madafackismo underground #03

MADAFACKISMOUNDERGROUND

Número 3 Mayo 2015

Madafackismo Underground

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Director: Brais Iglesias.Editor Gráfico: Lucas Ricca.Coordinación: Laia Gibert, Alaia Rotaeche.Artículistas: Jaime Cuesta, Sergio Sosa, Samuel Castellano, Joel Ricca, Carlos Gerona, Angel M. Mar-tinez, Cristian Castillo, Guillermo Caridad, Anycka HC, Miguel Aizpuru, Javier Caballero, Ignacio Salga-do, Eder Pozo, MJ Bernáldez. Foto de portada: Lucas Ricca.Ilustrador: Sebastián Blanchet.Fotos: Wikimedia Commons (Salvo indicar lo con-trario)

Esta obra se encuentra registrada bajo licencia Creative Commons, con algunos derechosreservados.

Madafackismo no se responsabiliza de las opiniones de sus artículistas (como por ejemplo poner en un altar a Nirvana o que el director de la revista escriba unos artículos más largos que un parto de octillizos ) que para algo son mayorcitos y no tenemos porqué estar detrás suyo recogiendoles los platos rotos.

Contacto:redaccion@madafackismounderground.comwww.madafackismounderground.com


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ÍNDICEMBC 4

EXPLOSIÓN DEL GRUNGE 12

RESEÑAS DE DISCOS 16

ENTREVISTA: THE SAURS 22

FOTORREPORTAJE 24

GOD SAVE MORRISEY 34

GEORGE HARRISON 40

INDIE GIRLS 44

DAVID BOWIE 48

INSTRUMENTOS 50

LOS FLECHAZOS 52

DESCUBRIENDO A 54

TWONES VAN ZANDT 55

MI PRIMERA VEZ 56

EL BACKSTAGE 58

RUIDO DE FONDO 60

NOVEDADES FESTIVALERAS 61

MADAFACKISMO 62

LA GUINDA FINAL 65


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Muchos no lo hubiesen creído, pero el bar-co del MBC (siglas sobre las cuales aún quiere mantenerse cierto misterio), nuevo

festival musical nacional, acabó llegando a buen puerto. Al de Sagunto, para ser más exactos.


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Y es que la marea no fue propicia, el temporal fue de esos jodidos. El agua, en forma de impre-vistos, empezaba a colarse por los derroteros

de la organización y el público, ya abono en mano, em-pezaba a enloquecer. Cambios en la localización, con la consiguiente terapia de los recepcionistas de los hote-les cercanos, la cancelación de autobuses oficiales… El naufragio parecía inminente, el barco parecía sin rum-bo… pero llegó. En Madafackismo siempre miramos el bright side de todo y, después de vivir la experiencia en nuestras propias carnes, podemos afirmar que el MBC llegó sano y salvo, y que además, acabó apuntando maneras. La maña final de la organización para solven-tar tanto barullo, así como el ambiente (11 de 10) y los grupazos de los que pudimos rodearnos, nos dejaron con ganas de más.


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PROS1. Un cartel sin solapes. Y esto es true story, ni uno. Acabar un concierto y empezar otro, así del tirón, para qué respirar.

2. La tirada nacional. Obviamente, para quien le guste. Para nosotros, no hay ilusioncilla más grande que la que nos producen nombres como Sr Chinarro, Grupo de Expertos Sol y Nieve, Los Punsetes, Novedades Car-minha… y no acabaríamos. Así sí.

3. Propuesta ecléctica. Y ya no sólo por la variedad enorme de grupos y estilos, si no por intentar hacernos ver que hay mundo (¿en serio?) más allá de la música. Teatro, danza, ilustración, libros, charlas… hay un mun-do lleno de posibilidades ahí fuera, chicos.

4. Proximidad: Porque si hay algo mejor que ver a Kip, el líder de The Pains of Being Pure at Heart, dándolo todo en la primera fila de Los Punsetes nosotros no queremos saberlo. Y sin ser vips, que mariconadas las justas.

CONTRAS 1. Las (no) áreas de descanso. Somos jóvenes y amamos la música, deberíamos aguantar 7 horillas seguidas de pie dándolo todo. Pero algunos no seguimos normas, así que por favor, no os cebéis así el año que viene.

2. Algunos horarios. Y entramos en terreno pantano-so, porque no querría ponerme en la piel de tener que cuadrar todo ese barullo. Pero, ay, Za! a las cinco de la tarde nos hizo mucho daño dentro.

3. Los food truck. Hay quien no come en un festival, sólo se hidrata (si es que la cerveza cumple con eso, pero bueno). Desde Madafackismo no vamos a ser se-lectos con la oferta gastronómica –aun cuando se nos había prometido como alternativa y gourmet- pero nos duele habernos dejado el alma en Future Islands y tener que hacer 40 minutos de cola para un Frankfurt.

4. Falta de propuestas para El Friolero. Y por aquí lo somos mucho. Sí, era un poco difícil aguantar el tipo más allá de la 1:00 AM, al ladico del puerto, en plena Semana Santa. Y menos si uno no bebe. Y eso no lo digáis a nadie, pero incluso la inmóvil Ariadna, de Los Punsetes, tuvo que traicionar su sagrado principio de no moverse para ir a coger una chaqueta. Hombre, una carpita o algo nos haría un apaño estupendo.

LO MÁS DESTACADO

Y sí, hay que reconocer que algunos por aquí somos algo tiquismiquis, pero también que todo se nos pasa y todo se nos gana con un buen concierto /el chantaje de toda la vida/. Y qué digo un buen concierto, en el MBC todos los que vimos lo fueron. Pero como nos embar-garía la emoción lidiar con tanto, hemos seleccionado lo mejor de cada día:

VIERNES:1. The Pains of Being Pure at Heart (EEUU – Indie pop, shoegaze). Una pega: echamos mucho de menos la voz femenina. Lo demás: todo ventajas. Los ameri-canos venían a presentarnos su último trabajo, Days of Abandon, pero contentaron un público algo escéptico con los temazos de siempre. En su línea, shoegaze con trazos pop, estribillos suficientemente buenos como para tararearlos días enteros, una fórmula directa y de conexión con el público, los de Kip (quien incluso bajó a hablar con los cuatro que seguíamos ahí después de finalizar el concierto) mantuvieron el tipo e hicieron mover a las primeras filas al unísono. Directos al grano.


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2. Grupo de Expertos Solynieve (Granada - Indie). Una de esas bandas, con uno de esos directos, que podrías calificar solamente con el adjetivo de “bello” sin sentir que les estás haciendo un flaco favor. Pop, folk, country (con algún fallo técnico continuo y con la siempre presente coñita de Jota); solvencia, repertorio, humor y temperamento sureño para amenizar lo que empezaba a ser un atardecer precioso, que explotó en chispas con La Reina de Inglaterra. Me pongo tonta, pero fijaos de quien estamos hablando.

3. Johnny B Zero (Valencia). Uno de los grandes SÍ a la colaboración con Deleste y la incorporación, a pocos días de empezar el festival, de su escenario. Calificar su sonido es arriesgado. Encasillarlo, quizás una injusticia: guitarra, guitarra y más guitarra. Folk rock, blues, una voz que rompe por dentro, gritando por un sonido le-jano y puro a la vez, desgarrador, que te hace saltar de donde sea, cuando sea. “Planted like a tree” suena en nuestras cabezas desde ese viernes.

Me ha costado –y dolido- mucho no meter a Los Pun-setes (Madrid) o a Univers (Barcelona) ahí dentro. Lo nacional siempre tira.

SÁBADO1. Future Islands (EEUU – Synthpop). Lo mejor del sábado, lo mejor de todo el festival y uno de los me-jores conciertos vividos por servidora. Y sí, yo soy una amante del género, también un pelín drama queen, pero atrapa a cualquiera. Yo lo siento, pero las palabras se quedan pobres. Lo mejor será, si no lo habéis hecho ya, que os plantéis en You Tube y bailéis un directo com-pleto al ritmo de Samuel. Imagináoslo en cuerpo pre-sente, en primera fila, y voilà.

2. The Horrors (Inglaterra – Post-punk). The Horrors tocaron justo antes que los ya citados Future Islands y por un momento una creía que iba a ser el último concierto que la cabeza (moviéndose de izquierda a derecha y sin final) podría aguantar. La distorsión se metía hasta el último cacho de cuerpo e impedía abrir los ojos, como si hacerlo fuese a quitarle religiosidad al momento. La cantidad infame de humo, incapaz de hac-er deslumbrar la sombra de ninguno de sus miembros, así como los riffs, los pedales, el sonido atmosférico y oscuro, las texturas llenas de matices, reafirmaban la sensación de estar viviendo algo místico. Still life, you know I’m listening.


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3. Novedades Carminha (Galicia) / Hidrogenesse (Barcelona – Art-rock electrónico). Empezamos con la locura de los segundos para pasar después al pogo desenfrenado (pero entre amigos) de los galegiños. Se-guramente portadores del dolor de pies y de la garganta más jodidos de todo el festival, a la vez de la alegría más tremebunda, son los dos grupos que vivimos con más energía de este MBC.

Hidrogenesse, con sus lanzas de humor y crítica agu-da, inteligente e irónica a todos nosotros a través de sus hilarantes letras, nos hacía descojonar, gritar y pas-arlo como niños. La faceta más desenfadada del synth y las voces distorsionadas. Novedades Carminha, por su lado, nos invitaba –cómo no- al gamberrismo puro y duro, al tomarnos en serio eso de no tomarnos de-masiado en serio, a seguir los pies a ritmo de melodías frescas y divertidas, recordándonos que hacer música por el simple hecho de pasarlo bien y mover el culo es también necesario. Jódete y baila, una bonita orden que acatar.

DOMINGO1. Ash (Irlanda del Norte – Rock alternativo). Y volvi-mos a los 90 inmersos en uno de esos nostálgicos conciertos (¿recordáis lo que era el grunge?). Present-aban nuevo disco, pero el concierto estuvo totalmente repleto de sus hits más imponentes (maravillas como Girls From Mars, Burn Baby Burn o la preciosa Shining Light), coreados –gritados- por un público entregadísi-mo, cuyos cuellos estaban al borde de desnucarse. Rápi-dos, eficaces y contundentes, así son Ash aun después de más de 20 años.

2. Sr Chinarro (Sevilla – Indie, pop rock). Prosa, voz y figura. Humor y mucho amor. Quizás el directo nunca ha sido el fuerte de los de Antonio Luque, puede ser, pero quizás desde aquí tampoco podamos ser objetivos cuando se trata de valorar qué nos produce desgarrar-nos la voz al mismo tiempo que él. Felicidad. Se le criti-ca que su directo suene como ponerse en casa el mismo disco. Yo, rara de mí, a eso lo llamo calidad.

3. Yuck (Londres – Noise-rock, shoegaze). Las com-paraciones son odiosas, y normalmente injustas, pero nos ayudan a acercarnos a la conceptualización de las cosas. En este caso, Yuck ha bebido de sonidos que ha-cen pensar en Sonic Youth o en Dinosaur Jr. Aunque el directo no nos aportó mucho más allá de lo que habría sido la pura y simple escucha a sus diferentes álbumes, podréis imaginar por qué están en esta lista. La simple genialidad que es su sonido bien vale irles a ver una y otra vez.


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La organización sabe que hay cosillas que hay que pulir. Nosotros sabemos que montar un festival es una tarea muy difícil. Y en medio, el amor conjunto a esto que es la música. Habrá segunda edición en 2016 (Semana Santa), y si os hemos convencido un poquito, correréis a coger las primeras entradas, que ya están a la venta. ¡Nos vemos el año que viene!

Laia GibertLucas Ricca

MBC EN CIFRAS

3 días 12.000 asistentes46 artistas+ de 45h de música3 escenarios3 artes (música, escénicas, ilustración)100% ocupación hostelera700 puestos de trabajo


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O L I E N D O AE S P Í R I T U J U V E N I L

LA EXPLOSIÓN DEL GRUNGE

Estamos a mediados de los ochenta, las hair bands y el metal triunfan con su parafernalia glam-ourosa y exhuberante, pero en la denominada

rain city un movimiento alejado de todo esto empieza a germinar, convirtiendo años más tarde a Seattle en el epicentro de la música rock de forma aplastante e indis-cutible. El conocido por sonido Seattle se caracterizaba por sus letras oscuras, llenas de desencanto y apatía ante un sistema consumista y competitivo que acentuaba el peculiar clima de la ciudad, empujando a los inquietos músicos a reunirse en garajes descargando su rabia y frustración.

Sus referencias musicales procedían fundamentalmente de los setenta, y gente como Led Zeppelin, Black Sab-bath y Neil Young están claramente presentes como influencias de las bandas denominadas grunge, donde se aprecian dos tendencias diferenciales: Mudhoney, Soundgarden y Green River, que apostaban por un sonido sucio y más cercano al punk, mientras que ya en los 90, Nirvana y Pearl Jam revolucionan el panorama musical con su talento y frescura más accesible y main-stream, borrando de un plumazo a los Cinderella, Poi-son o Warrant de las preferencias populares de la música alternativa.

Un luctuoso suceso supuso una de las claves para com-prender el boom del sonido Seattle y relanzar sus ventas a límites insospechados: la muerte de Andrew Wood por

sobredosis. Wood era el cantante de Mother Love Bone, donde también estaban varios de los futuros Pearl Jam, Jeff Ament y Stone Gossard, que, junto al guitarra Mike McCready, buscan por todo el país un nuevo frontman y quedan impresionados con la cinta que un alocado surfer californiano les envía. Su nombre era Eddie Ved-der... Su álbum de debut Ten (1991) comenzó a escalar puestos en los charts americanos, y el boom unos meses después de Nirvana y su Nevermind (1991) les impulsó al éxito y la popularidad de forma masiva.

Smells like teen spirit supuso el punto de inflexión definitivo para el cada vez más alabado movimiento, siendo fundamental el espaldarazo y apoyo comer-cial de potentes compañías discográficas, relegando a la pequeña Subpop a un papel secundario después de convertirse en el sello con el que grabaron casi todos los grupos primerizos. Geffen y Sony Music fueron dos de las compañías que apostaron y supieron ver el potencial que había en las bandas de Seattle, llegando Nirvana a ser en 1992 líder de ventas por encima incluso de un mito como Michael Jackson y convirtiéndose singles de ellos, Pearl Jam y Soundgarden en referencias juveniles de la MTV, algo impensable poco antes para unos chi-cos con camisetas y pantalones rotos que malvivían en-tre la apatía y el pesimismo.


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Al rebufo de su éxito, grupos como Mudhoney o los Screaming Trees del talentoso Mark Lanegan consigui-eron éxitos y mejores contratos para grabar sus discos, aunque siempre muy alejados del póker de bandas que lograban un mayor alcance mediático y aceptación ma-siva: Nirvana, Pearl Jam, Soundgarden y los oscuros Alice in Chains. Por esa productiva época se estrena la película Singles, que muestra la vida de jóvenes de Seat-tle interpretados entre otros por Matt Dillon y Bridget Fonda viviendo el efervescente momento musical de los clubs de la ciudad y su modus vivendi, con curiosos cameos de personajes como Tim Burton, Chris Cornell y varios integrantes de Pearl Jam y Alice in Chains.

Según avanza los noventa los jóvenes músicos emp-iezan a distanciarse de ser etiquetados en el mismo saco y dirimen varias luchas por su propia cuenta contra el sistema musical. Nirvana lanza su corrosivo y áspero In Utero, anticomercial y muy crítico, mientras que Pearl Jam anuncia que no grabará más videoclips y entran en guerra contra la compañía Ticketmaster por el precio excesivo de las entradas de sus conciertos, llegando a presentar un alegato en el congreso americano y dejan-do de tocar en grandes estadios, apareciendo estelar-

mente ante el gran público en 1994 junto a su ídolo Neil Young en los premios de la cadena MTV.

