repÚblica bolivariana de venezuela universidad de...
TRANSCRIPT
REPÚBLICA BOLIVARIANA DE VENEZUELA UNIVERSIDAD DE CARABOBO
FACULTAD DE CIENCIAS DE LA SALUD DOCTORADO EN CIENCIAS SOCIALES MENCIÓN: ESTUDIOS DEL TRABAJO
EL TRABAJO COMO ALTERNATIVA DE SOBREVIVENCIA PARA NIÑOS Y ADOLESCENTES EN CONDICIONES DE RIESGO
Autor: Belkis Zoraida Tovar Tutor: Dr. Carlos Zambrano
Valencia, Junio de 2006
INDICE GENERAL
CONTENIDO Pp.
LISTA DE CUADROS. . . . . . . . x
LISTA DE GRÁFICOS . . . . . . . x iii
RESUMEN . . . . . . . . . xiv
ABSTRACT . . . . . . . . . xv
INTRODUCCIÓN . . . . . . . . 2
CAPÍTULO I
AMBITO DE PROBLEMATIZACIÓN . . . . . 6
Objetivos . . . . . . . . 57
Justificación . . . . . . . . 58
CAPÍTULO II
MARCO TEÓRICO . . . . . . . 61
Antecedentes Históricos . . . . . . 61
Fundamentación Teórica . . . . . . 63
La Visión del Trabajo desde los Enfoques Teóricos . . . 63
El Orden Transformacional Social . . . . . 63
Concepciones sobre el Término Trabajo . . . . 71
Aspectos Legales . . . . . . . 77
Los Derechos del Niño y Adolescente Trabajador según los
Convenios Internacionales . . . . . . 77
Marco Regulatorio del Trabajo de los Adolescentes en Venezuela . 78
La Formación para el Trabajo de los Adolescentes . . . 84
Las Influencias Sociales sobre el Niño y el Adolescente . . 90
CONTENIDO Pp.
CAPÍTULO III
ESPECIFICACIÓN DEL CONTEXTO . . . . . 121
Venezuela como Contexto del Problema . . . . 121
Situación Económica y Social Venezolana . . . . 121
Situación Jurídica de Venezuela . . . . . 133
Contexto Económico y Social de Colombia . . . . 143
Situación Jurídica de Colombia . . . . . 154
Contexto Económico y Social de Ecuador . . . . 161
Situación Jurídica de Ecuador . . . . . 167
Contexto Económico y Social del Perú . . . . 175
Situación Jurídica del Perú . . . . . . 180
Contexto Económico y Social de Bolivia . . . . 187
Situación Jurídica de Bolivia . . . . . . 197
CAPÍTULO IV
MARCO METODOLÓGICO . . . . . . 206
Operacionalidad del Método . . . . . . 209
Definición de Categorías . . . . . . 210
Edad . . . . . . . . . 210
Escolaridad . . . . . . . . 210
Jornada Laboral . . . . . . . 210
Ingreso o Salario . . . . . . . 210
Descanso . . . . . . . . 210
Área o Sector de Trabajo . . . . . . 211
Salud y Seguridad . . . . . . . 211
Situación Familiar . . . . . . . 211
CONTENIDO Pp.
CAPÍTULO V
INTEGRACIÓN DEL MÉTODO ETNOGRÁFICO Y EL COMPARADO 220
Primer Componente o Fase . . . . . . 220
Presentación y Procesamiento de Datos . . . . 220
Venezuela . . . . . . . . 220
Segundo Componente o Fase . . . . . . 239
Interpretación y Análisis de los Datos . . . . 239
Venezuela . . . . . . . . 239
Presentación e Interpretación de los Datos en Países
Latinoamericanos . . . . . . . 244
Colombia . . . . . . . . 244
Ecuador . . . . . . . . 250
Perú . . . . . . . . . 259
Bolivia . . . . . . . . . 273
Tercer Componente o Fase . . . . . . 289
Integración e Interpretación de los Hallazgos . . . 289
Cuarto Componente o Fase . . . . . . 307
Significaciones . . . . . . . 307
CAPÍTULO VI
ALTERNATIVAS PREVIAS DE SOLUCIÓN . . . . 314
CAPÍTULO VII
EDUCACIÓN Y TRABAJO UNA OPORTUNIDAD DE PRESENTE Y
FUTURO . . . . . . . . . 344
CONTENIDO Pp.
Dificultades Obstáculos para Aplicar la Propuesta . . . 365
Beneficios o Ventaja de la Alternativa Propuesta . . . 366
El Futuro . . . . . . . . 367
Conclusiones y Recomendaciones . . . . . 370
REFERENCIAS . . . . . . . . 382
ANEXOS . . . . . . . . . 398
A Venezuela . . . . . . . 398
B Colombia . . . . . . . . 429
C Ecuador . . . . . . . . 446
D Perú . . . . . . . . 471
E Bolivia . . . . . . . . 482
F Guía para la observación Participante . . . . 484
G Formato de Entrevista, Versión borrador . . . 486
H Instrumento de Entrevista Definitivo . . . . 490
I Registro de Notas de Campo . . . . . 493
J Narraciones Aportadas por niños, niñas y Adolescentes en la
Entrevista . . . . . . . 501
LISTA DE CUADROS
CUADRO Pp.
1.- Población mundial. Distribución por Continentes. Años 2.001 y 2.050 (en millones) . . . . . . 7
2.- Distribución geográfica de niños entre 5 y 14 años que trabajan
En millones . . . . . . . 12
3.- Estratificación de la Población Venezolana. Comparación año 1.982 y 1.990 . . . . . . . 46
4.- Distribución de niños, niñas recolectores de desechos sólidos en el
relleno sanitario del sector La Guásima según sexo y edad . 228
5.- Distribución de niños, niñas por sexo, edad y asistencia a la escuela 229 6.- Distribución de niños, niñas por sexo, edad y turnos de trabajo. 230 7.- Distribución de niños, niñas por sexo, edad y horas de trabajo . 230 8.- Actividades realizadas por los niños, niñas en el botadero de basura 232 9.- Razones por las cuales el niño, niña y adolescente trabajan distribuidos por sexo y edad . . . . . 233
10.- Ingreso que percibe el niño, niña y adolescente de acuerdo a sexo, edad y días de trabajo . . . . . 234
11.- Riesgo del trabajo de niños, niñas y adolescentes en el relleno sanitario La Guásima . . . . . . 236 12.- Salud y riesgos que presentan los niños, niñas y adolescentes según sexo y edad . . . . . . . 237 13.- Tipo de accidente sufrido por niños, niñas , y adolescentes según edad y sexo . . . . . . . 238 14.- Composición de la muestra por sexo y edad . . . 246
CUADRO Pp. 15.- Asistencia escolar por sexo . . . . . 246 16.- Promedio de horas semanales en cada actividad por sexo y edad . . . . . . . . 247 17.- Jornada laboral por sexo y edad . . . . . 248 18.- Tipo de ingreso mensuales por sexo y edad . . . 248 19.- Riesgos a los que se exponen los niños y niñas por el trabajo en las minas . . . . . . . 249 20.- Tipo de labor minera que realizan los niños y niñas por edad y sexo . . . . . . . 250 21.- Distribución de niños, niñas recolectores de desechos sólidos según sexo y grupo de edad . . . . . . 251 22.- Distribución de los niños recolectores de desechos sólidos según tipo de familia . . . . . . 252 23.- Destino de la producción obtenida por los niños recolectores de desechos sólidos según su edad . . . . 253 24.- Disponibilidad de ingresos por sexo . . . . 254 25.- Disponibilidad de ingresos por grupo de edad . . . 254 26.- Ingreso promedio diario de niños recolectores de desechos sólidos por sexo y grupo de edad . . . . 255 27.- Promedio de días de trabajo por semana según edad y sexo . . . . . . . . . 255 28.- Riesgos del trabajo infantil en los basurales . . . 256 29.- Distribución de niños, niñas por edad y nivel de asistencia . .257 30.- Trabajadores infantiles domésticos según rangos de edad y sexo. 2001 . . . . . . . 260
CUADRO Pp.
31.- Razones por el que las hijas son trabajadoras domésticas . 263 32.- Forma como se colocó por primera vez la hija en el trabajo doméstico . . . . . . . . 265 33.- Retribución por servicios por ciudades según grupos de edad de las trabajadoras infantiles domésticas . . . . 266 34.- Retribución por servicios por ciudades según nivel socioeconómico del empleador . . . . . 267 35.- Formas de maltrato a las trabajadoras infantiles domésticas . 270 36.- Inasistencia escolar de niños, niñas y adolescentes trabajadores domésticos . . . . . . . 271
LISTA DE GRÁFICOS
GRÁFICO Pp.
1.- Niños en edad escolar primaria que no van a la escuela, por región . . . . . . . . 8 2.- Término de la primaria según zonas geográficas, 1.997 . . 10 3.- Adaptación del Modelo Ecológico de Bronfenbrenner (1.979) . 92
REPÚBLICA BOLIVARIANA DE VENEZUELA UNIVERSIDAD DE CARABOBO
FACULTAD DE CIENCIAS DE LA SALUD DOCTORADO EN CIENCIAS SOCIALES MENCIÓN: ESTUDIOS DEL TRABAJO
EL TRABAJO COMO ALTERNATIVA DE SOBREVIVENCIA PARA NIÑOS
Y ADOLESCENTES EN CONDICIONES DE RIESGO
Autor: Belkis Zoraida Tovar Tutor: Dr. Carlos Zambrano
Año: 2005 RESUMEN
La presente tesis doctoral, parte de la intelectualización de un problema sobre el cual se hacen consideraciones en el ámbito universal, regional y local. A través de la disertación se manifiesta la problemática que vienen enfrentando desde décadas pasadas los niños, niñas, y adolescentes que han tenido que incursionar en el ambiente de trabajo para tratar de sobrevivir en un mundo cargado de injusticias económicas y sociales. La investigación se propuso por una parte generar un análisis critico comparativo acerca de la situación que enfrentan los niños, niñas y adolescentes de Venezuela y de otros países latinoamericanos en sus relaciones laborales; y por la otra proponer una alternativa de solución que conduzca al mejoramiento de la situación laboral de los niños, niñas y adolescentes venezolanos en condiciones de riesgo que trabajan para sobrevivir, tomando como referencia el Municipio Libertador del Estado Carabobo. El estudio consigue su justificación porque permitió aportar una explicación desde el orden epistemológico, sociológico y legal, empleando como base el método comparado; a su vez, conocer la situación laboral de los niños, niñas y adolescentes en la realidad social venezolana En la investigación se siguió un enfoque multimetódico, empleando en principio el método comparativo, centrado en el pensamiento reflexivo de John Dewey, se complementó con los procedimientos de análisis en el dualismo crítico de Karl Popper, por considerar que a través de los mismos es posible lograr una explicación lógica del origen del problema. Los pasos del pensamiento reflexivo señalados por Dewey se aceptan como explicación del método científico y se constituyen en un supuesto básico del enfoque comparado. Para el referente empírico, se utilizó el método etnográfico y se examinó un segmento de la realidad social venezolana donde se desenvuelven los niños, niñas y adolescentes trabajadores. En el orden sociológico, el estudio se sustento en la teoría de cambio social asumiéndose como punto de referencia los postulados de Anthony Giddens. El estudio concluyó con una propuesta integral dirigida a los niños, niñas y adolescentes trabajadores y a sus familias. Descriptores: niños, niñas , adolescentes, trabajo, educación, pobreza, familia.
BOLIVARIAN REPUBLIC OF VENEZUELA CARABOBO UNIVERSITY
FACULTY OF HEALTH SCIENCES DOCTORATE IN SOCIAL SCIENCES
MAJOR: STUDIES OF LABOR
LABOR AS AN OPTION TO SURVIVE IN RISK CONDITIONS FOR CHILDREN AND ADOLESCENT
Author: Belkis Zoraida Tovar
Tutor: Dr. Carlos Zambrano Year:2005
ABSTRACT
The present doctoral thesis starts from the intellectualization of a problem on which you make considerations on the local, regional and universal surrounding. Through the speech the problem rises from past decades when kids and adolescents have had to go through a world of economical and social injustices to try to survive. The research intended, on the one hand, to generate a critical comparative analysis about the situation that Venezuelan children and adolescents and from other latinamerican countries face in their work relations, and on the other hand, it proposed an alternative of solution that leads to better the work relations under risk conditions to the Venezuelan kids and adolescents to survive taking as reference the Municipio Libertador, Carabobo State. The study based its justification because it came out with a legal sociological and epistemological explanation based on the comparative method, at the same time, to know the work situation on Venezuelan social facts in kids and adolescents. The investigation followed a multimethodical approach using, firstly, the comparative method focusing on John Dewey´s reflex thought, secondly, it complemented with analysis procedures on the Karl Popper´s critical dualism, considering through them it is possible to find a logical explanation to the problem. The steps of the reflex thought pointed to by Dewey are accepted as an explanation of the scientific method and they constitute a basic assumption of the comparative approach. To the empirical referent, the etnographical method was applied, a segment of the Venezuelan social reality where working kids and adolescents take part was also examined. In the sociological order, the study was based on the social change theory assuming as a point of reference the Anthony Giddens´ postulates. The research concluded with an educational proposal addressed to children and adolescents with work needs. Describers: children, adolescents, work, education, poverty, family.
2
INTRODUCCIÓN
A inicios del siglo XXI el trabajo de niños, niñas y adolescentes sigue
constituyendo una preocupación mundial, porque los niños, que hoy trabajan y no se
insertan adecuadamente en el sistema escolar formal, podrían ser los que conformen
los hogares pobres del mañana, producto de su menor preparación y conocimientos.
En este plano de interés la preparación para el trabajo está intrínsicamente ligada a la
educación, la capacitación y el desarrollo de habilidades adecuadas para intervenir en
el proceso de la economía, la cual en condiciones favorables podría generar
oportunidades para una mejor inserción de las nuevas generaciones en los mercados
laborales. Por ello, es quizás a través de la educación -y no por un acceso prematuro
a un salario precario- que se podrá avanzar de manera sustentable en la superación de
la pobreza, además de que los países perfilen sus plantillas laborales con trabajadores
calificados que, cuando posean la edad requerida para el trabajo y una impecable
preparación, accedan sin mayores dificultades al mundo del trabajo.
Lo puntualizado guía la reflexión hacia algunos países latinoamericanos,
muchos de ellos con dificultad en sus economías produciendo impacto social, por lo
que numerosas familias se ven afectadas por la situación de pobreza en que están
envueltas, vulnerándose sus derechos humanos garantizados por normas
Internacionales y Nacionales. En el caso, dentro de las familias, los niños, niñas y
adolescentes son los más lesionados por la situación de indefensión ante la necesidad
de involucrarse en trabajos que puedan perjudicar su salud e integridad personal por
la situación abusiva de explotación laboral con la que interactúan al tener que dejar su
ámbito natural de desarrollo y sueños infantiles para realizar alguna labor en procura
de su supervivencia. Es sobre esa labor que realizan los niños, niñas y adolescentes
y las relaciones laborales en que están inmersos, que enfatiza la investigación,
tomando como contexto países específicos como Colombia, Ecuador, Perú, Bolivia,
Venezuela, ámbitos en los que hay preocupación por el avance vertiginosos que ha
3
tenido el trabajo de niños, niñas y adolescentes en las dos últimas décadas,
resaltándose que la sociedad internacional ha señalado la importancia de buscar
soluciones a esta problemática en que están sumergidos millones de infantes, que en
lugar de juguetes en sus pequeñas manos, tienen herramientas de trabajo, muchas
veces peligrosas para su corta edad.
Por otra parte, a través de la investigación se asume el compromiso de generar
una explicación desde el orden sociológico, metodológico, legal y epistemológico que
conduzcan a un estudio social que se corresponda con las exigencias de una tesis
doctoral.
La investigación orientó la presentación de la tesis doctoral estructurada en
siete (7) capítulos siguiendo un orden racional. El Capítulo I presenta la
intelectualización del problema, el objetivo, la justificación. El problema se plantea a
partir de las décadas 80 y 90, teniendo en cuenta que a partir de éste período en
algunos países latinoamericanos comienza un proceso de desequilibrio por la
aplicación de políticas económicas que produjeron un manifiesto impacto social. En
el problema se indican datos aportados por organismos nacionales e internacionales
acerca de la situación de niños, niñas y adolescentes trabajadores en países como
Colombia, Perú, Ecuador, Bolivia y Venezuela. Los datos también muestran la
situación educativa de los niños, y la situación de pobreza en que están insertas las
familias que han tenido que enviar a sus menores hijos en edad escolar a buscar
trabajo, sin tener preparación previa para el ejercicio del mismo. Se destaca la
situación por la que están pasando los niños, niñas, y adolescentes trabajadores del
relleno sanitario la Guásima, del Municipio Libertador, Estado Carabobo, Venezuela.
En el Capítulo II, se discute la construcción de una idea fuerza que se derive
como alternativa para la interpretación del problema, representado por las
condiciones en las cuales laboran los niños, niñas y los adolescentes en los países
4
bolivarianos, con énfasis en los aspectos de orden sociológico, legal y
epistemológico. En este segmento se plantea la teoría de cambio social de Giddens.
En el capitulo III, referido a la especificación de contexto, se hace una
revisión del contexto tanto de Venezuela como de Colombia , Ecuador, Perú y
Bolivia, desde el punto de vista económico, social y jurídico, por considerar la
necesidad de ubicar el problema dentro de la situación contextual de los países
involucrados en el estudio.
El Capítulo IV, indica la metodología seguida, la cual esta circunscrita al
estudio multimetódico, con preponderancia en el enfoque comparativo,
complementado con la investigación etnográfica realizada en el Municipio Libertador
del Estado Carabobo. En síntesis, se utilizó el pensamiento reflexivo de John Dewey,
sumándosele procedimientos de análisis contenidos en el dualismo crítico de Karl
Popper. Los pasos del pensamiento reflexivo señalados por Dewey se aceptan como
explicación del método científico, sirviendo además de manera teórica racional en el
proceso de la investigación. Como referente empírico se examinó un segmento de la
realidad social venezolana, referida a la dinámica especifica del ámbito en que se
desenvuelven los niños, niñas y adolescentes trabajadores.
El capítulo V, comprende la integración del método etnográfico y el
comparado. El mismo esta referido a la presentación, interpretación y análisis de los
datos, hallazgos encontrados y significaciones. Como en el estudio se utilizó tanto el
método etnográfico para la investigación realizada en el Municipio Libertador, como
el método comparado para la indagación en algunos países latinoamericanos; y en
virtud de la necesidad de integrar ambos métodos se procedió a hacerlo a través del
abordaje de cuatro componentes o fases.
5
El Capítulo VI, esta referido a las alternativas previas de solución, donde se
realiza un estudio comparativo analizando cómo los países Venezuela, Colombia,
Ecuador; Perú y Bolivia han dado algunas soluciones a los problemas que confrontan
los niños, niñas y adolescentes trabajadores, a su vez se plantea la discusión, de la
posibilidad o no de que Venezuela asuma la solución que estos países han dado a sus
problemas del trabajo de niños, niñas y adolescentes.
El capítulo VII, denominado: Educación y trabajo una oportunidad de presente
y futuro, esta representado por la propuesta que se hace como alternativa de solución.
Al final de la propuesta se hacen consideraciones acerca de las dificultades u
obstáculos y los beneficios de la misma.
Finalmente se presenta un cuerpo de conclusiones y recomendaciones, en el
entendido que se le está dando al trabajo de investigación un cierre provisional.
6
CAPÍTULO I
ÁMBITO DE PROBLEMATIZACIÓN
En el presente siglo, continua teniendo vigencia e importancia primordial el
ocuparse tanto en el plano nacional como internacional, de la situación laboral que
viene enfrentando el niño, niña y el adolescente, cuestión que constituye un problema
desde el punto de vista social y económico, generando una preocupación adicional en
el espacio legal que concierne a los derechos humanos entre otros.
En tal sentido y de acuerdo con el contenido del informe: Un futuro sin
trabajo infantil de la Organización Internacional del Trabajo (OIT, 2002), se indica
que aproximadamente unos 352 millones de niños, con edades comprendidas entre
los 5 y los 17 años desarrollan algún tipo de actividad económica. Esta situación
hace referencia a las condiciones de niños, niñas y adolescentes que trabajan en todo
el mundo, que en muchos de los casos están privados de una educación adecuada, de
libertades fundamentales y con riesgos para su salud.
Por otra parte, si se observan las cifras de la población total del mundo, estas
indican cómo la infancia, la adolescencia y juventud ocupan aproximadamente la
mitad de la población. Así, de acuerdo a la Organización de Naciones Unidas (ONU,
2002), la población total del mundo es de más de seis mil millones de personas y
extrapolando los indicadores mediante los modelos pertinentes, se obtienen cifras que
permiten señalar como proyección, que la población mundial para el año 2050
pudiera alcanzar alrededor de los nueve mil millones de personas. Los indicadores
que se aluden son mostrados en el cuadro 1 y se refieren a los ámbitos geopolíticos
continentales en el marco de los cuales se hacen consideraciones relacionadas con la
población caribeña.
7
Cuadro 1: Población mundial. Distribución por Continentes.
Años 2.001 y 2.050 (en millones)
REGIÓN POBLACIÓN 2.001 POBLACIÓN 2.050
Asia
África
Europa
Caribe
América Central
América del Sur
América del Norte
Oceanía
3.720,7
812,6
726,3
38,3
137,5
350,7
317,1
30,9
5.428,2
2.000,4
603,3
49,8
220,2
535,5
437,6
47,2
Total mundial 6.134,1 9.322,3
Fuente: ONU (2.002)
Respecto al asunto ya planteado, señaló la ONU, que de la población mundial,
aproximadamente la mitad tenían menos de 25 años de edad para el año 2002; en ese
escenario, los jóvenes con edades entre 15 y 24 años son más de mil millones. Las
cifras también indican que en los países en desarrollo los menores de 15 años son
aproximadamente dos mil millones entre niños, niñas y adolescentes, constituyendo
la tercera parte de la población mundial.
Es destacable el hecho, de que la mitad de la población mundial esté
constituida según la ONU (2002) por niños, niñas, adolescentes y jóvenes, lo cual
podría significar la preocupación de los diferentes países por el futuro inmediato de
esta notable población, que en la práctica social busca mejoras en cuanto a la
educación, el trabajo, el nivel de vida, su crecimiento y su competitividad en la
economía. Por ello, la inquietud por las condiciones en que laboran los integrantes de
8
la población, con énfasis en los niños, niñas y adolescentes es una alternativa
inequívoca para repensar el desarrollo de las naciones.
La revisión de las fuentes referenciales sobre el problema indican que a nivel
mundial, el Fondo de las Naciones Unidas para la Infancia (UNICEF, 2001), con
respecto a la educación, señala que para el año 1999, 120 millones de niños y niñas
en edad escolar básica no estaban matriculados en la escuela, de ellos un 53% son
niñas y un 47% niños. Esta evidencia remite a pensar que si tal número de personas
carece de vías de acceso a la educación, difícilmente podrán mejorar las condiciones
bajo las cuales acceden o se mueven en el mercado laboral. (Ver gráfico 1)
36%
36%
2%
3%8%
7% 8%
AFRICA SUBSAHARIANA ASIA MERIDIONAL
PAISES INDUSTRIALIZADOS ECO-CEI
AMÉRICA LATINA/CARIBE ASIA ORIENTAL PACÍFICA
ORIENTE MEDIO/AFRICA SEPT
Gráfico 1 Niños, en edad escolar primaria que no van a la escuela, por
región. Tomado de UNICEF (2.001)
Según UNICEF (2001) las regiones de Asia y África tenían la inscripción
más baja y los países industrializados las más altas, entre ellos España, Francia,
Japón, e Italia con un 100%. No obstante las condiciones de acceso al campo laboral
9
de niños, niñas y adolescentes en tales países presenta similitud en el tratamiento
sociológico y legal como problema atinente a las sociedades más avanzadas Para
América Latina y el Caribe las cifras oscilaban entre 42 y 99%, México (97%),
Argentina (96%), Brasil (95%), Cuba (94%), Colombia, Ecuador y Chile 90%,
Venezuela (84%), países en los cuales la situación laboral de niños, niñas y
adolescentes cobra una dimensión ciertamente preocupante.
En Latinoamérica, de acuerdo al estudio de la Comisión Económica para
América Latina y el Caribe y el Fondo de las Naciones Unidas para la Infancia
(CEPAL – UNICEF, 2001), los avances en el acceso y finalización de la Educación
Básica han estado acompañados de persistentes e importantes insuficiencias en el
logro educativo. A medida que se avanza en la Educación Básica hay una alta
proporción de niños y niñas que no terminan los primeros grados o lo hacen con
rezago, y una alta proporción que no completan el sexto grado. Esto podría estar
respondiendo tanto a las desigualdades de acceso y logro de los niños y niñas de
distintos estratos económicos, así como a la inequidad que tienen los niños y niñas de
diferentes grupos étnicos y áreas geográficas para acceder a la educación, lo cierto es
que esta gran densa masa de personas se mueve de algún modo en el problema de
búsqueda de una ocupación y toca de cerca de los vaivenes de la condición en la cual
laboran los niños, niñas y adolescentes que abandonaron la escuela.
Un arqueo de información sobre la educación rural, para finales de la década
del 90 en Latinoamérica, permite puntualizar que dos de cada cinco niños, niñas y
adolescentes no lograron completar la Educación Básica, en tanto que en las zonas
urbanas uno de cada seis niños, niñas y adolescentes interrumpieron sus estudios
antes de terminar el referido nivel de estudio o lo completaron con al menos dos años
de rezago. En relación al porcentaje de niños y niñas que completaron seis años de
educación, destaca el hecho de que sólo en cuatro países (Honduras, Chile, México,
Panamá) disminuyeron apreciablemente las disparidades urbano – rurales durante la
10
década del noventa (Ver gráfico 2), de modo que en general persisten las
desigualdades derivadas del rezago educacional en las áreas rurales, observándose
que en los países examinados por CEPAL – UNICEF, Colombia, El Salvador y Brasil
son los que presentan las mayores desigualdades al respecto.
Gráfico 2 Término de la primaria según zonas geográficas, 1.997. Porcentaje de
niños y niñas de 14 años de edad que completaron al menos 6 años de estudio
Fuente: CEPAL 1.999 – 2.000
Los millones de niños, niñas y adolescentes que a nivel mundial no asisten a
la escuela, no sólo están lesionados en su derecho, sino que están carentes de los
conocimientos y la información que deben poseer para lograr un mejor nivel de vida
y alcanzar el estado de bienestar que le es propio (Tovar, 2004). Habría que indagar
acerca de la posible actividad que están realizando éstos niños, niñas y adolescentes;
y si se trata de una actividad que se enmarque en la concepción del trabajo como
actividad económica, en que condiciones la están efectuando y cuáles son los
11
elementos de carácter legal que permiten dar asistencia a los grupos de niños, niñas y
adolescentes que se enmarcan en esta categorización.
De acuerdo al Informe de la OIT (2002), se afirma que unos 352 millones de
niños, niñas y adolescentes con edades comprendidas entre los 5 y los 17 años
desarrollan algún tipo de actividad económica. De esta cifra, 106 millones han
alcanzado la edad mínima para trabajar, la cual es de 15 años de acuerdo al Convenio
Nº 138 de la OIT (1973), sobre edad mínima para trabajar. De estos jóvenes muchos
realizan trabajos en forma aceptable, propios para su edad, pero otros lo hacen en
condiciones peligrosas, de riesgos laborales. A su vez, 59 millones de adolescentes
entre 15 y 17 años deberían recibir protección urgente e inmediata contra los riesgos
laborales o bien ser retirados del tipo de trabajo que están realizando (OIT). Los 246
millones restantes entre edades de 5 a 17 años desarrollan formas de trabajo infantil,
del cual 179 millones de niños, niñas y adolescentes, en opinión de la OIT, debe ser
erradicado, ya que pone en peligro el bienestar físico, mental o moral del niño. De
éstos, unos 8,4 millones se encuentran sometidos a formas decadentes que ni siquiera
se les puede llamar trabajo infantil, por la posición en que se encuentran de
esclavitud, de servidumbre por deudas, el reclutamiento obligatorio para intervenir en
conflictos armados, la prostitución, la pornografía y otras actividades ilícitas.
Al respecto la Conferencia Internacional del Trabajo adoptó en junio de 1999
el Convenio Nº 182 sobre las peores formas del trabajo infantil y la acción inmediata
para su eliminación, reconociendo que el trabajo infantil se debe en gran parte a la
pobreza y que la solución a largo plazo radica en un crecimiento económico sostenido
conducente al progreso social, en particular a la mitigación de la pobreza y a lograr la
educación universal. De acuerdo con el artículo Nº 1 del Convenio 182, todo Estado
miembro que lo ratifique deberá adoptar medidas para conseguir la prohibición de las
peores formas del trabajo infantil con carácter de urgencia (OIT, 1999).
12
En cuanto a la distribución geográfica, la región de Asia y el Pacífico alberga
el mayor número de niños y niñas trabajadores con edades entre los 5 y los 14 años,
con una cifra aproximada de 127 millones, lo que representa un 60% del total
mundial. El África Subsahariana ocupa el segundo lugar con 48 millones de niños y
niñas , un 25% del total, seguida de América Latina y el Caribe con 17,4 millones,
8% y Oriente Medio y el Norte de África con 13,4 millones, 6%. El Informe señala
que unos 2,5 millones, es decir, el 1% se concentraron en los países industrializados.
(OIT, 2002) (Ver cuadro Nº 2)
Cuadro Nº 2
Distribución geográfica de niños y niñas entre 5 – 14 años que trabajan. En
millones.
REGIÓN TOTAL PORCENTAJE
Asía y el Pacífico 127 60%
África Subsariana 48 25%
América Latina y el Caribe 17,4 8%
Oriente Medio y el Norte de África 13,4 6%
Países Industrializados 2,5 1%
Fuente : OIT (2002)
La OIT (2002) a su vez de señalar que en América Latina y el Caribe trabajan
niños y niñas entre 5 y 14 años de edad, aproximadamente 17,4 millones, también
indica que hay 15 millones de adolescentes que trabajan, cuyas edades oscilan entre
15 y 18 años de edad; lo que significa que hay más de 30 millones de niños, niñas y
adolescentes trabajando, de éstos 50% laboran en el campo y 50% lo hacen en el
sector urbano de la economía.
13
El trabajo infantil, es un problema de alcance mundial y tiene sus antecedentes
en todas las culturas, tiempo y lugares. Desde el siglo XIX, al agravarse las
condiciones de miseria de las clases asalariadas, los empleadores no dudaron en
recurrir a la mano de obra infantil ante las posibles ventajas que representaba este
recurso: bajos salarios, menores gastos, mejor movilidad en lugares angostos.
Al respecto, los estudios de Fernández F. y Campos M. (1.997) señalan que
en la primera mitad del siglo XIX, tanto en Francia como en Inglaterra, se redactaron
informes sobre las condiciones de vida y trabajo de la clase obrera en el que se
descubre el uso de la mano de obra infantil. Según los autores aludidos, las primeras
luchas legales contra el trabajo infantil se dieron en Gran Bretaña en 1.802, con la
promulgación de la ley para la preservación de la salud y la moral de los aprendices
en la industria del algodón. En Francia (1.813), e Italia (1.873) también prohíben por
decreto el trabajo de los niños. Las primeras referencias constitucionales sobre la
protección del trabajo de los niños se encuentra en la Constitución de Suiza de 1.874
y en la Constitución Mexicana de 1.817.
A pesar de que a través del tiempo se ha luchado en contra del trabajo infantil,
a finales del siglo XX y entrada del siglo XXI, a nivel mundial, este adquiere cada
vez mayores proporciones, millones de niños y niñas están obligados a trabajar en
condiciones extremadamente penosas que afectan seriamente su desarrollo integral.
El informe de la OIT (2.002) también señala que el 70% de los niños y niñas
trabajadores están ubicados en la agricultura, la caza, la pesca comercial. Igualmente
entre el 10 y el 15% de los niños, niñas y adolescentes que realizan diversos trabajos
en la industria de la hotelería, restaurantes y el turismo tienen menos de 18 años. En
algunos países africanos, de acuerdo al informe citado, cerca de la tercera parte de la
mano de obra agrícola está formada por niños y niñas trabajadores. En Bangladesh
el 82% trabaja en el sector agrícola.
14
En los países menos desarrollados, el trabajo es relevante en la minería, en la
agricultura, en las fábricas de vidrio y de cerámica, la pesca de profundidad, en la
construcción y en los servicios domésticos. Algunas de las peores condiciones de
trabajo están en las fábricas que producen bienes para la exportación, bajo contrato de
multinacionales occidentales.
En la India trabajan millones de niños y niñas en las fábricas de vidrio
hindúes, uno de cada cuatro obreros son niños y niñas atareados en jornadas de 14
horas en hornos a temperaturas que oscilan entre los 1.500 grados, por un salario
menor de un dólar por día. En esta región, también niños y niñas de hasta 8 años
laboran en las fábricas de fósforos, respirando un aire envenenado por azufre y
asbesto. En Malasia, los niños y niñas trajinan hasta 17 horas diarias en las
plantaciones de caucho, bajo la amenaza de las picaduras de insectos y víboras. En
Brasil trabajan más de 5 millones de niños y niñas, muchos de ellos en las
plantaciones de azúcar, donde cortan la caña a machetazos, lo que ha provocado
decenas de miles de amputaciones accidentales de dedos, manos y pies. Los niños y
niñas ocupados en las plantaciones de café de Tanzania son sistemáticamente
rociados con pesticidas. En Colombia y Perú, niños menores de ocho años se
encuentran activos en fábricas de ladrillos (OIT, 2002).
En Sri Lanka, numerosas muertes son provocadas por las enfermedades
pulmonares, causadas por los pesticidas. En Nepal, los niños y niñas constituyen un
tercio de la fuerza laboral y están involucrados en el 40% de los accidentes laborales.
Un aspecto fundamental de esta explotación es la prostitución infantil, para la cual se
han montado redes mundiales en las que están atrapados millones de niños y niñas.
Mucho del trabajo que realizan estos niños y niñas es simplemente trabajo esclavo.
La explotación del trabajo infantil no es sólo de los países atrasados; al
contrario, los niños, niñas y adolescentes también trabajan en los países
15
industrializados. En Portugal se emplean niños menores de 12 años en la industria
de la construcción; en Italia, las curtiembres emplean niños, porque a diferencia de
los adultos, no pueden protestar por el ambiente envenenado que allí se respira y por
las insuficientes medidas de salubridad industrial. En Gran Bretaña, el 66% de los
adolescentes de 15 años ya sale a trabajar. En los Estados Unidos, más de 100.000
niños y niñas están envueltos en la prostitución. Estudios referido a la utilización del
trabajo infantil en las granjas de estado de Nueva York, revela que la mitad de los
niños y niñas, en su mayoría latinos y asiáticos, han sido obligados a salir a trabajar
cuando los pesticidas todavía estaban frescos. En el año 2000, la organización
Human Rights Watch publicó un informe acerca de la explotación de la agricultura
estadounidense, donde señala que cientos de miles de niños y niñas trabajan cada año
en los campos, huertos y naves de empacado en todos los Estados Unidos. Recogen
lechuga, melones, deshierban los campos de algodón y embolsan productos, además
cargan pesadas sandías durante largas horas.
Las jornadas son aproximadamente de 12 horas diarias. Los menores están
expuestos a peligros de pesticidas, trabajando a veces en campos aún impregnados de
veneno. Desde el punto de vista de la salud están expuestos a la deshidratación
debido al calor, sufren lesiones provocadas por cuchillos afilados, accidentes con
equipos pesados y caída de escaleras, la falta de sueño aumenta las posibilidades de
lesiones. En cuanto a la escolarización, sólo el 55% se gradúa en la educación
secundaria, los menores trabajadores del campo se enfrentan a una habitual
explotación salarial siendo sus ingresos inferior al salario mínimo.
Por otra parte, en 1.996, un estudio de la OIT, en la India (Uttar Pradesh),
logró debatir uno de los argumentos más comunes de las defensas del trabajo infantil,
en la industria de las alfombras tejidas a mano: el denominado argumento de los
dedos hábiles. Según el estudio realizado a 362 establecimientos de tejidos de
alfombra y a 2.130 tejedores autónomos, el 22% de los trabajadores de esta industria
16
son niños y niñas. Las condiciones de trabajo son deficientes, obligan a los infantes
a sentarse en la misma postura durante mucho tiempo y a respirar una alfombra
cargada de fibras de algodón y lana, además de provocarles cansancio en la vista por
las tareas de precisión que tienen que realizar con una escasa iluminación.
Según el estudio, en la mayoría de los casos los niños y niñas trabajan en
grandes establecimientos, ya que las pequeñas empresas son explotaciones de carácter
familiar, en las que el padre y otros familiares pueden dedicarse al tejido de alfombras
y al cultivo de una parcela, mientras que en las grandes organizaciones casi toda la
mano de obra es contratada. La proporción de trabajo infantil aumenta paralelamente
al tamaño de la empresa, pero no a la calidad de las alfombras; de hecho es más
frecuente que los niños y niñas trabajen en la producción de alfombras de baja
calidad que en las de calidad superior. No hay pruebas, señala la OIT, de que los
niños y niñas dominen técnicas especiales en cuanto a diseño o calidad. No ocurriría
así, si el argumento de los dedos hábiles fuese cierto.
Otro argumento que refuerza la refutación, se refiere a la capacidad de los
adultos para dominar las técnicas del tejido y alfombras. Muchos de los adolescentes
y jóvenes que asisten a los centros públicos de formación acaban abriendo sus propias
empresas, y para poder adquirir una habilidad completa necesitan más de un año de
capacitación en los centros de formación para este oficio.
En América Latina, concretamente en Colombia, de acuerdo al Departamento
Administrativo Nacional de Estadística (DANE, 2.004), las cifras señalan la
existencia de 11.325.693 niños, niñas y adolescentes, entre los 5 y los 17 años de
edad; de éstos aproximadamente 2.318.378 trabajan, pero de acuerdo al informe anual
de UNICEF Colombia (2004), para el año 2003, en este país trabajaban más de
2.500.000 niños y niñas. De este total 1.700.000 son adolescentes entre 12 y 17 años
y 800.000 son niños y niñas de entre 6 y 11 años. El 80% trabaja en el sector
17
informal, 323.000 niños, niñas y adolescentes entre 5 y 17 años se encuentran
trabajando en el servicio domestico en hogares de terceros.
Según el informe UNICEF, la población de niños y niñas entre 7 y 11 años
que trabajan en las ocho ciudades principales colombianas, el 49,3% de los niños y el
64,9% de las niñas, lo hacían en el comercio y en las ventas. En la zona rural se
encontró que el 87% de los niños y el 50% de las niñas de 10 a 11 años eran
trabajadores agropecuarios, que laboraban diariamente entre 12 y 15 horas en
promedio. El 25% de los niños y niñas trabajadores, desempeñaban labores de alto
riesgo, porcentaje que sube a 70% en el sector agropecuario.
Con respecto al salario, el informe puntualiza que aproximadamente el 50%
de los niños y niñas trabajadores de entre 12 y 13 años no reciben ingresos directos,
sino que tienen otro tipo de remuneración. Los menores de 18 años cuando reciben
salario, reciben entre 25% y 80% del mínimo legal diario. Así mismo, solamente el
23% de los niños y niñas trabajadores tienen seguridad social, un gran porcentaje de
ellos como beneficiarios indirectos, a través de la afiliación de algún familiar.
El informe UNICEF Colombia (2004) con respecto a los niños, niñas y
adolescentes que participan en los grupos armados irregulares, estimó que para el año
2002, había entre 6.000 y 7.000 adolescentes vinculados a los mencionados cuerpos
armados en su mayoría entre los 15 y los 17 años de edad.
Por su parte, el Instituto Colombiano de Bienestar Familiar (ICBF, 2003),
estima que en el país existen cerca de 30.000 niños y niñas que pasan en la calle la
gran mayoría de su tiempo. El 37% de esa población está ubicada en Bogotá.
En un estudio etnográfico realizado por Barreto (2001), cuya muestra fue de
100 adolescentes empleadas en trabajos domésticos en hogares de tercero, en la
18
ciudad de Cali, Colombia y cuyas edades oscilaban entre 12 y 18 años, encontró que
en relación con el nivel de escolaridad, el 35% de las niñas no había concluido la
primaria, el 30% tenía primaria incompleta, el 29% no tenía o no había terminado la
secundaria, el 5% tenía secundaria completa y una niña no había tenido acceso a la
escuela. En el momento de la investigación un 39% continuaba sus estudios. Las
niñas que abandonaron la escuela (61%) argumentaron diversas causas: falta de
recursos económicos, falta de permiso en el trabajo, no les gusta estudiar, no tenían
registro civil ni certificado de los estudios cursados anteriormente. En cuanto a la
situación familiar, la investigación arrojó que las niñas salían de su casa a trabajar
debido al maltrato familiar, abandono del padre y permanente precariedad económica.
Con respecto a las condiciones laborales de las adolescentes, la investigación
de Barreto, refiere que desde temprana edad asumieron responsabilidades consigo
mismas y con sus familias, presionadas por las precarias condiciones económicas y
conflictos familiares entre otros; según las cifras, el 13% de las adolescentes que
formó parte de la muestra en la investigación se inició en el trabajo doméstico a los 9
años de edad, el 46% entre 10 y 13 años y el 40% entre los 14 y 17 años. En relación
al salario devengado solo el 5% manifestó obtener el salario mínimo legal vigente.
Según Barreto, en cuanto a la jornada laboral, el 62% de las niñas manifestó
trabajar entre 9 y 14 horas diarias y el 38% restante trabajaba entre 6 y 8 horas
diarias. El 77% hacía todos los oficios requeridos por la familia empleadora, como
preparación de alimentos, aseo de la casa, cuidado de la ropa, atención de niños, el
porcentaje restante solo realizaba algunas de estas funciones. La mayoría de las niñas
entrevistadas en la investigación, tenía libres los domingos cada 15 días.
En relación a la salud y seguridad, en el estudio ya citado, el 92% de las
niñas afirmaron no tener ningún tipo de seguridad social, el 8% restante la tenía, no
por su vinculación laboral, sino porque era beneficiaria de algún familiar afiliado. De
19
acuerdo a la investigación de Barreto, todas las entrevistadas manifestaron sufrir de
dolores de cabeza, en algunos casos dolores de estómago, muelas, ojos, espalda,
cintura, cadera y sueño. Otras sufrían de cólicos menstruales, asma, alergias, sólo un
25% asiste a consulta médica por problemas de salud. Con respecto a las
prestaciones sociales sólo el 10% de las adolescentes las había recibido.
La investigación de Barreto es un referente que muestra la compleja y difícil
situación que viven las niñas empleadas en el servicio doméstico, en este caso en una
población de Colombia. Si esto es así, en el empleo doméstico de niñas y
adolescentes se estarían violando los derechos de las niñas, las cuales venden su
fuerza de trabajo como una obligación o una posibilidad de subsistir, pudiendo ser el
trabajo doméstico de niñas y adolescentes en hogares de terceros, una de las peores
formas de trabajo infantil, cuestión ante la cual es necesario señalar que no sólo
sucede en Colombia.
Ávalos (2004) en una publicación acerca de trabajo infantil, plantea que en
muchas naciones latinoamericanas el empleo de niños y niñas en el servicio
doméstico es considerado como un alivio para las familias menos afortunadas, que los
entregan como ahijaditos, bajo promesa de brindarle escolaridad, sustento y afecto.
Indica que en la mayoría de los casos estos niños y niñas son víctimas de maltrato
psicológico, castigos, corporales y humillaciones.
También es de interés el estudio realizado por Sierra P., Galeano M., Álvarez
A. y Sánchez F. (1.996) en las minas de carbón de Boyacá, Municipio de Topaga
(Colombia), se encontró bajo nivel de escolaridad de los menores, dificultad para
relacionarse o entrar en contacto con personas ajenas a su medio (introversión,
timidez y apatía), entre sus aspiraciones están trabajar en las minas y tratar de
sobrevivir, se calcula que en Topaga hay más de 100 minas y que en estas trabajan
alrededor de 200 niños, niñas y adolescentes que comprenden la edad de 10 a 18
20
años, por lo que sólo aspiran a 3 ó 4 años de escolaridad. Los riesgos a que están
expuestos estos niños, niñas y adolescentes son bajos niveles de oxigeno, altas
temperaturas en las minas, incendios, deformidades de su estructura ósea, sobrecarga
física, abandono del estudio, riesgos de maltrato físico, interminables jornadas de
trabajo.
Al revisar la legislación colombiana, en el artículo 42 de la Constitución
Política de Colombia (1991), se establece que la familia es el núcleo fundamental de
la sociedad y que las personas menores deberán ser sostenidas y educadas en un
marco de seguridad de derechos, respeto recíproco y no violencia. A su vez el
artículo 44 define el desarrollo integral de la niñez como responsabilidad de la
familia, la sociedad y el Estado y llama a la protección contra toda forma de
abandono, violencia física o moral, abuso sexual, explotación laboral o económica y
trabajos riesgosos para las personas menores de edad, prevaleciendo los derechos de
la niñez sobre todas las demás.
El artículo 53 del instrumento legal referido, establece los principios
fundamentales del trabajo: igualdad de oportunidades, remuneración mínima vital y
móvil, estabilidad, irrenunciabilidad a los beneficios laborales, garantía a la seguridad
social, capacitación, descanso necesario y protección especial al trabajador menor de
edad.
Igualmente el Código del menor de Colombia (1994), le protege contra la
explotación económica y el desempeño de cualquier trabajo que pueda ser peligroso
para su salud (art. 14), prohíbe el trabajo a los menores de 12 años y exige
autorización para que los niños y adolescentes mayores de 12 y hasta los 18 años
puedan trabajar (art. 237 y 238). Señala jornadas especiales de trabajo para las
personas menores de edad, el máximo permitido para los adolescentes de 16 y 17
21
años es de 8 horas diarias (art. 242); también establece el derecho al salario,
prestaciones sociales y demás garantías que concede la ley (art. 243).
A nivel internacional, la Convención sobre los derechos del Niño (1989),
exhorta a los Estados a protegerlo contra la explotación económica y el desempeño
de trabajos que puedan ser peligrosos o entorpecer su educación, salud y desarrollo
físico, mental, espiritual, moral y social (art. 32).
Si bien existen estos derechos en la legislación colombiana, se evidencia
también su incumplimiento, cuando los niños, niñas y adolescentes trabajadores ven
violentado sus derechos a tener una familia como núcleo afectivo fundamental y de
sostenimiento para el desarrollo integral de los mismos, en cuya responsabilidad
deben coadyuvar la familia, la sociedad y el Estado, los cuales deben velar para que
prevalezcan los derechos del niño, tal como lo sostiene el artículo 42 y 44 de la
Constitución Política de Colombia.
En la relación de trabajo de niños, niñas y adolescentes colombianos, se
incumple el artículo 53 de la Constitución Política de Colombia, ya que en las
relaciones laborales se desconoce los derechos que legislan el trabajo, se presenta
servidumbre y sumisión, la disponibilidad sobre la vida del menor trabajador es casi
absoluta, la remuneración no corresponde al trabajo desempeñado ya que se niega en
la mayoría de los casos el derecho a tener un salario mínimo vital, necesario para
poder cubrir la satisfacción de las necesidades del menor, lo cual puede agudizar la
explotación de la que son víctimas.
A su vez, los niños, niñas y adolescentes están sometidos a jornadas de trabajo
que superan las autorizadas por el Código del Menor, la Constitución y los convenios
internacionales. Las extensas jornadas de trabajo se constituyen en trabajo forzoso y
peligroso para su integridad, vulnerando sus derechos a un nivel de vida adecuado a
22
su condición de menores de edad y al pleno desarrollo de sus facultades espirituales,
morales, físicas y sociales. Al desempeñar labores peligrosas y superiores a sus
fuerzas, somete la integridad física a un riesgo permanente para su salud,
incumpliéndose el artículo 14 del Código del Menor Colombiano y el 32 de la
Convención Internacional sobre los Derechos del Niño. Igualmente al no lograr una
seguridad social se violentan los artículos 26 y 27 de la Convención Internacional
sobre los Derechos del Niño, los cuales establecen el derecho de beneficiarse de la
seguridad social y el reconocimiento de un nivel de vida adecuado para su desarrollo
físico, mental, moral y social.
Así, las dudosas condiciones de contratación, las extensas jornadas laborales,
la carencia de seguridad social y protección, la imposibilidad de estudio, la falta de
descanso, los malos tratos, la baja remuneración, las relaciones de servidumbre, el
alejamiento de sus familias, son situaciones que contradicen la vigencia y aplicación
real de los derechos contemplados en la legislación nacional e internacional en favor
del desarrollo integral de la población menor de edad.
En América Latina, Brasil tiene más de 3 millones de niños, niñas y
adolescentes trabajando en las plantaciones de caña de azúcar, sisal, tabaco y té,
corriendo graves peligros por el uso de pesticidas y productos químicos que afectan la
piel, los ojos, el sistema respiratorio, y el sistema nervioso. Otros miles de niños, y
niñas trabajan en carboneras, cañaverales y en explotación de oro, expuestos a
enfermedades. Así mismo, se conoce que en las diferentes ciudades del Brasil,
456.000 niños, niñas y adolescentes entre 5 y 17 años son trabajadores domésticos en
hogares de terceros, representando el 9% del total de trabajo infantil en ese país y 222
mil son menores de 16 años, edad mínima de admisión al empleo fijada en Brasil
(OIT, 2002).
23
De acuerdo a investigaciones realizadas por el Instituto Brasileño de
Geografía y Estadística (IBGE, 2002) y la Organización Internacional del Trabajo
(OIT), en Brasil aproximadamente 5,5 millones de niños, niñas y adolescentes hasta
los 17 años sufren de explotación laboral y son utilizados en actividades ilícitas. El
Informe puntualiza que de acuerdo a esta cifra, dos millones de niños y niñas entre
los 5 y los 14 y los otros tres millones y medio de adolescentes entre los 14 y los 17
años son utilizados para trabajar sin percibir salarios, ni mínima asistencia educativa,
salud y alimentación. El Informe agrega que muchos niños y niñas son sometidos a
trabajo esclavo porque les impiden salir de las haciendas o casas en las que trabajan.
El estudio del IBGE acota que en las ciudades muchos niños y niñas trabajan como
empleados domésticos en casas donde cumplen jornadas de hasta 18 horas al día, sin
derecho a la educación y a servicios de salud. Agrega el informe que en las calles de
las ciudades miles de niños, trabajan como vendedores ambulantes a cambio de una
comida al día, así como de lustradores de zapato, recolectores de basura o cuidadores
de vehículos. La investigación señala además que miles de niños y niñas son
trasladados a haciendas agrícolas para trabajar en las plantaciones y cosechas, donde
duermen en barracas sin recibir salario por sus servicios.
El problema del trabajo infantil en Brasil, probablemente tenga sus raíces en la
herencia histórica de la esclavitud y haya avanzado a la sombra de la pobreza. Hasta
la década del ochenta el fenómeno del trabajo infantil no era reconocido como
negativo por la sociedad brasileña, pero en los inicios del noventa, Brasil fue uno de
los primeros países en firmar acuerdos con la Organización Internacional del Trabajo,
comprometiéndose a erradicar el trabajo infantil en las diversas actividades
económicas y proteger el trabajo de los adolescentes.
La Constitución Federativa del Brasil (1988), el Estatuto del Niño y el
Adolescente (Ley n.8069-1990) y la Convención sobre los Derechos del Niño,
ratificada por Brasil en fecha 24.09.90 introducen en la cultura jurídica brasileña la
24
concepción del niño y el adolescente como verdaderos sujetos de derecho en
condición peculiar de desarrollo. Este nuevo paradigma fomenta la doctrina de la
protección integral al niño y al adolescente dirigidas a asegurar la permanencia y la
primacía del interés superior del niño y el adolescente. En la cualidad de sujetos de
derecho en condición peculiar de desarrollo, al niño y al adolescente le es garantizado
el derecho a protección especial.
Bajo esta perspectiva la Constitución Brasileña de 1988, en su artículo 227,
establece que: “Es deber de la familia, la sociedad y el Estado asegurar al niño y al
adolescente, con absoluta prioridad, el derecho a la vida, salud, alimentación,
educación, ocio, profesionalización, cultura, dignidad, respeto, libertad y convivencia
familiar y comunitaria...” igualmente señala el citado artículo “... ponerlos a salvo de
toda forma de negligencia, discriminación, explotación, violencia, crueldad y
opresión". En el numeral 3, igualmente, el mismo artículo de la constitución señala
que el derecho a la protección especial abarca entre otros aspectos, la edad mínima de
catorce años para la admisión al trabajo, la garantía del acceso del trabajador
adolescente a la escuela, garantía de derechos laborales, en armonía con la
constitución, el Estatuto del Niño y el Adolescente, al reglamentar la norma
constitucional, prescribe en su artículo 5º : “Ningún niño o adolescente será objeto de
cualquier forma de negligencia, discriminación, explotación, violencia, crueldad y
opresión, siendo penado por la ley cualquier atentado, por acción u omisión, a sus
derechos fundamentales". Añade el artículo 18 del mismo Estatuto: “Es deber de
todos velar por la dignidad del niño y el adolescente, poniéndolo a salvo de cualquier
tratamiento deshumano, violento, aterrorizante, vejatorio o constrictivo”
No obstante los adelantos resultantes de la Constitución y del Estatuto con el
fin de garantizar el derecho del niño y el adolescente, el respeto, dignidad, integridad
física, psíquica y moral, así como de ponerlos a salvo de cualquier tratamiento
25
deshumano o violento, se constata que tales adelantos no han sido capaces de romper
con una cultura que ha admitido por años el trabajo de niños, niñas y adolescentes en
condiciones de explotación laboral, sin asistencia educativa ni de salud, ni
alimenticia.
Otro país donde la presencia de trabajo infantil es preocupante es México,
según la Subsecretaría de Trabajo y Previsión Social (SSTPS, 2003), las estadísticas
sobre la realidad del trabajo infantil tanto en la Ciudad de México, como las del resto
del país, no existen oficialmente, particularmente por lo que se refiere al trabajo de
niños y niñas menores de 14 años, salvo algunas proyecciones que han dado a
conocer organismos internacionales como UNICEF y OIT, sin embargo la existencia
del trabajo infantil es real e inquietante en la sociedad de México, extendiéndose a
numerosas ramas de actividad de producción y de servicios, siendo común el trabajo
de niños y niñas en cadenas de panaderías, gasolineras, trabajo doméstico, talleres
mecánicos, tiendas, empresas de comida rápida, fabricas de ropa y mercados.
Conforme a UNICEF México (2003), se estima que para la fecha había
aproximadamente tres millones y medio de niños, niñas y adolescentes trabajadores
en México, teniendo mayor presencia en los sectores de la agricultura, las calles de
las grandes y medianas ciudades, el servicio doméstico y los pequeños talleres en la
periferia de las ciudades. De acuerdo a UNICEF, en México las raíces del trabajo
infantil hay que buscarlas por una parte, en las formas que adopto el desarrollo;
produciendo desequilibrios regionales, desigual distribución del ingreso, crecimiento
urbano explosivo, dispersión y aislamiento de la población rural. Por otra parte, los
nuevos procesos sociales han originado corrientes migratorias que incorporan
continuamente contingentes de menores y mujeres, aunado a lo anterior, hay que
agregar el crecimiento de la desintegración familiar y los hogares uniparentales; sin
olvidar que la indagación hay que hacerla también en los cambios de las pautas y
valores culturales, así como en la erosión de las formas tradicionales de convivencia
26
comunitaria. Lo anterior, posiblemente ha coadyuvado para que una de cada cinco
familias no obtengan suficientes ingresos para la alimentación, así como, uno de cada
dos habitantes del campo y uno de cada nueve de los que viven en la ciudad se
encuentren en condiciones de pobreza extrema, trayendo como consecuencia el
arrojar miles de niños, niñas y adolescentes al trabajo en forma prematura.
Contrariamente a lo que señala UNICEF, el Instituto Nacional de Estadística,
Geografía e Informática de México (INEGI, 2000), solo reconoce a 1.871.335 de
niños, niñas y adolescentes trabajadores, sin embargo, organizaciones no
gubernamentales, como la Central Latinoamericana de Trabajadores (CLAT, 2000),
refiere que hay aproximadamente 10 millones de niños, niñas y adolescentes
trabajadores en México.
Aunque las cifras varían notablemente de un organismo a otro, son
indicadores de la existencia de trabajo de niños, niñas y adolescentes tanto en la
economía formal e informal; en los diferentes sectores productivos; como trabajo
legal e ilegal; en las calles y en las casas. El problema de los niños, niñas y
adolescentes que trabajan a pesar de estar reconocido por los organismos nacionales
e internacionales, podría estar siendo subestimado al posiblemente tomar en mayor
consideración a los menores que laboran en la economía formal y con menos cuidado
a las que se encuentran en la economía informal, que son la mayoría, pudiendo
quedar éstos últimos excluidos de cualquier programa gubernamental y de los
organismos internacionales. A su vez es de señalar que algunos tipos de trabajo no se
registran porque tradicionalmente no se les ha considerado propiamente como trabajo,
este es el caso del trabajo doméstico en niños, niñas y adolescentes.
Aunque la pobreza es considerada la principal causa del trabajo de niños,
niñas y adolescentes, este factor podría estar reforzado por un orden social
discriminatorio, relacionado con cuestiones culturales, educativas, sociales y étnicas,
27
por ejemplo en México, aproximadamente 400 mil menores acompañan a sus padres
como jornaleros agrícolas, migrando hacia los estados del norte. Este es el caso de
los niños jornaleros de San Quintín, en su mayoría originarios de Oaxaca, Guerrero,
Veracruz y Sinaloa, que llegan a ese valle durante los meses de marzo y julio. Los
niños, oaxaqueños y guerrerenses son utilizados para las tareas de cosecha de
hortalizas y fumigación, sin equipos especiales para evitar el contacto directo con las
sustancias tóxicas.
En México también se encuentran las peores formas del trabajo infantil, por
mencionar algunos ejemplos, se encuentran los niños obreros que trabajan en los
molinos de arena sílica, en la industria metalmecánica y en las maquiladoras de
exportación o en las fábricas de talco y chupones, donde trabajan por turnos de día,
tarde y noche y se exponen a agentes químicos, polvos y altas temperaturas, cargan
bultos pesados y realizan largas jornadas.
El trabajo infantil ha sido aceptado por muchos niños, niñas y adolescentes
como una realidad inevitable para las familias más pobres, como algo casi natural,
pero en múltiples ocasiones los niños trabajan por inducción o imposición de los
padres, convirtiéndose para muchas familias, el aporte salarial del niño, un ingreso
fundamental para la sobrevivencia, ayudando a la madre abandonada o soltera, cabeza
de familia, apoyando al padre despedido o subempleado y en otros casos pagarse sus
estudios.
De acuerdo al informe del Segundo Estudio en Cien Ciudades de niños, niñas
y adolescentes trabajadores de México 2002 – 2003, bajo el auspicio del Sistema
Nacional para el desarrollo integral de la familia (DIF, 2003) y UNICEF( 2003), la
investigación refiere la existencia de 94.795 niños, niñas y adolescentes trabajadores
en el sector informal, de este total 32.992 (34,8%) son niñas y 61.803 (65,2%) son
niños. Con relación a las actividades que llevan a cabo los niños, niñas y
28
adolescentes entre los 6 y los 17 años destaca el informe que el 38,9% trabajan como
empacadores en tiendas de autoservicio; el 31,1% se dedican al comercio ambulante y
en vía pública y el 16,7% se dedican a actividades de ayuda y mendicidad.
Con respecto al promedio de horas que trabajan estos niños, niñas y
adolescentes, el informe señala que es de 5,7 horas diarias, aunque existe un
porcentaje importante (22%) que trabaja entre 9 y 16 horas al día. En cuanto al nivel
escolar y la asistencia a la escuela, el 71% asiste a la escuela, hay un porcentaje
importante que no asiste. La mayoría de los niños, niñas y adolescentes trabajadores
cursa primaria (48%) y un porcentaje menor asisten a los primeros grados de la
secundaria.
Sobre las causas declaradas por los niños, niñas y adolescentes para comenzar
a trabajar, el informe puntualiza que los mismos están relacionados con la obligación
de ayudar a su familia, representando este el principal motivo (38,2%), otros
respondieron trabajar para subsistir (13,9%) y el 10,5% trabajaba para poder estudiar.
En cuanto a la prevención de enfermedades de transmisión sexual y embarazo, el
estudio refleja que sólo el 50% afirmó utilizar medidas preventivas. El estudio
también indica que los menores entre 12 y 14 años consumen ciertas drogas como el
alcohol, la marihuana, la cocaína, pastillas, gasolina, éxtasis , entre otros.
Considerando la Constitución Política de los Estados Unidos Mexicanos
(1917), en su artículo 3, se puntualiza la importancia de la educación que imparte el
Estado – Federación, Estados y Municipios a través de la cual se tenderá a desarrollar
armónicamente todas las facultades del ser humano, fomentando el amor a la patria,
la solidaridad internacional, la justicia, así como contribuir a la mejor convivencia
humana, a fin de robustecer en el educando el aprecio por la dignidad de la persona,
la integridad de la familia, la convicción del interés general de la sociedad, la
igualdad de los derechos de todos los hombres entre otros aspectos.
29
A su vez el artículo 4 señala “...Es deber de los padres preservar el derecho de
los menores a la satisfacción de sus necesidades y a la salud física y mental. La ley
determinará los apoyos a la protección de los menores, a cargo de las instituciones
públicas”.
Si bien la Constitución en sus primeros artículos donde considera las garantías
individuales a todos los ciudadanos mexicanos, prevé el desarrollo del ser humano, la
convivencia, la integridad de la familia, el derecho que tienen los menores de la
satisfacción de sus necesidades, derecho preservado por el Estado y las familias, se
observa que no hay la debida correspondencia entre éstas garantías y la situación de
indefensión a la que podrían estar sometidos millones de niños, niñas y adolescentes,
al tener que acudir al campo laboral para poder sobrevivir dentro de su situación de
pobreza extrema que presentan tanto estos niños como su familia, al vivir en una
situación de desigualdad de oportunidades de acceso y de bienestar.
Igualmente, la Constitución de México en su artículo 123 señala “toda
persona tiene derecho al trabajo digno y socialmente útil . . .”, a su vez, el mismo
artículo puntualiza “queda prohibida la utilización del trabajo de los menores de
catorce años. Los mayores de esta edad y los menores de 16 años tendrán como
jornada máxima la de seis horas”. Norma Constitucional que se observa en miles de
casos vulnerados cuando los mismos organismos nacionales e internacionales
plantean la existencia de niños, por debajo de 14 años realizando trabajos tanto en la
economía formal como informal, que los perjudica física, mental, emocional, social y
moralmente, sobre todo los que están relacionados con las peores formas de trabajo
infantil, definidos así en el Convenio 182 de la OIT (1999), el trabajo extremo tiene
que ver con la violación de los derechos humanos básicos de los niños, como son
entre otros, la educación, a no ser explotados y abusados, el derecho a ser excluidos
de trabajos que son dañinos para su desarrollo físico y mental, que amenace su salud,
la seguridad o moralidad de los niños.
30
En igual forma, el que miles de niños, niñas y adolescentes mexicanos
trabajan más de ocho horas diarias; si esto es así, podría estarse evidenciando la
facilidad con que se violenta la norma constitucional, aunque las cifras
gubernamentales muchas veces quedan ocultas para que en forma pública y notoria
no se manifieste su contradicción con la normativa constitucional y legal.
De la observancia de la Ley Federal del trabajo (1970) de México, en su
artículo 5 y en armonía con la Constitución, se prohíbe el trabajo a los menores de 14
años, además prohíbe horas extraordinarias de trabajo para los menores de 16 años.
Así mismo, el artículo 22 de la citada ley prohíbe el trabajo de los mayores de 14
años y menores de 16 años que no hayan terminado la educación obligatoria, salvo
los casos de excepción que apruebe la autoridad correspondiente y que a su juicio
haga compatibilidad entre los estudios y el trabajo, dejando esta vigilancia a los
órganos del trabajo tal cual lo expresa el artículo 173 “El trabajo de los mayores de
14 años y menos de 16 años queda sujeto a vigilancia y protección especial de la
inspectoría del trabajo”. Al examinar el articulado es factible pensar en la situación
de debilidad en que se encontrarán los niños, niñas y adolescentes menores de 14
años, que trabajan y no está reglamentada su protección. Duda que implica la
revisión de la Ley para la Protección de los Derechos de Niños, Niñas, y
Adolescentes (2000) de México, quien indica “. . . las disposiciones de la presente ley
son de orden público, interés social y de observancia general en toda la República
Mexicana y tiene por objeto garantizar a niños, niñas y adolescentes la tutela y el
respeto de los derechos fundamentales reconocidos en la Constitución” (art. 1)
Igualmente señala “a los efectos de esta ley son niños y niñas, las personas de
hasta 12 años incompletos y adolescentes los que tienen entre 12 años cumplidos y 18
incumplidos” (art. 2), complementándolo con el artículo 3 y 4 cuando señala “como
principio rector de la protección de los derechos de niños, niñas y adolescentes el
interés superior de la infancia (art. 3) y de conformidad con el principio del interés
31
superior de la infancia “las normas aplicables a niños, niñas y adolescentes, se
entenderán dirigidas a procurarles primordialmente los cuidados y asistencia que
requieren para lograr un crecimiento y un desarrollo plenos dentro de un ambiente de
bienestar familiar y social” (art. 4).
Protección y asistencia que requieren miles de niños, niñas y adolescentes
trabajadores mexicanos, y donde hay que dirigir la atención hacia la falta de
esclarecimiento de la ley que los protege. De acuerdo al artículo 35 “para garantizar
la protección de los derechos reconocidos en esta ley, se reitera la prohibición
constitucional de contratar laboralmente a menores de 14 años bajo cualquier
circunstancia”, lo que conduce a pensar que para poder garantizar protección a los
menores de 14 años no deben estar trabajando o que no hay protección para los
menores trabajadores de 14 años, circunstancia que de alguna manera encuentra
mayor claridad en la redacción del artículo 5 de la ley cuando señala que “ la
Federación, el Distrito Federal, los Estados y los Municipios procuraran implementar
los mecanismos necesarios para impulsar una cultura de protección de los derechos
de la infancia, basados en el contenido de la Convención sobre los Derechos del Niño
y tratados internacionales que sobre el tema apruebe el Senado de la República.
México ha ratificado entre otros, tanto la Convención sobre los Derechos del Niño,
como el Convenio 182 sobre las peores formas del trabajo infantil, lo que implica
compromiso de garantizar protección al niño, niña y adolescente contra la explotación
económica y el desempeño de trabajos que puedan ser peligrosos o entorpecer su
educación, salud física, espiritual, social, moral.
En el Perú también se ha logrado establecer una legislación para la promoción
y protección de niños, niñas y adolescentes, en los diferentes aspectos de su
desarrollo, entre las que se encuentran el trabajo. De acuerdo a la Constitución
Política del Perú (1993) “El trabajo en sus diversas modalidades, es objeto de
atención prioritaria del Estado el cual protege especialmente a la madre, al menor de
32
edad y al impedido que trabajan . . .” (art. 23). Por su parte el Código de niños, niñas
y adolescentes (2000) aborda también entre otros aspectos, la protección a los niños,
niñas y adolescentes que trabajan, señalando como prioritario “que el niño y
adolescente gozan de todos los derechos inherentes a la persona humana y de los
derechos específicos relacionados con su proceso de desarrollo” (art. 3).
En cuanto al trabajo, el artículo 19 señala “El Estado garantiza el ofrecimiento
de modalidades y horarios escolares especiales que permitan la asistencia regular a
los niños, niñas y adolescentes que trabajan . . .” A su vez el artículo 22 indica “El
Estado reconoce el derecho de los adolescentes a trabajar, con las restricciones que
impone este código”, en este caso, el instrumento legal citado establece como
condición que “..siempre y cuando su actividad laboral no importe riesgo ni peligro
para su desarrollo, salud física, mental y emocional, no perturbe su asistencia regular
a la escuela”.
El Estado peruano también ha ratificado la Convención de los Derechos del
Niño y diferentes tratados internacionales para la defensa del niño y del adolescente
peruano, sin embargo, pese a sus novedosas normas jurídicas existen factores como la
situación de pobreza en las familias, la precarización del empleo adulto, el
desempleo, patrones culturales entre otros, que arrojan el ingreso temprano al trabajo
a niños, niñas y adolescentes en desconocimiento de sus propios derechos y donde se
puede ver interferido su proceso educativo y su salud física y mental.
De acuerdo a la OIT (2003) el trabajo infantil y adolescente en el Perú,
principalmente en zonas urbanas, se cuadruplicó durante la década del 90, de acuerdo
al Censo Nacional (1993), el trabajo de niños entre 6 y 17 años era de 497.032, y
para el año 2001 esas cifras aumentaron a un millón 833 mil, cifras que han
continuado en progresión, ya que para un total de 6.948.300 niños, niñas y
adolescentes entre 6 y 17 años (INE, 2005) que es el total de la población para el año
33
2005, de ese grupo de edad, de éstos, el 28,6 % realizan una actividad laboral, lo que
puede significar que aproximadamente 1.987.165 niños, niñas y adolescentes
peruanos, trabajan en diferentes ocupaciones.
Según la OIT (2003) se han identificado actividades de trabajo infantil
consideradas de alto riesgo. Se calcula que 50.000 niños trabajan en la minería
artesanal de oro en los departamentos de Puno, Madre de Dios, La Libertad,
Ayacucho, Arequipa. Igualmente 150.000 niñas trabajan en el sector doméstico;
8.000 trabajan en las calles de Lima como vendedores ambulantes y limpiadores;
1.000 niños trabajan en las ladrilleras artesanales; 1.000 niños trabajan como
recolectores de basura en los rellenos sanitarios y basureros de Lima.
A su vez, el informe también señala los altos porcentajes de deserción y atraso
escolar. El 49% de los niños, niñas y adolescentes que trabajan y asisten al colegio
tienen uno o más años de atraso escolar; además uno de cada tres de estos niños,
niñas y adolescentes que trabajan no asisten al colegio.
En ese orden de ideas, conforme al Programa Internacional para la
erradicación del Trabajo Infantil, por sus siglas en ingles IPEC (2003), una de las
actividades más nocivas en que se ubican los niños, niñas y adolescentes del Perú, es
la explotación minera artesanal; de acuerdo al estudio realizado por el programa
IPEC Minería, en dos de cada tres hogares dedicados a esta actividad, niños y niñas
trabajan, es decir unos 50.000 participan en labores mineras, según el estudio, la
pobreza, el desempleo y el debilitamiento de las políticas económicas y sociales
conllevan a muchas personas y entre ellos niños, niñas y adolescentes, a la búsqueda
de su propia fuente de empleo y de progreso en actividades como la minería artesanal.
En el departamento de Ayacucho, queda Santa Filomena, zona minera, a ésta
región en la década del 80, llegaron un grupo de hombres para extraer el oro como
34
una forma de sobrevivir ante la falta de empleo, la crisis en el campo y la violencia
política. Años después aparecieron sus esposas e hijos, formaron una comunidad
minera que hoy supera los mil quinientos habitantes que se alojaron en viviendas de
esteras. Debido a la falta de equipos para procesar el oro, los mineros utilizan
métodos artesanales que requieren la colaboración de toda la familia. De esta forma
500 niños, niñas y adolescentes se dedican a trabajar cargando materiales de 20 a 30
kilos. Al mismo tiempo se exponen a materiales tóxicos, como el mercurio. Con sus
pequeñas manos manejan molinos gigantes que después de dos o tres horas les
permitían triturar la roca y extraer pequeñas partículas de oro.
En vista de que el trabajo infantil es una realidad en Perú, la organización no
gubernamental Acción por los Niños (2004), realizó un censo en el mes de noviembre
del 2003, en 190 centros educativos a nivel primario, en cinco zonas de Lima (Callao,
Guacho, Huaraz, Cañete y Barranco) y donde se encuestó un total de 6.666 niños,
niñas y adolescentes trabajadores que asisten a las escuelas. El registro tuvo como
finalidad conocer el número de niños y niñas trabajadores que van a la escuela, así
como su situación laboral.
Los datos del censo arrojaron que 5.808 niños de un total de 6.666
encuestados estaban debajo de la edad mínima estipulada por la Organización
Internacional del Trabajo, que es de 12 a 16 años para trabajos ligeros, y de 18 años
para los más peligrosos. Los resultados fueron: el 16% está entre 6 y 8 años; el 71%
entre 9 y 12 años; el 11% entre 13 y 15 años; el 2% entre 16 y 18 años. En cuanto a
su situación familiar, el 92% de los encuestados afirmaron que vivían con sus
familias, sólo un 8% había abandonado a su familia, pero no se consideraban
abandonados porque vivían con amistades. En cuanto a la escolaridad, el 37% ha
repetido año.
35
La mayor parte de los niños, niñas y adolescentes trabajadores de la muestra,
trabajaban en los mismos distritos donde vivían. En cuanto a la remuneración el
censo arrojó que el 41% recibía un pago diario de 5 soles; el 23% recibía pago
mensual y el 36% no recibía remuneración ninguna por su trabajo. En relación a la
jornada laboral, la mayoría de los encuestados trabajaban de lunes a viernes o todos
los días (54%). Solamente el 25% trabajaba los fines de semana.
Llama la atención que tanto el estudio realizado por las organizaciones
internacionales, como el realizado por la organización no gubernamental de Perú,
señalan datos poco animadores acerca de la situación laboral de niños, niñas y
adolescentes de éste país. A pesar que existe una legislación de protección a los
mismos, los niños, niñas y adolescentes no reúnen en un porcentaje elevado la edad
mínima para trabajar, que de acuerdo al Código de los Niños y Adolescentes del Perú
es de 14 años, para algunos casos 12 años (art. 54). Se observa vulnerados sus
derechos en cuanto a la jornada laboral, ya que trabajan horas excesivas de trabajo en
contradicción de lo establecido en el Código de Niños y Adolescentes, el cual
expresa: “El trabajo de los adolescentes entre 12 y 14 años no excederá de 4 horas
diarias ni de 24 semanales. El trabajo de los adolescentes entre 15 y 17 años no
excederá de 6 horas diarias ni de 36 horas semanales” (art. 59). Se ha identificado
que realizan actividades de alto riesgo como el trabajar con sustancias tóxicas,
nocivas y excesivo peso que perjudican su salud.
A su vez, es preocupante el alto porcentaje de deserción, repitencia y atraso
escolar de los niños, niñas y adolescentes que trabajan, los cuales se encuentran en
difícil situación económica y social y trabajan como una forma de supervivencia, ante
la ausencia de programas sociales que los atienda en forma directa e inmediata.
Igualmente en Ecuador, según el Instituto Nacional de Estadísticas y Censo
(INEC), para el año 2001 existían 3.765.105 niños, niñas y adolescentes entre 5 y 17
36
años. De éstos niños, niñas y adolescentes y de acuerdo al Informe UNICEF
Ecuador (2003), existen aproximadamente 800.000 niños, niñas y adolescentes que
trabajan a tiempo completo o parcial, estos niños están ubicados en un 65% en la
sierra y un 25% en la costa, un porcentaje importante (60%) de estos niños, niñas y
adolescentes trabajan en actividades agrícolas principalmente en floricultura,
bananeras, mientras que el 20% se ocupa en el sector servicios; en actividades
industriales labora un 11% y en el sector doméstico laborando en hogares de terceros
están agrupados un 9% de niñas. Con respecto a la edad de trabajo, el informe
registra que muchos niños comienzan a trabajar a la edad de 5 años, reportando que
entre 5 y 9 años trabajan el 11% de los niños y el 44% de las niños, niñas y
adolescentes trabajadores, sus edades oscilan entre 10 y 14 años de edad.
El informe menciona que de éstos niños, niñas y adolescentes sólo el 64%
estudia; el 74% no llega a la secundaria y 33.000 no saben leer ni escribir, aunque
están en la edad para hacerlo.
En cuanto a las horas de trabajo, el informe reporta que el 26% de niños, niñas
y adolescentes trabajan más de 40 horas. Existiendo además un 50% de adolescentes
que trabajan y no reciben remuneración. Con respecto al reporte educativo, el
informe señala que el 75% de los niños, niñas y adolescentes trabajadores tienen un
retraso educativo de 1 y 2 años y un 25%, entre 3 y 6 años, indicando igualmente que
los niños, niñas y adolescentes trabajadores no poseen ninguna capacitación para el
trabajo.
Existen también de acuerdo al informe, problemas de salud asociados al
trabajo infantil, entre los cuales son notorios: discapacidades físicas y sensoriales,
problemas músculo esqueléticos, afecciones respiratorias y dérmicas, desnutrición,
intoxicaciones y exposición a sustancias nocivas, laceraciones, heridas y
traumatismos. Igualmente hay otros problemas que sufren los niños, niñas y
37
adolescentes trabajadores como déficit afectivos, culturales e intelectuales, así como
severa y temprana exposición a riesgos sociales, aunado al tener que asumir roles
adultos.
En ese mismo orden de ideas, el informe de investigaciones realizadas por el
Programa de Erradicación del Trabajo Infantil de la Organización Internacional del
Trabajo (2003), es un testimonio que reseña la delicada situación que viven niños,
niñas y adolescentes ecuatorianos que trabajan en la minería de oro, sobre todo la
practicada de manera artesanal, la cual viene a ser una actividad peligrosa en la cual
están involucrados niños, niñas de hasta 5 años. En los campamentos mineros del
Ecuador como Zaruma, Portovelo, Nambija, Chinapinza, entre otros, hay más de
2.000 niños ocupados en la extracción del oro en Ecuador. La mayoría de estos niños
están en las minas artesanales, que se encargan de los yacimientos que la minería
industrial estima poco productivos. Esta actividad se caracteriza por la baja
tecnología, con pocos sistemas de seguridad industrial, bajo control sanitario y de
salud de los trabajadores, bajos salarios y la escasa inserción legal e institucional
entre otras.
La mayoría de los niños ingresan a la minería acompañando a las madres, ya
que estas minas funcionan en comunidades aisladas geográficamente y con ausencia
de estructuras estatales, donde toda la familia se ve involucrada en esta actividad.
Los niños al trabajar en estas minas están expuestos al peligro de: ser atrapado por el
desprendimiento de rocas, afecciones de los huesos y músculos por cargas excesivas
del mineral, lesiones y enfermedades de la piel por la exposición crónica al sol y a las
altas temperaturas, agresiones físicas y psicológicas recibidas por parte de mineros
adultos. Aunado a estos peligros, los niños, niñas y adolescentes trabajadores de las
minas laboran más de 8 horas diarias, muchos no reciben remuneración y tampoco
asisten a la escuela.
38
Igualmente, el informe presentado por la Organización Human Rights Watch
(2002) acerca de la investigación realizada a 45 niños y niñas trabajadores de las
plantaciones de banano en Ecuador, que es el país que más banano exporta
mundialmente, refiere las infracciones a las leyes laborales por parte de los
plantadores de banano, al emplear niños y niñas en labores peligrosas. Los niños y
niñas entrevistados en la investigación comenzaron a trabajar en las plantaciones
entre los 8 y los 13 años.
En cuanto al salario, éste es de 3,5 dólares por día, 60% menos que el salario
mínimo fijado para los trabajadores bananeros adultos. Todos los entrevistados
describieron jornadas de 12 horas diarias, en condiciones peligrosas, expuestos al
contacto con plaguicidas y fungicidas tóxicos, no usando vestimenta protectora para
cubrirse cuando los aviones fumigan las plantaciones. La investigación indica que
estos niños y niñas en cuanto a su salud presentan síntomas como dolor de cabeza y
de estómago, fiebre, mareos, irritación de nariz y ojos, náuseas, vómitos, temblores,
picazón, fatiga, dolores en los huesos, afecciones que son propios de la inhalación por
el contacto con plaguicidas. Además el peligro también está representado, según el
informe porque los niños y niñas son obligados a trabajar con herramientas cortantes
como cuchillos, machetes y por arrastrar en carruchas cargas de más de 400
kilogramos de banano en una distancia mayor a un kilómetro, recorrido que va desde
el campo de cultivo hasta las plantas de empacado.
Con respecto a la escolarización, el informe señala que menos del 40% de los
niños y niñas entrevistados seguían estudiando a los 14 años. La razón por lo que
estos niños habían dejado la escuela para trabajar fue la de proporcionar dinero a sus
padres para la compra de alimentos y ropa para su familia, muchas de las cuales
dependían económicamente de las plantaciones cercanas. Asegura el informe que el
trabajo infantil en esas plantaciones se debe sobre todo a los bajos salarios y a los
escasos beneficios que reciben los trabajadores adultos.
39
Las investigaciones anteriores realizadas en el Ecuador, por organizaciones
internacionales, son parte de las evidencias que muestran la delicada situación que
viven cerca de 800.000 niños, niñas y adolescentes ecuatorianos los cuales están
vulnerados en sus derechos garantizados en la Constitución de Ecuador (1998), así
como en el Código de la Niñez y Adolescencia (2003), entre otros instrumentos
jurídicos. La Constitución de Ecuador, en su sección quinta, titulada: De los grupos
vulnerables, señala: “En el ámbito público y privado recibirán atención prioritaria
preferente y especializada los niños y adolescentes …” (art. 47), “será obligación del
Estado, la sociedad y la familia promover con máxima prioridad el desarrollo integral
de niños y adolescentes y asegurar el ejercicio pleno de sus derechos. En todos los
casos se aplicará el principio del interés superior de los niños …” (art. 48). La
Constitución Ecuatoriana también señala la obligación del Estado de adoptar medidas
que aseguren a los niños, niñas y adolescentes garantías. Entre estas: “protección
especial en el trabajo, y contra la explotación económica en condiciones laborales
peligrosas, que perjudiquen su educación o sean nocivas para su salud o desarrollo
personal” (art. 50). A su vez el artículo 51 señala “ … los niños, niñas y
adolescentes tendrán derecho a que se respeten sus garantías constitucionales”.
Al revisar el Código de la Niñez y la Adolescencia (2003), el mismo dispone
“sobre la protección integral que el Estado, la sociedad y la familia deben garantizar a
todas los niños, niñas y adolescentes que viven en el Ecuador, con el fin de lograr su
desarrollo integral y el disfrute de sus plenos derechos en un marco de libertad,
dignidad y equidad …” (art. 1). En cuanto al trabajo de niños, niñas y adolescentes,
garantiza el derecho contra la explotación laboral al expresar que los niños, niñas y
adolescentes tienen “derecho a que el Estado, la sociedad y la familia les protejan
contra la explotación laboral y económica y cualquier forma de esclavitud,
servidumbre, trabajo forzoso o nocivo para su salud, su desarrollo físico, mental,
espiritual, moral o social...” (art. 81).
40
A su vez, fija en 15 años la edad mínima para todo tipo de trabajo, incluido el
servicio doméstico, pudiendo el Consejo Nacional de la Niñez y Adolescencia
autorizar edades mínimas a la anterior, de conformidad con los convenios
internacionales ratificados por el Ecuador (art. 82). En relación a la erradicación del
trabajo infantil el Código ordena que el Estado y la sociedad deben ejecutar políticas,
planes, programas y medidas de protección tendientes a erradicar el trabajo de los
niños, niñas y adolescentes que no han cumplido 15 años, debiendo la familia
contribuir al logro de este objetivo (art. 83).
La protección que debe garantizar el Estado, la sociedad y la familia a los
niños, niñas y adolescentes para asegurarle el ejercicio de sus plenos derechos por
mandato constitucional y legal, refleja en la vida real, cotidiana, social, debilidades en
su aplicación ya que al niño y adolescente de Ecuador en su situación de trabajo, se le
vulneran sus derechos en cuanto que tienen que abandonar la escuela para trabajar, o
presentan retraso educativo, laboran excesivas horas al día, muchos no reciben
remuneración, o ésta es inferior a la mínima legal, están expuestos a riesgos en su
salud, están desprotegidos contra la explotación laboral y económica, lo cual atenta
contra su desarrollo físico, mental, social conforme lo manifiestan las investigaciones
realizadas por los organismos internacionales.
Por otra parte, y en orden de dirigir la atención hacia otro país
latinoamericano, se puede señalar que en Bolivia, según el censo 2001 realizado por
el Instituto Nacional de Estadística (INE,2001), la población total estaba conformada
por 8.274.325 habitantes. El 45% del total de habitantes lo constituyen los niños,
niñas y adolescentes de 0 a 18 años. Muchos de estos niños, niñas y adolescentes
según el informe UNICEF Bolivia (2003) trabajan; aproximadamente 1.700.000
realizan labores ya sea en la zafra de caña de azúcar, en la minería, limpiando
parabrisas, cuidando autos, en casas de familias, venta de periódicos. Señala el
informe que los niños, ayudan a sus padres en la economía familiar. Muchos padres
41
trasladan su grupo familiar fuera de su sitio de habitación para dirigirse a las
plantaciones para la zafra de la caña de azúcar desde el mes de Abril hasta Noviembre
de cada año, como una forma de garantizar su subsistencia.
A su vez, el informe presentado por el Departamento Minero del Centro de
Investigación y Servicio Popular (CISEP 2004) señala que los niños, niñas y
adolescentes dedican gran parte de su tiempo a la actividad minera, ya sea en el
interior o el exterior de la mina. El estudio se realizó a 210 niños, niñas y
adolescentes de los centros mineros de Huanuni, Japo, Poopó, Morococala y Santa
Fe. Las actividades principales son dos, una en el interior de la mina propiamente
dicho y la otra en la superficie realizando trabajos de desmonte. El 52% ingresa al
interior de la mina, el 10% combina esta actividad con el trabajo en superficie, y el
38% trabaja en superficie. Muchos de estos niños, niñas y adolescentes trabajan con
sus padres o algún pariente, aproximadamente el 68%, otros trabajan por cuenta
propia e independiente, representando el 30%, y 1% son subcontratados, son niños
que trabajan para una tercera persona.
En el informe se señala variación en la antigüedad de los niños, niñas y
adolescentes que trabajan en la actividad minera, esta varía desde un año hasta 12
años. El 30% realiza trabajos desde hace un año, el 40% entre dos y tres años, el 30%
restante tiene una antigüedad entre 4 y 12 años. Las causas por las cuales los
menores trabajan en la actividad minera es según el informe, ayudar en la economía a
sus padres (74%), mantener a su familia (15%), para sus gastos personales (7%), para
ayudar a sus hermanos (3%), porque es huérfano (1%).
Según el informe el 65% de los niños sólo tiene 3 ó 4 años de escolaridad. El
salario devengado es inferior al salario mínimo de los adultos, a pesar de trabajar más
de 8 horas diarias. Con respecto a la salud, los niños, niñas y adolescentes corren
42
riesgos de enfermedades respiratorias, calor excesivo, exposición a sustancias
nocivas, traumatismos, entre otros.
A pesar de que Bolivia ha ratificado convenios internacionales de erradicación
del trabajo infantil y elaborado leyes nacionales en protección del niño y del
adolescente, son pocas las acciones concretas que se han ejecutado para disminuir la
incorporación cada vez mayor de mano de obra infantil en las distintas actividades
económicas. El Código del niño, niña y adolescente (1999), ha establecido
ampliamente las normas de protección. Señala textualmente “todo adolescente tiene
derecho a la protección en el trabajo, a la formación integral y a la capacitación
profesional de acuerdo con su vocación, aptitudes y destrezas” (art. 125), “Se fija en
14 años la edad mínima para realizar un oficio. Los empleadores garantizarán que el
trabajo no perjudique sus salud física, mental ni el ejercicio de sus derechos a la
educación, cultura y profesionalización” (art. 126), “El salario será establecido de
acuerdo a las normas vigentes, en ningún caso será menor al salario mínimo
nacional” (art. 129). “Queda prohibido el desempeño de oficios peligrosos,
insalubres y atentatorios a su integridad” (art. 133).
A pesar de estas normas, a los niños, niñas y adolescentes trabajadores de
Bolivia le son incumplidos sus derechos, al tener que trabajar abandonando la
escuela, laborar todo el día, recibir una remuneración por debajo de la mínima legal,
estar expuestos a riesgos en su salud, y a explotación laboral.
Para el caso de Venezuela, el Informe presentado por el Instituto Nacional del
Menor en conjunto con el Fondo de las Naciones Unidas para la Infancia (1997),
indicaba que en el país para ese año, un millón y medio de jóvenes entre 14 y 17 años
trabajaban, por lo cual fueron considerados menores en estrategia de sobrevivencia,
de los cuales más de un millón (1.076.000) se dedicaban a la economía informal,
301.746 a la formal, en donde han sido víctimas del mal trato por parte del patrono,
43
no se les pagaba la remuneración correspondiente, no se respetaban los horarios de
trabajo, no estaban protegidos por sistemas de seguridad social; y 206.600 se
desempeñaban en actividades marginales de ingreso como la prostitución, robo,
tráfico de drogas, mendicidad. El 72,5% de los adolescentes trabajadores no estaba
asistiendo a ningún centro de enseñanza.
En Venezuela de acuerdo al estudio realizado por Martínez y Blanco (1999),
se dan a conocer las condiciones de trabajo y salud de niños, niñas y adolescentes del
sector agrícola, en una comunidad agrícola rural del Estado Aragua. En el estudio se
identificaron 154 niños, niñas y adolescentes trabajadores, detectándose que el
51,7% pertenece al grupo femenino con edades entre 7 y 12 años. El grupo estudiado
inició su educación básica entre los 7 y 9 años. El 98% pertenece a una familia
nuclear completa. Las edades en las cuales los niños y niñas comenzaron a trabajar
fue de 7 y 11 años de edad (60%), las causas por las cuales se iniciaron en el trabajo
fue por ayudar a sus padres en los gastos, reportándose que el trabajo es realizado en
forma permanente, en una relación de trabajo de tipo familiar. En cuanto a las horas
que laboran los niños, niñas y adolescentes es de 4 a 8 horas diarias, siendo la
actividad más frecuente la recolección de frutas. En relación a la remuneración, el
informe señala que sólo el 72,4% la recibía.
Con respecto a la exposición a factores de riesgo, el informe indica que el
calor es un riesgo de gran magnitud, seguida por el efecto del sol y los plaguicidas.
El niño y adolescente trabajador ha sufrido algún accidente de trabajo como heridas
por herramientas cortantes en el 60% de los casos. El 80% no utilizaba equipos de
protección personal por lo que estaban expuestos a enfermedades por la
contaminación con plaguicidas. Se reportaron enfermedades como infecciones de la
piel, alteraciones respiratorias, síndrome viral.
44
El informe además puntualiza que estos niños, niñas y adolescentes
trabajadores vivían con sus familias en precarias condiciones económicas, con
sistemas inadecuados de suministro de agua potable y disposición de excretas. El 7%
vivían en hacinamiento.
En Venezuela, la población de adolescentes entre doce y dieciocho años, tiene
una cifra significativa de 3.324.562, de acuerdo al último Censo Nacional
(INE,2.001). Los datos revisados también indican que de cada 100 alumnos que
ingresan al primer grado sólo el 55% sale de sexto grado y el 32% logra cumplir la
educación básica en su tercera etapa, logrando sólo el 17% cumplir la educación
media (INE, 2.001), esta situación de abandono escolar, unida a la dificultad social y
económica, lleva a estos jóvenes a enfrentar su inserción, tanto a la actividad
productiva como a la vida social, con desinformación, y con poca preparación.
Al ingresar al campo laboral sin ninguna capacitación previa para el trabajo,
se hace presente la posibilidad de que sean sometidos a un proceso de explotación,
bajos salarios, largas jornadas de trabajo, no sean registrados como trabajadores ni
exista un contrato firmado, no tengan acceso a ningún tipo de seguridad social o que
en el ambiente de trabajo predomine la informalidad, donde los adolescentes estén
expuestos a importantes riesgos para su desarrollo.
El problema toma mayor relevancia en Venezuela a partir de la década del
ochenta, cuando en el país comienza un proceso de desequilibrio por la aplicación de
políticas económicas que van a influir en los recortes del gasto social, por lo que las
familias van a ver disminuidos sus ingresos, debido a que el aporte del padre y la
madre que trabajan para el núcleo familiar va a ser insuficiente, y, sobre todo, se
agudiza en numerosos casos donde la cabeza de familia es sólo la madre por la
ausencia del padre, o es sólo el padre quien aporta recursos al hogar, sin pasar por
alto el caso en el que ambos, padre y madre, puedan carecer de empleo estable.
45
Ante el empobrecimiento de la familia los demás miembros tienen que ir en
busca de trabajo, y entre éstos, los hijos menores en edad escolar, de los cuales
muchos abandonan la escuela para poder cumplir una rutina de trabajo o trabajarán
asistiendo a la escuela, compartiendo los estudios y el trabajo. Pero el problema se
sigue manifestando porque un 32% de alumnos es el que logra cumplir la tercera
etapa de la educación básica y al egresar de la misma el educando no ha logrado
preparación alguna que lo califique para el trabajo.
Venezuela, en el inicio de la década de los ochenta, se caracterizaba por la
agudización de los problemas económicos, sociales y políticos. Los problemas de
margina1idad, la pobreza crítica, la inseguridad personal, la precaria situación de los
servicios básicos, la ausencia de espacios de participación, el deterioro de los valores
éticos y la baja capacidad de organización de la sociedad civil. Esto, aunado a un
modelo de desarrollo económico agotado, donde la política económica en los últimos
años agravó más la situación social al generar una acelerada inflación, una desmejora
significativa del salario, un incremento marcado del desempleo y del sector informal,
ha afectado sensiblemente a los segmentos pobres de la población (Banco Central de
Venezuela, 1.985).
La década del noventa, de acuerdo a datos del Informe Económico del Banco
Central de Venezuela (1995), se caracterizó por el desfase en la instrumentación de
un programa económico global orientado a corregir los desequilibrios que han
afectado a la economía en los últimos años, destacándose en particular la ausencia de
un plan fiscal que diera viabilidad a la gerencia de las finanzas públicas en el
mediano plazo y coadyuvara al proceso de estabilización económica.
En el aspecto social, la crisis tiende a profundizar las diferencias ya existentes
entre los grupos que componen la sociedad venezolana, acelerando, por una parte, la
concentración de la riqueza en grupos financieros y rentistas y, por la otra, generando
46
el empobrecimiento de la clase media profesional y aumentando el porcentaje de la
población en situación de pobreza crítica. Resulta ilustrativo en el aspecto social
el estudio de estratificación realizado por la Fundación Centro de Estudios sobre
Crecimiento y Desarrollo de la Población Venezolana (FUNDACREDESA 1.991)
que permite la comparación de datos y obtener evidencias de la situación de
pobreza (Ver cuadro 3).
A comienzos de la década del noventa, en Venezuela el porcentaje de la
población total en situación de pobreza (estrato IV) y pobreza critica (estrato V) se
mantiene alrededor del 80%, donde las posibilidades de movilización hacia el estrato
III son muy escasas si se toma en cuenta las cifras de alta tasa de desempleo y los
bajos salarios suministrado por la Oficina Central de Estadística e Informática (OCEI,
1995), hoy denominada Instituto Nacional de Estadística (INE) y el Informe del
Banco Central de Venezuela. Por el contrario, se observa un crecimiento del estrato V
y una disminución del estrato IV, indicando movilidad descendente y profundización
de la desigualdad que siempre ha caracterizado a nuestra sociedad.
Cuadro 3
Estratificación de la Población Venezolana. Comparación año 1.982 y 1.990
1 .982 1 . 990
Estrato I 1% 1,05%
Estrato II 5% 6,52%
Estrato III 14% 13,35%
Estrato IV 42% 35,73%
Estrato V 38% 43,35%
Fuente FUNDACREDESA. Proyecto Venezuela. 1.991
47
En un estudio de los estratos sociales venezolanos realizado por León (2.002),
éste afirma que la clase media (estrato C) pasó de representar el 27% de la población
total en 1.979 a 17% en el 2.002, lo que representa una caída de 10 puntos
porcentuales y la salida de este estrato a más de dos millones de personas en menos
de 15 años, ubicándose estas personas en los estratos inferiores de pobreza moderada
(estrato D) y pobreza crítica (estrato E), quienes representan a su vez el 38% y el 42%
respectivamente de la población total correspondiente. Agrega León que el nivel de
ingreso promedio del estrato C presenta una dispersión muy elevada, registrándose un
rango de ingresos mensuales familiares que va desde bolívares 750.000 hasta
5.000.000, para una familia típica de cinco personas, lo cual obliga a separarlos en
subgrupos, que a nivel de investigación de mercado se suelen denominar: clase media
baja (83% del estrato C), clase media (22% del estrato C) y clase media alta (5% del
estrato C). Sin embargo, acota León, el promedio de ingresos del grupo que forma el
estrato se ubica en bolívares 995.400, lo que podría indicar que la mayoría de los
miembros de la clase media se ubica en la zona fronteriza con los estratos de pobreza
moderada.
En el aspecto educativo, la educación venezolana presentó síntomas de
agotamiento y debilidad de sus estructuras. Los resultados obtenidos en la educación
venezolana, vistos a través de los informes presidenciales, los planes de la nación y
las memorias y cuenta del Ministerio de Educación proporcionan cifras poco
halagadoras, además de que la calidad de los egresados reflejan la necesidad de una
adecuación del proceso educativo acorde con las necesidades locales del área
geográfica en la que se ubican las escuelas. La Memoria y Cuenta del Ministerio de
Educación de 1.995 señala el alto porcentaje de deserción escolar y de alumnos
repitientes en la educación básica.
Para el año 2.000, según cifras del Ministerio de Educación, Cultura y
Deporte (MECD), estaban incorporados a la Educación Básica 4.448.422 alumnos;
48
de éstos pertenecen a la educación pública 3.690.482 alumnos y a la privada 757.940,
con un número de repitientes de 1º a 9º grado de 348.858 alumnos, y de 167.850
alumnos desertores, observándose la mayor repitencia y deserción tanto en primer
grado como en 7mo grado.
En el orden social, de acuerdo a datos suministrados por España (2.003) en el
foro “Acuerdo Social para la Superación de la Pobreza y el Desarrollo”, en Venezuela
existe un millón de excluidos sociales aproximadamente. Estos excluidos
simplemente ocupan un lugar en la dimensión física del país, enriqueciendo los
indicadores de pobreza; al estar excluidos no trabajan ni se educan. El reporte indica
que estas familias llevan más de 24 años encaminadas hacia el epicentro de la
pobreza, ocupando los jóvenes un 38% del grupo. En pobreza extrema viven
aproximadamente 800.000 familias englobadas dentro de un déficit habitacional
superior a los 1.8 millones de viviendas, más de 600 mil familias de bajos recursos
viven en ranchos. Los datos también señalan que a nivel educativo más de 652.000
niños entre 3 y 6 años no asisten al preescolar, 142.000 niños de 7 a 12 no asisten a
la educación básica en su primera y segunda etapa y 208.000 adolescentes entre 13 y
15 años no se encuentran en programas de educación básica en su tercera etapa.
En el orden social García (2.003), también en referencia a Venezuela,
puntualiza que al cierre del 2.002, la pobreza alcanzó a 72% de la población, mientras
que el 35% está en situación extrema. Para el economista del IESA, lo grave es que
la pobreza genera dificultades al crecimiento económico, porque está asociada a un
capital humano poco productivo que no tiene suficientes años de escolaridad ni
formación. A su vez, es de la idea, de que para reducir la pobreza se requiere un
mínimo de consenso entre los grupos políticos del país, autonomía de las
instituciones, respeto a las minorías y un ambiente propicio para la inversión privada
que permita movilizar el aparato productivo.
49
Por su parte, el Centro de Documentación y Análisis Social (CENDA, 2.003),
indicaba la existencia para el mes de enero de 2003, de 5.379.662 personas en el
sector informal (60%), 2.900.000 desocupadas (25%), y mientras la cesta básica
alimentaría con 56 productos de consumo masivo aumentó a casi cuatrocientos mil
bolívares, la población con salario mínimo sólo podía acceder al 50% de sus
productos. En este sentido, aún cuando el Instituto Nacional de Estadísticas (INE,
2.003) señala que son 4.953.706 (51,8%) de trabajadores informales y 2.300.000
desocupados, (19,8%), y una tasa de ocupación de 80,2%, y a su vez coloca la canasta
alimentaría en 256.000 bolívares, es de destacar que en uno y otro caso no deja de
llamar la atención que las cifras son relevantes para considerar como crítica la
situación de un significativo sector de la población del país.
En caso de que las cifras suministradas reflejen exactamente la realidad,
constituirían algunas evidencias de la situación de desempleo, subempleo,
deficiencias en el salario, carencia habitacional, niños, niñas y adolescentes
excluidos de los programas educativos, una parte importante de la población no está
protegida por la Ley del Trabajo, ni goza de seguridad social, esta situación conduce
a reflexionar acerca de la situación de pobreza y sin escolaridad en que se encuentra
un porcentaje elevado de la población venezolana.
El deterioro económico, social y educativo, que son factores que inciden en la
pobreza, si bien estos han continuado en los últimos años, desde el año 1.980 ha
venido ocurriendo el crecimiento sostenido del mismo, y de forma gradual se han ido
haciendo recortes en el gasto social, los cuales golpean sobre todo a la educación, la
cual se ha visto disminuida, tanto por la carencia de recursos, como por un basamento
en un enfoque rígido y tedioso en planes de estudio inadecuados y remotos en la vida
de los niños, niñas y adolescentes.
50
En Venezuela, el hecho que haya un número elevado de niños, niñas y
adolescentes no incorporados al sistema escolar, ya sea por deserción, por repitencia
o por exclusión, en una situación de pobreza extrema, que han tenido que incursionar
en el mundo laboral sin estar preparados desde el punto de vista de la educación,
refleja la necesidad de buscar soluciones para atenderlos, para que puedan
incorporarse en forma útil a la sociedad.
Este problema no sólo es de Venezuela, sino que es una tendencia común,
teniendo mayor evidencia, desde la década del noventa en los países
latinoamericanos, donde los adolescentes entre 13 y 17 años en un porcentaje
importante no continúan su escolaridad, por la necesidad de incorporarse al campo
laboral, aunque no posean preparación, deben contribuir con el sostenimiento de la
familia.
Al revisar algunos datos del contexto socio – económico y educativo de
países como Colombia, Perú, Brasil, Argentina, México, Chile, Paraguay y Uruguay,
vistos a la luz del Informe UNICEF (1997) sobre el estado mundial de la infancia, de
la red Latinoamericana de Educación y Trabajo (CIID – CENIEP, 1995), del
seminario subregional sobre Educación para el Trabajo y Lucha contra la Pobreza en
América Latina, y de la IV Conferencia Iberoamericana de Ministros de Educación
(1.993), coinciden en señalar que estas naciones se ven afectadas permanentemente
por la inestabilidad económica y financiera, los programas de ajuste estructural
impuestos a las economías en desarrollo por el Banco Mundial y el Fondo Monetario
Internacional (FMI), ocasionaron recortes al gasto social golpeando en forma
desproporcionada a la población en estado de pobreza; esos recortes del gasto social
afectan a la población produciendo desempleo, reducción de los ingresos
provenientes del trabajo (salario real), extensión del sector informal, baja calidad de
los servicios sociales básicos (salud, educación), elevadas tasas de pobreza,
desigualdad en la distribución de los ingresos, delincuencia común e inseguridad,
51
todo lo cual compromete las condiciones socio económicas de la familia, en especial
la de menores recursos económicos, y obliga a todos sus miembros, incluyendo los
menores en edad escolar, a buscar alternativas laborales para lograr su sustento.
Como consecuencias inmediatas se producen la deserción y la repitencia
escolar, que unidos a la reducción de presupuestos educativos alejan las posibilidades
de una mejor educación. El informe UNICEF de 1.997 señala que en América Latina
se redujo el gasto por alumno en la enseñanza básica; la educación ha estado
subfinanciada y en declive y basada en un enfoque rígido y tedioso, con planes de
estudio inadecuados y remotos en relación con la vida de los niños; del 30% al 60%
de los niños no termina la formación básica. Preocupación que ha llevado a que en el
año 2000, 189 Estados miembros de las Naciones Unidas se hayan comprometido a
cumplir para el año 2015 los objetivos del milenio, entre los cuales están lograr la
enseñanza primaria universal.
Por otro lado, y en atención a la explicación del problema, siguiendo los
postulados popperianos (Popper, 1986), en el problema se evidencia la asincronía
existente entre la normativa jurídica propia de algunos de los países latinoamericanos
en estudio, a través de la cual se busca proteger los derechos de los niños, niñas y
adolescentes trabajadores y la realidad social y económica que presentan estos países.
Así la Convención de los Derechos del Niño, adoptada por las Naciones Unidas en
1989, reconoce el derecho de todo menor de 18 años a estar protegido contra la
explotación económica y contra el desempeño de cualquier trabajo peligroso que
entorpezca su educación o pueda ser nocivo para su salud, y desarrollo físico, mental
o moral. Este instrumento reconoce la condición vulnerable de la infancia y le
concede el derecho a recibir cuidados y asistencia especiales.
El Convenio Internacional 138 de la OIT de 1973, establece la edad mínima
de admisión al empleo en concordancia con el final de la escolaridad obligatoria, o en
52
todo caso a los 15 años, pero permite bajar el límite a los 14 años para los países con
un sistema educativo o económico de desarrollo insuficiente. Dentro de esa
excepción, y para permitir una ratificación más amplia del Convenio, la OIT deja
abierta la posibilidad de que los Estados establezcan la edad mínima de 12 años para
los trabajos ligeros, entendidos como aquellos que no comprometan la salud,
educación o moralidad del niño y que no supere las 14 horas semanales.
En el año 1999, la adopción del Convenio 182 de la OIT sobre la erradicación
de las peores formas del trabajo infantil, estableció un hecho fundamental en la
protección de los derechos de la niñez. El texto adoptó medidas urgentes para
erradicar aquellas formas de trabajo infantil que ponen en peligro a los niños. Entre
ellas figuran la explotación sexual, comercial, la esclavitud, el reclutamiento de niños
como combatientes en conflictos armados y el trabajo infantil doméstico.
De igual forma, la Constitución de los diferentes países protegen los derechos
de niños, niñas y adolescentes trabajadores. Así para la Constitución Política del
Perú (1993) “El trabajo en sus diversas modalidades, es objeto de atención prioritaria
del Estado el cual protege especialmente a la madre, al menor de edad y al impedido
que trabajan” (art. 23). La Constitución Política de Colombia (1991), en su artículo
44 define el desarrollo integral de la niñez como responsabilidad de la familia, la
sociedad y el Estado y llama a la protección contra toda forma de abandono, violencia
física o moral, abuso sexual, explotación laboral o económica y trabajos riesgosos
para las personas menores de edad. Prevaleciendo los derechos de la niñez sobre los
de los demás. Así mismo, la Constitución de Ecuador (1998), señala la obligación del
Estado de adoptar medidas que aseguren a los niños, niñas y adolescentes garantías;
entre estas “protección especial en el trabajo y contra la explotación económica en
condiciones laborales peligrosas, que perjudiquen su educación, o sean nocivas para
su salud o desarrollo personal” (art. 50).
53
Para la Constitución de la República Bolivariana de Venezuela (1999),
también es prioritario la protección de la familia, así como los niños, niñas y
adolescentes, cuando expresa “El Estado protegerá a las familias como asociación
natural de la sociedad . . .” (art. 75). “Los niños, niñas y adolescentes son sujetos
plenos de derecho y están sometidos a la legislación, órganos y tribunales
especializados...”(art.78), agregando además el artículo “... los cuales respetan,
garantizan y desarrollan los contenidos de esta Constitución, la ley, la Convención
sobre los Derechos del Niño y demás tratados internacionales que en esta materia
haya suscrito y ratificado la República” (art. 78). “Toda persona tiene derecho al
trabajo y al deber de trabajar. La libertad de trabajo no será sometida a otras
restricciones que los que la ley establezca . . .” (art. 87).
