Quantum Zen

Una descripción cuántica de la conciencia

a la luz de la práctica de zazen

Ediciones Kosen Sangha

ÍNDICE

Conciencia cuántica-La experiencia subjetiva vista desde de la física cuántica……. pág. 3-Budismo y conciencia…………………………………………….. pág. 4-Medicina China y conciencia……………………………………... pág. 6-Partículas de conocimiento…. pág. 9-Procesamiento de la información en el esqueleto celular…….. pág 11-Reducción subjetiva y objetiva……………………………….. …. pág.12

En las fronteras de la realidad-La conciencia y la reducción del estado cuántico………………. pág. 17-La conciencia y la geometría del espacio-tiempo………………. pág. 21-La decoherencia y la experiencia conciente…………………….. pág. 26

Espacio y tiempo-La conciencia modela el espacio-tiempo………………………… pág. 29-Múltiples posibilidades y una realidad…………………………… pág. 33-Efectos gravitatorios de la información………………………….. pág. 34-Propiedades holográficas de la conciencia……………………… pág. 38

Conciencia y computación cuántica-Las proteínas y los qubits……………………… …………………. pág. 41 -Las proteínas en los microtúbulos............................................... pág. 45-¿Cómo hace el citoesqueleto para procesar la información?..... pág. 49-Los microtúbulos son computadoras cuánticas…………………. pág. 53- Conocimiento y colapso coordinado de la función de onda…… päg. 55

La conciencia y zazen-cognición y atención…………………………………………………. pág. 58-El centro de la atención…………………………………………… . pág. 60-La observación modifica el espacio-tiempo……………………… pág. 64-Mundo interior, mundo exterior…………………………………… pág. 65

La observación de la conciencia -Enseñanza del Maestro Kosen……………………………………. pág 68

Sanación y conciencia cuántica

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-Hacia una medicina del espíritu…………………………… …… pág. 71-El lenguaje del ADN…………………………………………….. pág. 72-El ADN fantasma………………………………………………. pág. 74-Enseñanza del Maestro Kosen……………………………… .. pág. 75-Fotones que curan……………………………………………… pág- 77-La química de zazen…………………………………………. pág. 79

Conciencia cuántica

La experiencia subjetiva vista desde de la física cuántica

La conciencia posee características que la hacen difícil de comprender e investigar para la neurociencia. Ya que la descripción clásica del mundo macroscópico es insuficiente y por lo tanto la metodología experimental es limitada y generalmente tendenciosa.

Por eso vamos a recurrir a la teoría cuántica, que explica el comportamiento fundamental de la materia y de la energía, para tratar de describir, en términos científicos, el fenómeno de la experiencia conciente y los procesos físicos que se producen en el interior de las células para que tengamos una experiencia subjetiva. Teniendo en cuenta a priori las limitaciones del pensamiento humano. El estudio de las neuronas, no puede revelar por qué la incidencia de ondas de sonido en nuestros oídos da origen a nuestra experiencia subjetiva de la Quinta Sinfonía de Beethoven. Todas las teorías físicas, describen sólo funciones, como por ejemplo la memoria, la atención, la intención o la introspección, relacionadas con específicos procesos físicos del cerebro. Pero ninguna de estas teorías, cuánticas o neurológicas, pueden explicar por qué el ejercicio de estas funciones va acompañado de la experiencia subjetiva.Por mucho que aprendan sobre el cerebro, los neurocientíficos no podrán nunca explicar la experiencia subjetiva con una teoría estrictamente física.

Esto representa un problema para la ciencia.

El objetivo de este trabajo no es profundizar en debates conceptuales, sino que es el de difundir información que ayude a profundizar la experiencia de zazen y ampliar el conocimiento de si mismo. Luego, no es necesario pensar demasiado, la práctica de zazen lo incluye todo. Conocimiento directo.

Así que vamos a hacer al revés: trataremos, a partir de la experiencia subjetiva que surge de la práctica de zazen, de comprender el funcionamiento del cerebro y la conciencia con el aporte de información científica.Pero comencemos con algunos conceptos básicos.

La física cuántica   describe el comportamiento extraño de la materia y la energía  que componen nuestro universo en un nivel fundamental.  En la base de la teoría cuántica está la dualidad onda / partícula de los átomos y sus componentes..

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Mientras que un sistema cuántico como un átomo o una partícula subatómica permanezca aislado de su entorno, se comportará como una "onda de posibilidades" y existirá en un estado de "superposición" (coherente) de muchos estados posibles. Hay algunas peculiaridades en el comportamiento de los sistemas a nivel cuántico, como ser la coherencia cuántica (que corresponde a estados en superposición) y el colapso o “reducción objetiva” (RO) de la función de onda, que son esenciales para la aparición de la experiencia conciente.

Todo indica que estos procesos se producen en el citoesqueleto de las células nerviosas en el cerebro, si bien no es posible “objetivar” la percepción subjetiva, la experiencia “interior”, el libre albedrío, etc., podemos tratar de comprender los mecanismos que hacen que seamos concientes y podamos expandir y dirigir la conciencia.

Es interesante, porque la experiencia individual es fundamental. Nuestras experiencias aportan información al medio. Es la naturaleza misma del universo. Una característica entrópica de la conciencia. La conciencia que es información se retroalimenta con más información.

Partimos de la base que cada célula es una unidad conciente, es decir, la célula tiene un nivel de conciencia que le permite interactuar dinámicamente con el medio: nutrirse, multiplicarse, cumplir sus funciones, adaptarse a los cambios, defenderse. Cada célula “sabe” lo que debe hacer, lo que necesita y lo que no Nuestro cuerpo es especialista en supervivencia y adaptación al medio, y esto solo es posible si hay una conciencia fundamental que se mueve.De manera que existe una protoconciencia o conciencia fundamental que lo impregna todo.La experiencia protoconciente es una propiedad básica de la realidad física. Cualquier forma de vida, desde un simple unicelular hasta un organismo complejo, incluye un grado fundamental de conciencia.

El universo es conciencia viva

La conciencia no está limitada al cerebro, pero es en el cerebro donde emergen los procesos mentales y se integra toda la información recibida para elaborar una respuesta. Es el hardware. El cerebro es el proyector holográfico de la realidad. Toma la información, la clasifica, la integra y listo: ¡luz, cámara…acción!

Esta observación de la conciencia es tan antigua como la humanidad. En el budismo se explica la experiencia conciente describiéndola en 5 agregados o componentes: (ver “los 5 skandhas”). Todo lo que percibimos existe en una relación de interdependencia con lo demás.

Budismo y conciencia

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A lo largo de los siglos, a partir de la experiencia práctica de zazen, el budismo ha profundizado acerca de los niveles de conciencia y de la verdadera naturaleza de la experiencia conciente.

La palabra sánscrita vijnana, que se traduce como conciencia, incluye una amplia gama de actividades, como la sensación, la cognición, la voluntad y el pensamiento conciente.

En el siglo 4, el gran maestro indio Vasubandhu describía a la conciencia en 9 niveles.Según esta enseñanza budista, hay nueve niveles de conciencia que están operando constantemente juntos para crear nuestra vida.

Una sola conciencia con diferentes niveles de manifestación.

Vasubandhu

Las primeras cinco conciencias corresponden a los órganos de los sentidos: la vista, el oído, el olfato, el gusto y el tacto.

La sexta conciencia es la función que integra y procesa los diversos datos sensoriales con información contenida en la memoria para dar un sentimiento unificador de lo que percibimos, es un tipo de pensamiento general o conciencia, que nos permite identificar la información recibida por los cinco sentidos. Es principalmente con estas seis funciones de la vida que realizamos nuestras actividades diarias. La realidad que experimentamos está creada por estos niveles de conciencia. Que dependen del soporte físico para su aparición. Es el nivel más elemental, corresponde a vibraciones en el plano físico y material. En este nivel la realidad que se percibe es física y por lo tanto más densa y limitada.

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A continuación está la séptima conciencia. A diferencia de los niveles anteriores que están dirigidos hacia el mundo exterior, la séptima conciencia está dirigida hacia nuestra vida interior y es, en buena parte, independiente de los datos sensoriales. La séptima conciencia es la base de nuestro sentido de identidad. El apego a un yo individual, distinto y separado de los demás tiene su base en esta conciencia, así como nuestro sentido de lo bueno y lo malo.

Es el asiento de los valores morales fundamentales y la base del continuo diálogo interno. Se conoce como la conciencia mano. Este estrato corresponde al subconsciente que se describe en la psicología moderna y es en donde reside nuestro sentido profundo del ego.

Debajo de la séptima conciencia, hay un nivel más profundo, la conciencia ālaya u octava conciencia, también conocida como la conciencia imperecedera o almacén universal. Este estrato de la conciencia contiene la energía potencial, tanto positiva como negativa, creada por nuestros pensamientos, palabras y acciones. Es aquí donde reside la energía de nuestro karma. Alaya Influye en las actividades de las otras conciencias.Mientras que las primeras siete conciencias desaparecen al morir, la octava conciencia persiste a través de los ciclos de la vida y la muerte. .La conciencia âlaya, es el inconsciente que contiene y almacena todas las potencialidades y alimenta la conciencia. Es el alma universal (anima mundi). La conciencia que recoge y conserva las experiencias individuales y colectivas.

Finalmente, está la novena conciencia. Es el nivel más fundamental. Es el origen mismo de la vida universal, este nivel abarca y sustenta, incluso, la función de la conciencia âlaya. Esta es la conciencia amala, la cual tiene el poder de transformar el flujo de energía e incluso a la materia.

La conciencia tiene el poder de crear universos.

Medicina China y conciencia

Para la Medicina china, cuerpo y mente son de una misma naturaleza: la curación del cuerpo incluye la de la mente y viceversa. La diferencia cuerpo-conciencia establecida por la filosofía occidental resulta incomprensible para el pensamiento chino. La importancia que se le concede a la mente y a las emociones es tal que el Neijing señala: “Si no se logra la mejoría espiritual y no se cura el mal mental, es imposible curar la enfermedad”.

Las actividades mentales se relacionan directamente con los distintos órganos y vísceras; el mal funcionamiento de cualquiera de ellos afecta a las emociones y sentimientos provocando la enfermedad.

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Existen puntos de acupuntura que se usan específicamente para abrir la conciencia espiritual, son los puntos celestiales.

La naturaleza luminosa del ser, se particulariza en el ser humano en cinco aspectos: Shen, Hun, Po y sus dos aplicaciones: Yi y Zhi, que arraigan en los cinco órganos y están relacionados con los cinco elementos.

 Aspectos de la conciencia

 elemento   Madera   Fuego  Tierra   Metal  Agua

 órgano  Hígado  Corazón   Bazo  Pulmón   Riñón 

conciencia  Hun  Shen  Yi  Po  Zhi

 

SHEN:

Shen es la energía espiritual y psíquica, la parte divina del ser, de naturaleza esencialmente luminosa. No tiene sustancia, pero proporciona expresión y apariencia a la sustancia.

Shen designa toda la actividad mental del ser humano. El Shen de una persona reside en el corazón (que está emparentado con el intestino delgado) y se puede ver fácilmente en los ojos. Los ojos de quien tiene un buen shen centellean y están vivos.

Corresponde al pensamiento conciente. Shen es la conciencia directora, la responsable de la coherencia mental y la inteligencia. Habita en el corazón y es indispensable para el equilibrio de las emociones. El exceso de alegría (como: superficialidad, exceso de placeres y avidez) produce excitación en el corazón, lo debilita y termina por provocar un “vacío”, originando un ciclo que va de la excitación a la depresión, dañando así la conciencia y la energía. La alegría controlada, en cambio, refuerza el fuego del corazón, estimula las funciones orgánicas, clarificando la mente y apaciguando el espíritu.

Hun:

Hun Yang, se relaciona con el cielo, genera los proyectos y gobierna el inconsciente. Está vinculado con el hígado-vesícula biliar. Representa la percepción de los hechos, los proyectos, la intuición y la imaginación. Desencadena los impulsos necesarios para emprender una acción. Se halla en relación con el atavismo, el instinto hereditario, la fuerza de la palabra, las pulsiones y las pasiones. Controla la imaginación y desempeña un papel esencial en todo acto de creación.

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Cuando se altera Hun, se afecta fácilmente la personalidad y entorno, además produce sueño agitado, pesadillas, proyectos excesivos e incoherentes y problemas de adaptación.

Como su naturaleza es movediza y penetrante, su alteración (estancamiento, bloqueos, frustración) provoca ira y descontento. Pero en su aspecto virtuoso representa la fe y las aspiraciones superiores. Cuando Hun puede expresarse y fluir genera un medio ambiente armonioso y creativo, donde la flexibilidad y el equilibrio es la norma.

Po:

Po Yin, se relaciona con la Tierra, es la parte más corporal de la conciencia. Determina las acciones y reacciones del organismo destinadas a escoger, sin que intervenga la mente, lo que es útil para su supervivencia y a rechazar lo que le es perjudicial. Se expresa en los instintos primarios (succión, deglución...), y más particularmente en el instinto de conservación, vinculado al apego inconsciente al cuerpo.

Anida en los pulmones que gobiernan el Chi. Su emoción es la melancolía y es dañada por el exceso de tristeza (separación, muerte de un ser querido, etc.). También un Chi de pulmón insuficiente puede afectar la conciencia y generar un cuadro depresivo.

Sus cualidades superiores son el coraje y la concentración (que está íntimamente ligada a la exhalación).

Hun es el aspecto más inmaterial de la conciencia, el alma divina, mientras que Po representa el lado más material, corporal, es el alma animal.

Yi:

Yi es la conciencia correspondiente a la reflexión, la memoria y el pensamiento. Está relacionada con el bazo-estómago y es uno de los grandes reguladores del Shen.

Yi es la memoria del pasado, que incluye a la memoria celular y al ADN y también se manifiesta como la capacidad de reflexión.

Su emoción es la preocupación que puede, muy pronto, convertirse en rumiación, es decir un tipo de pensamiento que da vueltas sobre si mismo, produciendo ansiedad, nerviosismo y enfermedades digestivas. En su aspecto positivo, Yi es la reflexión profunda que permite obtener información guardada en la memoria.

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Yi es la parte de nuestra mente responsable del registro de las experiencias, de su clasificación, conservación, compilación y reformulación. Al estar directamente unida a la memoria, gestiona la capacidad de integrar y reproducir informaciones. Esta ligada al aprendizaje.

 Zhi:

Zhi corresponde a la voluntad, a la determinación, a la capacidad para realizar una intención. Aporta autoridad y afirmación al yo.

Zhi se manifiesta como el deseo de realizar un acto, de emprenderlo, es la energía mental ligada a la fuerza del carácter. Reside en los riñones que, a su vez, controlan la esencia vital y la energía ancestral. Su deficiencia provoca miedo, indecisión y sometimiento; su exceso produce temeridad, autoritarismo y obstinación. Esta forma de conciencia también está ligada al deseo sexual. De la profundidad de los riñones brota la sabiduría. Cuando el Chi de los riñones es abundante genera un flujo de energía e información que estimula directamente la médula ósea y el cerebro. Este aporte de información tiende a materializarse en sustancia y en acción.

La actividad funcional de cada órgano depende de la información transmitida por estas “conciencias orgánicas”, cada una de las cuales se encarga de un aspecto particular de la personalidad, del control emocional y de los modos de comportamiento ante cada situación.

Partículas de conocimiento

El pensamiento conciente es un emergente de procesos subconscientes.

El pensamiento puede manifestarse porque a nivel cuántico se produce una reducción de los estados superpuestos no manifestados, en un único estado.Colapsa la función de onda y se genera la experiencia a nivel conciente. Una partícula de conocimiento. Esta reducción o colapso permite traspasar un umbral, por debajo del cual no se es conciente y luego si, aunque de solo una de las tantas posibilidades. La transición entre el subconsciente y el conciente es muy sutil y depende de muchos factores.

De manera que, como podemos ver, la conciencia individual es limitada y condicionada. El inconciente, que es la conciencia universal en si misma, representa el océano de potencialidad infinita, todas las posibilidades superpuestas y no manifestadas.

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Es interesante, porque esta descripción de los procesos mentales nos permite comprender que el pensamiento es simplemente una actividad de células especializadas en el cerebro. No tiene sustancia propia. No es “real”.

Es el resultado de la reducción de múltiples posibilidades en una sola. El pensamiento que emerge en el conciente ya fue modelado y condicionado en los niveles más profundos por los programas ahí instalados, entonces, ¿Quién soy en realidad? ¿Soy en verdad esto que pienso?

Maestro Sawaki

Si consideramos a la actividad mental conciente, como una actividad fisiológica más del cuerpo, al igual que la respiración, la digestión o cualquier otra función celular, sujeta a interrelaciones e influencias múltiples - internas y externas -, de esta forma podemos identificarnos menos con lo que nos “repite” la cabeza y podremos calmar la mente con más facilidad, sabiendo de antemano que se trata simplemente de actividad reactiva, solo existe en relación de interdependencia con el objeto o la cosa percibida, por eso se dice que no tiene existencia propia, por lo tanto no es real.

El maestro Dogen escribió en el siglo 13. “Si durante zazen el conciente permanece activo estaremos siempre encadenados a sus límites” (Gakudo yoshin-shu).

Para que el pensamiento no sea condicionado y tendencioso debe ser negado, filtrado y clarificado con el no pensamiento, la no conciencia. La observación profunda durante zazen permite comprender la raíz de las fabricaciones mentales y las ilusiones.

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El silencio interior y la inmovilidad es el punto de partida, el punto cero. ¿Como ser conciente de la no conciencia? ¿Cómo pensar sin pensar?

Zazen es la respuesta.

