ecología y valores final

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ECOLOGÍA Y VALORES: Un replanteamiento de la formación integral fundado en la vida. GUSTAVO GARCÍA CARDONA 1 1 Director del Departamento de Humanidades y del programa de revista bioética. Universidad Militar Nueva Granada- Colombia.

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  • ECOLOGA Y VALORES: Un replanteamiento de la

    formacin integral fundado en la vida.

    GUSTAVO GARCA CARDONA1

    1Director del Departamento de Humanidades y del programa de revista biotica. Universidad Militar Nueva

    Granada- Colombia.

  • 2

    CONTENIDO

    ECOLOGA Y VALORES

    Pg

    1. TICA, RECUPERACIN Y PROTECCIN DE LA VIDA 3

    1.1 De la Bio loga a la Biotica 3 1.2 Enfoque tico de la Bio - loga 3

    2. DIMENSIONES DE LA RESPONSABILIDAD Y EL IMPERATIVO

    TECNOLGICO

    9

    2.1 Resistencia a lo terico 11

    2.2 Dimensin planetaria de la tcnica y las responsabilidades de all

    derivadas

    12

    2.3 Los imperativos tecnocrticos 13

    2.4 De la contemplacin a la accin 14

    2.5 Responsabilidad y futuro de la humanidad 14

    3. EL LEGADO DE POTTER 17

    4. DE UNA TIERRA A UN MUNDO 20

    4.1 Nuestro futuro comn 20

    4.2 El desafo mundial 21

    4.3 Objetivos de la comisin mundial sobre el medio ambiente y el

    desarrollo (ONU.1987)

    22

    4.4 Dimensin estructural de la crisis 22

    4.5 Lagunas institucionales y desarrollo sostenible 24

    4.6 El direccionamiento de las polticas ecolgicas y ambientales 25

    4.7 Especies y ecosistemas versus recursos para el desarrollo 26

    4.8 La industria como fuente de la contradiccin entre produccin y

    recursos

    27

    4.9 El desafo urbanstico 27

    4.10 Cooperacin internacional y reforma de las instituciones 27

    4.11 Espacios comunes y administrativos 28

    4.12 La paz, la seguridad, el desarrollo y el medio ambiente 29

    4.13 Los cambios en las instituciones y las leyes 30

    4.14 Evaluacin de riesgos mundiales 31

    4.15 Llamamiento a la accin 32

    5. VALORES Y ECOLOGA 32

    BIBLIOGRAFA 37

  • 3

    ECOLOGA Y VALORES

    1. TICA, RECUPERACIN Y PROTECCIN DE LA VIDA

    1.1. DE LA BIO LOGA A LA BIOTICA.

    La lgica de la vida como instancia normativa de la Biotica.

    Mac Fairlane Burnett sostiene que hemos construido una cultura de espaldas a la vida2.

    En dicho texto seala que el proceso humano en su historia, ha ignorado consciente, o

    inconscientemente la historia natural de la vida. Se la ha apropiado sin ms arbitrio

    exclusivo que el de sus necesidades, intereses y apetencias.

    Se precisa la incorporacin de los conceptos de la biologa a la tcnica o a los procesos

    culturales de el ser humano. Esta es la imperiosa necesidad, hoy ms que nunca de volver

    la mirada a la vida misma de la cual participa como factor de integracin cultural. El Jefe

    Seattle en su carta al presidente expresa su angustia de entregar sus tierras al Estado: La pena es que hemos dejado de vivir y empezado a sobrevivir3.

    El Coloquio de la UNESCO realizado en 1978 ha constituido uno de los aportes ms

    significativos en el sentido de reclamar la urgencia, de la reinstauracin de la coherencia

    entre cultura y vida.

    En dicho coloquio, magistralmente acogido y publicado por Bruno Ribes, se reunieron

    cientficos de todo el mundo en torno a los ms destacados bilogos, filsofos y

    cientficos para redefinir la responsabilidad humana de asumir y respetar los aportes de la

    biologa como ciencia normativa, a manera de nuevos patrones de cultura4.

    En los principales apartados de dicho texto se establece que es evidente as mismo que si se quiere prolongar la evolucin y proseguir la lgica de lo viviente, todo proyecto

    de aplicacin biolgica ha de tender a preservar, restaurar, e intensificar el carcter

    relacional del ser humano reaprehendiendo, al mismo tiempo la necesidad de ello5La gran pregunta del coloquio gir en torno a si es posible deducir de la bio-logca una tica funcional6

    Con base a la anterior pregunta, se establece a lo largo del coloquio el hilo conductor

    de la discusin: una tica que se considere razonable no puede existir si se hace abstraccin de las faltas manifiestas contra la vida de acuerdo con sus potencialidades7

    En otra perspectiva es necesario hacer que el desarrollo cultural sintonice con el

    mismo proceso evolutivo, ..... lo mismo que la vida se expondra a la aniquilacin si se cerrare a la evolucin a la emergencia, de la misma manera la inteligencia sera irrazonable

    2 Mac Frailane Burnett. La Biologa y la apreciacin de la vida. Ed. S. XXI. 1998

    3 Carta del Jefe Seattle al Presidente. 1854 Washington.D.C

    4 Ribes Bruno. Biologa y tica. Coloquio de la UNESCO. Pars 1978. UNESCO. Col. Actual (pags 2 y ss)

    5 idem. Ribes Bruno. Pag. 168.

    6 idem. Ribes Bruno. Pag.169.

    7 idem Ribes Bruno. Pag.173.

  • 4

    si no prefiriese su propia superacin, si se determinase a si misma paralizando o

    uniformando las condiciones (sobre todo biolgicas) de su propio ejercicio8

    Dicha sintona, implica el respeto por las condiciones mismas de la vidaPuesto que el ser vivo, lo mismo que el ser inteligente, se revela como ese ser en s que existe en- el otro, la tica consiste sin duda, en respetar las necesidades inherentes (en si) la conservacin y la reproduccin de la vida, as como el ejercicio del pensamiento9

    Con base en lo anterior es preciso, integrar a la autonoma humana y a la cultura el

    Nomos de la vida; as es preciso plantear Qu es en definitiva actuar en libertad sino de

    aprehender y dejar que emerja la lgica misma de la vida?. Pero es preciso, adems que

    reconozcan que la libertad no es ms irreprobable (ni probable en el sentido de demostrable) que la lgica de lo viviente, que la verdadera incgnita se encuentra en el

    centro mismo de la vida: es ser lgica misma10. Esta integracin hombre naturaleza y vida, se constituye ahora en un imperativo cultural Luego no hay tica de la libertad que no tenga que reaprehender las necesidades profundas de la vida.11

    En esta perspectiva se concluy incorporar la lgica de la vida como instancia

    normativa del hombre y la cultura: El enfoque tico de los problemas que plantea la biologa consiste en modular mediante un proyecto deliberado que es posible percibir de

    las condiciones de existencia de la vida (y de la inteligencia), confiriendo en consecuencia

    o tratando de conferir al sujeto viviente un suplemento de lgica12. Como es evidente, hoy se precisa un nuevo enfoque para la tica.

    1.2 ENFOQUE TICO DE LA BIO - LOGA

    El logos de la vida debe regir todas nuestras interacciones con el entorno. El por qu de nuestras intervenciones en el ser vivo debe regularse en funcin del cmo del fenmeno de la vida considerada en toda su extensin; insistimos en la obligacin de

    criticar con prudencia los proyectos de la biologa y la aplicacin de posibilidades que

    ofrece la relacin de su compatibilidad con las necesidades (en s) inherentes a los sistemas

    vivos (en relacin con simbiosis y sincrona.13

    Dicha simbiosis ha de ser contenido de conciencia para la reinsercin del ser

    humano en la biosfera: En alguna forma la biologa es a su modo la ciencia de lo relacional.

    La condicin previa para lograrlo es precisar, restaurar, s llegara el caso, y de ser posible intensificar el carcter relacional de los seres vivos, en la medida que juntndose,

    compenetrndose y organizndose les sea posible superar sus necesidades particulares.....

    en realidad lo que est en juego en esta proposicin es la esencia del ser humano como tal,

    en la medida en que ste no puede realizarse de acuerdo con su atributos propios su inteligencia, su proyecto de libertad ms a que abrindose al otro; y tambin lo es la

    8 idem.Ribes Bruno. Pag. 174

    9 idem.Ribes Rruno. Pag.174

    10 idem.Ribes Bruno.Pag.176

    11 idem.Ribes Bruno. Pag. 176

    12 idem.Ribes Bruno. Pag.177

    13 idem.Ribes Buno. Pag.177

  • 5

    esencia misma de la vida, en la medida en que sta - es un hecho se manifiesta y prosigue su curso en un entre Dos14.

    Para poder asumir esta nueva lgica de la libertad circunstanciada en la naturaleza,

    se precisa reasumir al hombre como totalidad orgnica ........., es preciso aadir que el proyecto de libertad (consentimiento en uno mismo, consentimiento en el otro) est quiz

    inscrito en lo ms recndito del ser vivo, en la medida en que sigue perfectamente su

    lgica. Si la Biologa tiene por objeto luchar contra todo lo que en la vida es carencia (ruptura o deficiencia) de lgica, fortaleciendo al ser vivo en s, no puede, no obstante,

    hacerlo so pena de volverse ella misma ilgica, hipotecando el porvenir de los individuos,

    de las generaciones futuras y de la humanidad15.

    Debemos, entonces asumir crticamente los designios humanos de la cultura,

    teniendo como supuesto que el enfoque tico de los problemas que plantea la Biologa consiste en criticar nuestras investigaciones y nuestras intervenciones en el ser vivo en

    relacin con la lgica que la penetra: Consiste en respetarlo y afirmarlo tal como es o

    debiera ser en s, aunque no sin tender al ms ser en el mejor ser. En ltima instancia, el objeto propio de la tica consiste sin duda , en proyectar, la vida en la ex istencia16. As, pues, se encuentra una nueva instancia proyectiva para la tica que funda un verdadero

    porvenir: proyecto de vida.

    Es urgente emprender un estudio riguroso de lo que debiera ser la tica misma........durante mucho tiempo la tica se refiri implcita o explcitamente a

    determinados temas filosficos o religiosos que hoy son criticados o estn superados, por lo

    menos en su presentacin tradicional. La cuestin consiste desde ahora en saber si la

    humanidad adoptar por lo menos cierta perspectiva del hombre y de dnde y cmo lo

    obtendr. Cuestin crucial, si no queremos hipotecar nuestro provenir slo en la bsqueda

    del mejor estar17

    Porque la biotica contempornea en su perspectiva de fundamentacin tiene entre

    otras de sus misiones, la actualizacin y transformacin de categoras tales como:

    Naturaleza, naturaleza humana, teleologa, causalidad, dignidad, especie, unidad ecolgica,

    tcnica, responsabilidad.

