la increible caminata

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Relato en primera persona sobre la fuga que el autor protagonizó de un gulag soviético. La historia fue llevada al cine en una película que se tituló en español "Camino a la libertad", protagonizada por Ed Harris y Collin Farrell.

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5/15/2018 La Increible Caminata - slidepdf.com

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una anticuada escrtbania de bronce, conun ancla y dosremos cruzados. lEI tmteroera .de eristal y todo ello se apoyaba en'una base de marmot 0 al8Jbastro.Incesantemente, aquella consersacton

sobre temas 'de Ill.vlda. normal y cotidianafluia .b.asta mi desde el otro ilado de Ia. mesa. Y yo, que me habla pasado un anoentero sin que nadle me dfrlgiese Ill,pa-labra, que me habfaIdo hundtendo en unadepresion cada 'Vez mas honda.' y que mehabra visto absclutamente aislado de Ill,vida. corrlente baro la Implacable normaeercelarla del silencto.. conslderaba que

aquel era un dla feli2i.<Loraro e'sque, a pesar deha'llarme tan

suclo, en mts lnformes prendas, unos ha-rapes mmundos, no crela Incorrgruente mipresencia ante taquellos .rusos"tan alegres'Y bien vestidos. iEl altivo orgullo del on-clal polaco de Caba'lleria fue 10 prtmeroque me quitaron en Minsk, diez meses an-tes. Fue una despladada humillacl6ti la queme hlcieron suir!r al .obligarme a desnu-darme enpubltco antes de mi primer lnte-rrogatorio. Los o.ficialesrusos formaban co-rro en torno mio .mlentras me tenia quequitar,·primeroel uniforme, luego mffina,camlsa, las botas, los calcetmes y. la ropainterior. Los oflciales sonreian.jdespectlvos,YIYOestabaante ellos 'humill.ado, con unahorrible verzuenaa ,ysabieildo que as! em-pezaban las jndrgnldadoes que. me harlan

padecer. Se nartaron .de .burlarse de mihasta .que, por fin, sa cansaron y se mar-charon, Mucho tiempo despues me arro-jaron mis pantalones de pre-so'y la "ru-bachka", 130camisa-blusa de 100Suses, Su-jetando aquellos odiosos paritalones y ml-randofijameiJ.te a mrs verdugos, eseucheper prtmera vez las preguntas del cuestio-.nario que Iba a conwrtlrse en el "leit-moti'v" de mi vida de prlslonero.;.;Nombre? lEdad? GFecha. de nacimien-

to?' "D6nde naci6? lNombres de -los pa-dres? ~lNacionalidad de estos? I.Profesi6ndel padre? "Nombre de soltera d!eIll.ma-dre? GNacionalidad de esta? El' .padr6nera siempre el m~smo. AI principio, las.preguntas se desgranaron en el mismo or-den en que a·parecfan e n los documentosque maneJaban, oon un floreo, .los im-es-

tlgadores. En RQuel primer interrogatorloestuvleron muy amabfes. incluso me dJeronca.f~ ,y 'fipgieron no darse cuenta de' mitorp'eza para manejar Ia taza con Ia mano,que me Queda.ba.Ubre. Uno de enos metendi6 un cIgarrilIo y ItHigohizo un gestocomoae disculpa per no Ihabe.rp€n~ado quecon una sola mano' disponible no podria, encenderlo~ haciendoIo el mismo.

Luego, las otra.s preguntas, las pel1-grosa:s. ' . .

'&D6ndeestaba usted ·el 2 de agosto de19391Aldecirles. Yi>que en el Ej~rcito po-laeo, mov,il1zadocontra los aleinanes en e .1j'rente.del Oeste, me obJetaban; "Pero us-ted conoce muybien la Polonia, oriental.Sn :familia 'vivla en Pin-sk. Eso esta muycerca de la fronteracon Rusta. ino? Bu-biera side muy ,tacH para un loven ,bien

preparado, romo 10es usted, pasaral otrolado, lno1··'Lo nega·ba tOd'oron ca'lltela.,procurando

(ContinuarlD

[

JARKOV Y LA LUBY\ANKA

Eran, aproximadamente, las nuevede la.mafianade un dia desapacible de novtem-bre cuando sono la Have en Is. pesada ce-rradura de mi celda, en )aprisi6n Lubyan-ka, w los dos 'guardlas-.dos tfpos atJetl-ccs-c-penetraron en ella mpidos. YOhabiaestado paseando rentamente porIa ceJda,dando. vueltas s vueltas, ron la. rnano iz-quierda .en la poslcionya caraetertsticaentre 'nosotros de sostener por.la. pretina

'los pantalones que los rusos nos dabansin bctones ry nl siquiera ·una cuerda paraatarlos, basandoss en la razonable creen-cia de que un nombre preoeupado por sos-tenerse 16s pantalones vexperlmanta, unaseria nHlcultad si Intenta escapar, Bahia .Interrumpido mispaseos de norla al olrelruido doeIapuerta 'Y,cuando entraron losguardias'. me hadlaba anovado icontra Ill.pared del fondo.· Uno de €'ilos se qued6Junto a la .puerta y el otro avanaaunospasos, :'Ven con riosotros", me dijo. "Dateprisa."

iEste dia-doce meses despues" de miarresto len Prnsk el '19 de noviembre de1939--;habfa de ser importante. Me iban aconducir ante el Tribunal Supremo sovie-tico., "qui en Moscu. tambaleandome,· en-tre la pareja de guardias, por los estrechcs

corrsdores de la LUbya.nka, en los \tue .re-'sonaba lugubremente el eco, era yo unhombre cast privado de identldad. mal atl-mentado, desesperadamente solitario 'Y quetrataba de mancaner :viva' una chispa dere$.isbenclaen Ia irrespirable atmosrera de}ia prlsi6n, rodeado por el desprecio y Ia!usptcacla oficlales. ~xa-ctamente un ano

,. . antes, cuando los agentes: de .segur!da:dso-_ vleticos irrumpieron en la fiesta de bien-.; venlda ;quemi maqre 'habia organlzaao en

to

' - ) , ' nuestra casa- de ,Pinsk, 'yo era el. ten1entJe

Rawlcz;de lalOaibaH-eriapolaca,tenia vein-ticuatro anos. y resultaba ,un jOV'ende lnuY'buena presenCia, conmi uniforme biencortado y mis brillantes botas die montar.En cambio, el €sta,do 'en que me encontra-.ba ahora constltula una· -clara prueba de.las aplastantesbrutalidade~ 'Y de las astu~

tas sutilezas de.la. N.K.V.D.· (,Policiasecre-ta sovietica) y d·e ·sus interrogadores deMinsk ry Jarkav. 'NingTJ1npresopodra olv!-dar Jarkuv. Mediante eldolor, la.porquerfs.y la degradacion. procuran convertir a cadahombre en una ,besti!i. glmoteante.

Me lleg6 una corriente de ail'e heladocuando dobIa;ni.osIa illtim!l. 'Vllelta del co-rredor, a,vanzam09 unos pa·sos y' saJimos aun patio empedrrudo. Les dl un estir6n amis panta>lones IY apresure el paso para.marchar de nuevo entre mls guardlas, n.in-guno de los cuales h8Jbfapronunciado unapalabra desde que salimos de la ceIda: AIotro Ill.do del patio nos detuvimos ante una.pesada puerta. Uno de e110sme hiro re-trot:eder un paso tirandome, de la b1:usa,d<esabroclhada--mejor dicho, sin botones--que, como los pantalones. forIl1:E1!Oani

vestimenta carceiarla.Al abrirse Ia puerta,me empujaron para entregarme a otros doshombres uniformados, que me cachearon

en segulda 'por 51llevaba algUn arrna es-condida. N1\ldiehab16 ni una palabra. 'Mlsnuevos guardias me escoltaron hasta otrspuerte, en el interior del edHlcio. Tambienesta se abri6, como a 'Una sefial secreta,11volvieron a empufarme. iDetras de Ill,puerta hrubia unas cortlnas, Me hlcleronpasar POI'entre erlas. La puerta se cerrotras de - r o o f . Otra nueva ·pareja.de auardtasqUcd6detras de mi para vigJIarm'e.Era una' sala illnplia y d'e temperatura

agradable. Las paredes estaban rptntadasde blanco 0 quiza encaladas. :Dividia laestancia una larga mesa bala, ma.ciza. Del

lade de aca, sin muebles en absolute, losguardias y yo disponiamos para nosotrossolos de todo el vespacto. Y, aline ados alotro lade .de Ia mesa, se hallaban sentadosunos quince individuos, diez de Ius cuales-< > qUiz8.,menos-c-llevaban los uniformesazules de Ill,iNK.V.D. Los demas vestlands paisano. Esta:ban' todos ellos muy a gus-to alli, charlando, riendo y fumando clga-rrillos. Ni slquiera uno de e·1I03se dign6mirarrne,

AI cabo deunos.idiea .minutos me ElitreyI'a mover los pies en rolsalpargatas.(juetenfan oietesrpero no cordones) 'Yafro-tarlos contraoel-suelo d'emadera·· encera-da.M~ preguntaba sf nuhabrfa h8Jbido at-g-unerror. Se,gu~amente, algulen .se.habia€Qui'Vocadoy l"o.no debfaestar adli, Peroentonces un ce.pttan de' IaN.K.VD .. miro

hacia nosotros y les dijoa los guardlasque podian ponerse "en su lugar descan-sen".Oidetras. demtet ruldo de sus eo-tas al vartar ·de'postura.

Procur.aba no moverene y mire a mi al-rededor, \Me sorprendlo descubrir que, POl''prrmera vea en muehcs mesas de horriblemonotonia, di~rutaba levemente de una.nueva experle:ncia. ITodo estaba ani·' tanlimpio! Se respira.:Oaen aqueJla ihabitaci6nunambientJe tranquilizador, una ausenciade la ferrea discipJlna habitual. Me :pare-cia cas! estar en contacto ron el mundo def~era de 'Ill.carcel. iEntraba ysalfa muchagente que reia y ~harlaba con los de d:etrasd~ la o mesa. Algunos' a,poyaban los codos enla magnifica' ifelpa roja del tapete. Unopregunt6 cuando podria tener par fin susvacaciones un mayor'd,e la N.K.VD. Otros

lepreguntaban a un compafiero por .guabundanteprole. Un indlviduQ lmpecable-mente V'estido eon un traj·e gris oscuro,de corte occidental, parecfa tin diploma-tieo de los Ill'ejor'·situados. A este Ie ha-,cfan todos muCho caso. Le Uama:bari'Mis-dha. Y a este Mischa :b.abia WOde recor-darlo muy bien. Nunca 10olvldare. ., En· la ,pared .frente ami, al oho ladode Is. mesa, estaba el em-blerna so-vletico,en.yeso y pintado de vivos colores. A cadalado del emblema, pendian los retratos delos dirigentes SOvieticos.'dominados por unStalin de gesto soinbrio. Yopodfa mirarlotodo a mls anah-as. pues nadie me prestaba.atenci6n. Camble' de mana para Sostener-me los Pantalones. Be me habia cimsadoIll.·mano 12iQulerdaYlos sujete con la de-recha. Observe. que h:abla ·tres 'puertas en

aquella sala, las ·tres protegtdas.-con corti-. nas. 5610 habia un te1efono'; 10tenlan' 50-bre'Ia 1al·gamesa. Ante la silla centra1, 'V i

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borrar-de r o t memoria-las e~cursiones que [.a gran fortaleza de Jarkov, Imponente Iatazo con Ia plstola en la 'Parte dereeha'hacia, de muchaeho, a los .pueblos rusos prislon de piedra, me abri6 SUs tetricas de la mandibuta, Escupi unas muelas defronterlzos. Despues ze aceleraba erritmo puertas en abrll de 11,940.AUI;l'quealso en- ese lado. Al"dia siguiente,con.l_a cara. hm-del mterrogatorio-Dos de ellos measaeta- trenado por el ·rigor de M;insk, no estaba chada 'Yel interior de la boca lacerado yban can preguntas alternadas. Una ristra preparado para los ,horrores<ie .rarkov, R1.In·sangrando, ,volv! ante su presencia.~:e-nombres de pueblos fronteriZJOsrusos. A'qui florecfa en toda su crueldad el genio -Me s6riri6, Sus discfpU!losy admlradoresi,conoce_usted este &itio? tYeste otro? De- perverse de un mayor de Ia NX.v.D., El contemplaron con interes.Ia estupendaJa-bi6 de eonocer a este indi'VLduo.Sabemos Tor9. su maldad era ~nomena.I; iDe ex- por realizada POl' el maestro. "Veo que tie-que 10 conocio ousted. Nuestro movtmtento traordinaria corpulenela, tenia un tronco _-ne us ted- 1a eara desnlvelada", me d1jo.comunlsta clandsstmoIe slguio a usted los largo 'Y poderoso, unas pierna's cortas y - . Y , sacando la plstola, me asesto otro cu-p~.sos.8iempre hemossabldc eon que per- gruesas, wunos brazos cortes ,y maclzos. Jatazo, esta vez ten el lado Izquierdo. Sesonasse relaetonaba usted. Y estamos a l Su .poe10enia ercotor' del jengibre, y el me saltaron mas rnuelas. "Asi tendra us-corriente de 10 que trataron <ustedes. lNo vella le abundaba en el pecho y en el dor- ted 19ua]a-das las dOBmitades", ironiz6.

traJba.jaba usted paraIa "Dwojica" (Serwi- sode sus enormes manes rojlzas. SU cara, Yun dia me areitaron un redondeIJ,tocio Secreto del1J!lJercito.?) . bridlante ~ 'colorada, se 'h-undia en su abul- del craneovBatuveouarenta 'Y oeno horas-lC6mo es que ha,bla usted el ruso per- tado cuello. 'I'omaba su misionde.Interro- sentado en el borde de una stlla, mientras

fectamente? ' ' - gador con terrible 5eriedad.-OdialJ:a, con: - unos soldados ruses, relevandose, me gol-,..-;Esque mi madre es rusa, todas sus fuerzas 8,1 preso que, no capi-· peaban en aquel clare de mi cabeza .·a.l

. -<l'Le 'ensefio ella elruso? - tulaha. Ami, desde Iuego, .me od:laba in_ritmo exacto de un golpecada dos segun---,Sf, de nifio. tensamente. Y pure-dodeck tranourlamente des. ·Mientras, iJl!1Toro voclreraba o.seper---,claro, se comprende que a la "DwoJka" que, 'mcluso ahora, 10 matarta, slnel me- ,mitia elIujo t ie: un hurnorismo de eletfante,_

le wmiese muy bi>en:eontar con un ofieial nor remcrdimjento < y con la mas sana ale- . haciendose e1amable':y -pidlendome POl'

polaeo que hablara rusov. eSipiase.. gl·ia. f.avor que firm,ase.el maldito docum,ento,-

....:..jNo,yoera ofieial de CabarUeria.Luche POl' 10vtsto, El T-oroera un caso espe- para en seguida ponerse a dar alaridos-lVen el rrente occidental, 'no en el oriental: ela!.,incluso.dentrodela N.K.V.iD. ReaUza- Ianzarrrre Iospeores Insultos.lLuego 'Vim-fa la oportuntdad para acabar basus)nterrogatorios,como .i;rabaja en la Luego;.otra ve z :a la ."kichka.", al Pega-

de .una'vrez. Enalquel primer interrogate- F'acultad un eminentecrrujano: eX!hibl-en- josohedor,·.a las horas de espantosa som-..rio me ,Ill.presentaron del modo masama- d o slernpre su ihabilidad protesional ante nolencia, 'El..norobre que lehabia.n Plfes1;o

.ble, en eI plan de "aqui somos todos exee- gruPos'-distintoscada'Vez, de.ofl.cla1es j6- ,~~a.oqbaue.ml.tu},ypo._a·dd~~:~d~"·::~liC.,hkln~~s'·tinleo,;·.,es~~:,l-entes persona..s 'Y no queremos hacerle venes.vaue 10 rodeaban como' estudLantes "'" ~~"""v ~- "" ""

dafio a nadie". Me eolcearon un documsn- de·lY.I1edicinaue presencian una ope-radon tripa", Cuando sa1iadeaquel continuo es--to' delante sme pusieronuna pluma en- tnteresante.ssus metodos eran de un inge-' tado de semi-incorudencia(generalmente

la mano. . .. nto ·desprecLable.El procesode quebrantar porque se me doblaban las .rodHlas ytenia-JEsto-.me dIjo un sonrtente mayor de Iavcluntad a un Pl'€SOrerraotario, empe- que ,endel'€zarme),s6lo ·pensaba- en E1.

.ta N.K,V.D.~S el cuestionarto al que aea- zaba srernpre porIa "kicb!ka", .una ce1da Toro.L1enaba miYi:da ,pOl."compl<eto.Enba' usted de 'l'esponder.'S610 tienre usted en forma odeohimenea-a Ia que 58entraba una 0 dos ocasiones, e1guardia-de serwtcioque firmar a,qu! ~ 'Yano .le volveremos a bajandocerea de mediometro can relaclon me puso .entre los labtos un clgaordlIo en- -molesta.r.'· aI.nivel del corredorv.Alli ,10unlco que po_ cendido. Estes fueron los-untcos zesecs hu-'No fume. Dljeque DO 'POdia tlrmar im . dia uno ihacerera estar en ·pie. Las pare- manes que me mcteron en Jarkov. Estuve

documento cu;yocontemdonome era per- des Ie apretaban a uno como sl fueran un a punto de Jlorar de gra.tttud. . .mitido"comprobar.· iElma10r sonrro y se atlllud de piedrs, Cinco metros mas arriba Algunasvecres, creia queestarta !li lH paraencogio de. hombros. entraba la difusa elartdad de una ventana toda la vida. EI Toro parecia. dispuesto a_---4Lofumara usued, lsabe2, algfm. dill. invisible. La pueria solo se-!lJbi:iapara que seguirme interrogando eternamente. Me

10va ·usted a. fumar. Siento mucho que se el pre.so aC1l!dieraa dejarse 'inten'ogar par Horaban copiosamente 'los ojos a. causa de .perj-u-diqueustedal no flrmarlo ahora, La El Toro. Haciamos nuestras necesidades de -Jas lntermiriables sesiones hajo las poten-lamento muclllsimo. pie ,y ten-famosque aP<l\Yaros pIes en nues- tes Iampa.ra.s. Atado a. ·un estr6clho ,bancolSegul'amente, esta.ba. pensaado en Jar- tra propia porquerfa. Nunea 1impiaban la 50bre el -queme ten:dian de espalctas,tenia

·kov. . - . "kichka" ... iY paseseis meses en la que que mirar directamente a Ia luz elktrica,Asfcomenz6 la bata1lla de 'Voluntades e:Il- me 'Estaba l'esellVadaen J·axkov. Antes de mien'b'as E1Toro dabavueltas 'Y -mas ,vuel-

tl'€ ISIaJvomir·Rawicz y los hombres dB la visitar a IEl . 'Toro, me Illevab.an a un "],a- tas en Iisemioseurid!\'d, fuera del alcaneeNX.V.D~ rNo tarde en'comprender que .no vadero",:un euartuclhocon una bomba de del ifoco,preguntando lnterminablemente,

estaban concretamente lnfcrmados sohre ag-ua. POl' su:puesto, nada de refu1a-ml::';D- insultandome,· d,estinli.ndome .alinfiemomL S6I-ollabian 10 que reyeJa,ba 'mi e:o<pe- tos. Nunca nosdieron jab6n. ,Me desnu- pr:ivado rquee1 reserrvaba para. los tercos < y

. diente militM" 'Y 10 que,pudieron a-vrerJguar daba y:yo mfsmo accionaba la 'bomba,cu,yo - astutos polacos, ·para los espiaspo1acosen Pinsk wbre.mi a,mbiente familiar.' Sus charm de a'gua fria' empapaba mi -ropa. hijos de .tal W enamigos .de ,los inocentescal'goS contra mf -lie bassban lln1camente Luego la frotaba, la pisotea.ba. la retorcia sovleticos. En labruta.lida.d in-cansable deen· la convioo:i6n de que :tod:os los palacos tv '\-"okra 1lI , . ponerme1a. para. que; con e1 a;quel hombre. habia algode obsceno y

de edlicaet6n media 0 s1]ope'rlorY que .vi- tiempa. se secara en ·mi cuerpo. bestial. indescrlptlble. CUancio mi3 ojes,vian ,cerca de Ill: tfrontera ru:sa, eran ine,vi- Las preguntas eran siempre las mlsmas. entm:biados, empezaban a wrarse, Eltablemente espias, hombres' ;que Mbfan Procediandel miSmo mantOn -d·edocumen- . Toro loslllB.Iltenia abiertos ~on Unos pa-tra!Ja,jado srila-padamente.- con efectos mw toil que'Viajaba oonmigode prisl6n en p1'1- litos. Ademas, el trueo de 1a . gota -de aguaperniciosos, para im:Pedlr {j;oo lle-gasee1Dia s16n. Pero iE 1 Toro,' desde e1 primer mo" er.a una de &us·esp.ecialidadeS. De ,un de-de la LJ:aeracl6n.gl'a'cias a Ia .Union $ovie- mento. Se m03tro m a s impaciente· que los p65ito colooa:doprecisamente sabre el ·ban-tlca. Yo·desconooia todos:les sHies de que ante-rlores POl' consegulr mi fir'ma. Lanza- co, caiauna gota de agua helada, que seme hablilbanry nunes. /ha,bia ten1do notl- ba aSquerosas palabrotascon gran frecuen- estrellaba rexa-ctamente sobre el mismo sl-cia doe-pers.on-asque me a·clhacaban como cia. Perdia e1 ireno de un -modo exp1oslvo .tip de' mi ca·beza d'lll'ante horas lVnoras,cotn:Pit<l€S.A 'Veres, sentf.a. 1a ,tentaci6n de y·a cada.momento. Un dm, desj)ues de a'lute-walos regulares.a:.tlmitk que: ·lh:abfa. ten1do relac!6n con muehas rhoras de rugir tv amena2al'.ine, aaca , iE 1 d'ia ry la noOhe eT:an.1 0 mIsmo .paraaquellos Indiv1duos.Asi .podria Iogr8,rqui- de..pmnto su pistola; Edhando clhispas pOr. mi. iE1T9ro enviaba. a ibuscarm:e ClHUldozas un re8piro. Sin embargo, no ca.!en esa aos ojos iY con las ,v-enasa. punta de esta- se Ie antojaba, 'Y'10 ntismo podia ser me-

tentaci6n, por!lue, a , U D r en losmomentos llarsele,~ ..pusO sobr-eIasien la- boca del dlanOOlle 'que .el·alba 0 cualquieraotrade mayor :angustie:, comprendia :que -ese canon. Be p;l.S6unos treiilta segUndo::;fum- hora. Me· ih:vadia·siempre una embotadaj:econoeimiento. aparte de sex una mentira, blando, mientras 'Yoesp.eraba, con los ojos curloslo:ad-'por saber 10 que m1 ·verdugo

~ ~P oI[fa :I .se l'lD ,I f.~ ) .- .,~1/06/19;;?, 3~.el"l"ados.Lure-goseapatt6 .yme.d16 uncu- metendrra.reseryado cada vez. Losguar-1~'/J~_ ': ;3: '1 ~ , - :~-;- c, ', ;H.K_:_'.' . ~ . ' > _ ' s. '... ":d(l~: ,,!_".;' p-:::::_::_t:,::,:L; i:i >':v,:c-u ':J~:i~:~:'. ; ; ;~~;: ' ::t::.E"::~·:ct-,-:,>:_,y" !_J-.l:C.::: :l::"'i:?:~:"j;, ~ . t : ~ n:~;I~:'-' :;j-.-' :~:~:; .~~~.i,. ' ~ : ; . i ~:a '1 ; ; ~ ~ : . ' , tC P W ~ f n , i j ~ t ~ ! l . ," , , ;

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I(Contln1lacidll.).

dills i ne H (w ~b all POI ' . los corredorea , em -J;lu jdndo mll .· Una . d e lasv ece s, E 1 T<>ro m e< ls ta ,b a e sp ar an do c on madiadoeena doe su sdlsc:ipulos de Ie . <N.K.V,D . Forrnabanilnad·ob}e '11 la , t res . 'a .cada Ia 'do , it e!"cer-ebl 'o'maes tro" , e s decl! ' , ,e l oes t1 a sup remo . psr"ma,rlecla unos 'Paws d e t l ' a s de < e l l o s , al. (-01 1 do : Y o t eni a. qu e pasarP,<ll ' ent re . lo sse ts para Uegar a. aI , Nadiehabla .oa : n1.na patabra, En l l~ntoes tu 'Vea l alcaric 'edelprlmel ' ' 'dla 'c~puld' ' , un . tel ' l ' i) )~e golp-een la oredame lanro a1ctrc lado. Asi :tria.f u 'e l'o n· e .PQ~' l ·e , a ric l o s isbema· t l eament ' . e .

Cuandomel l a , f j ' l . a lBuelo, m e }evanta .banpara .dal'meel mif ie taoo slgulent.e. J?o.l' fin,E l T oro ,a 'V ,a nz6 un ))OCO yte rm1n6 1 £1 . ariec o n u n g o lp e ·. ·p a ra H z! IJ do l' en m ls c os t~ lla s.Luego me l :! ~ nt a l' o It ' enoe l · bo l· de d e 1 £ 1 .mts -Ina s!lla y. serean'Ud6' 6 1 interrosatono.Me' llasaban ·an·te los olos, un a 'y ot ra"lez ,e l .d oo um en to , m i-e ntra 's m eofr-eo ian unaplum a m a j.a ,cla , . . . .

Alguna'3 vecss Ie dU e .a,'lt'l Toro: . "De- .Jeme l ee r .el documento ..NOSu.pondr i . l l l s-ted que,vcy Ii ! i rmar 10. que no 'he le ir io ,"P.ero .nuncame 'p erro l't ia q ue J .e B o ha s8 , POl '1 0. menos , un!v ls tazo, 'B e . 11ml ta iba iI. ·~e1 ia :"la ,1 ' c on su d~fol 'mado. dedoindlce, ls I a1 t i odoncLe tenia qu e f i l ·ma~ .~ 'BMta con' quePOnga . · us b ed a .q u ! su i lombl 'e Da ta que Iede j : emos en paz," . . ,- "" tUnc lga . r rL11o? , m e dUo . en o ie rta o e a -

sl6n .. :Enc 'end1 6 uno pa l'a 61 · y .otro . para 'm f, Despuess,·vanzo l en tam 'ente ry cuan-dose de tuv ,o a ro t l a ,d o ; m e a ,p l asM 1 8 10 1 · . :giu 'r illo e n ei dQ<rsol ie la . msno , viotenta-mente. Aqu·ll'lls.v.ez me hl lblantenldossn-~ado ·en e l .bo r4 'e dI e· la .sHla . has te . qu e- eo m o s uo e dl s, sl em p re -l os mt1scul e ;g d. elli. espaJ .d 'a . ,y . de ·las ,pl t 'mas se · m e agar,ro, '~abancon un 'de lor . agudo, .W IToro s a s1 .tu 6: t~ tra s ,d e . .mi, 'If ml 1 /l nt l\ !\ S yo . me fl'otaba .la ma,no ;d,olor IdaJ)or la q1 .H im 'a du ra , t lr6l,e 1 8 sm a·yo m e hlza ca ie 1 'e n e l suslo da?ledra . . '. . '. .uno de lo s "nl1me1 'Oa": m a s o rl gln e.J .e s

'u~ : ,e le te l cuchm o ·C08 aco . La ! l ' epresent6m m l hono r hi 'c la e l l lnalde m l ,Bstanciain Jal ' !rov, E l '1 '01 '0 e stllo e. m uy org.ullosoI e s oq ue l ouchiUo ry p ara d .e Jn os tl '!l.l ' 1 0 b l'~ nlu a oor taba , pl'ob6su exce l en te ~cere . en

01 pecho. L!\scloatrlces que me qu>eds.nbO: m e pe l 'm1 ten oJ.v1da. r : la . 1ndudap. Ie · d'es -l 'eza d'e a lque lCI l1 'U l'~ ro , '

iE l'd !a ·ante ·s d e te rm ina l' aqu eI la ' p rIm e·a eD apa , m e e spe raba ' E l '1'01'0 s o lo ; : li : st a -·a .mury tran';J, 'uUo: No m e rec1b16 can susla .b1tuales lnsul tos "! o bs ce nl·d ad es . C ua n-o emp ew a .hablal ' , au ' v' oz , q ua Mempnera 'B s t r ldente , la Ihabta . ,oonseguldo c o n -tQla.r. Me hab16en tono mu.y ;ha·jo. C 'om~rendt en segutda qu e l ime ~stal>a supl1 -anc ie" ' q ;11e f i rmuo a l papal. [ 17s taba c . e . 1 i 1byect<>, Me pal 'eoi6 'qu·e .de un .m om entao tro illa a glm o: te a r; y . m e e stuv e dl lclen-( ) a m i ,m l smo: "No , ahora no , cerdo aSa .: 1 e r - o : o o . Y a n<l. ; · ' despue.s d e , t o d o 10 q u eI,e h !\lS i b.e $o p a3 ar ... " lt lre f,e l;i n o.i ha b1 a! l'~ ra no p e~ 'ju dl ca l'm 1 t rf t lnl8 l l·m!te a dre-~gar co n 1 £ 1 .ea,beza.. EntoMes, E l '1 '01 '0

lm1 lo16 e l'e g1 stro y : em.p 'eZ i6a l l lBa : l t a l' rr i e .;e d ijo cQ sas ho rl'ib l'e s co n a !)as lonada . Yolanta . 1n tensMad, hasta :q 'uedar se ago-00 .

l 'Cus.nto puech~ l~als t l run hom bo o d~bl~ . sa .e l· do cum lento , '1 058 '0Ipe 5, 1 -05 ir isultoslitad·o ' s 1 s tema tLcame~ te poj' la .pesl1 'na, al l · oontra l o s' " a sq ue r os o s ' e s pi a s . po l a .c os ". ~ .menta e lo n y 1 a ,ylo~<1ncla.f!s lca?··P ud·e com - ~ro de bo re cono ce r cue ,s61 0 P l 'e se :nta ron'prebar , qU 'a e l lim Ite d e la 'r,asistencili e'Sta un nnmero e ~ p 'a c la 'l , d e t o rt u ra q·ue lE I '1 '01 '0rouano m as aUa. d e (l Ua nd o el cuerpo tor- podla , haber env ld l e .do . 'rodo 10' ' dema 's &aturac iopldecJ . emenc1 . a . POl ' mi ' p a r&B,nun- . 1 0 sabia . de memor ia ~ & t e t qu e t! ra· inu~o s. ll ~g ut J -con,solenbe.tnrsnte. a l tendo ' .doe l SUPB1 ' l o r c om o v e rd u go . A e adauno 1 0 sU:yo,ab!smo en <que s e c ap it ul a,' Unapequef ia .Me ataron PO l' de bfiJo . de I ll. "me sa .de 'pa l'~e ·d em ! m ie nte se a re rraba . d o es es pe ra - o p ·e ra cl ol le s' ;o o n I os b ra to s b il en ·a st lre .d oadameri toe a l-a Id ea de 'tiu 'e c ede r equj1valia s o ·l :r e l ao euperticle ' d·s·la m ess, O ada ·m anaa con,d ana rna !hue rte . M ientras qulsle ra e s taba '! I ·ta .d a ,p a .r· ~ epa ra ,do ;. 'Y e l euerpo'\I~vl l '- ;Y no 01 ' l l 1den ustedes Ique JY<lera muy quedaba oolgando, a.rqu·eardo, PO l '. d e ,b a jo ,j( Jv : sn ~t ?e ·n dr !a . a ;q ueU a: I ll tl m a. fue rza ·de Me ·d.o lia todo Ell h i: >rrlb 1e m en te ·c ad e. y ,e z

va luntad · pa ra r .e s 1S 't h· , ·para apartar de m! que t l raban d 'e l as c el're 'a s pare;age 'gu~s. raqul i l documen to so bre e t qu e me ba$ta l ' · 1a . I :; ieil IDS brasos , PeTo todo es to no e ra m asha .zar un garaba to 'con 1 £1 .plum a para qu e 'p repa . ra l ' · la . ope1 'ao16n, oomci . cuandoconv.sr : t i r lo e n mtsaatane la de muerte , no s lnstala t il d e n ti s ts . e n s u 8 11 1 61 1 ' , ·este. -. :P ,e ro ,l lag6 I a noo he en' . qu e l ll e d l< 1 l 'o nmQs co n un terrible do lo r de .m ue lae . So..a ,queI .pescado 'M eo a .rit esd e U aV al'file e . la bllB la . mesa ihabian ~uspendldo un pequlg-1 ';a .bita :016n de ID S In~ erroga 'to l·JO S. M e f ie e ald ero , antleuado,qu8 tenla·a.pl1cada·a.C'U!ardo co n bastante clarLda.·d do e t adas IM I un a espita, Centenla a~Cluftra.li mU¥ ca -seslones :exce pto de ,esta. t11 ' t l .ma . La . oabeza l1 ente . '.m e dabs. lVuel t i l . s , 'm e ta rnbah:aba , e staba . .Em pez6 l t i . ha bitU al & erle doe In 'Vl tac lonescomobarraah,o.1 \1() . p od la ft ja l' la 'v ls ta .~ n i!;·firm'fl·r, eonla pl'om eaa de q'\19 81 10nad!\, ye :l 1 a .s v eC8S 'BsCl lv .e . a punto de caer- ha.cta . Il ' I 'B.soitar is.n ~nm'edia : t i l .ments y,;,01': '' .m sd 'e . ls .' s1 l 1 a , Lo sP~e t awS /I , empu.1ones " ,e l'la ..a m i c sl da . C l' Bo<! .u ,a s f ~n , aque l los·m·edeja .1 .1an 01181 ,1 IndU,e i '. en ta ,y . euando in-mcmentoshublese a 'ccedldo a i1rrnar .d,es·ten. te ihablar , apanaspodla . mo v e r I ll . l en - .!)uesdelgran tlnglad6 QUe Ibs ib ian mon-.glia. R~c~el 'do m uy v ali~ me nte .·Q u<1 . m e 1 'u - . '/ t ad o Y qu e lba . apl"OPol·clona. l·}.astar i l 'efi': 'sle po nde lante e l P I 1 'll 'e ly li·pluma. )):01'0 nada . a tv e ra l6n,se habr!an senttdo m uy;v.ano·puedo acordarril:e··d.e mas, como 'Ie •. tteslluslonados.· ,oCUrrl l ' i a .a .un borrse l¥> ' despue3 ,de una . ILapr}mera go ts. d e alqtt! tran f ue ' ln J! e r-

n eche ·:i e j.ue rga . " ..•• • .• • .. . . rial. Me sbras6 hOl'l'afOsamentsll] ~o r 8 o 'd e. : ,A 180ma. t4 l1 ' l a s l r ru l e_nte , al re CO bre .re l. I ll. m al 'l iO U slgUi6 quemandome mueho . t 1 ~m"CO Il oc li n1 sn to . ( p ue s' ne sa·sl :puedo d :e cl-r ,p o. Actue l l e . pnimera ·gata. iu·ble. peor . Fu 6"'dasper~a.rme"), p tl<l'clbl un 0.1 01 ' nuev o .. 'I ll apioe d el d olo r, Las d em al l • .B n . cemp9. ra~muy p.iu·tloul-ai ' . Como q.u 1e r.a ,·.qu le ih abia ' c io n, p ocH e. ' : ·eBis t ir l 'a ,s . LO/l r e no pe rde r ele8~Rdocon)a .ca t 'a .a peyada en . Ie . pared, aen . t ldo , qulta. pOl"Que·.me a fe l 'r aha ·t i e s .e l ip .e -~n ,e l. sm o .d ende hab!e .ten ldo .p egada la Tad'amente I I m l ld e e . de noeed ' e r , Me dlje-hOllavlulJ.a gran m anO ha v,srdosa . E 'S t o . ro n que PO'dr l a i l l 'mar co n la m ano wqU~sl'.m e asust6. l .Me' l ;I p la s ta b a, u n a: t 5 l' l1 l J. le o p rs · datif&pU~S d, e J a E .s a1 6 n, pel '0 '1es demo .stre -S16n, alga :a8£ :cemour ta c oma l "r-esaca". quese haplan€Iqul 'Voeado, IEs ta ,ba : ry o mu~·Oompl ·endi 'que m 'a !h ;abja ·r i~d8 ,do unadl"O -' e nt 'l 'e nado en la durae scue 1 a :de E l Toro .gR la nom e 'ante rio !'. "Mie him d~gado .co n . EE, ta qU~ihel'elata,do fu e e l ataque . m a s·e 1 ~es( l adQ :queme d i e r. o n" , p a na a ,b a ." tQ ue s ed io 'q ue hu be d ep ad 8~ er, 1 8 610 1 l eva .bal~ a ha br~ cUC IM ?N o C'Ile Oque'h~a firmado en la' L u bJ ya nk a . d 'o S ll er na na e . cu8Jndo meal. Jn~Idito p8ope l , p · er o t s.mpe ·o o pu·ec io . ass- hlofieTon dhfrutard'e l apr lmera yl ln lo t i .·g.urarl<>," ' M i a sent . l a enf ermo 'Y a tr.o zm ent.e . e XP 81 'i enc ia 'C lu e ih-e , ten1do de un tribuna lPriQcupad'o co n 10q,uB ) )U eH e ra h a .b e r. he - 'Bov l , e t ; ico ,- C ho . ,m j .e n tr as p e l' d! ;r il ccm oclm le nro , .• ·Aipooo :f)j . empo m e tras tadal 'on· Q Mos -

. ell, a la lLubyanka. Lo a g ua rd l.a a ' Ba tu v ie -. ro n muy a lmpA t100s ccmmIgo cuandovJ.e.-ro n ;que m e . t l :e.slar iaban. l!lstomesuced16enPln.! lk,en Mlnsk"en.Jark6v y e n Mo-s-00; l! lem pre pa re ,o ia que lo .s gua1 'd i 'a s sequ~d! l :ban lJl?uy ' al 1 v i a.dos . !I I l, , , w m e mar,char ,.lrichl.So me (lontaoa·n c hl st 'l !s ;' p a r. e cl a · qU'es~empre ha:bian sldoamigositt1os. . .

1!ln 1 £ 1 . Luby,a .nk:a ~stalban la .s <)osas me-Jer.Sln duc la :me h a bf a .p r. e ce d ld om l l' e pu -ta()16n.de~~calc!tr l !ol l ' te , porque e n 'S eg uld ame- envlarona. la"k ' lchka"~. Per.o <ests .' l Ik1oh~a" era ' l 1mp1a 'Y 1 00 ! ) e r l e>des q,ue.J)tlr-man-eoia e no err.a 'lio e n e lla &ran mas. cor-taB,' .

·EI. >e<qu.lpo I nte rro ga tio r .de ~ a L ubG r~ llk!i ..sin emba ' rgo , Do O ' liejab1l.nadrs. qu e 'des 'sal',encuanto a cru'el l 'Bf tharolento, EmpI , ea .l . IOI iCOnm!gO tetles s us medics d>&pel 'sua. : . ·

. s 16n . , 8 e oompl ' end,e qu e le s i lOUcfas de lacapi ta l no . qms ie r a n f~ .a . ca s a .l 'c o n io } o s p r e, .

. v I ne l anD 'S ,'Hubo l aB ' preguntas de l l e~e rno· :1 'ormu!al' lo. i l l ' S pe t lmones .pai-a. q ue fi rm a-

liI:'

N IJO ID E J SO Y I 8 1i1N Tl j;N IC IA

lE l anlmado i luchJ:clheo del.a sa l a . s a 'I n-. tsrrUIJl ' l 'pitlde p ro nto . M f~ :m a, ca n au Imp.-e .c abJ.e c ue Uo blanco Y'su e l f : lgapte oorbl!otad 'e s ed ,a g li s, qu e x 'esa l t aban entre 10s.Unl-formes y los t l'a 'je s u t1 l1 t ar !o s rU&o8; d1joco n rvoz_engola .de . : "Bu·eno;Cl 'BO ,Qulipocle·mos-empezar." Yo Uev a ba · lI l ed 1 a ·. ho r a de.pl ~ r:l llD rprlm el'a , Y ,e z.m e ·m lra ro ,n los.t ti lem ,b ~ os d e l trfburia,l. L o-s g,u ard la s qu eegtabande t l ' a s de m ! a cio pta ro n 1 a ·p esi oi6 nde , f irm~1(. .t,os J .u ec es ~ . J)asaban 'd e ,Ul lOa8;et ros ' m u C i h o s p l 1 ego s de papel ,lE t sil l-e nto o ent ra l" es taba ' oclipado .pOl"

un l ' U : S r D ·d,:eunos seoonta . a t ios ; un' Indiv i ..duo'de c e .b rs ll o I bl anr io r y vOZ ' su a rv - e , Vfl.$tis,la iha l : iHua· l ' C i h . a J q u , s · t a larga ·sobre la 'blus!}

ab<Jtonada. :haH~,a e l . co ol lo 'i f >811 . 105puf iosl i l ' o i a . OUrloSosbO:r .dados e n 'V erd e y 1 'Ojo· .A ,ca da la ~d o te nia . un ' o fi c la ·l d 'e l a ' N ';K '"V ,D .,con , un i forme 8zW. oscuro ,y ' ac io t il os l I: ~jo s

. . . (Contlnuarli,1

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«continuacion ;

en el euello y en lagorra milltar. El aslen-to de Misdha. .se 'hallaba. en 'Clextreme dela. mesa, a mi i21quierda. Pronto supe queeste ·Miseha era. el fiscal. Mientras el trl-bUnal preparaba su trabado, el me mira-btlfljamente, ron trialdad. Por miparte, cui-da.ba de que no 5Ie me caveran los panta-lones ,y ·mivlltba. a la pared, porenctma .de'ta cabeza del presidente,Y ·fue .elpresldente quien, despues de

consultar en voa bafacon los cnetales. co-ID'enzo el Interrogatorio, Ai principle, esteconsisna, claro esta, en 10desiempre. Me10 sabta de memoria. lNombre?l·Edad?lFeoha de nacimiento? lLugar donde nac!?l-Nombres de los padres? liN'aclonalldad deestes? l·Profesi6n del padre? ltN'illIlbre desoltera de Ia ma:dre? ya.sf nasta terminal'el forrnularlo que tenia ante e1.donde-<estoy seguro-e-se Iha,llaban .tamblen lasrespuestas que yo habfa dado en mls an-tertores encuentros con Ia NX.V D. desdemt' dstencion en P1nsk lhastami Ilegadaa MosCiu. Eran maIos pslc6logos sl cretanque a ruerza .cIerepetlr estas pr.eg:untas IbaY O ~ variar il.lguna de las respuestas. Lashabia respcndido :tantfsilnas veees que cadapN!gunta produeia slempre lamisma res-puesta como en un movmuento reflejo.Ere un fenomeno curtoso: en (manto em-pezaba el tnterrogatorto.xlejaba yo de pen-sar. Se 'ha·b18. converttdo en una costum-bre, en un acto reflejo. A las mlsmas pre-guntas. identicas respuestasc-

. 'Me ley.eron las cargos Que iha.J>iacontramt tE:L presidente (:quizB..no ruera esteexactarnente au titulo, pero esa era, sin

duda, Iii. funcl6n ,que dessmpefiaba) se. pas6un ·gran ratoacusandorne. Nombr6 muchospueblos, maMas personas "reaccionar1as"·yofeohasque cu·brlan· U n periodo durante..el ·cual se meacusaba de ib:ab~r cometidodelitos mlbY concretos de espionaj'e contralaoUnion SOvitHi'ca. 'Le estupendo era que,aba!i:cando estasacusaeiones- un perfodo,tan· extenso de· mivlda. no illegaran 'Etec-t!va.mente 8180epoca en :que, de m'llchacnoy ·para saclar miafan deatVenruras; "cru-ce, efect!vamente, en repe.tidas oca:siones,la frontera .ruso-polaca. ...Todos los· cargosqu~ me 'hacian eran

fantastlcos;;Me alegre mucho al trensar quesl no Ihabian· (ionsegU±do 'hacerme confesar

la serle de ca,rges <que habian inlventadocontra mf ,(luando para hacerlnelornco-nocer emplearorr los mas sa1vajes .;. re:fi-nados procecllm.Ientos detortura en laspr!s1enes mas acreditadas por sus grandesespe¢lallstas en 180tonura. podia conSlde-rarme seguro en 8'Cluclambiente. rnlativa-mente ·agrada.ble ,yci'Villzado. .de la.· salade un tr1bunail. Era segur<) qu'!!all! no po~dian ·torturarme para hacerme confesar..lComo podfan esperar que precisam'entealli fuera. a ceder?! . .

CUandi> el 1nterrogator1o entr6 ;va por. SUs cau~~s serios.ture !que a<lmlrar 180re-menda. t€Tquec!a.d de prop6sito.de :Ia men-

, t all dad ofic1a1 soviet i 'Ca. . Es un especta.cu1odigno de verse, Todoa;queilo .10habfa' pa-.decido yo en una serle de pesadillas. Yahora, .a la. Il l:<:del df.a, sin que na<lie me

(lstuviera torturando, podia darme ,(mentamejor de d6nde estabs. metido. !Pero la luz

del <118.no !mpedfa.que ei a.mb1<ente_e pe-sad~lla contlnuase. Pronto pude conven-cerme de q u e sesuta 'Vivle-ndo fuel'a. delmundo real. .'En resumen, 180aeusacion Vlenfa. So ·decb::

. i'U~ted, Slavomir Rawlez, polaco oultto dela elase media :y ofic1aI del antlguc ~er-slto polacoant1sQvietlco, residente eereede la frontera rusa, es, sin lugara. dudaalsune, un espia. 'Y un enemaao del pueblode Ia Unl6n de Re,ptlbtlca·s Sochrllstas 130-vlfft1ca.s,"Puestaa as! las cosas,· pareeja 10mas natural qUe el tribunal ihubiera dlehocon irrttacion: "i,Pal·a· que vamos a. per-der el tlempo con las IlJegativas de ese

hotnor.e?"Ai cabo de las dos .pr.!:tneras horas, rele-

varon a, los guardlas cue esteban detrlisde ml, Deseubrf :qUe el relevo de ]a. ·00-colti cada 1:105 beras era una. de las nor-mas del proeeso. Segui resoondlendo a laspregim·tas del presldente. :Me resultabamtzy .(liel1: 120rutlna de slempre, Ann· nohabra nega·do a1 punto en que zendrfaquepansar para darrne euenta del pel!gro· 'Y

evitar las trampas que me tenderian, Attn-quedebfa de estarclararnsnte. tespeciJftc'a.doen los documentoa.cue tenia,<ante el q U l e'Yohablaba mU'Y b1en~1 ruso,eLpI'€$ldeil.ter.ep!t16.1a pre'gunta:"lEnti'Cll,de: uste.l1elruso yl0 !!tabla usted?",preg·unta absurdasitenemos en cuenta que Y!l.tl1abia:r.es-pondldoa mucnasotras .hechasen ruS(j 'Y

que las iIla.bia.contestado en ruso.}'>et"011lla

vea estableeldo oncialmente mi conoctmien-to de ese.Idtoma. aumento el-jono de des ...confianza en el interrogatorto, pues los ru-scs parecan desconnar de todo extranjeroque ccnosca su Idfoma. Existe slempre lasospedha' de que nlng:l1n extranJero se mo-lestada ena;pr.im,c!er ruso s1no Juera parad:edfca,rseal espionaje.'Mientras, ibll.(rag-aando mi pIau. Com-

prendi que rio me con-venia lrr1tar a1 tri-bunal ryponerlo contra .In! m . a s de Ie que·estaba. Por eso, <iecicli recon~cer los he-

.. chos que eran ftnnegables. Ouan·do unaa,c<usac16n era manifiestamlSnte fa1s8.. 10decia· asf, ·pero 'pedfaperm!soal tribunalpa<ra.explicar por que 10 era. Me dejahanhablar mu-cho. Confesa;bauna cosa, reeo-.nociaque :una ,parte de·una ·aeusa,ci6n era<iferta, negabs. IS : mayoria doelos cargos 'Y

'daba detaUladas texpllcac.iones. tE:lamblenteme era <hostll, pero tev.elaba un cierto In~teres por mi metodo detensivo. La r1g!dezdel1nterrogator1o no me permitfa hacermetluslones sobre la poslblUdad de camJ>lar laa:.ctitud ofic1a.l 'l"eSPfrCto a mi. ·pero. par iJ omenos, 'Ve r a ql.le con esa t a c t i~a . de apa-rental' un r e r v l oen te deseo de colaborar conel .trlbtuial, no empeoraba II1!pos.f.ct6n.

Me impreslon6 1a. 1nformalldad: procesal.Los miembros del tribunal :fumaban c1-ga.rrnIos sm. para·r. Las ~ntradas ry saJldasdevlsltantes, que babian eln,l)ezado du-rante'Ia preparaci6n de, -IaVista, contlooa_ron cuando rya. estaba todo en lIlJll"c.ha.H7a ;b ia un constantem.ul'mullc de c'hataaS

entre 'ba5tldores, conversaciones· en vozbaja entre los j u e c e s y los·vi8itantes; son-'r isaS, j)alma:dftas· e n la espalda. MJ.entras

escudha;\)a 0 Ire-spondia, obsel'vaba. todo!lIQuel .mowIJniento.· .como Un· .especta.dor

tea tra), me Interesaba calfbra i' Ia slgnift *dacl6n e nriportaneia de los personsfes queIban entrando en escena,iE1 que mas me 1ntrlg6 fue un ind1"lduo

de unifor.mey da aspecto distingu1do. Te-rifa. mechones de cabello blanco, era alto.tsa presentd p C u ' entre las ccrtlnas quetiubrian la s pue~tas cuando el proceso Ile-vaba ! V a . tres horas; E1 presidente sa -in1;e·trumpi6 a la.mitad de una ?regunta q:uelll<eestaba obll!ciendoeuando uno de los ofI.-elales de N.K.VJl). le~oc6 en un brazo 'Y

l Iefia16 con la eabeza hae1a la - puerta, Elrecien lIe-gado, stijt!tandotod""vfa eon la.mano una de las eorttnas, recorria. Ill. sala

eonIa mirada. Por f in, sus ofos.se pose.-ron en mi, .1uC8o en misguardias t 'Vol-vleron a la mesa de-los ~uece!l. El. prest-dante ee ihabMIpuesto en pie de un brmco,':todos los. t,uncionarios le Im1taron apre-BUradamente. Sa aintl6 un gran r ebUUle10de s1t1las. .E1 distlngUldo tVisltanbe parec.1a un hom":

bra nerwioso lYse Merc6 :Illpresidente conpasos de mUfieco mecamco. E1 presldenteIe sonreta adu16n. MJ :e h tr as p a sa .b a PO l"de-lantede la' mesa, se ~ero:n murmullos 1 " e -·verenciosos. O f rej:l'atldas v e e e s : "Cam:ara -da . coroneh ' IE!. presId .ente !;allud6··contu,et.lie a.pret6n de DUlt10s al camarada co~nel'I este eseucho eon Ind1f<erencia las obse1'-vaeiones que le hiro. el presldente. Lucgo,se voLvi6, sonrU. _ a 1 elega-n,te Misoha. y per-manl!ci6 de p ie B .p«Y aqo en, Ia pared. , ce r ca

d e la puma. ·por donde hal>1a entrado, E)I

(:8,'rnarada coronet .hi® un gesto y el pro ... eeso fue reanudado, Empe:z6 de nuevo ei

Interrogatcrio y el Importante coronel 10escuehaba ·a,0un1do, 0 pOr 10menos tingrI\.hil'Uarse sumergido en pe.nsainientos demayor trascendencta qu e el proceso de unvulgar polaeo. Con irecuencla se ·q·ued.a.b&absbrafdo mirando M ,techo. A los il iei!: ml-nUtos, -semardh6 COn e l mismo sigilo co nQU I€ <habra entradO. A ias dos . de 'Ill. tarde,H presidetlJte. cedl6 SIl l siUda. un hombN!mas joven y se march6, proJ :>a1J , l e1n te I l feaaUnorzar. Luego hubo otros <:amblos entN!las que ()cupa.ban 1110arga mesa. Par 10vl..llto. en estos tribtinales no era necesarlomanten.er la con.tlIl1l1dad, Bastaba. con quealguien leyera las decl a r ac l onesheehB.81 parmI para .que estuviese- e n condiciones de

sustitul<r a los ju'eCes mie,ntras estos re S.1l~setltaban paraalmorzat-.

iE l presldente sustltuto'pose18. un air>Ei

de eficienc1aqUe Ie-faltaba a.l t ttuJ:ar. IIll-terrogaba con mayor rapld·ez. : M l e d<ejaibamenost!.empo para pensar. Pem no·:resul-t a b s . . ant1pa,tlco 1 1 me asom'l>ro,s.l pocotletnpo deencargarse del Interroga.torio,ofreciendome '\lri·.clga,rrL1lo. No era U1la;

·trampa. Un funclonar1o se me acerc6 conel e!g:arrUlo, y me 10 enceMi6.· .Aspire eIhutlio con gran satL<facc16n. Antes de qu~.termln:ara a:quella s.esl6n, me <tieron otro.j!>oS cigarrilllOs en Un solo d1a . t Esto meparec,l.6 U1,l. huen aU8'urio.Eicamlll'J lJcIa ooronelvolv16- a :v1!slta.rn.os

a ¥ : l . t 1 e l L a . tarde, reI.lOlTI6 Ia largamesa, !hoje6lOs doeumentos, ·lhaib16ner.vloso ci>I i dos· 0t i 'ea de los altos IfUrullOlia.rl08Y S~ ma:rch6

sigUosamente. P.ros1gui6 el 1nterrogator1o.iIll l segundo camblo de gUaixl.la detras de

(Contiiwarti'>

,

'!

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, I(Continuacion.} ,

nl queria declr .que ihJlJbtan pasado otras raron algo a este aloido. Un-o d~ los oft- persistente nega,tiva, y el fIscal afiad16:los !horM. ·MiJsehalanz6otr.a serle de pl'e- clales ks ·hizo entonces una. sefial a los -P-er<>le "obUgat:e" i ll- de<:il' J ; a . ·verdad.

runtas, -De wea en cuando sonreie. Yo co- .guardiat:.que me custodiaban ·para que m e i S l a yolvi6 subita.mente s regreso JlJ5U s1--rsspondia :atan:taamabilidadcon la me- saearan de la sala. Supuse que el proceso tiocon rapidaz. Los. Jovenes observadoreslor voluntad. Queria. dar1es la tmprssion ha..'biatermtnado I. Y que 0010,qu,edaba. el for- de de~ras de la .mesa; aountaban a. toda:Ie qu<ihac:ifatodo 10 posible poi- aIYUclal'- mulismo de comunicarme la.s:ent;enc~a.Me velocidad ensus blccks; .',es. 'Me parecio un camoio muy favorable eonsldere sati-sfecho de como habill.n ido Yo estaba aJli t€ril.hlanclo, odlando .m-~ara mJestaa:;·, tratando con un hombre las cosas. Incl-uso Jlegue a ClSPerarque la tensamense a1 fiscal, a todcs los :de la salazestido .a estrlo occidental Y {l'U'll .}lIs'Va.ba santencia ruera leve. Aquella. neche dorm! ya los ruses todos, , a cuanto eran y al la sala urr poco-de .aireclivilWado. muybi,eri. Fue lameier neche que pase cuanto representaban. Durante quince mi-Inc-lusO,l1eg6a parecerme que me demos- en muchos meses. ' nutoso mas me hice el sordo a . una terri-

ira,ban, alS'lin aJ!ecto euando me pregunta- (LO$guardias .Ilegaron u recogerme a. las .bIe andanada de Insultos r y pregUntrus en-ron POl' mr esposa, Er,s. 'U:I1ahistoria muy srete de J.a, mariana sig1ulen.te. Hacia, un tremezelados, 'Y ma n:egue a. oontestar en~l'eve;,Me case con Vera. en Pinsk. el '5 de ticmp-o rieblfnoso y la. 'humeda-d me calaba absolute. Me ardia:n las mcilUlas POl' lasiulio de lilP.i9,·durante un permiso de eua-· 'la ropa, Tembla.ba 'cl !e frio mientraseruza- bc&scta-das,·me sangraba tin.car·lie q,ueuna:entay oeho horas. iMimadre me Uam6 'llames I € " l patio €mpedl'ado en direecicn al 'de ellas me b.a.-biatheCho en e11nool''.ior delURnd.o estaba senfado en eIb:ail,quete de edifiC'io de los Tribuna1es . .A l. a entra.Cla'· la boca.\V.sentfa el saber salina de la. san-sodas, IPI'IebexUtquell1's J.lam.il,banPOl'tele- hubo e'l cacheo de slempre y de nuevo me gve.Por Qlt1m,o,me d,ecidf a hablar, 'pOr-[,ono. Me en-treg6 un telegrama que me' empujaron ,por Ia puerta de las cortlnas . que .deseaba. luohal' contra ellos lhasta el)l'aena.bi Incorporarme Inmedlatamente a para ,qu·eoeupase mi s1tl0 f.rente a la Iarga fin-at lEscogi '81 memento en que l\I:[i.scihani unfdad. Wee las' maletas. VlSra 1101'6. mesa. , ' pronuncro tres nornbres-c-los tres deseono-~o la bese If me d~g,'pedide ella. Las hi- P£1'O las casas hab>lan'cambiladQ. mueho .cldos para mf-de personas que se lha.bianirf.rnas'le corrfan ·por las mejHlas mien- am dentro, Todos los rniembros del tribu .. ' conf:esada· espias contra Rusia. ,IY' que me;·1'a.sme acarici>a'ba 1a c . a r a y el cabello. nal tertian cara de .pceos ll.migos;me es-' iha,biande}a.tado como c6Il1!PlicesU'Yo. .De manera que -memarcoo ry la mayor!a' peraban con alre :fastidia,do. Segura'mente '_";[,IPor que no los. trae usted : ruqui Y'1bs

ie ,los 'lnvltadosa 1a boda nisi'qure::ra se no meperdcnabanbaber t - enido que l:e'Van- carea ccnmigo?-preiru-nte.~nteraron de que me habia Ide. Quince tarse templ'an0E!n tin dLe"<como a I C l t l t H . ,~'ESposibl>e que 10 hagamcs; si, quizii. j:lias MsP 'OOs logre un permlso para. que Nada de las~rla.s del dUL.-a .n t :ar i -or . 'E l 10 Mgam-()s---.dl~o MlS1:ha... .~lIase' rsuntera 'eonmtso ry vLvie:ra cere a Trl,bunalSUPl'-Clll0..sov1eticolne pohia,·ll lala. 'Pe'rO, riaturalmente, no apM'ecl:6 tesrtlgofe ,mi en Ojarov.Perm.aneci6 am euatro cal'B..Se'v.eiaenS>f1.8'I.1icUi.Ue-d-e-s.ea.bilna . c a . - : . alg1lM. La V'el'dS.dera. que no habia car-) cmcd d.fas, y pude estar eon ella unas har manto ante',s.iEl ,tribunal .'8ra. el.mis- gos .auteritrcos contra mi. 0, sl acaso,&e~rashoras ...1 cifa. Fueron esta:s 'unas horas mo que el dIs. an~rIor. Pe-nsequ~ il>an a me aeusaba, en el 'j-cndo, de .ser 'polaOO;naravtllosas. en que cast conseguimosbo- ammeiarme ··lasen,tencia. Espera,pa,ten o o , Esto par-e,cia cons-titu!.'l"un deM:topara, los,-rar Ie.~.ensaei6n de anf'QuHamf.eilto proxi- rnientras ' l l iqu>El l lo·g ind1viduos.me miraban ruses s ovietdcos , . .no e irt.emed1a.ble :q'll>ee cernia sobre.toda hoscos. 1N0·puedo recorder todas las 'pl 'egunta-s. '::>olonia~Aqu-el1a fu e todaIa v ld : a de easa- Pero mehab!a,eiqUi'Vocado. i I i l l presidente pero'sl me acuerdo muy 'bioende 'Ie.lhabi-iris que pudimos haeer Vera y Y o . Des- sustituto inl·ci6 las pregunbas de &iempre... lida,d' de Mlsc!ha oom<>fisDa!LMIe oon-d.upiames de 'habel' luchado ,oontra los altem'll- i.Nomcl'e? G,Ed,ad? GD6nd:e ha.n.acido?.. por U n l L , sencl.a.'deperoonas e1iectlV'amentel;es en' €l ,oeste' 'Y de b.abernos invadido Era oomo si nunca roe Ihubiese lhallado has- conoeidas m1as 'YPOT'sitios nootLe yo ha-os ruoos pOl' el Este,l'eg;rese a Pmsk. La tao enton()es en'esta sala d,e; paredes .blan- bra. estado para q'ue yo me con.ftase r:; tu-~.K.V;D. actu9 oongran: l·a.pidez. A.pems cas. [ncluso en las p:reguntas :formularias v1era ya ·cast prepai'a-da 1a·respuesta si-.u'V-eti.empo desaludar.a. Vera y doe res- ,insi:stie.n con :nua.V;lljlw~rtda.d, oom'O51mLs gment.e, que- pareoia.:reT inevitable. Y en-)ond:er a sus p r im . e ra s y RnJh-eIaniwspre-' i 1esp-ues tas"antel ' io res , cien veces rep~tldas. t'On~s, ,cj,e1mp-rClvisO,'sin cambl.ar el rltmorimtas;cuand9 me cf-etuvieron. AqueUa rue' i h u c : L e T a . n resulbado fa1sas depronto~ . del in.te~l',roga.torio, surg1a otra ;persona,a ultlma 'V<ezque Ill. vI. (Me Clhlllaban, me co.rtaban las resPu>e~tas otro luga'l', lnesp.era-dos en a;que-l mom'ento.Ha.ci·a m-ed~, taJ'de, c:uando Y ! \ . lI-€rvaba a lamitad; go1peabcanl1a n1lesll.hastl\! ba~er c,?n dIo, m-e vela obIlJgado .a. pensar un1l(atl'Ohora,sde.juieio,mepregUD.t6 elpre- tembIaT >81pe'sado tintero . .Espf.apolaco. in~tahte,.a t i~bea . r mi'lm'trasme 'porua deId.ente ~sustitutos1 querrfa ollila tam de Traiij-or palaeo. mjode taL. polaro.Fas- hue,vo "al ,paso". MisCha. grltlaba-. triun~ate. R.espond!: '~Sf,POl' farvor". Entonoas o1-stapo1a.cO.Entin, no 'bab£a;p:reg'unta sin' {.ante: 'l i e cuando, me <Heron e1 iSeguildo ciga-rri- insult<>. . " -IYa yeo. 'perro palaeO, q\lJeesa. pr.egun-[o.,E1ell-foeera excelente: cargil<do. cali-imte . ,1Mi·scha.,que pa.1"fcia haber variado' de ta Iha parado en seco su Sieiriede menti-. azuca....ado. De$:.pu"s d= sa·...Aresl"lo ... de repEnt'" de' 'cara:ct,ar, .s:elevant6 para inta,- j .

"'"" -".,. 'UU J" ras!j"AlU' fue don-de en.trego w.ted susl1marm-e el c1g_a,rrlllo(Pr!m,el-Q beb! el caie rrogarme. La sala gu,a·rd6 unos m.omentos i.ruformes de 'eSpiald:espues me' fume e1 l(iga,rr11Ilo,ya que. die silencio mf.en-tI"as-61 me ll1iiaha iija-:>n una: mano sujetandome los pantaJo- mente. Detras del sinon pre$ld'ellcia.l e.s ta- Y 'Seguia un torrmte de lmproperios lYas. no podia ootnhinar las dos cos.as) me ban t.l'es indi'vld.uos de paisan-o a qu1eDles de .aCUSaci01l'as, Jn1.entras yo ! t ' e .pe tfa . que no'iz() unas cuantaspTeguntas un ~·ues.o in- no 'habia" visto hasta enton-oe.s.·Ca.da uno conocfa ],a persona. lll1el luga-r, que e l hab:ia.ilYJduo que, "y'estido.,d~ ,:paisal:lo. estabaaf d r e 61Io,stenia, ,un ;block de notas. Ml.ra~an mencl-onado.'tro extl'emo doel:a m,e:sa.reSpecto a Mls- oon eX;pect!\lci6n al :fiscal. R<e<iuerdo que lEI diao anterior, cuando el ·runblente me~. Compl'endi que. e s te .g1'a. e1 abo.gado a,qui:UlomJehdoopetl.Sa'l'en,Ej, Torol.Y en 8U habIa.; 1nduc1doll. mo,s;tra.rme eXpalwllvo Y .e>i'en.sor;B e notlliba que le producia.· im - pandlI1a de aprendlces de IV'erdugo. dispue-sto a poner a.}go de mi ·parte, hab16lei6n ten,erque representa.l'€s= ·pa.pel 'Y ' . ;__, . .Alhora, R-awicz, hijo de :perra palaca de los feUces d!a.s en que Iba. i ll- ca:lla;r ps,- .

)8nas Podia. ,disimular cl -< iespie ,c io Que-comenz6 .a dectr-'-, he-mas aaa.bado de .tos coo mJ 'padre a. los paIlitanos :del Pri-!utfa POl' rot Tom6 mulY eseasa par.te en maOha-carlnutHmente en $U estupide'Z.Us-Pet. ,'!Pus-s. hi>en, a1 diS, slguient!e; Mtsch.al)rocesoy, par !11J'P-ll2St,0; nad.a ihlm por 'ted. ·saba igua:l que lIlOSotrosqu,e'eS un 'as- utiliz6 mis 1nocentes declara.cione$ como!ejora-rini sltuaciOn. \ D e . no hab~ side queroso esp!a , 'Y.v ;a, usted a con~:esa1'lotodo. -Supuesta -prueba de i l i 1 . oondidoo.-de es -p ia .)1 ' la g!jarvedild de Jas ' -c ireunsta:ne1as. 00- -He didho .todo 10 que .se-replique---. y sa:bcteador. AI om-o lado del Prlpet es - '

'fa ·resttl tBJdo c6mica I:a int~encl6Iide Nada. mas tengo que ailadlr. Nada:tengo taba. l tu.si.a, ry :Ml.sdh-aten1a,especial inte~t-ea.bogado d.ef.enror, que sa esformba que oi'U1tar. ' .,.:: res :e n q,ue'ni \YOn1 e1 ~ibuna;l,olwidl1ran)1 ' que nadia pudj,e1"a.~h.a.r- que me . 'MiS~'illVanz6 tea.tra:lmente· desde' de- e s t e d.etaJllii.En m l d<eClaracl6n me ibabfataba de:f:endi-endo.· _tr.asde 111.mesa. ry&e colOco junstoamf. Me -v:a.na.gloriado de lUis proems ron, mil esoo-A eso. de las cUl1,tro de 1 & 'taMe termln6 dl:jo: - ' . , pete. < I . e eaza.. Y este data 10 oom1rli6 elvista repentln.amoo.te. uno' de los doo -IDsted es un. mentiroSo prQfeslonoan.· fiscal ,en J . a ; prUeba.flEfriaclenie de q.ue n().ma,1esde 1a' NX'yJD; oontados :9. ambos LuegO,con :to.ttade. calma, 'nli!l llibofete6 5610 e'r.a.'Youn espfa:, . s lnoun: vii asesino,ios del pres1dente. sustittito,: le ·.ll'l;Urmu~ hasta cuatro' 'Veces• .M-QlVla c;a;beza.. en' mi Un frAncot1ril.dor , , a , la .s .6rdenes del· Seiwi-

\ :,(,S:,:,,:i:-:~.a~- .~6/0~/1;~f, .,p~~ina3 9 '" (COntinua/ra.):

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(Continuaci6n.), '

do de rntelig'encla polaoo .. Y ast sucesl- que respondtautomaticamente. Esta lS fue:'V'limente.' '., \ ',l'Cln pr,e'guntas sin train:pa.' , '.'!Era. 'unpi~oceso liisensa,to a cargo de ' 'Y entonees me 'dijo 'eipr<!Sidrenlie sl no

unos locos. Be COIlJvir t i6 en una especie .de tendria mconveniente en proPQrcionarle alcompetioton ·deportiv.a, u n a luciha. entre un trlbunatuma muestra ~e ril iftr.ma; C9mo'rpol8.co medio muerto de 'hambre ¥ casti- 'vac11!~, insist16 'en que no .se tra~ba de 'quegada POl' todos los ,procedimientos Imagt- ftrmase documentO.,a,Jgutw.V'I;t runcioaa-:naoles, POI' un Iado, s, porotro, la pOO~- rfoseacercc a ml con un pedacito de pa-rosa ma:quin!l.ria del ,Estado Sovietico.No P81s610 del tamafio suflclente para quemeJhabian da'cio' nada de comer' antes de cuprese mi firma. Leestuvedando vueltasllevarme ala saladel tribunal y me de-uno.s Instarites enIa mano-Bbrev'Unmlem-, J arontodo'eldfaen ayunas. : " 1 nceea- bro del ti'ibunal medljo: "S610, deseamosbarnes hasta medtanocae, ~ dfa no hubo ver como firinat1ste,d." iCoglel Japlz quecigar,rmo,; nioa<fe. El nscai salia de vez eh 'me tendian 'Y escrlbi ml nomcre, fEl pre-cuando de susxio, se me acereaca s, con siderite .examlno -el papelitiJ. 'Y 10 paso a. (AI dIaslg'Uiente habla YI1.pruebas. detoda calma, me .daoa unpuft,etaw '.en e1 los oflcia1.es de Ia iN.K.V.IO.'Los tries estu- .'que las autQl'idades' de:].a, pr!s!6n habfan

, vlentre '0 unabOlf,etada. Para €sti>eJ.egiavie.i·onapifia,dosunhuen mtoesbudiando' tornado buena nota de mi.cambiode· si-preCisamJmte los :inomentos en quernevefa : 111uma.Elpl.>esldente m'elUiro,.sostenkin- ,tuacl6n.Yo ha.bfli dejado de ser- un pro-'desfaillecer. Jlln cuanto notabanue se me doel pedazo d,e papel con la: mano dere- cesado y me ha·bfa. convertido- en un eon-doblahan las rod~Ila,s oque me balaneeabe; eha, s, despues de hacer una bONita.eon eJ; denado. Con' ellotenla dereeho a 1 3 . rlicidna punto de dorrnirme de pie, Uegaba has- 1 0 tiro hacla .atil,a·s.', complete:: caU:y cie.ilstalnoS del habitual. 'ta, rm ~; como si luera, ,a reallzar un acto Luego,el. presidente isaco 'de entre sus ' pan negro a las 'sIl!te de Ja manana,>y, pOI 'perfectamente le,g,ad,me O101.tabaun golpe. pa,peles un docum;ent~,.ge 10 entresoa. un 'ila tarde, sop!!, Y obrosclen gramos de pan'Todos . losuntembros del tribunal, asi funcionarto que, a, su.vez, -me Ia paso It mi. negro. i.a sopa era ,tan :s6lo el agua en que

como el ftscalll\[ischa, descansarcn 'V'arias ~l;Es ,esb. su, ..flrm~? ......me 'ipre!i'Uilt6 el' b,abfan hel'Vi' tio nabos,sfn saln! prepara-veces durante eldfa. iLos sustltU£an'otros' .pb~sldente., .... '. ". ,ci6n'a1guoa. Pero el cambio de diet3- era.que no par>ecian saoer na'dadel -p.roceso. L a . . estuve examinando-uniminuto, largo'como uribanquete, . .Asi que era este un tribunal siempre cam-.; mterrtras e! tdbuna1 esperll:ba. Era, .efec- A'de:m.as,'une concedieron tnl prlmer ·ban.o .blante,-lJ?Ieroyo estaba 'llilli :fi.jo. Durante Ie. tivan:loepte, mt,firIha. Desae'Neg-o, .te:tnbilo,-calientedesde,mi detenrllon.EI "Jav.adero",tarde, el presldente actuo unas .horas !para Tcsa'ygemasiado :fina,'.pero 1.UcOl1\fundlble- a donde me escojtaron los gUardias estabeque-su sustituto descansana. Los gu'a,r'diaS,:m..ente::mila. ;Pense: "E,;;to ocurri6"en,Jar-a un08veitlte metros <tiem1 celda.y se dt~ya 10 he dichc, se turnaban cada dos ho- kov','la-'noohe aqu@a.'·' , " . ' ferencia.ba. delos dem?,s que habia lYoutili-

ras, Para mi,en'cambio, no habia ni un . -~Es.e.sasu:fl:rma ?.:.....repfti6 el presi- 'I'lado en quetenfa dossrtros en ~ de unomemento de repose. dente. ;... ." , .. . S61 o '. Me ' quita Ie . '''rubcltIta'', .lospantalones<Cuando, por fin. me llavaron, cast arras- '~Sf---.ci!je-, pera no' re'cuerdohalberla' Y ,lasalpa,rgat.as y ,ht.em)oti en 'la,pUa. aibler-

trando, ihasta Iilfoelda---<jjues los pies noescr~to YDO slgnilica, en absoluto, que yo ta, en el .suelo il1!pled1-a. .A:bli e1.grlfo de. m;e,-respondian-, no .medteronni una- p.~ - lists conforme con nada de II) que . a 1 l r : ! n a ,.Ia derecha ysa1l6, un buen ehorro d~ aguac a de comtda, A las slete de la maftana: en-ese documento. ," caliente. No habfatoMla ·ni;ab6n, perosiguiente,cU,ando moeconduderon de nuevo .,' --.Este ,c!ocumento ccnttene los cargos , r i q U e , sattsfR,cCI6n;. q~' 1uj'o 'bafui.l\sErconaIaeala -del' tr1buna1,regufa: yo stn probar que existen contra ruste d, - ' , 'ague. caliente I IBrin,que oonentilslasll'W.bocado, Otraves, atrozmente hambriento, ' ',--IDe sebra 10 8e-:-replique-. Pero nun- "Luego rna' agacM''Yme pegue al grilfo, paradolorido POl' tocl:as partes \\' mortalmente ca nne lo.ihan dado a Jeflt. y. 51 10 he fir- "queeLag'ua:me penetrara .bi.enen 'Jos po-'clmsado.sufrIuna nueva s,es,i6!ndela jus-mado; no 'Iha :sido ti e unmodo conseiente. ros y :me ,batrrlese eonfuerza , tOdo elouer-tiCla sovietica, otra-ses16n: de I~cura. Me ~e tcidosmodl(Js, les ono su firma:? Pq. Mle frota basta queml ,palida piel 3€

obseclonaha e1 POI' queperdelian tanto ~s ' . l l l i i ftrm:a, perono recuerao hliterII3. puso bien ooJorada." , ., 'ti'empo con un polaeo. l,iP<iT'queno : m e con.- ,escrlto.:' " ' ' -, 'tMls dos guardia!); ,uno de ellos armadodenm'li.n de unav.ez tmmiriandoesta far- Rubo unos'cUClhjcheos : 11; 10 lavgocfe JiI. con una pistola del.tlpo NiI.'gan ry elotrosa? 'Ya seqUe €staba en in! poder IlIcabaTmesa. 'EI :presidep.j;e se PUSOen , !pie. Todos . 4on'llIiacarabina, 'conielliplaban desde am,.eI?-seg.Uida,conf'es,a~doeua\nt(} me prope.. se ' pusleron ,en .pie. El,pr.esldente Je:v6'lDsbos !ados de.1a pu·erta. 'mis' eilCcentricidades;man. Pero no quena mom ·tocta.via. Era. caigos' qUe' habra contra. mi. Anunci6 que ' -Ahova <vasa estai' m~jor. Te lle;van Ie,.un a luoha.a <Vida 0, muerte. . f1 trilburta1me '()cnsiderabacttlpablede 'jos deaquI:--me dij<lunode -e110s .. ' "

'N'o,llegaron 'S : vancerme. ~cli.tsoreml- espiona.le 'Y eO!1..."l]>lrac!6nontra J.lsegtUri-,. _;lc.ua.ndo?"":"Ptegunte en segUida-. ~-Arrileron aImartirio d,el bOrde de ]a, s m a dad d1!l ,Pueblo sovietlco.' ;p·ara dec.iresto, d6nde? 'especlhlidadde EIToro, en Ja.tkov,p~ em'Pleaha'tantas pa.labraS qUe,me ,lmpa': Pe~oJosdos ~dlas se h1cteron ~ossor-despuesdeiha,bsTme pasado un ilia entilro, .cieDtaba 'Por' <lITd e una vez1a; sentencla., dos. ;Seguiba.nand{)me; hacletidc> Q:ue metratando 'desespendallltente. de impedll' que Poi'fui llei6: . ,.' .', dur~ 10 mas po.s.vb1e.Lue~o Cene ,el grifose me <Ioblaran la,s' rodiUas', oonsidere, un "'y, POl' tanto, sera condenado a:veinti., y,dance de un litdo pataot1'lO f'a'l'a seem-me,descanSo 'estaT senta<lo de ~uellainsoste~ clIlcoan.osde "tr.apa:josfotza'dos,'" -Meseque con la 'orusa 'Y, f inalment'e.J:ave'ruble lnanera. " " _', .........on esto-:-afia~U6 el :mayot, UIilforma- la Topa; quesol,t6' ,un ohol'ro negro. La., E l ,cuarto dill. 'ftie el uttltlio. Pareeia ha-' do de azul, que estaba a' la derechadel' retol"cI;.Ia \S3.,c);!.dfyvo1Vf a ,ponerme1a, D .e .bel' m:uOh,a'ma,s g.ente que en los diasan- .preslderi)te,-. tendra' usted el ,tien1lPomifi.- ' e}1a salla· una humareda de vlI:por~ , .teIliores. Supongo que todos , los f.linClona.-,' cientepara reponersede ~a.perdidade -:-Tellasconverlido 'e n undhicp iiniplorlos tqueohaibIan a,ctUaoo 'Coino sustltutos memorla.- , ' -Clijo e l deJa c a r a . b . t n a ; . . : . . ; Vamos.., " .

qu'el'fan 'lia'llarse presentes Ene! 11JJtl:mo PermanecL unos instantes m~ndo 'a Jo ,Cuando esttive,de nue-voen Ja ee1'da;meacto, El a.mbi,ente ~ultal>a muy PM'ooido Jar:go de ila t I l l l€se. .Mis oios ' se, tropezaron dierpn un clgamllb. Uno 'de Josguardias' al del pr imer dIa. iElPTesidente '!habia lI 'lle1.. con los 'tie Mischa, e1 eleg,3.nte e lm,peeable .10 li6, 10 encend16 y 10 dej6en e1 .sue-Ia. . A J .

to a su sit!o y revoWill. su mont6n depa~, MisCha. Sentado ;}lac1a.atras, como perso-- a.par.tar.se el me a.cer:que,l t 1 0 cogi. ® S t e eiapeles. TOMS ha:b'la,banani1ll'adamente ¥' nn. queha tetminado ifelizmente S u tarea. el prO~ed1iniento que',segUfan sieinpre'qUeMischa. c.haTlaiba: y se refa cozi,el capItan' me' s~nri6.'No era u.na sonrlsa m:aJinten-me dii,han .'tin , c igamllo. En 'lliD.gfui caso'

de ' l a · :N.K.V.D.' , cionada; A'llI1:Quepar€Z'Ca. :inentlra, resulta- me JO.df6un guardia o1rectaanent-e; rj 5 1Tambien,.a'quel dia ihubo que rspetl,r pre- ba m-asbien amistosa. Parecfa 'estarme fe- seme arpagaba,antes de recogetlo deJ:sue-ll:tn.inarl!s. Volvi pues, a : identificarm·e. ElF lieitanaG'stlenclosamente ·perlo bien qUe 10; ,me'ttraban. un oolof6sforo.' Luego re~tabacansadisimo. eIJJfermo 'Y'oon' un. ham-· 'me' habfa :pdr:tado en (la luoha. Y segufa ~og;fan ,el fosforo .s.PWgad.ory10 quita;banbre horrible., Hubo ~s preguntas, a las son:f1endo euando uno de 108 'g\lI3.rdias me de 1a celda. Aunq,ue laIila.7oria. de las rf- .

1 ' ,. '. ',' \ (Con.tiriu~ra.)

tir6 del iblus6n parahacerme darla vuelta,Cruce las cortinas y fUf conducido a m.icelda.' . .

iM i e d l e r on de comer •.Una granccimidaecn 'relaci6n' a 16' ,que se soUa comerei; .1l 'S ca rce t ee , Y < t a m l b l e n ·bel>ida. Los guai"':dlas hablaroiJ. 'coIlJllJigo.Sentfa que me ha-

bian qultado de ·enciinaun formidablepeSO. Dormi~ . . ,

' ..

In

DELApRJ.[SION AL VAOON DE G A N A D O

3C SEVILLA (Sevillitt:

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I

!

I

. ccon timuus ton . )

. almacenes de dadrfllo rode. Me Ilevaron auno de estos alil1lacenes s alii me entre-garon un pa~uete envuesto en papel decstraza. El hombre que me 10dio me dUo:"Esto es paca el viafe," Y sonrio.

Mientras esperabe en el patio, suietan-dome.con una. mano los jiantalones tv conla ot-ra el paquete,' temblaba .de frio tv deexcltaclon. Me Invadia una intensa sensa-cion' 00' Iibertad. Me dlje: "Sla;v, amigo·.mio, te estas despfdlendo de las carceles.

Adondequiera' que te ~leven, no sera unaa,p.osto;s.a,.rision." Flsta!ba. resjnrando a-irepure iY sabia. 'que me conductan e a!gUn

lugar concreto, aunque desconocta cullere. ~ro ::vase 1ha!1Jiaacabado la peregri-

nacton de careel en' careet, de tnterrega-torto en iIl'i;errogAtorio. Me espersban lostraoajos forzados, vero lnd!udabIemente, nome podfan hacer .trabadar en una. celdadonde no me pudiera mover. Esto era se-suro. Podrfa. emplear de nuevo 'mi~ rna-nos, trabadar, hablal'. con otros hombres ...IElstos otros 'hombres, lIDS ccmpaeieros,

Iban saltendo tambien ,a,1patio en peque-i i o s grupos, Me l!I.~ia..fuerj;eID.enteei cora-z6Dconforme 'los.~fa. l l-egar.iLos mlrabacon emoeton, No podia' aparrtar la vista deellos.Y ellcs memira'ban a..'mi, y saml-rEl!ba'll.unos a otrosrcorr lil. m f s : m . a . ansiedad

.!He debido on: esta advertencta varies y grandfsima simpatfa. Tndos estabamoscentenares de veees durante ml ca'\itlve- esperando enconsrae 'iii alll'lin. conoeldo,rio. Todo.s.'105 suardtas Ia haeian; todos P>ero compl'end! ensegutda que incluso en

los presos se Ia sabian, Los rusos se toma- el caso de que ihu'biel'·a,am ai'glUnconocidoban unsran trabado para oexplicarle a cada mfo, me seria impOSthle reeonocerlo. To-. recluse con tod.a minucios1d.ada d6nd,e Iba, des estabamos disfrazados con nuestro an-y se le .!nstttia. q<Ue Ill. menor desviaci6n drailoso unirorme earcelaric, con nu.:estroa la: dereeha o a la izqulerda, significa.ria eabello llirgo y las 'PO'bladas barbas' (/haeiapara el un tiro de eara.bina. 0 de pis-tola en un a.ii.oque no me halbla. aieitado illcor-la mica, que le'd!spararian al instant-e los tado el pel0, per-o no se me ha·bfa ocurrldoguarcUasque leseguian a. dOs paWs. bla que a todas los clJe.m.8ises ocurria !gual) ,LubYailka parecLa todo ' ll.queJIlo un exceso J)lIu:estra ropaera eX!actamente la misma.ridfculo ,de ,precauclones, per-o mas adelan- Ouando estu-vimos. todiJIS,oomo un reba:no,te, euando mldlares deca'utivos rfiuerontras-, concentrados en' el patio, el'llIInosunos 11;0ladados de unextremo de Rusla a otro y hombres 19ua·lesq'lle yo, to-dos sujetSnidosela fuga s~ con,vema ,par 10 menos en una los pantalones conI una mano: Ciento cln-posibilidad,aktUellas a4verten<:ias 81dqukfan cuenta almasperdidas en 'Un espantosoBU p}eno Significado desde el punta de vls- ,balle de ma,scaias.· con: u n dlsfra:z; misera-ta sovietico. I bIe y de una. monOltonia mareante. Una'!En la .manana. del cuarto dfa desp-ues vision· depesadiUla. Y, para colmo, todos

d-e ml sentenela, entr6 en a : n . 1 celda un· COn su paqu-ete. en pa,pel de e.>traza ljajotenieIi·t-ede Is. N.K.V.iD. . un brazo. Auill:tue parezca absu1'do, dada;;

-lEntlende usted eI rthSo?-1IIle pre- mls cirCunstanclas, tuve q;ue otmtener laguntO. , riaa; pero de pronto sent,{ una o1eada de-Sf-Ie respondf. compasI6n por 10 qUe habian hecho coniEntoooes me entreg6 un 'Clocumento que ~sotros.

·era. tin permiso de transito. Por 10 rv1sto Este rue ml prime<r enmlen1iro con ot1'00en Rusia basta o } i J 1 S condenados necesit~ prisioneros. En J1U'kov y.en Ia Luo!y.ankaun permiso 'para deja1'Se trasladar de u n a . nabia oido ruidos, habia 'indo los cllsparosc·arcela otra 0 a un campo 'detralbajo.s cuando fU5J.1ab.a!n a algunOs, Y ·tal:nbien e1

. forzados. Es perfeci;a>niente Iidiculo, pero espel'uznallte alando del hombre que ewo-·la bttroel'ada Iha adq.uirido en Rusia, como q\l'eOOde miedo. TaI®ien hllibia estado es-en otros· pai$S tot8ill·ta:rios, ;un desalTCi'IIo cUru1ando con g..an a.te·ncion los go!pecitosmonstruoso. El ofl.clll'l me prestO una plu- dados en Ia. pared poor -aJgu1en que inten- .:rna y flrme e1 pa.:pel Segua·rdo el permisotaba comuniCMse oonmigo. Pero nunea mey sa ma·rdh6.· l1!l1hfanpermitido, no ya- !habIar, sino ni;AI - anoobeoo1" ode aqtrel dfa: de' mediarlos s1quiera. vel' a otro recluso. La incolnunl-

de noviemlbre de 194.0, .sali oporUltima vez . caci6n forma,ba pa,l'te del "tratamiento",d'€ mi'celda.' de la LUb!Yanka..Me condu- 11 a mi me administraron Ia dosls mlixima~.jerona.} patio de laPrii l!6n; Ne;va.ba. !Y ' 161 La. tarea .de 1"eIIlII!I.rnos,e comprobarfrio era tan .inrenso Que 00I"tIaba, J s . respi- nuestros n o m h r e s y odecon,tarnos, duro dds. raclon. FormR!ban 'elpatio unoSI Cllrultos horns'oO 'quiza' m a s . .Dumnte este tiemPOpequefios edif!cios. lEn: uno de los extremos. noo oJ:illgaron a' l;lGnerDOS en : cuollllas. en 1$Ire ih.allaban la'S enormes puertas, entre dos lllev.e-at:ra· medlda. de s>eg 'U: t . l Jdad-- , mien- .

gidas medldas de segurfdad tenfan ,un sen-

tido, nunca 'pude comprender a que se de-bia este cui-dado con el Msforo ya utillzadoy con la .errtrega del cIgarri:llo cuando se

" haillabari presentee dos oguarcllas armadosI. hasta los di 'entes y estabamos en el inte-

rior 'de una prtsion ·tan ;formldabie comoIa LUhyanka. ..Y es que, a pesar de que lospresos es-taban Cuidadosamente IVigiIados ,para queno pudieran Intentar escaparse n1 :ba.cernada contra susguarci1a.hes, 'las medidasde seguridad eran extreznadas, Nin.gim pre-so POdia' ira. sucelda 00 salir de ella sinque Ie encuadrasen dos iuarcllas.· AI salir<:1 recluse, . los .g;1lurdias se colocaban unoa cada lado de la pue'l'.ta. El preso salie,y se deten.fa a. un paso delante de ellos,

Entonces le decian, par efernplo: "Alvanza

POl' el corredor- de la lzq·ui'3Tda, at finalvuelvea.Ia derecha y sigue andando hastaque te digamos que .tepal'Bs. Ve toao el. tlempo recto :par e.l centro del corredor."Jnstruccionesque eran remaehadas gene-ralmente !I>9l' 1 6 1 .es1irlbiUo: .

)

I

I

;Un paso ala derecha, , I 'unpaso a Il L iz'lui'."!rda.,iiJ;tellito de :fuga.

tras d9.s gropes de soldados nos vlgilalbancon las armas a punto. Cuando POl' fin nosordenaron ponemos en.ete, apenas se <v.eiaYn. Luego nos hicieron sublr a cinco ca-mtones mill-tareS ciWiertos con .lonas. Te-niarnos que permanecer de pie: Un carmon, .ileno de soldados, encabezaba el convoy"y otro 10 cerraea. Z'ara:rnieados. violenta-mente, nos-Ilevaron a una veloctdad tnsen-sata: (Ibamos todos. de pie). AI Cabo de10 que me parecieron qumce kH6meliros,los oamlones frena-ron brutalmente;y noscadmos hacia delante." !Aquel .viaie me produjo una groail, exal-

tae16n. Con·stltuia una nueva. ;y emoclonan-te experlertcla. iIla.ilarme nueva-mente en-tre hombres. sentir el roee de otros: hom-bres, los codazos en 'las costllIa.s, oler suscuerpos, .eseuehar exclamaelones en pala-eo .. , Pero es curioso que no se prodUjoIa ·tan esperada charla. IEstabamostan des-entrenados, que no sabmmosentablar eon-versacton, Tardariamos' en aeostumbrarnos.Por '10pronto, 5610sa cruzsoan entre nos-otros algunas .palabrassueltas.fEI .sltio donde se ohabia:parado e1 con-

voy de los oamlones era una' pequena. es-taclcn d~f'errocarril . .E&ta:bamll!Ycerca deMoscU. Mas tarde dUo ·al!gul!en que se tra-taba de una colonia. de 'Vlillas de recreopertensclentes a los altos f.unc!onar!os so-vMticos. No ,habfa·ilios recorrldo quince ki-16metros. eomoe! mcomodislzno viaje .me

habfa !hec-ho.creer, sino solaznente. unosocho, Al spearme del camion vi a 10 lefos

las lueesde las casas, mw espacladas, Perono se vela. tg·ente de pa.isano. Solo estaba-mos los prtsloneros 'Y los soldados, Ocu-pa.ba. la vfa:un mercanclas compuesto POl' .varies rvagones paTa ganado, de los que,sueIen emlplea'l"se para. los caballos 0 laisvacas, Ineth~ndolos Con '1a.·cabeza hac!aafuera 'Y el trasero y :las coIas asomancl'opor entre aos barrotes, iha'CIa un estrec'hopasillo -queodividleel va·gon. A cada. '::xtre-mo del tr.en 'habf:i.una Iocomo.tora dispues-ta para. la ma~dha..Cargaron muy pronto oal"'ganado ,huma-

no". A medLda que. iban leyendo nuestrO!! .nombres, suIh!amos al vagon. a.Y'Udados POI':dosguardla.s. As! G E l llenaron los < v a g - O n e s .

En elmlo estabamos sesenta 'hombres pren-

sados,de tal modO' (Lueno' nos era posible'n l . el Dl!ellIOr mav1mlento. iLuego cerraroDbien ·todos los depa'l"tamentos· de los va-gones e incluso cerraron los ·.'V'eIltan'Ucoscon sus plalliMas de metal.Dos sQildados eon :brazaletes nos g.rtta-.

ron: "Somos·. en:fexuneros. Si a"lguno de,:vosotros se ,pone malo durante ".1 vm.je,s6Iotiene .que Uama-rnos rylo pondremos:bien en seguida." .CeTraron hennetlcamen-te Iii .pUerta del 'V'!bg'()n,e manera. que los.

prlsloneros -quese ha;Jlaban oeroa de la en- .trada. queda·ron casl apiastadoo. Enla os-curid:ad, alguien Ja1lZ6una sa.rcastica. bro-rna sobre los e.n:fermeros: "i.C6mo vamosa llamarlos sl los neces:ltamos? l.Llaman-dolos POI' teUi!fono?" Y, en €!recio, en lassemanas sigmientes, nadie de mi 'Vag6npudo .Hamar. a. los sol'dados de lO s braza-retes, Era. u n a . de las mucihas lronfas de 1 a.oriiuiizaci6nsovletroa.. . .. Yo esta 'ba. aplastadQ. contra la pared del

. (Continuartt.) .

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(Contihuaci6n.)

vag6n, 'con el paquete estrujado LVambosbrasos pel!'ados a1 ~u~rpo.· POl'. supuesto,era. totalmente 'lmposl:ble sentarse, y para .l$vantal' 'Una' mano hacia falta combtnaruna, sarle de, complieados movtmlentos. EIque se hallaba m a : s eerca de ml, a m1 de-reeha (0 se·a.;que estaba como :f'Ulldido00.11-miso)', me lI'colllsej6 .que a,])rJese el paquete. y comlsra algo pOI' s1 lu'~·gome 10robaban,Despues de .una serie de difictlisimas ope-ractonas, pu;de. acercarme ,e1 pa.quete 'a Isnarta, 01er10:,y tocar su contenldo per fue-ra del pape1:Lue-goconseguf abrirlo comoen un numero. de malabartsmc. F u e una'

· estupenda sorpresa : un pan especial, de

i forma ovalada, de unos velnte eentlmetrosI . de larg-o 'Y : dl-ez de aneho p o r el centro.

Tamblen habia dos peseados secos, de losque llaman..i~n Rusia "taran", 'Ademas, unaonza de "korijk1",un. tabaco mu(Y bastaheeho con las .venas ide 'las rhO'Jasde €staplanta., y unahoda de periOdico para usar-la, a peda~itos, como papel de·d.'umar. ((Masadelante putle vel' que 181rpoerl&dico'ra doa1,9SS,) Me comi Is. initaddoel pan y uno de:

los peseados s gua.rtM 81 rssto, lfAndolo enmi blus6n, despues de haberlo vuelto aenvolver en. el papel de estraza,.La conIVer-sa.cion· no ,C<1!nenoo illa·sta que

el tren arran-c6.· Untlls voces empezaron acalcular. a. d6nd'e nos Ilevarfan. Algunostemlan . que ;fut!semes a parar a Nc,va,Y3ZEmly'a. la rna's te-t1'ica de las Islas del mar

d~ Barents, 0 a J'lS rnlnas d·esa'l d'e Kam~· ehatka, en Slbelia orIental, En 10que to-dos ~tlihamb-s de aeuerdo era en que 100-mos ·a SIberia. . .. ·Unadi! las Instrucc tones- que nos hablandado 1 l i 1 e,n'cerrarnes era qu:: ' no hicieramosruido 'Ill!glm6, pBro, anima·dos con €I es-truendo. del tr.en, empezamos a · gritar. Unovoc!fero: "lHalY aq,ui alg:uJ.en de L'Vov?"Otro ·r·espondi6 .desd~ e1 'extremo o'J)lUestod·el vagon: "Yo S O \ V de. cerca. de ali!." Perotodos lo s Intentos de general!zar Ia conver-.sacl6n se per!tian en nuestra aJ.gambia.LU!ego,poco a po~, cada uno fue. tratandod:e.ptll1'erss· en reIaclon con uno· de sus'Y>eclncs mas Inmed1atos. A mi me costabamas eS:fu'erzo ytlempo que a la mayoria· romar conf1anza. 'con Ia gente. Esto me haocurrldo siempr.e, 'Con 120 'e!'llalda pegada

a. Ia pared de mad·era d'el vag6n, escudha~ba a 10'5 of-r05 mLenMas s2g'uia , ' :1 hl:lo demis pensamlentos, inca paz todlWfa <Ie en-tablaruna ·amls~a·d,pero .contento de ha-·11arma mezclado a. un·a multitud;' de sa'berque ya no esta.ba solo.

