Proyecto “Fortalecimiento de la participación ciudadana para mejorar el acceso a bienes y servicios en comunidades marginalizadas”

Sistematización de la experiencia de CCM

Un canto a la vida: lucha por los derechos de las comunidades

marginalizadas Informe final

Roxana Martel Diciembre 2005

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� En este 10 de octubre de 2005 quiero hacer un reconocimiento a:

- Usted, Vicente Alfredo Salguero, que en paz descanse y que su muerte se llevó a un hombre que creía en la utopía.

- A todos los muertos por el terremoto del 10 de octubre de 1986

- A nuestros compañeros caídos: Víctor Chiquillo, Francisca, Domingo Chanta, Miguel N., Cirilo García, Blanca Estela Melgar, Blanca Marina Quinteros, Martín Ayala. Todos ellos grandes amigos y compañeros nuestros.

- A Mario Lungo, por su aporte que nos dio en su momento

- Al Padre Francisco García de Cevallos, padre Jesuita que murió en un accidente en España

- A nuestro compañero Óscar Armando López, asesinado brutalmente por la delincuencia organizada

- A nuestros compañeros y compañeras que desde la distancia nos acompañan: Celina de Monterrosa, Ileana Rogel, Marta Segovia, Leonardo Hidalgo, etc.

- Especialmente a Alberto Romero de Cooperacció y Adán Cuadra de TROCAIRE por creer en nosotros,

Antonia Viches Fragmento de carta personal Taller 10 de octubre 2005

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Índice

1. Presentación ……………………………………………………………….... 2. Contexto sociopolítico cultural………………………………………….. 3. Análisis histórico …………………………………………………………......

a. El Movimiento ……………………………………………………..... b. Las comunidades ………………………………………………….. c. Experiencias significativas ………………………………………...

i. Tomas de tierras ………………………………………….... ii. Acceso a servicios ……………………………………….. iii. Formación de líderes ……………………………………..

4. Análisis organizativo ……………………………………………………......

a. Pilares organizativos ……………………………………………..... b. Principios …………………………………………………………...... c. Estructura ………………………………………………………........ d. Financiamiento …………………………………………………...... e. Análisis de fortalezas, debilidades y desafíos ………………..........

5. Análisis prospectivo ………………………………………………………...

6. A manera de conclusión ……………………………………………………..

7. Anexos ………………………………………………………………….......... 1. Listado de entrevistas realizadas ………………………………… 2. Listado de documentos revisados …………………………………… 3. Estrategia metodológica: protocolos de los instrumentos aplicados …

3.1 Protocolo de la entrevista a líderes comunales …………….. 3.2 Protocolo de entrevista a diputadas ……………………….. 3.3 Protocolo de encuesta para funcionarios de instituciones …… 3.4 Protocolo de los grupos de discusión …………………........... 3.5 Guía para el taller con miembros deCCM…………………..

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1. Presentación “Sentimos que se están perdiendo los valores en las nuevas generaciones. Se ha

perdido el principio de solidaridad”

Entrevista a miembro de CCM

Documentar y sistematizar la experiencia de la Asociación Coordinadora para el

Desarrollo Comunal es el objetivo de este documento. El informe que se presenta recoge los elementos encontrado a lo lago de un proceso de investigación en el que miembros de CCM1, de las comunidades, funcionarios de instituciones y políticos reconstruyen la memoria de la organización y del movimiento que representa.

La investigación se enmarcó en la necesidad de generar documentos que recojan la experiencia que CCM ha tenido en el transcurso de estos 20 años con las comunidades marginalizadas. La sistematización realizada se justifica, básicamente por tres elementos. El primero, recuperar la memoria histórica de la experiencia. Es decir, hacer visibles de manera sistemática y con un marco de interpretación proactivo los hechos importantes de la historia de CCM. Este ha sido un proceso de construcción en él se han identificado momentos importantes marcados por cambios en el contexto, en las instituciones que han estado vinculadas o en las comunidades con las que se trabaja.

El segundo elemento que justifica un esfuerzo como el de esta sistematización es la necesidad de recuperar procesos y apuestas organizativas que se han implementado a lo largo del trabajo comunitario e institucional. Toda la experiencia se ha enmarcado en procesos educativos – participativos para los cuales se ensayaron una serie de iniciativas. De ellas pueden identificarse acciones que, adecuadas al contexto a las características socioculturales de las comunidades con las que se trabaja pueden replicarse. La posibilidad de identificar estos elementos es posible después de los años que se tienen de trabajo continuo.

El tercer elemento es la necesidad de generar insumos que sirvan de indicador de resultados del trabajo de CCM hasta la fecha. La sistematización busca definir “¿cómo estamos? Para mejorar procesos frente a los retos y oportunidades del contexto actual”.

La sistematización es aquella interpretación crítica de una o varias experiencias, que, a partir de su ordenamiento y reconstrucción descubre o explica la lógica del proceso vivido, los factores que han intervenido en dicho proceso, cómo se han relacionado entre sí y por qué lo han hecho de ese modo (Jara, O. 2001).

En este sentido, para la sistematización se han aplicado una serie de instrumentos metodológicos que han generado información que dan cuenta de esos complejos procesos de construcción de comunidad, capital social, reinvindicación comunitaria, etc.

De la historia de CCM pueden leerse también momentos de la historia salvadoreña. Pueden verse desde la historia de CCM la historia de las organizaciones populares, la historia del conflicto armado en contextos urbanos, la historia de los

1 La Asociación para el Desarrollo Comunal fue creada con el nombre de “Coordinadora de Comunidades

Marginales, CCM” y fue así como se dio a conocer popularmente. Ahora por la necesidad de insertarse en

el proceso de legalidad democrática del pías se ha convertido en la Asociación para el Desarrollo

Comunal, pero sigue manteniendo su identificación cmo CCM.

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procesos de urbanización de San Salvador y la historia de la institucionalidad salvadoreña. Todo, desde CCM. CCM es rostros, sueños, luchas, muertes y vida.

Para acercarnos a esa historia se optó, en la presente investigación, hacerlo desde una metodología que permitiera recuperar la historia colectiva desde el testimonio de los protagonistas. Se aplicaron entrevistas individuales y colectivas a miembros de las comunidades, miembros de CCM y funcionarios de instituciones vinculadas a CCM (Ver listado en anexos). Las entrevistas fueron el instrumento principal, pero fue complementado por la revisión de documentos institucionales tanto impresos como videográficos y fotográficos.

Los elementos que se tomaron en cuenta en las entrevistas fueron aspectos históricos comunales, aspectos históricos con relación a CCM, identificación de proyectos, relaciones institucionales y personales y análisis prospectivo (ver anexos).

La investigación se realizó de mayo a octubre de 2005 y contó con a colaboración oportuna y cálida de todos los miembros de CCM.

En el proceso de recuperación de la memoria institucional puede des-cubrirse la búsqueda por una historia que ilumine el futuro. Historia que sea capaz de dejar ver los aciertos y desaciertos que como movimiento social se han dado. El concepto “movimiento social” está relacionado con las posibilidades de presentar un proyecto colectivo alternativo a las condiciones imperantes. En ese sentido, la reivindicación por formas de vida dignas en un país que excluye a los que económicamente “no son rentables” sí es un movimiento social, sobre todo si esa reivindicación se hace desde las comunidades marginalizadas.

El informe en el que se recoge la investigación está estructurado en cuatro partes. La primera es una revisión sintética del contexto sociopolítico cultural en el que se inserta CCM. La síntesis sacrifica en profundidad porque la complejidad de los procesos que enmarcan la experiencia de CCM no se agotan en unas pocas páginas. Remitimos, para complementar a la vasta bibliografía histórica de los últimos 30 años del país.

La segunda parte es un análisis histórico en el que se recoge, con base a las entrevistas y documentos revisados, elementos importantes que han marcado la historia del movimiento, de algunas comunidades representativas en la experiencia de trabajo de CCM y tres experiencias significativas en el camino andado por la asociación: tomas de tierras, acceso a servicios y formación de líderes.

La tercera parte desarrolla un análisis organizativo de CCM en el que se recoge

los pilares organizativos y principios que sustentan la mística del movimiento; la estructura, el financiamiento y un análisis de las fortalezas, debilidades y desafíos.

La cuarta parte del análisis hace una revisión prospectiva de CCM. Interesa responder a la pregunta, qué hacer en el futuro. Si bien es cierto el documento pretende reconocer los elementos históricos que han constituido a CCM y a las comunidades vinculadas a él, esa historia cobra sentido si orienta los pasos en el futuro. Son muchas las necesidades. En la investigación se pudo sentir la preocupación por cómo orientarse en el futuro si las condiciones para fomentar la participación social parecen haber cambiado. ¿Cómo despertarnos de la aparente pasividad y apatía con una historia tan rica en compromisos?

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Son muchas las deudas que tiene este informe. El apoyo de los miembros de CCM, de las comunidades fue abierta e incondicional. El reporte en el que, por espacio y limitaciones propias de la investigadora, se queda corto ante la riqueza de las experiencias que se encierran entre los recuerdos, documentos, videos y fotografías de CCM. Espero complementar esas limitaciones con el proceso de difusión de este documento inacabado que intenta ser el pretexto para una discusión colectiva que permita dibujar los caminos que como movimiento se construirán.

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Cantidad de habitantes que residen en áreas urbanas de América Central, 1970 y 2010

Fuente: ONU, World urbanization prospects: the 2001 revision (2002). San Salvador, Libertad

2. Contexto sociopolítico – cultural

La historia de CCM se enmarca en dos procesos socioculturales y políticos fuertes

para la sociedad salvadoreña. El primer proceso es el de urbanización acelerada y desordenada sobre todo del Área Metropolitana de San Salvador y el segundo es el del conflicto armado propiciado por unas condiciones de represión política y desigualdades económicas profundamente arraigadas.

No se puede ver la historia de CCM sin estos dos procesos que, durante la década de los ochenta marcaron a la sociedad salvadoreña.

Proceso de urbanización

El proceso de urbanización, en El Salvador se inició desde finales de la década

de los cincuenta y fue durante los años sesenta y setenta cuando la importancia de las actividades urbanas cobró centralidad en las políticas públicas y en las lógicas de inversión privada.

Según datos de la ONU (2002), El Salvador es el país con más alto crecimiento urbano en la región centroamericana. Del 39 por ciento de la población que se concentraba en zonas urbanas en 1970, se prevé para 2010 que la concentración urbana aumentará al 70 por ciento. Este proceso de crecimiento inició en los años 1950 cuando la migración campo-ciudad se acelera. La aceleración de este proceso se debe a la implantación del proyecto de industrialización y economía liberal en el país. La inversión en el agro es una política a la que el Estado dejó de apostarle al optar por este modelo económico.

En ese período crecen en el Área metropolitana de San Salvador zona destinadas al desarrollo industrial (Soyapango, Plan de La Laguna en Antiguo Cuscatlán). El crecimiento industrial responde crecimiento de mercado centroamericano.

A la par de estos cambios en el uso del suelo urbano y las actividades económicas urbana ocurren una serie de hechos que determinan el paisaje urbano que el Gran San Salvador tiene en estos momentos. El terremoto de 1961 que

afectó fuertemente el área urbana de San Salvador, profundiza los problemas de vivienda para los sectores más empobrecidos quienes por la migración interna se asientan en las periferias. El terremoto de ese año genera el surgimiento de manera más visible los primeros campamentos que aunque fueron construidos con carácter temporal se volvieron permanente, manteniendo la precariedad con la que se instalaron. Esta fue

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una respuesta de las poblaciones afectadas directamente a la incapacidad del Estado de generar políticas integrales de vivienda para los sectores más empobrecidos. Es en esta coyuntura que se realizaron las primeras tomas de terrenos. Marca el surgimiento de asentamientos precarios urbanos ubicados en zonas de alto riesgo.

Durante las décadas 1970 - 1980 se produce un acelerado proceso de migración

interna provocado sobre todo por las políticas represivas de los gobiernos de turno. El porcentaje de desplazados internos aumenta y el punto de destino es el Gran San Salvador y otos núcleos urbanos como Santa Ana, Usulután y San Miguel. Para el censo de 1992, el 65 por ciento de población es urbana. Las zonas urbanas se convierten en los lugares más atractivos económica, social y culturalmente. La inversión y rotación de capital es mayor en las zonas urbanas. Los asentamientos urbanos más empobrecidos se enfrentan a la marginalidad. Las instituciones públicas, ni del gobierno central, ni de los gobiernos locales son capaces de responder a las necesidades de sectores marginalizados para las que ni la tierra, ni los servicios básicos son accesibles por las condiciones económicas en las que se encuentran.

Esta situación es crítica porque el proceso de urbanización se sigue desarrollando, aunque esto implique que los niveles de desigualdad se incrementen. En otra proyección del Viceministerio de Vivienda y Desarrollo Urbano se avisa que para el año 2025 cuatro millones y medio de personas residirán en zonas urbanas frente a 2 millones en la zona rural.

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Conflicto armado

El Salvador se

caracteriza desde el siglo XIX por una recurrente violencia contra la población campesina y la represión política contra todos los opositores a los gobiernos dictatoriales (Alvarenga, 1996). Esta situación, sumada a la violencia de orden criminal común se mantiene desde esa época. En la década del setenta las crecientes expresiones populares de protesta tuvieron como escenario todo el país, generando una feroz

represión política que presagiaba la guerra que se desplegó la década siguiente.

En El Salvador, el conflicto armado abierto duró once años y se generalizó a todo el país con una pérdida en vidas de 75,000 personas aproximadamente (alrededor de 6,250 personas fueron muertas por año a causa de la guerra). Este dato, sobre la base de una población total nacional promedio de 5 millones de personas, resulta una tasa de aproximadamente 125 por 100,000 habitantes. Más allá de su dimensión cuantitativa, la guerra se convirtió en un evento totalizante en el orden social del país (Martín Baró, 1988). La vida nacional estuvo en función del conflicto, en mayor o menor medida a lo largo de todo este período.

Represión, masacres y persecución política en la zona rural y urbana fueron las características de esos años. Estas acciones, realizadas por los militares y paramilitares de la época estaba dirigida a la población en general, pero sobre todo a aquellas personas organizadas en movimientos populares de oposición o resistencia.

El encarcelamiento de líderes, la represión sistemática a la organización comunitaria y asesinatos a miembros de comunidades fueron los costos sociales y humanos que trajo a los miembros de comunidades y de CCM iniciar la lucha, en un contexto como este, por la reivindicación de los derechos de las personas que habitaban comunidades marginalizadas por el sistema económico y político del país.

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3. Análisis histórico

Como ya se expuso, la historia de CCM ha

estado fuertemente vinculada con el contexto social y político del país. La década de los ochenta se caracterizó por la visibilización de las organizaciones populares en su lucha por la defensa de los derechos humanos, especialmente el de la vida. Los años noventa se cateterizaron por la diversificación y de las demandas sociales y las organizaciones que las representan.

CCM surge de la movilización de organizaciones sociales urbanos para la organización comunitaria. Desde su concepción se pensó en tres elementos básicos para el trabajo organizativo: la formación de líderes, la organización comunitaria y el apoyo en actividades reivindicativas (actividades de calle, tomas de terreno). Para dar cuenta de estas acciones y cómo CCM las ha ido adaptando a sus formas de gestión y relación con las comunidades y otras instituciones se presentaran tres elementos para su análisis: la historia del movimiento, la historia de algunas comunidades y tres experiencias significativas en el trabajo organizativo de CCM. a. El Movimiento

Para poder acercarnos a la historia del movimiento se desarrollará una línea de tiempo caracterizada por cuatro momentos: momento fundador, transición democrática, fortalecimiento interno frente a un contexto político adverso, renovación política frente a crisis económica

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CCM fue una experiencia grande desde el principio, no solo como producto de la dinámica nacional, sino como producto también de lo que le impregnaron este liderazgo que se formó desde la incidencia, en la política. Celina Monterrosa Entrevista, octubre 2005

Momento fundador: La apuesta – la formación: 1980 - 1985

CCM surge en un momento en el que distintos sectores de la población salvadoreña se organizaban para transformar las condiciones de represión e injusticia estructural que El Salvador vivía desde antes de los inicios de su historia como Estado. Los movimientos de izquierda habían iniciado una labor de incidencia en la sociedad a través de la organización popular.

En ese contexto surge el Consejo de Representantes de Comunidades Marginales, en 1984, conformada por 15 comunidades del Área Metropolitana de San Salvador. Algunas de ellas son Santa Marta, 4 de mayo, Labor, Amatepec1, Sector Credisa, ADESCOSOL o Bambú #1, ADESCO California #2, ADESCO La Roca, La Providencia, Bambú #2 hoy 10 de enero, El Bosque, La Fortaleza, La Independencia, California #3, etc. Surge como una forma organizativa que busca contribuir a resolver los graves problemas que enfrentaban las comunidades marginalizadas. En 1986, se cambia nombre por Consejo de Comunidades Marginales, CCM2.

Se contó, desde sus inicios con el apoyo institucional de CREFAC. Se inicia con un proceso de capacitación de líderes y la búsqueda de formas para lograr la legalización de tierras. Las dos primeras comunidades involucradas en este esfuerzo fueron Los Santos y California.

