san rafael guizar y valencia
TRANSCRIPT
Rafael Guízar Valencia 1878-1938
Su padres, D. Prudencio Guízar y Dña. Natividad Valencia
Nace el 26 de abril de 1878 en Cotija de la Paz, Michoacán
( México ) y es bautizado al día siguiente
Su padre era un hombre pobre y muy trabajador. Su madre,
por el contrario, provenía de
familia rica, pero muy caritativa.
Tuvieron 11 hijos
Interior y exterior de la casa natal en Cotija
El 19 de marzo de 1887 muere
su madre
En 1891 inicia sus estudios en
el seminario auxiliar
de Cotija
Entre los 16 y 17 años trabaja en la hacienda de sus
padres
Un día entrando a visitar el santuario
de la Virgen de San Juan del
Barrio, cercana a Cotija, descubre allí su vocación
sacerdotal
En el verano de 1896, a sus 18 años, entra
en el seminario de Zamora
Es ordenado sacerdote el 1 de junio de 1901, a los
23 años
Enseguida comienza su
actividad misionera,
que continuará durante toda su vida
“Tú me has llamado,
Señor. Por ti emprendo
esta aventura del
sacerdocio Ayúdame a
ser un sacerdote
santo, capaz de dar mi vida y mi
sangre por ti y por tu Reino”
En 1903 es prebendado de la Catedral de Zamora y director
espiritual del seminario de
Zamora
Funda la congregación de Ntra. Señora
de la Esperanza,
dedicada a las misiones y a la
educación
Patio del seminario de Zamora
En 1905, 1908 y 1910
funda colegios esperancistasen Jacona,
en Tulancingo y
en Cuernavaca,
respectivamente
Iglesia parroquial de Teocelo, Veracruz
De 1907 a 1909, por envidias contra su persona,
es acusado falsamente y suspendido
“a divinis”Nunca mostró el más
mínimo rencor hacia las personas que le
perjudicaron
En 1910 comienza la Revolución
mexicana,
y Rafael Guízar realiza su ministerio sacerdotal de
forma clandestina en
los ejércitos revolucionarios
Disfrazado de catrín,
de músico o de vendedor de baratijas, vive entre
los soldados para poder atenderlos
espiritualmente, sobre todo
a los moribundos
Descubierto, en varias ocasiones estuvo a punto de perder la vida, pero siempre se defendió valientemente:
“Dispárenme también a mí. Si quieren acabar con todos los sacerdotes, háganlo
conmigo. Aquí estoy. No les tengo miedo”
En 1915 es exiliado a los
Estados Unidos, donde da misiones
En abril de 1916 llega a
Guatemala y en enero de 1917 llega a Cuba, lugares donde
misiona
En 1919 Benedicto XV
lo nombra obispo de Veracruz
El 30 de noviembre recibió la
consagración episcopal en la catedral de
La Habana
Llega a Veracruz el
9 de enero de
1920 e inicia enseguida su primera visita
pastoral,
atendiendo durante un año a los
afectados por el terremoto
del 3 de enero
En su primer recorrido por los lugares afectados por el terremoto ( Cosautlán, Ixhuacán y
poblaciones del Estado de Puebla ) en enero de1920
5° Obispo de Veracruz
18 años ganando almas
para Dios, misionando en una diócesis de
50.000 Km2, donde
actualmente existen seis
diócesis
Escudo Episcopal
En su escudo episcopal manifestaba sus amores espirituales: la Santísima
Virgen de Guadalupe en adoración ante Jesús Sacramentado
Su lema era "Humildad y Caridad", virtudes en que se distinguió siempre
A su llegada a Xalapa, en enero de 1920, acompañado de los P.P. José María Flores
y José María Cervantes
Casa de Teocelo, en la que residía Mons. Rafael Guízar
Catedral de Xalapa,
Veracruz, en tiempos de Rafael
Guízar
Consagrante de su
hermano D. Antonio Guízar
Valencia el 30 de enero
de 1921 como obispo de Chihuahua
D. Antonio murió
santamente el 4 de agosto
de 1971
Con los Obispos mexicanos en el
Congreso Eucarístico Nacional en 1924
Rafael con sus hermanos Antonio (Obispo de Chihuahua), Emiliano y María de Jesús
(religiosa)
Hombre de gran espíritu de
pobreza, vivía únicamente con
lo que tenía puesto
Todo lo regalaba al momento
en que lo recibía
Recorrió a caballo toda la sierra de Veracruz, misionando:
“Aunque viniera una sola persona, yo le daría la misión. Vale la pena ganar para Cristo una sola
alma”
Misionó además en Cuba, Guatemala, Colombia y el Sur de los Estados Unidos
Con el Delegado
Apostólico, Mons.