    Francisco Varela busca horizontes de integracin entre conocimiento y vida:Existe una circularidad inalienable entre el acto de conocer y vivir, entre el universo de lo vivo y

    el conocer como objeto de estudio 18

    El sistema vivo debe diferenciarse de su medio ambiente, al mismo tiempo debe mantener su vinculacin con l; este vnculo no puede cesarse porque el organismo surge

    desde el medio ambiente, pero a la vez se debe al mismo.

    14

    idem.Ribes Bruno. Pag.178 15

    idem.Ribes Bruno. Pag. 179 16

    idem.Ribes Bruno. Pag.180 17

    idem Ribes Bruner. Pag. 181 18

    Varela Francisco, El fenmeno de la vida Ed. Ocano. Col. DOLMEN (contra solapa)

  • 6

    Ahora bien, en este enlace dialgico entre la unidad viva y el entorno fsico qumico existe una diferencia clave del todo de lo vivo, dado que cumple un papel activo en

    este enlazamiento recproco19

    Asumir la empresa intelectual de nuestro tiempo y el desafo mximo es asumir la

    vida como totalidad, por ello es preciso examinar el fenmeno de lo viviente desde el punto

    de vista del sistema de la vida como horizonte de comprensin holstica.

    Fritjof Capra, por su parte postula una visin integral de la vida como punto crucial

    de la cultura; la necesaria visin de una nueva realidad. Es impostergable para tal propsito

    imprescindible es establecer una reconciliacin entre ciencia y espritu humano para hacer

    posible el futuro.

    Llama la atencin: Los estudios detallados realizados sobre las escrituras han demostrado claramente que la mayora de las relaciones que existen entre los organismos

    vivientes son en esencia relaciones de cooperacin, caracterizados por la existencia, la

    interdependencia, y por varios niveles de simbiosis20.

    El problema ecolgico o ambiental, solo existe en la mente humana: El exceso de competitividad, de agresividad y de comportamiento destructivo predomina nicamente en

    al especie humana y ha de considerarse desde el punto de vista de los valores culturales y

    no explicarseseudocientficamente como fenmeno intrnsecamente natural21.

    Por ello es en la misma mente humana en donde radica la solucin al problema

    cultural ecologa de la mente. Hay dos temas bsicos que aparecen una y otra vez en el estudio de la materia viviente y no viviente y que tambin se repiten con nfasis en las enseanzas de los msticos: la

    interconexin e interdependencia universal de todos los fenmenos y la naturaleza

    intrnsecamente denominada de la realidad22.

    Ha sido de gran influjo en el mundo contemporneo el pensamiento de Capra sobre

    la interconexin e interdependencia como condiciones inexcusables para establecer claras

    normas de cooperacin Inter. humana e Inter. especfica para replantear profundamente la axiologa contempornea de cara al futuro de la biosfera.

    David Dickson, por su parte, ha planteado el concepto de tecnologa alternativa, no solo como posible, sino como indispensable: los cientficos, los tcnicos, los eclogos, los marginados, han demostrado, todos ellos, que es posible concebir una forma de

    tecnologa basada sobre una relacin armoniosa tanto entre el individuo y el medio

    ambiente natural como entre cada miembro de la sociedad. Las barreras que impiden el

    logro de estas relaciones son, sin embargo, polticas...23.

    19

    idem. Varela Francisco. P.59 20

    Fritjof Capra El punto crucial Ciencia y cultura naciente. Ed. Integal. 2000 21

    idem. Capra.Pag. 325 22

    idem. Capra. Pag 353 23

    . Dickson David, La tecnologa alternativa.Ed. Orbis 1885 Pags 78 y ss

  • 7

    En este contexto Dikson afirma el autoritarismo tecnolgico, y la necesidad de

    establecer criterios a la conciencia tecnolgica. En el hombre unidimensional Marcuse afirma que La ciencia, y la tcnica, han proyectado un universo en el cual, la dominacin de la naturaleza, ha permanecido vinculada a la dominacin del hombre, vnculo que tiende

    a ser total para este universo en su conjunto24

    La ideologa de la industrializacin: Legitima la continua persecucin del crecimiento econmico, que pone su nfasis en la generacin, ms bien que en la

    distribucin de la riqueza25....los modelos de consumo, han introducido plenamente a las actividades humanas la prolongacin de la tcnica, objetivando, modificando e

    instrumentalizando la praxis humana26

    .

    Hans Jonas en su universalmente conocido texto Tcnica y Responsabilidad llama la atencin en relacin con el dominio del hombre sobre la naturaleza, al abuso de ese

    dominio, y la amenaza de destruccin que podra resultar como consecuencia del impacto

    del desmesurado poder y del creciente peligro representado por los riesgos del progreso

    tcnico global y de su utilizacin inadecuada.

    La tica clsica estableca las relaciones del hombre con el hombre. Se caracterizaba

    por su antropocentrismo.

    Hoy vivimos una nueva situacin consistente en la capacidad humana de alterar

    drsticamente la naturaleza poniendo en serio peligro la continuidad de la vida.

    La tica clsica era de categoras y principios permanentes y fixistas. La historia humana

    era prcticamente acumulativa; los impactos de la cultura al medio ambiente no parecan

    notables .

    La nueva situacin creada por la tcnica establece una desmesurada capacidad de

    transformacin que es producto de la intervencin tecnolgica a todo nivel.

    La naturaleza pasa a ser hoy objeto de plena responsabilidad con base en el poder humano

    de manipulacin e intervencin. Por consiguiente, es preciso llegar a prever las alteraciones

    y consecuencias que an sean imprevisibles.

    Se precisa una nueva tica, que se ocupe no solamente del hombre sino tambin de

    la naturaleza de la cual somos parte integral y dependiente, por ello el poder humano

    tambin impone nuevas modificaciones a la tica y que trasciendan las caractersticas de las

    ticas tradicionales que se caracterizaban por tres aspectos:

    1. Principio de inmutabilidad, puesto que postulaban la condicin humana, como de naturaleza permanente (esencialista).

    2. Sobre esta base se pretenda plantear y explorar el bien humano en s mismo, disociado de la naturaleza, entendida como pura (exterioridad inferioridad).

    24

    idem. Dickson. Pag.76 ( citando a H. Marcuse) 25

    idem. Dickson. Pag. 165 26

    idem. Dickson. Pags.155 160

  • 8

    3. Propona la delimitacin del alcance del bien humano y de su responsabilidad, confinados y polarizados en su propia dignidad considerada en si misma.

    En consecuencia, la tica tradicional no consideraba como objeto de reflexin la

    afectacin de la accin del hombre en las cosas extra humanas (exterioridad: La naturaleza

    estaba por fuera de la actividad humana, de su responsabilidad y de su destino. La

    naturaleza careca de dignidad, solo era recurso material).

    Jonas, en consecuencia, propugna una actualizacin de la tica con base en un imperativo

    nuevo que puede plantearse con dos formulaciones:

    Acta de tal modo que los efectos de tu accin sean compatibles con la permanencia de una vida humana autntica.......

    Una nueva toma de conciencia, establece que acta de tal modo tus acciones No pongan en peligro la continuidad indefinida de la humanidad en la tierra

    La naturaleza ha de ser considerada como frgil y vulnerable y ha sido vulnerada, a

    niveles insospechados.

    Las modificaciones introducidas por el hombre a la naturaleza ya adquieren la dimensin

    de alteraciones planetarias. As mismo la responsabilidad del hombre se hace planetaria.

    Hoy es preciso hablar no solo del bien del hombre, sino del bien comn que incluye la

    naturaleza (extra humana), en aspectos tan trascendentales tales como la prolongacin de la

    vida humana, la destruccin del medio ambiente, el desarrollo, control de la conducta, el

    progreso, el control gentico, la evolucin, el consumismo ilimitado, etc., Jonas plantea el

    problema de fondo as; ante un potencial casi escatolgico de nuestra tecnologa, la ignorancia sobre las ltimas consecuencias ser, por si sola, razn suficiente para una

    moderacin responsable ....... hay otro aspecto digno de mencionarse: los no nacidos

    carecen de poder... Qu fuerza debe representar el futuro en el presente?.

    2. DIMENSIONES DE LA RESPONSABILIDAD Y EL IMPERATIVO TECNOLGICO.

    Jonas piensa fundamentalmente en la muerte esencial de la humanidad ms, que en su destruccin, fsica, o sea, aquella muerte que sobrevendra a una posible construccin o

    deconstruccin tecnolgica del hombre y del medio ambiente.

    En consecuencia el nuevo saber tiene que involucrarse en la relacin investigacin poder, con nuevas categoras de reconocimiento para ser incorporadas a la conciencia

    (categoras tecnocrticas puras) colectiva; las siguientes son las condiciones eminentemente

    problemticas y que son derivadas de la produccin y utilizacin del saber:

    Se consigna en bancos de datos.

    Se usa con el criterio exclusivo de utilizar todos los medios disponibles, sin otro referente que la utilizacin misma eficiente, eficaz y lucrativa.

  • 9

    Las decisiones las toman solamente los que tienen el poder.

    Es especializado y fragmentado, atomizado y sin referentes integrativos, de sntesis, de totalidad, ni de proyeccin histrica.

    Ha pasado de transitorio a vertiginoso con categoras cada vez ms inmediatistas o coyunturales.

    Es buscado por personas sujetas del todo a instituciones tcno burocrticas, con categoras puramente programticas eficientistas y lucrativas en funcin de la riqueza, el progreso y el desarrollo.

    La tecnociencia es una descomunal mquina de procesamiento y produccin de conocimientos distintos, ajenos, extraos y disociados en lo posible de la reflexin

    crtica la cual es , considerada adems como obstculo al progreso de la ciencia

    (sociedad de la informacin).

    Se le incorpora en la sociedad a manera de reglas inconscientes e inminentes que se imponen como sistemas de accin que modifican y se apropian sustancialmente la

    praxis humana con la excusa del bienestar, la productividad, la eficiencia, el

    automatismo, y el consumo, ajenos a la conciencia de si mismo (objetivo, subjetivo).

    El saber ha quedado subordinado al imperativo tecnocientfico. Se enajen del sentido autocrtico de la misma ciencia y de su autonoma a expensas de la viabilidad tcnica

    disociada de la multiplicidad de efectos e interacciones que generan en la cadena

    infinita de la dimensin global de su incidencia y deterioro progresivo.

