vayamos y poseamosla

8
En el libro de Deuteronomio encontramos a los hijos de Israel acampando en las planicies de Moab al lado oriente del Rio Jordán y de la Tierra Prometi- da. En este lugar, Moisés les recor- dó la Ley, les renovó el pacto y los retó a serle fiel a Dios cuando hubie- ran entrado a esa gran tierra. Ha- bían vagado en el desierto durante cuarenta años mientras miraban co- mo las generaciones pasadas se que- daban postradas a causa de su desobediencia y falta de fe. Sin duda que ellos habían escuchado acerca de los errores que se cometieron cuando los doce espías regresaron de ver la tierra y repetidamente oyeron que un día la nación finalmente podría po- seer la tierra que les había sido pro- metida. El tiempo se había llegado, Moisés era el último de las generaciones previas en morir y así serian libres de ir y conquistar la tierra. ¿Tendrían la fe necesaria para lograr lo que se les había prometido por tanto tiempo? En muchos sentidos esta generación de la Iglesia se encuentra en una situación similar a la generación de Israel que acabamos de mencionar. La diferencia mas notable entre nosotros y la generación de Israel mencionada es que las generaciones que han ido antes de nosotros han sido fieles y nos han traído a este lugar y permanecen con nosotros como grandes ejemplos a seguir. Ellos no se quedarán atrás mientras avanzamos a poseer las pro- mesas que Dios tiene para nosotros. Desde el “Levántate y Resplandece” de la Iglesia de Dios el 13 de Junio de 1903 se ha predicado el mensaje que la Iglesia alcanzara la perfección. Mu- chos se han fatigo de escuchar este mensaje y, al sentir que no ha habido progreso, han caído al lado del ca- mino. Aunque parezca que la prome- sa no se esta cumpliendo y la meta no se esta alcanzando, no podemos en- contrarnos en medio de “los que hacen divisio- nes” (Judas 1:19) entre los fieles. Imagine si hubie- ra habido unos entre aquella generación de Israel que dijeron “nunca pasaremos a la Tierra Prometida” y como resultado de su duda hubieran abandonado el campamento para unirse a una nación Gentil. No Cosas Volumen 1, Edición 2 Noviembre – Diciembre 2012 Vayamos y Poseámosla Dustin T. Hays, Coordinador de la BLV “Así que yo voy á morir en esta tierra; y no paso el Jordán: mas vosotros pasaréis, y poseeréis aquella buena tierra.” (Deuteronomio 4:22)

Upload: noah-solis

Post on 24-Mar-2016

238 views

Category:

Documents


5 download

DESCRIPTION

Revista Oficial del BLV

TRANSCRIPT

En el libro de Deuteronomio encontramos a los

hijos de Israel acampando en las planicies de Moab

al lado oriente del Rio Jordán y de la Tierra Prometi-

da. En este lugar, Moisés les recor-

dó la Ley, les renovó el pacto y los

retó a serle fiel a Dios cuando hubie-

ran entrado a esa gran tierra. Ha-

bían vagado en el desierto durante

cuarenta años mientras miraban co-

mo las generaciones pasadas se que-

daban postradas a causa de su

desobediencia y falta de fe. Sin duda

que ellos habían escuchado acerca de

los errores que se cometieron cuando

los doce espías regresaron de ver la

tierra y repetidamente oyeron que un

día la nación finalmente podría po-

seer la tierra que les había sido pro-

metida. El tiempo se había llegado,

Moisés era el último de las generaciones previas en

morir y así serian libres de ir y conquistar la tierra.

¿Tendrían la fe necesaria para lograr lo que se les

había prometido por tanto tiempo?

En muchos sentidos esta generación de la Iglesia

se encuentra en una situación similar a la generación

de Israel que acabamos de mencionar. La diferencia

mas notable entre nosotros y la generación de Israel

mencionada es que las generaciones que han ido

antes de nosotros han sido fieles y nos

han traído a este lugar y permanecen

con nosotros como grandes ejemplos

a seguir. Ellos no se quedarán atrás

mientras avanzamos a poseer las pro-

mesas que Dios tiene para nosotros.

