tesis liliana morales

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UNIVERSIDAD AUSTRAL DE CHILE FACULTAD DE CIENCIAS AGRARIAS FACULTAD DE FILOSOFIA Y HUMANIDADES ANALISIS DE LA “AGRICULTURA POR CONTRATO” EN LA ZONA SUR DE CHILE: FACTORES QUE DETERMINAN SU USO Y ASPECTOS LEGALES QUE LA SUSTENTAN. TESIS DE MAGISTER LILIANA MARGARITA MORALES CASTILLA VALDIVIA - CHILE 2012

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Page 1: TESIS LILIANA MORALES

UNIVERSIDAD AUSTRAL DE CHILE FACULTAD DE CIENCIAS AGRARIAS

FACULTAD DE FILOSOFIA Y HUMANIDADES

ANALISIS DE LA “AGRICULTURA POR CONTRATO” EN LA ZONA SUR DE CHILE: FACTORES QUE DETERMINAN SU USO Y ASPECTOS LEGALES QUE

LA SUSTENTAN.

TESIS DE MAGISTER

LILIANA MARGARITA MORALES CASTILLA

VALDIVIA - CHILE

2012

Page 2: TESIS LILIANA MORALES

ANALISIS DE LA “AGRICULTURA POR CONTRATO” EN LA ZONA SUR DE

CHILE: FACTORES QUE DETERMINAN SU USO Y ASPECTO LEGALES QUE LA SUSTENTAN.

Tesis presentada a la Facultad de Ciencias Agrarias y a la Facultad de Filosofía y Humanidades de la Universidad Austral de Chile en cumplimiento parcial de los requisitos

para optar al grado de Magister en Desarrollo Rural.

Por

LILIANA MARGARITA MORALES CASTILLA

Valdivia - Chile

2012

Page 3: TESIS LILIANA MORALES

UNIVERSIDAD AUSTRAL DE CHILE FACULTAD DE CIENCIAS AGRARIAS

FACULTAD DE FILOSOFIA Y HUMANIDADES

INFORME DE APROBACIÓN TESIS DE MAGISTER

La Comisión Evaluadora de Tesis comunica al Director de la Escuela de Graduados de la Facultad de Ciencias Agrarias que la tesis de Magister presentada por la candidata

LILIANA MARGARITA MORALES CASTILLA Ha sido aprobada en el examen de defensa de Tesis rendido el día 24 de abril de 2012, como requisito para optar al grado de Magister en Desarrollo Rural y, para que así conste para todos los efectos firman:

Page 4: TESIS LILIANA MORALES

A Dios.

A mi esposo.

A mi familia.

Page 5: TESIS LILIANA MORALES

AGRADECIMIENTOS

A Dios por su infinito amor y por ser mi dulce guía en este caminar por la vida.

A mi amado esposo Jorge David, por su comprensión, amor y apoyo incondicional.

A los mejores padres del mundo Gustavo y Omaira y a mis queridas hermanas Mónica

Patricia y María Claudia, por su amor y apoyo aún a la distancia.

A mi querido maestro Rodrigo Echeverría por su voto de confianza y apoyo incondicional

en esta etapa académica y a los profes María del Valle Barrera y Rodrigo Momberg, por su

traspaso de conocimientos. Así mismo, a los profesores del Instituto de Economía Agraria

especialmente a la profesora Beatriz Vera.

A mi tío Jesús Palmera, siempre agradecida, a mi tía Bertha Castilla y a mis primas Diana

Carolina Morales y Laura Castilla por su colaboración.

A mis amigos(as) en Colombia por sus voces de ánimo; y sin duda a mis amigos

Colombianos residentes en Valdivia (mi familia en Chile). A Romané Veliz, Joaquín

Burgos, Walter Maradiaga, Viviana Riquelme, Karen Carrasco y Juanito Aburto por su

colaboración y apoyo constante, así como a mis amigos(as) del Magister en Desarrollo

Rural, por sus valiosos aportes desde las diversas visiones disciplinares.

A la Universidad Austral de Chile, claustro educativo que me acogió y brindó

oportunidades y beneficios académicos.

Por último pero no menos importante a todos(as) los productores Chilenos que abrieron las

puertas de sus casas para realizar esta investigación, así como a las autoridades de las

Regiones de La Araucanía y de Los Ríos por su colaboración.

Page 6: TESIS LILIANA MORALES

i

INDICE DE CONTENIDOS

Página

I INTRODUCCION GENERAL 1 II

CHAPTER 1 FACTORS DETERMINING THE ADOPTION OF “CONTRACT FARMING” BY SOUTHERN CHILEAN FARMERS. 6

ABSTRACT 7 RESUMEN 8

1 INTRODUCTION 9

2 MATERIALS AND METHODS 12

2.1 Quantitative method 12

2.2 Qualitative method 15

3 RESULTS Y DISCUSSION 16

4 CONCLUSIONS 21

5 LITERATURE CITED 22 III

CAPITULO 2 CONDICIONES DE LA “AGRICULTURA POR CONTRATO” EN LA ZONA SUR DE CHILE: UNA PERSPECTIVA LEGAL. 29

RESUMEN 30 ABSTRACT 31

1 INTRODUCCIÓN 32

2 SITUACIÓN DE LA AGRICULTURA POR CONTRATO EN CHILE. 33

3 REVISIÓN DEL MARCO LEGAL EN CHILE. 34

4 MATERIAL Y MÉTODO 36

4.1 Análisis Jurídico de Contratos 36

4.1.1 Contrato A 37

4.1.2 Contrato B 37

Page 7: TESIS LILIANA MORALES

ii

4.1.3 Contrato C 38

5 RESULTADOS 39

6 CONCLUSIONES 42

7 REFERENCIAS BIBLIOGRÁFICAS 44

IV CONCLUSIONES GENERALES 45

Page 8: TESIS LILIANA MORALES

iii

INDICE DE TABLAS

Tablas Página 1. Descriptive statistics of variables used in the quantitative method 25 2. Factors determining CF analyzed trough a Multinomial Logit Model 26

Page 9: TESIS LILIANA MORALES

iv

INDICE DE FIGURAS

Figuras Página 1. Odd Ratios plot derived from the multinomial Logit 27 2. Predicted Probabilities for (a) Producer of exportables, and (b) Producer of

Traditional Products 28

Page 10: TESIS LILIANA MORALES

v

INDICE DE ABREVIATURAS

AC

Agricultura por Contrato

CF

Contract Farming

C.C.

Código Civil

INDAP

Instituto de Desarrollo Agropecuario

INE

Instituto Nacional de Estadística

FAO

Organización de las Naciones Unidas para la Alimentación y la Agricultura

ODEPA

Oficina de Estudios y Políticas Agrarias

Page 11: TESIS LILIANA MORALES

1

I. INTRODUCCION GENERAL

Como consecuencia de la liberalización de los mercados, la globalización y otros factores,

Organizaciones no Gubernamentales y Gubernamentales nuevamente han traído a la escena

pública el tema de la Agricultura por Contrato (AC) que consiste en un acuerdo entre

productores y la agroindustria, para la producción y abastecimiento de productos agrícolas

para entrega futura y a precios predeterminados (FAO, 2001). Esta modalidad ha existido

en algunos países desde tiempo atrás, sin embargo hoy surge como un mecanismo de

organización para la producción agrícola de pequeños y grandes productores, siendo aun

más favorable para los pequeños productores que encuentran en ella una forma de

comercializar sus productos hacia otros mercados.

En Chile según datos del VII censo agropecuario de 2007, solamente el 4% de los

productores ha adoptado el sistema de Agricultura por Contrato. La tasa de adopción de la

AC en la zona central alcanza un 12%, en tanto en la zona sur es sólo de 1%. Sin duda

varios factores estarían determinando la adopción de AC, sin embargo para entender

quienes materializan esta decisión, es preciso conocer los actores sociales que se hacen

parte de esta modalidad, esto es, las partes contractuales (el productor y la agroindustria) y

el Estado que en principio debería jugar un papel importante dentro de la adopción de este

sistema.

En ese sentido, el actual Gobierno de Chile apunta dentro de sus metas a través del

Ministerio de Agricultura, hacia la competitividad, apoyando la Agricultura por Contrato y

las alianzas productivas entre productores y la agroindustria, fomentando el fortalecimiento

legal de los contratos de compraventa entre productores y empresas, para que éstos puedan

constituir una real garantía de crédito1.

                                                            1 Metas Gubernamentales /www.gob.cl/cuenta-publica-2010/ministerio-de-agricultura/politicas-ministeriales/

Page 12: TESIS LILIANA MORALES

2

Por su parte la agroindustria Chilena durante los últimos diez años se ha caracterizado por

una rápida expansión, esto debido a diferentes factores que le han conferido un nivel

interesante de competitividad externa (Silva, 1999), este contexto de apertura al exterior,

aunado a la estabilidad macroeconómica y la presencia de una base empresarial importante,

con capacidad de innovar, de asumir riesgos y de conectarse con la red comercial y

financiera, consolidó un segmento productivo exportador que realiza un aporte concreto a

la economía del país.

