cultura y emociones

8/20/2019 Cultura y Emociones

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CULTURA Y EMOCIONES.Manifiesto por una Antropología de las emoiones !"#.

El presente texto está pendiente de publicación en la revista científicaFundamentos de Antropología.Dr. Josep Mª Fericgla2

Societat d’Etnopsicologia Aplicada i Estudis CognitiusProf. MGS de la FBG!ni"ersitat de Barcelona# Es algo ya sabido que las emociones constituyen un elementoesencial, a la vez paradójico y muy complejo de nuestra existenciahumana. Actualmente dedican sus recursos al estudio de lasemociones ramas de la ciencia tan distantes como la biología, lapsicología clínica y social, las ciencias de la comunicación, laneurología, la farmacología y la bioquímica, la etología, lasmatemticas y la robótica. !in olvidar el arte y las religiones que han

constituido el campo tradicional de socialización de las emociones"adems de la familia#. En sentido contrario, la antropología y lasociología, ciencias de la conducta que deberían tener las emocionesen su punto de mira fundacional, parecen ignorarlas, inclusomenospreciarlas, aunque no es ninguna idea absurda organizar lasculturas seg$n las emociones bsicas dominantes en cada una, mslo mucho que deriva de ello. %or ejemplo, para entender una culturacabría dirigir la atención tanto hacia su modelo emocional ideal , comohacia el modelo emocional real que regula las relaciones sociales y elcomportamiento. El cristianismo católico propone como emoción ideal

el amor, la fraternidad y la plenitud del gozo de vivir, pero elsentimiento real en el que encultura a las sociedades crecidas bajosus nubes es el de la profunda culpa creada por los judíos ytransmitida a trav&s del proceso primario de socialización. El miedo ala culpa y al castigo subsiguiente dominan el cielo cristiano.'ayamos, pues, por partes. En el presente artículo tratar& de caminarde lo ms simple a lo ms complejo, de lo ms arcaico a lo msactual y de una concepción esttica de las emociones en la cultura aotra concepción ms abierta y sist&mica. (omencemos por ajustar losconceptos )*u& es una emoción+ )(ómo hay que entenderlas desde

la antropología+ )ay espacio para una Antropología de lasemociones o, como afirmó cierta escuela francesa contempornea, esun campo caótico que carece de inter&s para la antropología+

I.Alguna idea inicial acertada sobre la naturaleza de las emocioneshumanas puede extraerse de la propia etimología del t&rmino.-uestra palabra emoción proviene del latín emotional , quesignificaba acto de remover/ y del verbo emotio, que venía asignificar alejarse y moverse. 0e ahí los juegos de palabraingleses actuales que parten de la raíz motion, moverse y emoción ala vez. %ara nuestros ancestros latinos, pues, la emoción tenía algoque ver con el movimiento, con la acción.

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%ara la biología, las emociones suponen un complejo procesohormonal, fisiológico e incluso muscular que sirve para establecer yasentar la vida en sociedad. %ara la psicología, simplificando, lasemociones suponen el impulso bsico de la mente consciente ademsde una fuente de patologías diversas si han sido mal socializadas.

%ara las grandes religiones 1 cristianismo, budismo, islamismo,hinduismo1 las emociones son el objeto central de su motivo deexistir, consistente en socializar ciertos impulsos emocionales 1 comola ira o el terror a la muerte1 para reorientarlos hacia el amor y elgozo de existir. En definitiva, para favorecer la vida en sociedad.0esde la antropología, las emociones deben entenderse como elcampo bsico sobre el cual se crea la red de conexiones y prcticassociales que devienen en sistemas y contenidos culturales. Lasemociones son la matriz sobre la que se mueve la vida social, sontipos básicos de conductas relacionales sobre las que se da la

comunicación necesaria para crear los diversos mundos culturales. Elamor, por ejemplo y en palabras del conocido biólogo umberto2aturana, es el conjunto de conductas relacionales a trav&s de lasque el otro, la otra o uno mismo surge como legítimo otro enconvivencia con uno mismo. El amor es el resultado de una forma derelacionarnos socialmente basada en el reconocimiento mutuo. Eneste sentido, las culturas que no alimentan el reconocimientos de losdems, de su realidad existencial, por parte del poder y de cadasujeto en particular, no son culturas amorosas aunque lo afirmen ensus declaraciones ideales.

%or otro lado, gracias el estudio de la mente y de la importancia quetiene en la construcción del mundo habitado por los humanos, cadadía aparecen ms datos que permiten afirmar, sin lugar a dudas, laexistencia de profundas relaciones entre el cncer y el sistemaendocrino "donde residen principalmente las emociones#/ entre elestr&s, las depresiones emocionales y el sistema inmunitario "amayor estr&s, menor eficacia inmunológica#/ entre las alergias físicas,hasta ahora atribuidas de forma gen&rica al polen primaveral, y lasfobias o miedos psicológicos, y un largo etc&tera ms que hoyconstituye el interesante objeto de estudio de la psicoinmunología.

%ara poner otra ilustración del peso de las emociones y de la vidamental en los procesos biológicos, cabe citar la importancia del factorplacebo en la vida humana. 3n estudio dirigido por el 0r. 4. 2atersondel eteran Affairs !edical "enter de 2iami, puso de relieve que el567 aproximado de los ancianos de 8lorida "EE.33.# regulan suhipertensión con un frmaco placebo que estiman eficaz. %or otrolado, . 4eecher, de la #arvard $niversit% demostró que con el uso deplacebos podía erradicar la tos nerviosa y el asma a un 967 de suspacientes. En estos casos, citados a modo de simple ejemplo de otrosmuchos que se podrían mencionar, la mente desde su ladoinconsciente y emocional 1 con un elevado condicionamiento cultural1

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es la que regula procesos somticos bsicos y las interrelacionessociales que derivan de ellos.Entrando en campos propiamente antropológicos, tambi&n sabemosde la incuestionable relación que existe entre la tradición oral detransmisión de conocimientos, ciertos patrones culturales específicos

y la forma de vivir las emociones. :a memoria est muy ligada a lasemociones y las personas socializadas en una tradición oral revivenlas emociones como guión mnemot&cnico de los aconteceres quesucedieron en su vida. Es decir, no recuerdan los hechos del pasadoen abstracto, como haría un occidental, sino que sus asociaciones sonde carcter eminentemente emocional. %ara recordar con detallealg$n evento pasado, evocan su mundo interior y reviven lasemociones asociadas a ello. A trav&s de los cambios emocionales escomo los pueblos de tradición oral pueden reconstruir los hechos ensu mente. !abemos tambi&n, por ejemplo y para volver a un

sentimiento ya citado, la gran relación existente entre el amor y lacultura. (ada sociedad genera una determinada ideación sobre laimportancia y naturaleza del amor y, desde luego, no se trata ni deuna emoción universal ni de una noción intelectual. El amor 1 sea loque sea que se entienda con este t&rmino1 puede concebirsecomo algo de valor, puede ser entendido como una emoción religiosa,como una atracción profana, como objeto de consumo y de interesesasociados, como... En algunas sociedades se entiende el amor con loque podríamos denominar con un gen&rico emoción espiritual, entanto que en otras es entendido como algo ms carnal/ e incluso el

enamoramiento es interpretado como enfermedad en diversas otrasculturas "8E;??@ y 5666#. :os orientales, en especial lacultura japonesa, afirman que los occidentales damos demasiadaimportancia al amor romntico, que no ocupa un lugar tan centralcomo el que le damos en nuestras culturas. En cambio, en el mundotradicional persa se daba tal importancia a este sentimiento que sedecía que las personas tenemos un camino fijado desde que nacemosy que tan solo el amor o la muerte nos desvían de tal camino.odavía hay un largo etc&tera ms que podría incluir el amor y eldesamor como justificación, en ciertas sociedades, de actos violentos,

suicidios, desajustes en sus prcticas cotidianas, locuras pasajeras osacrificios espl&ndidos y altruistas. B en otras sociedades se observasimplemente la inexistencia de alg$n comportamiento, culturalmenteconsensuado, asociado a lo que en castellano entendemos por amor.odo ello ilustra un campo de investigación antropológica de primeramagnitud que aun est por explorar.En este campo de estudio centrado en la consciencia y en lasemociones, existe un mbito de especial y fecunda profundidad parala antropología. 2e refiero al estudio de los Estados 2odificados de la(onsciencia "E2(# y a su larga relación con la cultura, el arte, lareligión, las curaciones, la historia de cada sociedad y las emociones.C ello tanto si los E2( estn inducidos por propulsores químicos

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"enteógenos, estupefacientes, estimulantes emocionales# como si loestn por t&cnicas biomecnicas "respiraciones especiales,deprivación sensorial, danzas extticas, ayunos místicos#. 2sadelante me referir& de nuevo a los E2( y a su gran relación con laeducación de las emociones en las culturas.