Un rata despues, Je pregunta1baa les·que tenia mas cerea. de -mi si aiguno co-nacia Plnsk. Una voz a ml'!zqulerda res-p·:md1o:"Si,he estado R.n.!." Y asi fUimosPtEg-untindoncs nombres de ,personas ylU1rarC!s,call135, pueblos pr6Jclmos, para. sa-ber sl el otro 10;3canoela. Pero el Plnsk de·e l no 'era. el mio, !!ilo1Jeniamos un terrenocom:t1nde cOIllVersac16n. EI dhUogo fu e apa':gandoSoe. Mie. sentia lrritado de que aquGIhomb11eno conoclese a.nlnguna d e las ~er-sonas qU'e a mi me parecfan ·conocldas detedos en P1nsk 'Y que nO'hublera estado· '.m

los mis.mos sltlos que 'Yo.Lamenta·ba ha,ber1niclado aquello. .EI tren se d.etuvo varla.s veces

SEVILLA (S'evilla) - 11/06/1957,

!".!>l';lj~::('j, 7riD9

prim-era; neche, y a. cada parada 'olamoscomo d·2-Sl:ar,ga.banmas "ganado !humane"de Camioll'C:s:y10metlan en nuevos vaso-nes .. ' . . .Aqliellos de nosotros que estabamos me-.

lor slbuadcs contra las tablas del vagon,podfamos a~isbal' algo de 10' que pasabafuera apllcando un. of o a una. de las grte-tas. .Unos reIJectOres IlumlnabanIa escenaa 16 largo d:al tren, Los que veian.alao 10coritaban tuesc a 105dsmas.La prlmera etapa de nuestro vJ.aje re-

suit6 u n a : p~satfilla, Estuvlmos' eneerradostoda. la neche ~ el dis slgutente. Por su~.puesto, rio pcdlamos ih<a·cernuestras neoe-sldades, nl siqulera las mas ursentes, de'modo que en muohoa casos se hacian depi -g, 'sin movsrse. El 6101' era espantoso,Cada vez 'qu:a se detenia el tren, gl'ita,ban10·s 'p'l'isioneros pldIendo algo de comer ya&'Lla·.Los suardianes respcndlan a.estaspettciones recorrlendo POl' ruera el tren yaporreando los vagones con las culatas desus carabinas para Imporrsr sllencio. Ada-mas,nos prometlan que los vasones seilbriri-an pronto;:r,,0sxluoe. esrabamcs pega-dos8. las 'paredasd:::1 vagon·tenf::rmos u n;(l'fo,lnsoportable.J:)oce horasaproxlmada-

m;'l1ta.d~iSpuis de.Ini prim era comlda, , '3n. e l tr-zn, SaqUe lel'esto d elpaquete ym ecomo!l:mtamentel0 que mequedaba. .. depanv.pascadov - .

ILos'que habiamcsfomado elt~n desde

el principlo Ilevabamoa veinticuatro horasencemidoscllR.nqopor fin se detuvo aquely abrteron las pusrtas de les 'Vag-ones.!Eracast de neche y s610 ,v.alamos una gran ex-tension doe nleve en un terreno ondulado.con aJg>Ullos. a'rboles cerca de la·s vias' yotros. it 10 'Ie-jos. Alguno3 de mlscompa-fi.~rosse hahian 'Cluedado ailiquilosa·dos deIa pro!ongada Inmo'vllidad 'Y ' no podfana.pear.·t! sin qu e los a'YUodaran.Todos nosestlrw'oamos, bostezando,' y nos ~jm03 untu~rte 'inasaJ.e -en piernas y. brazos para>desmr .umeoer los ·y i:estaurar Ia clrculad6n.Yo tenia una herlda. causa-da: POI'·un pro-~ctil d,e ar.tllleli.a:· y con el 'Vill!jese me ha-b!a vuelto. a abrir. Ademas, el dorso demi mana del'echa. donde me haManvertl-do elalqultran ahr9 ,sador, ·me ha·bia em-peorad·o, Pero a1.gunos de mls comDafi·~ros

esta·J:oimh~r !dO's .t!'s maiyor gra lV,eCiad . La·(mico que 'podia ha~r .pOl'eH()sera admi-

. re1' 8U /Valentia. En cuanto a los ,w,f·erm'!!.ro8 rusos, ni sl'qulera.. le die·ron a nadleuna asplrlna. .Unviento cortante del Es te sllbB..ba >e n

tomo al tren,. La nieve !hab:'a de·jadci deca.er y con ello el.,vl.enta era' aun mas frio,o. 'por l() menos 10 parecfa. Los solda·dosrusas se colocaron en arcci para.. eubrlrtodo :el·tren parado y, ademas, clrcula:banpatruillas de ellos.El tren se halla,ba enuna via muerta. . .

IG'emomadlda de seg-urldad, nos nianda-ron' ponemos en cucl1Uas frente a nuestrova.gon, y .entonces nos fueron reparthmdopan negro. TambMn reparthlron agua .Que. sabia. 'a ace i te y carbonilla. Despue s nos.permltf.eron andar. POl" un area estricta-

mente- acotada. par 'loa solda·dos. Tambh~n'autoi-l21aron a a .Jg·unos a ale jar .s<e un :pocomas, con una .fIuerte escol~a, .,ara. coger

ramas de arbOles' , .eon las cuales pensabanformar escobnlas para .limpiat '~1 vascnde laporquelia almacenada. D.esde 1uego,se oen(;£ndfa que' "un paso a. la derecha,un pa.so- a la lzqulerda" , se interpretarlacomo- un frrtento de fuga, IYel culpable se-.rfa fusllado inmedlatamente POL'. 'la es-palda, A pesar de ella, no faJtal'oll volu:n--tartcspsra a'Cluella. ·tarea.A todos nos in-·j;er:esa·baque el va.g6n quedara limpla:L05que sa encargaron de esto se metieron ellel vag6n y al cabo de algtln -tiempo salie-ron otrli. ,v:ez.a respf.1'a-r el aire puro, P!il"a.mlWOT seguridad, los guardias aprovecha-

ro o Ia parada .para reroraar el cierre delas barras de acero de ·la porteeuela delvag-on. Prepararon unos sellos de plomo,Nos carrartan esta vea can precinto y todo.. ill:! p;'an era Ilevarnos. de noehe par laseludades, para que nadie se diera cuentadel carsamentc del mlstenoso tren, 'Y de te-nerse de dia en 'V'Iasmu·a~~tas situarlas enluga1'2s ocultos, Mota bien, las largas ex-tenslones de terrene deshabitado' 'Y los obs-taeulos de la, ctrculacton ferr()Viaria haclanque a.lguna vez Ibagase.mos a las ciudadescuando 'Ya era bien de dia. Y me 1>J'('l;ll11-

tab'a yo .que pensarian 105 vladeros rusosqua esperaban is n tren e n Ia estacion yvelan pasar a'quel trei1'de giinada-cuya. velocldad por 120 'esta-Ct6n era minimn-'d'el 'q'U!2 sallan inoCon.fund1-1;l les voces hu-manas, .

'!!acia el flnllil doe la prremra semananuestros sesenta hombres' sa habian, orga-nlzado s~g(m las normas de una. primitivacomunldad, ,Se est-a·b-leci6 un turno, -rIg:uro-so para .que t odos pudieran 1 1 ' t!ls.frutan~oJdel cuorc:i to que habia 'en el. centro d,h.va·g6n-ea1efacci6n nat u I'a l-donde lapren3a humana 'er,a mas peri-eeta. Haclaeada :ve2i mas fria y en la '~erifilrla" sehalaba uno. Pero 'e'ste sistema - d i e rotac.!6np,rmltla, POl' otra-part.e,·que todospudle-

ran mirar un l 'a-tOa1ext.erlor POl'los ihters-ticiio<! ,,mtre lastilWas. El aburrlmientose pa.lia,ba. a:lgograelasa, nues·tros vlgias,,que anuncia·ban. con 'vQzestent6rea las mo- .dlficac:lon~s d,e1- palsaje, Algounos ha.aian,gracloscs' comentarios. AlU ~ricerrados nopodia'!llos teller una clara Idea de la dlrec-cion el'eclil,va de n'll!estre ,vinje, Pero, r~-

uniendo los mformes de lo s :sucesivos vi-gias, la -matyoria de los cuales 'no oonocianen abwluto e1 pa·is. Uegue·a laconclusi6nete que ,estAbamos dando una serle de ro-deos P O l . " la 'Rusia Occld<:ntal . Es. posibleque estas desviac10nes fueran in.evitablesdebfdo a las maIas condiciones del tra-fico f-erroviari{) y l a neoes!dad de reCog-ernuevos g-rupos de prisloneros en ilunt05mUG'aleJados entre ellos. Sin ·embargo, du'-rante Ill.SEgunda. seman a ', cuando nos a·cer-cam03 a los Urales ~ afiadi:eron unateroera loooIIiotora al ·tren, result6 eviden-te que nos ha'llabamos en el FerrocarrilTransiberiano, :Y ' no cabla duda de quenuestro punto de destinose encontra.ba enalgiin -lugar d.elas inmensas ·extensiones dela fa:lJ.ulosa .Siberia. Pasamos de noche porca.si -todas ~as clutlades impor.tantes, as!: ,

como por los cruces .. A estos los conoola-.mos porque s, quebraba -el :mon6t01'lo lit-nw !y por el l'uido' de 'los trenes que se

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ccn-.el nu-estro, ;POl' las locomo-pa:ra reprendernos eInststtrsobreIaneee- eeharles-encima unas' .paletadas de n ie 'v .e , ..d.em!\.nl,obras, etc .. : '.. . ..sida;d de ocadeeer las instruC'cionessobre elhuJalor. qe nuestros bromfstas 'adquiriame ha grabado en la. memoria unel stlencludurante ,_;lvlaje. "La malo d e un tono llgrlo, fero'z:"Despues· de "todo",

IIlll~lQen."I:O; .sobre todo porquaerade die. yustedes es que careeen de' cultura",: nos coment6 uno de ellos, "elpadrecito 'Stal1nojo pegado a un. intersticio. EI di,jo,'Es 10 mas estupendo que ns oido en s6lo .Ie ha'Pl'estadoa ese desgraelado Ie.. ya quinceidias .de-rnarcna y, .mucho tiempo. Y parecia que ,zl coman- rojia . mlentras dure su estancia en la

de inconvententesr.no. ha- dante estaba prorundamente convencldo .U, R. S. S. Parael vfaje que a . empren~~r,manbener. d horin:iomar-' de 16 quedeoia, A partir de entonces, siem-ahora' no 1a nacesitara. Es natural que selio·ha:biamos.!1egado al Iu- pre 'que sa vda o1:ll1gado.a dirigirnos la marche d e este mundotalcomovlnoa el",donde .de<biiimos pararnospalabl'a. por alguna infracetdn que habfa- Unido lpor ladesgracia: comun, charta-

la neche. Sed·atuvo el tren, con mcs cometido. comenzaba invariablem-ente 'bam-os ya: con mas mtimidad, .aunque el re-Iuz del dla, en un cruce importance. aludieIl'do a nuestra Inoultura. sultado noera slempre amistoso. Teniamos

ciudad,que estaba bastante eerca, ofre- iA·traves de' nuestras Impresionantes los nervios demasiado eri tensi6n para n ola !partlcularldad d,eque.todos ~os edt- barbas 'Y nusstra palambrera, 'Empezioa-. exaltarnos cuando algulen toca.ba un-nun-eran de ladrillo rolo. 1 , E i l tren 'ha'bia rnos Ii conocernos unos a otros:No era> to sensible. Por efemplo, todo lo.rererente

l i -p.ln·N",,,o\"!n a la p e q o J l e f H i . velocldad de quln- cuestlon de nombres, Losnombres n o - c a n - a la politl(la era dlrfam1ta.Recuerdo unaki16·trl,etros ;POl' nora: AI' acerearse a 'Ia . taban ..NadIe se preocupll'ba de aprender- vioknta dlseuston 'entr·edos d e nuestro

.debuvo, 'aivanZ6 otro poco, 'II 'selos. eada uno .era identlflc!\do P o t sus grupo BobI'e-elpapel dessmpefiadc por elslgulo a' :velocidad de. tortuga, earacterlsttcas, porsu mansra de ssr. Algu- mtnlstro polaco' de . AS·1intos~terior.as

cast ;parado. iEn-tonces, vrquapor nos eran los dirigentes nates, los organl- Back en los aeontectrnientos que' conduse-::via paralela.va la nuestra vmarcnaba zadores, Ios' hombres que. automatdcamen- ron a'la illJva'si6n de .Polonla 'por1os 'ale-·trende vasones Iguales a uo s nues- te asumian una esoecle de mandovpara maneaBnunmomento.vaquellos doshom-Tambien ibit.' mu'Y 'despacio. que, obsdeclando etertas reglas Y atenien- bres se habfan .enzarzadoen unarablosa

para Ilamarles Jaatencj6n y 10 Idose a <cIerta -dlseipltna.cpudieramos sobre- < i L 9 Pllta.Mientras los: demas t~at9Jbandeotros comoaneros mios que' 'VMr·~()S.mas poslbles:A1gunos, Y O entre c,onvencerlos,para 4ue:ctejaran la>dtSriu'.

r= ... ..' u . , " " . , L J de aiqu:Ua par·te. "IUn tren co- -ellos,"e;gtll:bamos d~eidicl0li a' no ,:morir..En sion.,e;llos se esforzaban fmpotentes por ..!fLaB ventantllas no estancain.Jl>lo,'o-tros. lkg.aronya alvag'6n comomcver las' pleinas(y los brazos para ata-

Se 've la gente que va 'en e ln•Por mtiertosaml:mla'!1tes,sin.la ,menor ·espe- carse, s : en vista de Q.ue les era imposlble,nuestro tren se d-etivo del todo, EI .ran.za. absclutaenente alli·quilados.Y. efcc-' utillzaron los dien-tes, comobestlas.: ouan- .se habia. parade ya. "MUjeres,' 'Van ,tl':v·a:m~nte, se [ueron muriendo sin' pronun- do conseguimos separarloB;tenia ya unode

IlIlllj.~res en ese tran: Y niiios". NOrecu.er- . c lar ni una ;palabraenJas largas-noches, . ellos ,e116bUlode una oreda cas1 de&gatja~o- .fuf yo el que d16 Ia nottcia I > fu e aI-'. euando 'les,tccaba e:tturIlO .deahandonar· de. un nnordlsmo Yel otro sangra'ba,con los

. Lociertoes que se. foi'm6 una -..el ealorolto' del centro.'Morfan -d:e;Pie y no 'dl'en~es'desu eontrincante seiiala,dOs.~n·laliglaraib1a iferiomena,\. lLos. homtF.·es-~'Qui sabiamos .qua sahabfan muel'to hasta·.qiJ.eunamecrHla..i£.,loraiban dera,hia iyestu!Vle-

en' el centro del vag6n empujaban abrlanIa puerta por Ia manana s entraba ron «nucho tlempo Insultandose, ry-amena-la ;ilarad exterior. de modo que los. "Ia luz, N-o les enterraoan: e1 suelo era duro 'zandose ·p~ra la primera ocasi6n. Luego'Estuvimos .a '~un:to de ser aplasta- -como e,l ;hierro y no Ihabfa enanera de ca- se traIi.qU11izari:my llelgaron a olvidarse de

Peroest!i.iJ:Jamos .tanacostumbrados,'vartumbas.·Senc~l1amente. -se.ios llevacan Ioocurrldor .' . : . . .apenas sinos'· dimos cuenta de.este . y amontopaba·n nieve sabre eUos. susnom- Una. V'Z se. detuvo el ·tren en Ie. oscurt-

de Ineomcdidad. Las mUjeres bras eran-borrados g.eune.llsta oficia1.Eso dad. Todo "estaba en. silencio. La.mRIYoria.lPar·e(~ian·!tsue.tadas. S610 veian el exterior -era ..odo. POl' 10menos sacaron ast. aoeno de ncsotros ~liJ:nos medlo dormtd,os. Una

los vagones, h:rnietlcamente-cerrados. de nuestro . , v a o g o n . . . . . voz' emipeZ6 a hablar; en tono.somnoltento,'. rutdo de nuestro tren lleg6 a ser ensor- Los compaikros aqulenes,m:1sa:dmiraba pero bastante alto .. !Sacudlendo . ntie&tre.·

Unogrit6: "1800 ~ujeres pola- y o ' ,era: a los .ehlstosos.- Nos ihacian)lll gran mC':lorra, ,einpazamos a prestar atenc16n •.nueatrasmuje.e$!. Estaban' en- . bien en los momentos de mayord·epres!on. "MlI!llU1er", decia,' <1 ho)nbre;' "era r imy

1101~·w:!Claos.ll posible quef.ues:-·n palacas, 'E.n nuestro ·g'rupqha:bf.a!por lomenos 'cin~ pequefta·"/Nos llE!Vamosmuy bien. GU1saoaa estonllinas. Nose. Qulzaco d:el<8l1os c!l!paces··dereirse··de 10 miis estu1)endam~nte. Su'madre s¢ 1 9 habHt,

anuestr,Os grltos • .pero, ,pormi tetrtco. Sus 'ocuiTenc!asresultaban con ire- ensefiado. VC,y. a . :Con·tarles a :ustedes .Ie.podia oir ~l escandalo que for- cumc1a, .maca,bras y se'ex;presahan con lert- ta·rta que m e h1zo para mi .eumplEli1ioi! in!

los d-emi vag6n. ' . gua..k rudo :Y o direetO.No Podfan contener,. m~iJer; Sa:bia que mi ;gran pasion sOn lossotdados rusos ilegaron ·corrl;;mdo'· se. Naad loshs.cia canar., S-L,mpre los re- dUlces ... "· . . .ambos extremos d,:l tNn, aporrean- 'coroarecona,gradee!miento ;por los 'ratos Y la voZ prosigu16 .S a relato; Era pro-vOgones 'Y . oroenando que' nos ca-quenoshlcler.on pasar imitando aleoman- fu:rid,a(ttaspalabras brota'ban lentamente'

Illa.seIno.S;Ea'a inutll. Todoel trenteIilbla- . dante del. tren, a:'los guardias>rusos.y a .yeon clarldad.Estaba sOfian.dci. Lees-1'01'.10 vista, ordenaron 8.1 todo 10 sovietico. Cuando .estail>amos ha- cuchwbemos ·d'ascinados. Todo 10describia..·

maquinista. . '~a looomotora'que'lbaen 'blandosob're l&",posibilidad. de que ·nos no- ,0 con:granJdetalle ylo.l'ecord-ablt ~oIi tl-erno .cabeza que.la. pusferai en marcl1a' en se- .varan a 'Jas minas daol:ode' Siberia Orlen- qarifio.· S~1mos. Rsi 111.istor1a de. ~quella. .gUida sin -eBPerafa ias seiia.Jes.AquelIa .·tal, urio de los bromis!;as nos €Xplle6 untartil.: c6mo sehlzo la pasta en la granpal'lloda:ilO -duro mas que sfete u oebt} nit- 1l1ande fuga q.J}e'se .le ha'bf.a.· ocUrrldo. . .t.uente blanca, e1 I~ento .de pal'tjr. losnutos.Cuando I(Os PusUUos 'en' rnarcha. ,LEra:·un .tlpo .bijolY reCihoncho, op:erode huevos.c6mo ,serenlovia., qU~ cantidli.dnuevamente, aquell6s ·hombr.es que 19no- . ai.pecto mUY'ifuerte, :;COI). una "mR!gUifiCa exa.cta: odeharlna se' necesitaba.Y muchos:rail>an d6nde esta.r!an·sus madr:s. sus es- bar·ba.·,n:gra.·"CRlbaUeros". anunei6, "prl- otros.ctetailes"Que.pe:r.toeceI6n9Joanla ·mag..posas. y stiil hijas, sallazaban, incanso1i1.- mero me C O i m e r e unos.Plitl.adosMpolVo niific!it~ta::por ej.£.mplo, :e1-artoe. delicac1!-bles.Ladeprimenteinflueneia d e aquel de oro,'lnezciAndolo con el pan negro; Lue.. sim.o de··.garra·pitl.ar1as·a.lmendras. ",Era.encuentro 'dur6 varlos. dias .. Fue Ia" peor 'gO .correre como aI,ma' que lIe'Va e l· diablo. Una tarta.~erinosishl:iui", proseguia el hom-fa]la enla minuciosa organizaci6n del he.cia Kamcihatka y..pa,gare al Jap6n. En- br,e,"una.,tarta rnara.villosa, de ra.rs.seua-·v111.j·e. . .tonces' soltal'~tambien. con e1 al1mento- I1dades, IY ' mi'..mujeriue capaz d e haeerIa,' .

Hwo.o unepilogo Jr6nlco. Cuando ((}Or el oro rus!> y - vivire feliz el l';sto '9a ml especla'k:1lente para ! ! O f . El aroma.; mientras .fin llegarno.s 8.·1.avia mUletta que .nos de- vida ... Nos ·reimos de su:,dlv'ertldoproyecto. la pr-eparaba., parecia. 'V-mir d!iectamente·'bia ser,Vir de ref,Ugio eontralas m1radasNosre.fmo's con grandes eareajildas, 'exa- del cicIo ...., '. . .. .. .' . .ind!scr-e·tas IY<londeteniamOs 'qtiti detener- geradamen1;e,. ~c:mio'.suelen reir. ...O s . · deses..Da proQ,to. uno 'de miscompafi.eros '1anz6.nos durante al dfa, el coman-dante del ken, perados. ,y euando vdan a 1&; ' i : u s O s des- unalarido. Sf, !oue U n a : ' alarido QUe nosun.tipo alto. (h modales finDS 'y hablarnundanuo a los cad4veres,:o seaqultandQ- .hizoel mismo afecto que ima . dUCb,.'l-.d.esuave, se' dirig16" a .nosotros ;POl' grupoS les el pIus6n' y los panta.lones 'antes de agaa. halada que desplerta vIolenta.mente

t:~~;,7:'~ILL\d~~~~t~~:L~i.~,r~~~/1957.agina~;,,,,: . . .. . . ·.(~~~Jllir40j ,;

,"p..~'f~i·\a:,: • ·'"f.':\,.1,":t_;c; '~:~ci:;", ' :;;XPl' '2:,;C::., ;~

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(CpnttnllaclOn.)

I ,I

al que duermet "IBastal l.Basta! IPotamor de Dli>s, b a,stal" Otros se unieron ala 'protesta: .'''Si, eMlate. que vas a volver-nos locos". ·Yel marldo de la gran cocme-ra lnterrumpI6 sl1'ensuefio de Ia tarta· ideal. Durante nll1chOS dias estuve aii,o-~rando la maravHlosay luaJcl l ta tar-tao Me, era l!mpostble recordar a' que sap.ia undulce.

IV.

CIN:co MIL Kl:t .OME'IlEOOs FOR T.RiEN

SabrabatiM1Po ,para.' pensar en todo

10 pensable durante aque} vtade por tren,que .parEcia intermtnabla \y' que a later-cera semana nos tenia ya por la SIberiaOriental. Halblatnos Ido perdlendo Interesen los nombres de las, estacfones, cadauna de ellas con un b1.lStode stalin 11a-·maetvamente pIntadO de .blanco; 'Todoslos slt ios dssviados donde entraba el tren~ara .ocultarnos durante el dfa,' tenianel mismo aspecto: extenslones nevadas,unas veces con bQi;ques y otras peladas.SOlamen;te .vartaban en el grado -de frioque nos orrectan, A -medida que avanza-bamos mas bacia el EsM, m~ ba:ja:ba la,temperatura. A veces; el frio'Y el viento..eran tan 1nsopor'tables que nos 'alegrabavolver a nuestro haelnamlento humane }I

a. la eale-taeclOn natural que este pro-pcrctonaba en, el centro del vag6n.

· Ca'da dia, nos :perfnltia saber un poco. mas unos sabre otros. As! deseubri .ll 'ueriinguno de mis eOl1lpafteros' habia ' side

condenado a menos de d!ez a:tios de tra-bados .forzadps. lhelUso ml senteneia d,

ve1ntlcinco' afioil era corrients, 'If cinco de7 X ! . ! gropo padeclan 'eondenas mucno maslargas. I..a m~tltd de aquellos hombres ha-bian cometlclo Identlco crimen: hab~r ser-vIda en e1 e~erctto polaco.Hablaban, cmnoes caracte.ristieD en los militares de· ·toddel m,tindo, de sus experienelas Mllcas 11de los sltlos aclonde hrub!an aldo destina-dos s u s reg1m1entos. anecdot·as de sus je-fes 0 de sUs 5I1bord1nados... Esto me obl1-·g O a. pensar en tt)lpropla. hlstorla, aun-que 'en 'Verda<i, no ,tenia much as ganasde recordar a Polonta, perc no podia re-medlarl0. Aunql1e me [uera doloroso eva;'

Clara .[as seres iqUerldos tamblen .podfa as!hUlr. retrospecUvamente. hacia 1a ,e13oca., en .que r V i v i en u n pais libre.

Fu6 ..un pl!gUefio jU'dfo el prIme-ro que,me trado aque.l1os recuerdos. Me h.lzo una:extrafia pregunta: extrafia. para un judio.Cuando. los alet:banesinvadleron el Oestey los rusas el bte d·e nuestra patrla, estehombrecHlo, qUe tenfa una. t1enda. :en tle-loyostok, vendla susblenes ,y cam:pr6 dia-mantes: Tenia. parientes en Z:Y!ardow, eloentro' text11 PrOXimo a Varso;via. y alliV l V 1 a tamb~en tIn zaplI.tero. amigo suyo,<2ue le h1zo. un par c1,ebotas especiales.conde .pudo meter 10J ! diamantes. Hechostodo! estes prej)!!ratfvos. se dJspuso a huirde Polonla.. &A d6nde .iba.? Pues ~,.A1e-manla", claro (lata. Por.qtie decf!t. '~ue noBe .fiaba. 'lie los. tusos. "Pero, homl:>re"" Ie

dije, '~los nacls le hll'b,rfan matado'l!, usted.Todo el mundo 10 saooque estan acaba.n-

do eon los JudIoS-O, por 10 menos, esocreen edlos-, pues los ¢dIan .a rnuerte.""Es posiole, es poslbte", replle6 el hom-brecUlo. "Per.o no me negara usted quellevaba 1'aOOn11.1desconrtar da los ruses.. Vea 10 que 'haen 'heCho' de ini". 81go ere-y-endoque tUIVogran suerte de -no ha·oer?U6stoa prueba a los "nacls. S1 todos losr~fmenes total1tarlos son detestables, pa-ra los judios era m'as desjnadado que Din-gUn otro el regimen hltleriano. Los ru-

BaS Ie sorprendteron tratando .de pasa r 1 1 1 .fronteTa. y. e so bast6para ,que le conde-naran aiea aiios de trahajos forzarlos.Sa consideraba un gra.ve delito Intentar

escaparsa de los "llberadores", Al mar-cnarme a mi casa de PiIlllk despues dedesmoronarse -la reststencia del ejercitopolaco centra los alemanes, habia· elegl-

doya virtualmente-ml entrega a. los ruses,tMh habia, ido medor como prisionero deguerra de los alemanes? Era Imposlbleeontestar a esta, pregunta a "posteriort",pero siempre que me Ia ptanteaoa me po-nraa pensar en los alemanrs ;y en I I I . in-utll lucha de nuestra cabaUeria contra.los. tanques, en ..el.ca.osde s:quellas bata-Ilas ry en Is. -valantia 'del ejel'dto polaco,que' . .estaba lrt'em;ediab1<mente destlnado :a.anlquilarse enaQue>llas tl'aglcas semanasdeseti{:mbre de ·1939.M-eJlamaran afilall en1937.cuandoes-

'tudiaba. Ia carrsra.. de arquttecto en laEscuela.Tecnlca deWaweliberea s Rot.",.an-

da, ...enyarsovla., ..Tenia que .•servlr doee .mesesen .laE.9c\1ela de preparacion miU-tar, de Bret Llti>vsk. A l o s siete meses pi-dleron voluntaries para. Instructores milt-tares del cuerpc de Caba.llerla. de-recono-elmlento. Yo era buenjlnete 'Y !}provech6aquella ~portuhidad. Al cumpllrB'e el ano,quede ,mtre leis pl'imeros pues'tos de ca-detes. Yowl: a la Escuela. Tecnica ~ meexamine de las tlltiltlll'S 'as!gnaturas en1938. El misni:o' ailo me reincorpore ailejerclt'o para. tomar parte en. las grandestnaniobraB-"llue dur8.'bal).seis semanas-ene l area de· WolIn. eerca . ' de Is . frontera1'usa ucranialla.· Me ascendlel'on a segtll1:do

, teniente y voivf a cllsa f,uute, bronceado,sat!sfecho. Para lLY\l'dara tnl madre .e nla. adm1nlstracl6n 'Y exPlotaci6n de su fill- 'ea de·Plnsk. M1 m!ldre era la persona mas

prActica 'Y e!1caz de nuestra familia. Mlpadre creia que la mlsl6n de la finca eraproporelonarle Jos. .medios ·para .contlnual'dedicandose a. au gran af!c16n: 'Ia plp.t iJ.ra(i'e paisajes: la' calla. estaba'l1ena de aus,-1ienzosy ca1Jalletes, pero nUnca <Iuiso}ven-derun cuadro a pesar d e qUe algunosmarohantes se los qulsleron cotnPrllJ' a.veces.lS610 perman,eel en '111.1nea unosmeses.

1li:'11 de marzO de 1939, me llamaron conuna orden de '~movUizaeion no of leia!!'.Selsmeses dellpaas,. el ,31 de agosto, vis-pera de m~ 'V~ocua.rto anlversarl0.mlentras ll!1a ias-cai 'tas que 'hab1a l' ;'Clbl-do de. mi mu<jer y de mi madre y in a ~e-

pamba .8 . abrlr los ..plI.Quetes que me ha-tbfan envlado, un mensa.!ero :1lego a . nues-,tro .campam'entode eaballeria, cerca de

o 7l l' ia rr ov . 1 > ar a. anUnciarnosque los a l e -, manes nos !n~Mtian.Era 1a. guerra.

Mi serviclo activo no .dut6 mas de tressemanas, pero fue.ron seznanas de vidamuy Intensa ~ dramatica. Repase, en estevagon ruso, mls Impreslones de aquelkisdias. Recordec6mo buscaos , reftlgio, co nmricaoanc, del ataque de 105 "stukas",que pasaban con un: sllbido por' enetmade .las carreteras que hablan de barrercon, sus ametralladoras: recorda los em-botetlamientos del tra.ns!to, los esfuerzosde nuestra artl: l1eria POl' acercarse al ene-mlgo, ..nosotros ,can .. los canones tirados!por ca:ba:llos ¥ ellos con sus ruerzas moto-J.:lza.das,MuCllas ...eees nos canoneaben yno sabdamos d6nde estaban, CerC81 de

Kutno encontramos a Ias £uerzas pr1ne!-pales de nuestra Caballerfa-eerea de diezmil jiniltes-quetenian oortada la retlra-da nacia Modian por los alemanes bien

. atrlneherados. '. Por 10 .mencs, en este easo hubo 'una.clertaunidad de mando. Cireul6 la ordenpor 'Ia fila de que debiamos abr1rnos pa-so como fum. Entre nosotros y los ale-manes !hRlb1auri Ibosque de mas de doslillometrasAe extension -.Las trompetas to-ceron Iii carga :y -nos lanzamos, Los que.tuvleron Ia -dessracta de desmontarse en,la primera arraneada, no pudieron vel-7/"er a. monta r 'poI'qlue fueron arrOlllq,dOsymuer tos par la o masa que Be prectprtaoadet1'li.s. Vi ea,baUos elavados en las es-tacas 1:Ielas' alambradas. cabBJIlos destrl-·PMOS en los pinches, Una earga de-Ca.ba-

11eria produce una especre de locura. Tantolos .linetes como los cabllil los pai 'tlclpan enella. Su runa, su peso y ,SU Impetu arro-11ador 5610.pueden ser detentdos par unabarrera d·:! fuego arM'llero mu:v .eoncen-trade, Los al~anes que <IU1lrfan rendlr-se .eran segados. L a Caba11erlano haceprisioneros cuando dauna carga.Batldos por los a·viones en plcado,

a:brlendonos paso por las .carret<eras ates-ta:das, r€;gresamos a Var.saviapara reorga-n1zarnos, como se nos habia mandado, Ydefenderla ea.pital. Muchos' soldadQs .de'infanteria montaban· en los cabaUos sinJln~te y nos acampafla,ban,' InclusovenfliCon nosotros Un marineropolaco, a ca·ba-llo.· No ihrullamos et:l YaTsovla. nada orga-nizia.do para 1 1 1 . de<!-ensti., cuando, despuesde trasll l1dllJ' cierta <:antidad de material

de los cuarteles 'I1~1'barrIo de Praga, cru-zando el Vfstula. a la antlgua Escuela deCa:d.etes 'de Varsovia, 01 ..que habfauilafU'f!rza'organ1za'tia .pa·ra la defe·nsa en lossubwblos, en la earretera deVarsovh-\?iastov. 'me marche baCia alla.· POI' mlcoonta. M !e reclbleron con gran alegria. 'Y

me diuon el mando de una patru11a decalba.lleria de oc:ho·jinetes.'As! pude- P1'eSeDCiarla. que !fua quiza la

ultima ~rwa de Caba1lerfa en la guerramOdierila. ga!biamas dejado los cabaUos,,vigl1a'dos por cuatro soldaodos, en e1 lin-del'o de un bosque ,ysubImos a 10 alto d<euna colina cubier.ta dearbustos desde ]a

cUIIl ~ dom1na.ba Is. carretere. pr1nclpel dePiastov. lnterceptaoda a unoa c1en metrosde nosotros por un cruce con otra. .carre'-tera. . iEla,bia una ea5a, Pintada ·Clealegres

corores,en uno de los Angu10s del crue€. Noest!llba !habltaoda entonces, pera hab!an de-·(Continuarci.)

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{Continua cion.) .

. .

[ado una sombrHlade Jardin, que atra-'V·esa,cauna mesa. Era una sombrl:1la. muygrande y de vivos colores, EntenC'2s vlmosdos pa-truillas alemanas que inspeeciona-ban aauella zona, a· e ada lado de la carre-tera principal, Una de las patrullas pas6entre nosotros y nusstros caballoa. NO'squedamos Inmnviles y clavados, la 'miradaen los dos k!l6metros de carretera prin-cipal que se extsndian ante nosotros,. No tardamos en vel' el motivo· de lapresencia ruU( de aquellas pa trullas. A 10

lej08, venia un peloton de soldados ale-manes, eon .los rlfles al hombre, seguldos

.por una media docena de o!icla}zs a caba-llo. Detras de ellos avanzaoa toda unacampania' de ·infante1'ia. y luego algunoscanones arrastrados par traccion anImal..Laeolumna so : hanlaoa a medie ki16metrodel cruce euando ot ruido de cabaulos parel camino que tenfamos detras. SalIendodel bosque a la carretera; surgian unosciento clncuenta jinetes polacos perrecta-mente equipados. Luego supe qu-e perte-necianal 1~:re·glm!ento de Ulanos.La cabrulhrfa se formo en un memento

y se lanro blandiendo ' las espadas, carre-tel'lI·ada.1ante, a tal velocidad que los-ale-

manes no tuvleron ttempo ds darse cuentade 10 que sucedia.: Los caw'lIos arrollarona toda la columna sin (.juanadle de esta,disparase apenas contra ellos. Los. caba-llos Ique tiraban de los canones sa- espan-

tarcn ;y , como consecuencta .de . ello, loscafiones quedaran cruzados en -Ia carre-tel's. POl' esc, hubo algunas 'vlctlmas pola-cas al tropezar los cabadlcs nuestros con-tra los canones, volvieron a formar,.Y dis-ron ott-a carga contra los rsstos de lacolumna alernana con la cual completa-ron la. matanza. Luego se marcharon POI'la cahetera que cruzab'a con aquella Ytodo qU'ed6 tranquilo. -Nosotros sallmos denuestrO' eseonelite :de Ia colina y regresa-mas para In,formar. La fec,ha Era el 11~0el 16 de septlembre. Vsrsavia. capitulo pa-co despues. .1Jegue a I l l . canclusion de que el' di-

lema :plante ado par el pe·queno judio no'podia ser resueIta. l·A1emanes? ~Rusos?.Para un polacoen mi' posici6n.en 1939,habia poco pal'a ele·gll', Y en mi tl'en. ve-

nian m'uChos que se ha·bfan visto en m!~aso: cl'eyel'on in1?,'enuame-nteque el habarcom1J.:i-Udocantu les nac!s seria un mo-tivo para aplaear ·a los rusos.Prosigu~eron losd'ias de in~vp<:>rta·h''''

aburrimJ.ento, apane de todo 10 demas. Nosalimos de uha continua mo:iorra. Laspaslid]llas 'que 50nibamos. nos 'dura/banhasta despi~rtos, aunque bahiamos llega-do a nO' estar nunca verdade1'amente d-es-plel'tos. .solei 10' 5U!nciente para darnoscuenta con 11m-rOore que seguian glrandalas ru€{!as. tEl mddltotren no parecfa ira pararse jamas. 'Hacienda un 'es!fuerZo,ijlsbhibamos de nueEtras espasas y nU2strasfamilJas . .A!I&"Uncsompaiieras describian asus 'bUos con amoroso'S det8'lles. Maldp-damas a los rusos, a HItler, y a sus alema~nes. Pas8:bamas luego Iarga·g horas sin ha-

blar nl una palahra, apelatonados unoscontra otras J)3.radefendel'nas del Intensofl·io.. A veces permanec-iamos

I

.trelnta ysels 'horass..~idas. ~ntonces . cinco mil k i l o metros de viaje, llegamos a.abundacan los Iamentos POl' nuestra derl'o-' nuestro destlno: Irkutsk, cerca del extre-ta Y' las maldicionesll los culpables de mo sundel la·go Bail~al. .nuestra degrada1l16n. Lea Eo'ldados reecrrleron e1 tren abrl~n_'1:'091'0o deja,bamos de avanzar, de ro- do las pUertas IYgrltil .ndonos: "ITodos

dar po r la rv ia . Morlan UllOS hombres Y'SUS aba~o! 1 l E : ! v,laje 'ha termlnadol" Cuandonomcres €oranborrados de-las listas, perc sallmos del abrigo de 105 vasones, un vien-la Iarga serpiente de los sessnta 0mas to sl:ll;ante nos ·azoto con J.atlgos de hie-vagonas de .ganado segula. devorando un 1 0. \La bad.!slm·atemperatura nos cortabanumero rabutcsc de k116met1'os. La in- la resplracton. Nos pa.l'Blpeia.bamos detras .mcnsidad ·deRusla es Impresionante, liden- de 105vasones. En pecos mlnutos sa n o st:hficamos, aunque nlng.Uno de nosotros helaron las or eua s , se nos pusleron rcdashaola estado aolli,el Importante centro sl- las narices y los ofosemnezarcn .a. entur-berlano de Novo SibrlSk, a unos tres mil blarsenos can la,gr~mas pl'od'llcldas POl' el

kilcmebros de nuestro punta de partIda., frfo glacial, Todos temblabamos Incontro-!7 el tren no se paraba. lablemente.. Era la ssgunda semana deY cuando pasamos POl" Krasnoyarsk ha- .' d~ci'e·m,bre,10 cual signlfica, en Siheria,

biamos racorrido itrea mil trescientos ki- pleno Invterno. Y no olvld>erl.ustedes quelometros en linea easl recta. El tren -lba todo nuestro abrtgo conslstfa en UllOS pan-muv despacto y pudimos verzraades mon- talones, una llgera blusa ·de a1god6n s.tones de cerealss enplenocampo. ;E n sra- unas alpareatas, Los soldados Inspecclo-'no se estropeaoa porque .falta'ba mana de ". naron todos Ios vagones para asegurarsecera y medias de transporte para aca- de que nadle se habfa que dado dentro.rraarlo. A traveade las rejas de nuestro A!'gunoe,con 103 miembros RJga·rrotados,.vagrin, Krasnoyarsk resultaea una gran tuvreron que ser saeados en brazes. Sll

cludad, 0 ppr to manos un luga1' d'S .eIlor- produjo un eierto rebullicio, nos dl'eronme almacenamtentcda granos Y: eon.ele- las mas detalladas ordenes, repetldas devades edUiclos rodtzos. .Como Importante grupo en sruno a 10'largo de Ill. fila y for-nuda de comunlcactones rerrovianas, ha- mamos luegoen una columna larga Ymuybia a:ll! 'una.cmiidosa actividad. poco marclal: unos cuatro mll prtsloneros

.. A unosddce kilometres m a s aUa de eneaceaados. flanq'Ueados y seguidos. POl'Krasno.yal'Eknvs detuvtmos ven una v:la un biren numero de soldados bien arma-lateral, bien ccuttos dela c1udad. Un dos, Alvanzslbamos dando traspies, con la

equi1l'Odeferrovtartos-bten arropados pa- cabeza contra el ,v:lento, los pantalonessaba a lalargo deltreh comprobando el empapados hasta la rodilla porIa nteveestado 'd·elas·ruedas.Estos obrerosdeben ('ma·.pissh·amos y POl'. las salplcaduras dede ser de los mas ocupados en e1 mundo los que Iban delante. Asr recorrimos cer-ferrovlario. AprcweChando cualquler opor- ca de eCho kilornetros, p'erdldo ya de vis-tunidad que S~ les pres·mta,&e pcnen afa- 'ta el ferrocarrtl. E1 sltlodonde habiamosnosamente a martillear iaarueaas. Y en d·s descansar era caractertsticc: nos 'per-Siberia son aun mas necessrios. ,Cual- . mineron romper fllas en un patatal 'in-quler averla en plena estepa ,ih':!ladapodria menso, barrldo POl' el viento. No habra.r.e:>u1tardesastrosa. AqueHa vez encantra- una 'oasa en todo 10 que abarcaln. la v:ls-ron ciertos dafectos en a'lS'llnos doelos va- ta; nl Ia mas modesta ohoza,ni un cober-gones. y' tu'VimQSque pasarnos desde .m.~- t!zo ni nada, La nleve que 'cuobrfa el pa-dia manana al anocbecer, mo'Viendonos sin tatal, renia mas de medio metra de es-cesal' para no ·quedarnos helados mlen- pesor. Unos cuan.tos camiones d·e "kolj6s",tras' ef~etuaba'n las repsraclorres im;pras- S~ 'hoa'llaban parado3 POI' alli. Hab,ia unacindibles. . . cacina de campafia que pareefa absaIu-INu2str.a; con:11cl6n iha'bfa mejora-da. un tamente lnadeoua.cta para hac-er en ella

.poco. Slguiendo el ::jemplo .de un compa- ki comid'a decu!!tro mil personas, El vien-fino de gran ingenlo. nos ha·':;of!lmoshecho to era .tan aczrado que tenia yo h i. sensa-

unos clnturones con ramitas !Iexi)}las, De c16n de estar ·d'&11Udo.Los prlsloneros noseste modo conse-gulmos tenel' ]!,brts am- mir,a,bamos unos a otros como pre·gunt8.n-bas manos y u·tillz.lrlas para desentum,e- donos que 1baa ocur.rir aibera. A causa' delcernQs: .Ustedes no tienen idea de 10 que ·su- viento,' se nos salta·ban las lagrlmas, Pero'pone tell'E1' libres las dos manos lVno verSoS natodas las lAgrlmas eran .causadas por·ol::ligado a suje.tB.l·seeternamente los pan- . el 'Viento. ._ talon~\S con una de ellas. 10' cual, es un No dur6 muc<ho esta vada esperai HabfapequenO' martirio qU'e·a lao larga resulta que hac~r alga 1nmedia-tamente s1 no qu'a-desesperante. riamos morimes tCldos conv:ertidos en e~-Nos .hMlabamos al final de Ia tercel'a tatuas de hlelo; U:ll grll'po proximo a mf

semana y algunos creian que Krasnoyarsk I?mpez6 a amontonar nieve para construlrseria el final de nuestro ·viaJe. Sinembar- un. refugiO' centra el "'iento. Este ·-e}em-gO', al ana Checer, nos met1eron de nu.e- plo cundi6 rl\.pldamente Y mucboos SoSP ' i l -va en los Y'agones, nos encel 'l'aron y nos sleron a l~JVan.t.ar'eJ.Em~ntal£s muros depreclntaron. El "ganado \humano" pro- nleve. En cuan·to tel'Illin-aban su trabajo;s~·gulasu marcha. Las ruedal! recuperaban ;;.~ acurrucaban d·etra·sdel muro protec-su hatltual ritmo. Rubo otras sels noches tor.de vla'je, se~s,dias-a partes de dfa~cul- Ma:s aHa de las alambradas, a unost.ns en alg.un sttio uesvladQ, saltanda y trescien'tos metros de 1a terminac16n de

golpea.ndonQs para que nuestra' sangr·e· sl- . este campo de prisioneros, liabla un bos-gulera clrculando. ·Entonces. Incref,blemen-que; Cuando e1 comandante d·el tren, a'queI. t~, aJ mes de nuestra salida ycas1 a los ap6stol d-e la cuJ.t·ura,nos vlsit6 horas des-

. (Conttnuara.)

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inminenela dell.lgl1n omlnoso aconteci-mientopara Ios cinco mil pnsioneros: unode eros glgante~s transportes en que' es-,tan especlattzadea. los ruses ..Los soldadosestaban completamehte equlpados, cubier-:toscon .sus "ballikIa.vas", guahtesdepielde cordero y Ue<Vandoeada v u n o so. mo-chtla caqul a la espalda, Par 10menosna-bia ..eincuente eamiones aparcados.: eon-seravndo un buen espacjo e~tre uno yetta. En cada caml6n habiah tnstatadopl'ata:formas can ametralladoras. La . pre-senclade tarrtasjropas y 'l'ehicules hacia

presaglar nuevcs SU:frimientos paravtodosnosotros, ' ., .J .,

<Las' t ropas llegaron a las' .once ide lamanana antes de que la dlstribuci6n.. delcarecon pan hubiera terminado, Enlpeza-ron a actuar mmedlatamente comprol:laJl-co una vez mas, can las Itstas, lai-eSen':'cia de los .prtsloneros. Esl;a tarea se rea-ltzo COn.grandesdificultades. pues conIfrecuencia. habiaque leer varias. veces losnombres.vya que los soldados los pronun-cia,i;'ltn.'en ruse y aos,1nteresados no los re-· conoefan. ;cada vea que se completaba unaIlsba de' clen hombres, estes .eran eondu-<lidos Junto 'a un camion, Fuese a propo-Biro 0 casuatmente.tIo vcierjo ' es q1l,€losgrupos que hablan -hecho elvlaje ..a :81-berra en. eada. vagori, quedaron dtsemma-dos. Yo, por ejemplo, me encontre can

etta grupo totalmente dlstlnto a1 que ·ve-nia en ml vagon. Nos condujeron al es-paclo I1bre entre el sexto y septtmo carmeny -a,JUpasarnos varlas horas mientras enel camposeg'\lj'a 18.tectura y comprobaeionde las l1stas. Esto duro toda la tarde.Cuando, . termmaron los preparattvos..'

termlnaba tambien un frio dia de dtciem-bre, Los soldados ;quedaron dis~rlbuidosenseccicnes .de unos vemte eada, una,· a. lasordenes de un suborlctal. cada seecion te-nia que vigflar un centenar de pristoneros.

, ContemplabamQs: con Interes.vtodas estas·operaciones .. con ;un frio ·lnsoportable, apesar de nuestra nueva ropa, deseando .quela ex:pedicion se pusiera pronto en mcvi-mlento, ' ..

. Todo e1 tiempO habia habido un bor-donso d,eClhal'laa 10largo d'<!:as fllasde

los pris!onerQs: De l'!epente, · s e ; produjo unImprestonante slleneio al verque de cadacamton sacaban una: larga cadena de ace-1'0clliYos eslabones tenian dos. centimetrosd e dia.inetro apl'oximadamente. Uniiol-dado de ml destacamento 1l!vatiz6hacta losoris Ihombresq:ue se ihaJla;ban en cabeza,apartandclos <las mas eran dobles, peroeSt:j;ba.mqs IDUJy Juntos), fue avanzandoentre nosotros, sepaeandonos. I.e seguianotros soldados, que· llevaban la cadena,dejandola. entre nuestra tdos ima·s, .en el·suelo, Luego nos: ordenaron .s , sritos quecogieramos la cadena, cada flla con lamano que le cam m a s cerea, Anti·· metocaba,e-!Iado iZquierdo. ReCuerdo como:m e a1egrQ no. VerIDIC obllgado: a utlllzarla mana dereeha.. que tenia a :dn despelle-

. 1ada. s :dOlorl'Cia.La cadena era compte-

. tamente nueva, Ann. estaba recublerta conun prepara·dooscuro, pegajoso, contra er.el moho. Senti la f'rlaldad dellicero e n laola mana como si tuerauna quemadura. Lue-

· ., ,<D<m ti nu a ra .k , , ," , ,. y,',~, ,:,' :1 u ; , -.

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<contin~aci6n.) ,

:lr0 nos 'encadenaron, cincuentahombres un parde noras, 10 sUficlente para: que la, !babel' sldo porque 'el comandante, 'POt 10a cada lade, con tina argolla en la .mufie- coeina decampafiaque llevaban en uno de 'visto, tenia orden de buscar un lugar algo

ca. Tres ,guar,dfa:svigilaban a cada lado, los eamlones nos J:l1clera cafe caliente 'Y protegtdo. No era una madtda humanlta- 'espaeiadcs a 10 lar,go de la ifila. :Ellcoman- 'qu,e los soldados repartieran entre nosctros ria, por. suouesto, sino que, correl dinerodan,te'de Ia, secelon sup!6 al cami6n, ins- las raclones de pan. El calor del caife rea- r: r la clifleulteydque les 'ha'bfs' ccstado trans-talandose Junto 301chMi:r' y los soldados a : rnmo extraondinarlamente y nos comlmos portal' aquella masa de trabajadores for-su-mando se colocaron en la parte ue la el pan con un hambre voraz.,Por supues- zados desde un extreme .de '!Rusiaal otro,,car:ga: Estfubamos iijspu.~stos para el vfaje. to, no nos quitaron las argO'llaspara comer' no estaban dispuestos a que se les que-Ninguno de, 1 05 .prisloneros ,hablaba. ' y ai poco rato reemprendlmos la marcha, dasen rriuchos POl'el camino. Seguranwn-. 'Como 'un interminable rep1;11,la ,cara- esta vsz a Ia luz del dia. ' ,b, 'el comandante habla' reclbido instruc-vanaempezo a .moverse 'gtiiada POl'erca- Los .seis . 'guardias qua' nos, ,flanquea,ban, ctcnas .severas Para Que ahorrase perdldas.mlorr que iba encabeza. Lleva-ban una : v - a - en nuestra marcha sa tumahan cada. dos d,e .la baratfstmamano de obra.,C'laroQile',locldad 'de:march-a humana : unos SJZ\skl- noras. SU'biali ill cannon; descendian de €st'Clpuede parecer Ironlco sitenemos en'16i.netros'par nora. E 1 extreme de la ca- este otros sels, y toao ello se veri1'icEl!ba cuanta las durlslmascondiciones en que

dena estaba suleto en un sanchocerrado .sizi que la rnarcna- se Interrumplese nl un . se nos obligaba a bactr el vlaje, perc otra'coil. un candado de : los ,(i,ue se ernplean memento. En las altas mesetas, el vlento ,vez 'hay que declr 1:luetodo es relatfwo en'para' el remolque. Al arrancar nuestro ca- aullaba como cien mn v d emomos sueltos, .este mundo, En aquella ocaslon, fuera delmion.vla cadenad16"un -tir6n ,Y nos pust- resbalabamos e o n : mucha rrecuencia jr se area haoitadade Irkutsk, nos soltaron PIr-mos vautomaticamenteren marcha. Y asi . .nos 'halaban las puntas de los dedos.vde la .ra pasar lan<i~e'y nos permitieron en-todos::detrfrs de .cadavsnfculo, la reata de 'nal'iz 'y' de las' orejas, iCesd,ael prin-eipio 'cender hqguei·as. Lo, mtsmo queen el pa-, ,presos: 'Entre carla 'uno .'de: nosotros y el ernpezaron a mortr comcaaeros mfos, Un tatal, cavamos 'en la nieve-para proteger-:cornpafiero d,ed'ela.rite .no habfa mas es- "grlto, que parti6 de uno de los Ultimos ca- nos del vlento heladoy, nos mantuvimospacto disponible que el necesarto .para an- . miones, fue retransmitrdo de, camlon en muy juntos a.J calor de Las,hogueras cuvadar sin tropezar, a coridlcion de que los pa-' camton hasta H"gar -al eomandante de la lena hablamos arrancado de los arboles _sos no fueran in'lllY largos. Ouando el ca- expedlcton, ique' iba en 'e l prImero. Esre se que nos rodeaban, Can las manes parall-

mj(~n-guia 'entre en una. zona de nieve mas detuvo Y los. demas fu,eron Ihaciendol() zadas ..POl' el frio. nos habia costado un'blan'da Y profunda, todo el eonvoz ae fue -t~nibien. Un cadaver fue "Uberado" POl'fin. tremendo: esfuerzo, pero merecia la penaernbotellando 'basta detenerse POl'compte- '(\T,como 105muertos del tren, ·lo,dejaron porel l'esult!idl:>.;A;1linosdieron la segun-to .. camion por vcamron , grupo porgrupo. enjilano campov.eubierto P a r . unas-P!l.le~ da taza cia 'caf~ de. aqmil lifa y los queSil'peran.cioelobstaculo, reanudamos .la tada~>d'enie'V'e. I.,e,qt)1tarohJa ropay.jll;s habfan tenidola pre,cauci6nde guardarmarcha, ' ' , ,o\)otas;Este fueel,prlmerode una!:!ll"gaun po::o de pan-repartido poria manana, Ailueila 'pr!mera nonhe-s-a principlos'de . serie. Antes de .terminar ,aqU:eLvia:ie'IIlu~ pudieron'ba'IIlJbJen mofarlo en el cafe;

, I a tercera semens de diclembre-c-c-Ia pasa- rio eldiez 0 el qu1ncepor .cioentodJeIIlt ''Me acuerdo. con a:gradecimiento de Ia'mos toda ella andando. ,E! camioIHruiaseeCi&n., ' ," "eoeina de campana. Ell ella se 'cocia elIhrminaba el camino con potentes taros, Era muy dLffcildarse. cuentade que ilia·, pan qua nos daban POl' lasmafianaB Y,~ro los que '1bamos detras teniamos que mos siguiendo una carretera normal" ya que era ,t6do nuestro ahmento durante el'a'Vanzal~ en plena oseurtdad, obedectendo que 1a cubda totalmente una gruasa capa. dla . .8010 f.all1ouna vea en que el venda-el insistente tir6nde la cadena.: Nos pre- de nieve,' Pero a cads cren metros spare- , val nos estuvovaeotando durante variasguntaJbamos adonde nos nevadan. temien, cia una estaca como de . 'dos metros y me- floras y 'nohaMa manera de riacer nada,do' que se prolongar'a aquella mortUera dio de aItura, rematada POi:un inanoj'o de ,Pera esedia noscbmpensaron con un pan,mar.!lha b8.!jo,un frio espantoso. Nomeca~ heno sacCi0 de ramas. Pallecian Una suce-. d'e centeno que ,tenianpreparado para''biA duda de que' este viaje nocturno 5610 slonde 'escobas de br:u;jas. Maroaban 6 1 casos, di'!.emergencia. 'El cambio fue muytenia POl"ohjetoa'Partarnos de, todo.s los camino y nosaeompanaron durante inter- bien acogido. Er.a un pan mojildo en mlelsi£los babitados eerca d,e Irkutsk. Su ob- minables ltilomehos; por -valles y monves. 'ri algo toSltado P\l.ra:poder conservarlo, Esjeto eila evitar que nos viera la po.blaci6n par d,es1"iladerose lncluso a tra'Ves de rios cU1'ioso con que claddad recuerdo todoscilv.lli:usa; , 'he'lacios. A veces.no solo eram{)s nosotros .losde'tailles que se rei'lllren ,a nuestra es-, En 'los d.fassigulentes el programa s e - 10 5 que resba,J:abamos sino' las ruedas de casa alimentaci6nen e'1 largo via.le, deI ria da V:!aJesdiumas y paradas n03tUrD.as. los camiones,con s u slstema cite6rugas. .Pi:risk a : 1a Siberia del Norte. oi,ras cosa~,De todos modos, la ruta elegida el1idia, el Entonees los sol<la'dos 'se ap.eaban y' em- POl'mas que, me 'e.s:fue1'2lOpOl' recordarlas,paso por los sltios ,habita,dos. ES,tas in- pudaban su cami6n y"los, prisioneros, an- seme han borra:do casi POI'completo. pe~menSas regiones de Siberia s e hallaban siosos de Ue·gal;10 antes 'posfule al 'sitlo ro. en cambio terugo slempre, vivas en la

tan poco pobiadas iluenisiquiera vimos ,donde POl' fin nos dejarari, descartsar un memoria todas las lnt:idericias d,enuestroUn'ser vWiente,a, tOdo 1 0 largo de la prolVin- "poco, aiiadfamos. nuestr.o es!u'el"ZOvo1un~, 'ra,elonamiento. Estabamos' siempre h~m-"cia' de Irk'uilih. tariamente. Estes tropiezos fueron cad'a brientos, con pan y' sin, el, d e , modo' que.Aquoe!'primer dia, media illora' despues vez mas frecuentes. ' nuest1'a idea, obsesiva era la -eomlda.

deamanecer.nos detuvimos'en una de~ 'Pocoi; de 'nosotros' d'udabamos de la di- Muc!hos lte nasotros hB;briamos dado pu-, PI'e51on'boscosa en-tre d05 montl!s, Estaba- reccl6nde la marClha: casidirectamenve fiadol! 'de diamanJtes POl',una, ,rebanad,a ex-, mos mortalmente cansados. ihambrientos y 81 norte, hacla el eJd;lIe:tnOsupet'ior de la ,tl'a. de pan y,nOs 'habiamos consid·eradocon todo el cuer:po anqUilosado. En, ml pI'ovincla de Irkutsk. donde esta el area de, como ios- seres mas afortunados, ya quegrope lhillbia indli\r1duos ,de' tedas las eda.., Y.a,k,utsk. Probabl-emente, ~gufamos, una " aollisolo tenia valor el alimento.d'es, desde muchac!hos de dieclsiete aiios' a r,uta 'pa.ralela' a 1a orilla occid,en'tal c i e l la-, 'lEn d transcurso de aquel via,je ,nos,

hombres de m4s desesenta y entre eUos' go Baikal" €Sa ,'enorme extetisl6n de ag'ua 'aootaron trestolmentas d'e' nieve ,cuallos lhabk1 de las m a s dlferentes posloiones interIor, en' forma de, platano y que 5e m a s t i : r e r t e . La pr!mera, que nos sorpren-sociaJes. A!1g:unosde' los mas ,,!eJos,g>e- a,larga unos selscientos kil6metros 'desde ru6 hllcla e1 final de I:a, primera seman a, ',1ll;fan.L9i mayori-a die eUos e.ran aboga,dos, el'elCtl;emo ;sur, Irkutsk, haiCla el norte. El nos pareC16 la peor porque fue nuestraarquitectos, medicos. etc.... 'hombres que foerrol:arrllTranslberlano pasa POI'Irkutsk; Primera experi'eneia de' eSbs :ven-dawaleshabia,n' ejercldo c6modamente su.sprofe~ Nos conducian en,direcci6n norte desde los' il'uriosos, que parecen",hielo hecho viento'siones ryque ,esta;ban a punto de r-eth'arse ,;iO' a los 50' de lat!tud norte. y mas aHA. ,'q 1anzado a enollmes wlocidades contra el,cuando, llegaron los l'USOS. No disponlim ~acla el Clrculo Al'tico. Pe modo que el hombr'e! ,!ndetenso. Arrastra,n ,ior:mida"-de medios:ffslcos 'Para luc!har cOn,]a niUe1'~'" tiempo empeoraba, a medidaqUe :pt:ose- bles masas de mere que 'Ie apJasta a uno.

'teque les RCecha:ba. POI' mAs que ihfcimos gufamos e1 vi!llje. , " ' ': , ,Elcie'lo habfa estado cubiertO POI' nu):}eslos , m a s j6venes', enton-ees y m a s a<le~ante; !La marCb.a ,contlnu6 el segundo d l l a . bl!.ja's 'Y plomtzas haSlta que esta:!16cen re-por. ary,udarlos,morfanmuchos, deeUos, ' hasta ultiam hora de, la. tarde. Y.podria- i)entlna furia. El convoy fue dlminU!Y'ezi.do

!Aquella pr1n:!era :parada dur6 solaJp.entte mo :11,l:be1'ubierto antes esta etapa de no' su nULrcha:hasta que todosI05 prisioneros

(Cont,tnuara.}

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<Continuacion.)

ieamos casi a ga tas, arrastrando los piescon grantllstma dificultad y movlendonoscomo tortusas. ,Era casl imposlcle abrirlos oios. La nieve .seapilwba en nuestrascabelleras y barbas, cubria losvagones emcluso se pegB,ba a las cadenas. Los sol-dados Be acurrueaban junto a Las ametra-Iladoras, tambien cublertas de nieve. EsIncomprensfble .como pudo arreglaa-selasel camton-guia para sesulr avanzsndo y

• arrastrando al eegado convos. Hacia lasdos de Ia tarde consegulmos cierto alivlo,Fue la. primera Ve Z que vi a los ruses usa rBUS "bakllks", una especle d~ "balaklava"

, pel'Ieccion.acta, heche. con palo de cam ella.

S610 podian ponersela mediante una 01'-d'en especial del cornandante de la expedi-cion.La tormenta 'dur6 hasta bien entrada

la neche. No podiamos encander Iuegosmientras contlnuase. Cuando oedlo, antesde amanecer, 'Y se. eonvlrtl6 en una finanevada. nos sentiamos ya destrozados POl'

el esruerzo realizado durante tantas ho-ras. Al amanecer. con asoeeto de una m'ul-tltud de hombres de nleve, coneentrabamosnuestras 1lltlma-s esp:eranzasen la coelnade campafia. Esta muda llamada encontr6su respuesta, Hici-eron y repartisron cafecaliente. y tamblen pan., Tenfamos pocas oportunldades para en-tablar amistades unos con otrcs, Cada unoestaba demaslado absorto en ;!IUS propias

preocupaclones.. Lo prtmero era. segulr vi-viendo y la lueha por sobrevrvtr 10 dorm-naba todo. Sin embargo, trabe amistad'con uno de mis compafieros, mt vecino decadena era un hombre JOV'2n , de, plernasgruesas 'Y con espaldas anchas y rectamuseulatura, se nOB pasaron dias y dfassin hablar, aunque nos observacamosmucho desde -;:1principio. Me fueslmpa-ti~ y C1"OO que yo tambien se 10 fui. La,primera vez que hablamos fUe dUranote'la. parada del convO\V para "liberar" de

'- la._cadena el ead8iv>erde Uno de losdos que

Iban delante de nosotros. "A mi no mematail'MJ. asi" , murmur6 mi vecino. "A mitampoco", dlje yo. "Ue,g:aremos a dondequi-era que hos llevJen".

Me dUo qu~ se 11ama'ba Grechlnen y

procedfa de Lublin. Er,a el. jere de eataciOn

.,...aunque quizQs ese titulo re.sultaba exa-gera-cto para una estaclon tan pequeiia-.en un a.pea:dero cerca de ,Lublin. La v:erdades ;que hacla allli de tooo, hasta de mozode equlpajes. Era mUG'"modesto y prefel'iael trabajo manual al de oflclnlSta. Cuan-do llegaron los rusos, 10 despldleron sInraOOn alguna 'Y 10 ell!v1aron a un -centrode reparacion de tractores. Greci.h.inen, quehabfa naeido en Ucranla, era uno de los"que -se 'habfan coniv,ertido en palacos aconsecuoencia del ,gran rea:lustede fron-teras despues de la primera guerra mun-dial. T{)mo con tranqulUda.d este cambiade tra,bajo: inc'luso _pre:ferla. ocuparse delos tractores que de su pequefia est~16n.Me conto que algunos de aque110s trac-

'tores no tenIan rep.aracl6n posibLe, :perolos rusos daban por elerto q,ue Greeh1nen

y sus compafieros los arI'eglarian para en-vlarlos a las granjas donde estaban ha-ciendo tanti falta. Grech1nen se apllco a

la tarea con su mejor voluntad. Paso todaunaesmana trabaJando en -uno de ellos yse quedo preocupado cuando se 10 Ileva-ron. T'.::nia serias dudas sobre la repara-,cion -que !habfa hecno. Un dill. 10 Ilamaronde la oficina del supeerlntsndente ~ le In-formaron, con may mala cara, de que sutractor s,~ hania roto an cuanto Ueg6 a lasranda, Cr~d.'llnen, con - toda calma, ex--plic6 -la Irnposibifldad de reparar eftcaz-mente una m'1iqulna que s610 servia ya pa-rachatarra.,Crecllinen fue arrestado r acusado de

sabotale: a la vez le aeusaron de otrascasas Igualmente fantastic as. Y el neche

de naber sldo "jefe" de escaclon en' unInsignifla'cnte apsadero "dernostro' sucondictcn de servidor de la poiicia polaca.Est,aba, pues, clare que era un enernlgndel pu.eoio. Crechmen rtrato de defender-se, para nadle Je htzo caso, en Vista da 10cual se encerr6 en un mutlsmo absoluteels.spues dei primer interrcgatoric. "lQueva uno a dectrles a . una pandilla de 1mbe-ctles que 1e lnterrogan a uno maohacc-naments con las mismas presuntas ;y quese venfurecsn ,p.ol'qu,"~as ..espuestas nocolnclden can roque €l1osesperan?" Lemaltrataron, Ie gritaron '8 insultaron, peronOlhub0 rnanera de sacarleuna. palabra.Llegaron a creerr.que era .:un •deficientemental~ suspendisron el -"tratamlento"para . '1!nvlarloante un tr.Lbunal.La senten-cia fue.mUG'"benigna: diez afios ••de traba-Jos forzad.qs por haber sldo "Jefe" de es-ta cion en. un apead.ero donde.s610 traba-ja,ba €I y ~or no -haber converttdo en untractor nuevo ama maquina inselwtble.ICuand,o Ie comuntcaron la senbencla.

Ohedhinen sa sorprendlo tanto queolvId6el voto de sUenelo que 00 hahla hecho a sf

- mlsmo. Exclam6: "jDiez 'atios! Y, lPo1'que?" EI fiscal se puso en pie de un orin-co, grItando: "iAjajal ",De modo que aho-ra. habla us~oo.!" Crech1nen volvlO a ca-lla:rse y desde entonees, segl1n me dljo, no,habia vuelto a 'ha.blar has,ta conocermea mi. Me advirtl6 que Is. oostumbre de ha-hlar en cual(Juler s1tl0 podia traerle a unogra'v-es perjuielos. Le agradeci el con-sejo. Durante el resto d'el viaJe mantu"V1-mos esta afeetuosa relaci6n. La . honradez

de Gre-ch!nen me agradaba.~gulen BUPO, duranre la segunda s e -'mana de nuestra marcha, que estaJ:lamoBa 24 de dlclembre. :Es poslble que uno deJos p1'isloneros sospe-chase que nos acerca-bamos a e.sa if:c-chay se 10 pregtUltase aun soldaao. La noticl.a eircu16 por las filas;€ > a extendio como un incendl0 en unbos-que .. '~EsNochebuena", se decian unO& aotros. ' \Es Nodhebuena, Grech1n'Sn". ie di-je IImi amigo. Gredhlnen 5Onri6 a mediascon sus labios reseoos. ' 'NoMebuena'' , re-pitt6. D.etnl.s de nosotros tu,f!·ereclendoun extrano ruld9.' algo que resultaba e a -tremecedor. Era, sencl1lamente, e1 cantode unos hombres, un canto que se hacJacada vez mas potente en las heladas Wde-serticas' zonas si-berlanas que fhamol) cru-zando.

'Ore! que los s01d,ados 10 cortarian conuna orden ta<jlln,te, pero el canto fu~ ere-clendo y aceroandose a nosotros basta que

nos sumergi6 en _sus ondas. Entol1cesGreohinen y !Yo nos surnames a el. Todoel que tenia ,VOZ , cantaba. Era un espec-tacuto -oell!slma aquellas Cinco mil vocesde lhomhres que aliviaban su desespsra-cion alabando al ,Nino Je-s(1.5que habia

de nacer aquella neche. La canci6n era"Sag-rada Nonhe" y los que no la saofanen polaco, Iii can Laban en el idioma enque la .habian anrencndo de pequenos.Luego. unas cuantas voces Inlclaron el,vmancico pclaco, "Canei6n de cuna deJesus", Me produlo tal emoc!6n que nop u d e sumarme al : coro, A la mJ.tadde ella, otrosvemoclonadamente tam-bien,

cornenzarcn a llorar. "Canclon de cuna"5e corte de repents y ya nadie canto mas.Nos estaUaba el corazon con el recuerdode otras ;I\iOcJ1ebu2llas.EI dia de Na;vldad pas6 como tantos

otros: .fue un dla mas de marcha. con elhabitual martlrio. En ese dill. padeclmosnuestra segunda tormenta de nisve. Gre-chtnen y 'Y O tuvlmos que sostener durantevarras horas a uno de los hombres quemarehaban dslante de nosotros tel quemarohaba delante de Greohtnen i,y aca-bamos Uamando a los guardlas para queIe ayudaran, "Podra arreglti.rselas el so-lito", dUo uno de ellos. Murl6 media ho-ra antes d'<!que Uegaramos a la proximaparada, y tensase en cuenta que siem-pre que hablo de - tlernpo y dls tan cia, 10

hago de un modo -aproxlmado.<Los soldados no eran siernpre tan Indi-terentes'cuando se trataba de avudar a losexhaustos prlsioneros. Se vela que lea na-bian ordsnado establecer dif,erencias entreunos y otros. A los mas vlejos y deblles losabandonahan a sus propios recurs os por-que era gente qua nos Iba a servlr grancosa para el trabajo, a pesar de que nosha;bian advertido d-e que slempre qu'e al-gulen se pusf.era enfermo habfa que aovi-sar. Tam'blen nos recordaban can frecuen-cia que contabamos con enferm'eros mayc!l'pacitadQs, pero nunea 108 vimos. A losj6venes y fuerbes los socorrfan en cuantovelan que los podfB.n perd-er. Con la buenamano. de obra no podlan jugar. Era eX!lC-tamente el mismo criterlo que se !lpllc(lal ganado.

'En aoquel punto de reun!6n cel'ca deIrkutsk,sebllll>la m'ezclado con los pr1-sleneros d-el tren un c!erto niunero derusos, ca51 todos elias Joy-enes y que nom'e parecleron deUncuentes phmlcos sinovulgares criminales que ha,bian de purgaren Siberia. sus crlmenes. En nuestra ca-dena habia tres 0 cuatro de ellos y fue-ron los Unlcos qUe reclbleron ayuda a 10largo del viaje. •,Ouando uno de los prlsloneros em,peza-ba a tropezar demaslado Y a deJarse alTas-trar, llamabamos a uno de los guard1aB.'Entonces estes gritaJban el nomb1-e deldesgraciado a los soldados que tban en e1cami6n corresa:>ondlente. Mil consultabanuna lista. Lama\Yoria de las V'eCes,el en-termo era desatendido. Se 1e ordenabacontinuar y sus compafieros ternan que

sostenerl0 todo e1 tlempo poslble tra-tan-do de ' mantenerlo'Vwo hasta la pr6xlmapara&l.. Maclb.os (gtltaban d'esgarradora~

(Continuara.)

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sConl ituuicion .•

mente pidiendo que los soltaran de la ca-dena y les de.iaran dorrnir en 1£1nieve, esdecir. mortrse de una vez. Entonces llega-

ban los soldados y a culatazos les haeianseguir unos pasos mas hasta que morianencadenados,

IPor eso nos sorprendio tanto 1 0 que su- .cedto 1£1prtrnera vez que uno d'e los re ,cien Ilegados, los delincuentes comunesl'USOS. se ca;y6 desmayado, Llamamos co-mo de costurnbre a losgual'dias. Estosgrttaron el nornbre. En el carnian consul-taron la Iista. De alli lleg6 una orden ylos guardlas se apresuraron a sostener vi-gorosamente aI desmayado y a reantrnar-

'10.Cuando volvto en si, 10 soItaron de 1£1cadena 'Y uno de ellos le diio: '"Eres ungran muchaeho, te vamos a d'ejar que des-eanses un poco. Asi podras trabajar .masa gusto con nosotros mas adelante". Subie-rona este hombre al cami6n y le llevaronen el un par+ de horas. Cuando se huborepuesto 10 traf eron otra vez a la cadena.Quiziis debiamos 'habernos alegrado de

que uno de nosotros hubiera sido auxilia-do, perc ha bian muerto tantos Icompa-fieros ante la absoluta indiferencia d'enuestros guardianes, que aquel Individuonos insplro una gran desconflanza. InclusoJlegarnos a odiarla. De entoncss en ade-Jante, rompfamos toda relacion Con unprtsionero que hublera sido llevado alcamion, Sospechllbamos Que rueran dela-tares planbados entre nosctros por ·105l'uSOS, aunque, pensandolo bien. i,QUere-compensa podria ser suficiente para unhombre que se hubiera sometldo a aquelmartlrio slberianos Desde luego, seguianel criterto de conservar a los rnejor do-tad os - ffsicamente y mas Jovenes. peronunca vi Que axiltaran a un polaco.Asi continuaron los dias a 10 largo del

mes de· enero. Cada vez esperabamos conmas ansia el descanso d'e 1£1noche, lashogueras. el cafe y el pedazo de pan. Algu-nos de los solda.dos veteranos nos declanque habiamos tenido una, suer,te magnificaporq<u'enos habia tocado un buen inviernosiberlano. ;,Como seran los malos?Cadadia nos retrasaha mas e1tiempo endeme-niado. IEran ea·da v,ez mas frecuentes lasocaslones en que j;enfamos Que empujar los

camiones hundidos en la nleve. Nos pre-guntabamos, cuanto tardarfamos en vernosin~ovilizados definitlvamente. E1 f.rio ace-.ro d'e 1a cadena me "Cluema.ba"la mufie-ca. Siempre estaba hambriento. helado ycon un hambre mortaL Ell'esistente Grec-hlnen proseguia Junto a mf dia tras dia.Nos hablabamos poco. pero nos anima-bamos mutuamente con nuestra presen-cia y con el decldlcl.o Pl'op6sito de ambosde :no dejarnos morir. Grechinen se pasa- .1>avarios dias caUado, pero de pronto me50nrela bajo su gran barba y yo Ie res-pondia con una media sonrisa que agrie-taba mis Jacciones :helactas. .

VI

FINAL DEL VlAJ'E

/Cree que fue en la ultima semana deenero de 194!1.despues de pasarnos ma&

de cuarenta dias eaminando, cuando latereera tormenta, la mas vlolenta, noslleg6 del norte. El convoy habia reccrrldomil tresctentos krlornetros desde Irkutsk.Habiamos cruzado dos grandes rios. prr-mero elVitim. y s610unos dias despues el

pcdsroso Lena, ambos soltdamerite hela-

des como anehas carre teras suavistmas on-dularido por el norte de Sibe~ia. Despues detodo esto, parecia increlble que los camio-nes tuvteran que detener BU lento 'y cons-tante avance nacra el norte. Pero Ia seca ypclvcrienta nieve, que azotaba con tuer-za los rostros de los soldados y los pri-stoneros, hizo 'que el camion-guia se atas-

case de manera que todos nuestros esruer-I 'i : :JS eran inuttles para' ponerlo otra vez enruta. La larga hilera de carniones 'Y pri-sianeros se convlrti6en una masa caoticay no nubo -mas rernedio que .interrumpir1£1marcha.Durante todo e1 vla.le esbabrecieron un

turn a para conducir el camion que ibaen cabeza. Cuando daban. Ia orden decambiar, el conductor sacaba a1 carnlon!fuera de Ia fila con sus prtsioneros enca- .

d"l1ado3 detras Ydeja>ba que los dernascamiones pasaran'Entonces ,ocllPaba. elU:lti1ll[)!ugal' s prcseguia. La duracron del.turnoidep~ndia delestado de Ia-carreteray delttemno, Estabamos. en .ulla,,.arretera.•.prillpipa:l'oordea dapor postes ,·telef6nlcos,cUyos1rilos se ccmbaban bajo .·e1 pesode Ill.nieve, perc Ia-.ventada decha.llarnosan una buena carretera quedaba contra-rrestada pore! hechode que avanzaba POI'terreno muy €le.wrdoy,por tanto, mas €x-puesto a la torrnenta. Aparte del arnon-tonamiento de nieve, debia de set Impo-sit:", para los conductores vel' el caminoentre aquellcs remclinos de ventisca,lEn actuella ocaston Ia posicion que ocu-

paba mi gruopoera 1£1cuarta 0 Ia quintaen 'el convoy y ,fue &111,casi a mi lado,dorudeel coma,ndante de Iii·expedicion ysus o1iciale5, despues de lnspeccionar IRS

secciones, se l'eunieron en conierencia.No · s e 10que acordaron, pero a·quellosmi-litares l'Usoses!;aib'an preocuj:)a·d£simos.Hablaron un rato con la espalda vueltaal vie.nto y luego un solda,dos>e ~ncaram6a uno de los postes, telef6nieos y conect6

'1m,telefono portatii. Descendie del posta eInform6 al eomanda:nte. Este y los ofl-clales movie-ron afirmativamente la, ca-b-eza varias' veces y los aflciales se dls-persaron para acudir' cada uno urgente-mente a su tal<!a. Los prlsioneros segufa-mos inm6viles, aguantandci nie-ve, mien-tras la tropa reeonocia los alrededores enbus~a .de un sitio algoprotegido.,Media horadespues de la interrupci6n

del viaije, sal-taron de los cMDiones las ca-denas y nos condujeros hacia. uno de losladas, Fuimos abrlendo !Ina senda porIanieve virgen. Los camiones se arrastrabancomo po.dian detras de nosetros: Desp.ueo;de r.ecorrer asi, con 1nfinita dif1cultll.d,cerea de dos kllometros, llegamos a unestuJ)endo refugio en e1llndero ode un bos-que. Logrnmos encencter centenares de

hogueras que alimentamos toda 1a nochepara sa'lvar Ill. vida. Tenlamos la segur1-dad <Ie que 1a tormenta. Use proponia"

enterrarnos en masa. Algunos Insensatos,haciendo caso omtso del prudente con-sejo Que se nos dia al Iniciarse 1£1mar-oha, se calentaron sus aterrdas rnanosmuy cerca de las llamas. La vuelta repen-tina de Ia circulacion les produio doloresespantosos, que les hacia retorcerse. Man-teniendonos dentro de la zona calentada,nos da,bamos Ia vuelte a cada mementopara evitar quese nos congelase Jn espal-da. No se Ie permltio a nadie que se dur-mtera. AI 'que empezaba a cabecear, 10 sa-cudfan viotentamente sus compafieros,Todos sabiamos que dormirse equivalia ano despertarse mas..

Durante .vetntrcuatro jioras vivImos ba-Jo el azote implacable de la tarmenta deniev.e. Los camiones desaparecian bajoenorrnes montonss de polvtllo blanco. 801a-mente sobrevlvlmos gracias a las hoguer asy a la cocina de camparia. La nieve chi-rrraba contra las llamas. como aceite.Pataleabamos para que nose nos con-gelasen los .pies. rnetiamos las manos ennuestras "fufa ikas" y maldeciamos a Iatormenta preguntandonos cuando diablos_podriamos salir de aque) Iugar.

Cuandose fue calmando iel vlento y lanleve era ya mas escasa, 1a prlmera Im-presion que rectbi Tue Ia del siJencio. Yaera posible oil' los pequefios ruidos delcampamento y mellegaban retazos de con-versaciones murmuradas entre los prislo-neros. Y lo-cunoso es que, aparte de estosruidoso seguia silbando el viento entre losarboles. perc, comparado con el tiorrfstmoestruendo de Ia tormenta de niave, quehubimos de-padecer durante tantas noras,todo eso podia ser llamado "sllencio", Norecuerdo el ,tiempo que permanecimos enel lindero del bosque. Me parecio mucht-simo trempo, pero quiza no rueran masde dos dias. La cierCo es que lleg6 unamanana clara, can esa claridad cegadol·s,de un dia de invierno siberiano en queel aUento sale ·en nu.becii1a.sde vapor ylos cjos domina.n una prodigiosa .distan-Cia con todo deta.l1e. VI a un grupo deoficiales ruses quebabIa1:)an sin dejar demirar en la direccipn en que ba.biam05v,enido, eChando frecuentes ojeadas a susrelojes. ~ra un ambiente de ex·pectacien, 'Y

.comoninguno de los p1'lslone1'ostenfamosnl Ia menor idea de cual pudiera ser e1acontecimiento que se avecinalba, I:iuestracuriosidad era ,grandisima. Estabamos acada'momento mas excitados..El primer anunclo· fueron unosgritosa 10 lejos. Todos volvimos la vista haciadonde sonaban. Tardaron 10 men.as cincomlnutos en apal'8cer po·1'el borde 'de Uliaeleva,cion,a medio k1l6me,tro .a.proximada-mente, ios primeros trineos tirado~porrenos. iMuchas docenas de trineos! Dos,tres y Q}asta cuatro renos para ca;da tri-neD, tirando de el en fllsa. Los conducianunos ihombreciillos morenos,' con rostros'1evemente mong6licos, los n6madas "ost- I

Y'akos", primitwos pastores de Jas estepassiberianas. u..a.l1iOvedadde este espectacu-10 fue como un' tonico para todos nos-

otros. Sa'limos de nuestl'a apatfa con gri-.tOSY 'risas.. Cerea. de mr. un ·prisionerobrincaba IYrepetia. incansable: "iQue tipos.

(Continuara.)

rI,

. ,I,,

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(Co~iinuaci6n.)

que tiPOS!" Ntrevas caras, sonidos nuevos,escenas nunca vistas. Las exclamaciones

tan extrafias de los osbyakos, Ill . opera-

cion de desenganchar a los renos, luego labusqueda POl' estes del pas t o, el .musso

oculto por Ja .gruesa capa de nleve ... todas

estas actdvidades absorbbian nuestra aten-

cion:' Todo ello constituia una gran nove-dad donde hablamos crefdo 'que seria im-'poslble unavartacton. El prtslonero que es-

taba detras doe 'rid; repetia-: "/,Que. pen-

I saran .nacer ahora 1'" .. Los astyakos tardaron roll(\' ',poco en

desenganohar it sus renos de .los trlneos de

madera, muy seneitlos, eargadcs de vartas

pte1es de marta clbelltna, Los hombrecillos

lleva ban' sus provisiones 'en unos saqultos ~se sentaron entre ncsctros junto a las

hosueras "'mientras bebtamos el cafe de la

manana y' nos reparttan Ia racton de pan.

Than vesttdoscon prendas de mucho abrt-go. Nos miraban eompasivamente con sus

oros pecjuenos 'y rasgadcs. Se. IE'Snotaoa

en SU mlrada que se pasaban laovida so-

portando e1 peor tlempo del mundo,Hab1e con uno de €'llos en ruso. Quizas

tuvrera unossesenta afios, pero es :rimy di-

fiCil calculer laedad de esto tipos men-

gales. Me dljo q u e en su campamento de

invterno 'habian, estado unos soldados del

ejel'cito ~ojo'y que les habfan 6bli.gado a;haccr este vtaje, 10que' Ies rastidtaba mu- .

oho, Habiari recorrido mas de ciento ctn-

cuenta -: kilometros par a e ncontrarnos.

Venian soldados con ellos.. dos en eada

trineo.:Me hablo de los' renos, diciendome

Que . no . podia uno rnontarlos camoa ca-balllos porque eran de Iomos rnuvdebtles:

pero en cambro, sonrnuv fuertes de patas

.y tenia,+! mtiY reststente la joroba que les

creee sabte 'la's patas delanteras, d~' ma-

ITera il.ue podlan saltar a pertiga desd·eel trineo vali<'lndQse del largo palo con

Que conducian y montar~,e en esa -gtba sin

que el .arumal tuviese que hacer ·.es.fuerzo

alguno. Me dijo como se 'llamaba', p'ero

es imposible 'que una memoria acostum~

tra,da a los .nombres 'occicientaJe's y I'USOS'

pueda l\etent~r \l,IU) ostyako.. :

Hable· con este 'hombre en etras oca-

'sio'ITes, pera. no twa gran cosa Que con-

tarme. D e costaba un gran esfuel'.ro nv.!n-

ta'l hllvanar unas ideas. Nos llamaba, co-

mo todos. los' ost,yakos, . '.'los desV'E-ntura-dos". Tradiciona1mente, 'desde la epoca de

los zares, er.llmOs los desVtenturados Pri-sioneros de un: regimen que €xplotaba. las

riquezas de Siberia vallendose de traba-jadores a quiene'S .no tenia que pag·a·r, los

presos· opoUticos que no encajaban en los

tingla.dos de las sucesivas tiranJas. para

ellos lit tirania za:rista y. la comunista eran10 miBmo,

. -Somos vuestras amigos-mj'! di~o una,vez--. Desde haDe mucrho tiem1)o, antes

que yo, y mi padre y el pa-dre de m 1 pa-

dre,' iJ:ubieramos exfstido, ·ml pueblo co-

looaba de noche pr<Wisiones ante nuestras

cabanas pa·ra los de;wenturados 'quj'! se'

habfan escapado (y no sabfan a dande ir.

Yo mismo he deiado esos alim-entos a Ill.

puerta de m! caibafiEi..hiwe ;va muchosanos.

-Esos hombres que eran como nosotros

-'loe pregunte-, l'han intentado siernpreescaparse ,de los rusosz

-Los hombres j6venes y f.uertes 'if que

odianla esclavltud, han iprocurado siem-

pre fugarse-me respcndio 'el ostvako->.

Suponga que tambien vosotros Intentareisescaparos. ,

La rusa. Ledi muchas vueltas a estapalabra en mi mente y comprendi Que ni

por un memento habia salida de ella des-

de el dia en qtre me sacaron -d e la Lub!Yan-ka. Sf, viejo O!;~yakc,pense,. todos los hom-

bres jovenes, 'y'fuertes y que, no quleren

morir ni ser esclavos, han de inten tar fu-

garse: Un' paso a' 'Ia izqulerda .. , 'Los rusos

tambien 10 'sablan. Pero solaments un

loco podia ali. .n}en.tar .esperanzas de fuga

mlentrasestuviese encuadrado en un con-

voy que avanzaba por el norte de Sib'eria

bajo e1 peor tiempo del mundo. Alin en e1caso de que no le mataran a uno=-y en

'las u.Jt!ma:s etBJPasdel Viaje,. cuando nues-tros ·guar.dianes se hadlaban demasiadopreoeupados por su propla conservacton

para ocuparsecorno antes de nosotros, ha-

bla ciertas posfbilidades de Iograrlo-i-solo

podfamoscaspirar. ala muerte si Jntsnta-

names vi·vir en este'pafs'en,invlerno. ago-

tados como estabarnos. Sinembargo,·eI

vIejo slberiano me animoa,a.iimentarml

esperanza ,al ..d&c_i.z:m.~_;m!£...slemiprehubopresos que en Siberia procuraron huff \!de

lo~ru~oz~'o,me ~ont6 como 'vi'V'fa su g;ente

.cazando animales ouy-as pleles constitutan

la 1Pl1ca.rlqueza para ellosv me ha·b16de

los renosva los que zcrmacan ..Dijo:

-Antes nos permltian cazar animalescon armas de fuego; 'pero alnora los soviets

00 nos d·ejan usarlas :y tenernos que casarcan trampas'. . .

lEI .dla que empfo1!dlmos Ia marcha de-

tras de· los· trine os hunG algunas risas POl'

las proteE.tas del ost(Vako, cu!yos cuatro

l"enos 118blan sMa. elegjdos. para tirar de

la co::ina de campafia, que no era .mas oue

un lhornHlo de'. acero pilra· fuego de lena

y. un horno comblnado can el. .El buen

hom'bre so!'tenia que sus anima'Ies no po-

drian 'con· tan compliea,da. carga. Los co-

cIneros ruso·s ·siR'Uleron·impertur:babl'es y.nowtros obsel"vabamas con simpatfa Jas

gesticulaciones del .siberlano, P'Ero seIitfa-

mas cLerta a;prension de que pudlera .tenerraz6n y se nos estropease la cocfua. Sin

embargo, t a d o fue perfectam-ente. NUils-

t.ras cadena's estaban ahara suJeta's a los

. trineos. Los camlones ~ quedaron oon-

de esta:ban y este ab-andono me intran-'

quiIrzo.· mies aquellos volullllnisos v.~hfcu-los, a 'pesar de ser un .sf.m1Jol0de nuestros

verdugos, nos daban una· se'll!;a;ci611de se-

gurldad .atra:vl\s de la nevada inmensldad.

No se que rue d·e ellos. Quizlis pudleran

r,egresar a 'suslluntiJos de partida 0 qllizasnecesital-an la ayUda de 1<>&tractores de

los koljoses,

La navedad de seguir a los ren<is mi>en-

t·ras eontempla,bamos sus cornamentas. ba-'

lanee'a,ndose al l'itmo de Ia maicha,. no

perdio su atra,ctivo en' todo el resta' del

vl.a.je. Nos dimas cuenta de Que tirando

imp'ercepti'blem:en~ de 1& cadena todos

juntos a medlda que anda.bamos, conse-

gclamcs disminulr Ill.veloc1d~d de la mar-

oha. Empleamos este truce en el cruoede un pequefio rio bordeado por unas pro-

nuncladas pendlentes. Los. renos oojaron .

la primern pendlente. con gran rapideahssta Ill .ortlla. Se produjo un desorden que

hacfa grltar a las soldados, dirlgiendosea los conduetores de los trineos, para que

conseneasen Ii i marcha mcderada, Los prl-

sloneros easi 'nos estabarnos divieztiendo

con la confuslon y" at sublr ,por la oriUa

del rio, combmamos nuestros esruerzos pa-ra eontrarrestar a los rsnos, quequerian'

trepar l'a,pidamente. Talxiamos casl unahora en rastableoer 'eI orden del. convov.PEroesto no nos ·hfzo·disminuir las pe~

nalidades de la maroha, ryel a·gotll.mien-

to produjo mas victimas, entre ellas al-gunos soldados, EstD'S tenian ahora que

soportar dl!flcu1tades ·tan grandes como

las nuestras. aunque seguian comlendo

mueho mejor que nosctros. Ademas, clareesta, tban rnueho mas abrlgados que nos-

otros, Pero, pri.vados ya' de sus camtones,

a nlnguno de enos=-excepto el comandan-te y .los. enrermos=-se 'les permitfa mon-·

tar en los trineos. A nosotros nos ayuda-

.ban las. cadenas, que nos arrastraban .. ])e-

ro ellos.-se vefan obUg-ados a abrlrse paso

individualmente a nuestros flancos, por la ., gruesa capa de nieve. Estfi ·esf 'ueW"ri. i5s ' IO ', ·· morrabamos los prisionilI'<is, excepto- los

que ibanen acbeaa abrlendo Ia ssnda. Para

muchos de estoaeoldados, procedentes ide

las Rilpublicas autonomas del sur, esta era

+su prlmsra experlenciade las Inclemenciasde .unInvierno septentrional, y padecfan

· n lli,C hn . '" , ~ • '

Las osby-a,kos; en cambio, 10 Itevahan

m~ ,bien. Lo unico nuevo para elloa era,

la ,tarea que les ·habra caido' endma.

Aunque nos compadeci'an, est!lJoan conven-

cidos d~ que la Unica manera en que pi)-

dian. aJYUdarnos era·eonducfendonos 10an-tes ' poii'ble .:·adonil.e' habfan:· dil hacernos

traba;jar' como escJa,vas, p<fr terr,enos .de

·todas clases, se las arreglaban p a r a . .ma.n-· tener una media de cuarenta kilometros

al dfa. Respecto.a lossoldados, mantenfan

·una. ind'ependencla'y despreocupacion que

008 'a'dm:ira'ba. La Unico qu.e ell'vtdiaban a.1 a tropa eran las latas ,vadas que, oIbede-

,Clendo ordenes, eran culdadoramente con-

servadas. Este interes POl' losobjetos me-

t~llcos demostraba el fondo primltlvo de'Ios ost\Yakos. Tenfan en gran a,bundancia

pieles y madera; en ca'm,~o, el·me·tal era

~a'ra ellas vanosfsimo POl' BU escasez. De

ruhl que, subreptlcfainente,· trocaran pieles

POl' latas con..Jos comneros. Una plel de

roartapor una latavaciaera un estupen-

do .trueque pOl' ambas partes y una. lec-

cion para·todos nosotros 'oohre Ill. relati-vidad de los valores. Nues-tros s.migos los

ostl1ak'os' nos dec!an que' esa.s latas ser.1an

apreciadas por= mUjeres 'Como elme-

jor de los rega~o.s, Pol1Que se:rw:lrian per-

fectament'e coino utensillos de cocina,La . 1'antastioa' caravana prasigui6 su

mardha 'durante mas de una semana. casi .

siempre ·por campo abler-to y sin aoercarse

~n ning:(m ca'SO a un Iugar' habitado. E!

trozo de cadena que a.rrS!strab:a POI'·la nle- .

ve a1 final d~ cada. secci6n, deale. clara-

. (qontin itc ir ilJ

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5/15/2018 La Increible Caminata - slidepdf.com

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I (continuaci6n:)

mente los hombres, que habian muerto por

el camino. A cada muerte, los prfslonerosque ocupacan los lugares posteriores al del

catdo, adetantaoan un puesto en Ia fila.

cambiados de argolla. Demanera que lasdiversas longitudes de cadena :desocupa-da. tndicabe, eneada. secci6n el numercde muertes que habia tenido; Los dos 111-tlmos de eada seccion, recogian ba:io el

axila un trozo de la cadena sobrante para

aliviar el esruerscde arrastrar la sobran-teoDe todos modes, los demas-c-exeeptuan-do 'a los viejO'S y enfermos=-, nos turna-camos para ocupar durante un rate eSDS

puestos. '.A 1 octavo 0 noveno dta despues de ha-

ber dejado los camiones, pentetramos en

. un g r a n : bosque que habiamos est-ado vlen-

do varies horas antes desdeuna eleva cion.

Era de enorme extension .. Nos a'legro po-del" carninar por entre .los arboles, .proto-gidos del' vlento. Srubmmos, ademas, que

este bosque representaba para nosotros

. un buen descanso nocturne. xotamos que,

los soldrudosdaban ciertas muestras de

contento y comprendimos que el bosquedebia de ser, uno de los hitos que anun-eia.ba'n et final del vlaje. Al amanecer em-

prendimos de nuevo la marcha y no nosdetuvimos en todo aquel brew dia. de in-

vrerno. AI· oscurecer, salimos a un clare, '

ablerto ar-tlficialmente en lao densidad del

bosque. V!mos luces y oimos unas voces.

!Este era nuestro punto de destino: elCampo de prisioneros mimero 3{}3, alnor-

te delrfo Lena ..Galenio que se hallaba en-

tre los tresclentos y cuatroclentos cin-cuenta kilOmetros a1 suroesto de loa'ca-pi-

tal del norte de Siberia. Yakutsk. No re-euerdo bien las eseenas de nuestra Ilega-gada aquella, noohe del 1. de' rebrero de1941. 6010 V'CO clara:menie c6mo aiVanza-

bamos cruda.secoi6n remolca.da 'POl" el tron-

co de renoS ycruzai>amos una enDrme puer-

ta. abierta en una fortisima empallzada de

bastos 'ma.deros. Tam'biEin me acuerdo de, , euando' me' soltaron de Ia. cadlm,a y de iaOO1'ios8sensacion' d e seg.ulida;:J-si tenemos

en cuenta rni coIidici6n d'e penada-, que

senti a1 encontrarme dentro del recinto,

y que nos repar.tieron una "sopa" de na-

bos. ,No semt) 01vida tampoco el espe.::tacu-

1 0 de la serie de !hoguera:s que daban calory Iuz a una'gran extensl6n de· terrenollano, una especle de campO para desfil!es

militares. Otro ,recuerdo; haber oido mi,nDmbre euando ,pasaron llsta. Senta.do

junto a Grechinen contra un manton de

vlgas, dharlaba un pOco, me adormllaba,vDlvla a desper. tarme, me poDia en piepara desentumecerme las piemas (can

10 eual se me cansa~an aun mas) yme vol-via a'sentar. A mas de mil seiscientos kil6-metros de Irkutsk: despues de una marcha

inverosimll, nos'encontra:bam:os en esteCampo. Aunque parezca. rara, me in'Vadia.IlUa sensacl6n cas! de fcllcidad. Estabamaravillado y no 'bas1i!j.ba. rill desastrosasltuacion fisica para contrar:restar esta Im-presion. ,Halbfa terminado e1 horribli! mar-tirio de dos meses ·de marclha,'enca'denado,

por las carreteras oubiertas de cleve. Eldia siguiente no podrfa traernos nada que

fU'C$f! peoI"'. Confieso ~que,fu~un poco !ri-

ABC 22/06/1957,;'::.L, tf,adl'id. 2(;(;.9.

