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2º Edición. Mayo — Junio de 2010 ¨VII Festival del Habano en Cuba¨ + Algo sobre vinos Degustaciones Pipas y Cigarros Un poco de buen humor Buenos cuentos Independencia Argentina Y mucho +HumO... La venta de alcohol y tabaco esta prohibida a menores de 18 años y es perjudicial para la salud

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Revista dedicada a los aficionados del buen vivir. Tabaco, vinos, cigarros, pipas y mas

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2º Edición. Mayo — Junio de 2010

¨VII Festival del Habano en Cuba¨

+ Algo sobre vinos Degustaciones Pipas y Cigarros Un poco de buen humor Buenos cuentos Independencia Argentina

Y mucho +HumO...

La venta de alcohol y tabaco esta prohibida a menores de 18 años y es perjudicial para la salud

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La vta de alcohol y tabaco esta prohibida a menores de 18 años y es perjudicial para la salud

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Índice: Vinos y Destilados. ¿Cuan Añejo es Viejo? Pagina 2 Cigarros y Tabacos. De Costa a Costa… Pagina 4 VII Festival del Habano en Cuba Pagina 5 ¿Cubanos o Dominicanos? Pagina 8 Catas y Degustaciones Degustación de la mezcla Libertador Pagina 10 Simplemente una Degustación Histórica Pagina 12 Un poco de + Humo’r . Pagina 14 + Pipas. El Laberinto de Brezo Pagina 15 + Rating de Tabaquerías. Pagina 17 Literatura para hacer HumO. La otra Mitad Pagina 18 Hasta la última hebra Pagina 21 Fuera del HumO. Bicentenario de la Independencia Argentina Pagina 22 Nota del Editor. Pagina 23

Director Propietario y Editor: Pablo David Minotti Colaboraron en esta edición: Magali De La Cruz Deborah García Zulueta Darío Maurizzio José Carlos Martin Agustín Alba David Weber Rafael Nacher Chartier

Año I – Nº 2 Mayo – Junio de 2010 Publicación Bimestral de Interés General Distribución Gratuita on line Reg. de la Propiedad Intelectual Nº 825199 Las opiniones y artículos publicados y firmados son entera responsabilidad de los autores.

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Puede ocurrir que encontramos un viejo vino en un estante o baulera uno que nos quedo sin abrir o guardamos para alguna ocasión y luego lo olvidamos por ejemplo en 1985. ¿Qué hacemos, lo arrojamos, lo guardamos de recuerdo? ¿Podemos beberlos con seguridad? Creo que 25 años es demasiado tiempo para guardar un vino. Esta es una pregunta que nos puede surgir o ya nos paso y creo que puede ser un asunto interesan-te de tratar, a mi me paso… El vino envejecido no nos lastimará real-mente. Debido a su contenido alcohólico, el vino adentro no se descompone ni es-tropea en el sentido de convertirse tóxico o realmente dañino a nuestra salud. Pero es correcto asumir que el vino guar-dado por 25 años en la temperatura am-biente ha perdido todo su buen sabor y tomado un color terroso. Solamente al-gunos vinos raros y costosos se pueden guardar un largo tiempo sin que se dete-rioren, y ellos debe ser almacenado bajo condiciones excelentes como un sótano preparado para ello a una temperatura constante de 13º C. ¿Si nos encontramos en la situación de habernos reencontrado después de años con una botella de vino guardada qué debe usted hacer? Si el vino era por ejemplo un Cabernet-Sauvignon o simplemente tinto y si se ha guardado en su lado en la temperatura ambiente fresca, entonces es posible que puede todavía ser potable después de unos 10 años, disminuyendo sus buenas propiedades después de este tiempo. ¿Pero por qué no animarnos? Ya sabe-mos que el vino viejo no nos intoxicara y que no existe riesgo en intentarlo.

Compruebe que la botella no haya perdido algo de su contenido por filtración o evaporación. Si sigue estando normalmente lleno, eso es una buena señal. Sostenga la botella y mire el con-tenido a trasluz. Una cantidad pequeña de

Cuan Añejo es Viejo? ¿Cuanto tiempo se puede guardar una botella de vino sin descorchar?

“sedimento” pegado al cristal es normal, pero una masa lodosa no lo es. (Si hay un poco de sedimento, es conveniente verter cuidadosa-mente el vino en una jarra para separar. No es dañino, sino que es terroso y no agradable). No esperemos encontrar un sabor frutado o que tenga el sabor de un vino fresco, pero si sobrevivió, es probable que encontremos una cierta acidez y puede ser que tenga aromas y sabores complejos, quizás con características del vino viejo como el café, el cacao y las cuali-dades “terrosas” - olores a veces impares como la salsa de soja, en lugar de la fruta acostum-brada. Si encontramos que se ha puesto muy viejo, quizás le encontremos algún sabor pare-cido a la nuez (como el algún un jerez barato) o peor, y será marrón y lleno de sedimento. Si huele mal y su sabor es desagradable, es el momento en que desearemos no beberlo y bus-car inmediatamente abrir algo en mejores con-diciones, después gozar vertiendo el contenido del viejo vino por el drenaje. Salud.

David Weber

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De Costa a Costa… El mundo del cigarro parece estar aun en desarrollo y se expande hacia nuevos horizontes...

Tuvimos el agrado de hablar con Emiliano Lagos y Antonio Costa, en una amena charla disfrutando de sus excelentes Cigarros, en-vueltos por la calidez de su humo y la pasión que nos transmiten, nos adelantaron en for-ma exclusiva algunos importantes cambios que se han desarrollado en la ya conocida empresa de cigarros Panameños Costa y al-gunas sorpresas que están desarrollando y por lanzar ahora en el 2010. La empresa manufacturera de Cigarros Pre-mium ¨Tabacos Costa¨ comenzó a elaborar sus productos en el año 2000 en Panamá, un país muy reconocido por la calidad de sus tabacos, introduciéndose en el difícil merca-do Europeo y el de los Estados Unidos de Norteamérica, logrando un fuerte posiciona-miento en esos países y aceptación del publi-co gracias a la calidad de sus puros. Este crecimiento permitió que la empresa expan-da sus fronteras y empiecen a pensar en abrir y desarrollar otros mercados. Así de a poco han ido creciendo y tomando una exce-lente presencia en países como España, Ru-sia, Argentina, Chile y Uruguay. Este gran crecimiento que tuvieron los ha impulsado a realizar una nueva inversión, con la que podrán abastecer y cubrir la gran demanda de sus cigarros sin la preocupación de que nosotros, los amantes del humo, nos quedemos sin él. Es así que nos cuentan que han abierto una nueva planta manufacturera en Nicaragua, en la ciudad de Esteli un lugar dedicado a la plantación de tabaco por años y con una gran tradición por su manufactura. Ahora sí, Tabacos Costa desde Panamá y Nicaragua, nos seguirán deleitando con sus ya conocidas vitolas (Costa y Bucanero) de Cigarros Premium, algunos nuevos productos y otros renovados en sus presentaciones, que ampliarán aun más el gran espectro de

variedad que ofrecen para los exquisitos paladares de habidos fumadores. Además, nos adelantaron que próxima-mente nos sorprenderán con algunos nuevos productos para los amantes del buen vivir, que acompañaran gratamente el placer que nos convoca, el del tabaco. Esperamos ansiosos conocer de que sé trata, pero estamos seguros también que sea lo que sea que tabacos Costa esta preparando, estará acompañado de la excelente calidad y buen gusto que los caracteriza.

