NÚMERO 31 NOVIEMBRE DE 2010

ISSN: 1909-5201PU

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ACIÓ

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La Brújula [ 3 ]

Nuestra fiestadeconceptos

Dentro de un par de semanas, culminará el tercer período académico de 2010 en la Tadeo. Carreras para llegar a tiempo a clases, concentración destinada a en-tender “al derecho y al revés” las lecturas asignadas en las clases, espíritu creativo para presentar los trabajos de la mejor ma-nera y, claro está, jornadas valiosas que per-miten superar exitosamente los exámenes –sin incluir los que aún faltan desarrollar– son vivencias que todos los estudiantes recordarán durante la etapa final del año. En la edición de noviembre, de La Brújula, tenemos la inten-ción de aportarles otros conceptos que puedan valorar con in-terés, cada vez que tengan en sus manos nuestra publicación.

Un concepto esencial es el de investigar, simbolizado en el Premio ACTA que acaba de obtener el Programa de Ingeniería de Alimentos; impulsado en la Universidad con iniciativas como el Ambiente Virtual de Aprendizaje Tadeísta (AVATA); y comple-mentado con temas como la innovación y el conocimiento, que dos especialistas de la Universidad Politécnica de Valencia, Es-paña, expusieron en la UJTL.

Como ciudadanos de un mundo cambiante y global, debe-mos tener en cuenta la importancia del pluralismo, tal como lo explica la nueva Decana del Programa de Bellas Artes, Carmen María Jaramillo; y no olvidar los beneficios que ofrece el hecho de llevar una vida saludable, tal como lo reflejan quienes inte-gran el equipo de tenis de la Tadeo.

Observar es otro concepto para tener en cuenta, si contem-plamos las imágenes de bibliotecas de Bogotá logradas por los estudiantes de la Tecnología en Producción Fotográfica, en su cátedra de Fotografía de la arquitectura; si nos centramos en las que ha generado el egresado tadeísta del Programa de Diseño

Gráfico, Jorge Iván Vásquez; o en aquellos pequeños detalles que resultan fun-damentales para valorar el tesoro editorial que alberga la Imprenta del Instituto Caro y Cuervo.

No debemos olvidar la importancia del concepto de libertad, ejemplificado en la iniciativa tadeísta de manejar la seguridad de la Institución desde una visión de puertas abiertas y respeto al ciudadano; representado en la importancia de los derechos culturales que el Centro de Arte y Cultura promueve en la Univer-sidad; y visibilizado en la experiencia vital de las tadeístas que se convierten en mamás y, al mismo tiempo, triunfan en sus estudios.

Finalmente, debemos darle espacio a la sensibilidad artística, condición pre-sente en proyectos audiovisuales como La luz, desarrollado por estudiantes de la Tadeo Seccional del Caribe; expresión vital en los dibujos e ilustraciones de Darío Villegas, docente tadeísta desde hace 15 años y ganador del Octavo Salón Nacional de Arte “Diversidad 2009” Casa Cuadrada; y punto de partida de las narraciones interesantes y complejas de Tatiana Antonio y Andrés Torres, que cierran el presente número de La Brújula.

Les deseamos lo mejor en el cierre de su período académico. Seguiremos acompañándolos en el 2011, felices de recibir sus opiniones e ideas en labruju-la@utadeo.edu.co. ¡Hasta pronto!

Por Equipo de redacción de LA BRÚJULA – labrujula@utadeo.edu.coIlustración: Manuel Corredor - manuelcorredor9@hotmail.com

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Por Natalia Rodríguez – nataliarodriguez_29@hotmail.comIlustración: Andrés Católico- chococato08@hotmail.com

El Programa de Ingeniería de Alimentos de la Universidad fue el ga-nador de la sexta entrega de los Premios de la Asociación Colom-biana de Ciencia y Tecnología de Alimentos (ACTA), en la categoría de “Investigación en Alimentos”, otorgados cada dos años por el Instituto Alpina, en donde compitieron un total de 52 propuestas nacionales y latinoamericanas.

Esta distinción le fue otorgada al trabajo de investigación De-terminación de la composición química y actividad antioxidante en distintos estados de madurez de frutas de consumo habitual en Colombia: Mora, Maracuyá, Guayaba y Papayuela, presentado por las profesoras tadeístas Ligia Rodríguez, Administradora Docente del Programa de Ingeniería de Alimentos y líder de la investigación; Lesly López y Maribel García.

El jurado de los Premios ACTA destacó la calidad y el nivel de investigación del trabajo, que comenzó en septiembre de 2009 y que ha sido financiado por la UJTL. El eje central de la propuesta es el desarrollo de bebidas que contengan sustancias antioxidantes, protectoras de la salud, a partir de hierbas aromáticas y frutas.

Según Ligia Rodríguez, la primera etapa de la investigación con-sistió en evaluar el estado de madurez de las frutas, desde su perío-do de cosecha hasta el momento de la recolección, para encontrar el mayor potencial de las sustancias bio-activas que les confieren propiedades funcionales.

En la iniciativa, que hace parte de los trabajos desarrollados por el grupo de investigación Aprovechamiento de Recursos Agroali-mentarios (APRA), que pertenece al Programa de Ingeniería de Ali-mentos, también participaron varios estudiantes de pregrado, así

como expertos del Centro de Bio-Sistemas que la Tadeo tiene en Chía, Cundinamarca.

A partir del análisis de las frutas, se validaron las metodo-logías analíticas y se adquirieron los reactivos adecuados, así como todos los equipos de laboratorio necesarios para llevar a cabo la práctica experimental, por medio de la cual se logró una argumentación estadística de los resultados obtenidos.

El Programa de Ingeniería de Alimentos de la Tadeo decidió participar en los Premios ACTA, enviando un resumen acerca del trabajo, fundamentado en la determinación de la compo-sición química y la actividad antioxidante en distintos estados de madurez de frutas que resultan de consumo habitual en Colombia. Posteriormente, como cuenta Ligia Rodríguez, “el resumen fue aprobado y nos solicitaron un artículo completo, que enviamos dentro de las fechas establecidas para la convo-catoria. A finales de septiembre, en definitiva, nos fue comu-nicado que la investigación había obtenido el primer puesto”.

Desde el grupo APRA, el objetivo es ofrecer servicios de in-vestigación al sector productivo e industrial, así como a otras universidades, en el caso de que requieran una evaluación re-lacionada con las propiedades funcionales de los alimentos y de otros sectores de la industria alimentaria.

Frente a la distinción recibida, la Decana del Programa de In-geniería de Alimentos, Janeth Luna, resalta el trabajo del grupo APRA, puesto que “están logrando un impacto destacable con las temáticas que manejan, a nivel nacional, en el sentido de profundizar en áreas que resultan interesantes desde el punto

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de vista investigativo, pero que también tienen un impacto real en el sector productivo”.

Para quienes integran el trabajo, resulta motivo de orgullo que el Programa de Ingeniería de Alimentos haya recibido una distinción que le otorga valor al trabajo realizado, en equipo, por docentes y estudiantes, no sólo en el grupo APRA, sino en los Semilleros de In-vestigación del pregrado.

“Nuestro Programa cuenta con Acreditación de Alta Calidad, otor-gada por el Ministerio de Educación Nacional, vigente hasta el 19 de julio de 2011. Esto significa que las actividades y la ejecución de pro-yectos de investigación, se hacen en el marco de lo que se reconoce en la comunidad de alimentos, vinculando a los estudiantes direc-tamente en esos procesos”, explica la decana Gilma Janeth Luna.

Para la profesora Ligia Rodríguez, esta clase de logros permite fomentar en los alumnos tadeístas los valores de la investigación,

puesto que “lo que queremos enseñarle a los estudiantes es que el ejercicio de ellos, como profesionales, va a ser de permanen-te investigación, ya sea científica, dentro de la formalidad de un método, o desde la búsqueda de conocimiento e información general”. La docente cree que si cada tadeísta desarrolla una disciplina de aprendizaje que genere conocimiento, será com-petitivo en el mercado laboral.

Durante 2010, además de obtener varias distinciones por su labor de investigación, el Programa de Ingeniería de Alimen-tos también ha logrado figurar en revistas especializadas, con publicaciones que visibilizan el trabajo desarrollado por sus in-tegrantes. El propósito, en lo que resta del presente año y para 2011, es continuar fortaleciendo los procesos de investigación y seguir logrando un impacto productivo en el sector de los ali-mentos en Colombia.

El Ambiente Virtual de Aprendizaje Tadeísta (AVATA), que surgió en octubre de 2008 como un apoyo al sistema de créditos académicos de la Universidad, es una herramienta que estimula a los alumnos de la UJTL para realizar sus labores estudiantiles apoyándose en una plataforma de software libre a la que pueden acceder de manera autónoma.

Hace dos años, cuando se empezó a implementar, AVATA funcionaba con base en los servidores de la UJTL, y esto impedía que los usuarios tuvieran un acceso veloz al momento de utilizarla. Pero, en la actualidad, con una importante inver-sión, la plataforma se maneja desde Moodle, un ambiente educativo virtual de distribución libre, que permite crear comunidades de aprendizaje en línea y que cuenta con un fuerte soporte de ingeniería, capaz de sostener el ingreso de la po-blación de estudiantes de la Tadeo, que en la actualidad llega a las 12 mil personas.

Rubén Encinales, licenciado en música de la Universidad Pedagógica, con es-pecialización en Edumática –área que estudia la relación entre la educación y la informática–, ha estado vinculado a la Universidad desde hace 13 años y es el coordinador de la plataforma AVATA. Él afirma que “la web 1.0 fue el principio para la implementación de herramientas de apoyo para el aprendizaje y, con el paso del tiempo, se avanzó a la web 2.0, en donde se empezó a hablar de ‘la nube’, un término que se refiere al trabajo con un servidor que permite a los usuarios realizar conexiones entre compañeros y utilizar recursos interactivos para llevar a cabo las actividades académicas”.

Rubén considera esencial que los estudiantes tadeístas conozcan y utilicen más la plataforma virtual y los beneficios que AVATA les brinda, así como las ventajas de usar constantemente el correo institucional, puesto que estos me-dios les abren las puertas a diversos portales de investigación.

