voces de las parteras, midwives’ voices realidades …...9 resumen ejecutivo la mayor encuesta...

78
Voces de las parteras, realidades de las parteras Hallazgos de una consulta mundial para brindar atención de partería de calidad

Upload: others

Post on 25-Feb-2020

1 views

Category:

Documents


0 download

TRANSCRIPT

  • Voces de las parteras,realidades de las parteras

    Hallazgos de una consulta mundial para brindar atención de

    partería de calidad

    Midwives’ Voices Midwives’ Realities

    Findings from a global consultation on providing

    quality midwifery care

    Midwives’ Voices Midwives’ Realities

    Findings from a global consultation on providing

    quality midwifery care

  • Midwives’ Voices Midwives’ Realities

    Findings from a global consultation on providing

    quality midwifery care

    Voces de las parteras,realidades de las parteras

    Hallazgos de una consulta mundial para brindar atención de

    partería de calidad

  • 4

    Catalogación (CIP) por la Biblioteca de la OMS

    Título original: Midwives voices, midwives realities. Findings from a global consultation on providing quality midwifery care

    I. Organización Mundial de la Salud. ISBN 978 92 4 151054 7

    Los títulos del tema se encuentran disponibles en el depósito institucional de la OMS

    © Organización Mundial de la Salud, 2016

    Todos los derechos reservados. Las publicaciones de la Organización Mundial de la Salud se encuentran disponibles en su sitio web (http://www.who.int) o se pueden solicitar a Ediciones de la OMS, Organización Mundial de la Salud, 20 Avenue Appia, 1211 Ginebra 27, Suiza (tel.: +41 22 791 3264; fax: +41 22 791 4857; correo electrónico: [email protected]).

    Las solicitudes de autorización para reproducir o traducir las publicaciones de la OMS —ya sea para su venta o distri-bución sin fines comerciales— deben dirigirse a Ediciones de la OMS en el sitio web de la OMS (http://www.who.int/about/licensing/copyright_form/index.html).

    Las denominaciones empleadas en esta publicación y la forma en que aparecen presentados los datos que contiene no implican, por parte de la Organización Mundial de la Salud, juicio alguno sobre la condición jurídica de países, territorios, ciudades o zonas, o de sus autoridades, ni respecto del trazado de sus fronteras o límites. Las líneas dis-continuas en los mapas representan de manera aproximada fronteras respecto de las cuales puede no existir pleno acuerdo.

    La mención de compañías específicas o de productos de ciertos fabricantes no implica que Organización Mundial de la Salud los apruebe o recomiende con preferencia a otros análogos. Salvo error u omisión, las denominaciones de productos patentados llevan letra inicial mayúscula.

    La Organización Mundial de la Salud ha adoptado todas las precauciones razonables para verificar la información contenida en esta publicación. Sin embargo, el material publicado se distribuye sin garantía de ningún tipo, ni explíci-ta ni implícita. El lector es responsable de la interpretación y el uso que haga de este material y en ningún caso la Organización Mundial de la Salud será responsable de daño alguno causado por su utilización.

    Portada: De izquierda a derecha, las fotografías son cortesía de: White Ribbon Alliance Sweden, White Ribbon Alliance India, Stephanie Bowen de White Ribbon Alliance, T. Chairani de Jphiego y Helen Stack de Health Poverty Action.

    Impreso en Suiza

  • 55

    Tabla de Contenido

    Reconocimientos ................................................................................................ 7

    Siglas .................................................................................................................. 8

    Resumen ejecutivo ............................................................................................. 9

    1. Introducción ..................................................................................................12

    2. Metodología ..................................................................................................152.1 Los hallazgos aquí presentados provienen de dos procesos de consulta

    cualitativa .................................................................................................. 152.2 Limitaciones de la metodología ................................................................ 152.3 Taller realizado por la OMS, ICM y WRA —junio de 2014 .........................162.4 La encuesta mundial en línea ................................................................... 172.5 Apoyo a redes de parteras ........................................................................ 18

    3. Hallazgos .......................................................................................................193.3 Hallazgos del taller .................................................................................... 193.4 Hallazgos de la encuesta mundial en línea ................................................223.5 Resumen de los hallazgos ......................................................................... 30

    4. Discusión .......................................................................................................354.1 Barreras sociales ....................................................................................... 354.2 Barreras económicas ................................................................................. 374.3 Barreras profesionales incluidas cuestiones del sistema de salud ............37

    5. Conclusiones .................................................................................................39

    ANEXO 1: Voces de las parteras, realidades de las parteras—Guía del taller para el facilitador .............................................................................................40

    ANEXO 2: Resultados del taller de lluvia de ideas .............................................42

    ANEXO 3: Cuestionario de la encuesta en línea .................................................47

    ANEXO 4: Respuestas a la encuesta en línea .....................................................49

    ANEXO 5: La investigación como un posible camino a seguir .......................... 77

  • 7

    Reconocimientos

    El Departamento de Salud de la madre, el recién nacido, del niño y del adolescente (MCA, por sus siglas en inglés) de la Organización Mundial de la Salud reconoce y agradece las importantes contribuciones realizadas a este informe por 2470 parteras de 93 países.

    Asimismo, deseamos agradecer a la Confederación Internacional de Matronas (ICM, por sus siglas en inglés) por hacer posible el taller participativo efectuado durante su Congreso de Praga en junio de 2014 y por publicar la encuesta en línea en su sitio web. Nuestro agradecimiento también para White Ribbon Alliance (WRA) por su apoyo y compromiso a lo largo de todo el proceso.

    Deseamos reconocer en especial a Sheena Crawford de CR2 Associates Ltd y a Georgia Taylor de WISE Development, quienes bajo la guía de Fran McConville del mencionado MCA de la OMS diseñaron, facilitaron y documentaron el taller y la encuesta en línea. La preparación de este informe quedó a cargo de Sheena Crawford, Georgia Taylor y Fran McConville.

    Agradecemos a la Agencia de Estados Unidos para el Desarrollo Internacional (USAID) y a la Agencia Sueca de Desarrollo Internacional (Sida) los donativos otorgados en apoyo a este trabajo.

  • 8

    Siglas

    APN Atención prenatal

    BemONC Atención obstétrica y neonatal básica de emergencia

    CA Calidad de la atención

    ICM Confederación Internacional de Matronas

    DIU Dispositivo intrauterino

    EmONC Atención obstétrica y neonatal de emergencia

    ESMOE Pasos esenciales en el manejo de emergencias obstétricas

    TMM Tasa de Mortalidad Materna

    LIC Países de bajos ingresos

    MIC Países de medianos ingresos

    MS Ministerio de Salud

    NICE Instituto Nacional para la Salud y la Excelencia Clínica (Inglaterra y Escocia)

    ODM Objetivos de Desarrollo del Milenio

    OMS Organización Mundial de la Salud

    ONG Organización no gubernamental

    RMC Colegio Real de Parteras

    SANC Consejo de Enfermeras de Sudáfrica

    SBA Parteras calificadas

    SIDA Síndrome de Inmunodeficiencia Adquirida

    UNFPA Fondo de Población de las Naciones Unidas

    USAID Agencia de Estados Unidos para el Desarrollo Internacional

  • 9

    Resumen Ejecutivo

    La mayor encuesta global de personal de parteríaEste informe documenta las voces y experiencias de 2470 parteras que brindan atención a mujeres embarazadas y a sus recién nacidos en 93 países. La información se recopiló mediante un taller participativo multilingüe junto con la mayor encuesta mundial de parteras realizada en línea hasta la fecha. El informe destaca los problemas cruciales de la prestación de servicios de partería de calidad, describe las barreras que enfrenta el personal y presenta soluciones para mejorar la atención brindada a mujeres, recién nacidos y sus familias.

    El informe fue desarrollado en colaboración con la Confederación Internacional de Matronas y la Alianza del Listón Blanco (ICM y WRA, por sus siglas inglés, respectivamente) y forma parte de un gran esfuerzo de la Organización Mundial de la Salud (OMS) por mejorar la provisión de atención de partería de calidad y evitar mayor número de muertes y discapacidades maternas y neonatales.

    La tasa mundial de mortalidad materna se ha reducido en un 44% en los últimos 25 años. Se estima que la tasa disminuyó de 385 a 216 muertes maternas por cada 100 mil nacidos vivos entre 1990 y 2015, pero en ese último año, en términos de cifras reales, se calcula que murieron 303 mil mujeres durante el parto y el 99% de esas muertes prevenibles ocurrieron en países de ingresos bajos y medios.1 De manera similar, la tasa de mortalidad neonatal mundial disminuyó de 36 muertes por cada 1000 nacidos vivos en 1990 a 19 en el año 2015, pero aún mueren 2 millones 700 mil recién nacidos año con año.2 La Estrategia Mundial para la salud de la mujer, el niño y el adolescente,3 desarrollada por la ONU y adoptada como parte de los nuevos Objetivos de Desarrollo Sostenible para 2016-2030, destaca la urgente necesidad de seguir avanzando en ello y con base en enfoques sensibles al género, impulsados por la equidad y fundamentados en los derechos, con un énfasis cada día mayor en la calidad de la atención.4

    Partería—“cuidado experto, informado y compasivo”¿Por qué resulta importante entender la partería, así como escuchar las voces de las parteras y conocer su realidad? La partería se define como “atención calificada, informada y compasiva para mujeres de edad reproductiva, recién nacidos y familias a lo largo de un continuo que comprende desde la etapa previa al embarazo y el embarazo mismo, el parto, el puerperio y hasta las primeras semanas de vida”.5 Según evidencias disponibles, la partería desempeña un papel “vital” y cuando la ofrecen parteras que han recibido instrucción, capacitación y certificación y que se encuentran reglamentadas, mejora la calidad de la atención y disminuye la mortalidad materna y neonatal de manera rápida y sostenida. Sin embargo y hasta la fecha, poco se ha documentado sobre las perspectivas de personal de partería (para este informe, la mayoría de quienes contribuyeron fueron parteras) y sobre el tipo de apoyo o sistemas necesarios para garantizar que “todas las mujeres tienen derecho a recibir el más alto nivel de cuidados en salud, que incluye el derecho a una atención digna y respetuosa”.6

    1 Trends in maternal mortality: 1990 to 2015 – Estimates by WHO, UNICEF, UNFPA, World Bank Group and the United Nations Population Division, 2015. Geneva: World Health Organization; 2015.