',lr.:::1i i~Y!l\\2 c

volo al pensar todo esto, :pero se trataba

de .una reaccton Inevitable.Doloridos, horriblemente cansados y con

los parpados como de :plomo, nos desper- ,tamos al amanecer del dia siguiente POI'la ruerza de la costumbre, Algunos de rnlscompafreros estaban muy .enrermos i los

mas proximos a ellos tenlan que RYudarlos

a levantarse. Los osbyakos y los ranos ha-bfan desaparecido 'durante Ia nocne. seme presentaba el primer dia de mi vida ennn campo sovtetico de trabajos forsados;

vn

LA VID~ ENEL O.AJMP0303

Be d!sipo la neblina del arnanecer y, a Iafria y clara Iuz del dia, estuve observando'el lugar adonds me habian consign ado yeli el cual debia pasar veinticineo afios deml vida. El Campo 303. situado entre losquintentos y setsclentos kilometres alsur

del Clrculo Polar Artlco, era. un recintorectangular de .eerca de un' kllomrtro de

longitud y unos ,cuatroclentos metros deaneho, en eada esqulna tiel cual sa elevaba

"una terra d,evigilanciaconstrufda: s6lida-mente con madera y ocupada por soldadO€con ametralladoras. La pU:Erta principal,en.torno a la cual 50.hallabanlos cuarteles,lascocinas, losalmaeenesy las' oflctnasadmin)stratlvas,daba al oeste, enuno delos .Iados eortosdel reotanaulo,

Noss8-paraband'el bosque las habituaJes

datensas ds los campos de eoncentracton.Mirando ~de5dedentro, la primera barreraentre nosotros y Ia ·1ibertalera una valtad.e alambre esplnoso retorcrdo destras de

la cual hllJbia un foso de unos dos metrosch prcrundtdad. seco, ClzyO lado mas pr6-ximo anosotrostenia una incllnaci6n deunos treinta grades mientras que Ia pareddi!1 otro lado era' ·ver:tical ry terminaba alpie de la doble empaUzada. iE l exte,rior di!estos dos muros de ma.dsra, de una A.lt,urade unos cua,tro metros, se iha'llaba a Sl1

,vez protegido POI' mas alambradas.

/Los ocupantes del Campo '303, que nos,

encontramos a nuestra Uegada, eran en sunia.yoria finlandeses y nos recibieron con

ci'~rta desconfianza. Nosotrris eramos 4,500.Ellos un millar. Salleron de euatro grandes

cabanas al extremo e5te' del Campo. Estos

barracones de los ·prisioneros, construfdoscon madera, tenian ochenta metros de lon-

gitud POI' diez de anchura, 'Y Su forma.' seadaptaba a la del Campo. Sus puertas da-ban al oeste Y estB!ban :protegidas d,e l ,vien-to y la nleve par un estrEciloporChe cu-biertD y 'con abertura ihacia el sur. Com-prendtmos en seguida que no habia sitiopara nOsotros, los recien !leg-ados.

·Pero no pudiemos pensar much,o tiempo- ennuestra situaci6n porque se nos ordenaponern05 en fila para el reparto de 130co-mida. Pasamos unopor uno ante Ia ven-taIiHla. de la cocina, uno 'lie los edificios aIa. i2lCjuierQade Ia. puerta principal. ComO'siempre, ,nos dieron,cafe y ".2rsatz" y pan.Gada uno se 'oobla el > c a d ' e ·10antes posibley entregllJba, e1 reciptente en otra 'Venta~nilla . .A!bundaba el liquido caliente, p,roescaseaban los utensilios. Esta escasez du- 'r6 todo e1 t.iempo que ,perma.ned en elCamPo y, a1ectaba tambh§n £!, los enenCOR

de ml!-der9, dond<' nos l'(-tvf<an ]a 50pa:

{En medlo del terrene libra, colocaronlos soldados una plataforma de imadera,

portable. En tornoa ella, obedeeiendo lasordenes de un ,gr.upo de suboflciales, for-,maron un gran circulo. Los, prlsion sros

quedamos eneerrados en este clrculo. defrente a la plataforma, Acompafiados' por

una pequefia escolta armada,' dos 'coronelesrUSDSse. dirlgleron hasta el pi'e de la pla-taforma y .uno de BIlos subi6 a esta, Desdemi ·sitio-en prim-era fila-, pude observar-le bien. Era alto, delgado y de aire distin-guido, can el eabello canoso en las .slenes,un tfplco eiemplar del mHitar prof'esionald·:

cuatquierpais. Su bigotito gris estaba

perfeotarnente curdado y en su rostro del-gado dos profundas arrusas baja,ban des-

de.las comisuras de la bcca a su firme 'bar-billa, Inclinaba la cabeza Ievements hacia'deJante y me, impr",siono su aire de mdf-

ferencia, esa cualidad Indertntole de au-tortdad natural, sin esruerzo, quetod.c:>aquel que haya servido en un edercito na-

bra,encontradom los Jefes militares pro-fesfonales. Se haJlaba ante una masa nos-til, una multitud de seres humanos trata-dos como fieras sallVllIjesy cuso odio eon--tra ..odo 10 ruso se podia, respirar en el

ambiente. Era un odiocasi tangible .' Peroel coronet no parecia tener en cuenta nada

de esto, E'stBJba completamente tranqulloy no habla en el Iii un 5610 movanlentonervtoso, Por la masa de prlsioneros co-

rrto el rumor de 'W i comentarto. El coro-nel nos abarco primero con la mirada.frfamente. Se produio tin silancto aJbsoluto:

Rapl6 secamente, en un ruso clare:-'Soy el coronel UChakDv-dija-. Sqy- e!comandants de este Campo. HabEils vent-do a~ui a trabafaz- y espero de vosotrosun traoado intense y diseipllna. No os ha-blare de castigo ya que, probablernente,tcdos srubeis 10 que os' espera sl no DSpor-tals b}en. Lo primero de que debemos pre-ocupal'nos es, de propol'<'ionaros, aloja-

. miento. POl' tanto, vuestro primertraoojo

sE; ra la construct'ion deJ)anaoones. La,

lnaiYOr rapidez y (!ficacla en el trat>ajo,s~gnifimll'a ,para 'Vosotros disponer -ant,a ;;de un refugio. Depende de vosotros. En

todas las comunidades ha:ygente que es-

pEra. que los demas tr,ahajen por ellos.

Aquf no toleraremos ~se t-ruco y a t0dos

os c.onvieIl·e que nadie dej~ de cumplircon

su deber. Espero que Il() me creareis di-ficulta-des con vuestra, conducta.Estoydi1.'puesto a . escuohar vuestra s quej a.s y ha-

r e cuanto esee en ml poder pOl' ayudaros.

No d~sponemos de medicos, peracontamos

con buen'Os end'-ernreros especializados.

Aiquellos de vosotros queS€ encueniren

ahora en un estado fiske demasiado ma-

lo, seran acomodados en los barraconel;

ya construidos mientras el resto de vos-

otros .construye los nuevos. 'Eso eO'todo.

iDescendio de Is . pIa.taforma. Inmediata-

mente, e1 otro coronel ocup6,su IUgar. :Masquesublr, salt6 con preclpitaci6n como '51

fuera a 'cum'pUr 'un deber de extremada

urgen'Cia. En c(mtraste con el anterior, e5-

te otro coronel era in.q;uieto, nervloso y senotaba que no estaba acostl1mbrado 81 ejer-

CiciOdel podeT. Lo p.xhlbla como una ban-

dera. Tha mejor vestido que UcMlcov,rJl~vaba .un~ guer.n~rfiJ de piel y ootflS ·d~

(Continuora,j

II

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(Continuaci6n.)

cuero fino, reluelenses. lll1:a 10 baslianteJoven para. haber stdo hUo de UeMkov.!No reeuerdo su nombre, Era el comi-

sarto politico s Ie llamabamos el Pol!truk,titulo abreviado P Ol' e l que eran eonocl-dos estes mllitares politiCOS. B e pasO unmlnato mil'andonos, sonrl'enclo levemsnte,seguro de sf mlsmo y rebosandc arrogan-cia, Los prfsioneros se removieron males·to s y luego quedaron de nU iWO Inmovilee.Nos hal)16 como u n s Rl \J ie nto veterano,

can rudeza y de un modo Insultanlie:, . , . , . .contemplaros a voso t ros mlsmos-dljoencogiendose de hombr~s y ponlendose en

j-arras-. Parecels un rebafto de anrmeles.IContem:plaros a vo,sotros mlsmos! QulzAsos creais gente e1vll1zada capaz de gober-nar el mundo. lNo"os dais euenta de laseatuptdeees que os han metldo en la ca-beza? '!Enva.lentona~o POI' ha:l1arse como dlsue1-

to en la o masa anonlma, uno de nosotrosBe atrevi6 a responder. SU vos i'0m-pI6 00-mo tina bomba Ia pausa que el Poll truk 5'!l .

hs.,bia permitldo para producir mayor etfe~-to: -~C6mo vsmos a parecer otta cosa?No nos perm1ten ustedes que nos arette-mOB , c a re e em o s de jab6n y de ropa- hmpta.lEI Polltrl1k se veMo en dlrecclon a :Ie.

vos: -S1a1gulen me vuelve a tnterrumplr_.grlt6-, hare que. essuprlman a todos'as raciones de alllIientos.Nii.die voW16 a declr nl una palabl'e..

-CUando 'h1I\yAis pasado aqui alguntlemp()-/proslifuio re I Polltru'k-', y bajo Iaguia del Camara<cla. Stalln, hal'en1os devosotros eludadanos lltiJes. Les que no tra-ba jen , no eomeraa. M1 deber eonslste ' enpe l1 f ecc iona , ros . Aquf, el que no tra ,baJa, nocome. Pero no todo ha de ser ,traba,Jo.Seguit-eis curses cultur,a>lcs para corregirIVuestre modo d.e pensar. I>i8ponemos- deuna. e xce le nt e b lb llo te ca que- podr6ia utlli-zar despues d:e la s horas de ttabajo.iDeSJ)ues de segu'ir ' dic1ende casas POl' el

estllo, Be 1I1terrumplo de pron.to y, del>pUesde une. ,brevepausa., aUO': -~Mguna pre.i l fUnta? -un prl,sienere p.il'e.i:'llIn<bo:-tCuAndO' lIega & q U i la. prlmavera?- ElPolitl'Uk r ep i l ea : -iNo ha,g~la preguntas!mMclleB-4lon 10.cual termin6 ]a reunion.!Losprlmel'os elias de trabaje, en la cons-

trucel6n de los nu:eves ba.rracones. [ullrOD.oa6tl'COS. Todos esta;bamos 'rdlSlPUe!ltosa.trabMar en firme,pere resu1taba. dl i f ic1U-slmo seftalarle a cada uno e) traba~o parae l que se haJ1a.ba mejor dotadO'. .A lO s treselias se fUe reallilando POl' S f sola eata se-1ecci6n. Hia'bla.entre nosotros arqultectosy aplI.r.eja,dores que pudieron haeer los pIa-nos y labrlfdor~s para abr1r 1011 clmlentospreparande Doquetes donde Irian los prin-<:lpa1espOStes de la estructura. Luego, loscarp1nteros 'Y albafilles hicleron 10 que lesc orre sp on di a. ;N i wn ero so B equipos de lefta-o o r e s y ea.rpm~ros saJ:ian todas las m a-fi:a>nasa las oOhn al bosque, bien 'V1.g11ados·POl' fuerti:! escolta, para cortar tron,cos de

arboles y dar1es ]a forma l'eQ11er!da.Yome uni a los leftadores. Un toque de

!dIana nos doespertaba a. las cinco de lamafiana. I:taJbfa una proceslOn d . e hciin-br~s medlo' d()rmlUos. hacia las letnnas,unas zanojas abJertas por Is. paTte -interior

I

\ .

d.e las aillmbradas dl8tw de dond~ ea-tabamos const~11'do el barracen. LuegO'nos poniamos en fUa para el deaa'Y1lno.Los &oldados saoClllbanas her ra in l en tas delalmacen. La,s deJaban a 1a lzQulerdade la puelia, las controlaban meticulosa-mente y con el m1smo cUldado al final dela Iornada. Con, forme ibamos aallendo potla pu erta princIpal, un 1 1&001 '0ompr oba -ba nuestros nombres en sus ·llstas.Los a.rboles que domlnaban en el Inmen-

so bosque eran los pinos, pero tamblen ha-bla, en abundancla, absdutes y terebintos.Trabaje con un grupo de "derribadores".

,Nues t r a tarea oonslstla. en aserrar, mane -lando entre dos una pesada s ie r r a . e- 1 tron-co d'e ca;cla a . 11bo1 .De v ez en auando varia-ba de ocupacton aba·tlendo can un hachalas ramas de los arboles. Desde los diasen que stendo un ch1quUlo, v iv ia e n nue s-t ra fln ca de Flnsk, sa.bia mane ja r el ha.chay srempre me ha divertido eete ej.erclcio.Nota'ba Q.uerecobraba fuerzas d1 a a dia.Me a,bsorbia la actlvldad y el bulllel0 denuestro tra:bajo. Me enorgulleeiapoder ut!:..l12ar de nuev0.m1s11 l ! 1n( j s . A II ! . unade I s . .tarde, regr.esa.baznes a~ C'am.po, l1eva,ndo~tes a los constructcres lam,adera queba-bIamol! as!!rrado.Nos da.ban unarael6tide ·sopa a. mediedia Y voliviames a,traba-jaral bo-~ue 'hastaqueoscurecia.La hl~lera. de barracones Ilumoenta'ba de 10ng1tudeada dfll..

Quince dlas despu~s de nuestra lleg-adaestabanvtermmados los barracones.P'or-maban dos mas ecnunavcadte" en rned10de eada dlez ca,bafu.s. A m1 me aslgnaronun a litera en una de 1115sets Ultimas, enlas que quedaban a.lln ciertos detalles portermlnar y recuerdo 1a mara'V1l1esa sema-Cion de calor y comodldad, ii~ pretecci6n,que senti 1&primel'a n.oc'he en que dejede dorlnir a la Intempierle y m e instsJe enm1 nuevo ' ' (hogar ' ' . Oha deliciosamente apino ri!ei~n. corta.'do, A 10 lallgO de cadapared de madera ha.bia c1ncuenta llterastdples heOhas slmplemente de tillblas sos-t en idas por caatro pO&tles. 'I'res estutu dehierro Espaciadas a 1 0 latgo de 1110ablta-ci6n y a:Umentadas por astli1las. 10 . calen-taban e ilUminaban de nodhe. Todos 104dla.s traismos del bosque u n a : 'bw!na. can-

ttda,d de ast111as. iS lgul enuo el ejramplo delos que astaban ya en e1 Ca'mpa a nuestralleg8lda. lleva.bamos todo e1mU9go que jJO-

diamos meter e.n nuestra& ".tUlfalkas" para.~lCtenderlosebre las d'1ll'astablll4 de nues-tras literas. Las e5tufas no tenian C'hlme-nea. El hurno salis POl ' un t\llbo corta y a s -ce11'dla.al tedho. 'E ! O'lor del hamo de lamadera se mezclaba. con el a r oma . del pi-no.Ya:clendo en m1 l l tera. , que era la de arri-ba de todo tr e las , t res, cruza,ba las manosdetr8.s del cueUo y escudha,ba 10 que hs.-bl&ban m1s com pa fie ro s. .

\Acost~do d e lade en una de laa llterassuperiores proximal! a la mia, Be 'hsJ1labaun ham1;)re di e unos cincuenta a:f ios. Char-1a:II1Ossobre la. coMtrucCion de las cabs-f\u alabando a Ips que 1 a ha.bian dlrl.g:Mo y llega.bamos, en nuestro sentldo del a . ju5h~oia . hasta e10giar a lo s ruses POl'sus eX 'oo1en te s e9 tUfU . Luego hablamos sa-bri! nuestras Vldas l'e3P'~ctiva5. Me cti:loque

, h a; bf ,a s ld o maestro d e e s eu e l a en :B res t -Llto.vsk y sarsentc de. Is reserve en elE.!ercito palaeo. Al !nvadir los roos nues-tro pa,fs, este hombre per,dio sucoiocacl6npcrque Be la dleron a un comunista queh8Jbla. a slsttdo a uno de esos curs!Uos In-tenslvos-c-de qUince dills-de pedagog1asovlet1ca. Las madres segu1an llevandolesus nifios huta QUea ligiuLep.it! fIueJ6 decsto y 10 detlWler<ln. DeSpoos de un brevei l1 re rro ga to rlo , 1 0 c on de na ro n a . diez at'l.08.La ~ompadeci, auneue a fa V 'eZ pensa.ba:"Tien.es a ue rt e, a m ig o,l dl ez atlos!" Con-tinuaba contandome eosas cuando moe dor-

mi profunda,mente . 'Era mi primer suetlenorma1 'desdoe ha(lia muclhos meses.'I'uvlmos que pallar muClhas boras en,

nuestras cabaftas. Despues de laB .!lela dela tarde, todcs los prisleneros tlenlamOllque estar ya eneerrados en ellas, Sa nospe rmH l a una cler ta Jlbertad d'e mOlVim l en -tos 'den,bro de losbarracones Y en torno a' , ' , ! l o s , slempre QUll no !orm1i~Pl08 l Il"UP'OSnumerosos, Atnbas f ilas de barraeonss lit!

hallaban cons tan temenbe v1giIa:das desdelas t oms d!alextreme este del rectnto, pe-ro inl<antras los prtsioneros cbedectesemosla s severas ortlenes de mantenernos ale-

Jados d oe l as aIambradas. los .guar.d.las nointe'llVlenian.En las .cs.bafia.s no sabla.mos· q u e Ihaeer .

Nada· habia para leer nl luz para elle. La\li lies actlV'lde,dpermltlda des.pues de las

sets de la tarde era a-cudir a las coIliferen-e ta s del Polltrilk los mtercol es por la no-~ 0 Ir a 1 & bJ.bl loteea, la otra empl"esaco1lltro~ada.por er Palltruk. iEmpeee a pen-sar qUt3 hOjoear los HbroS no me ~ro-tnet~a. a nada Y me euudarfa a romper larnonotonfa. de t an tas horas de Ina'Ct!vidsii.D e ja nd om e lle v.a .r pot' un Impulso, sollciteque me permltleran Ir a la bibl1ollece.unancc<h2. En se-gulda me 1 0 COl'leedl'!!ron.L9. blbl1oteoa ocupaba la nl1tad de uno

de lOll edltlcios admlnlstratlvo! a Ie . 1z-qUierda. de 1 & e.ntrada principal y a unosv-eint.e metros de la a~li.ttllbrada del [adO'

sur (unod<e los la,rKos d<eolrectangulo).Unos dosc1entoslibros llena·ban las es-'tanterias de madera sin plnta,~ a 10 largode uno de lo.s lados de ia h&>bltaclon. FWsa-oandolos a1 blum tun-,tun y volviendolos

1\ deJar. IillJbla.Vlarla,sobras de Ma(Y'9,kovBk1.Unos ciento clncuenta libr08 era·n todo!, . ;' l losde hi. serie "<R.1 lsskl l iYaAzbuka", ma-nualas i1ustrados para. niftos. Esa noche, yotras pas~ a}gUn tlem.po leeyn:do 10s'',Az-bun". Eran l1bros en Vt!rso.exaltanoo' lesm-er1to! ds lO B aeroplanos y P1lotos sovie-' tl co s, 1 0 3 t alW ue s- sovieticos Y sus conduc-.tores, el 1llJ~reit-oRojo, los heroes Bovie-tleo! como Verochilov, los pelit lcos de-l re-glmen......oo.bI'&todO'. claro esta. Lenin ySua,JIn-los conductores SO'Vi.etlcosde trac-tores y las traibaJadores de los "koljoses",y tode's la s 11'101'19.5e la U. R. S. S.

:Pero a1 orgaUo d'S Ill. ·b lb llo te ca e ra ' la''H1storfa. del P·artido Cmnunlsta Bdlohe-vlque", en 'dos vol1ltnenes bien 8ncuadt!1'~na;d0.9y una, ~dlci6n cotnenta'4a de lSiCOIlS-tl1luel6n rusa. p.a.seallWnas horas oieandoestos l'1br.()scbnintert's. Merecfa.,}a pena.pu~ Hegue' a. 1 a conclusion <ie' ,que nohabfa. E : o l =nor pe.:1gro de qU'8. ni slqulera

<Continuarll.i

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(Continuaci6n.)

en veinticua tro afios, llegara a corwertir-me al comunismo de RUsia ni de otro paisa:lguno., '

, Un eheco .IDUy entretenido y cinico

ccunaba una .litera pr6)dma a . Ill>mia, F u e~i'lquien me convencio para que asistiera.a una: de las conrerenctas nocturnas' delPolltrUJk, obligatoria.s pa,ra todos los sol-dados que, no esta!ban de servtcio. Eran,como Y'8 . he d '. L -c .h o ,l o s m i e rco le s . El Poli-,tl 'uk no oc1ll1t6].a;·se"tisfacci6n que le pro-

\, ducia vernos all!! e nncluso nos d'!!dic6 11.1-gunas frases antes de empezar sa clase

militar. Hab16 de la potencia. milita.r rusa,del lugar preponderante que ccupaba en

Ii el 'mundo (.conapa.rtes sobre III.decaden-.cia del perwerso sistema capitausta). Lossoldados Ie hacian pre'guntas y el las con-testaba sigUiendo ·lI>l·piede III.letra el dog-ma marxtstay con citadas de discursos. de:Lenin 'S' sta,!i.n. AI terminer. sonreia muy ,contento. No habrta sonreldo unos minu-tos despues si hubi'era pl"esenciado la pa-rodta que represento en honor suyo elc'heco ante un publico de prtsioneros ennuestro barracon, Uni mts carcafadas a .las de mis' comoafreros. 'El ehecoel'a unactor nato, con. un estupendo domlmo dela mlrnfca,' 'Iiermin6 rogando asu publicoque le hrctsra ,'las' preguntas que quisiera,y concestandolas con una, carleatura. delos preceptos del marxismo, el lenlnismo

'W 61 estalinismo, T()dos los prtsloneros ,denuestro, grupO estaban de acuerdo en quehablasnos 'heohomuy bien astsnendoa Iaclase eomunista para Iuego hacerles pasartan buen rato,Unas pocas neches despues tuvlmos una,

distrac6i6n de otro genero. En nuestra ca-bafia se ha!lla:ba uno de los muohos sacer-.dotes prlsioneros '('la mayona de ellos erancat6licos,pero tamb:teh los habfa ortodo-xos, griegos y ·ruOOs).Estabamos charlandoY'a avanzBlda la. noche cua<ndo nuestro sa-cel'dote cit6li~ ~corrt6 lentam'ente la ,!,s~tancia pregtin\i{mdonos sia a1gu:oo Ie mo-lestaba que celebrase un breve serv:icio re-l igioso. Algunos ,no respondleron, pero na-die tufo nada; que ob.1etar. El sacerdote sesitu6 en el e<;:htrode ,la: amplla habitaci6nv celebr6 u n sencilllO senviclo religioso. Los

latines soru;ban ex:tra~amente en aque!!. lugar. lL e est"uve observando a la debH luzde las estufas. y pense en 10 extrano queresultdJba,vet a un sacBr.dote eat61ico conuna la.:!'g.abal'>banegra. Luego rew pidien-dole iDiosnuestra liberaci6n. Entoneesdescendi de mt litera y'm'!! arrodille. Mu-dhos otros hicleron ao m1smo. Tenlendoen su niruno un cr.ucinjo del abatiul pIa,.tea-do, nos bendljO.i'Era. de una extrema:da.delg.aFdez,all:to y un POCO eIl!col'lVado.·Unosmechones 1:ItancOs veteaban. su negro ea"bello, aunque probaib1emente no t~niairui.s!Ie trein:ta y cinco mos. Nunes. ha>bla·badesf mlsmo.' Be l l a .m1i ;ba G-o I 'YCZ; 1 0 Clue enPO~B.CO &i;g;n.dlfica "a.ma!Vgura". N.adie h,!'podido ll~ar u n . nombr,e qu.e sentara 'peora . s u condici6n. Nuestro ,.sa;cerdote e r a . la ..esperama perronlflcada.

iA fines delprlmer mes, el Campo habra.

a-dqujrl-do un ritmo de vida dlscipllnaqoy tenfamos ,Ia im'Presi6n gellJeral de que,

sE~£Lp1We~)q1Je2~1.J-~l&~h~*.X~!&tW - P J l, : i' f: -. ': ;c.) I~:r~H:': i,E.C s.L, "l'laC;Yid, (',,;<'-d:;; p~-,:-r-,it'i,}a

' -;:Jalc; '-Jie.:_· _ir :, r" .~t (wyja.lij ;;;;j r.l-('V~'J.

'eSte remoto rinc6n del mundo, atslado POl'Ia rdistaneia y Is. temperatura glacial. lascosas podian. naber ide mucho peor. Todoslos trabadadores pristoneros recibien . 400

grarnos de pan ail dia y los que estacan 'demaslado enrermos para -tra.bajar, z e ogl'a-mos. Nos daban el pan pOr la mariana,COn el cafe. Una' parte nos la comiamosentonces, otra la guardabamos para la so-Pa del, mediodia y ei resto para III.behlda

caUente que repartian a~finail de la Ior-nada de trabajo. AlgtID domingo nos da-ban pescado seco, 'pero el pail seguia sien-

do nuestro anmento f.undamental, el sos-ten easi unlco de nuestras vldas. En me-nor gracto,tambien tenia imiportancla ,eltaoaco. Una vez a- 1a semana distri-bufanuna buena racion.delbasto "korljki" acorn-pafiado POl' una 'hoja de un periodtco muy

ViejO como pg,pel 'de, fumar; El,pan" eltabaco eran' .los tmicos generos de valoren el Campo y a veees servian de mone-.da para. pagar' servteios.. .En el prim-er mes continuo elevado elnive l de mortatldad. ,J;rullb.(}s de los hom-bres que sobrevtvieron a III..marcha de Iamuerte Ilagaron a1iPampo demasiado a"gO-'tados para poder.r~po:i: terse.,Enin rumas,h'llmana:s de cu-erj:)(}Ymentil.Les cedteronunas.hteras en la.s,~abafi.as ya construfdas,cuando llegaron.y:se pasaron muehos dias

en ellas apagandos e Ientarnenta. Grupos

voauntarios los 'e:n:terraron, vfgiladosporuna escolta armada, en un clare del bos-que a medio ki16m"tro>de1 :Campo.!Forme parte dos veees de estas partfdas

d-eenterradores v pude deseubrir que nues-tro jefJe (es declr, e-l coronel UooakOlV)"disponfa de' UIl!.av16n particular. Pasamos

POl' un aer6dromo elemental abl-erto ene1 bosque. E1 aVi6n, prOtegt.dopor unciarbnles,esta,bllJ cubierlo por lonas im~'Permeahl-es. Era pequefio;' del tipo TigerMoth. Uno de los guardias nos dijo queUcllaiko.v·lo pi1otalbaeI. mismo para aslstira las conf-er-enclasentre los jefes del distritomll:itar de y a k r u . t < . . k .

L;osrusoo in:tenvenian: mu~"poco en nuoes-. tras Vida'Sfuera de las horas· de tra'bajo.Muy pocas' veres inspeccion~ban' las ca-!::afiasy 51 10, ·ha:cian era POl'puro formu-

!islno. LO'Sprisioneros que trabajaban en'e1 bosque hic!eron nU'evas' amistades y

l l'cabaron, solicitanqo que les dejaran tras-la!darse a otros ba'l'racones para estar jun-to a su'S amtgoo. Las autoridades n o pu-sieJ:on' In~nlVeniente y nos hicieron' saber. flU,? tales trasla-dos poruan arreglarne en-tre nosotros sin su in!benv:enci6n.A la ma-yorfa de los prfsioneros se les· podia eon-'Veneer para que ca,IIi,bl!iran de barrac6n'6610con darlesun, poCo'de tabaco, de mo-'do que nubo un constante trasiego en lasprimeras ' sema;nas mientras re iban fra-gUando las amistades. POl' mi parte,' noeonocia de un: modo· espeelwl a ningunode mis compafieros, a 'l lnque a veces clhar-laba ~n Gr\:c' lrlirien,mi companero duran-te 1a mardha. A'p .ar l ; e de eI . s610 trata.bade manera, mas ~oIPtlnuaai { ;b.eCo cuyoill:genio y CU(j"ll. a>le'~a a:ctmir3iba, ~ro

nun.ca lleg6 a' 001" un amigo intimo. Los!Varlos grupos na1iiona1es tenrlian a viv1rjuntos, y los poia<:os, por ejemplo, selia·mas

coznenzar el d&acon ese himno tradiciona:lde alabama: "Cuana,o aparece la luz, de lamanana". A los rusos no re s gustaba quecantasemos, pero nunca nos 10 Impidteron,\Acostumbrll>bayO apasarme vanashoras

tumbado eli ,nii litera. en las largas ·t~d.esde Invierno, viendo suoir ei !humo .ae. Iasesturas :y .pensando en mis COl;aS. Siempre,habla rumor tie conversactcnes entre miseompafieros 0 entre ellos 'Y los vtsitantes

que venian de otras cabanas. Me !l1l;gaban,pambl'asy rrases Inconexas, riombres vd e

lugares, de prisioneros, de', regimientos ...

"Y ella ;me dijo: "quertdo, todo acaoaramuy pronto. 'lie estare esperandov.,; Unosha:b:aban del guardia que no se~art6 atiempo cuando ca:j{j el .arbol POl" el ladoeontrario 3;1 que seesperaoa ... "Al :po.bre!htjo de tal, no de daran nada. POI' !haberseroto III.pierna en acto deserwielc' •.. otrosse referian a uno que se 'ihabfa partido, una costflla. "La han puesto a limpi-ar loscomedores de ·105onciates, Ha salido ga-nando 'porque saca -todoel taoaco quequlere y.,a;penas tiene trabado" ... Todo ellofiota~!l. ,alrededor dem.i, strviendo de am-biente amts pensamientos. El olora pino,.til movtmiento y el calor en la habitaei6n.e1 ruido de las estufas euando les abrian {a.

.tapa para. atizar el fuego ... Y durante todo.este ttempo mi mente reproduota una tv otravea las .lmii;genes del .oampo 300., el coro-

net Uchako:v, el Politrllk,' los soldados("cuantos de- ellos morianvr , ry sabre todo,losihombres que vivian coIllmigo: los j6-venes como yo, reststentes.v capaces de re-ponerse en poco tiempc: los hombres decuarenta .anos que, con gran sorpresa miac P o I ' entonces) , se movtan lentamente, pe-1'0 con. gl'andes rerervas -de valor Y' fuerza,entre 105 de c1ncuenta YSesenta afios, queluchaban por permanecer ' j6venes: POl'tra-ba,jary lV'i-vir,os hombres 'QUeihab·jan vi-;vido'contocta clase<lecomodidades 'Y quea:llora, .con gran -admiract6n mia;. ,desple-gaban una increI'ble ca.pacidad para en- .freritarse ;valiehtemente con un genero devida. dia:mekalmente opuesto. a1 'que iha-bian 'Uevado. Normalmente, estaban en laedadde entretener a 'sus nietecitos. Enc:;tmbl0, se pasaban los dlas levantandotrancos de arboles junto a compafieros- a,

los cuales' dablaban - I I I . enad. H J l . y un !he~rOlsmo' que floreee en l-a.peor elase -de, ad-versidad 'Y' que earece de la espectaculari~dad deheroismo de l[}s guer'reros. Estosihombres eran de, esos a'dmirables' heroesan6nimos. , ' ,. .M1 -men t e revolvia elios pensamientos 'Y

.esas J.lD.a,genes.Las'impresiones se me acu-'mulaban 'Y luego (siempre sucedia 10 'mis~mo), ·acababa ·a.ferrandome a·m). problemapersonal hasta que me dormia en m'! leohode madera cublerta de musgo. iEl pensa-mientO mas inslstente, martElleante. erasi-eIDpre:"'VeinticlnOOan[}s en este sitio".Muohos de estos hombres que conoeia mo-rlrian durante ese tiempo. Llegariah otr05nuevas. Yo iria en~eciendo,.Veinticlncoa.LOS. Veinticincoaii05. Tarda.rfa, ' en salirtanto como ha,bia ~a 'Vi!'fido. lPero acaso

habia' 1I>}g11n medio de saJ!rimtes? SUpo-niendo que lograse cruzar'la ·alambpada.el!oso 'Y l aS. fornlida,bles empalizadas de

y ci'ili';':idCQlltinu~.Ii.)_':1 ,j,; ",;."

'lIe F:"'.'.:';:~~;.l. a J i ' ; : : ! . - " . . : . , , ; : ; ' :_ , : : iL" . ' - ,

l"es~: ;_;.,~c:1. ' ,"-; d-2.L ',is,", dl/··_CS

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(Continuacion.)

madera ... Blen; pero c;ad6nde me d1r1giria? en la raclon diana de pan mereela- la ·pe-Le daba vueltas a 10 que !h!abfa'd!cho el na de probar,osfJya:k~.·Mue:hos .hall-ian inwntado esca- !E l taller de los esquts se hallaba en. Is:par. Ahara .bien, loonsigui6 aIguno salir otramitad del edlflclo ocupado por Ia bi-de Siberia? Nadie pOtila·esperar Ia ·in:ve- blloteca. Med!a docena de los voluntariosrosimll Ibuena suerte .d<e veneer POl' si solo "ran verdaderos tecrucos en aquelasunto~s aplastantes dl!flci,lItades de este pais y, de.comun acuerdo, los dejamos dlngIi- yde distancias in'flnitas.Vna vezplaneada los demas actuamos d-a arudantes suyos,una Cug-a,G'en q6nd·e·haillar hombres re- unos.spara trabaja:r en el proeeso mate-. .sueltes a acompanarlo a uno en el Inten- ria'!' de Ia rabrtcacton y otros para derri->.o? iMe lhlce estas pnilUltll-s :y .otras mu- bar abedules en el bosque, aserrarta rna-chas, Y no ·ha[!e ·reSiPuesta. . dera nl tamafio requertdo Y cuidar de que

lUna tarde' encontre a Grecbinen· cuan- slsmprs ihubi'era en el taller una buena

do me ddrlgiaa.ias letrmss. "GrecJ:iin~n". provislon de material. El necno de haber-le.dUe, "st alg11india idearaun plan de me yo fabr!ea:do una vez un par de esquisfuga. i,lVendria.usted: conmigo? _Arrug6 13. me va'li6 un puesto dentro deLta:llel'. Metrente ... ~!Lodice en ~rlo.?"· ACirmecoli Ia -destmarcn al .equipo que les daba forma.caceza. Grechinen se paso los dedos Ienta- Ya aquel primer dia, antes de que huble-mente por la barba. "Rawiez", me respondlo ramcs podldo presantar ntngun eS'Qufter-por fin "10 pensare esta ncehe ymafi.ana .Ia minado, nos dieron una racion de pan dedare la contestacion", 500 grarnos.IPrudente Greclhirien!·r.a vial dia 51- 'AI segundo dfa. teniamos acaoado Ios

gUlente .en el amplto espacio que quedaba pnmeros dosjrares. Los cclocaron en se-libra entre las dos !'lIas'de barracones., gulda,:pur turno, apoyados POl' los extre-Vlno a ml encuentro. "No", me ,dUo.. "Simos ,.andos maderos IS ' con.la parte can-hublera alguna proba:bilidad de buen exito, .tralal aire ty elpropio Urchakov los probe>!ria can usted, pero e.stoy convencido de sublendose .encimahasta que,wearon ,elque Ianie'V'e \Y>el.frIo nos matarian antes suelo haciendoles adoptar la forma de ·unade que no nos cazasen." Yo .me encogi 'de tr. LUEio. 5e .fos llevaron unossoldadospa-.hombres. '''No :quiero morlr Joven", afia- ra probarlos en una earrera por el bos-,die>Gredhinen.. .q~e .•.AIilbos paresresultaron'puenos:,Al

Le 'hiee la mlsma pregunta al checo,. . final de,Ia semana,b"chAkov entre ehe1

Al 'prlncipio crey6' que estaba gastando tM.lerY·110Sanuncto que Ias muestras en-una .broma. Lue:go Be sent6 en el borde viadas aYakuark 'habian sldoaoeptadasde su litera :y me hizo. sefias de que me y,ccmlderada's como.'dignas •del tipo' quesentara dunto a el. ,Me puso la mana en empleaba e1 E.h§rcftoRaja. En vista de 10el hombro y murmurer "Sf, Ie acornpafia- cual, ..nuestra racion de pan serta aumen-I'ia, perc 10 que usted neceslta son varies tada a un kilo' diartc-s-mas del doble dehombres vallentes yv.lgorosos. M.I estorna- hi I·Ro16nnormal-,y nos darian mas tatia-go i!sta heeho po1IVoy no. tardara dema- co. Quince dias despues, produeimos' yasiado en Iriatarme. Sile acompafio. morln~ l'o·~pares de esqufs dla.rlos.m.uoho antesy el tlempo .que este junto L o s demas. trabajadores veian can ma-a usted, sere uil estorbo". Despues de estas los ojos riuestros prlvileglos. Mepregun-. taron mas de una vezc6mo· podia. fabri-pala;bras, a las cq·ueno respond!, pel·mane-· Car e.;;.quiespara ·elEJ-ercltoSovietlco. percelmos am senta-dos un buen rata. Luego .,eI Chaco ","okl6 a hablar~ "SI encuentra nunca entre en eliscw;16ncan nadle .sobreusted Ia oportunidad. larguese, muohacho. este asunta. Yo me .habja !hecho la id~Escoja ·bien flUS 'hombres y no 'Vacile.Les sigulente; "Cualquler cosa 'Q1l,e· haga' endeseare a ustedesbuena suerte." este C'a:mpo, puesto que nos t!~men aqui

para tra·ba;ja.r. ben-eflciara 11 . los rusos;Trlliba·jwbamosmucho los seis m a s ~ el de manel'S :que ]0 mejor es dedica'I'se a la:

'septimo era, o m cambio, ·un dia descansa-, tal'eaque results. mas agradable. Y no 5610do. iEldtjmingo era el dia en que el co- ,2S un trabajo inwl'esante sIno bIen remu-

r mandante delCamW-eI .coronel VCha- nerado con allmenros y tabJico." Eso esf i· kov-. ·ha,blaba a -los prision-eros. Nos ex-· 10que 'Yomoedecia. lEn aquel extremo del" pllcaba la tarea ,qUflnos espers . .ba para Ii i mundo. el panera.~ toda nuestra. v:lda, asil semana slgulente, nos amonoestaba por al- que 'habia sldo sorprendente (juenuestro .

I

I !rlUlas Infra'cclones de las normas del Cam- fantastieo aumento-Iun kHo al dia!-, nopo y a:nunclaba las medldas que podia:n hublera despertadoeilv:ldias. R~aIe ibuena.

r. afectarnos. Tamblen nos decia. Que podla- pal·tede mi ta.baoo y elimuchopan Ii10);t mos preguntarle 10 quedeseaxamos 0 su- enfermos y 10 mlsmo hioleron varios .de

gerir a'lguna idea 11tH.Llevabamos· alIi un mis com:paiieros del t1l!1lerde ee-quies.Peromes cuando UchAkov pldi6 voilUltarlos pa- el descontenWde los·demas' persistia.l"a un nuevo trabajo. iNecesitaba genre que lEg muy curiosa que [ueran ·prec!samen-suplera haecr esquis. DUo: "A. los volun.. te 'los defensores de la Sociedad sin clasestarios se Joesaumentarii inmeeliatamenre los .que lograsen. al poco tiempo de nues-en clen gramos Ii i raci6n d!arla de pan e tra estancIa· aJ1H . formal' dos clases de trli-

l· lnclus~ se les dara mas, sf los eSQtiis bajadores \Yqile se apresunisen a estable':1" constrWdos resultan de excelente cal1dad...· ceruna dLferencla tan senalada remune-r Se presentaron sesenta prisionerosvolun- rando muaho ID..fu! a ·105 prlv:lleglados.l tarlos,!yo entr:e elIas. En cieIta ocasl6n . ICon el.trabajo en el taller, bien caldea-.

r!habia·hecho un par de esq.uis.No es que dQ..-lya que Jas estutas 'ha'bian de estarpretendl!lra ser un especlallstaen su cons- cOntinuam.ente al maximo para banal' detrucci6n, ·peroun aum.ento de clen Eramos iVaporla madera de los esquies- y con _<

~ C SEVILLA (Sevilla) ~ 27/06/1957, Pagina 39 . , . J,J.U

- . c) f.':.r,R_IC! !,.s': s. . : : ;~~r;9. ':,j,,-,-,j~: px'~,tliL:~j;"

L,::iaEid,

aUmentaci6n aumentada, me' sentfa: .cadadill, mas vigoroso. Pero. 'en vesde restgnar-.me can ene a rot condena, esta sltuacl6nprtvUegla.o.ame estlinu16 aun mas en mlsprop6sitos de fuga. :Empece a preocapar-me por guardar unit parte del pan que medaban, Aun -no tenta un plan deflnido e

tgnoraJ::a que pronro·ha·bia de Iosrar avu-da de donde menos podIa esperarla,

:vm

LA U;:>.,::roAU'JER ENTRE NOSO':l':R.OS

Habiatenidomuchasuerte en mi primertrruba·joveluntarto. Y d.e nuevo meofrecivoluntarlo una f113.mafiana--,.es decir, m a sfria que his demas-i-, undomlnso de me-dlados de marzo, mtentrasta nieve cubrfalos hombres de losprisioneros durante larevista.--.En mi' casa-dijo V.cIlliLkov-, tengo

un aparato de radio. I .<a maroa' es Tele-funken. G,He,yalguno de vosotros que co-nozea 10bastante bien esta marca .de apa-l'litospara poder repararlo? '..:Yo conocia el Teldunken porque en

casa tenlamos uno. Aurrque Is: marca esaremana, los lfa'brieaban,"cOri:')lcencla enuna ifalnica de W1lno ·para el mercadopolaco. Mis compafieros miraban a unlado y. otro can ~-acuriosldad de Vel' sl Be

presentaba algulsn, Paw un minute deabsolute sllenc1o. AUm:t·ueonocia ese tdpode radio. ~podria yo repararla? Eo casoa<flrmatlvo,tendrfa Is. gran sa·tisfaccl6n de-oii- algo del rnundo exterior, del que habiapasado dteciocho meses separado .. Sentiun repentino panleo de. que algulen pu-dlera aceptar ef encargo, Lsvante la,manay alame. Un oricfal se meacerco y me tomeel· nombre 'Y. el sit!o donde tra·ba:iaba. Elcomandante ctijo: "Ya leen:v!are a bus-~ar cuando I e necesite." - .Esta fue una decisi6n.prenada de conSe-

cuenclas para mi ryque me haria entraren Ja !fase rna·s extraordinarla- de ml es-.tanela en el' Campo JO(j; :En esta alsladacomunidad formada 'POrcerea de se!s milpriEioneros \yun ·bataill6n con sus oflclalesy soldados, E6lo:habia una mu.ler. El Tele-

:fimken Blverladohabia de ser el medlo de·qu,!!(YO la conoelera 'Y . segUn' crea. fui elunico prlslone,ro ~ue hab16con ella.

!t i ·latarde siguiente. mdentras trabajil.bar:n 'el ta;lJer de .los escjuis, un asiste~te;llllimado Igor, can cara de luna. me llam6. \"El comandante te neceslta. Ven coo-migo'!, me dl:lo.Cuando sa-limos,mis oom-paiieros 'del tarrIer me gTitaron. "Enterate·de c6mo Va la guerra. y.ra.enos notielasde iPolorua"..Mie despedf de eUos agltandoel·brazo. COnfieso que iba nel'vioso, mleIi-kas salla del tailler \Y " 'IDedirlgia a case..delcomandante, aI otro lado del Campo, en ellingulo noroeste del terreno abierto. Comoles demas ecUficlos,era :de·madera \Y " teniae1 tfpico iIlOrOb.e que .se abrla ihacia el surpara 1mpedlr que 1a nle'Vey el viento eri-trasen .por .ra puerta principal. AJ entrar1 > ' 1 en seguida que diferia prn:o del estilode· los barracones de '105prlsioneros a noear po' l ' .las paredes de pla-nChas de made-'Ta ~uave, un 'teclho de madera ;y 'suelo de

y "'j, "".,(CQnt.inuarli.)",",!'(>ri-ujl;'~-C:~::<;:: ~,/:) - °l d:;'

;::·~,r, ~:,x.r.·rE'~';c

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Wontinuacion.)

usmo y que 1a estufa teniauntubo deisnea que Uegaba 8 1 1 techo W10 atra-ba. 'En las ventanas no habia cristaleslas mismas vpteles con que estabaneg.idas 18:5. de los otros edificios. Estas's rssrstian muy blen al vlento '. f 'de-n entra la luz,pero no se vela a traves11as .or me anuneio .. UchakO'V saU6 a 1atao d·espid16a .Igor y me hizo pasarrlvenldo para. ver ese aparato de radio,;podin Po1k6vnik"-diJe en. ruso, em-ndo el antiguo y respetuoso tratarnien-us se daba a un coronel,Ah, si, Se 10 ensefiare,

nto a .la estuta estaba sentada unaer, La estuta se hallaba empotrada enarad que divid·fa 1a casa en dos habt-mes, para que calentase a las dos.coronel murmur6 una presentaci6n:inclina y ruje unas palabras formu-.s, :IDHase sonrlo-e lnclino levementeaJteza. No podia. d.eJar de mlrarla, Erairlmera mujerque encontraba desdedeje. a m1 madre enPinsk. Me sentfa.sgusto, fastldiado par Ir vestido con.lla ropa horrible y. POl' mi barba en-afiada 'Y ml larga caoetlera que caiae el euello del chaqueton, No podia'tar los ojos d e aqueUamujer., puso en pie. Era alta para ser muder,fa una laraa !aIda de tela gruesa y

cha'quet1ta de lana cscura que dej'abaiar una blusa blanca de algod6n. consbordadas. Su eabello castano, caneas que le rormacan una corona' en:> a Ia-cabeea, al estilo ruso, tenia un) muy vivo. Me sorprendi» la Ilmple-e su tez. Nunca hesabldo acertar lade las muderes, pero no creo queira m a s de cuarenta afios. .No'era pre-aente hermosa, pero pose·ia.esaca,lmaI fominida·desen-clall, eSa manera de!i,'secon distincion na.tul'a1, de mirar-uno de un modo a·gradabl.e 'Y sin co-lria, qu,a atl'a·en si'Empre en una mu-::'uandosali de 'mi trance ·la vi minin-, cornpasivam~n!ie con sus ojos azules.evidente qua Ie era simpat·leo. Volvi

beza :y vi So Uc;hako·vesp-erando en la,a qu-e s€;paraba ambas habitaclones~r:v·andome con sU caracter!stico aire,renta:_;_'V-cry a ensenarle a usted hi.~me dijo. .habltaci6n interior era a laoyez elitor10 del matrimonio y el d,espaeho)ronel. A 10 largo de la pared donds.lllaba Ia estufacomlin a ambas ha-ones, habia una pesada litera d·ema-muy aneha y, a su cabecera,un ar-, alblerto donde opude've,r l~s unifor-:olgados. Cerca d·eel, contra 1a pareddejada de la puerta, una maeif.zac6-.. La cama quedabaa mi izquierda,trar yo, Y la c6m-oda enfrenba. Lade la ha"bitaei6n a midereoha era

;pacho de UClhakov. LE n Iipar,zd de'ec'ha, c1avado 'con dhinohe~as, nabialpa de SIberia Oriental. extrafio ma-que los lUgares apar.ecian con ntl-en v-ez de nomhres. Tambien vi unde nuestro Campo 303 'Y un retra-colores de Jose Stalin:' En un·banoo,'"'omnlPresente mira-da de Stalin, es_

, (SeviLla) - 28/06/1~57, Pagina 39DJ..r. ,FTC; ] ., ;; c . ': ; L, Na,i' i:,:;1, icc) . : : : . (,;i',ed,;, p-r(;h:ib_i;~:l::",

. taoa ela:·parato de radio, un T.alefUn'kencompletamente nuevo allmentado con ba...terla, como era 16gico rulli , puesto que nohabia electrtcldad,''Uohakov me dl0 un c1i~arrtll0 "Pucllikl",cog16una Iamparade petroleo IYla puso enel banco. junto a mi. Le quite la ta:pa ala radio y emp.eca a tantear pol' dentrocan los dedos, sospeehandoque POl' algu-

na parte ten!:a que haberse roto tina eo-nexton. Ucha-k1l'vme hizo warlas pregun-tas sobre Telefunken, su Iusar de fabri-ca-ci6n, su precio, como !funciona:ba... Yo, POl'rni parte, le pre.gunte en seguida que .d6n-de 10 -habfa.adquirJ:do. "POl' desgracia",

me respondio, "me tcco mandar tropas d·elas que €ntl'aron en Polonia en 1 '939 y 10ad'quiri' 2111 i" . M~ Irnpreslono que hublera

dloho "por desgraeia", Relaclone inmedla-tamente estas palabras con 10 que sollandecir los prtslcneros, que Incluso .ser co-mandante de un Campo en Siberia podia.constltulr un casttgo 'en £1 mundo sovie-tieo. Sospec'he, y ·c!-c£.puesaMa de creerloaun P18.s,que U::hZlkov debla su puesto1!iberia,no a alguna Ind1screci6n que co-.metiOduranta ta campana deiPoIonia.Volvloa la otra habitaci6njllnto a su

.esposa ..Yo 1!~gilitrabaJando con.toda cal-ma repasando e1 clrculto. Arcabo de me-diaho-ra,sentiquela. mujeriba de unlado a :otro POl' la .1:).abitaci6nproxima,

ccupada ien also. Alpoca rata,me Uam6el coronal. SU esposa esta,bapreparandodos jarritos.de te, .endulzado.ieon sacari-na. Primero bebi6 081coronel .y despues mepas6 su proplo Jarrlto para que yo bebieraen e l . Vo!'vfa mi tarea ryme asalto la idead-eque no d'ebia darme prlsa en terminal'la reparaelon. ya.:·queesta, <era19.experten-chi. mas agradable desde mi detenci6n ytenia que. hacerla dural' 10 mas posib!,e;Cuantdo Igor fue a recogerme, 'dfje quela com-probaei6n de todos los !hilos y :val-vulas r,zqu'erfa bastante tiempo: -Muybi·en-dijo Uohakov-, pues vueIva ustedotto cHaoYa- Ie avisare.

.IMe di6 otro cigarriIlo. y sali acompa-panodo POl' Igor.

-lQue tal ha ido eso?~me pr-e.gunta-ron mis compafieros cuando entr:e en eltaUer.

_:.Tod·avia .no Ie 'hepuesto en mareha-d1j·=-" perc ,ya os d1re 10que pasa en elmundo en 'cuanto fundone.fAI si.guiente fue otra vez Tgor a buscar-

me. Mientras yo a·largaba mi traobaJo 10m9;s posible, ,al eor-onel y su espOsa ha-b-1aban -conmigo. Esta;\)g,n sentados muy.fun·toserr' eI banco pullmentado de la ha-bitacion grande, a·don-deyo nabia lIeyadoesta .vez el .aparto.

lE111a~UClhakova-, sa intereso por mifamilia, aeom:b-rada por Ia ·facilldad conque yo hablaba el rus~. ·Le·dije que mi

.madre -.;ra rusa. .. -(,Que i.zo usted para que loeenviarana'quf?-me pregunt6 el coronel.-;~ida-;fuemi respuesta.

-!'e han condenado a . -veintiC1ncoanos,lno?

-..iSi

:Dzspues de una pausa, ;habl6 ella:

-Ne1ntlcincQ tlftos son mU¢los afios.t\Que edad nene usted?-,Precisamente, vemnetnco aiios.:Esta. ecnversaclon estaba salpicada de

largos sUencios. Enos seg'Ulan sentadcs enel banco pultmentado mlentras yo, de cu-clma, los miraba POI' enclma del Telefun-ken. Me sorprendto el coronet al pregun-tarme sl creia que RUBia se .veda impli-eada en tina nueva guerra. iL a llltima gue-rra rusa, por 10 !que afe-~taba al coronet,fue la de HI14 •.:Ci·tea .P'·inIandiay Polonia..-:Esas no han sldo 'guerras, sino . ltbe-

racfones=-me dUo. .

TUVi! ia sensa cion de :que decia esto por

rutina. No parecia estar muy ecnvencldo.Alce.un poco mas lacabeza ,por enetma dela tapa de la radio y Ie mire. Su rostro se-guia impfwido. ·Miraba al teeho.: Insist10en .la euestlon de Iaposlbllidad de que Bu-slaentease en otra .guerra.

-En P{)lonia~dije-,era eosa sab1daque Goering fue a sacarnos el pas1l10 que1epetrnitiria atacar a Rusia. Alemanlaesta dispuesta .y e l ataque sera inevitable,Todo-esto 1 0 B Olte prectpttadamente: es-

peraba ·queme reconviniesen POI' estar ha-blando dernasiado. Pero ni el coronet nisuoesposa nicieron comantarlo alguno. .-,,'Le ~ha parecldo muy cruel la guerra?

-me pregunt6 ell-a.

Le conta la Impreslon que me ,habfan

hedho Ia carreteras atestadas de muderespolaeasque hulan con sus nifios y los an-cianos,.yc6mo llegaban los Stukas 'Y los 'ametraiilaban. .'-La guerra es asdi~dljo -el coronel-,-,

Quando se pone usted a partir madera conun haeha, los que esten cerea Be nerirancon las astillas que salt-en..

Pense que no pareeian mtlY 1mpaclentesPOI'v-arme terminal' la r.eparac16n. Ya ;he.·biaencontradodonde radicaba Ie : averia.Pero no queria repararla tan pronto. Con·el Tele;funken arreglado, mis ;visitas ter-mlnanan ..

!La esposa, del coronel me pregunt6 por'la Polonia de· ante..:guerra.· li06mo eran

las modas femeninas? Le dlje lque soUanser elegantes, .pues llegaban dir.ecta:mente'de Faris. (, Ylos zapatos de tac6n alto?Le respondi que los. Uevaban -con 'mucha'soltura' y gracia. ..

!Pasaron dos dias antes de !que,yolvierana Rvlsarme. Mis eompaneros ,me.gasta-banbromasdielendome que 10 que ,sueed·fa esque yo no entendia, ni ·pizca de receptoresy ,que el Coronel acabarfa cansandose deesperar y me castigaria.

.En m1 tercera 'Visits.me puse en serioa reparar el aparato. Umlikoy tl'aoajaba ensu cl:e~a'cmoy su mu.ler hablat>a oonmigo.Sa 1nteres6 por las peliculas que mas mehabfan gustado. y se extran6 euando IedUe ,que 'Ias pe1iculas rusas estaban pro-

hicid:as en. Polonia. Mientras, logre quefuncio'nase el receptor y bUS'queunares-tacion. Elcoronel ded6 su trabajo y acu-di6 junto a nosotros. Escuc.ham-osun 'con-cie·rto Ique radifllban en Moscu. Fu£ de emi-sora en emisol'a oonslguiendo ·fragmentosd'e noticias y .pOl' ultimo oimos la voz deHitler soltando sus !nvarlable,sd1sparates

(Continuara.)- '- - ~ I " ~ i.-;,-;",.,,"- ': ;- , - , ; _ -- c" ,_ , '. , -: '" - . ; , , , , : c o - - -

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I

<Continuaci6n,}

en una coneentraclon [uvenil en' el RJhur(creo Que el'a 'en Dusseldorf),lEI coronel me regal6 un paqtiete entero

de tabaeo "ko-)'I.j1ti" 'Y una hoja de papelde peri6dico para liar los cigarl'lHos,Cuando se presento. Igo_r para recogerme.• me dUo Uchlikov:

~Bi Be nos vuelve e . descomponer, leIlamare. Me parece que no sabsmos rna-nedarlc ibien. . '.

,. Les conte a mls companeros todo 10 quehab!a oido en la radio. ,La que mas lesInteresaba era, naturalmente, el dlscur-so d·eHitler y 10 que sucedia en Alemanla.

Quer:fan saber cuando iria yo otra vez acasa del coronet. "Cuando' Ia radio se des-componsa otra vee:', Ies d.lje.:8e acercaba el final de marzo. Tl'abaje

varies dlas sesuldos en el taller de es-iClulsy Iamentando que /el. episildio delTelefunken hublese termtnado. POl' aque-Ilos dlas conocla un Indl1'lduo: muy no-tilible, IHamado Ana·stazi Koloemenos.Lehabia vieto varies veces calentil.ndose .jun-to a 1£ 1 gran estura del ta 'ller . Era uno delos. tlpos ;f:!sicosmas ccmpletoa que he en-contrado enmi 'Vida. De estatura muyelevada, ruble de cabellos y baroa y cu-riosos ofos verde-grlses, apenas adeJgaz6a peaar da las penandades sU!rl~as. Era ungigante ,bueno, stempre dispuestoa. pres-tar ~da a los mas debl1ea que .H-o seaa cast todos--, Y se dedicaba ·a acarrearlos lenos mas grandesde abadul y a par-til' los para su utillzacicn en nuestro .tailer.IEstaba yo eontemplandclo a Is.' salida

del taUer donde Kolemenos apllaba unoslenos. !Me acerque -para aG'udarle cuandose dlspuso a ce.rg·a·rseel primero a la es-palda. Mis esruerzos .fueron lntltlles. Ko-lemenos me .d1jo; "N!O se pi-eocupe, amigo,10 !hare YO solo", Be agach6 Y CQgioel Iefi.ocon admirable faciUdad. No me consideroun hombl'edeblluc'ho. pero no podria com-parar la mfa con 1 0 . fuerza fenomenal des.'!J:uelhombre. iLe dUe espontil.n'llamenbequien era. Elme di'jo como &e l lamaba, quehabla sido un pl'opietario rural en Letanlay que tenfa .ve!ntlslete afi.os. Automlit!ca-mente Burgi(>en mi otra ve z 1a idea de lafuga, pero no era aque1 el sUlo ni la oca-si6n para. iha:blal' <ie ella, As! que me des-pedi de el con estas .pala·brras; "Ya char-

laremos otro dia". "Mje encantal 'a", me d1joel amaole gj,gante.

:Entl'e los .r.uidos del taller. o i que me 11a-ma.ban. "Tu amigo te busca otre. vez", medijo un compafiero. Igor me esperaba enIa puerta, desde donde me hacfa &ei'ias.Pcje el i:squ1 q,lle estaba probando, mesacudl el polvo y 'saH con e l asistente.Estaban en casa el mal'ldo y Ie . mu:ler;

Uohak01' me ctijo que el receptor no fun-cionabe. tan bien como cuando ¥o 10 a.rre-gle. La probe y8610 Ie sucedfa que las ba-terras estahan bastanbes gastadas. Reco-mende que pUsieran atras nuevas. El co-ronel me dUo que se ocupana de eBO.Bepuso el abrigo, Ie ctijo a. l!U mujer algosobre una reun16nde ofleiales y se mar-ch6. Este matrlmon!o estaba mw unido.Se notabs que &e ten'ian gran carillo.

. -'Le hare un poco de te-me anunci6sonrloentc UClui.kov.....,.Mlentra:s, puede us-

ted buscarme una emlshora donde denbuena muslca.'Continu6 !hablando un rata sobrs la mu-

sica. que pl'eferia, alab6 a Ohopln, pero

dectaro que su muslco favorite era Tehai-ttov.s,kl.Me dijo que tocaba el piallo y queuna de sus mavcres prrvaciones en 81be-rla era tener'que renunciar a fl, Le mirelas manes, quehabia extendldo sobre su'l'egazo. 'Eran de dedos muv blancos, lar-gos, y flnos. Unas manes bian culdadas.Me atrevra declrle:-Irl.~ne usted manes de artlsta, senora.!Son1'16.

-Tambh~n dlbujo.Daspues

del piano,es

ml gran a.flci6n,.:Laeneontre en la radio la class cie mu-

sica que deseaba y, mlentras, me estuvohablando de su vIda can un ion do de 01'-questa slnronica. Hli.blaba para que yo lecorrespondiera, parmi parte, con otrasconfidencias. Era como 51 estuvlera di-

ciendc: "Esta so~ yo, esta es ml: vida,Pued·e usted confiar en mi." Yo estabadesconcertado, No sabra POl' que me su-cedia aquello a mi, un prislonero alslado enun extreme delmllndo. Para tranqulll-zarme, pensa'OIl que ••arnbien ,elias eranextladcs a' pesarde.Ja Importante posl-si6nque ocupaban.Ella sobre todc, medlje, era cast tanprlslonel'e. comoiyr;Estli.aqui .s6lo pcrqueesta su marldo y.l0

mas.probable esrque el Po1!truk sea .elnrdadel·o.comandante de este Campo 3(}3,

Beblmos el te caliente. Ella hablaba envoz bada. Me contonue su famllia 'era demllltares 'antes de la Re.voluci6n. Lo ha-,bian sido durante muehas seneraclones.Su padre fue coronet en la guardia par-sonal del ultimo zsr y 10 rustlaron los bol-cheviques. Su hermann menor mUl'i6 delas hcridas reclbJdas en Ie. defensa delInstitute smolny cuando era a1ln cadet'S.Su madre :huy6 con ella de la finca queposeia. la famllla cerea. de NUnl-Novgorod.Cuando, mas tarde, mUl'16 l a madre, eUa:;~ adapt6 a. la. nueVa vida, 10gr6 .una tar-jeta.de traba10 y:le d!eron una eolo:!aci6n.Le fue bien y Ie concedieron unas .vaca-ciones pagadas, como a otros tl'abaJadoresfavorecidos, en' Yalta. Alli 0011oc16e.U'chli.-kov. Comprendl que,dasde aquel momm-to, no hubo otro hombre en su vida.:

;Era muy leal a au m-aridoen ·todos losa.spectos. As!, no me dijo el motivo de que10 hublel'an trasladado repentlnamente depolonla. ""rimero fue e. Vladivostok .y ella.se pas6 sels meses sin tener notleia al.guna de e l. Pero Uchivkova conoela a va-rios dir!g'entes dlll Partido que III infonull-;ron que su marldo iba a encargarse en SI-beriE; de un Campo de 'trapa.jos fOl'za;dos 'Ydesdll entonces' no par6 basta .que Ie con-cedieron el .permiso para reunil'se con el.Todo el tlempo me decia a. mi mlsmo:

Me habla asi porque say un .prlslonero yme eompadece, y porque de estas cosas nopodria hablar con au propia gente. Sinembargo, cada vez se me lniponia. con masfuerza esta otra vers!6n: Es una. mujermuy intellgente y rensible que, al. verserodeada en este Campo de vldas crulll-

mente destrozadas y POI' m1lle.res de in·Justas condenas, se slente horrori.mda y

cstli . de corazon 'con nosctros, Desde luego.aqual no era un sltlo pal'a una mujer.UCihakova era rusa, crela apaalonadamen,te en ei gran destino de -Rusia, pero tam-bien era un muler de gran delicadeza yespiritualldad, de manera que no ,podriavel' s in sublevarse Interlormente, aquel es-pectaculo de varies miles de seres huma-nos tratados como fleras sin .habel' hechenada para merecerlo.No B e tque me h1:ro hablar de los ostya.-

kos. Creo ·que se deb!6 a ml azaramlento. al ver que me eonslderaba como un amigodlgno de sus confldeilciils, y al deseo de

apartar su atencl6n de mi. Pero fill a pa-rar a 10 mtsmo en euanto dUe que los ost-yakos dejaban comida a la puerta de SUsehozas para 108Desventurados. .'Sus claros ojos se clavaron en los mtcs:-i,lNunca. ha' penaadc usted en esca-

.pal·se?

Es·ta pregunta me' produjo verdaderopanico, Encerrabaun terrlble pellgro. Deje1atilza de golPe'lY enmudaci. Ella me ob-servaba sin pestafleal'. 'con sus ojos azu-les rnuy abiertos.Veia m! mtedo.......INome responde usted, Racwicz. No se

flademf.Cref que le sentarta bien des-Magai'se, Le aseguro que no' hai peligroalguno en' que ma ,hable' de esn.,; .

Fuga. Fuge...·El'a: como .si aquella mu-Jer hublera vlsto 10 que domlnaba mispensamlenbos. Sf, deseaba eontarle todas

mls pellgrosas Ilnsionss, todas mls espe-.ranzas, Paro su repentfna presunta mehabla .'neeho enmudeear, POl' mucho queme 'esforzaba, no me sallan .las palabras,;Enconc,s !leg6 Igor y me levante para

rnarcharme, desconcerrado y dl,g,gusi;adoeonmlgo rnismo como qulen le he heche unInjusto desaire a un intimo a·migo. Ella .me dljo friamente, con tono de circuns-tancias:

-l Vendl'B.usted otra ve z s1 e1 receptorvuelve a marc-hal' mal?Entenees ha.ble POI' fin, ~ 10 hice con

un vivo deseo de quedar bien::-Si, si, clal'o que vendre en cuanta ha-

,sa. falta. POI' supuesto, pueden. ustlldllScontar conmigo, Me encanta-ra ocuparmede eso.. .Durante los dias siguientes esperli ex-

citado a que v01vieran a llamarme, Conocia un hombre Hamada Sigmund Ma·kowskl,d'e tl'einta y s!ete afto.s, capitan de lasfuerzas fl'onterlzas polacas. F.ra de men-talldad clara y eftcl\J2l.y un tlplco 'oficlalprofesional en sus modales. Pense en se.-guida Que debla teMrlo en euenta paraml plan de fuga, 10mismo que haola ele-gldo a K61emenos Bin qUll Ell 10 suplera,En reaUdad, no tenia toda'Vla; lin plan de--iinldo. Aunque no sabia 10 que podia es-perar concretamentede la. mUJer del eo-'ronel, estaba oonvencido de que poddapor 10 men os aconsejarme, aunque fue-.se Indlrectamente,,D e nuevo me llama y cuando Ie hube

arrllglado e1 receptor y hacfa como que 10proba.ba.para: ca'ptaralgunas noticlas quepoderles dar a mis compafteros, empez6

UooAkoYa a. hablal'me, como pOl' hablarde algo, de que se aeercaba el corto vera-(Continuaraj

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(Con.tin uriciirn »

.O de Sib-~ri,::'t. ..l, :)ro~:!':'c.id·

e in .ocasior:·

-··-·LamenJ(: 1U~ i:·;.C:"

Inmediatamen-

Ia vez pasa da"'.: en esas co-

i.~.:--. P(:fO ][1:... ri':< anCIHS :"';~J tan e no rmes

! terreno ran :-]i' ·'.'i1 y carezco del equip~mprpc;<.:inrj;b!.': ;',:;,.: ~l::tce!' rrents a tan-

as circunstnD~.;n.:;. dcsf avoratiles. ..

··-··Tlelli::i]':(.ed solo veinttcinco-arios-c-me,'..)(;£;rJ···-·, y ;:0 ha de terrier en absoluten:.,,·· .C,," ':";' '", \. , f<!)p.ter.e pa5arse aqui los

. <~~gui::nt~s de su vida.

'. 'lsi'cd l~mer contesarrne-

-',,"'ii q'Je esto no va sa-

r:». W:~. Dentro de 10 cue

;~'; f:.;:'tO,v muv bien ate.ndi~l;L

.:":·(_(,c'n'-.. '· c' jilt :·, e ; r : , , , , confortable mu-

h o UL',j,;" (";lliiclii (jtW ·ustedes' tOd~S los

;g-arl'}ll()~ que, dcseernos: Pues bien, no;ojrla sopor tar- la idea d-e que Iuese a pa-

ar aqui veinticinco afios si alguien me

segurarse que en todo €se tiempo no vol-erfan a trasladar a rili marido.iPor eso,omprendo perfectamente que el proposi-

ode fuga sea 10 que domine todos los

-ensamientos. Y creo -que Ie sent.ara bien

.ablarme de ella,

Y '!lablamos de ello como de un asunto

bstracto, como de algo que solo pudiera

:lteresarle, a una tercera persona. Plan-

earnos .asi- Ia cuestion.: SUponiendo que

n hombre pudiera salir de este Campo

a~6nde ~e_~irigiria? Yo opinaba que. l~mea poslbllldad para el, serta avanzar 10

laS rapldamente posible directo hacIa e1

ste, l1egar a Kan:p.chatka y desde alli abrtr-e paso hasta.e1 "Jap6n. Pero me objet6lla que este plan fra casaria, porque la

osta de KamcJ;!atka era una de las' prt-

reras zonas de seguridad milstar y deota

e estar muvvlgtlada; ..(,Y no podria me-

srse erralgun tren y ciirlgirse a los Uralesn?ontrar trabajo en a1gtina mina y salil:

las tarde de Rusia .:occidental '? No, tam-

DCO esto era sensato, dije Ucohakova, pues

n papeles no podia irse a ninguna parte

entro 'de 1a URSS. Eso fue todo 10 que

a;bJamos aquel dia. Hasta que estuve ten-

ido en mi litera aquella noche no com-

rend! que la 1in:ica ruta de fuga qU'i!-e l lalreela haber01vidado a prop6sito era Ja

:1 sur: 0 seadejar atnis e1 lago Baika·I.lad6nde ir desde'aUi? Pense en el Afga-stan,

iEI propio coronel en:vi6 abuscarme' al

: a siguiente. Estaba visto q u e no enten-

a el &eneillo ,Telefunken. 10 cual no' dejo

, sorprenderme ya que se trntaba de un

)mbre inteligente, No ~ atl'evfaa tocar-

y me pedia que le buscara las estaeio-

,8 . Queria noticias y euando S E l las hube

iCo~tra.do y oy6 varios discpl'sOS y cb- .

umeados, me confeso que estaba ya s e -lro de que Rusia entrada en. la guerra.

) creo que desease vel' a su pais metido

lelIa, pero, desde luego, la guerra supo-a para el J a oportunidad de sa1ir de S1-ria y de ejercer la aetividad para la eual

taba preparado.

Naturalment~, estando' alli eI coronel

, h~.bia posi:bilidad de bablar de fuga:

e figuro que este hombre, comandante

nuesb-o CampO, se habria h01Torizado

,A (Sevilla) ,- 02!07/1957. Pagina 43) DT.4p "_ rn ABC E -. ; _ " J'1i1l1r.:_ct, :,'O(i9. O:":\f:da

" " _ ." , " - J , '" , ~ . " " . ., - , ' , , _ . . , _, ' ." " , - , , ,' ) ~ ; , . ~l

--:E~o es \i n;-~ . ; ' : : . ' . : , . ; C,'- f alt.an las cosasimpn~.<c;!::l;b'::.';_ ":'::'.\~{) darido POl' ctertoque ;"l,~i!",,,mos saIir del Campo.

.-1'::; muv probable Que logre algunaavuda,

---En tal caso, c'Jente conmigo. Que se

vaya al diablo esta jaula.

Uchakova parecia disfrutar en su papel

de conspiradora en jefe_ Nunea hoepodi-

do estar sesuro de si creta de verdad que .

'Yome iba a escapar. Quiza fuera senettla-

mente un .ejercicio de intriga-c-oor 'una

buena causa-, de una rnujer abunida POl'

la.monotonia aplastante deja vida en <e1

CamPo 303 y quenec.esitabadal'salida a

su.Ingemo e inventrva. HaYrnuchascosasque, Incluso despues de pasar tanto .tiem-'pO,no puedo dilucidar: '

''Y~no se trataba ide una idea abstracta.

Mien tras la radio.<1abaunadesussinfo-nias preferidas.Lde TchaikQ.vski, esta-ad-mirable.lmujer seocupabade los detaUes

mas practicos.

~Necesitara usted un grupo de hombresrnuy capaees y valientes. De sus raciones

extras, pO'dra ahorrar un cuarto de kilo aldia y tostario en la estufa del tatter. Luego,

cada dia, 10esconderausted. YO.me encar-gar~ de hacer unos sacos en forma dem-o-

chflas, Tarnbien necesitara usted unas pie-les . para abdgo y caizado.: Los soldadosccgen rnartas valieridose de trampas y lOS . -<.Lo dice usted en serio?oficiales las eazan a tiros. Luego las euel- . ::::.plato que S 1 . Completilmente en serio.

gan en las a1ambradas exteriores, LoS' que '.Quiz§.s mu!)' pronw.-·haya usted elegido pal'a. su 'grupodetien .. :EI hombr,(jn me sonl'io feliz a traves de'Cager una de esas pieles eada dia cuando SU barba rubia : .

welvan de trabajal' en e1 bolique, pues su- _,.;;irh~con ustedes:···.pongo que algunos de ellos senin de los que '-!Se rl6ac.ar~aj:a~as y me dio dos palma.:

trabaja'n fuera. Na,die- las eChara de me_as en elh.ombro: .nos; las hay a montones_ Estudie lYlen su -,Podrfa ilevaFles a,ustedes en mis :bom-

plan de fuga y luego dhijase sin 'vacila- bros si fuera' !5rei::isO.Creo :que si hemos

.cion hac!a e1 sur. Espere una neche en que lIegado ha'sta aqui cargados de cadenas

ni$V-<JcopioEamente para que las hueUas" mejor podremos ir' sin ellas. 'queden.cubiertas enseguida. 'Y:a eramos cuatro. Empezamos a plenear

Y luego, como n o dando]:e miporlancl:a, la fuga con urgencia. Estaibamos a finesana.dio:.. .' de mario y yo comprendia que no podfa-

~Ei. Coronel Uc'hakov sal~irapronto pa- mos perder tlempo., Lo primero que hlci-

ra Yakustk, donde tendra que actual' en mos ~?e observarlo - todo con extremada

un :eurs~Ilo para' olicia1es. No querrla qUe:. . .~tenclOn. POI" ejem:plo, notamos que e1

ocurriese a'qui nada mientras el estuvieri':. ~comi'i!nzo de la ronda de los soldados cona1 mando del CampO. . .'. . . c petr,Os POl' €ol pasiUo que habia entre las

IEsta Uchakovaera una esposa leal. dos' empalizadas era anunciado siempre

BUSQ.ue a Makowski inmediatamente. ·por los ladr-mes de los perros de los trl-

-Nos v am 0 s-le dije-. T:endremos n¢os, que protestaban de que no los lle-a.yuda. ..' :var9.n de ronda como a los perroS de pre-

sa. Y esa :senal 5610 se oiaca'da dos horas.

Ta,mbien descubrimos que Ill. patrulla se-guia si,gmpre la direc-ci6n contrarla ala.

de las agujas del reloj, recorriendo primero

el largo lado s_ur. Decidimos, pues. quenuestra f U g > a deber-ia hacerse c}'uzancto l - a c . .

(Cantinullrdj..~:cmr';::li_cac~_6n f,j_f::l-i_ca '/ :'It.:~]_j;;:acj_{!nJ t,)t.al Ci _r:i.1rcj_,lJ, die; 1

de habervsabtdc que 'su ssposa se habia

atrevido a -entablar una conver-sacionCOn

un prisionero sobre ese tema, Cuarido me

Ilego la hora de marcharrne, e1coI'onel

permanecto junto a1 aparato mientras su

mujer me acompafiaba a la puerta,

--No "e preocupe-c-me dijo-. Todo Ieira bien,

.Aqualla neche '\~lb;,; eon Makowski. Le

hice ir hasta '18, ;. ;:;-in":',,

-(;Qu<, :,' !)a:-'.·;,' ::::, ,'; ustcd .si intentase-mas fug?,:·ucs,?-·:', .i· ·."tnte,

~lCu{mtos hombres ne~esitara. usted?-Unos sels-Ie d1je.

-Blen_ Los encontraremos. Conozc; unoque puedo recamendarle decididamente.

!Pense en Kolemenos;

r.1'i,:;r.r-'.ib;Jci6rl, r _',"::St.3 a__ ,,~",.~~~ ".•~~~~~"~~A~

-Yo tamoien tengo uno. Manana ern-pesaremos a cuscar los que faltan,

IX

PLANES DE FUGA

IAlliesta---,dijo Makowski, que se harlaba

a mi lade durante el descanso de medlo-dia, al dia sigutente. Me sefialaba a un

prisionero que permanecia apartado de los

dernas=-. Esperemos .•iQui un.ipoco paraque puetia usted observarto,Aquel hombre teI,lia' .'.os . 'hom bros cua-

.drados y sus mtormes ·.l;opas no' podianocultar 5U poderosa· museulabura .

-Ust=d quees oficialde Caballerta-c-dijoal cabo de un rate Mako_wski--deberia re-

conocer ese tipo, aun no. conociendolo per-sonalmente. . .~lQuien es?

-Un polaco. El sarsento de cabalreria

Anton P,aluchowicz_ Tiene '41 afios, pero

-conserva toda su fOl'taleza~"Es persona muy

preparada y experimentada, Can el VOy voadonde sea. lQuiere que i e hablemos? '

·.N()sacercamos a el y. charlamos. Me

gusto' ague1 paluchowicz. Aeepto nuestro

otrecimlento como un buen soldado que'acepta una pefigrosa vmtsion sin vacilar,

Se alegro de saber que: y o era tenie JJ te dela Caba!lleria polaca.· .

-'Lo consegutremos juntos--ctijo--. &~ra

clificil. pero 10 conseguiremos.

·Aquella tarde, a 'ultima .hora, me acer-quepor detras a . KOlemeno~;'Y le di unapalrnada .en Ia: espalda .. ·Se·. vdll 'io son-r.iente:~,·.. - ..

. , -'--j.Ah;e·s usted! .

,~:. :-:,"~elemenos. yay a escaparme de flqIDconotros compafieros. 2.Querria ustcd unlr-

se a nosotros?.:Me. 'puso una de sus mariazas en un

.:·hombro~

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«contmuacion.;

fensas del lade sur. Para ella, teniamose instalarnos en la ultima cabafia deI parte. Esto nos fue f'acil consegulrlo.

.sto dar a cambio pan y tabaco paraenos cedieran unas literas en ella.Paluchowicz nos trajo a Zaro. Eugenero era balcanico. creo que vugoslavo.nia treinta anos 'Y antes de que los ru-s 10 detuvieran habia sido oftcinista.

i quieren ustedes pasarlo bien POl' e1mino", nos dijo el sargento, "cuenten11 Zaro". Como un comita de Inspeccion,akowski, Paluehowlcz y yo estuvlmos unto eontemplando a aquel hombre mien-lS estaca en la cola de las raciones. Eraaspecto vigoroso, de estatura mas bienja y sus oios casi nesros. brfllaban con~gria y malicia. Debia de estar contandoistes, porque los hombres que Je rodea-n se reian a 'carcajadas. Zaro porna caranicamente seria mientras sus olos reian.-Muy bien-c-decidi=-, vendra can nos-·os.~uando me acerque a el y Ie propuse

e nos acornpafiara en la fuga. Zaro me~pondi6:-Siempre me han gustado los vlajes y

e de que me habla usted pareee que

a ser dlvertido.-Seri la peal' de las excursiones queYa heche usted.-Ya 10 se, hombre, ya 1 {) se, De todos

idos, ire con mueno gusto--replic6.despuas de una pausa, afiadio: -LosiOS carecen Clel sentido del humor. POl'

Ime vendra muy bien vartar de publico,n ellos me aburro.\.sf se uni6 a nosotrosEugene Zaro yfuimos va cinco. Creiamos que noswendria ser diez para luego dividirnos

dosgrupos de cinco cada uno y tomardirecciones diferentes, con 10 cual di-iltarfamos la perseeucion.

'ero no habfa de resultar facll. ni muchonos, reunir diez indrviduos con las con-iones necesartas y que, adernas, estu-.·a.n dispuestos a emprender ·Ia aven-il. Dos compan·eros de mi taUer, que mee'Ci-eronmuy apropi'ados para 10 que se

;aba, se asustaron con solo ofr Ia pala-"f.uga". Era mu,y peligroso hablar de! asunto, me dijeron, perc intentarl0locuia, un su·lcidio. Estaban satisfe-s con su ra,c16n extra ordinaria y dis-er de un kilo de pan diario y de tantolCO les pa'r,ecf.a10 mas a qu'e podia as-,1 ' un hombre en nuestras cir<:)unstan-. lPara que p'erderlo todo y exponer-a morir casi ine'Vita;bIemente? Les res~di que quiza,s llevasen raz6n y trate de,arIe importancia a la cosa: S610 esidea que se me ha ocurrido, pero dea hacer1o... .

egui con mi tarea diarla de tostar unrto de kilo de pan en 1a gran estufa del: 1 ' . Ya teniamos un gran mont6n es-

lido detras de la pila d,e esquis re-m.dos·,en un rincon del blUer.)1'fin conseguimos el nllmero seis. Nosraja Ko1em-enos.Era un a1'quitecto li-to de Yeintiocho anos llamaclo Zaclha-Mardhlnlk:c'Yas,alto, delgado, con vivosaa;ules.No es que se h1cie1'a llusionese nuestras posibili'dades d'e buen exi-~ (Sevilla) - 03/07/1957, Pagina 37I)I ."-.PIO::· .Bi: .' S .L , ME:dr:: i~.1 , ; :' -009 . Q:JEd&.

-..-.~1,-.-._.;-_ _..--" T " ' "

to, perc aun reconoclendo que .habiamos detropezar con enormes obstaculos, nos dfjoque la mas insigni'ficante prababilidad deexlto Justificaba el intento. Esto me Im-preslono.iEl lltuano me parecio un tineinteligente y agradable.

,Cuando el sargento Paluchowicz nos tra-Jo el nombre de Sdhmidt. supuse que setrataria de uno de esos colonos germano-.rusos que se hablan unido al convoy enUfa, en los Urales. Estos rusos con nomoresgermanicos eran descendlentes de los ar-tesanos alsmanes llevados a Rus1a POl'FedI'D el Grande. Habra 'leido que se ha-bran instalado a ortllas del Volga.-,:,Es alsmanv-c-le pregunte al sareento.

-Se llama Sch!midt, perc no se si seraaleman-me respondi6--. Habla ruso per-fectamente. Esta siempre apartado de losdemas de su seccion, Es hombre que me-ditli mucho las cosas y siempre me ha da-do excelentes consefos. Se 10 recomlendoa usted.[Makowskiy yo acordamos ver al tal SC'h-

mddt al dis. siguiente.....-Ya·les dire,co:nul1asetiaJ de cabeza,

qui(m es-, nos R'dvirtio el rsars ...nro. ;'011.-

riendo........yam estabalIfbsal din. 1'~guicntecuan-

do el)lOmbl'e seaC;gr~':l,ba;,l,la. venta:niHadondsu-eparttan elgafc.Pal-uchowicz>.noshizolaseiial coll".t'n:da. Makowski :fYo

pascamos pOJ' dE:~antede el obsemndolecon disimulo. MLI:>rimera rmpresion fueque parecia d€ll1a..sla.clo.iejO para unaaventura tan al'duacomo la que planea-bamos, Podia tener unos cincuneta anos.

\Era anclho de hombres y de clntura es-trecha. Tenia el .cabello y Ia barba entre-canes. Nos habfa visto Ilegar s. probable-mente POI' haberle advertido el sargento,no manifesto sorpresa alguna cuando nosacercamos a hablarle,-:Querriamos hablar con usted-s-le dije

en ruse.lEI tambien me hab16 en ruso:-Va~an hacia las cabanas y alH me re-

unire en seguida con ust·edes.,Con su vasija de cafe en· la mand. se

reuni6 con nosotros donde ya no potlfa!Il'vernos. Nos detu<vimosy nos sonrio.-~Caba.ueros. me llama Smith. Tengo

entendido que van uste~es a proponermealgo.,Ma·kowski y YO nos' quedamos boqui-

abiertos.,-l"Smith"?~xclamamos a la vez.~Si, Smith. "MIster" Smith. Soy nor-

-teamericano. -Le divertia nuestro asom-,bro-. V;eo que les b-a extratiado mucho.,caba:lleros.

En efecto, no podf.amos creer 10 que oia-mos. Hablaba e1 ruso con absoluta per-fl9cci6n. No tenia ni el menor acento.~erdone, perc es tan sorprendente ...

leomo lleg6 usted aqui?-le pregunte.

'H!a'b-Iabacon calma y gran faciUdad deexpresi6n, como un profesor.-'-'Ante todo, permitame repetir que S Q < Y

nort-eamericano. Ml profesi6n es la. de in-g.miero y fui uno de los que llegaron aR!usia, haGe ya nUeve 0 diez anos, cordial-mente 1n.yitadosPOI'e1Gobierno Sovh~t!co,palra 1a ,construcci6n del Metro de Moscu.

Eramos cas! cincuenta. A mi me detuvie-ron en 1'936, Estaban convencidos de quelY O era un espia y me condenaron a veinteafios de trabaios f'orzados.:Se bebi6 el cafe rapldamente, Nosotros

le rniraoamos aun como atontados.-Alhora voy a dcvolver e1vaso, si es que

a este cacharro pue·de llamarsele vaso. "lIuego nos volvererncs a reunir-c-dtjo.IMa'kowskl y yo nos quedamos viendole

mare'har .. A 10'; polacos. ucranianos, leto-nes, estoniancs. ohecos, f-inlandeses... a losmas varies r(;pl'€S~ntantes de la Europainvadida y explotada POl' los comumstas,rio nos extrafiaba encontrarnoslos alli.Pero un ncrteamerfcano.. . Makowski co-mente:--,Qui:·zi.,st empezasemos a buscar. en-

ccntrurfaruos tarnbien algunos Ingleses y

franceses.IS2 nos acerco Paluchowicz r--(.Que tal les ha parecido?

iMakowsIq se encogic de hombres sinperder de vista a nuestra nueva adquist-cion, Que se dirigia nacia la ventanrlla,

mientras le decia a1 sargento:-=Hen'Sohmidt es "-1vflsterSmith".Palucho.wicz arrugo el entrecejo, mtrt,

gado, Makowski atiadi6:~y mister Smith. querido sargento, es

norteamericano.Esto era mas de 10 que podia compren-

del' PalucJhowicz. Abri6 la boca y voivio acerrarta.,'Reunidos otra vez, cerca de nuestra nue-va cabana, nos presentamos a Smith como<\1habla heche con nosotros, El, siguiendoen esto 1a etiqueta del Campo, nos pre-gunt6 a Morkowski y a mi:.-~Da cuantos afios es sucondena?,Esta era la frase de ritual despues de 1a

presentaci6n de una persona.IE;;ta·bamos a prlnclptos de abril y Ma-

kowski y yo habiamos Iogrado dos Iiteras 'en la cabafia del f,inal, (Kolemenos tam-bien 'tenia ya un buen sitio, precisamente

junto a la puerta). Diciendole a1 sargentoIque 1 0 verfamos 1uego. invita·nios a misterSmith a entrar con nosotros. Sentados

en 1a litera d,e Makowski, que el'a Ia dea'ba,jo, Ie e:x!pusimos al nuev{) ml·embronuestros planes. Le aUe que teniamos fun-<la'dasrazones para creer que solamente 1aruta 'del sur ofrecia algunas posibilidadesde e"ito, y que alguno de nueS'tros com':'patieros Stl obstinaba en preferir 1a rutadel este. hacia KamClhatka.Smith se tom6 a1gU_ntlempo para con-

t~star. EstlUvimos ca'llados un rata mien-.tras el reflexionaba. Par fin, dijo:--.;CabaJUeros,sera para mi un gran ho-

nor a,companarles. Eslioyd'e a.cuerdo en quela me~or ruta es la del sur. FUeden uste-des contar conm!go.

lP,ermanecimos muc.ho tiempo Cfrn.Smith.Todas nuestl'as historias segu1an !ineas

muy parecidas. En cambio. e1 casq deSmith era muy distinto. Su persona'lidadnos intrlg6 desde el principio. Aunque noscont6 muchas casas, ni entonces nl nun-,ca lleg6 a decirnos su nombre Pl'opio.Mas ad'elante.cuando los seis europeos,nos tuteahamos ya, e1 no1'teamericano fuesiemprepara nosotl'OS, como ern e1 mo-

cc·m:Jn5,ci:'icj_6;~1 y.:<ib:l:ica y u t . j _ :) _ , i ;: i _ ; C 5 6 , . l , C 1 ? c ~ t i . ln l f ~ , r g r ~ ~ ? : . 1 , dE: .1

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(Continuacion:'

mrnto en que 10 conoclmos. mlste Srrnith.E1 "Mister''' fue aceptado como un sus-tdtutivo de ese nombre que nunca nos re-

velo,Una lfvida oicatrtz Ie eruzaba la cabeza

') .pOI' detras, bajando de derecha a izquier-da, desde Ia coronilla a la nuca: una ci-catrtz de cast veinte centfmstros. Nos ex-p11c6que se la habia producido e1 derrurn-barniento de un andamiaje en la construe-ci6n del Metro de Moscu.-Aparte del accidente a1 que debo esta

elcatr iz-c-afiadio-c-, 10 ,pase muy bien enMoscii durante unos anos, MI trabajo eramuy Interesante, 'me pagaban esp!!\n:ild:a-mente y me entendia bien can los rusos.Contaba can sxpertos tngemeros, pero lospuestos de mayor responsabilidad s610eranconftadcs a extran] eros, Creo que 1a ra-zon de ella era Ia gran tmportancta queconcedian al Metro para su prestiglo. 51

algo rasultaba mal, les bastaba eeharles1a culpa a 10:>ingenieros extranjeros acu-sandolos de sabotade. En fin, yo 10pasabaestupsndamente y ganaba mucho dinero.~n el Moscu daentre-guerras, obsesio-

.nado con sus Planes Quinqu~nll,les, smith'y sus companeros, rnstalados v e n - buenospi50S y dlsponiendo de dinero sobrado para:comprar articulos que entonces eran coo-siderados como de gran Iujo y que 5610podian .adqulrtrse en las ttendas reserva-

das a los miembros del partido 0 a losextranjeros faworecidos, tenfan roreosa-mente que haberse singularlzado peligro-samente, Smith poseia autom6vi! y podiaviajar libremente, circunstancla que rno-

tlv6 su cootinuavigllancia por Ta Policiasecreta. Naturalmente, Smith sstuvo mu-eho tiempo sin sospaeharlo. Tampoco Ieshacia gracia Ii . los de I l l , N.K.V.D. que esteextranjero tuviera una amante nusa. Detodos modos, le defaron mueno tlempo enesa lihertad vigflada.-No vi llegar el golpe-Ilos conteso=-,

Cuan-do lIevaba un ana trabaJando conellos, los rusos, sin que yo hublera 5011-cltado na'da, me dob!aron el sueldo, queha'bfa sldo fUado POl' cont1'ato, para de-mostrarme e1 aprecio en que me tenfan.En verdad. habla reallzado una buena la-bor en e1 Metro. A partir de entoncas.me con!le POI' completo.Uoa macirugada, de 1936, €staodo Smith

con su amiga en su piso, sa presentaronvarios a,gentes de la N.K.V.D. Los detu-vier6n a eI y a Ill, joven rusa. Smith norvolvi6 a vi'rla. Los inquHinos de los demasplsos no se enteraron de nada. Al ama,-necer, ocupll ,ha el norteamericano una cel-da en 1a Lubyanka. oue tba a ser su "ho-,gar" durante los sels meses siguientes.Pidi6 repetidas veces que Ie dejaran po-nerse en contacto con la Embajada delos Estados Unidos y slempre se 10 ne-garon.

-Fue un cambio brutal-:coment6 Smithen voz baja-. Un dia era yo un ingenieromagnffi~amente situado y al dia, slguienteme veia tratado como eopfa profeaional,como sf en toda ml vida no hubiera hecho

p,ada mas. La del Metro nl siquiera Bedtaha ya. Par 10 visto, no 8610 h!l!bfan

SEffKJ1JJdP.ot09.~ pUs ~1l1:M;l.O, IlllCg~;rl<!p9n(c~ DI1\FIG ,\EC .s. L. ~·~,,:l::·i.tl. (".1':.'0;"p-o;;;i.b.:(],j

· ;t :: ;, :; _~ ,, -! j_ ,, ,, t· : ;, :y l" ,! _i '_" !; ,. d. :"1:',

f~r,,",,,, C:_;\rl'~,-

mI correspondencta con rni familia. La acu-saclon se basaba en que habla enviadoinformes sobra R'llSia a los Eseadas Uni-dos vallendome de mi correspondencia fa-miliar, El procaso fue una f'arsa. Ma con-denaron a velnte afios, como ya les hedioho. Me conflscaron el cache y todos mtsbienes, de manera que se volvieron a em-bolsar el dinero que me habian pagado

como sueldo.Despuas de una breve pausa, aiia:ii6:-euando estaba curnpliendo mi conde-

na en una mina de dlamantes de los Ora-les, les dije que podia aurnentar la pro-ducci6n aplicando procedlmientos moder-nos de Ingenieria que me eran r i lUY cono-

cidos, pero no se fiaban de mi... a no les

interesaba sacar mas dlarnantes.' Asi quecontinue trabajando como un Simple ml-nero.,Makowski Ie Interrumpio:-iNo penso ustsd nuncaen escaparse?-No he dejado de pensar en ella desde

que me Ilevaron a los Urales, perc llegueII 13 conclusion de que nopodria Iograrlo

,yo solo.!Luego nos .hlzo muchas preguntas sobre

nuestros planes. QU€l"ia tener una idea 10mas clara postbleide todastas posibillda-

, des con que contabamoaftasta aquel-mo-

mente. Insistl6 mucho sobre las distan-etas. iNc. ha'biam08tenido en cuentaque,

EC!OparaJlag'ar a Ia front era de Mongolia,decfamoa-canninar mas de mil serscientosk116metros?Estuvl:mos eharlando mucho

tternpo en voz baja. apenas perceptible,misntras los demis ocupantes del barra-ccn numero 1 pasaban POl'delante de nos-otros para caJentarse junto a las estufas,rcrmando grupos, se quitaban lanieve delasbotas, etcetera ... Le d!Jlmos a Smi~hque le aiyUdarlamos a consegutr una literaen nuestro barracon y preclsamente juntoa las nuestras. Yo estaba ya muy Inquietopor el poco t!empo de que disponiamos y

rogue a mis companeros no oWidaran laimportancia. que en nuestro caso tenia lapri8a.EI nor~amerlcano se puso en pie y se

despidi6 de nosotros.-Adi6s, cabaJlleros--nos dijo, camino ya

de la puerta.!Lostltros aoeptaron sin objt'!ci6n a.J.gunaeste septlmo y ultimo compafiero de fuga.Influ,y6 ttJ;ueho en ben&iclo 51l'YO la Ideade que POdia sernos uti! cuando Uegase-mos a1 mundo de aill ,bla in-gl,esa.Zaro'ledUo:-Me gustarfa ir a los .Estados Unido9

cuando logremos 1a ll:bertad.ISmlbh Ie rep11c6 que Ie encll 'ntaria lle-

Ivarnos a todos a su prus.tA fi·nes·de la primera semana de a:br!l

nos encontrA;bll'mos ya. los siete en el ba-rrac6n numero 1, 10 cual constituy6 untriun{o de organlzaci6n prelim inaI' . Estli.-'bamos reuniendo un buen monMn de pie-les, la. mll\Yoria de ellas a.rrancadas dedonde las ha,bfan puesto It secar, en lasalambta.daB, por Ill, aatuei!!. ;y ra,p!dez deKolemenos en sus freDUehtes salldas al

bosque para. acarrear maderos para. e1 ta-Uer. ,En ,la pletira de amolar que tenfamosen el taller, a'plaste y' afi1e'un clavo de

unos docs cenctmetros, convirttendolo as!en una ne1'l'am!enta mlllY uti! para abl'iragujeros en los duros cueros, Nuestra. co-1;;:cc16nIncluta pieles de marta, armlno,zorros slberlanosy, como, pieza de expost-cion, la plel de un magnifico reno. Cor-tames Iargas tlras de cuero para atarncslos mocasines que nos Iabrtcabarnos denoche. Tl'enzaba'mos otras tiras mas finas'para hacer cinturones. Cada uno de nos-otros se 'hlzo un estupendo chaleco de pte'!y 10 Ilevaba debado de la , ·~ufaik.a", conIa parte exterior de la plel en contactocan la carne. .Para proteger las piernas,nos hicimos polalnas tambl-en de plel.

