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Comunidad Pasionista | Santuario de Santa Gema | 28002 Madrid | Febrero 2019 | Nº 1.044 | Año CII

El camino pasionista con los

Jo´venesQueridos jóvenes de todo el mundo:Los pasionistas nos hemos reunido en Romapara celebrar nuestro Capítulo Generalal mismo tiempo que tenía lugar el Sínodosobre los jóvenes. Tuvimos en nuestra mentey en nuestro corazón a todos los jóvenesdel mundo. Durante esos días os hicimospresentes en nuestras oraciones. Queremoscompartir con vosotros nuestra misióny carisma. Los valores que vosotros abrazáisy expresáis nos llaman a renovarnuestra vocación pasionista. Como vosotros,también nosotros necesitamossuperar prejuicios.Si queremos avanzar juntos necesitamoscomenzar nuestra conversión.

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PASIONISTAS - Madrid

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SÁNCHEZ A.

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Agradecemos su colaboración.

Depósito Legal: SA Nº 1 - 1978Imprime: GRÁFICAS DEHON

PP. Reparadores - Tel. 916 751 536Preimpresión: Francisco Antón

SUMARIO

❚ Mensaje Pasionista MENSAJE DEL CAPÍTULO O ASAMBLEA

GENERAL PASIONISTA

❚ Mirada contemplativa al Señor Crucificado JOSÉ LUIS QUINTERO SÁNCHEZ, C.P.

❚ El Papa Francisco es un gran comunicador, y su palabra escrita, a raíz de encuentros y entrevistas M.G.

❚ Escuela de S. Pablo de la Cruz SOR CATI DE LA SS. TRINIDAD, C.P.

❚ Familia y vida JULIA MERODIO A.

❚ Entrevistas al atardecer TRANSCRIBIÓ: M.G.

❚ La España Católica, y la que no lo es MIGUEL

❚ Cada dos minutos JUAN CARLOS PRIETO TORRES

❚ Para qué Pasionista? JUAN IGNACIO VILLAR (VILY)

❚ Meditación ante un cuadro RAFAEL REY, O.C.D.

❚ Desde la otra orilla GREGORIO SANTOS ZAYAS

❚ Encuentros al caminar PEPE FERNÁNDEZ DEL CACHO

❚ Alegrémonos juntos RAFAEL SÁNCHEZ A., C.P.

❚ Santa Gema abrió sus brazos a la juventud de Taizé PEDRO LARA, C.R.

❚ La Palabra del Papa Francisco❚ Orar para ser FERNANDO HOLGADO RETES

❚ El evangelio cada día ANTONIO SAN JUAN

❚ Rincón familiar “Santa Gema”


Desde la Cruz, Jesús dirige su mirada a todas las personas. Él

conoce los sufrimientos de cadapersona, especialmente de los ex-cluidos, de los explotados, de losmanipulados, de los que sonmaltratados de diversas mane-ras. Por esta razón, Jesús Cru-cificado nos llama a encon-trarnos con ustedes los jóvenes dondequiera que estén, a llevar y desarrollar nuestro servicio amorosocon ustedes, lo mismo que la Iglesia,desde el comienzo, ha cuidado de lahumanidad. Hemos oído hablar e in-cluso hemos discutido sobre su tibieza;percibimos el agnosticismo de algunosde ustedes; si además los vemos comopersonas “que están alejadas de laIglesia”... debemos re-conocer nuestra partede culpa por no haberconseguido escuchar-los. Creemos que unaforma para renovarnuestra misión es pre-cisamente aprender aescucharlos. Nosotros,los pasionistas, estamosen un proceso de revi-sión y renovación denuestra misión y sabe-mos que este procesoconlleva riesgos. A pe-sar de todo, queremosafrontar dichos riesgos,

con ustedes y por ustedes. Sabemosque, en este proceso, podemos apren-der mucho de ustedes. Queremos en-trar en contacto y compartir la alegría

del evangelio tambiéna través del mundo di-gital, mediante la crea-ción de redes socialescon valores evangélicos.Tenemos mucho queagradecer a Dios porsu presencia y aperturaal diálogo. Esperamosque quieran acompa-ñarnos en la nuevaevangelización.

Todos compartimosla llamada común a lasantidad que recibimosa través del bautismo.Nuestra misión nos

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Mensaje Pasionista

Caminar juntos

Los pasionistasqueremos renovarnuestra misio´n conustedes. Con espi´ritude gratitud, sabemosque somos unafamilia; con espi´ritude profeci´a, nosenfrentamos ydesafiamos a larealidad; con espi´ritude esperanza, nosatamos a la Cruz.

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Mensaje Pasionista

pide que proclamemos el Evangeliode la Pasión en el mundo con nuestravida y nuestro apostolado, de acuerdocon las enseñanzas espirituales deSan Pablo de la Cruz. Ustedes puedenayudarnos a llevar a cabo esta misión,porque tienen su propio espacio per-sonal donde expresar su fe. Puedenasumir el riesgo comprometiéndo-se a evangelizar y transformar las diversas realidades que continúan crucificando a la humanidad. La es-piritualidad de la pasión les ofrecemúltiples oportunidades para el vo-luntariado, para cumplir su vocaciónsiendo solidarios y poder llegar asíjunto a todos aquellos que están enlas periferias. Esta es la vocación mi-sionera a la que la Iglesia nos invitapara vivir de forma profética.

Nosotros, los pasionistas, queremosvivir, servir y compartir el carisma

de la Pasión con ustedes y ofrecerrespuestas de esperanza a quienesbuscan opciones de vida. Queremosaumentar y revitalizar juntos todoaquello que da sentido a nuestra feli-cidad, nuestra esperanza, nuestraconfianza, nuestro compromiso... Dara cada uno de ustedes una visiónclara del futuro. Por eso, recordandolas palabras del Papa Francisco a losjóvenes en Cracovia durante la Jor-nada Mundial de la Juventud, noso-tros, los pasionistas, queremos decir:“ni jóvenes jubilados, ni jóvenes desofá”. Jóvenes y pasionistas en mar-cha, jóvenes y pasionistas en el ca-mino, jóvenes y pasionistas que avan-zan unos junto a otros, mirando haciael futuro.

❚ MENSAJE DEL CAPÍTULO

O ASAMBLEA GENERAL PASIONISTA.ROMA, OCTUBRE DE 2018

Asamblea Capitular Pasionistaen Roma.Asamblea Capitular Pasionistaen Roma.



La mirada al Crucificado-Re-sucitado revela la plenitud de lahistoria de la salvación en clavede “cumplimiento” y “recapitula-ción”. La reflexión creyente ras-treará en toda la Escritura lasimágenes que en Él se desvelan,se completan y plenifican; e in-cluso son incluidas en un nuevoparadigma interpretativo. La ac-titud del Peregrino en el caminode Emaús que “empezando porMoisés y continuando por todoslos profetas les explicó lo que ha-bía sobre él en todas las Escritu-ras” (cf. Lc 24,27) muestra el iti-nerario interpretativo creyentenunca definitivamente con-cluido. Algunas de las claves interpretativas retoman estas claves veterotestamentarias: ElCrucificado es el Cordero Pas-cual inmolado por nosotros; esel Nuevo Templo del que brotael Agua-Espíritu, fuente de toda regeneración; esel Nuevo Adán que en el seno del sueño-muerteengendra a la Nueva Eva-Nueva Humanidad, laIglesia-Esposa, madre de los nuevos hijos que re-nacen del Agua y del Espíritu; el Siervo de Yahvéque haciéndose obediente hasta la muerte es Sal-vación y Justificación; el Sumo Sacerdote que seofrece a si mismo en sacrificio en el altar de lacruz; José que vendido por sus hermanos obtieneun nuevo pueblo; el Hombre levantado en altoque atrae a todos en un acto universal de reden-ción y reconciliación; el Rey de la Gloria que reinasobre el leño de la Cruz.

EL CORDERO PASCUAL

“No le quebraron hueso alguno” (Jn 19,33-36)evocando el cordero de la Cena de Pascua “al queno se le quebrará hueso alguno” (Ex 12,46). Elevangelista Juan citando la Escritura intenta aplicaral Crucificado la tipología del Cordero Pascual,también lo hace con la temporización de sumuerte en cruz. Según la narración del libro delÉxodo 12,1-14, en la noche de la Pascua de la li-beración cada familia debía inmolar un corderode un año, sin defecto y asar la carne al fuego.Para ser asado el cordero era atravesado vertical-mente por un bastón granado. San Justino añadeque un segundo leño atravesaba horizontalmentela espalda para mantenerle abierto. Los dos leñosque sostenían la victima pascual presentaban lafigura de una cruz. Recreando esta imagen, la tra-dición afirma que la carne del Cordero colocadoen la cruz era abrasada por el fuego de la caridad.

DEFINITIVO “CORDERO PASCUAL” Y “NUEVO TEMPLO”Prefiguraciones de la Cruz en el Antiguo Testamento (II)

Con la sangre de esta víc-tima se debían rociar los din-teles de las casas donde sereunían los hebreos: En lapascua-paso el Señor verá lasangre y salvará a su puebloliberándolo de la esclavitudde Egipto (Ex 12,13). El pro-feta Isaías en el CuartoPoema del Siervo de Yahvé,lo describe como “Corderollevado al matadero, comooveja que delante de sus acu-sadores no abría la boca…portando el pecado de mu-chos e intercediendo por lospecadores” (cf. Is 53,7-12).Juan el Bautista, dando testi-monio de Jesús lo saludaaplicándole la imagen bíblicadel Cordero: “Este es el Cor-dero de Dios, el que quita elpecado del mundo” (Jn 1,29).En el libro del Apocalipsis se

habla de un “Cordero, como inmolado”, que es-tando en el trono permanece no muerto, sinocomo el Viviente: “…porque fuiste degollado ycompraste para Dios con tu sangre hombres detoda raza, lengua, pueblo y nación… Digno es elCordero degollado de recibir el poder, la riqueza,la sabiduría…” (cf. Ap 5, 9-12). Para la obra joánicano ha ninguna duda: El Crucificado es el Corderode Dios, anticipado en la imagen del Cordero Pas-cual, que rescata a la humanidad a precio de susangre. Ninguna oferta sacrificial de parte delhombre estaba en grado de eliminar el pecadodel mundo. Dios mismo, en su amor por la hu-manidad, es quien hace la ofrenda: Se dona en su único Hijo haciéndose ofrenda y sacrificio(Jn 3,16; Rm 8,31-32). No es necesario ya el cor-dero del rebaño para celebrar la Pascua, ahora esla “sangre preciosa de Cristo que como corderosin defecto y sin mancha se entrega” (cf. 1 P. 1,19)liberándonos de una esclavitud más radical quela de Egipto. Se ofrece como alimento para elnuevo éxodo hacia la libertad. Se hará parte delNuevo Pueblo aquel que alimentándose de él sedeja configurar por el amor que le dona y le trans-forma (cf. Jn 15,13).

