revista brújula ciudadana 73

10 años construyendoalianzas estratégicas

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NUEVA ÉPOCAEnero 2016

Fortaleciendo a la sociedad civil como actor de interés público

CONTENIDO

3 Elio A. Villaseñor GómezDíez años de alianzas

5Carlos Heredia Zubieta Una década de construcción de ciudadanía transnacional

8Francisco Alvarado Una retrospectiva pero con ánimo de futuro

11 Daniel Tacher Contreras Observación Electoral Binacional

14Yazmín Benítez Sánchez Construyendo políticas públicas desde la sociedad civil

16 Azyadeth Adame La sociedad civil del siglo XXI

18Karla Ambrosio Torres 10 años de Iniciativa Ciudadana, 5 años de colaboración

21 María Luisa Osorno 10 años de iniciativa

23Irma Reyes Iniciativa Ciudadana, diez años de trayectoria.

24Ángeles Calderón Iniciativa Ciudadana: El inicio de una trayectoria profesional

26Diana Erika Torres Torres Iniciativa Ciudadana: una experiencia de vida

INICIATIVA CIUDADANA PARA LA PROMOCIÓN DE LA CULTURA DEL DIÁLOGO, A.C.

BRÚJULA CIUDADANA 73

10° aniversario

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DIEZ AÑOS DE ALIANZAS Elio A. Villaseñor GómezDirector

Celebrar los diez años de Iniciativa Ciudadana para la Promoción de la Cultura del

Diálogo es una experiencia de aprendizaje en la construcción

conjunta, y con otros, de nuestro aporte como organización.

Al elaborar nuestras iniciativas en el espacio público, siempre buscamos la interacción de los distintos actores para construir políticas públicas desde una mirada ciudadana, sumando esfuerzos, inteligencia y diálogo. Esta cultura de ser parte de las decisiones del interés público, nos ha enseñado a ser tolerantes, transparentes e innovadores en las formas para influir.

En estos diez años hemos visto como algunos temas de nuestra agenda pública siguen vigentes, princi-palmente los derechos humanos y la construcción de pesos y contrapesos en nuestra democracia. En Iniciativa Ciudadana hemos colocado como tema central la construcción de la ciudadanía desde un imaginario transnacional, y en este escenario del siglo XXI, el actor emergente son los migrantes.

México es un país de migrantes, tanto por la movi-lidad interna como por los millones de mexicanos que radican en el exterior, principalmente en Esta-dos Unidos. Ante esta realidad, hemos contribuido junto con nuestros aliados binacionales en colocar la agenda de los migrantes como sujetos de derechos y vincularla en la agenda pública en ambos países, tanto aquí como allá.

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10 Años construyendo alianzas estratégicas

Estos diez años de alianzas e iniciativas ciudadanas han sido un gran laboratorio para elaborar proyectos que influyan en la agenda pública desde local hasta lo glo-bal. Nuestra vocación ha sido la coordinación con otros actores y fortalecer la red social para generar grandes olas por las diversas causas de la dignidad ciudadana.

Dentro de Iniciativa Ciudadana, la energía predominante en cada uno de sus miem-bros es la actitud de apertura en la búsqueda de nuevos caminos y la innovación. Estamos conscientes de que somos parte de una nueva generación, nos mueven las causas de los nuevos temas y de los actores emergentes, por lo que tener una actitud de sinergia permite hacer puente entre la sociedad.

Quiero agradecer la confianza demostrada por nuestros aliados y felicitar a mis compañeros y compañeras por ser parte en la construcción de esta nueva época y de una nueva humanidad donde eliminemos la desigualdad, la xenofobia y donde el ser humanos sea más humano.

¡Felicidades por los diez años de alianzas y de innovación ciudadana!

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UNA DéCADA DE CONSTRUCCIóN DE CIUDADANíA TRANSNACIONALCarlos Heredia Zubieta

H ace diez años, en 2005, el presidente de México era Vicente Fox y el de Estados Unidos era George W. Bush. La relación

bilateral estaba marcada por los ecos de los ataques terroristas del 11 de septiembre de 2001. El Presidente Lula gozaba de gran popularidad al tiempo que Brasil y Sudamérica vivían el auge de los precios de las materias primas. Ángela Merkel se convirtió en la primera mujer canciller federal de Alemania, y hoy todavía sigue en el poder en Berlín. China nos avisó que venía por todas las canicas en la economía mundial.

En 2005 tuvo lugar el lanzamiento de YouTube y hoy estamos tan acostumbrados y aficionados a usarlo que pensamos que toda la vida lo hemos tenido. ¡No existía Twitter, ni siquiera lo habían inventado! Brozo presentó los videos del ‘Señor de las ligas’. La Cámara de Diputados le retiró la inmunidad al entonces Jefe de Gobierno, Andrés Manuel López Obrador, pero dicha decisión se dejó sin efectos prácticos. Las redes sociales se volvieron el instrumento más versátil para opinar sobre política, pero por sí solas no bastan para transformar nuestras sociedades.

