Los cambios en los procesos productivos a causa del cambio climático representan un importante ries-go para todas las actividades económicas. Sin em-bargo, el impacto es mucho mayor y contundente en el sector agropecuario, debido a diferentes razones que ponen en riesgo a este importante sector de la economía.

El riesgo es un elemento que subyace en toda activi-dad económica, no obstante, en todo lo que tiene que ver con la agricultura la inseguridad por pérdi-das en cosechas debido a inundaciones o sequías, impide que muchos pequeños y medianos producto-

res puedan mejorar sus predios y condiciones de vida. Si bien estos riesgos son difíciles de mane-jar en la actualidad, se espera que sea aún más grave en el mediano y largo plazo debido al cam-bio climático.

Ante esta realidad los agricultores deben tomar conciencia de la necesidad de realizar acciones que les permitan adaptarse a las nuevas realidades que traerá el calentamiento global y los cam-bios bruscos de temperatura. En ese contexto, juega un papel de vital importancia la capacidad de resiliencia de los productores agrícolas, en el sentido de que tengan la capacidad de recuperarse

adecuadamente luego de ser afectados por los efectos del cambio climático.

A nivel internacional, la Agencia de los Estados Unidos para el Desarrollo Internacional (USAID) ha desarrollado la iniciativa Cambio Climático Global que provee fondos con el objetivo de ayudar a los países y comunidades vulnerables a adaptarse y aumentar la resiliencia a los impactos actuales y previstos del cambio climático.

“Como el cambio climático impulsa un aumento en la frecuencia e intensi-dad de los desastres naturales, las comunidades que no estén implemen-tando medidas de reducción de riesgos, se encuentran cada vez con mayo-res dificultades para mejorar sus medios de vida y hacer frente a los impac-tos del cambio climático”, indica un documento de la organización.

Como parte de los esfuerzos que desarrolla USAID en el país para mejorar la competitividad de los productores agrícolas en el marco de la implemen-tación del DR-CAFTA, la entidad ha decidido aunar esfuerzos con la Funda-ción REDDOM, para iniciar un proyecto piloto con el que se desarrollará un mecanismo de seguro agrícola indexado.

Marzo 2013, Volumen 1, Año 1.

Proyecto USAID implementó técnica de Silo con pasto mejo-

rado para ayudar ganaderos enfrenten efectos sequías.

Contenido:

Lanzamiento pro-

yecto Seguros y

resiliencia climáti-

ca

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Extractos discur-

sos lanzamiento

proyecto seguros.

2

Pymes más capa-

citadas para com-

petir

3

Proyecto de apo-

yo a cacaoculto-

res

4

“El propósito de este proyecto es que este tipo de seguro sea un ins-trumento financie-ro más democráti-co y accesible que pueda alcanzar a los productores más vulnerables y permitir que los mismos tomen riesgos inteligentes para aumentar su resi-liencia en el largo plazo.

El Consejo para el Cambio Climático ve con beneplácito esta iniciativa de implementar este plan piloto para crear un producto de

Para la ejecución de este proyecto vamos a trabajar con la Fundación RED-DOM, una ONG dominica-na con una gran vocación de trabajo con los peque-ños productores agrícolas del país. La Fundación tendrá como socios a un grupo de instituciones de los Estados Unidos con

amplia experiencia en esta materia. Los técnicos de la Fundación se encargarán de seleccionar a los grupos de agricultores para iniciar las activida-des piloto del proyecto. Una vez concluida esta etapa, se espera que esta modalidad de seguros esté disponible para todos los productores del campo dominicano.

Recientemente, USAID y la Fundación REDDOM lanzaron el Proyecto de Resiliencia Climática y Seguros basados en Índices para los Pequeños Productores de la República Dominicana, con el cual se aplicará un seguro indexado que fomen-tará el uso de medidas de prevención de riesgos en el sector agrícola, y que contribuirá a que los pequeños productores agrícolas del país fortalez-can su capacidad de resiliencia frente a los impac-tos del cambio climático y reduzcan el riesgo aso-ciado a los desastres naturales.

En el lanzamiento de esta iniciativa participaron representantes de la Asociación de Productores de Piña, el Movicac, Cooperativa Anacaona, Cooperativa San Rafael, Asocain, Nacas, Consorcio Do-minicano de Competitividad Turística, y el IDDI, entre otras entidades.

Por el sector privado y de seguros participaron representantes de Seguros Universal, Seguros Ban-reservas, la empresa de corretaje de seguros QuantumGR, Sur Futuro, Induveca y otras entidades.

