Mi Barrio, mi Historia

INSTITUCIN EDUCATIVA PEDRO DE HEREDIAProyecto Etnoeducativo ComunitarioLeyendas de mi Barrio

Los estudiantes de Noveno (9) de la I.E. Pedro de Heredia hemos participado en el proyecto Mi Barrio mi Historia indagando en nuestro barrio sobre las leyendas que an recuerdan nuestros abuelos, con el fin de fortalecer nuestra identidad.

Queremos compartir con ustedes esta experiencia.

A continuacin mi compaera Lina leer dichos relatos.

LEYENDAS DE MI BARRIO

La Candelaria y La Esperanza son barrios populares de Cartagena de Indias, ubicados en la localidad de la Virgen y Turstica. En los cuales viven muchos de los estudiantes de I.E. Pedro de Heredia, y en los que abundan leyendas urbanas guardadas en la memoria colectiva de sus ancianos. Los educandos de Noveno (9) grado se dieron a la tarea de indagar sobre esos relatos cargados de misterio y de fantasa que nunca pueden faltar en la historia de una comunidad y que de una u otra manera hacen parte de nuestra cultura.Las ilustraciones de las leyendas fueron elaboradas por el estudiante:

Keiner Jos Arango Hurtado

LA BRUJA MARA Recuerda la seora Ana Amrica Torres, que en su barrio haba una bruja que se llamaba Mara. Era tan vieja que no lo podran creer, y adems, era coja. Nadie se imaginaba que ella era la bruja. A dicha mujer la queran atrapar por las maldades que le haca a los nios, por ejemplo los colocaba debajo de la cama. El rumor se extendi a todos lo vecinos, hasta el punto de ponerse de acuerdo para cazarla. Noche tras noche, esperaban que llegara.

Un da, uno de los vecinos escuch algo que cay en el techo, ste sali corriendo a buscar el agua bendita y agarr una cabuya para atarla. Abri la puerta para que el espanto entrara y se escondi detrs de ella. La cacera fue exitosa porque entre todos los de la cuadra, la agarraron y amarraron, en ese momento se dieron cuenta que la bruja era Mara. Desde ese da todo el mundo le tema porque la haban descubierto y se conoca su verdadera identidad.

Apartada y solitaria, se ubicaba en la ventana de su casa a ver pasar a la gente, y cuando los nios transitaban, les tiraba piedras porque era una hechicera, y los odiaba. En las noches, la mayora de las personas no salan de sus casas por temor a sus fechoras. Ninguno de los vecinos quiso matarla por la gran desconfianza que ella provocaba. Pasados los aos doa Mara muri de vejez y slo qued en las calles del barrio la Candelaria, su leyenda.

Narrado por Ana Mara Torres. 75 aos. La Candelaria.

LA NIA CATALINA GUANGOCuenta mi abuelo, que en Palenque existi una nia llamada Catalina Guango. En una ocasin fue con sus amigas al arroyo. Ella se meti a buscar un pez y sus amigas le gritaban: -Catalina, Catalina, vmonos! Y Catalina no les haca caso. Al cabo de un rato ellas se fueron. Catalina se perdi en esas aguas. La gente la busc, pero nunca apareci. A los dos aos de haber ocurrido ese suceso se muri el abuelo de la chica desaparecida. Y al instante, apareci Catalina llorando a su abuelito, en medio de la casa y en sus gemidos se escuchaba: - Mi abuelo, mi abuelo! Dndose la vuelta, desapareci de ese lugar.

La gente asustada fue donde un brujo a preguntarle: Por qu Catalina Guango apareca y desapareca? ste les contest que si ella se desapareca era porque haba comido tierra del infierno, y tenan que amarrarla en la iglesia. A los pocos aos se muri su madre, y otra vez hizo su aparicin llorando.

Ay, mi mam, ay mi mam!

Cuando apareci, otra vez la gente, la amarr en un poste de la iglesia. Continu amarrada hasta el da siguiente en la maana cuando desapareci. Y as fue que siempre que mora alguien de su familia, apareca Catalina Guango llorando.

Narrado por: Jess Mara Tejedor A. 62 aos. Barrio La Candelaria, calle Los Palenqueros.

