vuelos y revueltas 3

Año 2. Número 3. Octubre 2014

2 Unión por la Organización Estudiantil

EditorialContenido

3 26 de septiembre: crimen de Estado

7 Antecedentes de las normales rurales y la fecsm

8 La educación en el contexto neoliberal

12 Ni hecho aislado, ni crimen organizado, es terrorismo de Estado

14 Argucias del Estado de derecho burgués

16 ¿Quién se los llevó? La desaparición forzada de los 43 normalistas

20 Resistiendo la embestida del Estado

22 ¡Vivos los queremos!

24 Contra el terrorismo de Estado, por la justicia y dignidad del pueblo

Vuelos y Revueltas es una publicación escrita y editada por la Unión Por la Organización Estudiantil, organización integrante del Frente Nacional de Lucha por el Socialismo (upoe-fnls).

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Justicia es la exigencia del pueblo mexicano frente a la brutalidad del Estado, ante la herida que ha dejado el asesinato a mansalva de 3 estudiantes de la Normal Rural “Raúl Isidro Burgos” de Ayotzinapa, Guerrero, 25 heridos con arma de fuego y la desaparición forzada de 43 más, quienes forman parte de la Federación de Estudiantes Campesinos Socialistas de México (fecsm). Para el movimiento estudiantil y popular, así como para el pueblo en general, no debe quedar duda alguna de que el autor intelectual de esta barbarie es el Estado mexicano.

Crimen de lesa humanidad que se circunscribe a la ola de violencia y represión argumentada en la “guerra contra la delincuencia organizada y el narcotráfico”, que en los hechos es una estrategia de exterminio en contra del pueblo y en contra de aquellos sectores que se organizan y luchan por un país mejor. En los últimos 8 años, este escenario de violencia ha dejado una estela de sangre y muerte: más de 70 mil detenidos-desaparecidos, más de 140 mil ejecutados y más de un millón y medio de personas desplazadas de forma involuntaria. Violaciones a derechos humanos y crímenes de lesa humanidad cometidos por corporaciones policiacas, militares y grupos paramilitares.

El cinismo de los tres niveles de gobierno llega a límites que ofenden la inte-ligencia y la dignidad de familiares, amigos, compañeros y pueblo solidario que nos mantenemos en la exigencia de la presentación con vida de los normalistas. El papel de las instituciones de “impartición” de justicia, así como de los medios de comunicación, deja de manifiesto la complicidad que existe entre éstos para no esclarecer los hechos, el juicio y el castigo a los verdaderos autores intelectuales y materiales de estos crímenes de Estado.

Peña Nieto y su séquito de nefastos intentan matizar el caso vinculándolo al “crimen organizado” ¡MENTIRA! El propósito es soslayar su responsabilidad, así como confundir y aplacar de esta manera todas esas muestras de solidaridad del pueblo mexicano que exigen la presentación con vida de los 43 compañeros normalistas y el juicio y castigo a los responsables por el intento de homicidio y asesinato de los estudiantes de Ayotzinapa.

La detención de Abarca, así como la de más de 70 personas presuntamente in-volucradas es el escenario “perfecto” construido desde los aparatos de inteligencia, medida con la cual se pretende mostrar que se ha hecho “justicia”. No basta con esto ni con la salida de Ángel Aguirre como gobernador de Guerrero, ni aun con la renuncia de Peña Nieto, el Estado mexicano debe ser enjuiciado y castigado confor-me al derecho internacional.

Aun cuando han sido muchas las versiones maquiladas desde la pgr y otras ins-tancias, la exigencia de presentación con vida no debe cesar en ningún momento.

A las cosas por su nombre, ni “ausencia de Estado”, ni “Estado fallido” ni “falta de gobernabilidad”; es fascismo y terrorismo de Estado: represión y aniqui-lamiento es la práctica de todos los días, es la única medida que el sistema tiene para oxigenarse y “superar” la crisis económica del capitalismo, de otra forma éste no podría sostenerse. Por eso afirmamos que para enfrentar la embestida del Estado la única alternativa del pueblo es la organización independiente, he aquí que las palabras de Rosa Luxemburgo se recargan de validez y fuerza cuando atinadamente exclamó ¡Socialismo o Barbarie!s

3Vuelos y revueltas

El día 26 de septiembre de 2014 a las 21:00 horas, 80 estudiantes de la Normal Rural “Raúl Isidro Bur-gos” de Ayotzinapa, Guerrero, de entre 18 y 25 años de edad, se dirigían a la ciudad de Chilpancingo desde Iguala, Guerrero, a bordo de tres autobuses de la empresa Costa Line, después de llevar a cabo actividades de colecta de recursos para costear los gastos de la Normal. Al salir de la central de auto-buses, unos 30 policías en varias patrullas cerraron el paso a la caravana en que se desplazaban, razón por la cual algunos normalistas bajaron de los trans-

portes y sin mediar palabra los policías municipales comenzaron a disparar en ráfagas de manera indis-criminada desde distintas posiciones, cayendo herido en ese instante Aldo Gutiérrez Solano, quien el día de hoy se encuentra en estado vegetativo. Los estu-diantes que se encontraban en el autobús de atrás fueron violentamente descendidos y sometidos por los policías, acostándolos en el piso, a un costado de una Bodega Aurrerá. El resto de los normalistas se dispersaron en diferentes direcciones, al tiempo que los policías municipales continuaban disparando. La

26 de septiembre: crimen de Estado

Marcha del 8 de octubre de 2014 en apoyo a Ayotzinapa, convocada por el fnls y las normalistas de la fecsm (Panotla, Amilcingo y Teteles).


balacera tuvo una duración de alrededor de cuarenta minutos y se percutieron por lo menos 200 disparos de treinta armas.

Los policías municipales detuvieron entre 20 y 25 normalistas y se los llevaron en las patrullas 017, 018, 020, 022 y 028, a la vez que algunos estudiantes se reorganizaron en el lugar de los hechos, esperan-do que arribaran las autoridades del Ministerio Pú-blico (mp), para dar fe de lo acontecido y realizar los peritajes correspondientes.

A las 00:00 horas del día 27, los estudiantes in-formaron a los medios de comunicación y diversas organizaciones populares que habían llegado al lu-gar de los hechos sobre el ataque del que fueron víctimas; momento en el que del Periférico Norte arribó una camioneta tipo RAM color rojo de la que descendieron varias personas con armas largas y nuevamente abrieron fuego a estudiantes, reporte-ros y miembros de las organizaciones. El saldo de los eventos fue de dos estudiantes asesinados, Daniel Solís Gallardo y Julio César Ramírez Nava; además de 19 estudiantes heridos, cinco de ellos de grave-dad y dos profesores que ahí se encontraban. Esta segunda agresión duró alrededor de 15 minutos, se disparó en más de 400 ocasiones.

A las 7 horas del día 27 de septiembre, los norma-listas se reagruparon en la Fiscalía de la Zona Norte de la Procuraduría General de Justicia del Estado de Guerrero (pgje). Comenzaron a declarar sobre los hechos y exigieron visitar los separos de la policía

preventiva para constatar la integridad física y psicológica de los estudiantes que habían sido detenidos por la Policía Municipal durante la primera agresión; sin embargo, el Director de Seguridad Pública declaró no tener persona alguna en los separos, les permitió “verificar” y efectivamente no se encontró estudiante al-guno.

A las 16:00 horas cuando los estudiantes se presentaron en la Fiscalía para dar seguimien-to a la denuncia, el mp informó que a tres cua-dras del lugar de los hechos, encontraron un cadáver con visibles huellas de tortura, sin ojos y desollado del rostro, quien fue identificado por sus compañeros como el normalista Julio Cesar Mondragón.

En este contexto el día 28 de septiembre, se interpuso una denuncia por el delito de

desaparición de personas, en agravio de los estu-diantes desaparecidos, que quedó radicada bajo la averiguación previa VRA/03/2385/2014 en la pgje en Chilpancingo. También se inició una queja en la Comisión Estatal de Derechos Humanos del Estado de Guerrero por parte de los normalistas.

Cabe destacar que en ambas agresiones, varios compañeros normalistas se dispersaron, situación aprovechada por la policía y los elementos paramili-tares para detenerlos y desaparecerlos. Son 43 nor-malistas desaparecidos hasta el día de hoy, jóvenes provenientes de comunidades rurales y zonas margi-nadas de entre 18 y 25 años de edad.

Aún más, debido a los testimonios de los norma-listas se prueba la intervención de la policía munici-pal de Iguala, la policía estatal, la policía federal, el ejército así como de grupos paramilitares y no sica-rios como lo plantean las versiones oficiales.

Por la manera en que se desarrollaron los aconte-cimientos antes referidos es irrefutable que se trata de un crimen de lesa humanidad contra el pueblo, bajo la dinámica de terrorismo de Estado, por lo que es responsabilidad del pueblo en general y del movi-miento popular no claudicar en la exigencia de la pre-sentación con vida no sólo de los compañeros norma-listas, sino de todos los detenidos-desaparecidos del país por motivos políticos y sociales, así como exigir el castigo a los autores intelectuales y materiales de la masacre, tortura, intento de homicidio y desapari-ción forzada del 26 de septiembre en Iguala.s

Mapa de la ubicación de Ayotzinapa en el estado de Guerrero, México.

5Vuelos y revueltas

Sonora El QuintoChuihuahua Salaices* SaucilloCoahuila Torreón*Coahuila Santa Teresa*Nuevo León Galeana*Durango Santa Lucía* AguileraTamaulipas Tamatán*Zacatecas San MarcosAguascalientes Cañada HondaSan Luis Potosí El Cedral Río Verde*Guanajuato El Roque*Jalisco Atequiza Ciudad Guzmán*

En México, la educación en el ámbito rural nos conduce a reflexionar acerca del papel que históri-camente han desempeñado los docentes forjados en las Normales Rurales, desde su aparición en 1922 en Tacámbaro, Michoacán. Estas escuelas surgen con la emblemática filosofía del orden post-revolucionario: terminar con la estructura social porfirista, comba-tir la ignorancia en las zonas rurales, luchar contra el fanatismo, introducir nuevas técnicas agrícolas e implementar los principios de justicia social emana-dos de la lucha revolucionaria.