En cuanto a los productores chilenos, Echeverría et. al (2011) indica que la apertura

comercial de Chile implementada durante las últimas décadas, ha causado una importante

transformación de los agricultores y sus sistemas de producción, identificándose claramente

tres categorías de agricultores de acuerdo a su orientación de producción y mercado, esto

es, productores domésticos, de transición (producen para el mercado interno y externo) y de

exportación. Estos tres tipos de agricultores difieren en varios aspectos, los productores

orientados al mercado externo, tienen características asociadas a productores más modernos

que aquellos que producen para el mercado interno, puesto que presentan un mayor nivel

educacional y tienen acceso a distintas fuentes de financiamiento y tienen mejores

capacidades de gestión, entre otras.

Ahora bien, respecto al desarrollo productivo de las regiones en estudio, según datos de

ODEPA/ADUANA (ODEPA 2010), durante el año 2010 la región de la Araucanía exportó

US$ 450 millones y la Región de los Ríos US $ 18 millones, cifras que corresponden

mayormente a la producción de celulosa, pero también se destaca una producción

emergente de productos exportables como berries, arándanos y frambuesas en todas sus

variedades, en ambas regiones. No obstante lo anterior, estas regiones también producen

tradicionales como la carne, leche y lácteos, existiendo una gran producción dirigida

principalmente al mercado interno tan es así, que la Región de los Ríos ocupa el segundo

lugar en abastecimiento de estos productos al país (ODEPA 2009).

Page 13: TESIS LILIANA MORALES

3

Al respecto, el mercado al que se oriente el producto que se cultiva influye en las

vinculaciones que puedan generarse con la agroindustria a través de contratos (escritos o

verbales), pues según datos del Censo Agropecuario 2007, el 70% de las vinculaciones con

la agroindustria se estarían generando a partir de la producción de exportables. Ahora bien,

la forma como se vinculan contractualmente la agroindustria y el productor no tiene un

marco especifico (Vargas, 1997), simplemente las partes acuden a la generalidad de los

contratos establecido en el Código Civil Chileno.

A excepción de Gómez (2006), no existen estudios que aborden el tema de AC en Chile ni

que analicen los factores que determinan el uso y mucho menos abordando el marco legal

con que se cuenta en el país para realizar las vinculaciones contractuales. En este contexto,

el trabajo tuvo como objetivos: 1) Analizar los factores determinantes del uso de la

Agricultura por Contrato en el sur de Chile y 2) Analizar las condiciones de la AC en la

zona sur de Chile desde una perspectiva legal. Este trabajo es de carácter descriptivo, y la

investigación se llevó a cabo durante el primer semestre del año 2011, la cual estuvo

dirigida principalmente a productores (exportadores y tradicionales) de la zona.

La presentación de esta tesis se estructuró en dos capítulos. En el primer capítulo

denominado Factors determining the use of “Contract Farming” by southern Chilean

Farmer corresponde al desarrollo del primer objetivo, que busca analizar los factores que

son determinantes para que los productores y la agroindustria se vinculen a través de

contratos para la compraventa de productos agrícolas. Aquí se muestra un enfoque

metodológico que integra estrategias cuantitativas y cualitativas de recolección de

información para abordar la temática de la Agricultura por Contrato en las Regiones de La

Araucanía y de Los Ríos, en el sur de Chile. La estrategia de complementación, busca

contar con dos imágenes distintas de la realidad que se estudia, en este caso se aplicó un

cuestionario como parte del método de investigación cuantitativo y se realizaron grupos

focales y entrevistas en profundidad (Bericat, 1998).

Page 14: TESIS LILIANA MORALES

4

En los cuestionarios se indagaron por variables productivas, socioeconómicas y

relacionadas con la Agricultura por Contrato, además del análisis mediante un modelo

econométrico denominado multinomial logic. En los grupos focales se profundizó sobre

variables relevantes para la vinculación entre productores y agroindustria a través de

contratos y en las entrevistas en profundidad se involucró un actor relevante dentro del

proceso de adopción de la AC, como lo son las Instituciones Públicas tales como INDAP,

PRODESAL, PROCHILE y SEREMI de Agricultura, donde se indagó sobre la importancia

de la AC para el desarrollo productivo de la región. Adicionalmente esta metodología

permitió un escenario adecuado para el análisis de los factores relevantes para la adopción

de la Agricultura por Contrato en las Regiones en estudio.

El segundo capítulo denominado Condiciones de la “Agricultura por Contrato” en la zona

sur de Chile: Una perspectiva legal, corresponde al desarrollo del segundo objetivo

planteado, el cual presenta la situación actual de la AC en la zona sur de Chile y una

revisión del marco legal con que se cuenta en el país para las vinculaciones entre

productores y la agroindustria, a través de contratos (verbales o escritos). En este capítulo

además se realiza un análisis jurídico de contratos en uso en las regiones de La Araucanía y

Los Ríos, lo que permite observar cuales son los tipos de contrato que mayormente utilizan

las empresas y los productores de la zona, si estos contratos presentan cláusulas arbitrarias,

etc.

Estos dos capítulos ofrecen al lector una contextualización completa de la Agricultura por

Contrato en la zona Sur de Chile.

REFERENCIAS BIBLIOGRÁFICAS

Bericat, E. 1998. La integración de los métodos cuantitativo y cualitativo en la

investigación social. Barcelona España: Ariel S.A.

Page 15: TESIS LILIANA MORALES

5

Código Civil Chileno. 2009. Edición oficial. Editorial Jurídica de Chile.

Cullinan, C. 1999. El derecho y los mercados - El mejoramiento del ambiente legal para la

comercialización agrícola, Boletín de Servicios Agrícolas de la FAO No. 139, Roma.

Eaton, C. y Shepherd. A. 2001. Agricultura por Contrato: Alianzas para el crecimiento.

Servicios Agrícolas FAO, Boletín 145, Roma.

Echeverría, R., Moreira, V., Barrena, J. y Gopinath, M. 2011. A Characterization of

Chilean Farmers based on their Market-Production Orientation. –en proceso de

publicación.

Hernández, R., Fernández, C. y Baptista, P. 2010. Metodología de la Investigación. México

D.F. Mc Graw Hill.

Instituto Nacional de Estadísticas -INE-. 2007. VII Censo Nacional Agropecuario de Chile.

Santiago, Chile.

Oficina de Estudios y Políticas Agrarias –ODEPA-. 2011 Ministerio de Agricultura de

Chile/ Estadísticas.

Silva Torrealba, F. 1999. La inversión en el sector agroindustrial Chileno. Serie reformas

económicas. CEPAL.

Políticas Ministeriales Gobierno de Chile Misión Institucional y objetivos estratégicos:

Disponible en: www.gob.cl/cuenta-publica-2010/ministerio-de-agricultura/politicas-

ministeriales (Acceso marzo de 2011).

Page 16: TESIS LILIANA MORALES

6

II. CHAPTER 1

FACTORS DETERMINING THE USE OF “CONTRACT FARMING” BY

SOUTHERN CHILEAN FARMERS

Liliana Morales1, Rodrigo Echeverría2*, María del Valle Barrera3.

1Tesista Magister en Desarrollo Rural. Escuela de Graduados Facultad de Ciencias

Agrarias y Facultad de Filosofía y Humanidades, Universidad Austral de Chile,

Valdivia, Chile. 2 Instituto de Economía Agraria, Universidad Austral de Chile, Valdivia, Chile.

3 Instituto de ciencias Sociales, Universidad Austral de Chile, Valdivia, Chile

Page 17: TESIS LILIANA MORALES

7

ABSTRACT

L. Morales, R. Echeverría and M. Barrera. 2012. Factors that determine the use of

“Contract Farming” by southern Chilean farmers. Differently from what happened in

the central zone of Chile, the use of Contract Farming (CF) is low in the southern regions,

and few studies have attempted to explain this situation. In this context, the objective of this

study was to analyze the factors that determine the use of CF in southern Chile. The

methodology consisted of two approaches: a quantitative one, wherein a multinomial logit

model was applied to data obtained from questionnaires applied to 384 southern producers,

and a qualitative one, that included in-depth individual interviews applied to professionals

and public institution officers and focus groups to producers. The main results show that

those producers with high educational level, with large farms, with a production oriented

towards the external market, located in areas with a high concentration of neighbors having

CF, that belong to organizations and that need technical assistance from agribusiness firms,

will have high probabilities of using a CF system. However, despite the individual effect of

each factor, the combined effect of them is related to the highest use of CF. Public policies

that intent to increase the use of CF in southern Chile not only should focus on the factors

identified in this study, but they should also consider a review of the legal framework in

which the contracts are stipulated.

Key words: Contract Farming, Multinomial Logit, Focus Groups, In-Depth Interviews.

Page 18: TESIS LILIANA MORALES

8

RESUMEN

L. Morales, R. Echeverría y M. Barrera. 2012. Factores que determinan el uso de la

“Agricultura por Contrato” en agricultores del sur de Chile. A diferencia de la zona

central, en la zona sur de Chile la Agricultura por Contrato (AC) es muy poco utilizada, y

existen pocos estudios que permitan explicar esta situación. En este contexto, el objetivo de

este estudio fue analizar los factores que determinan el uso de la AC en el sur de Chile. La

metodología consideró dos enfoques de investigación complementarios: uno cuantitativo,

en donde se aplicó un análisis logístico multinomial utilizando datos provenientes de

cuestionarios aplicados a 384 productores de la zona sur, y uno cualitativo, donde se

realizaron entrevistas en profundidad a profesionales y funcionarios de instituciones

públicas y grupos focales a productores. Los principales resultados muestran que aquellos

productores que tienen un mayor nivel educacional, con predios de mayor tamaño, con una

producción orientada al mercado externo, que se ubican en zonas con una alta

concentración de vecinos que usan contractos, que pertenezcan a asociaciones y que

necesiten asistencia técnica por parte de las empresas compradoras, tienen mayores

probabilidades de usar el sistema de AC. Sin embargo, a pesar del efecto individual de cada

uno de estos factores, es el efecto combinado de ellos el que está más asociado al uso de la

AC. Del estudio también se desprende que aquellas políticas públicas que pretendan

mejorar el uso de la AC en el sur de Chile no solo deberían considerar los factores

identificados como relevantes en este estudio, sino que también deberían considerar una

revisión del marco legal de los contratos.

