esstti immaaccióónn sddee leeffeeccttoos dllooccaaleess
TRANSCRIPT
EEssttiimmaacciióónn ddee EEffeecc ttooss LLooccaalleess eenn llaa cciiuuddaadd ddee IIbbaagguuéémmeeddiiaannttee MMoo ddeellaacciióó nn NNuumméé rriiccaa
19
55.. CCAARRAACCTTEERRIIZZAACCIIÓÓNN GGEEOOLLÓÓGGIICCAA YY GGEEOOTTÉÉCCNNIICCAA
De acuerdo al modelo geológico, geomorfológico y geotécnico propuesto en
Escobar (2001) se describen en este capítulo algunas características del suelo de
la ciudad de Ibagué.
La morfología actual de la zona de estudio se le atribuye a fenómenos
relacionados con la sedimentación fluvial, fluvio volcánica y a procesos erosivos y
tectónicos que aún continúan activos pero a menor tasa que en épocas anteriores
por lo tanto se generan continuamente pequeños escarpes, conos de deyección,
cárcavas y deslizamientos.
La ciudad de Ibagué se ubica sobre un abanico fluvio volcánico que cubre un área
de aproximadamente 700 km2, con una longitud de unos 40 km sobre su eje
longitudinal. Es la más grande manifestación de la intensa actividad glacio-
volcánica de la cordillera Central, durante el Holoceno y el Pleistoceno (Diederix et
al., 1987).
Este abanico consta de una acumulación de lahares, flujos de escombros, flujos de
lodos, conglomerados generalmente de origen volcánico y capas de ceniza
transportadas con un espesor aproximado de 150 m.
De esta llanura sobresalen algunos cerros, compuestos por rocas de edad
Paleozoica a Terciaria, como islas en el paisaje del abanico. Al pie de estos cerros
se forman depósitos coluviales como sucede en el caso del cerro de Góngora al
suroeste de Piedras, donde afloran las rocas cristalinas Paleozoicas.
EEssttiimmaacciióónn ddee EEffeecc ttooss LLooccaalleess eenn llaa cciiuuddaadd ddee IIbbaagguuéémmeeddiiaannttee MMoo ddeellaacciióó nn NNuumméé rriiccaa
20
55..11 SITUACIÓN GEOLÓGICA DE LA CIUDAD DE IBAGUÉ
Las formaciones geológicas que afloran en Ibagué y sus alrededores varían en edad
desde el Precámbrico hasta el Cuaternario, su descripción de la más antigua a mas
reciente es la siguiente y se puede observar dichas formaciones geológicas en la Figura
5.1.
AA.. Rocas Metamórficas:
•• Metamórfitas Precámbricas (Pem): Constan de anfibolitas, neises anfibólicos
y mármoles. Se localizan por fuera del área urbanizada, en los cerros al sur-este
de Ibagué.
•• Metamórfitas Paleozóicas (Pm): Complejo polimetamórfico que incluye
esquistos verdes, esquistos y filitas cuarzo- serícíticas, grafitosas y cuarcitas
biotíticas. Se localiza por fuera del área urbanizada al oeste de la falla
Chapetón-Pericos, en dirección de la vía que conduce al nevado del Tolima.
BB.. Rocas Igneas
•• Batolito de Ibagué (Jgd): Aflora sobre el flanco oriental de la cordillera Central,
se localiza en la cadena de cerros en los alrededores de Ibagué al norte y sur.
Lo constituyen rocas en composición granodiorítica, con variaciones a tonalita y
ocasionalmente granito.
•• Rocas Hipoabisales (Tad): Constituyen remanentes de lavas
predominantemente de composición andesítica, algunas veces basáltica, se
conservan geoformas que indican la existencia de antiguos cuellos volcánicos,
evidenciadas por una red de drenaje característica. Se localiza por fuera del
área urbanizada, en los cerros al sur-este de Ibagué.
EEssttiimmaacciióónn ddee EEffeecc ttooss LLooccaalleess eenn llaa cciiuuddaadd ddee IIbbaagguuéémmeeddiiaannttee MMoo ddeellaacciióó nn NNuumméé rriiccaa
21
CC.. Depósitos Cuartenarios
•• Abanico Fluvio – Volcánico de Ibagué (Qld, Qfv2, Qfv1): Es uno de los
depósitos Cuaternarios más extensos del departamento del Tolima. Su origen se
relaciona con múltiples episodios de actividad volcánica y aluvio torrenciales en la
cordillera Central, especialmente en la zona del nevado del Tolima. Los
materiales que lo conforman descendieron por el río Combeima. Quebradas como
Calambeo, Ambalá, Las Pamelas y otras menores han desarrollado abanicos
coalescentes que se superponen por el costado norte al abanico de Ibagué. El
deposito esta expuesto sobre las carreteras Ibagué-Rovira, en el cruce del río
Combeima, Ibagué-Payandé, cerca al río Coello, Ibagué–Alvarado en el paso del
río Alvarado y en la carretera entre el alto de Guandalay y el caserío de
Gualanday.
