el seminario trÂd1ci0nalista «la verdad»

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Page 1: EL SEMINARIO TRÂD1CI0NALISTA «La Verdad»

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<§aii/o a nuesfzc atfiadtsiniö M**» La Redacción.

Qzanada 24 de Sufic de- /9/0.

Page 2: EL SEMINARIO TRÂD1CI0NALISTA «La Verdad»

LA VERHAU

EL 25 PE JULIO CJI^BCHA memorable es esta para los

M . ,amantes, de l a t r ad ic ión , por­que en el la se conmemora la festivi­dad del Santo Apóstol Santiago Pa­t rón de las Espafias y porque en e l la t amb ién celebra su fiesta o n o m á s t i c a el Caudi l lo amado D. Ja ime de Bor-b'ón.

Y en efecto; Santiago.;, el Hijo del : trueno, . el Apóstol de las Espafias. fué el que en esta nación, predestina­da p r end ió esa hoguera, inmensa é inexlingui-ble, que a t r a v é s . d e diez y nueve siglos y entre terribles perse-cusiones caldea á los hispanos pechos en e l a lmor santo de la Religión del Crucif icado. Guando l a Reina de los Angeles M a r í a San t í s ima , vino á Z a ragoza en carne mortal á visi tar al pueblo que escogió como suyo. San­tiago fué el n inicio de ca r idad celes­t ia l que nos p r e p a r ó pa ra tan mi la -

. grosa visita; él .fué t a m b i é n el que en Za ragoza rec ibió de l a ' S a n t í s i m a V i r g e n el P i l a r Santo, dulce prenda y testimonio perenne de la predi leción

„ con que M a r í a nos distingue. Cuando las e s p a ñ o l a s huestes se hal laban em­p e ñ a d a s ¿ en. acue l l a t i t án ica luoha ocho veces secular cont ra e! poder de l a media luna , Santiago fué el pro lector de los e spaño l e s , hasta el pun­to de auxi l ia r los visiblemente con su milagrosa presencia en los campos de ba ta l l a . Y por úl t imo, cuando en nuestra historia patr ia se gravaron esas paginas inmortales, que con sus resplandores gloriosos son aún el asombro de la •humanidad, Santiago fué el sos tén , el patrocinio y el i m ­pulso de tan magnas empresas.

Por eso en ei c o r a z ó n de ios espa­ñoles tuyo, siempre l a memoria del Santo Aposto) un lugar, preferente y ante su.bendito cuerpo lo mismo ofre­cieron su filial, tr ibuto los hispanos pechos .que prestaron . rendido ho­menaje-las gloriosas banderas, , las" armas í j ivencib les y los . poderosos cetros d e j a . n a c i ó n e s p a ñ o l a .

T a m b i é n en este d ía y como coin­cidencia providencia l , celebramos la fiesta o n o m á s t i c a del Augusto Candi l io .D.- J a ime .de - Borbón . que soste­niendo , incansable . l a bandera de la verdad; y , puerta su confianza en Dios, aspira á t remolar la vic tor iosa sobre s'U pueblo, cubriendo con . e l la á los que h,oy. suspiran bajo el . peso abrumador de.,1a he re j í a , moderna. En este d ía junto á l a celestial figura del p a t r ó n de E s p a ñ a se a l za l a del Augusto Desterrado, que haciendo

: . suya la. causa del Santo Após to l no t a r d a r á , en hacer la triunfar de- los enemigos por que no le ha de faltar el poderoso auxi l io del Hijo del True­no. E n r e s t é d ía por ú l t i m o , recordan­do que somos los protegidos de Santia­go y l o s p a r t í d a r i o s de D. Jaime, nues-

• - 7 tro c o r a z ó n se l lena de esperanza y de nuestros labios brota en alas

•-del amor y del entusiasmo un doble grito que 'encierra todo un poema He honnx y á's glorias grito que parece resonar ya en estos d ías por toda Es p a ñ a y que cual c la r ín guerrero congrega presurosos á los soldados de la T rad i c ión que t a m b i é n repiten en medio de sus bélicos ardores:

r.jViva Santiago Pa t rón de las Es-

D. Jaime Salvador de la pañas !»

«¡Viva

B A S I L I * .

Un gran problema A D. José Luis Andrada Waudewilde-

?N la vida de los pueblos lo mismo que en la vida de los individúes

hay cié . tos hechos al parecer incom­prensibles de los que la Providencia se vale para cumplir sus inapelables desig. nÍ03. L a Filosofía de de la Historia, que

ha llegado ha descubrir algunas leyes que rigen !a vida de la Humanidad en; su desenvolvimiento, no se encuentra con el suficiente desar.olío pfira desentrañar el gran problema del Tradicionalismo español.

E l hecho singular, acaecido en el pri -nifr tercio del sigio pasado, por el cual una falange de católico?, inspirándose en la constitución de Sa monarquía españo­la se pone frente a la avalancha raciona-lista-l'beral que nos legara la Revolución Francesa y elige por Caudillo al genio representante de nuestras gloriosas tra­diciones, no.es ciertamente un pleito di­nástico, ns es una cuestión porsonal que la historia ha consignado zn sus anales, porque los individuos como los pueblos en la historia, por si, no valen nada si significan otra cosa qut el instrumento providencial que cambia con las vicisitu­des de los tiempos; y para confirmarlo ahí esti la historia de todas las edades: ¿qué significa el cambio de dinastía y el flujo y reflujo que acontece en la Histo­ria?. .. E l Tradicionalismo español es al gp más hondo q«e vive en la conciencia nacional y que eslá lian adG como agen­te histórico á cumplir su finalidad enei tien po y en el espseio.

¿Cuando sonara la hora en el reloj de la Providencia*? —Esa es la incognita que el tiempo de ifrará.

¿Cual será su. alcance y transcenden­cia? _ Si tenemos en cuenta que el pre­grama tradizionalista es un programa social.político y religieso y que en todas las esferas, de la vida, artística, literaria, científica, etc. se levanta como fortaleza inexpugnable frente á las instituciones lib otarias,y. racionalista?, le auguré nios colosal importancia que enmbiará el roo , do serien SL_esencia y constitución, de

-la sociedad e? peñóla.

