ensayo: tÉcnicas de plantaciÓn de morella faya en … · 2017-10-03 · ensayo: tÉcnicas de...

C.1 RESTAURACIÓN ECOLÓGICA DE LOS HÁBITATS QUEMADOS DE LOS BOSQUES

DE LAURELES MACARORNÉSICOS 9360 Y BREZALES MACARONÉSICOS ENDÉMICOS

450 EN EL PARQUE NACIONAL DE GARAJONAY

ENSAYO: TÉCNICAS DE PLANTACIÓN DE Morella

faya EN REPOBLACIONES FORESTALES DE

ZONAS INCENDIADAS DE GARAJONAY (ZEC

ES0000044)

“Ensayos sobre técnicas de plantación de M. faya en repoblaciones forestales”

C.1 Restauración ecológica de los hábitats quemados 9360 y 450 en el Parque Nacional de Garajonay

LIFE+ Garajonay Vive. LIFE13 NAT/ES/000240

2




3

A Pedro Luis González Negrín




4




5

Elaboración:

María Gómez Melini

Técnico superior Proyecto LIFE+ Garajonay Vive (LIFE13 NAT/ES/000240)

Equipo de campo:

Jonathan Cruz Montesino

Lincoln Coello Luis

Juan León Santos

José Manuel Dios Martín

Ovidio Medina Castilla

Peones forestales especialistas Proyecto LIFE+ Garajonay Vive (LIFE13

NAT/ES/000240)

Coordinación técnica responsable:

Jorge Padilla Plasencia

Director coordinador Proyecto LIFE+ Garajonay Vive (LIFE13 NAT/ES/000240)

Dirección técnica del trabajo:

Ángel B. Fernández López

Director Conservador del P.N. de Garajonay

Colaborador@s:

Pedro Luis González Negrín

Operario vivero de El Cedro. Grupo Tragsa

Javier Plaza Astilleros

Técnico de apoyo a la producción. Grupo Tragsa

San Sebastián de La Gomera, 30 de agosto 2017




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7

1. INTRODUCCIÓN Y OBJETIVOS ....................................................................................... 9

2. ÁREA DE ESTUDIO ....................................................................................................... 12

3. METODOLOGÍA ........................................................................................................... 21

4. RESULTADOS ............................................................................................................... 30

4.1 Tasa de supervivencia por técnica de plantación ................................................. 30

4.2 Tasa de supervivencia por zona de plantación ..................................................... 33

4.3 Calidad de la planta utilizada ................................................................................ 34

5. CONCLUSIONES ........................................................................................................... 38

ANEXO ............................................................................................................................. 41




8




9

1. INTRODUCCIÓN Y OBJETIVOS

El 4 de agosto de 2012 se producía en la isla de La Gomera el peor incendio

forestal de las últimas décadas en las Islas Canarias, desde el punto de vista ecológico.

Se trata del incendio conocido que ha afectado a mayor superficie de bosques de

laurisilva en Canarias, incluyendo importantes superficies de bosques centenarios de

gran valor ecológico. La superficie total incendiada de manera intencionada ascendió a

3.613,78 has, afectando a 7 ZECs en un 32,55% de su superficie. La superficie afectada

en el Parque Nacional de Garajonay fue de 741,7 has, lo que supone el 18,76% de su

superficie.

El Gran Incendio Forestal (GIF) ha tenido gravísimas repercusiones ambientales

como consecuencia de la destrucción de extensas masas de vegetación,

principalmente bosques antiguos de laurisilva incluidos en el Parque Nacional de

Garajonay, declarado Patrimonio de la Humanidad. Asimismo afectó directamente a

numerosas poblaciones de especies amenazadas, produjo una gran pérdida de suelos

de gran calidad, y ha supuesto un grave deterioro de las funciones de captación de

agua y regularización del ciclo hidrológico de los bosques, de los que depende la isla

para su suministro de agua.

El objetivo general del proyecto LIFE+ “Garajonay Vive” (LIFE13

NAT/ES/000240) es apoyar al proceso de regeneración natural de las zonas afectadas

por el incendio y el desarrollo e implantación de las medidas necesarias para reducir el

riesgo de que se produzcan nuevos incendios.

Para la consecución de este objetivo se ejecutaron durante los dos primeros

años de proyecto una serie de actuaciones encaminadas a obtener unas bases de

conocimiento que permitieran ir optimizando el rendimiento de las estrategias. La

gestión adaptativa con ensayo de diferentes alternativas puede contribuir a la

adaptación y puesta a punto de criterios y tecnologías de restauración para los

hábitats quemados de laurisilva, especialmente de hábitats maduros y de gran valor




10

científico. Teniendo en cuenta la enorme extensión de las zonas afectadas y la

fragilidad de muchos de sus hábitats, las actuaciones tuvieron en una primera etapa un

carácter piloto y de ensayo (los dos primeros años), lo que ha permitido validar y

comprobar distintas técnicas restauradoras y seleccionar las mejores alternativas para

la elaboración de un Plan de Restauración Ecológica (A.4 Redacción del Plan de

Restauración ecológica de las zonas quemadas den el gran incendio de 2012 en el

Parque Nacional de Garajonay).

Las acciones de conservación previstas dentro del marco de la actuación C.1

Restauración ecológica de los hábitats quemados de los bosques de laureles

macaronésicos 9360 y brezales macaronésicos endémicos 450 en el Parque Nacional de

Garajonay pretenden conseguir un territorio preparado para la mejor defensa contra

incendios y acelerar el proceso de recuperación de los suelos y de la cobertura arbórea

de los hábitats forestales con aumento de especies edificadoras menos inflamables.

