uso de biofertilizantes en la produc de papaya maradol
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USO DE BIOFERTILIZANTES EN LA PRODUCCIÓN
DE PLANTA DE PAPAYA MARADOL
Instituto Nacional de Investigaciones Forestales, Agrícolas y Pecuarias. Centro de Investigación Regional Sureste Campo Experimental Mocochá Mérida, Yucatán, diciembre de 2013 Folleto para productores No. 2 ISBN 978-607-37-0156-3
Mónica Guadalupe LOZANO CONTRERAS
Felipe SANTAMARÍA BASULTO
SECRETARÍA DE AGRICULTURA, GANADERÍA, DESARROLLO RURAL, PESCA Y ALIMENTACIÓN
Lic. Enrique Martínez y Martínez
Secretario
Lic. Jesús Aguilar Padilla Subsecretario de Agricultura
Prof. Arturo Osornio Sánchez
Subsecretario de Desarrollo Rural
M. C. Ricardo Aguilar Castillo Subsecretario de Alimentación y Competitividad
Lic. Marcos Bucio Mújica
Oficial Mayor
INSTITUTO NACIONAL DE INVESTIGACIONES FORESTALES, AGRÍCOLAS Y PECUARIAS
Dr. Pedro Brajcich Gallegos
Director General
Dr. Salvador Fernández Rivera Coordinador de Investigación, Innovación y Vinculación
M. Sc. Arturo Cruz Vázquez
Coordinador de Planeación y Desarrollo
Lic. Luis Carlos Gutiérrez Jaime Coordinador de Administración y Sistemas
CENTRO DE INVESTIGACIÓN REGIONAL SURESTE
M.C. Héctor Torres Pimentel
Encargado del Despacho de los Asuntos de la Dirección Regional
Dr. Raúl Díaz Plaza Director de Investigación
M.C. Héctor Torres Pimentel
Director de Planeación y Desarrollo
L.A.E. Alicia Díaz Vázquez Director de Administración
M.C. Jorge Ariel Vivas Rodríguez
Jefe del Campo Experimental Mocochá
USO DE BIOFERTILIZANTES EN LA PRODUCCIÓN
DE PLANTA DE PAPAYA MARADOL
MÓNICA GUADALUPE LOZANO CONTRERAS
FELIPE SANTAMARÍA BASULTO
CENTRO DE INVESTIGACIÓN REGIONAL SURESTE Campo Experimental Mocochá
Folleto para productores No. 2
Mérida, Yucatán, México
Diciembre de 2013
No está permitida la reproducción total o parcial de esta publicación ni la transmisión de ninguna forma o por cualquier medio, ya sea electrónico, mecánico, fotocopia por registro u otros métodos sin el permiso previo y por escrito de la institución. INSTITUTO NACIONAL DE INVESTIGACIONES FORESTALES, AGRÍCOLAS Y PECUARIAS Progreso No. 5, Barrio de Santa Catarina Delegación Coyoacán, C.P. 04010, México, D. F. Folleto para productores No. 2. USO DE BIOFERTILIZANTES EN LA PRODUCCIÓN DE PLANTA DE PAPAYA MARADOL. Primera edición 2013. Impreso en México ISBN: 978-607-37-0156-3 Cita correcta de esta publicación: Lozano, C. M. G. y Santamaría, B. F. 2013. Uso de biofertilizantes en la producción de planta de papaya Maradol. Instituto Nacional de Investigaciones Forestales, Agrícolas y Pecuarias. Centro de Investigación Regional Sureste. Mérida, Yucatán, México. 18 p.
CONTENIDO
Pág.
1. INTRODUCCIÓN 1
2. BIOFERTILIZANTES 2
3. ABSORCIÓN DE NUTRIENTES 4
4. BENEFICIOS DEL USO DE LOS BIOFERTILIZANTES 5
5. PRODUCCIÓN DE PLANTA INOCULADA 6
5.1. Pre-germinación de las semillas de papaya 6
5.2. Inoculación 9
5.3. Siembra 10
5.4. Fertilización 13
5.5. Compatibilidad de la micorriza con plaguicidas 13
5.6. Desarrollo de las plantas 15
ÍNDICE DE FIGURAS Pág.