Palabras Claves: Agricultura por Contrato, Multinomial logístico, Gupos Focales,

Entrevistas en Profundidad.

Page 19: TESIS LILIANA MORALES

9

1. INTRODUCTION

Contract farming, a business model where farmers and buyers establish pre-agreed supply

agreements, is date back to the 19th century, mainly as a consequence of the development of

the United States sugar beet industry (Vermeulen and Cotula, 2010). Today, to a greater or

lesser extent, Contract Farming, CF, is used in almost any country of the world. For

example, CF is intensively used by livestock producers of the USA; by most maize and

soybeans producers in India; many producers of pickles in Sri Lanka; numerous farmers

that produce exportable vegetables in Thailand; and a high number of rice producers in

China (Singh and Asokan, 2005; Guo et al., 2007; Eaton and Shepherd, 2001; Da Silva,

2005; Vermeulen and Cotula, 2010). Importantly, CF has been a key factor for promoting

the production of high value products, such as the exportables. For example, the successful

experience of Zimbabwe, which exports flowers, asparagus, sweet corn and chilies to

several countries, is mainly due to the use of contracts (Masakure and Henson, 2005;

Coulter et al., 1999; Heri, 2000).

The aim of CF is to generate oral or written agreements that provide benefits for the two

parties involved, i.e., for farmers and agribusiness firms (Prowse, 2012; Milocevic et al.,

1999). For example, firms can provide technical assistance to farmers in order that the

products meet the quality requirements required by the target markets. In this way, farmers

benefit from the access to the technological package and the firm is certain that its products

will be accepted by buyers. Also, prices can be settled in advance, so both parties can

forecast their expected benefits, reducing the risk of the business (Eaton and

Shepherd, 2001). In other cases, farmers can have access to credits provided by the firms,

so they can enter or stay in business, while the firm ensures that will receive the required

production. Moreover, according to Kirsten and Sartorius (2002), CF benefits small

farmers, especially those of developing countries because through contracts they can access

international markets in an easiest way. Besides, the use of CF can minimize transaction

costs (e.g., less costs of settling with farmers), reduces input unit costs through economies

Page 20: TESIS LILIANA MORALES

10

of scale, and gives access to land that otherwise firms should buy (FAO, 2001). On the

other hand, a disadvantage of CF is that agribusiness firms generally have a dominant

position, which can lead to abusive clauses or asymmetrical distribution of earnings (Singh,

2002; Watts, 1994).

Despite the advantages that CF offers, its adoption has been uneven in some countries. For

example, although CF in Chile has been intensively used by the export-oriented agricultural

sector, non-exporting farmers have relied on traditional ways of marketing their products.

In fact, according to the agricultural census of 2007 (INE, 2007), 48% of farmers that

produce for the external market use CF, while only 3% of non-exportable producers use

this system. Moreover, a spatial analysis on the use of CF shows a more unbalanced

situation. Among the farmers that use CF and are located in the central zone (Valparaíso to

Bio-Bio regions), 51% were export-oriented producers and 12% were non-exporters.

However, the same analysis done for farmers located in the southern regions (La Araucanía

region and further south) shows that 28% of export-oriented farmers use CF, while only a

0.8% of non-exporters use this contract system. Therefore, the use of CF in the southern

regions lags behind that of the central regions for both types of producers.

The literature reports several factors that determine the adoption and use of contract

farming.2 These factors are related to the farmer (e.g., gender, educational level, risk

aversion), the farm (e.g., farm size, land tenure system, farm production) and some out-of-

farm elements (e.g., the effect of neighboring producers). Producers’ gender is a relevant

variable because, in general, contracts are signed by the heads of the families that in many

cases are men (Eaton and Shepherd, 2001). The educational level of farmers in considered

important because provides farmers a better position to negotiate with agribusiness firms

                                                            2 We recognize that the terms “adoption” and “use” represent different things. “Adoption” implies that farmers have decided to use the contracts in a permanent basis, while “use” could represent the presence of contracts at a given moment. However, most farmers involved in this research declared that they use contracts since a long time, so we use both terms indistinctively.

Page 21: TESIS LILIANA MORALES

11

(Chiriboga et al., 2007). Indeed, more educated farmers have better negotiation skills,

which bring to more balanced agreements in terms of rights, obligations and benefits for the

parties (Miyata et al., 2009). The farmer’s risk is also a key variable for the use of CF

because farmers minimize the risk through contracts. For example, farmers that produce for

the external market are less risk averse than domestic-market oriented farmers, and

therefore, the use of CF could help to reduce the risks involved in the more complex

process of selling the products abroad (Goodhue, 1999; Key and McBride, 2003; Key and

Runsten, 1999).

Among the farm-related factors, the land tenure system is another critical factor. In general,

when farmers own their lands (instead of renting them) can offer the land as real

guarantees, so banks or agribusiness firms will be more willing to lend the money, favoring

the existence of contracts (Chiriboga et al., 2007). In terms of farm size, Gómez et al.

(2007) found that the farm area is positively related to the use of CF because high volume

production is desired by agribusiness firms. Indeed, large scale operations allow a reduction

of transaction costs in transfer of technology, contract negotiation and collection of

products, among others. Regarding the type of products a farm produces, it is necessary to

differentiate two situations. In some cases the contracts define the products and the

production systems. In other cases farmers determine what to produce and then the

agribusiness firms buy the production through contracts (the Chilean case). In both cases,

the use of CF provides the framework for producing high-value crops, such as those

products oriented to the external market (Masakure et al., 2005; Coulter et al., 1999; Heri,

2000). Lastly, the effect of neighboring producers that use contracts is an out-of-farm

element that also affects the adoption of CF. In fact, as any adoption process, some leader

farmers using contracts can influence the decision of other farmers to adopt contracts

(Feder and Savastano, 2006). Thus, a concentration of farmers using contracts in a

particular location creates an environment that generates strong relationships which can

help to disseminate the use of contracts (Durston, 2002).

Page 22: TESIS LILIANA MORALES

12

In this context, the objective of this study was to analyze the factors determining the use of

contract farming in southern Chilean farmers. This information could be very useful for

designing policies that promote the use of CF in the South of Chile. Indeed, it could be used

for national agencies such as the National Institute for the Agricultural Development

(INDAP), which has a specific program that promotes alliances between producers and

agribusiness firms. To our understanding, this is the first work in Chile that analyses the

determinants of the CF with farmers’ level data.

The paper is organized as follows. In the next section, the quantitative and qualitative

methods are presented, and the dataset is described. Then the results and the discussion are

presented. In the last section, the conclusions and some policy implications are shown.

2. MATERIALS AND METHODS

2.1. Quantitative method

The use of contract farming can be modeled through a discrete choice model (Long, 1997),

where farmers can reach an agreement (either written or oral) with agribusiness firms in

order to establish conditions for the production and marketing of the products. Let assume

that there are two contractual choices, Z and W, where the utility associated with Z is

Zu and the utility associated with W is Wu . Farmers choose the contractual alternative Z

when Z Wu u , and W when W Zu u . Assume that Z Wu u does not happen and that

farmers maximize their utility. A farmer i that chooses the alternative Z receives an utility

iZ which is also associated to a random error iZ . That is, iZ iZ iZu . If the farmer

chooses the alternative Z, then Z Wu u must hold, and therefore:

(1) i iZ iW iZ iZ iW iWPr( y Z ) Pr( u u ) Pr( )

Page 23: TESIS LILIANA MORALES

13

If there are J alternatives, i.e., the three contractual options (no contractual relation, oral

contracts, or written contracts), the probability that a farmer i chooses the alternative m is:

(2) i im ijPr( y m ) Pr( u u for all j m )

Let the average utility im be a linear combination i mx of the farmer attributes, farm

characteristics, and out-of-farm elements.

Assuming a logit distribution of the error term, , a multinomial logit (MNL) model can be

stated as:

(3)

2

exp( )( ) , 11 exp( )

i mi i J

i jj

xP y m x for m

x

where a category (J=1) is dropped to identify the model.

The estimation of equation (3) provides information on the direction and significant level of

the variables. As a consequence, marginal and discrete changes are calculated for

evaluating the magnitude of the effects. In this way, binary variables are analyzed using

discrete changes (0 to 1), and continuous variables are examined as marginal effects,

changes in their range (minimum to maximum values) and changes of one unit (Long and

Freese, 2006). Besides, given that the marginal and discrete changes depend on the value at

which each variable is evaluated, odds ratios (factor change coefficients) are also examined.

Additionally, predicted probabilities are used to analyze the combined effect of relevant

variables.

The data used in this quantitative method were obtained from face to face questionnaires

applied to a random sample of farmers from La Araucania and Los Rios regions. The

sample was geographically stratified to represent most counties of both regions (Hernandez

et al., 2010). Based on the differences in the use of contracts that exhibits the export-

oriented producers (exporters) and those that produce mainly for the internal market

Page 24: TESIS LILIANA MORALES

14

(commonly called traditional producers), the sample included both type of farmers.