Con el objeto de densificar el estrato arbóreo en las zonas que lo precisen por haber

quedado demasiado aclaradas después del incendio y evitar con ello la regresión del

hábitat forestal por matorralización, se están llevando a cabo plantaciones de especies

forestales en el Parque Nacional de Garajonay, priorizando especies edificadoras o

mejoradoras del hábitat que a la vez contribuyan a potenciar su resistencia y resiliencia

respecto al fuego, principalmente Morella faya.

Todo proyecto de repoblación o restauración forestal tiene en primera

instancia como objetivo el que la planta, en el mayor número posible, y en su conjunto

la plantación, sobreviva (sobre todo en el primer año) y que posteriormente sea

estable en el tiempo. Por ello, es fundamental precisar de la forma más exhaustiva

posible las características de la planta a instalar.

Para conseguir este objetivo, se realizó un ensayo de técnicas de plantación

utilizando diferentes métodos en zonas quemadas del Parque Nacional de Garajonay.

Con los resultados obtenidos ha sido posible realizar una aproximación a la

caracterización de planta más idónea para repoblaciones forestales en áreas

incendiadas del Parque Nacional de Garajonay y definir la técnica de plantación más




11

apropiada que garantice una mayor tasa de supervivencia de las plantaciones a largo

plazo.




12

2. ÁREA DE ESTUDIO

El Parque Nacional de Garajonay (ZEC Garajonay) se halla situado en el centro

de la isla de La Gomera (Islas Canarias, España), ocupando una extensión aproximada

de 40 km2. Comprende un gradiente altitudinal que se extiende desde los 800 m en su

cota más baja hasta los casi 1.500 m. en la cumbre más alta (Alto de Garajonay, 1.487

m). El relieve de la isla define dos vertientes principales: la vertiente norte, expuesta a

la acción de los vientos dominantes del NE (Alisios), y la vertiente sur, que se halla

resguardada de ellos pero se encuentra afectada por el efecto Föhn, que facilita el

rápido descenso de estos vientos tras desbordar las cumbres de la isla. Los principales

factores que condicionan el clima de esta Zona de Especial Conservación son las lluvias

orográficas y la alta frecuencia de nieblas, producidas gracias a la condensación de las

masas ascendentes de aire oceánico y húmedo transportadas por los vientos alisios. La

aparición de un fenómeno de inversión térmica a altitudes que oscilan entre 800 y

1.200 m. favorece la existencia frecuente de un manto de estratocúmulos e impide el

desarrollo vertical de las nubes. Las precipitaciones de lluvia son relativamente

escasas, oscilando entre 600 y 800 mm. anuales, concentrándose principalmente en

los meses de invierno. Sin embargo, las frecuentes nieblas proporcionan una humedad

casi constante, reduciendo la evapotranspiración y proporcionando aportes

suplementarios de lluvia horizontal, que pueden llegar a ser notables en determinadas

situaciones orográficas. Las temperaturas medias anuales son suaves, entre 13 y 15ºC,

produciéndose heladas únicamente por encima de 1.300 m. de altitud.

El Gran Incendio Forestal (GIF) acaecido en 2012 en la isla de La Gomera, de

origen intencionado, afectó a una superficie total de 3.617 has., 741 de ellas dentro

del ZEC Garajonay. Estas cifras significan que el 9,8 % de la isla y el 18,6 % del espacio

protegido se vieron afectados.




13

Fig. 1. Localización geográfica de las Islas Canarias (España) y del Parque Nacional de Garajonay ( ) en la isla de La

Gomera (Fuente: Image © 2016 TerraMetrics Data SIO, NOAA; U.S. Navy, NGA, GEBCO; Image © 2016 GRAFCAN).

El 13% de la superficie afectada en este espacio correspondía a la zona

denominada “áreas degradadas del sur del Parque Nacional de Garajonay”, vertientes

orientadas al sur empobrecidas por el pastoreo, corta, plantaciones de exóticas,

incendios, etc. hasta la declaración del Parque Nacional en 1981, tras la cual fueron

objeto de un Plan de Restauración que venía ejecutándose hasta el inicio del incendio.

Esta gestión activa había conseguido que la formación vegetal dominante de la zona

fuera un Fayal-brezal serial (Myrico fayae-Ericetum arboreae), comunidad arbórea o

arbustiva, generalmente densa, dominada por el brezo (Erica arborea L.) y la faya o

haya (Morella faya (Aiton) Wilbur) y originada en la mayor parte de los casos por la

degradación antrópica de los bosques de Monteverde. Presentaba distintos grados de

desarrollo, desde matorrales densos e impenetrables hasta formaciones arbóreas,

cuyo grado de evolución las iba aproximando a lo que pudo haber sido la vegetación

potencial.

El 5,4% restante correspondía a formaciones de mayor antigüedad y mejor

conservadas, tanto de Fayal-brezal arbóreo (>7 metros) como de Monteverde higrófilo

de fondo de barranco o cuenca con til, Monteverde húmedo con laurel, acebiño o palo

blanco, Monteverde húmedo de crestería con brezo, Monteverde de ladera y meseta

con haya, Monteverde húmedo de altitud y Monteverde de nieblas. Aunque en estos

bosques maduros la intensidad del fuego fue menor, la severidad de los daños




14

producida ha sido elevada, lo que ha provocado, en muchas zonas, la muerte del

estrato arbóreo afectado.