II.%or un lado, las emociones impulsan y dan forma a nuestrasreacciones frente a los estímulos que nos llegan/ en especial, frente alos dems seres humanos. %or otro lado, las emociones influyenprofundamente en nuestras percepciones y procesos cognitivos/ esdecir, que afectan la memoria, la capacidad de raciocinio, la dediscriminación. Adems, las emociones condicionan la forma en quecada ser humano establece sus relaciones con los dems y consigomismo. 0e ahí que podamos afirmar que las emociones están en la

base del mundo en que cada uno vive inmerso y que la desmedidaemocional, sea en ms o en menos, es uno de los pocos signosuniversales de anomalía.El principal problema teórico que presentaba hasta ahora el estudioanalítico de las emociones y su relación con la cultura era el mismointerrogante del huevo o la gallina, o del bipedismo y la inteligencia.)*u& sucedió primero en la historia de nuestra especieD el bipedismonecesario para usar las manos en menesteres ms complejos, lo cualimpulsaría el desarrollo del neocórtex/ o vino primero el desarrollo delcerebro que animó a aquellos no tan lejanos homínidos a levantar la

cabeza del suelo+ (on las emociones el problema es que, sabiendoque se trata de seales que alimentan y son alimentadas a su vez porla vida en sociedad )qu& estuvo antes, la expresión emocional comoseal o la vivencia subjetiva de cada emoción, tal vez auninexpresada+ 0e ahí la importancia que debe dar la antropología alproceso de enculturación de las emociones bsicas. %odemos reír,manifestar tristeza, incluso llorar para simular una emoción sin quehaya una vivencia subjetiva previa/ en sentido contrario, podemossentir una emoción muy profunda sin manifestar la menor sealexterna de ello. %ero tambi&n sucede que el hecho de expresar

arbitrariamente una emoción moviendo los m$sculos que lamanifiestan 1 reír o llorar1 , acaba despertando la propia vivenciasubjetiva. Así pues, la forma de expresar las emociones depende enmuy buena parte del proceso de socialización recibido pero )y lavivencia subjetiva emocional+ )(unto de ello adquirimos con losvalores sociales y cunto es connatural en el hecho de ser &umano+0e nuevo nos hallamos en el límite sist&mico de la vida humana,donde la biología y la cultura se entrelazan de forma "casi#inseparable para mantener viva la historia de la humanidad.:a biología ha puesto de relieve la existencia de un lenguajebioquímico molecular de las emociones, los p&ptidos 1 se conocenunos F6 p&ptidos distintos1 , pero la antropología no ha hecho todavíasu parte de estudiar cómo la cultura transforma estas pulsiones

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biológicas en modos de cultura, en seales comunicativas. En estesentido, parece claro que las culturas modelan y educan lasemociones por medio de los ritos y de los mitos. En especial de losritos. :a existencia de la vida ritual constituye la columna vertebral delas sociedades no occidentales y, si seguimos las propuestas el

algunos teóricos, los ritos tambi&n son el centro de las actividadescotidianas ms repetidas en la vida occidental. El verdadero rito enacción sirve de marco para realizar pactos sociales y, a la vez, comoestructura para vivir profundamente las emociones y educarlas GHI. Elproceso que cada colectivo usa para educar las emociones bsicas delos reci&n llegados y, a la vez, ensearles a sentir y a expresarsentimientos culturalmente codificados, es un punto nuclear paracomprender los factores esenciales del orden sist&mico que es cadasociedad. ;epito, las emociones constitu%en la red sobre la que seconforma la vida social.

III.Emoiones $ ulturas

!eg$n E.;. 0odds, reputado lingJista y especialista en el mundoclsico, los griegos ticos del siglo ' a.(. y sus predecesores jonios,se referían al yo con la palabra ps%'&(, traducible por el yoemocional ms que el yo racional. -uestros ya lejanos ancestrosgriegos consideraban la ps%'&( como sede del valor, de la pasión y lacompasión, de la ansiedad y del apetito animal. 0e hecho, nunca semencionó la ps%'&( como sede de la razón con anterioridad a %latón.Así por ejemplo, y citando el texto de 0odds, Anacreonte le dice a la

mujer a quien amabaD eres la duea de mi psyKh&/ !imónideshabla deD hacer pasar un buen rato a su psyKh&/ y en un epitafio enEretria, del siglo '< a.(., el personaje enterrado se lamentaba de quela profesión de marinoD da pocas satisfacciones a la psyKh&. %aralos griegos clsicos, pues, no existía ning$n antagonismo entrela ps%'&( 1 las emociones1 y el soma 1 el cuerpo. %ara ellos, lapsyKh& era meramente el correlato mental del soma. El intelecto eradenominado con la palabra gnome y ambas dimensiones, laemocional y la intelectual, se englobaban bajo un t&rmino medio,el p&rónema "0B00!, >???/ >HF1>H@#.

En este sentido, los griegos del siglo ' a.(. imaginaban la ps%'&( 1las emociones1 habitando alg$n lugar de las profundidades delorganismo, desde donde hablaban a su dueo con voz propia. :aemociones griegas no eran prisioneras del cuerpo, como promulgóms tarde el mundo cristiano, sino que eran entendidas justamentecomo la vida o el alma que anima el cuerpo. En &l se sienten a gusto,como en su propia casa. C no es una mala forma de describirlo.-uestra ciencia ha corroborado lo mismo a partir de los estudios depsicobiología y de neuroanatomíaD las emociones habitan el cuerpo deforma global, en forma de p&ptidos que se distribuyen por todos losórganos y tejidos. Es decir, todo el cuerpo responde al lenguajequímico de las emociones, las vive. A pesar de ello, los modernos

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estudios de psicofarmacología financiados por las grandescorporaciones farmac&uticas, solo se molestan en discriminar entreapetencia y rechazo ante un estímulo, medidos por el n$mero depestaeos, de latidos cardíacos y de alguna otra variable biológica,para realizar los estudios que determinarn la validez o no de los

psicofrmacos ansiolíticos.:os griegos clsicos, como la casi totalidad de sociedades nocristianas y no industrializadas, no creían en el ms all ni en undeterminado orden natural sino que sentían deliberadamente la vida.:as emociones primaban, eran la realidad a partir de la que seconstruían las relaciones con el mundo. Así por ejemplo, los alimentosy juegos que dejaban los griegos en las tumbas de sus muertos 1 yadesde tiempos neolíticos1 no era la respuesta a una abstractacreencia en el ms all sino que era una respuesta directa a susimpulsos emocionales inmediatos, sin que mediase ninguna teoría

abstracta sobre la permanencia de las almas. (omo cuando un nioda de comer tierna y cuidadosamente a su caballito de jugueteD seabstiene de matar su vivencia emocional aplicando criterios deracionalidad al objeto muerto/ a pesar de ello, el nio sabeperfectamente que el caballito es un juguete inerte.-o obstante la gran importancia de las emociones, estamos aun muylejos de entender en su totalidad qu& son y cómo se producen. Cestamos ms lejos aun de comprender hasta dónde configuran y sonmodeladas a la vez por cada cultura. !olo sabemos que juegan unpapel bsico en nuestra producción cultural, lo mismo que los E2(. A

pesar de ello, ha habido escasos intentos de clasificar las culturaspartiendo del tratamiento y socialización que dan a las emociones.2uy pocos trabajos antropológicos se han interesado en construir unaeoría (ultural de las Emociones y es en este sentido que la actualpsicología cultural1evolutiva est ocupando un territorio que hubieradebido labrar la antropología.Algunos de los pocos casos mencionables como precursores de unaantropología de las emociones son la antropóloga anglosajona ;uth4enedict quien, en su obra El crisantemo % el sable, propuso dividirlos pueblos en (ulturas de vergJenza y (ulturas de culpabilidad. :os

griegos clsicos y la mayoría de los pueblos indígenas americanos sonejemplos de (ulturas de vergJenza. En ellas, todo lo que expone a unhombre al desprecio o a la burla de los dems es vivido como algoinsoportable, llegando incluso a propiciar el suicidio. Lusto lo contrariode lo que sucede hoy, por ejemplo, con la mayoría de nuestrospolíticos quienes sobreviven impermeables al desprecio y a las burlasde sus ciudadanos. -o sienten vergJenza de sus actos a pesar de quepuedan ser objeto de la repulsa de muchos de sus conciudadanos.Esto sería la causa, siguiendo la propuesta de E.;. 0odds, de queestas sociedades de la vergJenza acabaran proyectando en laintervención divina tanto los casos de fracaso moral 1 tal podría ser lap&rdida de dominio sobre uno mismo, por ejemplo1 como tambi&n