El año 1994 supuso casi un punto y final en el fenóme-no grunge debido a las tendencias autodestructivas de dos de su más talentosos y atormentados componentes, Kurt Cobain y Layne Staley: Cobain da cada vez más muestras de no asumir su increíble popularidad y fama, y después de varios rumores sobre la ruptura del grupo, su depresión y adicción a la heroína desembocan en el suicidio con un disparo en la cabeza el 8 de Abril.

Mientras, Staley se hunde también en la heroína y cada vez se muestra menos interesado en el grupo, juguete-ando con una superbanda llamada Mad Season junto a miembros de Pearl Jam y Screaming Trees – como ya hi-cieran Cornell y Pearl Jam con Temple of the Dog hom-enajeando a su fallecido amigo Andrew Wood y bordan-do una bellísima canción cantada por dos de los líderes más carismáticos de la escena rock, Cornell y Vedder titulada Hunger Strike.


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Lamentablemente Staley acabará falleciendo en el 2002 después de dolorosos años de lucha y adicción que le impedían tocar y girar en unas mínimas condiciones, aumentando la leyenda negra del denominado soni-do Seattle y dejando prácticamente solos a Pearl Jam como referentes debido a la separacíon de Soundgarden en 1997 y al discreto éxito de Mudhoney o Screaming Trees, que desemboca en diferentes proyectos de su líder Lanegan al igual que hace Chris Cornell, tocando en solitario o más adelante con Audioslave, pero todo esto ya es otra historia...

Discos más representativos y populares: Nevermind de Nirvana, Ten y Vs de Pearl Jam, Badmotorfinger y Su-perunknown de Soundgarden, Dirt de Alice in chains y Temple of The Dog del grupo creado con el mismo nombre.

Canciones imprescindibles: Jeremy y Alive de Pearl Jam, Smells like Teen Spirit y Come as you are de Nirvana, Black Hole Sun y Spoonman de Soundgarden y Man in the Box de Alice in Chains.

Guillermo Caridad Franqueira


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Desde Boys & Girls, su álbum debut lanzado al mercado en 2012, Alabama Shakes no nos regalaban nada nuevo, salvo el single Don´t

wanna fight, con ese guitarrero comienzo que nos dejó con buen sabor de boca y ganas de más. Este pasado mes ha visto la luz su segundo trabajo, Sound & Color, un disco más blues-rock y que transmite muy buenas vibraciones.

La potente voz soul de Brittany Howard se funde a la perfección con una base instrumental de tintes más southern-rock, mucha guitarra y una potente línea de bajo. La percusión, a cargo de Steve Johnson (uno de los mejores baterías de grupos más recientes), completa esas doce canciones que, sin ser unas iguales a otras, siguen una misma línea, pues tienen los de Alabama un estilo bien definido.

Uno de los mejores temas del álbum, Gimme all your love, es una gran canción al nivel de clásicos; la perfecta unión entre la primera mitad más blues, que se centra en la voz, y la segunda mitad, más instrumental y más dura, envuelve al oyente. Un poco después, la más animada Shoegaze rompe un poco la cierta melancolía del disco y que invita a bailar; el cierre del álbum llega con Over my head, un tema enfocado casi enteramente en la voz de Howard y en cierta ruptura del sonido, supone un broche final idóneo.

De todo esta mezcla, y de ese sonido tan potente que tiene Alabama Shakes, resulta un gran disco, mucho me-jor que el primero, parece que más a conciencia y con grandes no, enormes, canciones.

Alaia Rotaeche@aL_rc

RESEÑA DE DISCOS

En la línea de This Modern Glith, su último ál-bum, lanzado al mercado en 2011, la banda de Liverpool The Wombats nos ofrece un disco

bailable, algo más cercano a la electrónica, con mucho sintetizador, que mantiene la esencia “espectacular” con la que nació el grupo, un poco a lo ópera pop. En conjunto, se trata de un álbum perfecto para pinchar, y en general está compuesto de temas más flojos, como la repetitiva Give me a try, pero también de buenos temas más divertidos, al más puro estilo de sus prim-eros discos, como el single Greek Tragedy o Be your shadow. En su tercer álbum de estudio, el trío británico no hace nada sorprendente, especial ni fuera de su estilo, y eso es precisamente lo que lo hace insulso, si bien no malo. A los fans más devotos del grupo les gustará pero no les encantará, y a la crítica extranjera no le ha entusi-asmado, más bien al contrario. Las críticas han sido algo excesivas, pero es lógico; estamos hablando de un tercer disco. Recordando los terceros discos de grupos como Arctic Monkeys o Vampire Weekend (más o menos de su generación y corte, salvando las distan-cias), quizá esperábamos más. Nada como aquel Let´s dance to Joy Division; esto es mucho más synth, sí, pero también más edulcorado y con menos alma.

En definitiva, un disco “correcto”, muy bailable, eso sí, pero, si me permiten, sin más. Y (es una opinión per-sonal) a veces suenan más a Bastille que a los mismos Wombats.



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THE PRODIGYTHE DAY IS MY ENEMYTras su último disco de estudio Invaders Must

Die publicado hace seis años, The Prodigy vuelven a la carga con The Day is My Enemy,

probablemente su mejor disco desde aquel mitiquérri-mo The Fat Of The Land, un disco que marcó para siempre a toda una generación (entre la que me incluyo), en una época en la que la música electrónica plantó cara al rock y llegó al gran público con artistas como: Apollo 440, The Chemical Brothers, Fatboy Slim o Daft Punk. Obviamente The Day is My Enemy no está a la misma altura ni supera aquel The Fat Of The Land, ni a sus dos primeros trabajos Experience y Music For The Jilted Generation, pero nos devuelve a aquellos agre-sivos Prodigy de los años noventa, que se definían a sí mismos como “electronic-punks”.

Liam Howlett y sus dos secuaces Flint y Maxim regre-san para cerrar muchas bocas de aquellos que decían que Prodigy ya no tenían nada que decir. Se les puede acusar de ser cuarentones ricachones y aburguesados (¿acaso vuestras adoradas vacas sagradas del indie no lo son?, ¿qué estrella de la música no lo es?) pero siguen estando muy en forma.

Abre el álbum la potentísima y apocalíptica The Day Is My Enemy, el siguiente corte es Nasty, el primer single que adelantaron del LP, irónicamente una de sus canciones más Fat of The Land pero una de las más flojas por su obviedad al querer repetir la vieja fórmu-la Prodigy. De las potentes y reconocibles baterías de Rebel Radio pasamos a Ibiza, en la que Howlett junto a Sleaford Mods critican a todos esos Djs estrellitas que pueblan la isla, Ibiza’s rotting in crusted rocks reza uno de los versos de la canción. Destroy, un tema que pasa sin pena ni gloria y de ahí a Wild Frontier, donde recuperamos el sonido que ha practicado la banda este siglo XXI, en el que a pesar de tener trabajos irregulares

han sacado hits incontestables como Girls, Omen o Invaders Must Die. Wild Frontier se une a esta lista y seguro que tendrá hueco en sus directos. Rock Weiler, sin embargo, parece un simple tema de relleno. En el siguiente tema titulado Beyond the Deathray respira-mos un poco con una especie de interludio. Rhythm Bomb junto a Flux Pavilion decepciona un poco pero sigue manteniendo la intensidad y agresividad del resto del disco. En la parte central del álbum aparecen Road-blox, que nos aporta un poco de sonido Drum & Bass y Get Your Fight On, una canción muy marca de la casa. El disco se cierra con Medicine, Invisible Sun y Wall of Death, temas bastante intrascendentes en general.

Como decía al comienzo, es de lo mejor que ha saca-do The Prodigy desde Fat Of The Land, aunque como parte negativa diría que el disco se hace largo y le sobran algunas canciones que no aportan nada.

Por último, os recordamos que podremos ver a Prodigy y su brutal directo en el próximo FIB.

Cristian C. @sickcris

RESEÑA DE DISCOS


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Circa Waves son un cuarteto de Liverpool que debutan este año con un disco donde destacan unas pegadizas guitarras y unas canciones de

tres minutos que te tendrán bailando desde el minuto uno. Su primer disco se llama Young Chasers y con-tiene 13 canciones pero si lo prefieres puedes escuchar su edición deluxe que contiene ni más ni menos que 19 canciones. Fueron teloneros de The Libertines y The 1975 pero fue Get Away, su primer single que presen-taron junto a Good For Me en el año 2013, donde empezaron a darse a conocer.

Escucharles es escuchar por momentos a los neoyorquinos The Strokes, a ratos a los irlandeses Two Door Cinema Club, The Vaccines o incluso a los suecos The Cardigans. Si te gustan algunas de estas bandas, este disco lo vas a disfrutar.

El comienzo del disco no puede ser mejor con Get Away, una canción muy divertida y que no conse-guirás sacártela de la cabeza durante tres minutos, un gran acierto para comenzar a viajar por este disco, pero no hay tiempo para parar porque luego viene T-Shirt Weather con un riff alegre y mucho desenfreno en el que no vas a poder parar de mover las caderas. Es una canción apta para aparecer en un anuncio de cervezas y sino al tiempo.

Luego llega Fossils para que continuemos con el baile, con un estribillo muy pegajoso fácil de recordar hasta que llega una pequeña pausa con Lost it, My Love y Deserve This. Aquí tenemos tiempo para reponernos un poco con tres canciones muy sentimentales y de una intensidad más baja. Con las siguientes canciones llega-mos ya al intermedio del disco, tres canciones con unos riffs rápidos de guitarra y muy pegadizos como son Young Chasers, Good For Me y Stuck In My Teeth.

Con estas tres canciones recordaras a los grupos ante-riormente mencionados (The Vaccines, The Strokes…) con un sonido muy característico y reconocible al in-stante. Un pop rock muy bailable y del que se puede disfrutar desde principio a fin.

Va llegando ya el final del disco con Best Years, The Luck Has Gone, So Long y cierran con otra muy bue-na canción Talking Out Loud.

En definitiva, este grupo ha sido capaz de lanzar un ál-bum debut muy bueno y agradable de escuchar con una presencia de las guitarras en todo el disco y que cuando nos demos cuenta el disco ya ha acabado.

El primer disco es siempre complicado, lo difícil es mantenerse pero el resultado ha sido satisfactorio.

Samuel Castellano @samuel13c

CIRCA WAVES

YOUNG CHASERS

RESEÑA DE DISCOS


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Christina Rosenvinge. Madrileña, con sangre danesa y británica, inconformista, exquisita, inquieta, íntima, independiente, introspectiva,

experimental, frágil, cosmopolita, áspera.., y un largo etcétera, pueden definir a esta cantautora que huyó del éxito comercial obtenido con el grupo Álex & Cristina y Cristina & Los Subterráneos, de finales de los años 80 y principios de los 90, para asentar una carrera en soli-tario de mediados de los 90 hasta la actualidad, con un estilo único, arriesgado, personal y diferente.

Con “Lo Nuestro”, Christina presenta su décimo se-gundo disco, volviendo a la escena musical desde que lanzara “La Joven Dolores” y el recopilatorio “Un caso sin resolver” en el año 2011. Es un disco, en palabras de la propia compositora madrileña, que habla de “ro-manticismo industrial”; con un sonido más tenso, cris-pado, negro, aunque con letras vitalistas, sin caer en el desamor. Se atreve a hablar de la muerte y del paso del tiempo con un tono sarcástico, no tremendista, con una visión positiva de la vida donde no importa cumplir años, contemplando la distancia de lo que eso supone y tu situación personal, con una visión general donde hay más de ganar que de perder.

El disco ha sido coproducido por Raül Fernández Miró (Refree) bajo el sello discográfico “El Segell” del Prima-vera. La portada es obra de la ilustradora Paula Bonet, quien apunta: “está cosido y dibujado de arriba abajo, salpicado de tinta china, acuarelas e hilos rojos. Cuando abráis el disco empezarán a caer dibujos”. Se compone de 10 canciones grabadas con tesón y mucho cuidado desde el verano del año 2013 y, según ella misma, se trata de un disco rompedor con temas tremendamente diversos. Temas que hablan de historias sentimentales (“Romeo y los demás”); de escapadas de la muerte (“La muy puta”); de aspectos sociales y reivindicativos en los que se ensalza la deuda que va a quedar hacia las genera-ciones futuras, sufridoras de los efectos de la crisis (“Al-guien tendrá la culpa”); del terror al vacío, del cual nace todo (“La absoluta nada”); del elogio a la figura materna en forma de araña gigante (“La tejedora”) inspirada en la escultura Maman de Louise Bourgois y que en parte se aprecia también en el “Pobre Nicolás”, inspirado en Nikola Tesla… hasta se atreve con un pulso a las redes

sociales, indicando qué no van a encontrar de nosotros en “Lo que te falta”.

En definitiva, estamos ante un disco profundo, sincero, personal, con tintes de humor, oscuro y transparente, dejando a los ojos y oídos de cada uno de nosotros su propia vida, con sus luces y sombras, tan comunes en cualquiera de nosotros y con las que resulta fácil iden-tificarse.

Angel Marín Martínez @angelmrnz

Christina Rosenvinge

Lo Nuestro

RESEÑA DE DISCOS


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Death Cab for Cutie

K i n t s u g iLo desconocíamos hasta que Death Cab for Cutie sacaron este nuevo álbum pero lo sabemos ahora. Kintsugi (Atlantic, 2015), concepto japonés, es concebido como todo un arte. ¿Para qué volver a reconstruir una pieza de cerámica cuando puedes usar oro para reparar sus grietas? El Kinstugi es la reconstrucción de las imper-fecciones a través del oro, es el embellecerlas y mostrarlas a todo el mundo. Es una visión que dice sí a la vida y a los errores: los cracks pueden ser agradables.

Así es como se nos presenta, a priori, como un título idóneo para este octavo disco de los americanos. Y es que a la marcha anunciada del

guitarrista y también productor Chris Walla, a la banda se le sumó un doloroso segundo divorcio: el del can-tante Ben Gibbard con la actriz y cantante Zooey De-schannel. Dos grietas que Death Cab for Cutie, es cier-to, no han escondido (tampoco lo han querido). Dos grietas que se han aprovechado como motor conductor para que el producto de ellas, este álbum, luciera aún más fuerte y esplendoroso… pero ¿lo han conseguido?

Si algo es cierto es que es un álbum al que hay que darle trote. No te va a captar en una primera escucha: como un buen vino, hay que dejarlo madurar y crecer en ti poco a poco. Me permito hacer un guiño a Golpes Ba-jos y decir que sí, que son malos tiempos para la lírica (¿cuándo no lo han sido?) pero no para la de ellos. Nun-ca. Porque no ganan en grandes producciones pensadas para un gran disco, público o crítica. Death Cab hablan, tocan y sienten para una canción, para un sentimiento, para la simple y dolorosa búsqueda de la belleza por el terreno de la fragilidad y la naturalidad, de la honestidad siempre brutal. La sinceridad de un corazón abierto.

Pureza que arranca con un sonido clásico en “No Room in Frame”, transportándonos así a sus mejores momen-tos allá por los 2000, y al que le sigue “Black Sun”, el hit indiscutible. Mucho más intenso, profundo y oscuro. Sin duda, atrapa.