En estos primeros años se contaba con el apoyo financiero de los Países Bajos. Esto posibilitó el trabajo de formación y acompañamiento intenso a las comunidades en ese período.

El trabajo realizado en estos años generó las bases organizativas para dar respuesta a las comunidades afectadas por el terremoto de 1986. Si bien es cierto este evento fue lamentable por las pérdidas humanas y materiales, desencadenó una movilización organizativa fuerte gracias a la preparación de líderes iniciada en su momento fundador.

2 Tomado del documento “Plan estratégico para el Desarrollo”, Asociación Coordinadora para el

Desarrollo Comunal, 1995 – 1997.

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Algunas comunidades de la Unión de Pobladores de Tugurios, UPT, conforman CCM lo que permite capitalizar la experiencia organizada que estos miembros daban a la naciente organización.

Por ser sus primeros años, el grado de visibilidad no era muy alta, pero se estaba dando a conocer dentro de las comunidades y sus líderes Momento de consolidación y visibilidad organizativa - referentes: 1985-1990

Este segundo momento se caracteriza por la consolidación del movimiento y su visibilidad organizativa. Se articula el trabajo de lucha con otras organizaciones populares. Las necesidades de este momento hacen que se modifique el trabajo. Se pasa del trabajo solo en formación y visitas a organizar comisiones de propaganda, investigación, proyectos, organización, comité ejecutivo. Esta estructura permitía responder a demandas de manera más sistemática y planificada.

Un elemento importante de este momento es el apoyo que recibe de los distintos involucrados en forma de voluntariado lo que representaba un elemento que garantizaba el compromiso de los que formaban parte del movimiento.

En esta época CCM participa en el ámbito político revolucionario. Una de las organizaciones del FMLN (las Fuerzas Populares de Liberación, FPL), en ese

momento en la clandestinidad, asignan A un educador, Roberto Hernández. Él apoyó de manera muy intensa el proceso organizativo tanto de las comunidades como de la organización. Esta organización permitió el reclutamiento de jóvenes que se incorporaron a la lucha con el FMLN.

Otro elemento importante en este momento histórico de CCM fue la creación de la Asociación de Mujeres Marginales (AMMA) y el Consejo Juvenil de Comunidades (CJC) que pretendían canalizar las demandas de estos sectores de manera específica. La vinculación que se tenía con las FPL produjo que estas dos iniciativas fueran independizadas de CCM por decisión política. Esta decisión trae como costo para la organización comunitaria una desatención a estos dos sectores que no ha podido retomarse con la fuerza de esos años.

En este momento inicia la estrategia de toma de tierras, acción que le vale el reconocimiento público a la organización3 y la consolidación de redes de solidaridad entre comunidades que apoyaban las tomas. Las tomas surgen como respuesta a las

3 En el apartado de “experiencias significativas” se describe y analiza esta acción.

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necesidades de vivienda reveladas por el terremoto de 1986 y que el gobierno no había atendido. Una de las primeras comunidades, producto de la toma de tierras fue la Comunidad 13 de enero, en Mejicanos. Esta toma se realizó en 1987.

Las siguientes tomas, realizadas en este período fueron la comunidad 10 de

abril de Ciudad Delgado; las San Luis I, II y II de San Salvador; la 21 de junio, la 15 de septiembre y la 4 de octubre de Mejicanos. Estas tomas se realizaron en 1987.

En 1988 se realizó la toma en Altos de Jardines de San Salvador y en 1989 la Comunidad Éxodo 29 de octubre, también de San Salvador.

Financieramente se cuenta con el apoyo de ICCO, Holanda. Este financiamiento se mantuvo por 10 años, de 1988 a 1998. La estabilidad financiera que este apoyo representó permitió realizar una serie de acciones que motivaron a los miembros de las comunidades a movilizarse en acciones específicas, como las tomas de tierra.

Surgimiento de otras instancias que aglutinaban a miembros de comunidades marginalizadas. Una de ellas es la Unidad Comunal de El Salvador (UCES) conformada, entre otros, por CCC, UNADES.

Aunque en esos años se tenía planificado abrir un Centro de Formación no Formal con el apoyo de la Universidad de El Salvador, UES, no se logra consolidar por intervención política del MCS.

En este período también se logra una visibilización en distintos ámbitos de la vida nacional e internacional. Se organizó el Primer Congreso de Asentamientos Populares, en

1987 con la participación de miembros de comunidades y la Universidad Centroamericana “José Simeón Cañas”, UCA. Esta visibilidad valió el apoyo de personas identificadas con la problemática que denunciaba CCM. Mención especial tiene el sacerdote jesuita Francisco Cevallos quien apoyó muchas de las acciones emprendidas por la organización.

En 1988, el CCM forma parte del Frente Continental de Organizaciones Comunales (FCOC) y participa en el 4º Encuentro Continental de Organizaciones Comunales realizado acá en el país.

El 7 de mayo 1989 surge el Movimiento Comunal Salvadoreño. El enlace con las FPL en ese momento es Leonardo Hidalgo.

En ese año se da también la Ofensiva Final. En ella participan miembros de comunidades de CCM que militaban en el FMLN. La Ofensiva también significó el repliegue de los militares que cercaban las comunidades en ese momento.

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En los últimos años de la década de los noventa, CCM forma parte del Comité Permanente para el Debate Nacional por la Paz, CPDN, y desde entonces forma parte de las organizaciones que piden una salida negociada al conflicto armado.

Precisamente por la visibilidad y porque las acciones realizadas por CCM confrontaban el sistema hegemónico de ese momento, la represión estatal se recrudece sobre todo con miembros de las comunidades. Por esta razón algunos miembros se retiran del esfuerzo organizativo de CCM con miedo a ser asesinados por las fuerzas represivas.

En todo el país se da una violación sistemática de los derechos humanos que se ejercía sobre las personas que estaban organizadas. Se dio, en ese marco una serie de capturas de compañeros miembros de las comunidades y asesinatos de compañeros. En 1990 se da el asesinato de Blanca Marina Quinteros (Comunidad El Bosque) y desaparece Blanca Estela Melgar (Comunidad Nueva Esperanza).

Otro hecho que refleja el estado de represión en el que se vivía en esos años es la intervención al local de CCM que hicieron policías de la Policía Nacional del 30 de noviembre de 1989 al 24 de marzo de 1990.

Para poder representar estos elementos en una línea de tiempo y comparar el tipo de incidencia se tomarán las acciones más representativas de este momento según los distintos momentos se presenta una gráfica en la página 14. Momento de la transición democrática: 1990 – 1995

Después de los Acuerdos de Paz, CCM se integró a las iniciativas de apoyo a la transición democrática. Desde la participación en el CPDN hasta la búsqueda de garantizar procesos de integración de comunidades repatriadas de Honduras coordinado por CRIPDES, el trabajo de CCM siempre estuvo volcado a las necesidades sociales y políticas del momento.

También se colaboró

Para la ofensiva nuestro local estaba por la Santa Anita. El 29 de noviembre fuimos al local a traer alimentos. Allí ya habían detectado y nos tenían bajo vigilancia… allí llegaba la gente a traer alimentos. En eso cayó el operativo del Batallón Pantera de la Policía Nacional. Allí teníamos una caja d propaganda. Nos llevaron a todos vendados a la policía. Este es el país donde nunca se ve. De la UCES empezaron a denunciar. Hubo tortura psicológica, física… yo pensaba, estando en la cárcel que salía viva o me mataban, pero no iba a comprometer a más gente.

Miembro de CCM Entrevista, abril 2005

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con el apoyo logístico del desmontaje del Frente Paracentral “Dimas Rampirez”. Se apoyó con láminas, alimentos, etc.

Otra iniciativa de este momento es el Foro de Concertación Económica y Social. CCM formo parte activa de este espacio. Desde él se buscaba garantizar la superación de los problemas de inequidad que generaban condiciones de pobreza extrema. Por razones externas, esta iniciativa no se consolidó.

Las acciones de tierra realizadas ese año fueron las comunidades 16 de marzo de Soyapango y San Luis de San Salvador en 1991. Esta última toma se realizó en una colonia de sector de ingresos medios pero fueron desalojados por un combinado de la Policía Nacional, Antimotines y el Ejército. Dos semanas después de ese desalojo, el 8 de julio de ese año fue asesinado el vigilante de CCM Martín Ayala. El apoyo de las organizaciones y de las comunidades a raíz de este asesinato fue masivo. Pese a que se denunció públicamente y se exigió justicia, no se inició proceso judicial. Fue uno de los miles de asesinatos que quedaron impunes durante el conflicto armado.

Desde ese hecho no se hizo ni un proceso de toma de tierra hasta cuatro años después, en febrero de 1995 cuando se tomó el terreno de la comunidad María Campos.

En 1990 se celebró el sexto aniversario de CCM. Pese a que en ese momento se había impuesto el Estado de Sitio por el Gobierno. Este suspendía de garantías institucionales. La respuesta de las comunidades a esta actividad marcó precedente por masiva. Esta rompió con el clima de miedo que se vivía en ese momento.

En términos organizacionales, el 24 de febrero 1994 se constituye la Asociación para el Desarrolla Comunal, CCM.

En este período se crearon clínicas con el apoyo de APDCA pero este proyecto se terminó por discontinuidad del financiamiento. También en este período se invirtió en la creación de una oficia de bienes raíces, pero por falta de terrenos e inmuebles en los que se pudiera invertir se suspendió.

También CCM participan en una iniciativa de preparación de cuadros políticos para diputados, alcaldes y concejales convocada por FLACSO El Salvador. Se participó en ella junto con otros movimientos sociales lo que permitió definir procesos y formas de diálogo político institucional. Momento de fortalecimiento interno frente a un contexto político adverso: 1995 – 2000

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Este cuarto momento se caracteriza por dos corrientes opuestas que contribuyen al debilitamiento en incidencia política de CCM. Por una parte se fortalece el nivel interno con el crecimiento de las comunidades atendidas, pero por otra, no se obtiene el apoyo de los niveles políticos lo que impide introducir cambios estructurales significativos a la situación de precariedad de las comunidades.

Durante 1996 se acompañó el proceso de toma de tierra de la Comunidad Cristo Redentor, en Mejicanos – Ayutuxtepeque.

En el plano de la

visibilidad política, se participó en espacios de organización regional como la Federación Centroamericana de Organismos Comunales en sus Asambleas Regionales. También se ejerció presión para presentar las propuestas de Ley para la legalización de tierras para su discusión y aprobación en la Asamblea Legislativa en 1996 y 1998. Pese a estos esfuerzos, se enfrentaron obstáculos en los espacios

de concertación por instituciones públicas. Con relación a las plataformas de ley no se contó con el apoyo político, ni del FMLN

También se apoyó los procesos democráticos a través del aporte y colaboración conjunta a los gobiernos municipales de izquierda. En estos momentos se puede constatar como, pese a este apoyo, hay muy poco apoyo de parte de gobiernos locales y diputados.

En el plano de la capacitación, se establecen procesos de formación permanente a líderes comunales. En 1997 se inicia un proyecto de formación de un grupo de jóvenes. Por falta de apoyo financiero no se puede responder a las necesidades sufridas por los jóvenes lo que produce que este proyecto no tenga continuidad.

En ese período se dio un crecimiento organizativo que se extendió a otras zonas (Guazapa, popa, María Madre de los Pobres - Chacra). Se desarrolla una nueva estrategia territorial organizativa, a partir de la formalización de intercomunales: ADECOZAC, Zacamil; Arco Iris, SanLuis I, II y II, Roca del Sur, San Salvador; 22 de abril, Zona 14/16, Soyapango; Asociación Territorial de Guazapa (ADECOG); Intercom Las Moras. Se apoyó la Organización comunal en Tacaba. Se planifica un proyecto de Agua en Jardines, Colón. También se inicia un trabajo en Panchimalco y Caluco.

El apoyo de ACSUR Las Segovias

permite la construcción de viviendas en Santa Rita, Ciudad Delgado.

El crecimiento organizativo que se tuvo en estos años fue frenado rápidamente por

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diversas razones. Se desarticuló el trabajo realizado en las intercomunales ADECOG, de Guazapa; Las Moras, de Colón; Roca del Sur, de San Salvador por conflictos políticos. En el caso de las comunidades dispersas hubo que suspender el trabajo por falta de recursos. En 1999 inicia una fuerte crisis económica CCM.

En 1996 CCM fue víctima del la ola de violencia delincuencia que desde esa época enfrenta el país. Al administrador, Ricardo Navarro, y al motorista, Mauricio Ávalos les robaron 84 mil colones al administrador y al motorista los asaltaron, robándoles 75 mil colones y el vehículo de trabajo de CCM. Este hecho generó un conflicto interno en CCM pues, después de una profunda investigación interna, se descubrieron vinculaciones con un grupo de personas, miembros de la organización. Esto obligó a una depuración crítica lo que planteó a CCM un nuevo reto por superar.

Este hecho le planteó el reto a CCM de garantizar mecanismos eficientes de probidad que garantizaran la auditoría permanente y permitieran regenerar la base de confianza establecida con los organismos de cooperación que estaban apoyando a la organización.

Estos eventos coincidieron con la finalización de un proyecto marco con ICCO, Holanda. Esta organización era financió en su totalidad los gastos de funcionamiento de CCM desde 1988. Era la principal entidad cooperante. Después de un período en el que CCM no tenía que gestionar proyectos específicos para su financiamiento pasa a generar capacidades que le permitieran ser un gestor de recursos compitiendo con otras organizaciones que en ese período terminaban con las entidades financiadotas externas.

Aunque nos hemos enfocado en CCM, esta era la situación que se vivía en todas las organizaciones que de alguna manera trabajaban en proyectos de desarrollo. El Salvador había dejado de ser prioridad en el mapa de los países con mayores necesidades. Fue este evento el que inició una profunda crisis económica en CCM. Fueron seis meses en los que, por compromiso personal de los miembros siguieron acompañando a las comunidades, aunque esto representara trabajar sin ningún financiamiento externo.

En 1998, El Salvador fue afectada por el Huracán Mitch. CCM coordina apoyos a algunas de las comunidades afectadas por el Huracán y permite introducir con más fuerza la reflexión sobre la gestión de riesgos en la agenda temática y ampliar el trabajo territorial. Momento de renovación política frente a crisis económica: 2000 – 2005

Este es el momento actual de la organización. Podríamos caracterizar este período por dos corrientes igualmente opuestas, pero que permiten espacios de consolidación organizacional que pueden paliar las amenazas que el contexto presenta. En este momento podemos ver una apuesta institucional por renovar y fortalecer la organización comunal.

De hecho, el esfuerzo por sistematizar la experiencia de trabajo que tiene la organización es una búsqueda honesta por reconocer los aciertos y desaciertos que se han cometido en el complejo proceso de fortalecer espacios democráticos en las comunidades marginalizadas y de esa manera contribuir a la resolución de sus necesidades básicas.

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Entre las acciones que se han desarrollado en este período tenemos, el apoyo a Comunidades afectadas por terremotos de 2001con víveres y materiales. Como el país es un territorio con una diversidad de riesgos sociales, económicos y naturales, CCM ha debido consolidar formas de respuestas que atiendan las emergencias, pero que a su vez se incida en la consolidación de una cultura de la prevención.

También se inicia el trabajo con Panchimalco, Candelaria, Nahuizalco, Comasagua, Apopa, Zacatecoluca (ADMZ) y zona norte de Santa Tecla. La ampliación de las zonas de trabajo se hace aún cuando en estos momentos se atraviesa una fuerte crisis económica. El trabajo con Panchimalco y Comasagua es débil por falta de recursos para la atención. La comunidad que se atendía en Comayagua tenía características que superaban las posibilidades económicas de CCM para mantener una infraestructura que pudiera abarcarla. Es una comunidad dispersa, lo que supone un mayor gasto en desplazamientos y recursos de funcionamiento.

Con relación a las tomas de terrenos, si bien para este período han disminuido con relación al período de 1987 a 1990, se realiza la toma en Colón en 2001. Por presiones del gobierno municipal ya que era terreno municipal. De esta manera, se efectuó el desalojo del terreno de la comunidad de Colón, pero que fue reubicada posteriormente.

En el año 2004 se realizan cuatro acciones significativas para CCM. En primer lugar, se da apoyo a los afectados por el Fallo de la Haya, en la comunidad Rancho Quemado, frontera con Honduras. Se apoya en la organización comunitaria y en las gestiones para la obtención de personería jurídica y capacitación.

La segunda acción ese año es toma de terreno donde se ubica actualmente el local CCM. También y muy significativo para las acciones de formación, CCM se incorpora al MPR-12 desde donde se coordinan acciones de incidencia política y de capacitación.

La cuarta acción significativa es la declaración de autonomía política. Como movimiento social se declara públicamente la separación de los intereses comunitarios de los intereses partidarios. Esto es un elemento positivo que sitúa a CCM en una posición de ventaja política, con relación a los funcionarios públicos. La labor de CCM en la lucha por los derechos de las comunidades marginalizadas trasciende las coyunturas políticas y los períodos eleccionarios.

En el ámbito organizativo comunal se crea la Concertación Comunal de El Salvador, CODESAL. Esta iniciativa no se consolida por falta de voluntad política y compromiso con el movimiento.

