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La Fundación Fahrenheit 451: la experiencia de descentralizar la cultura
Sergio Gama1
Resumen: Esta presentación busca enfatizar la necesidad de llevar la cultura, en este caso particular la literatura, fuera de los centros económicos y culturales. Esta necesidad responde a lo insuficientes que son esos espacios para personas de escasos recursos y a cómo gana el patrimonio cultural de una ciudad si se tiene como objetivo descentralizar la cultura, visibilizando manifestaciones marginales. Dicha exposición se encuentra basada en el trabajo, de los últimos tres años, de la Fundación Fahrenheit 451 con jóvenes de escasos recursos. Palabras-clave: descentralizar la cultura, jóvenes, patrimonio cultural, Bogotá.
A partir de la experiencia de la Fundación Fahrenheit 451, a continuación haré una
breve exposición del trabajo que, partiendo de un proyecto local, se volvió un festival de
literatura para toda la ciudad. Comenzando con un proyecto que promovía la literatura y
buscaba dar voz a jóvenes de escasos recursos, nosotros, la Fundación, hemos llevado
distintas manifestaciones culturales a sectores marginados de una zona de Bogotá y hemos
dado visibilidad a expresiones artísticas de dicha zona. Continuando este proceso hemos
creado el Primer Festival Bogotano de Literatura, “Letras Capitales” que continuará
llevando el arte, la literatura y, en general, la cultura más allá de los centros culturales
afiliados o próximos a sectores de clase alta.
Las generaciones 1 y 2 de Riel
En 2008, en el marco del programa Apoyos Concertados, de la Alcaldía Mayor de
Bogotá, la Fundación Fahrenheit 451 comenzó el proyecto “Letras y Comunidad”. Éste
tenía como fin primario la promoción de la lectura y escritura en jóvenes de escasos
recursos en la Localidad de Usaquén, al norte de Bogotá. Al tiempo se capacitó a 20
jóvenes para que ellos mismos produjeran y manejaran un periódico local de cultura.
1 Subdirector de la Fundación Fahrenheit 451. Magister en literatura de la Universidad de los Andes. E-mail: [email protected]
Es importante, antes de continuar, agregar cierta información sobre Bogotá y este
programa de la alcaldía, a fin de exponer el proyecto y su impacto. Por un lado, se debe
indicar que la ciudad de Bogotá está dividida en 20 localidades con sus respectivos alcaldes
menores; esto con el fin de descentralizar un poco el gobierno del Distrito Capital, de la
Alcaldía Mayor de Bogotá (Guía de Entidades Distritales). La localidad de Usaquén es la
Localidad 1 y tiene una población de cerca de 450 mil habitantes en un territorio de más de
6 mil hectáreas (Localidad de Usaquén). En ella se pueden encontrar unidades
poblacionales zonales (UPZ, siguiente subdivisión de la estructura de gobierno distrital)
muy dispares, muy diversas y muy desiguales. Así, hay algunas UPZ en que viven personas
de muchos recursos como Usaquén o Santa Bárbara, donde el suelo tiene uno de los precios
más altos de la ciudad; y otras UPZ, como San Cristóbal Norte, La Uribe y Verbenal, en las
que muchas familias subsisten con el salario mínimo y/o en condiciones de pobreza y
miseria.
Por otro, es necesario señalar que, dada la limitada envergadura de los proyectos
editoriales en Colombia, tan sólo dos medios culturales logran superar los 10.000
ejemplares en su tiraje; dicho tiraje suele quedarse entre las personas de más recursos. Esta
situación es aún más complicada cuando se ve que en la localidad de Usaquén no hay
medios que respondan a las necesidades de circulación y consumo de cultura en las clases
bajas. En Usaquén, sólo hay dos publicaciones de información general, una dependiente de
la casa editorial más grande del país (con claras filiaciones y dependencias del gobierno
nacional y sectores económicos hegemónicos) y la otra, con información de la alcaldía
local. Éstas sólo informan de algunos aspectos oficiales o que favorecen a la visión
oficialista y de clases altas, no reconocen la diversidad cultural y el potencial de la
población, sobre todo la de escasos recursos.