Absorbe casi la totalidad del desarrollo urbanístico de Ibagué. Tiene mas de
150 m de espesor en la parte más gruesa, conformado por una intercalación de
depósitos de lahar, de flujos de lodo, de depósitos de flujos torrenciales, aluviales
y flujos piroclásticos con pequeñas zonas con depósitos de cenizas volcánicas de
caída (Soeters, 1976).
La fracción gruesa está representada por cantos de rocas volcánicas, intrusivas y
metamórficas, predominante casi siempre las primeras en proporciones muy
variables. Se trata casi siempre de gravas clasto y matriz soportadas, con
diferente grado de cementación y compactación, dependiendo del fenómeno que
le dio origen al depósito.
La parte inferior del abanico está conformada por coladas piroclásticas, flujos de
ceniza y flujos de pumita, asociadas a la actividad explosiva del volcán Nevado
del Tolima y tendrían una edad de 25000 - 14000 (Thouret et al, 1985). Las
coladas pueden observarse en la carretera Ibagué Rovira (río Combeima) y las
coladas de pumitas con gradación inversa aparecen en el barrio el Libertador, por
el carreteable que conduce a Juntas.
EEssttiimmaacciióónn ddee EEffeecc ttooss LLooccaalleess eenn llaa cciiuuddaadd ddee IIbbaagguuéémmeeddiiaannttee MMoo ddeellaacciióó nn NNuumméé rriiccaa
22
•• Fase Deposicional (Qfv1): Deposición mayor del abanico, los materiales
corresponden a la primera y probablemente más voluminosa y violenta de las
fases relacionadas con la actividad del volcán del Tolima. Constituye la región
central del abanico y en la parte media se localiza la carrera 5a desde los barrios
La Pola y Piedra Pintada, y la carretera que conduce al Espinal.
•• Fase Deposicional (Qfv2): Ubicada sobre la Fase Deposicional Qfv1, con un
espesor de 15 a 20 metros, consta de capas limosas y arcillosas de 15 a 40 cm
intercaladas dentro de los lahares, con gravas hasta de 40 cm de espesor, debida
al proceso eruptivo del volcán del Tolima con aporte importante de procesos
fluviales, Se concentra hacia el borde noroccidental del abanico, cerca al canal
del Centenario, iniciándose en la intersección del barrio Fenalco con la avenida
Guabiral para ensancharse progresivamente al Este, en dirección del Salado. En
esta unidad se ubican entre otros, los barrios El Jordán, Simón Bolívar, El
Topacio y el parque deportivo.
•• Depósitos Lagunares (Qdl): Depósitos sedimentarios, con estratificación,
confinados dentro del abanico de Ibagué, asociados a la actividad de la falla de
Ibagué. En el Estadio se compone de limos y arcillas con 2 a 2.5 metros de
espesor. En El Salado consta de capas interestratificadas de arena y arcilla
limosa de 5 metros de espesor, originado por la erupción del volcán Machín hace
3600 millones de años.
•• Fase Deposicional (Qfv3): Nivel de terrazas aluviales del río Combeima,
conformado por lahares con alto grado de material volcánico, debido al
incremento en la actividad volcánica del volcán nevado del Tolima. Se encuentra
dentro de la unidad inmediatamente más antigua, a 40 metros de altura con
respecto al río Combeima. Morfológicamente son terrazas ubicadas a lado y lado
del río. Se ubican en Manuel Murillo, doce de octubre, Popular, Las brisas y
Plazas de Ferias.
EEssttiimmaacciióónn ddee EEffeecc ttooss LLooccaalleess eenn llaa cciiuuddaadd ddee IIbbaagguuéémmeeddiiaannttee MMoo ddeellaacciióó nn NNuumméé rriiccaa
23
•• Fase Deposicional (Qfv4): Nivel de terrazas aluviales del río Combeima
producto del último ciclo del vulcanismo del volcán del Tolima, sus depósitos se
sitúan a lado y lado del curso del río Combeima entre 6 y 15 m de altura. Son
gravas con matriz areno - limosa, moderadamente consolidadas. Se restringe al
cañón actual del río Combeima. Corresponde a la zona de amenaza potencial por
flujo de escombros y lodo de origen volcánico. Están los barrios Yuldaima, Lopéz
de Galarza, Matadero Municipal etc.
•• Abanicos Coluvio Aluviales (Qcd): Aparecen sobre el piedemonte de la ladera
al norte de Ibagué y al sureste sobre la carretera a Armenia, antes del Boquerón.
