el plan dalton en teoria

7/21/2019 El Plan Dalton en Teoria

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UNIVERSIDAD NACIONAL

MAYOR DE SAN MARCOS

Facultad de

EL PLAN DALTÓN EN

TEORÍALiliana Huertas Espinoza



EL PLAN DALTON EN TEORIA

Desde la teoría y enseñanza del aprendizaje el Plan Dalton se caracteriza

por el respeto a la individualidad del alumno para que realice su trabajo con total

libertad y con responsabilidad, este Plan se aplica a niños en la segunda infancia yadolescentes, que ya saben leer, escribir y calcular.

Para tener un mejor panorama de este Plan, en un trabajo de Miss

Parkurst, la autora, se entresacaron las siguientes ideas !" ¿Cómo cambiar de

conducta? #onvirtiendo la escuela en un mundo real, no en un imaginario jugar al

mundo. $o en un lugar donde se imite la vida de una comunidad pretendiendo

asumir sus finalidades, sino organizando una comunidad en serio con las mismas

funciones que una sociedad real% ¿Qué es preciso cambiar previamente para

decidirnos a proceder de otro modo? &nte todo es necesario cambiar de

'bitos% (a de cambiar de 'bitos el maestro. )nos se quejan de que la escuela

deviene algo informe si se introducen las nuevas normas educativas* otros, para

aceptarlas s+lo en teoría, se lamentan de su actual formalismo. os movimientos

son de inclinaci+n de uno a otro polo, como si el -ito de /a reforma escolar

consistiera en allar una posici+n prudente en esa oscilaci+n pendular. (e aí el

error. $o se trata de balancear la escuela entre esos etremos, de dar al p-ndulo

un impulso, sino de cambiar su direcci+n, porque /a generaci+n sobre que act0a la

escuela en nuestros días es distinta.

¿Qué dificultad se opone a esto? a que acabamos de apuntar, esto es,

/a de reformar nuestras costumbres. $o trabajos con nuestras ideas, sino con

nuestros 'bitos, dijo De1ey, y de aí que la aceptaci+n intelectual de una idea no

sea bastante para aplicarla sin 'bitos de trabajo concordantes con ella. 2l plan

Dalton a sido aceptado en teoría por gran n0mero de maestros, pero muy pocos

son los que lo practican, eactamente /o que a ocurrido con cualquier otro

ensayo, porque al intento de acer cosas diferentes se opone la cristalizaci+n de

los 'bitos, tan funesta como la cristalizaci+n de /as arterias mentales a que

equivalen los 'bitos. 2l 3si no fuera por esto o aquello, lo aríamos3 es la mejor

epresi+n de 'bitos, petrificados.

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http://www.ecured.cu/index.php?title=Alumno&action=edit&redlink=1

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4oda costumbre que no nos permita una f'cil adaptaci+n a cosas nuevas es

fatal, y la raz+n de que tan pocas de las ideas progresivas sean practicadas es

que nos falta el poder de ajustamiento a las nuevas condiciones. o importante no

es pues, aceptar la idea, sino poder llevarla adelante.

2l primer temor que sinti+ /a autora al lanzar su P/an fue que pudiera no ser

comprendido su alcance. &nte todo 5dice5 es eso un Plan y, por tanto, un veículo,

no una t-cnica ni un m-todo. )n veículo para el programa, un nuevo camino de

escuela viviente que permita al niño adquirir 'bitos fleibles que poner tras sus

ideas. )nos necesitan un programa ecesivamente detallado, otros un programa

demasiado libre. Para nosotros, si vamos a considerar la vida espiritual del niño,

ese veículo puede ser usado sin interferir el programa de que disponga cualquier

escuela, con tal de que en su desarrollo no se esclavice al alumno, 2l Plan es un

camino para la escuela del trabajo y de la vida y para la liberaci+n de los

discípulos que encontrar'n las condiciones preferibles para su aprendizaje, en

lugar de un ambiente disperso para la mera enseñanza. /nvertimos los t-rminos, y

en vez de redactar un programa que sea reflejo da la personalidad y el trabajo del

maestro consideramos la personalidad y trabajo de los niños.

