para contactar con nosotros bio

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Bio A ndalucía Nº 1 Revista del Colegio Oficial de Biologos de Andalucía Primer número de la Revista del Colegio Oficial de Biólogos Bio Andalucía El premio EURYI y la Carrera Investigadora Prevención social del fuego Anisákidos, parásitos de peces comerciales del Mediterráneo Andaluz El Biólogo en reproducción asistida humana Ocupaciones emergentes en Andalucía 2º SIMPOSIUM DE BIÓLOGOS ANDALUCES Noviembre-Diciembre 2004

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Page 1: Para contactar con nosotros Bio

BioAndalucía Nº 1Revista del Colegio Oficial de Biologos de Andalucía

www.cobanda luc i a . o r g

Para contactar con nosotros

Oficina en Sevilla, del COBAAvd. San Francisco Javier, 9 Edifício Sevilla, 2Planta sótano. Módulo, 1. 41.018 SEVILLAe-mail: [email protected]: Lunes, Miércoles y ViernesTardes: 17:30 a 21:30Teléfono: 954 70 53 63Fax: 954 70 53 63

Oficina en Málaga, del COBAC/ Arquitecto Eduardo Estévez, 12. 1ºOficina, 9. 29018 MÁLAGAe-mail: [email protected]: Lunes, Miércoles y ViernesTardes: 18:00 a 21:00Teléfono: 952 29 98 37Fax: 951 23 20 70

Sede Oficial del Colegio Oficial de Biólogos de AndalucíaAvda. Pablo Picasso, 28. 1ºC. 18008 GRANADAe-mail: [email protected] de Lunes a Viernes: 10:30 a 14:00 y 17:00 a 20:00Teléfono: 958 18 39 73 / 958 18 32 92Fax: 958 18 32 92

Primer número de la Revista del Colegio Oficial de Biólogos BioAndalucía

El premio EURYI y la CarreraInvestigadora

Prevención social del fuegoAnisákidos, parásitos de pecescomerciales del Mediterráneo

AndaluzEl Biólogo en reproducción

asistida humanaOcupaciones emergentes en

Andalucía

2º SIMPOSIUM DE BIÓLOGOSANDALUCES

Biólogos/as, profesionales indispensables parala vida y al servicio de la sociedad

Noviembre-Diciembre 2004

Más información:[email protected] (información en web).orientació[email protected] (orientación profesional y laboral).

Page 2: Para contactar con nosotros Bio

IntroducciónLas larvas de anisákidos en el pescado se conocen desde

el siglo XIII , sin embargo, su interés no se manifiesta hastamediados del siglo pasado, debido a las pérdidas económicasque registraron las industrias del bacalao por la implicaciónde estos nematodos en la Salud Pública. La ingestión depescado, crudo o semicrudo, que alberga en la musculaturael tercer estado larvario infectivo (L3) de nematodos de losgéneros Anisakis o Pseudoterranova puede provocar en elhombre dos síndromes bien diferenciados: uno, caracterizadopor un cuadro de dolor abdominal acompañado a veces devómitos, náuseas y diarreas y provocado por la acción delas larvas vivas presentes en el tracto digestivo, y el otroen el que se desarrollan reacciones alérgicas.

Las especies de anisákidos más frecuentes en los pecesdel Mediterráneo andaluz son Anisakis simplex s.l., A.physeteris, Hysterothylacium aduncum e H. fabri, si bienla primera es la de mayor implicación sanitaria y de la quese conoce mejor su biología. El estado adulto de A. simplexse desarrolla en ciertos mamíferos marinos (cetáceos),mientras que la L3 la albergan crustáceos eufáusidos dediversos géneros como Thysanoessa, Euphausia,Meganyctiphanes y Nyctiphanes (Smith y Wootten, 1978;Smith, 1983; Nagasawa, 1990). Un gran número de especiesde peces teleósteos y moluscos cefalópodos decabraquiosde todo el mundo pueden albergar la larva infectiva.

