marta lamas, méxico, 2003 -...

10
NÓMADAS 162 NO. 23. OCTUBRE 2005. UNIVERSIDAD CENTRAL – COLOMBIA Marta Lamas, México, 2003

Upload: truongnguyet

Post on 29-Sep-2018

229 views

Category:

Documents


0 download

TRANSCRIPT

NÓMADAS162 NO. 23. OCTUBRE 2005. UNIVERSIDAD CENTRAL – COLOMBIA

Mar

ta L

amas

, M

éxic

o, 2

003

163NÓMADASLORENZANO, S.: RETRATO DE UNA DAMA INCÓMODA

ORIGINAL RECIBIDO: 11-VII-2005 – ACEPTADO: 25-VII-2005

RETRATO DE UNA DAMAINCÓMODA

Sandra Lorenzano *

Por su trabajo como activista convencida del movimiento feminista, como defensora del derecho de la mujer a decidirsobre su propio cuerpo, como brillante ensayista, como interlocutora de los partidos y movimientos de izquierda mexica-na, como fundadora de debate feminista, la antropóloga mexicana Marta Lamas se ha convertido en un símbolo de lacultura contemporánea de su país. Este artículo muestra un perfil de esa intelectual, luchadora y crítica.

Palabras clave: debate feminista, libertad, derechos, mujeres, género, pensamiento contemporáneo.

Por seu trabalho como ativista convencida do movimento feminista, como defensora do direito da mulher a decidirsobre seu próprio corpo, como brilhante ensaista, como interlocutora dos partidos e dos movimentos da esquerda mexi-cana, como fundadora de debate feminista, a antropóloga mexicana Marta Lamas se converteu em um símbolo dacultura contemporânea de seu país. Este artigo mostra um perfil dessa intelectual, lutadora e crítica.

Palavras-chaves: debate feminista, liberdade, direitos, mulheres, gênero, pensamento contemporâneo.

Marta Lamas has become a symbol of contemporary culture in her country, because of her work as a convincedactivist of the feminist movement, a defender of the women’s right to decide on their own bodies, a brilliant lecturer, alistener of left parties and movements, and as the founder of the journal debate feminista. This article is a profile of thisintellectual, fighter, and critical woman.

Key words: debate feminista, freedom, rights, women, gender, contemporary thought.

* Escritora “argen-mex”, doctora en Letras, profesora-investigadora de la Universidad Autóno-ma Metropolitana, miembro del Consejo Editorial de debate feminista, directora de la colec-ción de narrativa latinoamericana Primero Sueño. E-mail: slorenzano@ laneta.apc.org

[email protected] • PÁGS.: 162-171

163NÓMADASNO. 23. OCTUBRE 2005. UNIVERSIDAD CENTRAL – COLOMBIA

NÓMADAS164 NO. 23. OCTUBRE 2005. UNIVERSIDAD CENTRAL – COLOMBIA

Para la banda de los martes,por las complicidades y el cariño

Había una vez una niña solitaria a la que legustaba leer rodeada de sus gatos… Había una vez unaadolescente que, con ojos espantados, miraba las des-igualdades que tenía alrededor… Había una vez unajoven estudiante de antropología que descubrió elmarxismo… Había una vezuna mujer que supo que sucuerpo y su sexualidad erantambién políticos… Habíauna vez una cantante quecon guitarra en mano le dis-paraba al sexismo… Habíauna vez una intransigenteluchadora por la despe-nalización del aborto… Ha-bía una vez una lúcidapensadora que se oponía aencasillar sus reflexiones…Había una vez…