!Como es natural, temiamos que alzulennos tratcionara, Parecia lmposible que tan.to trajin. tanto pl-eparatl,vo f,ebr!!, no Ila-mass Ia atencion, Debe tenerse encuentaque 51 uno de los Pl',lsioneros nos hublesedelatado, los rusos le habrlan aumentadoccnslderabsemente Ia'racl6h de pan y ta-baco. Pero, a:fortunadamente, no hubo Ju-, das alguno, 'Es mlllYprobable que aQ.ueU05que estaban a1 tanto de nuestro Pl'O>Y'fcto,noscrsy:eran locos y pensaran que 'bas-tantecastitgo iba a tener nuestra locura,Nos daban POI' muertos de antemano. Detodos modes, eran poq:wisimos los Que sa-btan 0 sospecnaban nuestro proyecto. Para.la Inenensa rnayorfa nada de particulartenia que robasemos pleles a los ruses y

que las uttlizasemos como se nos antojase,En el barracon nos mantenfamos 10 masaparte que podiamos, y las conversaclonessarras las eslehrabamos en la zanja de laslstrtnas.,En la prlmera ocasl6n, le .dlje a la es-

posa da Oclhakov quecontaba ra con selscompaneros de fuga. No ms pregunt6 qule-

nes eran y creo que no le Intsresaba sa-bsrlo. Me hlzo un regalo que habra deresultarnos de Inestlmable valor: un hacherstn ,e1mango). AI entregarmela, me d!jo:-E~,to pesara socre mi c{)ncl:encla todD.

mlvlda. Es 10 prlm-ero que ,he l'crbado.Le hice un mango y Kalem-enos Ill. e s-

er-ndl6 colgandose1a. de la. parte posteriords 1a pretina de, .sus panta!ones. otro uti-Ifsl1moinstrumento que fa.brlqu* en el ta-Iler de, los esquis r u e un cuchUlo, cuya.

hoja. tenIa sels centimetros de an-chura ycerca de 'cuarenta de 10TI'gltud. Lo saquede un tr020 roto de una s1-erra vleja. Localente en Ill ,estufa del tEj:11e1',e 1 1 1 formaa martillazos y Ie aIDe en Is. piedra deamo1ar. EI mango estaba formado por dos:peda,zos de ma'~el'a solldamente atados conlargas t!ras de pie1 de ciervo. KoIemenosera., ecmo h'e dlelho, el en,car,gado del ha-Cha; a m! me COrl'espondio 11evar e1 cu-dhJ!1l0. F.stos objetos podf.an costarnos mut\'caro slnos los deseubrlan en e1 Call13lO.Bastaria que nO's encontrasen e1 !badha 0el cuc!h11llopara Que todo eo l pJan se vl-nIes:; atbaJo, per Ie pronto; luego, el ~s--tl.go seria espantoso, 'IN'os pJanteamos el problema de c6mo

encenderlamos fuego. En el Campo 303,losf6Bferos ~i:an un luJo, peTO exlstfa. unanetodo primitIvo, que conslstfa t".n util1-

zar un tlpo de hongo mlllYgrueso, que losrusos Ilaman "W~"i' .0 sea ,p!;pontla.Tralamos del ·wEque una buena ]Jrovisi6n

- r . ~ : ~ - ' t ; : ~ . '~ . O O ~ t l ! l ': f '~ r ~ H ~ T ' ) '~ oc i C'I'>,':,-, ,i", 1-··

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5/15/2018 La Increible Caminata - slidepdf.com

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(Continuaci6n:)

nto en que 10 conoetmos, miste Srmith."Mister" fue aceptado como un sus-attvo de ese nombre que nunca nos re-6.Jna Iivida cicatrtz le cruzaba la cabeza" detras, hajando de dereeha a izquier-desde la coronilla a la nuca: una ci-

.rtz de casi veinte centfmetros. Nos ex-co que se lahabfa producido e1 derrum-.:niento de un andamiaje en la construe-n del Metro de Moscii.-Aparte del accid ente a1 que deboestaatriz-e-afiadio-c-, 10 pase muy bien en)SCu. durante unos afios. Mi trabajo eraty Interesante, 'me pagaban eS'p!en::Ud'a-

.nte y me entendia bien con los rusos.ntaba con sxpertos ingeni eros, perc lossstos de mayor responsabiUdad solo eranliiados a axtranjeros. creo que la ra-1de ella era la gran i'mportancia queicedian al Metro para su prestiglo. 51

:0 resultaba mal, les bastaba echarlesculpa a los ingenieros extranjeros acu-idolos de saootade, En fin, yo 10 pasabaupendamente Y ganaba mueho dinero.i:n e1 Moscu de ientre-guerras, obsesio-d o ccn sus Planes Quinqu~na1es, Smithsus companeros, instalados en- buenosas y d1sponiendo de dinero sobrado pamnprar articulos que entonces eran con-erados como de gran lujo y que solo:ifan adqulrlrse en las tiendas ressrva-) a los miembros del partido 0 a los.ranjeros favoreoldos, tenian rorzosa-mte que haberse singulartzado peligro-nente. Smith poseia automovtl y podiajar Hbremente, circunstancia que moo.~ su contlnuavigilancia POl' la Policiareta. Naturalmente, Smith estuvo mu-I tiemno sin scspecharto. Tampoco les

:ia gracia Ii . 10'S de Ia N.K.ViD. que esteranjero tuviera una amante rusa. Deos modos, Ie deja,ron muoho tiempo enUbertad vigilada.~No vi Ilegar el golpe-:nos confes6--.mdo Ilevaba un ano trabadando conIS, los rusos, sin que yo hubiera soli-ldo nada, me dablaron ~l sueldo, que

II a sido fijado POl' contrato, para de-~trarme el aprecio en que me tenian.verdad, habia realizado una buena la·en e1 Metro. A partir de entonces.conf1e POl' eompleta.rna madrugada, de 1936, €stando Smithsu amiga en su piso, se presentaronloS a,gentes de Ia N.K.V.D. Los detu-'on a e1 y a 1a joven rusa. Smith nori6 a v<'ria. Los inquHinos de los demas)s no se enteraron de nada. Al ama,-er, ocupaba 81 norteamericano una oe1-en Ia Lubyanka, que tba a ser SU "ho-.. durante los sei" mese'S sigulentes.l6 repetidas veces que Ie dejaran po-se en contaeto con 1a Embajada deEstados Unidos y siempre Se 10 ne-

: > D .- F u e un cambio brutaI--coment6 Smithvoz baja-. Un dIa era yo un ingenieromfficamente situado y a1 dfa. siguienteveia tratado como espfa prorfesional,

10 sf en toda mi vida no hubiera hechoa mas.Lo del Metro nl siqulera B e

ba ya. POl' 10 vista, no sOlo haibian

!{dfu~O~P§a~1s ~/~~', 1lf:J@ga81;if t l J PnDIl.PIC )\BC~~~.::._i~l:~:_'~~,~,-,,~::~:~._Q~~~-S:.,~j:;'.:~~ibid;.l

unos doce cencimetros, convirttendolo as!en una hierramienta mUJYutH para abriragujeros en los duros cueros. Nuestra co-Ieeclon Incluia pleles de marta, armino,Z{)!TOS slberianosy, 'Como,pieza de expost-cion, I l l , piel de un magnifico reno. Cor-tamos larses tlras de cuero para atarnoslos rnocaslnes que nos fabrlcabarnos deneche. Trenza.ba>mosotras ttras mas finaspara hacer cinturones. eada uno de nos-otros se 'hizo un estupendo ehaleco de p1oe'ly 10 Ilevabg dfle-adode Ia , ·~fu!aika". con1a parte exterior de la pie'l en contactocan I l l , carne. Para proteger las plernas,nos hlctmos polainas tambien de plel.

Como es nabuiral, temfamos que alsuiennos tratclonara, Pal'eeia impos11JleQue tan-to trajin, tanto preparative. tebrll, no 11a-mase 1a atenclen. Debe tenerse encuentaque sl uno de los prjsioneros nos hubiesedelatado, los rusos le habrian aumentadoccnslderablemente Ia :raclon de pan y ta-baeo. Pero, arortunadamente, no hubo Ju-. das aizuno. 'Es ml~ 'Probable que anuellosque estaban a1 tanto de nuestro proY'e'cto,nosersyeran locos y pensaran que bas-tante·castilgo iba a jener nuestra locura.Nos daban par muertos de antemano, Detodos rnados, eran pO'Q:u!slmoslos que sa-bian 0 sospechaban nuestroproyecto. Parala Inmensa mayorfa, nada de parti-culartenia que robasemos pleles a los ruses y

que las utilizlisemos como se nos antojase.En e1 banRz6n nos manteniamos 10 masaparte que podiamos, s las conversanionessarlas las celebrabamos en 1a zania de lasletrinas.·En 1a prlmera ocaston, le ,dUe a la es-

pnsa da Ucllakov quecontaba ya con selscompaneros de fuga. No ms pregunto qule-nes eran y creo qu e no Ie Interesaba sa-bsrlo. Me hlzo un regale que habia deresultarnos de Ine£timable valor: un haena(sin el mango) . Al entreaarmela, me di10:-E~to pesara score mt conctencia toda

mlvlda -; Es 10 prtmero que he robado.

Le hice un mango y Kolem~nos la es-c~ndi6 oolgandosels de Ill. parte posterior

,de Ia pretina de sus pantalen,es. otro uti.Usmo instrumel1to QUefa.br1:queen e1 ta-ller de. los esqu!s r u e un cuc,htllo, cays.hoja tenia seis centimetrosde an,chura ycerea de 'C'Uarenta.de longitud. La saqu6de un trozo roto de una sierra vleja., Lacalente en Ill.estufa del te,:ller, 1e d1 farma.a . nlartillazos y Ie aIDe en la pledra' deamolar. EI mango 'estaba farmado por dos:peda,zosde mali,era s611damente atalias contargas tlras de pie! de cienvo. Kolemenosera, cemo he dldho, el en,ca:r,gada del ha.-dha; a mi me corl'e!,pond16 llevar el cu-dhl!l1o.EStos o'hj~tos pod·Ian costarnos muwcaro sinos los de!'cul)rfan en el C'aJm)O.Eutana que nos encontrasen el iba,c!ha0el cuc!hl!llopara que todo e1 plan se vi-

nies~ aha-jo, por 10 pronto; lu£go, e1 cas-ttgo sena espantoso. .

IN'os planteanios el problema de c6moencenderfamos tu-ego. En elCampo 303,los f6£Jforos tli"an un huo, peTO exlstia unmetoda primitiv~, que consistfa en utili-zar un tipo de hohgo mUJYgl'ueso, que losrusos. llaman :'1gub(k;a ''_- .0 sea ,p~ponlja.Tl'a:iamos del ,bosque una buena pro-vision

p '. " C '. ', " " rj '['c'o"', cr" C : C ~ ' ' '' ' '''-'1':,,",1', p·:,h" ','," j 'l'cza",ii;r',(C!o1iffnfltLY"t':), ,i,

mi corresoondencta con mi familia. La acu-saci6n se basaba en que habia envladoinformes sobra Rusia a los Est,ados trnt-dos vallendome de mi correspond encia fa-miliar. El proceso fue una farsa, Ma con-denaron a veinte atios, como va les hediClho.Me connscaron el cache y todos misbienes, de manera que se volvieron a em-bolsar el dinero que me habian pagadocomo sueldo, .

Desptres de una breve pausa, afiadlo:-Cuando estaba cumpliendo mt conde-

na en una mina de diamantes de los trra-1es, les dlje que pcdia aumentar 11'1,pro-duccion apltcando procedimientos moder-

nos de Ingenierfa que me eran muv cono-eldos, psro no se fiaban de mi... 0 no lesInteresaba sacar mas diamantes.: Asi quecontinue trabajando como un simple ml-nero.,Makowski le Interrumpto:-GNo pensuusted nunca en eseaparse?-No he dejado de pensar en ello desde

Que 11):elevaron a los Ura1es, pero llegu'ea Is conclusion de que nopodria Iograrlo

~oisolo.lI..'Uegonos hizomuchas preguntas sobre

nuestros planes. Quel'ia teneruna idea 10

maselal'a posiblede tod~5JB.S posibilida-~ deseQ.[l que contabamos ,hasta aquet.mo-mento. Insist16 mucno sobrelas distan-cias.G;N'0ha'bfamostenido en.cuentauue,1:010 parailegar a Is . frontera de Mongolia.decfamos .•.anninar mas doemil seiscientoskilometros?' Estuvrmo$ '••charlando rnucnotiempo en v.oz baja, apenas perceptible,mtsntras los demls oeupantes del barra-ccn numero 1pasaban POl' delante de nos-otros para calentarse junto a las esturas,fcrmanjo grupos, se quitaban Ianieve delas betas, etcetera ... Le dlllmos a SmHJhque 1e alyudariamos a conseguir una literaen nuestro barracon y preclsamente juntoa las nuestras, Yo estaba ya muy InquietoPOl' el poco tiempo de que disponiamos yrogue a rnis compafieros no oWidaran Iaim.portancia que en nuestro case tenia laprisa.

'El nort-eattlerlcano se puso en pie y Sed'espidi6 de nosotros.-Ad16s, eaballieros--nos dijo, carnine ya

de 1a puerta. '!Los otros aoopta~on sin tlbjeci6n alguna

este ~-aptimoy iiI'tittlo eompai'iero de f'l1ga.Influ,yd lD;uche en bent'lftcio suyo 1a idea

de qu,e podia sernes iitil cuando Uzgase-mOB a.l mundo de friabla in'gl'l!sa. Zal'o' Iedljo:-Me gustarfa 11'a los Estados Unldoll

cuando logremos 1a Ubettad.tSmitlh Ie replic6 que Ie encantaria lle-

Ivarnos a todos a su pa~s,iA fines' de la primera St!ttl'ana de a;brll

nos enccmtra:bamos ya los siete en el ba-1'rac6n numero 1, 10 cual constltuy6 un

triunfo de organizaci6n preliminar. Estli-bamos reuniendo un buen mont6n de pie-.Jes, Is. ml1\Yorfa de ellas arrancadas dedonde Jas ha,bfan puesto It seear, en la.salambt'adas, POl' 18. astucia ;Y ra.pidez deKoi-e1nenos en sus frecuehtes salida:!! a1bosque para. aCarreaT maderos para el ta-Uer. ,En Ia piedra de amolar que tenfamosen e1 t.l,11er,a 'plast~ y' afi1~un clavo de

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iContinuaoion.;

A

de "gubka" para henvirla IY secarla. El

equipo encendedor se completaoa con un

clavo doblado y un pedazo de pedsrnal.

Llevrubamos en Ios bnlsullos del ehaquetonuna buena cantidad de "gubka" seca, en

la que prandian en seguida las chispas del

pedernal. Los slete nos acostumbramos a

usar este procedtmiento.' y nos funcionaba

tan bien como el mas moderno mecnero.

Nos enterarruos de que faltaba solo una

semana para el domingo de .Resurreccion.

~aia el 1 :3 de ab·ril-en aquel afio de

1,941-, segun he cornprobado luego. ~l

domingo anterior, 6 de abril, terminamosnuestros preparatives. Teniamos complete

<nusstrc "guardarropa" ·d·efuga. Nos ha-.tiamos heeho slete gonos de pi-el-tipo

"balak!aJva·"-. con una extension por de-

·tras para pcderla meter POl' debajo del

cuello del ehaqueton.

(Esta.bamcs todosen. tension. dispuestcs

·a partir y preocupadislmos POI' nuestras

flamantes pcsesiones: las pieles, el haena,

el cl1chHlo, las reservas de pan desnrdra-

ta:do... Temiamos que .pudi-eran robarnos

nueatros tesoros a ultima hora. .

\AIqueJ domingo. Uchakova me mando

llamar y me anuncio:

--'Mi marrdo se ,ha marchado a Yakutsk.

Por eso no ha asistrdo a la revista de hoy.

He heoho siete mocmlas aprovecriarido

unos sacos vtsjos. Tendra. usted que He"-varselas una. cada vez. .

iEE.ta.oa·mll\V trancuna, Su calma me

admire. porque yo, en cambio. me haillaba

excitadisimo. Parecfa que el coraz6n seme iba 11 sa:lir por la boca, t:uando me

entrego la prtmera bolsa vi que 11abia me-tido en eUa provislnnes y me pregurrte

como me las arreglaria para llevarla sin

infundir sospechas. Por fin, decidi que 10

mej{Jr sera apretar !a bolsa debajo del bra-

ZOo POl' dantro de la ohacueta, meterme

las manos en los bolsillos y dlrigtrme ha~

·cia las. cabanas mclinado .hacta delante,

eomo quien ests. mu(\" cansado y aburrido

de la 'Vida. Rice esta peligrosa exeursion

"eis veces mas en los dias si'gmentes. conla seguridad, cada ve~. de que 5i m~ des-cubria un ruso. el desastre serfa inmediatoe inevitable. :Mortunadarnente, pudim{Js

.tener reunidas las seis mochilas. Hicimos

con ellas a!mohada·s. cubriendolas con res-to.; de pieles. Cada minuto de los que pa-

sa'bamos fuera de nuestro barracon era

de una terr.ible angustia. Sud:'lbamos solo{)on pensar que quizas en aquel momenta

estarian descubriendo nuestro d-ep6sito.

:En a.quellos Ultimos dias adquirimos una

guerrera deseehada de w1dado. ,Era de

piel de oV'cia, Les conte a 'mls' companerosel truco que me habia ensenado Un viejo

cazador furtLvo: arra&trando a clerta dis-

tancia de uno, con una cuerd·a. una pie!de oveja, los perros de 'los guardacazas se

despistan y no percl:ben el 0101' humano.

Propuse que utlUzase.mos ese trueD. A to-

dos les pareei6 bien.

.Estabamos pendientes del tiem])<}, que

era esencial para nuestro prop6sito. Nece-

sitabamos una buena nevada, de copos

gran des, para cubrir nuestras huellas. ElJunes am~necio despejado. El martes ha-

SEVILI,A (Sevilla)

cia viento y el suelo se cu'bri6 de una nna

capa de hielo. A rrrediodia del miercoles,unos nubarrones plomizos, muy bajos, nos

Infundieron esperanza. En efecto, effi!P€2:0a caer una densa navada, 'que se fue acu-mulando en la "tierra de nadie" entre nos-

otros y la alarnbrada. ;En el descanso de

mediodia nos reunimos los siete unos ins-

tantes. Decidlmos que aque1 era el dia ade-

cuado, A las cuatro de la tarde sali del

tailler de los esauis con mi traoaln termi-nado y con mi "f'ukaika" atiborrada de

pan tos tado .. Tambien Ilevaba el cudhillo

sujeto contra la pierna dereeha por la

,tela. Sont!a el . frio de Ia hO.ia. Beotmos e.Jcafe caliente de la tarde, cornimos algode la racion de pan de aquel dia y entra-

rnos en la cabana sin formal' grlI])o.

Para ponernos de acuerdo wore los de-

talles de Ultima hera, hicimos frecuentssviafes a la zanja de' las Ietrlnas. Smith

a,coillE-jOque no debiamos salir demaslado

pronto. Era precise que el Campo estu-viera completamente tranquilo. entregado

Y'a al suerio, antes de 'que tnlciasemos la

fuga. Las doce de Ia noche seria la rnejorhora, opinaba Smith. Mierrtras tanto, de-

bfamos esforzamosen aparentar una ab-soluta indifereneia.La bendita nievese-

guiacaJyendo cadavea corr-mavor Inten-sldad, cubrfendoloitodo.

.IZarotuvo la disparatada idea-s-dispa-

ratada a primera vista-c-de cueaststrera-

mos a Ia clase Politica del POlitruk.ya'que era prectsamenta miercoles. Al .prin-cipio nos reimos.·· pero'Makowski dijo:"lPor que no?" Y alla fulmos los siete,

dEjando nuestros tesoros escondidos en las

literas. Procurabarnos darnos conftanza:

no era posible que en los ultimos momen-tos fuera a fastidiarse todo, Nos sentamos

en el banco del fonda y el Politruk nos

dedlco una complacida sonrrsa. Le devol-

vimos muy ccrteses Ill. sonrtsa y tratamos

de estarnos .muy .quietos, como si Iarnas

nubiesemos pensado en fu·garnos. Despues

de todo, Ill. idea de aSistir a Ii clase po-

litica habia sldo mu'Y buena para despis-tar si a~guien sospechaba algo.

Nunca he asi-stido con tanta ·emocion a

un mitln. politico, aunque el elemento

emoc::ional se debia mu'Ypoco. en este caso,

al orador. El Politruk, que a110ra era co-mandante dcl .Campo en ausencia del co-

Tonel U.::-j1a'kov,estaba en forma. Escucha-

mos una vez mas las alabanzas a los ml-

lagros .que operaba el Estado sovietico a la

extraordinaria d!seiplina .que ma:ntenia,

funclonando como un relo-j, a todo el felizpueblo ruso, para conseguir que fuese una

rea1idad el glorioso iciea! internaciona,l del

{)omunismo. lY qUe dijo el glorioso ea-

rnarada Stalin a sus camaradas obrerosde las granjas del Emdo, en 193'8? Ell-

tonees, un soJdado se levanto como un mu-neco meewnico' y reeit6 las palabras que

eJ eamara'da Stalin, padl'e \lnico de todos

los pueblos para toda Ja eternidad, habia

pronunCiado en a:quella historica oeasion .

EI POlitruk nos coloco todo el disco: lacultura sovietica, la decadencia {)apitalis-

ta ... Para nosotros eTa su discurso de des-

pedida, y 10 escuohamos devotament:e. Enel fondo. 10 estabamos pasando bien.

. A Ill. hora y media se termino la clasepolitica. Nos levantamos los slete.

-Buenas neches, m! coronel-i-exclama-mas a coro.-IBuenas naches-nos respondio.

Cuando regresamos a I l l . cabana mime-1'0 1 se estaban preparando para pasar la

. neche. Quedamos en que Smit!b. .y Zaro

nos darian la sefial. Ocupaban las literas .

mas proximas a Ia puerta. Nos rfuimos cadauno a su litera. Seis de nosotros estaba-mos completamente dsspiertos, esperando

el momento de partir. Uno solo se habiadorrnido ; el giganteseo Kolemenos, que

roncaba rulcosarnente.

'Tumbado en la litera, 'pense en 10 que

nos esperaba mientras eseuchaba los ve-

loces latidos de mi corazon. Recorde que

no me habia despedido de la esposa del

coroner UOh!i .kDV. Pero llegue a la conclu-

sion de que no deseaba que me desrndrese

de ella. Pasaban las horas con lentitud

desesperante. De vez en cuando a1guien

rcncaba mas fuerte, se despertaba apenas

y volvia a dormirse en ssguida. Otro 'ha-

blaba confusarnente en suenos, Uno se le-

vanto.para reavivar el fuego de la estura.

que estaba muy ceres de su litera. pero10 ruzo medio dormido y se inrnovihzo alos pecos instantes.

;Smitlh me dlo unas palmaditas en elmombro. Dijo: "A!hoia."

Movi suavemente a Kolem-enos. "Anora",

repetL

x

,SliET.E HOMiBRES CRUZAN EL RIO

ilJENA

Tiramos de las mochtlas POI' las correas'que les habfarnos hec'ho para colgarrios-

las de los hombros..Luego amontonamosel mussonue cubria 'as .m~ra-s de mane-ra que abultase.

-lTcdos blen?-murmure.

--:8i-ifue la respuesta, como un leve sll-

bido, de mis seis compaiieros.

-.Nadie se al'replen.te?

Ninguno me I'espondio. Makowski dijo:

-Vamos ya.

:Deje caer roi mochila cerea de la puerta

y me asome a1 exterior. El Campo estaba

en a'llsoluto silenclo. Neva.ba con la misma

intensidad. No pude dlstinguir la alam-hrada. mas proxima. En la torre de vigl-

laneia del angulo sudeste-de donde podia

venirnos el peligro mas ·eerio-no hubieran

podldo distingulr mas alla de veinte me-

tr05.En aqueUa oeasl6n comprendlmos la

€xtraordinaria suer·te que ha'biamos tenidode que el Campo {)areciese de electricidad.

Slempre nos habiamos quejado, sin pen-

sar en esto, de 111.alta de agua eorrientery electricidad. \N Q habia, ,pues, reflectol'es

'que temer.

!La alambrada in.terior se ha1naba a un

{)entenar de IIl/e·tros de la puerta del ba-

rracon numero 1 y el buen exito de hpri-

mera parte de nuestra operacion tenia que

basarse en una obsei'vaci6n que habiamos

!heoho: la parte inferior de la alam-brada

no se ajustaba POl' aquel sitio exaetamen-te al contorno del suelo. Sobre todo. ha-

(ContinuuraJ

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(Continuaci6n.)

:l

btamos vlsto que, en determinado lu)rs.r.

quedarfa casl un metro Iibra 51cavabamos

1 a nle,ve bado el alamore espinoso.

lSaliinos uno tras otro, con un minuto de

Intervalo. Zilro par.ti6 el primero Y rece

para que encontrase de prlmera Intencionel srtlo exacto. Luego fue el lltusno. Des-p-®s, mister Smith, sesurdo POl'Makowskiy :Paluchowlcz. Kolemenos se volvi6 hacra

·m f y me dijo en un susurro:

-Espe-ro que habran hecno un boquete10 bastante grande para que pueda yocaber .:

y se IIJeJ6, como los otros, llevando su

mochiIa POl' delante, dlspuesto a meterla

por el boquete antes de pasar &1, como!ha!biamos comvenido que hiciese cada uno.

Me habia Ilegado el .turno. Mesuda;oan las

palmas ·.de las manos. Antes de empezar

a andar. lance una ra,plda mirada a ml

alrededor y nacia dentro de la cabana. To-dos dormlan paciftcamente. Me lance r8. . -pido nacta la alambrada.

CUando Uegue estaba pasando Smith

POl' d-ebajo de ella. B e retorcia Ientamente

para ampUar el hueco. Dos habian pasado

~a. L o s demas esperabamos ten didos en

el suelo, T1;anscurrieron unos minutes an-

susnosos, mlentras el sargento y M!akows-ki grufifan y ha:cfan terrlbles esruersos

para pasar per debajo del alambreiespi-noso. ouandc Ia enorme mole de Kole-

menos se ianz6 de cabeza poi: el boquete,contuve la resplracion. Estaba ya 'por la

rnttad cuarrdo los pinc'hos se Ie enganoha-,ron entre los omoplatos. Se sacudi6 sua-

vernente, pero 5610 eonsiguro que los alam-

ores tlnttnearan musicalmente con los cs,..

rarnbanos de hielo que tenian adneridos..-No Be mtleva, Anasta~l~le dlJe-. No

se mueva en a.bsolute.

\A:l otro lado algu1en estaba. tlrando del

alambre. Pasalban los mInutos. Yo tenia

una terrible tensi6n de ner.vios. Koleme-

nos permanecfa inm6vl!l, mlentras el otro

tra'taca ae apartar su espa:lda del aiambre.

Algui!!n habl6 del Tado de aJla Y nUI!&trog1gantesco CO'Inpafiero pudo por fin pasar.

iJ!:Jdhale un profundo suspiro de' aUvio y

pase yo tamb1Em.. E1 prlm:er obstaculo nos

ihabia hedho perder 'Veinte minUitos.. Arro-

dillados al ,borde 'del foso seco, contem"

pla:bamos la~ mole de 1a empallzada, la

primera. mteilitras Kolemenos baJaba. a1

foso 'Y se disponfa a ha·cer de puente. ~os

fuepasando a todos 1 1 : 1 otro lado, forman-

do un esca16n can : S U s poderosas manos en

copa. Nos haIlllibamos al pie de la empa-

lizada interior, de casi cuatre metros de

altura.. 'Perdlmos otrobuep. rato en sacar a.

Kolemenos del f05O. Una vez conseguidoesto, el giga,ntesco compa:fiero se situ6 con-

tra la emPalizada Y cada uno ,de los delnAs 'se fue subiendo a sus Ihombros y, emplniln-

dose, se lIigarrllJba ll.l 'borde de la valla. ry

subia. a. julso, ctuedandose de pie en el sa-

liente del refuetzo. del otro lara. para 8!yU-

dar a los que Ie selgUian.

(EI hombre ...ancla, Kolemenos, volv16 aplantearnos elmismo problema: habia que

jzarlo. A horcaOladas en el borde de Ia em-

paI!zada,a-segurando nuestras ·piernasa;pretand.olas bien contra. la madera, Ma-

~~!,,J1'11~ry~ ~mipA~~~8f:lg~nt,p~~ 10 mas=:::'_:'.::::. S.:"', "';?'..i:ri'..1, ?~: '~9. V_H';j., .ip'r '.)LLbi:i: '; ::.",

:='),;,l_quil,:r ~:D_::T!k !:\,::·.j~:Ii(_l"'ijJ 2~!-:

1~,"';::i5;:_;:,s. dE! r.;_-'~r;::';] c'(::~ fin."f'

que podfamos s tendiamos un brazo cadsuno 'para tlrar de e l . POl' eres veees le tu"

vlmos cast tocando el borde, pero las tresveces nos vimos obUg;ados a delarlo caer.El terrible esruerzo nos tenia. Jadeantes y

desesperados. El bueno de Kolemenos, por.

:fin, did un increLble salta, que le perml-

tlo, uniendo S11 Impulse a nuestro t11:6n,aaarrarss bien a1 borde de la empali!1iada:.

Para burlar el obstaeulo queisupome Ill.nueva alambrada que bordea'ba el pie de

Ia parte exterior' de I l l . prlmera ·empaUza.-

da, nos Ianzamos con el 'mayor Impulseposlble para caer sobre Ill. nleve. Ca1mos

en menton, y . s610 dos de nosotros rozaron

el alambre retorcido y lleno de pinclho8,

pero no se hlcleron mas que aranazcs su-

perflciales,

INos hllillabamos. en el caillej6h de la

pa trolla, entre las dos empaliaadas, !y se

nos estaba haclendo tarde. Es pO&libleque

.no estuvleramos haeiendo ruldo, pero a mfmeparecla que rormaoamos tin estruendo

ensordecedor y que nos iban a otr de todo

eJOampo. Emprehdimos el asalto a 111.se-gunda empa.Jizada.. Fufyo el Ultimo ensu-

.bir y Kolemenos tiro de mi. As! fue" mas!tacil que la ..yez anterior. Luegomos Ian-

2iamos todos,.c'on el llliBIYorImpulse post-ble, mas a'lladeLrevoltljo de 31e.mbre es-

pinoso que form a'ba elultimoobsta.:culo,

-a.lpie de 18."empal izada ••exterior, 'Cai£n'los

decua'lquiermodo, nostUlmos lewantan-,do,pl'eguntamos sl todos estabanjnen y,

como de comun acuerdo,' empeaamosa co-

rrer, ludhando can Ill. blandura de Is. nieve.Yo Ilevaba enrollada. a Ill. c1ntura Ill. viefa

guerrera de piel de oveda, Lasolte y la

senti arrastrarse detras de mi·al extremede Ill. cuerda que ·m e at'tj, a la mufieca ..

Ja:deiLba.mos, sopla,bamo& y nos caiamos

a cada momento, pero no dejfl:bamos de

correr par el bosque fantasma:l-todos .sus

ar·boles convertldos en ftgums de. nieve-,

alejandonos del Campo. Asi Be nos pas6 Ill.nache y cuando amaneeio todlWla lWan-

zabamos con las moclhilas golpeB.ndonos en

Ia espai1da. .A!penas nos habfamos detenido

un minuto para' recobraT' aIJento cuando

los hice COl'l'er ;de nuervo, y asi hasta las

oncl! de la mafia·na. Nlng·uno de nosotrollpodria ya ha,ber aivanzado un solo paso

mas. Recogi el' engafla.,perros que hScbIaIdoarrastrando todo el .tiempa y 10 $Os-

tuve ba'jo el brazo. Nos observamos los

unos a los otros. PaluilbowlOZ estabs. do-

,blado, con las manos apoyadas en las ro-

dmas. '8e a:fanaba desesperadamente pal"

l"ecobrar Ia respirac.l6n normal. Otros dos

estaban en cucll:l1as. Todo.s teniamos Ill.

lengua fuera, Ja;deandp cOmu animalesa,gotados.

'Nos encontra·bamos en una depresl6n del

terreno-parecia el .fondo de una cOPa-

W par all!! habia me·nos. a.r;qoles. En reali·

dad; estabamos descaIL5ando, porque. nos.

Ihabfamos ca~do en aquelia hondona.da y

nlrugun.o d. e nOsOtros tenia. Ie . energia sti-

.fl.clente, sin d-escansar antes un poco, paratrepar ihasta. el borde 'Y cohtinuar. Pasa-

.mas en roquel s1tio' unas dlez minutes, de-

.masiado eldhaustos para hablar Iii una pa-,labra. y sudando, a pesa-rde la temperatura

-glaclal. Segura nevando, aunque menos que

. t t : .

'Po.r Ill. neche, 'I I por entre los B.l'bolei I te '-mfa tin viento que sacudie, las quejum-

;brosl'ls ramas, Co.mu anlmales persezuldos,

·a.guM:bamos el bIdo wr I'll sonaban ruldosde eaeerfa. 1r<0 s - e no s qultaban. del pensa -miento los perros del Campo. Pero 8610<1iM:ho8el vlento, el susurro de Ia nieve ~

' los dhiIlrl'1105 de las ramas.

iA. J;luestra. lZ!tulelltia,. en 1 0 alta. de la

pendie·nte •. habia m~s h,boles.

_ ,A lh i estaremos mejor-dije-, es un

ibuei1 refugio. H I l l Y menos probabiUdades de

kj,ue nos veaei,\Mgunos protestaron. Estaban demasiado

canaados .'Para. hacer ni Uh pequefio ea-

!fuer.z{).Pero eini l lh me ,aPOY6:

.--:RaWicz tietle l'az6n-dljo.

Oatesmos 'luIsta ar·rIba, 'Y , ya fuera del

ihoyo, nos lristl11amos entorno a. la aneha;base de un ehorme Ikbol. Retiramos la

nteve que rodeaca al al1bol y eonstrunnosun muro circular s61ldo, y baJo, Kolemenoscort6 unas ramas eon su haena. y las nu-slmos rormandoteeho, cubriendo luego larudlmentarta tecihumbre con mas nieve,

Nuestras .peI1ll!l ld.ades en Siberia nos ha-bfan ensetiado que, ante todo, 'habra que

deterrderse del viento, porque el viento esel que ma.ta. tEl viejo osbyako mejo habra

dlciho:

~llLa nleVe? i,Qulen se preocupa de la

nleve? En.-vuel'llase usted en eQla'Y dorrnlra .

caliente como 'en tin leoho de plumas..Fue entonees cuando vlmos POl'primera.

wez el contenldo de nuestros paquetes.Cada uno de nosotros tenia una esoecie-de torta, un poco deba·rlna, unas cinco

itbras de cebada, un poco de sal, euatro

o cinco onzas de taoaco "iIl:!or.!jki" y pa-

pel viejo para. hacer'10s cigantllos. Todo

esto, ademas del pan tostado que yo ha-.

.b£8:ido altnacenando. 'En In parte alta de

la mochlJa ll-evlibamos los moca$ines de

TeSel'V,ay los retazos de pie! que nos ha.-

Ibran sobrado. Nos apiftamos en Ill. casita

,de nleve ." 1 ramaje Y ha:blamo!; en voz muy

'b-ade,. No aee.bablJ:mos de 'pcmernos de

a·cuerdo sobre Iii debiamos fumar 0 no ..

,pOl' fin. d'ecH1imos. que 'el :riesgo adicional

que esto llIlIpUcaba era demaslado pequefio

para prlvar de este beneficio a nuestros

·n'e rno.!! , que parecian estar IVlbrando de

.ta.n el!)cltados. De modo que fumamos Yliils et1voh1inos en eltlblo humBlo azul.

A una dlStan.cia ,tan escas.a del Campo,

relatiJvamenti!, no, habia qUe pensaT en en-

Cender una hog.uera. ~os contentamos con

comer .......lfcon qu~a:pet1to!-un poco de

lOan, Y al ihacerlo hiclmos e1 descubrlmien-·t o de que el sargento de C'a;J)a·lleria Palu-

MOWicz no. tenia. tti un solo diente, nf una

'sola: muela, :Le oostaba un terrible emuer-

zo comersa llquel pan tan duro. EI unico

remetlio era mojarlo, .pero como no habiaagua. 1 0 0 hlzo como pudo, con Ie nle!Ve. .

. ~'1'enia una dentadura espleridida' cuan-

do me hicleton pttsionero cercn de Be]YS-tok-nos contO--, Luego esos perros de la.

N.K.V.D. me de:laron la' boca sin un hue-so. Me ha.cian sa,ltar los dientes a golpes.

Este ,juego Jes llacia mucha gr·acia, pero

YO no me he. refdo, creanme ustedes, cuan-do hetenido que roer el pan de 1 9 . pri-.,16n. Ml mS!)Tor llusi6n es, en cuanto lle-

. .'. ;,,'cdC.op.tinUtlTliJh,

Page 29: La Increible Caminata

5/15/2018 La Increible Caminata - slidepdf.com

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(ContinuaciOn.)

guemos 11 0 un sltl0 ltbre, iha<:erme una bue-na; dentadura postlza.-Pues pediremos que te la 'POngan toda

de oro. Te 10 has menecldo-c-dl] 0 Ze.l'o.!Nos refmos y el proplo Pa-luohowle-z se

ri6 ttambteIi.Dormlmos durante las restantes horas

del dfB. . turnandonos para vlgl lar , EI queesta~ de guareia se sltUa:ba junto a 1ae5treoha entrada ..Kolemenos •.como un nl1'1oque ha jugado mucha. se dur-ml6 en se-'guida 'beatliflcR'mente ry ronco de un modoque hB.'sta parecia musical. Haldie t,u'Vo1aerusldad de despertarlo pal'it que hitlietasu turno de guardia. El lituiino March1n-kovas nos desperto a todos cuando empl!-

\-zaloa a oseurecer .. Com1mos un poco masde pan, rumamcs un clgarriIIo cada uno'Y saUmos arrastrandonos. Apenas si ne-vaba ~a 'Y se estaba levantando viento. Eltrio' era Insoportable y todos estabamosentumeerdos, como de eorcho, :fsi sentla-mos el cuerpo, Era porqu-e cl dolor nospiru:ha.ba POl" alguna. parte con demasia-da Intensidad. .'Los s!ete sablamos perrectatnente que

era ursentfstmo que salleramos de laozona .. del Campo 303. Durante todaa'C}uella se-gundiL noeha anduvtmos 0 corrlmos, percnunca nos para mos. AI cabo de una herade marC!haempece a desentumecerme, perome entraron nuevos dolores, sobre todo en'la espa}da, a consecuencla de. los gol~BIncesantes de Is . moClh1la. Para allviar 1 a .espalda, me pasaba Ill. moehtla hacla de-

lante a rates, A Ko1emehos ie hacia umgra·n dafio el !haeha. al rozarle el traserocon I l l . mareha; Tuvo· que quitai-Sela de alliy llevarla debado del brazo, Nunea pare cia!Ilalberuna oscuricta-d completa POr Is. nie-VIe, perc se dla'Cia m~ dl1ioU abrlrse pasoeon Is. rapid.ez porIa bla.ilda masa. Ave-oes habfs. Derca. d.e un metro de nieve, Ylas ond'lliaciones del terreno quedabanoculta's POl' arbustos a. ras de suelo, de-.tr~s de los cudes podia presentarse una.pendlent,e 0 .una hondol1ad1i.. Ceroa dele.mianecer eruzamos un riaehuelo helado,en cuya otra oriHa s·e ele\r·a.ba unll; cuesta.escarpa·dl!;. Cuando la . hublmos escalado ..,estuvimos protegidos por el bosque que.lCOItlenzaba lilli mlsmo, install'lmos nuestroca.mpamento para poder pasar eldia.En los 'primeros cua.tro 0 cinco dias nos

atuvlmo.s 9, este plan de 'cam!nar de nocheW c10rmir de dfa. No 'habfa. seftal all!1\lnade Que nos es:fiUlViesenperslgillenoo. Espe-ranza.dos, l1egamos a la. conclusion de que,'por ihaber cublerto Ja ,n1e'\l 'enll-esttas hue-illa!l la primera.' nodhe, d·e·bfan de haoororganlzado la cazaen dlrecc16n Este, yaque era I l l . ruta mas corta y 16glea par!!.unO! fugitlNos. Nos li'ellcitllmos POt habete~gicl.o la; <iirecci6n Sur, P e r C no quislmos.-a:l-egrarnosd€lIlla.sladQ por !Ii las cosas aca ..,ba.ran POItlet),dose mal.

iA partir de ' entonees, empezslnOsa via·Jar de dia a.1r.anzando desplegadosen aba·<nloo" . recortiencl.o POl" te rmin~ medlo cua-~nta. y cinco kllometros diarlos. Mantu"vtzn.oa la ruta. Sur,basandonos en el 501

1l iouoso que se asoma.ba de tarde en tllrdeil" en el musgo que crecla en al la'do res-

gua,l'da:do de los arbo1es... Cruzamos otros

varlos rtaenuelos helados y me parecf6 quetodos ellos flu·ian haeia el Sur para des-embocar ell! el gran rio Lena. Fueron unosdias de extreme cansaneio, de luella a,go-tadora contra tcda clase de dlftcultades,pero estabamos anlmados. La que m a sdeseabamos era. encender una -hoguera, Ynos espoleaba Ia promesa que nos hacia-mos heche de eneenderlaen cuanto avis-tasemcs el rio Lena. -:-A Ia semana de empezar nuestro viaje,

.nos iuimos ernparedando sin dames cuen-tao Los dos soldados proresionates, Ma-kowski y -PaluCihowicz, ~ban slempre jun-tos. Marohinkovas, seriov reservado, perc. eon clertas vetas de seco tnsenlo, era muy

estrmado POI' Koleinenos. Smitlh, ya acep-tado como consejero titular de Ia expe-diclon-c-por merltos de. veterania-, eramtacompafiante habitual. iEl drverttdo Zaro,tncaoaz de entablar amistades ftjas, Iba deun gl'u'j:io a otro con un buen humor in-conceblble en nuestras ctrcunstaneras. EsteZ·aro era extraordinarto. Lo vi, al terml-nar uno de e50S dias en que nos queda-'Camm sin una pizcade energla y que, es-tando ya destrozados, no teniamos masrernadio que eonstruir un refugio de nlsve:10, vi, dlgo, dando brlncos en cuelalas,Despues de haberse burladorde su propio'can.s.ancio'3' del nuestro, nosrotrecfa aque-Have.rsi6n d~ un-a danzarpopular rusa,Se·guiadando saltcs.vconIaamanos en lascaderas y las plernas dchladas casl a rasdel suelo, basta .que Kolemenosernpeza:ba

a retrse.a carcajadas, y se reta tanto quese Ie saltaban las Jagiimas.No .he cone-dodo a. un .hom·brema's formidable paraludhar contra. la adversida d que ests Zarode los demonios. Magnifl.co tlpo. Nos en-sen6 que n! srqulera los peores trances deIa IVld!llcarecen de un aspecto humoris-tico.En esta pfimera etapa hasta el Lena,

·tu'Vimos nuestro primal' exlltQ. ·de caza.Atrapamos· y ma.tamos a una marta cebe-Ulna. que &erevoleaha en· la nleya. Bu as-pecto era, poC.Omas 0 menos. el de unacomadreja. HlZO grandes esfuerzos POl' ll-berarse cuande la cercamos, cada. uno denosdtros armade con una rame. de abedul.Quiz9.s estu'Viera herida; nO' se . Perc bast6un go,lp2 de Makowski para que murf-ese.Le quitamos la plel, pero aun no haM-amos

llegado a estar tan iha,mbrientos como,para comernosla.

~l octa'Ve 0 nOiV~modis. sa h1z{) muohomas < f a , e n el viaJe. El terreno ba:jaba ha-cia el Sur en una -suillVependlente q;ue fa-cllita'ba nuestra marcihe.. La tierra, queaparecfa ya desnuda, sin su capa de nie-ve. empezaba. a. mostrarPOr entre losarboLes esos ma.tajos dehlerba siberians..ryen los troncos de los arbeles ;habfa masmusgo. A primera hora de la tarde se fueaclarando el bosque POI' donde' cruza,ba-mos ry vimos el rio Lena, cubierto por unacapa. de pielo y de. una anchura que seacercal'ia aJ k1l6metro. POI' .aquel lIi·tlo,era.ya una. :poderosa corriente, aun:que le fal":b'ba. q,ue recorrer todalVia unos dos mlltreseientos kil6metros par.a lIegar a. sUmulti'ple desembocadura en al Oceano Gla-

elalArtico. Permanecimos un boon ·rato

oeultos por los arboles y desplegados, evi-tando siempre el grupo. ccntemplandoaquel palsade 'Y aguzando el oido POl' 51ca.pta;bamos alglun ruido sospechoso. Laa.bm6sfera estaba .muy despelada y eual-quter somdo nos h!llbria llegado perrecta-.mente, perc el sHencio era rubso1uto. Nadase movIa. en aq;ueUa inmenstdad. Nos ha-llwbamos a k11C1metroy medio de la. ori11amas proxima del rio. Parecfa un terrenepantanoso, que podia resultar pellgrosocuando se produiera el deshielo.1Se me ac:erc6 el norteamertcano tran-

quilamen·te.-Es .prelfel'tble que nos quedemoS' aquf

esta noche~me propuso-c, y crucemos el

rio mariana al amanecer.!Me parec!6hien este .plan......,Vamos a buscar un- refugio ahi atras'-Ie dtie, 'Y ' seil·ale €ill 'Ia dlrecclon 'POl'

donde Ihabfa-mos venido, ,

Retrocedlmos, slguiendo nuestras pro-plas huellas, durante veinte minutes derapids. marcha, Construfmos un refugio 'Y

encendlmos nuestra primera noguera cuan-de ya oscurecia. El sistema .de prtmrtivoencendedor y el musao seeo, la "guhka" deque tratamcs Ilenos los bolsrllos, runcionoperfectamente.La drstancta que habiarnos recorrtdo era

:llnslgni:ficante en relaclon con la. que nosia.ltail;a, perc represantaba para nosotrosun triun.fo, con el rio Lena 'a111 al Iado,como final de la primera etapa prevlsta.Oelebramos 1a consecuci6nde este primer

obj",tlvo con una corntda caliente: una nu-meante "kacha", 0 sacnas, de cebada ynarfna, con asua de n.leve y un poco desa·1.NUestro unico utensilio de ecclna erauna cazuela de aluminto. Contabamos ade-mascon dos cueharas muy toscas de-made-.ra. Nos pasabamos en ronda 1a cazuela y

<lada uno tom:a:ba dos eueharadas cada vez.Cuando desli'pareci6 la prlmera cimtidad,volvimos a 'hacerinas. Al sarjento Ie per-mltimos 'QuemoJas'e 5U pan en las gachas .Todos nos felicltamos de haber dls!l'utadode una comida tan espl€.ndlda. La hcgueraestuvo encendlda toda.· la noche. El queestall::a. de guardia atiza.ba. el fUego 1V 10

alimentaiba con nuevas ramas.;En la. Inchn'lta.·luz del a~ba emprendi-

mos la tl'alVesia del Lena. el rio mas for-mida:ble en este pais de 'nos caudalosisi-

mos. Uegamo-s con !aciJl.dad. a traves dela pista helada, hasta Is. empinada or111a'del otro lado. Nos .detuvimos ULvS mo-mentos para contempJ.ar la. superficie he-la·da.-que 9.'cabaibames de atra.vesar. Ya senos esta.ba 'quitando algo de Ia tensi6n quenos (ha.bia algarrotado en los dias ariterio-res. Nos .habia o'bsesionado el temor de queno 'lleg·arfamos al Lena y ani estabamos,sanos y salivol$y sin que nadie nos nubieramole~ado. Podfamos enifrentarnos con 1 1 1 .etapa siguiente con renovado brio.~ uno 1ie mis compaJieros se Ie ocurr16

Ihalblar de .pesca. Y est<> me hlzo pensarque en Polonia. durante el Invlerno. al!gu-nos pesca,ban en los 1,105 helados abriendoun bdtiuete en la nieve. RabIe de esto.'-lBueno-dijo ZarO--, y despues de abrir

el boquete, ~que ihacemos? Supongo que

(habra que s11bar'Para que sa1gan los peces.(ConttnuUT(U

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(Continuacion.J

--,No-repl!'Cj:ue-, es que el asulero se

abre a martillaaos, y los paces, .atontados

por estas vtbractcnes, tienen que salir ala superfrcle obllgados pol' el camblo depresion que se produce al rornperse el hlela.

!Los demas se rieron y me fellcitaron POl'mt 'ha'bilida·d como narra'dor de hlstorias·

fantasticas.

....-JPueden ustedes relrse-c-inststt-« pero

nada perdemos can pro'bal'.

Kolemenos fue Inmedlatamente a DUS-

car un madero ·para que hlciera las vecesde mazo y entramos unos velnte metros

sccre la superficle helada. Kolemenos sedispuso, con el madero entre los brazos,

hacer de marttllo pllon.. y Zarco y YO nossltuamos junto a el para dlrigir la opera-

cion, Empezamos a asestarle alhielo n O D Stremendos golpes. Sa rompio 'y el aguacroto en un 0001'1'0 formidable. Era comoun geyser que nos puso empapados. ((Pues,

sf, alli estaban los peces, vivitos yo colean-

do, como suele dectrset iNada msnos que

euatro y del tarnafio de arenques l 'Nos

arrcjarnos sabre e110s temiendo que se es-capasen. Estihamos excitados como chi-quillos. Todos me rodearon dandoms pal-

madas admlrativas s Zaro pronunci6 unpaqusfio discurso pidiendo perd6n por tia-ber dudado de ml palam-a. Smith, siernpre

prudente, dljo que no debiamos abusaride

nuestra 'buena suerte, y -que convema cor-

tar las manirestactones de jubilo y'pros-e-gulr Ill. marcha a cubierto, par e1 bosqueque se extendia ante na30tros,'Beblmos

un poco de 1a fria y limpia agua del Lenay ccntinuamos nuestro viaje. .

INuestro pr6ximo objetivo era el iase

Baikal. Aquel terrene nos era mas fami-liar. Se parecia mucho al que hB!biamos

reeorrido can el convoy hacia el Campo

303. No se velan grandes bosques como

aquel en que Ihabiamos trabafadov.pero no

deja'ban de aparecer arbole!; a Inter.valoseoronando los inc·esantes promon·torios y

las colinas. Arlrustos achaparrados 'y ma-

tbrrales reslstlan IncrelDlemente losata-ques inverna1es, y en casi tvdos los sitiosaa caracterlstlca; hlel'ba ver-de-marr6n ere-

cia ee,plendidamente sin detlmer ni un mo-men'to la danza a que la impulsa,ba el

silbante vi,ento siberlano.

'kquelJa primera noehe, una 'Vez cruza1io

el Lena, la; pasamos en un bosqueclUo al

pie de una baja colina, Clavamos nuestropeseado en unas ramas finas> y 10 as·amos.

E!"ta fue una comida suntuasa. La terml-

namos con gaehas,

/Par la mafiana, MarChinkavas, que se

,haoia aleJado para haeer sus necesldades,regres6 'Y nos hlz-o sefias de que Ie stguie-

ramos. Intrlgados, fulmos tras el. Nos con-dujo a un pequefio claro. Sin declr unapalabra, sefial6 hada algo que ha,bfa a Ill.

sombra de un arbol. Era. una. tosca. cruzde m'ble, de mas de un metro ~e altura.

La rod.mmos. Escarbe en el musgo y noteque mis dedos segufan las lineas de una

inscripci6n. Llmpiamos la. rudlinentarla. lA-piaa y aparecieron 'las letrail rusas ,V, P .•

babitual abrel'iat.ura de la expresi6n "vectt-

n:tya pamyat" (en eterna memoQa). Ade-mas, tres inieiales de un nombre y una

10/07/1957,:::x:;.,

mos ' a cczer ning una. Zaro las asustabahaciendoles rnuecas y snbandolas.

lEn cuestiones de carpinteria y truces

de caza, rni opinion era la mas sollcitada.L-os otros sels eran hombres de cludad. Los

felices dfas que pase en md adclescencia

'en los pantanos del Pripet, me sirvieron

entonees de mucno. Confiaba en que va-nendome de los slgnos d·~los arbclss ill del

sol, qu'e ~e dignaba asomarse alguna vez. que otra, pudlsse mantener el rumbo Sur

eon bastanteaproxlmacton. Ademas, teniagral::ado en la memoria el mapa de la Si-

.cerla sureste, domlnada por el Lena y ellago Baika'l, Solo teniamos que encontrar

el extrc.monorte del lago-c-les dlje a' mis

compafieros-c-, y sigulendo su larga costa. -ortental cruzeriamos el Trans-Baikal '.f

east estariamos ya fuera de Siberia.

tEsto de pensar en el Baikal como enun gula natural que nos ha!bla de abrtr elcamino POl' entre la Inmensidad slberlana,if;ue el a'gUijon que nos estimulo para mar-char anlmosamante, con raptdez y deci-sion, durante Ias sernanas sigulentes,

:t:eOOa:HH6. Comprobamos que la madera

de 1a cruz era erectivamente roble y nos

preguntamos como 'Podia haber Ilegado am,

l'a que todos los arboles de aquella regloneran contreras,-,Estey casl sesuro de que somes los

primeros en vel' esta cruz des-de esa re-cha-4:lijo Marcb.lnkovas.

<E 1 sargento Paluclhowicz Be quito lenta-. mente su gnrro de piel y quedo pensativocan laobarbllla pegada a1 peeho. La mira-

mos y luego nos miramcs unos a otros.

Todos nos descubrtmos ypermaneclmos en

stlencio con la cabeza Incllna:da. Rece men-talrnente pOI"el q u e ha,bola.muerto c a s ! unslglo antes y rece tambj.en·por nuestra1i'~el'aei6n. .. .

IH~biam6s 'desecihadoya las botas de-goma .que nos ihabfan: dado en "Irkutsk,porque estaban mservrbles. AUn tenfamos.los pies vendados con el iinico genero de

que dlsponiamos enel Campo 303: las lar-

gas tlras de lino baste. Todos Ilavabamos

mccasines y polainas de cuero atadas con'

correas.IAvanzabamo-shacla eLSur recorrlendo

con regularidad unos ouarenta y cinco kl-

lometros diarloS,6n dlez-horaa de .mar-eha, aproxlmadarnente, Aunquehasta. en-

tcnces no habfarnosiha'llado indlcioalguno

·de presencia humana, seguiamoaadoptan-

do 19,. precaucion 'de camlnardesp€I_g:ados, Me es dificil recordar de un modo sa-

de modo que sl <pOl' desgracla uno odos '. guldo los muehos cambios en e1 aspectode nosotros se veian en una sltuacl6n apu- -de los terrrtonos que cruaarnos. Me que-

.rada, los demas podrtamos hacer alga por dan en la mente Imasenes sueltas. clara-elias 0 continual' awanzando, sl na:da po- mente deta'lladas, de ciertospalsajes sibe -.dfa hacerse.· Las relaciones entre nosotros rtanos fj,jadOS-,como por la luz de un

eran ya de ma1yor conflanza, Oharl:ibamos foo:o'-, por, €l recuerdo de algUn Incldentsc o n . mas libartad y en los deseansos asse- extraordtnarlo. Los tango en Ia memoriat&,oamos a ,Smltlh. con pr-eguntas sabre Igual que sl hubieran servido de rondo: aArnertca. Dedujlmos de sus respuestas Clue la representacion de un drama.

-ha'hia rviajado mueho par tcdos ios Esta- Desde un eleva do promontorlo rnlramos

des Unidos, y recuerdo que nos Impresiond Ihacfa el Sur. Como un Inmsnso oleale sesu descrtpctonde Z\oMjicoy cfe la sHIa deextend.fan unos cuarenta 0 cuarenta y em-montar, riea.mente adomada con p.lata; {)ci kil6metros de campo-si no abierto,por

Que compr6 aolli. . . 10 menos "entreabierto"-partldo POl' un

Tamib,len nos cont6 que cuan'do tra·ba- aricllo ria y qUl! se cerra'ba en el horizonteja'ba en las minas sovletlcas de las Ura-' can unas colinas cubiertas de bosque. Du.les, encontr6 a otro norteamericano alll,Ue rante e1 diaentero a,vanzamos POI' entre

Iha:bia conocido en Moscm.Esto Ie hlzo los ma-torrales y los bajos arbustos, hastaccm:prender que no habra. side el Unieo de lIegar a losllnderos de·l bosque. Estuviinos.Ia colonia norte americana que se ,ha!llase varios dias camlnando por los bosques. Al

,baJo la vlglJancia de la N.K,V.o;. tercerdfa amaneelmos envueltos en nlebla.

1:05 exitos clnegeticos' de nuestro gl'upo . ,Por esta vez renunclamos a nuestro slste-

eran purame.nte accldentales. :Armados' rna de ca·mlnar en fila indIa y nos abrl-

unlcamente de un cucW!llo, Un hac:b .a y mas paso pOr Ia nlebla en campacto ~1.I-

una varlada. colecci6n de garrote's' y po-' po. Une denosotrol; lanzo un si1bIdo l'ara

rras, no .estli..bamos muy bien equipados.. que nos ca;llasemos. Nos .detuvlmos en secopara buscarnos .nuestro allmento "vlivo". y escuOha.mos.

Hrubda sido muclho m a s practico instalar iEnit'rente de 'nosotros, mu.y cerea, se oiatrampa.s, como ihaola-n los guardas del Cam- una tostemblorosa y prof-unda, unos gol-

po 303, pero .1anecesldad de movernos con- pes violentos en la tIeri'a y una serle deif;lnua.mente nos lmpedia esperltr el resul- rullios como 81 un cuerpo \S'e arrastl'ase

tado de Jas trampas. Este procedimlerito ihacla n090tr05 par entre la' ma,leza. Es.,

reQulere paclencla y tranlluiUd~. Nos ,tai:'amos lnm6viles como estatuas. Luego,quedaba el consuela de que mlentras nues- salQue {II cudhUlo. Kolemenos se puso el

firo pa-n, Ia. hllrina y la cebada, nos dura- Ihaooa al hombro y los demas apreetaron,ban aW,el pesca'<io y la. l1ebre haobian sus garrotes, Los desesperados y misterio-elervado. nuestra dieta· por encima. de 10 ' .sos ruidos cesaron de repente. Esperamos

halbltual en elCampo. En varlas ocasiones un minuto largo, esforzando eo l oido. Nos

rimos Iii. "susUk", que es la pequena mar- Uego. mw leve, e1 . sonMo de una re-spira-

mota ,siberlaIUl., asomando curIosa su ca- ciOn entreoortarla y tra'ba:josa. Paso otroIbecita POl" 1a ma.driguera, ,pera no Uega-m!nuto. Y de nuevo empez6 el jadeo an-

(ContinuCLrtU

EL BAlXAL Y l.iA JOVEN FUOITIV:A

1IIII

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t.continuucion.) ,

:g;ustioso y los golpes en la tierra. Kole-;menos se me acerco......... i.Que es eso?-murmur6.-'Debe ser un andmal-c-le respondi,

~Desde luego, ya no se acerca mas:--I(lijo Kolemeno&-. Vamos a ver 10que es,

I' Y, desp:legRndonos, avanzamos. .j,. traves de la niebla, a unos pecos me-

'/'tros, vi un bulto que seakitaba convulsi-~a!llente,Era un animal, pero tenia la!cabezll. oculta. Recorri agaehado, pero ra-'!pido, los pecos pasos que me separaban'ael antmal. Los otros me slzuieron a todaiP1isa. NlH, pataleando, jadeante. ry revol-

'viendose con desesperacion, sa hallah<!.un'ciervo de gran tamafio. Tenia el morro cu-bierto de espumarajos y ]a, raspiractonIe salta, como el IVll!porde una mazrulna;;descom'l1uesta,paea mezclarse con la nie-ihla. Nos olia y los edos se Ie desor.bitabanIde miedo. Sus patas delanteras hablantablerto un hQYO en la tierra a fuerza delilogitarse desesperadamente. Estaba engan-;ohado: no podia huir. Sus finos cuernos,imliltlpl·es y enramados, se le riabian que-:dado enredados de un modo inextrtcable,!entre' las rafces de un arbol cafdo. Por

'

·.todo10 que habia revuelto alrededor 'If por

,su esta:do de agotamiento. estaba claro queiel animal habia quedado atrapado desdelvarias horas antes. Elterror que le-produ-cia nuestra presencia. Ie in;yecto un ultimoarrebato de energia 'Y emoezo otra vez a

patalear, a resoplar y a quejarse. Par fin,permanecio Inmovil; melor. dicho, con s&10unrncvimrento corwurswo de una pata de-lantera. Miramos a Kolemenos, y este, sinapartar la vista del pobre animal. avanzoaun mas hacia el., IKolemenos di6 la vuelta por detras delclervo 0', b-a!ancean'dose expertamente,descarg6 su bri1lante hach'a en un golpeforti·simo en e1 cuello del animal, que mu-1'16inmediatamente. ,Luego, nuestro com-panero tir6 del hadha y limpi6 r a : hojaensangr'entada, pasandosela varias veces'POl' sus leguis. Todos unimos nuestros es-fuerzos para arrall!car de las raj.ces doelar-iooI Ia cornam-enta del ciervo. Ko1.e:inenosmeti6 Is espalda entre las raices y empu16hacia arriba, pero nl siquiel'a el, con sufuerte mus:mIatura, era. capaz de arrancar

·del arool al cier:vo.En vista de 10 cual, seJevant6, cog!6 de nuevo el ha·cha y a·eaboodecercenar la cabe2,9.del animal. Ap.arta-mos de a:m el ,cuer]:>Cdel olervo de'cap1-tado y 10 PU5imos en un claro. donde 10.cIesolle.Todo balbia transcurrido r.a:pidamente y

apenas ha:biamos hab1ado hast.a qUe Ma-;y>a.J!:ovski,nterpret{mdonos a todos, perocon Ia vista fij'a en mister Smith, dijo:-~Que "amos a 'hacer con esta carne?'Yo tenia los .brazos ensangrentados has-

ta elcodo. Intertumpi mi tarea de des-cuartizar el ciervo y me levanre.

-iLo mejor es qUe ce!ebrasemos unaconferencia--di\io el norteamericano.Mister smith abri6 la "sesi6n", aflrman-

do que no podriamos' ,tranSportal' tada-a'qUel1acarne. perc que tampoco podiamos

permitirnos el ludo de abandonarla. Nin-guno de nosotros podi'a olvidar que aquelmismo dill,.teniamos que recorrer fonosa-

mente de treinta y cinco a euarenta y cin-co kilometres, Tratamos de calcular el ma-ximo de peso con que podiamos cargarcada uno, pero aun can lo s calculos masopttmistas no habia manera de uevarnostoda la carne. Marchinkovas propuso lasoluci6n que parecia Inevitaole:-No podemos desperdictar alimentos-Jdijo-. Por tanto, soio ,hall'una scrucionpara nuestro problema. De:b:emosquedar-n03 aqul velnticuatro noras y comernostoda la carrie que podamos. El resto po-dremos Ilevarnoslo.

Zaro, retamlendosevdljo que se creta ca-,paz de a·li·gararnosbastante de peso.-~Dc acu€r..1o,sefiores?-;pregunt6 mis-

ter SmiUh.. '

tR~pondlffi'os a COl'O aprobando la pro-puesta, ,PaluO'h,owiczse dedico a coger lena y

preparar la lumbre, mrentras que 105 de-mas conscruiamos un refugio y acabaoa-mos de ~rtir la carne. Una. nora despuesse asaban, plnohados en un Improvisado

asacor de madera, estupandos trozos decarne. No podiamos esperar a que las Ila-maavcompletasen SU i ~r.No . tardamosmudhoen repartdrnos nuestras .chule·tas.DesdeluEgO, teniamos que mastlcar mu-eho ycon fUerza,pero la carne estabamllYbuena. PaluCiho",ic2ime .pidi6 presta-

do..l!licuchillo s sepal'ti6' sura.ci6n.enpe'dacitosm'llIY pequsfios, a causa desu

falta. de dientes. comlmos sin parar y1ll.grasa nos corria ]:>CrIasbarbas. Eruct.li..ba-mos ruidosamente ynos ~~famosfeltcitan-donos unos a otros por Ia magnifica suerteque habiamos tenido. F'u:mamos lueso ydormttamos un par de horas. Despues de-cldirnos preparar Ia piel.!Esta lawr nos' Hewo bastante tiempo.

Provi9to cada uno con un pedaz.Q.d:ema-d,zra,raspamos la piel trabajosamente paraquitarle todas las adhereneias de grasa. Y,enfrentados de nuevo con 1a necesidad deno aumentar nuestra lmpedimenta, no S:i-bfamos c6mo llevar la gran pieL i,C6mol'epartil'la? Entonces se ,nos oeurri6 falbrl-carnos mocasines. Nos hl·eimoscatoree pa-res. Nos cO':ocamosun par. cada uno, so-,ere los que ya cal2Jiibamos,y el par de re-ser-va10 guardamos en nu'estras moohilas.

AUn nos sobraba a cada uno un trozo depiel. Yo lIe'l'e Ia mfa enrollada sobre mimO:ihila. Despues de nuestro inesperadotral:a'ja de z9.'pateros,.v()~vimosa asar mas-carne, y por la noDhe comimos toda.viamas, 'ha'5~aque nuestros vientres estuvle-ron a punto de esta1Iar. Poco antes delamanecer del dia siguient.e, y ya sin tantoregoc1jo, camimos ciel'vo otra vez, y 10me-jor de 10que habia saorana 10distribufmosentre nuestras mochilas.

IA media camino, entre el rio Lena y ellago Baikal. habiamos perdido mucho tiem-po escalando los montesaltisimos de unacor.dHlera, y hacia media tarde penetra-mos en una regi6n de bosques.~ dis. noshalbia. resultado muy bueno, y nos pasa-mos dos horasy mas buscando alglin ar-bol pa.rn.1ienerun poco de somora. A aque-

11agran altura. senes present6 un venta-rr6n terrible y nos viinos en Is. n.ecesidadde protBgernos. Tuvimos mu\Ybuena suer-

te, pues encontramos una cabafia, aban-donada, que seguramente habia sldo de uncazador, Era. de troneos. de a.Dboles.~plo-ramoscuidadosamente los alrededores, perono 'haoia necesldad de tanta precaucion,pues todo aquel corrtorno habia sldo aoan-donado desde haoia mucho tlempo. E1 sue-10 de la eabafia estaoa cu!bierto de moho.Nos pusimos a' trabafar. Reparamos tos-camente el tecno, que estaba medio hun-dido, encendimos un fuego y nos tumba-mos a dormir. Nos turnabamos una hora'cada uno para montar la guar'dla.Zaro fue el prirnero que sall6 a 130ma-

nana stguiente, aprovechando que habtatenido que hacer la ultima hora de guar-'dla. Voltv16corrrendo y nos desperto.--!Par alhi cerca hay alguien tocando el

violin-nos grit6.Nos refmos a carcajadas 'Y 1e pregunta-

mos que broma era aquella. Zaro se es-forza:ba POI' que le tornasemos en serio y

c·jvl:dasem'ossu fama de humorista.~Digo que por ahi fuera hay alguien

que intents tocar el viol.in-insisti6.Seguimos rtendo. Mister Smith le propu-

so •que ••companase a aquella musica, conuna danza.rusa. Zaro continuaca. con ab-soluta seriedad, tratando de convencernos.-Neng.an ustedes y 6iganlo. ,lEI sargento, sin dejar de mirarlo por sl

S)! sonreia, sall6 con el. Todos los sesui-mos. A unos vemte metros de la cabafia,

POI' la parte de a tras, Zaro se detuvo snos hizo sefial de que callasemos. Nos in-movnlzamos, aguzando el oido.:Era.cierto que Zaro habfa oido unos ex-

trafios sonidcs. Llaznarles musica de vio-'lin era, desde Iuago, una exageraci6n. Mas 'nten resultaoa como st estuviera a1gu!enpulsando las euerdas de un contrabajo.!Era una nota alta y sostenida, que se tba.a'pagando para empezar de nuevo. A cadaminu.to, una pu1saci6n vibraba entre losarcolEs. Nos miramos asomorados y nosdir~gim05 d·ecididamente ha,cia el lugar de-donda pro:!edfa el misteriose sonido. Mor-tunadamente-ll' de un modo casual-Iod·escubrimos sin tener que acerearnos de-masia-do. Esta.ibamosen e1borde de un cla-ro, a·l otro la40 del eual 'haJbia un avbol'derribado por un ra'Yo. EI tronco hoa/bia

<:aido dentro del claro, sin de.gajarse POl'

completo de su parte imeriar. Y en la res-qUE;l:!rajadura,a unos dos me,tros del suelo,

se elevaoo una gran a-sti1la.Mientras con-templabamos aquello, observamos que la.astilla se arqueaba ha:cia a·tras como una1::a,lles~a.En seguida Ill,.soltaron, y Ill,."mu-sica" vior6 en nu·estros oidos. i.Qulen erael interprete? Pues nada menos' que un:gigantesco oso siberiano, que se ele.vaba,amenaza:dor sobre sus patas traseras. Nos'h!zo una tremenda impresi6n.Nos habfamos ocultado tras los aDboles,

y 'desde aU'fvimos como v01via a toear el050 el improvlsado instrpmento musical.La 'hlzo varia.s veoes, y cada v e z se que-da1ba con la cabeza. comieamente la:deada,escuclhando asombrado el penetrante 50-

nido. El "conelel'to"· dur6 varios minutos,

ihasta que e~ oso se cans6 'Y se alej6.~ste in<lidente nos dlvirti6 mucha. Zaro

imitaba al oso en un numero especial de

{Continutlra.~

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5U repertorio, al que llemamos "El vloll-nista sibertano". ,Por elerto Que cuandoin-,tentamos repetir 10 que habia heche ,e lgigantesco animal, t;uviplos que convencer-DOS de la supertoridad de este, Ningunode nosotl'os--individuaImente-pudo ar-(fUea,r la astma 10 :;;ufici-entepara produ-

cir vlbracion alguna. Fue necesarlo reunfr\ los esrueracs de Kolomenos y'de otros .dospara lIoegar8. sacarle e1 scnido.:AQuel fue el umco 050 que encontramos,

auntrua los mas viejos del campo de pr!-, sroneros nos hablan asegurado que habiamuehos en anuenas reglones, sobre todo aleomtanzo de ,1a pr,lmavera.- y' que eran pe-ligrosos. Con la otra amenaza, los 10008,nunca nos tropezamos, aunnue los oimosaullar s can rrecuencla encontramos sushue<Uas.,Es proba;lJ.leque s1nunca nos ata-caron f u e POl-que les lmp.onia nuestro nu-

mero.Pasaron las semanasy estabamos ya. a

mediados de rnarzo. Notamos. aliviados, losprimeros sintomas de la,breve prlmavera

slbertana, 'El viento habia amatnado rnu-cho y aLgunos arboles f1oreoi9.n, aunquemay 'Pobl1ammtii. POl' enctma de nosotrospasa.banalgun.as bandadas de ,patos y gan,sos silvestr-ss, que se dlrlgian a sus cuar-.teles de verano. Los arroeos que, cr1ll2J8;ba-mos estaban aun nelados y IS. alfombrade nleve conttnuaba sin derretlrse, Pen>\habian mejorado las cirounstanctas en 10

rererente B 1 cllma~ LO peor=-en este sen-tido-lha'bfa pasado.'La que mas deseaoamos era no encon-

, ·tral' a n!ngUn hombre y en esto tuvimosbuena suerte. Ouand'o lIegabamos, 'de tar-de en tarde, a. It}gUn' camino, solamente 10ocruzabamos despues de fumar toda clas'ede precauei<Jnes. Algunas nocihes ",elamos,a 10Iajos las luces de un pob1ado. Y cuan-do d!v:lsa:bamos a;lgdn pueblo grande,' mu!-t!plicftcamos nuestras cautas me,dici3.s., IA veces se pwd ucian entre nosotroo. es-talllldos de ll'rlta'Cion, <;as! siempre al :finalde uno de e.>osdfus de !Ilal'cha' agotarlol'a,ry e 1 pretexto para. dar salJda aJ mal tem-,pIe solia ser la. dlstrlbucI6n de'l 'Os deaeresen nuestrD campamenta antes de eciharnos

. "~a ,dDrmir .. Pero e-stosarrebatos pasa.banmay pron:to. Por fortuna, entre nDsotros

siete no hiUbia dhtttue' de personalldades nide caracteres lrreconc!ll~les. Nlnguno denosotros sentia el' dreseo'de imponer ~ losdema:s su mando. Be aceptaban 'todas. lassugerenclas y a ct ui iJ l; la m o s de a.cuer.do. SIse presentaiban empa:tes de oplniones. las,resol'Via con su voto e1"consejoero mayor", 'Sm~th, y nadie' dlscutia su. al'bltraje. Losescasos alterc800s sobre cuestlones de ser-vicio en el eampamenta los resolvia po.rsu euenta Kolemenbs. que nunea dLscut!aco n na 'd ie y hlliCia CQn la ~jor voluntad,10 que los demas' trata,ban de eludlr. Siem-'Pre trabaja:ba ~,de 10 que Ie oOrrespon-dfa; y II>hacia sIn darle impol-tancIa, in-cansab'le, 'gener.oso y siempre caballero so.

i F 1 u - e cUrioso que supleramos; das diasantes de v,erlo, que nos haUabamosoerca~el' la,igoBaika:l. Nos lleg6 el ]>eCulial'isimo'

olor de, aquel agua, comblnado con la. levefra 'ganela. de las plantas a.cuaticas y'otr08elementos 1ndefinJ:dos que I. e causan nos-

- 12/07/1957. Pigina 3~!I,,,~!:cid.

(Continuact6n.)

talgia a1 que ha vLvidojunto a los grandeslagcs. No, ha:biamo.s llegado .aun a1 lagocuando tropezamcs con un montOn de ':8-·p!nas de un gran pez. No ha:bfa asua cerca.de aquel smo' y nos 1ntngo muclho comohabrfa Ilegado wlli. Al desoender .deIa cor- .drllera, de Baikal, emnezamcs aencontrarverdaderas carreteras, quizas .de poca Im-pOl'tanc!II,' pero l.D:coi:ll:para:blement.emelo-res que tcdcsJos caminos que ha,blamos!Vista desde que nos escapamos. El aire,,que venia de la. direcci6n del Iago, nostra-, Jo el sonido de una Iejana strena de fa -brica. '

iSuhimos a un luga,I- elevad<J, desde don-de podlamos domlnar todo el vadle, y de-. cldimos, excttadcs, qu-'! lI-1ue£lla.debia deser la reston del Baika:1.A varies kllome-tros hacla e10esteviinos unos srupos deedlftclos. fabriles. 'Este panorama Ineluia 'unas 1m;ponellibesrocas decolor cere, co-ronadas POl' unos abetoa,"que' parecian el

negro adorno capllar de un salvafe. Enla orrlla del la.go vimos un a,pliiaml'ento'de casitas' de madera, achaparradas y 56-lldas, y juntoaellas,unas lanchas boc~

aba:ioy unaspertigas de madera de las'<lue.usan los pescadores para jioner a,13e-cal' sus rades, visubmdad era exeelente, e1airs estaba en calIria y el,oolllo de la~~hi--meneas d e las flvbrlcas 51 ! elevaba rectoe n . eleielo, Nadase movla en Ill. ald,ea. depescadores y nos'Pl'eguntamossi atjllellas

casitas no las' usarian mas que en elve-.rano. 'Entre nosotros y el agua, aU a abajo,pasa:J;;a'una carrerer!!," a lo larglO de Ill.eual se e],e,vwb,anunos postes teld6n!cos,con sus aisla'dores blancos, que soportabanel peso de los cables, Esto demostra:ba que'era un a ca,rre-tel'a'importante. Nuestra di-ficUlta'd radlcaba. en saber en que punto!h:a:bia'm05 IIJlJordadoel lago. La some'tlmosa. de,bate y llegamps a la conclusion deque no.s ha.biamos desvla'dD exces!.vamenteal Oeste, y que alhora debiamos de estaren 'el extl'emo nOl'este del lago. 1.0 ettalsignlficaba que reniamos fOrZOE~ml!ntequaseguir la orl!lla. Norte en direccl6n Oest,e,lhastaenflJar la ruts que nos proponiamostoma'r por el sur de' SiberIa.iNoopasllmos mas de'un,a hora senta 'dos

allIi los siet.e, aibsortos en .Ja ,lnmensi'dad

del paisaje qUe S8 extend!ia a nuestros pies. 'Hubo un momenta e;n que nos paraci6 olrIn'.irena de un baIleo. Estabamos de ex~e-,lente humor' a1 pensR,r en que habiamosa,lcanza'do otro 'obj£<tlivoen nuestra odisea!bacia ,el Sur. Hleimos planes, sin ol'Vidarni POl' un mommto que reniamos .easlagotadas nu~stras prov.tslones. Apenas nosquedaban mas ql1'a unos trozos ,de venado,:de un olor penetrante. H~lamos del Bai-kal::; les dUe a m!s compafteros que estaba,cons1derado como el la,go mas prof undo, ''pUU l1egaba en' a.ligUllos puntas a los 1,<500metrO 'S ; : Recorde Ill. h istorla que me cont6un tfo mIo que habIa 1udhado junto a. . Josrosos blRncos en Elber1a: '~ldesastre d1)los r.estos de, un ejereita a.nt!lbolohev1que<luando Inrent6 cruzar el JagO helado. E). ,

Bai1tal no estaiba heiado par e1· centro Y

'los !;Qldados fugl~L'VOs se a,hogaron a. cen- 'renares. Yo recordaba, a;unque vagamenre, 'Ihabe'r leido' qUe las !uertes comentel! de

. .

los muenos y turbulentos Tics que allm;;r.-taban al 'lago, le impedian heIR1'$<!' lJOl'

comnleto, ' 'iS rmt :h levant6 POI".finla ses.on.-iBajemos a 'eenar un 'Ii3tw'"u-no.> P:'i)-

puso.'Tardamos m a s de 10 que esperabarnos

en !legal' a In carretera, l '11 pOSG<! :l:dica-

dor, muy deterlorad« por 1[1, illt"nq~:'ie,

'seiialaba la dlreccion ,I' la dista118:? deuna cludad, 0 pueblo, Chithevka,,' qu~ de-bia de ser donde estaban las iabj',icJs que!babiamos vista desde arriba. Salimos ensagufda de la carrstera y nos eseondimos

entre unos matnrrales, al otroIado. Entre

nosotros y In orrlla del hlgo se extendiaun terrene Ilano, en el cual crecian lE'O~fusamsnte los Junlperos entre robles, fre~-nos, abadules, sauces y limas. En el- suelo

mas humedo abundaban unas plantas al-

tas. y clmbreantes .corno el bambu. cruza-mos unas hileras de urbustos IYnos bulla-mos en 'Iaortlla de un rio. Levant~ un bra-zo y mls companeros 1 > 1 1 me acercaron.Terifamos que deeidlr s! vadeabarnos 0

nO,el rio. SU anonurn 110 llE'gaba a los1'50 metros, nero at hlelo sethabfa 'rotahaci'a Iamitad del cauce YPOl' aUi se pre-cipitaba,una velos corriente. En esta oca-sl6n descubrlmos que' todos nosotros sa-biamos nadar. FU ? optnion, unanime que.en vista de los muehos rios que nos ve-riamos obUg;ados acruzar de entonces en'

adelante, mas ,valla 110 demorar la primeraprueba, Me ofreci voluntarto ipara Ir de--Iante. Dssenrollamos los varies metros deeorreas de cuero crude que llevanamoscada uno a laclntul'a para enlazarlas y'thacer una. cuerda de segurldad. Oada unode nosotros, tenia POl' 10menOs slet£ vuel-tas de correa." de modo ;Que .31 conljuntarestilto' de una lmpresionante IDngitud.,.Mis companeros vlgilarorimientras yo

, ruVanza .ba ,can g ra n c ul da d oh ac ia . el,borde'de la. 'pnmllra pal;te helaila del rio. Depronto cedi6 a ml peso y se resquebra.j6.Me, encontre en el agua tan de repente.lQue me post6' trllbaijo l;eilacerme.' Nadeluego fa.ci1ment.ehasta elotro borde de,la segunda, parre hela:da e intente subir.Pero el :hielo se 'romplo. Realice un nuevqliltento. Con lnfinltas pl'ecauclones pude

l2iarme, y una vez scbre el hielo, 'me quedetendld~ 'de bruces, sin itreverme a poner-me ,en pIe. Empapa'do de agua'ytlrif;and<J,.hIce sefias a los d-ema,s 'para que me si-guleran.iNo, Ills fUe tan dJ!icil a los otros, pero

si 19ualmente mo}esta., 'Cruzar<Jn uno a.uno, 'va'liendose de Ia. correa, y, smith,que 1ue, e1 ultimo, fue izado co n el ex-.tl'emQ d e Ia correa., que llevaba atado' ala cintura. La ,vez slgulente qUe hubedecruzar uno de eS to s rios semihela.dos utlli-'c e el hadha.iy golpee el hiel0 hasta que lahoja. qued6 bIen claNllda, y entances meagarre al Ill;ango pa.ra. sallr del agu~; ,,Corrimos 10 mas' rapldn;mente que pu-

dimaS par-a quedara cublerto' entre 'losarbOles, :y a :Ui no,s detgv1mos para quitar~nos las tres prendas que neva'vamos cada

uno: los pantal<Jnes acolohados, la ohaque-ta y el chaleco de piel,' y las e~pr1m1mos .t()do 10 postille. Nos las puslmos de nuevo,

(Continu.u.r4j>~"/ liti: :'~:·~~:i_:'}n, ( :' >' l1 ' '" ;~·11

':j(~:::l : : ·; 'Vl> :·6 : .:c : : : : i ·: : : ·r, ~/G !:::.:C;;j\::l. ,,1

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(Coniinuacion.)

para ' 1w€ se acabaran . de .secar sabre e1

cuerpo y continuamos, en rriareha rapida,

ihacia el lago, en direccton Esce. .

A ultima; .hora de la tarde tuvimos una

"reunion para decidir la. etapa si'guiente

-de nuestro viaje. ' El senti rio . comun :nosdecia que prosesuir Ia rnarciaa. cerca de In

orula euutvalta. . .a- ser descubiertos POl' los

:habitames 'de pueblecitos pesqueros 0 de

las poblaciones semitndustrtales que si en

el Nor'te estaban muv espa.ciadas, se api-

f..aban hacta el .Sur, en. torno ai ferrol'l'il

transsiberfano. POl' tanto, estuvimos todos

de acuerco en que debramosJr otra vez

,haaia el N'arte, ·a.pal'c:'tndo:qos·de aldeas y

ciudades, hasta poder romar la direcci6n

Sur, para.lela a la ortlta oriental del lago,

pero a prudente distancia de esta. Nos .dirigtmos, pues, riacta el Nordeste para

cruzar de nuevo la carretera a' una mayor

distancia del la'go que 'la otra vez, Nues-

tra ropa seguia mojada y anouvtmos con

rapidez para secarnos antes. Habiamos re-

corrido unos si:ete u ocho kilometres cuan-

do virnos frente a nosotrcs una hilera de

arboles.oue Indicaoa. la ori1:ta 'de otro rio.

A rnl dereoha Zaro, levantando el brazo,

dio el alto y Ia serial de alerta. Repeti 1a .

alerta 'Y todos se detuvieron. Zaro sena-laba urgentemence nacta 'el rio, Vi que

algo se movia entre los arboles. La mismo

podia ser un animal que un homb-re. Aaquella .distancia- ...warIos pentenares' de

metros=-, y 'Ya con poca luz, no. -podiamosdi3tinguil'lo. Teniamos qua saberlo. Ma

acercue a Zaro y Ie pl'·sglmte que J .e pa-

renia aquello.' Zaro me respondio ; .

-Quizas'sea un hombre. De todos mo-.dos, 10 que sea nos' ha visto Y procura

esconderse.

Los dema:s, gatean!io, se reuni:el'on con

;nosotros.

-Si es un hombre~dijo M;akowski-,

no tendrlll110s ma:s remedlo que darle un

buen.g.olpe en ia . cabeza y arrojarlo alrio.

No pademos exponernos a que alguian nos

delate.

'Volvimos a despl€'garnos. S~nitlh y Zaro

Iban a mi i'2I:J.uierda; Pao]uckowicz, Ma.-

kOlVski,MarCihinkovas y KOlemenqs, a. mi

del 'echa. Agachados, avanzamos de arbusto·

en arbusto, .hasta que pudimo3 'Vel"qUela

·hilera de arboLes se hallaba aU'nos cin-

cuenta metros del l'io, cuyas aguas que'da-ban ya claramente :visibles. Me .detuV<!a

e.scudhara unos diez metros del primer

·arbol dela fila. Los demas a,vanzal'on tain-

bien y permanecimos inm&Vlles, ~,,,p'acia-

dos, mirando fijamente, De pronto, la figu-

· ra que 'habra estado escondida detras d,e

un grueso troneo, se lanzo rapida hacia

un matorral, pero rios basto esa carrera

para. rusting-uil" unos pantalone" y unas

botas ..8'ali al deseubi.erto ;Y los demfls mesiguiel'on. .

. Las botas tenian suelas de goma. y Ie

Jlegaban a Ja rodilla, cubiertas de fieltro

por arriba. Sobresalian ridiculamen.te de

las matas, Me arroje oobre e'lIas. para ti~rar de su dueno; Me quede con ,",lIas en

·las manos. SentI la agitada respira:cion de

Kolelnenos detras de mi que miraba, como

YO, los 'piececitos envueltos en tela, y los

tinOs tohillqs que yo 'habia dejado al des-

-j .!.

cuhierto. De la espesura de las matas sa-

lian unos soliozos, La persona que se es-

condia 81 l l i estaba aterrorizada. aun ja:-

'dean res. de nueszra earrera, nos uuramosdesconcertados, Uno rnurmuro asombrado:".De·b" de ser una rnujer."

Koiemenos se arrontllo, lJ'parto las rna-tas, Toe(Qs nos a:pifi.amos au-ededor. l>ra

una muonacaa, una delicaua Jovencrea,con los ojos. muy ai;'N~r\tosPOl' ei espanto,

Las Iagr imas le annan \sm'cos en la mu-

gre de ra cam. Antt·s,· nabiarnos estaco

crsouestos '~atar a aqueua oersonapara.evitar que nos' deratase. Ab.ora la rodeaba-

mos, arrepanridos de haber tenido ese pro-

'posito como una pancrlla de golfi110:3SOI'-

prendidos en una barrabasada iy tratando.

de encontrar las palabras adecuadas para

ctisculparse. A traves de sus lagrimas, me

rniro y se encogio de mledo. "No .terna:

nada tiene ustsd qUe temer de .nosotros."

V:01vi6 a mirarme y luego, una a una, a

las otras sets caras solemnes L V barbudas.

~igui6 Ilorando y, en verdad, no podia

.extrafiarnos. Debiamos de tener el aspecto

«re Tos mas temiblesbaIldI~os del. mundo .. '---POI' fa'lIor, no 1101'1;, jov£nclta-dijo.el I

sargento Pa luchowicz,

lLamuchaC'ha seguia scllozando. asusta-disirna. Procure. tl'anq uilizarla: . .

-IN'o .Ie varnos. ahaccr.dano. Todos nos-otrosrtenemos hermanas 0 novias.

Losotros .as.int}eron; ml!lY~erios.

!Todo.io que Ilevaba puesto.Ta :joven Ie.quedaba ..comicarnente grande; la ancha-y

Iarguisima ...iuiaika ... .acolchada, le defor-

maba sus paquefios homoros y le. hacia

una joroba en su escreeria espalda. Sus

flnos .tobillcs salian, incongruentes, de los

anchos .pantalones almchadillados. Como

nuestra ropa, tanto su "fufaika" como sus

pantalpnEoS eran' de un tejJdo negro y bas-

to.. POl' debajo del cmaqueton asomaba

la parte s.uperior· de un vestido,muy usa-

.do . y' sucio, de .terciopelo morado. euya

,falda qu·edaba l'emetida.en los·pantalones.

A:proyeClhan:go Jas niangas de un cardigan

vel~de; se· 1'!a.bia hecho uni'- bufanda, que

ile-vata ent'ollada al cuello. Sus cijos, He-

nos aun de lagrimas, eran mllY a2illles.

Unos mechones de cabeHo castano Ie sa-.lian de sugOITO :de .pie.] apolillacta. Parecia

una ohrqul!lla diMra.zada· de hombre en

Ca.l'na·val. Pero estaba' tan desolada quela rodeall::·amos en silencio esperanao a que

sa Ie pasara elsusto y hablase. Ademas,

aun::jue 10 hubies'emos querido, ninguno de

nc'~otros 'podia prcnunciar nl una' palabra.

iL;want6 los IJ.razos para limpiarse la carli

con las mangas'y vi que en una de 'sus

manCls R:pretaba un pequeno crucifijo. Baj6

lasmanos; se. mir6 a los. pi-es y luego 'le- .

vanto. la vista h'acia rID, Estaba de pie,

descalza, en Ja ni'eve, y yo.tenia a11n sus'. totas. Me aI'ro:lllle para a.yudarla a po-

nerselas.

(Por·ftD. hablO en' una rara mezcla de

pala.co Y de ruso vacilante:

~'l\1je he extravialdo, No en.cuentro el ca-

mino para regresar a1 "koljos'.' 'donde tra-

bajo. sqy polaca y me dep'Ortaron para

ha:cerme traqa:jar en Siberia.!Nos se·gufa mirahdo con "desconfianza.

Paluchowicz y Makowsld se acerearon mas,

dispuestos a decirle todo.' Ellos dos y yo

.hablamos a la vez, precijntadamente . Nues-

tro silencio anterior se rompi6 en un oho-

rro de palabras. A pesar de la confusion

creada POl' nuestras explicaciones simujta.,

neas, la joven comprendio que erarnos po-Iacos como ella, que nos habiamos ruga-

do de un campo de prisioneros Y qUll'l;tlada

debia temer con nosotros, ImpuJsivai1rente,52 arrojo en mis brazos s exclarno {lon

enorrne aavio y sublta fe'licidad:

-iDio;; ha side muy bueno conmigo l

Los otros d.os polacos, como OS05 emocio-

nados, ie acariclaron la cabeza y le .dieron

unas palmaditas en la espalda.

,Fue una escena muy ernocionante. Y a

uno de nosotros le parecio qne abusaba-rnos del senttmentalismo y .haciamos mas

rutdo de 10 convenido. Smith, que 'se man-tenia apartado, no cesaba ide vigilar. De

pronto nos' lanz6en ruso:

-;Basta ya. Deshagan ustedes el igrupo..

o~ e ojvidan de donde estim? POl' amor de

Dios, pongamonos a cubierto en seguida.

lEI grupose desihieo Inmedtatameute. ~os

pusimos en marcha en busca de un sittoprctegido,

KRISTWA SE UN& A NOSOTIROS'

!Se llamaba .Kristina Polansk.a.Terua

diecisiate anos recien cumplidos. L1evabades dias sin comer y tenia un hambre

atroz, Re·buscamos en nuestras mochilas

if Ie dlrnos unos pedazos de pan. Cornio

como' un animalnllo a punto de perecer de

hambre, con una concentraclon intensa,

De 'vez, en cuando resoplaba vy se pasaba:por la naJ'iz la manga derec1la. Nos fasci-

naba. 'En cucliollas, no apartfl,bamos de elia

lamirada. Solo mister Smitili estaba 'sen-

tado tran~ui1amente, y, aunque· tambiEm

la miraba, 10 hacia de un :nodo mas se-r - e no' . .

La joven dej6por fin de .comer y nosdijo su nombre. . .

-No he perdiao el' camino del "kolj'os"

~conofesli-, sino que me he fugado. Llevo

vario5 dias corrienda--.:. . Y despues de 'una

pausa, ~ana·di6-.-- ': Ustedes son los prime-

r05 caballeros que' he encontrado .desde

que sali de mi' casa.- Y aC€ntu6 muchola palabra "cabaITleros":

.....;GD6ri.dev~v:ias.Kristina ?.,--"lepl'€gunte,

. -iMipa'dre tenia una tinea cerea deLuck, en' la Ucrania polaca-me dljo-.

Lo vi POl' ultima vez en 1939. Ya no tengohagar. .

El nOl'teamerl'cano' nos intel'I'umpi6, con

EU calma habituai, para preguntarnos cua-

les it:.an a sel' nuestros planes inmediatos.

Nos dijo que, en vista de que ya oscure-

da, debiamo.5 ',aP1'€surarnos ,a caminar ha-

cia el Norte, a Io laJ'go .del rio, hasta. en-

:contrar un punto en que fuera mas pro-

pieio el cruce la man'ana si'guiente. A:fiadiJ)

que· Ie par-ecia p'oco a{!onse0abIe darnos

otro remojon aqu€illa misma noche.Por

10 menos, podiainos dbrmirsecos.

No 'h'ubo discusi6n. Anduvimos. seis 0

sIete kil6metros a : 10 largo del rio, a cierta.

distancia de la orilla, bordeada· de arbo-

Page 34: La Increible Caminata

5/15/2018 La Increible Caminata - slidepdf.com

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(Continuacioll.)

les. Obsenve que Ill,mucnacha miraba mu-

chas veces a Smith sin que nunca lleaaraa hablartevOomprendi que Ill, joven con-

slderaba a este hombre como el unico que

podia oponerse a su presencia entre nos-

otros. Los polacos hablfl,bamos con ella.

Smith no decia nl una p3Jlabra.IEra ya de neche cerrada cuando en-

\: ccntrarnos un buen sltlo para descansar.:{ ;Constl'uimos un refugio aprovechando el

tronco de un arbol caldo. Tendimos nues-

tras moc!hilas para formar una especle de

camastro y aUi durmio Kristina, absolu-

tamente connada. Nosotros, en cambio,descansamos mal. Estabamos Intranqulios.Nos turnamos para Ill, guardia, como de

costumbre, KJ.·istina segula durmlendo pro-

fundamente, como una nina pequefia, apesar del Intensisimo frio. Y ann dormiacuando, ya arnanectendo, me toco del

hombre mister Smith para despertarme yIlevarme aparte,Me planted Ill, cuestlon abocaJarra:

"- tQu.e vamos a-- hacer con esta javen,

S1aJv?" Yo esperaba Ill, pregunta, pero no

supe que contestar, Dlje que antes _can-

vendria saber cuales eran los planes de

ella. Me daba cuenca de que can ello elu-

dill, la cuestlon, Vi en ese momenta queMakQwski estaoa hablando con Palueho-wicz. Se nos acercaron y trag- eltos vinoKalemenos. Un minuto despues los otrosdos salieron del cobtro iY se reunieron .con

nosotros: '':Muy bien", dllo el nonteame-rrcano, "celebraremos una conrerencla".Perc per mueho que hablabarnos, no IIe-

gabaznos a nada concreto: /,:N'es l1E1varia-

mas 0 no a la Cihica con nosotrosj Esta

era la cuestlon. Solo convinimos en que

debfamos haclar con Kristina ;y actuarluego en consecuencta.La despertamos con mucna suavidad. Se

desperto, bostezo, e Incorporandose, nos fue

mirando a todos. 8on1'16 f.eliz al recono-cernos. Aquel11a sonrlsa nos hizo un efectomu;y agrada-ble, y, toscamente, Ie devolvl-mas el saludo. Ante todQ, Ie buscamos algo

de comer en nuestl'as mochilas y tambiendesa:yunamQs nosotrQs, a la luz del -alba.

Luego, Paluchowlcz, aclara,ndase la gar-

ganta, turbado, Ie pregunt6 c6mo habla

lIegado hasta dande la habiamos encon-

trado y hacia d6nde se dlrigia. ":I:ntentaballegar a Irkutsk", respondl6 Kristina,

"pol"Que un hombre que se compadecl6 de

mr y ine llev6 en su cami6n un buen tre-000, me dHo que si lIegaba al !;ruce del

ferrocarril podria meterme en un tren sinque me vieran, -en uno. de los trenes que

van en direcci6n Oeste. El !hombre me

dej6 en Ill, car1'etera, 'Y desde entonces heestado caminanda. carl 'iendo casl slempre,tratando de dar un radeo para. na p.asarporIa cludad".

ISe qued6 mirando fijamente a Smith.