Para la realización del presente estudio se seleccionaron cuatro zonas con

características bióticas y abióticas distintas dentro de las denominadas “áreas

degradadas del sur del Parque Nacional de Garajonay” que se detallan a continuación

(Tabla 1.).

UTM278962,

3111711

278781,

3111013

278782,

3110959

Orientación

parcelaN N S

Pendiente

Tipo de sueloAndosoles

úmbricos

Precipitación

Media Anual (mm)

Precipitación

Horizontal (mm)Nada

Nubosidad

Cuenca

hidrográfica

Geología

Vegetación antes

del incendio

Fayal-brezal

arbóreo > 7 m

y Fayal-brezal

de 4-7 m

Modelo de

combustible4.8 4.8 4.8

Incendios 20121969, 1973,

20121969, 2012

Severidad del

incendio3 2-3 3

PARCELA 4. Jicó S2. Laguna Chica 3. Jicó N

8

Cambisoles esqueléticos

Fayal-brezal <

4 m

Basaltos subcrecientes,

pitones con intercalaciones

de domos y coladas sálicas

Domos y coladas sálicas.

Piroclastos

Plantación de P. radiata

densa con sotobosque de

fayal-brezal

Imada Erque

0-30

SO

1. Pajarito

279866,

3111029

1969, 1984,

2012

2-3

Área en contacto regular con nieblas, salvo en verano que son

esporádicos

0-50

> 700

Cambisoles

esqueléticos

Fig. 2. Superficie afectada por el

Gran Incendio Forestal (GIF) de 2012 en la isla

de La Gomera y en Parque Nacional de

Garajonay (Fuente: Image © 2016 TerraMetrics

Data SIO, NOAA; U.S. Navy, NGA, GEBCO;

Image © 2016 GRAFCAN, Datos GIS PN de

Garajonay).

Tabla 1. Características bióticas y abióticas de las cuatro zonas de estudio en las áreas degradadas afectadas por el GIF de 2012 en PN de Garajonay.




15

La vegetación de la parcela 1. Pajarito (Fig. 3, Foto 1.) afectada por el incendio

con una severidad 2-3 (soflamado-calcinado) fue un fayal-brezal menor de 4 metros

con orientación suroeste y asentado sobre basaltos subcrecientes y pitones con

intercalaciones de domos y coladas sálicas. Los suelos afectados, cambisoles

esqueléticos, han sido testigo del paso de las llamas en tres ocasiones (incendio de

1969, 1984 y 2012). La parcela de estudio presenta una pendiente que oscila entre 0-

30 % y recibe más de 700 mm de precipitación media anual, además de ser un área en

contacto regular con nieblas.

Fig. 3. Parcela 1. Pajarito de seguimiento para el estudio de técnicas de plantación de M. faya para repoblaciones

forestales en PN Garajonay (Fuente: Data SIO, NOAA; U.S. Navy, NGA, GEBCO; Image © 2017 GRAFCAN, Image © 2017 Digital

Globe).

Actualmente se incluye en el estrato de gestión post-incendio Fayal-brezal

menor de 4 metros orientación Norte (A.4 Redacción del Plan de Restauración

ecológica de las zonas quemadas en el gran incendio de 2012 de Garajonay). Este

estrato presenta una elevada densidad de matorral, aunque su distribución sobre el

terreno es bastante heterogénea. Además, el rebrote en la unidad también presenta




16

una importante variabilidad según la zona. Éste se sitúa mayoritariamente entre el 30 y

el 80%, con una altura máxima de 1,5 m. El matorral presenta una cobertura de entre

el 80 y el 90% principalmente, con una altura de entre 1,20 y 3 m. En la parcela de

estudio tenía una altura media de 1,3 metros al comienzo del ensayo. En el estrato

herbáceo predominan Carduus sp., Andryala pinnatifida y Sonchus hierrensis.

Foto 1. Estado de la vegetación en Parcela 1. (Pajarito) de seguimiento para el estudio de técnicas de plantación de M.

faya para repoblaciones forestales (julio 2016).

La vegetación afectada por el incendio con una severidad 3 (calcinado) en la

parcela 2. Laguna Chica (Fig. 4, Foto 2) fue un fayal-brezal arbóreo mayor de 4 con

orientación norte y asentado sobre basaltos subcrecientes y pitones con

intercalaciones de domos y coladas sálicas. Los suelos afectados son andosoles

úmbricos con pendientes que oscilan entre 0-30 %. Recibe más de 700 mm de

precipitación media anual y nunca había sido afectada por el fuego hasta el gran

incendio de 2012.




17

Fig. 4. Parcela 2. Laguna Chica de seguimiento para el estudio de técnicas de plantación de M. faya para repoblaciones

forestales en PN Garajonay (Fuente: Data SIO, NOAA; U.S. Navy, NGA, GEBCO; Image © 2017 GRAFCAN, Image © 2017 Digital

Globe).

Actualmente se incluye en el estrato de gestión post-incendio Fayal-brezal

mayor de 4 metros (A.4 Redacción del Plan de Restauración ecológica de las zonas

quemadas en el gran incendio de 2012 de Garajonay). Esta unidad actualmente se

encuentra dominada por especies de matorral, principalmente Adenocarpus foliolosus,

que han alcanzado una importante densidad y una altura superior a los dos metros en

algunas zonas. En cuanto al rebrote, éste se sitúa mayoritariamente entre el 20 y el

50%, con una altura aproximada de entre 1 y 3 m y su distribución es bastante

heterogénea. Respecto al matorral, el mismo presenta coberturas de entre el 50 y el

80%, con una altura de entre 1,50 y 2 m. En la parcela de estudio tenía una altura

media de 1,7 metros al comienzo del ensayo. En el estrato herbáceo predominan

Pteridium aquilinum, Andryala pinnatifida y Conyza bonariensis.