Por su parte, la ley de educación de los distintos países latinoamericanos
ratifica a la educación como un derecho humano y un deber social fundamental, la
misma debe ser democrática, gratuita y obligatoria.
A su vez, el ratificar los Convenios Internacionales ha llevado a los diferentes
países a crear una nueva generación de códigos o de leyes de niños, niñas y
adolescentes donde se manifiesta el interés superior del niño, el derecho a estudiar, a
jugar, al descanso, recreación, a la información, derecho a opinar y ser oído, derecho
a la protección en materia laboral, entre otros. En referencia a lo anterior, el Código
de Niños y Adolescentes de Perú (2000) señala “El niño y el adolescente son sujetos
de derecho, de libertades y de protección específica . . .” (art. 2). “El Estado
garantizará la Educación Básica . . .” (art. 15). “El Estado garantizará modalidades y
horarios escolares especiales que permitan a los niños, y adolescentes asistir
regularmente a sus centros de estudio” (art. 19). Igualmente el Código de la Niñez y
Adolescencia de Ecuador (2003), garantiza la protección integral que el Estado la
sociedad y la familia deben asegurar a todos los niños, niñas y adolescentes con el fin
de lograr su desarrollo integral y el disfrute de sus plenos derechos en un marco de
54
libertad y equidad, protegiendo a los niños, niñas y adolescentes en el artículo 81 al
derecho que tienen contra la explotación laboral.
En ese mismo orden de ideas, en Venezuela, la Ley Orgánica para la
Protección del Niño y del Adolescentes (1998), le garantiza a los niños, niñas y
adolescentes el derecho de “ser cuidados por una familia” (art. 26), “a un nivel de
vida adecuado” (art. 30), “ a la salud y servicios de salud” (art. 41), “derecho a la
educación” (art. 53), “educación para niños y adolescentes trabajadores” (art. 59), “la
protección en el trabajo” (art.94).
Aunque se ha avanzado en materia jurídica, donde se protegen los derechos de
niños, niñas y adolescentes, no ha ocurrido la debida correspondencia o sincronía
con la situación económica y social de los países objeto de estudio, donde viven
éstos, los cuales presionados por la pobreza de sus familias se han visto obligados a
dejar de lado roles y conductas propias de su edad como son el juego, su asistencia a
la escuela, la salud, lo cual tiene un costo elevado para la vida de niños, niñas y
adolescentes y sus familias, pero también para la sociedad. El que los niños trabajen
es un problema que tiene que ver con la pobreza y la pobreza extrema, así como con
la inequitativa distribución de la riqueza social.
Los informes de organismos internacionales, coinciden en señalar que algunos
países como Venezuela, Colombia, Ecuador, Perú, Bolivia, Brasil, entre otros, en la
década del noventa se vieron afectados permanentemente por la inestabilidad
económica y financiera; los programas de ajuste estructural impuesto a las economías
en desarrollo por el Banco Mundial y el Fondo Monetario Internacional , ocasionaron
recortes al gasto social que afectaron a la población, produciendo desempleo,
reducción del salario real, extensión del sector informal, baja calidad de los servicios
sociales básicos, elevadas tasas de pobreza, lo cual comprometió las condiciones
socio económicas de las familias, en especial la de menores recursos económicos,
55
obligando a todos sus miembros, entre ellos a los niños, niñas y adolescentes, a
buscar alternativas laborales para lograr su sustento.
Estudios de la Comisión Económica para América Latina y el Caribe
(CEPAL, 2000), sobre los niños, niñas y adolescentes que trabajan en las áreas
urbanas de la región latinoamericana con edades comprendidas entre 12 y 14 años,
señalan que la mayor parte de los mismos pertenecen a los estratos pobres.
Agrega el informe citado, la posibilidad incluso que muchos de los hogares no
afectados por la pobreza, serían pobres de no poder contar con el concurso laboral de
sus miembros infantiles o que muchos calificados como pobres no indigentes, serían
indigentes sin el trabajo de sus miembros menores.
Las dificultades económico sociales de la región latinoamericana conllevan a
la aplicación de políticas sociales donde esté involucrada la protección al niño y
adolescente trabajador. Se necesitan políticas sociales que permitan mejorar la
calidad de vida de la familia y la calidad de la educación escolar que son ejes
fundamentales para el bienestar de la infancia y el desmotivar el trabajo infantil.
En términos del eje central sobre el cual se mueve el interés de la presente
investigación, un problema prioritario a atender, es el presentado en el Municipio
Libertador del Estado Carabobo, concretamente entre los sectores La Guásima y El
vigía, entre los cuales se encuentra el vertedero de basura, conocido como relleno
sanitario la Guásima, el cual es atractivo para numerosas personas que presentan
signos de pobreza extrema; y en el que se observan a diario centenares de personas
hurgando en la basura, con el propósito de encontrar algunos productos alimenticios,
así como materia prima, para luego vender a empresas recicladoras. A diario se ven
adultos, niños, niñas y adolescentes, recolectando, clasificando y agrupando material
como vidrio, cartón, aluminio, plástico, piezas de metal. Las personas llegan a
56
tempranas horas de la mañana y parten a inicios de la noche, muchos con el material
recogido ya vendido y otros cargando con el material a cuestas, a destinos
desconocidos.
En el plano contextual del problema, al relleno sanitario, conocido por los
habitantes del lugar como el bote, asisten niños, niñas y adolescentes, tanto solos,
como acompañados por un posible familiar, los niños presentan diversidad de edades,
desde aproximadamente siete años, que a simple vista se ven muy delgados, y con
ropa muy desgastada, los cuales trabajan para sobrevivir y en muchos casos aportar
dinero a otras personas de su mismo núcleo familiar. La naturaleza de este trabajo es
ciertamente antihigiénica y de alto riesgo, donde pueden surgir enfermedades
cutáneas y respiratorias por inhalación de gases tóxicos, estar expuestos a condiciones
climatológicas externas como intensos rayos solares o periodos de lluvia, pudiendo
contraer enfermedades como insolación, neumonía, gripe. El transporte de pesada
carga en sus brazos o su espalda podría afectar su sistema óseo y muscular. Aunado a
lo anterior, el ingerir alimentos vencidos o sobras en estado de descomposición
puede conducirlos a trastornos digestivos e intoxicaciones.
Hacia estos niños, niñas y adolescentes que trabajan en el relleno sanitario del
Municipio Libertador, va dirigido el foco de atención de la investigación en el plano
local, sin perder de vista la estrecha relación con el entorno nacional e internacional,
en el que se encuentran millones de niños, niñas y adolescentes trabajando en
condiciones de alto riesgo.
En el Municipio Libertador, muchos de estos niños, niñas y adolescentes
trabajadores en el relleno sanitario, no están incorporados al sistema escolar, ya sea
por deserción, repitencia o exclusión, no logran cumplir la enseñanza primaria,
siendo la educación primaria como mínimo, uno de los objetivos de desarrollo de la
Organización de las Naciones Unidas a lograr para el milenio.
57
Partiendo de la intelectualización ya expuesta sobre el problema, se puede
constituir el objeto de estudio en los términos siguientes:
¿Cómo se explicitan en lo epistemológico, en el marco legal y en la práctica
social, las condiciones bajo las cuales laboran los niños, niñas y adolescentes en los
países bolivarianos?
OBJETIVOS
GENERAL
Generar un estudio, para la explicación del fenómeno del trabajo como
alternativa de sobrevivencia de niños, niñas y adolescentes en condiciones de riesgo,
y proponer una alternativa de solución que conduzca al mejoramiento de la situación
de los niños, niñas y adolescentes que trabajan en el vertedero la Guásima del
Municipio Liberador del Estado Carabobo.
ESPECÍFICOS
Estructurar un estudio explicativo al fenómeno del trabajo en niños, niñas y
adolescentes desde el contexto de los países bolivarianos.
Diagnosticar cuáles factores de orden educativo están asociados al trabajo de
niños, niñas y adolescentes en los diferentes países que configuran el concierto de
naciones reconocidas como bolivarianas
58
Determinar el nivel de participación de las organizaciones gubernamentales
en el desarrollo de estrategias para la protección de niños, niñas y adolescentes que
ejecutan actividades normadas como trabajo.
Examinar, en términos de la complementariedad del método comparado, un
segmento de la realidad social venezolana referida a la dinámica específica del
ámbito en el cual se desenvuelven los niños, niñas y adolescentes, tomando como
sujetos de estudio niños, niñas y adolescentes trabajadores en el Municipio
Libertador, del Estado Carabobo
Establecer la relación por contraste en la situación social laboral de los niños,
niñas y adolescentes en los países investigados, para la identificación de elementos
relevantes en lo correspondiente a la realidad social puntual usada como hito
referencial en Venezuela
Analizar diversas alternativas de solución aportadas por algunos países al
problema del trabajo en niños, niñas y adolescentes en condiciones de riesgo.
Presentar una alternativa de solución para mejorar la situación laboral de niños,
niñas y adolescentes trabajadores, tomando como referencia el Municipio
Libertador, del Estado Carabobo.
JUSTIFICACIÓN
Los estudios sobre el trabajo de niños, niñas y adolescentes cobran un tinte de
relevancia significativa en tanto se asume desde dos perspectivas constructivas de la
realidad social; la primera se vincula con un abordaje metódico diferenciado que se
distancia del pretendido signo del paradigma dominante en lo hipotético deductivo,
esto en razón a que tanto el trabajo como su connotación social son hechos históricos
59
innegables, cuestión que reclama un tratamiento que se deslinde del positivismo
lógico; la segunda perspectiva, tiene implicaciones con el momento histórico en el
cual los cambios que muestra la dinámica social apuntan a develar la necesidad de
búsqueda de nuevas opciones que permitan reivindicar la esperanza de inclusión de
un segmento social visto como tradicionalmente excluidos, representado en el caso
por los sujetos de indagación que sirven de centro de interés en este estudio.
Igualmente, el trabajo tiene su justificación porque permitió hacer un estudio
metodológico, sociológico, legal y epistemológico para puntualizar la existencia de
un problema social que afecta a un sector muy importante de la población como son
los niños, niñas y adolescentes y porque a través de ésta investigación se puedo hacer
un aporte significativo en términos de interpretaciones teóricas que contribuyan a
orientar las opciones viables para mejorar la situación de niños, niñas y adolescentes
trabajadores, de manera que contribuyan a mejorar sus condiciones de vida.
La realización de esta investigación, facilitó el estudio del contexto de los
países bolivarianos, proporcionando información para el examen de la situación,
económica, y social en que han estado inmersos algunos países sudamericanos como
Colombia, Perú, Ecuador, Bolivia y Venezuela durante años recientes, posibilitando
dar luces para el conocimiento y comprensión de la realidad de estos países y la
identificación de los problemas que los envuelven, sobre todo los relacionados con la
infancia y adolescencia en sus relaciones de trabajo que son de gran interés para la
comunidad Latinoamericana y mundial.
Igualmente, se considera que es valioso plantear un problema que se inserta en
la agenda mundial de investigación y buscarle una posible alternativa de solución,
aunque una propuesta de solución no se pueda corroborar en un tiempo breve, ya que
los cambios requieren de tiempos largos y en consecuencia la legitimidad de lo
resolutivo exige seguimiento y control de lo propuesto en lapsos predeterminados.
60
Por otra parte, el presente estudio permitió visualizar como algunos países,
atendiendo a su situación y dinámica propia han tratado los problemas de los niños,
niñas y adolescentes trabajadores y han intentado buscarle soluciones, por lo que no
se trata de imponer modelos de un país a otro, sino de obtener una visión universal,
regional y local para tratar de hacer una aproximación a las aristas interpretativas del
problema en el plano social y que sea inherente a estos países bolivarianos.
En el orden metodológico, el estudio recupera la opción metódica
representada por la utilización de métodos comparatistas en las ciencias sociales,
desde cuyo seno se hace posible la representación exhaustiva de las realidades
contextuales sociales que demarcan similitud o diferencia en la dinámica social de las
naciones. En complementariedad con el mismo, la investigación etnográfica, en un
segmento de la población venezolana arrojó información valiosa que permitió
conocer la situación laboral de niños, niñas y adolescentes dentro del país, lo que
pudo orientar hacia una alternativa de solución posible para el grupo investigado.
61
CAPÍTULO II
MARCO TEÓRICO
En este capítulo, se discute la construcción de una idea fuerza que se deriva
como alternativa para la interpretación del problema representado por las condiciones
en las cuales laboran los niños, niñas y adolescentes en los países bolivarianos, con
énfasis en los aspectos de orden sociológico, legal y epistemológico. Esta idea se
genera entre las que tienen más relevancia para el problema, constituyéndose como
una política a seguir en la interpretación del problema a estudiar. La acción
metodológica, relacionada con la construcción de los argumentos para dejar en claro
la amplitud de escogencia de políticas disponibles y así generar una aproximación
interpretativa deviene afinación del proceso de análisis.
Aquí se habla de la posibilidad de interpretar las condiciones bajo las cuales se
encuentran los niños, niñas y adolescentes que participan de actividades económicas
signadas como trabajo; éste último concebido como una actividad laboral que implica
remuneración o no.
ANTECEDENTES HISTÓRICOS
La situación del niño trabajador no es una realidad reciente, tiene alcance
mundial y sus antecedentes en todas las culturas tiempo y lugares. En el siglo XIX,
los empleadores recurrieron a la mano de obra infantil ante el posible provecho que
representaba este recurso; así vieron la posibilidad de suplantar el trabajo de adultos
por niños, por representar bajos salarios, menores gastos, mejor posibilidad de
desplazamiento en lugares angostos, mayor sumisión. Fue en el trabajo de los niños,
donde resaltó a la vista el desarrollo de un régimen inhumano, pues el acceso de los
62
mismos a las fábricas fue considerado conveniente para la economía y aún para la
vida social, siendo segregados de la familia y de la escuela.
En vista de lo anterior, en la primera mitad del siglo XIX, tanto en Francia
como en Inglaterra, se redactaron informes sobre las condiciones de vida de trabajo
donde se utiliza la mano trabajadora infantil, lo que hace posible el surgimiento de
leyes de protección al menor. De acuerdo a Fernández y Campos (1997), las
primeras disposiciones legales contra el trabajo infantil se dieron en Gran Bretaña en
1802, con la promulgación de la ley para la preservación de la salud y la moral de los
aprendices en la industria del algodón. En Francia en 1813, se prohíbe por decreto el
trabajo a menores de 10 años en minas. Italia, prohíbe en 1843, el trabajo en fabricas
a menores de 9 años. Las primeras referencias constitucionales sobre la protección del
trabajo de los niños se encuentran en la Constitución de Suiza de 1874 y en la
Constitución Mexicana de 1817.
El trabajo de niños ha sido continuado, pero a partir de los últimos años de la
década del 70, se observó una mayor actuación en vista de la preocupación del trabajo
realizado por esta vulnerable población. Así, en el año 1979, año internacional de la
infancia, se vivenció como la sociedad mundial toma conciencia de la complejidad
del fenómeno del trabajo infantil, aunque la protección de los niños, niñas y
adolescentes ha sido una de las tareas asumidas por la OIT desde su fundación, y en
el año 1919 fue incluida esta protección tanto en el preámbulo como en los principios
generales de su constitución.
Igualmente, la necesidad de proporcionar al niño una protección especial,
aparecía ya enunciada en la Declaración de Ginebra de 1924 sobre los Derechos del
Niño y en la Declaración de los Derechos del Niño adoptada por la Asamblea General
63
el 20 de noviembre de 1959, y reconocida en la Declaración Universal de Derechos
Humanos.
A partir de 1990, la percepción social internacional, ante la problemática
laboral de niños, niñas y adolescentes, sufre un cambio importante gracias a una serie
de hechos que se ponen de manifiesto a favor de los derechos de la infancia: la
Conferencia Internacional de Oslo de 1997, el urgente llamado de la Convención de
los Derechos del niño, los Convenios para el establecimiento de la edad mínima de
admisión al trabajo (Convenio 138 de la OIT), y para la eliminación de las peores
formas del trabajo infantil (Convenio182 de la OIT), han llamado la atención sobre
este problema y las formas inhumanas como niños, niñas y adolescentes efectúan
estas actividades.
FUNDAMENTACIÓN TEÓRICA
La visión del trabajo desde los enfoques teóricos
1.- El orden transformacional social
Si se asume como punto de referencia la teoría del cambio social (Giddens,
1999), puede decirse que este enfoque sociológico centra la atención en las formas
como las sociedades van alcanzando giros históricos en el desarrollo, apuntalado por
la gestión de cambio que realizan los actores sociales que se desenvuelven en su seno.
Bajo este enfoque, los teóricos que destacan recientemente discuten el poder
modelador del cambio a través del trabajo como una entidad socializadora, la
consideración de la educación y la concesión de alternativas de crecimiento a las
instancias locales, para el desarrollo de sus propias potencialidades.
64
Bajo el esquema de cambio social, autores como Giddens (1999), plantean que
es tarea de la administración gubernamental consolidar la renovación política y ante
ella avanzar hacia una nueva dimensión de la organización del Estado, por lo cual se
entiende, según el autor citado, que el gobierno existe para:
-Suministrar medios para la representación de intereses diversos. -Ofrecer foros para conciliar las demandas rivales de estos intereses.
-Suministrar una variedad de bienes públicos, incluyendo formas de seguridad y bienestar colectivos.
-Promover el desarrollo activo de capital humano a través de su papel esencial en el sistema educativo.
-Más discutidamente, tener una meta civilizadora el gobierno refleja normas y valores ampliamente aceptados, pero también puede ayudar a moldearlas, en el sistema educativo y fuera de él (p. 62).
Los criterios de Giddens, dirigen las expectativas sociales hacia el examen de
las ejecutorias de los llamados gobiernos centrales, que en el caso venezolano se
corresponde a los término de las políticas públicas en las cuales se enmarca la
protección social a los niños, niñas y adolescentes trabajadores, acción que se
armonice en la exaltación de los derechos humanos que le son legalmente asignados a
este segmento poblacional. En este sentido, la proyección que asuma la protección del
Estado a las garantías sociales atinentes a niños, niñas y adolescentes, puede a la par
de convertirse en una opción que apunte al bienestar económico y social de estos
grupos humanos, impactar positivamente la calidad de vida de los sujetos
involucrados.
Una acción sostenida, en función de exaltar el poder socializante del trabajo o
de cualquier actividad laboral, es según el autor citado, una vía relevante para
consolidar los factores que definen la cultura humanista, como opción de
preservación y protección de la población más joven, haciendo viable el enclave del
hombre en la “...globalización, las transformaciones de la vida personal y nuestra
relación con la naturaleza” (p. 80). Esto en el marco de una preocupación esencial
65
que Giddens (1999) define como justicia social, libertad, derecho y responsabilidades
ciudadanas; postulados que se hacen coincidentes en la práctica discursiva con los
contenidos generales de las leyes que dan protección al niño y al adolescente.
Los criterios sostenidos por el autor referido, implican una devolución del
poder, bajo una racionalidad de responsabilidad social, a la sociedad civil, cuestión
que coincide con el interés de promover la democratización de la democracia. Tal
criterio se manifiesta en la concesión a la sociedad de nuevas potestades, pero el
modo en que estas son utilizadas deberán ser reguladas por el Estado; es en esta
instancia en la cual cobra relevancia la propuesta de una alternativa para la
interpretación de las condiciones sociales y legales a través de las cuales se atiende la
necesidad de garantizar los derechos fundamentales que son aplicables a los niños,
niñas y adolescentes trabajadores.
En esta instancia, la teoría del cambio social sostenida por Giddens, permite
explicar la intencionalidad de una nueva opción para incorporar cambios en la
orientación de las políticas públicas cuando se coloca en conjunción con las
expectativas sociales de cada nación; que en el caso, centran su interés en los sistemas
que brindan atención a los niños, niñas y adolescentes en situación de riesgo.
Por otra parte, Luhmann (1990) propone la comprensión o interpretación de la
sociedad como un sistema que se constituye por sus propios medios, capaz de
incorporar correcciones a su dinámica en los procesos sistemáticos, puesto que la
sociedad se configura con subsistemas como entidades generales constituidas por
sistemas particulares. La condición de sistema, tal como lo plantea el autor citado, no
desvincula la necesaria atención que la sociedad debe dar a un segmento particular de
la población, signada por la demanda de protección que le formulan los niños, niñas
y adolescentes trabajadores.
66
En el marco de estos criterios, la sociedad no es otra cosa, sino una estructura
sintética sistemáticamente constituida, de aspectos que también pueden ser
diferenciados y que aparecen como subsistemas. Así la sociedad está configurada por
varios subsistemas: educativo, económico, científico, jurídico, familiar, de trabajo y
otros tantos, que pueden ser identificados y caracterizados como tales, entre ellos, un
subsistema constituido por el espacio laboral de niños, niñas y adolescentes que
acuden a su formalización sólo como una vía alternativa para sobrevivir. Todos estos
subsistemas pueden perfectamente ser comprendidos como círculos más pequeños
dentro de un gran círculo sistemático, como espacios societarios que están
constituyendo a la sociedad en su conjunto y que cada uno de ellos está formado por
relaciones que son autoreferentes; es decir, que le vienen desde su propio interior,
facilitando los procesos de autorregulación social. De no sostenerse en la práctica este
postulado, el sistema social evidenciaría perturbaciones que revelan la inoperancia de
sus propias instancias de regulación, por ello, en ninguna sociedad vista como sistema
se plantearía soslayar de manera intencional la preeminencia en la atención a sus
futuras generaciones.
En tales términos, bajo esta concepción de Luhmann (1990), se asume que la
sociedad está conformada por hombres que piensan, con sus intenciones, con su
libertad, con sus motivos y con su sentido. Por ello, lo societal es un espacio propicio
para que los hombres actúen como sistemas dentro del sistema social mayor; de
manera que puedan tener oportunidades de construir libertades, voluntades,
necesidades, motivos y sentidos. En el ámbito particular de la demanda social
expresada por los grupos humanos de niños, niñas y adolescentes trabajadores, el
énfasis de incorporación de elementos que satisfagan tales expectativas pudieran
asociarse a los criterios de los sistemas luhmanianos, considerados como
autoreferentes.
67
En contrario, Habermas (1992) plantea la definición de la sociedad en términos
sistemáticos y subsistemáticos, que se fundamentan en la idea general de una teoría
crítica de la acción comunicativa, de manera que esta concepción es una referencia de
la imposibilidad para que los sujetos puedan salirse de la necesidad centrada en la
constitución de las relaciones o de la acción social que están realizando en función de
sus expectativas, bien por mandato normativo o bien como dictamen del lenguaje al
interior de esos subsistemas. Sin embargo, el eje central del discurso sostenido por
Haberlas, tiene implicaciones relevantes en tanto sirve de catalizador a la búsqueda de
opciones resolutivas de lo social, que faciliten la construcción de los espacios de
socialización en la interacción comunicativa humana. Si se examina el planteamiento
habermasiano de la interacción comunicativa, como contraste a lo expresado por
Luhmann, se evidencia una dificultad para ampliar los contextos de las libertades, de
satisfacción de las necesidades humanas, en la idea fuerza de imposición de sus
voluntades, sus ideales, sus valores y sus sentidos; la sociedad así vista, desde el
impulso del poder manifestado en la sujeción del otro por los discursos dominantes,
adquiere connotaciones de sistema cerrado, entiéndase, una demarcación expresa
donde prácticamente no se puede hacer más nada sino describir las acciones humanas.
Se entiende entonces que Habermas, funda su teoría en lo que puede llamarse la
razón instrumental y no tanto en la razón estratégica; reduce la explicación de la
sociedad al proceso del trabajo, a la alineación y a la esperanza explicada en que a
mayor desarrollo de la fuerza productiva, habría mayor capacidad de emancipación y
libertad de los hombres, y resulta que en las sociedades signadas por los modos de
producción capitalista, el proceso ha sido contrario, con el incremento de la razón
técnica, cuya representación implica un elevado desarrollo de la ciencias y técnicas de
producción, hay menor posibilidad de independencia; por lo cual el Estado debe
asumir como opción emancipatoria la formación integral del ciudadano a través de la
educación, con énfasis en la capacitación en experiencias laborales que le permitan
insertarse, si fuese necesario, desde temprana edad a los procesos transformacionales
68
del entorno social en el cual se desenvuelve. Esta última observación es concordante
con el objetivo central de la indagación hacia la cual se mueve la construcción de una
teoría fundamentada que conduzca a esclarecer lo nocional del trabajo como
alternativa de sobrevivencia en los segmentos sociales afectados por la exclusión.
Por supuesto que en el análisis de la concepción precedente, surgen
señalamientos sobre las perspectivas educativas, como las que indican que el trabajo
promueve el desarrollo de la socialización, la puesta en escena de las actitudes y
aptitudes, la generación y adaptación de capacidades, todas apegadas
fundamentalmente a la razón instrumental técnica así como a la razón estratégica;
entonces, bajo este enfoque derivado del trabajo mismo, no es posible esperar un
carácter de instancia generadora de la emancipación, puesto que a mayor capacidad
de las relaciones productivas, se hace mayor la razón instrumental y eso incide en el
crecimiento de la razón estratégica; esta en la realidad, se traduce en la cesión de
espacios al discurso dominante. Así, la razón estratégica aparece como el dominio
entre los hombres, originado en la razón técnica que es dominio sobre la naturaleza.
Esta tendencia de la interacción humana es transmitida tanto por las formas más
elementales de preservación de la cultura como por la escuela y en especial por la
conceptualización del trabajo como una instancia que le es vinculante al
productivismo.
Por otra parte, Habermas (1992) plantea, en cuanto a que la razón comunicativa
-la acción comunicativa-, que ésta es el único escenario donde se puede romper la
dominación; allí aparece el hombre desde su naturalidad y con su poder
comunicacional impulsando el cambio mediante una Ciencia Social de entendimiento
crítico y hermenéutico que rompe contra la razón instrumental y contra la razón
estratégica; tal enfoque se refiere al cambio que debe dársele a la interpretación de las
condiciones bajo las cuales se ubica en la sociedad el ámbito laboral de los niños,
niñas y adolescentes.
69
Por lo tanto, la discrecionalidad de avanzar, según la norma, hacia el
reconocimiento de los derechos fundamentales de los niños, niñas y adolescentes
trabajadores hacen surgir, en términos de lo habermasiano una tercera razón, que se
llama razón emancipadora o razón comunicativa; es desde allí, tal como se ha venido
planteando, desde el único lugar donde puede gestarse un entendimiento científico
social, de ciencia crítica, de conocimiento humanístico que también se llama
hermenéutico, que pone en su sitio, que desecha el conocimiento de la razón
estratégica (dominio del centralismo sobre la gente) y del dominio de la naturaleza
que es la razón instrumental. La razón instrumental, entonces, es el conocimiento de
la ciencia y de las técnicas para el dominio de las fuerzas naturales, es el dominio del
poder de la información como red comunicacional para ejercer el sometimiento de los
menos informados, es la razón instrumental de la economía contra la que
necesariamente se debe romper, esta razón instrumental es la que justifica el soslayo
ya tradicional del modo de vida en el cual se desenvuelven los niños, niñas y
adolescentes evidenciados en condición de riesgo y que hacen de actores laborales en
cualquier nudo crítico de nuestra sociedad actual.
Así, desde el criterio Habermasiano, la razón estratégica es la del dominio. La
sociedad capitalista tiene una razón estratégica, además de tener una instrumental,
técnica, de dominio del hombre sobre la naturaleza, tiene una relación de dominio de
unos hombres sobre otros hombres. Contra esas dos razones es que Habermas (1992)
propone una tercera, la razón comunicativa o acción comunicativa, concebida como
la única que puede modificar el marco de las otras dos razones; postulado en el cual
guardamos acuerdo, en tanto sirve de norte para delinear la opción resolutiva que
puede derivarse de una nueva noción asociada a la facilitación de la inserción laboral
de un sujeto afecto a la formación en dominios cognoscitivos y operacionales de lo
laboral, sin que ello signifique potencialmente una vía de escape, no pensada, a la
responsabilidad de la sociedad de formar en y desde lo educativo a sus nuevas
generaciones.
70
En tales términos, la tercera razón, la comunicativa, reedifica tres aristas
teóricas que vislumbran el interés por propugnar un reposicionamiento del poder
local, constituido en la práctica social en: un interés técnico, un interés práctico y un
interés emancipatorio, que en lo particular del presente estudio, esclarezca las
concepciones del trabajo infantil y abra las brechas para entenderlo como parte de la
necesaria tutela sociedad-estado, como responsabilidad compartida, para garantizar
atención a la expectativa a los segmentos que se mantienen como signos de exclusión
derivados de la visión económico-social que prima el productivismo y no la
condición humana de la persona.
Así, Habermas advierte:
¿Los capitalistas pueden estar interesados en una razón emancipatoria? No, ellos están interesados en una razón de dominio. ¿Entonces quién puede estar interesado en una razón emancipatoria? ¿Quién? Pocos y pocas, y ¿Cuándo la pueden adquirir? ¿Cuándo la adquieren? Cuando sean capaces culturalmente de entender que la razón instrumental y la razón estratégica nos lleva por mal camino a todos y no nos conviene incluso por inseguridad y tampoco nos conviene por inhumanidad que rompan con la cultura que me han inculcado de razón instrumental y de razón estratégica, por que no nos conviene como alta cultura, tiene que haber una tercera cultura que diga que rompemos contra esa cultura porque es el único camino de nosotros sentirnos como solidarios, como participes, como humanos (esto es la razón emancipatoria) (p. 193).
Tomando como referencia el planteamiento teórico ya expuesto, se puede
entonces avanzar a proponer cambios radicales en la interpretación de la dinámica
social que revela participación de los niños y niñas en actividades económicas que
pueden ser catalogadas como laborales, en las cuales los actores sociales
mencionados interactúan en condiciones que en lugar de viabilizar el logro de
mejores niveles en la calidad de vida hacen evidente la generación de distorsiones
que inciden negativamente en las condiciones de trabajo, sometiéndose a situaciones
más bien de riesgo para su desarrollo integral.
71
Aquí surge el interés de aplicar el contenido de la teoría como soporte del
cambio que se propugna en la direccionalidad dada a la presente investigación:
asumir los aportes de la comprensión de la dinámica social para avanzar en el
mejoramiento del tratamiento que se da al niño y al adolescente trabajador en el
marco de los cambios que muestra actualmente la sociedad venezolana.
2.- Concepciones sobre el término trabajo
El trabajo como fundamento del vinculo social, por ser el principal cauce de
la socialización y de la integración social, constituye el principal soporte de la
sociedad, va a permitir el aprendizaje de la vida social y la constitución de
identidades, igualmente representa la medida de los intercambios sociales, es decir
que se refleja en la norma social y en el principio básico del mecanismo de
contribución y retribución sobre el que descansa el vinculo social, además va a
contribuir a que todos los procesos individuales o colectivos asociados al trabajo,
tengan una utilidad social, por lo cual el trabajo se convierte en un ámbito de
encuentros y de cooperación diferente a la familia.
En este sentido Smith (1990) y Marx (l986), señalan que el trabajo es el
vinculo social que relaciona forzosamente a los individuos y los obliga a cooperar y a
conectarse dentro de una red de mutua dependencia, esta arista social del trabajo es
muy peculiar porque representa la coexistencia pacifica, impuesta entre individuos
relacionados por el intercambio mercantil y material, de forma que este intercambio
solo tiene Interés social en la medida en que den lugar a la sociabilidad la cual se va a
ver reflejada en la riqueza y el trabajo.
Para los autores señalados la riqueza sólo se hace visible a través de los
objetos, fabricados por los individuos que han puesto una parte de su trabajo y que
72
son comprados a cambio de un trabajo equivalente, es así como el trabajo no solo es
la medida de las cosas, sino que es además la condición necesaria para el vinculo
social. En tal sentido cabe resaltar que especialmente Marx, en sus escritos sobre el
capital, señala que el trabajo representa la primera necesidad vital y es percibido
como puro vinculo social, ya que el trabajo de cada uno será al mismo tiempo obra
inmediatamente social, es decir que se realiza para ser apreciado por los demás, ya
que las relaciones son relaciones de expresión donde la sociedad se convierte en un
amplio escenario sobre el que cada uno viene a presentar lo que es su trabajo.
El trabajo visto en el ámbito tanto de la obra, como del vínculo social, se
tiene como una concepción radicalmente opuesta y diferente a la que ve el trabajo
como más sustancial y cuyo origen no puede residir en la producción.
Al respecto Habermas (1997), sostiene que el trabajo no es más que una
relación del hombre con la naturaleza que constituye un sistema para la satisfacción
de las necesidades, y también permite el establecimiento de relaciones sociales, de
modo que el trabajo sería la causa y razón de las relaciones sociales, donde los
posicionamientos en el sistema productivo determinarían todo los demás,
convirtiéndose así en su única modalidad. Habermas, demuestra que la interacción
no puede reducirse al trabajo, es decir que las relaciones sociales no se reducen a las
relaciones de producción, ni a la política, ni a la economía ni tampoco el diálogo a la
producción.
Igualmente Arendt (1998), sostiene que el trabajo constituye el centro de la
sociedad y el vinculo social principal, lo que significa defender una concepción muy
pobre del vínculo social y suponer negar que el orden político tenga una especificidad
que lo distinga del orden económico y de la regulación social, lo que supone olvidar
que la sociedad tiene otros fines además de la producción y de la riqueza y que el
73
hombre dispone de otros medios de expresión además de la producción y el
consumo.
La misma autora, afirma que estas concepciones son radicalmente opuestas al
vinculo social, ya que para una el trabajo en un vinculo económico, para otra este
vinculo es político, pero lo que si es cierto es que el trabajo sirve para satisfacer las
necesidades y es además origen y sinónimo del vinculo social.
El trabajo como ámbito de aplicación de intercambios mercantiles, no tiene
relevancia como vinculo económico, ni político, sino que se pueden percibir como
ambas tradiciones quedan ligadas a las ideas modernas que hacen del trabajo obra y
vinculo social y que además desempeña funciones macro sociales, lo que supone
que el trabajo asume una función eminentemente de fortalecimiento de las
solidaridades colectivas, es decir supone el modo moderno de estar juntos y de la
cooperación, lo que va a permitir que los individuos participen de la relación social
principal y de la relación trabajo, que al integrarse de esta forma en la comunidad se
produce la relación social en la sociedad llamada empresa.
El trabajo constituye la condición de toda vida humana y a decir de
Vialatoux (1962), el trabajo está ubicado en la articulación de lo espiritual con lo
biológico, donde la vida animal se distingue de la humana porque esta es una vida
laboriosa y vida espiritual, laboriosa porque el trabajo para poder tener efecto se
requiere de materia y espíritu ya que el trabajo deriva históricamente como lo más
Propio del individuo humano
En este mismo sentido, se afirma que el hombre no puede prescindir del
trabajo para lograr su desarrollo, de forma que del trabajo nace la interacción entre
el hombre y la naturaleza, de la cual él forma parte, pero que con su acción la
74
transforma, para transformarse a sí mismo, lo que significa que cuando el hombre
construye y modifica el mundo material, se construye y se modifica a sí mismo.
La actividad desarrollada por el hombre debe ser cumplida en beneficios de
otros o de la sociedad en general, para tener derechos y deberes que permitan al
individuos la obtención de beneficios mediante el trabajo, que en muchas situaciones
va a estar regulado por normas, usos, costumbres o tradiciones, pero que de cualquier
manera limitan la libertad del individuo en la situación del trabajo.
Es evidente, entonces, que el trabajo constituye una actividad humana que se
realiza de acuerdo a ciertas reglas y costumbres generales que implica la aceptación
de un sistema de derechos y obligaciones dentro de un orden social general, que
permite la sociabilidad como muestra de la unidad del ser humano en la realización
misma del trabajo.
Frecuentemente, asociamos la idea de trabajo con algo que supone una pesada
carga, con un conjunto de tareas que se quiere reducir al mínimo, sin embargo el
trabajo es importante para mantener la autoestima del sujeto trabajador, porque en su
constitución, psicológica el trabajo representa para los individuos una serie de
elementos que se conjugan para generar en el hombre un valor social.
Según Giddens (2000), el trabajo en sí representa la forma de obtener
dinero para cubrir las necesidades a la hora de afrontar la vida cotidiana, igualmente
le proporciona al individuo los medios para adquirir y ejercitar conocimientos y
capacidades los cuales son aplicados en las diferentes tareas que permite realizar el
entorno laboral y la socialización del trabajo.
75
El referido autor afirma, que el trabajo es un hecho económico por que se
busca con su realización la obtención de bienes económicos para la satisfacción de
las necesidades, que permitan al individuo conservar su vida y satisfacer las
exigencias que ella impone y además permite proporcionar a la colectividad los
bienes necesarios para el beneficio de la comunidad.
En efecto el trabajo como hecho económico, es decir como factor de la
producción impone al trabajador la obligación de colaborar eficazmente con el dueño
de la materia prima para lograr las transformaciones necesarias en bienes útiles a la
sociedad.
En efecto Grint (1991), admite que el trabajo produce la transformación de la
naturaleza por el hombre para satisfacer sus necesidades y además manifiesta que el
trabajo es construido culturalmente bajo la óptica de una sociedad capitalista como
generador de riquezas materiales o inmateriales con la finalidad de hacerlas circular,
de allí que el trabajo tiene una serie de componentes objetivos-subjetivos que se
acentúan en las relaciones sociales.
Al respecto, se puede afirmar que el trabajo en las relaciones sociales esta
vinculado a los diferentes procesos que se han dado en la sociedad, desde la
revolución industrial, en la segunda mitad del siglo XIX, donde se produjo un
cambio de la teoría económica clásica al marginalismo, pasando por la época del
dominio del la teoría neoclásica en economía, el establecimiento de la teoría
keynesiana hasta el ascenso del neoliberalismo desde los años sesenta hasta la
actualidad.
El trabajo, cuando es visto como el ámbito primordial de la integración
social y de la autorrealización del hombre en sociedad, no se está estableciendo
76
distinción entre las funciones del trabajo, como es la constitución del vinculo social
y el desarrollo del individuo, las cuales deben estar basadas en un sistema, sin
embargo, a pesar que no existe distinción de las funciones del trabajo, es necesario
establecerlas para señalar que el trabajo no es en sí mismo portador de esas
funciones y que estas funciones pueden apoyarse en otro sistema ya que su
significado cambia según las épocas.
Lo que significa que las funciones que hoy desempeña el trabajo en nuestras
sociedades, en diferentes espacios y tiempo la cumplían otros medios y otros
sistemas, así tenemos que en las sociedades primitivas no era una modalidad el
entendimiento y la acción para la adquisición de los bienes escasos, ya que es
imposible conseguir en estas sociedades un significado idéntico del término trabajo,
por cuanto las actividades productivas no se diferencian de los comportamientos que
se refieran a la idea global de término trabajo, por que lo que se perseguía en este
tipo de sociedad era la producción por todos los medios necesarios de materiales y
bienes para la subsistencia.
Así se tiene que el trabajo no se realiza para beneficio personal, ni tampoco
con miras a la obtención de beneficios económicos, sino que obedece a otras lógicas
más directamente sociales, es decir que el trabajo, depende de las relaciones sociales
directas de orden general, el cual se manifiesta como obligaciones derivadas del
parentesco o de comunidad existentes entre las partes, de forma que el trabajo en
estas sociedades primitivas es visto como una suerte de competición lúdica, de juego
social, el cual sirve para hacerse ver y competir con los demás y en donde la
satisfacción de necesidades y el animo de acopio no son primordiales.
77
ASPECTOS LEGALES
1.-Los derechos del niño y adolescente trabajador según los convenios
internacionales
La Organización de las Naciones Unidas, a través de su Fondo para la Infancia
y la Organización Internacional del Trabajo, han establecido los derechos de los niños
y los lineamientos básicos para protegerlos contra cualquier forma de explotación. La
Convención sobre los Derechos del Niño adoptada por las Naciones Unidas en 1989,
reconoce el derecho de todo menor de 18 años a estar protegido contra la explotación
económica y contra el desempeño de cualquier trabajo peligroso que entorpezca su
educación o pueda ser nocivo para su salud y desarrollo físico, mental o moral. Este
instrumento reconoce la condición vulnerable de la infancia y le concede el derecho a
recibir cuidados y asistencia especiales.
El Convenio Internacional 138 de la OIT de 1973, establece la edad mínima
de admisión al empleo en concordancia con el final de la escolaridad obligatoria, o en
todo caso a los 15 años, pero permite bajar el límite a los 14 años para los países con
un sistema educativo o económico de desarrollo insuficiente. Dentro de esa
excepción, y para permitir una ratificación más amplia del Convenio, la OIT deja
abierta la posibilidad de que los Estados establezcan una edad mínima de 12 años
para los trabajos ligeros, entendidos como aquellos que no comprometan la salud,
educación o moralidad del niño y que no supere las 14 horas semanales.
En 1999, la adopción del Convenio 182 sobre las peores formas del trabajo
infantil estableció un hito fundamental en la protección de los derechos de la niñez.
El texto centró la atención mundial, en la necesidad de adoptar medidas urgentes para
erradicar aquellas formas de trabajo infantil que pone en peligro a los niños. Entre
ellas figuran la explotación sexual comercial, la pornografía infantil, la esclavitud, el
78
tráfico de niños, su reclutamiento como combatientes en conflictos armados y el
trabajo infantil doméstico.
2.-Marco regulatorio del trabajo de los adolescentes en Venezuela
Las disposiciones en materia laboral de protección al adolescente se
encuentran distribuidas en numerosas normas de la legislación venezolana, de allí que
es necesario partir de la Constitución de la República Bolivariana de Venezuela para
luego hacer revisión de la Ley Orgánica del Trabajo, el Reglamento de la Ley
Orgánica del Trabajo, la Ley Orgánica para la Protección del Niño y del Adolescente,
la Ley Aprobatoria de la Convención sobre los Derechos del Niño.
La Constitución de la República Bolivariana de Venezuela (1.999), entre sus
disposiciones constitucionales contenidas en el Capítulo V del Título III, en cuanto a
materia laboral, refiere en su artículo 87 “toda persona tiene derecho al trabajo y el
deber de trabajar . . .”, consagrando esta norma que el trabajo es un derecho y un
deber para toda persona. A su vez el mencionado artículo señala expresamente
“ … la libertad de trabajo no será sometida a otras restricciones que las que la ley
establezca …”, concatenando esta disposición constitucional con el artículo 247 de la
Ley Orgánica del Trabajo (LOT, 1.997) que permite el trabajo de menores de catorce
años y el artículo 96 de la Ley Orgánica para la Protección del Niño y del
Adolescente (LOPNA, 1.998), el cual fija en todo el territorio de la República la edad
de catorce años como edad mínima para el trabajo, se puede establecer que el
adolescente mayor de catorce años tiene el derecho y el deber de trabajar.
A su vez, la Constitución de la República Bolivariana de Venezuela en su
artículo 89 numeral 6, prohíbe el trabajo de adolescentes en labores que puedan
afectar su desarrollo integral, y expresamente señala la obligación que tiene el Estado
79
de proteger al adolescente contra cualquier explotación económica y social.
Armonizando con esta disposición, se observa que el artículo 249 de la Ley Orgánica
del Trabajo prohíbe el trabajo de menores en minas, en talleres de fundiciones, en
labores insalubres que acarreen riesgos para la vida o para la salud, y en faenas
superiores a las fuerzas del menor, o en faenas que impidan su desarrollo físico y
moral. Por su parte, la Ley Orgánica de Protección del Niño y el Adolescente en el
ya citado artículo 96, en su parágrafo primero señala “Las personas que hayan
alcanzado la edad mínima y tengan menos de dieciocho años de edad, no podrán
ejercer ningún tipo de trabajo que esté expresamente prohibido por la Ley”.
Las disposiciones anteriores, protegen al adolescente en materia laboral, si
bien es cierto que en el niño y el adolescente su derecho y deber primario es estudiar
y es responsabilidad del Estado, la sociedad y la familia que esto ocurra; también es
notorio que la situación de pobreza en que se encuentran millones de jóvenes a nivel
mundial, latinoamericano y venezolano han arrojado a los mismos al trabajo en
condiciones de explotación; por lo que es importante que las legislaciones de los
diferentes países se aboquen a la protección del niño y del adolescente en
regulaciones laborales.
En la Ley Orgánica para la Protección del Niño y el Adolescente, además de
mantener la edad mínima para trabajar en catorce años, conserva la posibilidad, por
vía excepcional y previa autorización de El Consejo de Protección, de que el
adolescente de doce a catorce años pueda trabajar.
A pesar de que el Convenio Nº 138 (1.973) de la Organización Internacional
del Trabajo, establece como regla general que la edad mínima debería fijarse a los
quince años de edad, pero debido a la realidad del país en esa materia, se optó por
establecer una edad mínima inferior, en apego a las excepciones previstas en el
Tratado Internacional, que permite hacerlo cuando así lo impongan las circunstancias
80
específicas del Estado parte. Se debe puntualizar que se fijó la edad mínima de
catorce años para cualquier clase de trabajo, aumentando su ámbito de aplicación en
relación al artículo 247 de la Ley Orgánica del Trabajo, el cual se refiere
exclusivamente a trabajos industriales, comerciales y mineros y deja afuera otros
trabajos como agrícolas, pesqueros y de servicio.
Continuando la revisión de la Carta Magna, se observa en la disposición
constitucional, lo siguiente:
Los trabajadores y las trabajadoras sin distinción alguna y sin necesidad de autorización previa, tienen derecho a constituir las organizaciones sindicales que estimen conveniente para la mejor defensa de sus derechos e intereses, así como el de afiliarse o no a ellos de conformidad con la Ley . . . (Art. 95)
Armonizando la anterior disposición con la Ley Orgánica para la Protección
del Niño y del Adolescente, se observa de la literalidad de los artículos 101 y 103, el
derecho expreso que tienen los adolescentes a la sindicación y a la huelga. Al
reconocerles este derecho se dio cumplimiento a varias obligaciones derivadas de
diversos tratados internacionales ratificados por la República, sobre todo, se otorga a
los adolescentes medios idóneos para la defensa de sus derechos e intereses en el
trabajo. Se ha establecido límites al ejercicio de los mismos que se derivan de la
condición específica de los adolescentes, respetando la importancia que tienen las
facultades legales que corresponden a los padres, representantes y responsables de la
materia.
Comparando las anteriores disposiciones con la Ley Orgánica del Trabajo
(1.997), el artículo 404 literalmente expresa “los trabajadores podrán constituir
sindicatos o formar parte de los ya constituidos y participar en la dirección y
administración sindical siempre que hayan cumplido dieciocho (18) años”. Esta
81
disposición dejaba dudas en cuanto a si para constituir sindicato y formar parte de los
existentes, o si dicha exigencia es únicamente para las funciones señaladas de último.
Duda que no fue aclarada por el artículo 149 del Reglamento de la Ley
Orgánica del Trabajo (1.999) cuando sólo señalaba que “los trabajadores menores de
edad podrán ejercer libremente la actividad sindical”. Al reglamentista le
correspondía aclarar la duda proveniente del artículo 404 de la Ley Orgánica del
Trabajo y no lo hizo. Lo cual podía interpretarse del artículo 149 del Reglamento,
como que los menores tienen el derecho de participar en la dirección y
administración sindical lo que podría implicar violaciones del artículo 404 de la
LOT.
La única limitación posible es que los menores de dieciocho años no pueden
participar en la dirección y administración sindical, ya que al establecerse la
capacidad laboral a los catorce años de acuerdo al artículo 247 de la LOT, se les
permite a los menores celebrar contratos de trabajo y ejercer las acciones
correspondientes previa autorización de su representante legal o de otras autoridades
según el artículo 248 de la LOT; y recibir los beneficios de una eventual contratación
colectiva o participar como trabajadores en cualquier conflicto o negociación; el no
poder ser promotores o afiliados de un sindicato, implicaría violación de la libertad
sindical conforme a la Constitución de la República Bolivariana y el Derecho Social
Internacional.
Este problema quedó resuelto con la Ley Orgánica para la Protección del
Niño y del Adolescente, cuyos artículos 101 y 103, reconocen para los adolescentes
únicamente el derecho de constituir y afiliarse a las organizaciones sindicales y de
ejercer la huelga, con los límites derivados del ejercicio de las facultades legales que
correspondan a sus padres o responsables, de conformidad con la ley. Se entiende
82
que estos límites son los establecidos en el Código Civil y en la Ley Orgánica del
Trabajo.
En materia de jornada de trabajo, tanto la Ley Orgánica del Trabajo como la
Ley Orgánica para la Protección del Niño y del Adolescente mantienen un número de
seis horas diarias de trabajo y treinta horas semanales, pero en la LOPNA se
introducen dos modificaciones importantes como son: a) la prohibición del trabajo
del adolescente en horas extraordinarias (Art. 102) lo cual no estaba contemplado en
la LOT representando una debilidad de la misma, pero si estaba previsto en la
derogada Ley Tutelar de Menores y es una obligación que se deriva del Convenio Nº
138 de la OIT y b) se redujo el período de descanso de la jornada de dos horas a
una hora. Esto último está en contradicción con lo establecido en la LOT que señala
en el artículo 254 que “los menores disfrutarán de un descanso no menor de dos
horas”. Por lo que es necesario recurrir al artículo 8 parágrafo segundo de la
LOPNA que señala literalmente: “en aplicación del Interés Superior del Niño,
cuando exista conflicto entre los derechos e intereses de los niños y adolescentes
frente a otros derechos e intereses igualmente legítimos, prevalecerán los primeros”.
Con respecto a las vacaciones, la Ley Orgánica del Trabajo presenta debilidad
ya que en el capítulo referente al trabajo de los menores, guarda silencio en cuanto a
los días hábiles de vacaciones remuneradas. Sólo se limita en el artículo 260 a
establecer el derecho que tienen los menores a que le coincidan las vacaciones
laborales con las vacaciones escolares. Por su parte la Ley Orgánica para la
Protección del Niño y del Adolescente aumenta a veintidós días hábiles el período de
vacaciones remuneradas de los adolescentes trabajadores, (Art. 104),
correspondiéndoles siete días más que a los trabajadores de dieciocho años. Con esto
se asegura a los adolescentes el derecho al descanso y la recreación, así como
también se buscó adecuar la legislación al Convenio Nº 138, que obliga a los Estados
partes, a otorgar un período mínimo de cuatro semanas de vacaciones.
83
Tanto la Ley Orgánica del Trabajo (Arts. 252 y 253) como la Ley Orgánica
para la Protección del Niño y del Adolescente (Art. 105), protegen al menor de los
efectos que pueda causar el trabajo sobre su salud y al respecto ambas leyes
contienen normas protectoras de la salud y señalan el derecho y la obligación que
tiene el adolescente de ser sometido cada año a un examen médico integral. Una
debilidad notoria, en la Ley Orgánica del Trabajo con respecto al trabajo del menor,
es la carencia de sanciones específicas contra las infracciones cometidas en el trabajo
del menor, al respecto la Ley Orgánica para la Protección del Niño y del Adolescente
vino a llenar este vacío, constituyendo una fortaleza al establecer sanciones
específicas y con carácter disuasivo contra la infracción de la ley en materia de
trabajo de niños, niñas y adolescentes.
En este sentido se prevé en el Título III Capítulo IX Sección Segunda, las
infracciones y sanciones referidas a la violación de las normas concernientes a la
edad mínima y al trabajo sin autorización y el registro correspondiente, el ingreso o
permanencia en el empleo sin el examen médico integral, omisión de inscripción en
el Sistema de Seguridad Social, obstaculización de inspección y supervisión del
trabajo de niños y adolescentes. Es importante puntualizar que la competencia
judicial para conocer los asuntos contenciosos de los adolescentes en materia de
trabajo, ha sido atribuida al Tribunal de Protección al Niño y al Adolescente
(LOPNA, art. 115).
A su vez, el artículo 116 de la LOPNA, indica la aplicación preferente de esta
ley en su Título II, cuando reza: “En materia de trabajo de niños y adolescentes se
aplicarán con preferencia las disposiciones de este título a la legislación ordinaria del
trabajo”. Todas estas disposiciones si bien no van a resolver la problemática del
adolescente trabajador, significan un paso importante en la protección del
adolescente, ya que el mismo va a estar resguardado contra la explotación económica
84
y contra el desempeño de cualquier trabajo que pueda ser peligroso o entorpecer su
educación, o que sea nocivo para su salud o para su desarrollo físico, mental,
espiritual, moral o social, tal cual lo señala el Ordinal 1º del artículo 32 de la Ley
Aprobatoria de la Convención sobre los Derechos del Niño (1.990).
Es necesario mencionar el Convenio Nº 81 de la Organización Mundial del
Trabajo (OIT), sobre la inspección del trabajo que señala que los estados miembros
deben velar por el cumplimiento de las disposiciones legales relativas a las
condiciones del trabajo y a la protección de los trabajadores en el ejercicio de su
profesión, tales como las relativas a las horas de trabajo, salarios, higiene y bienestar,
empleo de menores; la inspección del trabajo de menores es relevante ya que los
estados se ven obligados a inspeccionar el cumplimiento de las normas relativas a la
edad mínima, autorizaciones para trabajar y supervisión del trabajo de adolescentes.
3.-La formación para el trabajo de los adolescentes
El Instituto Nacional de Cooperación Educativa ( INCE ) adscrito al Ministerio
de Educación y Deportes ha sido un organismo rector de la formación profesional en
Venezuela, desde su creación en el año 1.959, ha centrado su practica educativa en
los principios de formación en y para el trabajo. Partiendo de la premisa que el capital
humano, altamente capacitado es factor determinante y fundamental para la
competitividad, el INCE asume la formación profesional, para lograr la inserción del
trabajo en la actividad productiva, en la economía formal o autogestionaria, así como
dotarlo de mayores posibilidades de realización personal y de participación en el
desarrollo integral del país.
La Ley sobre el INCE (1970), en su capítulo IV regula el aprendizaje de
menores. Al respecto, denomina aprendices “ los trabajadores menores de dieciocho y
mayores de catorce años, sometidos a formación profesional sistemática del oficio en
85
el cual trabajan y sin que previamente a su colocación hubiesen egresado de los
cursos de formación para dicho oficio” (art. 13). De acuerdo a lo anterior y en
correspondencia con el Reglamento de la Ley sobre el INCE (2003) “no serán
considerados como aprendices, los adolescentes con formación profesional
sistemática, previa a su ingreso al Instituto” (art. 38), esta categoría de trabajadores,
podrán seguir los cursos que organice el Instituto Nacional de Cooperación Educativa
(INCE), en iguales condiciones que las señaladas para los trabajadores adultos, salvo
las limitaciones impuestas en razón de la edad por la Ley Orgánica para la Protección
del Niño y del Adolescente y por la Ley Orgánica del Trabajo y sus Reglamentos.
Corresponde al INCE, previo acuerdo con el ministerio de Educación,
organizar y vigilar el aprendizaje de los menores trabajadores (art. 14 Ley INCE),
normativa que esta desarrollada en el articulo 39 del Reglamento de la Ley sobre el
INCE, cuando indica la correspondencia que tiene el INCE, previa consulta con el
Ministerio de Educación y Deportes, organizar y supervisar el aprendizaje de los
adolescentes trabajadores en todo el país, sin perjuicio de las atribuciones que por ley
le corresponden al Ministerio del Trabajo y a los organismos integrantes del Sistema
de Protección del Niño y del Adolescente. Agrega el Reglamento que los cursos de
aprendizaje que se impartieren a los adolescentes deben estar acordes con las
tecnologías más actualizadas y el personal de instructores encargado de su formación
deberá tener la capacidad técnica, experiencia y preparación pedagógica suficiente
para transmitir eficientemente dicha capacitación, a su vez acota, que las relaciones
laborales de los adolescentes trabajadores, en cuanto a condiciones de trabajo, salario
y demás prestaciones de que puedan disfrutar los aprendices, se regirán por las
disposiciones de la Ley Orgánica del Trabajo y su Reglamento.
Atendiendo al artículo 16 de la Ley INCE, el Reglamento señala que el
aprendizaje de los adolescentes podrá realizarse en las dependencias del INCE, así
como en las instalaciones de los patronos o empleadores, o en las instalaciones de un
86
tercero que estuvieren suficientemente dotadas para ello y se complementará con la
formación, capacitación y práctica en servicio, realizadas en las instalaciones de los
patronos o empleadores. Dicho aprendizaje podrá realizarse combinando la fase
formativa con la de servicio (art. 40). Igualmente señala el artículo 41 del Reglamento
con respecto a la disposición del aprendizaje de adolescentes en fábricas, talleres o
explotaciones organizadas, que los dueños de éstos tendrán la obligación de emplear
y enseñar o hacer enseñar metódicamente un oficio a un número de adolescentes
seleccionados a tal efecto, hasta el límite del cinco por ciento (5%) del total de sus
trabajadores. Los patronos deberán garantizar las condiciones de desempeño previstas
en la Ley Orgánica para la Protección del Niño y del Adolescente.
Para la determinación de los diferentes tipos de aprendizaje según las
necesidades, estos deben ser establecidos por el INCE y diseñados tomando en cuenta
las necesidades de las industrias, del comercio y de las actividades agrícolas. Los
programas de estudio y el tiempo de duración se fijarán en función de los
requerimientos técnicos de las profesiones u oficios en cada caso. Sin embargo,
ningún aprendizaje podrá tener una duración mayor de cuatro (4) años, ni supondrá la
interrupción en la prosecución escolar.
De acuerdo a la Ley sobre el INCE, en la selección de los menores para el
aprendizaje se preferirá a los huérfanos y adolescentes en estado de abandono(art.18)
artículo que esta en armonía con el 43 del reglamento cuando en este se puntualiza
“en la selección de los aprendices se preferirá a los huérfanos y adolescentes en
estado de abandono, que hayan sido postulados por los organismos integrantes del
Sistema Nacional de Protección del Niño y del Adolescente y se encuentren en
condiciones especiales”. A su vez el reglamento agrega la prioridad que tienen los
aprendices hijos o familiares de los trabajadores de las empresas, al efecto señala “
los empresarios podrán preferir como aprendices en sus establecimientos a los hijos o
familiares de los trabajadores de sus empresas” (Art 43). Si este es el caso, lo deben
87
notificar a las dependencias del INCE, ubicados en la jurisdicción donde funcione el
establecimiento industrial o comercial de que se trate, indicando el número de
adolescentes seleccionados con señalamiento de las edades, ocupaciones donde
aspiran que sean colocados, parentesco que guardan con sus trabajadores y cualquier
otra mención que le sea solicitada.
El aprendizaje de los adolescente debe hacerse en las instalaciones de las
empresas o en las fabricas, pero cuando por circunstancias debidamente justificadas,
el aprendizaje de adolescentes no pudiere realizarse en las instalaciones de las
empresas o en las fábricas, talleres o explotaciones organizadas, el INCE celebrará
los acuerdos necesarios a fin de que el aprendizaje pueda cumplirse, en cualquier otra
instalación educativa debidamente dotada para impartir dicho aprendizaje. Los cursos
y actividades para el aprendizaje de adolescentes no podrán realizarse en faenas o
trabajos considerados peligrosos, ni en aquellos en que se prohíba trabajar a los
adolescentes, de acuerdo con la Ley Orgánica del Trabajo, sus Reglamentos y a las
disposiciones de los Tratados Internacionales suscritos y ratificados por Venezuela.
Con respecto a la obligación que tienen los adolescentes de concurrir a los
cursos impartidos, la Ley INCE señala: “los menores de dieciocho y mayores de
catorce años, que trabajan en fabricas o establecimientos comerciales, tienen la
obligación de concurrir a los cursos de mejoramiento profesional o de aprendizaje
que organice el instituto” (art. 19), armonizando con el mismo, el Reglamento sobre
la Ley INCE indica: “los adolescentes que trabajen en fábricas, talleres, explotaciones
organizadas o en establecimientos comerciales, tienen la obligación de concurrir a los
cursos de aprendizaje que organicen el Instituto Nacional de Cooperación Educativa
(INCE) o los entes a que se refiere este Reglamento” (art. 46), además agrega el
artículo que los patronos o empleadores concederán el tiempo requerido para el
estudio como parte de la jornada de trabajo con arreglo a las disposiciones
reglamentarias correspondientes.
88
Los adolescentes que al cumplir dieciocho años de edad, estén cursando
estudios en las empresas, fabricas, talleres o explotaciones organizadas tienen
derecho a proseguir dichos cursos hasta terminarlos en condiciones iguales a aquellas
que venían disfrutando y poder obtener el certificado correspondiente, igualmente
existe la obligación por parte del patrono de aceptar la continuación de los cursos de
los adolescentes cuando este es contratado para trabajar. Señala el Reglamento de la
Ley sobre el INCE : “la contratación como trabajador de un adolescente que estuviere
cursando aprendizaje en un centro perteneciente al Instituto Nacional de Cooperación
Educativa (INCE), implica para el patrono la obligación de hacerlo continuar el curso
indicado... ” (art.48), pero si es el caso que fuese autorizado el retiro de un
adolescente del curso de aprendizaje en que está inscrito, el patrono deberá presentar
dentro de los veinte (20) días siguientes el sustituto respectivo o aceptar el que le
presente el Instituto Nacional de Cooperación Educativa (INCE) (art.49), de igual
manera, se procederá cuando el adolescente termine el curso y reciba la aprobación
correspondiente. La aceptación del aprendiz sustituto, implica para el patrono la
obligación de inscribirlo en los cursos que sostiene el Instituto, dentro de los diez (10)
días siguientes a la aceptación.
Conforme al Reglamento “todo aprendiz en formación debe ser informado de
su rendimiento a través de un boletín o informe mensual, en el cual además debe
constar su nombre y apellido, estado civil, edad, trabajo realizado, empresa y lugar
donde sirve” (art. 50), en ese boletín deben registrarse las calificaciones obtenidas
tanto en las materias teóricas como prácticas, además de otras especificaciones que se
consideren de importancia. El boletín servirá para anotar las incidencias del
desarrollo formativo, así como las asistencias y faltas, las evaluaciones periódicas y
las sanciones aplicadas, debe ser autorizado por el director o gerente donde tiene su
asiento las escuelas especiales como centros de formación y capacitación y demás
dependencias del INCE, en que el aprendiz sigue sus cursos. En caso de cambio de
domicilio, esta circunstancia debe constar en el boletín, habilitándolo para continuar
89
los cursos en otra jurisdicción del país. La habilitación deberá hacerla el gerente de la
gerencia regional del nuevo domicilio. El referido boletín, salvo prueba en contrario,
servirá como medio de verificación de los hechos en ella consignados.
Las Escuelas Especiales como Centros de Formación y Capacitación y demás
dependencias INCE, destinados para el aprendizaje de los adolescentes, jóvenes y
trabajadores en general, también podrán suministrar otros cursos de continuación,
perfeccionamiento y especialización profesional. Se denominan cursos de
continuación de acuerdo al Reglamento “aquellos suministrados para complementar
los conocimientos adquiridos después de terminados los cursos de alfabetización, o
de adquiridas las nociones elementales de la educación formal, pero sin incluir en
ellos las orientaciones o programas correspondientes a otros ciclos de la educación”
(art. 52). Los cursos de continuación deben suministrarse para mejorar la cultura
general y para contribuir a una más firme orientación en el oficio que se desempeña,
mientras que los cursos de perfeccionamiento y los de especialización “deben
contribuir a mantener al trabajador actualizado en sus conocimientos profesionales, a
mejorar las técnicas de los oficios o profesiones y a profundizar en una determinada
rama de los conocimientos profesionales” (art. 53).
Es de observar que el reglamento señala la orientación que deben tener estos
cursos, en los que deben suministrarse aquellos conocimientos generales y
herramientas indispensables para que los trabajadores puedan comprender mejor los
fenómenos sociales, políticos, económicos, científicos y tecnológicos de la vida
contemporánea, con el objeto de que hagan valer su derecho ineludible a la igualdad y
equidad en el ejercicio del derecho al trabajo. En los planes y programas de dichos
cursos deben figurar, junto a las materias específicas de formación y capacitación en
el oficio, materias de carácter general.
90
En referencia a la comprobación de los objetivos logrados, la ley sobre el
INCE, indica “ al finalizar cada curso los asistentes recibirán un diploma en el cual
se dejara constancia de la habilidad adquirida. Las certificaciones o diplomas
expedidos deberán ser tomados en cuenta para las clasificaciones y ascensos de los
trabajadores” (art. 22).
De acuerdo a la norma los aprendices deben recibir un certificado
comprobatorio de su habilidad, el cual debe ser otorgado por el INCE, y en
correspondencia con la ley, el reglamento en su articulo 55 agrega que el certificado
debe ser firmado por el instructor del curso y por el resto de los responsables de
firmar los certificados en cada una de las dependencias INCE.
LAS INFLUENCIAS SOCIALES SOBRE EL NIÑO Y EL
ADOLESCENTE
Los niños, niñas y los adolescentes son sujetos de derecho, representan un
recurso humano que a través de la educación deben prepararse para ser ciudadanos
críticos, reflexivos, creativos, comprometidos, democráticos y lograr una formación
sana y productiva para colaborar en el desarrollo económico del país. A este
segmento social le tocara transitar, en el periodo de la adolescencia, una etapa de
desarrollo físico, emocional, social, intelectual, espiritual, de búsqueda de identidad
personal, de conocimiento de sí mismo, etapa de exploración de oportunidades, de
toma de responsabilidad, etapa de prepararse para una profesión, de asumir una
conducta socialmente responsable.
Todos los niños, niñas y adolescentes, tienen necesidades primarias, como
alimentación, vestimenta, vivienda, confort, recreación, necesidades de seguridad,
estabilidad, evitar riesgos, necesidades sociales como ser aceptado en grupo, también
tiene necesidades relacionadas con el ambiente laboral, como el realizar una actividad
91
laboral que le permita obtener una remuneración, al trabajar necesita un programa de
seguro y bienestar y condiciones laborales seguras. Para que el adolescente acceda a
un puesto de trabajo seguro y sin riesgos, necesita tener una preparación que podría se
lograda a través de la educación, la cual debe ser gratuita y obligatoria.
Por otra parte, en términos de las explicitaciones teóricas, los niños, niñas y
adolescentes no se desarrollan o se desenvuelven en el vacío, se desarrollan dentro de
múltiples contextos (sociedad, comunidad, familia, escuela, medios de comunicación,
organizaciones, la cultura donde crecen, sucesos del mundo), son parte y producto del
entorno y de las influencias sociales. Como señala Maturana (1.995) “los seres
humanos somos seres sociales, vivimos nuestro ser cotidiano en continua imbricación
con el ser de otros” (P.3). Igualmente Maturana es de la opinión que los seres
humanos son base de la sociedad, puede ser miembro de muchos sistemas sociales en
forma simultánea o sucesiva, por lo cual el hombre tiene que realizar las conductas de
cada sistema social. Así se puede ser miembro de una familia, de una comunidad
educativa, de un complejo turístico, de una organización laboral, realizando las
distintas conductas propias de los diferentes sistemas sociales involucrándose
totalmente.
Para Bronfenbrenner (1.979) “las influencias sociales pueden ser agrupadas en
una serie de sistemas que se extienden más allá del niño y del adolescente. Siendo el
niño y el adolescente el centro de los sistemas” (P.45). Siguiendo al autor se puede
hablar de un microsistema, mesosistema, exosistema, macrosistema (Ver Gráfico 3).
De allí que en la alternativa de solución futura, se podría tomar en cuenta alguno de
92
los factores que integran estos sistemas, para guiar la búsqueda de la misma.
Gráfico 3: Adaptado de: Modelo ecológico de Bronfenbrenner (1.979), para la
comprensión de las influencias sociales.
La influencia en el microsistema
Un microsistema está representado por las influencias más inmediatas que
actúan sobre el niño y adolescente e incluye todas aquellas con las que tiene contacto
inmediato. Para la mayoría de los niños, niñas y adolescentes la familia inmediata es
el microsistema principal, seguido de la escuela, la salud, los iguales a él, su
comunidad, un marco regulatorio, y en el caso del adolescente se podría ubicar
también el trabajo, entre otros. Un microsistema puede ser saludable o no saludable.
El microsistema no saludable está referido a todos los factores que influyen
93
directamente sobre el niño y el adolescente y que le causan problemas. En un
microsistema saludable, los factores que influyen sobre el niño y el adolescente van a
contribuir con el desarrollo de los mismos y a la solución de los problemas en que
están envueltos, preparándolos para el éxito en la vida de adolescencia y de adulto.
En referencia a estos se detectan:
La Escuela
Con respecto a la escuela puede pensarse en mirar hacia:
1. Extensión de la cobertura escolar.
La universalización de la Educación Básica es uno de los instrumentos que
puede asegurar la formación del semillero de ciudadanos que son sujetos de derecho
desde su nacimiento, por lo que el niño y el adolescente tienen un derecho ineludible
de ser involucrados dentro del proceso educativo, de ser beneficiados del servicio
básico de la educación, lo cual es un mandato de la Constitución de la República
Bolivariana de Venezuela.
En Venezuela, los alumnos que egresan de la Educación Básica en su tercera
etapa cubren sólo el 32%, y de cada cien alumnos que comienzan el 1er grado, sólo 55
llegan al 6to (INE, 2001), por lo que se hace necesario lograr una cobertura escolar
cercana al 100%. El lograr que una persona alcance como mínimo nueve años de
estudio, no le va a solucionar todos los problemas, pero le facilitaría a las personas
determinados conocimientos para su convivencia como ciudadano y que le
permitirían de acuerdo al Deber Ser: a) lograr una formación integral para la
búsqueda de una actitud democrática, responsable, y la participación activa y
solidariamente en la sociedad teniendo en cuenta los valores de libertad, igualdad y
justicia social, b) desarrollo de capacidades cognitivas intelectuales, cognitivas
94
motrices, cognitivas afectivas, así como competencias comunicativas en atención a
los procesos de comprensión y producción del lenguaje oral y escrito, c) comprender
los hechos y fenómenos del entorno cultural y social y aplicar el pensamiento, el
razonamiento lógico, verbal y matemático, d) emitir juicios críticos ante los
problemas sociales, familiares, personales, e) participar activamente en los procesos
de transformación social, f) desarrollar su capacidad científica, técnica, humanística
y artística que le permitan tener una visión integral de la vida y el mundo, g) iniciarse
en el aprendizaje de disciplinas y técnicas que le permitan el ejercicio de una función
socialmente útil, h) iniciarse en la tecnología.
2. Retener a un mayor porcentaje de alumnos dentro del sistema escolar
para que logren concluir la Educación Básica y no se estanquen en la tercera etapa,
sino que continúen hacia la etapa media y diversificada para completar el nivel más
elevado de secundaria, del que sólo egresa el 17% de los alumnos que se iniciaron en
Educación Básica.
3. Mejorar la calidad de la Educación Básica.
La educación siempre ha estado cargada de buenas intenciones, pero no basta
que las políticas educativas aspiren una educación democrática, en igualdad de
oportunidades para todos, donde se enaltezcan los valores de libertad, justicia social y
que el educando desarrolle su capacidad científica, humanística y artística. Profundos
cambios, reformas le han tratado de hacer a la educación, pero en esos cambios el
énfasis siempre ha sido el crecimiento cuantitativo y el cual no ha estado en sintonía
con el crecimiento cualitativo de la educación, aunque se han planteado reformas
profundas, estas quizás no se han llevado a cabo por falta de recursos, dentro de un
marco de estrechez financiera, por improvisación, falta de motivación entre otras.
95
El país continuamente ha pasado por dificultades económicas, y al hacer
recortes al gasto social, la educación ha estado incluida en estos recortes, impidiendo
que sean subsanadas las fallas que viene arrastrando. Para mejorar la calidad de la
educación habría que introducir mejoras donde se tome en cuenta al alumno, al
docente, las reformas curriculares, la infraestructura y dotación, entre otras.
Con respecto al alumno, para el caso en estudio, éste está representado por el
niño, niña y el adolescente, quien requiere de una educación integral que le permita
ser un ciudadano analítico, crítico, reflexivo, comprometido, con amor por la vida, la
paz, la libertad, un ciudadano que conoce, comprende, interpreta, infiere y generaliza
conceptos, reglas, principios, métodos, que comprende fenómenos, ideas, nociones
abstractas. Que adquiere, aplica, procesa y produce información, que expresa su
pensamiento de forma clara y coherente. Que promueve el mejoramiento personal y
social a través de su participación activa y conciente en acciones dentro de la
comunidad. Un ciudadano que necesita prepararse en una actividad laboral.
Mejorar la calidad de la Educación Básica también significa darle prioridad al
docente, quien necesita mayor accesibilidad a los planes de actualización,
implementándosele en forma continua talleres de mejoramiento docente, donde se
debe preparar al mismo, tanto en aspectos que tienen que ver con su especialidad,
como en el conocimiento de las características biológicas, psicológicas y sociales del
niño, niña y del adolescente, sus temores, intereses, motivaciones, aspiraciones para
que pueda tener una mayor comprensión de los mismos. A su vez también debe ser
actualizado en los roles gerenciales del docente en el aula, como pueden ser:
liderazgo, planificación, organización, supervisión, evaluación, motivación,
comunicación, toma de decisiones, investigación, innovación o cambio.
En tal sentido, los docentes necesitan estar motivados, tener voluntad en llevar
a cabo grandes esfuerzos para alcanzar las metas organizacionales, condicionada por
96
la capacidad del esfuerzo para satisfacer alguna necesidad individual (Robbins,
1.996), la motivación la debe tener el docente desde el mismo momento que
selecciona su profesión, pero la misma debe ser reforzada a través de la carrera. El
educador debe ser motivado, no sólo para que transmita conocimientos, sino que
también transmita un proceso formativo que incluya hábitos, normas, virtudes,
principios.
Existen muchas teorías que plantean la necesidad de la motivación hacia el
trabajo, entre estas, la teoría de la motivación – higiene, de Herzberg citado por
Robbins (1.996) es interesante, cuando plantea la existencia de factores intrínsecos en
la motivación como son los logros, el reconocimiento, el trabajo mismo, la
responsabilidad, los ascensos y el crecimiento, están relacionados con la satisfacción
en el puesto de trabajo, si las personas sienten que logran esto en su trabajo, tienden a
sentirse bien y a sentir una gran satisfacción. Hay factores extrínsecos como las
políticas, los salarios, la administración de la organización, la supervisión, las
relaciones interpersonales y las condiciones de trabajo que si las personas no lo
logran se sienten no satisfechas o insatisfechas.
En cuanto a reformas curriculares, hay la necesidad de emprender reformas
curriculares, tendientes a modernizar y actualizar los contenidos de la enseñanza y
acercar más la educación a ámbitos fundamentales de la sociedad, como la
producción, la cultura, la ciencia y la tecnología, así como a los requerimientos
prioritarios del proceso de desarrollo. Reforzar aquellos conocimientos que vinculan
la educación con los requerimientos del mercado de trabajo, especialmente en
relación al sector productivo.
La reforma podría tener en sus orientaciones que los alumnos tengan una
doble opción al egresar del 9no grado como es: iniciarse en los procesos productivos a
través de su inserción en el mundo laboral y organizar su tiempo de tal manera que
97
pueda a su vez continuar estudios dentro del sistema educativo. Una forma posible
para que el alumno de 9no grado, que tiene una edad promedio de quince años, se
conecte con el mundo del trabajo, es el poder realizar pasantías en las empresas. Por
lo menos pueda asistir dos días a la semana, preferiblemente a las empresas ubicadas
en la misma localidad del educando. Que tenga un aprendizaje alternado, donde
combine en forma simultánea, la capacitación en aula y taller con la práctica en una
empresa, y la capacitación para el trabajo independiente (Que los adolescentes
adquieran las competencias básicas para el autoempleo o para un trabajo formal).
El elemento pasantía es clave pero la interrogante sería ¿Con qué interés,
fluidez y compromiso, el sector empresarial asumiría ese rol, para aceptar esa masa
de jóvenes en las empresas para completar su formación básica?. Habría que hacer
un estudio para conocer las empresas ubicadas en cada comunidad, sector, región,
rama a la que se dedican, número de empresas, disposición y compromiso a aceptar
pasantes. Habría que establecer que tipo de convenio se puede dar entre la empresa
privada o pública y el sector educativo, donde la empresa acepte al alumno como
pasante, lo cual sería un paso importante para que el país reaccione en lo educativo,
coordinando esfuerzos del sector privado o público con el Ministerio de Educación y
Deporte. Es factible mirar tanto a la macroempresa como a la microempresa, como
alternativa para ubicar a los alumnos en sus pasantías.
La Educación para el Trabajo, de la Educación Básica en su tercera etapa, con
reformas previas (curriculares, infraestructura, dotación), podría estar entre las
posibilidades de capacitar a los adolescentes y estos una vez preparados, si se les
presenta dificultad para ingresar al sector formal, ellos mismos podrían instalar sus
propios negocios como instalar una mini peluquería, un pequeño taller de costura, de
manualidades, dulcería y comida criolla, tejidos de cestería, elaboración de artesanía,
trabajo de madera, cerámica, trabajo artístico en vidrio, trabajo de electricidad,
informática, decoración, dibujo técnico, turismo, pequeñas agencias de festejos,
98
plomería, herrería, negocios que podrían instalar en sus propias viviendas. Se ha
señalado algunas de las múltiples actividades en las que podrían estar capacitados los
adolescentes, ya que el Área de Educación para el Trabajo en su tercera etapa
comprende programas donde están insertas estas actividades, además de muchas
otras.
La reforma también tendría que mirar hacia la búsqueda de programas y
objetivos donde esté inserta la tecnología, ya que muchos de los programas que
existen en la actualidad en el Área de Educación para el Trabajo están desfasadas y
han quedado rezagadas ante los avances tecnológicos. En la reforma no basta con
hacer énfasis en los programas, objetivos, contenidos, estrategias metodológicas, hay
que pensar en la infraestructura y dotación.
Con respecto a la infraestructura, las edificaciones escolares son insuficientes
para el ritmo que demanda la expansión de la matrícula. Estas fueron construidas
para un determinado número de alumnos, pero a medida que se han ido aperturando
secciones, las edificaciones han quedado rebasadas. Es necesario además de la
construcción de nuevos locales educativos, el mantenimiento continuo de las
infraestructuras existentes, ya que el deterioro progresivo de las edificaciones podría
estar relacionado con la falta de mantenimiento.
La Familia
Es parte del microsistema que va a influir sobre el niño, niña y el adolescente,
que si el microsistema no es saludable, la familia interviene causándole problemas al
niño y al adolescente, pero en un microsistema saludable, la familia influye en forma
positiva. Representando esta influencia positiva, soluciones que la familia facilita en
la eliminación de los problemas a los niños, niñas y adolescentes.
99
La familia debe ser el medio natural y primario donde se garantice la
protección del niño, niña y adolescente permitiendo que los mismos crezcan en su
seno, en un ambiente de felicidad, amor y comprensión para contribuir con el pleno y
armonioso desarrollo de la personalidad del niño y del adolescente. Los padres son
los principales responsables de cuidarlos y educarlos, a tal efecto el Estado debe
brindar a la familia la ayuda necesaria para poder asumir plenamente sus
responsabilidades. Al apoyarse a la familia se apoya al niño, niña y adolescente. La
familia debe recobrar su poder socializador que tradicionalmente ha tenido,
manteniendo el control directo de los hijos y educándolos, permitiéndoles el pleno
desarrollo, inculcándoles valores, principios, normas, hábitos y haciendo sana presión
social para que el Estado asuma su función social de garantizar la educación.
Las familias también necesitan un proceso de preparación, que puede ser
impartido a través de los talleres de escuela para padres que deben darse en los
planteles escolares, con la finalidad de que tengan una mayor comprensión de la etapa
de la niñez y de la adolescencia y estén concientes de que los adolescentes pasan por
un período de maduración física y sexual durante el cual ocurren cambios evolutivos
en su cuerpo. También es un período de conflictos internos, en donde hay la
búsqueda de identidad, que los padres comprendan que los niños, niñas y
adolescentes tienen necesidades propias de la edad como el de vestirse a la moda,
recreación, paseo, fiestas, cargar accesorios entre otros, por lo cual el niño y el
adolescente mediante una educación que lo prepare para realizar una actividad
laboral, pueda obtener una remuneración para cubrir sus gastos y ayudar a la propia
familia, lo cual no es impedimento para que el adolescente continúe el proceso de
educación.
La Salud
100
Como parte del microsistema del niño, niña y adolescente, e influenciando en
forma positiva, la salud es un derecho social fundamental y es obligación y
responsabilidad intransferible del Estado. El Estado debe promover y desarrollar
políticas orientadas a elevar la calidad de vida, el bienestar colectivo y el acceso a los
servicios. Las personas tienen derecho a la protección de su salud y además tienen el
deber de participar activamente en su promoción y defensa y el de cumplir con las
medidas sanitarias y de saneamiento que establezca la ley. (Constitución Bolivariana
art. 83).
La Ley Orgánica para la Protección del Niño y del Adolescente (LOPNA,
1988) señala que “todos los niños y adolescentes tienen derecho a disfrutar del nivel
más alto posible de salud física y mental” (art. 41). La LOPNA está en
correspondencia con la Constitución Bolivariana de la República de Venezuela, de
allí que todos los niños, niñas y adolescentes deben tener derecho a servicios de
salud de carácter gratuito especialmente para la preservación, tratamiento y
rehabilitación de las afecciones a su salud.
El Estado debe garantizar atendiendo el derecho de salud del niño, niña y
adolescente, acceso a planes, programas y servicios de prevención, lo que implica
colocar en la agenda pública, atención primaria de salud, insistir en programas de
inmunización, de atención nutricional, de lucha contra el consumo del cigarrillo para
prevenir enfermedades del corazón y el cáncer, debe insistir en programas de
planificación familiar entre otros.
Marco Regulatorio
En el microsistema también está presente un marco regulatorio que influye
positivamente sobre el niño, niña y adolescente y que le puede solucionar problemas
ya que lo protege al regular los derechos que poseen ante la educación, ante el
101
trabajo, como sujeto de derecho a través de una diversidad de normas las cuales
deben ser cumplidas por mandato Constitucional y legal.
A través de la Constitución de la República Bolivariana de Venezuela, aunada
a una serie de leyes como la Ley Orgánica del Trabajo, Ley Orgánica para la
Protección del Niño y del Adolescente, Ley Aprobatoria de la Convención sobre los
Derechos del Niño, Ley Orgánica de Educación, los Tratados y Convenios de la
Organización Internacional del Trabajo y ratificados por el país entre otros, el niño,
niña y el adolescente debe ser protegido en su derecho a:
1. La vida
2. Interés superior del niño y del adolescente
3. Garantías inherentes a la persona humana
4. Desenvolvimiento de su personalidad
5. Igualdad y no discriminación
6. Acceso a los órganos de administración de justicia
7. Acceder a la información
8. Libertad personal
9. Respeto a su integridad física, psíquica y moral
10. Expresar sus pensamientos, sus ideas y opiniones de viva voz
11. La salud
12. La educación
13. Trabajar y ser protegido por normas laborales (adolescente)
14. Dedicarse a actividades económicas con las limitaciones de la ley
15. Ser cuidado por sus padres y ser criado dentro de una familia.
16. Un nivel de vida adecuado (alimentación, vestido, vivienda)
17. Descanso, recreación, esparcimiento, deporte y juego.
18. Honor, reputación, propia imagen, vida privada e intimidad familiar
19. Opinar y ser oído
102
20. Protección a la maternidad.
Trabajo
Como parte del microsistema, el trabajo es un factor que influye en el
adolescente (el niño debe estar fuera de la actividad laboral), a través del cual el
adolescente podría encontrar solución.
Podría señalarse que el trabajo en el adolescente estaría representado por una
serie de actividades que el adolescente realizaría, y que estas actividades estarían
encaminadas a producir determinados bienes y servicios, los cuales están dirigidos a
satisfacer las necesidades del individuo. Se plantea al trabajo como un hecho social,
buscando a través de la concepción social resaltar el carácter personal y humano que
el trabajo tiene.
La grandeza de un país y de sus habitantes reside en el trabajo, en la
exaltación y estímulo al trabajo, al reconocimiento de la dignidad humana del
trabajador. El trabajo es una de las características que distinguen al hombre del resto
de las criaturas, el hombre por su vocación al trabajo y por ser esta una de las
características naturales del hombre, es importante que toda persona tenga derecho al
mismo. De acuerdo al artículo 24 de la Ley Orgánica del Trabajo (1.997), toda
persona tiene derecho al trabajo y el Estado debe procurar que toda persona apta
pueda encontrar colocación que le proporcione una existencia digna y decorosa. Esto
implica que el Estado está en la obligación de crear condiciones favorables para el
crecimiento del nivel de empleo, lo cual debe hacerse a través de una política de
incentivos dirigidos a las empresas que son generadoras de empleo.
El adolescente se ve en la necesidad de trabajar para sí mismo, para su familia,
para la sociedad, debiendo contribuir en el desarrollo del país. El adolescente para
103
trabajar tiene a su favor dos elementos esenciales: a) Capacidad legal para trabajar, b)
Educación, a través de la cual debe obtener una profesión.
Con respecto a la capacidad legal, los mayores de catorce años pueden
celebrar válidamente contratos de trabajo, individuales y colectivos, asociarse en
sindicatos y ejercer las acciones derivadas de su actividad laboral y económica, de
conformidad con la ley y con los límites que imponen las facultades legales de sus
padres (LOPNA, arts. 100 y 101). Es decir, el adolescente tiene capacidad para
trabajar, firmar convenios de trabajo y asociarse, está protegido por la tutela del
Estado, pero también continúa sujeto al poder de protección legalmente reconocido a
quienes detectan el derecho y el deber de dirección, guarda y corrección sobre él que
son sus padres, representantes o responsables.
El Estado venezolano al facultar al adolescente para trabajar, también debe
cumplir con su obligación de prepararlo para el trabajo, obligación que puede cumplir
a través de la Educación Básica, en su tercera etapa, haciendo las reformas necesarias
a la misma, permitiendo que se produzca la interrelación entre educación y trabajo
tomando en cuenta los avances tecnológicos del momento y a futuro.
Para Bronfenbrenner (1.979), el mesosistema, está representado por las
relaciones recíprocas entre los diferentes contextos del microsistema. De cómo se
den esas relaciones va a depender la existencia de un problema social o la solución de
un problema social, en torno al niño, niña y al adolescente en este caso. En un
mesosistema saludable, las relaciones recíprocas entre los diferentes contextos
ayudarán a la solución del problema. En este caso el mesosistema va a estar
representado por las relaciones entre: a) escuela y familia, b) escuela y trabajo, c)
escuela y salud, d) familia y salud, e) trabajo y marco regulatorio.
104
Escuela y Familia
En la solución del problema debe intervenir la relación escuela familia y
viceversa. En la medida en que la familia participe o intervenga de una manera activa
en el acontecer cotidiano de la escuela, en esa misma medida la escuela se verá
fortalecida, acrecentándose la posibilidad de la solución de sus problemas.
Hay espacios posibles dentro de la escuela para que la familia participe. Así
se observa que en cada plantel funciona una comunidad educativa, las familias a
través de los padres y representantes, deben formar parte activa de esa comunidad con
la finalidad de:
1. Colaborar con las autoridades del plantel en los diversos aspectos del proceso
educativo.
2. Promover y participar en actividades científicas, humanísticas, técnicas,
culturales, sociales, asistenciales, deportivas y recreativas que contribuyan al
desarrollo y consolidación del proceso educativo y a la integración de todos los
padres al plantel.
3. Las familias a través de los padres deben participar en las visitas que se hacen a
los medios de comunicación social para la utilización de estos en la proyección
del plantel hacia la comunidad.
4. Las familias deben contribuir con la conservación y mantenimiento del plantel,
conociendo las necesidades propias del mismo y ayudando en cuanto a labores de
herrería, plomería, carpintería, albañilería, pintura, electricidad, jardinería, entre
otros.
105
Por otra parte, los padres y representantes como integrantes de la familia,
deben formar la sociedad de padres y representantes que tiene como cuerpo
deliberante a la asamblea y como cuerpo ejecutivo a la junta directiva. La Junta
Directiva de la Sociedad de Padres y Representantes en representación de la
Asamblea General se debe constituir en Asociación Civil sin fines de lucro y debe
regirse por un Acta Constitutiva Estatutaria, la cual debe ser registrada y se entiende
que el número de asociados de la asociación civil es igual al número de padres y
representantes de los alumnos inscritos.
Los padres a través de esta asociación civil deben colaborar con los objetivos
consagrados en la Ley Orgánica de Educación y su Reglamento; para que den
asistencia en todas sus formas para la promoción de la convivencia social, incluyendo
asistencia que proporcione alimentación, vestido, útiles escolares, y cualquier otro
programa de bienestar estudiantil para los alumnos de escasos recursos económicos y
en general efectuar todos los actos que fueren necesarios para el logro de objetivos
que señala el régimen complementario sobre la Organización y Funcionamiento de la
Comunidad Educativa.
Son los mismos padres los que manejan los fondos de la Asociación Civil
(tres padres directivos de la Asociación) y son los que deben convocar a las reuniones
ordinarias y extraordinarias de la Asamblea General de Padres, son los que deben
elaborar junto con el director del plantel, el presupuesto programa anual y los
balances económicos o relación de gastos que debe rendir la Junta Directiva de la
Asociación Civil ante la Asamblea General para someterlo a consideración de todos
los padres.
Los padres en asamblea son los que deciden el presupuesto programa anual,
en el mismo se deben indicar los gastos proyectados para cubrir las necesidades del
106
plantel tomando en cuenta rubros de gastos que según el art. 60 de la resolución Nº
751 del Ministerio de Educación sobre comunidades educativas (1.986) deben ser:
1. Bienestar estudiantil. Becas, ayudas socioeconómicas, asistencia médico –
odontológica, colaboración para las organizaciones estudiantiles, talleres de
servicios, apoyo para la educación física y el departamento estudiantil,
promoción y difusión cultural.
2. Gastos propios de la organización: materiales y equipo, programas dirigidos a
integrar a los padres y representantes a la vida del plantel, cursos, seminarios,
publicaciones, conferencias, otros.
3. Contribuciones para gastos de funcionamiento, mantenimiento y
conservación, reparaciones menores del plantel, materiales y útiles de enseñanza.
4. Fondo de emergencia: Gastos propios de la apertura del nuevo año escolar y
situaciones de apremio que puedan surgir.
En la medida que la familia ocupe los espacios que tiene en la escuela, ese
esfuerzo de la familia hará posible facilitar la solución de los diversos problemas
educativos dentro de la escuela, la familia también es un factor de presión dentro de
la sociedad para que el Estado se avoque e intervenga en la solución de problemas
educativos a través de políticas educativas que mejoren la educación.
Escuela y Trabajo
Los niños, niñas y adolescentes deberían como primera opción ser preparados
a través de la Educación Básica para incorporarse al trabajo, cuando legalmente les
corresponda y tengan necesidad del mismo, ya que la Educación Básica es la
107
educación mínima que debe tener todo ciudadano, según la organización de las
Naciones Unidas. La relación entre educación y trabajo debería ser estrecha, la
educación además de preparar al niño y adolescente para que sea un ciudadano sano,
crítico, apto para vivir en una sociedad democrática con una conciencia ciudadana
para la conservación, defensa y mejoramiento del ambiente y de la calidad de vida,
debe prepararlo en una determinada actividad laboral para que el adolescente se
desempeñe en un trabajo, si es esta su necesidad; tenga la doble opción como es la de
estudiar y trabajar. Es importante resaltar que cuando se plantea facilitarle la opción
de trabajar al adolescente, estando preparado en técnicas o habilidades que le
permitan su incorporación al mundo del trabajo, también es necesario señalar que el
adolescente debe tener la oportunidad de seguir estudiando, ya que a medida que
incrementa los años en educación, en esa medida el individuo se va formando
profesionalmente; y capacitando en los perfiles ocupacionales que demanda el
empleo formal o el autoempleo, y con un nivel tecnológico acorde con el desarrollo
mundial.
Escuela y Salud
De acuerdo con Bronfenbrenner (1979), no puede dejarse de lado la salud, el
no tomar medidas preventivas en salud puede significar un repunte de enfermedades
ya superadas, o el que se formen ciudadanos no saludables.
Como la salud es un derecho social fundamental y obligación del Estado, los
niños, niñas y adolescentes tienen derecho a gozar de salud física y mental, servicios
de salud que deben ser gratuitos, de allí que los niños, niñas y adolescentes a través
de la escuela deben ser informados, ser educados sobre los principios básicos de
formación en materia de salud, nutrición, salud sexual y reproductiva, higiene, entre
otros.
108
La escuela es un medio propicio para que el Estado garantice a todos los
niños, niñas y adolescentes en forma gratuita servicios médicos y odontológicos
periódicos, por lo que una forma de asegurar que la salud sea accesible a todos los
alumnos es la presencia de un médico y de un odontólogo en cada una de las
instituciones escolares. Esto no es una utopía, algunos planteles oficiales, aunque
pocos, tienen estos profesionales.
Familia y Salud
En la búsqueda de alternativas al problema, la relación familia y salud es
importante, no se puede pensar sólo en que el niño y el adolescente se prepare para el
trabajo a través de la educación en forma aislada, los mismos también debe ser
educado en cuanto a su salud.
Aunque se este preparando para realizar una actividad en el mundo del
trabajo, la persona no puede trabajar si no está saludable. Esta responsabilidad no
sólo es del Estado. Dentro de la familia los padres y representantes deben ser garantes
de la salud de los niños, niñas y adolescentes que están bajo su patria potestad o
responsabilidad.
Los padres tienen como obligación cumplir con las instrucciones y controles
médicos que se prescriben para velar por la salud de niños, niñas y adolescentes,
garantizando que sean vacunados oportunamente y que se realicen sus controles
periódicos para prevenir enfermedades. La familia debe estar atenta a las políticas
que el Estado junto con la participación de la sociedad activa debe garantizar a los
menores, como programas de prevención contra el uso de sustancias alcohólicas,
cigarrillos, estupefacientes y psicotrópicas.
109
Trabajo y Marco Normativo.
Existen normas laborales que van a proteger a los adolescentes en sus espacios
de acción en el mundo del trabajo, la existencia de las mismas y su oportuna
aplicación podían formar parte de las alternativas de solución del problema, ya que si
el adolescente necesita estudiar y trabajar, debe tener a su lado normas que lo protejan
contra todo trabajo que implique explotación; que sea peligroso o resulte nocivo para
su salud o desarrollo integral o que afecte negativamente su proceso educativo.
A tal efecto, la Constitución de la República Bolivariana de Venezuela
(1.999), prohíbe el trabajo de los adolescente en labores que puedan afectar su
desarrollo integral, indicando además que el Estado los debe proteger de cualquier
explotación económica y social (art. 89). Esta disposición constitucional está
concatenada con la Ley Orgánica del Trabajo (LOT, 1.997), cuando en el artículo
249, la ley prohíbe el trabajo de los menores en minas, talleres de fundición, en
labores que acarrean riesgos para su vida o para su salud, y en faenas superiores a sus
fuerzas, o que impidan o retarden su desarrollo físico y moral.
Igualmente, la Ley Orgánica de Protección del Niño y del Adolescente
(LOPNA, 1.998) protege al adolescente en el trabajo cuando puntualiza la edad
mínima de catorce años para el trabajo, además indica que las personas que hayan
alcanzado la edad mínima y tengan menos de dieciocho años de edad no podrán
ejercer ningún tipo de trabajo que esté expresamente prohibido por la ley (art. 96).
Todos los adolescentes para trabajar deben inscribirse en el Registro de
Adolescentes Trabajadores, llevado por el Consejo de Protección, con el objeto de
facilitar al ministerio del ramo, la inspección y supervisión del trabajo. Uno de los
datos solicitados en el registro es el nombre de la escuela, grado de escolaridad,
110
horario, el tipo de trabajo y horario de trabajo con la finalidad de poder verificar
mensualmente que el adolescente asista a una institución escolar (art.96).
A partir de los catorce años de edad los adolescentes tienen derecho a firmar
válidamente contratos y convenios colectivos relacionados con su actividad laboral y
económica, además pueden ejercer acciones para la defensa de sus derechos e
intereses, inclusive tienen derecho a huelga ante las autoridades administrativas y
judiciales competentes (LOPNA, art. 100). Los adolescentes también gozan de
libertad sindical y tienen derecho a constituir libremente las organizaciones sindicales
que deseen, así como el de afiliarse a ellas (LOPNA, art. 101).
En materia de jornada de trabajo, tanto la Ley Orgánica del Trabajo (art. 254),
como la Ley Orgánica para la Protección del Niño y del Adolescente (art. 102),
acotan un número de seis horas diarias de trabajo, divididas en dos períodos, ninguno
de los cuales será mayor de cuatro horas. Entre esos dos períodos los adolescentes
realizarán un descanso de una hora. Hay que agregar que el trabajo semanal no debe
exceder de treinta horas y existe la expresa disposición de prohibición de trabajar en
horas extraordinarias.
En cuanto a las vacaciones, los adolescentes tienen derecho a disfrutar de un
período de vacaciones de 22 días hábiles de vacaciones remuneradas (LOPNA, art.
104), estas deben coincidir con las vacaciones escolares (LOT, art.260).
Las normas también protegen a los adolescentes de los efectos que pueda
causar el trabajo sobre su salud, al efecto, tanto la Ley Orgánica del Trabajo, como la
Ley Orgánica para la Protección del Niño y del Adolescente, indican el derecho y la
obligación que tiene el adolescente de ser sometido cada año a un examen médico
integral, con el objeto de identificar los posibles efectos del trabajo sobre su salud. El
111
patrono debe velar por la salud del adolescente y prestar todas las facilidades (LOT,
art. 253, LOPNA, art. 105).
La LOPNA, de la misma manera, protege a los adolescentes trabajadores no
dependientes, o sea los que viven de su trabajo, sin estar en situación de dependencia
con respecto a un patrono, deben someterse a un examen médico integral cada año, en
servicios o centros de salud públicos, de forma gratuita.
El adolescente además tiene derecho a su inscripción en el sistema de
seguridad social y gozar de todos los beneficios, prestaciones económicas y servicios
de salud que brinda el sistema, de conformidad con la legislación especial en la
materia (LOPNA, art. 110). Señala a su vez la ley, que el Estado debe brindar
facilidades para que los adolescentes trabajadores no dependientes puedan inscribirse
y beneficiarse del sistema de seguridad social.
Exosistema
Siguiendo el orden de ideas de los sistemas, el exosistema, según
Bronfenbrenner (1977) estaría representado por aquellos contextos en los cuales el
niño, niña y el adolescente no juegan un papel activo, pero sin embargo lo que ocurra
en ese contexto va a influir en los menores, causándole problemas o solucionándole
las dificultades. En el exosistema se van a encontrar por ejemplo los familiares, las
organizaciones. Dentro de los familiares inmediatos están los padres y lo que ocurra
a estos padres en las situaciones en las que se encuentran puede influenciar en el
adolescente.
Los padres pueden estar trabajando y lo que ocurra en el trabajo de los padres
es importante, por ejemplo si ocurre la pérdida de trabajo de uno de los padres, esto
influye directamente no sólo en los menores, sino en todos los miembros
112
dependientes porque puede ocurrir una desmejora tanto en el panorama económico
como social, donde cada uno de los integrantes tiene que reajustarse a la nueva
realidad y definir su nuevo rol para evitar el desequilibrio en la familia.
Puede suceder, no la pérdida de trabajo de uno de los padres, sino el cambio
de lugar de trabajo de una ciudad a otra, esto también incide porque la familia
necesita reacomodarse a la situación y tomar decisiones que inciden en el
adolescente, como cambio de escuela, nuevos amigos, otros clubes y si el adolescente
es trabajador podría implicar la búsqueda nuevamente de trabajo, otros escenarios
laborales.
A la familia también le puede sobrevenir, no una pérdida de trabajo o cambio
de sitio del trabajo, sino un mejoramiento económico en la situación laboral de uno de
los padres o en ambos, o que tenga la suerte de ganarse un premio, esto va a
repercutir positivamente en el niño y el adolescente y su familia, puede acudir a una
mejor institución escolar, tener un seguro de salud, gozar de mejor calidad de vida,
puede dejar de trabajar si es el caso, o continuar trabajando para mantener la
autonomía de sus propios gastos.
Las diferentes organizaciones también pueden producir efectos. En las
decisiones que se toman en las organizaciones pueden ser causante de problemas o
pueden lograrse situaciones de beneficio. Para el punto en estudio, se tratará sólo de
los beneficios o posibilidades a tomar en cuenta en la búsqueda de una futura
solución.
Por ejemplo la escuela es una organización que incide positivamente en el
niño, niña y el adolescente cuando presenta un:
113
a) Currículum actualizado y en correspondencia con los fines que persigue la
educación, que para el caso de los menores, la mínima es la Educación Básica, fines
que están establecidos en las normas legales y las cuales además deben estar en
conexión con los progresos, científico, humanísticos, tecnológicos, culturales,
artísticos y de desarrollo económico, b) Horario escolar flexible que le posibilite a los
adolescentes estudiar y trabajar, c) Biblioteca escolar que le proporciones los textos y
demás materiales para su preparación, d) Canchas deportivas, que le permitan su
preparación física, e) Dotación de computadoras, servicio de Internet, equipos,
máquinas, talleres, aulas acondicionadas y laboratorios que le faciliten el proceso de
enseñanza – aprendizaje, f) Docentes y Orientadores motivados y dispuestos a asistir
al educando para facilitar su desarrollo personal y social, la adquisición de hábitos de
estudio y de trabajo, asesoramiento vocacional y profesional que le permita la toma
de decisiones conveniente, g) Médicos y Odontólogos que le proporcionen medidas
preventivas a su salud, así como la atención en caso de afecciones, h) Comedores
escolares que lo puedan proveer de una alimentación sana y balanceada.
Igualmente, un Club, representa una organización a través del cual, el
adolescente puede lograr esparcimiento, recreación, diversión, deportes, amistades
con los iguales a él.
La organización empresarial, donde el adolescente puede hacer pasantías, la
cual le dará formación en un trabajo. También la organización donde trabajen los
adolescentes en caso de que sean trabajadores dependientes puede darle empuje,
cuando cumplan normalmente con todas las normas legales de protección, así como
cuando le permitan el ascenso en la misma.
Macrosistema
114
Siguiendo a Bronfenbrenner (1.979), el macrosistema, es el sistema
conformado por aquellos contextos que van a influir en todos los demás sistemas y en
el individuo, con los cuales está en interacción. El macrosistema incluye las
ideologías, las costumbres, las leyes de una determinada cultura, los aspectos
políticos, económicos, sociales, religiosos, educativos. Si estos contextos están en
conflicto se estaría hablando de problemas que ocurren e influyen en el individuo,
pero si están en equilibrio o el macrosistema es saludable se producirán situaciones
que van a influir de manera positiva en la persona.
Para el caso en estudio como la mirada esta dirigida hacia la búsqueda de
soluciones futuras, se planteará el comportamiento equilibrado de los contextos en el
macrosistema venezolano.
Contexto Político
Con respecto al contexto político se puede acotar que en Venezuela a partir de
1.958, se implantó definitivamente la democracia, sistema político que ha
permanecido incólume por casi medio siglo, donde las instituciones a lo largo de los
años han procurado fortalecerse, sin embargo la debilidad institucional ha persistido a
lo largo del tiempo. A partir de la década del ochenta comenzaron los problemas de
representatividad, de participación y de democracia de partidos; planteándose el tema
de la reforma del Estado y la descentralización política como respuestas a las
exigencias del perfeccionamiento de la democracia. Fueron años de planteamientos
políticos y de sacudidas de la sociedad que condujeron a la reforma del Estado en
cuanto a reforma electoral, reforma de los partidos, reforma de la forma federal del
Estado (descentralización política y administrativa) y reforma municipal.
Sin embargo los cambios han sido muy lentos, a las regiones no se les ha
reconocido la relevancia que tienen, el proceso de descentralización permanece casi
115
invariable, con dependencia del poder central. Venezuela ha experimentado algunos
signos de descentralización, representado en los casos de salud y educación, puertos,
carreteras de algunas regiones, pero falta mucho, la descentralización continua en sus
pasos iniciales.
El problema de la ingobernabilidad ha persistido, así como la desconfianza en
los partidos políticos y el correcto funcionamiento de los organismos dependientes
del Estado.
Este panorama tiene signos de ser revertido, aunque es difícil conocer la clave
de la gobernabilidad, el modelo de democracia se fortalecerá con la energía de la
participación ciudadana, dentro de los diferentes ámbitos nacionales, la sociedad civil
está adquiriendo conciencia de que debe actuar organizadamente y donde cada uno de
sus miembros debe exigir políticas más responsables. La democracia participativa
debe convertirse en una garantía de poder basado en un criterio de unidad.
El poder ciudadano debe coadyuvar para la profundización de la
descentralización y en el futuro depender menos del Estado como ente centralizado y
estar más en contacto directo con las regiones y municipios como entes
descentralizados.
La difícil situación política venezolana quizás ha tenido como positivo haber
despertado en la comunidad un interés por participar en los asuntos públicos. En el
año 1.999, una de las tareas del constituyente fue la garantía de la participación,
dejando sentado que la soberanía, en Venezuela, la ejerce el pueblo, se ha pasado de
una democracia representativa a una democracia participativa, sin que el criterio de
representación se haya abandonado.
116
Del preámbulo de la Constitución de la República Bolivariana de Venezuela
(1.999), se desprende la oferta de una sociedad democrática, participativa y
protagónica; así mismo el artículo 5 tiene como principio la soberanía en manos del
pueblo, directa e indirectamente, soberanía ejercida a través de mecanismos de
participación expresado en el artículo 70, el cual está en armonía con el artículo 62 de
la citada Constitución, cuando en la sección de los derechos políticos se indica que
todos los ciudadanos y ciudadanas tienen el derecho de participar libremente en los
asuntos públicos.
A través de la participación ciudadana, la sociedad probablemente haya
adquirido conciencia de que todos deben intervenir para la solución de los problemas
de la educación, la salud, la cultura, los temas ambientales, además de luchar para
defender las libertades y para pensar en fórmulas que le sirvan a Venezuela para
salir de situaciones políticas difíciles.
Hay la posibilidad de que al resolver el problema político, las instituciones se
fortalezcan, los liderazgos emerjan, se desconcentre el poder para que Venezuela
pueda insertarse en el camino del desarrollo. Aunado a lo anterior, los partidos
políticos cuyo funcionamiento es propio en todo sistema democrático, deben estar
en sintonía con los ciudadanos, estas organizaciones en oportunidades se sienten
divorciadas de las gentes, por lo que la sociedad civil y otros sectores han tenido que
asumir ese rol.
Al solventarse la situación política; al aceptarse unos a otros; al estar los
partidos políticos actualizados, modernizados, menos atención de sus propios
intereses y más esmero en el beneficio del bienestar colectivo; al existir equilibrio
entre los poderes del Estado, manteniendo cada uno su autonomía y su imparcialidad
el despertar de la participación ciudadana, la seguridad jurídica, la gobernabilidad, el
fomento de la descentralización, son algunos signos de bienestar político que
117
posibilitarían el fortalecimiento de la economía en el sentido de lograr el retorno de
las inversiones nacionales e internacionales y la confianza suficiente para evitar la
fuga de capitales del país hacia otros espacios internacionales.
La Economía Venezolana
El contexto económico venezolano en la década del noventa se ha
caracterizado, por un desfase en la instrumentación de un programa económico
global que está orientado a corregir los desequilibrios de la economía, destacándose
en particular la ausencia de un plan fiscal que diera viabilidad a la gerencia de las
finanzas públicas en el mediano plazo y coadyuvara al proceso de estabilización
económica (BCV, 1.995).
A partir del año 1.997, la inestabilidad de la economía se intensifica, debido
en gran parte a la baja de los precios internacionales del petróleo, lo que generó la
aplicación de ajustes periódicos que implicaron recortes al presupuesto fiscal que
afectaron a la Agenda Venezuela (BCV, 1.998).
