si irse veloz fuera más irse

7/26/2019 Si Irse Veloz Fuera Ms Irse

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EDI CIN PARA LOS DIGITALES - LA WEB DE FEL I X

MARCOS VIEYTES

Si un irse veloz fuera ms irse
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Ante todo o Nueve aclaraciones para posibleslectores de este libro.

1. no ignoro que me falta mucho saber del amor en ejercicio: de cmose alimenta, de su implacable comercio, de la certidumbre sin sombraque requiere la delicada decisin de soarlo, plido pavor de no estar ala altura de esa nica belleza que no proviene de la muerte

2. compongo estos poemas que no necesitamos o que vos, en todo ca-so, no ignors no necesitar con el aliento de una vocacin contusa queprolonga su estancia de espaldas a la puerta que descorchan los apura-dos de caminos, como si un irse veloz fuera ms irse

3. yo ya no profeso ninguna de las dos religiones argentinas: la fe deque quien va al Paraguay volver con un loro o con un queso de Tafquien fue al norte: yo slo soy un regresado de la fragilidad

4. y ese dejar cada uno su familia, su pasado, su soledad que es lalectura? ahora somos atropellados por la vida como antes por la ausen-

cia suspendida entre pgina y pgina: ahora comenzamos a desenten-dernos de la fatalidad de ser felices, de hoy en ms no habr un besoque no sea otra cosa que un beso, una brusca travesura del afecto

5. un poeta ha dicho que los poetas deben evitar lo potico, tal vez,para no infligirle al lector lo irreparable: la piedad


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6. por un instante me qued triste de imposible, pero has visto el res-pirar de los que viven? esa manifestacin del aire por el pecho? lainescrupulosa apertura de sus fosas nasales? no niego ese despido de

amor que es toda muerte: esa muerte de amarte con olvido de que teamaba: ese tedio de tener que andar explicando la voz: esa confirma-cin de que hoy hay ms pasado que ayer, pero tambin escribo queprefiero hacerme quedar en la vida conversando con vos, mi lector,que no sos poco lector

7.esta escritura es un registro del devenir y es a la vez otro estmuloms del devenir; compadreo llamndola poesa para ganarme un lugar

entre los que tienen por costumbre no morir ni envilecerse: gozo delos encuentros de la palabra con lo inadvertido

8.puede parecerme, por ejemplo, que ahora el poema madura entre losrboles anchos y los plafones macilentos de parque Rivadavia; entre lanoche, entre octubre, entre la lluvia: hormiga que carga el pan de laaventura (un jueves le a cortzar entre incrdulo y maravillado: lacatedral contra el cielo tan cargado, tan cubierto, tan gato; otra vez,a macedonio a olivari a gelman a tun: todos los nombres posiblesdel poeta: profetas de hondo amanecer).

9.con la palabra y con los hombres -y con la cintura de una mujer- ha-go mi paraso, colaboro con dios sin contrato: la salvacin -de suce-der- tendr sabor a yapa: ser una caprichosa -y feliz- ocurrencia dedios


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Una advertencia y Cuarenta y siete poemas paralectores posibles.


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Advertencia

cuando me muerame van a tener que or


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Poema colectivo

decime, pasajera, qu ternura

acurrucs en la ochava del bolsito, qu vrtigode magnolias asustadas, qu vanguardias del pudorsabores un carameloque es tantas otras cosas improbables

cuntos cuerpos hay entre tu cuerpoy el que mira mi mano? cunto tactoparcial hasta el primero de la piel?cuntos ecos de la carne? cuntos ojosverdaderamente abiertos? cunto espacioimpenetrable -aire como murosentre nosotros, enredaderas de aire?

el colectivo me lleva por guzmny toda la noche es pelcula, del otro lado

cuerpos tambin tan ajenos como el mocuerpos tampoco, paraguas y automviles

qu distancias exiguas pretende la caricia?qu quietud al interior del tomo? qu fcilunidad del corazn? qu es eso de anunciarel apocalipsis con deleite -si ha de venircomo ladrn por la noche sigilosa?

