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FACULTAD LATINOAMERICANA DE CIENCIAS SOCIALES FLACSO
Evaluación de sostenibilidad. Estudio de caso en una UBPC ganadera
Autora: Lic. Taymer Miranda Tortoló
Tutora: Dra. Hilda Machado Martínez
Cotutora: M.Sc. Aida I. Cruz Martínez
Tesis en opción al Título de Master en Gestión y Desarrollo de Cooperativas
2006
DEDICATORIA
A mi madre la de siempre, la más consagrada, la guía y el ejemplo
A mi tío que de estar hubiese estado bien contento. A Noemy por estar
A mis hijas, mi esposo, a mi otro no pariente.
A todos los que quiero y saben que para mí, esto era algo importante
AGRADECIMIENTOS
A la Dra. Machado, por su ayuda incondicional, su entrega y compromiso para con
nuestra formación.
A mi madre y esposo por apoyarme y ayudarme con mis divinos tesoros (mis hijas)
para que esto fuera finalmente lo que hoy es.
A Suset, Arístides, Duke, Maybe por soportar mis arrebatos y ayudarme hasta el
final.
A Miriam, Landin, Caballito, Felo, a Frank y su esposa y demás trabajadores de la
UBPC sin el apoyo de los cuales, este trabajo no hubiese sido posible
A Yusi, Tania, Onel y Javier por estar en todo momento.
A Isa, por su disposición y amistad.
A Alicia y a Nayda por su exquisitez.
A Hilda Wencomo y a Juan. Carlos, por su apoyo en ratos difíciles.
Al Dr. Rey Machado por sus oportunas consultas.
A todos y cada uno de los que en algún momento estuvieron a mi lado.
A todos MUCHAS GRACIAS
SÍNTESIS
Con el objetivo de evaluar la sostenibilidad de una UBPC, perteneciente al Municipio
Martí, Provincia de Matanzas, Cuba, se realizó este estudio. Para ello, se analizó la
situación de la entidad productiva (UBPC) y su contribución al desarrollo dentro del
contexto donde está ubicada. La recolección de la información se realizó a través
talleres (5): dos con pobladores de la comunidad y otros tres con trabajadores de la
entidad productiva ganadera, los cuales en algunos casos coincidían por su doble
condición. Además, se utilizó la metodología MARPS (Mapeo Analítico, Reflexivo y
Participativo de la Sostenibilidad) para evaluar al ecosistema, tomando en
consideración dos dimensiones: la socioeconómica y la ambiental, las que se
dividieron en orden descendente en aspectos, variables e indicadores, seleccionados
de conjunto con el grupo facilitador, los trabajadores y los pobladores. Los datos
procesados a través de todo el estudio demostraron que no se ha sido lo
suficientemente efectivo en cuanto a la implementación de acciones que propician el
desarrollo rural. La sostenibilidad se mantiene en un nivel intermedio, con
evaluaciones, para el bienestar del ecosistema, de 46 y 49 en los años 2000 y 2005,
respectivamente. Con relación al bienestar humano este mostró valores de 60 en
cada año evaluado, por lo que se concluyó que los niveles de sostenibilidad se
mantuvieron prácticamente invariable entre los años 2000 y 2005, aunque algunos
indicadores mejoraron sustantivamente, tales como: el suministro de medicamentos,
la educación y la vivienda; y otros como la atención primaria de la salud, los aspectos
económico financieros y la biodiversidad, empeoraron, por lo cual los valores de
sostenibilidad se mantuvieron en niveles intermedios.
ÍNDICE
INTRODUCCIÓN .........................................................................................................1
CAPÍTULO 1. REVISIÓN BIBLIOGRÁFICA.................................................................7
1.1 Desarrollo sostenible ..........................................................................................7
1.2 El Cooperativismo y el desarrollo agrario sostenible ..........................................9
1.3 Surgimiento de las cooperativas.......................................................................10
1.4 Desarrollo económico agrario. Su sostenibilidad en Cuba ..............................13
1.5 La tercera Ley de Reforma Agraria. Las UBPC................................................22
1.6 El enfoque de sistema ......................................................................................25
1.7 Metodologías participativas ..............................................................................26
1.8 UBPC, Comunidad y desarrollo sostenible.......................................................27
CAPÍTULO 2. METODOLOGÍA DE TRABAJO ..........................................................31
2.1 Descripción del objeto de estudio.....................................................................31
2.2 Métodos participativos de trabajo en grupo .....................................................34
2.3 Mapeo Analítico, Reflexivo y Participativo de la Sostenibilidad (MARPS)........36
2.4 Otros métodos utilizados ..................................................................................39
CAPÍTULO 3. RESULTADOS Y DISCUSIÓN............................................................42
3.1 UBPC. Aspectos económico-productivos .........................................................42
3.2 Aspectos ambientales. Cambios en el ecosistema...........................................48
3.3 Comunidad. Aspectos socioeconómicos ..........................................................55
3.4 Indicadores de sostenibilidad ...........................................................................60
3.4.1 Dimensión socioeconómica .......................................................................60
3.4.2 Dimensión ambiental..................................................................................65
CONCLUSIONES ......................................................................................................69
RECOMENDACIONES ..............................................................................................70
REFERENCIAS BIBLIOGRÁFICAS...........................................................................72
ANEXOS ..................................................................................................................78
ÍNDICE DE TABLAS
Tabla 1. Estructura rural antes de la primera Ley de Reforma Agraria. .....................15
Tabla 2. Estructura agraria después de la Primera Ley de Reforma Agraria. ............15
Tabla 3. Evolución de las CPA...................................................................................17
Tabla 4. Insumos recibidos por la ganadería. ............................................................19
Tabla 5. Diferencias entre tipos cooperativos de producción (CPA y UBPC) ............23
Tabla 6. Número de entidades existentes. Primer semestre 2005.............................24
Tabla 7. Uso y tenencia de la tierra............................................................................32
Tabla 8. Composición de la masa. .............................................................................42
Tabla 9. Balance de superficie. ..................................................................................43
Tabla 10. Cambios en el área de los componentes del ecosistema (%)....................52
Tabla 11. Cambios en la disponibilidad de los bienes y servicios del ecosistema
(Escala de 0 a 10, donde 0 es pésimo y 10 es máximo, estimado por
integrantes de la comunidad)....................................................................54
Tabla 12. Fuentes de alimento por períodos..............................................................56
Tabla 13. Procedencia de alimentos (%). ..................................................................56
Tabla 14. Necesidades, en gastos de dinero, en la comunidad. ................................57
Tabla 15. Facilidad de acceso de las familias a los ingresos.....................................57
Tabla 16. Nivel de vida de las familias de la Comunidad según sus criterios. ...........58
Tabla 17. Proporción de familias con acceso a los servicios básicos. .......................59
Tabla 18. Relación Comunidad-Entidad (Escala de 0 a 10, donde 0 es pésimo, 10 es
máximo, estimado por integrantes de la comunidad). 59
Tabla 19. Dinámica de los aspectos que resumen la evaluación de la dimensión
socioeconómica. .......................................................................................61
Tabla 20. Dinámica de los aspectos que resumen la evaluación de la dimensión
ambiental. .................................................................................................65
7
ÍNDICE DE FIGURAS
Figura 1. Dinámica de las formas de organización cooperativas ...................................17
Figura 2. Variación anual del PIB de Cuba 1990-1996. .................................................21
Figura 3. Uso y tenencia de la tierra por forma de organización .productiva. ................33
Figura 4. Árbol de problema construido por trabajadores y directivos. ..........................44
Figura 5. Nivel de percepción de los criterios.................................................................46
Figura 6. Priorización de los criterios .............................................................................47
Figura 7. Mapa del pasado (A) y presente (B) de la UBPC, construido por los
vecinos..........................................................................................................49
Figura 8. Historia de la comunidad construida a partir de lo contado por los vecinos....50
Figura 9 (C y D). Terrenos en monocultivo e invadidos de marabú (Dichrostachys
cinerea).........................................................................................................51
Figura 10. Deforestación en las márgenes de los ríos (este elemento propicia los
procesos de sedimentación, que determinan la desaparición o
intermitencia de los cauces naturales de agua)............................................53
Figura 11. Diagrama de Venn de la UBPC. ...................................................................60
Figura 12. Evaluación de la variable cobertura y calidad de la asistencia primaria de
salud. ............................................................................................................62
Figura 13. Indicadores económico-financieros..............................................................64
Figura 14. Evaluación de los componentes del ecosistema...........................................65
Figura 15. Barómetro de la sostenibilidad. .....................................................................66
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1
INTRODUCCIÓN
Muchas naciones, organizaciones, grupos sociales e individuos están buscando
elementos de referencia que faciliten la construcción de su Sostenibilidad, ya que la
humanidad experimenta un cambio de época que produce transformaciones veloces,
cualitativas y simultáneas en las relaciones de producción, relaciones de poder,
experiencia humana y cultura, lo cual genera turbulencias, fragmentación,
inestabilidad, incertidumbre, desorientación, discontinuidad, inseguridad, perplejidad
y vulnerabilidad generalizada (De Souza, 2001).
“Los cambios globales en marcha, no pertenecen a la época del
industrialismo sino que se está forjando una nueva época histórica, donde
cambios cualitativos y simultáneos en las relaciones de producción, las
relaciones de poder, experiencia humana y cultura, están transformando
el sistema de ideas, el sistema de técnicas y la institucionalidad de la
época anterior. Un nuevo mundo, pero no necesariamente mejor, está
emergiendo de los efectos combinados de tres revoluciones: tecnológica,
económica y sociocultural”. (De Souza, 2002).
Desde finales de la década de los ochenta, la humanidad experimenta la ruptura de
numerosos modelos, enfoques y paradigmas que hasta entonces habían guiado los
procesos de desarrollo, los que abarcaban las dimensiones social, económica,
ambiental, tecnológica y política. La globalización y la revolución de la informática y
las telecomunicaciones, entre otras, han provocado incertidumbre y complejidad para
analizar los fenómenos y procesos que inciden en el desarrollo. Es por ello que,
durante los últimos años del siglo XX, comenzó a gestarse una tendencia hacia el
análisis de lo local, perspectiva que surge como consecuencia de la inviabilidad de
las diferentes estrategias de desarrollo efectuadas y como alternativa para lograr una
mayor efectividad y la sostenibilidad en las transformaciones que se implementan.
Lo anteriormente expuesto exige el uso de nuevas fórmulas y enfoques para el
análisis de los problemas, así como para la planificación de estrategias,
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2
considerando, además, los límites de los recursos naturales. De ahí que la
elaboración de cualquier estrategia de desarrollo, incluso de orden nacional, requiere
conocer a nivel comunitario las características del contexto, sus necesidades,
preferencias, potencialidades, los recursos materiales disponibles y la situación de
sus recursos naturales. Evidentemente ello implicaría el uso del espacio físico, la
gestión económica y la valorización de la iniciativa comunitaria como elementos
sustantivos del desarrollo a nivel local.
Al considerar la complejidad de la situación, uno de los desafíos más dramáticos que
debe enfrentar la humanidad es la concentración de más del 50% de la población en
zonas urbanas con la consiguiente despoblación de las rurales. Cuba, en 1959,
contaba con algo más del 50% de la población en zonas rurales y actualmente
cuenta con menos de la mitad, lo cual es preocupante si se tiene en cuenta que la
despoblación de los campos atenta contra la producción de alimentos, actividad vital
para la seguridad alimentaria y la soberanía nacional. A esto se suma la necesidad
de reorganizar la industria azucarera y redimensionar las empresas, actividades que
han provocado afectaciones a las fuentes de empleo de los municipios rurales, lo
cual propicia el éxodo hacia polos más atractivos y crea vulnerabilidad en la
población local.
Las entidades cooperativas de producción agropecuaria, poseedoras de gran parte
de la tierra cultivable y enclavadas en agroecosistemas donde conviven
comunidades rurales beneficiarias de los empleos que estas proveen, deben dirigir
sus acciones a lograr el aumento de la productividad de las áreas agrícolas y sus
producciones, así como el incremento del nivel de ingresos de los productores y la
satisfacción de sus necesidades de alimentación, de conjunto con la población
humana y animal de su entorno. Esto no consiste solamente en obtener buenos
indicadores productivos sin degradar el medio ambiente, sino en el aumento de las
oportunidades de los pobladores agrícolas para acceder a los productos del
desarrollo, sobre la base de un manejo sostenible de los recursos naturales que los
hagan perdurables en el tiempo (Verdaguer, 2000).
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3
La sostenibilidad es un concepto complejo y abarcador, que integra las dimensiones
agroecológica, económica y social del sistema productivo. El desarrollo rural en Cuba
fue un proceso que tuvo sus inicios desde el mismo triunfo revolucionario, cuyos
objetivos privilegiaban el desarrollo de la persona, presentando una etapa intensiva
que se inició en los años sesenta con la Reforma Agraria y la reorganización del
proceso productivo, acompañados de programas de educación, salud e
infraestructura que modificaron la vida en el campo en las diferentes dimensiones del
desarrollo, la nacionalización de la tierra sentó las bases para el desarrollo de las
fuerzas productivas de la agricultura.
Sin embargo, en esos años también tomaba auge en el mundo la Revolución Verde,
lo cual hizo inevitable que nuestra agricultura se convirtiera en un sector cada vez
más dependiente, consumidor de insumos que en la mayoría de los casos no
producía.
La modernización agrícola tuvo como objetivos directos el incremento de la
producción y de los rendimientos agrícolas y la humanización del trabajo, pero el
modelo utilizado provocó efectos negativos en cuanto a la eficiencia económica y
productiva, que fueron agravados por el colapso del campo socialista de donde
obtenía los insumos.
La nación cubana, eminentemente agrícola, con cultura de monocultivo,
agroexportadora y acomodada a las bondades del CAME, no tuvo otra opción que
buscar nuevas vías o modos de subsistencia. A finales de 1993 se hace
imprescindible que emergiesen nuevas reformas, especialmente en el modelo
agrario. La diversificación de las formas de tenencia y explotación del suelo y la
formación de un nuevo tipo de economía mixta agraria (colectivización de las tierras
estatales e incremento de las tierras en explotación individual) son los rasgos más
sustantivos de la reforma en el ámbito agropecuario (Figueroa, 1998).
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4
Comienzan a sucederse en la economía cubana todos estos cambios, en especial la
formación de las Unidades Básicas de Producción Cooperativa (UBPC), como una
necesidad para que la agricultura quedase más adaptada a las condiciones de cada
entidad y localidad. Pero las UBPC emergen en un contexto bien complejo, en una
década sumida en una profunda crisis recesiva, que llega a su punto más bajo en los
años 1993 y 1994, “cuando se hizo evidente el desabastecimiento de alimentos, las
serias limitaciones de combustible, de insumos de todo tipo para la agricultura y la
escasez e inestabilidad crónica de fuerza de trabajo” (González, 1999), a lo cual se
suma el avanzado deterioro ambiental de nuestros ecosistemas agropecuarios por el
uso indiscriminado de tecnologías inapropiadas altamente destructivas.
