rodriguez garcia, ariel - las nuevas entidades de informacion

8/4/2019 Rodriguez Garcia, Ariel - Las nuevas entidades de informacion

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LLaa pprreesseennttee oobbrraa eesstt bbaajjoo uunnaa ll ii cceenncciiaa ddee::

http://creativecommons.org/licenses/by-nc-sa/3.0/de d.es_MXhttp://creativecommons.org/licenses/by-nc-sa/3.0/deeed.es_MX

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Las nuevas entidades de informacin analizadas desdela perspectiva de la organizacin de la informacin


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Coleccin

SISTEMATIZACIN DE LA INFORMACIN DOCUMENTALCENTRO UNIVERSITARIO DE INVESTIGACIONES BIBLIOTECOLGICAS


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Las nuevas entidades de informacin analizadas desdela perspectiva de la organizacin de la informacin

Ariel Alejandro Rodrguez Garca

Universidad Nacional Autnoma de Mxico

Mxico, 2010


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Diseo de portada: Cristhopher Barrueta lvarez

Primera Edicin 2010DR UNIVERSIDAD NACIONAL AUTNOMA DE MXICOCIUDAD UNIVERSITARIA, 04510, MXICO, D.F.IMPRESO Y HECHO EN MXICOISBN 978-607-02-1420-2

Rodrguez Garca, Ariel AlejandroLas nuevas entidades de informacin analizadas

desde la perspectiva de la organizacin de la informacin

/ Ariel Alejandro Rodrguez Garca. Mxico: UNAM, Cen-tro Universitario de Investigaciones Bibliotecolgicas,2010.

vii- 123 p. (Sistematizacin de la Informacin Do-cumental)ISBN 978-607-02-1420-2

1. Organizacin de la informacin. 2. Entidades de in-formacin. 3. Metadatos. 4. Catalogacin descriptiva.

Z666.5R63

2010


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Contenido

Introduccin............................................................................. VII

Las nuevas entidades de informacin..................................... 1Explorando el universo de las entidades ............................. 1Cundo nacen las nuevas entidades? .................................. 3

Entidades bibliogrficas .................................................. 5

Entidades de informacin ............................................... 8

Las nuevas entidades de informacin................................... 10

Elementos para el anlisis de las nuevas entidades....... 12

Algunas propiedades para elaborar una definicin

operacional...................................................................... 18

Problemas con las nuevas entidades de informacin........... 21Los formatos mltiples. La categora de los duplicados ...... 27

Mismo contenido distinto formato. La categora Variante.. 36

Las nuevas producciones tecnolgicas. La categora

Emergente.............................................................................. 37

Las nuevas producciones ................................................ 38

Los contrastes entre las reglas de catalogaciny los metadatos.......................................................................... 45

La trayectoria del cambio de las Reglas de Catalogacin

Angloamericanas 2 Edicin ................................................. 45


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VI

Las nuevas entidades de informacin...

Los metadatos como solucin. Algo ms

que descripcin ..................................................................... 61

El concepto de metadatos............................................... 63

La arquitectura de los metadatos.................................... 69Los mtodos .................................................................... 76

Solventando las discrepancias entre las

RCAA2 y los metadatos............................................................ 83

Propuesta para organizar las nuevas entidadesde informacin........................................................................... 89

Por qu adoptar las iniciativas de metadatos

en esta propuesta?................................................................. 89Propuesta............................................................................... 91

La divisin de la propuesta................................................... 92

Las entidades de informacin ......................................... 93

Lenguajes, cdigos y formatos........................................ 95

Administracin de la informacin con metadatos

descriptivos...................................................................... 97

Recuperacin de la Informacin................................... 100

La interoperabilidad ...................................................... 106Derechos, propiedad y autenticacin de datos ............ 109

Conclusiones ............................................................................ 113Obras consultadas ................................................................... 117


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Introduccin

L A DIFICULTAD para asumir el nuevo entorno de las bibliotecasha provocado que se erijan diversos presupuestos alrededorde la dimensin de los cambios que nos desafan. La realidades que lo que se ha venido llamando cambio es un conjunto de in-

terrelaciones que implican que todo puede afectar a todo. Es muyprobable que el mundo donde dominaba el impreso como mediode comunicacin, y el cual se resguardaba en las bibliotecas, tengaahora que relacionarse con otras formas como las que han sido cre-adas por las tecnologas de la informacin y comunicacin que hoyenfrentamos.

Tener, retener y acumular, nos dice Riftkin,1 son ahora concep-tos muy apreciados. Sin embargo actualmente la velocidad de lainnovacin tecnolgica y el vertiginoso ritmo de la actividad eco-nmica hacen que con frecuencia la nocin de propiedad resulteproblemtica. Por eso se identifica el estudio de las nuevas entida-des de informacin como un rea de estudio que le resulta difcil ala bibliotecologa y estudios de la informacin.

Si para empezar nos centramos en el concepto ms cercano delas nuevas entidades de informacin, el primer problema de defi-nicin que han presentado los especialistas en la materia es quesus hallazgos son incipientes y que falta mucho an para que elmbito adquiera madurez. En los tres ltimos lustros el tema ha co-menzado a investigarse peridicamente por disciplinas como la bi-bliotecologa y estudios de la informacin, la informtica y otrasciencias afines.

VII

1 Jeremy Riftkin, La era del acceso: la revolucin de la nueva economa, (Barce-lona: Paids, 2002), 16.


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Como base conceptual para teorizar sobre las nuevas entidadesde informacin partimos de la idea general de Smiraglia,2 quien en2003 seal que los esfuerzos por entender el problema son ab-

solutamente recientes porque gran cantidad de los sistemas de in-formacin (catlogos e ndices) no fueron diseados de acuerdocon los datos estructurados de las actuales bases de datos de in-formacin bibliogrfica. Esencialmente tales sistemas haban sidocreados tomando en cuentan los datos extrados de los libros yotros impresos (entidades bibliogrficas) que se encontraban fsi-camente en las colecciones de las bibliotecas, sin ponerle atencina otras entidades que ya se estaban incorporando como productode distintos logros tecnolgicos.

Otros investigadores se concentraron en el estudio de lo queeran las entidades bibliogrficas3 y la funcin que estas tenan enla elaboracin de catlogos e ndices como productos clave de lasbibliotecas. Varios ms realizaron estudios sobre la transicin, yaen movimiento, que iba de las entidades bibliogrficas a las enti-dades de informacin o los paquetes de informacin;4 es decir, es-tablecieron de hecho, que la naturaleza de la organizacin de lainformacin registrada no es slo texto. Los registros en video yaudio, las fotografas, las representaciones cartogrficas y las p-ginas Web, son ejemplos de informacin registrada que justamenteno son texto. Por eso ahora un nmero creciente de estudios nue-

vos se ocupa de analizar las entidades de informacin desde laperspectiva de la organizacin de la informacin digital.5

VIII


2 Richard Smiraglia, Further reflections on the nature of a work: an introduc-tion, en Cataloging & Classification Quarterly 33, nm. 3/4 (2003), 8.

3 Richard P. Smiraglia, The nature of a work: implications for the organizationof Knowledge (Lanhman, Maryland: The Scarecrow Press, 2001), 2-3; ElaineSvenonius, The intellectual foundation of information organization (Cam-bridge, Mass.: The MIT Press, 2000), 33-51.

4 Arlene Taylor, The organization of information, 2nd ed., (Englewood, Colo: Li-braries Unlimited, 2004), 3.

5 K Lambert and D. Shanks, Knowledge, concepts, and categories, (Cambridge,Ma.: The MIT Press, 1997), 16-23, G. Lakoff and M. Johnson, metaphors we liveby, (Chicago: The University of Chicago Press, 2003), 3-32.


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Mientras que pocos estudios se refieren a lo que son las nuevasentidades de informacin, Martnez Arellano fue el primero en ad-

vertir la tendencia de las entidades en los actuales sistemas de in-

formacin, y sostuvo que: ahora se encuentra un universo deentidades de informacin,[que] puede ser definido como el con-junto de recursos (entidades) en los cuales los individuos y orga-

nizaciones registran y difunden informacin y conocimiento.6

Estos indicios sirvieron para teorizar y como definiciones prag-mticas de investigacin siguen siendo vlidas, pues se ajustan bienal empleo comn de trminos y establecen los lmites del campo deestudio porque, en la discusin de este trabajo, se explica la apari-cin de las nuevas entidades as como las caractersticas que lashacen ser diferentes y las dificultades que se encuentran al des-cribirlas. Tambin abordamos el problema que surge cuando unose pregunta qu es mejor emplear para registrar las caractersticasde las nuevas entidades, las Reglas de Catalogacin Angloameri-canas, segunda edicin y/o los Metadatos?

Los resultados distintivos del tema de investigacin se identifica-ron al analizar los aspectos que aborda la catalogacin de los recur-sos electrnicos, as como los principios y el futuro de las reglas decatalogacin, y la tendencia actual de la actividad de los metadatos,por lo que el estudio que se concreta es de tipo analtico-sinttico.

Por ello debemos fijar diversas condiciones para sealar las ca-tegoras en que se conjuntaron los tipos de las nuevas entidades deinformacin. Por ejemplo los tipos que ms se consideraban eranlos recursos electrnicos, pero no todos cumplan con las caracte-rsticas que se buscan para sealarlas como representantes de estasentidades. Recurrimos a hacer una seleccin tomando en cuentaaquellas particularidades que no pueden ser representadas deacuerdo con las premisas establecidas por la normativa descrip-cin bibliogrfica vigente.

Como sucede con los temas de la bibliotecologa y estudios dela informacin, la organizacin de la informacin ha tomado una

IX

Introduccin

6 Filiberto Felipe Martnez Arellano, Problemas y retos en la organizacin de lasnuevas entidades de informacin, BIBL. UNIV Nueva poca Vol. 7 nm. 1 (2004). 4.


