EL PODER DE LAS PALABRAS

Mgs. Iván Vanegas C

Gn. 12:3 “Bendeciré a los que te bendijeren, y a los que te maldijeren maldeciré…”

Dios nos ha concedido algo especial

Un poder que todo creyente posee (el poder de las palabras)

Podemos desatar multitud de bendiciones o causar mucho daño

En efesios 1:3. Pablo nos dice: “Bendito sea el Dios y Padre de nuestro Señor Jesucristo, que nos bendijo con toda bendición espiritual en los lugares celestiales en Cristo”.

No solo es para mí este favor divino

Es para que lo podamos transferir poderosamente

para que podamos sembrarlo con autoridad

CUANDO SE PRODUCE LA BENDICIÓN…

El origen está en Dios…pero la bendición se produce cuando tomamos ese poder…cuando pronunciamos bendición con una connotación importante, cuando lo hacemos creyendo lo que decimos y en el nombre de quien decimos (El Santo nombre de Dios).

Las bendiciones más poderosas son las que comienzan sencillamente cuando lo hacemos con fe.

Dios desea que seamos un canal de bendiciones, de amor, de sabiduría, de perdón…

Para lograr serlo debemos comenzar por ser una bendición para uno mismo.

a) Inicia con la fe (Hebreos 11:6)

b) Tiene una secuencia importante.

(1 Pedro 3:9 “…llamados para que heredaseis bendición”)

EL PODER DE LAS PALABRAS(Poder de vida o de muerte)

Nuestras palabras causan un impacto duradero. (Proverbios 18:21)

Una buena palabra lleva alegría a un corazón lleno de ansiedad y depresión (Proverbios 12:25)

Las palabras agradables producen en el alma tanta dulzura como salud física, el consejo sabio quita toda

perturbación, más las palabras poderosas traen victoria.

Santiago 3:6,8-10: “…Hermanos míos, esto no debe ser así..”

He venido para hablarles del poder divino que esta tiene…Cambiemos toda palabra ociosa, deshonesta, malintencionada… por palabras de bendición… poderosas en fe y en obra

Lucas 6:45 “…porque de la abundancia del corazón habla la boca”

Nuestras palabras representan lo que nosotros somos en realidad, son la expresión viviente del corazón de la persona, así como Cristo es la expresión viviente de Dios Padre así mismo son las palabras, la expresión misma de lo que somos…

“Para que cambien nuestras vidas… debemos comenzar por cambiar nuestras

palabras”

Nuestras palabras tienen un valor infinito para hacer el bien. RECUERDE: “LA LUZ VENCE A LAS TINIEBLAS”

Una bendición hablada puede anular el efecto negativo de cualquier maldición…

Dios no desea que sus hijos pronuncien maldición o desilusión (Salmo 37:4)

Usted tiene a su alcance un poder muy grande como es el de hablar… no lo desperdicie

SEA PODEROSO EN DECLARAR QUE EL FAVOR DE DIOS ESTÁ CON USTED

EL PODER DE LAS PALABRAS AUMENTAN SU POTENCIAL CON LA ESCRITURA.

Las bendiciones verbales contienen tres poderosas fuerzas. (a) El nombre de Dios, (b) Nuestras palabras y (c) Las palabras de Dios.Cuando bendecimos a los demás, podemos pronunciar las metas y respuestas bíblicas que Dios tiene para ellos

Números 6:24-26; Juan 1:9

CONCLUSIÓN

Dios desea que la manifestación de nuestra fe sea declarada en nuestras palabras…

Declare con poder que el habita en usted…

Dios no desea que la bendición sea solo para usted, en Hechos 2:39

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!Gloríese en Él y Bendiga!...

!A los que ama y a los que no le aman!