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todos aquellos eventos externos que incitaban a la burla ajena 1 cualsería un mal negocio o una batalla perdida. :os dioses habrían sidolos causantes de tales actos vergonzosos y el ser humano solo era un juguete en sus manos. :os avatares que jalonan los veinte aos quedura el mítico regreso de 3lises a


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potente cactus visionario. A pesar de esta clasificación de las culturasentre apolíneas y dionisíacas, ;. 4enedict no siguió literalmente lapropuesta de 8. -ietzsche, sino que las definió de la siguiente formaDel dionisíaco persigue los valores de la existencia aniquilando lascadenas y los límites de la existencia/ en sus momentos ms

valiosos, &ste trata de escapar de los límites que le imponen sus cincosentido, intenta penetrar en otro orden de la experiencia "...#. Elapolíneo desconfía de todo eso, y con frecuencia sabe muy poco de lanaturaleza de tales experiencias. Encuentra los medios deproscribirlas de su consciencia "4E-E0?H9#.El punto clave de ;. 4enedict era analizar el trato que recibía laexperiencia exttica en unas y otras comunidades. En su opinión, lospueblos dionisíacos consumían psicotropos y eran buscadores deexperiencias emocionales límite, descontroladas. En cambio, lassociedades apolíneas apostaban por la norma fría, seguían el dictado

de sus patrones altamente formalizados relegando a unos pocosespecialistas, a chamanes y locos, la experiencia exttica "para uncomentario ms extenso sobre este importante punto entre lasrelaciones de la experiencia exttica y la cultura, sugiero leer lapropuesta de !tephen :arsen que resumo en mi libro 8E;??N, donde el autorpropone cinco etapas evolutivas para entender la relación entre elimaginario mítico o transpersonal y la cultura#.ambi&n se debe a uno de los padres fundadores de la modernaantropología cultural, 8ranz 4oas, el haber realizado importantes

observaciones sobre la dimensión cultural de las emociones y ladimensión emocional de las culturas "4BA!, >??5#. 4oas afirmó queuna diferencia importante entre las sociedades orales y lasindustrializadas era que las primeras parecían organizar su mundo apartir de asociaciones emocionales, en tanto que los modernospueblos con escritura parecen crear su mundo a partir deasociaciones lógico1racionales.Así mismo, sobre la importancia del miedo al ridículo comomotivación cultural cabe destacar la obra El &ombre primitivo comofilósofo de %aul ;adin, el entraable profesor californiano de

mediados del siglo OO quien fue el primer antropólogo que escribiósobre el determinante uso de enteógenos en las sociedades nooccidentales. Pl mismo fue, probablemente, uno de los primerosinvestigadores contemporneos que se sumergió en las visiones delpeyote para estudiar el peso real de este cactus psicotropo, que act$ade amplificador emocional, en las cultura y la vidas de los indios de-orteam&rica.2argaret 2ead y =regory 4ateson tambi&n constituyen dos conocidasy fecundas excepciones al desinter&s antropológico por lo emocional.2. 2ead investigó la hipot&tica universalidad de las propuestaspsicoanalíticas de !. 8reud, cuya obra leyó estando ella en plenotrabajo de campo, y las discutió en sus clsicos textos sobre la

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sexualidad en !amoa. En especial cabe mencionar algunos artículosescritos en sus aos ya maduros, los de >?F@ y >?@N. %or su lado, elbiólogo y antropólogo =. 4ateson puso parte de las bases de lo quellegaría a ser la eoría =eneral de !istemas y la eoría de la(omunicación, con especial &nfasis en los aspectos cognitivos de la

cultura. !u obra sobre la educación de los nios en 4ali es un modeloaun no seguido, y sus dos libros *asos &acia una ecología de lamente y $na unidad sagradason precursores de una aut&nticaantropología de las emociones.En la actualidad hay que mencionar algunos investigadores cercanosal tema que nos ocupa tales como 2. (ole, ;. =. 0QAndrade, L. 2.


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a cantar una misma canción melancólica durante horas y horas, aveces noches enteras, evocando el ser querido sin nombrarlo aunquetodo el mundo lo sabe "lo cual forma parte esencial de la socializaciónde la tuza#, y a veces llorando. Alguna mujer ha estado tambi&nentuzada, pero generalmente son los hombres quienes experimentan

este sentimiento. !er capaz de vivenciar subjetivamente la tuza,como toda experiencia emocional, no es solo una cuestión demodismos idiomticos sino que se trata de realidades culturalesinexportables.%ongamos aun otro ejemplo de la importancia de la cultura en elaprendizaje de las emociones, en su expresión y en la determinaciónque ejerce en la red social. %ara muchos europeos meridionales, laexpresión emocional típica norteamericana es percibida como algoinfantil, vacío y totalmente carente de temple. (reen que la mayorparte del tiempo, los norteamericanos reprimen sus emociones

verdaderas y se pasan el día con una sonrisa vacía en la boca. 0eahí que los sectores ms críticos contra la -ueva Era 1 a los que mesumo1 , vean en este movimiento norteamericano de la felicidadvacía de ser uno mismo sin dolor una tendencia narcisista, ingenua einfantil. 3na tendencia emocional propia de personas atrapadas enuna adolescencia permanente, con problemas de identidad y deexpresión de sus emociones, y muy en especial en referencia a laemoción del enojo o beligerancia. :os europeos meridionales, por suparte, valoran de forma positiva, en ciertos momentos, la expresiónde la ira/ consideran que un hombre viril debe tener arrestos, y ello

siempre contiene una buena dosis de rabia bien dirigida. %ero losanglosajones la reprimen en extremo, impidiendo que sus hijosexpresen la ira en todo momento. :a emoción feist% to befeist% est mal considerada en el mundo anglosajón. %or ello, estassociedades frías sienten que los latinos y mediterrneos se dejanllevar en exceso por las emociones, en especial por la ira.=eneralmente, el norteamericano medio no puede soportar laintensidad emocional latina, viviendo la expresividad mediterrneacon desprecio y envidia a la vez. odo ello, como es obvio, condicionalas relaciones sociales entre unos y otros. :a red social se construye

sobre las emociones y sentimientos específicos en que ha sidoenculturada cada sociedad. :o que ms nos acerca a los demshumanos no es tanto compartir un mismo idioma, un mismo estatussocial o habitar un mismo territorio, sino ser cómplices en las mismasexpresiones emocionales, en las mismas vivencias sentimentales. :acultura es una red cerrada de conversaciones que crean una realidadde coordinaciones de comportamientos y de coordinaciones decoordinaciones en lo que . 2aturana denomina emocionear. Elhecho de vivir en una cultura nos condiciona para vivir de acuerdo aemociones determinadas, para emocionear de una forma concreta yno de otra. -uestra experiencia del mundo es cultural, y usamos laexperiencia acumulada para explicar las nuevas experiencias por las

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que atravesamos/ de ahí que, como afirman las filosofías orientales,percepción e ilusión son indiferenciables. :as emociones estn en elimpasse entre la biología que hay en nosotros y que nos viene dada,y la cultura que nos crea y a trav&s de la que creamos el mundoAprovecho este punto de mi aportación para realizar una importante

aclaración terminológicaD entender( los sentimientos comoemociones básicas que &an pasado por el filtro de la consciencia %, por tanto, de la cultura. Los sentimientos son emociones secundariaso derivadas, culturalmente condicionadas % aprendidas, de las que el su-eto es consciente. Las emociones son solo seis pero lossentimientos derivados pueden contarse por centenares,dependiendo de la cultura de que se trate.

