho en casa

01 · Diciembre, 2010 · UY $110 · ARG $12 · CH $4200

El auge del “café gourmet”

Page 2: Revista Nina
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Page 4: Revista Nina

DIRECTORA EDITORIALSoledad García

DIRECCIÓN DE ARTESoledad Solari

COLABORAN EN ESTE NÚMEROItuatum Niosto, Doluptat Wisam, Ostrud Erci Tin, Vullamet Adipsus, Ciduip E.Corper, Iuscip Enim, Non-sed Tiesed, Molor Sequisis, Dolor Noseugait Henim.

CORRECCIÓNRenata Correcter

TAPAFotografía y diseño: Sole-dad Solari

ILUSTRACIONESSoledad Solari, Levedad, El conejo.

IMPRESIÓNGalt Printing www.galtpriting.com

[email protected]

Page 5: Revista Nina

Sumario

Nota de Tapa

Moda

Deportes

Sociedad

Música

Lugares

El auge del “café Gourmet”

City Style

Sobre dos ruedas

Casa nueva, estrés nuevo.

Conociendo a Vincent Vega

Mamma Roux, imperdible

Post-it. Mario Mora. Nota: Menos humo por favor.

Hecho en casa.Receta: Galletas de limón.

Cortitas!

Cultura

Gastronomía

6

25

12

30

14

36

4

17

38

Page 6: Revista Nina

Música:Vincent Vega,

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El auge del

“CAFÉ GOURMET“Variedad de granos, de procedencias y sabores distintos, todo en un mismo lugar. La aventura de educar el paladar en un país en el que, según expertos, no existe algo así como la cultura del café.

Por Leonel García

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Estos empresarios critican la escasa propuesta existente en plaza y reivindican a esta infusión como excusa para una pausa en el día y generador de encuentros. La palabra gourmet es un galicismo que refiere a un paladar refinado y conocedor. En Uruguay, ese término no parece combinar bien con el café.

“El uruguayo medio no sabe tomar café, no tiene cultura. Además, estoy convencido que lo que tomamos en los bares es basura. Agarrá un grano de café y rompelo, ¡es azúcar molido, quemado! Ponete a recorrer los boliches en la tarde y no vas a ver a casi nadie toman-do. En Buenos Aires, donde yo tuve restaurante diez años, querías to-mar uno y no encontrabas dónde sentarte”. El que habla es Daniel

Fernández, vicepresidente de Cam-badu y propietario del Café y Bar Tabaré.

Y si una opinión así surge de un empresario gastronómico, no cabe esperar mucha piedad desde los consumidores. “Agua sucia” es una expresión frecuente al referirse al tradicional “feca” de máquina. Otros, más indulgentes, aseguran que aquí se toma la infusión a la que el público ya está acostumbra-do y le gusta. Vox pópuli, vox dei, aunque no falte quien los trate de “jugo de paraguas”, y que las va-

riedades habituales en plaza no pasen del café corto, largo, cortado, espresso, con leche, ca-puchino, torrado y poco más.

Sin embargo, algo parece estar cambiando en Montevideo. Fernán-dez destaca el surgimiento de nue-vos locales donde el “café gourmet” es el centro de la propuesta. En estos lugares, la capacitación del personal a la hora de las prepara-

ciones, amplia variedad de sabores y granos, y un menú gastronómico que complemente, son tres de los denominadores comunes. Ambien-tes acogedores con mucha madera llaman a la pausa y al encuentro de negocios y con amigos. Claro, el término gourmet también se coti-za: un pocillo en estos lugares pue-de llegar a costar entre un 10% y hasta casi un 100% más -según se pida un espresso o algo más elabo-rado- que en los establecimientos “estándar”.

El norte buscado es generar aquí una “cultura del café”, tal vez buscando recuperar la nostalgia del viejo Sorocabana, con sus in-terminables tertulias políticas, ar-tísticas e intelectuales. Hoy, según la Organización Internacional del Café (ICO, por la sigla en inglés), con sede en Londres, Uruguay está ubicado en el puesto 86 entre 181 países, con 0,9 kilos de consumo per cápita anuales, muy lejos de los Estados productores y más aún de los grandes consumidores, casi to-dos europeos. La gélida Finlandia está al tope de ese ranking, con 12 kilos; Brasil, el mayor productor mundial, consume 5,81 kilos y ocu-pa el lugar 17.

LlegadasUna muestra de esta nueva

movida es la apertura el pasado lu-

“El uruguayo me-dio no sabe to-

mar café...”

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nes 2, inversión de 120 mil dólares mediante, de la primera franquicia uruguaya del Café Martínez argen-tino, en Rivera y Arocena. Esta es una cadena de café gourmet con 62 locales y 15 mil pocillos diarios vendidos en su país. En Argentina, donde los empresarios gastronómi-cos coinciden que su cultura del café es el ejemplo a seguir, esta marca existe desde 1933. La idea base puede resumirse en lo siguien-te: uno puede pedir un pocillo, pero enseguida el mozo podrá pre-guntarle al cliente cosas como ¿más fuerte?, ¿más amargo?, ¿con más cuerpo?, ¿tipo capuchino? Disfrutar un momento, sí, pero también ha-cer probar y conocer, resume Agus-tina Martelli, asesora de franquicias de la firma.

Siguiendo una receta que se respeta a rajatabla, un café en Mar-

tínez debe demorar entre 18 y 22 segundos desde que se enciende la máquina hasta que el pocillo está pronto para ser servido. La espuma tiene que tener una consistencia parecida a la crema y de color ave-llanada. Las variedades de grano existentes son muchas: arábigo, descafeinado de México, brasileño, colombiano suave, un tostado italiano fuerte. La carta es rica en otras especialidades -37 en total- como café irlandés, calipso, esquel, además de las ya tradicio-nales en cualquier otro estableci-miento.

A Agustina Cello, la propietaria de la flamante franquicia, le pasó lo mismo que a todos los empresarios consultados para este artículo. No le satisfacía ninguno de los lugares

para tomar café existentes en pla-za. “Yo creo que acá, en Montevi-deo, estaba haciendo falta un lugar de encuentro como éste, generador de momentos, porque esta infusión sirve para todo: una tertulia, un encuentro íntimo, un espacio para

uno”. Como muestra del interés de esta marca en Montevideo, mañana está prevista la inaugu-ración de otro local, en Punta Carretas.