Este Ie devo-l'Vi6 l a mirada con gran se-

riedad Kristina tuvo un gesto muy feme-ninO-iY patetico en aquellas circunstan~

cias--, a1 me terse POl' los bordes del gorro

de piel los meohones de cabello rebeIde:'~Creo que debo -eontarles a ustedes todQ 10

que me 'ha pasado", nos·dijo. Todos agen-

timos.iEt'a una variante

dos nosotros conociamos. Los campos de

concentracl6n sovleticos est in Ilenos de

hombres que pueden contar caws mllY se-

meiantes. La locallzacion- y los detallespueden variar, pero el norror y la miserla

eran elementos comunes y proeedian del

mismo autor.Despues de Ill, primera guerra mundlal,

e1 padre de Kristina Polanska habla sido

recornpensado por sus servicios a Ill, patrlacan un terrene en la Ucrarila polaca, Ha-

till, Iuchado contra los bolcheviques 'Y elsenerat Pllsudski pudo concretar asf el

agradeclmiento polaco. Kristina .. que na-ci6 unos afios despues, fue hija unlca. SUpadre y su madre trabajaban mucno con

la Ilusion de que B tl hUa pudiera educarse

en los medores sttios. En 19'&9 empez6 a

estudiar en el Instltuto de Luck, y las Po-

lanska estaban muz satisfeohos de 10 mu-aha que aprendlan,

!Lleg6 septiembre de 1939. Los ruses In-

vadieron el pats. Antes de que plsaran sus

tierras lOS soldados "liberadores", los gran-

jeros polacos experlmentaron los erectosdesu proximidad.Loscomunistas estabanbienoreamzadosy bastaron unos cuantosdiseursosineendiarios sobre laurzente Ile-casldad de arrojarde sustlerras a los

"ter.ratenientes extranjeros"y entregarlasa 105. obreros y eampeslnos para queestossetransformasenen bandas de asesinos.Los Polanska sabian que 5U situacron-era

desespsrada. No dudaban de que la cl1US~

rna irta. a buscarlos . .Ocultaron a Kristina.

en un desvan y esperaron. "Sueeda 10 que

suoeda, no te muevas de aqui hasta que

volvarnos a buscarte", Ie diio su madre.

Kristina ey6 Ilegar a la multitud enru-rectda, O;y6 como destruian a hachasos,entre una espantosa a-Igarabia. las -Insta-Iaetones de las graoo a s cercanas. Le pa-reci6 reconoeer las voces de algunos hom-bres del pueblo vecino. Pero despues Po-

Ianska llam6 por sus nombres a unos In-

dlviduos que conoeia. El patetico rue·go Ie

Ueg6 a lanina. Inmovillzada POl' el ten!}ren el desvitn: "L1evaos 10 que querais, pero

no destru(Yiis nuestros hogares y nuestras

fincas-." Hubo un silencio de uno 0 das

minutes y luego la multitud rea-cclQn6 conuna bestial griterfa. L{}shombres a.vanza-

ban haeia Polau.s'ka y su casa. Krilitina no'!labia oldo a su madre, pero estaba se-gUra de que se ha1llaba junto a su pa~e.

Uno empez6 -a arengar a los revoluclona-

rlos con frases violentas y venenosas. La

VQZ de Palanska Be elev6 una vez mas,

-pero pronto _qued6 al1.ogada por los chi-

Uldos de la masa. Entonees -griM Ill,madre.

Kristina sa tap6 los oidos y gimi6, tem-hlando de mledo y de espanto. -

Permanecl6 en el desvan mUl'!ha tiempo.

POl' 10 menos a ella Ie pareci6 que eran

l1.Qras y horas, pero qulziis no fuera -masque un rato. Los hombres se ha-bian mar-

chado. La casa estaba en absoluto silen-clo. Tados los cria,dos hablan huldo el dla

anterior. Su padre y la madre nunca vol-

'Vieron a buscarla; Kristina supuso que loscampeslnos se los -habian llevado. Reco-

rrl6 con muc!has precauciones la casa va-

da. y sa.1l6 a1 patio. AUf. tendidos en el.. suelo, ilstaban los ca:da.veres de sus padres.

Kristina conservo de enos esa ultima ima-

gen: destrozados por los brutales golpes

que les habtan. dado y estrangulados con

alambre esplnoso,,observe su palIdo rostra mIentras nos

relataba el horror de aquella clara mafia-

na de septtembre. Hablaba con tono mate,

sin cambial' de expreslon, coma una au-

tomata. Se hrullaba todavfa bajo los erec-tos de la terrible 1nl!presien: 'IEntonces",

termino, "IVQl'Vi entrar en casa, reurn al-

,gunas provistones y las envoM en un fra-PO. Estuve rnucno ttempo eorriendo",

(No recordaba con detalle 105 dias st-gulentes. A:lgunas personas compasivas, ealos pueblos por donde pasaba, le daban

algo de comer y Ill. dejaban dormir en suscasas. Le obseslonaba el prop6sito de que

no la alcanzasen los ruses, Fu e una Ironiadel destlno que la detuvleron precisamentecuando, sin saberlo, Iba a cruzar 130fron-tel'a.El Ejel'Cito Rojo la entreg6 a un Tri_

bunal civil, que 130conden6 Inmediatamen-te a ser deportada a Rusia, dande habia

de trabajar en un "kolj6s", en la zona del

rio yenisei, de Siberia Occidental.

ISe arum6 mas para eontarnos su vidaen Ill,grarda sovtetrca. Era una experten-

Cia mas reciente para e11a. La m9.(Yoria

de las trabaJadoraseran mujeres rusas,de volumlnoso peciho y piel correosa, YKristina era Ill,unica polaca, Su tarea con-.slstia en .Ilenar y llevar de un lado a otro

enormes sacos de trlgo. Las otras muje-

res .se burlaban de ella POl' sus modalesrefinados y su debilidad. Se reian al verla

rracasar en BUterrible trabado, que para

elias era facH. Por las neches, Iloraba

desesperada, con todo el cuerpo doloridc.La a:JI.mentael6n era. muy denclente. -1.0unico que contaba era un kilo de pan

dla.rlo.1Pl)ro,naturalmente, no eran las mujeres

qulenes nactan correr a KristIna. La gran-Ja estaba dlrigida par un caoataz quesIetnpre procuraba Bacar partido de lasmuj'El"eS a sus 6rdemis .. Kristina Ie teilla

mucho miedo y procuraba a.partarse de el

10 1 mas posibl'e. Nas diJo que era un tipo

a1lto.muy fuerte. De vez en cuanda la bus-caba y Ie gastaba .bromas, dlch~ndQle que

era muy diferente de las mujeres rusas

y que ne~esltaba a1guien que culdase deella. Cada v ez que Ie decfa estas cosas,Illis rUBas se burlabim de ella Boezmente,

rIendose de la endeb1ez de-su -cuerpo. y Ie

ad'Vertian que yapodia tener cuidada s1

querla Ilbrar.se der clllp3otaz.

Un dill, -Ie -ardenaron que en vez de sa-llr al -campo can las demas mujeres en

los carros, se presentara en casa del ca-Pilltaz "para. ser !nterrogada". Las inten-ciones de este quedaron daras desde el

'PrinCiplo. Le dUo que no tendria que ha-

cer mas lahores pesadas si era arna.ble cone1 . Kristina, e&pantada, Ie sup-lic6 que la

dEljase ir con las dema.s mu.1eres. Enton-

<leS.el bestia se J.anz6 ya deeldidamente a

violarla. KrIstina grlt6, Ie arafi6 Ill, cara y

1 e golpe6 freneticamente con sus pesadas

botas. .sol'prendido por esta furiosa re-

sistencia, a,floj6 su presi6n 10 1 suficiente

para. .que Ill, muohacha pudlera soltarse yhulr velozmente, mientras. el capataz Ie

y "'i:i=aoi{."(Clm«n,l'~rf1cJ.;:. 6 " '''S.::;;:!_'r~~',cbC::'·,i~~" ~i\~puss: . .: :; ;

:.'.::<G:::·~,~';;:; ,o;:c '1 Hr ,-~ ""

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(Continuacion.)

grltabaque tenia medias para hacerla

caznbiar de opinion, y Ie llamo .todo 10

poor que puede Ilamarsele a una mujer,

lUis tina , aeurrucada en un rincon delcaseron donde vivian las muferes, espera-ba. horrorizada que el capataase presen-tara de un momento a. otro. Pero no rue.Ouando Kristina Cr8Y{) que se acercaba elmemento de regresar .las mureres. sall6corrtendo. Las Instalaclones del "kolJ6s". lao oeultaban de 11 10asa del ca.pataz. Aque-

1 1 1 1 0 nocha la paso a ]a, orilla del rio, entreunos juncos, y al otro dia slgulo a 10 largodel rio, reccrrtendo muchos kil6metros,

Ihasta que Ueg6 a una carretera y 10gr6 quela l l e v a r a n en un caani6n. Esta [u:e 1 1 1 0prt-rnera de las dos veces que Ia sublerona uncannon y le anorraron asl grandes dlsta.n-etas en direcci6n Este.

"Notodos ·Ios rusos son males", dtloKristma. "Altl'ue.llos dos me tuvieron !list!-rna, e Ineluso me dleron parte de su pan.. !m . segundo, cuando v i a qUe no podia lle-varme mas l.ejos, me di:lo que debia haeertodo 10 poslble por Ilegar a Irkutsk.'.'Nos fue mirando a todos y luego, dirt-

gIendose a mister Smillh, dl1o:-y asi es como llegue aqui.:

El norteamerlcano hundl6 las manes en:105 bolsillos de SU "fUifaika;". POl' fin, hablo:-iNa vamos a n1ngUti sltlo cerca de Ir-

kutsk, nos dldgiremos hacla '81Sur, por el

otro lado del lago; lQue plensa usted ha-

eel' a:hora?Kristina se llev6 con esto una gran ce-

eepcton. Nos mlro angustlada a. los otrossets, Todos guarda.mos sl.lencio. Los· setsdeseabamos que Ia desventurada-mucbacaasigulera. con nosotros, pero nos parecia bienque mIster Smith Ilevara aquel asuntotarrdeucado. Los lablos de Kristina tern-h}aron levemente. Luego, eon un gesto vo-luntarioso, di;jo:: ....jVoy ·con ustedes; no puet:en dejarme

sola...'.El norteamerlcano miro un momentohacia el rio, por enclmade la cabeza de1 a Joyen.~lSabe usted na:dar?-'-Na:do muy blen-dijo con orguUo-.

En el Instituto era de ·las mejoreS nada-

d6ras~ .IMfster Smith estuvo casl a punto desomeir .. Y los demiis sentImos un granalivio al oirle declr, tuteanda ya a·Kris-tina: .-:'PerdoDame, ehlea, 51mis preguntas te

,han pareriIdo descDnslderadas. Creiamosque ipudleras tener a:lgUti plan y ncrsotrossolo. pod emos ofrecerte penalidades. Ape-nas nos que-dan Ya provisiones yfalta aUn.mudho que andar. Tamil:Ylen d€<bes·com-prender que 51 te a:trapan con nosotros note llbrarastan f~mente que 51 vas sola.Detodos modos. sl quieres V!enir can noS-otros, te aceptamos encantados.

--Graela"s-di:lo Kristina con sencUlez-.Lo unico ,que deseaJ'oa. era. unirlne a. us:-tedes. .

La joven se ale-j6 de noiotros para es-conderoo entre unas Illlatas y '-aprovecha-mos esta breve auscncia suya pam· hailerun recuento: de los viveres que- nos· que- .daban. ·i \!brlmos las· siete. mochllas, 8Jpar-

tames las 'Jii1elesenrolladas y sacamos lasprovtstones. COmo t€I ! l l ia .mos, nuestra 51-tuac16n era muy graNe en cuanto a la co-mida, Entre todos, nos quedaoan unas dosIlbras de cebada, un poco de harma, algode sal y unas, cuantas llbras de carne devenado, ya cas! negra, Decid!mos racio-narnos estrlctamente a unacomida dia-ria, reducida al mmimo.. ha·sta. que ..pud!e-rarnos reponer nuestra "de9Pell5a". L e i unt-co que nos sobraba no era de comer, sinoel musso seco, Ia "gubka",que utlMzlllia·mas como y'e(!ca en nuestros pr!mIt1vosencendedores, Par 10 menos pcdrlamos ca-

lentarnos,iEs muy proba:ble que eada uno de nos-

otros tuviera, ademas de la infima reserve.que ensefiarn.os, POl' 10 m'C!DOSn pedazo

de pan, tostado s durfslmo, en un f:olsillodel OhaJQuetc,n.Desde luego, yo tenia uno'Y enas a.delante.pude comprcbar que losdemas h!l!bf.an pensado ta,mblen en guar-darselo. Ng,da habia en ello de antisocialo deshonesto. E!sconder pan era un movl-mlento re!Iejo de todo prislonero. un stn-.toma de'! cautlver1o.'Ulnprisionero eon uni;ledazo de pan, por,muy vieJoy duro quee s~ Jnera, 00 sezi-tia un1do, aU.n a 1 1 1 0 , v ida .10 mlsmo que el h@re que\vive normal-m e n t e , . ' .en plenaclivillz.aci6J;l,lleva conslzounamoneda-lCetiohe para' tenet; I e . segu-

rldadd:e que nuncava a f.aijtarle el dine-ro. Yda muy ,MenIa medi(jadel arectoque sentfamos por ..esta Joven polaea elheeho de que, ant;es o. ~espues, fuesemosdesprendlendonos todos de" esa linp:: '1,rtan-t£S~m-!I.eserve -para acaUar en 10 posiblesu hambre.iComimos apresuradamente :aquella rna-

fiana yd;)l '!dimos cruzar inmedlatamenteel do. La primera .hora de c}ar!dad pro-m-e.tfa un <)spJendldo dia de pr:imwvera ynos sentfamus arumados para aeaoar 10antes po~lble con aque11a .desvlaci6n y em-prender dv una vez 1a maroha segu1da endlr·ecc!6n Sur .

Pa.ra Krlst.tna el cruce del rio fue unadUlIaprueba. La cc.zwenc!mos para que se(J.u!tase su ·'Callente cll.aQ'Ileta,·los 'Pantalo-.nes y las botas ..HubQ IUnIlllemento en que. I f ! . cDmpaded protundamente al.verla Con

su descolorido tra;je de terclO:Pe~om·ollado.Aivlancecautelosamente hasta el 'borde delhielo, UeJVIandoatad·Q>a ml cintura un ex-tremo de la correa ([ormada por todos·nu,estros la.rgos cinturones un1dos) y. con'Ill ha'CJha firme,mente suJeta a mis panm-lone'S porIa parte de a.tras de la pretlna,o j cruce con facilidad a1 otro lade del. ca-llal que corria 9c 1 ' el oentio, c1a:van<l0 elha<&ls. en eoo otro sector del rfo ihelado.Tirando d'el m'9. 'ngo,oue estalba firme, mesubi 1 1 0 1 nueovoborde. Kolemenos me slgui6 ..llevando en alto Ie. rapa. de la ;polaca. Pa-luchowlcz y Makowsld pasaron juntos y19. c:h.1ca l ba tras ellos, amarrada por Jaclntnra con un trozo aparte de correa, que!habiamos prepara1io para ella y que su-.l>ebalbanlos dos po.lacOs. Seguian los otros. tres. Uno de eIlos llevlliba las. botas de

KristIna. Corrlmos para ponernos .0. cu-'bferto l'mrentras corrfamos enroll8bamoslacorrea.~ .

Kristina tenia. J : 8 . pie! azul ada de frio y

no .podfa dejar de castafietear los dientes.Kolemenos· reentrego Ia ropa. En cuantonos detu'Vinlos, etnorteamertcano le dijo:~o te quedes ahi parada, psquefia.

A!I~jate de nosotros y quitate. ese vestido,EXPrlmelo 10 mas que ,!>uedas y. pontemlentras los pantalones y'la "fUlf,aika", queestan secos, La muchacha obedecio, Ball6corrlendo. Nosotros nos desnudamos enseguida y mientras retorclamos la, ropa

da:ba.mos grandes saltos para qu1tarnos e1frio. Esta cperaelon nc duromueho, y, yacon .Ia ropa puesta, adn mnlada, espera-enos el regreso de Kristina. No tard6 en

Uega.r, can el veseido de terctopelo : v sus'Prendas lnteriores en un lio chorreante,balo el 'l:razo. . .-~Yieron ustedes c6mo sabfa, nadar?Mister Smith Ie respondi6 can una roue-

ca. Luego- dUo:

-Sf, ya 10 he visto, mUclhil:oha-. Y, '1 '01-"'i1~llidosehaclami-: Despues de todo, estaehtca, no sera. una ·carga para nosotros,Balbe arreglarsela.s bien.lCam!namos mueho aquel dia .. 8610 nos

detiuvlmospara descansar un poco de tar-:de en tarde. Kristina ·1 0 resistio perfec-taenente 0, POl' 10 menos, no se quejo nluna .sola vez. Era un tibIo dia de mayo-tlMo para aqualla latItud-, y el sol demedlodia contrtbuvo. unido al calor que(produefa nuestro pro.plo esIuerzo, para quese nos secara pronto la: ropa. S-eguramen-te recorrimos mas de euarenta y cincokll6metrCls en dlreccl6n Nord-es,te, alejall-donos del Iago Balkal, seglin nuestro plande desvdarnos para luegd' iniciar e. l rumbad i r e e t o Sur. Por 1 1 1 0 ·noche dormimos per-fectamente, bIen proti!gidos por gruesosal.1bo~es.·Al terc.;!r dia de ha'bt'!rnos apartad'O' de

la arma del lago, considere que haoia lle-,gado el momento de voLveI'nos hacia e1Sur, €'Il1I])rendiendoasi 1 1 1 0 ruta que nosllevaria. hasta la frontera de Mongolla,yendo para,lelos a,1Baikal; .que quedaria aun~s oC'henta kll6metros a nuestra der~-aha. Todcs estos. cllculos eran de pura..adw!naC!on, pero no ereo me equlvocase'lllueho. De todos mddos; hublera sido lin-post:i!e rnantener una ·ruta-verdaderam.en-

te paralela. El terreno era montuoso y, po-bla,d':. de bo~que. de modo· Que nuestroI!Ivance encontraba serias dlficultades. Confreouencla se nos presentaibala necesldadde vadear riaohuelos, escalar taludes, etc.Todos eSos arroyos, rlachuelo8 ~ al,run queotro caudaloso .no, eran afluentes del lagoBa1ka,1.Los'va-Iles Be IncJinaba.n, casi inva-ria,b1emente, hade. el Sudcceste. Aunquecj\sl siempre podfamos vadear las cQ·rrien-tes, estas eran a nreces m~ fuertes <mandolas engrosaba el desh!elo. Ko1emenos ibadelante, 'sondell1I'l·do.con un largo palo.Me mara,v1llalba 10 bien que oolPQrtaba

Klrlstma todas las 'dtfiowtades. Creo quetodos nO~()tr05 segufamos temiendo POl' sufragiJidad. yestoy .segura d>eQue ella sedaJba cuenta de nuestra deseonflanza. En

-ali:{ueIJl09pr!meros dias, ni una sola veztuvhnos que detenernos por 'Culpa d>eeJla.Al contrar1o, cuando nOS vefa tan fatiga-dos y anastrando los pies' 81·final de una.'larga Jornada ·de marcha, ncs anima-ba

(continuuriU

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·(Cofttinuacion.)

:.alegrernente. Nos trataca ccrno si fuerarnossiete iQ'~rmanos suyos... sxcepto a mister

Sn}itllf .Por a;quellos dias habiamas cmne-

zado tcdos a tutearnos; la propia Krlsti-na, a)pesal' de su poca edad, nGS trataba

de tuia todos. Percni ella ni nosotros nos

pernittia,mcs esa confianza con eJ norte-

amertcano. El, sin embargo, tuteaba a

Kristi'na y Ia 'trataba como a una nina

pequefia, Entre' ellos se entablo una curio-

sa relacicn, como de padre a hija y de

hija: a padre. PorIa neche, en el refugio.

Kristina lz resaca a mfstsr Smith que Ie

ccntase cosas de Ics Estadas Unldas. y enmas de una .Dcasion .oi que el norteame-

ricano le decia a la joven polaca que

euando termlnass nusstra cdisea, la 1Il'!-:varia a su pais. Solia gastarle bromas por

sus botazas. POl' ejsmpla. le decia: "No

te preocU:;:les'-Kristina, en los Estaaos trnt-des te comprare unos vestidos preciosos y

unos zapatcs muy elesantes de tacon alto."

11 , Kristina se reia, encantada.

,Aquzlla psqucfia f'ue metiendosenos en

el corazcn, basta el punta de que nl uno

solo de nosotros habria deiado de dar su

vida para sal var la de ella. euando se

despertaba POl' las mananas. se quedaba

mfrandonos. como ascmbrada, y nos decia :

."Es estupendo veros aqut a tocos, Tenlen-

doos al Iado, .rne slento cornptetamente se-

gura." Una" 'de sus ocupaciones era reani-mar a Zaro euando el .cuan humor de este

decafa. Estlmulado par ella. vc lvia a. ser

el gracioso corrrpansro de vtaje a quientcdo Ie parecia divert.ldo y al que las peo-res circunstanclas Ie pr'oporctonaban tema

para' un chiste .. M1..lchas voces, cuando los

vela juntos rtendose y haciendonos reir a

los demas, me parecia impcstble que es-

tuvierarn cs en mortal ;peligro y mediomuertosda rraimbre,IEl'mas reSel'llado de' nosotros era Mar-

cllinkevas, e1 lltua-no. Hablaba poco y, par10 g'clleral,' s~10 daba su 'opinl6n cuaudo

se lapedian. Kr'istlna caminaba junto a

el much.;:s kil6metros, ha-b-Iandole con se-

riedad, pero een gran·interes. A1 cabo de

a1gun tiempo, se producia el extrano 11"n6-

meDO de que Marchinkovas sonreia e In-

'cluso se ' l'eia a carcajadas.

A!demas, tenfamo.s en ella una enif·erme-ra. No 10 habiamo's pOdido crser sl alguien

. nos 10 hubiese anunciado. Cuando K-~le-mencs empez6 a ccjear can los pies infla-

mados, Kristina se los' bafi6,hlzo unasvendas con pedazos de su combl-naolcn y,

cen ··gran hai':t:Ida,d, levend610s sitios·doloridos entre les dedos. Y cuando Se meabrl6 mi ih:eliaa de ,Ill. pierna, tambien Ill. .

yen-do. En '<manto a!guno de nosotl'CS seccrtaba 0 se lastiffi.a!ba de algUn_ modo,

aeudia. s1J1icita. nuestra enfermerita. y sela.s a~rr.eglaba 'Para hacz,r una cura de uf-

g·encia 'con los ·medios mas eJementales.euando no tu'Vo ya manera. de sal:ar mas

vendas, se 1Imlta.ba a 1avarla en e1 ague.

·de un arroy:., 1as seca.ba y las ponia otra

I\nez en marcha. Pero, de no >ba'ller estado

alii Kristina, ninguno de nosotros se ha-

bria detenido a ba·cerlo. .-

Pero 111.prCJ!jlla.K'l'lstina necesit6 esosculdados euaD:do nos acere':'bam03 a un

riD-prrl'hs.'ble:men~ el rio Bal'gusin--:-; ·em-

p"zj a retrasarse y nnte que cojeaoa, De-tuve a los otros y retrocedi para ver que

Ie sucedia, "La·s· totas me lastiman unpoco", me dUo. Se las -quite. Sa le hablanforma do unas 'ampoltas. que se Ie ha,bfan

revantado. El cuero de las suelas y de los

talonss, por el interior, estaoa sin eurtir.

La Joven d'e-bi6 de pasar horas horrioles

rnientras flngfa que nada Ie ccurrla. Eran

unas botas demasiadc pesadas 'para ella

yde tal tamafio 'que le bat'aban los pies

dentro. Los siete Ill. rodearnos, sin s8iber·exactamante que nacer para curarla, pero

ella insistio en que estaba ya bien. De

todos modes, la vende los piES con trQZOS

de nuestras propias. vendasry la convene!

que le cortasemcs 'las Iargas cafias de las

cotas para redueirles elpeso y que pudlera

'sop: rtarlas meier. Guardamos e1 fleltrocorta do para hacer luego mocastnes. Pero

una . hera desoues, Kristina cojaaba RUn

mas que antes, de modo que decidimos

tlrar de una vez sus cotas y hacerle mo-

caslnss.

. Y:· me enearsue de esta labor y la nice

can tcda ia parfeccion que me permitfa el.

materral disPdnillle.Los. otrcs, sentados a

mialrededor, conternplaban-ccn jrran in.-

teres ml trabaj9LLe pusevsuelas dobles

para que Ia durasen mas y le.h.icieran .:massoportable la mareha. Lastorre conple!dp.marta. TodpsItlefe.l!cltaronpCrr mina,

billdad, y Kristirla, impulstvamente.v.medi6 untbesc .enlll.jta·d de la,frente.

. Fm'Pez~mos a creer que vl a vchica Il{)S

traia burna Isuerte. No tuvtmcs incidente.alguno en nuestro-avance-hasta la noche

(cinco dias despues de haber miclado la

marcha dtrectamente haela el Sur), en que

lle·ga;mos al rio Bargusln. Tedos los gran-

des rfos suoonian para nosotros una gran

']Jerdiaa' d1l ti€ilIlPO p:-r Ill. ne::::sj,dad de

practi~a-r .Pli!inero un I'econ~clm!~,nto en

'bu;ca dql mejor sitio para cruzados. Aldia sigui-ente de,scu'Jrimos qua nq se tra-

_,~a'b'1 de un solo rio, sino que teniamospar delant-~,' ~ara atravesa'rlos, nada me-

nos que tres ribs de l'espetat:le caudal. Una.

v.ez pasado e1 Bargusln, nCBhallamos ante

el segUndo a s610 una !lora de maroba. E1

tercero. que era el mayor, nos ohllg6 a

detmernos ti·as hora's 'di!SJ)ues y per-dImasmUc>ho tlem"po estudiando la manera' de

cruz9.rlo. Ad·1\inamos que los tres rios seunian. a1 Oeste, para desembocar en e1

')ago Baikal, f::rmando-en~onces el.Que se

nama e~n n:ias exactitud rio Bargusln.

EECaI2"llOSun monte, a Ill. orilla de alIad'31 tercer rio, y ·encendimos una hoguerapara cal~ntarnos. .

'''',hora pienso, respecto aa hambre, quela 'verda-de-ra '\hambre canlna" no me ate-

nazo -hasta .pasados los ocho prlmeros diasdesde que cast se nos acabarcn las· provi-

siones. Todos los demas sintleron desd·e elprinCipia los dolores del estomagolvacio.

Pero cuando me toco a m1 padece1'los, sufd

mas Quetodos mlscompafieros. Aquella. no-{ille ihiclmqs gachas ·de cebad.a, pero en:~an-

tlda'd tan pequefia que fUB easl peor.que no

tllmar nada. S610 pensabamosen la coml-·

da, 0 casl solamente en eso. Hub.o quien

propu'so que asaltaramos una casa de cam-

po ·para robar alguna comida, perc Inclu-

so en aquellas desesperadas ctrcunstan ,

etas nos .reslstfamos a poner en peligro eI

buen exrco de nuestra fuga alhacernos

not-al,"per 'los .habitantes de la region. Era

evidente que 5i se lanzaban en nuestracusca, POl' 10 menos a·lgunos de nosctros

serlan recapturados,;Kristina estaca prorundamente dorrmda

misntras celebrabamos nuestro consejillo.

,Ell.sangento la mir6. Ltie.go dljo ;

-:Curmamos. Mil.fiana, Kristina nos

tr'aera suerte y todo sa arreglara.

c-lE~paremosl0 asi-idljo Makowski.

IORUZAMOS EL ·F'ERROCARRU.

TRANSlBiERIANO

'E1 paso del rio Bargusln (es decir, de

sus tres brazos) r. a fines de mruyo, fue el

ultimo de estos arrfasgados ejercictos 'acuii-

.tieos ..Al sur de Bargustn nos esperaba un

suave verano slberlano. Desde e1 extreme

. septentrronal del lago Baika-I,· nos ravcre-

cia un tiempoC3'stante bueno, una prl-

rnsrvera seca, sin lluvtas. Pel'o 10 que en-

ccntrd.barnos ahora nos alegrruba y nos

Uena:bade estnnulo: un sol reconfortante,mucha hiel"Oa de Intense verdor, piiJaros,

rlores.,; L~s paoja'ros volvian de sus lei a-nfslmas emigraclones.tjsn sels semanas ha-liiam·os salfdo -del terr~hle !nf!erno frio, el

atroz invlerno sr.ertano, para ser acogldos

; p o r el riErano que recordabamos eninues--tras suenos. A 10 Ieios veiamos 81 esplen-

·d·~r'•de las huertas de las aldeas y nosmaravtllabaznos ante 1:5 cerezos y a·lbari-ccqueros. Ad·:mas, euando no' nos pare cia

prudents encender una hoguera, opodfamos

dormlr perractamente. Durante el- df.a w-niamos que quitarnos -Joscha1ecos de pie1,

·p=ro nos ",]os ponh1mes de nUE'VO-,p:1' la

.noc-he para prz·venirnoi; contra el relente:nurante los dos dias sigui.en'tes a,I 'cruee

del Bargusln, no co:mimos a:bsolut·amenti!

nada y -el pensamiento de la ccmida nos

{)b~='Eionaha. Ent:uces fue cuando vim'~sun ca·bll'IIo entre los arboles. Estaba en-

gauchado a un trineo. Ha:bia· olfa.tead<:uuestra pre&e·ncia ... y no le agra-da,ba. DE

a;hi' su I-n!quietud y sus rellncihos. Zaro 3yo, con grand'es precaucillnes, nos aeer-

cames. El c!1.1b-a.Jloos mir6 aEustado, qui-ias . sospecllando nu-estras intenciones.

Cmnpr-enderan usted,es qUi! la carne de

caJ":a;J]o,qUe tant·a g.mte come en paise<

dV1llZll;dos, nos pa'recia ·en aquellas e!r-

cuns,t2,ncias e1 co'1mo del l'efinami·ent'O.

Zaro'y yo Vlmos a Ie. vez Ia primitiva

e,sc~.peta apoyada en e1 tJ..neo. Ell canen y

1a ma·dera. se haIIaban atados con a1am-

bre. ·Junoo a ella habia una belsa de cue-;fO donde seguramenj;e esta-ban las mUll!-

cloms y Ia p61'Vora. Era una escopeta an-tiquislma~

lEn seguida pense que debiamos apode-.

rarnos del arma a.prmrecihando la ausencia

-del duefio y, naturalmenti!, Zaro ha;oiapensado 1{)mismo. Los dos corrlm,os hacip

el. trIneo; cogi' Ill. escopeta. y me la pus!!

.debaJo del bra:zo can el cafi6n apuntando

hacia abajo. Les hioo seiia.s a los otros para

que se acercasen. Kristina, con. mff-f~rrContinuurll.)

!';cJdri_:J

"'n c::alqui f;:.. f C~Tl \, -: C I

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'(Continuacion.)

Smitih, que la protegfa- paternalmente conun braze sobre los hombros, se mantuvo abastante distancia, mientras los demasacudieron junto a nosotros. Kolemenosse aproxirno a1 cabadlo y le estuvo hablan-

do para' tranquniearfo, pero el animal nose :fI.Sibade nadie.El duefio d,e,biade andar cerca, 10 bas-

tante cerca para, oir los reltnehos miedo-sos -d e su cabaillo. POl' :fin, aparecio. Nosenrrentamos con el 'en un ambiente degrandfsima tension. Era de unos sesentaanos, muy ruerte y corpulento, Sin duda,era lefiador; Ilevaba un haena al ihombro.

Tenia unas barbas largas, perc muy culda-das, asi como su largo cabello, Su aspectome Impresiono, y es que sin dejar de mi-rarnos fijam ente, y viendo que yo tenia suescopeta bajo el braze, no de:iaba de avan ,aar nacla nosotros, sin la menor vacllaclon.No parecia sentir miedo alguno nf estaralarmado. Como si nuestra presencia alliruese 10 mas natural del mundo, Se acercoal caballo, Ie pase una mano POl"la cabezapara. tranquilizarlo, s'e volvi6 hacia n05-'otros y, silbltamente,de un formidaole mo-llnete, elavo el hacha en el trcnco de unarbo! :y la dej 6 !\IIli. .

IMe mir6 con especial Interes, y Iuego aKristina, qua seguia junto, al nortearneri-cano.-lQuienes son ustedes?-dijo POl' nn.ISmi~h se adelanto UDOSpasos y .respon-.

di6:--<So-mosprrsioneros f'ugados. No Ie ha- '

remos dafio. buen hombre. S610 queremoscomer.-JLos tlemoos ban cambiado-c-dijo len-

taments el lefiador-. Antes, nabrfan en-ccntrado ustedes POI' todas parces viveres

especialmente defados para ustedes u otroscomo ustedes, y nadle les habria pre,gun-tado nada,IEste hombre poseia una gran dtgriidad

natural. Nos mira'ba a twos con nobIeza.Volvi6 a fijarse en Kristina y pense que!ba. a pregUntarnoB qUien era aquEUa jo-ven. Pern nada d!:lo. FIle hs.,cia el trineo'Y sa'c6 de el un saqui,to que- yo, en mi pre-<:lpi-taci6n,no ha,bia vis to. 1 . < > abrio d'csa-tando un cord6n de cuero. Mi'entras, dijo:

---lNose preocupan UBtedes,pot mL Vivo&010y SOIY el unlco hombre que habita enmucihos kil6metros a la redon<la.Del saeo sallo un tesoro: una magniflca

,bogaza de pan: cuatro pescados seeos y un,gran tr02lOde tocino sala'do. De su clntosac6 un largo cucih1110de caza_ Sin duda,aquellas eran las provisiones de un h-om-

bre que habia de pasarse e1 dia trabadan-do muy lejos de su casa de solitario. y queaUn no ha,bia comido. Obs€rvabamos' susmovimientos con atenci6n coneentrada.Con<gran euidado, corta'una rebanada depan y-una taja-da. de tocino, qUe vCJlrvt6ID'eter en el saQuito. Avanz6 hacia Kole-menos y Ie entrego Ia.hogam, el toeino yel pescado.

Kolemenos se estuvo tanto tiempo ml-ran-do Jos vfV'eres que tenfa, ,en las manos

que me vi obJigado a del:iI'Ie:-GuarcLaJo todo en tu IDochila, Anas-

, tazi. que ya 10 reparblremos Itl!ego.\A I oir mr vQZ, el ruso VOliVI6 acordarse

ABC SEVILLA (Sevillal

de mi y de souescopeta, Se me acerco con

una. muda pregunta en sus oios. Entoncesie pregunte a Smith, Ilevandomelo aparte,que haclamos con el arma. Todos estabande acuerdo en que aquel caeharro no nosservlrla para nada. No podiamos cazar conIll. escopeta, porque el ruido de los dispa-ros atraerda Ill. atene16n sobre nosotros,sobre todo en las zonas 10bastante pobla-

Gas a las que nos aproximabamos. Sin em-bargo, POl' razones de elemental segurldad,

no podfamos dejarsela al lefiador. Palu-chowicz y Makowski insistieron en que nopodiamos provocar el riesgo de que e1 arrna

sirviera para agredirnos 0 para dar la se-fial de alarma..Me encarsue de decfrselo al lefiador.--1LoSEntimos mucho, amigo, pero tene-

mos que Ilsvarnos la escopsta,

POl' urirnera vez parecio turbarse. Levan-t6 los brazos como para suplicarnos, perolos deio caer otra vez con desaliento, Y

diio:

--INo les conviene a ustedes usarlatuun-que ya comprendo por que S2 la lIevan.besagradece'r,ia mucho que Ill..de1aran col-ga,da..de un arbol, •••onde. lesparezca masconventante, yquLz;as aIg.1indiapueda yo-encan trar la.Nos.-\rolv1mospararnarcharnos. Otra vez

mir6.a.Krlstina_ ,____.uena suerte a todos, Ojalalleguen a

dondeiquieren.

,Caminamos una hora sin hab!ar,· con unsentimiento coiectivo de' culpabilldad por\haoErle quitado 8 .1 vi-ejo la escopeta, que'para el ~l'a de un extraordinario valor.'-De todcs modos.Ldtjo Zaro, Intentan-do aleararnos-c, todavia le queda el caba-llo. Y ,el trineo.:Nos reimos. pero no se nos pasaba el

senttmtento de culpabilldad. '

A UMSslate kil6metros del lugar de aquelencuentro colgue la escopeta de una rama,t:aja_ Era un arbor situado al borde deuna espeeie de sendero. £'1'8 1 0 mejor quepodia hacer en a'que-llas circuns-taneia's_No tocamos la comida hasta que, des-

pues de -todo un dill. de marc!ha, lIego eldescanso de Ill.nocthe_Kolemenos hiro ocho'partes. L·a's racloncs eran tan pequefia:s

.que yo podria haberme comido I l l . mia enun pa,r de minutos y continual" tan ham-'briento -como antes. Pero en tedos nos-otros predominaha el instlnto de preca.-~r5e contra momentos aun peores. Deci-dimos alm'gar a'queollosviveres durante tresdias, un poqulto para aque'lla primeI'll. nO'-.ohey el resto para las dos si'gUientes.Kris-tIna, comia, mientras nos ola hablar. suminusculo terelo_ Recuel'do que aqueUa no-che es-taba ,muy cansada y' paIida.

A pesar de nuestra natural preocupa-ci6n con el allmento, seguiamos recorrien-docada dia una buena canttdad de kil6-metros endirecci6n Sur. Mi1lntras masavanzabamos ma.s sefiales encontrabamoode poblaci6n. Nuestro meoodo cons,lstia ensubir· a 10 alto de eada monte y expiorarrolli el contorno para no meternos impen-

sadamente en' un pueblo: 0' en sus alrede-dores habitados. Con frecuencla. vefamosmDverse gente a 10 leJos_ Dabamos rode,ospara evitar las catietera,s a CU IYOS bordes

veiamos pastes del teJefono-senai sesurade que una carretera es importante-c., ytarnbien los camlnos con trance relatlva-mente intense. (Tengase en .cuenta e-1pe-ligro que para nosotros representaba cual-

quler numero de personas o de vehlculosque en ctrcunstanelas normales puede pa-recer msigrnneante.j ,En a}gunas ocasionesIlegamos a oil' los gritos de los campesinosque se llarnaban para comer y nos Ilegabael ruido de los, tractores, Tambien, alguna·que otra sirena de rabrtca.Vlajar de dill. se estaba haciendo muy

peligroso. Asi que, el dia despues de aquel

en que se agotaron las provtsiones del le-fiador, ceJebramos consejo, Recuerdo queaquel dill. Kristina no habia podido cami-

nar a nuestro paso. Varias veces se habtacaido y .habiemos tenido que detenernosun rato, Mientras discutiamos el plan mas

ccnvenlente para atravesar Ill. pellgrosazona que se extendia entre nosotros y Ill.frontera mongola, Kristina se rnantuvoaparta da,

-lQue le pasa a 1 a chica?-'dijo depronto el sargento.,Lerespomll cas! con rudeza:-iNa,da.·No le ocurre nada que no se

cure con -un dl" de repose. No,olvides quees una muter. Todas las mujeres tienenmales dias. GO no 10' sabes? .Paluchowicz se quedo consternado con

mis palabras, •

~No 10 Jla'bia. pensado, hom-bre-dijolenta-mente' Tampoco los demas habiancaidoen ello.-l"OI:)1'e criatura-c-murmuro Makowski.,Mister Smi-th tom6 la parabra :-Es €.-videnteque debamos ernpezar muy

pronto a cambial' el horarlo de las mar-.ehas, De dia no podemos carninar en unaregion tan pobiada. Y, si nemcs de hac€rlotan pronto. 10 mismo podernos empezaranora mismo y asi Kristina podra des-cansar todo el dfa. SIllv-ine dijo-, us'tedqU'ees el mas 'joven, tranquiliceJa y dig-aleque no partiremos hasta que se encuentrebien_

L:! saU al eneuentro euando ya ella veniahaeja nosotros_

-Kl'i£~ina-le dij-e-, -hemos de'cidido

descansar todo e1 dia y viajar de noche.-i.Lo haceis POl' mi?'Tenia las mejUlas mu:y l:oloradas,-iNo. no; es que'de dta nos exponemos

<l-emasiado.-Todo el dis. de hoy os he estado de-

tentendo a cad-amomento_ Lo lamerito mu-dhis1mo, pero, creeme, no he podido evi-tarlo. He<y me sientO dcstl'Ozada:-Lo comprendo. POl' fa'vor, no te pre-

ocupes_

-;Eres muy amah}e, Slav. Todos soismuy amab-1es conmigo. Gracias.La acompane hasta donde estaban los

otros_ Todos empezaron a habIa,!' con fin-glda despreoeupaci6n. Kristina sesent6al lado de mister Smitih y dijo:--lCuentBme mas l:osas de como v1sten

las.mujeres en Nort-eam-erica_

!Smith, sonriendo. trat6 de distraerlacontanaole cosas de 5U pais, pasando deun tema a otr<1como si temiese que Kris-tina· se aburri-ese. La jO'ven l€ escuchaba.

(Continuura.'____.__-

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sobre las ro-

'. plan de mareha result6 mU3'

lal!l'r~~Q'Wle.ormiamos meior con e t calor"del dia y luego teniamos la luz de la. para. orientarnos, y el fresco de la

'Y fue a la luz de la luna cuando POl'

primera vez robamos en un pueblo, forza-por el 'hambre que nos rnordia ' en las

I"'~~"~"U"''''os detuvimos en nuestra mar-·dba. cuando, al subir a un promontorro,vimos las luces de las casas, espareidas a

10Iargo de dos krlometrcs. Oimos con todaelarldad los dhlllldos de un cerdo, Esto nosexcito sobremanera. jUn cerdolZaro se rela·mi6 comtearnente y nos ha-

hlo de 'la rlqufsnna sopa que solia hacersu madre. con rabo de cerda. Kolemenosme toco en la espalda y dido:-Va-mas en busca de ese cerdo,lCalculamos elIiesgo. Tenfarnos que co-

mer. Smith presento las objeclones masfuertes. pero en seguida cedio. iEllegimosalos que habian de forrnar Ia expedicloncontra el cerdo: Kolemenos can el haena,yo con mi cuchillo y el lituano M'ilrclhin-

kovas, Los demas irfan hacia urrbosque-cL110situado a la derecba del pueblo y nosesperarian aut Convinimos en que si otanvoces de alarrna en el pueblo. se alejartan10 ant-es posible sin ocuparse de nosotros

para nada,;El lltuano Y Y<l f'uirnos delante, Mar ...

ohinkovas nos seguia .a cierta. dlstaneia.Nos dirigimos a todo correr lhacia dondecrefamos que habia chtllado el ce~-,doy Ile-·gamos a una huerta a la entrada del pue-blo. Por entre los arboles habia hierba mu,yereclda y espesa.

IDeJainos de centinela a Mardhinkovas aIa entrada del 'huerto y Kolemenos y yo.!wanza.mo.s It ga.tas hacia una especle degranero que habia al fondo. Kolemenos medijo iiI oid'o: "Huelo el cerdo." Nos pusi--mosen pie protegidos por una pila de ma-deros. "No los tOques", me advirti6 mi com-·pafiero, "porque 'S!! vendran aba;io can uneatruendo iIllferna.l". Mira-mos el teJado dea'Quella constl'uccl6n para a&egurarnos de

:que no selwla de ·vivienda. !Podiamos estartranqullos: no_ tenfa -chimenea. Peg-ua elDido a uno de los la-dos y of c6mo se mo-via 61 cerdo hozando entre la paja. Ade-mas, comprendi que me ha·hia olfateado Y:ine buscaba junto a la pared de madera.Kolemenos 5e me acerc6. Buscamos una.puerta. Por aquel lado no habfa n!nguna."Debe de estar por de~ras", Ie dijoa .Ko<>1em'enos, en un murmullo.· El otro ladoera el del pueblo y veiamos las luces dealgunas lVentanas, pocas y muy eSiJ'll,ciadas..Ai ll i estaba Ia puerta. Be abria. can gran

tacilldad, s61(')con mover una a·ldaba. Chi-rri6 y ·cru.j16 cuando la entreabrf. Entra-mos Kolemenos y yo en la oscuridad. Tan-.earido,de-scubri un portillo pordond:e sepasaba a la coClhinel'a.Di un saIto al sen-,tir el hOeleo del cerdo contra rn! pierna.·

Kolemenos se acerc6 por detras de mi. 5eaga-oh6 y abrazando a1 animal como suiuera un nmo, Ie tomo el peso.

-}:>esa demaslado para llevarlo en bra-zos y correr ala' vez-ilijo.

18610quedaba una solucion: convencer alcerdo para que vinlera can nosotros.-Procura hacerte amigo SU3'O-ISUSU,-

rre.:-. Hazlacosquillas en Ia barriga. Lue-so ponte detras de (;1 y .empufado 51 sa:hace el remoI6n. .Kolemenos se puso a la tares. y yo tam-

:bIen. El cerdo grufiia. de placer con las cos-qu.tllas de Kolemenos. mientras yO 1 0 co-.gia POl' Is. oreja y tiraba de el bacia lapuerta, KoLemenos a:v'Udaha dandole em-:pujoncltos. Pasarnos unos mementos dean-gustia mientras el cerdo vacllaba en se-

guirnos, POI' fin salimos con el animal.cerramos la puerta, crueamos el huerto- agacharios y sin dejar de rnurmurarle pa-

labras tiernas al cpohtno para. que nostomase earifio y no se arreplnttera, Mar-

ohtnkcvas, pA-Jido,nos esperaba a la en-trada del huerto 'y nos si'gui6 para cubrir

nuestra retlrada.Nos a,yud6 la buena suerte de los deses-

perados, A unos cien metros del lusar denuestra cita con los otros, Kolemcnos des-

paohO.al cerdo de unsolov.magtstra! ha-CllB.Zo.Mul'i6 sin declr nl pio .•Lo sentiporque.iera un cerdormuv carlfioso y sehabfa fiado de nosotros. El hambre noshace desagradecidos.ITrabaja'mos aprisatroceandoa!cerd(')a

Is. luzde. ,Ia luna para distrlMlrlo entre" los stete.rhombres. LOS.demiis nos-habtanvista 'Y se reunleron con nosotros. Nes fe-1t~ltaron conentuslasmo - Habia.n· pasadouna 'hora terrib'letemiendopor nuestrasvidas.

!La matanza del cerdo Ia hlclmos a me-nos de un kH6m-etro del pueblo 'Y por Tamanana podrian deseubnr facllmente las.hueltas del deli to. caminamos con la ma-yor rapidez posible para panel' entre elpueblo y nosotros toda la distanoia quepudleramos antes del amsnecer. CUandoel sol aparecio POI'el hcrtzonte. buscarnosa toda prisa un I'efugio. }:>orfin ha1lla·mosuna CllelVaihfuneda con una entrada tnu:y-€~treC'h9.,bien protegida POl' un gl'UPOde

.al'custos. Estlibamos en UnEf altura quedominaca la llanura POl' don-de habiamosvenido. No habia sena.les de vida, perc to-

mamos toda:s las precaueiones para. no serdeseubiertos. De-jamos al fonda de la-cueva-las macihilas hien eargaldas de carne decerdo. DiscU'tlmos sabre 10 que hab!amos. de haDer con esta. Can e1 cEl!Iorde junio,no perman<eeerfa muoho t1empo en buene-sta:do 51 no la asabamos. Tambien estavez tenctria:mo5 que comer 19.mayor can-tida·d posible mientras estuviera reclena~ada. En fin. no nos que-daba mas reIll€-dio qUe encender IumbI"e-. .-

Laencen·dimos, can ramas mU3' secas,a'l fondo de la CUEIVR. Kristina. Ie daba vue-I-tas a1 largo 'Y afilado .palo que s·el"viade<asador. Las llamas crepitaban y sllbabanal cae!' los goterones de grasa en la lena .Un dellcloso olor a. ·toeino asado y a ma-dera- quem ada llenaba 1& Cueva. Entre-tanto, Zaro y Marohinkovas buscaban- agua

pOr los alrededores con el jarro de-metal.Tarda..b>antanto que empezamos a preocu-;parnos. Cuando regresaron, Z'aro expl!c6qUe habfan ca-minado casi un kH6metro

basta encontrar un ar~uel0 entre lAS

rocas, can tan pocs. agua que hubieron de

ssntarsa un buen rato hasta que se Ilenoel.Jarro.'Nos pasamos aquel dia asando, comten-

do Y' durmlendo, Estableci-mo.s turnes deguardia de des noras, iA media tarde me

entr6 un fortfsimo dolo!' de estomago.Smith, Paluchowicz y Miakowskl se retor-cian tarnblen como consecuencia de todoel cerda que habfancomido. Se apretabanel estomago, desesperados. Todos surrta-mas los naturales efectos de la comilona,despues de tantos dias de hambre, Al ano-

cnecer se nos haotan pasado los dolores1 0 bastante para ponernos otra vez a CO-.mel'.

-Alguno-c-no. recuerdo quien~l'apusoque lilhumasemos parte de la carne y deljam6n para eonservario. Avfvarnos el rue-go con rarnas verdes de Junipero ry se pro-dufo tanto humo que no cesabarnos detoser y lagrimear. Estuvimos alhumando el

resto del cerda durante dos horas, hasta

que se puso de un cclor imarron ioscuro.Entonces guardarnos los trozos en las mo-Chila.s y emprendimos la marcna noeturna.ICuando saliamos de la cueva, me doblo

un terrible dolor de est6mago que se mereprodufo a mtervalos durante muchashoras.<Comprendi que debiamos de estar a una

semana,' aproxirnadamente, de la frontera.

Lo dije a los otros y esta idea nos hlzo aunmas preeavidcs. Nadie hablaba, A pesar delasmuy escasas probabiltdades de que nos

descucrteran de neche par aquella zonaIrshabttada, nos pasabamos una nora re-

conociendo el terrene antes de aventurar..nos POl' una llanura a de vadear cualqute-ra de los muohos riachuelos Clueflu1an para;llt Tenia yo Ia constante' sensacton deque nos movfamos entre gente host-il y quenos exponramos, muy fa'Cilmente, a. trope-zar de buenas a prlmeraseon esos enernt-gas. Mas qUe el eruce de la frontera, to-mia el del ferrecarril Translberiano. Yaestabamos 10 ba·staute eerea de e l para.haber oido, aunque muy a 10 lejos, lospltid09 del tren. Mister Smith estaba tanpreocu.pado como yo.

-iA 10 largo del fel'rOCRl'l'llhabra mu-ehas patrullas-me dijo, lnquleto.-Lo cruzaremos de neche.:Era dtffcil dormlr de dIa. No habia oe-

cesidad de establecer turnos de gua·rdia,pues todos estabamos alerta. Solo Kr·!stinapareeia tranqulla. Bu confial?Ja en nos-otros era absoluta. DOllIlia profundamentemlentrais nosotros nos a·tribuh\bamos pen-sando 'en el rlesgo a que n9S exponlamos.iYa,que tenfamos 1a convicci6n de la cre-·clente peligrosidad de nuestra B!ventura.Me alegre de que Kristina descansara bienmi·entra·s fUel's. posible. Le- dlvirti6 muohover una. cara·vana de camellos cargados dealgod6n y que pasaban a unos tres kil6.metros de nuestro escondite en un moute.Nup.ca habra vlsto camellos. Zaro coment6:-.;A1hora pue-do decir que 10 he visto

toda: desde renos a cameUos.·Aquel lUi,smo·dia vimos pasar a un05

siete U' oelho kil6metros---desde nuestl"3.atalaya-el Translberiano. Era una dla-fana mafiana de junio. Cerca de .I .- vii!.

<Continuar4.)

II

I

I :

~

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\Continuaci6n.)

y a sets 0 slete kilometros uno de otro,habia dos pueblos. En los alrededores decada uno se vefa una casa de piedra, pe·gada a 1a via, que debda de ser Ill. delguarda~arrera. A nuestro lado de 1 1 1 . via, asea 1 1 . 1 Norte, un cinturon protector. !for-mado con arboles,' y con una valta, servia-Indudablemente para Impedtr Ill.acumula.

( 'ci6n de la nieve sobre ios carriles. Estu·vlmos todo aquel df.a..vlglla.ndo Ill. vta, Pa-saron varlos 'largos trenes en amoas dl-recclones. A medlodia, 'un tren de Ia, Cr.uzRoja paso, hacla el Oeste'. Una hora .des-pues, aproxtmadamente.vun gran 'tren de

rnercancfas apareclo procedente del Este.Iba, cargado de canones. Mis .compaibrosdurmieron a rates, perc mister Smith y yoestacamos demastado 'excltados para ce-rrar los ojos. '

Inmedia,tamente que anochecio, nos pu-simos en marcha hacia e1 ferroearr11. Pa-luchowlcz y Makowski iban uno a cadaflanco destacados para nuestra protecci6n.La joven caminaba junto' a Smith. Kole-menos, March!nkovas, Zaro y yo avanza-camos, desplegados en abanico, a unosme-

tros de1ante del norteamerteano y Kristi-na. Tardamos hora y media-mas 0 me-nos-e-en llegar a' la pantalla de arbolesy esperamos, en cuclrllas, a que se nosreunleran los' dos po1acos.Nos Inrormaron 'de qu,e no habian. visto nada sospeehoso.-.Mu(Y I::I,m-'dlje-. Marchlnkovas ven-

dra conmizo basta Ill. via. Los demas.-es-perad a que as hagamos una sefial.

La valla no presentaba ·dificultad algu-na. Lusgo h!IJblauna zanla a la que bara-mos sde la emil.sanmossin gran estuer-ZO o Nos tendimos cada unosobre un rail yescudhamos can el oklo. pegallo a el. Nadase oia..Entonces ntce la sefial a los otros,VolvI a tenderme JUnto 1 1 . 1 lituano y e~perenervioso a quese nos reunler,an'los como,'paneros. Sin dejar de esc1,lclhare1rail POI'

51 se ·oiala.vibraci6n de a1gtin tron, aten-dIll. a la llegada de los demas. Me pareciaque estaban hllciendo un ruido tan grandecomo,para 'que los oyeran en dQs kHome-.tros a la redonda. L9. primera en Hegarjunto a mi fue Kristina.' ,

-lTodo ha 1 1 ' 1 . 0 blen?-le pregunte.-Per!,ecta'mente-me respondl6.

!Mire a mi alrededor. Todos estaban Y l i <alii. V01vi a ap11car e1 bido, 11.1br11lanterail de acero.

Me 'levan~ ,de un saIto y ag!tando elbrazo, dUe: "iVamost", y a'Van~e,l1evandojunto a mf II . Kristina. Todos descendimosrapidamente por,eI"terralllen 11.1tro Iadode 111.Ia y emprendimosuna. alocada ca-rrera. Cuando 'habIamos recOlTido unosden 'metros, uno de nosotros grit6, conpanico:

>--jA tierra, a. tierra!

Mire POl: ' enc!ma del hombro y vi quese•acercaba un tren de vlajeros. Me eeheal auelo, tirando. de Kristina para que 10,hlciera en segufC\a.Todos permanecimos decara al suelo mientras eltren pasaba' conestniendo. NQsleScapamos por' una Chlrlpa.Si algulen nos'hubiera visto desde eI tren,oestoycon'Vt'!lcldode que nos habrian per-

seguldo .1 1 cazado, SPrrtrramente, cu!mdoyo

.habia sscuchado sobre el railaque1 trenestarta detenidoen la estaelonanterlor.iLamafiana siguiente nos encontro, des-

pues de toda una neche de dura marena,l~sta'Iado3 ya. en In orilla. de, un rio, bienocultos entre la densa vegetacion. HaMa:muehos paces en este'rlo, pero 10 mlsmo

podian hacer esta:i:!oen unacual'io, puesno teniamos medio de pesearlos. Despuesde un rato de descanso, Smith dlJo que teparecla mas convenlente Quecruzasemos aJa otra orilla 10 antes posible. A dilerenctade los rios arfluentes del lago Baikal, lasaguas de este fluian lentas y estaban ti-

·bias. Fue muy agradable cruzarlo a nado.El terrene 11 . ' 1sur del rl o era. I lano , pe ro

con rrecuentes bosuuecmos que nos .ocul-'taban blen, Estaba cortado par' un grannumero de rlaohuelos. Y rue alllegar juntoa uno de enos. un par de dias despues,cuando Kristina dijo:-lMa gustaria Iavarme Ia ropa.Todos convinlmos en que era una' exee-

lente idea y que todos debiamos hager 10mlsmo. Todos estabamos infectados de pa-rasrtos y 'esperabarnos ,libramos de ellos,Kristina se alej6~de nosotros . rio abajo•porIa orrlla, conl9s mocastnes en Ia mana'ydhapoteandocon los ples .en elilgua.Asf/desaparec16de, nuestra Vista.' Enton-ces,.lossiete homores ncsdesnudamoa yernpezamoa a tavacnuestra rops. Pasarcnpor .lamanoa dos horas mlentras el sol lasecaba,y nosotl'Os.·aproveenabamos .parabafiarnos.Lwigo 'nos tumbamos. desnudos,en 111.lerha. Nos .sobresaltamos 11.1oir ·la'voz de, Kristina que avtsaba su Ilegada,To'dos nos apresuramos, frenettcos, a po-nernos los pantalones y'justamente esta-.camas presentables cuando ella aparecld.Kristina. por 10 vtsto, se habia bafiado

tamblen, pues traia la cam, reluclente y elpelo hrillants' y arreglado. Su matiz cas~ ,tano l'!!lu~ia al sol,' Hablli eonseguido do-mlnar ,la marafia que se Ie ha'bifl, formadocon tantos dias de forzoso descuido y SZ

hacia hecho dos trenzas. Muy derzclha yconv.cncioll'al, como ' u n a salterona en un,te. 1a ch.!ea n~g dijo:-BuslJ9.s tardes, caballeros. ;,me espe-

raban usredes?'I'o:ios ! : t . : . > s relm05 y aeabamos de vestlr-

r icz. Y mister Smith fue a coger ,unas !lo-

res silllestres, con las, cuales,hizo un 1'a-millets. y se '10' entrego solemnemente aKristina. '

-lEstas mu,y bonita .. hija mia':......,-~iJo.~ristina Ie soml6 rediante. Aquel debl6

sel' uno de sus ,'dias mas f.elices. '

Estiibamcs muy cerca de Ill. fronteracuando nos encontramos a los dos mono'l gol~s tUl,yatos. No' bubo manera de evI-.tar~o. Nos v'lmos do(!pronto, y a la vez,a una distancia de unos cincu~nta' metros'Y solo podlamos y.a avahzar hacla 111.are-ja. Uno era de' ,unos cincuenta ailos (sfes poslble calcular 1a.eda;d de 105 mongo-lesl. y' el otro mUIY joven. Padian ser pa-dre e hlj{). Sedetuvleron esperimdo a que'llegasemos'hasta, eIlos. Sonrefan, y mo-'v.ianIll. cabeza. ,Cu'andonos paramos, losdos nos hlcleron una profunda reverencia.-Fue,una conversaci6n 11ena de cortesla

'J formulas respe'tuosas qUe yo tom-aba de

ellos, Hablaban despacio, en ruso. Nos pre-guntaron BOl1C~tQs 51 nuestros pies nos lle-

vaban bien en nuestro via-ill.Lea asegureque nuestros pies nos 'Ilevaban pel'fecta-mente y les pregunre 10 mismo;on Iden-tlea solicltud. El ma,yor de los dos mos-traba una Ingenua curlosfdad POl' saber,quienes eramos y de donde venlamos.-iDe donde venis?-Dei Norte, de Yakutsk.~lY hacla dondeos dlrigfs?-Mlzy lejos, 11.1ur.E1 ncmbre me mrro fi'jamen,te can sus

olos brHlantes, bajo aquellos parpados tan

arrugados.' ,-Irels segurarnente .a Lhasa, para rezar.~e parecio una exeelente idea.-Lo has adlvlnado, amigo; contigo no

podemos tener secretes.Pero el mongol ,no habla terminado;-i,Por qUIallwliJ.s a Ia muje'r? ,<f>emerapidamente y eneontn; ..una. ex-

pllcacion, '

-,-Tiene parlentes POI' nuestro camino yhemos prometldo dejarla ,ll!l11. "

.A los dos monsoles les pai-ec16admira-, blenuestroproposttode acompanarv pro·, teger ala. mudhaoClha nos sonrleron siec-tucsamante. Entonces metleronlas manosen sus hondos ,bols~l1osy sacaron pUftadosde caeahuetes y nos los repartJeron ale-gremente. ' . ' ,

,Prlmero el mayor,)' luego-el, Joven, nosdssearcn que, nuestros ples l;iguleszn Ile-vandcnos ecmodamente hasta nuestro pun-. to de, destine. Se volvieron los dos a :I avez y reanudaron au mareha. Esperamosa que se perdleran, de vis,ta; pero a~ashabfan an-dadounos metros cuando el ma-yor de' ellos volv16haela nosotros solo. Se'dlr!gl6 hacla Kristina, lie inclin6 y Ie di6otro plifiado de caclllhu'etes.,Repltl6 sus''buenos deseos de feliz vlaje, prlmero es..,pcclaImente a 111.ov'en y luego ocra vez a:nosotros, ,y nosdej6. ' 'Cuando Sf! perdieron de vista, empr,en"

dimos de nuevo la marciha y a1 paso mas-rapido poslbole.Estabamos demaslado cer-ca de Ill.frontera para exponernos.

XIV

EN'I1MJMiOS' OCHO a~MONGOLIA

'La prllnera lase de nuestra fuga termln6con el cruee 'de Ill. '!rontera. ruso-mongo!a.,a1 final de Ia segunda; semana de junia. ,Se daracterJz6 POI ' dcs'<X>.!Ias:a (acil1dad,con quepa'samos y e1iheClhode que saUmOS,de 1 3 0 Republica Aut6noma Mongola de losBUI1y:atas,de la ~gi6n Oriental ,Siberians.,de la U. 1 & . S. S., ..!Ievim:ioeilclma una.'buena cantldad de patlatas, pequefie.s y'tempranas, cogJdas en 'un campo situados610a;'unas ihoras de Ill.frontera. La "Ope"tacl6n 'patatas" 'fue ,caleu1a'dalY reaUzadacon toda exa<:titud.Tuve ia sensacI6n a.gra-da'b1ede que, habiendo entI;ado en Stberlasin nada nuestro, sallamos de eUa con. un'l/!alioso.regalo, 'aunque los donantes 19no", rasen qUe ·hablan'sfdo tan generoses connosotros:.Lleganios 11.1unto donde habfamos ',de

cruzar. a (lltimR llOra de 1a tarde. La 05-(ContinUttTa.~

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(ContlnllactOn.i

curldad se ,1ntensiflca:ba..porque el cleto ~taba eubierto de nubesnegras. Los truenesretumbaban a ·1 0 JeJos como los gruftidOllde un glgante iastldia.do. La . atmoSifera es-tabamlDY' pesada. IY' caliente. Na'l1a samo-

(:vIa en todo ,1 0 que a.barcSiba la 'Vista. No,_, vefamos obstaculo alguno. La linea .fron-. tertza aparecla -sefialada. por un peste rojo, dedos metros < M ! a.lturll, coronado 'Por una.) placa meta>llca con' el emblema so.vJ.etlcode -Ia boz y elmart1llo enolma de unasIniclales en caracteres clrllicos. AI Oeste yal Este se velan dos pastes Identicos. B eballlaban situados --de tal modo selr!'m los'accldentes del terrene, ~uedeSde uno deellos se podf1\n slempre ver los otros dos.:Mire al otro 1II:dode la placs, ,para ver 10 'que decia,' Pero estaba en blanco. 'Z8,ro serio a cercafadas 'Y me grltO: '. I

-,:,Que ta,1 Be e s t a . en Mcngolia?lSe pusoa ballotear a mf Iado, Rleunl'dos

3 " 8 . todos, saltll;bamos de alegrfa, nos dll;.bamos pailmada'S en la espalda, nos ' t1ra-l:;amos de las barbas y nos estreehAbamoslas manos. Kristina ,fue hes8.n,donos a to-dos per turno 'Y Uor.aba de feJ!cid'l\d y ex-cltacl6n. Mister Sm1th-como slempre, Ill.voz de la sensatez-,..a,catiO con nuestras ma-nttestaeiones 'de entuslasmo e6handoseala espalda .su saeo de' patatas 'f' reempren-dlendo l1a.marCha el solo. Sin 'deJaif de

. "refr y - alborotar, ,-1esegu1mos. .-Mejemonos -de aqui 10 antes po-sible

-'-nos -d}jo el norteamericanc-c-, No S'S'b~.mOBhasta.doDde, !leg'a la lnf'Juen-cla l11Samas BJl1ade lafrontera. No sabemos dan-deestamos n l ad6n-de vamos.Estas palabras nOB se re n a ron lnm-edfll.-

tamente y cemlnamos rapidos eon nues-tros sacos, golpeandonos las espaldas,

Detras de nosotros, los paste!; fronterlzosdesaparecieron 'tra·ga.dos por la osc:urldad.La que Ihabfa d1dho ISmlt.h me hlzo pensarserlamente en nuestra sltuae16n. Calculeque ita,blames recorrldo dos mlJ kil6metrosen poco m~s do e sesenta. dias. (Era un' ure..cord" de \'Ieloci-dsdry doereslstencia.Pa·luClhow1cznterrump16 mis pensamien-

,tos a1' preguntarme:

-;lCUlintos nos iCluedapor recorrer?<-<Aproximadamente. e1 dob1e,de 10 que

(hemos and'ado--ile 'dlJe, despues l1e pen.sar

un poco sobre'las distancla-s.A Pa~ucihOWiCzIe desan1m6 mucho lanotic1a.iEntonces diseut!mos por primera vez

, cuM Ihabla de B e t - nuestra ruta. Ruta e l t e'momento 56 10 habiamos ,pen.sado en sa!!r,de Siberl8J. C'u:ando estlilbamos a11n en elCampa 303, hable, varias 'Veces del Mga-ni&tan, pero 'sIn mudha conv!ccI6n. Me pa.recfa que, ,por Iter un pais l)eQuefio y "a.trasmano'~, no ,nos iha'bt:an de !hacer, pre-gun-tas Ind1scretas. Pere, abandonando estaidea, nos'Parecfaahora mejor la India, 'Yea t o se nos ccurr16 como conseeuencia dela conV'ersaclon .que Ihabfamostenldo e1dla anterior con 10s das monifoles. Uhasa'.: H I e a Q : l ; f una 'PSilabra que 'llOttiamos utillzar<lomo'un taIlsman en' un pafs donde po-

quislmos -conocian nuestro Idloma; unos so-n1dos....D1R:-aa....:.que podls. entender Ia gen.-

teo con ,tods. tacll!dad Ii' que slempre evo-eabanl!\ 1mli.gen d e un brazo tendldo para

SEVILLA (Sevilla) ,- 24/07/1957, 39 -i_ ,j, :!~;} '] .

AE

Indlcarnos la dlrecc16n. iEn squella prime~ra nora de ,conclllabulo, oha-blamos,puea,del' Tfbet. La India. quedaba demasladolejos;" "

< E l l norteamertcano habfa dicho una ,gran ., verdadal.anrmar que no sabfamoa ad6nde!bamos. NO' tentamos mapa ldguno Ii' noc on ta bam o s c o n n in g(m e cn oc ed o r -delpalspara orlentarnos, En estes ultlmo.s anos,he lntentado ·muOha-s veces reeonstrulr'nuestra probable ruta, vaUendome de losmapas mas perfeccionados tie todas las re~'glones que recorrlmos, peronuestro·,'lpro.l

bable" recorrido puede Ihaber diterido delef.~cUvoen c)ento setenta 0 doselentos Id-lometros, Permitarune ustedes; .pues, queles dlga, muy a caleulc: creo qUe entramosen Mongolia por un punta desde dondepudimos 'dlrlgirnos en Unea recta a lasmontafias Kente! Slmn; que 1 1 . 1 atravesaresta cordillera, nos de s v i amos ;Jlacla eloeste de la linea directa sur, pasando aloeste de. -la. Unicagran ctudad -de aQueUazona, Ur'ga, 0, como ahora'la :llaman, 'P1an'Ba'tor, 'E$ teor!a pareee eonfiXmarlla elaspeeto .delterreno .por el cual :pasamos,s us montes, sus :l.lanuras muy',blen .cuIt1.vadas, suamucnos rios surcad().Spor sam-·pe.nescarga'dosde· mercancfa:s.iEsto expJ!-cariael gran trMlco fluvlal"porque -urgaestaen.Ia eonnuencta da tressrandesrfos, 'ca'dauno de ,los. cuales ,t!ene m,ucllosa.fluentes.. . . .. '" Dos1hol'as despues de haber'pasa<iolaiI'cntera· estabamosescalando montes. Su-d!i!l~amossln •parar. La tormenta se apro-xlmaba. tEl viento aumentaba. ,por mo-mentes. ,'.,

Kaeia m~dia neche esta1l6 la tormenta., El primertrueno estu'Vc a punto de dejar-00.5' Bordos. Son6como 51 hu,bleran 'dlspa-rado Junto a nosotros, iI-' la, 'Vez,toda una.bateria ar~l1lera.: 'm estruendo era horra-reso e lncesante. L-os relllmpflgos rasgabanla noche con /furta y cas! nos 'cegaban.iEmpez6',a ,llov-er ~ 'buscamos' lin refUgio,pero a la lurz;de los rele.mpagos pud!mosver que no habla mas 'que un ,desierto conali5Un-queotro Pl'omontorio rocoso:oLa llu-via ca1a.con una' 1uerza ,terrlbl~, maMa-cante, \Y silovertlcalldad no era ~ectadaen 10 'mas 'minimo, por el <vlan'toihura¢a-

na'do. Este fen6meno me asom-bro. En po-, cos minutos ''lie nos emP8.p6 :la, ropa.. Me'recoITian el ~erpo, ellon'os 'de a~a. :N 'Un .oa he conocldo una tormenta :tan iferozcomo aoquella. _,':Pasamos la 'noche apelotonltl:los los ociho

en una. estredha resguebrajadura. entre lasrocas. Erlsttna, a la qUe dejarilo\l el Unfeos!tioun poco ,menos inc6modo, al fondode 'lahendidura, se a-currucab!i..sin hal:llarnl una pa.1abra, 'Ytemblaba continuamente,de frio, conla ropa. cala:da y asustadfs!mlllPOl' la furla de la tormenta,

i F " u ' e un gran aliJv:lo~nudar .la marcbe. 'a Ie . ma'fiana slgu1ente, en cua.nta empezoa . clarear. La Uuvla. no cesaba nI pareciaque t l b a . a acabarse nunca.Slgu!o sin 1nte-rrupel6n todo alque! dm, POI' la nocbe y

hasta la otra. tarde. ceso tan espectacular-mente 'como habia empeza'llo. Fu~ como sf

algu1en Ihllb!era cerra'doun inmensci gr!loen el clalo. De 1 a8 r ocas salian nubes de

\VIlpor\1 >alsol ,m caldeaba todo rflpldamen-,ee, secsmcs 1 ' 8 . ropa. IY de nuevo eIllQlezam(J;S'a pensar en nuestra. .sl tu'acIOn.

!L a ,continua ascensien era m~ fatigosa,pero no rlM.fcll.El ,peSo de las patatas runesdlez kilos cada uno), que llevliibamos a Is .'espa'lda, nos, canseba alI in mas, pero nadle., s e quejaba. Desoola altura que 'alcanzamosal euareo ,dia, ~omlna:bamos un~xtensf-slmo ,panorama. Vefamos como se -extendle,la cordillera Ihacla el,Este IY el Caste, lIIVan-zando tamb1en e n 'dlrecc16n Sur, con: uneserle de plcos. La ruts. que ha.bfamos to-

made casualmente, empujados POl'Ia tor-menta, pasaba , ! > O r medic de dos :picos, ;Y

noscond.u:lo a una meseta. 'amplla y.desuperflele deslglial. Como quiera Clue ,la-lefia que encontramos estaba todavfa 'ihu~meda, no pudtrnos encender ,fuego y co-mlmos caca1huetesy unos "rIZhlkl" .que co-glmca. Yo .sabfa, ,desde ml In.fancia en Po-Ionia, qui! eran comestibles.' Son unas Be-

'tas de saber agr!!-dable. Yo erael perltoen Betas de nuestro grupo. Mis eompafie-ros, que a'! principio no se .f!aban,acep.ta~an (fa ml dictamen sobre los hongos,.venenosos '.y. 105 ccmestibles.Desde el borde meridional de .Ia meseta

vlmos en Ill. 'ilailurade abajo, 'Y m'cla 'elEste, un pueblo de casasblanqueadas IVdetejado plano. Unos rebafios se mOlvlanPOI ' unos pastos entrela sombra de lo s

arboles. Me pa:recleren eabras. En eamblo,Id-entifleamos con toda segurldad, mclusoa Slquel1adlstancia., un 'grupo de' cameftos,El norteamertcanc.se opuso Insistentemen-te a1 prQ<yectode iMarClhln!kovas,Palucho-,wiez y Makowski de ,que descendieramosbasta el pueblo IY nos' hlclesemos amigosde sus ihabitantes. Dee1a que aun nos ha-llibamos demaslado cerca de ,la :trontera:'para'arrlesgarnos tontamente. A fuerza. tiepaclencia, aeab6 convenclendonos.'lEI paso de las montafias Kentel nosllev6ooho dfas., ,En la iiltima etapa, du-rante ,el' dellcenso, !hlclmos, un, alto :para. '€Rcender una buena :'hoguera tv asar 10iiltimo qu! nos -quedaba del cerdo '!I queya olla mat Pushnos una piedra' plan·a so-,bre el fuego, sujeta 'POrotras phlss' de !pie-dras, y en aquellhorno lmprovisado a-samcsunas patat8:s. FIle una egplendlda comlda,

que terminamos con cacalhuetes como pos-tre. Lastlma. que fuesen los Iil timos.Blll.lar a la. l lanura desde las fr.escas al-

turas era como'1r metlendose en un horne.Nos C1ultamos las 'I!ufalkas" yUevlicbamO,$'puestos los 'ohaleCos de'piel (Que Ihabiamoscon.fecclonado en el Campo 300), con 'losbrs,ms a1 aire. 'Kristina ,llevaba el adadovestldo de, terciopelo, descotado~ El weloestaba durlslmo, C o m ( } <Ie cementa, IV : cu-blerto por una capa de polvo roJ1zo. touy:fino.' Los montes se 'habfan convertldo enuna extrafia sucesl6n de promontorlOs ova·,lados, como de' paisaJe lunar. Los brazos lie

nos 'pusleron 1 ' O ' . I o s , ,lie llenaren de ,ampo-l l aS , lie' despellejarlm '5', por~, quedaron,tastados, cobrlios. !;os trelnta y cinco ,0

cuaren,ta kil6metros dlarlos que nos habia-mos lm'PUesto; lie nos hacfan mu'Y pesados.Y por ,las nOOhes n(J;Sdolla y picabo. ·todoe1 cueI'lPO.Empez6 a : preocuparnos seria-men t e el e.stado de nuestros pies: entre los

. ' , .<ContlnrW T4.)~~~_" !~!~~~~[ ':~~~\:; '~:~~~~:~~~;;:; ' y ~~'"; , , 1 . :- . 1 . la ! 'C~ {_~;;: .: : ;~~: ; ( ;3

·:.·!X:;·"r::i_""1' . { l" ,. ., -" ": .C ; ' " " ,, ,, ." ,";",1 .,

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(Continuaci6n.)

dedos Benos abrian grletas y tenfamos al.gunos trozos en carne vWs. TuVlm05 queoendecn- la prevlsi6n' de PaluC'howlc~-'-acostumbl'a:do de slempre a padeeer de

los pIes-, que ha,bfa recostdo Ia gra,sa delcerdo, allaen lit CUe/Vasfberlana donde 10asamos, 'Y la llevaba en una especte decopa de" madera. que sehabia fabrieado.Nos .untabamos con dicha grasa Ias grietas.'9 demas sltlos dolorldos,

\Alquella. regi6n estaba cruzada POl' r!05,pero tardarnos dos dfas en Ilegar al prl-mero, A med1odis. de un dia terrtblementa[caluroso, can un resol cezador, la promesade las frescas azuasde ·lI.ICjuel'10nos haclacaminar 'sin pensar en nuestros inflamadospies. Era un 'heTmoso rio, con una. anchurade un centenar de metros y sus orillasverdeantes eri~ada:s de unas plantas aeua-tlcas pareddas a los bamoues, como ya las .iha:biamos visto en Siberia. Nos tumbamosboca abajo ,en laoIiUa y beblmos con frul-don. Luego metimos en el agua los pIessmtiendo un gran allvio. Nos bafiamos des-pues, y la nna arena de la orilla· nos' 511'-'Vi6 para frotar el cuerpo con ella. Lava-mas la r\iPa. Nos secamos al sol ;y comimosotra. racr6n de patatas. Luego nos tendl,mos en 1 1 1 . hlerba<y reladamos nuestrosmtembros agarrotados. Il\"'osInvadi6 una.sensacfon de blenestar.Una hora despues de nuestra l1egada vi-

mos acercarss-por el rio una embarcacl6n, pequefia,parecida a un sampan, alta deproa 'Y nopa. de ~u1lla aneha y con unaespecle de dosel en el centro, A amboslados. de la barca se extendian unos largospalos que, a su vez, sostenfan varies hacesde varas que se hundlan en el agua. Eranestabillzadores. EI barquero erachtno. Ibadescalzo, llevaba un sombrero de "coolie",

pantalones de uno, que termlnaoan debajode la ro~i11a. ry una camlsa flotante conla,s mangas rasgadas a Is. altura de los co-doh. Impulsaba. al sampan can una largapertiga de ,fuerte bamhll. ,Era un espec-taculo nU<E'Vopara nosotros y saludamosa1 chino cuimdo paso a nuestra altura.'En las dos ,horas Que permanecimos ampasarontres 0 cuatro embarcaciones mas,

todas ellas del mismotipo e ImpulsadasPOl' icMntico prooedimf.ento. B610 una deellas tenia un .tosco mastil.(En muohos otros rios de Mongolia Ex-

terior habiamos de 'Vel' estas barcas, ,perolos barqueros eran siempre chinos. En cam-,blo. nunea v,lmos ohinos POl' los (laminos.Pol' tierra no circulaban mas que man·goles.

Nuestro primer encuentro con natlivostuvo lugar cuando cruzamos aquel rio !y"

despues de habernos internado varios k1l6-metros hacia el Sur. No aeguiamos un planfijo, sino ,que nos adaptabamos a la confi-guracl6n del terreno y a las circunstan-cias. ;Evitabamos las pequefias calinas, ,pues.queriamos dominar el terreno ,desde una;altura 10 mlllYor poaihle para luego actual'en consecuencia. Asl que eIegiamos el pun-to mas alto y nos dirigiamos dereclhamentea el. Nuestra l'Uta se vi6. cortada aquella 'vez POl' una carretera que se extendis. ha-cia Este y el Oeste. De la direcci6n Oeste~nia un irupo de 'Via:jeros, y era evidente

que 51 ellos 'Y nosotros mantenfamoa lamareha que Ilevabamos nos' lhapiamos de

encontrar en la carretera, Nos hal1abamosa menos de cincuenta. metros de eata cuan-d o los monsotes se adelantaron. 5e detu-'vieron·!Y Be pusleron a. hablar; desde lue,go, de nosotros. Cuando nos aeercamosaun mas 'Y nos detuvimos ante ellos, secwllaron, se sonrieron y' nos hicieron pro-;fundas reverenctas, sin dedar de mirarnoscon enorme curiosldad,IC.O'mponfan Ill,expedielon dace hombres

-.0QW2!3 .S mas--, un camello,. do s rnulos

'Y des asnos. Los animales estaban pococargados e iban tambien aparejados parasenvlr de monfuras. Pero s610 en el camellomontaba uno de los mongoles. !Era un vie,iocon una barba grls enmarafiana y pareelaencontrarse muy comedo en 10 alto delcamello. Proba.hlementoe, Betrata.'ba de unafamma y el viejo era su patrtarca, Todosllevaban los tLplcos gorros conlcoede losmongolss, con sus largas orejeras baciaatras, y neches de un material que 10 'mrs-ll1(),podfa. ser cueroqu,etela acolcnada.To~os ellos usabanaltas botasdoe fino cue-ro,y,las del vlejo~l"an de extraordinariacalldad, en cuero ('Verde el~g,antemellteadornlJ,ClOcon seda.~e colol'j!-s.Sus pesa~das t1illlcas, muv ampllas,les·'llegabanal'bQrde,de las botas yEe abrlanpare m o s -trar unos ianchos ,cint'llrones.algunosdecuero 'Y'los demas de un tejldomu\y fuer-teo Me extrafto oue,vistlesende aquetlamanera con un tiempo tancalurooo.'Cada uno de ellos llevaba un euohlllo

de caza en el clnturon y hab1a uno quetenia un largo punal eon mango' de cuerono. colgado de una cadena de plata. EIpatr iarca. como convenfa eo su situaci6n,Ilevaba :un gran cuchbllo, el mayor de to-dos, con una hOja muy ancha, levementecUlwado y con el mango preciosamenteadol'nado.Despues de las I1ever,er..r.las;las de ellos

y las nuestras. entre E'onrisas ,meU:c.uas yun silencio absoluto, el viejo de Ia barbagris se ape6 del camello. Vol'Vimos a salu-dal'lo con una incllnacI6n'slmultanea. quenos sali6 mu" bien. y e1 nos respondi6 con

otra raverencia. E'ntonces nosdlri;r16 lape Jabra en su Idloma. Wster Smith medUo aI oido: '~-rable u1'ted, en ruso, Sla!V,1), ver 51 se entiende." Al vleifo no se 1ee s-.ca,p6 este aparte tV mle prest6 atenr:j(in;--Que tus pies te lleven can !fellcidad 9.

tu destino-lle dt,le en ruso.lSigUi6 una larga pausa. 'En ruso, titu-

,beando, pues 'Ie costaba gran e~fuerzo bll~-car laspalabras, el 'patriarca me respondio:-ffi:abJa ma,s. par fav<lr. Te comprendo

hien, pero hahlo mal el TUSO., Race tiemponablaba ese idioma; anOJ.'a, no..Asl 10 Ihice, y mulY' lentamente. El me

escuroa'ba con gran atenci6n. L,e expliqueque nos dlrigfamos Iha.cla el Sur (10 caaIera eVldente); yque hacia. anas horas quehabfamos cruzado el rIo. INosa'bfs. que masdeCil'le. Ouando ,termine Ihubo un silenciotan prolongado que supuse queya habiaterminado la. caremonia ;ypodriamQs mar-<iharnos. Pero 10 que sucedia era que el ,vieJo, Ileno de curiosldad, estaba luchandocon su escaso conociniiento del :ruso' y !pre-

(~villa) - 25/07/1957, Pagina 37[~:r_;\i'flc t.W: 1_:.L. :V:i l: : i - : - ' i ;j , ,".ri:)~;. ':!.H;rj;.;, p'!:;)h:i_bi_~.L.: ~il!:·\'.:rJ,~:r,ci'.,cci.r:;,",

";'?,:..',:-.'i~:;~ f"r;:i::" -n;;ja~:;;"];,;;), ~;in p:-e\'i:::,

n;."f::_~· ,f; ~,:: p; :"lE:,,; :>:'n r;n·~;:j c·:·\!·!';:;~:c:l,-~::,:o:.s c·

parando mentalmente las preguntas quedeseaba Ihacerme ..Para ello'se tomaba todoel tlempo necesarto y los demas respe-taban rellglosamente su trabaro mental.Par fin', inicl6 el Interrogatorto, que fue,poco mas a menes, asi:-lNo tenets camellos?-Samos mu.y pobrespara tener camellos.-lNo tenets mulas?-ISomos muy pobres para tener mulas.-<.No tenets asnos?..,.rrampoco tenemos asnos,Despues de haber averlguado asi que

perteneciamos a la clase mas infima de Iasociedad-la que nl slqulera posee borrl-cos-, me pregunt6 sobre la finalldad denuestro vlale. Entonces sa116 la palabra. .lhasa... Tendl6 el braeo bacia el Sur ycit6 varlos nombres geograficos. La inror.macion eraInutll, pues no dlsPQn(amos demapas y no entendiamos.aqne lrig-ares sereferia. . " ' .,-Eso ests. muy Iej<ls-d(jo ~. 'V~nerable

mongol-. 'El sol slrldra Y'ile~pri:ndl'9.mu-ehaaveces antes de' que ll'!!gulHsa Lhasa,'Y })Or fin hizo la pregunta que' habia

tenldo todo el tlemno en la punta de lalengua, Mir6 a Kristina.Bu caballo, queel sol habra aclarado mucho, contrastabade un modo vlolento con 10 tostado de suplel, Los ojos azules de la Joven sostuvle-'ron la Inquisltiva mirada del anciano, Pre-

gunt6 euantos afios tenia, sf era parlentede atsuno de nosotros y adonde Is. Ueva-'Valllos.L~ respondi lomlsmo que a aquelotro mongol que habiamos encontrado alotro Jado de la !frontera.!Eate tnterrogatorio Ihahfa durado media

,hora y el patrtarca pareela haberlo pasa-do rnuy bien con nosotros. Sospecho 'quese enorgullecla de demostrarles a BUS j6-venes parrentes como era capa~ de soste-ner una. conv·ersaci6n con extranjeros. Bevollvi6 hacia elias 'Y les hab16 en su icl1oma.Todos se sonrieron 'Y E e dedi caron a re-volV'ar entre 103 sacos de que iban carga-dos los animales. De a<1lfex.tra:!eron all-mentoE, los entregaron al viejo, !Yeste losdlshibu<y6 entr ,e nosotros, slndejar de son-r,eir n1 un instante. Puso gran culdado en

que cada ,uno ~clbies'e la misma. mcion decad a COM. POI' eJemplo, 8e 'd16 cuenta deque a Kolemenos I e habia dado un hI gomas que a los otros: D1f.culpandoBe cOl'tes-mente, se 10 qult6. Nos di6 nuec€s. pescadosecD. unas gaUetas: granos de <lebada 'pa-sados por'el 'horno ,y unas tortltas de all's-na de forma triangular. Todos nos Incll·nainos para expresarnu€stro agradeci-m!ento, y ryo, como portavoz de nuestrogrupo, Ie hable de nuevo con la~ pa1abrasmas finas ry respetuosas Que pude encon-trar. erei que ya habfa terminado la ex-trafia coni'erencla, pero los mongoles no semovian. ESP2raban la orden <Ie su patrlar·Ca para l'eanuda'r la marC'ha, 'pel'O este noparecfa tener prisa alguna .Nos expIlc6 que iban a un grAn mer-

,cado, que se hll'l1aba bastante cerca, alEste, pa'l'a· comprar eiertas mercancfas.Be aeerc6 a SU camello y. busc6 en unasaliforjas. Cuando ",01vi6 Junto a nosotrosvenia tumando una hoja enroUada de ta-·bac!>, lSU!letapor en media con una cafiita.

(ContinuClra.)

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tconttnuacion »

Me tandlo un paquete de ihojas de taba-

co=-ccntecra unas, quirice-c-; se 1 0 'agra-

dec! e hice adernan de suardarmelas, peroel viejo, extendierido el .brazo, me .suieto"el mio, drclendome: ", -POl' ravor, fuma.

Le explique 'que no sabia fumar como

~Hde aquellarnanera y que no tenia papel

para' .hacer .ciga.rrHlos.Fue otra vez hasta

el c~rnello:y saco de entre sus' cosas una'hoja doole de pa.pelde periodico.

9, --,Para ti, POI' favor, tuma.IObserve que el pertodico era el "\Estrella

Raja:" rasa, y que Ia _f'echa era de Ia prt-mera sernana de mavo. Tam,bien se ftj6

, $ . 1 1 esto mister Smith, que se naUaba a

mi Iado.-Tenga cuidado, Sla,v-ime dijo el nor-

tearnericano. No necesitaba que me 10 ad-

-virtlese.lCorte un trozo del margen, superior del

papel, cuidando mucho no romper Ill. parte

Impresa. De -una de las noias de tabaco,

arranque untrozo y 10 triture en Ill . palma

de la mana dereeha, mientras con dos de-

dos de la otra sostenia el ·pedacito de pa-.pel. La noja dobledet pertodico se Ill.pas aa mister Smith. Enro.lle el cigarrfllo y sa-

que mi pedazo de ·yesca: el cJIW9 doblado'S up. poco de. "gubka", 'Hic€- runctonarnuestro ortgrnal encendedor, con gran ad-miracion de 'los morigoles. Esta.ban ,fasci_

nados viendome encender el cigarrlllo.

'-l'Como se 'llama ese aparato para :ha-

cer fuego ?--me pregunto el patriarca.

-Los I'U'SOS te llaman "chajalo-badalo"en algunos sitios--le 'dUe;

iRepiti6 dos veces estas palabras, Fumecon .delectaclon, mientras el viejo daba

bccanadas a su curloso cig'arro.Cuando e1

extreme enoendido le ,11eg6 a Ia mitad,

movie lacafia Iha-cia e1 otro lado ry sigulo

f'umando. Terminamos de, rumar. Era 'ya

nora sobrada de marcnarse.

·E l patriarca sa-co un ,oh;}eto de subol-

smo a 1a altura de sucadera 'izquierda ifSe 10 aplia6 al oido. Era un relod muy

gi'ande, de plata, ,a'tado al clntur6n con'

una pesada cadena tamblen de plata. sedi6 cuenca en seguida del gran inreres

!Con 'que I,lli.s compaileros y yomirabamos

,oJ reloj. Nos acercamo'S y nos permiti6 que

10 examlnasemos. Era antiguo y de fabri-

cacion rusa, de esos a los que se daba

cUEl'da con una lhwecita.Podia tener unos

cincuenta ailos. Desde luego. era un pro-duct{) anterIor a ,la Revo~uci6n. En 1 £ 1 es-

fera figuraba e1 nombre d'e su fabricante y,por ilna de esas cosas rarasde 1a memo-

ria. aU!). recuerdo que seHamaba Pavel

Bure. ,Algdn artesanb zarista muoerto ha-cia muchos ano'S. ' ,

......iOuando los rusos pe1eaban 'un05 con

otros--me ,dijo el venerable mongol"':', al-gunos ,de' ellos se refugiaron en nuestro

pais. De esto hacl;l mumos ailos--. La eual

explicaba; no s610 SU »Osesl6n> del re10j,

sino como ha-bia aprendido el ruso .

. 'Nos' des·pedimos con re!teradas elf!pre-

siones deagradec!mlento, if'e1ieitacI6n y

deseos mutuos de buen via~e. Y" POl' su-

pucsto, POl' ambos ijados insistimoo en quenuestros pies seoon:ser,vamn saludal>les 'Y

aglles. lEslie fue 'quizas e1 encuent!;o m a s

tnteresante que tuvimos .en toda Mongolia,

psro habiamos de descubrrr que todas es-

tas gentes, a cualquier clase social que,

pertenectasen, eran Igualmente finos YCOl'-

teses, gerierosos y hospitalarios. ,Slempre '

nos ayudabari yobsequiiLban en la medida

de sus posibflidades eoonomlcas, pero en

tccos los cases 10 hacran alegrernente. Era,sin' duda alguna, una gran satisfaccion.

.pal'aellos. Y otra deliciosa cua.Jidad de los

mongoles era su ingenua y franca curiosi-dad. Desgraciadarnente. Ia dificultad "del

idioma nos impidi6 conversar con los na-

ti'Vos que seguimos encontrando. aunque

nos acostumoramos a expresar nuestras

ideas con gestos, sin delar de-habtar.rmen..

tras tanto en nuestro idioma, ya que estoresult at-a mas comedo, y menos embarazosoque llmttarse a Ia pura mimica.ICuando la pequefia caravans desapare-

cio de nuestra vista, nos, prectpitarnos.

como hambrtentos. sobre l a s hoias de "La

EstrC'lla -Raja". Habfa .muy pocas noticias,

pero nos leimos hasta Ia ultima linea, por-que era el primer perrodico que habiamos

visto desde aquellas ihojas, medio afro atra-sadas-c-oomo mjnlmo-c-, que nos daban en

elCampo 303 para liar Joscigarrillos. No

pudimos ent€rarno,sd,e 10 que mas nos in-teresaba a todos losprtsroneros que caimcsdesde.un prtncipioen pod.erd? los rusos:

st AI~,lllania y El.usia~staban'Yaen guerra.\Encontramos algurias-noticias aburridas

depoHtica Internay'referenctas-a.Ja Fi'esta

dell."d'e ..mayo y la:siJ:J.abituales afirinaclc-

nes gratuitas de 'Que .la industriay la agri..cultura sovletieas isuperaban todo 10 pre-

visto. Un extraficparrafoque parecia des-

mentir cualqurer rumor- de posible guerra

entre UR:SS y Alemania, daba cuenta del

en-via de un gran cargamento de trigo para

alrmentar a los alsmanes de Hitler.

.Despues de leer el-Jlapel, 10 niclmos~iraspara liar clgarrtllos y las repartlmos entre

todos. Caminamospor un terreno·ondulado

de sua.ves colinas, hasta en~ontrar\ln arro-yo, hacia las si'ete dtl 1a' tarde; Allf acam-

pamos. encendimos una hoguera para pro-

te'gernos de la fresell. noche, comimos :y 10pasamos mu:ybJ.en fumando ry chal'lando., 'Hacia el final de' la prfmera' quincena

que lle·vaJ::amosen Mongolia habiamos mo·

dificad.o ya nuestro sistema de avance con. relaCi6n aI empleado en Siberia. Ya no era

preciso establecer turnos de,vigilancia.:Oesde luego, t,enia·mos tanta prisa como

ant-es POI' '8y·anzar; Siehabia convertido ,enun' hal::ito arraigado en no,sotros', pera no

viviamos con la constan~, 3ngu'stia de <que

nos ovolviesen a capturar. Podfilmos rela-

.cion-arnos con las gentes del pai<s, pedir

ll!limentos, e Incluso trabajar para ganar-

los. NU'estl'as horas ,de marc.ha eran desde

el amanecer <hasta que se 'ponia el sol. perodescansa-hamos. dos horas, 'Clespues del me-

diodia. iQue gran adelanto haber podido

.adoptaI' la costumbre de los parses cali-

dos y dormir 1a siesta!

El terl'el1o presenta:ba ahara una serle

<ie montes P(){!oe levadoo, de cumbre re-

donda. ,Los rodeabamos cuando podiamos,

ycuando no, los esclilabamos. Algurios, delos montes estabancub!ertos de hferba,

que crecfa pro.fusamente en 1a ,[aIda Nor-

.te, Habia pecos arboles, excepto en, las

cercanias de los jnreblos Y de 'los rios, y

srempra . era escasa 1 a vegetaclon. Solo

abundaoa la rosa stlvestre y un tipo de

arcol frutal con una sabrcsa fruta ovalada,

rora. La poblacion estaba muy esparcida

e n pueblecitos muy separados, sternpre

cerca de algun riachuelo. Soio una redu-cida parte de Ia tierra que recorriamos se

hallaba cultivada.

!Lo prtrnero en que pensabamos cuandollegabamos a 10aUo de un monte era en

buscar desde am el1'io 0 nachuelo mas

proximo. 'Este viaje por Ia Mongolia Exte-

rior se reducia a una serte de marchas

forzadas bajo un calor asflxiante, 'en bus-ca de 'a:lgunaocorrtents de agua, lbamoo delagua al a gua. Lo demas era un martirio.N'ecesitabamos el agua para que iriuestrospies resistieran, para saciar la terrtbls sed

'Y para bafiarnos, Adernas, los rfos nave-

gables nos traian a veces allmentos, y es

natural que recuerde los incidentes que seprod ui eron. .'

, l1.:a primera vez que tuvimos buena, suer-, te, IhaIlamos un sampan encadlado en una,

orrlta ceriagosa, 'El barquero se esforzaba

par sacar de am su ernbarcacion empu.:Iando'desesperadamenteeon sa Iarga per-

tiga de barnbu, pero no tenia manera ,de

mover el sampan. Kolemenos dUo:-Vamos a' echarle una mano,

rvad-eamos unos diez metros rio adentro.Kristina nos contemplaba desde la ortlla ,lEI barquero nos paso unapel'tigaque Ile-

vaba de repuesto y con Ill.cual riicimos pa-Janca, rnlentras el hombre ayudaba empu-

Jando con su bambu, Despues de aranar-

nos unos mmutos-i-v este trabajo nos

drvertfa=-, lcgramos poner a flote elsam-

pan. El chino estaba contentlstmo. Su' car-gamento era de melones del tamafio de

calones de rugby. MJentras el sampan se

alejaba nos rue arroiando varios melones.

