la nueva historia socio cultural. peter burke
TRANSCRIPT
-
8/10/2019 La Nueva Historia Socio Cultural. Peter Burke
1/11
La Nueva Historia Socio-CulturalAuthor(s): Peter Burke and Jos CarazoSource: Historia Social, No. 17 (Autumn, 1993), pp. 105-114Published by: Fundacion Instituto de Historia SocialStable URL: http://www.jstor.org/stable/40340348.
Accessed: 15/11/2014 22:31
Your use of the JSTOR archive indicates your acceptance of the Terms & Conditions of Use, available at.http://www.jstor.org/page/info/about/policies/terms.jsp
.JSTOR is a not-for-profit service that helps scholars, researchers, and students discover, use, and build upon a wide range of
content in a trusted digital archive. We use information technology and tools to increase productivity and facilitate new forms
of scholarship. For more information about JSTOR, please contact [email protected].
.
Fundacion Instituto de Historia Socialis collaborating with JSTOR to digitize, preserve and extend access to
Historia Social.
http://www.jstor.org
http://www.jstor.org/action/showPublisher?publisherCode=fihshttp://www.jstor.org/stable/40340348?origin=JSTOR-pdfhttp://www.jstor.org/page/info/about/policies/terms.jsphttp://www.jstor.org/page/info/about/policies/terms.jsphttp://www.jstor.org/stable/40340348?origin=JSTOR-pdfhttp://www.jstor.org/action/showPublisher?publisherCode=fihs -
8/10/2019 La Nueva Historia Socio Cultural. Peter Burke
2/11
LA
NUEVAHISTORIA
SOCIO-CULTURAL
PeterBurke
La
denomination
nueva"
istorias mas
ntigua
e
o
que
su nombre
ugiere,
a que
ha
estado
n
circulation,
or
o
menos,
esde
principios
e
nuestro
iglo.
Desde
luego,
nunca a
habido,
ue yo
sepa,
una sola forma
rtodoxa
e escribir
istoria: erodoto
Tucidides,or jemplo,epresentaniferentescercamientosl pasado.Ennuestroiglo,
sin
mbargo,
e
da la
circunstancia
e
que
el modelo
istoriografico
ccidental
e ha visto
fragmentado
n
diversas
endencias
puestas
l
tiempo ue
era
ada
vez mas
mpliamente
aceptado
nAsia
y
Africa.
A
comienzos
el
siglo
einte,
l modelo
istoriografico
ominante
ra l de
a escue-
la de
Leopold
on
Ranke,
egun
l
cual a
tarea el
historiador
onsistiasencialmente
n
relatar
a historia
e los
grandes
contecimientos
oliticos
de los
lideres
oliticos
mas
importantes.
l modelo e
Ranke
ra l modelo
ominante,
ero
nunca
e alzo
conel
mo-
nopolio a
que
siempre
oexistio
onotros
ipos
e
historia.
uede
ue
a historia
ultural,
por jemplo
que
se
remonta
l
menos asta
a
mitad el
siglo
dieciocho,
asta
l
Essai
sur
es
Moeurs e
Voltaire-,
o
fuera omada
emasiado
n
serio
or
os
seguidores
e
Ranke, ero
si
y
todo
e
continuo
scribiendo.
os
obras
historicas
lasicas,
ultur er
Renaissancen talien1860)deJacob urckhardtHerfsttijerMiddeleeuwen1919)
de Johan
uizinga,
retendieron
intar
l
retratoe
una
poca,
y partieron
ara
llo de
as
obras
de arte
y
la literatura
unque
omaron
n consideration
anto
as formas
ociales
como
as
artisticas.
u
postulado
e
que
toda
pocaposee
una
unidad
ulturaloe
echaza-
do
por
os historiadores
ociales,
specialmente
or
os
marxistas,
ue
argumentaban
ue
los
diferentes
rupos
ociales
clases
enian
u
propia
ultura
cultura
e as
elites,
ultu-
ra
popular,
ultura
urguesa,
ultura
lerical,
tc.).
El modelo
e Ranke
ue ambien
riticado
or
os historiadores
conomicos,
ue ya
sugerian
principios
e
siglo
ue
el
historiador
ebia
nalizar
structuras
n vez
de narrar
acontecimientos
dedicarse
l estudio
e
as estadisticas
on
el
fin
e
reconstruir
as ten-
dencias
conomicas.
ernando
raudel
odria
ambien
er
descritoomo
un
historiador
economicoonuna nusualnchuraemiras. espuesdetodo, uvision e la "historia
total"
histoire
otale),
na
historia
ue
ncluiria
todos
os
hombres
mujeres
que
estu-
diaria
odas
as
formase
actividad
umana,
e
combinaba
n
a
practica
on l
presupues-
tode
que
a historia
eal
ra a historia
e
a
"cultura
aterial"
civilization
aterielle)
La historia
conomica
la
historiae
la
estructura
ocial
incluyendo
a
demografia
historica),
l
poner
on
firmezal
enfasis
n as estructuras
en as
grandes
endencias
1
J.
H.
Robinson,
The
New
History,
ueva
York,
1912.
Historia
ocial,
n.
17,
otono
1993,
pp.
105-1
4.
