PREVENCIÓN Y

CONTROL DEL RUIDO

PROFESOR: ROBERTO BLANCO TORRRENS

INTRODUCCIÓNLa minería al igual que otros sectores de la industria, ha sido objeto de una creciente mecanización que ha permitido el aprovechamiento de depósitos minerales de escasas rentabilidad económica hasta épocas recientes. Las ventajas derivadas de tal progreso han sido básicamente, un aumento de la productividad, una reducción de los costos y una disminución en el trabajo físico de los operadores. Simultáneamente con esto algunos inconvenientes entre los que se destaca el incremento del ruido en las áreas de explotación e incluso en su entorno.

De todos es conocido que los ruidos de alta intensidad pueden llegar a provocar en las personas un estado de agotamiento, fatiga nerviosa, disminución de rendimientos y hasta la pérdida de audición. También, los ruidos de menos intensidad pueden perturbar a los habitantes de áreas próximas a las explotaciones, lo que cada día es más frecuente, llegando a ser causas de quejas y reclamaciones que pueden derivar en un estado de conflicto permanente.

Se analizan brevemente las causas y los niveles de ruidos en las instalaciones de tratamiento y equipos móviles, los sistemas de control y previsión, los métodos de medidas y los niveles de ruidos aceptables.

I. CAUSAS Y NIVELES DE RUIDO EN LAS EXPLOTACIONES MINERAS Las dos categorías principales de fuentes de ruidos (se excluye en este análisis el ruido producido por la voladura) y son las plantas de tratamiento y los equipos móviles.Las plantas fijas comprenden una amplia gama de aparatos, que incluyen trituradoras, cribas, cintas, tolvas, celdas de flotación, vibradores, motores de diferentes tipos, etc. Normalmente, se ubican en uno o varios locales próximos a la mina y frecuentemente se construyen cubiertas para proteger a los operarios y a los equipos de las inclemencias del tiempo y para mejorar las condiciones de seguridad.

En la tabla #1 se indican el rango de niveles de ruidos correspondientes a diversos equipos de plantas fijas.

Los equipos móviles en minería son los ocupados en las operaciones básicas de arranque, carga, acarreo, transporte y otros servicios. En la industria minera existe una gran variedad de tipos, modelos y marcas.

En lo referente a las causas del ruido en los equipos móviles más empleados en minería, se han detectado 6 como principales:

Funcionamiento del motor.

Salida de los gases de escape.

Funcionamiento del ventilador del sistema de enfriado.

Funcionamiento de la transmisión.

Funcionamiento del sistema hidráulico.

Movimiento de las orugas o roce de los neumáticos con el suelo, según el tipo de máquinas.

No en todos los equipos estas fuentes de ruido tienen la misma importancia.

II. CONTROL Y CORRECIÓN DEL RUIDO

Las tres soluciones que pueden adoptarse para disminuir el ruido son:

Reducir la causa.

Aislar la fuente emisora

Absorber o atenuar el ruido entre la fuente emisora y el receptor.

Las dos primeras soluciones son las más efectivas, pero a veces requieren el desarrollo de nuevas tecnologías y por consiguiente de tiempo y capital. El diseño de la maquinaria móvil ha mejorado en los últimos años y se ha ido desarrollado sistemas combinados que producen menos ruidos; por ejemplo silenciadores más grandes para los gases de escape, envío del aire del ventilador soplante hacia arriba a través de rejillas que disponen de material absorbente, recubrimientos de gomas en las cajas de los camiones, etc.

Una medida cumplimentaría y de gran efectividad es el garantizar un mantenimiento sistemático d todos lo equipos, ya que así se elimina los ruidos producidos por elementos desajustados o muy desgastados que trabajan con altos niveles de vibración.También se debe señalar que en el caso de la minería a cielo abierto se hace muy difícil predecir los niveles de ruido en las proximidades de las áreas de explotación, ya que tanto las condiciones atmosféricas variables, como el efecto de la propia topografía influyen y modifica las posibles trayectorias repropagación del ruido.

Una técnica bastante extendida consiste en la construcción de barreras o pantallas entre la fuente emisora y el receptor (ver figura #1).

En la práctica la reducción del ruido es menor que la que se calcula teóricamente, lo que se debe a la turbulencia del aire y las posibilidades de dispersión del ruido en la coronación de la pantalla.