    2 Levels and trends in child mortality 2015. Estimates developed by the UN Inter-agency Group for Child Mortality Estimation. New York: UNICEF; 2015

    3 UN Global strategy for women’s, children’s and adolescents’ health 2016–2030. Geneva: World Health Organization; 2015.

    4 Strategies towards ending preventable maternal mortality (EPMM). Geneva: World Health Organization; 2015.5 Renfrew MJ, McFadden A, Bastos MH, Campbell J, Channon AA, Cheung NF et al. Midwifery and quality care:

    findings from a new evidence-informed framework for maternal and newborn care. The Lancet. 2014 Sept 20;384(9948):1129–1145. http://dx.doi.org/10.1016/S0140-6736(14)60789-3

    6 WHO Statement on the prevention and elimination of disrespect and abuse during facility-based childbirth. Geneva: World Health Organization; 2015.

    http://dx.doi.org/10.1016/S0140-6736(14)60789-3

  • 10

    Confrontar las jerarquías de poder y transformar la dinámica de géneroLos temas surgidos en el taller y en la encuesta mundial en línea revelan el sólido compromiso de las parteras a brindar atención de la mejor calidad a las mujeres, los recién nacidos y sus familias; sin embargo, la realidad que enfrentan es frustrante, ya que limita su accionar. Cabe notar que, según lo expresado por ellas mismas, se ven obstaculizadas por carecer de voz propia para generar los cambios y las soluciones creativas que tanto se necesitan. Tales experiencias se repiten una y otra vez en toda la información recopilada, sin importar si las parteras atienden a las mujeres y a sus recién nacidos en países de ingresos altos, medios o bajos. En este informe se destaca el hecho de que además de tratar de solucionar los problemas relacionados con recursos financieros o sistemas de salud, también se deben corregir las complejas jerarquías de poder y transformar las dinámicas de género. Las encuestadas subrayaron que “el poder, la autonomía y el estatus” son importantes para el personal de partería para lograr avanzar en la provisión de atención de calidad.

    Casos de falta de respeto, subordinación y discriminación de géneroLos temas incluidos en el informe brindan ejemplos inequívocos, tomados directamente de las experiencias de las 2470 parteras antes mencionadas. Se incluyen casos de falta de respeto tanto en el trabajo como en la comunidad: 36% mencionaron faltas de respeto de parte de personal médico de alto rango y 32% indicaron que valorarían “ser escuchadas” (porcentaje que aumentó a 53% entre las parteras africanas). La falta de estatus y la “subordinación a los profesionales de la medicina” se citaron con frecuencia junto con la ausencia de apoyo legal y regulatorio. Entre 20% y 30% de todas las encuestadas reportaron haber recibido malos tratos por la discriminación contra las mujeres y la desigualdad de género.

    Barreras socioculturales: acoso, entornos inseguros, aislamiento socialLas barreras descritas por las participantes durante la consulta concuerdan con el marco analítico desarrollado por la OMS para el mapeo sistemático de obstáculos sociales, económicos y profesionales que impiden la provisión de atención de calidad y la revisión sistemática de intervenciones que ayuden a superar dichas dificultades.

    Desde la perspectiva de las barreras sociales, 37% de todas las parteras de la encuesta han sufrido acoso en el trabajo y muchas de ellas mencionaron falta de seguridad y temor a la violencia. Un número significativo de encuestadas, especialmente en África, mencionaron que la falta de respeto en el lugar de trabajo “incluye el hostigamiento —intimidación verbal y en ocasiones abuso físico y sexual—”, actitudes menoscaban sus “sentimientos de autoestima y su capacidad de proporcionar atención de calidad”. Entre otras barreras que impiden brindar servicios de calidad se encuentra el hecho de vivir en lugares inadecuados e inseguros, situación que conduce al aislamiento y a la falta de apoyo familiar y entorpece la posibilidad de conciliar las obligaciones de un empleo remunerado con las responsabilidades domésticas y de maternidad.

    Barreras económicas: salarios no comparables, insuficientes para satisfacer necesidades básicasEn cuanto al aspecto económico, las parteras reportaron percibir salarios bajos, no comparables a los ofrecidos a profesiones similares y en ocasiones insuficientes para vivir. Una quinta parte de las participantes depende de otra fuente de ingresos para sobrevivir y, por ende, experimentan mayor presión y agotamiento. Sin embargo, muchas de ellas priorizan los valores éticos de la prestación de atención por encima de los niveles salariales; por ejemplo, las parteras encuestadas de un país en particular mencionan que “buscan obtener una formación completa y adquirir experiencia en hospitales del sector público, aun sabiendo que los salarios son mucho más bajos que en el sector privado”. Por la poca importancia de la partería en la agenda política, otras consideran que no cuentan con los recursos adecuados para prestar sus servicios y que “no se reconoce el papel vital de la partería y, en consecuencia, el financiamiento no alcanza”.

  • 11

    Barreras profesionales: la falta de oportunidades para el liderazgo anula el empoderamientoEn cuanto al aspecto profesional, 89% de las encuestadas mostraron una clara comprensión de que la partería y todo aquello que conlleva se consideran fundamentales para propiciar el cambio. Por otra parte, también manifestaron preocupación al reconocer la desvalorización de la partería y la creciente medicalización del parto. Otras más opinan que la falta de oportunidades de liderazgo para personal de partería experimentado debilita a la profesión, en particular cuando se le incluye dentro de las estructuras de enfermería. Se hicieron recomendaciones enfáticas para fortalecer la educación en partería y superar las mencionadas barreras al mejorar el acceso a estudios superiores y al desarrollo profesional y al contar con el respaldo de asociaciones de partería que dispongan de recursos adecuados.

    El personal de partería tiene las solucionesLas participantes compartieron muchas otras reflexiones respecto a cómo superar las barreras y crear un cambio positivo, entre ellas: asegurar que la partería (como es el caso en algunos países) se considere “una profesión diferente a la enfermería con reglamentos específicos para parteras” y que ellas mismas “formulen políticas”. También se consideró esencial que las personas que “planifican e investigan la educación adquieran conocimientos suficientes acerca de la profesión y del alcance de la práctica de la partería” antes de tomar decisiones sobre la atención de calidad. Las participantes describieron la necesidad de incluir derechos, género, ética e igualdad en las capacitaciones previas al servicio en todo el sistema de salud, además de aplicar un esquema de apoyo entre pares.

    Entre los ejemplos de buenas prácticas existentes se incluyen las unidades dirigidas por parteras, la provisión de atención de parteras en grupo y el fortalecimiento de las asociaciones de partería que brindan mejor apoyo a necesidades profesionales y normativas. Las encuestadas mencionaron que “tener parteras en puestos gerenciales y de supervisión que formen parte del equipo directivo permite visibilizar temas cruciales y tomar decisiones correctas”. Algunos países mencionaron que las campañas de abogacía han generado mejoras en cuanto al reconocimiento de la profesión de la partera.

    Debemos escuchar las voces de las parteras para mejorar la calidad de la atenciónAl escribir sobre la Conferencia Mundial de Salud Materna y Neonatal celebrada en México en 2015,7 Richard Horton (Editor en Jefe de The Lancet), señalaba que necesitamos líderes apropiados e invertir en más parteras. También afirmó: “Ciertamente, hay éxitos que celebrar en todo el mundo, pero también hay fracasos terribles. Nuestro comprensible deseo de preferir el éxito al fracaso oculta las realidades (y vejaciones) de la vida que enfrentan cientos de millones de madres y recién nacidos en todo el mundo.”

    Los temas presentados en este informe indican que en todo el mundo el personal de partería se encuentra muy consciente de qué se necesita para mejorar la calidad de la atención. Sin embargo, sus voces rara vez son escuchadas y los temas clave quedan fuera del diálogo de políticas internacionales, nacionales o locales. Esperamos que este informe nos ayude a seguir prestando atención a las realidades —y vejaciones— que enfrentan tanto las embarazadas como las miles de mujeres de todo el mundo que brindan servicios de partería, a fin de incluir sus voces como líderes de la mejora de la atención de calidad y apoyarlas en forma conjunta para que sigan ayudando a mujeres, recién nacidos y sus familias a sobrevivir, prosperar y transformarse.

    7 Horton R. Offline: The Mexican Revolution. The Lancet. 2015 Oct 31; 386(10005):1718. http://dx.doi. org/10.1016/S0140-6736(15)00681-9

    http://dx.doi. org/10.1016/S0140-6736(15)00681-9http://dx.doi. org/10.1016/S0140-6736(15)00681-9

  • 1. Introducción

    En los últimos 25 años se han registrado avances significativos en la reducción de la morbimortalidad materna y neonatal. Aunque la tasa mundial de mortalidad materna ha disminuido en un 44%, de alrededor de 385 a 216 muertes maternas por cada 100 mil nacidos vivos entre 1990 y 2015, se estima que 303 mil mujeres murieron durante el parto en el año 2015 y el 99% de esas muertes prevenibles ocurrieron en países de ingresos bajos y medios.8 De manera similar, la tasa de mortalidad neonatal mundial disminuyó de 36 muertes por cada 1000 nacidos vivos en 1990 a 19 en el año 2015, pero aún mueren 2 millones 700 mil recién nacidos año con año.9 La Estrategia Mundial para la salud de la mujer, el niño y el adolescente,10 desarrollada por la ONU y adoptada como parte de los nuevos Objetivos de Desarrollo Sostenible para 2016-2030, destaca la urgente necesidad de seguir avanzando en ello y con base en enfoques sensibles al género, impulsados por la equidad y fundamentados en los derechos.