18

Foto 2. Estado de la vegetación en Parcela 2. (Laguna Chica) de seguimiento para el estudio de técnicas de plantación

de M. faya para repoblaciones forestales (noviembre 2014).

La vegetación afectada por el incendio en las parcelas 3 y 4 (3. Jicó Norte: Fig. 5,

Foto 3; y 4. Jicó Sur: Fig. 6, Foto 4) fue una plantación de Pinus radiata densa con

sotobosque de fayal-brezal. La parcela 3, con orientación norte, fue afectada con un

nivel de severidad 2-3 (soflamado-calcinado) mientras que la 4, con orientación sur, se

calcinó por completo (severidad 3). Las zonas se asientan sobre domos, coladas sálicas

y piroclastos, sus suelos son cambisoles esqueléticos, y reciben más de 700 mm de

precipitación media anual. El área orientada al norte ha sido afectada por tres

incendios (1969, 1973, 2012) y recibe 0-50 mm anuales de precipitación horizontal,

mientras que la orientada al sur se ha visto afectada por el fuego en dos ocasiones

(1969 y 2012), y su contacto con el agua de nieblas es nulo.




19

Fig. 5. Parcela 3. Jicó norte y parcela 4. Jicó sur de seguimiento para el estudio de técnicas de plantación de M. faya

para repoblaciones forestales en PN Garajonay (Fuente: Data SIO, NOAA; U.S. Navy, NGA, GEBCO; Image © 2017 GRAFCAN, Image

© 2017 Digital Globe).

La parcela 3 (Jicó N) se incluye actualmente en el estrato de gestión post-

incendio Fayal-brezal menor de 4 metros orientación Norte (A.4 Redacción del Plan de

Restauración ecológica de las zonas quemadas en el gran incendio de 2012 de

Garajonay). Este estrato presenta una elevada densidad de matorral, aunque su

distribución sobre el terreno es bastante heterogénea. Además, el rebrote en la unidad

también presenta una importante variabilidad según la zona. Éste se sitúa

mayoritariamente entre el 30 y el 80%, con una altura máxima alrededor de 1,5 m. El

matorral presenta una cobertura de entre el 80 y el 90% principalmente, con una

altura de entre 1 y 3 m. En la parcela de estudio tenía una altura media de 1 metro al

comienzo del ensayo. En el estrato herbáceo predominan Carduus sp., Andryala

pinnatifida y Sonchus hierrensis.




20

La parcela 4 (Jicó S) se incluye actualmente en el estrato de gestión post-

incendio Fayal-brezal menor de 4 metros orientación Sur (A.4 Redacción del Plan de

Restauración ecológica de las zonas quemadas en el gran incendio de 2012 de

Garajonay). En este caso, el matorral presente en esta unidad no alcanza ni las

densidades ni el crecimiento que sí ha alcanzado en las zonas orientadas al norte.

Respecto al rebrote, el mismo varía entre el 30 y 90% aproximadamente con una altura

inferior a 2 m. En la parcela de estudio estos valores eran bajos (30%). El matorral

presenta coberturas de entre el 60 y el 90% principalmente con una altura que

oscilaba entre los 50 cm y 2 m. En la parcela de estudio tenía una altura media de 0,7

metros al comienzo del ensayo. En el estrato herbáceo predominan Carduus sp.,

Conyza bonariensis y Argyranthemum callychrysum.

Foto 3. Estado de la vegetación en Parcela 3. Jicó norte de seguimiento para el estudio de técnicas de plantación de M. faya para repoblaciones forestales (noviembre 2014).




21

Foto 4. Estado de la vegetación en Parcela 4. Jicó sur de seguimiento para el estudio de técnicas de plantación de M. faya para repoblaciones forestales (noviembre 2014).

3. METODOLOGÍA

Durante la primera anualidad de proyecto LIFE+ Garajonay Vive se ensayó en

cada parcela la aplicación de distintas técnicas de plantación con planta de primer año

procedente del vivero de El Cedro.

Para disminuir gradualmente la cantidad de combustible inflamable de las

cuatro parcelas y abrir zonas de plantación se eliminó desde un principio el arbolado

quemado y se desbrozó el material de sustitución (mayoritariamente codeso,

Adenocarpus foliolosus), creándose calles de plantación de 1,5-2 metros de ancho con

orientación este-oeste, y dejando bandas de matorral de 2,5-3 metros de ancho sin

eliminar a modo de barreras protectoras frente a condiciones adversas como altas

temperaturas, viento y/o heladas, que también funcionan como captadores de agua

procedente de la precipitación horizontal (Fotos 5, 6). En la parcela 1. Pajarito se

delimitó una zona donde se eliminó completamente el matorral de sustitución y el




22

arbolado quemado en pie para comparar los efectos de la corta a hecho en

repoblaciones forestales frente a la creación de calles de plantación (Fotos 7, 8).

En cada calle se realizaron plantaciones de la especie arbórea Morella faya

(faya o haya), utilizando un marco de plantación a tresbolillo, a una distancia de 2,5 – 3

metros (Foto 11). Cada planta fue marcada con una placa identificativa con la técnica

de plantación y/o procedencia (Fotos 9, 10).

5.

6.