La misma cronología del Evangelio de Juanque sitúa la muerte de Jesús cuando se inmolabanlos corderos en el templo funda esta tradición in-terpretativa (cf.Jn 18,28; 19,14.31.33).

La literatura patrística ha comentado la tipo-logía del Crucificado a la luz del Cordero Pascual.Así sucede por ejemplo en esta homilía sobre laPascua de Melitón de Sardes, obispo (muerto ha-cia el año 180):

Mirada contemplativa al Señor Crucificado


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Mirada contemplativa al Señor Crucificado

“Los profetas predijeron muchas cosas sobreel misterio pascual, que es el mismo Cristo, alcual sea la gloria por los siglos de los siglos.Amén. Él vino del cielo a la tierra para remediarlos sufrimientos del hombre; se hizo hombre enel seno de la Virgen, y de ella nació como hom-bre; cargó con los sufrimientos del hombre, me-diante su cuerpo, sujeto al dolor, y destruyó lospadecimientos de la carne, y él, que era inmortalpor el Espíritu, destruyó el poder de la muerteque nos tenía bajo su dominio.

Él fue llevado como una oveja y muertocorno un cordero; nos redimió de la seduccióndel mundo, como antaño de Egipto, y de la es-clavitud del demonio, como antaño del poderdel Faraón; selló nuestras almas con su Espírituy los miembros de nuestro cuerpo con su sangre.

Él, aceptando la muerte, sumergió en la de-rrota a Satanás, como Moisés al Faraón. Él cas-tigó la iniquidad y la injusticia, del mismo modoque Moisés castigó a Egipto con la esterilidad.

Él nos ha hecho pasar de la esclavitud a la li-bertad, de las tinieblas a la luz, de la muerte a lavida, de la tiranía al reino eterno, y ha hecho denosotros un sacerdocio nuevo, un pueblo ele-gido, eterno. Él es la Pascua de nuestra salvación.

Él es quien sufría tantas penalidades en la per-sona de muchos otros: él es quien fue muerto enla persona de Abel y atado en la persona de Isaac,él anduvo peregrino en la persona de Jacob yfue vendido en la persona de José, él fue expósitoen la persona de Moisés, degollado en el corderopascual, perseguido en la persona de David y vi-lipendiado en la persona de los profetas.

Él se encarnó en el seno de la Virgen, fue col-gado en el madero, sepultado bajo tierra y, re-sucitando de entre los muertos, subió a lo másalto de los cielos. Éste es el cordero que perma-necía mudo y que fue inmolado; éste es el quenació de María, la blanca oveja; éste es el quefue tomado de entre la grey y arrastrado al ma-tadero, inmolado al atardecer y sepultado porla noche; éste es aquel cuyos huesos no fueronquebrados sobre el madero y que en la tumbano experimentó la corrupción; éste es el que re-sucitó de entre los muertos y resucitó al hombredesde las profundidades del sepulcro”.

EL NUEVO TEMPLO

“Uno de los soldados le atravesó el costadocon la lanza y al instante salió sangre y agua” (Jn 19,34). Conociendo el evangelio de San Juancomo el “Evangelio de los signos” es difícil pensarque la referencia del evangelista a la sangre y alagua que brota de la herida abierta por la lanzaen el costado de Cristo sea una simple referenciabiológica o una crónica. Es más adecuado ver enello la referencia a la profecía acerca del “NuevoTemplo” que el Señor mismo había edificado enlos tiempos mesiánicos.

El Profeta Ezequiel afirma: “El agua bajaba dedebajo del lado derecho del templo… Esta aguadesemboca en el mar… y el agua queda sa-

neada… Por donde quiera que pase el torrente,todo ser viviente que en él se mueve vivirá… Aorillas del torrente, a uno y otro margen, crece-rán toda clase de árboles frutales…” (cf. Ez 47,1-12). Y el Profeta Zacarias afirma: “Derramaré so-bre la dinastía de David y sobre los habitantesde Jerusalén un espíritu de gracia y de oración;y mirarán hacía mí como a aquel a quien traspa-saron, harán duelo por él como se llora a un hijoúnico, y le llorarán amargamente como se lloraa un primogénito” (12,10). “Aquel día habrá unafuente a disposición de la casa de David y de loshabitantes de Jerusalén, para lavar el pecado yla impureza” (13,1). “Aquel día manarán de Jeru-salén aguas vivas, mitad hacia el mar oriental,mitad hacia el mar occidental: manarán tantoen verano como en invierno. Y Yahvé reinaránen toda la tierra…” (14,8).

Jesús mismo había comparado su cuerpo aun templo al afirmar, “destruid este templo y entres días lo reconstruiré” (Jn 2.19.21). Este es eltemplo nuevo y definitivo, que no ha sido hechopor mano de hombre, en el que el Verbo de Diosestablece su morada entre los hombres (Jn 1,14).Además, señala que el templo de piedra será des-truido, reseñando que Él mismo habrá de moriry resucitar: El templo de su cuerpo será destruidoy reconstruido, siendo esta la voluntad del Padre(Jn 10,17; 17,4). Acercándose un día cercano a lafiesta de los tabernáculos, Jesús dice esta palabraprofética: “Quien tenga sed que venga a mi ybeba el que cree en mí, como dice la Escritura:De su seno correrán ríos de agua vida. Esto lodecía refiriéndose al Espíritu que iban a recibirlos que creyeran en él. Porque aún no había Es-píritu, pues todavía Jesús no había sido glorifi-cado” (Jn 7,37-39).

Ya en el Antiguo Testamento el agua era sím-bolo de la vida que Dios da, sobre todo en lostiempos mesiánicos (Is 12,3; 55,1; Ez 47,1; Sal36, 9-10). También en el diálogo con la Samari-tana Jesús había anunciado el don del Espírituen el signo del agua (Jn 4,14-15). Con esta pa-labra, Jesús promete el don del Espíritu simbo-lizado con el agua. Citando la Escritura (Zac14,8; Ez 47,1s) se preanuncia también una fuenteque regenera toda la humanidad: Así hace com-prender que la efusión del agua-Espíritu llegaráen el momento de su exaltación-glorificación.Para el evangelio de Juan el momento de laexaltación-glorificación de Jesús coincide consu “elevación” sobre la cruz (cf. Jn 12,32: cuandosea elevado sobre la tierra, atraerá todo a mí).Será cuando suceda la mística boda entre el Es-poso y la Esposa; el don nupcial son el agua, lasangre y el Espíritu: “Este es el que vino conagua y con sangre: Jesucristo; no solamentecon el agua, sino con el agua y con la sangre. Yes el Espíritu quien da testimonio: el Espíritu, elagua y la sangre, y los tres convergen en lomismo” (1 Jn 5,5-8).

La sangre que brota del costado de Jesús esfigura de la muerte que él acepta para salvar a lahumanidad. Es la expresión de su gloria, de su


“¿Deseas conocer el valor de la sangre deCristo? Remontémonos a las figuras que la pro-fetizaron y recordemos los antiguos relatos deEgipto.

Inmolad —dice Moisés— un cordero de unaño; tomad su sangre y rociad las dos jambas yel dintel de la casa. “¿Qué dices, Moisés? La san-gre de un cordero irracional ¿puede salvar a loshombres dotados de razón?”. “Sin duda —res-ponde Moisés—: no porque se trate de sangre,sino porque en esta sangre se contiene una pro-fecía de la sangre del Señor”.

Si hoy, pues, el enemigo, en lugar de ver laspuertas rociadas con sangre simbólica, ve brillaren los labios de los fieles, puertas de los templosde Cristo, la sangre del verdadero Cordero, huirátodavía más lejos.

¿Deseas descubrir aún por otro medio el va-lor de esta sangre? Mira de dónde brotó y cuálsea su fuente. Empezó a brotar de la misma cruzy su fuente fue el costado del Señor. Pues muertoya el Señor, dice el Evangelio, uno de los solda-dos se acercó con la lanza, le traspasó el costado,y al punto salió agua y sangre: agua, como sím-bolo del bautismo; sangre, como figura de la eucaristía. El soldado le traspasó el costado,abrió una brecha en el muro del templo santo, yyo encuentro el tesoro escondido y me alegrocon la riqueza hallada. Esto fue lo que ocurriócon el cordero: los judíos sacrificaron el cordero,y yo recibo el fruto del sacrificio.

Del costado salió sangre y agua. No quiero,amado oyente, que pases con indiferencia antetan gran misterio, pues me falta explicarte aúnotra interpretación mística. He dicho que estaagua y esta sangre eran símbolos del bautismo yde la eucaristía. Pues bien, con estos dos sacra-mentos se edifica la Iglesia: con el agua de la re-generación y con la renovación del EspírituSanto, es decir, con el bautismo y la eucaristía,que han brotado, ambos, del costado. Del cos-tado de Jesús se formó, pues, la Iglesia, comodel costado de Adán fue formada Eva.

Por esta misma razón, afirma san Pablo: So-mos miembros de su cuerpo, formados de sushuesos, aludiendo con ello al costado de Cristo.Pues del mismo modo que Dios formó a la mujerdel costado de Adán, de igual manera Jesucristonos dio el agua y la sangre salidas de su costado,para edificar la Iglesia. Y de la misma maneraque entonces Dios tomó la costilla de Adán,mientras éste dormía, así también nos dio el aguay la sangre después que Cristo hubo muerto.

Mirad de qué manera Cristo se ha unido a suesposa, considerad con qué alimento la nutre. Conun mismo alimento hemos nacido y nos alimen-tamos. De la misma manera que la mujer se sienteimpulsada por su misma naturaleza a alimentarcon su propia sangre y con su leche a aquel a quienha dado a luz, así también Cristo alimentasiempre con su sangre a aquellos a quie-nes él mismo ha hecho renacer”.

❚ JOSÉ LUIS QUINTERO SÁNCHEZ, C.P.


amor hasta el extremo (Jn 13,1), la del pastor quese dona por las ovejas (Jn 10,11), del amigo queda la vida por sus amigos (Jn 15,13). Es vuelta alCrucificado como la Iglesia puede repetir: “hemoscontemplado su gloria” (Jn 1,14)

El agua que brota representa a su vez, el Espí-ritu, principio de vida que todos hemos podidorecibir cuando ha manifestado su gloria (cf.Jn7,37-39). Es el momento de la cruz, “el último día”anunciado por Jesús, en el cual los creyentes enél deben acercarse a él para beber el agua-Espírituque brotará de su intimidad. De este nuevo tem-plo, el Crucificado, surgirán las llamas del Espíritu(Jn 7,38; Ez 47,1.12), el agua que se transformaráen el hombre en una fuente que manará dandovida sin término (Jn 4,14).

El Espíritu es el don anunciado para los últimostiempos (Hec 2,17-21.33) cuando será derramadoen los corazones (Rm 5,5), creando la condiciónde hijos de Dios (Rm 8,15-16; Gál 4,6), sien-do también el Espíritu de las bodas mesiánicas(Ap 21,2.9-10; 22,17).