¿Cuál es el mejor co-mienzo para este cuento?¿Cuál es el mejor comienzopara el cuento –que no escuento– que nos permitaacercarnos a Marta Lamas?¿Hablar de su vida, de sumilitancia, de sus libros ode sus gatos? “Es necesarioinvolucrarse en varias acti-vidades para que cada unade ellas resulte positiva, ilu-mine, sirva, trascienda. Poreso he trabajado en distin-tos ámbitos, del activismo a la reflexión, de la antro-pología al psicoanálisis, del debate feminista al Grupode Información en Reproducción Elegida (GIRE)”(Lamas, 2001: 363). Marta Lamas es un referente in-eludible en la cultura mexicana contemporánea: mi-litante convencida del movimiento feminista desdesus inicios, crítica feroz del pensamiento conserva-dor y el statu quo, defensora del derecho de las muje-res a decidir sobre su propio cuerpo, activainterlocutora de los partidos y movimientos de la iz-quierda mexicana, aguda ensayista. Su rigor reflexi-

vo, su claridad e independencia ideológicas, su com-promiso político más allá de límites y fronteras parti-distas la han vuelto una figura clave en el México decomienzos del siglo XXI.

Marta nació en la ciudad de México, hija mayorde una pareja de argentinos liberales, hijos –a su vez–de españoles. “Migrantes hijos de inmigrados”. A loscuarenta días de nacida la llevaron a Buenos Aires.

“Gran parte de mi infanciala pasé yendo y viniendo.Mi padre era un apasiona-do de este país. Con la ideade que volveríamos a radi-car en Argentina nos empe-zó a llenar de México; nosllevaba a ver las ruinas ar-queológicas y los conventosen varias partes de la Repú-blica y a conocer lo másposible” (Lamas, 2001:364). Como su padre, Mar-ta se convirtió en una ena-morada de México, paísque decidió que sería elsuyo. Pero la realidad mexi-cana no era sólo arqueolo-gía y conventos; afuera delpequeño grupo familiar, dela cultura y los libros, de losviajes y los amigos intelec-tuales, había desigualdadese injusticias, había un mun-do incomprensible y dolo-roso. Tratar de entenderloy de transformarlo fuerondos objetivos que nacieronentonces y que parecen ha-

ber guiado la vida de Marta hasta ahora. Volverse mon-ja o trabajar en un kibutz –dos de sus aventurasadolescentes– no parecían darle las respuestas que bus-caba. Pero en la preparatoria –en la Mexico CitySchool, escuela fundada por refugiados españoles– elmaestro de doctrinas filosóficas les habló del marxis-mo: “…para mí fue como si descorriera una cortina yse aclararon muchos de mis interrogantes sobre la mi-seria y las diferencias sociales. A partir de ese momen-to comencé a vivir una época muy difícil. Mi papá erabanquero y vivíamos en una zona muy rica de Polanco;

En el jardín de su casa con su gata Shura. 2003

165NÓMADASLORENZANO, S.: RETRATO DE UNA DAMA INCÓMODA

en ese contexto me volví una izquierdista radical” (La-mas, 2001: 366). Llegaron entonces el 68 y el movi-miento estudiantil; Marta, estudiante de la EscuelaNacional de Antropología e Historia, participó en élactivamente.

Poco después, nacieron de manera casi simultánea–y es probable que en esa simultaneidad no haya ca-sualidad– Diego, su hijo, y su relación con el feminis-mo. En una charla que Susan Sontag dio en la Facultadde Ciencias Políticas y Sociales de la UNAM, Martadescubrió aquello de que “lo personal es político”; másallá de la lucha de clases y de la política en el sentidotradicional, “también en la cama y en las relacionescon los hombres había una situación de poder y de-bíamos preguntarnos qué pasaba con la sexualidad.(...) Después de la conferencia un grupo de mujeresnos acercamos a Sontag y Marta Acevedo nos invitóa una reunión feminista. Desde entonces participo eneste movimiento. Era 1971, yo tenía 23 años y mi hijo,uno” (Lamas, 2001:367). A la militancia de izquier-da, le sumó entonces la posibilidad de identificar supropia problemática como mujer y de empezar a lu-

Evento en el que se presentó la propuesta de ampliación de la Ley del aborto en ciudad de México en 2000. Marta Lamas aparece sentadaentre el filósofo Luis Villoro y la escritora Elena Poniatowska.

char también desde ahí. Esto no borró el compromisocon los grupos marginados sino que, en cierto sentido,lo afinó. “Por ejemplo, la lucha que mantengo desde1972 por la despenalización del aborto evidentemen-te beneficiará en mayor medida a las mujeres que vi-ven en peores circunstancias, las que no cuentan conlos recursos para practicarse un aborto –aunque clan-destino– en un lugar higiénico y con personas prepa-radas. Pero con esa lucha también estoy reivindicandouna libertad básica: la posibilidad de decidir sobre unamisma” (Lamas, 2001: 367).

