parálisis del tercer par craneal

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Imagen FMC. 2012;19(8):507-8 507 de 0,2 en cada ojo, no mejoró con estenopéico y fue similar a exploraciones previas. En el fondo de ojo, se objetivaban le- siones diseminadas en ambas retinas por láser, microaneuris- mas, hemorragias abundantes y exudados duros escasos y pe- queños, también sin cambios aparentes respecto a la última exploración registrada. En el resto de la exploración neuroló- gica y examen físico no se evidenció ningún cambio relevante. Comentario En vista de los hallazgos semiológicos observados en nues- tra paciente, nos planteamos una lesión del tercer par cra- neal. Las lesiones del nervio motor-ocular común se mani- fiestan por ptosis palpebral, parálisis de la elevación, descenso y aducción del ojo y ausencia de la contracción del esfínter pupilar. El globo ocular se desvía hacia afuera y ha- cia abajo por la acción no inhibida de los músculos recto ex- terno y oblícuo mayor, respectivamente; y aparece una di- plopía binocular que desaparece al ocluir uno de los ojos 1 . Desde un punto de vista clínico, las parálisis del tercer par craneal se clasifican como formas completas o incompletas, según el respeto o no de la función pupilar. En la valoración del paciente con parálisis del motor ocu- lar común es importante diferenciar las causas microvascula- res de las compresivas, ya que su manejo es muy distinto. A tal efecto, es importante recordar que las fibras parasimpáti- cas encargadas de la inervación pupilar discurren por la peri- feria del tronco nervioso y, por lo tanto, son resistentes al daño isquémico, en contraposición a las fibras profundas, de irrigación más difícil 2 . Por lo tanto, la parálisis incompleta (sin afectación pupilar) del tercer par craneal orienta a una M ujer de 58 años que acude a nuestra consulta por un cuadro de una semana de evolución de visión doble que desaparece al cerrar un ojo, sin otra clínica acompañan- te. Entre sus antecedentes, destaca una diabetes mellitus tipo 2 de 20 años de evolución, insulintratada, con complicacio- nes macro y microangiopáticas: retinopatía diabética de fon- do fotocoagulada, insuficiencia renal crónica en diálisis y neuropatía. El mal control de su diabetes se ha visto influido por el hecho de coexistir con alcoholismo, dependencia ta- báquica y condiciones sociales desfavorables. En la exploración, se objetiva una desviación del ojo iz- quierdo hacia afuera y abajo con la mirada al frente, y una ptosis palpebral del mismo lado (fig. 1). Con la mirada a la derecha, se constata una limitación de la aducción del ojo iz- quierdo que no sobrepasa la línea media (fig. 2). Al mirar ha- cia la izquierda, los dos ojos se movilizan adecuadamente (fig. 3). La exploración mostró unas pupilas isocóricas con una du- dosa hiporreactividad de la izquierda. La agudeza visual fue Parálisis del tercer par craneal Jesusjuan Figueroa Pérez* y Raquel Montiel Argaiz Médico Interno Residente de Medicina Familiar y Comunitaria. Unidad Docente de Medicina Familiar y Comunitaria. Hospital San Pedro. Centro de Salud Gonzalo de Berceo. Logroño. La Rioja. España. *Correo electrónico: [email protected] Figura 2. Mirada a la derecha (ojo izquierdo no pasa de la línea media). Figura 1. Mirada al frente (ptosis y desviación ocular izquierda). Figura 3. Mirada a la izquierda normal.

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FMC. 2012;19(8):507-8 507

de 0,2 en cada ojo, no mejoró con estenopéico y fue similar a exploraciones previas. En el fondo de ojo, se objetivaban le-siones diseminadas en ambas retinas por láser, microaneuris-mas, hemorragias abundantes y exudados duros escasos y pe-queños, también sin cambios aparentes respecto a la última exploración registrada. En el resto de la exploración neuroló-gica y examen físico no se evidenció ningún cambio relevante.

