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DÍAS SIN COLE EN CASA

Estimadas familias,

¿Cómo estáis llevando estos días en casa?

Esperamos que el dossier de actividades que os preparamos la semana pasada, os haya

ayudado a que esta situación sea un poquito más llevadera.

Os enviamos una nueva propuesta de juegos, manualidades y experimentos para entretener a

los pequeños con actividades de ocio educativas.

¡Esperamos que lo disfrutéis!

Un saludo,

Departamento Pedagógico de Alventus

https://www.google.com/search?q=grupoalventus&ie=utf-8&oe=utf-8&client=firefox-b-ab



¿JUGAMOS?

En esta parte del dossier os ofrecemos juegos sencillos y muy divertidos que vuestros niños

pueden disfrutar estos días en casa. La mayor parte de ellos, además pueden crearlos solos o

en familia.

¡Sed imaginativos! Adaptad los materiales, las normas o las temáticas y ¡divertíos!

Tragabolas

Este es un juego sencillísimo de realizar, pero con el que podéis pasar mucho tiempo

divirtiéndoos solos o haciendo campeonatos en familia. Es un juego de habilidad, pero tan

sencillo que pueden disfrutarlo hasta los más pequeños.

Coged una caja de zapatos. En el interior de la tapa, dibujad un personaje como el de la

fotografía, aunque podéis optar por un monstruo, un animal salvaje o cualquier cosa que se os

ocurra, siempre y cuando tenga una boca enorme.

Después, recortad la boca con ayuda de un cuter o unas tijeras, de modo que quede un

agujero.

Poned sobre la tapa unas nueces, 5, por ejemplo. Moviendo la tapa hacia los lados, tenéis que

conseguir que el personaje se “trague” las nueces y estas vayan a parar al interior de la caja.




¡Innovad! Cread varias cajas para hacer competiciones entre diferentes miembros de la

familia, superaos con retos de tiempo, usad una sola mano, jugad con los ojos vendados,

sustituid las nueces por garbanzos u otros tamaños de bola, haced bocas más pequeñas con

puntos adicionales…. ¡Este juego ofrece montones de posibilidades y formas de diversión!

Dinosaurios desmontables

¡No podéis olvidaros de trabajar vuestra imaginación durante estos días! Con unas sencillas

formas geométricas de colores, crearéis los dinosaurios más extraños que han pisado el

planeta Tierra.

Podéis crear este juego con cualquiera de estos materiales que tengáis por casa: retales de

cartulinas, folios pintados de colores, cartones pintados con témperas o ceras o fieltro.

Con la participación de los peques, ya sea recortando o pintando las figuras, recortad

diferentes formas geométricas del material que hayáis escogido.

Jugad a crear formas de dinosaurios increíbles, que se pueden montar y desmontar a vuestro

antojo. Podéis hacerlo según se os vaya ocurriendo o siguiendo estos modelos:

https://alventus.simun.es/crm/upload/72D65494_dinosaurios.pdf


https://alventus.simun.es/crm/upload/72D65494_dinosaurios.pdf



Gymkhana de juguetes

Ahora, un poquito de ejercicio. Por muy poco espacio que haya en casa, siempre podéis hacer

divertidos circuitos que ayuden a los niños a moverse.

Te damos algunas ideas que puedes usar de forma independiente o crenado un recorrido por

la casa con diferentes pruebas:

¡Primera prueba!: con una mantita, llevad juntos juguetes de uno en uno a una cesta o barreño.

¡No podéis tocarlos en ningún momento! Si se os caen por el camino, volvéis a empezar. Y, si

aterrizan fuera de la cesta o barreño cuando los dejéis caer, ¡empezáis de nuevo también!

¡Segunda prueba!: coloca una tira de precinto transparente de lado a lado de la habitación.

Escoge juguetes ligeros, como pelotas o globos. Los niños tendrán que pegar sobre la línea de

precinto todos los globos, sin que se caiga ninguno.