L a Filosofía de la Historia nos. da cnatro leyes sobre ¡as que descansa todo, su organismo: la ley de la generador, la. ley de la propaganda, la ley de ia asimi­lación y. la ley del progreso. Según es­tas leyes,, universalmente admitidas,-co. h-3.y.. actos indif.rentes en la vida de les pueblos.

Si e' TrrdicionaHsmo ha de cambiar-tan radicalmente, como dejamos con­sigli? do, la sociedad española, influirá como nos enseña )a, ;Historia, en la vida de.los demás pueblos. Ésta influencia sera tanto m. yor. cuanto que el campo, católico en Europa y. América, se pre­para á recibir u",scb< rano im julso. ¿Se­rá el Tradicionalismo español, en. elite-:

de las ideas .y de I s. hecho.-, la Ocvador ga-cíe la Iglesia Caióiics? ¿^erá el pleito dinástico cr.tre Carlos V y doña Isa! ei, hecrío al parecer insignificante, instrumento de.ia Providencia para altos fines?—La Historia con* s»: fallo inapela­ble io dirá al correr r'e los tiempos mien­tras tanto, nosotros con el corazón Heno..' de fe caminemos denodadamente por la senda trazada y devenios úi nuestro sé--' ÜO el depósito Sagrado de tes tradicio­nes patrias á la maner? COTIO el pueblo hebreo llevaba en ei suyo el Mesías pro­metido.en la ley y en loe Profetas.

¡Corazones generosos que formáis la" gran Comunión tradíctonalista!: Vos ­otros sois los mártires de la idea y seréis la admiración de las generaciones veni­deras. Ante el recuerdo de vuestras vir -tudes civico-religiosas se descubrirán con respeto vuestros hijes.

A N T O N I O P E R E Z M E D I N A

«rj jjj L Tradic iona l i smo es la c r i s l a l i -AC¿ zac ión de las vir tudes e s p a ñ o l a s

L a cabal leresca h i d a l g u í a de n ú e s tros siglos grandes, l a solidez del es­píri tu, cr is t iano, la leal tad m o n á r q u i ­ca a c e n d r a d í s i m a b r i l l an con piw e.za inmaculada en nuestra bandera..

E l esp í r i tu de sacrif icio es su fondo. E l respeto humano, las miras mer-can l i l i s l a s de una sociedad venal , el sarcasmo del e x c é p t i c o y el g r u ñ i d o del material ista le hacen blanco de sus dardos.

Pero es jus t i c i a el t radicional ismo y no t iembla; es verdad y no cede; es belleza y no se e m p a ñ a .

Cada adepto es un h é r o e ; su luchar es obstinado y e n é r g i c o ; sus enemigos incontables y poderosos; l a esperan­z a del triunfo, remota .

T5ada adepto es un cabal lero; no.es su objeto el lucro; no es.su i lusión el presupuesto, ,

L a justicia,de Dios, és su fin. ¿Quién piensa en' l a a ñ a d i d u r a ?

E l t radicionalismo es el campo-de las almas fuertes.

Cuando estas.se apa r t an . de él , ó no l legan, están fuer¿i .de su elemento y no viyen ó enloquecen. -

De a h í m u c h o s furores sectarios ó i dea 1 ism os ext raviados .

T raed hombres a l t radicionalismo" y. e s l e ; o s ; d a r á cabal leros , h é r o e s , es­paño l e s . No. puede ser hijo de E s p a ñ a , quien m a l d i c e ' ó reniega de.su Histo­ria.- '-v;-

/ No: .coniprendo - como., h a y a - almas graneles que no ,cor ran á é l .

Pero- comprendo,. menos que los hombres q.ue v iven l a y i d a - d e l espiri-

.tu no sean.sus avanzadas y sus más ardientes; defensores.

: F R A N C I S C O S O T O G A R M Ó N A . -

za heroica que tu titos días de gloria diera á su pa t r ia y que sus propios vicios, sus mismas indolencias l a ha-bían hecho despreciable; y h a b r í a desaparecido pa ra siempre su nom­bre si no hubiera habido corazones que lat ieran bajo el impulso de pasa-das grandezas, pechos que alentaran y mantuvieran dos ideales grandio­sos, dos ideales-.sublimes: Dios y ]' a

Pa t r i a . Eran los. indómi tosh i jos de las moni

l a ñ a s , que no respiraron aquel co­rrompido aire de muerte.-

;Jbau á permanecer indiferentes viendo pisoteada la Cruz y derrocado el trono, de sus mayores? No fueran hijos dignos de la noble L.eri.a si tal hic ieran. '

Por .eso se a lzó .un caudil lo que pu­so en sus manos la Cruz y en sus^ la­bios el glorioso nombre de Santiago y con este nombre bendito y , aquel sacrosanto emblema hizo, frente y venc ió a l enemigo.

Y E s p a ñ a fué grande; y España fué poderesa.

Triste es confesarlo, pero, no por se1' lan sensible á los corazones pa­triotas deja de ser menos cier.lo.

L a E s o a ñ a de ahora es, l a España d e D Rodrigo ." ' - ( -

.>ojnos frivolos como ellos,, ..débiles y apocados como ellos.

Y para que el cuadro r e s u d é más rea!.. t ambién ¡os enemigos de nues­tra rel igión nos rodean y estrechan hasta, sofocarnos, y acaso-no falten traidores que ' como 1). J u l i á n les habrar». las puertas. -. Si somos patriotas., si somos caba­lleros, si,somos cristianos, es fuerza que v.ojvamos la vista a t r á s y recor­dando. la. figura, be D'- Pe layo y po­niendo muy a l ta la c juz . gritemos animados del m is m o sentimiento: «.S.antiago y á ellos.»

M. D E - V i L L E N A . _

Libertad,- pero\abajo los conventos: Libertad, per;o al fraile echadlo fuera:.. Libertad, sí, pero la monja muera: Libertad, para:-estar, de ley-exentos: Libertad, libertad:;vengan tus vientos: ) Libertad para hacer, lo que.yo quiera: '.. Libertad para mí la pido entera: ; ' Libertad de emitir mis pensamientos: Libertad, y,que enseñe el ignorante: TJbertad, sí,.pero qué en Dios.no creásV :

Libertad para el pi l lo y eLtunante: Libertad á -las bombas -yalas teas.. Libertad,, libertad, tan repugnante4,-Abomino de tí ¡Maldita.seas!-.

