INDÍCE

INTRODUCCIÓN……………………………………………….. 3 EL PROBLEMA………………………………………………….. 5 EL PORQUE………………………………………………………. 11 LA SOLUCIÓN…………………………………………………… 23 EL PROCESO…………………………………………………….. 28 EPÍLOGO…………………………………………………………. 32

INTRODUCCIÓN Y la pregunta estuvo retumbando en mi cerebro desde el primer día que vi un promocional de Iniciativa México (el año pasado 2010) y medio entendí que es lo que se buscaba como primordial objetivo de un programa así... Y créanlo o no, aun hay momentos en que la pregunta regresa ¿tiene caso contar mi idea?, ¿tiene caso compartir mi visión? De entrada existe el escepticismo (normal creo yo) cuando por encima de todo se encuentra la historia de toda una vida en la cual mis bisabuelos, abuelos, padres y ahora yo no hemos tenido la capacidad de creer que las cosas puedan cambiar si no es de golpe, con violencia, sin miramientos ni diálogos. Y bueno mi carácter y mi forma de ver la vida nunca han sido de aquellos que miran las cosas pasar y por indolencia mental o conformismo o escepticismo (que bien pudiera ser realismo) no hacen nada. Así que decidí compartir mi visión, mi personal y quizás ilusoria solución para muchos de los problemas que aquejan al país. Después de todo escribía Fernando Schütte y Elguero para el financiero, pag 17, 2010-08-12... “Como quisiera que Iniciativa México no se quede, en el mejor de los casos, en un sano intento de lograr una causa común, en algo que nos una como mexicanos, en algo en lo que todos estemos dispuestos a aportar algo, en comprometernos con una o 20 iniciativas y que ello conlleve todo el esfuerzo mediático necesario, y las políticas públicas necesarias para lograrlo, total, soñar no cuesta nada”. Además un intento de ser escuchado nunca estará demás porque de una cosa estoy seguro y ya lo había escrito alguien más (John Lennon) “Pueden decir que soy un soñador pero... no soy el único” Agrego que “Iniciativa México” me ha servido como un móvil para decidirme a expresar mi visión de una problemática. Pero me queda claro de entrada que de ninguna manera puede convertirse en una solución ya que primero tendría que existir un verdadero idealista al frente de una potencia económica para que sin que nadie se lo pidiera le naciera por voluntad propia el dejar una vida de comodidad y sin tener ninguna necesidad correr todos los riesgos para hacer las cosas que podrían cambiar el rumbo y la forma de vida de un país entero. La idea aquí propuesta trata en la primera parte de explicar el principal problema que según mi visión aqueja al país. La segunda parte trata de explicar mediante el análisis de muchas de las soluciones propuestas y del entorno en el que se desarrollan el porque no han logrado permear hasta lograr un cambio de fondo y no de forma. La tercera parte trata de explicar la idea de una posible solución que se origina del análisis anterior y que intenta sortear los inconvenientes detectados y de asegurar el éxito si se cuenta con los

elementos de antemano comprometidos. La cuarta parte explica a grosso modo cual sería el proceso que hasta este momento me imagino como correcto pero que requiere del conocimiento y aportación de expertos en cada una de las áreas.

EL PROBLEMA La crítica a este apartado podría empezar diciendo -¿el problema? pero que quien escribió esto ¿no se ha dado cuenta que son muchos quizás innumerables los problemas que tenemos en este país?- y pues tendría yo que admitir que de entrada esto resulta cierto. Pero también es cierto que una buena parte de ellos se derivan de uno sólo y precisamente es ese problema el que pretende resolver esta propuesta. Me llevó un muy buen tiempo el organizar mis ideas a modo tal, no de reconocer ese problema por el que nos encontramos cursando actualmente en el país, sino de tratar de encontrar la manera de poder transmitir esta idea sin caer en clasificaciones de intereses personales ni de despertar el tan humano sentimiento de rechazo o descalificación automáticos. Porque... si a mi no se me ocurrió porque voy a pensar que a otro se le pudo haber ocurrido. Una buena parte de los seres humanos vivimos con la consigna de que nadie puede dar nada a nadie si no es por algún interés personal. Y resulta difícil creer en que exista alguien que no nos pedirá nada a cambio. Ha sido mucho tiempo el que he pasado observando acciones y reacciones de medios de comunicación, de redes sociales, de las tendencias de los correos que circulan en Internet y que me envían mis amigos, familiares y conocidos y en muchos círculos sociales en platicas informales y en un porcentaje (no calculado) pero evidentemente alto se encuentra un rechazo generalizado a todos aquellos que se dedican a la política. El cual es demostrado de diversas formas que van desde un sarcasmo a todo lo que dicen, hasta presentaciones o videos que circulan por la red y en los cuales ridiculizan desde la figura política de la que se trata hasta a los familiares y seguidores. Todo esto me ha hecho caer en la cuenta de que todos estamos concientes que la clase política no es de nuestro agrado porque finalmente sean quienes sean siempre terminan demostrándonos lo mismo... que las cosas se siguen y se seguirán haciendo igual porque así conviene a los intereses de los que mueven los hilos más allá de lo que podemos ver. O sea los hilos de los que tienen que ponerse una banda presidencial o dar la cara para hacer campaña o dirigir un discurso. Definitivamente ni es nuevo, ni es exclusivo de México el tener en un concepto ético y humanístico mediocre a la elite política y los que pensamos que esto es más reciente podemos darnos cuenta de lo global y de lo añejo al leer:

Es muy difícil hacer compatibles la política y la moral. Francis Bacon

La política es más peligrosa que la guerra, porque en la guerra sólo se muere una vez. Winston Churchill

No hay, no puede haber buenas finanzas, donde no hay buena política. Buena política quiere decir, respeto a los derechos; buena política quiere decir, aplicación recta y correcta de las rentas públicas; buena política quiere decir, protección a las industrias útiles y no especulación aventurera para que ganen los parásitos del poder; buena política quiere decir, exclusión de favoritos y de emisiones clandestinas. Leandro Alem

Ya sabe usted, una y otra vez en política las buenas intenciones se tuercen. Y las buenas intenciones se tuercen porque se gasta dinero de otros. Milton Friedman

La profundidad de los políticos rara vez pasa de la superficie. Philip Dormer Stanhope Que es una campaña política sino un esfuerzo concentrado para quitar a un grupo de políticos que son malos, y poner a otros que se cree que son mejores. La primer conclusión, creo que siempre es atinada; la segunda, es ciertamente falsa. Porque, si la experiencia nos enseña algo, es esto: que un buen político, en la democracia, es tan impensable como un ladrón honesto. Henry Louis Mencken

Las sociedades son apáticas y ni siquiera la evidencia de los hechos las conmueve o las mueve. Si no hay resistencia se puede llevar a las sociedades donde quiera. La sociedad civil, tan reclamada y aplaudida por políticos es la más manipulada y más allá está el caso de las multinacionales que desvirtúan las democracias. En democracia el ciudadano debe elegir, que yo sepa las multinacionales no se presentan a las elecciones y tienen el poder efectivo, real. Es una comedia de engaños. José Saramago

Todos somos culpables, pero si hubiera que repartir responsabilidades las mayores caerían sobre las clases dirigentes. René Gerónimo Favaloro Hay dos tipos de patriotas: el que ama a su país y el que ama al gobierno de su país. Lógicamente los gobiernos consideran más patriotas a estos últimos. Jaume Perich

No hace falta un gobierno perfecto; se necesita uno que sea práctico. Aristóteles Es peligroso tener razón cuando el gobierno está equivocado. Voltaire Ningún pueblo cree en su gobierno. A lo sumo, los pueblos están resignados. Octavio Paz

No se puede poseer mayor gobierno, ni menor, que el de uno mismo. Leonardo Da Vinci

Muy a menudo, en los cambios de gobierno, para el pobre cambia solamente el nombre del dueño. Fedro El gobierno no es una razón, tampoco es elocuencia, es fuerza. Opera como el fuego; es un sirviente peligroso y un amo temible; en ningún momento se debe permitir que manos irresponsables lo controlen. George Washington Nada es tan permanente como un programa temporal del gobierno. Milton Friedman

Con estas frases podemos darnos una idea de que la antipatía hacia la clase gobernante es universal y pertenece a todos los tiempos de la historia. Y ¿por qué si tanta gente en el mundo y desde todos los tiempos ha sido del conocimiento de los pueblos esto sigue siendo un problema? Bueno he aquí que los interesados en realizar estas labores se han organizado en colores, grupos, partidos o como queramos llamarlos y desde siempre se han dedicado a aprender los secretos y las sucias artimañas para conseguir y conservar el poder lo mas posible y están siempre en pie de lucha en contra de los rivales que se dedican a lo mismo y estas frases nos dan una idea:

Debe ser muy grande el placer que proporciona el gobernar, puesto que son tantos los que aspiran a hacerlo. Voltaire En política solo triunfa quien pone la vela donde sopla el aire; jamás quien pretende que sople el aire donde pone la vela. Antonio Machado El gobierno debe organizar la educación de modo que pueda controlar las opiniones políticas y morales.