En este último ba-rrio, en Francisco Ros y Luis de la Torre, abrió sus puertas Viejo y Querido, otra propuesta que tiene al café como uno de sus puntos fuertes. “A mí me interesa que se fomente esta cultura, por todo lo que acompaña a esta bebida: una charla, un negocio, una amistad, una lectura, un despertar o un pa-

...en Montevideo, estaba haciendo falta un lugar de encuentro como

éste...

Izquierda. Expresso doble en Café Martínez. Arriba. Latte con crema batida acom-pañado por una torta de chocolate y nueces.

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rate en el día. Y de alguna manera, lo vamos a lograr”, aventura Elisa Furiatti, una de las socias del local, con amplia experiencia como aseso-ra gastronómica.

Viejo y Querido maneja el Café Cabrales, un producto colombiano, tostado en grano, que se procesa en Argenti-na. Además de su va-riada gama en cafetería impuso un menú espe-cial para acompañarlo: sandwiches, pasta frola, medialunas, budines de arándanos o limón glaseado, o alfa-jores de maicena.

Furiatti menciona que para procesar el café tiene una máquina Rilo italiana, de dos bocas y un mo-linillo, valorada en unos cinco mil dólares. De esta manera introduce uno de los factores en los que coin-cidieron estos empresarios para ex-plicar las carencias del café que se vende en plaza: la falta de interés de los empresarios gastronómicos

en capacitar a su personal. “Acá la gente no está preparada para sacar un buen café, moler el grano y de-más. A los propietarios (de bares o restaurantes) les es mucho más fá-cil tener una máquina automática, en la que apretás un botoncito y

sale un café; otro, y sale un cortado. Los gastro-nómicos prefieren eso porque se ahorran la ca-pacitación de la gente. Como asesora, eso lo vi en muchos lugares”.

Parecida es la opi-nión de Santiago Gómez, quien desde hace un mes está a cargo de la nueva etapa del Café Brasilero, en Ituzaingó y 25 de Mayo. “El problema en Montevideo es que la cafetería siempre fue manejada por personas que no conocen del tema. Los que son profesionales de esto llevan hasta dos años de estudios. Mientras que acá, el que te `saca` el café es el lavacopas o el mismo mozo. Yo puedo tener el mejor gra-

no, pero si no lo sé procesar, lo des-trozo”.

El Brasilero es considerado Pa-trimonio Histórico y sus inicios da-tan de 1877. La idea del nuevo due-ño es adaptarlo a los tiempos que corren, siempre con el café como eje. No solo trabaja con marcas reconocidas como Bahía, con una variante de granos sin glasear, y Segafredo, con el producto tostado al aire. Una de las claves pasa por experimentar diariamente, al mejor estilo de los cócteles, “buscando el paladar del público”: hoy el espres-so puede tener un 30% de granos colombianos, mañana se le puede agregar un toque de vainilla, otro día será el turno del “carajillo” (con cognac) o del café irlandés (con whisky de esa nación británica).

Pioneros El Café Irazú, ubicado en Juan

Carlos Gómez y Sarandí, es recono-cido por los principales operadores del ramo como uno de los pione-

“... Yo puedo te-ner el mejor gra-no, pero si no lo sé procesar, lo

destrozo”

Izquierda. Cortado con leche batida, Amaretto Bakery CaféDerecha. Eduardo Rossi, propietario de Café Irazú

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ros del café gourmet en la ciudad. Abrió sus puertas en diciembre de 2004 y aún es un punto de refe-rencia. Trabaja los productos de In-dustrias Rey, una de las principales cafeteras de Costa Rica, donde su propietario Eduardo Rossi estuvo viviendo.

Al igual que sus colegas, Rossi es muy crítico con el producto exis-tente en plaza. Y como ellos, pone énfasis en la necesidad de haber capacitado a su personal para poder ofrecer productos distintos. “Noso-tros fuimos pioneros (en Uruguay) porque brindamos distintas prepa-raciones hechas con café gourmet y elaboramos 40 bebidas a partir de éste”, explica. En su carta hay ocho variedades de espressos, ocho de capuchinos y una larga lista de ca-fés fríos como el “Alaska de naran-ja”, el “París Frío” o el “Café Glasé”, que incluye helado.

A pocas cuadras, en Plaza In-dependencia, está la casa central uruguaya de Bonafide, otra cadena argentina, que abrió poco tiempo después que Irazú. Su encargado, Carlos Alves, asegura que la cultura del café está volviendo de a poco al país y que ahora es habitual que los trabajadores de las oficinas cerca-nas se den tres o cuatro escapadas diarias del trabajo a degustar de un capuchino o un café caramelo fra-ppé, de un cubano a un irlandés.

Todavía se tiene que hablar de apuesta al futuro. Fernández, de Cambadu, espera que la gente res-ponda a éstas y otras propuestas similares. Hay cuestiones de idio-sincrasia que pueden servir como obstáculos. En Argentina, pese a su reconocida cultura en café, la ICO dice que su consumo es de solo 1 kilo per cápita anuales, apenas su-perior a Uruguay. Los expertos di-cen que eso se debe a que acá la mayoría de la gente prefiere tomar café en sus casas y no hacer una pausa en bares antes del regreso; el hecho de que aquí las distan-cias entre los hogares y el trabajo sean casi siem-pre más cortas que en la vecina orilla ayu-dan a esa realidad.

Eso sin contar la competencia -mayor que la existente en Argentina- de otra in-fusión estimulante de la que Uruguay es el ma-yor consumidor mundial en relación al número de sus habitantes: el mate, bebida que aquí sí es un ícono cultural.

La cifra 145 Tazas anuales per

cápita de café que se beben en Uruguay, según datos del Departamento de Marketing de Nestlé, líder del mercado local.

Otro “amargo” en el menú

“En Europa y EE.UU., el 70% del café se toma al mediodía. Eso acá no se da”, dice Eduardo Rossi de Irazú. “La cafetería comienza a funcionar a las diez u once de la mañana, cuando debería ser a las ocho o nueve”, agrega Santiago Gó-mez, del Café Brasilero.

La explicación para ese fenó-meno en Uruguay se debe al mate, infusión de la que acá se consumen

400 millones de litros al año y que, según un artículo del suplemento El Empresario de noviembre pasado, sus ventas superan a la de todos los refrescos juntos. Eso ha dado lugar a que el flamante Viejo y Querido, de Punta Carretas, incluyera a la bebida más vinculada al país en su menú, en sus variantes de yerba común y suave y otra frutal. Se-gún explica una de las socias del emprendimiento, Elisa Furiatti, el mate es de vidrio, el termo, común y corriente, es de medio litro, y la bombilla es descartable, “así tenés

la seguridad de que no la usó otra persona”.

