TEMA 5: LOS SISTEMAS DE GESTIÓN MEDIOAMBIENTAL EN

LA EMPRESA (SGMA) Introducción 1. Sistemas de Gestión Medioambiental (SGMA)

1.2. Objetivos, elementos clave, principios y postulados de actuación de un SGMA

2. Implantación de un SGMA 2.1. Desarrollo de la implantación de un SGMA

3. Ventajas e inconvenientes de la aplicación de un SGMA 4. Norma UNE-EN ISO 14.001 y Reglamento Europeo (EMAS)

4.1. Norma UNE-EN ISO 14.001. 4.2. Reglamento (CEE) 1836/93 (EMAS) 4.3. Diferencias entre el registro EMAS y el certificado ISO 14001

BIBLIOGRAFÍA: • CONESA FERNANDEZ-VÍTORA, VICENTE (1997): Instrumentos de la

gestión ambiental en la empresa. Ed. Mundi-Prensa. Madrid-Barcelona-México.

• RUESGA, SANTOS, M. Y DURÁN, GEMMA (coordinadores) (1995): Empresa y medio ambiente. Ed. Pirámide. Madrid.

• SEOANEZ CALVO, MARIANO y ANGULO AGUADO, IRENE (1999): Manual de gestión medioambiental de la empresa. Ed. Mundi-Prensa. Madrid-Barcelona-México.

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Introducción Si la empresa en lugar de una adaptación pasiva –limitándose a cumplir lo estrictamente legal que no puede eludir- adopta una actitud activa, dándoles a los temas ambientales la misma importancia que a los otros temas empresariales, integrará la variable ambiental en todos los niveles de decisión internos. Lo que llevará: - a una anticipación sobre la normativa, - a minimizar costes mediante un menor consumo de recursos; mediante una correcta gestión de los residuos, y - a una mayor aceptación social y política de la actividad desarrollada.

Para alcanzar los objetivos perseguidos esta empresa deberá de poner los medios necesarios estableciendo un programa de acción integrado en un sistema de gestión medioambiental (SGMA). Existen dos vías para la implantación y para la certificación de los sistemas de gestión medioambiental:

- Norma UNE-EN ISO 14.001 - Reglamento Europeo (EMAS)

1. Sistemas de Gestión Medioambiental (SGMA)

A partir del V Programa Comunitario (Programa Comunitario de Política y Actuación en materia de Medio Ambiente y Desarrollo Sostenible, 1993-2000) la política medioambiental de la UE ha ido sustituyendo paulatinamente la regulación directa por instrumentos de tipo voluntario.

De esta forma se pretende, ante la oposición encontrada por parte del sector

industrial frente a las imposiciones obligatorias, que sea el mercado el que guíe la actitud de las empresas, y la competitividad entre ellas la que les lleve a aprovechar las ventajas de la aplicación de los instrumentos de protección medioambiental.

Esto supone aceptar la idea de la responsabilidad compartida, que exige la

participación de todos los agentes implicados en el mercado: empresas, consumidores, público en general y por supuesto la Administración. Dentro de estos instrumentos de política medioambiental de carácter voluntario, ocupa un lugar destacado el Sistema de Gestión Medioambiental, mediante el cual la empresa se compromete a cumplir unos objetivos medioambientales fijados por ella misma en función de sus necesidades. Según la Cámara Internacional de Comercio: “Un SGMA es el marco o el método de trabajo que sigue una organización para lograr y mantener un determinado comportamiento de acuerdo con las metas que se hubiere fijado y como respuesta a una normas, unos riesgos ambientales y una presiones tanto sociales como financieras, económicas y competitivas en permanente cambio. Los sistemas de gestión del medio ambiente tienen por objeto: - Garantizar el cumplimiento de las leyes y reglamentos de protección del medio ambiente, tanto locales, como regionales, nacionales e internacionales.