J O S É S E R R A N O AGUILERA.-

% ^ 3 Ü E R A a m b i c i ó n , ó perfidia ó. ruin venganza improp ia de cabal le­

ros crist ianos, lo c ie r io fué. que.se abrieiori las puertas de la I b c i a v cal lermi sobre el suelo español cob irresistible empuje los faná t i cos mu­sulmanes, eternos enemigos de nues­t ra raza , imphicables enemjg-os de l asac rosan ta Ciuz.;. - Y¡el pueblo e spaño l que descausa­

ba muellemente sobre tos placeres de una vida l icenciosa, sensual y grose-. r a , tan apto para hacer, ga l a de sus vicios como iniuibi l pa ra tomar las armas del guerrero, no pudo encon­t ra r en tr e • 1 o s - p ! i eg u es d e - s u re fi \ i ad a " ma l ic ia aquel la generosidad y noble­za de sentimientos, aquel valor heroi­co cap¿iz de resis t i r l à fiera pujanza de sus temibles adversar ios .

Y-cae bajo las plantas del enemigo, aquel la r a z a de val ientes , aquel la r a -

D. 3airae ç los Religiosos t-A N A L E J A S , el.exjoven ministro^ el

hombre d e j o s latifundios^... del j'ülncio de S((npma, ese petit Oomb s español , , no encontrando, otro proble ma más- digno.de- su inconmensura­ble talento que el problema religioso ó an t i c le r i ca l , .que para e! caso es lo mismo, al audo.nan.do otios problemas de escasa impor tancia , c a r e s t í a de Ío« alimentos, i a p ro tecc ión á . l a agricul­tura y el .comercio y la emigrac ión , por. i a que, anua! mente salen-de.-Espa-

:ñ a miles y m i 1 e s. d e es pan o 1 es, que n o en.con.trandQ en.su patria.lo- necesa­rio parixs.u. sustento, inarchan des<í-

. l ados . ; ' á -o t ros ; .paises.(londe han de í n e n d j g a r . e i trabajo, que los demo-

(0¿f$0ps. gobernantes de su país , no . h.am.sabido ó.no. han querido propor-c jónar ie ; .abandonando digo estos pro-bJemas.nuestro querido Canalejas, so-

: lo.se preocupa., en í.nle> pretar l a Cons­t i tución á guslo de las logias, mal que l é p e s e a l Dicc ionar io de | a Academia q u e ó s. e r e f o r m a ó b a b r á q u e s u p r i m i r -lo como retrógrado y clerical, en dar una R. O. rJe tanta impor tancia para el bienestar de E s p a ñ a , como la del empadronamiento [s\ así puede decir­se) de las ..Congregaciones religiosas y l a famosa ley def candado, porque así , cu.anídp. el .go-.bie.rji.o sepa los frai­les q u e .h ay . di i Es pan á ,v .no pu edan establecerse má>:.;.\tós'pja_ña s e r á - r i c a , será iebz^ sera, s a b i a , ' e n t r a r á en ei .concierto, de las naciones" europeas, y vo lve rá , á ser l a nac ión en cuyos dominios rro se pon ía el sol , porque esto.nos r e c o r d a r í a á aquel Rey tv^o-" ño que se llamó" Fe l ipe II, y aquellos tiempos de fatal absolutismo.

Y a lo sabé i s , amados religiosos, vo­sotros sois-el.enemigo del Sr. Canale­jas, ¿porqué"? tal vez.-porque sois la avanzada del.ejercito.de J e s ú s , con­t ra e l que v a "d i r ec ta m e n te. 1 a g u erra, c o m o . d e c l a r ó enelHeraldo Moróte, amigo de Canalejas y diputado de la

Page 3: EL SEMINARIO TRÂD1CI0NALISTA «La Verdad»

LA VERDAD

m a y o r í a ; tal vez porque no sois hoiti "totes de c ienc ia , aunque o b t e n g á i s premios concedidos a l talento, ami­gue t e n g á i s -observatorios como el fcé-le'bre ''del Ebro, colegio*.- donde se educan los hijos de esos clericales que constituyen la ar is tocracia d é l a poli -tica, aunque tengá is , a c a d é m i c o s y hombres eminentes en todos los ó rde ­nes dé conocimientos, habé i s i ncu r r i ­do en las iras del imitador de F r a n c i a V no p a r a r á hasta expulsaros de. este suelo liberal.

E n esta ocas ión , ¿quién os aux i l i a ­rá? ¿Las instituciones? no, que son l i ­berales como su siglo y le dispensan su-confianza al S r . Canalejas ese re­galiza disfrazado de dem cra ta que pide l a s u p r e m a c í a , del poder c i v i l : ¿Maura tal vez? no, que es hombre de gobierno y a y u d a r á á l a obra del señor Canalejas, p r e s t á n d o l e hoy su apoyo desde la oposición y encarnan­do m a ñ a n a en el pa ís estas conquis­tas aunque esto v a y a contra las con­vicciones de su conciencia , p a r a no faltar á su ecuanimidad y equidistan­cia. No; no podéis esperar nada de estos gobiernos liberales que nos ri­gen y nos rajan, á pesar de sus liber­tades, que. .. no son mas que pa ra ei mal ; pues por algo se l laman de perdi­ción. Vo lved les ojos hacia Frosdorf. hac ia ese glorioso asilo de las t radi­ciones, patrias y allí ve?é : s levantarse l a aurora , que hade i luminar á E s p a -ñ a . e n d i a n o lejano tras d é l a noche, tenebrosa del error en que estamos su­midos por el l iberal ismo, tras de un

: lago de sangre tal vez que nos purifi­que; s í . a l l í . e s t á vuestra é s p e r a n z a y vuestro refugio en las persecuciones que os amenazan, en l.os días de la t r ibu lac ión ; tended ab í vuestros bra­zos y esperad confiados en el auxi l io de nuestro glorioso R..,. que asi como en Harceloiui los carlistas sus parti darios defendieron un convento, de las hordas salvajes en l a semana I r á g ica , así os de fende rá y nos defende­r á á. todos de las- hordas no menos salvajes d é l o s , ant ic ler icales que os