Procesamiento de la información en el esqueleto celular

Los  microtúbulos  (MT) del esqueleto celular o citoesqueleto, presentan características que los hacen adecuados para procesos cuánticos, por ejemplo: están conformados por una estructura enrejada o entrelazada parecida a un cristal, son huecos en el interior, se encargan de organizar la función celular y procesar la información.

El interior de los MT es un espacio aislado del exterior que permite al sistema mantenerse en un estado de coherencia cuántica y evitar así fenómenos de decoherencia o reducción aleatoria por la intervención del entorno.

Veamos esto con más detalles.

El citoesqueleto es una estructura dinámica ubicada en el interior de la célula que le permite a esta moverse, (mediante cilios y flagelos) y mantener la forma, además desempeña un importante papel tanto en el transporte intracelular de moléculas como en la división celular.

Este esqueleto celular es un entramado 3D de proteínas que provee el soporte interno para las células, fijando las estructuras internas de la misma. En las células eucariotas, esta formado por: microfilamentos de actina, filamentos intermedios y microtúbulos.

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El citoesqueleto es dinámico pero no pierde la capacidad de mantenimiento de la forma, la funcionalidad y la estructura de la red tridimensional que lo conforma.

Hasta ahora vimos la función de estas estructuras con respecto a la mecánica y a la fisiología celular. (más info)

Los MT están conformados por subunidades de una proteína llamada tubulina   y están asociadas a eventos cuánticos internos, además interactúan en cooperación con otras tubulinas (procesos de computación cuántica).

El estado de coherencia cuántica en los MT se corresponde con el procesamiento subconciente de la información, que va aumentando hasta que el grado de diferencia entre la coherencia masa-energía conduce a una suficiente separación de la  geometría del espacio-tiempo , entonces alcanza un umbral relacionado con la gravedad cuántica, el sistema debe elegir y de esta forma colapsa, se produce una reducción objetiva (RO) en una de las múltiples posibilidades. Un único universo se manifiesta.

Los estados en superposición   tienen cada uno su propia geometría del espacio-tiempo.

De esta manera, una superposición transitoria de pequeñas diferencias en la geometría del espacio-tiempo persiste hasta que una abrupta reducción cuántica clásica se produce. Estos grados de diferencia entre las geometrías de cada uno de los estados es información.

Los programas instalados en el subconsciente operan en este nivel. Luego solo hacen falta pequeños estímulos para que el sistema colapse en un estado programado y se genere un pensamiento ya condicionado.

El pensamiento conciente es un emergente de procesos subconcientes. El tiempo desde el momento en que se produce la reducción objetiva hasta que se es conciente es de 0,5 seg.

La repetición produce acumulación de información que luego condiciona al sistema para que colapse siempre en un mismo universo (una misma realidad).

Por eso es muy importante calmar la mente. Volver al punto cero, a la no conciencia, y desde ahí eliminar programas inútiles o nocivos e instalar buenos programas actualizados y un buen anti-virus, que nos permitan crear la vida que deseamos y disfrutar de ella.

Para este propósito necesitamos energía e información.

Los programas se instalan mediante la repetición.

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Reducción subjetiva y objetiva

En la reducción subjetiva (RS) de la teoría cuántica causada por la observación o el entrelazamiento con el medio ambiente, interviene el azar, el indeterminismo. El proceso tiene un componente aleatorio.

En cambio, la reducción objetiva (RO) en el interior de los MT, es debida a un auto-colapso y da lugar a patrones particulares en la conformación de las proteínas (tubulinas) que regulan actividades de la neurona, incluyendo funciones sinápticas (formación de nuevas redes neuronales).

La RO representa una autoorganización, un “autocolapso de la función de onda” a nivel cuántico, y está relacionado con la inestabilidad en los niveles más básicos de la geometría espacio-tiempo.

Científicos como Penrose y Hameroff  la llaman: “reducción objetiva orquestada" (Orch OR).

El cómputo cuántico, que como vimos ocurre en los microtúbulos (MT) del citoesqueleto celular, dentro de las neuronas del cerebro, une la cognición con la experiencia protoconciente (memoria) y con la información integrada en la geometría del espacio-tiempo (conciencia alaya).

El término reducción orquestada o coordinada (ROC) se debe a que al traspasar el umbral crítico hacia la experiencia conciente se efectúa una verdadera reacción en cadena generando un flujo de conocimiento.

Luego de sufrir la reducción cuántica, los posibles estados que adopten las proteínas tubulinas, serán también influenciados por otros factores como las proteínas asociadas a los microtúbulos (PAMT) que actúan como "nexos" sintonizando y coordinando las oscilaciones cuánticas.

También la información contenida en la conciencia almacén (alaya) modifica la geometría del espacio tiempo e influye en la RO.

La información depositada en la conciencia alaya, es igual a las semillas puestas en un suelo fértil, tarde o temprano brotaran y darán frutos. Hay semillas buenas y semillas malas. Semillas de buen karma y semillas de mal karma.

La energía se manifiesta cuando las condiciones son propicias.

He aquí la base de la retroalimentación (feedback) y de porque siempre tendemos a pensar lo mismo y a recrear la misma realidad.

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Desde el punto de vista del universo no hay diferencia entre el bien y el mal, pero en la vida humana, en el mundo de las diferencias, las buenas semillas darán buenos frutos que a su vez darán buenas semillas, lo mismo para las malas semillas (programas nocivos o inútiles).

Es fundamental plantar buenas semillas (buena información) ya que de acuerdo al principio de causalidad, a su vez generarán pensamientos positivos y una realidad más feliz.

A veces un "karma no manifestado" encuentra las condiciones para manifestarse y colapsa en una realidad, independientemente del tiempo, es decir, puede manifestarse después de años o incluso de vidas.

Según como pensamos generamos pensamientos acordes, en una retroalimentación (feedback) continua. A esto se le llama “mentalidad”.

La ciencia en general considera a la conciencia como una propiedad emergente de las redes neuronales. Es decir, la conciencia emerge de la actividad del hardware cerebral, que produce la experiencia mental (cerebro = computadora). Esta propuesta obviamente es limitada y no alcanza para explicar fenómenos tales como la experiencia subjetiva, la vida interior, el libre albedrío, las premoniciones, la intuición, la voluntad, la creatividad, etc.

Algunos científicos empiezan a aceptar el hecho que debe existir una “protoconciencia”, una conciencia fundamental del universo, a partir de la cual se manifiesta la conciencia y la experiencia individual y no es computable,

¿Qué puede hacer la ciencia con la experiencia subjetiva?

Para algunos físicos, todo encaja dentro de la actividad neuronal, es decir, la conciencia es un producto de reacciones fisicoquímicas en el interior del cerebro. Argumentan que la conciencia se desarrolla en el individuo después del nacimiento, madura (junto con el sistema nervioso) y obviamente muere con el individuo. No se puede demostrar nada fuera de esto.

Actualmente otros científicos, menos convencionales y de mente más abierta, no creen que con la metodología convencional se pueda explicar la experiencia subjetiva.

Ya en la antigua Grecia, existían discusiones de este tipo. De un lado estaba Sócrates el cual sostenía que es el cerebro el que crea la conciencia,y del otro lado había gente como Aristóteles, Demócrito y Thales, que argumentaban que las cualidades mentales pertenecían y emergían de la realidad fundamental.

Quizás ambos lados tenían razón.

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La idea de la ciencia convencional es que la mente es una función computacional, un algoritmo   de las redes neuronales en el cerebro.

Se describe una actividad sincrónica oscilante de alta frecuencia (ondas gamma de más de 40 Hz) que forma bucles de retroalimentación en las neuronas del tálamo y de la corteza cerebral. Estas ondas “barren” y atraviesan el cerebro en un verdadero flujo de conocimiento, encendiendo y conectando grupos neuronales incluso a distancia de manera simultánea.

Una marea de conocimiento.

Las altas frecuencias, por arriba de 40 Hz, llamadas “coherentes” han sido sugeridas como mediadoras de los vínculos temporales de la experiencia conciente. Es decir, para que se genere la experiencia conciente, se debe traspasar cierto umbral, por debajo del cual todavía no hay separación de los posibles estados (están en superposición cuántica) y por lo tanto no hay cosa u objeto de percepción.

Pero, ¿es suficiente con algunas descargas neuronales y transmisiones sinápticas para que se genere un pensamiento, la experiencia subjetiva o la libre voluntad? ¿Significa esto que nuestras emociones y pensamientos son el resultado de la actividad electroquímica en el interior de las células?

Evidentemente esto sería así si consideramos solo el lado físico, material y dejamos de lado la experiencia subjetiva. Esto es lo que convencionalmente hace el método científico: trabaja solo con lo que es comprobable por elm observador, que como sabemos es relativo. Además se parte de una premisa falsa al no considerar que el universo “es” conciencia y que el ser humano, y su conciencia de si mismo, emerge de esta fuente de potencialidad infinita.

Sin sujeto no hay objeto. No existe el objeto fuera del sujeto. Sin observador no hay realidad. Sin la observación no hay objeto de percepción.

Así que incluso si la teoría parece muy sofisticada, la ciencia permanece limitada, se queda corta, se ve obligada a crear parámetros y constantes ilusorias para que cierren sus ecuaciones y teorías, porque le falta lo fundamental: la experiencia subjetiva, o sea el conocimiento directo.

Pero por otra parte es evidente que sin cerebro no hay conciencia. La parte física es fundamental. El hardware. Los procesos mentales, las emociones y sentimientos se corresponden exactamente con todo un universo físico y de reacciones químicas, que a su vez tienen una interrelación con los procesos orgánicos. Se puede comprobar desde otro lado por las lesiones cerebrales y su relación con la conciencia.

La antigua ciencia taoísta y la sabiduría del budismo han indagado esto, por otro camino: el de la experiencia subjetiva. Mediante la práctica de zazen, la

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concentración y profunda observación de su verdadera naturaleza. Conocimiento directo. El ser humano y su relación con el universo. Somos concientes porque el universo es conciente. Y si es conciente también está vivo. Si la energía no puede ser creada ni destruida, ¿por qué la conciencia lo sería?

Energía y materia se transforman entre si.

El verdadero sustrato del universo es la conciencia

¿Y la mente?

Espíritu, energía y materia surgen de la misma fuente original, por eso pueden transformarse entre si, porque en esencia son lo mismo. Por eso se dice cuerpo y mente son uno. Solo que en la realidad física cotidiana, toman forma diferente, cumplen distintos roles, pero expresan la misma verdad.

De esta forma la conciencia influye en el mundo físico, de hecho lo crea y lo organiza. Por otra parte, sin materia no hay objeto de percepción ni experiencia subjetiva. En el caso de un organismo, sin el cuerpo físico no existiría.

Ese es el sentido de la realidad física: soporte y vehículo de experiencia espiritual. No hay separación.

Somos el universo experimentándose a si mismo.

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En las fronteras de la realidad

La conciencia y la reducción del estado cuántico

En el universo más allá del átomo, la materia y la energía presentan características que escapan a nuestra comprensión ordinaria, como por ejemplo la extraña dualidad onda / partícula. Un electrón o un fotón pueden comportarse como una onda o como una partícula. Como una onda de posibilidades o como una partícula de experiencia.Esto no se corresponde con la realidad cotidiana macroscópica.

Dualidad onda/partícula

La física cuántica describe como es el universo en sus niveles microscópicos. A principios del siglo 20, el físico alemán Max Planck enunció la hipótesis de que la radiación electromagnética es absorbida y emitida por la materia en forma de cuantos de luz o fotones de energía mediante una constante estadística, que se denominó constante de Planck.

Describiendo la cuantización de la energía, Max Planck resolvió el espectro de la radiación del cuerpo negro. La energía total del cuerpo negro resultó que tomaba valores discretos más que continuos. Este fenómeno se llamó cuantización, y los intervalos posibles más pequeños entre los valores discretos son llamados quanta (singular: quantum, de la palabra latina para "cantidad", de ahí el nombre de mecánica cuántica). El tamaño de un cuanto es un valor

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fijo llamado constante de Planck, y que es equivalente a 6.626 ×10-34 julios por segundo.La energía de la radiación térmica (como la de un radiador casero) no es de emisión continua, sino que se presenta en forma de discretos «paquetes de energía» o quanta. Einstein postuló que todas las formas de radiación electromagnética pueden aparecer no sólo en forma de ondas, sino también como cuantos. Estos cuantos luminosos, o paquetes de energía, han sido aceptados como auténticas partículas. Una partícula, que es lo que más se acerca a la definición de “cosa”, es en realidad ¡un paquete de energía!

En 1925 Louis de Broglie propuso que cada partícula material tiene una longitud de onda asociada, inversamente proporcional a su masa, (a la que llamó momentum), y dada por su velocidad. Poco tiempo después Erwin Schrödinger formuló una ecuación de movimiento para las "ondas de materia", cuya existencia había propuesto de Broglie y varios experimentos sugerían que eran reales.

La energía se intercambia de forma discreta y no continua

Ahora sabemos que el espacio-tiempo a escalas muy pequeñas no es suave y predecible, sino caótico y rugoso, cuantificado. Esta granulosidad ocurre en las dimensiones muy pequeñas de la escala de Planck: a 10-33 centímetros y 10-43

seg.Es como si observáramos el mar desde un avión. A gran altura parece liso y calmo. Sin embargo, si estuvieras en un pequeño bote flotando en su superficie, serías sacudido por el oleaje (rugosidad) del mar, invisible desde lo alto. Igualmente a medida que descendemos en la escala por debajo del tamaño de los átomos (10-8 cm) el espacio vacío parece suave hasta que a la increíblemente pequeña "escala de Planck", se vuelve granuloso y agitado. (ver más adelante: espacio-tiempo).

Otra característica de la dualidad onda/partícula descripta por Werner Heisenberg es el principio de incertidumbre, el cual establece que no se puede conocer simultáneamente con absoluta precisión la posición y el momento de una partícula. La interpretación de Copenhague señala el hecho de que el principio de incertidumbre no opera en el mismo sentido hacia atrás y hacia delante en el tiempo. Muy pocos hechos en física tienen en cuenta la forma en que fluye el tiempo, y este es uno de las cuestiones fundamentales del universo donde ciertamente hay una distinción entre el pasado y el futuro.

Las relaciones de incertidumbre indican que no es posible conocer la posición y el momento simultáneamente y en consecuencia no es posible predecir el futuro, Con respecto a esto Heisenberg decía: “no podemos conocer, por principio, el presente en todos sus detalles”.

Pero es posible de acuerdo con las leyes de la mecánica cuántica conocer cual era la posición y el momento de una partícula en un momento del pasado. El

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futuro es en esencia impredecible e incierto, mientras que el pasado es completamente definido. Por lo tanto nos movemos de un pasado definido a un futuro incierto.

Entrelazamiento cuántico

Si medimos con precisión la posición de una partícula la forzamos a presentar mayor incertidumbre en su momento, y si hacemos un experimento para medir propiedades ondulatorias se eliminan peculiaridades corpusculares (particulares), no podemos mostrar experimentalmente ambos aspectos, el ondulatorio y el corpuscular simultáneamente.

Por ejemplo: observamos un átomo y vemos un electrón en el estado de energía A, después volvemos a observar y vemos un electrón en el estado de energía B. Uno supone que el electrón saltó de A a B, quizás a causa de la observación. De hecho, no podemos saber exactamente si se trata del mismo electrón y tampoco podemos hacer hipótesis de lo que ocurría cuando no se observaba. Lo que se puede deducir de los experimentos, o de las ecuaciones de la mecánica cuántica, es la probabilidad de que si al observar el sistema se obtiene el resultado A, otra observación posterior proporcione el resultado B, pero no podemos afirmar lo que pasa cuando no se observa ni cómo pasa el sistema del estado A al B.

La realidad depende del observador, el observador es modelado por la realidad. No existen separados. Sin observador no hay objeto de percepción, sin objeto de percepción no hay observador. ¿Existe algo si no lo observamos? Existe, no existe y ambos al mismo tiempo, Existe y no existe en una superposición de posibilidades que luego de la observación colapsará o sufrirá una reducción en un único estado.

¿Y que pasa con nosotros, existimos si no nos observamos? Si no se es “conciente” de si mismo, ¿el “yo” existe en verdad? Nuestro yo individual (particular) ¿de que depende para existir? ¿Existe por si mismo?

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Hay ciertas características de los estados cuánticos que pueden relacionarse con la conciencia, mejor dicho, con la experiencia conciente. La teoría cuántica puede explicar, o en todo caso ampliarnos la información, acerca de los fenómenos que ocurren a nivel microscópico entre la conciencia y la materia y la dinámica de sus transformaciones.

Una de estas peculiaridades es que las grandes colecciones de sistemas onda/partícula a nivel cuántico pueden fusionarse y unificarse en estados coherentes de tamaño e influencia en el mundo macroscópico. Por ejemplo: los superconductores, los condensados   de Bose-Einstein   y el láser   son estados unificados en que los átomos o moléculas que los componen abandonan su identidad y renuncian a un comportamiento individual. 

Tales estados cuánticos coherentes se producen entre las proteínas del cerebro para proporcionar un sentido unificador y "vinculante" en la percepción de si mismo y del entorno. Es lo que nos permite percibir y crear una realidad y un sentido de identidad.

Otra característica del nivel cuántico consiste en el “entrelazamiento". Componentes de sistemas aislados pueden existir en diferentes estados o lugares al mismo tiempo. Contrariamente a nuestra percepción del mundo macroscópico, en el que los objetos tienen posiciones bien definidas y son bien concretos. Las partículas entrelazadas (en inglés: entangled ) no pueden definirse como partículas individuales con estados definidos sino más bien como un sistema.

De acuerdo con el principio del entrelazamiento cuántico, dos fotones (partículas de luz) que nacen de una misma fuente coherente estarán entrelazados; es decir, ambas partículas serán la superposición de dos estados de dos partículas que no se pueden expresar ya individualmente de manera separada.En otras palabras: lo que le ocurra a uno de los dos fotones influirá de forma instantánea en el otro, dado que sus distribuciones de probabilidad están indisolublemente ligadas con la dinámica de ambos. Esto ha sido comprobado experimentalmente, e incluso se ha conseguido un entrelazamiento triple, en el cual se entrelazan tres fotones.