Si pueden hacerlo, pídeles una secuencia concreta en la que se tengan que fijar para

reproducirla en la tira de precinto. Poe ejemplo: “globo verde-globo azul-globo rosa-globo

amarillo”. Si lo hacen correctamente, ¡prueba superada!




¡Tercera prueba!: utiliza una cuerda sobre el suelo, o un palo si lo prefieres, y saltad un número

determinado de veces en 30 segundos.

¡Cuarta prueba!: recoged un número determinado de juguetes con los pies. Tumbaos en el

suelo, con los juguetes a vuestros pies y un barreño o cesto detrás de la cabeza. Coged los

juguetes uno a uno con los pies y daos impulso hacia atrás para dejarlos suavemente dentro

del barreño que está junto a vuestra cabeza. ¡Menudo estiramiento!




¡Quinta prueba!: llevad los juguetes de un extremo a otro de la habitación recorriendo una línea

de obstáculos hechos con latas u otros elementos similares. A la que vais a por los juguetes,

pasadlos a gatas. Mientras volvéis, hacedlo de pie y corriendo en zigzag.

Estas ideas son sencillas y muy divertidas. Os ayudarán a mantener activos a los pequeños y,

además, a que puedan también moverse tal como necesitan. Os recomendamos pensar en

alguna actividad física diaria de este tipo para ayudarles a mantenerse activos.




Rompiendo las mates

Este es un juego divertido, pero, a la vez, una manera interesante de repasar las operaciones

matemáticas. Lleva un tiempo de preparación, con lo que también resulta un pasatiempo

interesante.

Cread juntos tarjetas como las que se ven en la fotografía. Se trata de operaciones

matemáticas muy sencillas, restas en este caso, que podéis adaptar al nivel de vuestros niños.

El juego consiste en recortar el número de corazones que sobra para que la operación que

pide la tarjeta sea la correcta.

Como siempre os decimos… ¡No os quedéis sólo con esta idea! Este juego os permite hacer

competiciones relacionadas con palabras, recortando la que tenga faltas de ortografía,

sinónimos, imágenes que aparentan ser iguales pero que tienen alguna diferencia… Hay

infinidad de posibilidades para todas las edades.

La tela de araña

Este juego entrena la precisión y la coordinación de una manera sencilla pero tremendamente

entretenida. Se trata de ser hábiles y coger con unas pinzas pequeños juguetes que se

encuentran atrapados en una tela de araña.




Haced una especie de cuadrícula o tela de araña con cuerda, lana o hilo en una caja de

zapatos. Meted diferentes objetos e intentad sacarlos con unas pinzas de cocina.

Igual que siempre os decimos, podéis complicar o simplificar el juego con ideas que se os

ocurran. Por ejemplo, si tenéis niños mayores, estará penalizado tocar la “tela de araña” al

intentar sacar el objeto.

El canicódromo

¿Tenéis canicas en casa? ¿Chapas? ¿Bolitas de papel? ¿Rollos de papel higiénico? Pues con

esto, tenéis todo lo que necesitáis para fabricar uno de los juegos caseros más divertidos que

vais a ver estos días.




En esta fotografía, podéis ver una versión muy elaborada del canicódromo, pero podéis

simplificarlo si os apetece. El modelo de la fotografía, supone recortar una parte de 6 tubos de

papel higiénico y reforzarlos con goma eva para que no se cierren y hagan las veces de

túneles. Después, en la parte superior, también hay números de goma eva que corresponden a

la puntuación que tiene cada túnel para el jugador que mete la canica en su interior.

Podéis simplificarlo pegando los rollos de papel recortados sobre un cartón y poniendo en su

parte superior el número con rotulador. Entre estas dos opciones, un sinfín de cosas que se os

ocurran.

El juego consiste en que los jugadores, por turnos, irán lanzando una canica, pelota o chapa

para meterla dentro de los túneles. El primero que llegue a 20 puntos (o los que queráis), será

el ganador. Como siempre, os invitamos a pensar en otras opciones como, por ejemplo,

túneles que restan puntos en lugar de sumarlos.