Lic. Pablo Minotti

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Emiliano Lagos

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VII Festival del Habano Ricos, famosos, glamour y + HumO que nunca en Cuba ...

En la noche del 21 de febrero, en el Museo de Bellas Artes se inauguró el festival y cerro en Expo-Cuba, el día 25, con la tradicional Cena de Gala y entrega de los Premios Habanos en las categorías de Producción, Negocios y Comunica-ción. Desde la inauguración hasta la clausura, la ciu-dad se llenó de invitados famosos entre ellos el actor británico Jeremy Irons y el actor francés Gerard Depardieu paseaban por el Museo de Bellas Artes sede del gran festival. Y el broche de oro fue en la cena de gala del cierre en la que actuaron el maestro Chucho Valdés y el bailarín español Joaquín Cortés. Por suerte podemos contar con la narración de lo vivido, en tan especial evento, en compañía de Deborah García Zulueta, quien nos comparte su experiencia durante esos días. (Lic. Pablo Minotti)

Festivales se cumplió, era impensable el no es-tar en el Cóctel de Bienvenida, pues Habanos quería agasajar a todos los que tuvimos la suer-te de ser invitados con un programa de lujo en su apertura. Un concierto del jazzista cubano Chucho Valdez (ganador de tantos Grammys y una leyenda de la música cubana) que invito a compartir el concierto al no menos premiado Iván Lins y a una cantante descomunal Marisa, una portuguesa con una voz y sensibilidad enor-me que junto a dos consagrados y favoritos del público hicieron que la Gala de Bienvenida en el Gran Teatro de la Habana fuera una cita no solo imprescindible sino también inolvidable y dejara un listón muy alto para la Gala del año 2011. Las autoridades de Habanos como cada año dieron la bienvenida a todos , presentaron lo nominados a Hombre Habano en las 3 categorí-as: Negocios, Producción y Comunicaciones y adelantaron las vitolas y novedades que se pre-sentarían durante el Festival que como ya todos esperábamos presentaría los 3 nuevo formatos del exclusivo Behike de Cohíba, con nuevos ce-pos atractivos (52,54 y 56)que hace que Cohíba cumpla el sueño de cualquier fumador al tener un rango amplísimo de cepos que van desde la diminuta Panetela al impensable hasta hace un año 56 de Behike.

Deborah García Zulueta Ing. Agrónomo. Tra-bajadora por 23 años de la Fabrica Parta-gas. Durante 12 años Di-rectora de Calidad de la misma. Amante del Habano y Fumadora Persistente.

En cada Festival del Habano a uno lo espera una semana cargada de actividades en donde cada día habrá tantas, ocurriendo al mismo tiempo que será imposible cumplir con todas, entonces empieza uno a ver a los amigos y a quedar con cada uno de ellos, tratando de acceder a la ma-yor cantidad de eventos o al que concentre ma-yor cantidad de amigos, mayor cantidad de no-vedades, noticias, celebrities y comienza tam-bién una carrera frenética de los rezagados que no han logrado entradas y buscan posibles fallos a quienes comprarlas … siempre sabes que debes acudir a el Coctel de Bienvenida y la Cena de Gala, estas son la indispensables para decir que acudiste a un Festival del Habano. Este año aunque esta regla de los

Cóctel de Bienvenida

Cóctel de Bienvenida

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El miércoles estuvo dedicada a todas las muje-res que de una u otra forma hacen una leyenda del Habano y fue un pretexto para presentar una vitola dedicada a nosotras, con una presen-tación novedosa (petaca metálica) muy vistosa y un cepo 38 y aunque yo prefiero cepos mucho mayores como muchas de las fumadoras actua-les, es un logro regresar a cepos pequeño y me-dianos por debajo del 46, pues en los últimos años parecen haberse olvidado de estos forma-tos y seguir la tendencia de los habanos muy gruesos.

La Cena de Gala que siempre cierra los Festiva-les fue estaba vez esperada con ansias pues se sabía que el obsequio de la misma seria un pe-queño estuche de lujo que contenía los 3 nue-vos formatos del Cohíba Behike y que se convir-tió desde ese momento en un objeto de colec-ción para los que reúnen artículos de Habanos, bien preparada con una escenografía alegórica a Cohíba muy bien lograda, fue sin embargo una cena muy larga para mi gusto, que trajo los nombres de los ganadores en cada categoría del Hombre Habano y la subasta de humidores don-de todo lo recaudado en la misma va a la Salud Publica Cubana.

Sigue siendo un evento imprescindible para los fumadores de Habanos que al menos una vez deberían tener la suerte de poder disfrutar de uno y que siempre que tengo la oportunidad de hablar con amantes les aconsejo que lleguen a Cuba la última semana de Febrero, pues ten-drán la dicha de vivir algo distinto, de conocer de primera mano, todo el proceso desde las Ve-gas hasta la comercialización, tendrán oportuni-dades de participar en un evento teórico de gran categoría , visitar las plantaciones en el mítico Pinar del Río , recorrer algunas de las fabricas que producen los mejores Habanos del mundo, conocer amantes, entendidos, coleccio-nistas y ver de cerca que hace inimitable un Habano.

Ing. Deborah García Zulueta (Cuba)

Arriba Cena dedicada a la Mujer en Bellas Artes. A la derecha los Ganadores del Hombre Habano del 2010: Tanner en negocios (Suiza) José Ribagorda en Comunicación (España) y Valladares en Producción (Cuba).

Cóctel de Bienvenida

Cena de Gala

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Tienda de Puros - Tabaquería

Esmeralda 862 C1007ABI - Buenos Aires - Argentina

Tel / Fax : (54 11) 43 11 44 45

www.franciscodemiranda.com

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¿Cubanos ó Dominicanos?

Antes que nada, reflexionemos en dos preguntas:

¿Qué es un Habano? Habano, na Adj. De La Habana, de la isla de Cuba o relativo a ella. m. Cigarro puro elaborado en Cuba Se denomina Habano a todos los tabacos y ciga-rros en los cuales el tabaco que lo compone, en su totalidad, va desde su cultivo, fabricación y producción en forma íntegra dentro de la Isla de Cuba. Hoy en día la palabra es una marca regis-trada para la identificación y como una estrate-gia no solamente de mercado si no también para la protección de la producción interna. Es una marca que ha penetrado en la mente del consu-midor y tal vez por eso todos llamamos habanos a cualquier cigarro y eso no es así. Existía un slogan muy famoso que decía que “si no es un Habano, no es un buen puro”, y que fue perdiendo fuerza en estas ultimas dos déca-das debido a la competencia directa de este pro-ducto ¿Qué es un puro? Un cigarro o puro es un paquete firmemente enrollado de tabaco secado y fermentado, liado sin papel. Se enciende por uno de los extremos para poder introducir su humo dentro de la boca del fumador a través del otro extremo. Por lo tanto el cigarro cubano y el dominicano, ambos se los considera puros. Ambos de gran calidad. Los Cubanos: Los puros Cubanos se consideran inigualables y de gran calidad a pesar de que el resto de los países americanos ha comenzado una gran producción compitiendo en forma dire-cta así con los mismos. Se le conoce habitualmente como Habano. La reputación cubana se presenta tanto por la cali-dad que realmente tienen en su cuidado y manu-factura, por su suelo, tradición y algo de historia relacionada con España desde 1492 cuando Luís Torres fumó un “Cohiba” (así le llamaban los índios que habitaban la isla al tabaco enrollado como el cigarro de nuestros días pero mucho mas tosco) convirtiéndose así en ser el primer europeo en consumir tabaco. Luego la historia relacionará mas a Rodrigo de Jerez, quien junto

a Torres protagonizaron el primer contacto europeo con el tabaco. Los Dominicanos: Aunque los dominicanos no poseen la larga tradición de los cubanos en la elaboración de puros hechos a mano, han demostrado tener una gran habilidad a la hora de su manufactura. La tendencia de la crea-ción de nuevas fabricas, ha derivado en una urgente necesidad de creación de torcedores experimentados. Los puros dominicanos han mejorado constantemente, y se han ganado su actual reputación. La República Dominicana no solo ha superado a Cuba en volúmenes de exportación, también ha conseguido productos de altísima calidad pero, el problema del cuer-po del tabaco y de sus cualidades aromáticas se mantiene. Por ello, el tabaco es general-mente mezclado con otras variedades y usado como tripa (relleno) y, en menos casos, como tirulo o capote (hoja del envoltorio interior). En consecuencia, los tabacos más fuertes aun deben importarse, generalmente de Honduras, México y Brasil. Otro punto débil (como suce-de en la Argentina) es que las hojas dominica-nas no son adecuadas para las capas (hojas del envoltorio exterior) de alta calidad, y estas también deben ser importadas, básicamente de Camerún, y Ecuador. A pesar de todo, la se han conseguido recientemente producir capas auténticamente dominicanas derivadas de hojas del piloto cubano y la cual tiene un tinte rosado. La ventaja principal de crear buenos cigarros se deben principalmente al clima y el suelo. Los exquisitos cigarros dominicanos suelen ser por lo general un tanto mas terrosos y suaves que los cubanos. Sólo para paladares muy particulares.

José Carlos Martin

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El resto del mundo: También es cierto que existen otros países responsables de plantacio-nes de tabaco y fabricación de cigarros. En América nos encontramos con Panamá, Nicara-gua, Argentina, Estados Unidos, México, Brasil, Perú, Ecuador, siendo sobre todo este último muy importante en producción de capa entre otros. Fuera de América podríamos nombrar a Camerún y Sumatra como mayores exponentes. Algunas apreciaciones personales: Tanto el cigarro dominicano como el cubano, ambos están fabricados a mano dentro de una zona geográfica similar. Dentro del mercado local nos encontramos con distintas variables de marcas, tamaños, colores, aromas, sabores, diámetros, formas y texturas. La ventaja de los cubanos frente a los domini-canos es que los cigarros son 100% cultivados y manufacturados en Cuba y por otro lado una cuestión histórica y de trayectoria en el trabajo del cultivo y del armado. Se remonta a la época de los indígenas que habitaron la isla desde tiempos anteriores a la llegada de Colón. Ideal para aquellos que les gusten los cigarros con cuerpo. La ventaja de los dominicanos frente a los habanos es que la oferta es cada día mayor y el precio es bastante mas accesible que en el caso de la mayoría de los cubanos. Dentro de ambas procedencias existen distintas variables.

La fortaleza, el sabor, el aroma, el gusto y los formatos son algunas de ellas. Y la elección es indistinta a la hora de hablar de calidad. Ambos son perfectamente fumables y apreciados. Cada uno de ellos es una obra de arte en particular. Así como los seres humanos pueden ser simila-res y con diferencias entre sí, no existe ningún cigarro idéntico a otro… pueden ser parecidos entre ellos pero ninguno será literalmente idén-tico a otro. Son pequeñas obras de arte cada uno de ellos por separado que nos esperan en cada tienda esperando acompañarnos en algún delicioso momento de nuestras vidas. Si bien es cierto que se recomienda hacerlo en un momento y lugar íntimo, no se descarta que se puedan fumar en la calle, en el auto ó en cualquier circunstancia en la que uno no se en-cuentra en su living tranquilo con buena música y compartiendo con alguien una buena charla, acompañado de un buen libro, película o bebida espirituosa y/ó cualquier otra cosa que nos de placer. Siempre hay un buen cigarro esperando para ser fumado por todos en cualquier momento, lugar y circunstancia. Es un grato compañero de agradables momentos. Recordemos que el cigarro no se fuma… se de-gusta, y por lo tanto nos va a dar mucho gusto haberlo conocido.

José Carlos Martin

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Degustación de la mezcla Libertador Sentimiento Nacional. Blender, Antonio Norberto Petti (Argentina) Características: • Virginias maduros y brillantes con burley argentinos, latakia de siria y perique de San James Parish. • Corte: Ribbon o loose cut • 1º Premio 2008 concurso mejor mezcla del CAP Madrid Degustación llevada a cabo por los miembros del Pipa Foro de Valencia.

Con el tiempo, y sobretodo con la edad, uno se va haciendo mayor, y teniendo sus manías, mu-chas manías. En cuestión de tabacos y pipas, también. Una de esas manías, consiste en que general-mente, salvo excepciones muy contadas, la pri-mera pipa de la tarde, con el irrenunciable café de las 16.00 hs, es de latakia. Un café cargado, denso, fuerte y cremoso; ningún tabaco combi-na mejor con eso que la latakia. Gustos hay tantos como paladares, desde luego, pero para el mío, la combinación perfecta al sabor y aro-ma del café, es la del gusto acre y denso de la latakia. He probado muchos tabacos con latakia, algu-nos excelentes, otros simplemente pasables, o incluso algo picantosos (como la triste decaden-cia en que han caído algunas labores de Dun-hill). Pero hoy puedo decir que al fin, he encon-trado el latakiado perfecto para la hora del ca-fé: LIBERTADOR. Le había prometido esta cata a mi amigo Tony (y algunas otras que vendrán), pero un resfria-do inoportuno, y el no encontrar el momento sosegado para probar la labor, han retrasado estas líneas. Al fin hoy, ha llegado el día. Previamente, hace un par de semanas, ya abrí el paquete y me entregué a la sensación olfati-va. Es un tabaco inconfundiblemente latakiado, de olor fuerte e intenso. A la vista, también se aprecia un claro predominio de hebras oscuras, prácticamente negras. En comparación con la Mezcla Pipes Martín, ésta labor se adivinaba menos inglesa y mucho más “oscura”....acaso oriental. Prometía. Hoy tenía una reunión de trabajo a 150 Km. de aquí, a las cinco y media de la tarde, así que después de comer, y antes de partir, me tomé