    Las estrategias de la OMS para poner fin a la mortalidad materna prevenible resaltan más la importancia de abordar la calidad de la atención.11 Existe evidencia considerable sobre el impacto positivo producido por la asistencia calificada durante el parto12 en los resultados de salud materna y neonatal.13 Una lección crucial que hemos aprendido demuestra que lo importante no sólo es la cantidad requerida de personal calificado para la atención del parto (es decir, el número de personas que tienen, como mínimo, las competencias de una partera capacitada), sino también la calidad de la atención.14

    Aunque según la evidencia la partería puede contribuir significativamente a la atención materna y neonatal de alta calidad y a la consiguiente reducción de muertes de madres y recién nacidos, no se ha entendido bien en qué consiste la partería por la imposibilidad de aplicar definiciones consistentes, situación que ha llevado a que personas con y sin formación profesional sean consideradas parteras.15 La partería se define como “atención calificada, informada y compasiva para mujeres de edad reproductiva, recién nacidos y familias a lo largo de un continuo que comprende desde la etapa previa al embarazo y el embarazo mismo, el parto, el puerperio y hasta las primeras semanas de vida”. Sus características principales incluyen “optimizar los procesos normales biológicos, psicológicos, sociales y culturales de reproducción y vida temprana, prevención y manejo oportunos de complicaciones, consulta y referencia a otros servicios, respetando las circunstancias y puntos de vista de las mujeres y trabajando conjuntamente con ellas para fortalecer su propia capacidad de cuidar de sí mismas y de sus familias”.16

    8 Trends in maternal mortality: 1990 to 2015 – Estimates by WHO, UNICEF, UNFPA, World Bank Group and the United Nations Population Division, 2015. Geneva: World Health Organization; 2015.

    9 Levels and trends in child mortality 2015. Estimates developed by the UN Inter-agency Group for Child Mortality Estimation. New York: UNICEF; 2015.

    10 UN Global strategy for women’s, children’s and adolescents’ health 2016-2030. Geneva: World Health Organization; 2015.

    11 Strategies towards ending preventable maternal mortality (EPMM). Geneva: World Health Organization; 2015.12 La OMS, ICM y FIGO definen a la persona calificad para la atención del parto como a quien tiene, como mínimo, las

    competencias de una partera, conforme a lo definido por la ICM: “Capacitada hasta dominar las destrezas necesarias para manejar embarazos, partos y períodos puerperales inmediatos normales (sin complicaciones), y en la identificación, manejo, y derivación de las complicaciones en mujeres y recién nacidos.” Making pregnancy safer: the critical role of the skilled attendant: a joint statement by WHO, ICM and FIGO. Geneva: World Health Organization; 2004.

    13 Por ejemplo, ver: Yakoob MY, Ali MA, Ali MU, Imdad A, Lawn JE, Van Den Broek N et al. The effect of providing skilled birth attendance and emergency obstetric care in preventing stillbirths. BMC Public Health. 2011 Apr 13;11 Supple 3:S7. doi: 10.1186/1471-2458-11-S3-S7 PMID: 21501458

    14 Strategies toward ending preventable maternal mortality (EPMM). Geneva: World Health Organization; 2015.15 Renfrew MJ, McFadden A, Bastos MH, Campbell J, Channon AA, Cheung NF et al. Midwifery and quality care:

    findings from a new evidence-informed framework for maternal and newborn care. The Lancet. 2014 Sept 20;384(9948):1129–1145. http://dx.doi.org/10.1016/S0140-6736(14)60789-3

    16 Renfrew MJ, McFadden A, Bastos MH, Campbell J, Channon AA, Cheung NF et al. Midwifery and quality care:

    12

    http://dx.doi.org/10.1016/S0140-6736(14)60789-3

  • Conjuntamente con sus asociadas, la OMS, en colaboración con la Alianza del Listón Blanco y la Confederación Internacional de Matronas (WRA e ICM, por sus siglas en inglés, respectivamente) se esfuerza por mejorar la calidad de la atención (como la define la OMS17) brindada a mujeres y recién nacidos. Para ello, resulta esencial comprender las perspectivas del personal de partería, incluidas sus opiniones respecto a por qué, en algunas circunstancias, se sienten incapaces de proporcionar servicios de calidad.

    Para iniciar este informe, en la Tercera Conferencia Mundial de Women Deliver (Las mujeres cumplen), realizada en Kuala Lumpur en 2013, la OMS, ICM y WRA convocaron una sesión conjunta para determinar si las proveedoras de atención de partería se sentían “empoderadas, respetadas y seguras”. Los materiales presentados por las delegaciones de Afganistán, Nepal y Papua Nueva Guinea y las subsiguientes conversaciones entre varios países develaron la cruda realidad de la vida difícil —y a menudo peligrosa— de las mujeres que brindan servicios de partería. Después de esa reunión histórica, la OMS llevó a cabo un mapeo sistemático de la literatura sobre las barreras sociales, culturales y profesionales, así como una revisión sistemática de intervenciones que permiten superar las barreras identificadas y el presente informe sobre “Voces de las parteras, realidades de las parteras.”

    Los primeros hallazgos de las conversaciones de Kuala Lumpur y del mapeo sistemático revelaron que las barreras recurrentes que entorpecen la provisión de servicios de partería de calidad en contextos de ingresos bajos y medios podrían clasificarse en sociales, económicas y profesionales. Tales categorías se utilizaron para desarrollar el marco analítico representado en la Gráfica 1, a continuación.

    Figura 1. Marco analítico: barreras enfrentadas por personal de partería para prestar atención de calidad

    findings from a new evidence-informed framework for maternal and newborn care. The Lancet. 2014 Sept 20;384(9948):1129–1145. http://dx.doi.org/10.1016/S0140-6736(14)60789-3

    17 Tuncalp O, Were WM, MacLenna C, Oladapo OT, Gulmezoqlu AM, Bahl R et al. Quality of care for pregnant women and newborns – the WHO vision. BJOG. 2015 Jul;122(8):1045–9. doi: 10.1111/1471-0528.13451

    13

    http://dx.doi.org/10.1016/S0140-6736(14)60789-3

  • Los tres tipos de barreras —sociales, económicas y profesionales— se encuentran interrelacionadas y son interdependientes. Las parteras que experimentan dificultades en cualquiera de esas áreas enfrentan importantes desafíos que pueden impedirles prestar atención de alta calidad a mujeres y recién nacidos. Cuando la carga de la dificultad se vuelve demasiado agobiante en las tres áreas, el personal de partería se siente abandonado, experimenta agotamiento físico y entra en un estado de “aflicción moral”.18

    El marco analítico arriba descrito fue explorado más a fondo en un taller organizado conjuntamente entre la OMS, WRA e ICM como parte del Congreso de ésta última, que tuvo lugar en Praga en junio de 2014, y mediante una encuesta global en línea. El presente informe presenta los temas derivados de la consulta basada en dicho marco. La Sección 2 de este informe describe la metodología participativa y cualitativa utilizada; la Sección 3 presenta los hallazgos, y la Sección 4 la discusión y las conclusiones. Si desea obtener más información sobre los hallazgos y las herramientas cualitativas, consulte los anexos de este documento.

    18 El agotamiento y la aflicción moral se relacionan con elevados niveles de extenuación emocional y física, disminución de la autoestima, una sensación de haber obtenido pocos logros personales y de ausencia de propósito. Véase, por ejemplo, Gallagher A. Moral distress and moral courage in everyday nursing practice. Online J Issues Nurs. 2011 Mar 21;16(2):8. PMID:22088157

    14

  • 2. Metodología

    2.1 Los hallazgos aquí presentados provienen de dos procesos de consulta cualitativa

    ■ el taller realizado por WHO, CIM y WRA contó con la participación de 42 parteras de 14 países en el Congreso Trienal de CIM realizado en Praga en junio de 2014;

    ■ una encuesta mundial en línea en cuatro idiomas (español, francés, inglés y árabe), reunió las respuestas de 2.470 encuestados provenientes de 93 países.

    La diferencia clave entre las metodologías descritas a continuación y los métodos de investigación convencionales reside en la ubicación del poder durante el proceso de recopilación de información. Los enfoques participativos cualitativos dirigen su atención a los conocimientos, las prioridades y las perspectivas locales. Por lo general, los datos recolectados se centran en la acción, más que en el conocimiento per se.19

    2.2 Limitaciones de la metodología

    2.2.1 Limitaciones de la metodología del talleri. Identificación y selección de participantes. El taller se promocionó ampliamente: se

    anunció en el catálogo de actividades del Congreso de ICM, por medio de volantes, en distintas sesiones del Congreso y verbalmente de persona a persona. Asimismo, los esfuerzos de los facilitadores del taller por aumentar la asistencia influyeron en el número de participantes, así como los mensajes de correo electrónico enviados antes de la conferencia a miembros clave del ICM y WRA y el contacto directo con participantes del Congreso un día antes del taller. Naturalmente, con dicho enfoque, se debe haber generado algún tipo de sesgo en la selección intencional y en los casos en que las organizaciones decidían a qué personas enviar al taller.

    ii. Las personas del grupo de habla inglesa se mezclaron mucho con personal de partería de países africanos, europeos y americanos y por esa razón, quienes hablaban inglés no siempre pudieron llegar a un consenso por las circunstancias tan diferentes en que trabajan y viven. Con todo, sorprendió el nivel de acuerdo que sí se logró alcanzar (ver la Sección 3).

    iii. Se había preparado un cuarto grupo francófono, pero al último momento el facilitador de habla francesa no pudo asistir al taller y, por lo tanto, no se pudo contar con ese grupo.

    2.2.2 Limitaciones de la metodología de la encuesta mundial en línea i. Identificación y selección de participantes: Como la encuesta se realizó en línea,

    existía mayor probabilidad de que las respuestas provinieran de personal de partería con acceso a Internet. Por lo tanto, la muestra se encuentra sesgada con participantes procedentes de áreas más desarrolladas o con acceso a teléfonos inteligentes. La excepción es la encuesta en árabe y alrededor de 25 de los cuestionarios africanos de la Etapa 2, que se completaron fuera de línea y se cargaron manualmente. El ejemplo de Yemen demuestra que, con esfuerzo, se puede llegar incluso a las áreas más remotas y así, el personal de partería puede sentirse validado e incluido.

    ii. Dirigirse a países de ingresos bajos (LIC, por sus siglas en inglés) y medios (MIC, por

    19 Social Science and Medicine Vol 41, No 12 pp 1667–1676, 1995.

    15

  • sus siglas en inglés): Se buscaba enfocarse sólo en países de ingresos bajos y medios, pero resultó imposible ya que la encuesta se encontraba disponible en línea en todo el mundo. Se registró una importante respuesta de países de altos ingresos, en particular de Australia, Canadá, Holanda, Nueva Zelanda, España, el Reino Unido de Gran Bretaña e Irlanda del Norte y Estados Unidos de América.

    iii. Los datos se desagregaron por idioma: Las personas encuestadas pudieron elegir en qué idioma deseaban responder (inglés, francés, español o árabe). Los resultados revelan que no necesariamente respondieron en su idioma natal o de trabajo. Entonces, por ejemplo, hubo casos en que personal de Irak respondió en inglés y personal de España respondió en francés.

    iv. Limitación de la aplicación de la encuesta a sólo cuatro idiomas: Existe mucho personal de partería a nivel mundial que no habla ni lee ninguno de los cuatro idiomas y, por consiguiente, quedaron excluidos de la encuesta.