Lanza la anilla

Juego clásico donde los haya. Hace falta mucha puntería, precisión y coordinación. Se trata de

lanzar una anilla y conseguir meterla dentro de un poste que, en este caso, pueden ser

nuestros famosos rollos de papel higiénico.

Si, además tenéis tiempo, podéis decorar el juego de una forma tan bonita como esta:




Cread discos de cartón con cualquier caja que ya no os sirva. Podéis usar un solo rollo de

papel higiénico como poste o hacer varios con diferentes puntuaciones. Igualmente, podéis

poner diferentes longitudes de poste usando, por ejemplo, rollos superpuestos o de papel de

cocina. Cread competiciones por puntos y disfrutad de una tarde de diversión.

Si, además, os apetece decorar el juego, será más entretenido y atractivo, con lo que invitará

más a utilizarlo en otras ocasiones.




PEQUEÑOS ARTISTAS

Rollos de papel de cocina, hueveras, restos de cartulina, pintura, pinzas de la ropa…. ¿Estáis

pensando en tirar todo esto? ¡Ni se os ocurra! Estos días serán el material de plástica de

vuestros pequeños. Con su imaginación y todo eso, podréis crear manualidades tan chulas

como las que os proponemos a continuación.

¡Dejad rienda suelta a vuestra creatividad! Adaptadlas, cambiad los materiales, imaginad

nuevos modos de crear en base a nuestras propuestas y ¡disfrutad!

Esgrafiado con ceras blandas

Si tenéis ceras blandas en casa (tipo Manley), esta es una manualidad que nunca falla.

Pintad una cartulina o cartón con ceras blandas con diferentes colores, excepto el negro. No

dejéis ningún rincón sin colorear.

Una vez hecho, cubrid estos colores con una capa de cera negra. Después, coged un palillo

mondadientes y dibujar sobre el color negro. Rasparéis poco a poco la capa negra, dejando

ver los colores que había debajo. ¡El efecto es precioso!




Ninja:

Silenciosos, misteriosos y muy fáciles de hacer. ¿Os quedan rollos de papel higiénico para

crear estos divertidísimos ninjas?

Pocas manualidades hay tan sencillas y con un resultado tan gracioso. Pintad con ceras,

rotuladores o, mejor aún, témperas, un rollo de papel higiénico o de cocina. Dejad un pequeño

rectángulo para que el ninja pueda asomar los ojos.

Con rotulador negro, pintad sus ojos y cejas, con expresión de feroz guerrero.

Si tenéis pajitas de refresco, usadlas para hacer el cinturón de su traje y su espada. Si no,

podéis usar otros elementos como cuerdas, con las que hacer el cinturón y alguna otra arma

ninja, como unos nunchakus.

Paisaje con arroz de colores

¿Os apetece crear una obra de arte? Aunque el tema es libre, la propuesta es muy innovadora:

nuestros colores serán de arroz.




Para realizar esta manualidad necesitaréis arroz blanco, témperas, pinceles, cartulina o cartón,

pinceles, rotuladores y cola blanca o pegamento.

En primer lugar, teñid diferentes montoncitos de arroz con témpera de los colores que

necesitéis utilizar y dejadlos secar. Meted simplemente el arroz en un cuenquito y dadle con el

pincel mojado en el color que queráis.

Después, dibujad sobre la cartulina o cartón lo que os apetezca. Un paisaje, un cuadro

abstracto…. ¿qué os inspira más hoy?

Una vez hecho, empezad a cubrir con cola blanca las distintas secciones del dibujo y pegad

encima el arroz del color correspondiente. Poco a poco, id rellenando el dibujo y veréis qué

efecto tan chulo y original.

Dibujos con huellitas

Esta es una manualidad muy bonita para compartir un rato con los más pequeños de la casa,

aunque se pueden hacer cenefas preciosas también con los mayores. ¿Os animáis a crear

bichitos con las huellas de vuestros dedos?




