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SUMARIO CONTENTS ART˝CULOS ORIGINALES LE FORT I SEGMENTADO CON ASCENSO POSTERIOR. EVALUACIÓN DE LA TÉCNICA EN LA ADAQUIA ANTERIOR Segmental Le Fort I osteotomy with raising of posterior segments. Evaluation of the use of this technique in anterior open bite Sofía Barroso Ortiz y Josefina Roselló Roses COSTO DEL MONTAJE Y PUESTA EN MARCHA DE TÉCNICAS FIJAS Y REMOVIBLES Cost of application and placing of fixed and removable orthodontic appliances Paula Mok Barceló, Coralia FernÆndez Ramírez y Elena García Rodríguez TRATAMIENTO PRECOZ DE INTERFERENCIAS OCLUSALES QUE PROVOCAN LATEROG- NATISMO EN NIÑOS DE EDADES TEMPRANAS Early treatment of occlusal disorders causing laterognatism in children Herminia PØrez Varela, Clotilde Ramos Morales y LÆzaro M. Domínguez Fleites ESTUDIO DE LA MORFOLOG˝A OCLUSAL EN MODELOS CON OCLUSIONES NORMA- LES Study of occlusal morphology aided by normal occlusion models Lizandro Michel PØrez García, Rosalina SÆnchez Torres, Clara Irene `lvarez RomÆn, Maritza BlÆsquez Casanova y Rolando Castillo HernÆndez RETARDO EN EL BROTE DENTARIO EN EL NIÑO DE BAJO PESO Retarded tooth eruption in low birth weight infants YamilØ Moreno Barrial, Juan Betancourt Ponce, Zaida FernÆndez JimØnez y Lina Solís Solís RELACIÓN ENTRE LAS DIMENSIONES CRANEOFACIALES Y LA MALNUTRICIÓN FETAL Relation between craniofacial dimensions and fetal malnutrition AilØn Bello PØrez, Miriam Machado Martínez, Rolando Castillo HernÆndez y Eduardo Barreto Fin DIGITOPUNTURA Y SEDACIÓN NOCTURNA: UNA OPCIÓN EN EL TRATAMIENTO DE H`BITOS DEFORMANTES Pressure acupuncture and night sedation: an alternative for the treatment of harmful habits Ada Sochegui Rodríguez, Ana Edita Rigol GonzÆlez, Miriam GonzÆlez Navarro y Lourdes Martín Mendecochea

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SUMARIO CONTENTS

ARTÍCULOS ORIGINALES

LE FORT I SEGMENTADO CON ASCENSO POSTERIOR. EVALUACIÓN DE LA TÉCNICAEN LA ADAQUIA ANTERIORSegmental Le Fort I osteotomy with raising of posterior segments. Evaluation of theuse of this technique in anterior open bite

Sofía Barroso Ortiz y Josefina Roselló Roses

COSTO DEL MONTAJE Y PUESTA EN MARCHA DE TÉCNICAS FIJAS Y REMOVIBLESCost of application and placing of fixed and removable orthodontic appliances

Paula Mok Barceló, Coralia Fernández Ramírez y Elena García Rodríguez

TRATAMIENTO PRECOZ DE INTERFERENCIAS OCLUSALES QUE PROVOCAN LATEROG-NATISMO EN NIÑOS DE EDADES TEMPRANASEarly treatment of occlusal disorders causing laterognatism in children

Herminia Pérez Varela, Clotilde Ramos Morales y Lázaro M. Domínguez Fleites

ESTUDIO DE LA MORFOLOGÍA OCLUSAL EN MODELOS CON OCLUSIONES NORMA-LESStudy of occlusal morphology aided by normal occlusion models

Lizandro Michel Pérez García, Rosalina Sánchez Torres, Clara Irene Álvarez Román,Maritza Blásquez Casanova y Rolando Castillo Hernández

RETARDO EN EL BROTE DENTARIO EN EL NIÑO DE BAJO PESORetarded tooth eruption in low birth weight infants

Yamilé Moreno Barrial, Juan Betancourt Ponce, Zaida Fernández Jiménez y LinaSolís Solís

RELACIÓN ENTRE LAS DIMENSIONES CRANEOFACIALES Y LA MALNUTRICIÓN FETALRelation between craniofacial dimensions and fetal malnutrition

Ailén Bello Pérez, Miriam Machado Martínez, Rolando Castillo Hernández yEduardo Barreto Fin

DIGITOPUNTURA Y SEDACIÓN NOCTURNA: UNA OPCIÓN EN EL TRATAMIENTO DEHÁBITOS DEFORMANTESPressure acupuncture and night sedation: an alternative for the treatment of harmfulhabits

Ada Sochegui Rodríguez, Ana Edita Rigol González, Miriam González Navarro yLourdes Martín Mendecochea

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ARTÍCULO DE REVISIÓN

SÍNDROME DE BINDER CON MANIFESTACIONES ORTOPÉDICAS ASOCIADASBinder�s Syndrome with associated orthopedic malformations

Belkis Correa Mozo y Mylen B. García Alfonso

ARTÍCULO EXTRANJERO

INDICADORES DE MADURACIÓN. EDAD ÓSEA Y DENTARIAMaturity indexes. Bone and dental age.

Elena Faini

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Rev Cubana Ortod 1988;13(2):73-79

ARTÍCULOS ORIGINALES

Hospital Pediátrico "Juan Manuel Márquez"

LE FORT I SEGMENTADO CON ASCENSO POSTERIOR.EVALUACIÓN DE LA TÉCNICA EN LA ADAQUIA ANTERIOR

Dra. Sofía Barroso Ortiz1 y Dra. Josefina Roselló Roses2

RESUMEN: Se realizó un estudio, que estuvo compuesto por 14 pacientes operados en elservicio de cirugía máxilofacial del Hospital «Hermanos Ameijeiras», por exceso vertical del maxilaren el sector posterior y adaquia anterior, tratados mediante la técnica quirúrgica Le Fort I segmentadocon ascenso posterior. Para la evolución clínica de estos pacientes se realizó un examen físicoencaminado al pesquizaje de posibles secuelas. La evolución radiográfica se realizó, mediante unatelerradiografía lateral con perfilograma, donde se tomaron puntos fijos para conocer los cambios enlas mediciones cefalométricas, Las variaciones obtenidas en las mediciones cefalométricas, permi-ten comprobar cambios esqueléticos ostensibles durante la realización de esta técnica. El examenfísico demostró que las secuelas más frecuentes fueron retracción gingival, parestesia del labioinferior, persistencia de la adaquia anterior, aunque en menor magnitud, adaquia posterolateral ypérdidas dentarias.

Descriptores DeCS: MALOCLUSION/cirugía; OSTEOTOMIA LE FORT/métodos; RESULTADO DEL TRATA-MIENTO; MAXILA/cirugía.

1 Especialista de I Grado en Cirugía Máxilo-Facial. Hospital Pediátrico "Juan Manuel Márquez".2 Especialista de I Grado en Ortodoncia. Hospital Clinicoquirúrgico "Hermanos Ameijeiras".

Existe gran controversia en relacióncon los métodos quirúrgicos empleados enla corrección de la mordida abierta anterior(adaquia anterior),1 que se puede definircomo la falta de contacto dentario al cerrarlos arcos maxilares.

Sassouni y col.2,3 plantean que la mor-dida abierta anterior es aquella situación

de oclusión, en la que uno o más dientes(maxilares o mandibulares) no alcanzan el pla-no de oclusión, para hacer contacto con losantagonistas.

En la etiología de la mordida abiertaanterior se reconocen causas genéticas ocongénitas y adquiridas, estos factores pue-den ser extrínsecas o intrínsecas. Pueden pre-

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sentarse aberraciones esqueléticas por en-fermedades metabólicas y endocrinas, portumoraciones óseas o musculares ylinguales, sin embargo, la causa más fre-cuente es la forma adquirida.2,4

Las causas extrínsecas más comunesson los hábitos de succión digital, utiliza-ción de chupetes, así como las fracturas delos maxilares con terapéutica o seguimien-to deficiente, también se han descrito ca-sos secundarios a bridas retráctiles cervi-cales posquemaduras.2,5

Entre los factores intrínsecos se seña-lan la disfunción de los labios, de la respira-ción, de la masticación, de la conversación,las anomalías en el espacio nasofaríngeo yla capacidad muscular de la lengua o lasmejillas.6-8

La mordida abierta anterior se divideen esquelética y en no esquelética. En laforma esquelética existe una desproporciónvertical en la base ósea maxilar o mandibular,por tanto, puede formar parte de síndromeso tipos faciales específicos. En la adaquiaanterior no esquelética (dentario), los hábi-tos de succión digital del pulgar y el empu-je lingual, son factores que producen es-parcimiento y determinan la mordida. Ade-más, existen tendencias raciales que hacenque los individuos tengan maxilares peque-ños o grandes con sus respectivasmaloclusiones.2,4

Para la corrección de esta anomalía esnecesario identificar su origen.2,9 Es una si-tuación oclusal compleja que causa males-tar al paciente, dada su inefectividad fun-cional, masticatoria, fonética y estética.Además, es una deformidad dentomaxilardifícil de tratar, las recidivas son frecuentesy se requiere un enfoque integral queenglobe aspectos funcionales y estéticos.10

Durante años se interpretó esta desar-monía como de origen mandibular y se trata-ba con diferentes osteotomías yostectomías en la rama y cuerpo

mandibular.11-13 Entre ellas tenemos: la téc-nica subapical anterior,14,15 las técnicas enel cuerpo,2 y las técnicas en la rama.

La corrección de la adaquia anterior,cambia su enfoque cuando comienza ainterpretarse como una desarmonía cuyacausa fundamental es el exceso de creci-miento vertical del maxilar, posterior a losincisivos.16,17

Entre las técnicas utilizadas en el maxi-lar superior se citan la técnica segmentariaanterior,18 la osteotomía maxilar posterior16,17

y la osteotomía total del maxilar superior.19

La osteotomía Le Fort I con segmenta-ción y ascenso de los segmentos posterio-res, es útil para tratar la mordida abiertaesquelética y, ha sido utilizada por muchosautores como Bell, Epker, Merville yotros.9-11,13

El objetivo de este trabajo es conocerla efectividad de la osteotomía Le Fort Isegmentado con ascenso posterior en eltratamiento de la adaquia anterior.

Métodos

El universo para este estudio estuvocompuesto por 14 pacientes operados en elservicio de Cirugía Máxilofacial del Hospi-tal «Hermanos Ameijeiras» por exceso ver-tical del maxilar, en el sector posterior yadaquia anterior, tratados mediante la téc-nica quirúrgica Le Fort I segmentado conascenso posterior durante el período de1984 a 1992.

Se incluyeron los pacientes que se lesrealizó además mentonoplastia, ya que éstano influye en el tratamiento de la adaquiaanterior. Se excluyeron aquellos pacientesque se les realizó además otro tipo deosteotomía que pudiera influir en la correc-ción de la adaquia anterior.

A los pacientes se les realizó una evo-lución clínica y radiográfica pasado 1 año

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de la operación. El examen físico se enca-minó al pesquizaje de posibles secuelas,auxiliados de la historia clínica y los mode-los de estudio.

EXAMEN FÍSICO BUCAL

− Estado de los dientes superiores:a) Pérdidas dentarias no planificadas,

como consecuencia de la operación.b) Dientes desvitalizados (presencia de

discromias).− Relación de oclusión dentaria:

a) Adaquia anterior.b) Adaquia posterolateral.

− Estado de los tejidos blandos bucales:a) Fístula gingival vestibular.b) Fístula nasopalatina.c) Comunicación buco-sinusal.d) Retracción gingival en relación con

las osteotomías.

Se practicó telerradiografía lateral conperfilograma, preoperatoriamente y trans-currido 1 año, en un equipo marca Panex-Ec Elipsopantomografo y películasradiográficas de 24 x 30 cm.

Las mediciones cefalométricas se rea-lizaron tomando puntos fijos de lastelerradiografías pre y posoperatoria, don-de se concluyen como medidas anteriores:

1. La distancia de la espina nasal anterioral borde incisal del incisivo central superior (ENA-ICS).

2. La distancia del punto infraorbitario alborde incisal del incisivo central supe-rior (PIO-ICS).

3. La distancia interincisiva o sobrepase.

y como medidas posteriores:

1. La distancia de una cúspide sana delprimer molar superior al plano de Frank-fort (Cúspide sana 1er. MS-PF).

2. La distancia del plano de Frankfort alplano mandibular, con una línea quepasa tangente a la cara distal del primermolar superior (PF-PM).

Todos nuestros pacientes fueron some-tidos a movimientos dentarios ortodóncicospreoperatorio y/o posoperatorio, para lograrlas relaciones de oclusión deseadas y man-tener la estabilidad de los resultados, logra-das con la operación.

Para el procesamiento de la informaciónse confeccionó una base de datos en el pa-quete estadístico Microstat por medio demicrocomputadora, donde se incluyeron to-das las variables necesarias para el estudio.

Como medidas de resumen de los datosestadísticos se emplearon números absolu-tos, porcentaje, media aritmética, desvíoestándar, test de student y el test exacto deFischer.

Los resultados fueron dispuestos entablas y gráficos para su análisis, discusióny conclusiones.

Resultados

La tabla 1 nos muestra los tipos de ope-raciones realizadas a los pacientes. Estasfueron divididas en 4 grupos, donde se ob-servó que en el Le Fort I segmentado conascenso posterior, extracción y mento-noplastia, se agrupó el 42,9 % de los pacien-tes.

Al agrupar a los pacientes según las di-ferencias cefalométricas pre y posoperatoria,las mediciones anteriores del PIO-ICS yENA-ICS aumentaron en el 64,3 % de loscasos. Como era de esperar la distanciainterincisiva, distancia del PF-PM y la dis-tancia de la cúspide sana del 1er. molar su-perior PF disminuyó en el 100 % de los ca-sos (tabla 2).

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TABLA 1. Tipo de operación realizada

Pacientes No %

Le Fort I segmentado conascenso posterior 2 14,3Le Fort I segmentado conascenso posterior y mento-noplastia 5 35,7Le Fort I segmentado conascenso posterior y extrac-ción dentaria 1 7,1Le Fort I segmentado conascenso posterior, extracción y mentonoplastia 6 42,9

Total 14 100,0

TABLA 2. Agrupación de los pacientes aten-diendo a las diferencias cefalométricas prey posoperatoria

Agrupación de los pacientes según tendencia de la diferenciaDistancias Aumentada Disminuida Sin diferenciacefalomé- No. % No. % No. %

AnterioresPIO-ICS 9 64,3 2 14,3 3 21,4ENA-ICS 9 64,3 2 14,3 3 21,4Interincisi-va - - 14 100,0 - -PosterioresPF-PM - - 14 100,0 - -Cúspide sana1er. MS-PF - - 14 100,0 - -

Nota: % obtenido en base a los 14 pacientes.

Cuando analizamos los valores prome-dios (mm) de las mediciones cefalométricas,encontramos que tanto en la distancia PIO-ICS como en la ENA-ICS, existe disminu-ción de estas mediciones en el posoperatorioen relación con las cifras promedio en elpreoperatorio; estas diferencias no fueronsignificativas. De forma opuesta encontra-mos, tanto en la distancia interincisiva, asícomo en las mediciones posteriores, queestas diferencias disminuyeron signifi-cativamente en el posoperatorio con rela-ción a las registradas en el preoperatorio.

La tabla 4 nos muestra las secuelas en-contradas en el examen físico, las cualesfueron: retracción gingival, parestesia dellabio inferior y persistencia de la adaquiaanterior (aunque en menor magnitud), en-tre otras.

TABLA 3. Valores promedio (mm) (« de) delas mediciones cefalométricas pre yposoperatoria

Valores promedio (n=14)Distancias PreoperatorioPosoperatoriocefalométricas Media (+ DE) Media (+ DE)

AnterioresPIO-ICS 56,3 (4,1) 57,3 (3,3)ENA-ICS 33,7 (3,7) 34,8 (3,0)Interincisiva -6,5* (2,8) 0,4 (2,3)PosterioresPF-PM 92,9* (9,2) 84,9 (6,1)Cúspide sana1er. MS-PF 52,2* (3,8) 47,9 (3,3)

P<0,001 preoperatorio vs posoperatorio.

TABLA 4 . Secuelas encontradas al examenfísico

Pacientes No %

Retracción gingival 5 35,7Parestesia del labio inferior 5 35,7Adaquia anterior 4 28,6Adaquia postero-lateral 3 21,4Pérdidas dentarias 2 14,3Otras 3 21,4

n = 14

Discusión

En la tabla 1 se muestran los tipos deoperaciones realizadas a nuestros pacien-tes, donde prevalecen la combinación deosteotomía Le Fort I segmentado con as-censo posterior, extracción dentaria ymentonoplastia.