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postura de estudio orientada al cambio; es decir, se han comen-zado a constituir investigaciones que cumplan con un carcter msanaltico que descriptivo. Por eso el primer punto de vista que se

evit fue caer en la descripcin de los problemas prcticos de lacatalogacin.Esta orientacin result muy atractiva porque permiti analizar

diversas cuestiones que anteriormente se hacan con base en lasinstrucciones ya difundidas por las reglas de catalogacin. El an-lisis no descriptivo permiti incursionar en un mundo distinto yobservar cmo se comporta algo tan concreto como una entidadfrente a un sistema abstracto que ha sido creado para organizarinformacin, y pretende explicar que el universo bibliogrfico haevolucionado e introducido nuevas entidades de informacin.

El segundo enfoque fue acercarse a diversos principios tericosque ofrecieran una visin acerca de lo que se quera explicar quson las nuevas entidades de informacin? Lo anterior tratando deno involucrarse o confundirse con las discusiones en boga sobreel modelo conceptual7 de alto nivel, que se estaban llevando a cabopara analizar los registros bibliogrficos.

Este segundo enfoque trat de no caer en confusiones porqueen los ltimos lustros ha surgido un creciente inters por estudiarlas perspectivas de las entidades bibliogrficas, las entidades deinformacin y el formato que se pronostica como intangible, de lasentidades que son producto de una tecnologa de la informacin.

Se deca, por ejemplo, que las nuevas entidades de informacineran las pelculas, grabaciones sonoras en cintas o discos de ace-tato y los discos compactos, entre otros objetos ms. Y en otroscasos se afirmaba que tales entidades eran los multimedia interac-tivos, los recursos electrnicos y los recursos de Internet. De ahque fuera inevitable observar cada uno de los casos y considerarlo

X


7 Naturalmente es importante sealar que aunque estaba en boga la difusin, es-tudio y anlisis del modelo conceptual Requerimientos Funcionales para los Re-gistros Bibliogrficos (FRBR por sus siglas en ingls), la investigacin trat deconstruir un estudio til y al mismo tiempo de poner un cierto lmite entre elasunto en cuestin y el modelo conceptual.


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como representante de esas nuevas entidades para resolver la si-guiente pregunta, cules y de qu tipo son las nuevas entidadesde informacin?

El tercer enfoque fue precisar qu se estaba entendiendo cuandodecamos representacin y organizacin de las nuevas entidades deinformacin. Toda entidad antes de ser recuperada debe ser re-presentada; luego entonces la representacin consiste en describirlos elementos o atributos que la constituyen. Pero representar yorganizar es en bibliotecologa un proceso de simbolizacin que seobtiene con el uso y la aplicacin de distintas normas, reglas y es-tructuras creadas para desarrollar bases de datos estructurados coninformacin bibliogrfica.

Esto es, a nuestro parecer, la orientacin que se le da al pro-blema de estudio parte de la revalorizacin terica que hacemosdel universo bibliogrfico para llegar a la unificacin de ste conla prctica de la catalogacin.

Este texto examina los principales cambios ocurridos en la con-ceptualizacin del universo bibliogrfico que conforma la baseconceptual de la organizacin bibliogrfica. La incorporacin denuevas entidades en este universo, ms el estudio de sus formas yformatos, as como los estndares que sirven para su representa-cin y organizacin, y la introduccin de nuevos sistemas de in-formacin, nos llevan a un nuevo mundo donde esta adquisicinde las nuevas entidades de informacin se convierte en un autn-tico generador de cambio en el entorno y en la relacin que elusuario de la informacin tiene con ellas.

El presente libro est divido en cuatro captulos, el primero delos cuales argumenta que las nuevas entidades de informacin seestudian a partir del anlisis de las entidades bibliogrficas y las en-tidades de informacin, y por eso se han encontrado escasos es-cenarios para conocer las diferencias entre estas tres entidades. Elcaptulo concluye dando una definicin operativa sobre lo que seentiende por nuevas entidades de informacin.

Elsegundo captulo describe cmo se ha abordado este problemadesde el enfoque de la organizacin de la informacin; qu sucedecon su contenido?; cul es la relacin entre los formatos y las ver-

XI

Introduccin


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siones mltiples? y, qu difiere en las condiciones anteriores paraalmacenar datos e informacin respecto de los nuevos formatosproducidos por la tecnologa de la informacin y comunicacin? Al

final se concluye que en realidad la naturaleza de las nuevas enti-dades de informacin no ha sido an resuelta, y que todava hacefalta reconocer mucho camino para familiarizarse con ellas.

El tercer captulo sintetiza los diversos estudios que se han rea-lizado sobre los lineamientos que tradicionalmente se han emple-ado para describir y organizar todo tipo de entidades. Cabe aclararque el asunto de los metadatos es una iniciativa de reciente crea-cin, y que su enfoque principal pretende resolver las dificultadesde las entidades de informacin con las que se ha encontrado elambiente digital. Aqu se argumenta acerca de las modificacionesque deben efectuarse en la estructura y el contenido de las RCAA2,

y se defiende que la actividad de los metadatos es la ms indicadapara organizar la informacin de las nuevas entidades.

El cuarto captulo aborda el anlisis que se hace sobre cada unode los supuestos de la investigacin y las implicaciones en stos alorganizar la informacin. Adems se presenta una propuesta ba-sada en la iniciativa de los metadatos, que a nuestro juicio es la msindicada, para organizar las nuevas entidades en los sistemas ac-tuales de recuperacin de informacin.

Por ltimo se incluye un apartado de conclusiones con base enlas cuales se comprueban los supuestos, y se mencionan las lneasde investigacin que le darn continuidad a este trabajo. Final-mente se encuentra el apartado de las obras consultadas.

Quiero darles las gracias a todas las personas que desde dis-tintos lugares y tiempos me han brindado su apoyo, amistad y co-laboracin en todo momento, sin ellas no hubiera sido posible laculminacin de este trabajo. Especialmente quisiera agradecer atodo el equipo de trabajo del departamento de publicaciones delCentro Universitario de Investigaciones Bibliotecolgicas, porquesu presencia editorial es visible en muchas pginas de este libro.

Tambin quiero agradecerles a aquellos acadmicos que sembra-ron en m la razn y pasin por el estudio de la catalogacin.

XII



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1

Las nuevas entidadesde informacin

L AS ENTIDADES de informacin son un universo en evolucin,

que aunado a su dinamismo ha mantenido los rasgos distin-tivos de las entidades bibliogrficas y las entidades de in-formacin, que son los antecedentes inmediatos de este estudioque se propone analizar, explicar y describir lo que operativamenteson las nuevas entidades de informacin.

EXPLORANDO EL UNIVERSO DE LAS ENTIDADES

El estudio sobre las entidades de informacin se ha llevado a cabodesde hace varios aos, con el propsito de explicar, en primer lu-gar, que el espacio donde se encuentran esas entidades perteneceal universo bibliogrfico.

En segundo lugar es dable decir que ms all del registro de lainformacin en forma de texto existen hoy otros tipos de registroque han ampliado sustancialmente el universo de las entidades deinformacin.

A partir de la incorporacin de la computadora en la vida biblio-grfica, nuestro universo de entidades se ha ampliado, y nos obligaa trazar nuevos rumbos para hacer el registro de la informacin.Esto porque la evolucin tecnolgica ha generado, indefectible-mente, un nuevo tipo de entidad.

Durante mucho tiempo se crey que los libros eran los nicosmedios para registrar informacin; sin embargo el tiempo nos ha


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2

llevado a observar que existen otros medios que aceptan ademsdel texto, el registro de la imagen y del sonido.

La naturaleza de la informacin registrada ha incluido siempre

algo ms que texto. Al respecto Taylor1

enfatiza que los videos ygrabaciones sonoras, las fotografas, las representaciones carto-grficas y las pginas web son ejemplos de no texto. Por lo tanto,en lugar de emplear palabras como libro e tem, para referirnos aunidades organizadas de informacin, la expresin ms apropiadapara hablar de esas entidades debera ser paquete de informacin;es decir, toda aquella instancia de informacin que se registra, yase trate de un libro, video, documento de Internet, grabacin so-nora, revista electrnica, etctera.

Por su parte, Smiraglia

2

afirma que el universo est constituidopor el subconjunto de todos los casos del conocimiento registrado,el cual est contenido en millones y millones de puntos denomina-dos entidades bibliogrficas. Estas entidades existen en un espaciomultidimensional, y algunas de ellas orbitan con relacin a otras.

De igual forma, Svenonius3 defiende que las entidades biblio-grficas, las cuales se encuentran dentro del universo de las enti-dades, se refieren a documentos, conjuntos de stos (formados porlos atributos tales como obra, edicin, autor y temas) y las rela-ciones que tambin guardan entre s todos stos.

De tal suerte el universo de entidades es algo que existe simb-licamente e interviene como una metfora ontolgica para ciertosobjetos que poseen caractersticas propias que han sido estudiadaspara significar y simbolizar toda forma o formato utilizado pararesguardar la informacin registrada. Este universo debe enten-derse como el contexto donde los dominios de lo descriptivo y loexplotativo confluyen en una razn que aplica las rutinas de la ac-tividad bibliogrfica. De ah que la tarea consista en determinar ellugar que ocupan las nuevas entidades en el universo.


1 Taylor, The organization of information, 3.2 Smiraglia, The nature of a work: implications for the organization of kno-

wledge, 13 Svenonius, The intellectual foundation of information organization, 31-32.