Poco a poco, el ritmo del disco va creciendo hasta lle-gar a un álgido momento con “The Ghosts of Beverly Drive”, un tema rápido con toques más electrónicos,

pegadizo, más feliz. Y nos alegramos de estar experi-mentando lo que parece toda una racha creativa hasta que llegamos a “Little Wanderer”. Si bien es preciosa, y si bien nos quitamos el sombrero ante los arreglos instrumentales, por alguna extraña razón empezamos a anticipar un bajón que se nos confirmará con “You’ve haunted me all my life” y la acústica “Hold no guns”. Aun estando basadas en la fórmula balada-folk-rompec-orazones que tanto les ha acompañado durante todos estos años, esta vez no se quedan con un cacho de cora-zón como hiciesen otras piezas. Esas memorables joyas que no vamos a recordar por el bien y la seguridad emo-cional de todos.

Afortunadamente, “Everything’s A Ceiling” nos va re-montando poco a poco, acelerando sin prisa para llevar-nos a “Good Help (Is so hard to find)”: la otra cara de la moneda, de esa mitad de disco. Son dos canciones con matices electrónicos que nos hacen sentir poderosos y enérgicos, que nos conectan de nuevo con el álbum, y que nos transportan hacia un cierre de nuevo tranqui-lo. “El Dorado”, “Ingenue y Binary Sea”, una preciosa balada a piano, nos hacen volver a creer en el hecho de crear arte sin más intención que la búsqueda de la pura belleza. Son temas que harán saltar el “es la misma fórmula de siempre” de algunas bocas ya aborrecidas. Pero para qué cambiar algo que resulta ser (casi) siem-pre cautivador.

Como bien manda el Kinstugi, este es un disco imper-fecto (qué no lo es hoy en día) que se sirve de sus grietas para reconstruir un sonido puro, inocente; útil si llega aunque sea a un solo corazón. Las cicatrices están ahí, como en todo álbum que se precie, y Death Cab for Cutie han querido que las veamos. Apreciarlas es ahora también nuestro deber.

RESEÑA DE DISCOS


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blur

THE MAGIC WHIPAño 2003, último en el que la banda de rock-

pop británica y cabeza visible del britpop saca un disco. “Think Tank”, año 2015... 12 años

después vuelven con “The Magic Whip”. ¿Casualidad que hayan elegido la palabra magic para titularlo? Puede ser, o no, el caso es que uno ha tenido que frotarse los ojos para creérselo para ver que sí, que es cierto, que son ellos y esta vez al completo: Damon Albarn, Graham Coxon, Alex James y Dave Rowntree. El disco salió a la venta el 27 de abril del 2015 bajo el sello Warner y fue producido por Stephen Street (quien también fue productor de The Smiths o Kaiser Chiefs, entre otros).

Entre las particularidades de este disco hay que destacar que se grabó en su mayor parte en Hong Kong tras la suspensión de un concierto en la primavera del año 2013. También, y eso ya en palabras del propio Damon, “es un disco grabado sin esfuerzo alguno, al no tener la impresión de grabarlo como tal”. Se compone de 12 canciones, justo el número de años que hace que no sacan un disco. ¿Otra casualidad?

Como anticipos del disco la banda dejó que se escucha-ran tres temas. Uno de ellos es “Lonesome Street”, que empieza con un sonido callejero, de tráfico, sirenas y con un tintineo que bien recuerda al There’s No Other Way pero sin llegar completamente a él. Es el punto de partida y carta de presentación del estilo urbano que va a primar en todo el disco. Otro es “Go Out”, para mí el mejor tema del disco. Es un tema Blur por excel-encia, desenfadado, con las tan características guitarras arrítmicas de Coxon en los mejores discos de la banda, y con la voz burlona de Albarn. Por otro lado, “There are too many of us”, con ritmo creciente casi militar, y no por la inmovilidad del cuarteto en el vídeo promo-cional del tema, sería el último tema que nos querrían adelantar.

Otra perla del disco es “Pyongyang”, dando nombre a la capital y ciudad más poblada de Corea del Norte - hasta ahí llega la influencia asiática en este disco. En palabras del propio Albarn, una de las cosas que más les impacto de visitar esta ciudad fueron las revueltas

estudiantiles, así que quisieron transmitir su visión con música. En “My Terracotta Heart” uno duda por el parecido de la guitarra con Radiohead, como si el bue-no de Thom Yorke fuera a aparecer en cualquier mo-mento. El disco contiene temas pegadizos como “Ice Cream Man” y “Broadcast”, siendo este último guitar-rero y gamberro. El resto de temas, “Ice Cream Man”, “Thought I was a Spaceman” (con cierto toque español en la guitarra), “Ghost Ship”, “Ong Ong” y “Mirrorball (este con guitarras a los Chris Isaak) dan un toque tran-quilo e invitan a ser escuchados más pausadamente para sacarles todo su jugo.

27 de abril del 2015, corred a comprarlo, ¡insensatos!

Ángel Marín @angelmrnz


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The Saurs“Creíamos que íbamos a morir dentro del estudio”

ENTREVISTA

Entrevistamos a una de las bandas catalanas más prometedoras. Sueiro, Engui y Alejandro son veinteañeros que facturan un garaje acelerado

de muy alta calidad. Con un directo apabullante y ex-tremadamente divertido, arrasan en todos los escenari-os y concursos de la península, y anuncian disco debut para octubre con el sello del Primavera Sound.

Sois una banda que llama la atención por su poten-cia en directo. ¿Cómo hacéis para conectar tanto con el público?

Somos bastante sinceros cuando salimos al escenario, no pretendemos ir de ningún palo. Simplemente nos enchufamos, nos ponemos ahí y nos gusta dar caña, nos sale solo. No es que llevemos preparadas posturas o tonterías de esas. Hacemos lo que nos sale.

¿Cómo fue para vosotros ganar un concurso como el Villa de Bilbao?

Una sorpresa y una gran ayuda. Ir a tocar dos veces a otra ciudad, que te pagan el viaje y te puedas alquilar el coche y pagar un hotel, y además ganar un premio, es una pasada. A las semifinales fuimos sin presión, a dis-frutar. Pero, una vez que pasas a la final, te empiezas a poner muy nervioso.

Es una suerte que tengáis tantos bolos sin haber publicado un LP.

Hasta ahora no, pero hace dos semanas que hemos ter-minado de grabar el que va a ser el primer disco y ahora está en proceso de mezcla. Saldrá en octubre.

¿Cómo ha sido el proceso de grabación del álbum?

Lo hemos grabado en Aclam Records, gracias a que ga-namos otro concurso en Barcelona que se celebró en la Sala Apolo. El premio era tocar en el Primavera Sound

y siete días de grabación. Hemos estado tanto tiempo encerrados que creíamos que íbamos a morir ahí dentro del estudio. Grabar es una especie de bucle: entras a las 10, sales a las 8, cenas, duermes, y vuelves a entrar.

Vais a publicar el disco con El Segell, discográfica del Primavera Sound.

Firmamos con ellos en diciembre y en febrero lo hi-cimos público. Cuando salga el disco empezará la ver-dadera promoción y una gira más larga. Llevamos un año presentando nuestro anterior EP y tenemos ganas de poder estrenar las canciones del próximo disco.

Llama la atención que seáis un grupo sin bajista.

Teníamos uno, que decidió que no quería seguir tocan-do. Era muy difícil encontrar un sustituto responsable, que le gustara lo que hacíamos y que además se implic-ara. Pocas personas tienen tiempo para comprometerse en serio con la música. Estuvimos un mes sin saber qué hacer, hasta que decidimos seguir sin bajista e inventar-nos un sonido que funciona bastante bien, cambiando los roles en el grupo.

¿En qué consiste ese invento?

En conectar la guitarra a dos amplis a la vez (uno de guitarra y otro de bajo), para llenar el sonido sin que se eche en falta el bajo. En el disco tampoco hemos meti-do pistas de bajo, lo hemos grabado como lo hacemos en directo.

¿Qué se cuece ahora mismo por Barcelona?

Hay un montón de grupos jóvenes y de garaje. Por ejem-plo, Opatov, que acaban de ganar el Proyecto Demo. En general, hay mucha movida y bastantes sellos discog-ráficos. Igual por eso a los grupos catalanes nos cuesta salir de nuestras fronteras. En cuanto a salas para tocar,


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hay variedad, pero últimamente vemos que, garito que abren, garito que cierran.

¿Y qué bandas de la actualidad os molan?

Estamos enganchados a grupos como The Babies, el grupo de Kevin Morby y Cassie Ramone. Escuchamos muchas cosas, incluso las que no son de nuestro rollo. Biznaga, Cuello, Siesta… En Valencia y Alicante tam-bién hay bandas que nos gustan mucho como Morenas o Futuro Terror.

Recientemente prohibían a Grushenka tocar en Madrid por tener dos miembros menores de edad. ¿Creéis que son muy restrictivas las salas?

En Madrid, sí. Son muy estrictos con los temas del aforo y de la edad. Es más jodido que en Barcelona, aunque últimamente cada vez se hacen los conciertos más pronto porque los vecinos se quejan muchísimo. Es un problema, porque la gente tiene la costumbre de ir primero a ver el fútbol y luego ir al concierto. Y eso ya no puede ser, porque si llegas a las once, sólo ves cinco canciones del último grupo. Si anuncias un concierto a las nueve, la gente no llega hasta a las diez y media.

Miguel Aizpuru@Aizpurusolano


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FA U N AURBANAFOTORREPORTAJE

Eder Pozo nos presenta su fotorreportaje “Il·lustres Manresans” dónde podemos vertodo tipo de fauna urbana que habita en una ciudad medi-ocre como Manresa. Madafackismo Underground os ofrece una pequeña

muestra de la colección.


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Hará unos ocho años empecé a practicar algo llamado Parkour.

Se desarrolla esencialmente en la calle, por lo que el espacio urbano ha ido obteniendo nuevos significa-dos para mí: inicialmente no era más que un lugar de tránsito, el lugar de inevitable vínculo y paso del punto en el que estaba hasta el que me dirigía, un lugar a mi entender por entonces, carente de mucho interés. Veía a los demás transeúntes desplazarse de un sitio a otro, al igual que yo, sin hacer caso al proceso interactivo que podía o no formarse, mi relación con el espacio intermedio se acababa ahí.

Mi percepción del espacio urbano se ensanchaba cada día que pasaba en él: texturas, luces y sombras, alturas y vacíos, disposición del mobiliario urbano, interacción de una gente con otra, de un elemento con otro, etc. Observaba (y observo aun hoy) en ocasiones desde puntos elevados, a veces relativamente escondidos e in-accesibles, gracias a la libertad que da pasar por donde se quiere, de llegar hasta donde se puede.


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El estatus de observador neutral queda en entredicho cuándo soy detectado, cuándo alguien cae en que una altura más o menos elevada no es el sitio correspondiente por donde debe pasar una persona, entonces todos los proto-colos de comunicación cambian, supone un estímulo demasiado fuerte: advertencias, preocupaciones, amenazas, elogios, dudas… la mayoría de reacciones reflejan miedo o curiosidad, otras muchas solo fugaces gestos evidentes

de indiferencia.


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El tiempo ha permitido tomar el pulso, ver la evolución de los mismos espacios y sumar de nuevos. Yo veía a todas esas personas en todos esos espacios, todo dinámico y mutable y no podía guardar esas imágenes impresas en mi

retina, debían ser capturadas.


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La calle como espacio real está delimitada por la fron-tera a partir de la cual empiezan a elevarse las edifica-ciones o divisiones y alberga en un espacio relativa-mente reducido diversas realidades temporales paralelas que se desarrollan y se suceden inmediatamente todas a la vez. La suma de las acciones y acontecimientos que se ejecutan en este “escenario” y en sus distintos tiem-pos, podrían definirse como “la interactividad” dado su carácter comunicativo.

Estableciendo una comparativa, podríamos plantear que cada uno de los habitantes de una ciudad supone un bit -una unidad de información- en un gran sistema operativo (que es el conjunto total de calles) y que todo aquello que puede sentir por medio de los sentidos o con lo que puede interactuar, ya sean seres vivos u ob-jetos, conforma una realidad -común-, la interpretación que genere de la información recibida es pues su propia realidad-individual-. La realidad común es totalmente dinámica y está supeditada a las acciones y caprichos de las realidades individuales, pero está limitada por el es-pacio físico y sus elementos. No obstante esta realidad nace fuera del espacio común, en el personal.

Nuestra posición en el espacio urbano raramente nos permite observar y comprender más de una de estas realidades, limitando en mayor o menor medida la can-tidad y calidad de información que nos llega . A esto se le ha de sumar la capacidad más o menos eficiente -por medio de los sentidos y los conocimientos necesarios, “hardware y software” en función de las condiciones que le rodeen y los estados de ánimo en los que se pueda encontrar- que tenga un individuo para interp-retar o leer el espacio, los acontecimientos y la infor-mación contenida en ellos.


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En resumen, conjuntos de individuos transitan en tiempos distintos por un mismo espacio, haciendo que se cree un continuo de acontecimientos únicos e irrepetibles. Aquí la cámara actúa como un selecciona-dor de fragmentos de dichas realidades, partes de un todo fácilmente asimilables, instantes precisos en el tiempo y el espacio que estoy acostumbrado a transi-tar, porciones de diversas realidades individuales en un mismo espacio común, que en conjunto constituyen la visión de la realidad común desde la mía individual, mi realidad urbana, tan cierta como la de cualquiera en cualquier tiempo, mi realidad alternativa, mi ciu-dad y de quien la forma. Cada vez que recortamos la realidad, no solo con el encuadre fotográfico, sino con nuestra propia visión y con su procesamiento, creamos realidades paralelas propias.

Y en la mía se hallan “il·lustres Manresans”.

Eder Pozowww.ederpozo.com


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GOD SAVEMORRISEYMorrissey nunca ha dejado indiferente a nadie.

Narcisista y ególatra o mito e irrepetible solo son algunos de los adjetivos que habitual-

mente se suelen emplear para describir al protagonista sobre el que vamos a hablar hoy. Aunque ha sido la voz de una de las bandas más representativas de la década de los ochenta y origen de muchos de los sonidos que vinieron después, a lo largo de su trayectoria siempre ha gozado de admiradores y detractores por igual. En lo que parece haber cierto quórum ya es que su figu-ra trasciende más allá de lo estrictamente musical. Una historia que todavía se sigue escribiendo después de 35 años de trayectoria.

World Peace Is None Of Your Bussiness (2014) ha sido su último trabajo publicado hasta la fecha, un tra-bajo que enriquece una gran carrera en solitario marca-da por los altibajos en cuanto a éxito de crítica y público se refiere. Una carrera discográfica que Morrissey se vio obligado a emprender en solitario tras la disolución de The Smiths y que a continuación vamos a repasar con mucho interés.

En primer lugar, debemos remontarnos al 8 de Septi-embre de 1987. Morrissey concede una entrevista en Londres a la revista Les Inrockuptibles, joven pub-licación francesa que por aquel entonces empezaba a dar sus primeros pasos, y anuncia la separación oficial de The Smiths. The Queen Is Dead había salido hacía poco más de un año y la publicación del cuarto disco de estudio de la banda, titulado Strangeways, Here We Come, era inminente. Diferencias musicales irrecon-ciliables entre sus miembros habían provocado la sep-aración de la banda británica más representativa de la década de los ochenta.

Pero lo que parecía un punto y final en el panorama mu-sical para Morrissey se convertiría en un punto y aparte. Desde los inicios de la banda de Manchester, la crítica musical siempre había identificado a Johnny como el

artífice del sonido y el verdadero ideólogo en la sombra de The Smiths mientras que su vocalista, Morrissey, el único aporte que supuestamente realizaba era la voz y la fachada: la creación del mito. Con el paso del tiempo y analizando más de treinta años de trayectoria en soli-tario tanto de uno como de otro podemos afirmar con cierta rotundidad y sin riesgo a equivocarnos que aquel-la visión estaba muy alejada de la realidad. Es más, solo fue preciso esperar unos pocos meses para poder com-probarlo de primera mano con la publicación del prim-er álbum en solitario de Morrissey: Viva Hate (1988).