    El nuevo saber es inconsciente porque elimina al sujeto quien tiene que verse abocado a la subordinacin determinista de los efectos o resultados objetivos e inmediatos de la

    accin misma mediada y determinada objetivamente. (instrumentalizacin pura).

    La unidad sustancial del hombre y de ste con la naturaleza queda extraa, diluida distorsionada por la exigencia derivada de la definicin operatoria de la accin

    programtica instrumentalizada o materializada, hasta niveles insospechados de

    automatismo.

    Por todo, se trata de un nuevo saber cuya bsqueda y aplicacin estn disociados de la

    responsabilidad, y que lamentablemente suponen la progresiva desintegracin del mismo

    ser humano e invalida el sentido y proyeccin histrica de la accin misma.

    Al establecerse en la prctica la unin indisoluble de ciencia y tcnica impone entre

    ellas una nueva interdependencia indisoluble y casi de imposible diferenciacin:

    La ciencia, por su parte, es innovadora crea nuevos modelos tecnolgicos y dichos modelos tecnolgicos, recrean, a su vez a la ciencia pues hacen viables nuestros nuevos

  • 10

    objetivos cientficos. Esta retroalimentacin, produce una sinergia proyectada en una

    espiral sin fin.

    La comprensin de la vida y su significado vinculante, tambin quedan fragmentadas en las mltiples sub especialidades de la biologa actual, sobre todo las de enfoque positivista - determinista.

    Las anteriores situaciones generaron un nuevo divorcio entre tica y tcnica (o tecno ciencia) que implica y exige una relectura de la tica misma en sus diferentes aspectos,

    particularmente sobre el tema de la responsabilidad y todo lo relativo a una nueva y

    profunda preocupacin por la instauracin de una nueva tica sobre la vida y todo aquello

    que la haga posible, a salvo del frentico e incontrolado poder de la tcnica y del

    desenfrenado deseo consumista del hombre.

    La tcnica encarna la esencia o el alma del poder (poder saber, poder - saber y hacer), pues solo se considera relevante una teora cientfica, si es posible advertir claramente su

    aplicacin tecnolgica....en fin Fabricar y su implicacin o incorporacin en el sistema productivo.

    2.1 RESISTENCIA A LO TERICO

    En otra perspectiva se percibe una profunda y quizs indignada resistencia a lo

    terico, evidenciada, no solo en los intereses tecnocrticos, sino tambin en la esfera misma

    del quehacer investigativo. Casi que se asocia la reflexin tica moral como un inservible e

    interminable proceso especulativo y abstracto que retarda o pone palos a la rueda de la ciencia y la tcnica, hoy tecnociencia.

    Sin embargo insistimos en la necesidad de una slida proyeccin tica del

    investigador que articule en su quehacer ciencia y conciencia, que constituya un virtuoso

    conocimiento en la apasionante tensin dinmica entre conocimiento y virtud.

    Necesitamos una tica capaz de reinstaurar la autonoma y no la dependencia

    absoluta del poder de quienes poseen el poder mismo y determinan todo su quehacer en su

    propia subordinacin a la riqueza a las mieles del poder como criterio absoluto.

    As mismo, se requiere tambin una reformulacin profunda del ejercicio responsable del

    poder, como el ejercicio de la capacidad de servir.

    El problema de fondo tambin nos sugiere que no es posible hablar de ciencia sin

    tica o continuar hablando de una tica de espaldas a la ciencia y la tcnica, al considerar la

    profunda incidencia que sta tiene en el destino de la humanidad y de la naturaleza.

    Es evidente que la tcnica es objeto de la tica no slo porque es una actividad

    humana, sino que tambin se constituye como un modo de ejercer el poder humano, sin

    embargo la tica tradicional resulta insuficiente y anacrnica ya, puesto que carece de los

    soportes problemticos y de las categoras actuales de la tecnociencia. Es preciso reconocer

    que el problema de la consideracin tica de la accin humana, es hoy inseparable de las

    nuevas formas de poder y de transformacin inherentes al quehacer tecnocientfico y que

  • 11

    han invadido prcticamente todas las esferas del quehacer humano, con angustia existencial

    reclaman el desarrollo de una nueva tica de la responsabilidad.

    Tambin es cierto que la posesin, ejercicio, aplicacin de un poder no es per se aplicable al patrimonio tcnico de una sociedad, mxime cuando est en juego la

    configuracin actual y futura de la vida, de la naturaleza que la alberga, y del ethos humano

    mismo.

    Se precisa hacer la distincin entre el poder en s mismo, el potencial tcnico (posee

    la capacidad) y el deber de ejercerlo con responsabilidad.

    En otro sentido, no toda posibilidad nueva implica forzosamente su aplicacin, mxime, al

    considerar sus mecanismos de impacto, efectos desestabilizadores y mecanismos de

    induccin que se imponen abruptamente a la cultura y especficamente en sus subsistemas

    tico y esttico ( Ladriere, El reto de la Racionalidad)

    La valoracin de la accin tcnica especfica, no se restringe a su consideracin

    particular intrnseca, sino que se expande de inmediato a la accin colectiva.

    Por ello se precisa partir del anlisis del principio de responsabilidad entre la accin

    tcnica especfica y su esfera de incidencia en la accin colectiva que trasciende a niveles

    globales y / o planetarios.

    En consecuencia el incremento del arsenal de recursos tcnicos contiene,in crescendo una carga tico social, mucho ms all de los casos de carcter de aplicacin particular. Su impacto a gran escala ha explicitado la emergencia de un Nomos nuevo que

    influye de un modo notable en el sistema de actos, con efectos realmente acumulativos

    transformadores insospechados.

    2.2 DIMENSIN PLANETARIA DE LA TCNICA Y DE LAS RESPONSABILIDADES DE ALL DERIVADAS

    Lo anterior lleva a Hans Jonas a plantear su idea: Dimensin planetaria de la tcnica que hace referencia inicial a la introduccin sistemtica e inconsciente de inditos sistemas de actos que afectan e impactan no solamente la generacin anterior sino tambin

    a las futuras. Se trata de influjos sistemticos, que desde ya inciden en personas o en

    quienes an desconocemos, y an sobre quienes jams conoceremos. En este sentido la

    responsabilidad debe reconocer el derecho intergeneracional de las futuras criaturas de la

    biosfera.

    La tecnociencia, al devenir en tecnocracia, asume el saber-poder como producto,

    mercanca, un bien de uso, generador de riqueza. Se produce as una tensin dinmica entre

    tecnocracia y poder econmico , que con la excusa del bienestar y el progreso se imponen a

    todo nivel.

    El poder econmico cabalga cmodamente en el consumismo como destino

    fundamental de la vida, las relaciones humanas en este contexto, han de ser necesariamente

    transaccionales y as la calidad, el proyecto de vida y las aspiraciones han de objetivarse en

  • 12

    la concrecin y la obtencin de cosas que las faciliten: se estudia y trabaja para producir y

    consumir ...nada ms. El proyecto de vida queda restringido al desarrollo del potencial

    productivo y consumista sin ms.

    Sobre esta base se constituyen los planes de desarrollo, progreso como polticas

    fundamentales de los estados y gobiernos.

    La estrategia fundamental gira en torno a la artificializacin de la vida a expensas de

    la pura necesidad material, asunto que plantea el problema de si la simple creacin de

    nuevas necesidades materiales, constituyen autnticos derechos sociales, al igual que la

    pregunta en relacin con las nuevas implicaciones activas que inducen la

    sobredeterminacin de la relacin deseo- voluntad decisin y sus consecuentes transformaciones de las prcticas individuales y sociales inusitadas derivadas de la nueva

    experiencia de actuar de otras maneras, con el refuerzo conductual de nuevas apetencias

    materiales.

    Como vemos, estas incidencias, se imponen en toda su radicalidad, con aplicaciones

    inimaginables en el ejercicio de una responsabilidad la cual ha de ser renunciada por la

    magnitud del poder de la tecnociencia, y para la cual la tica tradicional no estaba

    preparada.

    Las exigencias a la responsabilidad se crean proporcionalmente a los actos de poder.

    Es muy preocupante el carcter omnmodo y monopoltico del poder de la

    tecnociencia, y mucho ms por ser de carcter estrictamente instrumental. Sin embargo es

    claro que nos podemos convertir en sbditos de nuestro propio poder, en la misma medida

    en que tampoco podamos ser sujetos responsables de los nuevos crculos de accin

    cargados de nuevas consecuencias insospechadas.

    Es preciso dejar en claro que la toma de una decisin no la otorga un saber

    especfico en s mismo, sino su conexin con la totalidad que lo contiene s existir es un imperativo categrico para la humanidad, todo juego suicida con esta existencia debera

    estar categricamente prohibido.

    Es claro que podemos ser libres de las circunstancias nuevas que creamos, pero

    tambin, es cierto que dichas nuevas circunstancias, una vez establecidas constituirn las

    nuevas condiciones en las que, a partir de este momento vamos a tener que vivir en el

    futuro.

    El problema se hace ms creciente y acuciante si nos preguntamos s esas nuevas

    circunstancias que estamos creando y que implican transformaciones tan radicales de la

    humanidad y de la naturaleza no afectan, o quizs puedan destruir no solo nuestra dignidad

    de naturaleza, sino a la naturaleza misma en la que acontece tal dignidad.

    2.3 LOS IMPERATIVOS TECNOCRTICOS

    El ejercicio de la sabidura frente a la tcnica parte del presupuesto que ninguna

    construccin tcnica constituye su propio objetivo ni imperativo.

  • 13

    Con base en lo anterior se impone la necesidad de plantear una nueva filosofa de la

    ciencia, que plantea entre otras razones fundamentales la relacin entre tcnica y sociedad y

    la no prescindencia de los valores de la ciencia en sus perspectivsa autotlicas y

    heterotlicas.

    An en el supuesto de la negacin de la dimensin axiolgica del saber, sta

    negacin constituira por s misma otro sistema de valores, sobre los cuales ser

    imprescindible pensar.

    En el ejercicio de la responsabilidad tambin esta implcita la capacidad humana de

    transformar el curso de la historia de la vida con sus intervenciones. Todo producto final

    necesariamente tendr que depender de alguna decisin (consecuencialismo).

    La responsabilidad esta ntimamente asociada con la solidaridad que a su vez, debe

    surgir de la incuestionable conexin entre los hombres y entre estos y la naturaleza; en esta

    perspectiva dicha conexin da origen de nuevo a la categora de universalidad, pero

    formulada con otro sentido: el de la interaccin global o csmica como principio de unidad

    y punto de convergencia cultural en torno a la vida.

