señor nadie - "el peso de un grano de arena"
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“EL PESO DE UN GRANO DE
ARENA”
Sebastián Castillo (Señor Nadie)
2012
Una mujer joven se acerca Al puesto instalado bajo el puente
La vendedora amablemente se acerca Y le dice que mire la mercancía ¿Dígame señorita que quiere?
A lo que ella responde sin vacilaciones "Somos de Impuestos Internos"
(Historia Real)
“Viejoven”
Todos pensaron en salir en mi auxilio Quisieron embriagarse de mi sobriedad
Y dar paso a su hedonismo iluminado Ley para todos ellos
Suelo ser la excepción
Aunque todos seamos una vergüenza Ni que lo haya buscado Ni menos negado en mí
Caso curioso
Abandonado del caudal natural de la vida Sigo los no esquemas
Sigo a mis dioses Y sobretodo
Hago oídos sordos ante el mundo
“Cableatierra”
Estuve dispuesto por un instante Un instante de claridad ante tanta vaguedad
Pequeño momento de grano de arena Soplo de olas, viento de sabiduría
Así, a un soplo de distancia A un haz de luz de perpetuarse
De creerte
Aun sigo pensando en que me detuvo
“Puente en llamas”
El sueño se está consumiendo a si mismo No seremos capaces de detenernos
Aun así estoy en el limbo del sentido común Maldiciendo esta decisión maravillosa y nefasta
No sé qué hacer al respecto Quizás los cuerpos se encontraron sin alma
Y creyendo que el otro la tenía Se dejaron derrotar por aquellos impulsos
Y se escarbaron sobre el pecho buscando algo Pero no es trabajo para los acuerdos
Sino que es un pacto apuñalado Y que todo lo transforma en cenizas
Un puente envuelto en llamas Sin posibilidades de volver
“Es lo que hay”
Caballos corriendo sobre las colinas El sol de medianoche sin rumbo
Los coyotes buscando su presa El campo está minado
Los muertos están en pie Hablando junto al fuego
Aun se escuchan los disparos Y las hojas mecidas por las corrientes
Un réquiem de día perdido Una canción para los recuerdos Sentido ególatra de una sola vía
La mía Otras más no puede sino ser el fondo de un trago
Parece que no termina aquí A no
Eso es todo
“Leviatán”
La vigilia nocturna Acompasa al océano
Que espera el instante De arrebato a la miseria
Que se hace parte De maniáticos cantares
Obsesionados con el Fondo del oceano
Donde sumido En las fosas abisales
Mis pensamientos son aire Y la luz es un espasmo
De fácil expropiación Pero solo es una mirada
De una foto mecida en el oleaje Contemplada por los rostros De las criaturas que devoran
Todo lo que presiento Al despertarse la bestia
Dentro de la oscuridad se palpita
Todos a cubierta Que el final se avecina
Encomendados a los dioses Al amparo de los milagros
Los que creíamos ser inmortales Conocimos el miedo
“Trabajadora del Amor”
Como si frente a mí Se hubiese detenido
Para regalarme una instantánea De curvilíneas
Minifalda oscura Lentes de cuneta
Y un celular Que no conoce la palabra amor
Al otro lado de la línea
Ya se ha ido Pero todos los presentes
Quedamos aturdidos Con su rastro
Y su estela prejuiciosa De laboriosa del amor
"Corporal II"
Manos histéricas, paraliticas, gélidas Me tienen enfermo
Y no me dejan crear
Los ojos me pesan Trasnoche acumulado
No logro concentrarme en las letras
Mente cansada y seca Sin inspiración
De sentimientos, nada
Sangre rígida y coagulada No deja de doler
Las regiones más remotas están desconectadas
Cuerpo indolente ¿Qué es esto?
Palabras viscerales sin relevancia
Me dejo desangrar Para descontaminar el ánima
De todos los tóxicos vivenciales
Me dejo estar Para reagrupar
Aquello mío que quedo por allí
“Punto muerto”
¿Valió la pena? Siendo que ayer
Al mañana Y no recuerdo más
Tan solo Sigo el olor de la muerte
Quien sabe
Fluyendo entre los dedos Paseando por entre los libros
Detrás de los puentes en llamas Por entre los días finales de nuestra juventud
Una planicie que no tiene por donde acabar El punto muerto de nuestras vidas
Es que tu vida está en un vacio
Que se extiende desde las sabanas Siendo mi punto sin retorno
Y de vuelta a las sabanas Ni me di cuenta Quizás mañana
Deje de ser el mismo
“Reanimación”
Lleno de ideas vacías El hambre me quema desde adentro
Apenas pueden estabilizarme Con dificultad puedo respirar
Ni siquiera logro ver a los salvadores
Tan solo sombrías batas blancas rodeándome Diciéndome cosas que respondo sin saber
Pero sigo sin ideas Y el hambre por ellas se hace peor
Estable dentro de su gravedad
Es el parte clínico oficial Un par de camillas más allá
Una extremaunción Familias envueltas en los velos del llanto de las mujeres
Y los rostros sumidos en el vacío de los hombres Todos nos asimilamos
Cada vez menos y cada vez Dejo de ser yo
Con tal de oír los latidos Y dar cuenta
De que se sigue con vida