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- Fijar y promulgar las políticas y los procedimientos internos necesarios para alcanzar los objetivos medioambientales de la organización. - Identificar y gestionar los riesgos en que incurre la empresa como consecuencia de los riesgos medioambientales. - Identificar el volumen de recursos y el personal adecuado para el nivel de riesgo y los objetivos medioambientales de dicha organización, asegurando al mismo tiempo su disponibilidad cuando y donde fuese necesario” La definición de Sistema de Gestión Medioambiental dada por el Reglamento (CE) Nº 761/2001 (EMAS) y por la Norma ISO 14001:1996 es prácticamente la misma:

Existen tres características que deberán cumplir todos los SGMA:

- Completo: Debe cubrir todas las actividades que se realicen en la empresa. - Comprensivo: Todos los implicados deben conocer y comprender claramente

su papel, sus responsabilidades. - Abierto: El proceso de mejora es continuo, con lo que el sistema debe

permitir cambios sobre la marcha siempre que se detecten irregularidades, lagunas o disfunciones.

1.2. Objetivos, elementos clave, principios y postulados de actuación de un SGMA Los objetivos de un SGMA podemos enumerarlos de la forma siguiente:

1. Reconocer que el medio ambiente es una prioridad para la empresa.

2. Identificar y controlar los aspectos medioambientales significativos y sus impactos, así como los requisitos aplicables establecidos por la legislación medioambiental vigente.

3. Identificar las oportunidades medioambientales significativas.

4. Establecer una adecuada política medioambiental, desarrollada en los

objetivos y las actuaciones necesarias para su consecución.

5. Proporcionar recursos adecuados y suficientes para alcanzar los objetivos marcados y permitir el funcionamiento del sistema.

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6. Controlar el funcionamiento y evaluar la eficacia del sistema y la necesidad de introducir modificaciones para adaptarse a cambios de las circunstancias o a nuevas demandas y para dirigirse hacia la mejora continua.

Los elementos de un SGMA vienen descritos en la Norma ISO 14001, siendo los

mismos para el Reglamento EMAS al haber adoptado éste, el modelo de Sistema propuesto por la Norma ISO 14001.

Elementos clave:

- Política Medioambiental. - Programa medioambiental o Plan de Acción. - Estructura organizativa. - Formación, información interna y competencia profesional. - Integración de la gestión medioambiental en la gestión de las operaciones de

la empresa. - Vigilancia y seguimiento. - Corrección y prevención. - Auditorias del sistema de gestión. - Revisión del sistema. - Comunicación externa

Los principios que deben guiar un SGMA serán:

- Cumplimiento de las normas legales y de la política ambiental de la empresa. - Unidad de gestión del medio ambiente. - Elaboración de procedimientos operativos. - Evaluación del impacto ambiental. - Ahorro de recursos. - Prioridad a la prevención respecto a la corrección. - Minimización de residuos en origen, y si es posible reciclado. - Vigilancia, control y registro de los impactos ambientales mediante la

ejecución de auditorías medioambientales y planes de vigilancia ambiental. - Formación e información interna y externa.

Postulados de actuación (¿a que obliga un SGMA?):

- Fomentar, a todos los niveles, el sentido de la responsabilidad en relación al medio ambiente.

- Evaluar por anticipado las repercusiones sobre el medio ambiente de las nueva actividades, productos y procesos.

- Evaluar y supervisar las repercusiones de las actividades en funcionamiento sobre el medio ambiente local, y el impacto significativo sobre el medio ambiente en general.

- Adoptar medidas necesarias para prevenir o eliminar la contaminación, reducir al mínimo los efluentes contaminantes y producción de residuos, teniendo en cuenta las posibles tecnologías limpias.

- Adoptar las medidas necesarias para evitar las emisiones accidentales. - Aplicar procedimientos de comprobación del cumplimiento de la política

ambiental.

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- Establecer y actualizar los procedimientos a seguir en caso de que se advierta incumplimiento de la política medioambiental.

- Colaborar con las autoridades públicas en la creación de procedimientos de urgencia que minimicen los efectos de accidentes.

