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Corsarios Alemanes en la Segunda Guerra MundialLuis Enrique Velez Roman

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Corsarios Alemanes


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ContenidoCruceros auxiliares, La guerra al trfico .......................................................................................... 3

Corsarios submarinos, El arma submarina en 1914 ...................................................................... 30

Buques trampas, 1914-1918 ......................................................................................................... 42

Hilfskreuzer o Handels-Str-Kreuzer (HSK) ................................................................................... 50

Admiral Graf Spee ......................................................................................................................... 54

Atlantis, HSK 2; Schiff 16. .............................................................................................................. 66

Orion HSK 1; Schiff 36. .................................................................................................................. 75

Widder, HSK 3; Schiff 21. ............................................................................................................... 83

Thor, HSK 4; Schiff 10. ................................................................................................................... 87

Pinguin, HSK 5; Schiff 33 ................................................................................................................ 91

Stier. HSK 6; Schiff 23. ................................................................................................................... 99

Komet, HSK 7; Schiff 45. .............................................................................................................. 103

Kormoran, HSK 8; Schiff 41. ........................................................................................................ 109

Michel, HSK 9; Schiff 28. .............................................................................................................. 117

Coronel, HSK 10; Schiff 14 ........................................................................................................... 120

El Hansa, HSK5 ............................................................................................................................. 121

Aprovisionadores: El apoyo a los buques corsarios .................................................................... 123

Las Lanchas Torpederas De Los Corsarios ................................................................................... 125

El Final De Los Corsarios .............................................................................................................. 128

Buques Auxiliares "Troschiff" .................................................................................................... 130

La Experiencia Corsaria Japonesa................................................................................................ 134


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Cruceros auxiliares, La guerra al trfico

El crucero auxiliar es un barco mercante al que se le ponen unos caones, segn una disposicingeneralmente prevista desde su construccin, y se le enva a hacer la guerra a sus semejantes. Escreencia general que en cuanto un barco lleva unos caones, es un barco de guerra; la suposicin estan equivocada como suelen serlo no pocas de las ms extendidas entre el vulgo. Para ser un buquede guerra es necesario disparar la propia artillera y... soportar las ofensas de la del contrario. Sien las condiciones ha de faltar alguna para merecer la calificacin, es casi preferible que falten loscaones pero que el buque pueda mantenerse a flote aunque reciba algunos impactos enemigos.Parecer una paradoja; pero lo mismo que las tres cosas necesarias para poder hacer la guerra,segn el clebre aforismo, son: dinero, dinero y dinero, podramos definir un buque de guerracomo el capaz de satisfacer estas tres condiciones: flotar... flotar y... flotar.

No faltar un espritu irnico que, conocedor de cmo van las cosas en la construccin naval, nosarguya que hay ciertos cruceros, de ltima moda, que no llenan ninguna de las tres condiciones.Es cierto, pero lo es tambin que es la moda y sta es absurda siempre en cuanto se quieregeneralizar; y ms cierto an es que ningn tcnico estuvo jams conforme con ellos. Sonsimplemente buques... diplomticos. El crucero auxiliar (similia similibus...) es eficaz para perturbarel trfico martimo; puede pasar inadvertido merced a su silueta que en su nuevo menester nodifiere, naturalmente, de la pacfica de sus tiempos de vapor de carga o correo; es capaz depermanecer largo tiempo en la mar, sin necesidad de entrar en puerto para carbonear; porque en losbarcos, como en los hombres, los mayores herosmos tienen casi siempre su origen en una buenacomida, sea carne o... carbn.

Pero donde el crucero auxiliar raya en lo heroico siempre, es en el combate; batirse tras una robusta

rodela o envuelto en una armadura frrea, es cosa de relativo valor; pero ir a la lucha a cuerpodescubierto, fiado en la eficacia del propio tiro, combatir con los costados que antao albergaran loscamarotes de lindas pasajeras enfermas del aburrimiento de ser millonarias, el peor de losaburrimientos, segn dicen; combatir con la direccin de tiro en el bar, lujosamente decorado, de untrasatlntico y el comandante en un puente, a dieciocho o veinte metros sobre el nivel del mar, ensitio que est diciendo: tiradme, es algo que recuerda los combates entre caballeros. Eso han sidosiempre los cruceros auxiliares; unas moles orgullosas acostumbradas a surcar los mares en unperpetuo alarde de lujo, en cuyo interior han ocurrido casi tantos idilios fugaces como han queridoatribuirles los novelistas cuyo mobiliario intelectual suele quedar reducido a una cama lujosa; se


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arman con unos cuantos caones instalados en cualquier sitio, que apenas pueden disparar conbuenos ngulos de tiro, porque les estorban las instalaciones que son su esencia, y salen a combatirsabiendo que llevan la muerte en su vulnerabilidad extrema, en sus flancos construidos para todomenos para recibir un caonazo. Han renunciado a su pintura esmaltada y la gris es una especie dehbito de penitencial, un sayal que los ha de acompaar algn tiempo y, a veces, una mortaja.

Antes de la Gran Guerra eran muchos los cruceros auxiliares, en estado potencial, que existan enlas grandes Potencias Navales ; por regla general, cuando se ve un buen barco y se sabe que hacostado relativamente poco dinero y que, adems, es veloz, lo general es torcer el gesto y decir:Crucero auxiliar tenemos; la velocidad es necesaria, el coste bajo indica una subvencingubernamental y, naturalmente, el inters de los gobiernos en que el viajero llegue a Nueva Yorkunas horas antes, es en verdad muy relativo. Alemania estaba preparada para el armamento de susvapores como cruceros auxiliares y previstos los que haban de desempear este cometido; enprincipio todos deban serlo y, sobre haber preparado las instalaciones para la artillera desde eltiempo de paz, mediante las consolidaciones adecuadas, en la mayora de los casos llevaban en elfondo de sus enormes bodegas los caones que haban de montar; si estallaba la guerra cuandoestaban en un puerto extranjero, el montaje era faena corta. Otras veces, los caoneros de estacinen aguas lejanas, cuyas condiciones de velocidad y autonoma no les haban de permitir una accin

eficaz, deban encontrarse con ellos en parajes ocultos, fijados de antemano, y transbordarles elarmamento y la dotacin correspondiente, dejndose internar, a continuacin, en un puerto neutralcualquiera. Y los nuevos corsarios salan a la mar, para recorrer zonas calculadas, con antelacintambin, en las cuales el aprovisionamiento lo daban, desde los puertos neutrales, los oficiales deetapa; corran stas a cargo de los agregados navales, conocedores del pas, y de las casasalemanas, generalmente establecidas en el mismo, que podan subvenir a las necesidades de todognero.

As fueron repostados los buques del almirante von Spee durante su larga peregrinacin por elPacfico sin una sola base amiga, los cruceros auxiliares alemanes que disfrutaron de una vidademasiado larga para lo previsto, los que salieron de Alemania forzando el bloqueo en algunoscasos. Para lograr esto es necesaria una vasta organizacin comercial en los pases que se juzguen

necesarios, que el Estado responda de los comandantes de los buques en cuestin y que aqul, a suvez, merezca confianza en las Naciones en que haya de tener lugar la accin de los corsarios. Eneste sentido, la organizacin alemana era completsima: antes de la guerra sus oficiales de Marina,sin que se conociese su verdadera calidad, estaban esparcidos por todo el mundo; era necesarioluchar con la formidable potencia comercial que es Inglaterra, con las intrigas de Downing street,que alcanzan a todos los rincones del planeta; y las referencias posteriores a la trgica contienda,demuestran que los preparativos estaban perfectamente hechos. Perdidos los cables telegrficos lequedaba a Alemania el recurso de la radiotelegrafa, en la cual estuvo siempre en primera lnea,especialmente antes de la guerra. Para mantener esta clase de organizaciones es indispensable unabuena red de comunicaciones.

Los cruceros auxiliares alemanes pueden dividirse en dos clases: los que operaron al principio de lacontienda, armados en su mayora fuera de los puertos nacionales y aquellos que, habiendo sidoadaptados para este menester algo despus, comenzaron sus hazaas burlando el bloqueo queenvolva a Alemania.

De los primeros, los que ms se distinguieron fueron el Prinz Eitel Friedrich, el Kaiser Wilheim derGrosse y el Cap Trafalgar, no por los daos acarreados al comercio adversario que en algunos

casos, como el del ltimo de los citados, fueron nulos materialmente, sino porque su presencia queera harto conocida dio lugar a un encarecimiento de los fletes y una subida de las plizas de segurosque amenaz con producir un colapso comercial en el mundo de los negocios.


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Cuando estos primeros desaparecieron comenzaron las correras de los Moewe, los Seeadler, losWolf, los Libau, los Gref, los Berln, los Meteor, con diversa fortuna; unos fueron hundidos en laprimera fase de su crucero, al tratar de atravesar las lneas de vigilancia britnicas y otros, encambio, recorrieron los mares por espacio de varios meses, llegando hasta el Pacfico y regresaron asu pas inclumes. La fortuna no es ciertamente un factor despreciable en achaques de guerra.

El Kaiser Wilhelm

El Kaiser Wilheim der Grosse era un magnfico vapor de pasajeros perteneciente al NorddeutscherLloyd, la poderosa compaa naviera de Bremen que rivalizaba con la Hamburg Amerika Linie en laslneas mundiales y, marcadamente, en la de Nueva York, ese recorrido que han hecho infinitas veceslos mejores buques mercantes del mundo y para el que fueron construidos, en todos los tiempos, los

ms soberbios palacios flotantes que han ido demostrando los adelantos de la construccin naval. ElKaiser Wilheim der Grosse, construido en el ao 1897, fue un motivo de admiracin cuando subotadura apareci en las revistas ilustradas del mundo profesional; su desplazamiento de 14.349toneladas era gigantesco en aquellos aos en que los mayores acorazados apenas rebasaban lasdoce mil. Su andar de 23 nudos le hizo ganar el ansiado blue ribbon, el trofeo simblico para elvapor de pasaje que emplease un mnimo de tiempo en cruzar el Atlntico septentrional. Su radio deaccin era de 17.200 millas a un andar de doce por hora. En sus tiempos fuera el orgullo de su pas,ya que el gallardete azul nunca haba sido alcanzado por un buque de su bandera. Hastaentonces, era un patrimonio ingls.


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Armado en corso, con diez caones de l00 milmetros, el Kaiser Wilheim der Grosse sali de Bremenal romperse las hostilidades, en la noche del 4 de agosto de 1914; la enorme masa obscura deltrasatlntico se deslizaba entre las sombras, cuando a unos metros en la mar y en la noche lasdistancias parecen ser siempre de unos metros solamente pasaba otra confusa silueta sin quetrascendiese una luz al exterior. El que bloqueaba y el forzador del asedio se cruzaron; el primero novio nada, el segundo s. Poco despus de medianoche, nueva alarma; un proyector recorra inquietoel horizonte, como un dedo que apuntase en una direccin peligrosa. A bordo del corsario alemnfueron unos momentos de angustia. Ser descubiertos en la zona de bloqueo ! El proyector seextingui, como una existencia que termina, y la tranquilidad renaci a bordo del Kaiser Wilheim derGrosse.