puede que vos te bajes antes que yo o viceversaque te hable: que me hables: que no dejemosde hablarnos o que nunca: qu lindo, qu raroesto de andar desencontrndonos arribade una ciudad rodante: vendran bienalgunos siglos ms para empezar a enterarnosde qu rostros ocultan las costumbres, vendran bien

algunos siglos ms para empezar


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Actualidades

posibles poemas para criaturas posibles

para seres que vendrn sobre los hombros de estas pginas para odos que arman su caracol en este instante con la cal viva de lavoz cifrada en versos

poemas para fragmentos de miradas fragmentos de poemas para mirarle por la cerradura del ojo una fraseal poema que ya canta la cancin que ser el motivo de una boca im-prevista por la mano que desate la escritura

poemas que son, posiblemente, para regresar subidos a los hombrosde criaturas que todava no son pero sern tenaces portadoras de la vozarmada por el poema posible

poemas para criaturas inquietas de posibilidad


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Hojeado

no soy yo quien escribe estas palabras que cruzan por tus ojos como

transentes de la noche es otro yo despierto que apacienta el vaco mal olor de unos silenciosque fueron los mos y podrn anegarme otra vez si me callo

hojeado interminablemente, escribo la historia de este mal de ojoscados como cadveres o advertencias de la virtud y soy el portavoz de los muertos que fui, el rgido anfitrin de la vozde los otros, el extranjero de la ma

importaba la voz: la impostaba de afueras, y crec robndome losverbos mirarle la conjugacin a las mujeres era delito, y la pena: una meti-culosa exportacin de los recursos hace ya siglos que inauguro derrotas sin avergonzarme: hace tiemposque part al descielo

parece que tambin en el paraso hace mal tiempo.


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El tiempo no trabaja

se miran desde el fondo casi ciego de la pena

se bajan del auto, se desatan los zapatos: alumbranprimero la escalera despus el dormitorioy se acuestan en su camaflaca de soltero

se besan: se atan: se duermen

se besan, se atan, se duermen: alumbranla noche los espera ms all de la esperanza


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Fuera de campo

el amor ocurre siempre ms ac de los actos: en el antes ntimo de la

actitud que los atraviesa

y slo ser posible que lo huelas durante el descanso de la imagen,por entre los poros de la conciencia suspendida


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Quehaceres

sobran estrellas

sobre las torres de alta tensin: quehaceresde la noche ambulanteandar tu voz viajando por esos cables?se mecen lamos bajo el cementoarmado de la noche: el cielo se pueblade pramos hondos, sobre la rutapasan automviles como animales cansados (desde la banquina los veo no llegar...


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Empeado

la risa es al deshielo de la tarde lo que el ala del pjaro a los bordes

de la luna: mrtir del oficio ingenuo de andar desencantando salvacio-nes

no por ello renunciar la piedra al lquido rubor que esconde hacia elcostado sur de sus indecisiones torpemente arrojadas contra s misma:como nubes que fueran fsiles de un cielo perdido, como arrugas den-tro de las arrugas que rasg la fiebre sobre la cara de un hombre empe-ado


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El f i lo

ni guerra ni poltica: una diccin nueva de lo dado conjugando en

otros tiempos las calenturas de la luz

polticas de guerra? guerra de polticas? astucias -y el filo lcidode la concesin posible ya me lastima la lengua cuando lo escribo-,que no insidias, que no hirientes maneras de morar morigerndose,que no morigeradas maneras de morar hirindose pero que tampoco

plidos permaneceres en la abulia


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Una buena mala palabra

nos urgi la fiera metalurgia del cuerpo

fraguando el escarnio

ella iba al cielo por una calle anchayo volvay era preciso decir revolucin


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Terrazas

toda primavera trae consigo

una especie de cardiaca ebriedad...

como ganas de ir por ai descerrajando corazones


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Alta primavera

a Mario Trejo

sentado a la mesa del cafel beso rueda sin destino cierto o conocido-quin sabe con qu ha de encontrarse el labioen la otra costa de su extraadura-mientras convence un rato ms al amorcomo alumbrado de sertan cerca de dos bocastemblorosas y posibles


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Al extr emo del ojo

la mano ya no escribe a la voz del espectro que en vano me implora

su limosna ocho fantasmas de la china anterior a la muralla lloran su amor ence-nizado cada vez que el viento del sudeste aflauta su silbido por entrelas hojas de un fresno que se muerde los brotes de su plpito ms h-medo y hay algo que no cuaja: como el horror desarticulado por el paso dela violencia atravesando el sentido, lugosi y la morfina hiriendo la per-siana con alfileres como hechizados de luz