I%.&istoria de una amnesia

:as emociones son una parte esencial de los mecanismos que regulanla vida social. En este sentido, son una foco crucial de inter&s en elproceso de educación de todo pueblo humano y especie animal. %orello, llegados a este punto cabe plantearse la pregunta directa )porqu& la antropología se ha mantenido tan alejada del estudio de lasemociones+ )%or qu& las emociones se han entendido, casiexclusivamente, como fenómenos psicobiológicos y no han formadoparte de los objetos de estudio de las ciencias de la conducta y de lacultura hasta muy recientemente+A pesar de las avanzadas propuestas decimonónicas del psicólogo

Tilliam Lames ">N?6# y de (harles 0arRin ">N@5#, cuyos marcosteóricos sobre la naturaleza de las emociones iluminaron tanto elmundo humano como el animal, ha tenido que pasar un siglo 1 hastala d&cada del >?@61 para que la investigación de las emocionesiniciara su camino de una forma sistemtica "?@N/ >15#. astaentonces y con alguna contada excepción, ni la psicología ni labiología, y menos la antropología o la sociología, se habían interesadopor las emociones.:a reflexión sobre este vacío 1 que ahora no me alargar& en detallar1permite observar una de las facetas ms antropoc&ntricas de la

historia de las ciencias de la conducta. El campo epistemológico enque se ha cultivado la lógica racional es radicalD expulsa de sudominio toda hipótesis que comprometa su discurso sobre el serhumano, entendi&ndolo en tanto que perfecto y brillante creador delpensamiento lógico racional. 0e ahí el spero contraste de estos$ltimos tres siglos entre la razón y el sentimiento, entre la lógica y losinstintos, entre la razón y las emociones G9I.ace pocos, muy pocos, aos que se ha empezado a aceptarseriamente que somos animales y que como tales tenemos dos caras.%or un lado, est la cara de las emociones, de los afectos y de losactos irracionales. %or otro, est la de la capacidad de procesamientoanalítico. C ambas dimensiones de la mente humana se afectan

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m$tuamente, son caras de una misma moneda. asta los aos >?@61N6 la cultura oficial oponía emoción a conocimiento, lo emocionalfrente a lo proposicional ";?N?/ >6 y ss.#. 0e ahí, la soporíferapostura del estructuralismo franc&s de alejarse de las emociones porconsiderarlo algo irracional y caótico. En un tono ms anecdótico,

tambi&n cabe recordar que en muchos sectores de las universidadesanglosajonas y europeas, el epíteto emocional poseía 1 Uy aunposeeV1 connotaciones despectivas o, como mínimo, pocas vecestiene un tono positivo. En cualquier Academia de (iencias, decirle aalguien que es demasiado emocional implica una cierta acusación deque no sirve para la ciencia, de lo cual deriva una cierta acusaciónimplícita de que no sabe desarrollar su parte ms elevadamentehumana, la lógica racional. :a misma arbitraria oposición entre razónproductiva y clida emoción la observamos extendida hoy acategorías continentales.

0esde Europa, (anad y los EE.33. se habla del sur con ciertodesprecio para referirse gen&ricamente a poblaciones pocoproductivas, desordenadas y de sangre caliente. En definitiva,emocionales. ay un disco de conocido cantautor cataln Loan 2anel!errat titulado El sur tambi(n existe, en el que reivindica la validez deun sur emocional, rural, clido y artístico frente al norte industrial,urbano, racional y frío. Este contraste del norte frío y productivofrente a un sur emocional y desordenado lo observamos tanto enEuropa "Alemania, Escandinavia, =ran 4retaaW frente a lasdesordenadas y emocionales Espaa, %ortugal, ??@#. C tal oposición ha supuesto unaestrategia ms 1 Uy ciertamente muy efectivaV1 para apoyar el magnoproyecto de las ridas y controladas sociedades urbanas estatales e

industrializadas de la civilización occidental frente a cualquier otraforma de cultura humana. %or ahora, el Estado ha vencido a lassociedades. %ara las emociones y la naturaleza, cada persona es unser individual, concreto y complejo, definido por su sentir/ pero parael Estado cada persona es tan solo una cifra de la que se calculanracionalmente los impuestos que debe entregar y la intención de suvoto para perpetuar al propio Estado.Esta oposición entre emoción y lógica racional ha sido una de lasestrategias ms eficaces para consolidar, de una vez por todas, undesierto que separara el animal y el ser humano, la sociedadindustrial y la naturaleza. 0e ahí que la antropología y otras cienciasde la cultura y la conducta, atrapadas por esta manifestación de la

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soberbia humana, hayan prestado mayor atención al estudio de losmecanismos de control social que a los sentimientos, a las vertientesms codificadas y predecibles de la conducta que a los aspectos msvivos y cambiante vinculados a las emociones.%or ello, me alegro especialmente de impartir esta conferencia en una

universidad latinoamericana, donde las emociones y los afectos nohan sufrido este proceso demoledor de la industrialización y postindustrialización, y donde los arrebatos extticos o de ebriedad detodo tipo no son mal vistos sino causan dao ajeno. %robablementees aquí donde el terreno est ms abonado para que nazca unadeseable antropología de las emociones.

%.Emoiones 'umanas $ de otros animales

!iguiendo con la alienación de la antropología acad&mica al ignorar el

estudio de las emociones, hoy se observa una nueva situacióntriplemente paradójica. %or un lado, el estudio de las emociones fuerechazado a la vez por la psicología humana y por la etología animal,debido a un doble motivo. (omo he comentado, hasta los aos >?@6se consideraba que los animales carecían de emocionesporque &stas selectas vivencias debían ser patrimonio exclusivo delser humano. (onstituían el paisaje de fondo de un cosmos subjetivoque 1 se creía1 falta completamente en los dems organismossuperiores. :as emociones nos hacen humanos, se decíapopularmente. %ero en cambio y al mismo tiempo, las emociones

humanas no gozaban del favor de los científicos porque desvelabanel rostro menos humano del #omo sapiens sapiens, el rostro queentraba en conflicto con el dominio de la lógica racional, del anlisisproposicional que impulsaba el progreso. C este es el escolloprincipal, aunque no el $nico, que ha desviado cualquier intento deconstruir una teoría unitaria de las emociones "ibid , >H#D ni seestudiaron en los animales porque eran algo demasiado humano, nitampoco se investigaron las emociones humanas porque es nuestraparte vergonzosamente animal. (omo se dice en Espaa, los unospor los otros y la casa sin barrer.

En la actualidad, la situación ha cambiado rpidamente, y es aquí donde aparece el tercer pie de la paradoja. 8inalmente se acepta quelas emociones son un mbito propio 1 aunque no exclusivo1 del serhumano. Entre otros eventos significativos en este sentido y solo paracitar un ejemplo, en los aos @6 la psicología ve expandirse la escuelade la =estalt donde se empuja a los pacientes a vivir y expresar susemociones sin traumas, a identificarse abiertamente con ellas comocamino terap&utico, camino en el que los orientales nos llevan unadelanto de tres mil aos a los occidentales. Al mismo tiempo queesto se acepta por una mayoría acad&mica, la etología y laneurofisiología ponen de relieve que los dems mamíferos tambi&nson movidos por emociones. ambi&n ellos disfrutan de un sistema

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neuroanatómico y bioquímico que les capacita para tener vivenciasemocionales, y se observa en los mamíferos ciertas conductasexpresivas cargadas de emoción en contextos eminentementesociales, al igual que entre los humanos ";?NN#. Esto nosacerca ms aun a los animales y a nuestra vertiente natural. En un

momento u otro de la historia contempornea tenía que pasar.8inalmente, uno de los $ltimos ataques a nuestra propia soberbiacomo especie ha venido, una vez ms, dado por la investigacióncientífica. Estudios comparativos recientes sobre la composicióngen&tica de los chimpanc&s y los humanos estn convergiendo en laconclusión de que hay un mximo de un >7 de diferencia entre losgenomas de una y otra especie animal.