En muchos pacientes, la osteotomíasegmentaria posterior no, puede ser reali-

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zada sin la previa exéresis de un diente, de-bido a la relación anatómica de las raíces,entre las cuáles, debe hacerse el corte. Deno ser así, pueden perderse los dientes alquedar sus raíces sin sostén óseo debido ala osteotomía. En ocasiones el sacrificiodentario está dado por la necesidad de evi-tar interferencias óseas y/o dentarias paralograr los movimientos predeterminados.

También es destacable en nuestro es-tudio, el predominio de esta osteotomía conmentonoplastia, esto se explica a causa deque diversos autores han demostrado quela mordida abierta anterior es más frecuenteen el síndrome de cara larga.2

La agrupación de los pacientes aten-diendo a las diferencias cefalométricas prey posoperatorio se refleja en la tabla 2. En 9pacientes aumentó la distancia del puntoinfraorbitario (PIO) al incisivo central supe-rior (ICS) en las mediciones posoperatoria,al igual que la distancia de la espina nasalanterior (ENA) al incisivo central superior.Este aumento puede ser explicado por lanecesidad de realizar en varios pacientesmovimientos ortodóncicos de extrusión,para completar el cierre de la adaquia ante-rior siempre que la relación labio-diente lopermita. La extrusión dentaria, también pue-de producirse durante la etapa de inmovili-zación máxilo-mandibular, una vez retiradala placa oclusal.

En 2 pacientes encontramos que lasdistancias del PIO-ICS y de la ENA-ICS, dis-minuyeron en el posoperatorio, lo cual, pue-de explicarse por el corte óseo que se reali-za en esta técnica, que lleva implícito algu-na ostectomía, comprometiendo la altura delmaxilar.

La distancia interincisiva disminuyó enel 100 % de los casos como se esperaba. Asu vez la distancia del plano de Frankfort(PF) al plano mandibular (PM) disminuyóen el 100 % de los casos, lo cual puede ex-plicarse porque en la técnica quirúrgica, al

ascender los segmentos dentoalveolaresposterosuperiores, los dientes inferioresbuscan contacto oclusal, donde provocanrotación en el eje transversal de los cóndilosmandibulares y desplazan el planomandibular a una posición superior. Tam-bién la distancia de una cúspide sana del1er. molar superior (1er. MS) al PF disminu-yó en el 100 % de los pacientes, por laostectomía realizada para lograr el ascensode los sectores posterosuperiores y el con-siguiente cierre de la adaquia anterior.

La tabla 3 nos muestra los valores pro-medio de las mediciones cefalométricas prey posoperatoria. En las medidas anterioreslas distancias PIO-ICS, así como ENA-EISen el pre y posoperatorio, no mostraron di-ferencias significativas, respectivamente.En cambio, la distancia interincisiva en elpre y posoperatorio, mostró una diferenciaestadísticamente significativa (p<0,001)entre ambas.

En las medidas posteriores las distan-cias del PF-PM y de una cúspide sana 1er.MS-PF al compararlas, mostraron diferen-cias estadísticamente significativas. De esteanálisis se deduce que la distanciainterincisiva, la distancia PF-PM y de lacúspide sana 1er. MS-PF, son las que mues-tran las modificaciones más importantes.Las secuelas de la osteotomía Le Fort I,pueden variar desde una desvitalización deldiente, defectos periodontales, pérdida dedientes y de segmentos de hueso alveolar,hasta la necrosis de todo el maxilar.20 Enesta investigación los hallazgos al examenfísico realizado al año de la operación fue-ron: retracción gingival, persistencia de laadaquia anterior (aunque en menor magni-tud), adaquia posterolateral, pérdidas den-tarias y parestesia del labio inferior, estaúltima, a causa de que en 11 de los pacien-tes se les realizó mentonoplastia.21 Esdestacable que no encontramos pérdida dela vitalidad pulpar, complicación frecuente-mente descrita por otros autores.22-25

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Conclusiones

1. La ostectomía Le Fort I segmentado conasenso posterior constituye una técni-ca quirúrgica adecuada para el cierre dela adaquia anterior.

2. Las variaciones obtenidas en las me-diciones cefalométricas permiten

comprobar cambios esqueléticos osten-sibles durante la realización de esta téc-nica.

3. La retracción gingival y la parestesiadel labio inferior, fueron las secuelasmás frecuentes al examen físico pos-operatorio.

SUMMARY: A study was performed on 14 patients operated from vertical excessive growthof maxilla in the posterior sector and anterior open bite by means of the surgical technique calledSegmental Le Fort I with raising of posterior segments. To follow the clinical evolution of thesepatients, they were physically examined to find out possible sequelae. The radiography evolutionwas based on lateral teleradiography with profilegram where fixed points were taken to observethe changes in cephalometric messures. Changes in cephalometric measurements allowed to provenoticeable skeletal changes during the implementation of this technique. The physical exam provedthat the most frequent sequelae were: gingival retraction, lower lip paresthesia, persistent anterioropen bite although in lesser extent, posterolateral open bite and loss of dents.

Subject headings: MALOCCLUSION/surgery; OSTEOTOMY, LE FORT/methods; TREATMENT, OUTCOME;MAXILLA/surgery.

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Recibido: 30 de marzo de 1998. Aprobado: 15 de

abril de 1998.

Dra. Sofía Barroso Ortiz. Ave. 19 No. 3412 entre

34 y 36. Playa, Ciudad de La Habana, Cuba.

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Rev Cubana Ortod 1988;13(2):80-83

Clínica Estomatológica Provincial de Santiago de Cuba

COSTO DEL MONTAJE Y PUESTA EN MARCHA DE TÉCNICASFIJAS Y REMOVIBLES

Dra. Paula Mok Barceló,1 Dra. Coralia Fernández Ramírez2 y Téc. Elena GarcíaRodríguez3

RESUMEN: Se realizó un estudio descriptivo, con la finalidad de determinar el costo en elmontaje y puesta en marcha de las técnicas fija y removible, utilizadas en el Departamento deOrtodoncia de la Clínica Estomatológica Provincial Docente de Santiago de Cuba, en los pacientesque ingresaron durante el mes de mayo de 1995. Con este propósito se efectuaron 6 ingresos: 3 parala técnica fija y 3 para la removible, y en cada caso, se calcularon los gastos de materiales y otroscomo salario por el tiempo empleado, depreciación establecida por tarifas en el Sistema Nacional deContabilidad, contribución a la seguridad social, gasto de agua y de electricidad, gastos indirectos yprestaciones complementarias; esto permitió constatar que hubo un aumento en los costos de lastécnicas fijas con extracciones en relación con la técnica fija sin extracciones. El costo menorcorrespondió al aparato con rejilla y el costo promedio fue mayor en la técnica fija al ser comparadacon la removible. De ello se infiere que es preciso prevenir las maloclusiones para disminuir lanecesidad del montaje de estas técnicas.

Descriptores DeCS: APARATOS ORTODONTICOS REMOVIBLES/economía; COSTOS Y ANALISIS DE COS-TO; ORTODONCIA CORRECTIVA/economía.

1 Especialista de I Grado en Ortodoncia.2 Especialista de I Grado en Administración de Salud.3 Técnico Medio en Costo y Contabilidad.

A pesar de los diversos tratamientosque se aplican en ortodoncia preventiva einterceptiva para erradicar lasmaloclusiones,1 es grande el número depacientes que las presentan; pues segúninvestigaciones realizadas, 8 de cada 10 ni-ños estudiados muestran alteraciones de ladentición2 y el 43 % tenía oclusión defec-

tuosa de los dientes.3 Además, teniendo encuenta que éstas afectan no sólo la estéticasino también la fonética,4 se precisa de sutratamiento, ya sea con técnicas fija oremovible.

Lo anterior nos motivó por conocerel costo de estos aparatos, dado que esteindicador se ha convertido en un elemento

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de valor para nuestros profesionales, lo quepermite una mejor planificación del presu-puesto, así como tener un patrón de com-paración para el costo de diferentes técni-cas, lo que sirve de herramienta de trabajopara el análisis destinado a facilitar la tomade decisiones y la orientación política.

De acuerdo con el interés expresadoen la confección de este trabajo, nos pro-pusimos como objetivo determinar los cos-tos en el montaje y puesta en marcha detécnicas en Ortodoncia.

Métodos

Se realizó un estudio descriptivo, conla finalidad de determinar el costo en el mon-taje y puesta en marcha de técnicas fija yremovible utilizadas en el Departamento deOrtodoncia de la Clínica EstomatológicaProvincial Docente de Santiago de Cuba,en 6 pacientes que ingresaron durante elmes de mayo de 1995: en 3 de ellos se utili-zó la técnica fija y en los 3 restantes laremovible.

Durante la primera visita se confeccio-nó la historia clínica y los modelos de estu-dio, así como el examen radiográfico; ya enla segunda visita se elaboró el plan de tra-tamiento, se indicó la mioterapia y lafisioterapia bucal y, a diferencia del tipo detécnica a emplear, se hicieron modelos detrabajo o se colocaron separadores. En latercera visita se instaló el aparato removibleo las bandas en el caso de la técnica fija,hasta concluir con el arco intrabucal y po-ner en marcha el tratamiento, lo que se tomócomo unidad de resultado para el costo.

En cada caso se efectuó el cálculo degastos de materiales y otros como salario,por el tiempo empleado, el de depreciación,establecido por tarifas en el Sistema Nacio-nal de Contabilidad, la contribución a la se-guridad social, el gasto de agua y de elec-

tricidad; entre los gastos indirectos se tu-vieron en cuenta las prestaciones comple-mentarias, como es el gasto del laboratoriode ortodoncia, el de la central de esteriliza-ción, de los rayos X y el del Departamentode Exodoncia.

Una vez obtenidos los datos, fuerontabulados y presentados en cuadros esta-dísticos.

Resultados

En la tabla 1 aparece el costo del mon-taje y puesta en marcha de la técnica fija, elcual fue de $ 27,73 en el maxilar superior sinextracciones, de $ 51,3 en ambos maxilaressin extracciones y de $ 36,42 en el maxilarsuperior con extracciones. El mayor costocorrespondió -desde el punto de vista ma-temático- al montaje de la técnica en losmaxilares superiores e inferior, el cual aquíresulta doble.

Si tenemos en cuenta el costo de la téc-nica en cuanto a la realización o no de ex-tracciones, es válido señalar que resultamayor en el primer caso, pues se incurre enun gasto adicional durante el montaje. Enesta técnica los gastos directos son mayo-res que los indirectos.

Dentro de los gastos directos en quese incurrió, debe destacarse lo costoso queresulta el material, así como el gasto de sa-lario. Ello se debe, a que en la técnica fija,cada diente lleva varios aditamentos, loscuales, se confeccionan directamente so-bre el paciente.

El costo del montaje y puesta en mar-cha de la técnica removible se muestra en latabla 2. El costo unitario fue mayor en elaparato con resorte ($ 17,32), al que siguióel aparato con tornillo ($ 17,12) y por últi-mo, el que tenía rejilla ($15,77).

Se aprecia aquí que el gasto está inver-tido con respecto a la tabla anterior, pues

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TABLA 1. Costo del montaje y puesta en marcha de la técnica fija

Técnicas fijas Maxilar S/E Maxilar Maxilar Maxilar superiorGastos superior % superior inferior con extracción %

Gasto de material $ 8,91 32,13 $ 19,95 39,02 $10,06 27,62Gasto de salario 6,96 25,10 11,33 22,16 6,61 18,15Otros gastos 2,70 9,73 4,25 8,31 4,41 12,11Gastos directos 18,57 66,96 35,53 69,49 21,08 57,88Gastos indirectos 9,16 33,04 15,60 30,51 15,34 42,12Laboratorio Ortodoncia 0,54 1,96 0,54 1,06 0,54 1,48Central de esterilización 2,38 8,58 8,82 17,25 4,32 11,86Deparamento de Rayos X 6,24 22,50 6,24 12,20 6,24 17,13Extracción - - - - 4,24 11,65Gasto Total 27,73 100,0 51,13 100,0 36,42 100,00

Costo unitario 27,73 51,13

Tabla 2. Costo del montaje y puesta en marcha de la técnica removible

Técnicas removibles Aparato con rejilla Aparato con resorte Aparato con tornilloGastos % % %

Gasto de material $ 1,62 10,27 $ 1,62 9,35 $1,62 9,46Gasto de salario 3,05 19,34 4,01 23,15 3,56 20,79Otros gastos 1,28 8,12 1,61 9,30 1,41 8,24Gasto directos 5,95 37,73 7,24 41,80 6,59 38,49Gastos indirectos 9,82 62,27 10,08 58,20 10,53 61,51Laboratorio de Ortodoncia 2,74 17,37 3,00 17,32 3,45 20,15Central de esterilización 0,84 5,32 0,84 4,85 0,84 4,91Deparamento de Rayos X 6,24 39,58 6,24 36,03 6,24 36,45Gasto Total 15,77 100,00 17,32 100,00 17,12 100,00Costo unitario 15,77 17,32 17,12 36,42

los gastos indirectos son mayores que losdirectos, a causa de que en esta técnica laconfección del aparato se lleva a cabo en elLaboratorio de Ortodoncia y luego, cuan-do se cita al paciente, es que el especialistaprocede a su instalación.

El costo promedio resultó mayor en latécnica fija por la gran cantidad de adita-mentos que requiere, el tiempo que se em-plea en su instalación y el instrumental quese utiliza para su confección; mientras queen la técnica removible resulta menor el tiem-po empleado por el especialista, así como elinstrumental.

De ello se infiere la necesidad de preve-nir e interceptar las maloclusiones, a fin dedisminuir el montaje de aparatos fijosmultibandas y dejarlos sólo para aquellospacientes que no evolucionen en su mo-mento, bien porque no fueron tratados,porque no cooperaron con el uso del apa-rato o porque no evolucionó la displasia yla disfunción neuromuscular y aún persistela maloclusión.5

Así, al conocer el costo por aparatos,conocemos por qué y para qué prevenimos6

desde el punto de vista económico.

83

Discusión

Se halló un aumento en los costos de latécnica fija con extracciones en relación conigual técnica, pero sin extracciones

En la técnica removible el costo fuemenor en los aparatos con rejilla y tuvo muypoca diferencia en los otros 2.

El costo promedio de la técnica fija re-sultó mayor que el de la removible.

SUMMARY: A descriptive study of patients admitted to Provincial Teaching Dental Clinics inSantiago de Cuba during May, 1995 was carried out, with the purpose of determining the cost ofapplying and placing fixed and removable orthodontic appliances by the Orthodontics Department ofsuch clinics. There were 6 admissions, three for fixed appliances therapy and three for removableappliances therapy. Material costs, time wage, depreciation set by the National Accounting Systemrates, social security contribution, water and electricity consumption cost, indirect costs andcomplementary expenses were estimated, all of which allowed to show that costs of fixed orthodonticappliances with tooth extraction were higher than those of thefixed appliance without extraction.Grid-like appliances exhibited the lowest cost whereas the average fixed appliance cost was highercompared with that of removable ones. This led to the conclussion that it is necessary to preventmalocclusions to reduce the requirement for these orthodontic appliances.

Subject headings: ORTHODONTIC APPLIANCES, REMOVABLE/economies; COST AND COST ANALYSIS;ORTHODONTICS, CORRECTIVE/economies.

Referencias bibliográficas

1. Pérez Varela H, Ramos Morales C, CastañedaAbascal IE. Tratamiento con mioterapia co-lectiva a escolares de primaria afectados conlabios cortos e incompetentes y/o lenguaprotráctil. Rev Cubana Ortod 1993;8(2):22-30.

2 . Blanco Céspedes AM, Pérez Varela H, VergaraDomínguez N, Rodríguez Betancourt R. Estu-dio transversal de dentición temporal en ni-ños de 5 años de escuelas primarias, munici-pio Habana Vieja. Rev Cubana Ortod 1994;9(1-2):3-7.

3 . Santiago Cepero A, Díaz Brito RJ, GonzálezPérez A. Diagnóstico ortodóntico del área de

salud "Venezuela", Ciego de Ávila. Rev Cuba-na Ortod 1996;11(1):22-5.

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5 . Cano Lavín V. Técnica del Profesor Poussin.Rev Cubana Ortod 1991;6(1-2):47-67.

6 . Tripaldi DA. Prevención: )por qué y para qué?Rev Odontol Rosario 1996;1(3):9-10.

Recibido: 21 de mayo de 1998. Aprobado: 3 dejulio de 1998.Dra. Paula Mok Barceló. Clínica EstomatológicaProvincial de Santiago de Cuba. Santiago de Cuba,Cuba.