Otro beneficio de AVATA es que cuenta con redes de comunicación y canales dedicados al soporte educativo, laboratorios remotos y una amplia cantidad de material escolar e información especializada, para reforzar las clases que se re-ciben en las aulas. Las herramientas web 2.0 disponibles ofrecen todo tipo de

ayudas académicas para la realización de trabajos. También se puede establecer comunicación con otras personas que comparten afinidades y perfiles univer-sitarios y profesionales, miembros de la Red Nacional Académica de Tecnología Avanzada (RENATA), de la Cooperación Latino Americana de Redes Avanzadas, (RedCLARA) y de la Red “América Latina Interconectada con Europa” (ALICE).

Cuando se desarrollan cátedras magistrales en la Universidad, a las que asis-ten personas de otras instituciones o entidades, ellas pueden acceder a AVATA como usuarias externas. Sin embargo, aunque obtienen información sobre los temas de las cátedras, no pueden interactuar con la plataforma ni tener acceso a las actividades que requieren una calificación, pues éstas se reservan exclusi-vamente para los tadeístas.

“En este momento, la Universidad está realizando grandes esfuerzos para que, en un futuro cercano, resulte posible acceder a AVATA desde los salones de clase”, comenta el Coordinador del Ambiente Virtual de Aprendizaje, antes de aclarar que, por ahora, la plataforma tiene un alto nivel de consulta desde los hogares de los estudiantes, teniendo en cuenta que le da mucha dinámica a las actividades de-sarrolladas durante las cátedras.Sin embargo, la meta es lograr que todas las dependencias de la Universidad se vinculen a este proceso tecnológico. Por tal razón, se va a capacitar a los profe-sores en temas como diseño y pedagogía para el uso de tecnología. Asimismo, ya se trabaja en la creación de cuentas de correo sólidas y con alta capacidad tecno-lógica, mediante Google Apps, para contar con una infraestructura consolidada.

Otro de los proyectos tadeístas, mediante el uso de AVATA, es la creación de un repositorio de objetos de aprendizaje –una herramienta que sirve como apoyo y guía para los estudiantes, al momento de realizar trabajos–, en el que se almacene información básica para el desarrollo académico. En Colombia, el Mi-nisterio de Educación Nacional ya está trabajando en uno de estos repositorios, que se llama “Colombia Aprende”.

En la actualidad, antes de ejecutar estas propuestas, Rubén Encinales y quie-nes trabajan a su lado en el desarrollo de AVATA tienen claro que lo prioritario para lograr que la plataforma sea 100% útil para los tadeístas es divulgar la in-formación acerca de los beneficios que aquella le da a cada usuario.Por esa razón, se realizarán campañas de enseñanza que involucren a los estu-diantes de pregrado, posgrado y educación continuada. Asimismo, se ofrecerán charlas inductivas en el Hemiciclo de la Biblioteca, para que el Ambiente Virtual de Aprendizaje Tadeísta forme parte de la esencia de la UJTL.

“Estar al margen de la tecnología resulta imposible y, teniendo en cuenta que el acceso constante representa una importante inversión económica, podemos lograr que la tecnología solucione necesidades inmediatas relacionadas con nuestro campo académico y laboral”, reflexiona Rubén Encinales. Así, los ta-deístas deben empezar a interactuar con esta herramienta, mediante el uso del tutorial de estudiantes que está disponible en la página de inicio de la platafor-ma, http://avata2.utadeo.edu.co. Allí existen videos, documentos en formato PDF y otras guías de uso. ¡AVATA es tadeísta!

conocimiento en líneaAVATA:

Más que un portal académico

Por Audrey Castro - michu_0304@hotmail.comIlustración: Carolina Vargas – dicarolinav@gmail.com

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“La innovación construye, gestionando conocimiento, caminos inéditos que conducen a una meta a la que a veces se llega, y

cuando esto ocurre, deja de ser objetivo de innovación, pues sólo existe aquella innovación en la que el camino aún está

por construir”.Justo Nieto, reconocido académico y director univer-

sitario español, dejó esta idea en el ambiente, frente a un grupo de tadeístas interesado en saber cómo pue-den integrarse de manera exitosa los mundos académi-

co y empresarial. Las iniciativas que él ha desarrollado en el campo de la innovación, como rector de la Universidad

Politécnica de Valencia entre 1986 y 2004, le han valido un importante reconocimiento internacional, que incluye los doc-

torados Honoris Causa de la Universidad de La Habana (Cuba), la Uni-versidad de Xalapa (México) y la Universidad del Valle (Colombia).

Invitado por el Programa de Relaciones Internacionales de la UJTL, el señor Nieto, quien actualmente se desempeña como presidente de la Fundación Globalidad y Microeconomía, visitó la Universidad el 8 de octubre de 2010, acompañado por Francisco José Mora, vicerrector de planificación e innova-ción de la Universidad Politécnica de Valencia (UPV).

La presencia de ambos directivos en la Tadeo permitió conocer, de primera mano, la manera en que la UPV pasó de ser, en menos de dos décadas, una institución de educación superior de nivel aceptable en Europa, a un modelo de progreso empresarial y de investigación, cuyo desarrollo se caracteriza por la excelencia, la internacionalización, la solidaridad y la eficacia, y en donde se incentiva la participación de organizaciones, empresas, estudiantes y profe-sionales en todos los aspectos de la vida universitaria.

Desde el punto de vista de Justo Nieto, la innovación es un proceso que se traduce en transformar, de modo inédito y original, el conocimiento en algún tipo de valor reconocido, ya sea económico o efectivo, que valoran los demás, pues es la sociedad quien decide cómo ve las cosas o cuánto paga por ellas.

Transformar el conocimiento

Por Equipo de redacción de LA BRÚJULA – labrujula@utadeo.edu.coIlustración: Nicolás Buenaventura - mucharata@gmail.com

Retos y valor social“Creo que la Universidad Jorge Tadeo Lozano cuenta con los elementos necesa-

rios para obtener importantes logros en el campo de la innovación, teniendo en cuenta que imparte programas de calidad en diversas áreas del conocimiento. Y el desarrollo plural de conocimiento permite generar riqueza social y económi-ca”, menciona Francisco José Mora.

Según él, los elementos con los que la UJTL debe complementar la buena for-mación que ya imparte a sus estudiantes –para lograr que existan propuestas exitosas de innovación– pasan por acoger las iniciativas de negocio que ellos presentan y analizar su viabilidad, fomentar una formación en donde la teoría y la práctica resulten equilibradas, definir alianzas que permitan el desarrollo de proyectos empresariales con la industria y, finalmente, ampliar los acuerdos educativos y de intercambio con universidades de otras regiones del mundo.

Con base en la experiencia desarrollada por la UPV, que en la actualidad cuenta con alianzas con más de once com-pañías y es uno de los motores laborales que existe en la Co-munidad Valenciana, otro factor que en opinión de Nieto y Mora debe tener en cuenta la Tadeo –y de hecho ya lo está haciendo desde diversas áreas académicas y de bienestar– es su función social.

“El objetivo de toda institución de educación superior debe ser la formación de personas que tengan éxito en la socie-dad. Y para lograrlo, se requiere difundir el conocimiento, fomentar el debate y acercar la educación a las poblaciones más vulnerables”, afirma el presidente de la Fundación Globa-lidad y Microeconomía.

Para lograrlo, resulta clave que cada universidad rompa con el imaginario social tradicional que la encasilla en un modelo académico poco dinámico y, por el contrario, lidere acciones que la dimensionen como epicentro de pensamiento y acción, a partir de los cuales se difunden y promuevan diferentes ini-ciativas culturales, deportivas, de desarrollo y de investigación.

De hecho, uno de los pilares que, de cara al futuro, resul-ta factible que las universidades desarrollen con más acierto, tiene que ver con la resolución de problemas reales que, en di-ferentes órdenes, pueden surgir dentro de las sociedades. En tal sentido, toma cada vez más fuerza la implementación de centros de pensamiento o Think tanks que aborden y analicen fenómenos científicos, económicos, políticos y de comuni-cación, entre otros campos, cuyas sedes centrales funcio-nan en centros académicos, pero cuyos resultados y puntos de vista abarcan temas de orden local, regional, nacional e internacional.

“La riqueza intelectual y académica debe emplearse para hacer mejor nuestra vida. Desde las universidades, debemos generar opciones para que se abran nuevas oportunidades la-borales y sociales, y para que los emprendedores puedan dar buen destino a sus ilusiones. Una de las posibilidades que mejor resume esa noción es la de Innovación”, concluye Francisco José Mora.

En la Tadeo, los esfuerzos dirigidos a investigar, innovar y ge-nerar impacto en la sociedad cada día toman más fuerza. Como estudiantes, debemos abrirnos a tales oportunidades, propo-ner ideas novedosas y buscar el apoyo de la UJTL. ¡Contribuya-mos a tener una mejor sociedad!

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A partir del tercer período académico de 2010, la filósofa Carmen María Jaramillo, quien se ha destacado en Colombia por su traba-jo como investigadora, docente y experta en temas de educación, ejerce como decana del Programa de Bellas Artes de la Tadeo.

Para que la comunidad estudiantil de la UJTL sepa cuál es la vi-sión y los objetivos de la nueva decana, quien se ha desempeñado en cargos tan importantes como la curaduría del Museo de Arte Moderno de Bogotá (MAMBO), la jefatura de la División de Artes Plásticas de Colcultura y la dirección de la Unidad de Artes y otras Colecciones del Banco de la República, LA BRÚJULA habló con ella y tuvo acceso a los puntos de vista que, en diferentes sentidos, deli-mitarán su labor como decana:

La Brújula: ¿Como decana, cuál es su visión del Programa de Be-llas Artes de la Universidad Jorge Tadeo Lozano?

Carmen Jaramillo: Encuentro un magnífico programa, estructurado mediante los ajustes que Víctor Laignelet, el anterior decano; junto a Manuel Santana, administrador docente; y el grupo de profesores del Programa, han realizado un proyecto articulado, pertinente para este momento en lo que se refiere a las artes, con áreas que retoman el oficio artístico y que cuentan, además, con una importante proyec-ción social.

Existe, de hecho, una nueva área llamada Plástica Social, encami-nada a los intereses de la comunidad y a la inserción en grupos vul-nerables, así como a la circulación de proyectos a través de diferentes redes. También está el tema de los nuevos laboratorios, que permiti-rán fortalecer a la Facultad de Ciencias Humanas, Artes y Diseño, y al Programa de Bellas Artes en distintos campos.