Because of the producers of exportables are few, for each producer of exportables that was

selected, a producer of non-exportables was selected in the surrounding area. Thus, using a

snowball sampling technique a total of 384 producers were selected and interviewed.

Being consistent with the literature, the questionnaire included variables related to the

farmer, the farm and out-of-farm aspects.3 Within the farmers’ variables were “age”,

“gender”, “educational level” (years of formal education) and “farmer’s risk perception”.

The latter was captured using a Likert scale, where the producers indicated their own risk

perception (high risk-averse, low risk-averse, risk-neutral, risky, risk-lover).

Econometrically, in the MNL model each category of this variable had to be included as a

dummy variable, but because of collinearity issues, it was necessary to group them. In this

way, the high and low risk-aversion options were grouped as low-risk perception (“low

risk”) and the risky and risk-lover categories were grouped as high-risk perception (“high-

risk”). As a result only three dummy variables related to risk were included in the analysis.

The land tenure system variable included the next categories: “owner”, “renter”,

“sharecropping system”, “tenure succession”, and “indigenous community”. However,

following the same procedures applied to the risk variables, the only categories that were

included in the analysis were the dummies “owner”, “renter” and “other land tenure” (that

grouped the other categories). Other farm-related variables include the “farm area”

(hectares) and the farm “production type” (internal/external market orientation). In the out-

of-farm group, we considered the effect of neighboring producers using contracts. This

variable was calculated as the geographic concentration of farmers having contracts in a

specific county for both written and oral contracts (“contracts’ concentration”) and only for

written contracts (“written contracts’ concentration”). Table 1 shows the descriptive

statistics of these variables.

                                                            3 Although originally this research also considered to survey agribusiness firms, most of them refused to participate in the study.

Page 25: TESIS LILIANA MORALES

15

2.2. Qualitative method

The categorical specification of the MNL model allowed the analysis on the determinants

involved in the use of CF. However, this discrete choice model is based on the concept that

there are unobservable variables encouraging the producers to adopt or not the CF system.

Therefore, we use an additional methodological approach that allows to understand the

factors underlying the decision of the producers to use contracts (Sechrest and Sidani,

1995). Once the survey data were analyzed, qualitative research instruments were used to

complement the results obtained from the MNL model.

Two instruments were used to collect qualitative data: “focus groups” and “in-depth

individual interviews”. The “focus group” method consists of group interviews where

participants are allowed to interact and talk about a specific topic (McLafferty, 2004). In

this context, four focus groups were conducted (two in each region). The participating

producers (traditional and exporters) were selected based on their experience on the use of

contracts in their respective areas. The discussion topic focused on the factors producers

considered important or relevant to generate contractual linkages among producers and

agribusiness firms. In-depth individual interviews consist of personal interviews to a small

number of people to explore their perspectives on a particular idea or situation (Boyce and

Neale, 2006). In this study, in-depth individual interviews were carried out with twelve

professionals and public institution officers located in La Araucania and Los Ríos regions

to capture their perception about CF, particularly its importance for the economic

development of the agricultural sector, their opinion about the use of CF and the concrete

actions these institutions are taking towards supporting this theme.

The qualitative data generated by the two instruments, i.e., focus groups and in-depth

interviews, presented above were analyzed by a relational matrix and a content analysis,

respectively. In the first case (the relational matrix), the main ideas that were coincident

among the participants were considered as the most relevant ones (Bordieu and Wacquant,

Page 26: TESIS LILIANA MORALES

16

2005). In the content analysis, certain words or sentences expressed by the interviewees

were grouped and then compared by those expressed by other individuals (Andreu Abela,

1998).

3. RESULTS AND DISCUSSION

The whole econometric analysis of the factors underlying the decision to use contracts

showed an important effect of the geographic concentration of producers having contracts

in a specific location. Thus, two models were examined. In a first model this effect was

restricted to both oral and written contracts (the variable “contracts’ concentration”), and in

a second model this effect was limited to only written contracts (the variable “written

contracts’ concentration”). The analysis showed that both models were not different, and

therefore we present only the results obtained in the second model. Besides, a test of the

Independent of Irrelevant Alternatives (IIA) assumption applied to both models showed

that the three categories of contracts are independent, what validates the use of the MNL

approach.

Table 2 shows the estimation of the multinomial logit model. The first and second columns

show the estimates of the MNL using the alternative “No Contracts” as the base category,

and the third column compares the alternative of using written contracts against using oral

contracts. The first important result is that the role of the selected variables is different for

the three alternatives. The only farmer-specific characteristic that showed up statistically

significant was Gender. Indeed, men have higher probabilities of adopting oral contracts

than women (instead of no having contracts). Among the farm-related attributes, “renter”,

“farm area”, and “production type” have a positive and significant effect on the use of oral

contracts. Contrary to what literature reports (Chiriboga et al., 2007), farmers that rent the

land (and not those that own it) have higher probabilities of using oral contracts. Although

there is no enough evidence to explain this with certainty, it is possible that producers of

high value products (mainly exportables linked to CF) are mostly entrepreneurs that would

Page 27: TESIS LILIANA MORALES

17

be willing to begin the production renting the land. Regarding the farm size, the probability

of a producer using oral contracts increases with each additional hectare of the farm he/she

operates. A larger farm is a desired condition for agribusiness firms because having many

small suppliers means higher trading costs (Gómez et al., 2007). Also, the effect of the

exportable production is associated to the commercial relationship with exporting

agribusiness firms, wherein a formal (at least oral) agreement has to be established to sell

the products in the external market. Finally, the geographic concentration of written

contracts in a particular county shows a positive and significant effect on the use of oral

contracts. This indicates that producers that are located in an area where most of their

neighbors have written contracts with agribusiness firm (regardless of the type of product

they grow) have a greater probability of also having contracts.

The analysis of the alternative “written contracts” against having “no contracts” (second

column) shows that, among the farmer-specific characteristics, the only variable relevant on

this choice is the educational level of the producer. This is a very important result because

shows that the use of written contracts probably requires a deeper understanding and

knowledge of the legal and commercial obligations and rights that the producer would be

willing to accept if he/she signs an agreement with the agribusiness firm. Thus, producers

with a lower educational level would have low probabilities of using written contracts when

they are compared to those producers that do not use contracts. Among the farm-related

elements, similarly to the case of the oral contracts, the exportable production and the farm

area are factors that affect positively the decision to use written contracts instead of no

using contracts.

The comparison between the alternative of using written contracts (against using only oral

contracts) shows that the production of exportables and the farm area are the only variables

that are relevant for choosing this alternative. This indicates that the decisions to use

written or oral contracts are related, and only productive aspects determine the type of

contract that is chosen.

Page 28: TESIS LILIANA MORALES

18

As mentioned previously, the results obtained from the MNL model only provide

information on the significance level and direction of the coefficients, but not about their

magnitude. For this reason, marginal and discrete changes were calculated. This analysis

showed that within the binary variables, the greater effect is caused by the exportable

production (instead of the internal-market production). In fact, the production of

exportables increases the probability of using oral and written contracts by 0.6 and 0.21,

respectively (while the other variables remain constant). Within the continuous variables,

the geographic concentration of producers with written contracts in a specific county shows

the highest effect. Thus, a farmer that is located in a county with the highest concentration

of written contracts increases his/her probabilities of having oral and written contracts by

0.39 and 0.13, respectively. Because of space constraints we do not present the entire set of

marginal and discrete changes. Instead of this, and for simplicity, we present a graphical

analysis of odds ratios (factor change coefficients) that has the advantage of providing

information about the magnitude of the effects without considering the value at which each

independent variable is analyzed, and also provides information about the dynamics

produced between the categories (Long and Freese, 2006). Figure 1 presents odds ratios for

the variables that were statistically significant in the MNL model. The letters represent the

three alternatives (no contracts, N; oral contracts, O; and written contracts, W). For each

variable, the effects on the alternatives that were not significantly different are enclosed in a

box. It can be noted that the only variables that have an effect statistically different from no

having contracts (N) are the farmer’s educational level, the farm area, the production of

exportables, and the concentration of written contracts (although in this case there is no

difference between using oral or written contracts). However, the last two variables show

the highest effect in terms of magnitude.

Despite the previous analysis, it is difficult to compare the effect of variables that are of the

binary type with those that are continuous. Thus, Figure 2 shows predicted probabilities

that allow a comparison of the relevant variables under different levels of their range.

Given the importance of the type of products that a farm produce, case (a) of Figure 2

Page 29: TESIS LILIANA MORALES

19

shows the case of a farmer that produce only exportables, and case (b) the case of a farmer

that produce only for the internal market (traditional products). In both cases there is a

combination of 3 variables: farmer’s educational level, geographic concentration of farmers

with written contracts and the farm area. As a result, in both cases, a and b, there can be

several combinations. For convenience and simplicity, we use education as the x- axis, and

chose arbitrarily the levels at which the variables are evaluated. In this way, Producer 1 of

case (a) represents a farm that produces exportables, has a size of 100 ha, and is located in a

county where there is a high (maximum) concentration of farmers with written contracts.