México y Estados Unidos seguíamos acu-sándonos mutuamente: ellos a nosotros, de enviar trabajadores indocumentados y drogas hacia el norte; nosotros a ellos, de inundar el sistema financiero mexicano con dinero ‘caliente’ de drogas y crimen organizado, y de vender armas de asalto a las bandas criminales mexicanas en más de 8 mil armerías a lo largo y a lo ancho de nuestra frontera común.

No se registraron mayores progresos en lo que Washington denominó Reforma Migra-toria Integral.

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Todavía no existía en 2005 la legislación conocida como Dream Act (Development, Relief and Education for Alien Minors Act, o Ley de fomento para el progreso, ali-vio y educación para menores extranjeros), cuyo primer proyecto fue presentado en septiembre de 2006 por los senadores Orrin Hatch (Republicano de Utah) y Richard Durbin (Demócrata de Illinois), que una década después aún no ha sido aprobada a nivel federal.

Aunque los estados de la Unión Americana no tienen facultades para legislar en materia migratoria, se multiplicaron las ordenanzas locales y estatales vinculadas con temas de acceso a servicios educativos y de salud para inmigrantes indocumentados.

Fue entonces que nacieron los ‘Dreamers’, jóvenes indocumentados que se convir-tieron en un actor político que ha innovado las formas de hacer política en Estados Unidos y paulatinamente en la relación bilateral entre la Casa Blanca y Los Pinos.

Empezamos a escuchar de unos jóvenes que, sin ser nacidos en Estados Unidos, pasaron de ser niños a adolescentes y jóvenes en el marco de la cultura y de la política estadounidense. Nacieron en México, tienen nombres mexicanos, pero piensan en inglés y sueñan en inglés, crecieron en inglés, y soñaban en inglés.

En 2009 empezamos a escuchar de los primeros dreamers deportados a México, algunos de los cuales eran sacados de sus casas o de sus es-cuelas sin previo aviso y puestos del otro lado de la frontera, en un país que ya no era el suyo, porque sus padres los llevaron al norte desde muy pequeños.

Hablamos entonces de los dreamers de allá, que se acogieron al DACA y están luchando contra políticos furio-

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sos porque no pueden aceptar que Estados Unidos sea un arcoíris de seres humanos con raíces en todos los rincones del planeta. Hablamos de los dreamers de acá, removidos de los sitios donde nacieron y crecieron. Buscamos a ambos, y ahora nosotros nos convertimos en sus ‘fans’, en sus admiradores porque han cambiado las formas de hacer política.

Iniciativa Ciudadana co-editó y publicó el libro pionero de Jill Anderson y Nin Solís, ‘Los otros dreamers’, lo cual fue un gran acierto, pues se ha convertido en una referencia obli-gada para asomarnos a esta nueva realidad de jóvenes que como ellos mismos dicen, son undocumented (sin papeles), unafraid (sin miedo) y unapologetic (sin pedir disculpas).

Actúan con la fuerza de quien sabe lo que quiere, de quien tiene como proyecto hacer

valer la ciudadanía transnacional: “puede ser que no tenga papeles ni de México ni de Estados Unidos, pero quizá tengo familia o amigos en los dos países, y quiero moverme entre dos culturas, dos idiomas, dos reali-dades vecinas y a la vez tan distantes”, así más o menos va su mensaje. Son jóvenes #DeAquiYDeAlla.

En Iniciativa Ciudadana apostamos desde el inicio por el apoyo y acompañamiento a los dreamers, aquí y allá. Hoy, diez años después, ratificamos esa apuesta de construcción de ciudadanía transnacional. Es una de las prioridades de nuestro trabajo, pero más allá de eso, se ha convertido en una causa que nos entusiasma y nos apasiona, porque es la causa de la vida, de la justicia y de la transformación de nuestras sociedades, que buscan soluciones compartidas a desafíos comunes.

Su ímpetu y compromiso para abonar en la construcción de un diálogo que marcara el consenso de la sociedad y el gobierno como partes del sustento democrático del que estaba urgido el país, me alentó a aceptar su invitación para sumarme a ese objetivo que me sirvió para vencer la resistencia que residía en mi persona para formar parte de una participación ciudadana, en la que era obligado el ser consciente de uno mismo, desarrollar sensibilidad y saber espabilarse frente a una realidad entonces pasmosa e insultante, para proyectar un futuro diferente, futuro en el que la participación se fundara en una idea de ciudadanía activa, empoderada e implicada con los asuntos colectivos y comprometida con la construcción de un proyecto común: construir ciudadanía con un modelo en el que la sociedad civil fuera protagonista activa, propositiva y con incidencia en las cuestiones públicas y en la toma de decisiones.

Díez años agolpan un cúmulo de recuerdos y experiencias profesionales y vivencias personales. No viene a mi mente con claridad el día exacto,

aunque sí el año, era 2005, en el que de manera fortuita pero afortunada, asistí a una reunión con Pedro Javier González Gutiérrez y Carlos Camacho Alfaro en la que Elio Villaseñor esbozó con un entusiasmo desbordado, pero con un sentido claro, la necesidad de impulsar una organización que diera voz, presencia e incidencia a la sociedad civil.