1 Biofertilizantes a base de Micorrizas Rhizophagus intraradices y bacterias del género Azospirillum.
3
2 Inicio de germinación de semillas de papaya. 8
3 Semillas de papaya inoculadas con Rhizophagus intraradices y Azospirillum.
10
4 Emergencia de las plantas de papaya. 12
5 Plántulas inoculadas con Rhizophagus intraradices y Azospirillum lista para su trasplante.
15
6 Plantas de papaya producidas en charolas. 15
7 Plantas de papaya inoculadas con biofertilizantes a los 2 meses del establecimiento.
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8 Producción de frutos de plantas de papaya inoculadas con biofertilizantes.
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1. INTRODUCCIÓN
La papaya es un cultivo tropical ampliamente distribuido
en México. Desde su introducción a nuestro país, la
variedad Maradol se ha posicionado en la preferencia
del consumidor llegando a ser la variedad de papaya
más cultivada.
Para su cultivo se recomienda la producción de plantas
en vivero, la calidad de las plantas se refleja en la
sobrevivencia, vigor, desarrollo del cultivo y
consecuentemente en el rendimiento. En el vivero las
plantas reciben cuidados que les permiten desarrollarse
mejor por lo que se puede planear su producción y
obtener plantas de tamaño uniforme en menor tiempo,
además el cultivo está protegido contra insectos que
transmiten enfermedades virales.
En el vivero también es factible asociar las plantas con
microorganismos benéficos. Los biofertilizantes
propician que las plantas de papaya tengan mayor
volumen de raíces, con esto se mejora la absorción de
agua y nutrientes por lo que es posible reducir el uso de
fertilizantes químicos.
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El objetivo de esta publicación es proporcionar
información práctica de cómo hacer la inoculación de los
biofertilizantes con las semillas de papaya y dar a
conocer los beneficios de la asociación.
2. BIOFERTILIZANTES
Los biofertilizantes son productos que contienen
microorganismos benéficos que pueden vivir asociados
con las plantas y le ayudan a su nutrición y protección.
Estos microorganismos presentes en los biofertilizantes
son inocuos dado que no causan daño al ser humano.
Complementan el uso de los fertilizantes químicos
nitrogenados y fosfatados e incrementan el rendimiento
de los cultivos a bajo costo. De igual forma permiten
utilizar los microorganismos que existen en el ambiente
para a lograr una agricultura sustentable y no
contaminante.
Los biofertilizantes más conocidos se elaboran utilizando
hongos benéficos llamados micorrizas, esta palabra se
compone de dos partes, mico que significa hongo y riza,
que significa raíz.
3
Otro tipo de biofertilizantes se elaboran con bacterias del
genero Azospirillum. Ambos tipos de productos ya están
disponibles en forma comercial (Figura 1).
Figura 1.- Biofertilizantes a base de Micorrizas Rhizophagus intraradices (A) y bacterias del género Azospirillum (B).
A
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3. ABSORCIÓN DE NUTRIENTES
Las micorrizas tienen una red de hifas que se asocian
con las raíces de las plantas, esto mejora
considerablemente la capacidad de asimilación del
fósforo. Por lo anterior, las micorrizas mejoran
sustancialmente el crecimiento de las plantas a las
cuales se les ha suministrado fuentes de fósforo
relativamente insolubles, tales como harina de hueso y
fosfato tricálcico, también aseguran una mejor
asimilación del fosfato disponible.
La micorriza Rhizophagus intraradices (antes conocido
como Glomus intraradices) tiene la capacidad de tomar
nitrato (NO3-) de la solución del suelo y facilita su
traslocación en la planta. Cuando los suelos están
restringidos por el contenido de agua, la movilidad del
nitrato se reduce drásticamente, en estas condiciones,
las micorrizas juegan un papel significativo en el
transporte de los nitratos. Esta relación positiva entre la
contribución de nitrógeno por la hifa y el estado
metabólico/nutricional de la planta ayudan a la planta
para resistir condiciones secas del suelo.
En el caso de los micronutrientes, las plantas
micorrizadas pueden tomar elementos como cobre, zinc,
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manganeso y fierro en suelos con poco contenido por
vía de las hifas extraradicales, la cual provee grandes
áreas de superficie.