Pintaos los dedos con témpera de colores o, si no tenéis, podéis optar por pintar muy fuerte un

papel con pinturas de madera, hasta que salga el polvito de colores, y usarlo como tinta para

estampar los dedos.

En un papel grande, id estampando huellas y convertidlas en los más graciosos personajillos.

Fuegos artificiales

Esta manualidad es realmente vistosa. Parece que se necesita un dominio increíble del pincel

para pintar fuegos artificiales realistas, ¿verdad? ¡Pues no es así! Cualquier niño puede

hacerlo…. Con un rollo de papel higiénico y témperas de colores.




¡No puede ser más sencillo y divertido! Recortad los rollos de papel en tiras hasta a mitad, tal

como aparece en la fotografía. Después, mojadlos sobre témpera de colores y estampadlo en

folios. ¿A que queda bonito? Los mayores pueden completar esta obra dibujando bajo los

fuegos, por ejemplo, una pradera con gente que mira la pirotecnia por la noche o una ciudad

que celebra una fiesta popular.

Monstruitos de plastilina casera

¿No tenéis plastilina en casa? Eso no es ningún problema. Aquí tenéis una receta estupenda

para crear amiguitos tan graciosos como los que veis en la foto.

Para elaborar vuestra plastilina casera, necesitaréis los siguientes ingredientes:

- 3 medidas de harina de trigo blanca (podéis usar un envase de yogur vacío como

medida).

- 1 medida de sal fina.

- 1 medida de agua del grifo (no caliente).

Mezclad bien todo esto y añadid 2 cucharadas de aceite de girasol. Si la plastilina queda muy

dura, id añadiendo progresivamente media cucharada más de aceite hasta que quede a

vuestro gusto. Si os pasáis un poco, usad papel secante. Es posible que lleguéis a un total de

unas 4 cucharadas pero, para no estropear la mezcla, id añadiendo poquito a poco, tanteando

la dureza de la plastilina.

Una vez hecha, si queréis hacer diferentes colores, os recomendamos usar colorante

alimentario. Esta es la fórmula más segura, especialmente, para los más pequeños, que

puedan querer meterse la plastilina en la boca. Para los mayores, que penséis que no corren




ese riesgo, podríais optar por colorear la plastilina con un poco de témpera de colores, pero

recordad que, en este caso, la masa se vuelve tóxica en caso de ingestión accidental.

Una vez hecha la masa, ¡imaginación al poder! Cread diferentes monstruitos y adornadlos con

cositas que tengáis por casa: ojos hechos con cartulinas, botones, hijos, cuerdas, pajitas de

refresco, purpurina… cualquier cosa es válida con tal de desarrollar la creatividad.

Esta masa se mantiene semanas en buen estado, siempre y cuando la tengáis bien

conservada en un tupper hermético o en bolitas de film transparente.

Pajaritos en mi ventana

En estos días en los que no podemos salir a la calle, da gusto asomarse por la ventana y ver

cosas bonitas. Si ponéis estos pajaritos en el cristal, podréis disfrutar de nuevas vistas y a otros

vecinitos como vosotros, les encantará disfrutarlos también.

Con retales de cartulinas o simplemente con folios coloreados, podéis hacer esta bonita

manualidad para decorar las ventanas. Cruzad los cristales con hilo negro, cuerda, lana o

simplemente con tiras de papel oscuro. Sobre ellos, poned una pequeña bandada de pajaritos

de colores para alegraros la vista a vosotros y a todo el que mire a vuestra ventana.




LA CIENCIA EN CASA

Os invitamos a hacer experimentos en casa y descubrir algunos de los misterios más

divertidos y enigmáticos de la ciencia.

Leche de colores

Con un dedo mágico, podemos separar los colores de la leche o la pimienta del agua. ¿Cuál es

la magia? Acércate que te digo el secreto: ciencia y un poquito de lavavajillas.