Se localizan los barrios Ambalá, la Gaviota, Aurora, Ancón, Pablo VI, San Diego,
La Florida, Miramar, Batallón Rooke al suroeste. Se distinguen dos sectores:
Sector Norte: Arenas y limos con gravas muy descompuestos, sobre las llanuras
de inundación se advierten acumulaciones de materiales que contienen gravas de
tamaño bloque.
Sector de la quebrada El Tejar: Cono aluvial complejo, formado por la red de
drenaje de la quebrada El Tejar.
•• Coluviones (Qdp): Depósitos recientes de talus, producto del desgarre de
materiales en la parte alta de las laderas.
•• Terrazas Aluviales (Qt): Son depósitos de poca extensión situados a lo largo del
río Combeima, con diferentes niveles de altura y desarrollo de escarpes
aterrazados, productos de eventos torrenciales recientes como flujos de lodo,
escombros o avalanchas de origen fluvial.
EEssttiimmaacciióónn ddee EEffeecc ttooss LLooccaalleess eenn llaa cciiuuddaadd ddee IIbbaagguuéémmeeddiiaannttee MMoo ddeellaacciióó nn NNuumméé rriiccaa
24
Figura 5.1 Modelo Geológico de Ibagué.(Instituto Geofísico Universidad Javeriana y Consultoría Colombiana, 2000)
EEssttiimmaacciióónn ddee EEffeecc ttooss LLooccaalleess eenn llaa cciiuuddaadd ddee IIbbaagguuéémmeeddiiaannttee MMoo ddeellaacciióó nn NNuumméé rriiccaa
25
55..22 GEOMORFOLOGÍA
55..33 GEOMORFOLOGÍA DE LA CIUDAD DE IBAGUÉ
La delimitación de unidades geomorfológicas para la ciudad de Ibagué se basa
fundamentalmente en el sistema de clasificación fisiográfica del terreno (IGAC, 1992)
que permite jerarquizar una zona, de lo general a lo particular, en diferentes
categorías.
El sistema tiene una estructura piramidal, cuyo vértice lo constituyen las estructuras
geológicas a nivel continental, como son:
Cordilleras de plegamiento
Escudos o cratones
Geosinclinales o grandes cuencas de sedimentación
A partir de las anteriores unidades, surgen cinco categorías o niveles de
generalización fisiográfica, que de lo general a lo particular son:
• Provincia Fisiográfica: Es la primera categoría del sistema, equivalente a una
región morfológica, en la que pueden prevalecer una o más unidades climáticas y
está constituida por conjuntos de unidades genéticas de relieve con relaciones de
parentesco de tipo geológico, topográfico y espacial.
• Unidad climática: Unidad de tierra, dentro de la provincia fisiográfica, cuya
temperatura promedio anual y humedad disponible son lo suficientemente
homogéneas como para reflejarse sobre la génesis de los suelos, distribución de
la vegetación y de los cultivos. Está constituida por el piso térmico altitudinal y el
índice de humedad.
EEssttiimmaacciióónn ddee EEffeecc ttooss LLooccaalleess eenn llaa cciiuuddaadd ddee IIbbaagguuéémmeeddiiaannttee MMoo ddeellaacciióó nn NNuumméé rriiccaa
26
• Gran Paisaje o unidad genética de relieve: Gran porción de tierra constituida por
asociación o complejo de paisajes con relaciones de parentesco de tipo
geogenético, climático, litológico y topográfico.
El parentesco geogenético implica que la morfología general del relieve se debe a
procesos geomórfologicos endógenos y/o exógenos mayores que lo originaron,
tales como el volcanismo, plegamiento, denudación, sedimentación y disolución.
El parentesco litológico se entiende a nivel de grupos de rocas ya sean volcánicas,
plutónicas, sedimentarias y metamórficas. Las relaciones topográficas se dan a
nivel de mesorelieve.
• Paisaje: Son porciones tridimensionales de la superficie terrestre resultantes de
una geogénesis específica, que pueden describirse en términos de unas mismas
características mesoclimáticas, morfológicas, de material litológico y/o edad,
dentro de las cuales puede esperarse una alta homogeneidad en sus
componentes tales como pedología, cobertura vegetal o uso de la tierra similares.
• Subpaisaje: Corresponde a una subdivisión del paisaje, hecha con propósitos
prácticos. Generalmente se recurre a criterios tales como posición dentro del
paisaje, forma y grado de la pendiente, tipo y grado de erosión acelerada,
remoción en masa, clase de condición del drenaje y grado de disección natural o
geológica.
En la Figura 5.2 se presenta el Modelo Geomorfológico de Ibagué. Y en la Tabla
5.1 se presenta la Leyenda de las zonas geomorfológicas del Modelo
Geomorfológico.