:Entr,e nosotros v Ia oriUa dende Kristina

nl}s esperaba :hab.ia un 'cintul'on de unos

cuantos metros de fango que, en Ill. esta-

Cion de las Ihwias, seiialaba el borde' del'

rio. La '5uperficie estaba resquebl'ajada, se-

cada. POI ' el sol. Pero deiJajo d<!esta eostra

habia una masa de ,fan-go en Ia que se

hundia uno can gran facilidad. Zal'O ac'a-

ba'ba de al'rojarle a Kristina, uno de los

melones y se l 'efa, cUidando de no Ihllndirse'

en, el lodo, cuando 1anz6 un grito.Le pre-

guntanios que Ie pasaba, pero antes de que

pudil,ra contestainos. s€nti que algo se 1'e-'

tOl'cfa a mis pies. Me agache. tanteando

entre el fango. Aquel10 5e me escap6 POI'.

dos, veces cuando ya creia, tenerlo eogido,

POl' fin encbntre la cabeza y agallas' y 10

sa,que a Ill. superficie.Daba fOl'midabl€s C.o-1·sta7AJs.Casi tenia cuarer,tta centimetros delongitud; era de cuerpo redondo y grueSo,

parecido a una anguiJa'. Reconoci el pel'.

, que los ruses Haman "viyuni".

-lSe p ,u e de com'€l'?-me ptegunt&Smith,

""'"Si-Ie respondi.

::Este hallazgo nos alegro, Nos ·lanzamos

a P€scar,sencillamente a' mano; mas :de

estas anguilas. Seresistian a morir'y tu -vlmos .que cortarles a todas la cabeza antes

de asarlas, La comida result6 opipara. Una .

.(CQntinuI/,TIl,)

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(Conti11uaci6n;)

padera de un tarrtto de mader~ y 8ae6 unpoco de sal Era morena y'degl'ano grue-so. Me la entl'eg6 con un culdado cue re-velaba la estlma en que J : a . ternan, comolu:tfeulo de gran lujo.· Apenas si podia Ile-narsa una caJa de eeridlas can aquenaean-tidad. Sae6 luego un pedaclto de tela desaco 'Y me la envolvi6. Me incline, sonreiy .les di las graclas-por e1 val1osistmo obse-quia. Nos despedlmos de €iIlos.. AI pasar POI' el pueblo, cerca de un ex-trano pozocuadradQ, del que salian, POI'un primittvo procedlmtento mecanleo. uncs

W conductos para riego, vtmos unas preCio.sas~ flol'.es sabre las que revoloteaban las mart-" peaa's masoCillas ·que . 'he admtrado en .mivida. Nos detuvlmos para verlas bien. ZaroIntento casar una, pero Krtstina le rog6

~ que no lohlclese, Instalamos nuestro cam-parnento a Ill. sombra de una medta docenade pequefios d.rboles.La V'egetaci6n fue. haelendose' mas es-

.easa ha:sba <QueVa no' 'haoJa, mas .que bre-zos cubriendo las eonnas. Nos dlriglilmoshacla el deslertc.. cuya extension 'Y . carac-terIsticas desconocfamos. 81 nos hublerananunctado los pellg.ros f e 1 horror que en-eerraba,nos habrtamcs preparado melor.Gobi no era mas que una palabra .paranosotros, Apenas 51 dlscutlmos sobre Ill.tra,V'esia del desierto que Be nos aveclnaba.EI sol S9ilfa. a nuestra i~Cluiel'da al amana-. cer y. camdnabamos sin parar Ihasta que seponia. 'Eso era todo.

La Ultima aet'lvidad humana que recuer-do, antes del desierto, estuvo a cargo. dedos peseadores dhinos en' un r10 de crtllasscmoreadaa POl' sauces .y cU;yas aguaslluian trescas yclaras POl' un cauce deguij.arros. H;abfainos' llegado aJ rio a. me-dlodia 'Y vtmos POI' p rlmera vez a los pes-cadores ·una :hora, 0 asI, despues de nu~s-trs. !legada. Uno. de eUos an<ia-ba porelrio en J a misma dlrecc16n -qUenosottos, Y

el otro junto a In orilla opu<esta,'El sguales llega,ta, a. Iii c1ntw.'a, 'Ya veces, ·apenagsf podian saoa,l' la. . ba rb -1 1 1 a, C a da uno' de(I!lo.aUevaba un largo bambll en una .mano,mientra-s con fa otratlraban de dos ouer-das que Ies eolglll1an de los ;hombl'os.Avan!l;aban s. !llIvor de La cOi'riente. AqUeUaoperaci6n nos lntrj.gaba, de modo qua nosacercarnos para. observar1es., :La pare·ja .tenia extendida a .tra'Ves delrfo una red .. Conslstlaen dos alas de ilnosvelnte metros de Jongltud cada una. un1-das en el medlo en una gran baJsa, ablerta.por enfrente que arrastraba. pm- el fonda.Toda la red era soatenida. a note POl' uns1stema. de pedazos ovaladoa de madera. .U-gera, iY a ,que no tenfan corch(); Sste siste-ma de arrastr.e no deJ aba .Ii: lospecel! delrio muClhas probalJ1l1dades. de sobreviV1r alpaso de ambos pescadores. Los Chinos ba-,ttan el' agua vigorosamente con sus palospara edhar Ii Jail peces de sus refUgiosentre la vegetaci6n aeuatlca. Los unicosque podian escaparse era:n los que salta-ban POI' enclma de la red. Tuvlmos 'buenasuerte porque .se detuyleron los dos justa-meRte frente a nosotros. El peseador de Ill.

otraorHla cruz6 hasta donde estaba succmpafiero y, ·al mismo tiempo, con Ill. r edde su lado iba cerra.ndo La boca de III.

.~,

bolsa, Cuando los tuvl,mos eerca vi que el:fonda de la red tenia. como Iasbre unaspl~dras sudetas a Intervalos y en el centrouna. piedra grande, plana ..-Las cuerdas de,que ttraban los des hombres estaban ama-rradas, l'especUvamente, a III. parte aHa .y'.a . la be.'ja de la red y corrlan a todo 10largo de ella,!Uno de los pescadores sujet6 los cuatro

picos de III. red, mlentras el otro, vadean-do, recosta una especle de .deseomunal cl-garro ihecno concanas de ba.mbu. El raroobjet{) habra ido flotando ,d,etras de Iii reda. buena distanela de ella. Este artelfactoservia de dep6slto flotante s mevll para 10

fa pescado. En 5U parte mas ancha teniauna abertura cuadrada con una. 'Porte2'lllelaque se abrta para meter las nuevas cap-

turas.. Le.s dimes a entender por senas que nosgustarla a~udarles. Los chinos pareeianaceptar 1 1 1 .idea. conasrado. Entre las ma-Has se rernoslan aprislo,nados varlas doce-nas d,e pe.quefios peces. Uno de los pesca-dores cogi6 a uno de Ioapeceejllos POI' 1acabeza :y 10 tiro a la ornla, Nos mir6 ": f

sefia16a la red. Se.gu1m.ossUe-j,emplo y lim-'plamos la red de la, pescalllenuda 'Y depedazos de 'plantas acUa:tleas.LOscshinoS levantarcn entonces la bo&

con S 1 l brtllante cariJa,. <l.ll"s-aTetorcia sin,cesar. Con habil rapldezqultrU'on lospe-ces malV'oresunopor uno ¥ los,metleron

en Iacal11:ara flotantoe ~ebambn.i,. Cuandotsrmfnaron, qued6,una grancs.ntldad de'pescado j}equefio.Noslndlearon Que podia-mos quedarn08 con el. Su:pon.go-que nor-mal mente esto habtfa ido a parar otta. vezal rio. Algunos se nos escapaban de nues-tros dedcs Inexpertos, perc ll,lma<yorfa Pll.-saron s. Ia orJdla y sa asftxlaron aUi. LosohInos .volV1eron a tender lared y prosl-guleron su tarea. ,IThIiiamos 'Ya lil1mento pa.t;a muchos dlas.

c D-=cldlmo3 comernos todo 10 que pudiese-,mos 'Y sacar el resto a1.sol para llevarnos-10 en nuestras modhllas. Mlentras Kole-menes corta,ba !a's cabezas .coglendo e1 ha-cha Junto a Is . Ihoja, G 'O los·desventraba. ". I

los otros los lbrin !avando 'en e1 riQ. Kris·tina y Zaro enoendleron fuego IYprepara-ron una pIedra .plana para que ihlclese de

plandha. Pronto no! Uegaba ys. el sabreso.aroma .de!'pescado asado. H<abfa cinco cIa-sea, y entre eUas reconoel la !perca, POI' sucaracterfs·tlca esp!na ..,S~ear pescado constltufa una entretenida

nD1edad para n·osotros, pera habiamos 1\11s-",to mUdhas veces el producto 'preparadonorma.lmente y querfamos logl' ll.r el mismoT·esultado. Al pesea,do des.ventrado -I e qui-,tamamos Ill.espIna ,y 10a.plastabamossobl'e

' 1 1 1 . pleclra. Luego 10 fb-amos anumando yseellndo ~rca de 11\1umbre. Esto nos oen-paba muclhas ho1'a8 y decidlmoa. quedai'nOB11111oda la noohe YAlOmpletar la tarea.Toda la manana slgu1ente qued6 expuestoe1 pescado a1 sol, mientras espantal1amoa'a las moscas agitando lneesantementenuestras "fulfalikas". Cuando coru;lder&mos

que esta>baUsto, 1 0 dlstrlbufmos y ~o guar-d3llIlosen nuestms mociMlas. M a s adelanteha,'bfamos de alegrarnos de babernos to-

mado este trabado, lEI peseado eeco entra-riaecnnosctros. en el dellierto- 'de GobL!La experlenela que ttwlmos un pal' de

dlas despues no rue ta n agradable. Era aprlmera 110ra de I I I . tarde LY :hacfa un solabrasador. Marchlnkowas . 'sefia16 a Uno!tres kil6metros delante de nosotros unanube cseura .que avaneaba a ras de tierra.. Nos pregillitamos q u e podia ser aquel raro .f-en6meno; !Era lndudable que se movia yp e n s e .que pUdiera ser una tormenta de\po~o, .pero esto parecla. Imposlb1e, puesapenas se movla el alre. iLa misterlosa nubese extendia conttnuamente. '. -Es . un endambre ,d e !angostas--d!jomister Smltih at caco de un rato--.:.. 1.0 me-jar que podemos ihacer es esperarlas qu1e-tOB.

Nos sentamos en la dura tierra, que Be

re~quebradaba can el calor, ynos cubrlmosCon las "lulfaikas" y las moclhl1as. El 801se fu e oscureciendo. a medlda que se . seer-caba Ie. nube de Iangostasvque venlan ennumero infinito, Les voLvlmos Ia a espaldasy nos acurrucamos, Pasahan por enetma denosctrcs, tropezando a miles con nuestroscu'erpos:~s senttamos pOl' todas partes.Prdducianun 2Jumbldo espantoso.-IGraciasa .0105 que no pueden comer-

.nos-dljo Zaro..--iNo estarfa yo tan sesuro de 'e·1Je-re-

plic6e1 'norteamericano-c-c-Se 10 van a co-mer cast todo.;Kristina le mir6' asustada.

-lEs una broma, Chi"uiUa-le dijo Smithparatranqu111Zarla.La nuba tard6 dos horas en pasar' sabre

nosotros. Volv16 a Jueir el sol s las victi-mas d e 1 1 1 .gran a m i g r a c l o n ennegreclan. elsuelo a nuestro alrededor, Algunas se mo-vian ann: otras, parecian muertas, Noslas sacudlmos de encima ja montones, Benos habfan metldo en ,todS's ')lartes, en los'bo!sHlos, en las mangas, en laB·perneras de

los pantalones. Menos mal que no habfanlogrado penetrar en las mochHas, don de ,guardabamos·!a preciadisima. resel'lVa de.pescado)Una de m1 s grandes dJ:fl.eultades a1 l'e-

daetar esta h1storia de nuestra hufda ha -cia la lfbertadlha sldo relaclonar e1 tiem-po- con .!a dlstancia. Y esto se acentua enel paso POI' M'ongolla,donde no'podlamoshal::lar con los iha.JJ.itantes y donde, aun'quenos dl:leran los nombres de los pueblos,TrOil,monta.tias, etc ... , no habiamanera. dereeordar .los sonldos de esas palabrasparaInterpretarlos a·fios despu>es.be todos mo-.dos, CIleo que tardamos de sels a 0000 se-m'aoas en atrlWesar Ja . Mongolla Exterior,habitada, .y penetrar en las desettleas re-giones de la. Mongolla Interior.iRecu-erdo que 1 a; entrada en e1 Gobi no

se produ"o como una translc16n llbrupta. /PoI" dos veees creimos que nos, haUabarnosen estedeslerto alpe~trar en grandesex;tsru!iones arenosas, pero en ambas oca-slones aparec16 Una. cardlUera. de monte~bastante e1evados !y sl !pie de lasegundacorrla un rlaOhuelo. junto a1 cual acampa-mos pa.rapaSal" la nodh~ .. En ei bebimos

nuestra .Ultima agua il'esCa' en muc.hislmo, tlem}lO,A1 anoohecer del dfa. gigulente, encon-

(Continuura.)

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5/15/2018 La Increible Caminata - slidepdf.com

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tramos una :pisti l.de caravanas que forma-- b e . angula recto con la direceion, que Ileva-bamos, En ella se halllaban sentados cua-tro rnongoles vigtlando unhirviente cal-"dera de hierro suspendido ,de un ·tl'ipode de'metal sobre el fuego. Todos ellos pareciantener xle tremta a.-euarenta afios 'de edad.trno de ellos era Indudablemente elde rna-

yOI' autorldad, pues tenia un magnifico"~rifle.aunque dernodelo anticuado. ouandc

sa levant6 para saludarnos, el rifle result6tan alto' como su duefio. IntercambiamosIas habituales cortestas.vpero 'esta v~ run-guno de los .mongoles sabta ruse. Nos ill-dtcaron que -nos sentasemos a un lado del'(fuego" A:lli nos'lnsta,lamos en sernictrculo.

Los cuatro nos observaban a .traves delas llamas. 'Eran vtajeros mas: pobres que Ios.otros

que Ihahiamos encontrado, \Note que te-nian remendadas las choquetas. LIelVaoanuna mula cargada con 10 impl'esclndibliepara el '\Tiade,rncluyendo dos peUe,jos pa·rael agna.Creo que eran 'est6magos de ca-mello, . Eaharon mas agua en e1' ealderomientras nos esrorzabamos, con. sestos y

'sontisas., en mansfestarles eI agrado .tiuenos !habia producldo encontrarlcs. En aten-cion a Ja barbs: entrecana de SmJth, el jefedel grupo mongol se dlrlgi6 a el. Desdelueso, 10 consideraba como a1 j€ife de. todosnosotros, .: .

!EStuvimos un ra.to sin entendernos, ha-

blando ellos su .Idioma if nosotros en rusoo polaco, hasta que mister Smith pro;'

, nuncio la palabra magica: Lhasa. :Eritoli-pes el jefe mongol. despues de un breveconcillabulo con los suyos, nos indico Ia

dlreccion. Del interior de su cnaqueta sacoun clllndro de metaI ry de em extrado unacinta de seda-por una rendlja....,. Igual.

que ~oscc'cidentales sacamos una cinta me-.tnica 'de las' que se enl'OI1lan:automil-tica-mente. La cinta desecia esta'ba cubierta

. POI' una serie de:dtbujos con marcos. for-mando como una. cinta cinema.togra:tica.Peso alg1in. tiempo; con tempI ando aqu,sllasimagene's COli' ,toda calma y POl' fin: wMo

. a enro11ar la clnta 'dentro del .c11lndro.Interprecamos esta operaci6n CCimoun rezo'para linpetrar la feliz term!na'ci6n de liues-tro vi~je. Mister smith Ie hlzo una pro-[unda' reverenc!a para' a.gradecerselo.EI encargado del caldero saeo una Pas-

t~lla de te negro, rompi6 un pedazo y 1 0

echo en el caldero. Durante varios mi-nutes estuIVo'l'emoviendo el agua hirvlendo'con un largo cuohar6n de madera, La. ira-ganda del' be nos alegro. Luegosac6 unjarro de made.raal cual quit6 Ia talladera.. A J . iprinclpio cre! que su contenldo era mlel,:»ero resultoser mantequ111a. Dlsolvdo una·buenacant1dad en el agua. h!.rv1endo y 5i-igui6 removiendo. '

E1. prooedimiento parasel"Vir el te fuerimy curiosa. Yaque antes tenfan que a'Ve-rignar nuestrasrespectlvas edades para es-,tab1ecer un rlgurosa orden de precedencia.Desde luego. a mfster Smitlh ya.'10 habran.elasifics,do como' el,mayor. Las d95 prtme-ras topas-,..unM· copas, de bronce brufildomuy originale.s.-, las ;))ebieron SmfI1h y e1mongol del rlfle. ~uego Ie correSpondlo aPal~owlcz. Vi que el sargento hacia una

mueca de asco 0 .1 tragar el Ifquldo. peromiro as,mich y en seguida empezo a rela-

marse los labios y a nacer gestos exase-rados-de sattsraccion, '~ cambio, el nor-tearnenicano bebla con rnueha calma y zna-nifestaba su contento con moderaci6n.,A Kristina y a mf nos sinvleron los ul-

times. Mientras esperabamos, le gaste bro-mas sobre I l l . curiosa costumbre monoso-lica de "las senoras, al final", Pero ella mereplico que ieran muy cortesss al servlrlala ·ult ima. pues con ello reconoclan que eraI l l . persona mas Joven de nuestro srupo.Los mongoles nos mtraban a Kristina 'Y a

mt, .muy intr\g,ados con nuestras nsas.:Cuando n09 toc6 elturno. !Vi que los com-

pafieros nos observaban de soslayo. Y esque el te sabia a demonios. Perc tanto la

Joven como yo nos portamos neroicamente. 'll:l saber de las fragantes iho:jasquedabaanulado POl' et horrible gusto de, Ia man-tequtlla rancta que Iflo·taba. en asquerosas

manchas de grasa. sabre Ia. superftcie. TUveque contenerme : para no romper a vrelreuando Kristina. al terminal' su eopa, diodes sonoros chasquidos con los Iabios, para, expresar 10 mueho que le !habia gustadoel teo ' , .

.La .hospltalidad i'de lbs'mongoles que ci6redondeada can eFobsequlode.u.n poco- detabaco ty unas cuantas nueces a' cadauno.N-ospu$imos en ,piee Iniciamos Ias rreve-

rencias. Nos alejalIl()s ycuando estabamosa.unoscincuenta.metros, los vlmos sentar-se denue·vo.dandonos Ill. esnalda. H'a!)fa-

mos sahdo defmttdvamente de 'Sus vidas ye110s de las nuestras, . .:Mas adelahte habriade recordar que los

buenos mongoles oonsideraron necesarlauna oraeion especial al pensar en el caml-'no que deblamos recorrer naste, Dhasa. Pe-netrabamos en 1 9 . abrasadora ydesertlcainmensida:d del Gobi, sin agua y con mtzyescaros IV'fveres.Ninguno de nosotros seImagina,ba entonces el infterno que nos es-.peraca. .

XV!

EL DESl!ERTO DEL GOBI: HA!MBRE,SED Y DElSASTRIE .

'A los dos dias sin as-oo en el arenosohorno -del Gobi, en pleno mes de ..agosto.

empece a. sentir ·miedo.iLos .primer08 ra-~Os del soldispersaban el frio Delente dela noC!he en 'el ,desierto. La lilz aJ.canzahila redondez'de, ·las ondulantes dunas' yarroja,ba violentas sombras en los pequefl.osvrulles de arena lntermedios. iE 1 mJedo senos acel'caba con sus alas' pequeiias derapldo bat!r 'Y 10 combatfamos ohupandopledreclta,s y h.a~lendo el maximo eElfuerzopara, recorrer 1a. ma'Yordistancia. pOsibleant-es de mediodia. De vez en cuando. a1-,guno de nosetros se ·subia a una. "tie lasinnume.rables .lomas. de arena IY oteabi!. elihorizonte ihacta el Sur. iLo ,que 'Vefamus . e r a ,siempre 1 0 mismo: el deslerto:ihfin;ito. Alllediod'a. chwa.bamos en Ia arena nuestroslargos bastOnes y formba.mos .una. tlendacon los ''fufalkas '' unidas. Supengo, quetodos se h8Jllaban 'Ya.tan a.la!lll'ladoScomo"lY e POI'nuestra s!tuacl6n. ,pru-anadle 10con~

I "",'

fesaba. Yo tam poco Io.decia POI'no asustar.a Kristlna. 'YIne figure que esta era tam-,bien Ill. raeon de que los demas dtstmulasen,,E! calor nos envolvia secando ·toda nu-

rnedad de nuestros cuerpos G ' poniendo gri- .lletes de let argo a nuestras pdernas. Ca-rmnabamcs '.Rbsertos en, nuestros pensa-'m~tos'lY nadle pronunclaba una. palabre,Con()eni;rabamoll nuestra enerzfa en la. ele-mental tareade avanzar un pie G ' luegootro, Interminablemente. casl siempre 'erayo et qua 'preeedia a ios demas, Kolemenos:y Kristina iban eerca de mi, IY los otros, enun grupo, nos seg'uian a pecos metros. Yolos dirigfa -!Yanimaba. nacrendo que se le-

vantasen at amanecer' y obllgandoles a

acortar el descanso de medlcdia.JCaminabamos todavia bajo los ratY:osdelsolponiente cuando me iIWadi6 una Inten-s a sensaci6ndemiedo. Era. desde luego,

un mlsdo fundamental, .ermas oprimentede los miedos, el miedo a mortr en la abra-. sado ra ydesertlca inmens!dad. Tuve queluchar contra el Impulso :de regresar perdonde ihabiamos venldo, de volver al 'aguay' ala. vegeta.ci6n. Logre weneer este pa-nieo , . .' '. .(Nosdejamos caer, destrozados, a1 pie de

unaduna, y las estrellas empezaron a mt-rarnos.parecia loglco que el terrible can-sancio que nos agarrotaba los hu·esos noshubiera hecho dormit inmediatamente.pero, . torturados con 10.sed, nos retorcia-mos. nos 11lvanta.bamos. vag9.bamos des-concertados 'Y .volviamoaa nuestro campa-

mente. Poco despues de media noche pro-puse 'que resnudasemos Ia .marchaparaa;provechar el frescor de laonoche. TO,dos,estaban despiertos. Nos pusimos de nuevoen marcha 'hacia el 'Sur. £ra rnucho mas',facilanda.r denoche. :Descansamos un :parde horas al amanecer ;y, otra vez huolmosde enfrentarnos con el mismo panorama .\siempre era' el mismc. . 'Despues deaquella pruepa noctuma, no

volvimos a caminar .de noche por el ·de-sierto. Makowski nos. convenci6de 'quedebiamos renuncial' a ello.~lPuedes· orientarte per la'S e&trellas1

-me pregunt6;!Los dema.s me miraroncon .ges-tosIhoscos.Tal'de ·un poco en con"testar:, . .,_No tengo abso~uta segurida·d..,..-l~Entlende de ero a,lguno de 'Vosotros?.{Nadie contesto. .---lEntonces ..es mw probable Ique.ha,yB.-

.mos estado danda, vUeltas '·toda la' noche:pasada.; vueltasy vueltas-dijo C O n ·granabatimiento.. .!Me d1cuenta' de la 'horrible'lmpresi6n

que estas palabras causaronen los' otros ..Protestede la supesio16n de, <Makowski e -" insistf 'en 'que el sol' nos h.a.bfademostradopor Is. mafiana que ·i;eguiamosfrente alSur. Sin em:bargo,debfa. reconocer. a\lIll:jue. no 10, dljera., que MakowSki podia tenerraz6n, ''Pues el' h~dho de en<lon-trarIiOs a1amaneter'en .dJ.reoci6nSur no !lueria decir.que· no' hubiesemg,s estEi-dodando 'VUeltas.90rla nodhe. En 'tedo caso, .ya;estaba Ian-zada. laosemilla 'de'!a duda 'Y no podiamos.permitirnos aftadir mas riesgos a los queya. soporta.bamoo.. .. ,.'.', De modo· que coritinua.mos avami!lndo

(ConUnuur4) .

/.

I_ j

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(Conti7waci6n.) .. .

. . .

;x>r la deslumbrante cali'n.&·del desierto,Nl siquiera la . mas Ieve brisa aeudfa a . ba-rrer . el finislmo polvUlo que flotaba castinvisible sobre -el desierto, el 'PoMllo querebozaba nuestras barbas v.rostros, que pe-netre;bi POl'nuestros resquebradados lablosy nO . 3 enrol ecfa los parpados,' ~a tan per-Judtcados i x > r 1a b1'll lantez del s o l . •lEI pescado seco, severistmamente raeio-

nado, se nos termln{); al qulntodla, euandosolo teriiamospor delante horizonte muer-to. En reaUdad,· 1 0 que mas desea:bamosera. tendernos en Ja arena 'Y mordrnos. Nos.asaltaba contlnuamente la ·tentac16n de no

mterrumpir . el' descanso de medtodia, deseguir dormltando hasta que el soldesapa-reciera ·por ei borizonte ..Tenlamos los :Piesen un estado lamentable. La quernantearena f ie nos metia POI' entre lasfinaS sue-.las de nuestrosgMtados mocastnes. .iLes ·gl·ita'ba':a mis eompafierosque se

Ievantasen, que .all! no habia nada que pu- .diera sa.lva:rnos. Volver atra:s selia Una es-tupidez, ·porque encontrarfamos otra ~ 10mIsmo. E~cambio, hacia. adetante nos es-per.a'tia algo que habia de ser mefor que 1 0pasado. Tenia iq·uebabel' "algo", Kristinase levantaba ,180prlmera y me $gufa. Lue-so. Kolemenos.· Y se g·u 1a n los otros en ra-cimo. ·Como -automatas, reanudabamos da .mercha, con la cabezB. fncllnida, sllencfo-50S, pensando srube IOlos en que, pero mo-.vlenao slempra '\l1l pie y luego otro, cas!'

arrastrandonos, . :hora tras hora de dases-peraeion. . .

!A1sexto dfa, se C IlI Y618 . Joven r, de re-dtI1as, memiro ..angustiada: ..;....Hesido una tonta, Slav. lMiehe trope-

.:ado eonmrao miama. He tropeaado un Piecon otro ilme he caido, .

No e.sPtlr6 a que Ie prestllSelW\lda .. B elevant6 lentamente de la .arena y me s1-fiu16 de nuevo. Y·lIlQueilla.mf&1lU\-tarde'me· acurri6 a .W ·10.mismo: me encontre derOdl:11as.eon.enorme sorpresa yrabla.. Nome di cuenta. de c6mo me )habia caklo. Ibe.anilando como' slempre iY un.nibmento des-·i>ull!sestabj!. aITOdUla.do como en pJegarle..Me puse en pie. Jo· mas rapldam€Ilte que,pu-de; :Ninguno ~m1s -compifieros se .de~~vo a ver que me sucectla.·!Es muy 'Pro-ba-ble que; no hublesen repamdo en m1

cafda, de tan abstraldos como ihan. cade.uno en su's pensamientos .. .M e dlo la bri-·presl6n de' que tarda.bS.muOhIslmo tlempoen recuperar mi p'uesto a 111.cabeza. de lafila. De' veiz en euan{!o, notabaque otros.cafan. Beles a.fl<?jaban .!as rod!llas'Y a: l l f

Be quedaban, como Idlotlzado8, asombradosde haber dejado de caminar. Pero saca-,ban energias bwerosfm!les y eontlnuabanla mllll'dhl!o.Eran sintomas mllY elaroa: .delestado· .tan. lIIvarwado .cI'edeb11idad en quenos lha>11a.bamos,pero habrla sldo sulcidareconocerlo. Erin los dedos de Ill. muerte,que .nos e:itaban probando para vel' 5! es-tabamos ya. maduros piu'a lleval'nos: pel'OaUn era. pronto. ., \AI septimo d1a se Ievant6 'el sol .en una.s!nfonfa de tonos dorados y rosas. Lle'Va-bam os camfn'ando ya una. hora a Ill.pallda:

luz d e un falso ama·necer. Mire hacla atrasy 'V i a Kristina· y a los demas que !ivan-'za.han tltubeantes ryar:quea:dos.

(Sevilla) - 01/08)1957,: :: ,r .; :' F' :: ': ~ , :~ ;. "- " i ~" ,dr ~d

zaban, Me admir6 esta sobrehumanaener-tollU\ndo. f01lma y empeeamos 8. aventurargfai, esta ifuetza· moral .que. los mantenia "defin1c~ones", Brotaba en nosotros .Ja·per-en movImlento. Y aihora avanzar era arras- didaesperanaa. IEran "arboles", verdade-trarse; el estuerzo de mover 10s ]lies re- ros "arboles",VlvOll·. verdeimtes,comogri-·sultaba superior a . nuestra eapaeldad de tos poderosoat En raelmo, se&iluetabansUf.rlmiento. . .. , sabre el fendo de arena 'come una man-Sin' esperanaa.wlmoe como ga.teaba. Ko- oha de tfnta verde sobreun' mantel blanco

1emano,shasta 1a clma de una duna mM ·:rec1enl!ilvado. . .alta que las demas, cast una. collna de --,De~de ihay arboles ha.y agua=-eenten-arena, Alguno de nosotros hilc14 esto cada c 16 el norteamer1cano.· .mariana, encuanto habf~.un poco de 1uZ. . -rUn oaslsl-grI:t6 uno, y todos repe-Subia al punto m a : s alto postble y oteaba tlmos.la exclamaei6n. ....el ·horizonte lhacla el Sur. 'Be estaba allf Kristina murmurd:unos mtnueos ihaciendase .vtsera; con 1 1 1 . -tEs un mHagro. Dios nos ba !!alvado;

mano mtentras los demas seguia:mos an:" .s1 lhublesemospodld<i COITe1',10 habria-dandoen espera del habitual encogimdento mos lheCiho.E1 ultimo kil6metro 16 reco-de hombrosdel vigfa. '~roesta vez,.Kole- rrlmos con la . mayor rapldez que ' J aOS per-menos contlnuabaen SI l pueseo de. obser- mltfan nuestras piernas de tra·Po.,Tuve quevaci6n mueno rnas tiempo que de ordlna- arrastrerme varlos trecl1os. Tenia la 'len-rio, ry como qu1era que mlraba fijamente&Ua sel la; ehlnChada. . .en una direccton d~rmlnadai, unos euan- Los arboles crecfanunte nosotros. lErantos . srados nacta el IEste, con relacl6n a pallIlleras. A su sornbra habfa, un hU1:cOennuestra ruta, emoeceapensar que quiz!l.s forma 'ovalada.:Tenia queseragua . .A . unosoeurrtese I\lgo y me detuve. SentI Ill.·mana eentenares demetrcs del oasis eruzamosde Kristina sabre mt braoo. Todos se de- u n a pJsta de care.vanas que l o a en dlrec-<tuvieron 'Y todosmiraba:n()s, como. fascI- don Este-0este.Cerca :va de los arbolesnados, a ·Kolemenos, Vimos .como se ,fro- pasamosante una. Inconsruente p1]a demba .JOS olos, movia la . eabil 'Za Ientamente ~a-taa mo1hosas. Los ultinios velnte metrosY,se ponla- de nuevoamirarcon t l d e . z s , en loaanduvlmos east corriendo, con relaci6nlatnisma cureccion. Tuve. )anag de' gri- 1l.nuestro paso anterior. . .tarle,pero en vez,de·ha,cerlo,me .cI1rigfha-, Habia una docena, 0 mas, de arboles,' •ciadon.cte estaba e 1 . Zaro ;y 1 a cntca ,venlan· sltuados en ,forma de ~ed1a luna !li! surconmtgo: Iuego, Marruunkovasy eII1,orte- de Ill. e harca, de rnanefa que esta recibfa

amerieano. Los dos polacos, PalucJhowicz I Y " . su sombra cast todo el dia. LamarB.iVlJl1osaMakowski, se apcwa:ron en sus ,1"llsticosbas- ague, fresca se halllaba en absoluta 1nmo-tonesyse 'quedaronviendonos 11'.' v1Hdad, como un espejo, bordeada POl' unasiCUandoUegue junto a Kolemenos,. me grandes piedras toscamente cortadas.· En

·iba· dlclendo a:mi mtsmo: '".Nodebo exci- ruQue'l1aepoca del ario, el as-ua quedabatarme: no sera nada. Nada. pilede -set:" muy <pOl'debaJo'delborde de piedras (f tu-Pero el coraeon me lat1a aloca.dg.:mente·con ,v1m9s que agaOhar muoho la cabeza <parael leve esf.uerzo-de- Ia:slJJblda. : . -~-." ;ltlcan~i'Ia. Una charca ,tan P&juefia y, para.!Kolemeno:S no .d1Jonl'una palabra. Se- nQsotJ:()S,era com~-lna!r.··· :-,~--;=~-~.tialn eon el ·brazo derecho exten-dido. B e IZaro t.enfadlspuesta:]a, jarra. pero nome habia. enturbiado la vllIta. if 'Pase· unos pudimos esperar a . que luese ofl'eclendolnstantes' sl'n· pod'er enlfocarla. lEntonces a.guS;uno POI' Uno. Be-blmos como los a n i -hice 1 0 .que habia. 'visto hacer a.Kolemenos males, MetImos toda. la eara dentro IY " nosyme Irote los ojos. . . eClhamosa.gua. .porel· cueUo. Seguimos be-'iI!lfecUvamente, ha:bfa "~o;': una mim- blendo hasta que ·algulen nos advirti6.de.l

aha. oscura sobre la ciara arena. potIra es- pellgro de Henar de golpe e1 est6mago'va-· t a r a unos oClho kJ16m,etros de d1sta.:tlcia. c~o if reseco con una eantldad :exCeslva deA trBves de la daniante nebll~ del 'ama- . agua... .necer, no podfanios Identift-car .JIlQucllaex- .Sentado5 en las pJedras,. nos remojamos

tratiaaparic)6n. A medida que la . miraba- los pIes llIenoa de grieta.& . v atrozmenti la-mos, ·nos excitabamos. ai;mpe2lamos.aha- cerados. i!;dhandonos a.gua con ·Ia jana en'blar todos a 1 8 . vez. Los dos polacos, ja- la cabeza, nos qultamos una ,buena, parte .;d.eantes, Be' reunleron con nosotros: Tam- de 1a avsna. y la sucledad 8.cumulada "enbien:'ellos' localizarona:q1l'e1 "argo". ella, as! como enel torso. Mojamos ·las-~Sera un ani:mal?~pregunt6 el· sar- tnochilas y nos estuvlmos un buen ratocon

gento. . . . . los Pies envueltoa en su f1'escura. .>-Sea 10 que sea, de· una;· cosapodemos 1S6Io con ver. e~ &ifua nos extasiabamos;

estar·seguros: no es arena.--<dljo m!sterNuestro esPfrituse reanimabapor·momen-Srill1Jh-. V8Q"amosa eclllEi.run vistazo ... ·de tos. De un a·bismo de·mledo,.habfamos sa-cerca. ... lldoauna vida nue'Va.~ Hena de esperan-Tardamos dos largas horasen_ reco-rrer za. Charlabamos IYrefamos con formidable

ll!Qutllla distancia. A ratos perdfamos de alegrflll, como sl el :agua que habfamos be-vista. nuestro ob.jeti<vo.·cuando caInlnaba". bldohublera s!do ohampafia.· Nos pregun-moo POI' depreslones de la arena .. Pero tamos q u e manos habl'lan colocado allfcomo no Podlamos soportar la idea de que aquellaspledra·g:y plantado las palmerasla mlsteriosa manoha deSll:pareciese-qul- para conyertlr a,()ueimllagrosoci1arco enzas temiesemos que. fuera un espej!smo-, ·ti.na sefia1 que pudiera ser v1sta desde muyBubiamos POI' la dune. mas proxima cada lejos .por 'hombres ·tortUrados porIa sed,

v·ez que. perdiamos la v!stbillq.ad. de ma-' . '\Xlmo·nosotros.. .nera que nuestro es.fuerzo fuemucho rna-IAnn· no··,sabfamos hasta, que.punto ha-YOI'de 10 que noscofi<venia. :A'Quello rue :blamos tenidobuena' suerte. A upos velnte

.0';.'·"""';;0';"''';; j._;Cibli-;:;~i y ;;'~~·i~iZaCi(:.n~C~f!n~~,r~(;?a.l,d.:" ...u' "

.s ~~~ : Z ~ ~ ' , -.~'~~~~r~~;~~~~~;;~l:,'~~:~~~~a~l\ ~ ; S 4 ~ ; , s i ~ ~ ;' , - ,::t:;s-:i~,~.s ';" r=.::vist'_~3. 0<2::c,n;~rdLi' '2,: "";'l,,,,_J_',ju

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5/15/2018 La Increible Caminata - slidepdf.com

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• (Continuaci6n.)

metros al este de Ja charca, del Iado con-trarto a aquel POl'donde habiamos Ilegado,se ha<llaba el rescoldo de un fuego y las

riuellas recientes de unos camellos. as!

como otras nuellasde ganado en, gran nu-

mero. Todo ella demostraba que se habia

detenldo wIll no ihacia mucno tiempo una

, . gran-caravana. Probablernente habia par-

tido aI amaneoer. Aquellos !hombres, quie-

nes quiera que ifuesen; habian guisado car-

n€---4j(Y'ae la fha,bran comido, claro esta.!-.

, piles los hu-esos aparectan esparcidos, aun.

-frescos, en tornoa las cenlzas, iEran hue-

sos de un 'animal grande y de otro 'poC!Iue-

no, y la carne les habia sido arrancada concucnialo, de manera ,que aun quedaban su-

culentos trozos adheridosa 'E'llos,'Nos re~

partimos los huesos aprovechables y los

roimos como perros hambrientos. :Ellpobre

Paluchowicz, POl' no tener dlentes, me pi-

di6 el cudhillory se las arreglo bastante

bien. Cuando no quedo mas carne, macha-

camos los 1'mesos con el hadha ;Y ohuparnos

la medula -,

IPermanecimos des 0 tres noras de la tar-

de-las de mayor calor-c-tendldos junto al

agua, ba>jolabendita sornbra de Ias palme-

ras. Kolemenos,. que poseia Ia rara cuah-

. dad de poderse relajar- en cualquier situa-

cion. POl' muy dum que (fuese. 0 por rnuy

excitante-c-como-jo eraa"l.uel1a~, se quedo

prorundamente dormido -con.las manos de-:tras de 190cabeea-w el -gorro echado hacia

·delante para taparsa la cam. iRoncaba co-00 si estuviera en elrnas comedo lecho.

,Los raves del sol empezaron a decaer, Y.

cuando me desperte de una pesadtlla en

.;;ue s610 vera un d-esierto interminable y

una Iua ceaadora, volvi al charco conTa

jarra :y be-bi de .pqe;vo. Mister Smith mesigui6 ry luego todos los otros ..

lZarose a:lej6para echar un: vistazo ,a

la extraii.a ·pila. d e lata" m{J<hosas.

~icA 10 ,mejor encu·entro· una que nos

·sirvapara. nevar a.gua !-m.os gl'it6.

'El misterio .de aquel monton de ehatarl'a

c~vi1iza'daen pleno coraz6n del Gobi. ha de

queda, sin res01ver. H1abfapor .10 menosun centena.r de' 1atas, de ·buen tamaii.o' y

.\ItlVaban9JlIi tanto tiempoque estaban

completamente.cubiel'tas'd·e moho. Les fui~

mos dando 190Vuelta unapor una-puestodos nos unimos a Zaro--. pero' nos f ) .H \

imposihle descubrir 10 que <habian eonte-

nido'ni de d6nde habian v-enido. C'onforme

las fbamosexaminando,las dejabamos a

un lado,de manera que la 'pila cambia

'desitio, ydeba;jo de doude !habia estado. aparec[6 un, rollo completo de' alambre

-tambiell mo<hoso-de medio centimetro

de dia;m-etro. Se hallaba atado POI' otro

alambre muciho mas fino. que s- e rompio en

cuallto 10 'toca;mos. Frotamos con arena el

alambre' enrollado 'Y result6- ser de' exce-Jente caUdad.

:E'or la nocihe Ihicimos una, especi-e de

illUl'O protector coli las Iatas. cogim·os' al-

gunos pedaeos de madera. dejados alli por

las caravanas y encendimos una .pequefia'hoguel'a. Fstuve desplerto mucho tiempo

para refiexional' sabre cu{mdo' debiamosatandonar el tentador .oasls. perci no pude

deeidil'lo. M-e dormi como un troneo., sin

pesad11las ni sobresaltos, sin sonar en nada,

bueno ni malo.

,Una !hora 0a'si antes' del aloa, me des-

perte porIa costurnbre adquirida en el de-sierto, y 10 prfrneroque vi rue a Zaro in- '

tentando tirar del alambre rY desenrollarlo.

lDiscutimos mucho Sabre cual seria la

longitud de aquel .rotlo. La Hev,amos cerca

del charco 'Y 10 drctamos bien can arena.

Nadie sahia que podriamos \hacer con ~l,

pero todos estabamos de acuerdo en que

podia servlrnos para. algo. Cualquier abje·to

de metal era mus- valioso. 'Y ' no podiamos

deiar abandonado semejants tesoro. Y en

vista de que Ibarrios a illeva,rnoslo,debfa.mospensar en dar1e alguna forma, faci1mente

transportable. Asi, nospasarnos varias ho-

ras de aquel dia cortando -unas longitudes

deatambrade un metro !l' cuarto. Torcia-

rnos un extrema enrforma, de pufio de bas-

t6n para.poderlo colgarde'1 cuello, El me-

tal era. mury resistentey nos costaoa. gran

trabajo doblarlo, Para ello 10 sujetabamos

PQr un extreme .en un futersticio de las

piedras, rnlentras 10 golpeabamo's con la

parte gruesa deliha.cJ;.a"Cuando cada uno

de .'nosotros tu:V{) lV.a .sU' bas,t6n rnetalico,Zaro ,' Y otros dos sethiciercnv.ademas, unos

picosde metal. con/un gancBo .para col-

garselos del ctnturon, Nosqlledaba. toda-

via una' buena cantidadde'alambre,p.ero

: v a . no podiamos l1~ll.r mas. Estatareanosdeja una sensa.ctoriestimulante.val verque .

otra -vez sacabarnosparttdo ariuestras rna-nos ry a nuestra .habflidad, Ademas, goza-

bamos del oraullo que siente todo pri5io-

nero encuanto posee algo, POl' Instgnift-

cante que ello sea. '

Inevitab1emente, se planteo Ill . 'cuestion

de deeidir Ill.marcha. Dos de ·nuestros pro-

blemas eran insolubles. El oasis nos of~ecfa

agua.' pero no con1ida. Nada ten-iamos en

que '·nevar agua. exceptb 'nuestra jarra de

metal. Makowski_ 50S tenia que 5i permane-

{liamas auli unos {mantos dias mas, tenia-

mos 190probabilidad de que pasara una ca-

ra·va-na y nos dejase provisiones, con· las

cuales podriamos resistir 190etapa siguien-

te a tr9ye.s del 'd.esierto. Yo, e n cambio. era:

partidario de que nos marchasemos ·en se-

guida. Me basaba e n que, si acababa de

paSar una car.avana" pod-ian transcurrir

.,varias S'emanas sin que apar.eclese· ot1'a.'Sf no~ quedabamos, esperariamos inutil-

mente. y en tanto nos iriamos debilihndo

hasta nopoder mov-ernos mas. Los proxi-

mos viaMros que 5e detuviesen en el oasisha!llarian .nuestros cada!Veres. Habriamos

muei:to d e hambre. Quando el lector conoz-

ea los aeonteeimientos que habi:ian de pro-ducirse, quizas crea quetuve yo 190culpa,

Pero sigo creyendo que tuve raz6n. Lo otro

-fue malo. pilro ·un mal menor que el que

. padria. !haob-er.resultado de ihaber continua-

do en el .oasis. De ·todos modos. no pode-mos juzgar esta.s cosas. Nu-estl 'a discusi6n

no {ue agria. Habia que decidirse rapida-

mente en un sentido 0 en otro. Y. a ultima

\hora de la, tarde. 1'esolvimos mardharnos aIam;anecer.

/Cuando sali6,el sol ya -estabamos de,ca-

mino y duran~e Ia mitad de a~u·el dia pu-dimes seguir viendo el oasis cada Nez que

volviamos la cabe2a. Y 58 meCl'€era si aiga

que me alegre cuarrdo 10'perdd de vista.

.:b:ra una tenta.ci6n que Ihacia, mas pesada

nuestra marcha, tirando de nosotros ha-cia atras. .

IZaro Ilevo la jarra muehas horas, can

una mano 'por debado IYla otra tapandola.

La habia Ilenado de agua despues de que

todos nos ihal'tamos de beber POl' ultima

vez. Las manos se le Jl-garrotabim de tantc

cuidado como ponia en su eometido. Ape·

sal ' de ella, se -le,salpicaba continuamenteal caminar. Cuando nos detuvirnos a. me-diodia:, Ihahia derramado casi la mitad en-

tre 10 que'saltab-a y 10 que se nabla eva-

porado, que no' era poco con aquel sol alrojo viIVO. POl' eso, sentados ,hajo 1a pre-

caria sombra de rruestras "!fu;faikas", ten,

didas sobre los bastones clavados en el

suelo, nos pasamos' la jarra 'en ronda, ;;

nos bsbirnos toda el asua que quedaba.

Cada uno tornaba un sorbito par turno.

!Empezaba, pues, lasegunda' etapa de

nuestro viaj e a traves del desierto, perc

esta vez sin disponer siquf.era de la psque-

ii.a reserva de pescado seco. Creo que du -rante los primercs tres dlas 10 soportamos

bastante .hien. Peroal cuarto, el v so l co-menco aquemamos de prontode un ,modo

intolerable: Cada vez eran mas rrecuentes

los tropiezos y las caidas, Apenas sl habla-

,bamos. Lo mas unas rrases sueltas, con. la

lengua estropajosa, como grufudcs. Recuer-do que Makowski diJo.: HElinfierno no pue-

de ser pear ,que este maId i to desierto.":AIquinto dia. Kristina se ca.yOde rodi-

Ilas. M e volvi lentamente hacia ella espe-

rando que se levantara como otras veees,

pero se quedo arrodtllada. inm6vi1. 'con sir

linda cabecita inclinada sabre e1 pecho.

Kolemenos !l' yo nos acercamos a ella al

mismo tiempo. Antes de ·que. pudh~semos

levantarla,caoy6de bruces sobre laal 'ena.

L e dimas la vuelta. 'Se habia' desma:yado.Le ·a·brfel ,cUEIllode SU !vestino y empeee a

Qlablarle. sacudien'dola suavem:ente, mien~

tras mfster Smil!h preparaba un. 'cobertizEl

CGn las "fUifaika's" lV Tos palos. .

'Vo~vi6 en s·l ra'll1damente: Mil'O nuestrasang.ustiadas cara,s. s·entMe. -nos soril 'i6 ha-ciendo un esfuerzo y 'dija: .

_!No s e 10,que me 11a ocurrido. Debo de

haberme caS·do.1N0ee.

,__jNote,Preocupes-la tranqui1ice-. Va-mos a 'descansar aqui un rato y te pondni.fo

bi-en'en aeguida.

,Be inclin6 hacla delante y'me di6 unas

c!3ofifiosas palmaditas en e1 dorso de mi

mano:

,-IT-e prom'eto :que no volvere a, ·caerme.

INoss·entamos 'a;llf mismo un rata. Kris-Una se rasc6 un' tObi,llo 'Y al mira rIa ' vi

:que 10 ten.ia tan ,hinchado que la piei ,50-

'cresalia del apretado, .borde de sus' panta-

lones acolahados.

-oTe ha mordido algo. Kristina'!~~o, Slav. opor que? '

-"-Tienes la piel 'na hinchada.

lSe ,remang6 can, dificultad la parte bll.ia

del panta16n ;y se mir6. Pellsativa, dUo:

--INc 10 !habia visto :hasea ahara. No le-

he notado si:juiem.iProseguimos 18 mal'cha otras do~ hOI'RS

Kris~ina pareeia mdor. Pero se ca'y6 o[r8

(CQntinu<lrq.j

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(Continuaci6n.) "

vez, no en 'do's tiernpos, sino a todo 10.Iar.-:go, de cara contra 11..'arena. ,,'

!De nuevo Ill, colocamos boca arriba y ,Ielim,!;liamos Ill, arena, que se le habla mettdoen:'fu liariz y la boca. Pusimos el sombrajo.

La jo.ven,y.acia CQn los oios cerrados res-

, pirando con gran dificultad, :Aihora tenia

hinolaados .arnbos toblllos. tanto, que pare-

cia ft}an a estallarle los bados de los pan-

,talones. ,Saque el euchfllo tV rasgue la tela.

La piel estaba como dlena de liquido. To-que 1ainflamaci6n W ·1s.serial de' mis de-

dos se mantuvo unos segundos.

.Nada menos que una Ihora estuvo Incons-

cierite Kristina\ Mientras, YO trataba de

animal' a 'mis eompafieros-c-y a mi mis-mo-. con' tonterias como esta:. ~€'be de ser una' tnsolaclon.SentIa como si tuvtera plomo en el ea-

tornago. Tenia muono rniedo. , ''CUando' volvi6 en 51 , Kristlnaestaba cas!

alegre: ',' . .

-'Me estor convtrtlendo: en 'un. iastidio

paravosotros-e-ddo=-, lQue me 'estara pa-

sander .. . , '.

, ITodos Ia rodeamos para ayudarla a le-

vantarse, pero se tevanto sola dlctendo :--1Vamo5, vamos, Estamosperdf.endo mu-

eho ttempo:

.c'amlnaba a mi lade. De .pronto se para

'/I se mir6 a las piernas, atratda su aten-

ei6n porIa tela pa.rtida de his perneras.

-ISe me estan poniendo las plernas como,patas de. elElfante, :Sla'V. ' .

-lT2 duelen, Kristina,?-No,. en absolute. Deben de, ha'berseme

hlnohado POl'10mueno quehe andado.

!EmporIa tarde del quinto dla. Kristinaanduvo noras y noras sin mas que algun

leva tropezon vseguia junto a Kolem02nos

y a mt cuando se puso el sol y nos detu-

vtmos para pasar la neche. Am ; sentada

entre nosotros, se miraba las plernas a

cada momento. Pero' no' iha,cia ·coin,ent.ario

alguno', como '5 1 no estu'Vi.era dandos'3

euenta.

:Fue una ma,Ia nOMe. Todos, m,enos' Ko-

lemenas, estabamos demaSla,do cansaaos y

Henos de j)1'eocupaciones para poder dor-

mlr. Kristina no Sle movia" pera, desde lue-

go, no dormi-a. . Yo I.e da'ba 'Vueltas y 'V\,!el-

,tas'en la boca a mi gulja1'1'o. Mi 2 dolian

las muelas. Tenia las ,encfas iniflamadas lYreblandecidas. Mis, pensamrentos se redu-

dan, de un modo oln'esivo; alagua, a'gua,{rescll fluyendo sin cesar. 'Me a cudlan a Iamemoria, una ,y otra, vez, como si los estu-

vfera viendo, los sampane's que, ,'!labiamos

visto en los ,rios.del Norte. De v,ezen cuan-

do, ,sentia ui;los ,temblores y me ponh a'

pasear 'a'Busta'do, 'Parecia que me apr,eta,ban

la'cabelza con' aros d-e hierro. :Mi3 dolia

todo, d!esde 105 'pies a ,Ia cabeza.

Dur-ante las dos primeras horas ,d,emar-

.(fua del dla siguientei' el aire estaba rela-

tlvamente .fresco y cas! nos resultaba agra-

dabIe andal\ Todo es relativo en est': mun-

do. Pero no tard6 el solen a.tacarnos contoda su furia. '

Coif a Kristina del codo:

-lPuedes continuar?

-'Sf, creo que sLlCinco mfmitosdespues selhabia caldo

otra. v,e:;:, desmalYada, de cara a la arena.

Esperamos, como las, otras veces, a que

abriese los ojos. Respiraba con bastante

normalidad. .

La observabamcs, muy preocupados,

Di.ie:

-Esta hinchadtsima. lSabe alguno de

nosotros 10 que esto pueda signifj.car?

iNadle conocfa aquellos slntornas. Estu-

vtmos un rato abantcandola con Ios gnrros,

POI' fin, vo],vlo en sf.. Nos sonri6 'Y dijo:

. -lotra vez soy una carga para vosotros.

, IMovimos la cabeza todos, negando enar-'

glcam'snte aauello.-'-'Cr-so que l o rm e j o r . e s q u e i c o n t t n u e l s

,sin mi.

Todos. protestamos a Ill, vez. KalEmenos

se arrod~I16' asu lado:-Jljo digas eso.Eres'una eriaturita. Nun-

ca te' abandonaremos.ISlgu16 reposando otra media hora, Y

euando lntent6 levantarse apol'1:i.ndose en

"Ios .ccdos. val'Vi6 a caerse.:Le. dUe a Kolemenos:

>cIDebemos aly.udarla aunque no. qulera,

,Y, en efecto, .la puslmos en pie.

----P]J.edo .andar si €stais cerea de mi.

iPareda Imposlbleque pudtese andar solocon que Kolemenosy \yo Ia-sostuvtesemcsPOl' 105 codes. F'E\ril.despuesde recorrermedic ki16metro'.i;entim05,;qUe empezabaa-ceder hacia dElaJ:lt: ..r.ellicimos recupe-rarelequilibrlo y;coJ:ltinu6 sin un lamento.

La vez sig ulente (I'ue'se doblc'jhacia delan-

te no. pudimcs retenerla. Ni' slquiera 'su. extraordlnarta {uerza de volun.tad era ,ya

capas deprolongarel esduerso. :eajo un sola ohicharrante, nos asrupamos en torno .aella.' Kol1'!menos y :Yole pasamos un brazo

cada uno por ,Ia. clntura v ast, Ilevandola

en vilo, lograrnos hacerla avanzar, pero alkllornetro y rnedio, Ya no me quedaban

energias para ella ni para mL Paramos yme coste gran trabado recobrar la respi-

raci6n normal.

-IV'en t,ll; '.Junto a mi, POl' s1 acasO. Voy

a HeY,a rIa. Yo soIo-ane dijo' Kol.emenos"-.

Y Ia cogi6 en brll.zos. AI principio, mien-

tras S~·acomo::l3ba aI peso, 'scilaoa un poco,

pero .en seguida emprendlo una marcha

,:firma. -Yasi 1\1.Ue'v6 dllscientos metros o.

mas. ,Mlpapel se reducla a :recog,er a Kris-

tina cuando el ,descansaba un momenta.

...:..JPor fayor, Anasta'?,i, dejame-le ro-g6--. Estas gast-ando tontamen'te las fuer-zas ,que te quedan.

:Hlcimos unsomorajo y nos pa.samos alii

·quizas mas de tres horas de las de mas

calor. Kristina yacla inm6vil. Cl'eo que ya

J. ~ era. imposi'cle moverse. La horrible hin-

chazan Ie P!lsaba de las rodillas ihacia a1'1'i_

l'a. y estaba cad a ,vez mas Ilena de liquido~

Kolemenos, tumbado de espaldas, reponiafuer:~,as: '

'El .wl emPEz,6 a declinar, Kolemenos se

agach6 Y Ievant6 en bra,zas a Ia muchacha

como pudl:era haher levantado una, masa

inerte. Nos pusimos en marcha. Kbleme-

nos anduvo medio kil6metro antes ,de ,dejar

a, Kristina en elsuelo par prim.era 'vez. Notard6 en ,volv;erla a coger en brazos. La

Hevaba' como a una nifia pequefia que se'

le.1hubiera dormldo. 1 . , 3 , cabeza de Kristinarepo~aba sabre el hombro de, eL Nunc"

,vere .en vida nada, tan ma-gnifieo como

aquel gigante de las grandes barbas ru-.

bias llevando a Ia deltcada, KrIstina en

.tirazos, hora tras ihora, hacia eI ocaso de

aquel tragicl) sexto dia. Es ta , terrtble prue-ba dur6 unas euatro 'horas, POl' fin, la So -ven te toco a Kolemenos en la meiitla:-IDa.Jame en el suelo, Anastazl, POI' fa-

vor, tiendeme en Ill. arena,

(La tome en lJrazos para qultarsela a Ko-

lemenos :y juntos Ia Instal amos con la me-

nor mcomodrdad poslble. iLa rodsamos to-

dos. Nos sonrio d,ebHmente. Nos miro con

fijeza uno a uno. Cne,l que ibn; a hablar,

Tenia los oros muy claros y mury azules en

aquelloamomentos. Estaba absolutamente.tranqulla, como sl no surrtese, Cerro losojos. ' ,

"':"'Debe de estar eanaadfslma-i-dljo el sar-g:ento Paluchowlez-c-. Pobreclta,: pobrecita,

'esta destrozada de cansanclo.No sablamos que ihacer. Kolemenos esta-

ba exnausto. En circunstancias-normales,habrfa aJ~'vado a Kristina en brazos una

Inerefble dtstancnr sm nftar fatiga alguna,pero en el estado en que todos nos haUa.-.

bamos. .. Nos mirabamos unosa otros, peronarl.a&e nos ocurrla. De pronto, senti elImpulao de arrodtllarme junto a Kristina

y apllcarle el oido ~l corazon. No latla,

Y YO no podia creerlo. Volvfa la cabeza alotro lado y aplique el otro oldo. Levante

entonces la cabeza y Ie tome el pulse. No

tenfajnrlso. Todos me mlraban 'fijamente.

Le solte la mario tV ca'Y6 blandamente s a -bre Ia arena,

rE I norteamericano habl6 .en un mUIIDU-

110. Intente responderle, perc .no me salia, '

!a voz. En carnblo me brota.ron Iagrlmas,amargas lagrtmas, y mls S0110Z05,se eon-

:fundfan can los de mls compafieros. Siete'·

hombres lloraban como nifiosen la Inmen-

sldad .del desierto, porque noa ihabfa sid a

, arrebat-ado, 10 que mas preCiado era'pa.ra.

todos n050tros. Kristina habra muerto.

Llegamos a estar medio locos j,unto al

eadav~r 'de la joven. ;Nos acusabamos de

ha,oerla Ue-vado a . la muerte. Mas personal-

ment,e. Makowski, Ji.ab-lando en polaeo, me

edh6 en caraduralnente eJ 'que los hu-

tiera inducido 'a abandonar el refugio del

oasis.

rnt'ol'vino mister Smith. CQn 'Voz neutra':

':_Caba;lleros, es inutil recriminarn05

,unos a otros. Cl'eo i:jue Kristina ha sida

feliz COD. :nosotros. Y ahora,; enterremosla.

decent.emente.

'Abrimos una. tumba a1 pie de una duna.Separamos ,las piedrecltas que encontra-

bamoa 'al catvar mas hondo. Raje uno de

los saouitos que habian CQntenido comida

'Y dobhi.ndolo, se 1 0 p.use a n,uestra amiga

para sostener la barbilla. Depositamos el

ca'da,ver. en la tumba. En el pecho ten~a

su pequefio crucifijo. P,ermanecimosalli

un rata con los go1'1'os ell la mano. Cada

uno d~ nosotros rez6 en su ,;Jropio idiorna.

Fuela priOlera vez em 'qu,e oi a 'mister

Smitih 'b.ablar en ingles. Las lagl'imas me'

enturbiaban la vista,. La cubrimQs con are-

'na y sefialamos elsltlo COil las piedrecitas

que ha,oiamos apartade.(Kolemenos, con el haC'ha, co~t6 u n trow

de su largo bast6n y 10 at6 al risto 'en

(ccmtinuur~.)

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!

I

1 -

(Continuaci6n.)

if'orma. de cruz, valiendose de unas tlras decuero.lAsi nos despedimos de ella IYcontinua-

mos nuestro amargo camino.

XV1J i I

fOA:RlNlEDE .SERJP1lElNrI1E Y F'ANOO

IY 10mas !horrible era que s610 podiamospensar en KrllStlna. Caminar era una do-lorose costumbre que no requeria particl-pao16n alguna de 1 8. mente; La constantepresion del sol sobre el cerebro alteraba aveces la nocion . de la realldad y Uegabaa Imaglnarmaque Ia chice, me sezufa 8.Un,

perC) ,llegaba. un memento enaue Ia ideade su presencia 'era tan- ruerte que meobllgaba. a. 'VolVer .!a. cabeza para mlrarla,.:Entonees, se Imponia la , ~trOZ' realidad.Aqllellla nodhe' me de:;perte de un suefiomu.y inquteto, torturado ~porla sed, y 'Vo-1vi. 1 1 . tener -10.segurtdad de oqueKrIstina con-tinuabo. can nosotros. De nuevo me con-vened de que !habia sido !Victlma iie una

. .Jluslon, rylapena tue. a<Unrnas honda queantes. _ .

Hasta. que no ocurrto otra desgracte se-mefante no .perdio. Intenslda.d--:.auDJquenunea se ILPag6----el dolor' -que sent!amospar la perdida de la Joven polaca. .Adem~,o r; por raro que pueda pareeer, esta sesundaperdida me Ubero de la responsabl:lIdad-que, . por muoho que intentase negar.melo

a mi mismo, sentfa por Ia muerte de Krls-t!na.

IA:l octavo d.ia de haber abandonadO' eloas!s,'Sigmund iMakowS!ki'se cay6 de. bTU--ees, INl s!qulers. 1edi6tiempo a utillzar e'lbaston ,para sostenerse a amortiguar Is.oaida-.Estuvo unos mlnutos sobre Ia arene.:semi-inconseiente. !L e observamos y en Be-

gulda. descubrimos el signo fatal: POr encl-rna. ,de los mocasines sobresalia 10. oarnehlndhada, fOfa, como !lIena de lfquido. Nosmlramos unos a. otros sin declr nada. Lepusimos bocs. - arr!ba, Ie a.banfcamos unpoco eon losgorros I V ' en sei.Qldase repuso.Nos ,miro. atontado, -movl6 1a cabeza 'Y co-

) glendo au -bast6n,se levanto y reanud6 lama.rcha. Vadas rveees m a s CBlYO,pero 5610de rodiJlas, 'leva~andose en·segufda. La

hfndhaz6n de las prernas leTha sliblendoy -presentaba cada. 'Vez ,pear aspecto.

'!Makowski nuro. mas que Kristina a par-tir del momento en que se Ie pre,sotmtaronlossfntomas iV:!sfbles·para nosotros. .Durante el -noveno dis. debl6 de C8.erse

media. docena de veces durante un ,par de!hoTas. La. ·Ultima VEZ lucl16 desesperada-mente eon los braoos para ponerse de ro-d~llas, hasta que, por flri, lIam6 a Kole-menos. !Este y YO nos arrod1!IJamos juntoa. e I . --Sime lllYudas a sostenerme en pie, se-

gulre a.ndando. .Ko1emenos 10 coglo. 'POr un brazo y yo -

por el otm. MakOWski, ya de !>ie,nO'sa'par-to. CDn manos ,temblorosas y !Wanz6 dandotumbos. como un .borradho. C1avaba el bas-

t6n en laarena como a clegas. Nomtrossels nos quedamos unos mOment os lQuietos,vlendolotamba1earse.

-Hay que evttar que se caiga·otra vez-me -diJo Kolemenos. .La alcanaamos en segulda. Kolemenos

Ie (logio el bast6n rI entre el y yo 10 sostu-__. vimos, pasandole un brazo pOr enelma de

nuestros thom-bros cada uno. Empezamos aandar. Makowski volvia Ill. cabeza .par tur-no hacia uno de nosotros y nos sonretacon esfuerzo. Conseguia mover las- piernslI,pero cada vez las .tenia mas f-lojas, de ma- .nera que al final de la Jornada nos resul-tab a una carge, insoportable II !uerza. detirarnoS del cuello. .\AQu-ellanodhe creo que durmlo tranqui-

lamente, y pal' Ia manana del decimo dlano 8610 estaba sUn mo, sino que parecte,

-baber recuperado algunas enersias. Reem-prendl6 la mareha coli nosotros dlfIculto-samente, pero sin aryuda. Camino aproxt-

madamente media !hora antes de cae r se ,pero a partir de entonees se derrumbabaa cada momento,-hasta que Kolemenos 'Y

-yo acudmros .en au auxil1o. A1 ~legar eldescanso de medlo dia, colgaba 'de nues-tros !hombros como un saco, y las plernasno Ie respondfan ya en absolute, MisterSmit!h y Paluahowlcz nos ao qultaron deencima can muoho cuidado y 10 tendierondeespaldas en .la ·a.rena.Luego Instalamosel sombrado 'Ynos sentamosen tomoa e l.Su mmoviltdadera tota.ly-solo .teniaanI-mados los oios... .., ..Al cabo de unrato losoerro, ry cret, por

unmomento, que se habiamuerto.,Pero

volv16.a abrtr los; Inmedlatamente se Ie ee-rraron, y esta:vezsf queru.biamuerto.Nlngun 'temblor, nlngUnespasmo~ nads, re-velo el paso dela vlda a la muerte ComoKristina, Makowski no se despidl6 de nos-otros eon palabras.

<Se babfa cerra do el expediente de Slg-mundMakowski, de ·treinta y slete afiosde edad, ex capi.tlin de las fuerzas fron-terizas p<>Iacas----"Kor:pusOchrony Pogra-nlcza"'~. 'En all! '\in lugar de Polonla tenIauna esposa. Me gustaria que esta supieraa-1~ d·fa 10 IvaUente que r U e au marldo,La enterramos allf, en el Gobi. La .primera~umba que Ie prepara-mos Tesult6 dema-slado p.equet'ia..Tuvlmosque sacar el cada- .ver ry earvar mas ,arena. Le (lubrimos Ill. cara·con la tela -de Ilu'mochila, vade. desde ha- .. era tantotlempo, la mochila que 'h.ab!a

'llevado .sobre sU eSpalda. durante mas detres mil tresclentos kl:16metroB. !L a cubri-mas de arena. Kolemenos !hlzo otra cruzde madera con dOB trozos de nuestros lar-gos bastones. Reza·mos y reanudamos lamarcha.'Me eliforzaba en Jlevar la cuenta d e 105

dias IY pracuraba recordarsi !habra leid<> -al,w sobre el t!empo Que puede resistir unhombre sin comer nIbeber. La cabeza medDlia 'horrlb1emente con el calor. A ratos.estaba firmemente ~n<vencldo de que 10..<;sell! ha.bfamos de morir en el desierto. Acad a. amaneeer. ma prelfun.taba: lcui3;lsera,el ·proximo? Era-mos sels fantasmas, seissombras 'QUearrastraban los pies .pOr Ill.blanda arena, la. arena que a cada mo-

. mento paroc!a mas reacia a soltar el pie

QUe se hundia en ella. Ca-davez que uno-de nDsotros se caia, saeaba, Increiblemen-te, fuerzas. de flaIquezapara: le.vantarse de

nuevo. Ya no nos recata.bamos para mt-rarnos contmuamente las, pternas, en es-pere. del primer indicio de hindhazOn, -se-guros de quesl se InIcJ.a.baesta. no tardaris.enllegula muerte. .Y a la sambra de la muerte, Unica som-

bra que se cernia sabre nosotroa baJo &quelsol de,ma:ldlel6n, nossentiamos mas urn-dos que nunea. Ninguno de nos-ot ros pro-nunclaba una .palabra de desesperacten.Nlnlflino' se quejaba siqu1era. Nadle',deeia·que tuviese miedo, iLo Unico de que ,habla- .bamos sin parar era del agua., de que mua"pronto. Ibamos a. en-contrar B!fUa . Todanuestra esperarum.. radicaba en e s t o . M:i

- lmaglnac16n veta, Ii. la. vue1ta de cada re-

peeao de a.rida.- s,renaque nos eerra.ba elllori2lonte,uns. - fresca eorrlente de agua,y en cuanto subfamos a aquella pequet'ia.elevaclon, nos desengafiA-bamos de nuev -o . ... y conflli.bamos clegamente en que ei agua

estarfa un poco mas am.Dos dlas despues deIa muerte de 'Ma-

kowski llegamos al limite de nuestra re-slstencia. Calculo que seria e1 duodecimodfa de nuestro vlaje a partir del casts.MIuet dis. no. habiamos andsdo mas quelielshoras.Ibamos en parejas. Estas se for-maball sencfllamente coslendo eada uno,delbraZD 81 que camlnaba dunto $. eL Cada·~lno de los <los sostenfa un poco a .1 otro.Lo linlco 'Vivo que .!hwlla.bamooen el desier-to eran las serplentes, que estlliban. mmc-viles asomando Ia cabeza 'POI' los aguiJe1"OS

que habian abierto en la arena. para ocul-·tarse e .~ pregunte como podrian <Vi.vir,Deque-ae a'lfmenta,ban? N<> ee asustaban a

nuestro paso W '. por nuestra parte, no te-mamos nlngiin deseo de molestarlas; Unavez vlmos u n a . rata, pero, engenera:I. lassenplentes pareclanIas duefias del desierto.A1 ftnal de -9.lQ.uelduodlOOlmo dia, iba YO

del. brazo con- Zaro . .MJfster Smith 'Y Palu-ohowiO:2ise a.yudaban- mutuamente. y Ko.,:lemenos ma'rc:haba. junto' a MarcllinkO!l"a.s..A media noehe. cuando esta-ba·mos descan-sando, senti el Impulso -Incontenib-Ie dereanudar Ia maroha. Oreo que era la I'n-·tuIcion de que 51 no enoontrabamos agua.en las velnticuatro horas sigulentes po-

dramos re:l1unclar a toda.esperlUlQ:3. deflnl- .twamenter Contuve este deseo. a ;pesar detodo. Ihasta <ioS'boras antes' del amanecel' .

Mardhinkovas, Zaro 'Y el tiorteamerlcano'estB.ban despierto.s. SacucU a. Kolemenos y-

. a Palu~owlcz, que dormian ;profunda men ..te o Nat'lie se opuso a mis argumentos. Me

puse en mardha ry los demas -me s1guieron.Pa1udbowicz se ta-mbaleaba un poco -alprineiplo. pOl'qUe ·todalVla no esta.ba. des-plerto del ·todo. Ten~a las plernas algo rt-gldas, pero .no tard6 en ponerse al p.a&Ocan lo s demas. .

Nuestra prolongada practica en 'IJ1B,I'Ohar' P O T el desierto DOS hllro llevar !a ruta exac-ta. a pesar de la ~ocbe. Es decir, no nosdesvlamos de III. l inea Sur, 'se8.1ln nos de-mostr6 el sol 11.1asoinar POl' el !horlzonte.Ouando lIeg6 el descanso de medio dfa,pens amos sl merecia ja pena fn!$talar e1sombrlll,jo, -pero acabamos baetendolO' por

la.fuerza de la costumbre. _1N'ospasamos tres horas wl1f. b'Uda:ndO !n u I . . s dolorJdoo y agotados que lJiUIlea, ca

(COI\&""··•

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(Continua cion.)

, la boca. ablerta, tralganno, con la lengua diasda caminar con nuestros 'llagados pies.luera, alquel aire ardiente y .portador de porIa abrasadora arena,resu1taba. una

un polvidlo asflxiante. Jadeabamos como bendici6n el alivio que ahora nos proper-perros extenuados, POl'mi parte, -debocon- cionaba este fango. AI cabo de un ratefesar que' me Ihli.liaba en mi punto mas sentfque e1 hueco <form:aodoOl' mis piesOllijO de resistencia. Resultaba Imposlble al hundirse en el barro .se Ilenaba poco aereer que -tuvlesemos la energfa sunciente poco de agua, Hasta los huesos parecianpara volvernos a levantar. No creo exa- beneftciarse . de aquel alivio. De vez 'engerar en-lo mas mlnlmo si dtgo que todos cuando Ievantaba losples solo por el gustonosotros nos encontrabamos a un paso de de volver a hundirlos de nuevo en el lodoIa muerte. y tormar otro eharquito.irr'odas mls visiones de agua, 'habian side 'AlIi sentados, dis.fl'utando por· prtrnerade rtos de agua crtstalma y pura y de 'char- vez de sensaclones agradables despues de

'cos delteiosos, entre arboles frondosos, cantos dias infernales, empezamos a char-Pero el asua que nos saliV6Ia vida era un lar sobre el futurfr-lque,.a pesar del asuapoco· de. fango, resto de 10'que habia sido rangosa, no se presentaba prometedor-s-e'un arroyuelo. al fondo de un canalillo que hrcimos planes. El primer heeho innegable

no tendria nl dos metros de ancho, Busea- es que nos estabamos muriendo de ham-barnes asua' .para salvarnos, y el desierto, bre, en el. sentldo mas exacto de la pala-no s610no: tenia mas que este flihgo para bra, lYa que s·e abusa mucho de esta ex-cfrecernos,. sino queIo ocultaba celosamsn- presion, El"egundo hecho era que, a pssarte, como un tesoro. Noquerili. q,ue:10 v i e - de este don del ciel0 que acababarnos deramos. No 10descubrimos .:hasta que Ilega- recibir con el agua enlodada, nos quedabamos enclma de el, Y entonces nostirsmos RUn mueho desierto 'que recorrer y sin Iafrenetieamente sobre el canaltllo, enupa- esperanza de que camblasen las clrcuns-mos el lodo, escarbamos con la pretension taneias, En ylstadeello,tomamos lade,-de sacar asua. Durante unos minutes noscisiOn. de quedarnos alll aquella noche;ycomportarnos 'como unosdementes. M"asti-el ·~siguj.ente. :POl':Ia neche dormirla-cabamos el fango para escurrirle elagua' mosyeJ dia 10 cie.dieariamosa explorarquepudiera tener y 10 .escupiamos. luego el .arrowuelo para veTS! encontrabamosencon asco. . . algunaiparte agua(lOrriente-. PellsabanlOs[Por fin, a mister Smith se Ie ocurrlo el q.ue donde !hay.aguahaIY vida y algo,que

procedrmlento. mas adecuado. Retorci6 un comer.plco de &U mochila y 10hundlo en el barre. IA primera horade la manana apilarnos

1.0 .tuvo .alIi unos minutos con estupenda nuestras "fuf'a.1kas" para que nos sirvlerancalma y Iuego 10saco y chupo Ia humedad de punto de rererencia y nos dlvidtmcs enadiherlda ~ la tela:-S~gulmos su .ejemplo_ des trios, marehando en direcciones opues-La oantidad obteriida poreste sistema era tas, .a '10 largo del arroyuelo. KolEimanos,infinitesimal con relaclon a·nuestra rabio- el norteamericano y :yo.avanzamos casisa sed, una sed de trece dias .sin probar doskil6metros en direccion. Este s, no en-

:ni unagota de asua. pero aun asl.era algo contramos nada.: A treehos, el cauce des-y nos infundia esneranza, Empezamos a aparecia casi POl' complete, como sl~cuan-h'lll1rIllf de nuevo. par primera v'ez en tan- do. llevab"a-agua--el. arro(yo hubiera corr1-to~ dras, y ·decidimos caminar a 10 largo do sUbterraneamente.Cuando voIlVimosadel secocanaIHlo con 1a Idea de 'Cluesi en· encontrarlo, &eguia siendo un cauce sec&.a'quel lugar estaba. aprutado, -debia de con- Muy a nuestro pesar, llegamos a la coil-tener agua mas ·a:delante. elusion de. que, sl .habia agua, debia de!EI arroyUe10 vacio se iba estre(';hando a fluir de' aIgtin manantial inaceesible para

medlda !queavanzabamos, hasta convertir- nosctros. a gran profundi dad .ba.jo·tierra.~e en una simple grieta en 061!i·uelo,pero EI .imico signo de vida que hallamos fue-

en ella eneontramos ague. "de vel'dad".. ron dos serpient~s. que POl' {)ierto tenianconcentrada en drminutos -cha·rquitosentre un aspecto mu,y salu1iable. Regresamos ael lodo. 'Entonces'pudimos ·:beberponi.endo nuestro punto de reuni6n. TUvimos Quelas manos en Iforma de copa . ' )1 pre::-!onan-. esperar alg'lln tlempo a Zaro, Marohiniko-dolascontra ea:da.charquito_ ~o bebiamos· vas ~ Paluc'howicz, y habialhos empezadotodO--el agua, la a,rena. e1barro-con :ve1'- ya a hllicemos ilusiones sO'breel buen au-dadera delicla. Gracias a Dios Que no pu- gurio de esta tardaIi·z:a.cuando les virnosdimos tragar cantldad~s mayores ne esta 1legar. Zaro a]:}r16los brazos. como indi-

, me21cla.Despues decada trago tertiamos cando que Ie.exploraci6n de eUos tres ha-Que esperar un poco thastaoue 061llUecose bia fracasado. . .llen'a:'baotra ve'r,. de agua. Mis·labios, hin- ~'No hubo suerte--ciijo :Marchinko:vas.eha.dos, agrletados 'II sangrantes, me que- --T.ampoco nO'sotros hemos encontradomaban al contacto con a'quel agua. La te- nada-;-les dije. .

fila un momentoen la boca antes de tra- B~bimos mas agua· en1odada. Volvimosgarmela .para remojar la lengua reseca, las .3 remojarnos los pies, mientras el sol seenefas .reblandecidas y los dientes dolo- elE'va.baen elciel0.ridos. . fTras' un rato de silencio coJecti.VO,hab16"Nosouedamos un par d e tiaras tend!dos. Kolemenos:

exhaustos, junto a aquella. grieta. Luego -Un desierto interminable· ysolo n{l~-

bebimos mas. Zarose quito los mocasines otros y las serpientes para disfrutar de t'H:.rvmeti6 los pies en el barro frf 'sco. Can sus Ni podemos, <::omer-la.si eUas 'pucden co-'iabios rotos. sanrela de felieidad. Nos in- memos a Ilosatros.v~t6 a' imitarlf!. Todos nos. sentamos en -'o'Esa afirmaci6n. Querido.compafiero-le

ABC<:mm: l ;Q: ; ,A:Qe;s ,OOas.a( ! !e - ta~/liin$e~S29 contradi'jo mister'Smith-'-, s610es aC'~PiT~_ql:;: ;c '--jj-~U A!:<: .'~ - "i":'cJ:.·i(j, :;GU_~\ «,_ ,, ' :::13 p]_"'Jl';:i_i::'L~~ d "C't.H"_'l-

,·,'te:-;id::::o ,:jf~ '~:ll_c,,'::::;_ll~r 'c,:nr:a c: '1~:_~-,:i;3~_(;,1( -";,S(::,'] I,",

~ C ' . ;" ; d'.:, f i!)(",'

medias, pues ha habido hombres que hancomido serpientes.

. tEsta,;"palabrasdespertaron ·en todos nos-otros un gran Interes, -,!Mister E;;mithse acariciabn EU gran bar-

bagris, pensando sobre 10 que .habia di-'

cho. Aii.adio: .

,......(Losndios de Norteamerica las comen.Incluso >he'vtsto -turistas en las reservasIndlas que han sentido Ia , tentaci6n deprcbarlas, Dasde luego, yo .nunca heInten-

tado comerlas. Debe de ser POl' una repug-nancia Jnstmtiva qua siente el zenero hu-

mano hacia los reptiles. .

[Ret1exionamos en concentrado silenciosobre 10'que-nabla. dicho Smith.. .ry de nuevo hablo :~Cabllilleros, me permico insinuarles que

las serptentes son nuestra ultima posibl-. lidad de salvaeion, Y cuando un hombreesta muriendose de hambre, es capaz decomer cualquter cosa, hasta 10 mas asque-roso. .

La Tdea nos fascinaba y nos repelia al.mlsmo tlempo. Diseutimos un rate sobre

elasunto, .pero estabamos todos convenci-

des de 'que acabarfamos haciendo la, prue-ba, No habia otro .remedio. .. .

-Necesitamos un palo abierto por el ex-tremo, en forma de V, para pcderIas ca-zar.....:.cJ.ijoMarchinkovas. .

.-:-oNoes problema-s-mtervtne YO-, Bas-

ta con que raiemos tina 0 des de nuestrosgarrotes por un extreme y :mantengamos .

abierta Ia hendedura POl' medio de unapledrecita.

Kolemenos se puso en pie en seguida ydldo ;: .

-IManos a la obra, Preparemos un par'de horquillas de esas.IDecid!mos usar los bastones de Zaro· y

Paluchowica, Kolemenos hizo las hendedu-ras con e1 haem. Con unas tiras de cuero'Y una piedra PElqueiia.dejamos listos dos."ea:zaserpi~ntes" bastante baenos.-<i.C6mo sabremossi jas serpientes son

veuenosas?-'Pregunt6 .!P.aluqhowicz--. GO'

a'caso 'podrfamos ~omer t'llmbien· l a s vene-.nosas?· .

tEn vel'dad. esta dud-a la tenfanios tados.

Pero alii estaba mister Smit'll para infor-mamos, como siempre.-No hay· que .preocuparse. El veneno

esta contenido en una bolsitaen la parte..de·atra:s de la cabeza. AI·cOl·tarleesta. ha-b~mos .eliminado .el 'veneno.IAparte de la caza, ha'bfa un problema:

"cemo eneend·erramos ja. luinbre?Busea-mos en las moC'hHasy vimos que cas·j 00nos habia acabado 'nuestra provision de"gu):}ka''',-lo ;que haeia de yesca-, .~roZero sac6 de su mochila unas boiiigas se-cas y lascoloc6 solemn~mente .Junto Ii.nuestro material de hacer fuego. En otra0::a~i6n nos habrfamos· reido de buenagana, pero teniamos los labios demasiadodo!orido5~para permitirnos ese ·lujo.'-:Recogi este "abono" en el oasis. Pense

que podda -ba.cernos falta para eneender.

Lamente que no :hubiesemos heciho .todos10 mismo que ·Zaro en 061oasiS. ~l excre-Imehto animal seeo era un·magnifico com-;bustible, que ar1iia lentamen·te y .produCfa.un calor constant-e. A part!-r de entonces

e ~ ~ ' ~ " ~ l U ! ' ! i; ~ ~ ~ : > f : ~ l ; ~ ,~":,!.'l j c o , : ) ' !~~;t :~~::j i~~9~t~~~:a~tt;l ; 'E}_-1;;I~~ r , n ~ ~ : ;; ~ ~ ~( !1 . 1E ' s:,.:: :11;." ' I i i_f:L-~:": ·;" L'p<.'sicii.';,-; e=<p~-2 .~c: a, sal '! ~ : . 1, , , , 1 11;: ' . ' t!·~; lDs

i

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(Continuacion.)

una de 'nuesbras grandes vpreocupacloneshabIa de ser In . de recoger 10 que ·pudi~raservlrnos de yeseR.ISmith Y''Yoquedamos encargados de t!n-

cender la lumbre, mientras los otros Iba11de' eaza eon LO s palos ahorqulllados, Elnorteamertcano y'yo eavamos en la arena.eon' las manos en busca de una caps" depiedras . '1, sabre todo, de 'una ancha 'Y plana.que nos strviera para asar Ia serptente.Tardainos anSI nora en hallar una. A 10ledos vetamos a los otros arrastrandose POl'entre Ias dUMS en €spera de que asomasealguna serpiente, Como en esta vida todo

es d!ficll, mrentras 'hay 'mucna gente quese encuentra con una serpientecuando me-nos Ie Interesacst uno ..la busca, no la en-cuentra 0 tarda mucno. Cuando no hacia-'mos caso de ellas, la s vetamos con granfrecuencia. . ;La Improvlsaua, cocmtlla estaba dispues-

tao SObre 1a. pIedra plana. que hablamos

encontrado podia nabarse frito ya un hue-vo, antes de eneender la lumbre, s610 conel . calor. del sot: Expuesta a los raves deeste :habia almacenado tanto calor que nopodtamos y , a . taearla s · 1 n quemarnos. Mar·Chinkovas regreso abattdo t

--Las serplentes deben dehaberse ente-rado de' que hemcs camb!ado de idea res-.peeto a eUas.· '. .Didho' esto, se sent6 con nosotros dOs;

De repente owes que Zai-o dabaun grangrlto. A el no .10 veiamos •. pero sf a. Kale·menos y Pa]uCihqwicz, Que"OOrrian'hacia'dond.e ha'bi-a sonado el grlto. 'I'ambil~n nos-otros :fulmos hacla. aIla; ... .A unosclncuenta metros estaba Zaro;

mJeta'IlXio laca,beza. de una' serpientecon1 3 1 palo .. E 1 cuerpo de.esta Be retorcta yZaro sudaba. par el gran esruerzo de m a n -·tenerla. aillf.. No pod!anWi>.sa'oer su tama~fioporque, a.parte· de unosdocecenUme--tros Q.ue .s e retorcian en li!. 'hOrqU~lJAdelpalo, el resto del cuerpo s.eguia ocultoenla. madriguera, y desde am tlraba canformidable fuel'U del palo que a cada mo-mento se a.cercab81 mas a. la boca del ia'!ro-.jero. Todos querfamos a\Yudil'r a Zaro, peroestabamos tim debl1es y torpesque no con-

seguiamos mas que dificultar la operaci6n.IEntonces Pal'udhowlcz apl'et6 con su paloel cuerpo dela Serplente, -R > unos elncocentfmetros 'maS alla. de POl' donde la te-nia. sudeta Zaro. Yo me quIte el cintur6nypa,sandolo pordeba:jo' del reptil. Ihlce.un lazo y ·tire deel con Ia mayor fuerzaposlble. Pero habIa· demaslada serpienoodentro 'Y mllY poca· .fuei'm. Estrubamos em-pata:dos.

Kolemenos nos sac6 de esta. s!tua~IOn.De un ta:jo. sepaJ'6 con S U haooa la cabe·za.del cuerpo d·el reptll. - E l· trozo ocultoen laomadriguerase :retorcia a . 1 1 n . La sa.~amos de a:l l i . Pasaba de metro y medio.Era del grosor de I I I ' ro-ufieea' de un hom.bre, negi'a. POl' arriba y con Ia harriga. deun color cremoso.oseuro. 'en 'contraste conel cremablanCl,uec1no del. cuello. .

Zaroadopt6 una. c6mica. aci!tud:"....Mudh:a.cJhos,aquf os p:re&i:oto el sucu-

l.ento man:jar que esperan .confruici6i1. an,ticipada. nuestros est6nia'gos.ABC ·.~l:d}') ~.m.i)y:jlf. . a: u ne :m~ nt ttw .; , IO a ~ ec vA - 29

"'--";~n ,\;:j':::'.'~.:J ~"!3d!"ir_j, -"t.;.l (.

bam os ihacie. Ia lumbre, ·Extendiendola so-bre unas moohllas, empece a qW~arle laplel bado la direcclon de mister 'Smlth; EIprinciplo de Ia cperacton fue-muy dlftcul-·toso, Porfin, 10 consegui, Nunce. habia vis-to una serpiente en carne viva.' Su. carneera blanquecina, pero se fue poniendo masoscura a . - 1 darle el sol mlentras 't'speraba-mos 'Que el fuego' ealentase 10.suficlente la

piedra. Abrimos el cuerpo alo largo '1 10·limpia,mos. .'En el memento de colocarla sobre Ia pie-

dra consenvaba tod9JVia un poco de vida.Nos agra.d6 a l i el dhlrrido de la carne asan-

dose. La.gras8. :hacfa chlspcrrotear Ia tum-bre al resbalar POI' 1a piedra ry caer sobrelas ·l~amas:. El ca.IOT del fuego. aiia·dldo alde} 'sol, era espantoso . .Ncs fa.sclne.bg, la. ser- .prente igua! que 51 estundera, mlrandonos,".Le ibamosdando vueltas con un palo, perocada vez habra que quitar I . a . .piedra delfuego y vOlvo.erla.a poner. Para ello utili·zabamos tamblen los bastones, CUandooonslderamos queestaba va a punto 111.PU-slmes a ellifriar un poco (51 a-lgo' podia·'.elllfriarse" con aque1·,s01>'. con piedra 'Y

todQ.; .'lPtlesta :va.sobreunas mo.dhllas para que

"noseIlenase de 'arena, no parecia. riinguno.denosotTos tenerprisa porcomenzal'elbanquete, Nos' mira:balllos con aprenslon.Kolemenos fue elprlmero enilablar:

-Il'engo unhambre atroz.-.dlJo-. Y seadelanto hacia. lacarne. TodosJe sesutmoee n masa.Paluc:'howlcz, .el~om'bre sin dlen-tes.me pldi6el cuchlllo.' Comimos. No tar-d6 muebo en quedar reduc~d9 Ia serplente.a suesqueleto, Yo 'habfa crefdo quesu sa-bor serla Inscpcrtable, ruerte ry repugnan-oo;i>ero resultc ser todo 10 contrano: sua-ve, cas! .!ns1pido. No . olia a nada. Recor-daba 11.1pescado hervldD sin sazonar.~ament() no haber pensado antes en

las serplentes-;....comentCi misoor Smith..Bebimosun poco mas deagua. fangosa.

La. tarde a,vanzaq,a. 8a:blamos que prontodeberfamos reanutar la marcha., pero. na-turalmente, nos sentiamos Inu&' reaclos a'abandonar aquel 'hllode agua.; POI' mu;v.moflt,!;cIa.daon ian,go que estuviese;y lan-

zaxnos de nuevo a.lodesconocldo, que seriaexactamente 19ual It10 qu·e '.yiS. conociamos:desierto. siempre deslel't-o. Me habia ten-dido de espaldas en: Iiarena y' e1.est6m:agoprotestaba'rUidosamente a.l J uchal' CDn el 'nuevo y ba.r'baro aLimento que Ie habfa pro-.porclonado. Sen:tia unos inoonsislmos de-seas 'de fumar. AUn tenlamos papel' piu"aliar clgarrillos. perc at! nos habla acabadoal tabaco hacia mucho tiempo'.·

iNlnguno queria plantear la cuestl6n denuestra partida, de modo que charlamosde otriJ-s cosas. Por primera v:ezrub1amoscon calma de lamuerte de Kristin's. L V deMakowski. l,Por que se los !habfa· neva dolamuerte Y . en camblo nos 'habIa dejadoa ios dema·s con suftcientesenergi'as. pormu.'Vescasasque fuesen. para proseguir eI'Vlaje? Nadie·podRe. responder a esto. perorumlabamos; obsesfonados. ese pensam1en-to. Ha·bla.bamos de 'ellos ron pene y carl~. f,io.Ya :fiter-2m.de recordarlos. Be nbs bacfamas tolerable su ausenela. .IMe :flijaba en mis cinco compafieros-

l"l',VT),;,_, '-"""'. d_;;::!"bl.'l;~ (in, [."J(O>,,,: :a a

caleulaba las posibilidades cue tenia eadauno de resistir. Desde Iuego, todos esta-bamos enfermos. Kolemenos se J1abla; qul-. tado los mocaslnes ry dej8.lba.al descubiertoinflamaclones en torno a las arnpollaa Que'Be le habfan reventado, perc ne POl'. esto.se. h!allaba peer que los demas. 'I'odos 00-niamo.s laacaras tan 'desfigllra.da.s Q.ue nislqulera nuestros parlentes mas proximosnos habrf.an reconocldo.Teniamos los laobios daformados grotescamente, surcadosPOI' profundas grietas. Las mejillas hun-dldas, los pa.rpaqos enrodeetdos y los odespar"cmn '·ha·hersenos hundldD. Nos halla.-

bamos en' un esta·do avanzado de eseor-buto. SOlamenoo el desdentado Palucho-wicz se evita.ba. el martirlo de los dlentesflojas enunasencias illIflamadas. Kaleme-nos Ie ha;bla sacado a Marahinkcvas unasmuelascon 108 dedos pOl'Que le dolian ho-rrlblemente, y all1nhabla. depraotfcar estaodontologia prlmltiva con varies de n08-otros,!Entre los paTasltos; el escorbuto 'Y el sol,

tentamcs la plel destrosada. Los' piojos sehabfanmultlpllcado con Ia fecun·d1daili.ca-racrerfstlca: desu especle y adquir1an untamanO rapugnante. NOB rascabemos sincesar, lrritlindonos cada vez masla plEl,que' se nos abrla, as! . como l'ais'ga.bamos,ann .mas de .10 'Que ya estaban, nueetras· r esudadas ropas, Lasunas sucias Int·ecta-

ban. las pe.quefia·s :herida·s :que nos causa-J:la.mos,Esteaupl!clo, '1'01' muy superficIalque ruel'a, nos deprtmdaatrosmente. CUan-do <:ogfa aIS'11n piojo,' 10 ma.taba. con unaalegria sawadei Ers.n, m a s que ningunaotre cosa, un stmbolo de nuestra degra-daei&n.lNadle cluerfa. tomar la Inlclatl;va. de.nues-

tramarebs. Por :fin, Kolemenos y Za1"O Be.

· levantaron a. 'la V~ Los demas 10 !hIelmostambien en S6gnlda. En ml mOClhila., lle'Va-be. la piedra. plana. 'donde !habiamos a!>9do.]a Serplente. El norte£lmerlcanog1,lard6 elresto de nuestro combustIble. Haciendomueca.s de dblor, KoIemencs se' puso '105

mocasines. Beblmos un pooo mas de a·gua·y reanuda.mos 1 1 1 ' ma.roha. iEsta;t)a. decl1n£ln-do : v a !a·· tarde. .

.AnduV'imos muchos kll6metrO's hastabien £IlVanz.ada.la nache. El clel0, tacho-nado de estrella·s. presenta.oa un color mo-·ra.do os.curo. Dorm1mos muy j'untos ~ an-tes del alba volvimos a ponernos en ca·mino. .

'Mjedla hora ·despu.es se d'etUJvo.PalUcl1D-wicz·con un.gemldo. Sa Jlev6 las manos·a1 .est6ma.go. E! dolor Ie tenia. doblado.pcico despues todos padecfamos los mismosfortislmos dolores .. TenIBmos una .. diarrea~an Intens·a Que nos deJ6 deSlhechos. :tiosquejlibamos . a gi'itoa. Con las :frecuenoospa.radl\ls a que nos'Vimos obllgados; no. pu-dimos :recorrer mas· que unosocho kilo-metros. casl·· todos e:l1os a. ultima ihora dela tarde, cuando los dolores' empszaron aCedfT.

l,Que los ';habia causado.· la serpienoo 0el a·gua? Nos 10 preguntabamos. ·.unes aotros. .Mfstel ' Smltlb. dUo::_''Oebe de n'a!ber sldo el a>n1a sucla.:lPero

qulz8.!:·se debe. senclllamente. a que nues·

p.~ ; :~ : I ; : :~~~??~~~-~;.:,~~11~~~:~ ~ P t f f l ' ~ ~ ~ « " _ ~ i 1 - ~ ':~;; r , ' - · _ " i.~;L::["t,c: c;f>Gs"'··:·:;Il.e:-;pres~;, ::: s",~';-G ,j!:;] '..:s,:.!.,ji~-

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(Continuac~6n.)

I t ros estornazos reacclonan contra Ia re-: penttna carsa de comida y bebida:' .-{No hay manera: de saoerlo-zdtjo Ko-

Ilemeno£.'-. comeremos mas serplentes. Yo-I 5igo hambriento. '.

Mia.rchinkovas se encozto de hombres:-,-Claro, 0 comemos serpiente 0 nada..Paluchowiez seiretorcio con otro vio-

Jento dolor-de estomago.-Que 'Dios' nos avude=-drjo fervorosa-

merite.: .

.EL F'1N:AL DEL GOBI

IInCludablemente, las serpierites del Gobinos salvaron de larnuerte. AI·dia sigulentecazarnos dos mas, a pocos minutosuna deotra, Una era· como Ta serpiente cornuneuropea de hieroa, mientras que la otratenia una esplendida plel goris-plateada.mareada a 10 largo de -I a espalda por unarava raja. con dos vlineas paralelas masfmas del mlsmo color. Recordando la difi-. cultad que tuve para quitarle la plel a laprtmera que comlmos, a estas dos las rna-tames a palos, sin 'cortarles la cabeza. yZaro las sujetaba por esta mlentras yo lasdespelfejaba. . - .

IEstas dos 'no nos gustaron tanto comola priinera.· Eran mas. delgadas y nos figu-rabarnos que sabian pear. Yo creo oue loscolores de su plel inf'luyeron en esta opi-nion. La came dela' prlmera serpientetenia un aspecto parecido al de la arigul-la, A partir de entonces buscabarnos stem-pre las de esta especle y nos constdera-barrios fellces cuando encontrabamos una.