Líneas de tendencia (Incidencia)

Las líneas de tendencias son representaciones gráficas sobre temas claves o específicos que tienen que ver con la recuperación de la historia de CCM. Las líneas de tendencia se aplican para graficar el tipo de proceso que se ha desarrollado evaluando su grado de intensidad o incidencia.

La información que se ha tomado para el análisis son variables significativas que surgen de la revisión histórica de la experiencia de CCM. Los niveles de intensidad se han graficado a partir de las percepciones que los mismos entrevistados tenían sobre

19

esos temas. Las variables son: Participación y vinculaciones políticas partidarias; toma de tierras; vínculos organizacionales internacionales; y organización comunitaria.

Gráfico 1

Fuente: Elaboración propia

Niveles de incidencia o intensidad según color.

Alto Medio Bajo

Nivel alto

Nivel

medio

Nivel bajo

1980 - 1985 1985 – 1990 1990 – 1995 1995 – 2000 2000 – 2005

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a. Participación y vinculaciones políticas partidarias

La participación y vinculación política corresponde a la relación que mantuvo CCM con el FMLN. Durante la década de 1980 hubo una vinculación muy estrecha. Esta se caracterizaba por definir líneas de trabajo en la que se compartían objetivos. En ese momento, la represión política sufrida por los miembros y la situación de crisis permanente que se vivía en la que se comprometía la vida de los integrantes el vínculo con el FMLN era fuerte y de mucho compromiso políticos. Específicamente, el vínculo se estableció con las miembros que en ese momento formaban el Frente de Liberación Popular, FPL.

En la década de los noventa, se establecen relaciones con los gobiernos locales administrados por partidos de tendencia izquierda. En las elecciones de 1997 se viven El Salvador el momento más significativo de transición democrática. Los gobiernos locales de los municipios del Área Metropolitana de San Salvador y las cabeceras departamentales son administradas por partidos de izquierda (FMLN y coaliciones). Al inicio se retomaron, sobre todo en el AMSS programas y proyectos que desde los gobiernos locales favorecerían las condiciones de las comunidades marginalizadas. El problema ha sido que por limitaciones administrativas, en el marco legal o por indiferencia de algunos funcionarios no se ha avanzado mucho en la seguridad jurídica de los terrenos en los que viven los miembros de las comunidades con las que trabaja CCM. Solo en aquellas administraciones municipales donde los problemas de las comunidades se han trabajado de manera sistemática se han alcanzado objetivos concretos, tal es el caso de algunas comunidades de Santa Tecla.

La distancia que ha marcado el poco apoyo real de las administraciones locales a las comunidades marginalizadas ha tenido como resultado más palpable la separación y declaración de autonomía de CCM en los últimos cinco años (2000 – 2005).

Una de las consecuencias más palpables de esta relación política partidaria es la vinculación que algunos de los miembros de las comunidades entrevistados siguen haciendo de CCM con el FMLN, pese a la declaración de autonomía. Este ha sido y representa un reto para CCM pues sus miembros expresan claramente que la autonomía es necesaria para un movimiento como este. Él representa los intereses de las comunidades que en ocasiones se opone a los intereses de las administraciones públicas, sobre todo locales.

Las comunidades marginalizadas representan de forma concreta la poca eficacia que tienen los gobiernos (tanto local como central) de responder a las necesidades, incluso básicas, de sus habitantes.

Las condiciones de precariedad jurídica, social y económica de los que habitan las comunidades y de los que obtiene CCM su razón de ser dejan ver el fracaso de las políticas públicas.

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b. Toma de tierras

Las tomas de tierra fueron acciones realizadas desde 1987. Estas se concentraron en los años que 1987 a 1995. De ese año a la fecha las tomas de tierra no son parte de las acciones de CCM. Aunque se expone un análisis detallado de esta experiencia en el siguiente apartado, se puede adelantar que esta ha sido una de las acciones más significativas y de mayor visibilidad que ha realizado CCM.

En las entrevistas y encuestas realizadas a las distintas personas en esta

investigación, la toma de tierras aparece como una de las experiencias más significativas en el movimiento por mejorar las condiciones de vida de las personas de comunidades marginalizadas.

Ellas nacen en un contexto políticamente adverso, pero de mucho compromiso

personal y apoyo de distintas organizaciones. Fue una acción que motivó una organización más sistemática y que posibilitó la participación de todos los miembros de las comunidades.

Esta acción dejó de realizarse por varias razones (políticas y económicas), pero

el problema que intentaban resolver está vigente: la falta de una vivienda para un porcentaje importante de la población. Es una de las tareas pendientes resolver este problema, vital en la garantía de los derechos fundamentales de las personas. Cuál es el papel que debe tener CCM en estas necesidades es motivo de reflexión para sus miembros. Aunque es deber del Estado garantizar el acceso a este derecho, CCM debe tener un papel importante y de mayor visibilidad para incidir en las políticas públicas con mayor eficacia.

Gráfico 2

Nivel alto

Nivel

medio

Nivel bajo

1980 - 1985 1985 – 1990 1990 – 1995 1995 – 2000 2000 – 2005

Fuente: Elaboración propia

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c. Vínculos organizacionales internacionales

CCM es referente internacional de la experiencia comunitaria en El Salvador. Lo ha sido desde los pimeros años de fundación. Los vínculos con orgnizaciones internacionales han permitido trabajar en dos líneas: la financiera-institucional y la organizacional formativa.

En la primera línea es interesante ver, en la tendencia, cómo el trabajo con y

desde las comunidades desde el incio permitió a CCM legitimarse frente a distintas organizaciones. Uno de los apoyos más importantes se obtuvo con el financiamiento de ICCO de Holanda. El trabajo desde este organismo de cooperació permitió cubrir los gastos operativos y de gestión de proyectos de CCM, durante el período de 1988 y 1998.

Al finalizar este financiamiento se enfrentó una crisis que supuso replantear las

formas de trabajo. De pensar en un financiamiento global tuvo que pensarse la gestión administrativa desde proyyectos específicos que permitiera cubrir los gastos mínimos y la continuación del apoyo a las distintas comunidades.

Actualmente se cuenta con el financiamiento de dos proyectos desde los que se

distribuyen los gastos de operación de CCM. De la segunda línea (la organizacional formativa) resulta prioritario rescatar los

vínculos que se han ido estableciendo desde CCM con otras organizaciones y movimientos sociales de la región centroamericana y latinoamericana. En este sentido, CCM garantiza su espacio y participación en acciones de resistencia a las políticas regionales en el marco de los derechos económicos, sociales y culturales (DESC).

Especial énfasis tiene la participación de CCM, con otras organizaciones

nacionales y regionales en las acciones de resistencia frente al TLC. Pertenecer a organismos regionales de resistencia lo ubican en una posición muy

interesante en el marco de las relaciones interinstitucionales.

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Gráfico 3

Nivel alto

Nivel

medio

Nivel bajo

1980 - 1985 1985 – 1990 1990 – 1995 1995 – 2000 2000 – 2005

Fuente: Elaboración propia Línea financiera institucional: Línea organizacional formativa:

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d. Organización comunitaria

La organización comunitaria es una de las principales apuestas de CCM. Esta se ha visto fortalecida por el acompañamiento que desde CCM se hace. Aunque la mayoría de comunidades mantienen una organización fuerte, las comunidades donde CCM ya no ha podido continuar por falta de recursos se han visto debilitadas.

La debilidad en algunas de las comunidades organizadas es producto de la inestabilidad y poca constancia dentro de las personas que en las comunidades se hacen cargo de los problemas comunales. En las comunidades en las que se entrevistó a sus representantes y donde la organización es débil se manifiesta el deseo de las comunidades es que CCM regrese para fortalecerse.

No está de más hacer énfasis en la necesidad del fortalecimiento de las

comunidades para que sean estas capaces de integrar a la mayor cantidad de personas a la organización propia y garantizar así la posibilidad de relevos internos. La integración a las actividades de organización de los jóvenes es un tema fundamental y que desde las comunidades se siente con fuerza.

Gráfico 4

Nivel alto

Nivel

medio

Nivel bajo

1980 - 1985 1985 – 1990 1990 – 1995 1995 – 2000 2000 – 2005

Fuente: Elaboración propia

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b. Las comunidades

Análisis histórico por comunidad

En la siguiente tabla se presenta una síntesis de los momentos más

representativos en la historia de las distintas comunidades. En ella puede verse el tipo de relación que se ha mantenido con CCM, por comunidad. En distintos momentos, todas las comunidades han recurrido a la organización para orientación de trámites legales o para formación de líderes.

Tabla 1 Comunidades Eventos importantes Rosita •Formación de la comunidad por terremoto (1965)

•Formación de primera directiva (1987) para el acceso al agua •Inicia relación con CREFAC – CCM para fortalecer organización comunitaria – Personería jurídica 1992 •Proyectos realizados: Baños, aguas negras, pasajes, casa comunal (1990 – 2000) •Principal decepción: legalización de tierra

Progreso III •Inicia la comunidad (1965) •Primera junta directiva (1987) •Proyecto de agua exitoso (1992) •Estatutos y reglamento interno (1994) •Resistencia de la comunidad ante desalojo. Apoyo de CCM (1996) •Se han logrado proyectos para la comunidad

Santa Rita –Eventos fundamentales •Fundación de la comunidad. Terremoto (1965) •Amenazas de los dueños del terreno (1975 – 1976) •Incendio en cohetería. Un muerto (1979) – Apoyo de las organizaciones FAPU y LP 28 •Ofensiva (1989) •Inicia relación con CREFAC y CCM – Compra de terreno con su apoyo- Organización de la comunidad •Nace CCM 1984: Inicia acompañamiento. Comunidad acude a actividades convocadas por ellos •Proyectos para acceso a servicios: aguas negras. * 1996 – 1997: se ejecuta el proyecto de viviendas con ACSUR Las Segovias.

Villa Olímpica •Llegamos al terreno en alidad de colonos (1973) •Terreno cae en embargo . Organización comunitaria para defender la tierra (2001). Organización de directiva •Antonia es el vínculo con CCM: formación de directiva, capacitaciones (2005) •Ayuda del COEN para casas (2001)

Comunidades Eventos importantes Valdivieso •Se inició la organización en 1978 para gestionar vivienda

•Pleito con dueña de terreno vecino (1986-1987). Se volvió a organizar la comunidad •Niño herido por un vecino que quería quitarles la tierra (1990) •Orden de desalojo - Inicia relación con CCM – apoyo en la organización •Búsqueda de apoyo con alcaldía de ARENA – no funcionó •Gestiones para la legalización – no se han concretado •Asistencia a capacitaciones en CCM •Nuevas amenazas de desalojo (2005)

María Victoria *1979 Asentamiento de la primera persona, Maria Victoria. Terreno

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público del MOP para vía pública * Por el terremoto de 1986 nuevas familias afectadas se asentaron en el lugar (26 familias) * Desde la alcaldía municipal de ARENA se intenta desalojar (1991). Por estas acciones se forma la directiva y se acude a CCM para orientación. Ellos han apoyado las luchas de a comunidad con los diputados del Frente * Se logra apoyo de la Asamblea para proteger la Comunidad, pero en el 2000 vino una nota formal de desalojo. * VMVDU presentó la propuesta de un terreno para reubicar, pero fuimos con la promotora de CCM y mostramos con fotografías que no era habitable. * Se hizo una petición de amparo a la Corte y se ganó. El proyecto de calle se daba por terminado: 2000 * La alcaldía propuso dar un terreno a la comunidad: enero de 2001 se fue a ver el terreno * terremotos de 2001: la comunidad no sale afectada, peo esa es la excusa para no dar el terreno prometido. Se declaró de alto riesgo, aunque ahora, allí se está construyendo.

Los Santos •Se llega de varias comunidades al Externado San José (1979) •Instalación en Tutunichapa, pero Guardia desaloja (1979) Allí se estuvo los primeros días. Se salía de allí a manifestaciones al centro. •Participación en las tomas a la universidad, a iglesias (El Rosario, Catedral) •Incorporación de gente de la comunidad a las FPL. Ellos apoyaros a comunidades marginales •En 1980 se llegó al terreno. Se instalaron viviendas temporales •Se llegó a CREFAC para el conflicto y de allí al CCM: * En el gobierno presidencial de Napoleón Duarte, la comunidad participó en todas las reuniones de CCM. En este momento se logró legalizar la tierra. CCM compró el terreno, pero se sufrió la represión de la guerra •Ahora la gente ya no se compromete.

Fuente: Elaboración propia

Comunidades Eventos importantes Cantón Victoria •La comunidad tiene años de haber sido fundada.

•Primera directiva: 1980. Se formó para distribuir el agua •Apoyo de Plan Padrino para casas (1979) •Cuando llegó el Frente a la alcaldía mandaron un promotor y se empezaron proyectos mas grandes: calle, reconocimiento legal •Construcción de casas para el terremoto (2001) – Se hizo censo •Hay un 25% de personas con problemas de legalidad de tierra •Relación con CCM (1997): Apoyo en formación, en convivencias

Amaya •Desplazamiento del interior a la zona urbana (1980) •Relación con CREFAC – CCM •Terremotos: fuerza de organización •Inicio de trámites para el terreno (1987 hasta ahora) •Consecución de personería jurídica – formación de directiva – Elaboración de plano (1990 – 1993) •Aviso de desalojos: 1995 – 1998 – 2001

Pipil •Formación de la comunidad por desplazamientos por a guerra (1983) •Apoyo del Plan Padrino a gente de la comunidad – láminas y madera •Presencia de Celina Monterrosa – organización comunitaria (1985) •Acceso al agua (1986)

Bosque •Se forma la primer directiva 1984 – participación de los jóvenes •Con el trabajo organizativo se han conseguido los servicios (1984 – 1990)

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•Presiones de la alcaldía para vender el terreno (1986). CREFAC y CCM compraron el terreno •Acusados de guerrilleros durante la guerra – Asesinato de una joven de la comunidad para la guerra •Apoyo de CCM: Enseño cómo organizarse. Se perdió contacto en el 89

Fuente: Elaboración propia

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Comunidades Eventos importantes 4 de octubre * La Comunidad nace con los afectados del terremoto de 1986

* Se hizo la toma con el apoyo de CCM. Ellos consiguieron los materiales * Con la organización comunitaria se logró el acceso a servicios * El terreno se logró legalizar

Cantón El Castaño, caserío Agua caliente

* La primera organización fue como en 1987, pero el alcalde decía que eso era volver a los tiempos de antes. * Ante la oposición solicitamos apoyo a CCM. Estaban en la 25. Desde entonces se ha participado en capacitaciones. Se mantiene fortalecida a la organización * Las relaciones con los alcaldes han sido difíciles * e legalizan los terrenos en 1997 * La comunidad se vio afectada por el Mitch, pero se pudo atender la necesidad. Gracias a CCM se pudo hacer contactos para proyectos de vivienda * Proyecto de luz: 1999 * Proyecto de agua para todo el pueblo, en el 2000 * Para el terremoto de 2001 se logró, a través de CCM conseguir láminas para casas en el arzobispado

Porvenir •Comunidad nace por terremoto de 1986 •Organización de primera directiva para gestionar proyecto de servicios 1992. •En ese año y por contacto con la alcaldía que llega CREFAC. Ellos inician con capacitaciones. Se hizo un plan de trabajo que organizó el desarrollo de la comunidad •Apoyo de CCM, desde el conflicto 1991 •Lucha por legalizar el terreno (12 años)

Capulín, Colón * La gente tiene de estar acá entre 15 y 10 años. Vinieron en los ochenta. * Se empezó a hacer una directiva, porque colonia sin directiva no es colonia. La primera directiva se formó como en 1986. * Las familias venían de San Andrés. Fueron reubicadas acá. * En esos años vino también el Plan Padrino * En 1990 ya vino más gente * En 1992 se logró poner el agua con la directiva * La luz la puso cada quien individual. Quisimos unirnos pero no se pudo * 2001: para los terremotos se organizó para conseguir ayuda. También se formó un comité de emergencia * CCM nos ha apoyado con capacitaciones * Se está luchando por la legalización. Ya casi sale. Llevamos 8 años en esto

Fuente: Elaboración propia

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Comunidades Eventos importantes 16 de marzo •La comunidad es producto de una toma de terreno en el 91. Fuimos con

CCM y ellos apoyaron con láminas y materia para las casas •En ese momento se formó una directiva y otra para el agua. Se consiguió instalar algunas conexiones de luz •La vivienda fue después, pero para eso vinieron de otras instituciones •Con CCM se logró la escrituración de terrenos 1997 •Se perdió el vínculo con CCM desde 1998 o 1999 •Directiva y comunidad desmotivada a participar

Cantón Álvarez •Se forma la directiva en 1995 •Los proyectos que se hicieron nacieron de necesidades: energía, agua, vivienda, letrinas, escuela. •Instituciones han venido apoyando en los distintos proyectos •Viene CCM en el 2001, para el terremoto y empezaron el apoyo a la comunidad con proyectos de capacitación, vivienda, tanques, letrinas, muro de contención •Se han organizado comités que trabajan bien

PROVIDA, Nahuizalco

* En los años 1999 – 2000 nace esta organización para dar respuesta a la necesidad de la gente de esta zona: vivienda. La gente tiene escrituras, pero no tiene con qué construir. * definición del nombre: “estamos para darle vida a la organización... darle vida, desarrollo al niño, a la mujer, a los jóvenes...” * Los que trabajan en PRÓVIDA lo hacen dando su tiempo en voluntariado. * Terremotos de 2001 hizo que diversas instituciones apoyaran en proyectos de vivienda * La gente se acercó a nosotros y no hallábamos cómo hacer. Allí se fue a pedir apoyo a CCM. Nos habían hablado de ellos: 2002 * CCM ha apoyado orientando lo de la personería jurídica y en capacitaciones * El gobierno municipal no ha apoyado.