EEssttiimmaacciióónn ddee EEffeecc ttooss LLooccaalleess eenn llaa cciiuuddaadd ddee IIbbaagguuéémmeeddiiaannttee MMoo ddeellaacciióó nn NNuumméé rriiccaa
27
Figura 5.2 Modelo Geomorfológico de Ibagué
(Instituto Geofísico Universidad Javeriana y Consultoría Colombiana, 2000)
EEssttiimmaacciióónn ddee EEffeecc ttooss LLooccaalleess eenn llaa cciiuuddaadd ddee IIbbaagguuéémmeeddiiaannttee MMoo ddeellaacciióó nn NNuumméé rriiccaa
28
Tabla 5.2 Leyenda de las Zonas Geomorfológicas de Ibagué
Provincia
Fisiográfica
Unidad
Climática
Gran Paisaje Paisaje Subpaisaje Símbolo
Depresión
del
Magdalena
Cálido Seco Planicie de
Piedemonte
Hidrovolcánica
Abanico antiguo Superficie plano
ondulada
Cs111
Escarpe de
abanico
Cs112
Relieve Montañoso
Fluviogravitacional
Montañas en
rocas ígneas
Laderas en
pendientes
empinadas a
fuertemente
empinadas
Cs211
Abanicos
coalescentes
Superficie plana Cs311
55..44 DDEESSCCRRIIPPCCIIÓÓNN DDEE UUNNIIDDAADDEESS GGEE OOMMOORRFFOOLLÓÓGGIICC AASS
AA.. Laderas en pendientes empinadas a fuertemente empinadas:
Aflora sobre el flanco Este de la cordillera Central y conforma casi un 30% del área
del departamento del Tolima. Lo constituyen rocas en composición granodiorítica,
con variaciones a tonalita y ocasionalmente granito; la composición mineralógica
incluye plagioclasa, ortoclasa, cuarzo, hornblenda y biotita. El batolito está cubierto
discordantemente, por rocas sedimentarias Cretáceas, Terciarias y Cuaternarias
que afloran hacia el valle del Magdalena (Vergara, 1989a).
BB.. Superficie Plano Ondulada:
Es uno de los depósitos cuaternarios más extensos del departamento del Tolima;
su origen se relaciona con múltiples episodios de actividad volcánica y aluvio
torrenciales en la cordillera Central, especialmente en la zona del nevado del
EEssttiimmaacciióónn ddee EEffeecc ttooss LLooccaalleess eenn llaa cciiuuddaadd ddee IIbbaagguuéémmeeddiiaannttee MMoo ddeellaacciióó nn NNuumméé rriiccaa
29
Tolima. El abanico de Ibagué está cubriendo discordantemente a rocas intrusivas
del batolito de Ibagué (Jurásico), a rocas sedimentarias del grupo Gualanday
(Eoceno-Oligoceno) y a rocas sedimentarias de la formación Honda (Mioceno). Los
materiales que lo conforman descendieron por el río Combeima. Quebradas como
Calambeo, Ambalá, Las Pamelas y otras menores han desarrollado abanicos
coalescentes que se superponen por el costado norte al Abanico de Ibagué y se
representan cartográficamente dentro de la misma unidad geológica. El depósito
está expuesto sobre las carreteras Ibagué- Rovira en el cruce del río Combeima;
Ibagué- Payandé cerca al río Coello; Ibagué– Alvarado en el paso del río Alvarado
y en la carretera entre el alto de Guandalay y el caserío de Gualanday.
El depósito tiene espesores que superan los 150 m, aunque normalmente se
estima entre 25 y 50 m. De acuerdo con Moreno y Vergara (1992) e Ingeominas
(1992), el abanico de Ibagué está constituido por intercalaciones de depósitos de
lahares, aluviales, glaciales, aluvio- torrenciales y flujos piroclásticos con pequeñas
zonas con depósitos de cenizas volcánicas de caída (Soeters, 1976). La fracción
gruesa está representada por cantos de rocas volcánicas intrusivas y
metamórficas, predominando casi siempre las primeras en proporciones muy
variables. Se trata casi siempre de gravas clasto y matriz soportadas, con diferente
grado de cementación y compactación, dependiendo del fenómeno que le dio
origen al depósito.
La parte inferior del abanico está conformada por coladas piroclásticas, flujos de
ceniza y flujos de pumita, asociadas a la actividad explosiva del volcán Nevado del
Tolima y tendrían una edad de 14000- 25000 años (Thouret et al., 1985). Las
coladas pueden observarse en la carretera Ibagué Rovira (río Combeima) y las
coladas de pumitas con gradación inversa aparecen en el barrio el Libertador, por
el carreteable que conduce a Juntas.
Espesos flujos de lodo se encuentran intercalados o cubriendo los depósitos
piroclásticos mientras que la parte superior del cono o abanico está conformada
por depósitos aluviales, con facies torrenciales.