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3

Con frecuencia se ha dicho que los actuales sistemas de infor-macin no seran lo que son hoy sin las nuevas entidades. Pero elasunto no es simple. Por ejemplo en el mbito bibliotecolgico no

se reconoce a las nuevas entidades como tales, a pesar de que elconcepto existe en las prcticas conceptuales de varios autores.En los aos que van de 1995 al 2003, Taylor,4 Smiraglia,5 Sve-

nonius6y Miksa,7 entre otros, sealaban que las entidades productode las tecnologas de la informacin y comunicacin eran dema-siado nuevas, y por lo mismo tenan escasos antecedentes. No obs-tante, esa incipiencia estaba marcando ya una de las caractersticasde las nuevas entidades: la volatilidad. El tiempo de permanencia,a diferencia del libro impreso, era cambiante: hoy estaba la infor-

macin y al da siguiente ya no. As, esta peculiaridad generabados entidades que difcilmente podran ser desplegadas a unmismo tiempo; adems se trataba de entidades que exigan un altogrado de participacin en su elaboracin. Fue as como se iniciel inters por explicar los estudios formales sobre las nuevas enti-dades de informacin: y haba que ubicar dichas entidades en eluniverso que nos ocupa.

CUNDO NACEN LAS NUEVAS ENTIDADES?

Cuando nos preguntamos qu son las entidades de informacinnuestra primera imagen es el libro y otros objetos publicados; esdecir, esas entidades que se han encontrado desde siempre en lasbibliotecas.

Pero las nuevas reflexiones se dirigen hacia las entidades surgi-das con el uso de la tecnologa de la informacin, ya que antes se

Las nuevas entidades de informacin

4 Arlene Taylor, The organization of information, (Englewood, Colo.: LibrariesUnlimited, 1999), 368.

5 Richard, Smiraglia, The nature of a work, 12.6 Elaine Svenonius, The intellectual foundation of information organization, 50.7 Francis Miksa, The cultural legacy of the modern library for the future en

Journal of education for library and information science37, nm. 2, (1996).


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4

haca poca referencia a las entidades que carecan de un formatofsico; y los documentos en formato electrnico o los recursos elec-trnicos y digitales no estaban considerados como parte de las en-

tidades de informacin.Svenonius, por ejemplo,8 slo abord el asunto de las entidadesdigitales cuando se comenz a decir que la revolucin digital es-taba afectando la representacin de la informacin, as como lamanera en que sta estaba siendo organizada.

Y es que la novedosa manera de registrar y transmitir la infor-macin con auxilio de la computacin originaba nuevos formatospara crear, almacenar, transmitir, desplegar y usar la informacin.

En enunciados de Ranganathan9 un organismo en constante

crecimiento haca referencia al universo de las entidades, mismoque estaba transformndose y regenerndose para darle cabida anuevas manifestaciones y medios para conservar la informacinregistrada.

Pero el verdadero auge de los estudios sobre las nuevas entida-des de informacin ocurri en el 2000, cuando diversas investiga-ciones comenzaron a justificar su existencia y a especificar elenfoque que poda tomar el desarrollo de las nuevas entidades. Apartir de entonces creci y se acept el inters por reconocer quelas nuevas entidades de informacin deberan ser incorporadas aluniverso de las entidades como las representantes de las nuevasformas y formatos en los que se poda almacenar la informacin.

Entonces el rumbo en el universo de las entidades plante nue-vas preguntas y abri las rutas para encontrar la descripcin detres conceptos:

entidad bibliogrfica, entidad de informacin y nuevas entidades de informacin.


8 Elaine Svenonius, The intellectual foundation of information organization, x.9 Shiyali Ramanrita Ranganathan. Heading and canons: comparative study of five

catalogue codes, (London: Blunt, 1955; reprint, High Wycombe: University Mi-crofilms for the Colleges of Librarianship, Wales, 1975).


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Entidades bibliogrficas

La idea respecto a lo que son las entidades bibliogrficassurgi en

1990 cuando Svenonius10

plante que la unidad central del uni-verso bibliogrfico es la entidad bibliogrfica.Para Svenonius una entidad bibliogrfica se constituye por un

conjunto de ejemplares que pueden ser descritos y representadosen un registro bibliogrfico. Aos ms tarde, en 1999, la propiaSvenonius11 seala que la razn de introducir definiciones opera-cionales sobre los fundamentos de las entidades bibliogrficas sedebe bsicamente a dos motivos: el primero es que sirve para de-finir las races operacionales que permiten desarrollar una disci-

plina. Una definicin operacional transforma un concepto envariables que pueden emplearse como hiptesis, pero slo si losresultados de estas hiptesis pueden generalizarse sustantivamentecomo declaraciones tericas. El segundo motivo para introducirdefiniciones operacionales en los fundamentos de las entidades bi-bliogrficas se enfoca ms en el sentido prctico: hay que emplearlas entidades para permitir la uniformidad que se requiere al equi-parar los alcances de la catalogacin cooperativa y el intercambiode documentos.

Para Svenonius

12

lasentidades bibliogrficas

son unidades querepresentan una porcin del universo bibliogrfico y no necesa-riamente tienen una existencia independiente. Por ejemplo, un ca-ptulo de un libro, un artculo de una revista y un track en un discocompacto, tienen dependencia con respecto al documento indivi-dual; es decir, respecto de la copia de una obra. De ah que losdocumentos sean considerados como objetos de informacin queexisten sustantivamente dentro de una obra.

Para el anlisis de las entidades bibliogrficas Svenonius, comootros autores, se apoya en la revisin de los problemas que haba


10 Elaine Svenonius, Bibliographic entities and their uses, en Seminar on biblio-graphic records p.5.

11 Elaine Svenonius, The intellectual foundation of information organization, p.34.12 Idem.


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6

con aquellas entidades que eran empleadas como conceptos bi-bliogrficos desde el tiempo de Cutter,13 como son la obra, la edi-cin, el autory el tema; as como los utilizados por Panizzi14 sobre

las formas de registro y el control de las autoridades.En trminos ms sencillos y a la vez ms amplios, las entidadesbibliogrficasson variadas y de gran complejidad, pero represen-tan un avance respecto del modelo conceptual creado por Sveno-nius15 para clarificar algunos puntos de inters sobre este tipo deentidades. El modelo conceptual de sta queda representado en-tonces por siete entidades: documentos, obras, superobras, edicio-nes, autores, temas y otras entidades.

Por su parte, Smiraglia16 seala que las entidades bibliogrficas

son ejemplos nicos del conocimiento registrado (e.g. una diserta-cin, una novela, una sinfona, etctera). Cada entidad bibliogr-fica posee dos propiedades fsica e intelectual y stas establecen

una relacin entre s. La propiedad fsica frecuentemente cono-

cida como un documento es el paquete de lo intelectual.

Esas dos propiedades estn relacionadas entre s. La represen-tacin fsica es conocida como el paquete material, el cual incluyelos aspectos fsicos, como las dimensiones, el material, el modo detransmisin y los datos bibliogrficos; es decir, ttulos, nombres ydetalles de la publicacin.

Las propiedades intelectuales, la obra en s, es el registro del co-nocimiento que est contenido en la copia. La manera ms carac-terstica de identificar esta obra en s es por medio de la citabibliogrfica que incluye el nombre del creador y su ttulo.


13 Charles A Cutter, Rules for dictionary catalog: selections, en Foundation ofcataloging: a sourcebook, ed. Carpenter Michael and Elaine Svenonius, (Little-ton, Col: Libraries Unlimited, 1985), 65-71.

14 Antonio Panizzi, Rules for the compilation of the catalogue, Foundations of des-criptive cataloging / ed. Michael Carpenter and Elaine Svenonius, Littleton,Colo.: Libraries Unlimited, 1985, pp. 3-14.

15 Svenonius, The Intellectual foundation of information organization, 34-50.16 Smiraglia, The nature of a work: implications for the organization of kno-

wledge.1.


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Para Smiraglia17 el concepto de entidades bibliogrficasest iden-tificado como el concepto central para entender las unidades de co-nocimiento registrado que son objeto del control bibliogrfico.

Adems, destaca a las entidades bibliogrficascomo entidades quepertenecen a una familia bibliogrfica, entendida por l como aque-lla que coexiste con un sistema de recuperacin bibliogrfica. Esdecir, un grupo de obras que a lo largo del tiempo han apareci-do de manera simultnea en uno o dos lugares, y que han presen-tado mutaciones en su forma fsica pero cuyo contenido siguesiendo del mismo progenitor; o sea, proveniente de la obra origi-nal. Por ejemplo los textos que han migrado a microformas; las pe-lculas que han migrado a videograbaciones o series de programas

de televisin; las ediciones con comentarios a ediciones emigra-das con modificaciones realizadas por el autor, y as sucesivamente.La siguiente figura muestra el modelo de relacin de la entidad

bibliogrfica desarrollado por Smiraglia.18

FIGURA 1 ENTIDAD BIBLIOGRFICA


Texto

ObraDocumento

Entidad bibliogrfica

En suma las entidades bibliogrficas, como lo afirman Sveno-nius y Smiraglia, son la nocin central de sus modelos conceptua-les y estn sirviendo para explicar las unidades documentales quese encuentran en el universo bibliogrfico, las cuales facilitan la lo-calizacin de una copia en especfico, o bien, el conjunto de enti-dades relacionadas con una entidad ms amplia.

17 Ibid.2.18 Tomada de Richard Smiraglia, The nature of a work p. 4.


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Entidades de informacin

Las entidades de informacin pueden observarse en las aporta Tay-

lor19

y Miksa.20

Taylor21

dice que los cambios ocurridos reciente-mente en las bibliotecas se han debido a la incorporacin de latecnologa e Internet. Esta innovacin ha tenido el mismo impactoque la aparicin de la rueda para los automviles o la lengua enuna sociedad. Es decir, ha modificado drsticamente la percepcinsobre ciertas actividades y objetos.

Con esta analoga Taylor explica que toda entidad, desde un ma-nuscrito hasta un documento electrnico susceptible de ser repre-sentado en un sistema de recuperacin tal como el catlogo de una

biblioteca, pero la intencin al describir tanto el manuscrito comoel documento electrnico, aunque podra ser la misma, vara de-bido a su propia naturaleza porque las entidades de informacinelectrnica y digital parecen ceirse ms a los postulados de la tec-nologa de la informacin. ste es el fundamento que nos permitehablar de la aparicin de las nuevas entidades de informacin.