- Poner a disposición del público la información necesaria para comprender las repercusiones de la actividad sobre el medio ambiente.

- Proporcionar a los clientes las instrucciones adecuadas, en relación al medio ambiente, sobre el uso y la eliminación de los productos y residuos de los productos elaborados por la empresa.

- Tomar las medidas oportunas para que los contratantes que trabajen en la actividad apliquen normas medioambientales equivalentes a las propias.

- Controlar periódicamente las actividades de la empresa para comprobar si son coherentes con los postulados de actuación.

2. Implantación de un SGMA

Aunque los SGMA son sumamente variados dependiendo de la empresa que sea, la mayoría de ellos constan de cuatro grandes fases dependientes e interrelacionadas: 1. Planificación: establecimiento de metas y objetivos, y fijación de estrategias para alcanzarlos. Estas estrategias configuran la política empresarial y comportan la asignación de recursos par llevarla a cabo. 2. Organización: establecimiento de una estructura organizativa -definición de funciones, responsabilidades y autoridad- capaz para aplicar los recursos asignados al SGMA. La estructura de organización de un SGMA debe de tener los siguientes aspectos:

- Identificar y considerar todas las actividades de la organización y además documentarlas correctamente.

- Definir las responsabilidades de cada persona implicada. - Designar a un representante de la dirección para que se encargue de resolver

los problemas que puedan plantearse con respecto al sistema organizativo. - Definir la interrelación de las diferentes actividades de una misma empresa,

procediendo posteriormente a su coordinación. - Identificación de problemas, actuales o potenciales, y de los riesgos que

plantea la puesta en marcha de medidas preventivas o correctoras. 3. Aplicación: facilita los mecanismos iniciales y crea el ambiente de trabajo necesario. Determinará los resultados que se obtendrán.

4. Control: evitar que la organización empresarial se separe de sus metas y se desvíe de sus objetivos medioambientales. Las auditorias medioambientales y los programas de vigilancia ambiental juegan un papel fundamental en esta tarea.

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2.1. Desarrollo de la implantación de un SGMA

Etapas: a) Revisión medioambiental inicial. b) Política medioambiental. c) Desarrollo del SGMA. • Organización y asignación de responsabilidades. • Identificación y cuantificación de aspectos medioambientales. • Evaluación de requisitos legales. • Objetivos y metas medioambientales • Programa de gestión medioambiental. • Documentación del SGMA. • Formación e información de empleados. • Comunicación externa. d) Revisión del SGMA. • Auditorias del sistema de gestión medioambiental. • Revisión del SGMA. e) Certificación del SGMA. • Solicitud del certificado. Validación por organismo certificador.

a) Revisión ambiental inicial

Aunque no es un requisito obligado si que se recomienda como medio de

obtención de una diagnosis de su situación medioambiental. Dicha revisión debe reflejar las incidencias o impactos medioambientales derivados de su actividad y del funcionamiento de sus instalaciones de conformidad con la legislación vigente, así como las prácticas en política medioambiental que haya desarrollado la empresa hasta el momento. A partir de aquí se podrá definir la política medioambiental.

b) Política medioambiental

La más alta dirección de la empresa, definirá una política medioambiental compatible con la política empresarial y en consonancia con las políticas de calidad y de seguridad e higiene, implicando a todos los departamentos y aplicándola a todos los niveles.

La política medioambiental debe ser breve, precisa y razonable, se diseñará con detalle y rigor, evitando ambigüedades, de tal forma que sea posible su aplicación. Como mínimo debe de contener el compromiso de cumplir la legislación medioambiental que incumbe a la empresa y el compromiso de profundización en la gestión medioambiental.

Se precisará el alcance de dicha política, especificando que partes de la organización se verán afectadas. Después de cada auditoria medioambiental se revisará y modificará en función de las necesidades y situación en cuanto al cumplimiento de los objetivos. La política medioambiental se hará pública.