Desde el “Levántate y Resplandece”

de la Iglesia de Dios el 13 de Junio de

1903 se ha predicado el mensaje que

la Iglesia alcanzara la perfección. Mu-

chos se han fatigo de escuchar este

mensaje y, al sentir que no ha habido

progreso, han caído al lado del ca-

mino. Aunque parezca que la prome-

sa no se esta cumpliendo y la meta no

se esta alcanzando, no podemos en-

contrarnos en medio de “los que hacen divisio-

nes” (Judas 1:19) entre los fieles. Imagine si hubie-

ra habido unos entre aquella generación de Israel

que dijeron “nunca pasaremos a la Tierra Prometida”

y como resultado de su duda hubieran abandonado

el campamento para unirse a una nación Gentil. No

Cosas Volumen 1, Edición 2 Noviembre – Diciembre 2012

Vayamos y Poseámosla

Dustin T. Hays, Coordinador de la BLV

“Así que yo voy á morir en esta tierra; y no paso el Jordán:

mas vosotros pasaréis, y poseeréis aquella buena tierra.”

(Deuteronomio 4:22)

Cosas Mayores es una revista oficial en la página interdigital de La Iglesia de Dios con Stephen E. Smith, Supervisor General, y es producida cada dos meses. Quienes deseen información o someter artículos, reportes, o testimonios para ser publicados pueden contactar al Coordinador General de la BLV: Dustin T. Hays, La Iglesia de Dios, P. O. Box 450, Charleston, TN 37310, o por correo electrónico: [email protected].

habrían tenido el privilegio de cruzar el Rio Jordán,

de mirar las paredes de Jericó derrumbarse y de habi-

tar ciudades que fueron construidas por otros para

ellos. ¿De que nos vamos a perder si nos desanima-

mos en el mensaje y nos rendimos a la tentación de

la duda que dice, “es seguro que la Iglesia no puede

alcanzar ese lugar,” o a la decepción que clama, “el

hombre no puede vivir perfecto en esta tierra”? Mu-

chos han caído ante estas tentaciones y han abando-

nado el campamento. A menos que vuelvan, no ten-

drán el privilegio de disfrutar el poder de Dios que

será manifestado entre los fieles quienes prosigan

para obtener la promesa.

¿Que podemos hacer nosotros? ¿Podremos al-

canzar las promesas que nos han sido predicadas por

tanto tiempo? ¿Podrá suceder esto en nuestro tiem-

po? Las generaciones antes de nosotros claman:

“¡pasen, y posean aquella buena tierra!” ¿Qué es lo

que se requiere para que lleguemos ahí? ¿Cómo

cruzamos el rio? “Hermanos, yo mismo no hago

cuenta de haberlo ya alcanzado; pero una cosa ha-

go: olvidando ciertamente lo que queda atrás, y ex-

tendiéndome á lo que está delante, prosigo al blan-

co, al premio de la soberana vocación de Dios en

Cristo Jesús. Así que, todos los que somos perfectos,

esto mismo sintamos: y si otra cosa sentís, esto tam-

bién os revelará Dios” (Fil. 3:13-15). Pablo nos

animó aquí a continuar a la perfección. Al parecer,

algunas veces hemos sido culpables de adoptar un

punto de vista que la Iglesia un día llegara a la per-

fección sin hacer ningún esfuerzo específico para

alcanzar aquel estado. Ha sido profetizado que su-

cederá, y nada podrá impedir que así suceda; así que

no hay necesidad de perseguirlo. ¿Acaso somos cul-

pables de alguna vez haber tenido este tipo de acti-

tud? Si, el estado perfecto de la Iglesia ha sido pro-

fetizado por Dios y ningún poder, fuerza o esfuerzo

hecho de hombre (o falta de esfuerzo) lo podrá pre-

venir. La pregunta más grande es ¿quién será parte

de la Iglesia cuando ella alcance ese estado? La res-

puesta parece ser dada por Pablo en la escritura de

arriba: los que prosigan en ella. Aquellos quienes

vivan para Dios diariamente como si aún no hubieran

logrado el lugar que Dios quiere que alcancen antes

“prosiguen al blanco”. Aquellos quienes rehúsan

mirar atrás hacia el pecado que una vez reinó en sus

corazones y la mundanalidad que un día amaron y

abrazaron. Aquellos quienes en toda situación y

decisión se dejen influenciar y se dejen ser guiados

por Dios y Su Palabra en la senda que deben seguir.