105
This content downloaded from 201.148.81.39 on Sat, 15 Nov 2014 22:31:01 PMAll use subject to JSTOR Terms and Conditions
http://www.jstor.org/page/info/about/policies/terms.jsphttp://www.jstor.org/page/info/about/policies/terms.jsphttp://www.jstor.org/page/info/about/policies/terms.jsp -
8/10/2019 La Nueva Historia Socio Cultural. Peter Burke
3/11
largo lazo, odrian
hora
er
nglobadas
entroe a
vieja
nueva istoria".in
mbargo,
desde l final e los
aiios
etenta,
emos ido
testigos
e una
reaction
ontra stanueva
historia,
ue
ha
sido ildada
or
muchos
e deterministacasi nhumana.
l
intentoe es-
cribiro
que
podriamos
lamar unahistoriaon
rostro umano"
que surgio racticamen-
te l mismo
iempo ue
el
famoso socialismo e rostro umano"
e
Dubcek)
a
adoptado
una
serie e formas
iferentes
aunque uizas
no tan
diferentes
omo
podrianarecer
n
principio).
Talesformas
ncluyen
navuelta
la
narrativa,
navuelta
la
historia
olitica,
nclu-
so
a
la "alta
politica",
,
o
que
es
mas
mportante,
l
surgimiento
e una nueva
istoria
mas
nueva,
ue
se
caracteriza
or
un
evidente
esplazamiento
el
eje
de interes acia a
historia
ultural en a
que
"cultura"e
entienden
un
entidoato
ue ncluye
a vida o-
tidiana
e
la
gente
omun,
os
objetos
materialese los
que
esta
e rodea
y
las diversas
formas e
percibir
imaginar
u
mundo. estemodode hacer
istorias
al
que
denomi-
no "historia
ocio-cultural".os
marxistasstabannteresadosn
a relacion
ntre
ultura
y
sociedad,
ntre
a
superestructura
la
infraestructura.os
nuevos istoriadoresocio-
culturales
nvierten
starelacion
ya que
consideranominante la
superestructura)
,
dicho
onmas
precision,
iisionana
sociedad a cultura. e
ahi a denominacionctual
"historiaocio-cultural".
No es facil
nalizar on
perspectiva
istoricaste
ugestivo
cercamiento
ue
se
en-
cuentraodavia n
pleno
desarrollo en
el
que,
como
Gareth tedman ones
Roger
Chartier,
o
mismo e
ugado
un
papel.
Me
limitare,
n
principio,
decir
ue
dicho nfo-
que
ha
abierto
uevas
erspectivas
ha
luminado
artes
e
a
historia
ue
otras
proxima-
ciones
ejaron
n a
sombra;
ambien
engo ue
decir
ue
estano es la linica
orma e
his-
toria
ue
vale
la
pena practicar.
ste articulo
ratara
e
explorar
os
puntos
uertes
debiles e
este
ipo
e
historia,
anto
us imitaciones
omo us
ogros.
Los
llamados
nuevos"
istoriadoresescriben
menudou
trabajo
on
cuatro rases
o
lemas.
l
primero,
ue
se
oye
obre
odo n
Alemania,
s "la
historia e lo cotidiano"
(Alltagsgeschichte).
ajo
esta
denominacion
o
tambien
ituaria
a
historiae as
practicas
sociales culturales,ncluyendol estudio e as"reglas",rincipiosconvencionesub-
yacentes
n a
vida
otidiana,
o
que
Pierre
ordieulama a
"teoria e a
practica"
Ste-
phen
Greenblatta
"poetica
e
a
cultura".
El
segundo,
n este
aso una
expresion
nglesa,
s
"la historia
esde
bajo"
history
from elow),
ue
se refiere
o solo a la
historia
e a
gente
omun,
os de
abajo,
ino am-
bien la
historia
ista
esde a
perspectiva
e la
gente
omun
que
cobija,
ajo
este er-
mino,
n
variado
onjunto
e
grupos
ubordinados,
arginales,
errotados
silenciados.
En
Gran
retana,
ste
metodoe
asocia
specialmente
on
History
orkshop,
uskin o-
llegey
Raphael
amuel,
ero
e
encuentran
rupos
imilares
racticamente
ntodos
que-
llos
ugares
n
os
que
se
estudiaa
historia
e
la
cultura
opular,
o solo en
Europa
ino
en
muchos
tros itios
por
jemplo,
l
grupo
e
historiadores
indues
irigidos
or
Rana-
jit
Guha
uyo
ampo
de
estudio
llos
mismos efinen
omo
Estudios
ubalternos",
n
otras alabraslestudio e oqueGramscilamabaasclassi ubalterni).
La
tercera
rase,
cunada n
talia,
s
microstoria,
microhistoria",
define n
tipo
de
historia
ue
estudia
l
pasado
desde l
punto
e vista e a
pequena
omunidad,
ea esta
una
ldea,
na
calle
o
una
familia.
ste
cercamientoe hizo
famoso
espues
e
la
publi-
cation
asi
simultanea,
mitad
e
los anos
etenta,
e dos
ibros,
lformaggio
i vermi
2
A.
Ludtke,
"The
Historiography
f
Everyday
ife",
en R.
Samuel
y
G. Stedman
Jones,
ds.,
Culture,
Ideology
nd
Politics,
Londres,
1982,
pp.
38-54;
R. van
Dulmen,
Kulturund
Alltag
n der
Friihen
Neuzeit,
vols.,
Munich,
1990;
P.
Bordieu,
Esquisse pour
une
theorie
e
la
pratique,
Paris,
1972;
S.
Greenblatt,
Sha-
kespearian
Negotiations,
xford,
988.
06
I
This content downloaded from 201.148.81.39 on Sat, 15 Nov 2014 22:31:01 PMAll use subject to JSTOR Terms and Conditions
http://www.jstor.org/page/info/about/policies/terms.jsphttp://www.jstor.org/page/info/about/policies/terms.jsphttp://www.jstor.org/page/info/about/policies/terms.jsp -
8/10/2019 La Nueva Historia Socio Cultural. Peter Burke
4/11
[El
quesoy
os
gusanos]
e Carlo
Ginzburg,
ue
tratabae reconstruirl mundo
mental e
un olo
ndividuo,
Montaillou,
e Emmanuele
Roy
Ladurie,
ue
se basaba n os "es-
tudios e comunidades"e
sociologos
antropologos
ociales.