UNA MIRADA RETROSPECTIVA CON EL ÁNIMO DE FUTURO

Francisco Alvarado ArceÁrea de Comunicación

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Esas ideas germinaron entre el grupo de personas que al paso de los días y después de reuniones y comidas en las que se intercambiaban e incluían opiniones provocadoras y conceptos sobre el que-hacer ciudadano en política, así como el de, como decía Elio, “ponerle nombre al niño”, fue como nació Iniciativa Ciudadana, a cuya fundación también fui venturosamente invitado a formar parte.

Inicialmente participé como relator en diversos foros en los que Iniciativa Ciudadana se estrenó como organización convocante en el análisis, discusión y presentación de temas y propuestas relacionadas

con la democracia, la participación ciudadana y la migración.

Pero el gran brinco para mi participación más formal se dio cuando Elio nos invitó a construir en el seno de Iniciativa Ciudadana un espacio que tuviera como objetivo dar forma al proyecto de nuestra organiza-ción: la comunicación, como basamento ineludible del Diálogo, un propósito ingénito a la denominación de origen de la institución.

Para lo anterior, la tarea fue ir construyendo al paso de los días, meses y años un instrumento de infor-

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mación sobre los acontecimientos cotidianos. La especialización fue tomando forma y en sintonía con los asuntos en los que Iniciativa Ciudadana fue labrando nichos de incidencia, en congruencia con su visión y su misión fundacionales.

Pero la labor al paso de los años no se circunscri-bió al ámbito estrictamente informativo, sino que implicó embarcarse en un proyecto más ambicioso en el que un equipo versátil –formado por su ser-vidor, Amanda Georgina González Ochoa, Pedro Javier González, Azyadeth Adame Ramírez, Karla Ambrosio Torres, Yazmín Benítez Sánchez, Daniel Tacher Contreras y Guadalupe Cruz, y perdón por si se me escapa algún nombre-, se aplicó a elaborar cotidianamente elementos de información siste-matizada y análisis puntual y ecuánime que dieran cuenta de la realidad política, económica, social y, obviamente, de la participación ciudadana en el país.

Ese propósito dio pie a la consolidación de nues-tras publicaciones Síntesis Informativa Diaria con su complemento Binacional, Brújula Ciudadana, Voces Ciudadanas y también su complemento binacional, así como a espacios virtuales en las redes sociales, que hoy día tienen como eje el propósito inicialmente planteado, pero que “co-rre” paralelamente con los avances tecnológicos e informáticos en los que Iniciativa Ciudadana cuenta con un nicho y aforo en una esfera de la comunicación social que nos ha demostrado que la experiencia y el profesionalismo son compo-nentes básicos para ingresar, permanecer, destacar y proyectarse como un espacio de comunicación profesional.

Díez años después, el reto es formidable, pues como integrante de Iniciativa Ciudadana no sólo hago un ejercicio de remembranzas y recuerdos sino que me permite ubicar con certeza mi expe-riencia y convicción de participar en una Institución consolidada a golpe de esfuerzos y compromisos colectivos, que abonan a la Democracia y a la participación activa de la Sociedad.

Díez años que, me permiten tomarme el atrevi-miento de presumir ser miembro y parte activa de una Institución que me ha dado la oportunidad de forjarme profesionalmente y que, con la distancia del que mira atrás, ve a otra persona en los propios ojos, y con retos futuros de los que ninguno de los que aquí escribimos podemos darnos el lujo de quedar al margen.

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OBSERVACIóN ELECTORAL BINACIONALDaniel Tacher Contreras

En 2012 -año marcado por múltiples coyunturas políticas- fui invitado a participar como coor-

dinador del primer –y hasta el momento único- observatorio electoral especializado en voto de los mexicanos residentes en el extranjero. Este proyecto se desarrolló con apoyo del Programa de Naciones Unidas para el Desarrollo, en el marco de la elección presidencial de ese año y fue la segunda ocasión en que los mexicanos residentes fuera del territorio ejercieron su derecho a votar.

El reto propuesto implicaba política y metodológica-mente desafíos en diversos niveles. En lo político el proyecto tenía como fin robustecer el debate sobre las limitaciones del modelo de votación desde el ex-tranjero, cuyos obstáculos se reflejan en los niveles bajos de inscripción y votación, sin poner en riesgo la imparcialidad de la observación electoral. Meto-

dológicamente buscamos que el proyecto se nutriera de los debates académicos más avanzados sobre el tema y con ello determinar las mejores herramientas y técnicas de investigación.

Con este escenario, tuve la oportunidad de invitar a colegas profesores-investigadores de la Universidad Nacional Autónoma de México, de la Universidad Autónoma Metropolitana y de mi Universidad Au-tónoma de la Ciudad de México. Con este perfil de investigadores se garantizó un trabajo de alto nivel.