Ahora bien, en el contexto bogotano, el programa Apoyos Concertados, de 2008, se
guió por las directrices de la administración de Luis Eduardo Garzón, Alcalde Mayor para
el periodo 2004-2007 y el Plan de Desarrollo “Bogotá Positiva” de 2004-2016. En esencia,
y como consta en la convocatoria abierta, para escoger y seleccionar los proyectos que
apoyarán, éstos debían responder a al menos uno de los siguientes lineamientos del plan de
desarrollo social (Documento de información del Programa Distrital de Estímulos 2008 16,
17):
• Participación;
• Descentralización;
• Interculturalidad;
• Concentración;
• Creatividad;
• Sostenibilidad;
• Articulación; y
• Lo público.
En gran medida, se buscaba que el programa permitiera a los ciudadanos participar
en el fomento de la cultura, diera apoyo a las distintas manifestaciones artísticas
descentralizando el arte del gobierno central distrital y las instituciones de la nación. Todo
ello debía darse sin dejar de articular los trabajos con los proyectos de desarrollo de la
ciudad, y con la posibilidad de convertirse en una experiencia perdurable y/o replicable.
En este contexto, propusimos y realizamos el proyecto
“Letras y comunidad”. A grandes rasgos el proyecto consistió en
la capacitación de 20 jóvenes de escasos recursos en literatura,
periodismo y creación y manejo de medios impresos, con el fin
de, desde ellos, potenciar, difundir y consolidar las
manifestaciones artísticas que se daban espontáneamente en
Usaquén. Ello se logró con la creación del periódico Riel2 que se
volvió un medio de difusión e información independiente que
recoge la voz de la localidad, de la comunidad, de los jóvenes.
Asimismo, también buscamos compenetrar a la localidad, y sobre todo a las
personas menos favorecidas, con las muestras y manifestaciones artísticas y culturales que
se daban en distintas zonas de Bogotá, así como en sectores acaudalados de la localidad.
Cabe agregar que, paralelo a las capacitaciones y con fuerte impulso del medio impreso, se
realizaron eventos culturales gratuitos cada mes (en bibliotecas públicas, parques y demás 2 El nombre del periódico responde a una analogía que el equipo de 20 jóvenes halló entre el medio y la carrilera del tren que atraviesa toda la localidad de Usaquén en el trayecto que hace por buena parte de Bogotá. Según ellos, así como el tren, con sus vías, pasa por toda la localidad sin distinguir nivel socioeconómico, raza, orientación sexual ni político, así el periódico llegaría a todas las personas sin distingo alguno. Al igual que el riel del tren pasa por toda la localidad, Riel habrá de recorrerla y recogerla.
espacios públicos). Éstos tenían como fin visibilizar algunas manifestaciones que eran
marginales y llevar muestras artísticas a las personas que hacían de los espacios públicos un
lugar propio. Uno de los espacios más visitados, tanto en las capacitaciones como para
varios eventos, fue la Biblioteca Pública Usaquén – Servitá 3 . Agradeciendo y
reconociendo el amplio papel que juega en la promoción de la lectura en la comunidad de la
localidad y, especialmente, con los sectores menos favorecidos, llevamos allí varias lecturas
de cuento, poesía y capacitaciones en español y periodismo, a las que se unieron los
visitantes de la biblioteca.
Todo este proyecto, “Letras y comunidad” (con las capacitaciones, la publicación
del periódico cultural y los eventos culturales con el apoyo del Distrito), duró tan sólo
cuatro meses, de septiembre a diciembre de 2008 (Informe final de gestión 2008 2-7). A
partir de este trabajo, los jóvenes produjeron el periódico Riel que aún hoy se publica de
manera independiente, haciendo de él un vehículo que les ha servido para difundir
realidades que otros medios no permiten ver. También lograron compartir con las personas
que no tienen acceso a otros medios, las muestras culturales y realidades de otras zonas de
Bogotá (Página de la revista Fahrenheit 451).