.persiguen y con vosotros á todos, los buenos ca tó l i cos . Esperad confiados en él, recordando que no. hace mu­cho, en la guerra ruso, japonesa, sa l -

-vó por dos veces á ios misioneros de las manos de los faná t i cos fetichistas del A s i a , levanUn.oo.se de la. cuma, donde lo tenía postrado una violenta fiebre, para ejecutar este acto d e h e

^roísmo, y es, que D Jctime represen­ta La lis pan a t rad ic ional . . la. E>paña a u s t r í a c a , ia E s p a ñ a de la unidad re­ligiosa, l a E s p a ñ a retrógrada medioe­val y oscwa'tísf a de. J i m é n e z de Cis­

queros, de F r a y L u s . de G r a n a d a y de León, de Sta . Teresa, de Mígu( 1 de

• Cervantes y. de. tantos y tantos otros como i luminaron a,l mundo con sus escritos; es que D . J a i m e represen­ta el anhelo español , el genuino senti­miento de toda la. nac ión , el amor de nuestra rel igión sacrosanta, de nues­tra . m o n a r q u í a t radicional y de nues­t ra integridad nacional , el lema, en una palabra, del partido t radicional ,

- «Dios, patria y lie;.»".

El Campesino Axdaluz: Granada 18-171-910.'

Lo p reiireseiita la Trafliciún Hab la r de la t radic ión y de. la po­

lít ica t radicional is ta en estos tiempos . progresivos por que a travesamos,, es,

a ju ic io de ciertas geni.es, algo así co­rno anteponer la pob e l l a m a de un an t i qu í s imo candil á la luz bri l lante de un poderoso arco vo l i á i co . ó de-senlerrar una ca l ave ra y unas tibias humanas pa ra mostrarlas s a r c á s l i c n -rnente sobre el ¡ojo y amar i l lo de nuestra gloriosa bandera. Por eso, el que escribe ó h a b l a de estos asuntos ensalzando las grandezas indiscuti-ples d é la t r ad ic ión e s p a ñ o l a , se ex-bone á que el vulgo, presente en to­

dos sitios, y hasta mangoneador de las clases intelectuales, t-é tache de regresivo-, de apaga!uces, de sacris­t án , y ' l e tenga por un ser raro, indig­no de-vivir-entregos esplendores de l a moderna c iv i l i zac ión

Y o , ante los ep í t e to - torpes que la r u d í s i m a intel igencia de nuestros ad­versarios nos prodiga, experimento siempre una. como interior satisfac­ción, porque las palabras en boca de tales gentes tienen significación dist in­ta á como las pronuncian . Por eso mismo me enorgullezco de amar , con toda la efusión de mi a lma , l a inmor­tal t rad ic ión e spaño l a , porque sí por convencimientos ín t imos y a r r a iga -d í -simos, prescindiendo de. toda 'consi­d e r a c i ó n h i s tó r i ca , que si l a t rad ic ión hispana es regres iva á los ojos mio­pes de nuestros l iberales, es porque representa l a civi l ización verdadera, ei progreso eterno de nuestra v ida social y po l í t i ca .

E n efecto ¡a t radic ión de un pueblo viene á ser como la conv ivenc ia es­p i r i tua l de todas las generaciones de la patr ia , como la cadena santa é in­destructible que une estrechamente el pasado con el presente y el porve­n i r - de nuestra n a c i A n , p a r a formar la fisonomía, l a c a r a c t e r í s t i c a , el 9.1 • m a de una sociedad. Por eso. los que desprecian la t r a d i c i ó n , desprecian l a patr ia, ios que alardean de l ibera- ' l ismo, a lardean de ant ipat r io l i smo. Esa es la consecuencia.

Y como, antes que nada, ei que es­to escribe es patr iota , antes que na­da t amb ién quiere ser t radicional is ta y amar el estandarte de las le iv indi -Cci ci o n es t r adiciona I es.

JOSÉ J I M É N E Z C O R R A L .

HAY OUK DEMOCRATIZARSE

Desde que al gran Canalejas lu tenemos en el mando sin duda, los Españoles vamos democratizando.

Ahí están las elecciones que no hace tanto han pasado 1

y todos los Españoles gustosos han presenciado.

Han salido más demócratas que perros se hallan descalzos pues donde tío los había se hair formado á garrotazos es forma mía, exclusiva, según dirán muchos amos, para hacer buenos demócratas á todos los ciudadanos. —

Así ha pasado, en Motril . y en infinidad de lados que aquél que no era demócrata ha'sido molido á palos.

Y esto á ciencia y paciencia, del gran pueblo soberano • del que calla paga y- sufre ¡y lo tratan á estacazos!

Que esto, después de todo nos está bien empleado, pues no debemos callar no debemos sufrir tanto.

Hay que ser Jaimista neto, restar co-'r.garrote, al brazo, que dondelas dan las toman dice un magnífico adagió.

Porque "así. el gran Canalejas, nunca tendrá que tacharnos • de-,El, no haber aprendido bien á democratizarnos.

. . J U A N B : F ERNANDEZ.

. 5 3

&Mm Ws^WW&?? Deseando o-r-éardaVVj^ígó ",d.é ¿mi', es­

pecial idad en-boitor :de f i : : J a ime III, requiero las tijeras, me ta*po-'-las na­rices, preparo él desinfectante, me cercioro repetidas veces, de l a buena resistencia.-de. mi e s t ó m a g o y hago comparecer ante mi-bufete á los chis-mngrafos locales., pidiéndoles cuenta de su conducta desde la ú l t i m a vez que e jerc í el ministerio fiscalizado;

con Frasquita La l'ublilla. la Mari­tornes Roja.