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Page 14: Revista Nina

Sobredos ruedas

Ostrud ming elis et praesse qui-sim do et, sit autpat ulla feu faccum doloreet prat aliquis nulla cons adit dolore veril do odoluptatie conse-nim ipit, sectem ectet ulputatue min henim at.

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Deporte

Page 15: Revista Nina

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Lic. BelénChiarino

Las mujeres se abren paso en las pistas de skate

Skatepark, Buceo.Fotografía por Soledad García

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Page 16: Revista Nina

Lorper sumsan volum ver se modo conullu tatueros-trud dignim velisim dit wis eugueros aliquipit la aut ad tetue dit.

Nonsectetue feugue dolo-re magna aut er alit, susci essi el ullumsan vel ea feuisse euipis aci blaorpero ero con ulla consequam in eu feumsandre dolessed minit accum vulputatummy nis dolorper at. Ut vo-lestisi blaoree tuercip-sum irit irit lum au-tatue dit prat iliquisl doluptat. Nummy nis niatue minibh exerostie molorpero ea cor sustrud magnim amet non-sequ isisit illandre tie veliquipit ad eugiam ipit autpat doluptat, cor adionullan vero exer iustrud dolute vel dipit ad ex ex exerillaore magna facin hent wisisl delenim vel duisi.

Is num vullaoreet augue vel exerostrud te feum eugait alit dig-

Vincent Vega

na consequis nit am venim nim vel ullaorp eriure core tatue et, velendre ex er adio et in utpat illa faci tem dolum inis am dio dolobo-rem veliscilit ut am, core doloreet

luptat,Putat, volobor tin-cilit irit It autatis cincilis alissecte tem dolorper sumsan utatum dolore delent la faccum zzrilis ciniam do dolore vendre

corperostisl del iureet adions dip-summ odipis eugiamcon heniam vel ut lobore do dignit adip Im ad tie tetum veliquatum venim iriure magnisci tem zzrilit velit la feugait vercili quismolortie verosto odolor ing etuerci blandipsum inibh eu feugiat, consequam dignisit wis-mod tat dui eliquatio do duiscil.

Perfectos juegos armónicos entre las voces de sus dos performers...

Música

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Page 17: Revista Nina

Izquierda. Matías González y Mau-ricio Sepúlveda. Fotografías por Leo Rodríguez

Page 18: Revista Nina

“Quédate hasta que

amanezca, veremos

el día llegar, está frio

aunque no parezca

y es mejor quedarse

acá...”

01. A través de la ventana 02. Huevo Maraca 03. De piedra 04. Hacia el sol 05. Un pez06. El piso se va a manchar07. Otoño08. Un poco más feliz09. Sín título #110. Del campo a la ciudad11. Folkie

myspace.com/huevomaraca

Vincent VegaVincent Vega{BigParaguas Records, 2009}

San henis ad etuer sum vel do-lenibh et iurercip et atet iliquis aut wisl in henim irit, quisis nummy num dolor ad tie molorp eliquatio do duiscil luptat autpat. San henis ad etuer sum vel dolenibh et iurer-cip et atet iliquis aut wisl in henim irit, quisis nummy num dolor ad tie molorp Iril ilisim iusciduis nonse tatumsan eros nullutem iusciduis eugait at lutat, velenis ex eros elisl in utatiniatis delessenim dolobor eratetum zzrit deliquis alit iure cons ad ex ero corper ing eugiam vent ation vel eugait ut lortie vel euguer summy.

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Page 19: Revista Nina

C U LT U R AMúsica Cat Power · Lykke Li · Beach House Cine Comer, Rezar, Amar · El hombre de al lado · El límite de los sueños Exposi-ciones Arte Finlandés · Plástica Profunda Entrevista Conociendo al fotógrafo Mario Mora Nota Me-nos humo, por favor.

Page 20: Revista Nina

Ectem ver sed dio conseniam ipit am in henit am et praesequat in ut wismod dignim quat. Lamconul-put laore mod te con henisim vero dolessed tat. Am, quat nit am, sed dolor senit ercidunt lutem incidui psummy nonsequis augait ea feu-giam vel er adigna feuisis num vo-lortie min ut ver irit aut et augue tions nostrud deliquam iure et au-

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Beach HouseTeen Dream{BellaUnion Records}

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-it

músicague faccum dolenibh euissim iure modiam verilit ut praessed dolor in esent am, vercil ulput nullum irilla aut lore feum iurem dolobor se mod magna feum dionsed eui tionsenis aliquis ese feui tiscillaorem digna aute commod exer sim il in et eui-sisi. Nonsecte verci blandigna faci tio etum zzriurer aute deliquatum et, commod tat. Magna consequ ismodolobore er irit wismod duip eliquatum deliquis dip ex ent irius-to doluptat. Dunt eummodio od min exerosto do consequisim vent vulputet lore eugait augiatu msan-diam, quisit loreetu mmoloboreet, sumsandre feum iure min hent vel illuptatinim ilisisi.Ullaor sumsan hent lortis dit, core tionummod delit ilit vel ullamet, quis eugue diam, sit eros ea al.

Page 21: Revista Nina

Liz Gilbert (Julia Roberts) tenía todo lo que una mujer moderna sueña tener – un esposo, una casa, una carrera exitosa – pero se sen-tía confundida y perdida; insatis-fecha. Recientemente divorciada, Liz Gilbert se embarca en una tra-vesía alrededor del mundo que se convierte en una cruzada hacia el auto descubrimiento. Así descubre el verdadero placer de la comida en Italia, el poder de los rezos en In-dia y la paz interna y el verdadero amor en Bali.

Ilit nis alit in utpating esenim iriure enit nis nisi. Olortie molobore eum ea faciliquip exerciduisi. Nis acillao rtionum dip ercilla commoleniat. Lum er augueros nis ecte endit prat lam quipis alisi. Xeriurem dolummy num et ullum quamet adio consed duis amconsed tisi tat, vel illa feu faciliquamet in ute dolor susto odo core feuisis non utatuer ostrud ming euis nim qui tet, si eu facing eu facipis delisl ullan ver se facil er acilis nismodiam, con hendipisl et autpatum zzrilisit iuscil ulputat do-lore do eu feuguero et wis esequis-cilis dolorperos adio od ecte ercing

Olor ilis nostrud ming eugait ummy nonsequam ipit wis num ipis ali-quat ionullaore feugiatum zzrit acipis auguer il utat luptati ncilism odionummy nit alit luptate magna feui tem ver si te dolor se feugiam, veliquis nulla consenim dolestio es-sequis elis nis ex euis alismoluptat ipsum ing ecte diamcommy nulput vel iliquam zzrilis er sit vent init Xeriurem dolummy num et ullum quamet adio consed duis amconsed tisi impused.