    Se trata de una responsabilidad inclusiva de la naturaleza, no exclusiva del hombre, sino

    tambin extensiva a lo que suceda en la naturaleza como resultado imprescindible de la

    interaccin tecno cientfica del ser humano con el medio ambiente.

    2.4 DE LA CONTEMPLACIN A LA ACCIN

    El ser humano ya no puede afirmarse como espectador pasivo del mundo en el que

    vive (paso de la contemplacin a la accin). La naturaleza ya no puede seguir siendo

    simplemente exterioridad (aporte marxista).

    El hombre se ha constituido en agente (activo) que interviene introduciendo

    mltiples transformaciones en la naturaleza bajo su dominio, modificaciones, que a su vez

    transformarn su propio ser y destino.

    Por lo tanto es preciso asumir una nueva responsabilidad transformadora que penetre la

    actitud cientfica.

    2.5 RESPONSABILIDAD Y FUTURO DE LA HUMANIDAD

    Lo que caracteriza el imperativo de Jonas es su orientacin hacia el futuro; ms exactamente hacia un futuro que se sobrepone al horizonte cerrado, en el interior del cual el

    agente transformador pueda (y deba) reparar los daos causados por l, o seguir la cadena

    de los eventuales delitos que haya perpetrado

    Ha de postularse un nuevo mbito de confianza y credibilidad de la accin tecno cientfica, en cuanto quien la ejecute, ha de ser necesariamente depositario del bien o

    realidad que ha asumido y que se le ha confiado, mxime si se trata de algo frgil y

    perecedero como es la vida misma.

  • 14

    Debe responder a la confianza, y credibilidad, no del tecncrata, o del dueo del

    proyecto de investigacin, o del poder de turno o de tal forma de xito, riqueza, sino que

    debe ser un fiel depositario de la confianza de la humanidad entera, de la naturaleza y de la

    vida, un juego, que han sido puestas en sus manos y al arbitrio de su sabidura. Sabidura no

    es lo mismo que conocimiento, ni informacin, ni capacidad de hacer.

    Es de sentido comn que no es aceptable la sustitucin de la vida por la muerte (no

    se puede matar la vida en funcin de la calidad de vida). La posibilidad de que esto ocurra,

    y lo que ha venido ocurriendo con el ejercicio irresponsable de la tecnociencia, coloca y

    destaca, como es lgico, la supervivencia en primer plano, y en sujecin a la

    responsabilidad no solo como un muro protector de contencin preventivo sino como

    horizonte de proyeccin de la vida misma. En este propsito Jonas acu y desarroll su

    tesis de HEURISTICA DEL TEMOR.

    Es preciso, llamar nuevamente la atencin sobre todo aquello que ponga en peligro los equilibrios csmicos y biolgicos que constituyen los cimientos vitales de la

    humanidad.

    La vida y sus entornos naturales, antao equilibrados, dinmicamente en su

    originalidad virginal e impoluta, han sido profanados (si se quiere) por la intervencin

    humana de la introduccin irreversible de los efectos del desequilibrio especfico.

    Por su dimensin csmica, por sus efectos acumulativos e irreversibles, las tcnicas introducen distorsiones tan definitivas que crean una dimensin de peligro sin

    precedentes en la historia de la vida.......La promesa de la tcnica moderna se ha constituido en amenaza ...dicha amenaza ha quedado indiscutiblemente asociada a la

    promesa.

    La Heurstica del temor, establece constructivamente la previsin del peligro como

    mostracin anticipada de efectos posibles a escala planetaria causados por la aplicacin de

    la tcnica. Se debe prever e impedir la desfiguracin del hombre: Est en peligro la muerte

    del hombre, el concepto que de l poseemos. Una nueva tica responsable debe plantearse

    como la previsin basada en la teora, una tica de la prudencia, del respeto, de la

    frugalidad, de la austeridad, de la solidaridad y del cuidado de la vida.

    No puede permitirse que el poder mismo se transforme en la impotencia de la

    subjetividad que lo ejerce o posee.

    Xavier Rubert De Vents, proclama revitalizar el ejercicio de la imaginacin: La imaginacin no es personal sino transpersonal, es decir, no se limita como la experiencia a

    eliminar toda consecuencia de identidad sino que parece postular una nueva identidad que

    nos engloba: El cosmos, la vida, la naturaleza27.

    27

    De Ventos, Xavier Rubert. Moral. Ed. Laia, Barcelona 1985

  • 15

    En este contexto Vents establece la conexin existente entre la imaginacin, la creacin

    cientfica y la innovacin tecnolgica, con su condicin de creacin de mundo, imaginacin

    originante de nuevo cosmos , de nueva realidad.

    No se trata de moralizar la naturaleza ni de naturalizar la moral sino de una nueva moral imaginativa con proyeccin global o csmica.

    Por lo tanto debe postularse al superacin de la reduccin de la percepcin o del cambio.28

    En el caso de esta instrumentalizacin estaremos poniendo nuestra imaginacin

    creadora, o reducindola al servicio de un autentico proceso de antropfagia simblica: Consumimos a travs de los objetos el ideal de nosotros mismos29.

    La inhumanidad y la irracionalidad del sistema en el que vivimos consiste en que......la nica posibilidad de nuestra auto realizacin reside en nuestra dilapidacin que slo convirtindonos en medios de nuestros mltiples fines podemos realizarnos a

    nosotros mismos30

    Un sistema que engendra ciudades en las que no podemos vivir......cuyos peridicos, revistas y televisin impiden la comunicacin que se supone, facilitan, fbricas

    que producen bienes destinados a destruirse a s mismos, el contorno en el que deberan

    insertarse y la gente que las recibe31.

    Edgar Morin, por su parte, propone una reconstruccin simblica de la unidad

    compleja de la vida, para acercarnos a su misterio, en trminos de comprensin y

    valoracin.

    La vida como fenmeno organizado tiene como premisa la asociacin compleja (complementaria, concurrente....) de instancias necesarias para la existencia, el

    funcionamiento y desarrollo de un fenmeno organizado. Dicho principio dialgico ha de ser un verdadero imperativo cultural que asegure nuestro destino comn, en aras de un desarrollo sostenible como aquel que atiende las necesidades del presente sin comprometer la capacidad de las generaciones futuras de entender sus

    propias necesidades.

    Edgar Morin, en procura de plantear el problema desde lo ms cercano a nosotros, presenta su propia versin del principio de responsabilidad as, dicho principio, ahora debe

    operar: all donde la tcnica tiene por objeto al hombre y donde nuestro conocimiento de nosotros mismos, la idea de nuestro bien y de nuestro mal tiene una responsabilidad directa,

    es decir en el mbito de la biologa humana (en nuestro destino comn).

    Dicha biologa tiene que ver con el equilibrio local y global de la biosfera en el

    efecto remoto de sus perturbaciones, sutil destruccin medioambiental con caractersticas

    28

    idem. De Ventos. Pag. 97 29

    idem. De Ventos. Pag. 101 30

    idem. De Ventos. Pag.131. ss. (citando a Bech) 31

    idem. De Ventos. Pag. 131

  • 16

    de suicidio de la humanidad....motivo vlido de la incondicional obligacin de al humanidad de mantener su propia existencia.

    3. EL LEGADO DE POTTER

    Las siguientes ideas pretenden esquematizar el pensamiento de Potter , expresado en

    el contexto de su Biotica: Puente al futuro. El verdadero pionero y quizs creador de la Biotica, como Inter.-disciplina fue

    Potter quien quiso orientar todo su trabajo hacia la construccin de una biotica sistmica y

    profunda, para la sustentabilidad de la vida: un puente hacia el futuro entre la ciencia, la tcnica y la tica (vale decir, las humanidades en general), como un ejercicio de superacin

    de la dicotoma o existentes entre las culturas cientfico- tcnica y humanstica.

    La Biotica de Potter se incrusta en la misma entraa contempornea con un sentido

    crtico y prctico, por una parte, y por otra, como una instancia de superacin de las ticas y

    morales clsicas, cuyas categoras bsicas no apuntaban a la proteccin de la naturaleza y

    del medio ambiente.

    En su texto fundamental La Biotica, un puente hacia el futuro, se desarrollan las siguientes tesis fundamentales:

    Se precisan las orientaciones filosficas de las ciencias biolgicas en la perspectiva de la formulacin de la sabidura de la accin, como nuevo horizonte y accin en la

    cultura.

    Dicho aporte de la biologa apunta a la reconceptualizacin de la sabidura de la accin. Constituye el pilar fundamental del puente hacia el futuro, como forma inteligente de encarar el progreso humano en trminos de orientacin cultural.

    La sociedad y la ciencia han de estar en plena coherencia en la perspectiva del conocimiento manejable, de la biologa molecular, del globo como mquina viviente, del control qumico de los procesos vitales y la magnificacin biolgica, entre otros .

    La sociedad contempornea esta sumida en el caos de las mltiples actividades humanas que, a su vez, producen manifestaciones sociales que dan testimonios nuevos

    de la existencia del mal y de la contracultura de la muerte, de la violencia. La

    destruccin del globo es genocidio.

    Se estn replanteando profundamente la concepcin del individuo en la sociedad moderna, a expensas de la automatizacin y de la analiticidad en los especfico, lo

    particular pero no precisamente unitario, por ejemplo la molcula de ADN como unidad

    bsica de la evolucin biolgica, o quizs de la vida misma. La idea como unidad

    bsica de la cultura actual, y quizs de la cultura misma. El espritu analtico y

    especializado, ha fragmentado (irremediablemente?) la unidad en la totalidad de la

    vida y de lo real, en particulas disociadas o difusas, las cuales tambin han

  • 17

    desarticulado la unidad del pensamiento, la unidad del ser humano con la naturaleza y

    la humanidad.

    Los indiscutibles cambios y respuestas intracelulares que son producidos o mejor, inducidos por el cambio ambiental.

    El ambiente, es a su vez, cambiante por el impacto humano: ambiente humano?, Qu

    ambiente?. Parecemos cada vez ms dbiles y susceptibles ante los cambios

    ambientales. podemos, entonces, producir cosas que realmente nos transforman en

    seres ms sabios en lugar de producir cosas que nos hagan ms dbiles?.

    Todo lo anterior sugiere la preocupacin humana por el cmo definir un ambiente ptimo; en relacin con la adopcin enzimtica y fisiolgica de los peligros txicos, a

    los regmenes diarios (sobre cargas activas), a la cultura considerada como medio

    ambiente humano?.