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Desojado

I

yo, que slo tuve ojos para la vozme qued con la garganta enceguecida

I Ilos ojos estorban cuando una mujerest all: bailandoa dos pasos del milagro enardecido de la noche

I I Idebajo de unos ojos,me vi mirarme tendido en la mirada: entre la verticaldel prpado y el pmulodecapitado a poniente


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El hmero del air e

este libro que respiro por los ojos, el aire lleno de palabras

no es ms que el encadenamiento de los insomnios adolecidos por unviajante de noches que busca escapar del olor a hoja mojada a libros hmedos llovidos por goteras de cielorrasos descascarados cubiertos del musgo invertido y urbano de la voz ahogada como unalepra encinta rancios y rados como la piel de los viejos inmviles en su ausenciapopulosa de cadveres danzantes de magras resonancias como ajuares de gaviotas en un ayer que nome deshabita todava tanto como a ellos que destierro en este instante a un continente ms blanco y an msvaco que la suerte: la pgina desnuda, la hoja intacta, el hueso siem-pre hurgado por la letra posible, por la golosa vocacin corrosiva delagua

santa rosa se anuncia en el hmero del aire


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El previsor

yo vi el precipicio y pude

slo precipitarme perocon anteojeras paracadas


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Como Dios manda

cuando en la hoja slo quedan versos mareados por el miedo, sobre-

vivientes de la incertidumbre en el adolecer de la derrota vos no s de dnde amanecs tanta belleza distinta

pero y la duda dura: el concreto de la incertidumbre sin fisura nivoz?el desierto sin trnsito ni oriente? el durante de la ausencia?

pienso en vos y acaricio tu voz en la mitad del recuerdo: los pajaritos marrones detu voz que miro volar o atrapo entre las manos de la ternura esta alegra de propiciar un pas con las palabras

(a cceres le gustaba decir que el paraso era marxista, ser quedios ley ms que sus intrpretes? a cceres le gustaba -y no tan slo a cceres- la historia del paraso:las idas y vueltas del trayecto: las curvas de la historia...)

cuando la vida sea al fin como dios manda, todos los das van a serperonistas


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Trayecto

a esos rostros ni catorce mil

caballos de fuerza les enardecern el msculo:pacen ensilladosrumbo a la noche domstica

a esos pies ni la rabiales sugerir la fuga:caminan boca abajo por ordende prudente solicitud

a esos prpados ni la desnudaconviccin de una rodilla les encender el decoro:duermen a deriva y de vueltade caducos aguinaldos


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El converso

aqu estamos/ somos

los torpes/ cada vezms y ms entumecidospor el orgullo que dicen que supurade nuestros ojos como un aguacero hambriento/y callamos/ y omossin chistar/ porque est bienas/ y/quin sabe?/y/ por las dudas...

/no vaya a ser que dioshable por boca de unos nios ufanos de redundanciascomo pelusas alrededor del ombligo


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palabra de Dios

hay letras, vocablos, palabras

sagradas? hay palabrasqueridas de dios y la palabraquerida por dios dios dicemalas palabras (no digas nopienses escandalizado: oh dios,no puedo creer lo que leo!,no usesel nombre de dios en vano: no seaspolica de la palabra: no malgastesla fe en foniatras)? dios nomaltrata palabras, dios no lasmalinterpreta: no miente: no haymentira que dios no desapalabre, dios

dio su palabra de Dios -escribo diosy Dios estuvo en mi mano aunque no sepanunca lo que escrib- y no hay otrodios que pueda volver atrs la palabraque palabra el futuro cul


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Sobrevuelo / Cuesta atrsoRecuperacin de la ternur a

si las palabras

como un ptalo

-apenas

hilaran la huella del olvido sobre la piel de la

caricia entonces tal vez

huelo a dios-te dira, aqu

con mi fe

de bruces

quietito quietito, quietito, dormido a vos


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Colonia

efmero, nfimo

bruscamente amado? vlido... vlido...

a brazo lento inocuo inicuo y ni sombras curiosidades sobran ya para este boletn descalificaciones: 0a la izquierda


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F lagelo del pajari to

en tu mecido

corazn de lata, pajaritova tu amorentumecido: paja, rito


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Oxidos huraos

todo el hueco es un cayo

todo el miembro cay nadie es miembro del hueco ya calladocuya oxidacin gotea en si lencio como cascaritas de la voz