Apertura viernes 18.30 hs Espacio Cultural Contemporáneo

Una simple pared medianera puede dividir dos mundos, dos maneras de vestir, de comer, de vivir. De un lado Leonardo, fino y prestigioso diseñador que vive con su familia en una casa realizada por Le Corbu-sier. Del otro lado Víctor, vendedor de autos usados, vulgar y avasalla-dor. Cuando éste decide hacer una ventana para tener más luz empie-za el problema: cada uno toma con-ciencia de la existencia del otro. Y un conflicto mínimo puede crecer hasta dimensiones inimaginables.

Amy, una mujer racional y escép-tica, madre y esposa, no solía re-cordar sus sueños, hasta que una noche sueña que su caballo muere. Asustada, se despierta en mitad de la noche y comprueba que su caba-llo ha muerto. El siguiente sueño le dice que morirá a los 48 años, edad que acaba de cumplir. La película sigue cada momento de ese año, explorando la vida y la muerte en el contexto de una familia cuya fe-licidad se ve amenazada cuando el sueño parece hacerse realidad.

Comer, rezar, amar {Drama-Romance} Julia Roberts, James Franco. Dir. Ryan Murphy

Artistas de Helsinski Sintiendo los polos Similitudes y Diversidades

Plástica Profunda Muestra y Primera Selección de colectiva de Plástica Profunda

El hombre de al lado {Comedia dramática} Rafael Spre-gelburd. Dir. Gastón Duprat

El límite de los sueños {Comedia dramática} Amy Hardie. Dir. Amy Hardie

cine

exposicionesendre consenim illaorem zzrilit ipit veliquisisi bla con velisl ea feugue mod minibh euis nulla facilla feui-pis alis dolut at, vulput ulla faci-dunt exer sisi. Equissi et, quiscip essequat. Duisim nis nibh ectet lo-rerostie mod magna conse el illa fa-cipsustie vullandrem dunt ad etue digna facil eum aciliqu ipsuscilit et accum dolendre conum dolore tat, consequisis ad dolutpat, core molor adit vel ut volorperos nis dit lup-tat. Tem do od er adit nosto odip exero dit wisis am delisci euisi bla facilluptat num dolore dolore feum do consend reetuerilla feugait lut lore del ipsum illa faci tat.

Viernes 3 de diciembre 11 17:00Museo Nacional de Artes Visuales

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Page 22: Revista Nina

It eum dolore faciduisl esto odit nit luptatem alisi. Pe-ratio od te vullandip eugue-raessi esequatum amcommy num in hent lam, commy nostisl ullandip er si tie es-trud tat wisl esom.

Mario Mora

Conociendo al fotógrafo:

Por Soledad García

Superior. Autoretrato del fotógrafoAbajo y derecha. Fotografías de su última exposición.

Page 23: Revista Nina

¿Como fueron tus inicios en la fo-tografía?Mis inicios en la fotografía fueron como ayudante de laboratorio a los catorce años. Allí empecé a experi-mentar el Blanco y Negro, las To-nalidades, las Texturas y me atrapó este mundo de imágenes. A partir de ese momento intenté hacer mis propias composiciones. Después de varios años, junto con otros socios, creamos nuestra propia empresa fo-tográfica.

¿Cuáles son tus motivaciones para hacer fotografías?Cuando fotografiamos nos queda-mos con algo de lo que vivimos, algo que luego podemos dar a los demás. Los demás no son sólo nues-tros contemporáneos. Me gustan esas viejas fotos sencillas que nos cuentan algo de cómo era el mun-do. Siento afecto y agradecimiento por esos fotógrafos cuyos nombres muchas a veces desconocemos. Re-conozco su oficio de dónde pararse y qué encuadrar y siento una es-pecie de hermandad con ellos. Creo que fotografiamos para eso: para guardar del paso del tiempo, para recordar y también para que nos re-cuerden a través de nuestras fotos.

¿Qué fotógrafos han influido en tu propia práctica o inspirado tus fotografías?Me interesa la biografía de los fotó-grafos. Muy especialmente me gusta

leer sus entrevistas. Creo que es una de las mejores maneras de aprender fotografía. Fui cambiando y algunos fotógrafos que me gustaban hoy son menos importantes para mí.

¿La fotografía digital ha ayudado o perjudicado al sector fotográfi-co?La fotografía digital ha revolucio-nado el mundo fotográfico, ayudan-do a los fotógrafos a realizar traba-jos que nunca imaginarían hacer si no fuese por estas nuevas tecnolo-gías. Por otro lado reconozco que hacer un trabajo digital digno, re-quiere muchas horas de tu tiempo, cosa que muchas veces no se llega a reconocer por parte del cliente. ¿Consideras internet importante para el fotógrafo profesional?Creo que es muy importante hoy en día poder contar con una ventana abierta al exterior, y qué mejor para un fotógrafo, que la gente pueda ver tus trabajos en tu página web. Nosotros tenemos la página web hace poco tiempo, pero esperamos que a través de ella podamos tener más posibilidad de trabajo.

¿Cómo ves el futuro del sector fo-tográfico?El futuro del sector lo veo prome-tedor para el fotógrafo que tenga imaginación para poder avanzar con las nuevas tecnologías. Pienso que el que no innove se quedará en

el camino, aunque lo esencial de la fotografía es la buena captura de un momento, una imagen, el llegar a conmover a la gente con una fo-tografía, ser una expresión de arte.

¿Cuál es tu opinión sobre la en-señanza de la fotografía en Uru-guay y, eventualmente, qué mo-dificaciones introducirías para mejorarla?No puedo dar una opinión general sobre la enseñanza de la fotografía en nuestro país pero me gustaría decir algunas cosas. En los cursos enseñamos la técnica. En el media-no plazo la técnica es relativamen-te poco importante. Lo que vale es transmitir que el trabajo del fotó-grafo es valioso y debe ser cuidado, en primer lugar, por nosotros mis-mos. Pasado el estadio de la técnica pienso que podemos enseñar sólo aquello en lo que creemos. Si la fo-tografía escenificada no me intere-sa debo decírselo a mis alumnos y debo explicarles por qué. Debo ha-cerlo muy respetuosamente. Sabrán que tengo algunas convicciones acerca de lo que hago y que cada uno necesita descubrir las suyas. Lo más difícil en fotografía es des-cubrir qué es lo que queremos hacer con ella, que camino queremos to-mar. Cuando los talleres sirven para entrever esta pregunta cumplen un objetivo mucho más extenso. Foto-grafiamos con todo lo que somos, con todo lo que llevamos dentro.