El 7 de agosto, ya en pleno Atlntico, hizo su primera presa, el Tubalcain, de la matrcula de

Grimsby, el cual, una vez evacuado, fue echado a pique. El 12 detuvo e inspeccion el vapor italianoPiemonte, al que dej seguir su viaje. Lo mismo hizo con los dos vapores Galician y Arlanza, porllevar pasajeros a bordo. Y esta generosidad haba de tener consecuencias fatales para el corsario.Dos barcos de carga, el Kaipara y el Nyanga, de quince mil y tres mil toneladas, respectivamente,fueron visitados en los das sucesivos y, con arreglo a lo estatuido por el Derecho martimo,abandonados por sus dotaciones y hundidos a caonazos. Despus hizo rumbo a Ro de Oro, lacolonia espaola donde haba dado cita a los vapores que haban de aprovisionarlo de carbn,vveres y otros efectos. Slo que el Arlanza y el Galician, llegados a Santa Cruz de Tenerife en elintervalo, haban dado la voz de alarma revelando la existencia del crucero auxiliar, hasta entoncestotalmente ignorada, y fueron lanzados en su busca los cruceros Cumberland, Cornwail e Highfiyer yel auxiliar Marmora.

El 26 de agosto, el Kaiser Wihelm der Grosse estaba tranquilamente fondeado en aguas territorialesespaolas y a sus costados estaban atracados los vapores, tambin alemanes, Arucas, Bethania yMagdeburg. Una humareda que cada vez se hace ms densa, se alza en el horizonte; el corsarioalemn se intranquiliza fundadamente porque desde el comienzo de la guerra o, por mejor decir,desde la intervencin de la Gran Bretaa era cosa lgica esperar que el Mundo entero se iraponiendo en contra del Imperio alemn. El Highfiyer, que tal era el productor de la humareda quealarmara a los alemanes, comprendi bien pronto la calidad del enemigo que tena delante; es ciertoque estaba en aguas jurisdiccionales de una Nacin neutral y que el Derecho ordena respetarlas,pero tambin lo era que a Inglaterra le convena, ante todo y sobre todo, terminar con las andanzas


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del audaz crucero auxiliar enemigo. Si se le hunda, todo se reduca a una reclamacin diplomtica,unas excusas no menos diplomticas y... el Kaiser Wilheim dar Grosse en el fondo del mar.

Y rompi el fuego, describiendo unas curvas en forma de ocho; el alemn, en el mismo instante enque reconoci la silueta del contrario con sus chimeneas y sus palos y advirti la espuma que alzabasu proa, enfilada hacia el fondeadero, comprendi asimismo de lo que se trataba y, dejando a los

vapores, sali hacia fuera decidido a entablar combate. Mand a bordo del convoy a todos losprisioneros y la gente que no era indispensable en la lucha que se avecinaba y sobre cuyo resultadono poda abrigar ilusin alguna y rechazando la demanda del comandante del Highfiyer, capitn denavo Buller, para que se rinda y advirtindole que debe respetarse la neutralidad de las aguas enque est, contesta al fuego enemigo sin vacilacin alguna. Los primeros disparos del crucerobritnico hacen blanco bien pronto en el corsario alemn, que contesta con poca eficacia a causa dela posicin de los caones que, como queda apuntado, nunca puede ser satisfactoria en estosbarcos. El combate dura una hora y media; el comandante del crucero auxiliar alemn, Rymann,agota sus municiones, y a las cuatro y tres cuartos de la tarde hace explotar las bombas colocadasen los fondos de su buque y desembarca en la playa espaola.

El Kaiser Wilheim der Grosse se tumb y su costado permaneci por mucho tiempo, como un

gigantesco cetceo muerto, en la costa. Despus, los temporales, los vientos y las corrienteshicieron su obra devastadora y el corsario alemn desapareci tambin para siempre.

El Cap Trafalgar

El Cap Trafalgar, perteneciente a la Hamburg Sudamericanische Dampfschiffarts Gesellschaft, habasido botado al agua en el ao 1913 y desplazaba 18.710 toneladas, poda alcanzar un mximo andarde 183 millas por hora y, a doce de velocidad, era capaz de recorrer 17.200 sin necesidad deaprovisionarse de combustible. Su armamento deban integrarlo cuatro caones de 105 milmetros yseis de 37; en la poca de paz estaba destinado a servir la lnea que une Hamburgo con el Ro de laPlata y en ste se hallaba al romperse las hostilidades. Deba armarlo el caonero Eber, uno de losdestinados en el frica occidental alemana, que por ser incapaz de cualquier actividad encaminada a

perturbar el comercio enemigo se hara internar en un puerto brasileo una vez desembarcado suarmamento. El Cap Trafalgar no hizo presa alguna y lo nico notable de su corta carrera blica fueque el sostenido contra su semejante, el ingls Carmania, trasatlntico de la compaa Cunardarmado en guerra como crucero auxiliar asimismo, es el primer combate de los habidos entre estaclase de buques; y, como todos, termin con muy graves daos para ambos caballerescosadversarios.


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El buque alemn quedaba armado el 4 de septiembre; diez das ms tarde, exactamente, terminabasu vida trgicamente. Fue en aguas de la isla Trinidad, en la costa del Brasil. Los ingleses conocansu existencia y las pesquisas se sucedan con xito negativo. El 14, el Carmania, destacado paravisitar los fondeaderos suramericanos, reconoci en aquella silueta gigantesca, con sus tres grandeschimeneas, a su competidor de aquellos mismos parajes en los tiempos de paz. Antes eranicamente cuestin de competencia comercial, de perfeccionar las instalaciones de a bordo, paraque los pasajeros diesen la preferencia al paquebote que mayores comodidades ofreciese. Ahora, eraun duelo a muerte...

El Carmania era superior en artillera a su adversario; cuatro caones de 130 milmetros, cuyosproyectiles pesaban 45 libras, contra los del Cap Trafalgar, de calibre muy inferior. El combate duruna hora. Poco despus del medioda ambos rompan el fuego, hallndose a unos tres mil metros de

distancia, bien escasa para cascos tan poco adecuados para recibir la ofensa de las piezas deartillera. Los daos fueron bien pronto evidentes, por ambas partes; los incendios no tardaron endeclararse en diversos puntos del Carmania y el Cap Trafalgar. Se combata con ardor, procurandoaumentar las averas. Los dos conocan la propia vulnerabilidad y la nica defensa posible estribabaen dar fin del enemigo lo antes posible. A la una y media de la tarde, el alemn ces el fuego; susdaos eran tan serios que su suerte estaba decidida. Sin gobierno, incapaz de manejar su buque, latripulacin decidi echarlo a pique para evitar que cayese en manos del contrario y fue recogida porun carbonero alemn de los que le acompaaban en calidad de buques de aprovisionamiento. ElCarmania peligraba; haba recibido cinco disparos en la flotacin y 64 en otros sitios de su casco ysuperestructuras, los cuales, a ms de las consiguientes averas, produjeron la muerte de 9 de sushombres e hirieron a otros 26.

El Cap Trafalgar se hundi lentamente primero; despus, siempre con su bandera ondeandoorgullosamente a popa, aceler su inclinacin y desapareci bajo las aguas. El Carmania llegabapenosamente a Gibraltar dos semanas despus del combate.

El Eitel

El Prinz Eitel Friedrich era un vapor correo del Lloyd Nortealemn, de un desplazamiento de 8.897toneladas y un mximo andar de quince nudos, que haca el servicio de pasaje con los puertos delExtremo Oriente y estaba en viaje a China cuando estall la guerra. Armado con las piezas de los


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caonero Tiger y Luchs, de estacin en los ros chinos para misiones de polica en tiempo de paz,pero carentes de valor militar combatiente, comenz su vida militar con la escuadra de von Spee. Alabandonar las islas Marshall, von Spee dio libertad de accin para llevar a cabo la guerra al trfico alcapitn de corbeta Thierichsens, comandante del Prinz Eitel Friedrich, acompaado del Cormorn,que era el vapor ruso Riazan apresado en los primeros das de la guerra y armado con las piezas ydotacin del viejo caonero de este nombre, tambin intil para la guerra. Mal terreno de caza elque les haba sido asignado, y como quiera que el Eitel haba, rellenado sus carbonerasinmediatamente antes de la prdida de las colonias alemanas de Extremo Oriente, decidi seguirhacia Levante hasta llegar a las costas de Amrica meridional. Volvi a reunirse con la escuadra enMs Afuera, antes de Coronel, y fue enviado a Valparaso para adquirir carbn para la escuadraentera; carbone a su vez y, vuelto a tener carbn en cantidad suficiente para regresar a Alemania,pas al Atlntico donde tuvo noticia del desastre de las Malvinas, ya que la misin asignada estavez por el almirante y que era la de hacer la guerra al comercio rival, por estimar que el dominio delmar en el litoral chileno era alemn, caa por su base. Solamente el vapor ingls Charcas haba sidohundido en el Pacfico por el Prinz Eitel. Primero hizo una finta hacia la isla de Pascua, teniendo lasuerte de capturar el velero francs Jean con tres mil quinientas toneladas de carbn Cardiff y queremolc por espacio de 1.800 millas hasta destruirlo despus de haber tomado todo el combustibleque transportaba. El ingls Kyldalton, procedente de Liverpool, ya doblado el cabo de Hornos, fue alfondo del mar al fin de su velera navegacin.

Por fin y tras larga estancia en la isla de Pascua, Thierichsens decidi emprender el regreso aAlemania; su presencia haba sido ya denunciada y tras el final de la escuadra en las Malvinas erapreferible dejar el campo libre; hizo rumbo muy al Sur, doblando el cabo de Hornos casi a la alturade los hielos antrticos, alcanzando los 61 grados de latitud Sur, para luego remontar el Atlnticopor las derrotas de los veleros, presas siempre fciles. Salido de la isla de Pascua el 6 de enero de1915, el 26 se encontraba a 1.300 millas al Este de la costa del Uruguay y haca su primera captura,el velero ruso Isabel Brown; al da siguiente, un poco al Norte, una barca francesa, la Pierre Loti, y el28 otros dos veleros, el norteamericano William P. Frye y el francs Jacobson, sufran la mismasuerte; cuatro capturas en tres das no era mal principio y, tras algunas vacilaciones, los cuatrofueron al fondo de la mar, no sin ocasionar un incidente posterior el hundimiento delnorteamericano, por el que hubo de pagar Alemania la correspondiente indemnizacin. Cruz unosquince das para despistar a sus posibles perseguidores y el 6 de febrero volva a los mismosparajes, donde pronto captur el Invercoe, bricbarca ingls de 1.784 toneladas. Ninguna captura,empero, como la del Jean para su provecho; era siempre trigo y otros cereales lo que contenan suspresas, pero nunca llegaba el ansiado cargamento de carbn, siquiera el apuro no fuese nunca tanapremiante como en los cruceros.