¿Tendría Israel la fe necesaria para lograr lo que

estaba ante ellos? El recuento de la Biblia nos revela

que si la tuvo. Cuando ellos le fueron fieles a Dios

fue tan fácil como andar por el rio que se partió ante

su paso, como marchar alrededor de una ciudad, y

como pelear cuando Dios dijo que lo hicieran. Solo

tenían que posesionarse de lo que Dios ya había pro-

clamado que era de ellos y les dio todo lo que piso la

planta de sus pies. Hay una “tierra buena” y la Igle-

sia ha estado acampando justo afuera de ella por

algún tiempo. Seguido nos referimos a ella como la

gloria postrera (Hag. 2:9), la lluvia tardía (Joel

2:23), o la perfección. Hemos escuchado predica-

ciones acerca de este lugar por tanto tiempo y

deseamos habitar en ella. A menudo nos decimos los

unos a los otros que Dios no retiene nada de Sus

hijos—que El esta dispuesto a darnos todas Sus ben-

diciones si nosotros vamos tras ellas. No veo la ra-

zón por la que debamos seguir acampando justo

fuera de esta “tierra prometida” por mas tiempo.

Vayamos y poseamos la tierra que generaciones en

la Iglesia han deseado ver; ¡seamos la generación

que la persiga hasta que la obtenga!

“Yo nunca había estado fuera de mi pequeña iglesia en Canadá, así que me bendijo inconmensura-blemente el poder adorar a Dios con miembros de todas partes del mundo quienes son enteramente santificados y tienen un fuerte visión de La Iglesia de Dios. ¡Jamás había sentido la presencia de Dios de una manera tan maravillosa y poderosa en mi vida! ¡Era exactamente lo que yo necesitaba!

—Campera Terra Beuchamp, Canadá Occidente. “Y sirvió Israel a Jehová todo el tiempo de Josué,

y todo el tiempo de los ancianos que vivieron des-pués de Josué, y que sabían todas las obras de Jeho-vá, que había hecho por Israel” (Jos. 24:31). Cuando todos esos santos de cabello canoso entraron a su descanso eterno, la nación en general se olvidó de Dios. Pero no es así, ni tampoco lo será en La Iglesia de Dios. Yo miro en el personal del CIJ un liderazgo joven que tiene el fuego de Dios ardiendo en sus almas, quienes están arraigados y establecidos en la fe, totalmente dedicados a la causa de Cristo y Su Iglesia. Los miro como representantes de la juventud de la Iglesia en todo el mundo, que son del mismo

“Y díjome: Profetiza al espíritu, profetiza, hijo del hombre, y di al espíritu: Así ha dicho el Señor Jehová: Espí-ritu, ven de los cuatro vientos, y sopla sobre estos muertos, y vivirán. Y profeticé como me había mandado, y entró espíritu en ellos, y vivieron, y estuvieron sobre sus pies, un ejército grande en extremo” (Eze. 37:9-10).

“Viento en el Valle” fue el tema para el Campamento Internacional Juvenil 2012. Que tiempo tan glo-rioso en el Señor mientras el Espíritu Santo envió su viento y ministró a los 82 camperos, personal, Supervi-sores y esposas de Supervisores quienes hicieron los sacrificios necesarios para asistir.

Experimentamos movimientos maravillosos de Dios mientras fuimos entrenados sobre como operar el ministerio de campamento, y recibimos recordatorios acerca de como todo lo que hacemos debe ser ungi-do por el Espíritu Santo si queremos que tenga éxito. Fuimos bendecidos con la predicación de uno de nuestros Supervisores Nacionales, el Obispo José Salazar, y uno de nuestros Supervisores de Estado, el Obispo Chris Clarkson. Un momento especial durante el campamento fue la presentación del Equipo de Misiones durante la última mañana. La presencia poderosa de Dios se movió en medio del campamento al terminar la presentación, y nos hizo sentir la gran necesidad de obreros en los campos de misión.

Un agradecimiento especial a todo el personal que laboró tan fielmente para ayudar a hacer de este Campamento Juvenil Internacional un gran éxito. Sus sacrificios y dedicación fueron de gran bendición y aportaron mucho. ¡A Dios sea la gloria por todas las cosas que ahí sucedieron!

espíritu y fervor. Miro en los camperos un hambre y sed de Dios, un deseo ardiente de aprender de Él, obedecer a Él en toda cosa; anhelando trabajar y an-helando conducir. ¿Será esta la generación que verá la obra terminada? Si no, ¡ciertamente están prepa-rando la próxima!”