Con el don del agua, de la sangre y del Espíritu,el proyecto de Dios se completa en Jesús (Jn19,28-30); ahora debe completarse en la huma-nidad. El Espíritu que brota del Crucificado seráaquel que transformará al hombre dándole la ca-pacidad de amar y llegar a ser hijo de Dios (Jn1,12). Con estos hombres nuevos, simbolizadosen Juan y María hecha madre junto a la cruz, seformará la nueva comunidad mesiánica, la quebrota de la Nueva Alianza en el Espíritu.

La literatura patrística ha comentado abun-dantemente la tipología del Crucificado comoNuevo Templo del que brotando el agua y la san-gre se dona la vida en el Espíritu. Así los expresaSan Juan Crisóstomo (fallecido en el año 407) enuna de sus catequesis:


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El Papa Francisco,un gran comunicador. Y su palabraescrita, a raíz de encuentros y entrevistas

Lograr una entrevistapersonal con el PapaFrancisco, es posible,pero no tiene que resul-tar fácil, como fácil-mente se comprende.Con todo, el Padre Fer-nando Prado, religiosoclaretiano, la obtuvo,para abordar con elPapa y publicar luego enforma de libro sus con-versaciones, sobre untema bien concreto; “Lafuerza de la vocación.La vida consagradahoy”. Los dos, el Papa y el religioso, com-partieron, en pleno mes de agosto, a lolargo de cuatro horas. Fruto de aquel en-cuentro, un libro con aquel mismo título,acerca de un tema que Fernando dominabien, que Francisco conoce desde dentroy por el que siempre ha tenido gran in-terés. A raíz de aquel encuentro, escribíael Padre Fernando: “Hace tiempo queFrancisco perdió el miedo a ser entre-vistado. Fue Francesca Ambrogetti quienle abrió los ojos y le convenció de quesus palabras podrían hacer más bien quesu silencio. Desde que llegó a la Sede dePedro, Francisco ha concedido varias en-trevistas...”.

Ciertamente, y algunas, ya antes,siendo Arzobispo de Buenos Aires.Francisco es un comunicador extraor-dinario. Sintoniza muy bien con unos ycon otros. Es claro y ameno en sus ex-presiones y apreciaciones. Y como laspalabras, todas las palabras, antes odespués, se las lleva el viento aún

cuando perduren los ecos en algunoscorazones, resulta genial la idea de en-garzarlas en forma de libro, de DVD,etc., para volver sobre ellas con la ma-yor facilidad.

El Papa lo sabe muy bien, y es porello que, evangelizador al cien por cien,ahora desde su sede en Roma y pere-grinando por el ancho mundo, no re-húye las entrevistas, las valora y lasacepta. Esta sobre el tema por demásactual y del mayor interés sobre la vidaconsagrada, que el padre Fernando lo-gró y nos ha regalado, ha merecido lapena y ahí está, en forma de libro, al al-cance de cuantos se interesan por lavida consagrada y también de los reli-giosos y religiosas, que siempre nece-sitan nuevas luces y nuevos ánimospara proseguir su camino de constantebúsqueda y encuentro con el Absoluto.En este libro, los encontrarán.

❚ M.G.



Escuela de San Pablo de la Cruz

Hacía muchos años que Gabriel (nuestro S. Gabriel) había muerto. Gema (nuestra Sta. Gema) estabaenferma y no parecía tener buen pronóstico su enfer-medad. Escribe en su diario:

“Un día, una señora, que solía venir a visitarme,me trajo para leer la vida del venerable Gabriel. Latomé con desprecio y la puse bajo la almohada, laseñora me recomendó que me encomendara a él, pero nole hice caso. En casa comenzaron a rezarle todas lasnoches tres Pater, Ave y Gloria”.

Gema se mostró indiferente ante el venerableGabriel, pero días después sufrió una fuerte tentacióny sintió la inspiración de pedirle ayuda. Se dijo: “¡primeroel alma y después el cuerpo!”.

Experimentó la protección S. Gabriel y desde aqueldía comenzó a leer su Biografía. “La leí varias veces;no me cansaba de leerla y admirar sus virtudes ysus ejemplos... desde el día en que mi queridoprotector me curó el alma, comencé a tenerleuna particular devoción: por la noche no medormía si no tenía su imagen bajo la cabece-ra... no dejaba ningún día de invocarle”.

Pasado tiempo, la señora que le habíaprestado la biografía del venerable Gabrielvolvió a recogerla. Gema lloró al tener queentregársela. Pero aquella misma noche,en sueños, se le apareció el venerable Ga-briel. Vestía de blanco y Gema no lo reco-noció. Pero al quitarse la vestidura blanca,

“Ayer, después de la comunión, Jesús me mandó hacer este ofrecimiento:Primero, de toda mi alma; Luego, de los años que me restan de vida. Me preguntósi le había ofrecido todas aquellas fatigas, que la obediencia o mi condiciónexigen de mí; lo hice de buena gana. Por último, me preguntó también si leofrecía de buen ánimo todas las amarguras, los ligeros trabajos que Él memandará para probar mi fidelidad y conformidad con su divina voluntad. Todose lo ofrecí de buena gana”

(Santa Gema)

S. Gabriel de la Dolorosa y Sta. Gema

San Gabriel de la Dolorosa murió el 27 de febrero de1861. Gema nació el 12 de marzo de 1878, es decir, 17

años más tarde. Gabriel ya en el cielo y Gema aún aquíen el suelo. Entre ambos se dio una relación mística y

profundamente real muy intensa. La fiesta litúrgicade San Gabriel es el 27 de febrero.


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Escuela de San Pablo de la Cruz

lo vio con el hábito pasio-nista. Le dijo que el sacrificiode desprenderse de su bio-grafía se lo había agradecidoy por eso venía él mismo avisitarla. Le dio a besar suhábito y el rosario y desa-pareció.

Pasaban los meses y laenfermedad no remitía.Gema deseaba que volviesesu amigo pasionista. Él, sinembargo, no se dejaba ver.

Gema quiso hacer votode virginidad y prometer que,si curaba entraría con las re-ligiosas de la caridad que laatendían en su enfermedad.Por la noche, también ensueños, se le apareció el ve-nerable Gabriel. Le dijo quehiciese su voto de virginidadpero no añadiese más. Lamiró sonriendo y le dijo: ¡her-mana mía!

El tiempo pasaba y Gemano mejoraba. Una de susmaestras le aconsejó haceruna novena a la beata Mar-garita María de Alaco-que –monja salesa–. S. Ga-briel –entonces Venerable–venía todas las noches a rezar con ella dicha novena.A veces, le ponía su manoen la frente; un día le pre-guntó si se quería curar.Gema respondió que ya ledaba lo mismo. Entonces S. Gabriel le dijo: “sí, te cu-rarás. Ruega con fervor alCorazón de Jesús. Todas lastardes vendré yo aquí con-tigo y juntos rogaremos alCorazón de Jesús”. Añadíantambién tres Gloria Patrien honor de la Beata Mar-garita. “Era el penúltimo díade la Novena. Llamé al con-fesor y me confesé, muy tem-prano comulgué. Jesús me re-

petía: Gena ¿quieres curar?Yo no podía contestar. Perola gracia se me había con-cedido, estaba curada”.

Además de éste, Gematiene otros muchos encuen-tros con S. Gabriel, comose lo detalla, en sus cartas,al P. Germán.

Curiosamente, antes quea los padres y a las monjasPasionistas, Sta. Gema co-noce, a través de la oración,a S. Gabriel y es él quien lainicia en el Amor crucificadoy en la obediencia.

S. Gabriel le inspira acudira confesarse con un padrepasionista. La anima cuandola encuentra llorando. La re-prende en sus fragilidades.La bendice y le asegura queserá pasionista aunque nun-ca le dice dónde.

Sta. Gema, podríamosdecir, entra en la Congre-gación a través de la Co-munión de los santos. Porsu muerte prematura no lle-ga a ingresar en el monas-terio pasionista pero su in-tensa vida interior está im-pregnada del espíritu de laCongregación.

Por eso ella, cuando sehace presente en nuestravida, nos habla del cielo,abre el cielo en la tierra. Ynuestro corazón recibe unhálito de Dios, una miradade fe donde antes no habíaesperanza.

S. Gabriel y Sta. Gemarogad por nosotros.

❚ SOR CATI

DE LA SS. TRINIDAD, C.P.OVIEDO

Miguel Possenti, hermano de San Gabriel,asistió a la canonización en Roma de su hermano santo.



Jesús, en familia, en Nazaret, seguía creciendo en edad, en sabiduría, y en gracia.

Familia y vida

Cuando ha nacido unhijo, no se escatiman

esfuerzos para que el niñocrezca sano, para que lle-gue a término la gesta-ción...; pero cuando reci-bes el don de tenerlo enbrazos por primera vez, teinunda el asombro y elgozo a la vez.

María, frente a Jesús¿Qué sentiría María al

contemplar a su hijo porprimera vez? ¿Qué sensa-ciones descubriría, al verque era como todos losdemás niños, que no tenía

corazón de todos los pa-dres para que amemos, demanera tan singular, a unacriatua incipiente, sin ponercondiciones? Y ¿qué ha pa-sado en el interior del bebé,recién nacido, para queconozca a sus padres, demodo que, los distinga detodos los demás cuando locogen en sus brazos?

Al contemplar la es-cena del nacimiento, em-piezas a descubrir lo queencierra “ser querido, de-seado, amado”.

Yo creo que todos ten-dríamos que partir de aquí,de lo más singular, para

ninguna característica es-pecial, a pesar de lo que lehabía dicho el Ángel?

María como madre, sepreguntaría: ¿Cómo hapodido formarse un serhumano en mi seno, sinque nadie lo regule, loacople, lo ajuste, loforme...? ¿Cómo puede te-ner cada órgano, cadahueso, cada músculo, cadanervio...? ¿Cómo puedefuncionar todo, con unacoplado perfecto, sin ne-cesidad de controladores?

Pero todavía iría másallá: ¿Qué ha pasado ennuestro corazón y en el

Aceptar el reto de ser familiaDespués de la Navidad: Ecos y Esperanzas


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Familia y vida

acoger y gritar a todos laimportancia de la familia.

La familia,el sueño de Dios

La familia es el gransueño de Dios. Él, le dioprioridad cuando decidiócrear la humanidad; y enNavidad nos hemos dadocuenta de que Dios quierereiterar su sueño, al decidirvenir al mundo y tomarcarne mortal, como lanuestra, apostando denuevo por la familia.

Así lo comprobamos: Jesús nace en el

seno de una familia. Saborea, en familia,

lo que es realmente amarde verdad.

En ella desarrollasus capacidades durante30 años. Aprende a:

Obedecer. Trabajar. A respetar. En ella recibe la cul-

tura adecuada a su tiempo. Una formación, hu-

mana, sólida y fuerte. Y en ella aprende a

orar.Nosotros también he-

mos apostado por la familiay no escatimamos esfuer-zos para que se consolide,para que prospere, paraque se fortifique... porquevemos que está amena-zada en grado sumo.