La dificultad que existe en términos sociales parapoder entender el aborto como un derecho de lasmujeres –más allá de la observación que hiciera Car-los Monsiváis hace algunos años en el sentido de quela sociedad mexicana ya había despenalizado moral-mente el aborto– “... tiene que ver básicamente conla ideología religiosa que está entretejida en nuestracultura y cuyo discurso es: ‘Tú no eres dueño de tuvida, Dios es el dueño de tu vida, tú no puedes dis-poner de ella’. En este contexto, el ‘derecho a deci-dir’ –sobre tu cuerpo y sobre tu vida, sobre la religión

NÓMADAS166 NO. 23. OCTUBRE 2005. UNIVERSIDAD CENTRAL – COLOMBIA

que quieres practicar, con quién te quieres ir a lacama, con quién te quieres casar, cuántos hijos quie-res tener, qué quieres leer, cómo quieres vivir; o sea,todo lo que tiene que ver con la vida íntima– se vuel-ve de alguna forma un atentado contra la idea deque hay un ser supremo que decide por ti y que tútienes que someterte a sus designios o seguir los dic-tados que los voceros de ese poder supraterrenal, susrepresentantes en la tierra, dictaminan. No está for-mulado de esa manera, pero ese es el sustrato de to-das las resistencias, es decir, algo que es un hecho demínima autonomía en el ejercicio de la concienciase convierte en todo un desafío cultural a la religión”(Brito, 2002).

Las fronteras del derecho a decidir se deben esta-blecer a partir del respeto:

El respeto al derecho ajeno es la paz,El respeto a la sexualidad ajena es la paz,El respeto al aborto ajeno es la paz,El respeto a las creencias ajenas es la paz,El respeto al ateísmo ajeno es la paz,

El respeto a la vida ajena es la paz.Vamos respetando las fronteras entre lo público y loprivado.Vamos respetando el derecho de las personas a tomardecisiones privadas en materia de sexualidad y de re-producción.Vamos respetando la frontera necesaria entre Estadolaico e iglesias. (Lamas, 2001-2).

La lucha por la despenalización del aborto es lalucha contra la intolerancia, contra los fundamen-talismos de cualquier tipo; es en este sentido que seconstituye en uno de los ejes fundamentales del traba-jo de Marta Lamas, tanto en términos de militanciapolítica como de reflexión teórica; esto es así “porqueno quiero que la vida de muchas corra peligro por unelemental acto de libertad: decidir sobre su propiocuerpo” (Lamas, 2001: 376).

Al marxismo y al feminismo que se trenzan comofundamentos teóricos y como modos de mirar la reali-dad en sus reflexiones y análisis, es necesario sumarleun tercer pilar: el psicoanálisis.

Marta Lamas dicta una conferencia en el Día Internacional de la Mujer, en Xalapa, Veracruz. 1993.

167NÓMADASLORENZANO, S.: RETRATO DE UNA DAMA INCÓMODA

Mis ídolos intelectuales son Marx y Freud, que en ciertosentido me resultan similares, pues comparten la mis-ma sospecha sobre las apariencias y hablan de la exis-tencia de otro tipo de mecanismos en las personas y susacciones; por sus enseñanzas me he propuesto mante-ner un alto nivel de cuestionamiento, crítica y apertu-ra. Para mí, marxismo y psicoanálisis siguen siendoválidos, más que por dogmas que ya están rebasados,por cierta manera de pensar, determinados principiosde funcionamiento. Ésas son las grandes influenciasintelectuales en mi vida. Que yo me dedique a la de-fensa de los derechos sexuales y reproductivos o a laedición de una revista feminista tiene que ver con uncompromiso político básico: la lucha irrenunciablepor ciertos intereses vitales. También mi labor con lastrabajadoras sexuales me resulta importantísima, puesen la estigmatización y explotación de estas mujeres sejuega todo el peso del sexismo. (Lamas, 2001: 368).