Entre el año 1.999 y el 2.000, el gobierno contó con 40 mil millones de
dólares por concepto petrolero y con 46 mil millones de dólares por concepto no
petrolero (BCV, 2.002), lo que trajo como consecuencia un programa excesivo de
gastos y a su vez consecuencias financieras negativas, produciéndose déficit fiscal y
maxi devaluación para el año 2.002, además de inflación y contracción económica y
una deuda interna de 15,4 billones al cierre del 2.002.
Venezuela podría cambiar su panorama económico y avanzar hacia el
progreso, para lo cual necesita la implantación de planes seguros y estables para
aumentar la productividad, tendría que darse la participación de los diferentes
sectores productivos para poder generar valor a la producción. El sector petrolero es
118
muy importante, es generador de riqueza y gracias a este sector la población
venezolana ha logrado progresos, pero es indispensable la diversificación de la
economía, aunque esto último ha sido el discurso trillado, no ha ocurrido la suficiente
implicación para que esta diversificación se ejecute de acuerdo a las exigencias del
país, por el contrario se está observando a través del cierre de empresas, la
disminución del parque industrial, cuando lo más sano para el desarrollo del país es el
desarrollo industrial, lo que a su vez podría significar políticas de incentivo para la
creación de empleos pudiéndose mejorar la situación del trabajador venezolano.
Gran parte de los recursos provenientes del petróleo deberían ser invertidos
fundamentalmente en la construcción de infraestructuras, inversión para el desarrollo
de la agricultura, la industria, el turismo y sobre todo para la satisfacción de las
necesidades básicas de la población como la alimentación, educación, salud,
vivienda, electricidad, seguridad, comunicaciones, vialidad, deportes, recreación,
evitando dilapidar los recursos en importaciones no fundamentales para el país, o en
importaciones de productos que pueden ser producidos en el país, esto en vista que
entre los años 1.993 y 1.998 hubo exportaciones por 193.453 millones de dólares,
cantidad que se distribuyó así: 162.561 millones de dólares (84% del total) por el
sector público y 30.862 millones de dólares (16,9% del total) por el sector privado.
Ingresos que van a salir nuevamente del país a través de las importaciones, las cuales
totalizaron 120.285 millones de dólares, donde el sector público importó por un
monto de 24.639 millones de dólares (20,5% del total) y el sector privado por 95.646
millones de dólares equivalentes a (79,5% del total) (FAO, 1.999), cifras que podrían
estar indicando que el Estado es un gran exportador y el sector privado un gran
importador.
Considerando el enorme peso del petróleo en las exportaciones, podría
pensarse en una apropiación de lo público por lo privado, toda vez que el ingreso
proveniente de la industria petrolera, puede estar no siendo convertido en producción,
119
consumo y explotación por parte de las empresas privadas, sino en importación,
creándose una mayor dependencia para la economía nacional.
De acuerdo a Montilla (2.003), se debe repensar en el planteamiento que hizo
en 1.961, el Banco Mundial para la Reconstrucción y el Desarrollo, quien en ese
entonces señaló:
Venezuela es un país ricamente dotado. Su localización geográfica y la variedad interior de su geografía la conducen al poderío. Su riqueza mineral ya es bien conocida, y puede resultar mayor aún que lo imaginado, tiene amplias áreas de suelos fértiles y de bosques no explotados, y algunas tierras no exploradas aún. El majestuoso Orinoco, ofrece fáciles medios de transporte desde Venezuela hacia los puertos extranjeros y posibilidades para abrir nuevos territorios. Su potencial en energía hidroeléctrica y térmica es inmenso. Pero estas ventajas naturales valen poco si Venezuela no posee la dirección y el dinamismo necesario para utilizarlos efectivamente. En un análisis final, el factor humano es el que decidirá el futuro del país (p. 10).
Planteamiento que está hoy día vigente, porque Venezuela sigue disponiendo
de una geografía, un clima y unos recursos naturales envidiables, por lo que el
engrandecimiento y progreso del país va a depender de las decisiones de su gente, por
eso es importante la participación del pueblo venezolano en la decisión de la ruta que
debe tomar el país en sus diferentes aspectos.
Es de pensar que con una economía prospera, se puede entregar mayor
presupuesto a la educación, ya que ésta es la vía susceptible para formar el capital
humano que debe intervenir de diferentes formas dentro del proceso productivo, que a
su vez revertirá nuevamente los recursos necesarios que se necesitan para lograr el
estado de bienestar.
120
La Educación Básica, debe preparar a sus niños, niñas y adolescentes, para
que estos a futuro den impulso al desarrollo del país y lograr con su participación la
transformación económica y social del mismo. Es de suponer que al implantarse
políticas económicas que converjan con una sana economía, se podrán direccionar
mejores presupuestos a la educación, con los cuales pueda construirse mayores
edificaciones escolares, mejor dotación escolar, mayor cobertura escolar, mejores
reformas curriculares, actualización docente, es decir mejorar la educación, que para
el caso en estudio está referido mas a la Educación Básica, mejoras que deben ser
orientadas tanto en lo cualitativo como en la cuantitativo.
Situación Social
Para el año 2.002 las cifras de organismos no gubernamentales (CEPAL,
2.002) señalan que en Venezuela 5.000.362 niños, niñas y adolescentes viven en
condiciones de pobreza, en general desnutridos y con serias deficiencias como para
abordar su futuro en condiciones normales. De ellos, 3.000.737 son menores de
catorce años y 2.009.625 son adolescentes entre catorce y diecisiete años. Esto revela
que la pobreza es un de los principales problemas venezolano y cuya atención y
solución en el mediano plazo está por encima de cualquier otra discusión en el país.
El discurso generalizado en la sociedad venezolana insiste en que son grupos de
atención prioritaria, pero las luchas van en otra dirección, aunque se han dado algunos
avances en la legislación y en el tratamiento a las necesidades a los derechos sociales
y de estos a su efectiva realización, equivale a la construcción de la ciudadanía
misma, implícita en la concepción de un Estado social de derecho.
Sin embargo, la lucha contra la pobreza no es asunto de ajustes, de medidas
aisladas, de pequeños planes de contingencia, ni del ejercicio público del sentimiento
privado de piedad y filantropía. La pobreza, la violencia social, y la exclusión en
Venezuela demandan políticas de emergencia en todos los frentes.
121
CAPÍTULO III
ESPECIFICACIÓN DEL CONTEXTO
VENEZUELA COMO CONTEXTO DEL PROBLEMA
Situación Económica y Social Venezolana.
Venezuela durante los siglos XVIII y XIX se caracterizó por ser un país
agropecuario, rural, monoproductor, monoexportador; dependiente y latifundista. La
agricultura fue la ocupación general de los venezolanos, fuente principal de su
riqueza; la producción se basaba fundamentalmente en cacao, café, cueros de res y
tabaco. De acuerdo a Veloz (1.945) “la producción de la agricultura dependía del
mundo capitalista mundial, se exportaba café para Alemania, tabaco y maderas para
Alemania e Inglaterra, algodón para Alemania y Estados Unidos, también se
exportaba ganado vacuno, cuero de res y oro” (P. 224).
En las últimas décadas del siglo XIX, una vez puesta en marcha la política de
viabilidad, concretamente el desarrollo de carreteras, caminos, ferrocarriles, canales,
puertos, telégrafo, cable submarino, hizo posible el aumento del comercio interno
como externo. Con respecto al comercio externo, Rangel (1.974) señala los progresos
en la exportación e importación en forma significativa a través de los puertos de
Maracaibo, Ciudad Bolívar y Carúpano, desde los cuales se exportaba hacia el
mercado exterior capitalista la producción de productos primarios como café, cacao,
cuero, oro, pero el carácter monocultivador de la economía venezolana, el atraso de la
ganadería y la industria obligaba a importar gran cantidad de alimentos y productos
industriales.
122
Al término de la segunda década del siglo XX, la economía venezolana se
presentó con una tendencia creciente hacia el predominio del petróleo, como rubro de
exportación que desplaza a los tradicionales productos agrícolas cacao y café, como
elementos fundamentales en la composición de las exportaciones, las cuales entran en
crisis debido a la caída de los precios en el mercado mundial, caída que se debió en
parte a los efectos negativos de la Primera Guerra Mundial.
El petróleo viene ocupando una situación privilegiada desde el año 1.917,
cuando se inicia la exportación masiva del mismo. A partir del año 1.926, el petróleo
no sólo se convierte en el primer producto de exportación, sino que los ingresos
fiscales provenientes de su explotación serán cada vez más crecientes y determinantes
en la composición del ingreso fiscal del Estado Venezolano, pasando el país de
monoexportador agropecuario a monoexportador petrolero, se transitó de la
Venezuela agropecuaria a la Venezuela petrolera, guiando la vida nacional en torno al
petróleo. La industria petrolera atrae la atención de grandes empresas, inglesas,
holandesas y norteamericanas, a las que se otorgan concesiones para la extracción y
explotación del petróleo en gran escala, ocupando Venezuela el lugar de primer
exportador de petróleo a nivel mundial. Para 1.930 el total de ingreso petrolero es de
19,39% y en 1.974 llega al 87,30% (Fuenmayor, 1976).
Para el año 1.935, la producción de petróleo se situó en 149 millones de
barriles, la exportación en 139 millones y el valor de las exportaciones alcanzó la
cifra de 649 millones de bolívares (Brito Figueroa, 1966), a lo cual hay que agregar
que el resto de las exportaciones entre las cuales están café, cacao, caucho, ganado
vacuno, cuero, azúcar, maíz, trigo, arroz, algodón llegó a 62 millones (Veloz, 1945).
Esto evidencia la diferencia del sector agropecuario que se encontraba en plena
decadencia con el sector petróleo el cual estaba en una fase de auge.
123
En la década de los setenta, la puesta en práctica, por medio de la
Organización de Países Exportadores de Petróleo (OPEP) de mecanismos, que por
primera vez permitiría la participación de los países productores en la determinación
del precio internacional del petróleo, provocó cambios trascendentales en la sociedad
venezolana.
La Venezuela que emerge después de 1.974, es otra. Al respecto, Briceño
León (1.990) puntualiza:
El cambio no es ya en relación a la Venezuela rural de comienzos de siglo, sino a una alteración generada al profundizarse el modelo petrolero y al convertirse más plenamente en una sociedad exportadora de petróleo. El impacto de los ingresos petroleros de 1.974 deben ser vistos como una acentuación de los efectos del petróleo sobre el país, los cuales, desde muchos años antes, se venía observando y anunciando, pero que encuentran su más extrema expresión cuando los precios del petróleo son triplicados y, en consecuencia los ingresos nacionales sufren el mismo incremento (P. 106).
Al efecto para 1.974, el precio del barril de petróleo estaba en 14 dólares
(CEPAL - ONU, 1.980) produciéndose ese año el movimiento financiero de traslado
de fondos más importante que haya conocido la historia contemporánea. Inmensos
volúmenes de capital se movieron hacia los países petroleros, siendo Venezuela
receptiva de un aumento de ingresos fiscales triplicados de 11.180 millones de
bolívares a 36.445 millones (BCV, 1.980).
Es necesario indicar que así como Venezuela triplicó sus ingresos, también
triplicó sus importaciones, existía un equilibrio entre el balance de exportaciones e
importaciones, donde el ingreso que entra por la exportación del petróleo sale de
nuevo a través de la importación masiva de bienes de consumo.
124
La nueva situación de ingresos permitió la construcción de importante
infraestructura industrial. Al mismo tiempo se llevó una política agresiva de
capacitación de alto nivel de la fuerza de trabajo a través del plan de becas Gran
Mariscal de Ayacucho, también fue importante la creación de tecnología nacional a
través del CONICID. En el año 1.975 se procede a la nacionalización de la
producción del hierro y un año después a la de la industria petrolera.
Para el año 1.976, con los numerosos recursos fiscales provenientes de los
crecientes ingresos petroleros, el país ya con su industria nacionalizada, conoció un
rápido crecimiento en diversos sectores de su economía. El Estado con sus grandes
capitales de origen petrolero desarrolló gigantescos proyectos siderúrgicos,
petroquímicos, hidroeléctricos, surgiendo numerosas empresas e institutos estatales y
agigantándose las existentes como SIDOR, VENALUM, EDELCA, PDVSA,
CADAFE, INOS, CANTV. Esta sacudida económica convirtió al Estado venezolano
en el principal empresario del país, y el programa que orientó ese proceso se le llamó
la Gran Venezuela.
Para Maza Zavala (1.981) desde el punto de vista de las estructuras
económicas: lo característico del período es un fuerte capitalismo de estado.
Aproximadamente la mitad del producto interno bruto está en manos del estado; los
medios de producción fundamentales y estratégicos son operados por entes públicos y
el sector privado de la economía pasa en la práctica a depender del Estado (p. 50).
Para 1.976, según el informe económico del Banco Central de Venezuela, la
tasa global de crecimiento del producto interno bruto (PIB) llegó al 7,8%. El
crecimiento industrial fue de 11,4%, el de los servicios 8,3% y la construcción se
sitúa en el 20%.
125
Con respecto al sector industrial el proceso de industrialización en Venezuela
tiene una tardía implantación, surgiendo como consecuencia de la exportación
petrolera. Surge fundamentalmente a partir del año 1.945, cuando la sociedad
venezolana contaba con ciertos recursos financieros para invertir en este sector,
cuando el capital extranjero consideró un negocio rentable invertir en el sector
industrial. Entre 1.945 y 1.958 el sector manufacturero creció en forma desarticulada
con un fuerte apego a la orientación del gasto público. Durante ese período la
industrialización no logró satisfacer ni en un 50% las necesidades internas de
productos manufacturados, tampoco cumplió su papel dinámico en la absorción de
mano de obra. La segunda etapa del proceso de industrialización, es la denominada
sustitución de importaciones aplicada entre los años 1.959 – 1.975. Con esa política
se abrieron amplias posibilidades para que las inversiones extranjeras instalaran sus
empresas productoras de bienes de consumo, tales como automóviles, cigarrillos,
textiles, alimentos, bebidas entre otros. La mayoría de estos productos hechos en
Venezuela, en realidad sólo eran ensamblados en el país utilizando tecnología y
partes o piezas importadas. Esta política de sustitución de importaciones a la larga
trajo problemas porque estimuló el contrabando, la corrupción, encareció los bienes
de consumo y no garantizó un adecuado abastecimiento de bienes para el país.
A partir de 1.978, el país después de haber experimentado las más altas tasas
de crecimiento económico, entra en un período de recesión bajo el peso del
endeudamiento externo, el crecimiento económico comenzó a desacelerarse y el
producto interno bruto (PIB) se situó por debajo del 6%, alcanzando la inflación
cifras alarmantes. El período de los altos precios petroleros decae a partir de la
década de los ochenta y se manifiesta a corto plazo en restricciones a los presupuestos
e inversiones públicas, dificultades en el pago de la deuda externa y devaluación de la
unidad monetaria. La crisis de 1.982 y 1.983 produjo la devaluación del bolívar
(viernes negro), el aumento de la deuda externa; comenzó un proceso acelerado de
inflación Las medidas de ajuste económico tomadas según las exigencias del Fondo
126
Monetario Internacional produjeron la aceleración del proceso inflacionario, la
disminución del salario real; aumento de la población en el sector informal que según
el Banco Central de Venezuela (BCV,1.985) estaba calculada en un 45%; ocurrió un
deterioro de los servicios de transporte, salud, educación, seguridad social.
La culminación de la década del ochenta fue compleja, el año 1.989, tuvo una
fuerte carga de inflación, 81% (BCV, 1.989), aumento de la población informal,
desempleo, deterioro de los servicios básicos, pocos recursos internacionales,
desaliento general, ocurrió el Caracaso, se originaron nuevos endeudamientos para el
gobierno venezolano. Así, a la década del noventa se entró con nuevos
endeudamientos, con refinanciamiento de la deuda externa acordada en el año 1.990,
lo cual le permitió al gobierno nacional obtener dinero proveniente de la banca
comercial de los gobiernos extranjeros (España, Francia e Italia) y de los organismos
multilaterales de crédito como el Fondo Monetario Internacional (FMI), el Banco
Mundial (BM) y el Banco Interamericano de Desarrollo (BID). Ese dinero, 113 mil
millones de bolívares (BCV, 1.990), se solicitó para financiar el llamado Plan de
Inversiones y el paquete económico implantado por el Presidente de turno.
La década del noventa tuvo dificultad, tanto en el desempleo, inflación,
devaluación del bolívar, caída de reservas internacionales, déficit fiscal, aumento del
sector informal. De acuerdo a cifras del Banco Central de Venezuela (1.996), el
desempleo fue en aumento, observándose 9,6% (1.991); 8,10% (1.992); 6,6% (1.993),
8,6% (1.994); 10,2% (1.995); 11,1% (1.996), la tasa de inflación tuvo el siguiente
comportamiento 31% (1.991); 32% (1.992); 46% (1.993), 70,8% (1.994); 56,60%
(1.995); 77,4% (1.996). Para el año 1.996, ante la alta tasa de inflación, que significa
empobrecimiento para la población venezolana, aunado a políticas económicas poco
coherentes, Venezuela acude nuevamente al Fondo Monetario Internacional (FMI)
bajo el nuevo plan llamado Agenda Venezuela para recibir nuevos préstamos con la
127
finalidad de bajar la deuda externa vencida y hacer frente a la inflación, a su vez
continua la permanente devaluación del bolívar que comenzó en el año 1.983.
Para el año 1.998 las cifras señalan (OCEI, 1998) (BCV, 1.998) que de una
fuerza de trabajo de 9.699.330 personas, 1.426.069 se encontraban desempleados
(15%); el sector informal de la economía lo constituían 4.210.230 personas (52,1%),
estando en el sector formal de la economía menos de 4 millones de personas. Según
el Centro de Documentación y Análisis Social para los Trabajadores (CENDA,1.999)
el desempleo aumentó a 20%. Aunado a lo anterior, las reservas internacionales
estaban en 14 millones aproximadamente y el PIB en 9 puntos.
Durante el año 1.999, continua el déficit fiscal de 9 puntos del PIB, el
presupuesto tiene que redefinirse en vista de que el precio del barril de petróleo bajó a
9 dólares, afectando la reducción presupuestaria a los Estados. Para
FUNDACREDESA (1.999), de los 23 millones de habitantes del país casi 20
millones vivían en pobreza crítica. Hacia finales del año 1.999, el precio del barril de
petróleo aumento, pero sin embargo la empresa privada no se incorporo a la
reactivación del aparato productivo, acentuándose la recesión y aumentando el
desempleo.
Entre el año 1.999 y el 2.000, el Estado contó con 40.000 millones de dólares
por concepto petrolero y con 46.000 millones de dólares por concepto no petrolero
(BCV, 2.002), sin embargo se produjo un fuerte déficit fiscal y se acude a la
devaluación para el año 2.002, que se suma a la conflictividad política y social
manifestada durante ese año, produciéndose además de inflación y contracción
económica el impacto del llamado paro cívico que incidió fuertemente en la industria
petrolera, ampliándose el monto de la deuda externa hasta 15,4 billones de bolívares
al cierre del 2.002. El Estado hizo erogaciones a través de un programa de gastos
excesivo en cuanto al monto, no por la realización de obras o de política social, ya
128
que aún siendo mayor el gasto que el ingreso, no logro cumplir con sus fines en
cuanto a la satisfacción de las necesidades de la población venezolana. El elevado
gasto trajo consecuencias financieras negativas, produciéndose déficit fiscal,
maxidevaluación para el año 2.002, ambiente de inflación en franco ascenso y
contracción económica, y con una deuda interna que pasó de 2 billones de dólares
(1.998) a 15,4 billones de dólares al cierre del año 2.002, significando esto que la
deuda interna del país aumentó casi 7 veces en cuatro años, constituyendo la misma
un gigantesco y costoso pasivo interno (BCV, 2.002).
Por su parte, la industria venezolana fue sufriendo un deterioro progresivo, en
el año 1.998, según el Instituto Nacional de Estadísticas (INE, 2.003), se registraron
11.539 establecimientos en el país, para el año 2.002 sólo estaban activas 6.500
empresas; o sea, que el 44% de ellas estaban cerradas. Este cierre llevó a que el
volumen de producción bajara colocándose Venezuela a la par de los países más
pequeños de América Latina, cuando hace aproximadamente 22 años, Venezuela
ocupaba el tercer o cuarto lugar del parque industrial del continente.
Según el estudio realizado por la Comisión Económica para América Latina
(CEPAL, 2.003), dentro de los países de la región Latinoamericana y el Caribe, al
segundo semestre del 2.003, Venezuela es el país que registra el más bajo nivel de
crecimiento (-13%), completándose así dos años consecutivos de fuerte contracción
que puede atribuirse en parte al conflicto político interno que ha afectado al país.
La dificultad económica ya planteada trajo desajustes en lo social. Las
medidas de ajuste económico realizados en la década del ochenta según las
exigencias de los organismos económicos internacionales, produjeron la aceleración
del proceso inflacionario, la disminución del salario real. El aumento del sector
informal fue en aumento progresivo, para 1.985 era de 45 % (BCV, 1.985), para el
segundo semestre del año 2.003 viene a estar representado por 51,8% (INE, 2003), así
129
mismo, se produjo el deterioro de los servicios de transporte, salud, educación,
seguridad social. A finales del ochenta aumentó la inflación a 81% (BCV, 1.989),
aumentando además el desempleo, deterioro de los servicios básicos. Entrando a la
década del noventa con endeudamiento, refinanciamiento de la deuda externa con la
banca comercial de los gobiernos extranjeros de Francia, España e Italia y los
organismos multilaterales de crédito.
El deterioro económico en Venezuela ha impactado en materia laboral, el
desempleo ha ido en aumento, de una tasa de 9,6% para 1.991 pasó a 15% para 1.998
(OCEI, BCV, 1.998) ubicándose en el año 2003 en 19,8% (INE, 2.003) ó 25%
(CENDA, 2.003), cifras que, aunque en el 2.003 tienen ciertas variaciones de un
organismo a otro, son indicativas del aumento gradual del desempleo en la población.
Un número considerable de personas con formación y futuro han tenido que salir del
mundo laboral estable a la inseguridad e inestabilidad de la informalidad, o al
desempleo. Por primera vez, en todo el período democrático, el desempleo llegó a
cifras tan elevadas y la informalidad superó al empleo y el desempleo. Para el
segundo semestre del 2.002, la informalidad llegó al 51,8% (INE, 2.003), otras
organismos señalan un 60% (CENDA, 2.003).
Trabajar en el sector informal significa realizar actividades de toda índole,
actividades que apenas permiten la subsistencia de las personas. Hay quienes logran
crear sus propios negocios estableciendo una microempresa, que al no registrarla se
mantiene como informal, son los casos de herreros, carpinteros, electricistas,
plomeros, que trabajan por su cuenta, que están en el sector informal por decisión
propia, que quizás no quieren emplearse en el sector formal. Los que trabajan en el
sector informal cada vez tienen que ser más creativos, por ejemplo, a falta de
teléfonos público, ofrecen el servicio en plena calle. Pero el trabajador informal no
tiene una remuneración fija, no goza de prestaciones sociales ni del sistema de
seguridad social integral, o sea, de atención a la salud, prevención y riesgos en el
130
trabajo, pensiones, indemnizaciones, subsidios y asignaciones familiares, servicios de
formación y capacitación, programas de descanso y recreación social.
La economía informal amortiguó el desempleo durante más de 20 años de
dificultad en el manejo de la economía, pero el sector informal ya no es igual que
antes, porque hay un crecimiento desbordado del sector, apareciendo cada vez más
buhoneros de cuanto producto o servicio puedan vender en las calles, redoblándose la
anarquía y la pobreza. Además, al ocurrir movimiento de la población trabajadora del
sector formal al informal, se puede producir la apertura de la brecha salarial entre
ambos sectores. Si para 1.998 el salario promedio del sector informal estaba 32% por
debajo del sector formal, al cierre del año 2.002 esa brecha se incrementó en 46%.
El deterioro del salario promedio del sector informal llegó en 1.999 a un
punto crítico, cuando más de la mitad de los trabajadores de este sector, se vieron en
la imposibilidad de acceder con sus ingresos a la canasta alimentaría, hasta ese año el
sector informal había sido una alternativa viable de subsistencia ante la incapacidad
del Estado de crear puestos de trabajo o de incentivar a las empresas para la creación
de los mismos.
La población, tanto la que trabaja en el sector formal, como en el sector
informal, ha ido acrecentando sus niveles de pobreza y disminuyendo el consumo de
bienes alimenticios esenciales, por el alto costo de la cesta alimentaría, la cual tenía
un costo aproximado entre 350.000 y 400.000 bolívares para el año 2003, por lo que
las personas con un salario mínimo sólo podían acceder a la mitad de los productos.
El salario mínimo para el sector de trabajadores urbanos que fue de 190.000
bolívares al 30 de Junio del 2.003, pero para el primero de Octubre de este mismo año
se incrementó hasta la cantidad de 247.104 bolívares mensuales (Decreto presidencial
Nº 2387, Abril 2.003). Igualmente el incremento para los trabajadores rurales fue de
222.396,60 bolívares al primero de Octubre del 2.003. Para el año 2004, el salario
131
mínimo aumento a 321.235,20 bolívares mensuales (Decreto presidencial N° 2902,
Abril 2004) y para el 2005 aumento en 405.000 bolívares mensuales ( Decreto
presidencial N° 3628, Abril 2005 ), teniendo la cesta alimentaría a finales de primer
semestre del 2.005 un costo de aproximadamente de 643.000 bolívares
(CENDA,2005), según INE es de 374.629,49 (INE, 2.005), aunque el salario ha
tenido un incremento, a la población se le dificulta la compra de la canasta
alimentaría por el aumento de la misma.
Estas cifras permiten reflexionar acerca de las pocas posibilidades que tiene
los trabajadores tanto del sector formal como informal de acceder a la cesta
alimentaría, menos aun poder alcanzar la cesta básica, que comprende la alimentaría,
más los demás gastos familiares (vivienda, agua, electricidad, teléfono) que para el
2003 estaba por encima de un millón de bolívares. A pesar de las cifras señaladas por
INE (2004), entre ellas, la tasa de ocupación o fuerza de trabajo 86.3%, tasa de
desocupación: 13,7%, índice de desarrollo humano: 0,80, indicativas de una mayor
ocupación y menor desempleo con respecto al año anterior es observable el deterioro
económico como social, los cuales son factores que van en detrimento de la calidad
de vida de la población, y ante la situación de desempleo, subempleo, carencia
habitacional, bajos salarios, exclusión social, la familia tiene que sobrevivir, y una
forma de lograrlo es que cada vez más miembros de la familia realicen alguna
actividad laboral para obtener una remuneración, si esto es así, entonces hay la
posibilidad de que cada día mas niños, niñas y adolescentes se incorporen a trabajar,
sin tener una preparación mínima para desempeñar una actividad productiva de
utilidad en la sociedad, por el contrario comienzan a trabajar corriendo grandes
riesgos para su vida.
En la Cumbre del Milenio del año 2000, 189 naciones acordaron la meta de
reducir la pobreza y el hambre a la mitad para el 2015. En el informe sobre Desarrollo
Humano 2003 del Programa de Naciones Unidas para el Desarrollo (PNUD, 2003)
132
centrado en la evaluación del cumplimiento de las metas del milenio identificados
como Objetivos de Desarrollo del Milenio (ODM), se ubica a Venezuela entre los
países de alta prioridad por presentar retrasos evidentes en el cumplimiento de las
metas del milenio. Estando Venezuela entre los 28 países del mundo y entre los tres
(3) de América Latina y del Caribe junto a República Dominicana y Bahamas, y el
único de América del Sur, clasificados como de alta prioridad. Definiéndose estos,
como los países que requerirán esfuerzos particularmente intensos para alcanzar los
objetivos y metas. Con respecto a Venezuela se señala específicamente que se trata de
un país con un nivel de partida medio pero en el cual el progreso ha retrocedido. El
ubicar a Venezuela dentro de esta clasificación según el informe del PNUD, indica
que ha experimentado retrocesos en el ritmo de progreso hacia las metas de:
reducción de la pobreza, de reducción del hambre y de acceso universal a la
educación primaria.
El documento del PNUD, afirma que en el caso de la meta de reducción de
pobreza extrema, el país muestra un estancamiento en su desempeño. Es decir, en los
últimos años no ha habido una reducción de pobreza significativa que permita pensar
que si no se alteran drásticamente estas condiciones, para el 2015 se puedan obtener
la meta de reducción de pobreza extrema a la mitad. En el caso de la meta del
hambre, que se refiere es a la población subnutrida, la situación es un poco más
delicada porque el informe habla de que Venezuela no solamente no ha disminuido al
ritmo que permitiría esperar que para el 2015 se redujera a la mitad esa población,
sino por el contrario, se ha incrementado.
Igualmente según el informe de desarrollo humano divulgado por el PNUD
(2005), Venezuela reduce su desarrollo humano. La pérdida de ingresos y la caída en
la esperanza de vida y en la alfabetización originaron que Venezuela cediera siete (7)
puntos en el índice de desarrollo humano (IDH) de 2005. El índice de desarrollo
humano es un indicador que cubre tres dimensiones del bienestar humano: el ingreso,
133
la educación y la salud. Según el PNUD, en Venezuela el 32% de la población vive
con dos dólares diarios y el 15% con un dólar.
Situación Jurídica de Venezuela
La Constitución de la República Bolivariana de Venezuela (1999), puntualiza
que “La República Bolivariana de Venezuela es irrevocablemente libre e
independiente y fundamenta su patrimonio moral y sus valores de libertad, igualdad,
justicia y paz internacional en la doctrina de Simón Bolívar, el Libertador...” (art 1).
Igualmente la carta fundamental es categórica al señalar que Venezuela se constituye
“en un Estado democrático y social de Derecho y de Justicia, que propugna como
valores superiores de su ordenamiento jurídico y de su actuación, la vida, la libertad,
la justicia, la igualdad, la solidaridad, la democracia, la responsabilidad
social...”(art.2), agregando además “la preeminencia de los derechos humanos, la
ética y el pluralismo político” (ver anexo A).
Con respecto a los fines fundamentales del Estado, consagrados en la
Constitución, la misma indica “El Estado tiene como fines esenciales la defensa y el
desarrollo de la persona y el respeto a su dignidad, el ejercicio democrático de la
voluntad popular, la construcción de una sociedad justa y amante de la paz...” (art.3),
el mismo artículo incentiva la prosperidad y el bienestar que debe tener el pueblo y la
prioridad para lograrlo a través de la educación y el trabajo, cuando señala como otros
fines del Estado “...la promoción de la prosperidad y bienestar del pueblo y la
garantía del cumplimiento de los principios, derechos y deberes reconocidos y
consagrados en esta Constitución. La educación y el trabajo son los procesos
fundamentales para alcanzar dichos fines” (art. 3).
Igualmente de la observancia del Título III Capítulo V, referido a los
Derechos Sociales y de las familias, entre los fines del estado se encuentran la
134
protección de la familia, de los niños, niñas y adolescentes cuando indica que el
Estado protegerá “ a las familias como asociación natural de la sociedad y como el
espacio fundamental para el desarrollo integral de las personas... el Estado garantizará
protección a la madre, al padre o a quienes ejerzan la jefatura de la familia”(art.75).
Igualmente manifiesta el artículo que “Los niños, niñas y adolescentes tienen derecho
a vivir, ser criados o criadas y a desarrollarse en el seno de su familia de origen.
Cuando ello sea imposible o contrario a su interés superior, tendrán derecho a una
familia sustituta...”(art.75).
A su vez le da protección a los menores cuando les garantiza ser sujetos de
derecho, al respecto indica que los niños, niñas y adolescentes “son sujetos plenos de
derecho y estarán protegidos por la legislación, órganos y tribunales especializados,
los cuales respetarán, garantizarán y desarrollarán los contenidos de esta
Constitución, la Convención sobre los Derechos del Niño y demás Tratados
Internacionales suscrito y ratificado por la República...”(art. 78), agrega el artículo
que “... el Estado, las familias y la sociedad asegurarán, con prioridad absoluta,
protección integral, para lo cual se tomará en cuenta su interés superior en las
decisiones y acciones que les conciernan...”
El Estado le garantiza también protección a los jóvenes, la cual se pone de
manifiesto en la Constitución, cuando indica que los jóvenes y las jóvenes “tienen el
derecho y el deber de ser sujetos activos del proceso de desarrollo. El Estado, con la
participación de las familias y la sociedad, creará oportunidades para estimular su
tránsito productivo hacia la vida adulta...” (art.79).
Igualmente entre los derechos sociales, el Estado le garantiza a los ciudadanos
el tener una vivienda al formular “Toda persona tiene derecho a una vivienda
adecuada, segura, cómoda, higiénica, con servicios básicos esenciales que incluyan
135
un hábitat que humanice las relaciones familiares, vecinales y comunitarias...” (art.
82). Este es un derecho que debe ser compartido entre los ciudadanos y el Estado
La salud también es un derecho social fundamental, la cual es una obligación
del Estado, que la garantizará como parte del derecho a la vida. “... El Estado
promoverá y desarrollará políticas orientadas a elevar la calidad de vida, el bienestar
colectivo y el acceso a los servicios. Todas las personas tienen derecho a la
protección de la salud...”(art.83). Las personas así como tienen un derecho también
tienen un deber, el cual es la obligación de participar activamente en su promoción y
defensa y el de cumplir con las medidas sanitarias y de saneamiento que establezca la
ley, de conformidad con los Tratados y Convenios Internacionales suscritos y
ratificados por la República.
Entre los derechos sociales la materia laboral también es prioritaria, de allí que
la constitución en sus diferentes artículos otorga una serie de derechos. Entre estos
están: “Toda persona tiene derecho al trabajo y el deber de trabajar. El Estado
garantizará la adopción de las medidas necesarias a los fines de que toda persona
pueda obtener ocupación productiva, que le proporcione una existencia digna y
decorosa...” (art. 87), agrega este artículo que entre los fines del Estado esta el
fomento del empleo. “El Estado garantizará la igualdad y equidad de hombres y
mujeres en el ejercicio del derecho al trabajo. El Estado reconocerá el trabajo del
hogar como actividad económica que crea valor agregado y produce riqueza y
bienestar social...”(art. 88). El trabajo “es un hecho social y gozará de la protección
del Estado. La ley dispondrá lo necesario para mejorar las condiciones materiales,
morales e intelectuales de los trabajadores y trabajadoras...” (art. 89)
A su vez, la Constitución protege a los adolescentes para evitar que estos sean
explotados en su actividad laboral, al respecto señala “...Se prohíbe el trabajo de
136
adolescentes en labores que puedan afectar su desarrollo integral. El Estado los o las
protegerá contra cualquier explotación económica y social” (art.89)
En referencia a la jornada de trabajo, la carta fundamental es taxativa cuando
señala los tipos de jornada, la duración, el descanso semanal, las vacaciones, el
derecho a un salario suficiente para vivir con dignidad ( ver anexo A ).
Con respecto a los derechos culturales y educativos, el Título III en su
Capítulo VI, garantiza a la educación como un derecho humano y como una función
del Estado, al respecto indica: “La educación es un derecho humano y un deber social
fundamental, es democrática, gratuita y obligatoria. El Estado la asumirá como
función indeclinable y de máximo interés en todos sus niveles y modalidades...”( art.
102 ). De acuerdo a la norma Constitucional esta es una función que tiene el Estado
en corresponsabilidad con la familia y la sociedad.
Al referirse a los derechos económicos, la Constitución puntualiza que todas
las personas “ pueden dedicarse libremente a la actividad económica de su
preferencia, sin más limitaciones que las previstas en esta Constitución y las que
establezcan las leyes, por razones de desarrollo humano, seguridad, sanidad,
protección del ambiente u otras de interés social..” (art. 112). Advierte también la
norma que el Estado debe promover la iniciativa privada, garantizando la creación y
justa distribución de la riqueza, así como la producción de bienes y servicios que
satisfagan las necesidades de la población, la libertad de trabajo, empresa, comercio,
industria, sin perjuicio de su facultad para dictar medidas para planificar, racionalizar
y regular la economía e impulsar el desarrollo integral del país.
En la Carta Magna de 1999, los derechos sociales se amplían a nuevas áreas
de la vida social y se incorporan nuevos sujetos; la función social del Estado se
redefine y se establece que será éste el que ejercerá el rol principal en cuanto a la
137
garantía de los derechos sociales; y se introduce el principio de la corresponsabilidad
de las familias y de la sociedad con igual obligación de cumplir deberes para asegurar
cabalmente el ejercicio de estos derechos. La Constitución incorpora elementos que
implican demandas de cambio, no solamente en la relación entre el Estado y la
sociedad, sino también entre los distintos ámbitos de la sociedad. El cambio está en
la definición del modelo político de la nueva República como democrático-
participativo y protagónico, escenario en el cual debe construirse la
corresponsabilidad entre los ciudadanos y el Estado. Según esta concepción, la
política social debe tener como finalidad capacitar, preparar y garantizar la salud, el
trabajo, la educación, la seguridad social, la vivienda, en otras palabras, construir una
ciudadanía de contenido social; sin embargo, y pese a lo anterior, el Estado social es
definido en la nueva Constitución como ente que tiene un conjunto de obligaciones
para con los ciudadanos, con el objetivo de lograr la justicia social. En ese mismo
orden de ideas se puede señalar que la ampliación de los derechos sociales ha
conducido a una explosión de demandas sociales que están comprometiendo
seriamente la capacidad institucional del Estado.
De acuerdo con la Constitución se podrían identificar algunos elementos que
podrían ayudar en el proceso de caracterizar la acción del Estado. En primer lugar se
identifica la construcción de una ciudadanía de contenido social fundamentada en la
universalidad de los derechos sociales, esenciales para elevar la calidad de vida, y en
el reconocimiento de los sujetos de estos derechos sin ningún tipo de discriminación.
En segundo lugar se encuentra la búsqueda de la equidad como objetivo supremo del
ordenamiento económico y social, para hacer efectiva la universalización de los
derechos y una justa distribución de la riqueza. En tercer lugar está definido como el
rescate de lo público como espacio para el ejercicio de una verdadera democracia que
deberá sustentarse en la participación protagónica de todos en función del interés de
todos. Estos elementos estarían conformando una guía que podría ayudar a la política
social; en efecto, de alguna manera fueron tomados en cuenta en los lineamientos
138
generales del Plan de Desarrollo Económico y Social de la Nación 2001-2007, en
donde se encuentran las bases estratégicas para llevar adelante el proyecto nacional
Para llevar a cabo las políticas sociales y económicas y dar de alguna forma
cumplimiento a los derechos socioeconómicos y exigidos por los ciudadanos, en el
año 1999, el ejecutivo de la República anuncio el Plan Bolívar 2000, definiéndolo
como un plan cívico-militar. Este Plan fue la plataforma de relanzamiento de la
política social del Gobierno de turno y buscó poner a la fuerza armada en contacto
directo con las comunidades mas necesitadas. El Plan comprendió un conjunto de
actividades definidas como de asistencia pública, en las que se incluyen acciones de
mejoramiento, recuperación y construcción de viviendas, de infraestructura educativa,
de atención ambulatoria en salud, reorganización del sistema de salud pública con
énfasis en la atención primaria, apoyada en la organización comunitaria de la
población, y un programa de empleo rápido, así como acciones de beneficiencia en
las comunidades de pobreza crítica y extrema, que incluyeron suministros gratuitos
de alimentos y de implementos básicos, entre otras acciones
En principio, el Plan comprendió los siguientes proyectos: el Proyecto País
(asistencia urgente a la población en pobreza crítica), el Proyecto Patria (atención a
los desempleados y organización de comunidades) y el Proyecto Nación (desarrollo
de planes industriales de largo plazo). El Plan sigue las prácticas del ejercicio de una
política social asistencial y focalizada en los más pobres y excluidos, con el fin de
paliar sus necesidades más urgentes. Sus ejecutores fueron los militares, quienes, tal
vez por desconocimiento, u otra causa, no hicieron uso de los canales
institucionalizados del Estado, por lo que estas acciones se presentaron débiles,
aisladas, y poco o nada coordinadas con los diferentes entes nacionales, regionales y
locales.
139
A finales de 1999, se crea el Fondo Único Social (FUS) que funcionó hasta
finales de 2001, la intención por parte del Ejecutivo era fortalecer los programas de
desarrollo social y garantizar que los recursos destinados al sector social llegasen a la
población en situación de pobreza y no se quedaran en el camino de la burocracia. El
fin primordial de este organismo era el de aumentar la eficiencia en la ejecución y
cobertura de los programas sociales existentes, especialmente los destinados a
alimentación, educación, nutrición y salud, para así estar en condiciones de eliminar
la gran desarticulación institucional que reinaba en el sector social. Fue el primer
intento dirigido a ordenar la política social. Con la creación del FUS y del Plan
Bolívar 2000 se concentraron las decisiones y los recursos destinados al sector social.
Estas iniciativas implicaron grandes gastos, denuncias de corrupción y
arbitrariedades.
Es de pensar que la implementación de la política social ha seguido el mismo
patrón de definición ocurrido en las décadas anteriores, no han ocurridos cambios
significativos ya que las políticas sociales se han abocado a paliar las emergencias
sociales y a asistir en determinadas oportunidades a los más pobres, lo que ha
impedido que se conforme una política social integral.
Otro de los programas presentados dentro de esta Agenda Social 2000, fue el
Proyecto Educativo Nacional, orientado a construir cultura de participación
ciudadana y solidaridad social a través de la vinculación de los contenidos
programáticos con la vida cotidiana. Una de sus herramientas fundamentales, pero no
la única, para estar en condiciones de alcanzar ese objetivo, fue la creación de las
escuelas bolivarianas. Este Plan contiene otros programas llamados también misiones
que tienen como objetivos generales democratizar la educación, para proporcionar a
la población venezolana acceso y participación a un sistema educativo que sea sin
exclusión y de calidad, que facilite su incorporación al trabajo productivo nacional.
En esta Agenda se podrían incluir todos los nuevos programas sociales que son
140
anunciados como son los programas dirigidos a la atención a los niños de la calle,
programa Niños de la Patria, a la población de la tercera edad desasistida, atención
integral al anciano, a los desempleados, a los indígenas, entre otros.
A pesar de las diferentes políticas socio-económicas; de las cifras difundidas
por los mismos organismos oficiales se desprende: aumento de la pobreza, aumento
del sector informal de la economía, continúan los bajos ingresos, se elevo la tasa de
desempleo. El gasto del sector social como porcentaje del PIB aumentó
paulatinamente desde 1999 (9 por ciento) hasta 2000 (11 por ciento); no mostrando
variación alguna hasta 2002. El gasto social como porcentaje del gasto público total
se mantuvo igual desde 1999 hasta 2002 (40 por ciento), aumentando levemente un
punto porcentual para 2003. En el 2005 las cifras oficiales indican crecimiento de la
economía, en caso de ser cierto, es observable la asincronía existente entre este
crecimiento y la situación de pobreza que vive el país, ya planteado en este mismo
capítulo, y que vulnera tanto los derechos de los adultos, como los derechos de los
niños, niñas y adolescentes que son motivo de estudio en la presente investigación.
Con respecto a los derechos de los niños, niñas y adolescentes, estos están
fundamentados en la doctrina de la protección integral, la cual esta basada en la
declaración de los derechos del niño; y la cual concibe una serie de principios
rectores que constituyen sus pilares fundamentales como son: el niño como sujeto de
derecho, el interés superior del niño, la prioridad absoluta, la participación y el rol
fundamental de la familia en la garantía de los derechos de los niños, niñas y
adolescentes. La nueva doctrina convierte las necesidades de los niños, niñas y
adolescentes en derechos civiles, culturales, económicos, políticos y sociales. En el
marco de esta nueva concepción jurídica y social se atribuyen derechos específicos a
los niños, niñas y adolescentes, pero no derechos especiales excluyentes. La
especificidad implica reforzar los derechos otorgados a los seres humanos de
cualquier edad adecuándolo a los niños, niñas y adolescentes como sujetos en
141
formación. Igualmente se amplían para ellos una serie de nuevos derechos que antes
solo se reconocían a los mayores de edad, entre estos: el derecho a la libertad de
opinión, a la participación, asociación a la seguridad social, por señalar algunos.
En Venezuela y jerárquicamente debajo de la Constitución, la ley que regula
los derechos de los niños, niñas y adolescentes es la Ley Orgánica para la Protección
del Niño y Adolescente, como se ha señalado en capítulos anteriores. La misma tiene
por objeto garantizar a todos los niños, niñas y adolescentes, que se encuentren en
el territorio nacional “ el ejercicio y el disfrute pleno y efectivo de sus derechos y
garantías, a través de la protección integral que el Estado, la sociedad y la familia
deben brindarles desde el momento de su concepción” (art. 1 ) ( Ver anexo A ).
En materia laboral, bajo el Titulo II Capítulo III (ver anexo A), la Ley regula
la protección de los niños, niñas y adolescentes trabajadores, al respecto la misma
indica que todos los niños y adolescentes trabajadores tienen derecho a estar
protegidos por “el Estado, la familia y la sociedad, en especial contra la explotación
económica y el desempeño de cualquier trabajo que pueda entorpecer su educación,
sea peligroso o nocivo para su salud o para su desarrollo integral” (art. 94) . De
acuerdo al artículo esta es una función en donde tienen corresponsabilidad tanto el
Estado como la familia y la sociedad. También señala la ley la necesaria armonía que
debe existir entre trabajo y educación, teniendo la responsabilidad tanto el Estado, la
familia, la sociedad como los patronos quienes deben velar para que los adolescentes
trabajadores completen la educación obligatoria y tengan acceso efectivo a la
continuidad de su educación. Igualmente la ley indica que la edad mínima para
trabajar en todo territorio de la República es la edad de catorce (14) años, aunque el
Consejo de Protección podrá autorizar, en determinadas circunstancias debidamente
justificadas, el trabajo de adolescentes por debajo de la edad mínima, siempre que la
actividad a realizar no menoscabe su derecho a la educación, sea peligrosa o nociva
142
para su salud o desarrollo integral o se encuentre expresamente prohibida por Ley
(art. 96).
Para trabajar todos los adolescentes deben inscribirse en el registro de
adolescentes trabajadores, cuyos datos deben ser enviados mensualmente al
ministerio del ramo, a efectos de inspección y supervisión del trabajo. Los
adolescentes trabajadores tienen capacidad laboral, derecho a la sindicalización, a una
jornada laboral, a huelga, vacaciones, examen medico anual, a inscripción en el
Sistema de Seguridad Social, entre otros derechos. Así, en referencia a la capacidad
laboral la Ley precisa: “ Se reconoce a los adolescentes, a partir de los catorce años
de edad, el derecho a celebrar válidamente actos, contratos y convenios colectivas
relacionados con su actividad laboral y económica; así como, para ejercer las
respectivas acciones...” (art. 100).
Se reconoce el derecho de sindicación “Los adolescentes gozan de libertad
sindical y tienen derecho a constituir libremente las organizaciones sindicales que
estimen convenientes, así como, de afiliarse a ellas, de conformidad con la Ley...”
(art. 101). Se garantiza el derecho a una jornada de trabajo “ La jornada de trabajo de
los adolescentes no podrá exceder de seis horas diarias y deberá dividirse en dos
periodos, ninguno de los cuales será mayor de cuatro horas... el trabajo semanal no
podrá exceder de treinta horas” ( art.102 ). Derecho de Huelga: “ Los adolescentes
tienen derecho de huelga, el cual ejercerán de conformidad con la Ley y con los
límites derivados del ejercicio de las facultades legales que corresponden a sus
padres, representantes o responsables” ( art.103 )
143
A pesar de las amplias garantías que ofrece la legislación venezolana, se
advierte que no hay la debida correspondencia con la protección integral que debe
proporcionársele a los niños, niñas y adolescentes trabajadores, los cuales por su
precaria situación económica y social tienen que trabajar en condiciones de riesgo
para poder sobrevivir. Aunque la oportunidad de la niñez y adolescencia no debe
perderse; y todo niño debe vivirla, tener sueños, juegos, recreación, disfrutando de
sus derechos y garantías que debe darle la familia, la sociedad y el Estado, pero en
lugar de esto, muy por el contrario, y en atención a los postulados de Popper (1986),
se podría indicar que existe una brecha entre la protección integral al niño y al
adolescente; y su situación de precariedad económica y social que conduce al niño
hacia el trabajo, cuando no se le cumplen las garantías que le corresponde, al no
ocurrir el debido desarrollo de las políticas orientadas a mejorar la calidad de vida, el
acceso a los servicios, el bienestar colectivo.
Contexto Económico y Social de Colombia
Para el año 2000, la población colombiana superaba los 44 millones de
personas, ocupando un área de 1.141.748 Km2. Aproximadamente el 75% de la
población habita en zonas urbanas y alrededor de un cuarto de la misma vive en áreas
rurales. Colombia cuenta con recursos naturales como petróleo, aceite, gas natural
carbón, y minerales como níquel, oro y esmeraldas ( anexo B ), pero las posibilidades
de crecimiento económico sostenido de Colombia se han visto dificultadas entre
otras cosas por la intensificación del conflicto armado y por las posibles
consecuencias sociales y económicas que se derivan del mismo.
De acuerdo a informes de la CEPAL (2001), la economía colombiana
experimentó una moderada recuperación (2.8%) en el año 2000, después de haber
sufrido en el año 1999 la recesión más aguda del siglo. En 1999 la economía de
144
Colombia reportó su primer crecimiento negativo desde los años treinta, rompiendo
un récord de crecimiento sostenido. Esta crisis, según el informe, pudo haber tenido
varias causas, entre ellas: un retroceso del consumo privado luego de años de
crecimiento acelerado, un incremento sostenido del déficit fiscal desde 1990,
resultado de las obligaciones creadas por la Constitución de 1991, un sistema de
banda cambiaria que se vio afectado por la crisis asiática y rusa, y que perdió
credibilidad luego de varios intentos fallidos por defenderlo por parte del Banco de la
República ( Banco Central ) y un abultado déficit en cuenta corriente.
No obstante, la moderada recuperación de la economía para el año 2000,
según el informe, la tasa de desempleo urbano se mantuvo en 20%, en el aspecto
social el 68% de la población colombiana vivía en condiciones de pobreza. Sin
embargo el déficit fiscal se redujo a 3.5% del PIB y persistió una tendencia
decreciente de la inflación (8.8%), ya que la de 1999 fue de 9,2%. La producción
industrial y las exportaciones petroleras y no tradicionales lideraron el crecimiento de
la economía, y a pesar de una lenta recuperación, la situación del sector financiero
siguió siendo frágil, lo que limitó las posibilidades de financiamiento del sector real.
En ese mismo orden de ideas, de acuerdo al Fondo de Población de las
Naciones Unidas (FNUAP, 2000 ), Colombia ha sido testigo de un rápido deterioro
de su situación económica, social y política, así como de la intensificación del
conflicto armado. Las tasas de desempleo alcanzaron niveles hasta de 19,2% ( 2000),
el 60% de la población ha vivido por debajo del umbral de pobreza y el 23%
mantiene condiciones de extrema pobreza. El 80% de la población de las zonas
rurales es pobre. En el año 2000, de acuerdo al informe, la población de Colombia
tenía una tasa de crecimiento estimada del 1,7%, la esperanza de vida era de 72,2
años, pero el conflicto interno ha dejado su huella en la población masculina
adolescente y adulta, cuya esperanza de vida estimada muestra una diferencia de siete
145
años en comparación con la estimada para las mujeres (ver anexo B). La
exacerbación del conflicto armado, combinada con el aumento de la pobreza, ha
acelerado también el desplazamiento interno de la población. Colombia tiene una de
las poblaciones de desplazados internos más grandes del mundo, con estimaciones
que llegan a las 250.000 personas por año; aproximadamente mas de 2 millones de
personas habían emigrado de Colombia desde 1999 al 2001.
De acuerdo al Plan Colombia (2000), Colombia ha tenido que enfrentar la
herencia de una economía en deterioro. El desempleo llego a un porcentaje histórico
de casi el 20 por ciento y el producto interno bruto paso ese año por su tercer
trimestre consecutivo de crecimiento negativo. Algunos choques externos como los
precios bajos del café y de otros productos básicos, así como daños mayores por
terremotos agravaron las debilidades económicas del país, observándose un déficit
fiscal creciente desde el primer quinquenio de la década de los noventa , además de
problemas en el sector bancario. El conflicto, y la situación de inseguridad pública
han servido para aumentar la erosión de la confianza en la economía. A medida que
las oportunidades de empleo han ido desapareciendo debido a la recesión económica,
hay la posibilidad que un mayor número de colombianos estén buscando su forma
de vida en un comercio desestabilizante en narcóticos y en otras actividades ilegales.
Para el año 2003, hubo mejorías, según el Departamento Nacional de
Estadísticas (DANE, 2004), el crecimiento de la economía colombiana estuvo por
encima de lo proyectado a comienzos del año. El crecimiento para el cuarto trimestre
de ese año fue 3,7% respecto al mismo trimestre del año anterior, y representó un
crecimiento anual del PIB de 3,5%. Durante el año 2003 el crecimiento del PIB
estuvo impulsado principalmente por el crecimiento exhibido en la inversión y en las
exportaciones totales, y en menor medida por el consumo. El comportamiento de la
economía a lo largo del año mostró una importante recuperación de la inversión, la
146
cual ascendió a 17,2% del PIB, aumentando en dos puntos porcentuales a la
registrada en el 2002. La fuente principal de crecimiento que se presentó en la
economía colombiana a lo largo del año fue de origen interno, principalmente por la
recuperación de la inversión privada. El crecimiento de 19,4% en los diez primeros
meses del año fue promovido por el dinamismo del sector de la construcción, el
optimismo sobre la capacidad de producción, las bajas tasas de interés, las mayores
posibilidades de crédito y los estímulos tributarios a la importación de bienes de
capital
Con respecto a la situación social, los resultados de los principales indicadores
del mercado laboral en 2003, fueron favorables en caso de ser tomados como ciertos.
Para DANE 2004, la tasa de desempleo en el ámbito nacional en diciembre de ese
año fue de 13,1%, inferiores en 2,5 puntos porcentuales a las registradas el mismo
mes del año inmediatamente anterior. A lo largo del año, la tasa de ocupación en el
ámbito nacional creció de manera que el promedio anual de 2003 es 53,3%, superior
al 51,8% que se registró un año antes.
De acuerdo a DANE, hasta diciembre la economía de ese año generó en
promedio 847.000 nuevos puestos de trabajo, lo que significo una mejora de 5,1%
respecto a 2002. En el último trimestre la población nacional en edad de trabajar se
incrementó en 702.500 personas, 2,2%, mientras que la población económicamente
inactiva descendió 0,1%, es decir, una pequeña parte de ella, 17.600 personas, decidió
dejar su condición de inactividad, sumándose a la población económicamente activa.
El 88,4% de quienes lograron emplearse (1.027.100) lo hicieron como empleados
plenos o no subempleados, mientras que el 11,6% restante encontró ocupación, como
subempleados. Adicionalmente, pese al crecimiento en el nivel de subempleo, su tasa
disminuyó en 0,6 puntos porcentuales al pasar de 33,6% a 33%, debido a la mayor
participación laboral. En el cuarto trimestre de 2003 se acentuaron substancialmente
147
las tendencias positivas de recuperación que caracterizaron durante el año la dinámica
del mercado laboral en los órdenes nacional, urbano y rural. La evolución positiva
del mercado laboral es quizás atribuible a la expansión exhibida por la actividad
económica del país durante el año 2003.
Es importante señalar que buena parte del crecimiento de la informalidad, en
particular en el área rural, continuó debido al aumento en el empleo para las
posiciones menos productivas, es decir, para los trabajadores familiares sin
remuneración, cuenta propia, los patronos y los empleados domésticos, lo cual se
debe a que el 61% de la ocupación en Colombia es de carácter informal.
En el año 2004, en concordancia con la CEPAL (2005), la economía
colombiana alcanzó un crecimiento del PIB en términos reales del 4,1%, cifra similar
a la observada en el 2003; permitiendo tanto la inversión privada (recuperación de las
obras civiles) como las exportaciones, el impulso del crecimiento , manifestándose
cierta reducción en el desempleo y en la inflación en parte por el dinamismo de las
regiones cafeteras. De acuerdo al Banco de la República de Colombia (2005) el
objetivo de la política económica ha sido impulsar el crecimiento y reducir el
desempleo, sin poner en peligro los logros en materia de estabilización
macroeconómica. El buen desempeño de la inflación permitió mantener bajas las
tasas de interés de referencia del Banco de la República (banco central), lo que
contribuyó a estimular la demanda interna. El banco intervino en el mercado
cambiario, con el fin de detener la apreciación del peso y preservar la competitividad
de las exportaciones.
Las cifras también señalan que el déficit del sector público consolidado fue
del 1,2% del PIB, cifra inferior a la meta del 2,5% pactada con el Fondo Monetario
Internacional. El déficit del gobierno central fue del 5,6% del PIB, y el sector
148
descentralizado registró un superávit del 4,2%. Este resultado pudo haber sido
producto de que las autoridades departamentales y municipales supuestamente
gastaron una proporción relativamente baja de los recursos presupuestados, así como
de la acumulación de recursos en el Fondo de Estabilización Petrolera, ligada al alto
precio del petróleo.
El déficit del gobierno central mostró una tendencia creciente, y el aumento de
los gastos continuó. Los ingresos ascendieron al 16% del PIB, cifra un punto
porcentual superior a la del 2003. El incremento se debió principalmente al alza de
los ingresos tributarios, en particular la recaudación proveniente de la actividad
interna, principalmente del impuesto sobre la renta. Entre los gastos se destaca el
crecimiento de las transferencias y las pensiones, que revelan el problema estructural
de las finanzas del gobierno central. La deuda neta del sector público no financiero
ascendió al 46,6% del PIB en diciembre del 2004, cifra inferior a la del cierre del
2003 (51%). La deuda del gobierno central bajó del 54,7% del PIB en el 2003 al
51,6% en el 2004. La deuda interna representa el 30,8% del PIB y la externa, el
20,8%. En el primer trimestre del 2005, el déficit del gobierno central fue del 2,2%
del PIB, superior a lo observado en el mismo período del 2004 (1,7% del PIB),
resultado de un crecimiento de los gastos (22,8%) superior al de los ingresos (12%).
Estos últimos se incrementaron un 3,6% del PIB, gracias a la expansión del 3,5% del
PIB de la recaudación tributaria, sobre todo de los impuestos sobre la renta y el valor
agregado (CEPAL, 2005)
De acuerdo a la CEPAL (2005), en el primer trimestre del 2005, la economía
colombiana creció un 3,6%, lo que supone una ligera desaceleración económica
respecto al 4,0% anual observado en el primer trimestre del 2004. Los sectores más
dinámicos fueron la construcción (10,6%), debido sobre todo el aumento de las obras
civiles (43,6%), el comercio (7,3%) y la minería (5,1%). Por su parte, la industria y el
149
sector financiero registraron una contracción del 1% y el 2,7%, respectivamente. La
inversión continuó elevándose; pero el consumo de los hogares se desaceleró. Las
importaciones presentaron un incremento superior al de las exportaciones. La
información disponible para el segundo trimestre revela una mejora de la industria en
abril, y los resultados de la demanda de energía son favorables. Sin embargo, el
marcado aumento de las importaciones podría ir en detrimento del crecimiento del
producto.
CEPAL (2005), con respecto a los precios, las remuneraciones y el empleo en
el 2004, señala que la inflación se redujo al cierre del año, el índice de precios al
consumidor mostró un ascenso del 5.5%. Salvo unas interrupciones relacionadas con
bruscos encarecimientos de los alimentos, la inflación al consumidor mostró una
tendencia decreciente a lo largo del año, en función de la favorable evolución de los
precios de los bienes transables, resultado a su vez de la apreciación cambiaria. Para
el 2005, el banco central estableció la meta de inflación en un rango entre 4,5% y
5,5%. En el primer semestre del 2005, la inflación total bajó al 4,8%. Por otra parte,
los precios de los alimentos registraron alzas, que no se tradujeron en presiones
importantes
El informe también revela que en el año 2004, el desempleo urbano continuó
siendo alto (15,4%, en 13 ciudades), aunque mostró una disminución respecto del
16,7% correspondiente al 2003. Esta baja es imputable sobre todo a la contracción de
la participación laboral, que pasó del 64,5% en el 2003 al 62,9% en el 2004. Es
preocupante el descenso de la ocupación, del 53,8% al 53,2%, mientras que es
positiva la disminución del subempleo (del 32,0% al 30,9%). A escala nacional, la
reducción del desempleo fue menor (un 13,6% en comparación con un 14,2%).
También retrocedió la tasa de ocupación, del 53,3% al 52,5%.
150
Para los primeros cinco meses del 2005 los resultados parecen favorables; el
desempleo urbano se observa reducido, del 16,6% al 15,1% (en 13 ciudades),
mientras que la tasa de ocupación parece tener cierta recuperación del 52,5% pasó al
52,8%, y el subempleo se mantuvo igual (30,1%). A escala nacional, la reducción del
desempleo fue mayor (un 13,0% en relación con un 14,9%); las tasas de ocupación y
subempleo, declinaron, del 52,2% al 51,8% y del 31,7% al 30,8%, respectivamente.
Por su parte, el salario mínimo (equivalente a 136 dólares) registró un aumento real
(en pesos) del 1,8% en el 2004. Los salarios reales de los empleados de la industria se
incrementaron un 2,5% y los de los obreros y operarios, un 1,1%.
Con respecto a las actividades externas, en el año 2004, las exportaciones
colombianas se aceleraron, gracias en parte a los altos precios de los productos
primarios y a una demanda mundial dinámica. Las exportaciones se elevaron un 26%,
debido al buen comportamiento tanto de las tradicionales como de las no
tradicionales. Estados Unidos continuó siendo el principal destino de las
exportaciones del país (39% del total exportado), seguido por los países de la
Comunidad Andina (19%), principalmente la República Bolivariana de Venezuela
(10%). Las exportaciones tradicionales se vieron favorecidas por el incremento de
los precios internacionales. Las de hidrocarburos, carbón, café y ferro níquel
aumentaron a pesar de la baja de los volúmenes exportados. Las no tradicionales
mostraron un gran movimiento, sobre todo las de maquinaria y equipo,
principalmente material de transporte, textiles y prendas de vestir, así como
sustancias químicas. Las importaciones también presentaron un significativo
aumento, estimuladas en parte por los incentivos tributarios a la inversión en
maquinaria y equipo. Las mismas crecieron en un 21%, sobre todo las de materias
primas y productos intermedios para la industria (26%) y bienes de capital para la
industria (17%). Las importaciones de bienes de consumo se incrementaron un 18%,
en especial las de bienes de consumo duradero (28%). En el primer cuatrimestre del
151
2005, las exportaciones se aceleraron (36%), gracias al impulso de las tradicionales
(43%), mientras que las no tradicionales mantuvieron su buen desempeño (29%). A
su vez, las importaciones se incrementaron un 29%, principalmente las de bienes de
capital, materias primas y productos intermedios para la industria. Por su parte, las
importaciones de bienes de consumo continuaron aumentando (29%), con un repunte
de las de bienes no duraderos (CEPAL, 2005).
Un grupo de cifras sobre indicadores económicos y sociales difícilmente
puede dar una imagen completa de la situación y perspectivas de un país, y menos en
una coyuntura en la que factores internos y externos imprimen a las variables una
gran inestabilidad o rompen en forma permanente las tendencias observadas. Es
preciso, sin embargo, presentar esa información cuantitativa, acompañándola con
algunas consideraciones que muestren, así sea someramente, las realidades sociales
que están más allá del crecimiento de la economía
Los indicadores de crecimiento del Producto Interno Bruto en los últimos tres
años, si las cifras señalan la realidad, permiten afirmar que Colombia está saliendo de
una crisis profunda y que, por lo menos en lo que respecta al crecimiento económico,
ha iniciado un proceso de recuperación que los colombianos esperan que se
mantenga y consolide en los próximos años.
Según el Departamento Administrativo Nacional de Estadísticas (DANE,
2004), la economía de Colombia creció 3,97% en el tercer trimestre de 2003
comparado con el mismo período de 2002 y 4,32% en el segundo trimestre de 2004.
Por otro lado la situación fiscal que enfrenta Colombia es un factor que se debe tener
en cuenta en el análisis de las políticas sociales, como las de empleo, educación
porque ella está en la base de políticas de eficiencia del Estado. Cabe anotar entonces,
que el déficit fiscal pasó de 3,4% del PIB en el año 2000, a 3,3% en 2001, a 4,1% en
152
2002 y a 2,5% proyectado para 2004. De acuerdo con estas cifras, uno de los retos
más importantes que enfrenta el Estado tiene que ver con la sostenibilidad de las
finanzas públicas, lo que implica reducir de manera significativa el déficit fiscal del
sector público y definir una estrategia para su financiamiento.
En el aspecto social, el desempleo se ha convertido en uno de los problemas
más complejos que enfrenta el país. El desempleo se mantuvo por encima del 16%
desde 1999 hasta marzo de2003, cuando registró un 16,4% en el total nacional y
osciló entre el 19% y el 20% en las siete principales ciudades. Según DANE en el
tercer trimestre de 2004 la tasa de desempleo en el total nacional se situó en 12,8%; el
desempleo de las trece áreas metropolitanas se ubicó en 15,0%; el subempleo en el
total nacional presentó entre julio y septiembre de 2004 una tasa de 31,5% y la tasa de
subempleo en las trece áreas metropolitanas fue de 32,4%.
El subempleo y la informalidad reflejan el deterioro de la calidad del trabajo,
la pérdida de ingresos y el aumento de la desigualdad. Si esto es así, se puede señalar
que la sociedad colombiana puede estar perdiendo buena parte de los beneficios que
se derivan de la ocupación productiva de sus miembros. El nivel y la calidad del
empleo y los ingresos podrían ser una condición necesaria de la estabilidad social, a
su vez la postergación laboral y la inserción de los trabajadores en empleos precarios
y de mala calidad son fuente de conflictos. Por el contrario, la garantía de empleo e
ingresos suficientes para la población económicamente activa contribuyen a la
reducción efectiva de la violencia; igualmente la seguridad de un ingreso permanente
eleva los grados de participación social y profundiza la democracia
Además es importante señalar que por efecto de esta situación de desempleo e
informalidad se puede perder acumulación de capital humano y experiencia laboral,
aunado a esto se puede también puntualizar que quienes resultan más afectados son
153
las personas y los hogares más pobres, para quienes se amplía la brecha de
desigualdad que ha caracterizado a la sociedad colombiana.
En el panorama social no hay que dejar por fuera la situación de Colombia
frente a los indicadores de Línea de Pobreza (LP) y Línea de Indigencia (LI). De
acuerdo a la Contraloría General de la Republica de Colombia (CGR, 2004), en el
2003 a pesar de la leve recuperación que el producto nacional tuvo en los últimos
años, la pobreza se ubica en el 64,2%. No sólo han aumentado los pobres, sino que
éstos son cada vez más pobres. La brecha de pobreza, que mide la distancia relativa
entre el ingreso promedio de los pobres y el valor de la Línea de pobreza, se
incrementó de 0,437 en 1997 a 0,542 en 2003. A la vez, la población total por debajo
de la línea de indigencia creció en 5 puntos entre 1997 y 2000, mientras en 1991 la
pobreza extrema cubría al 20,4% de la población, en 1997 había descendido a 18,1%,
pero aumentó al 23% en 2000 y en 30% en 2003.
Si bien los diferentes organismos nacionales e internacionales señalan
mejorías en la economía Colombiana, se observa una asincronía entre el repunte de
los indicadores económicos y la situación de las altas tasas de desempleo, subempleo,
baja ocupación, pobreza, indigencia, observándose que Colombia no escapa a la
exclusión social que caracteriza a muchos países latinoamericanos. No obstante los
logros que ha habido, el orden social colombiano dista de los propósitos planteados
en la Constitución de 1991, la cual señala que son fines esenciales del Estado “servir
a la comunidad, promover la prosperidad general y garantizar la efectividad de los
principios, derechos y deberes consagrados en la Constitución...” (art.2), así mismo
indica, “... facilitar la participación de todos en las decisiones que los afectan y en la
vida económica, política, administrativa y cultural de la Nación...” (art. 2). Aunque la
Constitución tenga entre sus finalidades promover la prosperidad general, mas del
60% de la población es pobre, con mas de 11 millones de colombianos bajo la línea
154
de indigencia; es decir, esta población no dispone como ingreso de un dólar diario
para garantizarse condiciones mínimas de alimentación, igualmente el 80% de la
población rural es pobre y cerca del 60% indigente. Aparte de la indigencia, pobreza
y marginación que implica vivir en desventaja, hoy el 60% de la población
económicamente activa del país no ha ingresado a la economía formal, esta
población estaría buscando desarrollar alguna de sus potencialidades y garantizarse
unos ingresos para poder alcanzar mejores condiciones de vida futura.
Dentro de la población pobre no hay que olvidar el alto porcentaje de niños,
niñas y adolescentes con precarias condiciones de vida, marginados en el acceso a
servicios públicos básicos como es la educación, observándose que mas de tres
millones de niños, niñas y adolescentes no tienen acceso a la educación; aunado a
esto es necesario puntualizar que en Colombia el 30% de las familias tiene una
mujer cabeza de familia, que tiene que cumplir con numerosas actividades, en
situación precaria de ingresos.
Situación Jurídica de Colombia
La Constitución Política de Colombia (1991) consagra que Colombia es “ un
Estado social de derecho organizado en forma de república unitaria, descentralizada,
con autonomía en sus entidades territoriales, democrática, participativa y pluralista,
fundada en el respeto de la dignidad humana, en el trabajo y la solidaridad de las
personas...” (art 1) (ver anexo B).
La carta suprema, igualmente pone de manifiesto los fines esenciales del
Estado, entre estos están “ servir a la comunidad, promover la prosperidad general y
garantizar la efectividad de los principios, derechos y deberes consagrados en la
155
Constitución; facilitar la participación de todos en las decisiones que los afectan y en
la vida económica, política, administrativa...” (art. 2)
El Estado Social de Derecho consagrado en la carta esta identificado con el
Estado Liberal y reconoce libertades ciudadanas, respeto por la vida privada, la
propiedad privada, entre otros, pero algunos críticos especialistas en la materia
esgrimen que el actual modelo económico imperante en Colombia está en absoluta
contradicción con las necesidades de progreso social de los sectores populares y se ha
convertido en una poderosa tenaza que amplia los niveles de marginalidad, de
pobreza, inequidad, injusticia e intolerancia; factores que determinan la violación de
los derechos humanos a gran escala. Sin embargo se puede considera que esta
situación que se plantea no ocurre solo en Colombia, sino también en otros países,
incluso desarrollados y no quiere decir ello que es responsabilidad del texto
constitucional.
Es de hacer notar que desde el punto de vista laboral, la Constitución
colombiana desde su primer artículo le da prioridad al trabajo, a su dignificación, el
cual va a estar complementado con el artículo 24 cuando manifiesta que “El trabajo
es un derecho y una obligación social y goza en todas sus modalidades de la especial
atención del Estado. Toda persona tiene un derecho a un trabajo en condiciones
dignas y justas”. A su vez, la carta magna declara unos principios mínimos
fundamentales para el trabajo y entre los cuales están : “Igualdad de oportunidades
para los trabajadores; remuneración mínima vital y móvil, proporcional a la cantidad
y calidad de trabajo; estabilidad en el empleo ...” igualmente están los principios
“garantía a la seguridad social, la capacitación, el adiestramiento y el descanso
necesario; protección especial a la mujer, a la maternidad y al trabajador menor de
edad” (art. 53).
156
Colombia, siguiendo los lineamientos de la Convención de los derechos del
niño (1989) incluyó en la Carta Magna el criterio y los principios de protección
integral de la niñez en su doble dimensión: garantía de los derechos de los niños, y
protección en condiciones especialmente difíciles. Además, establece la
responsabilidad del Estado, la sociedad y la familia, en la obligación de asistir y
proteger a los niños, y las niñas para asegurar su desarrollo armónico integral en
ejercicio pleno de sus derechos
Son derechos fundamentales de los niños : la vida, la integridad física, la salud y la seguridad social, la alimentación equilibrada, su nombre y nacionalidad, tener una familia y no ser separados de ella, el cuidado y amor, la educación y la cultura, la recreación y la libre expresión de su opinión. Serán protegidos contra toda forma de abandono, violencia física o moral, secuestro, venta, abuso sexual, explotación laboral o económica y trabajos riesgosos. Gozarán también de los demás derechos consagrados en la Constitución, en las leyes y en los tratados internacionales ratificados por Colombia. La familia, la sociedad y el Estado tienen la obligación de asistir y proteger al niño para garantizar su desarrollo armónico e integral y el ejercicio pleno de sus derechos. Cualquier persona puede exigir de la autoridad competente su cumplimiento y la sanción de los infractores. Los derechos de los niños, niñas prevalecen sobre los derechos de los demás (art. 44).
El respeto a los derechos del niño constituye un valor fundamental de una
sociedad que pretenda practicar la justicia social y los derechos humanos. Ello no sólo
implica brindar al niño cuidado y protección, parámetros básicos que orientaban
antiguamente la concepción doctrinaria y legal sobre el contenido de tales derechos,
sino que, adicionalmente, significa reconocer, respetar y garantizar la personalidad
individual del niño, en tanto titular de derechos y obligaciones.
157
La Constitución también protege los derechos de los adolescentes al apreciar:
El adolescente tiene derecho a la protección y a la formación integral. El Estado y la sociedad garantizan la participación activa de los jóvenes en los organismos públicos y privados que tengan a cargo la protección, educación y progreso de la juventud. (art. 45)
A pesar de las garantías dadas por la Constitución, los niños, niñas y
adolescentes colombianos, podrían estar sufriendo los rigores de la injusticia social
que se traduce en la falta de acceso a condiciones mínimas de supervivencia, como la
adecuada alimentación, salud, vivienda, así como condiciones que garanticen el
desarrollo integral, tales como el ejercicio del derecho a la educación, la recreación y
la cultura y por el contrario se ven sometidos a una dura explotación laboral. Pero lo
más preocupante de la situación de la niñez colombiana es que el mismo derecho a la
vida y a la integridad personal está siendo frecuentemente violado, pues cada vez son
más los niños, niñas y adolescentes víctimas de violación a estos derechos como
consecuencia del conflicto armado interno o por la intolerancia social .
En relación a la protección de niños, niñas y adolescentes en materia laboral,
el Código del Menor de Colombia (1994 ) en su titulo noveno ( ver anexo B ) regula
la protección de los mismos. Al respecto se señalan algunos artículos de interés que
especifican en cuanto al adolescente, la edad para trabajar, autorización, duración de
la jornada máxima de trabajo, salarios, trabajos prohibidos.
Se entiende por menor trabajador en condiciones no autorizadas por la ley al
menor “ de doce (12) años en cualquier caso de ocupación laboral y a quien, siendo
mayor de esta edad pero menor de dieciocho (18) años, fuera de las excepciones
158
contempladas en este Título, desempeñe actividades laborales expresamente
prohibidas por la ley” (art. 237). “Prohíbase el trabajo de los menores de catorce (14)
años y es obligación de sus padres disponer que acudan a los centros de enseñanza”
(art.238), y por vía de excepción “ Excepcionalmente y en atención a circunstancias
especiales calificadas por el Defensor de Familia, los mayores de doce(12) años
podrán ser autorizados para trabajar por las autoridades señaladas en este artículo, con
las limitaciones previstas en el presente Código” (238).
En cuanto a la especificación de la autorización que necesitan los adolescentes
para trabajar, el citado código menciona “ Los menores de dieciocho (18) años
necesitan para trabajar autorización de escrita del Inspector del Trabajo, en su
defecto, de la primera autoridad local, a solicitud de los padres y, a falta de éstos, del
Defensor de Familia” (art. 238).
Igualmente el Código en su articulo 242 establece las reglas de la duración
máxima de la jornada de trabajo, entre estas están:
1-El menor entre doce (12) y catorce (14) años sólo podrá trabajar jornada
máxima de cuatro (4) horas diarias, en trabajos ligero.
2-Los mayores de catorce (14) y menores de dieciséis (16) años sólo podrán
trabajar en una jornada máxima de seis(6) horas diarias.
3-La jornada de trabajo del menor entre dieciséis (16) y dieciocho(18) años no
podrá exceder de ocho (8) horas diarias.
4-Queda prohibido el trabajo nocturno para los trabajadores menores. No
obstante, los mayores de dieciséis (16) años y menores de dieciocho (18) años podrán
ser autorizados para trabajar hasta las ocho (8) de la noche siempre que no se afecte
159
su asistencia regulara un centro docente, ni implique perjuicio para su salud física o
moral.
En relación al salario, la norma advierte: “El menor trabajador tendrá derecho
al salario, prestaciones sociales y demás garantías que la ley concede a los
trabajadores mayores de dieciocho (18) años. El salario del menor trabajador será
proporcional a las horas trabajadas” ( art. 243 ).
En lo atinente a los trabajos prohibidos ya que suponen exposición a riesgos
severo para su salud o integridad física, entre otros se señalan algunos, regulados en
el artículo 245 del código, ya tantas veces citado.
1-Trabajos que tengan que ver con sustancias tóxicas o nocivas para la salud.
Trabajos a temperaturas anormales o en ambientes contaminados o con insuficiente
ventilación
2-Trabajos subterráneos de minería de toda índole y en los que confluyen
agentes nocivos, tales como contaminantes, desequilibrios térmicos, deficiencia de
oxígeno a consecuencia de la oxidación la gasificación.
3-Trabajos donde se tenga que manipular con sustancias radioactivas, pinturas
luminiscentes, rayos X, o que impliquen exposición a radiaciones ultravioletas,
infrarrojas y emisiones de radio frecuencia. Trabajos de pintura industrial que
entrañen el empleo de la cerusa, del sulfato de plomo o de cualquier otro producto
que contengan dichos elementos
160
4-Trabajos en basureros o en cualquier otro tipo de actividades donde se
generen agentes biológicos patógenos.
5-Trabajos en máquinas esmeriladoras, afilado de herramientas, en muelas
abrasivas de alta velocidad y en ocupaciones similares. Trabajos en cizalladoras,
cortadoras, laminadoras, tornos, fresadoras, troqueladoras, y otras máquinas
particularmente peligrosas Trabajo del vidrio y alfarería, trituración y mezclado de
materia prima; trabajo de hornos, pulido y esmerilado en seco de vidriería
,operaciones de limpieza por chorro de arena, trabajo en locales de vidriado y
grabado, trabajos en la industria de la cerámica.
6-Trabajos en altos hornos, hornos de fundición de metales, fábricas de acero,
talleres de laminación, trabajos de forja, y en prensa pesada de metales.
7-Trabajos y operaciones que involucren la manipulación de cargas pesadas.
8-Trabajos en fábricas de ladrillos, tubos y similares, moldeado de ladrillos a
mano, trabajo en las prensas y hornos de ladrillos. Trabajos en la industria
metalúrgica de hierro y demás metales, en las operaciones y/ o procesos donde se
desprende vapores o polvos tóxicos y en plantas de cemento.
9-Actividades agrícolas o agroindustriales que impliquen alto riesgo para la
salud.
En términos generales, es factible pensar que la problemática que podría
estar afectando a la niñez y adolescencia colombiana no se debe a la ausencia de una
legislación adecuada. Por el contrario, Colombia cuenta con un sólido y amplio
marco jurídico, tanto internacional como nacional, que en su conjunto crean amplios
parámetros respecto a los derechos del niño. El problema es que dicho conjunto de
normas en la práctica no se aplica a la situación real de la mayoría de los niños, niñas
161
colombianos, quedando los mismos desprotegidos y carentes de la formación integral
que le debe garantizar el Estado, la sociedad y la familia; sufriendo los niños, niñas
los rigores de la injusticia social, la cual podría estar traducida en carencia de salud,
educación, vivienda, recreación, entre otras.
El trabajo infantil es una realidad social en Colombia, a pesar de la legislación
vigente que lo prohíbe para menores de 12 años y que exige condiciones
excepcionales y autorización expresa del instituto del trabajo para los niños y niñas
entre 12 y 18 años. El trabajo infantil es una situación cotidiana, generalizada y
aceptada, propiciada por la pobreza y la marginalidad que vive mas del 50% de la
población Colombiana y que obliga a la participación en el ingreso familiar de los
diferentes miembros del hogar. De alguna forma se podría considerar explotación de
la pobreza, porque los empleadores hacen la oferta de trabajo a los hijos(as) de padres
pobres y/o desempleados, ya que los menores de edad pueden constituir mano de obra
barata. Cuando más riesgoso es el trabajo, es mayor la probabilidad de que lo ejerzan
los más pobres, las minorías étnicas y quienes carecen de educación.
Contexto Económico y Social de Ecuador
Ecuador es una República presidencialista basada en una democracia
representativa constitucionalmente establecida. El país está estructurado política y
administrativamente en 22 provincia, siendo Quito la capital de la República, con
aproximadamente 13.184.000 habitantes (2.001), ubicados principalmente en las
ciudades de Guayaquil y Quito, con aproximadamente 2.117.7553 y 1.165.809
habitantes respectivamente (Secretaria general de turismo, 2003). La población
urbana es aproximadamente un 64% del total, a su vez se puede indicar que la
población ecuatoriana es joven ya que el 36% tiene menos de 14 años y
162
aproximadamente el 4,5% ha pasado de los 60 años, según el Instituto Nacional de
Estadística y Censo ( INEC,2003 ) (ver anexo C).
Con respecto a la situación económica, en el año 1999 la economía
ecuatoriana estuvo sumergida en una honda recesión, por segundo año consecutivo.
El Banco Central del Ecuador (1999) estimó una caída del 7.3% del PIB al cierre de
1999, mientras que la inflación superó el 60%, la devaluación llegó a 197%, y las
tasas de interés permanecieron elevadas. Los sectores más afectados fueron, la
construcción, el comercio, las manufacturas y el transporte. Sólo el sector petróleo y
el eléctrico mostraron crecimientos positivos durante el año. El déficit fiscal continuó
siendo alto, aunque el repunte en los precios del petróleo y la reforma fiscal puesta en
vigencia en mayo de ese año contribuyeron a atenuarlo. En el sector externo el
balance fue diferente, ya que se pasó de un déficit de US$ 2,169 millones en la cuenta
corriente en 1998, a un superávit de US$ 926 millones en 1999. Este comportamiento
según el Banco Central estuvo determinado por una contracción de 50% en las
importaciones y un crecimiento de 0.6% en las exportaciones.
De acuerdo al Banco Central del Ecuador (1999), en el año 1999 el déficit del
sector público fue de 4.6% del PIB, inferior al 5.6% alcanzado en 1998. Sin
embargo, los gastos totales se incrementaron 4 puntos del PIB en un año, al pasar de
26% del PIB en 1998 a 30% en 1999. El comportamiento de la tasa de cambio en ese
año fue difícil, estuvo determinado por la incertidumbre económica, la difícil
situación fiscal, el aumento de la emisión monetaria y por una tendencia inflacionaria
represada. En los últimos meses del año citado, el precio de la divisa se incrementó
aún más a consecuencia del descongelamiento de los depósitos en dólares tanto en
bancos privados como públicos. De igual forma, la inestabilidad política del país, y
la incertidumbre sobre el futuro del Ecuador generaron una mayor demanda de
divisas por parte de los ciudadanos. Todo lo anterior unido al anuncio de que el
desembolso del FMI no seria por US$ 400 millones sino por US$ 250 millones,
163
acorde con el cumplimiento de las metas planteadas presionaron aun más el aumento
en el precio del dólar. De esta forma, la tasa de cambio saltó de cerca de 7.300 sucres
en enero de 1999 para luego incrementarse hasta 20.300 en el último mes del año.
Por su parte, de acuerdo al informe del Banco Central, las tasas de interés que
habían cedido levemente a mediados de 1999, se incrementaron de nuevo a finales
del año para contener la depreciación del sucre. La acelerada depreciación del sucre y
el fuerte aumento de la emisión monetaria condujo a una aceleración de la inflación.
Así, Ecuador presenta el nivel inflacionario más alto de América Latina por encima
del 60%. A su vez, la demanda interna registró una caída de 12.5% en 1999, como
consecuencia de la drástica reducción en la inversión (-34%) y en el consumo privado
(-9.6%). Las exportaciones y las importaciones también decrecieron en 1.9% y
35.3%, respectivamente. En 1999 las exportaciones a Estados Unidos, a Asia y a la
Comunidad Andina decrecieron. Igualmente, las importaciones provenientes de los
Estados Unidos decrecieron 50%, y las de la Comunidad Andina 41%.
La recesión económica provocó un agravamiento del desempleo. En
diciembre de 1999 la tasa de desempleo se ubicó en 15.1%, después de haber
registrado tasas inferiores al 11.0% durante 1998.
En la primera semana del año 2000, el ejecutivo anunció la dolarización de la
economía, fijando el tipo de cambio en 25.000 sucres por dólares. Hay la
probabilidad de que el descontento generado por la dolarización de la economía y el
empeoramiento de la situación económica y social durante 1999, hayan sido los
incitadores a fuertes protestas sociales al iniciar el año 2000, lideradas por la
Confederación de Nacionales Indígenas. Esta situación terminó en un golpe de
estado, que se superó con la designación constitucional de nuevo presidente del
Ecuador en enero del 2000. El nuevo Gobierno ratificó el proceso de dolarización de
la economía y en marzo del año en curso el Congreso aprobó el proyecto de ley de
164
transformación económica y monetaria, que conforma el marco jurídico del proceso
de dolarización.
De acuerdo al estudio realizado por la Comisión Económica para América
Latina y el Caribe (CEPAL, 2005), en el año 2004, Ecuador registró la mayor tasa de
crecimiento de la última década, que aumentó un 6,9% del PIB, generando una
mejora en el PIB per cápita con lo que se sitúa un 9,3% por encima del registrado en
1994. El crecimiento económico durante el 2004 es atribuible sobre todo al aumento
del 54,4% de la extracción petrolera privada, que llevó a un incremento de la
extracción total de petróleo del 26,1% (en promedio, 108.000 barriles diarios más). El
sector petrolero representa ahora el 23% del PIB. Por otro lado, la producción de la
empresa estatal PETROECUADOR, que venia cayendo anualmente desde 1994, se
redujo un 3,4% durante el 2004. La economía no petrolera, al igual que en el 2003,
volvió a crecer poco. Los únicos sectores de la economía que se expandieron más del
3% fueron los servicios. Esto podría confirmar la percepción de una economía que
ganó dinamismo básicamente por la exportación de hidrocarburos, aunque cabe
destacar la recuperación de otro rublo como la cría de camarones, que contrastó con
los resultados adversos del sector pesquero por razones climáticas.
Sin embargo, pese a que la situación fiscal estuvo bajo cierto control, sobre
todo gracias a los ingresos petroleros, el ejecutivo ha tenido escasa capacidad o
dificultad política para realizar varias reformas económicas esenciales, en particular,
las de los sectores eléctrico, de los hidrocarburos y de la seguridad social, que son
clave para asegurar el crecimiento futuro de Ecuador.
El sector externo fue dinámico en el 2004, gracias al fuerte incremento de las
exportaciones de crudo en volumen y en valor, que estuvo acompañado por aumentos
significativos de las importaciones. Así, la balanza de bienes fue positiva y
contribuyó al primer superávit de cuenta corriente que no había tenido desde el año
165
2000. Las exportaciones aumentaron un 26,8% durante el 2004, impulsadas por el
alza de los hidrocarburos (62,4%, 1.627 millones de dólares de aumento). Otros
rubros de exportación, principalmente banano, vehículos, pescado fresco y enlatado;
y cacao, registraron caídas. También hubo aumentos importantes en las exportaciones
de café y camarones, aunque en montos mucho menores que los hidrocarburos. Cabe
señalar que esto consolida al petróleo y sus derivados como el principal rubro de
exportación y generación de divisas, en el 2002 el petróleo crudo constituía el 36,5%
de las exportaciones totales y el banano (el segundo rubro de exportación por valor)
un 19,2%, mientras que en el 2004 el crudo pasó a representar el 50,9% de las
exportaciones y el banano bajó al 13,4%.
Las importaciones aumentaron un 19,8% en el 2004, acompañando el rápido
crecimiento del PIB y del consumo durante el año. Las importaciones de materias
primas y las de combustibles y lubricantes fueron las que más aumentaron (26,7% y
21,1%, respectivamente). Esto obedece a los elevados precios internacionales de las
materias primas durante el año (incluidos los derivados del petróleo) y el limitado
suministro interno de combustibles y lubricantes. Las importaciones de bienes de
consumo crecieron un 16,4%, mientras que las importaciones de bienes de capital
aumentaron un 14,5%.
La demanda interna logro un mayor incremento en comparación con el año
2003, al crecer un 4,8%, principalmente gracias al incremento del consumo de los
hogares, atribuible a un mejor acceso al crédito y aumentos de las pensiones, entre
otros factores. La tasa de crecimiento del PIB proyectada para el 2005 es del 3%,
habiendo crecido un 3,2% durante el primer trimestre del 2005 respecto del mismo
período del año anterior. Solo se esperan aumentos limitados de la producción
petrolera durante el 2005, a pesar de la existencia de una amplia capacidad de
transporte disponible en el oleoducto de crudos pesados y del hecho de que algunas
166
empresas miembros del consorcio no han alcanzado aún su capacidad deseada de
producción y transporte.
La producción de crudo en el 2005 hasta mayo aumentó solo un 1,8%, aunque
no existen razones técnicas por las cuales la actividad petrolera deba dejar de crecer:
Ecuador tiene campos sin explotar, con significativas reservas probadas y probables
(por ejemplo, Pungarayacu-Oglán e Ishpingo Tambococha Tiputini) así como amplias
zonas sin explorar en el suroriente.
En el orden económico también se espera una mejora en la producción
pesquera por razones climáticas, así como una mejora en el sector de la construcción.
En el sector bananero, las expectativas de crecimiento son limitadas, debido a los
precios internacionales del banano.
Con respecto al aspecto social, el informe sobre desarrollo humano de
Ecuador del Fondo de Población de las Naciones Unidas (PNUD, 2001) señala que
para el año 2000, Ecuador tenia aproximadamente 9.965.000 de personas pobres y
5.691.000 de población indigente. Así mismo puntualiza que la tasa de ocupación
laboral era de 25,1%, la tasa de desempleo era de 9 % y la tasa de subempleo era de
65,9 %.
Por su parte el Instituto Nacional de Estadística y Censo (INEC, 2003), con
respecto a las remuneraciones y el empleo para el año 2001 señala que la población
activa se estimaba en 4.200.000 habitantes, con una tasa de 28,7% de ocupación
plena, una tasa de subempleo del 50% y un desempleo urbano del 13%. A su vez,
CEPAL (2005) en su estudio indica que el salario mínimo privado aumentó un 3,1%
en términos reales entre diciembre del 2003 y diciembre del 2004, pero el desempleo
empeoró en el 2004 y principios del 2005, a pesar del fuerte aumento del PIB y de la
tasa de ocupación bruta. Esta última subió del 48,5% en promedio en el 2003 al
167
49,7% en el 2004 y ascendió al 49,4% en promedio durante los primeros cinco meses
del 2005. La tasa de desempleo total pasó del 9,8% en promedio en el 2003 al 11% en
el 2004 y marcó un 11,2% en promedio durante los primeros cinco meses del 2005.
En los últimos años Ecuador ha vivido un proceso de dificultad, y de crisis
marcadas por políticas de ajuste estructural, de inestabilidad política expresada en la
sucesión de tres gobiernos en un periodo de cinco años y el consecuente
debilitamiento de las instituciones democráticas. En este contexto de crisis, la pobreza
se ha agudizado severamente, afectando las posibilidades de desarrollo del país y el
ejercicio pleno de los derechos de la población en general, particularmente de las
mujeres y de los jóvenes. En los dos últimos años, si bien se ha mantenido el orden
constitucional y democrático, los niveles de conflictividad social e inestabilidad
política han seguido siendo altos.
Situación Jurídica de Ecuador
La Constitución política de la República del Ecuador (1998) declara que “el
Ecuador es un estado social de derecho, soberano, unitario, independiente,
democrático, pluricultural y multiétnico. Su gobierno es republicano, presidencial,
electivo, representativo, responsable, alternativo, participativo y de administración
descentralizada...” (art.1) (ver anexo C).
La Constitución en su artículo 3 señala los deberes primordiales del Estado,
entre los que están:
1- Fortalecer la unidad nacional en la diversidad.
168
2- Asegurar la vigencia de los derechos humanos, las libertades fundamentales
de mujeres y hombres, y la seguridad social.
3- Defender el patrimonio natural y cultural del país y proteger el medio
ambiente.
4- Preservar el crecimiento sustentable de la economía, y el desarrollo
equilibrado y equitativo en beneficio colectivo.
5- Erradicar la pobreza y promover el progreso económico, social y cultural de
sus habitantes.
6- Garantizar la vigencia del sistema democrático y la administración pública
libre de corrupción.
A su vez, señala la Carta magna que “El más alto deber del Estado consiste en
respetar y hacer respetar los derechos humanos que garantiza esta Constitución” (art.
16). En igual forma consagra la igualdad ante la ley al expresar “Todas las personas
serán consideradas iguales y gozarán de los mismos derechos, libertades y
oportunidades, sin discriminación en razón de nacimiento, edad, sexo, etnia, color,
origen social, idioma; religión, filiación política, posición económica, orientación
sexual; estado de salud, discapacidad...” (art. 23)
En el Titulo III Capítulo 4, referente a los derechos económicos, sociales y
culturales, con respecto al trabajo, la Constitución otorga plenas garantías al
trabajador al considerar el trabajo como “un derecho y un deber social. Gozará de la
protección del Estado, el que asegurará al trabajador el respeto a su dignidad, una
existencia decorosa y una remuneración justa que cubra sus necesidades y las de su
familia...” (art. 35).
169
De acuerdo a la Constitución ecuatoriana el trabajo se rige por las siguientes
normas fundamentales:
1. La legislación del trabajo y su aplicación se sujetarán a los principios del
derecho social.
2. El Estado propenderá a eliminar la desocupación y la subocupación.
3. El Estado garantizará la intangibilidad de los derechos reconocidos a los
trabajadores, y adoptará las medidas para su ampliación y mejoramiento.
4. Los derechos del trabajador son irrenunciables. Será nula toda estipulación
que implique su renuncia, disminución o alteración. Las acciones para
reclamarlos prescribirán en el tiempo señalado por la ley, contado desde la
terminación de la relación laboral.
5. Será válida la transacción en materia laboral, siempre que no implique
renuncia de derechos y se celebre ante autoridad administrativa o juez
competente.
6. En caso de duda sobre el alcance de las disposiciones legales, reglamentarias
o contractuales en materia laboral, se aplicarán en el sentido más favorable a
los trabajadores.
7. La remuneración del trabajo será inembargable, salvo para el pago de
pensiones alimenticias. Todo lo que deba el empleador por razón del trabajo,
constituirá crédito privilegiado de primera clase, con preferencia aun respecto
de los hipotecarios.
8. Los trabajadores participarán en las utilidades líquidas de las empresas, de
conformidad con la ley.
170
9. Se garantizará el derecho de organización de trabajadores y empleadores y su
libre desenvolvimiento, sin autorización previa y conforme a la ley. Para todos
los efectos de las relaciones laborales en las instituciones del Estado, el sector
laboral estará representado por una sola organización. .
10. Se reconoce y garantiza el derecho de los trabajadores a la huelga y el de los
empleadores al paro, de conformidad con la ley. Se prohíbe la paralización, a
cualquier título, de los servicios públicos, en especial los de salud, educación,
justicia y seguridad social; energía eléctrica, agua potable y alcantarillado;
procesamiento, transporte y distribución de combustibles; transportación
pública, telecomunicaciones. La ley establecerá las sanciones pertinentes.
Con respecto al trabajo de la mujer, esta goza de garantías “ El Estado
propiciará la incorporación de las mujeres al trabajo remunerado, en igualdad de
derechos y oportunidades, garantizándole idéntica remuneración por trabajo de igual
valor. Se prohíbe todo tipo de discriminación laboral contra la mujer” (art 36)
Con respecto a la salud, la norma fundamental garantiza este derecho cuando
puntualiza el “ Estado garantizará el derecho a la salud, su promoción y protección,
por medio del desarrollo de la seguridad alimentaria, la provisión de agua potable y
saneamiento básico, el fomento de ambientes saludables en lo familiar, laboral y
comunitario...” (art. 42).
La Constitución en vigilancia y garantía de los derechos de la niñez y
adolescencia es imperativa al indicar las responsabilidades primordiales del Estado,
de la sociedad y la familia, los cuales tienen la doble función de vigilar que se
171
respeten los derechos y de crear las condiciones para que se ejerzan cabalmente.
“Será obligación del Estado, la sociedad y la familia, promover con máxima prioridad
el desarrollo integral de niños y adolescentes y asegurar el ejercicio pleno de sus
derechos. “En todos los casos se aplicará el principio del interés superior de los
niños...” (art. 48) y el artículo 49 “Los niños y adolescentes gozarán de los derechos
comunes al ser humano, además de los específicos de su edad...”
El Estado asegura a los niños, niñas y adolescentes las siguientes garantías:
1. Atención prioritaria para los menores de seis años que garantice nutrición,
salud, educación y cuidado diario.
2. Protección especial en el trabajo, y contra la explotación económica en
condiciones laborales peligrosas, que perjudiquen su educación o sean nocivas
para su salud o su desarrollo personal.
3. Atención preferente para su plena integración social, a los que tengan
discapacidad.
4. Protección contra el tráfico de menores, pornografía, prostitución, explotación
sexual, uso de estupefacientes, sustancias psicotrópicas y consumo de bebidas
alcohólicas.
5. Prevención y atención contra el maltrato, negligencia, discriminación y
violencia.
6. Atención prioritaria en casos de desastres y conflictos armados.
7. Protección frente a la influencia de programas o mensajes nocivos que se
difundan a través de cualquier medio, que promuevan la violencia, la
discriminación racial o de género, o la adopción de falsos valores.( art 50 ).
172
El Código de la niñez y adolescencia de Ecuador (2003), en armonía con la
Constitución de Ecuador (1998), con los lineamientos de la Convención sobre los
derechos de Niño (1989), la cual suscribió en el año 1990; y con los convenios 138 y
182 de la Organización internacional del trabajo, de los cuales es suscritor, regula el
goce y ejercicio de los derechos, deberes y responsabilidades de los niños, niñas y
adolescentes y los medios para hacerlos efectivos, garantizarlos y protegerlos,
conforme al principio del interés superior de la niñez y adolescencia y a la doctrina de
protección integral (ver anexo C). A su vez indica la corresponsabilidad del Estado la
Sociedad y la Familia dentro de sus respectivos ámbitos, adoptar las medidas
políticas, administrativas, económicas, legislativas, sociales y jurídicas que sean
necesarias para la plena vigencia, ejercicio efectivo, garantía, protección y
exigibilidad de la totalidad de los derechos de niños, niñas y adolescentes. El Código
aporta la definición de niño, niña y adolescente, en los siguientes términos: “ Niño o
niña es la persona que no ha cumplido doce años de edad. Adolescente es la persona
de ambos sexos entre doce y dieciocho años de edad” (art. 4).
De acuerdo al código debe existir la igualdad y no la discriminación “ Todos
los niños, niñas y adolescentes son iguales ante la ley y no serán discriminados por
causa de su nacimiento, nacionalidad, edad, sexo, etnia, color, origen social, idioma,
religión, filiación, opinión política, situación económica, orientación sexual, estado
de salud, discapacidad...” (art.6)
En materia laboral, el código indica el derecho a la protección contra la
explotación laboral, al respecto indica
Los niños, niñas y adolescentes tienen derecho a que el Estado, la sociedad y la familia les protejan contra la explotación laboral y económica y cualquier forma de esclavitud, servidumbre, trabajo forzoso o nocivo para su salud, su desarrollo físico, mental, espiritual,
173
moral o social, o que pueda entorpecer el ejercicio de su derecho a la educación ( art. 81).
La edad mínima para el trabajo esta fijada en 15 años, pero el Consejo
Nacional de la Niñez y Adolescencia, de oficio o a petición de cualquier entidad
pública o privada, podrá autorizar edades mínimas por sobre la señalada de
conformidad con lo establecido en el Código, la ley y en los instrumentos
internacionales legalmente ratificados por el Ecuador. A su vez y en armonía con el
código para la erradicación del trabajo infantil “El Estado y la sociedad deben
elaborar y ejecutar políticas, planes, programas y medidas de protección tendientes a
erradicar el trabajo de los niños, niñas y de los adolescentes que no han cumplido
quince años...” (art. 83). La familia debe contribuir al logro de éste objetivo.
En referencia a la jornada de trabajo y educación, esta no puede exceder de
seis (06) horas diarias y no debe limitar el ejerció del derecho a la educación. El
ministerio del Trabajo debe llevar registro de adolescentes que trabajen. El código en
el artículo 87 prohíbe determinados trabajos a los adolescentes entre los cuales están
el trabajar:
1. En minas, basurales, camales, canteras e industrias
extractivas de cualquier clase;
2. En actividades que implican la manipulación de substancias
explosivas, psicotrópicas, tóxicas, peligrosas o nocivas para su
vida, su desarrollo físico o mental y su salud;
3. En prostíbulos o zonas de tolerancia, lugares de juegos de
azar, expendio de bebidas alcohólicas y otros que puedan ser
174
inconvenientes para el desarrollo moral o social del
adolescente;
4. En actividades que requieran el empleo de maquinaria
peligrosa o que lo exponen a ruidos que exceden los límites
legales de tolerancia;
5. En una actividad que pueda agravar la discapacidad,
tratándose de adolescentes que la tengan;
6. En las demás actividades prohibidas en otros cuerpos
legales, incluidos los instrumentos internacionales ratificados
por el Ecuador; y,
7. En hogares cuyos miembros tengan antecedentes como
autores de abuso o maltrato
De la observancia de algunos instrumentos normativos ecuatorianos, se podría
indicar que Ecuador cuenta con un sostenido marco jurídico nacional e internacional,
cuya existencia regula aspectos fundamentales de los ciudadanos ecuatorianos, en
condiciones de igualdad y sin discriminación en razón de religión, raza, sexo, edad,
origen entre otros, teniendo los niños, niñas y adolescentes dentro de estas normas un
espacio significativo de protección, pero el problema es que estas normas en la
practica no se cumplen con la rigurosidad deseada, observándose una asincronía entre
lo normativo y la realidad vivida por los ecuatorianos, por un lado los índices
macroeconómicos indican cierto mejoramiento de la economía y por otro señalan la
situación de pobreza en que esta involucrada la ciudadanía. Esta situación de pobreza
no escapa del ámbito de los niños, niñas y adolescentes, quienes la experimentan
como un entorno que perjudica su desarrollo mental, físico, emocional y espiritual, al
tratar de sobrevivir dejando sus sueños infantiles e incorporándose al trabajo en
175
condiciones de explotación, en la mayoría de los casos como ya fue señalado en el
capítulo I.
Contexto Económico y Social del Perú
El Perú está situado en la parte central y occidental de América del Sur, sobre
la costa del Océano Pacífico, es un país rico en tradiciones y cultura; la diversidad de
paisajes, climas, flora y fauna lo han convertido en un verdadero patrimonio cultural.
El territorio peruano tiene una extensión de 1.285,216 Km2 de superficie con tres
regiones naturales: costa, sierra y selva; en la costa vive el 52,1% de la población
peruana, la región andina alberga el 36,9 %, en tanto que en el llano amazónico sólo
vive el 11% de la población total. De acuerdo al Instituto Nacional de Estadística e
Informática del Perú (INEI, 2001), en el año 2000 el número de habitantes ascendía a
25,662 millones, con una ligera mayoría de mujeres (50.4%) y una esperanza de vida
de 69 años. El 72.3% de la población vive en zonas urbanas y el 27.7% en zonas
rurales. La mayor parte de la población habla castellano como lengua materna y
existe un 20% de la población que habla quechua, aymara y otras lenguas nativas.
(ver anexo D).
Tagle (2002), en un estudio realizado acerca de la situación económica del
Perú, señala que en la década del noventa, en Perú se presentaron dos ciclos
económicos, un ciclo al cual le denomina ciclo de expansión que va desde el año
1992 al 1997, considerado ciclo de crecimiento en la actividad económica, el cual de
alguna manera se podría verificar observando algunos indicadores macroeconómicos.
Al respecto, de los indicadores emitidos por el Banco Central de Reserva del Perú
(BCRP, 2001), se puede visualizar que en ese periodo el PIB percapital tuvo un
promedio de 5,1, la devaluación fue del 18%, la inflación promedio fue de 21%, a su
vez la tasa de desempleo se mantuvo en 8,6% aproximadamente, luego de este ciclo,
176
vino según Tagle, un periodo de contracción que sucedió entre el año 1997 al 2001 y
el cual estuvo caracterizado por el desequilibrio externo, el PIB percápita en -6%, el
aumento del desempleo en esos cuatro años reflejo una tasa de 8,9% a su vez hubo
mayor devaluación e inflación.
Si se toma como acertados los indicadores del Banco Central de Reserva de
Perú, quien es un ente con personalidad jurídica y que de acuerdo a la ley que lo
regula, la finalidad del mismo es preservar la estabilidad monetaria; y entre sus
funciones esta administrar las reservas internacionales, e informar sobre las finanzas,
entre otras funciones; y adjunto a estos indicadores, se anexan las cifras aportadas
por el informe de desarrollo humano del Programa de las Naciones Unidas para el
desarrollo (PNUD, 2002), acerca de las consideraciones de la década del noventa,
éste señala que la pobreza en el Perú para el año 1991 era aproximadamente de
12.147.420 personas pobres la cual aumento para el año 2000 a la cifra aproximada
de 13.863.142, correspondiendo a mas de la mitad de la población, la cual ha vivido
con menos de dos dólares diarios, ubicándose el 72,7% en el sector rural, el informe
señala que en el Perú para el año 2002 continuaban las bajas condiciones de vida y
también las desigualdades socioeconómicas, por lo que es factible la idea fuerza que
en la década del noventa Perú tuvo su periodo de dificultades tanto económicas
como sociales.
En ese mismo orden de ideas y de acuerdo a la comisión Económica para
América Latina y el Caribe (CEPAL 2005), se indica, que gracias al dinamismo de
las exportaciones y el repunte de la inversión privada, en el 2004 la economía peruana
creció un 4,8%, superando las expectativas de principios de ese año. Debido a la
notable demanda de materias primas de Asia y el acceso al mercado estadounidense
facilitado por la Ley de Promoción Comercial Andina y Erradicación de la Droga
(ATPDEA), las exportaciones crecieron casi un 40% y superaron los 12.600 millones
de dólares. Esta expansión se basó en un incremento de las ventas tanto de productos
177
tradicionales (42%) como no tradicionales (33%). Entre los primeros se destacaron
algunos metales, que se beneficiaron de los altos precios internacionales, sobre todo
el cobre, cuyas ventas casi se duplicaron, pero también el plomo, el estaño, la plata, el
hierro y el oro. También productos agrícolas como el café y pesqueros se vieron
favorecidos por una mejoría de las condiciones de precio y producción. En lo que
respecta a las exportaciones no tradicionales, todos los rubros mostraron un elevado
dinamismo. Se destacan los textiles, cuyas ventas superaron por primera vez los 1.000
millones de dólares.
Igualmente debido al repunte de la inversión, las importaciones de bienes de
capital aumentaron un 19%, pero todavía son inferiores a las registradas en la
segunda mitad de los años noventa. Los elevados precios de los combustibles
incidieron en la expansión de la compra externa de bienes intermedios (23%),
mientras que un moderado repunte del consumo privado conllevó a una mayor
importación de bienes de consumo (7%) que superó el máximo anterior, alcanzado en
1998 (CEPAL, 2005).