Leopoldo Ruiz y Flores,y el Arzobispo de México, D. Pascual
Díaz
Llegando a Papantla, Veracruz, para misionar
Edición de los
Evangelios que regalaba Mons. Guízar
en las misiones
“Cuanto más doy,
Dios más me da”
En un momento muy difícil se quejó a Dios diciendo:
“Señor, yo te he entregado mi vida por la salvación de las almas. Por ti he dejado mi casa, mi familia. Te he dado mis bienes, mi salud, todo lo
que tengo y soy.
Tú siempre me has ayudado, has estado cerca de mí, no has dejado que
el demonio triunfara por más artimañas que ha usado. Y ahora, ¿vas a dejar que él triunfe? ¿O es
que Tú mismo ya no quieres servirte de mí? Si es así, preferiría que
me llamases a ti en este instante”
Aprovechando el destierro para misionar en Guatemala, en 1929
Frente al altar de la
parroquia de La Candelaria, Guatemala
1929
De regreso a México,
reside en Perote,
30 de Junio de 1930
En las labores de tapar un caño en Atzcapozalco, junto con sus seminaristas
en 1937
Con miembros de la Cruz Roja en el obispado de Jalapa
Durante el Congreso Eucarístico de 1924
Con sus colaboradores
Con el Padre Benjamín Guízar
Conversando con un feligrés
El 14 de junio de 1926 se publicó la “Ley Calles”, con la que el
presidente de México, Plutarco Elías Calles, prohibía en todo el
país el culto religioso
A consecuencia de ello, el 31 de julio de 1926 la
Iglesia suspendió el culto en todo el país y el pueblo se rebeló contra la supresión de la libertad religiosa, comenzando la llamada
“guerra de los cristeros”
Sobre la “Ley Calles” declaró:
“Es el odio a Cristo. Estamos frente a una nueva
acometida de los enemigos de Cristo.
Preparémonos para el sacrificio. ¿Quién sabe lo
que el Señor
querrá de nosotros?”
“¿Cómo creerán en buena fe estos hombres que un solo sacerdote pueda velar
por el bien espiritual de cien mil personas?
Nos quieren destruir, pero no podrán. No cuentan con el poder de Dios, que es más
fuerte que cualquier potencia humana”
Entrada a un refugio
utilizado en tiempos de persecución
religiosa,Teocelo, Veracruz
Por estos años, el padre Marcial Maciel, nieto de una hermana de Mons. Guízar, convivió con él
y recuerda:
“En alguna ocasión me invitó a acompañarlo a la Alameda de la ciudad de México
Él llevaba un acordeón que tocaba muy bien, pero yo no sabía para qué lo iba a usar
Llegamos a este lugar, muy concurrido, sacó su acordeón y comenzó a
tocar canciones popularesLa gente se reunió en círculo en torno a él”
“Cuando hubo un número suficientemente grande, dejó de lado el acordeón y comenzó
a predicar a CristoNo sé si lo hizo para darme una lección
Yo creo que le salía del alma y se veía que gozaba verdaderamente cuando
podía hablar de Cristo a los demás”
P. Marcial Maciel, “Mi vida es Cristo”, n. 16
De 1927 a 1929 sufrió un segundo exilio y regresó a Estados Unidos,
pasando posteriormente a Guatemala, Cuba y Colombia, donde misionó
El 22 de junio de 1929 se arregla finalmente el conflicto religioso en México. Rafael Guízar regresa a su
diócesis e inicia una nueva gira pastoral
Postal que escribió desde Cuba, en 1927
Como el mejor fruto que podía
dejar a la Iglesia, cuidó siempre
a su seminario como a “la niña
de sus ojos”:
"Un Obispo puede carecer de catedral,
de báculo o mitra, pero no
de seminario"
En la calle Mar Mediterráneo de la ciudad de México estuvo su seminario