    2.3 Taller realizado por la OMS, ICM y WRA—junio de 2014El Congreso Trienal de la ICM realizado en Praga en 2014 constituyó una excelente oportunidad para aprovechar el impulso de los hallazgos del mapeo sistemático de la literatura. El taller se impartió a 42 participantes de 14 países e incluyeron personal de partería, defensores, legisladores, educadores y representantes de donantes, pero la gran mayoría era personal de partería. Las personas que participaron fueron seleccionadas por los organismos a los cuales pertenecían y recibieron información acerca del taller antes y durante el Congreso por parte de ICM y el equipo que lo impartiría.

    Objetivo del taller: Ofrecer a las parteras las condiciones que les permita expresar su opinión y compartir las realidades profesionales, sociales y económicas de su vida laboral cotidiana.

    Tras una introducción del trabajo realizado hasta la fecha, se dividió a las personas participantes en tres grupos según su idioma (inglés, español y árabe).20

    Mediante una lluvia de ideas con el equipo de facilitación, los grupos empezaron a explorar las barreras que enfrenta el personal de partería para brindar la atención que merecen las mujeres y sus recién nacidos. Entre las preguntas planteadas se encontraban las siguientes:

    ■ ¿Cuáles son sus condiciones de trabajo?

    ■ ¿Cuáles son sus oportunidades para educación, capacitación y desarrollo profesional?

    ■ ¿Qué impacto tiene sobre su situación familiar el hecho de ser partera?

    ■ ¿Cuáles son sus prioridades para el cambio, para satisfacer sus derechos, necesidades y demandas?

    Con la lluvia de ideas, los grupos empezaron a explorar las barreras que enfrentan para proporcionar atención de calidad y las organizaron en tres áreas: profesionales, sociales y económicas (ver Gráfica 1). Posteriormente, se les pidió que analizaran la siguiente pregunta: ¿Qué necesita usted para poder experimentar protección, seguridad y satisfacción en su trabajo? Los grupos señalaron una serie de iniciativas para abordar las barreras que acababan de identificar. Utilizaron la herramienta participativa llamada Spokes (ver Cuadro 1) para determinar en qué medida sentían que iban avanzando para superar los obstáculos de su vida laboral y personal (ver Sección 3, Hallazgos). Finalmente, votaron por las iniciativas que consideraban más importantes para lograr avances.

    20 El grupo de árabe se formó con 9 mujeres; el de habla española se integró con 16 mujeres y 1 hombre, y 16 se unieron al grupo de inglés. Los integrantes de los grupos tenían entre 24 y 70 años de edad y entre 7 y 47 años de experiencia.

    16

  • Análisis de los hallazgos del tallerLos datos cualitativos de los hallazgos se analizaron con los participantes del taller con la metodología Spokes. Cada uno de los tres grupos clasificó sus datos dentro de las tres áreas del marco —social, económica y profesional— e identificó prioridades. Los grupos trabajaron individualmente y luego reportaron sus conclusiones en una reunión plenaria. Todos recibieron apoyo del equipo de facilitación.

    2.4 La encuesta mundial en líneaLa encuesta fue diseñada para complementar el taller participativo. Consistió de diez preguntas (ver Cuadro 2) basadas en los temas que surgieron del mapeo sistemático de barreras realizado por la OMS, así como en los hallazgos clave del taller participativo. Con toda intención y para influir lo menos posible en los participantes, no se dividieron las preguntas en las tres categorías de barreras (Gráfica 1). Expertos de la OMS examinaron y revisaron las preguntas de la encuesta. Asimismo, se incluyó espacio para comentarios y se plantearon preguntas abiertas para que las personas encuestadas indicaran qué intervenciones podrían haberles ayudado o les ayudaron a mejorar la calidad de la atención.

    CUADRO 1: LA HERRAMIENTA SPOKES

    CUADRO 2: PREGUNTAS DE LA ENCUESTA EN LÍNEA (las preguntas completas se incluyen en el Anexo 3)

    La herramienta Spokes (rayos de una rueda) se puede emplear para explorar cualquier tema o asunto. En una discusión preliminar se identifican las características de una cuestión dada y se anotan o representan con símbolos. Las características se colocan en el exterior de un círculo y se unen al centro del mismo por medio de líneas, como si fueran los rayos de una rueda. El centro representa “nosotros” o “ahora” y los símbolos colocados alrededor del borde de la rueda representan las cosas que deseamos o necesitamos lograr. Se pide a los participantes que debatan y lleguen a un consenso sobre dónde se encuentran actualmente respecto de lo que desean lograr y que coloquen una marca a lo largo del rayo correspondiente para representar ese lugar. Es importante que los participantes no intenten dar valores porcentuales a las distancias que señalan en los rayos. Las marcas mostrarán valores en términos espaciales y también el potencial de una cuestión respecto de otra. Si no se logra consenso sobre dónde colocar la marca en un rayo de la rueda, se pueden poner dos marcas. En general, se considera que la herramienta es muy accesible y que brinda espacio para reflexionar y debatir sin perder de vista qué temas se analizan.

    Fuente: Guía del Taller del Congreso Trienal de ICM (2014) y CR2 Participatory Tools (2005).

    1. ¿En qué país trabaja actualmente?

    2. ¿Cuál es el título de su puesto y el entorno en que trabaja?

    3. ¿Cuántos años tiene?

    4. Califique las siguientes afirmaciones en términos de la frecuencia con que afectan su vida como partera.

    5. ¿Cómo se siente en su trabajo diariamente?

    6. Investigaciones previas han demostrado que las parteras a veces son maltratadas o experimentan condiciones laborales deficientes. ¿Por qué cree que eso ocurre? Utilice su propia experiencia (si aplica) y la de sus colegas de su país.

    7. ¿Cuán fácil es conciliar su vida familiar con su trabajo como partera?

    8. Si tuviese la oportunidad de hacer cambios a la manera en que experimenta la partería, ¿qué cambios serían los más importantes para usted?

    9. ¿Cómo cree que se pueden incentivar dichos cambios?

    10. Por favor platíquenos sobre las mejoras que se realizan en su país o en su sección del servicio de salud y cómo éstas han ayudado a las parteras a hacer mejor su trabajo.

    11. Opcional: Si desea que mantengamos contacto con usted respecto a la presente investigación, favor de proporcionar su nombre y dirección de correo electrónico.

    17

  • La encuesta se realizó en dos etapas y ambas se publicaron en el sitio web de ICM. Se promovió la participación por medio del Boletín de su Congreso y de otras asociaciones de parteras. Gracias a las competencias lingüísticas del equipo de la encuesta, se le pudo aplicar en francés, inglés, español y árabe. La primera etapa se llevó a cabo en 2014 en los cuatro idiomas. Por la baja proporción de encuestados de África, la segunda etapa estuvo disponible hasta febrero de 2015 y se condujo sólo en inglés y francés con participantes de ese continente. La encuesta se dirigió directamente a integrantes de ICM de países africanos por medio de la Secretaría de la ICM y de su sitio web.

    Nivel de respuesta inesperado: la necesidad de les escuchenLa respuesta a la encuesta fue alrededor de 10 veces más alta de lo anticipado, con un total de 2470 participantes. Por lo tanto y hasta la fecha, constituye la mayor encuesta mundial de personal de partería.

    2.5 Apoyo a redes de parterasUn gran número de participantes (un total de 1031 de las seis encuestas) proporcionaron sus direcciones de correo electrónico y solicitaron mantenerlas informadas de los hallazgos de la encuesta y los pasos a seguir, hecho que constituye una excelente oportunidad para mantener un diálogo continuo con el personal de partería de todo el mundo. Asimismo, se podría facilitar la creación de un foro abierto de chat / consulta para discutir temas o problemas específicos.

    CUADRO 3: RESPUESTA DE YEMEN

    La Asociación Yemenita de Partería de Sana’a se mostró de acuerdo en tratar de llegar al personal de partería que trabaja en gobernaciones remotas y en zonas rurales y urbanas. Para ello, la encuesta se imprimió y envió a esas áreas lejanas y una vez completada, se devolvió a Sana’a por servicio de taxi; el consultor nacional incorporó a la encuesta en línea los datos recibidos en papel. La respuesta del personal de partería de Yemen fue abrumadora, quizás porque la mayoría habita en regiones afectadas por conflictos, sin programas de donantes y anhelando que se les escuche. Posiblemente, para muchas de las personas encuestadas, era la primera vez que fueron consultadas. Sus esfuerzos por contribuir y lograr que se les escuche son de enorme importancia. También resulta significativo que se hayan recibido respuestas de todas las gobernaciones donde existen representaciones activas de la Asociación Yemenita de Partería, aunque no de Dhamar y Hodeidah.

    Fuente: S Salloum, Consultor Nacional

    18

  • 3. Hallazgos

    En las siguientes secciones, se resumen los hallazgos clave provenientes del taller y del proceso de consulta en línea y una breve comparación y análisis de los hallazgos recopilados. Se destacan también las sugerencias ejemplos positivos del personal de partería sobre cómo superar las barreras para proporcionar atención de calidad.

    3.3 Hallazgos del tallerLos tres grupos (inglés, español y árabe) del taller identificaron distintas barreras para la provisión de atención de calidad (ver Anexos 1 y 2, donde se presentan el programa y hallazgos detallados del taller). Los grupos tuvieron la oportunidad de analizar cómo abordar esos temas o problemas al reflexionar en la siguiente pregunta: ¿Qué necesita usted para experimentar protección, seguridad y satisfacción en su vida laboral y poder abordar esos problemas, en particular en las áreas social y económica?