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Las medidas realizadas sobre un sistema influyen instantáneamente en otros sistemas que están enlazados con él, a pesar de la separación entre ellos.

Esta condición de “no localidad” presenta un problema ya que la información, según los postulados de la física actual, no puede viajar más rápido que la velocidad de la luz. Sin embargo, en el caso de dos sistemas entrelazados comparten la información instantáneamente. Esto es posible si consideramos al universo como unidad y no en partes o componentes separados.

En 1964, el físico J. S. Bell dio a conocer una prueba matemática denominada teorema de Bell. El teorema apoya matemáticamente el concepto de que las «partículas» están conectadas según principios que trascienden el tiempo y el espacio, de manera que cualquier cosa que le suceda a una partícula afecta a las demás. Este efecto es inmediato y no necesita «tiempo» para transmitirse. La teoría de la relatividad de Einstein dice que nada puede viajar más rápido que la velocidad de la luz. Según el teorema de Bell, los efectos pueden ser «superluminales», es decir, más rápidos que la velocidad de la luz. El teorema de Bell ha sido respaldado por la experimentación.

¿Y si el universo se originó en el Big Bang, y si toda la materia conocida surgió de la misma fuente, no están todos los sistemas entrelazados en un nivel fundamental?

La propiedad matemática relacionada con el entrelazamiento es la llamada no separabilidad. Todos los sistemas físicos conocidos que sufren entrelazamiento cuántico son típicamente sistemas microscópicos, ya que en el nivel macroscópico esta propiedad se pierde debido al fenómeno de la decoherencia.

El entrelazamiento de partículas es esencial para el desarrollo de ordenadores cuánticos (que resultan mucho más veloces que los actuales). Buena parte de la ciencia va detrás de esta tecnología.

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La conciencia y la geometría del espacio-tiempo

Bajo condiciones normales la experiencia conciente ocurre en el nivel fundamental de la geometría del espacio-tiempo dentro del cerebro. Pero cuando el metabolismo que conduce la coherencia cuántica en los microtúbulos se pierde, por ejemplo cuando muere la célula, la información se filtra hacia la geometría del espacio-tiempo en el universo como totalidad. Siendo holográfica y entrelazada, no se disipa. Vuelve al universo y es reutilizada. La información contenida en nuestras neuronas no se pierde, digamos entonces que en el nivel fundamental la información tampoco puede ser creada, por eso solo podemos aprender lo que en cierta manera ya sabemos y solo podemos ser lo que somos.

Las partículas subatómicas, como vemos, tienen la capacidad de formar estados de entrelazamiento cuántico entre sí, estos estados son tales que un grupo de partículas forma sistemas globales de intercambio de información instantánea, aunque las partículas estén a millones de kilómetros de distancia.

Nuestra conciencia y la memoria son verdaderos sistemas cuánticos, holográficos, cada partícula de este sistema contiene la totalidad de la información del mismo, como si en un fotón existiera toda la información de todas las estrellas.

La conciencia que habita un cuerpo, al morir este, regresa al estado de entrelazamiento cuántico con todas las partículas del universo: el universo recolecta la información (o la memoria) de un individuo como un todo, y se alimenta de esta memoria (experiencia) para construir un nuevo circuito, una nueva individualidad. Literalmente, el universo se nutre de nuestra información, de nuestras experiencias. El universo absorbe nuestra conciencia (por eso más que perder, ganamos, cuando abandonamos la individualidad y nos volvemos uno con el universo. En este caso perder es ganar).

Toda la información y la energía contenida en nuestras células vuelven a la fuente original para ser reutilizada. Un verdadero reciclado de energía e información. Nuestros átomos formaran otras moléculas, nuestras experiencias aportarán información a la totalidad. La conciencia individual desaparece, porque para manifestarse depende del cuerpo físico, del hardware.

El sentimiento de individualidad corresponde con la percepción del mundo material y la información recibida por los 5 sentidos. Corresponde a un nivel de conciencia más básico, más físico. Cuando morimos esa conciencia desaparece porque no tiene soporte físico para manifestarse.

En zazen ocurre algo similar. Cuando se trasciende el cuerpo y la mente, mediante la concentración y la observación profunda, el “yo conciente” se

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desactiva. Sin la información del exterior y sin el discurso interior, no se manifiesta, está por debajo del umbral de la experiencia conciente.

Es lo que se conoce por “abandonar el ego”. Pero las palabras pueden engañarnos. En realidad no hay nada que abandonar. Cuando desaparece el cuerpo físico desaparece el ego. No tiene existencia propia ni sustancia. Lo que queda es la conciencia profunda, que no depende del cuerpo físico porque es universal, de hecho está creando constantemente al nivel físico y a la experiencia conciente.

Pero lo genial de zazen es que se puede ser conciente del inconciente. Es HIshiryo. Pensar sin pensar. No se trata de las ondas de alta frecuencia que oscilan por toda la corteza creando la experiencia conciente. Son ondas de mayor longitud, más lentas, gestionadas por el cerebro medio y profundo. Mientras se mantienen ahí, no se crea una corriente de pensamientos, ya que no se activa le neocórtex, que es el gran secuenciador.

Se ajusta el cuerpo, la respiración y la conciencia en la postura correcta y de manera natural, en el silencio y la inmovilidad, la conciencia cambia de dimensión. Percibe otra realidad, otra información. Transforma incluso la geometría espacio-tiempo. Se expande y afecta indefectiblemente a la materia.

Volviendo a los fenómenos cuánticos, se nos plantea una cuestión, ¿por qué y de que manera los microscópicos estados cuánticos superpuestos, coherentes y no manifestados,  se convierten en el clásico y definido mundo macroscópico,

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manifestado (palpable y concreto)? ¿Como una cosa que no estaba, ahora existe?

Esto se conoce como  reducción de estado cuántico, o colapso de la función de onda, y puede ayudarnos a comprender como surge la experiencia conciente y como se estructura la realidad.

Colapso de la función de onda

El colapso de la función de onda es un proceso físico que consiste en la variación abrupta del estado de un sistema después de haber obtenido una medida.

Como veíamos antes, el Teorema de Bell, describe el aspecto no-local de la

naturaleza, esta descripción se ajusta a la teoría cuántica por medio del

colapso de la función de onda, que es una reducción repentina y global de

la función de onda como sistema. Se produce cuando alguna parte del sistema

es observada. Es decir, cuando se hace una observación/medición del sistema

en una región, la función de onda varía instantáneamente, y no sólo en esa

región de la medida sino en cualquier otra, incluso a distancia (no-local).

La onda de posibilidades se reduce a una partícula de experiencia.

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Como veremos más adelante, el colapso o reducción coordinada (ROC) es una

reacción en cadena de reducciones, todas estas partículas de experiencia

crean una corriente de conocimiento.

En la interpretación de Copenhague, este comportamiento se considera natural

en una función que describe probabilidades. Puesto que las probabilidades

dependen de lo que se conoce como el sistema, si el conocimiento que se tiene

del sistema cambia como consecuencia del resultado de una observación, en

ese caso la función de probabilidad deberá obviamente cambiar.

Por esta razón, ante el aumento de información, un cambio de la función de

probabilidad en una región distante es normal incluso en la física clásica. Indica

que las partes de un sistema están conectadas entre sí y, por lo tanto, un

incremento de la información aquí está acompañado por un incremento de la

función del sistema en cualquier otra parte. Hablamos de aquí y parte, pero el

hecho es que no hay separación.

A nivel cuántico este colapso de la función de onda, depende de lo que el

observador eligió observar, pero también está la capacidad de autocolapsar

como una característica misma de la conciencia. Como en la transición entre

del subconsciente al conciente

El colapso que permite traspasar el umbral depende en gran mediad de la

información contenida en la conciencia (alaya) y en la memoria. La información

afecta a la gravedad a nivel cuántico, esto decide por un único estado posible y

genera una partícula de experiencia con una propia geometría del espacio-

tiempo.

La conciencia se crea a si misma.

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El Maestro Dogen escribía en el siglo 13: “Nuestro mundo está definido por las

diez direcciones. Cada dirección contiene totalmente la existencia básica de

todas las demás direcciones. Esto es, todo punto en  el espacio y tiempo, de

frente o por detrás, vertical u horizontal, contiene en sí mismo todos los

elementos de la existencia.  Este hecho es fundamental para  la comprensión

de  shinjitsunintai (la comprensión intelectual aprendiendo a través de la mente,

unida a la práctica a través del cuerpo)

Shinjitsunintai es concebido frecuentemente como apegado a subjetividad y

objetividad. Este no es el caso. Shinjitsunintai  no es más que  la verdadera

identidad, el verdadero cuerpo enraízado en Buda  y sin oponerse a ninguna de

las diez direcciones del mundo. Las diez direcciones están contenidas en

shinjitsunintai. Tal vez sea ésta, la primera vez que oyes esta explicación. Ten

en mente que cada dirección y cada región pueden ser aprehendidas juntas en

una experiencia. Tiene la misma identidad y existen juntas en shinjitsunintai.

Este cuerpo verdadero está compuesto por los cuatro elementos, tierra, agua,

fuego y aire, y  por los cinco skandhas. Para personas comunes, este mundo

de experiencia es muy difícil de analizar y la visión clara es difícil de obtener,

pero un santo está siempre conciente de la verdadera naturaleza del mundo.

En efecto,  él ve el mundo entero en una pequeña partícula de polvo”.

(Shôbôgenzô Shinjingakudo)

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La decoherencia y la experiencia conciente

La evidencia experimental en la primera parte del siglo 20, llevó a grandes científicos como Bohr, Heisenberg y Bohn a la conclusión ("interpretación de Copenhague") que los objetos permanecen como una onda en estado de superposición cuántica hasta que son observados por un ser humano conciente, o sea que ¡es la conciencia misma la que provoca el colapso de la función de onda! 

Para ilustrar el aparente absurdo de esta conclusión, Schrödinger en la década del 30 diseñó su famoso experimento mental con el gato. 

Un gato vivo es colocado en una caja cerrada en la que un gas venenoso puede ser liberado por un evento cuántico, por ejemplo, el envío de un fotón a través de un espejo semitransparente. El fotón puede tomar un camino u otro. Así que después de que el fotón ha sido enviado existen las mismas posibilidades que el gato está vivo o muerto. Pero de acuerdo con la interpretación de Copenhague hasta que un ser conciente no abra la caja para observar, el gato estará muerto y vivo al mismo tiempo. 

Gato de Schrödinger vivo/muerto

Muchos físicos creen ahora que entre la pequeña escala de los sistemas cuánticos y la grande de los sistemas macroscópicos, como el gato,

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media algún factor objetivo que perturba la superposición y provoca el colapso de la función de onda o “estado de reducción”.De acuerdo con el físico Roger Penrose, este factor objetivo es una característica intrínseca del propio espacio-tiempo, relacionado con la gravedad a niveles cuánticos, por eso lo denomina “reducción objetiva” (RO), ya que al no depender de un observador, la reducción no es subjetiva ni aleatoria, como es el caso de la decoherencia ambiental. Tampoco se puede decir que sea completamente determinista ya que la conciencia tiene aspectos no computables.Veamos antes de continuar de qué se trata la decoherencia ambiental.

En la física cuántica las partículas son tratadas como ondas (dualidad

onda/partícula) que se comportan según la ecuación de Schrödinger. De este

modo, este comportamiento entra en contradicción con la física clásica donde,

como sabemos, las partículas no presentan fenómenos típicos de las ondas

como la interferencia. El fenómeno por el cual las partículas cuánticas forman

cuerpos más grandes que se comportan de manera clásica, se conoce como

decoherencia cuántica.

Este término está íntimamente ligado con la computación cuántica, ya que la

decoherencia de los qubits representa un problema para la tecnología

informática. Esto se fundamenta en que los sistemas físicos no residen

aislados sino que interactúan con otros, y esta interacción es la que provoca

que se deshagan los estados de superposición de los qubits (mientras no

interactúe, es un sistema coherente que se encuentra en una indefinida

superposición de estados). Este intervalo de pérdida de coherencia es lo que

hace que a un sistema cuántico lo podamos describir por medio de variables

clásicas.

………………………………………………………..

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Espacio-Tiempo

La ilusión del espacio-tiempo continuo

Antes de meternos de lleno en el mundo cuántico, repasemos otra descripción de la realidad física.En 1905, Albert Einstein publicó su teoría especial de la relatividad, con la que invalidó todos los conceptos principales de la visión newtoniana del mundo. Según la teoría de la relatividad, el espacio no es tridimensional y el tiempo tampoco es una entidad aparte, sino que ambos están íntimamente conectados y forman un continuo de 4 dimensiones: el "espacio-tiempo".

Por lo tanto, no podemos hablar de espacio sin hablar de tiempo, y viceversa. Además, no existe un flujo universal de tiempo; es decir, el tiempo no es lineal ni absoluto. El tiempo es relativo. Ello significa que dos observadores ordenarán los acontecimientos en el tiempo de forma distinta si se mueven con velocidades diferentes en relación con los acontecimientos observados. Por tanto, todas las mediciones que impliquen espacio y tiempo pierden su carácter de absolutas. Tanto tiempo como espacio se convierten simplemente en elementos para describir los fenómenos.

Estamos habituados a funcionar en un mundo de objetos sólidos y con un tiempo absoluto que transcurre de forma lineal. Es nuestra herencia newtoniana. Incluso después de más de 100 años de haber sido demostrada la relatividad del espacio-tiempo, seguimos pensando de la manera convencional.

El continuo espacio-tiempo de Einstein indica que la aparente linealidad de los acontecimientos depende del observador. Hay quienes consideran las vidas pasadas como vidas físicas literales que han sucedido en el pasado en un escenario físico como éste. Nuestras vidas pasadas pueden estar sucediendo ahora mismo en un continuo espacio-tiempo diferente. Muchos relatan haber experimentado «vidas pasadas» y sentir sus efectos como si hiciera poco tiempo que han transcurrido. Sin embargo, rara vez hablamos de la forma en que nuestras vidas futuras están afectando a la que estamos experimentando justamente aquí y ahora. Al vivir el momento presente, lo más probable es que estemos reescribiendo nuestra historia personal, tanto pasada como futura. El aquí y ahora está conectado con el futuro y también con el pasado.

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En el Zen se dice que nuestro zazen de ahora actualiza la práctica y el despertar de los Budas del pasado, y también del futuro.

Otra consecuencia importante de la relatividad de Einstein, como vimos anteriormente, es el hecho de que materia y energía se transforman entre si. La masa no es más que una forma de energía. La materia es simplemente energía que ha perdido velocidad o se ha condensado.Nuestros cuerpos son energía: E=MC2

La conciencia modela el espacio-tiempo

Sabemos por la teoría de la relatividad que ante la presencia de una masa, el espacio-tiempo se curva.

¿Pero que pasa a nivel cuántico en los estados superpuestos de las proteínas en los MT del cerebro?

Como la masa es equivalente a la curvatura del espacio-tiempo, la separación del estado de superposición cuántica actual, o sea, el desplazamiento de las masas de los sistemas, es equivalente a la separación de las curvaturas del espacio-tiempo simultáneamente en direcciones opuestas, esta condición genera "burbujas" o separaciones en la realidad fundamental al comenzar a separarse los sistemas superpuestos.

Este fenómeno de superposición cuántica, se refiere a la existencia simultánea de dos estados distintos, cada uno con una geometría espacio-tiempo propia (utilizamos 2 para simplificar pero pueden ser un número enorme de estados). Estos estados están relacionados con la conformación de la proteína tubulina.

Las cuatro dimensiones del espacio-tiempo pueden ser representadas esquemáticamente por una de las dimensiones espaciales y una dimensión del tiempo, formando una "hoja bidimensional del espacio-tiempo".

En el estado de coherencia cuántica ambas hojas se encuentran “pegadas”, no hay separación, la masa/energía de ambos estados se encuentran superpuestas.

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A (arriba): Esquema de dos proteínas (tubulinas) conteniendo cada una un par de electrones dentro de un bolsillo hidrofóbico, que son capaces de cambiar entre dos

estados conformacionales. En realidad la tubulina puede tener varios pequeñas bolsillos hidrofóbicos que funcionan colectivamente y más de dos estados posibles, pero

para simplificar se ilustra un solo bolsillo y solo dos estados posibles.A (abajo): superposición cuántica (la existencia simultánea de dos estados distintos) de

dos pares de electrones y la conformación de la proteína.B (arriba): Las cuatro dimensiones espacio-temporales de la proteína puede ser

representadas esquemáticamente por una de las dimensiones espaciales y una dimensión del tiempo, formando una hoja bidimensional del espacio-tiempo. Cada hoja representa una conformación o una localización respectiva de la proteína. Como

la masa es equivalente a la curvatura del espacio-tiempo, cada hoja representa también una geometría del espacio-tiempo. Cada hoja es un universo.

B (abajo): La separación de las hojas del espacio-tiempo generan una “burbuja” en la realidad fundamental y es seguida por la reducción (colapso) en uno de los estados

posibles. (fuente: S. Hameroff Quantum consciousness)

Como se ve, la masa está relacionada con la curvatura del espacio-tiempo, así que las dos curvaturas del espacio-tiempo de los sistemas superpuestos representan la masa de la proteína en dos lugares o conformaciones diferentes respectivamente.

Estas separaciones del espacio/tiempo como burbujas en la realidad fundamental son inestables y colapsan o se reducen en estados y lugares específicos después de un grado crítico de separación. La experiencia conciente tiene sus raíces en la escala de Planck, es así que la reducción objetiva (RO) puede expandirse, como una reacción en cadena, a través de un campo de experiencia.