EEssttiimmaacciióónn ddee EEffeecc ttooss LLooccaalleess eenn llaa cciiuuddaadd ddee IIbbaagguuéémmeeddiiaannttee MMoo ddeellaacciióó nn NNuumméé rriiccaa
30
De acuerdo con Acosta y Ramírez (1985), los fragmentos líticos del abanico
corresponden en un 85% a rocas volcánicas andesíticas, en un 10% a rocas
metamórficas (neis, cuarcitas y esquistos) y el 5 % son rocas intrusivas del Batolito
de Ibagué.
55..55 RRAASS GGOOSS GG EEOOMMÓÓRRFFIICCOOSS
La morfología actual se le atribuye a la sedimentación fluvial, fluvio volcánica y a
procesos erosivos y tectónicos que aún continúan activos pero a menor tasa que en
épocas anteriores por lo tanto se generan continuamente pequeños escarpes,
conos de deyección, cárcavas y deslizamientos.
Según Ingeominas (1992) se identificaron 4 unidades morfológicas:
•• Zona montañosa.
•• Abanico fluvio-volcánico.
•• Conos aluviales.
•• Terrazas del río Combeima.
AA.. Laderas en pendientes empinadas a fuertemente empinadas (Zona
Montañosa): Circunda el área de estudio, con altura entre 1000 y 2500 msnm y
las pendientes predominantes van de 15 a 50 grados, posee un drenaje dendrítico
y subrectangular, perteneciente a rocas ígneas y metamórficas.
BB.. Superficie plano ondulada (Abanico Fluvio Volcánico): Comprende más del
80% del área urbana. Es un depósito del piedemonte de la cordillera; la extensión
es de 700 km2 y el espesor en algunos sitios es mayor a 150 m. La superficie es
ondulada con inclinación de 2 a 3 grados al Este. El entalle del río Combeima
alcanza 80 m de profundidad.
EEssttiimmaacciióónn ddee EEffeecc ttooss LLooccaalleess eenn llaa cciiuuddaadd ddee IIbbaagguuéémmeeddiiaannttee MMoo ddeellaacciióó nn NNuumméé rriiccaa
31
Por el parque Centenario cruza un paleocauce de 10 a 15 m de profundidad que
corresponde al lecho antiguo de un río, sugiriendo la ocurrencia de un evento
volcánico o tectónico que ocasionó el abandono del cauce.
Otro rasgo morfológico es un escarpe rectilíneo de 6 a 8 metros de altura que
atraviesa la ciudad por una longitud de 6 km, siguiendo la traza de la quebrada El
Hato de la Virgen, perteneciente una parte a la traza de la falla de Ibagué.
CC.. Superficie plana (Conos Coluvio-Aluviales): Son varios cuerpos formados de
abanicos de tamaños pequeños, ubicados al norte y al Sureste de Ibagué. A estos
pertenecen los conos aluviales de las quebradas El Tejar, Las Panelas, Cristal y
los conos donde se ubican los barrios La Gaviota, Ambalá, Aurora, Ancón, Pablo
VI y San Diego.
DD.. Escarpe del abanico (Terrazas del río Combeima): Son varias terrazas
escalonadas que se presentan a lado y lado del río Combeima. Estas son
posteriores a la sedimentación del abanico de Ibagué. El Cañón del río se
estrecha considerablemente aguas abajo del barrio Las Brisas, lo cual podría
relacionarse con actividad reciente de la falla de Ibagué, cuya traza atraviesa el río
Combeima por este sector.
55..33 TTEECCTTÓÓNNIICCAA YY GGEEOOLLOOGGÍÍAA EESSTTRRUUCCTTUURRAALL
La tectónica dominante es de tipo compresivo, con el desarrollo de grandes fallas
inversas y de tipo transformacional, la cual ha tenido su desarrollo desde el
cretáceo hasta el cuaternario, íntimamente ligadas a los procesos orogénicos de
levantamiento de las actuales cordilleras y formación de la cuenca del valle
Superior del Magdalena que ha dado como resultado una tectónica compleja.
EEssttiimmaacciióónn ddee EEffeecc ttooss LLooccaalleess eenn llaa cciiuuddaadd ddee IIbbaagguuéémmeeddiiaannttee MMoo ddeellaacciióó nn NNuumméé rriiccaa
32
Tal situación determina el desarrollo de numerosos planos de fracturamiento y
diaclasamiento, lo cual favorece, dependiendo de las condiciones
hidrometeorológicas, la descomposición acelerada de la roca y desarrollo de
movimientos masales de diferente magnitud.
Los patrones de fallamiento presentados son de direcciones predominantes
noreste-suroeste y norte-sur, con algunos sistemas transversales asociados a fallas
mayores.
