Teología II

Unidad 9:

Bautismo y Confirmación

El Bautismo y la Confirmación Bautismo, Confirmación y Eucaristía son los

sacramentos de iniciación cristiana. “Mediante los sacramentos de la iniciación cristiana, el Bautismo,

la Confirmación y la Eucaristía, se ponen los fundamentos de toda vida cristiana. “La participación en la naturaleza divina que los hombres reciben como don mediante la gracia de Cristo, tiene cierta analogía con el origen, el crecimiento y el sustento de la vida natural. En efecto, los fieles renacidos en el Bautismo se fortalecen con el sacramento de la Confirmación y finalmente, son alimentados en la Eucaristía con el manjar de la vida eterna...” (Cat 1212)

Estos sacramentos: Realizan la vocación cristiana. Configuran con Cristo.

Naturaleza y nombres del Bautismo Bautizar proviene del verbo griego baptein, que

significa sumergir, mojar, bañar, lavar. Con este significado fue usado tanto entre los griegos como en la Sagrada Escritura.

De este verbo deriva el adjetivo baptismÒj (lavado, purificación) que se usa en las Sagradas Escrituras para designar las purificaciones rituales, el bautismo de Juan y el Bautismo cristiano.

También deriva el sustantivo baptisma, termino exclusivamente cristiano, que designa la ablución con un efecto sagrado.

Naturaleza y nombres del Bautismo “El bautismo es el sacramento del nuevo nacimiento

por el agua y la palabra” (Catecismo Romano). En casi todas las religiones, encontramos baños y

abluciones, que tiene, generalmente un significado purificador.

En el judaísmo de la época del Señor eran frecuentes los baños rituales y las abluciones legales. Existía también el bautismo de los prosélitos.

El bautismo de Juan es especial porque se administraba a los mismos judíos. Es un bautismo de penitencia, que intensifica la espera mesiánica.

Naturaleza y nombres del Bautismo El agua es símbolo universal de la vida. El

Señor se sirvió de este simbolismo natural, dándole un significado nuevo y más profundo, absolutamente original.

El bautismo está prefigurado en varios episodios de la Historia de la Salvación: la salvación del diluvio de ocho personas en el arca de Noé, el paso del Mar Rojo, el paso del Jordán, la circuncisión…

Naturaleza y nombres del Bautismo Los pasajes fundamentales del Nuevo

Testamento que hacen referencia al Bautismo son tres: El Bautismo de Jesús en el Jordán: Mt 3,13-17; Mc

1, 9-11; Lc 3, 21-22; Jn 1, 29-34. La conversación con Nicodemo: Jn 3, 3-6. La promulgación del Bautismo en el mandato

misional: Mt 28, 18-20; Mc 16, 15-16.

Naturaleza y nombres del Bautismo

Mt 3: [13] Entonces vino Jesús al Jordán desde Galilea, para ser bautizado por Juan. [14] Pero éste se resistía diciendo: -Soy yo quien necesita ser bautizado por ti, ¿y vienes tú a mí? [15] Jesús le respondió: -Déjame ahora, así es como debemos cumplir nosotros toda justicia. Entonces Juan se lo permitió. [16] Inmediatamente después de ser bautizado, Jesús salió del agua; y entonces se le abrieron los cielos, y vio al Espíritu de Dios que descendía en forma de paloma y venía sobre él. [17] Y una voz desde los cielos dijo: -Éste es mi Hijo, el amado, en quien me he complacido.

Mc 1: [9] Y sucedió que en aquellos días vino Jesús desde Nazaret de Galilea, y fue bautizado por Juan en el Jordán. [10] Y nada más salir del agua vio los cielos abiertos y al Espíritu que, en forma de paloma, descendía sobre él; [11] y se oyó una voz desde los cielos: -Tú eres mi Hijo, el amado, en ti me he complacido.

Lc 3: [21] Se estaba bautizando todo el pueblo. Y cuando Jesús fue bautizado, mientras estaba en oración, se abrió el cielo [22] y bajó el Espíritu Santo sobre él en forma corporal, como una paloma. Y se oyó una voz que venía del cielo: -Tú eres mi Hijo, el Amado, en ti me he complacido.