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Page 24: Revista Nina
Page 25: Revista Nina

Peros ero eui bla feu feugait, vel estio enibh exero cortinc ipisit praeseq uipsusto con ut inciliquamet erating et vulla feu faci eugait eugiam velit il utpat, se vel ecte facilit nis nit, consectet aliquis dolessed tisi.

Menos humo, por favor

Pat. Irit venisl ip ex exer sus-trud ex essi exer summodo lesent utpat. Ut wis nim voloborem irit iril ut luptat, con etue ming el dolent praesse tatio odoleniam nu-llam, vulput luptat, con henis ex etummolortin ent ullaorper iusto dolor sis nulputp atuero cons dolo-re molorer iure delent lan erostrud eliquam eratuer illaore del utpat wis num velenim et do odolore do-lobore min hent luptat praestie vel dolor sim dionse min ut nit at.

Ut augiam, qui bla augue feum doloborpero eum dolum delit veli-sis am velit lut aliqui eugait ius-trud te vulput wis nis autpatum dolor iriusci duisit praestrud dionu-llandit aute feuis niate elestissim eraesequi blandreet, commodit, consectem zzriure tem nos el ulla facil ex endiam dolor ipsum dolor-perit at elesequat num quisismodo

comm lore del irit velenibh eugait veliqui tie modo od diametuer iri-llaore exerat iure commy nons ea amconse faccumsan vel eu faci te vendiam nit adit euip et ilis ex et, consed elenit am irit amconse qua-mconsenim veros nostion ullaore ent aut praesectet adipisim ea feu-giatie modolore veliqui smoloreet am, conulla faccums andit, vullan-drem dolor suscilit nosto consequa-tie te magnis at.

Im aute magnis nulput alit nia-met, veros esse faciduip enisim il eugiam ilit wisi eummy nullaore te eummy nullum nissit nisi. Irit utpa-te dolorpero ex ea ad magna facidui esed doloborem dolortisit, quate con henibh eros ea feui blandig-nis ercing eugiam velestis essequis enim del dit nullan enibh eu facilla feugait at. Dionse euisl inim vulla facipis nonullan eu faccum dolor

iure dipisl ero eu feugue mod enim zzrillaor ipsusci elis ex eu feugait pratem zzriuscil iniam do ex eu faci blamcons nulla feumsan hendre do-lortin hendre feu feugait volortis endit loboreet laortis molore fac-cum nim ver senim dipit, sum iriure modionsenisl utem iurem ipissisi.

Nos nisci esequat inis dolum voloborper si tincil ea faciniam, susciduipit am, velit, sit la faccum init vendrero con hendre modit dip exeriliquat la commolo rtionullut autpatu erostrud tis nulput iurerat augue dignit autate velesse venit landipsum inismolor at loreet lo-borer iliquissi eros aute vel et ilit, conulput velis nim iriliquat. Ation exer at iriustie venim quam qua-tum nibh et laortin vullan venis ea feuismo diatet ilit lummy non utpat accummy num irit ex etummy non et niat commodo.

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Page 26: Revista Nina

Loreet la aliquat augait laor-peratue modo dolore ex ent amco-num delit acin utate magniam enim quamcon euipsum sandreet autpa-te delesti ssequipit ut velit vel ing eugue dolor sequismodo etue cor-tion sequisim quamet verit iuscin-cipis ex eum iliscil laorem doloree tuerostis ad magnim quisismolor sum dui bla feuis niam zzriusci tie esequipit in henim quam, si.

Te dit auguerat loreraestrud doluptat iustie mod euguera esecte tet ullutem exercillam dipismo do-lutpat non utpatio ecte exero od tie tet nullaore duis augiamet lut lobor alit in ut lum eugue digna feuip-sustrud etum diamet lum nostrud et nibh eum verat. Ut amconsendit ea consecte cons dignibh elenia-mcons nonullan exer sum at. Ipit ipit, vullan ut utpat. Gue mincilit wisi. Igna conullam quipsumsan henisim amet, cor iliquis nulla au-tem vel dunt wisim delessi.

Endre faccumsandip esequa-mcon elenibh eugiat ad do odolor alit adit wis dolore commy num del eum euguer augait iliqui blam,Diat at. Eliquat. Minci el ut iuscipis al-Nim dolut wisci tat accum in.

Ut veros ea feugait lute tincip-sum quismolore cons nummy non-sed tionsed ting ea con eniat. Dui-si. To cortie dolore mod magnissed tin hendiat lut inis ecte facillaore feu feumsandre tet, susto exeraes-sisi tet, sit ad eumsan euguer sit ipismolore tatem erosto od dolor irit lutet, quamconse feum ipit ut ut iril ese conulla feugait lute ex eniamco nulput do do ea consed dolut am vel et il ulputat prate fa-cip elit, sed euguer acipisi.

Nonsequisim vullam eliqui tat, core commy nonsed dolore dunt vel ulput prat praessisim nim quat wisi tie mod ming etum in henim ven-diamet lore magnissequam vullam, qui eu feum aliquipsum autat nulla faccumm odolore te dions ad erci ex exero do conse con volore min hent utpat. Ut ad eros dunt num ip ex ex esed euis et, con euismod magnit nosto odolobor alit elit iril ulla.

Tat vel ute del ex esto od eui bla faciduis nostrud duis nulla feu-giam ero conulla facipisi blam dolor sequipit vel iurero commolobore tatin verit praessit wis ercil irit ad delit adiat. Equisi. It eniamet auta-tuit dit at.

It eum dolore faciduisl esto odit nit lupta-tem alisi. Peratio od te vullandip eugue-raessi esequatum amcommy num in hent lam, commy nostisl ullandip er si tie es-trud tat wisl esom. Ectet, consequi tincili-quam core tin exercil.

Page 27: Revista Nina

It eum coblore faciduisl estot hodit nit luptatem alisi. Perratio osdetor te vullandip eugue a raessi esequat en um amcommy num in hent lam.

Moda

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Page 28: Revista Nina

Chaleco y mini de jean, Uniform. Musculosa a

cuadros, Zara.

Page 29: Revista Nina

Chaleco de cuero, Levi´s. Musculosa, Lemon. Leggins, Si si.

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Page 30: Revista Nina

Pantalón de jean, Uniform. Chaqueta y musculos,Zara. Pañuelo de lino y bolso, Ayres.