    Otra gran preocupacin actual es la relacin entre la ciencia y el hombre biolgico; asuntos que hacen referencia a problemas de poblacin, paz, contaminacin, poltica,

    violencia.. futuro, progreso, entre otros. No se pueden ignorar estos temas en favor del

    progreso material y tecnolgico y as poder evitar un final desastroso y catastrfico.

    Es indispensable establecer con rigor una bio-ciberntica como asunto clave para la ciencia ambiental. Dichas relaciones son de retro alimentacin entre los organismos vivos y los elementos no vivos interactuantes al interior de los sistemas ecolgicos,

    entendidos como la trama de la vida.

    Esta discusin pone sobre el tapete la concatenacin, articulacin ente la

    concepcin econmica y la concepcin ecolgica, hoy divergentes. El oikos de la vida,

    debe articularse con el nomos y el logos de la economa y de la tica.

    Es necesario observar el comportamiento de las poblaciones intra e Inter. especficamente, y aspirar, por lo menos al control del crecimiento desmedido de la

    poblacin por una parte y el deterioro o extincin de especies por otra. As como el

    agotamiento de las fuentes de energa y el aumento progresivo de la contaminacin y la

    destruccin del medio ambiente.

    La meta actual en el ejercicio de la sabidura es la supervivencia. Debe asumirse la supervivencia como el horizonte para disciplinar la accin y competencia fundamental

    del ordenamiento de la vida social, para un mejor cocimiento y manejo

    interdisciplinario del problema del destino futuro de la vida. En este contexto Potter

    formul el ya famoso credo y compromiso con la vida.

    En esta misma lnea es preciso que los cientficos altamente especializados, no sigan siendo ignorantes de las humanidades, as como que los humanistas no continen en la

    ignorancia de las ciencias contemporneas.

    Vale decir que se debe promover tanto la nocin humanstica del cientfico, como la

    vocacin cientfica del humanista y garantizar su mutua cooperacin.

  • 18

    Se debe tener conciencia de que las leyes generales que rigen la bisfera y el universo, no cambian, simplemente por los deseos del hombre. En este contexto, si el hombre le

    induce a la naturaleza sus artificiosas reglas de juego, valdr la pena preguntar si est en

    capacidad seguir controlando esas modificaciones impuestas a su convivencia.

    La calidad de la vida ha de estar necesariamente articulada e indisociable a la calidad del ambiente y debe constituirse en una meta real, en el sentido de su aplicacin y

    vivencia.

    Este principio de inseparabilidad, y articulacin debe constituirse necesariamente en

    un factor integrador y vinculante de las ms diversas sociedades y tendencias culturales.

    Por ello tambin se precisa una fuerte crtica y presin social a cualquier disociacin

    advertida y denunciar todas las causas y consecuencias de esta situacin.

    En trminos generales, Potter propone la Biotica como un sistema moral basado en

    la integracin normativa entre los conocimientos biolgicos y los valores humanos, en

    una tensin dinmica.

    La humanidad debe aceptar su plena responsabilidad por nuestra supervivencia biolgica, cultural y por la preservacin indefinida del medio ambiente que la sustenta.

    Toda esta tarea requiere caminar con firmeza hacia la reconstruccin de la sociedad

    entera dispuesta a moderar y sanear el consumismo, que asuma el progreso con sabidura,

    con una educacin que no solo transmita conocimientos sino juicios de valor sobre la

    responsabilidad de los actos que comprometen el futuro de la vida sobre la tierra y

    relativice y desestime el deseo material como criterio o proyecto de vida.

    En esta misma perspectiva Aldo Leopold, en su texto tica de la tierra, establece el respeto por la naturaleza como categora esencial, en cuyo proceso de estructuracin estn

    la regulacin de la relacin entre los hombres, las relaciones entre stos y la sociedad, y la

    relacin de la humanidad misma en la naturaleza en su conjunto.

    Para todo esto se sugiere la instauracin de una Biotica Global o profunda que proponga el desarrollo de la humanidad sustentada en el conocimiento biolgico, para la

    cual es necesario superar la aspiracin competitiva y dar el salto a las aspiracin

    colaborativa

    Tampoco se conciben una ciencia y una tcnica cuyos fundamentos no sean una slida

    conciencia tica del investigador. La tecnociencia es insolvente dejndola slo en manos

    de los cientficos o tecncratas o de los emporios industriales. Por ello se precisa la

    progresiva integracin entre tecnologa y sociedad.

    La sociedad de la vida como valor primigenio, debe obligar a la modificacin de

    tendencias que sean capaces de rectificar los intereses del sistema econmico internacional.

    As se garantice como de prioridad inmediata una economa dirigida a la disminucin de las

    desigualdades entre los hombres, en aras de la justicia social.

  • 19

    De cara al futuro, los viejos enfoques del desarrollo son incompatibles con las nuevas

    realidades de la humanidad y de la biosfera.

    Las aperturas de las posibilidades de las nuevas generaciones como imperativos jurdico

    econmicos, son acciones no postergables.

    La ONU ha de instaurar con verdadera incidencia mundial el programa para el

    desarrollo sostenible, promover conferencias regionales y campaas educativas al respecto

    que incluyan la participacin ciudadana, debates, encuentros, etc.

    La UNESCO, y los gobiernos deben replantear sustancialmente sus polticas educativas, en

    relacin con nuevos proyectos de formacin de la niez y la juventud con verdadera

    conciencia de realidad sobre el futuro de la naturaleza y de la humanidad, sobre todo en la

    relativizacin de las concepciones desarrollista y consumista, de las diferentes dimensiones

    del conocimiento, de su aplicacin y de la actitud responsable de su utilizacin.

    La seguridad, el bienestar y la supervivencia del planeta dependen de los cambios

    que hagamos desde ahora y de su aplicacin sistemtica y responsable.

    4. DE UNA TIERRA A UN MUNDO

    Los siguientes son los aportes de la Comisin Mundial sobre el medio ambiente y el desarrollo, en la ONU:

    4.1 NUESTRO FUTURO COMN

    El primer elemento a destacar de dicha comisin es la urgencia de dar un salto

    cualitativo del antropocentrismo cultural de vieja data o un Bio Centrismo que orienta todos los esfuerzos de la humanidad a proteger la vida y el medio ambiente que la detenta y

    perpeta.

    Se precisa encuadrar la accin humana en el conjunto del mundo.... para encarar con suficiencia las modificaciones que amenacen la vida.

    Se trata fundamentalmente de afirmar como imperativo cultural la armonizacin de los

    intereses humanos con las leyes naturales. La salud de la tierra solo es afirmable si se

    garantiza la salud de cada una de sus partes, y su integracin en constante bsqueda del

    equilibrio dinmico.

    El concepto de futuro o destino comn slo es probable ser afirmado y aplicado si

    somos capaces de establecer cambios profundos en nuestra mentalidad de progreso y

    desarrollo econmicos fundados en el consumismo.

    Se tratara de una verdadera revolucin cultural que implique el trnsito a la formulacin y

    puesta en prctica de una nueva economa cuyos ideales de conocimiento, progreso y

    desarrollo estn fundados en polticas sustentables y sostenibles.

    Dichos ideales, a su vez deberan estar fundados en la esperanza de futuro para la vida, que orienten y normaticen las decisiones que deban tomarse fundadas en advertencias

  • 20

    argumentadas (cientfica, cultural y ticamente) que hagan posible la sustentacin de las

    generaciones presentes y futuras.

    Tambin, dichas ideas deben estar avaladas en un cambio profundo de la actitud

    competitiva a la actitud de cooperacin que invada todas las esferas de la cultura con planes

    concretos de accin integradora de la economa.

    4.2 EL DESAFO MUNDIAL

    Ante la constatacin del deterioro progresivo del ecosistema global y del medio

    ambiente, hemos concluido una situacin que parece ms abocada al fracaso que al xito, si

    se tiene en cuenta la condicin limitada de los recursos naturales en franca contradiccin

    con los ilimitados e incontrolados deseos materiales del hombre.

    No se trata de asumir una posicin apocalptica sino esperanzadora, y que implique

    un autocontrol ms favorable de la humanidad ante el consumismo exacerbado como

    alternativa de supervivencia.

    El desarrollo nos ha mostrado fracasos notables en la gestin y logro de un medio

    ambiente ms humano,. Al contrario, ha generado nuevas brechas y barreras entre los

    hombres, desequilibrios cada vez mayores entre opulencia y miseria.

    La riqueza que genera la industria da campo a resultados tales como los inconmensurables

    poderes y capacidad consumista de los mercados en contradiccin total con la deprivacin

    total y creciente de los sectores marginados.

    Hemos constatado las tendencias destructivas que son signo y sntoma de la

    industria y la agricultura frente a las tecnologas emergentes.

    Hoy es indispensable proclamar un principio de inseparabilidad entre los temas de

    desarrollo econmico y los temas medioambientales, en procura de la imbricacin y

    sinergia entre el nomos de la economa y el logos de la ecologa. Es preciso articular

    economa y ecologa en la perspectiva tica, vale decir Bio tica. De otro modo, cmo encarar el problema de la pobreza mundial, de la desigualdad internacional y del deterioro

    progresivo del medio ambiente y de las fuentes de energa?.

    El problema ecolgico, reside fundamentalmente en la mente humana.

    4.3 OBJETIVOS DE LA COMISIN MUNDIAL SOBRE EL MEDIO AMBIENTE Y EL DESARROLLO (ONU. 1987)

    El informe Brundtland establece los siguientes objetivos, con categora de urgencia

    exigitiva:

    Examinar los problemas crticos del medio ambiente y reformular propuestas realistas en su aplicabilidad para afrontar dichos problemas.

    Explorar y proponer, con base en concursos multilaterales, a escala mundial, modos de cooperacin internacional orientados a un redireccionamiento de las polticas y

  • 21

    estrategias econmicas que impliquen los cambios necesarios para un verdadero

    desarrollo a escala humana.

    Incrementar significativamente los niveles de comprensin, valoracin, significado y compromiso humano con la vida y el medio ambiente que se traduzcan efectivamente

    en decisiones y acciones efectivas, permanentes y responsables a niveles de

    poblaciones, individuos, organizaciones, el mundo de los negocios y las instituciones,

    los gobiernos y los organismos multilaterales, que establezcan la prioridad de la vida

    como fuente de todos valores.

    Desenmascarar y denunciar pblicamente las tendencias del desarrollo egosta que solo favorece la riqueza de los opulentos y la miseria de los pobres.

    Establecer polticas responsables conducentes al control del crecimiento poblacional.