Con el proyecto, desde la Fundación Fahrenheit 451, tratamos de, en el ámbito
local, desde el sector de la literatura, aportar a la formación, circulación y apropiación de la
cultura de la localidad. De manera directa, 20 jóvenes fueron capacitados en el manejo
editorial, de diagramación y redacción de un medio cultural impreso; y de manera indirecta,
la localidad, sobre todo los menos favorecidos, recibieron y se informaron de distintas
manifestaciones culturales, con la lectura del periódico y con los distintos eventos gratuitos
fomentados por el proyecto.
Sin embargo, dadas algunas deficiencias en el proceso de capacitación y manejo del
proyecto, no conseguimos capacitar correctamente a los jóvenes en el aspecto de
consecución de recursos, para que el periódico se volviese autosostenible. Por ello, al año
siguiente, en 2009, siguiendo parámetros muy similares, pero buscando aún mayor
3 Éste es un espacio manejado por Biblored, una organización que, desde las 20 principales bibliotecas públicas de Bogotá, busca: “Trabajar por el desarrollo social y cultural de Bogotá, fomentar la lectura y la escritura y garantizar el acceso a la información, al conocimiento, al arte y a la recreación, como elementos esenciales e insustituibles para el mejoramiento de la calidad de vida de sus habitantes” (Biblored).
cobertura, aún más beneficiarios directos e indirectos y consolidar el medio, recurrimos por
segunda oportunidad al programa de Apoyos Concertados.
Si bien el proyecto para ese año era en gran medida
similar, hubo algunas diferencias importantes (Informe inicial
de gestión 2009 7, 8). Una de las principales diferencias
radica en la búsqueda de jóvenes que se incorporaran al grupo,
a la generación 1 de Riel. Para esta generación 2, buscamos
principalmente jóvenes de escasos recursos, pero abrimos un
espacio para jóvenes de otros sectores socioeconómicos, con
el fin de dar un perfil más diverso e incluyente al periódico.
Además, como se había trabajado fuertemente el componente
de capacitación en literatura, esta segunda generación obtuvo
capacitaciones más enfocadas en el aspecto organizacional y de consecución de recursos.
Producto, en parte de lo último, el equipo de Riel, con el acompañamiento de la
Fundación, consiguió ganarse una convocatoria de la Fundación Colombia útil, que, hoy
día, significa un triunfo organizacional y la consolidación como grupo. Asimismo, desde el
comienzo, hemos apoyado y acompañado constante e incondicionalmente al equipo de
Riel, en sus dos generaciones y 6 publicaciones realizadas hasta la fecha. Dicho respaldo ha
permitido la continuidad del trabajo en medio de la diversificación y los inconvenientes
propios de todo medio independiente que recién comienza.
Otra diferencia significativa parte de la alianza que estableció la Fundación
Fahrenheit 451 con la organización Poesía sin fronteras. Si bien ambos proyectos
implicaban la realización de distintos eventos culturales gratuitos en lugares de la
comunidad (sacando las manifestaciones de sus centros habituales), en 2009, con la
colaboración de esta organización pudimos llevar a la localidad, para personas de escasos
recursos, poesía, obras y manifestaciones de carácter internacional. Con ello, no sólo se
consiguió dar visibilidad local a expresiones culturales a veces olvidadas, sino que también
se las hizo partícipe de espacios y talentos internacionales.
Es decir, con el respaldo de Apoyos Concertados, en dos años, desde la Fundación
hemos conseguido descentralizar un poco el arte en Bogotá llevándolo a jóvenes de escasos
recursos. También hemos logrado potenciar y visibilizar manifestaciones culturales de
grupos marginados; a la vez que se ha puesto en contacto a dichos grupos con espacios de
mayor amplitud y envergadura con alcances distritales, nacionales e internacionales.
Además, hemos alcanzado a crear, mantener y posicionar, a nivel local, el periódico Riel,
manejado principalmente por jóvenes de escasos recursos que ponen en él sus intereses,
preocupaciones y realidades.
