Dra. Jimena Campos

Se afectó la economía local y por ende el mercado laboral

Efecto directo en los ingresos del SIVM (Invalidez Vejez y Muerte)

Mujeres y trabajo reproductivo (no remunerado) ni les permite acceder por derecho propio a un régimen de pensión contributivo

Invisibilización del trabajo reproductivo de la mujer

El trabajo informal de las mujeres

Mujer, empleo, discapacidad

Reciente incorporación de la mujer al mercado laboral

Las desigualdades de género que se arrastran a lo largo de la vida y que se acentúan en el envejecimiento.

Una pensión digna y la cobertura de la seguridad social garantizan el derecho a la alimentación y a una nutrición sana, a la salud, al esparcimiento y a la integración social.

Empleos de menor calidad, irregulares e informales.

Escaso o nulo acceso a la seguridad social.

Pobremente o nula remuneración.

Explotación

Producto de la migración y las políticas capitalistas y neoliberales (mano de obra barata)

El desempleo en la población con discapacidad se manifiesta con mayor intensidad.

Mayor impacto en las mujeres.

Profesionales más afectadas.

Prejuicios que persisten en la sociedad costarricense.

La vinculación entre el envejecimiento y las relaciones de género tienen una importante base demográfica. Las mujeres son la mayoría de las personas mayores y tienen una expectativa de vida superior que los hombres que es proporcional al nivel de ingresos.

La seguridad económica y el ejercicio de derechos en la vejez se asocia a la participación laboral. Sin embargo, la cobertura previsional entre las mujeres es significativamente menor que la de la población masculina, lo cual indica que las mujeres envejecen en una situación de gran dependencia económica. En otros casos las mujeres reciben menos salario por la división sexual del trabajo.

El acceso de las mujeres al sistema previsional no se funda en la titularidad de derechos de ciudadanía, ni en las contribuciones que realizan al desarrollo de los países como el trabajo reproductivo. Los montos de las pensiones que reciben con frecuencia son no sólo menores a los de los hombres, sino insuficientes para una vida digna.

Las desigualdades de género del mercado laboral, en cuanto a acceso contrataciones, feminización del trabajo independiente informal, y monto de los salarios recibidos , entre otros factores de discriminación, se trasladan al sistema de pensiones, resultando determinantes para la exclusión de las mujeres de las pensiones.

Los sistemas previsionales excluyen a quienes se dedican exclusivamente al trabajo reproductivo, es decir al trabajo doméstico y a la economía del cuidado o las deja a expensas de recibir una pensión de viudez o asistencial cuando ésta existe. En este sentido, las mujeres continúan accediendo a los derechos sociales en virtud de su vínculo familiar o status marital, y no por derecho propio.

Las fórmulas de cálculo de las pensiones implican una discriminación expresa contra las mujeres al considerar tablas de mortalidad diferenciadas por sexo. En estas el fondo acumulado se divide entre la cantidad de años que hay entre la jubilación y la expectativa de vida promedio, la cual es diferencial para hombres y mujeres. De esta manera, la mayor esperanza de vida de estas últimas se convierte en una desventaja al igual que la brecha salarial en la medida en que contribuye a que se le asigne una pensión menor.

Mujeres con invalidez son discriminadas de los programas como el RNC por exceso de requisitos, prescripción de plazos para entregarlos, ya que el sistema no es flexible ni toma en cuenta las limitaciones físicas ni el deterioro cognitivo de las solicitantes, quienes deben hacer los trámites de forma personal o por medio de apoderado legal (poder generalísimo). En caso que la solicitante sufra deterioro cognitivo absoluto es excluida del programa ya que no puede ser representada por medio de un apoderado legal; el interdicto solo puede ser declarado por un juez de Familia y frecuentemente estos procesos son lentos y costosos, fuera del alcance de personas en situación de pobreza. El Estado no garantiza la gratuidad del trámite ya que los solicitantes deben cubrir los costos de los honorarios profesionales del abogado o el médico que deban valorar el caso.