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psicológico1 hay un hecho evidente en toda conducta emocionalD enaquellas especies animales donde es incontestable la existencia deexpresión emocional, (sta contribu%e a moldear el entornocaracterístico de la especie. 3na teoría sist&mica y unitaria de laemoción debe partir del hecho de que, en buena parte, estos motores

del comportamiento esculpen el $melt o ambiente contextual quecada especie lleva impreso dentro y trata de reproducir en suentorno. Es decir, las emociones tallan el mundo de significados % deacciones posibles en que se mueve cada animal social inclu%endo,naturalmente, a los seres &umanos.0icho de otro modo, en la actualidad nuestra mente es interpretada,no como una suma de pensamientos, recuerdos y decisiones, sinocomo una prctica relacional en la que los objetos, los recuerdos ylos contextos se presentan juntos, formando parte de un $nicoproceso bio1socio1cultural de desarrollo. 0e ahí que numerosos

especialistas contemporneos en antropología y sociología usen lanoción de prctica en los debates sobre el pensamiento humano. Elconjunto de las prcticas de una sociedad proporciona el fundamentopara la comunidad y el discurso "(B:E, >???/ >H>#. oy son lasprcticas, en lugar de los roles, los constituyentes bsicos del sistemasocial. C, en muy buena parte, las prcticas estn movidas poremociones.0e esta misma concepción parte la noción de &abitus, propuesta por%. 4ourdieu hace ya dos largas d&cadas. El sociólogo franc&s defineel &abitus en tanto queD sistema de disposiciones duraderas

transponibles que, integrando experiencias anteriores, funciona entodo momento como una matriz de percepciones, apreciaciones yacciones, y hace posible el logro de tareas infinitamentediversificadas "4B3;0?@@/N51NH#. %ero debemos reconocerque detrs de las prcticas y debajo de los hbitos que definen y danforma a cada sociedad hay un propulsor emocional que talla eimpulsa la vida social, tanto en animales superiores como en la vidacultural de los seres humanos. El hecho de no haber reparado en ellohasta ahora se debe, probable y justamente, a que se trata de algototalmente esencial en la vida social compleja. El antiguo dicho

castellano de tiran ms dos tetas que dos carretas es una de lasexpresiones ms populares de este hecho, del mismo modo que elpez es el $ltimo en darse cuenta que vive dentro del agua. :a teoríade sistemas ha puesto de relieve que ning$n sistema puede incluirsea sí mismo, en su totalidad, en la explicación ni en la simpleobservación del propio sistema. !i nuestra matriz social bsica es lade las expresiones y vivencias emocionales )cómo incluirlo dentro deun marco analítico holístico+

%I.Una uerda de m(ltiple 'ilos

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En el caso del ser humano, debe distinguirse entre sentimientos,motivaciones y emociones. Este trío es el n$cleo propulsor delas prácticas que nos definen como animales culturales. Es tambi&nen este trío 1 sentimientos, motivaciones y emociones1 donde est elhilo m$ltiple y complejo que entrelaza de forma sist&mica la cultura y

la naturaleza biológica humana en una sola cuerda.3n ejemplo. !e sabe que el propulsor químico de diversas emocioneses la adrenalina. Es el combustible material del miedo, la rabia, elestr&s y la sexualidad. En este sentido, se han realizado diversosexperimentos de laboratorio inyectando adrenalina y placebo, por elm&todo del doble ciego, a voluntarios humanos divididos en dosgrupos. El grupo A est formado por sujetos que reciben adrenalina 1o placebo1 , sin saber qu& se les inyecta. 0urante el experimento semantiene el grupo en un entorno emocionalmente neutro, sin ning$nestímulo externo que induzca a reaccionar. %or su lado, el grupo 4

tambi&n recibe adrenalina 1 o placebo1 en las mismas cantidades yproporciones, pero durante el efecto del estimulante químico sesomete al grupo a ciertas situaciones experimentales, aparentementeespontneas, que les producen determinas emociones 1 agresividad,sexo o miedo. ras el experimento, se informa del efecto que produjola substancia en cada uno de los grupos. En el grupo A 1 sin estímulosambientales1 , las respuestas son diversas y dispersas, se constataque el efecto estimulante de la adrenalina alimenta las expectativaspersonales "un voluntario informa que con la substancia se ha sentidoms agresivo, otro que sexualmente excitado aunque no haya habido

ning$n estímulo erótico, otros informantes simplemente se hansentido incómodos o con dolor de cabeza#. En cambio, en el grupo 4sometido a cambios manipulados de su entorno, la respuesta es casiunnimeD la substancia ha producido una misma e intensa emoción 1producto de la manipulación ambiental inducida ms el propulsorquímico inyectado.Btros experimentos de laboratorio con actores imitando undeterminado estado emocional o con grabaciones de voz cuyaemoción debe ser reconocida por un tribunal, han permitido constatarque mientras la tristeza y la ira son emociones fcilmente

reconocibles, el miedo y la alegría son fcilmente confundibles"0A-ME;, >?N?#. El miedo se confunde a menudo con la sorpresa ocon la excitación y este hecho es consistente con que el hecho de quesea la adrenalina el propulsor químico de ambas emociones.3n individuo colocado en una situación dada y en un momentopreciso de su existencia reacciona a los estímulos sensoriales yquímicos a que ha sido expuesto de acuerdo a su experiencia anteriory a sus expectativas. 0icho en otras palabras, la emoción /% enespecial el sentimiento/ nace de la interpretación que cada uno &acede la situación en que está inmerso, no de la situación misma . Estehecho implica la existencia de una relación muy estrecha entre lasemociones, la cognición "en especial la memoria# y el entrenamiento

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cultural. !e trata de algo ya aceptado pero que hay que recordar amenudoD a pesar de la unidad primordial de lo material y lo simbólicoen los procesos cognitivos humanos, las personas vivimos un mundodoble. 'ivimos en el mundo factual y en el mundo mental queinteract$an crendose y modelndose uno al otro. (omo ya escribió

hace ya aos, en >?Y?, el antropólogo :eslie Thite, unos de lospadres de la antropología cognitivaD un hacha tiene un componentesubjetivo, no tendría significado sin un concepto y una actitud. %orotra parte, un concepto o actitud no tendría significado sin laexpresión abierta en la conducta o en el habla "que es una forma deconducta#. odo elemento cultural, todo rasgo cultural, por tanto,tiene un aspecto subjetivo y uno de objetivo "T?Y?/ 5HF#.;esumiendo las diversas propuestas y aportaciones realizadas hastaaquí 1 y otras no mencionadas1 cabe afirmar que tanto enantropología como en psicología y en neurociencias se acepta sin

discusión que los humanos nos movemos en situaciones concretasque podemos entender gracias a los esquemas internos que tenemosde ellas, esquemas que hemos adquirido por medio del proceso deenculturación. El contexto es algo que rodea a los humanos desdeantes de su nacimiento y, a la vez, los humanos llevan gen&ticamenteimpreso el entorno que proyectarn sobre el contexto modificndolo.:as personas somos, al mismo tiempo, objetos pasivos y sujetosactivos de la doble realidad que nos rodea. %or medio de las palabrasy del recuerdo grupal, el entorno arrastra inevitablemente a cada serhumano hacia un mundo de significados que lo modela y le permite

entender el simple contexto. (omo indicó el psicólogo A.;. :uriaD :aenorme ventaja es que su mundo Gel de las personasI se duplica. Enausencia de palabras, los seres humanos tendrían que ocuparse solode aquellas cosas que pueden percibir y manipular directamente. (onla ayuda del lenguaje, pueden ocuparse de unas cosas que no hanpercibido siquiera indirectamente y de otras que eran parte de laexperiencia de generaciones anteriores. Así, la palabra aade otradimensión al mundo de los humanos. :os animales tienen un solomundo, el mundo de los objetos y de las situaciones. :os humanostienen un mundo doble ":3;?NF/ pg. HY de la ed. original de