De la reflexión teórica a la militancia, de la cáte-dra universitaria a las manifestaciones, del trabajo conlíderes políticos a la investigación antropológica enlas calles... Como modo de tender puentes entre estos

diferentes espacios, Marta funda la que llegará a seruna de las publicaciones más importantes en lenguaespañola sobre feminismo:

debate feminista nace de la necesidad compartida entrevarias feministas de disponer de un medio de reflexióny debate, un puente entre el trabajo académico y elpolítico, que contribuya a movilizar la investigacióny la teoría feministas, dentro y fuera de las institucio-nes académicas, y ayude a superar la esterilidad de losestudios aislados del debate político. No compartimosla concepción de las ‘mujerólogas’ (especialistas en eltema de la mujer, desvinculadas del movimiento femi-nista) y tampoco aprobamos el antiintelectualismo quetiñe algunas posiciones en el movimiento. d ebate femi-nista es una toma de posición frente a la fabricación deestudios banales (y su aprovechamiento curricular) ylas explosiones de resentimiento a nombre de la Revo-lución. (Lamas, 1990).

Con este párrafo se abre, en marzo de 1990, el nú-mero 1 de debate feminista; párrafo que es a la vez decla-ración de principios y establecimiento de objetivos. Los

Taller para trabajadoras sexuales dictado por Marta Lamas y Jesusa Rodríguez. Están acompañadas por la cantante Regina Orozco. 2004.

NÓMADAS168 NO. 23. OCTUBRE 2005. UNIVERSIDAD CENTRAL – COLOMBIA

nuevos aires que debate feminista lleva dentro y fueradel movimiento de mujeres comienzan, sutilmente, conuna “pequeña” transgresión ortográfica de una enormefuerza simbólica: debate será siempre debate, con minús-cula, no por minimizar sino por hacer de lo “menor”punto de crítica y resistencia –como proponían Deleuzey Guattari–, por bajarle el tono grandilocuente al dis-curso hegemónico. El Partido, la Revolución, las Insti-tuciones, muestran ya, hacia 1990, las grietas del edificioque sostuvo al PRI (PartidoRevolucionario Institucio-nal) en el poder durante casisetenta años. A pesar delmal sabor de boca que ha-bían dejado las elecciones de1988, o quizás por lo mis-mo, era un buen momentopara detenerse a pensar, acrear espacios de reflexión,a tratar de imaginar nuevoscaminos para la sociedadmexicana. debate feminista sepropone, así, desde un prin-cipio, transformar las “mi-núsculas”, el margen, latransgresión a las expectati-vas sobre lo que debía seruna revista, sobre lo quedebía ser el feminismo, enespacio generador de in-quietudes, de análisis, de in-comodidades para cualquiertipo de agenda política (ha-blo también, por supuesto,de política de género, depolítica académica, de polí-tica militante). No es gratui-to que el tema principal deeste primer número hayasido la democracia.

debate nace después de la experiencia de la revista Fem,de la que yo me salgo en 86 más o menos, después deregresar de Barcelona, porque me doy cuenta que ladinámica interna se había vuelto muy conflictiva... En87, le propongo a Carlos Payán hacer un suplementofeminista para La Jornada –que es Doble jornada–; empe-zamos a trabajar en el proyecto y las propias periodistasde La jornada quisieron sumarse; tuvimos una reunión

con ellas y ahí me di cuenta de que ellas querían unsuplemento de mujeres muy distinto al que yo estabapensando que era un suplemento en el que escribieranno sólo mujeres, sino también hombres pero con unaperspectiva feminista. Entonces, opté por no pelearme ydecidí que se quedaran con el proyecto las propias pe-riodistas de La jornada. Yo seguía con la idea de un pro-yecto en el que hubiera un nivel de debate interesante,político, en el que involucráramos tanto a hombres como

a mujeres, y así nació la idea desacar una revista feminista, queno tuviera el mismo público dela revista Fem; es decir, no iba aser una revista para vender enla calle, sino que iba a ser mástipo journal. Invité a muchasde las mujeres a las que habíaconvocado para hacer el suple-mento, entre ellas básicamentea Hortensia Moreno, a SaraSefchovich, a Martha Aceve-do, a Teresita de Barbieri, entreotras. Yo tenía muy claro queno quería una dirección colec-tiva después de la experienciade Fem, pero sí quería un grupocon el que me entendiera;tampoco pensaba hacer algorepresentativo de todas las ten-dencias del feminismo, queríaque el propio hecho de hacerla revista se volviera en sí unhecho disfrutable, no solamen-te el producto sino también elproceso. (Lamas, 2005).