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Podemos interpretar esta composición básica del universo como una red dinámica de geometrías que forman una matriz evolutiva a escala de Planck y definen las cuatro dimensiones del espacio-tiempo.

Por lo tanto la realidad que percibimos depende de la realidad particular de cada geometría del espacio-tiempo.

La RO, es un tipo particular de reducción del estado cuántico en el que una nueva información macroscópica surge.

Curvatura del espacio-tiempo

De acuerdo a la teoría de la relatividad especial es la entidad geométrica donde se desarrollan todos los eventos físicos del universo.

El nombre alude a la necesidad de considerar de forma unificada la localización geométrica en el tiempo y el espacio, ya que la diferencia entre componentes espaciales y temporales es relativa según el estado de movimiento del observador. De este modo, en el nivel macroscópico, se habla de continuo espacio-temporal. Debido a que el universo tiene tres dimensiones espaciales físicas observables, es usual referirse al tiempo como la "cuarta dimensión" y al espacio-tiempo como "espacio de cuatro dimensiones" considerando al tiempo como una dimensión geométrica más.En la escala macroscópica cada objeto ocupa un lugar en un espacio tridimensional con un tiempo que transcurre linealmente.

Pero en la pequeña escala de Planck, la realidad es otra.

-Longitud de Planck: equivale a la distancia que recorre un fotón, viajando a la velocidad de la luz, en el tiempo de Planck.-Tiempo de Planck: representa el tiempo que tarda un fotón viajando a la velocidad de la luz en atravesar una distancia igual a la longitud de Planck

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Hay varios tipos de descripciones de la escala de Planck: la teoría de cuerdas, la espuma cuántica y la gravedad cuántica de bucles.  En el contexto de la gravedad cuántica de bucles, Penrose retrata a la escala de Planck como una dinámica tela de araña de espines (dynamical spider-web of spin). Estas redes de espines definen volúmenes discretos en la escala de Planck y crean configuraciones que dinámicamente evolucionan y modelan la geometría del espacio-tiempo.

La cantidad de información posible en las redes de espines (spin network) es enorme, cada volumen de la escala de Planck, o "pixel de la realidad" puede estar conformado por una inmensa variabilidad y por interacciones no locales.

Además su cantidad total es enorme, hay aproximadamente 10.107 volúmenes de Planck en el volumen de un cerebro humano, mucho mayor que el número de partículas en el universo.

Con respecto al tiempo y a la conciencia, el Maestro Kosen dice:

 “En el budismo, hay tres tiempos, se dice a menudo: "todos los Budas de los tres tiempos." Obviamente, los tres tiempos son: pasado, presente y futuro. Pero en realidad, hay tres maneras de definir al tiempo, las tres son muy importantes para nuestra conciencia, para nuestra actitud ante la vida y la muerte. Son también tres reglas de tiempo, tres definiciones del tiempo.

La primera: Todo es impermanente, nada permanece, todo desaparece, todo cambia. No podemos apegarnos a nada.

La segunda: El tiempo y el ser son no-nacidos y no desaparecen nunca. Es el mundo del espíritu, el mundo de Buda.

La tercera: aquí y ahora. Solamente aquí y ahora es la realidad. Estos tres aspectos deben superponerse, juntarse con el fin de saber, como en un mapa, donde estamos.

Están los que sólo viven en el mundo de las apariencias, apegándose a lo que se manifiesta, a los amigos, lo social y que abandonan, olvidan, el mundo de los Budas.

Están los que quieren todo el tiempo permanecer en el absoluto y se niegan a compartir, a mezclarse con el mundo del siglo, considerando que no forma parte de la realidad divina y absoluta. Estas dos categorías de personas, se equivocan. Para terminar, cuando se encuentra el equilibrio entre lo absoluto y la impermanencia, nuestro aquí y ahora deviene el punto central del universo.

El "aquí y ahora" no se equivoca nunca. En zazen, se puede comprender lo que es aquí y ahora. En zazen, se reunen los tres tiempos. Todo es

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impermanente, pueden olvidarlo todo, darse cuenta que están solos. Pueden comprender el aquí y ahora porque justamente paran de mirar al exterior y pueden comprender esta existencia infinita sin nacimiento, sin desaparición”.

Múltiples posibilidades y una realidad

¿Qué significa que un objeto pueda estar en varios lugares o estados al mismo tiempo?

El misterio de la superposición cuántica ha desconcertado desde el principio a la ciencia. Hugh Everett, un físico estadounidense, para responder a este interrogante desarrolló la teoría de los múltiples universos. La propuesta de Everett es que cada medida "desdobla" nuestro universo en una serie de posibilidades (o tal vez existían ya los universos paralelos mutuamente inobservables y en cada uno de ellos se da una realización diferente de los posibles resultados de la medida). Por ejemplo: Una persona que se salva por un pelo de ser atropellada por un auto, podría sentirse afortunada de haber escapado. Pero en un universo paralelo, otra versión de la misma persona habría muerto. Y en otro universo más veríamos a esa persona recuperarse en el hospital. El número posibilidades es infinito.Según esta idea, la superposición es una separación de la realidad subyacente, el universo en su nivel fundamental se divide o se separa, y cada posibilidad se abre a formar un nuevo universo, una nueva realidad. Una geometría particular del espacio-tiempo.

Volviendo al problema de la medida, esta es una de las principales dificultades que presenta la mecánica cuántica.De acuerdo a la teoría cuántica, no se puede decir que algo exista a nivel subatómico hasta que no sea observado. Hasta entonces, las partículas ocupan una nebulosa de estados “superpuestos”, en la que estas pueden tener simultáneamente espines “arriba” y “abajo”, o aparecer en lugares diferentes al mismo tiempo.

La observación lleva a la partícula a adoptar un estado particular de realidad, en un modo similar a lo que sucede a una moneda que esté girando por el aire, y de la que solo se podrá afirmar que muestra “cara” o “seca” una vez que se la atrape.

Desde un punto de vista cuántico, las partículas no observadas se describen como “función de onda”, y representan a un conjunto de múltiples estados posibles. Cuando un observador realiza una medición, la partícula es forzada a adoptar una de esas varias opciones. Es decir se “particulariza”.

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Efectos gravitatorios de la información

La física clásica describe partículas moviéndose en un espacio-tiempo fijo. La física cuántica describe partículas borrosas, partículas que no tienen una posición bien definida en un espacio-tiempo fijo. La relatividad general describe las partículas moviéndose en un espacio-tiempo que se mueve. Una teoría completa sobre la naturaleza debe incorporar todos los puntos de vista, desde la física clásica, la mecánica cuántica y la relatividad general. Este es el intento de la teoría de la gravedad cuántica.

¿Qué relación tiene la fuerza de gravedad con los procesos de reducción objetiva y la experiencia conciente?

De acuerdo a la teoría de la relatividad general de Einstein, la fuerza de gravedad puede considerarse como una manifestación de la curvatura del espacio-tiempo. La masa le indica al espacio-tiempo como curvarse y éste le dicta a la masa cómo moverse. Es el contenido material el que modela la geometría del espacio-tiempo, aunque es la conciencia el verdadero sustrato de este movimiento.

Esto concepto es importante porque la propiedad de la conciencia de provocar autocolapsos de la función de onda (reducciones objetivas) depende de fenómenos gravitacionales a nivel cuántico (gravedad cuántica) que hacen que la masa se desplace en una dirección y se produzca una reducción a un estado particular, seleccionando una determinada geometría espacio-tiempo de la experiencia.

La conciencia impacta en el cuerpo físico siguiendo ciertas leyes naturales y procesos fisiológicos.

En este punto debemos aclarar algunos conceptos.

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A partir de modelos sencillos se han podido derivar resultados importantes, basados en tres principios básicos: 1) el espacio es emergente y no fundamental, esto quiere decir que el continuo del espacio (y del tiempo) es una ilusión, 2) la descripción más fundamental debe ser discreta y no continua y 3) esta descripción además se fundamenta en el principio de causalidad, es decir, las relaciones causales pueden determinar la propia geometría del espacio-tiempo. La propia causalidad es lo fundamental y significativo incluso a un nivel donde el concepto de espacio ha desaparecido.

Podemos entender cada espacio-tiempo cuántico como una secuencia de espacios posibles que se suceden los unos a los otros, igual que los tic-tacs de un reloj cósmico. La coordenada temporal es arbitraria.

La historia del mundo pueda ser vista como una serie de geometrías que se continúan unas a otras, como los puntos que forman una línea y dan una sensación de continuidad. Vamos de momento en momento. Cada momento es un aquí y ahora.

La conciencia es un flujo de eventos discretos, y no un estado continuo. Partículas de experiencia que el cerebro se encarga de editar proyectando una imagen coherente y continua: la película de la vida. Pero ese contínuo es una ilusión.

La conciencia se mueve de a saltos cuánticos.

Cada aquí y ahora tiene su propia geometría espacio-tiempo.

Sin embargo hasta el presente no hay una descripción cuántica de la gravedad. Algunos siguen “rompiéndose” la cabeza tratando de describir lo que solo puede ser experimentado.

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Lo importante es volver a la calma. Aprender a apagar alternativamente el conciente y permitir que la conciencia profunda se manifieste y exprese. La esencia solo puede ser experimentada por si mismo. Experiencia subjetiva, conocimiento directo. Este aspecto lo aporta la práctica de zazen. El Maestro Kosen dice: “zazen es simplemente apagar el motor”.

De todas formas, el conocimiento científico es una importante fuente de información y Según Erik Verlinde, físico que promulga la teoría de cuerdas   en la Universidad de Amsterdam: “la gravedad es una completa ilusión, es nada más que una consecuencia de las leyes de la termodinámica”. Veamos esto con más detalles.

Podemos comenzar a considerar a la gravedad básicamente como un fenómeno de información.La atracción gravitacional podría ser el resultado de como se organiza la información de los objetos materiales en el espacio. 

Stephen Hawking, propuso que la temperatura del agujero negro es proporcional a la aceleración gravitatoria en su horizonte, Verlinde argumenta que una aceleración proporcional a una temperatura no puede ser más que un efecto de entropía.

Esa aceleración entrópica se manifiesta en un sistema que evoluciona de forma que cada vez necesita un mayor número de bits de información para describir todas sus características.

¿Es posible que la atracción gravitatoria solo sea una consecuencia del aumento de información necesaria para describir el sistema?

Comparémoslo con el concepto de fluidez del agua. Sus moléculas individualmente consideradas no tienen fluidez, pero colectivamente si. O las moléculas de un gas que individualmente no tienen presión pero en conjunto si. De forma análoga, la fuerza de la gravedad no es algo inherente a la propia materia, sino que es un efecto físico plus, que surge de la interacción de la masa, el tiempo y el espacio

El papel que desempeña la información cuántica en la gravedad influye de manera determinista en los procesos de reducción objetiva de las ondas de posibilidades superpuestas, en una partícula de experiencia, Dicho de otra forma: los movimientos de masa/energía que corresponden a los cambios conformacionales en las proteínas de los MT de las neuronas, seleccionan una particular geometría del espacio-tiempo.

Consideremos a la gravedad como un fenómeno emergente; que de alguna forma surge a partir de complejas interacciones entre cosas más simples. La gravedad puede ser simplemente una manifestación de la entropía del universo.

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La gravedad es una "fuerza entrópica".

Esta idea está basada en la 2a ley de la termodinámica, que dice que la entropía siempre se incrementa con el tiempo. Esto sugiere que las diferencias de entropía entre las partes del universo generan una fuerza que redistribuye la materia de una forma que maximiza la entropía. Esta fuerza es lo que llamamos gravedad.

Un sistema que evoluciona necesita cada vez un mayor número de bits de información para describir todas sus características. Por eso podemos considerar a la gravedad como consecuencia de la información.

Algunos físicos creen que las propiedades de la información no proceden del comportamiento de los portadores de la misma, tales como fotones o electrones, sino al contrario.

La propia información es la matriz sobre la que se construye el universo.

La gravedad es un fenómeno que surge de las propiedades fundamentales del espacio-tiempo.

La información depositada en la conciencia alaya, que es la conciencia almacén, modela la geometría espacio-tiempo de la experiencia. Incluso en los niveles no manifestados su información afecta a la gravedad cuántica y al movimiento de los sistemas en superposición. Esto es en niveles no concientes.

Finalmente podemos considerar al universo como una memoria gigante compuesta por una incalculable cantidad de bits con una tendencia natural a aumentar (y a colapsar).

Lo que llamamos fuerza de gravedad sería más bien una característica intrínseca de la conciencia, de la naturaleza misma del universo relacionada con la información.Se corresponde con la dinámica bipolar de fuerzas del universo (contracción-expansión, partícula-onda, etc.). La gravedad es la fuerza que lleva hacia el colapso.

Podríamos decir también que el potencial gravitatorio surge de la tendencia natural (entrópica) de los sistemas a saturar con información todo el espacio disponible. En términos informáticos sería la tendencia natural a llenar de información todo el espacio disponible en el disco duro, independientemente de lo grande que este sea.

La conciencia es información, de ahí su tendencia natural a expandirse y evolucionar.

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Propiedades holográficas de la conciencia

Los físicos han descubierto que las partículas pueden ser simultáneamente ondas, no son ondas físicas reales, como las del sonido o el agua, sino más bien fenómenos ondulatorios de probabilidad. Las ondas de probabilidad no representan las probabilidades de las cosas, sino más bien probabilidades de interconexión. Es un concepto difícil de entender, pero, en esencia no existe lo que llamamos «cosa». Lo que solíamos llamar «cosas» son, en realidad, «sucesos» o procesos que podrían convertirse en sucesos (probabilidades).

Nuestro viejo mundo de objetos sólidos y leyes deterministas se ha disuelto ya en un mundo de pautas de interconexiones ondulantes. Conceptos tales como «partícula elemental», «sustancia material» u «objeto aislado» van perdiendo su significado. El universo entero se nos presenta como una trama de conexiones energéticas inseparables. Así, definimos el universo como un todo dinámico que incluye siempre de forma esencial al observador.

Desde luego, si el universo está compuesto por una trama semejante, en consecuencia no existe eso que llamamos “parte”. Por lo tanto, no somos partes separadas de un todo. Somos un todo.

El doctor en física David Bohm afirma en su libro The Implicate Order que las leyes físicas primarias no pueden ser descubiertas por una ciencia que intenta fragmentar el mundo en sus diversas partes. Bohm ha escrito acerca de un «orden plegado implícito» que existe en estado no manifiesto y que constituye la base sobre la que descansa toda realidad manifiesta. A esta última la denomina «el orden desplegado explícito». «Se considera que las partes presentan una conexión inmediata, en la que sus relaciones dinámicas dependen irreductiblemente del estado de todo el sistema... Así, somos conducidos a una nueva noción de integridad no fragmentada que niega la idea clásica de la comprensión del mundo en partes existentes de forma separada e independiente».

El punto de vista holográfico del universo facilita la comprensión de los órdenes plegado implícito y desplegado explícito. El concepto de holograma nos dice que cada pieza es una representación exacta del todo y se puede utilizar para reconstruir el holograma completo.

Cada pieza del holograma es una representación exacta del todo y reconstruirá la imagen completa.

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Según los estudios de muchos laboratorios, realizados mediante complejos análisis de frecuencias temporales y/o espaciales, demuestran que las estructuras cerebrales ven, oyen, gustan, huelen y tocan holográficamente. Seguidamente, la información es distribuida por todo el sistema de manera que cada fragmento puede producir el informe completo. Podemos emplear el modelo de holograma para describir no sólo el cerebro, sino también el universo. Se han investigado las energías susceptibles de generar telepatía, psicocinesis y curación a distancia. Desde el punto de vista de un universo holográfico estos efectos surgen de frecuencias que trascienden el tiempo y el espacio; no tienen que ser transmitidas. Son potencialmente simultáneas y están en todas partes.

Toda experiencia está interconectada. Por tanto, si tomamos conciencia de ello y acogemos esa interconectividad en nuestros procesos cognitivos, podemos ser conscientes de todos los acontecimientos con independencia del tiempo. Pero tan pronto como decimos «nosotros», hemos vuelto a caer en el dualismo. Es difícil experimentar esta interconectividad cuando nuestra experiencia más importante de la vida es dualista. La conciencia holística estará fuera del tiempo lineal y del espacio tridimensional y, por tanto, no será reconocida fácilmente. Hemos de practicar la experiencia holística para ser capaces de reconocerla.

Zazen permite trascender los límites de la mente lineal y conceptual, corta la secuencia de pensamientos y realiza la experiencia del verdadero ser en interconexión con todos los seres y cosas. Es muy difícil comunicar o tratar de describir dicha realidad con palabras, ya que los conceptos y categorías son limitados y relativos.La experiencia individual es fundamental. Aprender es la naturaleza misma de la conciencia.

Cuando uno aprende de si mismo, desaparece el si mismo, porque la conciencia individual ya no puede proyectarse. Al observarse a si mismo uno

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se olvida de si mismo, porque la mirada del observador y el objeto de observación (el observador mismo) se vuelven uno. Sujeto y objeto en unidad. La manera de expandir los límites de nuestra conciencia es yendo hacía el interior del ser, a lo profundo del agujero negro.

……………………………………………………………

Conciencia y computación cuántica

Las proteínas y los qubits

El material biológico más adecuado para los procesos de computación cuántica y reducción objetiva son las proteínas, en particular las llamadas tubulinas que conforman los microtúbulos (MT). Estas proteínas son el sustrato de procesos de computación cuántica.

Las proteínas son macromoléculas versátiles formadas por cadenas de

aminoácidos.