Para su estreno discográfico en solitario, Morrissey re-clutó al guitarrista de The Durutti Columm, Vini Reilly, que fue sin duda una pieza clave en el empaque final del disco con esos riffs de guitarra tan característicos que le proporcionaron un sonido que, para muchos (entre los que me incluyo), bien podría ser la continuación lógi-ca del Strangeways, Here We Come de The Smiths. Publicado en marzo de 1988, rápidamente alcanzaría el primer puesto de los charts británicos. Temas como Everyday Is Like Sunday o Suedehead nos muestran al Mozz más melancólico y depresivo, temática muy re-currente en la discografía de The Smiths. Y todo pare-cía indicar que iba a continuar siendo muy importante en sus futuras composiciones en solitario.

This is the coastal townthat they forgot to close down

armageddon - come armageddon!come, armageddon! come!Everyday is like sunday

everyday is silent and greyEveryday Is Like Sunday

Uno de los aspectos sobre el cual siempre ha girado la trayectoria artística de Morrissey ha sido su amor-odio hacia Inglaterra. Desde Margaret Thatcher hasta Tony Blair han sido objeto de crítica y escarnio público por parte del cantante. Prueba de ello fue la inclusión del


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tema Margaret On The Guillotine en este primer dis-co en solitario, lo cual le traería muchos problemas a posteriori, provocando una manifiesta antipatía desde diversos medios de comunicación británicos que lo acu-saban de traicionar a su patria. Pues bien, si la prensa le criticaba su escaso patriotismo, él recordaba que, en realidad, era irlandés. Steven Patrick Morrissey. Genio y figura.

Su vuelta a los escenarios se produciría con un corto pero intenso show en Wolverhampton el 22 de Diciem-bre de 1988, en plenas vísperas de Navidad. Además de ser la primera vez que se pudo escuchar en directo el Stop Me If You Think You´ve Heard This One Be-fore de The Smiths, Morrissey presentaría algunas de sus nuevas composiciones: Sister, I´m A Poet (B-Side del single Everyday is Like Sunday), Interesting Drug o la propia Suedehead que desataría el éxtasis de un público, entregado desde el primer minuto.

Morrissey siempre ha sido un músico a la vieja usan-za. Su producción discográfica había sido muy prolí-fica y frenética en The Smiths, con la publicación de un álbum cada año y un single cada seis meses. En los primeros años de su travesía en solitario continuaría lanzando singles sueltos entre discos acompañados de B-Sides, costumbre que ha ido perdiendo con los años pero que sobre todo a finales de los ochenta y principio de los noventa nos dejó más de una sorpresa agradable, con varias canciones que muchas veces superaban en calidad a otras incluidas en los discos. Por ejemplo, en-tre su primer y segundo disco cayeron nada más y nada menos que cinco singles, que posteriormente juntaría en el recopilatorio Bona Drag (1990). Algunas de esas canciones son la espectacular The Last Of The Fa-mous International Playboys y la infravalorada No-vember Spawmed A Monster, temas que no podrían faltar en un TOP-20 de mejores canciones de Mozz.

En 1991 llegaría a las tiendas el segundo disco de Mor-rissey, bajo el nombre de Kill Uncle (1991). Un trabajo que representaba una cierta ruptura del cantante con su pasado, netamente inferior a Viva Hate, y en cuyo contenido solo podemos destacar Sing Your Life. Un segundo disco en solitario que decepcionó tanto a la crítica como al público y que el mismísimo Morrissey ha considerado el peor trabajo de su carrera.

Solamente hubo que esperar un año para que Morrissey perpetrase su particular vendetta con la publicación de Your Arsenal (1992), álbum que a diferencia de su an-tecesor, tuvo una gran acogida tanto por la crítica como en número de ventas. Con la incorporación de los gui-

tarristas Alain Whyte y Bozz Boorer en tareas composi-tivas, Morrissey abriría su espectro sonoro hacia nuevos estilos como el rockabilly. Producido por el ex guitar-rista de David Bowie en su etapa glam, Mick Ronson, estamos ante un disco disfrutable de principio a fin, sin temas de relleno y con una coherencia sonora que lo convierten en uno de sus trabajos más completos has-ta la fecha. Desde You’re Gonna Need Someone on Your Side, Glamorous Glue o The National Front Disco pasando por Certain People I Know, We Hate It When Our Friends Become Successful, You’re the One for Me, Fatty hasta llegar al último tema del disco, Tomorrow. Un puñetazo encima de la mesa sin lugar a dudas.

Vauxhall and I (1994). Así se llamó el cuarto disco de Morrissey que vio la luz en 1994. Un trabajo excelso, con un sonido mucho más melódico que los anteriores y del que el propio cantante guarda un amargo recuer-do ya que durante la gestación del álbum se produjeron las pérdidas de varias personas con las que Mozz había tenido una relación muy estrecha: el productor Mick Ronson, con el cual había empezado a trabajar desde hacía varios años, su bussiness manager, Nigel Thomas, y el director Tim Broad.

Con su banda, comandada por Boz Boorer, Mozz se encerraría en una mansión de la época Tudor, en Hook End Manor (South Oxfordshire), para trabajar a las órdenes de Steve Lillywhite (U2, Siouxsie And The Banshees, Peter Gabriel, Simple Minds y un montón de glorias del rock internacional), un viejo conocido con el que ya había trabajado en 1986 en la remezcla del single Ask de The Smiths.

Se trata del disco más solemne de toda su discografía. Destacamos los siguientes temas: Now My Heart Is Full, una declaración de amor sincera que abre el dis-co de manera magistral; o The More You Ignore Me, The Closer I Get, un éxito de ventas y una verdadera declaración de intenciones del propio artista, una can-ción de amor no correspondido, tema recurrente en el cancionero de Mozz, pero que no cesa en su empeño y nos desprende al final con un optimismo que pocas veces hace acto de presencia en sus composiciones y del cual es imposible no quedarse prendado desde los primeros acordes. Y para finalizar, una de esas joyas im-prescindibles no tan conocidas en la discografía de un artista y que rara vez suele incluir en los setlist de sus conciertos: Why Don’t You Find Out For Yourself. Esa primera frase los días más cuerdos son locos, es simplemente genial.


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Sin duda, parece un álbum casi redondo, ya que atesora un buen ramillete de canciones. Y digo casi, porque en él nos encontramos con dos temas que sinceramente no dignifican en absoluto al resto y que aparecen en la cara B del disco: Lifeguard Sleeping, Girl Drowning y Used to Be a Sweet Boy. No los escuchéis, os ahor-raréis un disgusto.

Tras el éxito rotundo de su cuarto álbum de estudio, Morrissey volvió a recurrir al formato single como for-ma de dar salida a sus nuevas composiciones. De esta época data la colaboración de Siouxsie en Interlude o la recuperación de la descartada Sunny, una agridulce pie-za muy del estilo de otros singles publicados a comien-zos de los noventa como Ouija Board Ouija Board. Todos estos singles fueron publicados de manera con-junta en el recopilatorio World Of Morrissey (1995), publicado prácticamente a la par que su quinto álbum de estudio titulado Southpaw Grammar (1995), traba-jo que no consiguió estar a la altura ni de Your Arsenal ni de Vauxhall and I. Decepcionante.

En 1997 saldría a la luz el injustamente tratado Mal-adjusted (1997). A pesar de haber sido también un auténtico fracaso de ventas, contiene algunos temas que todavía perduran en nuestra memoria, como Malad-justed, canción que abre el disco y deja entrever una cierta madurez en el sonido de Morrissey, una joyita titulada Alma Matters y la melodramática Trouble Loves Me. Para promocionar dicho álbum, Morrissey se embarcaría en su mayor gira hasta ese momento vis-itando por primera vez en su carrera destinos donde había sido muy demandado desde hacía mucho tiempo como Latinoamérica. Después de la gira de conciertos y de recorrerse medio planeta, llegarían siete años en las tinieblas fruto del estancamiento creativo del propio artista y de la ausencia de un contrato discográfico. La historia de Morrissey siempre ha estado coqueteando entre la tragedia y la brillantez. Si hacía apenas tres años parecía acariciar el Olimpo con su álbum más comple-to, tras la publicación de Maladjusted (1997), en plena época de apogeo del BritPop en las Islas Británicas con bandas como Oasis, Blur, Suede o Pulp dominando el panorama musical y muchas otras nuevas emergiendo como Ocean Colour Scene, Supergrass o Manic Street Preachers, Morrissey se sentía desubicado. Si a esto le sumamos una encarnizada contienda judicial con su ex compañero de banda, Mike Joyce, y varias polémicas generadas por unas declaraciones suyas que fueron rec-ogidas en prensa, nos encontramos ante el punto más bajo de la carrera de Morrissey.


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No obstante, con el nuevo milenio volverían a alzarse voces que reivindicaban su legado. Una de las más céle-bres sería la de Noel Gallagher, alma matter de Oasis, quien siempre había manifestado sentir una profunda admiración tanto por el propio Morrissey como por su ex compañero de banda, Johnny Marr. Así pues, Mozz no tuvo más remedio que ponerse manos a la obra para un regreso más que esperado. You Are The Quarry (2004) es un álbum excelente, combativo y ácido a par-tes iguales que se convirtió rápidamente en su mayor éxito de ventas, logrando colocar al cantante de nuevo en el primer plano del panorama musical y que con-tiene uno de sus grandes hits por antonomasia: First Of The Gang To Die. Un single que reúne todos los requisitos imprescindibles para convertirse en un him-no: melodías contundentes, estribillos pegadizos y una puesta en escena que mejora incluso las prestaciones de la versión en estudio. En este tema Morrissey rescata una figura por la cual profesa una profunda admiración: el gangster.

En You Are The Quarry nos encontramos de todo. El disco, producido por Jerry Finn (miembro del grupo Ill Repute), se inicia con America Is Not The World, un ataque despiadado al sistema estadounidense y al cap-italismo salvaje. Con el rockero Irish Blood English Heart, Mozz volvía a atacar al establishment británico, en especial a la familia real y a la clase política al mismo tiempo que lograba reconciliarse con su patria, abor-dando la compatibilidad de sus ascendencias irlandesas y su sentimiento e identidad inglesa.

I’ve been dreaming of a time whenthe English are sick to death

of Labour, and Toriesand spit upon the name Oliver Cromwell

and denounce this royal line that still salute himand will salute him

Forever...Irish Blood English Heart

Otros temas dignos de mención del disco son: The World Is Full Of Crashing Bores, en el cual Mozz lanza un reproche ante la pereza mental y la estupidez intelectual del showbizz; All The Lazy Dykes, donde encontramos un guiño del artista a aquellas lesbianas que todavía no se atreven a salir del armario; y I´m Not Sorry, donde podemos saborear ese oscuro placer que ofrece el no arrepentirse de nada. Además, si por ello no fuese suficiente nos encontramos con Let Me Kiss You, una excelente balada compuesta por su fiel ami-ga Nancy Sinatra, típica canción de amor con un ex-celente tratamiento en el apartado instrumental con la


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sublime guitarra de Alain Whyte acompañando a la voz del Morrissey más desnudo. En I Have Forgiven Jesus Morrissey desafía al propio Jesucristo con una letra ar-riesgada, un ataque feroz al cristianismo, del que declara sentirse emancipado.

Por último destacamos dos temas igual no tan conoci-dos pero que en mi modesta opinión no tienen nada que envidiar a los que acabamos de mencionar antes: You Know I Couldn’t Last, balada que se inicia con las gui-tarras de Boorer y Whyte como protagonistas, al más puro estilo glam-rock en claro homenaje al productor y amigo fallecido hace casi una década, Mick Ronson, y que describe de una manera crítica el funcionamiento actual de la industria musical; y Munich Air Disaster 1958, homenaje a las víctimas del accidente aéreo de Munich que sufrió la plantilla del equipo de fútbol de sus amores, el Manchester United, y cuyo superviviente más célebre fue nada más y nada menos que Sir Bobby Charlton.

Una de las (recientes) obsesiones de Morrissey son las ciudades. Si bien en You Are The Quarry se pueden encontrar referencias a la ciudad de Los Ángeles (por ejemplo, en la intro de First Of The Gang To Die), para el próximo trabajo Morrissey se mudaría a Roma: Ringleader of the Tormentors (2006). Contaría con la colaboración de gente de la talla de Ennio Morricone y Tony Visconti en un trabajo que quizá no llegue a deslumbrarnos de la misma manera que lo había hecho dos años antes pero que resultó ser un álbum muy dig-no a añadir a su discografía.

El disco contiene temas como la energética canción de toques arábigos de I Will See You In Far Off Plac-es, en la que Morrissey aprovecha para atizar con sumo gusto a la administración Bush; un single resultón como You Have Killed Me en el que rememora al gran direc-tor de cine italiano, Pier Paolo Pasolini; y The Young-est Was The Most Loved, en la que Morrissey amaga con volver a coquetear con la figura del gangster. El inmortal Get It On de T. Rex (con quien colaboró el productor de este disco, Tony Visconti) sirvió de fuente de inspiración para la intro de In The Future When All’s Well, un tema con claro protagonismo de las guitarras donde parece mostrarse un falso optimismo llegando a caer en el cinismo más absoluto. Personal-mente considero que las dos mejores canciones de este trabajo no son ni mucho menos las más reconocidas por el gran público: Life Is A Pigsty y I’ll Never Be Anybody’s Hero Now. En la primera, de una dura-ción superior a los 7 minutos, nos encontramos con un Morrissey asqueado con el mundo que le rodea

en el que describe un pasaje absolutamente desolador llegando incluso a clamar que la vida es una pocilga. Y en la segunda canción, aparece en escena la melan-colía y una visión pesimista del futuro más inmediato. Tras un receso de un par de años, Morrissey se mudaría a Paris para preparar un nuevo álbum que posterior-mente vería la luz con el nombre de Years Of Refusal (2009). Trabajo muy flojo compuesto en buena medi-da a partir de descartes de otros discos del que sólo salvamos tres temas: la irónica All You Need Is Me, en la que parece mofarse de The Beatles, el single I’m Throwing My Arms Around Paris, canción pop al uso que nos recuerda al repertorio más jangle pop de The Smiths (Girlfriend In A Coma) y That’s How People Grow Up, donde vuelve a poner encima de la mesa su nula fortuna en el amor bien aderezado con la ya tradicional mezcla de guitarras en distorsión.

Para finalizar nuestro particular repaso a la carrera en solitario de Morrissey, World Peace Is None Of Your Business (2014) ha sido el último álbum de estudio publicado hasta la fecha. Un disco que alterna joyas de la talla de Staircase At University, The Bullfight-er Dies, I´m Not A Man, Kiss Me A Lot o World Peace Is None Of Your Business con temas sosos y carentes de gancho como Neal Casady Drops Dead, Smiler With Knife, Kick The Pride Down The Aisle o One Of Our Own que acaban restando más que su-mando al que considero su mejor trabajo desde You Are The Quarry (2004). En este apartado se ha notado la ausencia del gran Alain Whyte en labores compositi-vas de los dos últimos trabajos de Morrissey. Su susti-tuto desde 2006 ha sido el guitarrista Jesse Tobias (Red Hot Chili Peppers, Alanis Morissette) que está a años luz respecto a Boorer y al propio Whyte.