Era todo un reto para las nuevas entidades. Se requerían cambios de actitudes y
hábitos que no habían sido formados, se necesitaba un proceso de aprendizaje, una
construcción de nuevas capacidades y nuevas percepciones. Representaban
cambios que solo se logran como producto de un proceso lógico y gradual de tránsito
de un estado a otro, de recibir orientaciones, a tomar decisiones;.de tener una actitud
receptiva y demandar a un estado sobreprotector, a asumir mayores
responsabilidades y decidir conjuntamente las prioridades de inversiones (Díaz,
1997).
Desde su creación las UBPC han sido objeto de numerosos análisis; estas enfrentan
una serie de dificultades endógenas y exógenas, que no posibilitan explotar a
plenitud sus capacidades productivas y alcanzar resultados satisfactorios.1
Las UBPC no solo carecen de la capacidad de explotar a plenitud sus capacidades
productivas, sino que no cumplen aún las expectativas para con los pobladores de
las comunidades que se encuentran en su territorio, ya que mantienen la cultura de
monocultivo y no se sienten comprometidas con su entorno natural.
1(Nova, 2005). “Es conocido que la creación de las UBPC fue un proceso abrupto, que heredan una
situación económica agrícola extremadamente difícil, dentro del contexto de crisis económica del país y con una importante deuda económica a partir de la adquisición de los medios de producción, que deberían pagar en un período determinado”
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5
Es por ello que se realiza el estudio en una UBPC y una comunidad rural, asociadas
en un ecosistema donde el uso del suelo es fundamentalmente ganadero.
Problema: La entidad UBPC se encuentra en bajos niveles de sostenibilidad debido
a que el manejo inadecuado de su entorno natural y su situación económica y
productiva no les permiten satisfacer las necesidades de sus trabajadores y su
población circundante en cuanto a alimentos, ingresos, y acceso a bienes y servicios
ambientales.
Hipótesis: Si la UBPC no mejora el manejo de su entorno natural, ni su situación
económico productiva de manera que satisfaga las necesidades de sus trabajadores
y de su población circundante, entonces los niveles de sostenibilidad serán
inadecuados.
Objetivo: Evaluar la dinámica de los niveles de sostenibilidad socioeconómica y
ambiental de la UBPC - Comunidad en un período de cinco años.
6
Capítulo 1. Revisión bibliográfica
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7
“El mundo se encuentra en una crisis de insostenibilidad.
Esta se manifiesta tanto en la imposibilidad de lograr el bienestar
para todas las personas, como en la degradación y la destrucción
de los ecosistemas. La conducta humana es la única causa de esta crisis
y también su única fuente de solución”. (Prescott-Allen, 1997)
CAPÍTULO 1. REVISIÓN BIBLIOGRÁFICA
1.1 Desarrollo sostenible
El concepto de desarrollo sostenible concibe al desarrollo como un proceso
armónico, donde la explotación de los recursos, la dirección de las inversiones, la
orientación del cambio tecnológico y las transformaciones institucionales deben estar
a tono con las necesidades de las generaciones presentes y futuras. Así, se presenta
al desarrollo como un proceso que requiere un progreso global tanto en materia
económica y social, como en los órdenes ambiental y humano (Pichs, 2002), de
forma tal que se buscan tres objetivos: el crecimiento económico, la equidad (social,
económica y ambiental) y la sostenibilidad ambiental (Dourojeanni, 2000)
La concepción del mundo occidental, basada en el paradigma mecanicista y
racionalista, ha dejado a un lado al medio ambiente. La construcción de un nuevo
paradigma, el ambiental, exige de un cambio radical en el pensamiento y las
actitudes de los seres humanos. Esta misma mirada epistemológica, es necesario
realizarla al analizar los problemas de la interrelación del medio ambiente con los
procesos de desarrollo. El concepto de desarrollo se ha construido en el mundo
occidental, desde una visión de dominio sobre la naturaleza, usándola, más que
todo, como objeto a ser explotado sin límites. El paradigma ambiental exige ver al
desarrollo como algo intrínseco a la propia esencia del medio ambiente. Esa visión
conduce a actuar sobre cualquier esfera económica y social, desde una visión en que
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8
la naturaleza y el medio ambiente, se consideran como factores estratégicos del
desarrollo (Anon, 2005).
De Camino & Muller (1993) elabora un resumen a partir de conceptos de
sostenibilidad defendido por varios autores, en el que contempla las dimensiones
ecológica, económica y social. Considera que un ecosistema es sostenible
ecológicamente cuando, bajo uso, mantiene a través del tiempo las características
fundamentales en cuanto a componentes e interacciones en forma indefinida.
Sostenible económicamente, lo considera cuando este produzca una rentabilidad
razonable y estable a través del tiempo a quien lo maneje; y desde el punto de vista
social, explica que un sistema será sostenible cuando el manejo y la organización de
este sean compatibles con los valores culturales y éticos del grupo involucrado.
Para De Souza (2001), la sostenibilidad implica ir más allá de la racionalidad
instrumental y económica para subordinarlas a la racionalidad comunicativa. Bajo la
racionalidad instrumental, los problemas complejos se reducen a una dimensión
técnica de manera que las soluciones técnica eficientes los pueden resolver. Bajo la
racionalidad económica, los problemas complejos se reducen a requerimientos de
abastecimiento-demanda, de manera que las soluciones relacionadas con el
mercado competitivo los puedan resolver. Al asumir que el mundo como una red de
relaciones entre todas las formas de vida, la racionalidad comunicativa traduce los
problemas complejos en problemas antropogénicos que emergen de interacción
humana. De ello se infiere que si la sostenibilidad es una propiedad emergente de la
interacción humana, las soluciones sostenibles surgirán únicamente a través del
aprendizaje social, a través de un proceso interactivo por medio del cual los actores
claves de dicho proceso de desarrollo se comprometen para llevar adelante acciones
concertadas.
De esta forma, la sostenibilidad se configura como el marco necesario para el
desarrollo humano y constituye un paso adelante en el enfoque del medio ambiente y
su problemática, incorporando a la visión tradicional del medio natural las variables
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del medio humano y haciendo especial hincapié en su organización institucional,
económica y social (Casares y Arca, 2002). El desarrollo sostenible es un proceso de
búsqueda de equilibrio entre el de desarrollo social, ecológico y económico.
1.2 El Cooperativismo y el desarrollo agrario sostenible
Desde el mismo surgimiento de la humanidad, los problemas económicos han sido
disímiles, tanto como el tratamiento que se le ha dado a cada uno de ellos. Los
referidos a la producción, distribución y consumo de los bienes han sido un problema
latente. “Desde las primeras etapas de la civilización los animales por intuición y los
seres humanos por socialización han necesitado a sus semejantes para enfrentar las
vicisitudes impuestas por el contexto de sobrevivencia” (Botello, 2005).2 3
El cooperativismo existe en todos y cada una de los regímenes sociales, de lo cual
se entiende que sus funciones económicas y sociales dependen del sistema social y
las relaciones productivas en las que aparezca4. Es un evento singular que trata de
integrar la gestión de organizaciones a nivel local y su responsabilidad en el
mejoramiento de la calidad de vida de sus asociados y del progreso socioeconómico
sostenible.
El Diccionario Enciclopédico Espasa (1984) define a las cooperativas como “un
fenómeno que favorece la cooperación en el orden económico y social, que surge
como reacción de defensa contra el liberalismo económico, que pone en situación
difícil a los trabajadores”. Desde el punto de vista económico, expone, “son
asociaciones basadas en los principios de la reciprocidad o el mutualismo, para
2 (Anon, 2000a). “El hombre, desde muy temprano, fue capaz de reconocer la posibilidad de asociarse
con el fin de obtener los bienes y servicios indispensables para su subsistencia” 3 “A través del transcurrir histórico en diversos contextos de los albores de la civilización se
encuentran variadas manifestaciones organizativas de tipo grupal en la que los individuos, utilizando como medio la ayuda mutua, buscaban fortalecer sus intereses comunes. La necesidad de brindar protección a sus intereses hizo posible la constitución de asociaciones” (Botello, 2005)
4 El Capital. Carlos Marx, 1876
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10
fomentar los intereses económicos de sus miembros, que contribuyen a la empresa
común con parte de su actividad económica individual y tiene en ella igual
responsabilidad y derechos, caracterizándose por no perseguir un fin lucrativo, sino
el beneficio para sus socios”.
1.3 Surgimiento de las cooperativas
La revolución industrial (1750-1850) ocurrida en Europa, fue la cuna del
cooperativismo. Roberto Owen (1771-1858) y Carlos Fourier (1772-1837) fueron
considerados sus más notables figuras.
Robert Owen, según Botello (2005), consideraba que el uso de la tecnología en
forma cada vez mayor en la industria, necesariamente llevaría a una mayor
producción en todas sus ramas, en la que se incluía la agricultura, por lo que la
producción agrícola basada en el trabajo del hombre y con explotación intensiva de
los suelos, podría verse aumentada significativamente. Observaba que el sistema de
competencia era el responsable de la miseria humana y del predominio de una
conducta antisocial, tanto por parte de los ricos como de los pobres, y que una
solución a los problemas sociales de entonces podría darse a partir de la creación de
comunidades autogestionarias sobre la base de la cooperación, las cuales,
combinando las ventajas del campo y la ciudad, también cooperarían entre sí
Las ideas de Fourier eran similares, buscó la solución de los problemas sociales a
través de la asociación de las personas en colonias autónomas o comunidades
agrícola-industriales, organizando en común la producción y el consumo (Botello,
2005).
La situación social que se dio en la Revolución Industrial, el desorden, el
individualismo, la diferenciación y heterogeneidad en la clase trabajadora, fue una
sociedad donde las contradicciones socioeconómicas heredadas del feudalismo se
hicieron evidentes en la conformación de lo que Marx denominó clases sociales,
cuya sola presencia da origen a la necesidad de solidarizarse en la solución de
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problemas comunes, y por tanto, en la creación de propuestas ideológicas que
concretaran tales objetivos.
Los trabajadores encontraron en la idea de unirse en forma de cooperativas una
solución a su crítica situación, la idea tomó fuerza rápidamente y encontró
defensores por toda Europa. Se fundaron cooperativas de consumo en Gran Bretaña
y otros países del continente europeo, como Francia, Alemania e Italia.
En su desarrollo las cooperativas establecieron diversas formas de integración y fue
así como en 1895 se organizó en Europa la Alianza Cooperativa Internacional (ACI)
que se ha encargado de reunir a todas las organizaciones de este tipo bajo un único
mando regido por principios, en los cuales se anuncia que las cooperativas son
organizaciones que reciben sus miembros sin distinción de raza, religión, género, etc.
Con la única condición que se acoja al reglamento aprobado por los miembros y que
estén dispuestos a cumplir con sus deberes y derechos como cooperativistas,
aportando y controlando de manera equitativa el capital en común.
Principios del Cooperativismo (Establecidos en el XXXI Congreso Manchester,
Inglaterra en 1995) (Botello, 2005):
1. Membresía abierta y voluntaria.
2. Control democrático de los miembros.
3. Participación económica de los miembros.
4. Autonomía e Independencia.
5. Educación, entrenamiento e información.
6. Cooperación entre cooperativas.
7. Compromiso con la comunidad.
Las cooperativas se clasifican como entidades autónomas que brindan capacitación
a sus miembros como una estrategia que les garantiza su propia supervivencia, en la
que el trabajo de manera conjunta con otras entidades y con la comunidad de su
entorno propicia un mejoramiento de la calidad de vida de sus miembros.
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12
Si específicamente hablamos de cooperativas agrícolas o de producción estaremos
entonces pensando en las asociaciones formadas para la protección y fomento de la
agricultura. “Las cooperativas de producción se basan en el trabajo colectivo para
organizar el proceso productivo y su objetivo se dirige a incrementar la producción y
por tanto la utilidad de la empresa en común, en la cual los socios aportan trabajo”
(Nahela y Ravenet 1989).
Al hablar de cooperativas sostenibles, inmediatamente se piensa en entidades en las
que sus acciones están dirigidas a lograr el aumento de la productividad de las áreas
agrícolas y, por tanto, de las producciones, así como al incremento del nivel de
ingresos de los productores agrícolas y la satisfacción de las necesidades de
alimentación de la población humana y animal de su entorno. No consiste solamente
en obtener buenos indicadores productivos sin degradar el medio ambiente en un
lugar en particular, sino en el aumento de las oportunidades de los pobladores
agrícolas para acceder a los productos del desarrollo, sobre la base de un manejo
sostenible de los recursos naturales que los hagan perdurables en el tiempo
(Verdaguer, 2000).
Las cooperativas en Cuba posrevolucionaria surgen bajo estos mismos principios.
Inicialmente fueron formas simples de cooperación, en las que los socios disfrutaban
de sus ventajas en la esfera del comercio y el crédito, las que dieron paso a formas
más complejas, como las que abarcan la esfera productiva (Donéstevez, Fajardo y
Figueras, 1999). Destinadas históricamente para mejorar la calidad de vida de los
pobladores del campo y diversificar las producciones del sector más importante de la
economía por decenas de años, comenzaron a desarrollarse cada una con sus
características y ubicadas en el contexto histórico en el que surgen, pero todas bajo
los intereses revolucionarios que las engendraron. Primero las Asociaciones de
Crédito Rural (ACR), después las Cooperativas de Créditos y Servicios (CCS) y las
de Producción Agropecuaria (CPA), y por último las Unidades Básicas de Producción
Cooperativa (UBPC).
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1.4 Desarrollo económico agrario. Su sostenibilidad en Cuba
La sostenibilidad es un concepto complejo y abarcador, que integra las dimensiones
agroecológica, económica y social del sistema productivo. El desarrollo rural en Cuba
fue un proceso que tuvo sus inicios desde el mismo triunfo revolucionario, cuyos
objetivos privilegiaban el desarrollo de la persona, presentando una etapa intensiva
que se inició en los años sesenta con la Reforma Agraria y la reorganización del
proceso productivo, acompañados de programas de educación, salud e
infraestructura que modificaron la vida en el campo en las diferentes dimensiones del
desarrollo, según lo describen Martín y Machado (2004):
Dimensión socio-cultural. En el ámbito rural cubano se obtuvieron cambios
espectaculares, en los últimos cuarenta años, en cuanto a la eliminación de la
pobreza extrema y el analfabetismo, el establecimiento de redes eléctricas, viales,
educacionales y de salud, y la urbanización del entorno rural (creación de poblados
con condiciones urbanas), que acercaron las condiciones de vida del campo a la
ciudad; lo cual, unido a la subvaloración de las formas de vida y trabajo campesinos
y a la creación de expectativas de vida superiores en otras ramas del desarrollo,
produjo un éxodo hacia centros urbanos que redujo la población del campo de 50 a
25% en ese mismo período.
Dimensión política. De acuerdo con las características de la sociedad socialista
cubana, la población rural se incorpora a la vida política del país, se crean
organizaciones de masas de la misma forma que en la ciudad, donde desempeñan
un papel fundamental la Federación de Mujeres Cubanas (FMC), que ayudó de
forma contundente a la incorporación de la mujer campesina a la vida política, social
y laboral, y la Asociación Nacional de Agricultores Pequeños (ANAP), que tuvo un
importante papel en la organización de los campesinos, entre otras. El Estado
mantiene una alta presencia en las zonas rurales mediante los gobiernos locales y
también a través de la creación de unidades productivas empresariales estatales,
que fueron predominantes hasta 1994, año en que se realiza una reorganización de
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la tierra. La política del Estado cubano respecto a las áreas rurales fue la
transformación hacia formas de vida dignas.