    Los resultados aquí presentados reflejan las opiniones del personal de partería participante. Las áreas donde se requieren cambios (o nuevas iniciativas), identificadas por participantes de los tres grupos, son muy similares. Los tres grupos deseaban que existiera mayor reconocimiento y una mejor definición de la partería, ya sea por medio de marcos regulatorios más eficaces, descripciones de trabajo bien definidas o asociaciones de partería fortalecidas. Por otra parte, exhortaron a desarrollar mejores capacitaciones para impartirlas antes y durante el desempeño de su labor y a que se coloque a la partería en una categoría reconocida dentro de la jerarquía médica. Los grupos de habla española e inglesa expresaron interés en tener mayor representación durante la toma de decisiones y en el desarrollo de marcos regulatorios y legales. El grupo de habla hispana también mencionó la necesidad de ofrecer mayor educación en cuestiones de género, ética, igualdad y derechos dentro del sistema de salud y al personal de partería. El grupo de idioma árabe se enfocó más en la necesidad de gestionar condiciones laborales básicas para el personal de partería y en alentar a las niñas a elegir la partería como profesión.

    En los diagramas de la herramienta Spokes presentados a continuación (ver Gráficas 2, 3 y 4), los recuadros que se encuentran alrededor de la rueda representan las áreas donde las participantes consideran que se requieren cambios o nuevas iniciativas. Los puntos ubicados a lo largo de los rayos representan la viabilidad o probabilidad de que ocurra el cambio. Cuanto más cerca del exterior de la rueda (es decir, cuanto más cerca del recuadro) se coloque un punto dado, más cerca se encuentran de lograr el cambio o mayor el potencial de generarlo. Los puntos cerca del centro indican que el desafío es mayor. La presencia de dos puntos en una sola línea representa diferencias de opinión entre las participantes de un mismo grupo (por ejemplo, diferencias en lo experimentado entre entornos rurales y urbanos).

    19

  • Gráfico 2. Personal de partería de habla inglesa – propuestas de cambio

    Cambios más próximos a lograrse: Acceso a educación superior; entornos de vida adecuados y familias que brindan apoyo; opción de elegir la partería como carrera profesional; asociaciones de partería funcionales; personal de partería disponible para entrenar a sus pares.

    Cambios más difíciles de lograr: Participación del personal de partería en foros de toma de decisiones; mayor autonomía profesional; mejores salarios; mayor atención a la partería en la agenda política, y mayor apreciación al saber y a la práctica de la profesión.

    Posteriormente, de entre los cambios deseados, el grupo votó por aquellos que consideraban prioritarios para iniciar acciones y de esa manera, identificaron los tres más importantes.

    Prioridades de acción: (i) Asegurar que las asociaciones de partería se fortalezcan y trabajen a favor del cumplimiento de los derechos del personal de partería; (ii) aumentar las voces del personal de partería en la toma de decisiones y el desarrollo de políticas; (iii) mejorar la autonomía profesional y la autorregulación del personal de partería.

    Asimismo, el personal de partería del grupo de inglés reportó sentirse abrumado por su carga de trabajo y sufrir de agotamiento. Las parteras provenientes del Reino Unido y Estados Unidos mencionaron sentirse muy presionadas para atender cada vez más mujeres en tiempos cada vez menores y que, por consiguiente, disminuye su capacidad para proporcionar servicios de calidad.

    20

  • Gráfico 3. Personal de partería de habla hispana: propuestas de cambio

    Cambios más próximos a lograrse: El personal de partería de habla hispana (proveniente en su totalidad de América Latina) consideró posible organizar una “semana de partería” en la región. Por otra parte, mostró optimismo ante la posibilidad de contar con un nuevo proyecto de investigación para analizar los factores socioeconómicos que afectan sus derechos. Una cuestión que pensaban que se encontraba a su alcance fue el empoderamiento profesional mediante coaching y en menor medida, la probabilidad de coordinación entre la OMS, el Fondo de Población de las Naciones Unidas (UNFPA) e ICM para evitar duplicación de esfuerzos. También se consideró menos factible la provisión de asistencia técnica y financiera para una campaña regional de promoción del parto normal con el fin de reducir el número de cesáreas y fortalecer el papel de la partera.

    Cambios más difíciles de lograr: Promoción de la comprensión de las funciones del personal de partería; apoyo financiero para asociaciones de partería; inclusión de mujeres (parteras y obstetras) en los comités de políticas y leyes; inclusión de cuestiones de derechos, género, ética e igualdad en la formación previa al servicio; desarrollo de una certificación profesional mundial en partería.

    Prioridades de acción: (i) Desarrollo de estrategias de comunicación para concientizar y garantizar mayor reconocimiento a la profesión de partería; (ii) llamado de la OMS a los gobiernos para promover un mayor reconocimiento del personal de partería y su capacitación y contratación; (iii) asignar más apoyo financiero a las asociaciones de partería y preservar su condición jurídica de entidades sin fines de lucro.

    21

  • Gráfico 4. Personal de partería, idioma árabe - propuestas para el cambio

    MS: Ministerio de Salud.

    Cambios más próximos a lograrse: El personal de partería de Cisjordania, la Franja de Gaza y Yemen no pudo identificar ninguna área de su trabajo donde se opere satisfactoriamente. Se mencionó que el sistema en Cisjordania y la Franja de Gaza se encontraba algo más desarrollado en comparación al de Yemen, pero que actualmente ambos países sufren por los conflictos, la agitación política y la interrupción de los servicios. El avance que en su opinión resultaba más probable de lograr era el desarrollo de descripciones de puesto.

    Cambios más difíciles de lograr: Crear conciencia acerca de la partería en la población en general, en especial en las escuelas; establecer una dirección de partería dentro de los ministerios de salud; formar sistemas de seguridad social (seguros, pensiones); mejorar las condiciones de trabajo y los salarios del personal de partería, y generar oportunidades del desarrollo profesional.

    Prioridades de acción: (i) Crear una dirección profesional de partería dentro de los ministerios de salud, ASÍ COMO un sistema de desarrollo profesional continuo; (ii) fortalecer a las asociaciones de partería; (iii) otorgar a las funciones del personal de partería reconocimiento adecuado —al igual que autoridad y poder de decisión— dentro del sistema de salud.

    3.4 Hallazgos de la encuesta mundial en líneaEn esta sección, presentamos una descripción general de los resultados combinados de la encuesta en línea (las preguntas de la encuesta se incluyen en el Anexo 3 y en el Anexo 4 se presentan respuestas detalladas). La encuesta se llevó a cabo en dos rondas: primero en cuatro idiomas (inglés, francés, español y árabe) a escala mundial y después en francés e inglés específicamente para personal de partería en África debido a la baja la respuesta obtenida de ese continente durante la primera ronda.

    22

  • Pregunta 1: País donde trabajaSe obtuvo un total de 2470 respuestas de 93 países. Como en algunos países africanos de habla inglesa y francesa se envió el cuestionario en dos ocasiones, se generaron casos de traslape que después fueron eliminados. Los resultados se presentan por idioma de la siguiente manera.

    ■ Para las dos encuestas en inglés se registró un total de 1791 personas de 75 países: 58% de 25 países de Europa, 20% de África, 8% del Continente Americano, 11% de la región Asia Pacífico y 3% del Medio Oriente.

    ■ Para la encuesta en español se registraron 246 personas de 10 países: 50% de España, 46% de seis países de América Latina y 3% de dos países europeos y Estados Unidos.

    ■ Para las dos encuestas en francés respondieron 177 personas en total provenientes de 24 países, incluidos 19 de África.

    ■ Para la encuesta en árabe se registraron 256 personas de cuatro países: la mayoría (92%) de Yemen, 6.8% de Arabia Saudita, 0.4% de Argelia y 0.4% de Cisjordania y la Franja de Gaza.

    Pregunta 2: Nombre del puesto y lugar de trabajoMás de la mitad de las personas encuestadas (68%) se auto-describieron como parteras, aunque se observaron variaciones por región (como lo reflejan las versiones de la encuesta en los cuatro idiomas). La mayoría (80%) trabajaban en un hospital escuela o general. Entre las parteras latinoamericanas y españolas, se registró una menor tendencia a trabajar en áreas rurales y mayor probabilidad de ser clasificadas como enfermeras obstetras en comparación a otras regiones. Las personas encuestadas en África tendían más a auto-clasificarse como enfermeras parteras. En general, entre quienes laboraban en centros de atención primaria, 23% trabajaban en áreas rurales y 33% en áreas urbanas, y el 44% restante trabajaba en hospitales y hospitales escuela en áreas urbanas.

    Gráfico 5. Cargo que ocupa y lugar de trabajo

    23

  • Pregunta 3: Edad de las personas encuestadasEn total, 30% de las personas participantes tenía más de 50 años, ocupaba altos cargos en hospitales y contaban con acceso a Internet y a la encuesta.

    La mayoría de las regiones que respondieron tenían una distribución similar de edades, con excepción del personal de partería de Yemen, donde 75% tenía menos de 35 años. Tal situación se reflejó en el método de recolección de datos y en el hecho de que las participantes de los primeros cursos de parteras comunitarias se graduaron en 1998.

    Preguntas 4 y 5: Condiciones de trabajo y cómo se siente el personal de partería en el trabajoPoco más de la mitad de las personas dedicadas a la partería sienten que las tratan con respeto (58%), que los profesionales de salud las escuchan (77%) y que reciben apoyo para realizar su trabajo (61%). Con todo, sólo entre 41% y 48% de las encuestadas mencionaron sentirse satisfechas, felices y con energía.

    Por otra parte, como se muestra en las Gráficas 7 y 8, en ocasiones y en algunos lugares de trabajo, las personas encuestadas se sienten inseguras, sin apoyo, sin respeto y sin la capacidad de brindar atención domiciliaria. Alrededor del 37% sufre acoso en el trabajo; 15% rara vez o nunca recibe apoyo en el trabajo, y un 15% más rara vez o nunca cuenta con buena supervisión. En consecuencia, una proporción significativa (45%) del personal de partería encuestado sufre agotamiento y alrededor del 10% de esas personas se sienten traumatizadas, solas, asustadas o enojadas. Probablemente, tales sentimientos negativos se derivan de presiones sociales, profesionales y económicas —mismas que a menudo se entrelazan— y conllevan el riesgo de llevarlas al colapso total.