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c) Desarrollo del sistema de gestión medioambiental

• Organización y asignación de responsabilidades. La dirección además de asumir el compromiso a través de la política medioambiental, debe organizar y planificar las siguientes actuaciones:

o Asignar los recursos adecuados. o Crear una organización apropiada. o Definir las funciones. o Identificar al personal clave. o Atribuir las responsabilidades. o Atribuir autoridades. o Designar, si fuera preciso, una o varias figuras para la coordinación y

supervisión del SGMA.

• Identificación y cuantificación de aspectos medioambientales. Además de la revisión inicial, se realizarán evaluaciones periódicas para identificar nuevos aspectos medioambientales que puedan surgir, valorándolos y cuantificándolos. Se realizará un registro de los mismos con sus correspondientes impactos.

• Evaluación de los requisitos legales. se debe identificar toda la normativa

medioambiental vigente a todos los niveles -comunitario, estatal, autonómico y local- que regula la actividad desarrollada, elaborándose un registro.

• Objetivos y metas medioambientales. A partir del conocimiento de la

situación medioambiental de la empresa, y en base a la declaración de su política ambiental, se diseñan los objetivos y metas medioambientales, estos deben quedar especificados por escrito con detalle y precisión, cuantificados y dimensionados en el tiempo.

• Los objetivos definen el compromiso temporal a alcanzar en función de la

mejora continua en comportamiento respecto al medio ambiente que la empresa asume; deben ser exigentes pero alcanzables, referirse a aspectos significativos y consecuentes con la política medioambiental de la empresa.

Los objetivos tienen un carácter más general que las metas.

• Programa de gestión medioambiental. Es el documento que define las

estrategias, recursos, medios humanos y materiales y los plazos necesarios para garantizar el cumplimento de los objetivos ambientales definidos.

Dentro del programa se desarrollan subprogramas, donde se indican las tareas a realizar y los responsables de las mismas. Esta distribución de responsabilidades, exige en muchos casos, la creación de un departamento de medio ambiente y el nombramiento de un responsable interno del SGMA.

• Documentación del SGMA (procedimientos, registros y manual de gestión

medioambiental). Aunque según el sistema de certificación que se elija variará la documentación necesaria, en general los SGMA exigen:

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o Los procedimientos medioambientales, que proporcionan instrucciones

detalladas para controlar el SGMA, las actividades, los productos y procesos productivos. Básicamente, son de dos tipos:

⋅ Los destinados a garantizar la conformidad del SGMA con los

requisitos del programa de certificación escogido. ⋅ Los procedimientos operativos, enfocados al control interno de

las funciones de la empresa.

o El manual de gestión medioambiental, es un documento donde se citan todos los componentes del SGMA. Constituyendo una herramienta fundamental para mantener y revisar dicho sistema a lo largo del tiempo.

o Los registros proporcionan evidencias escritas acerca de la ejecución del

SGMA.

Formación e información de los empleados. Todo el personal de la empresa debe de concienciarse respecto a las consecuencias medioambientales que desarrolla su actividad, y respecto a la importancia del SGMA. La política medioambiental de que se dote la empresa deberá ser conocida por todos empleados de la misma, debiendo asumir estos su papel y responsabilidades dentro del nuevo sistema de gestión.

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Las empresas aplicarán programas de formación a todos los niveles, para capacitar a los empleados en sus responsabilidades dentro de la aplicación del SGMA. La comunicación interna debe ser bidireccional, poniendo los canales adecuados para la participación de los empleados en todos los niveles.

Comunicación externa. Consiste en responder las solicitudes de información, por parte de agentes interesados, sobre datos referentes a la influencia medioambiental de la actividad de la empresa.

d) Revisión del sistema de gestión medioambiental

Auditorias del SGMA. Con una periodicidad determinada, en función de la situación, necesidades de la empresa y del riesgo de sus actividades, se programará un sistema de auditorias medioambientales con los siguientes objetivos:

o Evaluación de la eficacia del SGMA o Verificación del cumplimiento de los objetivos fijados. o Determinación de su coherencia con la política de la empresa y con el

programa de gestión medioambiental. o Preparación de un plan de medidas correctoras para corregir las

desviaciones y para incorporar nuevas técnicas y avances

Revisión del SGMA. La alta dirección revisará el SGMA de forma periódica.