(la herrumbre de los muslos tie el sexode xidos huraos a la articulacin del placer)


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De coces

no vaya la mula de tu clera

a dar de coces contra el imperturbablesexo asfaltado de los cosos

no vaya tu sexo a dar coces que se mellael coso que los muslos se asfaltaronpara que nadie les perturbe la clera

no acalores el muslo mellado que hay cosascalladas bajo el asfalto que nadie mellaa no ser las mulas que no cosen el remiendode la clera: las que perturban al falso mulorindoseles en la cara de su cositoque se da de bruces contra el muladarembarrado de su burra

no vayas a dar, que se cuecen


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Lo que escapa

Hablo de los hombres que sin pensar hacen dao

y por negarse a pensar; de los oficinistasde los Diez Mandamientos; de los equilibristascon red; de todos los que habilitan el engaoo se avergenzan del corazn que los contrista

(si el hombre coincidiera, feliz, con su concienciano estara temblando de amor contra su culpa)

Pueden llamarme loco los que dicen que me amanporque escojo morder entre dientes el bostezopara dar a luz el sueo o porque nunca rezoel pblico peaje de piedad que me reclamano porque no invierto el grito o porque no oculto el beso

(lo que escapa a las leyes se atropella cantando)

Nunca mata la vida: solo mata el cansanciode tener que renacer tantas veces y darse;vivir es recomerse la poca luz que esparceel amor: morir es encomendarse a lo rancioy amargo. Vivir es desprenderse de disfraces.


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Dicho y hecho

as: sustantivadas, absueltas de la irrefrenable verdad carcelera de los

refranes, son dos piedras equivalentes de igual materia nominativa,maciza construccin de conceptos decantados desde el tiempo nuncadicho de los primeros nombramientos de cinco aristas incluyendo las haches(no letra, boca absorta, fantas-ma del idioma) son aire modelado por los ojos ms all de las defini-ciones convencionales de los diccionarios y desnudas y consistentes, expuestas a la mano que las escriba po-drn ser como proyectiles de luz o crepitaciones de la sed incluso


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El orzuelo de los hroes

la mecnica del chantaje reproduce la baba que nos muerde todava

desde los msculos estrechos de las potestades hasta hoy

en el ojo de los hroes un orzuelo entorpece la mirada del nio ani-mado de verdes insolencias y animales inquietos, que lee en silencio ladesobediencia mientras el grito le frota cadenciosamente los lagrima-les hasta alzarle todo el llanto caliente y expulsado

cuntos cielos abiertos le aplastarn el crneo...cuntas lluvias aejas le ampararn el duelo...

sabr que hay hombres como estatuas intilesy que hay mujeres que hay noches de luna negra que duran treinta aosy espesa leche acumulada que hay plpitos profanados y parsitos impvidos

pero tambin

que hay hombres y mujeres que hacen el amor con fe: sabr que hayun misterio mayor que el de la muerte: descifrar los codos donde seoxida la alegra, donde se acumula el sarro de la ofensa


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Generales de la ley

la ley de la vida

agota a los generales

los generales agotanla vida de la ley

la ley de los generalesagota la vida

pero la vida no se agotaen las generales de la ley


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Disentimientos

han evitado los errores y se sienten

salvados. Pero han cado en el supremo errorde no cometerlo. Mis errores me salvan

Francisco Urondo

yo disiento el poemacon desnuda punidad: el huesode la slaba a la vista dislocada, bizqueo el sueo de dios y lo digo qu virtud

hay en amar slo a los amigos, qu gracia tienesi callo el amor, qu voy a hacer conmigosi negocio -y en negro- la desgracia?

escribo mi dolor a mquina y piensoen las mquinas de dar dolor, en los que decandale mquina una vezy otravez ms y otra

vez ms y otra vez ms y otravez ms y otra ms y otra ms y otravez ms para maquinar de nuevo comodar ms y mejor dolor en las encasde reir: en los prepuciosde hacer pis: en los pezonesde amamantar o pienso en la dolosamacana de los mercados hambreando sin mcula

segn la mecnica maricona de la leymanijeada por tecncratas de traje y de corbata

yo pregunto el poema con abierta punidady no me avengo a las inconsecuencias, siemprehay alguno que pregunta, porque nadiedice nada siempre hay alguno que pregunta por qunadie dice nada, por qu nadie