En el nimo de Thierichsens iba ganando terreno la idea de la imposibilidad de retornar a Alemania,sino que su final sera el internamiento en un puerto neutral que pens fuese de los Estados Unidos,para estar ms a cubierto de cualquier veleidad de sus enemigos. Nadie pensaba entonces en que la


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gran Repblica iba a ser beligerante algn da. El vapor ingls Ana Mary Shorf vino a caer en supoder al aproximarse a la costa brasilea. Maz! Ms cereales!; poco despus hunda al vaporcorreo francs Florida y al ingls Willerby en aguas entre Fernando Noronha y Pernambuco. Esta fuesu ltima presa. Las mquinas daban seales inequvocas de fatiga tras haber atravesado el Pacficoy casi el Atlntico sin el menor ajuste, y los cruceros ingleses comenzaban a hacerse or en elocano. Dos veces pasaron por sus inmediaciones, el Otranto con rumbo a Inglaterra, llevando abordo a los supervivientes alemanes de la escuadra de von Spee, y el Edinburgh Castle, hacia el Sur.Thierichsens eligi el puerto de Newport News, en Virginia, para ser internado. El misterio lo supoconservar y cuando lo daban como operando frente a Iquique, el 11 de marzo entraba en NewportNews y desembarcaba sus prisioneros. Los ingleses haban descuidado de vigilar los accesos a labaha de Chesapeake y pudo fondear tranquilamente.

Fue autorizado a llevar a cabo las reparaciones ms urgentes y hasta se repost de vveres y carbncon intenciones de hacerse a la mar nuevamente; la aparicin de los cruceros ingleses Niobe yCumberland le convenci de la inutilidad de su intento. Internado al fin, la bandera alemana no habade volver a ser izada en la popa del Prinz Eitel Friedrich.

El Kronprinz

El vapor correo Kronprinz Wilheim estaba en Nueva York al romperse las hostilidades; el 3 de agostosala a la mar sin haberse operado el menor cambio en l; fue tres das despus cuando se reunicon el Karlsruhe y ste le entreg no lejos de las Bermudas tres piezas de setenta y cincomilmetros, que se montaron en la parte de proa. Tambin embarc el teniente de navio Thierfelder,con 17 oficiales y marineros, para tomar el mando del nuevo corsario. Cuando las operaciones detransbordo estaban tocando a su fin, hubo que acelerarlas y los dos barcos se separaronprecipitadamente por la presencia de los cruceros ingleses Bristol, Suffolk y Berwick, pero no sin queel Karlsruhe trabase combate, y el Kronprinz Wilhelm recibiese un proyectil del Berwick no obstantehaber sido desdeado por creerlo simplemente un buque de aprovisionamiento.


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El Kronprinz Wilhelm decidi operar en el Atlntico meridional; es sintomtica esta preferencia detodos los corsarios alemanes por las costas del Brasil y la Argentina. El 4 de septiembre comenzabasu carrera hundiendo el vapor ingls Indian Prince y el 7 era el turno del La Correntina.

El Kronprinz Wilhelm navegaba con tres vapores: Sierra Crdoba, Otavi y Holger, paraaprovisionarse y depositar las tripulaciones de los buques hundidos; sus andanzas haban de durar

hasta el 28 de marzo de 1915, pese a su silueta caracterstica con sus cuatro chimeneas en dosgrupos de dos y su desplazamiento de 14.900 toneladas que lo haca visible a larga distancia. Quincebarcos, con valiosos cargamentos, fueron sus vctimas. Los procedimientos para hundirlos fueron losusuales, con excepcin del empleado para dar fin del velero Wilfred M, al que parti en dos pedazoscon su proa. Las dotaciones y pasajeros de los vapores capturados fueron tratados humanamente,porque an no haba entrado la guerra en el perodo de odio y de represalias, por ambas partes, quela hizo ms tremenda en los aos posteriores.

El capitn de corbeta Pau Thierfelder, de 30 aos de edad, comandante delKronprinz Wilhelm

No escasearon los cargamentos de carbn, mas las mquinas se fueron deteriorando y lleg un daen que Thierfelder hubo de pensar en poner fin a sus hazaas. Unos das antes haba captado por laradiotelegrafa la noticia del internamiento del Prinz Eitel Fredrich en Newport News y a continuacinlas seales de los buques enemigos parecieron cesar; decidi probar fortuna a su vez y dirigirse almismo puerto en que se hallaba su compaero de correras. Una vez cerca de la costa sintinuevamente las seales inalmbricas de tres cruceros ingleses y uno francs; sigui adelante,confiado en su buena estrella que tan fiel le haba sido, y una maana, falto de combustible, sinvveres, con sus mquinas cansadas y sus fondos sucios, el Kronprinz Wilhelm se dejaba internar.

Tampoco en l haba de volver a izarse la bandera imperial.

El BerlinTerminada su vida los cruceros auxiliares armados en el Extranjero a raz del rompimiento dehostilidades, se pens en Alemania en enviar otros que, preparados para su misin en puertosnacionales, comenzasen por burlar el bloqueo ejercido por la Gran Bretaa. La primera esperanzaque se puso en estos buques fue el fondeo de minas; esta arma fue paulatinamente intensificandosu accin y al final del conflicto eran muchos miles las que acechaban bajo la superficie el paso deun barco cualquiera. No era necesario el combate, con lo cual se eliminaba la debilidad inicialocasionada por su falta de aptitud, de que ya hemos hecho mencin repetidamente, para recibir los


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disparos del adversario. Bastaba llegar al paraje que se estimaba propicio para dejar caer losartefactos y esperar que hiciesen su efecto; la mina, arma de sorpresa, se prestaba al gnero deguerra que es capaz de realizar un corsario.

Las minas que fueron fondeadas primeramente produjeron un efecto inesperado; el Berln logr

burlar la vigilancia britnica y salir a la mar el 19 de octubre de 1914, llevando a bordo doscientasminas. Perteneca al Norddeutscher Lloyd y desplazaba 15.000 toneladas. Era un buque mercantetransformado llegado a la costa septentrional de Irlanda, pudo fondear sus armas mientrasescuchaba en derredor las seales radiotelegrficas de varios buques enemigos. Una vez terminadala faena que comprometa seriamente la seguridad en el trfico, muy intenso en aquella zona,renunci a regresar a Alemania para no inducir al enemigo a sospechas respecto a su misin y sedirigi a un puerto noruego, donde qued internado.

Las estaciones alemanas de telegrafa sin hilos espiaron intilmente cualquier noticia que les diese aconocer algn resultado: el silencio ms completo reinaba. Las informaciones particulares no

daban mejor resultado. Dada la situacin en que el comandante del Berln aseguraba haber dejadocaer las minas, pareca imposible que la navegacin no se resintiese. El 27 de octubre corrieron losprimeros rumores, tan graves que en un principio se resistieron a creerlos en la propia Alemania; elacorazado Audacious, terminado en el ao 1913 y uno de los ms modernos con que contaba laGran Fleet por consiguiente, haba ido a dar en el campo minado depositado por el Berln y tras unalarga agona se haba ido a pique, no lejos de Slough Swilly cuando, en compaa de la segundaescuadra de acorazados de la que formaba parte integrante, se dispona a comenzar los ejercicios detiro al blanco. El acorazado en cuestin desplazaba 24.000 toneladas, andaba 22 nudos y montaba,como artillera principal, diez caones de 343 milmetros. De ser cierta la noticia, constitua una


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prdida lamentable para los ingleses y era para los alemanes un aliento en su ensueo de disminuirla potencia de la flota inglesa hasta hacer que la diferencia entre las rivales consintiese un encuentrocon probabilidades de xito para los germanos.

No se pudo comprobar la noticia; unos das despus pareci confirmarse con las declaraciones dealgunos pasajeros, de nacionalidad norteamericana, del vapor Olympic, el gemelo del tristementeclebre Titanic, coloso de 45.000 toneladas que haba sido testigo de la catstrofe. El soberbiotrasatlntico pasaba por la costa septentrional irlandesa, cuando advirti que un acorazado sehallaba en una posicin crtica, escorado a babor y, al parecer, hundindose lentamente. El capitndel Olympic, Haddock, se aproxim al Audacious y fue informado de que a las nueve de la maanade aquel da, 2 de octubre, se haba odo a bordo una explosin formidable sin que nadie pudiesesaber la causa que, en principio, se atribuy a un torpedo lanzado por un submarino, pero sin que

nadie viese la fatdica estela de burbujas de aire; empero, dado el estado de la mar, todosdescontaban la posibilidad de que el torpedo llegase sin ser advertido. Desde el primer momento, lamquina de babor qued inundada y fue imposible hacerla marchar. El gigante inmovilizado, sehunda lentamente.


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El capitn del Olympic se ofreci a remolcar al acorazado hasta la prxima base de Slough Swilly,pero el agua iba invadiendo sucesivamente otros compartimientos y el Audacious hacindose mspesado cada vez; hubo que dar la orden de evacuarlo y soltar los remolques. El crucero ligeroLiverpool qued en sus inmediaciones, mientras el Olimpyc se alejaba. El Audacious, inmvil,escoraba gradualmente y, al propio tiempo, se hunda. Nadie pensaba en la existencia de un campode minas y fue casualidad que el mismo Liverpool no pagase cara su guardia en derredor delacorazado moribundo. Hacia las nueve de la noche, otra horrorosa explosin sacudi al Audaciousque desapareci finalmente bajo las aguas. Nada se sabe concretamente respecto a la naturaleza deesta segunda explosin; unos creen fuese debida a otra mina contra la cual fuese arrastrado el barcoa la deriva, mientras algunos quieren atribuirla a la mala calidad de la plvora que encerrabanalgunas municiones, fundndose en que ya haba ocurrido otra en las del crucero acorazado Achilles;

ms tarde, el mismo explosivo haba de causar la prdida total del acorazado Bulwark el 26 denoviembre del mismo ao 1914, cuando estaba fondeado frente al arsenal de Sheerness, en ladesembocadura del Tmesis.