We call this combination as (1, 100, max). On the other hand, Producer 1 of case (b)

produces traditional products, has a farm size of 5 ha, and is located in a county where there

is no written contracts, i.e., a combination (0, 5, min). Following this nomenclature, we

have in case (a): Producer 1 (1, 100, max), Producer 2 (1, 5, min); Producer 3 (1, 5, max);

and Producer 4 (1, 100, min). In case (b) we have: Producer 1 (0, 100, max), Producer 2 (0,

5, min); Producer 3 (0, 5, max); and Producer 4 (0, 100, min).

The comparison of all situations shows an important result: despite the effect of each

variable on the use of contracts, it is the combination of them what causes the highest

probability of using written contracts. In this way, a farmer/farm that has the characteristics

of producer 1 of case (a) has a probability of around 70% of using written contracts when

he/she has the highest level of formal education. On the other hand, a farmer with the

characteristics of producer 2 of case (b), with no formal education, has the lowest

probability of using written contracts.

Complementing these results, the qualitative analysis provided a deeper understanding of

the processes underlying the factors that influence the farmers’ contract choice. The focus

groups indicated that the most important factor in the generation of contractual linkages

with agribusiness firms is the “associativity”, understood by farmers as the joint efforts

made by individuals for helping each other to solve their needs and problems. Indeed, the

associativity gives farmers a higher bargaining power with the companies because they can

Page 30: TESIS LILIANA MORALES

20

offer their production as it were a one large-scale production unit (Kirsten and Sartorius,

2002). In this way, it is likely that the dynamic interaction among members of an

association spreads the use of contracts from some members to others, which would be

consistent also with the findings from the quantitative approach, that is, the effect of the

geographic concentration of farmers with contracts. The other two factors that the

individuals reported as relevant for having contracts were the “technical assistance”

provided by firms and the “farmers’ educational level”. They expressed that because of the

importance that firms give to product quality, the contracts give farmers access to technical

support that otherwise they would have to pay. Although this technical assistance is

particularly strong in the production of exportables, these results show that the technical

support related to the production of internal-market products could also be an important

determinant in the use of contracts. Regarding education, they expressed that this is very

important for settling contracts because a better educational level provides a better

understanding of the agreement terms and their consequences, which is consistent with the

results obtained in the quantitative analysis.

The results from the in-depth interviews showed that CF was perceived as an important

subject for the productive development of the two regions of study, mainly because through

contracts small producers can obtain better guarantees of their production (prices and a

market where they can trade their products). Furthermore, they considered the use of CF as

something desirable, but hardly widespread in the agricultural sector. The interviewees also

indicated that there are no national specific actions towards the support of the CF system.

There are only small initiatives, such as the Productive Partnerships (Alianzas Productivas)

of INDAP, that wish to contribute to the development of a more mature CF system.

However, they pointed out that in this program the government only seeks to establish links

among producers and companies. It does not review the agreements or gets involved with

the delivery, payment and price terms of the contracts. These few actions taken by public

institutions regarding CF are consistent with the low adoption of CF in southern Chile.

Page 31: TESIS LILIANA MORALES

21

4. CONCLUSIONS

This study has shown that there is a strong association between the use of contracts and the

individual effect of the farmer’s educational level, the market-production orientation of

farms and the concentration of neighboring producers using contracts. However, when

these elements and others (the farm size, the presence of organizations, and the need of

technical assistance) act together, i.e., a producer with high educational level, with a large

farm, with a production oriented towards the external market, located in areas with a high

concentration of neighbors using CF, that belongs to organizations and that needs technical

assistance from agribusiness firms, then, that producer will have high possibilities of using

CF. However, it calls the attention that the study did not find a positive relationship

between the risk-averse farmers and the use of contracts.

Both theoretical and empirical works have shown that one of the great advantages of CF is

that help farmers to reduce the risk of their transactions. Thus, this could be a sign of a

failure in the way the contracts are established in southern Chile, specifically the clauses

they contain, wherein it is not clear the benefits that farmers should (or must) receive. Thus,

public policies that intent to increase the adoption of CF in southern Chilean farmers,

should not only consider the elements that encourage the adoption of CF identified in this

study, but also they should review the legal framework in which the terms and conditions

of the contracts are stipulated. Nevertheless, this work has provided important information

on the use of CF.

Further research is clearly needed on the dynamics underlying the spillovers effects of the

geographic concentration of contracts, the elements derived from the formal education that

allow to engage in CF, and the legal and commercial conditions as well as the obligations

of oral and written contracts, for both the farmer and the agribusiness firm.

Page 32: TESIS LILIANA MORALES

22

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Page 35: TESIS LILIANA MORALES

25

Table 1. Descriptive statistics of variables used in the quantitative method.

Variables Mean

Standard

Dev. Minimum Maximum

Age 52. 350 13. 966 19 91

Gender 0.586 0.493 0 1

Educational level 9.380 3.978 0 18

Low risk 0.307 0.462 0 1

Risk-neutral 0.158 0.365 0 1

High risk 0.535 0.499 0 1

Production type

(exportables=1) 0.266 0.442 0 1

Farm area 30. 970 75. 690 0.008 650

Owner 0.774 0.418 0 1

Renter 0.092 0.289 0 1

Other land tenure 0.133 0.340 0 1

Contracts’ concentration 0.063 0.063 0 0.225

Written contracts’

concentration 0.058 0.068 0 0.225

Page 36: TESIS LILIANA MORALES

26

Table 2. Factors determining CF analyzed through a Multinomial Logit Model.

“Oral contracts” versus

“No contracts”

“Written contracts” versus

“No contracts”

“Written contracts” versus

“Oral contracts”

Age 0.011 0.012 0.002

| (0.014) (0.021) (0.018)

Gender 1.018 * 0.926 -0.091

(0.404) (0.592) (0.502)

Educational level 0.078 0.186 * 0.108

(0.050) (0.073) (0.061)

Production type (exportables) 4.745 * 5.934 * 1.189 *

(0.619) (0.803) (0.577)

Low risk -0.246 -0.679 -0.433

(0.531) (0.808) (0.690)

High risk -0.296 -0.161 0.135

(0.503) (0.701) (0.571)

Farm area 0.008 * 0.015 * 0.006 *

(0.004) (0.004) (0.002)

Owner 1.498 2.057 0.559

(0.748) (1.280) (1.163)

Renter 2.498 * 2.564 0.067

(0.915) (1.492) (1.304)

Written contracts’ concentration 9.993 * 14.019 * 4.026

(2.935) (3.733) (2.637)

Constant -5.804 * -10.008 * -4.203

(1.309) (2.036) (1.739)

Number of observations 368

Log-likelihood value -174.80

Pseudo R2 0.47

* significant at 5%. Numbers in parenthesis are standard deviations.

Page 37: TESIS LILIANA MORALES

27

  Factor Change Scale (relative to category N)   1                                      10          50                    100                                400

Gender

N      W            O 

Educational level

NO  W 

Owner                                O

N                               W 

Renter

                                             ON                                                W 

Area

N OW 

Production type (exportables)

N                                                                                            O              W 

Written contracts’ concentration

N                                     O                   W

  0      1                 2                  3                  4                  5                 6

  Logit coefficient Scale (relative to category N) 

W: Written Contracts; O: Oral Contracts; N: No Contracts   

               

Figure 1: Odd Ratios Plot derived from the Multinomial Logit

Page 38: TESIS LILIANA MORALES

28

0.2

5.5

.75

1P

r(W

ritte

n C

ontract

)

0 1 2 3 4 5 6 7 8 9 10 11 12 13 14 15 16 17 18Education (years)

Producer 1 Producer 2Producer 3 Producer 4

(a)

0.2

5.5

.75

1P

r(W

ritte

n C

ontract

)

0 1 2 3 4 5 6 7 8 9 10 11 12 13 14 15 16 17 18Education (years)

Producer 1 Producer 2Producer 3 Producer 4

(b)

Figure 2. Predicted Probabilities for (a) Producer of exportables, and (b) Producer of Traditional

Products

Page 39: TESIS LILIANA MORALES

29

III. CAPITULO 2

CONDICIONES DE LA “AGRICULTURA POR CONTRATO” EN LA ZONA SUR

DE CHILE: UNA PERSPECTIVA LEGAL*.

Liliana Morales1, Rodrigo Momberg2*, Rodrigo Echeverría3.

1Magister en Desarrollo Rural (c). Escuela de Graduados Facultad de Ciencias

Agrarias y Facultad de Filosofía y Humanidades, Universidad Austral de Chile,

Valdivia, Chile.

2* Instituto de Derecho Privado, Universidad Austral de Chile, Valdivia, Chile. 3 Instituto de Economía Agraria, Universidad Austral de Chile, Valdivia, Chile.

*Este artículo presenta algunos resultados de la investigación realizada en el marco del

proyecto Fondecyt Nº 11100228. Investigador responsable: Rodrigo Echeverría.

Page 40: TESIS LILIANA MORALES

30

RESUMEN

L. Morales, R. Momberg y R. Echeverría. Condiciones de la “Agricultura Por

Contrato” en la zona Sur de Chile: Una Perspectiva Legal. La Agricultura por Contrato

“AC”, es un tema emergente y de tal importancia que está siendo promovida por los

gobiernos y los organismos de desarrollo como un mecanismo de coordinación para

facilitar la integración de productores con la agroindustria. En Chile no existe un marco

legal que promueva o incentive el sistema de Agricultura por Contrato, por lo que el

presente estudio tuvo como objetivo analizar las condiciones de la AC en la zona sur de

Chile desde una perspectiva legal.