debate feminista cumplióquince años. Sin duda, la de-mocratización de México es ya

un proceso imparable, a pesar de violentos vaivenes;sin duda, la secularización y la modernización de lavida nacional han cambiado en muchos aspectos larealidad de 1990; sin duda, el movimiento feministaha replanteado sus estrategias políticas; y sin duda tam-bién debate feminista es producto de todo esto, y almismo tiempo uno de sus motores menos complacien-tes. En las páginas de debate se han discutido temasvinculados a la situación del país y a los conflictosinternacionales –del levantamiento zapatista a la gue-

Marta Lamas el día de la presentación de su tercer libro:Cuerpo: diferencia sexual y género. 2002. Aparece con el

intelectual Carlos Monsiváis y la escritora Hortensia Moreno.

169NÓMADASLORENZANO, S.: RETRATO DE UNA DAMA INCÓMODA

rra de Irak, de los asesinatos en Ciudad Juárez a lasleyes de cupo en Europa–; se ha reflexionado sobreconceptos y problemas clave del pensamiento con-temporáneo (identidad, alteridad, ciudadanía,empoderamiento, género, cuerpo, racismo, nación,queer, escritura, sexualidades, justicia); se han revisa-do los vínculos entre teoría y praxis, entre producciónintelectual y militancia, entre análisis y realpolitik; sehan deconstruido los supuestos más firmes del pensa-miento feminista para revisarlos una y otra vez. En cadanúmero los análisis coyunturales dialogan con reflexio-nes teóricas que surgen de las principales líneas deldebate internacional. En este sentido, es fundamentalla labor de divulgación que debate feminista ha realiza-do, dentro del ámbito latinoamericano, de algunos delos más importantes pensadores contemporáneos. Porsus páginas han pasado, en muchos casos con textostraducidos por primera vez a nuestra lengua, PierreBourdieu, Pietro Barcellona, Judith Butler, Mary LouisePratt, Jean Franco, Bell Hooks, Benedict Anderson,Luisa Muraro, entre muchos otros.

Carlos Monsiváis, interlocutor privilegiado de de-bate y colaborador asiduo, dice: “Me parece una granrevista; es útil, tiene materiales de primera, una acti-tud militante y, lo básico, ha conquistado la continui-dad. Su mayor logro, así lo sepan todavía muy pocos,es mantener y ampliar los beneficios sociales de unacorriente de pensamiento” (Gámez, 2005: 12). Irre-verente, crítica, inteligente, aguda, la revista ha lo-grado incluir en el debate intelectual mexicano temasy discusiones fundamentales que muestran que el fe-minismo no es “una cosa de mujeres”. A través de suspáginas, así como de una amplia producción textual(artículos periodísticos, ensayos, conferencias, libros…),Marta Lamas defiende una concepción libertaria, abier-ta, democrática del género y la sexualidad.

Toda la sociedad genera costumbres y normas, prácti-cas y creencias, que regulan la expresión sexual: cuán-do tener relaciones sexuales, con quién tenerlas,cuántas veces, de qué manera, con qué objetivo y, so-bre todo, qué tipo de relaciones. A pesar de la impre-sionante pluralidad cultural, nuestra conciencia de ladiversidad sexual humana es muy limitada: ignoramoslas prácticas y costumbres sexuales de las demás cultu-ras. Respecto de la nuestra, damos por ‘natural’ la ideo-logía heterosexista en la que nos han educado y sin elmenor pudor calificamos de antinatural lo que desco-

nocemos o nos parece extraño. La evidencia antro-pológica nos muestra cómo los discursos moralistasconstruidos a partir de un supuesto orden ‘natural’ es-tán filtrados por valores etnocéntricos (centrados enuna cultura), cuya definición de la sexualidad oculta,desecha o niega otras prácticas, creencias y deseos.Cada cultura otorga valor a ciertas prácticas sexuales ydenigra a otras a partir de una limitada concepción dela sexualidad. (...) Quienes ejercen el poder simbólico–desde los chamanes hasta los sacerdotes– establecenlas fronteras entre lo normal y lo anormal, dictaminan-do qué prácticas son buenas o malas, naturales oantinaturales, decentes o indecentes. (...)