4. BENEFICIOS DEL USO DE LOS
BIOFERTILIZANTES
El uso de biofertilizantes en papaya proporciona los
siguientes beneficios:
Las plantas aumentan su capacidad para absorber
agua y nutrientes del suelo.
Se incrementa el crecimiento de las plantas, lo que
da por resultado plantas más vigorosas.
Se puede reducir la cantidad de fertilizantes
químicos manteniendo los rendimientos.
Su uso es compatible con la producción orgánica de
los cultivos y ejerce un biocontrol de fitopatógenos
del suelo.
Por otra parte, se tiene una reducción de la
contaminación ambiental a través de la disminución del
uso de plaguicidas y fertilizantes químicos.
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5. PRODUCCIÓN DE PLANTA INOCULADA
5.1. Pre-germinación de las semillas de papaya
El primer paso es adquirir semilla sana y de buena
calidad, el siguiente paso consiste en acelerar y
homogeneizar la germinación de la semilla.
Para tener un desarrollo uniforme de la plantas en el
vivero se sugiere hacer la pre-germinación, para esto se
realiza un acondicionamiento que consiste en remojar las
semillas en un recipiente con agua limpia y pH neutro
durante tres días.
El agua debe cambiarse cada 8 horas aproximadamente
para permitir la oxigenación y eliminación de las
sustancias que inhiben la germinación de las semillas.
A los dos días del acondicionamiento se eliminan las
semillas que flotan y se continúa con el
acondicionamiento.
Con este tratamiento se puede obtener hasta un 84% de
germinación, lo que representa hasta 2.5 veces la tasa
de germinación de las semillas no tratadas.
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Después del acondicionamiento, las semillas se lavan con
agua limpia y se colocan entre dos telas de jerga
manteniendo constante la humedad.
A los cuatro o cinco días, la semilla empieza a germinar y
este es el momento de realizar la inoculación con los
biofertilizantes (Figura 2).
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Figura 2.– Inicio de germinación de las semillas de papaya. Las semillas empiezan a germinar a los cuatro días después del acondicionamiento con agua.
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5.2. Inoculación
Los biofertilizantes que se recomiendan usar para
inocular las semillas de papaya son la micorriza
Rhizophagus intraradices la bacteria Azospirillum. La
inoculación consiste en hacer una mezcla de partes
iguales de ambos biofertilizantes y se aplican de 8 a 10
gramos de la mezcla por cada 100 semillas.
Para tener una buena cobertura, las semillas deben estar
ligeramente húmedas, si hay exceso de humedad, se
adhiere mayor cantidad de los biofertilizantes y no se
distribuye uniformemente en todas las semillas (Figura 3).
Se sugiere hacer la inoculación por partes para no
lastimar las raíces, una forma adecuada es seleccionar la
cantidad de semillas para de una charola, inocularlas y
luego sembrarlas.
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Figura 3.- Semillas de papaya inoculadas con Rhizophagus intraradices y Azospirillum.
5.3. Siembra
Se sugiere utilizar charolas de un máximo de 200
cavidades, las cuales se rellenan con una mezcla del
80% de sustrato comercial (Sunshine) y 20% de agrolita.
Las charolas de 77 cavidades permiten mejor desarrollo
de las plantas, aunque requieren más sustrato y más
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espacio en el vivero que las charolas de 200 cavidades;
con éstas se utiliza menor sustrato pero se debe tener el
cuidado en que las plantas se establezcan en campo
cuando alcancen la altura apropiada, si se mantienen
más tiempo, se corre el riesgo de que las plantas se
alarguen y pierdan vigor.
Las semillas se siembran a 1 cm de profundidad
colocando una semilla por cavidad, si las semillas apenas
empiezan a emitir la raíz, la disposición de éstas es
indistinta, pero si las raíces ya presentan curvatura se
debe colocar la raíz hacia abajo.
Después de cuatro o cinco días de la siembra en la
charola, las plantas empiezan a emerger, primero se
observan las dos hojas del cotiledón y luego las hojas
verdaderas (Figura 4).
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Figura 4.- Emergencia de las plantas de papaya.
