UNA NAVIDAD PARA RECORDAR

Había una vez una niña llamada Ana Lucía, ella no era una niña

cualquiera, pues Ana Lucía siempre obtenía lo que quería: Regalos,

juguetes, etc.

Pasaban los meses y una fecha muy especial se acercaba… ¡la navidad! Y Ana Lucía ya estaba pensando en

las cosas maravillosas que iba a pedir por navidad

La pequeña comenzó hacer una gran lista de lo que

pediría y se la mostró a su mamá.

Su madre le dijo que harían lo posible por comprarle lo que ella

deseaba, porque ellos no estaban tan

bien económicamente.

Ana Lucía comenzó a llorar y gritar, su mamá trataba de explicarle, pero ella

no escuchaba.Salió corriendo por la puerta principal de su casa; corrió y lloró mucho hasta llegar a un parque donde sin querer se

sentó en una banca a observar a la gente que estaba ahí.

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Pero la banca donde se sentó no estaba vacía, a su lado había una niña

pequeña.La niña tenía la ropa un poco sucia y

se veía muy delgada.

La pequeña se acercó más y la saludo con una hermosa sonrisa, le dijo que se llamaba Fernanda y entre risas y juegos

se hicieron amigas

Ana Lucía le preguntó dónde se encontraban sus papás, Fernanda le

contó con profunda tristeza que nunca había conocido a su padre y que su

madre trabajaba en la calle vendiendo golosinas para darles algo de comer a

ella y sus hermanitos

Fernanda también le contó que lo único que le pedía a Dios para la navidad era

que su familia esté unida y que se sintiera el amor y el calor de un hogar y que tuviera algo de comer esa noche especial del nacimiento del niño Jesús.

Fernanda también le contó que lo único que le pedía a Dios para la navidad era

que su familia esté unida y que se sintiera el amor y el calor de un hogar y que tuviera algo de comer esa noche especial del nacimiento del niño Jesús.

Ana lucía recordó porque había estado llorando, lo egoísta y malcriada que

había sido al haber pedido todas esas cosas materiales y no pensar en que

había gente como Fernanda muy pobres y que necesitaban más que

ella.

Ana Lucía se despidió rápidamente y salió corriendo para su

casa…

Cuando ingresó a su casa encontró a su madre muy preocupada porque no

sabía dónde estaba ella.Ana Lucía entre sollozos y besos le pidió disculpas a su mamá por lo

caprichosa y egoísta que había sido.

Le habló un poco de Fernanda y de cómo se habían conocido, le contó su historia y le dijo que ella quería una

sola cosa por navidad: que la familia de Fernanda pasará la navidad con ellos.

La madre al haber escuchado la historia de Fernanda, encantada aceptó de que su hija invitara a la familia de Fernanda

a pasar la navidad con su familia.

La madre al haber escuchado la historia de Fernanda, encantada aceptó de que su hija invitara a la familia de Fernanda

a pasar la navidad con su familia.

Y esa misma tarde Ana Lucía regresó al parque para buscar a Fernanda y hacerle la invitación a ella y a su

familia para que celebraran juntos la navidad…

Y así fue, La familia de Fernanda fueron a la casa de la familia de Ana Lucía

para pasar navidad juntos.Esa fue una de las mejores navidades de las vidas de las pequeñas, ya que

estuvieron rodeadas de puro y verdadero amor que es lo más

Y desde esa fecha en adelante, cada navidad las dos familias se juntan para compartir cariño y amor entre todo

FIN…