Los resultados de nuestro trabajo permitieron po-sicionar a Iniciativa Ciudadana en los debates de la reforma político-electoral a nivel federal y estatal. Los resultados fueron presentados ante la Comisión de Asuntos Migratorios de la Cámara de Diputados en diciembre de 2012 pasando por los congresos de Zacatecas, Puebla y Oaxaca, así como en el Instituto Electoral del Distrito Federal, además de los espacios universitarios en Puebla y la Ciudad de México. El trabajo de incidencia nos permitió finalmente llegar a foros y mesas de trabajo públicos y privados con consejeros electorales, diputados y senadores.


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Nuestras propuestas se fundamentaban en cuatros aspectos. El primero, se enfocó a explicar la importancia de establecer mecanismos para emitir credenciales para votar a los mexicanos residentes en el extranjero, pues implica el primer candado para la participación política y garantiza su derecho a la identidad. El segundo, modificar el modelo de votación para ampliar las posibilidades de ejercer el derecho, propusimos utilizar las herramientas de voto electrónico y explorar mecanismos de votación presencial. Tercero, demostramos que un elemento central de la participación es la confianza y el (des)conocimiento del sistema político, por lo que la autoridad electoral no debía solamente realizar acciones de comunicación también se deben generar programas específicos de capacitación y educación cívica con perspectiva binacional. Finalmente, sostuvimos el valor de la representación política para una población de más de 30 millones que radican fuera del territorio nacional.

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Sin esperar al texto final de la reforma polí-tico-electoral, ni la acción institucional, deci-dimos dar un paso adelante y comenzamos a desarrollar nuestros propios proyectos de capacitación y educación cívica. Reforzamos la experiencia de educación a distancia que comenzaba a realizarse en Iniciativa Ciu-dadana en nuestra plataforma de Iniciativa Virtual. Con este proyecto comenzamos a transformar la observación electoral en un proyecto de educación cívica binacional.

A tres años de distancia el proyecto de Observación Electoral Binacional ha dado diversos frutos y generado proyectos con organizaciones de mexicanos residentes en Estados Unidos. Ahora comenzamos una nueva etapa rumbo a la elección de 2018 y las elecciones estatales. Con el proyec-to “Credencialízate y vota, es tu derecho”

nuevamente apostamos por retomar desde la sociedad civil el papel protagónico del ciudadano en los procesos electorales.

En lo personal, mi paso por Iniciativa Ciu-dadana me ha permitido traer al ejercicio político las reflexiones que desde la acade-mia he realizado en los últimos diez años sobre el ejercicio de derechos políticos desde el extranjero y, como investigador, he podido nutrir mis reflexiones con la práctica política. Los retos futuros se en-focan a continuar con esta vinculación aca-démico-práctica y cuyos frutos esperados serán, por un lado, contribuir al estudio de los procesos electorales binacionales, y por otro, impulsar, fortalecer y generar condiciones para que los mexicanos que residen en el extranjero ejerzan su derecho a tener derechos donde sea.

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CONSTRUYENDO POLíTICAS PÚBLICAS DESDE LA SOCIEDAD

CIVILYazmín Benítez Sánchez

E stamos celebrando el décimo aniversario de Iniciativa Ciudadana para la Pro-moción de la Cultura del Diálogo, uno de sus principales propósitos ha sido, y

sigue siendo, fortalecer a las organizaciones de la sociedad civil, a través de múltiples acciones, tales como servicios de información especializada en temas de la sociedad civil, así como talleres y cursos de capacitación, entre otras acciones.

A lo largo de estos años hemos demostrado que algunos mitos que se tienen sobre la sociedad civil no son reales.

Como sociedad civil organizada, en Iniciativa Ciu-dadana, hemos participado a partir de nuestro conocimiento de la realidad de los migrantes, en la elaboración de las leyes de migrantes en Mi-choacán, Oaxaca y en el Distrito Federal. Hemos demostrado que tenemos el conocimiento para incidir en el proceso legislativo. Al mismo tiempo, hemos establecido alianzas con otras organiza-ciones para presionar al Senado y la Cámara de Diputados para que se lleven a cabo programas que beneficien a migrantes.

Sin embargo, también hemos participado en la imple-mentación de políticas públicas como fue el caso del programa Construye T, en el cual Iniciativa Ciudadana fue la organización que coordinó los esfuerzos de 36 organizaciones de la sociedad civil en todo el país. El objetivo del programa era ofrecer herramientas a jóvenes de escuelas de nivel media superior para que pudieran conformar su proyecto de vida, en más de 1,500 escuelas de nivel media superior.

Es una política pública de la Secretaría de Educación Pública, el Programa de Naciones Unidas para el Desarrollo y organizaciones de la sociedad civil, en este programa no sólo implementamos la política pública fundamental para enfrentar los problemas

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de deserción escolar, de violencia en las escuelas y apoyar a jóvenes en su proyecto de vida.

No fue fácil convencer a la SEP de que la sociedad civil podía implementar políticas de gran envergadu-ra, como el programa Construye T, que podíamos trabajar de manera coordinada entre organizaciones de la sociedad civil, así como con organismos inter-nacionales como el PNUD, UNICEF o UNESCO, que también participaron, así como con autoridades gubernamentales. El proceso tuvo sus contratiem-pos, pero se solventaron con el diálogo abierto y respetuoso.