La metodología utilizada en este estudio consideró un análisis jurídico de los contratos en

uso en la zona. Del análisis se pudo evidenciar que el tipo de contrato más usado en la zona

es la compraventa, por cuanto no existen otras formas de vinculación para este tipo de

relaciones contractuales. Además se observó que algunos contratos incorporan cláusulas

abusivas. Por último se logró establecer que existe poca credibilidad de los productores en

la zona respecto de los contratos, en las condiciones que se suscriben actualmente.

Palabras Claves: Agricultura por Contrato, compraventa, usos, marco legal

Page 41: TESIS LILIANA MORALES

31

ABSTRACT

L. Morales, R. Momberg and R. Echeverría. Conditions "Contract Farming" in the

south of Chile: A Legal Perspective. Contract Farming “CF”, is an emerging issue and of

such importance that is being promoted by the governments and the development agencies

as a mechanism of coordination to facilitate the integration of producers with the

agribusiness. In Chile there is no legal framework that promotes or encourages the Contract

Farming system, therefore the present study aimed to analyze the conditions of the CF in

the southern Chile from a legal perspective.

The methodology used in this study considered legal analysis of the contracts in use in the

area. The analysis showed that the most used type of contract in the area is the sales

contract, since there are no other ways of entailment for this type of contractual

relationships. It was also evident that some contracts incorporate abusive clauses. Finally it

was established that it exists little credibility about the contracts from the producers in the

area, in the currently underwriting conditions.

Key Words: Contract Farming, sales contract, uses, legal framework.

Page 42: TESIS LILIANA MORALES

32

1. INTRODUCCIÓN

La Agricultura por Contrato (AC) consiste en un acuerdo de voluntades entre el productor y

la agroindustria, en el que se establecen una serie de condiciones y beneficios para las

partes (Eaton y Shepherd, 2001). Entre las condiciones se pueden encontrar el precio

preestablecido, la cantidad requerida y el tiempo de entrega de producto, entre otras. Entre

los beneficios para el productor se pueden encontrar la garantía de la compra del producto,

la asistencia técnica y la entrega de insumos, para la agroindustria productos de calidad que

requieren los mercados de destino y la disminución de costos de transacción entre otros.

Los beneficios mencionados se plasman en contratos que pueden ser escritos o verbales,

según lo permita la normativa de cada país o según las formas en que los productores

definan las relaciones contractuales con la agroindustria, pues estas también difieren según

la cultura y el entorno (Asano-Tamanoi, 2009). En los contratos se especifican una o más

condiciones de producción y/o comercialización de un producto agrícola. Los contratos

escritos o formales, detallan en forma minuciosa las condiciones y obligaciones para cada

una de las partes y los acuerdos verbales también son usados con mucha frecuencia, sin

embargo el mayor problema que tiene esta última forma de contrato es la interpretación de

las condiciones y responsabilidades, puesto que fácilmente pueden generarse confusión y

malos entendidos si los acuerdos no son explicados claramente (Eaton y Shepherd, 2001).

Teniendo en cuenta las condiciones de producción y/o comercialización especificadas en el

contrato, la AC puede tomar diferentes formas (Wilson, 1986). Generalmente puede incluir

una serie de opciones en la estructura de los contratos entre el productor y la agroindustria,

que pueden ser: a) Contratos de comercialización (compraventa), donde el productor vende

el producto a un precio, calidad y tiempo determinado sin ningún control ni injerencia por

parte de la empresa en las labores de producción; b) contratos que especifican precio,

calidad, tiempo y la provisión de insumos, además de cierta injerencia por parte de la

empresa en las decisiones de producción; c) una forma contractual donde las decisiones de

Page 43: TESIS LILIANA MORALES

33

producción están bajo el completo control de la empresa, así como la provisión de todos los

insumos, además de establecer precio, calidad y tiempo de entrega (Rehber, 2007; Wolz y

Kirsch, 1999). Esta última estructura prima en países en desarrollo, especialmente

africanos, debido a que requieren un mayor control en la organización y producción.

2. SITUACIÓN DE LA AGRICULTURA POR CONTRATO EN CHILE.

Según datos del VII Censo Agropecuario 2007 (Instituto Nacional de Estadística 2007), en

Chile existen 301.376 productores agrícolas y forestales, de los cuales solamente 12.945

(4,3%) utiliza la “Agricultura por Contrato”. Cabe resaltar que este censo únicamente

consideró Agricultura por Contrato los acuerdos formales (contratos escritos) entre los

productores y la agroindustria4. Aunque en Chile existen otras vinculaciones no formales

(contratos verbales), no hay datos oficiales que los permitan cuantificar.

Ahora bien, del total de los productores que utilizan Agricultura por Contrato en Chile un

87,8% se concentra principalmente en la zona central del país (de la región de Coquimbo a

la región del Bio-Bio), y solo un 9,6% se ubica en la zona sur (regiones de La Araucanía,

Los Ríos y Los Lagos). Aún cuando las mayores vinculaciones contractuales se generan

entre productores y empresas exportadoras, datos censales indican que en la zona central el

42,8% de los productores están vinculados con estas empresas, en tanto en la zona sur solo

el 27,8% de los productores tienen contratos con empresas exportadoras. Estas cifras dan

cuenta del menor desarrollo que tienen los productores de la zona sur, en el contexto de la

relación contractual entre los productores y la agroindustria. Además de esta situación

tampoco existe normativa especial que respalde este sistema de producción agrícola, pues

para todos los efectos legales se deben remitir a la parte general de los contratos establecida

en el Código Civil chileno.

                                                            4 Datos suministrados por el Sistema Integral de Información y Atención Ciudadana del INE, Chile (Manual del Censador).

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En este contexto, el presente estudio tiene como objetivo analizar las condiciones de la

Agricultura por Contrato en la zona sur de Chile, desde una perspectiva legal. A nuestro

entender y por la literatura revisada, esta investigación es la primera en su tipo que se

realiza en la zona sur de Chile y que entrega información relevante sobre perspectivas

legales que eventualmente podrán ser de utilidad para instituciones públicas que pretendan

promover la adopción de la Agricultura por Contrato en la zona.

3. REVISIÓN DEL MARCO LEGAL EN CHILE.

El libro IV del Código Civil rige toda la materia relativa a las obligaciones y los contratos.

Los artículos 1437 y 1438 del mismo cuerpo legal disponen las fuentes de las obligaciones

y la definición de contrato. Sin embargo por lo impreciso de su definición acudiremos a la

doctrina. En el caso de López Santamaría (1998), señala que el contrato reposa en el

acuerdo de voluntades de las partes. Así, el contrato es un acto jurídico bilateral que crea

obligaciones, y que atribuye a las partes un poder soberano para engendrar obligaciones,

siendo la voluntad de las partes fuente de las obligaciones y medida de las mismas. Esto es,

el querer o intención de las partes domina la formación, génesis o nacimiento del contrato,

así como también sus efectos y consecuencias.

Revisado el libro IV del C.C. y normas concordantes, se observa que no existe en el

ordenamiento jurídico chileno identificado el contrato de “Compraventa de productos

agrícolas”, no se encuentra establecida ninguna norma legal sobre el tema, ni formas

especiales de celebración del mismo. Sin embargo, los productores y la agroindustria

recurren a la “compraventa” general para desarrollar todos los actos negociales que tienen

que ver con la comercialización de productos agrícolas.

El artículo 1793 del C.C. señala que la compraventa es un contrato en que una de las partes

se obliga a dar una cosa y la otra a pagarla en dinero. Aquélla se dice vender y ésta

comprar. El dinero que el comprador da por la cosa vendida, se llama precio.

Page 45: TESIS LILIANA MORALES

35

La doctrina en cabeza de Manuel Vargas (1997), hace mención a 6 tipos de contrato que se

encuentran en uso en Chile y que surgen del uso reiterado de las partes (productores y

empresas exportadoras de fruta). Estos son:

Compraventa a firme, la cual consiste en convenir definitivamente la cosa vendida y el

precio.

Compraventa con precio ajustable, donde el precio de la fruta vendida se fija a la

celebración del contrato, y queda sujeto a ajuste y para estos efectos las partes pueden

recurrir a los valores FOB de retorno, al precio promedio pagado por otros exportadores, a

las condiciones imperantes en el mercado de destino o al común acuerdo.

Compraventa con precio determinable con mínimo garantizado, en este tipo de contrato el

precio se fija a la celebración del contrato pudiendo ser sujeto a un ajuste por cualquiera de

las formas señaladas precedentemente, sin embargo, las partes, además fijan un valor

mínimo garantizado pagadero a todo evento, que el exportador pagara al productor, cuando

de la determinación efectuada según las bases establecidas en el contrato resultare un precio

inferior al valor mínimo.

Compraventa con precio determinable con mínimo garantizado compensable, en el cual las

partes convienen que las diferencias positivas obtenidas en la venta de una especie o

variedad sean compensadas con las diferencias negativas resultante de otras especies o

variedades.

Comisión, el productor suele otorgar al exportador una comisión para vender, a fin de que

este, por cuenta del productor (comitente o mandante) venda un determinado tipo de fruta.

En este contrato el riesgo de la cosa es del productor, y el exportador está obligado a rendir

cuenta de su mandato.