    4.4 DIMENSIN ESTRUCTURAL DE LA CRISIS

    La verdadera dimensin de la crisis ecolgica ambiental es resultado de la interconexin de las mal llamadas crisis particulares o especficas de reas, sectores,

    territorios, naciones, continentes, etc.

    Se constituye un error el tratamiento compartimentalizado de la crisis. El medio ambiente

    no tiene fronteras que permitan analizarlo separadamente con suficiencia por naciones, o

    sectores como la agricultura, la energa, el comercio; esferas de inters aisladas o

    independientes tales como la economa, los problemas sociales, el desarrollo, la tecnologa

    entre otros.

    Dicho tratamiento debe desaparecer. No se trata de crisis, es simplemente un punto

    de partida de una reaccin en cadena sin fin. En consecuencia todas las crisis son una sola

    crisis, un crisis global y estructural.

    Toda la crisis supone la pregunta por la afeccin y la incidencia que tienen el

    vertiginoso crecimiento y los cambios espectaculares, fundamentales que causan nuestros

    productos en un ambiente finito y las repercusiones en la biosfera derivadas de la

    explotacin intensiva de materias primas, y el vertedero global de excretas en las que

    hemos convertido el aire, el agua y la tierra.

    Lo anterior pone en evidencia la conexin, desafortunadamente indisociable entre

    crecimiento econmico nuevas tecnologas y consumo. Se debe retrasar el consumo?. cmo manejar las nuevas contaminaciones, las nuevas posibilidades de vida, las

    catstrofes naturales crecientes y la extincin de especies y el agotamiento de los recursos,

    la superpoblacin, la contaminacin, las migraciones, la violencia........?.

    Es preciso tomar conciencia de la red de causas efectos crecientes que ya constituyen verdaderas presiones ecolgicas y generan conflictos entre personas,

    instituciones y pases (vg, la crisis del agua, el calentamiento atmosfrico, la capa de

    ozono...........).

  • 22

    El agotamiento del capital ecolgico es irreparable y progresivo: los pases pobres

    agotan sus recursos sin superar el subdesarrollo. Los pases ricos los dilapidan y sustraen

    hegemnicamente, en lo posible de los pases en desarrollo. Esta realidad es el principal

    problema ambiental del planeta. Los pases pobres han sido literalmente condenados a

    exportar sus recursos naturales a menor precio como materias primas, amn de las presiones econmicas extremas que imponen los pases ricos ahora acreedores de los pases

    pobres, deudores obligados a la sobre explotacin de sus cada vez ms escasos recursos naturales, hasta quizs, dejar de ser viables econmicamente.

    En el actual sistema econmico mundial un pas rico saca muchsimo ms de lo que

    jams invierte en el medio ambiente o en los pases pobres.

    Las deudas que obligan a los pases pobres se hacen impagables; por otro lado se les

    imponen toda clase de barreras comerciales.

    Crece al pobreza de los pobres; las materias primas finalmente se destinan al pago de al

    deuda externa.

    Decrece ms y ms el ingreso per capita, asociado a la ausencia de criterios ecolgicos de planificacin del desarrollo a expensas de la moral del salvavidas. Crece el desempleo y las poblaciones deprivadas o marginales.

    Por ello, la crisis medioambiental es una amenaza para la seguridad nacional e

    internacional, para la supervivencia de al humanidad. Es fuente de inseguridad poltica y de

    tensin internacional.

    Otros aspectos preocupantes son el incremento desmedido de los gastos militares, de la

    guerra y de la violencia, en contraste con el decrecimiento en la inversin social.

    La carrera armamentista no reconoce la proteccin de la vida y del medio ambiente,

    parece pretender solamente mantener privilegios, sofocar o reprimir resentimientos

    derivados de la deprivacin y marginalidad de las poblaciones.

    Tambin se vislumbra un olvido o conspiracin de silencio frente a los derechos de

    las futuras generaciones . parece que nuestras progenies solo heredaran las prdidas.

    Hemos tomado el capital del medio ambiente de las futuras generaciones sin reembolso.

    Cabe, en todo caso, la inquietud por la educacin y la conciencia, la participacin de

    los jvenes actuales y de su papel en el contexto de la problemtica ecolgica y ambiental.

    4.5 LAGUNAS INSTITUCIONALES Y DESARROLLO SOSTENIBLE

    Los principales vacos en relacin con la articulacin entre las instituciones y la

    proteccin del medio ambiente se presentan en torno a las preocupaciones alrededor de la

    superacin de las visiones estrechas y/o la preeminencia de intereses particulares hoy

    compartimentalizados o atomizados.

    Otro aspecto que es altamente preocupante es la reaccin lenta, tarda o posterior a

    la rapidez y magnitud de los cambios generados por la tecnociencia, su aplicacin

    industrial, y su impacto ambiental.

  • 23

    Se nota inters por integrar las tareas mundiales frente a la coherencia entre medio

    ambiente y desarrollo, pero los mecanismos funcionales de interdependencia que hoy nos

    rigen a escala mundial, no permiten la apertura de enfoques de participacin y decisin por

    parte de los pases en desarrollo.

    La fragmentacin institucional incide profundamente en la expresin de mandatos

    limitados, procesos cerrados de decisin, aislamiento de quienes administran los recursos

    de proteccin de la naturaleza y del medio ambiente, aislamiento entre las instituciones y la

    economa hoy hegemnica y brutal en sus intereses de lucro y riqueza.

    Por ello se hace indispensable la modificacin de las polticas institucionales en

    procura de la interconexin y coherencia entre los sistemas ecolgicos y econmicos; en

    este sentido se requiere tambin la emergencia de autntica voluntad de colaboracin

    internacional.

    Los daos que se infringen al medio ambiente son desproporcionados en relacin

    con las exigencias de proteccin que proclaman los gobiernos y con lo que efectivamente

    hayamos obtenido de ellos. La insolvencia normativa y peor an, la precariedad punitiva a

    la trasgresin ambiental son de todos conocidas. Todo lo anterior esta contribuyendo al

    advenimiento creciente de consecuencias desastrosas y quizs irreparables.

    Los ministerios de economa han dirigido todos sus esfuerzos al lucro, rentabilidad,

    eficiencia y eficacia, tasas de crecimiento, riqueza , produccin, generalmente arbitrados

    por los intereses mezquinos de los grupos de poder. No as los ministerios del ambiente,

    que son de mucho menor fuerza decisoria, prestigio y capacidad imperativa que

    cualesquiera otros rganos de poder, igualmente sucede con los organismos internacionales.

    Todo lo anterior sirve ms bien para la generalizacin de un desarrollo insostenible

    e insustentable.

    Es innegable que la capacidad de prever y prevenir los daos al medio ambiente exige el examen de las dimensiones ecolgicas de la poltica, o de los verdaderas dimensiones polticas de la ecologa, tanto a niveles locales, nacionales, continentales, como globales.

    4.6 EL DIRECCIONAMIENTO DE LAS POLTICAS ECOLGICAS Y AMBIENTALES.

    Se deben interconectar y establecer las sinergias necesarias en los diversos centros

    que se ocupan de la poblacin, la seguridad alimentara, la extincin de especies y recursos,

    los asuntos genticos, energticos, industriales, los asentamientos humanos, la salud, etc.

    En relacin con la poblacin y los recursos humanos es preciso revisar las tesis del

    malthusianismo y del neomalthusianismo. Es claro que los recursos existentes no pueden

    seguir sosteniendo indefinidamente a una poblacin creciente y consumista a todo nivel.

    Vivienda, urbanismo, salud, nutricin y energa son factores cruciales.

  • 24

    Por ello se impone la necesidad de limitar el crecimiento de la poblacin, sin

    eliminar una generacin, pero tampoco sin negar el ejercicio responsable y el enfoque

    humano de la procreacin y de la sexualidad, de la libertad y de las motivaciones sociales.

    Es cuestin prioritaria en el tema demogrfico el que est asociado a la solucin de

    las necesidades bsicas. El sistema educativo, como un todo ha de replantearse

    radicalmente a la expectativa de una formacin renovada por el respeto, el asombro y la

    sensibilidad, el cuidado y la proteccin de la vida como valor fundamental, valor de

    valores. Esta mediacin axiolgica reformular los ideales de la juventud, de los criterios

    de acceso al conocimiento, de cara a la tecnologa para enfrentar con solvencia moral

    crtica las nuevas realidades y replantear hasta el valor de la justicia. El equilibrio ecolgico

    y ambiental es el nombre biolgico de la justicia.

    Mientras en los pases ricos los agricultores cuentan con toda clase de apoyos,

    subsidios y asistencia y producen enormes excedentes, en los pases pobres los agricultores

    se quiebran, trabajan con tecnologas inadecuadas, sin incentivos econmicos, sin

    conciencia ambiental, trabajan en tierras marginales que debieron ser protegidas, talan

    bosques, desertifican y se exceden cuando pueden en la utilizacin qumica de abonos y

    pesticidas sin ningn criterio ni control.

    La competencia por los productos agrcolas a nivel internacional es desleal y en

    unos pases por exceso y en otros por defecto no parece haberse impuesto la agricultura

    ecolgica.

    El hambre es un fenmeno dominante. Cada da decrece el poder adquisitivo en los

    pases pobres, an si existiera disponibilidad de alimentos.

    Aqu valdra la pena, ante el evento de consumarse el colapso ecolgico

    preguntarnos qu valor tendra el dinero acumulado en la empresa capitalista, el da en que

    no exista nada que comprar o comer.

    En otra perspectiva se necesita revaluar la idiosincrasia multicultural, la sabidura

    milenaria de las poblaciones tribales, aprender de ellos y de su intercambio enraizado en los

    ecosistemas donde habitan.

    4.7 ESPECIES Y ECOSISTEMAS VERSUS RECURSOS PARA EL DESARROLLO

    El ritmo de especies en peligro de extincin y las extinciones mismas estn

    creciendo sin precedentes. Es prioridad mundial poder detener este proceso.La bio diversidad es indispensable para que contine el equilibrio dinmico de la ecosfera. La

    proteccin de las especies ya debe entenderse como un imperativo moral. Las selvas son

    depsito por excelencia de la biodiversidad: Cmo utilizar sus recursos sin destruirlos?.

  • 25

    Se precisa la ampliacin y la garanta de control de las zonas protegidas. Urge una

    convencin mundial de especies como recurso universal y elevarlos a la categora de

    patrimonio exclusivo de la humanidad. Otra convencin sobre energa segura y sumada a

    la expectativa de desarrollar fuentes de energa y tecnologas limpias, en coherencia con la

    proteccin de los recursos naturales renovables y no renovables. Si todos los pases del

    mundo consumiera la energa que utilizan actualmente los pases desarrollados colapsara

    el ecosistema global.