Con Taylor se percibe lo inoperante que resulta el trmino bi-bliogrfico para referirse a las entidades cargadas de informa-cin que no son libros. As al emplear el trmino informacin

en toda su amplitud, ste puede referirse a cualquier cosa captadapor el cerebro a travs de los cinco sentidos.Taylor22 propone la designacin de entidades cargadas de in-

formacin, las que denomina paquetes de informacin en sustitu-cin de las entidades bibliogrficas.

Las entidades cargadas de informacin o paquetes de informa-cin, de acuerdo con Taylor, incluyen texto, video, sonidos y voz.


19 Arlene Taylor, The organization of information, (Englewood, Colo: LibrariesUnlimited, 1999), 3.

20 Miksa, The cultural legacy of the modern library for the future, 114.21 Arlene Taylor, The information universe: will we have chaos or control?, en

American Libraries25, nm. 7 (1994), 629-32.22 Arlene Taylor, The organization of information, (Englewood, Colo.: Libraries

Unlimited, 1999 y 2nd ed. 2004).


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En 1996 Miksa23 plantea algunas reflexiones acerca de las enti-dades cargadas de informacin, y aquellas otras que se encuen-tran en la coleccin de las bibliotecas. Y seala que a principios del

Siglo XX la biblioteca estaba considerada como una institucin so-cial que adoptaba una estructura, como hace toda organizacin,con normativas para solucionar la seleccin, coleccin, organiza-cin y distribucin de las entidades cargadas de informacin, prin-cipalmente las impresas, aspectos que aseguran la supervivencia deuna sociedad por medio del fcil acceso a la informacin. Perocuando cambia el entorno de la biblioteca, como ha sucedido conla incorporacin de las nuevas tecnologas de la informacin, laconcepcin de la biblioteca entra en un momento en el que se

hace necesario reconocer que la informacin impresa cambiarpaulatinamente a informacin electrnica y luego a digital.Miksa sostiene que la naturaleza de las entidades cargadas de

informacin y el universo donde stas se encuentran, han cam-biado las cosas significativamente debido a los avances tecnolgi-cos. Por lo tanto el universo bibliogrfico24 descansa en todas lasentidades cargadas de informacin producidas por todo el gnerohumano en todas las pocas.

El total de textos, grficas, grabaciones sonoras, los manuscritos,libros, microformas, pinturas, msica, mapas, recursos electrni-cos, etctera, que han sido producidos por la Humanidad, repre-sentan alguna forma de almacenaje para ser usado en un futuro.

Los nuevos representantes en el universo que establece Miksason las entidades cargadas de informacin electrnica, las cualesconstituyen una extensin sobre lo que hasta ahora hemos deno-minado universo bibliogrfico. Extensin que promete incremen-tar el tamao del todo, y provocar un cambio natural que seanticipa catico por cuanto faltara organizar, ordenar o reconcep-tualizar de nuevo el universo.

Desde hace un par de dcadas se ha tratado de explicar la exis-tencia de una nueva fase: se ha intentando determinar lo que son


23 Miksa, The cultural legacy of the modern library for the future.24 Ibid. 114


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las entidades de informacin y cules son sus caractersticas dis-tintivas, pero se han observado que estas entidades an dependendirectamente de sus antecesoras. Por eso en estos momentos, anun-

ciar un cambio radical no resulta apropiado, al contrario, el cam-bio debe manifestarse paulatinamente debido a la prdida de laestabilidad de eso que denominamos documento, como objetomaterial, fsico.

L AS NUEVAS ENTIDADES DE INFORMACIN

Conviene subrayar que las nuevas entidades de informacin tienen

un lugar especfico, ya que desde su aparicin se ha tenido pre-sente el entorno social y tecnolgico. Resulta que como las otrasentidades, las bibliogrficas y de informacin se privilegian de serrepresentaciones que parten de los objetos materiales, pues sondigitalizaciones de manuscritos, partituras, audiovisuales, impre-sos, revistas, etctera. As, el carcter fsico de las nuevas entidadesse reduce.

Si las entidades bibliogrficas y algunas entidades de informa-cin se caracterizan por tener dos propiedades, una fsica y otraintelectual, como lo seala Smiraglia, en el contexto de la revolu-cin digital podra suponerse que las nuevas entidades de infor-macin a diferencia de las dos anteriores son o sern intangibles,inmateriales y carentes de propiedad fsica. El hecho es que la so-ciedad ha avanzado en la desmaterializacin de los productos fsi-cos que durante largo tiempo fueron la medida de la riqueza en eluniverso bibliogrfico.

Feldman25 anota que existe una revolucin digital cuando hayun proceso de evolucin que tiene impactos potenciales en la vida.Por eso la revolucin digital ha iniciado un movimiento aceleradono nada ms en los medios de comunicacin sino tambin en eluniverso de todas las entidades cargadas de informacin.


25 Tony Feldman, An introduction to digital media, (London: Routledge, 1997),1.


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Desde el inicio esta revolucin ha conseguido establecerse entodas las nuevas formas de representacin, las entidades electr-nicas o digitales no slo preservan el atractivo de la informacin

sino que lo refuerzan. Es decir, son susceptibles de extraer y reor-ganizar la informacin, y se pueden cambiar con gran facilidad bo-rrando los lmites materiales y portentosos que existen entredocumento y coleccin.

Dizard Jr.26 indica que ms bien se trata de una utopa electr-nica que est relacionada con la transformacin de los medios ma-sivos de comunicacin y con el uso de las tecnologas de lainformacin y la comunicacin. Algunos de los postulados de la uto-

pa electrnica se pueden encontrar en las explicaciones que di-

versos autores han dado a conocer como la sociedad global,27

la sociedad multimedia,28 la era del acceso,29 y la sociedad de la in-formacin.

Nos encontramos en un momento crucial para el desarrollo dela utopa electrnica. Durante los primeros aos del nuevo mile-nio acontecimientos de todo tipo le plantearon grandes retos a laorganizacin de la informacin, que si no son atendidos desde sugestacin podran comprometer seriamente el futuro de los siste-mas de recuperacin de informacin.

Lo preocupante es que en trminos generales el sector de la in-formacin est representado por un nuevo conjunto de supuestosque plantean el acceso y la recuperacin de los datos como un sa-tisfactor de intereses propios, situacin muy diferente a la utilizadapara conducirse, segn Miksa,30 en la biblioteca moderna.


26 Wilson Dizard, Jr., Old media, new media: mass communications in the in-formation age(New York: Longman, 1994), 19-21.

27 Noam Chomsky and Heinz Dieterich, La sociedad global: educacin, mercadoy democracia, 2. ed. correg. y aum., 2a reimp ed. (Mxico: Joaqun Mortiz,2003).

28 Josef Brauner and Rolando Bickmann, La sociedad multimedia, 1a. ed., (Bar-celona: Editorial Gedisa, 1996).

29 Jeremy Rifkin, La era del acceso: la revolucin de la nueva economa, (Barce-lona: Paids, 2002).

30 Miksa, The cultural legacy of the modern library for the future,100-119.


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En este nuevo mundo hay lugar para todo aquello que sea po-sible representar y ste adquiere el rango de entidad. Asistimos aun cambio a gran escala desde la aparicin de la Web, y alrededor

de este tejido tecnolgico se ha venido desarrollando una intensaactividad de bsqueda, concepcin y normalizacin que tiene un es-pecial inters en crear sistemas, redes y grupos de trabajo que per-mitan el acceso y recuperacin de la informacin con base en lacomputadora y sus recientemente adquiridas tecnologas mviles.

Con las nuevas tecnologas de la informacin y comunicacin lasociedad en general se est aventurando ante la novedad. La com-putacin no es un anexo, es, sobre todo, una sustitucin que mo-difica sustancialmente la relacin entre el medio y el modo. Esto

es, los acontecimientos del mundo eran relatados en el texto; hoyel relato, el contenido, est en funcin de las imgenes y todo lodems que aparece en la pantalla de la computadora.

As las tecnologas de la informacin y comunicacin estn pro-duciendo modificaciones que afectan la naturaleza del individuo.La computadora no es slo un instrumento de comunicacin, es unmedio que est generando nuevas formas de actuacin del ser hu-mano.

sta es la hiptesis en la que se centra el anlisis de las nuevasentidades de informacin. Una hiptesis fundamentada en el he-cho de que al universo de entidades se han sumado nuevas formas

y nuevos formatos para resguardar la informacin.

Elementos para el anlisis de las nuevas entidades

Los estudios que indagan qu son las nuevas entidades de infor-macin no han decidido claramente si stas son un documento, unrecurso o un formato donde se guarda la informacin electrnica odigital. Por ello a continuacin se revisan cada uno de esos trminos.

Cuando Martnez Arellano31 se refiere por primera vez a las nue-


31 Filiberto Felipe Martnez Arellano, Organizacin de contenidos u organiza-cin de documentos?, en La investigacin bibliotecolgica en la era de la in-


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vas entidades de informacin, lo hace considerando la siguiente pre-gunta: organizacin de contenidos u organizacin de documentos?

El mayor valor de esta aportacin es que abre la posibilidad de

una discusin acerca de los problemas que se han venido sea-lando sobre las semejanzas o diferencias entre las entidades bi-bliogrficasy las entidades de informacin. No obstante es visibleque la preocupacin est centrada en cules deben ser vistos comolos elementos clave para determinar si se trata de documentos o derecursos (entidades) de informacin.