Se originaron a principios de los años veinte del siglo pasado, con las Escuelas Normales Regionales y las Escuelas Centrales Agrícolas; poco tiempo des-pués las dos instituciones se fusionaron y recibieron el nombre de Regionales Campesinas, destinadas a formar tanto maestros rurales como técnicos agríco-las. En 1926, las Regionales Campesinas pasaron a ser las Normales Rurales; ya para 1934 eran por lo menos 32 escuelas en todo el país.

Los normalistas rurales, al ser receptores directos de las problemáticas y experimentar en carne propia

Antecedentes de las normales rurales y la fecsm

Nayarit Jalisquillo*Michoacán Tiripetío La Huerta* Tacámbaro*Querétaro Tolimán* San Juan del Río*Hidalgo El Mexe** Actopan* Molango*Edo. de México TeneríaTlaxcala Xocoyucan* Huamantla* PanotlaMorelos Palmira* Oaxtepec* Amilcingo***

Puebla Teteles Zaragoza* Hueyapan* Xochiapulco* Champusco*Guerrero AyotzinapaVeracruz El Perote* Villa Aldama*Oaxaca Tamazulapa Comitancillo* Reyes Mantecón*Chiapas MactumactzáCampeche HecelchakánYucatán San Diego Tecax*

* Escuelas Normales Rurales cerradas por Gustavo Díaz Ordaz en 1969.** Cerrada el 6 de julio de 2008 por el gobernador Miguel Ángel Osorio Chong y el presidente Felipe Calderón.*** El 1 de octubre de 1974 inician las clases en esta nueva normal luego de un gran movimiento estudiantil nacional.

Escuelas Normales Rurales por estado del país


las carencias sociales y económicas que se vivían en el seno familiar de cada pueblo, región o estado, interiorizaron la necesidad de la organización estu-diantil no sólo para resolver sus necesidades como institución sino para coadyuvar en la conquista de las demandas no resueltas para el pueblo en la Revo-lución de 1910-1917, debido al carácter democrático-burgués de la Constitución de 1917. Por esta razón en 1934 los estudiantes de Tamatán, Tamaulipas, convocaron a todas las normales rurales con el fin de crear una organización estudiantil, pero sólo lo-graron concentrar una minoría en Santa Lucía, Du-rango. Para el siguiente año, se consigue reunir a las normales rurales en El Roque, Guanajuato y el 18 de junio de 1935 se funda la organización estudian-til más antigua del país: la Federación de Estudian-tes Campesinos Socialistas de México (fecsm).

La forma de organización de la fecsm ha sido siempre de carácter independiente del Estado y del control oficial de los maestros o los directivos de las escuelas. Cuenta con principios político ideológicos encaminados a la exigencia del derecho a la educa-

ción pública para los hijos de obreros y campesinos, y que este derecho se ejerza en condiciones dignas en las instalaciones académicas e internados de las normales rurales; dichos principios constituyen la columna vertebral de la lucha y la resistencia contra la política del Estado que busca desaparecerlas.

El objetivo de una normal rural no es sólo formar docentes que enseñen a leer y escribir, sino que ade-más pueda resolver la gente las necesidades elementa-les propias de la vida diaria en una comunidad rural. Por ello, estas instituciones proporcionan una educa-ción integral basada en cinco ejes: académico, cultu-ral1, deportivo2, módulos de producción3 y político.

Los alumnos de las normales rurales estudian el marxismo, conocimiento de la cultura, historia universal, sobre todo las luchas emancipatorias por su independencia. Dando como resultado docentes

1 Rondalla, trío, estudiantina, danza, teatro.2 Fútbol, básquetbol, voleibol, atletismo y natación.3 Ganado bovino, porcino, vacuno; milpas de maíz, avena y sorgo, y huertas; y talleres de carpintería y herrería.

Escuela Normal Rural “Raúl Isidro Burgos” de Ayotzinapa, Guerrero. En funcionamiento desde 1926.

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congruentes y estrechamente comprometidos con el pueblo, de conciencia crítica, que no son ajenos a las condiciones socioeconómicas y culturales de cada localidad en la que prestan sus servicios como maestros.

A partir de la derogación de la educación socia-lista en 1944 con el gobierno de Ávila Camacho, la embestida contra las normales rurales se ha agudiza-do. Uno de los ataques más fuertes y profundos del que han sido víctimas los integrantes de la fecsm fue el de 1969, pues Gustavo Díaz Ordaz desapareció la mitad de las normales, un año después de que los normalistas hubiesen participado activamente en el movimiento estudiantil-popular de 1968. Actual-mente sólo existen 16 normales rurales de las 36 que llegaron a ser en todo el país.

Los estudiantes normalistas nunca han dejado de luchar al lado del pueblo, se solidarizan con las causas populares, como la defensa de la educación pública, misma que los gobiernos neoliberales pre-tenden desaparecer por completo.

Algunos profesores y revolucionarios que se for-jaron en las normales rurales son: Arturo Gámiz García (Salaices, Chihuahua); Genaro Vázquez Ro-jas y Lucio Cabañas Barrientos (Ayotzinapa, Gue-rrero), y Misael Núnez Acosta (Tenería, Estado de México), quienes no dudaron en dar toda su capa-cidad física e intelectual por la construcción de un país mejor.

El Estado desprestigia y acomete política y mediá-ticamente a la fecsm, acusa al normalismo de tener un plan y un programa de estudio caducos y desfasa-dos, ya que con la intención de mermar la capacidad de organización y resistencia, recurre a la modifica-ción de planes y programas de estudio e impone las directrices neoliberales postuladas por la oligarquía nacional y extranjera.

Como pueblo es necesario cerrar filas en defensa de las normales rurales pues a lo largo de la historia han demostrado tener vigencia para el país, y sólo deben desaparecer cuando ya no haya pobres ni más niños que educar.s

fnls y normalistas de Panotla, Amilcingo y Teteles marchan en Puebla exigiendo presentación con vida de los 43 desaparecidos de Ayotzinapa.


La educación es un instrumento más de domina-ción ideológica de la oligarquía, del que se sirve para perpetuar el modo de producción capitalista; con la implementación del neoliberalismo se han abierto las puertas de par en par a la privatización de la educación bajo el sofisma de la “moderniza-ción” y la “calidad educativa”, es por esto que la campaña de linchamiento mediático y la crimina-lización en contra de los normalistas se ha hecho más descarada en los discursos de la burguesía y en el terrorismo de Estado mediante sus cuerpos poli-cíacos, militares y grupos paramilitares. El ejemplo más claro lo tenemos en la reciente masacre contra los normalistas rurales de Ayotzinapa, el pasado 26 de septiembre.

El neoliberalismo como teoría económica bur-guesa ampliamente difundida desde el último cuarto del siglo xx, ha encontrado cabida y cálidos recibimientos en países con administradores pro oligarcas y pro imperialistas, que no sólo han co-piado el modelo neoliberal, sino que han impuesto sus premisas fundamentales en su Constitución Política o Carta Magna, lo que permite el tránsito de un modelo netamente económico a un régimen neoliberal, transformador de los ámbitos económi-co, político y social; como sucede con la educación, instrumentada para producir el idiota funcional capaz de aceptar sin cuestionamiento alguno la voluntad

oligárquica y carece de conciencia sobre el papel que tiene como sujeto social en el proceso y las relacio-nes de producción.

En México, el régimen neoliberal se ha hecho ley, de ahí que todas y cada una de las mal llamadas refor-mas estructurales impulsadas mafiosamente desde el 2013 con el Pacto por México, sean acordes con sus planteamientos y “legalicen” la explotación a favor de la concentración económica del capital en manos de la oligarquía internacional y nacional.

Las premisas del neoliberalismo potencian el capi-talismo en su fase imperialista y constituyen el espíri-tu de la burguesía, tienen como punto de partida los mecanismos del capital: el logro de la mayor tasa de ganancia para las grandes empresas capitalistas, con base en la explotación de la fuerza de trabajo y el des-pojo generalizado de riquezas de toda índole. Su evo-lución hacia el neoliberalismo se da a partir de que la oligarquía internacional interviene en los gobiernos de las naciones y por medio de los organismos finan-cieros internacionales dicta rigurosamente su política económica, que fundamentalmente recorta el llama-do gasto social (destinado a vivienda, alimentación, educación y salud, entre otros) y promueve las condi-ciones para que los multimillonarios multipliquen su ganancia; su origen se remonta a los países imperia-listas como el Reino Unido, su aplicación a actores políticos como Margaret Tatcher.

La educaciónen el contexto neoliberal

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En nuestro país, estas políticas económicas rigen desde hace 30 años el diseño y la aplicación de la política educativa, imponen un sistema basado en competencias, en el cual la persona para lograr su sobrevivencia y su objetivación material como ser humano y social, debe desarrollar mayores aptitudes y técnicas de acuerdo a las necesidades actuales del capitalismo; esto es, el sistema educativo privilegia que los alumnos adquieran conocimientos técnicos útiles sólo para el desempeño del trabajo remunera-do a muy bajo costo, y por el contrario, desprecia la formación del sujeto crítico que analice y transfor-me su realidad.

El tiempo que actualmente se emplea para ser competitivamente apto para desempeñar un traba-jo, es mayor al requerido en décadas anteriores, lo que implica la mayor tecnificación de la mano de obra. Lograr la realización del ser humano, cada vez se hace más difícil en la medida que el capitalismo imperialista impone sus premisas en todas las regio-nes del mundo, es decir, en la medida que perpetúa y extrema la relación de explotación obrero-patrón.

Ante tal escenario caracterizado por la desigual-dad, el hambre, la iniquidad, la miseria, y por el surgimiento de mareas de inconformes, el neolibe-ralismo requiere legitimar el funcionamiento del aberrante sistema por medio de la ideología burgue-sa, en ella se instrumentan conceptos y categorías que legitiman y justifican tales hechos ominosos; pretenden mantener en pasividad la actitud y el consciente colectivo que no responde a las injusti-cias, a pesar de tener frente a sí mismos la destruc-ción de la especie humana. Convierte al sujeto ex-plotado y oprimido en sujeto enajenado que acepta de manera dócil cada una de las directrices del pa-trón, capitalista y político en turno, so pena de ser sancionado o reprimido; los jefes se convierten en cretinos útiles, capataces adiestrados con la capacidad técnica para manipular la “maquinaria industrial humana”, necesaria para continuar la producción de bienes, la realización de las mercancías y sobre todo para generar mayor plusvalía.