Se destacan como los más importantes por su longitud y relación con la geología
regional las siguientes estructuras:
•• Falla Chapetón-Pericos
Es una estructura que presenta una disposición general NE-SW, con movimientos
verticales de magnitud importante. Es de tipo inverso. Separa rocas metamórficas
del Precámbrico y Paleozoico de la cordillera Central entre el occidente de Ibagué y
norte del departamento en donde se une con la falla de Otú.
En esta falla se describe un fragmento de falla de 25 km. que se reconoció en la
inspección de policía de Cay, municipio de Ibagué, de los cuales en 5 km. se
presentan indicios débiles de neotectónica. De acuerdo con interpretaciones
geológicas y con dirección del campo de esfuerzos tectónico actuante, la falla es de
movimiento inverso y componente dextral; la componente lateral derecha fue
deducida a partir de análisis al microscopio de microestructuras (Vergara y
Cárdenas, 1999). Se clasifica como potencialmente activa.
Una característica importante de la falla de Pericos es que posee una zona de falla
que en concepto de Restrepo- Pace (1992) tiene aproximadamente 1.5 km. de
EEssttiimmaacciióónn ddee EEffeecc ttooss LLooccaalleess eenn llaa cciiuuddaadd ddee IIbbaagguuéémmeeddiiaannttee MMoo ddeellaacciióó nn NNuumméé rriiccaa
33
amplitud. En ella se conjugan fallas asociadas que separan bloques de rocas
graníticas y metamórficas muy deformadas y cizalladas.
•• Falla de Honda y Mulatos
Limita la depresión del valle medio alto del Magdalena por el oriente y occidente,
respectivamente; son clasificadas como potencialmente activas (Vergara, 1989).
La falla de Honda está expuesta en el noreste del departamento cerca a Honda.
Vergara (1989) reporta la existencia de rasgos característicos de actividad
tectónica en el Cuaternario y posible actividad sísmica reciente en su zona de
influencia, sin embargo, los datos disponibles no permiten clasificarla como activa.
La falla Mulatos bordea la cordillera Central limitando rocas antiguas del borde
oriental de la cordillera y rocas sedimentarias del Plio - Cuaternario del valle del
Magdalena, su traza esta bien definida por el cambio topográfico. Vergara Y
Cardenas (1999) la identifica como tipo inverso buzando al oeste; su movimiento
neotectónico se demuestra por 500 metros de desplazamiento vertical de la
formación Mesa de edad Plioceno, permitiendo inferir tasas bajas y su calidad de
potencialmente activa.
•• Sistema de fallas La Chusma y La Colorada - Samaria
Sur del departamento, marca el límite entre el valle superior del Magdalena y la
cordillera Central. Los estudios de Vergara y otros, indican la existencia de tramos
con indicios fuertes de actividad neotectónica. Son fallas inversas con componente
de rumbo (Vergara et al.,1996).
•• Falla San Rafael
Esta estructura se extiende desde el municipio de Rovira al Sur hasta el río
Cocora, controlando estructuralmente la quebrada San Rafael. Esta estructura
afecta rocas del batolito de Ibagué, causando fracturamiento intenso del mismo.
Esta falla es de tipo inverso.
EEssttiimmaacciióónn ddee EEffeecc ttooss LLooccaalleess eenn llaa cciiuuddaadd ddee IIbbaagguuéémmeeddiiaannttee MMoo ddeellaacciióó nn NNuumméé rriiccaa
34
•• Falla de la quebrada La Plata
Esta estructura se extiende desde el sureste del municipio de Cajamarca y
continua al Noreste, al parecer ejerce el control estructural del volcán Machín, la
quebrada Samú y la quebrada la Plata; generando en estas últimas un intenso
fracturamiento de rocas del grupo Cajamarca, originando desprendimientos de
gran magnitud encausados por estos drenajes. Esta falla presenta un carácter de
tipo transcurrente.
•• Falla de Ibagué
Presenta claras evidencias de actividad tectónica en el Cuaternario (Diederix et al.,
1987; Murcia y Vergara, 1986) detectaron actividad en el Holoceno y calculó una
magnitud sísmica probable de ML=7 por lo que se considera como activa. Su
importancia radica en que su trazo atraviesa la ciudad de Ibagué con dirección
N70E (Figura 8, Jaramillo et al., 2000).
Tiene alrededor de 100 km dentro del departamento, de los cuales 80 presentan
indicios fuertes de actividad en el Cuaternario. Este rasgo estructural atraviesa la
ciudad por el sitio el Boquerón, continua cerca del Batallón de Infantería Jaime
Rook, pasa por la Universidad del Tolima y por los barrios Santa Helena, Piedra
Pintada, El Jordán y el Topacio continuándose hacia el NE por el Abanico de
Ibagué y siguiendo su trazo cerca de la localidad de Piedras, como se observa en
la figura 8. La ruptura en superficie del abanico de Ibagué de edad Cuaternario, es
el rasgo neotectónico más contundente para darle categoría de falla activa y tasa
de movimiento moderada a alta. Actualmente el movimiento predominante de la
falla de Ibagué es transcurrente con desplazamiento dextrolateral, aunque
presenta algunos desplazamientos pequeños y de tipo inverso.