Las proteínas son capaces de cambiar su forma, de ahí su nombre en

referencia a Proteus, lo que les permite realizar una gran variedad

de funciones:

Estructural. Ésta es la función más importante de una proteína

Inmunológica (anticuerpos),

Transporte de O2 (hemoglobina)

Enzimática  (sacarasa y pepsina),

Contráctil (actina y miosina).

Homeostática: colaboran con el equilibrio del medio interno,

Transducción de señales (rodopsina)

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Protectora o defensiva (trombina y fibrinógeno)

Computacional (tubulina)

Esta última función es la que nos interesa en este trabajo y trataremos de

profundizar.

La vida se organiza de acuerdo a los cambios en la forma de las proteínas.

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Las proteínas se sintetizan como cadenas lineales de cientos de aminoácidos que se "pliegan" dando una conformación 3D. 

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La tubulina es un dímero que consiste de dos monómeros de estructuras casi idénticas (alfa y beta). Cada monómero está formado por un núcleo de dos láminas beta (verde), rodeado por

hélices (azul), y cada uno se une a un nucleótido guanina (rosa).

La manera precisa de plegado para cada proteína depende de las fuerzas de atracción y repulsión entre sus diversos grupos laterales de aminoácidos,y es posible que muchas conformaciones intermedias precedan a la conformación final (Baldwin, 1994). 

A pesar de que se conocen las secuencias lineales completas de las cadenas de aminoácidos de muchas proteínas, predecir su forma tridimensional plegada mediante simulación por ordenador, es extremadamente difícil. Este enigma se conoce como el "problema del plegamiento de las proteínas" y hasta ahora no ha sido resuelto. La respuesta se puede calcular en teoría, pero el espacio y el tiempo que se requieren por cualquier ordenador clásico lo hace imposible. ¿Tal vez el plegamiento de las proteínas es una computación cuántica?

La computación cuántica se diferencia de la clásica en que utiliza qubits.

El qubit es el análogo cuántico del bit, pero la cantidad de información contenida en un qubit, y, en particular, la forma en que esta información puede ser manipulada, es fundamental y cualitativamente diferente de un bit clásico.

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Hay operaciones lógicas, por ejemplo, que son posibles en un qubit y no en un bit,

Paralelismo cuántico

Otra de las diferencias entre bit y qubit es que un bit toma valores discretos

mientras que los valores representados por un qubit son de naturaleza

continua.

Una segunda diferencia es el paralelismo cuántico, que es la posibilidad de

representar simultáneamente los valores 0 y 1. Los algoritmos cuánticos que

operan sobre estados de superposición realizan simultáneamente las

operaciones sobre todas las combinaciones de las entradas. Por ejemplo, los

dos qubits representan simultáneamente las combinaciones 00, 01, 10 y 11. En

este "paralelismo cuántico" se cifra la potencia del cómputo cuántico.

En la computación clásica, un bit sólo puede tomar dos valores: 0 ó 1. En

cambio, en la computación cuántica, intervienen las leyes de la mecánica

cuántica, y la partícula puede estar en superposición coherente: puede ser 0, 1

y puede ser 0 y 1 a la vez (dos estados ortogonales de una partícula

subatómica). Eso permite que se puedan realizar varias operaciones a la vez,

según el número de qubits.

Entrelazamiento cuántico

Una tercera característica importante que distingue al qubit del bit clásico es

que múltiples qubits pueden presentarse en un estado de entrelazamiento

cuántico.

El entrelazamiento es una característica no local que permite que un sistema

de qubits se exprese con una correlación más alta que la posible en sistemas

clásicos. Como vimos al describir el entrelazamiento, un sistema de dos qubits

entrelazados no puede descomponerse en factores independientes para cada

uno de los qubits.

Los dos estados básicos de un qubit son |0> y |1>, que corresponden al 0 y 1 del bit clásico (se pronuncian: ket cero y ket uno). Pero además, el qubit puede encontrarse en un estado de superposición cuántica, combinación de los dos estados (α | 0 > + β | 1 >). En esto es significativamente distinto al estado de un bit clásico, que puede tomar solamente los valores 0 o 1.

El número de qubits indica la cantidad de bits que pueden estar en superposición. Con los bits convencionales, si teníamos un registro de tres bits, había ocho valores posibles y el registro sólo podía tomar uno de esos valores.

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En cambio, si tenemos un vector de tres qubits, la partícula puede tomar ocho valores distintos a la vez gracias a la superposición cuántica. Así, un vector de tres qubits permitiría un total de ocho operaciones paralelas.

Representación esquemática de la computación cuántica de tres tubulinas que comienzan (izquierda) con el estado inicial clásico, a continuación, se introduce la

superposición cuántica aislada en la que todos los estados posibles coexisten. Luego de la reducción un estado de salida clásico es elegido (derecha).

(fuente: S. Hameroff: Quantum consciousness)

Las proteínas en los microtúbulos

La proteína tubulina es un heterodímero formado por dos subunidades (α y β) que al ensamblarse de manera altamente organizada genera uno de los principales componentes del citoesqueleto, los microtúbulos

Los microtúbulos (MT) son el componente más importante del citoesqueleto. Los MT son cilindros huecos de 25 nanómetros de diámetro (nm = 10-

9 metros), cuyas longitudes varían y pueden llegar a ser bastante largos dentro de algunos axones de las neuronas. Las paredes del MT cilíndrico se componen de13 protofilamentos longitudinales y cada uno está formado por una serie de subunidades de tubulina.

Cada subunidad de tubulina es un dímero polar, de 8 nm que consta de dos clases de monómeros un poco diferentes, de 4 nm y 55.000 dalton

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conocidos como alfa y beta tubulina. Las subunidades de dímeros de tubulina en MT están dispuestos en una retícula hexagonal un poco retorcida, lo que resulta en relaciones de vecindad entre cada subunidad y sus seis vecinos más cercanos, y los caminos helicoidales que se repiten cada 3, 5 y 8 filas.

Microtúbulos

Los heterodímeros se ensamblan en los protofilamentos de forma que la tubulina-β de un dímero contacta con la tubulina-α del dímero siguiente. Por ello, los MT están polarizados de manera inherente, ya que presentan tubulina-α en un extremo del polímero (el extremo "-") y tubulina-β en el otro (el extremo "+").

Los 13 protofilamentos que forman un MT se disponen uno al lado de otro, de manera que si uno sigue las subunidades α o β lateralmente alrededor del MT, se observa que forman una hélice de tres subunidades. Esto significa que la hélice recorre 3 subunidades hasta completar una vuelta.

Este tipo de hélice no es perfectamente simétrica, lo que resulta en un una "junta" en la pared del MT en el lugar donde cada hélice completa una vuelta. Los protofilamentos interaccionan entre ellos lateralmente sobre todo a través de contactos α–α y β–β, aunque en la junta la tubulina-α contacta con la tubulina-β.

Los MT se auto acoplan y se desacoplan. Modificando la forma y función de la célula.

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Las PAMT (proteínas asociadas a los microtúbulos) también cumplen funciones importantes en la dinámica de los MT y en los procesos de RO.Algunas PAMT (dineína, kinesina) actúan como motores y transportan material a lo largo de los microtúbulos (transporte axoplasmático).

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Micrografía por inmunofluorescencia de microtúbulos neuronales interconectados mediante PAMT. Barra de escala: 100 nanómetros. (Hirokawa 1991)

Los posibles estados de conformación de las tubulinas en las redes de MT pueden interactuar con las tubulinas vecinas para procesar la información en el nivel molecular (computación cuántica).

Hay muchas investigaciones que indican la participación del citoesqueleto en los procesos cognitivos. 

Por ejemplo:

-La potenciación a largo término (PLT) es una intensificación duradera en la transmisión de señales entre dos neuronas que resulta de la estimulación sincrónica de ambas. Es una forma de neuroplasticidad (capacidad de modificar sus sinapsis), que sirve como modelo para el aprendizaje y la memoria en el sistema límbico, más precisamente en el hipocampo, de los mamíferos.  Ya que los recuerdos están codificados por modificaciones de la fuerza sináptica, se considera ampliamente a la PLT como uno de los mecanismos celulares principales subyacentes al aprendizaje y a la memoria. Por la repetición, es decir, por la acumulación de información, las conexiones se fortalecen. Cuando cesa el estímulo se genera el proceso inverso, aunque permanece la memoria.

La PLT requiere de PAMT-2, una proteína anexa específica de la dendrita, que es desfosforilada como resultado de la activación de receptores en la membrana sináptica. 

Según el resultado de investigaciones y experimentos:

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-En la corteza visual del gato, la PAMT-2 es desfosforilada cuando se produce la estimulación visual. 

-El condicionamiento auditivo (reflejo de Pavlov), eleva la actividad de las PAMT-2 en la corteza temporal de las ratas. 

-La producción de tubulina y las actividades de los MT en el cerebro del pollito se correlacionan con los picos de aprendizaje, la memoria y la experiencia. 

-Cuando las ratas bebé abren sus ojos por primera vez, las neuronas de la corteza visual empiezan a producir grandes cantidades de tubulina. 

Los procesos de fosforilación y desfosforilación de PAMT-2 representa una gran proporción del consumo de energía bioquímica del cerebro.

En 1990 Kudo comprobó que en animales cuyos cerebros están temporalmente privados de oxígeno, el grado de deterioro cognitivo se correlaciona con la disminución de los niveles de PAMT-2 en las dendritas. Bensimon y Chernat (1991) demostraron que el daño selectivo de los MT en los cerebros de los animales por la colchicina causa defectos en el aprendizaje y la memoria que imitan los síntomas de la enfermedad de Alzheimer (en la que está afectado citoesqueleto neuronal). Matsuyama y Jarvik en1989 vinculan la enfermedad de Alzheimer a la disfunción de los MT.

La ciencia en aras del conocimiento sacrifica animalitos tratando de describir lo que es imposible de describir con palabras o ecuaciones. Los seres humanos tenemos la tendencia a buscar afuera lo que llevamos puesto. Sería mejor respetar a todas las existencias y aprender cada uno de si mismo y de su relación con el cosmos. Conocimiento directo.

De todas formas, hay avances científicos, esto es innegable, la ciencia progresa, la conciencia se expande, hay más información disponible. El ser humano está cambiando su visión de si mismo y del universo.

Una nueva comprensión. Un nuevo paradigma.

¿Cómo hace el citoesqueleto para procesar la información?

La tubulina puede sufrir varios tipos de cambios en su forma. Los patrones de conformación de la tubulina en los MT representan información. Por ejemplo, en una cadena de un protofilamento, un monómero de la proteina puede cambiar 27 º respecto al eje vertical del dímero.Las proteínas tienen transiciones conformacionales en diferentes tiempos y tamaños de la escala.

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Citoesqueleto

Por ejemplo, pequeñas cadenas laterales se mueven en la escala de picosegundos (ps=10-12 seg) a femtosegundos (fs=10-15 seg), pero las transiciones conformacionales en las que las proteínas se mueven a nivel global y sobre las cuales depende su función en general ocurren en el orden de los nanosegundos (10-9 seg) a 10 picosegundos (10-11 seg) en la escala de tiempo. 

El grado de separación de los sistemas superpuestos que causa el autocolapso y la pérdida de la coherencia cuántica, está influenciado por fenómenos gravitatorios en la diminuta escala de Planck.

La gravedad cuántica modela el movimiento de las masas superpuestas hasta el colapso (reducción objetiva) y la experiencia conciente. Los sistemas cuánticos superpuestos tienen cada uno su propia geometría del espacio-tiempo. Cada uno es un universo.

 Estas geometrías están superpuestas, y de alguna manera "separadas", y cuando están lo suficientemente separadas, la superposición de las geometrías del espacio-tiempo se vuelve inestable provocando la reducción (colapso) en un único universo. 

Los límites de la inestabilidad están determinados por la gravedad a nivel cuántico, sin embargo la elección de uno de los tantos estados que hace la naturaleza es un fenómeno no computable. 

La gravedad de entropía es una hipótesis en la física moderna, que describe la gravedad como una fuerza entrópica, no una interacción mediada por una

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partícula fundamental, sino una consecuencia de la tendencia probabilística de los sistemas físicos para aumentar su entropía.A mayor información, aumenta la masa y la entropía.

Las reducciones se expanden de forma coordinada a través de los microtúbulos y ciertas biomoléculas, que de forma dinámica conectan áreas del cerebro, incluso distantes, produciendo así un flujo de energía conciente, que enciende o “despierta” los diferentes grupos de neuronas.

Cada neurona del cerebro se estima que contiene unos 107 tubulinas y hay aproximadamente 100 mil millones (1011) neuronas en el cerebro.

Los eventos de autocolapso o reducción coordinada pueden tener intensidad y duración variables en el procesamiento preconsciente. 

De acuerdo al cálculo de E = h/2pi / T

Donde E es la energía (masa), h es la constante de Planck, (también se la simboliza como ħ=h/2π, en cuyo caso se conoce como constante reducida de Planck), que es una constante física que representa al cuanto elemental de acción. Es la relación entre la cantidad de energía y de frecuencia asociadas a un cuanto o a una partícula. Desempeña un papel central en la teoría de la mecánica cuántica y recibe su nombre de su descubridor, Max Planck, uno de los padres de dicha teoría.

La constante de Planck relaciona la energía E de los fotones con la

frecuencia ν de la onda lumínica.

Para un tiempo de procesamiento preconsciente de  T = 25 mseg (por ejemplo: ondas tálamo-corticales de alta frecuencia 40 Hz / estímulos potentes, hiperestimulación sensorial)), E correspondería a la superposición / separación de 2 x1010 tubulinas, esto significan unas 20000 neuronas.

La mejor correlación de la experiencia conciente que se puede medir es la sincronía gamma del EEG (oscilaciones coherentes de alta frecuencia de 30-90 Hz), que se producen en varias regiones del cerebro. Estas ondas cambian con el tiempo y se mueven a través del cerebro, o de forma global, por ejemplo, la sincronía gamma cortical o tálamo-cortical.

Estas oscilaciones sincrónicas le permiten al cerebro realizar actividades cognitivas complejas simultáneas. Un ejemplo es la ejecución de un instrumento musical.

El pianista toca, escucha, lee, memoriza, es conciente del público y quizás de su propio dolor de estómago, todas estas funciones concientes las realiza al mismo tiempo, e incluso en los tres tiempos: presente, pasado y futuro. A nivel cuántico el tiempo puede viajar en una dirección u otra.Esta forma de automatismo conciente es una característica misma de la conciencia pero se desarrolla con la repetición.

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En el camino del aprendizaje la disciplina es fundamental. Es lo que establece conexiones neuronales duraderas y profundas que permiten el automatismo sincronizado.

Es como abrir varias ventanas del navegador en la computadora. En informática se le llama “multitarea”.

También en el Zen y en las artes marciales se aprende con la repetición. A medida que se aprende la postura de zazen la conciencia queda más libre para otras funciones.

Esta capacidad de automatismo debe ser controlada porque es una actividad expansiva que puede hacer perder foco y concentración. En Internet pasa algo similar, el exceso de información satura al sistema, que pierde eficacia, consume más recursos y además corre el riesgo de infectarse con virus.

Este correlato de oscilaciones sincrónicas no depende de descargas axonales típicas, sino de las conexiones (redes) entre dendritas (conexiones laterales).

Red de dendritas. En el centro se observa un cuerpo neuronal con su núcleo, los filamentos más gruesos son los

axones.

En el interior del citoplasma de las redes dendríticas se produce la computación cuántica en las tubulinas de los MT, es la base física de la experiencia conciente. 

Las redes dendríticas de alta frecuencia sincronizadas, se adaptan perfectamente a la función de "piloto conciente" del cerebro, moviéndose a lo largo de redes de computación neuronal, a manera de un scanner y son capaces de ajustar y tomar el control del piloto automático no-consciente 

Para T = 100 mseg (ondas alfa de 10 Hz / relajación, zazen)  implicaría 5 x 109 tubulinas (5000 neuronas)

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Para T = 500 mseg (tiempo de procesamiento preconsciente típico de los estímulos de baja intensidad y de ondas theta de 5 Hz / sueño, meditación profunda) , E es equivalente a 109 tubulinas (1000 neuronas).

Por lo tanto 2 x 1010 tubulinas mantenidas aisladas en superposición cuántica coherente durante 25 mseg (ó 5 x 109 tubulinas durante 100 mseg, ó 109 tubulinas durante 500 mseg, etc), luego de ese tiempo, se produce el autocolapso (RO) y provoca un evento conciente. Colapsa en una partícula de experiencia con su propia geometría espacio-tiempo.El tamaño (masa/energía E) de un sistema superpuesto (grado de separación espacio-tiempo) es inversamente proporcional al tiempo (T) hasta la reducción objetiva (RO) o autocolapso. A mayor masa (cantidad de neuronas), más rápida será la reducción (menor tiempo) y por consecuencia aumentará el número de reducciones.

Si aislamos un sistema macroscópico (por ejemplo, el gato de Schrödinger de 1 kilo) se someterá a reducción objetiva (RO) muy rápidamente, por ej:, en sólo 10-37 segundos. 

Si tomamos un sistema pequeño aislado, (por ejemplo un átomo en superposición) recién experimentará reducción objetiva (RO) sólo después de 107 años. 

La reducción objetiva en el cerebro estaría vinculada a los procesos neuronales con T (tiempo) en el rango de decenas a cientos de milisegundos (por ejemplo, intervalos de 25 mseg  a 40 Hz). Para T = 25 mseg (40 Hz) en el autocolapso o reducción objetiva coordinada (ROC), E (energía=masa) corresponde a cerca de 3 nanogramos, o sea: 3 x 10-9 grs. de masa cerebral (proteínas) superpuesta (unas 20000 neuronas). Esto para un solo evento conciente. Consideremos que la actividad cortical conciente corresponde a oscilaciones sincrónicas Gamma de alta frecuencia, que viajan por todo el cerebro activando las diferentes partes de manera coordinada. Esta vibración conciente se caracteriza por tener una longitud de onda pequeña y frecuencias elevadas entre 30 y 90 ciclos/segundo (Hz).