Actualmente Morrissey está inmerso en la segunda par-te de la gira promocional de su último disco, una gira que lo traerá a España en apenas unas semanas con conciertos en la Sala Razzmatazz de Barcelona y el Fes-tival SOS 4.8 de Murcia el 29 de Abril y 1 de Mayo respectivamente. Recordemos que desde hace un año el ex vocalista de The Smiths está luchando contra el cáncer, una enfermedad que el propio artista confesó en una entrevista realizada el pasado mes de Octubre y que sin embargo no le ha hecho mermar sus enormes fac-ultades interpretativas encima de un escenario. Los que disfrutamos de su concierto en el O2 Arena de Londres el pasado mes de Noviembre podemos dar buena fe de ello.

Algún día alguien debería estudiar cómo un chico de-presivo de la working class se convirtió en el mayor


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icono musical y cultural de Inglaterra a lo largo de 30 años. Según una encuesta recientemente publicada en la prensa británica, es el personaje vivo que para los ingleses mejor representa la esencia de lo British, por delante de Macca, de Bowie y de la propia Reina Madre.God Save Morrissey

LAS 25 CANCIONESIMPRESCINDIBLES DE MORRISSEY1. Everyday Is Like Sunday – Viva Hate (1988)2. Suedehead – Viva Hate (1988)3. Hairdresser On Fire – Viva Hate (1988)4. Sister I´m A Poet – B-Side del single Everyday Is Like Sunday (1988)5. The Last Of The Famous International Playboys – Single (1989)6. Ouija Board Ouija Board – Single (1989)7. November Spawned A Monster – Single (1990)8. You´re Gonna Need Someone On Your Side – Your Arsenal (1992)9. Tomorrow – Your Arsenal (1992)10. Now My Heart Is Full – Vauxhall and I (1994)11. The More You Ignore Me, the Closer I Get – Vaux-hall and I (1994)12. Why Don´t You Find Out For Yourself – Vauxhall and I (1994)13. Speedway – Vauxhall and I (1994)14. Sunny – Single (1995)15. Trouble Loves Me – Maladjusted (1997)16. Irish Blood English Heart – You Are The Quarry (2004)17. First Of The Gang To Die – You Are The Quarry (2004)18. I´m Not Sorry – You Are The Quarry (2004)19. Life Is A Pigsty – Ringleader Of The Tormentors (2006)20. I´ll Never Be Anybody´s Hero Now - Ringleader Of The Tormentors (2006)21. Ganglord – B-Side del single The Youngest Was the Most Loved (2006)22. All You Need Is Me – Years Of Refusal (2009)23. Action Is My Middle Name – No publicado. Inter-pretado en directo en la gira de 201124. Staircase At The University – World Peace Is None Of Your Bussiness (2014)25. Bullfighter Dies – World Peace Is None Of Your Bussiness (2014)

Brais Iglesias Castro @Bricepinkfloyd

MEAT IS MURDERMorrissey es sin duda uno de los vegetarianos más ilustres dentro del mundo de la música, además de activista de PETA, una asociación de defensa de los derechos de los animales a la cual rinde un apoyo in-condicional en todas sus luchas. Desde que cantara allá por 1985 Meat Is Murder (La carne es un crimen) que conocemos esta faceta de su personalidad. Y nunca ha dado un paso atrás, más bien todo lo contrario, hasta el punto de llegar a cancelar un concierto en Reikiavik (Islandia) ante la negativa del Harpa Concert Hall de prohibir la venta de carne dentro del recinto durante su actuación. Celebrities como Madonna también han sido foco de la ira del cantante, llegándola a bautizar como McDonna en clara alusión al uso de pieles natu-rales que la artista hace a la hora de elegir sus abrigos.


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George Harrison el genio en la sombra

El 24 de febrero de 1943, en un barrio a las afuer-as de Liverpool, nace George Harrison en una familia tranquila, de clase humilde y ascendencia

irlandesa. Desde pequeño escuchaba, como él mismo cuenta en Anthology, la magnífica serie documental so-bre el cuarteto de Liverpool, mucho country y a Carl Perkins, Elvis y Fats Domino, los cuales (sobre todo el primero, de quien era un gran admirador) influirían pos-teriormente en su forma de tocar y convertirían el pun-teo tan beatle en uno de sus rasgos característicos. A la edad de trece años, el joven George tenía ya su primera guitarra, y también tenía un amigo, sólo nueve meses mayor que él, con quien compartía trayecto diario en el autobús para ir a clase. El chico se llamaba Paul McCa-rtney, y el resto es historia.

McCartney había entrado por esa época en un grupo de skiffle llamado The Quarrymen, liderado por un jo-ven carismático y miope, de ondulante y rizado tupé, llamado John Lennon. Presentó a Lennon a su nuevo amigo, y es histórica la anécdota de cómo John quedó impresionado al ver a ese chico, dos años menor que él, tocando perfectamente la instrumental Raunchy, de The Ventures. Poco después, Harrison ya estaba dentro.

Es fácil imaginar cómo se sentía George dentro de esa lucha de egos que caracterizó la relación Lennon-Mc-Cartney. Más joven, más nuevo, más tímido, a él sólo le interesaba tocar la guitarra. No en vano gran parte de la riqueza musical de los Beatles depende enteramente de las habilidades de Harrison y su papel de guitarra solis-ta, pues, seamos sinceros, Lennon y McCartney eran grandes compositores pero no músicos brillantes. Los arreglos de guitarra y las innovaciones que fue introduc-iendo George dieron al grupo ese estatus de constante búsqueda de un sonido nuevo, y si del álbum A Hard Day´s Night a Let it be parece que pasa un mundo, es en gran medida gracias a él.Pero nos estamos adelantando. Los jóvenes Quarry-men, luego Long John and the Beetles y The Silver

Beatles, y finalmente The Beatles en 1960, comenzaban a hacerse conocidos por los clubes de Liverpool, y eso hizo que Allan Williams, especie de manager del grupo, les organizara varios conciertos en la ciudad alemana de Hamburgo. Ya con un batería, Pete Best, los chicos viajaron a Hamburgo y se quedaron por un período de tiempo, durante el cual se forjaron en los clubes de mala muerte y en la vida de un músico de gira, muy lejos de la imagen de chicos británicos perfectos que darían más tarde. Los problemas vinieron cuando las autoridades alemanas ordenaron la vuelta de George, que contaba entonces con diecisiete años, a Inglaterra por ser menor de edad, y toda la banda regresó con él.

En 1961 Brian Epstein ya era representante oficial del grupo y en 1962 Ringo Starr se unió en sustitución de Best; la formación estaba al completo. Como composi-tor, George Harrison hizo en los inicios de la banda sus pinitos. Su primera composición como beatle fue Don´t bother me, incluida en el disco Meet The Beatles, un tema a imagen y semejanza de las composiciones Len-non-McCartney y siguiendo prácticamente la misma estructura. Lo mismo ocurriría con I need you o You like me too much, si bien todas, sobre todo la segunda, son buenas canciones.

Sin embargo, sus dotes como guitarrista hacían cada vez más ricos los discos del grupo, a la par que se interes-aba por nuevos sonidos, desde las influencias de Bob Dylan en la banda a la música clásica hindú, cosa que se manifiesta claramente en el LP Rubber Soul. En este disco ya se incluyen composiciones de Harrison con un sonido propio que se diferencia de Lennon y McCart-ney, como If I needed someone. Sin embargo, es en el álbum Revolver donde George se revela ya como gran compositor casi a la altura de la pareja, y deja de imitar la estructura Lennon-McCartney.Siempre fue muy individualista, no soportaba muy bien la fama, y si bien se sentía parte del grupo, comenzaba a


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encontrar intereses propios: “Teníamos muchísimas co-sas materiales siendo muy jóvenes y nos dimos cuenta de que no se trataba sólo de eso; nos faltaba algo más”.

Siempre por detrás de la dupla protagonista, Harrison, interesado en la búsqueda constante de un sonido y de algo más, se interesó por la música, la filosofía y la re-ligión orientales. La obsesión de George por la música oriental venía probablemente de 1965, durante el rodaje de la película Help. Poco después de la grabación del film, el grupo componía el tema Norwegian Wood, y Harrison viajó a la India a profundizar sus conocimien-tos en la música tradicional de la mano del músico Ravi Shankar. Serían amigos durante años y Harrison incluso produciría sus discos.

Durante la grabación de Revolver, momento de ex-plosión creativa de Harrison y también de ruptura del sonido beatle, mientras McCartney seguía produciendo perfectos temas pop con su sello personal, Lennon in-vestigaba, como dice Ian Mc Donald en su libro Revo-lución en la mente, su mundo interior a través del LSD. De ese experimento nacen Tomorrow never knows o Rain. George por su parte centraba su atención en la música hindú, y en este álbum se incluyen brillantes composiciones bajo su influencia, sobre todo la sor-prendente Taxman, totalmente rompedora con lo que Harrison había compuesto hasta entonces, y I want to tell you, que si bien musicalmente no tiene tanta influ-encia hindú, sí la presenta en las letras. Claro que sus

composiciones quedaron algo eclipsadas por un disco que incluía hitos como Eleanor Rigby y Strawberry fields forever.

En 1966 se casó con la modelo Patty Boyd, a la que conoció durante el rodaje de la película A Hard Day´s Night, en la que ella hacía un pequeño papel. Se dice que el matrimonio no fue muy feliz, y ella misma cuenta que él estaba demasiado interesado en la religión orien-tal y centrado en su espiritualidad, y que eso unido a la presión de ser un beatle distanció casi desde el principio a la pareja.

Tras los álbumes Sgt. Pepper´s Lonely Hearts Club Band y Magical Mystery Tour, en los que sus contribu-ciones no fueron especialmente brillantes pero sí sus arreglos con la guitarra, en 1968 llevó a todo el grupo a la India en un viaje espiritual para visitar al gurú Maha-rishi, viaje del que todos se hartaron bien pronto pero que sirvió para introducir nuevas influencias y el sonido del sitar en muchas de las canciones del grupo.

Sin embargo, Harrison se había desvelado ya como un compositor más que brillante. Los temas que introdu-jo en los últimos discos del grupo son algunos de los mejores de la historia del cuarteto de Liverpool y de la historia de la música pop y rock: While my guitar gently weeps, donde cedió la guitarra solista a su amigo Eric Clapton, es una muestra. Fue compuesta en su mayor parte en la India y Harrison tardó cerca de 37 horas


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en conseguir el resultado final que buscaba, una com-posición redonda y brillante. Algunas canciones más “normales” como Piggies y Not guilty, quedan eclipsa-das por las enormes Here comes the sun y sobre todo por Something, ambas incluidas en la obra maestra Ab-bey Road.

Los Beatles empezaban a caer, no musicalmente pero sí como grupo. Las desavenencias entre Paul y John eran cada vez mayores, y los últimos álbumes, especialmente Let it be, son más trabajos individuales unidos que com-posiciones en grupo. Durante la grabación de Let it be, Ringo Starr llegó a abandonar la banda, harto de las lu-chas de egos, pero regresó al cabo de unos días. El docu-mental que ilustra la grabación y producción del disco es una muestra de las constantes discusiones entre Lennon y McCartney pero también entre éste y Harrison, harto George de las órdenes de Paul.En 1970, ya con el grupo disuelto, publica el triple ál-bum All things must pass, con todo el material com-puesto durante años que no había sido incluido en los discos de los Beatles. Dejó el listón demasiado alto y los siguientes, Living in the material world y Dark horse, no fueron tan remarcables. Sin embargo, en 1971 impulsó el Concert for Bangladesh, el primer macroconcierto solidario de la historia.

Durante los años posteriores al asesinato de John Len-non, George desapareció de la vida pública. Ya divor-ciado desde mediados de los 70 de Patty Boyd y casado con Olivia Harrison, en 1982 publicó la autobiografía I Me Mine y poco después publicó el álbum Cloud nine, un retorno a los temas del estilo de antaño. En los 90 siguió creando y grabando canciones, también junto a los otros dos Beatles, pero siempre descartando la re-unión del grupo.

En 2001, George Harrison murió tras una larga batalla contra el cáncer, y dejando un legado no sólo de lo que hizo, sino de toda la música que podría haber seguido haciendo y no pudo.



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INDIE GIRLSPorque el talento y la

belleza no están reñidos en el escenario

En el panorama actual de música alternativa, es-tán apareciendo una serie de artistas, que aparte de destacar en el apartado musical y vocal, de-

slumbran a su vez con un carisma y belleza usualmente más relacionada con el Pop comercial y sus divas.

La decana de esta lista es Cat Power. Durante años fue la artista más bella dentro del panorama indie, a lo que se le unía una desgarradora voz en sus composiciones y una personalidad magnética, que hacían de la cantauto-ra de Atlanta una auténtica estrella a nivel internacional.Desde la publicación de su último álbum Sun, la hemos podido ver bastante desmejorada debido a problemas de adicciones, pero para nosotros siempre nos quedará el recuerdo de la Chan Marshall de la primera década de siglo, con una actitud en el escenario y belleza cau-tivadoras.

Si Cat Power fue la reina del indie durante años, St.Vin-cent es la clara sucesora al trono.

La joven artista de 32 años, pero con una carrera ya lon-geva, se encuentra ahora mismo en su plenitud creativa, como refleja el último álbum con título homónimo, en el que está cada vez más cerca de encontrarse con su auténtico “yo” musical. Un trabajo mucho más elec-trónico y rockero y que guarda relación con su radical cambio de look. Y es que Anne Clark, aparte de ser una de las mejores guitarristas femeninas del panorama in-ternacional, deslumbra en el escenario por su sola pres-encia, y se puede decir sin ningún tipo de tapujos que es la mujer más bella del panorama indie actual, y que incluso con el cambio de estilo, parece haber ganado en personalidad.

Desde el otro lado del Atlántico, un poderoso torrente de voz emana de la garganta de Hannah Reid, algo más que la tercera parte de los británicos London Grammar.La rubia vocalista de Nottingham y los otros dos com-ponentes de su banda, sacaron hace un par de años un álbum debut casi perfecto, plagado de singles, y en el que la desgarradora voz de nuestra protagonista destaca


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por encima del sonido de un grupo muy cercano al de sus compatriotas The XX. Pero si en el excepcional trio liderado por Jamie XX, del apartado vocal se encarga una Romy, con un look cercano al que llevaban en su época las hijas del Ex-presidente Zapatero, en London Grammar , Hannah deslumbra por su poderosa voz, muy comparada con la de Florence, y por su delicadeza y dulzura en el escenario, con una sonrisa permanente que hace las delicias del público asistente en sus direc-tos. Esta joven británica , nos tiene encandilados por lo que esperamos verla pronto por España.

Desde Londres, y aun sin álbum públicado, empieza a sonar con fuerza un joven grupo de grunge-rock, Wolf Alice, liderado por una cautivadora Ellie Rowsell.

De aspecto menudo y delicado pero con una fuerza so-bre el escenario que no te esperas, la británica guitarrea y canta como si de la próxima Courtney Love se tratara, aunque también tiene momentos íntimos en el escenar-io como cuando interpretan su exitoso Blush en el que consigue enamorarnos perdidamente. El año pasado pudimos disfrutar de ella en Benicassim y esperemos no tardar mucho en volver a ver a este ángel del grunge.Con unas piernas kilométricas y unos movimientos propios de una diva del estilo Beyonce o Rihanna , Alu-na Francis, o lo que es lo mismo, la mitad femenina y de color de AlunaGeorge , destaca dentro del panorama electro-pop británico.

Con un solo disco en su haber, la guapa cantautora y su compañero de filas en la instrumentación George Reid, fueron nominados en 2013 a mejor nuevo sonido por la BBC.

Sus sensuales bailes y su estilo desenfadado hacen de sus videoclips una auténtica delicia. Puede que su músi-ca no transcienda tanto como la de otras anteriormente nombradas, pero sin ninguna duda, es la indie-girl negra por excelencia.