Además, viene la consolidación de proyectos de postgrado en nuestra área, que es uno de los retos más importantes que tene-mos, así como continuar con los procesos de formación, creación e investigación, tanto de estudiantes como de docentes, que deriven en resultados y publicaciones valiosas.

L.B.: Teniendo en cuenta su amplia experiencia en el ámbito do-cente, ¿qué aspectos desea impulsar como decana de Bellas Artes?

C.J.: A partir de mi experiencia como maestra, creo que existe un aspecto que resulta muy interesante y es el de los trabajos de in-vestigación con los estudiantes, porque siento que aprendí mucho al respecto a partir de los Semilleros de Investigación.

Considero que el trabajo en grupo multiplica el saber, cuando las ideas van tomando forma, y entonces logramos circular por un diálogo constante que va desmontando la figura y el estereotipo

del clásico investigador solitario. Por esa razón, me gusta que el docente aporte su conocimiento a los estudiantes y que, a la vez, se nutra de ellos, en un trabajo de doble vía muy importante.

L.B.: ¿Qué características deben identificar al profesional en Bellas Artes de la UJTL?

C.J.: Con base en los ajustes que ha tenido el Programa de Bellas Artes, creo que un aspecto a tener en cuenta es el do-minio del artista sobre los diferentes temas teórico-prácticos. Es decir, que sepa manejar muy bien los medios con los que trabaja, entendiendo que éstos no son únicamente técnicas bien utilizadas, sino que deben tener una intención y dotar de un mensaje claro a la propuesta artística.

Nuestro artista también debe contar con fortalezas en el área de la investigación. Creo que es importante que los estu-diantes desarrollen un verdadero autoconocimiento, una con-fianza en su talento y sean personas conscientes y respetuosas de todos los puntos de vista, capaces de construir un saber que los identifique como personas creativas y críticas.

L.B.: Siempre existe un fuerte debate respecto a los modos de aprendizaje del arte –empírico y académico–. ¿Por qué es importante que los artistas cuenten con una formación acadé-mica y profesional como la que brinda la Tadeo?

C.J.: El artista que estaba en contra de la academia –enten-dida como organismo hegemónico del conocimiento– se re-bela contra esa idea en el siglo XIX, porque no quiere que la creatividad esté regulada y definida por reglas.

Pero en la actualidad, todos los programas profesionales hacen parte de un campo académico e intelectual, por lo que la formación resulta vital, más allá de la experiencia empírica. Esto sucede porque la academia ya no es un ente regulador, sino un espacio de diálogo, de comprensión y de conocimiento mutuo. En este contexto, no habrá artistas que tengan una sola forma de entender el arte, sino que contarán con un pensamiento plu-ralista y variado acerca de qué es el arte y sobre cómo se asimila.

Tampoco debemos olvidar que el acceso constante a servicios de excelente calidad que ofrece la Tadeo, como libros, imágenes, medios audiovisuales, conferencias con expertos e invitados importantes, entre otras opciones, da la posibilidad de reforzar todas las áreas del conocimiento, por lo que la idea del “genio ar-tístico iluminado” que mencionaba Kant ha perdido fundamento.

Carmen María Jaramillo“El arte es pluralidad”

Por Andrés Torres - blackdog-towers@hotmail.comFotografía: Rafael Mora - rafamora82@gmail.com

Ilustración: Nicolás Buenaventura - mucharata@gmail.co

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L.B.: Respecto al tema de la responsabilidad social, ¿considera que es práctico que las comunidades menos favorecidas encuentren un espacio de expresión en el arte y se aproximen a él?

C.J.: Claro que sí. Creo que la parte social es un aspecto que se debe tener muy en cuenta para cumplir de manera primordial. Por eso, precisamente, el área de Plástica Social permite saber cómo se está trabajando con la sociedad y de qué manera ésta refleja sus pensamientos, genera sus vínculos y pone a circular el conocimiento de diferentes maneras. Y esto no se refiere únicamente a las obras, sino también a los proyectos colectivos importantes que ayudan a borrar definitivamente los límites que existían antiguamente entre lo que se supone que era arte culto y arte popular.

L.B.: ¿Dónde cree usted que radica la importancia del arte en un país como Colombia, en el que temas como la economía y la seguridad siempre son la prioridad?

C.J.: El arte está dentro de la academia porque construye conocimiento y, para todo país, el conocimiento debe ser una prioridad. Además, desde los di-versos tipos de investigación existentes, se construye un importante proceso del conocimiento que aporta en la creación de un sentido de avance que se proyecta hacia el resto de la sociedad. Quizá por eso, el artista ahora no piensa en la soledad de su obra pura, sino que se conecta con su entorno social, cul-tural, político y cívico. Entonces, esa clase de proceder favorece en diferentes sentidos la progresión de Colombia.

L.B.: Para finalizar, ¿cuál será la manera en la que los estudiantes del Pro-grama de Bellas Artes y de la Universidad podrán interactuar con Carmen María Jaramillo?

C.J.: Soy una persona que cree en el diálogo y es bastante dada a la concer-tación. Mi intención es incentivar, con la ayuda de los profesores y estudiantes, unos canales de consulta y de relación cercana con toda la comunidad artística y académica de la Tadeo. En el caso de los alumnos de Bellas Artes, mi idea es conocer las inquietudes que tengan y, con base en ellas, adecuar nuestras prio-ridades y objetivos según las necesidades que expresen. Por supuesto, pongo a disposición de todos ustedes mis experiencias y aportes, para que los encuen-tren visibles y los puedan consultar, de una forma participativa y constante.

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Por Miguel González – miguelgonzalezaguilar@hotmail.comFotografía :Julián Castillo – castillo.visualmedia@gmail.com

Ana Granados, Óscar Díaz, Jairo Hurtado, Francisco Osorio, An-drés Vargas y Andrés Parra, además de aplicados estudiantes de la Tadeo, son algunos de los jugadores que se destacan en el equipo de tenis de la Universidad. Ellos, que entrenan cuatro días a la semana, en las canchas de tenis del Parque Nacional, han clasificado a diferentes torneos nacionales, obteniendo participaciones destacadas en cada uno de ellos.

“Me gusta mucho el tenis y siempre he querido ser profesio-nal. Como la Tadeo tiene un buen equipo, he aprovechado la oportunidad que me da, para entrenar y luego competir, de-jando en alto el nombre de la UJTL”, comenta Óscar Díaz, quien cursa su primer semestre en el Programa de Mercadeo y que obtuvo, en agosto de 2010, el sub-campeonato en el Torneo Interuniversitario Grupo Cerros.

Óscar juega tenis desde los siete años, cuando empezó a practicar motivado por su padre y, teniendo en cuenta la ca-lidad de su juego, ha llegado a ser parte del equipo Élite de Bogotá, donde ha sido dirigido por Billy Espinosa, uno de los entrenadores más importantes de Colombia, quien lo ha ayu-dado a mejorar su nivel, para lograr mejores resultados. De esa manera, y ahora bajo la dirección del entrenador de la Tadeo, Carlos Murillo, también se está destacando en los escalafones de los mejores tenistas universitarios y juveniles del país.

“El equipo de tenis de la Tadeo comenzó a funcionar en los años 2002 y 2003, con estudiantes de diferentes programas, que sen-tían predilección por este deporte”, comenta el profesor Murillo. De esta forma, en la actualidad el conjunto tadeísta completa cerca de ocho años de funcionamiento, basado siempre en la defensa de principios como el juego limpio, la alegría, el esfuerzo y la dedicación, representando de la mejor manera a la UJTL.

La primera aparición oficial del equipo de tenis tuvo lugar en el año 2004, cuan-do intervino en un torneo nacional en Pasto, Nariño, donde ocupó el sexto lugar. Posteriormente, en 2005, lograron el cuarto lugar en un torneo nacional que se disputó en Medellín, y un año después, siguieron con la progresión constante, ob-teniendo el sub campeonato en los Juegos Universitarios de Bogotá 2006.

En 2007, los tenistas de la Universidad ocuparon el quinto puesto, a nivel na-cional, en los Juegos de Cartagena y, durante los años 2008 y 2009, la dirección del grupo, luego de no llegar a algunos acuerdos con ciertos rivales, tomó la decisión de no participar en los Torneos Distrital y Nacional, dedicándose a en-trenar y planificar las actividades posteriores, y a gestar una renovación gradual entre los jugadores.

En este marco, Óscar Díaz y los demás tadeístas que hacen parte del equipo de tenis se han preparado con rigurosidad y mucha disciplina, complementando el aprendizaje deportivo con un óptimo desempeño en las actividades académi-cas de la Universidad. La intención del profesor Murillo es que, en el corto plazo, los resultados permitan un progreso competitivo importante y que se obtengan mejores logros que en años anteriores.

Tenis para todos los gustosEl equipo tadeísta está dividido actualmente en tres categorías: la primera de ellas, la “Ca-tegoría A”, la integran jugadores que cuentan con una amplia trayectoria, tanto a nivel na-cional como internacional. En la “Categoría B” están aquellos tenistas de nivel intermedio, que no son principiantes pero que aún se en-cuentran en proceso de preparación para ac-ceder a la primera categoría. Finalmente, en la “Categoría C” entrenan y aprenden aquellos tadeístas cuya práctica y gusto por el tenis es reciente, quienes apenas están familiarizán-dose con el “deporte blanco”.

Los entrenamientos tienen lugar los días lunes, martes, jueves y sábados, entre la 1 y las 3 p.m., en las canchas del Parque Nacional. El objetivo trazado es que, para el primer se-

mestre de 2011, el quipo entrene seis días a la semana, algo que permitiría que los sábados se destinaran a la práctica de docentes, em-pleados e hijos de tadeístas.

En la actualidad, el equipo de tenis de la Tadeo está conformado por un total de 15 jugadores. “Sí lo podemos ampliar y llegar a tener 25 ó 30 jugadores, esto sería beneficio-so para mejorar la calidad”, agrega Murillo.Por eso, si usted es uno de los tadeístas a quienes le apasiona el deporte de la raqueta y vibra realizando voleas, primeros servicios y golpes ganadores, anímese y haga parte de este gran equipo. Puede obtener la mejor in-formación para hacerlo, acercándose a la Ofi-cina de Deportes, ubicada en el mezzanine del módulo 7, o escribiendo al correo electrónico deportes@utadeo.edu.co.