Con la frente alta, majestuoso por­te y sa t i s facción inmensa, se presen­t ó ' a n t e mí la Dama d<> la Gran Vía. Rebosaba contento 1 por todassus l í­neas y con a l e g r í a m i m o s a corno la de una n i ñ a fué c o n t á n d o m e . t o d a s sus impresiones. Se h a b í a indignado tan­to con las cosas de l). Antonio que hasta le h a b í a n salido subidos colores de antiinaurisrno á sus fondos-- pero estaba muy satisfecha con la conduc­ta de los ca tó l icos -espanVes H a b í a sentido la dulce jsatisfacción de andar por el ancho camino de la verdad sin irse 'por peligrosos atajos! Recuerda mucho la palidez románt ica , con qiie. p r e t e n d í a hacerse á todos interesan­te y deja ver,que a l l á . en lo ín t imo de su c o r a z ó n , .quedan aún las semillas que depositaron sus galanes con fe­mentidas promesas y cantos de s i ­rena.

Di le mi m á s cordial enhorabuena,-le a n i m é á seguir\ ;por Ja emprendida senda, hícele ver el peligro de andar guardando equil ibrio por crestas es­cabrosas, le p r o b é que los sanos colo­res son m á s eslimados por todos que las palideces a b ú l i c a s , le di ciertos consejos procedentes y la despedí has­ta otro d ía . : .

Algún tcinto enfadado pasa el Ptyo Noticiero y filien tras retuerce nervio­so su incipiente Ligóte se desata en improperios contra, la Se.Tinra de lo, Gran Vía.

Es tá i r r i t ad í s imo porque no ha te­nido con él consideraciones de n ingún g é n e r o y lo ha dejado á la a l tura de un zapato viejo ante tirios y t roya nos. E l Poyo dice que por haberse permitido usar, a lguna democracia en el asunto de la man i fes t ac ión , l a S<mora, no contesta con el rasgo de imparc ia l idad que él tuvo a l colocar á Tenorio en el sitio que le correspon­día , se e m p e ñ ó en que todos han de contar las cosas como son, como si hoy no fuera moda el mentir, cuanto se pueda..

Después de o ir otras amargas que­jas, h íce le un >.ermoncico crist iano y Jo m a n d é á tomar l i l a con azahar p a i a que c a l m a r a sus excitados ner­vios.

Fnisqv.iln. Lo. Publilla, la Var¡Lar-nos poja, e n t r ó luciendo el rojo paño­lón con que se c i ñ e e l talle y , hacien­do cínico alarde de su habitual desea ro; mient 'as me tarareaba- l a Marse-llesa. iba sacando de la cesta los ave­riados g é n e r o s del tiempo. Sin fijar­me en aquel la basura repugnante, le hice contar las mentiras. U n a . . . dos... diez. . . ve iule . . . t reinta. . . trein­ta y cinco y treinta-y seis T o f a l t r e i n -í a v seis menti ias gordas que.queda­ron marcadas con lápiz rojo y en con­diciones de sal ir á ja v e r g ü e n z a pú­bl ica si era. necesario. De las peque­ñ a s las ¡ l evaba por arrobas; porque siendo--sus marchantes gente de poco pelo ocupados, la m a y o r í a de eJlos f

en la exp lo t ac ión de la c é l e b r e fór­mula agua más polvos igual d vino, ir-i po.djau, ni q nenian andarse aver i ­guando la verdad de las in fo rmad o nes. ':•'•' - \

~ Quise despedirla, mas i i ó quiso irse sin e n s e ñ a r m e su ú l t ima a v e r í a Ku l a r e s e ñ a de. la sesión del Congreso del día 18 de ¡os corrientes y con el e p í g r a f e «Cosas de D . Dalmacio» ase­gura que cada vez que habla, este orador tradicionalista causa las del i c ías de la C á m a r a por su e x t r a ñ a ma­nera dé d i scur r i r y lue.iro l e adjudica algunas frases que son, ocas ión de risas. T o d j lo- cual-es evidentemente falso, porque ni D. Dalmacio es un

1 S o r i á n o . cfawn de la C á m a r a , ni en la sesión d e l d i a 18 pudieron r e í r s e de sus palabras, porque no p ronunc ió

• ningunas, pues no as is t ió á e l la . Por ú l t imo entra él' Viejo Verde

ta'ñ astuto í c o m q ' ' s r é m p r e y ' demos­trando q ú e ' a ú n ^ ú e quiere ' pasar por

¡ gallo es'zorro y muy .zorro. Este l le­v a e i comercio 1* a í por mayor: las mentiras gordas por quintales y las

chicas por tonelTidas, que * per- Wígp ha de ser trustem. -V ienendándose l a s de hombre grave , , imp.arcial etc. etc. pus cosas! pero lo conozco dema­siado.

A l pregun lar le i por su. .ú l t ima -fe • cho.ria-se-qsca.ilda!iza farisaicarnente y asegura .que j a m á s ..falta, a la ver­dad, j u rándo lo por su cana, cabellera, por sus muchos arios y hasta' :pór'SUs duros espolones pero yo-, mientras 4e echaba en ca ra Jas dos mil personas, de l a . m a n i f e s t a c i ó n , metí mano en en­saco y , con g i a u .cuidado para no llenarme, s a q u é una sección de "tele-iira.mas t i tulada «L ibe ra l e s y reac­c ionar ios» q u é tiene J pjr docenasloS embustes de pr imera , marca , , esos * que no pasan m á s que por las ,anchas tragaderas de ciertos embaucados lectores de los Sucesos y d e m á s pe­riódicos de noticias sensacionales. P a ­ra no cansarme mucho, ; me fijé sola­mente en un parr»fito- : que hablando del meetivg de -Gerona dec ía : han asistido escasamente i.500personas, de los cuales WO eran, curas; 400 seminaristas, y el resto jovencilos de doce á catorce años. Ks decir , que se­gún Defensor en Gerona se reunieron • el domingo 400 seminaristas y como es de suponer que las dos terceras parles lo menos no pod r í an asistir por encontrarse de vacaciones en pueblos muy distantes • de la cap i t a l y por otras causas, resulta e d í a i n ­formac ión del Viejo Verde que en el seminario de Gerona hay ¡¡¡1.200 se­minaristas!!! S i hubiera dicho que entre todos h a b í a 200 lo hubiera du­dado mucho; d i c i éndome que solo;en el meeting hubo 400 d e c l a r ó solemne-mente| (y someto mi fa 1 lo a l recto cri ter io de. personas: competentes) qu^ tal barbar idad indica que los que h m intervenido en tal noticia no han visto un Seminario dé diez a ñ o s k es­ta -parle y el de Gerona menos. , No quise,continuar aute .aque 1 cí-*nico viejo-y ;ie . m a n d é sal i r de mi c a ­sa hasta í i ueva ordei En la antesala l loraban unos rorros y m a n d é despe­ja r á escobazos'. Y a tenía- bastante pa ra ofrendar á D,-Ja ime en eLdía de suiSan.to la estul t icia de los que fían en las.noticias d é l o s c h i s m ó g r a f o s l i -b e r a I es

: ; ' " ' : " • L o o . Z A P A T E T A • - - - • • .

