la pestaña del lobo

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Libro sobre el proceso de iniciación en la mujer por C. Pinkola Estés...

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  • C l a r i s s a P i n k o l a E s t s M u j e r e s q u e c o r r e n c o n l o s l o b o s

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    CAPTULO 16

    La pestaa del lobo

    Si no sales al bosque, jams ocurrir nada y tu vida jams empezar

    No salgas al bosque, no salgas dijeron ellos. Por qu no? Por qu no tengo que salir al bosque esta noche?

    pregunt ella. En el bosque habita un enorme lobo que se come a las personas como t.

    No salgas al bosque, no salgas por lo que ms quieras. Pero, naturalmente, ella sali al bosque y, como era de esperar, se encontr

    con el Lobo, tal como ellos le haban advertido. Lo ves? Ya te lo decamos graznaron. Eso es mi vida, no un cuento de hadas, zopencos replic ella. Tengo

    que ir al bosque y encontrarme con el lobo; de lo contrario, mi vida jams podr empezar.

    Pero el lobo que ella encontr haba cado en una trampa, se le haba que-dado la pata prendida en un cepo.

    Socorro, auxilio! Ay, ay, ay! gritaba el lobo. Socorro, aydame y te dar la justa recompensa! aadi.

    Porque eso es lo que hacen los lobos en los cuentos de esta clase. Y cmo s yo que no me vas a hacer dao? le pregunt ella, pues su

    misin era hacer preguntas. Cmo s yo que no me matars y me dejars re-ducida a los puros huesos?

    Mala pregunta dijo el lobo. Tendrs que confiar en mi palabra. Y el lobo reanud sus aullidos y lamentos.

    Ay! Ay! Ay!

    Slo hay una pregunta que merece la pena hacer, hermosa doncella,

    dooonde est el

    almaaaaaa?

    Oh, lobo, voy a correr el riesgo. Vamos all! Abri la trampa, el lobo sac la pata y ella se la envolvi con hierbas medi-

    cinales y plantas. Oh, gracias, dulce doncella, mil gracias dijo el lobo, lanzando un

    suspiro. Pero, como haba ledo demasiados cuentos que no deba, ella exclam: Bueno, ahora ya puedes matarme, anda, terminemos de una vez. Pero no fue eso lo que ocurri. En su lugar, el lobo alarg la pata y se la

    apoy en el brazo. Soy un lobo de otro tiempo y lugar dijo. Y, arrancndose una pestaa

    del ojo, se la entreg diciendo: sala y procura ser sabia. De ahora en adelante

  • C l a r i s s a P i n k o l a E s t s M u j e r e s q u e c o r r e n c o n l o s l o b o s

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    sabrs quin es bueno y quin no lo es tanto. Mira a travs de mi ojo y lo vers todo con claridad.

    Por dejarme vivir, te ofrezco vivir

    como jams en tu vida has vivido. Recuerda que slo hay una pregunta

    que merece la pena hacer, hermosa doncella, dooonde est

    el almaaaaaa?

    Y as la doncella regres a la aldea,

    alegrndose de estar viva. Y esta vez cuando ellos le dijeron, "Qudate aqu y csate conmigo",

    o "Haz lo que te digo", o "Di lo que yo quiero que digas,

    pero que todo quede tan en secreto como el da en que viniste",

    la doncella tom la pestaa del lobo mir a travs de ella

    y vio sus motivos tal como jams los haba visto.

    Y la vez en que el carnicero pes la carne

    ella mir a travs de la pestaa del lobo y vio que pesaba tambin su pulgar.

    Y mir al pretendiente que le deca "Soy el que te conviene", y vio que no le convena para nada.

    Y de esta manera y muchas ms se salv

    no de todas pero s de muchas

    desgracias.

    Pero, adems, con esta nueva visin, no slo vio al astuto y al cruel sino que el corazn se le hizo inmensamente grande, pues miraba a las personas y las volva a calibrar gracias al don que le haba otorgado el lobo al que ella haba sal-vado.

    Y vio a los que eran verdaderamente buenos y se acerc a ellos,

    encontr a su compaero y permaneci a su lado todos los das de su vida,

    percibi a los valerosos y se acerc a ellos, capt a los fieles y se uni a ellos,

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    vio perplejidad por debajo de la clera y se apresur a disiparla,

    vio amor en los ojos de los tmidos y se inclin hacia ellos,

    vio sufrimiento en los callados y cortej su risa,

    vio necesidad en el hombre sin palabras y le habl,

    vio fe en lo ms hondo de la mujer que afirmaba no tenerla

    y se la volvi a encender con la suya. Vio todas las cosas

    con la pestaa del lobo, todas las cosas verdaderas

    y todas las cosas falsas, todas las cosas que iban contra la vida

    y todas las cosas que iban a favor de la vida, todas las cosas que slo podan verse

    a travs de los ojos de aquel que pesa el corazn con el corazn,

    y no slo con la mente.

    As descubri que era cierto lo que dicen, que el lobo es la ms sabia de las criaturas. Si prestas atencin, el lobo cuando alla hace siempre la pregunta ms importante, no dnde est el alimento ms prximo, la pelea ms prxima o la danza ms prxima,

    sino la pregunta ms importante para ver dentro y detrs,

    para sopesar el valor de todo lo que vive, dooonde estaaa

    el almaaaa?

    Dnde est el alma? Dnde est el alma?

    Sal al bosque, sal enseguida. Si no sales al bosque, jams ocurrir nada y tu vida no empezar jams.

    Sal al bosque, sal enseguida. Sal al bosque, sal enseguida.

    Seleccin de "La pestaa del lobo", poema original en prosa de C. P. Ests,

    copyright 1970, de Rowing Songs for the Night Sea Journey, Contemporary Chants.