EL NIO DENTN Hace mucho tiempo, un niito se apareca en las esquinas del barrio La Esperanza a altas horas de la noche. Esperando que al pasar la gente lo viera y se compadeciera de l. Pero, muchos aunque desconfiaban, se acercaban a preguntarle por qu estaba all solito, sin imaginarse que esa apariencia angelical se convertira en un violento y dentn nio. Al instante, el ingrato sacaba sus feroces dientes y empezaba a morder con ansias el rostro de sus vctimas. Quienes aterrorizadas, lo tiraban y huan inmediatamente de ese lugar. Mientras tanto la pequea criatura emitiendo unas carcajadas desapareca del lugar. En ese tiempo todos los jvenes del barrio evitaban sentarse en las esquinas en las noches para no pasar el susto de muchos.Narrado por: Juan Daniel Prez. 80 aos. Barrio La Esperanza.EL PERRO NEGRO Cuenta la seora Inginia Blanco, que en la Calle 10 de Mayo, del barrio La Esperanza, pasaba a eso de las 3:00 a.m., un perro negro al que le brillaban los ojos, y que a cualquier persona que lo mirara inmediatamente quedaba elegida para que le ocurriera algo malo al da siguiente. Dicen los que saben, que la nica forma que tena una persona de no ser vista por este mgico animal, era que se vistiera todo de rojo, para que con su inconfundible color quedara cegado y se fuera.Narrado por Inginia Blanco. 99 aos. Barrio La Esperanza.

EL CABALLO CON CUERPO DE SEORSemana Santa siempre ha sido momento propicio para que especies del ms all se manifiesten. Cuenta mi abuela, que un jueves santo, en el barrio La Esperanza, sali un caballo, de color gris y cuerpo de seor como a la 1:00 a.m., y le dio la vuelta a la manzana. Esta extraa especie usaba un traje blanco y una chaqueta, su cola arrastraba hasta el suelo. Al pasar sonaban sus herraduras. Volvi la segunda vez y su cola haba aumentado considerablemente. Ms tarde, desapareci en un remolino que emergi en medio de la calle.

Lo sucedido esa madrugada slo pudo ser visto por aquellas personas que tenan ojo para ver espantos entre ellas estaba mi abuelita Gertrudis.

Narrado por Dirce Mara Espinosa. 65 aos. Barrio La Esperanza.

EL RBOL MISTERIOSOHace mucho tiempo, un rbol apareca en las noches en medio de la calle y cuando las personas pasaban por ese lugar escuchaban voces. Sala una lmpara en rbol que se alejaba a medida que la persona se acercaba.

Una noche cuando pasaba por ah, vi una mecedora mecindose sola, no haba nadie sentado en ella. Me acerqu para ver quin estaba all y lo nico que pude ver fue a un perro que iba creciendo ms y ms hasta que tom un tamao mayor al mo, y me deca: -Qu se te perdi? Qu buscas en este rbol?

Se me puso la cabeza grande, el cuerpo no se me mova para nada, no poda hablar; dur dos das que no pronunciaba palabra alguna. Despus de eso le cont a mi mujer, pero ella me deca que eso era solo un sueo. Al da siguiente, vena de trabajar en la noche y cruzaba la calle vi la lucecita que se estaba metiendo en el rbol, pero se alejaba. De pronto, siento un llanto. Era un nio que lloraba bajo el rbol. Yo no quera llegar hasta all, sin embargo lo hice porque el nio segua llorando. Al preguntarle que por qu lloraba l no contestaba, no deca nada. En ese instante alz la cabeza y me mir fijamente y para mi sorpresa la cabeza se le desprendi y me dijo: -no me ests viendo? Yo vivo debajo de este rbol, ests ciego?

La gente deca que el rbol era misterioso, porque apareca era en la noche mientras que en el da no haba nada y toda persona que se encontraba con l le deca: -Regrsate por donde viniste, no sea que encuentres tu hora. Despus de esos momentos que viv de terror, no se ha escuchado a ms nadie hablar del rbol misterioso de La Candelaria.

Narrado por Bartolom Ortiz C. 81 aos. Barrio La Candelaria.EL DUENDE

Mucho tiempo atrs, en La Candelaria, cerca de la Cinaga de la Virgen, haba una recndita mina de oro y piedras preciosas. Un funesto da lleg un duende fantstico quien se present con unas cuantas monedas, poco diplomtico, con una lluvia de piedras, y se encarg de presumir en el barrio.

Los primeros das este misterioso ser se pavone de edad, estatura y color. A veces apareca como enano, otras veces de gigante y slo se escuchaba que vena del ms all. Luego el espectro comenz a asustar a todos los vecinos subindose a los techos de las casas, tratando de entrar para asustar a sus habitantes. En la actualidad, no se ha sabido ms de ese duende.

Narrado por Elida Rosa Castillo P. 79 aos. Barrio La Candelaria.EL ENANITO DENTN En una ocasin, en la calle Carrillo, de La Candelaria, se encontraba la seora Abelina Rodrguez, a las 12:00 p.m. esperando a uno de sus hijos. De pronto, a lo lejos vio a una persona pequea que le caus cierta admiracin. Qued bastante sorprendida y asustada, mucho ms cuando ste mostr su rostro aterrador, porque le abri los ojos y dej ver sus dientes, de los cuales brotaba candela. En ese momento la seora Abelina qued desmayada y no se acord de nada ms. Ella cuenta que ese suceso lo vivi en el mes de abril, cuando celebraban la Semana Santa.

Narrado por Abelina Rodrguez. 59 aos. Barrio La Candelaria.