>?N>#.En este sentido, el mundo doble es el de las emociones y lossentimientos. Los sentimientos son emociones que &an pasado por larazón % la consciencia, son emociones culturalmente codificadas y,por tanto, tienen algo de artefacto, forman parte del mundo doblede los humanos. :as emociones, en cambio, forman parte del mundoprimero, del que se experimenta de forma inmediata. :ossentimientos pueden contarse por decenas o por centenares, dependede cada cultura, pero el n$mero y calidad de las emociones bsicas esmuy limitado. 'aría en relación a la escuela de que se trate, peropartiendo de mi propia experiencia tras observar ms de un millar depersonas que han vivido la explosión emocional casi pura que sigue a

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los estados de catarsis de los alleres de


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:os impulsos emocionales bsicos son pocos 1 miedo, ira, tristeza,gozo de vivir, placer orgsmico y trance exttico1 , pero los diversos ynumerosos sentimientos que brotan de estas emociones son productodel proceso de enculturación seguido por cada persona. %or tanto, setrata de un campo en el que la naturaleza y la cultura se entrelazan

formando un sistema $nico y bsico en toda red social. 3na cara de larealidad son los umbrales y formas que adquiere la experienciaemocional 1 objeto de estudio de la neurofisiología, la neuroquímica yla psicología1 , y otra cara distinta son las normas que regulan lacontingencia p$blica o social de las emociones y su expresión,transformndolas en sentimientos aprendidos que disfrutan de alg$nsentido 1 lo cual debería ser objeto de estudio de la antropología.:as emociones se consolidan en el &abitus o las prcticas. Pstasmodelan el contexto en que vive cada especie animal/ y el contexto asu vez 1 en el caso humano, contexto socio1eco1cultural1 modela las

emociones bsicas y socializa los sentimientos hasta transformarlosen los juegos de estímulo1respuesta que nos permiten y empujan a lavida social, cerrando así el sistema.A pesar de lo anterior, el estudio de las emociones sigue siendo unproblema esencial para la antropología. Este problema se resume encómo dar el salto de lo objetivo a lo subjetivo. :a antropología es unaciencia natural y como tal sólo puede fundamentar sus afirmacionesen hechos visibles y describibles, no en subjetivismos ajenosinterpretados por el antropólogo. :a tarea de interpretar lo subjetivocorresponde, en todo caso, al psicólogo.

:os procesos emocionales, como sabemos, estn constituidos por unaexperiencia subjetiva a menudo intransmisible de forma completa, ypor modificaciones químicas y fisiológicas objetiva que le sonsincrónicas, sin saberse aun qu& es primero. :a rabia, por ejemplo,en su dimensión objetiva est compuesta por una mímica facial, unacontractura de los m$sculos de las mandíbulas, un aumento del ritmocardíaco, de la respiración y de la presión arterial, etc. %ero en ladimensión subjetiva se experimenta la sensación de ira de una formaintransmisible ya que la expresión depende mucho de la personalidadde cada sujeto, y no se puede medir la intensidad de la emoción

vivida por la intensidad de su expresión. 3na persona extrovertidacomunica mucho ms su rabia que una persona introvertida, pero )sepuede decir que esta emoción sea ms acentuada en un sujeto queen otro+ !i se inducen arbitrariamente los cambios fisiológicos resultatambi&n activada la experiencia subjetiva. )*u& debe centrar laatención del antropólogoD la expresión de la emoción, la declaracióndel sujeto al margen de su extroversión, la interpretación del propioinvestigadorW+ Este es uno de los grandes problemas metodológicos aresolver.%or otro lado aun, en la vivencia y expresión de las emocionesintervienen importantísimos factores socioculturales. (ada culturapremia la expresión de determinadas emociones y castiga otras.

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Algunas emociones estn presentes desde el nacimiento, o aun desdeantes, pero otras aparecen tardíamente. En este sentido, se puedeafirmar que aprendemos a reconocer cada una de las emociones ysentimientos a la vez en nosotros mismos y a trav&s de los dems.%ara hablar de las emociones y usarlas para crear redes de

interacción social 1 ya que esta es su función1 aprendemos adesignarlas con palabras y por medio de la comunicación no verbal, ala vez que experimentamos su dimensión subjetiva.%or ello, la frontera con que topa la observación 1 no lainterpretación1 de las experiencias emocionales de un individuo porparte de otro, es justo la imposibilidad de conectar plenamente lasubjetividad del científico 1 que se supone sometida a reglas ycontroles de verificación1 con la subjetividad del individuo observado.!i nos trasladamos a las emociones observadas en otras especiesanimales podemos admitir que son distintas, pero eso es todo "lo cual

no nos sirve para el anlisis antropológico de las emocioneshumanas#. El hecho de que el animal no hable y no sea capaz decontarnos sus vivencias emocionales, es secundario. :o significativo,como apuntó Tittgenstein, es que si los animales hablaran de susemociones tampoco les entenderíamos. Así pues, ya que humanosprovenientes de realidades culturales distantes pueden reconocer lasemociones bsicas de otro Z pero no siempre los sentimientos1 es desuponer que la experiencia emocional probablemente sea uno de losuniversales humanos ms bsicos. Ello indicaría una dirección aseguir para buscar las leyes generales que regulan nuestra vida

natural en su interrelación con la cultura, el mundo primero y elmundo segundo, en expresión de :uria.Antes he apuntado que las emociones son triplemente paradójicas.%or un lado, nos impulsan a vivir en sociedad. !abemos que el nocompartir ni externalizar las emociones es fuente de aislamiento,enfermedad y tal vez pueda conducir hasta la muerte. !omosemocionales porque somos seres sociales y al rev&s. !entimosemociones, debemos compartirlas y a la vez ellas son el motor quenos impulsa a estar en sociedad. %ero por otro lado y al mismotiempo, son la expresión ms individual de cada uno y de cada una

de nosotros. :as emociones son la dimensión humana que nosproduce ms problemas si no la hemos socializado correctamente. -ose considera asocial quien sufre mermas cognitivas o físicas 1 porejemplo, tener mala memoria o andar cojo1 , pero sí es marginante elhecho de que alguien est& siempre rabiando, exttico o triste/ el quealguien no comparta nuestro cosmos emocional. %III.Ro)ots 'umanoides dotados de sentimientos* no de emoiones3na buena parte de los problemas que he apuntado en las líneasanteriores 1 y que nos debi&ramos haber planteado los antropólogoshace tiempo1 , ahora estn siendo tomados por otros especialistas

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científicamente lejanos a nosotros. 2e refiero a los matemticos y alos expertos en robótica y en inteligencia artificial.:os mejores expertos de todo el mundo en robótica se reunieron porprimera vez el mes de septiembre del 5666 en 4oston, en ungigantesco congreso, para hablar exclusivamente de robots

humanoides. A inicios del siglo OO< se han desarrollado ya diversoshumanoides capaces de emular funciones hasta ahora exclusivas delos seres humanos. Así por ejemplo, la empresa japonesa onda hafabricado el ya famoso humanoide bípedo %H. 2ide >QF6 metros ytiene un aspecto típicamente humanoD dos piernas con pies que lesostienen y le trasladan, dos brazos multi articulados con artefactosparecidos a las manos en los extremos... El %H es capaz de caminar,subir y bajar escalones, reconocer el espacio y doblar esquinas GYI.Esta capacidad de bipedestación implica un complejo reconocimientodel entorno y una auto evaluación permanente de las propias

capacidades respecto del entornoD )puedo subir este escalón+)2antendr& el equilibrio al inclinarme para descender+Btro caso es el del humanoide Tasubo, creado por el especialista?NY interpretó al pianouna sonata de L.!. 4ach acompaado por la orquesta -S. %or otrolado, el