A partir de esta experiencia, Iniciativa Ciudadana también implementó en escuelas de educación bá-sica en Michoacán el proyecto “La escuela como centro de cohesión social”, el cual trató de volver a la escuela como eje de la comunidad, con el fin de promover la cohesión social, frente a la cre-ciente violencia que vivía el estado, fue necesario crear espacios de diálogo y de encuentro entre las comunidades, ya que el proyecto no sólo abarcó a los estudiantes de dichas escuelas, sino también a directivos, docentes y padres de familia.

De esta manera durante dos años se llevaron a cabo talleres para fortalecer la cultura del diálogo y la solución pacífica de los problemas, tan necesario en nuestras comunidades, como una forma de enfrentar la violencia y volver a la convivencia pacífica. Fue una experiencia muy enriquecedora y el impacto que tuvimos fue muy bueno en la entidad.

En Iniciativa Ciudadana hemos tenido como un eje de trabajo fundamental el fortalecimiento de los actores sociales, con la implementación de estas políticas públicas en el área de comunicación, no sólo pudimos incidir para su construcción, sino que fortalecimos capacidades de organizaciones de la sociedad civil, así como ayudar a las comunidades donde trabajamos a mejorar sus niveles de convivencia.

No fue un trabajo fácil, pero sí muy gratificante.

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LA SOCIEDAD CIVIL DEL SIGLO XXI

Azyadeth Adame Ramírez

Cuando yo me integré a colaborar en Iniciativa Ciudadana, recién habían concluido las elecciones de 2006. Se respiraba un entorno político postelectoral de mucha

polarización entre los y las ciudadanos. Es por ello, que fue muy interesante que desde sus primeras acciones siempre los y las integrantes de Iniciativa Ciudadana, trabajaron para crear espacios de consenso en donde diferentes actores de los distintos sectores de la sociedad pudieran dialogar sobre los diversos procesos en torno a las políticas públicas. Esto fue un punto fuera de la curva en el marco de la crisis de gobernabilidad que vivía nuestro país en aquel entonces.

Desde su inicio, Iniciativa Ciudadana siempre ha trabajado junto con otros, incorporando las

miradas de las fuerzas vivas de la sociedad y de los diferentes niveles

de gobierno, para materializar propuestas que beneficien a la

sociedad, siempre con un enfoque de incidencia en los espacios de

toma de decisiones.

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Iniciativa Ciudadana vive un sueño. Intentamos desde nuestros diferentes espa-cios, transformar la realidad de las personas moviendo estructuras de poder. En el transcurso de los ocho años en los que he participado en la institución, he visto materializarse diferentes leyes en pro de nuestros hermanos migrantes y en pro de la participación ciudadana en espacios clave, la implementación de políticas públicas que benefician a millones de jóvenes en nuestro país y otras veces desde el cabil-deo del presupuesto para el apoyo a programas clave en temas como migración, participación ciudadana y fortalecimiento a las organizaciones de la sociedad civil.

Otra estrategia de incidencia en Iniciativa Ciudadana son nuestros espacios de capacitación, que nos ayudan a conocer las diferentes realidades sobre un tema en común y poder construir estrategias compartidas de intervención tanto a nivel nacional como en las diferentes representaciones de México en el exterior. Apo-yamos también diferentes campañas para posicionar temas de interés nacional en la agenda pública como el Movimiento por la Paz Justicia y Dignidad.

Yo definido a Iniciativa Ciudadana como una organización que trabaja por construir un mejor futuro para nuestro país, en donde todos y todas no seamos simples es-pectadores del espacio público, sino actores protagonistas de las decisiones que se toman y que nos interesan a todos y todas.

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10 AÑOS DE INICIATIVA CIUDADANA, 5 AÑOS DE COLABORACIóN

Karla Ambrosio Torres

R ecuerdo el día en que la conocí. Llegó a mi vida gracias a mi amiga y colega Brisa Ceccon, quien en un viaje impor-

tante a Estados Unidos me invitó a colaborar en el programa de migración, desarrollo y ciudadanía binacional en el 2010. Yo regresaba de un año sabático en la India y estaba deci-dida a dedicar mi vida profesional a un proyecto ético, con alto sentido humano e impacto social. Así conocí a Iniciativa Ciudadana para la Promoción de la Cultura del Diálogo.

Al incorporarme a la institución el reto fue enorme. Sinceramente, no sabía nada de mi-gración. En ese momento la institución estaba animando la elaboración de una propuesta integral de política migratoria a través de un Foro Internacional en Morelia, Michoacán. Allí pude comprender el alcance de lo que se estaba gestando. En el evento participaron líderes migrantes de diversas partes de Mé-xico y Estados Unidos, autoridades federales y estatales, congresistas, académicos, otros miembros de la sociedad civil, medios de comunicación y ciudadanos responsables.

Ahora lo comprendo, el Foro Binacional fue un ejercicio de gobernanza.