Martnez Arellano dice que la catalogacin enfrenta una serie deproblemas debido al surgimiento de nuevas entidades de infor-macin y al incremento en el nmero de documentos publicados;

problemas que apuntan hacia la naturaleza, los tipos de contene-dores y las relaciones que se establecen entre las partes de unaentidad, entre s, o de esas partes con otra entidad, El autor sinte-tiza su aportacin de la siguiente forma:

El universo bibliogrfico ha sido rebasado ya que ahora existen pel-culas, cintas de audio, discos compactos que guardan msica, datos oimgenes, [o tambin] archivos de informacin electrnica que se pue-den depositar en mltiples soportes como son los discos de plstico yacetato, bandas plsticas emulsionadas, o recursos electrnicos que seencuentran en el Ciberespacio. En lugar de un universo bibliogrfico,ahora se encuentra presente un universo de entidades de informacin,el cual puede ser definido como el conjunto de recursos (entidades) enlos cuales los individuos y organizaciones registran y difunden infor-macin y conocimiento. 32

Con la aportacin de Martnez Arellano queda claro, desde nues-tro punto de vista, que resulta errneo tratar de entender las nue-


formacin. Memoria delXXI Coloquio de Investigacin Bibliotecolgica y de la

Informacin, ed. Filiberto Felipe Martnez Arellano y Juan Jos Calva Gonz-lez (Mxico: CUIB, 2004). 308-316.

32 Martnez Arellano, Problemas y retos en la organizacin de las nuevas enti-dades de informacin, 4.


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vas entidades de informacin tomando como punto de partida lostipos especficos de formatos que otros autores, como Taylor y Sve-nonius han calificado como entidades de informacin. El plantea-

miento de Martnez Arellano es til para reafirmar que los tipos deentidades, cuya mayora sin duda no son textos impresos, sonmuestras representativas de los medios de comunicacin que sedesarrollaron en gran parte durante el siglo XX.

En la segunda parte de la apreciacin de Martnez Arellano des-taca especialmente el tema del ciberespacio y el conjunto de re-cursos (entidades); con estas dos ideas deja de manifiesto que losorgenes de las nuevas entidades de informacin estn en el en-torno creado por los sistemas y redes de computacin. Y a pesar

de que este autor explica solamente los efectos y no la causa queda origen a las nuevas entidades, es posible apreciar aqu un indi-cio de lo que promete ser el rompimiento con los procesos ante-riores.

Desde el punto de vista de la catalogacin, al tipo de entidadesque menciona Martnez Arellano se les ha denominado materia-les no librarios o materiales audiovisuales, calificativos que re-nen aquellas entidades que como caracterstica particular empleanuna tecnologa anloga para ser vistos, usados y consultados; porejemplo, proyectores y reproductores de audio o video, entre otros.

La apreciacin de Martnez Arellano no difiere de los plantea-mientos que se han mencionado con anterioridad sobre el universobibliogrfico y el universo de la informacin.

Una segunda batera de definiciones concernientes a los elemen-tos que definen las nuevas entidades de informacin se relaciona in-directamente con los siguientes trminos: objetos informativos ofuentes de informacin,33 recursos electrnicos,34 publicaciones elec-


33 Peter Ingwersen, Kalervo Jrvelin, The turn: integration of information see-king and retrieval in context, The Netherlands: Springer, 2005, pp.385, 386.

34 Jane M. Read, Cataloguing without tears: managing knowledge in the infor-mation society, Oxford: Chandos Publishing, 2003, p.215.


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trnicas o digitales,35 documentos electrnicos o documentos digi-tales,36 objetos de informacin digital,37 entre otros.

Entonces, la nueva entidad sobre la cual estamos discutiendo ha

nacido en un soporte y un medio digital; es decir, como un objetointangible y por tanto deja de ser tocable como lo es un libro, deah que su entorno, como su propia constitucin, est dominadopor el aspecto electrnico y se considere como objeto digital.38 Esteobjeto y la informacin digital, en general, estn basados en losdos distintos estados que se encuentran en el cdigo binario, prin-cipal medio que permite representar los nmeros, textos, imge-nes, sonidos e instrucciones, cuya existencia es posible gracias alalmacenamiento que hace la computadora en sus archivos por pe-

riodos breves o largos.As el cambio representado por la informacin digital se hahecho por la tecnologa que permite informarse viendo. Este cam-bio empieza con la sustitucin de las caractersticas discontinuasmostradas por la informacin anloga. A los primeros tipos de en-tidades se los comenzara a llamar recursos digitalizados.39

Segn Rodrguez Bravo,40 el documento digital puede adoptarlas formas bsicas siguientes:

1. En lnea o por va telemtica, que a su vez puede adoptar las

siguientes variaciones:


35 Juan Voutsss Mrquez, Bibliotecas y publicaciones digitales, Mxico: Univer-sidad Nacional Autnoma de Mxico, 2006. pp. 97-143; Blanca RodrguezBravo, El documento: entre la tradicin y la renovacin, Gijn: Ediciones Trea,2002, pp.159-205.

36 Ramiro Lafuente Lpez, Roberto Garduo Vera, Lenguajes de marcado de do-cumentos digitales de carcter bibliogrfico, Mxico: UNAM, CUIB, 2001, pp. 4-10.

37 Readings on digital information organization [en lnea]http://projects.cis.drexel.edu/classes/info780/readings.htm. (Consultado: 13 defebrero de 2007).

38 Susan S. Lazinger. Digital preservation and metadata: history, theory, andpractices, Englewood, Col: Libraries Unlimited, 2001, p.19.

39 Susan S. Lazinger, Digital preservation and metadata: history, theory, andpractices, Englewood, Col, Libraries Unlimited, 2001, p. 26.

40 Blanca Rodrguez Bravo, El documento: entre la tradicin y la renovacin,Gijn: Ediciones Trea, 2002, p. 176.


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a. En formato Web o HTML, que es la forma mayoritaria.b. En formato ASCII puro, que se encuentra en vas de des-

aparicin.

c. En formato videotexto, prcticamente ya desaparecido.

2. Fuera de lnea o en soporte material:a. Disco ptico, ya sea CD-ROM o DVD.b. Discos o cintas magnticas (en vas de desaparicin)

La unidad bsica de las nuevas entidades de informacin es laque varios autores denominan entidad, documento, objeto infor-mativo y/o publicacin. Lo cierto es que cualquiera de los trmi-

nos anteriores puede ser empleado y relacionarse con una cosa, unproceso o un conocimiento.Segn Buckland41 un objeto es un dato y un documento repre-

sentados como un recurso informativo. Los objetos son reunidos, al-

macenados, recuperados y examinados como informacin... Son

colecciones virtuales creadas para describir o representar: una pe-

lcula, una fotografa, algunos sistemas de medidas, un directorio

o una descripcin escrita...

Por su parte, Schamber42 seala que el documento electrnico esla unidad flexible y dinmica, consistente en un contenido no linealrepresentado como conjunto de tems de informacin, enlazados oalmacenados en uno o ms medios fsicos o en red, unidad que escreada y utilizada por uno o ms individuos al desarrollar algnproceso o proyecto.

Schamber43 seala que el nuevo documento tiene ciertas carac-tersticas que lo hacen diferente, y permite que esas particularida-des sean de utilidad como elementos lgicos de recuperacin,acceso e identificacin en un sistema de informacin.


41 Buckland, Michael, Information as thing, JASIS. 42, 5, 1991: 35-54.42 Schamber, What is a document? Rethinking the concept in uneasy times,

JASIS, 47, 9, 1996: 66943 Idem


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Estas caractersticas son:

Fcilmente manipulable. El contenido puede componerse yrevisarse, cortarse y pegarse, formarse y rotarse. Y algunas

caractersticas, tales como las tablas dinmicas de contenido,pueden ser explotadas y personalizadas.

Capaz de ligarse interna y externamente. Los formatos mlti-ples de medios (texto, imgenes, audio, video) pueden co-nectarse y reconectarse dentro de ellos mismos y con otrosdocumentos.

Prontamente transformable. Los formatos de almacenamiento(discos, cintas, impresos) y de despliegue son cambiables ycanjeables, y de entrada o de salida para transmitir y produ-

cir. El almacenamiento requiere espacio de disco, ms que al-macenes.

Intrnsecamente investigable. La estructura lgica del docu-mento, el procesamiento en lengua natural y los sistemas ex-pertos facilitan el acceso y la interpretacin de los contenidos.

Instantneamente transportable. La informacin puede trans-mitirse instantneamente (o para puristas, en menos de unsegundo) a cualquier ubicacin geogrfica. La distribucin re-quiere de redes electrnicas.

Infinitamente replicable. La distribucin es realmente repli-cable; el original se queda en la fuente. Las cantidades tc-nicas son ilimitadas. La produccin masiva o el copiado nodegrada la calidad de la copia o del original.

Una idea de peso surge a partir del documento digital. Segn Ro-drguez Bravo44 los conceptos de documento electrnico y digitalconviven en un mismo ambiente y a menudo son utilizados deforma indistinta:

Documento electrnico: aquel documento que precisa de unamquina que funcione de forma electrnica, sea anloga o di-gital, para poder ser producido o visualizado.


44 Blanca Rodrguez Bravo, op cit. El documento... p.166.


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Documento digital o informtico: aquel documento electr-nico que est codificado sobre la base de una codificacin bi-naria, y que precisa de un ordenador para leerlo.

Documento telemtico: aquel documento, analgico o digital,que es transmitido mediante un sistema electrnico.

De acuerdo con Rodrguez Bravo45 el documento digitalo infor-mtico es diferente al documento electrnico debido a las incom-patibilidades que puedan encontrarse en el soporte. Aunque eldocumento digital o informtico es el que produce la disociacinentre la informacin y el soporte, es considerado como el causantede las peculiaridades de un nuevo documento. Lo cierto es que

tambin se est comenzando a emplear el trmino de recurso (di-gital o electrnico), como sinnimo de documento digital.En suma el uso de los trminos documento electrnico y docu-

mento digital indistinto porque uno es complemento del otro.