Joint Venture, en algunos casos se establece una asociación entre productor y exportador,

para efectuar un único emprendimiento comercial, es decir la venta y exportación de

determinada fruta con el fin de obtener una ganancia, este tipo de contratos está limitado a

una negociación única.

Esta clasificación no obsta para que se pueda emplear cualquier otro contrato, nominado o

innominado, idóneo al propósito de las partes, con las modalidades que estos convengan.

Page 46: TESIS LILIANA MORALES

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En estas circunstancias el contrato de “compraventa” de productos agrícolas esta referido a

las normas sustantivas que rigen dicho contrato. En lo demás las partes pueden incluir las

clausulas y modalidad que estimen convenientes.

4. MATERIAL Y MÉTODO

Para este estudio se utilizaron datos recabados en otra investigación donde participaron dos

de los autores de este trabajo. La aplicación de cuestionarios y la realización de grupos

focales realizados en las Regiones de la Araucanía y Los Ríos, proporcionan información

relevante que interesa para contextualizar las condiciones en que se encuentra la

“Agricultura por Contrato” en la zona sur de Chile dentro del análisis de los resultados de

este estudio.

4.1. Análisis Jurídico de Contratos

El análisis jurídico de los contratos busca analizar diversos aspectos de los contratos entre

los productores y la agroindustria. Este análisis comienza con un examen de las

estipulaciones de los contratos celebrados por 3 productores con la agroindustria, los cuales

han sido considerados representativos de los que se emplean regularmente en las zonas de

estudio, debido a que presentan iguales o similares clausulas a las contempladas en otros

contratos compilados. Los contratos seleccionados se escogieron intencionalmente con

productores que estuvieron dispuestos a que sus contratos fuesen analizados bajo total

confidencialidad.

Dentro del análisis de los contratos se observaron las clausulas propias de la naturaleza del

contrato de compraventa y otras que las partes incorporaron. Estos contratos han sido

identificados como A, B y C.

Page 47: TESIS LILIANA MORALES

37

4.1.1. Contrato A

Este contrato se denomina en su epígrafe “Compraventa de plantas y oferta de ventas”. Este

contrato tiene como característica especial la venta por parte de la agroindustria de plantas

de fruta y que incorpora dentro del contrato una oferta de venta por parte del productor. Es

un contrato sui generis y que por lo demás establece en la clausula séptima del contrato la

obligación preferencial de venta durante 15 años desde la primera cosecha. Cabe resaltar

que este contrato se hace bajo la condición de la existencia de la cosa futura que establece

el artículo 1813 del C.C., sin embargo al momento de la celebración del contrato no existe

indicio alguno de fructificación. Este contrato implica una fuerte incertidumbre para las

partes.

Este contrato a pesar de garantizarle la compra de la totalidad de la fruta al productor en

caso que existan, no establece otros beneficios propios de la Agricultura por Contrato, v.gr.

la asistencia técnica. Por su parte la clausula sexta, establece que la empresa dará a conocer

estándares de calidad para la fruta que informará anualmente al productor.

Establece también en la clausula novena que la resolución de cualquier conflicto que surja

entre las partes deberá ser resuelta mediante arbitraje, renunciando a la posibilidad de

acceder ante la justicia ordinaria.

A nuestro entender se trata de un contrato de naturaleza civil y no comercial, habida cuenta

que la venta que hace el productor no es resultado de una compra anterior de la fruta. De

igual manera, en el caso del comprador que adquiere la fruta para procesarla y crear un

producto con valor agregado y no para revender la fruta. En este sentido es un contrato

poco común en la zona pero igualmente representativo de esta.

4.1.2. Contrato B

Page 48: TESIS LILIANA MORALES

38

Este contrato en su epígrafe se denomina “Contrato de compraventa de producto de

exportación”.

Este contrato a diferencia del contrato A, establece la especie, la calidad y la cantidad de

fruta que requiere el comprador, se establece el tiempo de entrega del producto y se

establece el precio de producto.

Este contrato contempla en su clausula 1 la condición de venta de cosa futura. El artículo

1813 del C.C. establece que la venta de cosas que no existen, pero se espera que existan, se

entenderá hecha bajo la condición de existir. Las cosas futuras son aquellos bienes

corporales que en el momento de la celebración del contrato no existen, pero que se espera

lleguen a existir. Este concepto de cosa futura es el más aceptado por la doctrina y es muy

usual contratar en compraventa de frutos de una huerta (Weber Ponce de León, 1976). A

diferencia del Contrato A, la celebración de este contrato se da con el conocimiento que los

huertos han dado frutos anteriormente y por tanto solo se espera que la fruta evolucione al

punto que requiere la empresa, por tanto es un contrato menos riesgoso para las partes.

Este contrato establece también clausulas de fuerza mayor eximentes para las partes y las

clausulas de incumplimiento de contrato y arbitraje.

En cuanto a la naturaleza de este acto negocial, a nuestro entender para el vendedor es de

naturaleza civil por cuanto la fruta que vende no es producto de una compraventa anterior,

sin embargo para la agroindustria exportadora es indudablemente de carácter comercial,

puesto que la fruta se va a comercializar en mercados internacionales y esto implica en

definitiva la reventa de la fruta.

4.1.3. Contrato C.

Este contrato se denomina en su epígrafe “Contrato de compraventa”, a primera vista es

una plantilla que posee espacios en blanco para diligenciar los datos personales del

Page 49: TESIS LILIANA MORALES

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productor, por lo que parece más bien un contrato de adhesión, habida cuenta que el

productor no tiene ningún tipo de participación dentro de la construcción de este acto

negocial, porque es precisamente una de las partes (empresa) quien impone las condiciones

a la otra. No se discute que sea o no un contrato, sino que en el sentido estricto una de las

partes solo puede decidir firmar o no el contrato, pero no discutir sus términos. Si bien, esta

desigualdad, no le quita al contrato su carácter de tal, lo que se critica es que estos pueden

contener clausulas abusivas (entendiendo por estas, cláusulas que se dan en desmedro de

una de las partes y en beneficio de otra), en ese sentido, el contrato de adhesión constituye

un aspecto del fenómeno contemporáneo de la desigualdad de las partes. (Vargas, 1997).

Este contrato al igual que los Contratos A y B, determina dentro de sus cláusulas, la

cantidad requerida, las condiciones de entrega de tiempo y lugar, además de exigencias de

calidad del producto.

Respecto del precio la cláusula cuarta establece que se fijará semanalmente por el

comprador y se pagará mensualmente al vendedor. En este sentido no indica con base en

que forma el comprador establecerá el precio de la fruta, dejando en una total incertidumbre

al vendedor.

Este contrato denominado para efectos de este análisis C, a diferencia de los contratos A y

B no establece cláusulas arbitrales, por ende en caso de incumplimiento de las partes

deberían recurrir a la justicia ordinaria.

5. RESULTADOS

Para analizar los contratos en uso en la zona sur de Chile, se hace necesario contextualizar

las condiciones de la “Agricultura por Contrato” existentes en la zona.

En la zona sur de Chile el 62% de los productores venden sus productos en el mercado

abierto, sin ningún tipo de garantía en la compra de los productos y bajo precios

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indeterminados. Al respecto Eaton y Sheaperh (2001) indican que la Agricultura por

Contrato ofrece una solución potencial para esta situación dando garantías de mercado a los

agricultores y asegurando la oferta para los compradores. El resto de los productores han

optado por la Agricultura por Contrato. De estos últimos, el 26% utiliza contratos verbales

y solo un 8,6% utiliza contratos escritos.

Sólo un pequeño porcentaje de productores se estaría vinculando con la agroindustria a

través de las dos formas contractuales (contratos verbales y escritos), esto debido a que

cultivan varias clases de productos dentro de su predio y esto les permitiría estar

negociando con la agroindustria de diversas formas. Cabe anotar que este pequeño grupo de

productores son los que presentan un mayor nivel educacional, esto se condice con lo que

establece Echeverría et. al., (2011), en cuanto a que los productores que orientan su

producto hacia el mercado externo son productores con un mayor nivel educativo. Este

pequeño grupo de productores no produce, ni comercializa sus productos a menos que

cuenten con una garantía de compra del producto. Esto podría tener su explicación en lo

que argumentan los propios productores como resultado de los grupos focales, donde

claramente indican que un productor que tiene mayor nivel educativo podrá vincularse de

mejor manera con la agroindustria ya que esto les brinda mejores habilidades frente a los

negocios.

Las relaciones negociales dentro del sistema de Agricultura por Contrato también están

dada por los beneficios que el productor espera que se generen al vincularse con la

agroindustria. Es así como los contratos también pueden otorgar a los productores acceso a

una amplia variedad de servicios de asesoría técnica y de administración que de otra forma

no estarían a su alcance (FAO, 2001). En ese sentido, los productores que reciben más

beneficios al vincularse con la agroindustria son aquellos que tienen contratos escritos.

Las cifras son claras: 83% de los productores con contrato escrito señalaron que tienen

garantía de la compra del producto por parte de las empresas, mientras solo un 68% de los

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41

productores que utiliza contratos verbales tiene esta garantía. La misma situación acontece

respecto de otro beneficio como es la asistencia técnica que deberían brindar las empresas a

los productores. El 67% de los productores con contrato escrito cuentan con asistencia

técnica, en tanto solo el 44% de quienes se vinculan con contratos verbales le otorgan este

beneficio.