Fotos 5,6. Apertura de calles de plantación en parcela 4. Jicó sur (enero 2015).




23

7.

8.

Fotos 7, 8. Zona de corta a hecho en parcela 1. Pajarito para ensayo de técnicas de plantación (antes y después).




24

9. 10.

Fotos 9, 10. Peones forestales especialistas troquelando chapas identificativas para el presente estudio.

Foto 11. Calle de plantación con marco a tresbolillo en parcela 2. Laguna Chica.

El ensayo sobre técnicas de plantación se desarrolló a lo largo de la anualidad

de 2015, siendo objeto de seguimiento un total de 1.588 plantas en febrero, marzo y

septiembre de 2015. Durante el período estival fueron regadas en dos ocasiones, a

finales de julio y principios de septiembre.




25

En cada muestreo se rellenaron estadillos en papel (Fig. 6, Fotos 12, 13, 14)

donde se indicó la parcela, fecha y técnica empleada, y se recogieron datos

dasométricos de cada planta como altura total (cm), diámetro de tallo (cm), y ancho de

copa (cm), además de vigor mediante un código numérico (0-3) donde:

0: Muerto

1: Individuo con muy pocas hojas y marchitas

2: Individuo con bastantes hojas, unas verdes y otras estropeadas

3: Individuo completamente sano, lleno de hojas verdes y brotes

Fig. 6. Estadillo de campo para el seguimiento de técnicas de plantación de Morella faya.

TECNICAS:

A. TESTIGO (ahoyado 40 cm, poceta circular, no osmocote)

PARCELA: B. Ahoyado 40 cm, poceta circular, osmocote

FECHA: C. Ahoyado 40 cm, poceta oreja burro, no osmocote

TÉCNICA:

Especie: Morella faya BX. Ahoyado 60 cm, poceta circular, osmocote

CX. Ahoyado 60 cm, poceta oreja burro, no osmocote

I (Cm) II (Cm) I (cm) II (cm)

1

2

3

4

5

6

7

8

9

10

11

12

13

14

15

16

17

18

19

20

21

22

23

24

Vigor: 0Muerto

1 Individuo con muy pocas hojas y marchitas

2 Individuo con bastantes hojas, unas verdes y otras estropeadas

3 Individuo completamente sano, lleno de hojas verdes y de brotes

nº CHUPONES

> 3cm ØVIGOR OBSERVACIONES

PROYECTO LIFE+ GARAJONAY VIVE. ACCIONES DE CONSERVACIÓN: C.1 Restauración de los hábitats quemados

ESTUDIO SOBRE TÉCNICAS DE PLANTACIÓN 2014

ALTURA

VIVA

DIÁMETRO ANCHO COPA CEPA

AX. Ahoyado 60 cm, poceta circular, no osmocote

ARBOL NºALTURA

TOTAL (CM)




26

12.

13.

14.

Foto 12, 13, 14. Recogida de datos dasométricos de M. faya en vivero (Foto 12) y campo (Foto 13,14).




27

Se emplearon 7 técnicas de plantación diferentes. En algunos casos se utilizó un

fertilizante de incorporación lenta (Osmocote®) añadido en la poceta de plantación

antes de colocar la planta (Fotos 15,16). En otros se modificó la profundidad de

plantación con el uso de ahoyadora de gasolina (Sthil®) (Foto 18), el tipo de envase de

procedencia o la forma de la poceta de captación de agua (Foto 19). En cada calle

abierta se empleó una técnica de plantación determinada sobre un total de 50

ejemplares de Morella faya. Las técnicas de plantación fueron las siguientes:

- A. Testigo: ahoyado manual de 40 cm de profundidad, poceta de captación de agua circular, sin osmocote®. 250 plantas. Foto 17.

- B. Ahoyado manual de 40 cm de profundidad, poceta de captación de agua circular, con osmocote®. 250 plantas.

- C. Ahoyado manual de 40 cm de profundidad, poceta de captación de agua oreja de burro, sin osmocote®. 250 plantas.

- AX. Ahoyado mecánico de 60 cm de profundidad, poceta de captación de agua circular, sin osmocote®. 250 plantas.

- BX. Ahoyado mecánico de 60 cm de profundidad, poceta de captación de agua circular, con osmocote®. 250 plantas.

- CX. Ahoyado mecánico de 60 cm de profundidad, poceta de captación de agua oreja de burro, sin osmocote®. 250 plantas.

- Nº. Planta procedente de envase semirrígido, ahoyado manual de 40 cm, poceta circular, sin osmocote®. 88 plantas.




28

15. 16.

17. 18.

19. 20.

Fotos 15, 16, 17, 18, 19, 20. Aplicación de fertilizante de incorporación lenta (Osmocote®) (Fotos 15, 16). Ahoyado

manual (Foto 17) y mecánico (Foto 18). Tipo de poceta de captación de agua estándar (Foto 19) y “oreja de burro” (Foto 20).




29

Con los resultados obtenidos en este primer estudio de técnicas de plantación

se elaboraron tablas y gráficos de datos en formato Excel, se realizó un análisis

descriptivo de los mismos y se probó la hipótesis nula de igualdad de medias mediante

la prueba T para dos muestras emparejadas para comprobar si existían diferencias

significativas entre técnicas de plantación empleadas, así como en el crecimiento de

plantas supervivientes y aquellas que perecieron.