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Rev Cubana Ortod 1988;13(2):84-89

Clínica Estomatológica Docente Municipal "Habana Vieja"

TRATAMIENTO PRECOZ DE INTERFERENCIAS OCLUSALESQUE PROVOCAN LATEROGNATISMO EN NIÑOS DE EDADESTEMPRANAS

Dra. Herminia Pérez Varela,1 Dra. Clotilde Ramos Morales2 y Dr. Lázaro M.Domínguez Fleites3

RESUMEN: Se realizó un estudio con 870 niños de círculos infantiles y con 2 893 niños deescuelas primarias, entre los 3 y los 9 años de edad, con dentición temporal y mixta, de los munici-pios Habana Vieja y Playa; se comprobó que el 8,5 % de los primeros cn dentición temporal y el 6,1 %del segundo grupo con dentición mixta estaban afectados, presentando alteraciones oclusales queprovocaban desviación mandibular, interfiriendo el crecimiento y desarrollo normal de la cara. Laterapia aplicada fue de acuerdo con la gravedad de la alteración que presentaban y consistió desdeun balance oclusal en los dientes, hasta la colocación de aparatos. Después de corregida la altera-ción se ha continuado el control clínico sistemático del paciente, hasta la instauración de la denticiónpermanente.

Descriptores DeCS: MALOCLUSION/terapia; APARATOS ORTODONCICOS, ORTODONCIA CORRECTIVA;DENTICION MIXTA; DENTICION PRIMARIA; JARDINES INFANTILES.

1 Especialista de II Grado en Ortodoncia. Clínica Estomatológica Docente "Habana Vieja".2 Especialista de II Grado en Ortodoncia Clínica Estomatológica "Miramar".3 Especialista de II Grado en Ortodoncia. Clínica Estomatológica "Miramar".

El examen clínico bucal implica el análi-sis detallado de las arcadas dentarias, te-niendo en cuenta sus características encualquiera de las 3 denticiones (temporal,mixta y permanente).

La dentición temporal al igual que lamixta están sujetas a grandes modificacio-nes, de ahí que el mantener un control pe-riódico sobre estas denticiones permite pre-

venir y también interceptar alteraciones quese presentan en ésta.

El tiempo de duración de la denti-ción primaria es corto, de unos 5 años, sudesarrollo y función lo imprime el tipo dedieta, generando gran actividad de los maxi-lares y estos 20 dientes sufren cambios ta-les como la atrición y los diastemas. La atri-ción intensa aplana los bordes de los inci-

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sivos ocluye borde a borde, así como losmolares que sufren los desgastes necesa-rios y cumplen la mayor parte de la funciónde esta dentición que no sólo es lamasticación de los alimentos y la preserva-ción del espacio para la dentición perma-nente, sino también, su adaptación a lasmodificaciones del crecimiento.

En cuanto a la dentición mixta, ésta seestablece en el arco dentario con el brotede los primeros molares permanentes; yaque detrás de éstos, continúa el crecimien-to de los maxilares para alojar a los molarescomplementarios; las apófisis alveolaresaumentan su altura conjuntamente con elresto de la cara, este crecimiento está ínti-mamente relacionado con las adaptacionescontinuas de las relaciones oclusales.

Tanto la dentición temporal como lamixta, pueden presentar alteraciones, talescomo, disminución del ancho de las arca-das dentarias, mal posiciones dentarias yalgunos hábitos deformantes que puedenprovocar desviaciones de la mandíbula, quede no ser interceptadas, interferirá el creci-miento y el desarrollo de la mandíbula y delas articulaciones temporomandibulares(ATM),1 que afectan la función y estéticadel paciente.

En edades tempranas las ATM estánpoco desarrolladas y se van modificandode acuerdo con su crecimiento y su desa-rrollo normal; en los niños la cavidadglenoidea es poco profunda y los cóndilosvan sufriendo cambios normales, por lo tan-to, cualquier trastorno oclusal puede reper-cutir en el buen desarrollo de éstas.2,3 LasATM son las encargadas de regir los movi-mientos de la mandíbula, de ahí la impor-tancia de prevenir e interceptar aquellas al-teraciones que pueden afectar su función yforma, ya que en este conjunto dentomaxilardebe existir una correlación de función-for-ma y forma-función para mantener el equili-brio de todo este sistema tan complejo.4-6

Los niños que presentan desviacionesmandibulares o laterognatismo desde eda-des tempranas, se les diagnostica y se lerealiza el tratamiento adecuado, lo que evi-tará en el futuro un tratamiento quirúrgico.7

Métodos

Se realizó un estudio descriptivo so-bre la desviación mandibular en edades tem-pranas, se analizaron las siguientes varia-bles, asimetría facial, interferencias denta-rias, mordidas cruzadas por micrognatismoy alteraciones incipientes de las ATM.

Se examinaron 870 niños de los círcu-los infantiles y 2 893 escolares de primariahasta cuarto grado, de los municipios Ha-bana Vieja y Playa. Estos pacientes, de am-bos sexos y con edades entre los 3 y los 9años, con dentición temporal y mixta, se lesconfeccionó una plantilla de control indivi-dual, donde se recopilaron todos los datosque permitieron diagnosticar, por medio delexamen facial y bucal, el laterognatismomandibular.

En el examen facial, se observó al pa-ciente de frente para detectar la desarmoníafacial causada por el laterognatismo en queel mentón se ve desviado a la derecha eizquierda, y una de las comisuras labialespuede estar descendida. Al indicarle al pa-ciente que realizara el movimiento de aper-tura y cierre para determinar de que lado erala desviación, se le orientó mantener la bocaabierta para examinar las arcadas dentariasy observa la dentición (temporal o mixta),la posición de los dientes y la presencia deobturaciones con puntos brillantes. Ade-más, les realizó la medición de Bogue8 y lade Mayoral9 para diagnosticar elmicrognatismo transversal y la mordida cru-zada.

Después se le indicó que fuera cerran-do la boca lentamente para determinar la

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línea media inferior hacia qué lado quedabadesviada (derecha o izquierda), se compro-bó en las interferencias dentarias, qué dien-tes en mal posición las causaban o si erapor una obturación alta, si la mordida cru-zada era lateral o bilaterial y se clasificó lamaloclusión por la relación molar (neutro,disto, mesio).

Con los dedos del medio de ambasmanos, se palpó por delante del trago am-bos cóndilos derecho e izquierdo, se leorientó al paciente que abriera la boca lomás que pudiera y la cerrara lentamente parapalpar el recorrido condilar y detectar cual-quier alteración incipiente en las ATM, si elpaciente refería dolor, o si se escuchaba al-gún ruido o chasquido.

La técnica utilizada en el tratamientofue enseñarle al paciente a ocluir en céntri-ca para conocer cómo debía ocluir correc-tamente; esta posición sirve de guía parasaber qué tratamiento aplicarle, el cual, de-pende de la gravedad que presente ellaterognatismo.

En los casos que el paciente ocluya encéntrica y los segmentos laterales superio-res ocluyan por fuera de los inferiores, se leorienta ocluir sobre papel de articular paraque quede marcado en las caras oclusalesy cúspides los puntos de interferencia queserán rebajados, con una piedra o con elairotor.

Generalmente el niño que tiene denti-ción temporal y las cúspides de los caninosson muy agudas, éstas provocan una trabamecánica que impide el deslizamientomandibular que causan el laterognatismocon mordida cruzada y la desviación de lalínea media; esta anomalía puede intercep-tarse con un tratamiento sencillo al desgas-tar esas cúspides, devolviéndole una oclu-sión funcional que permita el deslizamientomandibular correcto y evitar que se inter-fiera el crecimiento y desarrollo de la carahaciendo que una hemicara crezca más quela otra.

Otros pacientes sólo necesitaron comotratamiento el balance oclusal en las arca-das dentarias, además de un aparatoremovible con aleta guía para mantener lasarcadas dentarias en céntrica, y coincidanlas líneas medias superior e inferior.

Los pacientes más complicados, queademás de tener la desviación mandibularpor la interferencia dentaria, presentabanmicrognatismo transversal superior, mante-niendo la mordida cruzada, al ocluir en cén-trica, fueron tratados con balance oclusal yaparato removible con aleta guía y tornillode expansión, para corregir elmicrognatismo.

Los que presentaron alteración de lasATM a la apertura, se les orientó ejerciciosque le limitaran la apertura al bostezar y alcomer, ingerir bocados pequeños para noabrir demasiado la boca.

A los pacientes que se les ha restable-cido una oclusión funcional, continúan bajocontrol sistemático, hasta el cambio totalde la dentición.

Resultados

Los 870 niños de ambos sexos, estu-diados en los círculos infantiles, 425 (48,9 %)eran del cuarto año de vida, de los cuales21 (2,4 %) resultaron afectados; fueron tra-tados 16 (1,8 %) y 5 (0,6 %) abandonaron eltratamiento; 445 (51,1 %) pertenecían a quin-to año de vida, de éstos 53 (6,1 %) afecta-dos, de los cuales se trataron 45 (5,2 %), deéstos,

8 no continuaron tratamiento (0,9 %)

(tabla 1).En las escuelas primarias, se examina-

ron 2 893 niños, también de ambos sexos,distribuidos por grados de la siguiente for-ma, de pre-escolar 483 (16,7 %) y estabanafectados 74 (2,5 %), se trataron 69 (2,3 %)y abandonaron el tratamiento 5 (0,2 %); enprimer grado se examinaron 610 (21 %) y

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TABLA 1. Niños de círculos infantiles examinados

Edad Examinados Afectados Tratados No tratados

% % % %

4to. año de

vida (3-4 años) 425 48,9 % 21 2,4 16 1,8 5 0,6 %

5to. año de

vida (4-5 años) 435 51,1 53 6,1 45 5,2 8 0,9

Total 870 74 61

TABLA 2. Escolares de primaria examinados

Grados Examinados Afectados Tratados No tratados

% % % %

Pre-escolar 483 16,7 74 2,5 69 2,3 5 0,2

Primero 610 21 48 1,6 40 1,3 8 0,3

Segundo 700 24,1 30 1 28 0,9 2 0,1

Tercero 520 17,9 17 0,6 13 0,4 4 0,1

Cuarto 580 20 11 0,4 9 0,4 2 0,1

Total 2893 180 159 21

estaban afectados 48 (1,6 %), se trataron 40(1,3 %) y no continuaron el tratamiento 8(0,3 %); de segundo grado, se examinaron700 (24,1 %) de los cuales 30 estaban afec-tados (1 %), se trataron 28 (0,9 %) y aban-donaron el tratamiento 2 (0,1 %); de tercergrado se estudiaron 520 (17,9 %), estabanafectados 17 (0,6 %), fueron tratados 13(0,4 %) y dejaron el tratamiento 4 (0,1 %) yen cuarto grado de 580 (20 %), resultaronafectados 11 (0,4 %), se trataron 9 (0,4 %) ydejaron de tratarse 2 (0,1 %). (tabla 2).

Los 254 niños afectados presentabanlas siguientes variables; 20 con desarmo-nía facial (9,1 %), éstos tenían una hemicaramás abultada que la otra, y algunos, conuna de las comisuras labiales descendidasdel lado de la desviación; 169 de los niños(66,5 %) presentaban interferencias cani-nas; 55 (21,6 %) presentaban interferencias

de otros dientes; 30 presentabanmicrognatismo transversal y con alteraciónde la ATM con chasquido a la apertura, 2niños (0,9 %). Ver tabla 3.

De los 254 afectados (6,7 %), se trata-ron 220 (5,8 %), ya que 34 abandonaron eltratamiento (0,9 %); a 154 niños (70 %) seles hizo balance oclusal por presentar inter-ferencia canina; a 44 (20 %) además del ba-lance oclusal, se le colocó un aparato conaleta guía para corregir la desviaciónmandibular, y a 22 (10 %) el tratamiento fuemás complejo, pues se le hizo balanceoclusal, y se le colocó un aparato removiblecon aleta guía y tornillo de expansión parael micrognatismo; se diagnosticaron 2 ni-ños (0,9 %) que tenían chasquidos en lasATM durante la apertura, a los que se lesorientó ejercicios al bostezar y al comer, li-mitando la apertura excesiva. (tabla 4).

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TABLA 3. Alteraciones diagnosticadas

4to. 5to.Alteraciones Año Año P-E 1ro. 2do. 3ro. 4to. Total

Asimetríafacial 0 1 7 5 3 3 1 20Interferenciacanina 14 43 64 32 9 6 1 169

5,5% 16,9% 25,2% 2,6% 3,5% 2,3% 0,4% 66,5%Interferenciade otrosdientes 5 6 7 14 13 7 8 55

1,96% 2,4% 2,8% 5,6% 5,2% 2,8% 1,2% 21,6%Micrognatismo 2 4 3 2 8 4 7 30

0,8% 1,6% 1,2% 0,8% 3,8% 1,6% 2,8% 11,8%Alteraciónde las ATM 0 0 0 0 0 1 1 2

TABLA 4. Tipos de tratamientos

Círculo infantil Escolares de PrimariaTerapia 4to. Año 5to. Año P-E 1ro. 2do. 3ro. 4to. Total

Balance oclual 12 38 61 30 8 4 1 15470 %

Balance oclusal yaparato removiblec/aleta guía 3 5 6 9 13 5 3 44

20%Balance oclusal yaparato removible 1 2 2 1 7 4 5 22c/aleta 10%Tornillo 220Ejercicios 0 0 0 0 0 1 1 2

Discusión

De los niños tratados, al 70 % seles aplicó la terapia de balance oclusal,devolviéndole la función normal al rea-lizar la mandíbula sus movimientos sininterferencias, ocluyendo las arcadasnormalmente al hacer coincidir las lí-neas medias superior e inferior. Resta-blecida la función dentaria, la asime-tría facial provocada por la desviaciónmandibular que tiraba de la musculatu-ra, se ha ido corrigiendo, el 20 % trata-

dos con balance oclusal y aparatoremovible con aleta guía, este último ele-mento permitió estabilizar la posición co-rregida ya que las interferencias la provo-caban diferentes dientes, y el 10% que ade-más tenía micro-magnetismo transversalsuperior, se expansionó la arcada, y seestabilizó la posición mandibular con la ale-ta guía y los 2 pacientes con alteración dela ATM, se les chequea la apertura limitada,que al ser pacientes de dentición temporaly mixta, su tratamiento continúa hasta elcambio total de la dentición.

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Recomendaciones

1. El diagnóstico precoz de estas alteracio-nes en edades tempranas en el círculoinfantil impide el desarrollo de una ano-malía compleja.

2. El tratamiento durante la primera denti-ción resulta más sencillo por ser la ma-

yoría de estas alteraciones de tipo fun-cional.

3. También el tratamiento resulta másecocamente con balance oclusal.

4. La intercepción inmediata de esta alte-ración, permitirá el desarrollo normal dela cara, sin afectar la estética, además deeliminar la posibilidad futura de una in-tervención quirúrgica.

SUMMARY: 870 day-care center children and 2 813 elementary school children aged 3 to 9years from Havana Vieja and Playa municipalities, who had primary and mixed dentition, werestudied. It was proved that 8.5 % of the former group with primary dentition and 6.1 % of the latterwith mixed dentition were affected by occlusal disorders causing mandibular deviation that interfereswith the normal growth and development of their faces. Used corrective therapy depended on theseriousness of the disorder and ranged fro from occlusal balance of teeth to treatment with orthodonticappliances. Once the malformation was corrected, the patients continued to be clinically followed upuntil the eruption of their permanent dentition.

Subject headings: MALOCCLUSION/therapy; ORTHODONTIC APPLIANCES; ORTHODONTICS, CORRECTIVEDENTITION, MIXED; DENTITION, PRIMARY; CHILD DAY CARE CENTERS.

Referencias bibliográficas

1. Castellino A.J. Crecimiento y desarrollo crá-neo facial. 1969. (Edición Revulucionaria).

2 . Vanghose HC. La oclusión y la ATM. ClinOdontol Norteam, 1964;

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5 . Echevar r i G, Kova lsk i GS. Neu-ro f is io logía de la oc lus ión. Bogotá :Monserrate Lida. 1986:

9 . Mayoral GM, Ortodoncia. Principios funda-mentales y práctica. Madrid: Labor, 1992:

Recibido: 30 de marzo de 1998. Aprobado: 28 deabril de 1998.Dra. Herminia Pérez Varela. Campanario No. 611entre Reina y Salud. Centro Habana. Ciudad de LaHabana, Cuba.

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7 . Espinosa de la SR. La ATM. Rev EstomatolMéx, 1971.

8 . Hotz R. Ortodoncia. En la práctica diaria. Susposibilidades y límites, 1973.

90

Rev Cubana Ortod 1988;13(2):90-93

Clínica Estomatológica Docente de Especialidades de Villa Clara

ESTUDIO DE LA MORFOLOGÍA OCLUSAL EN MODELOSCON OCLUSIONES NORMALES

Dr. Lizandro Michel Pérez García,1 Dra. Rosalina Sánchez Torres,1 Dra. Clara IreneÁlvarez Román,2 Dra. Maritza Blásquez Casanova2 y Dr. Rolando Castillo Hernández2

RESUMEN: Se realizó un estudio descriptivo de 49 modelos de estudio con oclusiónmorfológicamente normal, obtenidos del examen de 3 434 pacientes de ambos sexos entre los 15 ylos 18 años de edad. Se determinó el diámetro mesiodistal de cada diente, anchura y profundidad delpaladar, curva de Spee, espacio disponible, perímetro y longitud del arco. Se analizó estadísticamentela relación entre las variables.