Material y MétodosEn el presente estudio se han analizado seis especies

de pescados de interés comercial: 94 sardinas (Sardinapilchardus) capturadas en Málaga, 72 boquerones (Engraulisencrasicholus) de la misma procedencia que la especieanterior, 53 jureles (Trachurus trachurus) de las costasde Granada y Málaga, 301 bacaladillas (Micromesistiuspoutassou) capturadas en el litoral de Granada, 58 brótolasde roca (Phycis phycis) que procedían de Granada yMálaga, y 113 salmonetes de roca (Mullus surmuletus) delas costas de Granada, Málaga y Almería. La recogida delas muestras se hizo al azar. Una vez transportado elpescado al laboratorio, se procedía a la disección yrecogida de los anisákidos que se encontraban libres enla cavidad corporal (Fig. 1). Para liberar los nematodosencapsulados, las vísceras y la musculatura se sometíanpor separado a una digestión pépsica a 36 ºC (McGladery,1986) durante un tiempo variable dependiendo del tipode pescado (2-4 horas). Finalizada la digestión, se examinóbajo el microscopio estereoscópico. Una vez aislados

Victoriano Díaz, biólogo parasitólogo, y colaboradores nos presentan las conclusiones desu estudio, comprobando la existencia de larvas de nematodos en distintos tipos de pescado

consumidos de forma habitual por el ser humano.

Valero, A.; Díaz V.; Adroher, FJ.Dpto. Parasitología, Facultad de Farmacia,

Universidad de Granada, 18011-Granada.

ResultadosSe hal laron larvas de cuatro especies deanisákidos,pertenecientes a dos géneros: Anisakis eHysterothylacium. En la tabla 1 se indica la prevalenciade los distintos anisákidos en los hospedadores estudiados.Anisakis se hallaron sólo como larvas de tercer estadio(L3) y la mayoría de ellas estaban encapsuladas en hígado(Fig. 1); algunas se encontraron en gónadas o libres enla cavidad corporal y sólo una larva de A. simplex s.l.se aisló de la musculatura ventral de una bacaladilla.Todos los ejemplares hallados de H. aduncum fueron L3y se localizaron en mesenterio y peritoneo. H. fabri sedetectó en dos de los hospedadores estudiados. En lossalmonetes de roca, fue la única especie de anisákidodetectada, y el 29,20 % de las larvas halladas eran L3y el 71,68 % restante eran larvas de cuarto estadio (L4);

Los parásitos se observaron a 10x y 40xpara su identificación morfológica.

Larvas de A. simplex en hígado y musculatura debacaladilla; 2) Larvas aisladas.

Anisákidos parásitos de peces comerciales del Mediterráneo andaluz.

ARTÍCULOS

mientras que en la brótola de roca, donde el anisákidomayoritario fue H. fabri, el 19,76 % de las larvas de esteparásito fueron L3 y el resto L4. Ambas formas larvariasse encontraron en el mesenterio de ambos hospedadores.

DiscusiónLa diferenciación de las larvas de Anisakis se ha realizadode acuerdo con Shiraki (1974), Oshima (1972) y Smith& Wootten (1978), basada en los dos principalescaracteres morfológicos: longitud de la zona ventriculardel esófago (más corto para A. physeteris) y la presenciade un mucrón en el extremo final de la cola en A.simplex. En cuanto a Hysterothylacium, Janiszewska(1949), Sey (1970) y Petter & Maillard (1988) diferencianclaramente entre H. aduncum e H. fabri atendiendo ala longitud del ciego intestinal. Estos nematodos parasitanun amplio número de especies de peces. A pesar de quese han encontrado altas parasitaciones en distintaslocalizaciones –como son mesenterio, hígado ymusculatura, éstas dos últimas principalmente paraAnisakis–, no parece existir evidencias claras de queestas larvas sean patógenas para los peces adultos (Smith& Wootten, 1978), aunque pueden suponer unaimportante causa de mortalidad en los estadios larvarios(Balbuena et al., 2000). Sin embargo, en el hombre son cada vez más los casos de anisakidosis que se describen,debido a los cambios alimenticios de la sociedadoccidental con un mayor consumo de especialidadeselaboradas con pescado crudo como los boquerones envinagre, ceviche, sushi, sashimi, etc y sobre todo almayor conocimiento de la enfermedad por parte de losprofesionales sanitarios.

Tabla 1. Prevalencia de anisákidos

H. fabriHospedador Anisákidos A. simplex A. physeteris H. aduncum

-Sardina

-Boquerón

-Jurel

-Salmonete

de roca

-Bacaladilla

-Brótola

de roca

9,97

4,17

8,90

79,65

10,63

62,06

-

-

-

-

2,66

3,45

9,97

2,28

4,20

-

2,33

5,17

-

-

-

79,65

-

59,90

-

1,39

5,60

79,65

6,65

1,72

BibliografíaBalbuena, J.A.; Karlsbakk, E.; Kuenseth, A.M.; Saksuik, M.;Nylund, A. (2000). J. Parasitol., 86: 1271-1275.