Primer Festival Bogotano de Literatura, “Letras Capitales”
Como producto de los distintos eventos, y conscientes de la necesidad de
descentralizar tanto como se pueda las manifestaciones artísticas y culturales, la Fundación,
apelando a Apoyos Concertados, de nuevo, ha creado el I Festival Bogotano de
Literatura, “Letras Capitales”. Dicho espacio no sólo servirá para continuar
fortaleciendo la interacción del ámbito cultural general con las manifestaciones locales,
sino que también nos servirá para rescatar el talento oculto y permitir que éste sea
incrustado en el patrimonio cultural de la ciudad, de la nación.
El principal objetivo es crear, en Bogotá, el primer espacio totalmente gratuito que
sirva de lugar de interacción y compartir de la literatura y la cultura fuera de los centros ya
reconocidos. Un ejemplo de espacios que apuntan a compartir en esos ámbitos son el
mundialmente conocido Hay Festival (Portal de internet de Hay festival) y el Festival
Malpensante (elmalpensante.com), que sirven como espacios de difusión cultural, pero, en
tanto pertenecen a ciertos sectores hegemónicos, los costos de entradas y asistencia impiden
la participación del común de la población. Además, los espacios que tienen para compartir
con sectores menos favorecidos resultan ser un pequeño brochazo acompañado más por la
publicidad política y los medios de comunicación que por un trabajo real.
Por otro lado, se pueden hallar espacios como el Festival de Poesía de Bogotá que,
aunque es gratuito, no logra convocar, pues se hace horarios de trabajo y en centros
culturales ajenos a las necesidades y posibilidades de la mayoría de la población (Poesía
Bogotá). Este tipo de iniciativas fallan por cuanto no se descentran de los espacios ni están
conscientes de las posibilidades de la población general, aunque busquen ser inclusivas.
Ante ello, con el festival intentaremos replicar los buenos resultados de los eventos
realizados en 2008 y 2009, llevando la literatura, el arte y la cultura, a las comunidades, a
sus espacios y en sus condiciones. Buscaremos, por medio de talleres, seminarios,
conversatorios, lecturas de cuento y poesía y charlas (todos gratuitos en espacios públicos y
en momentos en los que sí pueda asistir el grueso de la población), sacar la literatura de las
instituciones, lugares y espacios de sectores dominantes cultural y/o económicamente.
Con el fin de conseguir lo anterior, tomaremos prestadas las instalaciones de las 20
bibliotecas públicas que hacen parte de Biblored, para ir allí a los lugares a los que
recurren las distintas poblaciones bogotanas. Además, trabajando en llave con la Red
Capital de Bibliotecas Públicas (Biblored), buscaremos fortalecer las manifestaciones,
talentos, campañas y resultados que se dan en sus espacios en la promoción de la literatura,
la lectura y la escritura.
Biblored cuenta con 20 bibliotecas públicas con distintos programas de promoción
de lectura con todo tipo de público, talleres de acercamiento a los libros e incentivo al
estudio (principalmente con niños y jóvenes). Sus bibliotecas se encuentran divididas entre
cuatro mayores, seis locales y diez barriales; las primeras son grandes espacios
ampliamente dotados y que logran acoger y responder a las necesidades de grandes grupos
poblacionales.
Las Locales, con un tamaño menor, consiguen agrupar y responder a las
necesidades de las distintas localidades en que se encuentran, haciendo énfasis en personas
de escasos recursos. La mayoría de sus programas están enfocados en niños y jóvenes. Y,
por último, las barriales son espacios propios de cada comunidad, lugares en que sus
distintos barrios acogen y responden a sus intereses propios en un ámbito más íntimo
(Biblored).
Desde estos espacios, buscaremos generar eventos que resulten en la promoción de
la literatura y el incentivo de la cultura de las comunidades que acuden a las bibliotecas.
Por ejemplo, en las bibliotecas mayores, que cuentan con auditorios más amplios y un
número de visitantes más grande, realizaremos lecturas y acercamientos con artistas
internacionales o nacionales de gran reconocimiento; mientras que en las diez barriales,
trataremos de generar charlas, talleres y momentos de compartir en torno a la importancia
de la lectura en familia y la necesidad de vincular las bibliotecas en las prácticas diarias,
desde un trabajo con las familias y los jóvenes (Primer informe de gestión 2010 11-14).