    Gráfico 7. Cómo se siente el personal de partería diariamente en su trabajo

    La mayoría de los enunciados de la Gráfica 8 tratan sobre la seguridad, el apoyo y el trato que recibe el personal de partería mientras trabaja y, por lo tanto, son relevantes para las barreras sociales que les impiden brindar atención de calidad. Sin embargo, la información cualitativa de la encuesta mostró que las raíces de algunas de dichas experiencias son de carácter social (el bajo estatus del personal de partería, desigualdad de género y discriminación mujeres líderes y tomadoras de decisiones) y profesional y se vinculan a las ineficiencias del sistema de salud (por ejemplo, la falta de buenos esquemas gerenciales o de supervisión constructiva, poca inversión en seguridad o en asistencia al parto en el

    Gráfico 6. Edad de las personas encuestadas

    24

  • hogar, personal de partería insuficiente en general y falta de posicionamiento de la profesión dentro de la jerarquía médica).

    Gráfico 8. Condiciones de trabajo

    Nota: Las cifras presentadas en esta tabla representan el porcentaje de relevancia de la pregunta. Se excluyó de la cifra total al número de encuestadas que respondieron que la pregunta era irrelevante.

    Pregunta 6: Por qué el personal de partería piensa que a veces sufre maltrato?Los datos de la Gráfica 9 muestran que el personal de partería piensa que los problemas del sistema de salud son la causa primordial de las malas condiciones de trabajo. Por ejemplo, el 68% de las personas encuestadas dijo que no había suficiente personal y que por lo tanto trabajaban en exceso; 55% dijeron que el sistema de salud se encontraba desorganizado; 40% opinaron que los gerentes no desempeñaban su trabajo correctamente, y el 43% atribuyó las malas condiciones laborales a la falta de equipos y suministros. Sin embargo, las barreras sociales también parecen generar algunas de sus malas experiencias: una cuarta parte de las personas encuestadas relacionó los malos tratos y las deficiencias en las condiciones laborales con la desigualdad de género y la discriminación contra las mujeres y el 19% mencionó que una capacitación deficiente empeora el problema del bajo estatus del personal de partería. Cabe notar que un mayor porcentaje de personas encuestadas de África señalaron todo lo anterior como barreras tanto sociales como profesionales.

    25

  • Gráfico 9. ¿Por qué el personal de partería piensa que a veces recibe maltrato?

    CUADRO 4: OTROS EJEMPLOS DE BARRERAS, COMENTARIOS ADICIONALES A LA PREGUNTA 6.

    Ghana: “Las políticas de apoyo no existen o carecen de fuerza. No se consulta a las parteras a nivel de políticas.”

    Liberia: “No tenemos una persona influyente a nivel de diseño de políticas que desee luchar a favor de los derechos, la responsabilidad y los beneficios de las parteras. Carecemos de empoderamiento pleno porque no se cubren nuestras necesidades humanas básicas.”

    Nigeria: “Baja remuneración y falta de oportunidades de desarrollo profesional para parteras.”

    Ruanda: “La población desconoce el rol de las parteras.”

    Uganda: “Uno de los problemas es el alto nivel de corrupción, es decir, que el dinero asignado a los servicios de salud no se utiliza conforme a lo especificado [en todos los niveles] y en el pasado, los trabajadores de la salud eran mal remunerados o sus pagos se retrasaban o nunca se entregaban. La reputación de algunos hospitales es mala porque no les interesan las mujeres que no pueden ‘pagar’. También se les ‘conoce’ por ser bruscos con las mujeres tanto verbal como físicamente... por lo tanto, las mujeres temen dar a luz en el hospital. A menudo faltan equipos o medicamentos, porque se les envía a las clínicas / negocios privados del personal médico; eso significa que así obtienen ingresos adicionales porque en esos lugares las personas pagan por los servicios prestados. Aquí la atención médica se considera un negocio; se adquiere una farmacia o una clínica para usarla como fuente de ingresos.”

    26

  • Pregunta 7: Conciliación del trabajo de partería con la vida familiarUna de las barreras sociales más importantes para la mayoría del personal de partería es el desafío de conciliar las responsabilidades del cuidado familiar y las reproductivas con la vida laboral. Las largas y estresantes horas de trabajo han afectado gravemente al 40% de las familias de las personas encuestadas. Casi 40% de las encuestadas consideran que su casa es un desastre porque no tienen suficiente tiempo para limpiarla y ordenarla, y 38% dejan solos a menores de 14 años mientras trabajan. Las presiones económicas significan que algo más del 20% de las mujeres requiere otra fuente de ingresos, hecho que aumenta todavía más la tensión del tiempo y su agotamiento.

    Sin embargo, las parteras que viven en esas circunstancias no se encuentran del todo solas. El 82% de las encuestadas menciona recibir ayuda de sus familias y alrededor del 74% dice recibir apoyo y ayuda de sus esposos con las tareas domésticas.

    Gráfico 10. Conciliación de la vida familiar con el trabajo de partería

    Pregunta 8: Cambios deseados por las parteras

    Uno de los cambios más importantes que les gustaría ver a las encuestadas es recibir mejor pago (70%). Sin embargo, el desarrollo profesional (53%) también fue un área importante y de especial valor para las encuestadas de habla hispana (67%) y de habla africana (71-86%). Alrededor de 36% de las encuestadas deseaban ser respetadas por personal de salud de cargos altos y 32% (53% de las personas participantes de África) apreciarían recibir supervisión constructiva y ser escuchadas.

    27

  • Gráfico 11. Cambios que el personal de partería considera importantes

    Pregunta 9: Como incentivar el cambioSe considera que el poder, la representación y el estado, están relacionados con el área social del marco analítico de la OMS y son importantes para el progreso. Una gran mayoría de las encuestadas piensa que los cambios pueden incentivarse aumentando el reconocimiento y el estatus del personal de partería, tanto dentro del servicio de salud como entre el público en general. Alrededor del 89% de las encuestadas piensa que es importante que el sector salud reconozca la importancia de las parteras para que se pueda producir el cambio; El 70% de las encuestadas piensa que se necesitan campañas de información para garantizar que el público conozca la importancia del personal de partería; y el 65% (entre el 75% y el 88% en los países africanos, árabes y de habla hispana) de las encuestadas desearía que se brinde apoyo a las asociaciones profesionales de parteras/matronas.

    CUADRO 5: OTRAS SUGERENCIAS PARA EL CAMBIO Y COMENTARIOS ADICIONALES A LA PREGUNTA 8

    Etiopia: “Capacitación adicional en obstetricia para que se permita a las parteras realizar cesáreas, en especial en comunidades rurales.”

    Kenia: “Crear un foro para compartir experiencias y participar más en el trabajo de investigación.”

    Reino Unido: “Se debe brindar a las parteras el mismo respeto por su experticia en embarazo y parto normales que a los médicos obstetras por sus conocimientos expertos en anomalías del embarazo y el parto. Las parteras deberían poder practicar con verdadera autonomía. La micro-gestión no produce buenos profesionales.”

    28

  • Gráfico 12. ¿Cómo se puede incentivar el cambio?

    Pregunta 10: Ejemplos de buenas prácticasSe solicitó al personal de partería que brindara ejemplos personales relacionados con iniciativas que hubieran estimulado un cambio positivo en la profesión en sus países. Los ejemplos más citados fueron:

    ■ Un aumento en disponibilidad y calidad de capacitación, tutoría y supervisión para el personal de partería, en particular la introducción en muchos países de BEmONC (Atención obstétrica y neonatal básica de emergencia) y ESMOE (Pasos esenciales en el manejo de emergencias obstétricas), medida que ha contribuido significativamente a la reducción de muertes maternas y neonatales.

    ■ Inversión en recursos que incluyan unidades de maternidad con más personal, más limpias e higiénicas y mejor equipadas y acceso a programas de parto gratuitos.

    ■ La creación y amplio reconocimiento de asociaciones de partería, unidades dirigidas por parteras especializadas y el Esquema de Servicios de Parteras han contribuido enormemente a mejorar la comunicación entre personal de partería, obstetricia, ginecología y enfermería y el público en general.

    ■ Contratación de trabajadores de apoyo a la maternidad o de personal menos calificado para realizar algunas de las tareas menos especializadas y aliviar así la excesiva carga de trabajo del personal de partería.

    CUADRO 6: SUGERENCIAS DE PAÍSES AFRICANOS PARA PRODUCIR CAMBIOS Y COMENTARIOS ADICIONALES A LA PREGUNTA 9

    ■ Que la partería se separe de la enfermería y se formulen reglamentos específicos para las parteras.

    ■ Crear más empleos para las parteras a fin de mostrar cuán importantes son en la sociedad.

    ■ Lograr que se contrate más personal de partería, especialmente en Zambia, donde las personas recién graduadas suelen esperar años antes de encontrar un empleo.

    ■ En Sudáfrica, las parteras y las enfermeras se rigen por un mismo órgano rector, el Consejo de Enfermería de Sudáfrica (SANC, por sus siglas en inglés). “Las parteras deben contar con su propio órgano rector, ya que esencialmente no somos enfermeras. Somos parteras.”

    ■ Alentar a las parteras a formular políticas. Planificadores e investigadores en educación deben tener suficientes conocimientos acerca de la partería y del alcance de la práctica.

    29

  • ■ Sensibilización y reconocimiento social y profesional de la labor del personal de partería.

    ■ Promover el parto en casa y el parto natural dentro del sistema de salud, además de atender las preferencias de las mujeres embarazadas y respetar sus derechos para permitir así la implementación de servicios dirigidos por parteras.

    ■ Intercambios de conocimientos y funciones entre personal de partería y enfermería y demás colegas.

    3.5 Resumen de los hallazgosEl análisis de los hallazgos tanto del taller como de la encuesta mundial en línea demostró la utilidad y relevancia del marco analítico de la OMS de las barreras enfrentadas por las parteras. Las personas participantes opinaron que el marco se podría mejorar aún más al considerar también el entorno que las genera, es decir, el contexto donde se experimentan los obstáculos (Gráfica 13).