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La experiencia de visitar las bibliotecas públicas de Bogotá, va más allá de la búsqueda o consulta de libros. Como se aprecia en las fotografías que incluimos en las páginas de La Brújula, su arqui-tectura genera nuevos espacios de esparcimiento, así como usos diversos para los usuarios. Esta experiencia fotográfica surge de la invitación que el boletín electrónico La Aguja le realizó al grupo de estudiantes de Fotografía de la Arquitectura, materia pertenecien-te a la Tecnología en Producción Fotográfica de la Tadeo, para que, guiados por el profesor Juan Antonio Monsalve, participaran con fo-tografías que invitan a contemplar las bibliotecas desde otra pers-pectiva. En la sección “Urbanautas”, de La Aguja, podrá consultar la crónica La biblioteca es otro cuento, así como otros reportajes fotográficos ¡Porque a La Brújula se le pegó La Aguja!

Por Jessica Sánchez - jessicaa.sanchezg@utadeo.edu.co Fotografía: Sue Rubio - Biblioteca Pública El Tintal Manuel Zapata Olivella

Fotografía: José Tapiero- Centro Cultural y Biblioteca Pública Julio Mario Santo Domingo

Fotografía: José Tapiero- Centro Cultural y Biblioteca Pública Julio Mario Santo Domingo

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Cuando habla de la Tadeo, Jorge Iván Vásquez menciona dos palabras que han sido fundamentales en su trayectoria profe-sional: libertad y creatividad. Egresado del Programa de Diseño Gráfico de la Universidad en 1990, también trabajó en la UJTL seis años como docente, de 1994 al 2000. A partir de ese momento y hasta el día de hoy, se ha dedicado a la fotografía, explorando áreas como la imagen publicitaria, el modelaje, el paisaje, la flora y la fauna, que le han permitido realizar exposiciones dentro y fuera de Colombia, y encabezar proyectos tan interesantes como el Club Fotográfico de Bogotá, en el que actualmente participan más de 800 personas, quienes realizan reuniones, salidas y exposiciones en torno al mundo de la fotografía. En las páginas de Imagen y proyecto, les presentamos una selección de algunas de las mejores imágenes desarrolladas por este egresado tadeísta durante los últimos años, que reflejan el dinamismo, la iniciativa y la exigencia que caracterizan el trabajo de su autor.

Imag

en y

Pro

yect

o Por Tatiana Antonio - tatiana.antonio@hotmail.com

[ 22 ] La Brújula La Brújula [ 23 ]

Allá, donde nacen los libros

Un profundo olor a tinta, mezclado con madera, hierro y estaño, inunda el espacio

donde operarios vetustos –sabios por esa labor de silenciosos barqueros– día a día

funden líneas de plomo para componer páginas, miles de ellas.

Allí, máquinas centenarias, perfectamente aceitadas –al menos media docena de

linotipos e intertipos, un par de rotuladoras Ludlow, varios chibaletes en perfecto

estado de conservación y sendas imprentas Heidelberg– operan de forma sincroni-

zada y rítmica para dar a luz la materia prima que sirve para hilar historias que serán

empacadas en hermosos contenedores.

Así es el taller de impresión de la Imprenta Patriótica del Instituto Caro y Cuervo1 ,

situado en la vereda de Yerbabuena, al norte de Bogotá: un lugar tranquilo, reservado

e inspirador, un espacio que queda allá… donde nacen los libros.

Imágenes y textos por Carlos Francisco Pabón - carlosf.pabon@utadeo.edu.do

1. Agradecimiento especial a todos los funcionarios

del Instituto Caro y Cuervo, quienes hacen de la visi-

ta de los estudiantes de la asignatura de Diseño de

Medios Editoriales, del Programa de Diseño Gráfico,

una experiencia inolvidable.

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Por Miguel González - miguelgonzalezaguilar@hotmail.comIlustración: Nicolás Buenaventura - mucharata@gmail.com

"Puertas abiertas" al respeto

Seguridad basada en la confianza

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En la Tadeo, la seguridad y la vigilancia de quienes integramos la comunidad univer-sitaria se basa en un principio esencial de la convivencia: el respeto mutuo. Cada uno de los integrantes de la comunidad universitaria nos comportamos como individuos en libertad y, asociados, aprendemos y actuamos con el valor de la solidaridad, que implica el apoyo entre sí y el cuidado para prevenir el daño o deterioro de los bienes y útiles para el cumplimiento de nuestra misión universitaria. Estos son pilares de la política de puertas abiertas que promueve la Universidad.

Tampoco olvidamos el hecho de ser parte de un conjunto urbano con demandas, retos, realidades y amenazas. Según estudios realizados por el programa “Bogotá cómo vamos”, hasta septiembre de 2010, de cada 100 habitantes de la capital del país, sólo 20 tenían una percepción positiva de la seguridad en la ciudad. No obstan-te, en la Universidad rescatamos el valor de la cultura del cuidado y de la confianza, expresados en la política de puertas abiertas, sin escatimar en las medidas de vigi-lancia y control, con base en sistemas amigables que disuadan a quienes pretendan incursionar para hacer daño.

Una perspectiva tadeístaLa administración de la UJTL apunta a mantener y fortalecer las mejores prácticas que faciliten el acceso y la permanencia de los estudiantes y profesores en el campus, partiendo de los criterios del bien común y de la confianza, como sustento del cuida-do mutuo y del acompañamiento que asegure el normal desarrollo de las actividades académicas, de formación y de extensión. Lo anterior es aplicable no sólo a la comu-nidad académica, sino a los integrantes del sector administrativo y a los usuarios y visitantes ocasionales que acuden a nuestra Universidad.

La política de puertas abiertas, como filosofía de la convivencia, se constituye en uno de los valores institucionales más importantes de nuestro entorno que, además, cuenta con espacios de interés general como el Museo del Mar, el Museo de Artes

Visuales (MAV) y el Auditorio Fabio Lozano, que se insertan en el desarrollo y en la propuesta cultural de la ciudad. A las personas de distintas procedencias que llegan hasta ellos, se les debe brindar un ambiente propicio para el goce y el aprovechamiento de las actividades culturales, sin más limitaciones que el respeto por el derecho de los demás y la igualdad.

Las actividades de vigilancia y de seguridad que forman parte de la estrategia del cuidado mutuo, dispuestas por la Tadeo, se desarrollan en un ambiente de corresponsabilidad, sin perjuicio de acciones que deban adelantarse para pre-venir el daño, la pérdida o la sustracción, y también para denunciar y activar las alertas. Asimismo, cuando resulta necesario efectuar procesos en contra de quienes son sorprendidos en la comisión de actos contrarios al derecho de la propiedad y de la tranquilidad de cada uno y de la comunidad universitaria. La Institución cuenta con instrumentos y siste-mas electrónicos y audiovisuales que permiten identificar situaciones sospechosas, de amenaza o de riesgo, tanto en el interior del campus, como en las áreas contiguas que conforman un cuadrante de seguridad integral. Estos controles están activos 24 horas, los siete días de la semana y complementan la labor de los vigilantes y los guías caninos que prestan sus servicios en la Universidad.

“La Tadeo debe ser un escenario de vida ca-racterizado por la confianza”, asegura Ger-mán Darío Rodríguez, nuestro director ad-ministrativo, teniendo en cuenta que “los estudiantes vienen a la Tadeo para disfrutar de las instalaciones, durante una etapa de la vida en donde cada uno quiere espacio y autonomía, más que control represivo y sen-sación de encierro”.Según él, el trabajo que se desarrolla con Guardianes, compañía líder de seguridad, según quedó establecido en los compromisos contractuales, se fundamenta en la vigilancia de nuestro campus y del en-torno inmediato, con acciones persuasivas, de comunicación y de alerta oportuna. Guardianes se obliga a disponer del personal necesario, en-trenado y con la dotación suficiente para desem-peñar la labor de vigilancia y de control, que no resulte invasiva, como garantía de la tranquilidad para los miembros de la comunidad universitaria.

Los ‘Guardianes’ tadeístasFernando Zúñiga, jefe de seguridad de la Universidad, menciona que Guardianes se ha adaptado muy bien a la filosofía de puer-tas abiertas que existe en la Tadeo, con base en la experiencia que tiene en el servicio de seguridad que vienen prestado en el sector educativo. Guardianes ha desarrollado labores de control en la Universidad Nacional de Colombia, la Universidad Santo Tomás y la Universidad Distrital, entre otras instituciones de

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educación superior, y en la actualidad, se encarga de la seguri-dad de 90 parques distritales, así como de las sedes del Servicio Nacional de Aprendizaje (SENA) que funcionan en Bogotá.

Un grupo de 112 personas, que ha cumplido con un detalla-do proceso de selección que le avala para trabajar en la Tadeo, desarrolla la vigilancia en la Universidad. Este grupo vela por el bienestar tadeísta en la Sede Principal, ubicada en la carrera 4, No. 22-61; en la Biblioteca-Museo Carlos Lleras Restrepo, cuya sede está en la calle 70A No. 7-37; y en el Centro de Bio-Siste-mas, emplazado en la Carretera Central del Norte, tres kilóme-tros al norte del puente de La Caro, en Chía.

De ese grupo de guardianes, 75 personas trabajan en la Sede Principal, de manera continua, repartidos en turnos de ocho horas. Cinco de ellos, además, realizan labores de vigilancia y detección de acciones sospechosas vestidos de civil. El apoyo se lo ofrecen 18 guardianes caninos, certificados por la Super-

intendencia de Vigilancia y avalados por la Alcaldía Mayor de Bogotá, que acom-pañan en turnos de seis horas, capacitados además para olfatear la presencia de sustancias psicoactivas. Los perros cuentan con una zona de descanso en donde se les brinda la atención y el cuidado necesarios, ubicada en el barrio La Paz. Allí, un cuidador canino está pendiente de cada uno de ellos durante las 24 horas del día.

Teniendo en cuenta las características que definen los espacios y estilos de convivencia complejos que existen en el Centro de Bogotá, la Tadeo cuenta con cuatro corredores de seguridad en sus zonas aledañas, que le brindan perma-nente cuidado y protección a los miembros de la comunidad estudiantil: el pri-mero abarca la calle 23, desde la carrera 7 hasta el Edificio de Posgrados y el se-gundo, va por la calle 22, desde la carrera 3, hasta la carrera 7. El tercer corredor funciona sobre la carrera 4, desde la Avenida 19 hasta las torres blancas de la calle 25; y el cuarto corredor, lo conforma la zona de las canchas de squash y del nuevo polideportivo, ubicado sobre la carrera 4A.