Como resultado de ese Foro continuaron muchos pasos importantes para colocar el tema de la migración en la opinión pública y construir una agenda ciudadana al respec-to. Eventos similares en Puebla, Zacatecas, Chiapas, Guerrero, Oaxaca, la Ciudad de México y otros estados, fueron incorporando diversas aristas sobre emigración, migración de tránsito, migración de retorno, refugio; así como derechos humanos, transparencia

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y rendición de cuentas, diversidad, juventud y más. Cabe resaltar el importante logro de la Ley de Interculturalidad, Atención a Migrantes y Movilidad Humana de la Ciudad de México, publicada en la Gaceta Oficial el 7 de abril de 2011.

Otro logro importante ha sido la consoli-dación de las redes de organizaciones que trabajan en asuntos de migración, en es-pecial el Grupo de Trabajo sobre Política Migratoria y el Colectivo Migraciones para las Américas. Ambos espacios son de una riqueza profesional y humana increíbles, e Iniciativa Ciudadana siempre ha aportado en los asuntos de la migración binacional y en las acciones de comunicación y difusión. Tampoco podemos olvidar a la Red por la Rendición de Cuentas, cuyo trabajo ha sido sumamente importante para construir un país transparente y sin corrupción. Les su-giero leer a mi colega Peter Winkel quien profundiza al respecto.

Otro componente relevante es la creación y la consolidación del equipo de comunicación, que gracias al profesionalismo y trabajo de mis colegas Francisco Alvarado, Azyadeth Adame, Yazmín Benítez, Guadalupe Cruz, Daniel Tacher y Ángeles Calderón, Iniciativa Ciudadana se ha vuelto un referente informativo a través de Brújula Ciudadana, Síntesis Diaria y Síntesis Binacional, Voces Ciudadanas y Voces Migrantes, el Observatorio Bina-cional, el programa de radio Voces de la Ciudad de México, el Video Blog, los sitios de internet, las publicaciones y la redes sociales. Con esta gama de herramientas de difusión, ofrecemos día con día una visión ciudadana, plural y fundamentada de los aconteceres de la vida nacional e internacional.

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También quisiera resaltar la importancia del proyecto de Iniciativa Ciudad de México, que surge en 2013 por el acuerdo de colabora-ción No. OM/CC-002-2013 entre Iniciativa Ciudadana para la Promoción de la Cultura del Diálogo y la Oficialía Mayor del Gobier-no del Distrito Federal. La apertura de las oficinas en Los Ángeles, California y Chica-go, Illinois, y el trabajo coordinado desde la Ciudad de México, ha permitido acercar a la Ciudad y a los ciudadanos, reconociendo y actuando corresponsablemente con las de-pendencias del Gobierno del Distrito Federal para hacer garantes y efectivos los derechos más allá de las fronteras. Este proyecto ha logrado implementar una nueva arquitectura institucional entre sociedad civil y gobierno para la atención y vinculación con los mexica-nos en el exterior, reconociéndolos además como aliados para el desarrollo. Claro que las guirnaldas las llevan Daniel Tacher, María Luisa Osorno, Irma Reyes, Alejandra Segura, Janet Valdés y David Herrera por su formida-ble trabajo. La información detallada puede ser consultada en: www.mexicocityusa.org

El Diplomado de Migración y Gobernanza, el Diplo-mado de Primeros Auxilios Psicológicos a Personas Migrantes con Perspectiva de Derechos Humanos y los talleres sobre Legalidad y Acceso a la Informa-ción Pública son sólo algunos ejemplos. Gracias a Azyadeth Adame y a Diana Torres por permitirme aprender las virtudes del e-learning y lo gozoso y divertido que es ser un real tutor virtual.

En este décimo aniversario los desafíos no son po-cos. La débil democracia en México, la simulación participativa, las múltiples formas de violencia, in-seguridad e impunidad y la evidente reducción de fondos y el debilitamiento al fomento de la sociedad civil nos lleva a innovar y a ser autosustentables. En lo personal, me he comprometido a profesionalizar mis aportaciones dentro de la institución a través de la formación en administración y el emprendimiento social. Sin duda, con este compromiso, algún buen bonche de granitos de arena servirán para fortalecer a esta gran institución.

Finalmente, quisiera agradecer a los que han confiado en mí, en especial a Elio Villaseñor, Gabriela Sánchez y Carlos Heredia, cuyo ejemplo y compromiso social son impecables.

Por último es importante señalar el valor agregado que Iniciativa Ciudadana aporta a la formación de ciudadanía, en especial, a través de los programas de capacitación y la innovación a través de las tecnologías.

Nuevamente, gracias a todas y todos.

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10 AÑOS DE INICIATIVA CIUDADANA

María Luisa Osorno

S e conmemoran 10 años de su creación, conmemorar no significa única ni necesa-

riamente celebrar. Significa hacer memoria, recuperar lo vivido, evaluar el presente y establecer y lanzarse con más fuerza hacia el futuro. Esa es mi reflexión después de la última reunión de trabajo, al terminar el mensaje que nos dio Elio Villaseñor. Ese hombre visionario que encabeza a este gran equipo de trabajo que no dejó de sorprenderme, cuando me di un tiempo y repasar las etapas en las que he tenido el gusto de formar parte. Muchas han sido las ocasiones de éxito, pero también de obstáculos, de cambios, de ajustes de metas, pero no han permitido que estos cambios cambien su misión. Esa sigue firme ante los cambios.