Desde las antípodas, una banda semidesconocida por el gran público, pero con un buen trabajo de debut se separaban en 2014. Hablamos de Snakadaktal, pero so-bretodo hoy queremos referirnos a su vocalista femeni-na, Phoebe Cockburn . La bellísima y delicada cantante australiana nos fascina con su celestial voz y con su mi-rada angelical, de la que disfrutamos por un muy cor-to periodo de tiempo. No sabemos cuándo podremos volver a disfrutar de su presencia en los escenarios, pero esperemos que más pronto que tarde, porque de talento va sobradada, y desde luego que una futura carrera en solitario de la indie-girl australiana probablemente sería bastante exitosa.


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Hace un par de años empezaban a aparecer en todos los medios de comunicación, tres hermanas americanas que hacían un rock desenfadado y que estaban causan-do sensación en medio mundo. Pero si hay una de ellas que destaca, es la cantante y guitarrista Danielle Haim, la mediana de ellas. Aparte de ser la más talentosa de las tres, es tan bien la más guapa con diferencia y la que cau-sa más sensación entre los fans del grupo. Para prueba de los que duden de la sensualidad de las hermanas no hay más que disfrutar del pegadizo baile que se marcan en el videoclip de If i could change your mind, no dejará a nadie indiferente.

De los mismos Estados Unidos, pero con un estilo com-pletamente diferente, la compositora y cantante Sharon Van Etten nos seduce con su folk introspectivo y con una mirada cautivadora. Sin ninguna duda esta chica sabe lo que se hace, ya que se trata de uno de los may-ores talentos salidos desde América en los últimos años.Con un estilo muy personal, tanto en el escenario como fuera de él, puede que ella no se considere un referente de belleza, pero desde Madafackismo no dudamos de ello, porque Sharon mola, y mucho además.

La pequeña y delicada cantante de los escoceses CH-VRCHES, Lauren Mayberry, sorprende en el escenario con una fuerza arrolladora acorde con el tipo de música que hace su banda. Un electro por altamente bailable y pegadizo. Pero sobre todo lo que no podremos quitar-nos de la cabeza es a esta chica de Glasgow, de belleza única y potente voz, y que en los últimos años hemos podido ver en algunos festivales españoles como el FIB, Primavera Sound o Dcode. Esperamos volver a poder disfrutar pronto de ella en la península.

Por último, la nota electrónica de esta lista de” bellezas independientes” la pone desde los platos y con destino directo, la pista de baile, la dj Nina Kraviz.

Y es que el bellezón ruso, bien se podría haber dedica a la moda, como muchas otras compatriotas suyas, pero su verdadero talento se encuentra tras la mesa de mez-clas.

Su estilo, que abarca desde el techno Detroit hasta el más bailable deep house, se muestra en las pistas de medio mundo, a base de mucha pose, y es que Nina sabe que su música gusta( y ella también), y eso es lo que la hace especial en un mundo donde la mayoría de compañeros de profesión son del sexo opuesto. Estamos seguros que pretendientes a cada club al que vaya no le van a faltar.

Jaime Cuesta@jaime1971


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DAVID BOWIEGENIO Y FIGURA

Si alguien se ha mantenido en el candelero más que merecidamente desde los 60, por encima de modas y tendencias –es más, creándolas- siendo hoy un auténti-co tótem para los aficionados a la música, es el perso-naje que nos ocupa: David Jones aka David Bowie aka Ziggy Stardust aka Aladdin Sane aka The Thin White Duke…

Andy Warhol, Mick Jagger, Lindsay Kemp, Marc Bolan, John Lennon, Iggy Pop, Lou Reed, Brian Eno, B-52’s o John Cale son una mínima parte de artistas muy vincula-dos a la carrera de Bowie. Hay muchos más, pero la lista sería interminable. Pop, glam, blues, mod, funk, folk, soul, hard rock, hasta jungle y otras músicas electrónicas han sido estilos que el Gran Camaleón ha cultivado con éxito dándoles su propia y teatral visión.

David Robert Jones nació en el famoso barrio londin-ense de Brixton el 8 de enero de 1947 en una familia de clase media. Ya desde niño se mostró especialmente dotado, creativo y rebelde. Con seis años cantaba en el coro del colegio, y con nueve, sorprendía y deleitaba con sus bailes espectacularmente precoces. El descu-brimiento de Elvis y sus coreografías marcó para siem-pre al joven David. Ukelele, skiffle y tea-chest con im-itaciones teatralizadas de rockeros de la época fueron el siguiente paso en su frenética actividad creativa. En este punto, coincide con los comienzos de The Beatles y otras bandas. Bowie, como Jagger o Macca, era el típico alumno de Art School, donde aprendió materias como Arte, Música, Diseño… y hasta Tipografía, despliegue que hizo mucho bien a su creatividad desatada. Lástima carecer de un Brian Epstein que le centrase en su carre-ra musical….

Mientras se aficionaba al saxo alto y al jazz moderno, en 1962 casi pierde la vista en una pelea. Desde ese momento, una pupila dilatada permanente le da esa sensación de tener un ojo de cada color que siempre le ha acompañado. Ese mismo año formó su primera ban-

da, The Kon-rads, especializados en bodas y bautizos, a los que siguieron los blueseros The King Bees, que con Liza Jane tuvieron una repercusión mínima. The Man-nish Boys fueron otro intento que tampoco consiguió despegar. Pero Bowie, terco y seguro de su talento y muy ambicioso, no cedía. The Low Third, bastante mods, The Buzz y Riot Squad son otras bandas con las que seguía persiguiendo el estrellato. En ese momento, el jo-ven Bowie decide que ya está preparado para comenzar su carrera en solitario y cambió su nombre, Davy Jones, que se confundía con el líder de los Monkees, por el definitivo, aunque no exclusivo, David Bowie. Ya en sol-itario, en 1967, publica el single The Laughing Gnome y su primer LP, David Bowie, una mezcla de pop-rock psicodélico con music-hall. Inquieto ante el relativo fra-caso, descansa musicalmente durante dos años, tiempo en que conoce a Lindsay Kemp, de quien absorbe su mímica, teatralidad y coreografías, que le marcaron para siempre. Bowie es un bohemio cautivado por la per-sonalidad arrolladora de Kemp. En este tiempo, con-oció a Hermione, una de sus primeras parejas – Letter to Hermione- con quién formó un trio artístico donde mezclaban folk, merseybeat, poesía y mímica.

Pese a todo, no terminaba de despegar. Participaba en castings, llegó a salir en algún anuncio de TV y hasta realizó un vídeo promocional con una selección de su mejor repertorio y simultáneamente, se entregaba a una frenética actividad narcótico-sexual, sin importar ni el sexo ni la sustancia.... Después de Hermione, conoció a Angela, momento en que Bowie se consagró a con-stantes orgías de todo género famosas en el mundillo artístico londinense. Mientras, seguía experimentando, en este caso con el folk y hasta llegó a dirigir un club de éxito en Londres, The Arts Lab.

Tras una exitosa demo de Space Oddity, que coincidió con la llegada del hombre a la Luna, se publicó el segun-do LP que se llamó también David Bowie, cambiándose para los USA y para evitar confusiones con el primero, por el de Man of Words/Man of Music, aunque sien-


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do conocido como Space Oddity. En el Reino Unido, Space Oddity llegó al Top 5. El siguiente paso, muy in-fluenciado por la carismática Angela –musa que inspiró el clásico de los Stones, Angie- fue formar una banda a la altura de las expectativas. Para ello, contó con John Cambridge a la batería, Tony Visconti al bajo y el gran Mick Ronson a la guitarra. A Cambridge, por discrep-ancias creativas con Bowie, pronto le sustituyó Mick

Woodmansey. Por último, contrató como manager a Tony Defries. A partir de aquí, el resto es historia. La música que hizo Bowie en los 60, infravalorada hasta su llegada al estrellato, es una muestra de todas sus influencias y el germen que le ha convertido en uno de los personajes más importantes e inclasificables de la música de todos los tiempos.

Discografía Básica (hasta 1969)

Singles

1964: Liza Jane (Davy Jones and The King Bees)1965: I pity the fool (The Mannish Boys)1965: You´ve got the habit of leaving (Davy Jones and the Lower Third)1966: Can´t help thinking about me (Davy Jones & The Lower Third)1966: Do anything you say (David Bowie)1967: The laughing gnome (David Bowie)1969: Space Oddity (David Bowie)

LP´s

1967: David Bowie1969: Space Oddity

10 canciones imprescindibles (hasta 1969)

1. Loveyoutilltuesday2. Liza Jane3. Can´thelpthinkingabout me4. Rubber Band5. I digeverything6. SpaceOddity7. You’vegotthehabit of leaving8. The London Boys9. I´mnotlosingsleep10. Sillyboyblue

Continuará...

Carlos Gerona@charlon05


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En esta sección no me centraré tanto en la música si no en los elementos indispensables para com-ponerla: Los instrumentos musicales. En este

número, haré un breve pero intenso repaso ilustrado a la historia de las guitarras eléctricas.

Historia de las guitarras eléctricasAunque la mayoría de gente pueda pensar que las gui-tarras eléctricas derivan de la guitarra acústica tradicio-nal, en realidad no es así. También hay gente que piensa que Napoleón era enano, o que si te acuestas con gente que sabe que tiene SIDA no te contagiarás, y que es muy sano y beneficioso para la salud.

Las guitarras eléctricas derivan de las conocidas como “Lap Steel Guitars”, esas guitarras que se tocan en hor-izontal, y que supongo que la mayoría de gente conoc-erán por David Gilmour. Las primeras en incorporar pastillas fueron las fabricadas por la empresa Ricken-backer. Fueron ampliamente adoptadas por los guitar-ristas de jazz con la intención de que las guitarras se es-cuchasen más (y desde entonces no ha cambiado nada).

Más tarde, en los años 40, el músico Lester William Pol-fuss, conocido como Les Paul, construyó en la fábrica de Gibson (una antigua empresa de mandolinas cuyo fundador acabó en un manicomio tras una visión en la que vio lo que haría Bono con los instrumentos que su empresa fabricaría) el modelo conocido como THE LOG, que consistía en un mástil y al final de este una pastilla, otra en el medio y, en el puente, otra más. A los laterales Les Paul añadió dos trozos de madera como si fuesen de un violín para que la gente no se asustase al verla, pero no tenían ninguna funcionalidad (como Andrew Fletcher).

En 1950 Leo Fender construyó la que sería la primera guitarra de cuerpo sólido (hecha en un bloque de made-ra maciza encolada), la Fender Esquier. Constaba de una pastilla SingleCoil (de bobina simple - no os preocupéis que en el próximo número os explico toda esta mierda técnica) y de dos potenciómetros. Su cuerpo se basaba en las guitarras acústicas y es conocida por ser usada por

INSTRUMENTOS

GUITARRAS ELÉCTRICAS


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Syd Barret. Más tarde se presentó una versión definitiva con dos pastillas, una en el puente y otra en la unión con el mástil, conocida como la Fender Telecaster, o la mejor guitarra jamás fabricada.

Durante los años 50 la empresa Gretsch fabricó guitar-ras eléctricas con caja de resonancia. Fueron muy pop-ulares en la musica rockabilly, así como consecuencia de que Chuck Berry, un músico con unas manos tan delicadas que extraña que siendo de Missouri no se ded-icase a recoger algodón, hiciese buen uso de ellas. Bono también tocó una vez una Gretsch, pero a toro pasado todo el mundo es Manolete, y si a lo que Bono hace se le llama música, lo que Hitler hizo fue filantropía.

Gibson imitó los modelos Gretsch con sus guitarras ES, como por ejemplo la ES-355, conocida por ser la guitar-ra de B.B.King, Lucille. La empresa, viendo el éxito de la Telecaster de la competencia, que dominó durante 7 años la venta de guitarras eléctricas, decidió basarse en el modelo de THE LOG para fabricar la guitarra Gib-son Les Paul. Aun así, este fue un modelo poco inspira-do, que llegó tarde y mal, y por eso se dejó de fabricar para dar paso, en 1961, a la Gibson SG, conocida por ser la guitarra de Angus Young. Un año después Fender inventó la segunda mejor guitarra de todos los tiempos, la Fender Jaguar.

Las guitarras originalmente se utilizaron para tocar blues y jazz, pero más adelante fueron adoptadas por las bandas de rock gracias al sonido que se podía conseguir sobrecargando los canales (overdrive), muy distorsiona-do y que daba una sensación de rumor de fondo que realzaba la voz.

Joel Ricca@crypto44


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LOS FLECHAZOSEl disco que han reeditado los Flechazos a raíz

del Record Store Day del pasado 18 de Abril gracias a Warner, volvió a abrir la caja de los

rumores como suele ocurrir en estos casos. Pero como se ha encargado de decir el líder y vocalista de la ban-da, Alejandro Díez, en una entrevista en el Diario de León, no volverán, y además, todo ello afirmado de una forma totalmente rotunda. Alex está embarcado en su proyecto como Cooper, el cual le da toda la diversión musical que necesita y volver a embarcarse en un retor-no de Los Flechazos sería perder la magia de su nueva etapa. La banda se disolvió en el transcurso del Purple Weekend de 1997, festival mod sesentero del que Alex Díez y Elena son fundadores, cuando incluso estaban preparando un nuevo trabajo, pero la marcha poco a poco de todos sus miembros y los más de 11 años en la carretera hicieron que el final se acelerara.

Los Flechazos pasarán a la historia como la banda mod del panorama español, en dura pugna con los Brighton 64 o Los Elegantes. Con claras influencias de los años 60 y un marcado estilo mod-beat y con la sombra del pop clásico británico de bandas como los Small Faces, The Jam, Kinks o The Who, tuvieron un cierto caché en la época, siendo protagonistas de la primera edición del FIB, en el lejano 1995. Aunque no llegaron en el mejor momento de la escena en España (ya había acabado in-cluso el revival mod) sí que tuvieron la suficiente fuerza para crear una pequeña explosión del movimiento y que incluso se llegara a tener conciencia del propio movi-miento.

Un mod leonés llamado Alejandro Díez tenía una banda llamada Ópera Prima basada en el powerpop y donde Alex no se encontraba plenamente contento al no pod-er introducir un estilo y toque personal; debido a ello se embarcó en la creación de una nueva banda, con el estilo, la elegancia y el sonido mod-beat como base de sus ideas, algo que llevaron a rajatabla y como veremos a continuación les supuso algún pequeño problema. La andadura de los Flechazos comenzó en el año 86, aparte del nombrado Alex Díez, los otros componentes eran Elena Iglesias, Pedro, Héctor y José. Su primera grabación se produjo en el año 88 y fue todo un bom-bazo que los llevó directamente al primer nivel de la música nacional con su marcado estilo sesentero. Aun-que previamente habían trabajado en algunos trabajos para la discográfica DRO, aquel disco llamado Viviendo

en la era Pop les puso de lleno en primera línea de salida por la carrera a mejor banda mod nacional, un disco cargado de canciones cortas pero muy directas, llenas de una vitalidad desbordante y bailables al 100% con bases R&B, power pop y garaje.

Tras el éxito de su primer trabajo, DRO, su discográfi-ca en el momento, les editó un segundo larga duración que obtuvo muy buenos resultados. En el club fue su definitivo lanzamiento a la primera plana de la música nacional, obteniendo ciertos resultados incluso en los círculos modernistas fuera de España. En dicho disco podemos encontrar el tema La chica de Mel, una de sus grandes canciones y que muchos grupos actualmente versionan, como los malagueños Airbag.