Visto estas cifras, se podría señalar que las favorables condiciones externas y
el ordenamiento macroeconómico iniciado en los dos años anteriores facilitaron este
resultado. En este contexto, se alcanzó un elevado superávit comercial de 1.950
millones de dólares, mientras que las reservas internacionales aumentaron más de
2.400 millones de dólares, con lo cual llegaron a 12.600 millones de dólares y
lograron cubrir la totalidad de los pasivos en dólares del sistema bancario, más la
deuda externa a corto plazo; en otras palabras, el favorable contexto externo facilitó
importantes avances en materia de mejora de las cuentas fiscales, reducción del grado
de dolarización del sistema financiero, aumento de las reservas internacionales y
manejo de la deuda externa. Así mismo, la política monetaria estimuló el crecimiento
económico, y la autoridad fiscal aprovechó las circunstancias para seguir
consolidando las finanzas públicas.
178
Por otro lado, y de acuerdo con el organismo internacional citado, en el
transcurso del 2004, la estabilidad de precios se vio perjudicada por el alto costo de
los combustibles. El crecimiento económico tuvo efectos limitados en los indicadores
laborales. Si bien se registró una significativa generación de empleo formal, fue
insuficiente para bajar el desempleo, que se mantuvo en un 9,4%. El desempeño
insatisfactorio del mercado laboral también se reflejó en el estancamiento de los
salarios reales.
Con respecto a los precios, la remuneración y el empleo; y de acuerdo a
datos aportados por CEPAL (2005), el alza de precios de algunos productos agrícolas
nacionales, debido a las condiciones climáticas adversas; y de productos importados;
y sobre todo de los combustibles, se tradujo en un aumento del IPC en Lima
Metropolitana, que superó a lo programado en la primera mitad del año 2004 y
supuso un incremento interanual del 4,6% en el mes de julio. A partir de agosto, la
inflación declinó y terminó el año en el límite superior de la banda establecida por las
autoridades en el esquema de metas de inflación, un 3,5%. A inicios del 2005 la
tendencia decreciente se profundizó y en junio la inflación era del 1,5%, aunque se
mantuvo la presión de los precios de los combustibles.
En referencia al empleo, en el promedio del año, el empleo formal en las
zonas urbanas aumentó un 2,7%. La tasa de ocupación de Lima Metropolitana se
incrementó medio punto porcentual. Sin embargo, dado que el crecimiento incentivó
la incorporación de inactivos al mercado de trabajo, la tasa de desempleo no cedió, y
su promedio anual se mantuvo en un 9,4%. El desempeño insatisfactorio del mercado
de trabajo también se expresó en una masiva emigración, de alrededor de 300.000
personas en el 2004. A inicios del 2005 se aceleró la generación de empleo formal,
que se elevó un 3,7% en los primeros cinco meses, sin que la tasa de desempleo de
Lima Metropolitana reflejara esta tendencia favorable. La creciente demanda laboral
179
tampoco se reflejó en los salarios, ya que en el 2004 el ingreso laboral medio nominal
de los ocupados en Lima aumentó solo un 1,9%, lo que corresponde una pérdida del
1,7% del poder de compra.
De acuerdo a los indicadores macroeconómicos se podría señalar que la
evolución de la economía peruana durante 2004 ha sido buena, el crecimiento
económico ha sido de 5%, con un impulso particularmente fuerte de las exportaciones
(15,2%). Este crecimiento tiene sólidas bases macroeconómicas: la inflación se
mantuvo alrededor de 2,5% y la balanza comercial es positiva (2700 millones de
dólares). Muy diferente del segundo quinquenio de la década del noventa donde
ocurrió un déficit en la balanza comercial de 2500 millones de dólares que luego dio
paso a la recesión de 1999-2000. La política monetaria del Banco Central de Reserva
fue un puntal fundamental en este proceso, al aumentar el crédito y la reducción de la
tasa de interés. Sin embargo aunque haya ocurrido un crecimiento económico, en el
Perú se mantiene las condiciones de desigualdad que ha tenido desde décadas atrás.
La economía creció, pero no se vieron favorecidos los más pobres. El empleo
apenas creció 2,6% en el 2004 y los sueldos y salarios en promedio no aumentaron
nada, mientras el déficit calórico (una medida de subalimentación) de las familias
urbanas del Perú, aumentó de 26% a 29%. Esto podría estar significando que un
elemento que esta particularmente ausente en las políticas económicas para lograr un
crecimiento realmente sostenible es el componente social; es difícil no encontrar
trabas en el crecimiento de un país que mantiene a una población mal alimentada y en
situación de pobreza; o se podría decir de otra forma siguiendo a Popper (1986), se
observa una asincronía entre el crecimiento económico y la situación de pobreza del
país; la tasa de pobreza, según el INEI (2001) era aproximadamente de 62,7 %, lo que
equivale a mas de la mitad de la población, estando el 15.6 % en pobreza extrema,
cifras que han continuado. Además el 65% de la población económicamente activa
son subempleados, principalmente dedicados a la agricultura o al comercio informal.
180
Es importante señalar también que hay una gran presencia de niños, niñas y
adolescentes trabajando, por lo menos 8 de cada 100 trabajadores tienen entre 6 y 14
años de edad.
El problema social no es solo de los adultos y de los niños, niñas y
adolescentes, sino también de los jóvenes, porque de acuerdo a un estudio realizado
por el Consejo Nacional de la Juventud de Perú (CONAJU, 2004), el 52% de los
jóvenes peruanos, se encuentran en situación de pobreza, mientras que el 20% de este
sector poblacional se haya en extrema pobreza.
Situación Jurídica del Perú
De acuerdo a la Constitución Política de la República del Perú (1993), la
República del Perú, es democrática, social independiente y soberana (art. 43), así
mismo, indica en lo referente al idioma : “Son idiomas oficiales el castellano y, en las
zonas donde predominen, también lo son el quechua, el aimara y las demás lenguas
aborígenes, según la ley ( art. 48).
Puntualiza la carta fundamental que entre los deberes primordiales del Estado
están: “proteger a la población de las amenazas contra su seguridad; y promover el
bienestar general que se fundamenta en la justicia y en el desarrollo integral y
equilibrado de la Nación”(art. 44), igualmente indica en su Título III, referente al
régimen económico “...el Estado orienta el desarrollo del país, y actúa
principalmente en las áreas de promoción de empleo, salud, educación, seguridad,
servicios públicos e infraestructura”(art. 58). Estableciendo además la carta magna
garantías para la generación de riquezas, la libertad para el trabajo y oportunidades
para superar las desigualdades cuando establece “...El Estado estimula la creación de
riqueza y garantiza la libertad de trabajo y la libertad de empresa, comercio e
181
industria...”, a su vez reza “... El Estado brinda oportunidades de superación a los
sectores que sufren cualquier desigualdad; en tal sentido, promueve las pequeñas
empresas en todas sus modalidades (art. 59)”.
De la literalidad de la Constitución, se desprende el deber que tiene el Estado
peruano de generar bienestar a la población, a través de la promoción del empleo, la
salud, educación, y demás servicios públicos, pudiendo generar también bienestar al
dar garantías para generar riquezas y oportunidades para superar las desigualdades.
Aunque este sea parte del deber ser del actuar del Estado, parece ser que la situación
real desde el punto de vista social que vive la población peruana es otra, debido al
aumento de la pobreza, a la poca mejoría de los niveles de desigualdad, al desempleo
y subempleo; y a la exclusión entre otros, manteniéndose un presupuesto público
insuficiente para los sectores sociales.
Sin ánimos de hacer un análisis vertical de la estructura social peruana, se
puede acotar que por la problemática social que vive el Perú, han aumentado los
niveles de pobreza, siendo la estructura social mas baja la pobreza extrema, que es
aquella que no tiene nada y que solo percibe aproximadamente 30 dólares por año,
pudiéndose ubicar en este renglón a los indigentes. Luego, la pobreza critica que hace
una década era el nivel mas bajo de pobreza, ocupa en los actuales momentos el
penúltimo lugar, esta conformado por los desocupados permanentes o la población
con ingresos por debajo del nivel mínimo de subsistencia. Otro nivel de pobreza se
podría decir que es el de supervivencia, donde están ubicados los niños, niñas y
adolescentes trabajadores, los trabajadores informales, los campesinos que no poseen
tierra, entre otros.
En materia laboral, la Constitución del Perú a través de sus artículos, indica
que toda persona tiene derecho a trabajar libremente, con sujeción a la ley (art. 2), en
cuanto a la protección y fomento del empleo se observa “El trabajo es un deber y un
182
derecho. Es base del bienestar social y un medio de realización de la persona” (art.2),
“El trabajo, es objeto de atención prioritaria del Estado, el cual protege especialmente
a la madre, al menor de edad y al impedido que trabajan. Promueve el progreso
social y económico, fomento del empleo productivo y de educación para el
trabajo...”(art. 23).
En cuanto a los derechos del trabajador, la citada Constitución manifiesta “El
trabajador tiene derecho a una remuneración equitativa y suficiente, que procure, para
él y su familia, el bienestar material y espiritual...” (art.24), “La jornada ordinaria de
trabajo es de ocho horas diarias o cuarenta y ocho horas semanales, como máximo...”
(art. 25). En referencia a los principios que regulan la relación laboral, se deben
respetar los siguientes: “La igualdad de oportunidades sin discriminación. El
Carácter irrenunciable de los derechos reconocidos por la Constitución y la ley. La
interpretación favorable al trabajador en caso de duda insalvable sobre el sentido de
una norma” (art. 26).
Por su parte en la Ley de Fomento del Empleo (1991), la política nacional de
empleo constituye el conjunto de instrumentos normativos orientados a promover, en
armonía con los artículos 42, 48 y 130 de la Constitución Política del Estado, un
régimen de igualdad de oportunidades de empleo que asegure a todos los peruanos, el
acceso a una ocupación útil, que los proteja contra el desempleo y el subempleo, en
cualesquiera de sus manifestaciones (art.1). Entre los objetivos de la Ley, se
destacan los siguientes: a) promover el acceso masivo al empleo productivo dentro
del marco de la política económica global del poder ejecutivo y a través de programas
especiales de promoción del empleo; b) mejorar los niveles de empleo adecuado en el
país de manera sustancial, así como combatir el desempleo y el subempleo, en
especial el que afecta a la fuerza laboral juvenil; c) garantizar la seguridad en el
empleo y los ingresos de los trabajadores, respetando las normas constitucionales de
estabilidad laboral; d) Coadyuvar a una adecuada y eficaz interconexión entre la
183
oferta y la demanda en el mercado de trabajo; e) fomentar la capacitación y
formación laboral de los trabajadores, como un mecanismo de mejoramiento de sus
ingresos y la productividad del trabajo (art. 2).
En referencia a la política nacional de empleo, esta comprende
fundamentalmente al conjunto de acciones de política laboral emprendidas por el
Ejecutivo, orientadas a la generación masiva del empleo; a flexibilizar el mercado de
trabajo; a la promoción activa del empleo autónomo, como mecanismo fundamental
de acceso a la actividad laboral por iniciativa de los propios trabajadores; a la
promoción de cooperativas de trabajadores; así como, las acciones gubernamentales
orientadas a fomentar el establecimiento de pequeñas empresas intensivas en uso de
mano de obra, dictando medidas tendientes a incentivar su integración a la formalidad
institucional (art. 4).
El Decreto Legislativo Nº 728 o Ley de Fomento del Empleo, precisa en su
título I, capítulos I al IV, las normas de la capacitación para el trabajo. Este, para
fines de formación profesional, considera tres tipos de contratos: el de formación
laboral juvenil, el de prácticas pre-profesionales y el de aprendizaje. Todos ellos, se
sitúan en el ámbito del derecho de la formación profesional, por cuanto su finalidad
no es la prestación en sí de la actividad laboral, sino la capacitación, en el nivel de la
primera formación, para el desempeño posterior de una actividad laboral. Algunos
laboralistas sostienen, que dada la necesidad de formar profesionalmente a los
jóvenes, los contratos con dicha finalidad deberían ser facilitados, para lo cual, las
empresas que asumen la tarea formativa, no deberían tener mayores cargas que las
ocasionadas por ésta. Señalan que el hecho de formar conlleva una preocupación y
una carga en trabajo para la empresa. De acuerdo a la ley citada la autoridad
competente para el control, la supervisión y demás responsabilidades asignadas en las
normas sobre formación laboral juvenil y prácticas preprofesionales, es la Dirección
general de empleo y formación profesional (art. 28). Esta dependencia del Ministerio
184
de trabajo y promoción social, queda encargada de llevar el registro correspondiente
de los contratos establecidos, bajo estas modalidades (art. 29).
En relación a la legislación sobre el trabajo de niños, niñas y adolescentes en
el Perú, además de los derechos que le reconoce la Constitución Política vigente, se
ha ratificado la Convención Internacional de los Derechos del Niño, existe el Código
de los Niños, y Adolescentes y se han creado las Defensorías del Niño y Adolescente,
que constituyen el marco legal e institucional para los derechos de los niños, niñas y
adolescentes.
Entre los dispositivos vigentes, tanto de la legislación internacional como
peruana, que protegen al niño y adolescente trabajador se encuentran las siguientes: la
Constitución Política del Perú (1.993), quien señala “El trabajo en sus diversas
modalidades, es objeto de atención prioritaria del Estado, el cual protege
especialmente a la madre, al menor de edad y al impedido que trabajan...” (art. 23).
El código de los niños, y adolescentes (2.000) aborda entre otros aspectos, la
protección a los niños, niñas y adolescentes que trabajan. Algunos artículos en
referencia expresan: “Se considera niño a todo ser humano desde su concepción hasta
cumplir los 12 años de edad y adolescente desde los 12 hasta cumplir los 18 años de
edad”(art.1). “El niño y el adolescente son sujetos de derechos, libertades y de
protección específica” (art. 2).
En cuanto a la modalidad educativa para el trabajo, la ley señala “El Estado
garantiza el ofrecimiento de modalidades y horarios escolares especiales que
permitan la asistencia regular a los niños, niñas y adolescentes que trabajan. Los
directores de centros educativos velarán que el trabajo no afecte su asistencia y
rendimiento escolar... (art. 19). En cuanto al trabajo, la norma expresa “El Estado
reconoce el derecho de los adolescentes a trabajar con las restricciones que impone
185
este Código...” y agrega “... siempre y cuando su actividad laboral no importe riesgo
ni peligro para su desarrollo, para su salud física, mental y emocional y no perturbe su
asistencia regular a la escuela”(art. 22).
En referencia al ámbito de aplicación el Código ampara “a los adolescentes
que trabajan en forma dependiente o por cuenta ajena, incluyendo el trabajo a
domicilio y a los que trabajan por cuenta propia o en forma independiente”. Así
mismo incluye “el trabajo doméstico y el trabajo familiar no remunerado” y excluye
en su ámbito de aplicación “el trabajo de los aprendices y practicantes que se rigen
por sus propias leyes.” (art. 51).
Al referirse a la edad mínima para el trabajo, el código menciona en el
artículo 54 que las edades requeridas para trabajar en determinadas actividades para
el caso del trabajo por cuenta ajena o que se preste en relación de dependencia son las
siguientes: a) Catorce (14) años para labores agrícolas no industriales, b) Quince (15)
años para labores industriales, comerciales o mineras, c) Dieciséis (16) años para
labores de pesca industrial. Para el caso de las demás modalidades de trabajo, doce
(12) años. Se presume que los adolescentes están autorizados por sus padres o
responsables para trabajar, cuando habiten con ellos, salvo manifestación expresa en
contrario de los mismos. Para mayor observancia del Código ver anexo D.
El Estado peruano ratifico en el año 1990 la Convención de las Naciones
Unidas sobre los derechos del niño, quien en su artículo 32 señala:
1. Los Estados partes reconocen el derecho del niño a estar protegido contra
la explotación económica y contra el desempeño de cualquier trabajo que
pueda ser peligroso o entorpecer sus educación, o que sea nocivo para su
salud o para su desarrollo físico, mental, espiritual, moral o social.
186
2. Los Estados partes adoptarán medidas legislativas y administrativas,
sociales y educacionales para asegurar la aplicación de este artículo. Con ese
propósito y teniendo en cuenta las disposiciones pertinentes de otros
instrumentos internacionales, los Estados partes, en particular: a) Fijaran una
edad o edades mínimas para trabajar, b) Dispondrán la reglamentación
apropiada de los horarios y condiciones de trabajo; y
c) Estipularán las penalidades u otras sanciones apropiadas para asegurar la
aplicación eficaz de este artículo.
En relación a otros Convenios Internacionales, el Perú ha ratificado los
siguientes: a) Convenio Relativo a la Edad de Admisión de los Niños al Trabajo
Agrícola b) Convenio por el que se fijo la Edad Mínima de Admisión de los Niños
al Trabajo Marítimo c) Convenio por el que se fija la Edad de Admisión de los
Niños a los Trabajos Industriales d) Convenio Relativo al Examen Médico de
Aptitud para el Empleo de los Menores en la Industria e) Convenio Relativo al
Examen Médico de Aptitud para el Empleo de los Menores en Trabajos No
Industriales f) Convenio Relativo a la Limitación del Trabajo Nocturno de los
Menores en Trabajos No Industriales g) Convenio Relativo a la Edad Mínima de
Admisión al Trabajo de los Pescadores h) Convenio para la erradicación del trabajo
infantil.
Perú, a pesar de tener una legislación que en la discursiva teórica, le da
protección integral al niño y al adolescente, en la práctica parece que la realidad es
otra. Los niños, niñas y adolescentes peruanos es ven obligados a trabajar, como una
forma de sobrevivencia, ante la carestía de las condiciones sociales para poder vivir,
entre las cuales están la educación, salud, alimentación, entre otras. Quedando al
descubierto la brecha entre lo que le corresponde como sujeto de derechos y la
situación económica y social del Estado peruano.
187
Contexto Económico y Social de Bolivia
Bolivia es un país localizado en pleno corazón de Sudamérica. Su parte
occidental contiene una extensa porción bifurcada de la cordillera de los Andes y en
donde se sitúa el Altiplano Boliviano. La mayor parte de los bolivianos vive de la
minería o de la industria del petróleo y del gas natural. Entre las riquezas mineras del
país, concentradas en Potosí, La Paz, Oruro y Cochabamba, se encuentran el estaño,
el oro, la plata y el zinc. En el aspecto agrícola, debido a sus características
topográficas, el país obtiene una extensa gama de productos tanto tropicales como de
valle y alta montaña. Se cultiva sobre todo el maíz, café, algodón, azúcar, arroz,
patata, cacao, cebada y quinua. Las principales industrias son las de los derivados
agrarios (cerveza, cigarrillos, azúcar), la textil y las cementeras. El idioma oficial es
el castellano, pero se reconoce también como tales al Aymará y al Quechua (anexo
E).
Según el Instituto Nacional de Estadística (INE, 2003), la población esta
conformada por 8.900.000 habitantes. De éstos, aproximadamente 5.600.000 viven
en áreas urbanas y 3.300.000, en áreas rurales. La niñez y adolescencia constituyen
casi la mitad de la población boliviana. La incidencia de la pobreza afecta a un 62,7
de la población nacional. El 47% de la población de las ciudades es pobre. El 81,7%
de la población del área rural es pobre. El 5,3% de las personas que habitan las
ciudades y el 33,7% que viven en zonas rurales son analfabetos.
De acuerdo al Programa de las Naciones Unidas para el Desarrollo (2.000),
en su informe de desarrollo humano, en la década del noventa, la economía de
Bolivia presentó una significativa estabilidad macroeconómica, resultante de la
aplicación de políticas fiscales y monetarias adecuadas y de reformas estructurales
que además buscaron promover el crecimiento a través de un mayor flujo de
188
inversión privada (nacional y extranjera) y de un mejor funcionamiento del mercado.
En este periodo se observó una mayor urbanización como consecuencia de fuertes
flujos migratorios del campo hacia las principales ciudades del eje central y cierta
diversificación de la producción. El Estado redujo su participación directa en la
economía y orientó sus acciones a su promoción y regulación, y a la creación de
infraestructura económica y social. Por su parte, el sector privado mostró mayor
dinamismo en las áreas productivas.
Igualmente, señala el informe que el crecimiento de la economía boliviana
alcanzó en los años 90 un promedio anual de 4.3%, superior en varios períodos a la
tasa de crecimiento regional. Se captaron montos significativos de inversión
extranjera orientados hacia los sectores extractivos, de transportes, comunicaciones y
de servicios que en muchos casos eran monopolios estatales. La inversión extranjera
incorporó formas de administración y tecnología que tienden a elevar la
competitividad de la economía.
El informe indica que el crecimiento no fue uniforme. La economía presentó
importantes diferencias, en algunos sectores como la agricultura y minería coexisten
empresas con producción artesanal e intensiva en mano de obra y otras con adelantos
tecnológicos y alta densidad de capital. La producción de los sectores intensivos en
mano de obra se canaliza, a excepción de la minería, al mercado interno y los de
mayor desarrollo buscan colocar sus productos en el exterior. En la composición del
PIB, la participación de las actividades primarias de origen agropecuario y extractivo
fue de 25%, las de comercio y servicios productivos y sociales participaron con un
54%, mientras que las de transformación (industria manufacturera y construcción),
representaron el 21%. Las características referidas generan diferencias en la calidad
del empleo que repercuten en los niveles de ingreso.
189
Los sectores económicos más importantes fueron la industria manufacturera,
la agropecuaria, la minería, la explotación de hidrocarburos, los servicios financieros
y los prestados a empresas, el transporte, almacenamiento y comunicaciones, y el
comercio. La producción de éstos, en conjunto, representa alrededor del 63% del PIB.
El sector agropecuario aporta el 15% al PIB, al interior del mismo se destaca la
producción agrícola no industrial que representa el 44% del producto sectorial,
caracterizado por actividades que se realizan a pequeña escala y sin mayores
adelantos tecnológicos, lo que incide en su baja productividad. Siguen en orden de
importancia la producción pecuaria (26%) y la agrícola industrial (19%) constituida
por los cultivos orientados a los mercados externos (en 1998 las exportaciones de este
subsector representaron 31% del total). También se destaca la silvicultura y la
producción de coca que representan el 11% del producto sectorial, aunque se
encuentra en descenso ( PNUD, 2.000)
El informe también puntualiza que la falta de infraestructura, riego,
transportes y almacenamiento, limita en gran medida un mejor desempeño del sector
agropecuario que además, es vulnerable a variaciones climáticas y costos de
transporte y comercialización muy altos. Los sectores extractivos que incorporan el
petróleo crudo, gas natural, minerales metálicos y no metálicos, participan con el 10%
del PIB y su producción se destina en su mayoría al mercado externo. La actividad
minera aporta con el 5.3% al PIB y está integrada por la minería mediana que genera
el 59% del valor total de la producción, la minería chica y cooperativas que generan
el 36% y la estatal que, luego de la privatización, sólo aporta con el 5%. En 1998, las
exportaciones minero metalúrgicas representaron el 33% del valor total exportado.
La producción hidrocarburífera genera el 4.8% del PIB y participa con un
7.3% del total de las exportaciones nacionales. La producción de derivados del
petróleo se canaliza sobre todo al mercado interno y un porcentaje marginal de
petróleo es destinado a la exportación. En cambio, la producción de gas permite
190
abastecer el mercado interno y genera un significativo excedente que se exporta al
Brasil. Las perspectivas de producción y exportación son importantes, porque se
registraron reservas certificadas de gas por 23.7 trillones de pies cúbicos.
El sector industrial participa con 17% en el PIB y el 14% de sus ventas se
destina al mercado externo, lo que representa más o menos el 30% de las
exportaciones. Sus productos de exportación más importantes son los derivados de la
soya, las manufacturas de madera y cuero, estaño y oro metálicos, joyería, alimentos
y textiles. En el sector manufacturero los establecimientos grandes representan el
1%, los medianos el 4%, los pequeños el 14% y la microindustria, el 81%, sin
embargo las industrias grandes y medianas generan en conjunto, casi el 96% del valor
agregado sectorial. El sector de electricidad, gas y agua, representa el 2% del PIB. El
sistema eléctrico está conformado por el Sistema Interconectado Nacional (SIN) que
une los principales nudos de generación y distribución e interconecta a La Paz, Oruro,
Potosí, Cochabamba, Sucre y Santa Cruz. El sector de transportes, almacenamiento y
comunicaciones constituye el 11% del PIB y abarca a los sistemas de transporte
terrestre, aéreo, ferroviario, fluvial y lacustre.
De acuerdo al estudio realizado por la Comisión Económica para América
Latina y el Caribe (CEPAL, 2.005), en el año 2004, la economía de Bolivia tuvo un
buen desempeño, gracias al impulso de una favorable coyuntura externa y a una
cierta, aunque precaria, estabilidad política y social. Sin embargo, en el 2005, año en
que el entorno externo siguió siendo positivo, se desencadenó una fuerte crisis
política que culminó con la renuncia del Presidente a principios de junio. Las
movilizaciones de mayo y junio tuvieron efectos negativos en términos de actividad,
inflación y recaudación tributaria. La situación comenzó a deteriorarse en enero,
cuando surgieron fuertes reivindicaciones de autonomía de Santa Cruz, después de
que el gobierno elevara el precio de los combustibles. Posteriormente, la discusión de
191
la Ley de Hidrocarburos dio pie a movimientos en favor de la nacionalización de
estos recursos, que de hecho culminaron en la renuncia del Presidente. En mayo, el
Congreso promulgó una ley sobre la materia, en virtud de la cual se adoptó un
impuesto directo a los hidrocarburos de un 32% sobre el valor de producción, que se
suma a la precedente regalía del 18% y da mayor participación y capacidad de
regulación al Estado en el sector.
A pesar del complejo panorama del año 2.005, la CEPAL señala que algunos
indicadores económicos que cubren la primera parte del año son favorables y
consistentes con condiciones externas que vienen siendo positivas desde el 2003 y
quizás con un cierto acostumbramiento de los agentes a la inestabilidad política. En el
2004, el PIB se expandió a una tasa del 3,6%, superior al 2,8% del año 2003,
crecimiento que si bien se tradujo en un aumento del producto per cápita superior al
del año anterior, siguió siendo insuficiente para retomar el nivel de 1998, lo que da
cuenta de los profundos efectos negativos que ha tenido el período de bajo
crecimiento iniciado en 1999. En el 2004, el déficit del sector público no financiero
se redujo notablemente, hasta llegar a representar un 5,5% del PIB, un punto
porcentual menos que lo proyectado a mediados de ese año, lo que se compara con un
7,9% en el 2003. Con la excepción de la pesada carga representada por las pensiones,
el déficit fue de un 0,9% y un 3,1% del PIB en el 2004 y el 2003, respectivamente.
Gracias al impulso de las exportaciones, la balanza de pagos presentó también una
posición desahogada en el 2004, cuando por segundo año consecutivo se registró un
superávit en la cuenta corriente, de hecho un máximo histórico. En el 2004, sobre
todo en la segunda parte del año, se aliviaron ligeramente las marcadas restricciones
fiscales y monetarias que afectan a la economía y la situación cambiaria también fue
positiva.
Con respecto a la política fiscal, el informe de la CEPAL, señala que el déficit
fiscal del sector público no financiero (SPNF) se redujo en 2,3 puntos porcentuales
192
del PIB, de 4.880 millones de bolivianos en el 2003 a 3.860 millones en el 2004; de
esta suma, el 84% corresponde a desembolsos por concepto de pensiones. La
importante mejora en este campo es atribuible, por el lado de los ingresos, al éxito de
los programas de regularización tributaria, a la aplicación de un impuesto a las
transacciones financieras, y al incremento de las entradas provenientes de las
exportaciones de hidrocarburos. El aumento de los ingresos tributarios, al que
contribuyen las dos primeras medidas, explica un 73% del crecimiento del total de
ingresos, que aumentaron un 23,3% en el año. Las donaciones representaron el 2,5%
del PIB (1.744 millones de bolivianos), porcentaje inferior al 2,9% registrado en el
2003, pero superior al 2,0% promedio del período 1998-2002. Desde el punto de vista
de los gastos, el agregado total creció un 12,7%, con los gastos de capital como
componente más dinámico (26,6%), mientras el gasto corriente se expandió
relativamente poco; en particular, el gasto en bienes y servicios se contrajo un 8%,
descenso que se relaciona con los programas de austeridad iniciados con el objeto de
mejorar la crítica situación fiscal que venía arrastrándose desde el 2003. El aumento
de la inversión pública, centrado en infraestructura e inversión social, fue posible
gracias a ingresos superiores a los esperados y al financiamiento externo
complementario.
En ese mismo orden de ideas, las cifras del banco central de Bolivia (2.004)
son indicativas de que a fines de diciembre del 2004 la deuda pública ascendía a
6.925,5 millones de dólares, lo que representa un 78,9% del PIB. Correspondiendo
4.950,6 millones a deuda externa, representando el 92% de la misma a prestamos de
de organismos multilaterales. Por otra parte, la deuda interna se elevó un 15,4%
(14,3% en el 2003) para situarse en el equivalente de 1.974,9 millones de dólares.
Con respecto a las variables económicas, señala la CEPAL (2.0005), que el
crecimiento económico de un 3,6% en el 2004 tuvo como componente más dinámico
a las exportaciones (16,1%), especialmente de hidrocarburos (23,8%), como
193
consecuencia del aumento de las exportaciones de gas a Brasil y el reinicio de los
despachos a Argentina. Por el contrario, la demanda interna se mantuvo
prácticamente estancada, con un aumento de apenas un 0,4%, aunque se revirtió la
contracción del 0,3% que se produjo en el 2003. El sector industrial mostró un
crecimiento del 5,1%, que se concentró en actividades vinculadas a las exportaciones
de textiles y cuero facilitadas por la Ley de promoción comercial andina y
erradicación de la droga, mientras que la construcción tuvo una pequeña recuperación
con respecto al notable descenso del 2003. La minería se contrajo debido al
agotamiento de algunos yacimientos de oro, pero los buenos precios internacionales y
el inicio de inversiones en nuevos proyectos hacen prever un aumento de la
producción en el 2005. Por otra parte, la agricultura fue afectada por problemas
climáticos. La actividad económica mostró una tendencia creciente en 2004,
concretamente una aceleración en el segundo semestre, que fue seguida por un
crecimiento del 3,9% en el primer trimestre del 2005. En este último período se
registraron indicadores favorables en la agricultura, la construcción, y en la
producción de gas, que se elevó un 37%.
En referencia a los precios, las remuneraciones y el empleo y de acuerdo a
estudios de la CEPAL (2005), la inflación de diciembre del 2003 a diciembre del
2004 fue de un 4,6%, superior a la meta establecida por el banco central (3,5%),
aunque la inflación subyacente fue de un 3,2%. Durante el año 2.004, el aumento del
precio interno de los combustibles y el desabastecimiento de diesel ejercieron una
importante influencia directa e indirecta en la inflación, especialmente a través de los
costos del transporte y el precio de algunos alimentos. La corrección de los precios de
los combustibles en enero del 2005 tuvo un fuerte impacto puntual en la inflación de
ese mes (1,37%), que se fue diluyendo en los meses siguientes. En mayo y junio, el
desabastecimiento registrado en varias ciudades se reflejó en el índice de precios, que
registró un crecimiento acumulado en esos dos meses del 2,22%; en junio, la
inflación acumulada en lo transcurrido del año era de un 3,45%, lo que se compara
194
con una meta anual del 3,8%. Con respecto a las remuneraciones las del sector
público descendieron un 6,4% en términos reales a lo largo del año. En el primer
semestre las remuneraciones reales del sector privado también decrecieron (5,6%).
La tasa de desocupación urbana en el 2004, se ubica en un 8,5%, porcentaje que
representa un descenso con respecto al 9,2% de fines del 2003.
Según los datos, si es que estos reflejan la realidad, Bolivia ha tenido periodos
largos de estabilidad económica, a su vez tiene inmensos recursos naturales, sin
embargo Bolivia es uno de los países más pobres y menos desarrollados de América
Latina, en donde se realizaron progresos considerables, en la década de los 90, hacia
el desarrollo de una economía de mercado. Los éxitos entre los años 1993-1997
incluyen la firma de un acuerdo de libre comercio con México y llegar a ser un
miembro asociado del Mercosur, así como la privatización de la línea aérea del
Estado, de la compañía telefónica, del ferrocarril, de la compañía de energía eléctrica,
y de la compañía del petróleo. El crecimiento se reduce en 1999, en parte debido al
desequilibrio presupuestario y a la crisis financiera asiática. En los años sucesivos, los
crecientes problemas civiles siguen afectando al crecimiento económico. Bolivia ha
estado muy dependiente de la ayuda extranjera y con limitaciones políticas para
desarrollar sus recursos naturales como es el caso del gas natural. Ahora bien, su
situación económica reciente se caracteriza por bajo crecimiento en un contexto de
inflación controlada. El déficit de la cuenta corriente es creciente y probablemente
uno de las áreas más alarmantes son las cuentas fiscales donde se alcanzan
desequilibrios sustancialmente altos.
Según el Fondo Monetario Internacional (2004), en Bolivia el centro de los
problemas macroeconómicos es el abultado déficit del sector público no financiero el
cual alcanzó a 8,9% del PIB en 2002. El acuerdo con el Fondo Monetario, firmado en
abril de 2003 establece como objetivo reducirlo a 6,5% del PIB (1,6% sin considerar
el desequilibrio del sistema de seguridad social). La meta preveía aumentar ingresos
195
eliminando exenciones, subiendo impuestos, incrementando la recaudación por
hidrocarburos y concediendo mayores facultades a la autoridad fiscal. El gasto
corriente bajaría por reducción de ministerios, gasto del gobierno central y otorgar un
mayor control para evitar otorgamiento fraudulento de pensiones. Sin embargo,
durante el 2003, la situación fiscal se deterioró con un crecimiento nominal del
déficit. El mayor factor de deterioro fue el aumento de un 14,4% de los gastos
corrientes, mientras que la inversión pública se contrajo un 2,3%. Se crearon nuevos
ministerios y se elevaron las remuneraciones, las adquisiciones de bienes y servicios
y los pagos netos de intereses de la deuda pública. Un 65% del déficit se financió con
créditos externos y el 35% restante colocando deuda interna. Actualmente, Bolivia
tiene un enorme déficit fiscal no financiado y depende de la cooperación
internacional para cerrar la brecha.
Desde el punto de vista social, Bolivia es uno de los países más pobres de
Latinoamérica. La pobreza afecta a la calidad de vida de la mayoría de su población y
restringe el disfrute y el ejercicio de sus derechos humanos. Todo ser humano tiene
derecho a acceder a la satisfacción de sus necesidades. Ser pobre no sólo significa la
incapacidad de satisfacer las necesidades básicas, también supone estar excluido de la
oportunidad de desarrollar capacidades para desenvolverse productiva y
creativamente en la sociedad, así como estar limitado en la posibilidad de hacer
efectivas las propias reivindicaciones.
Según el Mapa de la Pobreza 2002 con base en información del Censo del
2001(INE, 2001), el 59 por ciento de una población de más de 8.274.325 personas es
pobre y el 24,4 por ciento vive en estado de extrema pobreza. No obstante, muchos
analistas sostienen que estas cifran deberían de ser mayores porque el ingreso y el
empleo no se consideraron para realizar el cálculo.
196
Por otra parte, según el Informe de Desarrollo Humano del Programa de
Naciones Unidas para el Desarrollo (PNUD 2002), Bolivia ocupa el lugar 104 de un
total de 174 países en el ranking de desarrollo humano. Así, el país ocupa el quinto
lugar más bajo entre los países de la región. El Índice de Desarrollo Humano se
compone de tres variables: la esperanza de vida al nacer, el logro educacional y el
Producto Interno Bruto (PIB) real per capita.
La pobreza es desigual y afecta de manera distinta a los diferentes grupos
humanos, según el género y el origen étnico. Los indígenas y campesinos y, entre
ellos, las niñas, los niños, los jóvenes y las mujeres son los grupos más afectados por
la pobreza y la exclusión, son los más vulnerables. Se podría señalar que la mitad de
la población que esta conformada por niños, niñas y adolescentes ( INE 2001), viven
en condiciones de pobreza
Asimismo, existen brechas entre regiones del país y entre área rural y urbana.
Los Departamentos con la tasa de pobreza más alta son Potosí, Chuquisaca y Pando.
En cambio, Santa Cruz y Tarija presentan la tasa más baja. Según datos de la Unidad
de Análisis Político y Económico (UDAPE), en el año 2002 el porcentaje de
población que vivía por debajo de la línea de la pobreza era de 81,99 por ciento en el
área rural y de 53,94 por ciento en el área urbana. La pobreza rural se relaciona con
condiciones que determinan una baja productividad agrícola, falta de infraestructuras
y acceso a mercados. En el área urbana, la pobreza está relacionada con empleos de
baja calidad y reducido nivel de ingresos.
En Bolivia, el funcionamiento de la sociedad y la economía podría estar
produciendo inequidad. De hecho, el principal problema social del país es la
desigualdad en la distribución del ingreso y la riqueza. La falta de equidad implica
una ciudadanía limitada y precaria. Si los derechos establecidos en la legislación
197
sufren la imposibilidad de materializarse, entonces se convierten en reconocimientos
formales, vacíos de contenido. No tiene sentido para un pobre reconocerle el derecho
de propiedad cuando no la posee, o el derecho al voto cuando el ejercicio del sufragio
no le ayuda a cambiar su situación.
Sin igualdad de oportunidades en el acceso a bienes no se puede construir
ciudadanos sanos y productivos. Contrariamente, la satisfacción de las necesidades
básicas tiene un enorme potencial productivo individual y social, en la medida en que
acrecienta las capacidades de las personas para satisfacer sus propias necesidades y
contribuir al crecimiento económico del país.
Situación Jurídica de Bolivia
La Constitución política de Bolivia (1995), establece en cuanto a la clase de
Estado y forma de gobierno que Bolivia es “libre, independiente, soberana,
multiétnica y pluricultural, constituida en República unitaria, adopta para su gobierno
la forma democrática representativa, fundada en la unión y la solidaridad de todos los
bolivianos...” (art. 1), a su vez también declara que Bolivia “Es un Estado Social y
Democrático de Derecho que sostiene como valores superiores de su ordenamiento
Jurídico, la libertad, la igualdad y la justicia” (art. 1).
En atención a los fines esenciales del Estado Boliviano, entre estos se pueden
observar: garantizar la personalidad y capacidad jurídica a los ciudadanos, al respecto
la Constitución indica que todo ser humano tiene “ personalidad y capacidad jurídica,
con arreglo a las Leyes. Goza de los derechos, libertades y garantías reconocidos por
esta Constitución, sin distinción de raza, sexo, idioma, religión, opinión política o de
otra índole, condición económica o social...” (art.6). Igualmente en el artículo 7, le
garantiza a las personas derechos como la vida, salud, seguridad, emitir libremente
sus ideas y opiniones, a trabajar y dedicarse al comercio, recibir instrucción y adquirir
198
cultura, a la propiedad privada, individual o colectivamente, siempre que cumpla una
función social, a una remuneración justa por su trabajo, que le asegure para si y su
familia una existencia digna del ser humano, a la seguridad social.
De la observancia del Titulo Primero, Régimen Económico y Financiero, el
Estado garantiza el principio de justicia, cuando puntualiza que “La organización
económica debe responder esencialmente a principios de justicia social que tiendan a
asegurar para todos los habitantes, una existencia digna del ser humano (art. 132). Así
mismo con respecto a la finalidad del régimen económico, el texto Constitucional
señala que el régimen económico propenderá al “fortalecimiento de la independencia
nacional y al desarrollo del país mediante la defensa y el aprovechamiento de los
recursos naturales y humanos en resguardo de la seguridad del Estado y en procura
del bienestar del pueblo boliviano” (art. 133).
Entre los fines del Estado también puede observarse la garantía de la
planificación de la economía, como política económica del Estado al respecto se
señala “El Estado podrá regular, mediante ley, el ejercicio del comercio y de la
industria, cuando así lo requieran, con carácter imperioso, la seguridad o necesidad
públicas. Podrá también, en estos casos, asumir la dirección superior de la economía
nacional...” (art. 141). Igualmente la Constitución garantiza como deber del Estado el
realizar un plan periódico de desarrollo social y económico en ejercicio y procura de
la soberanía nacional “... El Estado formulará periódicamente el plan general de
desarrollo económico y social de la República, cuya ejecución será obligatoria. Este
planeamiento comprenderá los sectores estatal, mixto y privado de la economía
nacional...” (art. 144), el mismo artículo es indicador de que la iniciativa privada “...
recibirá el estímulo y la cooperación del Estado cuando contribuya al mejoramiento
de la economía nacional”.
199
El Estado Boliviano, entre sus fines fundamentales, en su Titulo Segundo,
Régimen Social, garantiza la protección al trabajo, al respecto manifiesta que el
trabajo “es un deber y un derecho y constituye la base del orden social y económico”
(art. 156). Igualmente se señala que el trabajo y el capital gozan de la protección del
Estado. “La ley regulará sus relaciones estableciendo normas sobre contratos
individuales y colectivos, salario mínimo, jornada máxima, trabajo de mujeres y
menores, descansos semanales y anuales remunerados, feriados, aguinaldos, primas u
otros sistemas de participación en las utilidades de la empresas...” (art. 157). Entre los
fines del Estado también esta la seguridad social “El Estado tiene la obligación de
defender el capital humano protegiendo la salud de la población; asegurará la
continuidad de sus medios de subsistencia y propenderá asimismo al mejoramiento de
las condiciones de vida del grupo familiar...” (art. 158).
Para el Estado Boliviano, la educación es la mas alta función del Estado, así lo
declara en la carta fundamental cuando indica en el Titulo Cuarto del Régimen
cultural “La educación es la más alta función del Estado, y en ejercicio de esta
función, deberá fomentar la cultura del pueblo” (art. 177). Igualmente señala en
cuanto la educación vocacional “El Estado promoverá la educación vocacional y la
enseñanza profesional técnica orientándola en función del desarrollo económico y la
soberanía del país” (art. 178).
Con respecto al régimen familiar, la Constitución garantiza la protección del
matrimonio, la familia y la maternidad por el Estado (art. 193). También garantiza la
protección por parte del Estado de la salud física mental y moral de la infancia “ El
Estado protegerá la salud física, mental y moral de la infancia, y defenderá los
derechos del niño al hogar y a la educación. Un código especial regulará la protección
del menor en armonía con la legislación general (art. 199).
200
En Bolivia el Código del niño, niña y adolescente (1999) es el que regula los
derechos de los niños, niñas y adolescentes, quién siguiendo a la Convención de los
derechos del niño (1989), ratifica los principios de la protección integral de la niñez.
El código establece y regula el régimen de prevención, protección y atención integral
que el Estado y la sociedad deben garantizar a todo niño, niña o adolescente “... con
el fin de asegurarles un desarrollo físico, mental, moral, espiritual, emocional y social
en condiciones de libertad, respeto, dignidad, equidad y justicia” (art. 1). El código
considera niño o niña “ a todo ser humano desde su concepción hasta cumplir los
doce años y adolescentes desde los doce a los dieciocho años de edad cumplidos”
(art. 2). A su vez indica “los niños, niñas o adolescentes, como sujetos de derecho,
gozan de todos los derechos fundamentales y garantías constitucionales inherentes a
toda persona, sin perjuicio de la protección integral que instituye este Código...”
(art.5).
El código es indicativo de la corresponsabilidad y prioridad social ineludible
que tienen el Estado, la sociedad y la familia de asegurarle al menor el ejercicio de
sus derechos, al respecto el artículo 7 señala “Es deber de la familia, de la sociedad y
del Estado asegurar al niño, niña o adolescente, con absoluta prioridad, el ejercicio y
respeto pleno de sus derechos”.
De acuerdo al código todo niño, niña y adolescente tiene derecho a la vida y a
la salud (art. 13), derecho a tener una familia “ Todo niño, niña y adolescente tiene
derecho a desarrollarse y educarse en un ambiente de afecto y seguridad en su familia
de origen y, excepcionalmente, en una familia sustituta que le asegure la convivencia
familiar y comunitaria...” (art. 27), en cuanto al deber de los padres “Los padres están
obligados a prestar sustento, guarda, protección y educación a los hijos conforme a lo
dispuesto por el Código de Familia...” (art. 32), tiene derecho a la libertad, al respeto
y a la dignidad como persona en desarrollo (art. 100).
201
En armonía con la Constitución el derecho a la educación es una garantía del
código en cuanto establece “El niño, niña y adolescente tienen derecho a una
educación que les permita el desarrollo integral de su persona, les prepare para el
ejercicio de la ciudadanía y cualifique para el trabajo...” (art.112).
En cuanto al derecho que tiene el adolescente al trabajo y a su protección, el
Código en su título VI Capítulo I, establece algunas disposiciones. El artículo 124
considera como adolescente trabajador:
1. Al que realiza actividades productivas o presta servicios de orden
material, intelectual u otros, como dependiente o por cuenta
propia, percibiendo a cambio un salario o generando un ingreso
económico;
2. Al que desempeña actividades orientadas a la satisfacción de
necesidades básicas que permitan la sobrevivencia individual y
familiar, tanto en el área urbana como rural. así no perciba
remuneración económica ni exista relación obrero patronal por
tratarse de trabajo familiar o comunitario.
Con respecto a la protección del trabajo señala la normativa “todo adolescente
tiene derecho a la protección en el trabajo, a la formación integral y la capacitación
profesional de acuerdo con su vocación, aptitudes y destrezas en relación a las
demandas laborales” (art. 125). A su vez, el artículo 126 fija en 14 años la edad
mínima para trabajar. En referencia al salario para adolescentes este debe ser
establecido de acuerdo a normas vigentes “...en ningún caso será menor al salario
mínimo nacional. Para fijar el monto y efectuar su cancelación se procederá en las
mismas condiciones que a un adulto que efectúa el mismo trabajo” (art.129). En lo
atinente a los trabajos prohibidos, el código puntualiza “Se prohíbe el desempeño de
202
trabajos peligrosos, insalubres y atentatorios a la dignidad de los adolescentes” (art.
133).
Se consideran trabajos peligrosos e insalubres, de acuerdo al artículo 134 del
Código del niño, niña y adolescente de Bolivia:
1. El transporte, carga y descarga de pesos desproporcionados a la capacidad
física;
2. Los realizados en canteras, subterráneos, bocaminas y en lugares que
representen riesgo;
3. La carga y descarga con el empleo de grúas, cabrías o cargadores
mecánicos y eléctricos;
4. El trabajo como maquinistas, fogoneros u otras actividades similares;
5. El fumigado con herbicidas, insecticidas o manejo de sustancias que
perjudiquen el normal desarrollo físico o mental;
6. El manejo de correas o cintas transmisoras en movimiento;
7. El trabajo con sierras circulares y otras máquinas de gran velocidad;
8. La fundición de metales y la fusión o el soplo bucal de vidrios;
9. El transporte de materias incandescentes;
10. Trabajos realizados en frontera que ponen en riesgo su integridad;
11. Los realizados en locales de destilación de alcoholes, fermentación de
productos para la elaboración de bebidas alcohólicas o mezcla de licores;
203
12. La fabricación de albayalde, minio u otras materias colorantes tóxicas, así
como el manipuleo de pinturas, esmaltes o barnices que tengan sales de plomo
o arsénico;
13. El trabajo en fábricas, talleres o locales donde se manipula, elabora o
depositen explosivos, materiales inflamables o cáusticos;
14. Los lugares donde habitualmente hayan desprendimientos de polvos,
gases, vahos o vapores irritantes y otros tóxicos;
15. Los sitios de altas temperaturas o excesivamente bajas, húmedos o con
poca ventilación;
16. El trabajo en actividades de recolección de algodón, castaña y zafra de
caña; y,
17. En general las actividades que crean riesgo para la vida, salud, integridad
física y mental.
De acuerdo al artículo 137 el Estado confiere al adolescente trabajador las
siguientes garantías y derechos:
1. De los derechos de prevención, salud, educación, deporte y esparcimiento:
a) tener un horario especial de trabajo y gozar de todos los beneficios sociales
reconocidos por Ley; b) Ser sometidos periódicamente a examen medico; c)
Tener acceso y asistencia a la escuela en turnos compatibles con sus intereses
y atendiendo a las peculiaridades locales, sin deducir suma alguna de su
salario.
2. De los derechos Individuales de libertad, respeto y dignidad;
3. De los derechos laborales de organización y participación sindical;
204
4. De protección especial en el trabajo, al adolescente que sufre de
discapacidad física o mental, conforme con normas internacionales y
nacionales que rigen la materia;
5. De capacitación, a través de un sistema de aprendizaje, que será
organizado, ejecutado y supervisado por la entidad departamental
correspondiente.
Con respecto a la seguridad social “ el adolescente trabajador, en relación de
dependencia, será afiliado con carácter de obligatoriedad al régimen de la seguridad
social, con todas las prestaciones y derechos establecidos por las leyes que rigen la
materia” (art. 140). En referencia a la jornada de trabajo la normativa señala “la
jornada máxima de trabajo para e l adolescente es de ocho horas diarias, de lunes a
viernes. El adolescente trabajador tendrá descanso obligatorio dos días a la semana,
días que no podrán ser compensados con remuneración económica” (art,142).
De la observancia de la legislación presentada, se podría señalar que Bolivia
es uno de los países latinoamericanos que cuenta con una normativa donde se le
asegura a los niños, niñas y adolescentes amplios derechos que le garantizan su
desarrollo integral, pero el registro de la situación económica de Bolivia el cual es
indicativo de la situación de inestabilidad económica, donde han ocurrido periodos de
crecimiento y otros tanto de desequilibrio, han mantenido a la población desde el
punto de vista social en un estado de perenne pobreza, donde las familias, a pesar de
conocer la corresponsabilidad que tienen en la protección y el deber de garantizar a
los hijos un desarrollo integral, muchas se ven impedidas de lograr este propósito por
la situación de indefensión en que a su vez se encuentran las mismas, al tener que
205
trabajar la familia completa, incluyendo los niños, niñas y adolescentes para lograr
adquirir los bienes de subsistencia.
Muchas familias tienen que trasladarse a las regiones de desarrollo de la
agricultura, abandonando las localidades de origen, y esto lo hacen por varios meses,
y como en la practica no tienen como dejar a sus hijos en lugares seguros protegidos
por la acción del Estado en cumplimiento de las garantías dadas en la legislación,
necesariamente tienen que llevar a los menores hijos con la movilización familiar, lo
que implica que el niño y el adolescente se ausente de las escuelas; a su vez, el que el
menor acuda acompañando a su grupo familiar a los sitios de las plantaciones,
significa que el niño se convierta en un trabajador a edades tempranas, iniciándose
como ayudante y luego el mismo realizar su propio contrato de trabajo, siendo
todavía un menor de edad.
En iguales condiciones, los organismos internacionales registran, la presencia
de niños, trabajando en un sin fin de actividades en Bolivia. Llama la atención el
trabajo de la minería artesanal, realizados por los niños, niñas y adolescentes, donde
realizan todo tipo de trabajo prohibido por la normativa correspondiente, por la
situación de peligrosidad para sus vidas que acarrea este tipo de trabajo. Todo esto
lleva a pensar que a pesar de que existe una normativa aceptable de protección de los
niños, niñas y adolescentes, pero si los derechos establecidos en la misma sufren la
imposibilidad de materializarse, entonces se convierten en reconocimientos formales,
vacíos de contenido. No tiene sentido para un niño reconocerle el derecho a la salud
cuando no la posee, o el derecho al estudio cuando se le imposibilita el acceso a la
educación, o el derecho que tienen los adolescentes a trabajar en condiciones
satisfactorias que le permitan continuar con sus estudios, cuando tiene que realizar
trabajos peligrosos, insalubres y atentatorios a la dignidad de los adolescentes.
206
CAPÍTULO IV
MARCO METODOLÓGICO
En un enfoque multimetódico, para la realización de la investigación se utilizó
tanto el método etnográfico como el método comparativo adecuado a las Ciencias
Sociales. En la consecución del método comparativo, a los fines de complementar la
arista interpretativa del comparativismo, se tuvo presente el pensamiento reflexivo de
John Dewey, contenido en su libro “How we think” (1960), que aún siendo un
reconocido pragmatista, hizo aportes de sistematicidad a la ordenación del
pensamiento reflexivo cuando se trata de abordajes de indagación en contextos
sociales explícitos, los cuales asociado al pensamiento reflexivo fue complementado
con los procedimientos de análisis contenidos en el dualismo crítico de Karl Popper
expresado en dos volúmenes de “The Open Society and Its Enemies” (1973). Desde
allí, la concepción de mundos poperianos orientan en la búsqueda de alguna
contradicción entre los componentes de los aludidos mundos, de manera que la
argumentación sobre un problema visto como necesidad sentida sean ciertamente
fuertes y den cuenta de los requerimientos sociales para la búsqueda de soluciones a
tal necesidad.
En consecuencia, la adopción del dualismo crítico tuvo especial importancia,
ya que a través del mismo fue posible explicar el origen del problema como un
elemento de orden particular en las Ciencias Sociales, esto está en concordancia con
los criterios sostenidos por Popper al señalar que los problemas se derivan de las
inconsistencias entre las leyes elaboradas por el hombre y el comportamiento del
mismo ante esas mismas leyes, esto en razón a que cuando se introducen cambios en
la sociedad en términos de normas o instituciones que no cuentan con los cambios
respectivos en otros órdenes o sectores, los citados cambios generan reacciones de
inconformidad ante el contenido de la Ley.
207
Por otra parte, los aportes del pensamiento reflexivo de John Dewey (1960),
para el orden metódico del trabajo investigativo se focalizaron en la idea fuerza de
que el pensamiento no surge en forma abstracta, sino de una situación de experiencia
concreta, que al principio es confuso, lo que origina la reflexión y luego de la
confusión, la reflexión se percibe en forma clara y armoniosa. De acuerdo a Dewey
en toda reflexión se distinguen los siguientes pasos:
1. Percepción de una dificultad.
2. Intelectualización del problema.
3. Solución, propuesta o hipótesis alternativa de solución.
4. Deducción de las consecuencias que producirá esa hipótesis.
5. Verificación de la hipótesis por la acción.
En el contexto internacional, los pasos del pensamiento reflexivo señalados
por Dewey se aceptan como explicación del método Científico y se constituyen en un
supuesto básico del enfoque comparado, sirviendo además de marco teórico racional
para el enfoque en el proceso de investigación.
Con respecto al análisis o intelectualización del problema se hizo a través del
pensamiento reflexivo de John Dewey, para perfilarlo y concretarlo; en efecto el autor
mencionado indica que lo primero que hay que tener claro e identificado es la
percepción de la dificultad.
La reflexión es la que permite descubrir en qué consiste el problema,
buscando que se logre en forma clara y precisa la intelectualización del mismo a
través de las interrogantes: ¿Por qué es un problema? ¿Cuál es el problema real a ser
estudiado? La reflexión metodológica, siguiendo las orientaciones de Dewey,
permitió precisar la selección y análisis del problema, estudiando las diferentes
208
variables tanto endógenas como exógenas, y las relaciones existentes entre ellas como
una vía de concretar el problema en estudio.
Para el referente empírico, se hizo una investigación etnográfica en el ámbito
venezolano, concretamente en el Municipio Libertador del Estado Carabobo. Según
Martínez (1991):
el objetivo inmediato de un estudio etnográfico es crear una imagen fiel y realista del grupo estudiado, pero su intención y mira más lejana es contribuir a la comprensión de sectores o grupos poblacionales más amplios que tienen características similares (P. 28).
De igual forma Goetz y LeCompte (1998) señalan que la etnografía y sus
variantes del diseño cualitativo “ofrecen a los científicos sociales, alternativas para la
descripción, interpretación y explicación del universo social, así como a los
fenómenos educativos que tienen lugar en él” (P. 54).
Tomando en consideración a estos autores, se desarrolló la investigación
etnográfica, a través de la cual se logró obtener datos descriptivos del contexto social
y de la actividad que realizan niños, niñas y adolescentes tal como ocurre en su
medio natural, con la finalidad de descubrir y percibir el acontecer cotidiano, para
luego buscar su interpretación; comprensión, análisis y de alguna manera tratar de
intervenir en el proceso social a través de posibles aristas resolutivas de tipo social.
Para realizar la investigación etnográfica se tomó como escenario
(investigación de campo) el sector “La Guásima”, localizando los sujetos informantes
escolarizados en las Unidades Educativas “Juan Escalona” y “El Vigía” ubicadas en
el Municipio Libertador del Estado Carabobo, en las cuales se tiene como
conglomerado de informantes a niños, niñas y adolescentes que estudian, muchos de
los cuales también trabajan.
209
De igual manera, el trabajo de campo asociado a la etnografía condujo a la
observación exhaustiva de escenarios laborales en los cuales se desenvuelven niños,
niñas y adolescentes; en este caso, el ámbito laboral elegido se constituyó como el
vertedero de basura localizado en el sector ya identificado “La Guásima” del
municipio Libertador.
Los escenarios o contextos fueron elegidos en forma intencional, así como los
conglomerados de informantes a estudiar, por representar fuentes potenciales de datos
sensibles al análisis e interpretación, por la posibilidad de integración de las
interpretaciones o significados en un marco conceptual o teórico más general, y luego
proceder a precisar sus relaciones con toda la investigación que representa la tesis,
coadyuvando todo el trabajo de investigación en la posibilidad de proponer elementos
teóricos de solución para este grupo estudiado, el cual de tener éxito allí, podría ser
extrapolado a otro contexto de condiciones similares.
Operacionalidad del Método
En la aplicación del método comparado se siguió el procedimiento siguiente:
1. Se establecieron las categorías comparables dentro de la situación laboral de
niños, niñas y adolescentes. Por lo que se tuvo en cuenta en cada país:
a) edad, b) escolaridad, c) jornada laboral, d) salario, e) salud y seguridad,
f) descanso, g) área o sector de trabajo, h) situación familiar.
Estas categorías fueron examinadas en cada uno de los países estudiados:
Colombia, Perú, Ecuador, Bolivia, Venezuela, ya sea en forma directa ( investigación
etnográfica para Venezuela) o a través de fuentes nacionales e internacionales (para el
caso de los países latinoamericanos) con la finalidad de describir su comportamiento
210
en el planteamiento del problema, así como para hacer un análisis crítico en algunos
capítulos de la investigación, hasta el logro de la propuesta final
Definición de categorías
Edad: referida a la situación de niñez o adolescencia, que permite establecer
según parámetros internacionales y nacionales su situación jurídica para trabajar.
Escolaridad: referida a la situación de educación elemental o básica y
secundaria, comprende: Cobertura de la tasa de matriculación, asistencia, deserción,
repitencia y finalización escolar que tienen los niños, niñas y adolescentes que
trabajan.
Jornada Laboral: referida al tiempo en que el niño, niña y adolescente
trabajador está a disposición de un trabajo y no puede disponer libremente a otras
actividades. De acuerdo a la OIT, existe una jornada determinada que es limitante a
la duración del trabajo diario. Los países ratificantes de Convenios con la OIT
establecen a través de sus normas laborales la jornada de trabajo máxima para los
adolescentes trabajadores con edad permitida para trabajar.
Salario: referida a la remuneración evaluable en efectivo que debe
corresponder al trabajador por la prestación de su servicio. Toda persona que trabaja
tiene derecho a una remuneración equitativa y satisfactoria. (Declaración universal
de los Derechos Humanos). Está garantizado en las constituciones de los diferentes
países, así como en normas laborales y en leyes de protección al niño y adolescente,
en ratificación de Convenios con la OIT.
Descanso: Es el tiempo efectivo en que el trabajador interrumpe el trabajo,
debe ser realizado en forma diaria, semanal, anual y en días no hábiles para el trabajo.
211
Tiempo que utiliza para la recuperación de energías perdidas durante el trabajo y para
realizar actividades de recreación y disfrute del tiempo libre. Garantizados en
Convenios internacionales y en las leyes de los diferentes países.
Área o sector de trabajo: referido a las modalidades de trabajo infantil. Se
ubicarán tomando en cuenta la agrupación que realiza UNICEF, entre éstos: Trabajo
doméstico, trabajo en la industria y en las plantaciones, trabajo en la calle, trabajo en
rellenos sanitarios.
Salud y Seguridad: referido al perfecto estado bio-psicosocial y no solamente
ausencia de enfermedad (OMS). La categoría estará en orden a los problemas de
salud asociados al trabajo infantil y de adolescentes, relativos a contaminación
ambiental, utilización excesiva de la estructura ósea y muscular por encima de sus
fuerzas, prevención y riesgos de enfermedades, utilización de equipos de protección
personal, riesgos por utilización de herramientas peligrosas, entre otros. La LOGNA
(1988) en armonía con la Convención sobre los derechos del niño señala: “Todos los
niños y adolescentes tienen derecho a disfrutar del nivel mas alto posible de salud
física y mental” (art.41). “Todos los niños y adolescentes tienen derecho a inscribirse
y beneficiarse del Sistema de Seguridad Social” (art.52).
Situación familiar: Como la familia debe ser el núcleo donde los niños, niñas
y adolescentes deben ser protegidos contra toda forma de abandono, violencia física o
moral, abuso, explotación, es necesario conocer la posición del menor dentro de la
familia, la presencia de desintegración familiar o familia nuclear completa, condición
social y económica, protección o no que le brinda la familia al menor. De acuerdo a la
LOGNA “ La familia debe ofrecer un ambiente de afecto y seguridad que permita el
desarrollo integral de niños y adolescentes” (art. 26).
212
En la búsqueda de las categorías se tomaron cifras de las siguientes fuentes,
entre otras:
A nivel internacional.
- Comisión Económica para América Latina y el Caribe (CEPAL).
- Organización de la Naciones Unidas (ONU).
- Organización Internacional del Trabajo (OIT).
- Programa Internacional para la Erradicación del Trabajo Infantil (IPEC).
- Fondo de las Naciones Unidas para la Infancia (UNICEF).
- Central Latinoamericana de Trabajadores.
- Informes de la Organización Human Rigths Watch.
- Organización de las Naciones Unidas. Objetivos de desarrollo de la ONU
para el milenio.
- Organización Mundial de la Salud.
- Programa de las Naciones Unidas para el Desarrollo ( PNUD ).
- Convención sobre los derechos del niño.
A nivel nacional
- UNICEF Colombia.
- UNICEF Perú.
- UNICEF Venezuela
- UNICEF Ecuador
- UNICEF Bolivia.
- Centro de Documentación y Análisis Social ( CENDA, Venezuela).
- Ministerio de Educación y Deporte (Venezuela).
- Ministerio de Educación (Colombia, Ecuador, Perú, Bolivia)
- Instituto Colombiano de Bienestar Familiar
213
- Encuesta Nacional de Niñez y Adolescencia de Colombia.
- Instituto Nacional de Estadística (INE, Venezuela).
- Instituto Nacional de Estadística (Perú).
- Instituto Nacional de Estadística y Censo (Ecuador).
- Instituto Nacional de Estadística (INE, Bolivia)
- Código de Niños y Adolescentes (Ecuador, Perú, Bolivia)
- Código del menor de Colombia
- Ley Orgánica para la Protección del Niño y del Adolescente(Venezuela)
- Constitución de la República Bolivariana de Venezuela
- Constitución Política de Bolivia
- Constitución Política de Colombia
- Constitución Política del Perú
- Constitución Política del Ecuador
Si bien las diferentes fuentes para la obtención de cifras y otros datos, pueden
no coincidir, ya que en la observación de las mismas se ven algunas contradicciones
entre las fuentes Internaciones y las Nacionales, así como en las fuentes
gubernamentales y no gubernamentales, si esto es así, esto no desvirtúa el aporte de
las cifras y otros datos, ya que estos fueron utilizados como germen que orienta y
fortalece la hipotetización de las ideas, sin necesidad de adhesión a una u otra cifra
como totalmente cierta. Las cifras aunque no coincidan exactamente, sirvieron para
demostrar la magnitud del fenómeno en cada uno de los países estudiados y en base a
las categorías seleccionadas.
También es de notar, que muchos estudios son realizados en alianzas del
organismo internacional con institutos públicos de estadística de cada país, por lo que
hay la posibilidad de que los entes gubernamentales oculten datos. A su vez ocurren
casos de que las organizaciones internacionales (públicas o privadas) tengan
imposibilidad de lograr cifras precisas ya que gran parte del trabajo realizado por
214
niños, niñas y adolescentes, aunque se conoce que existe, hay dificultad para
registrarlo porque todos los casos no acontecen en forma pública y notoria, por lo que
los organismos internacionales y nacionales acuden a estimaciones y proyecciones.
2. Desde el punto de vista jurídico se examinaron cada una de las constituciones
y código contentivos de las regulaciones sobre niños, niñas y adolescentes de
cada uno de los países estudiados, con la finalidad de que a través de la
comparación lograr determinar como los mismos presentan debilidades,
vulnerabilidad o fortaleza, en relación a la realidad económica, social, laboral
que presentan los niños, niñas y adolescentes de cada uno de los países en
estudio; y además en el desarrollo de la investigación hacer un análisis de
cómo estos instrumentos jurídicos pueden presentar puntos de acuerdos o
desacuerdos en cuanto a derechos garantizados a niños, niñas y adolescentes
trabajadores.
3. El método comparativo permitió dar una visión más amplia del problema,
establecer las asincronías que existen en los diferentes instrumentos jurídicos
de cada uno de los países en estudio, con la situación económica y social en
que están inmersos los niños, niñas y adolescentes trabajadores que viven en
cada uno de los países en estudio.
4. En la realización de la investigación el método comparativo ayudo a destacar
contrastes o relaciones al analizar la situación económica y social de cada uno
de los países examinados, examen que se hizo una vez realizada la revisión
del contexto; el método exige considerar el contexto en que se desenvuelven
cada uno de los niños, niñas y adolescentes, con la finalidad de hacer un
análisis crítico de cómo la situación de cada uno de estos contextos puede
incidir en la situación laboral de niños, niñas y adolescentes, sirvió para tratar
de dar algunas respuestas futuras: cuáles factores originan el problema, cuáles
215
factores impiden que se solucione el problema y cuáles son los factores
expectantes, además de ayudar a dar respuestas en la probable propuesta de
solución.
5. A través del análisis comparativo se hizo en la investigación un análisis
crítico, tomando en cuenta cómo los países objeto de estudio han tratado de
dar respuestas al problema (alternativas previas de solución), ¿por qué se han
visto limitados al mismo?, y ¿cómo respuestas dadas por otros países al
contrastarlas con Venezuela podrían ser objeto de rechazo o posibilidades de
aplicación para Venezuela?.
6. La comparación, en armonía con un estudio etnográfico en el ámbito
venezolano, permite hacer un análisis crítico desde Venezuela para la
creatividad de algunas probables respuestas orientadas a la solución del
problema en el ámbito puntual de observación y la probabilidad o no de que
estas respuestas o alternativas de solución puedan ser extendidas a los otros
países en estudio. Además dar respuestas a: ¿Cuáles pueden ser los
obstáculos para aplicar una alternativa de solución? ¿Cuáles pueden ser los
beneficios al aplicar una propuesta de solución? ¿Qué situación futura se
puede presentar si con tiempo no se dan las respuestas adecuadas para tratar
de aminorar el problema y evitar que éste se intensifique?
7. La teoría reflexiva de John Dewey se utilizó a lo largo de la investigación,
porque a través de la reflexión como la plantea Dewey, es posible dar mayor
claridad a la investigación, tanto para el planteamiento del problema, como
para dar respuestas o resultados, pudiendo hacer comparaciones. En el
planteamiento del problema a través de la teoría reflexiva se facilita percibir
que existe una dificultad, niños, niñas y adolescentes con necesidades
económicas que trabajan, que son explotados en su situación laboral, que
216
abandonan la escolaridad; fenómeno social que se presenta en cualquier país
del mundo y que en este estudio requiere énfasis en los países signados como
bolivarianos, que al principio se presenta con confusión, duda, y subsiguiente,
a través de ese proceso de reflexión poder lograr dar claridad a la situación
confusa y ver con mayor precisión la identificación de la dificultad, para
poder describir y explicar la situación problemática que se presenta, la cual
está planteada en el Capítulo I, luego a través del proceso de reflexión se trata
de dar solución al problema una vez que se hayan considerado a lo largo de la
investigación, las alternativas posibles. El pensamiento reflexivo es lógico y
racional y le da orden y coherencia al pensamiento.
8. Utilizar la teoría popperiana facilita el planteamiento del problema en
Ciencias Sociales, porque de acuerdo a Popper los problemas se presentan por
las asincronías existentes entre el mundo físico, el mundo institucional y el
mundo normativo. En el problema en estudio se detecta y reflexiona acerca de
las asincronías que se presentan en el marco normativo (mundo normativo
según Popper) representado en la investigación por los instrumentos jurídicos
que garantizan los derechos de los niños, niñas y adolescentes, con las
asincronías del mundo Institucional (diversas instituciones con sus políticas) y
el mundo físico (niños, niñas y adolescentes dentro de su contexto). El hecho
de que no haya armonía entre estos mundos puede producir los problemas que
se viven en la sociedad.
9. El abordaje del escenario real social, que se vincula al uso de herramientas
metódicas etnográficas, se desarrolla a los fines de captar en su esencia el
fenómeno del trabajo infantil en cuanto a sus características relevantes y a las
exigencias de formación que potencialmente le plantea el entorno de trabajo al
actor social tomado como eje de interés del estudio.
217
En el abordaje de la investigación etnográfica realizada en el Municipio
Libertador del Estado Carabobo, se siguió el procedimiento siguiente:
1. Se visitó de manera planeada los sectores La Guásima y El Vigía del
Municipio Libertador, con la intención de interactuar con los pobladores de la
comunidad para obtener información acerca del sector.
2. Se visitó en diferentes oportunidades las Unidades Educativas Juan Escalona
y El Vigía con la finalidad de localizar los niños, niñas y adolescentes que
estudian y trabajan.
3. Se hicieron diferentes visitas al relleno sanitario de La Guásima con la
finalidad de observar la presencia de niños, niñas y adolescentes trabajando
en el lugar y lograr hacer contacto personal con los mismos.
4. Elaboración de un guión o formato para la aplicación de la observación
participante ( anexo F ), observación que duro un periodo aproximado de ocho
meses. El papel inicial de trabajo se fue mejorando a medida que se logró el
contacto con el ambiente natural y hubo la interacción personal con los
miembros del grupo social a investigar. Es necesario señalar que con la
intervención del grupo a estudiar es que se concreto la observación
participante, ya que esta no procede de forma lineal, sino que se trata de una
experiencia cuya sucesión depende de la interacción entre el problema
estudiado, el sujeto que estudia y los sujetos estudiados. (Corbeta, 2003).
5. Como el observador participante debe observar, escuchar y preguntar; y al
preguntar, entre los instrumentos que emplea esta la entrevista (Corbeta,
2003), se elaboró un primer papel de trabajo ( versión borrador, anexo G ),
para realizar las entrevistas gravadas , con la finalidad de obtener información
218
acerca de la dinámica social y económica de los sectores La Guásima y El
Vigía del Municipio Libertador, así como la actividad laboral realizada por
niños, niñas y adolescentes en el relleno sanitario de esos sectores y las
condiciones de la labor. El borrador para la entrevista fue mejorado, quedando
definitivamente el guión de entrevista (anexo H). En el formato o guión de
entrevista para niños, niñas y adolescentes, las preguntas van dirigidas con la
finalidad de recoger información concreta sobre: a) edad b) escolaridad c)
jornada laboral, d) salario, e) salud y seguridad, f) descanso, g) área o sector
de trabajo, h) situación familiar.
6. Revisión de material documental tanto en las escuelas (registro de asistencia,
libro de vida, boletas escolares, horarios, registro de situación familiar, otros
datos, de los niños, niñas y adolescentes que estudian y trabajan) como el
localizar información en el Consejo de Protección del niño y del adolescente
ubicado en el Municipio, con la finalidad de conocer denuncias realizadas por
vulneración de los derechos de los niños, niñas y adolescentes trabajadores
del sector, así como conocer el registro de autorizaciones dada a los
adolescentes para trabajar.
7. Visita a la vivienda de niños, niñas y adolescentes entrevistados con la
finalidad de conocer personalmente su situación familiar, social, económica.
Aristas potencialmente resolutivas
1. El orden educacional: Se podría plantear una respuesta a través de una alternativa
educativa, tomando consideración que la educación es un derecho humano y un
deber social fundamental, siendo posible su interrelación con el trabajo desde su
etapa básica de acuerdo al principio constitucional y demás instrumentos
jurídicos.
219
2. El orden institucional prestacional: Indagar sobre la participación de
organizaciones sociales en la protección de niños, niñas y adolescentes en
condiciones de riesgo para establecer como a través de estas instituciones se
pueden dar posibles respuestas.
3. El orden normativo laboral: Posibilidad de tejer una red de vigilancia legal sobre
la condición laboral de niños, niñas y adolescentes.
4. El orden referencial empírico: Para complementariedad del método comparado se
examinó un segmento de la realidad social venezolana referida a la dinámica
social donde se desenvuelven los niños, niñas y adolescentes, tomando una
conglomerado de informantes a niños, niñas y adolescentes trabajadores que
habitan en el Estado Carabobo.
5. Contraste de comparación: Posibilidad de hacer la relación por contraste y por
analogía de la situación social laboral de los niños, niñas y adolescentes en los
países investigados para el establecimiento del contraste correspondiente a la
realidad social puntual usada como hito referencial en Venezuela.
220
CAPÍTULO V
INTEGRACIÓN DEL METODO ETNOGRÁFICO Y EL COMPARADO
Este capítulo está referido a la presentación, interpretación y análisis de los
datos, hallazgos encontrados, y significaciones. Como en el presente estudio se
utilizó tanto el método etnográfico para la investigación realizada en el Municipio
Libertador, así mismo, el método comparado para la investigación realizada de
algunos países latinoamericanos; y en virtud de la necesidad de integrar ambos
métodos, dándoles la misma importancia, se procedió a abordar cuatro componentes
fundamentales para la realización de la presentación, interpretación y análisis de los
datos, la integración de los hallazgos y significaciones logradas.( Goetz y LeCompte,
1988).
Los Componentes o fases aunque se abordan por separado, en realidad se trata
de tareas relacionadas entre sí, que se fueron realizando al mismo tiempo que la
recogida de los datos.
PRIMER COMPONENTE O FASE
Presentación y Procesamiento de Datos
Venezuela
El procesamiento y presentación de la información, fue posible por la
recogida de datos, para los cuales se utilizó tanto la técnica de la observación
participante como la entrevista a informantes claves en la investigación etnográfica
desarrollada en el Municipio Libertador del Estado Carabobo. A continuación se
221
presentan los datos obtenidos de la observación participante lograda a través de la
guía de observación y de las notas de campo.
Observación Participante
Para hacer la observación participante necesariamente se tuvo que ir a campo,
ambiente natural o contexto para poder interaccionar con las personas objeto de
estudio, compartir de alguna manera su cotidianidad, conocer sus preocupaciones,
esperanzas, sus concepciones del mundo y sus motivaciones al actuar, con el fin de
tener una visión de la situación. Siguiendo la guía de observación y las notas de
campo, se describieron e interpretaron los datos.
1. Participantes
Estuvo conformado por niños, niñas y adolescentes trabajadores del relleno
sanitario La Guásima, ubicado en el Municipio Libertador del Estado Carabobo. No
existen cifras estadísticas de cuantos son. Por las referencias de los pobladores del
lugar, así como por las observaciones hechas, sin que las cifras sean exactas, hay un
aproximado entre 80 a 100 menores que asisten al botadero ya sea en forma diaria,
interdiaria, en las mañanas, en las tardes o todo el día. Son infantes y adolescentes
con edades aproximadas entre 7 y 17 años, tanto del sexo masculino como del sexo
femenino, éste último en menor proporción.
Los menores trabajadores, algunos asisten a la escuela, otros la han
abandonado. Son niños, niñas y adolescentes que a simple vista se ven delgados, con
mirada triste y preocupada y vestidos con ropaje que a la vista se percibe que son
gente muy pobre.
2. Contexto o escenario de los participantes
222
El contexto físico de los participantes está comprendido por el sector La
Guásima y el sector El Vigía, ambos ubicados en el Municipio Libertador. Al sector
La Guásima, se llega por la carretera vieja de Tocuyito, la cual es una calle muy
transitada, con vehículos de todo tipo, y observándose en forma continua los
camiones que transportan la basura, los cuales en el sector La Guásima abandonan la
calle principal y se dirigen hacia el barrio Los Chaguaramos por donde queda el
botadero de basura. Se observó la calle principal en buenas condiciones, asfaltada y
con algunos baches, a través de la misma se puede llegar a los diferentes barrios que
conforman al sector La Guásima y El Vigía.
Se observaron viviendas de diferentes tipos, a lo largo de la vía principal hay
casas de bloques, algunas tipo quintas cercadas, y también ranchos de bloques, dentro
de las barriadas ya los ranchos son de bloque, algunos de tablas o de maderas de
embalajes con techo de zinc otros, e inclusive de tablas de madera y cartón.
Existen lugares públicos: entre ellos escuelas, hay varias escuelas en el sector
desde pre-escolar hasta sexto grado. Las escuelas objeto de interés por encontrarse en
los sectores de la investigación fueron: la escuela Juan Escalona, escuela estadal con
una matrícula de 1082 alumnos que estudian desde primero a sexto grado. La escuela
se caracteriza por tener además de sus maestros de grado, psicopedagoga y maestros
en Educación Especial, se observó la existencia de un comedor escolar donde se vio
que todos los niños y niñas del colegio reciben el almuerzo, tanto los del turno de la
mañana como los de la tarde.
De acuerdo a los historiales escolares los niños y niñas que aquí estudian
vienen del cerro El Calvario, Las Marías, Callejón el Torito. Por los documentos
observados son de escasos recursos económicos, se observa que hay casos de niños
indocumentados, y de niños con retraso escolar, que tienen 9 años y están en primer
grado, así como casos de adolescentes de 13 a 14 años que están en 4to grado. Otra
223
de las instituciones visitadas es la escuela El Vigía, la cual tiene 30 años de fundada y
con una matrícula escolar de 474 alumnos. En esta escuela estudian niños y niñas
desde pre-escolar hasta sexto grado. Aquí estudian algunos niños que trabajan. Tres
de los niños que trabajan viven en el barrio Chaguaramal. De la revisión del historial
estudiantil se observó que algunos niños y niñas tienen retaso escolar. También de
las fichas escolares se observó casos de niños y niñas que habían abandonado la
escuela y según entrevistas algunos de éstos niños y niñas están trabajando en el
basurero.
Otros sitios públicos existentes son las casas del mercal, barrio adentro, sitios
deportivos en Guásima 1, como una cancha de béisbol, una de valleyball. Existe el
grupo de barrio adentro conformado por 8 médicos, con los cuales no se logró
contacto. No existe módulo policial.
Dentro de las empresas privadas se pudo observar la existencia en el sector de
Mobil Salud, que es una empresa que se dedica a la fabricación de equipos médicos,
Farmacia La Guásima, abasto y carnicería La Primera, un Mercal donde se venden
diferentes productos alimenticios y fue motivo de varias visitas porque éste es el sitio
de trabajo de uno de los dirigentes de la comunidad que sirvió de contacto para
conocer el sector; también se encuentran las empresas TEMI donde fabrican tableros
de electricidad, la Regoven empresa que comercializa con desechos de caucho,
Fabeca que es una empresa metalúrgica, Pladispan que es una empresa recicladora de
plástico entre otras; por las conversaciones con los pobladores del lugar se puede
conocer que en éstas empresas trabajan muchas personas de la comunidad.
Con respecto a los recursos con los que la comunidad cuenta, están las
empresas anteriormente nombradas donde trabajan habitantes de la comunidad,
además el botadero de basura es considerado por algunos pobladores como un recurso
porque proporciona ingreso a muchas personas, tanto los que se dedican a recoger
224
desechos sólidos como los que se dedican a reciclarlos. Hace varios años, la
comunidad quería que trasladaran el bote de basura a otro sitio porque había excesiva
contaminación, pero desde que le hicieron algunos arreglos sale menos humo y ya las
personas se enferman menos de las vías respiratorias. Algunos ven el botadero de
basura como una oportunidad de sobrevivencia para muchas personas que viven en
pobreza.
Con respecto a lo que se produce en el escenario, aparte de lo que puedan
producir las empresas que están en el sector, lo que generalmente se produce no en el
sector sino que se lleva al mismo, es basura; mucha gente vive de la basura porque
ésta pertenece a todos los que la busquen, cualquiera puede ir a trabajar al botadero
de basura a la hora que lo desee, no se tiene horario de entrada ni de salida, las
personas pueden llevarse “gratis” todo lo que quieran, aunque lo de gratis es entre
comillas, porque hay una especie de red o de personas que controlan el lugar de
entrada que cobran aproximadamente 1.500 bolívares por entrar a los espacios del
botadero propiamente dicho. Una vez pasada ésta alcabala, todo lo que se encuentre
es de su pertenencia, pero para eso hay que llevar empujones, tropezones, y atropellos
en el momento que el camión de basura deposita la misma, para lograr la oportunidad
de llevarse los mejores desechos.
Con respecto a las sensaciones visuales, olfativas y auditivas, que se
vivenciaron en el contexto, al visualizar la situación de pobreza en que viven las
personas del sector, manifestada en la presencia de personas desnutridas, desaliñadas,
con vestimenta muy precaria, existencia de ranchos, familias completas recogiendo
desechos sólidos para vender; este panorama, no sólo debilita la vista, sino que es
imposible que el investigador y sus acompañantes no salgan afectados
emocionalmente. Con respecto las sensaciones olfativas se detectaron fuerte olores
nauseabundos, a desechos descompuestos y a humo. En referencia a las sensaciones
auditivas, el ruido se siente por la presencia de mucho movimiento en el sector, el
225
paso de los carros, algunos talleres de herrería, el martilleo de algunos ranchos en
construcción, el ruido de los camiones con la basura, las personas que gritan
anunciando la llegada de los camiones de basura, situación que se produce durante
todo el día.
Al observar el contexto social de los sujetos estudiados, aunque sólo se
visitaron pocas familias, se observó que éstas presentan un manifiesto estado de
pobreza, reforzado por el tipo de vivienda formada por ranchos de una o dos
habitaciones para familias de más de 5 miembros; en algunos casos el representante
era la madre por ausencia del padre y en otros existía la familia nuclear, se
observaron muchos niños pequeños. En el sector, las casas de habitación no tienen
cloaca, llegaba el agua pero no la pagaban, la energía eléctrica la tomaban del poste
más cercano. Compran sus alimentos en Mercal, comían 1 ó 2 veces al día, otros una
sola vez, los padres o madres no tenían trabajo fijo, hacían cualquier trabajo de
albañilería u otro que se le presentara, por la falta de ingresos permitían que sus hijos
recogieran desechos en el botadero de basura para venderlos y lograr comprar
alimentos para comer.
3. En referencia a las interacciones formales, los niños, niñas y adolescentes
muchos asisten a la escuela, otros pasaron por las mismas, estudiaron 1 ó 2 años y las
abandonaron, pero hicieron énfasis en que sabían leer y escribir.
4. Las actividades realizadas por los niños, niñas y adolescentes que trabajan en
el botadero de basura en su cotidianidad, en la descripción de las mismas, no se pudo
hacer solo con la observación, se tuvo que tomar en cuenta tanto la observación,
como las entrevistas, las notas de campo y algunas visitas domiciliarias logradas.
Una rutina diaria para una adolescente entrevistada de 13 años es hacer los oficios de
la casa, cuidar a sus hermanitos menores, ir al botadero de basura a recoger desechos
226
sólidos tres días a la semana, ir a la escuela, cuando le queda tiempo juega con una
muñeca de trapo que le regalo una vecina.
Hay niños y niñas que van todos los días al botadero de basura, estos niños y
niñas trabajan todos los días, la interrelación entre las personas que van al botadero
de basura es poco afectuosa, cada quién esta en su cometido, los niños son los que a
veces se ven jugando entre ellos, juegos de dar carreras, pero esto es poco frecuente.
Hay adultos que maltratan de palabras a los niños, niñas y adolescente.
Los niños utilizan su propio vocabulario, “jerga” o formas de comunicarse,
que a veces presenta dificultad para entender. Entre ellos hablan de sus cosas, de lo
que hicieron el día anterior y de lo que van a hacer en el día actual. En el lenguaje
utilizan tanto el discurso oral como el lenguaje gestual.
Al hablar con los niños, niñas y adolescentes se observa que estos tienen
sueños y expectativas sobre su futuro, según sus propias palabras “ quieren ser
alguien en la vida”. Sus sueños están relacionados con sus carencias económicas y
sociales. Desean una familia unida, ayudar a su familia, estudiar, bienestar
económico, otra casa, juguetes, viajes, no ser maltratados.
En el registro de algunos de esos sueños y expectativas se encuentran:
“Vivir tranquila y que no haya peleas en la casa y, si se puede, viajar para
Margarita” (niña de 13 años)
“Ser enfermera y ganar mucho dinero para comprar una casa a su mamá”
(niña 12 años)
“Tener una casa grande en Tocuyito” ( niño ll años )
227
“Quisiera salir de ese trabajo y buscarse otro mejor” ( adolescente 16 años )
“Desea tener muchos juguetes, y en especial una bicicleta” ( niño 9 años )
“ Desea no enfermarse nunca y comer mejor” ( adolescente 13 años )
“Desea ser una artista para ganar bastante dinero y viajar” (adolescente 15
años)
“Desea ser maestra para ayudar a que las niñas no sean maltratadas” (niña 12
años).
“ Ser un hombre de negocios y profesional” ( adolescente 17 años )
Entrevista
Presentación de los Datos de acuerdo a la entrevista.
Edad
En la investigación se detectaron aproximadamente 80 niños, niñas y
adolescentes, y se tomó como muestreo intencional a 30 niños, niñas y adolescentes a
quienes se les aplicó la entrevista.
De acuerdo a los datos, los menores tienen una edad entre 7 y 17 años, siendo
el grupo más numeroso el correspondiente a la edad entre 14 y 17 años, representada
por el 46,66% de los entrevistados, de este porcentaje el 40% corresponde al sexo
masculino y el 6,66% al sexo femenino. Se detectó también niños y niñas entre 7 y 9
años (ver cuadro Nº 4).
228
CUADRO Nº 4
Distribución de niños recolectores de desechos sólidos en el relleno sanitario del
sector La Guásima según sexo y edad
Edad – Sexo Niños % Niñas % Total %
7 a 9 años 3 10 2 6,66 5 16,66 10 a 13 años 7 23,33 4 13,33 11 36,66 14 a 17 años 12 40 2 6,66 14 46,66
Total 22 73,33 8 26,65 30 100 Fuente: Elaboración propia.
Se observó que de los 30 niños entrevistados 22 (73,33%) son de sexo
masculino y sólo 8 (26,65%) son de sexo femenino, lo que podría señalar una
tendencia de mayor número de varones que de hembras trabajando en el basurero.
Los niños y niñas entre 7 a 9 años, todas las veces observados estuvieron
acompañados de su madre unos y de sus padres otros. De los niños y niñas entre
edades de 10 a 13 años, sólo dos varones estaban acompañados de un familiar (padre)
y las 4 hembras estaban acompañadas de su madre. Se observó también que los
adolescentes entre 14 a 17 años venían solos al basurero.
Independientemente de las cifras de niños, niñas y adolescentes en cada rango
de edad, los datos aportan la existencia de niños y niñas desde la edad de 7 años
trabajando en la recolección de basura, lo cual acarrea un riesgo para su salud y
seguridad.
Escolaridad
A través de la entrevista se detectó que algunos niños van a la escuela y otros
no, o sea que algunos trabajan y estudian y otros sólo trabajan. El 60% asiste a la
escuela y el 40% no asiste (ver cuadro Nº 5). Algunos niños de los que van a la
escuela, no estudian en las instituciones del sector, esto se apreció cuando dijeron el
229
nombre de su escuela, además se pudo detectar también que algunos de los niños que
vienen a trabajar en el basurero de La Guásima no son del sector.
CUADRO Nº 5
Distribución de niños, niñas por sexo – edad y asistencia a la escuela
Edad – Sexo Niños Niñas
Asiste a la escuela 7-9 %
10-13 %
14-17 %
7-9 %
10-13 %
14-17 %
Total %
Si 3 10 4 13,33 7 23,33 2 6,66 2 6,66 0 0 18 60
No 0 0 3 10 5 16,66 0 0 2 6,66 2 6,66 12 40
Fuente: Elaboración propia.
Cuando se les preguntó acerca del grado de estudio, de sus respuestas se pudo
apreciar que algunos niños tienen retraso escolar (23,33%) porque hay niños de 14
años que están estudiando 5to grado y 6to grado, cuando de acuerdo a la edad les
correspondería estar en el 3er nivel de Educación Básica. El 40% de los niños y niñas
en edad escolar no asiste a la escuela, sin embargo dijeron tener de 2 a 3 años de
estudio, pero abandonaron la escuela en el tercer grado.
De la revisión del libro de vida que llevan en las escuelas visitadas, se detectó
que algunos niños y niñas que trabajan en el basurero y que estudian en éstas
escuelas, presentan irregularidades en su asistencia a clases, algunas boletas escolares
contienen indicadores de bajo rendimiento, se observó el registro de su situación
familiar y se detectaron casos de violencia familiar, mal tratos, entre otros.
230
Jornada Laboral
Los datos obtenidos señalan que los niños y niñas entrevistados no van todos
los días al botadero de basura, algunos asisten en la mañana (39,99 %), otros en la
tarde (43,32%), otros sólo los fines de semana (16,66%) (ver cuadro Nº 6).
CUADRO Nº 6
Distribución de niños, niñas por sexo, edad y turnos de trabajo
Niños Niñas Edad Sexo 7 – 9 10-13 14-17 n % 7 -9 10-13 14-17 n % Total Mañana 0 3 5 8 26,66 2 2 4 13,33 39,99% Tarde 4 7 11 36,66 0 2 2 6,66 43,32% Fin de semana 3 0 0 3 10 2 0 0 2 6,66 16,66 %
Fuente: Elaboración propia.
Con respecto a los días de trabajo y a las horas diarias (ver cuadro Nº 7).
CUADRO Nº 7
Distribución de niños, niñas por sexo, edad y horas de trabajo
Niños Niñas Días/edad 7-9 h 10-13 h 14-17 h 7-9 H 10-13 h 14-17 H Lunes 0 0 7 4 12 4 0 0 4 4 2 4 Martes 0 0 3 4 5 4 0 0 2 4 0 0 Miércoles 0 0 7 4 12 4 0 0 4 4 2 4 Jueves 0 0 3 4 5 4 0 0 2 4 2 4 Viernes 0 0 7 4 12 4 0 0 4 4 2 4 Sábado 3 6 0 0 0 0 2 6 0 0 0 0 Domingo 0 0 0 0 0 0 0 0 0 0 0 0 Total niños
3 - 7 - 12 - 2 - 4 - 2 -
Fuente: Elaboración propia.
Con respecto a los días de trabajo y las horas diarias de trabajo, las cifras son
indicativas de que los niños y niñas entre 7 a 9 de edad sólo asisten al botadero los
días sábados, donde trabajan 6 horas cada sábado, trabajando un aproximado de 24
231
horas al mes. Los niños entre 10 a 13 años (23,33 %), trabajan los lunes, miércoles y
viernes, pero 3 de los niños trabajan también los martes y jueves (5 días a la
semana). De los datos se observa que los 4 niños que sólo trabajan 3 días a la
semana a razón de 4 horas por día, la jornada de trabajo comprende 12 horas
semanales y 48 mensuales y los 3 niños que trabajan 5 días a la semana, la jornada es
de 20 horas semanales y 80 horas al mes, se detecta que los niños que no estudian en
éste rango de edad (10 %) son los que trabajan 80 horas al mes aproximadamente.
Con respecto al rango de edades entre 14 y 17 años, de los 12 adolescentes
(40%) que asisten al botadero de basura, 7 adolescentes asisten los días lunes,
miércoles y viernes, trabajando 4 horas diarias, 12 semanales y 48 mensuales, pero
dentro de esos 12 adolescentes hay 5 que van al basurero los 5 días de la semana, o
sea que éstos adolescentes, 5 (16,66 %) trabajan 4 horas diarias, 20 semanales y 80
mensuales. Al revisar cuales son los niños y adolescentes que trabajan más horas a la
semana, se detecta que son los niños que no asisten a la escuela (16,66 %), dentro de
éste rango de edad. Con respecto a las niñas se observa que entre 7 a 9 años sólo 2
trabajan (6,66%) los días sábados durante 4 horas, lo que equivale a 16 horas al mes.
Las niñas en rango de edad de 10 a 13 años, se observa que todas trabajan los lunes,
miércoles y viernes (3 días a la semana), pero dentro de éste grupo hay niñas que
trabajan también los martes y los jueves, lo que indica que el 50% dentro de éste
rango de edad trabaja 12 horas a la semana, 48 horas al mes y el 50% trabaja 4 horas
diarias, 20 horas semanales, 80 horas mensuales; observándose que las niñas que
trabajan diariamente son las que no asisten a la escuela.
Con respecto a las adolescentes que trabajan dentro del rango de edad de 14 a
17 años, se observa, que todas asisten 4 días a la semana al botadero de basura a
razón de 16 horas semanales, 64 horas mensuales, se observa que éstas niñas no
asisten a la escuela y una está embarazada.
232
Descanso
Analizando los datos acerca de la jornada laboral se observa que algunos
niños realizan una jornada laboral que va desde 6 horas semanales, a 24 mensuales, y
otros trabajan de 20 horas semanales a 80 horas mensuales, detectándose que el 40%
de niños, niñas y adolescentes que no va a la escuela, es el que tiende a trabajar más
horas a la semana, aquí se puede involucrar el descanso, al observar que los niños al
trabajar e ir a la escuela diariamente, no tienen horas de descanso o éstas son muy
efímeras, lo que podría presentar dificultades al niño, niña y adolescente por carecer
de tiempo para juegos y para una sana recreación.
Área o sector de trabajo
En relación a las actividades realizadas en el botadero de basura, los datos
indican que el 100% de los niños, niñas y adolescentes se dedican tanto a la
recolección y clasificación de materias sólidas de desecho como son cartón, papel,
botellas, plástico aluminio. El 83,32% se dedica también a actividades de embalaje; y
en cuanto a la comercialización, sólo el 59,99% se dedica a ésta actividad, ya que el
39,98% de los niños, niñas y adolescentes le entrega el material a otra persona madre,
padre, otro familiar, u otra persona para su comercialización) (ver cuadro Nº 8).
CUADRO Nº 8
Actividades realizadas por los niños, niñas en el botadero de basura
Edad – Sexo Niños Niñas 7-9 % 10-13 % 14 17 % Total % 7-9 % 10-13 % 14-17 % Total
% Total % general
Recolección 3 10 7 23,33 12 40 73,33 2 6,66 4 13,33 2 6,66 26,65 100 Clasificación 3 10 7 23,33 12 40 73,33 2 6,66 4 13,33 2 6,66 26,65 100 Embalaje 0 - 7 23,33 12 40 63,33 0 - 4 13,33 2 6,66 19,99 83,32 Comercializa-ción
0 - 3 10 12 40 50 0 - 2 6,66 1 3,33 9,99 59,99
Entrega a familiar
3 10 4 13,33 0 0 23,33 2 6,66 2 6,66 1 3,33 16,65 39,98
Fuente: Elaboración propia.
233
Razones por las cuales el niño, niña y adolescente trabajan
Para que un menor se decida a trabajar tiene que haber razones de peso, o
motivos suficientes. Al realizar la entrevista los menores dieron diferentes razones,
entre las cuales están: a) aportar dinero a su familia, b) tener su propio dinero para sus
gastos personales, c) aprender el negocio, d) por que no estudia, e) no sabe (ver
cuadro Nº 9).
CUADRO Nº 9
Razones por las cuales el niño, niña y adolescente trabajan. Distribuidos por
sexo y edad Edad - Sexo Niños Niñas
7 -9 % 10-13 % 14- 17 % Total % 7-9 % 10-13 % 14-17 % Total %
Total % general
a) aportar dinero 0 0 3 10 9 30 40 1 3,33 3 10 2 6,66 19,99 59,99 b) tener su propio dinero
0 0 1 3,33 3 10 13,33 0 0 1 3,33 0 0 3,33 16,66
c) aprender el negocio
3 10 1 3,33 0 13,33 0 0 0 0 0 0 0 13,33
d)porque no estudia
0 0 1 3,33 0 3,33 0 0 0 0 0 0 0 3,33
e) no sabe 0 0 1 3,33 0 3,33 1 3,33 0 0 0 0 3,33 6,66 Total 100
Fuente: Elaboración propia
De acuerdo a la información aportada el 59,99 % de los niños, niñas y
adolescentes manifestó que trabajaban para ayudar a su familia, en segundo lugar un
16,66 % manifestó que trabajaba para obtener dinero para sus gastos. El que los
niños, aporten dinero a sus familias es significativo porque podría ser un indicador de
responsabilidad hacia su familia por parte del menor, podría significar también signos
de identificación y solidaridad con su grupo familiar, sobre todo en casos de familias
visitadas que sólo trabajaba la madre por ausencia del padre.
234
Ingreso que percibe el niño, niña y adolescente
Los niños, niñas y adolescentes trabajadores perciben determinados ingresos
que de acuerdo al cuadro anterior un porcentaje elevado lo aportan al núcleo
familiar (59,99%).
El cuadro Nº 10 señala el ingreso promedio diario, semanal, mensual que
obtienen los niños, niñas y adolescentes trabajadores.
CUADRO Nº 10
Ingreso que percibe el niño, niña y adolescente de acuerdo a sexo, edad y días de
trabajo
Niños Niñas Edad – sexo
7 - 9 10 - 13 14 -17 7 -9 10 -13 14 -17
Diario 0 6.000 8.000 0 6.000 8.000 Semanal 0 18.000
a 30.000
24.000 a
40.000
0 18.000 a
30.000
24.000 a
40.000 Mensual 0 72.000
a 120.000
96.000 a
160.000
0 72.000 a
120.000
96.000 a
160.000 No percibe
3 - - 2 - -
Fuente: Elaboración propia
En vista de que los entrevistados manifestaron que todos los días no era igual
el ingreso, estos oscilan entre 5 y 7 mil bolívares diarios aproximadamente, para
unos y entre 7.000 y 9 mil bolívares diarios aproximadamente para otros, no es
uniforme; a fines de tener cierto ajuste y claridad se calculó un promedio diario
aproximado de Bs. 6.000 para unos y Bs. 8.000 para otros, de allí que las cifras de
ingreso sean aproximadas.
235
De acuerdo a la información obtenida existen 5 niños que a pesar de trabajar
los días sábados no perciben directamente ningún ingreso, son los niños que
acompañan a sus padres y van en calidad de ayudantes, son niños que trabajan 6
horas cada sábado y 24 horas al mes. Representan un 16,66 % de los niños.
Los niños y niñas de rango de edad entre 10 y 13 (36,66 %) perciben
aproximadamente bolívares 6.000 diarios. Aquellos que sólo trabajan 3 días a la
semana, su ingreso aproximado es de 18.000 bolívares semanales y 72.000 mensuales
y los que trabajan diariamente su ingreso aproximado es 30.000 bolívares semanal y
120.000 bolívares mensual.
Los adolescentes en el rango de edad de 14 a 17 años (46,66 %) ganan diario
aproximadamente 8.000 bolívares. Los que trabajan 3 días a la semana ganan
aproximadamente 24.000 bolívares semanales y 96.000 bolívares mensuales y los que
trabajan diariamente ganan aproximadamente 40.000 bolívares semanales y 160.000
bolívares mensuales.
De acuerdo a las cifras el 46,66 % de niños, niñas y adolescentes obtienen
ingresos entre 96.000 y 160.000 bolívares mensuales (dependiendo de cuantos días
trabajen) y el 36,66, % de niños y niñas obtienen ingresos entre 72.000 y 120.000
bolívares mensuales (dependiendo de los días de trabajo), observándose que los del
rango de mayor edad (14 – 17 años) obtienen mayores ingresos, trabajando todos los
días.
Es de hacer notar que los ingresos obtenidos por los niños, niñas y
adolescentes, producto de su trabajo diario es una parte muy pequeña de lo que
representa el costo de la cesta básica que de acuerdo a Cenda (2005) el costo
236
aproximado de la misma es de 1.500.000 de bolívares para una familia de 5
integrantes.
Si se toma en cuenta que muchas de estas familias que viven en situación de
pobreza, no sólo están integradas por la familia nuclear sino que en muchos casos la
familia vive ampliada en una misma vivienda, representando los gastos mayores
proporciones, sirviendo el ingreso aportado por los niños, niñas y adolescentes como
una ayuda a la familia.
Salud, seguridad y riesgos
CUADRO Nº 11
Riesgo del trabajo de niños, niñas y adolescentes en el relleno sanitario La
Guásima
Riesgo Efecto sobre la salud física Emisión de gases
Problemas respiratorios
Ingestión de alimentos vencidos y contaminados
Problemas gastrointestinales, parasitosis, intoxicación
Incendios
Quemaduras, asfixia
Presencia de ratas y otros animales
Mordeduras, epidemia
Cortaduras por utilización de objetos cortantes
Mutilaciones, tétano
Golpes con maquinaria pesada (camiones de recolección de basura)
Atropellamiento, fracturas, heridas
Transporte de bultos pesados
Daños óseos, desgarramiento muscular
Agresiones de otras personas Golpes, heridas, presiones psicológicas, traumatismos
Carencia de equipos de protección
Contaminación directa, dermatitis
Temperaturas extremas (calor, lluvia)
Quemaduras, estados gripales
Fuente: Elaboración propia
237
El ambiente encontrado en el vertedero de basura es totalmente contaminante,
por lo que se encuentran muchos casos de enfermedades asociadas a la misma;
aunado a esto, hay que agregarle los riesgos que corren los menores al frecuentar un
sitio donde acuden adultos cargados de agresividad y violencia que tratan de
adueñarse de los espacios para lograr un mayor beneficio, en éste ambiente el menor
corre riesgos de amenazas físicas por violencia, además de otros riesgos que tienen
que ver con la excesiva utilización de carga pesada, así como la carencia de equipos
de protección (ver cuadro Nº 11).
Los niños y niñas entrevistados reconocen los riesgos que acarrea el trabajar
en el botadero de basura y los riesgos que acarrea a su salud, en el cuadro Nº 12 (ver
cuadro) se señalan algunas respuestas a las preguntas hechas con respecto a la salud.
CUADRO Nº 12
Salud y riesgos que presentan los niños, niñas y adolescentes según sexo y edad
Niños, niñas
Niñas
¿El trabajo que realizas tiene algún riesgo? SI NO
7 -9 3 -
10- 13 7 -
14 – 17 12 -
% 73,33
7 – 9 2 -
10 -13
4 -
14 -17 2 -
% 26,25
% Total 100
¿Te enfermas a menudo por el trabajo que realizas? SI NO
1 2
4 3
7 5
40 33,33
- 2
2 2
- 2
6,66 20
46,66 53,33
¿Trabajas con peso superior a tus fuerzas? SI NO
- 3
7 -
8 4
50 23,33
- 2
4 -
2 -
20 6,66
70 29,99
Fuente: Elaboración propia
238
En la entrevista el 46,66% de niños, niñas y adolescentes manifestaron haber
presentado enfermedades con ocasión al trabajo, mientras que el 53,33 % manifestó
no haber presentado enfermedades en forma frecuente. Entre las enfermedades más
frecuentes están: problemas respiratorios, asfixias, problemas gastrointestinales,
atropellamiento, desgarre muscular, heridas, infecciones de la piel, mordeduras de
ratas, entre otras. Cuando se enferman acuden a un centro de salud cercano o
módulo, sino, tienen que ir al Hospital Central de Valencia.
El 70 % de niños, niñas y adolescentes manifestó trabajar con un peso
superior a sus fuerzas, lo que le ha producido a algunos dolores musculares.
Como en la entrevista algunos manifestaron haber sufrido algún tipo de
accidente como mordeduras de animales, cortaduras con vidrio, quemaduras por el
sol, golpes con el camión de basura, se registró en el cuadro Nº 13 (ver cuadro).
CUADRO Nº 13
Tipo de accidente sufrido por niños, niñas y adolescentes según edad y sexo Niños, niñas
Niñas
Sexo –Edad Cortaduras con vidrio
7 -9 -
10- 13 2
14 – 17 3
% 16,66
7 – 9 -
10 -13
2
14 -17 -
% 6,66
% Total 23,32
Quemaduras de sol
- 1 3 13,33 -
- 1 3,33
16,66
Mordeduras y picadas de de animales
-
1 1 6,66 -
- - - 6,66
Golpeados por el camión de basura
-
2
2
13,33
- -
-
-
13,33
Otros accidentes
-
1
1
6,66
-
-
-
-
6,66
No ha tenido accidentes
3
-
2
16,66
2
2
1
16,66
33,32
Fuente: Elaboración propia
239
El 66,63 % de los niños y niñas manifestaron haber tenido un determinado
accidente en su trabajo; mientras que el 33,32 % señaló no haber tenido ningún
accidente.
Situación familiar
Con respecto a la situación familiar, las respuestas a la pregunta ¿trabaja tu
mamá? La mayoría contestó que si, ¿trabaja tu papá o padrastro? El 40 % contestó
que no; el 20 % dijo vivir sin su papá o padrastro, un 6 % dijo no saber y un 34 %
dijo que si. La tendencia indica que aproximadamente un 60 % no cuentan con el
trabajo del padre. Lo que podría significar que la familia necesita el trabajo del niño
y adolescente para poder costear los gastos del hogar.
Los niños, niñas y adolescentes a través de la entrevista dijeron no conocer
sus deberes y derechos.
SEGUNDO COMPONENTE O FASE
Interpretación y Análisis de los datos
Venezuela
El trabajo realizado por los niños, niñas y adolescentes en el relleno sanitario
ubicado en La Guásima del Municipio Libertador, en forma general consiste en la
recolección de materiales de desechos sólidos que llegan en camiones de recolección
de basura al vertedero o relleno sanitario. Una vez que se recoge el material de
desecho, se procede a su clasificación, después se embala en paquetes para su
posterior comercialización, de éste trabajo participan tanto adultos como niños, niñas
240
y adolescentes entre 7 y 17 años aproximadamente. No existen cifras estadísticas
sobre la cantidad de personas trabajando en el basurero, aproximadamente y de
acuerdo a algunos pobladores de la zona la existencia de niños, niñas y adolescentes
trabajando en el lugar puede estar entre 80 a 100. A fines de la investigación se
entrevistaron 30 niños, niñas y adolescentes entre 7 y 17 años de edad, donde existe
una tendencia mayor de varones hacia éste tipo de trabajo por los riesgos que el
mismo acarrea. Se detectó que los menores que trabajan no todos van a la escuela, el
40 % no asiste a una institución escolar, y el 60 % que si asiste presenta problemas de
retraso escolar en 1 ó 2 años, así como irregularidades en su asistencia a clases y
dificultades en el rendimiento.
El trabajo realizado por niños, niñas y adolescentes en el relleno sanitario La
Guásima por las características que presenta es un trabajo de explotación infantil,
afirmación que se hace al comparar el trabajo realizado por los niños con los criterios
establecidos por UNICEF (2000) para determinar si el trabajo infantil es explotador.
Entre éstos criterios están:
1. Dedicación exclusiva a una edad demasiado temprana.
2. Se pasan demasiadas horas trabajando.
3. El trabajo provoca estrés físico, social o psicológico indebido.
4. Se trabaja y se vive en la calle en malas condiciones.
5. El ingreso es inadecuado.
6. El niño tiene que asumir demasiada responsabilidad.
7. El trabajo impide el acceso a la escolaridad.
8. El trabajo mina la dignidad y autoestima del niño.
9. Impide conseguir un pleno desarrollo social y psicológico.
El trabajo de los niños, niñas y adolescentes en estudio, cumple con estos
criterios para ser considerado un trabajo de explotación. Así se observa que con
241
respecto a la edad, en el relleno sanitario La Guásima se encuentran niños y niñas
desde 7 años de edad, por lo tanto inferior a la edad mínima para trabajar de acuerdo
al Convenio 138 de la Organización Internacional del Trabajo (OIT, 1973) y el cual
fue ratificado por Venezuela, acogiéndose a la excepción del Convenio. Igualmente
la Ley Orgánica del Trabajo (LOT, 1997) en su artículo 247 y la Ley Orgánica para la
Protección del Niño y del Adolescente (LOPNA, 1998) en su artículo 96 señala como
edad mínima para el trabajo los 14 años.