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e) Certificación del SGMA

Solicitud del certificado y validación del organismo acreditador. Por último y siempre que la empresa lo desee, se tramita la certificación, solicitando al organismo correspondiente la acreditación de su SGMA. La empresa, entonces, se verá sometida a una inspección/verificación que decidirá el veredicto sobre el certificado.

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3. Ventajas e inconvenientes de la aplicación de un SGMA Las ventajas directas se obtienen por la propia implantación del SGMA, y podemos considerar las siguientes:

1. Seguridad en el cumplimiento de la legislación vigente, y por lo tanto soslayar la posibilidad de sanciones por parte de la inspección.

2. Reducción de costes de producción. El establecimiento de procedimientos,

controles y formularios para reducir el impacto ambiental redunda en eliminar los derroches en el consumo de recursos naturales y por lo tanto también en un beneficio económico para la empresa.

En PYMEs de hasta 20 trabajadores, con una facturación anual que no supere los 1,5 millones de euros, tanto del sector industrial como de servicios, los ahorros estimados son: o En materias primas, entre un 2% y un 8%. o En material de envase y embalaje, entre el 25% y el 60%. o En materias auxiliares entre el 10% y el 25%. o Respecto a los tiempos de producción (menos paradas por defectos,

fallos y roturas), entre el 10% y el 20%. o En la producción de residuos entre un 20% y un 45% menos. o Respecto a la emisión de vertidos, una reducción de entre un 20% y un

80%. o Y, un ahorro de energía eléctrica y combustibles de entre el 10% y el

25%.

3. Ayuda a conseguir una mejor organización interna, por medio de:

o Implantación de un objetivo de empresa, plasmado en una Política. o Establecer objetivos de mejora, por medio de análisis de la situación,

recursos y necesidades. o Define los puestos de trabajo, con su formación mínima, funciones y

responsabilidades. o Implanta un mecanismo de comunicación, formación y motivación

interna. o Establece instrucciones de trabajo y procedimientos que permiten realizar

tareas de la manera más eficaz posible. o Establece controles de almacenes y stocks. o Creación de un Plan de Emergencias. o Establecer indicadores tanto medioambientales como de producción.

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o Instaura un sistema de resolución de problemas. o Se establecen auditorias sistemáticas en toda la organización.

4. Las empresas ante la última normativa de la norma ISO 9001:2000 que

incorpora exigencias de control del puesto de trabajo y del medio ambiente, están optando por la implantación de sistemas de gestión medioambiental ligados a la certificación ISO 9001 de calidad.

5. La disminución del riesgo medioambiental, supone optar a importantes

reducciones de primas en los seguros medioambientales. E incluso en algunos casos es un requisito necesario para suscribir un seguro el tener un SGMA.

Las ventajas indirectas, se derivan de la obtención de un Registro

Medioambiental de empresa. Y podemos destacar: 1. Mejora de la imagen de la empresa. Se percibe por el personal de la empresa,

clientes, administración y sociedad en general la imagen de una empresa respetuosa con el medio ambiente.

2. Aumento de la competitividad. Permite abrir nuevos mercados y mantener

aquellos cada vez más exigentes.

En el caso de empresas que optan a concursos públicos, la obtención del Registro EMAS les da una ventaja competitiva directa, al puntuar entre un 10% y un 20% en determinados concursos, por encima de las empresas sin sistemas certificados o con la ISO 14001.

3. Mejora de las relaciones internas y externas. Tanto con los trabajadores de la

propia empresa aumentando su motivación como con la comunidad local, administración, clientes, etc.