Este experimento es casi un truco de magia. Te ofrecemos dos opciones, en función de los

materiales que tengas en casa.

La más vistosa, es sin duda aquella en la que podemos un poco de leche en un plato y

pequeñas gotas de colorante alimentario en distintos puntos del mismo.

Tocad la leche con un dedo o con un palito de los oídos. ¿Qué sucede? Nada, absolutamente

nada. Sin que los niños te vean, moja un poco un palito de los oídos o tu propio dedo con jabón

de lavavajillas y… ¿Qué sucede? Los colores se retiran y hacen formas increíbles, huyendo de

tu dedo mágico.




¿Qué sucede? El jabón rompe la tensión superficial de la leche y, por tanto, la estabilidad de

los colores. Con su palito o dedo mojado en jabón, ahora, podrán jugar a mover los colores de

la forma más divertida.

Si no puedes usar leche y colorante, puedes hacer el mismo experimento usando agua y

pimienta en polvo. No es tan bonito pero el resultado es igual de espectacular.

Tinta invisible

Jugad a escribiros mensajes secretos y dibujos que sólo se desvelan con el calor.

Para hacer esta tinta mágica invisible, sólo necesitáis zumo de limón, pinceles y un folio.

Escribid o dibujad con el pincel mojado en zumo de limón sobre el folio. Puede ser un mensaje

secreto o un personajillo. Dejad secar y, después, dadle calorcito al papel. Normalmente, esto

se hace con un mechero o cerillas, con cuidado de no quemar el papel, pero también podéis

hacerlo con una plancha del pelo, pasando el folio por ella.

Una opción diferente para hacer este experimento, es vaciar la recarga de un rotulador

cualquiera y lavarla bien bajo el grifo. Una vez sequita, la podéis rellenar con zumo de limón y

así tendréis un rotulador mágico de tinta invisible.

¿Cuál es la explicación científica de esta cosa de magia?

El zumo de limón es un ácido que oxida las partes del papel con las que tiene contacto cuando

le da calorcito. ¡Así de simple!




Galaxia en un bote

¿Os imagináis cómo es el espacio exterior? Nebulosas, estrellas… ¡No es necesario imaginar

más! Vamos a hacer una pequeña galaxia y a meterla en un bote.

Atrapareis un trocito de galaxia en un bote y podréis así observarla tal y como los grandes

científicos espaciales pueden verlas.

Sólo necesitáis un bote, témperas o colorante alimentario, algodón y purpurina.

Echad un poquito de agua coloreada con témpera en un tarro de cristal bien limpito. Encima

de ese poquito de agua, poned unos trocitos de algodón, un poco de purpurina y mezclad con

un palito. Repetid este proceso con agua de diferentes colores hasta llenar el bote… y disfrutad

de un trocito del espacio en vuestras manitas. ¡Sólo los grandes científicos tienen esta visión a

su alcance! Jugad a hacer diferentes nebulosas y galaxias de distintos colores. Cada una es

única, nunca salen dos iguales.

,

¿Mezcla o disolución?

¿Por qué a veces ponemos cosas en el agua que se mezclan con ella hasta desaparecer y

otras no? Buscad vuestras gafas y batín de científicos, que vamos a resolver este gran

misterio.




Vais a aprender de forma muy entretenida la diferencia entre mezcla y disolución. Hablamos

de disolución cuando, al unir dos componentes, obtenemos una mezcla homogénea. Por

ejemplo, cuando mezclamos leche y cacao en polvo.

Por el contrario, una mezcla supone que, al unir dos componentes, podemos distinguir aún uno

de otro y no llegan realmente a unirse. Por ejemplo, agua y aceite.

En resumen: si se mezcla del todo, es una disolución. Si no, es una mezcla.