Iniciativa Ciudadana, siempre va anticipándose a los hechos, siempre un paso adelante de los acontecimientos en el país, esto es un gran reto para mí, ya que la Administración Contable debe responder eficientemente en la coordinación de los recursos materiales y económicos.

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Hoy me siento agradecida al hacer mi auto evaluación durante estos 10 años. De mi crecimiento personal y profesional, claro es que no hay éxito sin tropiezos, pero hasta eso también he logrado, tomar los tropiezos como lecciones, y que fácil me es decirlo cuando me he contado con el apoyo y fortaleza de Iniciativa para ayudarme a seguir adelante.

En definitiva, los verdaderos y buenos principios acompañados del esfuerzo y un excelente manejo, traen muchas recompensas como las que este gran equipo que es Iniciativa Ciudadana para la Promoción de la Cultura del Diálogo, A. C., ha recibido.

Gracias y Feliz Aniversario.

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INICIATIVA CIUDADANA, DIEZ AÑOS DE TRAYECTORIAIrma Reyes

Con gran ansiedad esperé el poder inte-grarme a trabajar con el Sr. Elio Villa-

señor con quién ya había trabajado en otra organización, siempre el llegar a una nueva organización da muchos nervios, de esto ya estoy hablando de 10 años.

Siempre agradeciendo la oportunidad que se me dio y el ir creciendo día con día en el plan laboral, me tocó hacer los primeros envíos de la Síntesis Informativa dentro de mis responsabilidades, el ver los proyectos que se iban obteniendo, como SEDEREC, PNUD, EDUCACION, en todos ellos fuimos participando en el área administrativa, el estar al pendiente de todos los requerimientos que se iban teniendo como pagos, compra de boletos, preparativos para eventos.

Ha sido un gran reto el presentar los in-formes administrativos a diferentes depen-dencias como Indesol y PNUD, que tienen muy marcados sus líneas de presentación, el ir preparando un calendario para que no se nos fuera a pasar algún boleto de avión, viáticos y demás necesidades.

Deseo seguir colaborando en Iniciativa Ciu-dadana y que se cumplan muchos años más.

Estos años han sido de aprendizaje y de ir viendo

como Iniciativa Ciudadana va creciendo y se va posicionando

como una organización de opinión pública, pero veo que es tiempo hacer una

evaluación de todos estos años y marcarnos nuevas metas, es tiempo de evolucionar y adaptarnos a los cambios.

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INICIATIVA CIUDADANA: EL INICIO DE UNA TRAYECTORIA PROFESIONAL

Ángeles Calderón

D espués de un extenuante proceso de tesis, fal-taban pocos meses para titularme de Licenciada

en Ciencia Política y Administración Urbana, por lo que surgía la inquietud de dónde iba a trabajar después de la titulación. Un día revisando el correo me encontré con la convocatoria de que estaban buscando a una persona para apoyar en una aso-ciación civil y así fue como ingrese a colaborar en Iniciativa Ciudadana con el Proyecto del Observa-torio Binacional, el cual había dado inició en el 2012, cuyo coordinador es Daniel Tacher.

El Observatorio Binacional es un espacio que busca contribuir con información a nuestros connacionales dentro y fuera del país, con temas de migración, derechos políticos, elecciones, credencialización, etc. Al entrar a la asociación, el primer desafío que encontré fue el manejo de las Tecnologías de la In-formación y Comunicación, las denominadas TIC’s

desde el manejo de las redes sociales y un micrositio en internet. Tenía conocimiento de ellas pero no el necesario para poder ayudar a coordinar el Observa-torio. El poder trabajar con programas nuevos, tiene cierto grado de dificultad hasta que te familiarizas con ellos, pero encontré en Iniciativa Ciudadana un equipo colaborativo, que me enseñó y capacitó para poder desarrollarme profesionalmente.

Una de las grandes fortalezas de la asociación sin duda es su capital humano, no lo digo por ser inte-grante de está, sino porque hemos podido comple-mentarnos y apoyarnos en la medida de lo posible. No hago mención de nombres de quienes recibo ayuda, porque sería enlistar a todas las personas que integramos la asociación, sólo mencionaré el de Karla Salazar Belmont, porque ya no colabora con nosotros, pero el tiempo que estuvo fue de gran apoyo.

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Desde agosto de 2014 a la actualidad soy la en-cargada de actualizar el micrositio y las redes del Observatorio Binacional cuyo objetivo es compartir información estratégica de la actualidad migratoria binacional, para favorecer el ejercicio de derechos fundamentales de los mexicanos en ambos países, reconociendo la participación como un valor fun-damental en la formación de una sociedad demo-crática. Asimismo, en febrero de 2015 comenzó la divulgación del Boletín Semanal del Observatorio y la Síntesis Binacional, en el que se incluyen las noticias que consideramos más relevantes de la semana.

