en la tradicin. Por eso, sus techos siguen re pi tiendo una inclinacin tan pronunciada, como si fuera a nevar de un momento a otro. El clima tropical obliga a nuevas soluciones y la cercana de la colonia espaola las sugiere. As, en las casas quinta de los suburbios y en las del campo, aparecen corredores y otros tipos de espacios sombre_ados y ventilados, extraos e inexistentes en su pas orgen. La tipologa holandesa urbana se mantiene ms apegada a la tradicin en las casas comerciales-resi-denciales del centro, donde se encuen-tran las unas arrimadas a las otras y con tres o ms pisos. La transmisin e influencia de elemen-tos arquitectnicos holandeses antilla-nos a Venezuela se hizo sentir mucho ms all de la regin coriana y alcanz una larga extensin costera desde La Guaira hasta Maracaibo y tambin se extendi a Caracas (Colegio Chvez), Cabudare (Capilla de Santa Barbara), El Tocuyo (Iglesia de San Francisco) y Ospino (Iglesia Parroquial). En Puerto Cabello hay una casa del ao 1765, con un hastial curazoleo, artesonado his- ' pano morisco y balcn canario; suma de transmisiones que, a la postre, son las que determinan las expresiones regio-nales. Como es fcil de entender, las muestras ms numerosas de la influencia holan-ds-antillana se encuentran en Coro y alrededores, principalmente en la Pennsula de Paraguan, la porcin del territorio venezolano que ms se acerca a las islas. Erwin Walter Palm, en 1945, fue el primero en sealar el origen flamenco de las columnas bulbosas de la "Casa de las Ventanas de Hierro" y de las del Colegio Chvez de Caracas (demolido). En 1952, el mismo autor aadi nuevos elementos comparativos y, en 1961, quien suscribe, aument el listado de las similitudes formales. Finalmente,

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