La
cuarta
rase,
omiinmentesada
n
Francia,
s la
histoirees
mentalites,
se re-
fiere unahistoria
ue
nvestiga
o tanto
as ideas
formuladasonscientementeomo as
nociones o
expresadas.
ctualmentestadenomination
sta iendo
rogresivamente
e-
emplazadaor l terminorepresentaciones"fomentadoor a existenciae unarevista
californiana
e ese nombre
imdada
or
Greenblatt).
El
logro
mas monumentale este
tipo
de historias el masivo
studio e Francia
n siete
oliimenes
ompilado or
Pierre
Nora,
es lieux
e
memoire,
na
empresa
olectiva
ue
esta
iendo hora mitadan otros
lugares
Gran
retana,
ortugal,
tc.).
Un
rasgo
lamativoe a
nueva istoriaociocultural
s la vuelta l
individuo,
ero
n
esta casion
o al
"gran
ombre",
ino l hombre
la
mujer
rdinarios.os microhistoria-
dores an
producido
ividos
etratose
individuos,
esde
l Menocchio e
Ginzburg
l
Pierre
lerge
e Le
Roy
Ladurie,
algunos
e
ellos,
omo
Giovanni
evi,
opinan ue
el
fin
de la microhistoria
s revelar
l
margen
e action
y
de
libertad
ue
el
pueblo
lano
podia
ncontrarn os ntersticios
e as estructuras
ociales.
Hay
simismo n creciente
interesn a relacionntre lyo ndividual os roles ociales, on a importantemplica-
tion
de
que
os
actores istoricos
on ibres
ara
ambiarus
roles,
ara
ctuar e manera
diferente
n situacionesiferentes
deferencia
n un momento
eterminado,
ebelion n
otro).
e
ahiel interes
ue
unniimeroe
historiadores
a mostrado
n el "situacionismo"
del
desaparecido
rving
offinan,
n
ociologo
ascinado
asta asi
a
obsesion
or
o
que
el llamaba
a
"dramaturgia"
e a vida otidiana.
asi,
unhistoriador
edicado
l estudio
de
a
Inglaterra
el
siglo
iecinueve
a
nterpretado
a deferencia
omo
na
representacion
puesta
n
escena
or
a
claseobrera
e cara la
burguesia,
na
representacion
ue
no ex-
cluia lementos
e
ronia
parodia.
Los
historiadores
e
procesos
gran
scala e
cuidan
tambien
e evitar
resentarlos
omo
fuerzas
mpersonales,
tratan
menudo
e identifi-
car
losrostros
ntre
a
multitud".
Otro asgomportantee
la
nueva
istoriaociocultural
s
que
es
da
la vuelta
los
supuestos
radicionalesobre a relacionntre ultura sociedad. os
historiadores,
l
igual
que
los
teoricos
e la
cultura,
an
reaccionado
esde
hace
algiin
iempo
ontra
a
idea
marxista
e
"superestructura".
uchos e
ellos
reen
ue
a
cultura,
omo
os
ndivi-
duos,
s
capaz
de resistir
as
presiones
ociales:
resistencia"
s
otra e
as
palabras
laves
de nuestro
iempo.
lgunos
legan
ncluso
mantener
ue
la
cultura
oldea
a realidad.
Hemos
asado,
omo
Roger
hartier
usta
ecir,
e
a historia
ocial
de
a cultura
la
his-
toria ultural
e
a sociedad.
Hay
muchos
jemplos
ontemporaneos
e
este ambio.
no
de ellos
es el
interes
n
la historia
el
"imaginario"
I'imaginaire
ocial),
desde
a
investigation
e los
olores
de
la
perception
e os
olores)
asta
l
estudio
e as
naciones
omo
comunidades
magina-
das".
Un
segundo
jemplo
s
el creciente
nteres
n a
historia
e os
estereotipos,
itera-
rios visuales, e udios, egros,alvajes, rujas,tc.,nterpretandolosomo ntentose
3
R.
Chartier,
Cultural
History
etween
ractices and
Representations,
ambridge,
988;
cf. L.
Hunt,
ed.,
TheNew
Cultural
History,
erkeley,
989.
4
R.
Samuel, ed.,
Patriotism,
vols., Londres,
989.
5
G.
Levi,
L'eredita
mmaterial,
Turin, 985;
G.
Levi,
"On
Microhistory",
n
P.
Burke, ed.,
New Pers-
pectives
n Historical
Writing,
ambridge,
991,
pp.
93-113.
6
P.
Bailey,
"Will the
Real
Bill Banks
please
stand
up?",
Journal
f
Social
History
12,
1978,
pp.
336-
353.
7
A.
Corbin,
Le miasme
t
ajonquille:
I'odorat
et
rimaginaire
ocial,
18e-19e
iecles,
Pans, 1982;
B.
An-
derson,
magined
Communities,983,
edition
revisada,
ondres,
1991.
I
107
This content downloaded from 201.148.81.39 on Sat, 15 Nov 2014 22:31:01 PMAll use subject to JSTOR Terms and Conditions
http://www.jstor.org/page/info/about/policies/terms.jsphttp://www.jstor.org/page/info/about/policies/terms.jsphttp://www.jstor.org/page/info/about/policies/terms.jsp -
8/10/2019 La Nueva Historia Socio Cultural. Peter Burke
5/11
I
respuesta
l
problema
el "Otro".