Algunas propiedades para elaboraruna definicin operacional

Despus de haber descrito la realidad sobre los rasgos y algunasde las particularidades ms especficas de las nuevas entidades deinformacin, la definicin operacional a la que se llega adopta unaforma entre lo descriptivo y lo funcional de la entidad. Estas dos for-mas permitirn, llegado el momento, explicar la naturaleza e in-cluso ilustrar de manera especfica el significado de estas entidades.

Es preciso sealar que las nuevas entidades de informacinno fueron identificadas de modo descriptivo debido a que conti-nuamente se regeneran y muestran informacin que las hace serdiferentes respecto a aquellas que las anteceden. Pero este condi-cionamiento no limita el hecho de que, en trminos ideales, debancumplir con las siguientes generalidades:


45 Ibid. 159-205.


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Estar sustentadas en una tecnologa de informacin que lesprovea un medio adecuado para organizar y presentar losdatos, los cuales no han sido pactados segn esquemas tradi-

cionales de publicacin. Tal tecnologa puede emplear esque-mas estructurados que le permitan contar con datos mnimossobre sus atributos.

Ser una entidad de informacin especfica que permite la mul-tiplicacin indefinible a travs de interfaces interactivas, conlas que el individuo pueda hacer uso de la informacin sin tenerque hacer demasiados esfuerzos para obtener y transmitir losdatos. Es decir, crear un ambiente colaborativo que permita, in-dependientemente del tipo de entidad de la que se trate, crear

relaciones entre dos o ms entidades sin importar su tipo.La expresin nuevas entidades de informacin se emplear para

comprender el significado de las entidades que han sido creadaspor la tecnologa de la informacin y comunicacin. El trmino hasido utilizado por Martnez Arellano de forma acertada, aunqueambigua, y tal vez deba su alcance precisamente a su ambigedad.

Comencemos por el significado de nuevas. En los inicios de latecnologa de la informacin y comunicacin se les agregaba el ca-lificativo de nuevas haciendo alusin a los ms recientes equipos

y dispositivos que usaba la computadora, hasta que finalmente seseal que las nuevas tecnologas siempre sern las ms recientes,

y las cuales sustituiran a la tecnologa anterior. Por lo tanto lasnuevas entidades de informacin estarn en constante revisinpara identificar las formas y formatos que surjan con la tecnologanueva del momento.

Por otra parte entidad de informacin en el contexto bibliote-colgico de un par de lustros atrs, se utilizaba para signi-ficarcualquier forma y formato que sirviera para preservar la informa-cin. Hoy, desde un manuscrito hasta las ms recientes manifesta-ciones de informacin digital son tipos de entidad que migran alambiente digital con fines de preservacin.

En los inicios del siglo XXI cada entidad de informacin tieneun valor social, cultural e histrico. Sea como fuere y volviendo al



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eje central de la definicin, lo importante es que cualquier nuevaentidad de informacin ser producto de tecnologas de informa-cin que permitirn amalgamar y cohesionar el universo de enti-

dades.La idea o descripcin operativa sobre las nuevas entidades de in-formacin es la siguiente:

Son un fragmento del universo de las entidades de informa-cin que estn siendo identificadas como nuevas formas yformatos que son suministrados por los mecanismos y me-dios de comunicacin, que estn siendo desarrollados por lastecnologas de la informacin y comunicacin.

Las nuevas entidades de informacin son consideradas comorecursos en el momento en que la tecnologa converge parahacer que el conjunto de entidades se vuelva ms dinmico einteractivo y pueda entremezclarse con entidades que perte-necen a otro recurso. Sus particularidades son tan cambian-tes como la tecnologa que utilizan, de ah que no hayahomogeneidad en los modelos que utilizan para su creacin.Esta falta de homogeneidad hace que la entidad se fragmente

y cada parte del recurso y de la propia entidad se conviertaen un elemento para acceder y usar la informacin.

En conclusin, las nuevas entidades de informacin son una ga-laxia dentro del universo de las entidades que estn constante-mente definiendo el mundo actual de la informacin.



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Problemas conlas nuevas entidadesde informacin

PARA SABER QU est pasando con las nuevas entidades de in-formacin conviene observar lo que sucede con los docu-mentos tradicionales cuando stos migran hacia un ambiente

electrnico.Para adentrarnos en el tema vale preguntar si una publicacin

seriada impresa es igual a una revista electrnica? O pensar si unarepresentacin cartogrfica es semejante a un mapa que se desplie-ga mediante un sistema de informacin geoespacial. La respuesta

inicial remite a admitir diferencias, pero cmo significarlas en tr-minos de la descripcin y el acceso bibliogrfico?Los recientes estudios sobre las entidades de informacin digi-

tal estn dirigidas a revisar la naturaleza, funcionalidad y modifi-cacin del documento impreso cuando ste migra hacia un medioelectrnico que permite la intervencin del usuario con el docu-mento a travs de manipulacin e interaccin.

Observar los cambios operados en el documento tradicional harequerido de la seleccin y agrupacin de casos de acuerdo conuna serie de categoras definidas por la funcionalidad de la nuevaentidad de informacin dentro del documento tradicional. Esto es,partir de los principios de descripcin creados para gobernar y di-sear los sistemas bibliogrficos.


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Las categoras de seleccin y anlisis se basaron en la propuestaque Campbell1 formul para agrupar los hipertextos, a las que de-nomin cibercategoras o cibergneros (cybergenres).

Las categoras son:

Duplicado yVariante, renen los casos de entidades de infor-macin con dificultades en el contenido, y los formatos mixtos;

Emergente, agrupa el surgimiento de los nuevos formatos, y Espontnea, aborda los problemas sobre las nuevas produc-

ciones tecnolgicas.

Campbell indica respecto a las cibercategoras, que el denomi-

nado gnero de Duplicado (Rplicated Genre) es la primera formaen que nace una nueva entidad de informacin; por ejemplo, de unimpreso u otro medio no electrnico.

En la categora Variante (Variant Genre) la nueva entidad de in-formacin es la continuacin fiel y exacta de la entidad que le dioorigen; es decir, una suerte de contraparte de las particularidades.Por ejemplo de un impreso, pero cambiando su forma y contenido,

ya que debe adecuarse a sus nuevas funcionalidades.La categora Emergente(Emergent Genre), se refiere a una nueva

entidad de informacin que adopta caractersticas nuevas, moder-nas, tanto en forma como en contenido.

La categora Espontnea (Spontaneous Genre) revela una claseque no es contraparte o duplicado de ningn medio; es decir, queno tiene un progenitor tangible o analgico.

Es preciso sealar que los casos seleccionados para desarrollarlas categoras Duplicado yVariantes quiz no cumplan con las ca-ractersticas de las nuevas entidades de informacin, pero comose explica en cada categora, son las formas y formatos ms actua-les de las entidades.


1 DGrant Campbell, Straining the standards: how cataloging websites for curri-culum support pose fresh problems for the Anglo-American Cataloging Rules,en Metadata and organizing educational resources on the Internet, Jane Gre-enberg, ed. New York: The Haworth Information Press, 2000, 79-92.


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Para emprender el anlisis se pens en primera instancia que eralo aconsejable usar los mismos principios de descripcin, peropronto advertimos, como lo dijo Pasch,2 que la industria editorial

tard cerca de 200 aos en fijar un patrn predecible de datos parala pgina titular de los libros; y dado que no podamos esperarotros 200 aos, se decidi actuar y comenzar el proceso de cam-bio. De tal suerte, las pginas Web, los servicios de bases de datos,los videos digitales, los textos completos, y, en general, los mate-

riales digitales, fueron evolucionando y mostrando caractersti-

cas que no se esperaban, y poco a poco, empez a dudarse si el

modo tradicional de hacer las cosas era lo mejor.3

Los nuevos tipos de entidades de informacin, refiere Lee Eden,4

como las bases de datos agregativas, los textos completos, losPDF

,JPG, TIFF, OCR, los multimedia y los documentos digitales a cargo delas instituciones educativas y comerciales, han creado normativasparticulares y tambin le han propiciado un problema al inter-cambio y el almacenamiento de informacin.

Si partimos del supuesto de que las nuevas entidades de informa-cin deben representarse de acuerdo con los principios de descrip-cin bibliogrfica, entonces tendran que sujetarse a las indicacionesestablecidas por los principios de representacin, estandarizacin eintegracin que sigue la descripcin bibliogrfica. Por lo tanto losproblemas de descripcin observados respondan a los principiosde estandarizacin e integridad de la descripcin bibliogrfica.

De acuerdo con Svenonius,5 los principios de descripcin se cre-aron para gobernar y disear los sistemas bibliogrficos, pero ade-ms instituyeron un lenguaje bibliogrfico especfico; estosprincipios se reorganizaron siguiendo los propsitos de cada nor-mativa. Por ejemplo, la normativa de catalogacin angloamericana,enuncia que los principios de descripcin son:

Problemas con las nuevas entidades de informacin

2 Grete Pasch. Los metadatos y el reto a las tradiciones bibliogrficas [en lnea]3 Idem.4 Bradford Lee Eden, Metadata and librarianship: will MARC survive?, en Li-

brary Hi Tech. Vol. 22, num. 1 (2004): 6-7.5 Svenonius, The intellectual foundation of information organization, 67.


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El Principio de conveniencia del usuario, por el que se deci-de la manera en que deber hacerse la descripcin teniendosiempre en cuenta al usuario. Un subprincipio es conoci-

do como el principio de uso comn, que se encarga de nor-malizar el vocabulario empleado en la descripcin, con la cualdeber estar de acuerdo la mayora de los usuarios.

El Principio de la representacin establece que las descrip-ciones debern basarse en describir la misma entidad de in-formacin. Un subprincipio es el principio de la precisin,donde las descripciones debern ser puntuales y estar so-portadas en la entidad.