Éste es el tipo de sujetos que crea el neoliberalis-mo y por el que los distintos funcionarios públicos y los partidos políticos en turno se rasgan las vestidu-ras por mantener; esperan de la juventud estudian-til y trabajadora un sujeto acrítico, cretino, estúpido pero útil para la producción capitalista. He ahí la

materialización cruel de la ideología burguesa, de la terrenalidad de los conceptos afines al sistema, como la competitividad, la eficiencia, la productivi-dad, etc., que caracterizan lo difundido por los apa-ratos ideológicos del Estado.

La privatización de la educación pública y la im-plementación de planes y programas educativos dic-tados bajo un esquema de utilidad económica son las dos grandes características de la política econó-mica educativa en México. La primera busca reducir el presupuesto a las instituciones públicas logradas por la lucha del pueblo; este modelo de Estado pre-tende que la educación de las masas ya no sea su responsabilidad, la considera un gasto oneroso y la entrega descaradamente al capital privado para que la convierta en negocio. Incluso emplea estrategias mañosas para disminuir la matrícula en las institu-ciones públicas con el fin de reducir el acceso del pueblo a la educación.

Por otro lado, instancias como el Fondo Moneta-rio Internacional (fmi), el Banco Mundial (bm), en-tre otras, colocan a sus paladines en las posiciones directivas de las estructuras gubernamentales y de mando en el sistema educativo, con el fin de decidir sobre los programas de estudio para delimitar con-forme a sus intereses toda una geografía global que configura qué actividades económicas se desarrollan en cada región, mientras que al interior de las na-ciones impide la movilidad entre las clases sociales para mantener la posición de poder de un sector oligárquico.

Cuando el Estado encuentra oposición a las polí-ticas privatizadoras de la educación pública, recurre a distintas maniobras de coerción, chantaje, inti-midación, corrupción, cooptación y represión. En efecto, los jóvenes normalistas, como gran parte de la juventud estudiantil y trabajadora politizada, son parte de la resistencia popular que se niega a aceptar de manera dócil la privatización de los servicios y recursos del país.

Los compañeros normalistas rurales de Ayotzina-pa, quienes se encontraban en actividades políticas como parte del plan de lucha de la Federación de Es-tudiantes Campesinos Socialistas de México (fecsm), estaban ejerciendo mediante mecanismos de organi-zación política independiente su derecho a la protes-ta, organización, manifestación, pero sobre todo a la defensa de la educación pública.s


2007, Noviembre 30. GuerreroEfectivos de la Policía Federal Preventiva (pfp) des-alojaron violentamente a estudiantes de la Normal Rural “Raúl Isidro Burgos” de Ayotzinapa, Guerrero, cuando exigían plazas de trabajo como maestros en la caseta de la Autopista del Sol, fueron detenidos 56 normalistas.

2008, Noviembre 27. MichoacánEstudiantes de la Normal Rural de Tiripetío, Mi-choacán se trasladaban a la ciudad de Morelia para conmemorar la represión sufrida en 2002. Fueron nuevamente reprimidos, ahora en el kilómetro 11 de la carretera Pátzcuaro-Morelia, cerca de la comuni-dad de Uruapilla, con saldo de decenas de lesionados, uno de gravedad, y 133 detenidos.

2011, Septiembre 24. DurangoDos estudiantes, José Alberto Martínez Favela y Omar Medina Tarango, de la Normal Rural de Agui-

lera, Durango, desaparecieron la noche del sábado 24 de septiembre, fueron vistos por última vez en las inmediaciones de la zona industrial de Aguascalien-tes. Habían asistido a un encuentro cultural que se realizó en la Normal Rural de Cañada Honda, Aguas-calientes, hasta la fecha en calidad de desaparecidos.

2011, Diciembre 12. GuerreroJorge Alexis Herrera Pino y Gabriel Echeverría de Je-sús, estudiantes de la Normal Rural “Raúl Isidro Bur-gos” de Ayotzinapa, Guerrero, fueron ejecutados por policías federales, estatales y ministeriales, durante el violento desalojo a normalistas en la Autopista del Sol México-Acapulco y la carretera federal, a la altura de Chilpancingo. Su demanda principal era una au-diencia con el gobernador Ángel Aguirre Rivero.

2012, Agosto 21. DurangoAlrededor de 500 policías antimotines del Estado de Durango intentaron ingresar de manera violenta a las instalaciones de la Normal Rural “Raúl José Guadalu-pe Aguilera” de Canatlán, Durango. En esta represión hubo varios alumnos detenidos y varios fueron gol-peados salvajemente, así como la detención arbitraria y tortura a los estudiantes Rodolfo González López y Jorge David Pérez Aguilar. Lo anterior aconteció en el marco de las movilizaciones por la exigencia de es-pacios para el ingreso de nuevos estudiantes y la res-titución de las becas alimenticias para la comunidad estudiantil.

2012, Octubre 15. MichoacánAlrededor mil 500 policías federales, estatales, muni-cipales e integrantes del Grupo de Operaciones Es-peciales de Michoacán irrumpieron en las instalacio-nes de tres de las ocho normales públicas del estado: el Centro Regional de Educación Normal de Arteaga, la Escuela Normal Indígena de Michoacán y la Es-cuela Normal Rural “Vasco de Quiroga” de Tiripetío, agrupadas en la Organización de Normales Oficiales del Estado de Michoacán (onoem), en el desalojo ile-gal y violento hubo 174 detenidos.

2014, Enero 7. GuerreroLos estudiantes Freddy Vázquez Crispín y Eugenio Tamari Huerta de la Normal Rural “Raúl Isidro Burgos”

Represiones, detenciones, asesinatos y desapariciones forzadas contra estudiantes normalistasy miembros de la Federación de Estudiantes Campesinos Socialistas de México (fecsm)

Estudiante de la normal de Ayotzinapa inhumanamente detenido en la represión del 30 de noviembre de 2007.

11Vuelos y revueltas

de Ayotzinapa, Guerrero, fueron asesinados con un tractocamión que fue usado como arma, cuando rea-lizaban un boteo en la carretera Atoyac-Coyuca de Benítez en Guerrero. En ese atentado también hubo tres heridos de gravedad.

2014, Marzo 21. OaxacaNormalistas de Oaxaca exigían plazas de trabajo como maestros, el gobierno los reprimió y encarceló a 162 estudiantes organizados en la Coordinadora Es-tudiantil Normalista del Estado de Oaxaca (ceneo) cuando se manifestaban frente al Instituto Estatal de Educación Pública de Oaxaca (ieepo).

2014, Abril 9. MichoacánUn provocador con un automóvil embistió a un con-tingente de estudiantes que se manifestaba en Mo-relia, en la salida a Salamanca; resultaron 11 norma-listas heridos y nuestra compañera Rosa Hernández Reyes del fnls sufrió lesiones craneoencefálicas.

2014, Mayo 13. ChiapasJóvenes estudiantes de la Normal Bilingüe “Jacinto Canek”, ubicada en el municipio de Zinacantán, Chia-pas fueron reprimidos en pleno ejercicio del derecho a la protesta, cuando se manifestaban a la altura de la caseta de cobro del tramo Tuxtla Gutiérrez-San Cristóbal de Las Casas, donde los estudiantes exigían el cumplimiento de minutas firmadas e incumplidas por el gobierno.

2014, Mayo 24. MorelosLas estudiantes de la Normal Rural “General Emilia-no Zapata” de Amilcingo, Morelos, se encontraban realizando un boteo a la altura del kilómetro 89.5 de la carretera México-Oaxaca, cuando un auto que via-jaba a exceso de velocidad las embistió y asesinó a Aurora Tecoluapa Tecoapa, mientras que seis de sus compañeras resultaron heridas.

2014, Septiembre 26. GuerreroLuego de realizar un boteo en Iguala, los estudiantes de la Normal Rural “Raúl Isidro Burgos”, de Ayotzi-napa, Guerrero, fueron atacados por policías muni-cipales en complicidad de policías federales, estata-les, militares y grupos paramilitares; resultaron tres normalistas asesinados, 19 heridos, uno con muerte cerebral y 43 detenidos-desaparecidos.

A veinte días

A veinte díasno te encontramostu persona falta por las callesen las aulas y en los pupitres desgastados.

Tu nombre también es tinta en los periódicostu retrato se estampa en las paredesen las avenidas revueltas que corristeen carteles descoloridos por el sol

La lluvia caeotra lluvia máspero sigues estando ausenteaún no te encontramos

La radio habla de ti como una cifraen la televisión no dicen tu nombrey en la garganta llevamos el silenciode aún no escuchar tu voz

Ráfagas relampaguearon en el aireestruendos percutidosrebotados en el asfaltogritos por todas partes.

El corazón de unos se detuvosonidos de recargas

policías municipales encañonan con sus armasesquirlas sobre el pavimento oscuro

luces bicolores parpadeantes de torretasruidos ensordecedores de sirenasagujeros en las láminas metálicas

cristales estrelladosríos de sangre recorren el piso.

“Eran policías los que estaban disparandolos autobuses estaban totalmente destrozados a balazos…las llantas pinchadassangre así dentro de los autobusessangre coaguladacoagulada puesera sangre en cantidades…el tableteo de los disparos nuevamente…

el ejército estaba patrullando el lugarnos decían cállense, cállense ustedes se lo buscaron…teníamos miedo y rabia a la vez..nos decían: no digas que te tienen los militaresy nos sacaron fotos a cada uno…

somos un caso más de gente desaparecida.

en México y en Guerrero se mata gente…”1

1 Testimonio de Omar García.


El 26 de septiembre quedará marcado en la memoria colectiva como uno de los episodios más aterrado-res y repudiables de la historia moderna de nuestro país; 19 heridos, 6 muertos, 3 de ellos normalistas, a los que se suma la desaparición forzada de 43 de sus compañeros en el estado de Guerrero. Este hecho ha ocasionado la indignación y la movilización po-lítica de las masas a lo largo del territorio nacional, bajo la exigencia de la presentación con vida de los detenidos-desaparecidos así como el juicio y el cas-tigo a los responsables materiales e intelectuales de esta barbarie.

No obstante, el Estado mexicano trata de diluir su responsabilidad en los actos perpetrados en con-tra de los compañeros de la Normal Rural “Raúl Isidro Burgos” de Ayotzinapa, mediante versiones difundidas desde los medios de comunicación masi-va, en donde reporteros, columnistas y conductores se desbordan iracundos como fieles protectores y vo-ceros de la administración de Peña Nieto, y con ello pretenden confundir a un pueblo profundamente herido e indignado.