Dimensión económica. Como consecuencia de las medidas económicas aplicadas
por el Gobierno Revolucionario encaminadas al logro del desarrollo rural, hubo un
gran desarrollo de infraestructura física, carreteras, obras hidráulicas, la electricidad y
las comunicaciones, así como un desarrollo agrícola basado en altos insumos
técnicos y materiales, representativos de la Revolución Verde, que partió de la
Reforma Agraria desarrollada en los años 60’, donde las empresas estatales
gigantes representaron la principal fuente de desarrollo y empleo rural. Este proceso
de transformación económico, como todo proceso histórico, tuvo sus antecedentes.
Cuba era un país subdesarrollado de la América insular, exhibía en 1950 una
economía mayoritariamente basada en la producción agrícola de monocultivo.
Debido a la necesidad de diversificar las producciones del sector y de mejorar las
condiciones en el campo, se dan, en esta etapa, los primeros esfuerzos de formación
de cooperativas. Un buen intento lo constituyó la creación de las Asociación de
Crédito Rural (ACR) como parte de la división agrícola del Banco de Fomento
Agrícola e Industrial de Cuba (BANFAIC), que aunque llegaron hasta el número de
trece en todo el país, fracasaron (Donéstevez, Fajardo y Figueras, 1999), lo que
estuvo determinado fundamentalmente por causas objetivas entre las que estos
autores mencionan:
La insuficiencia de recursos materiales en manos del campesinado.
La forma de tenencia de la tierra era desproporcionada y con fuerte tendencia al
latifundio, por ejemplo, el 8% de los propietarios poseían el 70% de las tierras y
el 68% solo poseía el 7%.5 (tabla 1).
5 Informe Central al Primer Congreso del Partido Comunista de Cuba (PCC)
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15
Tabla 1. Estructura rural antes de la primera Ley de Reforma Agraria.
Tamaño de la fincas (caballería) No. de fincas
Superficie
(caballería) Hasta 5 28 735 46 843.75 De 5 a 10 4 929 36 114.38 De 10 a 20 3 274 47 802.33 De 20 a 30 1 549 38 606.17 Más de 30 3 597 427 597.89
Fuente: Citado por Nahela y Ravenet (1989) tomado de Censo Agrícola Nacional (1946)
“La situación del campo cubano era considerablemente complicada, influían factores
como la propiedad de grandes extensiones de tierras en manos de latifundistas, la
precariedad de las condiciones de vida y trabajo de los pobladores que ponían de
manifiesto el total deterioro de la calidad de vida en nuestros campos” (Regalado,
1979).
Con el triunfo revolucionario de 1959, se enuncian la primera y segunda Ley de
Reforma Agraria, que por cuestiones táctico-políticas proponen eliminar de forma
paulatina la propiedad de la gran burguesía nacional (Nahela y Ravenet, 1989) (tabla
2).
Tabla 2. Estructura agraria después de la Primera Ley de Reforma Agraria.
Tamaño de la fincas (caballería) No. de fincas
Superficie
(caballería) Hasta 5 154 703 174 971.35
De 5 a 10 6 062 45 270.00
De 10 a 20 3 105 45 477.76
De 20 a 30 1 456 37 810.95
Más de 30 592 28 125.97 Fuente: Citado por Nahela & Ravenet (1998) tomado de Censo Ganadero (1961)
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16
“Con la aplicación de aquellas dos leyes de Reforma Agraria, se distribuyeron 1,1
millones de hectáreas de tierras y el Estado pasó a ocupar 7,8 millones de ellas, lo
que representó aproximadamente más del 70% de la superficie total. De esta forma
quedó conformado el Sector Estatal en la agricultura cubana” (Nova, 2000).
Las condiciones objetivas habían cambiado, la nacionalización de la tierra sentó las
bases para el desarrollo de las fuerzas productivas de la agricultura. La situación en
los campos cubanos, para impulsar el surgimiento y desarrollo del cooperativismo, ya
estaban creadas, la mayor parte de la tierra estaba en manos del pueblo trabajador
(pequeños y medianos agricultores).
A partir de entonces emergen las Asociaciones campesinas, las Brigadas de ayuda
mutua y las Cooperativas de Créditos y Servicios (CCS), todas como formas
intermedias que darían paso a niveles superiores de organización productiva
(Valdés, 1997).
Las CCS son asociaciones voluntarias de agricultores pequeños que mantienen la
propiedad de sus respectivas fincas y otros medios de producción, poseen
personalidad jurídica propia y responsabilidad limitada a su patrimonio. Están
formadas por campesinos que deciden agruparse para acceder con mayor facilidad a
créditos, abastecerse de insumos y aprovechar en conjunto un grupo de bienes
colectivos
En el año 1977 se celebra el primer congreso de la Asociación Nacional de
Agricultores Pequeños (ANAP), en el que dando cumplimiento a los acuerdos
tomados en el I Congreso del PCC (1975), da inicio al proceso de cooperativización
del campo en Cuba. Este proceso tuvo entre sus bases, respetar la voluntariedad de
integración de la familia campesina. (Castro, 1975)
Fue un proceso aceptado de manera general, que en un tiempo aproximado de 10
años mostró cierta estabilidad, socializando en sus inicios, en lo fundamental, a la
mediana hacienda campesina (figura 1 y tabla 3).
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17
0
500
1000
1500
2000
2500
3000
3500
4000
1977
1978
1979
1980
1981
1982
1983
1984
1985
1986
CPACCSAsoc. Camp.
Figura 1. Dinámica de las formas de organización cooperativas. Tomado de Castro (1980).
Surgen a partir de la integración voluntaria de sus miembros y su patrimonio, se
forman con el aporte de las tierras o medios de producción. La tenencia y explotación
del suelo es colectiva y la forma de distribución y apropiación del excedente depende
del aporte del trabajo.
Tabla 3. Evolución de las CPA.
Año No. cooperativas Extensión tierra
(caballería) 1978 363 246
1979 654 1 000
1980 1 017 14 007 Construida a partir de datos del Informe Central II Congreso del PCC
Según lo argumenta Donéstevez, Fajardo & Figueras (1999), este proceso de
integración encontró sus mayores incentivos en:
1. La creciente escasez por envejecimiento y éxodo de fuerza de trabajo que hacía
muy difícil mantener la explotación en haciendas campesinas.
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18
2. Cada cooperativa tenía un fondo en efectivo destinado a la construcción y
electrificación de viviendas a sus miembros.
3. Los miembros gozaban de la posibilidad de acceder a una jubilación.
4. La economía socialista mostraba una gran superioridad.6
Sin embargo el modelo de desarrollo agrícola que se adoptó fue un modelo
reduccionista. El reduccionismo se caracteriza por dividir un fenómeno en sus partes
constitutivas, suponerlas independientes y considerar que la suma de estas puede
explicar el problema como un todo. De este modo los fenómenos se dividen para su
estudio en partes cada vez más pequeñas y cada una se asocia a una disciplina,
dando lugar a una especialización extrema, lo cual, aplicado en el desarrollo de la
agricultura no toma en cuenta las “interacciones de los medios de producción
empleados, el papel del productor en la toma de decisiones y la habilidad de este en
el manejo de la empresa” (Saravia, 1985). Esto significa priorizar los aspectos
técnico-productivos (insumos y tecnología), por sobre los aspectos socioeconómicos
de los procesos de producción.
En esos años también tomaba auge en el mundo la Revolución Verde, todo lo cual
hizo inevitable que nuestra agricultura se convirtiera en un sector cada vez más
dependiente, consumidor de insumos que, es válido señalar, no producía, y que, en
la mayoría de los casos, eran proveídos por la ex URSS con grandes facilidades para
el ingreso al país a través del Consejo de Ayuda Mutua Económica (CAME) (tabla 4).
6 Castro, 1980 “Durante los primeros tiempos se elevaron los rendimientos por área, que duplicaron y triplicaron las producciones de las parcelas individuales que las integraron, se introdujo la mecanización y la técnica”
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Tabla 4. Insumos recibidos por la ganadería.
Recursos (MT) Promedio 1986-1990 1991 2000
Piensos Industriales 547 231.4 48.5
Suplemento proteico 64.1 5.5 13.1
Urea alimenticia 76 19.3 14.1
Miel final 995 943.2 225.1
Bagacillo 578.7 424.3 -
Ensilaje 3 416.0 749.2 102.3
Heno 1 547.9 1 280.2 441.6
Fertilizantes nitrogenados 186.8 35.7 6.0
Fertilizantes balanceados 144 16.9 3.3
Combustible 135 90.0 70.9
Salvado de trigo 80 60.0 1.4 Fuente: Tomado de González, Fernández, Bu, Polanco, Aguilar,
Dresdner & Tansini (2004)
Las cooperativas fueron organizaciones por lo general exitosas, su expansión se
extendió por aproximadamente 10 años, momento a partir del cual se frena su
desarrollo como producto de factores externos, tales como el recrudecimiento
paulatino de la situación económica del país y el éxodo de la fuerza laboral del sector
a otros más atractivos que comienzan a desarrollarse en esa época (Industria)7, Por
otra parte, en lo interno se dan otros fenómenos como la escasez de la fuerza de
trabajo, el enfoque empresarial industrial adoptado, que implantó una jornada laboral
que nada tenía que ver con las jornadas laborales campesinas, la pérdida por
envejecimiento del socio aportador y con ella el sentido de pertenencia, la poca
7 Donestévez, Fajardo y Figueras (1999) “a partir de esta situación entre sectores socioeconómicos la economía estatal entra en estancamiento y como es lógico la economía individual mostraba niveles aceptables de producción, bien remunerados además, a partir de la alta demanda de productos alimenticios
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20
estabilidad de la fuerza y el sobredimensionamiento, entre otros Donéstevez, Fajardo
y Figueras (1999).
La modernización agrícola tuvo como objetivos directos el incremento de la
producción y de los rendimientos agrícolas y la humanización del trabajo, pero el
modelo utilizado provocó efectos negativos en cuanto a la eficiencia económica y
productiva, que fueron agravados por el colapso del campo socialista de donde
obtenía los insumos.
El nuevo escenario internacional que venía conformándose a fines de los años
ochenta, signados por los llamados procesos de reformas en los países del este
europeo, hizo eclosión en 1990 con el derrumbe sucesivo de los regímenes de tipo
socialista existentes en la región, y en particular con la desintegración de la Unión
Soviética, como Estado multinacional y gran potencia. Este derrumbe y la
desaparición de las alianzas políticas, económicas y militares que definían el llamado
campo socialista europeo, dieron lugar a un nuevo e inestable orden internacional,
basado en un mercado mundial dominado por relaciones capitalistas de producción,
en la concertación entre grandes potencias y en la hegemonía militar de Estados
Unidos. El impacto de este acontecimiento sobre la Revolución Cubana fue
particularmente grave (Valdés, 1997).
La nación cubana, eminentemente agrícola, con cultura de monocultivo,
agroexportadora y acomodada a las bondades del CAME, no tuvo otra opción que
buscar nuevas vías o modos de subsistencia. A finales de 1993 se hace
imprescindible que emergiesen nuevas reformas, especialmente en el modelo
agrario, aunque para ello rompiese con los modelos que habían servido de guía
durante más de treinta años.
La diversificación de las formas de tenencia y explotación del suelo y la formación de
un nuevo tipo de economía mixta agraria (colectivización de las tierras estatales e
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21
incremento de las tierras en explotación individual) son los rasgos más sustantivos
de la reforma en el ámbito agropecuario (Figueroa, 1998).
La gran dependencia que tiene Cuba de la agricultura, su importancia en el consumo,
en las exportaciones y en el desarrollo económico nacional, que estuvo muy
deprimido entre 1990 y 1995 (figura 2), son razones que justifican todas las
transformaciones que se sucedieron en esos años, encaminadas especialmente a
modificar el régimen de tenencia de la tierra y los mecanismos económicos de este
sector.
-25
-20
-15
-10
-5
0
5
10
15
20
1990 1991 1992 1993 1994 1995 1996
TotalAgricult.
Fuente: Villegas (1999)
Figura 2. Variación anual del PIB de Cuba 1990-1996.
Este proceso de cambio necesario se ha dado en llamar tercera Reforma Agraria, la
que propone dos medidas concretas: i) la transformación del sector estatal en
cooperativas de tipo UBPC; y ii) la entrega de tierras a privados para autoconsumo y
el fortalecimiento de las CCS (Donéstevez, Fajardo y Figueras, 1999).
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22
1.5 La tercera Ley de Reforma Agraria. Las UBPC
“La diversificación de las formas económicas de producción y de los agentes
productivos, el redimensionamiento de las entidades productivas, la introducción y
generalización de la agricultura de bajos insumos y alta densidad de trabajo, la
apertura del mercado y la generación de nuevos incentivos capaces de estabilizar y
recapturar la fuerza de trabajo necesaria para el sector” (Figueroa, 1998), son las
características que distinguen esta nueva propuesta.
Jiménez y Almaguer (2003) describen los cuatro principios que instituyen esta nueva
propuesta:
La vinculación del hombre al área como forma de estimular su interés por el
trabajo y su sentido concreto de responsabilidad individual y colectiva.
El autoabastecimiento del colectivo de obreros y sus familias con esfuerzo
cooperado, así como el mejoramiento progresivo de las condiciones de
vivienda y otros aspectos relacionados con la atención del hombre.
Asociación rigurosa de los ingresos de los trabajadores a la producción
alcanzada.
El desarrollo amplio de la autonomía de la gestión. Las unidades de
producción que se proponen deben administrar sus recursos y hacerse
autosuficientes en el orden productivo.
Comienzan a sucederse en la economía cubana todos estos cambios, en especial la
formación de las Unidades Básicas de Producción Cooperativa (UBPC), como una
necesidad para que la agricultura quedase más adaptada a las condiciones de cada
entidad y localidad. Se hacía urgente sustituir la agricultura estatal centralizada y
vertical, puesta en práctica por la dirección de la agricultura desde un inicio y que
devino en freno notable de las posibilidades reales de participación, por otra con
mayores posibilidades participativas (Pérez, 1996).
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23
Correspondía pues, a estas nuevas entidades cooperativas (UBPC) constituirse
como opción a la producción agropecuaria estatal. La nueva forma de organización
poseería la tierra en usufructo por tiempo indefinido, la cual explotaría en toda su
extensión útil. Serían dueñas del producto de su gestión, asumiendo todos los
costos. Tendrían personalidad jurídica propia y autonomía financiera y su
organización y gestión se harían sobre las bases cooperativas. Su producción y el
uso del suelo estaría regulado por el Estado (Valdés, 1997).
Las UBPC tenían en la CPA un referente organizativo y práctico de la autogestión en
el país y una cultura cooperativa en ciernes. Muchas eran las semejanzas entre las
UBPC y las CPA. Sin embargo, es necesario tener en cuenta las diferencias entre
ellas (Valdés, 1997) (tabla 5).