Napoleón Bonaparte Este proceder de quien esta en el poder (no importando quien sea) ha tenido y tiene al pueblo en una franca desventaja. Porque mientras nosotros los ciudadanos nos dedicamos a aprender un oficio, una profesión para poder vivir, o simplemente mientras una gran mayoría se preocupa por aprender a infravivir y hacer infravivir a su familia... ellos, los políticos, como grupos u organizaciones llevan muchas generaciones que se dedican a aprender exactamente lo mismo: como obtener el puesto y el poder. La desventaja esta en que tantos años y tanta experiencia de vivir a costillas de los pueblos les han hecho escrupulosos especialistas en su oficio y difícilmente pueden permitir que existan cambios reales si no es por el camino de la violencia:

“Sin el apoyo de las bayonetas, ningún gobierno duraría 24 horas en el poder”. Librado Rivera Se han especializado tanto en poner a su servicio todo un aparato que incluye difusión, protección y sobre todo legislación que cuidan esmeradamente en términos de redacción para no dejar resquicio que los muestre vulnerables, que pareciera imposible lograr cambiar cualquier cosa que ellos no quieran que se cambie. El verdadero problema y quizás la inconformidad más generalizada sea que toda esa perfección ganada durante tantos años y tantas generaciones sólo sea usada con el único objetivo de seguir ganando elecciones y más elecciones. Y sacar toda esa experiencia y todos los conocimientos adquiridos para derrotar a sus contrincantes que buscan exactamente lo mismo y que se han perfeccionado exactamente en lo mismo. Y he aquí que podría alguien decir que todo esto aplica para los partidos más viejos y la verdad es que no, esto aplica para todos los partidos y todos los colores porque todos los partidos quieran o no, lo acepten o no lo acepten han emanado y se han formado a partir de ramas inconformes de los partidos mas antiguos y por lo tanto cuentan con la misma experiencia y la misma especialización. Y es así como podemos concluir que: dedicarse a pelear poderes permanentemente no deja tiempo para gobernar. Y entonces la función de gobernar que es para la que deberían de estarse especializando cada vez más es y ha sido siempre una constante improvisación porque realmente no es eso lo que les importa a los aspirantes...

“Los experimentos en política significan revoluciones” Benjamin Disraeli Por eso cuando nos damos cuenta a nivel mundial que existió un cambio significativo en algún gobierno del orbe siempre se llega al uso de las armas.

EL PORQUE… Para tratar de explicar el porqué tantos intentos aislados de cambiar las cosas hasta este momento no han tenido eco, tenemos que visualizar que las inconformidades son muy variadas y no se han centrado en el origen de todas ellas. El descontento general en contra de los gobiernos esta conformado entonces por varios factores, y este, de darnos cuenta de que nadie se dedica a gobernar es sólo uno de ellos (quizás el más importante). Pero existen factores más insultantes como los sueldos, las prestaciones, los bonos, los atropellos (redactados en reformas y convertidos en leyes). El constatar cuanto dinero que no les pertenecía y que amparados en las reformas que han hecho a su beneficio, por ley ahora les pertenece para ser tirado en campañas en miles de formas distintas, desde gorras, playeras, banderas, papel y más papel, etc. y muchos atropellos más. Porque si nos vamos a enfocar en detalles se puede mencionar de una forma muy simple: yo trabajo durante toda la vida para mantener una familia y tengo que ver que voy a hacer cuando ya no pueda trabajar. Con mi sueldo puedo comprar muchas cosas, algunas necesarias, algunas vitales y algunas opcionales. El gobierno actúa como uno de tantos vendedores a diferencia que el gobierno amparado en sus leyes me obliga a comprarle, mientras que otras empresas me ofrecen y ofertan sus productos. Las empresas gastan de su propio dinero para hacer promoción de sus productos. El gobierno elabora, reforma y redacta leyes para hacer uso de mi dinero para promocionar sus productos. Si con mi dinero yo quiero comprar un automóvil, al terminar de pagarlo me convierto automáticamente en el dueño del mismo y puedo hacer con el lo que yo quiera, incluso venderlo y recuperar parte de lo que invertí al adquirirlo. El gobierno me vende carreteras y el mantenimiento de las mismas para que yo pueda usar mi automóvil y se supone que si no soy el dueño absoluto, si soy el dueño en parte por lo menos para hacer uso de ellas. Pero he aquí que el gobierno me cobra por tener automóvil (tenencia vehicular), muchas carreteras son de cuota, al buscar lugar para estacionarme encuentro parquímetros y si no son parquímetros son ciudadanos que buscando un modo de vida se hacen llamar franeleros y que también cobran y pobre de aquel ciudadano que en un accidente cause algún daño a las vías de comunicación. Ya metidos de lleno en temas que pudieran ser pasados por alto o no los sentiríamos tan ofensivos si realmente la gente que se compromete a gobernar se dedicara a gobernar para que por lo menos trataran de desquitar una parte de lo que ellos mismos se pagan… cabría hacer la pregunta ¿Qué tienen de especiales como seres humanos? o ¿Qué cualidades y virtudes poseen para que estén tan sobre valorados en relación con el resto de la población? Pregunto y sin una pisca de sarcasmo ¿realizan mas

desgaste físico que un campesino o un obrero?, NO y entonces ¿por qué ganan más? ¿Son más inteligentes que el resto de la población?, por supuesto que NO, los científicos están trabajando en proyectos que requieren de la aplicación de métodos que demandan de análisis, observación y la aplicación de funciones cerebrales de un orden que muchos de nuestros políticos ni siquiera podrían imaginar, y entonces ¿Por qué ganan más? ¿Acaso son los dueños del dinero que manejan o del país que manejan? NO tampoco… irónicamente el dinero es nuestro, el país es de todos y además no conozco hasta ahora a ningún personaje de la política que no pregone con dotes de humildad que son nuestros servidores, que los contratamos (mediante nuestro voto) para trabajar para nosotros y aquí se puede redactar una pregunta más, ¿Por qué si ellos son nuestros empleados… ellos mismos escogen el sueldo que van a ganar sin que nosotros podamos modificarlo o hacerles descuentos? La respuesta es muy sencilla ellos hacen las leyes y ponen las reglas. Es por esto que la frase más socorrida de un político en función es “se actuara conforme a derecho”

Tanto en los medios de comunicación como en las redes sociales me he encontrado consignas y amenazas hacia quienes nos dirigen, frases como: “el pueblo ya esta cansado”, “ya estamos hasta la madre”, “no te quedes callado”, “has circular este correo para que todos se enteren”, etc. Sin embargo en donde circula la información más destructora de imágenes políticas y donde circulan más propuestas de soluciones e incluso en donde existen páginas web que invitan a participar a la ciudadanía para realizar verdaderas reformas políticas es precisamente en la red. Y todos los que tenemos acceso frecuente y utilizamos de manera constante las redes para comunicarnos e informarnos podemos en un momento dado y sin darnos cuenta pisar en el terreno fangoso que nos hace creer que un correo, un twitter, un comunicado de facebook o una página web podrán cambiar las cosas. Y si analizamos un poco nos damos cuenta que probablemente la cuarta parte de los mexicanos (el 25%) nos podríamos enterar de algo que se maneja en las redes y eso suponiendo que el 100% de los cibernautas mexicanos recibiéramos o abriéramos la misma información; pero he aquí que hasta este porcentaje puede formar parte de ese fango de ilusión en el que pisamos, ya que según datos del INEGI (hasta el momento que escribo esto) de esa cuarta parte de la población que ingresamos a los servicios de internet, el 43 % lo hace para consultas de corte académico, el 35.1 % para información general, el 21.4 % para chat, el 10.1 % para jugar o descargar videos y sólo el 40.1 % para correo y dentro de este rubro se consideran el face y el twitter de los cuales las cifras son aun menos alentadoras si pensáramos que por este medio podemos tratar de resolver algún problema del que estaríamos enterando aproximadamente al 2 % de la población mexicana ya que