Llegamos al año 1991 donde editaron aún con Dro un trabajo de recopilaciones, ¡Preparados, listos, ya!, donde incluyeron algunos temas nuevos pero en general fue recoger y seleccionar los mejores temas de sus dos primeros LP´s.

Poco a poco comenzaron los problemas de Los Flechazos con su discográfica Dro: mientras los prim-eros deseaban mantener su raíz sesentera modernista pura, los segundos buscaban sonidos más comerciales con los que obtener mejores resultados económicos. Los nuevos trabajos de los Flechazos buscaban esta mezcla y sinceramente, los resultados se notaron, pero a peor. En el año 92 publicaron un nuevo trabajo, En acción donde destacaba el tema A toda velocidad.

En el año 1993 y en un estado de plena madurez de la banda llegó uno de sus grandes momentos, dos días consecutivos de lleno absoluto en la mítica Sala Re-volver les llevó a grabar un trabajo en directo El sor-prendente sonido de Los Flechazos, donde muestran la fuerza que tenía la banda delante del público con una actitud entusiasta y llena de energía.

Llegados al año 94 los problemas que tenían con DRO llegaron a un punto insalvable. La discográfica exigía un estilo que enganchara más al público, algo a lo que se negaron para seguir manteniendo la línea maestra mar-cada desde un comienzo. El grupo siguió trabajando y antes de su paso a la recién creada Elefant, se publicó la biografía de la banda con el título Haciendo astillas el reloj, que a su vez sirvió para un nuevo álbum recopila-


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torio con todo su trabajo en DRO.

Recuperando de nuevo su estilo fresco, cargado de power pop y una clara vuelta a sus orígenes, publican un nuevo trabajo bajo Elefant, Alta Fidelidad,que como decíamos sirvió para recuperar de nuevo a los verdader-os Flechazos. Con poco tiempo entre uno y otro publi-caron varios LP´s en inglés que les confirmaron defini-tivamente como una de las bandas punteras de la escena mod europea y que confirmaban las excelentes críticas que obtuvieron tras sus primeros trabajos, actuando in-cluso en diferentes festivales europeos. En el año 95, primera edición del Festival Internacional de Benicas-sim, fueron una de las bandas que coparon el cartel del festival.

Su último trabajo llegó en el año 96, cuando ya solo es-taban Alex y Elena como miembros de la banda original y donde varios de sus temas fueron cantados en inglés, One more try, convirtiéndose así en el última larga du-ración que publicó la banda leonesa.

Durante la celebración del Purple Weekend del año 98 anunciaron su disolución, una banda con una intensa carrera de 11 años y 6 largas duración aparte de los in-numerables conciertos que dieron a lo largo de nues-tra geografía y parte de Europa, siendo quizás la mejor banda del estilo mod-beat de nuestro país y sin que por ahora tengamos un grupo que pueda hacerles sombra o quitarles de la parte más alta del pódium.

Alex ha seguido con su carrera en solitario, esta vez cre-ando la banda Cooper. En cierto modo podemos nom-brarlo como el mod-father del movimiento español, un Paul Weller a la española.

Javier Caballero@milic82


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DESCUBRIENDO A...

D E M O N H I G HEn los últimos años se está dando en Galicia la

proliferación de un buen puñado de grupos que valen mucho la pena. Si en el anterior número

os hemos presentado a Chicharrón, este mes os vamos a hablar de otra banda gallega de proyección similar: Demonhigh. Probablemente si mis paisanos hubiesen nacido en los Estados Unidos de finales de los sesenta estaríamos hablando de uno de esos grupos underground de culto, prácticamente desconocidos, que rescatamos para nues-tros viajes sónicos al pasado. Jóvenes, garageros, con una pizca de psicodelia bien aderezada bajo una apari-encia de banda rockandrollera al uso con humo. Mucho humo.

Demonhigh nació en 2013 bajo la batuta de Christian Senra (Guitarra y Voz) y Cristian Docampo (Batería), ambos procedentes de Fuzzipopes&theDevilsCarpet. El año pasado debutaron en formato largo con un gran disco cantado en castellano Corazón Ardiente. Los ejes temáticos sobre los cuales giran todas sus canciones son tan clásicos como evidentes en cualquier banda emer-gente que intente recuperar sonidos de los sesenta: chi-cas, corazones rotos y relaciones. El resultado ha sido más que satisfactorio, excelente. Hasta tal punto que, Jungla de Asfalto, el single de su álbum debut, se ha convertido en la banda sonora del spot promocional de Converse y el festival MakeNoise.

La fórmula del éxito es clara: canciones que ganen muchos puntos en directo, con estribillos pegadizos y melodías bailables, tan envenenadas y rabiosas como distorsionadas pero que no se deben entender como su particular reacción frente a la sociedad en la que vivi-mos, sino todo lo contrario. Su única intención es dis-frutar y hacernos partícipes.

Apunten este nombre: Demon….High…… Demon-high. Si, la traducción al castellano sería algo así como El Demonio Fumado. Darán mucho que hablar en los próximos meses.

Temas recomendados: Jungla de Asfalto, Corazón Ardi-ente, Noche Hipnótica y Están Temblando.

Brais Iglesias Castro @Bricepinkfloyd


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Steve Earle dijo una vez: “Townes Van Zandt es el mejor cantautor del mundo, y lo diré plantando mis botas de cowboy en la mesa de Bob Dylan”.

Y lo que es bien cierto es que el propio Townes rechazó la petición del de Duluth de colaborar en varias can-ciones. Ese era su interés por la fama y el dinero.

Como iba a titular su primer disco: For the Sake of the Song. Ignoremos la producción de Jack Clement: las canciones de Van Zandt tienen la simplicidad de la vida, la contradicción de muerte y amor, una magia primaria que las impregna, capaz de describir un pesimismo in-salvable para solucionarlo con la luz de una mañana o el brillo en los ojos de la persona amada. De eso se trata la vida.

“I don’t envision a very long life for myself. I think my life will run out before my work does. I’ve designed it that way.”

Alejado de la escasa poesía del folk y con mucha her-encia del blues, la música de Townes recogía lo efímero en la felicidad y la conexión con otro ser humano en un desierto donde el tormento abunda más que la arena. Be Here to Love me es un canto feliz, indescriptible-mente íntimo y desgarrador, sin miedo a ser vulnerable. Para qué.

Es la melancolía de un hombre desarraigado, mania-co-depresivo, sometido a una (ahora) inhumana terapia de choque insulínico. La melancolía de un hombre que se auto medicaba (entre sus favoritos estaban el whis-key, la heroína, la cocaína y el vodka) para calmar la lucha entre su talento y sus impulsos autodestructivos.

And time was like water but I was the sea

Tal vez uno de los mayores ejemplos de la capacidad creativa del cowboy sea To Live is to Fly: habla de un hombre fatigado, con una gran conexión con la natu-raleza, pero también existe un sentido de trascenden-cia; la carretera sigue y tiene destinos maravillosos, pero siempre existirá la calidez de un hogar. La seguridad de volver a ese punto de partida.

Pero, si To Live is to Fly es un exponente de su capaci-dad creativa, Pancho & Lefty lo es de su fatalista esen-cia vital. Morir como un forajido o traicionarse a uno mismo con tal de ver un nuevo día hasta convertirse en la sombra de uno mismo: no existe un final feliz, una resolución a la que aspirar. Pero perder no siempre es malo, y el tejano se encargó de mostrar la majestuosidad que tiene, simplemente, sobrevivir.

Tal vez su obra no sea lo suficientemente conocida. No lo es. A él tampoco le preocuparía. Por eso resulta tan agradable encontrar algunas de sus canciones en The Big Lebowski (versionando la maravillosa Dead Flow-ers, de The Rolling Stones), Six Feet Under, Deadwood, Breaking Bad o True Detective. O viendo cómo Nacho vegas bebió tanto de él, en canciones como Que te vaya bien, Miss Carrusel (adaptación directa de Fare Thee Well, Miss Carousel), Hablando de Marlén o Canción de Isabel (que recuerdan a Tecumseh Valley y Marie, respectivamente).

I tried to kill the pain, I bought some wine and hopped a train.

Aunque parezca lo contrario, su música no hablaba de una huida hacia delante. Hablaba del dolor, sí; de la tris-teza de estar vivo y del azul más oscuro (curiosamente, su último disco anunciaba que no había ya un azul más oscuro), pero también de la felicidad más simple, hon-esta, desnuda. La única que vale. Porque este texto es simplemente una humilde carta de amor a quien es, para mí, uno de los mayores cantautores, músicos, personas de la historia.

Mother thinks the road is long and lonelyLittle brother thinks the road is straight and fineLittle darlin’ thinks the road is soft and lovelyI’m thankful that old road’s a friend of mine

Ignacio Salgado @n_raist

Townes Van Zandt

No Deeper Blue


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MI PRIMERA VEZ EN...

PAREDES DE COURA

Vivir cerca de Portugal tiene la ventaja de poder mirar a ambos lados cuando un artista anun-cia fechas de conciertos y cuando comienza la

temporada de festivales.

Aquel año, 2011, habíamos tenido suerte con el reparto del otro lado de la frontera y, al llegar un Agosto en el que no íbamos a tener vacaciones (ese mes se res-erva, por alguna ley no escrita, a gente con hijos) y sí muchas ganas de hacer cosas, el cartel del Paredes de Coura atrajo nuestra atención: Pulp, Mogwai, Kings of Convenience, Warpaint, Metronomy, Deerhunter, Twin Shadow, Kurt Vile y un puñado de grupos emergentes portugueses bien merecían una excursión.

Primero fue el cartel. Luego, un mapa: ¿dónde estaba aquel festival que prometía un marco incomparable? Al noroeste de Portugal, casi llegando a Pontevedra, una vez pasado ese paraíso cool que es Oporto. Lejos, muy muy lejos, lo suficientemente lejos para huir del calor. Paredes de Coura es un pueblecito en las inmediaciones del río Coura, rodeado de un entorno natural increíble, que no llega ni a 10.000 habitantes.

Y, ¿cómo íbamos a llegar? Para otros, quizá, el avión sea necesario (el aeropuerto de Oporto a 100 km y el de Vigo a 50, ambos con vuelos lowcost, son una muy buena opción, la organización pone transporte públi-co expresamente esos días para poder llegar a nuestro pueblo perdido) pero para nosotros lo fácil era lidiar con los conductores portugueses y los incomprensibles peajes electrónicos y llegar por carretera. Afortunada-mente, la web del festival es bastante clara: sólo hay una autovía para llegar y la salida es Paredes de Coura, hasta que llegas, todo línea recta (cualquiera que haya teni-do que conducir alguna vez por una carretera comarcal portuguesa entenderá el por qué de la cursiva).Y así es, llegas y te topas con el parking, el camping y el festival en sí. Aquel año decidimos quedarnos en el

camping. Sólo hay un alojamiento en todo el pueblo y probablemente estuviera reservado desde el año ante-rior, no había muchas más opciones en realidad. Hoy por hoy, sabemos que no es mala opción quedarse en alguna de las aldeas de alrededor, con mucha casa habil-itada para turismo rural, e incluso llegar a Galicia para un hotel de verdad.

El de este festival queda dentro del top 10 de Camp-ings para eventos musicales. Buen número de baños y duchas, sin sensación de hacinamiento, mucha sombra, 95% en llano, poco vandalismo, puestos de comida, para recargar el móvil…y el río. El Río Coura, uno de los protagonistas del festival. Aunque está prohibido nadar ( y no querríais tampoco, creedme)no son demasiado estrictos con el tema, se puede navegar y se organizan actividades en su orilla. Por navegar, entendedme, hablo de barcas inflables en las que puedes ver disfrutar de su particular paraíso tanto al público como a algún artista. El primer año que fui, Erlend Øye (Kings of Conve-nience, The Whitest Boy Alive) perdió su equipaje antes de llegar y todo el público se desvivió por él, dejándole ropa, guitarras, barcas hinchables… Además, desde la hora de comer, hay improvisaciones de jazz, lecturas de poetas portugueses, algún conciertillo menor, de los que puedes disfrutar en la orilla o incluso en tu tienda de campaña. El pueblo, en caso de que necesites avitual-lamiento o, por ejemplo, usar las duchas individuales del pabellón deportivo municipal (50 céntimos aquel año ) se encuentra sólo a una cuesta de distancia.


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Porque si hay algo reprochable al festival es la cuesta. ESA cuesta. La cuesta que permite el acceso al pueblo y a la entrada del recinto. Si te alojas fuera, el parking oficial te obliga a utilizarla también. Si, diosnoloquiera, refresca por la noche y tienes que volver a por una su-dadera (estamos hablando del norte de Portugal, del sur de Galicia, puede pasar y pasará), tendrás que volver a enfrentarte a ella. La medicación del asma, los gemelos como piedras, la cuesta de tus pesadillas.Claro que, una vez dentro del recinto, tendrás dos op-ciones: bajarla de nuevo y meterte en el meollo del pú-blico, en la zona llana, para que te tiemblen las rodillas con el sonido que se puede llegar a arrancar del escenar-io principal y que hará que recuerdes los conciertos con un temblor de rodillas. O quedarte en la cuesta, marcan-do gemelos y flipar con las vistas un poco más generales del escenario y con el sonido envolvente provocado por los árboles del bosque. Ambas opciones son igual de válidas, cada una tiene su encanto.

El otro escenario, una carpa semicerrada a unos dos minutos andando desde el principal tiene un sonido digno de mencionar también y además, si refresca, es buen refugio.

Además no hay demasiado problema de colas en las barras ni en los baños (curiosamente, en este festival, las mayores colas se las llevan el cajero automático y los puestos de café, benditos, benditos portugueses). Los precios tanto de comidas como de bebidas son bastante más asequibles que los de un festival patrio. No esperéis alcohol de verdad. En los festivales portugueses se per-mite la entrada a menores de edad, por lo que sólo se vende cerveza (y alguna variante, por ejemplo, la sidra inglesa) y sangría, normalmente de barril. Con suerte, podrás encontrar algún puesto de alguna marca en con-creto que esté haciendo promoción.

En la parte técnica, conciertos irreprochables. El soni-do, en medio del bosque y los juegos de luces (tanto na-turales, con un atardecer increíble como artificiales, una vez entrada la noche) hacen de aquello algo realmente mágico. El público, si alguna vez habéis estado en un

festival portugués, es más que curioso. Muchísimo más respetuoso que el público español en general pero, ay, desacompasados como ellos solos. Un portugués par-ticipará en un pogo si y sólo si sabe que puede salir sin despeinarse del asunto. Se sabrá al dedillo las letras de los grupos que está viendo, eso sí, allí no hay nadie por el puro postureo. Además, no asistirás a ninguna pelea propiciada por un poco más de alcohol de la cuenta, el ambiente es prácticamente inmejorable.

Sumando todo lo anterior, sólo queda decir que el día que sales de allí ya vas pensando en cuándo volver (poca gente conozco que sólo haya ido en una oca-sión), te imaginas a los grupos que giran ese año en esos escenarios y todo concierto cambia para mejor.Que no te asuste lo imposible, en apariencia, del viaje, merecerá la pena.

María José Bernáldez@shewalkinglikea

Podéis enviarnos vuestros artículos contándonos vuestra primera experiencia en un festival a redac-ció[email protected]


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EL BACKSTAGEYéndonos a la Wikipedia, Backstage se define

como los trasbastidores o trasvestidores, el área trasera del teatro, sala de conciertos o del

rodaje de una película, los espacios ocultos al públi-co y relacionados con el desarrollo del espectáculo. También se utiliza la palabra backstage, literalmente detrás del escenario, en expresiones tradicionales como entre o tras las bambalinas. Como referencia, tanto física como ideológica, a los espacios y aspectos del show que no ven los espectadores. En resumen, si nos referimos al mundo de la música en directo, el inigualable morbo de compartir la privacidad de la estrella de turno favorita en plena acción….