clandestino, el único existente en el país entre 1927 y
1936
Con el P. José María Flores (izq.) y el Sr. De la Mora (der.) junto a un
grupo de seminaristas
En 1931 fue amenazado de muerte por el gobernador de Veracruz, Adalberto Tejeda. Mons. Guízar se presentó muy valiente en su despacho y dijo al gobernador:
"He venido a demostrarle que soy respetuoso de la autoridad. Usted ha
ordenado que me fusilen en el lugar que me encuentren. He venido para que usted
mismo pueda darse el gusto de hacerlo, y evitar así que ninguno de mis fieles
tenga que mancharse sus manos disparando contra su Obispo“
El gobernador, impresionado por su gran valor, lo dejó marchar
Desde julio de 1931, por las leyes estatales de Veracruz del
gobernador Tejeda, debe vivir fuera de la diócesis de Veracruz
Regresa en agosto de 1937, gracias al nuevo gobernador
Miguel Alemán
El 26 de diciembre de 1937 enferma gravemente en Córdoba
En sus últimos días decía:
“Jesús mío, sufro mucho, pero ¡qué hermoso es sufrir por
ti! Quisiera seguir siendo misionero,
seguir catequizando a los pobres y a los niños, pero, si tú
quieres tenerme en esta cruz para la eternidad, yo quiero lo que
quieras tú¡Bendito sea Dios!”
El 6 de junio de 1938 muere en la
ciudad de México
Su cuerpo fue trasladado de la ciudad de México a Jalapa
JalapaCortejo
fúnebre hacia el cementerio8 de junio
de 1938
Fue enterrado con
vestiduras de Obispo
Al ser exhumado, 12 años después de su muerte, el 28 de mayo de 1950, se encontró su
cuerpo incorrupto
A raiz de este hecho
en 1952 inicia su proceso de
beatificación
Un equipo de médicos reconoció la incorrupción del cuerpo
de Rafael Guízar
En octubre de 1954, el cuerpo fue exhumado por segunda vez para ser
colocado en una tumba dentro de la catedral de Jalapa
Mons. Manuel Pío López (6ª obispo de Veracruz) con los canónigos Justino de la Mora (izq.) y José Ruiz Navarro (der.)
Tumba donde descansan actualmente los restos de Rafael
Guízar Valencia
Primer milagro de Rafael Guízar después de muerto:Sergio Montiel Rivera
El 29 de enero de 1995 S.S. Juan Pablo II proclamó Beato a Rafael Guízar Valencia
Rafael de Jesús,el niño del segundo milagro
El 15 de octubre de
2006 Benedicto XVI
proclama Santo y
Patrono de los obispos de
todo el mundo a Rafael Guízar
“¡Dios les colme de
bendiciones y los llene de su
santo amor!”
El principal legado de Rafael Guízar a la Iglesia, su testimonio
misionero:
“Les invito a ustedes de la manera más atenta para que aprovechen este importante movimiento religioso
en bien de sus almas, tomando en cuenta la imperiosa necesidad que
tenemos de buscar el Reino de Dios”
ORACION PARA PEDIR LA INTERCESION DE SAN RAFAEL GUIZAR
VALENCIA
¡Oh Dios, que en San Rafael Guízar Valencia, nos ofreces un modelo de fidelidad al
Evangelio y de Pastor según el Corazón de tu Hijo, concédenos por su intercesión vivir
gozosos nuestra vida cristiana y obtener las gracias que te pedimos y Tú bien sabes
que necesitamos; para que así, podamos servirte en nuestros hermanos mediante la
entrega generosa en la vida de la Iglesia. Te lo pedimos por Nuestro Señor Jesucristo, tu Hijo, que vive y reina
contigo, en la Unidad del Espíritu Santo y es Dios, por los siglos de los siglos. Amén
Bibliografía:
“San Rafael Guízar Valencia,
Obispo mexicano”de Pedro Barrajón, L. C.
y“Mis recuerdos de Rafael Guízar Valencia”,
de Ignacio Lehonor