ese imprescindible café que me tonifica para el trabajo de la tarde, cargué una pipa hasta los topes de Libertador, la encendí despacio, y me puse el volante. Tenía una larga hora y algo más de camino por delante... para saborear el tabaco. Ha sido un viaje sublime. De inmediato me he dado cuenta que al fin he encontrado el latakia-do ideal para mi café de las cuatro. Libertador es una labor fuerte e intensa, que va más allá de la típica mezcla inglesa. Es un taba-co que te proporciona ese “algo más” que te engancha. No descubro nada nuevo si digo que las dos mejores características de las labores de Petti, son el equilibrio, y la materia prima de primerí-sima calidad. Es algo que se aprecia desde la primera pitada. Gracias a la primera, el sabor es redondo, completo sin picos de sabor duran-te toda la fumada; y eso es algo que hoy por hoy, muy pocos tabacos pueden tener a gala; gracias a la segunda, es absolutamente imposi-ble que ningún tabaco de Petti tenga el menor atisbo de picor; todo es suavidad natural. Fu-mando sus labores, uno siente que está fuman-do algo directamente de la tierra. Con todavía el sabor amargo y cremoso del café en mi boca, la primera bocanada de humo de Libertador, ha inundado de inmediato el pa-ladar y la lengua del inconfundible sabor acre a humo viejo, a maderas ahumadas, a hoguera centenaria, con ese punto final salado en la saliva, cuando paladeas la lengua tras exhalar el humo. Inconfundiblemente latakiado. Pero este tabaco te da algo más. Es fuerte, intenso, recio, contundente...como el café. Poco o nada que ver con las suaves mezclas típicas inglesas, que llevan latakia, pero más como un condi-mento que como plato fuerte. Libertador es

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mas rotundo, menos elegante si se quiere, pero acaso también más auténtico. Según Tony, la labor lleva muchas co-sas...virginias, burley, latakia y perique. No se-ría la primera vez que fumo un tabaco que dice llevar muchas cosas, y no sabe especialmente a nada. Con una labor de Petti, esto es sencilla-mente imposible. Más aún, consigue que todos los condimentos bailen juntos en perfecta ar-monía, aún incluso en el caso de que alguno de ellos predomine claramente. Me viene a la memoria una labor que probé hace tiempo, atraído por lo que anunciaba, “75 % de latakia”. Se trataba del DA VINCI de C&D. Un tabaco sin duda sabroso, intenso, rotunda-mente latakiado... pero también “aplastante”, sin el necesario equilibrio; la latakia cubría todo lo demás, aplastaba los sabores de los restan-tes condimentos. El logro de Libertador, a mi juicio, consiste en el equilibrio que siempre caracteriza a las labo-res de Petti. Por mucho que se aprecie contun-dente en el sabor a latakia, sigue siendo equili-brado y redondo; se saborea la base de virgi-nias de excelente calidad, y el pellizco avinagra-do del perique. Es un baile armonioso y subli-me. Es un festín de latakia, sobre un lecho de virgi-nias y perique. Y el burley se adivina, y sin em-bargo juguetea sin ser dulzón. Un guiño del blender. Según Tony, la labor lleva muchas co-sas...virginias, burley, latakia y perique. No se-ría la primera vez que fumo un tabaco que dice llevar muchas cosas, y no sabe especialmente a nada. Con una labor de Petti, esto es sencilla-mente imposible. Más aún, consigue que todos los condimentos bailen juntos en perfecta ar-monía, aún incluso en el caso de que alguno de ellos predomine claramente. Me viene a la memoria una labor que probé hace tiempo, atraído por lo que anunciaba, “75 % de latakia”. Se trataba del DA VINCI de C&D. Un tabaco sin duda sabroso, intenso, rotunda-mente latakiado... pero también “aplastante”, sin el necesario equilibrio; la latakia cubría todo lo demás, aplastaba los sabores de los restan-tes condimentos.

Las volutas de humo iban llenando el habitáculo del coche, lenta y armoniosamente. La labor te incita a juguetear en la boca con el humo con sabor a leña quemada, antes de soltarlo casi con timidez, por la nariz. La combinación de la latakia siria con los restos amargos del negro café son sencillamente per-fectos. Absolutamente perfectos. Café negro y negra latakia. Un tabaco oscuro, que deja hue-lla en la lengua (huella de sabor amado, de suavidad sublime y de gusto intenso). Como la mayoría de las cosas de la vida que están prohibidas, son tabú o resultan inconfesa-bles, Libertador es intenso e inolvidable, fuerte e impactante. Al igual que la mirada sensual y prometedora de una mujer inalcanzable, ésta labor te llega hasta lo más profundo, resulta difícil resistirse y casi imposible renunciar a ella. El camino se me ha hecho corto, el viaje muy confortable y evocador. Al salir de la reunión de trabajo y volver a entrar en mi coche, el olor fuerte a resinas y leña quemada me impacta nada más sentarme al volante; cierro los ojos unos segundos... y me doy cuenta que necesito urgentemente tomar un café caliente y cremo-so. Por Rafael Nacher Chartier. (España)

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Simplemente una Degustación Histórica !

Desde la Habana + años hasta Teddigton, UK.

Esta tarde mientras degusto un Cohíba Reserva acompañado de Ron Santiago, observando la lluvia Británica, la cual se convierte en pesadi-lla abrumadora e imposible de sobrepasar, su humedad tiene el poder de traspasar mis hue-sos y hacerme sentir un frío muscular imposi-ble. Las gotas mojadas resbalan por el cristal de la ventana, saboreo la perfección del tiro en mi Cohíba y casi sin proponérmelo comienzo a recordar y enumerar los mejores tabacos que he tenido el honor de haber fumado en los últi-mos 12 meses. El olfato y el sentido del tacto son capaces de recrear sabores y perfumes ya inolvidables para mi memoria perceptiva. El gusto por los Habanos anejados me vuelve tremendamente selectiva pues para mi (como para muchos otros) un Buen Cigar o puro es la manera mas directa que tengo de comunicarme con mi espíritu y entregarle la paz que necesita, mientras mi paladar disfruta de tanta sublimi-dad y magia de una Buena liga entre las parti-culares hojas del tabaco. Delirio con las manos de una torcedora, que bien podría ser mi propia madre, me presiento allí, parada delante de la mesa del torcedor examinando las texturas y colores de un producto que corre increíblemen-te por mis venas: el tabaco. En Mayo del 2009, durante el periodo en que trabaje con el Sr. Ajay Patel en su fabulosa Ca-sa del Habano (Teddigton, UK) organice un evento internacional, el cual resulto ser uno de los momentos más impresionantes y magistra-les de varios catadores; quienes visitaban Lon-dres por primera vez en sus vidas. Ajay y yo estábamos buscando un Tabaco que mereciera tal connotación histórica, después de una larga semana de cata descubrimos una verdadera Joya, tuvimos el indescriptible placer de experimentar lo que muy bien podría ser nombrado: Un Orgasmo del Paladar! Un pequeño doble figurado con más de medio siglo de vida, una pieza de arte trascendental y bella.