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sufrimiento+ )En qu& medida la sublimación del sufrimientoconstituye algo esencialmente humano 1 ya que no se conoce en losdems animales1 o solo es una cuestión cultural que cambia+ :osexpertos en cognobiótica plantean que, en el futuro, un problemaimportante pueda ser cómo identificar, educar y disciplinar a los

humanoides. En definitiva, los mismos problemas que se plantea cadageneración de seres humanos con respecto a sus hijos. Adems deello, tambi&n observo otras coincidencias importantes.Ca en >?Y6, Alan uring propuso un test que, en su opinión, deberíaser superado por los robots para ser considerados verdaderoshumanoides. El test planteaba tres preguntasD ># )%uede un serhumano distinguir si habla con un humanoide o con otro ser de carney hueso+/ 5# (uando un humanoide y un humano se den un apretónde manos )advertir la persona algo extrao+, y H# )!e comporta elhumanoide correctamente, como un humano, incluso en ausencia de

humanos+!i me permito la libertad de plantear algunas comparacionesinterculturales, resulta que estas tres preguntas, aunque planteadasde distinta forma, son aproximadamente las que se hace cualquiershuar amazónico cuando se encuentra con otra persona desconocidaen medio de la selva GFI. En lugar de pensar en un humanoide, elshuar concibe la existencia de acánis o espectros de personas yamuertas que andan pululando por la selva. :os shuar realizan un baileagresivo, acompaado de un interrogatorio cantado y amenazante ala vez, para distinguir la naturaleza del ser con aspecto humano que

encuentran por la selva. !u sistema de creencias les ensea que laspersonas, al morir, vagan un tiempo por la selva con aspectohumano, pero solo se trata de un peligroso espectro sin emociones.%ara ellos se hace necesario descifrar qui&n es qui&n, por razones queahora me alejarían del tema que nos interesa. En el caso de loshumanoides parece una repetición de patrón G@I.!i el bipedismo es un problema complejo de resolver en loshumanoides, el pensamiento artificial y las emociones lo son muchoms. :os ingenieros se preguntan )cómo construir algo similar a laestructura abierta que es nuestra mente+ :as estrategias actuales

van por dos caminos. B bien fabricar robots que nazcan sabiendo/ esdecir, que salgan de la fbrica listos para desenvolverse en elcontexto que les tocar "por ejemplo, para cuidar ancianos senecesitarn humanoides poco inteligentes para evitar discusiones,pero muy hbiles en sus movimientos y en el reconocimiento delentorno para evitar choques con los ancianos que debern cuidar#. Bbien la estrategia se encamina a hacer humanoides1beb& queaprendan poco a poco, a trav&s de la interacción con los humanos.:as personas usamos ambas estrategias por igualD las emocionesbsicas y los instintos responden a capacidades innatasgen&ticamente dadas, en tanto que los centenares de sentimientos yafectos que manifestamos, y que nos sirven para la vida social

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http://www.etnopsico.org/textos/emociones_cultura.htm#6%236http://www.etnopsico.org/textos/emociones_cultura.htm#7%237http://www.etnopsico.org/textos/emociones_cultura.htm#6%236http://www.etnopsico.org/textos/emociones_cultura.htm#7%237


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inteligente, son adquiridos. A mayor riqueza de sentimientos, mayorinteligencia social.Aunque la etnolingJística se ha dedicado poco al estudio delvocabulario emocional en las diferentes culturas, nuestra capacidadexpresiva de emociones es extremadamente rica. %sicólogos de la

3niversidad de


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todas las religiones y chamanismos clsicos. El trance exttico ocatrtico es una implosión hacia las vivencias emocionales ms purasy limpias, probablemente previas al proceso de enculturación"implosión significa explotar hacia dentro#. En muchas culturasregionales la ebriedad es alimentada socialmente como mecanismo

emocional negantrópico, y alrededor de la embriaguez se da unaparte importante de la producción cultural. Así por ejemplo, en


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despedida de su trabajo por el solo hecho de buscar la ebriedad. :osrecursos embriagantes y las estrategias usadas en cada sociedadpara educar las emociones son definitivos para dar forma a la redsocial sobre la que se construye cada pueblo.En nuestras sociedades postindustrializadas la televisión y el cine son

los principales vehículos transmisores de valores, símbolos yaprendizaje emocional. al vez esta sea tambi&n la $nica funciónprofunda, la socialización emocional, que le queda a la estructurafamiliar despu&s de haber sido el centro de producción económica enel mundo agrícola, el punto central de la identidad individual enmuchas sociedades tradicionales y de haber sido tambi&n el principalespacio donde se educaba a los nios. En otras sociedades, como lamestiza latinoamericana, el uso del aguardiente o de otras potentessubstancias psicoactivas 1 ayahuasca, marihuana, borrachero obrugmansias, tabaco silvestre1 es central para amplificar los estados

emocionales y crear sentimientos de complicidad, solidaridad, tristezao alegría, rabia y orgasmo, lo cual permite a las personas educar susemociones por el proceso de vivirlas intensamente, compartirlas y, endefinitiva, darles una forma cultural. En estas sociedades latinas yclidas tambi&n es bsica la ebriedad aguardentera para enmarcar latransmisión de valores de g&nero.%ara acabar, voy a enumerar una corta lista de epígrafes importantecuyo estudio en profundidad daría pie a una aut&ntica antropología dela emociones de un pueblo indígena de la alta Amazonia yamencionado, los shuar.

+.Apuntes etnogrfíos de los s'uar $ su relai/n

on las emoiones $ los ente/genos:os shuar tienen diferentes t&rminos para referirse a las emociones ysentimientos que llenan su panorama, pero carecen de palabraalguna para decir emoción ni emocional en sentido abstracto,lejano a la propia experiencia vital concreta.

• En ellos se observa un gran control emocional, dedicandoimportantes esfuerzos a este objetivo durante el proceso deenculturación. !e puede decir, incluso, que tienen un

excelente control en el descontrol de sus expresionesemocionales extremadas. Así por ejemplo, cuando alguienmuere las mujeres del clan familiar lloran ruidosamente lap&rdida, pero a la vez que gritan fuerte y derraman lgrimasdesconsoladas se espera de ellas que relaten, con voz clara, lasvirtudes del muerto, su vida, su genealogía y dems. Estosupone una elevada educación emocional 1 ni bloqueo nidesvarío1 que permite exteriorizar y comunicar la tristeza deuna manera a la vez altamente codificada y emocionalmenteintensa. Es un mecanismo de elaboración del duelo que ennuestras sociedades ha desaparecido "dicho sea de paso,generando continuos trastornos psicológicos por carecer de

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camino de exteriorización y elaboración de tal tristeza#. A loshombres shuar no se les permite llorar tanto como a lasmujeres y deben educarse en la contención del duelo, no en elbloqueo ni en ignorarlo sino en la contención. !e espera deellos que no sean tan expresivos de la tristeza, pero que lo sean

ms respecto de otras emociones como la ira. • ;especto de la rabia se observa una expresión emocional

masculina que pudiera parecer muy alocada, pero que enrealidad est tambi&n muy codificada. (uando un hombre sesiente enojado dicen que est cogido por la ira. Entonces, elsujeto se queda quieto y va pronunciando una sola sílaba envolumen quedo 01am, am, am2V#. :a emite en tono grave, largoy suave pero claramente audible. Es una manera de decirD note acerques, estoy muy rabioso, estoy enfadado y soy

peligroso. :os hombres se enojan y son conscientes de suestado, pero pueden retener la expresión explosiva de suemoción todo lo que requiera la situación social. En ello haytambi&n una elevada educación emocional. En su 1am,am..3, tranquilo aviso de que Ucuidado, estoy muy enojadoV,hay un gran dosis de templanza. En sentido contrario, los shuarestimulan voluntariamente la rabia cuando es necesariodisponer de un buen caudal de esta emoción. (uando unhombre shuar debe ir a pelearse o a discutir con alguien, paralo cual necesita estar bien cogido por la rabia, come

abundante ají para que esta tremenda variedad de pimientopicantísimo le queme la boca y le aumente la rabia. odos loshombres shuar acuden a tal estímulo hortícola para acrecentarsu emoción de ira. Es como drogarse con adrenalina para, unavez estimulado, dirigir este impulso emocional hacia alg$n finprefijado. En este sentido, pues, la expresión emocional de losshuar es objeto de una importante y refinada educación 1 queno es lo mismo que una desconexión emocional1 consistente enno mostrar nunca sus emociones si no quieren hacerlo, ycuando expresan sus emociones lo hacen bajo una estricta

inspección del descontrol. :a expresión emocional crea la red derelaciones y debe estar bajo mano todo el tiempo. :os hombresmayores hablan mirando al suelo, a un metro de distancia, ycon una mano tapando ligeramente la boca para esconder almximo sus gestos inconscientes y su expresión emocional.(uando quieren, pueden permanecer como impenetrables ysilenciosas estatuas de piedra durante mucho tiempo, inclusosoportando dolor, pero cuando desean soltar sus emociones lasviven con una intensidad de expresión desconocida para lamayoría de occidentales.