Por análisis geomorfológicos se ha deducido que los cauces de las quebradas El
Sillón y El Salto, localizadas al sur del estadio de la ciudad, están desplazados 90
m, por movimientos dextrolaterales. Para una edad Cuaternario temprano -
Cuaternario medio (Murcia y Vergara, 1986), para los flujos piroclásticos que al ser
EEssttiimmaacciióónn ddee EEffeecc ttooss LLooccaalleess eenn llaa cciiuuddaadd ddee IIbbaagguuéémmeeddiiaannttee MMoo ddeellaacciióó nn NNuumméé rriiccaa
35
removidos formaron el abanico de Ibagué, obtuvo ratas de fallamiento de 0.007
mm/año para los desplazamientos verticales inversos y de 0.08 mm/año para los
movimientos dextrolaterales. El hecho de que la traza de esta falla cruce por zonas
densamente pobladas, la hace potencialmente peligrosa.
•• La falla de Buenos Aires esta inferida por su expresión geomorfológica, con
indicios de actividad después de la depositación del abanico fluvio-volcánico, como
posible corroboración del movimiento de la falla de Ibagué. La intersección de la
falla de Buenos Aires con la falla de Ibagué se encuentra en plena zona urbana de
la ciudad, en el barrio Piedra Pintada Alto.
55..44 CCAARRAACCTTEERRIIZZAACCIIÓÓNN GGEEOOTTÉÉ CCNNIICCAA
En el modelo geotectónico se consideran dos grandes zonas: La zona montañosa
(M) y la zona plana (P). En la zona montañosa, se evalúa la susceptibilidad de los
materiales al deslizamiento; en la zona plana se califica la aptitud de los materiales
para soportar las fundaciones de las estructuras. Cada zona se dividió en tantas
sub-zonas como fue necesario, de acuerdo con las características geotécnicas
previstas para los materiales presentes. Los materiales se clasifican como IM, IIM,
IIIM y IVM ó IP, IIP, IIIP, IVP, VP de más competentes a menos competentes.
Se pueden observcar cuatro (4) sub-zonas (IM, IIM, IIIM y IVM) en la zona
montañosa y cinco (5) sub-zonas (IP, IIP, IIIP, IVP y VP) en la zona plana, como se
puede ver en la Figura 5.3.
La sub-zona IM está constituida por rocas duras: anfibolitas, neises anfibólicos y
mármoles. La sub-zona IIM está conformada por remanentes de lavas de
composición andesítica y basáltica, en los cuales se conservan geoformas que
indican la existencia de antiguos cuellos volcánicos. La sub-zona IIIM está
constituida por suelos residuales del batolito de Ibaqué; estos materiales consisten
de arenas limosas (SM) y limos inorgánicos (ML) de baja resistencia al corte y
EEssttiimmaacciióónn ddee EEffeecc ttooss LLooccaalleess eenn llaa cciiuuddaadd ddee IIbbaagguuéémmeeddiiaannttee MMoo ddeellaacciióó nn NNuumméé rriiccaa
36
susceptibles a la erosión; el espesor del suelo residual sobre la roca meteorizada
puede ser mayor de 10 m en algunos sitios. La sub-zona IVM está constituida por
depósitos coluviales y coluvio-aluviales del piedemonte; estos materiales están
compuestos por arenas y limos con gravas muy descompuestos.
La sub-zona IP está constituida por suelos de depósitos fluvio-volcánicos; se trata de
depósitos heterogéneos compuestos por fragmentos de hasta 2 m de tamaño en una
matriz de limos inorgánicos (ML), arenas limosas (SM), arenas arcillosas (SC) y arenas
con grava (SP); los materiales poseen ligera cementación y buena capacidad portante. La
sub-zona IIP está compuesta por suelos fluvio-volcánicos del último ciclo de vulcanismo
del volcán del Tolima; se trata de gravas en matriz areno-limosa, moderadamente
consolidadas; se encuentran a lado y lado del río Combeima. La sub-zona IIIP está
constituida por depósitos piroclásticos; se trata de suelos volcánicos moderadamente
compactos; consta de limos y arcillas de baja plasticidad (ML, CL), arenas limosas y
arcillosas (SM, SC) y ocasionalmente, limos y arcillas de alta plasticidad; la capacidad
portante es media a alta; La sub-zona IVP esta compuesta por sedimentos de origen
lagunar; se trata de suelos de naturaleza cohesiva, limos orgánicos de baja plasticidad
(OL) ó arcillas de baja plasticidad (OH) y arenas arcillosas de baja plasticidad (SC). Son
depósitos de poca extensión y un espesor de aproximadamente 5 m. La sub-zona VP está
constituida por materiales de las llanuras de inundación y de depósitos de canal (río
Combeima, quebrada Chipalo y afluentes mayores); se trata de materiales heterogéneos
compuestos por gravas arenosas, gravas limosas e intercalaciones lenticulares de arenas
y limos, formando niveles planos y aterrazados; el nivel freático es poco profundo y oscila
con el nivel de agua en la corriente.