Asociación Comunal Candelaria

•La Asociación nace en 2001 por la emergencia de los terremotos, con el apoyo de la Fundación Romero •Fundación Romero los vincula con CCM •Formación de la organización (2002) Trabajo en los estatutos. Apoyo y acompañamiento de CCM •Enfrenamiento con el Alcalde. Al final logran legalizar directiva •Trabajo en proyectos productivos: peces y conejos

Fuente: Elaboración propia Análisis organizativo

En el análisis organizativo por comunidad pueden identificarse las comunidades con organización más fuerte y las comunidades cuya organización es débil.

Las características de las organizaciones comunitarias fuertes están vinculadas a la existencia de proyectos que permiten concentrar acuerdos y unir esfuerzos comunes. También las organizaciones comunitarias fuertes tienen dentro miembros con mucho liderazgo, capaces de convocar a toda la comunidad.

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Tabla 2. Organizaciones fuertes

Comunidades Perfil organizativo: características de la organización Amaya - Organización inicial de la directiva

- Divisiones entre los de la comunidad generada por el acceso a servicios - Instituciones con presencia/ trabajo en la comunidad:

• FUNDASAL • ACISAM

Santa Rita - Organización comunitaria fuerte - Compromiso comunitario y con CCM - No hay presencia de otras instituciones

Villa Olímpica - Comunidad organizada por la presencia de CCM - Apoyo de la comunidad a actividades organizadas por CCM - Gestiones de la comunidad para legalizar la tierra

Asociación Comunal Candelaria

- Organización alrededor de proyectos productivos - Organización con vínculos con otras instituciones: REDES, CARE, CESTA, TROCAIRE - Organización desde la comunidad con un enfoque de desarrollo local *

Bosque - Organización comunitaria fuerte. Por ella es que se han obtenido servicios y proyectos. - La comunidad ha tenido mártires - Los principales problemas para la organización son las iglesias evangélicas. Hay comodismo, pero para necesidades alli están. - Problema de la comunidad: violencia intrafamiliar.

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Comunidades Perfil organizativo: características de la organización

Cantón Victoria - La organización comunitaria se ha mantenido - La formación y convivencias de CCM han fortalecido la comunidad - Presencia de instituciones: Alcaldía, Champagnat - Necesidades de la comunidad: calle, arreglo de pasajes, drenajes, tuberías, presión del agua

PROVIDA, Nahuizalco

- 15 comunidades, cada una con su junta directiva - Se quiere legalizar, pero el alcalde no apoya - Apoyo de CCM: Capacitaciones, asesorías, proyecto con TROCAIRE de cultivos hidropónicos, proyecto de participación ciudada, elaboración de censo - Instituciones con las que se trabaja: se pidió apoyo a PRÓVIDA, la de salud; PROCOMES

Porvenir - Organización fuerte por el apoyo de CCM y alcaldía - Gestión de proyectos por la comunidad - Necesidades: proyecto de alcantarillado, agua domiciliar, iniciar proyectos productivos

Cantón Álvarez - Organización fuerte. Asignación de responsabilidades en comités - Apoyo en formación de líderes por CCM - Los proyectos han unido a la comunidad - Instituciones: Alcaldía, MINED, ISN

Capulín - La directiva se formó desde 1989. - Se está luchando por la legalización - CCM lleva 15 años acompañando a la comunidad. Se han recibido capacitaciones

María Victoria - Organización fuerte. Se ha logrado el acceso a los servicios gracias a eso. - Apoyo de CCM a la comunidad

4 de octubre - La organización comunitaria se ha mantenido fuerte. Ahora, son los hijos de los primeros que llegaron los que están en la directiva - Se tiene el apoyo de otras instituciones: CNSP, alcaldía

Cantón , El Castaño, Caserío Agua calientes

- Organización fuerte - Vínculos con salvadoreño que vive en EUA: dona a la comunidad cosechas de su terreno - Otras instituciones con las que se ha trabajado han sido contactos de CCM

Fuente: Elaboración propia

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Las organizaciones débiles están relacionadas con la ausencia de líderes que

convoquen y den continuidad a los proyectos. Las directivas tienen poca representación y legitimidad en la comunidad. El problema de las organizaciones comunitarias débiles tiene menos que ver con los recursos económicos que con la voluntad y el compromiso con los intereses de la comunidad.

Tabla 3. Organizaciones débiles

Rosita - Organización comunitaria débil - No hay personas jóvenes que den continuidad a la organización - El no conseguir la legalización desanima a la organización comunitaria - La gente no colabora o participa en actividades convocadas por CCM – vínculos políticos

Pipil - Organización comunitaria débil - No hay gente que quiera responsabilizarse y participar - Apatía de los jóvenes con la organización comunitaria - Directiva provisional con poca fuerza

Valdivieso - La organización se fortalece y se deblita por períodos. El problema de los desalojos nos une - Poca participación de miembros en las capacitaciones de CCM – Los que asisten valoran positivamente el apoyo

Progreso III - Organización comunitaria débil por presencia e influencia de una familia – planes de trabajo no han funcionado - Ahora la junta directiva de la asociación comunal solo está integrada por mujeres. Los hombres no se comprometen - Presencia de otras instituciones: CNSP, AMSS, ASTAG

16 de marzo - Organización débil. Se han estancado una serie de proyectos - No hay motivación de la gente - Una vez dueños de las tierras, la gente ya no se quizo mover - La gente de la comunidad no va a las actividades de CCM - Problemas políticos dentro de la comunidad

Los Santos - La organización de la comunidad se ha debilitado porque ya no hay gente comprometida - La gente ya no participa en las actividades que CCM convoca - Los hijos de la comunidad original se han tomado el área verde de enfrente. Se ha hecho Los Santos 2 - No hay presencia de ninguna otra institución acá

Fuente: Elaboración propia

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c. Experiencias significativas

i. Tomas de tierras

Las tomas de tierra son una de las experiencias que más ha marcado CCM. En una encuesta realizada dentro de la investigación y que fue aplicada a representantes de distintas instituciones con las que CCM ha tenido relación, esta acción, la toma de tierra, aparecía como la acción más significativa en la historia del movimiento.

La toma de tierras surgió como un instrumento de presión política, por una parte, y como la salida inmediata a necesidades históricamente desatendidas por el Estado ante los sectores más empobrecidos. El evento que detona esta acción es el terremoto de 1986. La ya precaria situación de los asentamientos en condiciones de vulnerabilidad se revela en toda sus dimensiones. Una cantidad alta de familias residentes en el Área Metropolitana de San Salvador. La movilización de las poblaciones afectadas al interior de San Salvador fue grande. En ese momento y como recuso para que las comunidades no quedaran sin vivienda se organizaron las tomas de tierra. Para poder realizar las tomas de tierra se hacían hasta 6 asambleas para preparar a los miembros de las comunidades a la presión a la que se someterían y los costos que en esos momentos tenían este tipo de acciones. Costos que podían terminar incluso con la vida de la población. Una vez, en asamblea se acordaba realizar la toma, las actividades se iniciaban temprano en la mañana sin parar hasta terminar de instalar las viviendas que en un principio eran provisionales. Lo organización comunitaria puesta a funcionar a propósito de las tomas de

tierras permitió que muchas de las comunidades vinculadas a la experiencia mantengan junta, como mecanismo de gestión de las necesidades comunales. Pero las tomas de tierra no eran acciones instantáneas e improvisadas. Detrás de cada acción de este tipo se desarrollaba un trabajo de organización comunitaria fuerte. Para

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Cronología de las tomas de tierra

1987: 10 de abril, Ciudad Delgado San Luis I, II y II, San Salvador 21 de junio, Mejicanos 15 de septiembre, Mejicanos 4 de octubre, Mejicanos 1988: Altos de Jardines, San Salvador 1989: Comunidad Éxodo 29 de octubre, San Salvador 1991: 16 de marzo, Soyapango San Luis (22 de junio) 1995: Comunidad María Campos 1996: acompañamiento a Toma de Tierra Cristo Redentor, Mejicanos – Ayutuxtepeque 2001: 1º de abril, Colón, La Libertad

poder realizar una toma de tierra que lograra los objetivos propuestos se organizaban comisiones de trabajo: vigilancia, construcción de vivienda, comida, etc. Era toda la comunidad, hombres, mujeres, jóvenes, los que ponían su trabajo en las tomas de tierra con el apoyo solidario de miembros de otras comunidades. El papel de CCM era el de organizador, junto con las comunidades y gestionaban los materiales y recursos necesarios para efectuar la toma de tierra. Al hacer una revisión colectiva de lo que representaron las tomas de tierras, miembros de las comunidades y de CCM identifican dos fases en la realización de tomas. La primera fase corresponde a las primeras tomas de tierra (en 1986) que si bien se organizaban comisiones funcionaban de manera más improvisada. Las comunidades San Luis I, II y III y las comunidades instaladas cerca de los Juzgados, en San Salvador, son ejemplos de esas primeras tomas de terrenos de manera instantánea. Con la experiencia de las primeras tomas, se decide realizar la acción pero de manera más planificada. Para esto se iniciaba primero con la búsqueda de lugares adecuados, que reunieran condiciones mínimas y posibilidades de establecer asentamientos más permanentes (con los menores riesgos de desalojos). Las tomas de tierra eran los momentos de mayor presencia comunitaria. El ambiente de solidaridad, esperanzas, desafío al régimen, lucha colectiva por vivienda digna eran los ingredientes de esta fiesta comunitaria. Sentimientos de profunda entrega y temor por la vida se encontraban en las tomas de tierras. En esos años el conflicto armado y la represión estaban en un momento crítico. Todo tipo de organización que reivindicara los derechos mínimos se catalogaba de sospechosa, peligrosa. De enemigos públicos. Eso era CCM y los miembros de las comunidades quienes al realizar las tomas hacían visible la incapacidad del Gobierno de solventar las necesidades básicas de sus ciudadanos. Revisando la historia de CCM podemos encontrar 16 experiencias, aproximadamente de tomas de tierra entre 1986 y 2001. Si se busca entre la diversidad de experiencias las más significativas podemos citar los siguientes. a. 4 de octubre, Mejicanos Esta toma de tierra se realizó en 1987 y se pudo ubicar a tres comunidades en el asentamiento. Lo más significativo de esta experiencia fue la solidaridad de los miembros de otras comunidades y la misma comunidad quienes colectivamente enfrentaron los desafíos de la construcción en medio de un clima represivo. Una de las características de las tomas de tierra realizadas desde CCM era que se cnectaba agua y luz al momento de la toma. b. 16 de marzo, Soyapango Esta toma de tierra se hizo en 1991, en el municipio de Ilopango. Los protagonistas en la toma eran familias afectadas por el cierre del Instituto

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Regulador de Alimentos, IRA. Al momento de realizar esta acción, la oposición del gobierno fue grande. Se hizo un cerco militar para evitar la toma. Pese a esta presión oficial, en cinco años pudo obtenerse la legalización de la tierra. Se entregó a las familias los títulos de propiedad. c. 21 de junio, Mejicanos Esta acción también se realizó en 1987. Fue una de las más difíciles pues el gobierno había decretado Estado de Sitio. La comunidad pidió el apoyo y CCM, junto con las comunidades que lo conformaban en ese momento acompañaron a la comunidad. Se pensó realizar la acción en la Colonia San Mateo, una colonia para sectores de ingresos medios, medios-altos. Físicamente, esta colonia está próxima a espacios militarizados (Colonia Manuel José Arce, Estado Mayor, etc.). Tanto el lugar como el momento en que se hizo fueron significativos. Se rompió el miedo que la represión militar de ese momento generaba. También, simbólicamente, la localización de la comunidad entre una colonia de sectores medios representaba la posibilidad de vivir juntos sin importar el nivel de ingresos. La resistencia de los habitantes de la zona y del mismo gobierno fueron grandes. Al pasar los días y pese a las campañas negativas difundidas a través de los distintos medios de comunicación, los miembros de la comunidad se integraron a la cotidianidad del sector. Personas de las comunidades terminaron incluso siendo empleados de los primeros residentes. Debido a la presión existente, la comunidad fue reubicada, pero el peso simbólico que la toma representó ya estaba marcado. d. San José Obrero, San Salvador También, en 1987 se realizaron las tomas de las comunidades San Luis I, II, y III, ahora san José Obrero. La toma de este terreno generó una fuerte represión por pare de los Escuadrones de la Muerte, operando clandestinamente en esa época. A los directivos de la comunidad les pusieron en las puertas de sus casas el símbolo de la “mano blanca” utilizado para avisar que quien vivía en ese lugar era enemigo y sería “ejecutado”. La solidaridad de otras comunidades con la San José Obrero, en ese momento fue grande. Llegaban a vigilar para garantizar un mínimo de seguridad. Pese a esta represión, la comunidad siguió organizada, gestionando proyectos a través del apoyo de instituciones donantes. En 1990 se logró gestionar con FUNDASAL la construcción de vivienda en colaboración con el organismo Manos Unidas. La construcción duró 30 meses y aunque las gestiones han sido constantes hasta ahora se está buscando la legalización.

* * *

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… donde nos apoyamos en las

Tomas de Tierra de la 15 de

septiembre de Soyapango en el 89

y el 91 en la toma de tierra de la 16

de marzo de Soyapango donde

nuestra vida era expuesta ante el

peligro de morir por el ejército por

estar en plena guerra. Pero eso para

mí no era problema porque mi

familia estaba dispuesta a que si

me tocaba morir a mí o a ellos pues

esa era nuestra ofrenda por

defender a nuestro hermano pobre

y excluido de la sociedad.

Alejando Rojas

Carta personal Taller 10 de octubre de 2005

Una característica común a las toma de tierra ha sido la oposición de los grupos de poder, ya sea económico, político o militar. Sin embargo, estas acciones responden a las necesidades más básicas de la población. Las acciones de toma de tierra se hicieron buscando respuestas políticas, jurídicas y económicas a la presión militar. De hecho, un elemento significativo a esta búsqueda de respuestas es que todas las comunidades producto de las toma de tierra tienen vivienda permanente. Uno de los aprendizajes más significativos de las tomas de tierra es el grado de organización y los niveles de solidaridad que movilizaban a todos los que se involucraban con estas acciones. Sin embargo también se pueden citar dificultades que han hecho de las experiencias de tomas de tierra acciones que deben replantearse a la luz del contexto que vivimos La primera dificultad son los recursos. La toma de tierras requiere de una disposición mínima de fondos para poder proporcionar la seguridad que las comunidades andan buscando. Una Toma de tierra que no se alimente y fortalezca permanentemente está condenada al fracaso. Otro problema que se enfrenta es que no todos los vecinos se comprometen en la construcción de la misma manera lo que causa insatisfacción y malestar comunitario. También hay casos de personas que han obtenido su casa en los procesos de tomas de tierra, pero una vez legalizado el terreno de la vivienda es hipotecado a los bancos quienes son, al final, los beneficiados. Pese a esto se debe dejar constancia que el problema de la tierra es igual e incluso más agudo que hace 25 años. La mayor diferencia en este nivel de precariedad de tierras y viviendas dignas y el de los primeros años de CCM se enfrentaba con más fuerza comunitaria. Las acciones realizadas en colectivo daban elementos para pensar que se estaba en un movimiento social en gestación. Estos elementos son los que en estos momentos de revisión histórica hay que retomar.

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ii. Acceso a servicios

Además de la toma de tierra, CCM ha acumulado una experiencia significativa muy rica en la lucha por el acceso a servicios básicos. La luz y el agua son dos de los servicios más importantes y que garantizan el mínimo de condiciones para una vida digna. Ya se mencionó antes que en las comunidades que han sido producto de las tomas de tierra, la conexión de los servicios se hacía al mismo tiempo. Todas las comunidades han ido luchando por los servicios de diversas maneras. Cuando las comunidades están en situación de ilegalidad, el acceso a servicios es más difícil ya que el respaldo institucional es escaso o nulo. La población más pobre es la más vulnerable en este punto. El papel de CCM en este proceso ha sido de acompañamiento y organización. La lucha comunitaria por los servicios tiene una ventaja fundamental: los costos se comparten y por tanto se reducen. Tanto el acceso inicial a el agua y a la energía eléctrica representa un costo elevado para las familias que en condiciones de precariedad económica se asientan en las comunidades. La lucha por el acceso a los servicios ha sido, junto con las tomas de tierras, los puntos que más han fortalecido la organización comunitaria. La fortaleza de la organización comunitaria es la búsqueda colectiva de un objetivo. Luchar por una vivienda digna con sus servicios básicos garantizados han sido los detonantes iniciales para una participación comunitaria comprometida. Si bien es cierto son elementos muy concretos que una vez alcanzados tienen el riesgo de debilitar la organización, son puntos iniciales importantes al momento de pensar en fortalecer la organización de manera más permanente. Los consensos, apoyos, búsquedas que han surgido a propósito de la lucha por el acceso a servicios permite acercarnos a elementos concretos que fortalecen procesos más intangibles de participación ciudadana. Algunas de las comunidades que han luchado por el acceso a los servicios y cuya experiencia es significativa por lo que representaron son las siguientes. a. Comunidad San José Obrero San José Obrero es producto de una toma de tierra. Tanto el agua como la luz fue tomada de manera ilegal al inicio y se ha ido regularizando la tenencia por etapas. El acceso al agua se logró en 1988 tomando agua de la tubería madre de otra comunidad vecina. La conexión de agua se hizo, al principio con tres cantareras. En 1989, para la preparación de la Ofensiva se instalaron 12 cantareras más.