Respecto a los inconvenientes podemos mencionar:

1. Los costes económicos del proceso. Estos varían ampliamente dependiendo del tipo de empresa, actividad que realice, legislación ambiental que se aplique y estado medioambiental de la empresa en el momento de iniciar el proceso. También influyen factores como la formación del personal y los requisitos medioambientales que impongan los clientes. Los costes de implantación vienen ligados a:

o El asesoramiento especializado externo que se tenga que contratar

para asegurar la efectividad de la implantación. o El tiempo de dedicación del personal interno. Este es muy variable

pero en el caso de una PYME se estima que estaría en: i. Dirección, entre 2% y 5%.

ii. Responsable de Medio Ambiente, entre el 30% y el 100%. iii. Mandos intermedios (oficinas) entre el 2% y el 8%. iv. Mandos intermedios (planta) entre el 2% y el 15%. v. Operarios entre el 0,1% y el 1%.

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De todas formas influirá en ello la formación y sensibilización del personal, la actividad y el tipo de empresa y el tipo de asesoramiento externo contratado.

o La formación del personal, que se debe considerar como una inversión que afectará a la motivación y capacidad de trabajo.

o Adecuación de las instalaciones a la legislación medioambiental vigente. Lo que se debe de considerar como una necesidad del propio funcionamiento de la empresa que tarde o temprano deberá de realizar.

o Costes del Registro del SGMA, este en el EMAS es gratuito, no así en la ISO 14001.

o Costes de las auditorias medioambientales. o Coste de mantenimiento del propio SGMA, este en una PYME lo

pueden llevar a cabo el propio personal de la empresa asumiendo, además se sus tareas, las responsabilidades medioambientales.

2. Cambios en la estructura empresarial. La implantación de un SGMA supone

un impacto importante en la mentalidad de la organización, que puede implicar reticencias en algunas personas. Así:

o Se definirán nuevas responsabilidades respecto al medio ambiente. o Se establecen cambios en las prácticas y procedimientos de trabajo. o Un ligero aumento de la burocracia que supone el manejo de la

documentación necesaria para seguir el cumplimiento del SGMA. o El sometimiento a auditorias internas anualmente. o En el caso del EMAS el tener que realizar una Declaración

Medioambiental pública donde la empresa expone datos del funcionamiento de su sistema, el grado de cumplimiento de sus objetivos y los problemas medioambientales.

4. Norma UNE-EN ISO 14.001 y Reglamento Europeo (EMAS) 4.1. Norma UNE-EN ISO 14.001.

Las normas ISO 14.000 son una serie de normas sobre gestión ambiental que se han ido generando en el marco de la Organización Internacional para la Normalización (ISO). Se trata de normas voluntarias y aprobadas por consenso, que buscan evitar medidas comerciales proteccionistas expresadas bajo exigencias ambientales unilaterales. Constituyen, además, un poderoso instrumento para medir y caracterizar el comportamiento ambiental de las empresas. Las ISO 14.000 buscan alcanzar los siguientes objetivos: 1) Promover un enfoque de la gestión ambiental común y similar a la gestión de la calidad. 2) Potenciar la capacidad de una organización para lograr y medir mejoras en su desempeño ambiental. 3) Facilitar el comercio y remover barreras no arancelarias. Actualmente se encuentran en proceso de desarrollo las siguientes normas: ISO 14.001 Sistemas de gestión ambiental. Especificaciones y guía de aplicación. ISO 14.004 Sistemas de gestión ambiental. Pautas generales sobre principios, sistemas y soporte técnico en gestión ambiental. ISO 14.010 Pautas de auditoria ambiental. Principios generales de auditoria ambiental.