El Modelo Geotécnico se muestra en la Figura 5.3.
EEssttiimmaacciióónn ddee EEffeecc ttooss LLooccaalleess eenn llaa cciiuuddaadd ddee IIbbaagguuéémmeeddiiaannttee MMoo ddeellaacciióó nn NNuumméé rriiccaa
37
Figura 5.3 Modelo Geotécnico de Ibagué(Instituto Geofísico Universidad Javeriana y Consultoría Colombiana, 2000
EEssttiimmaacciióónn ddee EEffeecc ttooss LLooccaalleess eenn llaa cciiuuddaadd ddee IIbbaagguuéémmeeddiiaannttee MMoo ddeellaacciióó nn NNuumméé rriiccaa
38
55..55 Exploración del Subsuelo
La información geotécnica proviene de la recopilación y análisis realizado por
Martínez (2001). En éstos estudios se encuentran ensayos de laboratorio
realizados en las muestras tomadas en los sondeos, obteniendo las propiedades
estáticas de los diferentes tipos de suelo en la ciudad. Entre las propiedades
estáticas más relevantes tenemos: la estratigrafía, densidades, límites de Atterberg,
número de golpes del ensayo de penetración estándar y resistencia a la
compresión inconfinada.
Para obtener sondeos representativos para la aplicación del método de simulación
numérica han sido analizados un total 274 perforaciones. En total han sido
definidos 108 sondeos representativos, cuyo nombre orientativo, fuente y
localización puede observarse en la Tabla 5.1.
En la Figura 5.4 se presenta la localización de los 108 sondeos en la base
cartográfica de Ibagué.
EEssttiimmaacciióónn ddee EEffeecc ttooss LLooccaalleess eenn llaa cciiuuddaadd ddee IIbbaagguuéémmeeddiiaannttee MMoo ddeellaacciióó nn NNuumméé rriiccaa
39
Tabla 5.1. Sondeos utilizados en la modelación numérica.
Estudio
No.
Número de
SondeosEmpresa Consultora Localización
Zona
Geotécnica
1 3 Luis Enrique Velázquez Cra 7A No. 12-54 IIIP
2 3 Luis Enrique Velázquez Universidad Antonio Nariño IIIP
3 3 Luis Enrique Velázquez AV. 15 con Cra 4a IIIP
4 1 Luis Enrique Velázquez Cra 2a No. 1-36 IP
5 4 Luis Enrique Velázquez Calle 38 con Cra 2 IP
6 3 Luis Enrique Velázquez AV. 15 Calle 37 Cra 13 IP
7 4 Luis Enrique Velázquez Cra 6a con Calle 36 IP
8 9 Luis Enrique Velázquez Urbanización Andalucía IP
9 2 Luis Enrique Velázquez Cra 11 No. 79A-16 IVM
10 6 Luis Enrique Velázquez Calle 72 con Cra 2a IP
11 3 Edgar Langebeck B. Carlos Lleras Restrepo IVP
12 3 Edgar Langebeck Cra 14 No.47-35 IP
13 2 Jairo Helí Caballero Avenida Ambalá No. 64-20 IVM
14 2 Jairo Helí Caballero Zona Industrial el Papayo IP
15 3 Jairo Helí Caballero Calle 68A No. 2Bis -36 IP
16 9 Carlos Javier Callejas Conjunto El Salado IVP
17 6
Consultores Civiles
Asociados San José de Calmabeo
IIIM
18 14
Consultores Civiles
Asociados Proyecto San Isidro
IIIM
19 2
Proyectos Civiles y
Arquitec. Barrio Ricaurte
IP
20 6 Alvaro Guerrero Pardo
Av. Ferrocarril con Calle
42/43
IP
21 4 Miguel E. Baquero Cra 11A con Calle 37A IP
22 13 Edgar Langebeck Coorbanca -
23 3 Edgar Langebeck Cra 47 Sur Calle 120 IIIP
EEssttiimmaacciióónn ddee EEffeecc ttooss LLooccaalleess eenn llaa cciiuuddaadd ddee IIbbaagguuéémmeeddiiaannttee MMoo ddeellaacciióó nn NNuumméé rriiccaa
40
Figura 5.4 Localización de los sondeos utilizados en la modelación numérica