Ajay Habia comprado en una subasta una caja de Juan López, la cual contenía 50 pu-ros (Celestiales finos), la cual Había estado torcida entre los anos 1936/1940 en la Fabrica de la Corona, Habana. Dicha Caja de tabacos había sido importada a Uk por la compañía J.J.Fox (para la cual me encuentro trabajando actualmente), fue vendi-da en los 1940’s a un gran político londinense, quien decidió mantener la caja en la sala de maduración de la Tienda Robert Lewis en el Corazón De St. James Street (La meca Britanica de los grandes Habanos). Habiendo muerto el dueño y perdidos todos los contactos con la familia del depositario la caja, fue vendida en subasta de Vintages, oportuni-dad en la que muchos coleccionistas privados logran obtener productos únicos y de iniguala-ble valor histórico. Para muchos de los participantes, incluyéndome a mí, este ha sido el tabaco más antiguo que habíamos fumado en nuestras vidas. Varias personas pensaron que se trataría de un Cadáver insípido y disecado, felizmente estaban completamente equivocados, puesto que nues-tra miniatura histórica dejo mucho que decir y desear durante los 45 minutos que duro su de-gustación profesional.

Marca: Juan López Vitola: Regalía Perfecta País: Cuba Fabrica: La Corona (1937 – 1940)

Magali de la Cruz.

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Un tabaco de color Colorado oscuro con un perfume floral intenso y una textura perfecta en su capa. Se apreciaba la falta de molde para los dobles figurados, pues cada uno tenia la propiedad de un acabado diferente en la circunferencia supe-rior. Después de haberlo encendido, el Juan López Inicialmente nos regalo esa dulzura característi-ca de la miel y la Madera, la combustión fue exquisita y la complejidad de su liga fue au-mentando de una forma inesperada. Después de la primera mitad el pequeño figura-do nos comenzó a regalar un perfume primave-ral, fruta Madura con una nota picante, con un excelente contraste entre la miel y la sal. La ceniza fue perfectamente consistente duran-te toda la cata, de color Blanca y con una dure-za sorpresiva.

En sus finales hubo una nota de acides que termino con una intensidad jamás esperada para un Habano de casi 70 anos. Ya habiendo terminado el cigar la nota dulce perduro en mis labios por casi media hora, mientras en la punta de mi lengua seguía sin-tiendo una consistencia picante que decrecía a medida que la saliva limpiaba mi paladar.

Entre todos los presentes llegamos a la conclu-sión de que habíamos degustado un tabaco de magistral potencia de añejamiento, podríamos acertar que muchos de los tabacos estaban torcidos por la misma persona (a diferencia de los Habanos actuales, en los que se pueden fumar tabacos de una misma caja que han sido torcidos al menos por 5 torcedores diferentes) La puntuación final fue de 93/100 Comparto con vosotros algunas de las fotos más remarcables que aun conservo sobre esta Histórica y sensacional degustación. Doy las gracias a todos por permitirme colabo-rar con ustedes y compartir esta inmensa pa-sión, que aun desde Londres nos une, cada vez que fumamos un buen tabaco.

Magali de la Cruz. (Londres)

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El laberinto de brezo

Una travesía por los misterios del mundo de la pipa

¡Arroja ese cigarrillo! Fue la frase que disparé a un amigo al verlo desenfundar uno de esos efí-meros cilindritos de papel que, dicen algunos, suelen estar rellenos de tabaco. Lo cierto, es que mis advertencias y consejos no surtieron el menor efecto sobre su receptor pese a mis ex-plicaciones y a la romántica introducción en la que ensayaba la ambiciosa tarea de plasmar en palabras breves el vasto océano de la pipa.

Hace una década tuve la buena fortuna de olfa-tear los rastros del humo que delineaba el an-dar de dos ingleses altos y parsimoniosos. Ca-minaban delante de mí por la Avenida Quinta-na, en el corazón encantador de la Recoleta. Me aventuré a interrogarlos; yo era un profano en materia de buenos humos porque jamás había fumado. El mundo de la pipa puede ser extenso, pero el de los hombres no: El tabaco que saboreaban era el mismo que había anima-do alguna vez la cazoleta de Mr. Phillips, el mis-terioso rector del Abingdon School de Oxfords-hire, Inglaterra, al que asistí a los doce años de edad en calidad de estudiante. El alud de viejos recuerdos era inevitable, y la mezcla en cues-tión era “My Mixture” de Dunhill. A este en-cuentro debe sumársele la sensación de mara-villa que me produjo el haber visto la película “El señor de los anillos”, en cuyo transcurso es posible ver muchas veces a los personajes fu-mar en curiosas y muy estéticas pipas church-warden imaginadas por Tolkien.

¿Pero qué impulsa a alguien a fumar de un mo-do tan sofisticado, por no decir complicado? Supondré que en los inicios el fumador está inexorablemente sumergido en un mar de caos sensual; busca incansablemente el estímulo olfativo de la vainilla, del chocolate, de la miel y de tantos otros, como si se tratase de un post-re. Esas primeras búsquedas sensoriales sue-len ser sucedidas por algún desencanto que surge una vez que el novel fumador se percata de que su pipa sólo le entrega el humo amargo de una hierba en torpe combustión. Se pregun-ta si valen la pena el esfuerzo económico y el tiempo invertido. Lo que nunca suele pregun-tarse, es si está fumando correctamente, o si

mantiene su pipa en un riguroso estado de lim-pieza. El fumador inexperto suele creer en la magia: supone, en su natural ignorancia, que con sólo embutir unos gramos de tabaco en el hornillo, chamuscarlo con el fósforo o con el encendedor, y luego mamar frenéticamente como un lactante, será bañado con una casca-da de placer de la que puede incluso llegar a suponerse indigno. Lo que no sabe, es que la pericia para fumar correctamente en pipa no difiere mucho de la destreza necesaria para desempeñarse en otras disciplinas (qué intere-sante resulta la analogía entre un fumador in-experto y un violinista principiante que parece querer cortar las cuerdas del violín con la crin del arco).

Elegir la pipa entre las favoritas, observar las vetas y formas del brezo, oler el tabaco y jugar con él entre los dedos, cargar la cazoleta en un trabajo casi de ingeniería… Todo ello es parte del fumar en pipa. La mejor recompensa para el fumador es un sabor fiel y estable. Este mo-do prístino de disfrutar el tabaco nos induce a la reflexión profunda y también a la paz. Duran-te la calma de la noche, luego de una buena comida, mientras creamos algo, o simplemente cuando más nos plazca, la pipa será una fiel compañera y un cable a tierra.

La venta de alcohol y tabaco esta prohibida a menores de 18 años Y es perjudicial para la salud

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Yo, en lo personal, no puedo dejar de imaginar el trabajo de un artesano sobre el brezo que conforma mis pipas, ni puedo tampoco desco-nectarme de la Tierra cuando le tomo prestado con mis dedos unos gramos de tabaco fresco.