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ISO 14.011 Pautas de auditoria ambiental. Procedimientos de auditoria. Parte I: Auditoria de sistemas de gestión ambiental. ISO 14.012 Pautas de auditoria ambiental. Criterios de calificación para auditores ambientales. ISO 14.015 Evaluación ambiental de plantas industriales. ISO 14.020 Objetivos y principios de todo etiquetado ambiental. ISO 14.021 Etiquetado ambiental. Declaración de características. Términos y definiciones. ISO 14.022 Etiquetado ambiental. Símbolos. ISO 14.023 Etiquetado ambiental. Metodologías de muestreo y verificación. ISO 14.024 Etiquetado ambiental. Principios, prácticas y procedimientos de certificación. ISO 14.031 Evaluación del desempeño ambiental del sistema de gestión ambiental y su relación con el medio ambiente. ISO 14.040 Gestión ambiental. Evaluación del ciclo de vida. Principios y pautas generales. ISO 14.041 Gestión ambiental. Evaluación del ciclo de vida. Análisis de inventario. ISO 14.050 Términos y definiciones. ISO 14.060 Pauta para la inclusión de aspectos ambientales en las normas de productos. Fte: Revista Ambiente y Desarrollo VOL XIII nº 4 diciembre 1997 CIPMA

La International Standard Organisation (ISO), tras varios años de estudios del Comité Técnico creado ad hoc, publica en 1996 la Norma 14001:1996, Sistemas de Gestión Medioambiental. Especificaciones y directrices para su utilización. Norma que al año siguiente es aprobada por el Comité Europeo de Normalización como norma europea (norma EN ISO 14001:1997), adquiriendo rango de norma nacional en todos los países miembros (en España UNE-EN ISO 14001:1996).

Características de la ISO 14001: - Voluntaria (ningún texto legal obliga a implantar sus requisitos). - Basada en la mejora continua del comportamiento medioambiental de la

organización. - De aplicación internacional a todos los tipos y tamaños de la organización. - No establece criterios específicos sobre el comportamiento medioambiental

de la organización, ni los medios para ampliar sus requisitos. - Contiene requisitos auditables para conseguir la certificación que llevan a

cabo entidades externas reconocidas por la organización ISO. - Puede complementarse con la familia de normas ISO 9000.

Evolución del número de centros certificados en España según ISO 14001

(Si desea consultar más detalles sobre la norma ISO 14001, visite la página web oficial de ISO (International Organization for Standarization) www.iso.org.)

4.2. Reglamento (CEE) 1836/93 (EMAS)

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En 1993 la Comisión Europea aprobó el Reglamento Europeo sobre auditorias y

sistemas de gestión medioambiental: Reglamento 1836/93 del Consejo, de 29 de junio de 1993, por el que se permitía que las empresas del sector industrial se adhirieran con carácter voluntario a un sistema comunitario de gestión y auditoria medioambiental.

Recientemente este reglamento ha sido sustituido por el Reglamento 761/2001,

aprobado el 19 de marzo de 2001, que establece un Sistema Comunitario de Gestión y Auditorias Medioambientales (EMAS), para la evaluación y mejora del comportamiento medioambiental de las organizaciones y para la difusión de la información pertinente al público y otras partes interesadas.

En el reglamento de 1993 se establecía la obligatoriedad de un SGMA para la

mayor parte del sector industrial a partir del 2.000, pero la fuerte presión ejercida por este sector hizo cambiar dicha opinión, y mantener la aplicación de la norma como voluntaria. En el Reglamento del 2001, además de mantenerse el carácter voluntario de la norma, se extiende la posibilidad de su aplicación a todo tipo de organizaciones1 que se propongan mejorar su comportamiento medioambiental global

Entre las novedades que incluye el nuevo reglamento cabe destacar: - Su orientación hacia compatibilizarlo con la Norma EN ISO 14001:1996.

Copiando literalmente los mismos “requisitos del sistema de gestión medioambiental” mediante la inclusión en Anexo I.A del Reglamento de un texto similar al de la sección 4 de la Norma. Ahora bien, toda aquella organización que pretenda ser incluida en el Registro EMAS y que cuente con la certificación en base a la norma ISO 14001:1996, deberá demostrar al verificador medioambiental que cumple con los requisitos establecidos por este reglamento y que no están cubiertos por dicha norma (entre los que se encuentran los relativos a la Declaración Medioambiental del Art. 3).