Además se buscará que en los distintos eventos no sólo participen artistas
reconocidos o especialistas en los diversos temas. Desde las personas que participan en los
programas de Biblored, se incluirán los grupos de cada espacio, localidad o barrio. No sólo
se verá, en el atril o en escena, ante todos, a personas de renombre, sino también a
exponentes del patrimonio cultural local, del talento desconocido que algunos sectores han
querido hacer a un lado u olvidar. De esta forma, el festival trabajará en llave con los
promotores de lectura, los talleres, los asistentes, los talentos y los jóvenes que se apropian
constantemente de las bibliotecas (12).
También es esencial señalar que los eventos del festival se extenderán durante 2
meses y se realizarán los sábados en las primeras horas de la tarde. Esto último se ha
dispuesto así para poder acoger al grueso de la población que trabaja entre semana y sólo
dispone de parte de los sábados y domingos para otras actividades. También a que,
buscando apoyar y fomentar los logros y talentos que hay en los programas de Biblored,
estos horarios riñen muy poco con los trabajos que se adelantan constantemente en las
bibliotecas.
Por último, y ya para terminar, es importante señalar que todo este proyecto no sólo
potencia y continúa en la línea de descentralizar la cultura y fomentar el talento que se
esconde en las calles de Bogotá, sino que también busca hacer de este talento parte del
patrimonio de la ciudad. Este proyecto, junto con los otros proyectos aceptados para recibir
el apoyo del Distrito, logrará hacerse realidad pues se inscribió en una de las tres líneas que
dio la Alcaldía Mayor de Bogotá para 2010: una apunta a la celebración del bicentenario de
independencia; otra, al fomento de la cultura ciudadana; y, la tercera, al reconocimiento del
patrimonio de la ciudad (Documento de información del Programa Distrital de Estímulos
2010 11-14).
La Fundación optó por esta última, haciendo del festival un intento de aportar al
patrimonio de la ciudad un evento que sea incluyente y salga de esos centros culturales.
También esperamos que con éste se cree un espacio idóneo para resalar el patrimonio de la
ciudad que se mueve por sus calles, lejos de los centros económicos y las clases altas.
Conclusiones
Con el trabajo de la fundación y teniendo siempre presente la necesidad de
descentralizar el arte (un objetivo común entre la Fundación y el gobierno distrital), de
sacarlo de las instituciones y los lugares de las clases altas o los sectores dominantes
económicamente, se puede y se logra hacer del arte algo incluyente. Con este objetivo en
mente, se pueden generar espacios que hagan de la voz de los menos favorecidos, los
olvidados y los jóvenes, canales de expresión y compartir.
En esta misma medida, se pueden crear proyectos replicables como el periódico y el
festival, que abandonan los centros y se dispersan entre las comunidades, sus lugares,
tiempos e intereses, dándoles un canal para mostrar y apropiarse de su patrimonio. Todo
ello no sólo consigue ser una gran oportunidad para las comunidades que se ven
beneficiadas directamente, sino para la ciudad, la nación, para la generalidad de la
población, por cuanto puede ver enriquecido su patrimonio cultural inmaterial con aquel
que se ha movido lejos del poder económico.
Referencia Bibliográfíca:
Biblored. Red Capital de Bibliotecas Públicas. Tomado de: <http://www.biblored.org.co/>.
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Fundación Fahrenheit 451. Informe final de gestión 2008.Fundación Fahrenheit 451.
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http://www.bogota.gov.co/portel/libreria/php/x_frame_detalle.php?id=40890
Bogotá Poesía. Tomado de: < http://www.poesiabogota.org/>. 6 junio 2010. Digital.
Página Revista Fahrenheit 451. Fundación Fahrenheit 451. Tomado de:
<http://www.revistafahrenheit451.com>. 6 junio 2010. Digital.
Riel. Fundación Fahrenheit 451. Diciembre-Enero de 2008-2009.Bogotá, Colombia.
Impreso.
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