A lo largo de los últimos años, nuestra organi-zación ha denunciado el carácter pro fascista del Estado mexicano, la exacerbación de las medidas represivas y la consolidación de un Estado policiaco-militar que en la administración de Enrique Peña Nieto adquiere forma y representa la única medida mediante la cual la oligarquía puede dar “salida” a la crisis estructural del capitalismo.

Ante la ilegitimidad del Estado mexicano se ha instrumentado un modelo jurídico que amplía los márgenes de la violencia institucional con el obje-tivo de reprimir “legalmente” la protesta y al mis-mo tiempo opera la violencia contrainsurgente al

fomentar grupos paramilitares, escuadrones de la muerte a los que se les intenta maquillar como obra del crimen organizado o hecho aislado fuera del “control” gubernamental, el enemigo interno con el que se escenifica la confrontación entre crimen organizado y Estado; teatro que por su propio peso cae cuando se comprueba que tan sólo en el caso Ayotzinapa –uno de los miles de casos– al momento de la masacre y detención-desaparición de los 43 es-tudiantes no sólo actuaron las policías municipales de Iguala y Cocula, por si esto fuera poco este actuar se da en presencia, complicidad y anuencia del ejér-cito federal.

El teatro “Guerreros Unidos” es una artimaña mediante la cual intenta evadir su autoría en estos crímenes, finge la búsqueda y captura de los miem-bros de éste grupo paramilitar que a todas luces es parte de su misma estructura.

Al pueblo en general, al movimiento popular y sus organizaciones, y a los organismos defensores de derechos humanos no debe quedarnos duda que la práctica sistemática de encarcelamiento político, la tortura, la desaparición forzada, el genocidio, la ejecución extrajudicial, entre otros, son crímenes de lesa humanidad cuyo origen es el terrorismo de Es-tado, estrategia contrainsurgente con la que se pre-tende suprimir, impedir, aterrorizar y desmovilizar la organización popular, producto del descontento social que se ha agudizado por la imposición de po-líticas neoliberales, dictadas por los grandes organis-mos financieros internacionales controlados desde el imperialismo norteamericano.

La perversidad con la que actuaron las fuerzas represivas y paramilitares en Guerrero tiene exacta-mente el mismo sello con el que la contrainsurgen-

Ni hecho aislado, ni crimen organizado, es terrorismo de estado


cia ha marcado todos sus crímenes en las diferentes zonas de nuestro país y de América Latina a lo largo de la historia. El actuar de las instituciones encarga-das de la impartición de justicia apuesta al desgaste y la resignación de los familiares, los amigos y los compañeros de los 43 desaparecidos y maneja ma-quiavélicamente el tema de las 25 fosas que han sido encontradas tan sólo en el municipio de Iguala. La pgr declara que no son los cuerpos de los compa-ñeros, afirmación que no disminuye la gravedad de la situación en lo absoluto; por el contrario, abre otras interrogantes: ¿de quiénes son las decenas de cuerpos encontrados en esas fosas clandestinas, si es que no son los estudiantes? ¿de qué perverso acto fueron víctimas? Esta situación tampoco la podemos pasar por alto.

El artero asesinato y desapari-ción de los miembros de la Fede-ración de Estudiantes Campesinos Socialistas de México (fecsm) nada tiene de fortuito, es un acto previa-mente planificado, que en un pri-mer lugar tiene por objetivo asestar un duro golpe a una de las organi-zaciones más antiguas y combativas del país; por otro lado, aterrorizar y escarmentar a la juventud con el propósito de asegurar que éste deje de organizarse. Sin embargo, el cál-culo del Estado no fue el más acer-tado, puesto que la respuesta de los estudiantes de la fecsm, de varias universidades del país y del pueblo en general ha sido la movilización y las acciones políticas de masas en búsqueda de justicia.

Asumir que la desaparición de 43 jóvenes y el asesinato de 3 más es un hecho aislado, sería condu-cir este crimen rumbo a la impu-nidad, sería permitir que actos de esta crueldad se repitieran y única-mente amplíen la interminable lis-ta de los más de 70 mil detenidos-desaparecidos que hay en México y los más de 140 mil asesinatos ex-trajudiciales; cifras aberrantes que dejan en evidencia que para nada

se trata de un acto aislado y sí de una práctica siste-mática. De ningún modo existe un “Estado fallido”, por el contrario, se perfecciona como instrumento de dominación de una clase sobre otra y cumple ca-balmente el papel para el que está destinado.

“Ayotzinapa” no es un hecho aislado y al conside-rarlo histórica y geográficamente, encontramos que la represión hacia los normalistas de la fecsm tiene sus antecedentes en la huelga que los estudiantes iniciaron el 20 de julio de 1940 en la que exigie-ron el incremento de presupuesto para la pensión alimenticia; desde ese momento ubicamos el papel represivo de una política económica basada en la concentración de la riqueza, a la cual el modelo de las normales rurales ha estorbado debido a su carác-ter popular.s

Miembros del fnls y de la fecsm marchan en Puebla en apoyo a los normalistas de Ayotzinapa.


La respuesta inmediata a los hechos ocurridos en Iguala por parte de la administración federal, consis-tió en reducir el problema a un conflicto de carácter local y asumir que era responsabilidad exclusiva del gobierno de Guerrero esclarecer los acontecimientos.

Peña Nieto ha hecho diversas declaraciones ante los medios de comunicación, ha mencionado que lo ocurrido en Iguala fue un acto de barbarie, lo que constituye una medida demagógica, cínica y discur-siva, ya que no atiende la exigencia de los familiares, los estudiantes y las organizaciones populares en tor-no al problema esencial.

Enrique Peña Nieto así como Ángel Aguirre Ri-vero y sus respectivas administraciones recurren a diferentes mecanismos y argucias para desembara-zarse de su implicación y proteger su imagen política frente a la condena popular. Aunque Aguirre ya se encuentre fuera de la gubernatura de Guerrero, no se le ha fincado responsabilidad alguna, mucho me-nos a Enrique Peña Nieto, como Comandante en Jefe de las Fuerzas Armadas.

Gastada resulta la tesis de que el crimen organi-zado ha tenido la suficiente habilidad para infiltrar las corporaciones policíacas y militares, así como las estructuras gubernamentales que además han sido puestas en jaque ¡patrañas! dichos cárteles y grupos delincuenciales son los modernos paramilitares que forman parte de las mismas estructuras.

Por si fuera poco, después de ocurrida la masa-cre perpetrada por el Estado mexicano en contra de los estudiantes, perversamente se intenta vincular la actividad política del movimiento estudiantil-popular con organizaciones del movimiento arma-do revolucionario, situación que pone en extrema vulnerabilidad a los compañeros, ya que con esto tanto el gobierno federal como el estatal buscan establecer el pretexto idóneo para nuevamente gol-pearlos mediante la desaparición forzada, las eje-

cuciones extrajudiciales y en el mejor de los casos el encarcelamiento. A este escenario se ha sumado la ola de declaraciones de diputados de todos los partidos, incluyendo a los del prd, quienes aseveran cual camarilla de traidores que la existencia de las normales rurales debe ser replanteada, ya que, según ellos, sólo son núcleos de guerrilleros. Por si esto no bastara, quien fuera secretario de Educación Públi-ca de Guerrero, Pioquinto Damián Huato aseguró que en 1999, Aguirre Rivero le pidió señalar a los normalistas de Ayotzinapa como miembros del epr.

Ante el inminente y constante cuestionamiento de las masas, Peña Nieto se encuentra en la palestra internacional por los crímenes de lesa humanidad que se han cometido bajo el consentimiento de su administración. La Organización de las Naciones Unidas (onu), la Comisión Interamericana de De-rechos Humanos (cidh), Amnistía Internacional y el Parlamento Europeo han condenado al Estado mexicano por los hechos ocurridos en Iguala, a la vez que exigen una investigación profunda así como la búsqueda seria y eficiente de los desaparecidos; algo poco usual en estas instancias, lo que refleja la magnitud del problema.

Este viernes 7 de noviembre, a más de 40 días de ser detenidos desaparecidos los cuarenta y tres estudiantes, la pgr, representada por Jesús Murillo Karam, da a conocer que “tras detener a tres presun-tos narcotraficantes” se logró dar con el paradero de algunos restos humanos calcinados, adelantándose a las conclusiones de la comisión de antropólogos forenses argentinos, menciona que “podrían ser los restos de los cuarenta y tres estudiantes”, apostán-dole así al desgaste y la resignación de familiares, amigos y compañeros que persisten en la búsqueda de sus seres queridos. Sin más, pretende nuevamen-te eximir de responsabilidad al Estado en estos ac-tos que laceran a la humanidad, al sostener porfia-

Argucias del Estado de derecho burgués


damente que los estudiantes fueron entregados al “crimen organizado” para ser asesinados por éstos y quemados vivos, pero no menciona la responsabili-dad de los elementos de las corporaciones policiacas que detuvieron-desaparecieron en esa noche a los cuarenta y tres compañeros.

La “espectacular” detención de José Luis Abarca Velázquez y María de los Ángeles Pineda Villa, solo es el teatro con el cual se intenta dar una muestra de que se ha hecho “justicia”, no obstante, lo único que las instituciones encargadas de la “impartición de jus-ticia” están haciendo, es cortar cabezas menores sin importancia para la enorme estructura del Estado.

La vileza del Estado ha llegado al grado de ofertar el pago de una indemnización a los familiares por la desaparición forzada de los cuarenta y tres estu-diantes ¿acaso pretenden con tan indignante oferta acallar la exigencia de los familiares por la presenta-ción con vida de los cuarenta y tres muchachos? Es el colmo de la perversidad, tasar en valor monetario la vida de un ser humano, es la prueba fehaciente de lo bajo e inhumano de este régimen, sangrar a la juventud mexicana y después pretender tapar la herida con unos cuantos pesos.

Dentro de todo este conflicto salen a relucir las pugnas internas que existen entre la cúpula de los diferentes partidos electoreros, los que hacen uso de manera mercenaria del caso de los compañeros repri-midos en Iguala para ajustar cuentas, como lo decla-rado por Damián Huato, que quince años después “denuncia” el odio de Aguirre hacia los normalistas.