Colaborar, un aspecto fundamentalEl tema de la confianza en la persona, que la Universidad hace visible en el ámbito de la seguridad, también resulta destacable en otras áreas. Desde el año anterior, por ejemplo, se suspendió el uso de los ‘huelleros’ en los que cada profesor debía registrar su asistencia a las clases, valorando plenamente su profesionalidad y, de paso, permitiendo que se desarrolle un control ético y apoyado en las califica-ciones que los estudiantes expresan durante cada evaluación al docente.

Es fundamental que esa actitud de respeto se fortalezca cada día dentro de la Universidad. Cada tadeísta debe velar por el apoyo mutuo y, en caso de

detectar una situación sospechosa, dar aviso, para generar compañeris-mo en todos los sentidos.

El cuidado de los objetos personales es un aspecto esencial, pues como expresa Germán Darío Rodríguez, “la compañía de vigilan-

cia que tenemos cumple la función de vigilancia y activa meca-nismos de control cuando se requieren de manera precisa. En este aspecto, cabe resaltar la importancia de la comunicación que cualquiera de los miembros de la comunidad universitaria puede y debe suministrar”.

Teniendo en cuenta lo anterior, y como recomienda Fer-nando Zúñiga, ante una situación en la que consideremos que existen riesgos, debemos avisar a los equipos de se-guridad presentes en la zona y, de esta manera, contribuir para que los actos vandálicos se reduzcan y las estrategias para combatirlos, mejoren. En definitiva, ser tadeístas implica cumplir con nuestra labor de buenos ciudadanos, valorando, en la medida que corresponde el esfuerzo que realiza la Tadeo para que las “puertas abiertas” de nues-tro tiempo como estudiantes se basen en la libertad, el respeto a la intimidad y la confianza permanente.

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Todos hemos oído hablar, en algún momento, de la Declaración de los Derechos Humanos. Pues bien, durante el presente año, con la celebración del Bicentenario de la Independencia, no sólo en nues-tro país sino en otras naciones de América Latina, los debates, re-flexiones y propuestas sobre el reconocimiento y ejercicio de los derechos culturales cobran importancia, dentro de las prioridades de las agendas políticas y legislativas de la Organización de las Na-ciones Unidas (ONU); la Organización para la Educación, la Ciencia y la Cultura (Unesco) y la Organización de Estados Iberoamericanos (OEA) entre otras.

La Declaración de los Derechos Humanos estableció, por prime-ra vez en la historia de la humanidad, los derechos civiles, políticos, económicos, sociales y culturales básicos de los que todos los seres humanos debemos disfrutar. Esta declaración, con el paso del tiem-po, ha sido ampliamente aceptada como la norma fundamental que todos los gobiernos deben respetar. De hecho, el 10 de diciembre de cada año, para conmemorar la fecha en que se aprobó, se celebra en todo el mundo el Día Internacional de los Derechos Humanos.

La Declaración Universal, junto con el Pacto Internacional de Derechos Civiles y Políticos, y sus dos protocolos facultativos; y el Pacto Internacional de Derechos Económicos, Sociales y Culturales, hace parte de la “Carta Internacional de Derechos Humanos”.

Iniciativa bogotanaA partir de 2010, Bogotá se ha convertido en la primera ciudad iberoamericana con un documento de esta naturaleza, tras escribir su Declaración sobre los Derechos Culturales. En dicha Declaración, se contempla el acceso y la apro-piación de las prácticas culturales, así como el derecho al diálogo intercultural, el derecho a la participación, y el derecho a los paisajes culturales y naturales, entre otros.

En este marco, el Centro de Arte y Cultura de la Tadeo convocó a la acade-mia, desde sus diferentes áreas del conocimiento, con el propósito de plantear, desde una mirada multidisciplinar, diversas formas de apropiación acerca del ejercicio de los derechos culturales en relación con la comunicación, la eco-nomía, las relaciones internacionales, las ciencias sociales y el medio ambien-te, entre otros temas, dentro de una serie de actividades que se desarrollaron durante el mes de octubre, en el coloquio “De los derechos del hombre y el ciudadano a los derechos culturales”.

Las principales conclusiones y temáticas comunes de estas intervenciones señalaron un replanteamiento fundamental de la noción de cultura, además de una reflexión constante acerca de la diversidad cultural, teniendo en cuenta los conceptos de interculturalidad y multiculturalidad. Asimismo, el coloquio fue una oportunidad para gestar una práctica cotidiana de reconocimiento por los derechos, en torno a las conductas y a las formas de pensamiento de las personas.

La cultura de los derechosDe esta forma, la cultura de los derechos se plantea como una articulación entre los derechos humanos y la cultura, que resultan vitales para toda la sociedad. Tal como se pudo apreciar en las diferentes actividades realizadas en la UJTL, que incluyeron exposiciones, conferencias y foros, la temática de los derechos culturales se convierte en un desafío sustancial para el ámbito universitario. Y, a partir de él, surge otro aspecto sustancial y significativo: tener en cuenta la con-

tribución de la cultura al desarrollo humano, desde el campo de los derechos culturales.

No debemos olvidar que, según el más reciente Informe de Desarrollo Humano de Bogotá, se plantea que la cultura resul-ta estratégica para la capital del país, como una herramienta adecuada para la valoración de la creatividad, que es intersec-torial porque no funciona como un hecho aislado, sino que se relaciona con todos los ámbitos de la vida ciudadana.

La cultura, además, resulta propicia para el desarrollo hu-mano, porque ofrece alternativas y oportunidades que poten-cian las capacidades del hombre, sin jerarquizar la libertad; y propone unas líneas de acción estratégica que, sin duda, irrumpe en el campo de los derechos culturales, validándolos desde la función pública de la dimensión cultural.

Teniendo en cuenta ese contexto, desde la Tadeo resulta bá-sico entender la cultura de los derechos, porque nos permite encontrar un sentido humanista en las acciones, tanto de los individuos como de la sociedad, que permite superar diferen-cias y valorar, desde la diversidad, la libertad de “ser” y expre-sarse que tiene cada persona.

Por esta razón, espacios como el coloquio “De los derechos del hombre y el ciudadano a los derechos culturales” reafirman la visión de que la educación juega un papel fundamental como proceso integral, donde no sólo se transmite conocimiento académico, sino en donde se accionan mecanismos de inter-cambio, valores, conductas e ideologías. En este marco, la cul-tura de los derechos conlleva a un cambio de comportamiento que debe contribuir a mejorar la calidad de vida, donde aspec-tos como el derecho a la felicidad y la generación de patrones de convivencia asertivos funcionen en beneficio del ser.

Por Claudia De Greiff - clagre04@utadeo.edu.coIlustración: Manuel Corredor – manuelcorredor9@hotmail.com

Iniciativa vital en la Tadeo

“Levántate, ponte de pie por tus derechos”Bob Marley

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El tiempo transcurre lentamente y los pensamientos acerca de qué va a suceder se agolpan en la cabeza. Tomo el dispositivo blanco en la mano y, con cautela, lo observo detenidamente:

“miércoles, se pintaron dos rayitas”. Cuando esto te pasa, sien-tes como si un taladro te atravesara el pecho y la cabeza al mismo tiempo. En medio de un miedo que te deja medio entre y muda, te preguntas: “y ahora, ¿qué voy a hacer?”.

Resulta que aún estás en la universidad, que obviamente de-pendes de tus padres, que te encanta la rumba y que todavía quieres hacer mil cosas diferentes con tu vida. En realidad no estás en absoluto lista, pues jamás planeaste quedar embarazada.

“¿Embarazo? No mija, se dañó la vida”, te dice la mayoría de la gente a la que le cuentas –si es que lo haces– y también lo piensan las personas que, con el paso del tiempo, lo notan en tus cambios de fisonomía. Con esa expresión, deduces que la vida está llena de hijos que complicaron la existencia de sus papás y que muchos primogénitos no fueron “planeados”. Que, de al-guna manera, se les “tiraron la vida”. Entonces, quizá llegas a pensar: “Dios mío, o sea que yo le dañé la vida a mi mamá”.

Después, con una risa nerviosa, haces un flash forward y te imaginas con la linda barriguita, paseando por la Tadeo. Re-cuerdas que los ascensores del módulo 7 siempre están llenos y que allí no vas a caber; que te toca clase en el quinto piso del módulo 2 y que allá no hay ascensor; y a la vez, que jamás vol-verás a pasar frente al OMA del Museo de Artes Visuales, porque

“que boleta”, allí se sienta la crema y nata de la Tadeo, y fijo te van a “devorar” con sus comentarios y miradas.

Sin embargo, reflexionas y llegas a la conclusión de que eso es lo de menos, pues tienes la oportunidad de enfrentarte al pro-ceso más natural y milagroso que existe en la vida: darle la exis-tencia a otro ser. Si, obvio que te da mucho miedo, pero en ese momento también piensas si te habría gustado que tu mamá, por ejemplo, hubiera decidido no traerte al mundo porque le daba pánico o no se creía capaz de enfrentar la responsabilidad.

Aquí en la Universidad, son varias las estudiantes que no solo se alistan para recibir su grado, sino que también se prepa-ran para recibir a su bebé. Y si en ese caso resulta complicado hacer las dos cosas, cuando el proceso cambia y los bebés lle-gan antes que el día del grado, entonces tus deseos de gra-duarte rápido aumentan todavía más. Sabes que si te gradúas rápido, el pregrado, la tecnología o el posgrado que estás ha-

ciendo se convertirán en un orgullo propio y que además serán un descanso económico para el bolsillo de tu familia o para el propio, en el caso de que te lo costees por cuenta propia.

Terminar la carrera y pensar en las posibilidades de tener un mejor futuro para ti y para tu hijo o hija es una motivación vital, porque en realidad un embarazo no es una enfermedad termi-nal ni algo que “se le tire la vida” a nadie. Tampoco es un im-pedimento para seguir con tus estudios, para dejar de cumplir tus metas o arruinar tus sueños. Lo que cambia es que, ahora, todo eso que pensabas hacer sola, lo vas a hacer con una nueva “personita” a tu lado. Y claro, esa persona quizá te des-velará noches enteras, requerirá tus cuidados especiales, será tu centro atención y se apropiará de tu corazón. Seguramente habrá estrés, pero también estará presente una gran felicidad.