6uena prueba de /a equivocaci+n que sufren quienes an supuesto que el

Plan Dalton es un m-todo de individual instrucci+n puede ser el temor que /a

autora siente de que degenere en eso precisamente. a instrucci+n individual es

una buena cosa en cuanto significa tener presente la individualidad. 7in embargo,

la instrucci+n individual es una cosa y el desarrollo individual es otra. #on muca

instrucci+n el mucaco puede no aberse desenvuelto. y a lo que propende el

Plan Dalton es al auto desenvolvimiento. )n adecuado sistema no debe consentir

que la materia de enseñanza se interponga en el camino del desarrollo del espíritu

y /o entorpezca. 8tra cosa que preocupa a Miss Parkurst es que se piense que

su P/an es una t-cnica. 2/ Plan Dalton no viene a dar normas metodol+gicas sobre

la enseñanza de -sta o aquella disciplina, sino a abrir un camino en el que cabe la

infinita variedad de condiciones en que se da la enseñanza.



os daltonianos se quejan de que a /os visitantes de sus escuelas lo

primero que se les ocurre acer es tomar de los mucacos una muestra de su

trabajo y observar si lo que acen es algo diferente de lo que se acen otras

escuelas. 2sto es, buscan lo que ya est' eco en lugar de comprobar con lo est'

aciendo el niño, c+mo vive y si ay o no una real atm+sfera especial en la

escuela, siendo así que a los pocos instantes de allarse en ella debería notarse

esto, o a fracasado el plan puesto que con -l se aspira a poner en movimiento /a

vida del niño. #reemos aberlo logrado tanto, que algunos esc-pticos que no nos

comprenden, dice /a autora, al ver /a libertad de movimientos con que los

mucacos inician y abandonan sus etapas de trabajo, juzgan que emos

construido una serie de entretenimientos para /os niños. $ada m's distante de /a

verdad. $uestra finalidad no es meramente acer m's f'cil la labor. Permitirnos al

niño el cambio de departamento y de ocupaci+n conforme le plazca, porque así

creemos garantizar el inter-s por la materia y porque es la 0nica forma de que el

ritmo del trabajo de cada niño sea marcado por quien 0nicamente puede acerlo,

el niño mismo.

7írvanos de pre'mbulo estos pensamientos de Miss Parkurst para entrar

en un an'lisis m's detallado de los principios en que se funda su Plan y revisemos

por nuestra cuenta los motivos que sin duda pesaron en el 'nimo de la autora para

intentar corregir con su reforma /os inconvenientes de /a escuela ordinaria.

2n el caso m's favorable la escuela cuenta oy con maestros suficientes para que

cada uno atienda s+lo a un grupo de mucacos de condiciones y cultura

semejantes, esto es, lo que llamamos un grado. Pero los niños de un mismo

grado, por seleccionados que est-n, tendr'n capacidades y gustos distintos y el

programa de ese grupo no podr' seguirse con /a misma rapidez por todos los

alumnos* o unos perder'n su tiempo aguardando a los otros* -stos quedar'n

rezagados y desorientados.

&dem's, un par-ntesis en la asistencia a la escuela por enfermedad u otra

causa cualquiera, impide al niño incorporarse a la marca de sus compañeros. &

cada momento se produce, por tanto, un desequilibrio en la graduaci+n. &un



suponiendo que esos grupos y maestros dispongan de locales suficientes para

todos sus trabajos sin interferir la labor de otros grupos, debido a un programa y a

un orario maravillosamente previsores, siempre se dar' una situaci+n con visos

de paradoja, a saber" que cada maestro a de eplicar a su grado todas /as

materias y a su vez debe especializarse en las necesidades de su secci+n. 7i se

piensa en que el maestro siga a su grupo tendría que ser a base de que cada añ,o

las promociones cambiaran íntegramente* pero como esto no es posible porque

cada niño marca a su paso, y al final del curso abr' una fracci+n que deba

avanzar y otra que deba permanecer, el maestro 9&: pasar' a un grado donde se

encuentra la mitad de sus antiguos alumnos y la mitad de los del maestro 96: que

no alcanzaron el paso al grupo 9#:. 2n suma, el maestro no a eco en realidad

m's que cambiar de local y de programa, a menos que se violente el paso de los

niños de unas a otras secciones para que no se descompongan los primitivos

grupos. 7i los maestros ensayaran especializarse por materias serían ellos

quienes recorrieran las distintas secciones surgiendo, creemos, un grave problema

de orario si -ste a de seguir manteni-ndose con detalle y con rigor.