Descriptores DeCS: OCLUSION DENTAL; MODELOS DENTALES.

1 Residente de 1er. año en Ortodoncia.2 Especialista de I Grado en Ortodoncia.

Los modelos dentarios son los regis-tros más importantes en la mayor parte dela atención ortodóncica. Como registros delproblema inicial son invalorables para laplanificación del tratamiento. Sin embargo,su importancia aumenta con el progreso deltratamiento.1

En nuestro medio se utilizan métodosde medición de modelos de autores extran-jeros, donde los valores se comparan conlos resultados obtenidos, en el pacienteobjeto de estudio; pero las característicasmorfológicas de la dentición pueden variaren las diferentes poblaciones.2 Por estosurge el interés de analizar el comportamien-to de las diferentes variables en una mues-

tra significativa de pacientes de nuestraprovincia.

Métodos

Se realizó un estudio descriptivo de 49modelos de estudio con oclusiónmorfológicamente normal, obtenidos delexamen de 3 434 pacientes entre los 15 y los18 años de edad, de ambos sexos, duranteel período comprendido entre septiembrede 1987 y noviembre de 1988.

En éstos se midió el diámetromesiodistal de cada diente, el espacio dis-ponible y la distancia de 4-4, 5-5, 6-62 con

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un pie de rey previamente calibrado; asícomo la profundidad del paladar con uncompás tridimensional de Korkhaus. Paramedir la profundidad de la Curva de Spee3

se utilizó un alambre 0,28' y un pie de rey. Elperímetro del arco se midió con un alambrede ligadura 0,12 y la longitud del arco4 conun alambre 0,28' y en ambos se utilizó tam-bién una regla milimetrada.

Obtenidos los resultados se efectuó elanálisis estadístico donde se utilizaron téc-nicas descriptivas como media, desviaciónestándart, valor mínimo y valor máximo. Secalculó el coeficiente de correlación dePearson para determinar si existía o no de-pendencia lineal entre las variables. Se con-sideró que existía diferencia significativacuando p < 0,01 y muy significativa cuandop < 0,001.

Para el cálculo de los diferentesestadígrafos se usó el Paquete de progra-mas SPSS/PC; algunos de los resultadosmás importantes se presentan en tablas.

Resultados

En la tabla 1 se muestran las medidasde tendencia central y la variación de cadavariable como la media, la desviaciónestándar, el valor mínimo y el valor máximo.

En la tabla 2 se expresa la relación en-tre las variables asociadas con más frecuen-cia en la bibliografía revisada.2,5,9

Encontramos una relación lineal muysignificativa entre el índice incisivo inferiory las distancias de canino y bicúspides su-periores y no encontramos relación entreeste índice y las distancias inferiores.

Corroboramos en nuestra muestra la re-lación inversa entre la profundidad del pa-ladar y el diámetro transversal del maxilar,sin relación lineal significativa.

En nuestro estudio apareciamos unarelación lineal muy significativa entre el ín-

dice incisivo inferior y el diámetro transver-sal del maxilar, no siendo así entre el índiceincisivo superior y esta medida.

TABLA 1. Comportamiento de las variablesestudiadas

Desviación Valor Valor Variante Media estándar mínimo máximo

IIS 31,17 4,25 21,3 34,3III 22,82 1,45 20,5 25,8L4-4 36,52 3,09 31,2 49,1L5-5 41,92 4,21 24,25 51,5L6-6 47,43 3,32 40,0 55,3P p 19,30 2,28 14,0 25,0Las 27,96 9,64 21,0 78,9Lai 23,84 7,27 19,0 58,0Pas 74,85 9,95 18,5 88,0Pai 63,33 11,70 22,5 81,2Csd 1,60 0,76 0,0 3,0Csi 1,56 0,63 0,2 4,0Dsd345 21,90 1,20 18,2 24,1Dsi345 21,91 1,25 19,3 24,4Did345 22,65 8,68 18,1 81,2Dii345 22,34 7,26 18,0 70,7EDS 74,49 9,16 21,5 91,3EDI 64,90 3,64 57,2 72,3

Abreviaturas:IIS: Índice Incisivo superiorPai: Perímetro del arco inferiorIII: Índice incisivo inferiorPas: Perímetro del arco superiorL4-4: Longitud de 4 a 4Csi: Curva de Spee izquiedaL5-5: Longitud de 5 a 5Csd: Curva de Spee derechaL6-6: Longitud de 6 a 6EDI: Espacio disponible inferiorPp: Profundidad del paladarEDS: Espacio disponible superiorLai: Long. del arco inferiorDes. Sta. Desviación estándartLas: Long. del arco superiorDsi345:Dist. Sup. izq. de 345Dii345:Dis Inf. izq. de 345Dsd345: Dist. Sup. der. de 345Did345: Dis. Inf. der. de 345

Al observar las medidas obtenidas no-tamos la relación lineal significativa entrelos índices incisivos superior e inferior ysignificativa entre las longitudes, períme-

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tros y curva de Spee de las arcadas supe-rior e inferior.

TABLA 2. Correlación entre variables

Variables Variables para comparar

III IIS-3537*

IIS L4-4 L5-5 L6-6.3117 .2188 .3499*

III L4-4 L5-5 L6-6.5755** .2877 .5836**

PAS PAI. 4804**EDS IIS DSD345 SI345

.1674 .4885** .4220*EDI III ID345 II345

.6647** .3332 .3823*P P L4-4 L5-5 L6-6

.0195 .0108 .1133LAS LAI

.9527**III DSD345 SI345 ID345 II345 .5830** .6076**.2358 .2880CSD CSI

.4498**

* .01**001

Discusión

La media de la profundidad de la curvade Spee, en nuestro estudio, difiere de los

valores propuestos en la clave VI porAndrews3 0-1 mm (EE.UU.) y se correspon-den con los obtenidos por Reytor[Disfunción temporomandibular y las cla-ves de la oclusión de Andrews. (Trabajopara optar por el título de Especialista de IGrado en Ortodoncia, Villa Clara, 1996)]1,5-3,0 mm.

Cuando comparamos nuestros resul-tados con la tabla de probabilidades de losdiferentes diámetros mesiodistales para ladentición permanente5 (EE.UU.) encontra-mos coincidencia en los valores propues-tos para el maxilar inferior cuando coinci-den en la probabilidad del 75 % y en el maxi-lar superior cuando coinciden en la proba-bilidad del 50 %.

Los valores del diámetro transversaldel maxilar de nuestro estudio se corres-ponden con los de Mayoral2 (4-4:35, 5-5:41,6-6:47).

Al relacionar la profundidad del pala-dar con el diámetro transversal del maxilar,coincidimos con los resultados de otrosautores5 encontrando una relación inversaentre estas variables.

El valor medio del índice incisivo supe-rior obtenido en nuestro estudio es similaral expuesto por Mayoral2, pero Hotz10 con-sidera que esta cifra es elevada para la po-blación suiza.

SUMMARY: A descriptive study of 49 dental models with morphollogically normal occlusionstaken from 3 434 female and male examined patients aged 15 to 18 years was undertaken. Mesiodistaldiameter of each tooth, width and depth of palate, Spee�s curve, available space and arch perimeterand lenght were all estimated. Relationship among variables were statistically analyzed.

Subject headings: DENTAL OCCLUSION; DENTAL MODELS.

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estudiante y el odontólogo general. BuenosAires: Editorial Mundi, 1976: 351,362,269,379.

93

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los pacientes con respecto al tratamiento

ortodóncico, Rev Cubana Ortod 1995;

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Recibido: 15 de mayo de 1998. Aprobado: 3 dejulio de 1998.Dr. Lizandro Michel Pérez García. ClínicaEstomatológica Docente de Villa Clara. Villa Cla-ra, Cuba.

94

Rev Cubana Ortod 1988;13(2):94-98

Centro Provincial de Investigaciones Estomatológicas

RETARDO EN EL BROTE DENTARIO EN EL NIÑO DE BAJO PESO

Dra. Yamilé Moreno Barrial,1 Dr. Juan Betancourt Ponce,2 Dra. Zaida Fernández Jiménez3

y Dra. Lina Solís Solís3

RESUMEN: En esta investigación se determinan las alteraciones en el orden y cronología delbrote dentario con niños de bajo peso al nacer en dentición mixta temprana. La muestra comprende60 niños (30 normopeso y 30 bajo peso al nacer) seleccionados por el método de muestreo estratificadocomprendidos entre los 6 y los 9 años de edad, de ambos sexos, se realiza un examen bucal paradeterminar la cantidad de dientes presentes, la presencia o no de maloclusión y de hábitos. Los datosobtenidos fueron recogidos y procesados utilizando como método estadístico el estadígrafo de chicuadrado, concluyendo que el peso al nacer influye en el brote dentario y en la presencia demaloclusión y no guarda relación con los hábitos deformantes.

Descriptores DeCS: ERUPCION DENTARIA; RECIEN NACIDO DE BAJO PESO; DENTICION MIXTA;MUESTREO ESTRATIFICADO.

1 Especialista de I Grado en Ortodoncia.2 Especialista de I Grado Administración de Salud.3 Estomatólogos Generales.

Desde las primeras etapas de creci-miento y desarrollo prenatal del individuo,cuando comienzan a aparecer los primeroscambios en volumen, forma y peso, se pro-duce entre el cuarto y sexto mes de vidaintrauterina la calcificación de los dientestemporales, o lo que es lo mismo, el desa-rrollo de la dentición, proceso el cual, estáíntimamente coordinado con el de los maxi-lares.1-3

Tanto la calcificación y erupción de losdientes temporales, como la reabsorción desus raíces, y posteriormente la calcificación

y erupción de los permanentes, constituyeuna serie de fenómenos que conllevan jun-to con una gama de causas locales a darorigen a anomalías o alteraciones de la oclu-sión normal.2,3

El proceso eruptivo, tanto de los dien-tes temporales como los permanentes, seproduce una vez terminada la calcificaciónde la corona e inmediatamente después deque empieza a calcificarse la raíz y se creeque está regido por un control endocrinoque es el resultado de la acción simultáneade distintos fenómenos como la reabsorción

95

de raíces temporales, calcificación de lasraíces permanentes, proliferación celular yoposición ósea alveolar.3

En la erupción de los dientes tempora-les y permanentes no es posible dar fechasprecisas, puesto que es normal una granvariabilidad de acuerdo con las razas, cli-ma, etcétera, pero si es útil tener siemprepresente la edad promedio para determinarsi hay adelantos o retrasos notorios en ladentición (anomalías de tiempo de losdientes).4,5

El período durante el cual los dientestemporales y permanentes están juntos enla boca, se conoce como dentición mixta,lacual se extiende desde los 6 a los 11 añosde edad, esta a su vez, se divide en tempra-na que incluye desde los 6 a los 9 y denti-ción mixta tardía desde los 9 a los 11 años.1,2-6

En cuanto a los dientes permanentespodemos decir que éstos pueden ser suce-sores o complementarios. Los sucesoresson los que sustituyen a los temporales(incisivos, caninos y premolares) y los com-plementarios los que hacen su erupción de-trás del arco temporal (primero y segundomolar y más tarde el tercer molar).1

Los sucesores erupcionan simultánea-mente con el proceso de reabsorción de lasraíces de los temporales.1,3,4

Cualquier alteración, cambio de posi-ción o movimiento no considerado dentrode los límites normales se denominamaloclusión, la cual tiene su origenmulticausal.5-7-9

Estas causas actuando en una épocasobre los tejidos producen un resultado yesta es la llamada educación de Dockrell.5-7

Dentro de las causas tenemos los há-bitos, que son patrones neuromuscularesde naturaleza muy compleja, que se apren-den, éstos a su vez, se dividen en benefi-ciosos o funcionales y perjudiciales odelétereos, estos últimos, resultan de laperversión de una función normal y pue-

den provocar trastornos, anomalías y otrasalteraciones en el niño desde edades tem-pranas.7-11

No obstante, en un estudio preliminarrealizado en nuestro centro sobre el brotedentario de los niños de bajo peso al nacer,quedó demostrado que no existía ningunaalteración al compararlos con un grupo deniños normopeso. Esto nos hizo pensar quesi existían factores que producían defectosde esmalte, poco desarrollo del complejonasomaxilar, en el período de formación ycalcificación de los dientes y en las diferen-tes etapas de crecimiento y desarrollo du-rante la vida intrauterina, porque esos mis-mos factores no eran capaces de afectar elbrote dentario, por lo que nos decidimos aobservar en el niño de bajo peso al nacer(-2500g) el comportamiento del brote den-tario, en el período de dentición mixta tem-prana desde los 6 a los 9 años de edad,donde se plantea como hipótesis, que si nose observó retardo en el brote en el períodode dentición temporal, el peso al nacer noinfluiría tampoco en el retardo o adelantodel brote de la dentición permanente.

A punto de partida de esta hipótesis yde las discrepancias entre algunos autores,es que nos proponemos realizar esta inves-tigación para una mejor interpretación.

OBJETIVOS

Generales

Determinar las alteraciones en el ordeny la cronología del brote dentario en losniños de bajo peso al nacer en denticiónmixta y temprana.

Específico

Determinar el orden de brote y la cro-nología en dentición mixta temprana de losniños bajo peso al nacer.

96

Conocer la presencia de hábitos ymaloclusiones en el período de denticiónmixta.

Comparar los resultados obtenidos conun grupo de niños normopeso al nacer.

Métodos

La muestra de nuestro estudio estácompuesta por 60 niños (30 normopeso y30 bajo peso al nacer), comprendidos entrelos 6 y los 9 años de edad, de ambos sexos,pertenecientes a las Escuelas Primarias Raúl"Silvio Vega" y "Combatientes de Améri-ca" del municipio Cerro.

A cada uno de ellos se les realizó unexamen bucal que comprendió:

- Dientes presentes de acuerdo con la edad.- Presencia o no de maloclusión.- Presencia o no de hábitos.

El examen bucal fue realizado por per-sonal calificado al respecto, utilizando es-pejo plano no. 5 bajo condiciones de luznatural.

Los datos obtenidos se recogieron yprocesaron para su análisis y discusión, sepresentaron en forma de figuras y tablaspara su interpretación, utilizando como mé-todo estadístico el estadígrafo de chi cua-drado.

Resultados

La fig. 1 muestra la relación % del brotedentario en dentición mixta temprana entrelos de niños bajo peso y normopeso al na-cer, se observa que los niños de bajo pesotienen un 67 % en cuanto al retardo en elbrote, un 3 % de adelanto en el brote y un30 % de brote normal, mientras que losnormopeso presentaron un 30 % de retardoen el brote, un 43 % de adelanto en el brotey un 27 % de brote normal.

Esta figura expresa la relación % demaloclusiones en dentición mixta tempranaentre los niños de bajo y normopeso al na-cer, donde se demuestra que los bajos pe-sos tienen un 90 % (n=27) de maloclusión yun 10 % (n=3) sin maloclusión y losnormopeso un 67 % (n=20) de maloclusióny un 33 % (n=10) sin maloclusión (fig.2).

Esta figura compara porcentualmentecomo se comportan los hábitos deformantesen dentición mixta temprana entre los niñosde bajo y normopeso al nacer, se observaque en los niños de bajo peso, el 63 %(n=19), presentaban hábitos y el 37 % (n=1)no lo presentaban. En el grupo de niñosnormopeso observamos que el 60 % teníanhábitos (n=18) y el 40 % (n=12) no lo adqui-rieron, y se nota que ambos grupos presen-tan diferencias mínimas en la presencia dehábitos deformantes.

FIG.1. Relación del brote dentario en denticion mixta temprana entre los niños de bajo y normopeso al nacer.

B a jo p e so

2 5

6 7 %

3 %

3 0 % 3 0 %

4 3 %

2 7 %

2 0

1 5

1 0

5

0

N o r m o p e so

F u e n te : C .P.I. E . L a H a b a n a , 1 9 9 8

R e ta rd o A d e la n to N o r m a l

2 0

9 91 3

8

1

p 0 .0 0 1

97

Fig.2. Relación de maloclusiones en dentición mix-ta temprana entre los niños de bajo y normo pesoal nacer.

Discusión

En este estudio preliminar sobre el com-portamiento del brote dentario, maloclusióny hábitos en el período de dentición mixtatemprana (6-9 años) entre los niños de bajoy normopeso al nacer quedó demostradoque los niños de bajo peso al nacer, presen-tan un mayor retardo en el brote que losniños normopeso, donde se corrobora quelos factores que afectan al crecimiento ydesarrollo normal de los procesos de for-mación y calcificación de los dientes en lavida intrauterina, también pueden afectar elbrote normal de los dientes sin necesidadde que ocurran traumatismos en el períodode dentición temporal. Al compararse el gru-po de estudio con el grupo de control, losresultados hallados fueron altamente sig-nificativos p < 0,001.