según las estadísticas (hasta este momento) es un aproximado de 4 millones de ciudadanos que tienen cuenta en twitter y de ellos aproximadamente 2 millones son twiteros. Por simple experiencia personal de la gente que conozco, de aproximadamente 10 personas si acaso 1 cuenta con acceso a ese tipo de información y de los medios de verdad masivos como lo son la radio y la TV abierta, la mayoría sólo nos enoja y nos indigna más, ya que toda la información gira en torno a privilegios, abusos, burlas, riñas personales, fuero, bonos, verdaderas obras de teatro dentro del parlamento, descalificaciones y gastos y mas gastos de esa clase política, pero cuidando siempre de no involucrarse mas allá, ya que sólo se dedican a informar y a repetir que no podemos quedarnos callados y que el pueblo ya esta cansado y yo me pregunto y ¿qué? y que, que el pueblo ya este cansado, y que, que todos ya estamos enterados. ¿Eso va a cambiar las cosas? No soy político ni me interesa la política y como todos los ciudadanos comunes de este país bien me doy cuenta que los políticos en este y en todos los momentos de la historia han sido y son un mal necesario… “La política es el arte de buscar problemas, encontrarlos, hacer un diagnóstico falso y aplicar después los remedios equivocados” Groucho Marx En otras palabras alguien tiene que dedicarse a esas funciones pero... lo que todos podemos damos cuenta es que se necesita gente que se dedique a dirigir y gobernar a México y realmente no la hay. Cierto es que existe un presidente, gobernadores, diputados, senadores y muchísima gente más metida de lleno en la política y en puestos políticos pero que se dediquen a realizar el trabajo que les corresponde quizás por allí existan algunos que aun no son sometidos a hacer las cosas como el sistema político se los demandara en algún momento. Todo lo que me he podido dar cuenta que hacen de manera permanente los políticos es campaña y es lucha de colores, de nombres, de candidatos y de plataformas que en un momento dado deberían de servir para gobernar y dirigir pero la realidad es que todas esas plataformas de todos y cada uno de los protagonistas son plataformas para buscar la forma de conseguir mas puestos y mas poder que los otros colores porque finalmente todos van sobre lo mismo… “El político piensa en la próxima elección; el estadista, en la próxima generación” Otto Von Bismarck Es cierto, todos como ciudadanos tenemos nuestra opinión porque finalmente todos hablamos de cómo nos fue o nos ha ido en el baile.

Y sin esgrimir ningún color o tendencia y sin realmente hacer un análisis que englobe a todos los sectores ni todos los rubros yo podría decir que a mis 50 y algo de años de edad, si comparo mi niñez, mi juventud y mi época de estudiante existían más opciones para salir adelante antes que ahora. Sin embargo yo me pregunto ¿a que precio? No pretendo caer en calificar o descalificar a nadie de antes ni de ahora simplemente mencionar que siempre habrá sectores de la población que preferirían una crisis cada 6 años a cambio de un clima de paz. Otros más que prefieran la incertidumbre permanente a cambio de la certidumbre del cambio de incertidumbre cada 6 años. Otros más que opten por jugar el todo por el todo y sean promotores, participes o coparticipes del camino de la violencia. Otros que vivan el clima con la seguridad y la convicción de que las cosas van a cambiar cuando tengan que cambiar y que no vale la pena acabarse la poca vida que tenemos en preocuparnos de algo que no depende de nosotros; y así pueden existir mil puntos de vista para vivir, convivir e interpretar la sonata que escriben los que se dedican a la música. Una cosa es visiblemente cierta, el único precio que tienen que pagar los políticos por seguir haciendo política es permitir que el pueblo haga mofa y se ría de cada uno de ellos… “Si no fuera por el gobierno, no tendría de qué reírme” Nicolás Sebastien Roch Chamfort Pero en realidad es un precio muy bajo si tomamos en cuenta que han existido seres humanos profesionales en la comicidad y que por mucho menos nos han hecho reír… cantinflas, tin tan, palillo, resortes y muchos más que se hicieron cómicos a base de preparación y sufrimientos y que un político no tiene ni que estudiar ni que prepararse para hacernos reír y que no son cómicos de verdad sino que hasta eso nos lo deben. Nosotros los hemos hecho cómicos. Porque por lo menos hay que decir, criticar, hacer chistes, ridicularizar a quien tiene la sartén por el mango y no podemos quitársela… eso nos da cierto sentimiento de bienestar ante la impotencia de hacer algo más. Y es que el problema real no es tan fácil como pareciera o como pudiéramos ver en una solución inmediata: quitar del poder a los malos y poner en el poder a los buenos, si, realmente sería muy fácil pero… y ¿en donde encontramos a los buenos? Cierto existen muchos analistas políticos, en la televisión, existen muchos programas con panelistas que dan sus puntos de vista de uno y otro evento pasado, presente y futuro e infinidad de información con estadísticas, encuestas y números en donde nos dicen como somos, que pensamos, que preferencias políticas tenemos o pretendemos que funcionen en el país, en donde mencionan una y otra vez que el pueblo, que la gente ya esta cansada y en un momento dado hasta se olvidan quizás por código de que al aire yo no soy ni pueblo ni ciudadano y quienes votan y eligen

son los televidentes o los radioescuchas no los conductores. Y finalmente no me he encontrado un programa llámese panel o mesa de analistas políticos que nos aporte una solución, todo es un revolver la baraja y volver a repartir las cartas. Y no porque ellos tengan la obligación de resolver el problema pero si tienen la obligación de que si hablan de lo que ellos creen que pensamos, por lo menos un día tuvieran sentado en un panel o una mesa de discusión a un ciudadano común. Quizás así podrían tener más elementos de juicio que lo que las estadísticas dicen. Porque en realidad lo que las estadísticas y los números puedan decir, por su propia concepción pertenece al rubro de lo cuantitativo, sin embargo cualitativamente habría que decir que el sector más empobrecido del país se encuentra desde siempre no tomado en cuenta por quienes debieran. Y refugiado en la religión que por otro lado sólo los usa para subsistir en una política eclesiástica y que dicho de paso difícilmente tendrán a la mano a un nuevo Miguel Hidalgo o a un nuevo Morelos. Es difícil como mencione al principio versar sobre estos temas sin que llegue uno a exteriorizar los conceptos que se tienen de cada cuestionamiento y quizás sin querer ya di uno de tantos tropiezos y caí sin darme cuenta en el terreno de los calificativos o de las descalificaciones pero realmente no es esa mi intención. Uno de los objetivos que pretendo es puntualizar en lo más posible para tratar de contestar una pregunta: ¿las cosas serían diferentes? o mejor dicho ¿las cosas serían mejores? si las elecciones para cualquier puesto político ¿las ganan verdes, azules, amarillos, colorados, morados o un arcoíris diferente? Con esta pregunta se podría hacer un programa de más de dos horas en las cuales estaríamos elucubrando, ensalzando, descalificando y discutiendo acerca del si, del no y del tal vez y al final del programa estaríamos exactamente igual que al principio del mismo. Hasta ahora parece ser que las cosas cambian muy poco no importando quien haya conseguido ganar elecciones y no importando para que puesto se hayan disputado. Tal pareciera que todos los colores tienen la consigna de no tocar ciertos temas, de no modificar ciertas leyes que pudieran hacerles perder el poder. De hacer como que hacen pero sin dejar ningún resquicio que los vuelva vulnerables en manos de quienes necesitamos que las cosas cambien. Parece ser que todas y cada una de las ideologías que manejan los diferentes partidos tienen el mismo objetivo ganar, no gobernar, no cambiar. No tengo ni idea ni quisiera caer en emitir juicios a favor y en contra pero la verdad no recuerdo a alguien que se haya puesto a trabajar para nosotros, para el pueblo. Sólo recuerdo presidentes, diputados, senadores, alcaldes, regidores y toda una gama de personajes que no importando que color tengan se han dedicado a estar siempre en una campaña política permanente que tiene una continuidad impresionante porque apenas termina una elección, los perdedores se dedican (en lugar de trabajar) a señalar violaciones, alteraciones y manipulaciones del proceso electoral porque según su lógica no es