No hace falta nada másque echar una ojeada porel entorno para comprobarcon estupor que la familiade hoy vive desasosegada.Con amplios horarios; con

un bombardeo de amorsensacionalista por partede los medios de comuni-cación; con la exigencia deamarse a sí mismo olvi-dando a los demás y pa-sando por alto la entrega,el respeto, la fidelidad...; ylo que es peor, parece queel futuro no se observa de-masiado halagüeño.

Dios, Salvador de todosSin embargo, es asom-

broso que, en medio detanta desolación, Diosvuelva de nuevo a salvar-nos.

El Señor sabe, mejorque nadie que la familiatiene que calmarse. Que lafamilia no tiene tiempo deser familia.

Dios sabe que la familiade hoy, gasta el tiempoque le ha concedido paraser feliz, en correr tras unafelicidad que no halla; por-que la ha confundido conel placer. Por eso:

La familia de hoytiene que aprender que, lafelicidad no se encuentrahuyendo de los compro-misos, sino asumiéndolosy realizándolos.

La familia necesitaaprender a mirar, a con-templar, a valorar, a des-cubrir, a aceptar el miste-rio...

La familia necesitajuntarse, palparse, sabo-rearse, sentirse...

La familia necesita,dejar a Dios vivir en sucentro para tener vida y vi-virla en el amor.

La familia necesita,volver a los orígenes, alprimer encuentro, al lugardel enamoramiento... a,ese Paraíso, donde Diospaseaba a su lado, al caerde la tarde.

La familia necesitasentir su precariedad ydarse cuenta de que se haapartado de Dios y sesiente sola, desarropada,desasida... No tiene dondeapoyarse.

La familia necesitavolver a la fidelidad.

Vivir en el amorPorque cuando se es

fiel a los compromisos,cuando se vive en el amor,experimentas la libertad demostrarte como eres; notienes que tapar nada, no necesitas “divorcio ex-prés”, “ni aborto libre”...porque todo fluye desdeel amor.

Tenemos que adquirirel compromiso de estar ala escucha de esa voz in-terior que nos delata,cuando hacemos algo queno está bien. Esa voz quenada ni nadie, puede aho-gar y nos golpea cuandono somos coherentes conlo que hemos prometido.

Pero dichosos, noso-tros, si al oírla somos ca-paces de ponernos en piey decir: ¡Aquí estoy! ¡Quierorectificar! ¡He tomado ladecisión de amar!... porque¡He optado por serfamilia!

❚ JULIA MERODIO [email protected] / Madrid



Entrevistas al atardecer

El Padre Raúl Revilla, Pasionista,capellán de la cárcel de Zuera

Raúl Revilla frecuenta, como capellán, el centro penitenciario de Zuera, para aliviarmales y pesares ajenos. Así desde hace ya diecisiete años. Le esperamos a su regresode la prisión, a la que acude todos los días. Nos recibe amablemente, y nos invita aun café. Regresa de su “lugar de trabajo” con muy buen humor, nos cuenta algúnchistecillo al tiempo que nos va contestando.

¿Es muy cansado es-to de la cárcel?

Hay cosas muchomás cansadas. En lo nues-tro, siempre te queda lapreocupación de no habersabido decir la palabraoportuna en el momentojusto; o no haber podidohacer una cosa que te pa-rece interesante para uninterno. Esas cosas tam-bién cansan. Por lo demás,ya te digo que hay cosasmucho más complicadasy difíciles.

¿Cuándo empezastea venir a esta prisión?

Hacía un año que sehabía inaugurado esteCentro Penitenciario (megusta más llamarlo así). MiProvincial me preguntó siestaba dispuesto. Creoque tenía 56 años. Ense-guida cogí gusto a estetrabajo. Ahora ya he cum-plido los 74.

¿Se pasa el día conlos presos? He oído quetiene una habitación paradormir aquí.

No hagas caso; escosa de malas lenguas.

Antes estaba mucho más.Pero hace un par de añosque me traicionó el cora-zón y tuvieron que ope-rarme. Desde entonces hereducido un poco mi pre-sencia.

¿Dónde empieza ydónde termina la labor deun capellán penitencia-rio?

Allí donde empieza ydonde termina el trabajode un cristiano y más deun sacerdote cristiano. Pri-mero, ayudando a que na-

die tenga que venir aquí.Cuando llega alguien,acogiéndole como a unhermano; un hermanoque ha metido la pa-ta; ¡pero un hermano!Cuando llega la libertad,también hay que acompa-ñarles en lo que sea posi-ble. Y en todo momento,hay que mediar muchasveces con las familias. Fre-cuentemente la familia esquien más sufre la cárcelde un familiar preso, seapadre, esposo, hijo, no-

Padre Raúl Revilla, capellán.


Entrevistas al atardecer

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vio... Y lo mismo cuandose trata de una mujer.

¿Celebra la Misa to-dos los días?

No todo es cosa dedecir misas. Los sábadosdecimos una misa y losdomingos tres. Pero tene-mos varios grupos de ca-tequesis, otros grupos deformación en valores... Ylo más importante, que esel trato personal con losinternos siempre que ellosmismos lo requieren a tra-vés de diversas instancias.La verdad es que algunasveces te llaman para queles invites a fumar un ci-garrillo... lo cual no deja deser también algo intere-sante.

¿Algunas otras acti-vidades...?

Además de echar al-guna partidilla al par-chís –que cuando vineaquí ya se me había olvi-dado–, hemos tenido unacoral muy interesante conla que hemos llegado acantar a varias voces. Tam-bién tenemos un grupo de

teatro con el que hemosrepresentado obras inte-resantes, preferentementede C. Arniches. Algunosvoluntarios les ayudan asacar los estudios elemen-tales, a tocar la guitarra, adistintas manualidades...

¿Es verdad que ustedha dicho que se siente“más seguro en la cárcelque en la calle?

No sé si lo habré di-cho alguna vez; pero esverdad: Aquí están todosmás o menos controla-dos... En la calle no. Y losque están aquí, mayor-mente están por algo quehicieron fuera. No son tanmalos que están en la cár-cel; ni somos tan buenos

lo que estamos fuera. Y, aldecir esto, no excluyo anadie, ni a políticos, ni acuras, ni a nadie de cual-quier gremio en el que pu-dieras estar pensando.

¿Se requiere algunapreparación especial paraestar en un sitio de éstos?

Creo que toda pre-paración para una cosa, es

buena; y más cuando seva a trabajar con personas.Yo no creo haber tenidoninguna preparación es-pecífica. Pero hubo unbuen amigo que me hablóde la empatía, esa predis-posición para sintonizarcon los sentimientos deotro... y ponerte en su lu-gar. Yo me pregunto mu-chas veces cómo me gus-taría que me tratasen a mísi estuviera en su situa-ción.

¿Usted es sacerdote;y en ningún momento meha mencionado a Dios?

Pero es que Dios estásiempre presente en todo.¿Recuerdas aquello de‘...Porque estuve preso y

me vinisteis a ver’?(No te escandalices:Iba a decirte quepara mí, Dios estámás presente en unpreso que en el sa-grario)... ¿Y aquellode “lo que hagáis acualquiera de mishermanos me lohabréis hecho a mí?¿Te parece poco?No podemos olvi-dar que Cristo es elpreso más famosode la historia. Aun-que las circunstan-

cias eran muy distintas,tambié él las pasó ‘canutas’en los calabozos de Pila-tos.

Vale... Vale...Pues vale.

Muchas gracias, Raúl.

❚ TRANSCRIBIÓ: M.G.


La España Católica, y la que no lo es


Confidencias a mi amigo Alex

Vamos mal, amigo Alex, vamos mal.Me refiero solamente a la vida de fe ypráctica cristiana de los católicos espa-ñoles. Y te advierto que no se trata deuna simple ocurrencia mía. Más bien, dedatos estadísticos que repasaba yo el otrodía, desde un medio de información serio.Según este medio, solo el sesenta y seispor ciento de los españoles se declaracatólico. De ellos, poco más del quincepor ciento acude a la misa dominical. Elveintinueve por ciento se tiene por ateoo no creyente. En referencia directa a losjóvenes, estas cifras son más elevadas. Laestima y el amor y respeto a la Iglesia, endeclive también.

¿Qué es lo que nos está pasando a loshombres y mujeres de la siempre católicaEspaña? Tú me dirás, Alex, pero yo síquiero confiarte algunos enfoques muypersonales.

Son indiscutibles, en primer lugar, losesfuerzos y logros de nuestra Iglesia por

“ponerse al día”. Por acercarse a los jó-venes y a los no jóvenes, siguiendo siem-pre las orientaciones del Concilio y lasindicaciones y el testimonio del PapaFrancisco. Las Diócesis cuentan, en ge-neral, con Obispos y Organismos para laacción pastoral bien preparados y estruc-turados. De ellos emanan Documentos yorientaciones claras, evangélicas y evan-gelizadoras, etc. Sin embargo...

Hay que reconocer, sí, que la Iglesiade España cuenta también con grupos ymilitantes cristianos de “primerísima ca-lidad”, numerosos y comprometidos. Esla gran masa la que se aleja y que másnos preocupa. Es preciso reconocer tam-bién, en otro orden, los pecados, si no yaescándalos, de esta Iglesia que somos to-dos, no solamente los curas y las monjas,como alegan muchos. Los vaivenes polí-ticos. El clima de superficialidad que confrecuencia fomentan unos medios de co-municación bastante “irreflexivos”. La dis-


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La España Católica, y la que no lo es

gregación de muchas familias, antaño fo-cos de vida, de fe y de vivencia y prácticacristiana. Podríamos añadir más, peroquizá no merezcan la pena, ya que estasy otras motivaciones están en la mentede cuantos se permiten algunos momen-tos de reflexión y de análisis.

¿Recetas, Alex, para nuestros males?No soy yo quién para ofrecerlas. Quizá sípara una llamada de atención e invitacióna no dejar de lado las fuentes bíblicas yevangélicas. En concreto, la persona y lapersonalidad de Cristo, el Cristo del Evan-gelio, que es el mismo ayer, hoy y siem-pre, y es el fundamento de nuestra fe. Eltestimonio de innumerables mártires entodos los tiempos. Y el testimonio de los“Padres Apostólicos”, es decir, el de losSantos Pastores que tuvieron y nos tras-

mitieron su contacto personal con losApóstoles y los primeros discípulos deJesús. Quiero destacar el testimonio y lapalabra de Juan Evangelista, amigo en-trañable de Jesús, que nos dejó escrito:“lo que hemos oído, lo que hemos vistocon nuestros propios ojos, lo que con-templamos y palparon nuestras manosacerca del Verbo de la Vida...” Palabrasestas, y otras innumerables que alimentannuestra fe y estimulan nuestra esperanza,al tiempo que nos señalan de maneraclara donde se encuentra el manantial dedicha y gozo plenos y perdurables quetodos anhelamos.