Janiszewska, J. (1949). Zool. Poloniae, 5: 7-30.

McGladdery, S.E. (1986). Can. J. Fish. Aquat. Sci., 43: 1312-1317.

Nagasawa, K. (1990). En: Intestinal anisakiasis in Japan. Infectedfish, seroimmunological diagnosis, and prevention. (Eds.,Ishikura, H.; Kikuchi, K.), Springer-Verlag, Tokyo, pp. 23-29.

Oshima, T. (1972). En: Progress of Medical Parasitology inJapan, Vol. 4 (Eds., Morishita, K.; Komiya, Y.; Matsubayashi,H.), Meguro Parasitological Museum, Tokyo, pp. 301-393.

Petter, A.J.; Maillard, C. (1988). Bull. Mus. Nal. Hist. Nat., 4eSér., 10: 347-369.

Sey, O. (1970). Acta Adriatica, 13: 1-16.

Shiraki, T. (1974). Acta Med. Biol., 22: 57-98.

Smith, J.W.; Wootten, R. (1978). Adv. Parasitol., 16: 93-148.

Smith, J.W. (1983). J. Helminthol., 57: 205-224.

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IntroducciónLas larvas de anisákidos en el pescado se conocen desde

el siglo XIII , sin embargo, su interés no se manifiesta hastamediados del siglo pasado, debido a las pérdidas económicasque registraron las industrias del bacalao por la implicaciónde estos nematodos en la Salud Pública. La ingestión depescado, crudo o semicrudo, que alberga en la musculaturael tercer estado larvario infectivo (L3) de nematodos de losgéneros Anisakis o Pseudoterranova puede provocar en elhombre dos síndromes bien diferenciados: uno, caracterizadopor un cuadro de dolor abdominal acompañado a veces devómitos, náuseas y diarreas y provocado por la acción delas larvas vivas presentes en el tracto digestivo, y el otroen el que se desarrollan reacciones alérgicas.

Las especies de anisákidos más frecuentes en los pecesdel Mediterráneo andaluz son Anisakis simplex s.l., A.physeteris, Hysterothylacium aduncum e H. fabri, si bienla primera es la de mayor implicación sanitaria y de la quese conoce mejor su biología. El estado adulto de A. simplexse desarrolla en ciertos mamíferos marinos (cetáceos),mientras que la L3 la albergan crustáceos eufáusidos dediversos géneros como Thysanoessa, Euphausia,Meganyctiphanes y Nyctiphanes (Smith y Wootten, 1978;Smith, 1983; Nagasawa, 1990). Un gran número de especiesde peces teleósteos y moluscos cefalópodos decabraquiosde todo el mundo pueden albergar la larva infectiva.

Material y MétodosEn el presente estudio se han analizado seis especies

de pescados de interés comercial: 94 sardinas (Sardinapilchardus) capturadas en Málaga, 72 boquerones (Engraulisencrasicholus) de la misma procedencia que la especieanterior, 53 jureles (Trachurus trachurus) de las costasde Granada y Málaga, 301 bacaladillas (Micromesistiuspoutassou) capturadas en el litoral de Granada, 58 brótolasde roca (Phycis phycis) que procedían de Granada yMálaga, y 113 salmonetes de roca (Mullus surmuletus) delas costas de Granada, Málaga y Almería. La recogida delas muestras se hizo al azar. Una vez transportado elpescado al laboratorio, se procedía a la disección yrecogida de los anisákidos que se encontraban libres enla cavidad corporal (Fig. 1). Para liberar los nematodosencapsulados, las vísceras y la musculatura se sometíanpor separado a una digestión pépsica a 36 ºC (McGladery,1986) durante un tiempo variable dependiendo del tipode pescado (2-4 horas). Finalizada la digestión, se examinóbajo el microscopio estereoscópico. Una vez aislados

Victoriano Díaz, biólogo parasitólogo, y colaboradores nos presentan las conclusiones desu estudio, comprobando la existencia de larvas de nematodos en distintos tipos de pescado

consumidos de forma habitual por el ser humano.

Valero, A.; Díaz V.; Adroher, FJ.Dpto. Parasitología, Facultad de Farmacia,

Universidad de Granada, 18011-Granada.