Podemos observar en este estudio quelos niños de bajo peso al nacer presentanen el período de dentición mixta tempranauna mayor prevalencia de maloclusionescon respecto a los normopeso.

Corroborado este resultado con los ha-llados en investigaciones anteriores, tenien-do en cuenta el desarrollo transversalmaxilomandibular donde en los niños debajo peso al nacer tenían micrognatismotransversal, pudimos predecir que iban apresentar alteraciones en la oclusión, tantoen dentición mixta como permanente, y alrealizar este estudio se comprobó lo plan-teado en esta investigación. Siendo los re-sultados significativos p < 0,005.

En esta investigación queda demos-trado que los hábitos que se adquierendurante el período de desarrollo y brotedentario, intervienen directa e indirecta-mente en la aparición de maloclusiones,hecho este, descrito por diferentes auto-res. Notándose que tanto en el grupo deniños de bajo peso como en el grupo deniños normopeso al nacer, los hábitos,unos en mayor y otros en menor grado,intervinieron en la aparición demaloclusiones. Los resultados halladosno tuvieron significación estadística.

B a jo p e so

2 5

3 0

2 0

1 5

1 0

5

0

N o rm o pe s o

F u e n t e : C .P.I.E . L a H a b a n a , 1 9 9 8

M a l o c lu s ió n S in m a l oc l u s i ó n

3 3 %

1 0

6 7 %

2 0

9 0 %

2 7

1 0 %

3

p 0 .0 5

B a jo p e s o

2 0

1 6

1 2

8

4

6

1 0

1 4

1 8

0

2

N o rm o p es o

F u e n te : C .P.I.E . L a H a b a na , 19 9 8

H á b ito s S in h áb i t os

4 0 %

1 2

6 0 %

1 8

6 3 %

1 9

3 7 %

11

N o s ig n i f ic a tiv o

FIG.2. Relación de maloclusiones en denti-ción mixta temprana entre los niños de bajoy normo peso al nacer.

98

Conclusiones

1. El peso al nacer influye en el brote den-tario en el período de dentición mixtatemprana.

2. Los niños de bajo peso al nacer tienenmayor prevalencia de maloclusión que

los normopeso en el período de denti-ción mixta temprana.

3. Los hábitos deformantes adquiridos enlos primeros años de vida no guardanrelación alguna con el peso del niño alnacer.

SUMMARY: This research paper determined the disturbances in the order and chronology oftooth eruption in early mixed dentition of children who had been low birth weight infants. Thesample comprised 60 female and male children aged 6 to 9 years (30 normal birth weight and 30 lowbirth weight infants) selected by a stratified sampling method. The children were orally examined todetect the number of teeth, any malocclusion and any kind of habits. Data were collected andprocessed using Chi-square statistical method. It was concluded that birth weight has an effect ontooth eruption and malocclusion but has nothing to do with deforming habits.

Subject headings: TOOTH ERUPTION; INFANT, LOW BIRTH WEIGHT; DENTITION; MIXED; STRATIFIEDSAMPLING.

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Recibido: 14 de abril de 1998. Aprobado: 28 deabril de 1998.Dra. Yamilé Moreno Barrial. Centro Provincialde Investigaciones Estomatológicas. CalleDomínguez entre Calzada del Cerro y Sta. Catali-na. Cerro. Ciudad de La Habana, Cuba.

99

Rev Cubana Ortod 1988;13(2):99-106

Hospital Provincial Docente Clinico-Quirúgico "Arnaldo Milián Castro"Villa Clara

RELACIÓN ENTRE LAS DIMENSIONES CRANEOFACIALESY LA MALNUTRICIÓN FETAL

Dra. Ailín Bello Pérez,1 Dra. Miriam Machado Martínez,2 Dr. Rolando Castillo Hernández1

y Lic. Eduardo Barreto Fiu3

RESUMEN: Se escogieron 100 niños nacidos bajo peso por malnutrición fetal y 100 cuyocrecimiento era normal, para conformar una muestra de 200 infantes en las edades comprendidasentre los 6 y los 8 años. Se analizó la influencia de la malnutrición fetal en las dimensionescraneales, faciales e intrabucales y en las tipologías, que de ellas se derivan (tipo craneal, tipo facialy forma de las arcadas). Todas las dimensiones craneales, faciales e intrabucales fueronsignificativamente menores en los niños de bajo peso al nacer, excepto la anchura interorbitaria. Enambos grupos predominó el tipo craneal braquicéfalo, el tipo facial euriprosopo y la forma de lasarcadas ovoidea.

Descriptores DeCS: INSUFICIENCIA PLACENTARIA; RECIEN NACIDO DE BAJO PESO; CRANEO/creci-miento & desarrollo; CEFALOMETRIA.

1 Especialista de I Grado en Ortodoncia.2 Especialista de II Grado en Ortodoncia. Profesora Asistente.3 Master en Computación Aplicada.

La dinámica del desarrollo craneofacialy las variaciones normales en el crecimien-to de los maxilares, con el consiguiente de-sarrollo dentoalveolar, necesita ser com-prendida antes de planificar o realizar cual-quier tratamiento, mucho más si considera-mos que la mayoría de los tratamientos secomienzan en etapas muy activas del creci-miento general y específicamentecraneofacial, en la dentición mixta, conoci-da como la fase más dinámica del desarrollode los dientes y la oclusión.1

La alta complejidad del proceso de cre-cimiento y desarrollo craneofacial lo hacemás vulnerable al efecto de factores exter-nos y otros invisibles a nuestros ojos, comolos genéticos y los embriológicos.2

Es bien conocido el efecto de determi-nados factores sobre el desarrollocraneofacial, principalmente los que actúanen la época posnatal, como son los hábitosy los traumas, entre otros. Se ha determina-do que el efecto sobre las relacionesoclusales puede ser directo, por los cam-

100

bios en la dirección de crecimiento predo-minante o la pérdida de un diente, e indirec-to, mediante las variaciones en la ubicacióncorrecta de los dientes para las funcionesoclusales concomitantes.

Sobre esta temática existen numerosasinvestigaciones,3 pero, son pocas las queanalizan la influencia de otros factores queescapan a nuestro examen clínico directocomo los embriológicos de origen desco-nocido y la malnutrición fetal.

Está demostrada la correspondenciaentre la forma de la cabeza, la cara y lasarcadas, a causa de la influencia de facto-res genéticos que determinan no sólo estarelación, sino muchas otras típicas de losseres humanos, como la longitud de losmiembros superiores e inferiores, la formade la arcada y de los dientes, entre otras.No siempre sucede así, y en este largo pro-ceso, pueden aparecer influencias desfavo-rables, que lo alteren provocando variacio-nes notables en la forma y el tamaño de losdiferentes tejidos y órganos involucrados.4

Dentro de estas influencias se encuen-tra la malnutrición fetal y en esta investiga-ción tratamos de analizar la posible reper-cusión de este déficit nutricional en deter-minadas dimensiones craneales, faciales eintrabucales que constituyen variables im-portantes a considerar por el ortodoncista,al realizar un plan de tratamiento.

Métodos

Se estudiaron 100 niños nacidos bajopeso por malnutrición fetal que conformanel grupo estudio y 100 cuyo crecimiento eranormal, que sirvieron de grupo control, paraun total de 200 niños nacidos en el HospitalGinecoobstétrico Docente «MarianaGrajales» de la Ciudad de Santa Clara, du-rante los años 1988 y 1989, que cuentan enla actualidad con 6, 7 y 8 años de edad.

A toda la muestra se le realizó una se-rie de mediciones craneales (circunferenciacefálica, altura de la cabeza, diámetro trans-versal y anteroposterior de la cabeza), fa-ciales (anchura bicigomática, diámetrobigoniaco, anchura orbitaria e interorbitaria,anchura frontal mínima, altura de la nariz,altura nasión-mentón y altura subnasal-mentón) e intrabucales (anchura in-tercanino, diámetro transverso según Ma-yoral y según Bogué, perímetro de la arca-da superior e inferior). Se establecieron losíndices craneales y faciales.

Para efectuar la mediciones se emplea-ron diferentes instrumentos afines, talescomo el pie de rey, el compás de espesor, elantropómetro, y la cinta métrica plástica,todos estos instrumentos estaban calibra-dos y ajustados para permitir la fidelidad delas tomas de muestras. También se empleóun set de clasificación con pinza, espejobucal plano y explorador.

Para el análisis estadístico se utiliza-ron varias pruebas como son: t de Student,chi-cuadrado, V. de Cramer y el test deMann-Whitney, considerándolos significa-tivos cuando p < 0,05.

Resultados

La tabla 1 se refiere a los valores me-dios y desviaciones estándares de las di-mensiones faciales por grupos investiga-dos y constatamos que las medias en el gru-po control siempre son mayores que en elgrupo estudio, excepto para la anchurainterorbital que es la única que no se asociacon la malnutrición fetal, pues no alcanzaniveles significativas (p > 0,05) a diferenciade las demás variables.

La dimensión de la anchurainterorbitaria puede ser influida por el cre-cimiento del complejo esfenoetmoidal quecesa aproximadamente a los 7 años de edad,5

101

TABLA 1. Comportamiento de las dimensiones faciales en los grupos investigados

Dimensiones Gruposfaciales Estudio Control(cm) Media estándar mínima máximo Media estándar Mínimo Máximo

Anchura bicigomática 11,0 0,5 9,9 12,3 11,6 0,5 10,3 13,0Diámetro bigoniaco 8,8 0,6 7,8 10,1 9,3 0,5 8,1 10,4Anchura orbitaria derecha 2,9 0,2 2,5 3,5 3,1 0,2 2,6 3,5Anchura orbitaria izquierda 2,9 0,2 2,4 3,3 3,1 0,2 2,4 3,8Anchura interorbitaria 2,2 0,2 1,7 2,7 2,2 0,2 1,9 2,9Anchura frontal mínima 9,9 0,5 8,8 11,3 10,0 0,4 9,1 11,0Altura de la nariz 4,1 0,4 3,0 5,5 4,2 0,4 3,1 5,1Altura nasionmentón 10,3 0,5 9,3 11,3 10,7 0,6 9,6 13,5Altura subnasalmentón 5,8 0,4 4,8 6,8 6,0 0,5 4,5 7,7

Fuente: Formulario.

lo cual se corresponde con las edades in-vestigadas, o sea, que si en realiad existeun crecimiento compensador, ya en esteperíodo se manifestó completamente y lo-gró dimensiones simialres en ambos gru-pos para esta variables.

Según Proffit6 el tipo facial global de-pende más de la relación proporcional en-tre la altura y la anchura (índice facial) quedel valor absoluto de cualquiera de estosparámetros, y por ello se incluye en la tabla2 la clasificación, según el índice facial deIzard por grupos. El valor de chi cuadradorevela una asociación significativa al 1 %.

TABLA 2. Clasificación según el índice fa-

cial por grupos estudiados

Grupos

Estudio Control

Clasificación No. % No. %

Euriprosopo 73 73,00 86 86,00

Mesoprosopo 27 27,00 11 11,00

Leptoprosopo - - 3 3,00

Total 100 100,00 100 100,00

Fuente: Formulario.

Aunque en ambos grupos predominanlos euriprosopos, se presentaron en mayornúmero en el grupo control que en el grupoestudio. En los niños normales hay 3leptoprosopos, debido quizás, a que enellos el crecimiento craneofacial puede co-menzar a manifestarse desde edades mástempranas y llegar a tener dimensiones másacentuadas que las del niño afectado pormalnutrición fetal, en los cuales, aunqueexiste un crecimiento compensador nuncallegará a obtener las dimensiones predeter-minadas genéticamente.

Los resultados reflejados en la tabla 3señalan que todas las dimensionescraneales fueron mayores en el grupo con-trol que en el grupo estudio y esta diferen-cia caracterizó los grupos signi-ficativamente como lo reflejan los valoresde p < 0,05.

En dependencia de la magnitud de losdiámetros anteroposterior y transversal delcráneo, éste puede presentar diferentes for-mas que son clasificadas en dolicocéfalo,mesocéfalo y braquicéfalo. En la tabla 4 sonagrupados los niños de acuerdo con estacategoría.

Véase que en ambos grupos predomi-naron los braquicéfalos con ligeras mayo-ría en el control (68 > 64), pero estas dife-rencias no llegan a ser significativas(p > 0,05).

102

Tabla 3. Comportamiento de las dimensiones craneales según grupos investigados

Dimensiones Gruposcraneales Estudio Control(cm) Media estándar mínimo máximo Media estándar mínimo Máximo

Circunferenciacefálica 50,8 1,6 46,5 54,1 52,5 1,3 48,8 55,1Diámetroanteroposterior 16,5 1,1 13,3 18,7 17,2 1,0 10,3 19,2Diámetrotrandversal 12,2 0,8 10,6 14,0 12,8 0,7 11,4 14,7Altura de lacabeza 11,7 0,9 9,3 14,3 12,3 0,8 10,0 14,5

Fuente: Formulario.

Tabla 4. Clasificación de los grupos según el índicecraneal

Grupos Estudio ControlClasificación No. % No. %

Braquicéfalo 64 64,00 68 68,00Mesocéfalo 32 32,00 29 29,00Dolicocéfalo 4 4,00 3 3,00

Total 100 100,00 100 100,00

Fuente: Formulario.

Puede parecer contradictorio que las2 variables craneales usadas en el índicese diferencien significativamente entre losgrupos como vemos en la tabla anterior yque las categorías de tipología craneal nolo hagan como lo demuestra el valor dep > 0,05. No debemos olvidar que latipología depende más de la relación pro-porcional de 2 variables que del valor abso-luto de cualquiera de ellas; no obstante, losgrupos no se diferencian significativamenteen la forma del cráneo.

En la tabla 5 se muestra la compara-ción de los valores medios de las medicio-nes intrabucales por grupos y como se es-peraba, al igual que para los demásparámetros analizados, estos son mayoresen el grupo control y llegan a alcanzar di-

ferencias altamente significativas (p < 0,01),es decir, que estas mediciones caracterizanlos grupos.

De acuerdo con lo planteado porBetancur, 7 el ancho intercanino maxilar au-menta sucesivamente desde edades tempra-nas hasta los 10 años y en nuestro caso elcrecimiento retardado debido a lamalnutrición fetal puede ser respon-sabilizado con la diferencia notable entreuno y otro grupos.

Las medidas transversales a nivel demolares son indicadores fácilmentemedibles del crecimiento maxilar en ancho eincluso pueden utilizarse como índices decrecimiento óseo [González Rubio E, ToribioSuárez L.R y Quesada R.M. Relación de al-gunas dimensiones faciales con la distan-cia transversal máxima. En II Simposio deAntropología Física «Luis Montané». LaHabana. Instituto de Medicina Legal, 1990.]siempre y cuando no existan malposicionesdentarias. El diámetro a nivel molar seincrementa notablemente con el crecimien-to transversal del maxilar y posteriormentecon el crecimiento del reborde alveolar de-bido al cambio dentario y llega a una edaden la que se mantiene e incluso disminuyepor una verticalización de los molares.

103

TABLA 5. Mediciones intrabucales obtenidas por grupos estudiados

Mediciones Gruposintrabucales Estudio Control(cm) Media estándar mínimo máximo Media estándar mínimo Máximo

Anchura intercanina 29,7 2,4 21,6 37,0 31,2 2,2 25,0 37,5Diámetro transversosegún Mayoral 42,5 2,7 36,0 47,0 45,2 2,1 39,9 47,3Diámetro transversosegún Bogué 28,8 1,7 24,1 33,1 29,8 1,4 26,0 37,0Perímetro de laarcada superior 69,2 3,8 60,8 77,2 71,8 4,0 63,6 80,8Perímetro de laarcada inferior 66,1 3,1 56,9 72,7 67,9 2,8 60,1 75,4

Fuente: Formulario.

Las mediciones de Mayoral y Boguéen el grupo de control se acercan bastantea las consideraciones normales (45,2 de47 mm y 29,8 de 30 mm), respectivamente,pero en el grupo de estudio la diferencia esmayor con valores mucho menores, por loque podemos diagnosticar un microg-natismo transversal de los maxilares queresulta lógico por la interrelación entre elcrecimiento de éstos con el crecimiento delmacizo facial y craneal que también estáafectado por la malnutrición fetal en el gru-po de estudio, como se observó en las ta-blas 1 y 3, respectivamente.

La medida más importante de las di-mensiones del arco dentario es la circunfe-rencia o perímetro del arco, su reduccióndurante la dentición transicional es el re-sultado del corrimiento mesial tardío de losprimeros molares permanentes, de la ten-dencia al corrimiento mesial de los dientesposteriores, de las leves cantidades de des-gastes interproximales de los dientes y dela ubicación hacia lingual de los incisivosinferiores.8 Realmente esta medida nos dael espacio disponible para la ubicación delos dientes anteriores a los primeros molarespermanentes, por lo que su evaluación alelaborar un plan de tratamiento es vital paradeterminar la discrepancia hueso-diente y

para determinar cuál será la conducta tera-péutica a seguir . Es normal que el períme-tro de la arcada superior sea mayor que enla inferior y esto se cumple en ambos gru-pos con una diferencia de 3,1 y 3,9 para elgrupo de estudio y el grupo control, res-pectivamente.