2n este r-gimen el niño no es dueño de su tiempo, se lo administran los

dem's* ni es libre en su trabajo, emprende el que le ordenan* no puede poner el

serio de su personalidad* no ay modo de patentizarle las responsabilidades en

que incurre* no ay solidaridad ni cooperaci+n en el grado en que es conveniente.

3(ablaremos oy de los n0meros fraccionarios3, se les dice. os niños

saben que a llegado la ora de la aritm-tica, pero cualquiera sabe en qu-

direcci+n volaban en aquel momento sus espíritus. ; cuando la clase aya

alcanzado, quiz's, un alto grado de tensi+n y agudeza mental, es la ora* la

atenci+n ecitada o cansada ay que ponerla en un nuevo asunto, tal vez e/ que

menos le apetezca al mucaco en aquel momento. &dem's, el ilo de la materia

se rompe así a cada momento* el maestro tendr' razones para cortar por allí, pero

lo m's f'cil es que los cortes parezcan al niño arbitrarios.



;, sobre todo, el antiguo tipo de escuela est' organizado para la enseñanza

en lugar de crear un ambiente para la eperiencia. 2l Plan Dalton se ocupa de

armonizar ambas tendencias y de conseguir el fin propio de cada una.

a adquisici+n de conocimientos es un producto de la eperiencia y unfactor en la vida* /a escuela no puede, por consiguiente, desentenderse de /a

cultura, como de ning0n asunto en que los ombres ayan de estar luego

vivamente interesados. Pero la escuela no se compenetrar' con la vida en tanto

no se organice como una comunidad que tenga como esencial condici+n el libre

desenvolvimiento del individuo.

Los principios del Plan, en esquema podrían ser -stos"

1. ibertad.2. #omunidad de vida, colaboraci+n.3. 2sfuerzo individual para el /ogro de fines a alcanzar con presupuesto de

tiempo.

a libertad porque se propugna no es la que consiste en dejarnos acer

conforme a nuestras malas costumbres, de las que no podemos emanciparnos.

2so es esclavitud. 5tampoco es indisciplina ni licencia. 2l Plan Dalton reconoce al

alumno su libertad mental, le pone en condiciones de ser responsable, y en cuantoa los estudios, da a cada uno las facilidades necesarias para que pueda

proseguirlos en su propio camino. #oloca al espíritu en an'logas circunstancias de

bienestar que se eigen para nuestro organismo. 2sto es, que desde el punto de

vista acad-mico el alumno debe ser libre para proseguir sin interrupci+n el trabajo

que desee a fin de aprovecar la agudeza mental, la diligencia y la capacidad que

se despiertan cuando el queacer absorbe nuestro inter-s, por consiguiente,

quedan proscritas en el Plan las campanillas que anuncian los cambios de

ocupaci+n y que obligan al alumno a colocarse bajo el dominio de otra materia y

de otro maestro.

7i al alumno no se le permite marcar a su propio paso nada aprender'

s+lidamente. &dem's, la libertad consiste en disponer cada uno de su tiempo.

7ometerse a la distribuci+n que otra persona aga del suyo es una forma de



esclavitud. Por otra parte, los cambios arbitrarios en la direcci+n en que trabaja el

espíritu son antiecon+micos, porque, como la m'quina de vapor, el espíritu para

arrancar necesita aber alcanzado una conveniente presi+n.

os cortes en la tarea equivalen a apagar y encender de nuevo lascalderas. 2l segundo principio en que descansa el Plan Dalton, cooperaci+n o

interacci+n, puede ser un mentís para quienes an visto en el Plan un retroceso a

la enseñanza individual. 2s -ste e/ principio en que coincide el Plan Dalton con

todos los ensayos de escuela activa y del trabajo" llevar las unidades de

trabajadores a una interacci+n tan constante que ni el individuo ni el grupo puedan

presumir que viven con independencia de los dem's. ; no se diga que siempre a

conseguido esto la escuela porque siempre a abido reuni+n de niños y

programa com0n. a escuela antigua a permitido al niño vivir al margen del

grupo* se a rozado con sus compañeros incidentalmente, como se tropiezan en

el sanatorio los enfermos sujetos al mismo tratamiento. Pero en su conducta an

sido antisociales y erm-ticos. 4ampoco es bastante que el alumno sea un

partícipe inteligente en la vida de su clase, porque una educaci+n democr'tica

eige m's que eso. a vida social es m's que contacto, es colaboraci+n, y si la

escuela aspira a reflejar /a eperiencia social como fruto de la vida en com0n,

debe conseguir que todos sus elementos, individuos o grupos, mantengan

relaciones semejantes a las que fuera de la escuela ligan a los ombres y a los

pueblos.