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Durante la ofensiva, en noviembre de 1989, se aprovechó a hacer conexiones domiciliares. En medio del conflicto se aprovechó la coyuntura. Al final de ese año ANDA le puso a la comunidad una multa de 30 mil colones. Organizados, se tomaron la calle frente a la institución y se logró negociar la reducción de la deuda a cuotas accesibles para los miembros de la comunidad. La energía eléctrica se tomó al momento de la toma de tierra, en 1987. Cada vecino instaló su conexión. CAESS cortaba todos los días las conexiones en la mañana, pero la comunidad ya las reinstalaba. Ese lucha constante por el acceso se realizó desde 1987 hasta 1992 cuando CCM, a través de un cooperante español, pudo gestionar un proyecto para la instalación formal.

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b. María Campos La comunidad María Campos ha enfrentado la lucha por los servicios desde sus limitaciones económicas. En el caso de la energía eléctrica, se contó con la ayuda del párroco de San Antonio Abad. En 1996 él se acercó a la comunidad a preguntar por sus necesidades. La organización comunitaria permitió presentar las necesidades concretas y entre esas, la principal era la energía. El costo por instalación era alto y el apoyo económico de la parroquia a través de un donativo permitió que el acceso a la energía por las familias de la comunidad fuera posible. En estos momentos son 27 familias las que cuentan con el servicio. En el caso del agua, la comunidad, también organizada, solicitó la instalación de una cantarera a ANDA en 1987. Aunque esa fue la solicitud, después de negociaciones con ANDA y gracias a un proyecto de instalación de acueductos, se pudo instalar en diciembre de ese año agua domiciliar para todos los miembros de la comunidad. c. Guazapa Las comunidades de Guazapa se asociaron como producto de los Acuerdos de Paz. En 1994 se aglutinaron nueve comunidades. El acceso a la luz se empezó a gestionar en ese momento con fondos de un programa de Naciones Unidas. En ese momento, el financiamiento solo alcanzó para la instalación de postes. En 1995, CAESS tomó la administración directa y querían 7 mil colones por la conexión. En ese momento, a raíz de la necesidad de la energía se empezó a fortalecer la organización. Como comunidad organizada se iniciaron gestiones para disminuir la cuota pero por desconocimiento de los trámites e instancias el proceso se hizo más largo. En ese momento, el apoyo de CCM fue vital para orientar los trámites. Todo el proceso de acceso a la energía fue negociado y CCM estaba a la par de la comunidad. Al final se pagó una cuota accesible por familia y se pudo tener conexión permanente de energía. Todo eso se logró en 1996. El acceso al agua fue otra lucha. En 1997 el gobierno municipal del FMLN apoyó, pero el problema del agua en toda la zona es grande. Es una contradicción porque el Cerro tiene grandes reservas que, sin embargo, no son accesibles para la gente de las comunidades. Con CCM se iniciaron las gestiones y se logró el apoyo de una ONG para el financiamiento de la construcción de un tanque. Esto aseguraba el acceso a la comunidad. Las gestiones no hubieran tenido éxito si la parte organizativa no hubiera estado fuerte. En eso CCM fue de mucho apoyo para la comunidad. Entre 1999 y 2000 se logró el acceso al agua domiciliar. La administración del agua la tiene la misma comunidad. Existe un Comité de Agua. En estos momentos se tiene el problema de un ganadero que aunque compró el derecho de conexión al Comité, su uso limita y dificulta el acceso a la comunidad. “Hay que esperar que tomen agua las vacas”, dice Guillermo García, miembro de la comunidad que comparte su experiencia en uno de los grupos de discusión. Pese a los logros que se han obtenido en materia de servicios, la organización ahora se ha debilitado mucho. El acompañamiento que se tenía de CCM ya no es el mismo pues parece haber otras comunidades con necesidades que en estos

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El acceso a los servicios es un proceso lento en el que la gente de las comunidades no debe desanimarse. No se deben dejar manipular por los gobiernos municipales ni por nadie. La gente se queda desprotegida con las coyunturas políticas, por eso es mejor tomarse la responsabilidad de los procesos por la propia cuenta de la comunidad. Ahora estamos en momentos críticos para la organización. Hay una cantidad de comités, para una cosa, para la otra, ligada a partidos políticos, a iglesias. Hay tantos pero todos luchan de manera separada. Hay que unirnos para que nuestra voz se oiga como una sola. Guillermo Francisco García Grupo de discusión, octubre 2005

momentos se encuentran resueltas en Guazapa. Sin embargo, se hace necesario retomar el trabajo conjunto para garantizar el acceso a otros servicios que si bien es cierto no son básicos (espacios públicos, espacios para la participación, etc.) si son necesarios para la consolidación de una sociedad más democrática. d. Comunidades de Ciudad Delgado En Ciudad Delgado, el proceso de organización comunitaria ha estado fuertemente relacionado a la lucha para el acceso a servicios. Las comunidades Progreso, Pipil, San Francisco, Ferrocarril, Tinetti y el Carmen se unieron para acceder a un proyecto de agua colectiva que gestionó CREFAC con CCM. Se paga una solo cuota al ANDA. Para eso se recolecta una cuota fija por cada familia. El sobrante de lo que se recolecta por mes se ahorra y sirve para necesidades comunitarias. Otras comunidades en Ciudad Delgado están gestionando el acceso al agua (como la Lotificación San Sebastián, cercana a la Ciudadela Don Bosco), pero se ha tenido una serie de escollos con el Ministerio de Salud para la concesión del permiso. Tanto la negociación con los miembros de las distintas comunidades como con instituciones responsables de los distintos servicios han sido el componente principal en la lucha por el acceso a servicios básicos. En todos los casos, la organización comunitaria fuerte garantiza una negociación con las instituciones más posibilidades de éxito.

* * * Pese a que la organización comunitaria

se ve estimulada con la lucha por el acceso a servicios, este proceso ha dejado una serie de enseñanzas para la labor organizativa de CCM. Este proceso de construcción y aprendizaje no ha estado exento de problemas y dificultades. Entre as mayores dificultades relacionadas al acceso de servicios están:

� En algunos casos críticos, algunos miembros de las comunidades se han lucrado de los servicios. Se han dado casos de abuso de algunos directivos de comunidades quienes iniciaron el proceso de lucha con la comunidad, pero los beneficios han sido aprovechados por una élite que gira alrededor de quienes tienen el control de turno de los servicios.

� El acceso a los servicios representa n costo bien alto por lo que la gestión desde la comunidad se vuelve necesaria.

� El acceso a los servicios básicos para las comunidades marginalizadas se vuelve más difícil porque las mismas instituciones (quienes se rigen según los parámetros de la oferta y la demanda comercial) no ven rentable

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dar servicio a las comunidades más pobres. Ha habido funcionarios que en sus declaraciones públicas reconocen que las personas que viven en las comunidades no son rentables.

Pese a estos problemas, la lucha por el acceso a los servicios sigue siendo válida y necesaria. Hay que garantizar el acceso a los servicios no solo con cantidad, sino con calidad. Para esto la organización comunitaria es básica. Desde ella puede ejercerse mayor presión a las instituciones destinadas a prestar los servicios.

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iii. Formación de líderes

Uno viene a aprender para poder defenderse y defender la

comunidad

Miembro de Comunidad, grupo de discusión

La tercera experiencia significativa en el trabajo que ha realizado CCM es la formación de líderes. El propósito de CCM es posibilitar las capacidades e incidencia política de los miembros de las comunidades. Desde su creación, CCM concibe a los miembros de las comunidades marginalizadas como sujetos de cambio. Son ellos, desde su acción anclada en la realidad de precariedad los que deben luchar por hacer visible las condiciones en las que se encuentran. Con la visibilidad de los problemas puede ejercerse presión real a los gobiernos locales y central.

Los procesos de formación tienen un propósito: desarrollar herramientas y condiciones para que las distintas comunidades tengan un papel más activo y transformador. También se busca formar una masa crítica de personas que sean sujetos activos en la transformación de las condiciones de exclusión social que se han vivido hasta ahora.

Estos objetivos han estado determinados desde su fundación, y aunque la creación de CCM respondió a un contexto de guerra en el que se buscaba una transformación radical, siguen siendo válidos porque las condiciones de marginación y exclusión se mantienen.

Por los procesos histórico-institucionales se ha podido constatar que son las mismas comunidades las que deben hacer visibles las contradicciones en un mundo donde el marketing político por un lado y las necesidades individuales por otro parecen ahogar las voces críticas.

Con ese espíritu se inician los procesos de formación en el mismo momento que se piensa en la conformación de una organización como CCM. Los procesos de formación se desarrollan sobre la base de la educación popular, que concibe a los sujetos como personas activas. La educación popular es participativa, talante que la CCM ha buscado consolidar desde sus inicios. Lo que se busca con la aplicación de metodologías de educación popular la reflexión colectiva.

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Un logro importante de CCM en sus inicios fue la capacitación y liderazgo. Este fue un fenómeno que desencadenó otras cosas. Esa formación hizo que CCM surgiera con mucha fuerza organizativa y social, con mucho convencimiento...

Celina Monterrosa

Entrevista, octubre 2005

Temas como la

historia de los movimientos sociales en El Salvador,

participación ciudadana, género, desarrollo y construcción de agendas locales, incidencia política,

organización, prevención y gestión de riesgos, liderazgo comunitario, Tratados de Libre Comercio, entre otros son parte de las agendas de formación.

Un elemento que es importante rescatar en esta sistematización es que la capacitación ha sido un pilar en toda la historia de CCM. Esto se materializa en todos los proyectos que se desarrollan. Todos tienen ese componente que permite canalizar los recursos y mantener el espacio de formación permanente.

El proceso de formación de líderes puede dividirse en tres momentos diferenciados: Momento fundador, consolidación formativa y formación sistemática. Cada uno responde al contexto social, agendas temáticas y metodologías aplicadas.

a. Momento fundador (Década de los ochenta)

CCM surge por la necesidad de transformar las conciencias. Al principio, se tiene una concepción mágica o impersonal de la realidad. En los años ochenta, mientras la represión política era grande las organizaciones populares buscaban una transformación radical de las condiciones de injusticia. Esta búsqueda se originó con la toma de conciencia de esa situación. Luchar contra las visiones mágicas, pasivas fue uno de los retos que la lucha revolucionaria buscaba.

En esa lógica se insertan los procesos de formación para las comunidades urbano marginales. En este momento fundador, la organización CREFAC tuvo un papel central. Vicente Alfredo Salguero, director de CREFAC en ese momento junto con otros miembros de esta organización buscaban generar una base de miembros de comunidades comprometidos.

En 1984 se inicia capacitación a principiantes para poder conducir el trabajo organizativo de parte del área de promoción de CREFAC. Se seleccionaron representantes de distintas comunidades para que asistieran a charlas y clases intensivas. En este momento se contó con el apoyo de profesores e investigadores de la Universidad Nacional, UES, y de la UCA. El trabajo de reflexión era intenso y abarcaba áreas de sociología, economía, política.

En 1986 se inicia el segundo proceso de formación a promotores de base de las comunidades. 27 personas (hombres y mujeres) de las

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juntas directivas comunales participaron en esta etapa. Tanto en este momento, como en el anterior, quienes capacitan especialistas universitarios y de trabajo social.

También en este momento se capacitó a miembros de juntas directivas sobre sus funciones y la organización comunitaria. Como parte del proceso de formación crítica, los que participaban en el proceso realizaron una investigación en la comunidad El Refugio de San José Calle Real, Ciudad Delgado. La investigación sirvió como laboratorio para aplicar lo que la teoría revelaba.

Las áreas que formaban la agenda de formación en este momento eran el análisis social, el

trabajo social, la investigación, la psicología social, áreas de planificación, etc.

En 1987 se inicia la capacitación del tercer nivel de promotores y promotoras de base. Para este momento se tenía financiamiento externo de organismos de cooperación internacional lo que permitió un trabajo intenso del que se obtuvo como resultado la formación de la Asociación de Mujeres Marginales (AMMA) y el Consejo Juvenil de Comunidades (CJC) en 1988. En esos momentos y como se apuntó en la revisión histórica del movimiento, ambas iniciativas se separaron del trabajo directo de CCM por razones políticas tácticas de la lucha que se libraba. Aunque en su momento fue una decisión valorada por las necesidades coyunturales, ahora se valora como una de las decisiones más difíciles y que trajo como consecuencia que el trabajo con estos sectores fuera desatendido de la agenda organizacional del movimiento.

Además de los procesos de formación intensivos que se estaban dando con los miembros de las comunidades, en este período se participó en espacios de formación y capacitación internacional. Promotores de CCM y líderes comunitarios visitaron otros espacios en la región, como el Instituto Cooperativo Interamericano de Panamá, ICI, en 1990.

b. Consolidación formativa (Década de los noventa)

La intensidad de trabajo de estos primeros años se consolidó en un trabajo más sistemático y permanente en los años noventa. También se formaba parte de espacios de capacitación, formación e intercambio de experiencias regionales y continentales. Uno de estos espacios fue el Instituto para la Superación de la Miseria Urbana, ISMU, en Guatemala. El ISMU concentró organizaciones comunales desde Guatemala hasta Panamá. Desde el instituto se realizaron investigaciones, foros sobre el problema de la vivienda, capacitaciones en educación popular, etc. También, desde el ISMU se recibieron capacitaciones especializadas en el manejo del programas diversos

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En 1994 se participó en un curso modular organizado por FLACSO El Salvador sobre Rol de los partidos políticos, ONG, Movimientos sociales. Esto permitió ubicar y definir el rol de CCM como organización

En 1995 se desarrollaron capacitaciones tecnológicas con el CERCA del Programa Habitat Naciones Unidas. También estos años fueron intensos pues se participó en espacios de intercambios de experiencias comunales en la Asamblea de Mujeres en Costa Rica; las Asambleas de la FCOC – CA, foros y encuentros regionales, incluyendo con el llamado Deceno Internacional

Los temas que conformaban la agenda temática en este período eran organización comunitaria, economía comunitaria, niñez y adolescencia, Derecho a la vivienda, violencia intrafamiliar, organización comunal y poder local (apoyado por CODA Internacional y FCOC).

En los últimos años de esta década, de 1998 al 2000 se realizó una nueva modalidad para las capacitaciones. Se capacitó por módulos en red. Se formaron tres niveles. En cada uno se desarrollaban los temas y se pretendía que los participantes de un nivel replicaran la formación en el siguiente nivel. En esa lógica se capacitó en el primer nivel a 27 personas; en el segundo nivel se capacitaron 35 líderes; y, finalmente en el tercer nivel se capacitaron a 123 miembros de comunidades.

Los temas desarrollados en esta modalidad fueron educación popular, liderazgo, incidencia política, gestión de riesgo, organización comunitaria, agendas locales.

c. Formación sistemática (2000 – 2005)

En los últimos años, la

capacitación se ha desarrollado en los distintos proyectos que realiza CCM. Las metodologías han ido cambiando porque los distintos proyectos exigen elementos diferentes.

Una de las experiencias más significativas en estos años ha sido el apoyo a procesos de

formación en Santa Tecla. Cantón Álvarez. Los temas que se han desarrollado son organización comunitaria, liderazgo, educación familiar, autoestima, gestión de riesgo,

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capacitación especializada para mano de obra para desarrollo de proyectos de vivienda (25 personas). Todas estas capacitaciones se han realizado con un componente de género muy fuerte.

También se ha seguido la metodología de capacitar en niveles. En estos momentos se trabaja con dos niveles. El nivel 1 es el de los facilitadores. Se han realizado 21 talleres de planificación en todos los cantones de Santa Tecla. El nivel 2 se ha desarrollado para 60 personas. Los temas que se han trabajado en esta dinámica son liderazgo, género, gestión del riesgo, incidencia política

También en este período se ha participado en foros sobre experiencias de participación ciudadana tanto en el país como en la región.

En el período de 2003 a 2005 se participa en las escuelas del MPR-12. Los temas que en ese espacio se desarrollan son relaciones de poder, problema del agro, TLC, historia de los movimientos populares de El Salvador. Con este último tema se intenta recoger la memoria histórica del país.