Así mismo, se realizó un Análisis de la Varianza de un Factor (ANOVA) para

comprobar si existen diferencias significativas en el crecimiento de las plantaciones

supervivientes según la zona de plantación. La homocedasticidad (homogeneidad de

varianzas) y distribución normal de las muestras fueron verificadas previamente. La

base de datos se detalla en el Anexo de este informe.




30

4. RESULTADOS

4.1 Tasa de supervivencia por técnica de plantación

En la siguiente tabla (Tabla 2) se recoge el número total de planta superviviente

tras el primer año de plantación, así como por técnica de plantación empleada.

Ha sobrevivido el 49% de la plantación total, evidenciándose el mayor éxito en

aquellas cuyas técnicas de plantación empleadas consistieron en el uso de ahoyadora

mecánica, con un 62,6% de supervivencia (AX, BX, CX) frente a las que fueron

plantadas manualmente (A, B, C), con un 37,4%.

El descenso más drástico tiene lugar de forma general tras el período estival,

independientemente de la técnica y/o la zona de plantación.

Tabla 2. Número de hayas supervivientes utilizadas para repoblaciones forestales de zonas incendiadas de Garajonay

de 2015, totales y por técnica de plantación empleada. (A: Testigo; B: Testigo + osmocote®; C: Testigo + oreja de burro;

AX: Testigo + ahoyadora; BX: Ahoyadora + osmocote®; CX: Ahoyadora + oreja de burro).

En todas las zonas existe una alta mortalidad de ejemplares plantados con la

técnica de envase semirrígido (técnica Nº) pero todo apunta a una causa común: el

estado de la planta procedente de vivero no era apropiado, y finalmente esta técnica

no se incluyó en el estudio. La alta tasa de mortalidad general (más de la mitad)

también apunta a esta condición, siendo las características de la planta utilizada (hayas

de primer año procedentes del vivero de El Cedro) las menos apropiadas para

garantizar el éxito de la repoblación en zonas tan desfavorables como lo son las áreas

incendiadas del sur del PN de Garajonay. En el siguiente apartado se desarrolla más

detalladamente estas apreciaciones.

N total Morella faya viva

TÉCNICA 30/01/2015 14/05/2015 30/09/2015

A 250 212 88

B 250 225 84

C 250 219 103

AX 250 235 153

BX 250 237 151

CX 250 237 157

TOTAL 1500 1365 736




31

Fig. 7. Representación gráfica del número de hayas supervivientes utilizadas para repoblaciones forestales de zonas

incendiadas de Garajonay de 2015, totales y por técnica de plantación empleada. (A: Testigo; B: Testigo + osmocote®; C: Testigo +

oreja de burro; AX: Testigo + ahoyadora; BX: Ahoyadora + osmocote®; CX: Ahoyadora + oreja de burro).

Para evidenciar si las diferencias encontradas entre las técnicas de plantación

eran significativas se realizó la Prueba t de medias emparejadas con p<0,05. Los

resultados obtenidos corroboran esta hipótesis inicial en el caso de las plantaciones

realizadas con ahoyadora mecánica frente a aquellas plantadas manualmente. (Tabla

3). El uso de osmocote® o el tipo de poceta de captación de agua no mostró valores

significativos. Es posible que jueguen un papel determinante en la supervivencia y que

el ruido de fondo de la alta tasa de mortalidad causada por el tipo de planta empleada

no haya permitido evidenciar estas diferencias. Por otra parte, durante el período de

muestreo las precipitaciones fueron muy escasas, por lo que fue imposible comprobar

la función captadora de agua del tipo de poceta testada.

0

50

100

150

200

250

300

A B C AX BX CX

30/01/2015

14/05/2015

30/09/2015

N total Morella faya viva por técnicaN

Técnica

Prueba t para medias de dos muestras

emparejadas

Sin

ahoyadora

Con

ahoyadoraMedia 17,7 28,7

Varianza 197,9 187,9

Observaciones 12 12

Coeficiente de correlación de Pearson 0,929

Diferencia hipotética de las medias 0

Grados de libertad 11

Estadístico t -7,248

P(T<=t) una cola 0,00001

Valor crítico de t (una cola) 1,796

P(T<=t) dos colas 0,00002

Valor crítico de t (dos colas) 2,201

Tabla 3. Prueba T-Student para medias emparejadas de los datos de

supervivencia de las plantaciones de Morella faya con/sin ahoyadora.




32

Por tanto, se puede confirmar que para garantizar un mayor éxito de una

repoblación forestal con Morella faya de primer año procedente de vivero de El Cedro,

en zonas incendiadas del sur del PN de Garajonay, debe aplicarse la técnica de

plantación consistente en ahoyado mecánico a 60 cm de profundidad.

En cuanto a la influencia de la técnica de plantación sobre el crecimiento de la

planta superviviente, no se encuentran diferencias significativas (Fig.8, 9). Sí se han

encontrado diferencias en la tasa de supervivencia en función la zona de plantación

(apartado 4.2) y del diámetro inicial del tallo de la planta utilizada (apartado 4.3).

También se aprecian diferencias en el crecimiento de la planta superviviente por zona

de plantación (apartado 4.3).

Fig. 8. Seguimiento de la altura media (m) de las plantaciones por técnica de plantación empleada en zonas favorables (Pajarito y Laguna Chica) frente a zonas desfavorables (Jicó Norte y Jicó Sur).




33

Fig. 9. Seguimiento del ancho de copa medio (m) de las plantaciones por técnica de plantación empleada en zonas favorables (Pajarito y Laguna Chica) frente a zonas desfavorables (Jicó Norte y Jicó Sur).