Pues bien, el Plan Dalton crea condiciones en tal forma que el alumno, para

gozar de ellas, act0a involuntariamente como miembro de una comunidad social.

; si su conducta no concuerda con /a escuela, -sta le arroja de su seno* mas no

en virtud de una ley escrita, sino por el poder de la atm+sfera que allí se respira.

&sí llegar' el individuo a adquirir plena consciencia de que como cooperador es

responsable en el todo.

2sto tiene sus dificultades de procedimiento, ya que la organizaci+n escolar

no debe permitir que maestros ni alumnos se aíslen para esquivar la parte que les

corresponda en los trabajos y dificultades de los dem's. 2n cuanto al maestro, la



autoridad que inspire a de estar fuertemente cimentada en su personalidad. a

autoridad ficticia que el maestro quiera imponer transformando al llegar cada

mañana a la escuela su censurable personalidad, mueve m's a /a indisciplina que

al acatamiento. 4al circunstancia sería fatal para el concepto de la escuela como

vital unidad social. 2n cuanto al alumno, /a autoridad no reconocida y la imposici+n

de reglas inmutables le impedir' el desenvolvimiento de la conciencia social,

preludio indispensable a la formaci+n umana.

2l antiguo sistema es tan funesto desde el punto de vista acad-mico como

social. )n niño no emprender' nunca voluntariamente lo que no comprenda, a

elecci+n de sus juegos y trabajos est' determinada por una clara estimaci+n de la

propia capacidad para descollar en ellos. 4eniendo la responsabilidad de la

elecci+n, su espíritu act0a como un poderoso microscopio, tomando y analizando

cada aspecto del problema que necesita dominar para asegurar el -ito. 7i se le

dan las mismas condiciones de libertad al proponerle los problemas, su espíritu

obra en la misma forma. 2l Plan Dalton sit0a la tarea francamente ante el niño, le

indica el grado de esfuerzo que es preciso dar, y en seguida le deja que proceda

con arreglo a su inclinaci+n y su ritmo propios. a responsabilidad del resultado

desarrollar' no s+lo sus poderes intelectuales latentes, sino tambi-n su juicio y su

car'cter.

7iempre se a reconocido la necesidad de dividir los cursos en racionables

porciones. 2l conocimiento para el niño del ilo de la materia depende muy

especialmente del acierto con que est-n ecas esas divisiones. Pero en cambio

no se da importancia a la presentaci+n previa de un bosquejo general del asunto*

en seguida se sume al estudiante en los ecos y detalles y, cuando m's, se deja

a ellos mismos la interpretaci+n final de esos materiales. a psicología prueba que

el espíritu no trabaja siguiendo ese camino. Primero es preciso una idea general

de que partir* luego viene un proceso de an'lisis. Por esto el Plan Dalton pone al

mucaco en condiciones de conocer desde un principio el total de la tarea que se

le asigna. Para emprender la marca es preciso tener una visi+n clara de la meta.

&sí, al comienzo de un curso, se presenta al niño /a labor total para todos los



meses que aqu-l comprende. 2sto le proporciona una perspectiva y un plan, le

permitir' calcular /os pasos que necesita dar cada mes o cada semana para llegar

al fin en el tiempo convenido, en lugar de ir caminando a ciegas, sin idea de por

donde ni a donde va. <#+mo pretender en estas condiciones que el niño se

interese en la carrera, ni sienta deseos de triunfar= Por otra parte, los niños

aprenden como los adultos, adaptando otros medios a los fines.