Durante algn tiempo, no obstante, los constantes ments ingleses ante la insistencia de la noticia,mantuvieron sta en un ambiente de duda, pese a las afirmaciones categricas de los pasajeros delOlimpyc que dejaron al Audacious cuando a nadie poda caberle dudas acerca de la suerte que leestaba reservada. La carrera del Berln haba sido bien corta, pero ninguno de sus mulos, anterioreso posteriores, consigui jams un tan completo xito.

El Meteor

A fines de la primavera de 1915 fue el turno del Meteor; mientras los Dardanelos no quedasenabiertos para los aliados y a la sazn no eran grandes las probabilidades de xito de la desdichadaempresa de forzamiento de los estrechos, que atravesaba una de sus crisis ms graves , el nicomedio de aprovisionar en material de guerra al ejrcito ruso eran los puertos del mar Blanco; eraindispensable una larga navegacin remontando todo el litoral noruego, donde los submarinosalemanes vigilaban.

Se contaba con el deshielo para llegar hasta Arkangel, que se haba designado como puerto dedescarga; en el mes de febrero, inutilizado el buque rompehielos que los moscovitas tenan en


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aquella costa, hubo de hacer sus veces el viejo acorazado ingls Jpiter, de 15.000 toneladas,gemelo del Majestic torpedeado en los Dardanelos por el U-21 al mando de Hersing; a costa demuchos esfuerzos y no pocas dilaciones, pudo entrar en el puerto ruso, donde permaneci hastamayo, manteniendo abierto un canal con sus formidables embestidas al hielo que cubra la superficiede la mar en aquellas si altas latitudes. Los alemanes supieron la nueva direccin que pensabantomar sus enemigos, y como quiera que el aprovisionamiento de los rusos les perjudicabadirectamente, decidieron hacer abortar el plan o, cuando menos, estorbarlo lo ms posible. El Meteorhaba hecho una primera incursin al mando del capitn de corbeta von Knorr, y se le envinuevamente apenas se tuvo noticia de que el deshielo permita que se reanudase la navegacinhasta el mar Blanco. A fines de junio se enviaron submarinos ingleses a la costa de Noruega paravigilar el regreso del vapor alemn; pero ste consigui sin duda deslizarse hasta Alemania, porquenadie acus su paso.

Lleg el mes de agosto; el almirante Jellicoe estaba seriamente preocupado, porque todas susinformaciones coincidan en afirmar que el Meteor haba salido a la mar nuevamente, para ir alescenario de sus hazaas anteriores. El peligro de las minas, como todo lo que lleva aparejado algode misterio, parece siempre superior a lo que es realmente, aunque en este caso lo fuese muygrande. Ya se haba establecido una intensa corriente de trfico entre los puertos britnicos y el marBlanco y los convoyes se sucedan continuamente. Dos vapores haban chocado con minas, cuandoel Almirantazgo comenz a sospechar la nueva salida del Meteor, una divisin de cruceros fueenviada hacia Noruega para interceptarle el paso, y hasta el 8 de agosto, su jefe, el comodoro LeMesurier, mantuvo la vigilancia sin mejor resultado que la vez anterior. La impaciencia y elnerviosismo crecan cuando recibi noticias acerca de la posicin del nuevo buque fantasma, que

haba sido visto, no ya en los parajes que se juzgaban como ms probables, sino frente al CromartyFirth, uno de los puertos ms frecuentados por la Gran Fleet y que era uno de sus puntos de apoyo.Se tema hubiese sembrado minas en el acceso a est puerto, con el consiguiente peligro para lasescuadras inglesas, y se presuma hubiese emprendido el regreso a Alemania, por lo cual seordenaba al comodoro Le Mesurier que se dirigiese, a su vez, hacia Horns Reef; sus cruceros seencontraban, en el momento de recibir la orden, a 50 millas de Scapa Flow. Al mismo tiempo se lecomunicaba que iban a reunirse con l dos escuadrillas ms, una desde Harwich, y la segunda desdeRosyth.


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Este caso demuestra la dificultad de encontrar un buque: uno solo es suficiente para movilizarfuerzas numerosas en pos de l. Los ajenos a las cosas de la mar criticaban speramente, sinembargo, el que un Emden, un Karhruhe o un Moewe pudieran tener en jaque a muchos barcos, sinque stos diesen con ellos. En esta correra del Meteor entraron en juego por vez primera doselementos nuevos: el hidroavin y el dirigible, con eficacia tal que fueron capaces de advertir alcrucero auxiliar alemn de que estaba cercado y su comandante pudo hundirlo an antes de seralcanzado por los enemigos lanzados en su persecucin.

Al amanecer del 8 de agosto, el Meteor, que navegaba con bandera rusa, se hallaba en las cercanasde Cromarty Firth cuando hubo de encontrarse con su similar ingls Ramsey, vapor mercantearmado que estaba agregado a la Grand Fleet para proceder a la visita y captura, en determinadoscasos, de los buques sospechosos hallados en su camino. El Ramsey, una vez izada la sealcorrespondiente, se aproxim hasta unos cien metros escasos del supuesto vapor ruso y partranquilamente sus mquinas, para arriar un bote que condujese al oficial encargado de la visitareglamentaria. Fue en aquel instante cuando el Meteor, substituyendo rpidamente su bandera porla de guerra alemana, rompi el fuego con sus caones que estaban ocultos, y lanz, al propiotiempo, un torpedo. El Ramsey se fue a pique en tres minutos y su comandante y algunossupervivientes fueron salvados por los del Meteor. Las escuadras lanzadas en pos del fugitivo iban

tejiendo una espesa red en derredor de ste; los alemanes estaban tan lejos de sospechar el peligro,que an se detuvieron a registrar un velero dans, cargado de madera, que se diriga a Leith. En lamaana del 9, un hidroavin alemn pas sobre los buques del comodoro Tyrwhitt, que procedentesde Harwich iban hacia el Norte, sin que los caones antiareos fuesen capaces de hacer blanco en l,siguiendo hacia la isla Borkum. Casi a la misma hora, un zeppeln pas sobre el Meteor y le advirtide la presencia de cruceros enemigos que se interponan entre su situacin y el golfo de la Jahde y leaconsej arrumbase al Norte, en una direccin que vino a coincidir con la de Tyrwhitt, a cuarentamillas por delante de sus buques.

Dos zeppelines y tres submarinos fueron enviados en ayuda del portaminas; pero cuando sucomandante vio los primeros buques contrarios, decidi hundir al Meteor, y cuando los inglesesfueron estrechando el cerco en derredor de l, sus tripulantes, en unin de los del Ramsey,navegaban en un velero sueco. Los ingleses se alejaron seguidamente, temerosos de que el alemnhubiese sembrado minas en aquellos parajes antes de hundir su buque. Tambin es curioso esteencuentro por el problema de derecho internacional que se suscit a bordo del velero sueco; dentrodel alcance de los caones britnicos, quines eran los prisioneros a bordo, los alemanes delMeteor o los ingleses del Ramsey ? Estos alegaban que quedaban en libertad y no deban seguir a


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sus enemigos, conforme stos pretendan. La frmula consisti en que los supervivientes del Ramseytransbordasen a un pesquero noruego, llegando von Knorr a prestar unas libras esterlinas al tenientede navo Atkins, quien se las devolvi por el trmite de la Embajada norteamericana, acompaandolas gracias.

Si no fue muy larga la carrera del Meteor, sus efectos, en cambio, s tuvieron duracin; el 9 de

agosto, el destructor Lynx chocaba con una mina de las fondeadas por aqul y se iba a pique. Suprdida denunciaba la posicin de los artefactos y se enviaron dragaminas para proceder a lalimpieza de aquellos parajes; uno de ellos, el Lilac, fue gravemente averiado por la explosin deotra, aunque pudo ser remolcado a puerto. El 4 de septiembre le toc la misma suerte a un gemelo,el Dahila, sin que tampoco se perdiese, merced a la construccin especial de estos buquesdestinados a tan peligrosa tarea.

Fin del Meteor

El Moewe


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El Moewe marca una nueva era en el equipo de los corsarios; aleccionados por las aventuras de losprimeros, comprendiendo que era necesario hacer todo lo posible para manumitirse de la esclavituddel carbn, se fue hacia barcos de gran capacidad de combustible y consumo reducido. Estascondiciones las satisfacen los vapores de carga, de un andar moderado por debajo de los quincenudos, mquinas que exigen poco cuidado con la consiguiente reduccin de personal. Tal era el casodel Pungo, construido en Geestemunde en 1914 para dedicarlo al transporte de pltanos desde elfrica alemana a Hamburgo; 4.500 toneladas de desplazamiento, 14 nudos de andar, 115 metros deeslora, una sola hlice, con un aspecto perfectamente inofensivo que no poda despertar sospechaalguna en quin se cruzase con l en la mar. Fue la primera vez que se apel a la adopcin dechimeneas falsas capaces de alzarse y abatirse en un corto espacio de tiempo, lonas que modificasenla silueta, pintura para cambiar de color; todas las viejas artes que resucitaban, porque hasta losbuques-trampas que tantos creen ser una novedad de la guerra pasada, fueron preconizados por elentonces aspirante Mahan, en 1861, para destruir al Sumter, y en tiempos de Carlos II se construyun barco llamado Kingfisher con semejanza absoluta a uno mercante para perseguir a stos; y enaos ms recientes, a fines del pasado siglo, hubo un crucero francs, el Chateaurenault, quesemejaba un transatlntico de cuatro chimeneas.

El armamento del Moewe consista en dos caones de 100 en el castillo de proa y otros dos iguales a

popa, todos ocultos por instalaciones adecuadas, ms uno de 90 de la misma manera que los quemontaban los mercantes para su defensa contra los submarinos; dos tubos lanzatorpedos, bajo elpuente, completaban los medios ofensivos, con unos centenares de minas. El mando se confi a unode los oficiales de la ms rancia nobleza del Imperio, el capitn de corbeta, burgrave, conde Nicolszu Dohna Schlodien, a quin, antes de salir de Alemania, en diciembre de 1915, se le dieron lasinstrucciones siguientes: Fondear minas en diversos puntos de la costa enemiga y despus hacer laguerra al comercio. Sali pegndose a la costa noruega, aprovechando las largas nochesinvernales, y pudo llegar hasta el litoral de Escocia, donde fonde su primer campo minado, al Estedel cabo Wrath. La operacin se llev a cabo con toda precisin en la situacin, desde las seis a lasdiez y media de la noche, el da de Ao Nuevo de 1916, 252 minas en once hileras diferentesquedaron all, como huevos de la gaviota que pasaba (Moewe significa gaviota). Lasinmediaciones del Pentland Firth resultaban peligrosas para las escuadras inglesas.