posible que la gente haya votado por fulano en lugar de votar por su candidato que siempre será el mejor. Por otro lado el partido ganador se dedica (en lugar de trabajar) a destruir y criticar a su antecesor si era de otro partido, y si era de su mismo partido se dedica a defenderse, a tratar de convencernos de que nuestra decisión fue la mejor y a culpar a los otros colores de que no le permiten cumplir todo lo que prometió debido a que se encuentran permanentemente bloqueando todo su trabajo. A nada bueno nos puede llevar el conocer a fondo las plataformas ideológicas de cada partido porque el objetivo de ganar dista mucho de aplicarlas. El objetivo de ganar para todos sigue siendo el mismo hablar bien de su partido y hablar mal de los demás. Tratar de ganar la nota y tratar de preservar el círculo cerrado de la clase política. Además en teoría ¿no todas las plataformas políticas buscan el bien de México y el bienestar de los mexicanos en todos los sentidos? Entonces ¿qué nos interesa conocer los contenidos de una y de otra? Y por otro lado ¿existe alguna plataforma política que contemple que un diputado al ser electo deje de pertenecer a un partido? ¿Existe alguna plataforma política que busque desaparecer las fracciones parlamentarias de color morado, negro, blanco, rosa o del color que sea como para que todos enfocaran su interés en resolver los problemas del país? ¿Algún partido tiene dentro de su plataforma el requisito de que quienes vayan a modificar alguna ley sobre educación sean educadores de los que saben las necesidades porque las han vivido delante de los alumnos y dentro de las aulas? “Sólo la experiencia cuenta, en cada terreno. Por eso creo que deben gobernar los que trabajan” Oliver Goldsmith ¿Alguien tiene dentro de su plataforma política que quienes se atrevan a modificar leyes que versen sobre salud, medicamentos, atención médica etc. sean médicos que hayan ejercido y hayan vivido en carne propia todas las vicisitudes de la profesión? No, no existe ni existirá una plataforma real y conveniente sea del color y del sabor que sea mientras ellos sean los únicos que tengan en sus manos modificar las leyes a su conveniencia porque eso sí, todo lo hacen “con estricto apego a derecho”. Una cosa es cierta, ellos tienen a su servicio al IFE al cual le han conferido una autonomía ficticia como esta: “EL CONSEJERO PRESIDENTE DURARA EN SU CARGO SEIS AÑOS Y PODRÁ SER REELECTO UNA SOLA VEZ. LOS CONSEJEROS ELECTORALES DURARAN EN SU CARGO NUEVE AÑOS. SERÁN RENOVADOS EN FORMA ESCALONADA Y NO PODRÁN SER REELECTOS. SEGÚN SEA EL CASO, UNO Y OTROS SERÁN ELEGIDOS SUCESIVAMENTE POR EL VOTO DE LAS DOS TERCERAS PARTES DE LOS MIEMBROS PRESENTES DE LA CÁMARA DE DIPUTADOS, A PROPUESTA DE LOS GRUPOS PARLAMENTARIOS, (leyes que se

redactan con una dosis de burla y atole para todos los estúpidos ciudadanos que llegan a pensar que ellos pensaron en nosotros cuando escribieron) PREVIA REALIZACIÓN DE UNA AMPLIA CONSULTA A LA SOCIEDAD Y bla bla bla…”, tienen a su servicio a los medios de comunicación (no para que digan lo que ellos quieren ni para que hablen bien de ellos) pero de una forma u otra los tienen a su servicio ya que los obligan a regalarles tiempo aire que no pagan y debemos decirlo que lo hacen con “estricto apego a derecho” y también pueden sancionar a quien no cumpla con esa obligación puesto que tuvieron el buen tino de modificar, completar, redactar y adecuar las leyes para gozar también de ese servicio gratuito y si no como podemos entender esto: III. LOS PARTIDOS POLITICOS NACIONALES TENDRAN DERECHO AL USO DE MANERA PERMANENTE DE LOS MEDIOS DE COMUNICACIÓN SOCIAL. APARTADO A. EL INSTITUTO FEDERAL ELECTORAL SERA AUTORIDAD UNICA PARA LA ADMINISTRACION DEL TIEMPO QUE CORRESPONDA AL ESTADO EN RADIO Y TELEVISION DESTINADO A SUS PROPIOS FINES Y más bla, bla, bla, y como lógica consecuencia (los que podemos tener televisión de paga) podemos estarle cambiando y cambiando de canal para no presenciar los estúpidos Spots que tal parece que quien los encarga, los revisa y los autoriza para su transmisión no tiene ni idea de la forma de pensar de los ciudadanos mexicanos hoy en día ya que al menos en lo que a mi y a la gente que conozco respecta, hasta la fecha cualquier comercial de comida para perros esta mejor pensado en su esencia. Tienen a su servicio al ejercito que gracias a que recibe una instrucción especial y cuentan con una vocación a toda prueba son capaces de dar la vida por los demás pero me queda muy claro que ninguno de los diputados o senadores o sus familias valen más que el soldado de menor rango o su familia; tienen a su servicio a elementos de seguridad personal, y dentro de los mismos edificios de ambas cámaras tienen a su servicio médicos por si alguno de nuestros sufridos legisladores tiene alguna dolencia por pequeña que esta sea mientras que los demás ciudadanos tenemos que salir a buscar quien nos atienda si tenemos algún padecimiento no importando que tan grave sea. También tienen a su servicio toda una pléyade de arquitectos, ingenieros, contadores, impresores, productores de medios de difusión, fotógrafos, etc. y además tienen a su servicio nuestro dinero y lo que no tienen en este momento a su servicio lo pueden tener en el momento que se les antoje, sólo necesitan reformar, cambiar o elaborar una nueva ley para tener a su servicio lo que se les ocurra y con “estricto apego a derecho”. Es tal el cinismo y la burla que actualmente se hace hacia la ciudadanía que recientemente se aprobó la candidatura de ciudadanos independientes para que puedan contender en elecciones y pido una disculpa de antemano pero con este tipo de acciones sólo nos dejan bastante claro el pésimo concepto que tienen de nosotros porque no hace falta ser un genio ni conocer los términos en que dicha iniciativa se convertirá en (derecho) ley para asegurar que el IFE no le dará a

ningún candidato independiente ni el 1% del apoyo económico que les regala a los otros partidos y reitero “todo conforme a derecho” porque eso si, tienen el cuidado escrupuloso de vigilar muy bien los términos tanto del atole como del dedo y aquí cabe hacer otra pregunta ¿Por qué la iniciativa que pide desaparecer a los diputados plurinominales que tiene mucho mas tiempo y que les sigue causando urticaria ni siquiera figura en la tan mentada reforma? ¿Para que queremos tantos diputados? “La experiencia siempre ha demostrado que jamás suceden bien las cosas cuando dependen de muchos” Maquiavelo Una cosa es segura, de todos nuestros políticos, nuestros legisladores son los que tienen todo a su servicio y todo a su alcance, ni siquiera el presidente tiene en sus manos lo que ellos tienen, porque son los únicos que tienen también entre todas las cosas la ley para hacerla y modificarla según favorezca a sus intereses y para discutir aquellas propuestas que tengan ganas de discutir y para hacer caer en el olvido aquellas otras que no les interesan o que no les convengan por su contenido. Y así mismo cuando alguna de estas tiene que ser discutida porque ya no quedo de otra, tienen toda la libertad de modificación para dejarla perfectamente bien redactada a modo tal que nada se les escape de las manos y sigan teniendo todo bajo control y con un “estricto apego a derecho”. La verdad resulta aburrido y fastidioso escucharlos hablar, y me tomo la libertad en este punto de generalizar porque todos utilizan la misma jerga. Cuando algún medio entrevista a cualquiera de ellos de cualquier color, de cualquier comisión, ostente el cargo que ostente dentro del parlamento, sus salidas son exactamente las mismas y las frases más socorridas que tienen siempre a la mano son “el estricto apego a derecho”, “el cumplir con las normas y estatutos”, “el cumplir en términos de la ley con los tiempos”. “Cuando los políticos no tienen la capacidad de gobernar, crean las comisiones” Konrad Adenauer Y aquí cabe hacer otra pregunta... ¿existe la posibilidad de que algún día reformen artículos y leyes que les quiten privilegios, les bajen sueldos y que las modificaran para bien de México y no de ellos?, ¡claro que no! y yo se que no estoy descubriendo nada nuevo porque la respuesta la sabemos ya todos, ese momento no va a llegar nunca mientras ellos decidan que modificar, cuando modificar, que partes modificar, en que términos redactar, en otras palabras: mientras ellos sigan poniendo las reglas de un juego que nos pertenece y en