4.2 Tasa de supervivencia por zona de plantación

En el siguiente gráfico (Fig. 10) se observa la tasa de supervivencia (%) de las

plantaciones por zona de plantación. Es conveniente destacar que éstas son superiores

en aquellas zonas más favorables, independientemente de la técnica de plantación.

Así, el en la parcela 2. Laguna Chica sobrevivió el 74% de la planta y en la parcela 1.

Pajarito lo hizo el 60%. En la parcela 1. Pajarito, no se observan diferencias en los % de

supervivencia en zona de corta a hecho y las calles de plantación.

En las zonas más desfavorables se obtienen las mayores pérdidas, siendo éstas

más acusadas en aquellas orientadas al sur (86,4 %) que al norte (72,7 %).




34

Fig. 10. % supervivencia de las plantaciones por zona de plantación en las áreas incendiadas del PN de Garajonay.

4.3 Calidad de la planta utilizada

Independientemente de la técnica de plantación aplicada, hemos observado

que el tipo de planta empleado no garantiza el éxito de la repoblación a largo plazo en

campo. Si además le añadimos las condiciones ambientales adversas que se conjugan

en determinadas zonas de las áreas incendiadas del PN de Garajonay, como las

manifestadas en la parcela 3. Jicó norte y 4. Jicó s, las tasas de supervivencia

disminuyen considerablemente.

En la siguiente tabla (Tabla 4) se describen las características morfológicas de la

planta superviviente desde que sale de vivero hasta su último seguimiento tras la

época estival. Asimismo, se describen los mismos parámetros de aquellas que no

tuvieron éxito en la repoblación y perecieron durante el verano. En ambos casos, se

recoge tanto los valores totales, como por zona de estudio.




35

Tabla 4. Características morfológicas dasométricas de las plantaciones realizadas para el presente estudio, y su evolución a lo largo del período de muestreo.

Aquella planta que ha sobrevivido al primer año de plantación presenta unos

valores medios de altura total (m) y ancho de copa (m) iniciales similares a los de

aquellas que no consiguieron superar el período estival. Sin embargo, los valores

medios de diámetro de tallo (cm) de las plantas que perecieron son inferiores (0,43

cm de diámetro las supervivientes, 0,39 cm las muertas). Además, las supervivientes

hicieron frente a los meses más calurosos y secos del año con diámetros de 0,49 cm

mientras que las que no superaron este período tenían diámetros inferiores a 0,4 cm

(0,36 cm de media). Estos datos son recogidos en el mes de junio de 2015.

De esta manera, planteamos la hipótesis que postula que diámetros superiores

a 0,4 cm garantizan la supervivencia de las repoblaciones a largo plazo en campo,

mientras que aquellas plantas que salen de vivero con diámetros inferiores a 0,4 cm

tienen más posibilidades de perecer, sobre todo si son plantadas en zonas

desfavorables. Para evidenciar si estas diferencias encontradas en el crecimiento eran

significativas se realizó la Prueba t de medias emparejadas con p<0,05. Los resultados

obtenidos (Tabla 5) corroboran esta hipótesis.

Zona de plantaciónaltura total

(m)

diámetro

medio (cm)

ancho

copa

medio (m)

altura total

(m)

diámetro

medio (cm)

ancho

copa

medio (m)

altura total

(m)

diámetro

medio (cm)

ancho

copa

medio (m)1. Pajarito a hecho 0,25 0,39 0,17 0,28 0,51 0,17 0,40 0,69 0,26

1. Pajarito cordones 0,24 0,44 0,16 0,23 0,48 0,16 0,29 0,52 0,20

2. Laguna Chica 0,24 0,43 0,17 0,28 0,47 0,19 0,35 0,59 0,27

3. Jicó n 0,23 0,44 0,18 0,25 0,50 0,15 0,28 0,63 0,20

4. Jicó s 0,23 0,48 0,19 0,24 0,53 0,14 0,24 0,54 0,14

Totales 0,24 0,43 0,17 0,26 0,49 0,17 0,33 0,60 0,23

1. Pajarito a hecho 0,25 0,38 0,17 0,25 0,44 0,13 - - -

1. Pajarito cordones 0,23 0,37 0,15 0,21 0,38 0,12 - - -

2. Laguna Chica 0,23 0,37 0,15 0,23 0,35 0,13 - - -

3. Jicó n 0,23 0,41 0,17 0,19 0,36 0,08 - - -

4. Jicó s 0,23 0,39 0,16 0,16 0,31 0,08 - - -

Totales 0,24 0,39 0,16 0,20 0,36 0,10 - - -

Plantación no

superviviente

ene-15 jun-15 sep-15

Plantación

superviviente




36

Tabla 5. Prueba T-Student para medias emparejadas de diámetro medio (cm) de plantaciones supervivientes y no supervivientes.

Por tanto, se puede confirmar que para garantizar un mayor éxito de una

repoblación forestal con Morella faya de primer año procedente de vivero de El Cedro,

en zonas incendiadas del sur del PN de Garajonay, deben seleccionarse aquellas con

diámetros iguales o superiores a 0,4 cm.

Durante el último seguimiento realizado a las plantaciones supervivientes, se

observan diferencias en altura total (m) y ancho de copa medio (m) entre zonas

favorables (Pajarito y Laguna Chica) y zonas no favorables (Jicó Norte y Jicó Sur) (Tabla

4, Fig. 11, 12)). Así, presentan valores más elevados las hayas plantadas en zonas

favorables que aquellas de zonas no favorables.