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pregunta y se quedaa esperar que le contesten por qu noen vez de porque s o porque siempre

pregunto por ejemplo si tipos como e.g.tendrn que arreglar cuentas con la muerteo si la vida no arregla nuncacuentas con la muerte o si tambinla vida arregla e.g. tambinarregl: el poetatambin: los disidentes

tambin arreglaron? y los ministros?tambin arreglan cuentas con la muerte? todoslos hombres arreglan? en qu trminosla muerte los arregla? o la vida los terminasin trmino, incesantementecesanteados? quin cuenta, preguntolo que se da por descontado? a quincontaremos del poeta de los disidentes de todoslos hombres y sobre todo del ministroque arreglaba las cuentas? cmo jorobaese poeta contradicho, cmo joroba y lo peordel caso con necesidad, jorobala joroba de su voz, estorba la torvanecesidad de estar desaverdando la varada

o almibarada verdad as comosan marcos el desnudo que corre para contarla desventaja de los verdugos: el que no secretani la mitad dolida de su incomprensin: poetatuerto, media resde poeta no ve ms que la cojamedia red del absurdo, pero todo el entuerto: le duelesiempre la mitad que se queda

sola


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oblicuatartamudeandoel encuentro consigo mismo

y depende y pugna y poemaagitado por el versoperverso del neutral la facha no es msque la seora del facho, la reverenciadel reverendo y su discursosiempre tan lleno de buenas palabras, fachason los libros sin tacha que llevanlos contadores pblicos de dios: su asepsia

hospitalaria: su enferma salud: su frgido sufragio

(el individuo que difiere de sus paresque perturba o escandaliza a su familia o sociedad

suele ser calificado de rebelde acusado de enfermedady perseguido como enfermo

este acto de organizacin llena necesidades importantes)

se ahueca san martnen un hotel crepuscular de franciamientras contina la opaca, la justaconsistencia de los actos en su tiempo, leodowning street y rockefeller centercayendoentre lneas de un poema de urondocomo las bombas del 55 sobre un poema nacional, las

libertadorasrevoluciones sustituyendoa las palabras que producan el poema nacional, restituyndolesla tierra a los usurpadores de la tierra, a los postergadoresque la penetran y la desesperanzan: la tierratiembla como mi mano mientras escribo este versoa caballo de la madrugada inapresable, deshacindosemientras se escurre por los ojos la lecheplacentera de la noche materna: el rin

de la vida se les escapa


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a los escriturarios y a los contables-tambin a los poetas- quin lleva los librosfundamentales? quin se encarga

de la tenedura? ac abajono pasa nada que no hayapasado ya, o seavivirse por poder, in-termediar entre codicias, estipularprolijamente los estipendios: ponerse precio

alguna vez este desorden

tambin tomar los aires de la felicidad: ser tambincomo el agua que miraba sin rabia, porque la rabiaes calentona pero al odiolo rumia la razn y hay odiossumamente razonables: en este paspreferimos no saber los orientes que soplan, unalengua se introduce en un rosado orificioy se conmueve una plida noche sin horizontes


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Argamasa

perdones de toda ley: mil perdones

siempre a mano, siempre en guardia: guirnaldasde perdones colgando de la faldacomo banderas o como pendones

perdones para cuando no disponesde la gracia: para cuando te escaldala sed o cuando no te sobra espaldani gozas de influyentes relaciones

perdones como nuncas antedichosa la treta legal de la demanda:perdones en flor, perdones acsticos

o chcaros perdones como bichoscallejeros a los que nadie manda

ladrar entre tanto silencio rstico


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Mala fe

Al militante los profetas del odio le quitaron la sensacin de ser l

tambin un constructor de la historia, lo convencieron de que todacolaboracin propia indicaba indisciplina y ambicin , lo impidieronsistemticamente, lo organizaron de arriba abajo, le cegaron laapasionada voluntad, lo convirtieron en meros espectadores a laespera de la gracia, lo sustituyeron por pensionistas del poder.

Ar turo Jauretche

Entend con voz clara la obediencia/ que arma fila fusiles en mano/ yla flor de la fe del soberano/ encendida por lcidas violencias (bronca cuyo nico predicamento/ es ella misma: su afn de respues-tas/ su insomnio de cada vez que se acuesta/ interpelada por el pensa-miento).