Un tercer
jemplo
s la
preocupacion
or
a
historia el
lenguaje vistono tanto omo unreflejo e la realidad ocial sinocomo creador e la rea-
lidad a traves
e "actos de
habla").
9
Un cuarto
s
que
los
historiadores
el arte
han tendido
a
abandonar a creencia
de
que
el
arte es un
reflejo
de
la sociedad
y
a
adoptar
a
idea
opuesta
de
que
las
imagenes
oseen
el
poder
de
moldear a sociedad.
10
Si
generalizamos
o
anteriormente
icho,
podemos
hablar
de
"construccionismo",
s
decirde la
preocupacion
ontemporanea
or
a
"construction",
a
"invencion"
la "cons-
titution"
e lo
que
se
daba
por
sentado
ue
eran
hechos" sociales.
Muchos
ibros
ecien-
tes
han usado la
palabra
"invencion"
n sus
titulos:
The Invention
f
Tradition,
he
n-
vention
f Argentina,
he Invention
f
Ethnicity,
he
Invention
f George
Washington,
L
invention
u
quotidien,
tc.
n
La
sociedad,
as clases
y
los
pueblos
on
vistos
por algunos
historiadores
omo constructos
el discurso.
Dentro e la historia e las clases,historiadoresritanicosmarxistas nomarxistas)
como Gareth tedman
Jones
y
Patrick
oyce
studian as
clases como
construcciones
el
8
M. de
Certeau,
L
ecriture
e
I'histoire, aris,
1975.
9
P. Burke
y
R.
Porter,
eds.,
TheSocial
History f Language,
Cambridge,
987.
10
D.
Freedberg,
The Power
of mages, Chicago,
1989;
P.
Zanker,
Augustus
nd
die Macht
der
Bilder,
Munich,
987.
11
b.
J.
Hobsbawm
y
1.
Ranger,
eds.,
Ihe
invention
j
iradition,
Cambridge,
voj;
in.
^>humway,
me
Invention
fArgentina,
erkeley,
991;
W.
Sollors,
ed.,
The nvention
f
Ethnicity,
ueva
York, 1989;
P.
K.
Longmore,
The nvention
f George
Washington,
erkeley,
988;
Michel de
Certeau,
L invention
u
quoti-
dien,
Paris,
1980.
08
I
This content downloaded from 201.148.81.39 on Sat, 15 Nov 2014 22:31:01 PMAll use subject to JSTOR Terms and Conditions
http://www.jstor.org/page/info/about/policies/terms.jsphttp://www.jstor.org/page/info/about/policies/terms.jsphttp://www.jstor.org/page/info/about/policies/terms.jsp -
8/10/2019 La Nueva Historia Socio Cultural. Peter Burke
6/11
discurso.
2
n
el caso de los
ordenes
ociales,
e
podria
estacar l
trabajo
e
George
Duby
obre
a
creation
en
un
momentooncreto en un
contexto
olitico
oncreto)
e
los
"tres
rdenes" e la
sociedad: os
que
rezan,
os
que
combaten
los
que
trabajan.
3
Para
un
ejemplo articularmente
laro e como
as
representaciones
nfluyen
obre a
rea-
lidad
odemos
cudir los zamindarsn a
Indiadel
siglo
diecinueve,
n
grupo
ormado
por
ecaudadorese
mpuestos
quienes
os britanicos
ercibieron
omo l
equivalente
e
supequenaristocraciaerratenientea losqueprocedierontransformarn ella.
Dentro
el
apartado
e
historiae
los
pueblos,
no
piensa
nmediatamente
n
el
fa-
moso studio e Benedith
ndersone las naciones omo
comunidades
maginadas",
en
algunas
bras ecientes
obre a "invention"e
Argentina
Escocia,
en
unareinter-
pretacion
e
la
historiaritanica norteamericanae
os
siglos
iecisiete
dieciocho
ue
llevael
provocativo
itulo La
invention
el
pueblo".
4
n
una
escala
mayor,
l critico
americanodward
aid,
nspirandose
n
Foucault,
a
examinadoo
que
el
llama a cons-
truction iscursivael "Oriente"
or
os
occidentales,
specialmente
n
el
siglo
dieci-
nueve.
5
De
la
misma
manera
ue
los historiadoresccidentalesan socavado as nociones
de clase
y
nation,
os historiadoresindiies stan
poniendo
n cuestiona notionde
"casta". 6De modo imilar,oshistoriadoresfricanosan omenzado tratarlconcepto
de "tribu"omo
una
pura epresentation
construction
ultural.os estudiosobre ide-
res
politicos
e
concentran
ada
vez mas n sus
magenes:
a
imagen
e
Augusto,
l "mito
de
Hitler",
la fabrication
e Luis
XIV",
etc.
7
Gracias l
trabajo
e
Hayden
White
entre
otros
nvestigadores)
os historiadores
e hanhecho
masconscientes
e
su
propio apel
n
la
representation
el
pasado.
8
La nueva
istoriaocio-cultural
o es tannueva
omo ostienen
os
que
a
practican.
Es
preciso
onsiderar
na erie e
precedentes.
or
jemplo,
l libro el historiador
exi-
cano
Edmund
'Gorman,
a
invention
e
America,
ublicado
n
1958,
nos
parece
hora
una
obra
pionera.
9
a microhistoria
e remonta
asta
os anos cincuenta
e este
iglo,
cuando
e
publico
a obra
de
un
antropologo
ueco.
0
a historia
e la vida
cotidiana,
a
viequotidienne,rael titulo e una serie ueHachettempezo publicarn los anos
treinta.
l
interes
or
a
historiae a
imagen
e os ideres
e remonta
or
o
menos
un
estudio
obre a
reputation
e Cesar
traves e os
siglos,
ublicado
n os anos
veinte.