el cual los únicos que podemos ganar o perder somos nosotros. Sería necesario que esta elite estuviera conformada por personas con un alto grado de honestidad y de ética para que pudiéramos ser tomados en cuenta y eso no va a suceder nunca porque como ya lo mencionamos la política y la moral son dos términos que los mismos políticos no dejarían en una coexistencia que pusiera en riesgo todo su estatus y modus vivendus. ¿Pero que? ¿Los políticos no son seres humanos? Por supuesto que lo son de origen. Y entonces ¿en qué momento se gesta la metamorfosis de humano a parasito? Antes de continuar debo aclarar que todos los políticos a lo largo de su trayectoria tienen varias veces frente a sí la disyuntiva de continuar con el proceso de transformación o de preservar su moral y sus sentimientos humanitarios. Podemos decir que existen 3 tipos de políticos: a) Los buenos políticos; que si se entercan en seguir siendo buenos políticos son considerados por la política como malos políticos y que requieren convertirse en malos políticos para ser considerados por el sistema como buenos. b) Los malos políticos que para el sistema no requieren ninguna conversión porque el perfil del buen político para la política es ser mal político para el pueblo. Y c) existen también los pendejos que se creen políticos y que comúnmente son aquellos que ostentan puestos que les permiten estar en contacto con un político para lamerle los pies y con el pueblo para humillarlo. La mayoría de los políticos tienen en sus inicios que hacer labor con el pueblo. Deben de hacer surgir la empatía con los ciudadanos y por ideales o por interés hacer cosas positivas para la gente y con esto asegurar un porcentaje de votos para el partido al que pertenecen y siendo útiles para los ciudadanos se convierten en útiles para su partido. A partir de esos primeros pasos (si quiere continuar dentro de la política) tiene que ir olvidando sus ideales, su interés y su preocupación por la gente y paulatinamente irnos sustituyendo por números, cifras, porcentajes y estadísticas con el objetivo único y prioritario para todos y para cualquiera de los políticos en activo… los votos. Nunca me han gustado ni la política ni la injusticia quizás porque las considero como sinónimos. En la política “los medios justifican el fin”. En la política no importa quien tenga la razón. En la política no existe el interés sano. En la política el lodo y el excremento son materias primas. La política es la degradación del hombre por el hombre mismo. Y sin embargo es un mal necesario que debería ser más necesario que fuera menos mal. Y existe gente que aun cree que puede haber buenos políticos y que trabaja de verdad en pro y a favor de buscar un bien y que considera que si se trabaja en equipo se pueden lograr los objetivos prometidos por los políticos pero que tarde o temprano tendrán que convencerse que la política no admite equipos de trabajo sino equipos de lacayos incondicionales para los cuales el trabajo sea cargar al político y subirlo al siguiente escalón. Desde hace más de 20 años mi esposa fue una de esas creyentes que

se tomo tan en serio la labor de los políticos que incluso invirtió parte de su vida y salud en realizar un trabajo de investigación en los 122 municipios del Estado de México para tratar de que los políticos desde sus inicios contaran con equipos profesionales de trabajo que aseguraran los resultados que la gente soñaba que se cumplieran en cada nueva administración. No tengo que explicar lo que hacemos todos sin excepción cuando sentimos una piedra en el zapato. Y mi esposa y su estudio de investigación se convirtieron en aquel tiempo en una de esas piedras, porque desde los niveles más bajos de una administración existen los compromisos de campaña y la corrupción. Y a pesar de tantos años y tantos descalabros, mi esposa con su desencanto y decepción crónicos aun de repente deja escapar por alguna grieta de la coraza que los golpes invistieron, una inflexión de optimismo, que termina con el desgano de la última desilusión para vulnerar nuevamente su espíritu de idealista y que con el siguiente revés seguramente se transfigure en un análogo. Yo, el incrédulo, pretendiendo darle más objetividad a sus sueños le escribí… “Quizás aun no te das bien a bien cuenta que es condición de la mediocridad y la ignorancia del ser humano pensar que tiene la razón en todo, juzgar y criticar de manera irresponsable y abrir la boca sin haber conectado el centro del lenguaje verbal con el centro del raciocinio; olvidar la sabiduría y el temple de ser niño y desterrar de su vida la capacidad de aceptar que siempre podemos aprender algo de los demás. La ignorancia y los complejos de inferioridad hacen que las personas tomen decisiones basadas en una soberbia y vanidad estúpidas e ilógicas, carentes del mínimo sentido común y rebosantes de una discapacidad en cuanto a generar algo útil, productivo y positivo porque llevan per se, la vanagloria del destete neuronal. Tú perteneces a otra clase, a una clase que se rige por la fidelidad y el compromiso; y el carácter para no enlodarte esta en tus genes. Puedes trabajar cerca de la carroña, pero nunca esperes que la carroña trabaje contigo o piense como tu porque los ideales y valores son completamente distintos. Para los carroñeros otros deben de proveer lo que ellos no podrían conseguir puesto que sus genes tienen una gran carga de bucaneros y parásitos. Puedes compartir con ellos parte de tu experiencia, entrega y sabiduría, pero jamás esperes que la valoren; recuerda que quien le da de comer perlas a los puercos, mas tarde las va a encontrar en el excremento de los mismos”. Quizás para muchos esto que acaban de leer suene como algo lleno de un rencor personal que nada tiene que ver con lo que estamos hablando pero es así como me ha tocado vivir las cosas de cerca y cualquiera que tenga dos dedos de frente puede darse cuenta que lo que yo expreso puede interpretarse como miel al lado de todo lo que circula en las redes y que se escribe y se expresa con sentimientos que dejan entrever malestar, molestia, rencor, odio y todo tipo de percepciones de desaprobación que han ido in crescendo y que las diversas formas de mostrarlo no han sido hasta este momento tomadas en cuenta por los aludidos porque probablemente

piensan que “el efecto mariposa” es sólo una película y se sienten seguros de que aquí en este país no pasa nada ni pasara nada mientras ellos sepan legislar con mucho cuidado de no poner el “estricto apego a derecho” en manos del pueblo. La polarización es tan tangible que solamente los que ya no pisan tierra firme y se desplazan flotando en su mundo de poder y de guerras partidarias no la consideran como un riesgo de estabilidad pero las muestras no pueden ser pasadas por alto permanentemente. ¿Por qué hasta ahora ningún movimiento de protesta ha permeado de manera generalizada hasta poner en riesgo la estabilidad del país? Resulta que vivimos en una homeomería que ninguna propuesta hasta hoy ha logrado sumar mecánicamente cada una de sus partes a pesar de que todas son homogéneas en su sentir hacia el gobierno. Y es así como nos encontramos marchas, protestas, plantones, convocatorias, etc. De las cuales conocemos parte del objetivo y de los sectores involucrados gracias a la difusión de los medios de comunicación. Y no se diga en las redes; encontramos todo tipo de invitaciones para participar desde encuestas hasta invitaciones para boicot de eventos o para dejar de pagar tal o cual impuesto. Sin embargo la participación en uno u otro está en relación directa tanto con que el objetivo sea de interés común y prioritario, como con las actividades diarias que cada uno tenemos que realizar para seguir subsistiendo. Estas son algunas de las razones que hacen que hasta ahora no exista una convocatoria que capte el interés general de la población como para que la participación en la misma logre que el 100% de la población ponga a temblar a las autoridades que por otro lado saben capotear y resolver cada una con estrategias de platicas, promesas y audiencias que deben de realizarse “DENTRO DEL MARGEN DE LA LEY” que una vez más enfatizo… de la ley que ellos hacen a su antojo. La mayoría de las inconformidades y protestas que se llevan a cabo y que por otro lado causan descontento en el resto de la población porque son problemas aislados y nos perjudican al cerrar calles y bloquear carreteras o accesos a instituciones y servicios, normalmente se resuelven con el paso del tiempo, con el cansancio y el hastío de los que protestan y con la paciencia sorda, sistemática y bien aprendida de las autoridades. La falta de apoyo hacia todas y cada una de las protestas que surgen a cada momento, no habla de que estemos o no de acuerdo con lo que se solicita, habla de problemas de tipo técnico: el desplazarnos hacia un lugar determinado para brindar el apoyo, el faltar a nuestro centro de trabajo, el tiempo que va a durar la protesta, los riesgos físicos que esta representa, etc. Y todo esto parece estar tan bien estudiado por nuestras autoridades que se ven muy seguras de que en México no puede suceder lo que ha sucedido en otros países porque para empezar somos una gran mayoría la que rechazamos el camino de la violencia. Pero esta simulada actitud de apatía no garantiza que el clima de rechazo hacia el gobierno siempre se va a presentar aislado, separado, sectorial y que eso de “la unión hace la fuerza” pueda