Supo el alma de las incandescencias/ con que empuan el hacha los

hermanos/ que defienden a dios: ese paisano/ de esa patria de jueces ysentencias que habitan con prolija complacencia/ y defienden con celo sobrehu-mano./ Dios les conserve lo que por afano/ usurparon a falta de con-ciencia!

(en ancas de una rabia insatisfecha/ que gustan en llamar resenti-miento/ -como perros del no arrepentimiento/ o como decapitada cose-

cha: como perdn que no encuentra la fecha/ de dar a luz su vmito mu-griento-/ escupo todo mi convencimiento/ por el hilo flaquito de labrecha

que me abrieron los que ya tienen hecha/ y sobrecotizada al mil porciento/ la absolucin, la gracia, el salvamento/ y la misericordia conque acechan


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el motivo de la accin que sospechan/ culpable del pecado de disensopor no andar respondindole a los censos/ y por denunciar que si pen-ss te echan.)

Pero est el mar y est tambin la ciencia/ de amar, que no es ni gra-cia ni milagro/ y est la mujer y el trabajo y el magro/ terreno que novino por herencia y el sabor de los das sin la urgencia/ de acudir toda vez que se oye alamo/ abusar de la voz con el reclamo/ o del silencio con la indiferen-cia.

Del exilio escaldado de la ausencia/ no se regresa por camino llano:/la carretera es de una sola mano/ y hay que comerse el pan de la pa-ciencia y tramitar absurdas diligencias/ y tratar con oscuros funcionarios/cuidndose de usar el diccionario/ que define qu cosa es la decencia.

Qu miedo a caminar con displicencia/ sin tener que mirar siemprehacia abajo:/ no vaya a ser que algn escarabajo/ les haga tropezar latrascendencia! Pobre aristocracia de la carencia/ -que an tomando carrera vuelabajo-/ cuando se quede ya sin el trabajo/ de aspirar a prncipes de laregencia!


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El hacha, la cabeza y el mango

ni el filo de la cabeza

ni el peso del mangodel hacha de mis hermanos

ni los hermanos del hachani el mango de los hermanosni el filo sobre la cabeza


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Lo andado que vive en tus ojos

ciudad sobre la noche: luna sobre el espejo opaco del asfalto y el

alumbrado pblico de las estrellas dndole a la ochava de tu cuelloreunidor

zagun y traspatio de los dioses: ciudad edificada indefinidamenteque transpira herencias y parricidios por las costuras y amor fumn-dose en mangas de camisa


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AsomooVerano entre la sombra de todos los muslos

esa mujer una de sas- es esa mujer entre mis manos vecinas deabismos: acontecida mientras muerdo los bordes de su vientre entre-tenido

airosa sobre el sueo de las noches de enero -los pechos erguidos, elcorazn invalidado- mi mano saborea la consistencia de sus miradasmientras palpa la carne del verano entre la sombra imposible de todos

los muslos

armadas contra todo candor: exuberantes de estriles victorias ente-rradas bajo el campo santo de su sexo, marchan como si la noche h-meda y satisfecha- las violentara indefinidamente

el comps de sus tacos astilla las baldosas y bajo las veredas se es-pasman las races con un orgasmo verde de savia estremecida

la seda de sus miembros es hueco del sentido, un ojo se me asfixia enel centro de la palma y todo cuanto toco con la ua del prpado esapenas despojo de planeta conquistado o rmora de asomo o lcido as-tro muerto

despus de ella -vale decir antes de todo- todo ser ms que lo deayer: como variaciones de una fuga exquisita, como el sexo donde

muere la calumnia


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La manzana y el poema

un bocado de versos

el cuchillola hdricatajada entre los dientesque muerden el verbo deliciosospera entraa vibrantey cscara de otoo


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Andenes

vaya a saberde qu interior llova o qu viejo la soaba, la orillade qu ro o de qu mar la empujaron hasta la villamiseria de ser como un planeta remoto, qu manosse la tocaron a las manos que la tocaban aquella nochecon tedio y redundancia: como una de esas cosascasi inevitables: la almohada para la cabeza:el catre para el cuerpo: la mujer para el corazn

esta nochela escucho de nuevo y espero dormirmepoco antes de que acabe o que acabe como acabala msica en los discos: marchndose de a pocopara hacernos creer que todavaescucharemos otra nota ms y otranota ms y otra

nota ms y otranota ms y otra hasta un ardido silenciohecho de msicas que prefieren no despedirse-porque no saben despedirse: porque no quieren despedirse-desde los andenes del olvido