Si revisamos estas cifras, claramente se observa que existe un menor grado de beneficios

tratándose de contratos verbales. A este respecto los mismos productores han indicado que

a las empresas no les interesa vincularse formalmente (contratos escritos), por que

eventualmente ellas pueden incumplir en la compra de la totalidad del producto y en el

suministro de asistencia técnica. Cabe resaltar que los productores de la zona no recurren

ante la justicia ordinaria en caso de incumplimiento de contrato, por cuanto para los

mismos productores en su ámbito cultural, los acuerdos verbales carecen de valor y más

aún estos no son considerados contratos.

Ahora bien, es importante resaltar que el 81% de los agricultores que cultivan productos

tradicionales como (leche, carne, trigo, avena, etc) indicaron que estarían muy motivados a

cultivar productos orientados al mercado exportador (frutas), siempre y cuando tuviesen

contratos escritos. Sin embargo, es preciso señalar que dentro de los grupos focales, se

logró establecer que los contratos en un amplio sector de la zona en estudio son

considerados impopulares, sean escritos o verbales, debido a que estos no prestan reales

garantías a los productores. Además en ocasiones presentan cláusulas que son notoriamente

arbitrarias, por lo que, si bien estarían motivados a producir bajo contrato existe poca

credibilidad en estas vinculaciones en las condiciones en las que se suscriben actualmente.

Teniendo en cuenta lo anterior, el análisis jurídico realizado a tres de los contratos

seleccionados y que son considerados representativos de los contratos en uso dentro de las

regiones en estudio. Se observó claramente que el tipo de contrato más usado en la zona es

la “Compraventa” al no existir en el ordenamiento jurídico chileno, ningún otro tipo de

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42

contrato más especifico para la “Agricultura por Contrato”. Dentro del análisis de los tres

contratos se evidencia que ninguna de las clausulas prevé la asistencia técnica que debe

brindar la empresa al productor, y más bien el otorgar este beneficio queda a

discrecionalidad de la empresa y como un tema al margen de los contratos.

En cuanto a los precios preestablecidos, dos de los contratos de compraventa (A y B)

quedan sujetos a reajustes, como manifiesta Vargas (1998), “compraventa con precios

ajustables”, utilizando diversas formas de reajustes, entre ellas el FOB de retorno y el

promedio pagado por otros exportadores. Respecto al contrato C, no establece con base en

que el comprador reajusta el precio del producto. Es dable decir que en ocasiones las

liquidaciones son poco claras y sobretodo el pequeño productor no cuenta con las

herramientas necesarias para cuestionar los precios reajustados por el comprador.

También se observó que pesar que a simple vista el contrato C es una plantilla con espacios

en blanco para ser diligenciados por el productor, no se debe obviar que los otros contratos

poco y nada tienen de consensuales y más bien tienen mucho parecido al contrato de

adhesión. Una parte de la doctrina coincide en ello al atribuir que más que contratos de

compraventa de fruta son contratos de adhesión (Vargas, 1997), entendiendo por contrato

de adhesión al contrato, redactado por una de las partes, al cual la otra adhiere, sin

posibilidad real de modificarlo o discutirlo (Ghestin, 1993). Esta situación desigual puede

conllevar en algunos casos a una posición dominante de la empresa, frente al productor que

sería la parte débil de la relación contractual.

6. CONCLUSIONES

De lo expuesto, se puede colegir que en Chile no existe un marco legal conducente a

promover la Agricultura por Contrato, esto es, no hay legislación específica que regule los

contratos entre los productores y la agroindustria para la comercialización de productos

agropecuarios. Por lo que, es importante legislar sobre estos contratos no solo en la parte

Page 53: TESIS LILIANA MORALES

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sustancial, sino también en lo procedimental, concretamente en aspectos relacionados a la

especificidad de mercados, precios, opciones futuras, etc.

Así mismo se evidenció dentro del estudio la compleja situación en lo relacionado con la

falta de soluciones por la vía judicial. Dentro de la investigación realizada no se ha

conocido de productores de la zona que hayan recurrido al ámbito judicial o sistema de

arbitraje para reclamar incumplimientos contractuales. Ello se explica por el

desconocimiento que tienen los productores de la zona de la parte normativa y del

equivocado concepto que tienen acerca de los contratos verbales.

De otra parte, el rol del Estado y las políticas públicas en la Agricultura por Contrato es

importante, para efectos de incentivar este tipo de acuerdos. Si bien, el Estado no puede

intervenir en la negociación entre las partes, ni introducirse en las relaciones contractuales,

si puede apoyar esas vinculaciones a través de diversas acciones con los productores y la

agroindustria, tales como capacitaciones, formación en gestión, para los productores e

incentivos para las empresas, etc. También puede evitar con una adecuada regulación,

contratos con clausulas abusivas derivadas de acuerdos desiguales por la posición

dominante de la empresa dentro de las vinculaciones contractuales.

Finalmente, es recomendable que se realice un esfuerzo para contar con estadísticas

actualizadas sobre el uso de la Agricultura por Contrato. Ello es fundamental para

establecer políticas en esta materia, esto es, que se tenga en cuenta como Agricultura por

Contrato los acuerdos verbales que también forman parte del ámbito jurídico con total y

plena validez.

Page 54: TESIS LILIANA MORALES

44

7. REFERENCIAS BIBLIOGRÁFICAS

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in Spain and Japan. Vol 30.

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Instituto Nacional de Estadísticas INE. 2007. VII Censo Nacional Agropecuario de Chile.

Ghestin, J. 1993. La formatio du contract. 3edicion, Paris.

López Santamaría, J. 1998. Los Contratos. Parte General. Tomo I, Editorial Jurídica de

Chile. Segunda Edición actualizada, Santiago.

Cullinan, C. 1999. El derecho y los mercados -El mejoramiento del ambiente legal para la

comercialización agrícola, Boletín de Servicios Agrícolas de la FAO No. 139, Roma.

Hernández, R., Fernández, C. y Baptista, P. 2010. Metodología de la Investigación. Mexico

D.F. Mc Graw Hill.

INE. 2007. VII Censo Nacional Agropecuario de Chile. Instituto Nacional de Estadísticas,

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Rehber, E. 2007. Contract farming Theory and Practice. The ICFAI University Press.

Vargas, M. 1997. Contratos de Exportación entre productores y exportadores de fruta.

Editorial Jurídica de Chile.

Wolz, A. y Kirsch, O. 1999. Equitization of agribusiness in Vietnam: options for

small-scale farmers with special emphasis on coffee production in Daklak Province.

Discussion Paper No. 69. Disponible en http://www.rzuser.uniheidelberg.de/htm.

Page 55: TESIS LILIANA MORALES

45

IV. CONCLUSIONES GENERALES

Esta tesis estudió el análisis de los factores determinantes de la Agricultura por Contrato en

la zona sur de chile y las condiciones de la misma desde una perspectiva legal. A través de

una metodología de investigación complementaria y utilizando los métodos cuantitativos y

cualitativos, además se realizó un análisis jurídico a contratos en uso en la zona de estudio.

Se logró evidenciar distintos escenarios que permiten plantear recomendaciones para la

formulación de eventuales políticas públicas en el contexto en que se encuentra la

Agricultura por Contrato en la zona sur de Chile. Esta multiplicidad de enfoques permitió

una profundización y complementación en aspectos sociales, económicos y jurídicos, que

sin duda esperamos sean un buen aporte.

La Agricultura por Contrato en la zona sur de Chile se muestra como un tema con mucho

potencial para el desarrollo productivo de la región, pero sin duda que requiere un apoyo

irrestricto por parte del Estado como facilitador de las relaciones contractuales, pero

también con políticas públicas adecuadas a la promoción y aumento de la AC en la zona.

Si bien, por parte del Estado existe interés de aumentar el uso de la Agricultura por

Contrato en el país, es importante que se tengan en cuenta los factores que estarían

determinando las vinculaciones contractuales. En primera instancia este estudio evidenció

que existe una fuerte asociación entre el uso de contratos y el nivel educativo del productor,

además de otros factores relevantes como el mercado al que se orienta el producto

(exportables) y la concentración de productores bajo contrato en una comuna. Sin embargo,

cuando esos factores interactúan con otros como el tamaño de la explotación, la presencia

de organizaciones sociales (asociaciones) y asistencia técnica, entonces existe una alta

probabilidad de uso de AC.

Page 56: TESIS LILIANA MORALES

46

De lo anterior, se colige que es la interacción de todos los factores y no uno solo en

particular los que posibilitan las probabilidades de uso de AC en la zona sur de Chile.

De otra parte, se han realizado esfuerzos por parte del Gobierno a través de programas

como Alianzas Productivas de INDAP, como un paso para implementar la AC en el país,

sin embargo, es necesario que este apoyo implique temas de fondo como la clase de

contratos que se están usando y las cláusulas que estos contienen. Es claro que el Estado no

puede interferir en las relaciones contractuales directamente, pero sí jugar un rol como

facilitador y guía de lo que en realidad debería ser y entenderse por Agricultura por

Contrato; no dejándolo a la liberalidad de las empresas que son quienes en ultimas están

elaborando los contratos con los que se están vinculando los productores de la zona, sin

tener estos oportunidades de discusión y modificación de las clausulas contractuales, que en

algunos casos pueden parecer abusivas.

Por lo demás, esta investigación pone de presente esta interesante temática como lo es la

“Agricultura por Contrato” que de incentivarse entre los diferentes actores sociales, sin

duda aportará al desarrollo productivo de la zona sur de Chile.