—Obispo Delbert Bock, Supervisor SD/MN/MT(E)/NE/ND/WY.

“Qué bendición y honor poder asistir al CIJ este

año como esposa de un Supervisor. No había brecha entre la juventud, los pasados de joven y los más pa-sados de joven. Todo corazón de cada edad de todas partes de los Estados Unidos y el mundo fueron fu-sionados mientras el viento del Espíritu Santo sopla-ba en las devociones, clases y los servicios. Verdade-ramente estuvimos parados sobre tierra santa y sen-tados en lugares celestiales mientras el poder del viento nos movía hacia adelante…¡para siempre cam-biando nuestras vidas!”

—Vivían Campbell, FL/GA “El CIJ fue un tiempo grandioso para mí. Fue un

buen tiempo para aprender de cómo se opera un campamento y qué sucede tras las cortinas. El Espíri-tu Santo verdaderamente estuvo allí mientras nos ensenaba y nos conducía en los servicios, y alabo al Señor que yo pude asistir”.

—Campero Caleb Funderburk, TN

Unos Testimonios del

CIJ de este Año:

"Y luego Jesús hizo a sus discípulos entrar en el bar-co, e ir delante de él a la otra parte del lago, entre tanto que despedía a la gente. Y despedida la gente, subió al monte, apartado, a orar. Y como fue la tarde del día, estaba allí solo. Y ya el barco estaba en medio del mar, atormentado de las ondas; porque el viento era contra-rio. Mas a la cuarta vela de la noche, Jesús fue a ellos andando sobre el mar. Y los discípulos, viéndole andar sobre el mar, se turbaron, diciendo: Fantasma es. Y die-ron voces de miedo. Mas luego Jesús les habló, dicien-do: Confiad, yo soy. No tengáis miedo. Entonces le res-pondió Pedro, y dijo; Señor, si tú eres, manda que yo vaya a ti sobre las aguas. Y dijo: Ven. Y descendiendo Pedro del barco, andaba sobre las aguas para ir a Jesús. Más viendo el viento fuerte, tuvo miedo; comenzando a hundirse, dio voces, diciendo: Señor sálvame. Y al ins-tante Jesús extendiendo la mano trabo de él, y dijo: Oh hombre de poca fe, ¿por qué dudaste? Y como ellos entraron en el barco, sosegóse el viento. Entonces los que estaban en el barco, vinieron y le adoraron, dicien-do: ¡Verdaderamente eres Hijo de Dios!" (Mateo 14:22-33).

En este Pasaje de la Escritura familiar miramos que Jesús está caminando sobre el agua hacia los discípulos, ellos dieron voces de miedo. Yo he predicado que debe-mos ser mas como Pedro. Aunque muchos lo critican porque dudó y quito sus Ojos de Cristo, yo lo he elogia-do y le he dicho al pueblo de Dios que él fue el único dispuesto a salir del barco . Yo creo que la invitación que Jesús dio al decir 'Ven' era para todos, mas Pedro fue el único que salió por Fe. Hubo un tiempo en cada una de nuestras vidas cuando necesitábamos tomar ese mismo paso de Fe al cual Dios nos llamo a ir más pro-fundo con Él.

El año pasado nuestro tema general de BLV fue "Inmovible e Inquebrantable." Todo el año se enfoco en profundizar nuestra relación con Cristo para que nada nos pudiera alejar de Él. Este año nos estamos enfocan-do en ser "La Generación 'Mas Vosotros'" ¿Te das cuen-ta que los temas parecen estar construyendose uno al otro? Si no estamos arraigados y cimentados en Cristo, ¿cómo esperamos ser "La Generación 'Mas Vosotros'"? Dios está preparando la Iglesia para el regreso de Jesús. Cada día se espera que estemos aprendiendo y crecien-do más cerca de Él.