·La grasa que soltaban a1 asarlas Ia em-.pleabamos como 'balsamo' para los Iablos.los parpados 'Y los pies. y su erecto eraestupendo, 'durando varias horas.Dos' dias despues ·de haber abandonado

eI .fangoso arroyueJo-eI casi inexistentearroyuelo:'_tu:vimos :visita. Primero :vola-ron sobre' nosotros· media docena de cuer-. vos. Nos acorripafiarofl en 'nuestra marchadurante toda Ia manana y se alejaron. muydespacio. cuando' nos detilvimos a' cons-truir nuestro .sombrajo para el descanso

~e medio, dia. Nos Intrigaba por que sehabrian ·marchado. pero en' seguida se per-filaron sobre la arena dos grandes som- .bras en movimlento. Levantamos la vistay vimos.. a no mas 'de seis tn·etros sobre'nuesttas cabezas, dos magnificas aguilas,de largo ·cuello.lV un pluma Ie negro contraal sol. Dieron varias vueltas sobre nos-'otros y por ultlmose posaron a unos vein-te metros de donde estab'amos 'Y nos mira-ron 'fijamente.La envergadura de sus alasal pOsarse en 10. alto de aquel promon-'torio. de, arena. era. enorme.-&Que. iIuerran de nosotros?-pregun-

t6 uno.;Mister Smith estaba pensativo. POl' fin

dljo:

~Esevidente que han· visto a los cuer--:vos.yvlenen a.lnvestigar que comida hay''pol' a:quf. .

-Pues a : mi no me van a comer.,....'ClijoZaro en tono d .e broma. perc inquieto.-No te preocupes, '\1ombre...,..leran.q'ul-

(SevillE')C;i-\~.iJ:' j\!;{~: .s :I·_

licJ-. No van a comernos, ni a ' ataearnos,Zaro se levanto e hizo grandes vaspa-

vientos con los brazos, en direccion a lasaguilas, para echarlas. La. manestuosa pa-reda~no se did POl' entera davZaro.: enton-cas, adlondocon las rnanosen la arena :y

saco dos piedras. 'Apunt6 cuidadosarnente

y arrojo la prtmera contra una ~d<!'las'aguilas. loa piedra Ievanto una nubeclllade' arena a un metro /del pajarraco. fEsliedi6 un brmco, pero votvio a quedarse quie-to. £1 otro ni ' slquiera se inmuto, Zaro,nervloso, lanzo la segunda piedra. que calVOlefos de su obJeti:vo. Las' aguilas seguian

am tan trarrquilas, sin de]ar de rnirarnos ..Cuando 'quitamos el sombraio .y rsempren-dimes la .marcna; se elevaron y nos sigule-ron. planeando sobre nosotros Y desert-biendo .circulos durante mas ' de una hora.Volaban mUY altas. Por fin, desaparecie-

ron 'hacia el Sur.-fLas aguilas vlven en las montafias

-senttincio el .norteamericano-:.-. Quiza.nos falte poco tiempo parasalir del de-sierto. .·,Podiamos distih.guir ag·ran distancia ynoyeiamos elevaclon alguna, por mui1ejaria que estuviera. De modo quere-

plique:., ". '" .~Tamtiien es verdadqUeson capaces

d~ volar .a grandesvdlstancias.

a:iurante tres o cuatro dias nos atorrnen-taron !osdoJoresdeest6mago·YsuscOn-sigulen t€s ,diarreas, ,~ueg~, cuando ernpe-,zabamos.aec!harde. menos el agua otravez, se nos 'pasaron 105 dolores. Transcu-rrleron algunos dlas sin 'que Ihubie&emosvtsto ni una sola serpiente; Pero al fin en-contrabamos alguna tomando el sol. Nos-Ia comiamos rapldamente, pues ;ya.tenia-rnos i rnucha practice. en matarIas, despe-Jlaiartas y asartas. Hubo un dia estupendoen que cazamos dos de Ia especle que 11a-mabarnos Negras Gra·ndes.las dos en me-dia hora. .Pasaban losdlas. De vez en ,cuando nos

in~peccionaban los cuer-vos y ~asaguilas ..Ya habiamosaprendido i. orientarnos pordos'e!'treUas mas brVlantes que Jas demasy podiamas apr{)fy.eChllrbu-ena parte de Janoclhe. Empezamos 'de nuevo a sofiaI' conel agl1a.· .Vol·via'.perder la cuenta de los <Has.Mi

rnquit~to suefio se 'llenaba .de reptiles, tanaferrados a Ja ,vida. que, aUll'qi.z.eos apo-. rreaSe con,nii palofreneticamente. seguiansilba'ndo y retorciimdose sin cesar. Todosmis 'temores reaparecian en missuefios.El peor de estos era cuando me veia soloen medio del !:Iesierto, gritando para. quem~ .OIYeranlos demas.. perc> con Ia 'sel'u'-:ridad de' que jamas volvel'ia .R verlos. ·Medespertaba tembhi.ndo con el frio del albay ine tran;qpJlizaba al vel' junto a m! a.Smith, Kolemenos, Zaro, Marcihinkowas yPa!uchowicz ..

iCasi tmperceptiblemente, iba cambia,ndoel aspecto del tf>rreno. :La' aren.9..amari~llenta era ya mas oscura; los granos de".11a. mas bastos,oy Jas dunas.' inas altas.

Desde luego. eI 'so} seg·.ia asandonos. perobabia dlas en 'oue soPlaba una' Ieve brisaprocedente del Sur- y habia' un amago de-I'-~"cura en su earicla. 'Las n<l¢hes eran·

mas fr.fas ¥ yo tenia la Impresion de quesaliarnos paulatinamente de aquel lnmfm-so horne.. ·Alos siete u echo dias de haber aban-donado el riachuelo seco, nos encontramosaI despertar con un horizcnte distmto.Esto nos produjo una iran excitacion. Eraun dia rnuv clare. A mucha dlst ancia-,ha-cia elE.ste, qulza a unos ochenta kilorne-

.. tros 'h.acia el Este; envuelta en una neblinaazul, como h u n l O de tabaco, se elevaba'una cadena de montafias. Enf'rente de nos-.otros, hacla el Sur. tambien habia montes,·pero su altura era inslgntftcante en com-

paracion con aquellas mQntafias.1Estaba-mas tan poco enteradosde la geograffadelAsia Central que discutimos sabre si aque-Ila cordillera podria serel.Himala'Ya. Lle-games a creer que la habfamos dejado al~Este r;r' que ya nos ha.llabamos, por tanto,en el urnbral de Ia India. lrabiamos de'sab.erque to.da 1a enorrne extension delTibet se extendia de.Norte a Sur, con unterrene cast siempre montafioso. entrencsotros :y el Himalaya.'~ntes depisar "tierra iflrme" llegamos

a unasrocas levemente cubiertas de are-na. [)esde aquella elevacion, sintiendonosya al borde del agotamiento irremediable.contemplarnos .las hu':mas que habiamo!;dejado en Ia arena en ·la parte Inrnedtata-mente anterior de nuestro vlaje. Se nota-ban. muv bien en. Ill.superftcievpor 10 de-.mas intacta. No eran ihueltas clararne ntedefmidas. sino una larga .rava formadaPOI' el arrastrar-de pies. algo .que recorda-ba al surco 'que dejan los esouies en' .Ianleve. 'Aquella pendiente. rocosa, deaspec-to desoladoT.·eontinuaba hasta una granaltura'. 'Pense' en -segulda 'que detras de Iacresta montariosa debla de haberagui.Descansamos un .par de horas antes de se-gulr iasceridlendo. Nos quitarnos los mo-'caslnes y los Ilmplarnos de' arena. Nos qut-tamos el polvilJo a6umulado entre los df:-dosde los.pies. Luegoemprendimos .laa~-censi6n y saIimos del Gobi.

iAI superat la cresta s610 encontrall1"mas desolaci6n. :Al anochecer ,Uegamos h-

un va·l1epedregoso. Poqriamo5 haber COIl-·tinuado. pero Marcl1inkovas·se cay6 ;y se

lastim6 una rodilJa. Por la mafiana vinl'l>.·que el golpe lEiiha:bfa'producido una hi:rida. Podia andar, pero se "Cluejabade r:'gidez en la artlculaci6n. EI dolor· sP.~'pas6 con· el ejercicio y no volvio a qUe.

.iarse. Reanudamos· 1a.ascension. N o lltl.-blab amos .pOl'qUetodoel aliento no" <€':'aimprescindible para e1 esfuerzo de "~ca:\areI monte y por'que el solo hecho de movt!rlos la'bios noscausaba gran dolor. ' ' l ' a r c t a _mos. varias bOliasen coronar a~uelJa' oGracumore. ]jesde ami arriba 'yol,vimos a. COIl_

templar la enorme cordillera' del Este. qU\-a'hora pare cia a U n mas formidable que Ill.primera 'Vez aue la. vimos. Ante nosotro1't~rifamo's 10 'que parecia ser una suees!"!de ba,jascadenas montuosas qlie arruga-bcm.el paisaje en.todo lo.que abarcaba laovista. Debado de nosotros un nuevo valle

parecis arenoso. y' decidlmas recorrerl0para vel' si encontnibamos alguna 5er-piente.. tEstuvlmos it J>unto

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III- I

II

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(Continllaci6n.J

ante el agua cuando bajabamos.· Ell rea-

lidad, ya ;habfainos pasado cuando Zai·o

se volvi6, -como el, que ilia caido de pronto

. ' en algo, Y grit6 laorrraravtllosa palabra, io

mas importante del rnundo para nosotros:

"t Agua] ' No era mas que un hilo de agua

que brotaba entre .unas rocas, perc relucia

como plata. Kolemenos y IYO estabamos es-cozfendo el mejor sitio para· segulr des-

. cendierrdo nacla ei vaJle y nos-rnallabamos

veinte metros mas abajcque Zaro cuando

oeste grlt6.·:E;scalamos a toda prisa la pen-

dlente .. Vimos :que el rnananttat era s610

una ihendidura donde no cabian mas que

105 dedosde una mano .. El agua era lim-

plda, brtllante y 'fda,casi 'helada. "Canali-zamos" el chorrlto de rnanera :que Ilenase

Ia Iarra de metal. Esperamos con enorme

impactencra. La .jarra tard6 mas de diez

minutds en lIenarse.-

a..e dije a Zaro:

~Rabias pasado por aqui .delante y no

viste el agua. lQue'te indujo a volver?

Y me respondio muy en serto ;~Cr.eo que Ja qli. tFtie un impulse trre-

frenable el que me ihizo volver Ia cabeza,

EI -aguatintineaba musicalmente enla

Jarra rntentras la Ilenaba, COIl gran cui-

'dado. Zar'o la .fue levantando. Note que le

temblaba un -poco la mane, 10 ·aue> hlzoque'se derramase algo de agua. -Se 'volvi6

'bacia'Smith y con una aparatosa rsveren-cia, imitando -Ia etlqueta mog6lica. segUll

la cual 'se sirve primero afde mas edad,

1e .rendi6 Ia Jarra. Todos {uImos bebiendoporriguroso turno. De, cada vez s610 to-

.ma,bamos un trauo. iNingUn "nectar de los

dloses" nos \habria 'parecido tan exquisito.

Llenamos Ia [arrawarlas 'veces s bebimoshasta llartarnos .. Luego la dejamos 'debajo

del dhonito cristalino para 'que en eua1-

quier momento pudieramos eogerla y beber.

Era alrededor de mediodia. Convinimos .

en que nos c'onvenfa permarieeer a'lif, juri-

to at manantial, ·veintlcuatro'horas. pero

enaquella altura no se veia senal algima

de vida y sentiamos un tlambre atroz. Yo

me ofreci. voluntario .para, 'ha{!;!r una ir i-cursion POl' el valle- en .busea de alguna

serpiente. Zaro dUo que me acompaiiaria.

'Nos He-vamos los dos. 'palos ahorqui:l1ados

~ partimos. 'volviendola cabeza Call fre-

'cueneia para recordar luego bien el sit[o

donde 'babiarnos acampado·. .'Tardamos una hora en de.~cender. Ell

e1 valle bacia un cal{)1' muy fue1'te. Nues-

t1'a esperanz'il., s -e estimu16 mucho 31 'V·er.

en. cuanto pisamos el suel" arenoso y on-

dulado delvalle, una serpH.'nte que buy6ante nosotros, escondiendose en segulda'

entre unas rocas: Pero en varias oo1'a5 no

logramos encontrar ninguria otra, Por tin.

nos separamos para busear cada uno POl'

un lado, Y ya haoia renun(;iado YO a la

'~aza, cuando Zaro lauz6 un gi' itot<lUllfal.

Cord 'ihacia <\1y Ie hall.e su.ieiaIido can la

ihorquHla . una serpienLe. una' de his Ne-

gras Grandes. '~l reptll !ucha·ba. desespera-

damente para liberarse. 'Lo apalEe con el

mango de mi bast6n, hasta matado, Abra~

ce a Zaro ,y 10 .felicite con entusiasmo.

Era el, mejor caiador de serpl~ntes deto-

<los nosotros.IZarollev6 su presa.· enrollada en, tatno

al cuello, como un troreo. Estabatnos em- alegnia los bal1dosde las' oveias, Nos fal-

papados de sudor o - exhaustos cuando He- . taba a : l 1 n medic kH6metro para !lIegar has-games junto al manantial. Kolemenos se ta las prlmeras ovedas, cuandowimos los

.encargo de mi .babituaJ tarea de despelle- dos perros de pastor -que corrtan haCin

.jar a 1a serpiente y de prepararla para e1 nosotros para defender al rebafio encornen-asado. Paluchowiez nabia dispuesto el 'fue- dado a su custodia. .

go. ;Esta vez agctarnos 'hasta el ·ultimo pe- IZaro les hab16 cuando se detuvieron cer-dazo de y,esea. 0 sea, el exeremento seco ca de el ladrando:cogido POl' Zaro en el oasis. No 'habia: su- -,No os preocupets: no vamos a hacerlesficiente calor ·para un asado normal, pero . nada va las oveditas. lD6nde esta el pas-

teniamos demasiada hambre para ser exi- tor?-iLos perros le miraban con viveza.gentes. ,.Comimos y neblmos cuando ya e1 Kolemenosgrufi6:1

sot se estaba ponisndo. Aquella neche, s610 -En cuanto tensa al alcance de' in! ha-

Kolemtlnos durmi6 tnen: a los demas nos' eha a la prrmera o v e da . '. .10' impedia el 'frio. --'No seas Impaciente, A n a st az i-Ie

.A la manana sigulerite nos ha llabamos d~je.,-j. Es. evidente 'que el pastor ha en-ya en camino. 'Esta vez no nos doli6 el viado a los perros 'para Interceptarnos. Va-estomazo en absoluto.: 'La cual nos bizo mos aapartarnos del rebanov segulr a lospensar que los anterlores trastornos se ha- perros. para vex; st nos llevan riasta su

,bran debido al azua, y no a la carne de amo,serpiente. Le dimes, pues, la razon.icomo Desviarnos nuestra ruta de un modo muy

tantas otras veces, a mist-er Smith. Des- " marcado. Los perros nos observaron sus-

cendimos por Ia ralda de aquel monte, cru-' ptcaces, hastaxrue, satiefechos de habet'

zamcs el valle de arena donde habiamos alejado del rebafio eljiellgro que nosotros.cazadQ Ia serpiente yescalamos el otro representabamos, emprendleron la.carrera.

in ante que se elevaba frente a nosotrcs. En hacia la falda' del monte opuesto al que.tota).. recorrtmosiunoswelnte ktlornetros. acababamos de descender, Ssgui con IsDesde la nueva .altura oteamosun nuevo: vista rsu carrera .y poco despues lance una'

horlzcnte. Directarnente enf'rsnreteniamos , exclamacion, Sefiale cart el braze -exten-unas. montaiias forinidables,.Po.r eso.vdes- dido en direcci6n al monte. A unos dos

viamos nuestrarruta, por-un terreno mas' kil6metros se elevaba una pequefia colum-f{1~i1,djez'gradosal Estede la, direcci6n na d.,,!hum'O.

Sur. 'A ultima nora de uquella-tarde tuvi- -..Unfuego a medIQdia '5610 .puede signi-

masia aIegr'ia de vel', POl' prtmera vea en ficar cornlda-c-dljo Marchinkovas esperan-

,t;intotiempo:.vegetaci6n. pesde el oasis . zado.no ·habfathos encontrado niiuna pizca de 'lEi fuego ardia al pie .del monte. Junto

verde. Era una 'hiel'ba . basta que crecia a un refUgio de piedras. que' s61.0 podrfa

en lasgrietas del suelo rocoso. 'Cogimos alberaar a un hombre. Ai1i estaba sentado

un znanoio y exarninamos In h!erba como ' lID viejo. Los dos perros ..Iadeantes, all 'ha-

si 'no hubieramos .:visto en la vida ul1ve- llaban tenclIdos a sU laOo. Cuan'do nos acer-

geta!. . '. ·camos. el 'hombri 'hab16 a los perros, ',Que

.Asicontinuamosdia trasdia. De vez en· ell s~guida corrlerr'ln 'hacla A.l reo.'u10. So-

cuando comiamos una s'erpiente (vivimos bre h ioglita hervfa un caldero. El norle-

gracias a eUasdurante' tres semanas '0 americana se adele'nt6 e hlzo una profUnda

mas a partir deaqu-ella. prim~ •.a. que cO'- . reve'rencia. El viejo se le.vant6 sonriente,

mImos). Las no::hes eran illS0pOl'tablemen- {I.·volV:i6el saluda solpn1n~m-ente a mister

te .frias. En vallo buscamos algun ind!cia' Smith y iuego se inclln6 lentamente ante

de vida animal. oPero habia pajaros_ De ~ada uno de nosotros,

vez en (!uando, aparecian unos halcanes: .. TenIa una hermosa barba blanca. Los

con . .:f.recueneia v-eiamos 'coton'as .y, d~sde sallentes. p6mulos de su rostro ancho y

luego,' nue.'5tros amigos los cuervos. La hillr- cuadrado estaban cUbiertos por ima pie]

'ba d'e Ja<montsfia se ~13efa mas abundan- que el tieID'Po !haMa tornado d'e color pa-

t-l' y mas v·erde a medida que pasaban los lorr05a. LJ.e'vaba un gorro de piel de cabra

di!ls_ .Luego surgieron los arbustos, unos 'con orejeras vueltas' hacia arriba, a la rna-arboles enanos que seman de lefia ideal nera mong6llca. Susootas de fteltro pa~

para los fuegas can que nos calen~abamos recian bien !h-echas :y tenflll1 suela::; fuertespor las 1l0Cfhes.El espectro de la sed des- de cuero. Su chaquet6n tres ·cuartas-tam-

aparecio .. pues soliaPlos 'J1allal'frec:uentes bien. de piel de ca'bra~uedaba sujeto 3.1

manantiales.· Ya: era raro que tuvit~s·emos cuerpo. (Vaque carecia de botones, con un

que .pasar un dia entero sin 'Pl'Obar el.agua. clntur6n de .lana. Los pantalonesparecian

Y , aun en este caso, veniamos nartos de mu:v acol0hados,probablemente con lana

1J.eberla el dill. 0 laonoche anterior. .' de las oVe.ias. Se a,pa.:va·baen un ca:v,lldo

:Lleg6 el dia en ~ue, aesde la cumbre de '. doe cerca de dos metros. lEI extremo Infe-

un .monte, deseubrlmos' can en:orm~ eritu- rio1' de e s t e quedaba reIhatado por uria

siasmo uil vane conexcelentes pastos de contera. de hierro, mientras POl' arriba ter-

un verdebrnlante. Perolo rna's asoro-broso. minaba en forma de V aplastada. formada

como una, visi6n fantastlcapara: nosotros,por la blfuTcaci6n de Ia. rama original. En.

[ue divisar, a una distancla de siete U una vatna de madera ;torrada de cuero l1e-odho. kil6metro~, un 'rebafio que t.enaria vaba uncuehiUo con mango de hueEO. [,U1:-

mas decien cabezas, 'jun rebailo de. ove- go !Jude obsel"Var que era de {ios :filos y ac

jas! . Descendiinos .. con la mayor rapldez buena fabriCaci6n. Para saludarnos se ha-posible, tropezando y iesbalando a cada biB. levantado d·e una a1fombra· !ormada

momento de tanta prisa. como teniamos en con 'pi.eIes de ovejas. No nos ';abia dudn.!legar abaJo. Al acercarnos. olimos con de la buena .voluntad con q1.le nosa.cogia

'Continuura.)

Page 53: La Increible Caminata

5/15/2018 La Increible Caminata - slidepdf.com

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ineluso de la alegrfa que le producian centdrnetros de diametro IYseis de altura,

os inesperados 'vtsitantes en su absolute. muy bien torneaco, 'que brillaba al sol con

.islarniento. . . .... su herrnoso color nogal. EI viejo soplo

'Hablo sin' parar durante un buen rato. sabre el, 1 0 Iimpio con una rnanga y nos

escuchaoamos respetuosamente,pero el 10 fue ensenanuo uno a uno. ;Era, en ver-

uen ;hombre tard6 en darse cuenta de que dad, una obra de artesania,de la que cual-o Ie entendlamos ni una sola palabra. quiera -podfa sentirse orgulloso .. 'i'odos de-

o le :hable entonces en ruso, pero el viejo mostrarnos nuestra admtraclon.:e mir6 con cara de' no entender nada. .verti6 en el cuenco, con et cucharon,ue una .Iastima, porque el pobre debia de una. cierta cantidad de gachas del caldero

estar esperando con ansiedad que se le Y 10 dejo sabre' la aliombra de pieles, £n-

ofreeiese la ocasion de nablar con alsuien, tr6 en la cabana y alvolver traia un [ar'ro

Creo qae tra.taba de decirnos que nos ha- bas to de barre, de large cuello, 'que' con-

bia visto Ilegar desde muy lejos y que ha- tenia jeone de oveja. Aiiadioun poco de

bia preparado cornida para ofrecernosla a esta al contenido del cuenco. No aplieo el

nuestra Ilega da. Nos Indico que nos sen- sistema de Ia prioridad. para ofrecernos

tasemos en torno al fuego " sigui6 remo- aquella mezcla, sino que entreso el cuencov1endo el contentdo del caldera. labor en 'Y la cuchara a Zaro, que era' el que. estabala 'q.ue le habfarnos Interrumpido a nues- sentado mas cerca de el. Zaro tom6 una

tra Ilega da. Naturalmente, estabamos fue- cueharada, se relanii6 y fue a pasarnos el

rl" del refugio . .M1re adentro y vi que alIi cuenca, pero el pastor le cogio delica da-

s~o podia dormir un hombre. En el suelo mente par el . brazo, dandole a entender

habia una muelle al!fombra de pleles. que debia tomarselo el todo. POl' supuesto,

'Mtentras movia dentro del caldero 1£1, nuestro compafiero obedeci6 esta indica-

gran cuchara de madera, el vle.io intent6 ci6nalpie de 1£1,etrae-htso grandes ges-de nuevo cornunlcarse con nosotros. Habl6 tos desattsraccion. exclamando-vartas ve-

can muoha Ientltud. Pero fue imitil. Du- ces:"jDios m" io , estai'iquisimo!'"rante varios minutos guardamos todos si- !A mi ,metoc6 despues. El principal in-

lencio. Par fin, mister Smith se acraro la grediente-de aouella.mezcla parecia ser la

garganta y dijo muv despacio en ruso: cebada,pero le Ihabia"afiadido no, se que~ueremos ir a lJhas·a. . grasa. La Ieche frescay dulce le-daba al

.AI pastor Ie brillaron los cios. coniuuto una agradable sua'Vidad.,A mi

·~Lhasa. Lihasa".-l'epetia Smit.h. sefia- estomago, tan rnaltratado durante. las se-

lando 'hacia el Sur. Entonees, el viejo sae6 manas anteriores. Iesento magnfftcarnente

del interior del ehaqueton un rolla de ora- a'quallo. Eructe ruidosamente, me relamf

ciones-del sistema de mo1inH1o que Ie na- los labios y pase el cuenco al siguiente,

blamos visto a aquel natrtarca mongol-s-v :Despues que nosbfzo corner a todos, 10

etrrpezo a rezar. :Por su aspecto, parecia hizo el, A 10 que ,queditba en el caldera.

haberlo tenido enclma toda su vida. En el aIi.adi6 cterta cantidad de leche 'Y empezo

pergamino, cuvos bordes estaban gastados otra vez a remover lasgachas con el cu-a ruerza de uso. .apareclan pintados los 51,,- charon, Con ello, teniamos nueva racion.

nos religtosos. Luego, el buen pastor sefial6 A cada -uno de nosatros le correspondi6

hacia el Sur '!( ,empfz6 a deseriblr circul05 un nuevo cuenca bien Ueno,

can el brazo i2iqulerdo, mientras can el de- tEl viejo apaI't6 del;fuego el caldero, mo-

reeho sostenfa el pergamino, viendolo con clerta dificultad, ya que ca-

-Intenta de<:irnos los digs ,que vamos a. recla de asas. aunque 5e notaban los agu-

tardar en Uegar a lJhasa-dije. jeros donde habian de sel' engancihadas.

~Pues su brazo par-ece un molino de Con gran alegria nuestra, sac6 tabaco de

viento-se extran6 Zaro-. Debemos estar una bolsita de piel y nos, di6 a cada uno 10

a una eS]Jantosa distancia. suficient<'Opara hacer dos 0 trescigarrillos.!Nos inclinamos para. agradecerle al viejo Can nuestro papel de peri6dico los !iamos.

su in.formaci6n. Be sac6 de un obolsillo una Para encenderlo5. utilizamos tizones de 1abo1.~ita de sal Que parecia de la m·ejor ca- 1umbre, Nos sentiamos 1elices en aquel10s

lidad y nos· invito POl' sefias a. mirar den- momentos IYre'bosabamos de 'gratitud ha-

tro dei caldero mtentras e l echaba la sal Cia nuestro generoso anfUri6n. ·Por su par- .

en la, comic1a. As! 10 hiz-D,r~movi6 el con- tf'. estaba muy satisfeoho y nos sonreia.

tenido. sae6 un poco de caldo con la cu- encantado.

o'hara, 10 prabo, se Iami6, c1hasaue6 Ia len- Se ausent6 durante media hora para

!!Ua e hi:1'Oun <:6mico gest,o, como dicien- lavar el caldero. que ya se habia en.friado.

do: "jQue rico esta!" Parecia tan contento RechalZ6 nuestros ofrecimientos de ayuda .

.como un cihiauiUo con un '.iuego nuevo, Fue a un manantial cercano 'Y allf lavo

Nos hizo tanta gracia Que nos reimos a e1 caldero y el valioso cuenco. Cuando vol-

carcajadas. Hacia muchos meses que no via. atiz6 el fuego y no.shizo te, al estilo /Cree que cuando eneontram{)s al pastol'

nos reiamos asi. tibetano. Esta 1'ez no me pareci6 tan des- no habfamos penetrado aUn en ten:itario

'Lo que 'hizo luego e1 pastor tuvo un aire agradable, con su rancia manteq'uiUa flo- tibetano. sino que, al salir del desi-erto del

rnual. De su c'hoza saeo unob1eto envuel- tante, como a·quella otra vez. Gobi recorrimos la '2!Onamontafiosa. en Ill.

to en una bolsa de tela. /Nos mir6 con sus . Yo sentia ·grandes deseos de hacel' aigo parte mas estrec'ha de la provincia china.

o.iillos vivos, parpadeando 'Y su gesto me POl' el pastor. de devolverle el favor de de Kansu. situadaa 10 largo de la fron-

hizo pensa.r en los prestidhritadores cuando alg.una, manera'.. Le dine a Kolemenos: tera de 'China con el Tibet.

estos ponen en situaci6n al publlcopara "Vamos a hacerle -unas asas para e1 cal- Estabamos a principios de octunre de

sorprenderles con uno de sus truc~s. Por dero." Para eno, podiamos utilizar el alam- 19411 e ibamos a tar dar mas de tres mes-esnu.estra parte, no podiamos ser un publica bre que l1abia.mos cogido en el oasis Y Que en recorrer unos dos mil cuatrocknt.os ki-mas Jntrigado !Y a-tento. 'Extra:lo de la bol- llevabamos en forma de bastones. A todas "l6metros de terreno mll'YaccidelHado hasta

B~i~¥thcqTPe$~ll_l.f) ~a.r¥16lB/Ms-p'n9'lg<jlLw-z91espareci6 unaexcelente idea. S610 t;ar- lIega'l"al nimalaya. Procun\.bamas caminar!:-:) L::Xf··~:::. l':C~:-,; ,1" ·~·1;'::!:!·~.::L ;;;],:~;. G~lE;ch p!·:::h.~ l::_id," !," !TPt':::::b:>~;:;_:S:~ d:,st ~'::_i:.~",: ''<' pt:C;:;\:;J.:] d,: ~"P'A'-i i :' ir :; ::c,!t:::,i"c;:~{:,'j l>~ji::,l_i'-,;:; Y '.It: i .: ! . ~ : ;{ e on ti n :UUTa . .;):t~·· de 1

C'CO','-=":~_!:~j",sn<: .!: ' , ' ~ " : . ; ~ _ ~ ' ; : ~ , ; ; " \ \ < , / ~ ; _ ~ ~ ~ , ; , ~ ~ ':~~;~i~~.~~;~~~~:~,3.l_~~~'~~~~:: lcY.[.'1!25;''' _Y. ,e~,f_ :JE:";- CC' ,: : : ;-: : r> ;: ,Jc : i . < ' ; , , > , ;J"=~U'l"'l'~k, ,,:1 , r,,;rti':-' .l~H', ; :' 11 ' ,1 l2L" , r~:~?l.·C<I"C·~~:::://C.-.pl_;f::S.:;;'_:l dif:'[J .<

prc~d'.l(:::r::,::; qUe" ; 1 " , z,''':1.:c:!_,jc , : ' " . ' 71 1<1:'.: r..:G,,::.~i:::ic,,':-;:=; sxi.';';':t:r"_e::o I

(ContinulCcion.)

dames media hora en esta tarea. Nuestro

anntnon quedo contentisimo al vel' su cal-

dero con las flamantes asas.

:Pensamos con que otro servtcto podrfa-mos corresponderle. Uno de .nosotros pro-

puso que Ie buscasemos lena. Nos aleramosdurante una. :hora y regresamos can gran-

des brazadas de lena, meluyendo un arbo-lillo pequefio que Kolemenos habfa derri-

bado con el hacha. El pastor esperaba pa-

cientemente nuestro regreso. Le encontra-mos afilando su cuchtllo en una suave pie-

dra. Los dosperros

lbabianvuelto

a su

lada. Nos hizo sentar de nuevo y, acorn-pafiado POl' los perros, se mareho.

tAl poco tlempo volvio arrastrando, pot

1a lana de entre los cuernos, a, un earnero.

A los cinco minutes estaba el carriere dis-

puesto para ser asado, ! N o qulso v q u e le

prestasemos ayuda para esto. Aquella no-

che nos comimos lamltaddel carnero

asado :y nos quedamos hartos.

iLe dimes a entender a nuestro amigo...,.icongestos, como slempre=-que nos gus-

tariapasar ,aim 1£1,neche, Y el 10 compren-di6 en seguida y se mostr6 mu.y compla-cido 'Y honrado con ello. ·Los sets dormimosen 'torno al fuego, que estuvoencendido

toda la noche, mientras el 'Viejo Ia pasaba

dentro de su diminuta ohoza de piedra.

A 1a manana sisutente saco, no se de

d6nde, unas tortas de cebada, de las que

nos correspondteron tres a cada uno. Be-

bimos maste y, con gran asornbro nues-

tro,' puescretamos que ,ya se habia sobre-

pasa.do tcdo limite ooncebible de hospita-

lidad, el pastor prepard e1 resto del car-nero, 10 distribuy6 entre nosotros 'Y nosdi6 mas tabaco,

'!Lo dedamos a prlmera riora de la tarde,

desnues de reponerle otra vez su reserva

de lena. INo sabiamos c6mo agradeeerle su

extraordinaria ama'bil idad. iEl;to¥ seguro

de :que. esta exoelente persona se qued6

con.vencida de que tenia en el mundo seis

v,erdaderos am!gos profundamente agrade-

eidos.

POl' ultimo. nos apartamos unos pasos

de el 'Y empezamos Ia s,erie de reverencias,

sin apartar los oJosde su l"qstro. comomanda la costumbre. EI nos devolvi6 gra-

v·emente los saludos. Por fin, nos volvimos!'l emprendimos la mamha. Cuando mire

hacia atnis. 1e vi sentado de espaldas a

nosotros, con sus perros a1 lado. Ni si-ouieravolvia la' cabezil. Habiamos salido

de su vida para siempre.

iENTRAMOS ISEIS EN E[,TmET

IjI

Page 54: La Increible Caminata

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(Continuaci6n.)

POl' 10 menos treinta .y cinco kflcmetros

diaries. A veces, haciamos mas, Tambien

nabta dias que dedicabamos enteros al des-

canso, cuando encontrabarnos nospitalartostlbetanos. La tradicion 'de hospitalrdad

para con los viajeros era una parte innata

y admirable deeste pueblo. Eran de una

esplendida generosidad, sin pensar en ab-

soluto en' sacar de ello un urovecno. Sin

la a·YUdadeeste pueblo extraordinario no

podriamos haber subslstldo.

"I'enla yo la sensacion de que mi resis-

tencla al frio, cada vez mas intense de las

neches, 'era rnucho menor que cuando nos

escaparnos del Campo a , 0 · 3 a fines d,el in-

vierno siberiano. Y es que la terrible prue-

ba del Gobi nos ohabia dejado marcados a

tcdos mosotros, Despuss de la carninatadel dfa,busca'oamos un sltio abrigado. A

veces, acortabamos la. distancia que nos

habiamos propuesto rscorrer si en contra-

barrios una cueva u otro lugar bien pro-

tegido, lEI combustible se convirti6 en nues-tra obsesion, pues nos aterraba pasar una

neche sin encender fuego.

POl' las mananas €sbiba slernpre helado

el suelo y tardaba ..mueho ~n deshelarse.

EI hcrizonte, por la parte del Este, apare-

cia dentado con las sHuetas de los plcoscubiertos de rneve. Como siernpra, nos pre-

guntabarnos d6nde estarfamos,

Llsgarnos a Ia prlmsra ald sa cinco .dias

despues de habernos encontrado con ••el

pastor. u.:kvabamos una 'hora de rnarehadespues del alba, cuandovi R nuestra Iz-quierda ,y a unos dieclslete kilometres, una

vaga nubs de humo. Sentiamos un ih3mbre

atroz. frIo ,y muy mal cuerpo, 'Decidimos

Investtgar 10 que signifteaba aquel .numo.

Descendimos oor Ja falda d:e un monte a

cuvo pie habfa un va.He cubierto de exce-

lentes pastos. Al acercarnos. vimos oue el

humo salia de vaTi~s hogu~l'as. Com'pren-

dimoSQue nos halhYbamos cerca d·eun po-

bl~do 'QU'0 nos oeultaba aim el mont3 51-

guient~. Hasta primera ·horacle la tarde

no lIe.g-amos a Ia aldea. Protegidas p{)r rin

EaJi.ent~ de rocas. aparecferon d~ez casitas

como de .iug-uete. de te.iado plilno y gran-

d·es aleros. La parte de atnis de a1gulllls.

de esta s cab~fias tenian IItlacerea que

encerraha. un "patio" pequeiiisimo. de unos

do~ metros d·~ l ado. POl' las laderas de lasoollnas prnximas. pasta ban r·p'berios de

unas extrafias O'v,ejas, 'd~ lar)lufsima lana.

unas griSRs : v otra;; de color m.arron. Avan-

zamos lentamente para que los aldeanos se

dleran 'cuentade nuestra visita -con tiempo

'Y no se a1armasen demaslaclo. No sabiamos

c6mo iban a r·ecibil'nos.Ha'sta. t'ntonces

s6Jn habiamos encentl'ado pastores ais-lados.

.cuando nos aeerclJ.mos ma.s ·vimns unos

nifi{)s. ,(Rllinas ry pollltos. cabras y los pri-

meros 'Yaks "uP. 'habiam:Js vlsto. aparte· De

los que se hallan en los parqu~s :>:0016-gicns. POI' parejas. nO's aproyimamos a la

prim era de las casitas 'Y nos d~tuvimos In-

tel'esados POl' el especta<lula do e un <lam-pesina quP. uncia· un yak a un carro de das

ruedas. El h{)mbre nos ha.bia 'Visto, pero

tenfa las manos demasiado ocupadas en sutarea para pocfer .hacer nada. Medl", do-

cena de {'hiquillos tfmldos. pero di'cidlda-'mentecurlosos, se __".___._'__

(Sevilla) -

i

.- 1

y nos observaron con los oj os muv abler-

tos. EI .:yak. cuyo largo pelo 'era agitadoporel viento que soplaba entonees en elvalle, no se estaba quieta ni lin mementoy diftcultaba mueho la labor de su amo,

Probablemente, nos haoia ol!!ateado Y no

le gustaba nuestro 0101'. (jDcsde iueso, no

Ie podiamos eOhar errcara a nadie que se

sintiera ofendido POl' nuestro o:o1'!'),

POI' fin, el aldeano dsctdro renunciar asus Intentos, Dej6 caer los arreos y solto.

al animal. Seguiamos auietos a cierta dis-

tancia del hombre. Se v-ol~i6 hacia ncsotros

y entonces le hicimos una reverencia co-

lectiva sin perderde vista ni un instants

su rostrochato ry brHlante. El nos devolvio,

uno a uno, el saludo. Los ninos· contern-plaban la escena en silencic. Kolemenos y

yo, esperanzados, nos adelantamos unospasos, sonrlendo. Los nirios rornpleron a

lhablary a relr ante la enorme estatura de

Kolemenos. su barba y su eabello, tan ru- .

bios y largos. Volvimos a saludar al hombre

con una reverencla, 1:-\05 ha·b16 entonces:

nosctros le .hablamcs despues Y. clare esta,

esta clharla s610 nos sirvio para enterarnos

cl,e,que no nos-ccmprendlamos. 'Los nrfios,~ngrupo alrededor de nosotros. escucha-ballatent05 nuestras palabras, NoapaT-

taban.la vista delgigant'3 r1.l;bio.EI aldeano

seyo~vi6, despuesdahabernos hechoisefialde,s·eguirlo, y empazo a an dar. Los clhiqui-

Iloscorrtan delants de nosotros paradi-

fundirpor el pueblo la noticta-de nuestrsllegada,

IPor elcammo.observequehabia algunas

huertas, pero na'da crecia en .ellas. Vi a

una mujer 'que deiaba a la cabra, a la que

ordefiaba, 'Y se metia rapida en su casa.

SaUeron mas nlrios y nos rnlraron asorn-brados. Mas alla de la ultima 'easa. a unos

cincu.entametrDs de ella. vi que la aldea

quedaba Jimitada. haeia el Este por un

arro\yo. Pense en 10 bien situ3ida que estaba

·asta ald·ehuela.

'Los nitios pert:lran 1a timidez en seg-uida.

Ya nos s·egufa una docena d'e 'eHos. CUan-

do Ilegamos a· la mitad aproxlmadamente

de la hilera de casitas. se detuva el hom-

bre. Esta y}vienda era un poco ma;yor q.ue

Jas otras y tenia ,un 'ruliimentnio porrhe.

. ,_fEsto pareee interesante-,dljo mfster

Smith cuando el aldeano huboentra,do enla casa.

'-'.jCreo 'oue ba.. Id'O en bUBea del alcalde

_,1Jrome6 Z-aro.

No tuvimos muoho tiempo para seguir

haci·endo sUPosiciones. Como si hubiel 'a es-

tado esperando d,e-tras ·de la puerta, sallo

al porche una nUeva figura. Creo .que ten-

dria unos eineuenta ~fios y llevaba el tra-

oje corriente en el.;pais. con una· dhaq-ueta.

de piel de lo.v:eja sobre el. Era. un poco mas

alto qu·ee1 ,tipo mongolico a que ,estaba-

mos acostumbrados. y aunque muy .more-

no, sus facl)iones no resultaban tan pro-nunciadas·.como las del mongol ordinario.

Hubo el .ha'bitua.l mtel'cambio de r·ever·cn-

cias antes de 'Ilue este personaje nos ha-

blara en su .ldioma. Mavi n~gativamente

la caheza_w le iha:ble ,"-nruso, muy despacio

y artlculando··-:!!U3[._,b!en las palabras. Elhombre Ee puso· mu/y contento al orr este

idioma. Be . J o e llumino. la cara. 'i)ijo en es e

~mismo iwoma: '

--iBienvenid-os. Ahora podremos hablar.

Nos quedamos enormernente sorprendl-

des. Hiablaba el ruso con absoluta perrec-cion. Para tranqulizarrne tuve cue .decir-me qua. tan a.l Surcom-o estabamos, no

habia peligro ineluso st aquel hombre era

ruso.iEspsr6 un memento a que Ie respondiese

y como no 10 riice, prosiguto: .

-Soy circasiano y haee mUMOS afiosqua no he podidohablar en ruso con.nadie.-/.Gil'casiano?-res-pondf-. !Eso me pa-

rece interesantislmo.No se me ocurrio nada medor que decir.Empez6 a ·hacernos toda clase de pre-

guntas.

......c;Son ustedes peregrlnos? Hay paces

rusos.uue sean budistas. /.Es posible que

ha,yan reeorrido a pie el desierto delGobi?Esto le parecia una tnerefble hazafia.

~Sf. a pie-s-le respondi,

'-'De·ben· ustedes haberlo pa.sado muy

mal. Yo estuve una vez a .punto ·de mo-rirme en un vi~tje POl' el desierto.

'Be dlsjionfa a hacernos mas preguntas

cuando de pronto record6 sus deberes.comoanfitrlcn, Se disculpo y nos Invfto a pasara la casa. Una par-ed Inccmpleta de piedra

dividta Ia trnica lhabitaci6n de la casa.vicomo echaba una muder a tres 0 cuatronines nacia la parte de atras de la vivian-da, que debra. de ser la cocma, M:e :fide enPB:).ue:fi.osdetalles: unos jarros de hojala-

tao una fila de cuc:haras de madera en unestante.imanoios de hlerbas colgados deunosclavos y, 10que me pareciomas raro,

una litogrrufia de unos doce centdmetrosde lado, que representeca a San iNicolas.

al estilo de los iconos de la Ig1esia orto-doxa rusa. La imagen estaba muy desva-

necida porIa luz detras d'al -crista!. Debado

de este euadrito c01gado en la.pared, ha-

bia un tripode de metal .que sostenfa una

lampara de ac·eite mu\y PEquefuta. cerrada

con cristal ro.io. Habia tambi,en unos ba.n-

cos de madera s611dament,econstruidos,

un hornillode piedra. un cubo de madera,

un mollnillo de harina :y una hl1adora pri-

mitiva. EI poco espacio disponibLe estab9.

muy bien utilizado. LQS bant:os de madera

daban la vuelta a la ha·bitaei6n, contra

las paredes, .'1 estaocan recubiert{)s con co-

jines .de ha·sta lana. de confecci6n casera.Nos sent amos timidamente en los ban-

cos. E! <lircasiano se dirigi6 de nuevo a

nosotros. (,Fuese POl' olvido 0 a prop6sito.

no nos pregunt6 nuestros nombres ni nosdijo el suyo,) . •.

-Ii.Van ustedes armados?

-1No. nlnguno de nosotros Jleva armas

-Il"espondL

-Pe·ro, lni srQuiera tienen ustedes un

hacha para cortar la lena?

--lSi. desde1uego; tenemos un hacha y

un cuCh1l10 entre los sels. aparte de estos-

b<lswnes de palo y. los de alambl'e.

"':"i.Nada mas? Pues no ·van ustedes bien

protegldos para via.iar por estas ti:elTas.

'Me Quede perpie.io.

-JNo Ie comol'en:lo-dije-. Hasta aha-

ra nadie nos ha atacado.'P-ermaneci6 calJado unos instantes. J:..ue-

gO me pregunt6:

-/.Es p{)sible que no se hayan tropezado

.~Continuc.tr4.): !: I . " : : .~,~'~';" t ~ _, ;: _ :; _; _ ~ . : !:'2f~~.::,,'01

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compafieros tamblen se rascaban, 10 masdlslmuladamente poslble, !Xll'debaJo de sus"fuIalkas". Mi! acerque al circasiano y Ieha'ble en voz baJa-inutH precaucion, puesninguno de los veclnos de la aldea me ibaa comprender-: Cr,eo 'Clueserfa preferi-ble que mis eompafieros Y yo durrniesemosfuera esta neche. Ramos cogldo un buenmimero de blchos en nuestro viaJll y nopcdamos ltbrarnos de enos,, l EI etrcasianc me puso una mane amts-tosamenteen el nombro y me tranquiliz6:-Esos bichos no nos Bon desconcctdos.

Dormiran ustsdes en esta CBSa..:Me preguntaron mls eompafieros de que

Ie habia hablado. Se lo explique. Les pro-duJo gran alivio saber que a 'pesarde Josparasitos podlamos dormlr bajo techado.Ellos tamblen estaban mury preocupadospor eso.Los veclnos nOB dleron a BU rnanera las

buenas neches Y Bemareharon. !ban con-tennslmos, como sl salieran de una granfiesta. En sus vldas monotcnas, nuestraUagada 'habia consntutdo un aeonteclmten-to del que ~'blarian muchosanos yqUi!sus 'hUos .recordartan haber oido a sus pa-dres. Por' supuesto, 5610leshabiamos con-tado una psquefia parte de 10 que elloshabrtan querldo saber, perc aun asf, leshabfamos proporolonado diversion paramueho tlempo: podrlan haeer suposiclonesInbarrmnablamente. dlscutlr sobre el ver-

dadsro ob.1eto de nuestro vtale, etc ... has-tao convertlrnos en personafes east mito-16g1c\ls.EI que mas les Intrlgaba era Kolemenos.

Este gigante rublo de tlerras tan lejanasles maravlllaba. Les dljlmos que era de unpais del Oeste bafia.do por el mar. Kale-menos afiadlo lapalabra "Letonfa", percesto no slgnifica,ba nada para ell os.'Dol'mimos en unos camastros que nos

pre-pal'aron elln gran cuIdado. >Era nuestraprlmera noche bajo techado desde que sa-limos del Campo 30'3. No ll-ague a enterar-me de c6mo S3 las ihab!aarreglado la fa-milia para pasar la noche. Cr·eo .que eloil'casiano y su mujerse !nstaJaron en la,parte de a·tras ,y que los nlfi,os se acomo-darfan en casa de alg,Un v,ecino. Par prl-mera v'ez en tanto tlem!Xl me pude l'elajar

y dormir con toda tranouilldad. Dorm!como un tronco, me desperte con una sen-sacl6n de abs<oluta segurJ.dad. Nos dej.arondormir hasta qu,e buenamente nos desper..,tamos. Cuando nos sentamos en los ca-mastros, tenfamos junto a nosotros a losnifios de Ie. familia.qull. nos obser:vabanfijamente. :t..uego aalleron {lorrl~ndo para.avisar a su pactre.Nuestro benefactor .eg pl'esent6 con va-

rios ,trozos de tela al brazo. Era un teHdo:fu,erte. de ,fabricaci6n casera.-,Quiza. :quleran ustedes lavarse. caba-

lleros-cnos dbJo. sonl'ienre, dandonos unade aq'Uellas .to!l!llas a cada uno, pucs yalas podiamos Hamar tea·llas.-lEn este hotel haw un magnifico ser-

vicio--cUJo Zaro. rh~ndose. y afiadi6 enrusa--.-.': POl' favor. ldonde' estEi el cuarto

de bafio?EI clrcaslano se ri6 tamblen:-488 eneuentl'a al final del pueblo. se-

~ContlnUtlr4.)

(Conttnuacl6n.)

ustedes con los dhlnos? Quillro declr conlos soldados enmos,"""'No, no hemos visto ni sefial de ellos.IEntonces se levan to .y salle de la habl-

taci6n. Smith se mcllno hacla ml y medijo al oldo que procurase enterarme demas deta:lles sobre aquellos misteriososchinos.I EI .hombre volv!6 al cabo de unos ml-'TIutos. Creo que rue a dar lnstruccionespara que nos preparasen una comida. Le :insist! sobre et asunto de los soldados.

• --He constderado oportuno 'prevenirles aust·edes-cdUe-, de Que las tropas chinaspasan con frecuencla por estoscontomos.aveces nos compran' galllnas y otras aves.Parecen estar axplorando asta regi6n a pe-sar de que pertenece al Tibet. Les he vtstomarcnar en dlrecci6n 'Sur, .hacia Lhasa,

• Como nutera que ustedes hablan ruso yno el ldloma de estas tierras, es muy no-sible que sospeehen de ustsdes. 81 los ovenustedes, 10mejor 'que pueden nacer as apar-tarse de su camino.IEra un consefo muy util,Y Ie dl las gra- .

etas, pero la verdad es que nunca halla-mas soldados chinos. .A la media hora de nusstra Ilegada, co-

miamos tortas de avena con teo Nadf.e he-b16apenas hast a ,que se acabo la msrtenda.Estabamos demaslado ocupados Ilenandonuestrosvacios 1!stomagos.iEntonces nues-tro anfi,trI6n saco una pipa 'Y un cuenco

Ileno de tabaco. !Pronto el numo azul em-pez6 a saltr per Is puerta acterta de Iscasita.-ID~manera que van ustedes a Lhasa

-ldijo el tibetano entre des chupadas ala plpa.ILo dijncortesmente, como un pretexto

'para Ia conversaci6n. Pero sezuramenteno se 10 creta.-No.olviden-nos previno-s-que las no-

Ches son !XlI'aqui de un frio lnsoportable.sobre todo en las alturas. Nunca !ntentenustedes pasar una. noehe a 1a intemperie.,POI' muy cansados Que esten, 1 0 prinleroha d,e ser encender un fuego. 81 se dur-ml:esen ustedes en una de nuestras mont a-fias sIn. la deblda prot~cc16n. poria ma-fiana apareoer!an muerws. Es una muertefulm!nante. ,No Ia sentirian ustedes lIegar.

'Y afiadi6:__;Por a'qu! van ustedes en Ja dlrecclonde Lhasa. De a'quipart!! precisamente unsendero ;~ue les conducirii a ustedes !Xlf Je.pr6xlma etapa de su vlaje. Les sera facilcaminar pOl' ,el. Esta !loche se 'Quedaranustedes can nosotros y maiia.na yo mismoles ensefiare e1camIno. Estos senderos con-funden muoho aJ caminante y,hay que se-gulrlos con un gran sentldo de la <lrlenta-cion. Algunos de elJos 5610 conducen deuno a otro pU1lOblo.Y asi per del'fan ustedesmucho ti,empe. '8610 son veredas familla,-res, ablertas afuerza de transltar POl' e lJaB,durante muchos siglos. los habitantes deesta regi6n. 8i lIegan ustedes a un puebloantes del anochecer. quedense tm e1 por la-noche. 81empre contaran con un techo 'Y

una c<lmlda. Nadie· Ies pedira. nada en

pago deello._,Nuestl'a gran dificultad-~ntervlno POl'

prlmera vez mister Smith. en su perfecto

ruso-. es que no hablamos el Idioma deestastlerras.~Nuestro anfitr16n Ie sonr16: .-No es un Inconvemente tan· grande

como usted supone. 81 B e incllnan ustedesante un tiberano 'Y el corresponds Incli-nan dose tambtsn, no hace falta mas pre-sentaciones nl expltcactcnes. Desde esememento. son ustedes amizos SUYOS.

:A ultima hora de la tarde nos dleronuna esplendida Gena de carnero asado, cueuno de loshijos marores del elreaslanohabia matado poco despues de nuestra lls-gada. Mf.entras comtamos, e1 padre cort6unos buenos trozos de carne para los htlosmsnores .. Estos,cogiendolos, salieron a lapuerta de la casa a comerselos alII. Noson-seieron sal Y temo haber tornado masde Ia que un tnvttado prudente debs uti-lizar, -Pero no podia rsstsur la tentacionde probar de nuevo el plcante sabor.'Despues d,e la comida, unos sets 0 slete

veclnos llegaron para. hacernos Jos hone-res en nombre del pueblo. No se cabia enla habttacton, La esposa tibetana, que de-bia de ser muy trabajadora, hlzo mas teoCa~a.uno de los visltantee saccun euencopreelosamente labrado, como elque teniaaquelipastor con qul:en estuvlmos cincodis s antes. Era.evld3n.t'e, que estes cueneoseran lamas preciadaposesiondll aquellosaldeanos.... .. ..P6rque dan ,porestas tderr'as tanta

importanela . -a esos.reciplentes?-le pre-gunte al ctrcasiano.-J:mag!nese .usted+une .respondio, son-

rtendose-s-, a veces dan dos ya·ks par unode esos cuencos.-Pero, lde .qUe les viene BU gran valor?-Senclllamente, porque no los fabrlcan

en nuestro dlstrito ni en ntngain otro deestas mcneanas. iLos.,hacen con gran hab!-lldad, de una clase de madel'a que no 5epuede reequebrEl!Jar. Mientras mas ·aiiost!enen, mas pul!dos esta.n ;y mas valor s~les a·trlbuye. Se les conser,va, como usredhabra. obsel'vado, en b{)lsas de Uno, paraa'l-ea fuerz,a d'e rorarse' con la tela seahrHlante mas la madera.J:.os t!betanos bebleron el teo pues, en sus

propios c;uencos, IYcuando terminaTon, fue-ron s. lavarlos en Is. coclna. ,Aunque a mi

me par,ecian igll'alllS todos los cuencos,ellos los oonocfan perfectamente.Los guar-daron con gran carlfio en sus bolsas antesde saear las pipasry 'Ill tabaco.Lahablta-ci6n empez6 Ii . llenal'~ de un humo espe-so y el clrcaslano esta'ba ocupadfsimo ha-clendo de interprete entre nosotros Y lostlbetanos. Sin duda aJguna, nuestro anft-trion era Ill,persona mas eminente de aque-na comunIdad, una especle de "alcalde",como :habfa dicho Zaro. Lo .admlraban mu-cho POl' su conocimlento de ldlomas y persaber tanto 'de Jo tlue ocurria en aquelmundo exterior al valle, que nlnguno delos veclnos canoela. Be notaba que al 'hom-bre Ie enorgullecfa BU im!Xlrtan1;e papel,pero 10 representaba con dlgnidad 'Y mo-destia.ICotI el calor de la estancia. los parasitos

empezaron a rebulllr en nuestl'a ropa. Meplcaba Ihorrlblemente todo el cuerpo... ytambien la conclenc!a. Observe que mis

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:ti.ores.Hay asua ltrnpia y ccrriente de dill. venldos, pues aquetla segunda montana saho a despedirnos con 'repettdas reve-y de neche. nos pare ceria, POl' una ilusion de optlca, renelas.lFu1mos'hasta el arroyo. A pesar del cor- mucho mas cerca de 10 que realmente se :Despuesde una nora de marcha, apro-

tante frio de Ia manana nos desnudamos hallaba. Nuestro amigo creiaque por 10 ximadamente, M:arohinkovas se detuvoel torso, metimos Ill.cabeza en el agua y menos tardarlarnos dos semanas en llegar para examinar sUSmocaslnes y ,vi6que elnos frotamos energlcamente. Estuvimos a ella. ISintiendo!omucho-s-nos dijo--, no suelo l'OCOSO les <ha,bfaabierto un agujerotentados de la;var las "fufaikas" y los cha- podia darnos mas Indicaclones pasada esa en una de las suelas, Nos senjamos todoslecos, pero desisttmos de ella al pensar que montana, pues no recordaba bien los deta- en et suelo ,y nos dedicamos a reparar else nos Iba a hacer muy tarde rnlentras Iles y no querfa tdesorfentarnos con vagas moeasin roto. Pero todos nuestros mocasl-esperabamos a que '00 nos secasen esas reterencias, De todos modes, podia asegu- nes se hallaban en muy mal estado y al-prendas, Nos sentiamos ieli{}esdespues de rarnos que slgutendo en aquella direcci6n sunas de las reparaciones, suponian hacer-haber dormldo meier que nunca desde Ilegarlamos a encontrar un camino por los .nuevos, '

t - nuestra fuga 'y de riabernos lavado a gusto. donde se iba a Lhasa, Mejor dieho, quese Las perfeetas indicaciones del circasla-

• Nos reiamos mucho con las bromas de bifUl'caba en cterto punto ~endo a Lhasa no nos condujeron, €fectivamente, a laZaro durante el camino de regreso, A nues- hacia el 'Este, 'Y,,al Suroeste, a los pueblos montana en forma de azuearrllo. Cruzarlatro sequlto de chiqutllos les bacia aun mas situados 801pie de las estrfbaciones del Hi- me habrfa sldo relativamente facil de nogracia el jocoso Zaro. malaya. haberseme vuelto aabrlr mi 'vi,ejanerrda,

) INos dieron mas carne, mas tortltas 'Y .Alli 10 dejamos, rodeado de los nlfios de encima del tobHlo.Le nice un vendajemas teoEra 'Ya horade irnos. que nos habian seguido hasta aUi. ,Cuando rudimentario, utilizando la parte de arriba---<euando vuelvan ustedes pOl' esta re- nos volvlmcs.nos hizo un 'gesto mw poco de mi mochila, pero la frJ.eridame seguia

'glon-nos dijo nuestro amlgo-c-,no olviden mong61ico:Agit6 el ibrazo para despedlr- doliendo y se m e , habia inttamado.este casa, Siempre sera un hogar para nos. Asi 10 recordarnos, diciendoncs adios Pam un turlsta 0 un explorador bienustedes. con el brazo desde una altura. pertreehado, aquel paisaje lbabria presen-. ,EI norteamertcano correspondlo a tan Marchinkovas expreso una opinion que tado toda su inmensa belleza: cordillera.amables palabras con estas otras: todos teniamos: tras ..cordillera ,parecian hacer' saltado de-Muohas gracias, Ha sido usred esplen- --!Esta g'enteme' 'hace sentlrme mUYBu- lilcorteza de Ia tierra en alguna rormt-

didamente amable y generoso con nosotros. milde.. 'Es admirable todo JO<lue- h.a.ceil. daole convulsion sismica. Para nosotros,Yo dUe: paraiborrar el reeuerdo devotras g-ell tes en cambro. no era mas que un terrene 'qUe---!POl' favor,transmita usted a su espo- que Ie 'han perdido el resP'eto'a la numa- nos presentaba continuas dificultades 'Y que

sa nuestro agradecrmiento POl' todo 10que nidad. detenia nuestra rapida marcha hacla laha necho POl' nosotros.·· Pasamos unoscuantos dfaspl'eocupa.cios Iiberacion final. Solo podiamos juzgar al'Y el amo de la casa me replica: con las. tropas chinas, 'pero nlde cercani palsaje con nuestros martlrlzados pies y

-'No puedo hacer 10que usted me pide. de Iejosvimos a till solosoldado, Nos dtsci- el Tibet· estaba siendo de una refinadaMi mujer no comprenderia ese agradeci- plinamos para no tocar hastael tercer dia crueldad con ellos. Algunas neches en quemiento, Pero pensare en algo que pueda "105 pastelesqu€ Ilevabamos (teniamos tres pcdrfa haber dormido profundamerite Jun-deckle ;y que Ie agrade, cada uno). y luego alargarnos esta raci6n to a la hoguera, me ternan despterto losEn efecto, le ·dljo algo que a la muder de un modo muy severo. Thamos por un pies. destrozados en una subida POl' un

le produlo una gran satisfacci6n. Be le sendero claramente senalado y nada difi- terreno rocoso, Latian, me dolian y pro"puso radiante la cara.· Entonces; esta en- cultoso. oontabamos conabundantes ar- testaban POl'el estuerzo inhumano que setr6 en la otra parte de la habitaci6n y vol- bustos-i-parecidos a los juniperos siberia- les exigfa. Y tambien empecea resentlrmevia a sallr a1 poco tiempo con una. ban- nos=-para eneender hogueras par' Ia no- de la herrda que me nabta. causado undeja de maderallena de ·pastelHlosde ave- ehe, Slempre disfrutabamos, gracias a fragrnento de granada alemana que ni si-na; se los entreg6 a su esposo y le habl6. ellos. de una 'buena temperatura. AI final quiera sentfcuando se me incrust6 en la-Qulel'e que se los lleven ustedes para del cuarto dia acampamos al pie del mon- carne,

elviaje-...;Ilos dijo el. te con cresta en forma. de corona, y al dia Al otro lado de Ill..montafia en forma deLos cogimos muyagradeeidos y nos los siguiente.al amanecer, iniciamos' su esca- azucarillo seextendfa un terreno que no

repartimos, guardandooada eual los su- lada. Est:!. fue larga, pero no dificil. Tar- :presentaba dificultades pam nosotroS. Ayos en su moohlla. damos dos dfas en franquear la montana. 10Iejos, como un enorme espejo reflejando1Iabfa ademas otro regaio: una hermosa Hacia 'Yauna semana de nuestra ultima los rayos del sol, ,vimosun lago d'e unos

madeja de lana· que habia de servirnos comida propiamente tal cuando nos en- cuatro kilometros y medio de circun'fer,en-

para hacernos unos cali-entes mitones con contramos aun rebano y vimos las dos cia. Nos dimos prisa en llegar a i iI , estl-que proteg,er nuestras manos del frio de casas de los tibetanos que eran sus duenos. mulados POl'e1 d,eseo,de 'banarnos y re-~as montanas. Hac[a calor, sobre todo en contraste con frescarnos. Me quite los mocasines lYmet!.Nos ·acompan6 thasta ;fuera. del pueblo las 'heladas temperaturas de las cumbres los pies en el agua. El agua estaba muy

y nos indic6 el mejor camlno. POl'prim-era montanosas. ,Abundaban por a·lliunas ma- fria 'Y , cosa extrana, a la ,vez parecfa que-vez en nuestro viaje recibimos detaUadas tas par'ecidas a rosales silvestres con ale- marme los pies.Zal'o, forman do una copaIllstrucciones }:)arRorlentarnos bien. gres capullos amarillos, rajos y blanco'S. con sus manos, se ,llevae l agua 'a 105la--1Algunas de las sendas que les he di- -La casa a que nos 1l€:v6aquel pastor ,bios. ,p~co despues laoescupfa con a5Oo.

cho-.afiadi6 el clrcasiano--, son dificiles tibetano era del mismo estilo que'la de Era agua salada, :perocon mUcha mas salde !hallar. Para encontrarlas, no miren us- nuestro amigo el circasiano, a.unque mas .queel agua del mar. ,Entonces comprendi1iedesa los pies, slno a 10 lejos. Entonces pequei'ia 'Y no tan bien equipada. Desde que POl'eso me escocian los pies ,tantf-se ven con toda claridad.· Iuego, l o a . cortesia !V1a J10spitalidad eran de simo. Proseguimos Ia marcha. en busca deNos describi6 con gran precision los hi- Ia misma elevada condici6n. La familia 5'8 aJg:11nmanant!.al;pero al cabo .deunas ho-

tos que J1abfan de seI"Virnoscomo puntos compania de un hombre ry su mujer, ambos ras, Be me iniflam6 tanto el toblUo qU,!!de referencia. en nuestra ruta. iEI ,l)rimero entre los trelnta y los cuarenta anos, una 'hube de pararme para examinarl0. Be meseria una montana cuya cresta tenia for- mujer mas joy,en,como de veintlcinco eEtaba !nfectando la herld,a iY tew no pO-ma de corona. ry que esta~aa unos cuatro afios-Que debia de ser Ia hermana de Ia del' andar rya mas_ .<lias de camino. Par'a llegar alIi tomarfa- espoSB.-, y cuatro nliios, cuyas edades .Antes de anochecer l1egamos a un riomos una senda que nos conducirIa a un Ihande los cinco a los dieciseis anos. A de rapida. corriente, curyocauoe era muy