• 3na parte muy importante y un potente recurso para suentrenamiento emocional proviene del consumo de ayahuasca y

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de otros enteógenos que, en este caso, cabe entenderlos comoamplificadores y desveladores emocionales. :os shuarconsumen la mixtura visionaria de la ayahuasca, diversasvariedades de brugmansia y tabaco, todos ellos potentesalucinógenos.


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permiten aprender y memorizar mucho ms material que enestado de vigilia cotidiano, por ejemplo hasta quinientas nuevaspalabras en un estudiante de idiomas/ B!;A-0E; y!(;BE0E;, >??5#.

• El consumo consensuado y ritualizado de enteógenos, tan

habitual en las sociedades no occidentales, supone unaexperiencia emocional de primer orden compartida por todoslos individuos que participan en ello. 0e ahí que la expresión detales profundísimas emociones compartidas sea casiinnecesariaD en todo caso, los mitos se encargan de estadifusión y los ritos permiten actualizarlas. :os enteógenos,substancias sagradas en la mayoría de las culturastradicionales, son amplificadores emocionales, pero no de suexpresión y esta es una de las diferencias bsicas con losrobots humanoidesD en ellos se busca que haya expresión, no

una vida emocional subjetiva. En este sentido, hay que admitirque la vivencia emocional profunda es, en su mayor parte, unarealidad relacionada con E2(. En este sentido, hoy son el cine yla televisión los mayores vehiculadores de formas de expresiónemocional/ a trav&s de estos medios de comunicación de masasse difunden nuevos sentimientos y nuevas formas expresivas. Cel cine induce un ligero, pero claro, E2(. El espectador 1 enespecial si es una buena película1 deja de vivir su contextofísico y psicológico inmediatos para vivir una realidadalternativa que hace suya pero que no es ms que un juego de

luces vacías proyectadas sobre una pantalla de cristal, decuarzo líquido o de tela sobre una pared. El televidente o elespectador de cine suda, se enoja, se deprime en extremo, ríe,le sube la presión sanguínea, el corazón se desboca, descubrenuevos sentimientosW seg$n el contenido emocional que lapelícula le est estimulando y socializando.


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conceptuales cada vez ms diminutos. %ara trabajar en unaantropología de las emociones es preciso hacerlo partiendo de lasaportaciones de la neurología, la fisiología comparada, la psicología yactualmente tambi&n la robótica. al vez así la antropología recuperesu vocación inicial consistente en ser una ciencia holística y

transdisciplinaria.!i la psicología evolutiva1cultural estudia cómo afecta la cultura en lamente, la antropología de la emociones debe estudiar como afecta lamente emocional en la cultura, qu& camino de transducción siguenlas emociones hasta convertirse en la red expresiva y de vivenciassubjetivas sobre la que se construye la vida social de los puebloshumanos. C el $nico camino seguro de exploración de quedisponemos hoy es la teoría general de sistemas y sus hijos degabinete, la teoría de la comunicación y la teoría del caos.!abemos que las emociones son procesos mentales y físicos abiertos,

muy complejos y bsicos en nuestras vidas. !abemos que tienenD a#una dimensión fisiológica "ciertas emociones suben o bajan la presiónarterial, estimulan las glndulas sudoríferas y los lagrimales, act$ansobre el sistema hormonal, etc.#, b# que tienen una dimensiónpsicológica "la vivencia que cada uno tiene de sus emociones#, c#sabemos tambi&n que tienen formas de expresión individualconsecuencia de la estructura de personalidad, y d# tambi&n sabemosque tienen una dimensión cultural resultado y causa a la vez delproceso de enculturación recibido. :os biólogos admiten que lasemociones tienen un papel decisivo en la organización de las

conductas y que estn regidas por un sistema químico autónomodentro de nuestro cuerpo, sistema tan complejo como el nervioso yque se comunica por medio de las macromol&culasdenominadas p&ptidos. %arece que cada p&ptido se encarga detransmitir un tipo específico de emoción en combinación con elentrenamiento facilitado por la cultura que estimula o inhibe ciertasvivencias y formas expresivas. Así pues, ya que todo nuestro cuerpoest lleno de receptores de p&ptidos cabe decir que las emociones,aunque popularmente se sit$en en la cabeza o en el corazón,realmente act$an en todo el cuerpo, estimulando ganglios, m$sculos,

aparato perceptual y dems. Es decirD las emociones nos afectancompletamente tanto a trav&s de la biología como de la cultura/mejor dicho, es en ellas que la cultura y la biología se entrelazan deforma de forma inseparable.ambi&n sabemos que la función de las emociones es actuar demecanismo de interrelación social. =racias a estos motores denuestras vidas nos sentimos atraídos o refractarios a un estímulodeterminado, actuamos cuando algo nos produce ira o rabia,tratamos de mantener una situación o una compaía cuando nosresulta grata y nos llena de alegría. C nos jugamos la vida hastalímites insospechados para tener una experiencia emocional exttica,sea por medio de substancias enteógenas o por medio de prcticas

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deprivatorias o de otro tipo. 0e ahí que, a pesar de no haberseconstruido aun una antropología de las emociones cabe reconocerque regulan nuestra vida sociocultural y tambi&n cabe reconocer quenuestra percepción de todos los hechos est matizada por la vidaemocional, de la misma forma que lo est nuestra capacidad de

reacción y nuestra conducta.3n individuo colocado en una situación dada, en un momento precisode su vida y en un contexto determinado, no reacciona a losestímulos exteriores con la misma carga emocional que en otromomento de su camino biogrfico o en otro contexto. En otraspalabras, la emoción 1 y en especial los sentimientos1 nace de lainterpretación de las situaciones, no de las situaciones en sí mismas yde ahí tambi&n que la vida emocional debiera convertirseinmediatamente en objeto de estudio prioritario de la antropologíacultural.

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4arcelona.;?NN, :as emociones en los animales, Luego, n$m.>>1>5, pgs. >51N>, 8acultad de 44AA, 4arcelona.;?N?, %rólogo, en 0A-ME;, >?N?.3;-E;, 'ictor, >??6, La selva de los símbolos, !iglo OO, pgs. 55@15Y>.

-otas al pieD

">#Este texto corresponde a la conferencia inaugural del ?YY. a sidoprofesor de antropología en la 3niversidad de 4arcelona y deetnomusicología en la 3niversidad de !alamanca. Actualmente esprofesor del 2ster en =erontología de la 8undación 4osch i =imperade la 3niversidad de 4arcelona y director de la !ociedad de

Etnopsicología Aplicada y Estudios (ognitivos, con sede en 4arcelona.Anualmente imparte cursos y conferencias en universidades dediversos países. a publicado >F libros y es especialista enantropología cognitiva, en etnopsicología y en ritualística. aanalizado en profundidad la importancia de los estados modificadosde la consciencia en distintas culturas, realizando trabajo de campoen el Surdistn turco, en el 2agreb "norte de Xfrica# y en (atalua.:os $ltimos diez aos ha estado investigando el uso de psicotropos enlos pueblos de la alta Amazonia, en especial entre los shuar. Esconocido por los alleres de


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los psicotropos 1tanto vegetales como las prcticas extticas engeneral1, pone de relieve que el ser humano ha consumido yconsume psicotropos como recurso para tomar decisiones y paraacceder a las fuentes originales y sagradas del saber dondeimpera el imaginario inconsciente, que no es sino este estado

cognitivo y emocional previo a la socialización desde donde sepuede recrear el mundo y la red emocional que nos sirva pararelacionarnos con &l. 4ajo estos E2( el sujeto puede ver suserrores y su situación original, sus emociones bsicas y corregir ocambiar sus decisiones. al proceso es un mecanismo deadaptación de primer orden. 2s detalle en 8E;??9, >??@y 5666

Sd0EASoietat d0Etnopsiologia Apliada i Estudis Cognitius

Apdo. de Correos 11.1"2

34343 5arelona 6 S7AINTel8 9:;

cultura y emociones

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