Tabacos aromáticos frescos con sabores diver-sos, mezclas inglesas simples o muy complejas, mezclas regulares suaves, tabacos regionales de intensidad apabullante, mezclas en hebras, picadas, en cuerdas, en láminas (flakes)… To-das ellas son hermanas en la noble función de calmarnos, relajarnos y llevarnos a meditar. Una natural sinfonía de sabores y de aromas puede ser disfrutada con señorío en el teatro de la cazoleta. Los muebles para pipas suelen ser fuente de una rica variedad de piezas: rec-tas, curvas, semicurvas, muy grandes, de bolsi-llo, exóticas, artesanales o incluso de colección. La exquisita trinidad “Tabaco-Pipa-Fumador”, es un inductor de placeres si el sistema es equi-librado.

Cada cual expone y defiende su método preferi-do de carga. Como en las matemáticas, hay muchas formas de conseguir el objetivo final; hay varias formas de lograr una correcta com-bustión del tabaco en el hornillo. Lo importante es el disfrute y el relax. El fumar en pipa es una actividad gratificante. Para el principiante se trata de algo visceral, sensorial, y para el ex-perto, se transforma casi en un placer racional.

Antes de encender un mecánico, insípido y no-civo cigarrillo, debemos siempre recordar que allí, en el fondo de alguna buena tabaquería, se encuentra una pipa esperando a ser fumada. El relax y el placer son la base de la fértil creación en todos los campos. Entreguémonos a ellos con una buena pipa y perdámonos en el fasci-nante laberinto de brezo y del buen tabaco.

Por Darío Maurizzio

La venta de alcohol y tabaco esta prohibida a menores de 18 años y es perjudicial para la salud

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“La Otra Mitad”

Una noche en la ciudad, que se encontraba totalmente a oscuras, el olor de la lluvia se mezclaba con el humo de las chimeneas humeantes en pleno invierno, como si fuesen mantos de neblinas haciéndole frente al propio sol… Se podía percibir una sensación de disturbio en las mentes de las nubes que solamente hallaban co-bijo en los brazos de un cielo gris, oscuro y dramático. Ante semejante angustia paisajista, el escritor palpando su lapicera, le hacía notar las caricias, de manera impronta y sublime, para luego aplicar con trazos finos la muy buena escritura, acompañada de su aprendizaje adolescente de caligrafía… Mirro, el Lord del Pencil Case, no soportaba que las ideas se le volaran hacia un espacio que le era inalcanzable, notaba con sopor que su creatividad yacía en el letargo, que se amainaba la locura de su ser en una tromba huracanada de temor… “¿Cuántas veces me ha pasado?” Pensaba y exclama-ba, “nunca”, le respondía su cerebro, encabritado y desencajado… Su sala de “escritura” era un verdadero manantial de placer. Paredes forradas en mahogany; el piso de parquet era de vieja pinotea traída de Canadá; los grandes ventanales victorianos; el hermoso y sobredimensionado hogar; el fantástico escritorio de noble madera, una vieja Rémington y una PC moderna descansaban sobre él… a su lado un humidor con capacidad para 125 puros donde Mirro “depositaba” sus mejores Habanos; era un gran consumidor y un gran entendido… La casa no era inusual para un escritor con su capacidad de marketing, todo lo que escribía se ven-día como agua; lo bueno y lo malo… todo, absolutamente todo. Poseía cuatro garajes repleto de au-tomóviles de colección –un Rolls Royce año 1920, un Mercedes “alas de gaviota”, una Ferrari F 450 y un Bentley cabriolet que destacaba por su color –anaranjado-. Sus siete baños estaban recubiertos, desde el piso hasta el techo, de mármol Botticcino en juego con mármol travertino y escalones de carrara. La grifería era de bronce bañada en el más puro oro de 24 quilates que había hecho traer desde una fábrica especial con diseño de Stark. Así, con todo el lujo vivía Mirro… pero ese día, ni una sola idea le brotaba de sus entrañas… Se levantó del sillón forrado en cuero de fino arce en busca de un trago de ron cubano. Tomó un vaso, lo enfrió girando el vaso lleno de hielo, tiró el hielo, escarchó otro poco más, agregó hierba-buena, y azúcar negra con jugo de lima; hasta convertirlo en un sabroso mojito –trago típico cuba-no-. Luego se arremangó, y buscó en el humidor un Cohíba siglo VI –aunque dudó entre el Cohiba y un Trinidad Fundador de 1995. Se volvió a sentar en el mullido y cómodo sillón, trato de relajar su mente, y se puso a disfrutar de los manjares que tenía entre sus manos y a los cuales amaba con locura. Mientras el mojito bajaba de una manera suave por su garganta, olía el tabaco, aun sin pren-derlo, acariciaba la textura de la capa como si se tratara de la piel de una mujer. Se quedó quieto, pensativo. Algo le faltaba en ese perfecto momento para convertirlo en absoluta divinidad…la música, necesitaba de una melodía apropiada que le ayudara a pensar…. Se levantó sin mucho esfuerzo y buscó entre su inmensa colección discográfica, ojeo varios álbumes antiguos y sacó uno que estaba empolvado por los anos..Pero que guardaba aquella melodía, que aún ahora; le regalaba el poder de las lagrimas.. Un compositor cubano, el gran maestro Lecuona. Un piano que hacia resucitar muertos y tejía miste-rios en el aire con sus notas bajas y su ritmo bien marcado. Ahora sí estaba listo para la meditación, para la catarsis espiritual que tantas veces le hizo parir las mejores de sus ideas literarias.

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Dibujó una sonrisa inigualable… el placer de ese sabor era inconfundible para él... Cada noche lo poseía y le hacía sentir sensaciones inexplicables y diferentes.. Bebió otro sorbo del mojito y se acomodó en la butaca… su cuerpo tomo una postura mas etérea y su alma se escapó al magnifico mundo de la fantasía de los poetas… Llevaba años sonando con visitar Cuba, lo había visto siempre como una posibilidad distante. Pero últimamente ese deseo se convertía en capricho necesario; En acción de vida y descubrimiento. Le habían mencionado mil anécdotas del caimán de la Antillas, pero aún así no sé atrevía por miedo a derrumbar tantos sueños acumulados en su memoria imaginativa. Se sintió medio en trance por el tabaco y el mojito cuando sintió que algo le rozaba, delicadamente, como un suspiro, le mojaba la nariz y le soplaba las pupilas… Era un ser que alucinaba con facilidad y tenía momentos en los que la locura le aseguraba metáforas inexistentes y surrealistas, pero le complacía ese tipo de existencialismo verbal. Pero esta vez era diferente, realmente sentía un perfume carnal acercándose a su piel, podía intuir una forma femenina con curvas alargadas y aliento húmedo… imaginaba una bailarina danzando sobre un piso frió y levantando los pies como pájaro que despega… Tenía miedo abrir los ojos y borrar el momento, pero necesitaba mas ron y mas tabaco... no tenía idea de cuanto había transcurrido en ese lapso, pero si sabia que ya no estaba solo… Allí poseída y entregada estaba su musa...esa a la que debía algunos de sus mejores libros y con la que compartía un amor platónico extremo. Se amaban de manera incondicional y sin embargo jamás se habían conocido en un mundo real, to-do era poder de la imaginación y el deseo literario… Era una musa frágil emocionalmente, podía desaparecer con solo un suspiro y regresar a través de una lágrima mojada. Sabía que Mirro la deseaba y eso le complacía, le permitía usar lo erótico de su cuerpo para provo-car la reacción en el escritor y llevarlo a la locura más apasionada. Vestía siempre de blanco, un blanco sedoso y transparente, sus cabellos eran de oro, caían desorde-nadamente sobre su espalda cubriéndole los hombros y descubriéndole el pecho con incoherencia sensual. Mirro le había invitado muchas veces a bailar, pero ella juguetona prefería danzar para él, le creaba coreografías conceptuales con una metamorfosis corporal asombrosa. La ultima danza que le regaló duró semanas… mutó de mujer a cosmo, a leopardo, a manantial y regresó más tarde nuevamente carnal, esa vez Mirro escribió su Premio Novel y sintió que vivía la más culminante de las obsesiones literarias.