    Por ello hay que racionalizar al mximo el uso de combustibles fsiles e impedir el

    incremento del recalentamiento y la acidificacin del planeta.

    Buscar mecanismos para aumentar la eficiencia energtica, definir polticas de

    ahorro y educacin de la utilizacin convencional de la energa. Hay que dirigir

    nuevamente la mirada crtica hacia la energa nuclear, a la expectativa de la resolucin de

    los problemas que origina

    La experiencia energtica implica la bsqueda de medios de bajo consumo, basados

    en fuentes renovables.

    La energa domstica que consume inveteradamente la lea, es tambin un gran problema,

    sobre todo en los pases pobres.

    4.8 LA INDUSTRIA COMO FUENTE DE LA CONTRADICCIN ENTRE PRODUCCIN Y RECURSOS.

    El incremento del consumismo de la poblacin ya ha crecido a niveles

    insospechados. En este sentido se estima indispensable investigar, desarrollar y aplicar

    tecnologas de proteccin del ambiente, tanto en el flujo de materias primas, como de los

    procesos de produccin y de consumo para disminuir al mximo los daos inflingidos al

    medio ambiente. Tambin se reclaman instancias legales que obliguen a responsabilizarse

    y a asumir los costos de la industrializacin inadecuada en aras de la reparacin, asistencia

    informativa y educativa, y quizs a los aspectos punitivos o de reparacin del dao

    ecolgico.

    Se requieren replanteamientos radicales que permitan emprender nuevas conciencias

    en los procesos de industrializacin. Otro horizonte benfico es el establecimiento de

    controles severos a los qumicos txicos peligrosos.

    El replanteamiento e inculturacin de las necesidades bsicas humanas esenciales, har

    posible un desarrollo fundado en una industrializacin, produccin y consumos sostenibles.

  • 26

    4.9 EL DESAFO URBANSTICO

    El crecimiento desordenado y excesivo de las ciudades, as como las migraciones

    masivas se han constituido en un problema casi inmanejable. No solo por la emergencia de

    nuevos cinturones de miseria, sino tambin por la desadaptacin cultural, el desarraigo, la

    depravacin total, el incremento de los ndices de delincuencia, la descompensacin social,

    el biclasismo polarizado entre opulencia y miseria, la violencia. Tambin el dficit de

    infraestructuras en educacin, salud, servicios pblicos, movilidad, asentamientos

    subnormales, el desempleo, el hacinamiento, la inseguridad y polucin.

    Estas situaciones son denigrantes y contradicen las mnimas exigencias de la

    dignidad humana, alteran la ecologa humana, y alimentan da a da los focos de

    corrupcin, particularmente en las grandes urbes.

    Si entre los seres humanos vislumbramos profundas injusticias, y escasa capacidad de

    integracin y respeto por el otro en la equidad, pereceremos en lo que podra esperarse del

    ejercicio del espritu integrativo entre el ser humano y la naturaleza

    El deterioro de los medios ambientes urbanos y rurales son altamente preocupantes. La

    ansiada relacin de integracin y complementariedad entre la ciudad y el campo se

    encuentran muy lejos de lo deseable.

    4.10 COOPERACIN INTERNACIONAL Y REFORMA DE LAS INSTITUCIONES

    El primer punto que ha de considerarse es el papel que debe cumplir la economa

    internacional en lo relativo a la creacin de las condiciones que pueden ofrecer garantas

    reales desde la naturaleza a la sustentabilidad y sostenibilidad continuidad de sus procesos,

    de los cuales depende la misma economa. La economa debe adaptarse a la naturaleza y no

    la naturaleza a la economa. El hombre depende de la naturaleza y no a la inversa.

    Tambin es inexcusable establecer a todo nivel, especialmente multilateral, la

    conviccin de que la base de cualquier intercambio econmico tiene que ser necesariamente

    equitativo.

    Otro problema de fondo, es la condicin de acceso real el crecimiento por parte de

    los pases subdesarrollados, por encima de los intereses de los pases ricos.

    Los pases pobres estn ahogados por los bajos precios que imponen los pases

    desarrollados y con casi destinacin exclusiva a la exportacin de materias primas, sin la

    ms mnima posibilidad de competir con los pases desarrollados en productos

    manufacturados, principalmente por el atraso tecno- cientfico, el proteccionismo, la

    dependencia poltica y econmica absoluta que genera la deuda externa, hasta el punto de

    inmanejable o no pagable, a la par que la minimizacin de los fondos existentes para

    promover el desarrollo.

  • 27

    Estas situaciones tambin son insostenibles. No son claras, no existen verdaderas, o

    son inoperantes las polticas del medio ambiente, tanto en el Banco Mundial como en la

    Asociacin Internacional de Fomento y el Fondo Monetario Internacional. Sucede lo

    mismo con las polticas de crecimiento, en coherencia con los objetivos sociales.

    Ya es evidente la incompatibilidad econmica entre el desarrollo de los pases

    pobres, con la deuda externa y el desarrollo sostenible, mientras estos pases sigan

    dependiendo exclusivamente del uso exorbitante de sus recursos naturales como materias

    primas para la industria exterior.

    Algunos paliativos empiezan a abrirse camino tales como los medios de alivio, la

    mejora de acuerdos sobre productos bsicos, la financiacin compensatoria, la explotacin

    racional de los bosques.

    Otras vas posibles son la articulacin entres las multinacionales y el desarrollo

    sostenible, el flujo de capitales extranjeros, la capacidad de negociacin, condiciones de

    respeto ambiental, precisin de los medios respectivos de cooperacin. Pero lo ms urgente

    es el establecimiento de un sistema econmico internacional en la perspectiva del fomento

    del conocimiento y disminucin de la pobreza.

    4.11 ESPACIOS COMUNES Y ADMINISTRATIVOS

    El medio ambiente y la ecologa definen para todos los seres un espacio comn, o

    mejor un destino comn. En el orden poltico se han definido y caracterizado formas

    tradicionales de fronteras, territorios, soberanas nacionales y fronteras.

    No se asume con un sentido de armona solidaria el concepto de espacios mundiales.

    El medio ambiente, los ecosistemas no contemplan fronteras ni soberanas; por ello es

    indispensable que la humanidad aprenda a compartir el hbitat global en actitud de

    concepto comn que comparte en convivencia con los ecosistemas, ocanos, selvas, ros,

    espacio extra terrestre, antrtida,etc.

    Un ejemplo interesante ha sido la Conferencia de las Naciones Unidas sobre el mar

    que puso sobre el tapete los problemas de ratificacin de tratados anteriores, los acuerdos

    de pesca intensiva, el problema acuciante de los vertederos, envenenamiento de las aguas,

    la tierra y el aire.

    En lo relativo al espacio orbital se precisa un rgimen especial que respete los

    derechos y deberes de todas las naciones en temas vitales como son la tecnologa de

    satlites, las comunicaciones, los desechos espaciales, las armas en el espacio, en procura

    de un ambiente pacfico.

    Desde el ao de 1959 se firm el Tratado de la Antrtida, hoy se advierte el decrecimiento preocupante de la capa de ozono, el descongelamiento de los casquetes

    polares, el sobrecalentamiento de la atmsfera, el proceso de desertificacin, entre otros.

  • 28

    4.12 LA PAZ, LA SEGURIDAD, EL DESARROLLO Y EL MEDIO AMBIENTE

    Todos somos conscientes de la guerra nuclear como un peligro grave, casi al filo del

    exterminio. Es preciso que se establezca una prohibicin radical de todo soporte tcnico

    cientfico y logstico asociado al conflicto nuclear.

    Ya se ha establecido la necesidad de articular la paz con el desarrollo sostenible. El

    desarrollo expansionista desmedido de los pases ricos y su consumismo exacerbado en

    claro contraste con la miseria de los pobres y la profundizacin de la brecha entre

    desarrollo y subdesarrollo, son referentes perpetuos de conflicto, son una bomba de tiempo

    originada por la injusticia social y la discriminacin degradante de la mayora de la

    poblacin en la miseria, en contraste con la opulencia indiferente y explotatoria de los

    poderosos.

    Todo esto incide en la seguridad de los pueblos y en su estabilidad poltica y

    pacfica, son indiscutibles los efectos polticos de la presin ambiental. Por ello se deben

    profundizar las relaciones entre inseguridad y destruccin ambiental. La preservacin del

    medio ambiente ha de ser para todos una forma prioritaria de seguridad.

    En otra perspectiva, siempre ser preocupante el gasto armamentista, las guerras

    permanentes, el trfico de armas y de narcticos, cuyos gastos son francamente exorbitantes

    en claro contraste con la precariedad en inversiones para reducir de la pobreza, el hambre y

    la restauracin del medio ambiente degradado.

    Es de sentido comn comprender que la prohibicin o por lo menos el control de las armas

    de destruccin masiva mejorara las relaciones entre las naciones, y sera otra gran

    alternativa para la previsin de la destruccin nuclear o qumica del medio ambiente.

    4.13 LOS CAMBIOS EN LAS INSTITUCIONES Y LAS LEYES

    Ya sabemos que tradicionalmente se ha asumido el tema del medio ambiente como

    tierra de nadie es grave que sigamos pensando que el patrimonio comn de la humanidad es patrimonio de ninguno, de tal suerte que fuera posible apropirselo a su antojo quien

    tuviera cmo hacerlo, al arbitrio de sus intereses y caprichos.

    As ha sucedido con todo el arsenal de convenios, encuentros y declaraciones

    internacionales, que si bien generan conciencia, no pasan de ser expresiones idealistas ,

    romnticas, bellas y sensibles, pero carentes de fuerza normativa, punible, coactiva o

    exigitiva a niveles jurdicos nacionales e internacionales.

    Pareciera que en el orden jurdico internacional slo tuvieran espacio las buenas intenciones, que ceden todo el terreno a los intereses econmico polticos de las multinacionales y las de sus pases de origen.

    Algunos pases poderosos, en muchas circunstancias, hasta se niegan a firmar actas

    convenciones y compromisos internacionales sobre el medio ambiente, cuando stos

    afectan sus intereses de explotacin, produccin o comercio.

  • 29

    Sin embargo, ante la emergencia creciente de resultados ambientales funestos, ya se

    est creando y desarrollando una mejor actitud y conciencia mundiales.

    Se precisa acudir a las fuentes mismas de la produccin legislativa, para comprender su

    racionalidad normativa y prohibitiva, as como a las fuentes mismas que producen los

    daos tales como fbricas, explotacin de materias primas, excedentes industriales,

    factores contaminantes, no solo para establecer responsabilidades directas sino tambin

    para garantizar su resarcimiento y penalizacin correspondientes.