Inútil es la salida del ex-gobernador de Gue-rrero, así como la llegada del sucesor interino Ro-gelio Ortega, personaje no menos nefasto que su antecesor quien vanagloriándose de su pasado hace la labor de zapa en beneficio de Peña Nieto. Para Murillo Karam lo sucedido en contra de los compañeros normalistas es un “caso típico de desapa-rición forzada, no un crimen de Estado”; según su apreciación, Iguala no es todo México; señor Murillo, le preguntamos: ¿Acteal, El Charco, Aguas Blancas, Atenco, las Huastecas, San Fernando o Tlatelolco son sólo hechos aislados? ¿acaso la represión, las desapa-riciones forzadas, los asesinatos extrajudiciales y los encarcelamientos por motivos políticos no son el pan de todos los días en todo nuestro país? Lejos ha llega-do su grado de cinismo señor Murillo, usted como “conocedor” del derecho debe saber que los crímenes de lesa humanidad dentro de los cuales se enmarca la desaparición forzada son actos inherentes al Estado y cuya única responsabilidad recae sobre el mismo.

Ante la ilegitimidad del estado de derecho burgués, el Estado mexicano busca para sí la salida política me-nos nociva, la cual frene el avance y el fortalecimiento del movimiento popular, sin embargo, se trata de un escenario inevitable generado por los gobiernos de ca-rácter antipopular y fascista de resolver las demandas del pueblo.

Para el movimiento popular en su conjunto y para el pueblo de México es responsabilidad enton-ces impulsar la lucha organizada por la construcción de un futuro socialista.s

Miembros del fnls y de la fecsm en el Congreso del Estado de Puebla exigiendo reprueben la masacre del 26 de septiembre en Iguala.


La desaparición forzada1 es un crimen de lesa hu-manidad, es decir, atenta no sólo contra la víctima, sino contra la humanidad en su conjunto; el des-plazamiento forzado, la tortura, las ejecuciones ex-trajudiciales y la masacre por motivos políticos son tipificados como crímenes de lesa humanidad.

A diferencia del delito de privación ilegal de la libertad en su modalidad de secuestro, la desapari-ción forzada cumple con los siguientes elementos: la detención y la privación de la libertad de la víctima, la intervención directa o indirecta de agentes del Es-tado; esto es, se lleva a cabo por órdenes directas de uno o más funcionarios públicos aunque los ejecu-tantes sean policías de las diferentes corporaciones policiacas e incluso grupos paramilitares, estos úl-timos se caracterizan por ser formados, adiestrados

1 En este artículo se retoman varios elementos analizados y plan-teados en otros documentos que hemos publicado como Frente Nacional de Lucha por el Socialismo (fnls), ya que la demanda de la presentación con vida de todos los detenidos-desaparecidos en nuestro país la hemos impulsado desde nuestra conformación, de-sarrollando actividades como la Semana Internacional del Deteni-do-Desaparecido en el mes de mayo, y la conmemoración del Día Internacional del Detenido-Desaparecido en agosto. Para mayor información sobre desaparición forzada consulta:

Consigna Socialista Edición especial (4) 2007 <http://fnls.org.mx/contra-la-desaparicion-forzada/>

¡Porque vivos se los llevaron! ¡Vivos los queremos! [en línea] Vuelos y Revueltas, Crímenes de lesa humanidad, 0 (2): 11-12, Marzo 2013 <http://fnls.org.mx/vuelos-y-revueltas-2/>

La Desaparición Forzada continuidad transexenal [en línea] Consigna Socialista 5 (18): 6-9, Abril-Mayo 2013 <http://fnls.org.mx/consigna-socialista-18/>

Fechas históricas del pueblo por la presentación con vida de los desaparecidos [en línea] Consigna Socialista 6 (19): 22-24, julio-agosto 2013 <http://fnls.org.mx/consigna-socialista-19/>

La Desaparición Forzada: expresión del terrorismo de Estado que se vive en México [en línea] Consigna Socialista 6 (23): 5-7, agosto 2014 <http://fnls.org.mx/consigna-socialista-18/>

y financiados por el ejército federal, por lo tanto operan al servicio, amparo y para la protección del Estado. Finalmente la desaparición forzada implica el ocultamiento y la negativa de reconocimiento de la detención y el paradero del desaparecido.

Para el derecho internacional, la desaparición forzada de personas se encuentra tipificada en trata-dos firmados y ratificados por México, como la Con-vención Interamericana sobre Desaparición Forzada de Personas y la Convención Internacional para la Protección de todas las Personas contra las Desapa-riciones Forzadas. Asimismo, existen organismos internacionales que sancionan este crimen como la Corte Penal Internacional en el Estatuto de Roma y la onu en la Declaración sobre la protección de to-das las personas contra las desapariciones forzadas; sin embargo, en los hechos ha existido nula volun-tad política por parte de las administraciones fede-rales y estatales pasadas y actuales, sin importar el partido político al que representan, para hacer valer dichos tratados. El Código Penal Federal y algunas legislaciones locales “tipifican” este crimen, con el fin de legitimar al Estado frente a la comunidad in-ternacional, no obstante existe ambigüedad jurídica en la materia, de la cual el Estado se vale para conti-nuar con esta práctica sistemática, por la que suman 70 mil desaparecidos desde el sexenio de Calderón a la fecha.

El Estado es el instrumento de dominación de una clase sobre otra, por lo tanto no debe extrañar la negación de auto-sancionarse ¡pues cómo contra-deciría sus propios principios!

La desaparición forzada en nuestro país es un cri-men que forma parte de la Guerra de Baja Intensi-dad global, una práctica sistemática contrainsurgente

¿Quién se los llevó?La desaparición forzada de los 43 normalistas


implementada desde el Estado mexicano ante la im-posibilidad de superar la crisis estructural capitalis-ta por la que atraviesa y su determinación selectiva de clase para no resolver las demandas económicas, sociales y políticas más apremiantes del pueblo mexi-cano. Es esta la respuesta del Estado para silenciar aquellas voces conscientes, el objetivo es desmovi-lizar a las organizaciones populares además de evitar que los sectores del pueblo que viven en condiciones de pobreza y miseria se radicalicen y se integren a las diferentes formas de lucha para liberarse de la explo-tación económica y la opresión política.

En México la desaparición forzada ha sido una práctica sistemática, agudizada a partir de los años sesenta y que con la llamada “guerra contra la delin-cuencia organizada” implementada por Felipe Calde-rón y perpetuada por Enrique Peña Nieto, se ha incre-mentado exponencialmente. Actualmente hay más de 70 mil desaparecidos por motivos políticos y sociales en nuestro país, cifra que el Estado a través de sus instituciones como la segob y la pgr ha intentado maquillar inútilmente. A dos meses de la llegada de EPN a la presidencia se hablaba de 26,121 desapare-cidos “contabilizados” durante el sexenio anterior; después en mayo de este año la Segob hablaba de la fantasiosa presentación de 18,121 víctimas del sexenio calderonista (nunca se aclaró en qué condi-ción fueron presentados, si vivos o muertos). Ante el cuestionamiento por parte de las organizaciones po-pulares y los organismos independientes defensores de derechos humanos, la institución antes referida duplicó la cifra y, en agosto, en el marco del día in-ternacional del detenido-desaparecido, la pgr señaló que son 22,322. En otras palabras el Estado mexicano pretende “invisibilizar” a nuestros desaparecidos.

Al ser un crimen de lesa humanidad no prescri-be, por lo tanto es obligación de la administración actual y de las futuras, dar con el paradero de las víctimas, así como enjuiciar y castigar a los responsa-bles materiales e intelectuales de las desapariciones forzadas de ayer y hoy.

En la actualidad los casos más emblemáticos son el de Edmundo Reyes Amaya y Gabriel Alberto Cruz Sánchez, luchadores sociales reivindicados por el Par-tido Democrático Popular Revolucionario-Ejército Popular Revolucionario (pdpr-epr); Daniela y Virgi-nia Ortiz, comunicadoras triquis integrantes del Mo-vimiento de Unificación y Lucha Triqui (mult); Fran-

cisco Paredes Ruiz, defensor de derechos humanos; Lauro Juárez y Gabriel Gómez integrantes del Frente Popular Revolucionario (fpr) en Oaxaca y Veracruz; Teodulfo Torres Soriano alias “el Tío”, testigo de la agresión en contra de Juan Francisco Kuykendall que provocó su muerte tras estar más de un año en es-tado de coma, agresión sufrida durante el llamado #1DMX2; el profesor Carlos René Román Salazar de la Sección XXII de Oaxaca, entre muchos otros.

La desaparición forzada nulifica la dignidad humana y lo anula como ciudadano con derechos, desde que es detenida la persona, de facto se violan todos sus derechos constitucionales y humanos; mientras permanece cautiva es sometida a tratos crueles e inhumanos, a tortura física y psicológica, la deja en un estado de indefensión total y en constante in-certidumbre sobre su vida y entorno, es decir, este crimen se vincula con otros crímenes de lesa huma-nidad. Para los familiares y amigos la desaparición forzada constituye una de las prácticas de Estado más viles y perversas que existen pues mientras la víctima se encuentra desaparecida, su entorno social vive en un estado permanente de angustia y desespe-ración. Aunado a esto, parte de la perversión se efec-túa al someter a aquellos que exigen su presentación con vida al desgaste emocional, físico y económico, principalmente a los familiares, por el seguimiento jurídico al que se someten cuando el Estado maliciosa-mente maneja varias hipótesis inverosímiles sobre el paradero y la condición del desaparecido.

El caso de los 43 compañeros desaparecidos de la Normal Rural “Raúl Isidro Burgos” de Ayotzinapa, Guerrero, es un caso de desaparición forzada, no es secuestro y el victimario no es el narcotráfico, ni el crimen organizado. El 26 de septiembre el Estado obró con premeditación valiéndose de diversos re-cursos para asesinar, torturar y desaparecer a los es-tudiantes normalistas; el móvil siempre fue de carác-ter político y no la idea que se ha tratado de sembrar en la opinión pública a través de los medios de co-municación: que se encontraban en el lugar y momento equivocado, que rompieron las reglas que la “delincuencia organizada” ya había ordenado3.

2 1 de diciembre, México. Toma de protesta de Enrique Peña Nieto como presidente de México.3 Las versiones de la prensa oligárquica mencionan que la pre-sidenta del dif, Ángeles Pineda de Abarca daría su informe de


Los hechos prueban que se trata de un crimen de Estado, basta recordar que elementos de la poli-cía federal y estatal así como elementos del ejército se encontraban en el lugar de los hechos y fueron cómplices de la policía municipal y el grupo para-militar aunque fueron estos dos últimos los que ac-cionaron sus armas, los otros ignoraron el llamado de auxilio que los estudiantes hicieron para atender a los heridos. Con antelación se montó todo un operativo para exterminar a los normalistas, tanto es así que confundieron a los integrantes del equi-po de fútbol “Los Avispones de Chilpancingo” con normalistas y asesinaron a 3 personas, otro infame “daño colateral”.