Para reflexionarA estas alturas de la historia, algunos de ustedes pensarán que esta es una historia rosa, medio cursi o hasta simplona. Asi-mismo, habrán concluido que un hijo es una renta, un encar-te, un problema, etc. Bueno, nadie está diciendo lo contrario, porque dar un testimonio no quiere decir que estés invitando a todos las tadeístas para que encarguen su bebé.

Tal como lo mencionó una de las psicólogas de la UJTL, en los 30 segundos durante los que me atendió, muchas perso-nas analizan de la siguiente manera el fenómeno de las madres actuales: “la maternidad la asume cada persona y muchas de las estudiantes no ven como una opción el tema del aborto. Entonces, prefieren tener los bebés”. Eso me lo dijo con apuro, antes de agregar que no podía hablarme de métodos de pre-vención porque eso lo escoge cada persona y que muchas jó-venes no se cuidan porque piensan que nunca les va a pasar.

La afirmación resulta cierta, al menos en mi caso, pues nunca pensé que me sucedería. Además, enseña que el em-barazo de diferentes mujeres jóvenes no es una cuestión de estratos, ni de grados de escolaridad, ni de ignorancia acerca del tema. Más bien, es una cuestión de responsabilidad, porque si no existe cuidado y protección, las probabilidades de un em-barazo no deseado van a aumentar.

Un punto de vista en el que coinciden varias estudiantes tadeístas, es que en caso de quedar embarazadas durante la carrera, lo más seguro es que aplacen un tiempo y después re-tomen. En otros casos, si cuentan con el apoyo de los futuros

abuelos, ellos les colaborarán con la crianza del bebé, mientras las madres estudian. Al respecto, el profesor de tiempo completo del Programa de Pu-blicidad de la Tadeo, Hugo Mastrodoménico, quien además es psicólogo de la Universidad Nacional de Colombia, explica que la decisión de entregar la res-ponsabilidad de la crianza de los hijos a terceros puede traer consecuencias negativas para las madres, puesto que, en el futuro, sus hijos podrían repro-charles ese abandono parcial, “y puede que nunca las vean como sus verda-deras mamás. Quizá ellas querrán regresar y encargarse de sus bebés una vez culminen los estudios, pero cuando lo hagan, tal vez el niño o la niña le dirán

‘mamá’ a la abuelita”, afirma.Desde otro punto de vista, cuando el papá del bebé te apoya resulta genial.

Sin embargo, muchos entran en estado de “shock masculino” y huyen. Des-pués algunas mujeres nos vamos de la casa, a otras las echan, y otras jamás vuelven a la U, pues no pueden con los gastos y con tanta responsabilidad.

El tema de la valentía resulta fundamental, como sucede con Yuly Heredia, quien estudia en el Programa de Ingeniería Industrial y trabaja en la Oficina de Compras de la Universidad. Además de encontrarse becada, para Yuly su bebé es el motor que la impulsa día a día, aunque a veces, a sus 23 años –la misma edad que tengo yo– siente que el tiempo no le alcanza ante la infinidad de cosas que debe hacer cada día.

Pero, más allá del ajuste con el tiempo, que en ocasiones le impide realizar trabajos en grupo, tiene la certeza de que le dará un mejor futuro a su hijo, además de convertirse en la primera mujer profesional dentro de su familia.

Según el profesor Mastrodoménico, debe representar un enorme orgullo para cada mujer el hecho de salir adelante con un hijo de por medio, sin olvi-dar que, afortunadamente, los tiempos han cambiado y las épocas en donde el tema de quedar embarazada sin haberse casado constituía un hecho terrible, que incluso motivaba a las familias a enviar a sus hijas a otras ciudades o fuera del país, se terminó.

Las últimas cifras de estudios realizados por Profamilia, en los años 2000 y 2005, arrojan resultados como que las mujeres de 19 años son quienes más em-barazos presentan, mientras que, en el lapso de esos cinco años, el porcentaje de jóvenes con educación superior que ya son madres ha pasado de 2.3% a 7.4%.

Sin embargo, me atrevo a decir que en asuntos como el del embarazo y los hijos no hay ninguna verdad absoluta, pues al menos en mi caso, he sentido que ser mamá me ha realizado como mujer y me ha hecho ver la vida de otro color. Algo que si tengo muy claro, sin embargo, es que la responsabilidad para cada mujer debe ser un aspecto para no dejar al azar, pues definir la vida tal como lo deseamos resulta fundamental.

En mi caso, estoy segura de que seré una mamá con título profesional muy pronto. Y también, que el hecho de quedar embarazada no tiene porque da-ñarme la vida. Creo que ése es un mito que ya va siendo hora de acabar.

Por Mayra Vargas - haditamayris20@hotmail.comIlustración: Nicolás Buenaventurar - mucharata@gmail.com

Ser mamá en la UExperiencia vital

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Durante el período intersemestral, los tadeístas siempre estamos bus-cando nuevos proyectos y actividades que nos saquen de la monotonía del día a día. Es común encontrar estudiantes que, durante ese período, realizan viajes en plan turístico, mientras otros buscan empleos tempo-rales. También, con la idea de agilizar el proceso académico, algunos rea-lizan cursos inter semestrales en la Universidad.

Un grupo de estudiantes de la Tadeo Seccional del Caribe, junto a egre-sados de la misma, se dieron cita para realizar un cortometraje liderado por Rafael K rdenas –el apellido fue modificado por Rafael, a manera de firma personal–, un joven cartagenero, egresado de la Tecnología en Pro-ducción de Radio y Televisión, que consiguió reunir, bajo la premisa del amor por el séptimo arte, a un nutrido grupo de amigos y colegas para producir el cortometraje La luz.

El proyecto estaba en la mente de ‘Rafa’, como le dicen sus personas más allegadas, desde hacía varios meses. Sin embargo, el momento clave para que este proyecto fuera tomando forma tuvo lugar durante el 50° Festival Internacional de Cine de Cartagena, que se llevó a cabo del 25 de febrero al 5 de marzo de 2010, cuando él y otros alumnos de la Tadeo to-maron parte en los distintos comités de la organización. Esta experiencia les permitió fortalecer los lazos de amistad, para ir armando el equipo de producción del corto. Junto con la Fundación Cero Esquemas, definieron lo que iba a ser la producción ejecutiva que, una vez finalizado el Festival, empezaron a desarrollar de inmediato, con la intención de obtener los permisos y recursos adecuados para llevar a cabo el proyecto.

Como sucede en diferentes oportunidades, realizar una pieza audio-visual presenta algunos obstáculos para los nuevos talentos: el aspecto

económico, la falta de apoyo de la empresa privada y la escasa ayuda de los entes gubernamentales, etc. También influye definir los horarios del grupo de trabajo, pues al estar conformado por estudiantes, es complejo reunirlos a todos teniendo en cuenta los horarios de clase.

La consecución de actores requiere un casting riguroso, pues en ellos radica buena parte de la responsabilidad de lograr que las ideas del director y del guio-nista sean bien representadas. Para la escogencia del grupo actoral, se desarro-lló un proceso en el que se buscaba, teniendo muy en cuenta la fisionomía, al actor que caracterizaría mejor al protagonista de la historia.

Faltaba definir quién sería el actor que interpretaría a ‘Jesús’, el personaje principal de La luz. Si bien pensaron que para el papel sería ideal el reconocido actor Juan Pablo Shuk, lo que ellos no esperaban es que mediante Facebook podrían contactarlo, logrando que se interesara por el proyecto e incluso apor-tara nuevos elementos al guión, para mejorar algunos detalles. Así, los cambios que él sugirió fueron concertados entre el director y la productora, de modo que fueron incluidos en el plan de rodaje, para que éste resultara balanceado y permitiera reducir costos en la producción.

Asimismo, la productora ejecutiva del corto, Angélica Quintero, puso en con-tacto a Rafael K rdenas con la reconocida actriz Maribel Abello, quien una vez que conoció el guión, aceptó el ofrecimiento de la mejor manera.

Tres, dos, uno… ¡Acción¡La grabación del cortometraje se planificó para el fin de semana que iba del

23 al 25 de julio. Además del equipo de producción, así como de Maribel Abello y Juan Pablo Shuk, también participaron jóvenes representantes del talento car-tagenero, como Juliana Rojas y Charles Bolívar.

Una vez reunido todo el equipo, el trabajo se desarrolló según lo planeado y sin demorar los horarios, pues cada miembro de corto estaba completamente enfocado en su trabajo, por lo que todo funcionó a la perfección.

Para la grabación, se contó con la presencia de un experto en cámaras y luces como David Covo, egresado de la Escuela de San Antonio de los Baños, en Cuba, quien además se desempe-ña como docente en la Tadeo Seccional del Caribe. Él, asistido por sus alumnos de la clase de Realización multimedia, generó la atmósfera adecuada para el desarrollo de la producción, ga-rantizando que el material de video fuera de la mejor calidad. Luego de tres días de intensa grabación, la producción finalizó con “broche de oro”, en una fiesta de clausura a la que fueron invitados, además del equipo de trabajo, los patrocinadores del corto y diferentes medios de comunicación de Cartagena de Indias que tuvieron la oportunidad de conocer cómo, a partir de la creatividad y el amor por el cine, un grupo de estudian-tes y egresados, la mayoría de la Tadeo, realizaron esta pieza audiovisual.

El cortometraje La luz se estrenará durante el Festival In-ternacional de Cine de Cartagena de Indias 2011. Y como ya su-cedió durante la etapa de producción, todo el equipo se dará cita en “La heroica” para el acontecimiento. Así, a partir de una buena idea tadeísta, se continuará incentivando la realización de piezas audiovisuales por parte de jóvenes talentos universi-tarios y cartageneros.

Por Gilberto Gómez - giccioni@gmail.comIlustración: Carolina Vargas – dicarolinav@gmail.com

Fotografías: Rafael K`rdenas

Creatividad y amor por el cine

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Darío VillegasPor Johann Buitrago - johannjbc@hotmail.com

Dibujos de Darío VillegasFotografía: Rafael Mora- rafamora82@gmail.com

maestro del dibujo

“ E l a r t i s t a d e b e s e r l i b r e ”

Una de las pocas cosas con las que el ser humano puede ser realmente libre es con su forma de expresarse. Hay diferentes actividades que dan fe de ello, como a las que se dedica el artista y profesor de la Universidad Jorge Tadeo Lozano, Darío Villegas: el dibujo y la poesía.Si bien, como él menciona, sus pasiones “no son las más grandes ni las más costosas”, si le han permitido obtener el primer puesto en el Octavo Salón Nacional de Arte “Diversidad 2009” Casa Cuadrada, otorgado por esa importante galería a comienzos de 2010.

