Lectura rápida y comprensiva (preparación)

Muchas personas encuentran más fácil concentrarse en la lectura, cuando realizan previamente un ejercicio que va activando sucesivamente diferentes funciones y zonas cerebrales, hasta detenerse en un punto ubicado en la parte posterior y superior de la cabeza.Para llevar a cabo el mismo, elegimos un objeto del tamaño de una pelota de tenis, que podamos imaginar fácilmente.Para este caso, elegiremos una naranja, por las numerosas asociaciones sensoriales que podemos hacer con la misma, y realizamos esta secuencia de acciones:1. Imagine una naranja, ubicada a la altura de sus ojos, a unos 15 o 2º cm de los ismos.2. Trasládela hacia su mano izquierda; vea la imagen, su color; sienta su peso, y su textura; acérquela a su nariz, sienta su aroma e imagine su sabor..2. Luego, arrójela hacia la mano derecha, y tómela; repita la experiencia anterior, y luego, pásela a la izquierda. Sienta el peso y el volumen en cada mano, Repita este movimiento de ida y vuelta unas cuatro o cinco veces. 3. Ahora, con su mano más diestra, apóyela sobre la frente, y desplácela rodando lentamente, hacia la parte posterior y superior de su cabeza. Apoye allí su mano, e imagine que es la naranja que está haciendo contacto con la misma. Imagine ahora la naranja en equilibrio en esta parte de la cabeza.4. Imagine que la parte posterior de sus ojos adquiere sensibilidad, y que desde los mismos percibe claramente la naranja. 4. Deje descansar sus brazos naturalmente a ambos lados, sobre su falda, e imagine que la naranja aún permanece en el lugar. Sienta con claridad su atención centrada en ese punto, y perciba su estado relajado y alerta, con sus ojos prestos para iniciar la lectura..5. Sostenga ese estado, abra sus ojos, y comience a leer.