¿Cuál será la actitud de un alumno cuando como en el PIan Dalton, se

le hace responsable de su trabao? /nstintivamente buscar' la mejor manera de

ejecutarlo, /a ensayar', y si no le conviene, la desecar' y emprender' otra. 2n

esos tanteos consultar' con el maestro y con sus compañeros. 2l cambio de

impresiones le ayuda a aclarar sus ideas y su plan. #uando remata su tarea se

presentara con todo el regocijo del -ito, porque allí lleva todo lo que -l a

pensado, cuanto a sentido y vivido en aquel período. 2sta es la verdadera

eperiencia. 2s la cultura adquirida mediante el individual desenvolvimiento y la

cooperaci+n.

2ste procedimiento no s+lo estimular' el m's profundo inter-s y los m's

altos poderes del estudiante, sino que le enseñar' a proporcionar el esfuerzo a los

resultados que desea alcanzar. 2/ ataque a un problema ser' m's f'cil si el niño

puede concentrar todas sus fuerzas, en un momento dado, sobre lo que -l mismo

estime digno de aquel embate. Para todo esto, el Plan Dalton trae una novedad

que nadie podr' negarle" permite que el niño presupueste su tiempo y lo gaste

conforme a sus necesidades.

Miss Parkurst declara que su m-todo a querido traducir a la pr'ctica este

pensamiento de 2merson" -l .secreto de la educaci+n descansa en el respeto al

alumno. $o est' en nuestra mano escoger lo que aquel debe saber. $uestraecesiva intervenci+n, inoportuna e inadecuada, puede desviar al estudiante de sí

mismo. >espetar al niño es respetar el nuevo fruto de la naturaleza que gusta de

las analogías, pero no de las repeticiones. $o invadamos con el papel de padre

toda la vida del mucaco. 2sto despertar' la protesta de mucas gentes celosas

de llevar las riendas de la moralidad y de la disciplina, acus'ndonos de abandonar



al niño a sus pasiones y capricos y sembrando anarquía. 7eamos el compañero

de pensamiento, su amigo, el admirador de su virtud y procuremos no ser las

víctimas de su pecado. $adie ace mayores esfuerzos que el niño por eplicarse a

sí mismo y por merecer /a aprobaci+n de quienes /o rodean. 2l niño no esquiva al

maestro, al contrario, .lo busca. #onsciente de la pobreza de sus medios para

transmitir sus pensamientos, anela allar el sabio que pueda ponerlo en posesi+n

del instrumento con que realizar sus deseos. 2l niño es dicoso recre'ndose en la

idea que le fascina. Dej-mosle caminar con buena o mala informaci+n* ya volver'

en sí y desear' entrar en la sociedad de los amantes de la verdad. ?ueremos

vernos reproducidos en nuestros alumnos, acer varios ejemplos de nuestro yo.

#on uno ay suficiente.

Pero /a libertad es parte integrante del plan y /a autora a evitado la

tentaci+n de acer un molde estereotipado para todas las escuelas. 2n el mismo

sentido se abstiene de dogmatizar sobre las materias que deben incluirse en el

programa y sobre la forma de medir los resultados de los trabajos de los alumnos.

2l plan no prescinde, pues, del programa confeccionado de antemano, pero deja

amplio margen, para que ese programa sea tan diverso como se quiera, incluso

para que sea el que se guie en centros que persiguen fines acad-micos

especiales.

; no se suprime el programa eco por el maestro porque por muca que

sea la libertad del niño para sentir predilecciones, y por conveniente que así sea,

a de uirse por aora de la especializaci+n. &dem's, no es prudente fomentar las

manías particulares, que pueden transformar el inter-s en una pasi+n est0pida.

ombardo >adice nos a ablado con gran elocuencia de los peligros que encierra

la supresi+n del programa. (e aquí una glosa de sus ideas a este respecto" en la

vida infantil se ven frecuentemente fases de predilecci+n que acen abandonar o

descuidar todo lo dem's, verdaderos ecesos de determinaci+n en el inter-s. as

escuelas cuyos programas an sido suprimidos siguen @as manifestaciones

intempestivas de la elecci+n capricosa y toman un car'cter patol+gico. $o cabe

ablar entonces de la libertad del niño. 7i se le dejara acer de un modo absoluto,



el niño abusaría de las golosinas, pasando de una a otra, pero el que alimenta al

niño, por indulgente que deba ser con sus preferencias, se propone que llegue a

ser un omnívoro. #oncedamos el m's amplio margen al trabajo libre, al

componimento líbero, en un sentido m's restringido, pero no permitamos que una

actividad espont'nea invada el campo de tal modo que cierre el camino a otras

aptitudes dej'ndolas dormidas. 2l programa de estudios tiene por objeto provocar

el inter-s en el mayor n0mero de direcciones.