Tabla 5. Diferencias entre tipos cooperativos de producción (CPA y UBPC)
CPA UBPC
Se constituyen a partir de productores campesinos
Se construyen a partir de trabajadores agrícolas asalariados
Baja identidad inicial como colectivo Mayor identidad inicial como colectivo
Mayor disponibilidad de fuerza de trabajo Menor disponibilidad de fuerza de trabajo
Mayor disciplina y productividad del trabajo y medios
Menor disciplina y productividad del trabajo y los medios
Mayor eficiencia económica relativa Baja eficiencia económica y subsidios generalizados
Organizada mediante fusiones de fincas campesinas
Organizada mediante la segregación de áreas de empresas estatales
Alta autonomía Baja autonomía
Fuente: Valdés (1997)
Las UBPC emergen en un contexto bien complejo, en una década sumida en una
profunda crisis recesiva, que llega a su punto más bajo en los años 1993 y 1994,
“cuando se hizo evidente el desabastecimiento de alimentos, las serias limitaciones
de combustible, de insumos de todo tipo para la agricultura y la escasez e
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24
inestabilidad crónica de fuerza de trabajo” (González, 1999), a lo cual se suma el
avanzado deterioro ambiental de nuestros ecosistemas agropecuarios por el uso
indiscriminado de tecnologías inapropiadas altamente destructivas, que han
convertido la actividad agropecuaria en la actividad económica que provoca mayor
destrucción de los recursos naturales en la América Central y el Caribe (Kolmans y
Vásquez, 1996).
Era todo un reto para las nuevas entidades. Se requerían cambios de actitudes y
hábitos que no habían sido formados, se necesitaba un proceso de aprendizaje, una
construcción de nuevas capacidades y nuevas percepciones. Representaban
cambios que solo se logran como producto de un proceso lógico y gradual de tránsito
de un estado a otro, de recibir orientaciones, a tomar decisiones;.de tener una actitud
receptiva y demandar a un estado sobreprotector, a asumir mayores
responsabilidades y decidir conjuntamente las prioridades de inversiones (Díaz,
1997).
Desde su creación la UBPC han sido objeto de numerosos análisis; estas confrontan
una serie de dificultades endógenas y exógenas, que no posibilitan explotar a
plenitud sus capacidades productivas y alcanzar resultados satisfactorios.8 Sin
embargo, para el primer semestre del 2005 sumaban 2 430 en todo el país (tabla 6)
(Jiménez, 2005).
Tabla 6. Número de entidades existentes. Primer semestre 2005.
CCS CPA UBPC
MINAGRI 1 911 701 1 600 (el 44% son ganaderas)
MINAZ 328 371 830 Fuente: Estadísticas del MINAGRI y MINAZ. Tomado de Jiménez, 2005
8(Nova, 2005). “Es conocido que la creación de las UBPC fue un proceso abrupto, que heredan una
situación económica agrícola extremadamente difícil, dentro del contexto de crisis económica del país y con una importante deuda económica a partir de la adquisición de los medios de producción, que deberían pagar en un período determinado”
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25
Comenzaron su actividad económica bajo la concepción de que tenían el deber de
incrementar de manera sostenida en cantidad y calidad las producciones, empleando
racionalmente los recursos de que disponen y mejorando las condiciones de vida y
trabajo de sus miembros.
Valdés (1997) realiza profundos análisis sobre el desarrollo de las UBPC, las
compara con las restantes formas de organización de la producción estatal y no
estatal y desde una perspectiva antropológica, el autor considera que “la nueva
estrategia de cooperativización no logrará la totalidad de sus objetivos a mediano
plazo y solo lo alcanzará a largo plazo si logra construir y desarrollar una conciencia
autogestionaria y una cultura cooperativa autóctona”.
1.6 El enfoque de sistema
El desarrollo de las UBPC debía estar orientado desde esta perspectiva
autogestionaria, autóctona e integradora, donde se conciba a las partes como un
todo y no al todo como la suma de las partes. El inadecuado manejo que pudiera
hacerse de los ecosistemas en estos procesos de desarrollo repercutiría
inevitablemente de forma negativa en el bienestar de los socios y las familias rurales
comprendidas en el entorno de estas organizaciones productivas.
Si se parte del precepto de que un sistema es conceptualizado como un conjunto de
elementos que tienen interrelaciones y que actúan hacia un mismo objetivo, el
estudio de los sistemas agrarios apunta hacia el análisis de los vínculos existentes,
de sus respectivos componentes y de su funcionamiento. Este análisis requiere de
un enfoque histórico de los sistemas de producción que diluciden la evolución social,
económica, tecnológica y cultural de las transformaciones humanas y espaciales del
paisaje agrario. La historia, en consecuencia, se aborda como una práctica social en
la que el hombre y la naturaleza se transforman, se desarrollan y se agreden, como
producto de leyes económicas y de bases ideológicas concretas. Ello remite a un
enfoque global que metodológicamente descompone la realidad en diferentes
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26
niveles, para luego estudiarla de manera interrelacionada y multidisciplinaria, donde
el espíritu lógico y la rigurosidad científica coadyuvan a la configuración de una
interpretación de los fenómenos (Mora, 1996). Estos enfoques metodológicamente
globales e integradores han de ser, además, necesariamente participativos.
1.7 Metodologías participativas
El término metodología designa el modo en que se enfocan los problemas y se
buscan respuestas. En las ciencias sociales se aplica a la manera de realizar la
investigación, y son los supuestos, intereses y propósitos los que llevan a elegir una
u otra metodología.9
La metodología participativa agrupa las formas en que se interrelaciona la teoría y la
práctica, la acción y la participación. Con ella se obtienen las suficientes evidencias
empíricas para garantizar la validez científica de la investigación. Asume como
premisa que todo el proceso debe ser realizado por los miembros del grupo o
colectivo afectado, lo que significa que todo análisis o decisión es producto o
resultado del consenso entre ellos.
“La investigación participativa es un enfoque de la investigación social mediante la
cual se busca la plena participación de la comunidad en el análisis de su propia
realidad, con objeto de promover la participación social para el beneficio de los
participantes en la investigación…La actividad es por lo tanto una actividad
educativa, de investigación y de acción social” (De Wit y Gianotten, 1998).
Según Selener, Endara y Carvajal (1997) los métodos participativos de trabajo
facilitan la identificación, preparación y diseño de proyectos comunitarios que
viabilicen la autogestión y el desarrollo sustentable, basados en la realidad y en los
criterios propios de sus habitantes. Permiten describir y analizar, desde el punto de
9 Fernando González- “La investigación cualitativa en psicología. Rumbos y desafíos”. Editora EDUC,
Sao Paulo, 1999
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27
vista de la comunidad, sus características y condiciones, incluyendo la identificación
de sus problemas y potenciales soluciones.
En las últimas décadas se han desarrollado guías o estrategias para la intervención
más efectiva, tanto para los estudios que se realizan, como para las
transformaciones que se implementan en las diferentes realidades rurales a nivel
mundial (Suset, 2004); así, por ejemplo, Selener, Endara y Carvajal (1997) desarrolla
la propuesta del Sondeo Rural Participativo (SRP), que reconoce como principios
fundamentales “la participación, el empoderamiento y la solidaridad en busca de
resultados que posibiliten la autogestión y el fortalecimiento de las organizaciones
comunitarias rurales”. Estas consideraciones son muy similares a las defendidas por
Imbach, Dudley, Ortíz y Sánchez (1997) cuando propone el enfoque metodológico
MARPS (Mapeo Analítico, Reflexivo y Participativo de la Sostenibilidad), que
“considera que las personas y el ecosistema en su conjunto tienen la misma
importancia”.
“un proceso de reflexión (R) permanente acerca de la situación de la sostenibilidad, ya que se acepta que la sostenibilidad no es un estado final, sino un proceso continuo para equilibrar las necesidades crecientes de las personas con la capacidad de los ecosistemas para satisfacerlas sin deteriorarse; análisis (A) de las partes del sistema en sus dimensiones socioeconómicas y ambientales de forma desglosada por aspectos indicativos, variables e indicadores, con la participación (P) de los actores sociales involucrados en la evaluación para que los resultados sean útiles y creíbles, con el uso de mapas (M) como herramienta de análisis y síntesis ya que la evaluación se realiza en el espacio y en el tiempo” (UICN, 1997).
1.8 UBPC, Comunidad y desarrollo sostenible
De acuerdo con criterios de la FAO, para que el desarrollo agropecuario sea
compatible con la sostenibilidad, debe cumplir metas esenciales como:
El empleo y la generación de ingresos dentro del área rural
La seguridad alimentaria
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28
La conservación de los recursos naturales
El desarrollo agropecuario sostenible está fuertemente vinculado a la interpretación
que se haga del ecosistema sobre el cual crece y a la aplicación consecuente de los
conceptos adecuados en su manejo, ya que de las condiciones del ecosistema
depende su capacidad de carga (población x impacto per cápita) y producción. Un
agroecosistema está constituido por componentes que tienen que ver con las
tecnologías que se emplean en su manejo, los recursos naturales y su situación, y
los aspectos socioeconómicos que se relacionan con la cultura, costumbres y
tradiciones de los humanos que toman decisiones sobre el manejo de estos, y
además, sobre los productos agrícolas que serán obtenidos, lo cual tiene que ver con
la seguridad alimentaria de la población local.
La agricultura produce deforestación, degrada los suelos, destruye la biodiversidad y
contamina las aguas terrestres y marinas, como consecuencia de prácticas agrícolas
inadecuadas que conducen a procesos de desertificación, el uso de plaguicidas o
fertilizantes químicos que producen la muerte a especies vegetales, animales y hasta
al hombre, y la emisión de gases de efecto invernadero, que involucran tanto las
producciones agrícolas (arroz bajo aniego) como la producción animal de rumiantes
(producción de gas metano) (González y García, 1998), todo lo cual afecta
directamente a la población humana residente en el ecosistema.
La comunidad local ocupa un lugar privilegiado respecto al uso adecuado de los
recursos naturales, ya que es el barrio, el consejo popular, el municipio, la
cooperativa, la granja (la tribu) o cualquier colectivo situado a nivel local, quien puede
evaluar y proteger su patrimonio, con una adecuada educación ambiental y visión del
patrimonio de sus recursos naturales, con el adecuado concepto de que la naturaleza
es limitada en su elasticidad y en su extensión, y que tiene una capacidad de carga
que no se puede rebasar.
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29
Sin embargo, las entidades productivas (UBPC, CPA, CCS, granjas) deciden sobre el
uso de la tierra, en la mayoría de los casos, basados solamente en una visión de
mercado, sin tener en cuenta las necesidades de la población local, ni los impactos
que se producen en el ecosistema por el uso inadecuado de este.
En particular las UBPC, por la dinámica que caracterizó su creación, carecen de la
capacidad de explotar a plenitud sus potencialidades productivas, de manejar
adecuadamente sus recursos naturales y de satisfacer las necesidades de sus
trabajadores y su población circundante en cuanto a alimentos, ingresos, y acceso a
bienes y servicios ambientales, lo cual las mantiene en niveles bajos de
sostenibilidad.
Por todo lo antes expuesto son importantes los estudios que permitan evaluar con
enfoque holístico y sistematizador el desarrollo de esta importante organización
productiva para poder, a partir del conocimiento de la problemática existente en su
seno buscar soluciones pertinentes.
30
Capitulo 2. Metodología de trabajo
VtÑ•àâÄÉ EA `xàÉwÉÄÉz•t wx àÜtut}É
31
CAPÍTULO 2. METODOLOGÍA DE TRABAJO
2.1 Descripción del objeto de estudio
El municipio Martí, donde radica la UBPC seleccionada, está ubicado al noreste de la
provincia de Matanzas, limita al norte con el estrecho de la Florida, al sur con los
municipios Perico y Colón, al este con la provincia de Villa Clara y al oeste con el
municipio de Cárdenas. Ocupa el 8% del área total de la provincia y el tercer lugar en
extensión. Sus suelos se aprovechan fundamentalmente en plantaciones forestales,
pastos, cañas y cultivos varios.
La ganadería constituyó, después de la tala de árboles, la primera rama económica
de la zona. Desde 1784 en esta zona se fomenta la producción azucarera, lo que
hace que en ese período esté considerada entre las zonas azucareras más ricas del
país. La Guerra de los Diez Años afectó su economía, lo que añadido a los altos
impuestos, la crisis económica generalizada y el fin de la esclavitud, hizo que sólo los
poseedores de sólidos dotes no quebraran (Guerra, 1989).
Desde sus primeros estadios de desarrollo este municipio fue un territorio
eminentemente agropecuario, lo cual explica la tradición que tiene el sector ganadero
a pesar del auge de la industria azucarera (tabla 7).
VtÑ•àâÄÉ EA `xàÉwÉÄÉz•t wx àÜtut}É
32
Tabla 7. Uso y tenencia de la tierra del Municipio Martí (construida a partir de datos aportados por el museo municipal y la Dirección Municipal de Estadísticas).
Descripción Área (ha) %
Extensión del territorio 92 347.18 100
Area agrícola 55 405.84 59.9
Area cañera 7 266.19 7.86
Pastos naturales 25 342.88 27.44
Pastos artificiales 7 246.55 7.84
Superficie forestal 21 962.61 23.78
Humedal 5 721.78 6.19
Superficie ociosa 9 279.24 10.05
No cultivada 34 622.12 37.49
En la actualidad el municipio cuenta con seis consejos populares y una extensión
de 1 069,6 km2, 25 360 habitantes de los cuales el 45% está ubicado en zonas
rurales
En el territorio radican 931 campesinos individuales, una CPA, cuatro CCS y 11
UBPC (cuatro ganaderas, tres de cultivos varios y cuatro cañeras), en una de las
cuales se realizó el presente trabajo (figura 3.)
VtÑ•àâÄÉ EA `xàÉwÉÄÉz•t wx àÜtut}É
33
67.7
6.4
17.5
5.92.4 0.1
0
10
20
30
40
50
60
70
% del Área
Emp. Granj UBPC CPA CCS CampDisp
Figura 3. Uso y tenencia de la tierra por forma de organización .productiva.
Es válido señalar que el contexto socio-productivo en estudio se constituye
organización productiva de uso colectivo a partir de 1962, con las transformaciones
socioeconómicas derivadas de la Reforma Agraria y las estrategias de desarrollo
agropecuario a nivel nacional. Hasta ese entonces sólo constituían familias rurales
ubicadas de manera dispersa (Suset, 2004).
Al igual que en el resto del municipio en su economía tuvo gran peso la producción
de azúcar, aunque posteriormente se diversificó la agricultura con plantaciones de
cultivos menores y también la ganadería para comercio de carnes y pieles, basada
en ese entonces en grandes extensiones de tierra.
A partir de la segunda mitad de los años 50 del siglo XX, comienza el cultivo del
tomate, labor que fue estimulada por la participación de capital extranjero. Se logró
un auge predominante en esta zona, dadas las características de los suelos (más
altos). De ahí que el tomate constituyera la principal actividad económica que se
realizaba durante esta etapa.
Fuente: Construida a partir de datos obtenidos en Estadística Municipal
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34
Más de 1 000 trabajadores se movilizaban entonces desde otras localidades
buscando trabajo en la prolífera zona, todo lo cual da pie al surgimiento de la
Comunidad. Con el triunfo revolucionario a mediados de 1959, se creó la Granja del
Pueblo, la cual posibilitó la construcción de la escuela, viviendas, infraestructura vial,
comercios y servicios.