Como se puede observar, el tamaño (E) de un sistema superpuesto aislado es inversamente proporcional a la duración del tiempo (T) hasta el colapso mismo.

Los microtúbulos son computadoras cuánticas

Hablamos de masa y de nanogramos, pero en verdad ¿a que nos referimos?, ¿nanogramos de qué?

Los MT neuronales son estructuras biológicas que pueden funcionar como ordenadores clásicos y cuánticos, evitando la decoherencia ambiental.

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Gestionan actividades de la neurona, además intervienen en la dinámica de las sinapsis y de las redes neuronales.Esta capacidad esta ligada a su estructura proteica.

Entonces, el fenómeno de la decoherencia se debe al acoplamiento del qubit con el entorno. En consecuencia el qubit debe considerarse como un sistema abierto. El acoplamiento del qubit y el ordenador cuántico produce un entrelazamiento entre ambos sistemas que modifica el qubit de manera aleatoria e incontrolable. Generalmente se asume que una vez que el qubit ha perdido la coherencia la computación completa falla y, en consecuencia, los resultados que se obtienen no son correctos.

En el modelo de computación cuántica los cálculos se realizan aplicando transformaciones unitarias al qubit. Sin embargo esto sólo se cumple de forma aproximada ya que, debido al acoplamiento entre los dos sistemas, la evolución del qubit generalmente no es unitaria.

A medida que la conciencia se expande, el cerebro evoluciona, cambia, se reconfigura. Mencionamos la computación cuántica, pero esta es solo una descripción humana de la experiencia conciente y le falta el componente fundamental que es la experiencia en si misma.

Por otra parte es muy probable que los MT no eviten completamente la decoherencia ambiental de manera que los procesos de reducción preconcientes se vean influenciados por el entorno. Con lo que se puede concluir que el pensamiento conciente es el resultado de un collage de información y emerge bajo la forma de experiencia individual.

La conciencia aprende de si misma, pero necesita de un espejo para poder observarse. El espejo somos nosotros. Cada uno es vehículo de esta experiencia universal única e irrepetible.

Para que un evento atraviese el umbral de la conciencia hacen falta un número determinado de proteínas (tubulinas), estas luego activarán a otras de la red en una verdadera reacción en cadena. Es decir, hace falta una cantidad de E suficiente para poder traspasar el umbral de la conciencia.

Esto tiene varias implicancias:

1) Cuanto mayor es el estímulo que registran los sentidos, mayor número de neuronas (masa/energía E) serán activadas, disminuye el tiempo T, con lo que se incrementará el número de reducciones (RO), y también en consecuencia, la actividad perceptual y el flujo del pensamiento.

Esto se ve en la sociedad moderna donde hay una sobrecarga sostenida de estímulos (visuales, auditivos, olfativos, corporales, mentales, etc,) que producen una hiperactividad de los MT neuronales, fundamentalmente de las áreas corticales del hemisferio izquierdo, sede del pensamiento conceptual y

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lógico. Disminuye el umbral para la RO, de manera que el conciente está activo todo el tiempo con lo que se generan pensamientos más fácilmente y se incrementa el gasto metabólico y la fatiga.

2) A menor estimulación perceptual, menor masa/energía E (microtúbulos) desplazada, mayor tiempo T hasta la reducción (RO), menor actividad conciente, por lo tanto el flujo del pensamiento disminuye.

Es el caso de la meditación. Durante zazen se reducen los estímulos exteriores, los sentidos reposan, las ondas cerebrales se vuelven más lentas y profundas, elevando el umbral para la experiencia conciente, de manera que el número de RO, y el flujo del pensamiento decrece. La actividad mental se calma y el cerebro puede equilibrar su actividad.

Hay otra cuestión interesante. ¿Cómo puede la coherencia cuántica en los microtúbulos estar aislada del entrelazamiento (entanglement) del medio ambiente?A primera vista, el interior de las células vivas parece un sitio poco probable para efectos cuánticos.  Además de la elevada temperatura, están los ruidos provocados por los movimientos térmicos del agua de la célula, lo que produciría decoherencia causando un colapso o reducción aleatoria. Sin embargo, nuestro organismo ha evolucionado y se las arregla para evitar la decoherencia aleatoria (no del todo).

Por otro lado, los sistemas cuánticos aislados que evitan la decoherencia ambiental,  por ejemplo en el cerebro, al final colapsan debido a que atraviesan un umbral objetivo (reducción objetiva RO) debido a una característica intrínseca de la geometría del espacio-tiempo fundamental, que a este nivel es muy inestable. Es la conciencia misma la que provoca el colapso y la experiencia conciente. El sustrato de la transformación es información.

La experiencia conciente es un proceso no computable, esto implica un proceso no algorítmico que no es ni determinista ni al azar, es decir, la elección del estado resultante no es ni completamente determinista ni tampoco aleatoria, porque hay un elemento no computable integrado en la estructura del espacio-tiempo. ¡La conciencia misma!

Conocimiento y colapso coordinado de la función de onda

Cada evento de ROC consiste en una fase de computación cuántica aislada, relacionada con procesos preconcientes implícitos, que culminan en la reducción instantánea correspondiente con una conciencia discreta del "ahora". La onda de posibilidad colapsa en una partícula de experiencia. Se genera el proceso cognitivo. Que se expande en el cerebro de manera global y sincrónica como un flujo de conocimiento.

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Cada uno de estos acontecimientos selecciona las configuraciones propias (particulares), a escala de Planck, de la geometría espacio-tiempo de la experiencia, y determina la configuración de los microtúbulos que a su vez regularán la dinámica de las neuronas y sus conexiones.

La conciencia en su nivel más fundamental elige una geometría particular del espacio-tiempo que se corresponderá con una experiencia conciente.

La separación a escala de Planck de los sistemas quánticos superpuestos es muy diminuta en términos ordinarios, incluso los movimientos de masa relativamente grandes (por ej: cientos de estructuras de tubulina moviendo de 106 a 0,2 nanómetros) tienen precisamente efectos muy pequeños en la curvatura del espacio-tiempo.Cuando llega a un grado crítico de separación causa la reducción objetiva y la abrupta selección de una sola de las curvaturas y por ende una geometría particular de la experiencia.

Consideremos ahora la posibilidad de un colapso o reducción coordinada (ROC) en el contexto de dos tareas cognitivas: el reconocimiento de una cara y la elección de la comida.

Cada uno puede ocurrir en una serie de pasos dando soluciones intermedias y en realidad las posibilidades superpuestas son enormes, sin embargo, con fines didácticos consideraremos como una sola la ROC conciente que puede realizar estas tareas. 

A pesar de que procesos de computación clásica en el nivel neuronal pueden explicar en parte estas funciones, el sistema de ROC, al efectuar procesos de computación cuántica, permite: una capacidad mucho mayor de información, mayor número de vínculos (conexiones) agregando además aspectos no computables de la experiencia conciente, estas son propiedades vinculadas con el libre albedrío y la experiencia subjetiva.

Imaginate ahora que ves brevemente la imagen de la cara de una mujer conocida. Puede ser Betty, Lucy o Mary. Todas las posibilidades están en superposición cuántica. Por ej: durante 25 mseg de computación cuántica subconsciente la información se presenta en forma de “qubits”, estados cuánticos superpuestos en los MT. Cuando se alcanza el umbral crítico, se produce el colapso (RO) de lo qubits en un estado definido, volviéndose ahora “bits”. Ya podes reconocer a Mary. Este es un ejemplo simplificado, pero en realidad puede haber un número astronómicamente grande de posibilidades superpuestas en los procesos de computación cuántica en los MT.

Otro ejemplo. Un acto volitivo incluye muchas opciones posibles. Supongamos que debemos elegir la comida de un menú. Durante el procesamiento subconsciente, varias posibilidades se superponen: el bife, las papas fritas y la pasta, cada una con su propia geometría espacio-tiempo están en estado de superposición cuántica. Cuando el umbral para la RO se alcanza, el estado cuántico se reduce a un único estado clásico (macroscópico), cuya selección resulta de la computación

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cuántica determinista influenciada en el momento de la reducción por varios factores, por ej.: valores fundamentales incrustados en la realidad en la escala de Planck, la información contenida en la conciencia alaya, memoria, programación subconsciente, etc. Se hace una elección. ¡Quiero pasta!

Por eso se dice que no es ni completamente determinista ni aleatoria. Lo interesante, como se puede apreciar, lo que emerge como una elección conciente ya fue decidido a nivel subconsciente una fracción de segundo antes. Nuestras conductas, deseos y aversiones se originan y moldean en niveles subconscientes.

Entonces, ¿Quién tiene el control sobre tu vida? ¿Para que sirve la experiencia conciente si la individualidad finalmente es descartada y reciclada?

La experiencia es información. La información no se pierde ni se destruye. Cada pensamiento es un movimiento de energía e información. Cada respiración es también un movimiento de energía e información. Finalmente somos concientes porque el universo es conciencia y podemos respirar porque el universo está vivo y respira.

Nuestras experiencias aportan información al universo. El conocimiento implica vínculos sutiles entre el cerebro y la geometría fundamental del espacio-tiempo. El cerebro da forma al espacio-tiempo y este modela al cerebro, en un feedback de información constante. Creamos al medio y al mismo tiempo somos creados por este.

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Zazen y conciencia

Cognición y atención

La experiencia conciente es el resultado de un largo proceso cognitivo. Normalmente el cerebro procesa aproximadamente 400.000 millones de bits por segundo y solo somos concientes de 2000, que es la cantidad de información que necesitamos para construir nuestra realidad cotidiana, es decir nuestro ahora y aquí.

Es evidente que el cerebro debe filtrar información, sino sería imposible construir una realidad material coherente y útil.

La atención es una cualidad de la percepción que funciona como un filtro de los

estímulos, internos y externos, decidiendo cuál es la información más relevante

y dándole prioridad por medio de la concentración sobre el objeto, para un

procesamiento más profundo en la conciencia. También podemos considerar a

la atención como el mecanismo que controla y regula los procesos cognitivos;

desde el aprendizaje por condicionamiento hasta el razonamiento complejo.

En muchos casos el proceso actúa de manera inconsciente iniciándose en

el hemisferio cerebral   izquierdo para luego ser mantenida en el hemisferio

derecho.

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Durante la práctica de zazen, la atención se incrementa volviéndose más lúcida

y sutil. Junto con la concentración producen el estado de espíritu característico

de la condición normal y equilibrada de la mente-cuerpo.

La atención sutil tiene un rol decisivo en el proceso cognitivo y su influencia se puede comprobar en las tres fases de todo proceso cognitivo:

1) En la captación y transmisión de los estímulos.2) En el procesamiento de la información.3) En la respuesta adaptativa.

1) La captación de estímulos

Para poder crear (proyectar) una imagen correcta de la realidad las señales deben llegar hasta el tálamo y de aquí a algunas estructuras del sistema límbico (como el hipotálamo, hipocampo, amígdala cerebral, etc.), al tronco encefálico (más precisamente a la llamada “formación bulbo reticular” o FBR) y también al córtex, según corresponda (ver áreas de Brodmann).

Como vimos más arriba, las ondas de alta frecuencia (más de 40 Hz) son responsables de la experiencia conciente. Este tipo de vibración tiene la tendencia a generalizarse o expandirse con gran facilidad, de manera que puede haber varias áreas encendidas al mismo tiempo. Si esta actividad no es coordinada se vuelve caótica y desorganizada, la información se fragmenta y los procesos computacionales pierden eficacia, que es lo que ocurre en la vida moderna de las grandes ciudades: exceso de estimulación y falta de calma y autocontrol.

Pero además, las señales no sólo deben llegar a sus respectivas áreas cerebrales, es fundamental que estas zonas sean capaces de recibir dichas señales. Para ello, es importante que las zonas cerebrales implicadas estén "despiertas". Si no están despiertas, las señales no serán recibidas. Si sólo están medio despiertas, las señales serán recibidas a medias.

¿Cómo se activan las diferentes zonas del cerebro?

De la siguiente forma: cuando las señales llegan, por vías nerviosas aferentes, hasta el tálamo, éste realiza dos funciones: 1ª. Envía la señal a la zona cerebral correspondiente y 2ª envía una señal de alerta al centro de la atención el cual se encarga de despertar a la zona cerebral específica que debe recibir las señales enviadas por el tálamo.

El centro de la atención, como se ve, es directamente estimulado también por la FBR, la cual, a su vez, es estimulada por el tono muscular y sus conexiones con el cerebelo. Hay una relación directa entre los músculos abdominales (kikaitandem) y de la nuca con la atención.

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Finalmente, a través de la tonificación correcta del kikaitandem mediante una espiración larga y profunda y estirando la columna vertebral (particularmente la nuca), podemos mantener concientemente despiertas, gracias a la atención sutil, amplias zonas del cerebro, lo cual facilita un procesamiento adecuado de las señales nerviosas, sin generar una actividad conciente descontrolada.

El centro de la atención

Según investigaciones del famoso fisiólogo Arthur Guyton, se han encontrado en el sistema nervioso dos vías oscilatorias que, al ser estimuladas, causan la atención. Estas dos vías pasan a través del centro simpático en el hipotálamo (sistema límbico), por cuya razón esta área se denomina a menudo centro de la atención.

En uno de los ciclos oscilatorios las señales pasan del centro de la atención a la parte anterior del tálamo, siendo luego transmitidas en todas direcciones dentro de la corteza cerebral. Las áreas corticales, a su vez, retransmiten nuevamente los impulsos hacia el centro de la atención, reexcitándolo y produciendo todavía más impulsos para estimular el córtex. Esta secuencia de transmisión se produce una y otra vez, retroalimentándose, creando un ciclo oscilatorio que podemos denominar como "ciclo oscilatorio 1".

El segundo ciclo oscilatorio que puede causar la atención es el siguiente: desde el centro de la atención se transmiten señales hacia la formación bulboreticular (FBR) del tronco cerebral, que a su vez conecta con el cerebelo, lo cual aumenta el tono muscular en todo el cuerpo. La tensión justa de los músculos, a su vez, estimula los propioceptores y otras terminaciones de los nervios sensoriales a lo largo de todo el cuerpo, ocasionando señales sensorias que son retransmitidas a lo largo de la médula espinal hasta el tálamo y, finalmente, al centro de la atención. De este modo se establece el “ciclo oscilatorio 2”: el centro de la atención estimula los músculos, y las sensaciones corporales reexcitan a su vez el centro de la atención"

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2) El procesamiento de la información

Incluso si una señal ha sido bien captada, no es útil si no se procesa correctamente.Este procesamiento hace referencia a las funciones de identificación, comparación, asociación y clasificación que están vinculadas a la memoria.Cuanta más memoria accesible tenga el cerebro, mayor será su capacidad de procesar una información determinada. La accesibilidad a la memoria es pues fundamental. Desde un punto de vista informático, podemos decir que el cerebro cuenta con, al menos, dos tipos de memoria: la memoria RAM y la memoria del disco duro (ROM). La memoria RAM (random access memory) es la que permite acceder a cualquier byte almacenado sin acceder a los bytes precedentes. Es un tipo de memoria en el que la computadora guarda información para que pueda ser procesada más rápidamente. En la memoria RAM se almacena toda información que está siendo usada en el momento. Es volátil, es decir, pierde su contenido al desconectar el ordenador. Se utiliza normalmente como memoria temporal.La memoria ROM, (read-only memory) o memoria de sólo lectura, es la memoria que se utiliza para almacenar los programas que ponen en marcha el ordenador y realizan los diagnósticos. La mayoría de los ordenadores tienen una cantidad pequeña de memoria ROM (algunos miles de bytes).

En el ser humano, la memoria RAM correspondería a la memoria accesible para el lóbulo frontal, sede de la conciencia individual, del control voluntario, de la palabra y de la capacidad de tomar decisiones.

La memoria del disco duro (ROM) sería la memoria contenida en la totalidad del cerebro y del sistema nervioso en su conjunto, en cada célula, en el código genético, incluso en la conciencia alaya (almacén). Un tipo de memoria que compartimos con los miembros de nuestra especie y con todos las demás especies.

Usualmente, el lóbulo frontal no tiene acceso a este segundo tipo de memoria.Para él, ésta es una memoria inconsciente. Debido a ello, su capacidad de procesar adecuadamente las señales es limitada. Como consecuencia, la imagen de la realidad que el lóbulo frontal crea también es limitada. Como consecuencia, su decisión puede ser "torpe" impidiendo una respuesta adaptativa adecuada.Esta es la situación actual de una buena parte de los seres humanos que viven en las grandes ciudades.

Esto evidencia una falta de comunicación entre los tres cerebros que evolutivamente conforman el cerebro humano: el cerebro primitivo o reptil (paleocerebro), el cerebro medio o emocional (sistema límbico) y el neocórtex (especialmente el lóbulo frontal) que es la parte más nueva en la evolución, y es característico del ser humano.

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Cerebro triuno

El cerebro primitivo o reptil, el medio o emocional y gran parte del córtex están íntimamente relacionados con la memoria del disco duro, mientras que el lóbulo frontal es el que gestiona la memoria RAM.

Los contenidos de la memoria RAM son seleccionados por la conciencia del yo, la cual, a su vez, está condicionada por el sistema socio-cultural. En las sociedades en las que la cultura humana se ha “separado" de la naturaleza, la memoria del lóbulo frontal está (parcialmente) "desconectada" de la memoria celular, que es gestionada fundamentalmente por el cerebro profundo (primitivo y medio). Teniendo en cuenta que el sistema nervioso voluntario está controlado por el lóbulo frontal y el sistema nervioso autónomo por el cerebro primitivo y por el sistema límbico, podemos decir que muchas de las enfermedades del mundo moderno tienen su origen en la falta de comunicación entre estos tres cerebros. La información no fluye libremente de unos a otros y sus respectivas memorias no son adecuadamente permeables entre ellas.