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Parabrisas

el copo de nieve no se desploma sobre el parabrisas como la gota que

estalla contra el vidrio

el parabrisas desmenuza sin odio el copo de nieve que se aloja en elfilo vertiginoso de la paciencia como quien no quiere la cosa

la huella que exhal en el parabrisas ya es inmaterial y sbita comoel recuerdo


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Cuerpo de hadas

tuvo

una corona de espinas entre los labios a la horade aquerenciarse bajo la aurora de un te quiero

bast la sombra del sueola torpeza del airela noche en veremosel ro creciente...

la vimosirse de pronto, desaparecercomo por desencanto: magia negra de su peloelctrico, trasnochado: magia blanca de su cuerpode hadas


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Miguitas

los besos que dejaste por el suelo, sin barrer, se alzan se incorporan:

miguitas de lluvia invertida que te dicen lo sabroso que poda ser convos: almorzndonos toda el alma, chupndonos hasta los huesitos


50/59

Entre un telfono y un rbol

alma crecida en tu belleza

de mujer a secas: armada por s misma armada en los silencios


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La cif ra

hasta ayer no saba cunto mar calla la arena de la ausencia

cmo estalla cuando anochecey vos no ests para crujirlacuando tu voz se pone y hace froy el telfono es un animalito que esperala caricia de siempre, la cifra de tu voz


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Costanera

ella calla

y yo caigo en el pozo sin fondo de su silencio

el ro nos arrullala ribera del cuerpo


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Los ojos de tu corazn sin prpados

(monlogo para leer de un tirn de ojos)

cada sombra, cada gesto, cada inslita geometra de tus pestaas sonreflejo de la herida original como un hoyo cavado en el alma a golpede hacha desafilada en el que se miran los ojos de tu corazn sinprpados: como un emprstito obscenamente librado que te usura laspalabras y el recurso natural de la sonrisa: que te come las entraas enel nombre de tu bien, y yo s que callndome me salvara de lapoltica de amar y tal vez slo por eso hablo a orillas de tu llantoaunque no me sobre nada y a veces no sepa ni siquiera si ests


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Potica

tomo un instante cualquiera (nima

encinta ) y le pongopalabras al instante (instantneadel nimo): lo vistode intenciones hasta saber (puntitadel rumbo) cul es su forma aproximada:su ndole: su fisonoma (movimiento alumbradoa dnde s yo...


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Potica

me desnombr hasta la poesa


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Vida nueva

seguir siendo, entre otras cosas, poeta mientras la gloria consistente

de la fruta por saberse eche raz entre las manos amenazadas de apuroy vida nueva


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M ientras tanto

mientras tanto, no puedo ser otra cosa que poeta: poeta mientras yo,

poeta mientras prjimo, poeta mientras tanto


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Indice

Ante todooNueve aclaraciones para posibles lectores de este libro,

Cuarenta y siete poemas para lectores posiblesAdvertencia,

Poema colectivo,Actualidades,Hojeado,El tiempo no trabaja,Fuera de campo,Quehaceres,Empeado,El filo,Una buena mala palabra,Terrazas,

Alta primaveraAl extremo del ojo,Desojado,El hmero del aire,El previsor,Como dios manda,Trayecto,El converso,

palabra de Dios,Sobrevuelo oCuesta Atrs oRecuperacin de la ternura,Colonia,Flagelo del pajarito,Oxidos huraos,De coces,

Lo que escapa,


59/59

Dicho y hecho,El orzuelo de los hroes,Generales de la ley,

Disentimientos,Argamasa,Mala fe,El hacha, la cabeza y el mango,Lo andado que vive en tus ojos,Asomo oVerano entre la sombra de todos los muslos,La manzana y el poema,

Andenes,Parabrisas,Cuerpo de hadas,Miguitas,Entre un telfono y un rbol,La cifra,Costanera,Los ojos de tu corazn sin prpados,Potica,Potica,Vida nueva,Mientras tanto,

Indice.

Marcos Vieytes (Todos los Derechos Reservados)

Editado digitalmente el 13 enero de dos mil cuatro para Los Digitalesde La Web de Flix - http://lawebdefelix.iespana.es
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si irse veloz fuera más irse

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