En el vertedero de basura aunque trabajan adolescentes entre 14 y 17 años,
para éstos también es considerado un trabajo explotador al tomar en cuenta que el
trabajo en los basureros es peligroso para el desarrollo físico, psicológico o social, en
éste caso la edad mínima no puede ser menor a 18 años como lo indica el Convenio
138 de la OIT y lo ratifica la Ley Orgánica del Trabajo (1997) en su artículo 249
cuando prohíbe el trabajo de menores en labores que acarreen riesgos para su vida o
su salud, o en faenas superiores a sus fuerzas, o que impidan su desarrollo físico y
normal.
Igualmente, en éste tipo de trabajo los menores corren riesgos en su vida y en
su salud, cuando realizan actividades superiores a sus fuerzas en los casos que tienen
que cargar bultos pesados, y cuando se exponen a riesgos de accidentes en función de
la labor que realizan como los casos presentados de los niños, niñas y adolescentes
donde sufrieron cortaduras por vidrio, quemaduras de sol, mordeduras de animales,
golpeados por el camión de basura, violencia física, problemas respiratorios,
intoxicaciones entre otros. Estos tipos de riesgo al dañar la salud, la seguridad y la
moralidad de niños, niñas y adolescentes es considerado por el Convenio 182 de la
OIT (1999) como el de los ubicados dentro de las peores formas del trabajo infantil, y
obliga a los países ratificantes a su eliminación, Venezuela es país ratificante de éste
Convenio, por lo tanto le corresponde hacer lo necesario para la erradicación del
mismo.
242
En la presentación de los datos se observa el alto porcentaje de niños y
adolescentes que no van a la escuela, existe la tendencia de que los niños no estudian
por tener que trabajar, al respecto UNICEF (2000) plantea entre sus criterios que al
ocurrir éste hecho ya cae el trabajo dentro de los criterios de explotación infantil. Al
respecto la Ley Orgánica para la Protección del Niño y del Adolescente (1998) señala
“El trabajo de los adolescentes debe armonizar con el disfrute efectivo de su derecho
a la educación” (art. 95).
Con respecto a la jornada laboral cumplida por niños, niñas y adolescentes en
el relleno sanitario La Guásima, aunque ya en líneas anteriores se ha dicho que los
menores no deberían trabajar en los botaderos de basura, a fines del análisis
respectivo se observa que la tendencia fue o no tener más de 30 horas semanales de
trabajo.
Según los datos las jornadas no son iguales para todos los niños, niñas y
adolescentes trabajadores, algunos trabajan sólo los sábados, otros en forma
interdiaria y algunos diariamente, pero las cifras señalan que ninguno de los
entrevistados trabaja 30 horas a la semana; al respecto la Ley Orgánica para la
Protección del Niño y del Adolescente (1998) señala “La jornada de trabajo de los
adolescentes no podrá exceder de seis horas diarias . . . el trabajo semanal no podrá
exceder de treinta horas” (art. 102).
En cuanto a las actividades realizadas por los niños, niñas y adolescentes en
el vertedero de basura se encuentra la recolección, clasificación, embalaje y
comercialización. Antes de iniciar el proceso de recolección, cuando los camiones
que transportan la basura llegan al relleno sanitario para hacer el depósito, ya traen
los niños montados en los mismos, los cuales se han subido en los vehículos para
hacer una búsqueda previa, antes de la descarga, corriendo el riesgo de ser
lastimados, tanto por el vehículo como por otras personas que también hacen lo
243
mismo. A medida que la basura es descargada de los camiones, ocurre que ésta cae
también sobre muchos niños, adolescentes y adultos que están esperando; les cae los
desechos sólidos encima, pudiendo ocasionarles traumatismo; enseguida todos hurgan
en los desechos y consumen lo que consideran alimento, pudiendo presentar
problemas de intoxicación por la ingestión de alimentos contaminados o en mal
estado.
Luego de éste esfuerzo, comienza inmediatamente la fase de recolección de
materiales como plástico, cartón, papel, botellas, aluminio entre otros, donde
intervienen todos los niños, niñas y adolescentes. Cumplida ésta actividad, se
procede a la clasificación de los mismos para separar los distintos desechos sólidos,
continua el embalaje donde se colocan en sacos o formando paquetes de desechos ya
clasificados y por último se realiza el proceso de comercialización a empresas
recicladoras, muchas de las cuales se encuentran en los alrededores del relleno
sanitario. En ésta etapa de comercialización no todos los niños, niñas y adolescentes
están involucrados en la misma, sobre todo es realizada por los adolescentes de
mayor edad y por los adultos. Cuando los niños, niñas y adolescentes participan en
la comercialización del material recogido se someten a regateos de precios por parte
de las empresas recicladoras o de otros adultos.
Estas actividades realizadas por el niño y adolescente, le podrían estar
minando su autoestima, su desarrollo social psicológico, cuando permite que gran
parte de la basura le caiga encima para estar entre los primeros que escarban en la
misma, aunque lleve golpes y aporreos y esté expuesto a violencia física y verbal para
evitar el robo del material, hay riesgo de que los niños consigan sus recursos
mediante la violencia que impide la construcción de una jerarquía de valores.
Esos niños, niñas y adolescentes están desprotegidos, no se cumple su
proceso normal de desarrollo infantil y de adolescencia y todos los derechos quedan
244
vulnerados, a pesar de que Venezuela es país ratificante de la Convención de los
derechos del niño a través de la Ley Aprobatoria de la Convención de los Derechos
del Niño (1990), la cual puntualiza que los Estados partes reconocen el derecho del
niño “a estar protegido contra la explotación económica y contra el desempeño de
cualquier trabajo que pueda ser peligroso o entorpecer su educación, o que sea nocivo
para su salud o para su desarrollo físico, mental, espiritual, moral o social . . .” (art.
32).
En referencia al ingreso que percibe el niño, niña y adolescente, se puede
indicar que no todos los niños que trabajan reciben ingresos y para los que lo reciben,
resulta inadecuado, lo que podría significar que la actividad de trabajar en la basura
no es rentable, sobre todo por la calidad de desechos sólidos generados. Estos niños
con ingresos de 6.000 a 8.000 bolívares diarios, viven en familias que tienen
condiciones socioeconómicas que se les dificulta superar los índices de marginación,
tienen muy pocas o ninguna oportunidad de acceder a servicios sociales y
económicos que les permita satisfacer sus necesidades básicas. Frecuentemente son
niños con familias numerosas y donde el ingreso del niño y del adolescente es
necesario para poder sobrevivir aunque sea en condiciones de pobreza crítica o
indigencia.
Presentación e interpretación de los datos en países latinoamericanos
estudiados.
245
COLOMBIA
De acuerdo al estudio realizado por el Sistema de Información Regional sobre
Trabajo Infantil (SIRTI) y estudios y estadísticas del Programa Internacional para la
Erradicación del Trabajo Infantil (IPEC) (2001), acerca del trabajo de niños, niñas y
adolescentes en la minería artesanal de Colombia, los datos señalan que 1.580 niños,
niñas y adolescentes entre 5 y 17 años trabajan en el sector de la minería. El estudio
fue realizado en 10 municipios mineros de Colombia y tuvo como objetivo central, el
de recopilar información cualitativa y cuantitativa que permitiera dimensionar la
magnitud del problema y posibilitara comprender de manera integral las
características del trabajo infantil en la pequeña minería.
Es importante señalar que la pequeña minería es una actividad de carácter
informal y el trabajo infantil en éste sector es ilegal en Colombia, prohíbida por el
alto riesgo que acarrea para los niños; por ésta razón a veces resulta difícil encontrar
información disponible y confiable. El trabajo infantil en las minas existe también en
otros países como Ecuador, Perú, Bolivia, objeto de estudio en la presente
investigación.
Edad
En el estudio se detectaron 1.580 niños, niñas y adolescentes entre edades de
5 y 17 años, llama la atención que el 16% de la muestra corresponde a niños y niñas
entre 5 y 7 años y un 30% representado por edades entre 8 y 11 años, pero
independientemente de la cantidad de niños y niñas en cada rango de edad, lo que se
podría evidenciar de los datos es que todos los niños y niñas corren riesgos en la
medida en que estos menores de edad se incorporan cada vez más a las actividades
mineras desde edades muy cortas (ver cuadro Nº 14).
246
CUADRO Nº 14
Composición de la muestra por sexo y edad.
Total menores
Trabajan
Hombre Mujer Total Trabajan n % n % N % 5 –7 años 152 9,62% 113 7,15% 265 16,77%8 – 11 años 278 17,59% 206 13,04% 484 30,63%12 –13 años 171 10,82% 101 6,39% 272 17,22%14 – 17 años 363 22,97% 195 12.34% 558 35,32%No informa 0 0,00% 1 0.06% 1 0,06%
TOTAL 964 61.00% 616 39.0 1580 100,00 Fuente: SIRTI – IPEC (2001)
Escolaridad
En cuanto a la escolaridad, según los datos proporcionados por el estudio, hay
probabilidad de que los niños y niñas al comenzar a trabajar en las minas muchos
abandonan la escuela por causa del trabajo, pero a medida que aumentan la edad hay
mayor probabilidad de que el porcentaje de niños que estudia y trabaja abandone la
escuela; el siguiente cuadro muestra como los adolescentes de 14 a 17 años son los
que presentan mayor riesgo de abandonar la escuela (ver cuadro Nº 15).
CUADRO Nº1 5
Asistencia escolar por sexo
Trabaja Hombre Mujer Total menores Asiste No asiste Asiste No asiste % % % % 5 -7 años 17,7 8,2 19,4 11,4 8 – 11 años 33,9 8,8 37,2 7,6 12 – 13 años 19,7 9,8 17,7 7,6 14 – 17 años 28,7 73,2 25,5 73,4 No informa 0.0 0,0 0,2 0,0
Fuente: SIRTI – IPEC (2001)
247
Jornada laboral
En el estudio con respecto a la jornada laboral, los datos señalan que los niños
trabajan entre 18 y 27 horas a la semana, ya sea que el trabajo lo hagan colaborando
con sus padres o de manera independiente (ver cuadro Nº16).
CUADRO Nº 16
Promedio de horas semanales en cada actividad por sexo y edad Hombres
Edad Total
Total menores 5 -7 añs 8-11 años 12-13 añs 14-17añs N.I.E. Hombres
Prom. Prom. Prom. Prom. Prom. Prom.
a. Asistir al colegio 26,8 27,7 28,7 28,5 27,3 27,8
b. Colaborar en la minería 11,6 11,7 15,9 21,4 9,6 15,6
c. Trabajar independiente 6,3 12,8 15,6 27,1 2,0 21,6
d. Oficios del hogar 12,8 14,3 15,1 14,9 15,3 14,3
Total 14,4 16,6 18,8 23,0 13,6 19,8
Continuación cuadro No.16
Mujer
Edad Total
Total menores 5 -7 años 8-11 años 12-13 años 14-17añs N.I.E. Mujer
Prom. Prom. Prom. Prom. Prom. Prom.
a. Asistir al colegio 26,5 27,7 28,6 29,0 26,7 27,8
b. Colaborar en la minería 10,4 10,2 14,5 15,3 19,8 12,5
c. Trabajar independiente 7,0 12,9 8,0 18,5 24,0 15,1
d. Oficios del hogar 13,2 15,1 18,4 21,4 19,6 17,0
Total 14,3 16,5 17,4 21,0 22,5 18,1
Fuente: SIRTI – IPEC (2001)
Los niños asisten en la mañana o en la tarde al trabajo de la minería, pocos en
la noche; pero el mayor porcentaje de niños trabaja en las tardes (59%), en
248
comparación de los niños que trabajan en la mañana que representan 739 niños y
niñas (40,5%) (ver cuadro Nº 17).
CUADRO Nº 17
Jornada laboral por sexo y edad
Total Hombre Mujer Total
menores Edad Total Edad Total General
5-7 añ 8-11 12-13 14-17 Hombre 5-7 añ 8-11añ 12-13 ñ 14-17a Mujer
% % % % % % % % % % %
a. mañana 32,7 28,6 41,3 49,6 40,3 33,3 33,9 38,2 52,4 40,8 40,5
b. tarde 66,0 71,1 58,2 49,4 58,9 66,7 66,1 61,8 47,6 59,2 59,0
c. noche 1.3 0,3 0,5 1,1 0,8 0,0 0,0 0,0 0,0 0,0 0,5
Fuente: SIRTI – IPEC (2001)
Ingresos
Referente a los ingresos que reciben los niños y niñas mineros, el estudio
indica que un 60% de ellos no lo reciben, al 6,1 le pagan en especie y solamente una
tercera parte de los menores 538 (34%) recibe pago en dinero (ver cuadro N°18).
CUADRO Nº 18
Tipo de ingreso mensual por sexo y edad
Total Hombre Mujer Total
Menores Edad Total Edad Total General
5-7 añ 8-11 12-13 14-17 Hombre 5-7 añ 8-11a 12-13 ñ 14-17a Mujer
% % % % % % % % % % %
En dinero 13,6 28,0 32,6 55,5 36,9 16,4 28,2 33,7 35,7 29,3 34,0
Especie 8,2 5,4 5,2 5,2 5,8 8,2 5,3 6,9 7,1 6,6 6,1
No le
pagan
78,2 66,7 62,2 39,3 57,3 75,5 66,5 59,4 57,1 64,0 59,9
Fuente: SIRTI – IPEC (2001)
249
Del estudio también se desprende que los niños de menos edad es a los que
tiende a no pagárseles, reflejando los datos la explotación a la que están sometidos.
Los niños que reportan ingresos mensuales en dinero, estos ingresos no eran
superiores a los 10.000 pesos mensuales, siendo el salario mínimo legal en Colombia
para el 2001, aproximadamente de 286.000 pesos (Ministerio de Protección Social)
Salud y seguridad
CUADRO Nº 19
Riesgos a los que se exponen los niños y niñas por el trabajo en las minas Total Hombre Mujer Total Menores Edad Total Edad Total General 5-7 8-11 12-
13 14-17
Hombre 5-7 añ 8-11a 12-13 ñ 14-17
Mujer
% % % % % % % % % % % Ruidos, vi braciones o choques molestos
8,1
10,0
6,7
9,5
8,9
9,5
9,5
6,3
8,5
8,6
8,8
Temperatura extremas
21,9
25,9
26,6
21,4
23,7
25,3
21,8
25,9
23,2
23,6
23,7
Exposicio- nes a tóxicos
4,2
3,6
4,2
4,8
4,2
3,3
3,6
2,5
3,0
3,2
3,8
Olores fuer-tes o presen- Cia de polvo en el ambiente
18,0
15,9
16,4
17,6
16,9
14,7
15,5
15,9
15,8
15,5
16,4
Picaduras de insectos y/o mordeduras de animales
16,2
16,7
16,9
14,8
15,9
18,7
15,5
13,4
15,6
15,8
15,9
Exposición permanente a variaciones climáticas
16,2
15,2
13,2
13,5
14,4
14,7
18,5
15,1
16,8
16,7
15,3
Tratos indebidos o presiones psicológicas
1,2
0,3
0,7
0,9
0,7
1,1
0,2
0,0
1,2
0,7
0,7
Jornadas de trabajo muy largas
6,9
5,2
7,6
8,4
7,2
7,7
7,9
11,3
8,5
8,5
7,7
Falta de herramientas o implemen-tosde trabajo adecuados
1,8
3,8
6,0
6,1
4,8
3,3
4,6
7,9
5.7
5,2
5,0
Presión o acoso por parte de las autoridades
0,6
0,3
0,2
0,4
0,4
0,0
0,2
0,0
0,2
0,1
0,3
Ninguno de los anteriores
4,8
3,1
1,6
2,4
2,8
1,8
2,6
1,7
1,6
2,0
2,5
Fuente: SIRTI – IPEC (2001)
250
En cuanto a la salud y seguridad, los datos del estudio señalan que éstos
menores trabajadores están expuestos a grandes riesgos entre los que están las
temperaturas extremas, olores fuertes, polvo en el ambiente, picaduras de insectos y
mordedura de animales, entre otros (cuadro Nº 19).
Área o sector de trabajo
En relación al tipo de labor minera que realizan los niños, niñas y
adolescentes, de acuerdo al estudio el mayor porcentaje de niños y niñas (80%) se
dedica a actividades de extracción (ver cuadro Nº 20).
CUADRO Nº 20
Tipo de labor minera que realizan los niños y niñas por edad y sexo Total Hombre Mujer Total Menores Edad Total Edad Total General 5-7 8-11 12-
13 14-17
Hombre 5-7 añ 8-11a 12-13 ñ 14-17
Mujer
% % % % % % % % % % % Actividades de extracción
80,1
83,8
83,0
76,1
80,3
82,7
82,4
77,2
81,0
81,3
80,7 Actividades de procesamiento
9,6
6,9
4,7
4,4
5,9
12,7
5,4
8,9
5,6
7,3
6,5
Actividades de fabricación
4,8
4,3
4,7
7,2
5,5
0,9
4,9
5,9
6,2
4,7
5,2
Otras actividades
4,8 4,7 7,0 11,7 7,7 3,6 7,3 6,9 6,2 6,2 7,7
Fuente: SIRTI – IPEC (2001)
ECUADOR
De acuerdo al Estudio auspiciado por la Organización Internacional del
Trabajo (OIT) Oficina Regional para América Latina y el Caribe. Programa
Internacional para la Erradicación del Trabajo Infantil (IPEC) (2003), elaborado por
el Centro de Desarrollo y Autogestión (D y A) titulado: El Trabajo Infantil en
Basurales de Ecuador, el cual fue realizado en 13 ciudades de Ecuador, se detectó la
251
presencia de niños, niñas y adolescentes trabajando en los basurales de Ecuador. El
Estudio tuvo por objeto describir la magnitud y características de trabajo de niños y
niñas en botaderos de basura de ciudades del Ecuador. En el estudio se aplicó una
metodología cualicuantitativa, considerándose variables entre las que están a)
sociodemografía, b) escolaridad, c) salud, d)económicas, e) institucionales y se
aplicaron instrumentos tales como: a) encuesta a niños de 5 a 17 años que trabajan en
botaderos de basura, b) encuesta a adultos que trabajan en botaderos de basura, c)
entrevista abierta a padres de familia, d) entrevista abierta a maestros de las escuelas
donde estudian los niños y niñas, e) entrevista a funcionarios municipales, f)
entrevista a organizaciones relacionadas con la situación de los niños, g) entrevista a
empresas recicladoras. En el estudio se detectaron 497 niños y niñas entre 5 y 17
años (ver cuadro Nº 21).
CUADRO Nº 21
Distribución de niños, niñas recolectores de desechos sólidos según sexo y grupo
de edad
Edad/sexo % niños % niñas Total % 5 a 9 años 25,1 36,1 28,7
10 a 13 años 50,3 48,2 49,6 14 a 17 años 24,6 15,7 21,7
Total 100 100 100 Fuente y elaboración: Encuesta línea de Base IPEC D y A (2002)
Edad
De acuerdo al estudio, aproximadamente el 50% de los menores se encuentra
entre los 10 a los 13 años de edad, el 29% aproximadamente se encuentran entre los 5
a los 9 años de edad y el 22% entre 14 y 17, observándose que la proporción de niñas
entre 14 y 17 años es menor que el porcentaje de varones a esa misma edad, mientras
252
que en las edades entre 5 y 13 años la proporción de niñas supera a los varones. De
acuerdo al estudio en su especificación cualitativa esto podría deberse al hecho de que
las niñas mayores de 14 años pueden sentir vergüenza de trabajar en un botadero de
basura, sobre todo en una edad que se comienza a fortalecer su feminidad.
Situación familiar
En cuanto a la composición familiar, en el estudio aparece un porcentaje
significativo (65,7%), de los niños y niñas viviendo en familias estructuradas, aunque
muchos niños y niñas viven sin sus padres, sólo con su madre y hermanos (12,5%), y
con madre, hermanos y otros parientes (9,84%) (ver cuadro Nº 22).
CUADRO Nº 22
Distribución de los niños recolectores de desechos sólidos según tipo de familia
TIPO DE FAMILIA % NIÑOS,
NIÑAS
Núcleo de papá, mamá y hermanos 65,7
Con mamá y hermanos 12,5
Con mamá, hermanos y otros parientes 9,84
Con papá y hermanos 2,36
Con papá, hermanos y otros parientes 0,78
Con otros parientes 7,87
Viven solos 0,78
Total 100
Fuente y elaboración: Encuesta línea de Base IPEC D y A (2002)
253
Área o sector de trabajo
El proceso de trabajar en los botaderos de basura es una actividad que implica
varias fases como son: recolección, clasificación, embalaje y comercialización.
Primero se hace la recolección de materiales sólidos que han sido desechados, entre
los que están: plástico, cartón, papel, aluminio, cobre, bronce, botellas, hierro,
cauchos, carbón, leña, desechos sólidos, otros; para luego clasificarlos, realizar el
embalaje y la sucesiva comercialización, los niños y niñas trabajadores de acuerdo al
estudio actúan en las diferentes fases del proceso, exceptuando la comercialización,
donde sólo un 43% participa en forma directa en la venta, ya que otro porcentaje
(31%) entrega el material a sus padres u otro familiar para que haga el proceso de
comercialización (Ver cuadro Nº 23).
CUADRO Nº 23
Destino de la producción obtenida por los niños recolectores de desechos sólidos
según su edad
Destino– Edad 5 – 9 años 10 – 13 años 14 – 17 años Total
Venta 20% 45,5% 66,7% 43,4%
Entrega 44,5% 28,5% 22,2% 31,4%
Otros 38,5% 27,5% 11,1% 26,9%
Fuente y elaboración: Encuesta línea de base IPEC D y A (2002)
Ingreso o salario
Respecto al salario que reciben por la realización de su labor, de acuerdo al
estudio no todos los niños y niñas trabajadores lo reciben, sólo un 49,6 lo recibía (ver
cuadro Nº 24), lo cual según el estudio un porcentaje elevado de niños, trabajan en
254
grupos familiares, en estos casos el jefe de la familia vende los productos y luego
administra los ingresos.
CUADRO Nº 24
Disponibilidad de ingresos por sexo
¿Percibes ingresos? Hombre Mujer Total
Si 51,5% 45,8% 49,6%
No 48,5% 54,2% 50,4%
Fuente y elaboración: Encuesta línea de base IPEC D y A (2002)
El estudio al indicar la disponibilidad de ingreso por grupos de edad, se
observa que los niños y niñas de mayor edad (14 a 17), son los que mayormente
pueden disponer del ingreso (63,6), mientras que los más pequeños en edades
comprendidas entre 5 y 9 años, no reciben ingresos, son los que podrían estar
trabajando al acompañar a sus padres, ya como una estrategia familiar o por la
ausencia de sitios donde permanecer mientras sus padres trabajan (ver cuadro Nº 25).
CUADRO Nº 25
Disponibilidad de ingresos por grupo de edad
¿Percibes ingresos? 5 a 9 años 10 a 13 años 14 a 17 años Total
Si 34,2% 52,4 63,6 49,6
No 65,8% 47,6 36,4 50,4
Fuente y Elaboración: Encuesta línea de base IPEC D y A (2002)
El estudio señala que el ingreso promedio diario, según la edad va de 2,62
dólares a 4,02 dólares diario (ver cuadro Nº 26).
255
CUADRO Nº 26
Ingreso promedio diario de niños recolectores de desechos sólidos por sexo y
grupo de edad
Edad (años) Niños (usd.) Niñas (usd.) Total (usd.)
5 a 9 años 3,12 2,16 2,62
10 a 13 años 2,42 1,97 2,28
14 a 17 años 4,21 2,94 4,02
Total 3,12 2,17 2,84
Fuente y elaboración: Encuesta línea de base IPEC D y A (2002)
Jornada laboral
En relación a la jornada laboral, el estudio indica que los niños trabajan un
promedio de 4 días a la semana laborando aproximadamente 25 horas semanales (ver
cuadro Nº 27).
CUADRO Nº 27
Promedio de días de trabajo por semana según edad y sexo (incluye fin de
semana)
Días promedio Total
Sexo y Edad 5 a 9 años 10 a 13 años 14 a 17 años
Niños 4,00 4.00 4,26 4,07
Niñas 3,87 3,86 4,75 4,00
Promedio 3,94 3,96 4,37 4,05
Fuente y elaboración: Encuesta línea de base IPEC D y A (2002)
256
Salud, seguridad y riesgos
Los niños y niñas trabajadores, en este tipo de trabajo presentan grandes
riesgos que producen efecto contra su salud física, por lo que la Organización del
Trabajo (OIT, 1999) ha ubicado el trabajo de niños y niñas en la basura, como el de
las peores formas del trabajo infantil, el cual hay que erradicar (Convenio Nº 182)
(ver cuadro Nº 28).
CUADRO Nº 28
Riesgos del trabajo infantil en los basurales
FUENTE DE INSEGURIDAD O RIESGO EFECTOS SOBRE LA SALUD FÍSICA
Contacto con desechos hospitalarios (jeringuillas, y sustancias contaminadas)
Infecciones, Hepatitis B, SIDA, intoxicación, enfermedades infectocontagiosas.
Contacto con residuos peligrosos como compuestos químicos, tóxicos, inflamable o radiactivos.
Intoxicaciones, infecciones, quemaduras, radiaciones cancerígenas, etc.
Consumo de aguas contaminadas por lixiviados y substancias tóxicas.
Intoxicación, problemas gastrointestinales, parasitosis, amebiasis, patologías a largo plazo.
Emisión de varios gases Problemas renales, respiratorios, cáncer. Ingestión de alimentos contaminados con sustancias mezcladas en la basura.
Problemas gastrointestinales, parasitosis, amebiasis, intoxicación.
Presencia de sustancias inflamables y riesgo de incendio.
Quemaduras y asfixia.
Propagación de epidemias por agentes animales (ratas, cucarachas)
Epidemias varias.
Desprendimiento de plomo en la combustión de desechos.
Lesiones cerebrales e hipertensión arterial.
Desprendimiento de gas metano y riesgo de explosión.
Quemadura y asfixia. Muerte.
Combustión de residuos orgánicos Quemadura de distintos grados. Cortes, golpes y demás traumatismos en distintas fases y por el contacto con objetos cortopunzantes.
Inflamaciones, lastimaduras, tétanos, mutilaciones, discapacidades a mediano y largo plazo.
Contacto con maquinaria pesada y falta de planificación de los procesos.
Atropellamiento, golpes y heridas.
Transporte de bultos de residuos compactados. Daños óseos, lastimaduras. Fuente y elaboración: Encuesta Línea de Base IPEC – D y A (2002)
257
Escolaridad
Al referirse a la escolaridad el estudio indica que el 68,5 de los niños
trabajadores en la recolección de desechos sólidos en el basurero, asisten a la escuela;
las edades en la que se identifica mayor asistencia a la escuela se ubica entre 5 y 13
años, mientras que la inasistencia de los adolescentes entre 14 y 17 años es notable
(ver cuadro Nº 29).
CUADRO Nº 29
Distribución de niños, niñas por edad y nivel de asistencia
5 a 9 años 10a13 años 14 a 17 años Total
% % % %
Asiste Si 74,0% 77,8% 40,0% 68,5%
Establecimiento No 26,0% 22,2% 60,0% 31,5%
Total 100% 100% 100% 100%
Fuentes: IPEC – D y A: Línea de Base trabajo infantil basurales(2002)
A pesar de que sólo se han ubicado algunos aspectos del estudio llevado a
cabo por el organismo Internacional, haciendo énfasis en los que están relacionados
con las categorías establecidas en la operacionalidad del método comparado de la
presente investigación doctoral; del estudio de los niños, niñas y adolescentes
trabajadores en los basurales del ecuador se advierte la explotación laboral a que
están sometidos los mismos, lo cual va en contradicción con la regulación establecida
tanto a nivel internacional, como nacional. A nivel internacional, la Convención
sobre los Derechos del Niño (1989) en su artículo 31 establece de los Estados
Suscritores al derecho de los niños, niñas y adolescentes a estar protegidos contra el
desempeño de cualquier trabajo que pueda ser peligroso o entorpecer la educación o
sea nocivo a su salud o desarrollo físico, mental, espiritual, moral o social, así como
258
el tomar una serie de medidas para la fijación y cumplimiento de una edad mínima
para trabajar con condiciones apropiadas de horario y trabajo.
Con respecto a la edad mínima para trabajar, el Convenio 138 de la
Organización Internacional del Trabajo (OIT, 1973), señala la edad mínima de
admisión al empleo. Ecuador ratificó este Convenio en el año 2.000, acogiéndose a la
excepción del Convenio, permitiendo una edad mínima para trabajar de 14 años.
Pero como el trabajo en los basureros es peligroso, Ecuador estaría violentando, el
Convenio, porque de acuerdo al mismo, en los trabajos peligrosos para el desarrollo
físico, psicológico o social la edad mínima no puede ser menor a 18 años, y los niños
en los basureros de Ecuador trabajan incluyendo las edades de 5 a 17 años.
Igualmente el Convenio 182 de la OIT (1999) sobre la prohibición de las
peores formas del trabajo infantil obliga a los países ratificantes, a la acción
inmediata para su eliminación, Convenio ratificado por el Ecuador en el año 2.000.
Analizando el caso del trabajo infantil en la basura, este es una de las peores formas
del trabajo infantil ya que por las condiciones en que se lleva a cabo es probable que
dañe la salud, la seguridad o la moralidad de niños y niñas.
A nivel nacional las normas protectoras del trabajo del niño, niña y
adolescente se encuentran contenidas en diversos instrumentos entre ellos
principalmente la Constitución Política de la República del Ecuador (1998) y el
Código de la niñez y adolescencia de Ecuador (2003), quienes regulan el goce y
ejercicio de los derechos, deberes y responsabilidades de los niños, niñas y
adolescentes y los medios para hacerlos efectivos, garantizarlos y protegerlos
conforme al principio del interés superior de la niñez y adolescencia y a la doctrina de
protección integral. Derechos que a la luz del trabajo de niños, niñas y adolescentes
están siendo vulnerados ya que el Código de la niñez y adolescencia expresamente
prohíbe el trabajo de los niños, niñas y adolescentes en ésta actividad.
259
El artículo 87 numeral 1 señala: “se prohíbe el trabajo de adolescentes en
“minas, basurales, camales, canteras e industrias” extractivos de cualquier clase”. A
su vez el trabajo en basurero de estos niños, niñas y adolescentes, vulnera y entra en
contradicción con la protección que el Estado asegura a los niños, niñas y
adolescentes, ratificándole una serie de garantías en la Constitución especialmente el
artículo 50, ya citado en capítulos anteriores.
PERÚ
De acuerdo al estudio realizado por la Organización Internacional del Trabajo.
Oficina Regional para América Latina y el Caribe. Programa Internacional para la
Erradicación del Trabajo Infantil. Proyecto Subregional de Prevención y Eliminación
del Trabajo Infantil Doméstico en Hogares de Terceros en Sudamérica (2002 ), acerca
del trabajo doméstico en hogares de terceros de niños, niñas y adolescentes del Perú,
de acuerdo al estudio, los trabajadores infantiles domésticos proceden de familias
rurales pobres y numerosas. Tienen entre 12 y 17 años, aunque algunos empiezan a
trabajar desde los 5 años cuidando y haciendo jugar a niños. La mayoría son niñas,
estimándose en 79% los trabajadores infantiles domésticos entre 6 y 17 años de sexo
femenino. A las niñas se les asignan responsabilidades en el interior del hogar,
mientras que a los niños trabajadores domésticos se les compromete en actividades en
el exterior de la casa, como cuidando el jardín, lavando los carros, haciendo
mandados.
Al igual que en otros países las cifras sobre el trabajo infantil son escasas,
especialmente las referentes al trabajo infantil doméstico. Según la Encuesta
Nacional de Hogares (ENAHO), realizada por el INEI en el año 2001, se estima que
el 28.6% de los niños y niñas entre los 6 y 17 años se encuentra trabajando. Destaca
el hecho que el trabajo infantil doméstico ocupa el tercer lugar entre las actividades
260
desempañadas, antecedidas por los trabajadores del sector agrícola y la participación
en negocios familiares.
Edad
Respecto al trabajo infantil doméstico, la información que brinda la ENAHO
2001 señala que esta población asciende a 111,142 niñas, niños y adolescentes.
Asimismo permite apreciar una diferencia consistente en la relación de género entre
dos rangos de edad. Mientras en el grupo de 6 a 13 años la presencia de niñas es
ligeramente superior a la de niños, en el grupo de 14 a 17 años las mujeres
constituyen casi todo el universo ( ver cuadro N° 30 ).
CUADRO Nº 30
Trabajadores Infantiles Domésticos según Rangos de Edad y Sexo. 2001
Grupos de edad
Sexo
Hombre Mujer
Total
6 a 13 años 44,5% 55,5% 45,120
14 a 17 años 5,9% 94,1% 66,022
Total 21 % 79 % 111,142
Fuente: INEI. ENAHO (2001)
De acuerdo al estudio, dentro de los trabajadores domésticos infantiles se
pueden distinguir dos grupos:
1-Niñas, niños y adolescentes por debajo de la edad mínima de admisión al empleo
(de 6 a 13 años). Este grupo se encuentra conformado por niños y niñas que han sido
261
confiados por sus familias a familiares directos o conocidos con los cuales le ligan
ciertos lazos de amistad o compadrazgo. La función inicial suele ser la de niñera.
Posteriormente, se les asigna mayores responsabilidades como las de realizar
compras, limpieza de la casa, lavado y planchado, entre otras labores. Este es el grupo
más vulnerable y donde resulta inaceptable el trabajo infantil.
2- Adolescentes por encima de la edad mínima de admisión al empleo (de 14 a 17
años). En este grupo se encuentran mayoritariamente las y los adolescentes cuyas
expectativas los llevan a la búsqueda de nuevos horizontes en el mundo urbano, como
una estrategia de movilidad social, y de sobrevivencia para ayudar a sus familias, o
como una vía de escape de situaciones de maltrato y abuso sexual.
Con respecto al lugar de origen de los niños, niñas y adolescentes
trabajadores domésticos, el informe producto de la investigación realizada por el
organismo internacional, indica que los menores que laboran en las ciudades peruanas
de Cajamarca y Cuzco, provienen de lugares cercanos a las mismas, generalmente de
provincias del mismo departamento en un 95%. Mientras que en Lima, principal foco
receptor del proceso migratorio interno, el origen de las niñas, niños y adolescentes
trabajadores infantiles domésticos es muy diverso. Sólo el 35.2% son limeñas. Entre
los lugares de origen de los migrantes destacan los departamentos de la sierra central
y sur peruana, clasificados como los más pobres del Perú y los principales expulsores
de población en las décadas pasadas por el problema de la violencia subversiva:
Cusco, Apurímac, Huánuco, Ayacucho, Junín, Huancavelica y Pasco. Otro porcentaje
importante (15.1%) es el que ha arribado de la región norte, específicamente
Cajamarca, Ancash, Piura, Lambayeque y La Libertad. Le sigue en importancia la
Selva de donde procede el 5.4%. El resto (2.3%) es oriundo de la Costa Sur, como
Arequipa, Ica y Tacna.
262
Situación familiar
El estudio con respecto a la situación familiar, señala que los resultados de las
encuestas aplicadas a niños, niñas y adolescentes muestran que la mayoría de los
trabajadores infantiles domésticos proviene de familias que tienen padre y madre,
aspecto que cobra mayor significación en Cusco y Cajamarca, lugares en los que el
82.5% y 78.8% respectivamente de los niños, niñas y adolescentes viven con ambos
padres, lo que podría contradecir de alguna manera la creencia generalizada de que en
las familias monoparentales es donde se concentra la mayoría de los trabajadores
infantiles
Otra característica relevante de las familias de las niñas, niños y adolescentes
trabajadores domésticos es la carga que soporta el hogar por el número de hijos que
tiene que mantener. Los resultados ponen en evidencia un elevado tamaño familiar
con un número de hijos que fluctúa entre 5.5 en Cajamarca y 4.4 en Lima. Si al
número de hijos se suman los padres, los miembros del hogar superan ampliamente el
promedio estimado para cada una de estas ciudades. Merece ser destacada la
proporción de hogares que tienen más de 6 hijos, los cuales en Cusco y en Cajamarca
superan el 45%. En el estudio se tomo en cuenta también la ocupación de la familia,
en virtud que el grado de pobreza familiar puede estar directamente correlacionado al
grado de vulnerabilidad de los niños o niñas, el tipo y características del empleo de
sus padres pueden constituir un factor explicativo de la inserción temprana al trabajo
doméstico. Los resultados del estudio muestran que la situación de precariedad en la
que viven se deriva principalmente de la calidad de los trabajos que realizan padres y
madres, dado que la mayoría de ellos son eventuales. En las tres ciudades, el trabajo
eventual es mayoritario, pero cobra una relevancia especial en Lima, en la medida
que el 70.9% de los entrevistados en la investigación se encuentra en esta situación.
263
Acerca de las razones de la incorporación de niños, niñas y adolescentes en el
trabajo doméstico, el estudio señala que al entrevistar a las madres estas dieron una
variedad de respuestas relacionadas con factores económicos, familiares y culturales,
que siguen similar tendencia en las tres ciudades estudiadas. Entre las razones
relacionadas a la situación económica familiar, la principal es la pobreza y la falta de
recursos económicos. Otra razón esgrimida es la ayuda que pueden dar las niñas y
niños, o el mandar algo para la familia; lo cual podría ser indicativo que el trabajo
doméstico constituye una estrategia de sobrevivencia, que permite incrementar o
aliviar el escaso presupuesto de la economía familiar (ver cuadro 31).
CUADRO Nº 31
Razones por el que las hijas son trabajadoras domésticas
DESCRIPCIÓN CIUDAD
Cajamarca Cusco Lima
Total 100,0 100,0 100,0
No tenemos dinero/ somos pobres 63,2 76,8 52,5
Quería estudiar y trabajar/ pagar sus estudios 52,6 44,2 38,3
Así puede aprender cosas/ formarse 20,0 32,6 7,5
Así puede ayudarnos/ mandar algo a la familia 20,0 13,7 9,2
Le gusta tener su propio dinero/ ser independiente 20,0 7,4 13,3
Ofrecieron llevarla/ “madrina”, pariente 3,2 17,9 4,2
Aquí no hay trabajo para una chica como ella 1,1 10,5 1,7
Aquí tenía problemas/ en la casa/ barrio/ pueblo 1,1 6,3 5,0
Para que no se quede solita/ que se entretenga 1,1 1,1 3,3
Para comprarse ropa 3,2 1,7
Va a ayudar por enfermedad del tío/ abuelo/ vecino 4,2
Fuente: OIT-IPEC (2001) Encuesta a familias de origen de las trabajadoras
domésticas en Lima, Cajamarca y Cusco.
264
Un segundo grupo de razones vinculadas al factor económico aluden a la
decisión de las propias niñas: querían trabajar y estudiar, pagar sus estudios, tener su
dinero, ser independiente, comprarse ropa, lo que podría indicar una percepción del
trabajo doméstico como vía de ascenso social e independencia en un contexto de
precariedad económica familiar. La respuesta que aparece en tercer lugar como el
aprender cosas y formarse, se podría relacionar con una valoración positiva del
trabajo doméstico, asociada al rol asignado socialmente a las mujeres.
De acuerdo al estudio existen diversas modalidades empleadas para colocar a
las niñas en su primer trabajo como trabajadora doméstica. Entre las principales están
las recomendaciones de personas conocidas de la familia, el conocimiento previo de
la empleadora o que ésta sea una pariente o amiga, y el requerimiento de las
madrinas. Todas estas vías indican la importancia que tiene la existencia de una
demanda de niñas y adolescentes en su inicio en el trabajo doméstico. Los
mecanismos difieren y cobran mayor relevancia en cada una de las ciudades
investigadas. En Cajamarca el 35.8% de las niñas fueron colocados por primera vez
como trabajadoras infantiles domésticas a partir de una recomendación dada a la
empleadora por una conocida de la madre. Le sigue en orden de importancia el hecho
que la primera empleadora haya sido pariente o amiga de la madre.
En el Cusco, un gran porcentaje de niñas y niños (20.0%) fueron colocados
mediante el enganche con la denominada madrina. Al respecto de esta modalidad las
madres indican que encargaron a su hija con la madrina, principalmente porque es
buena y apoya a su hija, porque ofreció tratarla bien como si fuese su hija o porque es
su madrina y la necesitaba. Estas respuestas según el estudio, indican una relación
basada en un alto grado de confianza de parte de las madres y una gran ascendencia
del lado de la madrina. En esa ciudad, otras dos modalidades que cobran relevancia
son la ubicación de la niña por una hermana, probablemente trabajadora doméstica
265
también, o un familiar; y la recomendación de una persona conocida de la
empleadora. En Lima cobra relevancia en el inicio de la vida laboral de la trabajadora
infantil doméstica el requerimiento de parientes (26.7%) y de conocidas de la madre
(25.0%) ( ver cuadro N° 32 ).
CUADRO Nº 32
Forma como se colocó por primera vez la hija en el trabajo doméstico
DESCRIPCIÓN CIUDAD
Cajamarca Cusco Lima
Total 100,0 100,0 100,0
La empleadora era recomendada por una conocida 35,8 17,9 25,0
La empleadora era una pariente suya 16,8 16,8 26,7
Hermana o familiar trabajadora infantil doméstica
le buscó el trabajo 9,5 17,9 14,2
Conozco a la empleadora 12,6 7,4 14,2
Enganche con madrina 3,2 20,0 4,2
Vecina 3,2 1,1 8,3
La empleadora ofreció el trabajo 4,2 6,3 2,5
Preguntó por un aviso en una casa 5,3 5,3 1,7
Fuente: OIT-IPEC. (2001) Encuesta a trabajadoras infantiles domésticas en Lima,
Cajamarca y Cusco.
Con respecto a la remuneración, el estudio advierte que no todas reciben una
retribución económica por su trabajo. Una parte significativa recibe únicamente una
propina o pago esporádico, e incluso sólo casa y comida. La situación más crítica se
presenta en Cusco donde el 50% de las trabajadoras infantiles domésticas declaran
que no reciben remuneración. Un hecho a tomar en cuenta es que a menor edad es
mayor el número que no goza del derecho a un salario. En las tres ciudades peruanas
objeto de estudio por el organismo internacional, el porcentaje de niñas, niños y
266
adolescentes por debajo de la edad mínima de admisión al empleo que no recibe
sueldo supera largamente al segmento de las adolescentes mayores de 14 años en esa
situación ( ver cuadro N° 33 ).
CUADRO Nº 33
Retribución por servicios por ciudades según grupos de edad de las trabajadoras
infantiles domésticas
Retribución por
servicios
Lima Cajamarca Cusco
Niñas Adolescentes Niñas Adolescentes Niñas Adolescentes
Total
Recibe un sueldo
Recibe propinas
No
Si pero no es fijo
100.0
28.1
47.7
22.9
1.3
100.0
75.9
17.1
5.0
2.0
100.0
64.4
28.0
5.4
2.2
100.0
89.4
5.9
1.2
3.5
100.0
36.0
34.0
26.0
4.0
100.0
65.2
17.4
15.2
2.2
Fuente: OIT-IPEC. (2001) Encuesta a trabajadoras infantiles domésticas en Lima,
Cajamarca y Cusco.
Salario o ingreso
Otro aspecto a resaltar en el estudio, es que relacionando la retribución a la
trabajadora infantil doméstica y el nivel socioeconómico de la familia empleadora, se
podría constatar que mientras más bajo es el estrato de la familia empleadora, más
alto es el porcentaje de las trabajadoras que no reciben sueldo, aunado a esto, aquellas
trabajadoras que reciben sueldo, este no se compagina con la actividad realizada ( 13
dólares por mes para el año 2001) ( ver cuadro N° 34 ).
267
CUADRO Nº 34
Retribución por servicios por ciudades según nivel socioeconómico del
empleador
Retribución por
servicios
Lima Cajamarca Cusco
Alto Medio Bajo Alto Medio Bajo Alto Medio Bajo
Total
Recibe un sueldo
Recibe propinas
No
Si pero no es fijo
100
83.6
8.2
8.2
100
65.5
19.0
12.9
2.6
100
38.3
45.7
14.3
1.7
100
90.3
6.5
3.2
100
76.9
15.4
3.8
3.8
100
69.6
24.6
2.9
2.9
100
75.8
12.1
12.1
100
47.2
30.3
19.1
3.4
100
41.4
27.1
27.1
4.3
Fuente: OIT-IPEC (2001) Encuesta a trabajadoras infantiles domésticas en Lima,
Cajamarca y Cusco.
Jornada laboral
En atención a la jornada laboral, el estudio señala que los niños, niñas y
adolescentes trabajadoras domésticos trabajan más de 12 horas diarias,
constituyéndose en una de las principales restricciones para el desarrollo de
actividades educativas, recreativas y otras propias de su edad. Algunos relatos de
acuerdo al estudio dan cuenta de esta situación:
“Me levanto a las 7 de la mañana y me duermo a las 9 de la noche después de haber
terminado de repartir la leche” ( María, 8 años) .
“Empiezo a las 5 de la mañana, para hacer las cosas de mi hija ,empiezo a trabajar
a las 7 de la mañana y me acuesto a las 11 o 12 de la noche, estoy cansada, pero no
268
puedo dejar de trabajar por que no tengo a donde ir, en otros trabajos no quieren
con hijos” ( Nayda madre soltera de 17 años)
Estos dos testimonios podrían servir para mostrar lo extensas y agotadoras que
resultan las jornadas laborales tanto para las niñas más pequeñas como para las
adolescentes. Con respecto a la seguridad social y de salud, el estudio señala que casi
la totalidad de los empleadores incumple con proporcionar seguridad social a las
trabajadoras infantiles domésticas estudiadas, solo 5 casos gozaban de este beneficio.
Descanso
Al referirse al descanso semanal y vacaciones, el estudio indica que el mismo
puede variar tomando en cuenta si el menor duerme en la casa donde presta los
servicios o va diariamente a su casa. Aunque el descanso es un derecho laboral; sin
embargo, en el primer caso, la niña o el niño se encuentran a disposición de los
empleadores prácticamente todas las horas del día, exceptuando, tal vez, las horas de
sueño o las que asiste al colegio, cuando esto sucede. En el segundo caso, el momento
de desplazarse hacia sus casas puede marcar una hora aproximada de término de la
jornada y una distancia que impide a los empleadores acudir a ellos durante este
lapso. De acuerdo a la investigación, la mayoría de las menores duerme en la casa
donde trabaja; estas no sólo no pueden distinguir el horario de trabajo del descanso,
sino que enfrentan situaciones variadas dado el lugar que les destinan para el
descanso. Se encontró, por ejemplo que más de la cuarta parte de las niñas, niños y
adolescentes trabajadores domésticos duerme en diversos lugares de la casa como la
cocina, el depósito, la sala, el pasadizo o patio; y de ellos cuatro de cada diez duerme
en el suelo, incluso sin un colchón. Además de las escasas horas de descanso diario,
una proporción importante no cuenta con días de descanso durante la semana.
269
El descanso semanal del trabajador está consignado en la ley, y su
incumplimiento revela no sólo una situación de abuso extremo, sino un total
desconocimiento de los derechos laborales y humanos por parte de la familia
empleadora, la familia de origen y la propia trabajadora
La investigación revela en cuanto al trato recibido de la familia empleadora,
que la percepción de los trabajadores infantiles domésticos sobre el trato, guarda
correspondencia con las relaciones afectivas o conflictivas que se establecen en el
entorno laboral. Los niños y niñas valoran y esperan manifestaciones de cariño de
sus empleadores, que les hablen de buenas maneras, que les animen para salir
adelante, entre otras. Los resultados del estudio, sin embargo, ponen de manifiesto la
existencia generalizada de diversas formas de maltrato y trato cruel que sufren las
trabajadores infantiles domésticos de diversos miembros de las familias empleadoras,
que van desde el maltrato psicológico hasta el físico y sexual. Para las niñas entre los
maltratos más comunes están: llamarlas por otro nombre, insultarlas, darles de comer
las sobras y hacerlas trabajar cuando están enfermas. Entre las formas de maltrato
psicológico cobra relevancia el que las llamen por apodos y no por su nombre, trato
humillante, desvalorízador y de marginación que afecta directamente su autoestima.
( ver cuadro 35 ).
270
CUADRO Nº 35
Formas de maltrato a las trabajadoras infantiles domésticas
Lima Cajamarca Cusco
Respuesta % Respuesta % Respuesta % Te llaman por otro
nombre
53.4 Te llaman por otro
nombre
84.4
Te llaman por otro
nombre
56.8
Te hacen trabajar aún
enferma
32.2 Te hacen trabajar aún
enferma
30.3 Te insultan 43.9
Te insultan 28,8 Comes lo que sobra
de la comida
13.9 Te halan el pelo o te
dan coscachos
37.2
Comes lo que sobra
de la comida
24.5
Te insultan 10.7 Te hacen trabajar
aún enferma
31.8
Te halan el pelo o te
dan coscachos
16.8
Te impiden comuni-
carte con tu familia 9.8
Comes lo que sobra
de la comida
30.4
Te impiden comuni-
carte con tu familia
14.9
Te patean, te dan
puñetes
6.6
Te impiden comuni-
carte con tu familia
23.6
Te han tocado de una
forma que te
desagrada
12.0
Te halan el pelo o te
dan coscachos
5.7
Te patean, te dan
puñetes
17.6
Fuente: OIT-IPEC. (2001) Encuesta a trabajadoras infantiles domésticas en Lima,
Cajamarca y Cusco.
Escolaridad
Con respecto a la situación educativa, el estudio revela que una de las
limitaciones de los niños, niñas y adolescentes que se ven obligados a entrar al
mundo laboral, es no poder recibir la educación a la que tienen derecho. En el trabajo
infantil doméstico en hogares de terceros, la situación es preocupante, no obstante
que la ley obliga a los empleadores garantizar que la trabajadora del hogar asista a la
escuela, hasta que cumpla los 14 años y a ofrecer facilidades también a las de mayor
271
edad. A este respecto la información de la ENAHO 2001, muestra cifras alarmantes.
Los niños y niñas entre 6 y 13 años la tasa de inasistencia escolar es 69.3%, y en el
caso de las adolescentes entre 14 y 17 años la tasa es de 60.5%. La diferencia
significativa entre hombres y mujeres corrobora la inequidad de género que se amplia
y profundiza en contextos de explotación y restricción de derechos ( ver cuadro 36 ).
CUADRO Nº 36
Inasistencia escolar de niños, niñas y adolescentes trabajadores domésticos
Sexo Niñas, niños y adolescentes de
6 a 13 años
Adolescentes entre 14 a 17 años
Hombre 43.1 % 25.1 %
Mujer 78.7 % 65.1 %
Total 69.3 % 60.5 %
Fuente: INEI. ENAHO 2001
Del estudio llevado a cabo por la organización Internacional de Trabajo ( OIT,
2001 ), se detecta que los niños, niñas y adolescentes trabajadores domésticos del
Perú, enfrentan una situación de explotación laboral, lo que contradice tanto lo
establecido por la normativa internacional como nacional. A nivel internacional el
Convenio 138 de la OIT ( 1973), indica la edad mínima para trabajar, en este caso
Perú al ratificar el convenio, tomo la vía de la excepción, permitiendo una edad
mínima para el trabajo de 14 años, pero es el caso que en el trabajo doméstico la
investigación señala que existen menores hasta de 6 años en el trabajo doméstico, los
cuales por su edad no deben trabajar. Estos niños, niñas y adolescentes, trabajadores
domésticos están ubicados dentro de las peores formas del trabajo infantil, el cual
debe ser erradicado (Convenio N° 182, OIT), cuando a muchos se les niega una
remuneración por el trabajo realizado, se les impide continuar estudios, se les obliga a
272
largas jornadas de trabajo, no existe el descanso, se les somete a diversas formas de
maltrato y trato cruel. Este tipo de trabajo por las condiciones en que se lleva a cabo
es probable que dañe la salud, la seguridad y la moralidad de niños, y niñas.
A nivel nacional, existen normas protectoras de los derechos del niño, niña y
adolescentes, entre éstos, el código del niño y del adolescente del Perú, el cual
recoge los principios de igualdad de oportunidades, no discriminación e interés
superior del niño y del adolescente, así como la garantía de un sistema de
administración de justicia especializado, donde los casos sujetos a resolución judicial
o administrativa en los que estén involucrados niños, niñas o adolescentes sean
tratados como problemas humanos. En su Libro Primero dedicado a los Derechos y
Libertades, Capítulo I De los Derechos Civiles, hace referencia expresa al derecho del
niño de vivir en un ambiente sano, a su integridad personal moral, psíquica y física a
su libre desarrollo y bienestar, considerando formas extremas que afectan su
integridad personal, el trabajo forzado y la explotación económica, así como el
reclutamiento forzado, la prostitución, la trata, la venta y tráfico de niños, niñas y
adolescentes, y todas las demás formas de explotación.
En su Capítulo II dedicado a los Derechos Económicos, Sociales y Culturales,
recoge el derecho a la educación, cultura, deporte y recreación, asegurando la
gratuidad pública de la enseñanza para quienes tienen limitaciones económicas, y
garantizando dentro de la educación básica incluso la capacitación del niño y el
adolescente para el trabajo productivo y para el manejo de conocimientos técnicos y
científicos. Establece la obligación de los padres o responsables de los menores de
edad que tengan bajo su cuidado, de matricularlos en el sistema regular de enseñanza;
asimismo el Estado reconoce su derecho a participar en programas culturales,
deportivos y recreativos, y a la atención integral de su salud, mediante la ejecución de
políticas que permitan su desarrollo físico e intelectual en condiciones adecuadas.
273
Cabe destacar que su articulado toma en cuenta de manera especial la
situación del menor de edad trabajador al señalar, por un lado la obligación de los
Directores de los centros educativos de comunicar a la autoridad competente los
casos que impliquen violación de los derechos del niño y del adolescente, como
maltrato físico, psicológico, de acoso, abuso y violencia sexual en agravio de los
alumnos, reiterada repitencia y deserción escolar, reiteradas faltas injustificadas,
desamparo, rendimiento escolar deficiente de niños, niñas y adolescentes
trabajadores, y otros hechos lesivos .
Sin embargo parece que la norma tuviera un vacío de contenido, por el
irrespeto de los derechos garantizados a los niños, niñas y adolescentes
trabajadores domésticos. El trabajo infantil doméstico en el Perú se caracteriza por
el irrespeto a los derechos de las niñas, niños y adolescentes, existe una
generalizada inobservancia de los derechos laborales de maltrato, aislamiento,
marginación y carencias, entre ellas de afecto, de parte de la familia empleadora.
Intolerables condiciones de trabajo que indudablemente limitan su desarrollo y, en
los casos más graves, los envuelve en un circulo que con seguridad dejará marcas
a lo largo de toda su vida.
BOLIVIA
En Bolivia, los niños, niñas y adolescentes trabajan en comunidad familiar en
la zafra de la caña de azúcar, la cual se produce principalmente en el departamento de
Santa Cruz y en el de Tarija. El área de producción de caña de azúcar en el
departamento de Santa Cruz abarca más de 78.000 hectáreas de caña de azúcar y
cuenta con una producción de más de 7 millones de quintales de azúcar lo que
implicó un valor de unos 110 millones de dólares para el año 2001. En el
departamento de Tarija el área de producción de caña de azúcar está ubicada en el
274
municipio de Bermejo y tiene una extensión cultivada de cerca de 12.000 hectáreas,
con una producción de 900.000 quintales de azúcar y un valor aproximado de 15
millones de dólares en el 2001. La cosecha de caña de azúcar, conocida como la
zafra, moviliza de mayo a octubre a las zonas de producción de caña de azúcar de los
departamentos de Santa Cruz y Tarija, un contingente importante de trabajadores y
sus familias.
En el estudio realizado por la Organización Internacional del Trabajo. A
través del Programa Internacional para la Erradicación del Trabajo Infantil (2002),
acerca del trabajo infantil en la caña de azúcar en Bolivia, se señala que las familias
trabajadoras proceden entre un 60% o 65% de los mismos departamentos productores
de caña y el restante 35% o 40% proceden fundamentalmente de los departamentos
de Potosí y Chuquisaca. En general se trata de familias que migran temporalmente
para paliar su situación de extrema pobreza. En esta situación el cambio radical de las
condiciones de su hábitat habitual se convierte en el primer reto que deben enfrentar.
Al proceder de zonas altas con clima seco y frío, estas familias no están preparadas
para las altas temperaturas, la humedad, los cambios violentos de clima y la
agresividad tropical característica de las regiones con plantaciones de caña de azúcar.
Edad
Según el estudio, la zafra de Santa Cruz moviliza a más de 30.000 personas,
de las cuales cerca de 7.000 son niños, niñas y adolescentes menores de 18 años. Por
su parte la zafra en Tarija moviliza 5.500 personas, de las que 2.860 son niños, niñas
y adolescentes menores de 18 años. En total esta actividad productiva involucra de
manera directa e indirecta a cerca de 10.000 niños, niñas y adolescentes. En relación a
las edades de los niños, niñas y adolescentes que participan de manera directa en las
labores de la zafra, tanto en Tarija como en Santa Cruz, el estudio señala que la edad
mínima es de 9 años. Por otro lado, según estimaciones realizadas en Santa Cruz,
275
cerca del 50% corresponden al grupo etáreo de 9 a 13 años, mientras en Tarija la
participación de este grupo etáreo sube al 60%. Al desagregar por sexo se manifiesta
que la participación directa de los varones es de dos a uno en relación a las niñas.
Situación familiar
El informe indica que la mayor parte de los niños, niñas y adolescentes que
participan en la zafra de caña de azúcar tanto en Tarija como en Santa Cruz, viven
habitualmente con su familia, sea esta monoparental, nuclear o extendida. Sólo un
18.2% de los varones y un 4.8% de mujeres en Tarija declaran vivir solos y en el caso
de Santa Cruz un 25% de varones señalan que no viven con su familia, lo cual indica
según el informe que, pese a tratarse de una población con cierta autonomía por los
ingresos que genera, y que preserva importantes vínculos familiares y comunitarios,
movilizándose a las actividades de la zafra mayoritariamente con miembros de su
familia.
Área o sector de trabajo
Respecto a la ocupación de los niños, niñas y adolescentes en las actividades
de la zafra se presentan ciertas diferencias por la división del trabajo según el
departamento. En Tarija existe una marcada división del trabajo por la cual los varones
adultos son zafreros y cortadores de caña, mientras los niños, niñas y adolescentes
junto a las mujeres adultas se ocupan de amontonar, pelar y en menor proporción del
cortado de caña, por lo que son considerados ayudantes de los zafreros. También están
fundamentalmente las niñas y mujeres adultas que se dedican a las labores de casa en
forma exclusiva o combinando con las actividades anteriores. En Santa Cruz la función
del varón adulto mayor es igualmente de zafrero o cortador de caña, labor que
276
comparte con los niños y sobre todo adolescentes principalmente varones, quedando
las labores de casa en manos de las niñas, adultas y adolescentes mujeres, quienes
suelen combinar esta tarea con labores relacionadas directamente con la zafra.
El informe advierte que tanto en Tarija como en Santa Cruz, el tipo de
contrato en la mayoría de los casos es de carácter verbal y lo establecen el contratista
con el zafrero adulto, varón y excepcionalmente ante la ausencia de éste, con las
mujeres adultas. Amparado bajo esta modalidad de contrato entre contratistas y
zafreros, el empresario cañero queda exento de toda responsabilidad contractual,
contraviniendo las disposiciones legales que prohíben expresamente la contratación
de trabajadores por enganchadores, oficinas privadas de colocación u otras
intermediarias. En general el tiempo del contrato es por toda la temporada de la zafra,
aunque un tercio de varones y mujeres entrevistados en Santa Cruz dicen desconocer
la duración del contrato, reflejando un alto grado de inseguridad en cuanto a la
estabilidad laboral. Además, el contrato incluye la dotación de equipo de seguridad,
que consiste en una lona para que los propios zafreros elaboren un protector para las
piernas, también incluye la dotación de equipo de trabajo, que consiste en un machete
y en algunos casos un cuchillo y azadón. Por último, incluye la vivienda, que en la
mayoría de los casos consiste en viviendas colectivas o galpones precarios que
comparten varias familias.
En la investigación, la OIT(2002) revela además que los niños, niñas y
adolescentes en general no contraen ningún tipo de contrato, por tanto no se les
provee de ningún tipo de equipo de seguridad, ni son tomados en cuenta para ningún
beneficio social. Por lo que existe un esfuerzo por invisibilizar el trabajo de niños,
niñas, adolescentes y en buena parte de las mujeres adultas; porque los cañeros
propietarios y los contratistas señalan que ellos no contratan a menores y que la
277
participación de estos en la zafra es responsabilidad de los padres. Los padres a su
vez mencionan que sus hijos sólo son ayudantes, y que los únicos zafreros son ellos.
Salario o ingreso
La distinta división del trabajo determina a su vez la forma de pago y los
ingresos que perciben los niños, niñas y adolescentes incorporados en la zafra. En
Tarija el pago es fijo y en forma mensual para los que trabajan como ayudantes, y el
monto fluctúa en los varones desde 50 hasta 600 bolivianos, es decir entre 7.3 y 88.7
dólares USA, para el momento de la investigación. Las féminas perciben menos
ingresos, aproximadamente hasta un máximo de 300 bolivianos mensuales. En Santa
Cruz son muy pocos los que declaran percibir una remuneración mensual, puesto que
la modalidad de pago es por tonelada de caña cosechada, que fluctúa entre 14 y 17
bolivianos. Sin embargo, en su gran mayoría no son los niños, niñas y adolescentes
quienes perciben de manera directa esta remuneración, puesto que son considerados
como ayudantes. Solo los padres o responsables adultos son los que contraen los
tratos con los Contratistas.
El informe en cuanto a la inversión del dinero por parte de los menores
puntualiza que los ingresos percibidos por los niños, niñas y adolescentes, están
orientados a la satisfacción de necesidades básicas como alimentación y vestido, y
sólo entre el 10% y el 20% se traduce en ahorro.
La modalidad distinta de pago anotada anteriormente sólo se refiere al trabajo
de los niños, niñas y adolescentes, puesto que el pago tanto a los zafreros adultos en
Tarija como en Santa Cruz es por tonelada cosechada, la misma oscila entre 14 y 25
bolivianos. Según estimaciones el zafrero con su ayudante en Tarija o en Santa Cruz,
278
cosecha en promedio entre 2 y 3 toneladas diarias, obteniendo mensualmente un
ingreso aproximado de 1200 bolivianos, percibiendo en los 6 meses de zafra
alrededor de 7.200 bolivianos, de los cuales descontando los gastos retornan a sus
lugares de origen con alrededor de 5.200 bolivianos.
La percepción del trabajo de los niños, niñas y adolescentes varía según los
distintos actores entrevistados y de acuerdo al departamento. En Tarija y en Santa
Cruz muchos de los padres y madres se declaran en contra del trabajo de sus hijos,
otros tanto dicen no estar de acuerdo pero se resignan, aceptan y dan su aprobación
para el trabajo de sus hijos. Sobre las razones por las que trabajan los niños, niñas y
adolescentes, los padres y madres declaran básicamente la necesidad económica y en
segundo término, principalmente las madres, resaltan el aprendizaje a través del
trabajo. A su vez, existe una evasiva notoria de los padres en reconocer los riesgos
que implica la incorporación de sus hijos a esta actividad laboral; sin embargo
terminan reconociendo la presión a la que están sometidos por las duras jornadas de
trabajo y las inclemencias del tiempo, así como las enfermedades, accidentes y en
menor escala el abandono escolar.
Escolaridad
Según el informe, en Tarija en promedio un 90% de los niños, niñas y
adolescentes no asisten a la escuela. En Santa Cruz es menos critico, pero también
alarmante, el 55% de los varones y el 33% de las mujeres están excluidos del derecho
a la educación. En cuanto al nivel de instrucción, en Tarija el 90% no superó el quinto
grado de primaria, mientras en Santa Cruz mas del 50% de los varones no superaron
este nivel, mejorando levemente en el caso de las mujeres. Indagando sobre las
razones tanto de la exclusión escolar como sobre el bajo nivel de instrucción, la
respuesta es principalmente por carencia económica asociada a la necesidad de
279
trabajar. Junto a ello, y sobre todo en Tarija, se identifica la ausencia de grados
superiores en las escuelas de las áreas rurales.
Salud, seguridad y riesgos
En cuanto a la salud, el informe advierte que los problemas de salud de los
niños, niñas y adolescentes que trabajan en la zafra están íntimamente relacionados
con sus condiciones de vida y de trabajo. En general viven en campamentos precarios
con altos niveles de hacinamiento sin acceso a servicios básicos como agua potable y
sistemas de desechos sólidos, además de estar expuestos durante más de 12 horas
diarias a las duras condiciones de este tipo de trabajo y a las inclemencias del tiempo
en los cañaverales, sumado a una dieta alimentaría deficiente en calorías, proteínas y
minerales. Estos factores hacen de esta población un grupo altamente vulnerable a
enfermedades infectocontagiosas, respiratorias y gastrointestinales, sin contar con los
frecuentes accidentes de trabajo. El principal problema para la atención de la salud
radica en los escasos centros de salud cercanos a los campamentos de zafreros y en la
falta de recursos económicos para acceder a ellos. Por ello tanto en Tarija como en
Santa Cruz, mayoritariamente los niños, niñas y adolescentes señalan que atienden su
salud en los mismos campamentos y que en situaciones extremas a los escasos
centros de segundo o tercer nivel.
Respecto a los riesgos, de acuerdo al informe de la OIT (2002), los mayores
riesgos identificados por los propios niños, niñas y adolescentes involucrados en la
zafra son las cortaduras provocadas por el machete y las picaduras de víboras.
Asimismo, el mayor maltrato psicológico identificado se refiere a la presión por
cumplir con el trabajo encomendado, lo que les produce miedo a no cumplir con el
cupo de producción establecido. Como principales aspecto negativo resaltan las
condiciones duras de las jornadas de trabajo, que abarcan 12 horas; además del
280
tiempo que utilizan en trasladarse de las viviendas a los cañaverales. En el caso de las
niñas está el cumplir con las tareas de la cocina.
Al analizar el estudio de la OIT (2002), se observa que éste es revelador de la
situación de explotación en que se encuentran miles de niños trabajando en el sector
de la agricultura, en este caso en las plantaciones de caña de azúcar de Bolivia. Son
niños que no tienen oportunidad de ir a la escuela o la abandonan prematuramente
debido a la carga de trabajo; ya que diariamente trabajan 12 horas aproximadamente,
por lo que se ven vulnerados en su derecho al estudio consagrado en la Constitución
política de Bolivia (1.995), viven duras condiciones de trabajo, expuestos a riesgos
como las inclemencias del tiempo, desde el frío intenso de las madrugadas, hasta el
sol abrasador de la tarde; con posibilidades de sufrir cortes con el machete o con las
afiladas hojas de la caña. Son niños mal alimentados que unido a la carencia de agua
potable pueden padecer de enfermedades gastrointestinales; eso sin contar las
posibles picaduras de serpientes, las lesiones de columna o las enfermedades
respiratorias que debilitan su salud.
La familia ve violentado su derecho a la vivienda cuando en la temporada de
la cosecha de la caña, muchos padres de zonas pobres ante la encrucijada de dejar los
hijos solos o traerlos con ellos, prefiere que toda la familia se traslade a los sitios de
la zafra, llegando a los campamentos zafreros y se instalan hacinadas en precarias
viviendas colectivas donde duermen y cocinan, pasando los seis meses de cosecha
trabajando duramente todos los miembros.
Los padres ante la necesidad de sobrevivir y realizar una mejor zafra para
cumplir con el cupo de producción establecido por los contratistas, involucran a toda
la familia en este proceso, dándole menor prioridad a la educación de los hijos, a
pesar de ser corresponsables junto con el Estado en la misma, de acuerdo a lo
establecido por la Constitución Boliviana.
281
La industria azucarera de Bolivia se concentra en los departamentos de Santa
Cruz y Tarija, se trata de aproximadamente 90 mil hectáreas de cultivo que producen
anualmente cerca de 8 millones de quintales de azúcar. En el año 2001 esta
producción reportó al país 125 millones de dólares. Estas cifras positivas, lejos de
endulzar las estadísticas de una golpeada economía latinoamericana, encubren el
drama humano de cerca de 40 mil personas que cada año entre los meses de mayo y
octubre migran a las zonas cañeras del país.
Los zafreros como se les llama a estos trabajadores, son vinculados por
contratistas intermediarios, que viajan a las comunidades de origen a establecer
contratos entre los trabajadores y los empleadores; estos intermediarios acostumbran
dar un adelanto de dinero a los zafreros para comprometerlos con la cosecha. Este
mecanismo informal de contratación, en el que media tan solo un acuerdo verbal, está
prohibido expresamente en la legislación boliviana. De este modo, los empresarios
eluden sus responsabilidades en cuanto a la seguridad social y atención médica, o
aplican jornadas laborales de más de 12 horas diarias. Del estudio se puede detectar
que los empleadores no cumplen con las condiciones de trabajo establecidas para esta
actividad, si esto es así, se estaría incumpliendo con la Constitución Política de
Bolivia (1.995), la cual garantiza las condiciones de seguridad e higiene, asistencia
médica, seguro social y dotación de vivienda, entre otros derechos.
El trabajo infantil en la cosecha de la caña priva a miles de niños, niñas y
adolescentes de vivir y disfrutar de su infancia e interfiere con su desarrollo físico y
mental, vulnerándose la Convención de los Derechos del Niño (1989), de la cual
Bolivia es país ratificante.
En Bolivia, también se encuentran niños, niñas y adolescentes trabajando en
las zonas mineras. Este país ha sido considerado tradicionalmente como minero, y
282
esta actividad ha sido permanente e importante para la vida económica, social y
política de Bolivia, donde el trabajo infantil en la minería artesanal a pesar de no ser
un fenómeno nuevo, recobro nuevas dimensiones a partir de la década del ochenta,
como consecuencia de la situación económica y social que vivió el país en las últimas
décadas. La actividad minera artesanal se caracteriza porque basan su productividad
en tecnologías muy primitivas y en la incorporación de mayor mano de obra, en
muchos casos familias enteras de trabajadores, se incorporan al proceso de
producción. En estas condiciones, este sector de la minería considerado minería
artesanal, precisamente por los métodos de producción que utiliza incorpora la mano
de obra de niños, niñas y adolescentes.
En un estudio realizado en conjunto por la Organización Internacional del
trabajo y el Fondo de las Naciones Unidas para la Infancia (2004), acerca del trabajo
de niños, niñas y adolescentes en la minería artesanal de Bolivia, se estableció la
presencia de aproximadamente 3.800 niños, niñas y adolescentes mineros en los
municipios donde se concentra esta actividad. Cifra que es significativa porque
representa de acuerdo al estudio el 10% de personas ocupadas en la actividad minera.
Estos niños, niñas y adolescentes, trabajan en su mayoría en labores de superficie,
ocupados de cargar, trasladar y seleccionar mineral y de otras tareas igualmente
pesadas relativas al procesamiento del mineral.
Dentro de las minas, en los socavones, donde trabajan sobre todo los
adolescentes, pero también en algunos casos niños, realizan labores de ayudantes de
sus padres o de otros adultos, expuestos a la inhalación de gases tóxicos y otros
peligros, cargando herramientas y mineral e incluso en tareas de perforación y disparo
de dinamita. Pero también un gran número de ellos trabaja en las tareas de la minería,
que tiene que ver con el rescate de minerales en los ríos. Según el estudio los niños,
están obligados a trabajar para contribuir al ingreso de sus familias, que pertenecen a
los sectores mas pobres de la sociedad.
283
La minería artesanal en Bolivia, en la que se ha establecido la presencia de
niños, niñas y adolescentes trabajadores, está concentrada en dos zonas geográficas
muy distintas entre sí. Por un lado, los centros mineros tradicionales de la zona
andina donde se explota estaño, plata y zinc, ubicados en los departamentos de Oruro
y Potosí. Por el otro, los centros mineros auríferos del municipio Tipuani, en el norte
tropical del departamento de La Paz.
La minería es la principal actividad económica de esta zona, y las otras
actividades, como el comercio y los servicios, dependen en gran medida de ésta. Los
siete municipios que concentran la actividad de la minería artesanal están, uno en La
Paz, dos en Oruro y cuatro en Potosí, en el año 2001 tenían una población de
aproximadamente 286 mil habitantes y cerca de 68.000 hogares. De éstos habitantes,
215 mil viven en los centros mineros propiamente dichos y más de 38.000 están
ocupados en la minería. En los centros de la minería artesanal, el 12% son niños,
menores de 10 años, el 20% son niños entre 11 y 13 años, y el 56% son adolescentes
entre 13 y 18 años. ( OIT-UNICEF, 2004 )
Con respecto a la actividad minera artesanal, realizada por niños, niñas y
adolescentes, el estudio en conjunto de las dos organizaciones internacionales, señala
que los niños, niñas y adolescentes participan en las diferentes etapas del trabajo
minero. Trabajan igualmente en las minas subterráneas como en las superficiales,
como son los depósitos aluviales y ríos; y realizan tareas tanto en la explotación
como en el procesamiento del mineral. Las tareas vinculadas al procesamiento del
mineral, que incluyen su traslado y clasificación demandan mayor cantidad de mano
de obra de niños y de mujeres adultas porque se las considera labores más aptas para
ellos. En cambio, en las tareas relacionadas con la explotación, especialmente en las
minas subterráneas, como la perforación de la roca y el disparo de dinamita, en
general se privilegia la mano de obra de adultos. La manipulación de los carros
metaleros que transportan el mineral del interior de la mina a la superficie es otra
284
tarea en la que participan frecuentemente adolescentes y niños. En las minas donde
no hay carros, éstos transportan el mineral en sus espaldas. Igualmente, se encuentran
niños, en las bocaminas, escogiendo, con ayuda de una pala o directamente con las
manos, la carga que luego es transportada a los lugares de procesamiento.
En referencia al procesamiento, señala el informe que los niños trabajan por
ejemplo en la molida del mineral, para ello utilizan el quimbalete: que es una
herramienta precaria constituida por una piedra en forma de medialuna En el caso de
los adolescentes que se insertan en el trabajo de interior de la mina, la mayoría lo
hacen en calidad de trabajadores eventuales bajo la dependencia de un cabecilla. Sin
embargo, también hay casos de niños, niñas y adolescentes entre los 8 y 12 años que
realizan trabajos en interior de la mina. Esto ocurre por varias razones; en algunos
casos, los parajes de explotación son tan angostos que sólo un niño o un adolescente,
por su tamaño, puede entrar en ellos, con enormes riesgos para su seguridad. En otros
casos, las viudas de los trabajadores se ven obligadas a ingresar a laborar al interior
de la mina y llevan a sus hijos como ayudantes. Los niños también ingresan a los
socavones como ayudantes de sus padres o de terceras personas para cargar mineral o
herramientas. Uno de los trabajos que realizan los adolescentes en el interior de la
mina es el de ayudantes de los maestros perforistas. Éstos perforan la roca
manualmente con combo y barreno para colocar las cargas de dinamita, y sus
ayudantes les pasan las herramientas y limpian y recogen los desechos de esta
actividad. Los adolescentes, y en algunos casos niños también trabajan en la
preparación de los explosivos, manipulando la masa de éstos.
Otra actividad a que se dedican los niños es al embolsado del mineral
procesado, empleando una pala, los niños llenan las bolsas de un quintal y las niñas y
sus madres las cosen. En el exterior de la mina, las niñas se dedican también a otras
actividades, como la venta de comida y refrescos y el cuidado de los depósitos de
mineral y herramientas. En centros mineros grandes, como el Cerro Rico de Potosí,
285
niños, y niñas se dedican también a la venta de muestras de mineral a los turistas que
visitan el lugar; y los adolescentes trabajan como guías recibiendo un pago mínimo
de las agencias de turismo.
Señala el estudio, que entre las principales causas por las que ingresan a
trabajar los niños, niñas y adolescentes son la contribución económica a la
subsistencia de su familia; en el caso de los adolescentes, para continuar sus estudios
o para atender otras necesidades personales o cuando deben asumir la jefatura del
hogar, ya sea por la muerte de los padres, abandono o independencia de éstos. En
algunos casos los padres dejan de cumplir sus obligaciones por desocupación,
discapacidad o alcoholismo.
También el estudio informa que el 77% de los niños que trabajan no reciben
un ingreso, la mayoría de los niños que trabajan en unidades económicas familiares
donde su trabajo responde a la necesidad de contar con fuerza de trabajo que rebaje
los costos de operación debido a que estas unidades, que en general se desenvuelven
en situaciones de subsistencia, no cuentan con recursos para la contratación de
trabajadores ajenos a la familia. En este contexto, su trabajo adquiere la forma de
ayuda y es percibido familiar y socialmente como parte de la responsabilidad familiar
y con un sentido de obligatoriedad y obediencia hacia sus padres. El esfuerzo del niño
no se traduce en una remuneración especifica porque es parte del ingreso que obtiene
el padre.
Con respecto al aporte o contribución de los niños, niñas y adolescentes al
hogar, en el informe se señala que éstos aportan el 14% del ingreso total del hogar,
con el 27% de las horas trabajadas, con el 20% de las horas de trabajo remunerado y
con el 69% de las horas de trabajo no remuneradas. Es decir, su contribución es muy
importante, esto podría explicar también la enorme presión que existe para que ellos
trabajen, incluso con la expectativa de recibir ingresos tan bajos. En referencia a su
286
situación escolar, el informe señala que el trabajo de niños, niñas y adolescentes en la
minería constituye un obstáculo para su educación. En términos generales, en los
centros de la minería artesanal, la mayoría de la población sólo alcanza el nivel
primario de educación. El 68% cursó entre uno y siete años de escolaridad, mientras
que sólo el 9% completó la educación primaria y menos del 3% obtuvo el
bachillerato siendo la tasa de deserción de 6% en primaria y de 85% en secundaria
Con respecto a los riesgos, la investigación de la OIT y UNICET (2004)
advierten que éstos tienen que ver con la manipulación de cargas explosivas y con la
voladura de rocas. Los niños trabajadores están expuestos a la inhalación de gases
tóxicos residuales de las explosiones por la falta de ventilación en los socavones. La
disminución o pérdida de la audición provocada por el ruido de las explosiones, de las
perforadoras y otras máquinas es otro riesgo para la salud de quienes participan en
esta actividad. Igualmente, la absorción de polvo y partículas mineralizadas
producidas por las perforaciones.
El trabajo prologado en posiciones incómodas en socavones estrechos y la
manipulación de carga de pesos excesivos es también una causa frecuente de
problemas de salud, especialmente para los músculos y los huesos. En los trabajos
relacionados al procesamiento de los minerales, los niños, niñas y adolescentes están
expuestos a accidentes, como el aplastamiento de pies o manos al manipular el
quimbalete, esta precaria herramienta utilizada en la molida del mineral puede
producir también afecciones musculares de tendones y articulaciones por su acción
repetitiva y prolongada. El contacto y la inhalación de substancias tóxicas utilizadas
en la concentración del mineral, como el xantato pueden provocar afecciones
orgánicas agudas y crónicas. Igualmente los ríos contaminados con mercurio,
sulfuros, residuos minerales, aguas negras y basura, expone a niños, niñas y
adolescentes a afecciones de la piel, enfermedades respiratorias, así como a
enfermedades por intoxicación crónica y enfermedades diarreicas agudas.
287
El trabajo de los niños, niñas y adolescentes en las actividades mineras de
Bolivia, permite reflexionar acerca de la violación de sus derechos fundamentales, la
minería implica graves peligros para la vida, la salud y educación de estos menores y
sobre todo cuando su número aumenta cada día. El primer dato importante de la
participación de los niños, niñas y adolescentes en el trabajo de la minería artesanal es
su proporción. Los niños, niñas y adolescentes constituyen el 46% de la población
de los centros mineros y el 10% de los ocupados en la minería.
Existen convenios internacionales y leyes nacionales destinados, a proteger
la vigencia de esos derechos. Así, la Convención sobre los Derechos del Niño
aprobada por la Asamblea General de las Naciones Unidas el 20 de noviembre de
1989 y ratificada por el Estado boliviano en el año 1990, en su definición de niño
señala a todo ser humano desde su nacimiento hasta los 18 años de edad y como tal
tiene derecho “a estar protegido contra la explotación económica y contra el
desempeño de cualquier trabajo que pueda ser peligroso o entorpecer su educación o
que sea nocivo para su salud o para su desarrollo físico, mental, espiritual, moral o
social” (art. 32). El trabajo de niños, niñas y adolescentes en la minería es un
trabajo peligroso, entorpece su educación y es nocivo para el desarrollo integral del
niño y adolescente.
En ese mismo orden de ideas, el Convenio 182 de la Organización
Internacional del Trabajo (OIT, 1999), sobre la prohibición de las peores formas de
trabajo infantil y la acción inmediata para su eliminación, ratificado por el Estado
boliviano en junio de 2003, establece una categoría denominada Trabajo Infantil
Peligroso. Esta categoría abarca el trabajo que, por su naturaleza o por las
condiciones en que se lleva a cabo, es probable que dañe la salud, la seguridad o la
moralidad de los niños y niñas. Estos tipos de trabajo y su localización deben ser
determinados por la legislación nacional o por la autoridad competente, previa
288
consulta con las organizaciones de empleadores y trabajadores. En el ámbito de la
legislación nacional, el Código del Niño, Niña y Adolescente, que entró en vigencia
en el año 2000, es el instrumento de referencia más importante para la vigencia de los
derechos de este sector de la población. Este Código tiene por objeto regular el
régimen de prevención, protección y atención integral de todo niño, niña y
adolescente con el fin de asegurarles un desarrollo físico, mental, espiritual,
emocional y social en condiciones de libertad, respeto, dignidad, equidad y justicia.
Este Código establece en su artículo 126 que la edad mínima para trabajar en Bolivia
son los 14 años.
Establece, igualmente el Código, la prohibición de ciertas actividades
laborales como los trabajos peligrosos, insalubres y atentatorios a la dignidad de los
adolescentes. Entre estos trabajos peligrosos e insalubres se encuentran las
actividades relacionadas con la minería, como el transporte de carga y descarga de
pesos desproporcionados a la capacidad física, trabajos en canteras, subterráneos,
bocaminas y en lugares que representen riesgo, manejo de substancias que
perjudiquen el normal desarrollo físico y mental, trabajo que implique manipulación
de explosivos, materiales inflamables o cáusticos, trabajo en lugares de
desprendimiento de polvos, gases, vahos o vapores irritantes y otros tóxicos, trabajos
en sitios de altas temperaturas o excesivamente bajos, húmedos o con poca
ventilación tal como se desprende del articulo 134.
La Ley General del Trabajo, por su parte, en su artículo 58 establece la
prohibición del trabajo de menores de 14 años, salvo en el caso de los aprendices y en
su artículo 59 prohíbe el trabajo de menores en labores peligrosas, insalubres o
pesadas y en ocupaciones que perjudiquen su moralidad o buenas costumbres. La
incorporación de niños, niñas y adolescentes al trabajo de la minería responde a estas
características y, por lo tanto, su erradicación progresiva es una prioridad nacional e
internacional.
289
TERCER COMPONENTE O FASE
Integración e interpretación de los hallazgos
Una vez analizados e interpretados los resultados obtenidos en cada uno de los
países en estudio, se procedió a integrar los hallazgos de la investigación etnográfica
con los hallazgos de los estudios comparados, e insertarlos dentro de marcos teóricos
más amplios, para luego buscar sus aplicaciones y significaciones dentro de la
investigación doctoral. Para ésta fase se tomó en cuenta el objetivo del estudio, las
categorías conceptuales, el marco teórico, el contexto de los países estudiados, la
naturaleza de los datos recogidos y analizados, así como la experiencia del
investigador.
Teniendo como punto de referencia la teoría del cambio social en Giddens
(1999), según la cual el gobierno existe entre otros, para suministrar seguridad y
bienestar colectivo, promover el desarrollo activo del capital humano, y en
observancia en cuanto la dirección de las expectativas sociales hacia el examen de
las ejecutorias del gobierno central, en término de las políticas públicas en las cuales
se enmarca la protección social a niños, niñas y adolescentes, en acción que debe
estar en sincronía con la exaltación de los derechos humanos propios de éste
segmento poblacional, por lo que la proyección que asuma la protección del Estado a
las garantías sociales atinentes a los niños, niñas y adolescentes, puede a la par de
convertirse en una opción que tenga como norte el bienestar económico y social de
éstos grupos humanos, impactar positivamente la calidad de vida de los sujetos
involucrados.
A pesar de la acción socializante que debe tener el Estado y que las informa a
través de sus prácticas discursivas en concordancia con los contenidos de las normas,
a través de las cuales se logra el asidero jurídico que permite de alguna manera la
290
convivencia humana, pero que no siempre hay la protección eficaz a los grupos
vulnerables como son los niños, niñas y adolescentes, los cuales aspiran tener una
infancia vivible en consonancia con sus sueños y juegos; y un futuro prometedor
donde logre una convivencia humana dentro de un marco de justicia social, libertad,
paz, derechos y responsabilidad ciudadana.
Tanto en Venezuela como los demás países latinoamericanos involucrados en
el estudio de tesis doctoral, existe la posibilidad de que con la incorporación de
mejoras en las políticas públicas, colocando éstas en sincronía con las expectativas
sociales de cada nación, haya la oportunidad de tener avances significativos que
mejoren el desarrollo de los pueblos, guiándolos por horizontes donde cada día
signifique mejoramiento de la calidad de vida de las poblaciones, dentro de un
proceso equilibrado de satisfacciones económicas y sociales que alcance a toda la
humanidad.
A pesar de las buenas intenciones de las políticas públicas de los Estados, hoy
día es de observancia que algunos países que han logrado mejorar su crecimiento
económico, éste está en asincronía con el mejoramiento social de su gente, aunque
hayan leyes que en teoría buscan la protección de la población.
Teniendo como norte la integración de los hallazgos se puede señalar que en
la misma se encontraron analogías y contrastes. Entre las mismas se han visualizado:
1.- Con respecto a la situación económica y social de los países tanto para
Venezuela, Colombia, Ecuador, Perú y Bolivia, la década del noventa fue difícil,
éstas naciones se vieron afectadas por la inestabilidad económica y financiera, los
programas de ajuste estructural impuestos a las economías en desarrollo por
organismos internacionales, ocasionaron recortes al gasto social, incidiendo en forma
desproporcionada en la población en estado de pobreza, afectándola ya que se
291
produjo aumento del desempleo, reducción de los ingresos provenientes del trabajo,
extensión del sector informal, baja calidad de los servicios básicos sociales,
principalmente salud y educación, elevadas tasas de pobreza, desigualdad en la
distribución de los ingresos, situación que comprometió las condiciones
socioeconómicas de las familias, en especial las de menores recursos económicos,
obligando a todos sus miembros, entre ellos los de menor edad, a buscar alternativas
para su sustento. Una consecuencia importante que trajo la reducción del gasto social
fue la reducción de los presupuestos educativos de éstos países, alejando las
posibilidades de una educación de calidad. Organismos internacionales señalados en
la investigación, indican cómo en éstos países estudiados del 30 % al 60 % de los
niños no terminó la educación básica para la década ya nombrada.
Los problemas económicos y sociales de éstos países tuvo su punto más
sensible al término de la década, los años 1998 y 1999 fueron de recesión económica
aguda, experimentando para el año 2000 una moderada recuperación, la cual fue
mejorando durante el primer quinquenio del presente siglo, así las cifras
macroeconómicas de los diferentes países con algunas diferencias, pero con un
continuo crecimiento, han registrado una mayor tasa de crecimiento en su economía,
expresado por un mayor dinamismo en sus exportaciones, aumento del PIB, el
repunte de la inversión privada, aumento de la extracción petrolera, acceso a nuevos
mercados entre otros, pero hay que acotar que el crecimiento de éstos países en los
tres primeros años del siglo no fue uniforme, porque para el caso de Venezuela, éste
país fue el que registró el más bajo nivel de crecimiento dentro de los países de la
región Latinoamericana y del Caribe, según estudios realizados por organismos
internacionales ya previamente nombrados en capítulos anteriores; situación que ha
ido superándose en los años 2004 y 2005, en parte por el aumento de los precios del
petróleo y la activación de la economía.
292
Es de hacer notar que aunque estos países manifiestan recuperación en su
economía, ésta activación económica si es que las cifras reflejan la realidad, se podría
señalar que aunque estos países están saliendo de sus crisis económicas, éste
mejoramiento en la economía no está en sincronía con la situación social que siguen
manteniendo los mismos, la economía creció, pero no se vieron favorecidos los más
pobres, siendo el desempleo uno de los problemas más complejos que presentan,
reflejando el subempleo y la informalidad el deterioro de la calidad del trabajo, la
pérdida de ingresos y el aumento de la desigualdad. El componente social está
particularmente ausente de las políticas económicas para lograr un crecimiento
realmente sostenible, resultando más afectados los hogares más pobres, para quienes
se amplía la brecha de desigualdad que ha caracterizado a las naciones en estudio, lo
que trae como consecuencia que la población más vulnerable como son los niños,
niñas y adolescentes se vean violentados en sus derechos.
2.- Con respecto a la situación jurídica, tanto en Venezuela como Colombia,
Ecuador, Perú y Bolivia que son los países en estudio, a través de sus diferentes
Constituciones, manifiestan que son repúblicas democráticas, descentralizadas,
independientes, soberanas, constituidas en Estado social de derechos, entre otros. En
cada una de éstas Cartas Fundamentales se prevé los fines primordiales del Estado
entre los cuales por analogía se detectan: La defensa y el desarrollo de las personas,
el respeto por la dignidad humana, respeto por la vida privada. Promover el bienestar
general y la prosperidad de cada uno de los pueblos fundamentado en la justicia, la
vigencia de los derechos humanos, en el desarrollo integral y equitativo en beneficio
del colectivo. Cada una de las Constituciones en estudio dan plenas garantías de
respeto a los derechos humanos considerando a todas las personas iguales, gozando
de los mismos derechos de libertades y oportunidades, sin discriminación en razón de
raza, sexo, edad, etnia, idioma, religión, filiación política, condición social.
293
En cada una de éstas Constituciones en referencia a los derechos económicos
y sociales, se da garantías para la libertad de trabajo, se considera al trabajo como un
derecho y un deber social, donde toda persona tiene derecho a un trabajo en
condiciones dignas y justas. Se observan principios fundamentales para el trabajo
como son: igualdad de oportunidades para los trabajadores, remuneración, mínima
proporcional a la calidad y cantidad de trabajo, duración de las jornadas de trabajo, el
descanso semanal, las vacaciones entre otras.
En referencia a la educación, ésta es considerada como un derecho humano;
asumida por los Estados como uno de sus fines fundamentales, al igual que con la
salud, garantizada como parte del derecho a la vida.
En atención a la familia en cada una de las Constituciones en estudio se
indica la protección a la misma, estableciéndose a su vez la corresponsabilidad que
tiene la familia.
Con respecto a la situación jurídica de los niños, niñas y adolescentes, los
países en estudio, atendiendo a las llamadas de la Organización Internacional del
Trabajo, a la Convención sobre los derechos del niño y otros organismos
internacionales han venido adecuando sus Constituciones y leyes nacionales a las
recomendaciones de éstos organismos. Así se observa como los diferentes países,
han ratificado la doctrina de la protección integral, la cual está basada en la
declaración de los derechos del niño y la cual concibe una serie de principios rectores
que constituyen sus pilares fundamentales entre los cuales están: el niño como sujeto
de derecho, el interés superior del niño, la prioridad absoluta, la participación y el rol
fundamental de la familia en corresponsabilidad con la sociedad y el Estado en la
garantía de los derechos del niño y del adolescente. La nueva doctrina convirtió las
necesidades de los niños, niñas y adolescentes en derechos civiles, culturales,
económicos, políticos y sociales.
294
De ésta manera se observa que en cada uno de los países en estudio se ha
ratificado a través de una ley la Convención de los derechos del niño, la cual fue
adoptada por la Asamblea General de las Naciones Unidas el año de 1989,
constituyendo la Convención el marco fundamental a partir del cual los gobiernos
desarrollan sus políticas para la niñez y la adolescencia. Así entre los derechos del
niño y adolescente garantizados en las diferentes Constituciones, leyes y códigos de
los niños, niñas y adolescentes se aborda el derecho a la vida, a tener un nombre, a la
identificación, a ser inscrito en el registro, ser criados en una familia, libre desarrollo
de su personalidad, un nivel de vida adecuado, al ambiente, ser protegidos contra el
abuso y la explotación sexual, a la salud, a la educación, a recreación, libertad de
expresión, a información, a ser oído, a participar, a la protección en materia de trabajo
entre otros derechos.
En materia laboral, los países en estudio y ratificantes de la Convención sobre
los derechos del niño, han acogido el artículo 32 de la Convención, reconociendo y
garantizando el derecho de todo menor de 18 años a estar protegido contra la
explotación económica y contra el desempeño de cualquier trabajo peligroso que
entorpezca la educación o pueda ser nocivo para su salud y desarrollo físico, mental,
o moral. Reconociéndose así, la condición vulnerable de la infancia y adolescencia
en materia de trabajo. En observancia de ésta disposición las diferentes leyes y
códigos de niños, niñas y adolescentes en materia de trabajo tienen entre sus
disposiciones: la protección de los niños, niñas y adolescentes por el Estado, la
familia y la sociedad contra la explotación económica y el desempeño de cualquier
trabajo que entorpezca su educación, se garantiza jornadas de trabajo acordes con la
edad, prestaciones sociales y un salario proporcional a las horas trabajadas, horarios
especiales que permitan que el adolescente que trabaje pueda tener asistencia regular
a la escuela, autorización para trabajar, inscripción en el registro de adolescentes
trabajadores, vacaciones, examen médico anual, a inscripción en el Sistema de
Seguridad Social entre otros derechos laborales.
295
Igualmente los países atendiendo a la Organización Internacional del Trabajo
en su convenio 138 (1973), han ajustado sus Constituciones, leyes y códigos de
protección a los niños, niñas y adolescentes, a la edad mínima de admisión al empleo
la cual debe ser de 15 años, o no inferior a la edad en que cesa la obligación, con la
excepción para aquellos Estados miembros cuyas economías y medios de educación
sean insuficientes, donde la edad mínima para trabajar es de 14 años, observándose
que los países en estudio se han acogido a la excepción de 14 años como edad
mínima que requieren los adolescentes para trabajar.
En el mismo orden de ideas, se puede puntualizar que los países en estudio,
atendiendo también al Convenio 182 (1999) de la OIT sobre las peores formas de
trabajo infantil y la acción inmediata para su eliminación, se han comprometido para
adoptar medidas para determinar cuales son en cada país las peores formas de trabajo
infantil para proceder a su eliminación.
Si bien, los países en estudio, garantizan a través de sus Constituciones, leyes
y códigos la protección integral del niño, niña y adolescente, esto en realidad no se
está cumpliendo de acuerdo a lo esperado por las familias y la sociedad, como
advierte Popper (1986) los expectantes para este estudio, además de los niños, niñas
y adolescentes, están la familia y la sociedad, quienes esperan que se le garantice la
solución a sus problemas, aunque hay que agregar que éstos últimos junto con el
Estado son corresponsables en la solución de los mismos. De acuerdo a Popper existe
una asincronía entre el marco jurídico y la realidad económica y social que presentan
estos países, que de alguna manera empujan a los niños, niñas y adolescentes hacia el
trabajo; lo cual queda evidenciado en la investigación tanto etnográfica como
comparada, donde a través de la misma se da a conocer el trabajo de niños, niñas y
adolescentes, tomando en cuenta principalmente cada una de las categorías
propuestas y analizadas en los diferentes países.
296
3.- Con respecto a la integración de los hallazgos provenientes del examen de las
categorías edad, escolaridad, jornada laboral, salario, salud y seguridad, descanso,
área o sector de trabajo, situación familiar, estudiados en cada uno de los países
objeto de ésta investigación se puede puntualizar lo siguiente:
Edad:
Los datos producto de la investigación de los diferentes países, revelaron que
los niños y niñas trabajan a partir de los 7 años, inclusive hay países donde se
identifica la presencia de niños y niñas de 5 años. Estos datos son preocupantes
porque se trata de niños que están perdiendo su infancia, sus sueños, sus juegos, su
recreación, expuestos a abusos físicos y psicológicos.
Hay muchas causas por las cuales los niños, niñas y adolescentes entre los 5
y los 17 años trabajan. Siguiendo a Popper (1979), en una critica al holismo, como
método de análisis de los factores relacionados con un problema social, Popper
sostiene que no todos los factores presentes en una sociedad tienen la misma
importancia en esa relación con un problema determinado; unos son más relevantes
que otros en esa relación, por lo tanto, es sobre los mas relevantes que debe hacerse
énfasis y no sobre todos los factores.
Tomando en cuenta el planteamiento de Popper, se puede señalar que entre
las causas por las cuales los menores trabajan, se ha podido detectar la pobreza de las
familia, por lo que los niños, tienen que contribuir económicamente a la subsistencia
de la misma; los padres no pueden suministrar un ingreso debido a antecedentes de
violencia; falta de escuelas disponibles y accesibles; patrones culturales, ya que se
espera que los niños, participen del trabajo de la familia; los niños y niñas son muy
rápidos para algunas actividades (pueden recoger rápidamente desechos sólidos,
pueden penetrar fácilmente en los espacios de las minas) y también hay los casos de
297
que los padres se los llevan consigo al trabajo porque no disponen de guarderías para
dejarlos. Pero cualquiera sea la razón por las cuales los niños, niñas y adolescentes
trabajan, los niños y niñas menores de 14 años no deben trabajar y menos aún en las
condiciones de riesgo y explotación en lo que hacen.
A pesar de que el marco regulatorio de cada uno de los países estudiados,
señala 14 años como edad mínima para trabajar, se evidenció la vulneración de la
norma. Pero la violación de la misma es en forma continuada cuando se observan
adolescentes entre 14 y 17 años trabajando en actividades prohibidos para su edad y
consideradas de explotación laboral por las normas nacionales e internacionales, es el
caso de los adolescentes que trabajan en la recolección de desechos sólidos en el
Municipio Libertador del Estado Carabobo, Venezuela, donde el ambiente es
totalmente contaminante, no sólo por las enfermedades que se puedan contraer, sino
también por los riesgos que corren los menores al frecuentar un sitio donde acuden
adultos agresivos y violentos, tratando también de sobrevivir, hay la posibilidad de
que éste tipo de trabajo le mine al niño y al adolescente su autoestima y le impida
conseguir un pleno desarrollo social y psicológico.
En iguales condiciones se encuentran los niños, niñas y adolescentes de
Ecuador que trabajan como recolectores de desechos sólidos en los basurales, o los
niños y niñas de Perú realizando trabajo doméstico en hogares de terceros, o los niños
de Colombia, Perú y Bolivia trabajando en las minas, así como los niños trabajadores
en la zafra de la caña de azúcar de Bolivia; todos estos menores realizan actividades
sin tener una edad apropiada para los mismos; y donde en la mayoría de los casos el
trabajo que realizan es prácticamente invisible porque no está registrado en las cifras
estadísticas oficiales de los países en estudio.
298
Escolaridad:
Tanto en Venezuela como en los demás países latinoamericanos investigados
se detectó que los niños, niñas y adolescentes que trabajan, en la mayoría de los
casos no asiste a la escuela, un porcentaje bajo es el que asiste. A su vez es de
advertir que el porcentaje de niños, niñas y adolescentes que asiste a la escuela
presenta dificultades en su rendimiento, así como retraso escolar en 1, 2 ó 3 años.
De acuerdo a la investigación realizada existen varias causas por las cuales los
niños, niñas y adolescentes que trabajan no asisten a la escuela, entre ellas: Pobreza,
no tienen dinero para adquirir los útiles escolares, los padres no le dan la importancia
debida que tiene la escuela, creen que es más importante que el niño trabaje a que
vaya a la escuela, no existen suficientes escuelas en el sector donde viven y trabajan,
la extensa jornada laboral impide que el niño se registre en la escuela. De acuerdo a
las normas internacionales y nacionales, los niños que trabajan deben tener acceso a
la escuela, deben compartir su horario de trabajo y de estudio, deben tener facilidades
para continuar su educación.
Jornada Laboral:
En la investigación realizada en Venezuela (Municipio Libertador), los datos
no reportan jornadas mayores a 30 horas semanales, pero en la investigación
comparada realizada a los otros países, los datos si reportan jornadas de más de 30
horas semanales, inclusive se reportan jornadas de más de 12 horas diarias como es el
caso de los niños, niñas y adolescentes trabajadores en la zafra de caña de azúcar o
en la minería en Bolivia. De acuerdo a las disposiciones encontradas en las leyes y
códigos de protección al niño y adolescente, la norma es reiterativa en los diferentes
países en cuanto a las horas semanales que deben trabajar los menores que tienen
edad para hacerlo, señala la normativa que la jornada laboral no debe ser mayor de
299
30 horas a la semana, ni de 6 horas diarias, sobre todo para las edades entre 14 y 16
años, acotando además la legislación que las personas que hayan alcanzado la edad
mínima para trabajar y tengan menos de 18 años de edad, no pueden ejercer ningún
tipo de trabajo que esté expresamente prohibido por la ley, además se prohíbe el
trabajo del adolescente en horas extraordinarias.
En Venezuela, la Ley Orgánica del Trabajo (LOT, 1997) en su artículo 249,
prohíbe el trabajo de menores en minas, en talleres de fundición, en labores que
acarreen riesgos para la vida o la salud y en faenas superiores a sus fuerzas, o que
impidan o retarden su desarrollo físico y normal, igualmente Colombia en el código
del menor (1994) en su artículo 245, prohíbe a los menores los trabajos que tengan
que ver con sustancias tóxicas, trabajos de minería, trabajos en los que se tenga que
manipular con sustancias radioactivas, trabajos en los basureros, trabajos que
impliquen cargas pesadas, trabajos en fabricas de ladrillos, actividades agrícolas que
impliquen alto riesgo entre otros; así mismo el código de la niñez y adolescencia de
Ecuador (2003) en su artículo 87, prohíbe determinados trabajos a los adolescentes
entre los cuales están: en minas, basurales, canteras e industrias, en actividades que
impliquen manipulación de sustancias explosivas, tóxicas, en actividades que
requieran el empleo de maquinaria peligrosa entre otras.
Perú y Bolivia también prohíben en sus respectivos códigos cualquier tipo de
trabajo que pueda ser peligroso, que impida su educación, o que sea nocivo a su salud
o que pueda entorpecer su desarrollo físico, mental, espiritual, entre éstos están: el
trabajo en las minas, en los basurales, trabajos de carga pesada, trabajos en la
agricultura que sea peligroso.
A pesar que los países en estudio, tienen disposición legislativa expresa de
prohibición de determinados trabajos en los menores, la investigación evidencia que
300
los niños, niñas y adolescentes trabajan tanto en la basura, como en las minas,
agricultura, evidenciándose la vulneración de las normas.
Salario o Ingreso
Con respeto al ingreso, se detectó en los diferentes países que los niños, niñas
y adolescentes, trabajan con o sin ingresos, un porcentaje elevado no lo recibe, sobre
todo los niños y niñas que tienen menos de 10 años, son los que podrían estar
trabajando como acompañantes de sus padres, como una estrategia familiar, o por la
ausencia de sitios donde permanecer cuando los padres trabajan. En estos casos un
porcentaje de niños, niñas y adolescentes trabaja en grupos familiares, donde al padre
de familia le corresponde vender los productos o materiales logrados y luego
administrar los ingresos.
Muchos niños que trabajan con sus padres solo son considerados como
ayudantes, por ejemplo las familias que trabajan en la zafra de la caña de azúcar en
Bolivia, necesita del trabajo del niño y adolescente para poder cumplir con el cupo
de producción establecido por los contratistas, de manera que quien hace el contrato
y recibe el ingreso es el padre o la madre.
En otros casos se presenta la situación que los niños, niñas y adolescentes que
reciben ingreso, en un porcentaje de los casos deben entregarlo al padre o a la madre
para la contribución con los gastos familiares, lo que podría estar significando que
muchos niños, niñas y adolescentes aunque reciban ingresos, estos no van a ser
administrados por los mismos, sino que deben ser entregados al jefe de la familia para
su administración.
Igualmente se detectó a lo largo de la investigación, que en los diferentes
países los niños, niñas y adolescentes que logran obtener ingresos producto de su
301
trabajo diario, estos ingresos aunque reportan una ayuda a la familia, representan
una parte muy pequeña con respecto a los gastos que tiene que hacer la familia para
sobrevivir, tomando en cuenta que estas familias viven en situación de pobreza.
UNICEF (2000) establece en sus criterios que si el ingreso que percibe el
niño y adolescente en su situación de trabajo es inadecuado, es un indicador de
explotación laboral infantil.
Salud y Seguridad
En la investigación se perciben los riesgos en la salud a que están expuestos
los niños, niñas y adolescentes trabajadores. Estos realizan actividades superiores a
sus fuerzas en los casos que tienen que cargar bultos pesados, pudiéndose producir
daños óseos y desgarramientos musculares, riesgos de accidentes cuando sufren
cortaduras por vidrio o por herramientas filosas que tienen que manipular,
pudiéndose producir algún tipo de mutilación; riesgos por ingestión de alimentos
contaminados lo que conlleva a problemas gastrointestinales; riesgos por agresiones
físicas o verbales de otras personas como es el caso de los niños, niñas y
adolescentes que trabajan en los vertederos de basura en Venezuela y Ecuador.
También los niños que trabajan en las minas, están expuestos a riesgos de
ruido, vibraciones, temperaturas extremas, exposiciones a tóxicos, cargas pesadas,
picaduras de insectos, mordeduras de animales, tratos indebidos como es el caso de
Colombia y Bolivia. Otro caso sucede con los niños trabajadores en las plantaciones,
como es el caso de los niños que activan laboralmente en la zafra de caña de azúcar
de Bolivia, los cuales están expuestos a riesgos como cortaduras por instrumentos
cortantes, picaduras de víboras, maltrato psicológico por la presión de tener que
cumplir con un cupo de producción.
302
Los problemas de salud de los niños, niñas y adolescentes que trabajan en la
zafra están íntimamente relacionados con sus condiciones de vida y trabajo. En
general viven en campamentos precarios, con altos niveles de hacinamiento, sin
servicios básicos como agua potable, y además de estar expuestos por mas de 12
horas diarias a las inclemencias del tiempo, sumado a una dieta alimentaría deficiente
en calorías, proteínas y minerales, estos factores hacen de la población de menores,
un grupo vulnerable a enfermedades infecto contagiosas, respiratorias y
gastrointestinales, lo cual esta aunado a los accidentes de trabajo.
Los diferentes riesgos encontrados en los países en estudio se pueden
reagrupar de la siguiente manera:
• Accidentes laborales, por ejemplo heridas como cortes y pinchazos.
• Riesgos físicos, causados por trabajar a la intemperie, en toda clase de
condiciones climáticas.
• Riesgos químicos, por ejemplo si hay sustancias tóxicas en los sitios de
trabajo.
• Riesgos ergonómicos, por ejemplo levantamiento de peso y dolor de espalda
crónico.
• Riesgos psicológicos, por ejemplo, baja autoestima, alucinaciones y acoso
sexual.