La orden directa no fue de José Luis Abarca, ni un desacato de los policías municipales de Iguala a sus altos mandos para obedecer al grupo delictivo “Guerreros Unidos”. El narcotráfico siempre ha operado en nuestro país con completa libertad, ya que se trata de una de las actividades ilegales que más aporta económicamente, por lo que el destape de nexos con autoridades municipales y estatales así como con las distintas corporaciones policiacas es una mentira, la descomposición social siempre se ha originado de las altas cúpulas del poder. Ahora para ganar credibilidad y como un supuesto acto de jus-ticia, cortan las cabezas más pequeñas, “¡que caiga todo el peso de la ley en los policías municipales de Iguala y Cocula y en José Luis Abarca, son ellos los asesinos, son ellos los perpetradores! grita desde las plateas del teatro México, Enrique Peña Nieto y el gobernador Ángel Heladio Aguirre Rivero mientras se limpian las ma-nos y el rostro ensangrentados con el pañuelo de la impunidad.

Mantener la condición de detenidos-desapa-recidos de los 43 estudiantes normalistas, sirve al Estado mexicano para asestar un fuerte golpe a la Federación de Estudiantes Campesinos Socialistas de México (fecsm), debilitar a las Normales Rura-les del país con vísperas a acelerar su desaparición, lo que traería entre otras consecuencias: negar la educación gratuita a miles de hijos de campesinos y trabajadores además de debilitar el movimiento

labores en el zócalo de Iguala el día sábado 27 de septiembre. Los normalistas realizaron una actividad en la ciudad el día 26, si-tuación que el presidente municipal José Luis Abarca interpretó como un acto de sabotaje y al mantener un vínculo con el cártel “Guerreros Unidos” ordenó abrir fuego contra los normalistas.

magisterial en defensa de la educación pública y los derechos laborales, puesto que es una de las princi-pales alianzas; he ahí el intento represivo de Enrique Peña Nieto.

Iguala se ha convertido en el escenario de las pug-nas interburguesas entre los partidos políticos elec-toreros; para montar toda la pantomima en donde sorprendentemente cae el grupo delictivo “Guerre-ros Unidos” casi en su totalidad, con sus principa-les líderes, pues el mensaje es a todas luces: “gracias a los normalistas pudimos dar con esta peligrosa y bien estructurada banda de narcotraficantes, su des-aparición valió la pena” con el objeto de resignar al pueblo y cesar su exigencia, una justificación perfec-tamente orquestada para crímenes tan atroces como la desaparición forzada en nuestro país.


No caigamos en falsas conclusiones basadas en el engaño y la manipulación, José Luis Abarca es cierto, es cómplice y responsable por este crimen, sin embargo es el último eslabón en la cadena de criminales; en realidad es el Estado el único res-ponsable de la desaparición de los normalistas, es él quien debe presentarlos con vida, la responsabi-lidad entonces es de Enrique Peña Nieto no sólo por estar al mando del ejecutivo sino en su carácter de comandante en jefe de las fuerzas armadas, así como del ex gobernador del estado de Guerrero, Ángel Heladio Aguirre Rivero, en complicidad con el 27° batallón de infantería y las diferentes corpo-raciones policiacas, el grupo paramilitar al que han disfrazado como “Guerreros Unidos”, e inclusive, responsabilidad del procurador general de la Repú-

blica Jesús Murillo Karam y del fiscal Iñaki Blanco Cabrera, quienes han llevado al desgaste emocional y físico a los padres de los 43 normalistas desaparecidos con sus tendenciosas investigaciones; son ellos quie-nes deben responder por este crimen, son ellos quienes deben presentarlos con vida. Las organizaciones popu-lares, familiares y compañeros de lucha así como el pueblo en general continuamos con la exigencia de la presentación con vida de los 43 estudiantes de la nor-mal rural “Raúl Isidro Burgos” de Ayotzinapa, Guerre-ro, de Edmundo Reyes Amaya y Gabriel Alberto Cruz Sánchez, Daniela y Virginia Ortiz, Lauro Juárez, Ga-briel Gómez, Francisco Paredes Ruiz, Teodulfo Torres Soriano, Carlos René Román Salazar y los más de 70 mil desaparecidos en nuestro país por motivos po-líticos y sociales.s

fnls y normalistas rurales de la fecsm marchan en Puebla exigiendo la presentación con vida de los 43 compañeros de Ayotzinapa.


Resistiendo la embestida del Estado¿Qué alternativa queda como pueblo explotado y oprimido, y en este caso como sector estudiantil que se le criminaliza y se arguye que sus miembros son sujetos sociales potenciales de violencia irracional, se les estigmatiza por todos los medios de comunicación oficiosos y se les presenta como la fuente de la desgra-cia nacional educativa?

Desde los aparatos de inteligencia del Estado y di-fundidas por los medios de comunicación, hemos leí-do y escuchado las más absurdas excusas, aludidas al principio de cada narración de los hechos, tanto del 26 de septiembre como de las acciones emprendidas por normalistas, familiares y organizaciones populares que exigen la presentación con vida de los desapare-cidos; acciones políticas y de masas que se catalogan peyorativamente como actos vandálicos e irracionales para justificar el actuar criminal represivo del Estado.

Algunos otros generan corriente de opinión, acos-tumbrados a la mera actividad contemplativa, siem-pre desde la comodidad de un escritorio, de mane-ra alienada califican las acciones emprendidas por

la juventud, vierten opiniones que coinciden con el estigma que se promueve desde el Estado y sus aparatos ideológicos. Tachar a un joven de violento o delincuente, por su apariencia física o manera de vestir, por pintar consignas en las paredes, convali-da los planteamientos vertidos por los ideólogos del sistema, lo dicho por el Estado. Según la lógica de aquellos que opinan con poca o nula reflexión, los jó-venes normalistas al secuestrar por enésima vez los autobuses para trasladarse a Iguala ejercieron un acto de violencia que generó más violencia y por ende se justifica la actuación criminal de los cuerpos represi-vos. Quienes contienen la movilización y coartan las expresiones de resistencia del pueblo, en los hechos se convierten en dique y “sutil” defensor del sistema.

Con los hechos del 26 de septiembre se demuestra una vez más la crueldad del Estado, su responsabili-dad y la ilegalidad con la que opera, violando incluso su propio estado de derecho que tanto pregona, ma-neja un doble discurso, por un lado de respeto a los derechos humanos y de garantía a los derechos cons-


titucionales y por el otro masacra, encarcela, tortura y desaparece a los hijos del pueblo. ¿Cómo podemos entonces exigir justicia cuando el Estado es el victima-rio y es él mismo el que imparte la justicia a través de sus instituciones?

Por más infructuoso o contradictorio que parez-ca, es necesario impulsar y dar seguimiento a la lucha jurídica, ya que crímenes como el de la desaparición forzada no prescriben, por lo que la responsabilidad no sólo recae en la administración actual, sino en las administraciones venideras; es menester ir agotando las diferentes instancias nacionales para posterior-mente acudir a los tribunales internacionales y que el Estado mexicano responda por los crímenes polí-ticos de los que es responsable.

La lucha es jurídico-política, por lo tanto la alter-nativa está en la organización por la presentación con vida de los normalistas, así como para exigir cas-tigo a los autores materiales e intelectuales de la des-aparición, la tortura, el intento de homicidio y las ejecuciones extrajudiciales; impulsar acciones polí-ticas de masas y actividades de denuncia y difusión del caso, analizar con objetividad el acontecer de los hechos a partir de los elementos políticos-ideológi-cos que nos proporciona el marxismo para poder dar claridad política y certidumbre a aquellos que tienen poca o nula información sobre el caso, así como para desenmascarar el oportunismo y neopor-tunismo; desmentir las malversadas versiones poli-ciacas para desenmascarar el carácter antipopular y

represivo del gobierno en turno e involucrar a otros sectores populares a dicha exigencia.

Sin embargo no es suficiente, nos enfrentamos a un Estado policíaco-militar, a un estado de derecho que garantiza y protege los intereses y privilegios de la oligarquía y el capital monopolista transnacional, a un régimen neoliberal perpetuador de los desig-nios del imperialismo a ultranza; por lo que las des-apariciones forzadas, las ejecuciones extrajudiciales y los desplazamientos forzados seguirán en incre-mento por ser una política de Estado

Es indispensable como pueblo abrazar la nece-sidad de un cambio social e histórico para acabar con la explotación económica y la opresión políti-ca siguiendo el itinerario de la lucha de clases, pero sólo será realizable en la medida en que se dé un salto cualitativo de la lucha electoral, la denuncia, las movilizaciones de carácter espontáneo, la lucha por las demandas más sentidas de los distintos sectores en contra del neoliberalismo y todas esas expresiones de descontento, hasta confluir a una conciencia de clase que nos permita emprender la lucha anticapitalista y antiimperialista mediante la lucha popular e independiente.

Se requiere entonces que cada una de las acciones políticas que emprendamos, tengan por objetivo la organización, estructuración y movilización de los distintos sectores del pueblo que en su práctica y su posición política–ideológica asuman una actitud combativa y consecuente en la lucha por el Socialismo.s

Miembros del fnls y Normal de Teteles exigen presentación con vida de los 43 normalistas de Ayotzinapa, desaparecidos por el Estado.


Como Frente Nacional de Lucha por el Socialismo (fnls) hemos emprendido diversas acciones políticas de masas para exigir la inmediata presentación con vida de los cuarenta y tres normalistas de Ayotzinapa detenidos-desaparecidos, así como el juicio y casti-go al Estado mexicano por los crímenes de lesa hu-manidad cometidos el 26 de septiembre en Iguala, Guerrero. Hemos impulsado una serie de actividades con el objetivo de contribuir a la generalización de las acciones de protesta popular a lo largo y ancho del país; actividades coordinadas ante la necesidad que la presente etapa de lucha demanda. La siguien-te cronología de actividades tiene por objeto que el pueblo conozca la práctica política que rige nuestro

¡Vivos los queremos!

fnls y Normal de Amilcingo exigen presentación con vida desde tres radiodifusoras.