Actualmente se puede hablar de una población de 1 150 habitantes que comprenden
300 familias. La comunidad constituye un Consejo Popular con dos
circunscripciones. La UBPC con el mismo nombre surge en 1993 en el marco de la
tercera Ley de Reforma Agraria. Abarca 93.8 caballerías y cuenta con 1 037 cabezas
de ganado entre F1 y criollo, distribuido en ocho unidades. Se escoge como objeto
de estudio del presente trabajo por su “estabilidad” en comparación con el resto de
las entidades de su tipo en el territorio.
2.2 Métodos participativos de trabajo en grupo
Con este trabajo se analizó la situación de la entidad productiva, la UBPC, y su
contribución al desarrollo del contexto donde está ubicada. Para la recolección de la
información se realizaron un total de cinco talleres: dos con pobladores de la
comunidad y otros tres con trabajadores de la entidad productiva ganadera, personas
que en algunos casos coincidían por su doble condición.
Los talleres tuvieron una duración entre dos y cuatro días, con la participación de 20-
25 personas en cada uno de estos, enriqueciendo la información obtenida en una
reunión posterior con la comunidad.
En cada uno de ellos se usaron técnicas como la nube de ideas, los juegos de roles y
juegos participativos, con el objetivo de conocerse, recordar los nombres de los
participantes, energizarse, desinhibirse o reflexionar en torno a un tema según fuera
el caso Todo lo cual estableció la relación de confianza necesaria para la realización
VtÑ•àâÄÉ EA `xàÉwÉÄÉz•t wx àÜtut}É
35
del Diagrama de Venn10, en el que los participantes ubicaron en el centro la entidad
productiva y a su alrededor todas las entidades con las que se relacionaban, la
distancia que entre ellas había, representaba su interrelación, y la cabeza de flecha
el sentido en que se daba esta.
En el primer taller participaron 61 personas, de las que 32 eran obreros y vecinos,
14 eran mujeres, 10 eran directivos a diferentes niveles, amas de casa, escolares y
jubilados (en menor número), en el que se construyó la historia de la Comunidad
propuesta por Selener, Endara y Carvajal (1997) en la guía práctica para el Sondeo
Rural Participativo.
El estudio fue realizado desde esta perspectiva holística e integradora con toda
intención, pues se profundizó en la UBPC como agente clave en el desarrollo local
en ese contexto rural, como responsable, en última instancia, del bienestar de sus
miembros; acorde con los principios que rigen las cooperativas.
La elaboración e implementación de estrategias de desarrollo sostenible, de forma
participativa, constituye un primer paso para priorizar acciones de desarrollo
coherentes entre sí (Gallo, Ammour, Panigua e Imbach, 2000) y requiere de
herramientas necesarias para el monitoreo de los impactos que deben producir estas
acciones propuestas, por lo que fue necesario buscar y aplicar las metodologías
participativas a este escenario.
Se realizaron entrevistas semiestructuradas a 23 de los participantes en los
talleres. Al obtener toda la información procedente de las entrevistas realizadas,
definimos 9 variables correspondientes a los nueve criterios que en el ejercicio
aparecieron a partir de las cuales se construyó el diagrama de Pareto y el análisis de
Frecuencia, usando como apoyo el paquete estadístico SPSS.
En el grupo figuraban: Delegados del Ministerio de la Agricultura (2), inspectores
estatales de diferentes organismos (5), técnicos de diferentes especialidades (9), jefe
10 Ochenta Herramientas para el Diagnóstico Participativo.
VtÑ•àâÄÉ EA `xàÉwÉÄÉz•t wx àÜtut}É
36
del grupo territorial de la Oficina Nacional de Inspección (ONIA) (1), delegados de
Consejos Populares (3), jefes de unidades (2), jefe del Servicio Estatal Forestal (1).
2.3 Mapeo Analítico, Reflexivo y Participativo de la Sostenibilidad (MARPS)
Se utilizó la metodología MARPS (Mapeo Analítico, Reflexivo y Participativo de la
Sostenibilidad) elaborada por la Unión Internacional para el Cuidado de la Naturaleza
(UICN, 1997), de la que a continuación se hace un resumen:
Primera etapa
Recolección de información externa.
Organización de los datos.
Coordinación previa con las autoridades locales.
Con la intención de motivar la participación de los directivos y trabajadores, se
explicó la situación del sector ganadero en Cuba y la finalidad del trabajo con miras
al logro de transformaciones efectivas en el sector.
Reuniones de sensibilización con los habitantes y trabajadores y líderes de la
UBPC y la Comunidad, para explicarles la necesidad de realizar esta
investigación y de su decisivo aporte en este proceso.
Preparación de materiales de comunicación y del equipo de trabajo. En este
momento se preparan los materiales visuales y se prepara igualmente al grupo en
cuanto al código de conducta a seguir.
Evaluación del bienestar mediante el barómetro de la sostenibilidad. Propósito:
Proporcionar a la comunidad un instrumento para medir el bienestar humano y del
ecosistema y fortalecer la idea de que se deben mejorar ambos a la vez. Obtener
una idea compartida de cómo se evalúa la comunidad en esos aspectos
Elaboración de mapas del sistema (ecosistema más personas) y de los cambios
desde que se estableció el poblado o desde hace al menos 50 años. Propósito:
VtÑ•àâÄÉ EA `xàÉwÉÄÉz•t wx àÜtut}É
37
desarrollar una idea compartida acerca del ecosistema y de las personas y de
cómo y por qué han cambiado
Análisis de tendencias. Propósito: comprender más profundamente cómo y por
qué ha cambiado el ecosistema. Cambios en el clima, cambios en el área de los
componentes del ecosistema, cambios en la calidad o condición de los
componentes del ecosistema, cambios en la diversidad de las plantas y animales
en los componentes del ecosistema, cambios en los productos o servicios
obtenidos a partir de los componentes del ecosistema. Los cambios se
representan con mapas.
Evaluación de las condiciones de la gente: Se analizaron los cambios en cuanto
a: alimentos, ingresos, bienestar e infraestructura, salud y población,
conocimientos, instituciones, producciones al menos durante los últimos 50 años,
de la misma forma que en el ecosistema.
Para ello se decidió agruparlos y evaluar la dimensión ambiental y social, según lo
indica la metodología propuesta. Además, se consideró oportuno incluir la dimensión
económica productiva al estudio, por entenderla como un eslabón de vital
importancia en cualquier proceso de desarrollo sostenible a nivel local. En este caso
la inclusión de la dimensión económico productiva, como se le nombró, significa la
inclusión de la entidad productiva como ente económico dentro del ecosistema
analizado.
Las dimensiones evaluadas se dividieron, en orden descendente, en aspectos,
variables e indicadores. Los aspectos, variables e indicadores a evaluar fueron
seleccionados de conjunto con el grupo facilitador y los vecinos, tomando como
referencia los trabajos de validación de la metodología MARPS realizados por Gallo,
Ammour, Panigua e Imbach (2000) en el estudio de caso realizado en el Estero Real
de Nicaragua, y por Machado (2002) en el propio Municipio Martí. Se utilizaron las
etapas e incluso indicadores, muchos de los cuales fueron validados por este grupo
de Indio Hatuey y por el grupo del Centro Agronómico Tropical para la Investigación y
la Enseñanza (CATIE). No obstante, se hicieron las adaptaciones necesarias.
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38
Para la realización del diagnóstico económico-financiero y productivo, se estudió la
composición de la entidad y se recopiló y procesó la información contenida en los
registros primarios, estados de resultados y balances de comprobación durante los
años en cuestión, y se usaron indicadores definidos por Benítez y Miranda (1997)
La información obtenida de estos registros contables, las entrevistas realizadas al
personal del área productiva, así como la participación directa de estos en el
diagnóstico, permitió calcular y evaluar los indicadores que caracterizan esta
dimensión, que fue agregada por ser interés de nuestro estudio.
Se trataba de cuantificar los indicadores o de lograr su estimación cuando estos son
cualitativos o cuando no existe información precisa o estadística. Para ello se
revisaron documentos en la dirección municipal de estadísticas y documentos de
diferentes instancias municipales, como la Dirección Municipal de Viviendas,
Dirección de Servicios Comunales, Dirección de Arquitectura y Urbanismo (DAU),
Dirección de Cultura, Dirección de Planificación, Unidad Silvícola “La Alameda”, etc.
Se utilizaron los datos recopilados en la primera etapa del trabajo.
Para el cálculo del valor de la sostenibilidad de cada indicador a partir del valor actual
se utilizaron las fórmulas de Prescott-Allen (1997):
Si lo mejor es el valor máximo y lo peor el valor mínimo del indicador, la fórmula es:
([Valor real menos el mínimo] dividido por [el máximo menos el mínimo]) multiplicado
por 100.
Si lo mejor es el valor mínimo y lo peor el valor máximo del indicador, la fórmula es:
([Valor real menos el mínimo] dividido por [el máximo menos el mínimo] sustraído de
uno) y multiplicado por 100.
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39
Devolución de la información recolectada.
Se devuelve el resultado del trabajo a la población sobre el trabajo del grupo.
Regreso al barómetro con la nueva evaluación realizada, lo cual tenía como
propósito analizar con los habitantes la nueva visión acerca de su situación y la del
ecosistema después de haber reflexionado.
Segunda Etapa
Monitoreo Se evaluaron nuevamente todos los indicadores en la actualidad y se
construyó nuevamente el barómetro de la sostenibilidad. (cinco años después).
Devolución de la información del monitoreo a la comunidad.
2.4 Otros métodos utilizados
Como antes se expuso, las técnicas participativas representaron el centro de dicha
investigación. Para la construcción del árbol de problemas se utilizó el método de
nube de ideas, ejercicio en el que, utilizando tarjetas, los participantes plasman todos
sus criterios (con la premisa que la única idea mala es la que no se da) y
posteriormente se agrupan en nubes por semejanza en cada uno de los temas, para
poder sintetizar la información obtenida, la cual conduce al análisis, detección y
solución de problemas, que puede ser ilustrado en forma de árbol de problema y de
objetivo (en el caso de las soluciones) para una mejor comprensión. Además, se
realizaron entrevistas no estructuradas a 23 trabajadores, aplicándose en un taller
inicial de tres días y en diferentes reuniones desarrolladas con los agentes claves del
desarrollo rural en el territorio, a cuyos resultados se les realizó un análisis de
frecuencia, que permitió graficar los elementos obtenidos según su incidencia en el
problema.
En otro momento del análisis se empleó el diagrama de Pareto, el cual es un caso
particular del gráfico de barras; este se conoce también con el nombre de regla
80/20, significa que el 80% de un efecto es causado solamente por el 20% de los
VtÑ•àâÄÉ EA `xàÉwÉÄÉz•t wx àÜtut}É
40
elementos que contribuyen; esta es una técnica para ordenar de forma gráfica los
datos, de acuerdo con su prioridad o importancia, indicando qué problemas deben
resolverse primero al eliminar los defectos y mejorar las operaciones.
Este gráfico se apoya en el “principio de Pareto”, que sostiene que en todo grupo de
elementos o factores que contribuyen a un mismo efecto, solamente unos pocos son
los responsables de la mayor parte de dicho efecto. Algunas veces se suele dar el
caso de que no queda clara la frontera entre las categorías importantes y las demás,
apareciendo lo que algunos autores denominan la “zona dudosa”, que empieza en la
zona en torno al 50% y termina sobre el 80%, por lo que es recomendable, cuando
esto sucede, no tomar en consideración las categorías o atributos de la zona dudosa
y concentrarse en el 50-60% que más contribuye al efecto o problema que se esté
analizando.
A modo de resumen utilizamos como base metodológica el Mapeo Analítico
Reflexivo Participativo de la Sostenibilidad (MARPS) para la determinación del nivel
de sostenibilidad de la UBPC seleccionada, además se usaron herramientas
participativos de modo complementario como el diagrama de Venn, la nube de ideas,
juegos de roles, análisis de tendencia, historia de la comunidad, transeptos y
entrevistas semiestructuradas que fueron procesada con la ayuda del paquete
estadístico SPSS. Además, se usaron métodos complementarios como el diagrama
de Pareto y el análisis de frecuencia para priorizar los problemas y las soluciones
derivadas de dichos trabajos en grupales y entrevistas. En el caso del análisis de
frecuencia se utilizó el número de veces en que apareció el criterio como un
indicador de percepción
41
.
Capítulo 3. Resultados y Discusión
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42
CAPÍTULO 3. RESULTADOS Y DISCUSIÓN
3.1 UBPC. Aspectos económico-productivos
Por su representatividad, esta forma de organización en el Municipio (11 UBPC)
desempeña un importante papel en la producción de alimentos, responsabilidad de la
cual no está exenta esta UBPC, que debiera producir alimentos para una población
de 1 500 personas; sin embargo, se dedica en lo fundamental a la producción de
leche para la entrega a la industria láctea provincial. Para ello, la entidad cuenta con
ocho unidades de producción (una de novilla, tres de desarrollo y cuatro de ordeño)
distribuidas en 1 258,8 ha del extremo nororiental de la provincia Matanzas. Además
cuenta con una masa total de 1 037 cabezas de ganado, clasificadas según se
describe en la tabla 8.
Tabla 8. Composición de la masa.
Categorías No. cabezas Categorías No. cabezas
Hembras totales 862 Machos totales 175
Vacas 379 Añojos 20
Añojas 52 Terneros 127
Terneras 149 Ceba 6
Novillas 282 Bueyes 22
Aproximadamente en el 54% de su área (tabla 9) desarrolla su actividad productiva
con animales criollos y F1, en condiciones tropicales y con una alimentación basada
en pastos naturales y una suplementación proteica condicionada según los
resultados productivos que obtengan; este aspecto les resulta contradictorio a los
productores11, antiguos obreros de granjas estatales, en muchos casos
11 cuando más lo necesitamos es en el período seco; debido a la baja disponibilidad de pastos disminuyen nuestras producciones y es en este período donde nos entregan la menor cantidad” (palabras de un productor (Miriam) en entrevista semiestructurada)
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43
sobredimensionadas, defensoras de la agricultura consumista basada en insumos
externos. Sin embargo, la situación actual exige un cambio de cultura que adapte a
los productores -y en ocasiones a extensionistas e investigadores- a las exigencias
de una agricultura de bajos insumos externos (Figueroa, 1998) y, por tanto, a una
ganadería cimentada en el uso de los pastos asociados con leguminosas herbáceas
y arbóreas como alternativa alimentaria sostenible económica y ambientalmente.
Tabla 9. Balance de superficie.
Destino del área Superficie (caballería)
Área de pastos naturales 25.96
Área de pastos mejorados 25.04
Área de monte y manigua 42.8
En lo que respecta a las producciones, en los años 2000, 2001 y 2003 las
producciones resultaron ser suficientes en cantidad y calidad para el logro de
utilidades. Sin embargo, estos resultados no se pueden considerar como una
tendencia positiva y estable, pues en otros años como el 2002 o el recién concluido,
aunque se sobrecumplieron las metas previstas en los planes de producción, se
registraron pérdidas por la mala calidad del producto entregado a la Industria,
elemento que se relaciona directamente con el precio de venta que alcanza.