Pronto hicieron sus efectos; el da de Reyes, el acorazado King Edward VII, que iba de Scapa Flow aBelfast, volaba sobre una de ellas, mientras el frica, su gemelo, pasaba en marea alta atravesandotoda la superficie peligrosa sin recibir el menor dao; a la maana siguiente el vapor noruegoFelicidad (?) se hunda en el mismo sitio. Nunca pudo ser dragado por completo hasta el fin de laguerra y fueron las corrientes y los temporales los que fueron arrancando las minas de sussumergidores. Cuando se descubri la existencia del peligro, ya estaba Dohna Schlodien a muchasmillas de distancia, en pleno ocano; pas por el oeste de Irlanda y coste Francia, una vez en elgolfo de Vizcaya, para fondear minas delante de La Rochela; aunque supo por radiotelegrafa laprdida del King Edward VII no lo atribuy a sus propias minas, por no citar el parte la situacin delnufrago. El 13 de enero el vapor espaol Blgica se perda en una de las minas fondeadas en aguasfrancesas y unos das ms tarde el Rayo, tambin de Espaa, sufra anloga suerte.

Desde entonces inici la guerra al comercio propiamente dicha, o por gestin directa; el 11 de enero,a 150 millas del cabo Finisterre, capturaba y hunda el vapor ingls Farrignford (3.146); mientras loechaba a pique a caonazos surgi el Cordbridge, con 4.000 toneladas de buen carbn Cardiff, quepas a ser acompaante del corsario, que no quiso desperdiciar tan magnfico aprovisionamiento; a220 millas al oeste de Lisboa encontr otro vapor carbonero, el Dromonby; la buena suerte lesonrea, mas no queriendo reunir demasiados buques cuyas humaredas podan despertar la atencina distancia, decidi hundirlo. A cinco millas del anterior apres el Author con carga general, parte dela cual transbord a bordo antes de hundirlo. Y para que la jornada fuese completa, otro vapor, el


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Trader (3.608) era capturado por la tarde; en un radio de seis millas, tres vapores haban cado enlas redes del corsario alemn. Tras dos das sin nuevas presas, otros dos vapores eran apresados: elAriadne (3.055), con maz, y el Appam, de la compaa Elder Dempster (9.781), a 135 millas deMadeira, el que con todos los prisioneros habidos a bordo del corsario era despachado para Amricadel Norte, no sin rescatar veinte alemanes hechos prisioneros en el frica occidental y que eranenviados a Inglaterra; entre los que iban a bordo estaba el gobernador general de Nigeria y el altocomisario ingls en el pas de los ashantis; el teniente de navio Berg se hizo cargo del mando parallevarlo a Newport News, donde se reunira con el Eitel y el Kronprinz Wilhelm. El Clan Mactavishcay a continuacin y fue incendiado al intentar resistir. Y como quiera que tratase de comunicar conlos cruceros del almirante Moore, que no andaban lejos, el conde de Dohna Schlodien considerprudente cambiar de terreno de caza.

Pasaron unas semanas en que pareci haber desaparecido, al cabo de las cuales comenz una nuevaserie de capturas en el Atlntico meridional, en la zona de Pernambuco, la misma que fuera preferidaanteriormente por el Karlsruhe y muchos otros; cayeron el velero Edinburgh (1.473), el vaporLuxembourg, con 5.900 toneladas de carbn para los ferrocarriles argentinos, el Flamenco, elEstrella, el Westburn, tambin con carbn este ltimo, y el Horace (3.335). El Westburn, vapor viejo,fue enviado a Santa Cruz de Tenerife, con 180 prisioneros de sus compaeros de infortunio, donde

los desembarc; pero al intentar salir y encontrar al crucero acorazado Sutlej, su tripulacin lo echa pique a la vista de Tenerife. En febrero Dohna Schlodien emprendi el regreso a su pas; no setrataba ya de las largas noches invernales con las que se poda contar para deslizarse a travs de laslneas inglesas; se mantuvo siempre en comunicacin con Berln y supo que a l y a cincuenta de sustripulantes se les conceda la Cruz de Hierro. Alejndose de las derrotas frecuentadas, cesaron laspresas; hasta el 23 de febrero no captur ningn barco y en este da lo fue el velero francs Maroni(3.100), que fue hundido al noroeste de Finisterre; el 25 lo era el vapor ingls Saxon Prince (3.471),6oo millas al oeste de Fastnet.

El 4 de marzo, llevando las banderas de todas sus presas izadas en el palo mayor, sin una sola baja,el Moewe entraba en Wilhelmshaven y el premio se ampliaba a la Cruz de Hierro para todos, sinexcepcin alguna; el comandante era llamado urgentemente al Cuartel General, donde el Emperador

en persona le felicitaba por su aventura. Los daos causados al enemigo eran considerables y nopodan alegar malos tratos los prisioneros. La experiencia de emplear barcos mercantes vulgaresconvenientemente armados no pudo ser ms satisfactoria y no deja de extraar que no semultiplicasen las intentonas. Tampoco se explica que los ingleses no recurriesen a armar carbonerosya que eran los ms codiciados por corsarios para destruir a stos. Cuando lleg el otoo, laestacin preferida por los alemanes para burlar el bloqueo, Jellicoe tom precauciones; el Moewevolvi a salir el 22 de noviembre de 1916, seguido a breves intervalos por el Wolf y el Seeadler,estos dos ltimos con miras de ir mucho ms lejos, como veremos ms adelante.

La primera captura de esta segunda etapa del Moewe fue el vapor Voltaire (8.618) en los parajes enque apresara el Saxon Prince en su crucero anterior; vino luego una presa, el Sumland, cargado con9.000 toneladas de carne para Blgica y provisto de un salvoconducto de la Embajada alemana enWashington, que hubo de dejar pasar y no dej de narrar su encuentro y dar detalles del Moewe asu llegada; hundi luego un vapor noruego cargado de municiones de fusil y el ingls Mount Temple(9.792), el velero Duchess of Cornwall (152), el vapor King George (3.852), el Cambrian Grange(4.234), el Georgic (10.180) y el Yarrowdale (4.652), presa importante con sus cien camiones y3.200 toneladas de acero para municiones, por lo cual lo marin con gente propia y decidi enviarloa Alemania, y el 12 de diciembre el Saint Theodore, con 7.000 toneladas de carbn norteamericano,que tampoco fue echado a pique para servir de aprovisionador al corsario. El 18 capturaba alDramatist con frutas de California y explosivos (5.415), el da de Navidad el velero francs Nantescon 3.300 toneladas de salitre chileno para una fbrica de plvoras cercana a Londres y el 2 de


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enero el velero francs Asnieres y el vapor japons Hudson Maru. El Saint Theodore era armado condos caones y al mando del teniente de navo Wolf comenzaba por su cuenta la guerra al comercio;el ltimo da del ao 1916 el Yarrowdale entraba en un puerto alemn, sano y salvo, con toda suvaliosa carga y 469 prisioneros pertenecientes a las dotaciones de los barcos hundidos. El 7 de enerohunda el Rodnoshire (4.310) y el 9 el carbonero ingls Minieh, que acababa de dejar su carga alcrucero ingls Amethyat, en vista de lo cual Dohna Schlodien abandonaba aquellas aguas para ir apatrullar al centro del Atlntico, donde al da siguiente capturaba, ,el Netherby hill (4.461); elHudson Maru fue enviado a Pernambuco con 445 prisioneros, carboneando despus del Geier (exSaint Theodore) y producindose mutuas averas por la marejada al chocar los barcos, amadrinadosen la mar. Este ltimo slo haba hundido el pequeo velero canadiense Jean, de 215 toneladas.

El Moewe fue hacia las derrotas del cabo de la Buena Esperanza, sin el menor resultado, y volvi alas costas del Brasil; el 14 de febrero recoga la dotacin de presa del Geier, que tampoco habacapturado sino otro velero insignificante y hunda al fugaz corsario. El 15 le tocaba el turno almagnfico vapor ingls Brecknockshire, que con 7.000 toneladas de carbn haca su primer viaje, endonde encontraron peridicos que alcanzaban hasta el 23 de enero y en los que hallaron detalles desus propias andanzas; al da siguiente el French Prince aumentaba la lista (4.766) y al otro el Eddie(2.652); cuando se estaba procediendo a hundir con bombas a este ltimo, apareci el cruceroauxiliar ingls Edinburgh Castle y merced a un chubasco tropical pudo huir el Moewe a todo el andarde sus mquinas. Aquel da decidi el conde de Dohna Schlodien regresar a Alemania, sintindosedescubierto por lo que vea y haba ledo en los peridicos encontrados en el Brecknockshire. Puso la

proa al Norte, alejado de las derrotas frecuentadas, y por el camino captur el Katherine (2.926) el23 de febrero y el 4 de marzo el Rhodanthe, a 340 millas de Cabo Verde; el 10 el Esmeralda (4.678)y el mismo da el Otaki que, armado en guerra, se resisti y fue hundido con bajas, su capitn entreellas, no sin producir averas en el casco al Moewe y la muerte de algunos de sus tripulantes. ElDemeterton (6.048) y el Governor (5.524) fueron sus ltimas vctimas. El 16 de marzo atravesaba atodo vapor la zona de vigilancia, viniendo de las aguas de Islandia, y el 22 entraba en Kiel, al cabode cuatro meses de aventuras constantes y xitos notorios.


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Comenzaba la guerra submarina a ultranza y las cifrar de barcos hundidos crecan en proporcionesastronmicas. El Moewe no volvi a salir.

El Greif

Los primeros cruceros auxiliares estaban armados simplemente con artillera, instalada en sitiosdeterminados desde la construccin del buque, como ya hemos indicado. Se trataba de barcostransocenicos perfectamente conocidos por su silueta clsica; eran demasiado grandes y con elloaumentaba su vulnerabilidad. En la segunda poca, se cambi el criterio que presida en elarmamento de tales buques; convencidos de que la velocidad no era de primordial importancia, sinoque sta era muy inferior a la que se juzgara en un principio, se recurri a buques de un andarmoderado, de silueta semejante a las de los inofensivos tramps, dndoles el nombre de un neutralque se pareciese en su aspecto general y armndolo con tubos lanzatorpedos, caones y minas.

El Greif era un vapor de stos; con un andar de catorce nudos, se le instalaron las armas queacabamos de mencionar y se le lanz al Atlntico; la poca, empero, no era la ms indicada.Acababa de regresar, acogido triunfalmente, el crucero auxiliar Moewe y la vigilancia haba sidoreforzada, porque el afortunado paso a travs de las lneas de vigilancia no era desconocido para losingleses. En tiempo normal haca servicio con Australia, y se llamaba Guben. El armamento de estoscruceros auxiliares comenzaba en un ambiente de misterio, realmente atrayente para el que sintieseel placer de la aventura, yendo de cara a lo desconocido. Entre las gentes ms indicadas, a juicio desus superiores, se pedan voluntarios y cuando todos estaban reunidos se proceda a una cuidadosaseleccin de los presentados. Entonces se haca la eleccin del comandante, en la que resida larazn del xito; eran empresas en las cuales la iniciativa del que manda era el todo y, por ello, elque se vea designado para uno de estos mandos, se senta justamente halagado.