Jn 1: [29] Al día siguiente vio a Jesús venir hacia él y dijo: -Éste es el Cordero de Dios que quita el pecado del mundo. [30] Éste es de quien yo dije: «Después de mí viene un hombre que ha sido antepuesto a mí, porque existía antes que yo». [31] Yo no le conocía, pero he venido a bautizar en agua para que él sea manifestado a Israel. [32] Y Juan dio testimonio diciendo: -He visto el Espíritu que bajaba del cielo como una paloma y permanecía sobre él. [33] Yo no le conocía, pero el que me envió a bautizar en agua me dijo: «Sobre el que veas que desciende el Espíritu y permanece sobre él, ése es quien bautiza en el Espíritu Santo». [34] Y yo he visto y he dado testimonio de que éste es el Hijo de Dios.

Naturaleza y nombres del Bautismo Jn 3: [3] Contestó Jesús y le dijo: -

En verdad, en verdad te digo que si uno no nace de lo alto no puede ver el Reino de Dios. [4] Nicodemo le respondió: -¿Cómo puede un hombre nacer siendo viejo? ¿Acaso puede entrar otra vez en el seno de su madre y nacer? [5]Jesús contestó: - En verdad, en verdad te digo que si uno no nace del agua y del Espíritu no puede entrar en el Reino de Dios. [6] Lo nacido de la carne, carne es; y lo nacido del Espíritu, espíritu es.

Mt 28: [18] Y Jesús se acercó y les dijo: -Se me ha dado toda potestad en el cielo y en la tierra. [19] Id, pues, y haced discípulos a todos los pueblos, bautizándoles en el nombre del Padre y del Hijo y del Espíritu Santo; [20] y enseñándoles a guardar todo cuanto os he mandado. Y sabed que yo estoy con vosotros todos los días hasta el fin del mundo.

Mc 16: [15] Y les dijo: -Id al mundo entero y predicad el Evangelio a toda criatura. [16] El que crea y sea bautizado se salvará; pero el que no crea se condenará.

Naturaleza y nombres del Bautismo En los textos del San Pablo, la idea clave acerca del

Bautismo es la unión con Cristo: El Bautismo lava del pecado, justifica y santifica. Por el Bautismo nos sometemos y pertenecemos a Dios

(también por una unión interna). Es vestirse de Cristo, una nueva creación. Significa ser crucificado y sepultado con Cristo para

resucitar y ser vivificado con El. La acción bautismal se prolonga a lo largo de la vida del

cristiano. Los bautizados son una cosa con Cristo. Esta es fondo del

misterio de la Iglesia como comunión.

Celebración del sacramento

El signo sacramental está compuesto por dos elementos: El lavacrum con agua.

Por inmersión Por infusión

Las palabras que determinan el signo y expresan su significado sobrenatural. NN., yo te bautizo en el nombre del Padre, del Hijo y del

Espíritu Santo.

Celebración del sacramento

Ritos complementarios: Señal de la Cruz en la frente Los exorcismos La unción con el óleo de los catecúmenos La unción con el crisma La vestidura blanca El cirio encendido

También se hacen lecturas de la Palabra de Dios y un confesión explícita de fe.

Ministro del Bautismo

Ministro ordinario: Obispo Presbítero Diácono

Ministro extraordinario: puede ser un laico (varón o mujer), un pagano o un hereje, con tal que guarde el signo establecido por la Iglesia y tenga la intención de hacer lo que ésta hace.

Sujeto del Bautismo Es sujeto del Bautismo toda persona viva no bautizada.

“Dios quiere que todos los hombres se salven y lleguen al conocimiento de la verdad. Porque hay un solo Dios, y también un solo mediador entre Dios y los hombres, Cristo Jesús, hombre también, que se entregó a sí mismo como rescate por todos”. (1 Tm 2, 4-6)

El bautismo debe acogerse libremente: En el caso del adulto requiere:

fe penitencia intención

En el caso del niño que aun no tiene uso de razón, la Iglesia provee solidariamente la fe y la intención particularmente por los padres.

El Bautismo de los niños ¿Se puede bautizar a los niños?

El concilio de Trento ha determinado su validez: “Si alguno dijere que los párvulos por el hecho de no tener el acto de creer, no

han de ser contados entre los fieles después de recibido el bautismo, y, por tanto, han de ser rebautizados cuando lleguen a la edad de discreción, o que más vale omitir su bautismo que no bautizarlos en la sola fe de la Iglesia, sin creer por acto propio, sea anatema”.