Para procesar adecuadamente las señales, el lóbulo frontal debería tener libre acceso y ser permeable a la memoria del disco duro, incluyendo la memoria contenida en el código genético. Esto significa que el lóbulo frontal debe ampliar su umbral (límites) y su capacidad de memoria.

El cultivo de la atención sutil permite esta ampliación. La práctica de la meditación zen, facilita el acceso a la memoria inconsciente, actualizando un poder de procesamiento insospechado, o sea, acceso a nueva información.

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3) La respuesta adaptativa

El ser humano, como cualquier ser vivo, está inmerso en un ecosistema del que depende para sobrevivir y, al mismo tiempo, es un ser social inmerso en un sistema socio-cultural de que también depende para sobrevivir. El hecho es que, principalmente en las sociedades llamadas desarrolladas, el conflicto y la separación entre cultura y naturaleza es muy evidente. El sistema nervioso humano se enfrenta a un grave dilema: ¿A qué adaptarse, al ecosistema o al sistema socio-cultural? Siendo como somos seres sociales no podemos vivir apartados del sistema socio-cultural, pero al mismo tiempo, siendo seres biológicos nuestro organismo busca adaptarse convenientemente al ecosistema que sustenta la vida.

Muchas personas en la sociedad moderna optan por adaptarse al sistema socio-cultural, incluso si esto provoca la muerte del ser biológico. Este sobreesfuerzo de adaptación a un sistema social que no toma en cuenta la realidad biológica, es la causa de muchas enfermedades y sufrimiento hoy en día, (infartos, cáncer, estrés, insomnio, desequilibrios emocionales y psicológicos, etc.) La enfermedad del individuo es también la enfermedad del sistema social en el que vive.Aquí también la práctica de la atención sutil es muy importante. Al aumentar el umbral de atención, la conciencia se expande y el individuo tiene acceso a un volumen mayor de memoria biológica (celular), entonces, esta memoria adquiere mayor importancia a la hora de tomar decisiones y de ordenar respuestas adaptadas no solo al sistema socio-cultural sino también a su realidad biológica.

La práctica de zazen desarrolla naturalmente y de manera inconsciente la atención. Al eliminarse estímulos sensoriales innecesarios y tonificar de manera justa los músculos y fascias aumenta la atención sutil. Se le llama sutil porque no es un proceso conciente pero interviene la conciencia.

Al haber menos estímulos disminuye la información y el movimiento de masa/energía con lo cual hay menos reducciones y menos procesos mentales. Esto favorece la concentración y la observación del espíritu durante zazen. La conciencia se observa a si misma, zazen es el espejo. El espejo que refleja todas las formas y no se queda con nada. Finalmente la conciencia es una. Sujeto y objeto se vuelven uno. Desaparece el espejo…sin embargo siempre queda algo.

El cerebro procesa información todo el tiempo. La mayoría de está información se gestiona en niveles por debajo del conciente.

Por otra parte en zazen no se está cortado del exterior, sino que simplemente los estímulos, sensaciones y percepciones se dejan pasar, no son tomados en cuenta, por eso no alcanzan un umbral para provocar una reducción objetiva y generar actividad conciente.

En el Zen se le llama hishiryo, la conciencia durante zazen.

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Es una condición de equilibrio de la conciencia en la cual los estados superpuestos no concientes se separan provocando una pequeña reducción controlada, que no atraviesa el umbral para la experiencia conciente y genera un pensamiento que no se disemina, es decir, no genera una reacción en cadena ni una corriente de pensamientos.

Al no haber suficiente estímulo (información), las oscilaciones corticales de alta frecuencia están desactivadas y no se genera un pensamiento secuencial.

Hishiryo es el pensamiento absoluto que se eleva desde las profundidades del océano de potencialidad infinita. No corresponde a una actividad reactiva de los niveles concientes, se sitúa por debajo del umbral crítico para activar las zonas superficiales (córtex) y generar así una corriente de pensamientos, sin embargo el observador está presente, moviéndose sin moverse, sin dejar huellas ni provocar partículas de experiencia. Esta actividad de la conciencia no se encadena de manera secuencial, como el pensamiento ordinario y trasciende la mente individual.

El tono muscular justo y el equilibrio de la postura junto con la respiración, estimulan al sistema nervioso y a los músculos posturales que a su vez aumentan la atención y la concentración correctas, lo que profundiza la experiencia de zazen.

Este tipo de conciencia tiene acceso directo a la memoria celular profunda y a información contenida en los niveles más fundamentales, como la conciencia almacén (alaya) y a nivel genético. Esta propiedad se utiliza para sanar el cuerpo-espíritu de cualquier enfermedad.

La observación modifica el espacio-tiempo

Se puede recuperar información archivada y eliminar programas y archivos inútiles (no deseados) con la simple observación.

La observación modifica la geometría espacio-tiempo en sus niveles fundamentales.

Evidentemente este equilibrio de masa y energía influye en la configuración de los MT y por consiguiente en las conexiones (sinapsis y redes) y en el metabolismo neuronal.

La práctica regular de zazen, mantiene estas condiciones vibratorias, de manera que la configuración de las conexiones se mantiene. Esta capacidad llamada: neuroplasticidad, permite reconfigurar el cerebro y generar una actividad mental controlada. De esta forma el practicante se concentra y puede observar su espíritu con más profundidad y equilibrio.

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Hishiryo es la conciencia misma del universo. Es el pensamiento de Buda.

Mundo interior, mundo exterior

Durante zazen, los ojos se encuentran semi abiertos y la mirada se posa 45º hacia el suelo, sin fijar la vista en nada. En realidad la mirada está vuelta hacia el interior pero sin estar cortados del exterior. Esto disminuye la actividad del córtex frontal (particularmente el izquierdo) y las áreas visuales del córtex occipital.

Este reposo de la vía óptica produce efectos en el equilibrio de la postura, ya que al recibirse menos información desde el exterior, para equilibrar la postura el sistema de equilibrio lo hace con la información interna (propiocepción), esto permite acceder a nueva información y a estimular el cerebro profundo, sede de la intuición y del instinto.

Al reposar el cortéx, que habitualmente consume muchos recursos de sangre y energía, estos pueden redirigirse a otras áreas del cerebro. La base de la alimentación de las neuronas corticales es el oxígeno (90%) y la glucosa, (esto muestra el alto nivel metabólico que implican los procesos concientes).

Lo podemos ver también en las caóticas y aceleradas ondas de alta frecuencia (tipo beta) de los procesos más superficiales que corresponden con grandes eventos de reducción cuántica (ROC) y por ende con un aumento de la actividad mental.La posición de los ojos y la mirada, influye directamente en la conciencia y en la capacidad de concentración.

El Maestro Kosen dice: “Es en esto que insisto en el hecho de que el zazen último es el que reconcilia totalmente la vida ordinaria y el nirvana, y esto lo dijeron los Maestros. Es difícil de comprender, pero lo dijeron. Es el que reconcilia las condiciones diarias de vida ordinaria con lo más profundo.La postura es natural, la respiración tranquila, los ojos están abiertos…Es como si estuviéramos sentados en el autobús. ¿Cuál es la diferencia?.¿Dónde está la diferencia?.El Maestro Dogen lo explica en el Fukanzazengi, donde dice una frase muy importante: “giren su luz hacia el interior.” ¡Solamente esto! Cuando se gira su luz al interior -no puedo decirles cómo, pero se enterarán de esto haciendo zazen, cuando se gira la luz hacia el interior, entonces el mundo interior y el mundo exterior no están separados, todo se vuelve el espíritu. Todo se unifica”.

Cuando los ojos están abiertos y miran hacia afuera se proyecta el mundo exterior, fotones de luz transportando información generan fenómenos de reducción cuántica generalizados y una corriente de conocimiento. Se incrementa la actividad mental.

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Cuando los ojos están cerrados, no hay estímulos lumínicos, es el mundo interior, disminuye drásticamente la información con los cual las ondas en superposición cuántica no alcanzan el umbral crítico para la separación de las múltiples geometrías espacio-tiempo superpuestas. Decrece la actividad mental.

Maestro Deshimaru

Durante la práctica de zazen los ojos no están ni cerrados ni abiertos. Si están completamente abiertos es más difícil concentrarse en la respiración y en la postura. El conciente se encuentra activo. A esta condición se le llama sanran. Pensar. Su aspecto controlado es la observación.

Si los ojos están cerrados, puede ayudar a la concentración pero la conciencia finalmente sin estímulos, tiende a “apagarse” y se termina durmiendo. Es kontin. No pensar. Su aspecto controlado es la concentración.

Solo pensar o solo no pensar, son excesos, extremos.

Zazen no es ni kontin ni sanran. Es el equilibrio. Pensar sin pensar.

Observación y concentración.

El Maestro Deshimaru dice: “A veces sanran cura a kontin y a veces kontin cura a sanran”

Si la mente está agitada hay que practicar la concentración, el no pensamiento. Incluso pueden cerrarse por un momento los ojos. La concentración es la capacidad de mantener la coherencia de un sistema, evitando que esta se pierda mezclándose con otros sistemas, controlando las ROC (colapsos masivos de la función de onda).

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Si la mente está oscurecida, adormilada, hay que practicar la observación, el pensamiento, se pueden abrir un poco los ojos, despertar la energía, incrementar la información hasta llegar a un nivel justo.

Una vez encontrado el equilibrio, que es el punto (cero), donde todas las fuerzas convergen, se manifiesta naturalmente hishiryo, verdadera pureza, pensamiento más allá del pensamiento y del no pensamiento. La condición normal del cuerpo y del espíritu.

La luna reflejadaEn la mente clara

Incluso las olas que rompenReflejan su luz.

Poema del Maestro Dogen

La esencia solo puede ser experimentada por si mismo. Experiencia subjetiva, conocimiento directo.

La práctica de zazen   permite realizarlo con la totalidad de nuestro ser. Inconcientemente. Naturalmente.

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La observación de la conciencia

Maestro Kosen

Enseñanza del Maestro Kosen durante zazen:

“Se habla de meditación. Se dice, finalmente, que el zazen no es una meditación tan elevada porque uno se pasa una hora de zazen observando su cuerpo, viviendo su cuerpo, corrigiendo su postura. Esto no es tan elevado, tan transcendental, me digo a veces cuando paso mi hora de sentir mi hígado, de sentir mi nuca, de sentir mis hombros, mis caderas.

El interés, no es el objeto, es verdad, nos concentramos sobre algo muy simple. En zazen nos concentramos sobre la postura. No nos concentramos en Dios, el nirvana o no sé qué. Nos concentramos en la postura. Y entonces digo, lo importante no es el objeto de concentración, es el sujeto. Y el despertar, el satori como decimos, no nace del objeto sino del sujeto, es decir del que observa.

Y poco a poco vamos a volvernos íntimos con quién observa la postura. Vamos a darnos cuenta que esta conciencia que observa la postura está al mismo tiempo dentro del cuerpo, está al mismo tiempo por encima del cuerpo, está por

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delante, está por detrás. De hecho, es universal. Está por todas partes y es esto que es importante. Vamos de repente a darnos cuenta que la dimensión de nuestra conciencia es mucho más fabulosa, más libre, enorme y universal que lo que habíamos pensado. Y todo esto, justamente, observando, a fuerza de observar simplemente su postura. Y entonces sentimos una alegría inmensa porque nos damos cuenta que somos mucho más allá de lo que estamos observando. Y que somos capaces de observar, por ejemplo, dos lugares al mismo tiempo.

Nuestra capacidad de conciencia es fabulosa. Somos al mismo tiempo uno mismo y estamos al mismo tiempo más allá de uno mismo. Entonces la respiración tiene también un papel muy importante en nuestra conciencia, en la observación de la postura. La respiración está fuera, dentro, arriba, abajo. Y es pues un intercambio. Así que nuestra conciencia está dentro, fuera, arriba, abajo.

La conciencia es primordial para nosotros. Es decir que una conciencia que no evoluciona, que no progresa, se deteriora. El cuerpo también. Si no caminan más, si no hacen 10 metros sin usar el coche, el cuerpo se deteriora. Hasta una edad que sobrepasa la edad adulta, la conciencia puede evolucionar. Puede evolucionar ad infinitum. No es solamente a los 20 años o en la juventud que la conciencia se desarrolla.

Y entonces si están atentos, si están concentrados, si están motivados, cada zazen es histórico, cada zazen es de una importancia capital y marca su conciencia, su cerebro. Abre nuevos espacios en el cerebro mismo.

Cuando están en su casa, si se plantean la pregunta por ejemplo de si van al zazen, "si voy a practicar hoy o si me quedo en casa. Oh! Bueno, voy a quedarme en casa ". La conciencia que se tiene cuando estamos en casa es muy, muy diferente de la que se tiene cuando se penetra en el dojo.

En el momento en el que penetran en el dojo, donde toman la postura de zazen, donde enderezan su cuerpo y su espíritu, donde se despiertan, entonces esto se convierte en un momento histórico que señala, que forja su cerebro, que abre nuevos espacios en su cerebro.

Cuando van al cine a ver una película, se sientan cómodamente en una butaca, la sala se oscurece, la película comienza: ¿Qué es lo interesante en el hecho de ir a ver una película? Pues bien, durante la proyección se identifican con los personajes de la película, con las acciones de la película, con las emociones de la película y están allí, olvidan completamente que son ustedes y transponen su conciencia en esta aventura que están mirando.

De hecho, la vida es la misma cosa. Al igual que en el cine podemos percibir una cincuentena de imágenes por segundo, no más -la conciencia humana no puede almacenar más. Entre cada imagen, y esto es muy importante, existe un espacio vacío. Y pues en nuestra vida del mismo modo que en el cine, es la

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misma cosa. En nuestra vida es la última imagen percibida que se define como la realidad.

Por esta razón durante zazen deben mantener los ojos abiertos, completamente naturales, con la mirada posada a 45 grados delante de ustedes, y no solamente concentrándose objetivamente en la postura, en el zazen. A menudo digo: "corrijansus posturas, las manos, el mentón, la nuca", pero ustedes están atentos también a su propia percepción de las cosas.

Cuanto más retroceden en relación al objeto, más su percepción espiritual se vuelve profunda. Vuelven al origen de la percepción. Así pueden ver todo el mecanismo. Hasta pueden ver la oscuridad entre dos espacios de luz manteniendo los ojos abiertos. Así como se dice en los sutras antiguos: pueden ver la oscuridad en la luz. Un poema dice: "medianoche es la verdadera luz, el alba no es clara."

Hablo en relación a la postura, por supuesto. Es importante para que la postura sea fuerte, derecha, noble, pero los detalles, por ejemplo la posición de las manos, especialmente la posición de las manos, son muy importantes, la posición de los pulgares, deben estar bien horizontales. También detalles como el hecho de que los codos no deben tocar al cuerpo, los hombros deben caer hacia abajo. Decimos que estos son los detalles pero está también el todo, el conjunto, el conjunto de la percepción, el conjunto de la actitud”.

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Sanación y conciencia cuántica

Hacia una medicina del espíritu

La conciencia puede elegir una determinada geometría espacio-tiempo. Moviéndose de a saltos cuánticos, de fenómeno en fenómeno. Cada punto de la experiencia, cada momento, tiene su propia geometría y una conformación material particular. Cada punto es independiente del otro, pero están conectados.

La conciencia modela el mundo físico. Los pensamientos generan una corriente electroquímica de información que impactan en cada célula del cuerpo.Con la suficiente energía e información la conciencia la célula puede regenerar incluso su ADN. Es posible transformar cualquier condición. El poder curativo del cuerpo es enorme. La conciencia mueve a la materia y a la energía, da forma y función. Es el sustrato mismo de del universo.

De manera que podemos utilizar esta capacidad dice la conciencia para afectar la materia en sus niveles fundamentales. De ahí el nombre de sanación cuántica. Es una curación espiritual, pero no solo mental, también participan el cuerpo y la respiración (energía).

La conciencia es energía e información. La realidad que vivimos depende de la información que procesa el cerebro.

Esta capacidad está ligada a la creencia de la persona. Si no lo crees profundamente, es decir, con todo tu ser, entonces no es eficaz. Pero si crees en algo, esto, tarde o temprano se realiza. Cada célula del cuerpo participa de nuestro diálogo interno.

La fe es una cualidad superior de la conciencia. Este tipo de fe o creencia no es ciega. Emerge del inconciente y gestiona información que no accede al conciente. Por eso la fe no es algo que se pueda probar concientemente. Pero su impacto en el mundo cuántico, en los niveles más fundamentales de la materia es profundo.

Creer que se puede, es lo primero. La fe inicia el movimiento. En la medicina china representa a la madera, la primavera, el viento, el hígado.Es una fuerza expansiva que llega a todas partes y aporta información fundamental al sistema, que luego lo transforma en movimiento, acción y estimulación. La madera nutre al fuego del corazón y este activara todos los mecanismos para la curación: memoria celular, respiración, purificación, regeneración, etc.

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El lenguaje del ADN

La memoria celular es la base de la inmunidad específica mediada por leucocitos y anticuerpos. (Ver: sistema inmunitario)Este cambio de vibración fundamental modifica incluso la estructura del ADN y la información genética.Si el ADN recodifica su información ya no sintetiza la misma secuencia de proteínas. Cambia. Esto transforma la estructura y la función de la célula. Permite regenerar el tejido y recuperar la fisiología normal.

El  ADN no es sólo responsable de la construcción de nuestro cuerpo sino que también almacena información y energía. El físico y biólogo molecular ruso Pjotr Garjajev y sus colegas también exploraron la conducta vibracional del ADN: "La función de los cromosomas vivientes como computadoras holográficas/solitónicas utilizando la radiación láser endógena del ADN".Estos investigadores consiguieron modular ciertos patrones de frecuencia hacia un rayo láser y con él influenciar la frecuencia del ADN y así la información genética misma.