- Se destaca la importancia que se confiere a la implicación de los trabajadores

en el proceso destinado a la mejora continua del comportamiento medioambiental de la organización (Anexo I-B.4).

- Una mayor exigencia a las organizaciones respecto no solo al conocimiento y

cumplimiento de la normativa que afecte a su actividad, sino también se les exige estar actualizados periódicamente respecto a las novedades en materia de legislación.

Características del Reglamento EMAS

- Directamente aplicable en todos los estados de la UE y a cualquier

organización. - De carácter voluntario. - Gradual (permite a las organizaciones establecer el programa de actuaciones

que consideren necesario). 1 Por organización se entiende según el art. 2.s) “La compañía, sociedad, firma, empresa, autoridad o institución, o parte o combinación de ellas, tenga o no personalidad jurídica, sea pública o privada, que tiene sus propias funciones y administración”.

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- Sometido a esquemas de certificación. - Respaldado por las administraciones estatales y autonómicas. - Obliga a un cumplimiento estricto de la legislación medioambiental. - La organización es validada por un órgano competente institucional.

Número de centros verificados según reglamento EMAS en la UE y Noruega

(Para consultar la norma de modo gratuito, así como las organizaciones registradas, usted puede visitar la web de Ministerio de Medio Ambiente, www.mma.es o de la UE: http://www.europa.eu.int/comm/environment/emas/about/participate/sites_en.htm)

Tanto en el ámbito comunitario como en el estatal, las empresas registradas en el sistema EMAS es comparativamente mucho menor. En octubre del año 2002, 3.796 centros de la Unión Europea (y de Noruega) habían obtenido dicho registro, estando representado el Estado Español por 243. 4.3. Diferencias entre el registro EMAS y el certificado ISO 14001 La diferencia principal es que el Registro EMAS supone la implantación de un sistema ISO 14001 cumplimentado con una serie de requisitos adicionales, entre los que destaca una mayor implicación del personal de la empresa y, sobre todo, una mayor información pública. De esta forma el EMAS es mas completo que el certificado ISO 14001. Como diferencias entre ambos cabe mencionar:

1. EMAS no es un modelo de sistema de gestión medioambiental, sino un Reglamento que articula el mecanismo para obtener un registro europeo, dentro del cual se incluye un modelo de sistema a implantar; ISO 14001 es un modelo.

2. El certificado ISO 14001 lo otorgan Entidades Independientes que pueden o

no estar acreditadas para ello. El Registro EMAS debe ser otorgado por entidades acreditadas por un Estado miembro de la UE. Entidades que en la práctica también están acreditadas para otorgar la certificación ISO 14001.

En cuanto a los diferentes requisitos que requieren cada uno de los dos sistemas

de gestión medioambiental, tenemos:

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REQUISITO EMAS ISO 14001

Análisis medioambiental previo

Es obligatorio, excepto en los casos en los que se disponga de un sistema de gestión certificado. Se indican los contenidos mínimos que debe contener.

Es aconsejable pero no obligatorio

Cumplimiento de la legislación

La empresa debe haber adoptado todas las disposiciones oportunas para su cumplimiento

Es suficiente la existencia de un compromiso de cumplimiento de la legislación

Comunicaciones externas

Debe demostrarse la existencia de un diálogo abierto con el público y las partes interesadas

Debe existir un proceso de comunicaciones con el exterior

Implicación de los trabajadores

Se deberían utilizar formas apropiadas de participación, pudiendo participar los representantes de los trabajadores

Debe estar suficientemente formado y sensibilizado, existiendo vías de comunicación interna.

Auditorias medioambientales internas

Como mínimo cada 3 años. Y se establecen los requisitos para su realización

De forma periódica, sin establecer un período prefijado. Se regulan por la norma ISO 14001

Declaración Medioambiental

Es obligatoria y en el Reglamento se indica cual debe ser su contenido

No se exige