Actualmente los temas de agenda de formación son participación ciudadana, desarrollo local, liderazgo, incidencia política, personería jurídica y todo el funcionamiento de la organización, normativa constitucional y municipal. La metodología que se aplica sigue siendo la de educación popular porque es la pertinente para el tipo de sujetos activos que la sociedad requiere en estos momentos. En la década de 1980 el contexto era de guerra y los temas estaban vinculados a esa urgencia. Se buscaba formar sujetos políticos. Ahora, el contexto es de crisis económica profunda. Lo que se busca ahora con las capacitaciones es fortalecer la lucha por el cambio del sujeto social. Tanto durante la guerra como ahora se violan los derechos.

Dificultades en las capacitaciones

Aunque el eje de formación/ capacitación ha sido permanente en el trabajo de

CCM, se han enfrentado una serie de dificultades que minan las posibilidades de sostenibilidad e impacto de las iniciativas.

La primera dificultad es la constancia de los participantes. Debido a que la formación es una actividad que se suma a las ya adquiridas por los líderes comunales, la constancia en la participación no es permanente. En las entrevistas realizadas durante el trabajo de campo para esta sistematización se hizo evidente cómo todos los que han participado en talleres o espacios de formación evalúan positivamente el esfuerzo, pero lamentan que otros miembros de la comunidad no apoyen estas acciones. Hay personas que se han retirado del proceso de formación y no necesariamente se releva en los procesos que coordina CCM.

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Hay temas que se han dejado ya sea por los intereses de los distintos proyectos desde donde se planifican las capacitaciones o porque surgen temas coyunturales que los reemplazan. En las entrevistas y grupos de discusión al abordar este tema se sugiere una revisión de la agenda temática y definir aquellos temas que sean prioritarios para que se conviertan en agendas permanentes.

Precisamente porque el tiempo que se da a las capacitaciones e marginal por parte de los miembros de las comunidades porque comparten otras actividades, temas

que deben tratarse con mayor profundidad no pueden sino hacer una revisión superficial. En el grupo de discusión este elemento se hacía notar. Personas capacitadas solicitan trabajar con mayor profundidad los temas ya que ellos deberán realizar réplicas de los temas analizados con su comunidad.

Otra limitante que sale en el tema de capacitaciones es el de los

recursos económicos. La falta de estos hace que la tarea de movilizar a la gente sea más difícil y limite las posibilidades de abracar a más gente.

Un tema que se señala como pendiente es la definición del proceso de formación que se quiere tener con los miembros de las comunidades. Es necesario tomar en cuenta procesos pedagógicos en donde los niveles de dificultad tanto en el contenido como en las metodologías sean dosificados según los niveles en los que las personas que se están formando estén.

Otra debilidad señalada a los procesos de formación es la aplicación de metodologías y técnicas que no motivan a los participantes. Pareciera que los mecanismos aplicados en las capacitaciones se han vuelto repetitivos y monótonos. Es necesario fomentar la creatividad en la metodología.

La necesidad de incorporar gente nueva a los procesos es fuerte. El problema es que los recursos económicos y de espacio son limitados e insuficientes para un programa más ambicioso.

Es necesario definir indicadores cualitativos que permitan valorar el impacto y desarrollo de las capacitaciones.

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4. Análisis organizativo de CCM

a. Pilares organizativos

Después de la riqueza histórica del trabajo de CCM se hace necesario retomar los elementos que su planificación organizacional está implementando en estos momentos. Los pilares del trabajo organizativo siguen siendo las comunidades marginalizadas y la defensa de sus derechos. Estos elementos se hacen evidentes en la documentación institucional con la que cuentan.

En los documentos institucionales revisados se declara la finalidades del trabajo de CCM como la organización y capacitación; el desarrollo integral de los pobladores de las comunidades; la participación democrática; la defensa de los derechos humanos; el desarrollo del pensamiento crítico y capacidad de análisis; la promoción y relaciones estratégicas con otras organizaciones.

En esta misma línea. CCM tiene como visión ser una asociación dinámica y fuerte que trabaja para el desarrollo y la disminución de la pobreza de las comunidades excluidas. Esta visión, para materializarse, exige la revisión permanente de su quehacer que es precisamente lo que busca este proceso de sistematización.

Junto a su visión, otro elemento que marca el talante actual de CCM es su misión en la cual se declara que trabaja junto a los habitantes de las comunidades pobres urbanas y rurales desarrollando procesos que generen capacidades propositivas y de empoderamiento para la defensa de sus derechos en el ámbito municipal y nacional a fin de superar las actuales condiciones de vida.

En la siguiente tabla se listan las comunidades en las que actualmente está acompañando CCM, en el marco de proyectos específicos.

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Tabla 4. Comunidades con las que se tiene trabajo actualmente

Comunidades Localidad 26 comunidades específicas

- Inter Arco Iris (13); Progreso III; María Campos; San José Obrero; Éxito; Valdivieso

San Salvador

Inter. Zacamil (14); Villa Olímpica; 4 de octubre; Los Próceres Oriente Mejicanos Santa Rita; Porvenir; Rosita; Pipil; San Francisco; Las Terrazas; Lotificación San Sebastián; Consorcio de comunidades (13)

Ciudad Delgado

Cantón Victoria; Cantón Álvarez; Catón Progreso; María Victoria; Las Palmeras

Santa Tecla, La Libertad

Comunidad Capulín Colón, La Libertad

Asociación Comunal de Candelaria, CDL (9 Cantones) Candelaria, Cuscatlán

Asociación PROVIDA (10 cantones) Nahuizalco, Sonsonete

Caluco Sonsonete Barrio El Rosario Panchimalco Fuente: Elaboración propia Las acciones que se están realizando actualmente son proceso de legalización de la Personería Jurídica de CCM; promoción de la participación ciudadana (en el marco de un proyecto amplio); escuelas MPR-12 que busca continuar con el proceso de formación de liderazgos permanente; mesa agropecuaria, que pretende ser una plataforma de discusión del tema para generar propuestas a las políticas gubernamentales; estudio situacional de vivienda (Mesas: Nahuizalco y Candelaria) para diseñar proyectos de intervención; y redes temáticas en las que se discuten con los líderes de las comunidades los temas de tierra urbana, servicios básicos, salud y medio ambiente b. Principios Los principios que sustentan el accionar de CCM son ocho: 1. Participación democrática 2. Equidad de las relaciones entre el hombre y la mujer 3. Organización y formación para la generación de estructuras de dirección comunitaria 4. Promoción y formación de liderazgos 5. Solidaridad y unidad de los pobladores 6. Defensa de los derechos humanos 7. Promoción de la participación ciudadana y comunitaria 8. Concertación dinámica, innovadora y propositiva

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c. Estructura

El trabajo de CCM está estructurado de manera operativa en cuatro áreas de trabajo: el desarrollo comunal, la incidencia política, la gestión y prevención de riesgos y el fortalecimiento institucional

1. Desarrollo comunal El objetivo de esta área es fortalecer y ampliar la organización territorial a distintos

niveles, con enfoque de género, facilitando procesos de organización y formación de las comunidades para el empoderamiento, participación, defensa de los derechos humanos, incidencia política y gestión de recursos en el ámbito municipal y nacional, a fin de mejorar las condiciones de vida de la población.

2. Incidencia política

Esta área se propone fortalecer el desarrollo de capacidades para incidir en

espacios de poder y decisión a través de la movilización, concertación y negociación de propuestas en torno a la plataforma del sector comunal.

3. Gestión y prevención de riesgos

En una país donde la vulnerabilidad física, económica y social es tan grande

cualquier evento puede desestabilizar y producir crisis permanentes. Por esta razón, desde esta área se busca fortalecer las capacidades de gestión participativa para la prevención y reducción de la vulnerabilidad y efectos de los eventos naturales y sociales en las comunidades pobres.

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4. Fortalecimiento institucional

Desde el fortalecimiento institucional se busca potenciar la organización comunal, su

perfil público, recursos, capacidad administrativa y de concertación que asegure el desarrollo de planes y procesos institucionales con el fin de que los pobladores sean autores de su desarrollo

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Organigrama

Asamblea General

Junta Directiva

Auditoría externa

Consejo Ejecutivo

Asesoría técnica Asesoría técnica

Desarrollo Comunal

Departamentos

Gestión y prevención del riesgo

Incidencia política

Departamentos

Fortalecimiento institucional

Municipios

Comunidades

Municipios

Comunidades

Departamentos

Municipios

Comunidades

Departamentos

Municipios

Comunidades

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d. Financiamiento

Uno de los elementos más débiles en la organización de CCM es el tema de los recursos financieros. El trabajo que realiza se orienta a partir de proyectos específicos financiados por organismos de cooperación internacional. El marco de estos proyectos específicos permite la realización de actividades que dan continuidad al trabajo que CCM ha venido realizando, sobre todo de cara al fortalecimiento de liderazgos comunales. En estos momentos, CCM cuenta con dos organismos de cooperación financiando los proyectos. Estos organismos son la Asociación Cooperacció (Cataluña, España) y TROCAIRE (Irlanda).

Cooperacció es una organización que coordina proyectos con organizaciones sociales nacionales con fondos provenientes de diversas instituciones públicas y privadas catalanas. Realiza sus acciones en el sector de la cooperación internacional, la sensibilización y educación por el desarrollo. Trabaja en Centroamérica, en Guatemala, El Salvador, Nicaragua, y en Brasil y Colombia en Sur América. También desarrolla programas en Marruecos y en Palestina.

Con Cooperacció, CCM está ejecutando el proyecto “Fortalecimiento de la participación ciudadana para mejorar el acceso a bienes y servicios básicos en comunidades marginalizadas de El Salvador”. Este proyecto tiene una duración de un año, aunque es continuación de un trabajo que se ha venido realizando entre CCM y Cooperacció, desde 1997.

Procesos de legalización de tierras, fortalecimiento de organizaciones comunitarias, reconstrucción de viviendas y fortalecimiento de los procesos de participación ciudadana han sido temas en los que Cooperacció y CCM han colaborado juntos.

Estas dos organizaciones han definido un programa de colaboración 2004 – 2007 que tiene como objetivo promover la organización de las comunidades marginalizadas y las capacidades de su liderazgo, para el ejercicio pleno de su ciudadanía en la defensa del derecho a la vivienda y los servicios básicos4.

La otra organización es

TROCAIRE. Esta es una organización construida por los obispos de la iglesia irlandesa con el objetivo de ayudar a los habitantes empobrecidos a mejorar su calidad de vida. Esto lo hace mediante el financiamiento de una diversidad de proyectos. Es miembro de la Cooperación Internacional para el Desarrollo y la Solidaridad, CIDSE, y de Cáritas Internacional. Tiene proyectos en África,

4 Tomado del documento de proyecto ““Fortalecimiento de la participación ciudadana para mejorar el acceso a bienes y servicios básicos en comunidades marginalizadas de El Salvador”, 2003 – 2004.

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Asia, América del Sur y el Caribe, Centroamérica, Europa y el Medio Este.

Con TROCAIRE, CCM está realizando dos proyectos. El primero “Fortalecimiento de la organización comunal y la incidencia para a reducción de la exclusión en comunidades marginales, de 4 municipios del Área Metropolitana de San Salvador”. El segundo es “Seguridad alimentaria de las comunidades rurales a través de la instalación de huertos hidropónicos en el municipio de Nahuizalco, Juayúa, Salcoatitán, Caluco del Departamento de Sonsonate”. Ambos proyectos tienen como período de realización 2004 - 2006.

La dependencia financiera de CCM en los proyectos de operación se vuelven una amenaza cuando no existen fuentes propias de sustentabilidad. En el apartado del análisis proactivo se expondrán algunos elementos vinculados a este tema.

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�Avanzamos bastante y aprendí mucho sobre el tema de legalización de tierras, a conocer sobre la vulnerabilidad de las comunidades marginales. También analizar la realidad nacional. Me gusta el trabajo con la población con la que se trabaja en la organización y la lucha social. Por lo anterior, personalmente, persevero con CCM ya que siempre está a la par de la población. Lilian García Carta personal Taller 10 de octubre, 2005

e.Análisis de fortalezas, debilidades y desafíos

En CCM tengo la oportunidad de compartir con la gente pobre. La motivamos para la lucha por lo que me siento bien de trabajar con la organización. Sé que mi trabajo no es para un empresario, sino para la gente marginalizada de todos sus derechos. Esto aviva mis valores y principios para seguir luchando para lograr cambios importantes en la calidad de vida de la gente y en las estructuras del Estado.

Roberto Antonio Figueroa Carta personal

� Fortalezas ºEn la serie de entrevistas realizadas, los grupos de discusión y la convivencia con los miembros de CCM durante el período de la investigación se hicieron evidentes una serie de fortalezas que hacen de CCM una organización muy valiosa y pertinente para el sector con el que trabaja.

La primera fortaleza es el equipo humano con el que cuenta. Sus miembros son personas entregadas a la tarea que realizan. CCM ha

sobrevivido, a dos períodos críticos, precisamente, por la entrega de sus miembros al trabajo. En los ochenta, se trabajó a la par de las comunidades pese a la persecución política que se vivía en el país. En los noventa, ha sobrevivido a la crisis económica por el compromiso que los une a las comunidades. El que todos pertenezcan a comunidades marginalizadas es un elemento valioso que salió en las entrevistas tanto a representantes de instituciones con las que trabaja CCM como en las entrevistas y el taller realizado a los propios miembros. Este elemento da cuenta del valioso capital humano con el que cuenta CCM.

Un elemento que hay que hacer notar es que en las entrevistas se respeta mucho la figura de Antonia Viches, parte del equipo de CCM desde sus inicios en 1984.

Otra fortaleza es su experiencia en actividades reivindicativas. Las tomas de tierra, tomas de calle, marchas, cabildeo político son algunas de las acciones que permite que CCM tenga el tipo de incidencia que tiene.

La organización comunitaria de la mayoría de las comunidades que atiende es un factor muy valioso, reconocido por otras organizaciones sociales. Las comunidades cuya organización es débil tienen problemas internos que no permiten su consolidación (tal como lo vimos en apartados anteriores).

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Hoy está un poco débil y bajo perfil público, pero los problemas siguen siendo peor. Usted debe saber que las tormentas y la erupción del volcán han puesto en crisis el sistema en que vivimos y que es necesario que el CCM cambie o redefina su estrategia de lucha organizada y que se convierta en un verdadero referente de las comunidades Miembro de CCM Carta personal Taller de discusión, Octubre de 2005

La formación de líderes es también una experiencia significativa valiosa de

CCM. La aplicación de metodologías de educación popular y tener como propósito la formación de sujetos críticos activos hacen que la satisfacción de quienes pasan por ellos sea grande.

Otra fortaleza es el proceso de acompañamiento a comunidades. CCM ha estado con las comunidades que lo permiten cuando ninguna otra organización ha podido acompañar a las comunidades. Las comunidades con las que CCM trabaja están en situación de exclusión y marginalización. En esas condiciones, tanto instituciones públicas como privadas o personas particulares con suficientes recursos económicos irrespetan sus derechos sistemáticamente.

Desalojos, demandas, amenazas de muerte, heridos en el peor de los casos han sido algunos de los irrespetos y violaciones que

las comunidades han sufrido. En las

entrevistas a líderes comunitarios

reconocían que en esos momentos solo

CCM los apoyaba. Este es un reconocimiento valioso y lleno de sentido

en una sociedad donde la marginalización

y exclusión es una práctica permanente. El acompañamiento en la lucha

reivindicativa y la organización

comunitaria es una de las acciones replicables según las personas

encuestadas.

Otra fortaleza que se señala en las entrevistas y en las encuestas es la relación que establece con otras instituciones. En la encuesta se solicitaba evaluar el trabajo de CCM con las comunidades, con otras organizaciones y con instituciones públicas. En la evaluación, más del 80% de los encuestados califica con nota superior (4 puntos de 5) el trabajo de CCM en estos tres ámbitos.

� Debilidades .

Una de las debilidades apuntadas con mayor fuerza es la poca renovación de liderazgo. Es necesario diseñar políticas de renovación de cuadros que permitan capitalizar la riqueza en experiencia de los miembros con más trayectoria, pero que permita involucrar a más gente.

Una de las debilidades apuntadas en las entrevistas, sobre todo en las de los representantes de instituciones, es la débil incidencia pública. Es necesario diseñar un plan de comunicación que tome en cuenta a los medios de comunicación para garantizar que la voz de las comunidades marginalizadas será escuchada. Durante la investigación sucedieron dos eventos que pusieron en crisis al país y las comunidades marginalizadas,

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como es usual, son las más afectadas. Estos eventos fueron la amenaza de huracán Adrián en mayo y las lluvias de la tormenta Stan. Funcionarios, políticos y técnicos esperaban pronunciamiento de CCM que hiciera visible la situación de las comunidades que fueron sobre-fotografiadas por los medios, pero sin un plantear la raíz de los problemas de vulnerabilidad de un sector históricamente excluido: los más empobrecidos.

Esta situación propicia que no se incida en las políticas estatales, municipales y privadas de una manera más consistente.

La comunicación planificada se vuelve necesaria en un momento donde la incidencia y consolidación de tejido comunicativo puede generar vínculos de identidad (al trabajar la comunicación interna) y espacios de visibilidad (al planificar las comunicaciones externas, incluidos los medios de comunicación social).