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A Mirro nunca antes se le había antojado nombrar a su musa con algo terrenal, pero hoy era diferen-te, necesitaba susurrarle un nombre propio al oído; quería gritarle cosas que la emocionaran y que le entregaran el universo de una forma más lírica… Tomó una cortadora de puros y con lástima, disfrutó del placer de sacarle la capa de la cabeza al Cohíba… prendió una astilla de cedro y dio vueltas al tabaco para que quemara parejo antes de lle-várselo por primera vez a los labios… Allí estaba preparándose otro trago, esta vez optó por un Daiquiri, para el cual abrió una botella de un ron casi desconocido pero delicioso. Guayabita del Pinar, mientras batía el hielo y agregaba jugo de limón lo vio claro en su cabeza… desde ahora nombraría a su amante Guayabita, tenía varias ra-zones para esto y la más poderosa de todas era la lujuria que tanto esta bebida como su bailarina le producían. A través del cristal de su vaso miraba ensimismado como la figura de su musa se retorcía danzan-do… se levantaba el cabello y le brindaba un perfil perfecto, un cuello alargado y elástico cargado de lunares y con luz propia. Desde el cuello Mirro bajó hasta el pecho .allí se despertaban dos rosas, casi perfectas, entreabiertas y firmes, como estrellas de un firmamento celestial. Desde el pecho bajó a las caderas, no eran anchas pero se movían armoniosamente al compás de la música… de ahí hasta las rodillas unas piernas largas con buen balance muscular, unos movimientos delicados con pasos dobles y en puntillas de pies… La musa se le acercó y pegó su espalda al cuerpo de Mirro, este le acaricio el pelo y bajó las manos palpando cada porción de esa tierra tan conocida y tan temida a la vez. Ella lo empujaba hacia el centro de la habitación, lo invitaba a moverse libremente al compás de su temblor… Hacían ya dos años de la última gran provocación carnal, aquella vez estuvieron cercanos a la entre-ga morbosa de sus almas… Mirro sintió como latía su órgano central, corría a la velocidad de mil caballos desbocados, era ya imposible detenerlo por lo que se entregó totalmente a los antojos de Guayabita..Lo cual le dijo sua-vemente al oído. Aquella figura corpórea que se levantaba al alcance de sus manos, de sus dedos era todo cuanto deseaba ahora y se perdió en una dimensión cósmica total. No logró descifrar el enigma de aquella irrepetible escena, sólo guardó el sabor insustituible en su boca, en su carne. Despertó con un titulo en la mente y quedó claro de cual sería su nuevo proyec-to:’La otra Mitad’. Comprendía ahora cómo su musa era simplemente esa otra parte de sí mismo, transformada en mu-jer, en aire, agua y eternidad. Mientras su cabeza caída lloraba por su sueño, ahora, sus compases cardíacos reaccionaban de una manera suntuosa y real. Cada astro del firmamento acrecentaba la aptitud diabólica angelical para su musa; para su interioridad más onírica, para su comienzo estrepi-toso. Mirro observó en el amplio reloj de pared ya pasaba la media noche. Había delirado y por más de seis horas vivido un infinito de sublimidad, donde lo real se mezclaba con lo absurdo, pero finalmen-te Guayabita le había regalado la historia ás trascendental, a la que estaría entregándose en cuerpo y alma inmediatamente.

Magali de La Cruz. (Londres 2007)

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Hasta la última hebra® Por Darío Maurizzio – ¿Vio que le dije? – Espetó con una irónica sonrisa y cierto aire de resignación el doctor Bauman ni bien abrió la puerta de su mítico departamento de la calle Guido. – De acuerdo, tiene razón – admití a regaña-dientes y con profundo pesar. Pero no era al chaparrón otoñal que me había asaltado furtivamente a lo que el viejo Bauman hacía referencia, sino a la espantosa y lamentable concreción del octavo crimen en el mismo fatídico mes, perpetrado por la misma mano sombría. Tras cruzar la recepción, nos sentamos calladamente en el living solemne de luces tenues. Aun a pesar de ser mediana, aquella sala silenciosa albergaba una espesa y nostálgica población de muebles antiguos. Bauman ordenó té para dos a su mucama silente de uniforme oscuro y encendió su pipa con la mirada hundida en la nada. Una carpeta de cartulina abarrotada de papeles inquietos yacía sobre la caprichosa mesa ratona, y la platería que descansaba en ella chisporroteaba con cada relámpago que invadía el am-biente. Bauman señaló el título de la carpeta con la boquilla de su pipa humeante, pero la memoria me ha traicionado hoy, ya por mandato de esos oscuros mecanismos mentales destinados a olvidar detalles dolo-rosos, ya por el terco paso del tiempo. Lo cierto es que no puedo recordar cómo estaba caratulado el ex-pediente en cuestión. Cualquiera hubiera sido el nombre que los fiscales le endilgaron al caso, no podía bastar para describir crímenes como aquellos. El doctor trató en vano de mantener la compostura, pero sus nervios no dejaban de asomarse por las puntas de sus dedos. Sabía lo que ocurría; conocía con clari-dad el final de la historia tan bien como yo. Bauman era, además de solterón empedernido, un brillante médico forense que también había ejercido durante veinte años la cirugía plástica en los Estados Unidos. Ejercicio que, por cierto, le reportó una cuantiosa fortuna personal pese a haber heredado vastos y fértiles campos tanto en La Pampa como en Pergamino. El té llegó finalmente, pero el doctor jamás tocó su taza. Se aferró, en cambio, a su pipa furio-sa incluso más que a la excelente amistad que mantuvimos durante tres largas décadas. Si la escaramuza iba a dirimirse con humo, también yo debía encender mi pipa. Allí estábamos, sentados frente a frente, pipa a pipa, humo a humo, con un espantoso expediente de por medio y una de las situaciones más incó-modas que me hubiera tocado vivir. El doctor me laceró con una mirada áspera y opaca. Acarició a Gaucho, su perro de caza, y apartó la pipa de su boca. Se puso de pie con calma y extrajo del cajón de un antiguo secretaire una pistola plateada. Se deslizó entre los relámpagos e inmediatamente apareció sentado en su lugar echando humo por su pipa. Meditabundo, apisonó la brasa en su cazoleta. Al igual que un rizo de humo, Bauman siempre había sido impredecible. -¿Vio que le dije?- Insistió. –Usted iba a ser capaz de desenmarañar la trama de este caso. No me cabían dudas. Y esta vez no necesitó de mi ayuda en absoluto-. Apuntó su pistola a mi cabeza en el tiempo que le tomó a un relámpago efímero llenar la habitación y desvanecerse. Oí el chasquido seco y metálico del percutor. Inmediatamente me embargó la ilusión atroz de que el destello violáceo provenía del autoritario cañón del arme y no de la ventana permisiva. Pero al instante recordé… extraje del bolsillo de mi saco un cargador lleno de balas y lo blandí con orgullo a la altura de mi rostro. Los ojos vacíos de Bauman lo decí-an todo; mi sonrisa con notas de tristeza, también. Unos pocos gramos de presión sobre la tecla de llama-da de mi teléfono celular bastaron para movilizar en segundos a los ocho oficiales armados de la policía que hubieron copado el pasillo tras mi arribo al departamento. Bauman había asesinado fríamente y de un modo que no describiré, a ocho personas en lo que iba del mes. El complejo entramado de deducciones y de pruebas empíricas quedará, felizmente, para otro relato. Ahora lo interesante resulta ser lo que nos dijimos antes de que los oficiales lo esposaran y se lo llevaran. -¿qué va a hacer cuando mis abogados me saquen de esta; dónde se va a esconder?- Preguntó el doctor con una serenidad que desmoronó al instante treinta años de amistad y de reciprocidad. –No sé qué voy a hacer en ese caso. Lo único que pienso hacer, por ahora, es fumarme esta pipa hasta la última hebra. Confieso que aún conservo, guardada en una caja de metal, la pipa que alguna vez fumó un asesino des-piadado que fue mi amigo. La pipa que yo mismo fumaba mientras unía penosamente las diversas piezas del macabro rompecabezas policial para encontrar al asesino, también descansa junto a la pipa que el asesino saboreaba, conjeturo, mientras maquinaba sus homicidios. Los restos del tabaco a medio fumar que dejó Bauman, duermen aún en su cazoleta. Si algún día, por obra de la justicia incompleta y corrupta de los hombres, el doctor saliera en inmerecida libertad, su pipa inconclusa lo estará esperando para librar conmigo hasta la batalla final.