Rogamos á. todos los cuscritores que se ausenten de la capi ta l pasen a v i ­so ú esta Redacción, , cal le de • S a n Juan de Dios .68,- para : enviar le el.pe­r iódico sin a u m e n t a r - n a d a por el friinqueo. ,.; .

• i . - ••• -. •

• E l día del Aposto! Santiago á las-nueve de la noche, se c e l e b r a r á ' e n ' e l C i rcu lo A n t i l i b é r a ! , P laza d é las P a ­siegas, la velada l i terario --musical que los j ó v e n e s ' j a i m í s l a s e s t án organizan­do en honor de D; Jaime, , par a solem­niza r el d ía de su Santo, . . .

En e l la t o m a r á n j?arte varios j ó v e ­nes tradicionalistas. E l programa-de la fiesta es el siguiente: 1

I..° Sinfonía. — ..«HimDO. á D . J a i ­me I I I » , á voces y orquesta;, o r ig ina l del maestro L a r r e a .

9.° «Estudio h is tór ico legal ' del t r a d i c i o n a l i s m o » . (Discurso..).

3.° « C a v a l l e r í a R u s t i c a n a » : Pre­ludio. . • 4.° « I d e a s fundamentales del t ra­

d i c iona l i smo» . D i scurso. 5 0

7 . c

Vals Boston. «Kl Veterano c a r l i s t a » . Poes ía . « S e r e n a t a ver-ecianao.

8.° aVA partido Ja imis ta s a l v a ­ción de E s p a ñ a » . Discurso-j-- : ;; í ;-o o í ? r

9 V a-u.so dob le» . 10 [{.estimen. L a fiesta promete ser b r i l l a n t í s i m a

y a el la quedí in invitados todos tos t.iadicionalistas.

% r -

Page 4: EL SEMINARIO TRÂD1CI0NALISTA «La Verdad»

Por el alma de Carlos VII YA jueves 2 1 be' celebraron en la

iglesia de San Juan de Dios unos so­lemnes funerales por el eterno descan­so del alma de'nuestro malogrado Cau­di l lo D . Car los de Bfjrbon y Austr ia do Este.

Á las d'icR de la m a ñ a n a s e cantó la V i g i l i a por la capilla que dirigen los H . H . de S u . Juan de Dios y después de la Misa solemne que celebró el M . L S r . Dr . D . José Antonio Garulla y Estrada Capellán Mayor de Reyes Ca­tólicos, el P . E r . Esteban Azcona, Agustino Recoleto, pronunció una ora­ción, fúnebre que quisiéramos reseñar cumplidamente; mas, en la-imposibil i­dad de fijar los piofnndos y elocuentí­simos conceptos del orador, nns l imi­taremos á decir cuatre palabras sobre la misma. ' • E l P . Azcona con magistral elo­

cuencia principia comparando la muer­te del A-ugusto Desterrado en la solé dad y -e4 abandono c*n la que hubiera tenido en el fausto de la Corte y c><n la que en estos tiempos de libertinaje y error se cierne constantenn nt^ sobro las testas coronadas. Hab la del amor á la T i adición del que prefirió el des­tierro á un trono comprado á costa de una infame transigencia con el error y fija como tesis que D . Carlos de Bor bón Austria de Este fué el mur.. pro videncial que se opuso en España á ios avances de la revolución. A l entrar el P . Azcona en el cuerpo de su eloeuem tísimo discurso recuerda las gloriosas páginas de nuestra historia en que E * -.paña aparece venciendo las herejías con fíecared.o, los reyes de la Reconquista, los Reyes Catól icos , Fel ipe I I y los Augustos Desterrados. A l llegar á Car-loa V i l dice que no ha de hablar de él considerándolo bajo el punto de vista gubernamental, político militar, etc. s i ­no só lo en el orden religioso. Asegu ­ra que ya en el nacimiento del Augus­to Prímfipe, ocurrido incidental mente en un mesón pobre donde faltó al re­cién nacido hasta unos pañales que cu­brieran su tierno cuerpecitn, su misión providencial empezó á revelarse.

Con rasgos elocuentísimos describe hi cristiana educación que recibió Don Carlos de su santa madre, su acendra do amor a E s p a ñ a , su ilustración y do­tes relevantes, la admiración que sien do aún muy joven se conquistó en la Europa culta y el elevadísimo juicio que de él tenía formada la prensa de todas las naciones, citando como mues­tra las frases de un periódico inglés de aquellos tiempos. Con elocuencia i n ­descriptible, describe después la impie­dad reinante en España , la indignación del .Caudillo Augusto y su resolución d e ^ v a r á nuestra patr ia . Dice que por sabidos calla los motivos que obli­garon á D . Carlos á traspasar nueva­mente la frontera y recuerda la céle­bre frase «volveré» que muchos toma-

,ron como profesía y que en realidad faé el freno que contuvo desde enton­ces los avances sectarios del liberalis­mo gubernamental. Describe la nueva Vida de ostracismo, y la aflicción que produjo en el corazón def Príncipe la pérdida de las colonias y elogia con frases sentidísimas ei desprendimiento de Carlos que renunció el trono, que hubiera seguramente ocupado el ampa­ro de la constitución l iberal , porque

ante todo era buen católico y que no quiso conquistarlo con las armas en momentos de angustia nacional, por- . que era el mejor de los patriotas. De­duce de todo lo dicho que no habiendo claudicado en su fe murió Carlos V i l , después de cumplida su misión provi­dencial, legando á su heredero un tes­tamento político, prenda incalculable que todo buen, tradicionalista debe te­ner siempre presente y en el cual se encierran las aspiraciones santas del malogrado Caudi l lo y ( l u e pueden compendiarse en las palabras del lema tradicionalista «Dios, P a t r i a » . Por úl t imo termina su hermosa oración con un párrafo bri l lantísimo en que pide á los presentas que nieguen á Dios por el alma del finado y luego d i ­rigiéndose a los'tradicionalistas les di­ce que no'es día de luchar sino de orar y haciendo caer de rodillas al conmo vido auditorio rec'ta como final el Re qu¿e>n ae.iernam... que mil labios res­pondieron derramando el fervor de sus corazones.