Aunque en el pasado he visto la necesidad de pre-dicar y enseñar que necesitamos andar por Fe, ahora siento que para poder ser todo lo que Dios nos ha lla-mado a ser, tenemos que profundizarnos. Ya no pode-mos mirar hacia Pedro en esta historia, sino a Jesús. Después de todo, Jesucristo es nuestro perfecto ejem-plo. Miremos unos versículos atrás, antes de que Jesús comenzara a caminar sobre el agua. En el principio del capítulo 14, Juan el bautista es decapitado, su cuerpo enterrado, y a Jesús se le dice lo que pasó. Luego Jesús se aparto a un lugar desierto, pero un gran gentío lo siguió. La Palabra dice que sintiendo compasión por la gente Él sano a los enfermos. Luego miramos donde Jesús alimentó a 5,000 con cinco panes y dos peces. Para este punto, cuando todos habían comido, los discí-pulos se subieron al barco para

ir al otro lado del lago y la gente fue despedida. Jesús luego sube a estar solo con Dios. Aunque Él era el Hijo de Dios, Él también era humano. Puede imaginarse la fuerza que se necesitaba durante este tiempo en su vida? A su Primo y amigo, Juan el bautista, lo habían matado y el tuvo muy poco tiempo para afligirse antes que llegase el gentío para reunirse a su alrededor, con necesidades de sanidad y comida. ¿Qué tan a menudo tomamos el tiempo para nosotros mismos, olvidándo-nos de la gente a nuestro alrededor? Lo más pronto que pudo Jesús tomo tiempo para estar con Su Padre. Justo como escribió el Salmista, "Mi socorro viene de Jehová, Que hizo los cielos y la tierra" (Salmos 121:2), Jesús sabia de donde venia Su fuerza. Él sabía que tenía que estar a solas con Su Padre. No podemos solamente ve-nir a la Iglesia y orar colectivamente y pensar que pode-mos obtener la perfección. Si nuestro ejemplo requería tiempo a solas con Dios el Padre, entonces es lógico que nosotros también.

Tenemos que estar arraigados y sobreedificados en la Palabra y en nuestra relación con Dios para que poda-mos ser como Jesús y animemos a otros para que ven-gan y se profundicen en él. ¿No es lo que hizo Jesús con Pedro? A menudo cuando hablamos sobre Jesús lla-mándolo a que saliera del barco, hablamos sobre el temor y la duda. Pero en Verdad, ¿no era sobre profun-dizar su relación y conocimiento de Cristo? Justo como no podemos quedarnos en el barco para siempre, no

¿Quién es tu Ejemplo? Penny Cox, Coordinadora Regional de BLV, MS, LA, TX (E)

podemos esperar ser "La Generación ' Mas Vosotros'" si no crecemos en Él.

El Pedro que Vemos en mateo, capitulo 14, es un hombre muy diferente al Pedro que vemos en el libro de Hechos. Justo como la mujer con el problema de flujo de sangre sabía que si simplemente tocaba el bor-de del manto de Jesús seria sanada, la gente en Hechos traía a los enfermos a las calles para que solamente la sombra de Pedro los tocara y serian sanados. Fue Pedro el que le dijo al hombre en la puerta de la Hermosa, "...En el Nombre de Jesucristo de Nazaret, levántate y anda." recuerdo de cuando, " Dícele Jesús: Levántate, toma tu lecho, y anda. Y en el acto aquel hombre fue sano, y tomo su lecho, y se fue. Y era sábado aquel

día" (Juan 5;8-9). Las gentes en el libro de Hechos po-nían todo lo que tenían a los pies de los discípulos sa-biendo que ellos tenían algo de gran valor, justo como los discípulos habían abandonando sus redes para se-guir a Cristo.

Entre más se profundizaba Pedro en Cristo mas se semejaba a Cristo. ¿Nos estamos semejando mas como Cristo cada día y mostrando a Cristo al mundo alrededor de nosotros? Oh aun nos vemos mucho como Pedro se veía en Mateo, capitulo 14, dando voces de miedo y nervioso para caminar sobre el agua? ¿Quién es tu ejemplo? Dios nos ha llamado a ser más. El nos ha lla-mado a ser " La Generación 'Mas Vosotros'" y eso re-quiere que tengamos los ojos puestos en Jesucristo.