Hasta siempre, Alextu amigo,

❚ MIGUEL



No hay precedentes. Desdeel fin de la Segunda Guerra

Mundial no se había visto algoigual. El número de refugiadosa nivel internacional está supe-rando la cifra de los 66 millo-nes. Los conflictos bélicos, laviolencia, el hambre o la per-secución política han provo-cado que 3,2 millones de personas de África y OrientePróximo hayan tenido queabandonar sus países. Más dela mitad de ellos escapó de laguerra de Siria, otros se mar-charon a Irak, Somalia, Repú-blica Democrática del Congoo Sudán del Sur. Cada dos mi-nutos una persona se ve obli-gada a desplazarse por las cau-sas antes indicadas.

Son los países con meno-res posibilidades económicaslos que acogen a nueve decada diez personas refugiadas.Chad y Uganda, con escasosrecursos monetarios, ofrecensus tierras y precarios sistemasde salud y educación paraaquellos que huyen del hambrey de la guerra. Turquía es eldestino elegido por la mayoríade los emigrantes procedentesde Siria. Paquistán, el Líbano yotros como Jordania, Kenia yEtiopía encabezan la lista de lospaíses más acogedores. Hastaque no llegamos al octavo lu-gar, no aparece Alemania comoprimer país europeo receptorde refugiados. Mientras queotros países como Arabia Saudío Emiratos Árabes Unidos, Ku-wait o Qatar no reciben a nin-guno. De nuevo, los pequeñosy pobres nos dan ejemplo.

Estos datos nos tienen quellevar a una reflexión profundasobre nuestra enriquecida Eu-ropa desde el punto de vistaeconómico pero pobre en

jamiento y alimentación dignasasí como la inserción en elmundo laboral de las personasque llegan. Por otra parte, or-ganizaciones como ACNUR,IRC, USCRI, RI, OOPS u ORAM.contribuyen al bienestar de laspersonas refugiadas.

Tirando de cita evangélica,no me quedo escaso cuandodigo que Jesús, hombre quecaminó por distintas regionesde Palestina, atravesó límitesfronterizos y surcó los maresde los corazones, invitaba unay otra vez a acoger a los quevienen de otras tierras, Curio-samente, hoy los refugiadospalestinos tienen que abando-nar sus raíces desde la creacióndel estado de Israel. El profetaIsaías ya iba avisando de losplanes de Dios: “Conduciré alos extranjeros a mi santa Mon-taña y los colmaré de alegría”.Las profecías no se cumpliránmientras nosotros no ayude-mos a desmantelar gobiernosque fabrican muros-montañase imponen leyes que generanlágrimas en lugar de alegría.Esta vez no basta conabrir el corazón...

❚ JUAN CARLOS PRIETO TORRES

[email protected]

Cada dos minutos

hospitalidad. Calculadora enmano, el viejo continente haceuna media de los refugiadosque puede acoger cada país,mientras las naciones africanas,no tan habituadas a cálculosestadísticos sino a lo que dic-tan las matemáticas del cora-zón, abren puertas y despensasa aquellos que nada tienensalvo lo justo y a veces ni eso.

Mirando de forma másaguda, uno se da cuenta deque a este punto se ha llegadopor lo que desde hace añosviene ocurriendo a escalamundial. Las guerras no se ge-neran por sí solas y nadie lasquiere salvo aquellos dirigentesque las fomentan o son cóm-plices, que venden armas o im-piden el diálogo entre las par-tes que están en conflicto. Unade las vías es acabar con la in-dustria armamentística y nocreernos la falacia de que lascrisis económicas se superanvendiendo armas. La espiralbélica es una de las causasprincipales de la búsqueda derefugio. Es fundamental optarpor partidos políticos que res-peten las convenciones inter-nacionales y fomenten las víasde la acogida y la inclusión, quecreen infraestructuras de alo-


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Para qué Pasionista?


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Confieso que el cuadrodel pintor alemán ErnstMax del Museo Ludwingde Colonia me producecierto desasosiego si nofuera por el halo de la Vir-gen Madre y el del niño,caído en el suelo como sifuera un eclipse de su di-vinidad, me parecía unamadre cualquiera que azo-te a un hijo cualquiera poruna travesura cualquiera.

Me produce descon-cierto porque las manosde María no están hechaspara herir, sino para acari-ciar, para acunar ternurastarareando nanas y restañarheridas. Aprecio la calidadpictórica, su fuerte croma-tismo, pero su contempla-ción hiere mi sensibilidad.

Me gustaría entrar en elcuadro y preguntar a esajoven qué ha hecho eseniño rubio, el mejor de loshijos, para que le maltrateasí la mejor de las madres.Pero, ¡por Dios! ¿Qué tras-tada pudo hacer Jesús paramerecer esos azotes, quehan coloreado sus nalgas?Y no me venga un exégetaa decir que la escena essimbólica y que no ocurrió

Meditación ante un cuadro

En el museo Ludwing de Colonia, hay un cuadro del pintor alemán Ernest Maxque me produjo cierto desasosiego. No lo reproduzco pero sí me propongo

comentarlo.

en realidad. ¡Qué se lo pre-gunten a él!

Bien está que el ancianoSimeón, bueno y leal él, leanunciase una infancia di-fícil, para que ahora se aho-gue de pena al sentir elvuelo de la mano amada,que cae dura sobre sublando cuerpo de niño,copo de nieve herido. Nohay un solo detalle en elcuadro que mueva a la in-dulgencia, que retarde el

brazo amenazador. Pero,¿dónde está José? Sí, a tra-vés de una breve ventanase asoman tres rostros: eldel pintor, el de André Bre-ton y el de Paul Aluard,pero, ¿en qué piensan?

Manso y pacífico recibeJesús la lluvia de azotes,ofreciendo su espalda ino-cente. Tal vez, si hubierallorado... Ellos, los adultos,son indiferentes al dolordel pequeño Jesús. Justi-



sometía a la criatura; elgrande era pequeño y lospequeños grandes. Sólo enel amor había cierta igual-dad. No porque todosamaran igual, sino porqueninguno podía amar másde lo que amaba. Y cuando

se ama, se obedecesin rechistar.

Bernanos gritaba alos adolescentes: “Per-maneced fieles a la in-fancia. No os hagáisnunca personas ma-yores”. Pero Bernanosno conocía el cuadrodel pintor alemán. Anteél dan ganas de aban-donar la infancia y nosé cuántas cosas más.

No le perdono laausencia de San José.A buen seguro que él,padre y varón justo,hubiera levantado elcastigo o tal vez lamano que lo castiga.Ayer soñé, que miles

de niños recogían cartasde protesta para que elcuadro sea retirado y duer-ma “per secula seculorum”en un oscuro desván.

❚ RAFAEL REY, O.C.D.MADRID

ficada pudo estar laregañina materna trassu estancia en el tem-plo de Jerusalén, des-pués de aquel triduode penas, aunque losperdidos fueron lospadres. Él cumplía consu deber (Luc 2,49).

Yo he leído a sanPablo y sé que Jesús,siervo de Dios en sumisterio pascual, “sedespojó de su rango ytomó la condición deesclavo, pasando poruno de tantos” (Flp 2,7).Se hizo hombre contodas sus limitaciones,fue humano, pero parademostrarlo no es ne-cesario que el artista em-borrone el cuadro con algotan inhumano como elcastigo físico. La obedien-cia fue la clave de su vida.El que todo lo sabía apren-día de los que casi todo loignoraban; el creador se

San José, también pendientede Jesús, en su infancia.

La Vida ConsagradaEl sábado, 2 de febrero, es la “Jornada de la Vida

Consagrada”, y el miércoles, 27 de febrero, la fiesta de SanGabriel de la Dolorosa, un joven que consagró a Dios suvida en la Familia Pasionista. Un joven plenamente feliz.Hoy, también hay jóvenes con inquietudes, con anhelos decentrar su vida consagrándola al Señor en la Iglesia.

Joven, la Familia Pasionista te abre sus puertas. Aquíencontrarás la posibilidad de una consagración a Dios,como sacerdote o como Hermano Coadjutor, viviendo encomunidad de vida, de oración y de apostolado. Igualmentetú, chica joven con inquietudes, como religiosa de vidaactiva o netamente contemplativa. Ponte en contacto connosotros. Serás siempre bienvenido/a. Muchas gracias.


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Desde la otra orilla

El inefable misterio de Dios queda re-sumido en el argumento ontológico deSan Anselmo de Canterbury: “Aquello ma-yor que lo cual nada puede pensarse”.Incomprensible a la razón humana, peroello no impide que la enseñanza que laIglesia nos ofrece sobre Él sea profunda-mente armónica. «Dios es Amor», nosdice el evangelista San Juan. Y el queama desea comunicar a otros y repartircon ellos lo que tiene; así pues, Diosquiso crear el mundo y, en especial, alhombre libre.

Jesucristo es la personificación delamor. Nos amó tanto que murió en lacruz para salvarnos, fundó una Iglesia yse quedó mediante ella entre nosotros; y para seguir su “plan de Salvación y ha-cernos dignos hijos suyos”, nos envió suEspíritu Santo. Jesucristo es, para nosotroslos cristianos, Camino, verdad y Vida.

El Dios ocultoDios se oculta de la presencia visible

de este mundo para que el ser humanopueda ser libre y ejercer su libertad. Deesta manera también puede ser creyente,es decir, tener fe. La condición para quepueda darse una fe libre es que Dios seano visible, evidente, en este mundo.

El esfuerzo creyente por dar razón dela esperanza, no puede jamás ser con-fundido con la pretensión de someterlotodo al imperio de la razón. Se nos olvidaque, cuando hablamos de Dios, lo hace-mos seres humanos con lenguaje humanoy dentro de los estrechos límites de lohumano.

Si observamos el entorno cultural y la forma como son tratados temas como

la religión, Dios, Transcendencia... es algoque nos debe hacer reflexionar.

Quizás fue Blaise Pascal el primer fi-lósofo que se planteó la existencia deDios en términos de posibilidad; quien,admitiendo que no se podía demostrarque Dios existiera, formuló su famosateoría de la apuesta por defender la ra-cionalidad de creer en un Ser supremo;y lo hizo más o menos en estos términos:“si uno cree y Dios no existe, no tienenada que perder; pero si Dios existe, laganancia es infinita”. “Se debe creer enDios si hay una mínima posibilidad dife-rente de cero, de que exista; porque elhipotético infinito de la vida celestial mi-nimiza cualquier sacrificio de una vidafinita”.

Dios y el hombrerelación imprescindible

Pero independientemente de la anéc-dota pascaliana, al tratar de la cuestiónde Dios, el hombre se pregunta necesa-riamente también por la cuestión de su

El misterio de Dios

Para dialogar con Dios, mirar al cielo,y al propio corazón.


Revista Pasionario | 59Revista Pasionario | 59

propia existencia, y porque no tiene unaexperiencia inmediata de Dios, debe ad-mitir que la cuestión de Dios no será po-sible sino en cuanto la experiencia de laque surge la cuestión del hombre, y queculmina por sí misma en “Algo” más alládel hombre, el mundo y la historia, de talmanera, que en la reflexión interpretativade la experiencia existencial, tendría queplantearse la cuestión de una realidadtrascendente.