Al mismo tiempo, se haba requisado el vapor que con gran secreto y fingiendo salir para un destinocualquiera, era enviado a un astillero particular donde sufra las transformaciones adecuadas; en

realidad, este secreto llamaba siempre la atencin de los asiduos visitantes de los muelles. Desde elcomienzo de la guerra, los puertos alemanes rebosaban de buques amarrados, inmovilizados por elbloqueo, que languidecan en las drsenas, all en el fondo, en la parte menos frecuentada deordinario por el trfico comercial. Naturalmente, para nadie poda pasar inadvertida la salida dealguno de esos buques que recobraba su libertad y sala del amarradero, como si sacudiese susarticulaciones entumecidas por una prolongada quietud. Y un da, reunidos buque y tripulacin elcuerpo y el alma, el flamante crucero auxiliar sala del astillero, siempre sin perder su inofensivoaspecto externo, y se internaba en alta mar en pos de glorias y laureles; muchas veces, todo eltrabajo terminaba a las pocas horas en una muerte rpida.


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Fue el caso del ex Guben, ahora Greif; el almirante Jellicoe sospechaba que un nuevo corsario estabapara salir a la mar y dispuso varios de sus cruceros de suerte que pudiesen cortarle el paso. ElAlmirantazgo advirti que, el 28 de febrero, saldra un crucero auxiliar y, poco despus demedianoche, las estaciones radiogoniomtricas, que en los comienzos de este ao de gracia de 1915empezaban a ser utilizadas con notorio xito, sealaron la presencia de buques enemigos a escasadistancia de Ekersund, en la costa suroeste de Noruega.

Tres cruceros rpidos y la dcima escuadra de cruceros, integrada, casi en su totalidad, porauxiliares, se dispusieron en arco de crculo, interceptando el paso hacia el Atlntico. El Greifcaminaba hacia ellos, sin sospechar que no le estaba reservada la Fortuna que haba sonredo a suspredecesores; todos, a bordo del crucero auxiliar germano, soaban con emular las glorias delMoewe y sus tripulantes, cuyo entusiasta recibimiento acababan de presenciar unos das antessolamente. A las ocho de la maana, cuando el crucero auxiliar ingls Alcntara navegaba hacia elNordeste para llegar al punto fijado para ser relevado por su similar Andes, con objeto de ir acarbonear, vio un humo por babor, al mismo tiempo que reciba un radiotelegrama del Andes, quedeca: Buque enemigo quince millas al Nordeste. Era el Greif disfrazado de vapor noruego, quenavegaba tranquilamente; el comandante del Alcntara decidi identificar aquel vapor que procedaexactamente de la direccin sealada por los radiogonimetros la noche anterior; dispar dos

caonazos sin bala, invitndolo a que se detuviese, y el Greif obedeci la orden. El Alcntara seacerc cautamente, con sus caones preparados para hacer fuego a la menor sospecha de que fueserealmente el crucero auxiliar alemn.

A popa se lea claramente el nombre: Rena y la matrcula: Bergen. Cuando el Alcntara arriaba unbote para proceder al reconocimiento de la documentacin, un nuevo radiograma del comandantedel Andes rezaba simplemente: Ese es el buque enemigo que esperamos. Y como lo interpretaseasimismo el Greif, en aquel momento y como en las comedias de magia, cayeron unas maderas,surgi, orgullosa, en el palo la bandera de guerra alemana y el Alcntara se sinti alcanzado por unalluvia de proyectiles; recobrados de su sorpresa los del buque britnico, contestaron al fuegoinmediatamente, ayudado por el Andes que se aproximaba a todo el andar que eran capaces deproporcionarle sus mquinas. El duelo dur un cuarto de hora; pasado este tiempo, el Greif,

envuelto en una densa nube de humo cesaba de disparar; el Alcntara escoraba lentamente,mientras su gente lo evacuaba y, finalmente, dio la voltereta y se hundi entre remolinos yespumas, dejando una nubecilla de humo en la superficie, como ltimo resto de su existencia. ElAndes y el crucero ligero Cosmus, temerosos de que fuese acompaado por un submarino, conformehaba sido informado el Almirantazgo, no osaban acercarse al Greif, limitndose a caonearlo desdelejos.

El alemn, con su bandera arriba, se fue a pique tambin. De sus 300 hombres, 220 fueronrecogidos por los ingleses; los sueos de gloria terminaban cayendo prisioneros a las pocas horas deabandonar su pas.

El Wolf

En el otoo de 1916, un nuevo corsario sala a la mar; esta vez se trataba de un vaporconcienzudamente preparado, un barco mercante ya armado como un crucero pequeo, en el que seaunaban las condiciones de economa de combustible del mercante de tipo medio y el armamentocompleto de un barco de guerra. Era un vapor de la compaa Hansa, construido ex profeso para eltransporte de frutas; botado al agua en Flensbourg en el ao 1913, con 5.809 toneladas brutas, unasola hlice, 126 metros de eslora, 17 de manga y 9 de calado, slo gastaba 6o toneladas diarias a sumximo andar de diez nudos y medio y 35 al de ocho; sus bodegas podan llevar 6.000 toneladas,que con tan escaso consumo le daban una enorme autonoma. Y ya hemos visto que la pesadillaconstante de los comandantes de los corsarios era el carbn. De aspecto vulgar, una chimenea y dos


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palos, provisto de una frigorfica especial para la clase de mercanca que transportaba en tiempo depaz, cambi su nombre original de Wachtfels por el de Wolf y, habindosele asignado un hidroavinpara exploraciones, se dio a ste a su vez el apelativo de Wolfchen. El lobo y el lobezno.

Se le arm con dos caones de 152, dos de 100 y dos de 47 milmetros, ms algunasametralladoras, dos tubos lanzatorpedos colocados bajo el puente y cientos de minas. Instalacin

completa de telmetros, once botes, de ellos algunos automviles, y 380 hombres de dotacin, almando del capitn de corbeta Carlos Augusto Nerger, hasta entonces comandante del cruceroStettin, que no hablaba ingls; pero en cambio su segundo, el teniente de navo Schmehl, habavivido en Inglaterra cuatro aos, era socio del Richmond Tennis Club y en cierta ocasin habamerecido una recompensa del Gobierno britnico por haber entrado en la cala de un barco ingls,cargado de explosivos, incendiado en Calcuta.

A fines de noviembre, en un da de densa niebla, sala a la mar y a causa del mal tiempo no pudo

navegar a todo su andar; hasta el 2 de diciembre no se encontr en mar libre, dejando atrs laslneas inglesas de vigilancia; esquiv intencionadamente todo encuentro en el Atlntico y el 16 deenero estaba en las costas de frica del Sur, fondeando sus primeras minas en el cabo de la BuenaEsperanza, siguiendo al ocano Indico y dejando caer otras en Colombo y en Bombay; a mediadosde febrero estaba en aguas de Ceyln. El vapor ingls Worcestershire (6.728 toneladas) y el Perseus(7.175) se hundan a causa de las minas. Se alej entonces de aquellos parajes para ir a patrullar enlas derrotas que van de frica del Sur a la India y de Aden a los estrechos del mar de la Sonda ycomenzaron las capturas. Era necesario fondear las minas en cantidades no muy grandes y adistancia unos grupos de otros, pues una vez descubierto uno es fcil dragar todo el campo minadosin una buena utilizacin de tales mquinas infernales. La primera presa fue el Turritella ingls,vapor ex alemn Gutenfes capturado en Alejandra al comenzar las hostilidades, y con una dotacinalemana y 24 minas se le mand a fondearlas ms al Noroeste, naufragando en la empresa sobre

una de ellas; la gravedad de la prdida consisti en que los ingleses conocieron la existencia y hastadetalles del Wolf.

Reanud entonces el viaje a travs del ocano hasta el Nordeste de las islas Seychelles, dondecaptur el Jumna, de 4.152 toneladas, y una vez transbordadas sus provisiones y el carbn fueechado a pique con bombas en sus fondos; el 11 de marzo caa en la red el Wordsworth (3.509) concargamento de arroz, del cual tom 15 toneladas, y el vapor corri la misma suerte del anterior; el31 el velero Dee, cuyo capitn llevaba a bordo 22 aos. Ajeno a quien pudiera ser el vapor iz laseal de Sin novedad a bordo acostumbrada en los barcos de vela cuando cruzan un vapor, por


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ser considerados siempre como un poco menores de edad; su asombro no debi de conocer lmitescuando la respuesta fue la orden perentoria de abandonar el barco y se encontr prisionero tras ladolorosa escena de ver hundir su buque.

Pasaron luego las semanas sin ningn nuevo encuentro; se dirigi al archipilago de las Kermadec,grupo desierto a 600 millas al nordeste de Nueva Zelanda, y fue a fondear a la isla Domingo, escollo

volcnico, desde donde el Wolfchen encontraba en su vuelo al vapor Wairuna (3.497) con 1.200toneladas de carbn, ms grandes cantidades de carne, leche y quesos. El avin dej caer un sacoen la cubierta con la orden: Pare sus mquinas no utilice la radiotelegrafa, entrguese; elWairuna no obedeci hasta que el hidroavin dej caer una bomba en su misma proa y el Wolf,advertido, sala a recoger su presa con la que fonde al socaire de la isla. Carbn, agua dulce,vveres frescos en abundancia, reses inclusive; dos maquinistas intentaron escapar en la noche y searrojaron al agua; nunca se ha sabido de ellos. El Wolf hizo un somero ajuste de sus mquinas yalgunas reparaciones, por espacio de una semana; la telegrafa sin hilos, imprudentemente usadapor los ingleses, pona al Wolf al corriente de los viajes de sus futuras presas, como suceda con elEmden; as en un caso pudo detener a un vapor y asombrar al capitn, al preguntarle: en qu

bodega lleva usted las quinientas toneladas de carbn ?.