COSTo:

$75

Tema: La Teocracia

Maestros:

Mississippi / Louisiana /

Texas (Esta)

Tendrá una

En Camp Dixon Cerca de

Philadelphia, Mississippi

Para mas información

Contacte con Penny Cox a: [email protected]

www.facebook.com/TheChurchofGodVLB

Vicki Smith

James Cox

Allene Cox

´

La BLV, BMF Y el departamento

de Misiones se complacen en anunciar

Un viaje del equipo misionero a:

Peru

Fechas Tentativas: Abril 22-30, 2013

Costo Aproximado: $1,350

(Esto incluye el vuelo desde Atlanta)

Actividades: Ministrar en la Convención

Nacional y en Las Iglesias Locales Si usted está interesado en participar en este gran esfuerzo, por favor pida una aplicación al equipo de misiones y un folleto de

misiones internacionales a las oficinas del cuartel general. Las apli-caciones también pueden descargarse desde la página de la BLV o la BMF en nuestra página oficial. Todos los solicitantes deben de

ser mayores de 18 años de edad y poseer un pasaporte válido que le queden por lo menos 6 meses después de la fecha del viaje. Los

pasaportes nuevos tienen un costo de aproximadamente $170 (incluyendo las fotos y el envío) y esto no está incluido en el precio del viaje del equipo misionero. Las aplicaciones para los pasapor-

tes generalmente se pueden obtener en su oficina local de correos.

Para más información, por favor contacte a

Dustin Hays, Robert Hawkins o Betty Bishop

El Programa de La Banda de Lideres Victoriosos una vez más tomo lugar durante la sesión del Sábado por la noche en la Asamblea General Anual. Con Gran

anticipación la BLV de la Iglesia comen-zó a reunirse una hora antes de que la marcha comenzara y formaron dos líneas que llenarían el audi-torio mientras mar-chaban cantando y desplegando sus banderas al Señor y para promover el trabajo en su área. Qué hermoso ver que 378 jóvenes y espigadores marcha-ban, con muchos

representando La Banda de Lideres Victoriosos al usar su uniforme de la BLV. La BLV de la Iglesia fue bende-cida al marchar tras su nuevo escudo y espada, que igualaba el logo nuevo de la BLV que fueron construi-dos por miembros de La Iglesia de Dios en Montana. Si Dios quiere, este escudo y espada serán usados por muchos años durante nuestro programa de la BLV y servirá para emocionarnos

y animarnos para ser fieles en la batalla espiritual en la cual estamos involucrados. Mientras la mar-

cha y la adoración fueron guia-dos por la Hna. Amy Anders de Tennessee un espíritu hermoso empezó a llenar el auditorio. Con mucho entusiasmo el canto de BLV fue presentado a la Asam-blea General por primera vez en Español cantado por la Hna. Shanna Weekes de Tennessee. Esto sin duda será una bendición para la Juventud de habla Hispa-

na de La Iglesia de Dios alrededor del mundo mientras comienzan aprenderla y usarla en sus marchas. El Hno. Timothy Strong de Ca-rolina del Norte canto " Dios de Este Pueblo" justo antes del mensaje.

Mientras cantaba, un slideshow de la juventud alrede-dor del mundo se mostro. Es un gran animo ver a nuestros jóvenes ocupados en adoración, ministerio y oración. Un video similar puede ser visto aquí: http://media.thechurchofgod.org/video/ministries/vlb/greaterthings/god-of-the-city.mp4

Para cerrar el programa

el Coordinador General de BLV Dustin Hays introdujo el tema nuevo "La Genera-

ción 'Mas Vosotros,'" con un mensaje. Dios desafió a esta ge-neración de la Iglesia a que die-ran el paso y convertirse en lo que Dios ha llamado a la Iglesia a ser. Generaciones pasadas han sido fieles, pero nosotros tene-mos que exceder su fidelidad si vamos alcanzar los lugares de los cuales se ha predicado por tanto tiempo. Al cerrar el mensaje la juventud inundo los altares por un tiempo para buscar a Dios para que nos ayude a cumplir lo que se nos ha llamado hacer. El reporte oficial dice que 9 almas fueron salvas, 2 santificadas, 3 fueron bautizados con el Espíritu Santo, 4 renovaron su pacto, y 4 se unieron a La Iglesia de Dios. Solo Dios tiene el registro com-pleto de todo lo que se logro y Él debe ser adorado por Su presen-cia y poder sobre nosotros.

El Viento de cola del Espíritu Santo E. Roger Ammons, Coordinador General de Evangelismo

Un viento a favor es un viento que sopla en la

dirección que viaja un objeto, mientras que el viento

contrario sopla contra la dirección del viaje. Un vien-

to a favor Aumenta la velocidad de un objeto y redu-

ce el tiempo requerido para alcanzar su destino,

mientras que el viento contrario Tiene el efecto con-

trario (wikipedia).