    Gráfico 13. Principales hallazgos de la consulta al personal de partería: barreras de la calidad de la atención

    CUADRO 7: OTROS EJEMPLOS DE BUENAS PRÁCTICAS Y COMENTARIOS ADICIONALES A LA PREGUNTA 10

    Kenia: “En la provincia donde trabajo, el departamento de salud ha organizado capacitaciones y programas de desarrollo profesional con apoyo de donantes. Estas capacitaciones comprenden atención obstétrica de emergencia. Una vez que las parteras adquieren ese conocimiento práctico, les resulta fácil aplicarlo en su trabajo diario.”

    Perú: “Tener parteras como gerentes y supervisoras que formen parte del equipo directivo, ayuda a visibilizar más nuestros problemas y a tomar las decisiones correctas.”

    Ruanda: “Se enriquece el desarrollo profesional continuo de las parteras y sus conocimiento y habilidades para servir mejor. El reconocimiento de la Asociación de Matronas de Ruanda a las parteras de ese país [marca la diferencia] y viene acompañado del hecho que se les clasifica como ‘parteras’ en lugar de ‘enfermeras’.”

    30

  • 3.5.1 Barreras que enfrenta el personal de parteríaLas personas participantes en el taller y en la encuesta en línea expresaron preocupación por nueve temas clave que en su opinión contribuyen a las tres barreras principales, mismos que se presentan en la Gráfica 2.

    BARRERAS SOCIALES1. La desigualdad de género y en las relaciones de poder dentro del sistema de salud y de

    las comunidades puede afectar la capacidad del personal de partería de proporcionar atención de calidad. La desigualdad se manifiesta de varias maneras; por ejemplo, una partera declaró que “en Malta el personal de partería no es independiente, sino que se encuentra subordinado a la profesión médica”. Las relaciones desiguales de poder también pueden favorecer la existencia de barreras profesionales y financieras:

    ― Cuando otros profesionales de la salud ejercen un poder jerárquico, la autoridad y capacidad de toma de decisiones del personal de partería puede verse socavada.

    ― En general, el personal de partería no cuenta con seguridad ni protección mientras realiza su trabajo: sufren acoso sexual y violencia de parte de sus colegas o de las comunidades donde prestan sus servicios.

    ― Dentro del sistema de salud, existen pocos puestos de nivel gerencial para personal de partería, situación que limita su poder y capacidad de toma de decisiones. Más aun, se crean pocas oportunidades para el desarrollo de sus capacidades de liderazgo.21 En otras palabras, quizás no puedan desafiar el statu quo ni asumir roles de liderazgo, si existieran.

    ― Como la mayoría del personal de partería son mujeres, muchas sufren restricciones sociales o falta de apoyo de su familia a pesar de desempeñar responsabilidades productivas, así como en el ámbito de salud reproductiva, de atención y en el cuidado de sus hogares.

    2. Falta de seguridad, miedo a la violencia y el acoso y aislamiento social

    ― El personal de partería a menudo experimenta malas condiciones de vida y aislamiento social.

    ― El 37% de todo el personal de partería que participó en la encuesta sufrió acoso en el trabajo.

    ― No existen condiciones ni medios de transporte seguros que permitan al personal de partería asistir partos durante la noche.

    3. Limitaciones en capital social, solidaridad y poder organizativo

    ― Muchas asociaciones de partería carecen de poder y recursos para apoyar a la profesión y al personal de partería en forma individual.

    ― Gran parte del personal de partería carece de redes personales y comunitarias para recibir apoyo.

    21 Cabe mencionar que, en América Latina, la Organización Internacional de Certificación de Comercio Justo (FLO, por sus siglas en inglés) diseñó un programa para desarrollar las habilidades de liderazgo de jóvenes profesionales de la partería.

    31

  • BARRERAS PROFESIONALES4. Falta de capacitación adecuada en partería antes y durante la prestación de sus

    servicios y falta de desarrollo profesional. Tal situación produce un impacto negativo en la preparación para el desempeño de sus funciones y en el fortalecimiento de su autonomía y, por consiguiente, terminan con niveles bajos de competencia y de confianza propia.

    5. El personal de partería a menudo enfrenta políticas deficientes en materia de administración y recursos humanos

    ― Administración deficiente (hasta el 30% de las personas encuestadas en África mencionaron que se sentían apoyadas en su trabajo).

    ― Número insuficiente de personal de partería y de apoyo que genera cargas de trabajo excesivas y agotamiento.

    6. Algunos aspectos del sistema de salud aumentan el estrés y limitan la capacidad del personal de partería para brindar atención de buena calidad

    ― Falta de claridad respecto a normas y estándares relacionados con el personal de partería, incluidas descripciones de trabajo y protocolos que estipulen funciones y responsabilidades.

    ― Falta de acceso a suministros.

    ― Los mercados del sector privado y la jerarquía médica han llevado a la creciente medicalización del parto y con ello a la reducción de oportunidades de proporcionar atención de partería de calidad.

    7. Falta de reglamentos y acreditación: poca claridad respecto al estatus, la definición y las funciones del personal de partería22

    ― Existen casos de identidad profesional débil por la ausencia de asociaciones profesionales sólidas y reglamentos apropiados sobre los roles de la partería. Dicha situación se agrava por la creciente medicalización del parto que limita la autonomía del personal de partería.

    ― Frecuentemente, no existen reglamentos ni políticas públicas que respalden el trabajo del personal de partería.

    ― En ocasiones, no se entrega al personal de partería una descripción de puesto y no existe documentación sobre las competencias esperadas para cumplir su función. Por lo tanto, es posible que desconozca sus derechos laborales.

    ― Dichos factores contribuyen a que el público en general desconozca la importancia del personal de partería.

    BARRERAS ECONÓMICAS8. Bajos salarios no comparables con los ofrecidos por profesiones similares y en

    ocasiones, insuficientes para vivir

    ― El personal de partería que trabaja en países de bajos ingresos no recibe su salario con regularidad.

    ― Lo anterior les obliga a encontrar un segundo empleo para poder sobrevivir

    22 Consultar The State of the World’s Midwifery Reports (2013, 2014), Nueva York, UNFPA, donde se resaltan las múltiples definiciones y roles del personal de partería en diferentes países.

    32

  • ― Las malas condiciones de vida y la falta de apoyo económico agravan el estrés causado por las demás barreras.

    AUSENCIA DE UN ENTORNO PROPICIO9. Normas sociales y entorno legal y normativo que fomentan la desigualdad de género

    y la mala opinión pública sobre de la partería

    ― En algunas comunidades la gente piensa que no son respetables las mujeres que trabajan como parteras y que viajan de noche para prestar sus servicios, actitud que tal vez se derive de una falta de comprensión de la función de la partería.

    3.5.2 Qué cambios se necesitani. El personal de partería participante propuso cambios en distintas áreas.

    Área Social: ― mejores redes de apoyo social, apoyo entre pares, redes de contactos e

    intercambio de experiencias;

    ― condiciones de vida de buena calidad;

    ― mejoramiento de su imagen y estatus ante el público mediante concientización a gran escala (por ejemplo, al implementar un día de la partería a nivel regional);

    ― investigación de los factores socioeconómicos que afectan sus derechos;

    ― inclusión de cuestiones de derechos, género, ética e igualdad en la formación previa al ejercicio de su profesión y a todo nivel del sistema de salud;

    ― servicios de consejería para personal de partería.

    Área económica: ― mejores salarios, seguro médico y sistemas de seguridad social para personal de

    partería.

    Área profesional: ― mejoramiento de su desarrollo profesional, de talleres y cursos y del acceso a

    educación superior;

    ― donde no se haya implementado, impartición de educación en partería por educadores con experiencia en la profesión (y no con un modelo médico impartido por doctores únicamente);

    ― mejor apoyo profesional, es decir, asociaciones de partería fortalecidas y con recursos suficientes, apoyo entre pares, redes de contactos e intercambio de experiencias;

    ― mejora de la educación previa al ejercicio de su profesión (por ejemplo, estandarización del plan de estudios de partería en todas las regiones);

    ― supervisión y tutoría constructivas en el trabajo;

    ― respeto de parte del personal directivo;

    ― mayor autonomía profesional y autorregulación del personal de partería.

    Sistemas de salud: ― crear y mejorar oportunidades para puestos de influencia y poder para el personal

    de partería dentro del sistema de salud;

    33

  • ― crear y mejorar oportunidades para ocupar puestos de influencia y poder dentro del sistema de salud;

    ― crear oportunidades para líderes de partería de alto nivel dentro de instituciones gubernamentales; por ejemplo, un departamento de partería en los ministerios de salud.

    Entorno facilitador en aspectos legales y regulatorios: ― aumentar su participación en la toma de decisiones y la formulación de políticas

    (por ejemplo, con la inclusión de mujeres y personal de partería y obstetricia en los comités de diseño de políticas y leyes);

    ― mejorar leyes y protocolos referentes a la partería;

    ― la OMS puede hacer un “llamado” a los gobiernos para aumentar el reconocimiento del personal de partería y promover su capacitación y mejores condiciones contractuales.

    ii. Ejemplos de mejoras implementadas:

    Se pidió al personal de partería que participó en la consulta que brindara ejemplos de cambios positivos en sus condiciones. Las seis áreas más mencionadas fueron:

    ― aumento en la cantidad de personal de partería;

    ― capacitación y desarrollo profesional: una persona se refirió a la capacitación obligatoria y otra habló del coaching en cuestiones clínicas con fines de apoyo y educación;

    ― unidades dirigidas por parteras especializadas o práctica de parteras en grupo (por ejemplo, con visitas domiciliarias);

    ― contratación de personal de apoyo de servicios de maternidad o de personal menos calificado para realizar algunas tareas menos especializadas, que ha aliviado la carga del personal de partería que tiene exceso de trabajo;

    ― campañas de igualdad salarial y aumentos salariales;

    ― supervisión y administración mejoradas.

    Cataluña, España: Se observó una mejora en el respeto y las opiniones de las usuarias acerca de las parteras después de la elaboración de un protocolo para promover y definir el parto normal en un hospital, sin intervenciones innecesarias y con la asistencia de una partera.