2l tipo individual tiene sobrado campo de manifestaci+n, imprimiendo

car'cter personal a la obra que realizamos. $o cabe concebir que el niño deje de

desarrollar simult'neamente sus aptitudes de epresi+n Alenguaje, arteB, de

construcci+n, de observaci+n y selecci+n, creadoras, de orden y organizaci+n, de

inibici+n y concentraci+n interior, de participaci+n social, pero /a iniciativa del

maestro debe trazar un programa que responda a esas finalidades y a los ideales

educativos de su -poca y de su país.

La educación nueva ve en el niño Ia posibilidad de un alma original: de un

poeta, de un científico, de un apóstol, y para no entorpecer Ia germinación de esa

simiente quiere el trabajo individual, pero alimentado, del hombre completo que

hay en cada niño. <?u- quiere significarse si no cuando se dice que la semilla a

de depositarse en un terreno rico en elementos nutritivos= 2/ terreno es el

programa que ace probar at niño todas las direcciones posibles del ombre. Por

eso el trabajo libre sin el programa colectivo puede llegar a una falsa libertad y a /a

atrofia de facultades latentes.

2sta es la misi+n del programa de estudios que el Plan Dalton considera en

todo su valor. Pero de eso a tomarlo como problema principal de la escuela, ay

muca distancia. 2s preciso pensar muco m's en el alumno que en el programa.2l programa es s+lo la t-cnica, el instrumento. 2l prop+sito a de ser el niño.

as dificultades que agobian al maestro no provienen de la t-cnica,

provienen del niño. #uando las segundas desaparezcan quedar'n desvanecidas

las otras, no sin antes aber reeco /a maquinaria escolar pensando en el



todas las materias fundamentales en porciones adecuadas y con la coordinaci+n

posible.

&lguien a supuesto que el sistema Dalton ecluye las clases. $o, las

admite y las forma, pero con aclaraciones a este concepto. 2s ilusorio confiar enque cuando maestro aya epuesto brillantemente su lecci+n, los alumnos an

llegado al mismo punto. )nos no abr'n llegado m's que al tercio, otros a la

mitad, algunos al final del camino. 2se es el resultado del sistema tradicional de

clases. Por reducidas que sean las secciones de niños y por aquilatada su igual

capacidad, siempre se distinguir'n en un poder de asimilaci+n distinto para la

istoria o para las matem'ticas que en seguida distancia a unos de otros. 2s

absurdo seguir manteniendo el sistema de clases. os nuevos ensayos

pedag+gicos est'n conformes con esto, aunque lo ayan intentado resolver de

maneras distintas.

2l Plan Dalton tiene grupos de alumnos* al comienzo, formados por los

maestros, son grupos reales compuestos por niños que se supone podr'n seguir

una tarea anal+gica m's tarde, a medida que los escolares avanzan en proporci+n

a su capacidad y a su esfuerzo, se van encontrando unidos los que no

comenzaron juntos. a denominaci+n de los grupos es entonces algo abstracto

que no responde a suma de individuos, sino a temas de trabajo. 7e encuentran

agrupados circunstancialmente quienes se ocupan de una misma cuesti+n, y

puede que algunos de ellos, por su permanencia en departamentos distintos de la

escuela, ni siquiera se vean cierto día durante las oras de trabajo libre. &l tratar

del Plan en la pr'ctica se comprender' esto claramente. os grupos que le acen

en las escuelas Dalton son, pues, grupos por progresos, no grupos de instrucci+n,

7on unidades sociales.

!l Plan Dalton no es un método "ue con el uso se petrifica # bao el

cual van pasando las $eneraciones de alumnos% $o es programa de estudios

que sirva para marcar a los individuos que an logrado completarlo. 2s una vía de

reorganizaci+n educativa que trata de poner de acuerdo la doble actividad de

enseñar y aprender. 2sto es, cuando se emplee inteligentemente, crear'



condiciones que capaciten al maestro para la enseñanza y al alumno para el

aprendizaje.

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