• Riesgos biológicos: muchos trabajadores sufren de protozoos intestinales,
infecciones oculares, enfermedades de la piel y diarrea.
• Otros: sufren de mordeduras de perros, ratas, serpientes y escorpiones;
violencia entre diferentes grupos.
Al revisar el marco regulativo, de los países en estudio, tanto en las
Constituciones como en las Leyes y Códigos de protección a los niños, niñas y
303
adolescentes, se observa que la protección jurídica es unánime en cuanto al derecho a
la salud que debe tener todo ciudadano, dándose prioridad a la población mas
vulnerable y entre estos los niños, niñas y adolescentes. Los diferentes Estados
garantizan la salud como parte del derecho a la vida. Sin embargo la investigación es
reveladora de la situación no saludable en que trabajan los niños, niñas y
adolescentes, los cuales tienen muy poco acceso a planes, programas y servicios de
prevención y seguridad. Los niños, niñas y adolescentes al trabajar y correr riesgos
en su salud y seguridad, este tipo de trabajo es considerado por el Convenio 182 de la
OIT (1999) como de las peores formas de trabajo infantil, y obliga a los países
ratificantes del Convenio a su eliminación.
Descanso
Si se considera que el descanso es el tiempo libre, que debe tener toda persona
para la recuperación de las energías perdidas; y para realizar actividades de
recreación y disfrute del tiempo libre; en atención a la investigación, se detecto que
los niños, niñas y adolescentes que trabajan no tienen el descanso necesario para
juegos, recreación, esparcimiento, debido a las extensas jornadas de trabajo a que
están expuestos algunos niños, como es el caso de los niños, niñas y adolescentes
trabajadores de la zafra de caña de azúcar en Bolivia, quienes trabajan juntos con sus
padres de sol a sol.
En la investigación, también se advierte la presencia de niños, niñas y
adolescentes trabajadores que laboran en basureros (Venezuela y Ecuador) durante
cuatro horas diarias, pero su vez muchos de estos menores van a la escuela, lo que
podría significar que los niños que trabajan y estudian tienen menos oportunidad de
tiempo libre para ser utilizado en su descanso. Hay casos de niños que estudiando
comenzaron a trabajar, pero abandonaron sus estudios a medida que el trabajo capta
su mayor tiempo, sin advertirlo los niños, niñas y adolescentes van olvidando sus
304
horas de juegos, sueños infantiles y recreación que son elementos que colaboran en el
desarrollo integral de los mismos y que pueden fortalecer en los niños, niñas valores
de solidaridad, tolerancia, compañerismo, entre otros.
La legislación de cada uno de los países en estudio, garantiza el derecho de
los niños, niñas y adolescentes a tener un descanso y una recreación sana en
ratificación de la Convención de los Derechos del Niño (1989), la cual en el artículo
31 establece que 1- los Estados partes reconocen el derecho del niño al descanso, el
esparcimiento, el juego y a las actividades recreativas propias de su edad y a
participar libremente en las vida cultural y en las artes, 2 – los Estados partes
respetarán y promoverán el descanso del niño a participar en la vida cultural y
artística y propiciaran oportunidades apropiadas, en condiciones de igualdad, de
participar en la vida cultural, artística, recreativa y de esparcimiento.
A pesar del Convenio, el niño, niña y adolescente trabajador no está
disfrutando de tiempo libre para su sana recreación, lo que le podría estar impidiendo
un pleno desarrollo social y psicológico.
Área o sector de Trabajo
En la investigación se divisaron las diferentes modalidades de trabajo infantil,
encontrándose que los niños, niñas y adolescentes trabajan en los basureros, en la
minería, en las plantaciones, como domésticos entre otros, y cada una de estas
agrupaciones de trabajo tienen sus actividades propias, donde el niño, niña y
adolescente comienza realizando una tarea que pareciera de menor peligro, y termina
ejecutando la faena de mas riesgo.
Por ejemplo, en las actividades realizadas en el vertedero de basura, el niño en
principio se dedica a recolectar y clasificar los desechos sólidos, pero luego ese
305
proceso de recolección implica para muchos el tener que enfrentarse a otras personas,
que también hacen lo mismo, presentándose casos de violencia física y verbal debido
al enfrentamiento por llevarse los mejores desechos; o cuando se lanza al camión que
deposita la basura en los sitios destinados para hacerlo. A su vez el embalaje y mover
carga pesada implica riesgos para su formación ósea y muscular.
Otro tanto acontece en la actividad minera artesanal realizada por niños, niñas
y adolescentes, los cuales participan en las diferentes etapas del trabajo minero. Al
principio trabajan en labores de procesamiento del mineral que incluye su traslado y
clasificación y al poco tiempo se inician en actividades de perforación de la roca y
disparo de dinamita, ejecutando actividades totalmente peligrosas que tienen que ver
con transporte de carga pesada, inhalación de gases tóxicos, temperaturas extremas,
tratos indebidos o presiones psicológicas entre otros peligros.
Cualquiera sea la actividad que se realiza en los basureros, en las minas, en las
plantaciones, en el trabajo doméstico entre otros, es ubicada dentro de las peores
formas del trabajo infantil, de acuerdo al convenio 182 de la OTI (1999).
Situación Familiar
En vista de que la familia debe ser la primera instancia o núcleo donde los
niños, niñas y adolescentes sean protegidos contra toda forma de abandono, violencia
física o moral, abuso, explotación entre otros; al hacer la revisión de la situación
familiar de los niños, niñas y adolescentes trabajadores en términos de hallazgos
encontrados, las familias de los menores trabajadores comúnmente están ubicadas
dentro de los estratos mas pobres de la sociedad, a los cuales no les llegan las
políticas económicas y sociales de los diferentes países, son por lo general las
familias excluidas, las que para sobrevivir dentro de su situación de pobreza necesitan
de los ingresos que puedan percibir sus menores hijos, o necesitan de la ayuda del
306
trabajo de los menores para poder los padres y madres cumplir con su cuota de
trabajo o producción.
En la investigación se encontró tanto la existencia de familias nucleares
como la familia desintegrada. Dentro de la familia nuclear muchos padres carecían
de empleo, por lo que los menores hijos tenían que trabajar; en otras familias al no
existir la figura del padre, tanto la madre como los hijos tienen que trabajar. En
Bolivia por ejemplo, la familia casi completa tiene que emigrar por aproximadamente
6 meses hacia las zonas de producción de la caña de azúcar, se trata de familias que
tienen necesidad de paliar su situación de extrema pobreza y en la temporada de la
cosecha de la caña, las familias ante la encrucijada de dejar sus hijos solos o traerlos
con ellos, prefieren que toda la familia se traslade a los sitios de la zafra, llegando a
los campamentos zafreros, instalándose hacinados en precarias viviendas colectivas
donde duermen y cocinan, pasando los seis meses de cosecha trabajando duramente
todos los miembros, de allí que el menor en unidad familiar comienza su actividad
laboral con ingreso o sin ingreso.
Para el caso de los niños trabajadores de la basura en el Municipio Libertador,
Carabobo, Venezuela, un alto porcentaje de las familias están desintegradas, o
estando en situación de familia nuclear ampliada, se dan casos de que el padre o
padrastro no esta trabajando, por lo que los niños, niñas y adolescentes tienen
necesidad de trabajar para colaborar en el presupuesto familiar, aunque el ingreso de
los menores sea poco, de alguna manera contribuye a los gastos del hogar y lograr
obtener algunos alimentos comprendidos dentro de la canasta alimentaría.
Las normas internacionales y nacionales son indicativos de que la familia debe
ser el núcleo fundamental, donde el padre y la madre tienen el deber compartido e
irrenunciable de formar, educar y asistir a los hijos, comprometiéndose el Estado a
protegerlos y a garantizarle una serie de derechos para que cumplan su finalidad de
307
protección de los hijos. Pero en los diferentes países en estudio, la realidad que
viven las familias es la desprotección por parte del Estado, al excluirlos de derechos
básicos como son tener una vivienda, servicios de salud, empleo, educación,
seguridad, entre otros, incluyéndose cada día mas familias en niveles de pobreza que
viven con uno o dos dólares al día.
CUARTO COMPONENTE O FASE
Significaciones
El estudio de las fases anteriores permite realizar un primer avance
conclusivo, determinando un acercamiento a la concepción de trabajo infantil, las
causas por las cuales los niños, niñas y adolescentes trabajan y posibles
consecuencias que acarrea el trabajo de niños, niñas y adolescentes en los países
involucrados en la investigación, ya que para poder formular alguna propuesta que
incida en la superación del problema, es necesario tener un conocimiento apropiado
del trabajo infantil y el entorno sociocultural y económico que lo rodea.
El trabajo infantil podría entenderse como toda actividad física o mental,
realizada por niños, niñas o adolescentes que tienen una edad por debajo de la mínima
establecida en cada país para trabajar, de acuerdo a la legislación del mismo. Esa
actividad puede generar ingresos o no, y donde los niños se dedican a la producción,
comercialización, transformación, venta o distribución de bienes o servicios, entre
otros; puede ser realizada en forma independiente o al servicio de otra persona ya sea
natural o jurídica. También puede considerarse trabajo infantil aquellas actividades
económicas realizadas por adolescentes menores de 18 años con edad para trabajar,
(para el caso en estudio, la legislación de los diferentes países señala a partir de los
14 años) que interfiera con la escolarización de los adolescentes, se realice en
308
ambientes peligrosos o se lleve a cabo en condiciones que afecten su desarrollo
psicológico, físico, social y moral inmediato o futuro.
Es un fenómeno mayormente observable en sociedades con dificultades
económicas, que conllevan a la pobreza, aunque la pobreza no sea su única causa. En
los diferentes países en estudio existen también factores de orden social, cultural y
educativo, que se conjugan y entremezclan, constituyéndose en germen de ocupación
infantil.
Factores culturales
En torno al trabajo infantil se tejen algunos criterios acerca del carácter
formativo del mismo, y su mayor valoración frente a una alternativa como la
educación escolar. En muchos sectores sociales se tiene un alto reconocimiento del
trabajo como terreno de aprendizaje. En estas concepciones populares expresadas en
costumbres y en tradiciones ancestrales, el trabajo cumple una función educativa
fundamental en la infancia, en la iniciación y desarrollo de habilidades y destrezas en
un determinado oficio, convirtiéndose el trabajo en un legado familiar que se
transmite de generación en generación, sin considerar que puede ser una limitante en
el desarrollo integral de los niños, niñas y los adolescentes.
En los países en estudio, se pudo detectar como en algunos casos se encuentra
el deseo de los propios niños, niñas y adolescentes de dedicarse al trabajo y no a la
educación, por las posibilidades de independencia y reconocimiento que aquel les
puede permitir. Obtienen su propio dinero y reconocimiento familiar. En
determinados casos también es de observancia la manera como la mujer desde
temprana edad es relegada a ciertos oficios específicos. En ciertas comunidades, se
piensa que las niñas no necesitan ir a la escuela, sino que deben quedarse en la casa
309
en el oficio doméstico. Esto hace que los niños y niñas desde su corta edad,
incorporen elementos de inequidad de género que pueden reproducir en la edad
adulta.
Entre las principales causas culturales que impulsan el trabajo del niño, niña y
adolescente se han podido identificar:
1.- La idea de que el trabajo constituye un proceso de formación para las personas.
2.- La creencia de que hay trabajos que preparan al niño para la vida adulta.
3.- Baja escolaridad en los adultos.
4.- Los niños y niñas no son reconocidos como sujetos de derecho.
5.- El trabajo se transmite de generación en generación como una tradición familiar.
6.- Poca importancia al estudio.
7.- Asumir el rol de los adultos.
8.- El trabajo pueden adaptarse a las etapas de desarrollo de los infantes.
9.- El trabajo aleja a los niños y niñas de los vicios.
10.-Hay labores que no se consideran trabajo. (trabajo doméstico).
Factores económicos
En los diferentes países en estudio, al reconocer la presencia de trabajo infantil
siempre aparece la dificultad económica como una de sus principales causas. En
algunos casos es reconocida como la única razón, desconociendo los otros factores
que inciden en la vinculación laboral precoz. La pobreza estructural que padece una
gran parte de la población ubicada en los diferentes países objeto de estudio se
expresa en realidades como el desempleo adulto, las necesidades básicas
insatisfechas, la economía informal, y por supuesto, el empleo de mano de obra
infantil.
310
Se lograron detectar algunos factores económicos, entre los que están:
1.-Pobreza en las familias
2.-Poca inversión y presencia del Estado
3.-Inequidad en la distribución de riqueza
4.-Desempleo adulto
5.-Movilidad de la familia según ciclos y bonanzas
6.-La flexibilización del trabajo adulto
7.-Bajos salarios
8.-Trabajo infantil como disminución de costos laborales
9.-Participación en el ingreso del núcleo familiar
10.-Necesidad de pagar sus propios gastos
11.-Madres cabeza de familia
12.-Explotación por parte de un adulto
Factores sociales
Dentro de los factores sociales identificados como accionantes del trabajo
infantil, se destacan complejas realidades nacionales como la ausencia de las
políticas sociales del Estado en algunas de las regiones.
Se han podido identificar dentro de estos factores:
1.- Falta de oportunidades
2.- Familias disgregadas
3.- Alto número de hijos en familias pobres
4. -Bajo nivel educativo del entorno familiar
5.- Hogares con jefatura femenina
6.- Madres solteras
311
7. -Maternidad y paternidad adolescente
8.- Violencia intrafamiliar
9.-Abandono
10.-Alta permanencia en la calle desde temprana edad
11.-Influencia de pares, amigos y familiares
12.-Falta de espacios de recreación y ocupación del tiempo libre.
13.-Pocas posibilidades de acceso a la educación y la salud
Factores asociados al sistema educativo
Un dispositivo para evitar y prevenir el trabajo infantil es la inserción y
permanencia de los niños, niñas y adolescentes dentro del sistema educativo. Pero se
ha observado una relación opuesta entre los niños y niñas que asisten a la escuela y
cuando no asisten. Cuando los niños y niñas asisten a la escuela, el número de horas
trabajadas disminuye; por el contrario, cuando desertan de la institución educativa, se
encuentran en mayor riesgo de vincularse voluntaria o involuntariamente a
actividades laborales. La vía hacia la limitación del trabajo infantil involucra
necesariamente proyectos educativos que tengan como propósito aumentar el acceso
a la educación básica de los niños y niñas trabajadores, así como mejorar la calidad y
la relevancia de la educación. Muchos países que tienen un alto índice de frecuencia
de trabajo infantil enfrentan también limitaciones de recursos que afectan el acceso a
la educación y la calidad de la misma. En los países en estudio, no solamente hay
innumerables familias que se les dificulta proveerles uniformes o textos escolares a
sus hijos, sino que en ciertas regiones se sufre también la falta de escuelas en las
zonas remotas, relaciones desproporcionadas de maestros y alumnos, un alto
porcentaje de maestros insuficientemente capacitados, y un mal entorno físico en las
escuelas. Los proyectos de iniciativa educativa deben sostener mejoras en el acceso y
la calidad de la educación, financiando capacitación de maestros, materiales
312
escolares, educación vocacional, comedores escolares, para que logre mantener a los
estudiantes dentro de la escuela.
Entre los factores educativos que podrían estar incidiendo en la exclusión y
deserción escolar, se pueden mencionar:
1.- Poca inversión en el sector educativo por parte de las autoridades competentes.
2.- Carencia de infraestructura educativa
3.- Baja cobertura
4.- Docentes desmotivados
5.- Baja calidad
6 - Costo que representa para las familias
7.- Poco valor al estudio
8.- Escasa oferta de educación técnica y profesional
9. -Lo económico por encima de lo educativo
Efectos y Consecuencias
En observancia del desarrollo físico de las niñas y niños trabajadores, son
mucho más vulnerables que los adultos porque sus cuerpos están en proceso de
crecimiento y no están formados completamente. Pueden tener una salud física
deficiente porque el trabajo que ejercen los expone a riesgos de enfermedades y
accidentes propios a la ocupación y a las condiciones en que se labora. La agricultura,
por ejemplo, arriesga a los niños y niñas a substancias químicas tóxicas, cargas
demasiado pesadas, manipulación de herramientas muy afiladas o uso de motores sin
haber sido formados para ello y sin adoptar las más mínimas precauciones. En la
minería artesanal, los expone a peligros de absorción de niveles elevados de plomo o
mercurio en la sangre, heridas o lesiones causadas por golpes y otras formas de
313
agresión, infecciones graves por tétanos, problemas pulmonares, deformaciones del
esqueleto causadas por el acarreo de cargas pesadas, trastornos cutáneos y accidentes
por derrumbes. En el trabajo doméstico están expuestos a maltratos, abuso sexual,
entre otros.
En el desarrollo emocional, las niñas y niños trabajadores frecuentemente
laboran en actividades que son explotadoras, peligrosas, degradantes y de
aislamiento. A menudo son maltratados, abusados y abandonados por sus patrones, lo
que les ocasiona dificultades para vincularse con otras personas o tener sentimientos
hacia ellas. Tienen problemas para interactuar y cooperar con otros y para desarrollar
un sentido real de identidad. Les falta confianza en sí mismos y experimentan
sentimientos de baja autoestima.
En el desarrollo social las niñas y niños, que laboran no tienen la oportunidad
de participar en actividades que son vitales para su formación, como por ejemplo
jugar, ir a la escuela y socializar con otros pares, soñar. No adquieren el nivel básico
de educación que se necesita para enfrentar la vida y tampoco tienen la oportunidad
de interactuar con otras personas, participar activamente, o vivir la vida. Estas
actividades son abandonadas por el trabajo y en consecuencia los niños y niñas se
ven presionados a llevar una vida adulta y a negarse un futuro mejor. Los efectos
sociales del trabajo infantil sobre el desarrollo y seguridad de la niñez son altamente
discriminatorios y empeoran la situación de desventaja de personas y grupos que se
encuentran ya entre los socialmente marginados.
Es significativo conocer los aportes ofrecidos por los diferentes países en
estudio, para tratar de dar solución al problema del trabajo de niños, niñas y
adolescentes, por lo cual el próximo capítulo esta referido a las diferentes alternativas
de solución previstas y llevadas a cabo por los diferentes países.
314
CAPÍTULO VI
ALTERNATIVAS PREVIAS DE SOLUCIÓN
El problema del trabajo de niños, niñas y adolescentes presenta características
diferentes en cada país y así mismo las alternativas de solución propuestas pueden ser
diferentes, aunque la intención sea la misma, solucionar el problema que se presenta.
En Venezuela, tradicionalmente el organismo que ha sido rector de la
formación profesional través de varias décadas ha sido el INCE, el cual ha centrado
su practica educativa en los principios de formación en y para el trabajo. Este
organismo adscrito al Ministerio de Educación y Deportes, se ha ocupado entre otras
actividades, de organizar el aprendizaje de los adolescentes trabajadores, mayores de
14 años y menores de 18 años, en todo el país, denominándoles aprendices según la
Ley sobre el INCE (1970). A este organismo se le reconoce haber capacitado para el
trabajo a muchos jóvenes, incluyendo a huérfanos y adolescentes en estado de
abandono, en cumplimiento con el artículo 43 del Reglamento de la Ley sobre el
INCE (2003), el cual puntualiza:
En la selección de los aprendices se preferirá a los huérfanos y adolescentes en estado de abandono, que hayan sido postulados por los organismos integrantes del Sistema Nacional de Protección del Niño y del Adolescente y se encuentren en condiciones especiales.
A su vez, el artículo agrega la prioridad que tienen los aprendices hijos o
familiares de los trabajadores de las empresas, al efecto señala “los empresarios
podrán preferir como aprendices en sus establecimientos a los hijos o familiares de
los trabajadores de sus empresas”.
Por otra parte, hoy día, ha aumentado el numero de jóvenes que requieren del
INCE, para capacitarse en un determinado oficio, pero a pesar de que el INCE esta
315
presente en todas las regiones del país, se torna insuficiente para atender todas las
demandas; aunado a esto, el INCE tiene nuevas actividades que atender como es la
formación de los participantes de la Misión Vuelvan Caras (2004), llamada así, en
este periodo constitucional y la cual tiene por finalidad capacitar a jóvenes y adultos
desempleados en diferentes oficios. De acuerdo a la misión citada, los ciudadanos
tienen la oportunidad de formarse y desarrollar habilidades en diversas ramas de la
producción y los servicios a partir de la capacitación para el empleo productivo. Este
proyecto incluye la formación de cooperativas en actividades especificas. Se ha
registrado aproximadamente 314.000 en proceso de formación, pero la meta es para
mas de un millón de personas.
La Misión Vuelvan Caras, aunque no vaya dirigida a los niños y adolescentes
trabajadores, podría ser incluida dentro de las alternativas posibles de solución , ya
que los adultos excluidos al tener la oportunidad de prepararse en alguna actividad
productiva pueden agruparse en cooperativas para participar en el desarrollo del país
y poder mejorar su calidad de vida; al estar las familias preparadas y con posibilidad
de trabajar, poder cumplir con su responsabilidad de mantener, educar y proteger a
sus hijos, estos ya no tendrían que trabajar para ayudar en el sustento familiar, por el
contrario tendrían oportunidad de participar en el sistema formal de la educación.
Aunque ya hay casos de cooperativas que están cumpliendo con los propósitos de esta
misión, habría que esperar por los resultados de la misma y de su efectividad en el
mejoramiento de las familias mas desposeídas.
Desde décadas pasadas se ha sentido la preocupación por mejorar la situación
de los niños y adolescentes trabajadores, pero las políticas planificadas para tal
gestión no han tenido la repercusión esperada. En Venezuela al ratificarse la
Convención Internacional sobre los Derechos del Niño en Agosto del año 1990, se
316
manifestó la voluntad de asumir a la niñez y la adolescencia como prioridad
nacional. Posterior a la ratificación, y en pro de aplicar lo contemplado en este
instrumento jurídico, se creó una Comisión Presidencial sobre los Derechos del Niño
con el fin de que esta elaborara un Programa Nacional de Acción a Favor de la
Infancia, cuya ejecución estuvo a cargo del Ministerio de la Familia (1991).
Las metas y compromisos a ser alcanzados por el Programa Nacional para el
año 2000, fueron entre otras, en el área de Supervivencia: reducir la mortalidad
Infantil, reducir la mortalidad materna, reducir la proporción de déficit nutricional .
En el área Educación y Desarrollo: atender por lo menos al 55% de la población en
edad preescolar; alcanzar el 100% de la cobertura de la matrícula escolar de los niños
entre 7 y 12 años e incrementar por lo menos un tercio de la matrícula de los niños
entre 13 y 15 años; lograr la prosecución de por lo menos el 80% a nivel de sexto
grado, y reducir por lo menos el 50% de los que no concluyen el noveno grado. En el
área Protección: Facilitar y mejorar la tutela de los menores en situación de
abandono; hacer respetar los derechos de los menores que se ven obligados a
trabajar; mejorar la eficacia en el cumplimiento de las leyes, hacer efectivo a corto
plazo, el derecho que tiene un niño a un nombre y una nacionalidad.
La ejecución del Plan Nacional de Acción (1991), a cargo del Ministerio de la
Familia, enfrentó dificultades para su implementación debido a que las orientaciones
de políticas propuestas no fueron instrumentadas, no logró extenderse a todo el país,
y, a las acciones iniciadas no se les previó un sistema de evaluación y seguimiento.
Estas situaciones trajeron como consecuencia su paralización definitiva en 1994.
En 1995, luego de un análisis de la situación de la infancia, coordinado por el
Instituto Nacional del Menor, y ante la paralización del Plan Nacional de Acción, los
organismos que participaron en la elaboración del análisis plantean la necesidad de un
317
Plan de Acción Intersectorial para la Atención Integral de la Infancia, proponiendo a
la Oficina de Coordinación y Planificación de la Presidencia de la República
(CORDIPLAN) como organismo coordinador para el diseño del mismo. Durante el
año 1996, CORDIPLAN llevó a cabo el diseño del Plan, previendo su inicio para
1998. Sin embargo, no fue divulgado, ni implementado el contenido del mismo,
desconociéndose las razones por las cuales quedo sin efecto el plan.
Las referencias además de señalar que hubo buenas intenciones en asumir a la
niñez y a la adolescencia como prioridad nacional, también son indicativas que se han
elaborado planes para la protección de este segmento de la población, pero que los
mismos, por diferentes razones no se lograron implantar en la década del noventa, no
lográndose la suficiente protección integral de los derechos que amerita el niño, niña
y adolescente, aunado a esto, es de la observancia que los niños y adolescentes
trabajadores no lograron ser amparados en su accionar laboral, las pocas medidas de
protección en la década mencionada van a estar explicitadas en la Ley Orgánica del
Trabajo, en lo que se refiere al menor trabajador mayor de 14 años.
En Venezuela, aunque no se dominan las cifras exactas de niños, niñas y
adolescentes incorporados a la fuerza de trabajo, informes presentados por el INAM
en conjunto con UNICEF (1997) indicaban la existencia en el país de mas de millón
y medio de jóvenes entre 14 y 17 años trabajando, sin embargo las políticas de
protección especificas hacia este sector trabajador de la población han sido débiles,
sin hacer el énfasis requerido en las políticas integrales de protección de niños, niñas
y adolescentes puestas en acción con la vigencia de la Ley Orgánica para la
Protección del niño y del adolescente.
En el país través del Consejo Nacional de Derechos del Niño y del
Adolescente (CNDNA), quién es la máxima autoridad del Sistema de Protección del
318
Niño y del Adolescente, y quién comenzó su constitución a partir del 1ro de abril del
año 2000, fecha en la cual entra en vigencia la LOPNA, se diseño el Plan Estratégico
Nacional para la protección integral del niño, niña y adolescente año 2000-2006
(CNDNA,2000). La elaboración del Plan constituye una herramienta que guía las
decisiones en materia de protección, la cual se replantea y adecua a las realidades y
desarrollo del sistema de protección, sus actores y las definiciones que se construyan
a partir de la nueva doctrina de protección y del desarrollo humano de la infancia y la
adolescencia. En tal sentido el Plan es una guía para el control de las garantías
contenidas en los derechos humanos que orienta acciones en primer lugar, respecto
del papel del Estado en su gestión y en las transformaciones institucionales requeridas
por el nuevo marco normativo, en segundo lugar, el rol de los ciudadanos y las
ciudadanas en la gestión y protagonismo para exigir y velar por los derechos de los
niños, las niñas y los adolescentes con criterio de corresponsabilidad, y en tercer
lugar, el rol de las familias como espacio natural para el desarrollo humano de los
ciudadanos.
El plan comprende tres fases:
La primera fase, referida a la búsqueda de espacios para compartir, construir y
homologar conocimientos. A través de dichos espacios se generaron toda una serie de
actividades de formación, capacitación e intercambio en dinámicas de grupos, talleres
y consultas para definir los aspectos básicos sobre la misión, visión y orientaciones a
ser desarrolladas por el Consejo.
La segunda fase de constitución del Consejo propiamente dicha, en la cual se
definieron las directrices estratégicas de la política a desarrollar por el órgano
atendiendo a las atribuciones que determina la ley y a los aspectos y contenidos que
319
se establecen en las construcciones colectivas entre los actores e integrantes del
Sistema de Protección Integral del niño, niña y el adolescente.
La tercera fase es de promoción del Sistema de Protección en una estrategia
de articulación con actores locales para la implantación del sistema en los tres niveles
de gestión pública, definida en su alcance y contenido como el medio de gestión que
determina la ley, con el propósito de garantizar y velar por los derechos difusos y
colectivos de la infancia y adolescencia.
El Plan se orienta por directrices estratégicas, principios, metas. En las metas a
alcanzar para el periodo 2000-2006 se visualizan entre otras:
1- Apoyar la constitución de 24 Consejos Estadales de Derechos, 334 Consejos
Municipales de Derechos, 334 Consejos de protección del Niño y del Adolescente,
promover la constitución de 1700 Defensorías del Niño y del Adolescente y dictar los
lineamentos acerca de la formación requerida por estos órganos del sistema a los fines
de garantizar el ejercicio de sus funciones.
2- Capacitación y adiestramiento de 24 Consejos Estadales de Derechos para el
cumplimiento de las atribuciones que le confiere la Ley. Diseño e implementación del
Sistema de Formación y Asistencia Técnica para la capacitación en Derechos.
Creación del Centro de Investigaciones y educación del Sistema de Protección del
Niño y del Adolescente. Promoción y difusión del Sistema de Protección en los 24
estados del país. Elaborar los Instrumentos Jurídicos necesarios para la implantación
del Sistema de Protección del Niño y del Adolescente.
320
3- Hacer el seguimiento para el cumplimiento de las siguientes metas suscritas
por la Republica en la cumbre mundial a favor de la infancia: Reducción de una
tercera parte de la tasa de mortalidad infantil y de niños menores de 5 años.
Reducción del 50% de la mortalidad materna. Reducción del 50% de la tasa de
malnutrición grave y moderada de niños menores de 5 años. Acceso universal al agua
potable y medios sanitarios de eliminación de excretas. Acceso universal a la
educación básica y finalización de la enseñanza primaria por lo menos del 80% de los
niños en edad escolar. Reducción del 50% de las defunciones como consecuencia de
la diarrea en los niños menores de 5 años. Reducción de la tercera parte de las
defunciones por infecciones respiratorias agudas en los niños menores de 5 años.
Ofrecer mejor protección a los niños en circunstancias particularmente difíciles y
eliminar las causas fundamentales que conduzcan a tales situaciones. Mejoramiento
de la protección de los niños en circunstancias especialmente difíciles. Hacer el
registro, sistematización y seguimiento a los acuerdos y convenios internacionales
suscritos por la República en materia de infancia.
4- Diseño e implantación del Sistema en red de Información y Registro de
Indicadores de Derechos del Niño y del Adolescente en los 24 Consejos Estadales y
334 Consejos Municipales de Derechos. Establecer un acuerdo común en el ámbito
internacional de fronteras que permitan excluir a los niños, niñas y adolescentes de
los conflictos armados. Velar por el derecho de niños, niñas y adolescentes a tener
acceso a un nivel de vida adecuado. Establecer mecanismos que permita situar la
desnutrición infantil en niños entre 0 y 5 años de edad en la mínima técnica universal.
5- Establecer los mecanismos de corresponsabilidad entre el Estado, la familia y
la sociedad para garantizar la protección de niños, niñas y adolescentes: Establecer
con los ciudadanos, ciudadanas, niños, niñas y adolescentes modelos e instancias de
participación para el ejercicio de su ciudadanía ante el sistema de protección en los 24
321
estados y los 334 municipios del país. Determinar con los ciudadanos y ciudadanas
los mecanismos de seguimiento y control en el cumplimiento de las metas de los
planes nacionales, estadales y municipales de protección del niño y del adolescente.
Así como hay una difusión del diseño del Plan Estratégico Nacional para la
protección integral del niño, niña y adolescente (2000-2006), no existe a la
actualidad, o no se han sido difundidas el seguimiento y la evaluación que se le ha
hecho al plan para conocer su eficacia o su aplicación, por lo tanto se dificulta
puntualizar la operatividad del plan fuera del contexto teórico y ver su aplicación en
la práctica. Algunas de las metas propuestas son producto de acuerdos en la Cumbre
del Milenio del año 2000, pero en el informe sobre Desarrollo Humano del Programa
de Naciones Unidas para el Desarrollo (PNUD, 2003), centrado en la evaluación del
cumplimiento de las metas del milenio, se ubica a Venezuela entre los países de alta
prioridad por presentar retrasos evidentes en el cumplimiento de las metas,
experimentando retrocesos en la reducción de la pobreza, el hambre, y de acceso
universal a la educación primaria entre otros.
Atendiendo al Plan Estratégico Nacional para la protección integral del niño,
niña y adolescente, tanto a nivel Estadal como a nivel municipal se han ido
constituyendo durante el primer quinquenio del siglo XXI, los Consejos de
Derechos a nivel estadal y municipal, a quienes le corresponde llevar a cabo las cabo
la protección integral de los niños, niñas y adolescentes, orientándose de acuerdo a
las políticas, estrategias y metas del Consejo Nacional y en base a los recursos de
cada región y localidad. En los diferentes municipios existe un proceso de
formulación de políticas, directrices y planes locales para la protección del niño, niña
y adolescente. Entre esas políticas se han operacionalizado algunas que tienen que ver
directamente con el niño, niña y adolescente trabajador, entre las cuales están:
autorizar a los adolescentes para trabajar y llevar el registro de adolescentes
322
trabajadores; solicitud ante la autoridad competente de la expedición de partidas de
nacimiento, y otros documentos de identificación, lo que podría ser significativo, en
el sentido de la insuficiente operacionalidad de las políticas a favor del adolescente
trabajador.
En ese mismo orden de ideas y tomando en cuenta los lineamientos generales
expresados en el Plan de Desarrollo Económico y Social de la Nación 2001-2007
(MPD, 2001), en el Plan Estratégico Social (MSDS, 2001), el Plan Estratégico
Nacional para la Protección Integral del niño, niña y adolescente (2000-2006), los
diferentes Ministerios han elaborado programas, proyectos en beneficio de los niños,
niñas y adolescentes. En el Ministerio de Educación y Deportes es de observancia las
escuelas bolivarianas. El Proyecto se inició como una propuesta experimental que
aspira extenderse a todas las escuelas del país, y consiste en la creación de un espacio
educativo que le ofrezca al niño, niña y adolescente una educación integral que
permita el desarrollo pleno de sus potencialidades en un ambiente acorde con las
exigencias científico-tecnológicas actuales, y en el cual se satisfagan necesidades
básicas como alimentación, salud preventiva e interacción cultural y deportiva.
A través de las escuelas bolivarianas se aspira: a) Brindar una educación
integral a niños, niñas y adolescentes, de práctica pedagógica abierta, reflexiva y
constructiva, que establezca una relación amplia con la comunidad, así como
satisfacer las necesidades básicas de alimentación, salud preventiva e intercambio
cultural y deportivo de los educandos. b) Implementación de jornada escolar
completa. c) Integración de servicios de alimentación y salud. d) Dignificación
progresiva de las edificaciones existentes y construcción de nuevas escuelas. e)
Renovación curricular sostenida en un sistema de formación permanente. f) Creación
de nuevas formas de gestión escolar. g) Integración comunitaria. h) Conformación del
sistema escolar como red social. I) Dotación de recursos para el aprendizaje como
bibliotecas escolares, modelos anatómicos ,entre otros (MECD, 2003).
323
Con las escuelas bolivarianas el país tiene grandes esperanzas porque se
estaría buscando mejorar la calidad de la educación, pero es el caso de que a la
actualidad, muchas escuelas bolivarianas se han quedado en aspiraciones, porque lo
prometido no ha logrado alcanzar a todas las escuelas implementadas como
bolivarianas. A su vez, no todos los niños tienen la oportunidad de ser incluidos en
las mismas, las cifras señalan aproximadamente mas de 600.000 niños, niñas y
adolescentes excluidos del sistema escolar formal, encontrándose económicamente
activos y en condición de pobreza, a su vez anualmente mas de 100.000 niños y
adolescentes desertan de la educación (INE, 2003), aumentándose el problema de la
situación de la infancia.
Otro de los programas dependientes del Ministerio de Educación y Deportes
es el Programa Alimentario Escolar (PAE), destinado a contribuir con el
mejoramiento de la calidad nutricional, el rendimiento académico, la permanencia y
la prosecución de los niños, niñas y adolescentes en el sistema educativo, mediante el
suministro de una alimentación diaria, variada, adecuada a los requerimientos
nutricionales, a los patrones culturales y la disponibilidad de insumos en las zonas en
que se aplique.
Con el PAE, los beneficiarios pueden gozar del servicio alimentario en los
planteles educativos de manera gratuita, y se vigila el estado nutricional de los
estudiantes. El PAE le da también participación activa a las comunidades. El
programa se aplica en tres variantes. La primera, es la que se lleva a cabo en las
escuelas bolivarianas. La segunda es la que se realiza en planteles no bolivarianos. La
tercera es aquella que ejecutan las gobernaciones y alcaldías en convenio con el
Instituto Autónomo Fondo Único Social (IAFUS). Las dos primeras son financiadas
con recursos ordinarios del MECD, y la tercera, se cofinancia con recursos del
IAFUS y de las respectivas alcaldías y gobernaciones. Población atendida Escuelas
324
Bolivarianas 649.816, Escuelas no bolivarianas 124.232, IAFUS, gobernaciones y
alcaldías 1.081.376 Total: 1.855.424 escuelas (MECD, 2003).
El Ministerio de Salud y Desarrollo Social (MSDS) también tiene programas
de atención integral a niños, niñas y adolescentes, entre estos: el Programa Ampliado
de Inmunizaciones (PAI), el cual se ejecuta en coordinación con gobernaciones y
alcaldías. Está dirigido a proteger a niños, niñas y adolescentes, en todo el territorio
nacional de enfermedades inmunoprevenibles, a través de la aplicación oportuna del
esquema de inmunizaciones, con la garantía del derecho a la protección de
enfermedades de gran morbilidad y letalidad. Se prevén acciones permanentes de
rutina en toda la red de establecimiento de salud y desarrollo social con atención al
niño y a la mujer embarazada. También se implementa a través de campañas
especiales.
EL Programa de Apoyo a la Infancia y la Adolescencia (PAIA). En convenio
con el Banco Interamericano de Desarrollo (BID) se fortalece el Programa PAIA con
el fin de potenciar el esfuerzo gubernamental para la atención integral a la niñez y
adolescencia. La ejecución de los proyectos fue prevista en 14 estados y 51
municipios priorizados por índice de calidad de vida, en tres años. Durante el año
2003 se previó ejecutar 20 proyectos en cinco estados y 21 municipios (Amazonas,
Delta Amacuro, Portuguesa, Sucre, Táchira). El Programa permite: El
Fortalecimiento del Sistema de Protección de niños y adolescentes. Capacitación de
los miembros de Defensoría, los Consejos de Derecho Estadales y Municipales.
Sensibilización de las familias y organizaciones comunitarias en LOPNA y
constitución de redes para la prevención de vulneración de derechos. Financiamiento
de proyectos para la atención y restitución de derechos de niñas, niños y adolescentes
(MSDS, 2003).
325
Otro proyecto importante promovido por el MSDS es : Promoviendo Calidad
de Vida de niños, niñas y adolescentes que habitan en la calle, el mismo comprende
la realización de censo con el acompañamiento técnico del INE; atención integral,
suficiente y de calidad a niños, niñas y adolescentes con vida difícil en la calle para
garantizar la restitución de sus derechos, propiciando condiciones favorables para su
desarrollo individual y social. A través de este proyecto se fortalecen iniciativas que
ya se están ejecutando en el Distrito Metropolitano, entre las cuales es posible
detectar la capacitación y formación de los educadores de calle; aproximación a la
realidad de los niños, niñas y adolescentes que habitan la calle para la estimación de
necesidades sociales (individuales y colectivas), con el equipo de educadores de calle,
lo cual permitirá referenciar la problemática en el Distrito Capital (MSDS, 2003).
El Programa de Comedores Escolares, tiene como propósito garantizar una
dieta saludable, de buena calidad nutricional que incluya los requerimientos calóricos
protéicos, mediante el suministro de almuerzos balanceados, a los alumnos y
alumnas del sistema educativo oficial que presenten cierto grado de desnutrición,
vivan distantes o que sean de condiciones socioeconómicas bajas. A través del
programa se busca suministrar comidas balanceadas, preparadas con los
requerimientos calórico protéicos conforme a la edad escolar de seis a 14 años
(MSDS, 2003).
El Programa de Cocinas Comunitarias, es interesante por tener como
propósito suministrar alimentación gratuita o a bajo costo a los grupos de población
con mayor vulnerabilidad biológica, con énfasis en niños, niñas, adolescentes,
mujeres embarazadas y en etapa de lactancia, adultos y adultas mayores. En 11
estados se realiza este programa, a saber, Amazonas, Barinas, Bolívar, Distrito
Capital, Guárico, Lara, Delta Amacuro, Monagas, Nueva Esparta, Vargas y Zulia.
Entre las acciones se visualizan: Suministrar alimentación gratuita o a bajo costo con
326
participación activa de la comunidad a través de empresas de propiedad colectiva
(cooperación del INN y BANDES)( MSDS, 2003).
Es importante destacar el programa Barrio adentro, el cual se perfila como un
programa de atención y participación social para las regiones más necesitadas del
país, a través del mismo se promueve el desarrollo de la salud, educación, cultura y
deportes; brindar atención médica gratuita en estas zonas las 24 horas del día y con
atención domiciliaria, suministrar medicinas de forma gratuita, entre otras acciones.
Este programa tiene significación dentro del estudio porque es la idea de que llegue a
toda la población necesitada y dentro de la misma los niños, niñas y adolescentes
representan un porcentaje representativo.
Todos los programas y proyectos nacionales mencionados, si bien buscan la
protección integral de niños, niñas y adolescentes, hacen muy poca referencia a la
protección del niño y adolescente trabajador, se considera importante haber
localizados los mismos para poder indicar con cierta propiedad la debilidad en los
programas y planes de acción para la protección de esta población trabajadora y
vulnerable, expuesta a todo tipo de riesgos al estar económicamente activos. Cuando
se plantea el trabajo de niños menores de 14 años, el discurso teórico es la
erradicación del trabajo infantil, pero en el plano operativo y especifico para el niño
trabajador no se detallan las acciones a seguir para cumplir con el deber ser.
Un organismo que actualmente se ocupa del niño y adolescente trabajador es
el Instituto Nacional de Prevención, salud y seguridad laborales (INPSASEL),
organismo autónomo adscrito al Ministerio del Trabajo, se encarga de diseñar y
ejecutar políticas en materia de prevención, salud y seguridad en el trabajo.
Diseñando y ejecutando las mismas en beneficio del niño, niña y adolescente, a
327
través del Programa Nacional de Protección de niños, niñas y adolescentes
trabajadores (PRONAT).
El programa tiene como objetivo establecer un sistema de control de
condiciones de trabajo de los niños, niñas y adolescentes trabajadores, que permita la
protección de su salud para un efectivo desarrollo personal y social. Entre las líneas
de acción a seguir se distinguen:
-Coordinación de actividades con el Consejo Nacional de Derechos de niños, niñas y
adolescentes, Ministerio del Trabajo, Entidades de Atención de niños, niñas y
adolescentes, Ministerio de Educación Cultura y Deporte, Ministerio de Salud, para el
diseño, ejecución, seguimiento y control de políticas y planes que garanticen el
disfrute pleno de derechos y garantías de los niños, niñas y adolescentes trabajadores.
-Registro, autorización y credencial para adolescentes trabajadores
-Derecho a la educación de niños, niñas y adolescentes trabajadores
-Derecho a la Seguridad Social
-Derecho a la Salud de niños, niñas y adolescentes trabajadores.
-Fortalecimiento del Sistema de Supervisión y Control de las condiciones de trabajo
de adolescentes trabajadores
-Establecimiento de un Programa de Supervisión y Control de condiciones de trabajo
de niños, niñas y adolescentes en el sector informal de la economía
-Clasificación y actualización de las categorías trabajos peligrosos y nocivos para
niños, niñas y adolescentes tomando en cuenta las condiciones en las cuales se
realizan estos trabajos y los riesgos a la salud de los niños, niñas y adolescentes
-Implementar un programa de atención médica ocupacional para niños y adolescente
-Implementar programas de capacitación en materia de salud trabajadores y trabajo
dirigidos a miembros del Consejo de Protección de los niños, niñas y adolescentes,
Entidades de Atención de niños y adolescentes trabajadores y sus familiares.
328
Si bien estas son acciones planificadas para su ejecución, en la practica no se
han logrado llevar a cabo, existe el compromiso de su puesta en practica, pero en la
actualidad son pocas las acciones que están respaldando los derechos del niño y
adolescente trabajador, quedándose en el plano de coordinaciones, conformación de
comisiones, realización de programas aún sin instrumentar, realización de reuniones,
encuentros.
Entre algunas acciones ejecutadas se pueden mencionar:
-Coordinación interinstitucional para la protección integral de los niños, niñas y
adolescentes a través de convenios de cooperación entre el Ministerio del Trabajo
y el Consejo de Derecho para el diseño de políticas públicas de protección
integral.
-Conformación de comisiones de trabajo integrada por INPSASEL, Dirección de
Inspecciones y Condiciones de Trabajo y Oficina de Relaciones Internacionales
del Ministerio del Trabajo para coordinar la ejecución del PRONAT.
-Programa de supervisión del trabajo para niños, niñas y adolescentes trabajadores
del sector informal de la economía
-Encuentro con Consejos de Protección, Entidades de Atención y NAT.
-Reuniones de trabajo con la Dirección de Inspecciones del Ministerio del
Trabajo para definir normas y procedimientos para la supervisión de adolescentes
trabajadores del sector formal de la economía.
329
-Encuentros con Consejo de Protección de diferentes municipios y con
supervisores del Ministerio del Trabajo para el diseño del plan de acción de los
niños y adolescentes trabajadores en automercados.
-Encuentro con Consejeros de Protección del Estado Lara. Encuentro con
personal Ursat y Supervisores del Trabajo de Lara, Yaracuy y Portuguesa.
-Incorporación del INPSASEL y Unidades de Supervisión del Trabajo a la
Comisión Institucional de Protección a niños niñas y adolescentes de Mercabar y
de la Feria de las Hortalizas (Mercados populares).
-Programa de capacitación para la atención integral de los niños, niñas y
adolescentes trabajadores. Seminario taller: Niños trabajadores. Viejos y nuevos
paradigmas de infancia
-Realizar encuentros en todo el país a fin de que se unifiquen criterios entre los
Consejos de Protección, Unidades de Supervisión del Ministerio del Trabajo y
funcionarios del Instituto.
Se tiene pendiente:
-Mayor efectividad en el registro, autorización y credencial para adolescentes
trabajadores.
-Fortalecimiento del sistema de supervisión y control de las condiciones de
trabajo de adolescentes trabajadores
330
-Clasificación y actualización de las categorías de trabajos peligrosos y
nocivos para los niños y adolescentes.
-Creación de una base de datos sobre la ubicación por actividad económica y
condiciones de trabajo, entre otros.
Otro país, donde se han establecido algunas acciones para mejorar la situación
del niño, niña y adolescente trabajador es Colombia, en esta Nación la presencia de
niños, niñas y adolescentes en todas las actividades económicas ha sido frecuente a
lo largo del tiempo. Los niños han trabajado y continúan laborando como
agricultores, mineros, albañiles, empleados domésticos, vendedores de periódicos,
limpiabotas, vendedores, entre otras labores. En el siglo XX durante los procesos de
industrialización colombianos, se incrementó la presencia de niños, en actividades
laborales por la permisividad, indiferencia y aceptación de la sociedad.
Actualmente en Colombia, según el Departamento Administrativo Nacional
de Estadística (DANE , 2.004) hay 11.325.693 de niños, niñas y adolescentes entre
los 5 y los 17 años de edad; de éstos aproximadamente 2.318.378 trabajan. Su
incorporación a la fuerza laboral es el resultado de múltiples factores económicos,
sociales y culturales. Lo preocupante además del número es el hecho que la mayoría
de los casos se realiza en condiciones de riesgo , abuso y explotación, lo cual podría
traer consecuencias funestas para la sociedad puesto que podría conducir a
mutilaciones intelectuales y sociales de un grupo importante de niños, niñas y
adolescentes.
Los intentos por resolver la situación desde la década del noventa, ha sido
aumentar la disponibilidad de los recursos educativos dentro del presupuesto
nacional; y basados en la Constitución Colombiana de 1991, fortalecer los programas
331
sociales que incluyan enseñanza básica y asistencia sanitaria básica, con la finalidad
de mejorar la Educación Básica y tratar de retener el mayor número de alumnos en la
misma, para que se cumpla el derecho que tiene el niño y adolescente de recibir la
educación necesaria para su formación integral entre los 5 y los 15 años de edad, la
cual es obligatoria. Como solución también se busca el brindar las condiciones para
que el niño no trabaje y el adolescente con edad laboral para trabajar reciba un salario
justo, tenga iguales derechos que el adulto, no realice jornadas mayores que las
establecidas por el régimen laboral para el menor y cuente con un sistema de
seguridad social.
En este orden de ideas, desde el año 1995, con la creación de un Comité
Interinstitucional como instancia responsable, Colombia se comprometió con la
formulación y puesta en marcha de políticas públicas orientadas a prevenir y eliminar
progresivamente el trabajo infantil y a proteger el trabajo juvenil, cumpliendo de esta
manera con los compromisos adquiridos al suscribir la Convención Internacional de
Derechos del Niño y adoptar los Convenios 138 y 182 de la OIT como parte de su
legislación interna. El marco legal establece el compromiso del Estado
colombiano en la protección de niños y niñas “contra la explotación económica y
contra el desempeño de cualquier trabajo que pueda ser peligroso o entorpecer su
educación, o que sea nocivo para su salud o para su desarrollo físico, mental,
espiritual, moral o social” tal como lo establece la Convención Internacional de
Derechos del Niño en su artículo 32. Con este objetivo el país ha establecido en 14
años la edad mínima para trabajar y se ha propuesto unir los esfuerzos en la lucha
contra las llamadas peores formas del trabajo infantil.
Durante los últimos diez años, Colombia ha diseñado y ejecutado dos planes
nacionales de acción, para los periodos 1996-1999 y 2000-2002, y ha formulado un
tercero (2003-2006) que está en curso . Al proceso de formulación y ejecución de esta
política pública se han vinculado diversas instituciones del Estado y actores de la
332
sociedad civil con el apoyo permanente de la cooperación internacional a través del
Programa para Colombia IPEC, de la Organización Internacional del Trabajo.
La formulación y puesta en marcha de estos tres planes expresa la inclusión
del tema en la agenda pública nacional; y la voluntad política de diferentes actores de
incidir sobre una problemática que vulnera los derechos de algo más de 1.500.000
niños, niñas y adolescentes colombianos. A tal efecto, los planes nacionales han
servido en el marco político para el desarrollo de acciones diversas tales como el
estudio sistemático de la problemática, la adecuación legislativa o el diseño de
estrategias de intervención. Contar con una política pública no significa que el
problema esté en vía de solución o que puedan mostrarse grandes avances, pues el
trabajo infantil se explica por una compleja articulación de factores sociales,
económicos y culturales que tienen sus raíces en la historia de la sociedad
colombiana, caracterizada por la debilidad de las políticas sociales y el atraso en
materia de garantía de derechos ciudadanos. Sin embargo, tener una política pública
frente al trabajo infantil que pueda ser revisada y ajustada permanentemente, facilita
el esfuerzo continuado en términos de recursos y acciones que conduzcan a resultados
en el mediano plazo, pese a las condiciones adversas del país, derivadas de la crisis
económica, el conflicto armado y la distribución del gasto público, que muchas veces
dificultan el logro de sus propósitos.
En Colombia, el Ministerio de la Protección Social como responsable de la
política de Infancia y dentro de ésta, la de protección de los niños y niñas del país, y
en cumplimiento de los Convenios 138 y 182 de la OIT, ha venido desarrollado a
través del Comité Interinstitucional Nacional y dentro de los lineamientos del
tripartismo de la OIT (participación de gobierno, empleadores y trabajadores), la
descentralización de las acciones de implementación de las políticas públicas, con la
participación y coordinación interinstitucional e intersectorial dentro de un diseño
metodológico que busca garantizar los derechos de los niños en la perspectiva de
333
avanzar en la prevención, el desestímulo y la erradicación progresiva del trabajo
infantil, además de la protección del adolescente trabajador.
El Ministerio de la Protección Social en coordinación con Instituto
Colombiano de Bienestar Familiar (ICBF), con el objeto de dar cumplimiento al
mandato del Plan Nacional de Desarrollo, hacia un Estado Comunitario que ordena
la formulación de un nuevo plan nacional de prevención y erradicación del trabajo
infantil que defina los instrumentos específicos de intervención para prevenir y
atender la problemática, sobre todo en sus peores formas; en la búsqueda de que los
menores trabajadores disfruten de la infancia mediante actividades lúdicas y
recreativas, y se integren al sistema educativo para fortalecer su capital humano; ha
estado logrando la definición de los planes departamentales de Amazonas, Arauca,
Casanare Caquetá, Cauca, Cesar, Córdoba, Chocó, Guainía, Guaviare, Guajira, Huila,
Magdalena, Norte de Santander, Putumayo, Quindío, San Andrés y Providencia,
Vaupés y Vichada, entre otros; a partir del cual se definieron los planes
departamentales de prevención, desestímulo y erradicación progresiva del trabajo
infantil, con énfasis en las peores formas y protección del trabajo juvenil completando
el cubrimiento nacional que se inició en 13 departamentos en el año 2003 con el
apoyo de la OIT - IPEC.
Con este trabajo se avanza en un tema importante para el desarrollo de la
política pública frente al trabajo infantil: la descentralización, buscando que las
decisiones e iniciativas sean creadas en donde ocurren los problemas y se adapten a
las necesidades y desarrollos de cada región. La formulación de los planes
departamentales en todo el país se constituye en el punto de partida de la acción
institucional, que posibilita además de avanzar en el desarrollo de la política nacional,
garantizar la unidad e integración metodológica de los planes, la participación
regional en el proceso, la caracterización de las manifestaciones locales y regionales
334
del trabajo infantil en cuanto a la dimensión, la interacción y coordinación
interinstitucional e intersectorial.
Aunque no se han dado los resultados esperados, la alternativa Colombiana,
dentro de las políticas sociales, ha logrado mejorar los niveles de educación
preescolar, primaria y secundaria, pero aunque la oferta educativa mejoró en el
segundo quinquenio de la década del noventa, ya que creció en 2.400.000 cupos,
todavía faltan mas de 1.300.000 cupos para lograr la universalidad de la educación,
considerando los niveles de preescolar, básica y media. Igualmente en Colombia la
iniciativa de la descentralización departamental para tratar el problema de niños,
niñas y adolescentes de acuerdo a las características de cada región ha dado algunos
frutos. Según las cifras aportadas por DANE (2.004), el trabajo infantil ha estado
disminuyendo en su proporción, se ha producido una disminución de la participación
de los niños, niñas y adolescentes en el sector productivo de la economía que pasó de
12.8% en el 2001 al 10.4% en el 2003, cifras que señalan que el proceso es lento y a
futuro.
Si esto realmente es así, podríamos pensar que esa alternativa podría ser
factible para Venezuela, y que al aumentar los recursos para la educación trae mejoras
a la misma, pero el problema no es solo de cobertura escolar, el problema también es
de calidad, de repitencia, de entrada tardía a la escuela, de deserción escolar. Así como
de situación económica que limita un mayor presupuesto a la educación, entre otros.
También habría que pensar en la descentralización, en Venezuela la protección del
niño, niña y del adolescentes es competencia concurrente dentro de los tres niveles del
poder público, pero es a nivel municipal, considerando las características propias de
cada región, donde podría ser mas factible el buscar solución a la problemática del
trabajo infantil y del adolescente trabajador.
335
En ese mismo orden de ideas, se puede señalar que en el Ecuador, más de
800.000 niños, niñas y adolescentes se dedican al trabajo a tiempo completo o parcial
en actividades como la agricultura, minas, sector servicios, doméstico, basurales,
entre otros; entre estos menores existen entre 500 y 1.000 niños, niñas y adolescentes
entre 5 y 17 años que trabajan en la recolección y procesamiento de basura. Estos
niños en la mayoría de los casos no cuentan con el apoyo apropiado para ingresar a la
escuela y acceder a un futuro mejor para si mismos y para su familia.
El trabajo de niños, niñas y adolescentes en basureros viola los derechos
fundamentales a la libertad, la vida, la educación, la salud y el ocio de las personas
menores de edad, exponiéndolos a sufrir trastornos psicológicos producto de una vida
sin infancia y una socialización en ambientes desfavorables, violentos e inseguros.
En el municipio Santo Domingo de los Colorados de Ecuador, para disminuir
el trabajo infantil, se desarrolló un proyecto con el apoyo del Programa IPEC y de la
ONG Desarrollo y Autogestión (2001), el cual tuvo como propósito definir una
política local de erradicación del trabajo infantil en este sector. A través del proyecto
se logró retirar aproximadamente a 101 niños y 33 niñas del trabajo en basureros. El
trabajo realizado necesitó la movilización y sensibilización de la opinión pública
local, de las instituciones estadales y privadas con presencia en el municipio, de los
propios recolectores de basura, para que reconocieran y enfrentaran el problema de
los niños y niñas que trabajan en ese sector. Se focalizó la acción en cuatro
componentes que actuaron de manera combinada: educación, salud, mejoramiento de
ingresos, y sensibilización. El programa para que se llevara a efecto necesitó
conformar una red institucional de apoyo para lograr los resultados planificados en
los distintos componentes, por lo que se realizaron alianzas con las autoridades del
municipio, la asociación de médicos, con la asociación de recolectores de basura,
medios de comunicación y con el Instituto Nacional del Niño y la Familia (INNFA).
336
En el abordaje multisectorial del programa se plantearon estrategias como: a)
incrementar los ingresos familiares para que sustituyan los que producen los niños,
niñas y adolescentes, b) crear espacios no escolarizados de juegos, aprendizaje y
socialización para los niños y niñas con el fin de alejarlos del basurero y apoyarlos en
su inserción, permanencia y rendimiento en la escuela, c) mejorar la salud de los
miembros de la familia, afectadas por el trabajo y en las condiciones que lo realizan,
d) generar una actitud en pro de la erradicación del trabajo infantil, entre las familias,
las organizaciones de recolectores y las instituciones.
En el área de Educación el programa concentró sus esfuerzos en tres aspectos:
la escolarización de los niños y niñas que no asistían a la escuela; la creación de una
ludoteca para apoyar el desarrollo de las destrezas de los niños y niñas para el
aprendizaje; y la promoción de una cultura escolar que apoyara la erradicación del
trabajo infantil.
En el área de la salud el programa logró que los niños y sus familias recibieran
atención primaria de salud y accedieran a servicios médicos y hospitalarios de bajo
costo.
Para la estrategia económica o mejoramiento de ingresos, se logró generar una
microempresa de reciclaje y se impulso la ejecución de 31 pequeños proyectos
productivos familiares. Estas iniciativas fueron soportes importantes para que las
familias accedieran a mejores oportunidades de generación de ingresos.
En el componente de sensibilización, las acciones de comunicación,
información con los padres de familia, con las autoridades, los miembros de los
servicios de salud y los docentes de las escuelas, fueron la base de una cultura de
apoyo a la erradicación del trabajo infantil.
337
Si bien la alternativa ecuatoriana, fue acertada para el Municipio Los Colorados
de Santo Domingo, donde viven solo 215.000 familias, el trabajo infantil en los
demás rellenos sanitarios de Ecuador todavía sigue vigente, sin embargo es de la idea
de llevar estas alternativas a otros Municipios de Ecuador
Esta alternativa que fue acertada para Ecuador pudiera aplicarse en Venezuela,
pero habría que pensar que en Venezuela, los vertederos de basura de cada municipio
pueden tener características diferentes a las de Ecuador, habría que tomar en cuenta el
contexto venezolano y las características propias de cada Municipio, tener presente su
situación económica, los recursos con que cuenta, las familias que viven al alrededor
de los botaderos de basura, empleo o desempleo de las mismas, posibilidades de
ingresos, las escuelas existentes, módulos de salud locales, la sensibilización que
tengan las autoridades municipales hacia la solución del problema. Sin embargo
aunque estos aspectos son positivos, no llevarían por si solos a la solución del
problema, porque es necesario también la adopción de un marco legal que reglamente
la actividad y situación de los rellenos sanitarios a fin de evitar enfermedades a la
población que vive alrededor de los mismos, evitar la entrada a los niños y niñas a
los vertederos, formar laboralmente a los padres desocupados para que estos aprendan
un oficio, en el cual puedan tener un ingreso estable, mayor posibilidades de empleo
para los adultos, mejorar los servicios de agua potable y la red de servicios sanitarios
donde esta inmersa la población, lo que puede significar que hay que contar también
con políticas regionales y nacionales que ayuden en la solución del problema.
Con respecto a Perú, se puede señalar que en el país, mas de 50.000 niños
trabajan en minas y canteras de menor escala. Estos niños trabajan en las peores
condiciones en las que enfrentan grave riesgo de sufrir heridas, enfermedades
crónicas o muerte. En minas de superficie y bajo tierra, los niños trabajan muchas
horas, acarrean cargas pesadas, colocan explosivos, excavan arena y rocas, pasan
horas golpeando las piedras para convertirlas en grava, se arrastran por túneles
338
angostos, inhalan polvo insalubre y trabajan en el agua, con frecuencia en presencia
de toxinas peligrosas como plomo y mercurio. Los niños mineros extraen oro, plata,
carbón, esmeraldas y estaño, tanto en Perú como Colombia, Ecuador, Bolivia y otros
países Sudamericanos. En las canteras los niños enfrentan riesgos de seguridad y de
salud al tirar y acarrear cargas pesadas, inhalar polvos y partículas peligrosas y usar
herramientas y equipo de trituración peligrosos.
En el Perú se han realizado proyectos en colaboración con la Organización
Internacional del Trabajo, que han demostrado que es posible eliminar el trabajo
infantil, al ayudar a las comunidades mineras y canteras a organizar cooperativas u
otras unidades de producción, mejorar la salud, seguridad y productividad de los
trabajadores adultos, y asegurar servicios esenciales como escuelas, agua limpia y
sistemas sanitarios. La comunidad de Santa Filomena, en Perú, que en 2004 se
declaró libre de trabajo infantil en su industria de minería del oro en pequeña escala,
es sólo un ejemplo.
En la comunidad de Santa Filomena trabajaban aproximadamente mas de 500
niños, niñas y adolescentes en la minería. La industria minera de Santa Filomena se
organizó en una asociación comunitaria de mineros con la finalidad de mejorar las
condiciones de trabajo. La comunidad ayudada por el Programa internacional para la
eliminación del trabajo infantil (PIETI) el cual esta adscrito a la OIT, logro instalar
una grúa para izar los minerales a lo largo del pozo de la mina. La grúa eliminó la
necesidad de que los niños, soportaran pesadas cargas desde unos 200 metros de
profundidad. Por medio de esta asociación con la organización no gubernamental
CooperAcción, y con la cooperación de las autoridades peruanas y el apoyo del
PIETI, se inició en el año 2000 su proyecto para eliminar el trabajo infantil en la
minería de Santa Filomena. Se utilizó el modelo de la OIT de prevenir y eliminar el
trabajo infantil que toma como base un método integrado de desarrollo sostenible en
las comunidades y familias.
339
El proyecto de Santa Filomena también apoyó actividades alternas de
generación de ingresos. Por ejemplo, compró máquinas de amasar y hornos para un
grupo de mujeres locales, las capacitó en el uso de las máquinas y las ayudó a instalar
una panadería. Como resultado, las mujeres del grupo elaboran pan diariamente,
complementando la dieta de sus familias y, al mismo tiempo, aumentando sus
ingresos, con lo que deben depender menos de los ingresos de sus niños.
Adicionalmente, el proyecto del PIETI organizó actividades de creación de
conciencia en las escuelas. El proyecto también apoyó una exhibición fotográfica
dedicada a temas de trabajo infantil y a los riesgos de salud que los niños encuentran
en las minas. Estas acciones estuvieron dirigidas a aumentar el conocimiento de la
comunidad sobre los peligros del trabajo infantil y sobre los beneficios de hacer que
los niños vayan a la escuela.
Centenares de niños y niñas pudieron dejar las minas de Santa Filomena
gracias al fortalecimiento de la capacidad de organización, la mejora en la protección
social, la creación de oportunidades de ingreso para las mujeres a fin de que sus hijos
no tuvieran que trabajar en las minas, la difusión de información sobre los beneficios
económicos y sociales y los costos del trabajo infantil; y el desarrollo de mejores
servicios de salud y nutrición. El retiro de todos los niños trabajadores de las minas
y canteras de escala pequeña es una meta que puede alcanzarse.
Aunque Perú tiene muchas comunidades mineras donde continúa el trabajo
infantil, al menos en Santa Filomena se hizo un trabajo en conjunto con la
comunidad, con los padres y madres de familia para alejar a los niños y niñas del
trabajo y acercarlos a la escuela, ayudándoles a adquirir derechos legales, organizar
cooperativas o unidades productivas, mejorar la seguridad y la productividad de los
trabajadores adultos, y la calidad de algunos servicios esenciales tales como la
educación y la salud
340
Si bien esa alternativa peruana fue acertada, donde incluyó un método
integrado de desarrollo sostenible en las comunidades y familias. Apoyando también
actividades alternas de generación de ingresos y capacitando a las madres de familia
para que obtuvieran sus propios ingresos, con la finalidad de que dependieran menos
del ingreso de sus hijos. Alternativa que puede llevarse para la eliminación también
de otras formas de trabajo infantil y que pudiera aplicarse en Venezuela a través de la
integración de las comunidades y la familia, pero hay que tomar en cuenta que la
situación venezolana es distinta a la peruana, a pesar de que en Venezuela puede
haber mayores recursos económicos, el país esta pasando por un periodo difícil,
donde a las familias no se les esta dando el grado relevante que deben tener por
mandato constitucional, por lo tanto, a muchas madres de familia, no solo tienen
problemas de dificultad económica, sino que no se les ha tomado en consideración
para una capacitación integral y oportuna que les permita de alguna manera lograr
una mejor preparación para insertarse de manera favorable en el mundo del trabajo,
muy por el contrario, muchas madres trabajadoras venezolanas forman parte de las
cifras de desempleo y de pobreza, dificultándosele formar parte activa en el ingreso
familiar; y por la situación de carestía en que viven se les dificulta enviar a los hijos a
las instituciones escolares, si es que logran un cupo; porque si no pueden satisfacer
sus necesidades de alimento, mucho menos la de transporte, uniforme, útiles
escolares.
Sin embargo no todo es negativo, como las familias venezolanas son
corresponsables en la manutención y educación de sus hijos y necesitan ingresos para
hacerlo, tienen el deber de buscar la oportunidad para organizarse e integrarse en las
comunidades, conocer los programas sociales y económicos y solicitar ser incluida
en los mismos, como se conoce, en los dos últimos años en Venezuela se han estado
desarrollando una serie de programas en beneficio de los mas desposeídos, aunque
estos no han llegado a todos los necesitados, son interesantes porque a través de los
mismos hay la oportunidad para que las madres puedan ser capacitadas en diferentes
341
oficios y una vez formadas en el trabajo, pueden tener la oportunidad de formar parte
de cooperativas, integrándose a las redes de producción que se han venido
impulsando.
Por otra parte, y en relación a Bolivia, las áreas de trabajo y explotación
infantil mas notorias son las vinculadas con la producción agroforestal como la zafra
y la producción minera, en las cuales un elevado número de niños, niñas y
adolescentes, participan en forma temporal o permanente, bajo un régimen de trabajo
familiar. Las familias campesinas dedicadas a la zafra de la caña de azúcar,
anualmente y durante seis meses se trasladan desde sus sitios de origen a las
plantaciones de cultivo de este rubro, y ante la alternativa de dejar a sus hijos solos
prefieren llevarlos consigo al sitio de la zafra, implicando que una parte importante de
la población que migra temporalmente, este conformada por niños, niñas y
adolescentes, que directa o indirectamente participan de las actividades de la zafra.
Los niños desde los nueve años deben abandonar la escuela, para incorporarse a un
trabajo con jornadas de 12 horas, en un clima de temperaturas extremas y en
condiciones peligrosas, vulnerándosele sus derechos al privarles de su infancia, de su
potencial, de la oportunidad de ir a la escuela, y de sus sueños, perjudicándose en su
desarrollo físico y mental, considerada la actividad realizada por estos niños como
una de las peores formas del trabajo infantil, de acuerdo al Convenio 182 (OIT,1999)
En iguales condiciones se encuentran los niños, que trabajan en la minería
artesanal de Bolivia. Aproximadamente existen 3.800 niños, niñas y adolescentes
mineros en los municipios donde se concentra esta actividad. Los niños y niñas,
trabajan en su mayoría en labores de superficie, ocupados de cargar, trasladar y
seleccionar mineral y de otras tareas igualmente pesadas relativas al procesamiento
del mineral. Dentro de las minas, en los socavones, trabajan sobre todo los
adolescentes pero también en algunos casos niños realizan labores de ayudantes de
sus padres o de otros adultos, expuestos a la inhalación de gases tóxicos y otros
342
peligros, cargando herramientas y mineral e incluso en tareas de perforación y disparo
de dinamita. Pero también un gran número de ellos trabaja en las tareas de la minería,
que tiene que ver con el rescate de minerales en los ríos. Los niños están obligados a
trabajar para contribuir al ingreso de sus familias, que pertenecen a los sectores mas
pobres de la sociedad.
En Bolivia, tanto el Estado como la sociedad civil, han dirigido su atención
hacia la problemática del trabajo infantil, implementando programas con objetivos
orientados a propuestas viables, pero condicionados por la situación económica y
social del país. La limitada disponibilidad de recursos por parte del Estado, no ha
permitido un decisivo apoyo al abordaje de la situación, en términos de generar
programas de mayor alcance. Algunas organizaciones no gubernamentales vienen
desarrollando algunas acciones de educación y capacitación técnica para apoyar la
formación integral, prestando también algunos servicios complementarios de atención
a la salud y la alimentación; igualmente la iglesia con sus obras sociales atiende a los
mas necesitados y entre estos a los niños, niñas trabajadores.
En Bolivia, la Comisión Interinstitucional para la erradicación del trabajo
infantil (2001), integrada por instituciones gubernamentales, instituciones de la
sociedad civil y organismos de cooperación internacional, elaboraron el Plan de
Erradicación Progresiva del Trabajo Infantil, para reducir progresivamente el trabajo
de niños y niñas trabajadores menores de 14 años, mejorar sus niveles de calidad de
vida, a través de medidas de desarrollo integral para ellos y sus familias, a su vez
mejorar las condiciones laborales y calidad de vida de los adolescentes trabajadores
mayores de 14 años, generando medidas de protección laboral y oportunidades de
desarrollo integral, en forma progresiva para el año 2010, de acuerdo al plan se
prevén actividades de estrategia comunicacional, diagnósticos a través de censos
poblacionales de trabajadores infantiles, estrategias de escolarización nacional, diseño
de programas de desarrollo integral, social y económico de familias con niños y niñas
343
trabajadores, elaboración de un reglamento en relación al código del niño, niña y
adolescente.
Así mismo se tiene entre las estrategias del plan, el desarrollo de un programa
de microcrédito para pequeñas empresas familiares, desarrollo de un programa de
reactivación productiva familiar en áreas rurales de 20 Municipios, fortalecimiento
del servicio básico de salud para la atención del familias en situación de extrema
pobreza, aplicación de un programa de becas escolares para familias en situación de
extrema pobreza, diseño de un programa de formación y capacitación técnica para
adolescentes trabajadores, desarrollo de cursos de formación técnica a través de
instituciones y organizaciones que desarrollan actividades de formación, desarrollo de
talleres de capacitación y actualización, desarrollo de programas de escolarización de
adolescentes trabajadores.
A pesar de ser un plan con grandes expectativas, su aplicación es muy lenta
debido a factores económicos, por lo que todavía no se han logrado ver los resultados
efectivos, ya que no ha ocurrido la disminución del trabajo de niños y niñas, y
tampoco se ha mejorado la situación del adolescente trabajador. Las estrategias del
plan son interesantes porque abarca en forma integral a las familias, a la escuela, a la
comunidad, a la salud, y a la necesaria corresponsabilidad del Estado, la sociedad y
la familia.
344
CAPITULO VII
EDUCACIÓN Y TRABAJO UNA OPORTUNIDAD PRESENTE Y FUTURA
Para formular una política o propuesta de solución posible, es necesario
repensar la teoría de Bronfenbrenner ( 1979 ), en la cual se puntualiza que los niños y
adolescentes no se desarrollan o se desenvuelven en el vacío, sino que lo hacen
dentro de múltiples contextos, tales como la sociedad, familia, escuela, salud,
organización, medios de comunicación, la cultura donde crecen; forman parte del
entorno y de las influencias sociales, donde el niño, niña y adolescente como
semilleros del futuro deben ocupar la posición central. De allí que estos factores
deben estar presentes en la solución de sus problemas.
La familia tiene un papel fundamental, ya que los padres son los principales
responsables de cuidar y educar a los hijos, garantizándoles su protección dentro de
un ambiente de amor, comprensión y mayor suma de felicidad. La familia con niños
trabajadores debe ser involucrada e incluida ya sea a través de un proceso de
sensibilización y capacitación de los padres y madres en actividades ocupacionales a
través de las cuales puedan obtener un ingreso estable y digno, que satisfaga sus
necesidades de sustento y que le permita poder cumplir con sus obligaciones
económicas, para que dependan menos del trabajo de los niños. A lo anterior hay que
sumarle la intervención del Estado, los entes regionales y municipales, con sus
políticas públicas nacionales, regionales y locales en la responsabilidad que tienen de
garantizar a las familias la ayuda necesaria para que estas cumplan con su función.
Ayuda que tiene que venir a través de las políticas sociales y económicas en el
cumplimiento de los derechos garantizados en la Constitución y demás leyes, tales
como educación, trabajo, salud, seguridad social, vivienda adecuada, entre otras.
345
Todos estos factores tienen que tomarse en cuenta para poder abordar una
política de solución integral, donde se le de participación a la familia y a los niños,
niñas y adolescentes involucrados en el problema tratado en la presente investigación.
Lo que significa que es un tarea compleja que necesita de un equipo
multidisciplinario, donde cada actor desde su visión disciplinar formule una opción
viable. Sin embargo se ofrece una alternativa de solución para dar respuesta a los
problemas planteados, destacando el carácter hipotético que le da Holmes (1981) a las
alternativas de solución, pues según el autor, ninguna teoría es cierta o falsa, como
tampoco lo es una alternativa de solución, sólo el tiempo y la experiencia servirá para
demostrar la solidez o debilidad de la alternativa de solución propuesta.
Propuesta con dos vertientes
La propuesta tiene dos vertientes: por una parte hacer un proceso de
intervención tomando en cuenta las familias que trabajan directamente en el
vertedero de basura y por la otra tomar en cuenta la situación de los niños, niñas y
adolescentes trabajadores en el vertedero de basura.
Primera vertiente
Una de las primeras gestiones a cumplir es hacer contacto con las autoridades
municipales, ya que cualquier acción a seguir necesitaría de su participación y apoyo
con los recursos humanos y financieros en la operatividad de acciones a seguir.
Proceso de diagnóstico
Como primera acción a seguir, es la realización de un proceso de diagnóstico
tanto a los niños, niñas y adolescentes (énfasis en los excluidos del primer
diagnóstico) como a toda la población adulta que trabaja en el vertedero del
346
Municipio Libertador, ya que no existen estadísticas referentes a la población que
vive del vertedero de basura municipal, ni de su situación generalizada. A través del
mismo es necesario verificar:
-Número total de personas trabajando en el vertedero de basura la Guásima
-Existencia de familias completas trabajando en el vertedero
-Donde viven, tipo de vivienda
-Cuantos integrantes son en la familia
-Existencia del padre, de la madre, padrastro, madrastra
-Preparación y oficio del padre , de la madre, padrastro, madrastra
Detectar
-Quienes quieren salir del vertedero y quienes no
-Quienes están interesados en participar y contribuir en la solución de sus problemas
-Posibilidades de participar en un trabajo compartido
-Existencia de las escuelas del sector, programas a que están incorporadas (programa
alimentario escolar, programa de inmunizaciones, dotación de útiles, roperos
escolares)
-Necesidades de la comunidad (la Guásima y el Vigía)
-Programas Nacionales, Estadales y Municipales en que esta incorporada la
comunidad.
Basamento
Luego del diagnóstico, atendiendo a los lineamientos generales expresados en
el Plan de Desarrollo Económico y Social de la Nación 2001-2007 (MPD, 2001),
precisar como las comunidades del Municipio Libertador esta llevando a cabo su
Desarrollo Endógeno, como están impulsando la economía, como están desarrollando
347
sus potencialidades, existencia de redes productivas; existencia en el lugar de
organismos encargados en la formación para el trabajo.
Objetivos de iniciación
Tomando en cuenta lo anterior, hacer jornadas de sensibilización o reuniones
interactivas por un equipo especializado y multidiscipinario, cuyos objetivos sean: a)
incentivar a las personas para que sientan la necesidad de salir del vertedero y
conozcan la existencia de otras opciones de vida como el aprender un oficio, que les
permita otro tipo de actividad. b) que las personas reconozcan sus propias
potencialidades que les permita salir de la exclusión en que han vivido y la necesidad
de su incorporación al sistema educativo, económico y social en el proceso de
desarrollo. c)posibilidades de involucrarse voluntariamente en redes productivas,
para lo cual deben prepararse. d) llevar a cabo un proceso de interacción y discusión
para reconocer posiciones e intereses variados a ser confrontados para que las
personas identifiquen sus compatibilidades e incompatibilidades y llegar a decisiones
conjuntamente con los afectados e interesados quienes en definitiva van a ser los
responsables y destinatarios directos en la ejecución de cualquier acción. Al principio
estas jornadas de sensibilización deben ser hechas en los propio escenarios del
vertedero, luego continuar con la misma, en la casa sede de la asociación de vecinos,
o en cualquier casa vecinal.
Acciones
Es necesario realizar un proceso de revisión de los diferentes organismos que
vincula la educación con el trabajo, de acuerdo a lo establecido en el artículo 3 de la
Constitución de la República Bolivariana de Venezuela. Un programa que podría ser
posible de implementar en el presente, es el llevado a cabo por la misión Vuelvan
348
Caras, institución conocida con este nombre en el actual periodo constitucional, y la
cual se esta expandiendo en las diversas comunidades pobres. A través de la misma,
las personas, en los actuales momentos, pueden formarse en y para el trabajo. Esta
misión cumple un proceso de capacitación a las personas, con un periodo de duración
entre seis meses y dos años, según el oficio que se aprende, lo que significa que las
personas tienen diferentes ritmos para su aprendizaje y que su integración al proceso
productivo es en periodos diferentes.
La idea es incorporar a todas las personas adultas trabajadoras del basurero
para que se capaciten en un oficio. Para esto es necesario que las autoridades
municipales se avoquen a la realización de las gestiones pertinentes, y ante los
organismos competentes, para la implementación de los programas que capaciten a
las personas en y para el trabajo en la comunidad; y si es el caso, que ya el programa
esta implantado en la comunidad, haya posibilidades de que al mismo sean
incorporadas las personas que acuden al vertedero de basura municipal del sector la
Guásima.
Formación de cooperativas
La finalidad, además de capacitar en un oficio, podría ser la formación de
unidades productivas o cooperativas, por lo tanto es necesario la realización de
jornadas de orientación adecuada, a las personas incorporadas en el proceso de
capacitación para el trabajo, para que participen en la formación de cooperativas. Para
iniciar a las personas en las cooperativas y que estas puedan producir determinados
productos específicos de beneficio, para si y para la comunidad, el Estado y la
alcaldía correspondiente, debe darles la ayuda financiera y los recursos materiales,
para el inicio de las mismas.
349
Las cooperativas o empresas de producción, son agrupaciones de 5 personas
o socios quienes al seguir ciertas formalidades, como tener un nombre, estatutos de
acuerdo a parámetros de la ley, aprobados en asamblea, transformar la asociación en
personalidad jurídica ante el registro subalterno de su localidad, con éste registro
inscriben la cooperativa en la Superintendencias de Cooperativa y reciben la
constancia oficial. Con esta constancia pueden solicitar la ayuda económica o créditos
que ofrecen los organismos públicos que dan créditos a las cooperativas, entre ellos el
fondo de crédito de la Pequeña y Mediana Industria y el fondo de desarrollo
microfinanciero.
El lograr capacitar a las personas en un determinado oficio, orientarlas y
darles la ayuda necesaria para la formación de cooperativas, estas lograrían una
forma de sustento familiar distinta a obtener desechos sólidos hurgando en la basura.
Al lograr un sustento estable para la familia, los padres y madres ya no tendrían
necesidad de mandar a sus hijos al vertedero, al contrario podrían ejercer el deber de
mejorar la situación de sus hijos menores dándoles manutención y protección.
Como un área de producción, en relación a los seis ejes, a través de los cuales
se ejecutan los proyectos para la conformación de los núcleos de desarrollo endógeno,
es el área de servicios. En esta área podrían incorporarse algunas cooperativas, que
dentro de la comunidad intervengan en los procesos de producción, que ayude a los
niños y adolescentes a obtener los materiales necesarios para su inclusión escolar. En
otras palabras, las escuelas demandan cooperativas dentro de la comunidad, que
tengan que ver con oficios de carpintería y herrería concretamente en la fabricación
de pupitres, bibliotecas, escritorios. Así también hacen falta cooperativas para la
fabricación de uniformes escolares, cooperativas dedicadas a la fabricación de
calzado escolar, entre otras
350
Aunado a lo anterior, es necesario sensibilizar a las autoridades municipales y
estadales, para que estas en realización de su capacidad de gestión, hagan operativas
las acciones a seguir en cumplimiento del equilibrio social, que es una de las líneas
generales del plan de desarrollo económico y social de la nación 2001-2007.
Inclusión de las familias en diferentes programas sociales
En cumplimiento de este plan, las autoridades municipales y estadales deben
incluir a estas familias en los programas sociales como el de salud, llevado a cabo en
el Municipio Libertador por el programa Barrio Adentro, el cual esta siendo ejecutado
tanto por médicos cubanos como venezolanos; y los cuales prestan atención médica
gratuita tanto en el modulo de atención, así como citas domiciliaria, suministrando
además medicamentos en forma gratuita, siempre y cuando lleguen los recursos del
Estado. Estas familias logradas sacar de los vertederos de basura deben ser incluidas
también en los otros programas dependientes del MSDS, para que mejoren en su
situación de salud (programas que tienen que ver con la nutrición de los niños
menores de 5 años, con reducción de la tasa de mortalidad infantil, acceso al agua
potable, programas para las mujeres embarazadas, eliminación de las enfermedades
por carencia de yodo, programas para que las mujeres amamanten a sus hijos los seis
primeros meses, entre otros).
Las acciones también tendrían que ir dirigidas a incluirlos dentro de los
programas de mejoramiento de sus viviendas, se tendrían que hacer acciones para
informar e incluir a la comunidad de la Guásima y el Vigía de la existencia del Plan
de Rehabilitación de Viviendas en Barrios (REVIBA), adscrito a FUNDABARRIOS,
es un programa que consiste en la rehabilitación y construcción de viviendas
adecuadas, a través del trabajo social comunitario, donde las personas intervienen en
el proceso de autoconstrucción y mejoramiento de las viviendas, este es un programa
adscrito al Ministerio de Infraestructura, y el barrio o comunidad interesado en su
351
mejora, debe solicitarlo ante el organismo, mediante acta levantada en asamblea
comunitaria firmada por los vecinos, especificando el deseo de obtener el beneficio
de rehabilitación de viviendas y del barrio. El deseo no es poder, pero debe darse la
sana presión de la comunidad y de las autoridades municipales en aras de lograr la
inclusión de la comunidad en estos programas.
Al lograr los padres tener un oficio y una ocupación definida y estar
incentivados a participar en la solución de los problemas de la comunidad, hay
mayores posibilidades de proteger y darle manutención a los hijos dentro de la
familia, y los hijos menores de 17 años al no trabajar podrían dedicarse al estudio.
Segunda vertiente
Como segunda vertiente en igualdad de importancia, la propuesta va en
beneficio de los niños, niñas y adolescentes trabajadores del Municipio Libertador,
haciendo énfasis en los niños, niñas y adolescentes trabajadores en el vertedero de
basura la Guásima.
Principios fundamentales
La propuesta tiene como principios fundamentales: el Interés superior del
niño, la protección absoluta, la participación en la sociedad, el niño y el adolescente
como sujetos de derecho, el rol fundamental de la familia, los cuales están
establecidos en la LOPNA.
La Educación una alternativa de prioridad para la inclusión
352
Como los niños, niñas y adolescentes tienen una serie de derechos y garantías,
que deben ser garantizadas por la familia, así como por el Estado, y en vista de que el
Estado a través de políticas públicas debe asegurar condiciones que permitan asegurar
el cumplimiento de esta responsabilidad, una forma de cumplir con la misma es a
través de las escuelas, por lo que se hace necesario el buscar formulas para que estos
niños abandonen el trabajo y sean incluidos dentro del proceso educativo Una
formula factible es fortaleciendo a las escuelas en los programas sociales que vayan
directamente a los niños, garantizándoles sus derechos.
En ese orden de ideas, se puede señalar que las escuelas para poder retener a
los niños, niñas y adolescentes deben ser atractivas tanto en la calidad de la educación
como en la prestación de los diferentes servicios, como servicios de comedores
escolares, biblioteca, útiles escolares, roperos escolares, entre otos. Las escuelas que
no están incluidas dentro de estos servicios deben hacer las gestiones pertinentes ante
los organismos dependientes del MED y el MSDS, por lo que es necesario incorporar
a los docentes y directivos en la búsqueda de soluciones.
Al estar la escuela por ejemplo, incluida dentro de los programas de
comedores escolares, no solo seria beneficioso porque el alumno tendría su
alimentación asegurada, sino en el aspecto nutricional, tendría oportunidad de tener
una dieta saludable, donde estén incluidos los requerimientos calóricos protéicos
conforme a la edad escolar. La presencia de comedores escolares en todas las
escuelas de las comunidades de la Guásima y el Vigía, daría oportunidad para que
las madres de la comunidad participen en la elaboración de los alimentos, siendo este
un trabajo productivo que podría realizarse a través de una cooperativa creada en la
comunidad.
Igualmente lograr en todas las escuelas la existencia de una biblioteca escolar
y bibliotecas de aula, es un recurso necesario, porque muchos niños, niñas y
353
adolescentes se excluyen del ambiente escolar, porque su situación de carencia le
impide poder adquirir los materiales de lectura y escritura propios del proceso
educativo. En ese mismo orden de ideas, a todas las escuelas de la comunidad de la
Guásima y el Vigía deben incorporarse además los programas de bulto escolar, y el
de ropero escolar, entre otros. Para que un niño, niña y adolescente no se excluya de
la escuela, al contrario se garantice su inclusión, necesita vestimenta apropiada y que
lo abrigue, existen niños totalmente excluidos de los programas sociales, que al
carecer de ropa, calzado y útiles escolares, se ven imposibilitados de asistir a la
escuela.
Los niños, niñas y adolescentes trabajadores del Municipio Libertador, al
lograr ser reinsertados en las escuelas a través de la implementación de los programas
citados y contenidos dentro de las políticas sociales existentes, también tienen
oportunidad de participar en los programas de salud preventivos, que el MSDS a
través de las coordinaciones regionales debe llevar a las escuelas, como son la
vacunación y prevención de enfermedades como el sarampión, rubiola, poliomelitis,
hepatitis, tuberculosis, entre otras.
Existen niños, niñas y adolescentes trabajadores del vertedero que por su edad
y años de desincorporación de la escuela ya no pueden ingresar al proceso de
educación formal abandonado, por ejemplo un adolescente de 14 años que haya
desertado de la escuela en el tercer grado, el no puede volver a la escuela a estudiar
con niños de 9 años. En estos casos puede ser incorporado en los programas que tiene
el Estado para que concluya su educación básica y luego pasar a la educación de
adultos, o insertarse dentro de un programa que lo capacite para el trabajo.
354
Opción de prosecución en el ámbito educativo formal
A nivel de la tercera etapa de educación básica, las cifras del MED, son
indicativas de que un número significativo de estudiantes no continúan la
prosecución en sus estudios al pasar para el séptimo grado, y que las mayores cifras
de deserción se encuentran en séptimo, octavo y noveno grado, esto también es de
observancia en el Municipio Libertador, donde los niños y adolescentes de forma
significativa desertan a nivel de séptimo grado, muchos por incorporarse a la
actividad laboral y no lograr suficiente motivación para continuar estudios. Esto
podría significar que los adolescentes entre séptimo y noveno grado que tienen una
edad aproximada entre 12 y 15 años, a veces hasta 17 años, necesitarían de un
esfuerzo mayor para ser retenidos en la educación formal. A los adolescentes, a
partir de los 14 años, la Ley Orgánica del Trabajo y la LOGNA, los autoriza para
trabajar, por lo que la propuesta también va en función de que los adolescentes antes
de incorporarse a realizar alguna actividad laboral, tengan la oportunidad de
capacitárseles en un oficio dentro de la educación básica, para que a partir del noveno
grado tengan una doble opción, incorporarse a la actividad productiva y continuar sus
estudios de ciclo diversificado. Pero esta doble opción deben lograrla a través de la
educación básica en su tercera etapa.
De acuerdo a la Ley Orgánica de Educación, artículo 21, a través de la
educación básica se vincula la educación con el trabajo. En cumplimiento de éste
articulo, desde el año 1988 el diseño curricular del área educación para el trabajo en
su tercera etapa de educación básica ha comprendido 6 subáreas (industrial,
comercial, agropecuaria, hogar, estética y deportiva) y mas de 150 programas (dibujo,
electricidad, mecanografía, contabilidad, artesanía, manualidades, técnicas de oficina,
corte y costura, entre otros), si bien estos programas dentro del pensum de estudio
representa de 6 a 14 horas semanales , no se ha logrado una real vinculación de la
educación y el trabajo como es su finalidad, ya que desde su implementación los
355
programas han tenido muchas debilidades por ser muy teóricos, altamente
estructurados, carentes de secuencia, con pocas posibilidades de implementación por
la carencia de talleres y recursos apropiados y no han respondido a las expectativas
locales (Rodriguez, 1995). Por lo que se hace necesario que en la integralidad de la
propuesta, vaya también la iniciativa de proponer mejoras a la educación básica en su
tercera etapa como una forma de retener a los alumnos en la misma y lograr que todos
los adolescentes entre 12 y 17 años sean capacitados en una determinada labor de
acuerdo a sus necesidades y a las necesidades de la comunidad.
La propuesta va dirigida en repensar y reorganizar en cada institución escolar,
el área educación para el trabajo, que es el área que dentro del Plan de Estudio de la
Educación Básica en la tercera etapa, presenta mayor vinculación del proceso
educativo con el trabajo. Se debe organizar tomando en cuenta la comunidad
circundante a objeto de ampliar las posibilidades de formación y capacitación de los
alumnos en base a las necesidades y demanda laboral que se evidencia en la
comunidad y con miras a lograr la participación, tanto de los integrantes de la
institución escolar, como de los diferentes sectores de la comunidad, tales como la
familia, organismos del Estado, asociaciones de la localidad, empresa privada, en
procura de estrechar la vinculación entre la escuela y la comunidad y canalizar las
acciones en la búsqueda de los recursos humanos, materiales, técnicos, experiencias,
para hacer efectiva la ejecución programática del área educación para el trabajo, que
facilite al educando su preparación en un trabajo productivo, en beneficio propio, de
la familia y de la comunidad.
Instrumentación
Para la Instrumentación de la mismas se sugiere el seguimiento de etapas o
fases, las cuales pueden desarrollarse en un mismo período de tiempo.
356
Etapa de diagnóstico:
Se sugiere en primer lugar; hacer un estudio diagnóstico a fin de conocer la
realidad de la comunidad, de los programas correspondientes al área educación para
el trabajo y de los planteles escolares donde se va a impartir los programas de dicha
área. Diagnóstico que debe ser realizado con suficiente tiempo, antes del inicio del
año escolar y el cual puede comprender varios aspectos.
1- Diagnóstico a la comunidad para detectar (las necesidades, demandas
laborales, recursos materiales, financieros existentes y con cuales puede contar la
escuela, número de alumnos aspirantes a cursar 7mo, 8vo y 9no grado). El diagnóstico
al detectar las necesidades de la comunidad, podría indicar qué actividades u oficios
están ausentes en la comunidad y cuya presencia coadyuvarían en el desarrollo de la
misma. El conocimiento de lo anterior permitiría determinar con mayor claridad, las
subáreas y programas del área educación para el trabajo que deben ser impartidas a
los alumnos. Puede ser que la comunidad demande falta de personas preparadas en
electricidad, plomería, carpintería, herrería, entonces los programas que se impartan
en 7mo, 8vo y 9no grado tendrían como objetivos capacitar para el trabajo, en la
formación de estos recursos. Si se trata de una comunidad donde haya que desarrollar
el turismo, los programas a impartir tendrían que ver con el turismo.
Existen comunidades cuyo desarrollo depende de la producción agrícola y
pecuaria, en esas comunidades los programas deben estar dirigidos hacia la
agricultura, cultivos regionales, huertos escolares, maquinaria agrícola, desarrollo de
vacas lecheras, de ovinos, caprinos. En las comunidades artesanales, los programas
deben ser dirigidos hacia el desarrollo de la artesanía propia de la región. Una
comunidad puede tener requerimiento de diversidad de recursos humanos, para su
desarrollo, por ejemplo una comunidad costera, cuyo desarrollo se realiza a lo largo
de muchos años, donde se construye hoteles, apartamentos en propiedad horizontal,
357
resorts, sitios de recreación, que son sitios turísticos por las bondades del mar y de la
zona geográfica, donde haya una tradición artesanal y donde los habitantes laboren en
el mar para sacar los productos marinos para su alimentación y para la venta.
En una comunidad con estas características, hay probabilidad de que se
necesite gente preparada para trabajar en la construcción (albañiles, cabilleros,
herreros, carpinteros, electricistas, plomeros), gente preparada en turismo, en oficios
artesanales que tengan que ver con la elaboración de redes de pesca, chinchorros,
sombreros y jarrones; gente preparada en elaboración y conservación de alimentos,
gente que construya peñeros, además personas preparadas en informática y en
mercadeo entre otros.
Lo importante es que los recursos humanos se preparen de acuerdo a las
necesidades del ciudadano y de la comunidad, para la solución de los problemas de la
comunidad. De allí que el diagnóstico puede facilitar el impartir los programas de
educación para el trabajo, específicos en cada región.
2- Diagnóstico al área educación para el trabajo en su tercera etapa en el nivel de
educación básica
Considerando que el marco regulatorio de la educación básica, contenido en la
Constitución de la República Bolivariana de Venezuela (1.999), en la Ley Orgánica
de Educación (1.980) y su Reglamento, y, demás instrumentos legales que rigen la
materia educativa, establecen la finalidad de la educación básica, como es :
1. La formación integral del educando.
2. La formación para la vida.
3. La formación para el ejercicio de la democracia.
358
4. El fomento de un ciudadano capaz de participar activa conciente y solidariamente
en los procesos de transformación social.
5. El desarrollo de una conciencia ciudadana para la conservación, defensa y
mejoramiento del ambiente y de la calidad de vida.
6. El desarrollo de sus destrezas y su capacidad científica, técnica, humanística y
artística.
7. Inicio de aprendizajes, disciplinas y técnicas que le permitan el ejercicio de una
función útil.
8. La consolidación en el educando de las destrezas para el manejo del lenguaje, de
los procesos de pensamiento, la valoración hacia el trabajo y la participación
ciudadana.
9. Desarrollo de sus capacidades del ser, conocer, hacer y convivir de cada
individuo de acuerdo a sus aptitudes.
Así, la finalidad de la educación básica debe consolidarse a lo largo de las tres
etapas del nivel, las cuales deben tener continuidad y articulación para la formación
del educando, el cual debe ser el centro de la escuela, donde además de lograr
aprendizajes significativos, sea él mismo que construya su propio aprendizaje y, sea
capaz de crear, conocer, hacer y proponer cambios en su realidad social.
Tomando en cuenta la realidad social del alumno en su comunidad
circundante, hay la necesidad de fortalecer una de las áreas de la educación básica
en su tercera etapa, como es el área de educación para el trabajo. A través de ésta
área el proceso educativo debe desarrollarse tomando en cuenta además de las
necesidades, intereses y aspiraciones de los alumnos, las necesidades de la
comunidad, reconsiderando la estructuración de los programas existentes,
359
incorporando nuevos contenidos de aprendizaje y metodologías innovadoras donde
el alumno en su situación de aprendizaje tenga oportunidad a través de su
potencial creativo de construir y producir conocimiento. Esta consideración está en
concordancia con la educación crítica y liberadora cuyo postulado afirma que lo
que se aprende debe tener posibilidad de aplicación y recreación (Freire, 1990).
Por otra parte, el perfil del área educación para el trabajo está enmarcado
dentro de las finalidades del nivel de la Educación Básica, porque a través del mismo
se ha esperado que contribuya a la formación integral del educando, a la formación
para la vida, que permita desarrollar una conciencia ciudadana para la conservación y
uso racional de los recursos, participar en acciones ambientales, el fomento de valores
como el amor, la identidad nacional, la convivencia, el respeto a las demás personas,
así como formar al alumno en disciplinas y técnicas que le permitan el ejercicio de
una función útil. El área puede fomentar también el desarrollo de las capacidades del
ser, conocer, hacer, y convivir.
Tomando en consideración los fines que persigue el nivel de educación básica,
los objetivos generales del área educación para el trabajo, los objetivos del área en su
tercera etapa y el perfil que se debe lograr en el educando a través del área en la
misma etapa, a su vez, tomando en cuenta aprendizajes fundamentales como el
aprender a ser, aprender a conocer, aprender a hacer, aprender a convivir y
aprendizajes basados en principios globalizadores e interdisciplinarios como son por
ejemplo la capacidad de comprensión y expresión, la cual es básica en toda situación
de intercambio comunicativo, la capacidad de pensar, o la capacidad para trabajar
individual y grupalmente de forma sistemática y responsable, es necesario
reconsiderar la organización tradicional existente en los programas del área la cual a
llevado a una praxis pedagógica sustentada en la trasmisión, en la acumulación de
360
información y poca pertinencia del sistema educativo con el desarrollo económico
social del país.
Se propone la renovación o reforma de los programas, donde se tome en
cuenta las condiciones en que se desarrolla el proceso educativo, la realidad social y
económica de la comunidad en que se desenvuelve el alumno, los avances
tecnológicos; y, considerando a los programas de estudio como instrumentos
operativos que orientan en el logro de objetivos y finalidades de nivel, de área, de
etapa, estos deben contemplar contenidos o saberes relacionados con lo cultural, lo
social, lo económico, lo científico, lo tecnológico, los valores, lo humanístico donde
el educando pueda construir y le aporte significado y sentido a lo que aprende, con
contenidos que aborden los problemas, situaciones y necesidades de la sociedad en
general y de la comunidad específica en que vive el educando, para que tome
conciencia de su entorno y desarrolle competencias para mejorarlo
Se propone que la organización del conocimiento podría realizarse a través de
contenidos de tipo conceptual, procedimental y actitudinal, que generen aprendizaje
significativo, manteniendo una estrecha relación con el desarrollo de las
competencias cognitivas intelectuales, cognitivas motrices y cognitivas afectivas.
Estos tipos de contenidos deben estar en interacción con los aprendizajes
fundamentales como el aprender a ser, aprender a conocer, aprender a hacer, aprender
a convivir. A su vez los contenidos deben estar impregnados de la capacidad de
comprensión y expresión, necesarios para el dialogo y la comunicación; de la
capacidad de pensar o desarrollo del pensamiento, necesarios para la reflexión, toma
de decisiones, para interiorizar el aprendizaje, para aplicar lo aprendido, para la
resolución de problemas sociales, científicos, cotidianos, para adoptar posiciones en
la realidad en que se vive; de la capacidad para lograr aprendizajes en valores donde
361
el alumno descubra e interiorice el trabajo como una realidad y como un valor
esencial para la existencia humana. En la revisión de los programas de educación
para el trabajo en la tercera etapa, podrían considerarse estos aspectos, además de
tomar en cuenta los avances tecnológicos que deben ser incorporados en los mismos.
3- Diagnóstico a la Institución Escolar. Debe tomarse en cuenta tanto la planta
física como los recursos. Planta Física (Número de planteles que imparten el nivel de
educación básica en su tercera etapa, condiciones de la planta física, capacidad de
ampliación, número de talleres, sub-áreas que se administran en educación para el
Trabajo). Recursos humanos y materiales (equipos, herramientas, mobiliario,
biblioteca
La finalidad es tener identificados los planteles que imparten Educación
Básica en su tercera etapa, las condiciones en que se encuentran estos planteles,
posibilidades de mantenimiento, ampliación, dotación de talleres propios del área y
los recursos con que cuenta cada taller. Este diagnóstico permitiría implantar
determinados programas en determinados planteles, de acuerdo a los recursos
existentes en cada uno de ellos, teniendo como norte las necesidades del alumno y de
la comunidad. En caso de que el recurso sea insuficiente o no exista hay que
emprender acciones para obtenerlo.
4- Diagnóstico a la Organización Escolar: Matrícula escolar a atender por
plantel, carga horaria, número de secciones, número de alumnos por sección, número
de horas clase de alumnos por programa, número de horas docente por programa,
subáreas y programas
Etapa de Incentivación, Entrenamiento:
362
Implicaría a su vez los siguientes pasos:
- Incentivación al personal docente para ampliar el estado de conciencia sobre
la necesidad de los nuevos programas a impartir.
- Contactar a personal especializado para actualización y entrenamiento de
docentes.
- Actualización de docentes.
- Entrenamiento de docentes no especializados en los respectivos programas.
En la búsqueda de la inclusión de nuevos programas (de acuerdo a los
intereses de los alumnos y necesidades de la comunidad), de actualización y
mejoramiento de los existentes, se propone realizar un proceso de actualización y
entrenamiento de personal docente, se podría entrenar, instruir a los docentes
incorporados al área pero que no están especializados en la misma, e incluso
abarcar a los nuevos docentes que se requiere sean incorporados en vista del posible
aumento de la demanda de los mismos en los programas a impartir.
Recursos
Hay que distinguir entre los recursos humanos y los recursos materiales. Entre
los recursos humanos se debe tomar en cuenta:
Zona Educativa (Director de zona Educativa, Jefe de Personal, Coordinador de
Educación Básica, Jefe de Presupuesto, Coordinador del Área Educación para el
Trabajo)
Municipio Escolar (Integrador Municipal, Integradores sectoriales, Coordinador del
Área Educación para el Trabajo)
363
Instituciones Escolares (Director, Subdirector, Personal Docente, Administrativo,
Obrero, Orientador, Evaluador, Coordinador del Área Educación para el Trabajo,
Padres y Representantes).
Comunidad (familia, asociación de vecinos, dirigentes de la comunidad,
representantes de la Alcaldía, administradores de la Empresa Privada.
Entre los recursos materiales hay que distinguir:
1- Recursos propios de los talleres, aulas o espacios donde se impartirán los
programas. Entre estos recursos están: equipos, herramientas, máquinas,
computadoras, mobiliario.
Forma de obtenerlos:
La obtención de estos recursos se puede lograr a través de: Ministerio de
Educación y Deportes, la Zona Educativa, la Comunidad Educativa de cada plantel,
solicitando donaciones al gobierno local y regional, solicitando precios especiales a la
empresa privada, autogestión (realización de domingo familiar, verbena, venta de
comida)
2- Recursos a utilizar como materia prima o insumo necesario para el desarrollo
de la actividad de clase.
Forma de obtenerlos:
Utilización de material de reciclaje.
364
- Solicitar en los aserraderos de la comunidad madera.
- Solicitar en las construcciones de casas y edificios material considerado de
desecho como baldosas y cerámicas partidas, las cuales pueden no ser
requeridas en la construcción de los edificios, pero si pueden ser utilizadas en
la elaboración de productos de artesanía.
- Recolectar para vender a las empresas recicladoras: periódicos viejos, latas,
vidrios, cartones, plástico.( sin que esto implique ir al basurero municipal)
- Ingresos obtenidos por la venta de artículos producidos por los alumnos en las
actividades de clase.
Para la utilización de los conocimientos obtenidos a través de la actividad
escolar, se sugiere que desde el mismo momento que el alumno esté incorporado en
su proceso de formación hacia el trabajo, comience a realizar actividades productivas
dentro de la comunidad que le procuren beneficios económicos a él y a su familia.
Por ejemplo si en la escuela, el alumno aprendió a través del programa
carpintería, a realizar mesas y sillas, entonces el alumno debe utilizar ese
conocimiento para fabricar muebles como una actividad productiva que le puede traer
beneficios a su familia. Otro ejemplo sencillo es: en el caso de que el programa sea de
pastelería y preparaciones criollas, el alumno una vez adquirido los conocimientos
básicos, pueda preparar pasteles y productos criollos, decorarlos y presentarlos
preparados, ese producto elaborado debe reportarle beneficios a la familia,
utilizándolos para su alimentación, o ponerlo a la venta en la comunidad para la
obtención de ingresos.
La idea es que el alumno cuando termine su etapa de escolaridad pueda
integrarse a las redes productivas, mediante una ocupación estable y digna, pudiendo
asociarse con otras personas de la comunidad para la creación de una cooperativa que
le produzca beneficios a la persona y a la comunidad en general.
365
Dificultades u obstáculos para aplicar la propuesta
La alternativa de solución puede encontrar dificultades para su aplicación.
Entre las dificultades podría estar el que el Municipio no cuente con los recursos
necesarios para participar en la operatividad de las acciones, así como tampoco sea
apoyado por políticas estadales y nacionales, ya que formar a una comunidad en el
trabajo y fomentar la creación de cooperativas, aunado a la inclusión de todos los
niños, niñas y adolescentes al proceso educativo, es una tarea ardua que no solo
necesita de buenas intenciones sino asegurar su financiamiento.
Dificultad también podría visualizarse, en caso de que las familias
involucradas en el problema no consideren viable las opciones presentadas y se
resistan a posibilidades de cambio en su comunidad, estas personas después de tanto
tiempo de vivir en la exclusión le puede resultar difícil pensar en otras soluciones
diferentes a seguir viviendo del vertedero de basura. Por lo tanto se requiere un
proceso de sensibilización realizado por expertos, debido a las características propias
de estas familias, si el proceso de sensibilización hacia las mismas es inadecuado,
habrá problemas para entender la necesidad de cambio.
La familia puede ser un factor que obstaculice la puesta en práctica de la
solución, cuando no participan o colaboran en el acontecer cotidiano de la comunidad
y de la escuela. La familia tiene su espacio para participar en la escuela formando
parte activa de la comunidad educativa, colaborando en los diferentes aspectos del
proceso educativo, promoviendo y participando en la ejecución de actividades a
realizar para aplicar la alternativa de solución, búsqueda de recursos, aplicando la
autogestión, interesándose en los planes y programas, horarios, organización del
plantel, controlando la actuación diaria de los educandos, participando de
cooperativas comunales en la producción de bienes necesarios a la escuela y a los
366
escolares. Si las familias no se interesan en colaborar en estas actividades propias de
la escuela y de la comunidad, la alternativa de solución tendría dificultades para su
implementación.
Beneficios o ventajas de la alternativa propuesta.
Al estar los ciudadanos pertenecientes a una determinada comunidad
preparados en una actividad u oficio, habría mayor probabilidad de desarrollo de la
comunidad. La misma contaría con gente de la localidad para el desarrollo de
actividades diversas. Para la construcción (edificios, casas, carreteras, puentes),
prestación de servicios (plomería, herrería, carpintería), confección de vestidos,
manualidades (piñatería, arreglos florales), repostería, preparación de alimentos,
ejercicio del comercio, producción agrícola y pecuaria, entre otras
Es decir que las diferentes actividades que se ejercen dentro de una
comunidad para el desarrollo y beneficio de la misma, sean realizadas por sus propios
habitantes, ciudadanos que deben ser educados, preparados y capacitados para formar
las redes productivas de su comunidad .
La alternativa de solución también trae beneficios al Estado, porque al estar la
persona preparada en una actividad específica y logra trabajar a través del empleo
formal, el autoempleo, o a través de las diferentes formas de participación ciudadana,
le ayuda a disminuir al Estado la pesada carga que constituye el desempleo o la
pobreza en la familia.