    República Unida de Tanzania: El fortalecimiento de la supervisión constructiva, la provisión de coaching y la tutoría han mejorado la calidad de los servicios de partería. Con el aumento de actividades de abogacía en el país contra las altas tasas de muerte materna y perinatal, se ha generado un mayor reconocimiento de las parteras como gremio profesional importante.

    Yemen: El establecimiento de la Asociación Nacional de Partería ha generado mejor capacitación, apoyo y representación para el personal de partería y mayor número de visitas y partos domiciliarios atendidos por dicho personal.

    34

  • En esta sección se analizan los hallazgos del taller y la encuesta mundial en línea y con base en las tres categorías de barreras identificadas en el marco analítico de la OMS, se organizan en: sociales, económicos y profesionales. Sin embargo, como se muestra en la Gráfica 1, existe cierto grado de superposición entre las barreras. Por ejemplo, la falta de poder del personal de partería dentro del sistema de salud y la ausencia de su voz en los foros de políticas se categorizan como problemas sociales (debido a la desigualdad de género y a la falta de empoderamiento) así como profesionales (debido a deficiencias administrativas y de apoyo dentro del servicio de salud). Por lo tanto, las iniciativas para solucionarlos deberán enfocarse tanto en las barreras sociales como las profesionales.

    4.1 Barreras socialesDesigualdad de género: Día con día surge nueva documentación sobre las distintas maneras en que la desigualdad de género afecta a la partería.23 Aunque “el personal de partería ocupa un lugar prominente entre los profesionales de salud” (según una participante del Congreso Trienal de la ICM), se siente excluido al no poder participar en el ámbito de políticas y el desarrollo de servicios. Con base en los comentarios recabados de las personas participantes, su capacidad de proporcionar atención de calidad se ve seriamente comprometida cuando sus perspectivas no se toman en cuenta y no se les permite ocupar puestos altos dentro del sistema de salud y en la agenda política, situación que muchas de ellas atribuyen a la desigualdad de género subyacente. Como en la partería predominan las mujeres, entonces tanto las personas como la profesión en su conjunto padecen dicha desigualdad. Lo anterior significa que tal vez los hombres dedicados a la partería también se vean afectados por esos problemas.

    Varias personas dedicadas a la partería, consultadas durante el Congreso Trienal de la ICM, consideraban que su estatus no es tan alto como el que gozan otros miembros de las profesiones de la salud. La falta de estatus y la subordinación a la profesión médica se citaron frecuentemente y se vincularon al bajo reconocimiento de sus competencias y estatus, así como a la falta de autonomía o a una autonomía que se encuentra bajo amenaza dentro del sistema de salud. Por ejemplo, el hostigamiento laboral es indicativo de la desigualdad de género, por la falta de poder de las mujeres dentro del sistema. Una proporción significativa de las personas encuestadas, en particular del grupo de África, expresó que la falta de respeto en el lugar de trabajo llega a convertirse en hostigamiento verbal y, a veces, incluso en abuso físico y sexual. Tales conductas afectan su autoestima y su capacidad de proporcionar atención de calidad.

    Algunas parteras comentaron que la implementación adecuada de estructuras y sistemas regulatorios apropiados desempeña un papel importante para que se reconozcan debidamente las habilidades de la partería y se atienda la desigualdad de género y el acoso en el lugar de trabajo. Asimismo, consideran que, de no realizarse mayores esfuerzos a favor de la igualdad de género y el cambio social, las medidas antes mencionadas no bastarán para garantizar que trabajen libres de acoso y que reciban el respeto que merecen. Investigaciones recientes de la Universidad de Cardiff subrayan la importancia de promover un robusto sentido de identidad profesional y de implementar sistemas de apoyo —formales e informales— efectivos para generar resiliencia en las parteras en su lugar de trabajo.24

    23 Filby A, McConville F, Portela A (2016) What Prevents Quality Midwifery Care? A Systematic Mapping of Barriers in Low and Middle Income Countries from the Provider Perspective. PLoS ONE 11(5): e0153391. doi:10.1371/journal.pone.0153391.

    24 Hunter B, Warren L. Midwives’ experiences of workplace resilience. Midwifery. 2014 Aug;30(8):926–34. doi: 10.1016/j.midw.2014.03.010.

    4. Discusión

    35

  • Todas las personas dedicadas a la partería mencionaron que no se les escucha y no se les brinda espacio en la agenda política y, por ende, se les excluye de foros de toma de decisiones. A pesar de reportar que sus asociaciones profesionales son fuertes en algunos países, hasta ahora no han logrado consolidar un lugar importante para la profesión en la agenda política y, por lo tanto, sienten que no reciben el apoyo debido ni una compensación adecuada por su trabajo. Por otra parte, algunas atribuyen la existencia de dichas barreras a la desigualdad de género institucionalizada, presente en todos los ámbitos, niveles y aspectos de la sociedad.

    No siempre se sienten respetadas: En algunos países, las personas que prestan servicios de partería sienten que la comunidad no las respeta. Tal sentimiento es fuerte en particular en países donde sólo ciertas ocupaciones se consideran aptas para las mujeres. En Yemen, por ejemplo, las participantes informaron que no se les respeta porque trabajan de noche y además sufren acoso sexual en hogares, hospitales y comunidades: “Los hombres se burlan de nosotras y nos invitan a que vayamos a enseñarles a ponerse un condón; tenemos que cruzar la comunidad sin mirarlos. Queremos poder mantener la cabeza en alto.” Durante el taller, el personal de partería opinó que tal falta de respeto se debe, en parte, a que el público no entiende bien el papel de la profesión.

    Cuestiones de seguridad y protección: La mayoría del personal de partería de países de ingresos altos dijo sentir cierto grado de seguridad y protección al desempeñar su trabajo tanto de día como de noche; no así en países como Afganistán, Yemen y algunas regiones de África, donde no siempre se considera seguro trabajar por la noche. En muchos lugares, cuando oscurece, las mujeres deben salir acompañadas.

    Incapacidad para equilibrar el trabajo y la vida personal: El hecho de que el personal de partería pueda o no recibir apoyo de sus familias para lograr un mejor balance entre su vida laboral y personal, depende en mucho de su procedencia y de las expectativas de la sociedad respecto a las mujeres. Por ejemplo, las mujeres de Cisjordania, la Franja de Gaza y Yemen reportaron que en casa reciben poca o ninguna ayuda de parte de sus esposos y que ellas son responsables de encargarse de todos los aspectos del hogar y de la crianza de los niños, así como de aportar un salario. Algunas parteras mencionaron que, para el cuidado de sus hijos, dependen por completo de sus parientes indirectos. En Cisjordania y la Franja de Gaza cuentan con un sistema de guarderías que operan de día, pero no de noche. En muchos otros países, los sistemas de salud no ofrecen servicios de cuidado infantil. Durante el taller, varias parteras dijeron que el trabajo nocturno y el agotamiento les impiden tener vida social y sienten que sus hijos sufren debido a su excesiva carga de trabajo: algunas dejan solos a los pequeños en casa o se encuentran demasiado cansadas para darles atención adecuada.

    CUADRO 8: COMENTARIOS SOBRE LA FALTA DE PODER DEL PERSONAL DE PARTERIA DENTRO DEL SISTEMA

    País europeo: Los médicos obstetras a veces son irrespetuosos y no valoran nuestro trabajo.

    Grecia: Los obstetras se hacen cargo del parto y el personal de partería se convierte principalmente en enfermeras obstétricas subordinadas que obedecen órdenes y no pueden expresar su opinión.

    Malta: A las personas que trabajamos en partería no se nos considera profesionales independientes en Malta; estamos subordinadas a la profesión médica.

    Turquía: El público considera al personal de partería como cuidadores o auxiliares de enfermería y las leyes que rigen la profesión son incompletas e inconsistentes. Existe un dominio médico dentro del sistema de atención a la maternidad

    36

  • 4.2 Barreras económicasNiveles salariales y sueldos recibidos con regularidad: La mayoría del personal de partería de países de ingresos medios y altos informó que reciben sus pagos regularmente, aunque eso no siempre sucede en países de bajos ingresos. En todos los países encuestados, el personal de partería considera que su salario no corresponde a la carga de trabajo ni a la responsabilidad que deben asumir. Algunas parteras mencionaron la necesidad de contar con un segundo trabajo para que el dinero alcance para alimentar a sus familias.

    Pensiones y seguros: Durante el taller, el personal de partería de Cisjordania y la Franja de Gaza y Yemen analizaron el tema de la desigualdad en los planes de pensiones y la falta de seguro médico. Señalaron que tienen que trabajar 30 años para poder obtener una pensión, mientras que el personal del sector educativo sólo tiene que laborar 25 años.

    Recursos inadecuados para la partería: El personal considera que debido a que la partería no ocupa un lugar destacado en la agenda política y a que los doctores y demás personal médico pueden sentirse amenazados por esa profesión, no hay recursos adecuados para brindar el servicio. El papel vital de la partería no se reconoce y el financiamiento resulta insuficiente.

    Vivienda inadecuada y aislamiento: El personal de partería en algunos países de bajos ingresos informó que pueden enviarlas a zonas aisladas donde no pueden pagar una vivienda adecuada y segura y donde no les alcanza el dinero para pagar el transporte a casa para visitar a sus familiares. Esa presión económica conduce a que se sientan aisladas y sin apoyo, especialmente cuando existe una brecha cultural o lingüística entre ellas y las comunidades donde trabajan.

    4.3 Barreras profesionales, incluidas cuestiones del sistema de saludEstructuras, sistemas y mecanismos: El personal de partería de muchos países señaló la falta o debilidad de estructuras, sistemas y mecanismos, incluidas las asociaciones profesionales y los organismos reguladores dentro de los sistemas nacionales de salud, los cuales podrían apoyar adecuada y eficazmente a la partería como profesión y al personal de partería como trabajadores. Lo anterior ocurre tanto en países de altos ingresos como en los de escasos recursos, como Yemen, por ejemplo. El personal de partería de ese país mencionó que no existe un sistema de salud del que hablar, ya que el desarrollado en las últimas décadas se colapsó en años recientes.

    Falta de recursos dentro del sistema de salud: La falta de equipo y suministros y pe