1
Las
comparaciones
ntre istoria
antropologia
omenzaron
hacerse
principios
e
siglo.
l
estudio
e las
representaciones
os
evoca
Emile
Durkheim a
sus
representa-
tions
ollectives.
n el
siglo
iecinueve
os
folcloristas
os anticuarios
staban
scribien-
do
ya
una
specie
e
historia
esde
bajo.
12
G.
S.
Jones,
anguages
of
Class,
Cambridge,
983;
P.
Joyce,
Visions
f
the
People,
Cambridge,
991.
13
G.
Duby,
Les trois
rdres, aris,
1978;
cf. O.
Niccoli,
I
sacerdoti,
guerrieri,
contadini,
urin, 979;
P.
Burke,
"The
Language
of Orders
n
Early
Modern
Europe",
en M. L.
Bush, ed.,
Social
Orders nd
Social
Classes inEuropesince1500,Londres, 992,pp. 1-12.
14
Anderson,
Shumway,
p.
cit.\
M. G.
H.
Pittock,
The nvention
f
Scotland,
Londres, 1991;
E. Mor-
gan,
Inventing
he
People,
Nueva
York,
1988.
15
E.
Said,
Orientalism,
ondres,
992.
16
R.
Inden,
magining
ndia,
Chicago,
1992.
17
P.
Zanker,
op.
civ,
I.
Kershaw,
The Hitler
Myth,
Oxford,
987;
P.
Burke,
The
Fabrication
of
Louis
XIV,
New Haven
y
Londres,
992.
18
H.
White,
Tropics
of
Discourse,
Baltimore,
978;
H.
Kellner,
Language
and
Historical
Representa-
tion,
Madison,
1989.
19
F.
O'Gorman,
La invencion
e
America,Mexico,
1958.
20
B.
Hanssen,
Osterlen,
stocolmo,
1952.
21
F.
Gundolf,
Caesar:
Geschichte
eines
Ruhms,
erlin,
1924.
I 109
This content downloaded from 201.148.81.39 on Sat, 15 Nov 2014 22:31:01 PMAll use subject to JSTOR Terms and Conditions
http://www.jstor.org/page/info/about/policies/terms.jsphttp://www.jstor.org/page/info/about/policies/terms.jsphttp://www.jstor.org/page/info/about/policies/terms.jsp -
8/10/2019 La Nueva Historia Socio Cultural. Peter Burke
7/11
Sin
embargo,
n
el desarrollo
e a
historia
ocio-culturall
trabajo
e otras
iscipli-
nasha tenidomas
mportancia
ue
os
precedentes
istoricos.a nueva istoria
e ha ba-
sado
ustancialmente,
e unmodo irecto
consciente,
n
a
antropologia.
os historiado-
res
han
aprendido
e los
antropologos
sean estos
etnologos
ranceses,
ntropologos
sociales ritanicos
antropologos
ulturales
mericanos-combinar
as
deas
de cultura
sociedad.
a nueva istoriae ha
nspirado
ambien,
e
un
modo
rofondounque
ncons-
ciente,n a fenomenologiacon amediation,l menos casional,e ossociologos os
antropologos).
e
podria
ecir
ue,
con
un
retraso e
medio
iglo,
os historiadoresan
descubiertoas deas
de
Edmund usserl.
2
Entre
os filosofos as
recientes,
a
sido
eguramente
ichel
oucaultl
que
mas
ha
hecho
or omper
a barrerantreo cultural o
social,
on
o cual
ha contribuidol de-
sarrollo e la historiaocio-cultural.
n
un sentido vidente
a historiaocio-cultural
s
"posmoderna",
o
tanto n
el
sentido
as
preciso
ue
os historiadoresan ornado
resta-
do de filosofos
ontemporaneos
omo
Jacques
errida
aunque
sto
ha
ocurridocasio-
nalmente),
ino n
el
sentido as
vago
de
que algunos
istoriadorese siententraidos
or
la notion ctual e
que
tantoas cosascomo as
categorias
on
fluidas,
ragiles,
recarias
inestables.
3
Hemos
pasado
de
la
historiadura" e las estructurasociales
la historia
"blanda" e asrepresentaciones.
Estos cambios
istoriograficos
ran asi inevitables han
de ser en
gran
manera
bienvenidos.or
jemplo,
a creencia radicional
n
a unidad ultural en
el
consenso,
implicita
n
a obrade Burckhard
Huizinga,
s
imposible
e
ustificar.
a
preocupacion
por
a vida
otidiana el
pueblo
lano
ha
enriquecido
l
pasado
y
ha ensanchandoos hori-
zontes
e
la
disciplina
istorica.a historiaocialde los
anos
esenta ra
en
general
e-
masiado eterminista
ponia
n excesivo nfasis
n
as
grandes
endencias
expensas
e
la
experiencia
ndividual.as
pretensiones
e
la historiauantitativan sus dias dorados
eran
implemente
emasiado mbiciosas.
l
viejo presupuesto
e
que
los historiadores
describianos
"hechos",
omo ellos es
gustaba
ecir,
no
os
representaban
staba
e-
cesitado
e
unarevision.
De todos
modos, o
no
pienso ue podamos
sumir
in
mas
que
la
nueva
historia
socio-culturalea
superior
sus
predecesoras
ntodos os
aspectos.
o es sencillo riticar
un
movimienton
el
que
se ha
ugado
un
papel, unque
ste
ea
pequeno.
o me iento n
absoluto
vergonzado
e hacerhistoria
ocio-cultural
je
ne
regrette
en.