Por el sector público, estuvieron presentes Agrodosa, el Banco Agrícola, INDRHI, el Ministerio de Medio Ambiente, Consejo de Competitividad y la Oficina de Meteorología. Contamos con la colabo-ración además del Ministerio de Agricultura y el Consejo Nacional para el Cambio Climático y el Mecanismo de Desarrollo Limpio, quienes expusieron sus puntos de vista a favor de este proyecto de USAID a ser ejecutado por REDDOM.

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Amilcar Romero, Omar Ramírez, Alexandria Panehal y

Pilar Ramírez.

Desde diciembre 2012 hasta finales de febrero del 2013, la Fundación REDDOM ha entrenado a más de 500 pequeños productores del país en Buenas Prácticas Agrícolas y en Gestión de Exportación y Análisis de Precios, a través del programa +PYMES que ejecutan en conjunto la Dirección de Cooperación Multilateral, el Con-sejo Nacional de Competitividad, el Ministerio de Industria y Comercio y la Unión Europea.

Como parte de esa acción se han capacitado técnicos y productores de cacao, ganado, le-che, queso, café y vegetales a campo abierto y en invernaderos.

Los entrenamientos han girado en torno a los requerimientos básicos para la aplicación de buenas prácticas agrícolas, buenas prácticas de manufactura, en el entendido de que así se facilita que los productores agrícolas se con-viertan en proveedores más confiables para clientes más exigentes en el mercado interna-cional. En este renglón fueron capacitados 315 pequeños productores de diferentes lugares del país.

Al mismo tiempo REDDOM se ha enfocado también en la capacitación en exportación, ya que entiende que dentro de las diferentes cade-nas de valor agrícola este es un tema prioritario para asegurar el acceso al mercado internacio-nal de las PYMES agrícolas en el país. Para que el pequeño empresario agrícola tenga una participación proactiva y consciente en el nego-cio internacional, es importante lograr la com-

prensión de los esquemas de negociación im-perantes en el mercado internacional, los siste-mas de distribución en el país de destino de las exportaciones, los requerimientos del mercado meta, las opciones de colocación de los pro-ductos y realizar un análisis actualizado de los movimientos de los precios internacionales. En ese sentido han sido capacitados unos 230 pequeños productores agrícolas y exportadores en Gestión de Exportación y Análisis de Pre-cios en los rubros de zapote, vegetales orienta-les, aguacate y vegetales bajo invernaderos.

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Informativo Publicación mensual de Fundación REDDOM.

Vicepresidente Ejecutivo Jesús de los Santos.

Director Ejecutivo Pilar Ramírez

Especialista de Comunicación Tony Arias Gil

Av. Rómulo Betancourt #1516, Plaza Thalis, 3er nivel. Bella Vista, Santo Domingo, D.N., República Dominicana. Tel.: 809-338-0887

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Con el objetivo de contribuir al futuro sostenible del culti-vo del cacao en la República Dominicana, la Fundación REDDOM está implementando el proyecto para la Pro-ducción Sostenible de Cacao, a través del cual se impac-tará de manera significativa en el futuro de los producto-res de cacao del país.

Esta labor se lleva a cabo gracias al apoyo de la Agencia de los Estados Unidos para el Desarrollo Internacional (USAID) y Kraft Foods, en coordinación con la Confede-ración Nacional de Cacaocultores Dominicanos (CONACADO).

Esta iniciativa se está llevando a cabo en la comunidad de Corozo Abajo, un paraje ubicado en La Guázuma, Peralvillo, Provincia Monte Plata (Noreste). Entre sus metas están mejorar las técnicas de manejo de fincas para incrementar el rendimiento en el cultivo del cacao, mejorar los sistemas de manejo pos-cosecha para incrementar los niveles de calidad, incrementar las oportunidades de generación de ingresos a partir de cultivos adicionales y negocios en áreas rurales, así como incrementar la participación de las mujeres y la juventud en la producción de cacao y su cadena de valor.

Como parte de esta iniciativa se hizo un levantamiento de la situación de la zona a través de un estudio de línea base de la población meta, y se esta-bleció una base geo-referenciada de las fincas de ca-cao en dicha comunidad. Esta última herramienta es de vital importancia, ya que la misma permitirá mostrar con una precisión casi exacta dónde se encuentran las propiedades de los socios, un inventario de las carac-terísticas agronómicas de cada predio, así como datos generales y socioeconómicos de cada productor.