Los beneficios son también para la familia, contribuyendo al mejoramiento
económico de la misma, las familias productivas tendrán mas facilidad para su
desarrollo y el de sus miembros, al poder obtener ingresos que le permitan su
sustentabilidad, porque con poder adquisitivo puede cumplir con su deber y entre
367
ellos enviar a sus niños, niñas y adolescentes a estudiar. El hecho de que los hijos
integrantes de la familia logren estudiar Educación Básica, que dentro de ésta pueda
ser incluido dentro de las políticas nacionales, estadales y locales, cumplir como
mínimo nueve años de estudio; y que en la tercera etapa se le capacite en una
determinada labor y se le acredite en un oficio, y si la familia necesita que ese joven
egresado se incorpore a los procesos productivos cuando tenga su edad respectiva,
éste podría trabajar desempeñándose en la labor para la cual se preparó, sin necesidad
de estar peregrinando, haciendo quehaceres para los cuales no está preparado. A su
vez el alumno egresado de 9no grado puede tener la doble opción como es el de
trabajar y seguir estudiando si este es su deseo.
Puede darse el caso de que la familia no tenga problemas económicos y que el
adolescente no tenga necesidad de trabajar, la alternativa de solución también trae
beneficios, si el adolescente desea trabajar y seguir estudiando a fines de su
autonomía. El aprender y realizar una actividad laboral que le permitiría satisfacer
sus necesidades propias del ser joven como son vestirse a la moda, cuidar su
apariencia física, asistir a un gimnasio, ir a reuniones, paseos y utilizar accesorios, eso
aunado a continuar sus estudios para lograr otros niveles más elevados dentro de la
educación. En uno y otro caso la familia podría sentirse con mayor seguridad y
satisfacción.
EL FUTURO
Según la Organización de las Naciones Unidas (ONU, 2.000), la población
mundial aumentará desde los seis mil millones en el año 1.999 hasta una cifra
aproximada a los nueve mil millones en el año 2.050, correspondiendo las tasa más
altas de crecimiento demográfico a países pobres, situados la mayoría de ellos en
Asia, África y América Latina. En 62 países de estas regiones más del 40% de la
368
población es menor de quince años. Este aumento de la población mundial no está
siendo acompañado por un mejoramiento en el crecimiento económico y social
El devenir indica que habrá mayor número de personas con necesidades
sociales, entre ellas trabajo y de acceso a los diferentes servicios públicos, donde la
educación tendrá un mayor margen de demanda, si esto ocurre y no se han tomado las
medidas preventivas subsanando los problemas de capacitación a la población en
edad de trabajar, los problemas pueden profundizarse. Ante este acontecer inmediato,
todos los aportes que se hagan en la búsqueda de soluciones a los problemas sociales
tienen un valor significativo.
Lograr que una persona alcance como mínimo nueve años de estudio formal,
no le solucionaría todos sus problemas, sin embargo le podría facilitar conocimientos
útiles y necesarios para su convivencia como ciudadano, y que le permitirían, de
acuerdo al deber ser: a) Lograr una formación integral para la búsqueda de una
actitud democrática, responsable, y la participación activa y solidaria en la sociedad
teniendo en cuenta los valores de libertad, igualdad y justicia social. b) Comprender
los hechos y fenómenos del entorno cultural y social y aplicar el pensamiento, el
razonamiento lógico, verbal y matemático. c) Emitir juicios críticos ante los
problemas sociales, familiares, personales. d) Participar activamente en los
problemas de transformación social. e) Desarrollar su capacidad científica, técnica,
humanística y artística que le permitan tener una visión integral de la vida y del
mundo. f) Iniciarse en el aprendizaje de disciplinas y técnicas que le permitan el
ejercicio de una función socialmente útil. g) Iniciarse en la tecnología, entre otros.
Es preciso incluir a un mayor porcentaje de alumnos dentro del sistema escolar
para que además de concluir la Educación Básica, continúen hacia la etapa media y
diversificada para completar el nivel más elevado de secundaria. Para poder retener al
alumno, dentro del proceso educativo hay que introducir mejoras, donde el alumno
369
encuentre opciones factibles que satisfagan sus espacios de interés y necesidades. La
escuela es un espacio donde el educando podría participar de los beneficios de las
políticas pública en forma directa.
Por otra parte, desde el punto de vista social, la pobreza es un problema
venezolano y cuya atención y solución en el mediano plazo está por encima de
cualquier otra discusión en el país. La lucha contra la pobreza no es asunto de ajuste,
de medidas aisladas, de pequeños planes de contingencia, ni del ejercicio público del
sentimiento privado de piedad y filantropía. La pobreza, la violencia social y la
exclusión demandan políticas de emergencia. La superación de la pobreza es un
desafío ético, económico, político, educativo que no puede abordarse sólo desde la
perspectiva economicista, sino desde un enfoque multicausal y multidimensional de
visión estratégica que lleve a resultados contundentes en lo inmediato
En el trabajo y la educación están contenidas las esperanzas de un alto
porcentaje de personas pobres, de allí que la alternativa de solución propuesta para
que los ciudadanos se capaciten en una determinada actividad laboral se
redimensiona, por la necesidad que existe de superar la pobreza realizando un trabajo
para el cual estén capacitados e interviniendo en los procesos de producción
comunitario.
El futuro es esperanza, Freire (1998), pero no esperanza pasiva, sino activa,
donde cada uno de nosotros debe contribuir en la construcción de un mundo mejor,
mas humano, lleno de paz, armonía y felicidad. El trabajo de los niños es un
problema que invade el mundo de hoy, pero no es un problema sin esperanzas. Hay
pruebas claras de que cuando las personas asumen un compromiso, cuando se
movilizan y unen las sociedades, y deciden que el trabajo de los niños ya no es
aceptable, se pueden hacer grandes progresos hacia la meta de asegurar que no se les
niegue a los niños, niñas y adolescentes su infancia y un futuro mejor.
370
CONCLUSIONES Y RECOMENDACIONES
CONCLUSIONES
Avanzando en el camino del conocimiento, alejada de toda pretensión de
certezas absolutas y asumiendo que todo saber es incierto y cargado de
provisionalidad como señalan Morin (2005) y Popper (1986) y a fines de dar un
cierre provisional al presente estudio se señalan las conclusiones siguientes:
1- El trabajo infantil, es un problema de alcance mundial y tiene sus
antecedentes en todas las culturas, tiempo y lugares. Desde el siglo XIX, al
agravarse las condiciones de miseria de las clases asalariadas, los
empleadores no dudaron en recurrir a la mano de obra infantil ante las
posibles ventajas que representaba este recurso: bajos salarios, menores
gastos, mejor movilidad en lugares angostos. A pesar de que a través del
tiempo se ha luchado en contra del trabajo infantil, a finales del siglo XX y
entrada del siglo XXI, a nivel mundial, este adquiere cada vez mayores
proporciones, millones de niños están obligados a trabajar en condiciones
extremadamente penosas que afectan seriamente su desarrollo integral.
2- De acuerdo a organismos internacionales, en América Latina y el Caribe
trabajan niños entre 5 y 14 años de edad, aproximadamente 17,4 millones,
a su vez hay 15 millones de adolescentes que trabajan cuyas edades
oscilan entre 15 y 18 años de edad; lo que significa que hay más de 30
millones de niños y adolescentes trabajando, de éstos 50% laboran en el
campo y 50% lo hacen en el sector urbano de la economía.
371
3- Los niños, niñas y adolescentes son sujetos de derecho, representan un
capital humano, y requieren de una educación integral que les permita ser
ciudadanos analíticos, críticos, reflexivos, comprometidos, con amor por
la vida, la paz, la libertad, un ciudadano que conoce, comprende,
interpreta, infiere y generaliza conceptos, reglas, principios, métodos, que
comprende fenómenos, ideas, nociones abstractas. Que adquiere, aplica,
procesa y produce información, que expresa su pensamiento de forma
clara y coherente. Que promueve el mejoramiento personal y social a
través de su participación activa y conciente en acciones dentro de la
comunidad. Un ciudadano que necesita prepararse para la vida, por lo
cual es necesario retener a un mayor porcentaje de este segmento
poblacional dentro del sistema escolar para que logren concluir la
Educación Básica y no se estanquen en la tercera etapa, sino que continúen
hacia la etapa media y diversificada para completar el nivel más elevado
de secundaria.
4- A través de la Constitución de la República Bolivariana de Venezuela,
aunada a una serie de leyes como la Ley Orgánica del Trabajo, Ley
Orgánica para la Protección del Niño y del Adolescente, Ley Aprobatoria
de la Convención sobre los Derechos del Niño, Ley Orgánica de
Educación, los Tratados y Convenios de la Organización Internacional del
Trabajo y ratificados por el país entre otros, el niño y el adolescente debe
ser protegido en su derecho a: la vida, interés superior del niño y del
adolescente, garantías inherentes a la persona humana, igualdad y no
discriminación, la información, libertad personal, su integridad física,
psíquica y moral, la salud, la educación, un nivel de vida adecuado
(alimentación, vestido, vivienda), descanso, recreación, deporte y juego,
honor, propia imagen, vida privada, opinar y ser oído , entre otros.
372
5- La Constitución de la República Bolivariana de Venezuela, prohíbe el
trabajo de los adolescente en labores que puedan afectar su desarrollo
integral, indicando además que el Estado los debe proteger de cualquier
explotación económica y social. Igualmente, la LOPNA protege al
adolescente en el trabajo cuando puntualiza la edad mínima de catorce
años para el trabajo, indica que las personas que hayan alcanzado la edad
mínima y tengan menos de dieciocho años de edad no podrán ejercer
ningún tipo de trabajo que esté expresamente prohibido por la ley. A partir
de los catorce años de edad los adolescentes tienen derecho a firmar
válidamente contratos y convenios colectivos relacionados con su
actividad laboral y económica, además pueden ejercer acciones para la
defensa de sus derechos e intereses, inclusive tienen derecho a huelga ante
las autoridades administrativas y judiciales competentes. Los adolescentes
también gozan de libertad sindical y tienen derecho a constituir libremente
las organizaciones sindicales que deseen, así como el de afiliarse a ellas.
6- El trabajo realizado por niños, niñas y adolescentes en el relleno sanitario
la Guásima por las características que presenta es un trabajo de
explotación infantil, afirmación que se hace al comparar el trabajo
realizado por los niños con los criterios establecidos por UNICEF (2000)
para determinar si el trabajo infantil es explotador. Entre éstos criterios
están: dedicación exclusiva a una edad demasiado temprana; se pasan
demasiadas horas trabajando; el trabajo provoca estrés físico, social o
psicológico indebido; se trabaja y se vive en la calle en malas condiciones;
el ingreso es inadecuado; el niño tiene que asumir demasiada
responsabilidad; el trabajo impide el acceso a la escolaridad; el trabajo
mina la dignidad y autoestima del niño; el trabajo impide conseguir un
pleno desarrollo social y psicológico.
373
7- En relación a la edad, en el relleno sanitario La Guásima se encuentran
niños desde 7 años, por lo tanto inferior a la edad mínima para trabajar de
acuerdo al Convenio 138 de la OIT y el cual fue ratificado por Venezuela,
acogiéndose a la excepción del Convenio. Igualmente la Ley Orgánica
del Trabajo y la Ley Orgánica para la Protección del Niño y del
Adolescente señalan como edad mínima para el trabajo los 14 años. En el
vertedero de basura aunque trabajan adolescentes entre 14 y 17 años, para
éstos también es considerado un trabajo explotador al tomar en cuenta que
el trabajo en los basureros es peligroso para el desarrollo físico,
psicológico o social, en éste caso la edad mínima no puede ser menor a 18
años como lo indica el Convenio 138 de la OIT y lo ratifica la Ley
Orgánica del Trabajo, cuando prohíbe el trabajo de menores en labores que
acarreen riesgos para su vida o su salud, o en faenas superiores a sus
fuerzas o que impidan su desarrollo físico y normal.
8- En los diferentes países quedo revelado que los niños trabajan a partir de
los 7 años, inclusive hay países donde se identifica la presencia de niños
de 5 años. Estos datos son preocupantes porque se trata de niños que están
perdiendo su infancia, sus sueños, sus juegos, su recreación, expuestos a
abusos físicos y psicológicos. Hay muchas causas por las cuales los niños
entre los 5 los 17 años trabajan, entre las mismas se ha podido detectar la
pobreza de las familia, los niños tienen que contribuir económicamente a
la subsistencia de la misma; los padres no pueden suministrar un ingreso
debido a antecedentes de violencia; falta de escuelas disponibles y
accesibles; patrones culturales, ya que se espera que los niños participen
del trabajo de la familia; los niños son muy rápidos para algunas
actividades (pueden recoger rápidamente desechos sólidos, pueden
penetrar fácilmente en los espacios de las minas) y también hay los casos
de que los padres se los llevan consigo al trabajo porque no disponen de
374
guarderías para dejarlos. Pero cualquiera sea la razón por las cuales los
niños y adolescentes trabajan, los niños menores de 14 años no deben
trabajar y menos aún en las condiciones de riesgo y explotación en lo que
hacen.
9- En los países investigados, en cuanto a la escolaridad se detectó que los
niños que trabajan en la mayoría de los casos no asiste a la escuela, un
porcentaje bajo es el que asiste. A su vez es de advertir que el porcentaje
de niños que asiste a la escuela presenta dificultades en su rendimiento, así
como retraso escolar en 1, 2 ó 3 años. Existen varias causas por las cuales
los niños y adolescentes que trabajan no asisten a la escuela, entre ellas:
pobreza, no tienen dinero para adquirir los útiles escolares, los padres no le
dan la importancia debida que tiene la escuela, creen que es más
importante que el niño trabaje a que vaya a la escuela, no existen
suficientes escuelas en el sector donde viven y trabajan, la extensa jornada
laboral impide que el niño se registre en la escuela. De acuerdo a las
normas internacionales y nacionales, los niños que trabajan deben tener
acceso a la escuela, deben compartir su horario de trabajo y de estudio,
deben tener facilidades para continuar su educación.
10- En relación a la jornada laboral, (excepto Venezuela, caso la Guásima)
los datos reportan jornadas de más de 30 horas semanales, inclusive se
reportan jornadas de más de 12 horas diarias como es el caso de los niños
y adolescentes trabajadores en la zafra de caña de azúcar o en la minería
en Bolivia. De acuerdo a las disposiciones encontradas en las leyes y
códigos de protección al niño y adolescente, la norma es reiterativa en los
diferentes países en cuanto a las horas semanales que deben trabajar los
menores que tienen edad para hacerlo, señala la normativa que la jornada
laboral no debe ser mayor de 30 horas semanales, ni de 6 horas diarias,
375
sobre todo para las edades entre 14 y 16 años, acotando además la
legislación que las personas que hayan alcanzado la edad mínima para
trabajar y tengan menos de 18 años de edad, no pueden ejercer ningún tipo
de trabajo que esté expresamente prohibido por la ley.
11- Con respeto al ingreso, se detectó en los diferentes países que los niños,
niñas y adolescentes, trabajan con o sin ingresos, un porcentaje elevado no
lo recibe, sobre todo los niños que tienen menos de 10 años, son los que
podrían estar trabajando como acompañantes de sus padres, como una
estrategia familiar, o por la ausencia de sitios donde permanecer cuando
los padres trabajan. En estos casos un porcentaje de niños y adolescentes
trabaja en grupos familiares, donde al padre de familia le corresponde
vender los productos o materiales logrados y luego administrar los
ingresos. Se presenta la situación de los niños y adolescentes que reciben
ingreso, en un porcentaje de los casos deben entregarlo al padre o a la
madre para la contribución con los gastos familiares, lo que podría estar
significando que muchos niños y adolescentes aunque reciban ingresos,
estos no van a ser administrados por los mismos, sino que deben ser
entregados al jefe de la familia para su administración. Igualmente se
detectó a lo largo de la investigación que en los diferentes países los niños
y adolescentes que logran obtener ingresos producto de su trabajo diario,
estos ingresos aunque reportan una ayuda a la familia, representan una
parte muy pequeña con respecto a los gastos que tiene que hacer la
familia para sobrevivir.
12- Se percibieron los riesgos en la salud a que están expuestos los niños y
adolescentes trabajadores. Estos realizan actividades superiores a sus
fuerzas en los casos que tienen que cargar bultos pesados, pudiéndose
producir daños óseos y desgarramientos musculares, riesgos de accidentes
376
cuando sufren cortaduras por vidrio o por herramientas filosas que tienen
que manipular, pudiéndose producir algún tipo de mutilación; riesgos por
ingestión de alimentos contaminados lo que conlleva a problemas
gastrointestinales; riesgos por agresiones físicas o verbales de otras
personas como es el caso de los niños y adolescentes que trabajan en los
vertederos de basura en Venezuela y Ecuador. También los niños que
trabajan en las minas están expuestos a riesgos de ruido, vibraciones,
temperaturas extremas, exposiciones a tóxicos, cargas pesadas, picaduras
de insectos, mordeduras de animales, tratos indebidos como es el caso de
Colombia y Bolivia. Otro caso sucede con los niños trabajadores en las
plantaciones como es el caso de los niños que activan laboralmente en la
zafra de caña de azúcar de Bolivia, los cuales están expuestos a riesgos
como cortaduras por instrumentos cortantes, picaduras de víboras, maltrato
psicológico por la presión de tener que cumplir con un cupo de
producción. La investigación es reveladora de la situación no saludable en
que trabajan los niños y adolescentes, los cuales tienen muy poco acceso a
planes, programas y servicios de prevención y seguridad. Los niños y
adolescentes al trabajar y correr riesgos en su salud y seguridad, este tipo
de trabajo es considerado por el Convenio 182 de la OIT (1999) como de
las peores formas de trabajo infantil y obliga a los países ratifícantes del
Convenio, a su eliminación.
13- Con respecto a la situación jurídica de los niños, niñas y adolescentes, los
países en estudio, atendiendo a las llamadas de la Organización
Internacional del Trabajo (OIT), a la Convención sobre los derechos del
niño y otros organismos internacionales han venido adecuando sus
Constituciones y leyes nacionales a las recomendaciones de éstos
organismos. Así se observa como los diferentes países, han ratificado la
doctrina de la protección integral, la cual está basada en la declaración de
377
los derechos del niño y la cual concibe una serie de principios rectores que
constituyen sus pilares fundamentales entre los cuales están: el niño como
sujeto de derecho, el interés superior del niño, la prioridad absoluta, la
participación y el rol fundamental de la familia en corresponsabilidad con
la sociedad y el Estado en la garantía de los derechos del niño y del
adolescente. La nueva doctrina convirtió las necesidades de los niños y
adolescentes en derechos civiles, culturales, económicos, políticos y
sociales. De ésta manera se observa que en cada uno de los países en
estudio se ha ratificado a través de una ley, la Convención de los derechos
del niño, la cual fue adoptada por la Asamblea General de las Naciones
Unidas el año de 1989, constituyendo la Convención el marco
fundamental a partir del cual los gobiernos desarrollan sus políticas para la
niñez y la adolescencia.
14- Si bien, los países en estudio, garantizan a través de sus Constituciones,
leyes y códigos la protección integral del niño y el adolescente, esto en
realidad no se está cumpliendo de acuerdo a lo esperado por los propios
niños, niñas y adolescentes, las familias y la sociedad que son los
expectantes y quienes esperan que se le garantice la solución a sus
problemas, aunque hay que agregar que éstos últimos junto con el Estado
son corresponsables en la solución de los mismos. De allí que es
observable una asincronía notoria entre el marco jurídico y la realidad
económica y social que presentan estos países, que de alguna manera
empujan a los niños y adolescentes hacia el trabajo en vulneración de sus
derechos.
15- El trabajo infantil es un fenómeno mayormente observable en sociedades
con dificultades económicas, que conllevan a la pobreza, aunque la
pobreza no sea su única causa. En los diferentes países en estudio existen
378
también factores de orden social, cultural y educativo, que se conjugan y
entremezclan, constituyéndose en germen de ocupación infantil.
RECOMENDACIONES
1- La familia debe ser el medio natural y primario donde se garantice la
protección del niño, niña y del adolescente, permitiendo que los mismos
crezcan en su seno, en un ambiente de felicidad, amor y comprensión para
contribuir con el pleno y armonioso desarrollo de la personalidad del niño,
niña y adolescente. Los padres son los principales responsables de
cuidarlos y educarlos, a tal efecto el Estado debe brindar a la familia la
ayuda necesaria para poder asumir plenamente sus responsabilidades. Al
apoyarse a la familia se apoya al niño, niña y adolescente. La familia
debe recobrar su poder socializador que tradicionalmente ha tenido,
manteniendo el control directo de los hijos y educándolos, permitiéndoles
el pleno desarrollo, inculcándoles valores, principios, normas, hábitos y
haciendo sana presión social para que el Estado asuma su función de
garantizar la estabilidad económica y social a que tienen derechos las
familias para cumplir con su misión.
2- La educación siempre ha estado cargada de buenas intenciones, pero no
basta que las políticas educativas aspiren una educación democrática, en
igualdad de oportunidades para todos, donde se enaltezcan los valores de
libertad, justicia social y que el educando desarrolle su capacidad
científica, humanística y artística. Profundos cambios, reformas le han
tratado de hacer a la educación, pero en esos cambios el énfasis siempre ha
sido el crecimiento cuantitativo y el cual no ha estado en sintonía con el
crecimiento cualitativo de la educación, aunque se han planteado reformas
379
profundas, estas quizás no se han llevado a cabo por falta de recursos,
dentro de un marco de estrechez financiera, por improvisación, falta de
motivación entre otras. Para mejorar la calidad de la educación habría que
introducir mejoras donde se tome en cuenta al alumno, al docente, las
reformas curriculares, la infraestructura y dotación, entre otras.
3- Los niños, niñas y adolescentes trabajadores deben ser reinsertados dentro
del proceso de educación formal para evitar que sean explotados y a su vez
darles la oportunidad de disfrutar de los programas a que tienen derecho y
que son implementados a través de la educación. Deberían ser preparados
a través de la Educación Básica, como una opción para incorporarse al
trabajo, cuando legalmente les corresponda y tengan necesidad del mismo,
ya que la Educación Básica es la educación mínima que debe tener todo
ciudadano, según la organización de las Naciones Unidas.
4- La relación entre educación y trabajo debería ser estrecha, la educación
además de preparar al niño y adolescente para que sea un ciudadano sano,
crítico, apto para vivir en una sociedad democrática con una conciencia
ciudadana para la conservación, defensa y mejoramiento del ambiente y de
la calidad de vida, debe prepararlo en una determinada actividad laboral
para que el adolescente se desempeñe en un trabajo, si es esta su
necesidad; tenga la doble opción como es la de estudiar y trabajar.
5- Es importante resaltar que cuando se plantea facilitarle la opción de
trabajar al adolescente, estando preparado en técnicas o habilidades que le
permitan su incorporación al mundo del trabajo, también es necesario
señalar que el adolescente debe tener la oportunidad de seguir estudiando,
ya que a medida que incrementa los años en educación, en esa medida el
individuo se va formando profesionalmente; y capacitando en los perfiles
380
ocupacionales que demanda el empleo formal o el autoempleo, y con un
nivel tecnológico acorde con el desarrollo mundial.
6- La Educación para el Trabajo, de la Educación Básica en su tercera etapa,
con reformas previas (curriculares, infraestructura, dotación), podría estar
entre las posibilidades de capacitar a los adolescentes y estos una vez
preparados, si se les presenta dificultad para ingresar al sector formal, ellos
mismos podrían instalar sus propios negocios como instalar una mini
peluquería, un pequeño taller de costura, de manualidades, dulcería y
comida criolla, tejidos de cestería, elaboración de artesanía, trabajo de
madera, cerámica, trabajo artístico en vidrio, trabajo de electricidad,
informática, decoración, dibujo técnico, turismo, pequeñas agencias de
festejos, plomería, herrería, negocios que podrían instalar en sus propias
viviendas.
7- Como existen normas laborales que van a proteger a los adolescentes en
sus espacios de acción en el mundo del trabajo, se recomienda su oportuna
aplicación para evitar la explotación del menor, ya que si el adolescente
necesita estudiar y trabajar, debe tener acceso inmediato a normas que lo
protejan contra todo trabajo que implique explotación; que sea peligroso o
resulte nocivo para su salud o desarrollo integral o que afecte
negativamente su proceso educativo.
8- Necesidad de formación de un equipo multidisciplinario que se avoque a
conocer la situación de los niños, niñas y adolescentes que trabajan no
solo en el vertedero de basura la Guasima, sino también los que trabajan
en el mercado de mayoristas, los que trabajan en los supermercados, las
niñas trabajadoras domésticas, los niños que transportan cargas en los
cerros, todos del Municipio Libertador; con la finalidad de aportar
381
diferentes propuestas en la solución de los diversos problemas que aqueja
a este segmento poblacional.
9- Presentar la investigación en foros, simposios, seminarios, congresos, con
la finalidad de comunicar la situación de niños, niñas y adolescentes
trabajadores tanto del Municipio Libertador, como la presentada en los
diferentes escenarios latinoamericanos
10- Continuar con el proceso de investigación del trabajo de niños, niñas y
adolescentes, tanto en el Municipio Libertador, como en otras regiones
venezolanas
11- Comunicar a las autoridades municipales la investigación realizada y la
necesidad de incorporar la propuesta aportada, en los diferentes proyectos
que se siguen para mejoramiento de la comunidad.
12- Sensibilizar a las autoridades municipales y estadales para que a través de
su gestión se involucren en la solución de los problemas que presentan los
niños, niñas y adolescentes trabajadores, ya que sin el concurso de las
autoridades correspondientes es difícil cualquier proceso de intervención
en el vertedero de basura la Guásima.
382
REFERENCIAS
Acción por los Niños. (2004). [Documento en línea] Perú. Disponible: http://www.
acción por los niños. org.pe/. [Consulta: 2004, Agosto 30]
Ary, D., Jacobs, L. Ch. y Razaviech, A. (1994). Introducción a la investigación pedagógica (2a. ed.). México: Editorial Mc Graw Hill.
Arendt. H. (1998). La condición del hombre moderno. Barcelona: Edit. Peninsula.
Arvon. H. ( 1965). Filosofía del trabajo. Madrid: Editorial Taurus.
Ávalos, S. (2004). Niños condenados al trabajo. [Documento en línea]. Uruguay. Disponible:http:// www.cioslorit.org/ detalle. Php [Consulta: 2004, Septiembre 9]
Banco Central de Bolivia. (2004). Informe económico. [Documento en línea]. Bolivia. Disponible: http//www.bcb.gob.bo [Consulta: 2005 Septiembre 17]
Banco Central del Ecuador. (1999). Situación económica. [Documento en línea]. Ecuador. Disponible: http:// www. bce.fin.ec/ [Consulta: 2005, Agosto, 31]
Banco de la República de Colombia. (2005). [Documento en línea]. Colombia. Disponible: http://wwwbanrep.gob.co/ [Consulta 2005, Agosto 30]
Banco Central de Reserva del Perú. (2001). Indicadores económicos. [Documento en línea]. Perú. Disponible: http:// www.bcrp.gob.pe/español. [Consulta 2005, Septiembre 10]
Banco Central de Venezuela. (1976). Informe económico. Caracas. Autor
Banco Central de Venezuela (1980). Informe económico. Caracas. Autor
Banco Central de Venezuela (1985). Informe económico. Caracas. Autor
Banco Central de Venezuela (1989). Informe económico. Caracas. Autor
Banco Central de Venezuela (1990). Informe económico. Caracas. Autor
Banco Central de Venezuela (1995). Informe económico. Caracas. Autor
Banco Central de Venezuela (1996). Informe económico. Caracas. Autor
Banco Central de Venezuela (1998). Informe económico. Caracas. Autor
383
Banco Central de Venezuela (2002). Informe económico. [Documento en línea]. Venezuela. Disponible: http://www.bcv.org.ve/publicaciones [Consulta: 2003, Agosto 10]
Banco Central de Venezuela (2003). Boletín económico mensual. [Documento en línea]. Venezuela. Disponible: http://www.bcv.org.ve/publicaciones [Consulta: 2003, Agosto 11]
Barreto, J. (2001). Trabajo doméstico infantil y juvenil en hogares ajenos. Colombia. Editor Save the Children y UNICEF.
Briceño León, R. (1990). Los efectos perversos del petróleo. Caracas, Venezuela: Fondo editorial acta científica venezolana.
Brito Figueroa, F. (1966). Historia económica y social de Venezuela. Caracas, Venezuela: Universidad Central de Venezuela.
Bronfenbrenner, U. (1979). The ecology of human development .Cambridge. Harvart University Press.
Central Latinoamericana de trabajadores (2000). Trabajo infantil en Latinoamérica. [Documento en línea]. Chile. Disponible: http://www. Clat. org/ [Consulta: 2004, Noviembre 20]
Central Latinoamericana de trabajadores (2004). Erradicación del trabajo infantil en Latinoamérica. [Documento en línea]. Chile. Disponible: http://www. Clat. org/ [Consulta: 2005, Febrero 26]
Centro de Documentación y Análisis Social. (1999). Indicadores sociales. [Documento en línea]. Venezuela. Disponible: http: // www. feve maestros. org/ [Consulta: 2003, Noviembre 10]
Centro de Documentación y Análisis Social. (2003). Indicadores sociales. [Documento en línea]. Venezuela. Disponible: http: // www. feve maestros. org/ [Consulta: 2004, Octubre 8]
Centro de Documentación y Análisis Social. (2005). Indicadores sociales. [Documento en línea]. Venezuela. Disponible: http: // www. feve maestros. org/ [Consulta: 2005, Noviembre 2]
Código de Niño, Niña y Adolescente. (1999). [Documento en línea] Bolivia. Disponible http:www.unicef.org/bolivia/legislación.codigo.htm.[Consulta:2004, Noviembre 10]
384
Código de los Niños y Adolescentes. (2000). [Documento en línea]. Perú. Disponible:http://www.i/o.org/public/spanish/región/ampro/cinterjor/temas/youth/legise/Perú/. [Consulta: 2004, Agosto 12]
Código de la Niñez y Adolescencia. (2003). [Documento en línea].Ecuador. Disponible:http://www.innfa.org/paginas/código_niñez.pdf.[Consulta.2004, Noviembre 2]
Código del Menor de Colombia. (1994). [Documento en línea]. Colombia. Disponible:http://www. Webs jurídicas. Com/ [Consulta 2004, Agosto 10]
Comisión Económica para América Latina y el Caribe. Organización de las Naciones Unidas. (1980). Estudio económico de América Latina. Santiago de Chile.
Comisión Económica para América Latina y el Caribe. Organización de las Naciones Unidas. (1998). Estudio económico de América Latina y el Caribe 1997 – 1998. Santiago de Chile: Naciones Unidas.
Comisión Económica para América Latina y el Caribe. Organización de las Naciones Unidas. (2000). Panorama social de América Latina 1999 - 2000. Santiago de Chile: Naciones Unidas
Comisión Económica para América Latina y el Caribe (2001). Estudio económico de América Latina y el Caribe, 2000- 2001. [Documento en línea]. Colombia. Disponible: http//www.elac.cl./publicaciones/ Desarrollo Económico/2/LCG2 142 P/LCG2139E1105pdj. [Consulta 2005, Agosto 29]
Comisión Económica para América Latina y el Caribe – Fondo de las Naciones Unidas para la Infancia. (2001). Construir equidad desde la infancia y la adolescencia en Iberoamérica. [Documento en línea]. Las desigualdades en las condiciones de vida de los niños, niñas y adolescentes en Iberoamérica. Chile. Disponible:http://www.cepal.org/publicaciones/desarrollosocial/4/LCG2/44//cg2144.E-cap2.dpf [Consulta: 2002, Noviembre 10].
Comisión Económica para América Latina y el Caribe. Fondo de las Naciones Unidas para la Infancia. (2002). La pobreza en América Latina y el Caribe. Aún tiene nombre de infancia. México.
Comisión Económica para América Latina y el Caribe (2002). Estudio económico de América Latina y el Caribe, 2001- 2002. Santiago de Chile: Naciones Unidas.
Comisión Económica para América Latina y el Caribe (2003). Estudio económico de América Latina y el Caribe, 2003. Situación y perspectiva 2003. Estudio
385
económico de América Latina y el Caribe 2002 – 2003 [Documento en línea].Chile. Disponible: http:// www cepal.org. Publicaciones/ Desarrollo económico /8/LCG2208P/lcg 2208c.dpf [Consulta: 2003, Septiembre 15].
Comisión Económica para América Latina y el Caribe (2004). Panorama social de América Latina 2004. [Documento en línea]. Santiago de Chile. Disponible: http://www.elac.cl/publicaciones/ desarrollo social. [Consulta, 2005, Agosto 29]
Comisión Económica para América Latina y el Caribe (2005). Estudio Económico de América Latina y el Caribe 2004 - 2005. [Documento en línea]. Santiago de Chile. Disponible: http://www.elac.cl/ [Consulta 2005, Agosto 30]
Consejo Nacional de Derechos del Niño y del Adolescente. (2000). Plan Estratégico Nacional para la Protección Integral del Niño, Niña y Adolescente (2000-2006). [Documento en línea]. Venezuela Disponible: http://www.cndna.gov.ve. [Consulta 2006 Marzo 24]
Constitución Política de Bolivia. (1995). [Documento en línea]. Bolivia. Disponible: http://www.cdi.gob.mx/conadepi/iii/legisla bolivia.pdj. [Consulta 2005 Septiembre 20]
Constitución de la República Bolivariana de Venezuela. (1999). Gaceta Oficial de la República de Venezuela, 36.860 (Extraordinario), Diciembre 30, 1999.
Constitución de la República Federativa del Brasil (1988). [Documento en línea]. Brasil. Disponible:http://www. cinterfor. org. Uy/public/spanish/region/ampro/ cinterfor/temas. [Consulta: 2005, Marzo 1]
Constitución política de Colombia. (1991). [Documento en línea]. Colombia. Disponible:http://www. presidencia .gov.co/constitu/ [Consulta: 2004, Agosto 10]
Constitución política de los Estados Unidos Mexicanos (1917). [Documento en línea] México. Disponible:http://www.cddhcu.gob.mx/leyinfo/ [Consulta:2005, Marzo
8]
Constitución política del Perú. (1993). [Documento en línea]. Perú. Disponible: http://www. cinterjor.oog.uy/ public/spanish/ [Consulta: 2004, Agosto 12]
Constitución política de la República del Ecuador. ( 1998 ). [ Documento en línea]. Ecuador. Disponible:http://www.ecuanex.net.ec/constitución/ [consulta:2004, Octubre 30]
386
Contraloría General de la República de Colombia. (2004). Evaluación de la política social 2003. [Documento en línea] Bogotá. Disponible: http//www. contraloriagen.gob.co. [Consulta 2005, Agosto 29]
Convención sobre los derechos del Niño. (1989). [Documento en línea] Disponible http//www.unhchr.ch/spanishhtml/. [Consulta 2004, Enero 10]
Corbeta, P. (2003). Metodología y técnicas de Investigación Social. España: Editorial Mc Graw Hill
Decreto Nº 2387 (fijación de salario mínimo). (2003, Abril 29). Gaceta Oficial de la República Bolivariana de Venezuela, 37.681, Mayo 2, 2003
Decreto Nº 2902 (fijación de salario mínimo). (2004, Abril 30). Gaceta Oficial de la República Bolivariana de Venezuela, 37.928, Abril 30, 2004
Decreto Nº 3628 (fijación de salario mínimo). (2005, Abril 27). Gaceta Oficial de la República Bolivariana de Venezuela, 38.173, Abril 27, 2005
Dema, G. (2003). Derechos humanos y trabajo infantil. [Documento en línea]. Discurso presentado en el Primer encuentro de Comisiones Nacionales para la Erradicación del trabajo Infantil del Mercosur y Chile. Asunción. Disponible: http:// www. oit. org. Pc/spanish/260 amerit/oit. actividad/proyectos/ IPEC [Consulta: 2003, Junio 30].
Departamento Administrativo Nacional de Estadística. (2004). [Documento en línea]. Colombia. Disponible: http://www.dane.gob.co. [Consulta: 2005, septiembre 2]
Departamento Minero del Centro de Investigaciones y Servicio Popular. (2004). Niños trabajadores de las minas. [Documento en línea]. Bolivia. Disponible: http://www.cisep.org.bo/ [Consulta: 2004, Noviembre 11]
Dewey, J. (1960). How we think. Heath USA
Dewey, J. (1998). Cómo pensamos. Madrid: Ediciones Paidos.
España, L. (2003, Febrero 1). Un millón de excluidos sociales. Foro acuerdo social para la superación de la pobreza y el desarrollo. El Universal, p. 2 – 4.
Estatuto del Niño y del Adolescente. (1990). [Documento en línea]. Brasil. Disponible:http://www.cinterfor.org.uy/public/spanissh/región/ampro/cinterfor/ [Consulta: 2005, Marzo 1]
387
Etzioni, A. y Etzioni, E. (1979). Los cambios sociales. México: F.C.E.
Fernández, F. y Campos, M. (1997). Aspectos jurídicos laborales de la explotación infantil en el trabajo. Gaceta laboral, 3 (3), 49 – 73. Zulia.
Fondo de las Naciones Unidas para la Infancia. (1994). Foro adolescencia, pobreza, educación y trabajo. El desafío es hoy. Buenos Aires, Argentina.
Fondo de las Naciones Unidas para la infancia. (1997). Estado mundial de la infancia. Trabajo infantil. Nueva York. Estados Unidos.
Fondo de las Naciones Unidas para la Infancia. (2000). Estado mundial de la infancia. [Documento en línea]. Disponible: http: ww.unicef.org/ [Consulta: 2005, Septiembre 24]
Fondo de las Naciones Unidas para la Infancia (2001). Trabajo infanto juvenil en América Latina y el Caribe. Nueva York. Estados Unidos.
Fondo de las Naciones Unidas para la Infancia (2001). Progresos desde la Cumbre Mundial a favor de la infancia. Un análisis estadístico. [Documento en línea]. Nueva York. USA. Disponible: http//www.unicef. org/spanish [Consulta: 2002, Octubre 20]
Fondo de las Naciones Unidas para la Infancia.(2003). Niños y niñas trabajadores que trabajan a tiempo completo o parcial. [Documento en línea]. Ecuador. Disponible: http://www.unicef.org/ecuador. [ Consulta 2004, Octubre 11 ]
Fondo de las Naciones Unidas para la Infancia. (2003) . La niñez. [Documento en linea]. Bolivia. Disponible: http://www.unicef.org/bolivia/infancia. [Consulta 2004, Noviembre 09]
Fondo d e las Naciones Unidas para la Infancia. (2003). El Trabajo Infantil en México. [Documento en línea]. México. Disponible: http: ww.unicef.org/ mexico/trabajo/en México.htme. [Consulta: 2005, Febrero 26]
Fondo de las Naciones Unidas para la Infancia. Colombia. (2004). Situación de la infancia. Informe anual Colombia 2003. [Documento en línea]. Colombia. Disponible: http://www.unicef.org .co/pdj/in part 2.pdj 2004 [Consulta:2004, Agosto 2]
Fondo Monetario Internacional. (1994). Situación económica de Perú, Bolivia y Argentina. [Documento en línea]. Bolivia. Disponible: http://www.imj.org. [Consulta: 2005, Septiembre 30]
388
Fondo Monetario Internacional. (2004). Informe semestral. Perspectivas económicas de Bolivia. [Documento en línea]. Bolivia. Disponible: http: //www.imj.org/external/pubs/pdj. [Consulta: 2005, Septiembre 18]
Fondo de Población de las Naciones Unidas. (2000). Esbozo del programa para Colombia. [Documento en línea]. Colombia. Disponible: http://www.colombia. unfpa.org [Consulta: 2005, Septiembre 2]
Fondo de Población de las Naciones Unidas. (2001). Informe de desarrollo humano de Ecuador. [Documento en línea]. Ecuador. Disponible: http://www. unfpa.org/exbvd/2001 [Consulta: 2005, Agosto, 31]
Freire, P. (1990). La educación liberadora. Colombia: Editorial América Latina
Freire, P. (1998). Pedagogía de la esperanza . México: Siglo XXI editores.
Friedman, G. Naville, P y Colen, A. (1997). Tratado de sociología del trabajo (El traté de sociologie du travail). Francia: Edit Boyard.
Fuenmayor, G. (1976). Historia de la Venezuela política contemporánea. Caracas, Venezuela.
Fundación Centro de Estudios sobre Crecimiento y Desarrollo de la población venezolana (1991). Estudio social. Proyecto Venezuela. Caracas Venezuela.
Fundación Centro de Estudios sobre Crecimiento y Desarrollo de la población venezolana (1999). Estudio social. [Documento en línea]. Venezuela. Disponible: http: //www.fundacredesa.com / [Consulta: 2000, Marzo 11]
García, G. (2003, Junio 1). Sin estabilidad política no habrá desarrollo. El Nacional, p. B1.
Giddens, A. (1999). La teoría social hoy. Madrid: Gedisa.
Giddens, A. (1999). Las nuevas reglas del método sociológico. Buenos Aires, Argentina: Amorrortu Editores.
Giddens. A.. (2000). Capitalismo y la moderna teoría social. España. Editorial Idea Universitaria.
Giddens, A. (2001) Sociología. Madrid, España: Editorial Alianza.
Goets, Y. y LeCompte, M. (1988). Etnografía y diseño cualitativo en investigación educativa. Madrid, España: Editorial Morata.
389
Grint. K. (1991). La sociología del trabajo. Buenos Aires: Editorial Polis.
Habermas, J. (1992). Teoría de la acción comunicativa. Madrid, España: Tecnos.
Habermas, J. (1997). El discurso filosófico de la modernidad. Madrid: Editorial Taurus.
Habermas, J. (2000). Conciencia moral y acción comunicativa. Mexico: Editorial MC Graw Hill.
Holmes, B. (1981). Comparative Educación. Unwin. London
Human Rights Watch (2000). Informe Campo de lágrimas: Explotación en la agricultura Estadounidense. [Documento en línea]. Estados Unidos. Disponible:http://www.hrw.org/spanish/informes/2000/lagrimas.html [Consulta: 2005, Marzo 1]
Human Rights Watch. (2002). Informe la cosecha mal habida. Trabajo infantil y obstáculos a la libertad sindical en las plantaciones bananeras de Ecuador. [Documento en línea ]. New York. Disponible: http://www. hrw.org/spanish/informes/2002/cosecha.thml [Consulta: 2 004, Septiembre 12]
Instituto Brasileño de Geografía y Estadística. (2002). [Documento en línea]. Brasil. Disponible:http://www. IBGE. Gov.br/espanol [Consulta: 2004, Septiembre,02]
Instituto Colombiano de Bienestar Familiar. (2003). Niños, niñas de la Calle. [Documento en línea]. Colombia. Disponible:http://www. gobierno en línea.govico/ciudadanos/ [Consulta: 2004, Agosto 20]
Instituto de Estudios Superiores de Administración. (2002). Trabajo infantil. [Documento en línea]. Venezuela. Disponible: http:// www.iesa.org.ve/ [Consulta: 2003, Febrero 14].
Instituto Nacional de Cooperación Educativa. (2004). Misión Vuelvan Caras. [Documento en línea]. Venezuela. Disponible: http:// www.ince.gov.ve/vuelvan caras[Consulta: 2006, Marzo 20].
Instituto Nacional de Estadística, Geografía e Informática (INEGI, 2000).
[Documento en línea]. México. Disponible:http://www.inegi.gob.mx/inegi [Consulta: 2005, Febrero 26]
Instituto Nacional de Estadística (2001) Censo. Población total nacional. [Documento en línea]. Venezuela. Disponible: http:// www.pnud.org.ve/ censo 2001/nac 1103.pdf [Consulta: 2003, Febrero 10].
390
Instituto Nacional de Estadística e Informática. (2001). Encuesta Nacional de Hogares. [Documento en línea]. Perú. Disponible:http://www.inei.gob.pe [Consulta: 2005, septiembre 30] Instituto Nacional de Estadística e Informática. (2001). Indicadores socio económicos y demográficos. [Documento en línea]. Perú. Disponible: http: //www.inei.gob.pe [Consulta: 2005, Septiembre 5]
Instituto Nacional de Estadística. (2001). Censo. Población [Documento en línea]. Bolivia. Disponible: http://www.ine.gob.bo/egi [Consulta 2004, Noviembre 08]
Instituto Nacional de Estadística y Censo. (2001). [Documento en línea]. Ecuador Disponible: http://www.inec.gov.ec/ [Consulta: 2004, Octubre30
Instituto Nacional de Estadística (2003). Censo. [Documento en línea]. Venezuela. Disponible: http://www.ine.gov.ve/ [Consulta : 2003, Abril 15].
Instituto Nacional de Estadística (2003). Población. [Documento en línea]. Bolivia. Disponible: http://www.ine.gov.bo [Consulta : 2005, Septiembre, 16].
Instituto Nacional de Estadística y Censo (2003). [Documento en línea]. Ecuador. Disponible: http://www.ineic.gov.ec [Consulta : 2005, Septiembre 1].
Instituto Nacional de Estadística e Informática. (2003). [Documento en línea]. Perú. Disponible: http://www.inei.gob.pe/ [Consulta : 2005, Septiembre 10]
Instituto Nacional de Estadística e Informática. (2005). [Documento en línea]. Perú. Disponible: http://www.inei.gob.pe/ [Consulta : 2006, Marzo 12]
Instituto Nacional de Estadística (2005). República Bolivariana de Venezuela en cifras 1998 - 2004. [Documento en línea]. Venezuela. Disponible: http://www.ine.gov.ve/cifras. [Consulta : 2005, Septiembre 8].
Instituto Nacional del Menor. Fondo de las Naciones Unidas para la Infancia. (1997). Millón y medio de niños, niñas trabajan en Venezuela. Caracas, Venezuela.
Instituto Nacional de Prevención, Salud y Seguridad Laborales. (2003). Programa Nacional de Protección de niños, niñas y adolescentes trabajadores. [Documento en línea]Venezuela. Disponible: http://www.inpsasel.gov.ve/pronat [Consulta : 2006, Marzo 25].
Kerlinger, F. N. (1985). Investigación del comportamiento. México: Editorial Interamericana.
León, L. (2002, Septiembre). Pompas de jabón. Question Nº 3 p. 9.
391
Ley Aprobatoria de la Convención sobre los Derechos del Niño. (1990). Gaceta Oficial de la República de Venezuela, 34.541 (Extraordinario), Agosto 28, 1990.
Ley Federal del Trabajo. (1970). [Documento en línea] México. Disponible: http:
//www. cddhcu.gob.mx/ley info. [Consulta: 2005, Marzo 8] Ley de Fomento de Empleo.(1991) [Documento en línea]. Perú. Disponible: http:
//www. cintufor.org.Uy/public/region/ampro/cintufort/temas. [Consulta: 2005, Septiembre 15]
Ley Federal del Trabajo. (1942). [Documento en línea]. Bolivia. Disponible: http:
//www. ilo.org/public/spanish/region/ampro/cintufort/temas/youth/legisl/bol/ii/ [Consulta: 2005, Noviembre 3]
Ley Orgánica de Educación. (1980). Gaceta Oficial de la República de Venezuela, 2635 (Extraordinario), Julio 28, 1980.
Ley Orgánica del Trabajo. (1997). Gaceta Oficial de la República de Venezuela, 5.152 (Extraordinario), Junio 19, 1997.
Ley Orgánica para la Protección del Niño y del Adolescente. (1998). Gaceta Oficial de la República de Venezuela, 5.266 (Extraordinario), Octubre 2, 1998.
Ley para la Protección de los Derechos de Niños, Niñas y Adolescentes. [Documento en línea]. México. Disponible: http://www.cddhcu.gob.mx/ley info/[Consulta: 2005, Marzo 8]
Ley sobre el Instituto Nacional de Cooperación Educativa. (1970). Gaceta Oficial de la República de Venezuela, 29.115 (Extraordinario), Enero 8, 1970.
Luhmann, N. (1990). Los sistemas sociales. Barcelona España: Ediciones Grau.
Mahia, R. (2003). Economía Latinoaméricana: Causas de la crisis del 2002 y perspectivas de evolución futura [Documento en línea] Disponible: http://w.w.w.cesla.com [Consulta: 2003, Noviembre 2]
Martinez, M. (1991). Manual teórico práctico. Caracas. Venezuela : Editorial Texto SRL.
Martinez, M. y Blanco, V. (1999). Trabajo y salud en niños, niñas y adolescentes trabajadores del sector agrícola. Revista Salud de los Trabajadores, 1 (11). Aragua
392
Marx, K. (1986). El Capital. Tomos I, II. Moscú: Editorial MIR.
Maturana, H. (1995). La Realidad: ¿Objetiva o Construida? 1. Fundamentos biológicos de la realidad. México: Editorial Anthropos.
Maza Zavala, D. (1981). Reflexiones sobre un modelo alternativo de desarrollo para Venezuela, en revista Nueva Sociedad. Caracas Nº 53.
Ministerio de Educación (1995). Memoria y Cuenta. Caracas. Venezuela.
Ministerio de Educación, Cultura y Deporte (2000). Alumnos matriculados en Educación Básica. [Documento en línea]. Venezuela. Disponible: http// www. me.gov.ve/mecd/ [Consulta 2002, Septiembre 8].
Ministerio de Educación, Cultura y Deporte (2003). Programas sociales. [Documento en línea]. Venezuela. Disponible: http// www. me.gov.ve. [Consulta 2006, Marzo 24].
Ministerio de la Familia (1991). Plan Nacional de Acción a favor de la Infancia. [Documento en línea].Venezuela. Disponible: http//www.platino.gov. ve/minfamilia . [Consulta 2006, Marzo 23].
Ministerio de la Protección Social de la República de Colombia. (2005). [Documento en línea]. Colombia. Disponible: http// www. min protección social.gov.co/ [Consulta 2005, Agosto 29].
Ministerio de Planificación y Desarrollo (2001). Plan de Desarrollo Económico y Social de la Nación 2001-2007. [Documento en línea]. Venezuela. Disponible: http// www.mpd.gov.ve/pdeysn/pdesn.pdj. [Consulta: 2005, Octubre 4 ]
Ministerio de Salud y Desarrollo Social (2001). Plan Estratégico Social. [Documento en línea]. Venezuela. Disponible: http// www.msds.gov.ve [Consulta 2006, Marzo 24].
Ministerio de Salud y Desarrollo Social (2003). Programas sociales. [Documento en línea]. Venezuela. Disponible: http// www.msds.gov.ve [Consulta 2006, Marzo 24].
Montilla, G. (2003, Marzo). ¿Qué importamos? Cuestión N° 9. p.10.
Morin, E. (2005). Introducción al pensamiento complejo. Barcelona, España: Editorial Gedisa.
393
Muil Kay, M (1994). La visión sociológica de la ciencia. En la Ciencia y la tecnología, v.v. AA, C.S.I.C. Madrid.
Newron. R. (1996). Constructivismo humano. Planteamientos en educación. Revista Nº 1 abril 2.
Nickerson, R. (1980). The Teaching of Learning Strategies. Cambridge, MA. Newman Inc.
Oficina Central de Estadística e Informática. (1995). Caracas. Venezuela.
Oficina Central de Estadística e Informática. (1998). Caracas. Venezuela.
Oficina Internacional del Trabajo. (1990). El trabajo en el mundo. (Vol 2). Caracas, Venezuela: Editorial Nueva Sociedad. (Trabajo original publicado por OIT en 1985).
Organización para la Alimentación y la Agricultura de la organización de las Naciones Unidas (FAO). (1999). [Documento en línea]. Disponible: http:www. fao.org. [Consulta: 2005, Marzo 14]
Organización de las Naciones Unidas. (2002). Población mundial. Nueva York.
Organización Internacional del Trabajo. (1973). Convenio Nº 138 sobre edad mínima para trabajar. [Documento en línea]. Ginebra. Disponible: http://www. oit.org./ilolex/spanish [Consulta: 2002, Octubre 9].
Organización Internacional del Trabajo (1996). Trabajo infantil. Refutación del argumento de los dedos hábiles. Revista, (17), (40) Ginebra. Suiza.
Organización Internacional del Trabajo (1997). Trabajo infantil. Ginebra. Suiza.
Organización Internacional del Trabajo (1999). Convenio Nº 182 sobre las peores formas del trabajo infantil. Conferencia 87. [Documento en línea]. Ginebra. Disponible: http:// www.oit.ilolex/spanish, [Consulta: 2002, Octubre 9].
Organización Internacional del Trabajo. Programa Internacional para la Erradicación del Trabajo Infantil. (2001). Encuesta a trabajadores infantiles domésticos en Lima, Cajamarca y Cusco. [Documento en línea]. Perú. Disponible: http:// www.oit.org.pe/ipec/documentos/ras-peru.pdj [Consulta: 2005, Noviembre 1].
Organización Internacional del Trabajo. Programa Internacional para la Erradicación del Trabajo Infantil. (2002). El Trabajo infantil en la caña de azúcar de Bolivia. [Documento en línea]. Bolivia. Disponible: http:// www.
394
ilo.org/public/spanish/Standard/ipec/simpoc/Bolivia/ra/cane.pdj [Consulta: 2005, Noviembre 4].
Organización Internacional del Trabajo. Oficina Regional para América Latina y el Caribe. Programa Internacional para la Erradicación del Trabajo Infantil. Proyecto Subregional de Prevención y Eliminación del Trabajo Infantil Doméstico en Hogares de Terceros en Sudamérica. (2002). Invisible y sin derechos. Aproximación al perfil del trabajo infantil doméstico [Documento en línea]. Perú. Disponible: http://www.oit.org.pe/ipec/ documentos/ras-peru.pdj [Consulta: 2005, Septiembre 30].
Organización Internacional del Trabajo (2002). Un futuro sin trabajo infantil. Informe Global sobre el Seguimiento de la Declaración de Principios y Derechos Fundamentales en el Trabajo. Conferencia Internacional del Trabajo, 90ª sesión. Informe I (B). Ginebra.
Organización Internacional del Trabajo. Programa Internacional para la Erradicación del Trabajo Infantil. Centro de Desarrollo y Autogestión. (2003). El Trabajo infantil en basurales de Ecuador. [Documento en línea]. Ecuador. Disponible: http:// www. oit.org.pe/ipec/documentos lb-basurales-ecu.spa.pdj [Consulta: 2005, Septiembre 30].
Organización Internacional del Trabajo. Programa Internacional para la Erradicación del Trabajo Infantil. (2003). Trabajo infantil [Documento en línea]. Perú. Disponible: http:// www.oit.org.pe/ipec/documentos/ [Consulta: 2005, Noviembre 5].
Organización Internacional del Trabajo. Fondo de las Naciones Unidas para la para la Infancia. (2004). Buscando la luz al final del túnel. El trabajo de niños, niñas y adolescentes en la minería artesanal de Bolivia. [Documento en línea]. La Paz. Disponible: http:// www. unicef.boletin/spanish/boreseurces –buscando la luz.pdj. [Consulta: 2005, Octubre 3].
Plan Colombia. (2000). [Documento en línea]. Disponible: http:// www. Colombia enb.org/openems/plancolombia/documentos [Consulta: 2005, Septiembre 2 ].
Popper, K. R. (1973). The open society and its enemies. London. Routledge.
Popper, K. R (1986). El universo abierto. Un argumento a favor del indeterminismo. Post Scriptum a la lógica de la investigación científica. Madrid. España: Editorial Tecnos.
Popper, K. R (1988). Conocimiento objetivo. Madrid. España: Editorial Tecnos.
395
Programa de las Naciones Unidas para el Desarrollo. (2000). Informe de desarrollo humano de Bolivia. Prospectiva económica y social 2000. [Documento en línea] La Paz. Bolivia. Disponible: http:// www.pnud.org.bo/ publicaciones [Consulta: 2005, Septiembre 16 ].
Programa de las Naciones Unidas para el Desarrollo. (2000). Informe sobre el desarrollo humano en Venezuela. Caminos para enfrentar la pobreza. [Documento en línea]. Disponible http// www.pnud.org.ve [Consulta: 2001, Marzo 12]
Programa de las Naciones Unidas para el Desarrollo. (2002). Informe de desarrollo humano de Bolivia. [Documento en línea]. Bolivia. Disponible: http:// www.pnud.org.bo/ informe [Consulta: 2005, Septiembre 18].
Programa de las Naciones Unidas para el Desarrollo. (2002). Informe sobre el desarrollo humano Perú. [Documento en línea]. Perú. Disponible: http:// www.pnud.org.pe/inf-nacional humano 2002 [Consulta: 2005, Septiembre 3 ].
Programa de las Naciones Unidas para el desarrollo (2003). Informe sobre el desarrollo humano. [Documento en línea]. http// www.pnud.org.ve. [Consulta, 2004, Octubre 30]
Programa de las Naciones Unidas para el Desarrollo. (2005). Informe sobre desarrollo humano. [Documento en línea] Disponible: http:// www.undp.org/spanish [Consulta: 2005, Noviembre 15].
Programa Internacional para la Erradicación del Trabajo Infantil. Desarrollo y Autogestión. (2001). Erradicación del trabajo infantil en el basurero municipal de Santo Domingo de los Colorados. [Documento en línea]. Ecuador. Disponible: http:// www. oit.org.pe/ipec/documentos/basureros/ ecu.pdj [Consulta: 2005, Noviembre 1].
Programa Internacional para la Erradicación del Trabajo Infantil. Encuesta línea de Base Centro de Desarrollo y Autogestión. (2002). El Trabajo infantil en basurales de Ecuador. [Documento en línea]. Ecuador. Disponible: http:// www. oit.org.pe/ipec/documentos/lb-basurales-ecu.spa.pdj [Consulta: 2005, Septiembre 30].
Programa Internacional para la Erradicación del Trabajo Infantil. (2003). Programa de erradicación del trabajo infantil en la mineria artesanal de Sudamérica. [Documento en línea]. Disponible: http//www.oit.org. pe/spanish/260 ameri/oitreg/actividades/proyectos/ipec/minería [Consulta: 2004, Septiembre 10]
396
Rangel, D (1974). Los Andinos en el poder. Balance de Historia Contemporánea 1899-1945. Valencia: Vadel Hnos.
Reglamento General de la Ley Orgánica del Trabajo. (Decreto Nº 3.235). (1.999, Enero 20). Gaceta Oficial de la República de Venezuela, 5.292 (Extraordinario), Enero 25, 1999.
Reglamento de la Ley sobre el Instituto Nacional de Cooperación Educativa. (2003, noviembre 03). Gaceta Oficial de la República de Venezuela, 37.809 (Extraordinario), Noviembre 03, 2003.
Resolución N° 751. Ministerio de Educación. (Comunidades Educativas). (1986, Noviembre 14). Gaceta Oficial de la República de Venezuela, 33598.
Robbins, S. (1996). Comportamiento organizacional (7.ed.). México:Prentice-Hall Hispanoamericana, S.A.
Rodríguez, N. (1995). Educación Básica y Trabajo. Un aporte a la utopía pedagógica. Caracas. Venezuela: Universidad Central de Venezuela.
Rosenwitz, J. (1996). Comportamiento humano en el trabajo. México: Prentice Hall.
Secretaría General de Turismo. (2003). [Documento en línea]. Ecuador. Disponible: http://www. mc.es/ turismo/infopais/Ecuador. [Consulta: 2005, Agosto 30]
Sierra Bravo, R. (1999). Tesis doctorales y trabajos de investigación científica (5ª. ed.). España: Editorial Paraninfo.
Sierra, P., Galeano, M., Álvarez, A. y Sánchez, F. (1996). Niños trabajadores del carbón de Topaga. Colombia: Universidad Nacional de Colombia.
Sistema Nacional para el Desarrollo integral de la Familia. (2003). Segundo estudio en cien ciudades de niños, niñas y adolescentes trabajadores de México 2002 – 2003 [Documento en línea]. México. Disponible: http://www. dij.gob.mx. [Consulta: 2005, febrero 25]
Sistema de Información Regional sobre Trabajo Infantil. Estudios y Estadísticas del
Programa Internacional para la Erradicación del Trabajo Infantil. (2001). Niños y niñas en la minería artesanal de Colombia. [Documento en línea]. Colombia. Disponible: http://www. oit.org.pe/ipec/boletín/documento/minería col.pdj [Consulta: 2005, Septiembre 28]
Smith, A. (1990). Investigación de la naturaleza y causas de la riqueza de las naciones. Barcelona : Editorial Bosch.
397
Subsecretaría del Trabajo y Previsión Social. (2003). [Documento en línea]. México Disponible:http://www. [Consulta: 2005, febrero 25] Unidad de Análisis Político y Económico. (2002). [Documento en línea]. Bolivia. Disponible:http://www. Unda.org/Bolivia/pdj. [Consulta: 2005, Septiembre
20] Veloz, R. (1945). Economía y finanzas de Venezuela 1830 – 1944. Caracas. Venezuela: Unidos
Vialatoux. J. (1962). Significación moderna del trabajo. Barcelona: Editorial Nova.
Tovar, B. (2004). Posibilidades de incorporación al trabajo para la población juvenil de 15 a 16 años. Tesis Doctoral. Valencia. Venezuela. Universidad de Carabobo.
398
ANEXOS
ANEXO A
VENEZUELA
Se encuentra ubicada al Norte de América del Sur, con una superficie de
916.445 Km2 y una población de 24.631.900 (INE, Censo 2.001) con una proyección
de 26.577.423 millones de habitantes (INE, 2.005)
Venezuela cuenta con una población urbana de 87% (2.000). Crecimiento
Demográfico (tasa media): 1,6% (2.000 – 2.015). Fertilidad (número de hijos por
mujer): 2,72 (2.000 – 2.005). Esperanza de vida (años): 70,8 (hombres), 76,6
(mujeres) (2.003). Índice de desarrollo humano (entre 0 y 1): 0,77 (2.000). La
Educación es pública y privada. Existe un analfabetismo (adultos) de 7,4% (2.000).
Sistema de Gobierno: Republicano. La División Administrativa está
estructurada en 23 Estados, el Distrito Capital (Caracas) y las 74 islas que constituyen
las dependencias federales. El Poder Público Nacional comprende el Ejecutivo,
Legislativo, Judicial, Ciudadano y Electoral. El Ejecutivo Nacional se ejerce por el
presidente, vicepresidente y los ministros. Siendo el Presidente de la República el
Jefe de Estado y del Ejecutivo Nacional. El Poder Legislativo está representado por
la Asamblea Nacional la cual es unicameral.
Es un territorio con grandes riquezas naturales donde destacan: el gas natural,
petróleo, hierro, oro, diamante, bausita, recursos pesqueros, forestales, vastas
extensiones agrícolas y pecuarias, numerosos ríos con potencial hidroeléctrico y una
gran variedad de ecosistemas y paisajes de indudable valor económico y turístico.
399
Su flora y su fauna de incalculable valor, las diferencias paisajísticas,
climáticas y topográficas de las regiones de Venezuela le permite poseer una enorme
variedad vegetal, constituyendo la Orquídea la flor nacional y el Araguaney el árbol
nacional. La fauna es diversa y abundante, con presencia de mamíferos característicos
de la zona tropical y una variedad de aves que llenan de colores el espacio aéreo
venezolano y numerosos reptiles y peces propios de los grandes ríos venezolanos,
entre otros.
La Educación para el Trabajo en Educación Básica
A través del área educación para el trabajo, se ha vinculado la educación con
el trabajo, relación que estuvo fundamentada en la derogada Constitución Nacional
de 1961; y que continua su vigencia con soporte legal en la Ley Orgánica de
Educación (1980) en los artículos 3, 6, 7 y 21. Así mismo la relación de educación y
trabajo se observa en la Constitución de la República Bolivariana de Venezuela
(1999) cuando en el artículo 102 se vincula a la educación con la valoración ética del
trabajo.
La Educación Básica, si bien, a partir de la promulgación de la Ley Orgánica
de Educación (1.980 ), representa un nivel dentro de la estructura del sistema
educativo venezolano, donde esta establecida su finalidad y su vinculación con el
trabajo a través del área educación para el trabajo, este nivel de estudio en su tercera
etapa tiene sus antecedentes mas cercanos en el nivel de educación media , el cual
por decreto en el año de 1969, queda constituida en dos ciclos, el ciclo básico común
de tres años de duración y el ciclo diversificado con especialidad en ciencias,
humanidades y educación técnica, incorporándose luego la rama de docencia o
normal y las ramas técnicas de: industrial, comercial, servicios administrativos,
agropecuaria y asistencial.
400
Con respecto al ciclo básico común, su finalidad era ofrecer cultura general y
oportunidades para la orientación y exploración vocacional. En el año 1971 por
resolución del Ministerio de Educación, se incluye la asignatura trabajos manuales en
el plan de estudios del ciclo básico común, que se curso a través de las áreas de
exploración y orientación (AEO). La finalidad fue facilitar la exploración vocacional
y la información sobre las actividades reales y potenciales del mercado ocupacional.
En 1978 por resolución, el Ministerio de Educación introduce modificaciones al plan
del ciclo básico común, en la asignatura trabajos manuales. Se eliminan las áreas de
orientación y exploración y quedan tres áreas: industrial, comercial, y agropecuaria,
siendo obligatoria cursar una sola.
Sin embargo antecedentes remotos de la educación para el trabajo, se pueden
encontrar en el pensamiento educativo de Simón Rodríguez (Molins, 1988), la unión
del estudio con el trabajo productivo se fundamentaba en su proyecto societario y en
su idea de república cuyos principios eran “educación popular” “destinación a
ejercicios útiles” y “aspiración fundada en la propiedad”. Estos tres principios que
escribió en distintas oportunidades, fueron vectores que guiaron su praxis educativa
(Molins, 1988).
Después de Simón Rodríguez, en los diferentes instrumentos normativos de
la educación en Venezuela se dedico un dispositivo para relacionar la educación con
el trabajo, por lo que a los niños y niñas a través de la educación primaria se les ha
enseñado el conocimiento de oficios propios de su genero como corte y costura,
confección de vestidos, nociones de economía domestica (niñas), y albañilería,
carpintería, herrería, sastrería, zapatería (varones). Pero fue en 1911, siendo ministro
de instrucción pública José Gil Fortoul, que se promulgaron los primeros programas
para la educación primaria venezolana. Por primera vez se incorporaron los trabajos
manuales al plan de estudio de la educación primaria. (Rodríguez, 1995).
401
Desde el año 1988, el diseño curricular del área educación para el trabajo en la
tercera etapa de educación básica, ha comprendido seis subáreas y 149 programas
iniciales. Las subáreas con sus diferentes programas como son : industrial (con
programas como dibujo, carpintería, electricidad), comercial (mecanografía,
contabilidad, técnicas de oficina), agropecuaria (agricultura, maquinaria agrícola,
pesca, bovinos), hogar (corte y costura, manualidades, conservación de alimentos),
estética (cerámica, técnicas de pintura, pintura decorativa), y deportiva ( gimnasia
artística, pesas, tenis de mesa), entre otros programas, han dado apoyo al área de
educación para el trabajo.
Los programas desde su implementación han tenido debilidades por ser muy
teóricos, altamente estructurados, carentes de secuencia y no han respondido a las
expectativas locales. Han promovido la adquisición de conocimientos y habilidades
manuales mínimas mediante la observación de las demostraciones del profesor y la
repetición por parte del alumno. Las estrategias metodológicas y de evaluación se
concretan en la actuación del profesor, promoviendo solamente la actitud receptiva
por parte del educando. Los objetivos específicos, las estrategias metodológicas y de
evaluación, y los contenidos se han caracterizado por su carácter informativo
(Rodríguez, 1995).
Objetivo tradicional del área, etapa, perfil
El área Educación para el Trabajo ha presentado como objetivo general:
contribuir a la formación integral del educando al lograr que valore el trabajo en su
sentido individual, social y trascendental, mediante la adquisición de actitudes hacia
la planificación y la organización del trabajo, la ejecución de técnicas, la utilización
adecuada de los recursos del medio, el desarrollo de habilidades y destrezas y la
creación de tecnología de bajo costo, que le permitirán transferir los conocimientos a
402
situaciones de la vida diaria. Este objetivo general ha estado en interrelación con los
objetivos de la tercera etapa que corresponden al área, entre estos se encuentran:
1. Valorar la importancia del trabajo en la producción de bienes y servicios
culturales, para el desarrollo de la comunidad.
2. Desarrollar actividades en el hacer creativo que permitan el fortalecimiento de la
autorrealización.
3. Administrar técnicas en un campo específico de trabajo que permitan satisfacción
personal y prosecución de estudios.
4. Adquirir experiencias en el proceso de autogestión, mediante la realización de
actividades de abastecimiento y trabajo cooperativo.
5. Desarrollar proyectos que contribuyan al mantenimiento y conservación del
ambiente.
El área educación para el trabajo ha presentado un perfil específico para la
tercera etapa, perfil que el estudiante debe adquirir a través del área. De acuerdo al
mismo el alumno en su formación debe lograr entre otros aspectos:
1. Valorar la importancia de la producción de bienes y servicios para el desarrollo
socio-cultural de la comunidad.
2. Respetar el trabajo de las demás personas.
3. Establecer metas de trabajo.
4. Tomar decisiones.
5. Cooperar en la solución de los problemas del hogar, la escuela y la comunidad.
6. Realizar actividades dirigidas a la satisfacción de sus necesidades.
403
7. Trabajar en forma cooperativa para el autoabastecimiento.
8. Realizar proyectos de mantenimiento para la escuela y la comunidad.
9. Aplicar técnicas en la elaboración de objetivos diversos.
10. Ser creativo en la sustitución de herramientas y materiales.
11. Aplicar proyectos de protección y conservación ambiental.
12. Valorar los principios de identidad nacional.
CONSTITUCIÓN DE LA REPUBLICA BOLIVARIANA DE VENEZUELA
PREÁMBULO
El pueblo de Venezuela, en ejercicio de sus poderes creadores e invocando la
protección de Dios, el ejemplo histórico de nuestro Libertador Simón Bolívar y el
heroísmo y sacrificio de nuestros antepasados aborígenes y de los precursores y
forjadores de una patria libre y soberana; con el fin supremo de refundar la República
para establecer una sociedad democrática, participativa y protagónica, multiétnica y
pluricultural en un Estado de justicia, federal y descentralizado, que consolide los
valores de la libertad, la independencia, la paz, la solidaridad, el bien común, la
integridad territorial, la convivencia y el imperio de la ley para esta y las futuras
generaciones; asegure el derecho a la vida, al trabajo, a la cultura, a la educación, a la
justicia social y a la igualdad sin discriminación ni subordinación alguna; promueva
la cooperación pacífica entre las naciones e impulse y consolide la integración
latinoamericana de acuerdo con el principio de no intervención y autodeterminación
de los pueblos, la garantía universal e indivisible de los derechos humanos, la
democratización de la sociedad internacional, el desarme nuclear, el equilibrio
ecológico y los bienes jurídicos ambientales como patrimonio común e irrenunciable
de la humanidad; en ejercicio de su poder originario representado por la Asamblea
Nacional Constituyente mediante el voto libre y en referendo democrático,
404
decreta la siguiente Constitución
TÍTULO I
PRINCIPIOS FUNDAMENTALES
Artículo 1. La República Bolivariana de Venezuela es irrevocablemente libre e
independiente y fundamenta su patrimonio moral y sus valores de libertad, igualdad,
justicia y paz internacional en la doctrina de Simón Bolívar, el Libertador.
Son derechos irrenunciables de la Nación la independencia, la libertad, la soberanía,
la inmunidad, la integridad territorial y la autodeterminación nacional.
Artículo 2. Venezuela se constituye en un Estado democrático y social de Derecho y
de Justicia, que propugna como valores superiores de su ordenamiento jurídico y de
su actuación, la vida, la libertad, la justicia, la igualdad, la solidaridad, la democracia,
la responsabilidad social y, en general, la preeminencia de los derechos humanos, la
ética y el pluralismo político.
Artículo 3. El Estado tiene como fines esenciales la defensa y el desarrollo de la
persona y el respeto a su dignidad, el ejercicio democrático de la voluntad popular, la
construcción de una sociedad justa y amante de la paz, la promoción de la
prosperidad y bienestar del pueblo y la garantía del cumplimiento de los principios,
derechos y deberes reconocidos y consagrados en esta Constitución. La educación y
el trabajo son los procesos fundamentales para alcanzar dichos fines.
Artículo 4. La República Bolivariana de Venezuela es un Estado federal
descentralizado en los términos consagrados en esta Constitución, y se rige por los
principios de integridad territorial, cooperación, solidaridad, concurrencia y
corresponsabilidad.
Artículo 5. La soberanía reside intransferiblemente en el pueblo, quien la ejerce
directamente en la forma prevista en esta Constitución y en la ley, e indirectamente,
405
mediante el sufragio, por los órganos que ejercen el Poder Público. Los órganos del
Estado emanan de la soberanía popular y a ella están sometidos.
Artículo 6. El gobierno de la República Bolivariana de Venezuela y de las entidades
políticas que la componen es y será siempre democrático, participativo, electivo,
descentralizado, alternativo, responsable, pluralista y de mandatos revocables.
Artículo 7. La Constitución es la norma suprema y el fundamento del ordenamiento
jurídico. Todas las personas y los órganos que ejercen el Poder Público están sujetos a
esta Constitución.
Artículo 8. La bandera nacional con los colores amarillo, azul y rojo; el himno
nacional Gloria al bravo pueblo y el escudo de armas de la República son los
símbolos de la patria. La ley regulará sus características, significados y usos.
Artículo 9. El idioma oficial es el castellano. Los idiomas indígenas también son de
uso oficial para los pueblos indígenas y deben ser respetados en todo el territorio de la
República, por constituir patrimonio cultural de la Nación y de la humanidad.
TÍTULO III
DE LOS DEBERES, DERECHOS HUMANOS Y GARANTÍAS,
Capítulo V
De los derechos sociales y de las familias
Artículo 75. El Estado protegerá a las familias como asociación natural de la sociedad
y como el espacio fundamental para el desarrollo integral de las personas. Las
relaciones familiares se basan en la igualdad de derechos y deberes, la solidaridad, el
esfuerzo común, la comprensión mutua y el respeto recíproco entre sus integrantes. El
406
Estado garantizará protección a la madre, al padre o a quienes ejerzan la jefatura de la
familia.
Los niños, niñas y adolescentes tienen derecho a vivir, ser criados o criadas y a
desarrollarse en el seno de su familia de origen. Cuando ello sea imposible o contrario
a su interés superior, tendrán derecho a una familia sustituta, de conformidad con la
ley. La adopción tiene efectos similares a la filiación y se establece siempre en
beneficio del adoptado o la adoptada, de conformidad con la ley. La adopción
internacional es subsidiaria de la nacional.
Artículo 76. La maternidad y la paternidad son protegidas integralmente, sea cual
fuere el estado civil de la madre o del padre. Las parejas tienen derecho a decidir libre
y responsablemente el número de hijos o hijas que deseen concebir y a disponer de la
información y de los medios que les aseguren el ejercicio de este derecho. El Estado
garantizará asistencia y protección integral a la maternidad, en general a partir del
momento de la concepción, durante el embarazo, el parto y el puerperio, y asegurará
servicios de planificación familiar integral basados en valores éticos y científicos.
El padre y la madre tienen el deber compartido e irrenunciable de criar, formar,
educar, mantener y asistir a sus hijos o hijas, y éstos o éstas tienen el deber de
asistirlos o asistirlas cuando aquel o aquella no puedan hacerlo por sí mismos o por sí
mismas. La ley establecerá las medidas necesarias y adecuadas para garantizar la
efectividad de la obligación alimentaría.
Artículo 77. Se protege el matrimonio entre un hombre y una mujer, fundado en el
libre consentimiento y en la igualdad absoluta de los derechos y deberes de los
cónyuges. Las uniones estables de hecho entre un hombre y una mujer que cumplan
los requisitos establecidos en la ley producirán los mismos efectos que el matrimonio.
Artículo 78. Los niños, niñas y adolescentes son sujetos plenos de derecho y estarán
protegidos por la legislación, órganos y tribunales especializados, los cuales
407
respetarán, garantizarán y desarrollarán los contenidos de esta Constitución, la
Convención sobre los Derechos del Niño y demás tratados internacionales que en esta
materia haya suscrito y ratificado la República. El Estado, las familias y la sociedad
asegurarán, con prioridad absoluta, protección integral, para lo cual se tomará en
cuenta su interés superior en las decisiones y acciones que les conciernan. El Estado
promoverá su incorporación progresiva a la ciudadanía activa y creará un sistema
rector nacional para la protección integral de los niños, niñas y adolescentes.
Artículo 79. Los jóvenes y las jóvenes tienen el derecho y el deber de ser sujetos
activos del proceso de desarrollo. El Estado, con la participación solidaria de las
familias y la sociedad, creará oportunidades para estimular su tránsito productivo
hacia la vida adulta y, en particular, para la capacitación y el acceso al primer empleo,
de conformidad con la ley.
Artículo 80. El Estado garantizará a los ancianos y ancianas el pleno ejercicio de sus
derechos y garantías. El Estado, con la participación solidaria de las familias y la
sociedad, está obligado a respetar su dignidad humana, su autonomía y les garantizará
atención integral y los beneficios de la seguridad social que eleven y aseguren su
calidad de vida. Las pensiones y jubilaciones otorgadas mediante el sistema de
seguridad social no podrán ser inferiores al salario mínimo urbano. A los ancianos y
ancianas se les garantizará el derecho a un trabajo acorde con aquellos y aquellas que
manifiesten su deseo y estén en capacidad para ello.
Artículo 81. Toda persona con discapacidad o necesidades especiales tiene derecho al
ejercicio pleno y autónomo de sus capacidades y a su integración familiar y
comunitaria. El Estado, con la participación solidaria de las familias y la sociedad, le
garantizará el respeto a su dignidad humana, la equiparación de oportunidades,
condiciones laborales satisfactorias, y promoverá su formación, capacitación y acceso
al empleo acorde con sus condiciones, de conformidad con la ley. Se les reconoce a
408
las personas sordas o mudas el derecho a expresarse y comunicarse a través de la
lengua de señas venezolana.
Artículo 82. Toda persona tiene derecho a una vivienda adecuada, segura, cómoda,
higiénica, con servicios básicos esenciales que incluyan un hábitat que humanice las
relaciones familiares, vecinales y comunitarias. La satisfacción progresiva de este
derecho es obligación compartida entre los ciudadanos y ciudadanas y el Estado en
todos sus ámbitos.
El Estado dará prioridad a las familias y garantizará los medios para que éstas, y
especialmente las de escasos recursos, puedan acceder a las políticas sociales y al
crédito para la construcción, adquisición o ampliación de viviendas.
Artículo 83. La salud es un derecho social fundamental, obligación del Estado, que lo
garantizará como parte del derecho a la vida. El Estado promoverá y desarrollará
políticas orientadas a elevar la calidad de vida, el bienestar colectivo y el acceso a los
servicios. Todas las personas tienen derecho a la protección de la salud, así como el
deber de participar activamente en su promoción y defensa, y el de cumplir con las
medidas sanitarias y de saneamiento que establezca la ley, de conformidad con los
tratados y convenios internacionales suscritos y ratificados por la República.
Artículo 84. Para garantizar el derecho a la salud, el Estado creará, ejercerá la rectoría
y gestionará un sistema público nacional de salud, de carácter intersectorial,
descentralizado y participativo, integrado al sistema de seguridad social, regido por
los principios de gratuidad, universalidad, integralidad, equidad, integración social y
solidaridad. El sistema público nacional de salud dará prioridad a la promoción de la
salud y a la prevención de las enfermedades, garantizando tratamiento oportuno y
rehabilitación de calidad. Los bienes y servicios públicos de salud son propiedad del
Estado y no podrán ser privatizados. La comunidad organizada tiene el derecho y el
deber de participar en la toma de decisiones sobre la planificación, ejecución y
control de la política específica en las instituciones públicas de salud.
409
Artículo 85. El financiamiento del sistema público nacional de salud es obligación del
Estado, que integrará los recursos fiscales, las cotizaciones obligatorias de la
seguridad social y cualquier otra fuente de financiamiento que determine la ley. El
Estado garantizará un presupuesto para la salud que permita cumplir con los objetivos
de la política sanitaria. En coordinación con las universidades y los centros de
investigación, se promoverá y desarrollará una política nacional de formación de
profesionales, técnicos y técnicas y una industria nacional de producción de insumos
para la salud. El Estado regulará las instituciones públicas y privadas de salud.
Artículo 86. Toda persona tiene derecho a la seguridad social como servicio público
de carácter no lucrativo, que garantice la salud y asegure protección en contingencias
de maternidad, paternidad, enfermedad, invalidez, enfermedades catastróficas,
discapacidad, necesidades especiales, riesgos laborales, pérdida de empleo,
desempleo, vejez, viudedad, orfandad, vivienda, cargas derivadas de la vida familiar
y cualquier otra circunstancia de previsión social. El Estado tiene la obligación de
asegurar la efectividad de este derecho, creando un sistema de seguridad social
universal, integral, de financiamiento solidario, unitario, eficiente y participativo, de
contribuciones directas o indirectas. La ausencia de capacidad contributiva no será
motivo para excluir a las personas de su protección. Los recursos financieros de la
seguridad social no podrán ser destinados a otros fines. Las cotizaciones obligatorias
que realicen los trabajadores y las trabajadoras para cubrir los servicios médicos y
asistenciales y demás beneficios de la seguridad social podrán ser administrados sólo
con fines sociales bajo la rectoría del Estado. Los remanentes netos del capital
destinado a la salud, la educación y la seguridad social se acumularán a los fines de su
distribución y contribución en esos servicios. El sistema de seguridad social será
regulado por una ley orgánica especial.
Artículo 87. Toda persona tiene derecho al trabajo y el deber de trabajar. El Estado
garantizará la adopción de las medidas necesarias a los fines de que toda persona
pueda obtener ocupación productiva, que le proporcione una existencia digna y
410
decorosa y le garantice el pleno ejercicio de este derecho. Es fin del Estado fomentar
el empleo. La ley adoptará medidas tendentes a garantizar el ejercicio de los derechos
laborales de los trabajadores y trabajadoras no dependientes. La libertad de trabajo no
será sometida a otras restricciones que las que la ley establezca. Todo patrono o
patrona garantizará a sus trabajadores o trabajadoras condiciones de seguridad,
higiene y ambiente de trabajo adecuados. El Estado adoptará medidas y creará
instituciones que permitan el control y la promoción de estas condiciones.
Artículo 88. El Estado garantizará la igualdad y equidad de hombres y mujeres en el
ejercicio del derecho al trabajo. El Estado reconocerá el trabajo del hogar como
actividad económica que crea valor agregado y produce riqueza y bienestar social.
Las amas de casa tienen derecho a la seguridad social de conformidad con la ley.
Artículo 89. El trabajo es un hecho social y gozará de la protección del Estado. La ley
dispondrá lo necesario para mejorar las condiciones materiales, morales e
intelectuales de los trabajadores y trabajadoras. Para el cumplimiento de esta
obligación del Estado se establecen los siguientes principios:
1. Ninguna ley podrá establecer disposiciones que alteren la intangibilidad y
progresividad de los derechos y beneficios laborales. En las relaciones
laborales prevalece la realidad sobre las formas o apariencias.
2. Los derechos laborales son irrenunciables. Es nula toda acción, acuerdo o
convenio que implique renuncia o menoscabo de estos derechos. Sólo es
posible la transacción y convenimiento al término de la relación laboral, de
conformidad con los requisitos que establezca la ley.
3. Cuando hubiere dudas acerca de la aplicación o concurrencia de varias
normas, o en la interpretación de una determinada norma, se aplicará la más
favorable al trabajador o trabajadora. La norma adoptada se aplicará en su
integridad.
411
4. Toda medida o acto del patrono o patrona contrario a esta Constitución es
nulo y no genera efecto alguno.
5. Se prohíbe todo tipo de discriminación por razones de política, edad, raza,
sexo o credo o por cualquier otra condición.
6. Se prohíbe el trabajo de adolescentes en labores que puedan afectar su
desarrollo integral. El Estado los o las protegerá contra cualquier explotación
económica y social.
Artículo 90. La jornada de trabajo diurna no excederá de ocho horas diarias ni de
cuarenta y cuatro horas semanales. En los casos en que la ley lo permita, la jornada de
trabajo nocturna no excederá de siete horas diarias ni de treinta y cinco semanales.
Ningún patrono o patrona podrá obligar a los trabajadores o trabajadoras a laborar
horas extraordinarias. Se propenderá a la progresiva disminución de la jornada de
trabajo dentro del interés social y del ámbito que se determine y se dispondrá lo
conveniente para la mejor utilización del tiempo libre en beneficio del desarrollo
físico, espiritual y cultural de los trabajadores y trabajadoras. Los trabajadores y
trabajadoras tienen derecho al descanso semanal y vacaciones remunerados en las
mismas condiciones que las jornadas efectivamente laboradas.
Artículo 91. Todo trabajador o trabajadora tiene derecho a un salario suficiente que le
permita vivir con dignidad y cubrir para sí y su familia las necesidades básicas
materiales, sociales e intelectuales. Se garantizará el pago de igual salario por igual
trabajo y se fijará la participación que debe corresponder a los trabajadores y
trabajadoras en el beneficio de la empresa. El salario es inembargable y se pagará
periódica y oportunamente en moneda de curso legal, salvo la excepción de la
obligación alimentaría, de conformidad con la ley. El Estado garantizará a los
trabajadores y trabajadoras del sector público y privado un salario mínimo vital que
será ajustado cada año, tomando como una de las referencias el costo de la canasta
básica. La ley establecerá la forma y el procedimiento.
412
Artículo 92. Todos los trabajadores y trabajadoras tienen derecho a prestaciones
sociales que les recompensen la antigüedad en el servicio y los amparen en caso de
cesantía. El salario y las prestaciones sociales son créditos laborales de exigibilidad
inmediata. Toda mora en su pago genera intereses, los cuales constituyen deudas de
valor y gozarán de los mismos privilegios y garantías de la deuda principal.
Artículo 93. La ley garantizará la estabilidad en el trabajo y dispondrá lo conducente
para limitar toda forma de despido no justificado. Los despidos contrarios a esta
Constitución son nulos.
Artículo 94. La ley determinará la responsabilidad que corresponda a la persona
natural o jurídica en cuyo provecho se presta el servicio mediante intermediario o
contratista, sin perjuicio de la responsabilidad solidaria de éstos. El Estado
establecerá, a través del órgano competente, la responsabilidad que corresponda a los
patronos o patronas en general, en caso de simulación o fraude, con el propósito de
desvirtuar, desconocer u obstaculizar la aplicación de la legislación laboral.
Artículo 95. Los trabajadores y las trabajadoras, sin distinción alguna y sin necesidad
de autorización previa, tienen derecho a constituir libremente las organizaciones
sindicales que estimen convenientes para la mejor defensa de sus derechos e
intereses, así como a afiliarse o no a ellas, de conformidad con la ley. Estas
organizaciones no están sujetas a intervención, suspensión o disolución
administrativa. Los trabajadores y trabajadoras están protegidos y protegidas contra
todo acto de discriminación o de injerencia contrario al ejercicio de este derecho. Los
promotores o promotoras y los o las integrantes de las directivas de las
organizaciones sindicales gozarán de inamovilidad laboral durante el tiempo y en las
condiciones que se requieran para el ejercicio de sus funciones.
Para el ejercicio de la democracia sindical, los estatutos y reglamentos de las
organizaciones sindicales establecerán la alternabilidad de los y las integrantes de las
directivas y representantes mediante el sufragio universal, directo y secreto. Los y las
413
integrantes de las directivas y representantes sindicales que abusen de los beneficios
derivados de la libertad sindical para su lucro o interés personal, serán sancionados o
sancionadas de conformidad con la ley. Los y las integrantes de las directivas de las
organizaciones sindicales estarán obligados u obligadas a hacer declaración jurada de
bienes.
Artículo 96. Todos los trabajadores y las trabajadoras del sector público y del privado
tienen derecho a la negociación colectiva voluntaria y a celebrar convenciones
colectivas de trabajo, sin más requisitos que los que establezca la ley. El Estado
garantizará su desarrollo y establecerá lo conducente para favorecer las relaciones
colectivas y la solución de los conflictos laborales. Las convenciones colectivas
ampararán a todos los trabajadores y trabajadoras activos y activas al momento de su
suscripción y a quienes ingresen con posterioridad.
Artículo 97. Todos los trabajadores y trabajadoras del sector público y del sector
privado tienen derecho a la huelga, dentro de las condiciones que establezca la ley.
Capítulo VI
De los derechos culturales y educativos
102. La educación es un derecho humano y un deber social fundamental, es
democrática, gratuita y obligatoria. El Estado la asumirá como función indeclinable y
de máximo interés en todos sus niveles y modalidades, y como instrumento del
conocimiento científico, humanístico y tecnológico al servicio de la sociedad. La
educación es un servicio público y está fundamentada en el respeto a todas las
corrientes del pensamiento, con la finalidad de desarrollar el potencial creativo de
cada ser humano y el pleno ejercicio de su personalidad en una sociedad democrática
basada en la valoración ética del trabajo y en la participación activa, consciente y
solidaria en los procesos de transformación social, consustanciados con los valores de
la identidad nacional y con una visión latinoamericana y universal. El Estado, con la
414
participación de las familias y la sociedad, promoverá el proceso de educación
ciudadana, de acuerdo con los principios contenidos en esta Constitución y en la ley.
Artículo 103. Toda persona tiene derecho a una educación integral de calidad,
permanente, en igualdad de condiciones y oportunidades, sin más limitaciones que las
derivadas de sus aptitudes, vocación y aspiraciones. La educación es obligatoria en
todos sus niveles, desde el maternal hasta el nivel medio diversificado. La impartida
en las instituciones del Estado es gratuita hasta el pregrado universitario. A tal fin, el
Estado realizará una inversión prioritaria, de conformidad con las recomendaciones
de la Organización de las Naciones Unidas. El Estado creará y sostendrá instituciones
y servicios suficientemente dotados para asegurar el acceso, permanencia y
culminación en el sistema educativo. La ley garantizará igual atención a las personas
con necesidades especiales o con discapacidad y a quienes se encuentren privados o
privadas de su libertad o carezcan de condiciones básicas para su incorporación y
permanencia en el sistema educativo.
Las contribuciones de los particulares a proyectos y programas educativos públicos a
nivel medio y universitario serán reconocidas como desgravámenes al impuesto sobre
la renta según la ley respectiva.
Capítulo VII
De los derechos económicos
Artículo 112. Todas las personas pueden dedicarse libremente a la actividad
económica de su preferencia, sin más limitaciones que las previstas en esta
Constitución y las que establezcan las leyes, por razones de desarrollo humano,
seguridad, sanidad, protección del ambiente u otras de interés social. El Estado
promoverá la iniciativa privada, garantizando la creación y justa distribución de la
riqueza, así como la producción de bienes y servicios que satisfagan las necesidades
de la población, la libertad de trabajo, empresa, comercio, industria, sin perjuicio de
415
su facultad para dictar medidas para planificar, racionalizar y regular la economía e
impulsar el desarrollo integral del país.
LEY ORGÁNICA PARA LA PROTECCIÓN DEL NIÑO Y DEL ADOLESCENTE(resumen de algunos artículo)
TITULO I
Disposiciones Directivas
Artículo 1°. Objeto. Esta Ley tiene por objeto garantizar a todos los niños y
adolescentes, que se encuentren en el territorio nacional, el ejercicio y el disfrute
pleno y efectivo de sus derechos y garantías, a través de la protección integral que el
Estado, la sociedad y la familia deben brindarles desde el momento de su concepción.
Artículo 2°. Definición de niño y de adolescente. Se entiende por niño toda persona
con menos de doce años de edad. Se entiende por adolescente toda persona con doce
años o más y menos de dieciocho años de edad.
Si existieren dudas acerca de si una persona es niño o adolescente se le presumirá
niño hasta prueba en contrario. Si existieren dudas acerca de sí una persona es
adolescente o mayor de dieciocho años, se le presumirá adolescente, hasta prueba en
contrario.
Artículo 3°. Principio de Igualdad y no Discriminación. Las disposiciones de esta Ley
se aplican por igual a todos los niños y adolescentes, sin discriminación alguna
fundada en motivos de raza, color, sexo, edad, idioma, pensamiento, conciencia,
religión, creencias, cultura, opinión política o de otra índole, posición económica,
origen social, ético o nacional, discapacidad, enfermedad, nacimiento o cualquier otra
condición del niño o adolescente, de sus padres, representantes o responsables, o de
sus familiares.
416
Artículo 4°. Obligaciones Generales del Estado. El Estado tiene la obligación
indeclinable de tomar todas las medidas administrativas, legislativas, judiciales, y de
cualquier otra índole que sean necesarias y apropiadas para asegurar que todos los
niños, niñas y adolescentes disfruten plena y efectivamente de sus derechos y
garantías.
Artículo 5°. Obligaciones Generales de la Familia. La familia es responsable, de
forma prioritaria, inmediata e indeclinable, de asegurar a los niños y adolescentes el
ejercicio y disfrute pleno y efectivo de sus derechos y garantías. El padre y la madre
tienen responsabilidades y obligaciones comunes e iguales en lo que respecta al
cuidado, desarrollo y educación integral de sus hijos.
El Estado debe asegurar políticas, programas y asistencia apropiada para que la
familia pueda asumir adecuadamente esta responsabilidad, y para que los padres y las
madres asuman, en igualdad de condiciones, sus responsabilidades y obligaciones.
Artículo 6°. Participación de la Sociedad. La sociedad debe y tiene derecho de
participar activamente para lograr la vigencia plena y efectiva de los derechos y
garantías de todos los niños y adolescentes.
El Estado debe crear formas para la participación directa y activa de la sociedad en la
definición, ejecución y control de las políticas de protección dirigidas a los niños,
niñas y adolescentes.
Artículo 7°. Prioridad Absoluta. El Estado, la familia y la sociedad deben asegurar,
con Prioridad Absoluta todos los derechos y garantías de los niños y adolescentes. La
prioridad absoluta es imperativa para todos y comprende:
a)Especial preferencia y atención de los niños y adolescentes en la
formulación y ejecución de todas las políticas públicas;
417
b)Asignación privilegiada y preferente, en el presupuesto, de los recursos
públicos para las áreas relacionadas con los derechos y garantías de los
niños y adolescentes y para las políticas y programas de protección
integral al niño y al adolescente;
c)Precedencia de los niños y adolescentes en el acceso y la atención a los
servicios públicos;
d)Primacía de los niños y adolescentes en la protección y socorro en cualquier
circunstancia.
Artículo 8°. Interés Superior del Niño. El Interés Superior del niño es un principio de
interpretación y aplicación de esta Ley, el cual es de obligatorio cumplimiento en la
toma de todas las decisiones concernientes a los niños y adolescentes. Este principio
está dirigido a asegurar el desarrollo integral de los niños y adolescentes, así como el
disfrute pleno y efectivo de sus derechos y garantías.
Parágrafo Primero: Para determinar el interés superior del niño en una situación
concreta se debe apreciar:
a)La opinión de los niños y adolescentes;
b)La necesidad de equilibrio entre los derechos y garantías de los niños y
adolescentes y sus deberes;
c)La necesidad de equilibrio entre las exigencias del bien común y los derechos y
garantías del niño y el adolescente;
d)La necesidad de equilibrio entre los derechos de las demás personas y los
derechos y garantías del niño o adolescente;
e)La condición especifica de los niños y adolescentes como personas en
desarrollo.
418
Parágrafo Segundo: En aplicación del Interés Superior del Niño, cuando exista
conflicto entre los derechos e intereses de los niños y adolescentes frente a otros
derechos e intereses igualmente legítimos, prevalecerán los primeros.
TÍTULO II
DERECHOS, GARANTÍAS Y DEBERES
Capítulo I
Disposiciones Generales
Artículo 10. Niños y Adolescentes Sujetos de Derecho. Todos los niños y
adolescentes son sujetos de derecho; en consecuencia, gozan de todos los derechos y
garantías consagrados a favor de las personas en el ordenamiento jurídico,
especialmente aquellos consagrados en la Convención sobre los Derechos del Niño.
Artículo 11. Derechos y Garantías Inherentes a la Persona Humana. Los derechos y
garantías de los niños y adolescentes consagrados en esta Ley son de carácter
enunciativo. Se les reconoce, por lo tanto, todos los derechos y garantías inherentes a
la persona humana que no figuren expresamente en esta Ley o en el ordenamiento
jurídico.
Artículo 12. Naturaleza de los Derechos y Garantías de los Niños y Adolescentes. Los
derechos y garantías de los niños y adolescentes reconocidos y consagrados en esta
Ley son inherentes a la persona humana, en consecuencias son:
a)De orden público;
b)Intransigibles;
c)Irrenunciables;
d)Interdependientes entre sí;
e)Indivisibles.
419
Artículo 13. Ejercicio Progresivo de los Derechos y Garantías. Se reconoce a todos
los niños y adolescentes el ejercicio personal de sus derechos y garantías, de manera
progresiva y conforme a su capacidad evolutiva. De la misma forma, se le exigirá el
cumplimiento de sus deberes.
Capítulo II
Derechos, Garantías y Deberes
Artículo 15. Derecho a la Vida. Todos los niños y adolescentes tienen derecho a la
vida.
Artículo 16. Derecho a un Nombre y a una Nacionalidad. Todos los niños y
adolescentes tienen derecho a un nombre y a una nacionalidad.
Artículo 17. Derecho a la Identificación. Todos los niños tienen el derecho a ser
identificados, inmediatamente después de su nacimiento.
Artículo 18. Derecho a ser Inscrito en el Registro. Todos los niños y adolescentes
tienen derecho a ser inscritos gratuitamente en el Registro del Estado Civil,
inmediatamente después de su nacimiento, de conformidad con la Ley .
Artículo 19. Declaración del Nacimiento en Instituciones Públicas de Salud. Cuando
el nacimiento ocurriere en hospital, clínica, maternidad u otra institución pública de
salud, la declaración del nacimiento se hará ante la máxima autoridad pública de la
institución respectiva.
Artículo 20. Plazo para la Declaración de Nacimiento. Fuera de los casos previstos en
el artículo 19, la declaración de nacimiento debe hacerse, dentro de los noventa días
siguientes al mismo, ante la primera autoridad civil de la parroquia o municipio..
420
Artículo 21. Expedición Gratuita de la Partida de Nacimiento. La autoridad del estado
civil expedirá gratuitamente la primera copia de la partida de nacimiento, en todos
aquellos casos en que la presentación del niño se realice en el término previsto en el
artículo anterior..
Artículo 25. Derecho a Conocer a sus Padres y a ser Cuidados por Ellos. Todos los
niños y adolescentes, independientemente de cuál fuere su filiación, tienen derecho a
conocer a sus padres y a ser cuidados por ellos, salvo cuando sea contrario a su
interés superior.
Artículo 26. Derecho a ser Criado en una Familia. Todos los niños y adolescentes
tienen derecho a vivir, ser criados y desarrollarse en el seno de su familia de origen.
Artículo 27. Derecho a Mantener Relaciones Personales y Contacto Directo con los
Padres. Todos los niño y adolescentes tienen derecho a mantener, de forma regular y
permanente, relaciones personales y contacto directo con ambos padres, aun cuando
exista separación entre éstos, salvo que ello sea contrario a su interés superior.
Artículo 30. Derecho a un Nivel de Vida Adecuado. Todos los niños y adolescentes
tienen derecho a un nivel de vida adecuado que asegure su desarrollo integral. Este
derecho comprende, entre otros, el disfrute de: a)Alimentación nutritiva y balanceada,
en calidad y cantidad que satisfaga las normas, de la dietética, la higiene y la salud;
b)Vestido apropiado al clima y que proteja la salud; c)Vivienda digna, segura,
higiénica y salubre, con acceso a los servicios públicos esenciales.
Artículo 31. Derecho al Ambiente. Todos los niños y adolescentes tienen derecho a
un ambiente sano y ecológicamente equilibrado, así como a la preservación y disfrute
del paisaje.
Artículo 32. Derecho a la Integridad Personal. Todos los niños y adolescentes tienen
derecho a la integridad personal. Este derecho comprende
421
Artículo 33. Derecho a ser Protegidos contra Abuso y Explotación Sexual. Todos los
niños y adolescentes tienen derecho a ser protegidos contra cualquier forma de abuso
y explotación sexual. El Estado garantizará programas permanentes y gratuitos de
asistencia y atención integral a los niños y adolescentes que hayan sido víctimas de
abuso o explotación sexual.
Artículo 37. Derecho a la Libertad Personal. Todos los niños y adolescentes tienen
derecho a la libertad personal, sin más limites que los establecidos en la Ley. No
pueden ser privados de ella ilegal o arbitrariamente.
Artículo 38. Prohibición de Esclavitud, Servidumbre y Trabajo Forzoso. Ningún niño
o adolescente podrá ser sometido a cualquier forma de esclavitud, servidumbre o
trabajo forzoso. .
Artículo 41. Derecho a la Salud y a Servicios de Salud. Todos los niños y
adolescentes tienen derecho a disfrutar del nivel más alto posible de salud física y
mental. Asimismo, tienen derecho a servicios de salud, de carácter gratuito y de la
más alta calidad, especialmente para la prevención, tratamiento y rehabilitación de las
afecciones a su salud.
Artículo 42. Responsabilidad de los Padres, Representantes o Responsables en
Materia de Salud. Los padres, representantes o responsables son los garantes
inmediatos de la salud de los niños y adolescentes que se encuentren bajo su patria
potestad, representación o responsabilidad. En consecuencia, están obligados a
cumplir las instrucciones y controles médicos que se prescriban con el fin de velar
por la salud de los niños y adolescentes.
Artículo 43. Derecho a Información en Materia de Salud. Todos los niños y
adolescentes tienen derecho a ser informados y educados sobre los principios básicos
de prevención en materia de salud, nutrición, ventajas de la lactancia materna,
422
estimulación temprana en el desarrollo, salud sexual y reproductiva, higiene,
saneamiento sanitario ambiental y accidentes.
Artículo 44. protección de la Maternidad. El Estado debe proteger la maternidad. A
tal efecto, debe garantizar a todas las mujeres servicios y programas de atención,
gratuitos y de la más alta calidad, durante el embarazo, el parto y la fase post natal.
Adicionalmente, debe asegurar programas de atención dirigidos específicamente a la
orientación y protección del vínculo materno-filial de todas las niñas y adolescentes
embarazadas o madres.
Artículo 52. Derecho a la Seguridad Social. Todos los niños y adolescentes tienen
derecho a inscribirse y beneficiarse del Sistema de Seguridad Social.
Artículo 53. Derecho a la Educación. Todos los niños y adolescentes tienen derecho a
la educación. Asimismo, tienen derecho a ser inscritos y recibir educación en una
escuela, plantel o instituto oficial, de carácter gratuito y cercano a su residencia.
Parágrafo Primero: El Estado debe crear y sostener escuelas, planteles e institutos
oficiales de educación, de carácter gratuito, que cuenten con los espacios físicos,
instalaciones y recursos pedagógicos para brindar una educación integral de la más
alta calidad. En consecuencia, debe garantizar un presupuesto suficiente para tal fin.
Parágrafo Segundo: La educación impartida en las escuelas, planteles e institutos
oficiales será gratuita en todos los ciclos, niveles y modalidades, de conformidad con
lo establecido en el ordenamiento jurídico.
Artículo 54. Obligación de los Padres, Representantes o Responsables en Materia de
Educación. Los padres, representantes o responsables tienen la obligación inmediata
de garantizar la educación de los niños y adolescentes. En consecuencia, deben
inscribirlos oportunamente en una escuela, plantel o instituto de educación, de
conformidad con la Ley; así como exigirles su asistencia regular a clases y participar
activamente en su proceso educativo.
423
Artículo 55. Derecho a Participar en el Proceso de Educación. Todos los niños y
adolescentes tienen el derecho a ser informados y a participar activamente en su
proceso educativo. El mismo derecho tienen los padres, representantes o responsables
en relación al proceso educativo de los niños y adolescentes que se encuentren bajo
su patria potestad, representación o responsabilidad.
Artículo 58. Vínculo entre la Educación y el Trabajo. El sistema educativo, nacional
estimulara la vinculación entre el estudio y el trabajo. Para ello, el Estado promoverá
la orientación vocacional de los adolescentes y propiciara la incorporación de
actividades de formación para el trabajo en la programación educativa regular, de
forma tal que armonicen la elección de la profesión u oficio con el sistema de
enseñanza y con las necesidades del desarrollo económico y social del país.
Artículo 59. Educación para Niños y Adolescentes Trabajadores. El Estado debe
garantizar regímenes, planes y programas de educación dirigidos a los niños y
adolescentes trabajadores, los cuales deben adaptarse a sus necesidades específicas,
entre otras, en lo relativo al horario, días de clase, calendario y vacaciones escolares.
El Estado debe asegurar recursos financieros suficientes que permitan cumplir esta
obligación.
Capítulo III
Derecho a la Protección en Materia de Trabajo
Artículo 94. Derecho a la Protección en el Trabajo. Todos los niños y adolescentes
trabajadores tienen derecho a estar protegidos por el Estado, la familia y la sociedad,
en especial contra la explotación económica y el desempeño de cualquier trabajo que
pueda entorpecer su educación, sea peligroso o nocivo para su salud o para su
desarrollo integral.
424
Parágrafo Único: El Estado, a través del ministerio del ramo, dará prioridad a la
inspección del cumplimiento de las normas relativas a la edad mínima, las
autorizaciones para trabajar y la supervisión del trabajo de los adolescentes.
Artículo 95. Armonía Entre Trabajo y Educación. El trabajo de los adolescentes debe
armonizar con el disfrute efectivo de su derecho a la educación.
El Estado, la familia, la sociedad y los patrones deben velar para que los adolescentes
trabajadores completen la educación obligatoria y tengan acceso efectivo a la
continuidad de su educación.
Artículo 96. Edad Mínima. Se fija en todo territorio de la República la edad de
catorce (14) años como edad mínima para el trabajo. EI Poder Ejecutivo Nacional
podrá fijar mediante decreto, edades mínimas por encima del limite señalado, para
trabajos peligrosos o nocivos.
Parágrafo Primero: Las personas que hayan alcanzado la edad mínima y tengan
menos de dieciocho años de edad, no podrán ejercer ningún tipo de trabajo que esté
expresamente prohibido por la Ley.
Parágrafo Segundo: En los casos de infracción a la edad mínima para trabajar, los
niños y adolescentes disfrutaran de todos los derechos beneficios y remuneraciones
que les corresponden, con ocasión de la relación de trabajo.
Parágrafo Tercero: El Consejo de protección podrá autorizar, en determinadas
circunstancias debidamente justificadas, el trabajo de adolescentes por debajo de la
edad mínima, siempre que la actividad a realizar no menoscabe su derecho a la
educación, sea peligrosa o nociva para su salud o desarrollo integral o se encuentre
expresamente prohibida por Ley.
Parágrafo Cuarto: En todos los casos, antes de conceder autorización, el adolescente
deberá someterse a un examen médico integral, que acredite su salud y su capacidad
425
física y mental para el desempeño de las labores que deberá realizar. Asimismo, debe
oírse la opinión del adolescente y, cuando sea posible, la de sus padres, representantes
o responsables.
Artículo 97. Niños Trabajadores. Los niños trabajadores serán amparados mediante
medidas de protección En ningún caso estas medidas pueden implicar perjuicios
adicionales de los derivados del trabajo y deben garantizar al niño trabajador su
sustento diario.
Artículo 98. Registro de Trabajadores. Para trabajar, todos los adolescentes
deben inscribirse en el Registro de Adolescentes Trabajadores, que llevará, a tal
efecto, el Consejo de protección
Parágrafo Primero: Este Registro contendrá:
a)Nombre del adolescentes;
b)Fecha de nacimiento;
c)Lugar de habitación;
d)Nombre de sus padres, representantes o responsables;
e)Escuela, grado de escolaridad y horario escolar del adolescente;
f)Lugar, tipo y horario de trabajo;
g)Fecha de ingreso;
h)Indicación del patrono, si es el caso;
i)Autorización, si fuere el caso;
j)Fecha de ingreso al trabajo;
k)Examen médico;
426
Artículo 99. Credencial de Trabajador. La inscripción en el Registro de Adolescentes
Trabajadores de derecho a una credencial que identifique al adolescente como
trabajador, con vigencia de un año y el cual contendrá:
a)Nombre del adolescente,
b)Foto del adolescente;
c)Fecha de nacimiento;
d)Lugar de habitación;
e)Escuela, grado de escolaridad y horario escolar;
f)Nombre de sus padres, representantes o responsables;
g)Lugar, tipo y horario de trabajo;
h)Fecha de ingreso al trabajo;
i)Fecha de vencimiento de la credencial.