En
cualquier
caso,
l
principio
e
os
anos
noventa
s un
buenmomento
ara
hacer
nventario,
ara
xa-
minaros
aspectos
eligrosos,ara
calcular l costode la innovation.ada uno de los
cuatromovimientos
onsideradosnteriormente
Alltagsgeschichte,
a
Historia
esde
bajo,
Microstoria
Uhistoirees
representations
ollectives)
a
provocado
ontroversia,
con
razon.
1.
El
concepto
e lo cotidiano o es
tan
laro
omo
parece.
xiste,
or jemplo,
l
riesgo
e confundir
as ideasde vida
privada,
ostumbre,
ida de la
gente
omiin,
tc.
4
Otra eria ritica
anzada ontra ste
tipo
de
historia
s
que
su enfasis n
lo
cotidiano
puede ener,a veceshatenido,l efecto etrivializarahistoriaocial.Aunquee ha ie-
gado
la
caricatural
senalar
ue
os estudiosose
a vida otidianan el Tercer
eich
e
pasaban
l
tiempo
ontando
as
veces
que
los funcionariosazis
descansaban
ara
omar
22
P.
Berger
y
T.
Luckman,
The
Social
Construction
f Reality,
ondres, 1966;
R.
RORTY,
hilosophy
and theMirror
f
Nature,
Oxford,
80.
23
Para
una utilization
xplicita
de
Derrida,
vease T.
Mitchell,
ColonizingEgypt,Cambridge,
988,
y
P.
Mason,
Deconstructing
merica, ondres,
1990.
24
N.
Elias,
"Zum
Begriff
es
Alltags",
n Hammerich
y
M.
Klein, eds.,
Materiellen ur
Soziologie
des
Alltags,Opladen,
1978,
pp.
22-29.
10
I
This content downloaded from 201.148.81.39 on Sat, 15 Nov 2014 22:31:01 PMAll use subject to JSTOR Terms and Conditions
http://www.jstor.org/page/info/about/policies/terms.jsphttp://www.jstor.org/page/info/about/policies/terms.jsphttp://www.jstor.org/page/info/about/policies/terms.jsp -
8/10/2019 La Nueva Historia Socio Cultural. Peter Burke
8/11
te,
s evidente
ue
si
las rutinas iarias
e estudiann si
mismas,
inrelation
on el con-
texto el
entorno,
s mas
ueprobable
ue
a
trivializacione
produzca.
5
2.
La historia
esde
bajo
es otro
oncepto
ue puede
onducir la
confusionon-
ceptual.
Historia
el
pueblo
lano
historiaesde l
punto
e
vista e a
gente
omiin?
^quien
s
el
pueblo
lano?
La mayoria (para
variara
metafora
spacial)
as
capas
mar-
ginales?
?,D6nde
ncajan
as
mujeres?A
una
historiae a
educacion
esde
bajo
e inte-
resan osprofesoreslosalumnos?Unahistoria e la guerra esde bajoestudia los
soldados a
los civiles?
Se
debe studiara
historia el
pueblo
lano n si
mismo
hay
que poner
l
enfasis
n
las
interaccionesntre
icos
y
pobres, oderosos
impotentes,
entre
quellos ueposeen
na
ducacion ormal os
que
no?
3. La microhistoria
sta ambien
ujeta
debate. stahistoriae
basa
en
el
concepto
de
"comunidad",
este
oncepto
a
sido
puesto
n
cuestion.
an
peligroso
s
asumir
ue
existe n
consensoocial cultural
n
una ldea omo
ensar
ue
este e da en
una scala
socialmas
mplia
aunque
os
sociologos antropologos
olian
acerlo).
os
viejosy
os
jovenes,
os hombres a
mujeres,ueden
ener
ntereses,
xpectativaspercepciones
e
la aldeadiferentes.
Y
que
ocurre on os vinculos ntrea
comunidadocal
y
el mundo
exterior?
inguna
ldeaes una sla
o
mejor uizas,
inguna
sla esta
isladadel resto
e
la sociedad,omohandemostradolgunosstudios ecienteseantropologiaistoricae
Islandia Hawai.
6
4.
Los
historiadorese as
representaciones
an eaccionadon exceso ontraa idea
tradicionale
que
a cultura
refleja"
a
sociedad
se han
do
al extremoontrario.
stos
historiadores
ueden
er
criticados,
de hecho o han
sido,
porque arecen
sumir
ue
nada
xiste etras mas lia de
a
representation.
n
mi
propio
rabajo
obre
a
imagen
e
Luis
XIV en el
siglo
diecisiete,
ugeri,
l
igual
que
otros istoriadores
ocio-culturales,
que
dicha
magen
ra
poderosa,ue
mpresionaba
los
que
a
contemplabanque
nfluia
en sus
respuestas
las acciones
el estado rances.
in
embargo,
l
mismo
iempo
enale
que
sus
contemporaneos
ran menudo
onscientes
e las
discrepancias
ntrea
imagen
oficial el
rey
a realidad
otidiana:
abian
ue
Luisno era
an lto
ni
tanvaliente
omo
se erepresentaba,stabanl
tanto e
que
tenia
mantes,
tc.
El construccionismoambien
lantea
tros
roblemas
omo os de la action
y
la li-
bertad.i
las
clases,
os
generos,
as naciones
as tradiciones
on onstrucciones
inven-
ciones,
quien
as
nventa
las
construye?Bajo
que
condicionantes
peran?
n
otras
a-
labras,
cuales
on
os limites
este ibre
uego
de
la
invention?,
existe
na
historia
social
de a
historiaultural
e
a sociedad?
Un
problema
inal
ue
quisiera lantear
qui
es el de a
fragmentacion
ntelectual.
a
nueva
istoriaocio-cultural
e
inspira
n una
variada erie
e
disciplinas:
a historia
el
arte,
a
critica
iteraria,
a
antropologia
ocial,
tc.