Ahora bien, lo que sí resulta notable esla diferencia entre las medias de cada arca-da en uno y otro grupo, que es de 1,6 mmpara la superior y 1,8 mm para la inferior, afavor del grupo de control. El perímetromenor de los niños bajo peso al nacer noslleva a considerar este aspecto como unfactor predisponente de las maloclusionesfuturas por una mayor tendencia a la dis-crepancia hueso-diente negativa.

Moyers8 plantea que la mayoría de losarcos primarios en la dentición mixta tem-prana son ovoides y muestran menos va-riabilidad en su conformación que los per-manentes. Esta aseveración es reforzadapor nuestros resultados, los cuales se mues-tran en la tabla 6, donde se evidencia que laforma ovoidea es la más frecuente en am-bos grupos, tanto para el maxilar como parala mandíbula.

104

TABLA 6. Formas de los arcos dentarios, se-gún maxilar y grupos estudiados

Grupos Estudio ControlFormas No. % No. %

Maxilar SuperiorCuadrada 3 3,00 3 3,00Ovoidea 89 89,0 92 92,00Triangular 8 8,00 5 5,00MandíbulaCuadrada 32 32,00 17 17,00Ovoide 67 67,00 82 82,00Triangular 1 1,00 1 1,00

Fuente: Formulario.

En la arcada superior se presentó en181 pacientes (89 del grupo de estudioy 92 del control) seguida de la triangularcon 13 niños (8 y 5 para cada grupo) y lacuadrada sólo en 6 ( 3 de cada grupo). Lavariable no mostró asociación significativacon la malnutrición fetal (p > 0,05).

En la mandíbula, aunque predominó laovoidea en 149 niños (67 y 82 para los gru-pos estudio y control, respectivamente),resulta curioso la gran cantidad de niñoscon la arcada cuadrada, 32 en el primer gru-po y 17 en el segundo, para un total de 49niños. Este hecho puede deberse al creci-miento diferencial y relativamente indepen-diente que existe entre el maxilar y la mandí-bula, además, entre los 6 y los 8 años es laépoca del cambio dentario que tiende a in-fluir notablemente en la apreciación visualde la forma de las arcadas. La menosprevalente fue la triangular que sólo semostró en 2 casos (1 para cada grupo).

Discusión

Según Nelson5 el crecimientoposnatal máximo de los ojos se producedurante el primer año de vida, despúes evo-

luciona de prisa pero progresivamente másdespacio hasta el tercer año y a partir deahí, sigue creciendo con mayor lentitud hastala pubertad, pero ya casi con variacionesinapreciables, por lo tanto, si realmente seproduce el crecimiento compensador en loscasos con malnutrición fetal, este debe ma-nifestarse en edades tempranas, antes deque culmine el crecimiento de la matriz fun-cional local (ojos) y ello puede justificar susimilitud en ambos grupos. Este crecimien-to compensador en las zonas orbitarias du-rante el primer año de vida se corroboró enel estudio realizado por Machado,9

específicamente durante el segundo trimes-tre de este año.

Aunque existen ligeras discrepanciasnuestros resultados coinciden con otros re-portes de Machado10 en el que las excep-ciones son, el diámetro bicigomático y laanchura frontal mínima.

Por lo general, la cara de los niños tie-ne forma redondeada y su crecimiento enedades tempranas no es tan marcado comoel de la bóveda craneana; lo cual se debefundamentalmente a los reajustesneceasrios para mantener las relacionesadecuadas con el cráneo. Lo expresado nosignifica que no existan variaciones, peroellas se producen principalmente en senti-do tranversal. El desarrollo posterior delaparato masticador y los crecientes reque-rimientos funcionales a que son sometidoslos huesos faciales determinan que seincremente el crecimiento del complejo fa-cial en su conjunto; no obstante, todavíaen las edades analizadas (6 a 8 años) predo-mina la forma redondeada y por tanto loseuriprosopos.11

Como ya se ha referido, el peso, la talla y lacricunferencia cefálica son indicadores delcrecimiento y desarrollo de un niño en de-terminado momento, por lo que no resultasorprendente que la mayor diferencia entrelos grupos sea para la circunferencia

105

cefálica (52,5 - 50,8 = 1,7), ya que muchasotras investigaciones han demostrado lomismo, por ejemplo, Sheth12 obtuvo que elcrecimiento de la circunferencia cefálica en450 niños malnutridos a los 18 meses noalcanza el crecimiento en niños normales,incluso reporta una diferencia de 1,6 cm,casi igual a la obtenida en nuestra muestra;Itabashi al examinar 382 infantes a los 2años y medio13 y 379 a los 4 años14 obtuvosimilares resultados, al igual que Cocke15

en 52 niños de 3 años.Tanto la tipología craneal como la facial

están íntimamente relacionadas y su clasi-ficación es el resultado de la combinaciónde medidas lineales analizadas en las tablas1 y 3; como se aprecia, en ambos grupospredominan los euriprosopos (tabla 2) y losbraquicéfalos (tabla 4). Aunque sólo exis-ten diferencias significativas entre los gru-pos para el índice facial, su comportamien-to responde a lo anteriormente planteado.

Conclusiones

1. Las dimensiones craneales faciales eintrabucales fueron significativamentemenores en los niños bajo peso al nacer,excepto la anchura interorbitaria. Esto de-termina que la malnutrición fetal sea con-siderada un factor predisponente demaloclusiones futuras por una mayortendencia a la discrepancia hueso dien-te negativa, debido a un crecimiento re-tardado.

2. En ambos grupos predominó el tipo cra-neal braquicéfalo y el tipo facialeuriprosopo, aunque este último índicefue estadísticamente menos frecuente enel estudio.

3. La forma ovoidea de la arcada fue ma-yoritaria en ambos maxilares para los 2grupos, pero en la mandíbula el predo-minio de esta forma fue estadísticamentemayor en los niños del grupo control.

SUMMARY: 100 children, who were low birth weight infants due to fetal malnutrition, and100 choldren who were normally developed infants, were chosen to make up a sample of 200children aged 6 to 8 years. The impact of fetal malnutrition on cranial, facial and intraoral dimensionsand on cranial and facial types and arch form was analyzed. Cranial, facial and intraoral dimensionswere significantly lower in children who had been low birth weight infants, except for interorbitalwidth. Brachicephalous cranial type, euryprosopic facial type and ovoid form of arches prevailed inboth groups.

Subject headings: PLACENTAL INSUFFICIENCY; INFANT LOW BIRTH WEIGHT; SKULL/growth &development; CEPHALOMETRY.

Referencias bibliográficas

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106

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Recibido: 9 de junio de 1998. Aprobado: 3 de juliode 1998.Dra. Ailén Bello Pérez. Calle Máximo Gómez No.114-A entre Julio Lover y Martí. Santa Clara,Villa Clara, Cuba.

107

Rev Cubana Ortod 1988;13(2):107-111

Clínica Estomatológica "5 de septiembre"

DIGITOPUNTURA Y SEDACIÓN NOCTURNA: UNA OPCIÓNEN EL TRATAMIENTO DE HÁBITOS DEFORMANTES

Ada Sorhegui Rodríguez,1 Ana Edita Rigol González,1 Mirian González Navarro2 y LourdesMartín Mendecochea3

RESUMEN: Se plantea que en los niños, todos los hábitos perniciosos que tienen un fondopsíquico, responden positivamente al tratamiento de la cura sugestiva nocturna y la digitopunturacomo método coadyugante con hábitos constantes y nerviosos, que contribuyen a su sedación; debecuidarse la edad del paciente en que se realiza esta forma de tratamiento. Se expone el método quedebe observarse para su realización pues se han obtenido muy buenos resultados con la combina-ción de la cura sugestiva nocturna y la digitopuntura con el consiguiente ahorro de materiales.

Descriptores DeCS: ACUPUNTURA; HABITOS; SEDACION CONSCIENTE; SUGESTION.

OBJETIVO

Demostrar que la sedación nocturna yla digitopuntura pueden ser utilizados porel Estomatólogo General para el tratamien-to de los hábitos deformantes.

Los hábitos son patrones aprendidosde contracción muscular de naturaleza muycompleja.1

Puede definirse como la costumbrepráctica que se adquiere de un acto, por surepetición frecuente. Incialmente es un actovoluntario o consciente, que se convierteen involuntario o inconsciente cuando searraiga.2

1 Estomatólogo General.2 Especialista de I Grado en Ortodoncia.3 Especialista de I Grado en Parodoncia.

Se pueden clasificar en dos grupos, be-neficiosos y perjuciales, estos últimos seadquieren por la práctica repetida de un actoque no es funcional ni necesario y entre loscuales se encuentran la succión del pulgar,la deglución atípica y la onicofagia; a losque nos referiremos en nuestro trabajo.2

A veces para poder eliminar un hábitoes necesario recurrir al subconsciente delniño y a la vez tratar de eliminar los factoresque inciden sobre él. Es por eso que decidi-mos usar este método de cura sugestiva noc-turna y digitopuntura para obtener mejoresresultados en el tratamiento de los hábitos.

108

Existe un crecido número de hábitosque tienen un carácter psíquico en el niño yque la única forma lograda para suprimirloes la sugestión durante el sueño, que apelaal subconsciente mediante la palabra edu-cativa e incita el resultado que esperamos.

Los efectos más halagadores para laaplicación de este tratamiento se han obte-nido en niños de uno u otro sexo despuésque han cumplido los 6 años ya que en ni-ños menores de esta edad hay poca com-prensión del problema.2

En la sugestión nocturna se mantieneal niño en un estado sofrónico, que consis-te en un estado intermedio entre el sueño yla vigilia; una forma de relajaciónpsicosomática donde se mantiene ciertacomunicación con el medio ambiente[Matos T. Hábitos de succión del pulgar(trabajo para optar por el título de Especia-lista de I Grado en Ortodoncia) 1982. Clíni-ca Estomatológica Docente de Santa Clara.Villa Clara.]

La digitopuntura es una forma terapéu-tica y de mantenimiento de la salud, desa-rrollado por los chinos hace más de 5 000años, y donde se estimulan puntos especí-ficos de la piel con el objetivo de provocarun balance en la energía del cuerpo.3

La técnica de aplicación es sencilla yaque consiste en ejercer presión con el pul-gar imprimiendo un lento movimiento circular.

El masaje debe aplicarse en puntos bi-laterales de 1 a 15 min y puede repetirse lasveces que sean necesarias.4

Métodos

La muestra está constituida por 92 ni-ños, entre los 8 y los 10 años de edad queasistieron a la consulta, distribuidos de lasiguiente forma:

− 40 niños con succión del pulgar.− 40 niños con deglución atípica.− 12 niños con onicofagia.

A cada niño se le confeccionó unamicrohistoria clínica donde se reflejan lossiguientes datos:

1. Nombre2. Edad3. Sexo4. Hábitos5. Resultados del cuestionario. Se incluyen

preguntas como:- Desde qué edad comenzó con el hábito.- En qué horario los realiza.- Si el paciente es intranquilo, nervioso, etcétera.

6. Puntos colocados utilizando el mi-crosistema de la oreja según el hábito.- Shemen-punto piloto principal de ac-ción sobre el sistema nervioso como se-dante y analgésico.- Corazón-efecto tranquilizante, se usapor relación entre el corazón y la mente,facilitando la trasmisión del mensaje.- Ansiolítico-punto de sedación impor-tante.5

7. Se evoluciona reflejando las primeras 4visitas y se dan las conclusiones al finalde la 3ra. sem. del tratamiento.

En la sedación nocturna para cada casose elaboró un mensaje que siempre debeser leído por la misma persona, generalmen-te la madre o persona más allegada, de for-ma suave y no debe tener incluida la pala-bra NO. Después que el niño lleve 15 ó 20min. dormido para iniciar el tratamiento, serepite de 5 a 10 veces cada noche. El men-saje puede ser de esta forma:

Para la succión deel pulgar: si te quitasel dedo de la boca tu cara lucirá más bonita,debes dormir con la boca cerrada y sin eldedo en la boca.

Deglución atípica: debes tragar con lalengua en el cielo de la boca para que tucara luzca más bonita y tus dientes parejitos.

109

Onicofagia: si llevas las uñas a tu boca,tus dientes se virarán y los bichitos quehay en ellas entrarán en tu boca y te harándaño.

Si el niño presenta un hábito constan-te (más de 1 año con el hábito y en cual-quier horario) y además, es nervioso o in-tranquilo, se colocan las semillas decardosanto utilizando el sistema de la oreja,en dependencia del hábito (fig.1,2 y 3).

Fig.1. Puntos del Microsistema de la oreja parael tratamiento del hábito de succión del pulgar.

B o c a

R e la ja c ió n m u scu la r

C o ra z ó n

A n sio l íti c o

F ig . 2

S h e n m e n

H a m b re

F ig . 3

A n sio l íti c o

S h e n m en

C o ra z ó n

F ig . 1

A n sio l íti c o

Fig.2. Puntos del Microsistema de la oreja para eltratamiento del hábito de deglución atípica.

Fig.3. Puntos del microsistema de la oreja para eltratamiento del hábito de onicofagia.

Resultados

En la tabla 1 se reflejan los resultadosdel tratamiento en el hábito de succión delpulgar, se observa que hay un predominiode los niños que abandonaron el hábito to-talmente en una relación de 21 casos, de untotal de 40 para un 53 %.

TABLA 1. Succión del pulgar

No. %

Niños que abandonan

totalmente el hábito 21 53

Niños que abandonan

parcialmente el hábito 12 30

Nipos que no abandonan

totalmente el hábito 7 18

Total 40 100

En la tabla 2 analizamos los mismos as-pectos para el hábito de deglución atípica,se percibe el mayor número de casos enniños que abandonaron totalmente estehábito para un 50 %.

110

TABLA 2. Deglución atípica

No %

Niños que abandonan totalmente el hábito 20 50Niños que abandonanparcialmente el hábito 11 28Niños que no abandonanel hábito 9 23

Total 40 100

En la tabla 3 sobre el hábito deonicofagia, también se observa un predo-minio de los niños que abandonaron total-mente el hábito, en una relación de 10 ca-sos, de un total de 12, para un 82 %.

TABLA 3. Onicofagia

No %

Niños que abandonantotalmente el hábito 10 82Niños que abandonanparcialmente el hábito 0 6Niños que no abandonanel hábito 2 17

Total 12 100

Los niños que no abandonaron el há-bito fueron remitidos al psicólogo paraprofunzidar su tratamiento; además, refor-zamos otros puntos con la digitopuntura,como son: intestino grueso 4, corazón 7,vaso gobernador 20 y continuamos su tra-tamiento.

LOCALIZACIÓN DE ESTOS PUNTOS

Ig4. Parte posterior de la mano, entre elpulgar y el índice, en la parte más alta de laprominencia que se forma al unir estos de-dos.

c7. La palma de la mano hacia usted, enel pliegue más cerca de la mano. En el hue-

co que está en línea directa con el dedomeñique.

Vg20. A mitad de la distancia, entre elápice de ambos pabellones auricolares, anivel de la fontanela posterior. Es el mejorpunto tranquilizante.5

RESULTADOS ECONÓMICOS

En realidad el ahorro en moneda nacio-nal es poco, pero lo más importante es quelos materiales a utilizar son la mayoría im-portados, y en estos momentos muydeficitarios. Con este material ahorrado,podemos resolver otros casos más compli-cados, que necesariamente llevanaparatología removible, y con ésto, damosmayor cobertura de tratamiento a nuestraárea de salud. (tabla 4).

TABLA 4.

Hábitos Casos Costo de cada caso Total ($)

Succióndel pulgar 21 $ 10.00 210.00Degluciónatípica 20 $ 10.00 200.00

Total 41 - 410.00

Conclusiones

Este método tiene la ventaja de ser apli-cado por el estomatólogo general.

Por ser fácil y sencillo de llevar a caboes práctico y se observan resultados muyalentadores a corto plazo.

Por este método se ahorran materialesque pueden ser empleados en casos máscomplejos.

Ayuda a la eliminación del hábito y a lasedación del niño, así como a mejorar suconducta en la escuela y en el hogar.

Especialista de I Grado en Parodoncia.

111

SUMMARY: It is stated that harmful habits of psichic origin found in children positivelyrespond to a combined treatment of night suggestion cure and pressure acupuncture that helps totheir sedation although the patients age should be carefully considered when applying this form oftreatment. The method that should be followed for this treatment is explained since very goodresults and material savings have been achieved with the combination of night suggestion andpressure acupuncture.

Subject headings: ACUPUNCTURE; HABITS; CONCIOUS SEDATION; SUGGESTION.