Acciones políticas de masas del fnls por la presentación con vida de los 43 normalistas de Ayotzinapa, Guerrero

SEptiEMbREPuebla29 Se organiza rueda de prensa de denun-

cia convocada por las compañeras de la Normal Rural “Gral. Emiliano Zapata” de Amilcingo, Morelos.

proyecto organizativo, haciendo uso de nuestros ór-ganos de difusión para romper el cerco informativo de los medios oficiales de comunicación y la tergi-versación de información que perversamente hacen.

El otro objetivo fundamental es externar nuestra solidaridad incondicional con los compañeros norma-listas y los familiares de las víctimas del terrorismo de Estado, elevar la moral y mediante los hechos decirles que no están solos, su coraje e indignación también son nuestros.

Hacemos un llamado a las organizaciones indepen-dientes, a los diferentes sectores en lucha y al pueblo en general, a no desistir en la jornada que hemos em-prendido por la presentación con vida de los normalis-

tas rurales detenidos-desaparecidos. No es momento de escatimar esfuerzos, por el contrario, es una necesidad urgente no cejar en las acciones de protesta. No caigamos en el juego macabro del Estado mexicano que exhorta a realizar acciones de luto o exige paz, cuando ha sido él quien ha declarado la guerra a nuestro pueblo. ¡Todos somos Ayotzinapa! por-que ¡si reprimen a uno nos reprimen a todos! la lucha que se propaga en todo el país debe complementarse con la coordi-nación y la unidad política de acción me-diante un plan nacional multisectorial que nos permita enfrentar la embestida del Estado.s


OCtubREDistrito Federal29 Se liberó la caseta de Chalco de la autopista México-

Puebla, en coordinación con organizaciones popula-res y universitarios.

Puebla2 Cuautla, Morelos. Se acompaña a la Normal de Amil-

cingo en su marcha conmemorativa de la masacre del 2 de octubre de 1968 en Tlatelolco.

Puebla. Se pegan carteles para denunciar la masacre y desaparición forzada de normalistas de Ayotzinapa.

7 Rueda de prensa con las compañeras de las Escuelas Normales Rurales “Carmen Serdán” de Teteles Puebla, “Gral. Emiliano Zapata” de Amilcingo Morelos y “Lic. Benito Juárez García” de Panotla Tlaxcala, así como con organizaciones populares del estado de Puebla.

8 Marcha-mitin en coordinación con las normales rura-les de Teteles, Amilcingo y Panotla. Se realiza mitin en Congreso del Estado para exigir pronunciamiento por la masacre a los normalistas de Ayotzinapa.

15 En coordinación con Promotora de la cnte-Puebla se realiza colecta de víveres en el zócalo de la ciudad.

17 Se asiste a marcha-mitin convocada por las normalis-tas de Teteles.

27 Cuautla, Morelos. Se asiste a marcha convocada por la normal de Amilcingo, a un mes de la desaparición forzada de los 43 normalistas de Ayotzinapa.

29 En coordinación con normalistas de Amilcingo, se exige espacio en radiodifusoras (Cinco Radio, Ultra y Radio-buap) para informar y denunciar el crimen de Estado cometido contra los normalistas de Ayotzinapa. Se rea-liza mitin y colecta de víveres en el zócalo de la ciudad.

Veracruz22 Córdoba. Mitin en el parque 21 de Mayo, y marcha en

coordinación con organizaciones populares.29 Córdoba. Toma de la Delegación Regional, Subsecre-

taria de Gobierno, concluyendo con un mitin en el parque 21 de Mayo.

Xalapa. Volanteo informativo, mitin y bloqueo intermi-te de las calles del zócalo y en el Parque Juárez.

Huejutla de Reyes, Hidalgo y Chicontepec. Se realizó una marcha, saliendo de distintos puntos para con-centrarse en la presidencia municipal de Huejutla y la de Chicontepec.

30 Orizaba. En el parque Castillo se realizó un mitin con-cluyendo con una marcha.

Michoacán2 Marcha por la conmemoración de la masacre de 1968

y por la exigencia de la presentación con vida de los 43 normalistas detenidos-desaparecidos.

5-15 En plaza pública de Morelias se realiza la Jornada na-cional contra la desaparición forzada, terrorismo de Es-tado, por la justicia y dignidad.

8,12,15 Marcha en exigencia de la presentación con vida de los 43 normalistas detenidos-desaparecidos; así como juicio y castigo a los criminales de Estado.

22-24 En coordinación con organizaciones estudiantiles se cerro las instalaciones de la Universidad Michoa-cana de San Nicolás de Hidalgo (umsnh) para hacer paro de labores por la exigencia de presentación con vida de los 43 normalistas detenidos-desaparecidos, así como juicio y castigo a los responsables materiales e intelectuales de los criminales de Estado.

29-31 En coordinación con organizaciones estudiantiles se cerro las instalaciones de la Universidad Michoacana de San Nicolás de Hidalgo (umsnh) para hacer paro de labores por la exigencia de presentación con vida de los 43 normalistas detenidos-desaparecidos, así como juicio y castigo a los responsables materiales e intelectuales de los criminales de Estado.

29 Bloqueo de las vías del tren y pintas en el mismo en exigencia de presentación con vida de los 43 norma-listas detenidos-desaparecidos de Ayotzinapa.

Chiapas2 San Cristóbal de Las Casas. Colectivo Tsoblej y Colec-

tivo Rosa Luxemburgo realizan marcha-mitin. Unión de Transportes “Los Quetzales” pegan carteles.12 Volanteos carreteros en Región Costa por la Socie-

dad Cooperativa 10 de abril, Organización Campesina Emiliano Zapata (ocez) Ocosingo y Chiapa de Corzo, y del Movimiento de Resistencia Popular del Sureste (mrps) Altamirano conjuntamente con la Unión de Transporte “Los Quetzales”.

16 Colectivo Tsoblej coordina foro de denuncia titulado Por justicia y presentación con vida de los detenidos-desapare-cidos, en el auditorio de la Facultad de Ciencias Sociales.

22 Colectivo Tsoblej realiza marcha-mitin en San Cris-tóbal de Las Casas, de manera conjunta con Núcleo Estudiantil en Resistencia y Rebeldía, Colectivo Rosa Luxemburgo, Colonia Candelaria, Comité Seccional del Bloque Democrático Sección VII y Asamblea Es-tatal Democrática de la Sección 40. Conferencia de prensa por Sociedad Cooperativa 10 de abril.

29 Chiapa de Corzo. ocez realiza volanteo carretero. Tuxtla Chico. Sociedad Cooperativa 10 de abril lleva a

cabo volanteo carretero. Ocosingo. ocez, mrps y Unión de Transportes “Los

Quetzales” del municipio de Altamirano realizan mar-cha-mitin.

San Cristóbal de Las Casas. Colectivo Tsoblej, Colectivo Rosa Luxemburgo, Núcleo Estudiantil en Resistencia y Rebeldía, maestros y alumnos de la Facultad de Cien-cias Sociales realizan mitin frente a las oficinas de la Comisión Nacional de los Derechos Humanos (cndh).

31 Participación del Colectivo Tsoblej en marcha-mitin, en San Cristóbal de Las Casas.


Ante la negativa por parte del gobierno federal de presentar vivos a los 43 estudiantes normalistas de-tenidos desaparecidos e impartir justicia ante el cri-men de Estado cometido por los cuerpos policiacos y paramilitares en la Ciudad de Iguala, Guerrero, el pasado 26 de septiembre; ante la respuesta dila-toria de un gobierno que hace de la impunidad, la aquiescencia y la omisión, su estrategia política de terrorismo de Estado, el Frente Nacional de Lucha por el Socialismo (fnls) emitimos el siguiente mani-fiesto político:

Hace más de un mes de los hechos execrables su-cedidos en Iguala, Guerrero, de los asesinatos de tres estudiantes, uno de ellos con suma crueldad y tres ciudadanos más, así como la detención-desaparición forzada de otros cuarenta y tres normalistas, críme-nes de Estado abominables en toda la extensión de la palabra, cometido por cuerpos policiacos y para-militares, con la complicidad del Ejército Mexicano (aquiescencia y omisión), con todas las agravantes de la ley: premeditación (acto planeado por las altas esferas militares y policiacas del Estado), alevosía y ventaja (contra estudiantes indefensos e inermes).

A la luz de los acontecimientos ha quedado de-mostrado que desde el primer momento la intención de los cuerpos policiacos, militares y paramilitares fue el de asesinar, causar daños irreparables, infun-dir el terror y cometer crímenes de lesa humanidad en contra de los normalistas que realizaban activi-dades políticas propias del movimiento estudiantil.

La acción premeditada de los cuerpos policiacos y tuvo como propósito central el ataque contra la es-tructura organizativa estudiantil, puesto que diez de

ellos son activistas, en su conjunto, éstos cuarenta y tres estudiantes fueron detenidos-desaparecidos de manera forzada por el Estado mexicano, indepen-dientemente de la estructura que haya participado en este crimen de lesa humanidad. Los estudiantes nor-malistas no están ausentes por su voluntad, tampoco fueron “levantados” o “secuestrados”, son víctimas de la desaparición forzada por motivos políticos.

No hay lugar a dudas sobre la responsabilidad del estado, la fingida actitud de indignación de Enrique Peña Nieto no debe engañarnos, las diez promesas he-chas apresuradamente a los familiares de las víctimas de este crimen de lesa humanidad sólo tiene como objetivo desarticular la protesta popular, crear la ilu-sión de un supuesto compromiso gubernamental.

Entendemos y compartimos el dolor de los fa-miliares de las víctimas de éste crimen de Estado, precisamente por ello consideramos que no se pue-de confiar en un gobierno pro oligárquico confor-mado por funcionarios marrulleros, sin ética ni es-crúpulos, que hacen del discurso demagógico y falaz una herramienta de dominación y manipulación, lucrando con el dolor y los sentimientos de los fami-liares de las víctimas.

Prevenimos a los familiares, las organizaciones y al pueblo en general del engaño y manipulación por las promesas de un gobierno que sólo pretende ganar tiempo, ofrecer sin escrúpulos soluciones que no concreta, apostarle al cansancio y la desespera-ción de los familiares, ofrecer todo sin hacer nada, manipular a la opinión pública con el arsenal me-diático con que cuenta, aplicando la política de lin-chamiento y criminalización de la protesta popular

Manifiesto político:

Contra el terrorismo de Estado, por la justicia y dignidad del pueblo


y del movimiento estudiantil a través de los mono-polios de la comunicación, desde donde se azuza, se incita y se promueve a la confrontación entre los diversos sectores del pueblo.