Porusar na
de sus frases
avoritas,
os
historiadores
ocio-culturales
omparten
discursos"on
sus
colegas
e otros
ampos,
e
un modo
ue
erararo
ntre istoriadores
e
generaciones
nteriores.
in
embargo,
ada
grupo
orre
l
riesgo
e
perder
ontacto
on el
cuerpo
rincipal
e
historiadores,
ue
no
soncapacesde entenderequeestan ablando. nsegundoipode fragmentacions el
precio
el enfasis
ctual
n a diferencia
ultural.
ercibimos
a variedad
la diversidad
con
mucha
mayor
laridad
ue
antes,
ero
osresultaada
vez mas
dificil
er
as conexio-
nes. Es hora
de discutir
i esta
fragmentacion
s
inevitable,
i es
posible
esarrollar
n
nuevo cercamiento
la historia
ultural,
nnuevo
modelo
ue
permita
los
historiadores
25
Ludtke,
op.
cit;
cf. J.
Kocka,
"Historisch-anthropologisch
rage-stellungen",
n
Hans
Sussmuth, d.,
Historische
nthropologie,
ottingen,
984,
pp.
74-83.
26
M.
Sahlins,
Islands
of History,
hicago,
1985;
K.
Hastrup,
Culture nd
History
n Medieval
celand,
Oxford,
985.
I
111
This content downloaded from 201.148.81.39 on Sat, 15 Nov 2014 22:31:01 PMAll use subject to JSTOR Terms and Conditions
http://www.jstor.org/page/info/about/policies/terms.jsphttp://www.jstor.org/page/info/about/policies/terms.jsphttp://www.jstor.org/page/info/about/policies/terms.jsp -
8/10/2019 La Nueva Historia Socio Cultural. Peter Burke
9/11
I
I
I
8
ver as culturas omo un
todo sin
percibirlas
omo uniformes
homogeneas. legados
a
este
punto,
l
modelo
que yo
recomendaria s el de "encuentro" ultural.Hemos
oido
mucho obre ncuentrosulturales n
1992,
probablemente
emasiado.No
tengo
a
inten-
tion de volver
recorrerse caminootravez sino
que quiero
enalar omo
los
conceptos,
los
modelos
y
los metodos esarrollados
riginalmente
ara
escribira historia e los otros
cuatro
ontinentesstan
mpezando
usarse ambien
ara
escribira historia e
Europa.
Lo
que
resulta uevoen
la historia e los descubrimientos
del colonialismo s
que
las
consecuencias ulturales e la
expansion uropeapreocupen
anto omo as consecuen-
cias
economicas,
ociales
y politicas,
si como
que
exista un interes
or
como los euro-
peos
y
los no
europeos
e
percibian,
e entendian
dejaban
de entenderse nos
a otros.
n
algunasobras recientes otables,os antropologos istoricos an intentado econstruiro
que
un
historiador
mexicano,
Miguel
Leon-Portilla,
a llamado la "vision de los
venci-
dos".
27
Han
aparecido,
or ejemplo,
studios obre l modo en el
que
los caribes
percibie-
ron a
Colon
y
a sus
hombres,
obre como los aztecas vieron Corteso los hawaianos l
capitan
Cook,
y
sobre as diversasmaneras n
que
cada cultura
prendio
e
la otra.
8
La
27
M.
Leon-Portilla,
Visionde los
vencidos,
Mexico,
1959;
cf. N.
Watchel,
La vision des
vaincus,
Paris,
1972.
28
P.
Hulme,
Colonial
Encounters,
ondres, 1986;
I.
Clendinnen,
Aztecs,
Cambridge,
1992;
Sahlins,
op.
cit.
12
I
This content downloaded from 201.148.81.39 on Sat, 15 Nov 2014 22:31:01 PMAll use subject to JSTOR Terms and Conditions
http://www.jstor.org/page/info/about/policies/terms.jsphttp://www.jstor.org/page/info/about/policies/terms.jsphttp://www.jstor.org/page/info/about/policies/terms.jsp -
8/10/2019 La Nueva Historia Socio Cultural. Peter Burke
10/11
historiae
as
misionesristianas
e esta
studiandoesde
n
punto
e vista
imilar,
anto
si os misioneros
ctuaban
n
China
Peru,
frica
India,
omo
i o hacian n o
que
al-
gunos
esuitas
lamabanas
"otras
ndias":
as zonas de alta
montana
uropeas
n los
Alpes,
os
Apeninos
los
Pirineos.
9
l
interes
or
a
multiplicidad
e os
puntos
e vista
es un
rasgo
aracteristico
e a
historiae os
encuentros.
0
Dicha
preocupacion
or
os
encuentros
o
mplica
nacelebracion
ndiscriminadae
los encuentrosulturales.stos menudo stimulana creatividadultural,erono debe-
riamos
lvidar l
precio ue
se
pagapor
llo.
El
"choque"
e
culturas
uede
er
violento
conducir
la destruction
e
as tradiciones.
quello
ue
es
positivo
ara
nade as
partes,
una
"conquista"
ultural
espiritual,uede
muy
ien
resultar
egativa
ara
a
otra,
na
"invasion
ultural".
l
usar
estemodelo
e
encuentro
e debe extremara sensibilidad
hacia
l
punto
e vista
e ambos
ados.Es
necesario
restar
tencion
la diferencia
ntre
el
mensaje
nviado
or
una
cultura
el
mensaje
ecibido
or
a
otra,
lgo
que
os historia-
dores
acen ada
vez mas.