seguir siendo pasado por alto. Debemos recordar que las nuevas generaciones están siendo olvidadas y menospreciadas por nuestros gobernantes al grado de agruparlas y clasificarlas despectivamente con vocablos como el de “NINIS”, pues bien esta generación está siendo condenada por la falta de oportunidades tanto de empleo como de estudios. Y están pasando por alto que es una generación tecnológicamente dotada (con celulares que ya en su mayoría dan acceso a redes), que al no tener oportunidades tienen un objetivo en común y al no tener ocupación tienen todo el tiempo para poner de cabeza al gobierno de este país como se ha podido ver en otros países del orbe. Creo que este foco esta siendo muy subestimado y que sólo es cuestión de tiempo para que si no se busca resolver las cosas de manera pacífica tendrán que resolverse de cualquier otra forma porque cuando los que pueden hacer algo prefieren seguir haciendo las cosas de la misma forma antes de sacrificar sus privilegios, los que no tienen la posibilidad de cambiar las cosas mas que por el camino violento finalmente y tarde o temprano tomaran la única opción que los gobernantes obstinados no pueden controlar. Es cierto y no faltara quien pueda expresar que en otros países están peor en todos los sentidos: que tienen gobernantes y autoridades más corruptos, que hemos visto a través de los medios parlamentos enfrascados en riñas que no sólo llegan a los insultos sino hasta agresiones físicas entre los mismos integrantes, que existen países en que abiertamente llevan a cabo compra de votos en elecciones, que existen países con dictaduras férreas y amenazantes, que existen países que presentan más limitaciones y discriminaciones y que existen países que sufren más hambre, más desempleo, más de todo, y si es cierto. Pero yo puedo expresar abiertamente que no es de mi interés estar haciendo comparaciones como diplomacia para encontrar el bienestar mental y el conformismo porque exista siempre quien este peor mejor que nosotros. Personalmente no me interesa como están en tal o cual lugar o como se han dado las cosas en otras partes. Me interesa como hacemos las cosas aquí y como podrían hacerse mejor y sobre todo me interesa que tanto gobernantes como ciudadanos reconozcamos que todos somos exactamente iguales como seres humanos y que ningún gobernante debe verse ni debe ser visto como un ser sobrenatural que puede hacer y deshacer a su antojo (amparándose en el estado de derecho). Porque la realidad es que nadie vale ni una pisca más que otro y cualquier político está a la par como ser humano que el más pobre, oprimido y olvidado de los mexicanos.

LA SOLUCION…

Cada uno tenemos quizás una percepción diferente y valida de cómo solucionar los diferentes problemas que aquejan al país. La solución que aquí expongo trata sobre cómo se resolvería el problema que yo visualizo como principal y que es el causante de que todos los demás problemas no se ataquen, prevengan o resuelvan en tiempo y forma porque existe siempre por encima de ellos la lucha del poder. Si lo que impide a los diputados, senadores y presidente de la republica realizar su trabajo, sin más interés que el de centrar sus acciones y decisiones en mejorar las condiciones de vida de todos los mexicanos es que siguen perteneciendo a un partido y están obligados con un determinado color por seguir siendo miembros activos de uno u otro partidos, la solución es tan simple como desaparecer los colores y los partidos tanto en la presidencia como en las cámaras. Probablemente el sólo mencionar esta idea haga que algunos de nuestros políticos sufran de taquicardia, otros quizás sufrieran un ataque de hilaridad y como hay de todo en la viña del señor no será raro que haya quienes ni se tomen la molestia de leerlo o pensarlo por considerarlo una soberana y gran estupidez… pero… ¿no todos pregonan que quieren el bien de México? O cabría preguntarles ¿quieren el bien de México pero sin afectar sus intereses partidistas? O podríamos preguntar ¿si creen que para ellos es más simbólica la bandera de su partido que la bandera de su patria? Esta propuesta por supuesto conlleva el tener que legislar que cualquier mexicano que ocupe un puesto dentro de las cámaras o sea presidente de la república, presente al mismo tiempo de rendir protesta, su renuncia irrevocable al partido al que pertenece para iniciar a trabajar por México y por todos los mexicanos. El legislar puntos como estos obviamente debe de quedar en manos de expertos en cuanto a su redacción ya que se debería contemplar el no poder volver a pertenecer como militante a ningún partido una vez que se haya completado su labor para la que fue electo, a fin de evitar suspicacias y presiones en el tiempo que desempeña su trabajo. Si quisiéramos ser un poco sarcásticos podríamos decir que tendrían que renunciar a sus diferentes nacionalidades de partido para comenzar a ser mexicanos de verdad. Pero… quizás nos preguntarían: ¿cómo piensan estos inconscientes que podemos revolvernos negros, amarillos, azules, rojos, verdes, blancos y morados en un solo caldo si venimos de ideologías, plataformas y corrientes políticas tan diferentes? A lo que podemos contestar que lo único que nos interesa es que mexicanos trabajen con mexicanos y para mexicanos y los conceptos que tenemos de corrientes políticas no nos interesan dentro de los recintos, en donde sólo interesa lo mejor para México y los mexicanos. Después de todo tendrían primero que decirnos ¿Qué entienden por ideología? y cuál es la ideología con la que comulgan porque no todos los conceptos ni concepciones son iguales, aquí un ejemplo:

Ideología 1 Concepción del mundo que implica una determinada perspectiva de vida ligada a los intereses de las clases sociales, una escala de valores, junto con normas de conducta práctica. Ideología 2 Es una concepción falsa de la realidad que los académicos de las clases dominantes elaboran y difunden para sostener su poder. Ideología 3 Es una concepción del mundo vinculada a los intereses de los trabajadores (Ideología 1) que cuestiona toda falsa conciencia ideológica de la burguesía (Ideología 2). Y si preguntaran… ¿Pero y los que somos de derecha o de izquierda? Aquí van otros conceptos: Derecha Es el sector político más reaccionario de la burguesía, ligado a la defensa de la religión, el patrioterismo, el ejército y los grandes intereses monopolistas. La expresión proviene de la Revolución francesa de 1789, cuando la reacción se sentaba siempre agrupada en el ala derecha de la Asamblea Nacional. Izquierdismo Es la desviación en la línea política de un partido comunista que consiste en la ejecución de planes precipitados sin tener en cuenta la situación objetiva. El izquierdismo, decía Lenin, es un mal infantil de algunos partidos comunistas poco experimentados que tratan de imitar a los verdaderos revolucionarios sin una preparación suficiente, incurriendo en el subjetivismo, en confundir su propio entusiasmo con el ánimo de las masas, que son quienes deben llevar a cabo la revolución. El subjetivismo se manifiesta singularmente en desatar ofensivas en momentos en los que es necesario ponerse a la defensiva en espera de tiempos mejores, de que la crisis se profundice. A veces el error izquierdista no sólo consiste en un mal cálculo sino en la misma línea política, que no refleja las condiciones políticas del proletariado, que necesitan de una labor previa de preparación y formación para emprender luchas decisivas.