punto intermedio entre l<Jsdos plcos de 1a nuestra. 'llegada nosdleron leche ry luego. peciregaso.AlIi bebimos y nos lavamos. E1"corona' '' que daban al Norte. IDesdeaque- dos fuertes comidas, a . !base de carne de agua nos puso"carne de .gallina, pero. al~la altura !habfamos de husear otra. a. la cahr:a. Nos hicieron comprender .qlle de- secarnos 1a piel a1 sol nos quedamos bas-.

~~~,~id~!t~¥!~¢£All~;r~J_;~~r!~ ~I : ' :~ :~ l~ : '~~O~a~:~!~::li~Ia~~e~=~:.c", i :~~<l:~~~~~l~~~~~~n~:,~~c:~~~~IP~l!c IU

C~:: ~_O:~~~~~~~~\e~~s~~;~~,~;:;~~:;, ,j~ : ~~·~':~.s~~~l~,~a~,ja,j, :(1~el:~~~~~~. / ,:e~:~~t ~ · , : c ~; ~ ~ ~ : ; ~~ ' ~ ~ , ~ ; ~ ~ : ~~~;~!y~~rE>~'q ~ : ~ ~~~ L · ; ~ , . : ~ ' ; "' ~~ ' ; ;.~,ir)~~::~~~,:~_~~;l~';~;·.Jg~i(1lR~,f~~~,~~::',~~~c.~'.~'~

'c., 'n"". ,

(Continuacion.)

Il

II

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(Continuacion.)

como IJhasa no nos acoglese con tantacordlalidadvcomo los pastores y aldeanos'alslado'3..Nos harfan presuntas molestas 'Y

"nos pedirian, naturalments, 111,dccumen-tacion, '

Marchlnkovas no 1nslstJ'en sa Idea. Dijoque 10 habla propuesto unicamenta parasondearnos y que le satisfacia nuestra de-clsi6n. iNo ha:bia sMa una propuests, de-

rr.otista. Mar,ehiDlkovas se hallaba. tan con-v~ncldo como todcs nosotros de la victo-ria tIna'l ; Y es que no podlamos permltlr-nos el lUjo de pensar en' un poslb1e ira-caso: esto 'habria. equ!vaIido 'a quedarss

par el camino.!Fue POl' entonces cu~ndo les encontra-mos aplicacl6n a los ,alambres que trafmosdasde el oasis. Hallarnos bloqueado el ca-mino que subiapor un monte. Un despren-dtmtento d~Tooa'S·10habra taponado. Paraveneer este obstaculo, tenfamos que haceralpinismo de gran clase. Tejlmos una lar-gil, cuerda, Zaro,. pox ser el que pesabamenos, escalo pr·~merola paned rocosa, des-pues dee que Kolemenos lanzo III, euerda

Transcurrian las semanas, novlembre hechaun lazo, Y aL~abodeUll.a ..docena d~lIustltuy6 a. octubre, los. dfas eran cada vez Inte~tes la suleto a . . t 1 D saliente de roca.mas frios y POI' las neches nos helabamos, .cla;valldo los ganehosa,rriba, fu1mos esca-AI cruzar extensos terrttortos tan arldos lando.la.par,ed uno a .. uno.que ni las oveias nl las cabras hubleran En Iaptra veli;lentehallalll>()S)ln camblopodrdo hallar sustento en ellos, nos esta.-comple.todel paisaje.Rabiamtlcdl0'5 pue-

,barnos cuatro y cinco dias sin probar bo- 'bleeltos.esparcldos,todos ellos deelemen~cado, Habla amaneceres-en que me des- tal al'qttltectura. <Nosreci,bieron.sus nab!-

:pertaba tan desanimado, tan {alto de ener- tantes conla ;hesp!talJdad a queestabamosgias. 'lUe :.hubiero. prefezldo abandonarlo 'IIcostumbrados Y nose. dlstlngu!eron d,e

, todo Y quedarme a:lli tend1do. Eran ma- nuestros anterioresamlgils POl ' nada quefianas nebllnosas, 111gubres, que Invitaban pueda ,permf.tlrme recordarlos. Perc mea ladesesperacl6n. Todos nosorros tenia- acuerdo rnuv bien de uno de .les lugaresmos nuestroa dtas malos por turno. cuan- 'que -vrsrtamos a causa de un encuentrodo comiamcs, gracias a alg(m encuentro muy notable que tuvtmos en el.feliz 0 a hBiber dad(} con una aldea, eran /No eran ma'sqUesels casitas apliiadas.comidas masivas qu.e nos doeJab.an ahitos, Ni siquiera ,las Ihabrfamos vist1l de no hll-pero si£mpre taltaban en ellas los vege- ber pasado muy cerca. !Nos condujo a latales. de maners. que segufamos padecJ'en- aldehuela un jeven tlbetano qu,e par.ec16do de escorbuto. De todos m1ldos, nos con- Impresionars,e muaho de aue hablasemossideni.lJamos afortunados de <Iue nlnguno una lengua desconoclda. Con una urgen-de nosotrossu'frlera a1guna enfoermedad .Cia sorprendente, como 51 se tratase da unlrremedia,ble que Ie hubiese obligado a In- asunto de ,vida 0mu'erte. nos· Uev6 anteterrumplr el Vl.aje. Cruzabamos a nado un grupo d£ hombres 'que 'se hallabanarIos turbulentos cuando nos veiamos obll- 1a entrada de una de las casas. Uno d,£!gados a ello. Escal6..bamos cumbr.esque eUos l1am6 en &egulqa nuesera atenclonparecian formidables 'Y que luego no oive- per ser muC/ho ma.s alto 'qUe t odos los tibe-

cian grandes diftculta.des en IS U ascension.tanos qu,s habfamos vista hasta entonces.En cambio. em'PI'endfamos a·nimosos la su- Nos llevamos Una· gran sorpresa: aquel·bida de pequefios montes que luego resul- 'hombre 'era un europeo. ,e'e l1ruzaron losta,ban Henos de obsta:culos casl invenClbles. saludos y re,v,erencias de s~empre ,entr,e losMarClh1nkovas plante6 una noche la con- "aldeanos y nosotros. En cambio, el europeo

venlencia de torcera la dereoha hacia el nos salud6 solo con una lev'e Inclln'<l.c16nHlmalaya. Creia. que debiamos dirigirnos de ca.J;eza. Nos examin6 ,en sl1enclo conhacia lJhasa 0 a alguna oj;r9, cludad donde banta atenci6n que empece .a intrallXlu1l1-pudieramos 'Vim ,una temporada IY repa- zarIllIe.

ner fU€l'ZB.Sara emprender la ultima eta- Pare cia tener unos setenta afro'S y su ea-p s. de nuestro Vl.aje.Encontr6 alg(m apo- bello canosoconservabll aUn indlclos deyo, aunqu,e no ,entuslas.ta. en P'aluohowlez. haber 'sldo paJlzo en su juventud. Era,Los demas no querfamos perder Uempo. com<l dije. muy alto· y ligeramenj;e encot-POl' m! parte, teInfa_ ,que esa soluc16n in- vado.:A pesar _de-su -edad. daba ],a -impre~tennedia quebrantar.a nuestro lmpulso. Los sl6n de ser muyfuerte. En seguida se no-meses que llevabamos caminando nos ha- ,tabs. que !l'quel hombre habia -vivIdo a1blan creado una energie. migratoria com- -alre llbre muohos afios; tenia. la piel depulsiva. _un -habito -de est'Sr siempre -a"van- la.s."lDJanosy e1 rostro lntensamente too-.zando y no qu,eria. cortarlo antes de ha.- ta,da"por el· sol. E ra de expres16n!nte--

<llamos en Ia segurldad total de la- India. lIgente .. Su. ropa, d.e estilo tibetano, que-!Mister SmJtJh obJet6, con su habitual dab!!. medio cubierta por un chaquet6n de

sentIdo practico, que 10 mas probable era piel que Ie Uegs:ba a las radiUas Y sujetoA~0~Ielt!'1n~Wiclal die ' ~1_g;wn .C1~ _29par un clntur6n estrecl10 de cuere. No pudeCC'E:~,,·i9bo:. ;c; r..'l,p-.r,u~; J~"E:: ' . s. le , " '8". J: :l_d , , :~ ;F:S iJ ';~:::::; ..i pl:t,ni_biC13 :li~~t!.u: :c;-: : : : .; : : ·;-; .r::o,-,t£':fllrj,.'!,: 'Ji! t-:S,_d '~"_';.t', :'On c~;i:lq"':'f;! ;; ::,,_,'jal:'..d2ieJ,

'a colocar en el tobiIlo. As! 10 hlee, espe-rando que mej erase ml herida.iNos 'ha.biamos desviado mas de tres ki-

Iometros de nuestra ruta para llegar a esterio. N os pare cia que esce .flufa de ~~orte aSur dtrectamente. Durante varies dias se-t gulmos au- curse ~ nos resultaba mucho, mas .fa~ll cammar por su orilla y evttar. ,asl las alturas. Pero Il<egoun memento ent. que el rio torero ihacia el Oeste y tuvhnos)Jc',que abandonarlo paI-a no apartarnos denuestra ruta ,Sur. rEI tobUlo me molestabamucho msnos s tenia meior 111,piel.Otra veaestabamos hambrientos y cada

vez que veiamos un ¥a;lle nos desviabamosPOl' 51 'hallabamos gente 'Y rebanos, Mar-ehinkovas S8 d16 un golps .contra 111,rtstade una roca e iba cojeando, Teniamos que, encontrar algUn sltio ,donde comer y des-cansar un dfa entero.

xx

CINCO P,ASAMiOS CERCA DE LHASA

• vel' el color de sus cios porque me 10 Im-pedia el sol, que se i'ef.leja,ba en sus len-tes, con montura de acero, Verunos len-tes en sequel sUlo eonstltuia una extraor-d1naria. novedad para nosotros, Los tfbeta-nos nos rodeacan y nos mlraban con ex-'cltacl6n al europeo 'y.a nosotros, Consid,ereque ya era hora de que a<Jguien rompleseel hielo, de manera >Queme dirigi a el enruse. Aquellas palabras aumentaron i!l ten-so iziteres de los tipetanos.

IEl ihombr.e alto movie la cabeze y res-pond16 en aleman. .M!ircihlIl'kovas, Zaro Y

Ko1smimos, estaban tan versados en ale-

man como yo 10 estaba en el ruso, Lesencant6 encontrar POI' fin una oeasion deser tUlles como Interpretes. P'aluehowlcz yY 'O sabfamos 10bastante de ese idioma parasegulr 111,onversacton, perc 'Yono sabia siel norteamerlcano :podria.

:Me sorprendto la gran reserva d'el eu-ropeo. Hab16 con las menos palaoras po-sible. lRespondIa. crtspado a nuestras pre-suntas y noafia:dia ni Un a sola frase es-pontaneamsnte. ;Nos dijo <Iue era unml-slonero ..no-condormlsta que habia. l1egadoaaquellas Menas con otros europeos de lamlsma secta. Habia vtalado per Cihina ,y. ,.el Tibet durante cerca de clneuenta MOS.

Creo que era aleman 0 austriaco.S1n ventr iI. cuento empez6 a' hablar en

frances. Zaro ·hablaba este Idioma perlee-taments y le sigul6 111,enversacton hasta

qu.~ otra y.ez habla en aleman. Los tlbeta-nos escuchaban rascmados el fluir de ex-,tl'afios sonldos. Tuve la impresl6n de queno le eramos simpaticos a nuestro inter-loeutcr. Seguramente, esto sedebia a nues-tra apariencla-la cabellera revuelta, laropa d,..,stroza<!a, nuestra acsoluta pobre-za-aspecto ,que :podria perjudica.r su pres-tlglo c()mo occidental, En ef1!cto, pa,recmque all! 10, veperaban (loma a. un ser su-perior.Zaro, que llevaba el peso de .Ia conver&a-

ci6n, se di6 cuenta muy, pronto de quenuestra Uegada no era del agradodeI altoy mlsterioso anciano. iE l temperamento deZaro no .era el moo a prop6sf.to para tole-rar ,esta actitud sin darle 1 1 1 , r,espuesta ade-cU'ada'. Asi, con unac6mlca Indloterencla,dijo que eramos "un grupo de turistas cos-

mopoI!tas", ,y eludl6 1 9 0 respuesta cuando elmisionero pregunt6 'CIu'e de d6nde ve-niamos.["ueg,o'di'jo que ibamos a Lhasa en pere-

grina.c16n. ,Eviclentemente, el europeo nose trag6 este. mentira. NI siqulera hizo POl'

l l.parentar que 10 c1'&. Be habla creadoun ambiente de desconflanza ,mutua queresultaba Ylll irrespirab1e.1En cambio, lostlbetanos '1 0 est'll!ban' .Pasando admirabloe-mente. Para elIos, a.qu.eUa conversaci6n de12 0 que no entendian urut ,pa;labra, cons-,t!tuia un espectaculo lll1ico;r--UIl'otraen, U'sted,es na:da.. le6mo viven I'

-lpregunt6 el misionero.lZaro :contest6 en seguicia:'-De Ia . hospttBllidad de las gen,tes. y.o.

nabm usted podi'do comprobar que la ,gen-te de estas tierras ea rilUY hOBpita'laria.o....-lPeroes imposible .que pu:edan ustedes

-comer toelos los df.aa de ess. manera.-iDesde luegCl---'dijoZarO'-, ha!Y dills en

p"bLcc y .,,,c "(continul.t1t4jp,,,'ccSl IlIt:::;i !_"l':r·;:-,::-·d.,.c:::i6n y./ ,")

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'·:i

(Continuacicin.)

que tenemos que apretarnos eI cinturon, de noviemcre llegamos a una especie. de Hice todas estas pruebas por segunda vez,pero estamos acostumbrados a ello. Los mar interior. Desde Ill. altura en que nos I negandome a creer 10que 'Yaera evldente.peregrinos han de sersobrtos. ,hallatamos tratamos de ealcular la exten- El cuerpo conserwaba. aun alguna tfbteza,'Intel'vino Marchinkovas para preguntar- sion de aquel enorrne Iago, Como no po- -iMarchinkovas ha muerto=-anuncte con

Ie ;a1europeo que donde vivia. Este sefialo diamos estar seguros de que el horizonte voz tan tranquila .que me sorprendi6 a rnia una mula que pacta POl' alli cerca. que 10 cerraba ,fuese Ill. otra ortlla, s&10 mtsmo, POl' eso, repeti=-c Marchinkovas ha' -IEsa es mt mula. Donde quiera que se pudimos atrfbuirle de cuarenta a sesenta muerto.detenga, ahi estara mi casa. kil6metros de anchura. En cuanto a la Uno de nosotros, no recuerdo quien, eX6'Entramos en el pobladoa las diez de Il l. longitud. no habia. manera de celcularla, clamor ' .

manana, poco mas 0 menos, El misionero pues arnbas orillas se perdian a ambos """'iPeros f,no puede serf iNo le ,ocurrfa.se sent6 junto a nosotros mientras comia- lados del horizcnte. Nos bafiamos en sus nada malot Haceunas horas ~able con elmos. Nos dieronarroz. ,Me pregunte de frescas aguas y pasarnos la neche ceres de y estaba normal No se quej6 de nada.donde 10 habrfan sacado. Aunque el eu- Ia ortlla, con mucho 'frio, pues Ill. hoguera -iEsta muerto-Insisti. .

ropeo hab16 tin poco, nos sentiamos rnuy . que encendimos no bastaba para suprlmir Mister Smith se arrodtllo junto al cuer-fastidiados. E! 'hombre estaba intrigadisi- 1&humedad proeedente del lago. po, S610 estuvo observandolo un par de, mo con nosotros 'Y no sabia c omo nacernos . Lusgo sigui6 un pertodo de Iacil avance. minutes y Iuego 'I e cruzo los brazos sobrehablar, A Ias tres de I l l. tarde anunci6 que La ortlla del lago nos sirvi6 de gufa du- el vpecho, se levant6 i dilo ;tenia que mareharse. Salimos con el y le rante muchos kilometres. Un par de dias - -'Si, caballeros, Slav ttene razon.a.oompafiamos en la ronda que hizo POl' despues estabamos otra V€Z en terrene. Palnohowfcz se quit6 el gorro de plel Y setodas las casas. Luego ensill6 su mula y montaiioso. Nos detuvirnos en unaa1deapersign6.nos mir6 mientras cogia las rieridas y tlra- para comer, 'Y al negarnos a pasar alli Ia :ZaC'harius Marohinkovas. de velntiochoba de ellas:-Les deseo a ustedes buena suerte adon- neche, nosdleron provisiones para e1vi-a- 0 v.eintinueveafios de edad, que habria

je. Marcha'bamos mejor y con excelente podido ser un maantnco arquitecto en sudequiera que va;yan-nos dljo en aleman. 'moral. Sa me habia cerrado de nuevo Ia Lituania natal st los rusos no se 10 hu-iLe dimes las gracias. Ni siquiera nos

estrecho Ill.mano.Se desordio de 105tibe- herida y me-pude quitarla venda. bieran Ilevado, habfa abandonado la lu-tanos y se alejo a pie, conduciendo la mula Tres 0 cuatro-dias despues de habernos cha:y no pOr SU .voluntad. iNo podiamostras ·el. aIejado del lago,.acampamos en un valle comprenderlo, no 'podfamos entender c6mo

lEI ttbetuno en cuya casa, hablamos co- pedregoso con un poco de vegetacion que habta podido apoderarse de ella muerte.mido le contemplo hasta .que se perdtode pugnana porcreeer. entre, las piedras. Ha- Quiza estuvlera mas agotado de 10 quevista. Despues nos hizo senas, elevo sues_blallevido y el suelo estabamuv >bUrnedo. nesotros creiarnos. ,Nose. Ninguno de nos-tatura poniendose de puntillas, hizo flexio- Noscost6 muchotrabajo encenderun fue- otros 10sabfa. E1s11encioso :Marchinkovas.

nes de brazos. resptro hondo para hinchar go. Mortunada::mente, encontramos ','una que de vez en cuando tenia, un agudo ras-el neoho y se toco los rmisculos. Luego se- cuevavant comimos 10 que nos quedaba go de ingenio. 'Marchinkovas,que vlviafla16 nacta donde ha'bia desaparecido el de lastortitasdeha'rinaque nos habian encerrado en sus pensamtentos y con unamisionero . .Era evrdenteuue deseaba ha- dado en €I ultimo poblado. La brisa noc- carga de amargura, al que Kristina se es-cernos comprender quaaquel riombre na- turna vo lvda el hU-ID{) contra nosotros, pero forzaba par animal' y hacerle reir ... , ya nobia sido un arleta. ,De pronto, lamente que no nos molestaba, porque nos daba mas estaba con nosotros,le hubieramos dedado rnarchar sin procu- calor. Pasamos la neche en Ia cueva api- En aquel terrene rocoso no podfamos en-rar por todos los rnedlos atraernosto. 1: '0- fiados, Apenas podU. diferenciarse aquella terral' a nuestro compafiero. Tu'Vimos quedill. habernos sido muy uttl dandonos to- neche de tantas otras que hablamos pa- meterlo en un espacio libre entre dos 1'0-das las lndicaclones que necesttabamos sado en nuestro interminable viaje. Nada cas y cubrirlo icon piedras. Kolemenos Iepara nuestro viaje, Despues de todo. era hacfa que nos slrviera de avrso de que ib3. hi2lOuna pequena cruz. Nos despedimos denatural 'que' en principio nos miras€ con a ser una tragica noche. e1 con nuestras oraciones, aa'da uno en sudesconfianza. Dormimos lnt'ranquilos, excepto Kole- idi{)ma. En silencio, encomendamos sulEI inevitable racimo de chiqulllos nos menos, como slempre, De vez en cuando alma aDios. Y reanudamos 18.marcha Ire-

rodeo mientra,s Il.comp.a.nabamosa nuestro se despertaba a,lguno de nosotros, 'grunen- vandonos Ill."fu.fai'Jra"yel chaleco de mar-,anf!trlon a su casa. Un chico de ocho aiios do, y 'atizaba el fuego. Cuando empezaba ta cebellina de ,Marchlnkovas;' PensamosIe tiraba a Zaro de los pantalon1)s y nues- a clarear, Zaro Belevant6- y 5e alej6. Yo que podian sernos utiles.tro compaii.>eroe ~bahaciendo mu~cas. Los estaba. incorporado. aPQ'Yandome en un Dias despues divisamos el rleslumbranteninos---,por' 10 menos habi!J, una dccena- codo,y Ie vi regr.esar. l'eftejo del sol sabre los tejados de una

se reiandivertidisimos'.'EntoncesZaro 1}izo -Hay nlel;rlay Ihac:efrio-me dijo-. Es ciudad muy distante y situada en una ele-algunos de sus 'D:Iim>erosomicos, ganando- pre,f,eribleque 'eObemosa andar. vaci6n. Nos agradaba pensar que por 10I ' I i e deflnltlvamente a la chiquelleria, Fuedespertando a los otros. Palucho- menos, habfamos v.lsto,de lejos la ciudad~ora. Eugene, el baile' cosaeo-<1epro- wlcz estaba junto a mf; Marchinkovas, en- santa de Lhasa. Pero es mllY pOsible que

puse. tre Smith Y' Kolemenos. ,Me lev ante des- 5610se tratase de uno de los grandes mo-Y, zaro: brincando a un rlt:mo endemo- 'per,e~9ndomey me frote mis d{)]oridaspier- naste,rios del Tibet. ,De todos modos. en

niado, bai16 la danza cosaca. Tanto los nas. Kolemenos, para animarme, me em- aquella direcci6n tenia que estar Lhasa. yninos como los ma<yores10 contemplaban pu,iaba con movimientos de elefante. 1a idea de thaberla ·visto despues de usaradmirados y divertidos. Esta representa- Ormos que Zaro grita'ba: su nombre como un talisman desde quecion fue como una burla, POl' contraste, -'iVamos, Zaoharius, levantate! salimos de Siberi'S.nos atrafa mucho.con laosotemne-actltud' del misionero. Y (Estabainclinado sabre Marchinkov.as Y ,A fines de dlciembre llegamos al mayor'creo que Zaro se daba cuenta de -ello. Ie saeudia suavemerte por los hombros. pueblo tibetano que tuvlmos ocasi6n dePor fin llegamos a una encrueijada que .Note e1panico que habia en la voz de Za- visitar. Por 10menos se componia de cua-

supusimos era 'laque nos habfa anunciado ro al gritar de nuevo: renta casas, dispuestas con una regulari.el circa siano, con un ramal hacia Lhasa y -,-jLeviimtate, levantatel dad ins6lita a cada lado de 1a calle fullca,otro hacia los pueblos del Sur-Oeste, ha- ,Zaronos miro.'a'larma,do, y dijo: que era e1 mlsmo camino principal. Teniacia, la India. Pocas horas despu€s vimos,' -iCreo que Ieoeurre algo. No puedo des- ,ademas un ediftcio mucho mayor que' los-muy lejos,una cara;vana de unos cinnuen- pertario. otros 'Y que en ,Ocnidente hahria sido elta hombres que conducfan anlmales. Iban IMe arrodille junto a Marchinkovas. Es- A<yuntamiento.A este edmcio nos condujo

en la direcci6n que suponiamos ser la detaba 'en una posici6n de completo relaia- uno de los habitantes del pueblo. Obser-Lhasa. Este fue eI' unieo grupo numeroso 'miento, con un brazo cruzado sabre la cara. vamos en segulda 10 bien protegido con-

• de viajeros que vimo::;.por aquella l"eg16n. Tenia los ojos cerrados y no se Ie notaba tra eI <frioque iba estehombre. TamblenABC sEvr:rJllfo.(1.!;I;l!J.iltuipnAAIiUJi l~~ ~l;:ilji~ y la respiraci6n. Le tome e1pulso, Ie ap1ique nos llam6 laatenc!6n la ausencia de chi-

,::;;,~',',}'3~~~~;I;;O:~~~!l',~sZ~~:';i'fr,~,nre~,S~~~;,!(;'tt~~f;,elelOldtr>al"p€ohl),'e:i1eVa'Dte:'los':Par_f)a:dcs."'qulUosc;,;EIstose debiai;a,que IdeniaIl<,mie- j, '"

-r":',, rL~(Wl '~ ne,~. ' . ',o;~srl:;;:~,., !·e'::~s, d s jl'= PTl';;'':O<', (>~,n f i ~~.~;:~G~:~J":~.:~'~~~,/:,:,~.~':~:~;:~~)~'"~,~;;.~~;~:.:::\-.~;:.~:.;,l. ::.c.l ~:!'~;II:{~:';~~~~r:~:::~~U;~'~;.~;-:~:'JQr:os.~~·~~;r~~~~.~~:~:i~:~~;:,lCont l .1tu.~.f~ : ~ i : ' :, . . ; ( . ,"~", ,_. ': .' . ·· . :01··" &III

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p

cconunuacum.s

,heClI10se \:iaje sin Ilevar animales 'Y acun-dantss provisiones.---07, ~adonde 'Van ustedes ahora ?~pre-

gunto.,--Queremos- Uega·ra, 1a India-,dijo

Zaro.Y.a era inutil ·hablar de una peregrina-

cion a Lhasa, ciudad uue habiamos ·d·ejado

a un lado,

.El tibetano duefio de la casa Interrum-pio cortesmente para rogar que 1e tradu-Jesan aquallo. La palaibra India. habfa des-pertado EU mteres ..m maestro se 1 0 diJoy ambos se quedaron .preccupados.-Deben .ustedes cambial' de ruta-c-nos

aconselo-c-. E1 tf.empo se pondra muy re-vuelto y les sera austedes muydi:ficil, castImpcslble, pasar POI' entre las montafias.La mejor que pueden ustedes hacer es Ira Lhasa y unlrse a1lfa una cara vana. Esposlble que tengan ustedes que esperar mu-cho tiempo, pero merece la pena..'Zaro 1eagradeci6. el consedo y Ie dijoque 10 seguirfamos, perosabfamos que Iba-mos a contlnuae nuestra ruta y que nunca

entrariamos en Lha,$A'('I.e/rogamosal maestro .queleagrad.e-

ciese'altlbetanoenlluestro no.in:bresucp--11liday~u alliabll1da(i para con llOSOtl'O$.

Comullicado este Jl1;e1'l5aj~,elaD1o tl,elacasa .;hab16 asuvez<yeI ma-estrotradujo:---'DiCe que esti'l1lu.y contento.)" de~a

que los pies les searr.a ustedesprorncio. 'Yque no encuentren desgracias enel camino,Dice quetesta nochesequedaran ustedesen su casa y .que manana les dara provi-stones para e1 .vlaje.ISeguiroos aUi oharlando con ei maestro

basta que se hizo cornpletarnente de no-che. POl'medic deZaro nice una pregunta

que fha·biatenido en Ia punta de los Iablosdesde que entramos en Is . casa: que eraaquel 0101'acre, tan peculiar, que 10 mva-

dia todo.

Ia persona .qu·epocas mementos des-habia. de sallr de Ia casa grande anrnos. Era un asiatica rnuy delgado,'Jos escrutadores. que nos estuvo ob-ando un rato, s·e inclind unte nosotrosego volvi6 a entrar.

)COS Instantes despues, toda Ia chrqul-

a . del pueblo Uego corrterido por+ la! para .mirarnos a su gusto. La casa.de era la escuela ''I aquel hombre quehabia recibtdo era probablemente el

stro.

itoy seguro de que no era tibetano.lno? No. 'podia ar.t'irmarlo.Be nos acer-n tres 0 euatro tibetanos a la vez que

11 individuo 'vo1fViaa sahr y .empazoiarlar con ellos. ,Era evidente que -ela princlpalde Ia conversa cidn era

•tra incapaeidad para entender su Idio-El' personaje, !qu,eparecia tener entretreinta 'Y los cuarenta afios (con losttcos, las edades no pueden calcularse

aproxlmacion) , nos hablo en dos idio-, que supongo serfan el tibetano y .el.0, pronunciando con tcda clartdad situd. Dij:e unas cuantas palabras eny Zal'o hablo en aleman. Era inuti).

;£ estuvimosun rata. Los tibetanosmira ban intranqullos, lEI maestro 'Vol-a . .hablar, iIldn mas despacio. Esta vez

el frances.Zaro. Intervino muycon-o, ,Empezo a hablar can gran rapldez.naestro, sonriendo; levanto un brazedijoqu,e nablase mas despacio. Porse entendleron perrectamente y estu-m charlando varies minutes. Los ti-ncssonrelan-ccntenttstmos.rtonees el maestro Ie dUo a Zaro:

Vayan ustedes can el .hombre que los) nesta rot EI les. llevara a su casa yatendera cumplidamente. Volveremosunirnos y charlarernos mucho.

legose volvi6 :hacia €I tibetano ,y Ie6 -brevemente. ·Nos lIevaron a Ja casa)s dieron unb1. len te tnientras prepa- E1 maestrosonrl6 y. sefia16 il suelo den la eomida. AI cabo. de un rata lleg6 pie-dra, que parecia estar recil§n ptntadotaestro. Entl'O sin llamaI'. En el Tibet, de rojo. EI 0101' procedia. del suelo. La10·vi s ta . ; nadie Uama a Ia puerta para pintura empleada, argullo de los tlb~ta-'

ar en casa; ajen-a.. 'Nos salud6 a todos nos, se !hacia con un polvH1orojo lI1ezcla-, l'edonda. Sent6se entre no.sotros 'Y do con orines' ·-de aniroales. .ldo estuvo lists la com1da. cornia co.n >Tambien Ie pregunt6Zaro si sabia latros. Sae6 una nsvajade muel1e ata- fecha a .que estabamos. Result6 que era..su cinturon de cuero. Al notal' mi el 23 de di-ciembre de l'9~L·es. :me Ia ensefi6. IEra de una sola !Dormimos profundamente en las pieles, con' mango de hueso y la inscrlpci6n extendidas .wbre el· rajo :suelo de' piedra.1acero decia,,que habia sido fabricada A la mafiana siguiente nos dieron las pro-Uemania. No me dijo donde la habfa visiones que nos habian 'prometido y nostirido. Zaro trat6 de enrerarse d6nde despldieron ·con 1&ama'billdad acostum-abia educacto.y, sabre todD, d6nde ha- brada.aprendido el !frances que sabia, perc Pasamos la Noohebuena en tome a UITaombre eludi6 Ie. respuesta con gran gran hoguera. La noche estaba terrlble-lidad. 'Aquel ind1,v1duome interesaba mente tria 'Y ninguno de n<lsotros quisoh.D,pues estaba segura de que no ba- dormirse. Hablamos de las LNa.vidadesquerivido todo el tiempo en el Tibet. Lue- cada una lhabia ·pasado.mejor y ·tambienle :pensado que q u 1 z a . viviera algu.n de Ia que peor habiamos :pasado ,todos:po en la Jndochina ·francesa. ia del ailo anterior, camino del Campo 303.,

n nuestra habitual cautela. no Ie di- enc.ad:enades ry Uevados como bestias sal..nil motivo de nuestro -viaje, perc Zaro va·jes POI' 1a inmensidad helada.5zo su curi{)s1daden: cuanto ,a nues- iPalu:chDwicz,eat6lico polaco muy devo-mtrada. en el Tibet.Le· impresiono to., nos sorprendio entonando unos viUan-nemente enterarse de ,que ihabfamos . cicos con suo/Vozbronca. Solo canto: dos,d o a pie el deSierto del Gobi. Nos versos, pues 801ver que no leacompafia,-QU<~'110 sabia de nadie' que hubiera bamos, se oa116.ILLA (Sevilla) ..- 21/08/19'57, Fagina 29

DI.ARI.C} AEC S.L/ Hadrid, 2or!? (t.leda 1,:-, rep1_'oducci6n, c1istribuci6n,

e.s't;:... "leb. eon c:u;,~lr:rujer form;:.; (1 s:in n:reH_ir:~, e - ; . . : r Y 1 : e . s i : " ~ v e:;:~crjt;.~

Al cabo de un rata dHo:,.......Todos los anos, desde -que recuerdo,

he cantado vtllanciccs en Nochebuena. Poreso he cantado esta nocne. Se que nostraera suerte, .

Ah·ora eran tambien muy frfos los dias;'Y las neches, clare esta, mueho mas. Lasnubes, eargadas de nleve, se cerrnarrame-nazadoras sobre Iosaltislmos uicos del Hi-malaya, en la lejania, 'Y bajaban hasta lasfaldasde las montanas, productendo fan-tasttcos efectos. Pasamos una neche enuna aldea de casitas de piedra, Y a,' la

mafiana islgulente nos hiciroos unos mito-.nes con la gran madeja que nos nabiaregalado el circasiano,

Lleg6 un dia muy desperado en que vi-mos con toda claridadvlas -enorrnes cum-bres, cubiertas de nieve y envueltas en .nubas, del Himalaya. Parecian estar muycerca, pero esto era una Huston deOptlca.En efecto. nos ;ha.1hi.bamosa una formida-ble distancia y habtamos de encontrarsrandes obstaculoa por el camino.Tratabamos des-esperad'amentecLe que

ll.()\nQ~. eogiese 1a noch€ en las altura-s.nero no rnrbo rnanera de evitarlo, una no-che en que nos sorpreridlo una tormentade nieve. Hubiera vsido una Iocura seguircammando a' traves 'de ella. ,La nlave gel-peaba nuestros rostros y no. podiamo.s vel'mas .que a un par de 'metros ante nosotros,

Nos arrastrabamos en busca de un refugioy la nievecse agolpaba en nuestros moca-'sin:es.Ibamos descendtendo por una pen-dierite muy aeentuada 'Y las reshalosas sue- -Ias nos amenazaban a cada momento conun desastre.

iL!l Providencia nos prcporciono un re-fugio. entre dos grandes rocas, como unaespecie de cueva. Llevabarnos un saco delena y algunos excrementos secos de ani-males 'que nos servirfan de yesca, de modoque pudirnos encender una noguera, PerrieEtuviroo5a punto de renunciar a ello.por-que· el viento nos 10 apagaba una y otravez. Al cabo de una !hora teniamo.s unbuen fuego., gra·clas a mi tozudez y a lit

de Zaro. IExtendimos nuestaas mochilas en

la estreC'haab,ertura de laentrada, entreJas dos rocas. Las suj,etamoscon piedras 'Y

pronto esta'ban (hinchadas con Ia nleveque les caia per fuera. Entonce's pusimoslos bastones entrecruzados, ·formando as!un pequeno tinglado protecto.r.A pesar de tantas 'precauciones, amane-

cimos Henos de nieve en nuestro refugiO,pero la -verdades !que'Jia:samosbien la no-che, Lo peor· de Ia tor.mentahabfa pasa-do, y <mando reemprendim 0.5 la mar.chas610 ea:ian unes- eopos pequ,efios. Aunqueel descenso.era pel1groso. 10 hicimos bas-tante bien. Tardam{Js tode e1dia en bajarde la cumhre donde habfamos pernoctado.

EN a : J A l S EST.RJ1B:AC[Ol'TES DEl,iEiE.\1;AIJA Y iA .

Calculo que fue a",fines de enero euandollegamos llBlquei gran rio Que estaba he-ladode orma a orHla, Debia, ser el formi-dable rio t1betano que COITe de Oeste a

,c·o;,,,mic,,c:.Jn p(ibl:c.e y ',ltiliz'C:oo~inUttl'4J;,"l'ciol, .j

e .n l ".' i.' ir ti _c :.J .l; :, r, .~ ~u ;"e_T[~ reFr;:Y'l')c.~ci,6n '1/:.",1 e'Je.c,'t;::. ;, ': dj;;, 'e;:"-,,,, '

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'Conti IllIacian.)

Est-e por el sur del pals para convertirse,enol'me cordillera nos esperaba, coronada ayuno nos 'divirt16 vel' que eJ duefio de laoal pasar a la.'lndia a traves de laoIngente de nubes. Para ser tibetanas, estas casas casa iba regtstrando met6dicamente nues-barrera montanosa, en eJ pcderoso Brah- eran muy espeoiales. Fooron las unieas de tras mochllas. Zal'O dtlc: "Creo que estamaputra, POI'lanoehe, la temperatura es- dos plantas quevimos desde que salimos asezurandose de que no nos Ilevamos Ill.t·aba slempre muy POl' debajo de eero, De de Slbelia. plata." Y el ti,lJ.etano,aunque no pudo ha-vez en cuando caian grandes nevadus, la Estabamos cansadisimos y con un ham- bel' entendrdo estas palabras, se ri6 a Ill.nuvra se convertta en celllsca y el viento bre terri·ble. Paluohowlcz cojeaba del pi" vez que nosctros Y continue imperturbablebuiaoa rurloso 'Y gel1do de las crestas de derecho, pues se habla lasttmado la planta su Ngistro. S e qued6 asombrado al ver quelas montafras. Pero, a pesar de serun tiem-al tropezar can una piedra aftlada. solo Ilevabamos unos cuantos pedazos depo tan espantoso, no Ilegaba, ni con mu- .cuando los ttbetanos sntendieron POl' pleles y excrementos 5eCOSde animates,\cha, al jnvlerno slbarfann. AUDQue.en las nuestros g.estos 'Y slgnos de donde venia- nuestra yesca. Terminada su rnveattgactcn.condiciones en que noa fianatmmos. des- mos y adonde nramos, se quedaron· asorn- nos miro compasivo, sefial6 a las mocht--nutrtdos y deblUtados en extreme POl'nue- brados doenuestra audaola 0 locura y 10 las y lueso al alimento que estabamos co-kve meses de continua maroha, B e nos ha- manlfestaron a. su man-era. Nos Ilevaron mlendo. .

rcia aun mas Insoportabte este tiernpo que amablemente ,a una de las casas, nos hr- Mister Smith dljo: "Esta preocupadoel padecldo en Siberia. cieron sentar en unosbancos bales, CllYO ,parque viajamos sin provislones,"-Cruzamos el rio con extraordinarlo cui- brtllo decia bien claro los muchos afios Nuestro buen anfitri6n paso a una ha-

dado, Zaro, et que pesaba menos de nos- de uso que ternan; nos dieron te caliente bitacion pequefia que habia al fondo y Ieotros. Ibn delante para "proba r lEIreslstsn- y lusgo una comtda a base de cordero y olmos hablar alJi con unas muieres. Luegocia del htelo hacla el centro delcauee don- las nabituales tortas de avena.: A Palu- cruzo ante nosotros, seguldo POl' un mu-de temiamos uue pudiera abrIrse a nuestro chowiez Ie pusieron grasa-qulza de ove- cha'liho de unos quince afios, Salleron depaso. SIn embargo, ·no encontrarnos dlft- ja_n su pie lnflamado y le dieron rna- Ill.casa y estuvleron ausentea durante me-cultad algunahasta Ileaa.r a Ill. otra oritla, saje en el con gran pericla. De todas las dla hera aproximadamente. Cuando regre-en la que teniamos que subir nor un talud casas llagaron hombres y nlfios para con- saron, trafan un corderito recien-rnatadomuv emplnado yalta, cublerto de nieve. tTlTIplarnos.Todos •.n0ssonrelall yconstan- y despellefado, J..as mujeres de la easa seKolemenosbal16 en el hielo unos peldanos telTl~.nte teniamos ••que hacert.reverencias pasnron vartas thoras troceando y asandocon su nacha y subimcs par e1105.Segui- pal"R.c()rrespondera4ls de ellos.. NatUra). la carne.Entr~ tanto, el hombre fUe exa-mos a 10 largo de la orftla en dlreccion mente,nuestra jJegada era run acontecl- mlnandonos los pies a todos nosotros con_Oeste idurante unos dos kilometres :basta mlento extraordlnarto y pasarla II seruno gran atencl6n. ISubloaJ piso de arriba, yque llegamos a un punto en: que el terrene de los .Inagotabjes 'temaadeiconversacion. trajo uncs vellones de lana. Utilizando unose haela trnas llano junto 301rio. Alli en- ,F.;:tl aquena casavencontramosxnn exee- de los mocaslnes de Palucoowlcz, nos en-contramos tres chozas de piedra y, frente lente ejemplo .ce ..u n a costumbre. que •..\" a sefi6 como se podfan ,farrar para afslarlos

a ellas, en una pJiylta en pendiente, bas- habfamos.observadnen el Tibet: una Iosa contra el frio. 'Nos dlstribll'y6 la lana. Eratante apartados del agua-pues en toda en Hi que aparecian grabadasyarias Ilneas. una Idea ·estupenda que Ie· asradectmosaquella parte estaba el rio deshelado-c-. Esta habiasidocolocada cerea de la puer- mueho.habfa media docena de botes con las qui- ta principal y se elevaba sobre €I sueio Cuando sallrnos de la aldahuela, ibamoslias haclaarrtba. Como quiera que tenian casi un metro. El clrcaslano nos habia di- cargados de viveres. Hasta entonces--enmuy altas -Iap roa y 111popa, quedaba sitlo cho que estas Ianldas solo nodian gl'abar- las ultimas etapas de nuestro vlaje-ha-POl' en rnedlo para que pasara un hombre. las ciertos lamas y que los tlbetanos las blames nietido todas las provislcnes en unaMeti Ill.eaoeza POl' alli y note un fuert€ apreciaban mucho, pues las palabras Ins- sola rncchlla que llevabamos POl' turno.olor a peseadopodrido. oritas en ell as eran como un amuleto Dara Pero esta vez decldimos d1stribulr la carneEntl'amos en las ohozas. Eran tanbajas que los malos espfrltus se ale.lasen de la y las 'tortltas en partes iguales, de ma-

que Kolem€nos ·tuvo que arquearse para caSR.Nuestro anfitrion. muy alto para sel' nera que 'si a alguno de nosotros Ie .ocurrfano tropezar· con el techo deesterlllas su- Ubeta·no. y que parecia tener unos treinta a·lgo-pues cada 'vez estahamos mas ex-jetas COIl bambl1. Las cafias esta'ban ama- afios, se alegr6 mucho de que yo me in- puestos a desaparecer en las. pellgrosas es-rradas con pelos de animales. probable- teresase porIa inscrioci6n. Sefial6 ~;acia calada_se cyitarla que Ia valiosisima car-mente de yaks. EI ·8ue10,completamente ella y lu~go a su mufieca i.-;qu}erda,en Ill. gil. se perdl:era con su porta dol'.::;eco, era prueba de que el techo no ae Que llevaba un ancmo brazalete de laton. EI tibetano nos acompafi6 casl un k1l6-caiaba. La construcci6n de esto~ re.fuglos del que colgaba una cajita de m€tal. Com- 'metro POl"la estrecha ::;endaque subfa delno podia. ser mb elemental: tres bloques prendi que se tratabade una. variante del v!l.!lle.LJ.egado a una altura, nos· sefia.16de piedra y unas esteras tendldas POl'arri- rolla de la,s plegarlas y me pareci6 evl- Inslst'ent-emeltte Ihacia e1 Sur-Oeste y nOl,

ba. No habia puerta, •.sJno una stmple aber- dente que el1hombr€ trataba de ·indicarme fue Indlcando. a cada· uno 'de nosotrofi POl"tura. Dentro hallamos· unas redes vlejas. que exlstia una relaci6n religiosa entre la- separado. los picos gC:lloelosque ::;eveianunos trozos de bambu y unos cuanto5 cl- piedra y a,quel curiosa ob.ieto. a gran dlstancla para que entendle3emosllndl'Os de madera. de gran dJametro, muy Eran expertos tejcdores. En la habita- que pOl' alli era <londe deblamos cruzar., nbrlllantados POl' el uso. Indudahlemente. cion principal del pl50 bajo. habfa una Be de&pidla de nosotro5 y ::;emareh6 porlos empleaban para hacer radar sobre ellos rueea y un pequefio telar. Producfan un donde habla venldo.los botes y alejarlos asl del agua 0 llevar- tejido grueso de lana de excelente caUdad. -IQue Dics te acomps.l5.el....Jredijo conlos hasta ella. Vi algnnas de las mantas hechis POI'ellos fel'Vor Paluchowicz. en palaco.Eleglmos ]a mejor de la·s chozas para 11 cobertores de aJegres colores. en viv,as ICom'snzaba la tarde y en 10 Que nos

pasar en ella la noche. En el auelo de tie- combinac'\ones de rojo y amarlllo. Los re- queda·ba del dla recorrlmos seguramenterra habfa un circulo ennegrecJdo con' unos banos que les proporclonaban la· lana se mas de quince kllometros POl"un terreno·cuantos tl7,oncsapagados. y encima. en e1 halJaban en aquella epoca invernal bien bastante c6modo. A'Quellanoohe. en tornotecho, un pequefio boquete que hacia de protegidos en apl'iscos reforzados con mu- a 'una hoguera, charJamos durante vadaschlmenea .. Encendimos alli un fuego con ros de pieru:a. contra el vlento. horas tratando de fijar lluestra situaci6nlas canas de bambu que encontramos. 'La familia dormfa en el plso de arriba. Y ·la distancia q'ue aun tenfamos que an-En febrel"(}llcgamo5, al ultimo poblado, a1 cual se subia POl'una empinada esca- dar. ;Quando la conversaci6n decay6. 'nos

unas sels U ooho casas escondidas en una 1~J'ad,epiedra sin barandilla. Tambien em- enyolv16 Ia extl'gordlnaria calma y el ma-hondonada a un05 dosclentos metros 50- pleaban el pisa alto para almacenar la jestuoso sllenc10 de ias montafias. Senti

br!l un estrec'ho valle. Detras de Ill. a lde- lana. Allf. en medio de la calida lana y con cOlnpas!611pormi

mismo y POl'tOdOBnos-nuela se elevaba la cadena de montaflas un agradable olor a oveja, pasamos aque- otros. Y lucl:ntba contra un miedo desespe-que hal:lIamos cruzado dW'ante los dias an- lla nOClhedel modo mas confortahle, mlen- rado a qU€ precis-amente ahora. Quando te-terlore!!. Y al otro lado.-envuelta en la luz tras el viento rugfa y azotabala casa. . nlamos ya a nuestl'a~ espaldas tantos ml-

~~l l1~1- !~Ai! !e~, l9~,bH ~tl¥:!~tl.YreroP'tji.gGj\?a29. i9uando tomAb_amos el esplendldo des- les d e .ki16metro~que hablnn representado

~ ~ ~ ; C ~ ! ~ : C : ~~ : "' ; ~ ~ : ~ : , , ; : : ' ~ \ i ; : ; ~ i ; : ; : " ~ ~_ , ' " ' ~ ~ ' : : ~ ~; i ; ~ t : ~ t ' , i ~ ~ : : ; ~ : ~ F : : " · ' "" , 'J . . o ," ( U '. " . , ' : " " " " . " ; . ~ i ' ~ " " ! C ' l i ~ " : ~ £ ' ~ ' ~ ; ' E ~ m : ' " '~~:'co ':;~~;~.'~;:~~~~#ti~~t;;!i,""~_l.JU._;, •.. ,,,, ." -- "'".".'-_.1.. ..""_' .... 1,:: "f.-<:O-~. ':" :.ndi::c,~.,;::'.3-:-;.el::t'..: lUCl";lt::i. ...'.'~ :; ""__ . _ :~!-""",: ;:,. :;:,':"v'\d:c,l

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(Continuaci6n.)

p€na'lidades mcesantes, no fU!!semosCElP9.-eel! 'de reslsttr MM. Esos estados depre-sivos de animo me . .solfan entrar mucnasneches, Y estoy sesuro de Que a mis com-pafieros les sueedia 10 rnismo, aunque,

como yo, nuncs 10 confesaban. Al amane-

cer, nos reanlmabamos slempre. EI miedoSeguLaagazapado en nuestro espfrttu, peroeI movimlento y la urgente necesldad de"\reneer eada obstaculo que se presentaba,no le aejaban salir a la superdcle. Expe-rimenta:bamosS!Un mas que antes el Irre-,prlmlble Impulso de movernos, de avansarvsm cesar. Se ihabfa eorrvertldo en una ob-seaton, en una especle de mania. Como

automatas, nos levantabamos cada mafia-na,cuando cuatquiera de nosotros decia"vamos". Ninguno solicitaba nunca que le.dejaran idescansar un rato mas. SenclUa-mente, nos ponf.amos de pie 'Y andabamoscomo sonambulos basta que la marcna nosqultaba vpoco a. poco la rigldez adqutrrda:por el cuerpo en las horas de inmovihdad,

Raclonamos los vfveres severamente ynos duraron, haclendo una sola comidadlarla, hasta .qulnce dlas. Altmento que,naturalmente, no bastaba, ni m:ucho me-nos, para sostener las energfas que nece-sttabamos en el continuo escalar y descen-der las pendtentes montafiosas, Pero, por10menos, sablamos 'que no nos morlriamosde hambre mlentras durase, A veces, nossorprendl.a la noche en alguns cumbrey

teniamos que recurrtr a Ias Iecclones denuestra expertenela slberrana, Nos cons-trutamos un refugio de nleve y nos api-:M.bamos en el, sin dormtr, basta el alba.

~prendimos mucho a1plnismo en aque-lIas seman as. Antes de la guerra nablaescalade yo montanas, perc aquello se pa-recfa muy poco 'a estes formldables eder-clcios que nos velamos obUgados a haceren el Hlmala\Va. Entoncesdlsponia yo demagnlllcas ·botas claveteadas y de todo elequipo clvUlzado de montafiismo. y, por slfuera poco, iba slempre con un expertogula. Adema.·s.10 haalamos en verano, comodeporte. Aquf.en cambio, tenlamos quel!Ubir y S1l!bird'urante muchas ·lhoras conlas mochilas a Ia esps.lda ps.ra encontrar-nos al flnal. cuan.do ya estabamos agota-dos, conaJguna roca sallente que nos 00-

rraha el camlno. Despues de descansar lospIes por el sencillo procedimlento ·de col-garnos unos momentos del saliente, te-nia.mos que retrooeder y buscar otro IUgardesde donde ]a ascens16n-una nueva as-.censi6n de muchas -horas-resultase masafortunada. Ya se comprendera que enta1es condiciones avanzli.bamos can una.lentltud desesperante.Nuestro equ!po sereducfa a una fuerte cuerda demasladocorta, el 'haoha-lo mas 11tHque posela-mo&-,eI cuohlllo de ancha hoja y losganehos 0 picas que nos hablamos cons-truido con el cable eneontrado en el oasisdel Gobi.Zaro, POl'sel' el de menos peso. !ba slem-

predelante, probando con el hacha lospuntos de apoyo. ·Abrfa escalones enIa

costra helada doela nleve y nos preparabe.asf eJ camino de Ill.escalade.. Yo Ie segulay a veces camblaba con el su puesto degula para Que descansara un poco. Luego

iban Kolem~nos,. mister Smith y Palucho-wicz, POl' ese orden, Procurabamos !acl-lttar'les las cosas, en 10 posible, a los dosde mas edad, pero slernpre inslstfan enserlos primeros en los descensos, Toda.yia lIevabamos nuestrcs fleles bastones 0 garro-tes, que nos servian, en las pendientes me-nos pronuncladas, para scndear la mevepar sl esta ocultaba hondonadas, otrasveces nos los pornamos cruzados a la es-palda, sujetos POl' los cinturones.

eia.ro era un perfecto montanero. Habia-mos ideado per fin un proeedimJento paraveneer el obstaculo que representaban lossallentes rocosos.Era una piedra negra:muy pesada, que tenia forma de 8 rI a 'laque atamos nuestra cuerda por el centro.La arrojabamos una y otra vez. haste que,par fin, sin que pudlesemos verla desdeabajo, se enganohaba en cualquter parte.Kolemenos se ca.lgaba entoncesde la euer-da :Ilasta que esta aguantabs todo su peso.

LUego Zaro trepaba por ella! herotcamente,mientras 10 ccntemplabamos ansusnadcs,pues al rnenor deseuldo podIa matarse. Envarlas ocastones se me subl6 el est6magoa la garganta-euando v11uego c6mo esta-ba enganchad'ala piedra. Parecia Increibleque no hubreracedldo con nuestro peso.

'Los dias deintensa .Iumincsidad nostraian un nuevomartlriocon el reflejo delanleve. Ademas, conoclmospor entcncesunnuevo .fastldioque se afiadia a 10'smu

enos, graves yleves, que yapadeciamos:el frio que nos torturaba la .frente hastaparecer que latenfa:mos apretada can ven-das de hlelo. 'Para veneer esta nueva afllc-416n nos h1cimos unas caretas de piel deoveja con unas rajas para los olos. La par-te superior la sujetabamos con nuestrosgorros y la deabajo colgaba a la alturade la nariz. Las caretas nos qultaron elfriO' de la frente 'Y a la vez suavizaban elresplandor de la nieve, pero result6 quedebajo de ellas se ,fonnaba una humedad'cuyas gotitas se iOOnacumuJando en ternaa la nariz y a la boca, ·helandoseaUi. De

vez en' cuando tenla:mos que detenernospara de5lheIar aquella citra careta que seformaba en Is. parte Inferior del rostro.Para ella apretaha contra ·la cara' mls ml-.tones de lana; Casi siempre llevabamos cu-blertas Jas manos, pero cuando teniamo5que escalar. nos los qultabamos y los de-Sabamos colgar sujetos a las.mUi'l.·ecas.Conlas caretas ata·daspor detras de Ia cabeza.y las or-ej.eras de ,nuestros gorros rUBos

nos .era mw' dlffc!l oimos unosa otros .C&da vez estabamos mas lrr!tados. Nossentlamos -mortalmente cansados y slempre hambrientos. Yo tenia los nervlos ten-sos como cuerdas de piano. Y, para colmo,hacia demaslado frio 'Para conclllar elsuetio.A principlos de marro nos encontramos

de pronto en una depresi6n prOtfnda, cu-bIerta de nieve, entre las montafias. :anciabuen sol y era medioci-la. de modo Cluenosqultamos las caretas :y los gorros. Nos sen-tamos a descansar, rodeados· de un sile:riclo

sobrecogedor. Hacia dos d.!as que no pro-JJabamos bocadoy nos encontrabamos mAsbajos de forma' que nunca. No teniamosg,an1l.Sde hlliblar ni una pa~abra. Entonces

of un ruldo ,y .aguoe el oido para identlfi.carlo. En ese momenta dlfo Pa.luchowlcz:-:He oldo ladrar un perro.-lYo tamblen he ofdoalga-.dlje.Paluchowlcz ati!ld16, excttado:-Ra venldo de' esa dlrecclon. Tenemos

que ir hacla alla Inmediatamente para ver10 que ha.y.

Avanzamos medlo ,kllometro, con el oldoalerta, euando volvimos a oir el ladrldc,

estaua tan cerea 'Y sonaba ,tan fuerte Quenos detuvlmos todos. Pero· par mas quemlrabamos, nada veiamos. ESperabamoBdescubrir alsuna easa 0 refugio de 'pastor.pero estuvlmos un buen rate sin ver nada

oarectdo. POl' fin dlvisamos la negra boca.de una cueva que contrastaba con 'la blan-cura de Ia meve, 8e ihalla'ba a unos ctenmetros y cuando nos acercabamos sallo dela eueva un hombre que mir6 en nuestradtreeclon. Le IhAb16al perro, alque sahabia un1do otro, y lOgro hacerlo callar.

'Ere. un viejo de blanca 'bal'blta y rostroarrugado, muy bronceado por 'el sol y elaire, Caa·ndo nos sonrto, observamos quele !altaban varlos dientes. Estaba bien proteglcto contra. el frio por Ia habitual zama-rra tlbetana de 'pi{;lde oveja sobre Ie. acol-oha.da.cnaqueta 'Y los panta lones grlleS<!s.Llevaba buenas botas de cuero, Se alegrbde-vernos tanto como nosotros de enccn-trarlo a el, Sanrefa ccntinuamente, se in-cllnaba ante nosotroa, hablaba y movta la.

cabeza con entuslasmo, Nosotros nos rela-mos, hactarnos reverenclas y sentiamos ga-nas-de bailar 'alrededor del vlejo. rneiusolos perros sintleron el in!!ujo de esta a.legr1&y salteban en torno a nosotros, ex-cltados,!Fuera de I l l . cueva habra un peQuefiD

muro, como de metro y medlo de alto,oocho con piedras amontO'nadas, qu,e ser-'Via de protecc!6n contra el vlento. El vie-jo nos hizo entrar en la cueva 'Y antes deque nuestros ojos se ,hubleran aeostumbra-do a1 cambio de luz, nos neg6un 'PGgajosoolor a ovejas..La peque1l.ez de Ie. entrada no me per-

mitlo sospechar la amplltuddel interior,Forma.lia unrecodo y su ·plnno, si quisie-rames dibujarlo, pareeeria un boomerang.E1 hombre vivia. con sus perros ~n el e8

pacio que habra desde I l l . ~!ntrada ;basta.una pared levantada con pequefia-s ·pie-dras, Clueservia de partlcl6n. iEn lapartede !J , tras estaban las ovejas. Calculo ClUIehabr!a un centenar de ella·s.. Aquello erae1cuartel de !nvlerno de un pastor queesperaba la llegada de la prlmaV'era y eldeshl€lo para que su reba!\o pudlera pas-

o tar en Ia. hlerba reclente de'! valle. De unosolavos pendlan cuatro 0 cInco paquebes debenD en tosoos redes. -Una plla de redescomo aquellas, 3 o ' a vaclas, demostra'ba queel rebafio estaba encerrado desde baciamuchas $l!manas.

El vl~o tenia eneendida 1a lumbre en·una prlmitiva cocinlUa. de piedra, y sobr$ella hab!a.des calderos, uno gI"a.:ndeY otrope:quefio. Observe que en el' ealdero grands

se derretia nleve para proporclonar agua.1I.las ovejas. El otro, el pequefio, venia a ser.la 011'11.e 'lIS0 generalpar·a. el pastor. Eneuanta entram06, se puso a .preparar el te o

(ContlnuuT4J

' ' ' ' ' ...

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lConti7Iuacion.)

POI primera .vez, tanto en el Tibet como

en Mongolia, vi hacer te con noras secassueltas. El viejo Ias -saco de una cajs demadera pulimentada.El color del te eraverde aceltuna. Esta debio de ser una dis-tmcion muy especial, pues siernpre nos

f orrecieron .te negro.• ;El hombre se saco del cintur6n una ria-

1Vaja de rnuelle y laabri6. Se arrodHl6 y

con toda calma la estuvo afilando en .una.piedra, Los perros salta ban a su alrededor''fnientras el trabajaba. Sabian que prontolhabria carne fresea. Probo el filo de Ia

navaja en la serna de su dedo pulgar, nos

htzo una stmpatlca mueca Y se dirigi6, se-guide de sus perros, a buscar la victima,Sali6 de la cueva arrastrando una oveiaque seresistia pataleando. En poqulsrmo

trempo volvlo con el animal ya despelle-

Jado. An'oj6a Iosperros la cabeza y otrosdespojos, Luego troceo la carne. para asar •

la. Mientras la carne rechinaba al fuego.el pastor aproveohaba los chorretones deg rasa, que dejaba caer sobre las botas,trotindolas Iuego para suavizar e1 cueroII consenvarlo rnejor. 'Con una harlna rnuvbasta y un poco de agua del fondo del cal-dero, prepare unas tortas ccciendolas sa-bre la piedra Ilana que estaba a un Iadodel fuego y .quehacf·a iunciones de horno.comtmos con f.eroz apetito, y ya se supon-dra que no nos coste esfuerzo alzuno ma-

nifestar nuestro agradecimlento y satis-

taccl6n por Ia comica mediante los sonoroseructos 'que exige la cortesia oriental.Cuando el viejo se disponaa a levantar

el pesado caldera para .sacarto de Ia cueva,KoIemenos 'y YO se 10 qultamos de las rna-nos y 10 Ilevamos fuera. Todos avudamosen la tarea de llenarlo de nieve. Thamosa transportarlo de nuevo a Ia eueva cuando eI pastor nos ,hizo seiialdeque 10 de-jasemos en e1 suelo. Con sorprendente agi-lidad se meti6 de 'un saIto en el caldero '!1

empezoa bailotear en el para apisonarIa nie·ve. Cuando termino y salt6 fuera.Jevantamos otra vez elcaldero. Pero antesse habla metido dentro Zaro imit-ando alviejo en su manera de prensar la nieve.Asi 10 lleva-mos ·hasta la cueva, rtJ.ientrasel pastor nos segufa muy d~vertido. La nie-ve. hecha una masa compacta. fue !un-

didil, al fuego. Despues. e1 pastor alimEntolal rebaiio 'II Ie dio agua.

La temperatura de 1a cueva resultabamuy agradable, gracias, mas queal fuegoque quedaba. al calor animal de las ovejas.Dorm! profundamen~,aunque un par deveces durante la noche medesperto e1 iA fines de marzo de .1942 llegamos a laintenso 0101'del rehafio, pero en seguida convicclon de 'que POl' fin nos hallabamos'Volvi a dormirme, sintiendome seguro y muy cerca del puerto doesalvaci6n quesin frio. Nuestro "hombre de las cavernas" serfa para nosotros Ia India. Frente a'lle le'Vant6 antes :que nosotros, y cuando' nosotros teniamos las montafias mas for-nos despertamos del todo, ya :habia prepa- midables que habiamos visto en nuestrarado unas gaC'has muy espesas, .que estaba ·vida.·Nos dijimos que bastaTia un es,fuer-removiendo lentamenre. Al marcharnos, zo final 'para entrar en el pais donde en-

b 1 b contrarfamos definitivamente Ia Jibertad.nos 0 sequ 6 con una uena pa:rte de 1a la c'ivilizaci6n, el reposo 'y la tranquilidadoveja que haMa matado el dia anterior. espiritual. La ,verdad es que todos nece-Ya. fuera de la cueva, nos pregunt6 por sitabamos el mayor estimulo poslble. Por

sefias hacia donde nos d!ri·gi.amos•Mira- mi' parte, he de confesar que temia que

mos a1 sol y se.iiaJamos hacia -e1Sur. En un ultimo eSfuerzo acabase conmigo. A1:)ue-·ton<!esel pastor cogi6elbraw extendido Uas montafias me aterraba'n. Me pareciade Zaro y 10"desvio unos. euantos gra.dol Que una ascension ma~ podia signiil.car

Be SEVILLA (Sevilla) - 24/08/1957. Pigina 29r·1'.::d;_:i cj, :[_~..;; C!,. : ' . : ;d:~

nuestra denota cuarido ya estanamos tancerca de la meta. Precisamente, esa con-viccion que todos teniamos de que toea-

bamosva. POl' decirlo asi , el triunf 'o deft-

nitivo,' era .1 0 ·queacentuaba mis temores.Bl espectro del ,iracaso adquirta una rna-.yorconsistencia junto a la frontera de IaIndia, despues de los seis m i l trescientos"kilometros recorrldos a pie. Estabamos apunto de derrumbarnos fisicamente y nonos quedaba mas apoyo que aquella amis-

.tad entraiiable entre los que habiamos pa-decide juntos tantos mfortumos. Mioentrassiguierarnos juntos, no hablaque abando-

nar Ia esperanza. ,Ninguno de nosotros, in-dlvldualmente, .habrla tenido rya energiasmorales ni f'isfcas ·para continuar solo,perc juntos ccntabamos con el estimulo y

la esperanza coJectiva.

'Nos sentamos en torno a un fuego en-cendido con la ultima yesca animal quenos quedaba y nos comirnos el resto denuestras provisiones. Sacamos la cuerda,

el 'hacha, eI cuehillo, los ·picos de cabley los examinamos culdadosamente, Pro-camos su resistencia. Nos concedimos unpal' . dehoras, antes de que oscureciese,para reparar los mocasines. :Es deetr, nospreparamos 10 meJor que pudirnos para el

asalto final. Antes de media noche se ha-bia apagado ·Iap.equefia hozuera. Apenasdormimos de .tan inquietos como est aba-mos. Cuando apenas clareaba, nos levari-

tamos. Zaro se enro1l6 la cuerda a la em-tura, cogi6 el haena que Ie dio Ko1emenosyemprendio la rnarcha .el prrmero. A pe-sar de que apenas habia dorrnido, me a11-vi6 mucho ha.llarrne de nuevo caminando.Tuvimos mury buena suerte con el tiem-

po. Aunque :haeia viento Trfo, el sol ca-lentaba 10 suficiente. Ernpreridimos Ia as-cension con mas seguridad y cautela quenunca. Zaro Pl'obaba cada punto de apO'yoPOl' dos vecesantes' de que lO'Sdemas Iesiguieramos. (Noshabria asi el camino, ha-ciendo escalones con el 'hacha. Le .veiamossalir POl' d'!ba:io de Ja careta Ia respiracionhecha vapor.Al principio del tercer dia coronamos

aquella cumore, pero nos enfrentamos conmra €norme montana. 'Era como una pe-~adilla. Una .vez vencida: 'una montana.

aparecia inmediatamente otra, <Jerni.-ndo-nO'se1 camino. iSe nO'spasarondos dias enel descenso.· A mf me a,tacaba los nerviosel esfuerzo- de bajar mucho m:i:s que el desubir. En el valle nO'sconstruimos un re-giode nievepara protegernos contra elviento 'Y logramos dormir aquella noaheunas floras, aunoque con sueno intranqui-1 0. Asf nos 'preparamos para la prueba.sigulente. • _

La otra montana fue la peor de todfl.nu-estra eXpeTiencia monta:fiera. De vallea va-lIenos costo seis dias cruzar1a y esteesfuerzo nos dejo tan desesperados quePOl'primern vez 'hablamos lfrancamente deIll. ·posibilidad fie que pereciesemo& :prontotodos nosotros. Estoy completamente con-'I'encido ·deque una tormenta de nieve queohubiese durado varias ho,(as ·habria aca.-

bade con todos nosotros.:A los dos dias :de a-scensi6n y con 1£1,,cumbre oeult;\ entre nubes- blancas ,que 00

: : ' -·: ' ; ,r,: . .: . .: ; .icaCiCjn P ; t : l i C C i y,;ti~i:.:S~~,~tln.:t¥:;~T~·~J;]r':iCil ,joe; ~,-.1.s

f,'n -<r~"l\l'~-~ "l','" PlJl";:~,,_a ,l ·-'~:-:",c"'.i' ::<:r

f_,~~:l.;:~....: ~.- ~ ; " , U - , \ - ' - " " , ' ; ,-,=-,f" ;:""( ","~",; ~,,, c:;:)~,-"""""~,-,,,:::c::)r,-. " - , " - , " " , , , , : . . . , , , , , , , G ; - , - ~ - : j " - ~ " ' ~ : ~ " ' ~ ~ ' - : ; ; 2 " " ~ ' - :" ' . f : " , : - ; ' = = = ' - - ' : - : _ . " ~ J _ ' _J("j_cn t~ "P l ( ' ~ . S : . . i , a So, I vo d,,::" 'J (co

al Suroeste. Y esa ru e la direccion quetomamos.!Losacontecimientos de los dias siguien-

tes demostraron que elviejo conocta-bienla region. Ibamos en direccion Sur POl' unlargo sendero natural que nos evitaba lasdificiles escaladas. Seguramente, la distan-cia era asi may-or. perc habiamos perdidomucho mas tiemno lanzandonos cara a lasmontaiias.Recuerdo muy bien un Incidente de

aquellos dias.Cuando descendiamos por

'una nevada pendiente, Palucaowicz tro-

pezo vse le desprendio uno de sus moca-

sines. Sali6 rodando POI' la- ernpinadisrmacuesta hasta que se detuvo a una buenadistancia. Paluohowicz cojeada para no pi-sal' la nteve con el pie descalzo, s, rurtoso,Ianzaba maldicionescuarteleras.

,...:..wote desesperes. 'hombre. Yo te 10

cogere-c-le diSo zaro, que -salto disparado

pendlente abado, Le vimos agacharse a re-coger el mocasin antes de haber podldo

frenal' el impulso adqurrido. Entonces se

deio caer sentado en la nieve, AIli misrnose.iterrmnaba da pendiente.i o 10 que nosotros ••veiamos de ella . . Un memento des-.pues,Zaro, resbalalldo comovslTuera venun trineo, d-esa~arecio de nuestra vista.

Conrnas eutdado del quejhabia nevadaZaro, fuf el prtmeroien Tlegarta acuetIu-gar. 'Entonces vi queIa pendiente-se aeen-

tuaba alii iormandocomo una.pistade

patinaje en curva. Alfondo de ella estabaZaro, trcnchandosa de rlsa y sacudiendosela nieve de los pantalones. Paluchowicz ru eel ultimo en reumrse con nosotros al cor-de ·de la "pista". Zaro se ha,Ilaba POl' 10

menos a trescientos metros de nosotros ynos grita.ba:,-ijHaoodcomo yoy dejaos resbalar has-

ta aqui!'.Me sente y me desIice siguiendo la hue-

lla que habia dejaro Zaro en Ill.nieve. Resulto muy divertido. ·El viento me silbabaen los oidos. Termine -junto a Zaro, rien-dome como el,. a carcll.Jadas. Uno trasotro, Kolemenos, mister Smibh Y Palucho-wicz, siguieron nuestro ej'2mplo.EstEi incidente se me haquedado gra-

badO'en la memoria. porque fue la .linicaetapa de nuestro viaje que no hicimos

a pie..XXII

LOS ABOMllN.ABLESHO:MBRES DE LASNJ.EVES

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5/15/2018 La Increible Caminata - slidepdf.com

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.. ..movfaneon TapideZ. hundJ. inieuchillQ -e n dos que nos habr.famos dormido de 'pie, iDlscutlmos el asunto y 't6dos estu'VieronlUna gTieta para' izarme del estreChfs1mo' ~ro sabfamos que, eon salo un rata Que eontormes ,en Que mereci~ la p e n a reco-reboidedonde ',8'P(jyaba, los, pies. Con e1 nos adormilasemos, estabamos' perdidos., ITer aquellos cerros en , b U S C a 4e una eueva.euerpo: -aplastado .contra ls :Pared: de Toea, ! F u 6 'la neche mas larga demi 'Vida. Api- ILo extraordinarlo de esta ,8;'Yelltura 'noiui 'sOltando,- Pot,turno, ,cada pie y. cada ' tiSdOll,. rodeandonos unos a otros con los ,lue que, e!ectl,va'mente, enoontr!i.semos 'I1lls.

mano,de ~era :qu~, sin perder el apO.,. brazos, luChii.bamos contra elsuefi.o, que euevs 11.1abo, de sOlo un par de horas de ',;yo; pudlera il.escansa'r las ·~tremidades del nOBeerraba los-parpados a eada lnstante. ibtisq.ueda, sino :que :fuese Ia euers de un-:t,~ari'otamtentO:a que'las obUgaba et sos- _Erac'omo :51una,pesada,masa preslonara pastor, aunque sin pastor. AIlf encontra--wn!do esfuerzo. LUego empece 'il. intentar' contra los ,oj os. Yo recurri al proeedimlen- .znos u n a : p!la .de lefios y. una buena: can-.la 5ublda agarrandome d.el mango del eu- to de rmantenerme abiertos los ,parpados, tida-d, de pielea de. oveJa escondldas en. , u nChfIlo., !D e pI;iinto, el euchillo', saIto eomo eon los dedos, porlas aberturas de ]a ea-rine6n. 51 hub~ramos n~ltado a-lguna..si estu,vlera YWO, .semeeseapo deja msno reta. Por' tres veees, Kolemenos, el gran sefial de que la IProvidenc1a seguia s. nues-.,. v:016sobre nii. eabeaa eon 1a:, vlbracl6n dorml16n, dej6 eaer labal'blllla sabre', el tro lado, alli hi. (:enjam05, 'musical der9.cer<!~Desconcertado, 'me a«a':: pecha y empezo a.ronear, ry eada : v e z Ie Colgado de un olavo en el techo de l8 .ire ,a laoca ,10 zp.ejor que pude:' HabUi, saeudlmos para.desper,tarlo. Cada uno de eueva habia un saqUito'de piel de eordero.perdldo'el'cuchliIlo.Y'era oomosi,hublese nosotros ,vigilaba',a lOlldemas para. acudirUno de nosotros 10 descolg6 ylo desato;"de,sapareddo'tin amIgo' muyqueri<io.', en cuanto pareciese que el suefioIo hibfa. Contenfa. una p1erna. de cabra, ahumad.aAi tercer, dia,eerca rya'<ie la eumbre.' selVencldo.A intervlllios nos movlamos euan- '.I cast negra., ,Tenjamos ~maslada hambre

nosihizo mas, tacH 1 8 . .ascenston, s. sin 'to nos permttia et reborde. Era como una para..ser exigentes. Decidimos' eneenderembaTgci~.empeeamos. 11, (Iudai' serlamente 'danza ·grotesea, e lncIso d.urante ella me :Iu!D-breY .asarla, F I l e ' una hoguera estu-de .r sf podrlamos'termlnarla. :Ell trio' era senti trarisportado IlIl'mundo de los sue- penda. Las' danzantes llamas Ilumtnabanhorrible y nos envolvfalanlebla. ,LOs " e t e e - nos" pero 'el norteamertcano me despert6 toda la cueva, AI calor, nos .deshelamostos·del ,vertig{) '1 de, las grandes altl-tudes' ttrAndome de Ie.barba, dindome patmadas porprimera vez .en !Varlas semanas, Como-estabari oonslmlleitdo fas escasfsfmas re- y sa.cudlendome. Luego 'lahora , m . a s Inso- quiera que mbla'mosperd!doel euchlllo,.' l !el'Vas:vltales <1uenos quedaban. Cada. paso pqrtable. Is, an,ter1Q(il.l:,a.lba~. en que el ,tuvlmos que arreglii-noslas con el haclln., era una luclia 'espanoosa contra 'el mortal ,(la~sanciio"y el fr.lo"CQmblnados.me hac.!an Dejamosla mltad de 18carne pal'acomer:"ca-nsanc,o que .nos 'dominaba. Loque en ,temblp,r de los..PI es ala cabeza.' aa a la. 'ma1iaila si.gulente. Sl" pobre PaIu-, realidad deseaba.uno en aquellos momen- '. ,_.jVamoS-dlJo.uno de nosotros-.Es chowiez . em nm aluepo en. laboca' Y sin 180,toa'era sentarse a.lloraT de RUTS.<lebilldad' p:rMetible ,.negar ,a:.algtinsltiodondei'po-" l l G " U ' d S . del cuchHlo, .tardo m'llOhotlempo~ del'sentimlento de hil.berfracasado.:Me damos-por 1 0 menosresolrar, ',. • •.• . ,.' '... ' ,en eomerse su raci6n. Perc, en fin, t o ooSparecfa que.mili pulmones lban a :estaUsr 'Y '!Pa.IUChOWiCZo r l t ' e : s 6 : . ' . , ' aogramos qultarncs el ihambre m.ortal que

;V me asflxlaba pOrno,peder re&P1rar.LoS,~OnOPodriaaguantai-()tra noche lleva;bamos. . , : ' ,latidos de m1 ,coraz6ri podlan oirsePerfee- Como 'esti';", ,.', ' : En esta eueva, por primers; :vez desdetam.ente, martlI1eandome contra :el :pecho. EraiomiSni.o quepensa~ostodos, que.sallmoa ''deS iberia; nOSAPl"Qp,iamos deCada!lllo de nosotros,' de haber' -e & ta < ! .Q . ·:A.unno habia. amanecidc del todoeuan- 10 .cue pertenecia aotra persona. Con la15010,se !ha'bda dejado 'morir ~'b habr!a. do ",reimudamos 'la mareha, PaluchowiC2l ' lana. -que el dllsconocl<lo ~u])anw de' Is.conslderado una feUei-dad, pero siempre iba etprtmero y,Zaro el illUmo': ,Incluso cueva- 'tenia escon'dida, 'nos Ihlclmos cadI!.!Veiamosalg1in compafiero que segufaarras- aih<ira.;pensando 'e.Il!' !lqW!1 ~u~rzo, no uno Un a especie' ,d e dh&leco. Creo que lie-tI'fmdose,'y esto nos estimulaba lIrin~a- puedo COIWeneerme .de 'que 'logora.semos nosperdona.rn ten!endo en' cuenta 1a Im-:,tamentea prosegu1r el,horrible esfueizo.:rl:uestro.prop6slto; lJ'a.cla mediodia tuvimosPeriosa. neoestdad qUe nos mavfa a ello.'POl' ,sl n-o Jlub!~semos,padecido bastante, que j,ararno8 u n a . :hora, por~l'ue' 18 senda Pasamos la n O c h e muy, bien. en 'una at-

D hubO un l'eilna,mtento fIna.l deladesven-de 'nuestro descenso se lnterrumPfa abTup- mOs!era cal<iea:da porel fuego y' PO'l"las~tura: hos SangrabS, Is. n1iri.?J.Trate: de cor", ,tamente· sobre 'un espantoso ablsrilo. Re- pieles <leOl'eja, con l a s ,:qu,e,:hiclmos,' untat' mt ''hemorragia ,taponAndome la ·narIz 'trocedlmos por' donde, habiamos ' venido gran ..lechoeom'lhi. ", ... " , ' . 'con peda.zos. de ~ ,de Saoo, pero resur- hasta eIicontrar otro sltfo desde, donde Cuando'nos despertl1mos, ya lhab.ia. ama-ta;ba mucho peortener que respirat POI' intentl,!.r' nuevamente ,el,deseeI).SO.Esta:vez necldo ihacfa dos horas, ~e}. !'Ilegose ha-la ,bOca. enaque1laa circunstancias. de' 'Pudimos, conseguirlo, perc no 'Sin empleaT' bfa.a:pagadolhaeia mueho tl~J;?O. A toda.modo ,que me 'quite el tapon. [ia sangre ... a cadamomerito la.-cueid8' '!I e! l : t a . : c h a , y- prisa, 'Volv1mos a poneI' en, au' esoondite,me cafa por -Ia'barba 'Y .se congell1ba alli. ,sin vernos qonstantemente en:'~gro;, A 'las pieles queha-bfamos, 'lltlliza.do !pSl'lI.

!Sabfamos 'que tendriamos que paSarla. 'las dtez 'horas, ha.biamos desoendldo unOs dormir. nos,ooinlmos el restode hi. came

nOMe, en aquella atm6sfera irrespirable 'Y 'milqUin1entos metros. AWl·no"er~ deno~ de ca;bra ,1nos marohamos. ,s6lci con :pen.<;aren', e110 nos desespera.ba- che. Podhi.mos rya 'IespiTar''Y, 1a; morllIl de !Era InUtil ihaeer ya mAa'!!uPOslei~s &0-.

mos.aUn mas.'· ',., ." nuestrogr:up() mejor6:,VOlvia:m~a, tener, bre 10, que'nos 'faltaba PM'a terminar el~a.v quesegUiT m1entras 'haoya luz esperanza:,' iE'asamos -etra maia ,noe.he 'Villl,je.No ihAi.bfamOssaUdo de lasmontll.-

-dUoZaro-':'. Tene~os que paSar'la cum--B.unque 'no pudiei'a compararse con: la 'fi-as: II"ero el plea .que empeza.mos a.'escalar,breantes de que sea. de noche. anterior.--siIi. doi:riur.. tv a-l 'dia. slgu1ente das dfa.sdespues era, aunque entOnees no,y 'aM· 'continua-mos,': destrozandonos, ,:continuamos eJ descens-o, ihasta:qu.e por fin. • 10 sabianios,el ,Ultl1ru:lbaluarte del, Hima->comomosca:s que tntentan a'Van2lB.rpor en-' :pudimos ,ver con tOda cla~ida'd'el 'Y'aiIle.'laya; euyas estrfba.c1ones nos' 'habian d~clma. de !is mleL Nos desvll\bamosa de- iJi'Qr'.la tarde m e dijo Zal'o:.' ' , Uevar '801norte de'la. tIrid1a. No recUerdoredha e izquierda para' evitar el asalto ,-:tNo !lotas, algo',esp'eClal en ese valle? los 'detadles'de e s t& . u}tlnla a:scensi6n:.'S61ofrontal, que nos ihubiera Iheeho ,perder 8.lln. -Mo, 'lrJOr que?-,J.lerespondi,' " ' ,~;que ·pasam.os dos d1as sin' Uegar a lamastie.rm>o. :No' reeuerdo haber Uegado Zaro ~t}a16: iha.cla una ',seriede ~, ,cumlbre de' aquella montafta, que una vez1i la cresta de lUIuella. montafta. 8610 me qUe se. prolongaba 'en ,dl.recciOn,.()el;te, co'.. .'aiTiba ,SentImOs 'VertigO tv q,ue a1.' inlclar,aeuerdodel punto e n que me detuve, va- mo desgaJjandose deJa mssa,de 19 . montafta eld.esoenso,pOr Is. otra IV'ertlente D os en-ga-menoo"sorprendldo, a1 darme cuanta de par cuya iladera dellCendiamos. Y dljo: 'contra:inos con ,que eLa!Te era de una.que Zaro, que debfa precederme. se hallaba· -lEa una formacl6ri.,oomeJantea aq'uellatninspar.encia .~inaria. y que el soldetras, -de miP.roseguh:nosy d.e pronto oka." donde enoo.ntramas 18,' cueva 4el ' l'aluclaesplelldorosamente. 'A gran distan-cO'mllrel'ldimos. que empe:i;aba 1 6 1 descenso. pastor.' , cIa, al Oeste, unas fPB'ant.escM m-ontaftasAquella nodhe se proliujo 190crlsi5, En un :Me rei! en comparaclon eon Jas cuales 1& que. a,ca-

ancho reborde dOhde Is nleve se habia.-i,l!Acaso crees (lue'fan-ws a encontrar ba.bi!.mos -de.veneer result-abi!. sOlo un ee-acumulado, cavamos traba.-josamente en Ill. otl'9reba:llo con !lU ]laster? f r o ; Haciri. eI' BUr"el terreno o1'rec!a. unnieve' para 'Preparamos un, refugio en que -No-me repltoo., Zaro-:, perc' qulza' cambio total de' a8pecto. La ,llan'ura. ae.

,~~,lgMlirfrf~fr~o~tMl&t1ll~t~lia~;i,,::~:i,~;~n:an:h~~;~~:de podamos Pa- , =~~~i~fab=~~~d~~l~~:~~" ';' ,: " ' l 1 t 2 i ~;~~::e~:s.~~~~_::;:.~~~~.; - ; . ~ ~ :~!~~~;;~ ; ~·~:;~_~; '~ .s~: ~ : ~ , ~ ~ " l.~~!:~~'_::~I~~"~~'~'!'~.~'.: ~~;: '~~~~~';_/D~ ; : : ~ ; _ ~ ~ ~ : . 7 C_i;:~e,-,r_ ~ q~~ ~ : - ~ I ~ ! ~ ~ ~ , ~ f ~ ~ ~ ~ , ~ . ~ C \ , ~ . ~ ~ ~: .~~i~.T.~;~~~«;MJt I~~~;;~,c~~";':j. ~ J 5 1 1

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IContimtaciOn.)

;En nuestro viaje a traves de las l'{!gio- quiera dii·ia. que son alemanes". coment6 tura media de un ejemplar adulto de~nes hlmal8IYas,"solo habiamos visto de Paluchowicz. de tener mas de dos metros .todos los seres de Ill. .cre=ci6n. al hom'bre. Ll "" " uegamos a la "conclusl6n unanlme de" .Y fueron aquellos des "AbommabJesIII perro y a la ovele. POl' eso nos Intri - t· b ' te J d . . .ue es a amos can mp an 0 un tlpo de Hombres de las ·Nieves" los que, al obli-garontantisimo. euando emnezabamos :a. crt t J A" l... bf t "" ia uras que amas .na ...mos vis 0 en los garnos a erectuaruna desviacl6n de nues-descender aquella ultima montafia,' dos parques ZoologicOsen libertad ni en nin- tra ruta, nos trajeron 'la desaracta finalrnotttas negrasque nos mdlco Kolemenos ,"gUn libro. Lo.masfacll hanria sido consi- de nuestro vlaje,y que se mov,ian sobre la meve ~ cosa de "d I '". erar os como una especle de osos o de ;Cuando reanudamos el descen'so era me-.medlo kil6metro POl' debalo de vnosotros. oran U' ' h b d " ~g canes y . a er espera 0 a,', que se dio dia. Todo iba bien. A pesar 'de .nues-En seguida pensamos que"serfan anrmales "1 j Pit· b .e asen, ero nos n riga an demaslado tros estomagos vaclos, nos sentlamos anl- .

)' que P o d : ! . 'iamos'cazar y comer, perono te- para no Intenta b 1 s: d ell ." nsar sa er I! " go mas e os. mados. Encontram{)s una cavldad ideal

nramos grandes "esperanzas,cuando nos T f I ' . '" '6

1. en an a' go_del ow y del orangutan. entre unas rocas para pasar 1a neche. E1

"anza'mos en supersecuclon, de que se es- d ..

fi

,pero no po fa conrundlrseles con nlnguna dla siguiente amanecio clare y agradable,

perasen 10 su ciente para que pudlesemos d ' d " .Ie eS.RS as espeeies, El color de su vp e - Aunque al principlo habfa un poco de nie-a cansarios, 'Mlentras bajabamos, los con- 1 b fi '-tornos de Ia montana nos los ocultaron at? re. era casta 0 rcltzo. Parecia que su . bla,se dlstp6 pronto. Era un estupendodurante mueho tremoo. Perccuando ,apa_peIo,era de dos clases: el roflzo, que les dia de' abril. ' ,. 'd" daba su color caracterlstrco. y tIDOSme- Dos horas 'despu·s ocurrto aquello. Zaro

recreron e nuevo, nos sorprendro vel' que 11 1 " v ". .no pareclanihaberse movido, Estaban 5610 c ones argos de un mattasrtsaceo, y,yo manteniamos la cuerda suieta a nues-a una. "docena 'de metros por debajo de Sentados en el borde de unaroca los tros. dos gruesos bastones clavados en l8 .nosotros, pero a un eentenar .de metros de estuvlmos -ohservando durante mas de una cresta de un monte. Desde luezo, no sedistancia. ' , ' ,hora. No haclan mas que avanzar con Justi:ficaba el ernpleo de la euerda, ya que

Dos cosas me llamaron en seguida In gran lentitud, deteniendose' de vez en la pendlente era de noca altura. La cuer-atencton en ell{)s:e ran de enorme tamafio ;:uando para mtrar en torno, como" dos da pendia suelta solo' par ai la necesttabay andaban solo con las patastraseras. Losperwn~s que .admiran un patsaje. De' vez Paluchowlcz, que deseendia a gatas 'Y ' de'recuerdo-perfectamente . pues se quedaron e ,n .cuando volvian .la eabeza para mlrar- espaldas. Siempre podia' ocurrir que ca-como grabados en mi retina alcabo de dos nos, pero no pareclan tener inter~s alguno yese eni.alguna' hondnnada Y la cuerdsnoras de observaci6n. Nos cause tan honda ennowtros. " podia serle !ltil. Le seguian Smlt1h y Ko-Impreslon vel' aquenos dos extrafios seres JPorfui, Zaro se levant6 ydjje: Iemenos, muy espactados, Ninguno utlll-que nos quedamos Inmovtles contemplan- .....JNopodemosestarn(l"s aqui tadoeldfa zaba lacuerda, que eolgaba 'oerea.de ellos.doles. Resultaban mveroslmlles. Uilode ihastaque esos upos se decldan a apresu- Entanees vt que Paluchowlc2111egaba a1mis cornpaneros propuso que descendiese- ra'rse.Yoy a darles prisa.·' final de la pendiente. M e volvia haclamosa sunIv€l para observarlos mefor, Y empezo a saltar

sa mover 103 brazos Zaro Y en aquel .momento Ill. cuerda se

Zaro re~lic6:., alocadamente en una imitaci6n, , ~una pusojensa paravolver a aflojarse en se.-~N()' 10 creo prudente, Parecen 10bas- danza dejneles ro.ias,lanzando aJarldos'.' ~da. Slmultanea.mente onnos 'un grito

tante ruertes, para. devorarnos a todos. Los "tlpos" n! siquiera se cUgnaron volver :penetrante.Zaro y,'yo nos arrojamos a la.Y sesuimos deride estabamos, No tenia-" la cabeza, Entonces Zaro sealej6para. 'Vezalsuelo para mlrar nacta !libajo. Vi-

mos demaslada seguridad depoder luchar volver en seguida con media docena de mos a Ko,lemenos y a Smith, pero Palu-ventajosamente contra. 'dus criaturas tan, bolas de nieve de buen tamano. F u e arro- ehowica habfa desaparecido, IEmpezamos"extrafias qUe ni slqulera se .alteraban ante" .jandoselas a Ja "pareja, 'pero n1nguna de a llamar10 freneticamen"te. No contestaba.nuestra presencia. ellas di6 en el blanco. La 'mas'aproxlmada Los ot1'08dos, que descendian con la es-,Mi entrenamiento ,de arti1lero me per- les ca.-y6aunos veinte metros. No sf s1 'palda vuelta Ibada Paluchowicz, no se ha-

miti6 c810u1ar,la altura de los wrp1'enden- 'Yerian los proYectiles, po1'que ni siquiera bian da{'locuenta de nada. Al oirno's gritartes animales. Desde 1uego, tenian casi dos movieron -1aaa,beza.Zaro volvi6 a sentarse, 6e inmovilizaron .y' nos miraban deseon-

metros Y l}1ediocada uno, aunque uno 'de ja-deante. Poco despues se detuvleron, Les ,certados.ellos era un pOCO' mas alto que el otro en ,dimos una h~ra mas, pero seguian quietos. .,....Yolved-Uesdlje-.' A:lgoIe ha pasado

la relac!,6n que suele. sel' mas alto el hom- Empeee a sospechar, intra,nqullo, que se a Ant6:n. "o r e que la mujer. . habian propuesto impedirnos el paso. Al poco tiempo estaban o(ra. ~ez con

Noesta,ban quietos, sino que avanzaban ."...,se estan riendo de nosotroS-'1iljo Zaro y conmlgo Smith y, Kolemenos. YoJIiuy lentamente, como arrastrando los Zaro. " ' Ure de 1a, cuerda y me ate ,a la clntuiapies, y'preeisamente por e1 sendero natu- :Mister Sml:t.~ :;e levant6 y e",puso su e1 extremo nbre.

ral que habiamos de tomar para proseguir opini6n: - . -<Voy a. baj'ar para ver 10que Ie ha su-nuestro descenso. 'Pensamos que si espera- ~Se, me acaba deocurnr' que bien pu- ced!do-dije.bamosmas, se alejarfan y nos dejarian diera ineterseles en la cabeza subi:i' hasta i,legue al punta en que, desdearriba,el camino Ubre. 'Era €'vldente que nos ha- aqui paraobservarnos "a nosotros". Creo se veia ,queterminaba )a pendlente. Zarobian v,isto y tampoco podia negarse que que de·lJ.erfamosmarcham{)s ,par 'otrorsitlo tiraba de la cuerda. Me 1V01vl.como Ie

'no nos temian en absoluto. mientras podamos 'hacerlo.. .' habia visto hacer.a Pa1uchowlcz poco an-"El norteamer!eano nos dijo que estaba IYasf 10 hic,imos. tomando lad1recct6n tes de desaparecer. Me quede sin respira-seguro de que ,pronto los veriamos ponerse exactamente opuesta.· Cuando mire hacia c16n.La montafia se a'bria en un formida--acuatro patas como los OS05. Pero Ie ver- atras, los dosextraordinarios seres ~ta_"]jle abismo como 51Ie :tiublera cortado undad e5 que todo el tlempo los ..,.jmosen ban parados, balanceando los brazos leve- gigante con un hachazo. Era" una grletapie. como hombres. mente" Y,en a,ctltud de escuchir con gran de unos vetnte" metros de', anchura, peroNo' puedo expJicar detalladamente' c6mo atencion. el precipicio re' abrfa luego hasta hacerse

eran sus rostros, pero sf que tenfan Ill.ca- ~Que eran? Durante, varios alios siguie-, varlas veces mas ancho. No pude distin-beza euadrada (en el mlsmo sentI do en ron slendo un mlsterlo para mihasta que guirel fondo. ~ 5udaba Ia lrente. Grite

• que se dice esto dela cabeza madza de lei los"fnformes de las expedlclones". c J e n U - " irarias 'veces,' 10 m a s fuerte ,que pude.:algunos hombres) Y que las orejas debfanfieas al Hlmala-ya sobre el llamado Abo- "jAnt6nl ,IAnt6nl" Era Inutn. Regre,<J\de tenerlas peg;ldasal<,craneo," porque no minabJe Hombre de las Nieves,'Y he es- Juntos.. mis compafiems 'y a ,la1' dpudlmos verselas.Tenian los homb'ros algo tudiado las deooripciones' que de el "han tacit que era, a'quella subida. ,t." d qUt<:aidos,pero eJ pecho muy fillerte, Los ora- dado los natives. Ahora' creo que aquel dis' jet-arme, bien a la cuerda, pues me'

zas eran largos y las muii.ecas les lIegaban encontramos una pareja de e~,s anlmales. :bleba todo el cuerpo; .a la altura. de las rodlllas. Vistos de per- Insisto. sin embargo, en que los redentes 'lTod{)s me hablaron.a la nz. lLo hab!a, 111,la ,parte de atras de la caOOm y el calculos sobre su altura, que se fija en U ll visto? l;Por qUe gritaba? (,I)6nde estaba?

:~r~,T:r~~~~\~~,~~{,~~~..c~~t'~,~,,,,,metro y medio, estan eQuivocados. La al~ ~s explJque c6mo era el ablsmo Y Que

.~;,:~o:';.;~~,;;~;·~;~o;';:~ ~"';;~~:,;,~~;'~,." ~ : : ; : ci l : ;~~;.~,~;:,f~:~!~~:""C'i0, : :' : ,' ;, : : ~ , : ~ ; i ; : ; ; . ; ' ~ ~ m ~ : : :; ; ~ ! ~ ; H t ; , ~ ; ; " ; ~ : ; l ; m ;' L : ~ ; : : ~ , : : ~, ~ ~ : ~ ~ ; ; ~ m C ~ ~ ! ? ~ : t r ~ ~ ~ !~ ~ ; ~ i : : ~

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.(Cont;nuac[6n.)

no habla. eJperllnza de' encontra Ii Palu'- merla; pero era muy amarsa Y nuestros ta que rutmos ·ea,yendo al suelo uno tr.asenowtcz ..'. .' "est6magos' no la admitian.. .otro.-Pues nemosde eneontrlU'lO-idljo Ko- lAunque exhaustos. y convertldos en es- Kolemenos repetla obseslvamente: "Sal-

lemenos, 'J ." ,quele1jos 11mbulanres, dl'sfrutabamos por .vados. .. salvados ... " Y Smlt'h dijo:' "Por-=-.E!sinUhl..:..inslsti-. Se 110S J:Ja mar- primera vez de ,tranql1!l1dad de animo. Por :fin, podremosvivir de nuevo." Pense un

chado para siempre, , ", ' :fin habl'a:mos perdido e1 mledo de que nos 'POCOen estas palabras.parecian maravi-Ninguno, qUeria. creerlo, Nf. YO tampoco. volv!esen' a captural'.· , . Ilosas, Habfan sldo necesarlas toc1a a-gull-

'j Con diflcultad; nos abrlmos paso ,hasta un Del Oeste 'se acereaba un srupo de hom- lla miserta, todas las terrlbles desventu-sltlo desde ;.donde . p adiamos dottiina.r· el bres.' Al a,pi'oximarse viuue eran sets sol- ras por que habtamos pasado, f u e ' neee-abtsmo. Ehionces, mis' companeros com- dados- indfgenas con un subonctat, tam- sario un ano entero recorrlendc a 'ph! ml-,prenqieron:'lo', que.yo' les .,habiB ,dleno.blen nativo, a su mando, Quiseagltar los les r miles de k1l6metros para. que fuerat Ari'o!amosUria piedra 'Y esperamos a .que brazos y grltar. p'ero me Quede Inmovl], posible empezar a vlvir de nuevo.

se o.Y.eraei ruldo que producirta, abajo: como mlsCotnpaneros. esperando a que ' !Nos dljo'mister SmithqUil aque11a era. Pero nada ~,oY6. Entonees tlramos, ha- lQs soldados llega.senjunto n nosotros. • una patrulla que podia Her-amos, 51 nociimdolB' to!lar;.una roca. Tampoc<> Be oy6 'Vellinn Impecablemente unlformados, tan estabamos demasiado 'debiles para. andarnt el.menor rumor a s i ! Heg-ada. al rondo, llmpios y dlscipl1nados.que nosjirodufe- -ldemaslado de biles 1-: , hasta que, unos'Noil quedatrios alii un buen' rato sin ~a- ron In .Impresldn de un Bueno. Mis ojos se kH6metros mas alb\' llegasemos a una ca.-

bel" que hacer , Nos .habfa Ininovllizado 10 llenaron de lagrimas. "rretera donde estaban eltados con un. ca-subitO, de aquells desgracta. PaluC'howicz iSmlth 'avlI;nz6 unos paso~, jr tendi6 1B mien mUltar de su regtmtentc. Sml,th les, estaba con .nosotros y de:'Ptonto, en un matio.·· " habfa dlcho que despues de cammar tan-instante, :ha,bfa desaparecldo para. stem- '-iNbs a-legr.amos mueho de encoritrar- .tosmiles de kilometres, bien podfamos an-:,pre. 'No pOdl!aznos n.l .enterrarto, 'NunCe.les_~.dLlO. ,.,' dar uno'S cuantos mAs. Cua:ndo nQ'S reco-pense Que Pa:luc;.howlc2Jpudlera monr. en gi,ese el eamien, podrtamos comer 'a Dues-este viaje. ,.;Parecla indestructible. NuncR XX'IIlI, . tra plena satisfa'cc16n. .olvidare 0 . 1 ' energtco y desdentado sargen- !La patrulla saco de sus pertrecbi,ls unasto P-a-luohoWlcz. tan devote. LL'EGA-MOS CUh'I":ao. .A. LA INDIA. mantas Y levanto una tlenda de CIi.·mpafia-!Llegar hasta :a4ul., dEiSpuesde ander :pal'li.pro_tegernos del sol. AlJi dentro pa-

miles y.miles de'kIl6metroS---Qij() Bmlth- :<$ehacfa diffclloompreIl.!:ierQue e m , era samos uriabora descansando, Me zumba-pal'smQ'r1r .tan tontamente, cuando cas! eJ.1lnal. APoyado'en ml,baston, procurabal)a hi. Cabeza.Me sentie mal. Nos ldlerontocamos yaa-J. filial del. vh1je. . 'man.tencl' bien ablcI'tbs lospjos. Me sentta un banquete de etgarrillos 'Y f65foros.Creo que fue' et norteamert-ano qulen comocon fiebre ~ .apunto' de derrumbar- Me apetecla ,fumar, aun mas Que comer.

,mas slntl6 la muertede'l1uestro compa- me.MP-temblaoahlas rodU1a13Y me-cos- 'M~ emoctono tener en lamapo ese pe-nere. Eran los dos.hombres de mas ed.ad taba un.enorme,esftlerzono<.caerrne. ll'l quefio producto de Ia clviUzaci6n que ell

'y andaaaJl sfempre.' juntos.' " Buelo.Zaro 'tambiell estaba doblado vsobre ,unacaja .de f6sforos. Y e1 numo del et-.',K<ilemenos se q{tit6 la mOChllade la 'es- su bast6n y Kolemertos 'le sostenfa POl' los garrillo .:era una bendieion. De pronto,palda y"paltsadamente, la"fue desgarran- hombros'con uno@ sus largos brazos .. EI apareclo una lata de 'melocotones en e o n -de por'las junturas, Mientras. todos ca- terrene que nos rodeana. rugose y artdo, serva, Nos la abneron rii;pl<lamente y loslllilJamoa:' Atv u n a pled:ra en un extremObailaba en mts 0]05 en la luminosa neblinacuatro metlmos en ella nuestros sucio! de-yarroj,6"a,lespaclo a,quella elemental ban- del, sol del mediodia.L-Os soldados, para- -dos: :Nos metlmos en laboea lostrozosdera de telil.de saco. La : piedra. se des- dos a' unos sels metros de nosotros, entra- 'demelcccton y 'nos 'deleitiimos 06n el jUgOprendi6 'y,caovopol ' el,pre<!lplclo:'La mochi- ban y ial1an en ml ' vacilante campo de y la pulpa, que' estaban ,exquisltos. NosIa desc{)sidaea.y6 tambien, pero. f1;otando: vision. Vestfan "shorts" y camlsa trcpl- ,dleron a beber ·sgua",de.1as' cantlmplorasEra como. un sudarlo slmb6li~0 Para nues- cales. Y yaestabamos ·Ustos para. .emprender la,tro queriao eompanero, Luego, KolemeIios Can Ia cabeza Incllnada • ota como ha- marcha.' '. 'cagl6 BU hacha Y. p.ortarido ,un extremo plaba mister Sntlth.en ingles, ldioma qU'2 ..Crea qtle nlllgUno' 'de nosotros recuerdadel'largo pal!> Que ·le 5el"\rlade ba'st6n •. iYO' ,no entendfa, perc no ca'bia .dudadel .los detalles de aque! p,aseo mllltar.La pa-hlzo una crUz oon el, cJ.avandola seguida- tone de, urgencia con .que se expressba. ,trulla"adapt6 su paso a nuestro .lentomente e n ' el borde del predplcio. ' Dobie las rodillas para evitar que t e m . arrastrE!l' de pies. Supongo .que tardamos,Luego, reaUudamos el' descenso sin, per- blasen. " .una! cincohoras en reoorrer s610' diec1-der de' Vista el lugar, POl"donde habfa; car- El nortea-merlcano Be nos aeerc6 son- ,slete k1l6metros, Zaro matcht\ba a. mlladodo PaluChowIcz. pero, no llegalllos 11 Vel' rlente y nos 'dljo: ' ,.. '/ nos sentfanlos muy orgUllosos, porqueel lon1io' del aolsmo. -!Caba:llel'OS. estamos salvados-. Y al nos _jl'gurabamos' qUe llevabamos unbuen

Losdias, que siguieron ' e r a n - maimlflco5 'ver que nos qued;i,ba,mos qUietose Impa- paso, m1l1tar.' ' . ,'Y .pildlmos v e r , e n toda su grandlosldad las sibles,' replti6" en' 'tuso}muy lenta,men- . .;..;;m regreso de los hero_-deefa. Zaromontl!lias, que,' ha'biamos CrUzado. Peri> te- te: -<Caballeros.' estamos salvados. eon u n a ' mueca c6mlca-. SOlo nos falts.niamo8 un· hambre atroz y despuAs de rea- Zaro di6 un alarido. de loca Alegria que q,ue nos preceda una banda de mUSica.llzar el 'esftierzo su,premo,nos sentiamos -me sobresalt6. Tir6 sU bast6n ,y gt1t6 Ie- iLOmtis estupendo de todo 10 que su-mas deblles y'dest~OZ'adcis'quenunea. Ape - 'l'wtando los brazos po r encima de la ea- ,ced16 a1 final de est1l.'m.archa, r u e Que nonas si. nos podfamos mover. Un dfa. vimoa beza., Abraz6 alnortea.mericano y e s o o tuvo teniamos que' declr nada. TOdo no's loda-Un· 'par de cabras salvajes,' de" J:)eio muy que retenerlo para evltar ,que se lanzal'a ban hecho. Hubo, .primero, un pa.seo enlargo; Saltab1l.n cOlllO centella-s. No tenian a basar a todos los hombres de la pe.trul1a. cami6n atod.a velocldatt, 'como es costum.-'Por que 9.sustar:se de ni:>sotr08. Apenas nos '_;Ven. Eugene-Ie' grit6 Smit'h .......Apar- bre en ~os camlenes de todos lo s ,eJercltos.qued!lban fuerzas paoo'matar un Insecw. tate .,de eUos. Les he dle-ho que estamos Esta. excI1l"8l6nnos prodUjo un entus1asmoAunqile elterreno segUra slendo mantuo- Plagados de blchos. . formidable. Pareelamos chiqulllos en vau-so, habra arrOYos. rios. ~rboles y p8.jaros...' 'Zaro rompi6 iii relr y a.' bailar denti·o de ,clones. Era la prlmera vez que ilnmos so-.'L!evil:bamos DOhodias sill comer ,cuando los bfllZOSde smith, que lesujetaba. Lue- bre ruedaS desde que nos apeamos del'vlmos ,a gran, d,lstahcia. hacia elEste. un It O obl1g6 al norteamericana a balla.r con tren rusoal llagar j(,~utsk dieciochci me-'rebafio 'de <Jveja5 con pastores y. perras. el u n a especle de poIR:a, y as! estuvierons~ antes.:alstaba1l, demaslado lejos 'para qui pudie- ambos un buen rato. chlllando y llorando , Los1ngleses Be hicieTon cargo de n05-ran ~rnos 1Ulles. peronos bast6- v.erIos eomo .10005. i\To r.ecuerdO que yo tambi~n otros paratodo. Nos dirian todo 10 quepara que se reavlvaran nuestras esperan- ballase, pero Jos cuatro pasam08 bastante debfamos hacer, nos culdarian. nos mima-

zas. Pronto nos iecoge,riari. Arrancamos tiemPO .sa1talldo, pataleando ,en e1 polvo. ,.' rian "lneluso;

~

a. lgUnOS man.ojos de L a bierba qUe cr_!!c£a Abrazandonos unos a o.troi;. ri~nd() 'hist~!N'uilca' supe con exaetitud por d6nde jba.a la,otiUa.:de,·,un arroyo. Iil!;enta.mosco- ;icainente ~ ttavesde u . . . . ~:>":'Il'~>.,... !I;:'''- i'li.lll hora que era. La:verdades"que no

ABC SEvi;LLA ' ~ 29/98/-1957, Pagina 29 cCcmtinuar4')' [TP~ i? !· :; :: ' :, :: :: L:r""dr.·::,:j i);.i<:;,j:.; 'pl~(;~';.~l~iGt;! '-~cc:'-<dl.'cr::iC-, ·ii~-:.t_:::~bu,~_:i6n. !=,·.lC~.<::-. 2. ·fi"-'~.>ri~."'ic'~r:',·, C~_~i",.;-:-:.:~.~:,,::J;;-~-;J~~~:j.,:::" '/ -,~~~::'_i:~<:<:V;;~-' t>~>"_,;1-l ,_. c ., ," :r ::~. ':d , .; .

, : c ; , ; e ; ' e : : ~ e ~ ~ ~ ;0 ;~ ;~~ ' ; ~ ,~ " , ~ : : ; : ; ; : ; . O . ; e~ ~ ; ~ , ~ o; ; : , ; ; ' ; ;~ ;~ : '""m~':~;:~~; 'e ; j ; : ; " : : : ~ 'Y : ' ; ; ; ; l : ; ~ ~ ; : , ; , ; ; ~ : ; : : ' { , , ~ ~ ' ~ , ; :;~:','\:;t;·,:~~~;~,;;;\,;;:~,:",;'::;~c~'~~';.~';~~~";' :,\:'~Slf]'\,~~'~~~:,,;'.

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me lmportaba en absoluto. serta in.ut!l que Be con ia ropa. Vertieron petroleo por en- tortuga. Era algo calvo: BU'edad riarectaa'hora pretendlese reconstruirlo POl' medic 'elma y le prendleron fuego. Pronto se ele-, de unos cuarenta afios, Le haela continuas

de mapas: Oualquier' c:Heulo tendrla un I 'D una columna de humo negro en el a1repreguntas a .smith y a1irmaba con la ca-error de ctentos de kllometros, Es muy clare y PUl'O. Todo 10que nos habta acorn- beza cada ,vez que e l le eontestaoa, comopostbleque Bmtth ,llevara' cuenta de nues- panado en nuestro, viaie fue paste de las ,51esperase prectsamente aquella respues-trorecorndo, perc, 51 es que me 10 dljo, 'llamas, -tao A pesar de' su acentuado aire .profe~.no se me ha grabado en. 1 1 1 . memoria su Kolemenos dllo: stonal, resultaba amable y simpatico. Le

mrormactcn, Para mi no nabfa mas -que -iConfio en que esos eondenados ptoics dljo a Smith que necesltabamos gran desun dato de fenomenal tmportancta, y esto mortran de una muerte lenta y dolorosa.' culdados. No' debiamos hacernoa Iluslones

, era, 10'umco que .me. importaba: aquello Haste ahera 10 habian pasado muy bien a de .que ruesemos areponernos en segulda.efB:la'India. ,,' " '" costa mia. Tardariamos una, buena. temporada en re-'

E1 joven tertiente que nos' contemplaba ,:Nosmlramos y '€mpezamos'a reir. Poco,cobrar las enel'giasperdldas, ,

, mientras-vnos :Instalabamos en el camlon despues estabamos todos rtendonos a car- :Nos tuvieron all! unos euantos dfas, Elestaba reclen afeltado y con su unirorme cafa..das. Y' es que nos dabamos cuenta de doctor nos admJJi.istr6 una serle de, p11dO;;.parecfa tu n ftgurin. Esto nos maravillaba, que 110S vefamos unos a otros por prlmera ras y otros medtcamentos, Nos pasa.bamosacostumbrados como estabarnos 'a vernos el tiempo tumbados. Comfamos esplendl--como unos desecnos riumanos. T _ observe vea, descubriendo. por fin. el dibujo de 'la d"" ,~v .ur; ~ b la f d 'I b bil! fin I' amente s, sobre ' todo, nos Ihacian tomarmlentras 'ha'b'Jaba con Smi"", S e . ' hallaban oea, a orma e a ar 1 a, en . e"" VU t ,... 1 h bl ld t mueha rruta fresca. Kolemiln05 admlrao!:l.~',l~ -somora . de un arbol, en', el carnpa- TOS ro ce os que ' a an s 0 nues 1'05 1 ld '~ ~ '" " ,a, redue 0 personal de la clinlce con 5Umente tnstalado al borde de la carretera companeros constantes durante doce me- '

u enoi:me apetito. PodIamos fumar cuantodonde esoeraba 'el carnlorr. ''''u expresion: res y 'con lO S que ila:bfamvs luchado. Jun-

" '" to' brei j I de Ias ma d qulsleramos.. Am fue don de nos separamosmientras escuehaba 'al norteamertcano. s POI' so rev v l''a una' e ras mas uras

b d t'- I ' transitortamente de Smith. DUo que 10'parecia incredula. Eu mirada Ib'R co"ntl- prue as que pue an presen arse es a un ',~ '" ' d ~ " ' J : _ mil kil6 Uevaban para presensarlo a las autorida-nuamente de'Smiths. nosotros, ,=~cfa todo 'grupo' e hombres. "VU!"> de sets ' - ,~o posible por comprender, pe;';; nuestra metros camtnamoajuntos.. durmlendo uno des norteamericanas. ,

-. aventura te :debla parecer Inveroslmtl, y allado del otro,yn6 noscenoclamos. E s . . . . . . .osotros tres lreis a Ca-Icuta-nos'no me extrana.: Hizo varlas preguntas ' y mas, ,nl sfquierapjillse nunca en Joque ,<lijO-, '!>etodos modos, ya as vere alli.oada.vez que Smith le responcUa,'el movla podia esconderse'rdetras de-aquel colchon , . Le estrechamos la mano. Nada tenlamos.lil caceza lentamente, como diciendo .que de-pelos que e:iJ:vglviaa. cadavuno dem!s 'que .dectrncs, 'si, pero sugesto era como de declr que no, 'corn.'pafieros r, segurarnente, tatnPQCop;;n- -;A1limo, "muohachoS--IlOs reecmendo, Mesorpr.endl6 10 joven '<lueera. Sin em- =sarorr ellos en c6mo podlaser YO. Era, antes de partir-. EI doctor me baad-, barso, no serta mas joven que yo. ' eomo'Ja.l'llv,elael6n,. el memento de ••qui- vert!do de que todos nosotros nos pondre'"",,Cuando terminaron de hablar, el nor- tarse el disfraz. dimadrugada, despuesde mosbastantemalantes de curarnos de-teamerlcano senos,acerc6 y nosntfc: un protonsado balle .de mascaras. finitlvamente del vlajecito. Pero Inslste en

-iCaramba, Zaro!~xclame-. iPj1r~ s l que; can los cuidados que nos prestaran~Por fln be consesuido que me cree, h t! en un gran hospital a'donde .van a Ilevar-

Dice que"dlspondra, 1 0 'necesario para que -eres as a guapo ~nos deslnseeten y nos deien como nuevcs, ,__,T1ltampoco tienes mala facha-'dijo nos, nos pondremos 'muy bien.' , ,

en 10 que se reftere a. nuestra apartencia, Zaro, muy 'drverttdo. • Yo creta que no estabamos tan mal, Yporque no,podl'ia llevarnos a BU 'base tal Y mister Smft/hno era tan ,viejo como se 10dlle. Entonees no me data cuenta decomo estamos, I?l'CC'.quetendra que a151a1'- yo habfasup\Iesto-,Jes declr, no 10 par~~ que me, halla'ba 'bajo una fa15a, senssctonnos 'de sus, soldados hasta qu.e estemos cia-una vez Que 5ehubo quitado su ,pe- de bienestar, como embriagado odrogadolImpios, perc que nos,"atenderanperfecta- lanibrera entl'ecana. ,Kolemenos, a pesar 'pOI' 'eleontl'aste de la magnifica vida 'Que1ll:en,te,Comeremos cuanto queram05. in- de las huellas que en todo!; nuestrcis ro5'- ',l1ev9.bamos, con 1 a miseria pasada. No que-

s!ste enqu,e no debemos preocupamos de troshabian dejado his penali:lades pasa- rJa admltir que nbs qu'Cdaba una cuentanada. das, era un hombre ,de gran presencia. Y que saldar, can Ie . naturaleza por,el es-'AquelJanoche nos dieron una comida 'allf seguimos un buen rato 'rlendonos y fuerzo caS! &obrehumano real!zado.

caliente. ,que termln6 con cruta en com- g.astandonos brom.as, completatnente des- iSmith ' , s e aIe'j6 com~ una figura que s S . 1 ~'Pota y"un magnffico pudding. POi'primera nudos. mientl'as el' fuego oonsumiatodo de un sueno. Zaro d1jo; "Ya 10 veremos'Veztome el fuerte y.ill:om~tlco te del ejer:- 10 qUe rePl'e$enta,ba nuestrs. odls'ea. en Caleuta", como s1 1 1 1 India Juese unelm bl'itanico, con lech~ cOnaensada y, Con el cuerpo limplo y las herldas. In- pequefio lugar' y Calcmta estuvlese a . I s . .

abundante azIlcar. Nos dieron ma.~ ciga~ flamaeiones. etc. . : debidamente ateildidas. vaelta de III. esquina, Pero nuestro opt!mis.rl'litos. Nos, curaroll los pies en una,' pl'l- nos 'hallil.bamos ya en condiciones de ser rna no tenia I1mltea en aquellos dfas. Todomera :cura ,de urgeneia. Y aquella nOChe pr~sentados a 1a comunidad c!vllizada.,Nos 10 wniamos soluclonado~ Nos habfamos,dorm1mos completamente tl'anquilos. bien dieron ropa interior Iimpla, 'que estrena.- quedJldo vacios de teda aquella energiatapados con ma,ntas del 'ejerc1to. en una. nios n050t1'05; zapatas de lona, eamisas que nos mantuvo en vilo contra los 'pell-c6moda tlenda de campafia. ' ' 'coloniales. calcatines altos. '~5hOl'ts"Y.para ,gros if las lnelemenclas de toda alaae. <Xln~

La novedad' y 1 a excitaci6n de todo colmo, unos flamantes sombrer,osaustra- tra el calortorrido 'Y el frio que helabaaquello me,'sostenian artificlalmente. No llanos, ae' fieltro Ilgero. Smith Stl yist16 los huesos.contra. el hambre yelmarUriotenia ocaslonde ponermeen pley con- metlculosamente. perc los' otros tres 10 hI· de III. marcba. NOBsentiamos feUces. perovencerme 'de io cercf1.q'ue me halla_ba del elmos apresuradamente. deseando cads. apagados, sin aquel fuego 'Vita l , y nos pa-, colapso. Una nueVa inyecclon estlmulante unoser el primero en estar I1sto. reefa que : v a . no podia ocurrlrnos nadafue el ties&yunO e . 1a'matians. sigulente:' , 'Nosneva ron en'autom6vU hacla cilEste, ma.lo, puesto,.que tantas 'personas capacl-mas te o carne en con~rva., tocinQ-;tam- A lUi iodo Jo que ohacian can nosotros me tadas yeon' todos los recur.sos, Be ocupa~bien en l8.ta-<y mennelada. ' dejaba:un pocoOlndit'erente. como un na.- !:Ian de nosotros, Pero 10 clerro es que es-;Nos ,desinfectal'on concienzudamente. dador exhausto ~ue se deja. an-astrar POl' ta:bamos mucho ' m a s entennos'de 10 que

Nos ,desnudaron ,por completo., Pusleron la o lllJl.l'ea.Asf llegamos a una pequefia ,clu~ suponiamos,' ', en ,un montOn nuest1'os chalecos de, plel dad mlllta.l', pero 'no, tuvhnos tiempo de ,~cuerdo,muy poco del vlaie a Calcuta..de oveJa,''las, ":fufaikas", los otros chaJe- v er nada, wa que Inmeiliatamente nos 'me- Sf puedo declr que n O s N.liiultOlargoy pe-cos, las, mocbilas y his polalnas de piel. tieren en una clfni,ca. , sado 'Y que yo .aentia ,una' creelente depre-Encima., del mont6n de ropa: echaron las :El :medico mil1tar nos esperaba, NOB50- sion. Fumtibamos'sin' cesar; ,'mantasen'Que habiamos donnldo, Nos pe- 'metio aun detenido reconoclm!ento, en- , Supongo qUe sepuede consldel'ar como

I~~,~.r ~~i~~~: ' i§~~~~~t~~~; '~~~A:0~~~J:7ij ' ,~l'j~~;,~~~t~~:~;'~W~i:fl~~,~~~:'~:~~~::": ';:;'~~~c~~~;~;J;~~i,,~~J~r;~d' 1e, ''- :--n,~~:-,ij:"::; 'dt': ,,:;:;i'i;: (:,~: ;-:-'J~::_C";';:Jn'f:-;nlkl r; ,:,,~)'j~,):ij~;d, ..~in pr·E"..["·; V.!".';'cr::.'::c; .'l..,t':.~:i,t:.';c "·n i"ol"f ·p·l'!'· !ft"'''_' "'Tn'·lJji'''''C'~~71UUM.l''' .-.1"."""1·"--""

.~ " ':; : ;: . . ' I ": '; ;'; :: : :; :'e ; ';":: . 'O , _:~ ,;~~ ,~: }:·l.-e~!;';=-:l::(;r~ f i n ,; : s ' ': :C ' ;' 'C : :: - C; _ ; _ a . " : ' "2 :; (; 0 i,~rjf-::_'e' . ::,~. ' .!me;-:r: - h ~.:.·~i\:. j:\ G: ; , 1 ~~ :.1,-;2 :~~,; ,; ,, ,:ni ti ,~,::.l ' ? r , , : ; . ~ · i- : : i 6 ; ~ "~' :Xp~"~:-;a, : 1 " -" .. :i _ , ;; ; . . '$~.J;:;'~'" , ~~ "l ,: ;.~ - '.

(Continuacl(5rz·)

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(Continuacion.)

produdo cruzar en el autobus la cludad deCa.lcuta, Al pasar par aquellas ca lles tan

rumosas y ptntorescas nos, Indicabamos

unos a otros los, sitios mas curlosos, conun buen humor cast.htsterrco, y nos creta-

mos unos turistas desocupados que 5610

tienen perspectivas agradables. Despues de

la depresl6nqui' habia senti do, expert-rnentaba otra vez una rebrtl excltaci6n que

me ·engafl.aba sobre m; saIud. -convencien-

dome cast de que ya habia empezado el

perlodo 'de reeuperaclon de enersias.

·E J auto bus entr6 poria gran puerta delhospital' y un enrermero nos llevo a Zaro.

a 'Kolemenos y a mi. en cuanto nos apea-

mos. para ser sometrdos a 'un reconocl-

miento preltmtnar. AI .prtnctpto tropeza-

mos con la <liflcultad del ldioma.' AI cabo,

de 'algun ti,empo,Qued6 clare que entre

-todos ,ha'l~labamos ruso, polaco, frances y

aleman, pero no Ingles. 'POl' fin apareclo

, un enfermero que hablaba frances. Que-

rian nu astra. 'hlstorta clintca desde. 111.n-

fan cia y Zaro tuvo Que contarle 11.1nrer-

mero. -todas nuestras enfermedades. desdeel sarampinn y la tosferina 'basta todas

'las ·1nter.venclones medicas Que cada runo.de nosotros podia recordar, Todo' elloque-

do registradoen una. sene de fichas. Nos

exarninaron varies medicos, nos, pesaron,mrdleron.: banaron, nos pusleron unosjn-. Jamas 'y nos metteron en send as camas

sltuadas en una Iarga sala, Zaro .y Kole-menos quedaron en, dos camasveclnas v

yo en otra ,frent€ a ellos.

, Recuerdo con toda 'clarldad rnl desper-

tar al dia slgulente: una enfermera, des-tumbrantecon su unlforme ,blanco, se ha-

!laba junto a rni cornparando su 'braze

moreno con Is. blancura del mio ygastan-dome bromas con este motivcjrasta que

le sonrei. ·Luego me sirvleron 'el desayuno.:

huevos muv frescos con flnas rebanadas'de pan con mantequilla.

,Aque!la misma mafiana cai en un' pro-

fundo sapor-como. si me -hubiesecs.idoen .un 'po2o sin fondo-y perdi to do re-

cuerdo y toda facultad mental. Tarde cer-

es. de uli mes ell volveT en mi. Me entere·de todo ello despu~s. y rue mister Smithel que me reconstruy6 aquel ,periodo. '

''M'e dieron' sedantes '! 1 me estuvleron cul-dando dill. y noelle. Entre tanto. Zaro y

Kolemenos pasaron POl' el mismo oscure-clmlento total de sus facultades. Poria

llochegdtaba 'Im e retorcia como un' loco.'. Me escape otra. vez de los ruses, cruce yosolo di!siertos y montafias. Y todos los dias

me comla la mitad de ml pan y escondfa

astutamente Ill.·.otra mltad debajo de ]a

almohada 0 del colch6n. Cada d,ias, las en-

fermeras tenlan que quitarme mi tesora

aJimentlclo. Me 'hablaban y me traiangran des paneS' blancos, recllin h~Clhos,paraque me convenc1ese -de que yo no neceslctaba ahorrarlo. Slempre ha,brfa ya pan.

,"Pero no 'habla modo de 'convencerme. Yo'seguia 8u.arqan(!o reservas, para Ill. etapa

siguiente de mi fuga. ,

. La crisisse produjo a los dlez' dias apro-

:ximadamente, segUn me, contaron. A par-tir de entonces estuve mas tl'anqullo. pe-

(~:9§Jhlljlen~1c,l@\',)iJIY5iP;t~s~1J:e .gi ' los mas,l t,[!,:: 5. ' · :, , , : ' :_ :- :, . ::i, }('C:; Q;"C'::il j:}E'cbiLid:Ol

:u;,~:.':p;:::_';;:r f.z>!:;~;" (' fii,-;O.j;:,; i6,~j.

::0':::"':';>1S ",h" 1;_ (;,;&;:", c,:;;-, fir,",S

graves. Kolemenos y Zal'O se 'hallaban tan

mal como yo.

.Pera, segun los medicos del hospital,

ninzuno de los otros dos neso al extremedel espectaculo que yodl Ia segunda no-

che de estar hospitallzat;lo.· -Cogl el pan.

que habia ahorrado, enrolle el .colchdn,

la almohads w toda la l'opade la cama

y, congl'an asombro de aquella buena

g·ente.....:que no concsbia como podia' tener

'fuel'za, en mls cclrcunstancias, para car-

gal' con to-do aquello-c-, me dirlg! 'bacia

la puerta, tambaleandome balo er peso del

enorrne lio. En cuanto me ·vi6 saear el

colehon de la cama, la entermera lIam6 11.1

medico de guardia. I~ero este le dijo: "De-jelo; vamos aver 10 que hace.'

En .lapuerta de la sala, el medico, la

entermera y dosenfermeros .me cerraron

. el paso. EI medico me hab16 suavsmente,

como podia haberlo heche .con un sonam-

bulo. Pero YO'Intsnte seguir, Los enter-

meres me agarraron por 105'brazos y yo .

luche y me revolvi con furla. salvaje. S enecesit6 el esruerzo comb Ina do de los cua-~ro -para reduclrme v .hacerme 'v,olver a

la cama. ,Norecuerdoe'ste Incidents.

Cuatto semanas despues devhaber in-

grssado /enel.h'ospltalme desperte una

manana. completamente vdespejado, como'<elque, despues' de -un .dia' .de cansancio,

11a' .dormido.pel 'fzctament·e todauna no-cbey se levanta con energtas rencvadas,

Cuando me dlieron que mi noene :habla

dura do un mes, no podia creerlo, .

;Misrer.Smlth fUe a vernos. Estaba es-

balto y agil con. su traje civil de tela flna ..

Nos dljo que durante una sernana se ha1l6

a'tas puertas de la muerte. Hahia estado

all! dos dias antes. perc yo no le habiareconocido. Habl6 €xtellsamente con los

medicos y Ies conto detalladamente nues-

tras aventuras.

-tAhora estara usted bien del todo.

SJav-. Y S'efialando. hacia' K'olemenos y,

Zal"o, que nos mira ban sonr!entes de~de

sus camas de el).frente. afiadl6: ~Y eUos

tambien.

'Uno de los solda.dos .hospita.1izados enaquella mlsma sala, quiso saber nu€stros·

nombres.El norteamericano se los ,dijo,

pero al soldado se Ie hacJa muy dific!lret€n,e1' las .sxtraiias sila,bas. Y en vista de

ello, Ilegamos a un compromiso: seliamos

Zal'o. Sla·v y "Big Boy". (Naturalmente,

el "Chicazo" 0 "'Mtlchachote" ,era' elgl-gantesco' Kolemenos.J '

'Se di!uridl6 nuestra sensac10nal histo-ria. De otraspartes del hospital lIegaron

medicos y 'enierm~ros para vernos,. Los

Eoldados ingleses <Ie nuestra sala 'Y de laspr6xlmas, nos abru'maban consu amablli-

dad. Uno de ellos hizo una colecta. pasan-

do su sombrero, 'Y recogi6 cigarrillos.' di- ,nero, chocolate. pequefios objetos de re-

galo, todo 10 cual iUe distribuido entre

nosotros.

. El 'norteamerica.no vina a vernos otra, vez. Mil di6 una pltlllera de plata y dinero.

-~Que proyectos tlene usted para cuan-

d'o este mejor. Slav?"':"rrie pregunt6.:1£ dije que 5610me quedaba un cainino.

C<m10pficial polaco 'que era; debfa unirme

1 1 . 1 ejerclto L!bre. de Polonia.

-lEste. seguro de que eso es 10 que pre-

flere hacer?-insisti6.

":"';Es 10UnIco Que ilUedo hacer •.

-iBueno, Desde luego, nos veremos des-

pues de 111.gu,en·a. ~D6nde sera esc?

-'En Varsovla-Ie dlje- .. Y le apunteIa direcci6n de mi familia. .

.,.....Estupendo.: Nos veremos en VarroviB..

,Un oflc1albrit{mico y un 1Ii.terprete 'pO':

taco mil vtsttaron. Fue una Iarga conver-sacicn de un tone amlstoso 'que, nada '·w-nla de la severidad de, los Iaterrcsatonosdel Servicio de,' Int€llgenc.la. Perotuve queresponder Ii. un largo rormutarto sabre P o - 'lonia.. los polacos y la polittca de mfpais,

para probar rni buena fee Luego, por se-

sunda vez, huce de con car. cuanto sabia

deIos rusos Y 10 que nabla. vlsto durantemt vtafe, . .

El Interprete volv!6 solo 11.1dlasiguien-

te, 'l levan:dome como regale media docena

de panuelos y .una pHiIlera india de mar-

fi1. Me d!jo que 'hablan arresjado mitras-

lado para que me reuniese con las fuerzaspolacas que luchaban junto , a 105 allados •, en el Oriente Medlo. '

La neche antes de mt marcha, Koleme-nos. Zaro y yo celebramoa 111.espedlda enla cantina dei-hospital: .

, Mister SrDlth .tuea despedlrrne al hospt-

tal el ultimo dia, Ilevandome una' ,male-,.'

tits. de flbra para que guardase las pocas

cosas que poseia. HaWa decldldo que rntseparacion .de Zaro y' Kolemenos fuera '10

menos penosa posible, Les d!jlmos adios

a los que habian side nuestros comnane- .

1'08 en la sala del .hospttal 'I todos mosgribaron: "'i,Buena suerte!" "iQue te vaya

bien; Slav!", y cosas POl' el estllo.. Fuf

hacia la puerta, preeedlendome Smith.Zaro y Kolemenos lban detras' -de mi.' Ya

que.da qU,ese retrasal'an, pero adelantilron

el paso. Entonces me detuve en Ia puerta:

y el, e.norme K~lemenos me a'braze con

todas sus' fuer21as. ,Casi meahog6. 'Luego

Ie toc6 el, turno a Zaro, todo emocionado:Nos' asomaron las Ia.grimas a : los tres y

tuve que arrancarme deellos bruscamen-

te. 1 1 : 1 nOl'beamericano me acompafi6. Be'iba sonando la nariz para dlslmular. Vino

conmigo e n el autobus hasta Calcuta, don~

de -tuvo ,que :a·pearse. •

. ......Cuidate. Slav; 'I que Dios r e bendlga. . . . . .m e dijo.- tuteandome en el ultimo ins-,tarit€. ' '

. EI s.utobus me dej6 en ei' Canipo de

TI·ansito. donde 'tenia que' esperar .el 001'-

.co que ,mellevaria a .1 Oriente Media. Mire

par ultima: vez a nuestro mister Smith,

:que .agitaba 'elbrazo, .

:De re'pente me vi privado de amlgos, me

consldere desposefdo de todo, me sel).tf 10

mas· desolado y solitario que pueda sen-

tirse un hombre.

FIN