 El ADN se expresa, a través de ondas (solitónicas) que pueden almacenar información durante mucho tiempo y son capaces de propagarse, sin deformarse, a grandes distancias en medios no lineales.

Comprobaron que los cromosomas dañados por los rayos X pueden ser reparados. Captaron patrones de información de un ADN en particular y lo transmitieron hacia otro, así reprogramando las células a otro genoma. De manera que ellos transformaron con éxito, por ejemplo embriones de rana en embriones de salamandra simplemente por transmitir los patrones de información del ADN.Este experimento evidencia el inmenso poder que tiene la onda (vibración) sobre la información genética. Los genes, que son los encargados de codificar las proteínas pueden modificar su información.

El ADN en los sistemas vivos tiene atributos de onda que nos llevan a una dimensión desconocida. La información genética es tan sólo la parte del código referida a la síntesis de proteínas... y nada más. Pero los cromosomas trabajan como ordenadores solitónicos/ holográficos   bajo la influencia de radiaciones láser endógenas de ADN.

El ADN funciona como una antena cuyas características vienen determinadas por su tamaño. La molécula extendida tiene alrededor de dos metros de longitud y una frecuencia natural de 150 megahertzios. Curiosamente esta frecuencia está exactamente en la banda utilizada por el radar humano para las telecomunicaciones e ingeniería de microondas. Es decir, nosotros usamos exactamente el mismo rango de frecuencia para recibir y emitir señales a nivel de ADN que en nuestra tecnología.

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La oscilación vibratoria de nuestro ADN puede causar patrones de perturbación en el vacío produciendo agujeros de gusano   magnetizados, equivalentes microscópicos de las perturbaciones Einstein-Rosen formadas en las inmediaciones de los agujeros negros (dejados por las estrellas que estallaron).

Estas son conexiones en forma de túnel entre áreas completamente diferentes en el universo a través de las cuales la información puede ser transmitida más allá del espacio-tiempo. El ADN atrae estos bits de información y los pasa a nuestra conciencia. Este proceso de hiper comunicación o comunicación cósmica es de lo más efectivo en un estado de relajación o de meditación.El stress, las preocupaciones o el exceso de pensamientos obstruyen esta hiper comunicación o distorsionan la información haciéndola inútil. En la naturaleza la hiper comunicación ha sido aplicada exitosamente durante millones de años por todas las especies vivas, desde plantas, insectos y animales. El hombre moderno lo conoce solamente en un nivel mucho más sutil, como "intuición".

En la naturaleza, cuando una hormiga reina es separada de su espacio en la colonia, la construcción aún continúa fervientemente y de acuerdo al plan. Pero si se mata a la reina el trabajo en la colonia se detiene. Ninguna hormiga sabe más qué hacer.Aparentemente la reina envía los "planes de construcción" también desde muy lejos a través de la conciencia de grupo a sus sujetos. Ella puede estar tan lejos como lo desee, mientras que esté viva.

La hiper comunicación en el ser humano se da cuando uno repentinamente tiene acceso a la información que está fuera del conocimiento ordinario. No depende de la actividad neuronal de la corteza cerebral.

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Es una intercomunicación a nivel cuántico. La conciencia obtiene información más allá del tiempo–espacio. Algunos animales "saben" también, desde lejos, cuando sus amos están por regresar a casa.

Esta hiper comunicación se desarrolla cambiando la conciencia ordinaria y sintonizando nuestro chi con el chi universal. Depende de la correcta alineación de la columna vertebral y que el flujo de chi en el cuerpo se libere, estableciendo un ritmo respiratorio natural, calmo y profundo, la mente clara y en calma.Es una sintonía. Si sintonizamos correctamente, el ADN, este amplifica la señal, recibe y transmite, de ADN a ADN, de conciencia a conciencia.

El ADN fantasma

Los científicos rusos irradiaron muestras de ADN con luz láser en cámaras especiales. En la pantalla se formó un patrón de ondas típico. Cuando retiraron la muestra de ADN, los patrones de onda no desaparecieron, si no que permanecieron. Decenas de experimentos de control demostraron que el patrón seguía proviniendo de la muestra retirada cuyo campo energético aparentemente subsistía por sí mismo. Este fenómeno fue denominado "Efecto del ADN fantasma"Vladimir Poponin, físico cuántico, reconocido mundialmente por sus estudios sobre las interacciones entre los campos electromagnéticos y los sistemas biológicos se refiere así a ese efecto fantasma: "Después de reproducir esto muchas veces y verificar el equipo de todas las maneras posibles nos vimos obligados a aceptar de que alguna nueva estructura de campo estaba siendo excitada desde el "vacío" físico (actualmente recibe el nombre de Campo Punto Cero). Lo denominamos "ADN Fantasma" para dar énfasis a que su origen está relacionado con el ADN físico”.

Se cree que la energía fuera del espacio y del tiempo aún fluye a través de los agujeros de gusano luego que el ADN ha sido removido. La hiper comunicación genera campos electromagnéticos cerca de las personas involucradas.

Es posible estudiar esto desde el punto de vista físico, debido a la capacidad intrínseca del campo fantasma de acoplarse con los campos electromagnéticos convencionales.

En ese acoplamiento se produce una transmisión de información directa desde el vacío creador. Se abre así un universo de posibilidades. De hecho, podría ser que nuestro ADN esté recibiendo desde el primer día sus "instrucciones de ensamblado" más allá del espacio y tiempo conocidos. A partir de esas instrucciones la naturaleza holográfica   del ADN iniciaría el proceso de organización. En el sutra de la Gran Sabiduría se dice: "el vacío y los

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fenómenos no son diferentes, el vacío se convierte en fenómeno y el fenómeno se convierte en vacío. La forma es el vacío. El vacío es la forma”.

En sus comienzos la humanidad estaba muy fuertemente conectada a la conciencia de grupo, como la mayoría de los animales, la supervivencia dependía del grupo. La dependencia era total.

Para desarrollar y experimentar la individualidad los seres humanos tuvimos que olvidarnos de la hiper comunicación casi por completo, aunque conservamos nuestro instinto colectivo aún, incluso de manera inconciente. Así, una pequeña parte del cerebro, la corteza frontal (principalmente izquierda) se encargó hasta el momento de percibir y organizar la realidad. Un mundo de opuestos, basado en categorías y conceptos limitados, dependiente de la palabra y de la individualidad.

De ahí el desequilibrio y el aislamiento actual del ser humano "civilizado".

Pero ahora que estamos claramente estables en nuestra conciencia individual y que ya no la podemos llevar más lejos (se pueden ver los resultados), podemos crear una nueva forma de conciencia de grupo, principalmente una en la que tengamos acceso a la información contenida en el ADN sin ser forzados o remotamente controlados sobre qué hacer con esa información. Podemos ahora saber que, como sucede en Internet, nuestro ADN puede recoger información de la red y puede establecer contacto con otros participantes en ella.

Enseñanza del Maestro Kosen:

“Somos la integridad de lo que nos constituye, tanto físicamente como a nivel de la conciencia. Pues soy la conciencia que tengo de mí mismo, soy la conciencia que tengo de mi cuerpo, la conciencia que tengo de mi conciencia misma, soy esta piel, esta carne, estos músculos, estos huesos, esta médula, soy estos sistemas que constituyen mi cuerpo, soy estas células, soy este ADN, soy estos átomos, y soy ku, vacío.

Se piensa que para elevarse en conciencia y en dimensión, es necesario elevarse, ir alto, más grande, alto en el cielo, más lejos. Lo más grande, lo más lejos posible, es la visión objetiva de las cosas; pero la visión subjetiva, es decir, la mirada de sí mismo, va hacia lo infinitamente pequeño. Es la misma cosa, pero es subjetivo, es lo que se es realmente, la mirada interior, no la mirada exterior.

Digo esto, es importante durante zazen, porque el zazen depende de su conciencia. Está claro que no es una gimnasia, aunque la postura es muy importante. Pues pueden hacer un zazen de carne y músculos pero pueden también hacer un zazen espiritual, pueden hacer un zazen celular, pueden hacer un zazen atómico, pueden hacer un zazen que regresa completamente al

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origen, al espíritu original, a dios, a buda, al punto cero, eso depende de su conciencia.

Lo que solidifica la materia y la realidad, es nuestro pensamiento. Es por esta razón, que se nos anima, cuando uno es principiante, a concentrarse directamente en los puntos de la postura dejando de seguir sus pensamientos, sus debates interiores. Es seguro que si se sientan, cierran los ojos y comienzan a discutir, repetir el pasado, recordarse, o pensar que van a hacer más tarde, pasarán por al lado de la experiencia directa de zazen.

Para que comprendan el valor de zazen, voy a proponerles un teorema propio de zazen:

Cuando no hacen zazen, no pierden nada. Y cuando hacen zazen, ganan.

La otra parte del teorema:

Cuando ustedes hacen zazen, no ganan nada. Y cuando dejan de hacer zazen, pierden.

Pienso que es útil practicar zazen en grupo. Pero no debemos apegarnos al grupo en tanto que grupo. Es como si el Buda hablara de la sangha. La significación de la palabra sangha, es decir el grupo de practicantes, es de un altísimo nivel. Sin embargo, practicar solo es diferente. Aquello que llamamos sangha, es el grupo sentado frente a la pared, cada uno solo pero juntos. La amistad, los grupos de amigos, la afinidad en el marco del grupo zen no tiene estrictamente hablando valor alguno, quiero decir con respecto a la práctica auténtica. Ningún interés, ningún valor, si se quiere es incluso una dificultad.

La práctica auténtica de zazen es algo que uno aborda solo.

Una gestión de grupo humano es una de las cosas más difíciles de realizar en la tierra. Nos damos cuenta de ello. Es un tema, un asunto extremadamente interesante, importante y vital a resolver por la humanidad. El Zen, sin embargo, no es política.

En la tradición auténtica se dice que hay un dios para cada órgano del cuerpo, cada víscera, cada articulación del cuerpo. De hecho, durante zazen, a cada respiración, a cada sensación enunciamos los nombres de Dios en nuestro interior…

Una vez, el emperador pregunto al maestro de Bodhidharma, Hannyatara, es una historia que me gusta mucho, el le dijo: "Usted hace mucho zazen, pero no hace muchas ceremonias, no hace muchas plegarias." Entonces el Maestro Hannyatara respondió: "Cada una de mis respiraciones es una plegaria."

La posición de zazen es bien particular porque ella hace de vuestra individualidad algo universal. Ella nos funde con lo universal. No vale la pena tener miedo, vuestro propio cuerpo, así está dicho en los textos, es el cuerpo de Buda”.

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Fotones que curan

La visualización es muy importante en el proceso curativo. Aprender a dirigir la mirada hacia el interior de si mismo es fundamental, observar su cuerpo, sus órganos internos, la columna vertebral, etc. incluso observar la raíz de la enfermedad. La observación modifica la geometría del espacio-tiempo. Fotones de luz que modelan verdaderamente la materia. La mirada interior aporta información y energía donde se dirija. Al mismo tiempo se desarrollan la concentración y la atención sutil que permiten la capacidad de foco. En términos curativos, esto aumenta la eficacia.

Nos referimos a la sanación cuántica, que es en realidad un cambio de configuración y sintonía del ADN que modifica drásticamente la realidad física. Incluso hay fenómenos de sanación a distancia, En el Zen, la ceremonia del KIto es un ejemplo. También la telepatía o la clarividencia, pueden así ser explicados. Las conciencias están conectadas, solo hay que despejar, pulir, entrenar de nuevo este vínculo con la "conciencia universal", con la "red". Comenzar a percibirnos y a aceptarnos de otra forma.

Somos creadores de realidades, está en nuestra naturaleza, solo que lo hacemos generalmente sin darnos cuenta y muchas veces en una dirección errónea e inútil. Lo interesante es conectar concientemente con ese nivel de conciencia, con ese "océano de potencialidad infinita". Durante zazen, la conciencia, el observador, puede sumergirse en este océano inconciente y acceder a información sumergida en las profundidades de la conciencia. Esta es la fuente de la sabiduría.

Cuando el agua de la sabiduría se mezcla con el fuego de la compasión, en el taoísmo se dice que se realiza el elixir de la inmortalidad y la felicidad suprema. El yin y el yang en armonía perfecta. Riñón y corazón. El agua de la sabiduría modela y contiene a la compasión, evita que se queme o que pierda eficacia. El fuego de la compasión, del amor universal, impulsa a la sabiduría, la expande, la relaja.

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Hay una gran cantidad de casos de curaciones espontáneas y remisiones de enfermedades graves, que escapan a la explicación de la ciencia médica.El común denominador de todos es que la persona decidió profundamente curarse y ya no depender del tratamiento médico convencional.Obviamente, el propio cuerpo “escucha” esta decisión y se hace participe. Cuerpo y mente en unidad, es la puerta de acceso a recursos ilimitados.

Es muy simple y muy misterioso. Es una cuestión de mentalidad, de confianza en si mismo y en su verdadera naturaleza.

Por eso en este nivel la fe ya no es ciega. Es el movimiento de la conciencia que se reconoce a si misma y ya no depende de la información del exterior para manifestarse.

Hay varias disciplinas y técnicas que son favorables para este propósito curativo. Tanto el chi kung, taichi chuan o yoga fortalecen la energía y el cuerpo físico además de calmar la mente.

Esto es la base. Si la mente se agita, la energía se perturba, pierde coherencia y por consiguiente el cuerpo físico (materia) se ve afectado.

Las emociones son el nivel más físico de las energías sutiles. Se somatizan muy fácilmente, a su vez, cada órgano interno genera un estado emocional particular. El cuerpo físico y el cuerpo emocional son muy cercanos. En el cerebro medio hay estructuras que gestionan directamente las emociones y el aprendizaje (memoria), tradicionalmente se lo conoce como sistema límbico.

Sabemos ahora que las emociones y los pensamientos, tienen su expresión química en el cuerpo. Cada célula del organismo escucha y participa del “diálogo interno”.

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El cerebro responde a cada pensamiento con una química determinada, ya sea de alegría, de placer, de miedo, de alarma o de dolor.

La química de zazen

Zazen también genera una química determinada. Esto está estudiado a nivel científico. La calma mental y la ecuanimidad emocional provocan un aumento de endorfinas y otros neuropéptidos (serotonina, dimetiltriptamina (DMT), etc.) involucrados en la sensación de bienestar y relajación. Además aumenta el umbral para el dolor y los estímulos concientes por lo que disminuye la sensación dolorosa y su valoración conciente. Así se puede penetrar en la raíz del desequilibrio, comprenderlo.

Este movimiento de información cancela el vector en desequilibrio, desaparece la causa, y genera así un equilibrio. Que se convierte en una nueva causa que generará más tendencia al equilibrio. Como hemos visto hasta ahora, la mirada del observador modifica el mundo cuántico. La observación es en si misma transformación.

El Maestro Dogen dice: “Estudiar el Camino de Buda es estudiarse a sí mismo. Estudiarse a sí mismo es olvidarse de sí mismo. Olvidarse de sí mismo es ser iluminado por todas las existencias. Ser iluminado por todas las existencias es estar libre del cuerpo-mente de uno mismo y de los otros. No queda rastro de iluminación, y esta iluminación sin rastro sigue para siempre”.

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La verdadera sanación debe ayudar a la persona a recuperar la condición normal del cuerpo-espíritu. La buena medicina da la oportunidad de corregir aquí y ahora errores del pasado, fortaleciendo el sistema con energía e información.

Debido a esto la verdadera curación debe incluir la disciplina y la higiene del cuerpo-mente. Meditación, ejercicios, masajes, educación…

La conciencia que cura, es la misma que crea universos. Pare encontrarla no hay que ir hacia fuera sino hacia adentro, hacia nuestras raíces, a la esencia.

Zazen es la puerta directa a nuestra esencia divina. La conciencia universal colapsa fácilmente en esta posición del cuerpo-mente. Zazen es la materialización de la conciencia de Buda. La postura de zazen en si misma es Buda.

Si bien zazen no es un método terapéutico, como método de salud es el mejor, el más elevado, el más espiritual, porque no solo cura, al mismo tiempo ilumina y salva a todas las existencias.

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“La iluminación es como la luna reflejada en el agua. La luna no se moja, ni el agua se altera. A pesar de que su luz es muy amplia y grande, la luna se refleja hasta en un charco de una pulgada de ancho. La luna entera y todo el cielo se

reflejan en las gotas de rocío sobre la hierba, o incluso en una gota de agua. La iluminación no te altera, al igual que la luna no altera al agua. No se

puede obstaculizar la iluminación, así como una gota de agua no obstaculiza a la luna en el cielo. La profundidad de la gota es la altura de la luna. Cada

reflejo, aunque sea larga o corta su duración, pone de manifiesto la inmensidad de la gota de rocío, y realiza lo ilimitado de la luz de la luna en el cielo”.

Maestro Dogen

Escrito por Mariano Seiki Giacobone

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Fuentes:

Directa:

-Zazen-Enseñanza del Maestro Kosen en el dojo

Bibliografía:

-Kusenes del Maestro Kosen-La práctica de la concentración (Maestro Deshimaru)

-Zen y cerebro (Maestro Deshimaru)-La nueva mente del emperador (R. Penrose)

-Phisique quantique et représentation du monde (E. Schrödinger)-Principios de mecánica cuántica (P. Dirac)

-Tratado de fisiología médica (Guyton)

Web:

-La web del Maestro Kosen http://zen-deshimaru.com/ES/home.php-Quantum Conciousness http://www.quantumconsciousness.org

-Espiritualidad y ciencia http://budacuantico.blogspot.com/

Mar del Plata 2011

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