Otra debilidad es la escasa sostenibilidad económica. El financiamiento de una organización como CCM no puede restringirse a la cooperación internacional. Es necesario fortalecer la organización y generar un movimiento social fuerte en el que la búsqueda de vías productivas se combine con las acciones que históricamente ha realizado.

También se mencionó como debilidad, sobre todo en el taller con miembros de CCM, la dispersión del trabajo. Parece haber una sensación de dispersión porque no se hacen propuestas concretas que tengan un seguimiento o no se le da seguimiento a los procesos iniciados. Esto genera que se inicien de nuevo esfuerzos. Esta dinámica parece convertirse en un freno que no permite el avance y desarrollo.

� Desafíos

En desafíos se listan los principales temas que en las entrevistas salen como pendientes por CCM y que necesitan ser atendidos para fortalecer desde otros espacios las comunidades marginalizadas: − Trabajo con jóvenes y mujeres − Mayor presencia en comunidades. No

solamente los promotores − Incidir políticamente en procesos. Trazarse

proyectos concretos y alcanzables. Gestionar y acompañar la ejecución de proyectos concretos: casas, servicios para todos

− Vinculación con proyectos productivos − Capacitación de líderes − Actualizar metodologías y replantearse a

la luz del nuevo contexto − Seguir apoyando en fortalecimiento

comunitario y la formación de líderes − Formación y proyectos dirigidos

especialmente a jóvenes: política – laboral

“Yo quisiera que CCM tuviera su personería jurídica, que tuviera legalizada su propiedad donde están sus oficinas al igual que una administración sólida y eficiente, con su Junta Directiva ejecutando resoluciones de la Asamblea” “Quisiera un CCM como una organización fuerte en lo organizativo, en la movilización, con recursos y personal para atender a cada comunidad que demanda de nuestra atención. Que mantenga su misión y visión como un ente revolucionario y que sea un referente nacional de las comunidades en El Salvador” “CCM debería de contar con reconocimiento grande y organizado que le permitiera ser un equipo que pudiera formar parte de la estructura gubernamental para tomar decisiones desde donde se ejerce el poder para ser parte del equilibrio político y no como se conoce y se viene dentro del poder que ejerce el gobierno” Miembros de CCM Fragmentos de cartas personales, Octubre 2005

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− Atención desde programas específicos para la mujer − Charlas de relación interpersonal − Programas de alfabetización − Enseñar metodologías participativas para asambleas − Lograr la legalización efectiva de terrenos − Conseguir más apoyo institucional − Legalización de CCM

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5. Análisis prospectivo

A veces pienso que tenemos miedo al cambio, al desarrollo. En sí a lo nuevo por venir, por lo que nos acomodamos, dejando la lucha constante. Carta personal, integrante equipo CCM

A la luz de la historia de CCM surgen a la reflexión cinco

prioridades de cara al futuro. Es necesario definir una política

organizativa que eleve el perfil de los miembros de CCM. También

se necesita definir una política financiera que permita construir las

bases de un proceso de sostenibilidad económica que tenga como

referente un movimiento social más fuerte y trascienda la

organización.

También es necesario asumir una política

clara y planificada de comunicación que atienda los niveles interno (identidad) y externo (visibilidad). Otro ámbito prioritario, por ser uno de sus pilares, es el de una política de formación de cuadros más sistemática. Finalmente, es necesario pensar la gestión de las crisis como políticas organizacionales. POLÍTICA ORGANIZATIVA

Cuando se habla de política organizativa se hace pensando en cualificar el papel de los miembros de CCM. Aunque la mayoría tiene claro su papel frente a las comunidades, en las entrevistas es común ver cómo se les concibe como promotores sociales. El papel de CCM históricamente ha trascendido la promoción social. Es necesario que las comunidades den el salto pero con una claridad, desde los miembros del rol que jugarán. Una discusión sobre qué perfil es necesario para los fines organizacionales parece pertinente: monitores, enlaces, coordinadores. Las figuras pueden ser muy diversas, pero lo suficientemente claras como para que los procesos de autonomía superen la visión de promoción social que resulta muy reducida ante las complejas dinámicas de las comunidades marginalizadas.

POLÍTICA FINANCIERA

Es necesario garantizar el fortalecimiento financiero, garantizar la sostenibilidad. Una posibilidad que debe ser valorada por las implicaciones administrativas y de gestión es el que cada comunidad se convierta en unidades productivas y que esto genere ingresos para el sostenimiento de familias vinculadas a la producción y de CCM por ser la organización que los representa y los asesores para posibilitar un funcionamiento eficiente y rentable. Esto significa cualificarse en tecnologías y en el área administrativa y de gestión.

Cómo queremos a CCM? Una organización fuerte, con capacidad de movilización y de incidencia; con capacidad de propuesta y de gestión de recursos; con un perfil público más fuerte y que ayude a resolver problemas en las comunidades. Una organización con valores y principios que tengan claro el rumbo hacia dónde quiere llegar y qué modelo de desarrollo orientar y construir en CCM. Víctor Mejía Carta personal Taller 10 de octubre 2005 Yo me siento satisfecho de colaborar en todo lo que se pueda y quiero que el CCM sea más fuerte para estar en la vanguardia de las comunidades de extrema pobreza. Mencionarles que los que forman el CCM somos gentes de las mismas comunidades y vivimos en carne propia las necesidades. Manuel Cornejo Carta personal Taller 10 de octubre 2005 Quiero que CCM sea un interlocutor para que defienda los derechos económicos, sociales, culturales y humanos; que todos tengamos una vivienda digna sin riesgos ni amenazas de ser desalojados ni de ser aterrados por barrancos, ni llevados arrastrados por los ríos y quebradas. Elías Romero Carta personal Taller 10 de octubre 2005

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Lo que se intentaría es ensayar una política financiera que permita el autofinanciamiento. Esta modalidad no es nueva y aunque las comparaciones deben hacerse considerando los contextos, el Movimiento de los Sin Tierra inició su proceso de consolidación precisamente de esta manera. Para llegar a ser lo que es, tuvo que iniciar por cosas concretas. POLÍTICA DE FORMACIÓN DE CUADROS Los talleres eran bonitos porque eran nuevos. Han pasado los años y los mecanismos

son los mismos. Se vuelven mecánicos. La gente se desmotiva porque no ven el tema

sino el método. Se necesita implementar técnicas que mantengan el interés.

Persona en grupo de discusión, octubre 2005

Aunque esta es también una de las áreas donde más experiencias ricas y significativas se tienen, en los grupos de discusión surgía la necesidad de replantear el proceso de formación de manera tal que permita actualizar metodologías y formas de gestionar el conocimiento.

En los grupos de discusión se proponía el diseño de un proceso pedagógico metodológico que defina niveles y garantice procesos de certificación. Esto permitiría seleccionar las personas por nivel y así descubrir talentos y vocaciones. También esto garantizaría un mayor compromiso de los miembros.

Lo que se necesita es buscar técnicas diferentes para que se les pueda poner más interés a los temas. En los grupos de discusión se propusieron una serie de temas que parece importante mencionarlos en función de construir agenda temática.

1. Oratoria 2. Re-organización 3. Capacitación en el área laboral 4. Formación de líderes (hombres y

mujeres) 5. Globalización 6. Equidad de género 7. Derechos 8. Planificación y formulación de

proyectos 9. Gestión de riesgos 10. Economía comunitaria 11. Comunicación social: Sistemas –

redes internas y externas 12. Incidencia política 13. Metodologías de educación

popular 14. Poder popular local 15. Marketing político: - Imagen - Análisis 16. Análisis de coyuntura

17. Sistemas políticos: socialismo desde la sociedad civil

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POLÍTICA DE COMUNICACIÓN

Como se expuso en el capítulo anterior es necesario definir una interna (identidad) y externa (visibilidad). No puede dejarse la comunicación como algo marginal cuando es ese ámbito el que puede permitirnos incidir tanto política y públicamente, como en la consolidación de procesos identitarios que desde una historia común se pueda comprometer simbólicamente a los miembros de las comunidades con CCM. GESTIÓN DE CRISIS COMO POLÍTICA Asumirla es también una necesidad puesta en evidencia en el trabajo de campo. La gestión de crisis no solo debe ser asumida desde capacitaciones de cara a las comunidades, sino desde CCM en su relación con las comunidades. Qué hacer en situaciones de crisis debe ser algo planificado con anterioridad, sobre todo cuando sabemos por historia que en nuestro país lo constante son las crisis. Establecer mecanismos de monitoreo que no implique necesariamente movilización física, posibilidades de gestionar ayuda que garantice respuesta a la emergencia, incidir en la opinión pública en esos momentos son elementos que pueden incorporarse si se asume la gestión de crisis como política.

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Construcción de escenarios: Visión para 201 0 ¿Cómo nos vemos?

- Fortalecidos organizativamente - Capacidad de incidencia local y

nacional

- Capacidad de movilización

- Referente de movimiento comunitario popular a nivel nacional

- Infraestructura fortalecida con el equipo necesario para funcionar

- Dirigencia y personal comprometido con capacidades desarrolladas

- Relaciones a nivel nacional e internacional

- Con mayor capacidad de gestión

- Liderazgo comunitario más comprometido y solidario

- Organización legalizada y con autonomía2

Visión elaborada con miembros de CCM Taller octubre 2005

Agenda programática A manera de agenda programática se elaboró una lista con los miembros de CCM en la que se listan ocho acciones prioritarias desde las que CCM debería enmarcar su gestión de cara a las comunidades y a su propio fortalecimiento interno. Ordenados por orden de prioridad tenemos:

1. Fortalecimiento y ampliación de organizaciones territoriales con participación de mujeres y jóvenes

2. Movilización para la reivindicación y defensa de los derechos económicos, sociales y culturales. Capacidad de convocatoria. Temas: tierra, vivienda, servicios, agricultura, soberanía alimentaria

3. Elevar el perfil público de CCM con acciones en defensa de las comunidades y difundiendo acciones realizadas por el movimiento

4. Fortalecer la capacidad de gestión de recursos

5. Fortalecer espacios articulados con organización nacional e internacional

6. Continuidad de procesos educativos 7. Impulsar estrategias relacionadas a la

prevención y gestión del riesgo 8. Impulsar y fortalecer espacios de

participación ciudadana

En un proceso de elaboración del plan de trabajo de mediano y largo plazo, estas líneas deberían retomarse e incluir, en el marco de los proyectos financiados, la posibilidad de concentrar la acción en estas prioridades.

La ventaja de las acciones estratégicas apuntadas es que ellas representan

indicadores de avance organizacional y comunitario que permitiría medir (en términos objetivados) el trabajo que se realiza en cada una de las iniciativas.

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6. A manera de conclusión

Quisiera terminar este informe con unas reflexiones generales que surgen después de un acercamiento a la historia de una organización que tiene tanto qué decir.

En primer lugar, insistir que al hacer una revisión histórica de las luchas de CCM se ha hecho, también una revisión de las luchas que la vida urbana ha generado. CCM no representa una historia marginal, sino que se encuentra en el centro de las reflexiones sobre la vida contemporánea en las ciudades. Por un lado procesos de exclusión social, económica y cultural que margina a un porcentaje alto de la población. Las comunidades marginalizadas representan un número importante de personas que se encuentran en situación de precariedad por lo que cualquier crisis las vuelve vulnerables. Esto situación se explica desde la Falta de voluntad política reflejada en la incapacidad de las instituciones publicas por generar condiciones de vida digna a la población.

Ante esta ausencia, organizaciones como CCM desempeñan un papel fundamental. El riesgo de esta situación es, como lo mencionó una de las personas entrevistadas en la investigación, sustituir al Estado resolviendo necesidades que el Estado debería resolver. De allí que la claridad con la que se diseñen los planes y programas de intervención delimitando la naturaleza de la institución y las acciones que impulsen es básico.

Otro elemento que la sistematización de experiencias pone en evidencia es la necesidad de recuperar la memoria como elemento para consolidar la identidad. Este proceso, si es colectivo es más rico. Reconstruir las memorias de eventos dolorosos, gratificantes, recordar personas que ya no están porque dejaron su vida en la misma historia de la organización no es un proceso sencillo.

En algunas entrevistas pudo percibirse cierta desesperanza o impotencia ante los problemas actuales y las pocas posibilidades de transformación radical de las condiciones. Esta impotencia es lógica cuando la intensidad de historias que nutren la memoria parecen irrepetibles en un contexto como el actual. Preocupa la aparente indiferencia de miembros de algunas comunidades, sobre todo en los sectores juveniles. Habrá que repensar esa indiferencia a la luz de nuevas formas de expresar y vivir los derechos. Si bien es cierto la presión económica parece ser una fuerza que agudiza la preocupación por el día a día, tan bien es cierto que hay que construir nuevas formas de consenso.

Identificar qué moviliza a los jóvenes en estos momentos, de qué maneras

podemos hacernos escuchar por una sociedad que ha cambiado aparentemente, pasa por una reflexión permanente sobre las nuevas formas de comunicar e intervenir en los espacios sociales.

CCM se presenta como un laboratorio de construcción de procesos. En su historia pueden verse formas de crecimientos personal y aprendizajes colectivos. Son esos procesos (individuales y colectivos) los que deben dar las pistas del camino y las formas de seguir caminando en una lucha que es tan válida como hace 21 años.

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7. Anexos

4. Listado de entrevistas realizadas 5. Listado de documentos revisados: impresos, videográficos 6. Estrategia metodológica: protocolos de los instrumentos aplicados

6.1 Protocolo de la entrevista a líderes comunales 6.2 Protocolo de entrevista a diputadas 6.3 Protocolo de encuesta para funcionarios de instituciones 6.4 Protocolo de los grupos de discusión 6.5 Guía para el taller con miembros de CCM

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ANEXO 1. Listado de personas entrevistas

a. Comunidades Comunidades Personas entrevistadas

Amaya Eladio Álvarez Santa Rita Álvaro Benítez, William Tejada, Lilian Tejada, Armando

Pérez Rosita Ovidio Marroquín, Dora Mejía, Miriam Paniagua Pipil David Mejía Valdivieso Rodolfo Martínez, María Luisa Castillo, Alberto Ramírez

Edelmira Amaya, Elsa Elizabeth Vásquez, Erica Suleyma Campos

Villa Olímpica Rosa Elvira Ramírez, Juan Bautista Reyes, Roxana del Carmen Chicas, Víctor Ramírez, Ana Silvia Barahona Ana Miriam Ávalos, Ruth Mabel Cruz, Modesta Antonia Chicas

Asociación Comunal Candelaria

Armando Ramírez

Progreso Paola Martínez, Sonia Pérez Bosque Carlos Quinteros, Manuel de Jesús Cornejo, Antonia

Viches Cantón Victoria Vilmo Antonio Melgar PROVIDA, Nahuizalco Agapito Patriz, Vilma Corado, Carlos Jiménez Porvenir Saúl Martínez, Francisca Moreno 16 de marzo Marta Haydeé Hernández Cantón Álvarez Francisca Ramírez, Elio Pérez, María de los Ángeles

Salas, Carla Pérez Capulín Hilda Marta Menéndez, José Domingo Rivas, Julia de

Rendón Los Santos José Luis Hernández María Victoria Ada Luz Cáceres, Francisco Peñate, Eliseo Asencio 4 de octubre José Renato Rodríguez, Teresa Alvarado, Luis Pérez Cantón Aguascalientes Israel Aguilar

b. Representantes de instituciones

Institución Personas entrevistadas FESPAD Jaime Martínez PROCOMES Jaime Choto CREFAC Carlos Hernández CRIPDES Lorena Martínez CORDES Hugo Flores FUMPROCOOP Dimas Vanegas

Hugo Flores Foro de la Sociedad Civil Pedro Juan Hernández Alcaldía de Santa Tecla Elda Tobar UES Gilda Benavides Alcaldía de San Salvador Ernesto Ortiz

Carmen Rodríguez Roberto Hernández Irving Rodríguez

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Institución Personas entrevistadas

Alcaldía de Ilopango Leonardo Hidalgo Alcaldía de Ciudad Delgado Orlando Alférez Diputada Celina Monterrosa Diputada Ileana Rogel

c. Miembros de CCM (participación en taller)

1. Víctor Mejía 2. Antonia Viches 3. Alejandro Rojas 4. Manuel Cornejo 5. Roberto Antonio Figueroa 6. David Córdova 7. Rolando Oliva 8. Lilian García 9. Eladio Álvarez 10. Victorio Guillén 11. Elías Romero

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ANEXO 2. Listado de documentos revisados Impresos

1. Documento de sistematización del seminario de análisis por CREFAC (1986) 2. Sistematización de trabajo organizativo (1986) 3. Archivos de cuñas radiofónicas 4. Campos pagados: 15 5. Medios de comunicación propios: Documentos institucionales, seriados (serie

Aacelhuate), volantes (Declaración de problemas fundamentales), documentación interna: convocatorias, panfletos.