Para él, dibujar es crear formas e imágenes para hacer una poesía: “cuando estaba en el colegio, en Medellín, a mi papás les estaban mandando todo el tiempo boletas porque yo no atendía las clases, pues me la pasaba dibujando”, cuenta divertido.Los temas favoritos del profesor Villegas, cuando se trata de dibujar, son la vida y la fantasía, porque siente que la imaginación le ayuda, no sólo como artista visual, sino como ilustrador. De hecho, durante varios años, trabajó como ilustrador y dibujante en prestigiosas publica-ciones nacionales como el Magazín Dominical de El Espectador y la revista Número.

15 años en la TadeoEl profesor Villegas afirma que la estabilidad que la Tadeo le ha dado durante los últi-mos 15 años, en los que ha tenido la posibilidad de enseñar a cientos de estudiantes de Diseño Gráfico las virtudes del dibujo, le ha permitido desarrollar paralelamente su trabajo como artista.

Como docente, se ha encontrado con estudiantes llenos de talento y cree que los mejores son aquellos con los que se puede charlar. En ese grupo, destaca a Iván Cha-cón, egresado tadeísta y quien se ha dado a conocer como ilustrador de uno de los discos de la agrupación ‘Koyi K Utho’, así como del comic Puberman, a quien define como un “tipo genial, al que todo el tiempo lo ves rayando”. Villegas recuerda que cuando lo conoció, en la cátedra de Dibujo II, su obra le pareció asombrosa.

El consejo que les da el profesor siempre a sus alumnos es que tengan perseveran-cia, y que crean en sí mismos y en lo que hacen. En el ámbito editorial, Darío Villegas tiene sus propias iniciativas. Hace un par de años inició un proyecto personal, que se titula Quiero, puedo y no me da miedo, mediante el cual ha publicado interesantes antologías poéticas de grandes autores, ilustradas con sus creaciones artísticas, con el apoyo de académicos de diferentes lugares de Bogotá y Colombia.

Un tema que le llama poderosamente la atención es la manera en que las nue-vas tecnologías están influyendo en las maneras de dibujar, de crear que tienen las personas. Sin embargo, en dicho sentido él prefiere la técnica clásica, sobre todo el lápiz. “Lo importante es que cada uno tenga claro el concepto de lo que quiere expresar. En esa medida, si lo hace mediante un lápiz, una acuarela o un dibujo ge-nerado por computador, lo importante es que materialice lo que siente y piensa”, menciona Villegas.

Respecto al premio que obtuvo a comienzos de 2010, menciona que compitió con su propuesta de dibujo, ante diversos tipos de técnica, incluyendo video, fotografía y pintura. La muestra de Darío Villegas era una serie de cajas con dibujos y acuarelas, montadas en diferentes planos, titulada Las tortugas de Apu.

Según Daniel Ortiz, uno de los jurados de la Bienal, la obra del maestro tenía un aire de libertad y, después de ver muchos trabajos convencionales, el jurado analizó que Darío Villegas era auténtico y generaba el arte que deseaba, por lo que merecía con-vertirse en el ganador. “Mejor dicho, me premiaron por hacer artísticamente lo que se me daba la gana”, afirma divertido el profesor. Teniendo en cuenta la distinción, así como la amplia y variada obra que Darío Villegas ha generado durante los últimos 20 años, la Galería Casa Cuadrada le abrió sus puertas para realizar su más reciente exposición, La rebelión mágica, que tuvo lugar de la segunda a la última semana de octubre del presente año.

La muestra, según su autor, expresa “una oposición que diferencia la vida que hace parte de lo planeado y lo cifrado, donde prima lo racional y lo económico, de aquella en donde, por otra parte, existe presencia de lo irracional y lo mágico, porque no está sometida a ningún tipo de límite”.

El galardón obtenido por el maestro Villegas le permitirá optar para realizar una residencia artística en Suiza y, adicionalmente, hacerse acreedor a un importante premio en metálico. Para él, sin embargo, lo importante es continuar dibujando, en-señando y siendo fiel su propia manera de percibir la existencia.

[ 36 ] La Brújula La Brújula [ 37 ]

Después de recibir la llamada, corrí al hospital. No podía creer que tu situación fuera tan delicada. Un viejo lobo soldado como tú puede ser muy valiente, pero a tu edad, ya no soportabas más batallas.

Yo estaba caminando cuando, de pronto, mi corazón se de-tuvo. Frené el paso y mi cabeza dejó de pensar. Por un momen-to, admito que pensé que, en realidad, moriría en plena calle.

Aunque cerré los ojos y caí, podía sentir los pasos de la gente que seguía con sus vidas. Después de una hora, volví a vivir y nada nuevo había pasado. La lluvia me había despertado, pero las gotas que mojaban mi rostro no las sentía dolorosas ni tampoco frías.

Como pude, volví a la rutina y me embarqué en aquel apara-toso bus. Pasada una hora, logré llegar al hospital. Y allí estabas tú, pobre hombre acostado en una cama que, en nada, se pa-recía a la cama de cedro que tenías en la casa.

Recuerdo que tú tenías algunas cicatrices y muchas arrugas. Me enseñaste a vivir cuando mi madre partió al cielo… Pero aún así seguías dormido, mientras tus grandes manos perma-necían libres de algún libro.

Aunque no me habías visto en 10 años, porque por mi trabajo tuve que dejarte lejos, abandonado con los recuerdos de cuan-do aprendí a caminar en el jardín, o cuando aprendí a escribir en tu vieja agenda, cuando cerré la puerta prendí tu viejo fonógrafo. Allí puse una canción que te gustaba mucho cuando eras joven.

Y eso te despertó. Bostezando como un holgazán, me miraste con ojos tiernos. Sim-plemente me acerqué a ti, y poniendo tu mano sobre mi rostro, mencionaste cuánto había crecido. Te confesé que mi fe titubeaba por los avatares de la vida y tú, simplemente, me tomaste de las manos y me dijiste que la vida era más fácil de lo que pensaba. Resulta-ba paradójico que un hombre que había visto morir a su esposa, a varios amigos y a parte de un pelotón, me lo estuviera diciendo.

Cuando volví a mi casa, lejos de ti, me pre-ocupé por mi vida. Al dormir, fue mi cama la que sollozó con mis pensamientos. Pero el corazón se paró de nuevo y caí en un profundo sueño. Cuando desperté, había otra como yo. Llevaba una vela, que combinaba con la pintura de la habitación gris en la que me encontraba.

Asustada, le pregunté qué estaba haciendo ahí, pues era mi vivo retrato. Convirtiéndose en niña, Moral me dijo que yo me había con-vertido en ti. Que había dejado de admirar los pequeños placeres de la vida, para dedicarme a cuestiones laborales y que, por eso, mi alma

quería irse de este cuerpo inhóspito y lleno de vacío, en el cual me había convertido al no poder amar al hombre que quería.

Por un momento no me importó. Tú estabas en cama, a punto de morir. El hombre que yo amaba se había ido lejos y ya sin regreso. Le contesté a mi alma que la gente no necesitaba moral, ni tampoco conocía cuáles eran los predicamentos en cuestión. El hombre se adecuaba a las situaciones de su propia conveniencia y la moral no tenía cabida cuando el dinero inundaba sus bolsillos. El alma no valía cuando un hombre le pegaba cruelmente a su mujer. Con una sonrisa que dejaba ver todos tus dientes, me abrazaste y descubriste que aún seguía creyendo. Con lágrimas en los ojos, le pedí a mi alma que no se fuera.

Ella, inclemente había desaparecido. Grité. Cerré los ojos y con lágrimas de sangre, me eché al suelo a llorar. Una voz, una muy familiar que toda la vida quise conocer, llegó a mis oídos. Hubo abrazos frescos, mientras la voz me susurraba que todo acabaría. Entonces, cuando finalmente abrí los ojos, estaba en mi habitación, caída de la cama, sudando.

Y aquí me tienes ahora viejo, hablándole a tu lápida. Como lo prometí de joven, te enterré bajo el árbol que querías. Me que-daré con tu rosario pero ya debo irme. Descansa ahora, querido perro viejo, que mi vida te agradece por salvarme del infierno en que se había convertido.

Por Andrés Torres - blackdog-towers@hotmail.comIlustración: Nicolás Buenaventura- mucharata@gmail.com

(La canción que da sentido a este cuento es Sometimes You Can´t Make it On Your Own, de U2)

[ 38 ] La Brújula

Por Tatiana Antonio - tatiana.antonio@hotmail.comIlustración: Giovanni Rincón - wwwgiovanni@hotmail.com

Empecé cerrando su garganta. Primero, como un pulgar bajo la manzana y luego con ambas manos, lado a lado, secando la boca. Pero nada salía, ni un suspiro pudo escaparse. Sólo pudo pensar en lo que ya no sucedería.Luego pasé por los brazos. Fui resoplando la piel desprevenida, que había arrojado su armadura meses atrás. Hice que se eri-zara hasta que sintiera dolor, como un millar de agujas empa-padas de alcohol entrando por debajo de las uñas.Rápidamente llegué al estómago y, una por una, masacré cuanta estúpida mariposa había, desgarrándoles las alas y los ojos. Las paredes quedaron cubiertas como un collage de guardería. La garganta recuperaba el aliento, sólo para retener las ganas de un conciliador vómito de alas y sueños.

Entonces le debilité las piernas, sin premeditarlo, aunque las náuseas eran cada vez más fuertes e incontenibles. Las palmas de las manos le sangraban por la fuerza con la que enterraba las uñas en un puño que jamás utilizaría, sino fuera contra la pared.

Millones de palabras controlaron sus ansias de salir. Le bri-llaban y temblaban los ojos como un cascabel de perro, hasta que poco a poco fue bajando la mirada, mientras lloraba, aún contra sus fuerzas.