As apres el velero Winslow. Cuando tema que su presencia pudiera ser notada, bien por haber sidovisto o tambin por la desaparicin de ms de un barco en la misma derrota, se alejaba y al llegar aun nuevo teatro de sus andanzas comenzaba por fondear minas en series de doce a veinticuatro; el25 de junio las dejaba caer en Nueva Zelanda, el 3 de julio en la isla Gabo y unos das antes en elestrecho de Cook; en uno de ellos pasaron unos barcos con las luces apagadas, pero no lo vieron;las islas Fidji, el archipilago Salomn, la antigua Nueva Guinea alemana. Como nadie sospechabaan la existencia de un corsario alemn en aguas tan remotas, las presas continuaban cayendo en ellazo. Hacan travesas largas y era difcil darse cuenta de su desaparicin; el Pacfico ha sido siempreel mar de las tragedias marineras, en su enorme extensin. En Nueva Guinea permaneci en unarada solitaria con una de sus presas, el vapor Matunga (1.608), alijando la carga y mientras un buzolimpiaba los fondos del Wolf, harto necesitado de esta medida con tan larga navegacin, y se hacanejercicios de lanzamiento de torpedos. El 26 de agosto nueva reanudacin de sus actividades; el 29

pasaba a Clebes, rumbo al Oeste, llegando el 30 a la mar de Java; sigui hasta delante de Singapurdonde fonde 108 minas audazmente, en las inmediaciones del puerto militar britnico. Con ellasquedaba libre de su carga peligrosa hasta entonces, en caso de tener que combatir, y desde aquelmomento comenz realmente el regreso a su pas.

Hay una captura que es interesante para nosotros, los espaoles, porque dio lugar a pintorescasescenas en los pueblecillos vascos: el Wolf se tropez un buen da con el vapor Igotz Mendi, de lacompaa Sota y Aznar, de Bilbao, y como el cargamento de carbn iba de Lourenco Marques aColombo, lo decomis, haciendo que el Igotz Mendi lo acompaase; eran 5.500 toneladas decombustible de propiedad inglesa. Juntos doblaron el cabo de la Buena Esperanza y entraron en elAtlntico. En Espaa se dio al vapor por perdido. Todos los prisioneros fueron transbordados al vaporespaol y en la primera semana de febrero se ordeno al Igotz Mendi que regresase a Alemania; paspor el Noroeste de Islandia, alcanzando el Crculo Polar rtico el 7 entre nieblas y brumas, llegando ala costa noruega el 21 para entrar por el Kattegat; esta vez la niebla fue an ms densa y el 24, alas tres y media de la tarde, el Igotz Mendi varaba en la costa danesa para no salir jams. Pudierondesembarcar todos, con sus efectos personales, mas el temporal que vino despus de la nieblaaveri grandemente el vapor. Los incidentes escabrosos vinieron despus; algunas de las supuestasviudas se casaron nuevamente; un da apareci el marino nmero 1 y hubo de surgir una cuestinno completamente nueva, pero s poco habitual. Intervinieron las altas dignidades eclesisticas ydeclararon vlida solamente la primera unin, pero el primer marido renunci generosamente.


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El Wolf pudo regresar a Alemania con toda felicidad al cabo de 451 das de navegacinininterrumpida, con un recorrido de 64.000 millas. El 19 de febrero, al cabo de unos cuantos das deansiedad tanto suya como del Almirantazgo de Berln que conoca su posicin exacta, entraba entrelas aclamaciones de los tripulantes de la escuadra, obligados a una inercia fatal por el bloqueoenemigo y la indecisin de los altos dirigentes de la Marina. El Wolf ech a pique o inutiliz sietebarcos ingleses, tres norteamericanos, un japons, un espaol, un francs y un noruego por mediode su accin directa; a estas prdidas hay que agregar los hundidos o averiados por las minas y quefueron cinco en el cabo de la Buena Esperanza, dos frente a Colombo, cinco en Bombay, uno en laisla Gabo y dos en el estrecho de Cook. El capitn de corbeta Nerger se demostr digno de laconfianza en l depositada por sus superiores al nombrarle para un mando de tan difcil desempeo.

El Libau

Alemania fomentaba siempre cualquier rebelin de orden interno que pudiese debilitar el poder de laGran Bretaa; la accin contra el canal de Suez fue ms poltica que guerrera, no obstante lasinmensas ventajas que hubiera reportado la obstruccin de aquella va navegable. La accin delImperio de los Hohenzollern en la Sublime Puerta tena siempre una marcada tendencia a enemistara las poblaciones musulmanas contra los ingleses; la guerra santa era uno de los sueos del Kaiser.

Cuando los irlandeses parecan dispuestos a recabar la independencia, Alemania estuvo alerta ydesde septiembre de 1914 intrig cerca de los jefes del movimiento, por mediacin de su Embajadaen los Estados Unidos. El oficial de Marina alemn, Carl Hans Lody, fusilado por espionaje, fuedetenido en Irlanda el 2 de octubre de 1914. En noviembre sir Roger Casement llegaba a Berln conun plan completo para atacar a Inglaterra, al amparo de un levantamiento en Irlanda. En laprimavera de 1916, una gran cantidad de fusiles, ametralladoras, municiones y explosivos serandesembarcados en la costa occidental de Irlanda, en la baha de Tralee y el muelle Fenit para armara los sinnfeiners por obra de los alemanes, quienes adems de suministrar todo el material citadose comprometan a llevarlo. En los Estados Unidos se reclutaba en tanto una milicia irlandesadispuesta a luchar por la libertad de su Patria.

El 12 de abril de 1916, Casement, jefe de la conspiracin antibritnica, sala de Kiel en el submarinoU-22 y desembarcaba en la costa de Kerry el viernes santo, 21; el lunes de Pascua, estallaba lainsurreccin en Dubln. Los buques de vigilancia estaban advertidos de la posibilidad del desembarcode armas, a partir del 17 de marzo. Un vapor de 1.228 toneladas, antiguo barco ingls apresado porlos alemanes en uno de sus puertos y antao perteneciente a la Wilson Line, el Castro (mas tarde elLibau), fue elegido para llevar el armamento y el mando confiado al teniente de navo de la reservaCarlos Spindler, antiguo oficial en los correos del Lloyd Norte Alemn; dos oficiales y diecinuevehombres de los barcos de patrulla de Wilhelmshaven formaron la tripulacin. Se le disfrazconvenientemente de vapor noruego, con la bandera pintada en los costados, se le di el nombre deAud por existir uno de gran semejanza con l y de este nombre se le provey de documentacinfalsa para burlar los registros posibles y probables por parte de los ingleses y en Lbeckembarc provisiones para seis meses, carbn para cuarenta y cinco das de navegacin y las armas

y municiones, que fueron disimuladas bajo un cargamento de madera. Todo se preparminuciosamente, incluso los certificados sanitarios de los tripulantes, con las armas noruegas entodos ellos. El domingo 6 de abril, mientras repicaban las campanas en fiesta, sala al amanecer parasu misterioso destino.


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El Aud llego al mar del Norte y fue hasta el crculo polar para burlar el bloqueo; una vez un cruceroauxiliar lo sigui por espacio de unas horas a distancia de apenas trescientos metros; Spindier nopens nunca que su viaje era conocido y que no queran cortarlo los ingleses hasta que llegase a su

destino, a fin de comprobar que transportaba armas y municiones para los rebeldes, conforme hubode declarar el almirante Hall, jefe del servicio secreto de la Marina britnica. Muy mal tiempo lesorprendi en su viaje hacia el Sur, y en las inmediaciones del islote Rockall, alcanz su peor cariz.Finalmente, el 20 de abril, arrojando por la borda la mayor parte de la madera que estorbaba paralas operaciones de descarga, llegaba delante de Inishtooskert, isla situada en la parte Nordeste de labaha de Tralee, punto designado para reunirse con el U-22 y Casement. Esper intilmente, hizoseales luminosas, rond por las inmediaciones; nada apareci hasta que el 21, poco despus de lamedianoche, dej caer el ancla en Inishtooskert. Un pesquero armado, el Setter II, vino a l y loregistr; pero el comandante, un patrn de pesca movilizado, no hizo sino una requisa rpida y noencontr nada; acaso el buen whisky de Spindier le hizo ser benvolo. El Aud, dando por perdida lapartida, lev el ancla y puso la proa al Suroeste. El caonero Bluebell lo registr a su vez y entoncesla captura fue inevitable; no encontraron nada, pero el Bluebell decidi llevarlo a Queenstown para

proceder a una investigacin detenida. Ya cerca del puerto, en la maana de Pascua, 23 de abril, losingleses vieron que el Aud paraba sus mquinas y sus tripulantes arriaban los botes y seembarcaban en ellos. El Aud hizo explosin y se fue a pique.

La mala suerte haba pesado sobre l; el U-22 haba entrado en la baha de Tralee cuando estaba elAud y tomndolo por un barco enemigo huy. Casement desembarc, fue capturado, y condenado amuerte y ejecutado con los procedimientos expeditivos ingleses. En cuanto a Spindier fue hechoprisionero y hubo de sufrir todo gnero de vejaciones en la prisin y el consejo de guerra al que fuesometido, pese a sus demostraciones de que era un oficial en servicio activo. Enviado a campos deconcentracin primero y a la crcel ms tarde, solo el armisticio lo libr de las consecuencias de tandesdichada expedicin. Y la rebelin fracas falta de medios.

El Seeadler, Velero Corsario

Si el Moewe y el Wolf significan la minuciosidad en la preparacin en una nueva evolucin de laguerra de corso, el Seeadler fue el romanticismo y la poesa de los tiempos de la marina a vela,resucitados por la pericia de un gran oficial de Marina enamorado de su profesin. Cuando se veantodas las desventajas de la servidumbre debida al combustible, no falt quien pensase en echar a lamar un barco de vela. Si se puso ingenio y cuidado en la preparacin de los dos arriba mencionados,estas precauciones llegaron al lmite deseado en el alistamiento del Seeadler.


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Era un velero construido en 1888, por cuenta de una casa inglesa y que llev el nombre de Pass ofBalmaha en sus primeras navegaciones; desplazaba 1,571 toneladas, y en junio de 1915, cuando ibade Nueva York a Arkngel con un cargamento de algodn, fue detenido por unos bloqueadoresingleses al norte del cabo Wrath y enviado a un puerto escocs para ser registrado en seguridad; porel camino, un submarino lo retuvo a su vez, puso a bordo una dotacin de presa y lo envi aCuxhaven, a donde llego felizmente. El Pass of Balmaha permaneci abandonado, porque los barcosalemanes no navegaban. Hasta que un da el velero se vio llevado al arsenal, se le instalaron dosmotores Diesel, cuatro caones de 100 milmetros, dos tubos lanzatorpedos, una magnficagestacin radiotelegrfica, bombas, explosivos y en Bremenhaven todo el piso de la cmara de popase cort de suerte que los que estuviesen sentados a la mesa se viesen tragados por el piso por la

presin de un botn. Se le dot de documentacin noruega, con el cuaderno de navegacin de unvelero autnticamente vikingo, y hasta los instrumentos de navegacin y las marcas de los sastresen los trajes eran de Oslo o de Trondhjem o de un almacn de Bergen; sobre las mesas seencontraban cartas llegadas del reino de Haakon VII y un sello del consulado ingls garantizaba suviaje a Melbourne.