El Principio de la suficiencia o necesidad, enuncia que las

descripciones debern ser lo suficientemente completas yestar de acuerdo con los objetivos establecidos, y que no de-bern incluir elementos innecesarios para ese propsito. Unsubprincipio es el principio de significancia donde las des-cripciones incluyen aquellos elementos que son bibliogrfi-camente significativos.

El Principio de estandarizacin sostiene dice que las descrip-ciones debern ser estandarizadas, con toda su extensin ynivel posibles, y

El Principio de integracin subraya las descripciones paratodo tipo de materiales, mismas que debern basarse en unconjunto comn de reglas que pueden ser extendidas.

Interesa destacar los principios de representacin, estandariza-cin e integracin, dado que es evidente que su interpretacinsirve para entender por qu las nuevas entidades de informacinno pueden ser representadas con las normas vigentes de catalo-gacin angloamericana; adems, porque estos principios sirvenpara confirmar que la estandarizacin es insuficiente para descri-bir en su totalidad los tipos, clases, formas y formatos.

Qu pasa con el contenido?

Los problemas relacionados con el contenido de las nuevas enti-dades de informacin caminan cerca de tres aliados calificados



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como los nuevos modos de acceder y recuperar la informacin: latecnologa de la informacin, la Internet y los sistemas de recupe-racin de informacin.

Hoy la informacin electrnica y digital llega cada da ms r-pidamente a manos de los usuarios, y a diferencia del pasado ahorase acompaa de entidades de informacin que permiten una mayorinteractividad y granularidad as como mayores posibilidades demodificar la informacin al mismo tiempo que sta se consulta.

Para explicar el primer aliado es menester preguntar si la cata-logacin anglosajona permite describir los aspectos de formato ocontenido? Aunque el cuestionamiento pudiera no ser claro, si ob-servamos las RCAA2,6 que en su introduccin dicen a la letra: Un

principio fundamental del uso de la Parte I es que la descripcinde un tem fsico ha de basarse en primer lugar en el captulo quetrata de la clase de materiales a los que pertenece dicho tem...

Se reconoce aqu que la intencin de las RCAA2 es representarlos aspectos fsicos. Lo anterior significa que estas reglas no repre-sentan contenido sino al contenedor de la entidad de informacin;sin embargo, las nuevas entidades de informacin tienen caracte-rsticas significativas relacionadas con ambos aspectos.

A nuestro juicio las nuevas entidades de informacin tienen pro-blemas en cuanto a la descripcin del contenido debido a que sonparte componente de los dos niveles de representacin, el formato

y el contenido. Es decir, para organizar la informacin en el espa-cio de la nueva entidad, las unidades primarias funcionan comouna coleccin de datos que son agrupados de manera lgica paradarle coherencia tanto al aspecto estructural como al contenido.

Si entramos en debate sobre qu es una nueva entidad, o sobrela transicin del impreso al medio digital, diremos que las prime-ras formas de representacin eran extensiones de otras formas,como el impreso, las reproducciones musicales, el cine y el au-diovisual, cuyas caractersticas dependan del proceso anterior, entanto que las posteriores acarrearan cambios radicales y con ello


6 Reglas de catalogacin angloamericanas, 2 ed. Rev. de 1988, enmiendas de1993 y 1997, (Santaf de Bogot, DC: Rojas Eberhard Editores Ltda., 1998), 8.


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la prdida de estabilidad de la entidad como objeto material. Deah que los estudios actuales analicen la entidad como una piezaque se distribuye en funcin de las demandas del usuario.

De acuerdo con Smiraglia, citado por Martnez Arellano,7

siste-mas como las normas bibliogrficas se crearon teniendo en mentelas caractersticas fsicas de las entidades (documentos) comopunto cardinal, sin prestarle demasiada atencin a sus atributos in-telectuales y a las relaciones que pudiesen establecer la entidad yel contenido.

En contraste Ravilious sostiene que una obra puede presentarcambios de medios la ejecucin de una sonata o la lectura de unpoema los cuales, a priori, podran considerarse como nuevas en-

tidades.Otra explicacin la proporciona Yee,8 basada en lo que estable-cen las RCAA2, las cuales sostienen que cuando haya modificacionessustanciales en la naturaleza y contenido de la obra original o delmedio de expresin, entonces se realizarn los cambios necesarios

y se buscar el encabezamiento apropiado.De este modo, los trminos del debate quedaran determinados

por los medios de expresin y por las entidades. As que intentar unacuerdo sobre las modificaciones en el medio fsico nos lleva aperfilar la representacin de los diferentes criterios que se han usa-do o querido establecer en la catalogacin para adaptarse a loscambios sufridos por las publicaciones. Por ejemplo, una novelaplasmada en un libro no es lo mismo que una pelcula basada enesa novela, y por tanto tendera a inscribirse en lo que actualmentese denomina trabajo.9


7 Martnez Arellano, Organizacin de contenidos u organizacin de documen-tos? 315.

8 Martha M Yee. What is a work? Part 4, 12.9 Con relacin al concepto de trabajo, Ammy K Weiss y Timothy Cartens en su ar-tculo The years work in cataloging, 1999, LRTS Vol. 45, Num. 1 (2001): 47-58, re-

visan la literatura sobre catalogacin relacionada con las teoras y problemas quese han estudiado sobre la obra. Su conclusin es que la catalogacin de los si-tios Web y de los recursos electrnicos ha sido la contribucin ms fascinante enlos ltimos aos de la catalogacin, aunque es difcil seguir aplicndole las tra-


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Cabe advertir que la mayor aportacin de las unidades fsicas alos principios de descripcin es la generacin de una gran varie-dad de manifestaciones de una obra, y que los problemas hoy ob-

servados se deben a que no todas las entidades de informacintienen una naturaleza textual.

LOS FORMATOS MLTIPLES.LA CATEGORA DE LOS DUPLICADOS

Cuando aparecieron las nuevas entidades de informacin surgierondiversas dificultades para entender que los impresos y los recursos

electrnicos podran presentar el mismo contenido pero distintosformatos. As, para no incurrir en equivocaciones se adquiranambos. Este panorama evidenciaba la carencia de un fundamentoque permitiera explicar en qu trminos debera organizarse elnuevo formato; es decir, el recurso electrnico.

Los nuevos formatos con caractersticas diferentes a los impre-sos y libros, provocaban, como lo indica Lynch,10 que el foco deatencin se centrara en describir, organizar y administrar de lamisma manera como se haca con las otras entidades (las tradicio-nales) pero sabiendo que no eran una rplica sino piezas nicasque a mediano plazo se compartiran y usaran.

Lynch11 afirma que en el mundo de la informacin digital, la du-plicidad de los objetos es un asunto difcil de tratar porque inter-

vienen varios factores: el formato, la encriptacin de los datos, losesquemas de representacin y compresin, as como las diversas

versiones que puede tener un objeto de informacin digital.


diciones y estndares de catalogacin a estos nuevos tipos de documentos y ala informacin electrnica en general.10 Clifford Lynch, Bibliographic description and digital objects: toward a new dis-

cipline of information description and management, en The future of the des-criptive cataloging rules, Ed. By Brian E. C. Schottlaender, Chicago: ALA, 1998,p.107.

11 Ibid., 115.


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Por ello en los inicios se daba por hecho que haba una seme-janza entre el impreso y el nuevo formato digital, cuyo contenidopoda ser exactamente el mismo, pero diferente en su formato.

Es comprensible por eso que deba dejarse pasar algo de tiempoantes de adoptar las nuevas apreciaciones conceptuales de cual-quier tecnologa cuyos efectos son tan profundos que se tienen que

redefinir no slo categoras basadas en la impresin como y , sino tambin conceptos como , con todos los presupuestos temporales y especiales que

esto arrastra consigo. 12

Para explicar los formatos mltiples se toma en cuenta lo sea-lado por Svenonius, Feldman, Graham y Crawford, quienes men-

cionan que una entidad de informacin puede aparecer en uno oms formatos y que la relacin que exista hasta antes del surgi-miento de las nuevas entidades era de una unidad bibliogrfica.

As, los formatos mltiplescomenzaran a dividir las entidades o re-cursos en varias partes ms pequeas, lo cual no sola apreciarseen los impresos.

Feldman13 sostiene que la iniciativa para simplificar la produc-cin de las entidades de informacin llev a la estructura de la in-formacin digital a crear formatos hbridos, como los CD-ROM, quehan sido el medio de transicin entre el formato fsico y la cone-

xin con redes a travs de textos, sonido, imagen y video que pue-den ser vistos con diversos programas de cmputo.

Crawford14 recuerda que los formatos hbridos y mixtos ofrecenla oportunidad de poseer informacin nueva con slo hacer clicen algunas de sus partes y acceder a los datos que estn en el discocompacto o los sitios Web.

Pero ciertos formatos siguen teniendo caractersticas equivalen-tes a las de los viejos formatos, como son las listas de discusin y


12 Geoffrey Nunberg. Adis a la era de la informacin. El futuro del libro estomatar eso? 1 ed. (Barcelona: Piados, 1998), 111.

13 Feldman, An introduction to digital media, 68.14 Walt Crawford, Being analog: creating tomorrows libraries, (Chicago: ALA,

1999), 156.


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los mensajes de correo electrnico, los cuales pueden slo enviarlas listas de los participantes y sus comentarios, o la lista de las pu-blicaciones recientemente llegadas a las libreras.

Svenonius15

escribe que los problemas con los formatos mlti-ples son las entidades conocidas como versiones. Y explica queuna versin es un subconjunto que distingue los atributos fsicos,como una grabacin en formato de CD y una copia de ste en uncasete. Esto, por ejemplo, de acuerdo con algunos lineamientos bi-bliogrficos, no establece claramente si las diferencias entre ver-sin y edicin son causales para pensar en una nueva edicin.