Y allí se le rompió el corazón, que bombeó fuertemente hasta encontrar una rápida salida en la muñeca izquierda… Toda su vida se resumió en un breve lapso, durante el momento en el que llegué.

El adiós

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La Brújula - Universidad de Bogotá Jorge Tadeo Lozano

COMITÉ EDITORIAL

Impreso por D´vinni S.A.

asentado en el brazo en el que se apoya. En ese mismo recorrido existe otro punto, acentuado por el efecto de la luz, que son los ojos. Allí se presenta una clase de iluminación distinta –posible-mente incoherente con las condiciones físicas– respecto a la esce-na. En el mismo contexto, se nos desvela la dirección de la mirada, que se fuga de forma paralela, respecto a la línea de la mesa que, a su vez, nos dirige hacia el interior del cuadro.

La visión de RenoirLa manera en que Renoir define el tema del fondo tiene que ver con la influencia que ejerce sobre él la obra del pintor español Diego Velázquez (1599-1660). En esta pintura, dicho elemento se eviden-cia en el fondo, puesto que no es una característica contextualiza-dora del espacio, sino que se convierte en una extensión cromática, al servicio de la belleza del cuadro.

Percibimos una pincelada gruesa y extendida hacia abajo, que nos acerca a una especia de cortina.

Al momento de pintar este cuadro, Renoir mantiene la liber-tad y espontaneidad que, en cuanto a las expresiones, resulta un elemento común en buena parte de sus creaciones. Cuando era un joven alumno en el taller de Charles Gleyre (1806-1874), a este artista suizo le inquietaba el hecho de que Renoir sintiera un apego exagerado por el color. En cierto momento, Gleyre le repro-chó tal particularidad, culpándolo de pintar para divertirse. Ante

La bebedora de ajenjo. Henri de Toulouse-Lautrec

la observación, Renoir le respondió: “¡Desde luego! Y créame, si no me entretuviera no pintaría”. Así, dejó en claro la importancia que para él tenía encontrar una experiencia estética dentro de la acción pictórica:

“La pintura no es ensueño, sino más bien, y ante todo, artesanía y es preciso ejercerla como un buen obrero”.

Vera Sergine Renoir es una pintura que el artista francés realizó luego de su lesión en el brazo y afectado por varias enfermedades. Él admiraba a pintores como Jean Ingres (1780-1867), por la perfec-ción plástica de su obra. Utilizando la mano izquierda, parece que cada pincelada fue realizada con una intención diferente, resaltando un interés cromático propio, en el sentido de armonizar el cuadro a partir de una especie de “condensación” entre la mujer y el fondo. Sin embargo, en ningún momento dicho efecto aplana la escena, ya que la profundidad la otorgan unos datos cromáticos evidentes, que además se pueden ver, junto con el recurso del fondo, en otras obras de su autoría donde existe cierta clase de ‘destrucción’ del fondo como referente y los colores responden a la composición del cuadro.

De hecho, se puede entender cómo la paleta de color de Renoir, durante su última época creativa, se dirige hacia unos colores más fríos y suaves, aunque existe un contraste complementario entre el naranja y el azul. Así, Renoir juega con la disposición de los contras-tes tonales y, a pesar de la predominancia del naranja, equilibra la calidez del cuadro con el camisón y un par de azules casi puros en el fondo.

Otros retratos, como el que realizó de Jeanne Samary, en 1887, cuyo título es homónimo del nombre de la actriz, evidencian bas-tante semejanza, tanto compositiva como con la paleta de color, respecto a la tendencia cromática que Renoir adoptó en su etapa creativa final.

Lautrec y su punto de vista En su obra La bebedora de ajenjo, Henri de Toulouse-Lautrec nos muestra un fondo en el que los colores ‘dialogan’ con los demás elementos de la escena, en espacios donde la mujer está iluminada. El fondo contrasta con los colores menos lumínicos y, de manera contraria, el fondo se ilumina para resaltar la forma en lugares más oscuros de la obra. Adicionalmente, la pincelada existente ayuda a lograr profundidad, puesto que cambia de dirección en virtud de la forma.

Para Lautrec, la importancia de lograr una deconstrucción en el fondo del cuadro es distinta a la que expone Renoir. Mientras en este caso, se quiere lograr la deconstrucción como una extensión de la

mujer retratada, que ayuda cromáticamente en la exaltación de la forma como belleza propia, en el caso de Lautrec el fondo se destruye con el fin de que la esencia de la escena esté determinada por los elementos que se relacionan con la mujer. De allí que se contextualice con elementos como la mesa y el ajenjo. La paleta de color que usa el pintor tiene el propósito de llevar al observador hacia un lugar interior, con poca luz, como parte de un ambiente nocturno generado por la calidez de las tonalidades.

Los elementos pictóricos en La bebedora de ajenjo están re-lacionados como una extensión psicológica que nos adentra en el individuo retratado. El ajenjo se va a convertir, con el paso del tiempo, en un símbolo donde el feminismo histórico debe poner su iconografía libertaria, en un contexto donde el interés de Lau-trec por algunos temas nocturnos y moralmente censurados per-mite realizar una reflexión ética profunda, donde la aproximación al individuo, dentro de la obra, se da a partir del entorno y sus elementos:

“He intentado plasmar la verdad sin idealizarla. Cuando mi lápiz se mueve, tengo que dejarlo correr”.

Hay otras pinturas de Lautrec, como La lavandera (1886), en dónde se contrapone la figura del retrato y la persona es representada dando la espalda. Existe allí una fuerte semejanza con creaciones de Edgar Degas (1834-1917), pero a diferencia de esas obras, Lautrec expone a la mujer de espalda, mientras descansa, durante un momento en el que, posiblemente, siente que nadie la está observando y en el que se deja llevar por abstracciones personales, con base en las cuales su mirada se eleva, hasta perderse en un punto que está fuera del cuadro. En dicha representación, Lautrec ofrece claridad respecto a su visión del trabajo como un deber moral o social y nos deja ver cuál es su postura ante la naciente sociedad industrial y capitalista de la época.

Distinciones y comparacionesPierre Auguste Renoir usa una composición de carácter académico para el retrato, en tanto que Henry de Tolouse-Lautrec aborda la pro-puesta de una manera que va en contravía con dichas reglas, expo-niendo de espalda a quien plasma. Para mí, con esta perspectiva sinte-tiza una forma propia de entender el retrato, como elemento revelador de una esencia más íntima y, a la vez, donde se entiende que la persona se manifiesta tal como es. Allí, existe una marcada diferencia con el retrato de Renoir, que por sus características requiere que la persona pose y aparezca poco natural.

En definitiva, mientras Renoir ‘pierde’ la mirada de la mujer a la que ha retratado –que se difumina en el vacío– Lautrec nos propone mi-radas que parten de una escena específica pero que, de alguna forma, nos transportan hasta el interior de La bebedora de ajenjo. Y ella, que aparece dándonos la espalda, no sólo se opone al observador, sino que de alguna manera se obstaculiza a sí misma y a la realidad inmediata ¡Está soñando!

Bibliografía

Argan, Giulio Carlo, El arte moderno, Ediciones Akal, Madrid, 1992.

Feist, Peter H, Un sueño de Armonía, Taschen, Berlín, 1990.

Boutet, Jean, Toulouse-Lautrec, Ediciones Daimon, México, 1968.

Julien, Edouard, Toulouse-Lautrec, Ediciones Daimon, México, 1965.

“August Renoir”, en Maestros de la pintura mundial, Editorial de Artes Aurora, Leningrado, 1984.

Los Impresionistas y los creadores de la pintura moderna, varios auto-res, S.A de ediciones, Barcelona, España. 1989.

Vera Sergine Renoir. Pierre Auguste Renoir

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Ensayo realizado por Jorge Alberto Segura, estu-diante de los Programas de Bellas Artes y Diseño Industrial, para la cátedra de Historia del Arte IV, a cargo de la docente Adriana Tobón.

Renoir y Lautrec

Las pinturas Vera Sergine Renoir (1914) y La bebedora de ajenjo (1876) son retratos de mujeres y, aún cuando existe similitud cronológica, técnica y estilística en la elaboración de ambas, el tema y el tratamiento del género nos deve-lan intereses muy diferentes por parte de Renoir y Lautrec, respectivamente. Los autores tienen maneras totalmente distintas de relacionar a los observadores con las pinturas.

Sin embargo, como retratos, las dos obras pretenden re-velarnos laberintos diversos del individuo. Además, los dos cuadros, más que mostrarnos la persona retratada, nos ponen de frente, ante las inquietudes del artista respec-to a su realidad propia y cotidiana. Estas imágenes fueron contrastadas, con el fin de analizar mejor los elementos básicos formales y, a la vez, evidenciar cómo llegan a un contraste lumínico a partir del color, no con la técnica del claro-oscuro, sino en un juego cromático que hace parte de la composición general y formal de los cuadros.

Características generalesEn el caso de Pierre Auguste Renoir (1841-1919) y Vera

Sergine Renoir, tenemos tres líneas básicas de tensión, que nos proponen un recorrido visual por las zonas más ilu-minadas. Tanto así que, proyectando dos de estas líneas,

ambas confluyen en la zona más iluminada del fondo. Es decir, en la posible fuente de luz. La mano en la que se apoya el rostro, por la línea que genera y la iluminación que tiene, sirve como sendero visual dirigido hacia el rostro, con una considerable iluminación. Renoir lo da a entender como el elemento formal más importante del retrato, junto con las flores del pelo y el anillo de compromiso que la protagonista luce en su mano de manera grande e iluminada.

En La bebedora de ajenjo, de Henri de Toulouse-Lautrec (1864-1901), resulta muy provechosa la herramienta de desaturación, teniendo en cuenta que, por la paleta de color que usa Lautrec, es más difícil encontrar en estas zonas una iluminación que nos devele elementos de gran importancia para él. Pese a ello, hay dos tensiones importantes genera-das en el brazo más próximo –bastante iluminado– y la es-palda. Además, se suma la línea de fuga de la mesa que nos dirige hacia una parte que, en contraste, es la más iluminada del cuadro. En mi opinión, es un elemento semántico muy importante para Lautrec.

La línea del brazo, en el plano más cercano, nos lleva a un elemento macizo y oscuro, ubicado en la mesa, junto a la copa de ajenjo. Hay otra línea de la mesa, ubicada en el últi-mo plano de la obra, que nos conduce a un débil viso de luz,

dos miradas del retrato

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