Artículo 100. Capacidad Laboral. Se reconoce a los adolescentes, a partir de los
catorce años de edad, el derecho a celebrar válidamente actos, contratos y convenios
colectivas relacionados con su actividad laboral y económica; así como, para ejercer
las respectivas acciones para la defensa de sus derechos e intereses, inclusive, el
derecho de huelga, ante las autoridades administrativas y judiciales competentes.
Artículo 101. Derecho a la Sindicalización. Los adolescentes gozan de libertad
sindical y tienen derecho a constituir libremente las organizaciones sindicales que
estimen convenientes, así como, de afiliarse a ellas, de conformidad con la Ley y con
los límites derivados del ejercicio de las facultades legales que corresponden a sus
padres, representantes o responsables.
427
Artículo 102. Jornada de Trabajo. La jornada de trabajo de los adolescentes no podrá
exceder de seis horas diarias y deberá dividirse en dos periodos, ninguno de los cuales
será mayor de cuatro horas. Entre esos dos periodos, los adolescentes disfrutarán de
un descanso de una hora. El trabajo semanal no podrá exceder de treinta horas.
Se prohíbe el trabajo del adolescente en horas extraordinarias.
Artículo 103. Derecho de Huelga. Los adolescentes tienen derecho de huelga, el cual
ejercerán de conformidad con la Ley y con los límites derivados del ejercicio de las
facultades legales que corresponden a sus padres, representantes o responsables.
Artículo 104. Derecho de Vacaciones. Los adolescentes trabajadores tienen derecho a
disfrutar de un periodo de veintidós días hábiles de vacaciones remuneradas.
Todos los adolescentes trabajadores deberán disfrutar, efectivamente, del período de
vacaciones. En consecuencia, el disfrute de las mismas debe realizarse en la
oportunidad que corresponda y se prohíbe posponer su disfrute o su acumulación.
Artículo 105. Examen Médico Anual. Los adolescentes trabajadores deben someterse
a un examen medico integral cada año, con el objeto de identificar los posibles
efectos del trabajo sobre su salud.
Parágrafo Primero: El patrono debe velar porque el adolescente se someta a este
examen oportunamente y, a tal efecto, debe concederle las facilidades necesarias. El
patrono está en la obligación de denunciar, ante los Consejos de protección. Los casos
en que los adolescentes trabajadores a su servicio no puedan someterse a estos
exámenes, por causas injustificadas imputables a los servicios o centros de salud.
Parágrafo Segundo: Los adolescentes trabajadores, no dependientes deben someterse
a un examen medico integral anual, en servicio o centro de salud público, de forma
totalmente gratuita.
428
Artículo 106. Presunción de Relación de Trabajo. Se presume, hasta prueba en
contrario, la existencia de una relación de trabajo entre el adolescente y quien se
beneficie directamente de su trabajo o servicios.
Artículo 107. Forma de los Contratos de Trabajo. Los contratos de trabajo de los
adolescentes se harán por escrito sin perjuicio de que pueda demostrarse su existencia
mediante otras pruebas. Cuando esté probada la relación de trabajo y no exista
contrato escrito, se presume ciertas todas las afirmaciones realizadas por los
adolescentes, sobre el contenido del mismo, hasta prueba en contrario.
Artículo 110. Seguridad Social .El adolescente trabajador tiene derecho a ser inscrito
obligatoriamente en el Sistema de Seguridad Social y gozará de todos los beneficios,
prestaciones económicas y servicios de salud que brinda el sistema, en las mismas
condiciones previstas para los mayores de dieciocho años de edad, de conformidad
con la legislación especial en la materia.
Artículo 111. Inscripción en el Sistema de Seguridad Social. El adolescente
trabajador podrá inscribirse, por sí mismo, en el Sistema de Seguridad Social.
Artículo 113. Trabajo Doméstico. Los adolescentes trabajadores que presten servicios
en labores domésticas deben disfrutar de un descanso no menor de dos horas, durante
su jornada de trabajo, sin menoscabo del período de descanso continuo previsto en la
legislación del trabajo.
429
ANEXO B
COLOMBIA:
Nombre Oficial: República de Colombia. Capital: Bogotá.
Nacionalidad: Colombiana. Idiomas: Español (oficial).
Día de Fiesta Nacional: 20 de julio (Día de la Independencia)
Situación Geográfica: Noroeste de América del Sur. Área: 1.141.748 Km2.
Características: Cordillera de los Andes (Norte y Sur), Cuenca del Orinoco con
extensos llanos (Este), selva virgen (Sur). Clima: variado, tierras cálidas (24o C a
30o C), tierras templadas (17o C a 24o C), tierras frías (7o C o menos).
Ciudades principales y habitantes: Bogotá (6.004.782), Cali (1.985.906), Medellín
(1.970.691), Barranquilla (1.157.826). (1997).
Demografía:
Población: 44.531.434 (2003)
Densidad: (habitantes por Km2): 37 (2003)
Población Urbana: 74% (2000)
Crecimiento demográfico (tasa media): 1,5% (2000 – 2015)
Fecundidad: (número de hijos por mujer): 2,62 (2000 – 2005).
Esperanza de vida en años: 69,2 (hombres) 75,3 (mujeres) (2000)
Mortalidad infantil: 26 por 1.000 nacimientos (2000)
Índice de desarrollo humano: (entre 0 y 1): 0,772 (2000)
Educación: pública y privada.
Analfabetismo: (adultos): 8% (2000)
Matriculación en primaria, secundaria y terciaria combinada: 73% (1999)
Gasto público en Educación: (% PNB): 4,1 (1995 – 1997)
Salud:
Gasto público en Salud: (% del PIB): 5,2 (1998)
430
Constitución y Gobierno
Sistema de Gobierno: República presidencialista.
División Administrativa: 32 departamentos y el Distrito Capital de Bogotá.
Régimen partidario: pluripartidismo.
Poder ejecutivo: Jefe de Estado y de gobierno.
Poder legislativo: Bicameral, Cámara de senado y de representantes.
Constitución vigente: 1991.
Economía: peso colombiano, tasa de cambio 2.650 por US$ (2002).
PIB (US$): 88.910 millones (2003)
PIB por sectores: agropecuario (14%), industria (25%), servicios (61%) (1998).
Crecimiento anual del PIB: 1,0% (2002)
Deuda externa (US$): 40.000 millones (2002)
Reservas internacionales (US$): 10.200 millones (2003)
Tasa de inflación: 8% (2003)
Fuerza de trabajo: 17 millones (1998). Desempleo: 16% (2002).
Principales productos agrícolas: café, cacao, caña de azúcar, banano, tabaco, arroz,
yuca, papa.
Ganadería: equinos, bovinos, porcinos, aves.
Minería: petróleo, gas natural, carbón, níquel, oro, esmeralda.
Principales industrias: alimentación, química, bebida, textil, equipos de transporte.
Exportaciones (US$): 14 millones (2003)
Importaciones (US$): 14 millones (2003).
Principales vínculos comerciales: Estados Unidos, Venezuela, Alemania, Ecuador,
Perú, México, Japón, países miembros de la Unión Europea.
Medio ambiente: consumo de energía per cápita: 753 Kg de petróleo (1998)
Deforestación anual: 0,5% (1990 - 1995).
Emisiones de CO2: 64,1 millones de tm (1998).
431
CONSTITUCIÓN POLÍTICA DE COLOMBIA
PREAMBULO
El pueblo de Colombia
en ejercicio de su poder soberano, representado por sus delegatarios a la Asamblea
Nacional Constituyente, invocando la protección de Dios, y con el fin de fortalecer la
unidad de la Nación y asegurar a sus integrantes la vida, la convivencia, el trabajo, la
justicia, la igualdad, el conocimiento, la libertad y la paz, dentro de un marco jurídico,
democrático y participativo que garantice un orden político, económico y social justo,
y comprometido a impulsar la integración de la comunidad latinoamericana, decreta,
sanciona y promulga la siguiente:
CONSTITUCIÓN POLÍTICA DE COLOMBIA
TITULO I. DE LOS PRINCIPIOS FUNDAMENTALES
ARTICULO 1. Colombia es un Estado social de derecho, organizado en forma de
República unitaria, descentralizada, con autonomía de sus entidades territoriales,
democrática, participativa y pluralista, fundada en el respeto de la dignidad humana,
en el trabajo y la solidaridad de las personas que la integran y en la prevalencia del
interés general.
ARTICULO 2. Son fines esenciales del Estado: servir a la comunidad, promover la
prosperidad general y garantizar la efectividad de los principios, derechos y deberes
consagrados en la Constitución; facilitar la participación de todos en las decisiones
que los afectan y en la vida económica, política, administrativa y cultural de la
Nación; defender la independencia nacional, mantener la integridad territorial y
asegurar la convivencia pacífica y la vigencia de un orden justo.
432
Las autoridades de la República están instituidas para proteger a todas las personas
residentes en Colombia, en su vida, honra, bienes, creencias, y demás derechos y
libertades, y para asegurar el cumplimiento de los deberes sociales del Estado y de los
particulares.
ARTICULO 3. La soberanía reside exclusivamente en el pueblo, del cual emana el
poder público. El pueblo la ejerce en forma directa o por medio de sus representantes,
en los términos que la Constitución establece.
ARTICULO 4. La Constitución es norma de normas. En todo caso de
incompatibilidad entre la Constitución y la ley u otra norma jurídica, se aplicarán las
disposiciones constitucionales.
Es deber de los nacionales y de los extranjeros en Colombia acatar la Constitución y
las leyes, y respetar y obedecer a las autoridades.
ARTICULO 5. El Estado reconoce, sin discriminación alguna, la primacía de los
derechos inalienables de la persona y ampara a la familia como institución básica de
la sociedad.
ARTICULO 6. Los particulares sólo son responsables ante las autoridades por
infringir la Constitución y las leyes. Los servidores públicos lo son por la misma
causa y por omisión o extralimitación en el ejercicio de sus funciones.
ARTICULO 7. El Estado reconoce y protege la diversidad étnica y cultural de la
Nación colombiana.
ARTICULO 8. Es obligación del Estado y de las personas proteger las riquezas
culturales y naturales de la Nación.
433
TITULO II DE LOS DERECHOS, LAS GARANTIAS Y LOS DEBERES
CAPITULO I DE LOS DERECHOS FUNDAMENTALES
ARTICULO 25. El trabajo es un derecho y una obligación social y goza, en todas sus
modalidades, de la especial protección del Estado. Toda persona tiene derecho a un
trabajo en condiciones dignas y justas.
ARTICULO 26. Toda persona es libre de escoger profesión u oficio. La ley podrá
exigir títulos de idoneidad. Las autoridades competentes inspeccionarán y vigilarán el
ejercicio de las profesiones. Las ocupaciones, artes y oficios que no exijan formación
académica son de libre ejercicio, salvo aquellas que impliquen un riesgo social. Las
profesiones legalmente reconocidas pueden organizarse en colegios. La estructura
interna y el funcionamiento de éstos deberán ser democráticos. La ley podrá
asignarles funciones públicas y establecer los debidos controles.
ARTICULO 27. El Estado garantiza las libertades de enseñanza, aprendizaje,
investigación y cátedra.
ARTICULO 39. Los trabajadores y empleadores tienen derecho a constituir
sindicatos o asociaciones, sin intervención del Estado. Su reconocimiento jurídico se
producirá con la simple inscripción del acta de constitución. La estructura interna y el
funcionamiento de los sindicatos y organizaciones sociales y gremiales se sujetarán al
orden legal y a los principios democráticos.
CAPITULO II
DE LOS DERECHOS SOCIALES, ECONOMICOS Y CULTURALES
434
ARTICULO 42. La familia es el núcleo fundamental de la sociedad. Se constituye
por vínculos naturales o jurídicos, por la decisión libre de un hombre y una mujer de
contraer matrimonio o por la voluntad responsable de conformarla.
El Estado y la sociedad garantizan la protección integral de la familia. La ley podrá
determinar el patrimonio familiar inalienable e inembargable. La honra, la dignidad y
la intimidad de la familia son inviolables.
Las relaciones familiares se basan en la igualdad de derechos y deberes de la pareja y
en el respeto recíproco entre todos sus integrantes. Cualquier forma de violencia en la
familia se considera destructiva de su armonía y unidad, y será sancionada conforme
a la ley.
Los hijos habidos en el matrimonio o fuera de él, adoptados o procreados
naturalmente o con asistencia científica, tienen iguales derechos y deberes. La ley
reglamentará la progenitura responsable.
ARTICULO 43. La mujer y el hombre tienen iguales derechos y oportunidades. La
mujer no podrá ser sometida a ninguna clase de discriminación. Durante el embarazo
y después del parto gozará de especial asistencia y protección del Estado, y recibirá
de éste subsidio alimentario si entonces estuviere desempleada o desamparada. El
Estado apoyará de manera especial a la mujer cabeza de familia.
ARTICULO 44. Son derechos fundamentales de los niños : la vida, la integridad
física, la salud y la seguridad social, la alimentación equilibrada, su nombre y
nacionalidad, tener una familia y no ser separados de ella, el cuidado y amor, la
educación y la cultura, la recreación y la libre expresión de su opinión. Serán
protegidos contra toda forma de abandono, violencia física o moral, secuestro, venta,
abuso sexual, explotación laboral o económica y trabajos riesgosos. Gozarán también
de los demás derechos consagrados en la Constitución, en las leyes y en los tratados
internacionales ratificados por Colombia.
435
La familia, la sociedad y el Estado tienen la obligación de asistir y proteger al niño
para garantizar su desarrollo armónico e integral y el ejercicio pleno de sus derechos.
Cualquier persona puede exigir de la autoridad competente su cumplimiento y la
sanción de los infractores. Los derechos de los niños prevalecen sobre los derechos
de los demás.
ARTICULO 45. El adolescente tiene derecho a la protección y a la formación
integral.
El Estado y la sociedad garantizan la participación activa de los jóvenes en los
organismos públicos y privados que tengan a cargo la protección, educación y
progreso de la juventud.
ARTICULO 46. El Estado, la sociedad y la familia concurrirán para la protección y la
asistencia de las personas de la tercera edad y promoverán su integración a la vida
activa y comunitaria. El Estado les garantizará los servicios de la seguridad social
integral y el subsidio alimentario en caso de indigencia.
ARTICULO 47. El Estado adelantará una política de previsión, rehabilitación e
integración social para los disminuidos físicos, sensoriales y psíquicos, a quienes se
prestará la atención especializada que requieran.
ARTICULO 49. La atención de la salud y el saneamiento ambiental son servicios
públicos a cargo del Estado. Se garantiza a todas las personas el acceso a los servicios
de promoción, protección y recuperación de la salud.
Corresponde al Estado organizar, dirigir y reglamentar la prestación de servicios de
salud a los habitantes y de saneamiento ambiental conforme a los principios de
eficiencia, universalidad y solidaridad. También, establecer las políticas para la
prestación de servicios de salud por entidades privadas, y ejercer su vigilancia y
control. Así mismo, establecer las competencias de la Nación, las entidades
436
territoriales y los particulares, y determinar los aportes a su cargo en los términos y
condiciones señalados en la ley.
Los servicios de salud se organizarán en forma descentralizada, por niveles de
atención y con participación de la comunidad.
La ley señalará los términos en los cuales la atención básica para todos los habitantes
será gratuita y obligatoria.
Toda persona tiene el deber de procurar el cuidado integral de su salud y la de su
comunidad.
CÓDIGO DEL MENOR DE COLOMBIA( 1994 ) materia laboral
TITULO NOVENO
Del menor Trabajador en Condiciones no Autorizadas por la Ley Capítulo Primero
Generalidades
Artículo 237.- Se entiende por menor trabajador en condiciones no autorizadas por la
ley, al menor de doce (12) años en cualquier caso de ocupación laboral y a quien,
siendo mayor de esta edad pero menor de dieciocho (18) años, fuera de las
excepciones contempladas en este Título, desempeñe actividades laborales
expresamente prohibidas por la ley.
Artículo 238.- Los menores de dieciocho (18) años necesitan para trabajar
autorización de escrita del Inspector del Trabajo, en su defecto, de la primera
autoridad local, a solicitud de los padres y, a falta de éstos, del Defensor de Familia.
Prohíbase el trabajo de los menores de catorce (14) años y es obligación de sus padres
disponer que acudan a los centros de enseñanza. Excepcionalmente y en atención a
circunstancias especiales calificadas por el Defensor de Familia, los mayores de
437
doce(12) años podrán ser autorizados para trabajar por las autoridades señaladas en
este artículo, con las limitaciones previstas en el presente Código.
Artículo 239.- La contratación de menores indígenas, se rige por las normas de su
legislación especial y a falta de ellas por las que sean pertinentes del Código
Sustantivo del Trabajo y por las consagradas en este Código.
Parágrafo.- Para contratar a un menor indígena se necesita la autorización del
Gobernador del Cabildo Indígena, o dela autoridad tradicional de la comunidad
respectiva. En su defecto, la autorización será otorgada por el Ministerio de Trabajo y
Seguridad Social, previa solicitud de la Oficina de la Comisión de Asuntos Indígenas
del Ministerio de Gobierno. Si en lugar de la contratación no existe oficina del
Ministerio de Trabajo y Seguridad Social ni autoridad indígena, la autorización la
otorgará la Oficina de la Comisión de Asuntos Indígenas, la cual deberá informar a la
dependencia del Ministerio de Trabajo y Seguridad Social más cercana, para lo de su
competencia.
Artículo 240.- Si durante las diligencias previas a la autorización para trabajar o en
desarrollo de su labor de vigilancia, los funcionarios competentes del Trabajo, los
Jueces de Menores o de Familia establecen que el menor se encuentra en situación de
peligro o de abandono ,lo reportarán de inmediato al Defensor de Familia con el
objeto de que se tomen las medidas de protección pertinentes.
Artículo 241.- El menor deberá demostrar su edad, mediante la presentación del
registro civil de nacimiento o de la tarjeta de identidad.
Parágrafo.- Cuando el menor carezca de registro civil, el Defensor de Familia, a
petición de aquél, deberá solicitar su inscripción en la notaría u oficio de registro
respectiva, para lo cual llenará los requisitos de ley. El funcionario competente para
expedir el registro deberá atender de inmediato la solicitud del Defensor de Familia
expidiéndolo en forma gratuita.
438
Capítulo Segundo
Jornada de Trabajo y Salario
Artículo 242.- La duración máxima de la jornada de trabajo del menor se sujetará a
las siguientes reglas:
1. El menor entre doce (12) y catorce (14) años sólo podrá trabajar
jornada máxima de cuatro (4) horas diarias, en trabajos ligero.
2. Los mayores de catorce (14) y menores de dieciséis (16) años sólo
podrán trabajar en una jornada máxima de seis(6) horas diarias.
3. La jornada de trabajo del menor entre dieciséis (16) y dieciocho(18)
años no podrá exceder de ocho (8) horas diarias.
4. Queda prohibido el trabajo nocturno para los trabajadores menores. No
obstante, los mayores de dieciséis (16) años y menores de dieciocho (18) años
podrán ser autorizados para trabajar hasta las ocho (8) de la noche siempre
que no se afecte su asistencia regulara un centro docente, ni implique perjuicio
para su salud física o moral.
Artículo 243.- El menor trabajador tendrá derecho al salario, prestaciones sociales y
demás garantías que la ley concede a los trabajadores mayores de dieciocho (18)
años. El salario del menor trabajador será proporcional a las horas trabajadas.
Artículo 244.- El menor trabajador tendrá derecho a la capacitación y se le otorgará permiso no remunerado cuando la actividad escolar así lo requiera.
Capítulo Tercero
Trabajos Prohibidos
Artículo 245.- Los menores no podrán ser empleados en los trabajos que a continuación se enumeran, por cuanto suponen exposición severa a riesgos para su salud o integridad física:
439
a. Trabajos que tengan que ver con sustancias tóxicas o nocivas para la
salud.
b. Trabajos a temperaturas anormales o en ambientes contaminados o
con insuficiente ventilación.
c. Trabajos subterráneos de minería de toda índole y en los que
confluyen agentes nocivos, tales como contaminantes, desequilibrios
térmicos, deficiencia de oxígeno a consecuencia de la oxidación la
gasificación.
d. Trabajos donde e menor de edad esté expuesto a ruidos que
sobrepasen ochenta (80) decibeles.
e. Trabajos donde se tenga que manipular con sustancias radioactivas,
pinturas luminiscentes, rayos X, o que impliquen exposición a
radiaciones ultravioletas, infrarrojas y emisiones de radio frecuencia.
f. Todo tipo de labores que impliquen exposición a corrientes eléctricas
de alto voltaje.
g. Trabajos submarinos.
h. Trabajos en basureros o en cualquier otro tipo de actividades donde
se generen agentes biológicos patógenos.
i. Actividades que impliquen manejo de sustancias explosivas,
inflamables o caústicas.
j. Trabajo de pañoleros o fogoneros, en los buques de transporte
marítimo.
440
k. Trabajos de pintura industrial que entrañen el empleo de la cerusa,
del sulfato de plomo o de cualquier otro producto que contengan
dichos elementos.
l. Trabajos en máquinas esmeriladoras, afilado de herramientas, en
muelas abrasivas de alta velocidad y en ocupaciones similares.
m. Trabajos en altos hornos, hornos de fundición de metales,
fábricas de acero, talleres de laminación, trabajos de forja, y en
prensa pesada de metales.
n. Trabajos y operaciones que involucren la manipulación de cargas
pesadas.
o. Trabajos relacionados con cambios de correas de transmisión, aceite,
engrasados y otros trabajos próximos a transmisiones pesadas o de
alta velocidad.
p. Trabajos en cizalladoras, cortadoras, laminadoras, tornos, fresadoras
,troqueladoras, y otras máquinas particularmente peligrosas.
q. Trabajo del vidrio y alfarería, trituración y mezclado de materia
prima; trabajo de hornos, pulido y esmerilado en seco de vidriería
,operaciones de limpieza por chorro de arena, trabajo en locales de
vidriado y grabado, trabajos en la industria de la cerámica.
r. Trabajo de soldadura de gas y arco, corte con oxígeno en tanques o
lugares confinados, en andamios o en molduras precalentadas.
s. Trabajos en fábricas de ladrillos, tubos y similares, moldeado de
ladrillos a mano, trabajo en las prensas y hornos de ladrillos.
441
t. Trabajo en aquellas operaciones y /o procesos en donde se presenten
altas temperaturas y humedad.
u. Trabajos en la industria metalúrgica de hierro y demás metales, en las
operaciones y/ o procesos donde se desprende vapores o polvos
tóxicos y en plantas de cemento.
v. Actividades agrícolas o agroindustriales que impliquen alto riesgo
para la salud.
w. Las demás que señalen en forma específica los reglamentos del
Ministerio de Trabajo y Seguridad Social. dos.
Artículo 246.- Queda prohibido a los trabajadores menores de dieciocho (18)
años todo trabajo que afecte su moralidad. En especial les está prohibido el
trabajo en casas de lenocinio y demás lugares de diversión donde se consuman
bebidas alcohólicas. De igual modo se prohíbe su contratación para la
reproducción de escenas pornográficas, muertes violentas, apología del delito
u otros semejantes.
Capítulo Cuarto
Trabajador Independiente
Artículo 248.- Se entiende por trabajo independiente de menores el que ellos realicen
sin que medie relación de dependencia o subordinación. Para desempeñar un trabajo
independiente el menor requerirá autorización en los términos del artículo 238.
Las prohibiciones establecidas para el desempeño de las actividades remuneradas en
los artículos anteriores, se aplican también al trabajo independiente. Los Inspectores
de Trabajo conocerán delas infracciones a estas normas, sin perjuicio de la facultad de
los Defensores de Familia para asumir la protección de estos menores cuando se
configuren situaciones irregulares de conformidad con el presente Código.
442
Artículo 249.- El menor trabajador independiente podrá obtener su afiliación al
Instituto de Seguros Sociales, de acuerdo con el régimen establecido para el
trabajador independiente mayor de edad.
Capítulo Quinto
Trabajo Asociado
Artículo 250.- El Gobierno Nacional protegerá, fomentará y estimulará el trabajo
asociado en que participen menores de dieciocho(18) años y mayores de doce (12) en
condiciones de socios y no de dependientes. Para todos los efectos legales, se
entiende por trabajo asociado el que realiza toda organización cuyo objeto social
estatutario o fáctico, lo constituya la producción, transformación, distribución o venta
de bienes o la prestación de servicios con fines económicos solidarios, en la que todos
los socios integrantes aportan su trabajo.
Artículo 251.- Los menores de dieciocho (18) años y mayor de dieciséis (16) años, se
tendrán por emancipados y plenamente capaces para los efectos de dirigir y
administrar empresas asociativas y cooperativas, obtener personería jurídica y ejercer
su representación legal.
Capítulo Sexto
Seguridad Social
Artículo 252.- En ningún caso la seguridad social y las demás garantías otorgadas a
los trabajadores mayores de dieciocho(18) años, podrán ser disminuidas cuando se
trate de trabajadores menores de edad.
Artículo 253.- Todo empleador que tenga a su servicio menores de dieciocho (18)
años, tiene la obligación de afiliarlos al Instituto de Seguros Sociales o a la entidad de
previsión respectiva ,a partir de la fecha en que se establezca el contrato de trabajo o
la relación laboral.
443
Artículo 254.- Para la afiliación al Instituto de Seguros Sociales del menor trabajador,
bastará la presentación de su documento de identificación y, en su defecto, de copia
del registro civil de nacimiento. Una vez realizada la afiliación, el Instituto de
Seguros Sociales deberá expedir al menor un carné, con el cual se identificará a fin
de recibir los servicios de que trata el presente título.
Artículo 255.- Efectuada la afiliación, el menor tendrá derecho a todas las
prestaciones económicas y de salud que otorga el Instituto de Seguros Sociales o la
entidad de previsión respectiva, de conformidad con lo contemplado en sus
reglamentos.
Artículo 256.- Cuando por omisión del empleador, el trabajador menor de dieciocho
(18) años de edad no se encuentre afiliado al Instituto de Seguros Sociales o la
entidad de previsión respectiva y el menor sufriere accidente de trabajo, enfermedad
profesional, enfermedad general o se encontrase en período de maternidad, tendrá
derecho, desde le momento de su vinculación con el patrono, a las prestaciones
económicas y de salud que consagran los reglamentos en favor de los beneficios y de
los derechos habientes.
Parágrafo 1.- Las prestaciones de salud de que trata el presente artículo las
suministrará el Instituto de Seguros Sociales en forma inmediata, obligándose el
menor o sus familiares, dentro de las setenta y dos (72) horas siguientes, a demostrar
su vinculación con el patrono a través de cualquier medio idóneo aceptado por el
Instituto de Seguros Sociales. Si esto no es posible para el menor, el Ministerio de
Trabajo y Seguridad Social establecerá dicha vinculación.
Parágrafo 2.- Las prestaciones económicas las pagará el Instituto de Seguros Sociales
una vez el menor haya comprobado su vinculación en la forma prevista en el
parágrafo anterior.
444
Artículo 257.- El Instituto de Seguros Sociales recuperará el costo de los servicios de
que trata el artículo anterior directamente del empleador, para lo cual la cuenta de
cobro que formule contra éste, prestará mérito ejecutivo. Si el menor no tuviere el
vínculo laboral invocado, sus padres o las personas de quienes dependa estarán
obligadas al pago de las sumas de que trata el inciso anterior, sin perjuicio de las
sanciones por falsedad u otras conductas que se configuren.
Artículo 258.- En los lugares del territorio nacional donde el Instituto de Seguros
Sociales no haya extendido sus servicios, los patronos están obligados a otorgar las
prestaciones consagradas en el Código Sustantivo del Trabajo en favor de los
menores. Esta obligación dejará de estar a cargo del patrono cuando las contingencias
sean asumidas por el Instituto de Seguros Sociales.
Artículo 259.- La cotización para los trabajadores menores de catorce (14) años y
mayores de doce (12) años de edad, estará a cargo exclusivo del patrono. Para los
demás se seguirán las normas generales.
Artículo 260.- Además de las prohibiciones contenidas en el artículo 59 del el Código
Sustantivo del Trabajo y de las establecidas en el presente código, no se podrá
despedir a trabajadores menores de edad cuando se encuentren en estado de embarazo
o durante la lactancia, sin autorización de los funcionarios encargados de la vigilancia
y control del trabajo de menores. El despido que se produjere sin esta autorización no
produce efecto alguno. Igualmente se prohíbe a los empleadores de trabajadores
menores de dieciocho (18) años de edad, trasladarlos del lugar de su domicilio, sin el
consentimiento de sus padres o guardadores o, en su defecto, del Defensor de Familia,
salvo temporalmente y solo cuando se trate de participaren programas de
capacitación.
445
Capítulo Séptimo
Vigilancia y Sanciones
Artículo 261.- El Ministerio de Trabajo y Seguridad Social visitará regular y
periódicamente, a través de los funcionarios de inspección y vigilancia, las empresas
para establecer si tienen a su servicio menores trabajadores y si se cumplen las
normas que los protegen.
Artículo 262.- El Ministerio de Trabajo y Seguridad Social impondrá a quienes violen
las disposiciones vigentes sobre el trabajo de menores de edad, multas sucesivas por
el equivalente de uno (1) hasta cuarenta(40) salarios mínimos legales mensuales a
favor del Servicio Nacional de Aprendizaje, -SENA- con destino a los programas de
capacitación dirigidos a menores en situación irregular.
Artículo 263.- La reincidencia será sancionada cada vez con multas no superiores al
doble de la anterior, sin que el monto de cada una exceda de cuarenta (40) salarios
mínimos legales mensuales. Cuando se trate de una empresa que haya puesto en
peligro la vida del menor o atente contra la moral o las buenas costumbres, la sanción
podrá consistir en el cierre temporal o definitivo del establecimiento, a juicio del
Ministerio de Trabajo y Seguridad Social, según la gravedad de la falta.
Capítulo Octavo
Aplicabilidad Normas Laborales
Artículo 264.- Las normas laborales sustantivas y de procedimiento que rigen las
relaciones laborales para adultos, se aplicarán al trabajo del menor en cuanto no sean
señaladas en el presente Código.
446
ANEXO C
ECUADOR:
Nombre Oficial: República del Ecuador. Capital: Quito
Nacionalidad: ecuatoriana. Idiomas: español (oficial), quechua.
Día de Fiesta Nacional: 10 de agosto (Independencia)
Situación Geográfica: Noroeste de la América del Sur. Área: 283.561 Km2.
Características: dos cadenas de la Cordillera de los Andes (Noroeste y Suroeste);
tierras llanas y bajas (Oste), basta región cubierta de selvas (Este). Clima:
ecuatorial.
Ciudades principales y habitantes: Guayaquil (2.117.553), Quito (1.615.809), Cuenca
(278.035), Machala (216.901), Santo Domingo de los Colorados (211.732). (2001).
Demografía:
Población: 13.710.000 (2003)
Densidad: (habitantes por Km2): 46 (2003)
Población Urbana: 65% (2000)
Crecimiento demográfico (tasa media): 1,5% (2000 – 2015)
Fecundidad: (número de hijos por mujer): 2,76 (2000 – 2005).
Esperanza de vida en años: 68,3 (hombres) 73,5 (mujeres) (2000)
Mortalidad infantil: 41 por 1.000 nacimientos (2000)
Índice de desarrollo humano: (entre 0 y 1): 0,732 (2000)
Educación: pública y privada.
Analfabetismo: (adultos): 8% (2000)
Matriculación en primaria, secundaria y terciaria combinada: 77% (1999)
Gasto público en Educación: (% PNB): 1,7 (1995 – 1997)
Salud:
Gasto público en Salud: (% del PIB): 1,7 (1999)
447
Constitución y Gobierno
Sistema de Gobierno: República presidencialista.
División Administrativa: 21 provincias subdivididas en Cantones y parroquias.
Régimen partidario: pluripartidismo.
Poder Ejecutivo: Jefe de Estado y de gobierno.
Poder legislativo: Unicameral.
Constitución vigente: 1998.
Economía: Moneda dólar de los Estados Unidos
PIB (US$): 22.530 millones (2003)
PIB por sectores: agropecuario (13%), industria (35%), servicios (52%) (1988).
Crecimiento anual del PIB: 3,0% (2003)
Deuda externa (US$): 15.000 millones (2003)
Reservas internacionales (US$): 1.250 millones (2003)
Tasa de inflación: 8% (2003)
Fuerza de trabajo: 5 millones (1998). Desempleo: 10% (2001).
Principales productos agrícolas: banano, café, cacao.
Ganadería: bovinos, ovinos, porcinos, aves.
Minería: petróleo.
Principales industrias: alimentación, refinación de petróleo, química, equipos de
transporte.
Exportaciones (US$): 5 millones (2003)
Importaciones (US$): 5.800 millones (2003).
Principales vínculos comerciales: Estados Unidos, Japón, Colombia, Alemania, Italia,
Corea del Sur.
Medio ambiente: consumo de energía per cápita: 737 Kg de petróleo (1998)
Deforestación anual: 1,6% (1990 - 1995).
Emisiones de CO2: 26,8 millones de tm (1998).
448
CONSTITUCIÓN POLÍTICA DE LA REPÚBLICA DEL ECUADOR
EL PUEBLO DEL ECUADOR
Inspirado en su historia milenaria, en el recuerdo de sus héroes y en el trabajo
de hombres y mujeres que, con su sacrificio, forjaron la patria; fiel a los ideales de
libertad, igualdad, justicia, progreso, solidaridad, equidad y paz que han guiado sus
pasos desde los albores de la vida republicana, proclama su voluntad de consolidar la
unidad de la nación ecuatoriana en el reconocimiento de la diversidad de sus
regiones, pueblos, etnias y culturas, invoca la protección de Dios, y en ejercicio de su
soberanía, establece en esta Constitución las normas fundamentales que amparan los
derechos y libertades, organizan el Estado y las instituciones democráticas e impulsan
el desarrollo económico y social.
TÍTULO I
DE LOS PRINCIPIOS FUNDAMENTALES
Artículo 1.- El Ecuador es un estado social de derecho, soberano, unitario,
independiente, democrático, pluricultural y multiétnico. Su gobierno es republicano,
presidencial, electivo, representativo, responsable, alternativo, participativo y de
administración descentralizada.
La soberanía radica en el pueblo, cuya voluntad es la base de la autoridad, que ejerce
a través de los órganos del poder público y de los medios democráticos previstos en
esta Constitución.
El Estado respeta y estimula el desarrollo de todas las lenguas de los ecuatorianos. El
castellano es el idioma oficial. El quichua, el shuar y los demás idiomas ancestrales
son de uso oficial para los pueblos indígenas, en los términos que fija la ley.
449
La bandera, el escudo y el himno establecidos por la ley, son los símbolos de la patria.
Artículo 2.- El territorio ecuatoriano es inalienable e irreductible. Comprende el de la
Real Audiencia de Quito con las modificaciones introducidas por los tratados válidos,
las islas adyacentes, el Archipiélago de Galápagos, el mar territorial, el subsuelo y el
espacio suprayacente respectivo.
La capital es Quito.
Artículo 3.- Son deberes primordiales del Estado:
1. Fortalecer la unidad nacional en la diversidad.
2. Asegurar la vigencia de los derechos humanos, las libertades fundamentales
de mujeres y hombres, y la seguridad social.
3. Defender el patrimonio natural y cultural del país y proteger el medio
ambiente.
4. Preservar el crecimiento sustentable de la economía, y el desarrollo
equilibrado y equitativo en beneficio colectivo.
5. Erradicar la pobreza y promover el progreso económico, social y cultural de
sus habitantes.
6. Garantizar la vigencia del sistema democrático y la administración pública
libre de corrupción.
Artículo 4.- El Ecuador en sus relaciones con la comunidad internacional:
1. Proclama la paz, la cooperación como sistema de convivencia y la igualdad
jurídica de los estados.
2. Condena el uso o la amenaza de la fuerza como medio de solución de los
conflictos, y desconoce el despojo bélico como fuente de derecho.
450
3. Declara que el derecho internacional es norma de conducta de los estados en
sus relaciones recíprocas y promueve la solución de las controversias por
métodos jurídicos y pacíficos.
4. Propicia el desarrollo de la comunidad internacional, la estabilidad y el
fortalecimiento de sus organismos.
5. Propugna la integración, de manera especial la andina y latinoamericana.
6. Rechaza toda forma de colonialismo, de neocolonialismo, de discriminación o
segregación, reconoce el derecho de los pueblos a su autodeterminación y a
liberarse de los sistemas opresivos.
Artículo 5.- El Ecuador podrá formar asociaciones con uno o más estados para la
promoción y defensa de los intereses nacionales y comunitarios.
TÍTULO III
DE LOS DERECHOS, GARANTÏAS Y DEBERES
Capítulo 1
Principios generales
Artículo 16.- El más alto deber del Estado consiste en respetar y hacer respetar los
derechos humanos que garantiza esta Constitución.
Artículo 17.- El Estado garantizará a todos sus habitantes, sin discriminación alguna,
el libre y eficaz ejercicio y el goce de los derechos humanos establecidos en esta
Constitución y en las declaraciones, pactos, convenios y más instrumentos
internacionales vigentes. Adoptará, mediante planes y programas permanentes y
periódicos, medidas para el efectivo goce de estos derechos.
451
Artículo 18.- Los derechos y garantías determinados en esta Constitución y en los
instrumentos internacionales vigentes, serán directa e inmediatamente aplicables por
y ante cualquier juez, tribunal o autoridad.
En materia de derechos y garantías constitucionales, se estará a la interpretación que
más favorezca su efectiva vigencia. Ninguna autoridad podrá exigir condiciones o
requisitos no establecidos en la Constitución o la ley, para el ejercicio de estos
derechos.
No podrá alegarse falta de ley para justificar la violación o desconocimiento de los
derechos establecidos en esta Constitución, para desechar la acción por esos hechos, o
para negar el reconocimiento de tales derechos. Las leyes no podrán restringir el
ejercicio de los derechos y garantías constitucionales.
Artículo 19.- Los derechos y garantías señalados en esta Constitución y en los
instrumentos internacionales, no excluyen otros que se deriven de la naturaleza de la
persona y que son necesarios para su pleno desenvolvimiento moral y material.
Artículo 20.- Las instituciones del Estado, sus delegatarios y concesionarios, estarán
obligados a indemnizar a los particulares por los perjuicios que les irroguen como
consecuencia de la prestación deficiente de los servicios públicos o de los actos de
sus funcionarios y empleados, en el desempeño de sus cargos.
Las instituciones antes mencionadas tendrán derecho de repetición y harán efectiva la
responsabilidad de los funcionarios o empleados que, por dolo o culpa grave
judicialmente declarada, hayan causado los perjuicios. La responsabilidad penal de
tales funcionarios y empleados, será establecida por los jueces competentes.
Capítulo 2
De los derechos civiles
452
Artículo 23.- Sin perjuicio de los derechos establecidos en esta Constitución y en los
instrumentos internacionales vigentes, el Estado reconocerá y garantizará a las
personas los siguientes:
1. La inviolabilidad de la vida. No hay pena de muerte.
2. La integridad personal. Se prohíben las penas crueles, las torturas; todo
procedimiento inhumano, degradante o que implique violencia física,
psicológica, sexual o coacción moral, y la aplicación y utilización indebida de
material genético humano.
3. El Estado adoptará las medidas necesarias para prevenir, eliminar y sancionar,
en especial, la violencia contra los niños, niñas , adolescentes, las mujeres y
personas de la tercera edad.
4. Las acciones y penas por genocidio, tortura, desaparición forzada de personas,
secuestro y homicidio por razones políticas o de conciencia, serán
imprescriptibles. Estos delitos no serán susceptibles de indulto o amnistía. En
estos casos, la obediencia a órdenes superiores no eximirá de responsabilidad.
5. La igualdad ante la ley. Todas las personas serán consideradas iguales y
gozarán de los mismos derechos, libertades y oportunidades, sin
discriminación en razón de nacimiento, edad, sexo, etnia, color, origen social,
idioma; religión, filiación política, posición económica, orientación sexual;
estado de salud, discapacidad, o diferencia de cualquier otra índole.
6. La libertad. Todas las personas nacen libres. Se prohíbe la esclavitud, la
servidumbre y el tráfico de seres humanos en todas sus formas. Ninguna
persona podrá sufrir prisión por deudas, costas, impuestos, multas ni otras
obligaciones, excepto el caso de pensiones alimenticias. Nadie podrá ser
obligado a hacer algo prohibido o a dejar de hacer algo no prohibido por la
ley.
453
7. El derecho a desarrollar libremente su personalidad, sin más limitaciones que
las impuestas por el orden jurídico y los derechos de los demás.
8. El derecho a vivir en un ambiente sano, ecológicamente equilibrado y libre de
contaminación. La ley establecerá las restricciones al ejercicio de
determinados derechos y libertades, para proteger el medio ambiente.
9. El derecho a disponer de bienes y servicios, públicos y privados, de óptima
calidad; a elegirlos con libertad, así como a recibir información adecuada y
veraz sobre su contenido y características.
10. El derecho a la honra, a la buena reputación y a la intimidad personal y
familiar. La ley protegerá el nombre, la imagen y la voz de la persona.
11. El derecho a la libertad de opinión y de expresión del pensamiento en todas
sus formas, a través de cualquier medio de comunicación, sin perjuicio de las
responsabilidades previstas en la ley. La persona afectada por afirmaciones sin
pruebas o inexactas, o agraviada en su honra por informaciones o
publicaciones no pagadas hechas por la prensa u otros medios de
comunicación social, tendrá derecho a que estos hagan la rectificación
correspondiente en forma obligatoria, inmediata y gratuita, y en el mismo
espacio o tiempo de la información o publicación que se rectifica.
12. El derecho a la comunicación y a fundar medios de comunicación social y a
acceder, en igualdad de condiciones, a frecuencias de radio y televisión.
13. La libertad de conciencia; la libertad de religión, expresada en forma
individual o colectiva, en público o en privado. Las personas practicarán
libremente el culto que profesen, con las únicas limitaciones que la ley
prescriba para proteger y respetar la diversidad, la pluralidad, la seguridad y
los derechos de los demás.
454
14. La inviolabilidad de domicilio. Nadie podrá ingresar en él ni realizar
inspecciones o registros sin la autorización de la persona que lo habita o sin
orden judicial, en los casos y forma que establece la ley.
15. La inviolabilidad y el secreto de la correspondencia. Esta sólo podrá ser
retenida, abierta y examinada en los casos previstos en la ley. Se guardará el
secreto de los asuntos ajenos al hecho que motive su examen. El mismo
principio se observará con respecto a cualquier otro tipo o forma de
comunicación.
16. El derecho a transitar libremente por el territorio nacional y a escoger su
residencia. Los ecuatorianos gozarán de libertad para entrar y salir del
Ecuador. En cuanto a los extranjeros, se estará a lo dispuesto en la ley. La
prohibición de salir del país solo podrá ser ordenada por juez competente, de
acuerdo con la ley.
17. El derecho a dirigir quejas y peticiones a las autoridades, pero en ningún caso
en nombre del pueblo; y a recibir la atención o las respuestas pertinentes, en el
plazo adecuado.
18. La libertad de empresa, con sujeción a la ley.
19. La libertad de trabajo. Ninguna persona podrá ser obligada a realizar un
trabajo gratuito o forzoso.
20. La libertad de contratación, con sujeción a la ley.
21. La libertad de asociación y de reunión, con fines pacíficos.
22. El derecho a una calidad de vida que asegure la salud, alimentación y
nutrición, agua potable, saneamiento ambiental; educación, trabajo, empleo,
recreación, vivienda, vestido y otros servicios sociales necesarios.
455
De los derechos económicos, sociales y culturales
Sección primera
De la propiedad
Artículo 30.- La propiedad, en cualquiera de sus formas y mientras cumpla su función
social, constituye un derecho que el Estado reconocerá y garantizará para la
organización de la economía. Deberá procurar el incremento y la redistribución del
ingreso, y permitir el acceso de la población a los beneficios de la riqueza y el
desarrollo.
Se reconocerá y garantizará la propiedad intelectual, en los términos previstos en la
ley y de conformidad con los convenios y tratados vigentes.
Artículo 31.- El Estado estimulará la propiedad y la gestión de los trabajadores en las
empresas, por medio de la transferencia de acciones o participaciones a favor de
aquellos. El porcentaje de utilidad de las empresas que corresponda a los
trabajadores, será pagado en dinero o en acciones o participaciones, de conformidad
con la ley. Ésta establecerá los resguardos necesarios para que las utilidades
beneficien permanentemente al trabajador y a su familia.
Artículo 32.- Para hacer efectivo el derecho a la vivienda y a la conservación del
medio ambiente, las municipalidades podrán expropiar, reservar y controlar áreas
para el desarrollo futuro, de conformidad con la ley. El Estado estimulará los
programas de vivienda de interés social.
Artículo 33.- Para fines de orden social determinados en la ley, las instituciones del
Estado, mediante el procedimiento y en los plazos que señalen las normas procesales,
podrán expropiar, previa justa valoración, pago e indemnización, los bien es que
pertenezcan al sector privado. Se prohíbe toda confiscación.
456
Artículo 34.- El Estado garantizará la igualdad de derechos y oportunidades de
mujeres y hombres en el acceso a recursos para la producción y en la toma de
decisiones económicas para la administración de la sociedad conyugal y de la
propiedad.
Sección segunda
Del trabajo
Artículo 35.- El trabajo es un derecho y un deber social. Gozará de la protección del
Estado, el que asegurará al trabajador el respeto a su dignidad, una existencia
decorosa y una remuneración justa que cubra sus necesidades y las de su familia.
Artículo 36.- El Estado propiciará la incorporación de las mujeres al trabajo
remunerado, en igualdad de derechos y oportunidades, garantizándole idéntica
remuneración por trabajo de igual valor.
Velará especialmente por el respeto a los derechos laborales y reproductivos para el
mejoramiento de sus condiciones de trabajo y el acceso a los sistemas de seguridad
social, especialmente en el caso de la madre gestante y en período de lactancia, de la
mujer trabajadora, la del sector informal, la del sector artesanal, la jefa de hogar y la
que se encuentre en estado de viudez. Se prohíbe todo tipo de discriminación laboral
contra la mujer.
El trabajo del cónyuge o conviviente en el hogar, será tomado en consideración para
compensarle equitativamente, en situaciones especiales en que aquél se encuentre en
desventaja económica. Se reconocerá como labor productiva, el trabajo doméstico no
remunerado.
457
Sección tercera
De la familia
Artículo 37.- El Estado reconocerá y protegerá a la familia como célula fundamental
de la sociedad y garantizará las condiciones que favorezcan integralmente la
consecución de sus fines. Esta se constituirá por vínculos jurídicos o de hecho y se
basará en la igualdad de derechos y oportunidades de sus integrantes.
Protegerá el matrimonio, la maternidad y el haber familiar. Igualmente apoyará a las
mujeres jefas de hogar. El matrimonio se fundará en el libre consentimiento de los
contrayentes y en la igualdad de derechos, obligaciones y capacidad legal de los
cónyuges.
Artículo 38.- La unión estable y monogámica de un hombre y una mujer, libres de
vínculo matrimonial con otra persona, que formen un hogar de hecho, por el lapso y
bajo las condiciones y circunstancias que señale la ley, generará los mismos derechos
y obligaciones que tienen las familias constituidas mediante matrimonio, inclusive en
lo relativo a la presunción legal de paternidad, y a la sociedad conyugal.
Artículo 39.- Se propugnarán la maternidad y paternidad responsables. El Estado
garantizará el derecho de las personas a decidir sobre el número de hijos que puedan
procrear, adoptar, mantener y educar. Será obligación del Estado informar, educar y
proveer los medios que coadyuven al ejercicio de este derecho.
Se reconocerá el patrimonio familiar inembargable en la cuantía y condiciones que
establezca la ley, y con las limitaciones de ésta. Se garantizarán los derechos de testar
y de heredar.
Artículo 40.- El Estado protegerá a las madres, a los padres y a quienes sean jefes de
familia, en el ejercicio de sus obligaciones. Promoverá la corresponsabilidad paterna
y materna y vigilará el cumplimiento de los deberes y derechos recíprocos entre
458
padres e hijos. Los hijos, sin considerar antecedentes de filiación o adopción, tendrán
los mismos derechos. Al inscribir el nacimiento no se exigirá declaración sobre la
calidad de la filiación, y en el documento de identidad no se hará referencia a ella.
Artículo 41.- El Estado formulará y ejecutará políticas para alcanzar la igualdad de
oportunidades entre mujeres y hombres, a través de un organismo especializado que
funcionará en la forma que determine la ley, incorporará el enfoque de género en plan
es y programas, y brindará asistencia técnica para su obligatoria aplicación en el
sector público.
Sección cuarta
De la salud
Artículo 42.- El Estado garantizará el derecho a la salud, su promoción y protección,
por medio del desarrollo de la seguridad alimentaría, la provisión de agua potable y
saneamiento básico, el fomento de ambientes saludables en lo familiar, laboral y
comunitario, y la posibilidad de acceso permanente e ininterrumpido a servicios de
salud, conforme a los principios de equidad, universalidad, solidaridad, calidad y
eficiencia.
Artículo 43.- Los programas y acciones de salud pública serán gratuitos para todos.
Los servicios públicos de atención médica, lo serán para las personas que los
necesiten. Por ningún motivo se negará la atención de emergencia en los
establecimientos públicos o privados.
El Estado promoverá la cultura por la salud y la vida, con énfasis en la educación
alimentaría y nutricional de madres y niños, niñas , y en la salud sexual y
reproductiva, mediante la participación de la sociedad y la colaboración de los medios
de comunicación social.
Adoptará programas tendientes a eliminar el alcoholismo y otras toxicomanías
459
Artículo 44.- El Estado formulará la política nacional de salud y vigilará su
aplicación; controlará el funcionamiento de las entidades del sector; reconocerá,
respetará y promoverá el desarrollo de las medicinas tradicional y alternativa, cuyo
ejercicio será regulado por la ley, e impulsará el avance científico-tecnológico en el
área de la salud, con sujeción a principios bioéticos.
Sección quinta
Delos grupos vulnerables
Artículo 47.- En el ámbito público y privado recibirán atención prioritaria, preferente
y especializada los niños, niñas y adolescentes, las mujeres embarazadas, las
personas con discapacidad, las que adolecen de enfermedades catastróficas de alta
complejidad y las de la tercera edad. Del mismo modo, se atenderá a las personas en
situación de riesgo y víctimas de violencia doméstica, maltrato infantil, desastres
naturales o antropogénicos.
Artículo 48.- Será obligación del Estado, la sociedad y la familia, promover con
máxima prioridad el desarrollo integral de niños y adolescentes y asegurar el ejercicio
pleno de sus derechos. En todos los casos se aplicará el principio del interés superior
de los niños, niñas , y sus derechos prevalecerán sobre los de los demás.
Artículo 49.- Los niños y adolescentes gozarán de los derechos comunes al ser
humano, además de los específicos de su edad. El Estado les asegurará y garantizará
el derecho a la vida, desde su concepción; a la integridad física y psíquica; a su
identidad, nombre y ciudadanía; a la salud integral y nutrición; a la educación y
cultura, al deporte y recreación; a la seguridad social, a tener una familia y disfrutar
de la convivencia familiar y comunitaria; a la participación social, al respeto su
libertad y dignidad, y a ser consultados en los asuntos que les afecten.
460
El Estado garantizará su libertad de expresión y asociación, el funcionamiento libre
de los consejos estudiantiles y demás formas asociativas, de conformidad con la ley.
Artículo 50.- El Estado adoptará las medidas que aseguren a los niños y adolescentes
las siguientes garantías:
8. Atención prioritaria para los menores de seis años que garantice nutrición,
salud, educación y cuidado diario.
9. Protección especial en el trabajo, y contra la explotación económica en
condiciones laborales peligrosas, que perjudiquen su educación o sean nocivas
para su salud o su desarrollo personal.
10. Atención preferente para su plena integración social, a los que tengan
discapacidad.
11. Protección contra el tráfico de menores, pornografía, prostitución, explotación
sexual, uso de estupefacientes, sustancias psicotrópicas y consumo de bebidas
alcohólicas.
12. Prevención y atención contra el maltrato, negligencia, discriminación y
violencia.
13. Atención prioritaria en casos de desastres y conflictos armados.
14. Protección frente a la influencia de programas o mensajes nocivos que se
difundan a través de cualquier medio, que promuevan la violencia, la
discriminación racial o de género, o la adopción de falsos valores.
Art. 51.- Los menores de dieciocho años estarán sujetos a la legislación de menores y
a una administración de justicia especializada en la Función Judicial. Los niños y
adolescentes tendrán derecho a que se respeten sus garantías constitucionales.
461
Art. 52.- El Estado organizará un sistema nacional descentralizado de protección
integral para la niñez y la adolescencia, encargado de asegurar el ejercicio y garantía
de sus derechos. Su órgano rector de carácter nacional se integrará paritariamente
entre Estado y sociedad civil y será competente para la definición de políticas.
Formarán parte de este sistema las entidades públicas y privadas.
Los gobiernos seccionales formularán políticas locales y destinarán recursos
preferentes para servicios y programas orientados a niños, niñas y adolescentes.
Sección sexta
De la seguridad social
Artículo 55.- La seguridad social será deber del Estado y derecho irrenunciable de
todos sus habitantes. Se prestará con la participación de los sectores público y
privado, de conformidad con la ley.
Artículo56.- Se establece el sistema nacional de seguridad social. La seguridad social
se regirá por los principios de solidaridad, obligatoriedad, universalidad, equidad,
eficiencia, subsidiaridad y suficiencia, para la atención de las necesidades
individuales y colectivas, en procura del bien común.
Sección séptima
De la cultura
Artículo 62.- La cultura es patrimonio del pueblo y constituye elemento esencial de
su identidad. El Estado promoverá y estimulará la cultura, la creación, la formación
artística y la investigación científica. Establecerá políticas permanentes para la
conservación, restauración, protección y respeto del patrimonio cultural tangible e
intangible, de la riqueza artística, histórica, lingüística y arqueológica de la nación,
así como del conjunto de valores y manifestaciones diversas que configuran la
identidad nacional, pluricultural y multiétnica. El Estado fomentará la
462
interculturalidad, inspirará sus políticas e integrará sus instituciones según los
principios de equidad e igualdad de las culturas.
Artículo 63.- El Estado garantizará el ejercicio y participación de las personas, en
igualdad de condiciones y oportunidades, en los bienes, servicios y manifestaciones
de la cultura, y adoptará las medidas para que la sociedad, el sistema educativo, la
empresa privada y los medios de comunicación contribuyan a incentivar la
creatividad y las actividades culturales en sus diversas manifestaciones. Los
intelectuales y artistas participarán, a través de sus organizaciones, en la elaboración
de políticas culturales.
Sección octava
De la educación
Artículo 66.- La educación es derecho irrenunciable de las personas, deber
inexcusable del Estado, la sociedad y la familia; área prioritaria de la inversión
pública, requisito del desarrollo nacional y garantía de la equidad social. Es
responsabilidad del Estado definir y ejecutar políticas que permitan alcanzar estos
propósitos.
La educación, inspirada en principios éticos, pluralistas, democráticos, humanistas y
científicos, promoverá el respeto a los derechos humanos, desarrollará un
pensamiento crítico, fomentará el civismo; proporcionará destrezas para la eficiencia
en el trabajo y la producción; estimulará la creatividad y el pleno desarrollo de la
personalidad y las especiales habilidades de cada persona; impulsará la
interculturalidad, la solidaridad y la paz.
La educación preparará a los ciudadanos para el trabajo y para producir
conocimiento. En todos los niveles del sistema educativo se procurarán a los
estudiantes prácticas extracurriculares que estimulen el ejercicio y la producción de
463
artesanías, oficios e industrias. El Estado garantizará la educación para personas con
discapacidad.
Artículo 67.- La educación pública será laica en todos sus niveles; obligatoria hasta el
nivel básico, y gratuita hasta el bachillerato o su equivalente. En los establecimientos
públicos se proporcionarán, sin costo, servicios de carácter social a quienes los
necesiten. Los estudiantes en situación de extrema pobreza recibirán subsidios
específicos.
CODIGO DE LA NIÑEZ Y DE LA ADOLESCENCIA DE ECUADOR
LIBRO PRIMERO
LOS NIÑOS, NIÑAS Y ADOLESCENTES COMO SUJETOS DE DERECHOS
TÍTULO I
DEFINICIONES
Artículo 1.- Finalidad.- Este Código dispone sobre la protección integral que el
Estado, la sociedad y la familia deben garantizar a todos los niños, niñas y
adolescentes que viven en el Ecuador, con el fin de lograr su desarrollo integral y el
disfrute pleno de sus derechos, en un marco de libertad, dignidad y equidad.
Para este efecto, regula el goce y ejercicio de los derechos, deberes y
responsabilidades de los niños, niñas y adolescentes y los medios para hacerlos
efectivos, garantizarlos y protegerlos, conforme al principio del interés superior de la
niñez y adolescencia y a la doctrina de protección integral.
Artículo 2.- Sujetos protegidos.- Las normas del presente Código son aplicables a
todo ser humano, desde su concepción hasta que cumpla dieciocho años de edad. Por
excepción, protege a personas que han cumplido dicha edad, en los casos
expresamente contemplados en este Código.
464
Artículo 3.- Supletoriedad.- En lo no previsto expresamente por este Código se
aplicarán las demás normas del ordenamiento jurídico interno, que no contradigan los
principios que se reconocen en este Código y sean más favorables para la vigencia de
los derechos de la niñez y adolescencia.
Artículo 4.- Definición de niño, niña y adolescente.- Niño o niña es la persona que no
ha. cumplido doce años de edad. Adolescente es la persona de ambos sexos entre
doce y dieciocho años de edad.
Artículo 5.- Presunción de edad.- Cuando exista duda sobre la edad de una persona,
se presumirá que es niño o niña antes que adolescente; y que es adolescente, antes
que mayor de dieciocho años.
TÍTULO II
PRINCIPIOS FUNDAMENTALES
Artículo 6.- Igualdad y no discriminación.- Todos los niños, niñas y adolescentes son
iguales ante la ley y no serán discriminados por causa de su nacimiento, nacionalidad,
edad, sexo, etnia, color, origen social, idioma, religión, filiación, opinión política,
situación económica, orientación sexual, estado de salud, discapacidad o diversidad
cultural o cualquier otra condición propia o de sus progenitores, representantes o
familiares. El Estado adoptará las medidas necesarias para eliminar toda forma de
discriminación.
Art. 7.- Niños,niñas y adolescentes indígenas y afroecuatorianos.- La ley reconoce y
garantiza el derecho de los niños, niñas y adolescentes de nacionalidades indígenas y
afroecuatorianos, a desarrollarse de acuerdo a su cultura y en un marco de
interculturalidad, conforme a lo dispuesto en la Constitución Política de la República,
siempre que las prácticas culturales no conculquen sus derechos.
465
Artículo 8.- Corresponsabilidad del Estado, la sociedad y la familia.- Es deber del
Estado, la sociedad y la familia, dentro de sus respectivos ámbitos, adoptar las
medidas políticas, administrativas, económicas, legislativas, sociales y jurídicas que
sean necesarias para la plena vigencia, ejercicio efectivo, garantía, protección y
exigibilidad de la totalidad de los derechos de niños, niñas y adolescentes. El Estado
y la sociedad formularán y aplicarán políticas públicas sociales y económicas; y
destinarán recursos económicos suficientes, en forma estable, permanente y oportuna.
Artículo 9.- Función básica de la familia.- La ley reconoce y protege a la familia
como el espacio natural y fundamental para el desarrollo integral del niño, niña y
adolescente.
Corresponde prioritariamente al padre y a la madre, la responsabilidad compartida del
respeto, protección y cuidado de los hijos y la promoción, respeto y exigibilidad de
sus derechos.
Artículo 10.- Deber del Estado frente a la familia.- El Estado tiene el deber prioritario
de definir y ejecutar políticas, planes y programas que apoyen a la familia para
cumplir con las responsabilidades especificadas en el artículo anterior.
Artículo 11.- El interés superior del niño.- El interés superior del niño es un principio
que está orientado a satisfacer el ejercicio efectivo del conjunto de los derechos de los
niños, niñas y adolescentes; e impone a todas las autoridades administrativas y
judiciales y a las instituciones públicas y privadas, el deber de ajustar sus decisiones y
acciones para su cumplimiento.
Para apreciar el interés superior se considerará la necesidad de mantener un justo
equilibrio entre los derechos y deberes de niños, niñas y adolescentes, en la forma que
mejor convenga a la realización de sus derechos y garantías. Este principio prevalece
sobre el principio de diversidad étnica y cultural.
466
El interés superior del niño es un principio de interpretación de la presente Ley. Nadie
podrá invocarlo contra norma expresa y sin escuchar previamente la opinión del niño,
niña o adolescente involucrado, que esté en condiciones de expresarla.
Artículo 12.- Prioridad absoluta.- En la formulación y ejecución de las políticas
públicas y en la provisión de recursos, debe asignarse prioridad absoluta a la niñez y
adolescencia, a las que se asegurará, además, el acceso preferente a los servicios
públicos y a cualquier clase de atención que requieran.
Se dará prioridad especial a la atención de niños y niñas menores de seis años.
En caso de conflicto, los derechos de los niños, niñas y adolescentes prevalecen sobre
los derechos de los demás.
Artículo 13.- Ejercicio progresivo.- El ejercicio de los derechos y garantías y el
cumplimiento de los deberes y responsabilidades de niños, niñas y adolescentes se
harán de manera progresiva, de acuerdo a su grado de desarrollo y madurez. Se
prohíbe cualquier restricción al ejercicio de estos derechos y garantías que no esté
expresamente contemplado en este Código.
Artículo 14.- Aplicación e interpretación más favorable al niño, niña y adolescente.-
Ninguna autoridad judicial o administrativa podrá invocar falta o insuficiencia de
norma o procedimiento expreso para justificar la violación o desconocimiento de los
derechos de los niños, niñas y adolescentes.
Las normas del ordenamiento jurídico, las cláusulas y estipulaciones de los actos y
contratos en que intervengan niños, niñas o adolescentes, o que se refieran a ellos,
deben interpretarse de acuerdo al principio del interés superior del niño.
467
TÍTULO III
DERECHOS, GARANTIAS Y DEBERES
Capítulo I.- Disposiciones generales
Artículo15.- Titularidad de derechos.- Los niños, niñas y adolescentes son sujetos de
derechos y garantías y, como tales, gozan de todos aquellos que las leyes contemplan
en favor de las personas, además de aquellos específicos de su edad.
Los niños, niñas y adolescentes extranjeros que se encuentren bajo jurisdicción del
Ecuador, gozarán de los mismos derechos y garantías reconocidas por la ley a los
ciudadanos ecuatorianos, con las limitaciones establecidas en la Constitución y en las
leyes.
Artículo 16.- Naturaleza de estos derechos y garantías.- Por su naturaleza, los
derechos y garantías de la niñez y adolescencia son de orden público,
interdependientes, indivisibles, irrenunciables e intransigibles, salvo las excepciones
expresamente señaladas en la ley.
Capítulo II.- Derechos de supervivencia
Artículo 20.- Derecho a la vida.- Los niños, niñas y adolescentes tienen
derecho a la vida desde su concepción. Es obligación del Estado, la sociedad y
la familia asegurar por todos los medios a su alcance, su supervivencia y
desarrollo.
Se prohíben los experimentos y manipulaciones médicas y genéticas desde la
fecundación del óvulo hasta el nacimiento de niños, niñas y adolescentes; y la
utilización de cualquier técnica o práctica que ponga en peligro su vida o
afecte su integridad o desarrollo integral.
468
Artículo 21.- Derecho a conocer a los progenitores y mantener relaciones con
ellos.- Los niños, niñas y adolescentes tienen derecho a conocer a su padre y
madre, a ser cuidados por ellos y a mantener relaciones afectivas permanentes,
personales y regulares con ambos progenitores y demás parientes,
especialmente cuando se encuentran separados por cualquier circunstancia,
salvo que la convivencia o relación afecten sus derechos y garantías.
No se les privará de este derecho por falta o escasez de recursos económicos de sus
progenitores.
En los casos de desconocimiento del paradero del padre, de la madre, o de ambos, el
Estado, los parientes y demás personas que tengan información sobre aquél, deberán
proporcionarla y ofrecer las facilidades para localizarlos
Art. 22.- Derecho a tener una familia y a la convivencia familiar.- Los niños, niñas y
adolescentes tienen derecho a vivir y desarrollarse en su familia biológica. El Estado,
la sociedad y la familia deben adoptar prioritariamente medidas apropiadas que
permitan su permanencia en dicha familia.
Excepcionalmente, cuando aquello sea imposible o contrario a su interés superior, los
niños, niñas y adolescentes tienen derecho a otra familia, de conformidad con la ley.
En todos los casos, la familia debe proporcionarles un clima de afecto y comprensión
que permita el respeto de sus derechos y su desarrollo integral.
El acogimiento institucional, el internamiento preventivo, la privación de libertad o
cualquier otra solución que los distraiga del medio familiar, debe aplicarse como
última y excepcional medida.
Artículo 27.- Derecho a la salud.- Los niños, niñas y adolescentes tienen derecho a
disfrutar del más alto nivel de salud física, mental, psicológica y sexual.
469
TÍTULO V
DEL TRABAJO DE NIÑOS, NIÑAS Y ADOLESCENTES
Capítulo I.- Disposiciones Generales
Artículo 81.- Derecho a la protección contra la explotación laboral.- Los niños, niñas
y adolescentes tienen derecho a que el Estado, la sociedad y la familia les protejan
contra la explotación laboral y económica y cualquier forma de esclavitud,
servidumbre, trabajo forzoso o nocivo para su salud, su desarrollo físico, mental,
espiritual, moral o social, o que pueda entorpecer el ejercicio de su derecho a la
educación.
Art. 82.- Edad mínima para el trabajo.- Se fija en quince años la edad mínima para
todo tipo de trabajo, incluido el servicio doméstico, con las salvedades previstas en
este Código, más leyes e instrumentos internacionales con fuerza legal en el país. La
infracción a lo dispuesto en el inciso anterior, no libera al patrono de cumplir con las
obligaciones laborales y sociales que le impone la relación de trabajo.
El Consejo Nacional de la Niñez y Adolescencia, de oficio o a petición de cualquier
entidad pública o privada, podrá autorizar edades mínimas por sobre la señalada en el
inciso anterior, de conformidad con lo establecido en este Código, la ley y en los
instrumentos internacionales legalmente ratificados por el Ecuador.
Artículo 83.- Erradicación del trabajo infantil.- El Estado y la sociedad deben
elaborar y ejecutar políticas, planes, programas y medidas de protección tendientes a
erradicar el trabajo de los niños, niñas y de los adolescentes que no han cumplido
quince años. La familia debe contribuir al logro de éste objetivo.
Artículo 84.- Jornada de trabajo y educación.- Por ningún motivo la jornada de
trabajo de los adolescentes podrá exceder de seis horas diarias durante un periodo
470
máximo de cinco días a la semana; y se organizará de manera que no limite el
efectivo ejercicio de su derecho a la educación. Los progenitores del adolescente que
trabaja, los responsables de su cuidado, sus patronos y las personas para quienes
realizan una actividad productiva, tienen la obligación de velar porque terminen su
educación básica y cumplan sus deberes académicos.
Artículo 85.- Registro de adolescentes trabajadores.- El Ministerio de Trabajo llevará
un registro de los adolescentes que trabajan por, cantones, debiendo remitir la
información periódicamente a los concejos cantonales de la Niñez y Adolescencia. Él
reglamento establecerá la forma de llevar dicho registro y los datos que deben
registrarse.
Artículo 87.- Trabajos prohibidos.- Se prohíbe el trabajo de adolescentes:
1. En minas, basurales, camales, canteras e industrias extractivas de cualquier
clase;
2. En actividades que implican la manipulación de substancias explosivas,
psicotrópicas, tóxicas, peligrosas o nocivas para su vida, su desarrollo físico o
mental y su salud;
3. En prostibulos o zonas de tolerancia, lugares de juegos de azar, expendio de
bebidas alcohólicas y otros que puedan ser inconvenientes para el desarrollo moral o
social del adolescente;
4. En actividades que requieran el empleo de maquinaria peligrosa o que lo exponen
a ruidos que exceden los límites legales de tolerancia;
471
ANEXO D
PERÚ
Nombre Oficial: República de Perú. Capital: Lima.
Nacionalidad: peruana. Idiomas: castellano, quechua, aimara (oficiales) lenguas
indígenas.
Día de Fiesta Nacional: 28 de julio (Independencia)
Situación Geográfica: centro - oeste de América del Sur. Área: 1.285.215 Km2.
Características: costa desértica de ancho variable (60 km. A 170 km.), cruzada por
valles (oeste); Cordillera de los Andes, con cuencas y valles de los ríos andinos
(centro); Cuenca del Lago Titicaca (Sur); región amazónica (Este), que comprende el
59% del territorio peruano, con densa selva tropical. Clima: costa: subtropical árido
(centro y sur); semitropical (Norte), región andina: varia de templado, cálido a glacial
o muy frío; Selva: tropical.
Ciudades principales y habitantes: Lima metropolitana (7.060.600), Arequipa
(710.100), Trujillo (603.700), Callao (515.200), Chiclayo (469.200), Iquitos
(324.000), Cuzco (278.800). (1998).
Demografía:
Población: 26.900.000 (2003)
Densidad: (habitantes por Km2): 20,9 (2003)
Población Urbana: 73% (2000)
Crecimiento demográfico (tasa media): 1,4% (2000 – 2015)
Fecundidad: (número de hijos por mujer): 2,64 (2000 – 2005).
Esperanza de vida en años: 67,3 (hombres) 74,4 (mujeres) (2000)
Mortalidad infantil: 37 por 1.000 nacidos (2000)
Índice de desarrollo humano: (entre 0 y 1): 0,747 (2000)
Educación: pública y privada.
Analfabetismo: (adultos): 10% (2000)
472
Matriculación en primaria, secundaria y terciaria combinada: 80% (1999)
Gasto público en Educación: (% PNB): 12,9 (1995 – 1997)
Salud:
Gasto público en Salud: (% del PIB): 2,4 (1999)
Constitución y Gobierno
Sistema de Gobierno: República presidencialista.
División Administrativa: 25 departamentos, 155 provincias y 1.586 distritos.
Régimen partidario: pluripartidismo.
Poder ejecutivo: Jefe de Estado y de gobierno.
Poder legislativo: Unicameral.
Constitución vigente: 1993.
Economía: moneda: nuevo sol. Tasa de cambio: 4,00 por US$ (Diciembre, 2003).
PIB (US$): 58.920 millones (2003)
PIB por sectores: agropecuario (7%), industria (38%), servicios (55%) (1999).
Crecimiento anual del PIB: 3,0% (2003)
Deuda externa (US$): 31.000 millones (2003)
Reservas internacionales (US$): 8.900 millones (2003)
Tasa de inflación: 2,6% (2003)
Fuerza de trabajo: 10 millones (1999).
Principales productos agrícolas: café, arroz, maíz, papa.
Ganadería: bovinos, ovinos, caprinos, aves.
Minería: cobre, oro, plomo, zinc, plata, petróleo.
Principales industrias: alimentación, refinación de petróleo, textil, máquinas, equipos
de transporte.
Exportaciones (US$): 8.500 millones (2003)
Importaciones (US$): 8.300 millones (2003).
Principales vínculos comerciales: Estados Unidos, Japón, Brasil, Reino Unido,
Alemania, China, Suiza, Venezuela, Colombia, España.
Medio ambiente: consumo de energía per cápita: 581 Kg de petróleo (1998)
473
Deforestación anual: 0,3% (1990 - 1995).
Emisiones de CO2: 27,3 millones de tm (1998).
CONSTITUCIÓN POLÍTICA DEL PERÚ 1993 ( con reformas hasta el 2005)
CAPITULO II
DE LOS DERECHOS SOCIALES Y ECONÓMICOS
Artículo 4º: La comunidad y el Estado protegen especialmente al niño, al adolescente,
a la madre y al anciano en situación de abandono. También protegen a la familia y
promueven el matrimonio. Reconocen a estos últimos como institutos naturales y
fundamentales de la sociedad.
La forma del matrimonio y las causas de separación y de disolución son reguladas por
la ley.
Artículo 5º: La unión estable de un varón y una mujer, libres de impedimento
matrimonial, que forman un hogar de hecho, da lugar a una comunidad de bienes
sujeta al régimen de la sociedad de gananciales en cuanto sea aplicable.
Artículo 6º: La política nacional de población tiene como objetivo difundir y
promover la paternidad y maternidad responsables. Reconoce el derecho de las
familias y de las personas a decidir. En tal sentido, el Estado asegura los programas
de educación y la información adecuados y el acceso a los medios, que no afecten la
vida o la salud.
Es deber y derecho de los padres alimentar, educar y dar seguridad a sus hijos. Los
hijos tienen el deber de respetar y asistir a sus padres.
Todos los hijos tienen iguales derechos y deberes. Está prohibida toda mención
474
sobre el estado civil de los padres y sobre la naturaleza de la filiación en los registros
civiles y en cualquier otro documento de identidad.
Artículo 7º: Todos tienen derecho a la protección de su salud, la del medio familiar
y la de la comunidad así como el deber de contribuir a su promoción y defensa. La
persona incapacitada para velar por sí misma a causa de una deficiencia física o
mental tiene derecho al respeto de su dignidad y a un régimen legal de protección,
atención, readaptación y seguridad.
Artículo 8º: El Estado combate y sanciona el tráfico ilícito de drogas. Asimismo,
regula el uso de los tóxicos sociales.
Artículo 9º: El Estado determina la política nacional de salud. El Poder Ejecutivo
norma y supervisa su aplicación. Es responsable de diseñarla y conducirla en forma
plural y descentralizadora para facilitar a todos el acceso equitativo a los servicios
de salud.
Artículo 10º: El Estado reconoce el derecho universal y progresivo de toda persona a
la seguridad social, para su protección frente a las contingencias que precise la ley y
para la elevación de su calidad de vida.
Artículo 11º: El Estado garantiza el libre acceso a prestaciones de salud y
a pensiones, a través de entidades públicas, privadas o mixtas. Supervisa asimismo su
eficaz funcionamiento.
La ley establece la entidad del Gobierno Nacional que administra los regímenes
de pensiones a cargo del Estado.
(* Artículo modificado por Ley Nº 28.389 del 16 de noviembre de 2004).
475
Artículo 12º: Los fondos y las reservas de la seguridad social son intangibles. Los
recursos se aplican en la forma y bajo la responsabilidad que señala la ley.
Artículo 13º: La educación tiene como finalidad el desarrollo integral de la persona
humana. El Estado reconoce y garantiza la libertad de enseñanza. Los padres de
familia tienen el deber de educar a sus hijos y el derecho de escoger los centros de
educación y de participar en el proceso educativo.
Artículo 14º: La educación promueve el conocimiento, el aprendizaje y la práctica
de las humanidades, la ciencia, la técnica, las artes, la educación física y el deporte.
Prepara para la vida y el trabajo y fomenta la solidaridad.
Es deber del Estado promover el desarrollo científico y tecnológico del país.
La formación ética y cívica y la enseñanza de la Constitución y de los derechos
humanos son obligatorias en todo el proceso educativo civil o militar. La educación
religiosa se imparte con respeto a la libertad de las conciencias.
La enseñanza se imparte, en todos sus niveles, con sujeción a los principios
constitucionales y a los fines de la correspondiente institución educativa.
Los medios de comunicación social deben colaborar con el Estado en la educación
y en la formación moral y cultural.
Artículo 22º: El trabajo es un deber y un derecho. Es base del bienestar social y un
medio de realización de la persona.
Artículo 23º: El trabajo, en sus diversas modalidades, es objeto de atención prioritaria
del Estado, el cual protege especialmente a la madre, al menor de edad y al impedido
que trabajan.
El Estado promueve condiciones para el progreso social y económico, en especial
mediante políticas de fomento del empleo productivo y de educación para el trabajo.
Ninguna relación laboral puede limitar el ejercicio de los derechos constitucionales,
476
ni desconocer o rebajar la dignidad del trabajador.
Nadie está obligado a prestar trabajo sin retribución o sin su libre consentimiento.
Artículo 24º: El trabajador tiene derecho a una remuneración equitativa y suficiente,
que procure, para él y su familia, el bienestar material y espiritual.
El pago de la remuneración y de los beneficios sociales del trabajador tiene prioridad
sobre cualquiera otra obligación del empleador.
Las remuneraciones mínimas se regulan por el Estado con participación de las
organizaciones representativas de los trabajadores y de los empleadores.
Artículo 25º: La jornada ordinaria de trabajo es de ocho horas diarias o cuarenta
y ocho horas semanales, como máximo. En caso de jornadas acumulativas o atípicas,
el promedio de horas trabajadas en el período correspondiente no puede superar dicho
máximo.
Los trabajadores tienen derecho a descanso semanal y anual remunerados. Su disfrute
y su compensación se regulan por ley o por convenio.
Código del Niño y Adolescente del Perú (1993)
Articulo 1°.- Se considera niño a todo ser humano desde su concepción hasta cumplir
los 12 años de edad y adolescente desde los 12 hasta cumplir los 18 años de edad.
Si existiera duda acerca de la edad de una persona, se le considerará niño o
adolescente mientras no se pruebe lo contrario.
Artículo 2° .- El niño y el adolescente son sujetos de derechos, libertades y de
protección específica.
Deben cumplir las obligaciones consagradas en la presente norma.
477
Artículo 3°.- El niño y el adolescente gozan de todos los derechos inherentes a la
persona humana y de los derechos específicos relacionados con su proceso de
desarrollo.
Artículo 4°.- El presente código se aplica a todos los niños y adolescentes que habitan
en territorio peruano, sin ninguna distinción por motivo de raza, color, sexo, idioma,
religión, opinión política, nacionalidad, origen social, posición económica, etnia,
impedimento físico o mental, o cualquier otra condición suya, de sus padres o
responsables.
Artículo 19º.- El Estado garantiza el ofrecimiento de modalidades y horarios
escolares especiales que permitan la asistencia regular a los niños y adolescentes que
trabajan. Los directores de centros educativos velarán que el trabajo no afecte su
asistencia y rendimiento escolar, debiendo reportar periódicamente a la autoridad
competente el nivel de rendimiento de los estudiantes trabajadores.
Artículo 22º.- El Estado reconoce el derecho de los adolescentes a trabajar, con las
restricciones que impone este Código, siempre y cuando su actividad laboral no
importe riesgo ni peligro para su desarrollo, para su salud física, mental y emocional
y no perturbe su asistencia regular a la escuela.
Artículo 23º.- Los municipios Distritales y Provinciales llevarán un registro de las
asociaciones formadas por niños, niñas y adolescentes para los fines enunciados en el
artículo anterior.
Articulo 40º.- El niño que trabaja por necesidad económica o material, y el niño de la
calle, tienen derecho a participar en programas dirigidos a asegurar su proceso
educativo y su desarrollo físico y mental.
El Ente Rector, en coordinación con los gobiernos locales, tendrán a su cargo la
promoción y ejecución de estos programas.
478
Articulo 51º.- Este Código ampara a los adolescentes que trabajan en forma
dependiente o por cuenta ajena, incluyendo el trabajo a domicilio y a los que trabajan
por cuenta propia o en forma independiente.
Así mismo incluye en su ámbito de aplicación el trabajo doméstico y el trabajo
familiar no remunerado.
El trabajo que desarrollan los niños y adolescentes institucionalizados se rige por las
normas reglamentarias de las instituciones respectivas.
Excluye de su ámbito de aplicación el trabajo de los aprendices y practicantes que se
rigen por sus propias leyes.
EDAD MINIMA PARA EL TRABAJO
Articulo 53º.- Los adolescentes requieren autorización para trabajar, salvo el caso del
trabajador doméstico y el del trabajador familiar no remunerado.
El que contrata a un trabajador doméstico o el responsable de la familia, en el caso
del trabajador familiar no remunerado, inscribirá al adolescente trabajador en el
registro municipal correspondiente.
EDADES REQUERIDAS PARA TRABAJAR EN DETERMINADAS ACTIVIDADES
Articulo 54º.- Las edades requeridas para autorizar el trabajo de los adolescentes son
las siguientes:
Para el caso del trabajo por cuenta ajena o que se preste en relación de dependencia:
a) Catorce (14) años para labores agrícolas no industriales.
b) Quince (15) años para labores industriales, comerciales o mineras.
c) Dieciséis (16) años para labores de pesca industrial.
Para el caso de las demás modalidades de trabajo, doce (12) años.
479
Se presume que los adolescentes están autorizados por sus padres o responsables para
trabajar, cuando habiten con ellos, salvo manifestación expresa en contrario de los
mismos.
COMPETENCIA PARA AUTORIZAR EL TRABAJO DE ADOLESCENTES
Articulo 55º.- La competencia para autorizar el trabajo de los adolescentes que
cuenten con las edades señaladas en los artículos anteriores, será la siguiente:
a) Sector Trabajo para trabajo por cuenta ajena o que se presten en relación de
dependencia.
b) Municipios distritales o provinciales para trabajos por cuenta propia o que se
realicen en forma independiente y dentro de su jurisdicción.
REGISTRO Y DATOS QUE SE DEBEN CONSIGNAR
Artículo 56º.- Las Instituciones responsables de autorizar el trabajo de los adolescente
llevarán un registro especial en el que se hará constar lo siguiente:
a) Nombre completo del adolescente
b) Nombre de sus padres, tutores o responsables
c) Fecha de nacimiento
d) Dirección y lugar de residencia
e) Labor que desempeña
f) Remuneración
g) Horario de trabajo
h) Escuela a la que asiste y horario de estudios
AUTORIZACION
Artículo 57.- Para otorgar autorización para el trabajo de adolescentes se requiere:
480
a) Que el trabajo no perturbe la asistencia regular a la escuela
b) Certificado médico expedido por los servicios médicos oficiales que acredite su
capacidad física , mental y emocional para las labores que deberá realizar.
EXAMEN MEDICO
Artículo 58º.- Los adolescentes trabajadores serán sometidos a examen médico
periódicamente.
JORNADA DE TRABAJO
Artículo 59º.- El trabajo de los adolescentes entre los doce (12) y catorce (14) años no
excederá de cuatro (4) horas diarias ni de veinticuatro (24) horas semanales.
El trabajo de los adolescentes entre quince (15) y diecisiete (17) años no excederá de
seis (6) horas diarias semanales ni de treinta y seis (36) horas semanales.
TRABAJO NOCTURNO
Artículo 60.- Se prohíbe el trabajo nocturno de los adolescentes, entendiéndose por
éste el que se realiza entre las 19:00 y las 7:00 horas. El Juez podrá autorizar
excepcionalmente el trabajo nocturno de adolescentes entre quince (15) y diecisiete
(17) años, siempre que este no exceda de cuatro horas diarias.
TRABAJOS PROHIBIDOS
Artículo 61º.- Se prohíbe el trabajo de los adolescentes en subsuelo, en labores en que
se manipule pesos excesivos y en actividades en las que su seguridad o la de otras
personas esté sujeta a la responsabilidad del adolescente.
El Ente Rector a través del Sector Trabajo, coordinación y consulta con los gremios
laborales y empresariales, establecerá periódicamente una relación de trabajos y
481
actividades peligrosas o nocivas para su salud física o moral, en las que no podrá
ocuparse adolescentes.
REMUNERACION
Artículo 62º.- Ningún adolescente trabajador percibirá una remuneración inferior a la
de los demás trabajadores de su misma categoría para trabajos similares. No se podrá
pactar el pago de la remuneración de los adolescentes por obra, por pieza, a destajo o
por cualquier otra modalidad de rendimiento.
482
ANEXO E
BOLÍVIA
Nombre Oficial: República de Bolívia. Capital: Sucre
Nacionalidad: boliviana. Idiomas: Español (oficial), quechua, tupiguaraní y aimara
Día de Fiesta Nacional: 6 de agosto (Independencia)
Situación Geográfica: centro - oeste de América del Sur. Área: 1.098.581 Km2.
Características: Altiplano (165 del territorio) (oeste y sureste), llanos orientales 70%
de la superficie (norte y este), valles entre el altiplano y los llanos (14% de la
extensión). Clima: región altiplánica (10º C), región de los valles (18º C), región de
los llanos (25º C).
Ciudades principales y habitantes: La Paz (1.900.783), Santa Cruz de la Sierra
(1.364.389), Cochabamba (1.110.205). (1992).
Demografía:
Población: 8.900.000 (2003)
Densidad: (habitantes por Km2): 8 (2003)
Población Urbana: 63% (2000)
Crecimiento demográfico (tasa media): 2,0 % (2000 – 2015)
Fecundidad: (número de hijos por mujer): 3,92 (2000 – 2005).
Esperanza de vida en años: 61,9 (hombres) 65,3 (mujeres) (2000)
Mortalidad infantil: 62 por 1.000 nacimientos (2000)
Índice de desarrollo humano: (entre 0 y 1): 0,653 (2000)
Educación: pública y privada.
Analfabetismo: (adultos): 15 % (2000)
Matriculación en primaria, secundaria y terciaria combinada: 70 % (1999)
Gasto público en Educación: (% PNB): 4,9 (1995 – 1997)
Salud:
Gasto público en Salud: (% del PIB): 4,1 (1998)
483
Constitución y Gobierno
Sistema de Gobierno: República presidencialista.
División política administrativa: 9 departamentos.
Régimen partidario: pluripartidismo.
Poder ejecutivo: Jefe de Estado y de gobierno.
Poder legislativo: Bicameral, cámara de senado y diputados.
Constitución vigente: 1947 revisada en 1964.
Economía: moneda: boliviano. Tasa de cambio: 7 por US$ (2003).
PIB (US$): 7.430 millones (2003)
PIB por sectores: agropecuario (15 %), industria (29 %), servicios (56 %) (1998).
Crecimiento anual del PIB: 3,5 % (2003)
Deuda externa (US$): 4.560 millones (2003)
Reservas internacionales (US$): 1.100 millones (2003)
Tasa de inflación: 2,5 % (2003)
Fuerza de trabajo: 3 millones (1998). Desempleo: 9 % (2000)
Principales productos agrícolas: soya, caña de azúcar, café.
Ganadería: bovinos, porcinos, ovinos, aves.
Minería: zinc, estaño, plata, oro, plomo, gas natural, petróleo.
Principales industrias: alimentaria, refinación de petróleo, bebidas, joyas.
Exportaciones (US$): 1.500 millones (2003)
Importaciones (US$): 1.930 millones (2003).
Principales vínculos comerciales: Estados Unidos, Brasil, Japón, Argentina, Perú,
Reino Unido.
Medio ambiente: consumo de energía per cápita: 581 Kg de petróleo (1998)
Deforestación anual: 1,2 % (1990 - 1995).
Emisiones de CO2: 12 millones de tm (1998).
484
ANEXO F
GUIA PARA LA OBSERVACIÓN PARTICIPANTE
(Aspectos sensibles de observación)
1-Participantes
-Quienes son
-Cuantos son
-identidad , características relevantes ( nombre, edad sexo, escolaridad, status
socioeconómico)
2-Contexto o escenario de los participantes
-Contexto físico
Estado de las calles, vías de acceso.
Estructura de las viviendas
Lugares públicos (escuela, mercados, centros de salud, sitios deportivos)
Lugares privados (clubes, empresas)
Recursos naturales con que se cuenta
Empleo del espacio físico
Que se produce en el escenario
Que se consume
Que sensaciones visuales, olfativas, auditivas se detectan en el contexto
-Contexto social
Como viven, comen, invierten el dinero, como visten, duermen, hábitos
de consumo de los sujetos objeto del estudio.
3-Interacciones formales
-Interacción de los sujetos participantes con organizaciones formales (escuela)
485
4-Actividades realizadas por los participantes
En que actividades o rutinas están involucrados
Que recursos emplean en sus actividades
Que relación o interacción hay entre los participantes
Como el grupo distribuye o utiliza el tiempo
Cuales son los temas de su preferencia
Cual es el contenido de sus conversaciones
Que relatos o anécdotas intercambian
Lenguajes verbales y no verbales utilizados para su comunicación
5-Normas, valores, costumbres
Que tipo de normas, costumbres, rigen a los participantes dentro del grupo
social
Que símbolos, tradiciones, valores y concepción del mundo se puede
apreciar en los participantes.
486
ANEXO G
FORMATO DE ENTREVISTA ( VERSIÓN BORRADOR)
REPÚBLICA BOLIVARIANA DE VENEZUELA UNIVERSIDAD DE CARABOBO
ÁREA DE ESTUDIOS DE POSTGRADO DOCTORADO EN CIENCIAS SOCIALES
MENCIÓN ESTUDIOS DEL TRABAJO
PRESENTACIÓN
El presente instrumento permitirá realizar las entrevistas grabadas con la
finalidad de obtener información acerca de la dinámica social y económica de los
sectores la Guásima y el Vigía del Municipio Libertador, así como la actividad
laboral realizada por niños, niñas y adolescentes en el relleno sanitario de la Guásima
y el Vigía ,y condiciones de esa labor.
DATOS SOCIODEMOGRÁFICOS
Datos personales
Nombre________________Sexo___Edad____
Lugar de ubicación de la vivienda_________________________________________
1-¿Asistes a la escuela?
2.-¿lo haces regularmente?
3.- ¿En cual turno vas a clases?
487
4- ¿Cómo se llama tu escuela?
5.-¿En que grado estas?
6-¿A que edad iniciastes tus estudios?
7-¿Tu trabajas?
8.- ¿En donde trabajas?
9-¿ Que actividad realizas al trabajar?
10.-¿En cual horario trabajas?
11.- ¿Por qué trabajas?
12-¿Desde que edad trabajas?
13-¿Consideras que con el trabajo que realizas tienes algún peligro o riesgo?
14.- ¿Cuál riesgo crees que tiene tu trabajo?
15-¿Qué herramientas utilizas para trabajar?
16-¿Cuánto ganas aproximadamente?
Diario:
Semanal:
Mensual:
488
17-¿En que utilizas el dinero que obtienes trabajando?
18-¿Qué día tienes libre a la semana?
19-¿Cuántas personas viven en tu casa?
20-¿Con quienes vives en tu casa?
Con tu mamá:
Con tu papá:
Con tu mamá y papá:
Con otra persona:
21-¿A que hora descansas?
22-¿Tienes autorización para trabajar?
23.- ¿De quién obtuvistes autorización para trabajar?
24-¿Te enfermas a menudo?
25.- ¿Qué enfermedad o dolores te dan con mayor frecuencia?
26-¿Cuándo te enfermas, acudes a un centro de salud?
27-¿Trabajas con algún peso superior a tus fuerzas?
28-¿Has sufrido algún accidente cuando estas realizando tu trabajo?
29.- ¿Cuál tipo de accidente has sufrido?
489
30-¿Trabaja tu mamá?
31.- ¿En que trabaja tu mama?
32-¿Trabaja tu papá?
33.- ¿En que trabaja?
34-¿Cuántas veces te alimentas al día?
35-¿El agua que bebes de donde viene?
36-¿Con cuáles materiales está construida tu vivienda?
37-¿Cuántas habitaciones tiene tu casa?
38-¿Cuáles servicios tienes tu casa?
39-Cuando trabajaste por primera vez ¿Quién te involucro en el trabajo?
40-¿ Para trabajar te colocas algún equipo de protección?
41-¿Conoces algunos de tus derechos?
42.-¿Nombra alguno de los derechos que conoces?
43-¿Conoces algunos de tus deberes?
490
ANEXO H
INSTRUMENTO DE ENTREVISTA DEFINITIVO
REPÚBLICA BOLIVARIANA DE VENEZUELA UNIVERSIDAD DE CARABOBO
ÁREA DE ESTUDIOS DE POSTGRADO DOCTORADO EN CIENCIAS SOCIALES
MENCIÓN ESTUDIOS DEL TRABAJO
PRESENTACIÓN
El presente instrumento permite realizar las entrevistas grabadas con la
finalidad de obtener información acerca de la actividad laboral realizada por niños,
niñas , niñas y adolescentes en el relleno sanitario de la Guásima y el Vigía , y
condiciones de esa labor.
Datos Sociodemográficos
Nombre________________Sexo___Edad____
Lugar de ubicación de la vivienda_________________________________________
Escolaridad
1.-¿Asistes a la escuela?
2.-¿lo haces regularmente?
3.- ¿En cual turno vas a clases?
4.- ¿Cómo se llama tu escuela?
5.-¿En que grado estas?
6.-¿A que edad iniciastes tus estudios?
491
Área o sector de trabajo
7.-¿Tu trabajas?
8.-¿Cuál es tu lugar de trabajo?
9.-¿Que actividad realizas al trabajar?
Jornada laboral
10.-¿Qué días trabajas a la semana?
11.-¿Cuántas horas trabajas al día y a la semana?
12.-¿Por qué trabajas?
13.-¿Desde que edad trabajas?
Ingreso o salario
14.-¿Cuánto ganas aproximadamente?
Diario, Semanal, Mensual, no recibe ingresos.
15.-¿En que utilizas el dinero que obtienes trabajando?
Salud, seguridad y riesgos
16.-¿Consideras que el trabajo que realizas tienes algún peligro o riesgo?
17.- ¿Cuál riesgo crees que tiene tu trabajo?
18-¿Qué herramientas utilizas para trabajar?
19.-¿Te enfermas a menudo por el trabajo que realizas?
20.- ¿Qué enfermedad o dolores te dan con mayor frecuencia?
21.-¿Cuándo te enfermas, acudes a un centro de salud?
22.-¿Trabajas con algún peso superior a tus fuerzas?
23.-¿Has sufrido algún accidente cuando estas realizando tu trabajo?
24..- ¿Que tipo de accidente has sufrido?
25.-¿ Para trabajar te colocas algún equipo de protección?
492
Descanso
26.-¿Qué día tienes libre a la semana?
27.-¿Que haces cuando no estas trabajando?
28.-¿A que hora descansas?
Situación familiar
29.-¿Cuántas personas viven en tu casa?
30.-¿Con quienes vives en tu casa?
Con tu mamá:
Con tu papá:
Con tu mamá y papá:
Con tu Padrastro
Con hermanos( as)
Con otra persona:
31.-¿Tienes autorización para trabajar?
32.-¿Trabaja tu mamá?
33.- ¿En que trabaja tu mama?
34.-¿Trabaja tu papá o padrastro?
35.- ¿En que trabaja?
36.-Cuando trabajaste por primera vez ¿Quién te involucro en el trabajo?
Aspectos legales
37.-¿Conoces algunos de tus derechos?
38.-¿Nombra alguno de los derechos que conoces?
39.-¿Conoces algunos de tus deberes?
40..- ¿Nombra alguno de los deberes que conoces?
493
ANEXO I
REGISTRO DE ALGUNAS NOTAS DE CAMPO
Nota de Campo
Fecha: 30 – 01 – 2005
Hora: 11:30 AM
Investigador: Belkis Tovar
Acompañantes: Luis Tovar, Carlos Sánchez
Objetivo: conocer el sector La Guásima
Recorrido: Autopista, entrada por el Mercado de Mayorista, se pasa por la zona de
Nueva Valencia, se llega a la carretera vieja de Tocuyito hasta encontrar el sector La
Guásima.
Organizaciones encontradas en la vía, a la llegada del sector:
- U.E. Pedro Briceño Méndez (Carretera vieja de Tocuyito)
- Mobil Salud (Fabricación de equipos médicos)
- Mercal
- Farmacia La Guásima
- U.E. Juan Escalona
- Abasto y carnicería La Primera
- Temi (Tableros de electricidad)
- Regoven (comercialización con desechos de caucho)
- Faveca (empresa metalúrgica)
- Recicla (elabora fibra de vidrio)
- Pladispan (recicladota de plástico)
Personas abordadas
Juan González: Vecino del sector, quien nos indicó el sitio donde quedaba el
botadero de basura (bote), buscamos el sitio y seguimos a un camión de basura,
494
vimos que la entrada es a continuación de la Farmacia La Guásima. Llegamos al
barrio Chaguaramal donde se siente la contaminación olfativa y visual.
Pedro Marín: vecino del sector El Vigía nos indicó lo peligroso que era entrar
al botadero de basura, recomendó devolvernos porque la calle estaba a esa hora muy
sola y era día domingo, nos indicó la ubicación de la escuela El Vigía la cual colinda
con el botadero de basura.
Se buscó al señor Esteban Romero de la asociación de vecinos, que era el
contacto a lograr en esa primera visita, no estaba ese día en el sitio donde
normalmente se encuentra que es la sede de Mercal.
Nota de Campo
Fecha: 05 – 02 – 2005
Hora: 2:00 PM
Investigador: Belkis Tovar
Acompañantes: Carlos Sánchez, Jessica León y Freddy Patete
Recorrido: Autopista, entrada por el Mercado de Mayorista, luego zona de Nueva
Valencia, hasta encontrar la carretera de Tocuyito, se toma ésta vía y pocos
kilómetros más adelante se encuentra el sector La Guásima. El investigador y los
acompañantes concentran todos los sentidos para observar, oír y oler. Se toman datos
para la guía de observación. Se observan con más detalle la carretera, la cual está
asfaltada, y hay bastante tráfico, hay casas de cada lado de la carretera, hay una
heterogeneidad de viviendas, ya que algunas son tipo quintas de 2 plantas con patio
frontal, pero otras son ranchos con paredes de bloque y techo de zinc.
495
Se logró contactar al señor Esteban Romero que pertenece a la asociación de
vecinos, en la sede de Mercal. Se estuvo hablando con el ciudadano por espacio de
dos horas, sentados en el porche de la sede y saludando a los diferentes pobladores
del lugar que pasaban por el frente. Se le realizó entrevista abierta al señor Romero,
quien es conocedor del lugar. Quedó comprometido a llevarnos a las diferentes
barriadas de la zona para hablar con algunas familias de los niños, niñas y
adolescentes que trabajan en el botadero de basura.
Nota de Campo
Fecha: Miércoles 16 – 02 – 2005
Hora: 11:30 AM
Investigador: Belkis Tovar
Acompañante: Freddy Patete
Recorrido: Autopista, entrada por el Mercado de Mayorista, luego zona de Nueva
Valencia, hasta encontrar la carretera vieja de Tocuyito, llegada al sector La Guásima.
Objetivo: visitar la Escuela Juan Escalona. Se entrevistó a la Directora de la Escuela.
La Escuela es Estadal, allí funciona desde primer grado hasta sexto grado.
Presenta una matrícula de 1082 alumnos, con psicopedagoga, y maestros de
educación especial. Los niños y niñas que aquí estudian vienen de los sectores
pobres del lugar (El Calvario, Las Marías, El Torito).
Se afirmó la presencia de niños que estudian en la escuela y trabajan en el
botadero de basura. Se quedó para una próxima visita a la escuela para conocer éstos
niños y revisar su ficha estudiantil.
496
Luego se hizo un recorrido por la calle que va al botadero de basura, se
observó la presencia de niños y adolescentes que venían del botadero de basura con
paquetes de cartón. Se logró conocer a 4 de ellos. Se les preguntó ¿ para dónde
llevaban esos cartones? y señalaron una de la empresas recicladoras del lugar.
Nota de Campo
Fecha: Jueves 24– 02 – 2005
Hora: 7:30 AM
Investigador: Belkis Tovar
Acompañante: Freddy Patete
Objetivo: detectar la llegada de niños, niñas y adolescentes al botadero de basura.
Sitio previsto para la observación: frente a la Farmacia La Guásima.
Resultados: se observaron niños y adolescentes llegar a la calle que lleva al botadero
de basura, se lograron contar 18, la hora no era la apropiada, tenía que ser más
temprano, si es que se trataba de tener un aproximado en números, comenzó a llover,
decidimos dejar el lugar.
Nota de Campo
Fecha: Miércoles 02 – 03 – 2005
Hora: 9:00 AM
Investigador: Belkis Tovar
Acompañantes: Freddy Patete
Objetivo: visitar a la Escuela El Vigía, la cual está ubicada en el barrio Los
Chaguaramos.
497
Se visitó la escuela El Vigía, no estaba la directora en ese momento. Se
entrevistó a un funcionario de la escuela. Se le dio a conocer el objetivo de la visita.
Se pudo conocer que la escuela tiene una matrícula de 474 alumnos, tiene 30 años de
fundada, en su edificación hay alumnos desde preescolar hasta la segunda etapa de
Educación Básica. Se afirmó la presencia de niños que estudian y trabajan. Se nos
advirtió la peligrosidad del barrio. Hicimos un corto recorrido, saludamos a varias
personas. Se detectó la presencia de empresas recicladoras en el lugar.
Nota de Campo
Fecha: Miércoles 10 – 03 – 2005
Hora: 6:45 AM
Investigador: Belkis Tovar
Acompañantes: Freddy Patete
Objetivo: Primero detectar la llegada de niños, niñas y adolescentes al botadero de
basura. Segundo aplicar algunas entrevistas.
Resultado: se detectó la llegada de niños y adolescentes solos, sin ningún familiar.
Se logró contar aproximadamente 25 menores. Se trató de abordar a varios, se
mostraban recelosos y no se logró ninguna entrevista a ese grupo.
Luego decidimos ir a visitar a la escuela Juan Escalona, en el camino venían 3
niños, aproximadamente de 12 y 13 años, logramos abordarlos y hacerles la
entrevista, estos niños que trabajan en el vertedero de basura la Guásima, se
identificaron como Carlos Suárez, Luis Romero y José López, venían del barrio Las
Marías pero no dieron su dirección exacta. Estamos satisfechos que se habían
logrado 3 entrevistas. Fin del recorrido.
498
Nota de Campo
Fecha:19– 03 – 2005
Hora: 10:00 AM
Investigador: Belkis Tovar
Acompañantes: Freddy Patete
Objetivo: Detectar la presencia de niños, niñas y adolescentes trabajando en el
botadero de basura un día sábado.
Resultado: se observó la presencia de niños acompañados por sus padres. Se logró la
entrevista a un niño y a su padre que venían de regreso del basurero. El padre señaló
que el niño no trabajaba en el basurero, que sólo lo ayudaba a recoger algunos
cartones y que lo traía porque la madre que era doméstica le tocaba trabajar. El niño
que tenía una edad de 7 años, iba montado encima de los cartones que eran
transportados en una carrucha, para su venta. Se hizo un recorrido para ver pasar los
camiones de basura y percibir como los niños y adolescentes se montaban en los
mismos hurgando en la basura del camión con posibilidades de sufrir caídas.
Nota de Campo
Fecha: Miércoles 30 – 03 – 2005
Hora: 8:00 AM
Investigador: Belkis Tovar
Acompañantes: Freddy Patete
Objetivo: hacer entrevistas a niños, niñas y adolescentes que estudian y trabajan.
499
Resultados: Se visitó la escuela Juan Escalona, se hizo entrevista a 3 niños. Se revisó
documentos indicativos de rendimiento escolar.
Nota de Campo
Fecha: Miércoles 6 – 04 – 2005
Hora: 7:00 AM
Investigador: Belkis Tovar
Acompañantes: Freddy Patete
Objetivo: Conocer y aplicar la entrevista a niños, niñas y adolescentes trabajadores.
Resultados: se logró aplicar la entrevista completa a 3 niños que se habían negado en
días anteriores, se les trajo ropa usada para que compartieran entre ellos. La
entrevista se logró hacer frente a la escuela El Vigía, por lo peligroso del sitio. Se
habló con 2 niños más, pero la entrevista fue incompleta. Salieron corriendo a
lanzarse sobre el camión de basura. No se si a éstos niños lo vuelva a ver, o si los
reconozca en caso de encontrármelos nuevamente. No se si las entrevistas que están
incompletas, tendré oportunidad de continuarlas o éstos entrevistados los desecharé.
Nota de Campo
Fecha: 16– 04 – 2005
Hora: 2:00 PM
Investigador: Belkis Tovar
Acompañantes: Luis Tovar
Objetivo: Visitar a una familia de niño trabajador.
500
Resultado: Fuimos a un barrio llamado Las Marías, ubicamos la vivienda buscada,
allí encontramos al seños Manuel, quien es padre de uno de los niños, entrevistados.
La casa de habitación está constituida por un rancho de zinc, con 2 habitaciones,
observándose que una de las habitaciones tenía la puerta abierta, a través de la cual se
detectó la presencia de 2 neveras, el rancho estaba rodeado por una cerca de alambre,
subimos por unas escaleras de tierra para acceder al rancho y al señor Manuel, el cual
nos recibió en forma cortés y nos dijo que tenía en el barrio aproximadamente 17
años, el señor Manuel nos informó de la peligrosidad del sector, nos señaló que por
allí no se podía transitar con carro nuevo porque los mismos eran asaltados y
desvalijados por los delincuentes del lugar, sentimos un poco de tranquilidad porque
andábamos en un carro viejo con bastantes años de uso, además si algo nos servía de
apoyo, ya estábamos en el patio cercado de la casa en el cual nos instalamos sentados
en las dos únicas sillas de plástico que había en el lugar.
Señalamos al señor Manuel el objetivo de nuestra visita. En la amena
conversación logramos confirmar que muchas personas que viven en el lugar viven
del botadero de basura. Señaló que en el bote habían muchos adolescentes con 13
años y más de edad trabajando, recogiendo bolsas, botellas, metales, cartón, comida,
los materiales recogidos los vendían en el sitio del botadero ya que venían camiones a
comprarlos.
Las personas para entrar al sitio del botadero tenían que pagar Bs. 1.500
aproximadamente. Hicimos la entrevista objeto de nuestra visita y nos retiramos. Se
percibía mucha pobreza en el barrio, la mayoría de las viviendas eran ranchos, no
tenían cloacas, ni asfaltado de calle, la gente toma la luz de los postes de electricidad
de la calle.
501
ANEXO J
Registro de algunas narraciones aportadas por niños, niñas y adolescentes en la
entrevista
Juan Carlos (niño de 12 años)
“Vivo con una tía que es menos pobre que en mi casa, allí por lo menos como
dos veces al día, pero yo la ayudo trabajando”
Félix José (niño de 10 años)
“Mi papá es un borracho y nos manda a recoger cartones y aluminio para él
venderlos”
Lalo (adolescente 13 años)
“Cuando llega el camión de la basura yo me tiro para recoger más plástico y
cartones aunque algunas veces me aporreo”
Luis (adolescente de 13 años)
“Yo siempre encuentro latas de sardinas, las abro y me las como, ya estoy
acostumbrado”
Pepe (niño de 8 años)
“Yo no trabajo, yo vengo con mi papá los sábados y lo ayudo a recoger
cartones y botellas”
502
Francisco (niño de 10 años)
“Yo recojo cualquier cosa de la basura y mi papá las vende”
Antonio (niño de 11 años)
“En el módulo me dijeron que yo tenía parásitos porque comía de lo que
encuentro en la basura”
Jesús (adolescente de 14 años)
“Mi mamá me dice que eso es bueno, trabajar pero que siga estudiando para
que sea gente de respeto”
Toñito (adolescente de 14 años)
“El otro día me mordió una rata y duré 3 semanas sin venir al bote, pero tuve
que regresar porque necesito chamba”
Melo (adolescente 15 años)
“Yo no fui más a la escuela porque no tenía para comprar el uniforme ni los
cuadernos”
José (adolescente 14 años)
“Yo voy en la mañana a la escuela, allí me dan comida, pero en la tarde vengo
al bote para ganar algo para ayudar a mi mamá, mi papá se fue del rancho hace
tiempo”