Y a la pregunta: ¿qué hay de nuestras carreras políticas? Bueno en esta pregunta yo colocaría el punto neurálgico real, porque sin lugar a dudas lo que más les podría preocupar, espantar o deprimir a los que realmente no lo hacen por ser servidores públicos en toda la extensión del significado… es lo único que realmente podría quitarles el sueño. Los ideales, corrientes, ideologías, etc. Pueden ser abandonados fácilmente y nos lo han demostrado todos aquellos que han formado alguna facción de su partido de origen: Facción — 1. En la etapa originaria del capitalismo, se denominaba así a un grupo de bandoleros o gente alzada en armas que vagaban por los caminos o las montañas y vivían de expropiaciones y asaltos. — 2. Actualmente, es una parte disidente dentro de una organización política que dispone de una línea de actuación diferente de la mayoritaria y pretende cambiarla o escindirse de ella. Y regresando al punto neurálgico que tendrían que superar quienes tuvieran después de servir a su país que dedicarse a otra cosa yo podría decirles: BIENVENIDOS A LA REALIDAD DE MUCHOS MEXICANOS que aunque contamos con una profesión no contamos con una jubilación ni mucho menos con una pensión vitalicia pero… ¿de que se preocupan? Supongo que la mayoría tienen una profesión y además eso de subir y subir escalones o escalafones para asegurar tener mas y mas sólo perjudica a los que los rodean y a la empresa, organización o país para el que se trabaja, y si no lo creen así que busquen un libro llamado “El principio de Peter” de Laurence J Peter y Raymond Hull, y que traten de leerlo para que entiendan que no es sano llegar al límite de incompetencia. Entre las ventajas de desaparecer fracciones, colores y partidos para homogenizar el trabajo, se encuentran: A) Que las campañas electorales serían ocupación exclusiva de los partidos políticos y no de los gobernantes. B) A los gobernantes, diputados y senadores no les distraería de sus labores la próxima elección porque no tendrían que defender a nadie ni atacar a nadie. No tendrían nada que esconder ni tampoco estarían pensando en sacar los trapitos al sol de fulano o zutano. C) Sus intervenciones en el estrado estarían más cargadas de aportaciones que buscaran el bienestar de todos que de ponzoña, resentimientos y derechos de replicas. Esta propuesta no busca que dentro de las cámaras nuestros congresistas beban del mismo vaso ni que canten el himno a la alegría tomados de las manos. Lo que de verdad se pretende es que los trabajos, las ideas e iniciativas que se presenten sean bien estudiadas y analizadas en sus pros y contras de aprobación, modificación, legislación, etc. sin que en ello intervenga el bloqueo, la negativa y el boicot. Con esto realmente todo ejercicio será realizado con el único objetivo de mejorar las cosas.

Según mi punto de vista si les ayudamos a nuestros gobernantes a quitarles los motivos que les hacen pelear en lugar de gobernar, podrían ocuparse meticulosa y profesionalmente de tratar de resolver todos los demás problemas que aquejan a nuestro país y a todos los que en el vivimos, que según pregonan todos y cada uno de ellos, es lo que realmente les preocupa y lo que todos quiere hacer. Agrego que los diferentes partidos dividen no sólo a los que obtienen beneficios directos de ellos, ya que hemos podido ver a lo largo de la vida política de México verdaderas luchas campales entre los fanáticos de un determinado color, que finalmente cuando su candidato gana, ellos, los que defendieron sus colores a costa de su propia vida son olvidados. Si pudiera llegar a cristalizarse una idea como esta creo que las cosas podrían mejorar para todos. Y en el caso contrario que esto se quede como un sueño guajiro más preguntaría y eso si con mucho sarcasmo: ¿De qué nos preocupamos los mexicanos? ¿Qué nos puede importar quien gane las elecciones? Si todos y cada uno de los candidatos tienen (según lo dicen) la solución para todo, ya que el que no pregona que hará de México una potencia económica, promete acabar con la corrupción, mejorar la educación, acabar con la pobreza, crear empleos para todos, escuelas y oportunidades, limpiar las calles y acabar con la inseguridad. Y realmente debemos de considerarnos privilegiados y afortunados de contar con aspirantes tan preparados y profesionales que en tan poco tiempo han encontrado la solución para todo, incluso para problemas que en otros países llevan décadas estudiando y aun no dan con la mejor salida para poner solución a cosas que nuestros próximos dirigentes ya superaron. Y digan lo que digan, y aunque el IFE les suplique y legisle en un aparente sano afán de que no se saquen la lengua, ni se rasguñen, ni se busquen sus trapitos en WikiLeaks, sabemos perfectamente que las campañas versaran en lo mismo de siempre; el partido que nunca ha estado en el poder, cifra su campaña en recordarle a los mexicanos que todos los problemas han sido causados por los que ya han ostentado el poder y no han resuelto nada. El partido que ya estuvo en el poder y que quiere regresar cifra toda su campaña en atacar mediante cifras y estadísticas al partido que está en el poder y enfatiza que los últimos años han sido los peores. El partido que está en el poder sustenta su campaña en reforzar con promesas la continuidad de programas que aparentemente han dado resultados. El partido nuevo que no tiene un formato definido trata de hacer una campaña de chile y de dulce tratando de hablar de lo que los demás no toman en cuenta. Y el presidente tratara en los próximos meses de hacer sin que lo que haga se preste a suspicacias, al grado de que si pudieran apresar al Chapo Guzmán, posiblemente tendrían que pedirle que los espere hasta que hayan pasado las elecciones ya que de otro modo su captura podría ser tomada como un acto político para favorecer y fortalecer la campaña de su candidato. Todo esto es lo que

deberíamos pensar en desaparecer ya que entonces las campañas tendrían otro tinte puesto que no podrían atacar a un presidente que no perteneciera a ningún partido. Y lo mismo versaría para todos los demás servidores ya que no tendrían colores y si hubiera ataques tendrían que ser individualizados.

EL PROCESO

El país nos pertenece a todos, sin embargo no está en nuestras manos. La mayor parte del tiempo el país con todos sus recursos naturales, recursos económicos, relaciones internacionales, recursos humanos, etc. está en manos de nuestros dirigentes para que hagan con él lo que mejor convenga a sus intereses. El mango de la sartén la tienen ellos porque la ley (que ellos cuidan) así lo marca. ¿Cuál es el momento en que se puede intentar un cambio o iniciar el proceso que aquí se propone? Existe un día en que el mango de la sartén se nos presta y sólo por unas horas. Pero no sólo eso sino que es un día que difícilmente se nos podría olvidar coincidir a tal porcentaje de mexicanos, que de otro modo el convocar a tanta gente a realizar la misma acción, sería prácticamente imposible. El día de las votaciones es un momento en que si se hacen las cosas de una manera escrupulosamente precisa y sin caer en errores de interpretación ni de violación de tantas y tantas leyes que han sido redactadas para maniatar todas las tentativas de influencia en las preferencias del pueblo… pueden dejar al descubierto un talón de Aquiles que normalmente se encuentra oculto. Es el único momento en que la afluencia de votantes (no manipulados) sino muy al contrario, libres, pero informados y conscientes, podríamos convertirnos en un gran caballo de Troya el cual no podría ser rechazado ya que ellos mismos lo convocan. ¿Qué se necesita para poder llevar a cabo un cambio así a plena luz, a la vista de todos y dentro del marco de la ley?

1) Identificar el momento preciso. Que como ya dijimos es el día de votaciones

2) Votar sólo por aquellos quienes se comprometan a que la primera acción que llevaran a cabo será realizar una reforma que considere como requisito imprescindible para fungir como presidente, senador o diputado el presentar su renuncia irrevocable a sus respectivos partidos.

Todo esto suena demasiado sencillo de hacer. Pero al mismo tiempo demasiado complicado, ya que exige sortear infinidad de obstáculos que las leyes tanto de la constitución, como del IFE y todas las que derivan de ellas en leyes de organizaciones a las que se les ha otorgado autonomía para regularse, y hacerlo perfectamente bien al entrar en esta fase operativa, o sea, dentro del marco de la ley. Así que estos dos puntos del proceso representan el momento de coincidencia, que dicho de otro modo significa la fuerza de una acción. Pero existe un antes y un después de esta acción. Una planeación y difusión antes de, y una verificación permanente de lo que se consiguió con la acción realizada después de.

La ley en general, está hecha por el hombre y es interpretada por el hombre. Cualquier ley tiene que pasar por un procedimiento largo y meticuloso cuyo objetivo es permitir, mandar o prohibir algo que cumpla con determinadas normas. Los estudiosos de esta rama buscan que cuando se redacta una ley, esta quede en los términos exactos que no permitan otra interpretación más que la que se pretende. Sin embargo cuando existe una discrepancia entre dos o más individuos y tiene que recurrirse a que un tercero decida quién tiene la razón, se recurre a una ley específica para el caso en particular y los representantes de las partes involucradas analizan hasta la última coma, acento y redacción en busca de poder interpretarla de una manera que su representado obtenga el máximo beneficio, tenga o no tenga la razón. Es así como en el antes se necesita: 1).- De una convocatoria para que todos acudamos a emitir nuestro voto. Convocatoria que el IFE se encarga de hacerla por y para nosotros (aunque de manera muy poco inteligente) pero al fin y al cabo nos recuerda mañana, tarde y noche y con mucho tiempo de anticipación, la fecha en que debemos de hacerlo. 2).- Se requiere también de mexicanos profesionales que sean especialistas en legislación para que puedan sortear lo que hasta este momento la ley dice y que puedan establecer de que manera y en qué términos se puede exponer o sugerir el por quién votar sin señalar a nadie y por quien no votar sin mencionar a ningún partido, candidato, corriente o ideología, sino únicamente mencionando lo que nosotros buscamos de cualquier candidato; que se comprometa a realizar la reforma apartidista que se busca en esta propuesta. Afortunadamente si ellos, los legisladores, los que llegan al poder, cuentan con equipos (exageradamente especializados) de asesoría para redactar y maniatar por medio de las leyes… existen miles de mexicanos que sin estar dentro de la política y especializados en lo mismo, son (en el buen sentido de la palabra) mucho más perros y más inteligentes que los que están adentro. 3).- Se requiere también de mexicanos profesionales de la comunicación que puedan (una vez realizado el análisis por los especialistas en legislación) hacer que ante los medios de comunicación abierta los candidatos se comprometan o de una vez por todas se desmarquen delante de todos ante una propuesta de esta naturaleza. Las frases, formas y términos para no incurrir en violaciones a la ley deberán ser bien establecidos por los mexicanos especialistas en derecho y los mexicanos comunicadores que estén de acuerdo tendrían que ver el cómo manejarlo como parte de la información, que quizás llegara a convertirse en un momento dado en información de interés general en sus diferentes espacios