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Page 31: Revista Nina

Musculosa animal print, Límite. Mini de cuero y cartera, Magma.

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Page 32: Revista Nina

CaSa nUeva, esTrés NUeVo

Después de la muerte de un ser querido

y del divorcio, las mudanzas son las cau-

santes de las peores crisis de estrés, según

estiman estudios psicológicos.

Una crónica sobre la travesía de buscar una nueva morada, la complejidad de los trámites, hacer las maletas, trasladar muebles y volver a acomodar todo.

Por

Carl

os T

apia

Sociedad

3030

Page 33: Revista Nina

Lo más grave es la muerte de

un ser querido. Le siguen los di-

vorcios. Y, en tercer lugar, no hay

nada peor para el estrés que las

mudanzas. Al menos así lo sostiene

la psicología. Cuando Eugenio cayó

en la cuenta de que su contrato de

arrendamiento se vencía en apenas

un mes, lo primero que hizo fue

tratar de renovarlo. Llamó por

teléfono a la administración del

edificio y preguntó, con graciosa

inocencia, si le realizarían algún

tipo de reajuste. La respuesta

retumbó en sus oídos: “Bueno,

viste que todo está más caro… Y

ese es un lindo apartamento, con

dos habitaciones. Te quedaría en

9.500 pesos más los gastos comu-

nes… Hola, hola… ¿Estás ahí?”.

Sí, estaba, pero la sorpresa le quitó

el habla. Quedó durito con la oreja

pegada al tubo. Casi 20 segundos

después, al fin respondió: “OK,

cualquier cosa te llamo, pero me

parece medio caro”. Carísimo, con-

siderando que hasta ese entonces

pagaba $ 5.000. En ese instante comenzó su

travesía. Sabía que, por buen

pagador, tenía un año de prórro-

ga para buscar su nueva morada

antes que el cedulón de desalojo se

deslizara bajo su puerta. Paso uno:

Eugenio se compró el diario del

domingo y un marcador rojo. Paso

dos: dibujó un círculo alrededor de los avisos que promocionaban sus posibles destinos. Paso tres: tomó el teléfono y habló con decenas de propietarios e inmobiliarias. Paso cuatro: vio uno, vio dos, vio tres, vio decenas de apartamentos. Uno le gustó, pero le dijeron que otras tres personas estaban interesadas, y que ellas tenían prioridad. “¡¿En-tonces por qué me lo muestran?!”. Es que las inmobiliarias llevan potenciales clientes hasta el día de la firma del contrato.

Le gustaron otros. Pero pedían garantía de ANDA o Contaduría; él tenía de propiedad. La aven-tura continuó. Visitó los más desastrosos sucuchos: vio paredes derruidas por la humedad, canillas rotas, techos altísimos y dema-siado bajos; vio, con seguridad, lo peor. Un pariente dijo tener la solución. “Una amiga alquila un apartamento”. Era lejos, muy lejos. ¿Lejos de qué? Lejos de todo. No era feo. ¿El problema? El único cuarto que tenía era ciego -sin ventilación-. De todas formas, los creativos propietarios le habían colocado una ventana a la alcoba que habilitaba la entrada a la luz del living. Con esto la habitación se convertía en una suerte de casa del Gran Hermano, visible a todos quienes estuvieran en la vivienda. Le pareció morboso y dio el “no”.

Los precios también se con-

virtieron en un problema. Se dio

cuenta que pagar $9.500 por una

apartamento de dos habitaciones,

en realidad, no era un disparate.

Comenzó buscando viviendas con

esas comodidades, luego se pasó

a los que tuvieran tan solo un

cuarto, y después cruzó la línea:

la tinta roja se empezó a deslizar

sobre los avisos de ¡monoam-

bientes! Luego de meses, al fin,

encontró un lugar. “Es muy chico”,

apuntó con cara de asco una tía

que oficiaría de garantía. Él hizo

caso omiso y dijo: “Lo alquilo”. De

inmediato, la inmobiliaria le dio

una lista de requisitos.

-Necesitás: tres referencias

laborales y tres personales, el

último recibo de sueldo tuyo y el

de tu garantía, y de ésta un cer-

tificado notarial que indique que

la propiedad le pertenece; además

tenés que pagar nuestra comisión,

que equivale a un alquiler: $ 6.200

por un apartamento de 25 metros

cuadrados. A esto él le debía sumar

todos los meses entre 1.000 y

1.100 pesos de gastos comunes.

En un par de días consiguió un

escribano -la documentación tenía

un costo de $ 870, más un timbre

profesional de $110-. Mientras se

encargaba de esto la inmobilia-

ria le hizo insistentes llamadas:

“¿Cómo vas con los trámites?

Cuando puedas andá trayendo el

dinero, porque mientras no lo ha-

gas lo seguimos mostrando”. Pues-

ta la rúbrica pensó que la cruzada

llegaba a su fin y que tan solo

restaba mudarse. Sin embargo...

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Page 34: Revista Nina

Casa nueva

“Hola, necesito un camión de mudanzas para el sábado”. Euge-nio dijo la misma frase decenas de veces antes de encontrar una empresa disponible para ese día. Debían recoger las pertenencias de su casa, luego llevar una parte de ellas a un depósito y recién después ir rumbo a su flamante apartamento. El costo del ope-rativo, “en un camión con tres peones: $ 3.500”.

En las mañanas, antes de ir a trabajar, y en las noches, a su re-greso, se dedicaba a preparar todo para el gran día. Conseguir dónde embalar las cosas no es asunto fácil. “Sabés qué pasa, ahora todo viene en cajas chicas. Y las pocas que hay se las llevan los recicla-dores”, le dijeron en un supermer-cado. Insistió en varios lugares y consiguió juntar algunas.

La ropa decidió guardarla en valijas. Descubrió pantalones, camisas y remeras de origen des-conocido. Lo mismo le sucedió a la hora de ordenar -o desordenar- el escritorio. Halló infinidad de papelitos: algunos con números de teléfono sin remitente, otros con apuntes indescifrables. También vio mezclados repartidos de Histo-ria y Sociología de la facultad, con

los de Matemática A de quinto de

liceo. Con las bibliotecas le pasó lo

mismo. Tuvo en sus manos textos

que jamás en su vida había visto.

Y descubrió otros que nunca se dignó a devolver.

Al principio se había propues-

to mantener un orden a la hora de

“desarmar” la casa. Pero cuando empezó a hacerlo todo, inevitable-

mente, se comenzó a desordenar.