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5 . Rigol OA. Manual de acupuntura ydigitopuntura para el médico de la familia. LaHabana: Editorial Ciencias Médicas, 1992:

112

Rev Cubana Ortod 1988;13(2):112-120

Hospital Pediátrico Docente "Juan Manuel Márquez"

SÍNDROME DE BINDER CON MANIFESTACIONES ORTOPÉDICASASOCIADAS

Belkis Correa Mozo1 y Mylen B. García Alfonso2

RESUMEN: El síndrome de Binder o Displasia Nasomaxilar es una curiosa enfermedad carac-terizada por una hipoplasia del tercio medio facial que produce cambios mandibulares compensatoriosque traen como resultado la aparición de una maloclusión clase III de Angle. Se han descritoanomalías raquídeas asociadas a esta enfermedad en las personas que la padecen. Por lo interesan-te que resulta el tema nos proponemos realizar una revisión de la literatura y mostrar una pacienteafectada por esta enfermedad, en la que además, se ponen de manifiesto alteraciones asociadas enel raquis cervical y lumbar.

Descriptores DeCS: MALOCLUSION DE ANGLE CLASE III; HUESO NASAL/anomalías; MAXILA/anoma-lías; HUESOS FACIALES/anomalías; ENFERMEDADES DEL DESARROLlO OSEO.

En el año 1962 Binder presentó 3 casosde niños con las características siguientes:hipoplasia nasomaxilar, labio convexo, narízvertical, ausencia del ángulo frontonasal,ausencia de la espina nasal anterior, atrofiade la mucosa nasal y senos frontonasaleshipoplásicos; la referencia de estos sínto-mas hizo que su nombre fuese asignado alsíndrome que él representaba. Aunque yaen 1939, Nogers había descrito por primeravez la apariencia facial mostrada por laspersonas afectadas de displasia na-somaxilar, no se atribuyó la categoríasindrómica. Los pacientes con tales carac-terísticas habían sido referidos hasta en-

1 Especialista de I Grado en Ortodoncia.

tonces con otras denominaciones: faciesescafoidea, «cara de plato», retrusión con-génita del tercio medio facial, hipoplasianasomaxilar, hipoplasia del tercio medio fa-cial. No se habían distinguido de los res-tantes cuadros malformativos caracteriza-dos por un hipodesarrollo del tercio mediofacial tales como los Síndromes de Cronzony Apert, las anomalías esqueletales de losfisurados labio-alveolo-palatinos y laretrusión maxilar postraumática.1-3

En esta patología medianamente co-mún, se han presentado pocos reportes ex-tensivos de casos. Notables son los reali-zados por Delaire4 en Francia con 37 pa-

113

cientes, Munro5 en Canadá con 11 pacien-tes, Olow Nordenram y Ranberg6 en Sue-cia con 43 pacientes, Horswell7 con 27 pa-cientes.

Descripciones clínicas y anatómicasanteriores a las realizadas por Noges yBinder pueden ser consideradas como típi-cas del Síndrome de Binder, tal es el caso dela fossa prenasalis y sulcus prenasalis des-critos por Guckerkandt en 1882 y citado porHolmstrom.8 Por lo interesante que resultaeste tema, nos proponemos realizar una re-visión de la literatura a nuestro alcance don-de se destacan las características particu-lares del síndrome y algunas consideracio-nes sobre el tratamiento, se presenta uncaso afectado en el que se asocian anoma-lías vertebrales.

Desarrollo

Los pacientes afectados por este Sín-drome son fácilmente identificables y ge-neralmente el diagnóstico clínico es rápi-do; se manifiesta por una hipoplasia del ter-cio medio facial siendo considerados comorasgos característicos los siguientes, ausen-cia del ángulo frontonasal por causa de unaplanamiento de la glabela y verticalizaciónde la pirámide nasal; la naríz es corta; concartílagos alares hipoplásicos y columelacorta: agenesia de la espína nasal anterior,ángulo nasolabial agudo, narinassemilunares y aplanamiento perialar porcausa de la hipoplasia del maxilar superiory labio superior convexo. El perfil de estospacientes se caracteriza por mostrar unaapariencia prognática debido a la hipoplasiadel maxilar superior y/o a la retroposiciónde éste, ocasionada por un acortamientode la porción anterior de la base craneal.Estos trastornos del crecimiento maxilar, seacompañan de cambios mandibularescompensatorios que pueden observarse

cefalométricamente por un adelantamientodel punto B.

Estas desviaciones de la normalidadpueden repercutir en la oclusión con la apa-rición de una maloclusión clase III de Angle.

En el Síndrome de Binder la cresta na-sal está reducida de tamaño o ausente ytermina en una espina nasal anteriorhipoplásica y situada en un nivel más bajoy posterior, observación destacada porHolmstron8 en sus investigaciones. Elseptum nasal esta unido a la cresta nasalen un nivel más bajo y posterior, y está másreducido en sentido anteroposterior lo queocasiona el aplanamiento del lóbulo nasal.El borde inferior de la apertura piriforme estáexcavado en sentido medio laterial y delimi-tado por 2 crestas transversales, una ante-rior y otra posterior; esta concavidad secorresponde con la fossa prenasalis ya re-ferida. En algunos casos de displasianasomaxilar el borde inferior de dicha aper-tura está completamente ausente, existien-do un canal que continúa la cara anteriordel proceso alveolar del maxilar a nivel delos incisivos con el piso de las fosas nasalesy que se corresponde con el fulcusprenasalis ya mencionado. La hipoplasiadel maxilar superior muestra grados de in-tensidad variable, que involucra la apófisisascendente, con el consiguiente retrocesode la porción superior de la pirámide nasal,la apófisis alveolar y el reborde infraorbitariocon la consiguiente retrusión del párpadoinferior y una mayor exposición de laesclera.9,10

Aunque la historia familiar anterior esrara y se acepta que cada ocurrencia repre-senta una mutación genética, se han repor-tado casos con antecedentes familiares pre-vios.1 En la descripción original del síndro-me se propuso como origen una alteracióndel prosencéfalo embrionario por las lesio-nes en la pirámide nasal y en el maxilar su-perior en contraposición a esta teoría, pue-

114

de esgrimirse la ausencia de anomalías enlos ojos, órbitas, región frontal y cerebro.Atendiendo a la frecuente aparición de ano-malías en el raquis cervical, se puede con-siderar que este síndrome es producido porun agente teratógeno que, actuando entrela quinta y sexta semana de la vida altere eldesarrollo del esqueleto facial y las vérte-bras cervicales.

Como responsables de estas alteracio-nes han sido citadas las hemorragias, in-fecciones e inflamaciones. Converse y col12

cita una serie de pacientes con displasianasomaxilar que habían sufridotraumatismos nasales en la infancia por loque consideraron los traumas como agen-tes etiológicos y señalaron además, que estemecanismo podría indicar un defecto pri-mario en el genoma responsable del desa-rrollo cartilaginoso y esqueletal en un mo-mento de la vida intrauterina. Otras posi-bles formas de origen de la enfermedad hansido evaluadas por otros autores.13-16

Radiográficamente puede observarseen una telerradiografía lateral de cráneo, elacortamiento de la base craneal anterior,poco desarrollo del seno frontal, hipoplasiamaxilar en sentido anteroposterior y verti-cal, maxilar inferior prognático, aumento delángulo goniaco y vestibuloversión de inci-sivos. En los casos en que la espina nasalanterior está ausente, esto puede compro-barse radiográficamente, además de la del-gadez de la capa ósea, que cubre las carasvestibulares de los incisivos superiores.17-21

Pueden encontrarse malformacionesasociadas tales como displasias del atlas y/o axis, sinostosis vertebrales congénitas,acortamiento del arco posterior del atlas,persistencia de la notocorda, escoliosis,sifosis y otras. Autores como Resche,22

Pietu,23 y Narcy24 han detallado hallazgosen las muestras estudiadas por ellos.

El diagnóstico diferencial debe es-tablecerse con otros síndromes y condicio-

nes que cursen con la característica distin-tiva de este síndrome, la hipoplasianasomaxilar que induce una naríz corta.Entre éstos tenemos acordisostosis,microrrinodisplasia de Bimler, SíndromeOrodigitofacial, Síndrome Marshall, Síndro-me de Kniest, Síndrome Warfarínico Fetal,Nariz sifilítica y Síndrome Fetal Alcohólico.Éstos cursan con otras anormalidades quelos distinguen.

Otra diferenciación hay que hacerla conla condrodisplasia Punetata (Displasiaepifisial punteada) o Síndrome de ConrodiHümermann, enfermedad caracterizada porcalcificaciones puntiformes esqueléticas yextraesqueletales más acentuadas en lasepífisis de los huesos largos, catarata con-génita y facies aplanada.25 Sheffield25 seña-la que una forma moderada de presentacióncon aplanamiento nasal, calcificacionespunteadas en las epífisis, disminución en laestatura, poca inteligencia, una alta inci-dencia de distress respiratorio o en la pri-mera infancia, hablan a favor de unacondrodisplasia punteada. Algunos pacien-tes con Síndrome de Binder tiene poco de-sarrollo e inteligencia neonatal, lo que pro-duce una confusión entre las 2 condicio-nes. Muchos profesionales piensan que elSíndrome de Binder y la CondrodisplasiaPunteada, representa el fin de un largo es-pectro de condrodisplasias, mientras otrosla dan como 2 entidades por separado.26,27

El tratamiento depende la severidad dela enfermedad, la edad inicial de presenta-ción e inquietudes y deseos del paciente yfamiliares. Como quiera que en su inmensamayoría los afectados tienen buen desarro-llo e intelecto, el reconocimiento de su de-fecto estético puede influir negativamenteen la incorporación a su medio. Horswel17

propone el siguiente protocolo de tratamien-to:

1. Evaluación psicológica temprana.2. Implante de Silastic como medida tem-

poral para el alargamiento inicial de la narizy mejoramiento del tejido blando entrelos 7 y los 8 años de edad.

115

3. Alargamiento de la columna.4. Implante de silastic o injerto

costocondral que se mantiene duranteel crecimiento.

5. Tratamiento y asesoramiento orto-dóncico usualmente entre los 10 y los14 años de edad.

6. Procedimiento quirúrgico de avancemaxilar después de los 15 ó 16 años deedad.

7. Rinoplastia secundaria.

Al evaluar un paciente con este sín-drome para decidir el plan de tratamiento,debemos tener en cuenta que en el reciénnacido pueden presentarse dificultades res-piratorias por la hipoplasia nasal y que pue-de requerir de cuidados intensivos. En lamedida que el niño va creciendo, junto conlos problemas estéticos, aparecen los pri-meros trastornos oclusales que en la denti-ción temporal se manifiestan por unavestibuloversión de incisivos. En la denti-ción mixta aparecen trastornos de mayorenvergadura acentuados por la hipoplasiamaxilar y la posición más baja de la lenguaque al proyectarse hacia abajo y adelanteejerce una acción de empuje sobre los inci-sivos inferiores y agravan la maloclusiónen el sector anterior.

En estas edades resultan efectivas lasmedidas ortopédicas y dentro de éstas, lastracciones extraorales han mostrado ser par-ticularmente efectivas.28-30 Al final de la ado-lescencia y en el curso de la edad adulta,las anormalidades esqueletales deben co-rregidas quirúrgicamente. Han sido pro-puestas osteotomías Le Fort I y en algu-nos casos, osteotomías segmentarias delmaxilar.7-10,31 La rinoplastia practicada enestos casos exige la colocación de injertosde hueso y/o cartílago en el dorso nasaljunto con un avance del septum.12,20 y 29

Presentación de un caso

Paciente femenina, blanca, de 5 añosde edad que solicita atención llevada porsus familiares preocupados por su estéticafacial. Al examen físico se aprecia la exis-tencia de un aplanamiento del tercio mediofacial que involucra la pirámide nasal y am-bos maxilares superiores con ligero aumen-to del tercio inferior. El perfil muestra unaatenuación del ángulo frontonasal, nariz,recta y vertical, agudización del ángulonasolabial, labio superior convexo y perfilcóncavo. El examen de la cavidad bucal nospermite constatar una relación borde a bor-de de incisivos y un plano terminal demolares temporales en escalón mesial. En latelerradiografía lateral de cráneo se aprecia

FIG.1. Telerradiografía lateral de cráneo conperfilograma, tomada a los 5 años donde seconstata el aplanamiento nasal convexidaddel labio superior y perfil cóncavo. Hay au-sencia de la espina nasal anterior, acorta-miento de la base craneal anterior ehipoplasia maxilar.

116

la existencia de una relación maxilomandibular de clase III (ANB=-3E, la delga-dez extrema de la cortical ósea vestibularque recubre los incisivos superiores, aúnno brotados y la ausencia de la espina na-sal anterior. Se constata además el acorta-miento de la base craneal anterior y lahipoplasia maxilar en sentido vertical y ensentido horizontal, a pesar de la difícil loca-lización de ENA.

La posición mandibular es normal y seacompaña de inclinación vestibular de am-bos grupos de incisivos y aumento del án-gulo goníaco. (figs. 1y 2).

FIG.2. Vista frontal, tomada a los 8 años, don-de se aprecian, además de las característicastípicas del síndrome, las narinassemilunares y el acortamiento de lacolumela.

FIG.3. Radiografías del raquis cervical en proyección anteroposterior donde se aprecian ano-malías en C4-C5.

Se indicó interconsulta especializadade Ortopedia pues comenzó a manifestardolores en las extremidades inferiores, se lerealizaron estudios radiográficos del raquiscervical y lumbar y se le detectó una espinabífida en C

4, C

5 y L

5 (figs. 3 y 4), además de

diagnosticarse una escoliosis, 4sacrolumbalgia con ciatalgia derecha yenuresis nocturna. Estas sintomatologíasfueron estudiadas en profundidad ya queel diagnóstico diferencial de la

117

FIG.4. Radiografía de co-lumna en proyecciónanteroposterior de pie sinzapatos, se aprecia espinabífida en <5 y una esco-l iosis.

sacrolumbalgia en niños de esta edad hayque hacerlo teniendo en cuenta lastumoraciones benignas y/o malignas quepudieran presentarse en el raquis. Todoslos síntomas fueron tratados mediante pro-cedimientos ortopédicos adecuados inclu-yendo la escoliosis. En el plan de tratamien-to se decidió la tracción maxilar con másca-ra facial (fig.5) y el seguimiento por las es-pecialidades de ortopedia y ortodoncia y laevolución de las correcciones estéticas enuna segunda fase del tratamiento.

En el caso presentado no existe una his-toria familiar de displasia nasomaxilar, nohay antecedentes de enfermedadesperinatales, ni traumatismo facial alguno. Elperíodo de gestación se desarrolló normal-mente y el parto eutócico de un embarazo atérmino. El único hecho a destacar alrede-dor del nacimiento es que, según refiere lamadre nació con la "nariz pegadita" sin otrascomplicaciones que requirieran tratamien-tos neonatales.

118

Discusión

La displasia nasomaxilar o Síndrome deBinder parece ser un cuadro relativamentefrecuente aunque escasamente referido ennuestro medio; en los pacientes afectadosse encuentran anomalías de moderada in-tensidad. La etiología es oscura siendo pro-puesta diferentes teorías que tratan de ex-plicar la patogenia de la enfermedad. Nues-tro caso no aporta datos al respecto ya queno se encontraron elementos de posibleacción teratógena ni factores posnatalesque pudieran alterar el crecimiento y el de-sarrollo facial, por lo que consideramos quese trate de una nueva mutación quística.

El diagnóstico puede ser difícil en ca-sos muy leves pero en los casos típicos,como el que presentamos, el diagnóstico

clínico no ofrece grandes dificultades com-plementado por un análisis cefalométricoque permite corroborar el acortamiento dela base craneal anterior, y permite cuantifi-car el grado de hipoplasia maxilar, así comolas modificaciones compensatoriasalveolodentarias y las posibles anormalida-des del desarrollo mandibular que pudieranexistir.

Los pacientes afectados por estesíndrome presentan con frecuencia anoma-lías de la oclusión dentaria responsable dela aparición de trastornos funcionales quedeben ser tratados a tiempo. Se le atribuyegran importancia para el diagnóstico clíni-co, a los rasgos típicos faciales y además, ala ausencia de la prominencia de la crestanasal al palpar la base de la ventana nasal.La deformidad es fácilmente reconocida,aún en orientales, en los escandinavos lasmanifestaciones pueden ser leves; en indi-viduos no caucásicos, la fossa y el sulcusprenasalis pueden ser hallazgos normales.

El diagnóstico diferencial con lacondrodisplasia punetata se realiza a partirdel interrogatorio teniendo en cuenta queen sus 2 formas clínicas, la de tipo Conradi-Hünermann y la rizomética, es fácilmenteidentificable en el nacimiento, al conocerde trastornos respiratorios en el neonatoque generalmente requiere de cuidados in-termedios y radiográficamente, al compro-bar la presencia de zonas punteadas de cal-cificación esqueletales y extrasqueléticasmayormente acentuadas en las epífisis delos huesos.