Analicemos el actuar de los funcionarios guberna-mentales que desde el primer momento de la denun-cia hicieron oídos sordos, como lo manifestó Osorio Chong para quien el caso de Iguala no era de incum-bencia federal; así mismo, se montó una estrategia mediática y dilatoria que le permite al gobierno ganar tiempo y fabricar coartadas que hagan posible evadir su responsabilidad utilizando chivos expiatorios, o en el mejor de los casos sacrificar piezas desechables.

Desde el ejecutivo federal, ante la creciente indig-nación, la protesta popular y la exigencia de la pre-sentación con vida de los estudiantes normalistas, hoy se hacen desplantes de cinismo e histrionismo para simular la preocupación y la actuación de todo el aparato policial y militar pero ¿quién puede creer en su fingida incapacidad para presentar con vida a los estudiantes detenidos desaparecidos, cuando tie-ne todos los recursos para hacerlo? más aun cuando está plenamente acreditado que fue el Estado el res-ponsable directo de este acto criminal y terrorista.

No es posible creer en la tesis del Estado de que las desapariciones forzadas en el país son cometidas por la “delincuencia organizada”, coartada recurren-te para ocultar su responsabilidad en los asesinatos de más de 140 mil personas, en más de 70 mil detenciones-des-apariciones, a los que se suman los hechos criminales cometidos por el Estado el pasado 26 de septiembre.

La delincuencia organizada es otro instrumento paramilitar del Estado, por lo que nunca lo com-bate ni combatirá porque para el Estado burgués el paramilita-rismo realiza el trabajo sucio de detener-desaparecer, masacrar y torturar, a los luchadores sociales en un intento por desarticular el avance del descontento popular como parte de la polarización de la lucha de clases.

Tlatlaya en el estado de Méxi-co e Iguala en Guerrero, no son

los únicos casos de terrorismo de Estado en el país, como antecedente están las emblemáticas masacres estudiantiles en los sesenta y setenta cometidos por la dictadura priista, el caso de diecisiete campesinos masacrados en Aguas Blancas, Guerrero en 1995; cuarenta y cinco indígenas Tzotziles en Acteal Chia-pas en 1997; El Charco en Guerrero en 1998, y las decenas de profesores, indígenas, colonos y campe-sinos, asesinados en el movimiento popular magiste-rial en Oaxaca en 2006.

También como antecedente inmediato está la detención-desaparición de los luchadores sociales Edmundo Reyes Amaya y Gabriel Alberto Cruz Sánchez, Lauro Juárez, Virginia y Daniela Ortiz Ramírez, en Oaxaca, Francisco Paredes Ruiz en Mi-choacán en 2007… y los más de 70 000 casos de desaparición forzada por motivos políticos y sociales en el sexenio de Felipe Calderón y la administración actual de Peña Nieto.

Estos hechos no son fortuitos, obedecen a una estrategia de Estado que aplica lineamientos impe-rialistas, con el objetivo de crear condiciones para que las empresas transnacionales y nacionales se apoderen sin ningún obstáculo a sangre y fuego de los recursos energéticos, mineros, tierras y diversas materias primas, es decir, generar condiciones de rea-cumulación de capital que le permita al capitalismo salir fortalecido de su crisis económica prolongada.

Toma de la cdh Puebla por la presentación con vida de los 43 normalistas de la fecsm.


Los estudiantes normalistas no son delincuentes, como deliberadamente han pretendido hacer creer tanto el gobierno estatal como el federal a través de hipótesis policiacas filtradas subrepticiamente para confundir al pueblo, revictimizar a las víctimas al convertirlos de esta manera en victimarios.

Así mismo denunciamos la política de represión, amenaza e intimidación de manera velada y abierta desatada por el gobierno federal contra los familia-res de los cuarenta y tres estudiantes detenidos-des-aparecidos, de los seis asesinados y las decenas de heridos, sin que cese la amenaza de desaparecer las normales rurales del país y de la ocupación policia-ca-militar y paramilitar de la Escuela Normal Rural Raúl Isidro Burgos de Ayotzinapa, Guerrero.

La cifra escalofriante de más de 70 mil casos de desaparición forzada en México por motivos políti-cos y sociales, refleja la magnitud criminal y geno-cida de los gobiernos neoliberales por imponer a cualquier costo un régimen autoritario, un Estado policiaco-militar y un estado de derecho burgués. Las fosas “descubiertas” son el testimonio fehacien-te del terrorismo de Estado que se ejerce como una forma brutal de dominio sobre el pueblo para garan-tizar la explotación económica y la opresión política de la burguesía sobre el proletariado.

No son momentos para actitudes timoratas y me-drosas, sino para la audacia y la creatividad de las masas populares organizadas; para crear una dirección políti-ca colectiva sustentada en los principios del marxismo-leninismo; para impulsar un proyecto de unidad que fortalezca al movimiento popular independiente.

Con fundamento en lo anterior, consideramos como una necesidad apremiante cerrar filas contra el terrorismo de Estado, seguir sumando esfuerzos por la presentación con vida de los cuarenta y tres estu-diantes normalistas y de todos los detenidos-desapa-recidos de ayer y hoy.

Esta es una lucha de carácter nacional, porque Ayotzinapa somos todos y ninguna forma de lucha se demerita, por el contrario, se complementan en la articulación de un plan general de acción que nos permita detener la embestida represiva y de terroris-mo de Estado, así como enjuiciar política y jurídica-mente a los autores intelectuales y materiales de estos execrables crímenes de Estado y de lesa humanidad.

A impulsar el siguiente plan general de acción de carácter nacional e internacional:

1. No cejar en la exigencia de presentación con vida hasta encontrar a los cuarenta y tres estu-diantes normalistas detenidos desaparecidos.

2. Exigir el juicio y castigo a los criminales de Es-tado.

3. Porque somos pueblo, continuar desarrollando creativamente la solidaridad incondicional a las víctimas del terrorismo de Estado.

4. Exigir al unísono: ¡Alto al terrorismo de Estado!5. Porque ¡todos somos Ayotzinapa! propagar a lo

largo y ancho del país las acciones de protesta popular.

6. Porque es una necesidad obligatoria, impulsar la coordinación y la unidad en el movimiento popular.

7. Nutrir el foro de denuncia permanente en el pla-no nacional.

8. Porque el pueblo merece conocer la verdad, impulsar una campaña de información ante las mentiras, las calumnias y los montajes mediáti-cos que se vierten desde los aparatos del Estado y los monopolios de la comunicación.

9. ¡Si reprimen a uno, nos reprimen a todos! por lo que es necesario responder con la movilización política de masas y la acción solidaria.

10. Impulsar la organización popular independien-te por ser ésta la única alternativa que nos han dejado para detener la escalada represiva del Es-tado y garantizar nuestra vida, libertad así como nuestros derechos humanos y constitucionales.

FRATERNALMENTE:

¡Vivos se los llevaron, vivos los queremos!¡Presentación con vida de los 43 normalistas

detenidos-desaparecidos!¡Presentación con vida de todos los detenidos-

desaparecidos por motivos políticos y sociales en el país!¡Alto al terrorsimo de Estado!

¡Juicio y castigo a los crimenes de Estado!¡Libertad a todos los presos políticos

y de conciencia del país!

¡Por la unidad obrero, campesino, indígena y popular!Frente nacional de lucha por el socialismo

Noviembre de 2014

AbelGarcía Hernández

AdánAbrajan de la Cruz

AlexanderMora Venancio

AntonioSantana Maestro

BenjamínAscencio Bautista

BernardoFlores Alcaraz

Carlos IvánRamírez Villarreal

AbelardoVázquez Peniten

Christian AlfonsoRodríguez Telumbre

Christian TomasColón Garnica

CutbertoOrtiz Ramos

DorianGonzález Parral

Emiliano AlenGaspar de la Cruz

Carlos LorenzoHernández Muñoz

César ManuelGonzález Hernández

IsraelJacinto Lugardo

EverardoRodríguez Bello

FelipeArnulfo Rosas

GiovanniGalindes Guerrero

IsraelCaballero Sánchez

Jesús JovanyRodríguez Tlatempa

JonasTrujillo González

Jorge LuisGonzález Parral

José ÁngelCampos Cantor

José ÁngelNavarrete González

José EduardoBartolo Tlatempa

JorgeÁlvarez Nava

Jorge AníbalCruz Mendoza

Jorge AntonioTizapa Legideño

José LuisLuna Torres

JhosivaniGuerrero de la Cruz

Julio CésarLópez Patolzin

LeonelCastro Abarca

Luis ÁngelAbarca Carrillo

Luis ÁngelFrancisco Arzola

Magdaleno RubénLauro Villegas

MarcialPablo Baranda

Marco AntonioGómez Molina

Martín GetsemanySánchez García

MauricioOrtega Valerio

Miguel ÁngelHernández Martínez

Miguel ÁngelMendoza Zacarías

SaúlBruno García

El Frente Nacional de Lucha por el Socialismo (fnls) exige la inmediata presentación con vida de los 43 estudiantes de la Escuela Normal Rural “Raúl isidro burgos” de Ayotzinapa, Guerrero, miembros de la Federación de Estudiantes Campesinos Socialistas de México (fecsm), que fueron detenidos-desaparecidos por el Estado mexicano el 26 de septiembre de 2014 en iguala, Guerrero.

¡Porque vivos se los llevaron, vivos los queremos!

Somos la joven guardia,Que va forjando el porvenir,

Nos templó la miseria,Sabremos vencer o morir.

Noble es la causa de librar,Al hombre de la esclavitud,

Y si el camino hay que regar,Con sangre de la juventud.

Joven guardia, siempre en guardia.Al burgués insaciable y cruel, y cruel.

Joven guardia, siempre en guardia.No le des paz ni cuartel, paz ni cuartel.

Mañana por las calles,Masas triunfantes marcharán,

Y ante la joven guardia,Los poderosos temblarán.

Somos los ojos de Lenin,Que a vuestro régimen feroz,

El comunismo ha de abatir,Con el martillo y con la hoz.



Con la unión del pueblo,El triunfo pronto llegará,Con armas en las manos,Se hará la guerra popular.

Prestos estamos a vencer,Al enemigo explotador,Y con la guerra popular,

El triunfo pronto llegará.



Joven guardia

vuelos y revueltas 3

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