    Igualmente, en este contexto, tambin se deben establecer responsabilidades directas

    a los organismos que deben velar por el aseguramiento de los rdenes polticos, proyectos,

    programas, acciones de desarrollo sostenible considerado siempre el impacto econmico y

    ecolgico, ojal de obligatorio cumplimiento.

    Los ministerios en general, ( no solo el del medio ambiente) debern establecer

    mecanismos Inter. ministeriales de carcter sinrgico, para trabajar mancomunadamente e Inter. sectorialmente en la proteccin del ambiente, en aspectos tan fundamentales como en la conformacin de sus objetivos, procesos, actividades y planes de accin.

    Tambin deben incluir los temas ambientales trans- fronterizos como poltica bsica

    de las cancilleras. Todo debe apuntar al establecimiento de polticas internacionales de

    concertacin, con la mediacin autorizada de organismos multilaterales de coordinacin.

    En dichos organismos se deben adelantar acciones de evaluacin, asesora,

    asistencia, informacin, seguimiento de los temas ambientales.

    Otro aspecto destacable es garantizar que se afronten realmente los efectos de deterioro

    ambiental; para ello se precisa establecer las funciones y capacidades de proteccin de los

    organismos multilaterales de su capacidad organizativa y protectora. Es de anotar la

    trascendencia que deber tener el el Programa de las Naciones Unidas para la Proteccin del medio Ambiente (P.N.U.M.A), asumido como fuente primaria de informacin y evaluacin. Igualmente, ser interesante asignarle nuevas funciones.

    El fortalecimiento de nuevos recursos jurdicos constituye por otra parte, la

    instauracin de nuevas legislaciones ambientales, nacionales e internacionales que superen

    las anacrnicas existentes.

    La precisin de los derechos generacionales, particularmente en los aspectos de

    salud y bienestar futuros y producir ms agresivas declaraciones de proteccin ambiental en

    lo relativo al desarrollo sostenible.

    El establecimiento a nivel internacional de mecanismos para resolver controversias

    relacionadas con la explotacin y gestin de recursos en litigio.

    En el referente econmico ecolgico, el replanteamiento de los criterios que determinan la eficiencia de la inversin con base en la idea de contener la contaminacin, el ahorro de

    energa y que contemple el problema de las consecuencias financieras de la depredacin

    ambiental y el agotamiento de recursos.

  • 30

    Incorporacin en el Banco Mundial, en los bancos regionales y en el FMI, de

    polticas que restrinjan sus apoyos y establezcan en sus prioridades financieras unas metas

    protectoras, que sirvan como nuevos criterios a las ayudas bilaterales. Estas metas , deben

    tener carcter orientador y normativo de sus polticas.

    Se debe instalar con categora universal la economa ambiental o ecolgica.

    4.14 EVALUACIN DE RIESGOS MUNDIALES

    Desde los puntos de vista acadmico y poltico es indispensable avanzar en la

    capacidad de reduccin, determinacin y comunicacin de los riesgos de dao irreversible a

    los sistemas naturales que amenazan la supervivencia y seguridad de la vida. Otro horizonte

    es la revolucin de las categoras que hoy caracterizan el bienestar de la comunidad

    mundial.

    Tambin se proclama el establecimiento de un eficiente programa de vigilancia

    mundial, que disponga de autonoma y de capacidad independiente para hacer la evaluacin

    de los riesgos ms crticos a nivel mundial y difundir ampliamente la informacin que de

    all se deduzca, sin secretos cmplices.

    En esta perspectiva, deben acogerse con mayor inters, a nivel de organizaciones

    cientficas de grupos industriales, intelectuales y de polticos, los nuevos aportes de las

    ONGS dedicadas a la proteccin del medio ambiente.

    Se requiere el fortalecimiento de la participacin, la sensibilidad social de categora

    tica moral y del apoyo comunitario a nivel global que respalden con fuerza el desarrollo de

    polticas de proteccin ambiental.

    4.15 LLAMAMIENTO A LA ACCIN

    El primer replanteamiento profundo ha de hacerse en torno a nuevos conceptos de

    cooperacin, solidaridad e integracin en torno a las relaciones entre humanidad y el

    planeta, fundados en el amor, la sensibilidad por la vida, el respeto, su inviolabilidad, su

    proteccin y perpetuacin. Aqu el papel de al educacin es fundamental

    Dicho replanteamiento debe tener fuerza de conciencia de la necesidad de un orden

    transformador de los criterios para hacer ciencia, tcnica, industrializacin, explotacin,

    consumo y desarrollo en coherencia con la naturaleza.

    Se deben precisar cules cambios planteados por el desarrollo y la economa son

    indeseables para el aire, el agua y la tierra.

    Otro aspecto tiene que ver con la ecologa humana que replantea las relaciones de equilibrio entre los hombres.

  • 31

    Es preciso superar la desmotivacin que surge de la fragmentacin, el atomismo y la

    dispersin, que impide una propuesta integral, unificadora y fuerte con verdadera

    incidencia en la proteccin del medio ambiente y de los ecosistemas.

    Lo ms importante en el desarrollo de una nueva categora de responsabilidad con la

    naturaleza que convoque y unifique a toda la familia humana para que definitivamente

    cierre filas en la defensa de la vida como valor de valores, fuente y posibilidad para la

    realizacin de todos los valores.

    5. VALORES Y ECOLOGA

    Hacia la reconceptualizacin axiolgica de la cultura

    La relectura de la tica clsica, ha de orientarnos hacia una cultura de la vida. Desde

    esta perspectiva que hoy denominamos como Biotica Global, Eco tica, tica ambiental y Biotica profunda entre otros nombres, pretendemos abrir un nuevo horizonte axiolgico

    para la cultura del tercer milenio.

    La tarea de la nueva tica es la modificacin profunda de los ideales tradicionales

    de la cultura dirigidos ahora hacia un Bio centrismo. El Bio centrismo ha de proclamar la vida, cuanto la haga posible como bienes supremos y obligaciones morales incuestionables.

    Las actitudes individualistas de progreso, desarrollo y consumismo, han de ser

    radicalmente modificados. La nueva conciencia moral es conciencia ecolgica.

    Han de ser protegidos prioritariamente la Bio diversidad es natural y cultural como condiciones que perpetan la dinmica de la vida y su entorno humano, por encima de toda

    homogenizacin o estandarizacin que empobrecen la vida.

    Es preciso entender que los problemas ambientales, ahora son problemas polticos,

    econmicos, sociales e histricos y ante todo tico morales: La historia natural de la vida

    debe incorporarse normativamente al proyecto de humanidad.

    As mismo es preciso revaluar una cultura de la axiologa clsica centrada exclusivamente

    en lo humano del hombre. Dicha relectura debe proclamar la sociedad de vida y los

    entornos naturales como fines en s mismos que se integran en la comunin fraterna con los

    seres humanos: La nueva tica debe construir una autentica comunidad de vida.

    Crear, amar, proteger, cultivar la vida son los pilares del proyecto esperanza de la

    humanidad. No somos dueos de la naturaleza sino sus administradores, cada uno de

    nosotros hemos tomado prestada la naturaleza de nuestros hijos, no la hemos heredado de

    nuestros padres como propietarios despilfarradores.

    Actualmente es preciso volver a dar el debate profundo entre ser y tener.

    Somos miembros constitutivos de la comunidad Bitica global y administradores de nuestra

    naturaleza biolgica, no sus propietarios. Debemos reinsertarnos interactiva, coherente y

    complementariamente con el ambiente en el cual vivimos y del cual vivimos.

    Es preciso insistir en el carcter social de la propiedad, ms no en la apropiacin

    individualista de los bienes.

  • 32

    Es indispensable asumir una actitud de cambio profundo de comportamientos

    objetivos personales y colectivos. Este cambio requiere, tambin profundos cambios en las

    ciencias que ahora tenemos sobre el poder, la riqueza, el bienestar y dominio de bienes

    materiales como apetencias bsicas en procura de construir un nuevo ambiente axiolgico

    fundado en la vida, la calidad y su sentido.

    Es indispensable llevar a cabo una revolucin cultural que reivindique las

    necesidades en el orden del espritu de su actual manipulacin instrumentalista: El amor a

    la vida, la ternura, la sensibilidad, la contemplacin esttica, el asombro, la comprensin, la

    solidaridad, el reconocimiento del otro, la justicia, la convivencia pacfica, el respeto, la

    comunicacin, la diferencia en complementariedad, la ciencia, la responsabilidad, la

    frugabilidad, la compasin, la solidaridad y la austeridad. Son valores y revivificantes y

    realizadores de la humanidad, pero deben plantearse en coherencia con la naturaleza

    La reformulacin de estos valores, producirn una reelaboracin revolucionaria de

    las actitudes y desde stas de las costumbres, que debern ser enraizadas en el Ethos

    biolgico: ya no podemos continuar tratando la naturaleza y el ambiente solo como recurso

    o medio, sino como finalidades en s mismas.

    Debemos superar la actual miopa intelectual que con categora de apertura

    inmediatista, pierde su visin de futuro en su proyeccin histrica: por qu continuar

    matando la vida en la perspectiva de la calidad de la vida?.

    Es preciso relativizar tambin la actual mitificacin de la ciencia de la tcnica,

    centrada en la inversin de su poder ilimitado. La ciencia y la tcnica por s mismas,

    carecen de proyeccin histrica. Deben rehumanizarse en el contexto de la perpetuacin de

    la vida como horizonte normativo.

    No se puede, en aras de la pretendida objetividad de la ciencia y de la tcnica seguir

    proclamando ingenuamente su neutralidad axiolgica y antolgica. Esto constituye en el

    horizonte prctico, los inconscientes fundamentos del manejo ideolgico y tecnocrtico de

    un saber que no une y dignifica a lo seres humanos, sino que los discrimina, los explota

    como a la naturaleza misma. Por ello es preciso relativizar el concepto de superioridad del

    hombre sobre todos los dems seres.

    Otro elemento preocupante es la prdida de la nocin del conocimiento como

    patrimonio cultural de la humanidad, a expensas de dueos o propietarios del conocimiento

    mismo o de las patentes o de las tecnologas para explotar lucrativamente su utilizacin

    como nico criterio.

    Hemos dado un salto brutal desde la sabidura hacia la capacidad inconmensurable de

    manipular todos los horizontes de la realidad en aras de nuestros intereses. La razn, al

    igual que la humanidad, la subjetividad encarnada en la humanidad