En el año que recién culminó (2005) se promediaron valores del indicador litros por
vaca en ordeño de 4.56 L, superiores a lo obtenido con animales criollos en los
rebaños genéticos del país en el año 2000 (3.08 L) e iguales a la media de la
provincia de Matanzas (4,5 L) en el 200512. En este período, los costos por peso en
la producción de leche ascendieron hasta 1.08, cifra que aunque negativa es inferior
a la mostrada por González, Fernández, Bu, Polanco, Aguilar, Dresdner y Tansini
(2004), quienes señalan que como promedio en las entidades productivas de este
12 Programa Estratégico de la Ganadería hasta el 2015. MINAG (2006)
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44
tipo (que fueron irrentables) se perdieron por cada peso producido,
aproximadamente, 30 centavos.
Existen diversos factores que inciden en los resultados productivos. En la figura 4 se
muestra el árbol de problemas elaborado por los trabajadores y los directivos de la
UBPC, donde se evidencia que el principal problema percibido como causa de la
irrentabilidad de la UBPC es el estancamiento socioeconómico de la entidad.
Efecto
Problema Principal
Causas
Subcausas
Figura 4. Árbol de problema construido por trabajadores y directivos.
Estancamiento en el desarrollo Socioeconómico de la UBPC
Escasa alimentación para la masa ganadera
Limitada autonomía
Poca solvencia económica
Elevada fluctuación laboral
Irrentabilidad
Poca rehabilitación de los pastos
Poca diversificación de la producción
Áreas infestadas de marabú
Poca capacitación técnica
Escasa reforestación
Baja producción de leche
Insuficiente comercialización
Inadecuada atención al hombre
Limitado espacio cultural para la motivación
Pocos programas de desarrollo, coherentes y científicos
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45
A partir de esta construcción se interpreta que existen varias causas que mantienen
a la entidad en el estancamiento o la insolvencia económica, todas relacionadas
entre sí, y dentro de las más importantes se señala la falta de autonomía, criterios
que coinciden con los encontrados al realizar entrevistas a dirigentes de la ganadería
a nivel municipal, donde se definieron nueve elementos correspondientes a los nueve
criterios que aparecieron en el ejercicio:
• Exceso de centralización (V1) • Pocos conocimientos para el uso de recursos (V2) • Se elaboran planes arbitrarios (V3) • No se trabaja en equipo (V4) • El destino de los recursos lo decide la administración (V5) • Los planes se deciden con todos los trabajadores (V6) • Poco conocimiento de los directivos (V7) • Mala organización y participación (V8) • Exceso de descentralización y participación (V9)
El análisis de la frecuencia con que aparecieron las variables (figura 5) indicó que el
comportamiento más significativo lo tuvo V3, que corresponde al criterio “se elaboran
planes arbitrarios”, o sea, sin contar con los trabajadores directos a la producción,
seguidos de V4, V5, y V6 que se comportaron de manera similar, y que a su vez
precedieron a V1, V2, V7, V8 y V9 que alcanzaron valores de frecuencia de aparición
igual a dos, teniendo así la menor incidencia.
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V9V8V7V6V5V4V3V2V1
Med
ia
12
10
8
6
4
2
0
Figura 5. Nivel de percepción de los criterios.
Al aplicar el diagrama de Pareto (figura 6) se determinó que bastaría con centrar los
esfuerzos en solucionar los elementos V3 (se elaboran planes arbitrarios) y V4 (no se
trabaja en equipos), según indica la gráfica, para resolver el 50% de los problemas.
En este sentido, es bueno resaltar que las variables V4 y V5 y V6 (destino de los
recursos se deciden por la administración) pueden ser escogidas indistintamente y
causar el mismo efecto, pues se colocaron en ese orden, ya que la selección y
entrada de los datos se realizó al azar y de ese modo quedaron ubicadas, aunque
alcanzaron iguales niveles de importancia.
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47
V9V8V7V2V1V6V5V4V3
Frec
uenc
ia
40
30
20
10
0
Porcentaje100
50
022222444
11
Figura 6. Priorización de los criterios
El haber encontrado estas opiniones permite asegurar que las decisiones territoriales
están fluyendo de una manera bien distante del logro de la autonomía, de la
descentralización, la participación y la estimulación de las relaciones horizontales de
producción. Los criterios mejor percibidos (se elaboran planes arbitrarios y no se
trabaja en equipo) se encuentran entre los descritos por González (2002) como
atributos del comportamiento que condicionan la capacidad gerencial de los
directivos en un estudio realizado en la misma UBPC.
Este estilo de dirección (vertical y autoritario) limita la iniciativa, la voluntad de hacer
y de asumir el compromiso que todos deben tener para con el desarrollo, aspectos
que resultan de vital importancia para lograr el éxito económico y productivo en
cualquier entidad.
Como planteara Gómez (1995), una empresa -en la agricultura o la industria- es un
sistema sociotécnico donde se estructuran actividades humanas alrededor de
distintas tecnologías. Este sistema contiene un subsistema tecnológico que afecta el
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48
tipo de insumo requerido, la naturaleza de los procesos de transformación y los
productos obtenidos; un subsistema social donde se determina la efectividad y
eficiencia de la utilización de la tecnología; y un subsistema cultural que condiciona el
subsistema social en el que se generan las interacciones entre las capacidades y
habilidades del individuo, sus valores, motivaciones y creencias, con las creencias
exigencias y metas de la organización, todo lo cual se relaciona directamente con el
compromiso, sentido de pertenencia y actitudes de los trabajadores y directivos en la
organización, elementos determinantes de la efectividad del proceso productivo.
3.2 Aspectos ambientales. Cambios en el ecosistema
Los pobladores y trabajadores determinaron como componentes del ecosistema y
sus bienes y servicios los siguientes elementos:
Componentes Ecosistema Bienes y servicios que proveen
Tierras de cultivo Alimento humano y animal
Tierras de pastoreo Alimento para el ganado, carne, leche, animales silvestres, refugio de fauna
Bosques y arboledas Madera, leña, carbón, muebles, aire puro, fijación de carbono, frutas, refugio de fauna, animales silvestres, plantas medicinales.
Manigua Refugio de fauna, animales silvestres, plantas medicinales
Arroyos y lagunas Drenaje natural, refugio de animales de forma temporal, agua para animales de forma temporal
Ríos Agua para animales y siembras, peces, arena para construcción, refugio de fauna
Arenal Arena, refugio de fauna
Loma Madera, leña, animales silvestres, refugio de fauna, plantas medicinales
Como se puede observar, los pobladores tienen un conocimiento acertado de su
entorno natural. Los cambios ocurridos en el área en los últimos cincuenta años y las
tendencias e historia de la comunidad aparecen en las figuras 7 y 8,
respectivamente.
En lo concerniente al desarrollo humano, tanto en los mapas como en las tendencias
se observa cómo el bienestar humano mejoró en los servicios básicos, la educación,
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49
la salud, la vivienda y las comunicaciones; mientras que los componentes del
ecosistema disminuyeron. Existe una tendencia a la disminución de la cantidad de
productos agrícolas que a largo plazo afecta la seguridad alimentaria, lo cual se
convierte en un importante factor limitante para el desarrollo humano.
Figura 7. Mapa del pasado (A) y presente (B) de la UBPC, construido por los vecinos.
A B
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50
Figura 8. Historia de la comunidad construida a partir de lo contado por los vecinos.
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51
Se identificaron cambios, como el crecimiento de la población y el establecimiento y
mejoramiento de otros servicios básicos (electricidad, agua, comercio y servicios
personales); se realizaron nuevas construcciones; aumentó el nivel cultural de la
población; se produjo un proceso de descampesinización (el campesino pasó a
obrero agrícola) y urbanización del poblado. En un inicio, con el triunfo de la
Revolución existió un gran desarrollo socioeconómico y se trabajó para mejorar la
vida de las personas; de esta manera se benefició la población humana, en tanto el
ecosistema se vio afectado.
Los cambios experimentados por los recursos naturales en la zona objeto de estudio
han sido drásticos. Se ha perdido la diversidad biológica en más de 22 especies
animales y 20 vegetales (árboles frutales y palmas) comunes en la década del 50; en
su lugar aparecieron otras no autóctonas, entre las que se incluyen las plantas
invasoras (ver anexo III). La salud del suelo ha descendido de una manera marcada;
en una evaluación realizada en los años 50 se alcanzó un valor óptimo de 10 puntos
(en una escala de 10); sin embargo, en la actualidad se estima un valor por debajo
de la media (4 puntos) (ver anexo VI) según los criterios emitidos por los pobladores
de dicha zona, quienes además consideran que esto está provocado por la tendencia
al monocultivo, práctica que ha sido realizada históricamente (figura 9).
Figura 9 (C y D). Terrenos en monocultivo e invadidos de marabú (Dichrostachys cinerea).
C D
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52
De igual manera descendió el área destinada a cultivos menores y aumentó el área
de pastos (tabla 10), la cual por el creciente deterioro de los suelos evidenció niveles
de producción de biomasa para el consumo animal aún insuficientes, aspecto que
tiene un efecto marcado, en primer orden, en la producción y consumo de carne y
leche, y en última instancia, en los niveles de ingresos de las familias que dependen
de esta actividad, lo que se generaliza al sector ganadero cubano en su conjunto.
Según González, Fernández, Bu, Polanco, Aguilar, Dresdner y Tansini (2004), con el
advenimiento de la crisis económica se modifican las bases de sostenibilidad de la
ganadería vacuna, lo cual se agrava por el desbalanceamiento financiero de la rama
producto de la dualidad monetaria, que no logró ser superado por el cambio en la
estructura de propiedad. Baste señalar que el área agrícola actual de la ganadería
asciende a apenas 2:220.000 hectáreas, de las cuales el 39% están invadidas por
leñosas y maniguas inaccesibles para el pastoreo. La protección alimentaria para
suplir el déficit en la oferta está dada por 78,7 mil hectáreas de forraje, con 42% de
forraje. Esta área usada a plenitud, representa solamente el 23% de la protección
mínima forrajera que se necesita para los 180 días de seca.
Tabla 10. Cambios en el área de los componentes del ecosistema (%).
Componentes 1950 1960 1970 1980 1990 2000 2005
Suelo de pastoreo 5 5 46 25 22 35 55 Suelos de cultivo 30 40 25 21 21 11 13 Bosques - - 3 3 3 6 10 Marabuzales 5 5 15 10 40 40 13 Manigua 15 5 - - 3 - - Arroyos y lagunas 3 2 2 2 2 2 2 Ríos 2 2 2 2 2 - - Arenal 4 4 1 1 1 1 1 Lomas 7 7 4 4 4 3 4 Arboledas 30 30 2 2 2 2 2
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53
De igual manera, la garantía de alimentación, según González, Fernández, Bu,
Polanco, Aguilar, Dresdner y Tansini (2004), no solo es determinante en la
producción de leche inmediata, sino también en la reproducción. “La indebida
prestancia al ganado de relevo ha traído como consecuencia que una tardía
incorporación a la reproducción a más de 40 meses, con un primer parto a los 52
meses como promedio y un alargamiento del período interpartal en más de dos
años”, todo lo cual a mediano y largo plazo se traduce en el desaprovechamiento de
las potencialidades productivas de los animales.
Por otra parte, los bienes y servicios ambientales que provee dicho ecosistema están
en declive (tabla 13). La disponibilidad de agua, por ejemplo, ha disminuido
considerablemente; los ríos, arroyos y lagunas han desaparecido o se han hecho
intermitentes (figura 10). Aun así, en la actualidad los animales consumen agua
potable, sin dificultades asociadas a la existencia del bien natural; la población, de
igual manera, exhibe niveles de acceso que superan el 95,2%, valor promedio
alcanzado por Cuba en este indicador según datos publicados por la oficina regional
del PNUD (Anon, 2005).
Figura 10. Deforestación en las márgenes de los ríos (este elemento propicia
los procesos de sedimentación, que determinan la desaparición o intermitencia de los cauces naturales de agua).
VtÑ•àâÄÉ FA exáâÄàtwÉá ç W|ávâá|™Ç
54
Por otra parte, también han descendido los servicios que ofrecen los paisajes
ganaderos, como la presencia de animales silvestres y el refugio de la fauna (tabla
11). Este elemento denota una progresiva pérdida de la diversidad biológica de las
especies, aspecto que pudiera estar relacionado directamente con la ausencia de los
elementos que Pimentel (citado por Alonso, Torres, Ruiz, Febles, Cárdenas y Achan,
2004) señala como factores que benefician la diversidad de las especies, entre los
que resaltan: la abundancia de biomasa, la diversidad de especies de plantas, la
diversidad y estabilidad de los agroecosistemas, la presencia de abundantes
nutrientes en el suelo, la buena calidad del suelo, la suficiencia de agua y un clima
favorable. Tabla 11. Cambios en la disponibilidad de los bienes y servicios del
ecosistema (Escala de 0 a 10, donde 0 es pésimo y 10 es máximo, estimado por integrantes de la comunidad).
1950 1960 1970 1980 1990 2000 2005 Pastoreo Alimento para el ganado 2 3 4 6 8 8 9 Carne 9 10 7 8 3 7 8 Leche 4 5 8 10 7 7 8 Refugio de fauna 10 9 5 3 3 5 5 Suelo de cultivo Alimento humano 10 10 8 10 7 7 7 Alimento para animales 4 5 7 9 7 8 9 Marabuzales
Carbón 2 2 5 7 10 10 8 Madera 2 2 5 7 10 8 8 Animales silvestres 3 4 7 8 9 7 7
Manigua Plantas medicinales 10 8 6 4 3 3 3 Animales silvestres 10 10 8 6 4 5 5 Empleo/marabú 1 3 5 8 10 10 10
Según Altieri (1990), la agricultura es esencialmente una actividad ambiental. Es el
proceso de artificialización del ecosistema natural para canalizar la energía en forma
de alimento para las personas, lo cual se realiza modificando el medio ambiente
mediante la adición de la energía y los recursos.
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55
Cuando se hace agricultura se artificializa un ecosistema con el objetivo de
aprovechar la mayoría de sus atributos básicos y su funcionamiento, o sea, se
redistribuyen sus funciones y productos naturales, lo que exige el subsidio energético
en muchos casos. La complejidad ambiental de la agricultura consiste en cómo
especializar el ecosistema, interviniéndolo de tal forma que genere productos
socialmente útiles, al mínimo costo ecológico posible.13 .
El modelo de desarrollo agrícola adoptado por la agricultura cubana está proyectado
para ser eficiente a corto plazo, sin considerar que las transformaciones pueden
hacerlo insostenible a mediano y largo plazo, ya que prioriza la rentabilidad de las
explotaciones sin considerar la capacidad del ecosistema, lo que conlleva su
sobreexplotación y con ello se pone en peligro la sustentabilidad. Esto se agrava
cuando se obliga al ecosistema a producir un rubro que no corresponde a su aptitud
natural.
En Cuba, y específicamente en esta zona, los agroecosistemas fueron reorganizados
para intensificar la producción de alimentos en detrimento de la sustentabilidad, por
lo cual al cesar el subsidio de energía, la producción de biomasa del ecosistema
queda por debajo de las necesidades del crecimiento humano, con el consiguiente
efecto en el bienestar de los pobladores.