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1810 + 200 =

Bicentenario de la independencia Argentina En este tiempo he escuchando opiniones diversas y posturas varias, algunas extremas con un alto contenido e interés político, otras razonables, algunas sin desprecio y otras desechables por comple-to, respecto de la emancipación de la Republica Argentina. Por ello y más allá de las posturas individuales y de los festejos quiero enmarcar esta nota comen-zando con algunas líneas que marcan el comienzo y el verdadero espíritu que empujo la génesis de la controvertida historia de la patria y es así que viene a mi mente la Constitución; ¨… constituir la unión nacional, afianzar la justicia, consolidar la paz interior, proveer a la defensa co-mún, promover el bienestar general, y asegurar los beneficios de la libertad para noso-tros, para nuestra posteridad y para todos los hombres del mundo que quieran habitar en el suelo Argentino …¨ Así nacía esta nación Federal, con este preámbulo y buenas intenciones, con ansias de libertad y con esperanza de crecimiento y seis fines a perseguir y conquistar. Sí 200 años trascurrieron de aquel sueño, hemos cumplido algunas cosas, creo que nos falta mucho de aquella primera intención, pero aun hay esperanza, es lo último que se pierde dicen, solo espero no transcurra otro bicentenario pa-ra ver el afianzamiento de estos simples y sencillos puntos de buenos deseos cumplidos: • Afianzar la justicia: el Congreso tiene la capacidad de introducir las formas de legislación

necesarias para que el reconocimiento de los derechos y el ejercicio de los poderes, reconoci-dos por la Constitución Nacional y las leyes, se haga y cumplan con equidad y sin discrimina-ción.

• Constituir la unión nacional: formar un Estado Nacional sólido y con la suficiente autoridad

como para hacerse cargo de las atribuciones delegadas por las provincias. • Consolidar la paz interior: es el fortalecimiento de la soberanía popular y sus instituciones,

y evitar el enfrentamiento entre los argentinos. • Proveer a la defensa común: Esto comprende, en primer lugar, a la defensa de la Constitu-

ción Nacional, las provincias, la población, los valores, el estado de derecho y el federalismo. • Promover el bienestar general: es la preocupación por constituir un país que garantice un

nivel de vida decente para toda la población, es decir el bien común. • Asegurar los beneficios de la libertad: esta libertad es extensible a «todos los hombres

del mundo que quieran habitar suelo argentino» encierra el concepto de dignidad humana obligando a la sociedad y al Estado a crear la posibilidad cierta y real de que el individuo des-arrolle en plenitud sus derechos.

Que cada quien saque sus conclusiones del festejo de ¨ emancipación ¨ del 25 de mayo. Es mi de-seo y simple reflexión que los argentinos logremos consolidar estos principios básicos y logremos revertir el contexto en el que nos encontramos inmersos hoy los Argentinos, en el que se vislumbra el deterioro de las instituciones, aumento de la violencia y falta de seguridad, estancamiento en ma-teria de salud y educación pública, tres elementos claves y fundamentales (Educación, Salud, Segu-ridad) para el bienestar y crecimiento de los pueblos.

Lic. Pablo Minotti

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Nota del Editor: Estimados lectores, amigos y amantes del tabaco y

el buen vivir, hemos llegado gracias a Uds. Y con

gran esfuerzo al segundo número de ésta, nuestra

revista, espero disfruten de esta edición donde creo

hemos mejorado sustancialmente el contenido gra-

cias a la colaboración e interesantes aportes de dis-

tinguidos columnistas, otorgándonos además de

una lectura mas atractiva, excelente información

sobre el mundo del tabaco, los cigarros, las pipas,

cosas que nos rodean y acompañan y sobre todo +

HumO.

Igual que en el primer número, mi más sincero

agradecimiento a quienes nos auspician y tienen fe

en este sencillo, pero no por ello menos ambicioso

proyecto, que intenta acercar a los productores,

vendedores y consumidores de los placeres que

nos da el buen tabaco. E invito a quienes aún no se

han podido sumar a que nos consulten, creo es importante un buen acercamiento y comu-

nicación aprovechando un espacio propicio para nuestro tema.

En la primer revista, gracias a Uds. hemos llegado a los 3500 lectores, nada mal para el pri-

mer número, creo… Pero pretendemos seguir creciendo y eso es gracias a su apoyo. Tam-

bién agradecemos sus variados comentarios y consultas y respondo sobre todo a una muy

reiterada que es dónde se consigue la versión impresa. Incluso hemos recibido esta consul-

ta varias veces desde USA, país de habla inglesa pero con una comunidad hispana muy

grande. La respuesta es, en eso estamos y esperamos poder cumplir con ese deseo tam-

bién muy pronto. Mientras tanto los invito a quienes quieran guardar los números e impri-

mirlos a bajar la versión en PDF de la misma desde nuestro sitio web ya que la revista es

bimestral y cambiará en ese período.

Espero disfruten de este número lleno de interesantes artículos, novedades, humor, cuen-

tos y + HumO para compartir y disfrutar. Lic. Pablo Minotti

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