L - i oración fúnebre está siendo elo g iad í s ima . Después se cantó ante ei severo catafalco, iluminado con infini dad de cirios y blandones, un solemne responso.

Presidieron el duelo el R . P . Supe­rior de la Re.-idencia de P . P . Reden-toris as de esía Ciudad; el l i m o , se­ñor D . Lu i s Andrada, de la Real Ma»-ztranza de Granada y Jefe Provin­cial Jaimista; el l i m o . S r . Conde del Prado, de la Real Aíaes t ranza de Gra­nada y Jefe Provincial Integrista; el l imo. S r . D . Fernando Contreras de la Real Maestranza de Granada; y según do Jefe Regional Jaimista, el IImu. señoi D . Antonio Blanes, el l>r. Don Ricardo Corzo, Catedrático de la F a ­cultad de Farmacia; D . José de Raya , de la Oficialidad tradicionalista; Don José María Cami la , Decano de los pe­riodistas, D . Antonio Moreno y Don Antonio Moscoso.

Asistieron además numerosos tradi-cionálistas y Comisiones de P . P . Je­suí tas , Capuchinos, Escolapios, Reden-toristas, H . H . de Sn. Juan de Dios, señores Curas Párrocos, Clero secular y de tradicionalistas de Arm.i l la , Chau-china, Alhendín y otros pueblos. Hubo muchas señoras y no obstante ser ía de trabajo > hora avanzada el templo estuvo completamente lleno de fieles.

Terminado el acto religioso se di­rigieron telegramas á D . Jaime y al Correo español.

L o s sobres que ostenten los le­mas de los trabajos no p remiados se q u e m a r á n s in abr i r los ; r e m i t i é n d o s e estos trabajos, á los que los rec lamen como autores, si a c o m p a ñ a n á la pe­t ic ión el impor te del franqueo y los dos pr imeros renglones de cadacuar- ' t i l la .

Concurso literario E l semanar io t radic ional i s ta L . \

V E R D A D c e l e b r a r á un concurso l i te­rar io en honor de nuestro A u g u s t o C a u d i l l o D o n J a i m e III. L a cal i f ica­c i ó n de los trabajos que se presen­ten y la p u b l i c a c i ó n del resultado se h a r á n ( D . m.) el d í a 2 de A g o s t o , oc tava de la fes t iv idad de l Santo A p ó s t o l San t iago P a t r ó n de las E s -p a ñ a s . A l ofrecer este humi lde ho­menaje al s e ñ o r D u q u e de M a d r i d , L A V E R D A D rei tera una vez m á s su inquebrantable a d h e s i ó n al A u g u s t o desterrado y á la bandera santa que sos t iene .

L o s trabajos p o d r á n remi t i r se po r correo cert if icado ó por conducto" de tercero, sin fecha, firma n i s e ñ a l a l ­guna que denunc ie á su autor. A d ­junto se r e m i t i r á en sobre cerrado e l n o m b r e , apel l idos y d i r e c c i ó n de l concursante , escr ib iendo en aquel m i s m o l e m a que l leve el trabajo.

•ri> Temas v premios. «El T r a d i c i o n a l i s m o ú n i c a sa lva­

ción de E s p a ñ a en los t iempos pre­sentes.

Premio: «Un objeto de a r t e» do-notivo del l i m o . Sr . D . L u i s A n d r a d a , j e f e P r o v i n c i a l .

«La C o m p a ñ í a de J e s ú s solo es amada y defendida, entre todos los partidos po l í t i cos e s p a ñ o l e s , por la C o m u n i ó n T r a d i c i o n a l i s t a » .

Premío: « C a r t a s de S a n Ignac io de L o y o l a » , obra en seis tomos, de l M . I. S r . D . J o s é R o c a y P o n s a , C a ­n ó n i g o M a g i s t r a l de la Canta Igle­sia Ca tedra l de S e v i l l a .

« P a r t i c i p a c i ó n ele la p r o v i n c i a de Gronac l aen los mov imien to s l eg i t i -m i s t a s » . (Es tud io h i s t ó r i c o c r í t i co ) .

Premio: « H i s t o r i a de E s p a ñ a por don V í c t o r G e b h a r d t » , trece m a g n í ­ficos tomos, donat ivo de D . F ranc i s ­co Guer re ro VíLchez, D i rec to r de L A V K B D A D .

« A s p i r a c i o n e s del Par t ido T r a d i ­c ional is ta respecto á la in tegr idad terr i tor ia l de la p e n í n s u l a I b é r i c a » .

Premio: • H i s t o r i a de la Fi losof ía» y « E x p l i c a c i ó n del San io E v a n g e ­lio»; dos elegantes v o l ú m e n e s dona­tivo de su autor, el Benef i c i ado de esta Santa Iglesia Catedral D r . D o n J e s ú s MvJ R e y e s R u i z .

«La C r u z a d a de la T r a d i c i ó n » ( P o e m a é p i c o . )

Premio: « E c o s de las m o n t a ñ a s » ; leyendas h i s t ó r i c a s escri tas por D o n J o s é Z o r r i l l a é i lustradas por Gus t a ­vo D o r é , donat ivo de D o n A n t o n i o G u e r r e r o M o r e n o .

«El So ldado t r a d i c i o n a l i s t a » ( C u e n ­to).

Premio: I L J ano de s u s c r i p c i ó n al diario t radic ional is ta de P a m p l o n a El Pensamiento Nararvo concedi ­do.por la A d m i n i s t r a c i ó n de dicho p e r i ó d i c o .