3.3 Comunidad. Aspectos socioeconómicos
Teniendo en cuenta lo anteriormente expuesto, la evolución económica de la zona
limitó la formación de una cultura para la producción de alimentos a nivel local. Sus
primeros pobladores eran personas que emigraron desde otras provincias en busca
de trabajo. En los años setenta, con el desarrollo de las granjas del pueblo, los
alimentos en su mayoría (77%) se traían desde otras localidades (tabla 12). Esta
cultura prevalece en la actualidad, lo cual explica la baja biodiversidad agrícola, en la
13 CEPAL/PNUMA 1985. Avances en la interpretación ambiental del desarrollo agrícola de América
Latina. ONU
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56
que los niveles de producción siguen siendo insuficientes para su autoconsumo. Los
alimentos que compran en otras localidades (frijoles, arroz, etc.) y los que el Estado
provee en la canasta básica y en las placitas, son las fuentes que tienen el mayor
peso en la dieta diaria de los pobladores (tabla 13).
Tabla 12. Fuentes de alimento por períodos.
Fuente 1950 - 1960o 1980 2000 2005Sus propios cultivos y ganado 3 10 10 10 Frutas y hortalizas silvestres, animales y peces silvestres 10 10 10 15
Compra de alimentos de origen no local 10 60 30 25 Compra de alimentos de origen local - 10 15 20 Otras fuentes (préstamos, regalos) 5 5 - - Compra en otros poblados 77 5 35 30
Tabla 13. Procedencia de alimentos (%).
Fuentes de alimento Alimentos que provienen de cada fuente % 2000
% 2005
Sus propios cultivos y ganado
Plátano, yuca, boniato, maíz, calabaza, maní, piña, caballo, vacas, terneros, leche 10 10
Frutas y hortalizas silvestres, animales y peces silvestres
Mango, guayaba, tamarindo, jutía, camarón, jicotea, venado, liebre, tilapia, trucha, tenca, mura, crisol, carpa, anguila
10 15
Compra de alimentos de organismo no local
Placita Canasta familiar Plátano Arroz, frijoles, azúcar Pepino chícharo, picadillo, sal Boniato mortadella, pan, leche Papa huevos, aceite, quimbombó, tomate Punto de venta en CUC
30 25
Alimento de origen local
Leche, pepino, maíz, plátano, yuca, calabaza, tomate, quimbombó, habichuela, ají, cebolla 15 20
Compra en otras localidades
Manteca, aceite, boniato, pescado, frijoles, huevos, arroz, cerdo, pollo 35 30
El aspecto ingresos de la población es uno de los más polémicos desde el punto de
vista social y moral. Las prácticas ilegales y la emigración laboral (por su
característica de limítrofe con otros municipios y provincia) representaron, en un
VtÑ•àâÄÉ FA exáâÄàtwÉá ç W|ávâá|™Ç
57
momento dado, la solución inmediata para una parte de la población de la zona.
Actualmente, los salarios medios se han incrementado y de igual manera han
aumentado los requerimientos de las personas para consumir lo mínimo necesario
(tabla 14), lo que ha traído consigo que la mayoría (98%) de la población esté situada
en el grupo de los que obtienen con dificultad lo imprescindible (en ingresos) para
cubrir sus necesidades (tabla 15).
Tabla 14. Necesidades, en gastos de dinero, en la comunidad.
En qué se necesita gastar dinero
¿Cuánto se necesita gastar? (una familia de cuatro miembros como promedio al mes) 2000
¿Cuánto se necesita gastar? (una familia de cuatro
miembros como promedio al mes) 2005
Alimentación 1 025.00 755.00 Medicina 25.00 25.00 Organizaciones de masa 10.00 10.00 Vestuario 575.00 1 250.00 Aseo 235.00 235.00 Electricidad y agua 35.00 20.00 Transporte 50.00 50.00 Reparación y construcción 100.00 200.00
Recreación 390.00 390.00
2 445,00 2 935,00
Ingreso medio por familia 2000 $ 150
Ingreso medio por familia 2005 $ 210
Tabla 15. Facilidad de acceso de las familias a los ingresos.
Año ¿Cuántas familias obtienen el dinero mínimo necesario?
¿Cuantas familias tienen problemas para
obtener el dinero?
¿Cuantas familias son incapaces de obtener el
dinero mínimo necesario?
2000 4 familias 290 familias 6 familias 2005 4 286 10
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58
Para los miembros de la Comunidad, tener buen nivel de vida significa: tener una
vivienda confortable, equipos electrodomésticos y muebles, ingresos (salario más
otros) que les permitan satisfacer sus necesidades, poder disfrutar de una recreación
sana (esparcimiento), de una buena y balanceada alimentación, de transportación
con regularidad, de acceso a la educación y a vestirse decorosamente y a la moda,
en el caso de los jóvenes.
Es importante destacar que en la comunidad hoy cuenta con el 90% de sus casas en
buen estado, con buena cubierta y paredes confortables (restauración posterior al
huracán), lo cual implica que entre los indicadores más malos del nivel de vida no
figura la vivienda y sí el problema de la alimentación, la recreación, el transporte y el
vestuario en la comunidad, lo cual ha determinado que en la actualidad la mayoría de
las familias de la zona (254) disfruten de un nivel de vida medio; mientras que en la
década del 60 la mayoría de las familias (80) poseían un bajo nivel de vida (tabla 16).
Tabla 16. Nivel de vida de las familias de la Comunidad según sus criterios. Décadas 1960-1980
Alto nivel de vida Nivel medio de vida Bajo nivel de vida Muy bajo
nivel de vida Número de familias 10 20 80 10
Décadas 1990-2000
Alto nivel de vida Nivel medio de vida Bajo nivel de vida Muy bajo
nivel de vida Número de familias 6 214 70 10
2000- 2005
Alto nivel de vida Nivel medio de vida Bajo nivel de vida Muy bajo
nivel de vida Número de familias 6 254 30 10
Con respecto a los servicios básicos estos han ganado en cobertura (alcanzan al
100% de la población de la zona), excepto el servicio de agua potable por cañería
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59
que cubre al 50% de los habitantes, lo que demuestra que aunque se ha avanzado
significativamente quedan aspectos por resolver (tabla 17).
Tabla 17. Proporción de familias con acceso a los servicios básicos.
Servicios 1950 1960 1970 1980 1990 2000 2005
Agua por cañería 0 0 50 100 150 150 150
Electricidad 0 125 200 300 300 300 300
Comunicaciones 0 0 0 300 300 300 300
Carreteras o caminos buenos 10 125 200 300 300 300 300
Servicio de barbería, talleres y reparación, etc.
10 125 200 300 300 300 300
La educación, como en el resto del país, llega a todos los niños en edad escolar y
cuentan con una escuela en buen estado. Entre los pobladores existe el deseo de
ampliar su cultura general; ellos consideran que necesitan una sala de video, una
biblioteca y acceso a conferencias en diferentes temas, a revistas y a cursos de
capacitación.
Se confirmó que la relación Comunidad-Entidad fluye satisfactoriamente; los
pobladores alegan que todas las actividades recreativas que se dan es porque la
UBPC las organiza (chequeo de emulación), que la mayor parte de la población
empleada de la zona trabaja en su seno y que la UBPC es responsable, junto a otros
factores, del mantenimiento y desarrollo de su capital social (tabla 18).
Tabla 18. Relación Comunidad-Entidad (Escala de 0 a 10, donde 0 es pésimo, 10 es máximo, estimado por integrantes de la comunidad).
Indicador 1990 2000 2005
Recreación de la comunidad 10 10 10
Oferta de empleo 8 8 8 Capital social 8 8 8
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60
En el Diagrama de Venn construido por los trabajadores y directivos de la UBPC
(figura 11), se hizo evidente que la relación es igualmente importante desde la
entidad hacia la comunidad; nótese cómo fue ubicada bien cerca de la UBPC y
además con doble flecha, lo que refleja que hay una relación en ambos sentidos y
que es realmente cercana e importante para ambos sujetos sociales.
Figura 11. Diagrama de Venn de la UBPC.
3.4 Indicadores de sostenibilidad
3.4.1 Dimensión socioeconómica
Al comparar los indicadores de los años 2000 y 2005 en la dimensión
socioeconómica se observó una tendencia al ascenso ligero de manera general
(tabla 19), lo cual demuestra que se necesita tomar medidas adicionales que
incentiven la realización de actividades que favorezcan el mejoramiento del bienestar
de las personas. El aspecto salud, entre los antes expuestos, fue el único que mostró
UBPC UBPC. R. Paz
BANDEC
PCC Poder
Popular
Indio Hatuey
Comunidad
Acopio
Cultura Deporte
Forestal Itabo
EPM
ETA
CDR
ECIL
Salud ONAT
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61
un comportamiento inverso. Ello se debió a la inestabilidad del médico de la familia
en la comunidad (indicador), la cual es percibida por esta como una desventaja, ya
que, como producto de la restructuración de los servicios primarios de salud en la
nueva coyuntura política latinoamericana, muchos médicos se encuentran prestando
servicios en otros países, cumpliendo con la labor humanista y multiplicadora de
ideas que les ha encomendado la Revolución (figura 10) (ver anexos I y II).
Tabla 19. Dinámica de los aspectos que resumen la evaluación de la dimensión socioeconómica.
Evaluación variables Dimensión Aspecto Variable
2000 2005 Alimento Fuentes de alimentos 53 57 Fuente y capacidad de ingresos Ingreso familiar 35 41
Bienestar Nivel de vida 73 86
Salud Cobertura y calidad de la atención primaria 92 65
Educación Calidad y cobertura de la educación 100 100
Relación Entidad-Comunidad Intervención de la UBPC 78 78
Producción UBPC Producción y reproducción 46 64
Socioeconómica
Economía y finanzas UBPC
Actividad económico-financiera 33 17
Valor dimensión socioeconómica 60 60
VtÑ•àâÄÉ FA exáâÄàtwÉá ç W|ávâá|™Ç
62
0,00
20,00
40,00
60,00
80,00
100,00
Estabilidad delmédico de la
familia
Cobertura delMédico de la
familia
Permanencia delas enfermeras
Suministro demedicinas
2000 2005
Figura 12. Evaluación de la variable cobertura y calidad de la asistencia primaria de salud.
En lo referido a la base productiva, según González, Fernández, Bu, Polanco,
Aguilar, Dresdner y Tansini (2004) el 78% de las entidades económicas de este tipo
reportan pérdidas, y en las que han registrado progreso esto se debe, en general, a
los ingresos derivados de otras actividades no pecuarias. La UBPC en cuestión, en lo
concerniente al resultado económico productivo, no escapa a esta generalidad.
Únicamente se dedica a actividades ganaderas y su desempeño es similar al de la
mayoría de su tipo, que actualmente son irrentables.
Los indicadores evaluados en la variable producción alcanzaron resultados por
debajo de 50 puntos (ver anexo I), excepto los días de lactancia y el período
interparto, que en el año 2005 lograron valores superiores. Sin embargo, la avanzada
edad en el primer parto, la producción por vacas en ordeño, la ganancia de peso y el
porcentaje de natalidad fueron los de peor evaluación.
No obstante, aunque los valores obtenidos en los indicadores estudiados no fueron
óptimos (pues las escalas de desempeño fueron establecidas a partir de valores
promedio, por contar con más de una raza en la entidad estudiada), resulta alentador
100
80
60
40
20
0 Valo
r de
sos
teni
bilid
ad
VtÑ•àâÄÉ FA exáâÄàtwÉá ç W|ávâá|™Ç
63
señalar que, en la mayoría de los casos, igualaron o superaron los obtenidos con
animales criollos en los rebaños genéticos del país en el año 2000 (ver anexo IV).
Los indicadores económicos seleccionados también evidenciaron que existen
diferentes problemas; entre los más analizados se encuentra el referido a las deudas,
el cual indicó la obligatoriedad de esta forma de organización productiva a realizar
todas sus compras a través de créditos; como tantas de su tipo (UBPC), continúa a la
espera de una solución a los problemas que ha enfrentado con el pago de la
dotación inicial, que en cada ejercicio económico sobrecarga sus obligaciones en
aproximadamente 700 000 pesos. Esta cuestión ha devenido en una desmotivación
para los productores, que aunque se esfuercen tienen ese peso cada año sobre sus
economías.
Al respecto, Valdés (1997) expresó. “Un régimen financiero de corte tradicional será
un insuficiente incentivo en la búsqueda de eficiencia e incremento de la producción
y la productividad. Contrariamente, un régimen financiero que no dé cuentas de las
condiciones iniciales del sector será desincentivo a su consolidación y desarrollo”.
Por su parte, los costos mostraron una dinámica preocupante; hubo un aumento
durante los años estudiados, mientras que, de forma inversa, los precios
disminuyeron, situación que determina la ocurrencia de pérdidas económicas. A
pesar de ello, continúan esforzándose y la entidad, aunque con un corto margen, ha
sido capaz de asumir sus obligaciones (cuentas por pagar) con sus activos (efectivo,
inventarios, cuentas por pagar, etc.), lo que le confiere cierta credibilidad ante sus
proveedores (figura 13).
VtÑ•àâÄÉ FA exáâÄàtwÉá ç W|ávâá|™Ç
64
0102030405060708090
100
Liquidéz
Solvencia
Costo por p
eso producid
o total
Costo p
or peso
lech
e
Precio de ve
nta lech
e
Endeudamiento
Margen de
Utilidad
20002005
Figura 13. Indicadores económico-financieros.
A consideración de González, Fernández, Bu, Polanco, Aguilar, Dresdner y Tansini
(2004), existen numerosos factores que limitan el desarrollo de las entidades
agropecuarias y, en general, de la agricultura; a su criterio están fallando las
relaciones económicas a nivel micro (de entidad productiva local o empresa); al
respecto plantean que se debe restructurar el modelo de gestión del productor y que
este debe lograr una alineación de las medidas económicas generales, los objetivos
sociales y el ordenamiento institucional, con los incentivos, regulaciones y
capacidades de decisión de los productores directos; expresan además que existe
una urgente necesidad de recapitalizar el mercado interno de moneda nacional y
crear las condiciones para que la ganadería pueda cerrar por sí misma el ciclo
productivo, sin necesidad de asignaciones discrecionales provenientes de esquemas
financieros ajenos.
Val
or d
e so
sten
ibili
dad
VtÑ•àâÄÉ FA exáâÄàtwÉá ç W|ávâá|™Ç
65
3.4.2 Dimensión ambiental
De acuerdo con los estudios realizados se determinó que la biodiversidad, la
cantidad y calidad del agua y la conservación de los ecosistemas eran los puntos
más débiles de los elementos analizados en la dimensión ambiental (figura 14). Al
comparar su comportamiento se observó una tendencia al aumento ligero, lo cual
indica que existen numerosos aspectos en los que no se ha trabajado lo suficiente
como para lograr un salto significativamente superior (tabla 20).
Figura 14. Evaluación de los componentes del ecosistema.
Tabla 20. Dinámica de los aspectos que resumen la evaluación de la dimensión ambiental.