Su comandante era un personaje de aventura; en general, todos los oficiales elegidos para estosmenesteres eran personas de mrito indudable. Porque para ello es indispensable elegir y concuidado, no llevar un turno ni permitir que cada uno pida por s mismo el destino que estimeconveniente, sea cual fuere el motivo. El teniente de navo conde Flix von Lckner, quiso servir enla Marina de guerra y por mil causas no alcanz el ingreso. Marino de vocacin, se enrol comogrumete y naveg en barcos de vela, alemanes y extranjeros, en un continuo aprendizaje errante

por el Mundo entero, gozando plenamente de las soledades entre el cielo y la mar que haba soadoen su adolescencia. Cuando tuvo el ttulo, opt al ingreso en la Marina Imperial, como oficial de lareserva, y fue movilizado al romperse las hostilidades. Era alto, fuerte, rubio, con ojos azules ydotado de un valor y energa extraordinarios. Nacido el 9 de julio del 1885, frecuentaba Inglaterraen el perodo anterior a la guerra en el yate Germania de Krupp, y por ser su abuela maternainglesa, su familia lo introdujo en la sociedad britnica y era socio del Royal Yacht Squadron, deCowes, en la isla de Wight, a cuyas regatas veraniegas jams faltaba. Haba tomado parte en lascorreras del almirante von Hipper contra la costa oriental inglesa y en el combate del 28 de agostode 1914, en Helgoland. En Jutlandia, era oficial de tiro a bordo del acorazado Kronprinz, uno de los


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ms modernos. Su dotacin la integraban 7 oficiales y 64 hombres de clases y marinera; susegundo, el teniente de navo Kling, era hombre avezado a las expediciones polares, y otro de losoficiales, Ludermann, navegar mucho tiempo en los veleros ingleses que hacen las carreras deltrigo y del t.

Cuando estaba a punto de partir en pos de la aventura, los espas alemanes en Noruega avisaron losnombres de los veleros, prximos a hacerse a la mar y, con arreglo a las semejanzas, se pint en elcasco el nombre de Irma; el 21 de diciembre de 1916 el Seeadler sala del Weser con un verdaderotemporal, en el que se confiaba para poder esquivar las lneas enemigas; como siempre se haca entales casos, coste von Lckner la costa noruega y dando un gran rodeo por las altas latitudes, en lamaana de Navidad se encontraba a 180 millas al suroeste de Islandia cuando fue detenido por unpatrullero ingls; visita detenida; pero esta vez las cosas estaban tan perfectamente disimuladas,que el Seeadler fue dejado en libertad y vio abrirse ante s la dorada perspectiva de la libertadinfinita.

El 9 de enero, en una travesa rapidsima en la que lleg a alcanzar catorce nudos de velocidadmerced al fuerte viento, hizo una primera captura cerca de las islas Azores, la del vapor inglsGladys Royle (3.268), que llevaba carbn de Cardiff a Buenos Aires. Al da siguiente hunda el vaporLundy Island y continuaba hacia la misma zona ya denominada el paraso de los corsarios, dondesus antecesores hicieron tan buenas presas. El 21 echaba a pique la fragata Charles Gounod y por sulibro de navegacin dedujo la derrota que haba seguido y fue a recorrerla con la esperanza de darcon varios barcos de vela; el 28 encontraba el Perce, goleta de 364 toneladas, y a continuacin elbrick francs Antonio (3.071) y el 9 de febrero la fragata italiana Buenos Aires (1.811) y el brickPinmore (2.431), en el cual reconoci uno de los barcos en que haba servido en sus tiempos deaprendizaje, en 1902; a este recuerdo de otros tiempos, siguieron la fragata inglesa British Yeomany la francesa La Rochefoucauld y el 5 de marzo la Dupleix. El 11 de marzo tuvo lugar la lucha de dos


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pocas; el vapor ingls Horngarth, detenido por el corsario velero, intento escapar y se dio el hechode que ste le alcanzase sin cesar de disparar sobre l, averiando el puente, la radiotelegrafa y susmquinas, hasta obligarle a entregarse. Diez das ms tarde capturaba el velero francs Cambronne,al que trasbord los numerosos prisioneros envindolo a puerto; ms para evitar una rpidatravesa, le rindi los palos dejndole el aparejo necesario para llegar a la costa.

Ya era suficiente el tiempo que haba permanecido en el Atlntico y decidi pasar al Pacfico; el 18 deabril doblaba el cabo de Hornos a cuatro millas de la costa y el 14 de junio destrua en aguas de laisla Christmas la goleta norteamericana A. B. Jhonson y el 8 de julio otra de la misma nacionalidad,la Manila. Con ellas se cierra la lista de sus presas. Naveg hacia el Norte y tras perder tres semanasen la zona ecuatorial de calmas fonde en Mopelia, en las islas de la Sociedad, para dar un descansoa su gente y proceder con tranquilidad a algunas reparaciones; en un atoln de coral, sin temor aque recalase la mar, se hallaba, cuando un movimiento ssmico hizo levantarse una enorme ola quearroj el Seeadler sobre los arrecifes y lo destroz; el casco qued intil y el aparejo se vino abajoestrepitosamente. Era el 31 de julio de 1917. Tres semanas despus Lckner, con cinco de lossuyos, abandonaba la isla en un bote de motor de diez metros de eslora y el 21 de septiembre caanprisioneros en una de las islas del grupo de las Fidji, al cabo de una azarosa travesa. Los quepermanecieron en Mopelia, sin noticia alguna, se embarcaron en una goleta francesa de las

destinadas a la pesca de la tortuga y llegaron a la isla de Pascua, donde estuvieron hasta que unbarco chileno los llev al continente, quedando internados hasta el fin de la guerra.

Lckner no fue ms afortunado en otras dos novelescas tentativas de evasin, y prisionero estuvohasta la liquidacin de la lucha. Vuelto a Alemania este hroe de novela, prodigio de valor y energa,mand el velero escuela Niobe de la Marina de guerra alemana, perdido poco despus en el Bltico.Como Dohna Schlodien, Lckner fue un corsario modelo; nada falt a estos dos brillantes oficialespara suscitar justamente la admiracin de sus contemporneos.


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Corsarios submarinos, El arma submarina en 1914

Cuando se rompieron las hostilidades entre Alemania e Inglaterra, nadie conoca todo el alcance quela accin guerrera de los submarinos podra tener en la realidad de la contienda; ni siquieraAlemania, como lo prueba el que solamente contaba con veintisiete submarinos, muchos de ellos conmotores de petrleo ligero que ya se haba demostrado que no eran de garanta suficiente en lalucha.

Entre las grandes potencias, era la que posea menor nmero de esta clase de buques y, dada laprevisin minuciosa del Imperio en todos los aspectos de la guerra, nadie puede dudar que de haberpensado en que el submarino se haba de revelar como un medio eficacsimo en la guerra alcomercio de la que se preocup Alemania, tomando disposiciones para el armamento y

manutencin de los buques mercantes que se juzgaron susceptibles de ser transformados encruceros auxiliares von Tirpitz hubiera dotado a su pas de una flota submarina tanminuciosamente preparada como al rompimiento de las hostilidades lo era la de superficie.

En las maniobras hechas en los aos inmediatamente anteriores a la lucha, las Potencias martimashaban llevado a cabo experiencias de empleo de la nueva arma en forma que pudiesen apreciarsesus posibilidades. En Inglaterra, el defensor de los submarinos era nada menos que el a la sazncapitn de navo sir Roger Keyes, que a la cabeza de este servicio demostr sus posibilidades en lasmaniobras de 1911, pese a la enemiga que siempre ha existido en la Gran Bretaa contra los pecesde acero. Es posible que su rivalidad con Fisher rivalidad que surgi en Inglaterra en todosaquellos que tuvieron personalidad destacada y el mismo afn de que el submarino no prosperaseanhelo nacional que los sbditos de Albin no ocultan ni siquiera ahora en cuanto se presenta laocasin , hizo que no se llevasen a fondo las experiencias en aos posteriores y que llegase laguerra sin haber puesto a punto de madurez lo que era una realidad tangible.

El 22 de septiembre, fecha en que Weddingen con su anticuado U-9 hundi en menos de una horatres cruceros acorazados de 12.000 toneladas, marca el punto de partida de una poca en la historiade las Marinas militares; cuando Otto Weddigen contase su hazaa y se viesen sobrepujadas todaslas previsiones de los tiempos de paz; cuando en el Reich Marine Amt se diesen cuenta de que sehaba perdido un tiempo precioso en el desarrollo de un arma que como todas las nuevas haba decifrar sus triunfos en la sorpresa antes de que se descubriese el antdoto contra ella, como sucedesiempre fatalmente por imperativo del estudio, es posible que el gran creador de la Marina alemana,


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adalid del torpedo, formado en las flotillas de destructores, sintiese un principio de desesperacin aldarse cuenta de la carta que se le escapaba de las manos en la peligrosa partida guerrera. Porquevon Tirpitz se pas su juventud en los torpederos y puede decirse que senta el horror hacia losbarcos grandes para tripularlos, se entiende que suele ser patrimonio de los que pasaron losprimeros aos los mejores! de su carrera en esos barquitos que tienen su modo y suencanto peculiar. Esos submarinos y esos destructores que son un poco familiares, en los que todosse conocen por sus nombres y hasta en los detalles ntimos; porque slo en los barcos chicos hayalgo de hogar para el tripulante...

Mucho se ha vituperado la actitud de Alemania en el empleo del submarino contra los buquesmercantes; no es justa la campaa que se hizo contra ellos, a falta de armas ms eficaces. Taninjusto como el bloqueo del hambre que contra ella se hizo es el torpedeamiento de barcos depasaje. O tan justo, si se quiere defender la lnea de conducta aliada; lo que no se puede es medirpor distinto rasero. Alemania vio en el submarino un rayo de esperanza en el acoso mundial a que seencontraba sometida y apel al submarino, como pudo apelar al rayo de la muerte si ste se hubieseinventado.

Los aliados disponan de la hegemona marinera tal y como se entenda hasta entonces, en el

concepto clsico de la guerra martima, de la guerra que hasta entonces era guerra plana. Elsubmarino era la guerra en el espacio, completando el avin esta transformacin que no es queorigine una guerra nueva, como creen, o fingen creer, unos cuantos futuristas, pero que desde luegointroduce otras modalidades como ha acaecido siempre desde que un arma o un adelantosensacional ha cambiado los puntos bsicos del planteamiento del problema. El submarino no es, nipuede ser, el seor de los mares; es un auxiliar indispensable, un barco que es el vehculoindispensable para el torpedo, arma poco segura que requiere unas condiciones de lanzamiento queya no puede reunir el moderno torpedero de superficie, grande, y visible, por consiguiente, a largadistancia; el empleo del torpedo ha - de tener como premisa inicial la sorpresa, y al disminuirproporcionalmente el andar

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