Estas pantallas se suelen construir con una altura de 5 a 10 metros, utilizando los estriles de la mina y en ocasiones la plantación de árboles, aunque esta variante es menos eficaz para la reducción de ruidos.

III. MEDIDA Y ANÁLISIS DEL RUIDO Para el control del ruido en la industria minera se utilizan los medidores de nivel de sonido o sonómetros, que responden al sonido de forma parecida a como lo hace el oído humano y dan una indicación objetiva irreproducible del nivel sonoro. Estos sonómetros están básicamente construidos por los siguientes elementos: micrófonos, amplificador, atenuador equilibrado, redes equalizadoras, dispositivos de lectura.

Los sonómetros integradores que se suelen situar en las proximidades de las explotaciones o equipos, registran el ruido durante un cierto tiempo y dan el nivel continuo equivalente en decibeles. Esto permite no solo la medida del ruido ambiental, sino incluso, la medida de los ruidos cíclicos, la valoración del riesgo de elección auditiva y la realización de mapas de ruidos.

IV. NIVELES MÁXIMOS DE RUIDOS ACEPTABLES

Una exposición prolongada a niveles altos de ruido conduce a un deterioro de la audición, aunque el oído puede tolerar variaciones intensas de corta duración.

En ningún caso debe ponerse a una persona a un ruido continuo con un nivel sonoro superior a 115 decibeles o intermitentes superiores a 140 decibeles e incluso una exposición a 90 decibles durante 8 horas diarias puede ocasionar daños en algunas personas.

Cuando la exposición diaria se compone de periodos de ruidos con diferentes niveles sonoros, hay que considerar el efecto combinado, no debiendo exceder el conjunto de lo establecido.

En la tabla #2 se señalan el tiempo admisible de exposición para diferentes niveles de presión sonora.

Tabla #2: Tiempos admisibles de exposición para diferentes niveles de ruido

DURACIÓN DIARIA EN HORAS

NIVEL DE PRESIÓN SONORA EN dB (A)

8 90

6 92

4 95

3 97

2 100

1.5 102

1 105

0.5 110

0.25 115

Los efectos producidos por el ruido sobre las personas se pueden resumir en:

Fisiológicos (deterioro de la audición).

Sicológicos (interferencia con la comunicación hablada, con el descanso y el sueño).

Efectos subjetivos (molestias e irritación).

Efectos sobre el trabajo (molestias, accidentes, situaciones, perdidas de rendimientos, etc.).

Efectos directos sobre la salud.

V. RECOMENDACIONES En el desarrollo de una nueva operación, si requieren minimizar los problemas o las quejas derivadas de los ruidos producidos por las maquinarias e instalaciones, deben cubrirse las siguientes etapas: Identificar las actividades existentes que pueden ser afectadas por el ruido del nuevo proyecto.

Determinar los niveles de ruido de cada operación de trabajo.

Medir los niveles de ruido en las actividades que se realizan.

Comparar los niveles de ruido previstos con los ya existentes.

Estudiar la viabilidad y evaluar las actuaciones correctoras para reducir o eliminar el impacto del ruido.

Las medidas que pueden adoptarse para reducir los ruidos procedentes de instalaciones fijas y equipos móviles pueden resumirse en:

Situar las plantas de tratamiento lo más alejadas posibles delegares poblados.

Construir barreras de sonido entre las fuentes y los receptores.

Cubrir las salas de compresores con estructuras de hormigón.

Revestir las plantas de tratamiento con paredes dobles y rellenas de fibras de vidrio u otros materiales aislantes.

Utilizar en la medida de las posibilidades transportadores de banda en lugar de camiones.

Que todos los equipos móviles posean silenciadores.

Estudiar alternativas de rutas de transportación en zonas cercanas a lugares habitados.

Realizar un mantenimiento sistemático.

Instalar recubrimientos de gomas en molinos, cribas, cajas de camiones, etc.,para reducir el ruido por impacto del material con elementos metálicos.

Utilizar equipos accionados eléctricamente mejor que por motores diesel (aquí también se logra evitar el desprendimiento de gas).

Limitar el trabajo de las unidades más ruidosas a un horario diurno