Cuando nosotros hablamos de Dios,hablamos sobre todo del mundo que nosrodea y de nuestra existencia; y hablamosde nuestra existencia como algo que noencuentra en sí misma la razón y elsentido profundo y último de su ser, sinoque lo encuentra más allá de sí mismo. Elhombre descubre este más allá no iden-tificable con la realidad palpable comofundamento que da sentido último y de-terminante del todo.

Se podría decir, que no es el hombreel que lleva la cuestión del sentido de suvida, sino que es llevado e interpretadopor ella; y así, él será llevado e interpretadopor la cuestión de Dios; no será el hombreel que busca a Dios, sino Dios que vendríaal encuentro del hombre. «Esta es la vidaeterna: que te conozcan a ti, el únicoDios verdadero y al que tú has enviado,Jesucristo» (Jn 17,3).

El Nuevo Testamento, la Tradición y elMagisterio de la Iglesia nos ofrecen sufi-cientes datos sobre el misterio de Diosuno y trino, que se ha revelado en Cristo.El Nuevo Testamento da testimonio deJesús que nos da a conocer al Padre y,después de su resurrección y exaltación,envía sobre sus discípulos el Espíritu queha reposado sobre él.

No se puede hablar de Dios “objetiva-mente” reduciéndolo a objeto de mi es-tudio o de mi descripción, sin embargo,partiendo de una pre-impresión de Dioslo podemos afirmar de entrada como “larealidad última determinante del todo”.

Podemos decir también, que Dios no esun objeto extraído del conjunto de la realidad, fundamenta y da sentido a todala “realidad”, sin que por ello se debaconfundir, ni con una parte, ni con elconjunto tal de la realidad.

La “imagen” de un Dios invisibleLa imagen de Dios tiene una impor-

tancia esencial en la vida de la fe cristiana.Dado que a “Dios nadie lo ha visto nunca”(Jn 1,18), siempre funcionamos, inevita-blemente, con imágenes y representa-ciones suyas que nos lo hacen accesiblea la experiencia humana. Estas imágeneshacen de mediadoras de su presenciaviva en nosotros. Unas imágenes forjadasa lo largo de los siglos mediante la lecturade la Escritura, la enseñanza corriente, lapráctica religiosa, la moral cristiana. Estasimágenes son la forma como los creyenteshan llegado a conocer y relacionarse conDios.

En palabras de Joseph Ratzinger (papaemérito Benedicto XVI), “nosotros los cre-yentes creemos que tenemos algo quedecirle al mundo, a los demás, que lacuestión de Dios no es una cuestión pri-vada, entre nosotros, de un club que tienesus intereses y hace su juego. Por el con-trario, estamos convencidos de que elhombre necesita conocer a Dios, estamosconvencidos de que en Jesús apareció laverdad, y la verdad no es la propiedad dealguien, sino que ha de ser compartida,ha de ser conocida”.

Dios es, “providencia”, está presente,nos ve y nos da “plena libertad”, pero almismo tiempo nos dirige, y eso no quieredecir que el hombre esté predestinado,sino que tiene un destino.

❚ GREGORIO SANTOS ZAYAS

BARCELONA


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Encuentros al caminar

Lucio Blázquez,TABERNERO DE LA CAVA BAJA

SUS SECRETOS

“Una carta corta, no haymuchos platos y de los quehay, materia prima de pri-mera calidad para que elcliente comiendo, goce. Mefijo en la cara de los clientesy como sé leer en ellas, rá-pidamente deduzco si estáncomienzo a gusto, muy agusto, o no... El plato rey de

Lucio Blázquez nació el12 de febrero de 1933,

en Serranillos (Ávila), hizo suaprendizaje culinario en lacalle con más pedigrí de lacapital: Madrid de los Aus-trias, la Cava Baja, dondearrieros, pícaros, tercios deFlandes, escritores, canóni-gos e hidalgos diseñaron lomejor de la cocina españo-la.

De chico, en su puebloabulense le llamaban “Elveintiuno”, porque era el nú-mero al que llegaba cuandose ponía a contar. De ahí nopasaba... Lucio exhibe comoeslogan eso de “en tripa vacíano cabe alegría”. Tabernerode guisos rotundos y consu plato estrella: “Los huevosrotos o estrellados con pa-tatas y jamón”.

PINCELADAS DE UNA VIDA

Nace Lucio en familia deganaderos de Ávila y co-mienza a trabajar a la edadde seis años como pinchede un matadero, pero sindejar la escuela de eso seencarga su madre, Benedita;su padre, Simón Blázquezfrecuenta a menudo Madridcon motivos de negociosganaderos y se aloja en losmesones de la Cava Baja.En algunos viajes le acom-paña su hijo y es empleado

en uno de ellos “El Mesóndel Segoviano”. Sus padresquerían mandarlo con losPadres Paúles, a Burgos,pero el crío con desparpajodijo que no, que prefieretrabajar... Con el correr delos años, se queda con elnegocio y la taberna a laque prestigia Ramón Gómezde la Serna; se hace inter-nacional.

Lucio Blázquez junto a Pepe Fernández del Cacho,fotos de ayer y ahora...



mi casa se le ocurrió a miabuela materna, se llamabaModesta. Los huevos estre-llados, que hablaron de ellosdesde Cantinflas a MarcelloMastroiani, pasando poraquel político sabio y buenollamado Sandro Pertini, quecomió varias veces con elRey Juan Carlos, no tienemucha historia... A mi abuelacuando se le caía un huevoal suelo lo recogia y, ¡zas,zas!, para aprovecharlo lorompía encima de las pata-tas”.

EL “TRAGÓNDE CASA LUCIO”

Mejor, en plural... trago-nes, muchos. Evoca a uno:“Orson Welles fue el únicoque se zampaba tres racio-nes de huevos rotos y depostre cordero... ¡Qué ma-nera de comer!”.

De los clientes preferidos,la lista es larga. Recuerdacon cariño a Antonio Gadesal que conoció desde pe-queño cuando era botonesdel fotógrafo Gyenes.

–¿Cuándo se jubila Lu-cio?

–”Nunca, moriré en elrestaurante, allí voy todoslos días, es mi vida y aunquetengo a mis hijos, que sonunos fenómenos y que estánconmigo, necesito sentir lacocina, saludar a los amigosy jugar al mus”.

–¿Cómo consiguió queun plato de huevos fritossea tan apreciado por losclientes de medio mundo?

–”Tengo que reconocerque mis huevos fritos noson extraordinarios sólopara mí, que las gallinas losponen para todos. Lo quepasa es que tengo una for-ma de hacerlos que los ha-

cen diferentes a todos. Esponer corazón y materiaprima de calidad. Los hue-vos son de la Sierra de Gre-dos, de Ávila. El aceite deJaén, la cocina de carbón,sartenes muy antiguas, yluego otra cosa muy im-portante es que, al contrariode otros cocineros que pochan las patatas por lasmañanas, nosotros las ha-cemos en el momento. Lapatata gallega y todo ade-rezado con cariño. Este esel verdadero secreto deCasa Lucio”.

Lucio Blázquez es ungran trabajador y, sobretodo, buena persona y esoes lo mejor que se puededecir de aquellos que noshacen el viaje de la vida másagradable. ¡Un saludo, ilus-tre!

❚ PEPE FERNÁNDEZ DEL CACHO

Lucio es seguidor fiel del Atlético de Madrid y su foto favorita junto aVicente Calderón, Santos Campano y Luis Aragonés.


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Alegrémonos juntos

Tom PenneyEL DELINCUENTE CONVERSO

En una ocasión dijo Je-sús: “No necesitan mé-

dico los sanos, sino los en-fermos. No he venido allamar a los justos, sino alos pecadores.” (Mc 2, 17)No hay que dar por per-dido a nadie y sí, en cam-bio, procurar su conver-sión y salvación, comohizo doña Inés con donJuan Tenorio. De un per-sonaje literario, vamos apasar a un personaje his-tórico: Tom Penney. ¿Dequien se trata? De alguienque había dado con sushuesos en la cárcel y allí,precisamente, fue Diosmismo a rescatarlo.

Tom Penney,peligroso criminal

Este joven norteameri-cano dedicó una buenaparte de su vida a delinquir,cometiendo todo tipo defechorías (en especial, asal-to a mano armada). A losquince años de edad, enjunio de 1924, incurrió enun delito de robo. Lo arres-taron en repetidas ocasio-nes y, con todo, no apren-día la lección sino que volvía a las andadas. Enseptiembre de 1941, en-traron su compinche BobAnderson y él, fuertemente

armados, al Club de Cam-po de Lexington, con laintención de obtener unsuculento botín. Las cosasno salieron como ellos ha-bían programado. Lograronsustraer 130 dólares, conel resultado de una mujermuerta y otra herida gra-vemente. Cuando arresta-ron a Bob, en el bar quetenía en propiedad enLouisville, traicionó a sucompañero Tom duranteel interrogatorio inventan-do que le había robado sucoche, un sedán de doscolores, siendo otra la ver-dad: él le había facilitadosu vehículo para que es-capara. Un tercer hombre,Skeeter Baxter, guarda delClub de Campo, estuvoimplicado en el robo, porlo que también fue dete-nido. De los interrogatoriosrealizados a cada uno de

ellos, se dedujo que quienmató a la mujer fue An-derson.

Curiosamente, a partirde ese instante, recluidoen la cárcel, Tom empezóa salir del túnel (años deconflictividad, prisas, an-siedad, persecución y vidatrepidante). Su ingreso enla prisión por decisión hu-mana constituiría, desde elpunto de vista de Dios, el‘momento idóneo’ paraque el joven delincuenteiniciara el proceso de libe-ración interior y abando-nara la mazmorra delegoísmo y el desamor.

Una conversiónespléndida

Por mediación del ins-pector Austin Price, hom-bre creyente, el P. JorgeDonnelly empieza a visitar

Entre rejas.Entre rejas.



a Tom a partir del día 23 deoctubre de 1941. En una delas visitas, Tom le comu-nica su deseo de hacersecristiano en la Iglesia Ca-tólica. A medida queavanza en el conocimientoy la comprensión de suhistoria y doctrina, crececon intensidad y firmeza suaspiración de llevar unavida en gracia de Dios.

En el mes de diciembre,Bob, Skeeter y él, fueronsentenciados por el Ju-rado, en diferentes sesio-nes, a morir en la silla eléc-trica. A los pocos días deconocer el veredicto, Tomescribe a su consternadamadre para felicitarla porNavidad y comunicarleuna estupenda noticia:“Querida madre. Tengoque decirte algo que tealegrará mucho. ¡El padreDonnelly me ha bautizado!Así que ahora soy una pi-zarra limpia, madre. Mesiento mucho mejor, y séque, de ahora en adelante,la vida será muy diferente”(M. Raymond, Dios baja al infierno del crimen,STVDIVM, Madrid, 1973 [5ªedición], p. 69) En enerode 1942, recibió la anhe-lada visita de su madre.Ambos, emocionados, sefundieron en un abrazo yconversaron con amor yalegría. Esta visita tuvo unefecto terapéutico de re-conciliación y paz, espe-cialmente en la madre. Enel mes de febrero, los tresreos fueron trasladados al

penal del Estado en Eddy-ville, la Casa de la Muerte.