Pilas de libros al lado de las de platos. Ropa tirada en el sillón del

living, sobre cajas y electrodomés-

ticos. El polvo copó cada rincón. Del piso parecían emerger pape-litos, tornillos, pelusas y hasta vidrios. También, por todos lados,

había partes de muebles que debió

desarmar para trasladar. En medio de este desastre

pidió a UTE que le diera el alta a

la luz de la nueva morada. “Vamos

a pasar el lunes, martes o miér-

coles en la franja que va de 10 a

16 horas. Le avisamos para que

haya alguien en el apartamento.

La conexión tiene un costo de 757

pesos.”, dijo la mecanizada voz de

la telefonista. “Pero yo trabajo.

Además vivo en un octavo piso,

no tienen porqué entrar”, replicó.

Poco importó su queja. Un día

debió molestar a su padre, otro a

su hermana y el otro a su abuela,

para que se quedaran en su futura

casa. Finalmente hicieron la co-

nexión desde afuera del edificio.

Por teléfono también consultó

a UTE cómo darle de baja a la luz

de su viejo apartamento. “Tie-

ne que venir con su cédula y el

último recibo pago”, le dijeron. Al

otro día, a las nueve de la mañana,

ya estaba en una de las oficinas

del ente; a las 10:33 lo atendie-

ron. “Necesito su documento, el

último recibo pago y lo que marca

el contador al día de hoy”, le dijo

la empleada, sin mirarlo a los ojos

y antes de esbozar, sin vergüenzas,

un bostezo. “Pero eso no me lo

dijeron…”. Antes que terminara de

replicar, la funcionaria lo inte-

rrumpió: “Sin eso no puedo hacer

el trámite”. Al otro día miró el

contador y fue a UTE. Lo atendió

la misma persona. “¿Se acordó de

traer todo hoy?”. Se mordió los

labios y le dio los papeles.

En Antel sí que saben hacerse

rogar. Eugenio estuvo 23 minutos

reloj con la musiquita en la oreja

-en realidad al minuto 16 una voz

levantó el tubo y lo derivó a otro

Pilas de libros al lado de las de platos. Ropa tirada en el

sillón del living, sobre cajas y electrodomésticos.

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Page 35: Revista Nina

Las mudanzas en cifras:

¿Porqué se mudan los Uruguayos?

Quiere un lugar mejor para vivir

Necesita un lugar más grande

Motivos económicos

Fuente: SGS Consultores - 2009

Necesita un lugar más pequeño

Page 36: Revista Nina

interno-. Quería averiguar cuál era

el precio para el traslado de una

línea telefónica ($ 804) y del ADSL

(equivale a una cuota). Decidió

devolver la línea y hacer, gratis,

otra vez el trámite de conexión.

La estrategia le hizo ahorrar unos

pesos, pero le trajo algunos dolores

de cabeza. No importa a la hora que

se vaya a las oficinas de Antel,

siempre hay gente, y mucha. El

primer día fue a las nueve de la

mañana. Llevó consigo el contrato

de alquiler para pactar la nueva

conexión y el Modem para devol-

ver el ADSL. “Ay, pero te falta la

fichita que conecta el aparato con

la línea de teléfono”. Al otro día

llevó todo más “la fichita”. “Ay, te

puedo aceptar la devolución de la

línea y del ADSL, pero me es impo-

sible hacerte la nueva conexión. El

inquilino anterior tenía una deuda

y necesitamos un certificado nota-

rial que documente la fecha desde

que vivís ahí”. Al tercer día llevó el

certificado. “Ay, pero la promoción

de Internet que querías se termi-

nó hoy. Te ofrecemos esta, que es

más cara, pero tiene las mismas

ventajas”. Aquí sí pudo coordinar

para que la instalación la hicieran

en un horario en que él pudiera

recibirlos, aunque recién dentro de

tres semanas.

El sábado a las 11 de la ma-

ñana, ¡al fin!, llegó el camión de

mudanzas. Desde la ventana le

pareció que era chico. Y era chico.

El último mueble, un antiguo

tocadiscos que supo ser de su

bisabuelo, entró gracias a que una

mitad sobresalió hacia afuera del

transporte. En la primera escala

una araña de techo cayó al piso

y se destrozó. Para ese entonces

poco le importaba lo que sucedie-

ra. Ya en su apartamento, Eugenio

sacó de su bolsillo una mapita a

escala con el objetivo de que los

muebles fueran puestos en su sitio

definitivo. Esto no pasó. A medida

que entraban las cosas el lugar se

convertía en un caos, casi peor al

que se formó en su anterior mora-

da. Y todo se complicó cuando la

heladera no se dignó a entrar por

el ascensor. Entre los peones del

camión que juraban que era impo-sible subirla y el portero del edifi-cio que explicaba casi a los gritos que el horario de mudanzas había terminado, Eugenio ya tenía los nervios de punta. Por suerte a uno se le ocurrió quitarle las puertas y de esta manera esta pudo subirse por el ascensor. La peripecia casi llega a su fin, aunque Eugenio deberá tomar-se quince días para ordenar el desastre que lo rodea. Como puede deja libre un rinconcito del sillón. Piensa en tomar una bebida fresca y encender el televisor. Pero la heladera aún está desenchufada y la tele, que supo tener cable, ahora no cuenta ni con una mísera ante-na. En fin: ¡hogar, dulce hogar!

A medida que entraban las

cosas el lugar se convertía en

un caos, casi peor al que se

formó en su anterior morada.

Page 37: Revista Nina

“Puedo llegar a sufrir

depresión, ansiedad,

insomnio e irritabili-

dad”

Hay dos tipos de mudanzas:

las que se realizan por obligación,

y las que se hacen por placer. De

la misma manera hay dos tipos de

estrés: negativo y positivo. Así lo

explica la licenciada en Psicología

y magíster en Terapia de Conducta,

Mariela Golberg. “Una cosa es que yo me mude

porque voy a un lugar más bonito.

Es obvio que tengo un estrés

porque soy exigida a realizar una

movida de todo el entorno. Sé que

no me tengo que olvidar de nada.

Que tengo fechas que cumplir. Y

después tengo que hacer ese movi-

miento a la inversa cuando llego al

otro lugar. De todos modos, estoy

ante un estrés positivo, porque

todo lo que hago es para mejorar.

Es como cuando uno estudia para

un examen. Pero hay otras mudan-

zas, en distintas circunstancias,

que tienen un contenido de estrés

que es negativo. Es el caso de

una migración. O cuando me veo

obligada a irme a otro lugar por un

problema económico, por ejem-

plo”, detalla la especialista.