¿Experimentamos para saber si estas uniones son mezclas o disoluciones? ¡Preparad el

laboratorio con los ingredientes que aparecen en este cuadro y experimentad para

completarlo

1 cucharada de…. 5 cucharadas de…. Agua Resultado: ¿mezcla o disolución? Sal Pimienta No Sal Nada Sí, un vaso

Nada Sal Sí, una cucharadita Aceite Nada Sí, un vaso

vinagre Nada Sí, un vaso

Proponed otras opciones locas y compartid los resultados con la familia.

Arenas movedizas

¿Cómo funcionan las arenas movedizas? Es extraño que cuanto más se lucha por salir, más

cuesta moverse y, cuanto más despacio, más sencillo resulta. Esto tiene que ser por algo…

¡Menos mal que sois grandes científicos y podéis averiguarlo!




Este experimento nos será muy útil en caso de que, explorando la selva o cualquier lugar

misterioso, caigamos en un pozo de arenas movedizas.

Necesitaréis preparar vuestro laboratorio con los siguientes ingredientes: agua, un recipiente

para mezclar, una cuchara y harina de maíz o Maizena (en proporción de 2 partes por cada

una de agua).

Echad en un vaso 3 cucharadas de harina de maíz y, poco a poco, añadid el agua mientras

vais mezclando con la cuchara hasta crear una papilla, no muy espesa. Recordad que la

proporción total es de 1 parte de agua por cada 2 de Maizena.

Observad que, al principio, cuesta remover la mezcla. Si lo hacéis despacio, es sencillo, pero, si

lo hacéis deprisa, la arena empieza a endurecerse y es cada vez más difícil. Cuando la notéis

muy dura porque os movéis deprisa por ella, poned un poco en las manos sin moverlas. ¡Se

escurre entre los dedos!

¿Pero, qué está pasando aquí?

Las arenas movedizas son un tipo de fluido llamado “no newtoniano”. Nos devuelven la misma

fuerza que aplicamos sobre ellos así que, cuanto más los presionemos, más nos presionarán.

Mmmmm… ¡esto es lo que les ocurre a los exploradores que caen en arenas movedizas!

Cuando más luchan por salir, más les atrapan. Hay que mantener la calma y moverse

despacito para poder salir.

¡Listos para explorar la selva (si hace falta algún día, claro)!

¿Son las fases de la luna o la merienda?

Un buen científico tiene que alimentarse bien y…. la verdad, la ciencia y la merienda no son

cosas incompatibles. Vais a aprender las fases de la luna mientras coméis galletitas rellenas.




.

Para realizar esta investigación necesitaréis una cartulina, pinturas y galletas Oreo (si no

tenéis galletas, podéis hacerlo con cartulina o papel de color blanco y negro).

La idea consiste en hacer un mural con las fases de la luna, como los que veis en las

fotografías, chupando el interior de la galleta hasta dejarlo como la fase de la luna que

corresponde.

Una vez hecho, se puede jugar a poner cada fase en su sitio correspondiente, para no olvidar

el nombre de cada una.

¡Ciencia deliciosa!

Globo que se hincha solo:

Soy capaz de inflar un globo sin tocarlo. ¿Os lo creéis? ¡La ciencia nos resuelve este misterio!




La reacción química que se produce al mezclar vinagre y bicarbonato genera un gas, el CO2,

que sube muy rápidamente y es el que infla el globo.

Para comprobarlo, necesitáis una botella, un globo (aunque un guante de cocina bien ajustado

a la botella os puede servir), bicarbonato y vinagre.

Echad vinagre en la botella y poned un par de cucharadas de bicarbonato dentro del globo.

Ajustad la boquilla del globo al cuello de la botella y dejad que caiga el bicarbonato dentro de

la misma, mezclándose así con el vinagre de su interior.

¡Empieza la reacción! Las burbujas de CO2 suben y suben hasta hinchar el globo.

¿Qué, se podía o no se podía? ¡Sólo hay que conocer bien los recovecos de la ciencia!


dÍas sin cole en casa...poe ejemplo: ɲĬloĄo verde-globo azul-globo rosa-globo amarilloɳ. si lo...

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