Tom distribuía el tiempoen diferentes actividades:la lectura de libros y folle-tos religiosos, escribir car-tas a muchas personas (so-bre todo a religiosas queoraban por él constante-mente), la oración, el en-cuentro con los sacerdotesque le acompañaban en suitinerario espiritual (entreellos, dos religiosos pasio-nistas: el P. Eugenio Cree-gan y el P. Brian Mahedy)y, en la medida de lo posi-ble, el contacto con susdos compañeros: Bob yBaxter. El primero, ex-tremadamente soberbio,prescindía de Dios y me-nospreciaba a sus seme-jantes; el segundo, em-pero, era de carácter débily más dócil. Tom queríaque ambos, como el hijopródigo, se decidieran aemprender el camino deregreso al encuentro conel Padre misericordioso.No faltaban los momentosdifíciles, las ‘horas bajas’ detristeza, desaliento y amar-gura. Entonces, se refu-giaba en el rezo del SantoRosario y otros ejerciciosde piedad. A partir del mesde noviembre concluyesus cartas con la frase A laderecha de la cruz, identi-ficándose con Dimas, elbuen ladrón.

El día 26 de febrero de1943 Baxter, Anderson yPenny fueron ejecutados.Los dos primeros, reaccio-

naron con nerviosismo ydesazón. El tercero, por elcontrario, irradió sosiego,humildad y entereza. Es-taba preparado. Había pa-sado casi una hora re-zando. Tom Penney entróen la Cámara de la Muerte,le ataron con correas a lasilla eléctrica donde murióa la una y veintidós minu-tos de la madrugada, trasrecibir cuatro descargas, alos 33 años de edad.

¿Cómo no sentirse ale-gre con la lectura de estetestimonio? Un joven,Tom, que pese a estarconfinado en la cárcel ysentenciado a muerte, diotestimonio de Cristo y par-ticipó en la evangelizaciónde la Iglesia a través de lacorrespondencia (familia,sociedad y hermanos en lafe) y con gestos humanosy fraternos en la cárcel(funcionarios de prisiones,compañeros y visitantes).Vivió con libertad interior,precisamente en los ca-torce meses que estuvorecluido en la cárcel.¡Cuántas personas son pri-sioneras de sus traumas,complejos, manías, mie-dos, fobias…! Una vidacentrada en Cristo aportaequilibrio, serenidad y ale-gría. “Para ser libres nos haliberado Cristo. Mante-neos, pues, firmes y no osdejéis oprimir nuevamentebajo el yugo de la esclavi-tud.” (Ga 5, 1).

❚ RAFAEL SÁNCHEZ A., C.P.


64 | Nº 1.044 | Febrero 2019

Santa Gemaabrió sus brazos

a la Juventud de Taizé“Taizé” es un movimiento

espiritual que nació en Fran-cia, en tiempo de la II GuerraMundial, con la finalidad deacoger a todas aquellas per-sonas que huían del horrordel conflicto armado. Taizées un movimiento ecumé-nico formado por monjesde distintas ramas del cris-tianismo: católicos, ortodo-xos y protestantes.

Cada año, en las mismasfechas, esta comunidad realiza un encuentro inter-nacional de oración en al-guna de las ciudades de Eu-ropa, a este encuentro lollaman “Peregrinación de laconfianza”. A esta cita nosolo acuden jóvenes cristia-nos, sino que también parti-cipan jóvenes de otras reli-giones, incluso aquellos que

están en búsqueda de la feen Dios. Todos son acogidos.

Este año el encuentro serealizó aquí en España.Nuestra parroquia se unió ala iniciativa de la arquidió-cesis de Madrid para acoger,del 28 de diciembre al 1 deenero, a los jóvenes que vi-nieran a participar de estagran semana de oración.

La organización no fuefácil, se esperaba que llega-ran más de quince mil jó-venes de distintos países,culturas y lenguas. Se nospidió a las parroquias buscarfamilias que acogieran ensus casas a estos jóvenes, laintención era que muchasfamilias fueran partícipes di-rectos de este gran encuen-tro. El gesto en sí mismo eshermoso, acoger a un des-conocido que sé, por mi fe,es mi hermano.

Desafortunadamente, lasfechas no ayudaron a teneruna respuesta masiva comose esperaba. Muchas fami-lias nos comentaban que lesgustaría poder recibir a es-tos jóvenes, pero que enesos días recibían a sus fa-miliares que venían a pasarlas fiestas navideñas conellos o bien, ellos eran losque tenían que salir de Ma-drid. Ante estas dificultadesque vivimos la mayoría delas parroquias, me gustaríacompartirles una frase queuno de los voluntarios deTaizé dijo al respecto en unaentrevista: “también el niñoDios llegó en malas fechas”.

Nuestra parroquia aco-gió en total a 19 jóvenes, loscuales se repartieron en dis-tintas casas. Especialmentepudimos compartir con un

“Jóvenes Taizé” de Ucrania, en el Santuariode Sta. Gema.



grupo de 8 ucranianos,cuatro chicos en nuestracomunidad de Santa Gemay cuatro chicas en la comu-nidad de las hermanas de laSagrada Familia.

Sin saber nada de caste-llano, nos entendimos a laperfección desde el primerdía. Las jornadas diarias es-tuvieron bien organizadas yel día transcurría marcadopor los tiempos de oración.Por la mañana compartíanel desayuno con nosotros,después la oración en lasparroquias de acogida, se-guido de un momento dereflexión grupal, tiempo li-bre de descanso, la comidaestilo pic-nic y la oración demediodía en alguna iglesiade la zona centro.

Por la tarde tenían talle-res o conferencias a elegirlibremente, los temas fueronsobre la oración y la espiri-tualidad, sobre el arte y lacultura o sobre temas socia-les relacionados con nuestrafe. La jornada se cerrabacada día con una oración,todos juntos, en el centro deferias de Madrid. La expe-riencia fue increíble, más dequince mil personas juntas,en silencio. Orando y con-templando. Saboreando la

palabra de Dios y respon-diendo a ella con el canto.Hasta hoy, es un misteriopara mí el que tantos jóve-nes, que viven inmersos enuna sociedad llena de ruidoy distracciones, busquenmasivamente estos espaciosde paz y quietud.

Taizé tiene la gran cuali-dad de ser una experienciade encuentro fraterno entretradiciones religiosas quecomúnmente no se jun-tarían para rezar. En unmundo marcado por los ex-tremismos y fanatismos re-ligiosos, Taizé es un signode tolerancia y fraternidad.Nadie de los que participa-mos nos preguntábamos aqué iglesia pertenecía el quetenía a mi lado, nos bastabasaber que era mi hermanoy que, también como yo,estaba en búsqueda del en-cuentro con Dios.

Nuestra parroquia tuvo lafortuna de compartir estosdías con los 8 chicos ucra-nianos, pertenecientes alrito ortodoxo de la iglesiacatólica. Celebramos juntosla eucaristía dominical. Am-bos nos enriquecimos, ellosparticipando por primeravez del rito católico romanoy nosotros escuchándolos a

ellos proclamar la palabra deDios en su propia lenguanativa. Conocieron quiénfue Santa Gema, cómo se laquiere aquí en Madrid y elgran testimonio de su vidapara todos nosotros, espe-cialmente para los jóvenes.

Como todo lo bueno enla vida, los días del encuen-tro se fueron muy rápido.Ellos se fueron muy agra-decidos y felices, con unaparte de España en su cora-zón. Nos despedimos entreabrazos y buenos deseos.Entre tanto, alguna lagrimitacorrió por más de alguno.Damos gracias a Dios porestos días de fe y fraterni-dad, pedimos por estos chi-cos, por su crecimiento defe y esperamos que al re-gresar a su país puedancompartir esta buena noticiaque han recibido.

A nosotros, que nos que-damos aquí, ojalá nos sirvaeste tipo de encuentros paratomar conciencia de la uni-versalidad y pluralidad denuestra Iglesia, y para saberque tenemos muchas máscosas que nos unen, de lasque nos podrían separar.

❚ PEDRO LARA, C.R.MADRID

Encuentro multitudinariode jóvenes de Taizé,

en Madrid.


66 | Nº 1.044 | Febrero 2019

La Palabra del Papa Francisco

Los Santuarios,lugares de encuentro y oración

El Papa recibió el jueves 29 de no-viembre en el Vaticano a los rectores ytrabajadores de santuarios de todo elmundo. «¡Cuánto necesitamos los san-tuarios en el camino cotidiano de la Igle-sia!», exclamó el Pontífice al recibir a susinvitados. Francisco destacó que los san-tuarios son un lugar donde las personaspueden expresar su propia fe de unaforma sencilla y eso los convierte en «in-sustituibles» porque contribuyen a man-tener viva la piedad popular. «La piedadpopular es el sistema inmunitario de laIglesia. Nos salva de muchas cosas», ase-guró Francisco.

El Santo Padre hizo una serie de peti-ciones a estos responsables de los san-tuarios. Una de las más importantes esque recuerden la importancia de la aco-gida a los peregrinos, tanto los que lle-gan en grupos organizados como losque llegan de forma individual. «Es tristeque cuando llegan no haya nadie que lesofrezca una palabra de bienvenida y losacoja como peregrinos que han cum-plido un viaje, muchas veces largo, paraalcanzar el santuario. ¡Y peor todavía escuando encuentran la puerta cerrada!»,les dijo el Papa, quien les pidió que pri-men este aspecto por encima de preo-cupaciones materiales o financieras.«Ellos son los primeros, el pan vienedespués», destacó Francisco, insistiendoen que los peregrinos deben sentirsecomo en casa y así serán capaces deabrir el corazón «y dejarlo modelar porla gracia».

El santuario también es, sobre todo,un lugar de oración. La mayor parte deellos están dedicados a la piedad ma-riana, por eso, Francisco destacó que enellos «la Virgen María abre los brazos desu amor materno para escuchar la ora-ción de cada persona». «En ellos la Vir-gen derrama sus lágrimas con quienllora, presenta a cada uno al Hijo deDios», explicó.

Les pidió que los santuarios facilitenla celebración de los sacramentos paraque los peregrinos se sientan parte de lacomunidad y que alimenten la oraciónporque, de este modo, al experimentar lagracia regresan y así los santuarios seconvierten en lugares fecundos.

También les dijo que los santuarioshan de ser lugares donde nadie se sientaextraño, sino que deben ser lugares pri-vilegiados para experimentar «la miseri-cordia sin fin», porque cuando esta sevive se convierte en una forma de evan-gelización real y transforma al peregrinoen testigo de la misericordia.

Extracto de la crónica de Ángeles Conde, desde Roma,para la Revista “Ecclesia”



Orar para ser

Vivir en la presencia del SeñorToda relación del hom-

bre con Dios tiene comometa la participación delhombre en el estado pro-pio de Dios, que es serbienaventurado; nosotroslo seremos, en la medidaen que vivamos la unióncon Dios.