En la esfera espiritual, vientos a favor Y vientos

contrarios Soplan. Jesús dijo, “El viento de donde

quiere sopla, y oyes su sonido; mas ni sabes de dón-

de viene, ni á dónde va: así es todo aquel que es naci-

do del Espíritu"

(Juan 3:8). El viento del espíritu sopla donde él

quiere. Nosotros no lo podemos ver, controlar, o sa-

ber cuándo o dónde va a soplar, pero podemos escu-

charlo, sentirlo, mirar y experimentar los efectos de

este. Un pequeño niño estaba volando su cometa tan

alto que la perdió de vista. Alguien le preguntó,

¿Cómo sabes que la cometa todavía está ahí?” él

contestó, “Porque puedo sentir algo jalando en la

línea”. Así pasa con el viento del espíritu.

Sin embargo, lo mismo se puede decir de los

vientos de tentación, decepción, relaciones conflicti-

vas, etc…, que son sopladas por el príncipe y los

poderes del aire. Cuando apagamos, resistimos, o

contristamos al Espíritu de Dios, aún el viento a fa-

vor Viene a ser un viento contrario. Estos diversos y

contrarios vientos son destructivos y tratan de sacar-

nos de nuestro curso. Pablo estaba dando golpes con-

tra el aguijón Pero cuando él dijo, “¿Señor, qué quie-

res que haga?" (Hechos 9:6), él cambió de dirección

y sus vientos contrarios se volvieron en vientos a

favor.

Muchos barcos todavía están amarrados y ancla-

dos en el muelle. Nosotros no sabemos cuándo ni

cómo o donde los vientos del espíritu van a soplar.

No debemos murmurar cuando el viento se demora,

no nos debe agarrar desprevenidos o durmiendo

cuando venga. Debemos arreglar lo que está dispare-

jo, alzar la vela, preparar la dirección, y esperar el

viento. Cuando el viento sopla, rompe las cuerdas,

saca el ancla y deja ese barco libre de todas las ata-

duras que lo detienen. Pablo tuvo una visión de un

hombre que dijo, “Ven a Macedonia, y ayúda-

nos” (Hechos 16:10). “Inmediatamente” (v. 10) se

embarcó hacia Macedonia en un “Viaje Dere-

cho” (v.11). “Levantar Anclas” es traer las anclas a

bordo un buque en preparación para partir. La frase “

Elevar Anclas” es un reporte de que el ancla ya no

está en el fondo del océano y de ahí el barco está

oficialmente en marcha. Yo quiero gritar, “Levanten

las Anclas”. Hasta que se oiga el eco de la juventud

de La iglesia de Dios, “Anclas Levantadas”.

Oh, qué sensación navegar a toda velocidad con

el viento del espíritu a favor, ir con la corriente, pro-

pulsando hacia adelante por un poder increíble mas

allá de nosotros mismos, más rápido de lo que jamás

hubiéramos imaginado!

Las escrituras son el aliento de Dios (2 Timoteo

3:16) y fueron escritas por hombres santos de Dios “

siendo inspirados del Espíritu Santo”. (2 Pedro 1:21).

En Hechos 27 “Phero” es usada en los versículos 15,

22, 27 para describir un barco siendo llevado por el

viento. El viento del espíritu llevó a los escritores de

las escrituras a decir exactamente lo que Dios quería.

“phero” es traducido como “recio” en hechos 2:2

(“Un viento recio”). En Hebreos 6:1, “phero” es tra-

ducido como “vamos” -a “La Perfección”. Podemos

ir a nuestro destino final solo si somos llevados allí

por el viento del espíritu llenando las cubiertas de la

vieja nave de Sión.

Esta nave fue lanzada desde las afueras de Jerusalén

Capturó una nueva ráfaga de viento

Cuando sopló en el aposento alto

Formó una tormenta con una canción

en la celda a media noche

Qué te hace pensar que ella se va a hundir

En algún tifón de estos días modernos

Navega, vieja nave de Sión, desafía lo

que se esconde en una noche obscura y fría

Navega, vieja nave de Sión, hasta que veas el faro de luz

Navega, vieja nave de Sión, él está a bordo no estás sola

Navega hasta que escuches al capitán

Decir “¡Tierra a la vista, llegaste a casa!”

Vieja Nave de Sión

(por Ronald Hinson)