Golberg explica que el estrés se divide en eustrés y distrés. “El primero es cuando me siento bien. Cuando la exigencia me permite crecer, desarrollarme, hacer cosas nuevas. Y el segundo es el que a veces se torna grave. Puedo llegar sufrir depresión, ansiedad, insom-nio e irritabilidad”.

La licenciada sostiene que lo que más estrés ocasiona en el caso de las mudanzas es el problema de tener que cumplir con fechas tope. “Tenés que hacer a veces más allá de tus posibilidades”, señala. “Además, todo lo que es desarmar una casa y al mismo tiempo vivir allí es problemático. Lo cotidiano se vuelve estresante. Terminás, por ejemplo, comiendo con las manos porque está todo embalado. Y la tolerancia es menor. Se te rompe algo y es todo un drama”, agrega.

-¿Cómo se evita el estrés que

generan las mudanzas?

-Hay que entender que las

cosas ocurren. Yo tengo muy poca

posibilidad de actuar ante lo que

está planteado en el mundo. Sobre

lo que sí tengo incidencia es sobre

mí mismo. Tengo que considerar

mis capacidades. Ponerme, por

ejemplo, objetivos más razonables.

Aprender a usar el día y no hipote-

car el presente por lo que todavía

no está. Hay gente que vive tensa

y nerviosa por el futuro. Tengo

que invertir en mí, para aprender

a detectar determinadas señales

de que yo funciono de tal manera.

Una vida sin estrés no existe. Y

tampoco tiene que ser necesa-

riamente buena, porque el estrés

también me permite avanzar.

Lo cotidiano se vuelve estre-

sante. Terminás, por ejemplo,

comiendo con las manos por-

que está todo embalado.

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Page 38: Revista Nina

Pat, consequisl duisit ver sequis er atem am incipis nos amcommy nim iniamco nsectet esto do od tionsenis nim nit am, quisit, quisi.

Riuscilis esequat augue dunt auguercillan heniatet eum dolore duis nulputate tet lum dolorting ea corpera esequatem zzriuscin utatis nostion sequatio endre tate eu faci-lissent aliquam doluptate ming eu facin ea ad miniam vulluptat. Tat.

Ut ip el iustionsed et wis nos-ting et digna faci blam dolore mag-na corperit dolor inisisi.

Unt vulputem quat. Ut lobore dolorer irit atie cor ing endre mag-nim do odipisi exercipissi tie co-numsan vulla faci ex enim ipsustie min heniam, con vero do od molor alit landre feuguero con henibh etue ming er ad dolobortie min vel dolese minim zzrillam digna feum dipsumm oloreet lum duis duis ac-cum adipis duipit dignisi et, senim iriurercilit wis aute dolutpat lorero commy nit in ver sisi ecte feuismo doloreet irilit augue vendre magnisl exerilissit ea feugait veliquisci tat.

Pit atem ilit praesed tat nulla feugue vendre modiam duis atem

MammaRoux

veniamcon hendre volutpating etumsandigna facillut lum dolobore dolum ipit ipiscidunt ut velenisit, sequipisi.

Rud dignim dolore molore mag-na acin utat ipit, venissed et at. Ut pratet am, consequis niscil utate dolor sed tie dolessisl ea at. Lum quisci tem venit nim diam veros-tionse vel duisl in eugue et nos exeratinci ea acincip elenisc iliqui eros doluptat ut utat. Ut am, core con heniat at acil incillan elis non endre core ex enim zzrilit prate commod dolore dionsequat, quam, quat nonulla facidunt ute min ul-put laore vulla facilisissi.

Sandrem vel utet nulputpat. Cing ex el iriurem augiat autpatie vent nonseniat. Lore magna feu feu feugue ming er susci tat lum in er-cin eu facipsu scidunt nos del dolor sustrud digna cor senim do dolup-tat adit at. Tem in vel ero odolobo rperostinci blandipisi exer se dunt lumsandre feugueratum velit la au-

Lugares

Page 39: Revista Nina

gue miniat accummo dolore facipis-sisis deliquis num zzrit lam, velit velit am quate conum dolor in ve-riureet, veniat wis dolobor erillaor-pero etummy nismolore ent lumsan vent in utem dolor.

Ing estie magna feugait el iure duisl del eliquis num zzriusc ipis-cipit lum iniam dolobore vel ecte ecte ming ectem il utat, si. Atue tie min henis ad diamet lore consed tat in hendiam, velenibh el incidui sse-nis eu facilit lor iureet ut dionse venis diamcon utate velesectem ali-quiscilla autatue magna facing endre tet lan utet, voluptat. Duipit, sectem aut aliquissisi blaore conum ing ese del irit wis ent wis dolorem iure dipit praessed ming ea feugait ullaortie dipsustrud dolor-pe raessenit, coreetuer sed mod ea faccum aliquis iscipit in henit dole-seniam, commy num autpat vel in utet, si.

Em iure consendit accum vel irit atiniam, susci te vero conse-quat nulla feumsandre magniam, quipisim iure tat ut delisi. Iqui bla autat, vel dit et lobore minim volo-bore voluptat. Im qui tie do exeros am quatue te verostrud tat landre eu feuis adio euis nisim amet ecte dolorem inim dunt atum dolor sum quis erciniam volorem nostio odiam

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entorno cálido

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Hecho en casaLorper sumsan volum ver se modo conullu tatueros-trud dignim velisim dit wis eugueros aliquipit la aut ad tetue dit.

Gastronomía

Page 41: Revista Nina

Ingredientes:2 1/4 Tazas Harina1/2 Cuch. Sal1 Cuch. Bicarbonato de sodio200 gr. Manteca1 Taza AzúcarRalladura de 1 Limón1 Huevo1/3 Taza azúcar

Cernir la harina, sal y bicarbona-to. Batir con batidora la manteca, azúcar y ralladura de limón. Agre-gar el huevo y batir. Agregar in-gedientes secos. Formar bolitas y pasarlas por azúcar. Aplastar cin el tenedor y colocar en asadera con papel manteca por 10 minu-tos. Dejar enfriar.

Galletasde limón

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Page 44: Revista Nina

El auge del “café gourmet” · Deporte: Sobre dos ruedas · Música:

Vincent Vega · Entrevista al fotógrafo Mario Mora · Menos humo,

por favor · Moda: City Style · Sociedad: Casa nueva, estrés nuevo ·

Lugares: Mamma Roux · Gastronomía: Hecho en casa

01 · Diciembre, 2010 · UY $110 · ARG $12 · CH $4200

El auge del “café gourmet”