informativos. Con esto dejarían al descubierto por qué personas nos conviene votar y por qué personas no nos conviene votar, y todo esto poder hacerlo sin incitar preferencias ni mencionar términos que los comprometan como comunicadores. Pareciera una tarea casi imposible si tomamos en cuenta que una palabra de más o un término mal ubicado dentro de una frase, podría ser tomado por alguno de los partidos o por el IFE como una violación a alguna de tantas leyes y por ende merecedora de una consabida sanción. Sin embargo también en este rubro personalmente reconozco que contamos con comunicadores con el colmillo tan desarrollado que incluso personajes de la política tratan de evitarlos en lo más posible porque pueden envolver y dejar sin habla o hacer hablar de más hasta a los dirigentes más pintados. Definitivamente tengo que reconocer que todo lo que aquí expongo es muy sencillo de escribir o describir pero llevarlo a la práctica involucra la voluntad de todos nacida de algo que nos convenza de que es factible poner en marcha. Una vez completada esta fase en donde estaríamos apoyando con nuestro voto a todo aquel que se comprometería a legislar nuestra propuesta, tendríamos que estar pendientes de que esta se cumpla. Porque de antemano sabemos que en tiempos electorales los políticos son capaces de prometer que van a conseguir para el país todo lo bueno, que van a terminar con todo lo malo y que en su gobierno el país llegara a ser una gran potencia económica y cultural como nunca antes lo hemos podido imaginar. Estas promesas pueden llegar a tal nivel que si no ponemos atención, fácilmente podemos confundir un spot de un candidato, con uno que actualmente podemos ver de una vidente en la que sale alguien diciendo que necesita trabajo y la vidente dice “lo conseguirás”, alguien más dice que necesita que la amen y la vidente contesta “lo tendrás”, y sale otra persona diciendo “necesito dinero” y la vidente contesta “lo recibirás”. Esta parte lógicamente lleva el riesgo de que todos y cada uno de los que prometieron algo antes de las elecciones le comiencen a dar largas hasta hacerlo caer en el olvido. Así que dentro de esta parte del proceso se requiere nuevamente del apoyo de todos los que realizan el trabajo de informarnos para que aquellos personajes que den muestras de incumplimiento a la promesa dada antes de las votaciones expliquen a la ciudadanía el porqué no se ha cumplido y que esto se busque hacer ante cámaras, micrófonos, entrevistas, paneles y todas las herramientas con las que nuestros comunicadores trabajan, saben, conocen y pueden explotar para evidenciarlos a uno por uno de ellos. Puede caber la pregunta ¿en que cambiarían las cosas si son evidenciados y cínicamente aceptan que no han cumplido por X o Y causas? Y la verdad que hasta ahí no terminan las cosas, el siguiente paso sería arremeter en lo que más puede preocupar a todos los políticos, al grado de que la mayor parte del tiempo sólo

piensan en eso y todas sus acciones van encaminadas a conseguirlo… EL VOTO. Si existe algo que ocupe 25 de las 24 horas del día la mente de un político, es el voto. El castigo de negar el voto a un partido o político se puede comparar como el castigo de negar a un niño que use su consola de video juegos por mal comportamiento; pero no sólo eso, con el castigo del voto podemos hacer que partidos que tienen todos los años en la historia de México pierdan (dentro del marco de la ley) su registro como partidos. El castigo del voto es comparable a la piedra que uso David contra Goliat y en ningún momento hablo de no votar o del voto nulo, voto en blanco o voto anulado, no, hablo del voto nutrido, hablo del voto cuantioso, de proporciones históricas por lo profuso, hablo de algo tan excedido que puede hacer que cualquier partido político se dé cuenta de que ya estamos tan hartos, que buscamos una última opción de cambiar las cosas sin que se llegue a detonar ningún tipo de arma que no sea la del raciocinio.

Héctor A Díaz Gómez

EPÍLOGO

No soy como ya lo mencione, ni político ni me interesa la política. Pero como una gran mayoría de los mexicanos ya me harte de que nadie se dedique a gobernar por estar siempre peleándose las riendas de un país tan noble por su gente… que a pesar de estar constantemente al garete sigue subsistiendo. De una cosa podemos estar seguros, el cambio va a llegar en algún momento. La generación que va a cambiar las cosas ya vive entre nosotros y sólo es cuestión de tiempo y de oídos sordos por parte de las autoridades. Personalmente no tengo idea si una propuesta como esta sea viable. No tengo idea de cuáles serían las consecuencias de desaparecer los partidos en ambas cámaras y en la presidencia si es que algo como esto llegase a funcionar. Quizás los analistas políticos pudieran prever dichas consecuencias, quizás todo esto no es ni viable ni posible ni razonable, pero siempre he creído que no sólo debemos criticar y destacar problemas o desatinos sin proponer ideas de factibles soluciones. Créanlo o no, esta es la percepción de un ciudadano común, sólo una. Como esta existen millones de mentes en nuestro México, cada una con su forma muy particular de mirar las cosas y de idear resolverlas. Si los políticos no quieren hacerlo alguien más lo hará por ellos. Atentamente:

Patria Es sinónimo de nación. Nación Es una comunidad humana estable y asentada en un mismo territorio que habla el mismo idioma y dispone de una misma cultura y de una misma historia en común. Oligarquía Es un reducido sector social estrechamente unido que controla todos los resortes del poder del Estado gracias a su posición dominante en la economía del país. Oportunismo Es la actuación política adaptativa y sin principios de cuantos aspiran a vivir de los presupuestos públicos enarbolando lemas demagógicos. Lo que singulariza a los oportunistas es la permanente explotación del momento político concreto en provecho de sus mezquinos fines y, aunque invocan la defensa de los intereses de una generalidad de personas, sólo pretenden encumbrarse entrando en alianzas y pactos con organizaciones variopintas. Partido Es la forma de intervención política de las distintas clases sociales en la época capitalista. Los partidos políticos nacen con el capitalismo al crearse los parlamentos como agrupaciones de intereses de los diputados burgueses que lo componen. Para dirigir el nuevo Estado, las revoluciones burguesas crean asambleas legislativas donde la nueva clase ascendente trata de conciliar sus intereses y dirimir sus conflictos internos.

Populismo Es una corriente ideológica burguesa que pretende ganar el favor de las masas con invocaciones demagógicas, habitualmente de carácter nacionalista o apelando a un supuesto interés común de todas las clases sociales. Radicalismo Es la actitud izquierdista, propia de la pequeña burguesía, que aparenta ademanes verbalmente extremos para esconder su claudicación política. A pesar de su apariencia, el radicalismo es una forma de reformismo que pretende aglutinar el descontento de las masas populares para negociar en interés de la pequeña burguesía que lo sostiene. En muchas ocasiones, los radicales se adornan con frases estereotipadas tomadas del comunismo o del anarquismo para encubrir su nula actividad revolucionaria, ya que su presencia es puramente literaria, propagandística o teórica. Derecho Es el conjunto de normas jurídicas sancionadas por el Estado a través de las cuales la clase dominante impone su dominio político. Elitismo Es la teoría reaccionaria burguesa que considera que una minoría de hombres especialmente cualificados debe dirigir la sociedad. Es una consecuencia del individualismo burgués, que no confía en las masas pero considera que existen superhombres y que deben ser ellos, los más selectos, quienes detenten el poder.