Fig. 11. Altura total (m) de las plantaciones que han sobrevivido al primer año de plantación en las zonas incendiadas del sur del PN de Garajonay, por zona de plantación.

Prueba t para medias de dos muestras

emparejadasvivas muertas

Media 0,4351 0,3833

Varianza 0,0010 0,0002

Observaciones 5 5

Coeficiente de correlación de Pearson 0,26

Diferencia hipotética de las medias 0

Grados de libertad 4

Estadístico t 3,692

P(T<=t) una cola 0,010

Valor crítico de t (una cola) 2,132

P(T<=t) dos colas 0,021

Valor crítico de t (dos colas) 2,776

0,00

0,05

0,10

0,15

0,20

0,25

0,30

0,35

0,40

1. Pajaritocordones

2. Laguna Chica 3. Jicó n 4. Jicó s

Altura total (m)




37

Fig. 12. Ancho de copa medio (m) de las plantaciones que han sobrevivido al primer año de plantación en las zonas incendiadas del sur del PN de Garajonay, por zona de plantación.

Estas diferencias evidenciadas tras un análisis somero de los datos fueron

contrastadas mediante un análisis de la varianza (ANOVA) de un factor. Los resultados

obtenidos se muestran en las Tablas 6 y 7. Para ello se planteó la hipótesis nula de

igualdad de medias en todas las parcelas que fueron objeto de muestreo. Previamente

se probó la homocedasticidad mediante el test de Fmax (p<0.05).

En ambos análisis se obtiene un valor de F superior al esperado con un p<0.05,

con lo cual rechazamos la hipótesis nula de igualdad de medias. Existen pues razones

objetivas para afirmar que la altura total y ancho de copa medio de las plantaciones

son superiores en zonas favorables.

Tabla 6. Análisis de la varianza de los datos de altura total (m) de las zonas muestreadas.

Tabla 7. Análisis de la varianza de los datos de ancho de copa medio (m) de las zonas muestreadas.

0,00

0,05

0,10

0,15

0,20

0,25

0,30

1. Pajaritocordones

2. Laguna Chica 3. Jicó n 4. Jicó s

Ancho de copa medio (m)

Origen de las

variaciones

Suma de

cuadrados

Grados de

libertad

Promedio de

los

cuadrados

F ProbabilidadValor crítico

para F

Entre grupos 0,07685444 1 0,07685444 7,59 0,0071237 3,95

Dentro de los

grupos0,89079556 88 0,01012268

Total 0,96765 89

Origen de las

variaciones

Suma de

cuadrados

Grados de

libertad

Promedio de

los

cuadrados

F ProbabilidadValor crítico

para F

Entre grupos 0,04669444 1 0,04669444 7,26 0,00845815 3,95

Dentro de los

grupos0,56624556 88 0,00643461

Total 0,61294 89




38

5. CONCLUSIONES

- Ha sobrevivido el 49% de la plantación total, evidenciándose significativamente

el mayor éxito en aquellas cuyas técnicas de plantación empleadas consistieron

en el uso de ahoyadora mecánica, con un 62,6% de supervivencia frente a las

que fueron plantadas manualmente, con un 37,4%. La técnica consiste en el

ahoyado mecánico a 60 cm de profundidad.

- El uso de osmocote® o el tipo de poceta de captación de agua no influye

significativamente en el éxito de las repoblaciones.

- Las pérdidas más drásticas tienen lugar de forma general tras el período estival,

independientemente de la técnica y/o la zona de plantación.

- No existen evidencias significativas de la influencia de las técnicas de plantación

sobre el crecimiento de las plantaciones.

- Existen evidencias significativas de la influencia de la zona de plantación sobre

el éxito de las repoblaciones. Las zonas favorables son zonas soflamado-

calcinadas de fayal brezal de 4-7 metros orientadas al norte y/o orientadas al

sur pero dentro de la zona de influencia de nieblas, con alta densidad de

troncos muertos en pie y un matorral de sustitución denso y superior a 1,5 m

de altura. Los suelos son ricos en materia orgánica y las plantaciones superan

con mayor éxito los meses de verano con un o ningún riego de apoyo durante

la época estival. Las desfavorables son zonas soflamado-calcinadas de fayal

brezal menor de 4 metros orientadas al norte con influencia de nieblas y al sur

sin influencia de nieblas, con baja densidad de troncos muertos en pie y un

matorral de sustitución denso pero e inferior a 1,5 m de altura. Los suelos son

pobres y pedregosos. En estas zonas el papel del matorral de sustitución como

barrera protectora ante elevadas temperaturas y/o insolación, así como

captador de humedad en las zonas orientadas al norte, es fundamental para

aumentar la supervivencia de las repoblaciones. Por otra parte, es conveniente




39

incidir con riego de apoyo en la época estival, sobre todo en las orientadas al

sur.

- Existen evidencias significativas de la influencia del diámetro medio (cm) del

tallo de la planta en el éxito de las plantaciones de Morella faya. Diámetros

superiores a 0,4 cm aumentan la supervivencia a largo plazo en campo.

- Existen evidencias significativas de la influencia de la zona de plantación sobre

el crecimiento (altura total (m) y ancho de copa medio (cm)) de las

plantaciones. En zonas desfavorables el crecimiento es más lento, por lo que

alcanzar coberturas de arbolado deseado a largo plazo es más complicado.




40




41

ANEXO




42

San Sebastián de La Gomera, 30 de agosto de 2017

ensayo: tÉcnicas de plantaciÓn de morella faya en … · 2017-10-03 · ensayo: tÉcnicas de...

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