Encontramos tambin que hay cierta relacin entre las descrip-ciones denominadas multinivel.16 El ejemplo clsico de esa rela-

cin es el que se da entre un original y una reproduccin, un librocon su microfilm. Este tipo de relacin multinivel tambin es em-pleado para mostrar el todo con sus partes.

En suma, los formatos y versiones mltiples estn proponiendoque se cuente con ms manifestaciones digitales junto con los im-presos. El problema aqu es que tcnicamente hablando, cada ver-sin necesitar de un registro descriptivo ms detallado para cadauna de sus partes componentes.

Tambin las versiones multiparte poseen la misma informacinpero en diferentes formatos, los cuales pueden ser hbridos y teneruna representacin fsica: disco, cinta, casete o carrete. Pero ade-ms pueden no tener propiedad fsica, cuya intangibilidad seraasumida por la constitucin de la informacin digital.

Cabe anotar que el problema de las versiones mltiples es tancomplejo que ha producido ramificaciones.

Al respecto, los mapas, los documentos cartogrficos y las ver-siones electrnicas producidas por un Sistema de Informacin Ge-

ogrfica (GIS , por sus siglas en ingls) son ejemplos claros deversiones mltiples; hay documentos cartogrficos en discos com-pactos que incluyen digitalizaciones de los mapas y datos geoes-paciales digitales que pueden observarse a travs de un GIS.


15 Svenonius, The Intellectual foundation of information organization, 41-42.16 Ibid, 99.


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Cuando Larsgaard17 advierte las dificultades que se tienen paracatalogar los mapas en CD-ROM, se cuestiona si stos deben descri-birse como mapas o como recursos electrnicos, ya que varios ele-

mentos se relacionan desde el punto de vista de la descripcinbibliogrfica, con las caractersticas que identifican al mapa comouna obra, mientras que otros corresponden a un disco compactoque hace referencia al formato fsico.

Una situacin parecida refieren Welch y William18 cuando sea-lan que los recursos catalogrficos digitales pueden dividirse endos tipos: atlas electrnicos y datos geoespaciales. Los primeros seemplean para desplegar informacin sobre reas geogrficas parti-culares o respecto de temas especficos; en tanto que los datos ge-

oespaciales proporcionan informacin sobre la localizacin de unobjeto en la faz de la tierra. Cada uno de estos recursos es repre-sentado por un tipo de archivo que es operado por un GIS o unprograma similar.

Estos mismos autores juzgan que los lineamientos actuales de ladescripcin bibliogrfica no tienen claridad en cuanto a aquelloque se debe catalogar en los formatos y versiones mltiples, si losatributos fsicos u otras caractersticas relacionadas con el conte-nido. Por ello las nuevas manifestaciones cartogrficas refieren quedeben revisarse los sealamientos correspondientes al formato f-sico u otra caracterstica que indique la diferencia.

Por su parte, McEathron19 dice que los documentos cartogrfi-cos producidos entre 1400 y 1600 son entidades de informacin


17 Mary Lynnette Larsgaard, Cataloging cartographic materials on CD-ROMS, en Maps and related cartographic materials: cataloging, classification and bi-

bliographic control, Paige G. Andrew, Mary Lynnette Larsgaard, guest ed. Ca-taloging and Classification Quarterly, Vol. 27, nm. 3 /4 (1999): 363-374.

18 Grace D. Welch y Frank Williams, Cataloging digital cartographic material, Maps and related cartographic materials: cataloging, classification and bi-

bliographic control. Paige G. Andrew, Mary Lynnette Larsgaard, guest ed. Ca-taloging and Classification Quarterly. Vol. 27, nm. 3 /4 (1999):343-362.

19 Scott R. McEathron, Cartographic materials as works, en Works as entities forinformation retrieval, Richard P. Smiraglia, ed. Cataloging and ClassificationQuarterly, Vol. 33 nm. 3 / 4 2002: 181-191.


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que representan el contenido y el formato. Es decir que debido ala poca en que fueron creadas, las caractersticas que presentan nopueden ser descritas y representadas por un sistema de recupera-

cin de informacin actual. Por ello, la cartografa antigua lo nicoque puede aportar es una versin digital; esto es, un duplicado.Como punto de coincidencia con la afirmacin anterior, los do-

cumentos cartogrficos han sido utilizados como ejemplos clsi-cos para explicar lo que son los duplicados de una manifestacinfsica y una versin duplicada digital. El esquema general del mapaincluye al menos los siguientes principios:20 1) la posicin de unespacio fsico identificado por un sistema de coordenadas, 2) larepresentacin de espacios geogrficos con un rango de tamao o

dimensin, 3) el espacio descriptivo y estructuralmente jerrquico,4) puntos, lneas y reas de objetos que existen en el espacio, y queson representados por smbolos, 5) grficas principalmente linea-les que varan en tamao, 6) la relacin que existe entre las lneas

y los smbolos con el espacio fsico real, y 7) la escala del mapa quemarca el tamao imaginario del lugar descrito.

Segn lo anterior, lo que deja de manifiesto el anlisis de losmapas y los recursos cartogrficos digitales es que no hay coinci-dencias en la mayora de sus elementos descriptivos; sin embargoen la prctica se sigue trabajando con los procedimientos ms con-

vencionales de descripcin.Otro de los casos se relaciona con las videograbaciones y las

imgenes en movimiento, consideradas regularmente como repre-sentaciones visuales y auditivas que difieren del texto impreso; ladescripcin de stas est estructurada con base en el formato fsico,

ya sean cintas o casetes.En varias ocasiones ha surgido la pregunta, como lo indican Tur-

ner y Groodrum21 y Andrea Leigh,22 de por qu las imgenes en


20 Alan M. MacEachren, How maps work: representation, visualization, and de-sign, New York: The Guilford Press, 1995, pp. 198-199

21 James Turner y Abby Goodrum, A. modeling videos as work, en Work as en-tities for information retrieva, guest editor Richard Smiraglia, Cataloging &Classification Quarterly , 33, 3 / 4, (2003): 29-38.

22 Andrea Leigh, Lucy is Enceinte: the power of an action in defining a work,


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movimiento son consideradas como iguales al texto?,23 porque elcuerpo de un libro es un texto abierto generado por un autor y setiene acceso a ese texto con el propsito tanto de leer como de es-

cribir. Sucede que cuando se desarticula un texto se percibe quehay una entidad que se puede disgregar (separar), manipular y re-agrupar de nuevo (reunir) sin daar el texto en s ni al autor.

Las videograbaciones y las imgenes en movimiento mantienenuna relacin demasiado compleja entre lo que es el formato fsico

y el contenido, debido a que su naturaleza no surge del todo de untexto. Por ello, como lo indica Desley,24 la descripcin de la enti-dad se hace de acuerdo con un grupo de materiales conocido, y esque puede determinarse tanto la clase como el formato. Pero

cuando aparecen los nuevos formatos que carecen de ese elementoidentificatorio, surge la duda: qu hacer con ellos?Por eso los videos y sus nuevas versiones no presentan infor-

macin normalizada en sus formatos, situacin que torna complejala ubicacin de dnde inician y dnde terminan; y adems est laintervencin de demasiadas personas en la elaboracin, lo cual di-ferencia mucho los datos que se ofrecen en el estuche y los queaparecen en la pantalla.

Desde 1997, cuando aparecen los videodiscos digitales (DVD, porsus siglas en ingls), los problemas de descripcin fueron simila-res a los que presentaron los discos compactos (CD) y su gran ca-pacidad de audio. En general, el video disco no difiere mucho encuanto a su descripcin de la que se haca con los casetes en for-mato VHS, excepto en algunos detalles.

La descripcin de un DVD requiere mayor atencin cuando haydatos complementarios, como la reedicin de la pelcula, subttu-los en varios idiomas, versiones alternativas a toda la pelcula (cor-


en Work as entities for information retrieval, Guest editor Richard Smiraglia.Cataloging & Classification Quarterly, 33, 3 / 4 (2003): 99-127.

23 Raffaele Simone, El cuerpo del texto, en El futuro del libro: esto matar eso?Geoffrey Nunberg, com. 1a ed. Buenos Aires: Paids, 1998, pp. 243-244.

24 Tom Desley, Modeling the Logic of AACR, en International Conferences onthe Principles and Future Development of AACR, ed. Jean Weihs (Monteral, Ca-nada: ALA, 2002), 5-7.


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tos de estudio, cortos del director, cortos para TV), material docu-mental complementario, entrevistas, etctera. Todos los datos quesurgen de esa informacin adicional o complementaria, son sus-

ceptibles de registrarse en el rea de notas. Y tambin existen di-ficultades con las fechas de elaboracin y las indicacionesnumricas de las regiones en las que puede exhibirse el DVD.

Lo mismo sucede con las series deTV en videodiscos o discos di-gitales, (en todos los idiomas), y existen varias dificultades, comola imprecisin de los ttulos de las series y otros ttulos depen-dientes de stas.

Weitz25 asegura que las series de televisin pueden presentarseen captulos multiparte, como sera una novela que se divide en

programas semanales o en programas que se presentan regular-mente en un documental de una hora de duracin.La batalla especfica con los programas de televisin est pre-

sente en las casas televisoras o de Cable. Estas empresas denomi-nan series a sus programas de TV, mientras que en la catalogacinla expresin serie est relacionada con una serie bibliogrfica.26

Por tanto no puede establecerse una relacin directa entre uno yotro trmino, y por eso no se cuenta con los elementos necesariospara decir que los programas de TV sean semejantes o iguales a lasseries bibliogrficas.

En otro orden de ideas, con la comercializacin masiva de las c-maras reproductoras de videograbacin aparecieron tres tipos deproducciones de imgenes que no necesariamente son productode las cadenas de TV y Cable, sino producciones locales o persona-les. Las primeras son las videograbaciones creadas localmente (por


25 Jay Weitz, Videorecor

rodriguez garcia, ariel - las nuevas entidades de informacion

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