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5.4. Fertilización
Para la fertilización de las charolas se sugiere utilizar
una solución nutritiva de 6-3-1miliequivalentes de nitrato,
fosfato y potasio, en un volumen de aproximadamente
800 mL por charola y luego dar un riego de saturación.
Esta solución nutritiva se puede lograr con 4.0 g de
fosfonitrato, 3.4 g de fosfato monoamónico soluble (MAP
técnico soluble) y 1 g de nitrato de potasio en 10 litros
de agua, la cual se puede ajustar dependiendo del
desarrollo de las plantas. Al inocular con biofertilizantes
generalmente se utiliza menor cantidad de fertilizantes
en comparación a las semillas no inoculadas.
5.5. Compatibilidad de la micorriza con plaguicidas
En el vivero o después del trasplante se pueden
presentar enfermedades de tallo y raíz, por lo que puede
ser necesario utilizar algún fungicida en su control.
Anteriormente se pensaba que la aplicación de
plaguicidas tenía efectos negativos sobre las micorrizas;
sin embargo, se pueden usar algunos de ellos.
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Los fungicidas clorotalonil y mancozeb que se utilizan
generalmente en papaya se pueden usar para el control
de enfermedades foliares en el vivero, sin que se tengan
efectos dañinos con la micorriza Rhizophagus
intraradices.
Una semana antes del trasplante se sugiere tratar las
plántulas con imidacloprid, para lo cual se prepara una
solución con 1 cc/L de agua y se aplican a la base del
tallo entre 10 y 25 cc por contenedor, dependiendo de
su tamaño. De igual forma, es importante proporcionar a
las plántulas un proceso de exposición gradual al sol
una semana antes de su trasplante, para disminuir el
estrés al ser plantadas en campo.
5.6. Desarrollo de las plantas
Las plantas están listas para el trasplante en
aproximadamente 5 semanas, aunque en invierno
puede requerirse 6 semanas o más ya que las bajas
temperaturas ocasionan una lenta germinación y un bajo
desarrollo general de las plantas (Figuras 5 y 6).
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Figura 5.- Plantas inoculadas con Rhizophagus intraradices y Azospirillum listas para su trasplante.
Figura 6.- Con el uso de charolas de polietileno de 200 cavidades las plantas están listas para el trasplante en un tiempo de 5 a 6 semanas.
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Cuando las plantas se establecen en suelo, el desarrollo
de raíces y la colonización de los microorganismos
benéficos se incrementan, por lo que las plantas tienen
mejor desarrollo en altura y emisión foliar (Figura 7). El
beneficio de la inoculación con los microorganismos
benéficos se traduce en mejor desarrollo y producción
de frutos (Figura 8)
La asociación de Azospirillum y Rhizophagus
intraradices permite reducir la cantidad de fertilizante
químico sin reducir el rendimiento ni modificarla calidad
del fruto.
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Figura 7.- Plantas de papaya inoculadas con biofertilizantes a los de 2 meses del establecimiento.
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Figura 8.- Producción de frutos de plantas de papaya inoculadas con biofertilizantes. Las plantas inoculadas tienen mejor desarrollo en campo, lo que repercute en mejor producción de frutos.
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Comité Editorial del CIR Sureste Presidente M.C. Héctor Torres Pimentel Secretario Dr. Felipe Santamaría Basulto Vocales Dra. Aixchel Maya Martínez Dr. Raúl Díaz Plaza M.C. Jorge Basulto Graniel M.C. Eric Díaz Maldonado M.C. Edgar Enrique Sosa Rubio REVISIÓN TÉCNICA Dr. Enrique Vázquez García M.C. Manuel Jesús Zavala León FOTOGRAFÍAS Dr. Felipe Santamaría Basulto DISEÑO Y FORMACIÓN Dra. Mónica Guadalupe Lozano Contreras CÓDIGO INIFAP MX-0-310704-38-08-38-10-2
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Esta publicación es producto del proyecto “Estrategias
para el mejoramiento de la calidad de la papaya” el cual
fue apoyado con financiamiento fiscal No. SINASO
159570287.
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documento y otras tecnologías, diríjase a:
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FORESTALES, AGRÍCOLAS Y PECUARIAS
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Mocochá, Yucatán.
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