« A D . J a i m e » . ( S o n e t o / Premio: U n a ñ o de s u s c r i p c i ó n al

Semanar io tradicionalista- L A V E R -D A r>.

(Se r u e g a l a i n s e r c i ó n á todos nues­tros colegas.)

——— ~~-*' t"f' ~~rr_ *j un —

¡Atrás! ¡Atrás! Legiones de pigmeos que con los pies pegados á latierra desafiáis al cielo poderoso cegados, cual Satán, por la soberbia.

¿Atrás! Que vuestras manos pecadoras no osen tocar las inmovibles piedras del templo de la Fe de nuestros padres, donde la luz dé la verdad se encierra:

Que, aunque en inmensa pira vuestrafuria los católicos templos destruyera,

•tiene cada español dentro del pecho un altar, y la Cruz en él se eleva.

¡Atrás! Que al mancillar con" vuestro alien to el tesoro sin par de las creencias mancilláis nuestras santas tradiciones y hacéis escarnio de la historia ibérica.

Que es España católica, y su gloria en la Fe poderosa se cimenta; y llevó siempre el bravo castellano una cruz en la espada y en la enseña.

Que antes en el abismo de los mares habrá de hundirse la española tierra que consentir que arranquen de su suelo su Fe, su religión y sus creencias.

¡Atrás! ¡Atrás! Los pechos varoniles aprestados están á la pelea: que la lucha por Dios no les asusta; que el femenil temor no les arredra;

y á defender al Dios de los Ejércitos, al que tiene por trono la tormenta, se elevarán en alto las espadas sembrando el campo con espigas férreas.

¡Atrás! ¡Atrás! Legiones de" pigmeos, doblad al punto la rodilla en tierra, inclinad en el polvo vuestras frentes: el Dios-bondad desde la Cruz lo ordena;

ó el el Dios delSinaí. grande y terrible, hará rugir sobre las nubes negras el trueno pavoroso, y á su eco, han de implorar piedad vuestras blasfemas bocas, y el huracán ha de barreros como las hojas por el fuego secas.

AGUSTÍN AGUTLAR Y T E J E R A .

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Homenaje al Sr. Duque de Madrid Lista de las cantidades recogidas en l a 1U

d s c c i ó n d e L A V E B D A D para ofrecerá! Sr Duque de Madrid una espada de ho­nor. S u m a anter ior , 18'05.

(Continuación)' D . A n t o n i o B l a n e s , 5 pesetas; D o n

J o s é A p a r i c i o , 3 pesetas; D o n J o s é Hor tas , 1 peseta; D o n J . Bau t i s t a Ro­d r í g u e z , 1 peseta; D o n Juan V á z ­quez C a m p o y ; 2 pesetas.

T o t a l 30'05 pesetas.

E L F A L Í O Í e T Í n C E R T A M E N Hemos recibido un ejemplar del «Fa­

llo del Jurado del Segundo Certamen periodístico» organizado por la «Sección cié Propaganda» del Seminario de Sevi­lla.

H a obtenido la «Pluma de plata» el señor D . Lucas Lozano, alumno del Se­minario de Comillas, por su poesía titu­lada, «L<a Constancia ó el Martirio de San Ignacio.»

Los premios er metálico concedidos, por el Sr. Arzobispo de Sevilla al .me- . jor trabajo de cada una de las cinco sec­ciones en que se dividía el programa se han adjudicado á los señores siguientes:

Den Manuel Blanco Bellido del .Se­minario de «Sevilla;» D . Ignacio Vil la-nueva y Bic egaín, del de «Pamplona»; Den Zótic.o Hoyo, del de «ComiUas»; Don Miguel Hospital Gasol, del de «Co­millas*, y D. José Sainas Anchelerga; del de «Córdoba.»

Además han cbtenido premios veírti-cinco seminaristas, pertenecientes á las diócesis de Sevilí?, Piasencia, Astorga, Zaragosa, Pamplona, Ciudad Roarigo, Santiago, León, Málaga, Oviedo, Sala­manca, Santander, Jaca, Sigüenza, Seo tíe Urgel y Córdoba.

Nuestra enhorabuena á los seminaris­tas premiados.

A l primer premio consistente en una pluma de oro artísticamente ejecutada se han presentí do treinta y tres traba­jos que han sido considerados insuficien­tes para obtener el premio; sin embargo se han concecido ocho accesis entre ellos uno al trabajo titulado «La Patria y los Socialistas» original del ilustrado y vir­tuoso seminarista granadino D. Modesto Maqueda Ruiz, único alumno de este se­minario que ha temado parte en el con­curso, según nos aseguran personas bien informadas.

Especial enhorabuena para este señor.

Publicación interesante Nuestro colega de A l m e r i a La In­

dependenciaacaba de editar en un primoroso escriio .los notables ar­t ículos que nuce poco escr ibió para a q u é l estimado y popular diario, el .sabio c a t e d r á t i c o y fundador ilustre de las escuelas del A v e Mar í a , dou A n d r é s Manjón, combatiendo l a ense­ñ a n z a la ica

Recomendamos con todo in te rés l a lec tura del expresado Ir b rito, en el que se demuestran con irrefutables arg-umenlos las consecuencias funes­t í s imas de lá e n s e ñ a n z a i r re l ig iosa .

E l mayor elogio que podremos ha­cer de tan interesante pub l i cac ión lo e n t r a ñ a el nombre del autor de tan brillantes a r t í cu los , en todas partes respetado y por todos reconocido op-"10 autoridad indiscutible en cuanct se re laciona con los transcendentales problemas de l a ins t rucc ión y la edu­cación,

E l precio de cada centenar de ejemplares es de 8 pesetas y el de un m i l l a r , 70, y se vende en la l ibrer ía de Herederos de Juan Gilí, Cortes, 280, Barce lona .

E l l i m o . Sr . Jefe P r o v i n c i a l nos m a n d a comun ica r á todos los s e ñ o ­res ja imis tas de esta C i u d a d , l a ne­ces idad de que acudan al Cí rcu lo A n t i i i b e r a l , p l a z a de las Pas iegas , 3, p r inc ipa l , de 9 á 11 de l a noche, don­de es convenien te su presenc ia .

I m P r e n t a d e P u c h o ! .