Las manifestaciones asociadas en lacolumna cervical y lumbosacra que han sidodetectadas en casi la mitad de los pacien-tes, fueron también corroboradas en nues-tro caso donde se observaron espinasbífidas en C4, C5, L5, escoliosis ysacrolumbalgia con ciatalgia derecha las querequieren de tratamiento ortopédico general.

El conocer suficiente las característicasde este síndrome así como las medidas te-rapéuticas aplicables, permitirán al estoma-tólogo, al ortodoncista y al cirujano

FIG.5. Utilización de la máscara facial paratracción maxilar.

119

maxilofacial establecer la secuencia de tra-tamiento, encaminadas a resolver las ano-malías detectadas con sus secuelas de in-capacidad funcional y/o inadaptación so-cial que se generan en los casos más seve-ros en los que, además, es de considerablevalor el apoyo psicológico al paciente y asus familiares.

Aún cuando no se manifiesten sínto-mas relacionados con el raquis cervical olumbar, deben realizarse estudiosradiográficos de columna para detectar eincluir en el plan de tratamiento anomalíasque requieran de tratamiento ortopédicogeneral.SUMMARY: Binder�s Syndrome or Maxillonasal dysplasia is a curious disease characterizedby hypoplasia of the middle third of the face that causes compensating mandible changes bringingabout the occurrence of Angle Class III malocclusion. Rachideal abnormalities found in patients andassociated with this disease have been described. Since this topic is so interesting we intend tomake a literature review and present a female patient affected by such illness, who shows thereferred associated abnormalities in her cervical rachis and lumbar rachis.

Subject headings: MALOCCLUSION, ANGLE CLASS III; NASAL BONE/abnormalities; MAXILLA/abnormalities; FACIAL BONES/abnormalities; BONE DISEASES, DEVELOPMENTAL.

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Recibido: 4 de marzo de 1998. Aprobado: 7 dejulio de 1998.Dra. Belkis Correa Mozo. Hospital Pediátrico Do-cente «Juan Manuel Márquez». Ave. 31 y 78.Marianao. Ciudad de La Habana, Cuba.

121

Rev Cubana Ortod 1988;13(2):121-125

ARTÍCULOS EXTRANJEROS

INDICADORES DE MADURACIÓN ESQUELETAL. EDAD ÓSEA,DENTAL Y MORFOLÓGICA*

Dictante: Dra. Elena Faini

Crecimiento somático,desarrollo y maduración

En la evaluación general de un pacien-te es importante de que el desarrollo físicogeneral sea juzgado en relación con el cre-cimiento ya ocurrido y con el potencial decrecimiento que aún resta. La aceleracióndel crecimiento facial durante la pubertades leve, comparada con la que ocurre en lasextremidades del cuerpo, pero es significa-tiva, ya que este período de aceleraciónmarca el momento más favorable para ata-car la mayoría de los problemasortodóncicos.

Hay que predecir la naturaleza y tiem-po de la manifestación del crecimientopuberal para el planeamiento de la terapiaortodóncica.

Hay que evaluar características físicastales como: altura y peso; conformación ge-neral del cuerpo (Ectomorfo-Mesomorfo-Endomorfo).

Tenemos que evaluar las Curvas de cre-cimiento que son diferentes para los teji-

dos nerviosos y linfáticos, los órganosgenitales y el cuerpo en general. El creci-miento craneofacial está afectado por la di-ferencia entre las curvas de crecimientoneural y de crecimiento general del cuerpo.Ocupa una posición intermedia.

La aceleración del crecimiento generaldel cuerpo que se observa en la pubertadestá también relacionada con la maduraciónsexual. El indicador más directo es lamenarquia en la mujer, y sin embargo, cuan-do ya ha ocurrido, también la mayor partedel crecimiento esquelético ya ha sucedi-do.

Los patrones de osificación de varioselementos esqueléticos son los que se usanpara establecer la edad ósea. Son losindicadores del momento en que va a co-menzar el empuje prepuberal, y de cuandollega al pico máximo así como cuándo dis-minuye. Podemos hablar entonces de unritmo de crecimiento, ya que los brotes decrecimiento prepuberal dependen del sexoy varían en relación con la edad cronológica.Estas variaciones determinan la velocidady duración del proceso de crecimiento. Por

* Conferencia dictada en el curso básico de Ortodoncia. Primer año en el Instituto OdontológicoInterdisciplinario de Rosario. Argentina.

122

lo general, el brote de crecimiento puberalse inicia en las niñas, entre los 10 y 12 años,y en los varones, entre los 12 y 14 años,con un margen de variación de 3-6 años. Sehabla de Trastornos del Ritmo de Creci-miento cuando se produce una desviaciónde +-2 años entre la edad cronológica y labiológica.

El Proceso de Maduración sólo se pue-de valorar sobre la base de la osificación.

Edad biológica y radio-grafía de la mano:

La edad cronológica no siempre permi-te valorar el desarrollo y la maduraciónsomática del paciente, por lo que se recurrea determinar la edad biológica, que se cal-cula a partir de la edad ósea, dental ymorfológica o del momento de la madura-ción sexual.

Por lo general, la edad ósea, se valoracon una radiografía de la mano, que se con-sidera el reloj biológico. La madurez ósease determina hasta el noveno año de vidapor el grado de mineralización de los hue-sos de la muñeca (carpo) y posteriormente,por el desarrollo de los huesosmetacarpianos y falanges.

La interpretación de la radiografía de lamano se basa en diversos factores de desa-rrollo y maduración, que aparecen en formaregular y secuencial durante los mismos.

En ortopedia maxilar se ha utilizado elanálisis de Bjork, que divide el proceso demaduración de los huesos de la mano en 9estadíos evolutivos entre el noveno y los17 años de edad. Las características de osi-ficación se detectan a nivel de las falanges,huesos del carpo y radio. Los estados decrecimiento de los dedos se valoran segúnla relación entre la epífisis y la diáfisis. Sedistinguen tres Estadíos de Osificación delas Falanges.

Primer estadío: la diáfisis tiene la mis-ma anchura que la epífisis. Segundo estadío:estadío de capuchón, donde la diáfisis ro-dea a la epífisis a modo de capuchón.

Tercer estadío: estadío de U(U=unidad) donde la diáfisis se osifica conla epífisis.

Los dedos se denominan con las cifras1 a 5 a partir del pulgar.

El primer estadío comienza aproxima-damente 3 años antes del brote de creci-miento puberal.

El segundo estadio de osificación co-incide con el brote máximo de crecimientopuberal, y se corresponde con el quintoestadio de maduración del esqueleto de lamano.

El tercer estadío de osificación signifi-ca la terminación del brote de crecimientopuberal y se corresponde con el sexto, sép-timo, octavo y noveno estadios de madu-ración de la mano.

1. Diáfisis de la falange distal del pulgar.(DP1).

2. Diáfisis de la falange proximal del pul-gar. (PP1).

3. Hueso sesamoideo en la articulaciónmetacarpofalángica del pulgar. (S).

4. Diáfisis de la falange distal del dedo ín-dice. (DP2).

5. Diáfisis de la segunda falange del dedoíndice. (MP2).

6. Diáfisis de la falange proximal del dedoíndice. (PP2).

7. Diáfisis de la falange distal del dedomedio. (DP3).

8. Diáfisis de la segunda falange del dedomedio. (MP3).

9. Diáfisis de la falange proximal del dedomedio. (PP3).

10. Diáfisis de la falange distal del dedoanular. (DP4).

11. Diáfisis de la segunda falange del dedoanular. (MP4).

123

12. Diáfisis de la falange proximal del dedoanular. (PP4).

13. Diáfisis de la falange distal del dedomeñique. (DP5).

14. Diáfisis de la segunda falange del dedomeñique. (MP5).

15. Diáfisis de la falange proximal del dedomeñique. (PP5).

16. Diáfisis del primer hueso metacarpiano.17.Diáfisis del segundo hueso meta-

carpiano.18. Diáfisis del tercer hueso metacarpiano.19. Diáfisis del cuarto hueso metacarpiano.20. Diáfisis del quinto hueso metacarpiano.21. Trapecio.22. Trapezoide.23. Hueso grande.24. Ganchoso.25. Apófisis uniforme del ganchoso. (H).26. Piramidal.27. Pisiforme. (Pisi).28. Semilunar.29. Escafoides.30. Diáfisis distal del Radio. (R).31. Diáfisis distal del cúbito.

Según el análisis de la radiografía demano de Bjork, Grave y Brown, encontra-mos los siguientes estadios de maduración:

PRIMER ESTADIODE MADURACIÓN

La diáfisis de la falange proximal deldedo del dedo índice (PP2), muestra la mis-ma anchura que la epífisis. (=). Este estadiocomienza aproximadamente 3 años antes delbrote de crecimiento puberal.

SEGUNDO ESTADIODE MADURACIÓN

La diáfisis de la segunda falange deldedo medio (MP3) muestra la misma anchuraque la epífisis. (=).

TERCER ESTADIODE MADURACIÓN

− (Pisi): osificación visible del huesopisiforme.

− (H 1): Osificación de la apófisis unifor-me del ganchoso.

− (R): anchura equivalente de la diáfisis yepífisis del R.

CUARTO ESTADIODE MADURACIÓN

− (S): inicio de la mineralización delsesamoideo.

− (H 2): osificación avanzada de la ap. unc.del ganchoso.

Este estadio se alcanza poco antes o alinicio del brote de crecimiento puberal.

QUINTO ESTADIODE MADURACIÓN

− (MP3 cap.): la diáfisis rodea a modo decapuchón a la epífisis, a nivel de la se-gunda falange del dedo medio.

− (PP1 cap.): en la falange proximal del pul-gar.

− (R cap.): en el Radio.

Este estadio de osificación coincide conel brote máximo de crecimiento puberal.

SEXTO ESTADIO DE MADURACIÓN

− (DP3 u.): Fusión visible de la diáfisis yepífisis de la falange distal del dedo medio.

| Al alcanzarse este estadio evolutivo,termina el brote de crecimiento puberal.

124

SÉPTIMO ESTADIO DEMADURACIÓN

− (PP3 u.): Fusión visible de la diáfisis yepífisis de la falange proximal del dedomedio.

OCTAVO ESTADIO DE MADURACIÓN

− (MP3 u.): Fusión visible de la diáfisis yepífisis de la segunda falange del dedomedio.

NOVENO ESTADIODE MADURACIÓN

− (R u.): Osificación completa de la diáfisisy epífisis del Radio.

Al llegar a este estadio, termina la osi-ficación de todos los huesos de la mano y,al mismo tiempo, el crecimiento óseo.

Es de considerar que la osificación delos huesos de la mano está sometida a unagran oscilación individual y que la determi-nación de la edad ósea en la radiografía nosiempre es exacta.

Edad dental

La valoración de la edad dental es esen-cial para un pronóstico sobre el desarrollode la dentición. Se determina por 2 méto-dos: Estado de erupción dental y el estadiode gemación, que se basa en la compara-ción del estado de desarrollo radiológicode los diferentes dientes frente a una esca-la de maduración.

De esta forma no sólo se mide la últimafase de desarrollo dental, sino todo el pro-ceso de remineralización. La valoración sebasa en un sistema de puntuación(Dermirjian y cols.). Se adjudica a cada dien-te una puntuación, según su estadio dedesarrollo. La suma de los diferentes pun-tos da el valor de madurez, que se puedeconvertir directamente en la edad ósea conayuda de unas tablas convencionales.Cuanto menor es la suma de puntos, menores la edad dental y viceversa. Este métodoresulta bastante preciso si sólo se utilizanlos dientes del cuadrante inferior izquierdo.Además, la escala de puntuación delgrado de mineralización depende del tipode diente y del sexo del paciente (Tablas 1 y 2).

Tabla 1. Escala de puntuación de los diferentes estadíos de desarrollo dental

Niños EtapaDiente 0 A B C D E F G H

M2 0,0 2,1 3,5 5,9 10,1 12,5 13,2 13,6 15,4M1 0,0 8,0 9,6 12,3 17,0 19,3PM2 0,0 1,7 3,1 5,4 9,7 12,0 12,8 13,2 14,4PM1 0,0 3,5 7,0 11,0 12,3 12,7 13,5C 0,0 3,5 7,9 10,0 11,0 11,9I2 3,2 5,2 7,8 11,7 13,7I1 0,0 1,9 4,1 8,2 11,8Niñas EtapaDiente 0 A B C D E F G HM2 0,0 2,7 3,9 6,9 11,1 13,5 14,2 14,5 15,6M1 0,0 4,5 6,2 13,5 14,0 16,2PM2 0,0 1,8 3,4 6,5 10,6 12,7 13,5 13,8 14,6PM1 0,0 3,7 7,5 11,8 13,1 13,4 14,1C 0,0 3,2 5,6 10,3 11,6 12,4I2 0,0 3,2 5,6 8,0 12,2 14,2I1 0,0 2,4 5,1 9,3 12,9

Etapa o=falta de calcificación.La escala de puntuación del grado de mineralización depende del tipo de diente y del sexo del paciente. Estatabla se ha elaborado para el cuadrante inferior izquierdo. (Según Demirjian y cols. 1973).

125

TABLA 2. Conversión para determinar la edad ósea tras conocer el resultado del desarrollodental

Edad Puntos Edad Puntos Edad Puntos Edad PuntosJ K M J K M J K M J K M

3.0 12,4 13,7 6.3 36,9 41,3 9.6 87,2 90,2 12.9 95,4 97,2.1 12,9 14,4 .4 36,9 41,3 .7 87,7 90,7.2 13,5 15,1 .5 39,2 43,9 .8 88,2 91,1 13.0 95,6 97,3.3 14,0 15,8 .6 40,6 45,2 .9 88,6 91,4 .1 95,7 97,4.4 14,5 16,6 .7 42,0 46,7 .2 95,8 97,5.5 15,0 17,3 .8 43,6 48,0 10.0 89,0 91,8 .3 95,9 97,6.6 15,6 18,0 .9 45,1 49,5 .1 89,3 92,3 .4 96,0 97,7.7 16,2 18,8 .2 89,7 92,3 .5 96,1 97,8.8 17,0 19,5 7.0 46,7 51,0 .3 90,0 92,6 .6 96,2 98,0.9 17,6 20,3 .1 48,3 52,9 .4 90,3 92,9 .7 96,3 98,1

.2 50,0 55,5 .5 90,6 93,2 .8 96,4 98,24.0 18,2 21,0 .3 52,0 57,8 .6 91,0 93,5 .9 96,5 98,3.1 18,9 21,8 .4 54,3 61,0 .7 91,3 93,7.2 19,7 22,5 .5 56,8 65,0 .8 91,6 94,0 14,0 96,6 98,3.3 20,4 23,2 .6 59,6 68,0 .9 91,8 94,2 .1 96,7 98,4.4 21,0 24,0 .7 62,5 71,8 .2 96,8 98,5.5 21,7 24,8 .8 66,0 75,0 11.0 92,0 94,5 .3 96,9 98,6.6 22,4 25,6 .9 69,0 77,0 .1 92,2 94,7 .4 97,9 99,5.7 23,1 26,4 .2 92,5 94,9 .5 97,1 98,8.8 23,8 27,2 8.0 71,6 78,8 .3 92,7 95,1 .6 97,2 98,9.9 24,6 28,0 .1 73,5 80,2 .4 92,9 95,3 .7 97,3 99,0

.2 75,1 81,2 .5 93,1 95,4 .8 97,4 99,15.0 25,4 28,9 .3 76,4 82,2 .6 93,3 95,6 .9 97,5 99,1.1 26,2 29,7 .4 77,7 83,1 .7 93,5 95,8.2 27,0 30,5 .5 79,0 84,0 .8 93,7 96,0 15.0 97,6 99,2.3 27,8 31,3 .3 80,2 84,8 .9 93,9 96,2 .1 97,7 99,3.4 28,6 32,1 .7 81,2 85,3 .2 97,8 99,4.5 29,5 33,0 .8 82,0 86,1 12,0 94,0 96,3 .3 97,8 99,5.6 30,3 34,0 .9 82,8 86,7 .1 94,2 96,4 .4 97,9 99,5.7 31,1 35,0 .2 94,4 96,5 .5 98,0 99,6.8 31,836,0 9.0 83,6 87,2 .3 94,5 96,6 .6 98,1 99,6.9 32,6 37,0 .1 84,3 87,8 .4 94,6 96,7 .7 98,2 99,7

.2 85,0 88,3 .5 94,8 96,8 .8 98,2 99,86.0 33,6 36,0 .3 85,6 88,3 .6 95,0 96,9 .9 98,3 99,9.1 34,7 39,1 .4 86,2 89,3 .7 95,1 97,0.2 35,8 40,2 .5 86,7 89,8 .8 95,2 97,1 16,0 98,4 100,0

J = años. K = niños. M = niñas.El número de puntos para determinar la edad ósa se obtiene de la suma de los diversos puntos de los 7 dientesdel cuadrante inferior izquierdo. Si falta alguno de los dientes que hay que valorar, se incluye en la valoraciónel diente del lado contrario. (Según Demirjian y cols., 1973.)