Hoy en México, muchas personas empiezan a expre-sar su desacuerdo con la visión heterosexista tradi-cional de la sexualidad. Frente al atraso conservador,que invoca una única moral ‘auténtica’ para restrin-gir la sexualidad a sus fines reproductivos, se alzauna ética libertaria que defiende la posibilidad deuna relación sexual placentera, consensuada y res-ponsable con el otro. Como las premisas valorativasde la sexualidad se establecen a partir de la relaciónentre el sexo, la identidad y la vida pública, se re-quiere una ética no etnocentrista ni fundamentalistaque elimine las clasificaciones artificiales sobre lasprácticas y se centre en el carácter del intercambio.(Lamas, 1997).

En términos de activismo político, Marta ha prefe-rido no ser militante de ningún partido sino convertir-se en una interlocutora imprescindible para varios deellos, fundamentalmente desde GIRE (Grupo de In-formación en Reproducción Elegida), asociación quefundó en 1991. Si debate feminista cubre el aspectomás teórico y académico de sus preocupaciones, GIREle ha permitido ser el canal a través del cual se mani-fiesta su activismo. Asimismo ha estado muy cerca dela formación y consolidación de diversas agrupacio-nes y organizaciones políticas feministas como la So-ciedad Mexicana Pro Derechos de la Mujer (Semillas),Milenio feminista, Diversa, el partido político MéxicoPosible, y actualmente el Partido Alternativa Social-demócrata y Campesina, presidido por PatriciaMercado.

Yo me asumo como mujer aunque el papel que se meha asignado culturalmente en la sociedad no me gus-ta. Por eso me reivindico como feminista y lucho día

NÓMADAS170 NO. 23. OCTUBRE 2005. UNIVERSIDAD CENTRAL – COLOMBIA

a día con el fin de mostrar los complejos orígenes dela discriminación sexual y los sutiles mecanismos delsexismo. (...) Pienso que en sus luchas políticas muje-res y hombres deben ir a ratos juntos y a ratos separa-dos; cuando hay cuestiones que ellos no entiendan,no acepten o no apoyen, las mujeres tienen queempujarlas por su cuenta. Nosotras somos personasantes que cualquier otra cosa y lo que nos hace muje-res es nuestro sexo. Esto determina una posición en lasociedad y una lectura de la manera en que se nos vey se nos trata. Tenemos que luchar por la igualdadcon los hombres como personas iguales, sin dejar dereivindicar nuestra diferencia como género. (Lamas,2001: 374).

La lucha tiene también un lado lúdico que a Mar-ta le gusta explorar, por eso no es raro encontrarlacada tanto guitarra en mano, disfrutando de lo queella llama “mis locuras semicómicas y levemente mu-sicales”. “La primera canción feminista arreglada queMarta cantó fue el ‘Querreque del aborto’, en 1972durante una conferencia en el Poli. Con su guitarra ysu cara de ‘yo no fui’ soltó las subversivas estrofas: ‘Siel hombre se embaraza / les apuesto lo que quieras /habría abortos gratuitos / seguro que entonces sería /el aborto un sacramento’. ¡La que se armó!” (Roffiel,1985, 23). En 1975 fundó el grupo “La tet ala ire”; en1976 inició “Las leonas” que trabajó intensamentehasta 1982 y de manera esporádica a partir de 1986.En 2004 Marta volvió al placer de cantar con ¡“Lasmoscas muertas”!