Evaluación variablesDimensión Aspecto Variable
2000 2005 Conservación del ecosistema 38 44 Calidad y cantidad de agua 40 40 Suelo 63 75 Biodiversidad 0 0
Ambiental Componentes del ecosistema
Disponibilidad de bienes y servicios ambientales 80 80
Valor de la dimensión ambiental 46 49
0,0020,0040,0060,0080,00
100,00
Conserva
ción
AguaSuelo
Biodivers
id ad
B ienes y Se rvi
c ios
2000 2005
100 80 60 40 20 0
Valo
r de
sos
teni
bilid
ad
VtÑ•àâÄÉ FA exáâÄàtwÉá ç W|ávâá|™Ç
66
De manera general, la evaluación comparativa (2000-2005) de la UBPC y la
comunidad objeto de estudio permitió visualizar cuánto se ha avanzado y cuánto
queda por hacer; además, se identificaron los principales problemas sobre los que
deben elaborarse las estrategias de acción y priorizar los aspectos que mayor
influencia tienen en el desarrollo sostenible de la entidad productiva y, por
consiguiente, de la comunidad, poniendo al hombre como solución y parte del
problema.
A través de todo el estudio, los datos procesados han demostrado que existe un
estancamiento en el desarrollo sostenible en la zona, que aunque se ha avanzado en
algunos aspectos se ha empeorado en otros, lo que hace que al promediar resulten
valores similares a los de cinco años atrás. La sostenibilidad se mantiene en un nivel
intermedio, con un valor de 60 para el bienestar humano en cada año evaluado y de
46 y 49, respectivamente, para el bienestar del ecosistema (figura 15).
Figura 15. Barómetro de la sostenibilidad.
Malo Insostenible
Intermedio
Adecuado, casi sostenible
Bueno Sostenible
20 40 60 80 100bueno adecuado medio pobre malo
0
2000 2005
Pobre, casi insostenible
VtÑ•àâÄÉ FA exáâÄàtwÉá ç W|ávâá|™Ç
67
Se analizaron los problemas fundamentales que detienen el avance hacia mejores
resultados, entre los que se citan:
1. La escasez de alimentos y los elevados precios. Escasas tierras para el cultivo
2. La falta de recreación y de cultura
3. La inexistencia de inversiones, que afecta el empleo y el ingreso
4. La necesidad de capacitación
5. La insuficiente transportación
6. Los problemas ambientales que afectan el suelo y el agua
7 La escasez de medicamentos
8 La irrentabilidad de la entidad productiva.
68
Conclusiones y Recomendaciones
VÉÇvÄâá|ÉÇxá
69
CONCLUSIONES
La deuda inicial heredada, la poca posibibilidad de decisión, el difícil acceso a los recursos e insumos necesarios oportunamente, los bajos precios del producto final (por ser un producto social) y la imposibilidad de este tipo de entidad de realizar inversiones que le permitan mejorar sus sistemas productivos, e incluso vincularlos a actividades de cultivos varios que pueden representar una fuente de ingreso o beneficio para sus trabajadores, son factores que se han visualizado como un freno al logro económico productivo de esta forma de organización, que solo encontrará su solución en la restructuración del modelo de gestión del productor, en el que se debe lograr la sintonía entre el objeto social de la entidad y su organización económica e institucional por una parte, y las posibilidades, capacidades e intereses de los trabajadores por la otra.
Con la urbanización del campo, después del triunfo revolucionario, se realizaron numerosas obras en “beneficio” de los asentamientos rurales existentes; ello determinó que la calidad de vida mejorara en detrimento de los ecosistemas naturales, lo cual caracteriza a la comunidad estudiada, a cuyos pobladores les corresponde vivir de esos beneficios pero también de los perjuicios ocasionados. La artificialización de los sistemas naturales de la zona ha provocado numerosos problemas ambientales, para cuya solución requieren una nueva visión integradora y sistémica en cuanto a estrategias medioambientales que demuestren que se puede producir sosteniblemente y mejorar los niveles de satisfacción de los pobladores. En este proceso de cambio han de estar comprometidos e involucrados los pobladores y además los decidores, que son los que, en última instancia, manejan los recursos y toman las decisiones que afectan o benefician a un mayor número de personas.
A pesar de que se han realizado numerosos esfuerzos, es claro que se necesita
una mayor intervención del sector de la I+D+i y de otras instituciones estatales de
desarrollo, en comunidades y entidades agropecuarias del tipo de la estudiada,
que mediante programas de capacitación, proyectos de innovación e incentivos,
potencien los conocimientos y capacidades de los pobladores, trabajadores y
directivos desde una visión holística y adaptativa a las exigencias de un entorno
cada día más cambiante.
exvÉÅxÇwtv|ÉÇxá
70
RECOMENDACIONES
Socializar los resultados del presente documento con pobladores, trabajadores y
directivos.
Trazar estrategias, de conjunto con los actores claves del desarrollo en la entidad
productiva y la comunidad, encaminadas a dar solución a los aspectos que están
lastrando la vida cotidiana de la gente y a aprovechar todas las potencialidades de
la zona.
Establecer un proceso de aprendizaje para los directivos y trabajadores de la
UBPC y para los pobladores de la comunidad, que les facilite los conocimientos
necesarios para manejar sosteniblemente su ecosistema.
Fomentar sistemas productivos amigables con el ambiente, que garanticen el
cuidado y la protección de los ecosistemas y la diversificación de la producción, lo
cual generará el incremento del bienestar de los pobladores y los trabajadores.
71
Referencias bibliográficas
exyxÜxÇv|tá u|uÄ|ÉzÜöy|vtá
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Anexos
Anexo I. Resumen de aspectos, variables e indicadores sin descripción, medición y escala de desempeño.
Dimensión Aspecto Variable Indicador Valor 2000
Valor 2005
Evaluación 2000
Evaluación 2005
Producción de alimentos locales ( UBPC) 35 45 49,2 63,7 Alimentos producidos por sus propios cultivos y ganado 10 10 47 47 Consumo de alimentos silvestres 10 15 50 75 Consumo de alimentos no locales 65 55 49 34,7
Alimentos
Fuentes de alimentos
Compra de alimentos en otras localidades 35 40 64 57,15 Ingreso real sobre ingresos deseados 14% 7% 14 7 Ingresos por familia 1,3 1,3 1,31 1,31 Ingresos por familia 2 2 3 2,04 3,09 Fuentes de ingresos de origen legal 97,5 98,5 97,5 98,5 Importancia del ganado como fuente de ingresos 100 100 100 100
Ingresos Fuentes y capacidad de ingresos
Peso del ingreso proveniente de la ganadería 40 75 14 58 Bienestar humano Nivel de vida Nivel de vida de los habitantes 73 86 73 86
Estabilidad del médico de la familia 100 50 100 0 Cobertura del médico de la familia 100 100 100 100 Permanencia de la enfermera 100 100 100 100 Salud
Calidad y cobertura de la asistencia primaria Suministros de medicina 80% 87% 60 74
Cobertura escolar 100 100 100 100 Educación
Calidad y cobertura de la enseñanza Condiciones de las instalaciones escolares B B 100 100
Ofertas de recreación 10 10 100 100 Oferta de empleo 8 8 70 70 Entidad Comunidad Intervención
comunitaria Desarrollo capital social 8 8 70 70 Producción por vacas en ordeño por día 3.8 4.5 26 50 Días de lactancia 270 268 100 98 Ganancia media de peso por animal 440 444.4 48 49 Período ínter parto 750 460 10 67 Edad al primer parto 38 32 12.5- 50 % de Natalidad: Estima el % de vacas que paren al año 60% 78% 50 95
Producción UBPC Producción y reproducción
Producción por lactancia ¿? 900 ¿? 36 Liquidez 1.08 1.6 54 80 Solvencia 1.07 0.94 53 47 Razón de endeudamiento 92% 99% 10 2 Margen de utilidad 0.045 (92000) 1.5 0 Dinámica del Costo por peso producido total 0 0 0 0 Dinámica del costo por peso (L leche) 0 0 0 0
Socioeconómica
Económico financiero UBPC
Actividad económica
Dinámica del precio de venta leche 10 0 100 0
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2
Dimensión Aspecto Variable Indicador Valor 2000
Valor 2005
Evaluación 2000
Evaluación 2005
Conservación de las tierras forestales 25 35 6,25 18,75
Conservación del ecosistema
Malezas indeseables en los pastizales 6 5 55 44
Calidad y cantidad del agua
Estabilidad de las aguas 4 4 40 40
Productividad de los suelos de cultivos 70 80 62,5 75
Suelo
Productividad de los suelos de pastoreo 70 80 62,5 75
Biodiversidad Cambios en la diversidad de plantas y animales 20 20 0 0 Disponibilidad de leña en el área de marabú 8 8 80 80 Disponibilidad de carbón en el área de marabú. 10 8 100 80 Disponibilidad de animales silvestres
7 7 66.6 66.6
Disponibilidad de alimentos para el ganado. 8 9 75 87,5
Ambiental Componentes del ecosistema
Disponibilidad de bienes y servicios ambientales
Producción de leche, carne, o cultivos según la comunidad.
7 8 66,6 77,7
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3
Anexo II. Ejemplo de Indicadores con descripción, medición y escala de desempeño elaborados para evaluar la sostenibilidad de la UBPC- Comunidad Palma Sola.
Dimensión Aspecto Variable Indicador Valor 2000
Valor 2005
Evaluación 2000
Evaluación 2005
Producción de alimentos locales ( UBPC) Descripción: estima el % de los alimentos que son producidos en la comunidad. Medición: en este caso se evaluó por estimación de la comunidad pero puede medirse por las estadísticas locales. Escala de desempeño: entre 1 y 70%, donde 1 es pésimo y 70 es óptimo.
35 45 49,2 63,7
Alimentos producidos por sus propios cultivos y ganado Descripción: estima el % de los alimentos que son producidos por los propios consumidores en sus predios. Medición: en este caso se evaluó por estimación de la comunidad. Escala de desempeño: entre 1 y 20 %, donde 1 es pésimo y 20 es óptimo
10 10 47 47
Fuentes de ingresos de origen legal Descripción: Obtiene el ingreso obtenido por la vía laboral de forma legal. Medición: fuentes de ingreso mediante su trabajo en empresas y empleos estatales o por cuenta legalizado/ total de fuentes de ingresos x 100. Escala de desempeño: entre cero y 100 donde cero es pésimo y 100 es óptimo.
97,5 98,5 97,5 98,5
Socioeconómica Alimentos Fuentes de alimentos
Dinámica del costo por peso (L leche). Descripción: Estima la evolución de los costos por peso de la producción de leche. Medición: datos de la UBPC Escala de desempeño: Si costo 1- año analizado es mayor que el año analizado es optimo (10), sino es pésimo (0)
0 0 0 0
Producción por vacas en ordeño por día. Descripción: Estima la producción promedio por vaca por día Medición: Producción (Lt)/ vacas en ordeño. Escala de desempeño: Entre 3 y 6 donde 3 es pésimo.
3.8 4.5 26 50
Días de lactancia. Descripción: Estima el nivel de producción considerando que la alimentación y el manejo no sean una limitante. Medición: Estadística de la cooperativa. Escala de desempeño: entre 150 y 270 donde 150 días es pésimo
270 268 100 98
Ganancia media de peso por animal. Descripción: Estima la ganancia media de peso por animal por día. Medición: Estadísticas cooperativa. Escala de desempeño: Entre 700 y 200 Kg por día, donde 700 es el óptimo.
440 444.4 48 49
Período ínter parto: Descripción: Estima el período ínter parto en las vacas con vida reproductiva Medición: Estadísticas cooperativa Escala de desempeño:. Entre 290 y 800 donde 800 pésimo
750 460 10
67
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Anexo III. Cambios en la diversidad de plantas y animales. Según apreciación de personas de larga vida en la comunidad.
Componentes del ecosistema
Especies comunes en el 50 y ausentes o escasas en el
2001
Especies ausentes o escasas en los 50 y comunes en el 2001
Especies siempre ausentes o escasas Especies siempre comunes
Tierras de cultivo Millo, yuquilla, ajonjolí, tomate, melón de castilla, maní, berenjena
Tabaco, soya Melón, malanga, toronja, sorgo, marañón, níspero, guinga
Boniato, pepino, piña, calabaza, plátano
Ríos, lagunas y arroyos
Trucha, camarón de ley, Jaiba, carpa, biajaca criolla, camarón batata, jicotea, guabina, anguila rana toro
Tilapia, anguila, tenca, amura, crisol Manjuarí Rana común
Tierras de pastoreo Algodón, palma cana, peralejo, palma real, yuraguano, mango, limón, guayaba, guayabita del pinar, anón, aguacate, chirimoya
Marabú, Pangola, andropogon Pasto estrella, guinea, king grass caña, stylosanthes, teca
Paloma torcasa, búfalos, perdiz, mulo y burro
Ganado vacuno y equino, caimitillo, venado, maja, jubo, milpiés, jutía. Pastos naturales, Espartillo, Garza, Codorniz
Lomas Arabo, yaya, ácana Soplillo Ébano Guao negro, y de costa, Caimitillo, Almácigo
Bosques y arboledas Caoba, roble, algarrobo, Almendro, Tomeguín del pinar, ateje
Teca, acacia, cedro, mangos de clase
Melón, malanga, toronja, sorgo, marañón, níspero, guinga
Boniato, pepino, piña, calabaza, plátano
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Anexo IV. (Anon, 2000b)
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6
Anexo IV. (Anon, 2000b)
TÇxåÉá
7
Anexo IV. (Anon, 2000b)
TÇxåÉá
8
Anexo V. Indicadores nacionales de la UBPC ganaderas
Indicador / UBPC Ganaderas Nacional
Cantidad de UBPC Ganaderas 705
Que ganan 308
Que pierden 552
UBPC que ganan
Costo por peso de venta 0.78
UBPC que pierden
Costo por peso de venta 1.29
Fuente: González, Fernández, Bu, Polanco, Aguilar, Dresdner & Tansini, 2004
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Anexo VI. Cambios en la calidad de los componentes del ecosistema. Estimación por integrantes de la comunidad. Escala: 10 máxima calidad 0 mínima calidad
Componente Indicador 1950 1960 1970 1980 1990 2000 2005
Arroyo y lagunas • Peces 10 10 8 9 9 9 9 • Refugio de fauna 10 8 6 4 4 4 4
Ríos y humedales • Agua siembra y ganado 10 10 8 6 6 8 8 • Peces 10 10 8 5 5 6 8 • Cambio en la estabilidad de las aguas 10 10 10 10 5 4 4
Lomas • Madera 10 10 8 6 6 6 6 • Lena 10 10 7 5 5 8 8 • Refugio de fauna 10 10 7 5 5 6 6 • Animales silvestres 10 10 8 5 5 6 8
Tierras de Cultivos • Alimentos hombre 5 10 10 5 6 5 8 • Degradación del suelo 10 10 10 8 6 5 4
Tierras de Pastos • Leche y carne 10 10 10 10 8 8 8 • Malezas 10 10 10 10 4 6 5 • Productividad del suelo 10 10 10 10 4 5 6
Tierras forestales • Cambio en el tamaño de los árboles • Productividad 10
10 10 10
10 10
4 4
5 5
6 6
6 6