Siempre he pensado en la Factory de Warhol como la metáfora perfecta del espíritu de un backstage per-manente, con el estallido creativo de egos permanen-temente en guardia, en una continua juerga donde se daban todo tipo de excesos. El backstage depende en la práctica de un montón de cosas: tipo de banda y caché, tipo de local, tipo de concierto… Además, podemos encontrar desde backstages elefantiásicos de bandas como los Stones a otros infinitamente más discretos, una mesa con una caja de cervezas, algún refresco y, a lo sumo, agua mineral. Cabría mencionar también los desfases de festivales como Woodstock o Reading.

También conviene recordar en la machista historia del backstage típicamente rockero a las míticas groupies de los tiempos heroicos, entre las que destacan Bian-ca Jagger, Pamela des Barres, Bebe Buell, Anita Pal-lenberg, Nancy Spungen, Sable Starr o la mismísima Marianne Faithfull. Hay libros y hasta películas sobre este tema donde se atestigua como funcionaban los camerinos de las grandes bandas en la época dora-da del sex, drugs & rock’n´roll. Alcohol, coca, yerba, sexo, destrozos… todo valía.

En nuestro país, mucho más modesto , también ten-emos nuestra versión del mito del backstage, aunque,

no por sencilla menos salvaje. Desde los camerinos de garitos como los madrileños Rockola o Agapo (si las paredes hablaran…) a otros de salas como por ejemp-lo La Riviera, Revolver, Universal, RockClub, Zeleste, Bikini, Razzmatazz, Gasolinera… por citar algunas conocidas. Mención aparte merecen los desparrames que se montan en festivales tipo Benicassim.

España, después de una siesta de cuarenta años, y con una escena muy underground en los 70, a partir de los 80 empezó a entrar en los circuitos internacionales de conciertos y consolidó a la vez una escena nacional muy interesante con muchas y variadas bandas, con lo que el backstage patrio creció y creció reproduciendo lo que se cocía fuera. Ahora, sexo, droga y fiesta son sustituidos en el caso de bandas que ya van peinando canas por cosas más frugales tipo agua mineral, fru-ta o alguna excéntrica demanda del músico de turno, aunque no faltan nuevas generaciones que toman el relevo de las anteriores. Mil historias se podrían con-tar sin duda, pero el que tenga ganas, que investigue, y el que no, que imagine. El tema da mucho de sí…

Carlos Gerona @charlon05


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Como en Madafackismo Underground nos apasionan las redes sociales y todo lo relacionado con este mundo, cada mes seguiremos atentos a las publicaciones que postean los propios artistas, como datos curiosos, algo gracioso e

interesante, recomendaciones de algún artista internacional o nacional…

RUIDO DE FONDO

¿Sabías que…?¿Un usuario hizo una petición en Change.org pidi-endo a la organización del Glastonbury quitar como cabeza de cartel a Kanye West?

En esta sección invitamos a realizar cualquier sugerencia, crítica o propuesta y a que se pasen por nuestros perfiles de Facebook y Twitter.

Samuel Castellano @samuel13c

#TIDAL“Unos jodidos plutócratas de la nueva escuela”, esto decía Winston Marshall, miembro de Mumford and Sons, sobre TIDAL, un servicio de streaming en el que los dueños lo forman doce artistas como Jay Z, Beyonce, Daft Punk, entre otros. Este servicio, llevado a cabo desde hace unas semanas, no sido bien recibido por al-gunos artistas. Estas han sido algunas de las reacciones:Geof Barrow (Portishead) y Edward Droste (Grizzly Bear)

#PETERCHECKCourtois le ha quitado la titularidad a Petr Cech en el Chelsea. Pero no pasa nada, porque mientras él espe-ra su oportunidad, saca tiempo para tocar la batería y abrir un canal de Youtube en el cual ha subido ya varias covers a diferentes artistas, incluida la última a los es-pañoles Vestusta Morla. Desde aquí recomendamos que vean el resto de covers. Además, su grupo favorito es Foo Fighters así que ¿lo veremos en el Pyramid Stage del Glastonbury este año?

#ABBEYROADTe has gastado todos tus ahorros para ir al Arenal Sound, FIB o BBK y lo sabes, y ahora no puedes visitar los estudios de Abbey Road en Londres.

Pero no pasa nada porque Google te lo trae a casa a través de un viaje virtual para que conozcas un poco mejor este mítico estudio, del cual salieron discos como los de Radiohead, Pink Floyd, etc. Así que, siéntate, colócate tus auriculares ¡y disfruta!


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N OV E DA D E S

FESTIVALERASAGENDA DE FESTIVALESEl SOS 4.8 dará comienzo el 1 de mayo a la tempora-da festivalera (con permiso de los recientes San San y MBC). Repasemos que nos depara este mes de mayo:

SOS 4.8(1-2 mayo): Morrissey, The Vaccines, The Na-tional, Metronomy…

Primavera Sound (27-30 de mayo): The Black Keys, Alt-J, The Strokes, Interpol, Belle & Sebastian, Patti Smith …

Gradual (29-30 mayo): Ivory Coast, Belako, Varry Bra-va, We Are Standard …

Palencia Sonora (29-30 mayo): Los Enemigos, Nove-dades Carminha, El Columpio Asesino...

Este último mes también ha habido bastante movimien-to en los line-up de los festivales nacionales. Destacan la inclusión de Vetusta Morla, The cribs y Frank Turner en el FIB, The Subways y Everything Everything en el Arenal, Major Lazer al Rototom y Kendrick Lamar en el Cruïlla.

Contempopránea (5 y 6 de Junio) Vetusta Morla y Novedades Carminha.

Sónar ( 18, 19 y 20 de Junio) Just Blaze, Nazoranai, Lost Twin, Teengirl Fantasy, Christian Kroupa, Ole-fonken, Adda Kaleh, Sumorai, Wife , Skepta, Mum-dance & Novelist feat. The Square, Floating Points, Xosar, Zebra Katz, Larry Gus, Brigitte Laverne, Olde Gods y Palms Trax.

Cruïlla (10, 11 y 12 de Julio) Kendrick Lamar, Aloe Blacc, Emeli Sandé, Dub Inc., Vintage People, Milky Chance, Osibisa, Zuco 103, Archive, Kiril Djaikovsky feat. Tk Wonder, Diana Fuentes, Birth Of Joy, Els Ca-tarres, Ferran Palau, Furguson, El Puchero del Hortela-

no, Los Granadians, Miquel Serra, Gramophone All-stars, Anna Roig i L’ombra de ton chien, Línia Maginot y Los Retrovisores.

FIB (16, 17,18 y 19 de Julio ): Vetusta Morla, The Cribs, Frank Turner & The Sleeping Souls, Godspeed You! Black Emperor, Palma Violets, Reverend & The Makers, Swim Deep, Celica XX, The Riptide Move-ment, Hamsandwich, Gavin James, Curtis Harding, Tiga, Madeon, Vessels, Holögrama, Evan Baggs y Ely-ella Dj’s.

Al Rumbo (16, 17 y 18 de Julio) Lauryn Hill Dub Inc, Rapsusklei & The Flow Fanatics, Miguel Campello, Foreign Beggars y Mártires del Compás, que se unen a Steve Aoki y Cypress Hill.

Festival’Era (25 de Julio) The Antlers, Gold Panda, The New Raemon, El Último Vecino, Jupiter Lion, Sau Poler, DJohnston, Lili’s House, Wesphere, DJ Capo y Bel Bee Bee.

Arenal Sound (del 28 de Julio al 2 de Agosto): , Zedd, The Subways , Everything Everything, We Are Scien-tists, The Shoes, Twin Atlantic, Don Broco, Dinero, Full, Amatria ,Correos, Elyella Dj’s,Toundra, Mujeres, La Bien Querida, Les Castizos y El Último Vecino. Por desgracia OK GO caen del cartel al cancelar toda su gira europea.

Rototom Sunsplash (del 15 al 22 de Agosto): Major Lazer, Matisyahu, Brown Sugar y un homenaje a Bob Marley con algunas de las figuras nacionales más de-stacadas del reggae, el hip hop y el mestizaje.

Cristian C. @sickcris


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Este mes en Madafackismo hemos decidido ced-er nuestro espacio a @DivanInquieto a cam-bio de una cita con la golfa del Honky Town

Woman de los Rolling Stones.

La música cuenta historias. En ocasiones abarca las fan-tasías, otras veces perfila recuerdos, sea cual fuere el con-tenido que guarda siempre hay un mensaje subyacente. Qué hacer con él, cómo aplicarlo a la vida o con quién compartir cualquiera de sus significados entra dentro de lo personal. En este lugar emergente, y como soy un diván me presto a ello con facilidad, analizaremos qué hay detrás de algunas de las letras de nuestra vida. No siempre será algo trascendente (sí lo fue en el muro (The Wall) de Pink Floyd. Qué cosas, ahora casi todos tene-mos muros, pero esto es otra historia de la que habla-remos en otro momento. ¿Ironías del destino?), pero sí algo ¿útil? Serán desvelados muchos de los misterios de la naturaleza humana que se ocultan verso tras verso.También se utiliza, cantando o integrando el mensaje, como elemento expiatorio de dramones, desengaños, minidramas y alegrías personales. Ahí queríamos llegar, al punto de preguntarnos para qué nos sirve escuchar algo o inclusopor qué lo hacemos.

En esta ocasión vamos a indagar en la pesadez y el abur-rimiento que comporta la conversión en Chupiguay del Universo (CdU, para abreviar), familiar transversal del Madafacka, ¿qué es? No perdáis detalle, a ver cuántos/as os identificáis con esto o, en su defecto, a cuántos personajes quiero y no puedo conocéis a los que se les apliquen tales rasgos.

Imaginemos que lo somos o quisiéramos convertirnos en uno/a (CdU). ¿Qué hemos hecho para conseguirlo? O ¿Qué hay que hacer para ello? Para empezar, dejar de ser un voyeur de la vida y empezar a introducirse en el modo vividor, es decir, menos pensar y dar vueltas una y otra vez a las cosas y más actuar (con cautela). En un momento empezamos a desgranar el misterio, antes pongámonos en antecedentes.

MADAFACKISMO Nº3

¿DE QUÉ HABLA TU CANCIÓN?

En 1994 aparece en la escena española Circodelia, for-mación compuesta inicialmente por dos guitarras, Pab-lo Parser y Marcos Íñiguez, y un bajo, Mike Rata, que se reúne versionando a The Clash. En el 95 se incorpora a la banda un batería, Juan Velázquez. Finalmente, en 1996, se completa el grupo con la entrada de Víctor Pérez como vocalista. A pesar de llevar cierto tiempo en la música no es hasta 2002, con Las chicas de las canciones, cuando el grupo se hace visible en la esce-na española. Su estética podría recordar a una mezcla entre la etapa de pop y glamour más ochenteros de Ra-dio Futura y los Stones de los 70. Buscad y comparad las semejanzas y divergencias entre todos ellos, tanto a nivel de imagen como de influencias. Se supone que sois melómanos, mitómanos y fans empedernidos de algún grupo, a veces tanto a nivel de investigación en biografías y demás como estético, ¿no? ¿Acaso nunca os habéis vestido como vuestro(s) cantante(s) favoritos? No mintáis, que os estoy viendo. Aunque ahora pert-enezca a la categoría de secreto inconfesable todos lo hemos hecho. Pues eso.

¿Se puede construir un CdU?Eso parece, a priori, tal como nos cuenta Circodelia. Pero ¿cuánto hay de verdad en la fórmula mágica que la publicidad promete? Veamos:

¿Dónde están las chicas de las canciones?¿Dónde están las intensas emociones?¿Qué fue de la golfa del Honky Town Woman?¿Quién tiene el móvil de Madonna?

Punto de partida, ensoñación: se da por supuesto que hay chicasque son, que su mera existencia debe generar sensaciones concretas. Desinhibidas y descaradas como Madonna o laprincesa de antro anónima que equilibran con maestría la fina línea entre lo elegante y lo vulgar. Parece no haber duda en que casi nada de esto se ase-meja a la realidad, porque ¿quién es el/la que elige? Ahí lo dejamos, pensad, pensad inocentes.

Nos conocimos en una fiesta absurdaYo estaba muy cargado


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Ella estaba solaNo estuve brillanteNo fue sugestivaDios bendiga a la bebida

Comienzan las evidencias: la ilusión de lo fantástico no (suele) responde(r) a las expectativas previas: chico/a conoce a chica/o (recordad lo de la elección de antes porque suele ser cierto). Si no existe algo de curiosidad inicial no se pondrán en marcha los engranajes de la se-ducción. También es preciso dejar tiempo y dar la opor-tunidad a una segunda impresión. Las primeras pueden ser erróneas. Ojo.

Yo tengo una casaTú tienes para el taxiYo tengo MartiniTú tienes profilaxisSin mucho negocio nos fuimos a acostarY no fue la noche del jaguar

Vamos a ver: ¿De verdad te crees que, liándonos por primera vez después de decirnos cuatro cosas y tontear con media destilería en la boca, alguno de los dos va a desplegar toda la capacidad de juego y la magia am-orosa para complacernos más allá del desahogo nece-sario?, ¿de verdad lo creías? Pero, pero, pero ¿qué me estás contando? Lo de las películas es mentira. Y lo de esas películas más aún. Y eso no lo arregla ni una ni dos botellas, os lo juro, más bien lo estropea más.

Quise vivir un viernes noche salvajeMe pasé de listoY me echaron de la discoQuiero saltarme el protocoloPero no encuentro ni dónde ni cómo

¿Recuerdan ustedes lo de la cautela? Pues este (tercer verso de la estrofa) es uno de los motivos por los que es necesaria. Porque es muy, pero que muy fácil pasar de la gracia sutil al esperpento, y cuando sucede, la diversión acaba y la vergüenza asoma horas después. Pasará más de una vez, y más de dos (y de tres), pero a mayor nivel de cautela (y aprendizaje) se van minimizando los ries-gos.

Uso lo más macho en aftershaveY en el ascensor me siguen dando la espaldaUso calzoncillos de Calvin KleinY tampoco me la noto más larga

¿Y si a ellos les funciona, por qué a mí no? Porque a la utilización de equis producto se le suma cierta actitud, algo de autoconfianza. Si la tienes de partida la sugestión a lo mejor la incrementa, si no es así es más complicada la cosa. La clave está en aprender a jugar bien las car-tas de las que dispongas. ¿Cómo? ¿Qué tal un poco de sentido del humor? ¿Qué tal algo de cortesía? ¿Por qué no algo diferente que no digan otros/as? Cosas así, por ejemplo.

Total, que para ser un Chupiguay del Universo no hay más que seguir esos pasos, más o menos. Eso sí, no lo recomiendo porque la chupiguayez del universo acaba cansando. Los/as CdUs suelen ser egocéntricos, estúpi-dos/as de conversación limitada y (casi) nada cálidos porque sienten que es el mundo el que debe estar a sus pies, no ellos/as. Para risas bien, sé tu propio CdU a tiempo parcial, pero para la vida en general no. Es muy aburrido, aparte de cansino, dañino y falso. Ya veis que los circodelios lo han analizado a fondo. Y qué, ¿con-océis algún/a CdU o lo sois o habéis sido en algún mo-mento? Pues cuidado, el Diván os vigila, es capaz de leeros el alma. Y lo hará.

Diván Inquieto@DivanInquieto


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LA GUINDA FINALPOR SEBASTIAN BLANCHET

Ilustración en homenaje a Richard Ashcroft de su single “Break the night with colour”.


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madafackismo underground #03

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