Se trata de una praxis tradicional de la Iglesia que se remonta a los tiempos apostólicos.

Argumentos teológicos: Prioridad del hacer de Dios en su misericordia. La familia cristiana es instrumento del crecimiento de la Iglesia. Siempre es necesario convertirse y actualizar la gracia

bautismal.

Necesidad del Bautismo

El Bautismo es absolutamente necesario para la salvación, porque es el único camino que nos ha dado Dios para borrar el pecado original y formar parte de la Iglesia.

Esto no ha de entenderse en el sentido de que se salvan exclusivamente los que han recibido el Bautismo de agua: Bautismo de sangre. Bautismo de deseo (incluso puede ser implícito).

Necesidad del Bautismo

“Los que inculpablemente desconocen el Evangelio de Cristo y su Iglesia, y buscan con sinceridad a Dios, y se esfuerzan bajo el influjo de la gracia en cumplir con las obras de su voluntad, conocida por el dictamen de la conciencia, pueden conseguir la salvación eterna. La divina Providencia no niega los auxilios necesarios para la salvación a los que sin culpa por su parte no llegaron todavía a un claro conocimiento de Dios y, sin embargo, se esfuerzan, ayudados por la gracia divina, en conseguir una vida recta”. (Lumen Gentium, n. 16)

Efectos del Bautismo

Configuración con Cristo: El Bautismo nos incorpora a Cristo sin perder

nuestra propia identidad. La comunión con Cristo implica la comunión con

los misterios de su vida. Es la puerta del la inhabitación de la Trinidad en el

alma del cristiano. Al incorporarnos a Cristo, pasamos a formar parte

de su Cuerpo Místico. El Bautismo construye la Iglesia.

Efectos del Bautismo

El carácter bautismal: El carácter es un sello o señal indeleble impreso en

el bautizado, que lo hace propiedad de Cristo y partícipe de su señorío y sacerdocio.

De aquí surgen los llamados compromisos bautismales: Compromiso de tender a la santidad. Compromiso de ejercer los oficios de Cristo: sacerdocio,

realeza y profetismo.

Efectos del Bautismo El perdón de los pecados:

El bautismo perdona todos los pecados (original y personales) y la pena eterna debida por ellos.

Perdona la pena temporal en la medida de las disposiciones del sujeto.

Conservamos las heridas de la naturaleza debidas al pecado.

La gracia sacramental específica: Es una peculiar configuración de la gracia habitual

que nos auxilia para cumplir los compromisos bautismales.

Sacramento de la Confirmación

Origen y naturaleza de la Confirmación Este sacramento ha recibido diversos nombres

a lo largo de la historia: imposición de las manos, unción, crisma, sello, carácter.

Empieza a llamárselo Confirmación de manera habitual a partir del Concilo de Orange I (411).

Este nombre subraya su mutua ordenación con el Bautismo, y de ambos con la Eucaristía: lo que inicia el Bautismo lo completa la Confirmación.

Origen y naturaleza de la Confirmación El Antiguo Testamento habla de los tiempos

mesiánicos como tiempos de la efusión del Espíritu. “Saldrá un vástago del tronco de Jesé, y un retoño

de sus raíces brotará. Reposará sobre él el espíritu de Yahveh: espíritu de sabiduría e inteligencia, espíritu de consejo y fortaleza, espíritu de ciencia y temor de Yahveh. Y le inspirará en el temor de Yahveh”. (Is 11, 1-3)

Origen y naturaleza de la Confirmación El tiempo inaugurado por Cristo es tiempo de

plenitud del Espíritu: “Ahora bien, el que os comunica el Espíritu y obra milagros

entre vosotros ¿lo hace por virtud de las obras de la Ley o por la obediencia a la fe?” (Gal 3, 5)

En la Ultima Cena, el Señor prometió enviar su Espíritu: “Yo rogaré al Padre y os dará otro Paráclito para que esté

con vosotros siempre: el Espíritu de la verdad, al que el mundo no puede recibir porque no le ve ni le conoce; vosotros le conocéis porque permanece a vuestro lado y está en vosotros”. (Jn 15, 16-17)

Origen y naturaleza de la Confirmación El día de Pascua el Señor realizó esta promesa:

“Dicho esto sopló sobre ellos y les dijo: -Recibid el Espíritu Santo”. (Jn 20, 22)

De manera manifiesta la cumple el día de Pentecostés: “Al cumplirse el día de Pentecostés, estaban todos juntos en un

mismo lugar. Y de repente sobrevino del cielo un ruido, como de un viento que irrumpe impetuosamente, y llenó toda la casa en la que se hallaban. Entonces se les aparecieron unas lenguas como de fuego, que se dividían y se posaban sobre cada uno de ellos. Quedaron todos llenos del Espíritu Santo y comenzaron a hablar en otras lenguas, según el Espíritu les hacía expresarse”. (Hech 2, 1-4)

Origen y naturaleza de la Confirmación El Espíritu Santo es concedido por el Bautismo. Sin

embargo, existen pasajes que muestran cómo los Apóstoles comunicaban el Espíritu en un momento posterior al Bautismo: Cuando los apóstoles que estaban en Jerusalén oyeron que

Samaría había recibido la palabra de Dios, les enviaron a Pedro y a Juan. Éstos, nada más llegar, rezaron por ellos, para que recibieran el Espíritu Santo, pues aún no había descendido sobre ninguno de ellos, sino que sólo estaban bautizados en el nombre del Señor Jesús. Entonces les imponían las manos y recibían el Espíritu Santo. (Hech 8, 14-17)

Origen y naturaleza de la Confirmación Los Apóstoles comunicaban el Espíritu Santo

mediante la imposición de las manos con toda naturalidad, lo cual sólo se explica a partir de una instrucción concreta de Cristo.

Aunque en algunos testimonios de la Tradición es difícil distinguir el Bautismo de la Confirmación (se conferían juntos), el conjunto de la Tradición atestigua suficientemente la existencia de la Confirmación.

Signo y rito de la Confirmación El Sacramento de la Confirmación se confiere

mediante: La unción con crisma en la frente.

El crisma es aceite de oliva mezclado con una pequeña cantidad de bálsamo, consagrado por el Obispo el Jueves Santo en la Misa Crismal.

Que se hace por la imposición de la mano. Y las palabras: Recibe la señal de los dones del

Espíritu Santo.

Efectos de la Confirmación Los resume el n. 1303 del Catecismo: 

confiere crecimiento y profundidad a la gracia bautismal; nos introduce más profundamente en la filiación divina que nos

hace decir “Abbá, Padre” (Rm 8,15); nos une más firmemente a Cristo; aumenta en nosotros los dones del Espíritu Santo; hace más perfecto nuestro vínculo con la Iglesia; nos concede una fuerza especial del Espíritu Santo para

difundir y defender la fe mediante la palabra y las obras como verdaderos testigos de Cristo, para confesar valientemente el nombre de Cristo y para no sentir jamás vergüenza de la cruz.

Efectos de la Confirmación La Confirmación no solo provoca un aumento

de la gracia Bautismal, sino que implica algo novedoso: es el sacramento de la mayoría de edad espiritual.

En cuanto al carácter: Capacita y obliga al testimonio público de la fe. Da una particular fortaleza para afrontar las

dificultades que se derivan de dicho testimonio.

Efectos de la Confirmación La gracia santificante, que se recibe en el sacramento, se

ordena a afrontar las dificultades de la vida espiritual y del apostolado.

Se recibe también la plenitud de los dones del Espíritu Santo “Recuerda, pues, que has recibido el signo espiritual, el Espíritu de

sabiduría e inteligencia, el Espíritu de consejo y de fortaleza, el Espíritu de conocimiento y de piedad, el Espíritu de temor santo, y guarda lo que has recibido. Dios Padre te ha marcado con su signo, Cristo Señor te ha confirmado y ha puesto en tu corazón la prenda del Espíritu”. (S. Ambrosio)

En resumen, Confirmación, en primer lugar, se orienta a la consagración del fiel cristiano a la tarea de la evangelización del mundo; secundariamente a la santificación personal.

Ministro y sujeto El ministro ordinario es el Obispo. La práctica

se remonta la época apostólica. El sacerdote es ministro extraordinario de la

Confirmación. Puede recibir el sacramento todo bautizado

aún no confirmado. EL bautizado con uso de razón debe tener la

intención de recibirlo. Además, el candidato debe estar en gracia de

Dios.