ResultadosSe hal laron larvas de cuatro especies deanisákidos,pertenecientes a dos géneros: Anisakis eHysterothylacium. En la tabla 1 se indica la prevalenciade los distintos anisákidos en los hospedadores estudiados.Anisakis se hallaron sólo como larvas de tercer estadio(L3) y la mayoría de ellas estaban encapsuladas en hígado(Fig. 1); algunas se encontraron en gónadas o libres enla cavidad corporal y sólo una larva de A. simplex s.l.se aisló de la musculatura ventral de una bacaladilla.Todos los ejemplares hallados de H. aduncum fueron L3y se localizaron en mesenterio y peritoneo. H. fabri sedetectó en dos de los hospedadores estudiados. En lossalmonetes de roca, fue la única especie de anisákidodetectada, y el 29,20 % de las larvas halladas eran L3y el 71,68 % restante eran larvas de cuarto estadio (L4);

Los parásitos se observaron a 10x y 40xpara su identificación morfológica.

Larvas de A. simplex en hígado y musculatura debacaladilla; 2) Larvas aisladas.

Anisákidos parásitos de peces comerciales del Mediterráneo andaluz.

ARTÍCULOS

mientras que en la brótola de roca, donde el anisákidomayoritario fue H. fabri, el 19,76 % de las larvas de esteparásito fueron L3 y el resto L4. Ambas formas larvariasse encontraron en el mesenterio de ambos hospedadores.

DiscusiónLa diferenciación de las larvas de Anisakis se ha realizadode acuerdo con Shiraki (1974), Oshima (1972) y Smith& Wootten (1978), basada en los dos principalescaracteres morfológicos: longitud de la zona ventriculardel esófago (más corto para A. physeteris) y la presenciade un mucrón en el extremo final de la cola en A.simplex. En cuanto a Hysterothylacium, Janiszewska(1949), Sey (1970) y Petter & Maillard (1988) diferencianclaramente entre H. aduncum e H. fabri atendiendo ala longitud del ciego intestinal. Estos nematodos parasitanun amplio número de especies de peces. A pesar de quese han encontrado altas parasitaciones en distintaslocalizaciones –como son mesenterio, hígado ymusculatura, éstas dos últimas principalmente paraAnisakis–, no parece existir evidencias claras de queestas larvas sean patógenas para los peces adultos (Smith& Wootten, 1978), aunque pueden suponer unaimportante causa de mortalidad en los estadios larvarios(Balbuena et al., 2000). Sin embargo, en el hombre son cada vez más los casos de anisakidosis que se describen,debido a los cambios alimenticios de la sociedadoccidental con un mayor consumo de especialidadeselaboradas con pescado crudo como los boquerones envinagre, ceviche, sushi, sashimi, etc y sobre todo almayor conocimiento de la enfermedad por parte de losprofesionales sanitarios.

Tabla 1. Prevalencia de anisákidos

H. fabriHospedador Anisákidos A. simplex A. physeteris H. aduncum

-Sardina

-Boquerón

-Jurel

-Salmonete

de roca

-Bacaladilla

-Brótola

de roca

9,97

4,17

8,90

79,65

10,63

62,06

-

-

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2,66

3,45

9,97

2,28

4,20

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2,33

5,17

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79,65

-

59,90

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1,39

5,60

79,65

6,65

1,72

BibliografíaBalbuena, J.A.; Karlsbakk, E.; Kuenseth, A.M.; Saksuik, M.;Nylund, A. (2000). J. Parasitol., 86: 1271-1275.

Janiszewska, J. (1949). Zool. Poloniae, 5: 7-30.

McGladdery, S.E. (1986). Can. J. Fish. Aquat. Sci., 43: 1312-1317.

Nagasawa, K. (1990). En: Intestinal anisakiasis in Japan. Infectedfish, seroimmunological diagnosis, and prevention. (Eds.,Ishikura, H.; Kikuchi, K.), Springer-Verlag, Tokyo, pp. 23-29.

Oshima, T. (1972). En: Progress of Medical Parasitology inJapan, Vol. 4 (Eds., Morishita, K.; Komiya, Y.; Matsubayashi,H.), Meguro Parasitological Museum, Tokyo, pp. 301-393.

Petter, A.J.; Maillard, C. (1988). Bull. Mus. Nal. Hist. Nat., 4eSér., 10: 347-369.

Sey, O. (1970). Acta Adriatica, 13: 1-16.

Shiraki, T. (1974). Acta Med. Biol., 22: 57-98.

Smith, J.W.; Wootten, R. (1978). Adv. Parasitol., 16: 93-148.

Smith, J.W. (1983). J. Helminthol., 57: 205-224.

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