• La división sexual del trabajo. Las mujeres resaltan en carreras vinculadas con la educación, secretariado, servicios médicos y ciencias sociales; que se caracterizan por ser mal remuneradas y saturadas. Mientras que los hombres trabajan en áreas tecnológicas y de ingenierías por lo que suelen ser mejor remunerados.

Población de 60 años y más1

Por grupos de edad

Según sexo y tamaño del hogar

Julio 2014

Sexo y tamaño del

hogar Total

Grupos de edad

60 a 64 65 a 74 75 y más

Ambos sexos 635 893 195 094 248 125 192 674

Unipersonal 79 601 17 329 33 409 28 863

De 2 a 4 personas 443 743 137 985 173 625 132 133

De 5 o más 112 549 39 780 41 091 31 678

Hombre 280 221 89 714 110 692 79 815

Unipersonal 27 539 8 416 10 485 8 638

De 2 a 4 personas 199 103 61 807 80 216 57 080

De 5 o más 53 579 19 491 19 991 14 097

Mujer 355 672 105 380 137 433 112 859

Unipersonal 52 062 8 913 22 924 20 225

De 2 a 4 personas 244 640 76 178 93 409 75 053

De 5 o más 58 970 20 289 21 100 17 581

Población de 60 años y más1/

Por grupos de edad2/

Según sexo y condición de aseguramiento

Julio 2014

Sexo y condición de aseguramiento Total

Grupos de edad

60 a 64 65 a 74 75 y más

Ambos sexos 636 802 195 394 248 417 192 991

Asegurado directo cotizante 91 490 58 601 23 551 9 338

Asegurado directo no cotizante 356 971 58 649 158 247 140 075

Asegurados indirectos 156 753 64 941 55 471 36 341

Seguro privado o del extranjero 2 786 167 1 279 1 340

Otro 871 136 326 409

No asegurados 27 731 12 900 9 543 5 288

Condición de aseguramiento ignorada 200 200

Hombre 280 538 89 714 110 692 80 132

Asegurado directo cotizante 65 660 42 343 17 403 5 914

Asegurado directo no cotizante 169 057 26 354 79 021 63 682

Asegurados indirectos 26 827 11 104 9 159 6 564

Seguro privado o del extranjero 1 517 68 597 852

Otro 408 82 326

No asegurados 17 069 9 763 4 186 3 120

Condición de aseguramiento ignorada

Mujer 356 264 105 680 137 725 112 859

Fuente INEC Encuesta Nacional de Hogares 2013.

Mujer 356 264 105 680 137 725 112 859

Asegurado directo cotizante 25 830 16 258 6 148 3 424

Asegurado directo no cotizante 187 914 32 295 79 226 76 393

Asegurados indirectos 129 926 53 837 46 312 29 777

Seguro privado o del extranjero 1 269 99 682 488

Otro 463 54 409

No asegurados 10 662 3 137 5 357 2 168

Condición de aseguramiento ignorada 200 200

Ingreso promedio en la

actividad principal

(cifras en colones)

Ocupación principal Hombre Mujer

Brecha

salarial

Directores y gerentes 1 721 005 1 372 595 20.24%

Profesionales científicos e intelectuales 1 219 709 894 115 26.69%

Técnicos y profesionales de nivel medio 633 154 558 895 11.73%

Personal de apoyo administrativo 438 142 397 424 9.29%

Trabajadores de los servicios y vendedores de

comercios y mercados 434 875 211 625 51.34%

Agricultores y trabajadores calificados

agropecuarios, forestales y pesqueros 275 173 95 396 65.33%

Oficiales, operarios y artesanos 315 991 134 965 57.29%

Operadores de instalaciones y máquinas 340 081 290 122 14.69%

Ocupaciones elementales 206 879 181 122 12.45%

No especificadas 293 312 210 207 28.33%