Nuestra
ropia
poca,
n a
que
son
cada vez
mas frecuentes
intensos
os encuen-
tros
ulturales,
s tambien
na
poca
n
a
que
existe
ada
vez
mayor
nteres
or
l
proce-
so de
cambio
ue
sigue
tales
ncuentros;
roceso
ue
ha recibido
ombres
andiversos
como culturacion,propiacion,similacion,comodacion,restamo,riollizacion,ialo-
go,
ntercambio,
ibridacion,
nterpretation,
estizacion,
egotiation,
eception,
incre-
tismo,
ransculturacion,
raduccion
ultural,
tc.
Esta
multiplication
confusion
e
termi-
nos
acuiiados
n
diferentes
enguas
disciplinas
estimonia
o solo
a
fragmentation
el
mundo
cademico
ctual
ino
a
preocupacion
or
l
problema
e
los encuentros
n dife-
rentes
ugares
tiempos.
Parte
e la
investigation
ctual
mas
atractiva
n el
campo
de la
historia
ultural
s
aquella
ue
se realiza
obre
as
fronteras:
obre
as
fronteras
el
sujeto,
obre
as fronteras
de
Europa.
ste
rabajo
uede
ervir
omo
jemplo
ara
l resto
e
a
profesion.
i
ningu-
na cultura
s
una
sla,
ni
siquiera
ran
retana
Hawai,
eberia
er
osible
sar
l modelo
de encuentro
ara
studiar
a historia
e nuestra
ropia
ultura,
culturas,
ue
deberiamos
percibiromomultiformes
as
que
como
homogeneas
como
plurales
n
ugar
e
singu-
lares.
Los
historiadores
e
la
Espana
medieval
levan
mucho
iempo oniendo
l
acento
sobre
a coexistencia
convivencia
ntre
udios,
ristianos
musulmanes
sobre
a
inter-
action
ultural
ntre
llos;
pero
ste
no
es
un
ejemplo
islado.
La Venecia
enacentista,
por jemplo,
ue
una
ciudad
oliglota
n
a
que
era
posible
ir
aleman,
riego,
roata
turco
n
cualquiera
e
sus
esquinas.
este
especto,
s
posible
rgumentar
ue
a creativi-
dad
ultural
e
a ciudad
ebe
mucho
estadiversidad
e
culturas
incluso
las tensiones
que surgen
ntre
llas.
Lo
mismo
e
podria
ecir
e
Amsterdam
n el
siglo
diecisiete,
donde
as
minorias
ablaban
spafiol,
ortugues,
ebreo,
leman,
rances,
anes
ingles.
De
modo
odavia
mas
general,
odriamos
er
a
historia
e
Europa
omo
un
proceso
de
nteraction
ntre
as diferentes
ulturas
subculturas,
ntre
l
norte
el sur
e
Europa,
entrel esteyeloeste,ntreombresmujeres, undorbano mundoural,atolicos
protestantes,
en
a cual
e
debe
ecuperar
a
multiplicidad
e
puntos
e
vista
e os
dife-
rentes
ctores.
os
grandes
contecimientos
los
grandes
onflictos
la
Revolution
ran-
cesa,
a restauracion
eiji,
a Guerra
ivil
espanola,
tc.)
tendrian
ue
ser
estudiados,
como
si
empieza
ocurrir,
e
este
modo.
1
29
J.
Gernet,
Chine
et
christianisme,
aris,
1982;
J.K.
Mandelbaum,
The
Missionary
s
a Cultural
nter-
Dreter.
ueva
York,
1989.
30
G.
Prins,
The
Hidden
Hippopotamus,
ambridge,
980;
R.
Price,
Alabi's
World,
altimore,
990.
31
R.
Fraser,
Blood
ofSpain,
Londres,
979.
I
113
This content downloaded from 201.148.81.39 on Sat, 15 Nov 2014 22:31:01 PMAll use subject to JSTOR Terms and Conditions
http://www.jstor.org/page/info/about/policies/terms.jsphttp://www.jstor.org/page/info/about/policies/terms.jsphttp://www.jstor.org/page/info/about/policies/terms.jsp -
8/10/2019 La Nueva Historia Socio Cultural. Peter Burke
11/11
Tampoco
abria
ue
olvidar
a interaction
ntre
uropa
el resto
el
mundo
i,
por
supuesto,
a interaction
ntre
asadoy presente.
l
Renacimiento
uropeo,
or jemplo,
puede
studiarse
omounencuentro
ntre
a
Europa
e a
Baja
Edad
Media
y
a
Grecia
Roma
ntiguas.
n este aso as culturasstaban
eparadas
or
l
tiempo
no
por
l
espa-
cio,
pero
a resucitacion
a
reception
e a
traditionlasica
lantearon
roblemas
imila-
resde
nterpretation,
similacion,tc.,
los
quesurgieron
n
os encuentros
ntre
uropa
y
as Americas escritosnteriormente.
El
modelo
el encuentroiene
a enorme
entaja
e dar
una
gran
mportancia
las
conexionesntre
as culturas
as subculturas
in
dejar
or
llo de ado
as
variacionese-
gionales
sociales.
stemodelo os
podria
erde
gran
yuda ara
percibir
a
unidad
ue
esta
debajo
e a
diversidade a cultura
uropea,
de a
cultura
spanola,
s
decir,
as es-
tructuras
ubyacentes
n as
variaciones.o
podemos,
i
debemos,
olver
Burckhardt,
una
manera raditional
e escribir istoria
ultural
ue
asume
n consenso
homogenei-
dadcultural
ue
nunca xistio.
in
embargo,
nnuestra
usqueda
ontemporanea
e a va-
riedad a diferencia
o deberiamos
lvidar
as
aportaciones
e Burckhardt.
Traduccion
e
JoseCarazo
114
I