6. Boletines de prensa 7. Informe descriptivo del Programa “Atención y capacitación en salud comunitaria” 8. Informe sobre el Foro “Vivir en las ciudades en condiciones dignas” 9. Memoria de la segunda jornada de elaboración de proyectos, 1991 10. Proyecto para el área de comunicaciones, 1993 11. Convenio de cooperación entre las organizaciones del sector comunal y concejos

municipales, diputados del FMLN y coaliciones, 1997 12. Carta compromiso entre organización CREFAC y CCM, 2002 13. Estatutos de asociación comunal Las Margaritas, 1999 14. Informe financiero, 1999 15. Documento de proyecto “Iniciativa de reforma urbana en El Salvador y

asistencia crediticia para comunidades aglutinadas al CCM, 199 16. Anteproyecto de Ley Especial para el acceso a bienes inmuebles por parte de

grupos o familias asentadas en zonas urbanas y suburbanas en propiedades del Estado o privadas

Videos

1. Asamblea impuesta por alcaldía a Comunidad 16 de marzo

a. Marcha y concentración de calle a la alcaldía Municipal de Soyapango de la Comunidad 16 de marzo. � 22 de abril 1996 Demanda: Personería Jurídica – legalización de terrenos y los 487,500 colones donados por el VMVDU

2. Desalojo Comunidad Dueñas 28 de mayo 1994

a. Asamblea del sector comunal b. Clausura educación para líderes comunales

3. Primer Foro de Concertación. Mejicanos 13 de febrero de 1993 4. Evento Inic. Reforma urbana . Domingo 19 noviembre 1995 5. Zonas de defensa 6. 30 de octubre de 1992, Guarjila, Chalatenango. Desmovilización del tercer 20% del

FMLN a. 31 de octubre Marcha Cooperativismo y Comunidad Éxodo 29 de octubre b. Clausura 2º curso para líderes, 1995

7. Leticia Campo

a. Masacre Martín Ayala

8. Tomo N. 1 sobre el Foro Nacional sobre el acceso a la propiedad

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9. Marcha por la paz El Salvador 10. Asamblea de constitución. CCM 6 de septiembre 1998

11. Marcha a la Asamblea Legislativa Anteproyecto de Ley: 22 de octubre 1998

12. Spot CCM Avance de comunidades 1997

13. Asamblea general de CCM

14. Denuncia de las comunidades

15. Celebración de la madre Comunidad Nueva Esperanza 11 de mayo 1996

a. Celebración día de la madre CCM 12 de mayo 1996

16. Foro sobre administración de Justicia

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ANEXO 3. Estrategia metodológica: Instrumentos de investigación

3.1 Protocolo de la entrevista con líderes comunales

Aspectos históricos comunales

1.Principales eventos (negativos y positivos) en la comunidad � énfasis: organización comunitaria: Momento de fundación de las comunidades (años). 1. Cronología: Periodización de cinco años y ubicar en ella los eventos relacionados

a los siguientes temas: - Organización comunitaria - Relación con otras comunidades - Relación con otras instituciones o apoyos externos - Participación de mujeres, jóvenes y personas mayores - Temas de interés comunitario (que han provocado consensos y disensos): Desastres, salud, seguridad, etc.

2. Línea de tendencia: Definir cuáles han sido los momentos de mayor y menor organización comunitaria: identificar eventos vinculados a ello

Aspectos históricos con relación a CCM

1. Relación entre la comunidad y CCM: historia, personajes importantes 2. Eventos positivos y negativos en la relación con CCM (ubicarlos en el tiempo) 3. Generar una línea de tiempo en la que se identifiquen los momentos en que las

relaciones entre la comunidad y CCM han estado más vinculados (qué acciones o proyectos lo han posibilitado)

Identificación de proyectos

1. Qué proyectos se están trabajando actualmente con CCM en la comunidad (objetivo: construir un mapa de influencia de CCM)

2. Quiénes de la comunidad participan en los proyectos Diagrama de relaciones

1. Identificar las instituciones con las que la comunidad tiene relaciones (Apoyos externos): Qué instituciones son Qué proyectos tienen Nivel, tipo e intensidad en las relaciones: Mayor o menor presencia, efectividad en los proyectos ejecutados, tipo de organización que se promueve.

2. Identificar relaciones con CCM: Tipo de relación Definir proyectos Definir individuos con los que CCM tiene relación.

3. Relaciones con salvadoreños en el exterior

X = Períodos de tiempo

Y = Niveles alto, medio, bajo

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Prospectivo

1. Cuál debería ser la relación de las comunidades con CCM 2. Cuáles deberían ser las acciones impulsadas por CCM 3. Cómo ven el trabajo de CCM en cinco años

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3.2 Protocolo de entrevista a diputadas Elementos generales

1. Tipo de relación con CCM 2. Experiencia de trabajo más significativa 3. Principal fortaleza 4. Principal debilidad

Aspectos históricos con relación a CCM

1. Relación con CCM: historia, personajes importantes Prospectivo

1. Evaluación del trabajo de CCM con las comunidades (1-5)/ por qué 4. Cuál debería ser la relación de las CCM con las comunidades 5. Evaluación del trabajo de CCM con otras instituciones (1-5)/ por qué 6. Cuál debería ser la relación de las CCM con otras organizaciones sociales 7. Evaluación del trabajo de CCM con instituciones públicas (1-5)/ por qué 8. Cuál debería ser la relación de las CCM con las instituciones de gobierno 9. Cuáles deberían ser las acciones impulsadas por CCM 10. Cómo ven el trabajo de CCM en cinco años 11. Acción replicable en otras organizaciones sociales 12. Acción a replantear

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3.3 Protocolo de encuesta para funcionarios de instituciones Dirigida a Instituciones y personas vinculadas a la organización

1. Nombre: _________________________________________________________ 2. Institución a la que pertenece __________________________________________________ 3. Tiempo de conocer el trabajo de CCM a.Más de 20 años _______ b. Entre 15 - 19 _________ c. Entre 10 – 14 _______ d. Entre 9 – 5

__________ 4. Cuál ha sido su relación con CCM: _______________________________________________________________________ ___________________________________________________________________________________________________ ___________________________________________________________________________________________________ 5. Cuál ha sido la experiencia de trabajo más significativa que recuerde del trabajo de CCM ___________________________________________________________________________________________________ ___________________________________________________________________________________________________ ___________________________________________________________________________________________________ 6. Cuál es la principal fortaleza de CCM ___________________________________________________________________________________________________ ___________________________________________________________________________________________________ ___________________________________________________________________________________________________ 7. Cuál es la principal debilidad ___________________________________________________________________________________________________ ___________________________________________________________________________________________________ ___________________________________________________________________________________________________ 8. En una escala del 1 al 5 (siendo 1 el valor mínimo y 5 el máximo) cómo evalúa el trabajo de CCM con las comunidades

1 _______ 2 ________ 3 ________ 4 ________ 5 _________

9. En una escala del 1 al 5 (siendo 1 el valor mínimo y 5 el máximo) cómo evalúa el trabajo de CCM con otras instituciones

u organizaciones sociales

1 _______ 2 ________ 3 ________ 4 ________ 5 _________

10. En una escala del 1 al 5 (siendo 1 el valor mínimo y 5 el máximo) cómo evalúa el trabajo de CCM con las instituciones públicas (gobierno central o gobiernos locales)

1_______ 2 ________ 3 ________ 4 ________ 5 _________

11. Qué acción, emprendida por CCM, podría ser replicable en otras iniciativas de organización comunitaria ___________________________________________________________________________________________________ ___________________________________________________________________________________________________ ___________________________________________________________________________________________________ 12. Qué acción, emprendida por CCM, cree usted que debería replantearse a la luz de las demandas sociales actuales ___________________________________________________________________________________________________ ___________________________________________________________________________________________________ ___________________________________________________________________________________________________ 13. Qué cree que es lo que podría caracterizar mejor a CCM

a. Sus acciones con las comunidades _______ b. Su misión _______ c. Los logros alcanzados _______

14. Cuál es el principal logro de CCM en sus años de trabajo ___________________________________________________________________________________________________ ___________________________________________________________________________________________________ ___________________________________________________________________________________________________ 15. Cuál debería ser la acción que CCM tiene que impulsar en relación con las comunidades ___________________________________________________________________________________________________ ___________________________________________________________________________________________________ ___________________________________________________________________________________________________

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3.4 Protocolo de los grupos de discusión

Grupo de discusión – CCM Experiencia significativa 1

Toma de terrenos Objetivo Complementar la experiencia de Tomas de tierras realizadas por CCM y miembros de distintas comunidades durante los años de 1984 a 1991 Metodología El grupo de discusión se desarrollará siguiendo una guía de once preguntas abiertas. Las preguntas explorarán los siguientes elementos: - Reconstrucción histórica colectiva: hechos, personas e instituciones involucradas, acciones específicas. - Evaluación de experiencias positivas y negativas - Enseñanzas al proceso de organización comunitaria - Posibilidades de réplica en un contexto sociopolítico distinto Al final se hará un ejercicio de construcción en imágenes representativas de la experiencia para identificarla con símbolos significativos. Participantes: grupo de 10 personas máximo – líderes comunitarios vinculados a la experiencia.

Guión – agenda Tiempo estimado de duración: Dos horas

1. Presentación 5 minutos Presentación de la responsable de la investigación Presentación de los participantes (Dinámica)

2. Explicación de metodología 5 minutos 3. Seguimiento de la guía de preguntas 1 hora y

media

a. Reconstrucción de la toma de tierras: Cómo surgen las acciones de toma de tierras; cuáles son los hechos representativos; cuáles son las tomas de tierras más significativas – por qué; quiénes estuvieron vinculados; cómo se desarrollaban las tomas de tierras

b. Cómo se realizaba la organización de las comunidades: durante la toma

/ después de la toma; cómo están organizadas las comunidades que participaron en las tomas de tierras. Evaluar nivel de organización de las que se han mantenido y las que ahora están, aparentemente más desorganizadas.

c. Qué elementos eran los más importantes en las tomas de tierra – qué

elementos garantizaban el éxito o el fracaso en las tomas de tierra

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d. Cómo se desarrollaba el proceso de negociación legal de las distintas comunidades; a qué acuerdos se llegaban; con qué instancias se negociaba; cómo eran esas negociaciones; cuál es la situación legal de esas comunidades; cuál ha sido la diferencia de las comunidades ya legalizadas y las que tienen pendiente el proceso.

e. Qué es lo que más se ha aprendido de los procesos de tomas de tierra;

qué llevó a dejar de hacer las acciones de tomas de tierra; qué nuevas presiones hay por parte de las comunidades al momento de plantear la necesidad de espacios para habitar.

f. Se conocen experiencias de tomas de tierra en las que no ha habido

participación de CCM; cómo han sido esas experiencias; qué apoyos institucionales han tenido; tienen algún tipo de contacto con esas comunidades.

g. Cuáles fueron las mejores experiencias de tomas de tierra; por qué han

sido las mejores (nivel organizativo, nivel comunitario, legalización, apoyo institucional)

h. Qué era lo más positivo de las tomas de tierra; cuáles eran los

principales logros que se obtenían; cómo se aprovechaban esos logros.

i. Qué era lo más negativo de las tomas de tierra; cuáles eran las principales dificultades que se vivían; cómo se solventaban.

j. La experiencia de tomas de terrenos ha generado dificultades o

problemas años después de haberse realizado?; cómo se están enfrentando esos problemas por la comunidad y por CCM.

k. Si el problema de vivienda sigue siendo grande en los sectores más

pobres, cómo se puede solucionar ese problema (no la legalización de terrenos ya habitados, si no la necesidad de nuevos terrenos).

4. Trabajo con imágenes – explicación 20 minutos Se entregará una serie de periódicos para que busquen en ellos imágenes que representen simbólicamente lo que significó las tomas de tierra a las comunidades. La pregunta principal en este ejercicio es: ¿qué significó las tomas de tierra para las comunidades? ¿Cómo podría representarlo en imágenes?

5. Cierre – agradecimiento – refrigerio

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Grupo de discusión – CCM Experiencia significativa 2 Capacitaciones

Objetivo Complementar la experiencia de capacitaciones realizadas por CCM durante sus 21 años Metodología El grupo de discusión se desarrollará siguiendo una guía de 8 preguntas abiertas. Las preguntas explorarán los siguientes elementos: - Reconstrucción histórica colectiva: hechos, personas e instituciones involucradas, acciones específicas. - Evaluación de experiencias positivas y negativas - Enseñanzas al proceso de capacitación - Temáticas que deben abordarse en capacitaciones en el futuro Al final se hará un ejercicio de construcción de temarios, dinámicas y grupos de personas a los que puede ir dirigido Participantes: grupo de 10 personas máximo – líderes comunitarios que han participado en las capacitaciones Guión – agenda Tiempo estimado de duración: Dos horas

1. Presentación 5 minutos Presentación de la responsable de la investigación Presentación de los participantes (Dinámica)

2. Explicación de metodología 5 minutos 3. Seguimiento de la guía de preguntas 1 hora y

media

a. Reconstrucción histórica de las capacitaciones: Cómo eran las primeras

capacitaciones; qué temáticas se han abordado en el transcurso del tiempo; quiénes han participado.

b. Qué temáticas han sido las más interesantes; qué temáticas han llamado más la atención; qué temas han llamado más la atención de los jóvenes, de las mujeres.

c. Qué temáticas han sido las más provechosas; de qué temáticas se ha aprendido más.

d. Qué se ha obtenido de las capacitaciones; qué se han ganado de las capacitaciones; qué cosas se han mejorado; cómo podemos ver los resultados de las capacitaciones.

e. Si se hace una valoración general de las temáticas, cuáles podríamos decir que no han dado los resultados esperados; por qué hay esa

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percepción; qué pudo haber influenciado para que la capacitación no obtuviera los resultados esperados.

f. Cómo se evalúan las capacitaciones que se han dado; cómo se evalúan los temas; cómo se evalúan los capacitadores; cómo se evalúa la manera que han dado las capacitaciones. En qué se pueden mejorar

Elemento Fortalezas Debilidades

Capacitaciones Temas Capacitadores Manera en que se han dado

4. Construcción de agenda 20 minutos

Se llenará una matriz con los elementos que se proponen para una agenda de capacitación

Temas Personas a quienes va dirigido

Dinámicas Resultados esperados

5. Cierre – agradecimiento – refrigerio

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Grupo de discusión – CCM Experiencia significativa 3

Acceso a servicios básicos Objetivo Complementar la experiencia de capacitaciones realizadas por 6 durante sus 21 años Metodología El grupo de discusión se desarrollará siguiendo una guía de 7 preguntas abiertas. Las preguntas explorarán los siguientes elementos: - Reconstrucción histórica colectiva: acciones, personas e instituciones involucradas. - Evaluación de experiencias positivas y negativas - Elementos de réplica - Tipo de servicios Participantes: grupo de 10 personas máximo – líderes comunitarios que han participado en las capacitaciones

Guión – agenda Tiempo estimado de duración: Dos horas

1. Presentación 5 minutos Presentación de la responsable de la investigación Presentación de los participantes (Dinámica)

2. Explicación de metodología 5 minutos 3. Seguimiento de la guía de preguntas 1 hora y

media

a. Reconstrucción histórica de la lucha por acceso a servicios en las distintas comunidades: Cómo se ha accedido a los servicios; qué temáticas se han abordado en el transcurso del tiempo; quiénes han participado.

b. Cuál ha sido el papel de CCM en esas tomas de servicios c. Qué problemas se han generado después de la toma de los distintos

servicios d. Cuál es la relación que se establece con las instituciones que brindan los

servicios e. Cómo se evalúan las tomas de servicios: cuáles han sido los aspectos

positivos y los negativos. Qué tipo de problemas se genera cuando se inicia un proceso de toma de servicios.

f. Qué elementos retoman de su experiencia en la toma de servicios para poder reproducirla en otras comunidades, qué recomendarían a las comunidades que tienen problemas en el acceso a servicios

g. Además de los servicios básicos: luz, agua... qué tipo de servicios o infraestructura debería garantizarse en una comunidad. Cómo acceder a ello.

4. Cierre – agradecimiento – refrigerio

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3.5 Guía para el taller con miembros de CCM

1. Elaborar carta: inicio de trabajo en CCM, hechos que marcaron su vida, cómo quieren que sea CCM

Aspectos históricos comunales

1. Principales eventos (negativos y positivos) de CCM GRUPOS 2. Cronología: Periodización de cinco años y ubicar en ella los eventos relacionados

a los siguientes temas: - Preparación de líderes - Renovación de cuadros y metodologías - Organización comunitaria - Relación con las comunidades: Nivel de intensidad - Relación con otras instituciones o apoyos externos - Temas de interés comunitario (que han provocado consensos y disensos): Desastres, salud, seguridad, etc.

3. Línea de tendencia: Definir cuáles han sido los momentos de mayor y menor organización comunitaria: identificar eventos vinculados a ello

Identificación de proyectos: recursos y ubicación geográfica

1. Qué proyectos se están trabajando actualmente con CCM en las comunidades: Dónde? (Objetivo: construir un mapa de influencia de CCM)

2. Quiénes de la comunidad participan en los proyectos Prospectivo

1. Cuál debería ser la relación de CCM con las comunidades 2. Cuáles deberían ser las acciones impulsadas por CCM: temas pendientes 3. Cómo ven el trabajo de CCM en cinco años

X = Períodos de tiempo

Y = Niveles alto, medio, bajo