ComentarioEn vista de los hallazgos semiológicos observados en nues-tra paciente, nos planteamos una lesión del tercer par cra-neal. Las lesiones del nervio motor-ocular común se mani-fiestan por ptosis palpebral, parálisis de la elevación, descenso y aducción del ojo y ausencia de la contracción del esfínter pupilar. El globo ocular se desvía hacia afuera y ha-cia abajo por la acción no inhibida de los músculos recto ex-terno y oblícuo mayor, respectivamente; y aparece una di-plopía binocular que desaparece al ocluir uno de los ojos1.

Desde un punto de vista clínico, las parálisis del tercer par craneal se clasifican como formas completas o incompletas, según el respeto o no de la función pupilar.

En la valoración del paciente con parálisis del motor ocu-lar común es importante diferenciar las causas microvascula-res de las compresivas, ya que su manejo es muy distinto. A tal efecto, es importante recordar que las fibras parasimpáti-cas encargadas de la inervación pupilar discurren por la peri-feria del tronco nervioso y, por lo tanto, son resistentes al daño isquémico, en contraposición a las fibras profundas, de irrigación más difícil2. Por lo tanto, la parálisis incompleta (sin afectación pupilar) del tercer par craneal orienta a una

Mujer de 58 años que acude a nuestra consulta por un cuadro de una semana de evolución de visión doble

que desaparece al cerrar un ojo, sin otra clínica acompañan-te. Entre sus antecedentes, destaca una diabetes mellitus tipo 2 de 20 años de evolución, insulintratada, con complicacio-nes macro y microangiopáticas: retinopatía diabética de fon-do fotocoagulada, insuficiencia renal crónica en diálisis y neuropatía. El mal control de su diabetes se ha visto influido por el hecho de coexistir con alcoholismo, dependencia ta-báquica y condiciones sociales desfavorables.

En la exploración, se objetiva una desviación del ojo iz-quierdo hacia afuera y abajo con la mirada al frente, y una ptosis palpebral del mismo lado (fig. 1). Con la mirada a la derecha, se constata una limitación de la aducción del ojo iz-quierdo que no sobrepasa la línea media (fig. 2). Al mirar ha-cia la izquierda, los dos ojos se movilizan adecuadamente (fig. 3). La exploración mostró unas pupilas isocóricas con una du-dosa hiporreactividad de la izquierda. La agudeza visual fue

Parálisis del tercer par cranealJesusjuan Figueroa Pérez* y Raquel Montiel ArgaizMédico Interno Residente de Medicina Familiar y Comunitaria. Unidad Docente de Medicina Familiar y Comunitaria. Hospital San Pedro. Centro de Salud Gonzalo de Berceo. Logroño. La Rioja. España.*Correo electrónico: [email protected]

Figura 2. Mirada a la derecha (ojo izquierdo no pasa de la línea media).

Figura 1. Mirada al frente (ptosis y desviación ocular izquierda). Figura 3. Mirada a la izquierda normal.

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Figueroa Pérez J y Montiel Argaiz R. Parálisis del tercer par craneal

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patología microvascular, mientras que las parálisis comple-tas sugieren una patología compresiva.

Con estos hallazgos clínicos, y sospechando una parálisis completa del tercer par debido a la hiporreactividad pupilar izquierda, la paciente fue derivada a urgencias del hospital de referencia para su evaluación, descartándose una patolo-gía compresiva por técnica de neuroimagen.

Bibliografía1. Savino PJ, Sergott RC. Neuro-Ophthalmology. En: Rhee DJ, Pyfer MF,

eds. The Wills Eye Manual. 3.ª ed. Filadelfia: Lippincott Williams & Wilkins; 1999. p. 640.

2. Ropper AH, Brown RH. En: Adams and Victor´s. Principles of neurolo-gy. 8.ª ed. Boston-Massachusetts: McGraw-Hill; 2006. p. 234.