Siguiendo esta línea del “cabaret feminista” queen México tiene a sus representantes más “conspicuas”en Jesusa Rodríguez y Liliana Felipe, me gustaría ce-rrar estas páginas – poner el “Colorín, colorado…” aeste cuento, que no es cuento– con el “Re corrido deMarta Lamas”…. ¡Música maestros!!!

Nació Argentina y Jarochahija de rico banquerosu cuna fue de oro y platasu sino meter la pata.

Su infancia fue al tiro “popis”las Europas y el Club Yokispero desde muy chiquillase dio cuenta que había pobres...muchos pobres.

Y allí empezó el desgarriatecon la mamá y el magnatela corrían de los colegiospor presumida y orate.

Los papás desesperadosprefirieron la ignominiade meterla en una escuelade españoles refugiados.

Y ora sí fue para piorahí le dio por ser marxistaapenas adolescenteya era roja y comunista...¡ bien troskista!

O se iba para el demonioo se iba p’al matrimonioy así fue como un tal Maherentró y salió de su vida....Porque no todo es saberalgo de antropología.

Se llegó el sesentayochoella ya era militantey a escondidas del maridollevó a un tipo proscribido....al mero departamentoque estaba rete elegante.

¿Junto con otros sujetosquieres pernoctar la nochey meter al del morralen el lecho conyugal?

¿Y llenarme los librerosde panfletos subversivos?¡Va a venir la policía!¡Yo voy a dormir al coche!

Marta puso un hasta aquíaquel guey se fue pa´siemprey del romance siguientecon poeta guerrillero... nació Diego Sebastiánel único descendiente.

171NÓMADASLORENZANO, S.: RETRATO DE UNA DAMA INCÓMODA

Con la más grande emociónle hicimos este corridopor ser la más generosala más chulala más güena,la más dulce,la más alta,la más, la másLamas Marta.

Bibliografía

BRITO, Alejandro, “Marta Lamas. El aborto, una cuestión de libredecisión ciudadana”, en: Letras S, suplemento de La Jornada,México, 2 de marzo de 2002.

GÁMEZ, Silvia Isabel, “El feminismo en México. Juicio al feminis-mo”, en: Enfoque, suplemento de Reforma, México, 31 de octubrede 2004.

LAMAS, Marta, “Valores sexuales. Una perspectiva libertaria”, en:Letra S, suplemento de La Jornada, México, 7 de agosto de 1997.

________, “Presentación”, Debate feminista, año 1, Vol. 1, México,1990.

________, “El feminismo como batalla cultural”, en: Mujeresmexicanas del siglo XX. La otra revolución, Francisco BlancoFigueroa (director), México, UAM/Edicol, 2001

________, “Las fronteras del derecho a decidir”, en: Letra S, suple-mento de La Jornada, México, 5 de abril de 2001.

________, Entrevista inédita, 2005.

ROFFIEL, Rosa María, “Las leonas”, en: Fem, año 9, No. 42, octubre-noviembre, 1985.

Ya tenía veintitrés añosy se había vuelto muy listaya tenía su casa solaya era dueña de sí misma....por andar leyendo librosque se vuelve feminista.

Pa'qué les cuento señoraslo que se volvió su vidamarchas, mítines, protestasy una cantidad de encuestas.

Prostitutas y violadascostureras y golpiadasmujeres abandonadasel aborto y... la chingada.

Y fue haciéndose de amigaslas Leonas y las Peludastodas ellas chipocludasdivorciadas y hasta viudas.

Dicen que todos los viernesse resuelven en su casaproblemas universales,políticos y sexuales... muy mundiales!

Ha cambiado mucho Martano quiere hombres, quiere gatasy aunque te acuestes con ellaoye gata no la lamas.... ay qué ganas!

Una cosa les diréya publicó una revistadonde se da a conocerla Debata Feminista.

Otra cosa les diréla vida es una revistamientras que algunos la leenotros le pasan la vista.

Y aquí comienza la historiade esta mujer singularque es capaz de enamorarhasta al propio Monsiváis.

En

un a

cto

de m

ovim

ient

o fe

min

ista

en

Méx

ico.

Apa

rece

can

tand

o co

n Su

sana

Vid

ales

. c.

197

7.