El Salmo 1º: “¡Biena-venturado el hombre queno sigue el consejo delos impíos, ni camina porla senda de los pecadores,ni se sienta donde losburlones, sino que secomplace en la Ley delSeñor y medita su Ley díay noche!”.

De la impiedad se sigueal pecado, esto es, la bús-queda de sí mismo y node acuerdo con el ordende Dios.

Si estamos con Cristotodo cuanto nos ocurraserá para nuestro bien,sea cuanto sea, aunqueno lo entendamos.

Tratemos de vivir siem-pre en la presencia deDios, viéndole en cadaacontecimiento, tal comoÉl se nos manifiesta y no-sotros respondemos enverdadera y constanteoración, como nos dicela Palabra “orar sin des-fallecer”. Amén.

❚ FERNANDO HOLGADO RETES

VILLAMARTÍN, CÁDIZ


68 | Nº 1.044 | Febrero 2019

El evangelio cada día

¿A que no deja de ser unconsuelo, el que el Evange-lio venga hoy a hablarnosde la poca fe que tenían losdiscípulos de Jesús? Ten-drán que recibir más tardesu mismo Espíritu, para quela fe en su Maestro seaplena e incondicional.

Lo habían dejado todopor seguirle; lo estabancompartiendo todo con él,pero todavía no se fiabandel todo de él. Es ciertotambién –y consolador paranosotros– que a pesar detodo, sigan con Jesús, aquien no creen del todo;pero del cual no puedenprescindir; de ahí su hu-milde y sincera petición:“Señor, auméntanos la fe”.

Es toda una lección paranosotros, cuya fe en Jesústampoco es grande que sediga. Creo que los creyentesde hoy tenemos que reco-nocer lo mismo: que nues-

Muy rico, pero sin entrañas

Los discípulos dijeron aquel día al Señor: “Auméntanos la fe”.

Y el Señor contestó: Si tuvierais fe como un granito de mostaza, diríais a esamorera:

“Arráncate de raíz y plántate en el mar”, y os obedecería. Suponed que un criadovuestro trabaja como labrador o como pastor; cuando vuelve del campo, quién devosotros le dice: “Enseguida, ven y ponte a la mesa”?

No le diréis: “¿Prepárame de cenar, cíñete y sírveme mientras como y bebo; ydespués comerás y beberás tú?”

Tenéis que estar agradecidos al criado porque ha hecho lo mandado? Lo mismovosotros: cuando hayáis hecho todo lo mandado, decid: “Somos unos pobressiervos, Hemos hecho lo que teníamos que hacer”.

(Lucas 17,5-10)

Tu palabrame da vida.



de Enmanuel; y a que, a pe-sar de su aparente incredu-lidad, no dejen de apoyarseen la fuerza de la fe que seles ha regalado. Aunque seapoca, si es verdadera fe, lesbastará para poder plantarmoreras en el mar.

El Señor viene a decirlesque no hace falta ser el me-jor creyente del mundo,para ser buen apóstol suyo;y que pueden contar siem-pre con él, para hacer posi-ble lo que a nosotros nosparece imposible: sembrarde moreras el mar. Lo mástriste y peor para un cris-tiano sería convertirse engente apocada y pusilá-nime, a la hora de dar testi-monio de su Evangelio.Basta que nuestra fe sea tangrande como un grano demostaza.

CREYENTES, PEROEN TODO SIERVOS

Si basta una fe pequeñacomo un grano de mostaza,Jesús exige que esa fe seasincera y total. Solo una feque se convierte en obe-

diencia incondicional es laque puede realizar lo impo-sible, como en el caso deMaría, que llega a ser Madrepermaneciendo Virgen.

El siervo que regresa acasa del amo, tras habercumplido con su deber, si-gue siendo llamado a servir.En nuestro caso, el man-dato cumplido no nos daderecho a un salario comorecompensa. Nuestra mejorpaga es la de contar con unSeñor que ha venido a ser-vir, y que camina a la cabezade todos los que sirven.

Convertir nuestra vida decreyentes en una hoja deméritos frente a Dios, signi-fica no tener fe, ni muchani poca. Jesús acepta lapoca fe de los suyos, perono puede soportar la deso-bediencia. Solo la obedien-cia del siervo, que nada es-pera por haber hecho loque tenía que hacer, haceposible que nuestra poca felogre lo imposible que elPadre tiene preparado parasus hijos.

Y puesto que tú y yocontamos con ser sus envi-dados, tenemos que pedirlehoy al Señor una fe que noshaga verdaderos siervos su-yos, al estilo de María, quellega a ser Madre de Diospor el camino de la obe-diencia.

Aquí me tienes, Señor,aquí me tienes, para hacercomo ella, siempre y en to-do, tu amorosa vo-luntad.

❚ANTONIO SAN JUAN

tra fe cristiana es poca e in-suficiente. Pero tampoconosotros queremos aban-donarle; nos seguimos que-dando con él, pidiéndole lomismo: “Señor, aumentanuestra fe”.

ASÍ ERAN LOSAPÓSTOLES DE JESÚS

Llamados para estar conél, para seguirle, para apren-der de su boca el Evangelioy ser un día por él Enviados.Y así somos nosotros hoy.La fe escasa que podamostener en él, no tiene que ha-cernos olvidar que Jesúscamina con nosotros y quenosotros podemos caminarcon él; y que el Señorcuenta con nosotros paraser apóstoles suyos en estemundo nuestro, tan olvida-dizo de Dios, y tan entre-gado a tantas cosas quenunca podrán llenar estecorazón nuestro, que es deanhelos infinitos.

Jesús no se impresionapor la escasa fe de susapóstoles. Les provoca másbien a confiar en su palabra

“Señor,aumenta nuestra fe”


Rincón familiar “Santa Gema”

70 | Nº 1.044 | Febrero 2019

PEREGRINOS DE MATAPOZUELO(VALLADOLID)

(En memoria del Padre Leandro G. Monge, Pasionista)

DonacionesA.Z., 20 €; Unas devotas (Trujillo, Cáceres) 77 €; Unas devotas (V. de Valdetronco, Valladolid) 10 €; Unasdevotas (León) 13 €; Trinidad Barbadillo (Santander) 25 €; Rita María Blanco (Santander) 51 €; JuliánCerrada (Madrid) 10 €.

Esta Beca se destina a la formación de jóvenes aspirantes al sacerdocioy a la vida pasionista, en España y América. Colaboradores y amigos de nuestras Misiones,

¡muchas gracias!

Agradecen y piden favores a Santa GemaInt. de salud por Asunción Escorial (Tocina, Sevilla); Rosario García, por aprobar los exámenes de lahija (Tabladillo, Segovia), agradecen favores por la recuperación de su hijo (Eva María Sevilla Caballero,Madrid); Gracias querida Sta. Gema, hoy quiero pedirte por mi hija Sheila, ayúdala y protégelasiempre, tu fiel devota, P.T.C. Carmen Martínez Velasco, Madrid.

Cuantos agradecen y piden favores a Santa Gema, si desean salir en esta página,deben dirigirse a REVISTA PASIONARIO, C/ Leizarán, 24. 28002 Madrid,

Teléfono 915 635 407. http://www.libreriaelpasionariomadrid.com

Descansan para siempre en el SeñorJosé Jiménez-Ortíz Dueñas (Madrid), Magdalena Gordillo Cobija (Valenzuela, Córdoba), Nicolasa Montilla(Tocina, Sevilla), Nicolasa Redondo Castro (La Cumbre), José María Alfonso Pico (Monovar, Alicante), AntonioRuiz Vinader (Madrid), Gema Soto Ramón (Los Alcázares, Murcia).

Por su eterno descanso celebramos la Santa Misaen el Santuario el día 14 de cada mes a las cuatro de la tarde

Santa Gema que se venera en laCatedral de Almería

ARCHIVO ICONOGRÁFICO

DE FCO. SALLERAS.


A LOS PEREGRINOS DE TAIZÉHabéis llegado como peregrinos. Con el cuerpo cansado y el alma llena de

amor a Dios.Habéis llegado hoy, día 28 de Diciembre, en el que se conmemora la festividad

de los Santos Inocentes y regresaréis, el día 1 de Enero, solemnidad de María Madrede Dios y Jornada mundial por la paz.

Nada es casual. Todo nos grita que sois signo de que la iglesia sigue viva.Sois:• Los heraldos del Evangelio.• La iglesia que, como María, camina en cada uno de vosotros llena del

Espíritu del Señor.• Sois, los que nos llamáis a ir al encuentro de Jesucristo desde lo profundo

del corazón.Os habéis ofrecido como propuesta de oración y plegaria. Habéis atravesado

montañas, planicies, pueblos y ciudades para llevarnos a la fecundidad de la Iglesia.Habéis sabido correr los riesgos del camino y superarlos sin miedo.

Con vuestra lectura orante y creyente de la Palabra de Dios, sois un regaloque nos lleva a introducirnos en lo esencial de la persona.

Por eso, a vuestro lado, sólo queda preguntarse:¿Qué puedo hacer por el Señor?¿Cuáles son sus caminos?Con nuestro mayor agradecimiento.

Julia Merodio


Lourdes, capital mundial del dolorcon esperanza

El once de febrero es la fiesta de la Virgen de Lourdes. Y ese mismo día, es el“Día del Enfermo”, de todos los enfermos. De los que acuden a Lourdes conesperanza, y de los que acudieron un día y en Lourdes encontraron paz, bendición ytambién salud.

Lourdes habla a todos de gracia, cercanía y bendición de Dios, por intervenciónde María, El tema y la presencia de los enfermos en Lourdes, nos habla, a su vez, dela siempre frágil condición de los humanos, necesitados siempre de amor, de gracia,de salud y de salvación.

¿Milagros en Lourdes? Sin duda. Siempre y en los casos y momentos másinopinados.

Me permito trascribir el dato de un milagro de hace ya unos cuantos años, yque tengo más a mano. “La Iglesia católica ha reconocido que una joven italiana fuecurada “milagrosamente” en Lourdes, según anunció el sacerdote doctor TheodoreMangiapan, director de la Oficina de Comprobaciones. Delizia Cirolli, de veinticuatroaños, a quien en 1976 se le diagnosticó un tumor maligno en la pierna derecha, quele impedía moverse, peregrinó a Lourdes ese mismo año, tras el dictamen de variosmédicos, de que era imprescindible amputarle la pierna. En la gruta de la Virgen, lajoven empezó a sentirse mejor, y se curó completamente unos meses después. Estemilagro hace el número 65 de los homologados por la Iglesia en Lourdes”.

Fe, amor, oración y “el querer de Dios”, son condiciones indispensables paraque se produzcan milagros. Por parte de Dios, nunca queda. Por parte nuestra, nolo sabemos. Será bueno y saludable terminar siempre nuestra oración, en Lourdes ypor doquier, con las palabras del Señor: “Padre, que se haga siempre tu voluntad...”

M.G.


el camino pasionista con losjo´venes · digno es el cordero degollado de recibir el poder, la...

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