En Iniciativa Ciudadana, la educación y capacitación han

sido pieza clave para poder ayudar a fomentar una sociedad más democrática y participativa,

por ello, en colaboración con otras instituciones, cuenta con

diplomados, cursos presenciales y virtuales, seminarios y talleres.

Ejemplo de ello y en los que he podido participar, son los Seminarios de “Ciudadanos Vigilantes, Gobiernos Responsables”; “El Futuro del Sistema Nacional de Transparencia”; el Curso Virtual “Derecho a la Iden-tidad, Nacionalidad y Residencia” y en el Encuentro de Jóvenes Sin Fronteras #DeAquíYdeAllá.

Recientemente acaba de concluir el Diplomado de Primeros Auxilios Psicológicos a Personas Migrantes con Perspectiva de Derechos Huma-nos, coordinado por Iniciativa Ciudadana y la Universidad Intercontinental, fue una grata ex-periencia, tuve la oportunidad de ser facilitadora en él, como lo dice la palabra, era facilitarles el proceso de aprendizaje a las y los participantes del diplomado. Pero creo que fui yo, la que se llevó más enseñanzas de las personas a las que estuve apoyando, porque fueron ellas quienes me compartieron como es el día a día el trabajo con las personas migrantes.

Actualmente estudio un posgrado por las tardes, he sentido el apoyo de las personas que confor-mamos esta gran institución para no descuidar el trabajo. Considerando que uno nunca deja de aprender, la capacitación y preparación siempre es importante para poder desarrollarnos perso-nal y profesionalmente.

Un logro significativo de la asociación es que está a punto de cumplir 10 años y se ha posiciona-do como una institución que trabaja, que tiene objetivos y que los cumple.

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INICIATIVA CIUDADANA: UNA EXPERIENCIA DE VIDADiana Erika Torres Torres

Se ha caracterizado por ser un actor conciliador más que como agente beligerante en una sociedad que pide a gritos la solución de conflictos mediante el diálogo en contraposición a la violencia. Las bases de Iniciativa Ciudadana se edifican sobre los valores de la democracia, las prácticas dignas y los sueños que se convierten en realidades concretas con el trabajo diario de las y los que allí ponen su corazón.

Reciente ha sido mi integración en mencionada insti-tución, haciéndome la persona menos indicada para hablar sobre las vivencias internas y obstáculos que como organización ha enfrentado a lo largo de los años. No obstante, si puedo abonar en relación al tipo de institución que me ha tocado conocer a una década de su conformación.

Inicialmente me encuentro congratulada y agradecida con Iniciativa Ciudadana por permitirme ser parte de este ambicioso y noble proyecto que apuesta, sin lugar a dudas, por la transformación de un país que requiere de todo el apoyo para reconstruirse como un lugar digno para todas las personas que en él habitamos y transitamos. Me satisface saber que aún existen personas que dedican su vida a trabajar por aquello que muchos consideran “imposible” o “inalcanzable” puesto que es más sencillo darse por vencido antes que comenzar el sinuoso camino de la transformación social.

Me resultó particularmente interesante ver como Iniciativa es un referente importante para otras organizaciones: en términos del personal que allí

Iniciativa Ciudadana es una organización que se ha destacado por acompañar las causas más trascendentes en la vida política y social de nuestro país desde hace 10 años.


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labora, los proyectos que han lle-vado a cabo y como institución solidaria con otras luchas. Si bien, Iniciativa no es ni pretende ser la vanguardia dentro de las OSC, sí es una institución amiga a la cual se le solicita para formar parte las decisiones políticamente im-portantes puesto que tiene una facilidad para crear nuevas redes de colaboración.

Identifico en la organización una genuina preocupación por generar un impacto positivo y contundente en la sociedad, así como en hacer más eficientes las estrategias para alcanzar objetivos concretos a nivel interno. Las nuevas inquietudes que han sur-gido para renovarse como institución hablan de la existencia de una visión a largo que representa un fuerte compromiso con la gente.

Finalmente, durante mi estancia en Iniciativa he aprendido la importancia del calor humano como puente para generar lazos de amistad y trabajo; de tener un verdadero compromiso con la labor realizada aunque los retos sean diversos y muchos. Agradezco las oportunidades que aquí se ofrecen para crecer a nivel personal y laboral: actualmente curso el Diplomado en Migración y Gobernanza el cual ha sido sumamente útil para mi crecimiento profesional, mi participación en el área logística-ad-ministrativa del Diplomado en Primeros Auxilios

Psicológicos para personas Migrantes representó un reto fascinante y mi colaboración en el Encuentro de Jóvenes Dreamer’s que me permitió conocer gente maravillosa.

Estamos a punto de comenzar el nuevo año y se avecinan nuevos desafíos para la organización, sin embargo, esto no la detendrá en su labor por seguir generando cambios en la vida de muchas

personas como hasta ahora lo ha hecho a lo largo de 10 años.

El contenido de La Brújula Ciudadana es de exclusiva responsabilidad de Iniciativa Ciudadana para la Promoción de la Cultura del Diálogo, A.C.

Yazmin Benitez editora de la Revista Brújula Ciudadana Tels. 5514 1072 / 5525 8232 / 5525 8276 [email protected]

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